Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Administrativo
RESUMEN
MATERIA CRITERIO ESTABLECIDO
De la cuenta de ahorro El aporte al Régimen Prestacional de Vivienda y Hábitat debe
obligatorio para la hacerse con base en el salario integral (con carácter
vivienda (FAOV). retroactivo).
NORMAS RELACIONADAS
LOT: Artículo 133.
COT: Artículo: 55.
LRPVH: Artículo 172.
MAGISTRADA PONENTE: EVELYN MARRERO ORTÍZ
EXP. N° 2011-0711
Mediante Oficio Nro. 251/2011 de fecha 9 de junio de 2011 el Tribunal Superior
Cuarto de lo Contencioso Tributario de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de
Caracas, remitió a esta Sala Político-Administrativa el expediente signado con letras y
números AP41-U-2009-0000286 y el cuaderno separado distinguido con letras y números
AF44-X-2010-000004 (ambos de la nomenclatura del aludido Tribunal), contentivos del
recurso de apelación ejercido el 5 de abril de 2011 por la abogada Mirna Yasmín Olivier B.,
inscrita en el INPREABOGADO bajo el Nro. 127.913, actuando con el carácter de apoderada
judicial del instituto autónomo BANCO NACIONAL DE VIVIENDA Y HÁBITAT
(BANAVIH), adscrito al Ministerio del Poder Popular con competencia en materia de
Vivienda y Hábitat; representación que se desprende del instrumento poder que cursa a los
folios 587 al 590 de la pieza Nro. 2 del expediente judicial, contra la sentencia definitiva Nro.
022/2011 dictada por el Tribunal remitente el 16 de marzo de 2011, que declaró con lugar el
“recurso contencioso tributario” interpuesto conjuntamente con solicitud de medida cautelar
de suspensión de efectos el 15 de mayo de 2009, por el abogado Juan Carlos Balzan Pérez,
inscrito en el INPREABOGADO bajo el Nro. 64.246, actuando con el carácter de apoderado
judicial de la sociedad de comercio ACBL DE VENEZUELA, C.A., inscrita en el Registro
Mercantil de la Circunscripción Judicial del Estado Bolívar en fecha 6 de septiembre de 1993,
bajo el Nro. 22, Tomo A Nro. 179, representación que se evidencia en documento poder que
corre inserto a los folios 88 al 97 de la pieza Nro. 1 del expediente.
En fecha 9 de agosto del citado año el abogado Juan Carlos Balzán Pérez, ya
identificado, actuando con el carácter de apoderado judicial de la empresa recurrente, consignó
el escrito de contestación a la apelación interpuesta por la representación judicial del Banco
Nacional de Vivienda y Hábitat (BANAVIH).
Realizado el estudio del expediente pasa esta Alzada a decidir, previo a lo cual
formula las consideraciones siguientes:
ANTECEDENTES
4. Manifiesta la improcedencia del “reparo fiscal”, toda vez que fue dictado con
fundamento en un falso supuesto de derecho al incluir en la base imponible para el cálculo de
los aportes correspondientes a los períodos revisados, conceptos que no corresponden al
“salario normal”, tales como: utilidades, bono vacacional, horas extras y bonos extras-
ejecutivos, bono de seguridad, bono de producción y excelencia; desconociendo con ello
disposiciones establecidas en la hoy derogada Ley Orgánica del Trabajo y criterios vinculantes
de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, respecto a la base de cálculo de las
contribuciones en el ámbito laboral.
II
DE LA SENTENCIA APELADA
“(…) PRESCRIPCIÓN.
III
FUNDAMENTOS DE LA APELACIÓN
2. Prescripción:
Señala que la prescripción no puede ser aplicada para impedir la revisión de los
aportes correspondientes al año 2003, pues se imposibilita verificar el cumplimiento de la Ley
del Régimen Prestacional de Vivienda y Hábitat “a un período anterior a cuatro (4) años de
la citada revisión”.
3. Presunta violación del principio de exhaustividad de la sentencia:
Expresa que el Tribunal Superior Cuarto de lo Contencioso Tributario de la
Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas, no verificó en forma alguna el
cumplimiento de la Ley del Régimen Prestacional de Vivienda y Hábitat, e indicó
erróneamente la naturaleza del ahorro habitacional y su base de cálculo, además de haber
guardado completo silencio acerca del aporte enterado por la recurrente, conforme a
cualesquiera de los criterios asumidos.
4. Falso supuesto al declarar la violación del derecho a la defensa y al debido
proceso:
Indica que el mencionado Tribunal declaró la nulidad de la Resolución Nro. 129 de
fecha 6 de abril de 2009 dictada por la Gerencia de Fiscalización del Banco Nacional de
Vivienda y Hábitat (BANAVIH), por prescindencia total y absoluta del procedimiento
legalmente establecido en el Código Orgánico Tributario de 2001. Sin embargo, “la
recurrente decidió no agotar la vía administrativa, por el contrario interpuso recurso
contencioso tributario (…) enalteciendo (sic) el derecho a la defensa y al debido proceso
(…)”.
5. Error por determinar que la base imponible es el salario normal:
Sostiene que la sentencia apelada incurrió en error, toda vez que debió tomar el
ingreso total mensual asimilado a salario normal e incluir los conceptos de bono vacacional,
utilidades y cualquier otra bonificación que cumpla con la característica de ser salarial, regular
y permanente.
Con fundamento en los razonamientos de hecho y de derecho expresados y en
atención a “las evidentes irregularidades y vicios contenidos en la sentencia recurrida”,
solicita a la Sala declarar con lugar el recurso de apelación ejercido.
IV
CONTESTACIÓN DE LA APELACIÓN
El 9 de agosto de 2011 el abogado Juan Carlos Balzán Pérez, antes identificado,
actuando con el carácter de apoderado judicial de la empresa ACBL de Venezuela, C.A.,
consignó su escrito de contestación a la apelación ejercida por la representación judicial del
Banco Nacional de Vivienda y Hábitat (BANAVIH), en el cual expresa lo siguiente:
1. Naturaleza tributaria de los aportes que deben efectuarse al Fondo de
Ahorro Obligatorio para la Vivienda (FAOV):
Ratifica los razonamientos expuestos en el “recurso contencioso tributario” y,
contrario a lo afirmado por la parte apelante, expresa que los aportes al aludido Fondo
encuadran por su tipificación en la clasificación legal de los tributos, y constituyen
contribuciones parafiscales por lo que tienen carácter tributario.
2. Prescripción:
Arguye que los aportes al Fondo de Ahorro Obligatorio para la Vivienda (FAOV)
están sujetos a lo establecido en la normativa tributaria y, por tanto, al régimen de prescripción
previsto en el Código Orgánico Tributario de 2001.
3. Presunta violación del principio de exhaustividad de la sentencia:
Explica que el Tribunal Superior Cuarto de lo Contencioso Tributario de la
Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas, en sus consideraciones para
decidir analizó lo relativo a la retención y enteramiento de los aportes al Fondo de Ahorro
Obligatorio para la Vivienda (FAOV) por parte de la recurrente y, por tanto, la sentencia
apelada se ajusta a lo dispuesto en el numeral 5 del artículo 243 del Código de Procedimiento
Civil.
4. Falso supuesto por declarar la violación del derecho a la defensa y al debido
proceso:
Manifiesta que el procedimiento seguido en la fiscalización no se sujetó a ley
tributaria alguna y, por ende, la Resolución impugnada no estuvo precedida del procedimiento
de fiscalización y determinación previsto en los artículos 177 y siguientes del Código
Orgánico Tributario de 2001 para la formulación del “reparo fiscal”.
5. Error al determinar que la base imponible es el salario normal:
Refiere que la Sentenciadora interpretó correctamente la normativa aplicable al caso
bajo examen, por considerar que la base de cálculo de los aportes al Fondo de Ahorro
Obligatorio para la Vivienda (FAOV) es el salario normal del trabajador.
Finalmente, solicita que la sentencia Nro. 022/2011 de fecha 16 de marzo de 2011,
que declaró con lugar el “recurso contencioso tributario” de autos sea confirmada y se declare
sin lugar la apelación ejercida por el Banco Nacional de Vivienda y Hábitat (BANAVIH).
V
CONSIDERACIONES PARA DECIDIR
En la oportunidad para decidir, correspondería a esta Sala Político-Administrativa
conocer el recurso de apelación interpuesto por la apoderada judicial del Banco Nacional de
Vivienda y Hábitat (BANAVIH), contra la sentencia definitiva Nro. 022/2011 dictada por el
Tribunal Superior Cuarto de lo Contencioso Tributario de la Circunscripción Judicial del Área
Metropolitana de Caracas el 16 de marzo de 2011, que declaró con lugar el “recurso
contencioso tributario” interpuesto conjuntamente con solicitud de medida cautelar de
suspensión de efectos por la sociedad de comercio ACBL de Venezuela, C.A.
Ahora bien, esta Máxima Instancia previamente considera necesario destacar que en
un caso similar al hoy objeto de examen, proveniente del Tribunal Superior Noveno de lo
Contencioso Tributario de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas, la
Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia en la sentencia Nro. 1.771 del 28 de
noviembre de 2011, declaró “Ha Lugar” la revisión constitucional solicitada por el Banco
Nacional de Vivienda y Hábitat (BANAVIH) de la decisión Nro. 1.202 del 25 de noviembre
de 2010 dictada por esta Sala Político-Administrativa como Tribunal de Alzada de los
Tribunales que conforman la Jurisdicción Especial Tributaria, con fundamento en el numeral
10 del artículo 336 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.
En la decisión revisada la última de las mencionadas Salas analizó la naturaleza
jurídica de los aportes que deben pagarse al Fondo de Ahorro Obligatorio para la Vivienda
(FAOV) y la aplicación de la prescripción como medio extintivo de la obligación de pago de
los aportes al mencionado Fondo, desde el enfoque de las contribuciones parafiscales,
reguladas en el Código Orgánico Tributario.
Con base en una visión garante de derechos fundamentales referidos al buen vivir
para las trabajadoras y los trabajadores, la Sala Constitucional fijó el criterio vinculante con
fundamento legal en la Ley Orgánica del Sistema de Seguridad Social, que establece los
recursos destinados a su financiamiento y la Ley del Régimen Prestacional de Vivienda y
Hábitat que crea y regula el Fondo de Ahorro Obligatorio para la Vivienda (FAOV); y en
atención a los principios de progresividad e irrenunciabilidad de los derechos de las
trabajadoras y los trabajadores, así como al principio de la interpretación más favorable, según
el cual los aportes al citado Fondo son parte del régimen prestacional de vivienda y hábitat y
del sistema de seguridad social, la mencionada Sala consideró que los referidos aportes no
responden al concepto de parafiscalidad y, por tanto, se encuentran al margen del sistema
tributario.
Por consiguiente, como consecuencia del establecimiento de su nuevo criterio
vinculante, conforme al artículo 335 del Texto Fundamental, la Sala Constitucional ordenó
extender los efectos de la sentencia de revisión a todas aquellas decisiones que sobre la misma
materia hubiesen contrariado ese criterio.
De allí que en atención al nuevo criterio respecto al cual -se insiste- ningún Tribunal
de instancia ni esta Alzada antes se habían pronunciado, no existiendo, por tanto, necesidad de
convocar la Sala Accidental por haber sido declaradas sin lugar las inhibiciones de las
Magistradas y el Magistrado principales; esta Sala Político-Administrativa, con ocasión de
emitir el nuevo pronunciamiento ordenado por la Sala Constitucional, en reciente sentencia
Nro. 00739 del 21 de junio de 2012, caso: Banco del Caribe, C.A. Banco Universal Vs. Banco
Nacional de Vivienda y Hábitat (BANAVIH), además de acoger la doctrina judicial de dicha
Sala del Máximo Tribunal, relativa a la naturaleza no tributaria de los referidos aportes y su
imprescriptibilidad, declaró lo siguiente: “la competencia para conocer los recursos de
nulidad incoados contra los actos administrativos emanados del Banco Nacional de Vivienda
y Hábitat (BANAVIH) y de cualquier otro ente púbico encargado de la administración de
mencionado Fondo, en ejercicio de las facultades de control, inspección, y supervisión
atribuidas, corresponde a la jurisdicción contencioso administrativa ordinaria o general”,
concretamente, a las Cortes de lo Contencioso Administrativo, hoy Juzgados Nacionales, de
acuerdo a lo dispuesto en los artículos 9, 24, numeral 5 de la Ley Orgánica de la Jurisdicción
Contencioso Administrativa. (Destacado de esta Sala).
En la indicada decisión la Sala Político-Administrativa puso de relieve que el
conocimiento y resolución de los recursos de nulidad interpuestos contra actos administrativos
emanados del Banco Nacional de Vivienda y Hábitat (BANAVIH), no correspondía a la
jurisdicción contencioso tributaria sino a la jurisdicción contencioso administrativa ordinaria,
razón por la cual declaró la nulidad de la sentencia dictada en primera instancia por el Tribunal
Superior Noveno de lo Contencioso Tributario de la Circunscripción Judicial del Área
Metropolitana de Caracas.
Por otra parte, en orden al carácter extensivo que la Sala Constitucional dio a su
decisión vinculante, esta Sala Político-Administrativa estima que siendo el centro de lo
debatido lo atinente a la naturaleza jurídica de los aportes al Fondo de Ahorro Obligatorio para
la Vivienda (FAOV) y la no prescripción de los mismos, puntos específicos sobre los cuales
no se requiere de esta Sala un pronunciamiento que amerite un estudio distinto al realizado por
la Sala Constitucional en la indicada sentencia vinculante Nro. 1.771 del 28 de noviembre de
2011; esta Máxima Instancia en aras de ejercer una justicia expedita y garantizar la tutela
judicial efectiva prevista en el artículo 26 de la Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela -lo cual supone darle al caso una solución efectiva e inmediata-, en observancia de
los principios de celeridad, economía y eficacia procesal orientados como están a evitar
dilaciones innecesarias y reposiciones “inútiles”, y en atención a lo ordenado en la parte
dispositiva del mencionado fallo dictado por la Sala Constitucional; anula la decisión
interlocutoria Nro. 047/2010 del 19 de marzo de 2010 dictada por el Tribunal Superior Cuarto
de lo Contencioso Tributario de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas
(que declaró procedente la medida cautelar de suspensión de efectos solicitada conjuntamente
con el “recurso contencioso tributario”) y la sentencia definitiva Nro. 022/2011 dictada por el
mismo Tribunal el 16 de marzo de 2011. Así se declara.
Con vista a lo decidido, resulta improcedente conocer sobre la apelación incoada
ante esta Alzada por la representación judicial del Banco Nacional de Vivienda y Hábitat, por
haber quedado sin efecto legal alguno los pronunciamientos emitidos por la Jueza del
nombrado Tribunal, en virtud de ser un órgano jurisdiccional incompetente por la materia para
revisar la legalidad de los actos administrativos dictados por el Banco Nacional de Vivienda y
Hábitat (BANAVIH) por no ser estos de naturaleza tributaria, conforme al criterio vinculante
sentado por la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia. Así se decide.
Resuelto lo anterior, pasa esta Sala a conocer el recurso contencioso administrativo
de nulidad interpuesto por la empresa ACBL de Venezuela, C.A., tomando en cuenta la
doctrina judicial vinculante fijada por la Sala Constitucional del Máximo Tribunal, no sin
antes estimar desde este escenario que las actuaciones procesales llevadas a cabo en el curso
del juicio contencioso tributario en el Tribunal Superior Cuarto de lo Contencioso Tributario
de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas -salvo las sentencias antes
anuladas-, se encuentran ajustadas a derecho por haberse salvaguardado en ellas el derecho a la
defensa y al debido proceso de las partes, pues la tramitación del recurso contencioso
administrativo de nulidad y la del recurso contencioso tributario, en ningún modo, es
incompatible por ser estos dos recursos medios clásicos de impugnación de actuaciones
emanadas de la Administración; en el primer caso, actos administrativos derivados de la
aplicación de leyes administrativas y, en el segundo caso, actos administrativos tributarios,
como resultado de la aplicación de normas tributarias, conforme a las disposiciones legales
que regulan a ambos recursos, vale decir, la Ley Orgánica del Tribunal Supremo de Justicia de
2004 (vigente para el momento de la interposición del “recurso contencioso tributario”), la
Ley Orgánica de la Jurisdicción Contencioso Administrativa (vigente para la oportunidad de
decidir el presente recurso) y el Código Orgánico Tributario de 2001; razón por la cual esta
Alzada valida los aludidos actos procesales. Así se declara.
En orden a las consideraciones realizadas, entra esta Sala a resolver el recurso
contencioso administrativo de nulidad de autos y, en tal sentido, aprecia que la controversia en
el caso objeto de análisis se circunscribe a verificar lo siguiente: i) la violación del derecho a la
defensa y al debido proceso de la citada empresa por parte de la Gerencia de Fiscalización del
Banco Nacional de la Vivienda y Hábitat (BANAVIH) al emitir la Resolución Nro. 0129 de
fecha 6 de abril de 2009, en ausencia o incumplimiento del procedimiento para la fiscalización
y determinación tributaria, establecido en los artículos 177 y siguientes del Código Orgánico
Tributario de 2001; ii) la aplicación de la figura de la prescripción a los aportes que deben
prestarse al Fondo de Ahorro Obligatorio para la Vivienda (FAOV) correspondientes al año
2003, de acuerdo a lo contemplado en el artículo 55 del mismo Código; iii) el vicio de falso
supuesto de derecho del “reparo fiscal”, al incluir en la base de cálculo de los respectivos
aportes de los años revisados, conceptos no calificados como “salario normal” y, otros, a
criterio de la empresa recurrente, que ni siquiera son salario sino beneficios contractuales;
asimismo, considerar la funcionaria actuante que los aportes al mencionado Fondo no tienen
tope o límite para su cálculo; y iv) la procedencia de la condenatoria en costas al Banco
Nacional de la Vivienda y Hábitat (BANAVIH).
Antes de decidir sobre los particulares enumerados, es pertinente señalar que en el
caso concreto el “recurso contencioso tributario”, hoy examinado como un recurso
contencioso administrativo de nulidad, fue incoado conjuntamente con una solicitud de medida
cautelar de suspensión de efectos, cautela respecto a la cual la Sala no se pronunciará por ser
de carácter accesorio y provisional a la acción principal de nulidad cuyo fondo corresponde
ahora conocer, atendiendo al criterio vinculante sentado como resultado de la revisión de la
Sala Constitucional. Así se declara.
Para decidir, la Sala observa:
1.- De la supuesta violación del derecho a la defensa y al debido proceso de la
recurrente:
Denuncia el apoderado judicial de la sociedad mercantil ACBL de Venezuela, C.A.,
la transgresión de los derechos constitucionales referidos a la defensa y al debido proceso, bajo
el argumento de que la Gerencia de Fiscalización del Banco Nacional de la Vivienda y Hábitat
(BANAVIH) al emitir la Resolución Nro. 0129 de fecha 6 de abril de 2009, con fundamento
en el Acta de Fiscalización Nro. 2008-238-1 del 20 de noviembre de 2008, lo hizo en
incumplimiento del procedimiento de fiscalización y determinación de la obligación tributaria,
previsto en los artículos 177 y siguientes del Código Orgánico Tributario de 2001.
Respecto a las garantías de orden constitucional del derecho de defensa y al debido
proceso, esta Sala ha precisado lo siguiente:
“Ahora bien, en cuanto al contenido del derecho a la defensa y
a la tutela judicial efectiva, (…), que éstos se encuentran
contemplados en los artículos 49 y 26 de la Constitución de la
República Bolivariana de Venezuela, respectivamente.
(…)
De tal manera que en atención al criterio antes expresado, y visto que en el caso de
autos se trata del reconocimiento por el Estado de la progresividad e irrenunciabilidad de los
derechos de las trabajadoras y los trabajadores a la luz de la solidaridad y la corresponsabilidad
social entre el Estado y los aportantes, como uno de los signos distintivos del Estado Social de
Derecho y de Justicia, se desestima el alegato referido a la prescripción consumada de las
obligaciones por concepto de aportes al Fondo de Ahorro Obligatorio para la Vivienda
(FAOV) correspondientes al año 2003. Así se decide.
3.- Vicio de falso supuesto de derecho del “reparo fiscal”:
La recurrente afirma, por otra parte, que el acto impugnado incurre en el vicio de
falso supuesto de derecho, al incluir en la base de cálculo de los aportes al Fondo de Ahorro
Obligatorio para la Vivienda (FAOV) correspondientes a los años 2003, 2004, 2005, 2006,
2007 y 2008, conceptos no calificados como “salario normal” así como otros que ni siquiera
son salario sino beneficios contractuales, y advierte que la funcionaria actuante consideró que
esos aportes no tenían tope o límite para su cálculo.
Por su parte, la apoderada judicial del Banco Nacional de Vivienda y Hábitat
(BANAVIH) sostiene en su escrito de informes consignado en instancia, que a los efectos de
calcular los aportes al Fondo de Ahorro Obligatorio para la Vivienda (FAOV), se tenía que
considerar el ingreso total mensual asimilado a salario normal e incluir los conceptos de bono
vacacional, utilidades y cualquiera otra bonificación con las características de salarial, regular
y permanente.
En relación a ese planteamiento, cabe destacar que la investigación practicada por el
Banco Nacional de Vivienda y Hábitat (BANAVIH) a la recurrente, abarcó los años 2003,
2004, 2005, 2006, 2007 y 2008, resultando una deuda a pagar por el monto de Un Millón
Setecientos Un Mil Doscientos Treinta y Nueve Bolívares con Sesenta y Ocho Céntimos (Bs.
1.701.239,68), por concepto de diferencia de aportes dejados de pagar al Fondo de Ahorro
Obligatorio para la Vivienda (FAOV), además de liquidarse unos rendimientos hasta febrero
de 2009 por la cantidad de Quinientos Cincuenta y Dos Mil Novecientos Veintinueve
Bolívares con Treinta y Siete Céntimos (Bs. 552.929,37), lo que justifica la necesidad de
precisar cuál es la normativa aplicable durante los citados años, sobre cuyo fundamento se
determine posteriormente si la base para el cálculo de los referidos aportes la constituye el
“ingreso total mensual o el salario normal”.
Sobre el particular, la Ley que Regula el Subsistema de Vivienda y Política
Habitacional, publicada en Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela Nro.
37.066 el 30 de octubre de 2000, aplicable para los años 2003, 2004 y 2005, en su artículo 36
dispuso lo siguiente:
“Artículo 36.- El aporte obligatorio de los empleados y obreros
estará constituido por el uno por ciento (1%) de su
remuneración, y el de los empleadores o patronos estará
constituido por el dos por ciento (2%) del monto erogado por
igual concepto. Los empleadores o patronos deberán retener las
cantidades a los trabajadores, efectuar sus propias cotizaciones
y depositar dichos recursos en la cuenta única del Fondo
Mutual Habitacional a nombre de cada empleado u obrero
dentro de los primeros siete (7) días hábiles de cada mes, a
través de la institución financiera receptora.
(…omissis…)
De la citada norma se infiere que la base de cálculo de los aportes que deben
efectuarse al Fondo de Ahorro Obligatorio para la Vivienda (FAOV) es el salario normal que
perciba la trabajadora o el trabajador y que para precisar su alcance debe acudirse a la
legislación laboral.
Así, el artículo 133 de la derogada Ley de Reforma Parcial de la Ley Orgánica del
Trabajo, publicada en la Gaceta Oficial de la República de Venezuela Nro. 5.152 del 19 de
junio de 1997, estableció lo siguiente:
“Artículo 133:
…omissis…
Del aludido artículo se desprende que el legislador asumió como base de cálculo de
los aportes que deben realizar tanto las patronas y los patronos como las trabajadoras y los
trabajadores al Fondo de Ahorro Obligatorio para la Vivienda (FAOV), la totalidad de los
ingresos que devenguen las trabajadoras o los trabajadores mensualmente.
En conexión con lo expresado, el artículo 30 del Decreto Nro. 6.072 del 14 de mayo
de 2008, con Rango, Valor y Fuerza de Ley del Régimen Prestacional de Vivienda y Hábitat,
publicado en la Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela Nro. 5.889
Extraordinario del 31 de julio de 2008, indica:
“Artículo 30. El ahorro obligatorio de cada trabajadora o
trabajador se registrará en una cuenta individual en este Fondo
y reflejará desde la fecha inicial de su incorporación:
El artículo transcrito consagra como base de cálculo de los aportes que deben
efectuarse al Fondo de Ahorro Obligatorio para la Vivienda (FAOV) el salario integral, el cual
comprende todos los conceptos que a título enunciativo se contemplan en el artículo 133 de la
derogada Ley Orgánica del Trabajo de 1997, ahora artículo 104 del Decreto Nro. 8.938 del 30
de abril de 2012, mediante el cual se dictó el Decreto con Rango, Valor y fuerza de Ley
Orgánica del Trabajo, los Trabajadores y las Trabajadoras, publicado en la Gaceta Oficial de la
República Bolivariana de Venezuela Nro. 6.076 del 07 de mayo de 2012. De tal manera que el
salario integral conforme a la normativa indicada comprende toda “remuneración, provecho o
ventaja, cualquiera fuere su denominación o método de cálculo, siempre que pueda evaluarse
en moneda de curso legal, que corresponda al trabajador o trabajadora por la prestación de
su servicio y, entre otros, comprende las comisiones, primas, gratificaciones, participación en
los beneficios o utilidades, sobresueldos, bono vacacional, así como recargos por días
feriados, horas extraordinarias o trabajo nocturno, alimentación y vivienda. (…)”.
Respecto al mismo punto, la Sala de Casación Social ha señalado que tanto “en la
Ley de 1990 como en su reforma de 1997 (…), el artículo 133 contempló el denominado
salario integral, conformado por todos los beneficios y remuneraciones recibidos por el
trabajador y no expresamente excluidos a sus efectos, comprendidos allí por consiguiente, las
percepciones correspondientes a las jornadas tanto ordinarias como extraordinarias;
concepto ese diferente por más amplio al de salario normal, tal como estableció la Sala Civil
de la Corte Suprema de Justicia en fallo del 22 junio 1998.” [Vid. sentencia Nro. 438 del 02
de noviembre de 2000, caso: Aurelio Rafael Correa Santamaría Vs. Petroquímica de
Venezuela, S.A. (Pequiven)].
Bajo la óptica de las normas antes transcritas y del criterio jurisprudencial sentado
por la Sala de Casación Social de este Máximo Tribunal, donde se establece lo que debe
entenderse por salario normal y salario integral conforme a la normativa laboral, esta Sala
Político- Administrativa estima necesario examinar los postulados constitucionales que
orientan al régimen prestacional de la vivienda y hábitat, a fin de concluir si la base de cálculo
de los aportes que deben realizar tanto las patronas y los patronos como las trabajadoras y los
trabajadores al Fondo de Ahorro Obligatorio para la Vivienda (FAOV), es el salario normal o
el salario integral.
Así, debe partirse de una interpretación sistemática y axiológica de los valores que
se encuentran íntimamente relacionados con el sistema de seguridad social, el cual recoge
dentro de los subsistemas que lo integran al sistema de vivienda y hábitat, por lo que debe
hacerse referencia a los parámetros que orientan al Estado Democrático y Social, de Derecho y
de Justicia concebido por el Poder Constituyente.
La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela en su Exposición de
Motivos destaca el derecho a la vivienda como uno de los derechos sociales. Considera a la
vivienda como un hábitat que humaniza las relaciones familiares y comunitarias, siendo el
derecho a la vivienda uno de los elementos elevados a rango constitucional y que requiere una
interpretación acorde con su finalidad y no sujeta a exigencias jurídicas alejadas de la realidad
social.
De allí que el artículo 86 de la Carta Magna a efectos de asegurar la efectividad del
derecho a la seguridad social, obliga al Estado a crear un sistema de seguridad social regido
bajo los siguientes principios: i) universalidad (protección a todos los
ciudadanos); ii) integralidad (garantizar la cobertura de todas las necesidades de previsión
amparadas por el sistema); iii) solidaridad (protección a los menos favorecidos); iv) unicidad
(articulación de políticas, instituciones y normativas que lo regulan); v) eficiencia
(óptimo uso de los recursos disponibles); y vi) participación (coparticipación entre el Estado y
los ciudadanos).
En armonía con lo anterior, cabe enfatizar que el Fondo de Ahorro Obligatorio para
la Vivienda (FAOV) tiene como sujetos beneficiarios a las trabajadoras y a los trabajadores
bajo relación de dependencia, razón por la cual es innegable que el sistema está íntimamente
relacionado con el derecho al trabajo, constituyendo un deber y un derecho para todos los
ciudadanos en condiciones de coadyuvar en términos de corresponsabilidad, solidaridad e
igualdad, al desarrollo de los fines esenciales del Estado, siendo el trabajo uno de los
elementos esenciales que permiten alcanzar la mayor suma de felicidad en la población, lo que
incluye entre otros elementos la adquisición de una vivienda digna.
Asimismo, es necesario insistir en que los aportes al mencionado Fondo tienen por
finalidad establecer mecanismos para que a través del ahorro individual de cada aportante se
garantice el acceso a una vivienda digna, por lo que se requiere que las cotizaciones sean
suficientes a objeto de garantizar la posibilidad de tener acceso a mejores créditos (lo cual está
relacionado al monto acumulado), pues un aporte disminuido indudablemente limita la
capacidad del ente encargado para proveer a sus beneficiarios del mayor número y calidad de
espacios de vivienda y hábitat, es decir, en mejores condiciones para el desarrollo humano.
Analizado el preámbulo constitucional antes descrito, es pertinente enfatizar que la
normativa regulatoria de la base del cálculo de los aportes al Fondo de Ahorro Obligatorio
para la Vivienda (FAOV) contemplada en la Ley del Régimen Prestacional de Vivienda y
Hábitat, ha experimentado un proceso evolutivo desde el salario normal inicialmente
concebido al salario integral, siendo cónsono con la realidad social existente que impulsa la
necesidad imperativa de ampliar la base de cálculo de los aportes a fin de beneficiar a las
trabajadoras y a los trabajadores. En efecto, a mayores aportes más facilidades habrá a la hora
de obtener créditos para vivienda; asimismo el sistema prestacional será más eficiente y eficaz
al contar con una masa de dinero mayor que indudablemente incrementará las opciones para
ofrecer viviendas dignas.
Por tal razón, esta Alzada al momento de ejercer su labor hermenéutica de las
normas jurídicas y aplicarlas al caso concreto, debe partir desde la perspectiva del derecho y la
justicia social, desde el cual las normas que regulan el actuar de los individuos no sean vistas
como compartimientos estancos sino que deban ser entendidas y aplicadas cediendo espacios a
la realidad social imperante, en la que la justicia implica más la inclusión de lo colectivo en lo
social que una mera justicia para satisfacer intereses individuales.
En virtud de lo expresado, esta Sala observa que en la causa examinada la norma
que previó la base de cálculo de los aportes al Fondo de Ahorro Obligatorio para la Vivienda
(FAOV) ha experimentado algunos cambios, desde la Ley que Regula el Subsistema de
Vivienda y Política Habitacional de 2000, aplicable para los años 2003, 2004 y 2005, la cual
en su artículo 36 se refirió expresamente al salario normal; las Leyes del Régimen
Prestacional de Vivienda y Hábitat de 2005 y 2006, aplicables a los años 2006, 2007 y 2008,
que en el artículo 172 aludieron al ingreso total mensual; y el Decreto Nro. 6.072 del 14 de
mayo de 2008, con Rango, Valor y Fuerza de Ley del Régimen Prestacional de Vivienda y
Hábitat, publicado en la Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela Nro. 5.889
Extraordinario del 31 de julio de 2008, cuya vigencia comenzó a partir del 1° de agosto de
2008 y estableció en el artículo 172 el salario integral.
(…)
Por su parte, la Sala de Casación Social de este Máximo Tribunal ha sostenido que
el principio de favor o principio in dubio pro operario concreta su finalidad en tres
aplicaciones: a) en caso de conflictos de leyes, deben prevalecer las del trabajo, sustantivas o
procedimentales; b) cuando se presenten conflictos de normas, ha de aplicarse la más
favorable al trabajador; y c) en el supuesto de incerteza entre dos declaraciones posibles
derivadas de una misma norma, ha de preferirse la interpretación que más beneficie al
trabajador. (Vid. sentencia 1211 del 29 de julio de 2008, caso: Wilma Escalona Leal y Otros
contra Petróleos de Venezuela, S.A. (PDVSA) y otra).
En el mismo orden de ideas, el artículo 24 de nuestra Carta Magna, consagra el
principio de irretroactividad de la norma jurídica en materia penal, el cual pone de relieve
como regla que ninguna norma jurídica puede ser aplicada a situaciones ocurridas antes de su
entrada en vigencia, salvo que: a) imponga una pena menor; b) se trate de normas adjetivas
cuya aplicación será inmediata; o c) beneficie a la rea o al reo. Principio este cuya aplicación
se ha extendido en otros ámbitos del derecho, como por ejemplo en el campo del Derecho
Tributario y en el del Derecho Laboral.
Reconoce esta Sala Político-Administrativa como principio general del Derecho,
que las normas deben tener efectos a partir del momento en que son publicadas y no antes,
vale decir, que la regla fundamental conocida por su aforismo latino “tempus regit actum”, es
que los actos y las relaciones se regulen por la ley vigente en el momento en que ocurrieron.
Así, la retroactividad se manifiesta en el ámbito del derecho laboral, cuando se aplica la norma
más reciente por ser más favorable al trabajador.
Por las razones que anteceden, en función de los postulados constitucionales que
orientan al sistema de la seguridad social, el principio constitucional en materia laboral
referido a la “protección o de tutela de los trabajadores” en su expresión del “principio de
favor” o “in dubio pro operario”, incluida la aplicación retroactiva de las normas cuando
beneficien a la trabajadora o el trabajador; esta Alzada estima que la base para el cálculo de los
aportes al Fondo de Ahorro Obligatorio para la Vivienda (FAOV) es el salario integral, siendo
la base correcta que sustenta la disponibilidad y fluctuación de los recursos financieros
necesarios para el Fondo, al permitir que los recursos se usen para el financiamiento justo de
créditos por todo el universo de personas que cotizan en el aludido sistema.
Aunado a lo anterior, se constata que la intención del Constituyente como la del
legislador ha sido la de procurar a la mayor cantidad de ahorristas el acceso a una vivienda
adecuada, segura, cómoda, higiénica, con servicios básicos esenciales que incluyan un hábitat
que humanice las relaciones familiares, vecinales y comunitarias, mediante el crédito
hipotecario, tal como lo expresa el artículo 82 de la Constitución de la República Bolivariana
de Venezuela.
Con fundamento en lo expresado y examinadas las actas procesales que conforman el
expediente, se evidencia que la funcionaria actuante adscrita al Banco Nacional de Vivienda y
Hábitat (BANAVIH) estableció a cargo de la sociedad mercantil ACBL de Venezuela, C.A., el
pago de las diferencias no depositadas por los conceptos de vacaciones, bonificaciones y
utilidades correspondientes a los años 2003 y 2008, por la suma de Un Millón Setecientos Un Mil
Doscientos Cincuenta y Nueve Bolívares con Sesenta y Ocho Céntimos (Bs.1.701.259,68), así
como los “rendimientos” (intereses devengados por los fondos no depositados) calculados hasta
el mes de octubre de 2008 en Cuatrocientos Cuarenta y Nueve Mil Setecientos Catorce Bolívares
con Dieciocho Céntimos (Bs. 449.714,18), los cuales ascienden a la cantidad total de Dos
Millones Ciento Cincuenta Mil Novecientos Cincuenta y Tres Bolívares con Ochenta y Siete
Céntimos (Bs. 2.150.953,87).
Asimismo, la Gerente de Fiscalización del Banco Nacional de Vivienda y Hábitat
(BANAVIH), adjunto al Oficio Nro. GF-2009 de fecha 7 de abril de 2009, notificó a la empresa
la Resolución Nro. 0129 del 6 de abril del mismo año en la que señaló lo siguiente: (i) “(…) la
deuda por las diferencias no depositadas ante el Fondo de Ahorro Obligatorio para la Vivienda
(FAOV) asciende a la cantidad de UN MILLÓN SETECIENTOS UN MIL DOSCIENTOS
TREINTA Y NUEVE BOLÍVARES CON SESENTA Y OCHO CÉNTIMOS (Bs. F.
1.701.239,68 )”; (ii) “(…) los rendimientos (…) para los períodos 2001-2002-2003-2004 hasta
mayo 2005 y a partir de junio de 2005 hasta la fecha; por (…) la cantidad correspondiente es de
QUINIENTOS CINCUENTA Y DOS MIL NOVECIENTOS VEINTINUEVE BOLÍVARES
CON TREINTA Y SIETE CÉNTIMOS (Bs. F. 552.929,37) (…) y en consecuencia el monto
total asciende a la cantidad de DOS MILLONES DOSCIENTOS CINCUENTA Y CUATRO
MIL CIENTO SESENTA Y NUEVE BOLÍVARES CON CINCO CÉNTIMOS (Bs. F.
2.254.169,05) (…)”.
De los actos administrativos señalados se desprende que el concepto utilizado por la
Gerencia de Fiscalización del Banco Nacional de Vivienda y Hábitat (BANAVIH) para calcular
los aportes al Fondo de Ahorro Obligatorio para la Vivienda (FAOV), corresponden al criterio de
salario integral, en razón de lo cual esta Sala Político-Administrativa encuentra ajustada a derecho
la base de cálculo utilizada en el acto administrativo impugnado. En consecuencia, se desestima
la denuncia efectuada por la representación judicial de la recurrente sobre este particular. Así se
declara.
Por otra parte, en cuanto a los rendimientos a pagar correspondientes a los aportes
omitidos durante los años civiles 2003, 2004, 2005, 2006, 2007 y 2008 y que fueron
calculados hasta febrero de 2009, observa la Sala que al ser éstos accesorios a la obligación
principal, igualmente, deben ser declarados procedentes. Así se establece.
Señala, asimismo la recurrente, que el acto impugnado no tomó en cuenta lo
previsto en el artículo 116 de la Ley Orgánica del Sistema de Seguridad Social para el cálculo
de los aportes de la empresa, por cuya razón debe declararse la nulidad absoluta de la
Resolución Nro. 0129 de fecha 6 de abril de 2009, conforme a lo establecido en el numeral 4
del artículo 19 de la Ley Orgánica de Procedimientos Administrativos y el numeral 4 del
artículo 240 del Código Orgánico de 2001.
Respecto a esta afirmación de la recurrente, cabe examinar el artículo 116 de la Ley
Orgánica del Sistema de Seguridad Social publicada en la Gaceta Oficial de la República
Bolivariana de Venezuela Nro. 37.600 del 30 de diciembre de 2002, el cual prevé lo siguiente:
“Artículo 116. La base contributiva para el cálculo de las
cotizaciones, tendrá como límite inferior el monto del salario
mínimo urbano y como límite superior diez (10) salarios
mínimos urbanos, los cuales podrán ser modificados
gradualmente conforme a lo establecido en las leyes de los
regímenes prestacionales.”
La citada norma pone de relieve que la base de cálculo a efectos de establecer los
aportes que deben realizarse al Fondo de Ahorro Obligatorio para la Vivienda (FAOV), solo
está delimitada por un límite inferior que es el salario mínimo obligatorio, con la finalidad de
incorporar a las trabajadoras y los trabajadores que superen los diez salarios mínimos, evitando
con ello una discriminación entre los aportantes del sistema.
Al circunscribir el análisis al caso bajo examen y en atención a los principios
constitucionales que rigen el sistema de seguridad social y, por ende, al sistema prestacional de
vivienda y hábitat, esta Máxima Instancia reitera la importancia de garantizar a todas las
ciudadanas y a los ciudadanos el derecho de acceder a una vivienda digna.
Para cumplir tal cometido, el referido régimen prestacional está conformado por
recursos financieros procedentes de diversas fuentes, entre ellas, los ingresos generados por el
sistema de aportes que estimula el ahorro habitacional, con lo cual se persigue la intervención
de manera protagónica de los aportantes en la satisfacción de este derecho, en atención a los
principios de participación y corresponsabilidad.
De modo tal que, en aras de garantizar la igualdad de contribución de todas las
ciudadanas y los ciudadanos para el acceso a una vivienda digna, el legislador en acatamiento
a los principios constitucionales antes indicados, estableció únicamente el salario mínimo
obligatorio como límite inferior; a fin de crear una masa de dinero que beneficie a todos sus
aportantes.
En orden a lo anterior, esta Sala, en atención al examen realizado en cuanto a la
utilización del salario integral como base de cálculo de los aportes al Fondo de Ahorro
Obligatorio para la Vivienda (FAOV), de los postulados constitucionales que orientan al
sistema de la seguridad social, de los principios constitucionales en materia laboral como lo es
el “protector o de tutela de los trabajadores” en su expresión del principio de favor o “in
dubio pro operario” y la retroactividad de las normas; considera que el Banco Nacional de
Vivienda y Hábitat (BANAVIH) al efectuar el cálculo de los años investigados, sobre la base
de las cifras que arrojan los balances contables al cierre de cada año, no contrarió los límites
establecidos por el legislador en ejecución del mandato constitucional. Así se declara.
Por las razones que anteceden, se desestima la denuncia del apoderado judicial de la
sociedad mercantil ACBL de Venezuela, C.A., acerca del vicio de falso supuesto de derecho
que -a su criterio- afecta al “reparo fiscal”. Así se decide.
En consecuencia, se declara sin lugar el recurso de nulidad interpuesto por la
empresa, contra el acto administrativo impugnado, el cual queda firme. Así se decide.
4.- Condenatoria en costas al Banco Nacional de Vivienda y Hábitat
(BANAVIH):
La representación judicial de la empresa recurrente solicitó en su recurso la
condenatoria en costas procesales al Banco Nacional de Vivienda y Hábitat (BANAVIH),
conforme a lo dispuesto artículo 327 del Código Orgánico Tributario de 2001.
Sobre el particular, la Sala enfatiza que al no ser la materia debatida de naturaleza
tributaria, el mencionado Código no resulta inaplicable.
Ahora bien, partiendo de la calificación que hizo esta Sala Político-Administrativa
respecto al recurso incoado por la sociedad de comercio ABCL de Venezuela, C.A., dándole el
tratamiento de un recurso contencioso administrativo de nulidad (en atención al cambio de
criterio asumido en acatamiento a la sentencia vinculante de la Sala Constitucional Nro. 1.771
del 28 de noviembre de 2011), y al no estar prevista la condenatoria en costas en las normas
que regulan el procedimiento para tramitar el aludido recurso, no procede tal condenatoria en
el caso concreto. Así se decide.
VI
DECISIÓN
1.- NULAS la sentencia interlocutoria Nro. 047/2010 del 19 de marzo de 2010, así
como la decisión definitiva Nro. 022/2011 de fecha 16 de marzo de 2011, dictadas por el
Tribunal Superior Cuarto de lo Contencioso Tributario de la Circunscripción Judicial del Área
Metropolitana de Caracas, por lo que no procede conocer los alegatos planteados por la
representación judicial del Banco Nacional de Vivienda y Hábitat (BANAVIH) en su escrito
de fundamentación de la apelación.
2.- VÁLIDAS las demás actuaciones procesales cumplidas en el curso del proceso
ante el Tribunal Superior Cuarto de lo Contencioso Tributario de la Circunscripción Judicial
del Área Metropolitana de Caracas.
3.- SIN LUGAR el recurso de nulidad ejercido por la sociedad mercantil ABCL
DE VENEZUELA, C.A., contra la Resolución Nro. 0129 de fecha 6 de abril de 2009, emitida
por la Gerencia de Fiscalización del Banco Nacional de Vivienda y Hábitat (BANAVIH), que
estableció a cargo de la nombrada empresa la obligación de pagar la cantidad de Un Millón
Setecientos Un Mil Doscientos Treinta y Nueve Bolívares con Sesenta y Ocho
Céntimos (Bs. 1.701.239,68), por diferencia de aportes dejados de pagar al Fondo de
Ahorro Obligatorio para la Vivienda (FAOV) durante los años civiles 2003, 2004, 2005,
2006, 2007 y 2008, y el monto de Quinientos Cincuenta y Dos Mil Novecientos
Veintinueve Bolívares con Treinta y Siete Céntimos (Bs. 552.929,37) por rendimientos
obtenidos de los aportes no depositados durante los años civiles 2003, 2004, 2005,
2006, 2007 y 2008, y que fueron calculados hasta febrero de 2009, para un total de Dos
Millones Doscientos Cincuenta y Cuatro Mil Ciento Sesenta y Nueve Bolívares con Cinco
Céntimos (Bs. 2.254.169,05); acto administrativo que queda FIRME.
NO PROCEDE el pago de las costas procesales a la recurrente en los términos
expuestos en este fallo.
El Magistrado
EMIRO GARCÍA ROSAS
TRINA OMAIRA ZURITA