Está en la página 1de 8

República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria


Universidad Nacional Experimental de los Llanos Centrales Rómulo Gallegos
Programa Municipalizado de Formación en Derecho
Fundación Misión Sucre
Aldea Universitaria Juan Germán Roscio

Responsabilidad Civil por el Hecho


Ajeno

Facilitador: Participantes:
Abog. Jesús González Campos Kenia
Figueroa Grenny
Medina María Sofía

Valle de la Pascua, 17 de Marzo del año 2022.


ÍNDICE

Pág.

Introducción 3
Responsabilidad por Hecho ajeno 4
Referencias Bibliográficas 8
INTRODUCCIÓN

En esta oportunidad se realiza este trabajo con el tema de la Responsabilidad por


Hecho Ajeno y su definición pone de relieve que quien ocasiona un daño con su
conducta ilícita no necesariamente será la persona que acabará reparando el hecho
dañoso que ha causado. Universalmente, el ordenamiento jurídico considera que
determinadas personas, por su relación de control o de supervisión sobre otros
individuos, deben responder civilmente por los daños que éstos causen. Así, los padres
han de reparar el daño causado por los hijos que se encuentren bajo su guarda; los
tutores, el causado por quién está bajo su tutela; el titular de un establecimiento o
empresa por los daños que causen sus dependientes; el titular de un centro de enseñanza
no superior por los hechos dañosos causados por los alumnos menores de edad mientras
se hallen bajo el control del profesorado.

Este trabajo, trata la Responsabilidad Civil por el Hecho Ajeno, considerado


como una responsabilidad civil compleja porque considera aspectos fundamentales para
poder definir las causas civiles principalmente, pero también se consideran aspecto muy
somero en cuanto a lo penal.
RESPONSABILIDAD CIVIL POR EL HECHO AJENO

En materia Civil hay un derecho de actuar limitado por la Ley y un derecho que
tiene la víctima a recibir una indemnización por el daño que le han causado, y siendo el
hecho ilícito una conducta culposa el cual produce un daño, la víctima y el agente del
daño o el civilmente responsable se encuentran en un plano de igualdad.

Ahora bien, cuando se señala de responsabilidad civil por el hecho de otro


debemos tener presente que por regla general es indiferente determinar si el agente actuó
con Dolo o con Culpa ya que la obligación de reparar se extenderá a todo el daño
causado y la repartición entre los coautores del hecho Ilicito por ser solidariamente
responsables así como está establecido en el Código Civil Venezolano en su artículo
1195, quiere decir entonces que el civilmente responsable queda obligado a reparar el
daño causado, no solo por el hecho propio sino también, por el hecho ajeno.

En tal sentido, se debe definir el hecho ajeno, de acuerdo a como lo indica Planiol
y Ripert “es el realizado directamente por otra persona diferente de aquella que debe
responder civilmente de sus consecuencias, ante los terceros perjudicados”.

Otra definición necesaria a considerar es la que manifiesta el autor español


LASARTE, que dice que el hecho ajeno es de carácter “subjetivo” y se funda en una
“presunción de culpa” de las personas que teniendo facultad de elección o de guarda
sobre otras, actúan descuidadamente, permitiendo o dando ocasión a que éstas dañen a
terceros. De igual manera afirma LE TOURNEAU que “desde luego, la responsabilidad
por hecho ajeno... parece ser particularmente subjetiva”, pues la referida responsabilidad
por hecho ajeno también supone una responsabilidad por hecho propio, o en otras
palabras, las personas que con base en el mismo, deberían responder porque también son
causa del daño (ya sea in educando, in vigilando o in eligendo).

Por lo tanto, la conjunción de un fundamento subjetivo (la voluntad del


civilmente responsable) y de un régimen objetivo (una responsabilidad de pleno derecho)
instaura un cierto equilibrio y mantiene el principio general en sus justos límites. Así la
hipótesis de la responsabilidad por hecho ajeno y por cosas (responsabilidad indirecta)
trae implícita la idea de la culpa; de hecho se recogen presunciones de culpa. La
enumeración tiene carácter taxativo o exhaustivo. Esto es, aparte de los casos
contemplados por la ley no puede existir responsabilidad por hecho ajeno.

En todo caso la responsabilidad por hecho ajeno es exclusivamente civil, pues


solo se responde por el daño, no por delitos, penas o comiso. Y por su carácter gravoso y
excepcional “no admite aplicación analógica”.

En cuanto a la superposición de responsabilidad en el que se trata de determinar


si se pueden combinar dos más responsabilidades especiales. Por ejemplo, demandar al
padre del menor de edad y a su vez al preceptor. La tesis dominante responde
negativamente, señalado que lo propio es resolver la responsabilidad especial contra el
civilmente responsable más inmediato al agente del daño, y ello desplaza cualquier otra
clase de responsabilidad especial que pareciese aplicable. Por su parte, Mélich ante la
posibilidad de concurso de acción contra el responsable civil con la acción el agente
inmediato del daño, señala que no supone la posibilidad de acumularlas sino de estar
obligados solidariamente.

Por lo expuesto anteriormente, en el Código Civil Venezolano en el artículo 1.190


reseña que en cuanto al hecho ajeno, que este debe ser de responsabilidad de la madre,
padre, tutor, por el simple hecho de que los hijos son menores y que habitan con ellos, a
menos que se pruebe que no tuvieron culpa.

En materia penal en Venezuela, el autor de un hecho Ilícito o autor de un delito


responde por sus propias actuaciones y es de suma importancia distinguir si el delito es
intencional o simplemente culposo, en el caso de menores de edad y de acuerdo a la
última reforma de la Ley Orgánica de Protección de Niño, Niña y Adolescente
(LOPNNA) establece que si el menor de edad (14 años) es sorprendido en flagrancia
inmerso en la comisión de un hecho punible la autoridad policial deberá dar aviso al
Ministerio Público para que lo ponga a la orden del Consejo de Protección de Niño, Niña
y Adolescente en un lapso se veinticuatro (24) horas.
Existen causas que pueden exonerar de la responsabilidad del preceptor y de los
padres, ya que deberán probar que no incurrieron en culpa y que educaron de manera
adecuada al menor mientras están bajo su tutela o cuidado, o podrán demostrar que en el
hecho existió una causa extraña no imputable que se puede originar por diversas
circunstancias, por ejemplo, el caso fortuito y de fuerza mayor, la pérdida de la cosa
debida, el hecho del acreedor, entre otros.

En otras palabras, el efecto fundamental de esta causa es que el deudor queda


liberado del deber de prestación y responsabilidad civil, sin embargo la doctrina ha
distinguido los efectos de esta causa desde tres puntos de vista tales como, el efecto
relativo al cumplimiento, señalando la causa que lo originó; si es un incumplimiento
definitivo o temporal, puede ser por efecto liberatorio, éste está establecido en el Código
Civil en el artículo 1.271 y por último, por efecto restitutorios los cuales están
relacionados con la teoría de los riesgos.

Dentro del ámbito jurídico venezolano, se hace mención precisa de dos


Sentencias en las cuales se puede visualizar la decisión por sentencia firme de casos de
responsabilidad por el hecho ajeno, en fecha 01 de Noviembre del 2016 el Juzgado
Superior de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes con Sede en Barquisimeto estado
Lara, en su decisión No. 098-2016 se aprecia un caso donde exime de responsabilidad
objetiva al conductor y al propietario.

De igual manera, en la Sentencia No. RC 000666 del Tribunal Supremo de


Justicia Sala de Casación Civil de fecha 5 de Diciembre del año 2011 se observa que el
Tribunal dicta sentencia firme donde y declara sin lugar a responder por daño ajeno, y
donde se exime a su vez el pago de costas a la niña del demandante.

Es necesario detenerse en el caso de la Minoridad y es que se precisa la


condición de menor de 18 años de edad, pero cabe excluir al menor emancipado, pues la
emancipación sustrae al menor de la patria potestad, tutela o colocación, aunque siga
conviviendo en casa de sus progenitores. En este caso se esta tratando de la
emancipación legal la que subsiste derivada del matrimonio que supone discernimiento
como integrante de la capacidad matrimonial por la cual se adquiere el libre gobierno de
la persona, “se debe rechazar la aplicación del artículo 1190 del CC, pues ya el menor no
se encuentra bajo la custodia y vigilancia de los padres. En este caso, resulata certero
concluir que el menor emancipado responde por su propio hecho ilícito, es decir tiene
capacidad delictual”.

También se debe considerar, cuando existe demostración del hecho ilícito del
menor al margen de su imputabilidad o discernimiento, surge aquí el hecho que los
progenitores o tutores no responden de cualquier daño cometido por el menor sino que se
precisa el estricto cumplimiento de las exigencias del artículo 1185 del CC. Toda vez que
la diferencia con que el menor sea imputable es que la víctima podría optar por la
responsabilidad por hecho propio del incapaz (1186 CC) .

Entonces para concluir, es determinante en la legislacion venezolana que las


responsabilidades por hecho ajeno son complejas, ocurren cuando una persona esta
sometida la guarda, control, vigilancia, subordinación del civilmente responsable
comete un hecho ilicito. También que en el ordenamiento jurídico venezolano, la
responsabilidad por hecho ajeno en cuanto a menores lo determina la LOPNNA y
también, que dependerá de la emancipación si el menor de 18 años cumplirá por el hecho
ilicito al que esté sometido.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Código Civil Venezolano (1982). Gaceta Oficial Exttraordinaria del 26 de junio de 1982.
Caracas. Venezuela.

http://rvlj.com.ve/wp-content/uploads/2017/01/libro-Curso-de-Derecho-Civil-III-
Obligaciones-ilovepdf-compressed-63

Ley Orgánica para la Protección del Niño, Niña y Adolescentes. Gaceta Oficial
Extraordinaria Nro. 5.859 Extraordinaria 10/12/2007. República Bolivariana de
Venezuela

También podría gustarte