Está en la página 1de 3

Universidad Vizcaya De Las

Américas
Ensayos

Alumna:

 Widelmy Monserrat
Caracas Perez.
Materia:

Seminario de tesis 2

Maestro:

Anahi Yunuen Domínguez


Nava.
El sistema límbico y las emociones: empatía en humanos y primates.

Introducción

Dentro de lo que componen las emociones se encuentran conductas varias que se


encargan de ver como el ser humano responde a estas como la motivación y el
aprendizaje todas ellas presentan dos características comunes: la primera se
refiere a una respuesta motora visceral y la segunda a una respuesta motora
estereotipada somática. La existencia de rasgos de empatía en los animales y
para la conservación de éstos en diferentes razas y culturas en los humanos,
puede ser la existencia de CPS conservados en la escala filogenética de los
mamíferos. De esta forma, el sistema límbico formaría parte de uno o varios
CPG’s que controlan la respuesta emocional y la empatía en los humanos.
Probablemente esta misma relación está conservada en los primates.

En el presente trabajo trata de explicar y ver como el sistema límbico y a los


CPG’s como estructuras involucradas en la empatía en los humanos y primates.

Desarrollo

Diversos experimentos en humanos y en animales permitieron posteriormente


establecer que la amígdala, que intercomunica al sistema de la expresión
somática de las emociones (hipotálamo y núcleos del tallo cerebral), es el sistema
de los sentimientos concisos, especialmente el miedo (cortezas cingulada,
parahipocampal y frontal, Los CPG’s inicialmente descritos en animales sencillos
como la lamprea han sido estudiados y descritos en algunas de las conductas
humanas Por ejemplo, se ha descrito la presencia de CPG’s en la expresión facial
de las emociones. Cuando un estímulo externo provoca una emoción en los
animales y en el hombre, varios núcleos cerebrales se comunican entre sí, los
cuales finalmente activan la contracción y relajación de ciertos músculos faciales.

Este proceso, según observaciones en humanos y en animales experimentales,


señala que, como primer paso, es indispensable el involucramiento emocional
para después generar el entendimiento de lo que está sucediendo y de la emoción
percibida, y finalmente “imaginarse” esta respuesta en el contexto que está
sucediendo. La respuesta observada en animales experimentales sugiere
fuertemente que este componente emocional (empatía o antipatía) es un proceso
viejo y se ha conservado en nosotros desde el ancestro de los mamíferos hasta
hoy, formando una parte crucial de la conducta de los humanos.

Conclusión

De los experimentos realizados en animales, sobre todo en ratas y primates, si


bien no es posible hablar estrictamente de que se generen sentimientos durante
estos experimentos, es indudable que se demuestra que se genera en ellos un
cambio en la intensidad de sus experiencias. Esta demostración nos permite
hablar de la empatía no sólo en términos humanos sino también en el reino
animal, por lo menos en los animales que muestran un cerebro evolucionado. En
términos científicos, existen dos corrientes que observan el mismo fenómeno
desde dos puntos de vista totalmente diferentes.

También podría gustarte