Está en la página 1de 3

Tema:

Título: Una muestra de verdadero amor.


Texto: Rom. 5:8.

Cuando llega los meses especiales o las fechas en que las personas buscan manifestar su
aprecio por otros, por ej. En cumpleaños, día de San Valentín o amor y amistad en
nuestro país o navidad, días especiales como día del padre o madre o alguna fecha de
aniversario buscan la forma de por medio de un regalo demostrar lo que sienten por otras
personas, por ej. Algunos regalan dulces, otros con una decoración hermosa regalan
flores, algunos regalan prendas de vestir, joyas, etc., la lista puede seguir.
Todos esos detalles buscan de manifestar la importancia de esa persona en nuestra vida,
no se mide el sacrificio, no se miden los esfuerzos ni se mide el costo por el simple hecho
de que nuestro deseo más profundo es ver a esa persona especial feliz.

Aunque algunas personas han querido hacer regalos grandes y extravagantes hacia sus
seres queridos, ningún ser humano en esta tierra podrá superar la muestra de verdadero
amor que nos mostró Dios Padre, y ni con todo el dinero del mundo podrá superar el
regalo que Dios ha hecho a la humanidad: El Sacrificio de Su hijo por nosotros.

Por eso…en esta mañana debemos mirar a la cruz no como teniendo lastima, sino con
gratitud por el amor que Dios manifestó a través de Su Hijo, no mereciéndolo.

Dios a través de su hijo manifestó su bondad con pecadores como nosotros, realmente
no había ninguna razón que obligara a Dios a hacerlo, sin embargo, él lo hizo, POR
AMOR.
En este mes que muchos llaman mes de amor y amistad, no hay mejor ejemplo que el
que Dios nos ha dado de lo que realmente significa amar.

I – La Manifestación de su amor.
¿Cómo Dios hizo manifiesto su amor por nosotros y como lo hace aun hoy?
Hay tres formas en que podemos ver el amor de Dios hoy.
a- Nos ha dado un día más de vida.
b- Nos ha dado el camino para ser salvos. El Sal. 8:4, manifiesta asombro por el
proceder de Dios para con el hombre.
c- Nos ofrece misericordia para acercarnos a él. Jer. 31:3. Dios sigue apostando por
darnos una oportunidad nuevamente. Note Lam. 3:22-23.
No podemos ignorar que Dios es fuego consumidor, ni prescindir que es amor, pero esto
es que Él es la fuente del verdadero amor.
Cuando Dios mostro su amor a través de su Hijo, nos enseñó lo que el amor de verdad
significa. La gente piensa que el amor es un sentimiento pasional, de entrega y
recibimiento, pero el verdadero amor, viola la emoción y el sentimiento a favor del
bienestar, aunque eso implique sacrificio. Es decir, es una decisión que incluso va en
contra de lo que podemos sentir. 1 Juan 4:19.

II – La Medida de su amor.
Dios nos muestra que el verdadero no tiene medida. Juan 3:16. “Porque de tal manera”.
El no tuvo contención alguna, sino que envió a su hijo, su único hijo. Rom. 8:32.
Debemos ver que el amor de Cristo no fue un amor superficial, sino grande. 1 Juan 3:1.
En la carta a los Filipenses encontramos una de las muestras de la medida de su amor,
note Fil 2:5-8. Él lo dejo todo, su gloria, su honra, su posición para venir a esta tierra
por amor a ti. El dejo sus riquezas para hacerse pobre para que tu y yo fuésemos
enriquecidos con su amor. 2 Cor 8:9.
Nació en un pesebre, donde ni él bebe más pobre del mundo había nacido, pero el lo
quiso así, anduvo errante y sin recostar su cabeza, no vivio como rico en la tierra y aun
así fue a la cruz para que tú y yo tuviéramos una mejor oportunidad para nuestra alma.
No solo dejo todo aquello que era valioso en su gloria, pero renuncio a su propia vida. 1
Juan 3:16. - 1 Pedro 1:18. No existe mayor sacrificio y muestra de amor
verdadero en el mundo como el que Cristo hizo por nosotros. Y no habrá.
Notamos ademas
III – La Misericordia de su amor. “en que, siendo aún pecadores, Cristo
murió por nosotros”.
Todos nosotros somos deudores de la misericordia de Dios, porque eso fue lo que Cristo
hizo con nosotros.
Ef. 2:3 nos dice que éramos hijos de ira por naturaleza, merecedores de la condenación,
pero Dios por “gran amor con que nos amó, nos dio vida”.
Juan 8:1-11. Aquí vemos a una mujer que había sorprendida en adulterio, estaba en
pecado, tenia todo en su contra y aun asi el no levanto su mano. La perdono.
Tu y yo estamos en la misma posición de esta mujer, todo en nuestra contra y aun asi
Dios decidio perdonarnos.
Cuando tú y yo merecíamos todo, el no levanto su mano para condenarnos sino para
perdonarnos, decidio amarnos. 1 Juan 4:9-10.
La Palabra “propiciación” significa “en favor de”. Aquí tiene que ver con que Cristo se
sacrificó para favor nuestro.
Dios decidio poner el peso de nuestros pecados en Cristo para que fueramos salvos. Tu y
yo debíamos haber pagado, debíamos haber sido castigados, o sacrificados pero el Señor
decidio hacerlo en Cristo. 1 Pedro 2:24. Pero todo eso fue por amor, para acercarnos a
Dios. Ef. 5:2, 1 Pedro 3:18.

También podría gustarte