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J. L. González de Rivera y cols.
cas durante el estado autógeno, hipótesis sustan- sionante que llamamos epilepsia.
ciada por la evidencia electroencefalográfica y por Sin embargo, la medicación sólo afecta las ma-
la tendencia a fenómenos convulsivos desarrolla- nifestaciones clínicas de tipo neurológico, sin ac-
da por algunos pacientes durante los primeros ción directa sobre las manifestaciones psicopato-
ejercicios autógenos. lógicas, que pueden incluso empeorar bajo el
efecto de la medicación (1). Por otra parte, la ele-
vada frecuencia de trastornos psiquiátricos de di-
versa índole en la epilepsia hacen de esta una
Abstract enfermedad de interés para el psiquiatra, y diver-
sas modalidades de tratamiento psiquiátrico han
Psychological Treatment of Epilepsy
sido ensayadas, independientemente o en conjun-
Associated psychopathology and stress-related ción con el tratamiento medicamentoso. De es-
seizures are two indications for psychotherapy in tas, la más obvia es la manipulación de los recur-
epilepsy. Support psychotherapy and autohypnotic sos de rehabilitación psicosocial, la asistencia su-
or relaxation methods are the two most frequen- portiva para ayudar al epiléptico y sus familias a
tly recommended therapies. realizar las necesarias adaptaciones y a desarro-
In the present study, we compared autogenic llar los mecanismos compensadores necesarios
therapy with support psychotherapy in the 9 para hacer frente a la relativa incapacitación im-
months treatment of 20 epileptics with high puseta por la actividad epiléptica. Esta psicotera-
scores of psychiatric pathology. 18 patients had pia de apoyo, habitualmente ejercida por el mé-
temporal focii, and none of them had achieved dico de cabecera o por la asistencia social, tiene
complete control of their seizures with medication. su importancia, ya que muchas veces es el deter-
Treatment were blindly evaluated with the Brief minante que mantiene al enfermo en su, con fre-
Psychiatric Rating Scale (BPRS) and the Cornell cuencia, precario ajuste social, y le anima a se-
Medical Index. guir el tratamiento médico y a hacer frente a las
Both groups improved on the Total Pathology dificultades relacionadas con la epilepsia. El ries-
Score of the BPRS, although the degree of impro- go principal de este tipo de psicoterapia es la po-
sibilidad de reproducir situaciones patógenas fa-
vement was significantly higher in the autogenic
miliares, creando excesiva dependencia y su co-
therapy group. In the Cornell Medical Index only
rolario de actitudes hostiles más o menos incons-
the group on autogenic therapy showed signifi-
cientes que contaminan la relación terapéutica.
cant improvement, although there was a trend in
La psicoterapia de grupo, incluyendo o no a los
the support group. Autogenic therapy was parti- familiares del paciente (2) e incluso solamente con
cularly effective on symptoms of inadequacy, anxie- los familiares, con exclusión de los pacientes (3),
ty, irritability and psychosomatic complaints. Both tiene considerables ventajas. En primer lugar, el
intensity and frequency of seizures decreased hecho de compartir los propios problemas con in-
with autogenic therapy during the treatment pe- dividuos similarmente afectos ya tiene un efecto
riod, particularly in patients with high seizure fre- psicoterapéutico en sí, al disipar la idea de «ser
quency. especial» y «único» y permitir asimismo el inter-
The EEG showed no basic changes after the 9 cambio de mecanismos psicológicos de adapta-
months treatment period. However, there were ción y el apoyo moral entre iguales.
significant changes in the EEG recordings of the Por otra parte, la psicoterapia de grupo permi-
autogenic-therapy group when the patients were te el acceso al terapeuta de un mayor número de
asked to practice passive concentration on the first pacientes, y la disminución de la intensidad de la
autogenic formula. The most consistent of those relación individual queda compensada por la crea-
EEG changes during the autogenic state was a ción de relaciones entre iguales en el interior del
diffuse low-amplitude slow-wave activity, recor- grupo, y por el proceso psicodinámico de grupo.
ded over both hemispheres, interrupted by a well A causa de la fuerza del grupo, es mucho más
regulated alpha rhythm. There was also a ten- fácil para el líder-terapeuta evitar la actitud con-
dency to exaggerated manifestations of the epi- descendiente y superprotectora en la que tan fá-
leptic EEG abnormalities, particularly on the tem- cilmente se puede caer en la psicoterapia indivi-
poral regions. dual del epiléptico, y cuyos efectos patógenos ya
hemos comentado.
The clinical improvement with autogenic thera-
En la psicoterapia de grupo se pueden conside-
py may be related to subclinical neuronal dis-
rar varios niveles o enfoques terapéuticos:
charges during the autogenic state. This hypothe-
En primer lugar, la psicoterapia puramente de
sis is substantiated by the EEG findings and by the
apoyo, con una acción superficial, encaminada a
tendency to seizure activity during long autogenic discutir y resolver problemas inmediatos en la vi-
exercises, observed in some patient during the da social, y a informar a los enfermos sobre la na-
initial period of therapy. turaleza de su dolencia, sus causas, etc, disipan-
do los temores de lo desconocido y las actitudes
sociales groseramente inapropiadas (4).
Es indudable que el tratamiento medicamentoso Otro nivel es el ocupado por los métodos psico-
es la terapia de elección en el síndrome convul- terapéuticos de grupo que buscan poner en evi-
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mismos métodos conductistas en casos en que, durante este período son menos marcados o
en apariencia independientemente, existe un gran inexistentes (21, 22, 23, 24).
nivel de angustia (17, 18). En otro estudio posterior, Binder (25) describe
En el caso descrito por Pinto (17) se presentan como en un pequeño grupo de epilépticos con
concomitantemente agorafobia y epilepsia refleja auras suficientemente largas y claras, la inicia-
a ciertos tipos de movimientos. ción de ejercicios autógenos parciales tan pronto
Una vez tratada la fobia mediante el método como los fenómenos iniciales se hacen sentir im-
de inmersión («Flooding») se observó una dismi- pide el desarrollo ulterior de la crisis, o disminuye
nución significativa del número de crisis, sin que significativamente su intensidad y duración.
ningún aspecto del tratamiento fuera encaminado Las modificaciones electroencefalográficas re-
a tratar la epilepsia en si. Standage (18) trato un gistradas en niños epilépticos son de interés por
paciente excesivamente ansioso, con fobia a la permitir la elaboración de hipótesis neurofisioló-
soledad, que presentaba asimismo crisis epilépti- gicas explicatorias de la mejoría psíquica obser-
cas de tipo «Grand Mal», mediante el método de vada en epilépticos practicando el entrenamiento
inhibición recíproca de la angustia, y observó asi- autógeno.
mismo que con la desaparición de la fobia se En un estudio clínico y electroencefalográfico
obraba una reducción de la frecuencia de las cri- de 60 niños epilépticos practicando entrenamien-
sis. to autógeno, Barolin y Dongier (26) encontraron
Que la disminución de la reactividad emocional una gran reducción de la agitación psicomotriz, de
pueda tener un efecto beneficioso sobre las ma- la agresividad, y de la hiperreactividad emocional.
nifestaciones epilépticas, se puede deducir de los El número de crisis convulsivas no varió signi-
trabajos experimentales de Small y Stevens (19), ficativamente y el electroencefalograma mostró,
quienes demostraron la posibilidad de inducir una en varios sujetos, una hipersincronía y un aumen-
actividad epileptiforme del electroencefalograma to marcado de descargas eléctricas subclínicas
mediante una presentación de comentarios de co- durante la práctica del ejercicio autógeno. Los
nocido valor conflictivo para el paciente recogidos autores concluyen que el posible mecanismo por
durante una entrevista psiquiátrica. Aproximada- el cual se produce un reajuste favorable del com-
mente 25% de los enfermos as¡ estudiados, en portamiento y de la reactividad emocional en es-
su mayoría sufriendo de epilepsia localizada, res- tos pacientes es la facilitación durante el estado
pondieron a la presentación del material conflicti- autógeno de las descargas infraclínicas, disipando
vo con aparición de anormalidades paroxísticas así la tensión neuronal sin necesidad de una crisis
en el electroencefalograma o con intensificación epiléptica clínica.
de anomalías preexistentes. Sólo 18% de estos
enfermos con activación emocional del. Electroen-
cefalograma presentaron manifestaciones clínicas Psicoterapia autógena en la
apreciables del ataque epiléptico. epilepsia: un estudio controlado
El entrenamiento autógeno o terapia autógena,
primeramente descrito por Schultz en 1928, tiene En vista de la frecuencia de trastornos psicoló-
un efecto terapéutico notable sobre la angustia, gicos en los enfermos epilépticos, y de la aparen-
libre o fóbica (20) y en vista de lo que antecede, te influencia de los estados emocionales altera-
se puede suponer teóricamente que su empleo sea dos en la precipitación de crisis en algunos epi-
beneficioso en ciertos casos de epilepsia. lépticos hemos decidido realizar un estudio con-
Binder (21) ha utilizado el entrenamiento autó- trolado de las modificaciones obtenidas en la psi-
geno básico en el tratamiento de enfermos con copatología, en la frecuencia e intensidad de las
lesiones cerebrales consecutivas a traumatismos crisis epilépticas y en la adaptación social de un
craneanos, con un notable efecto terapéutico so- grupo de enfermos epilépticos.
bre los trastornos del sueño, la irritabilidad emo- El presente estudio ha sido realizado en los lo-
cional y la reactividad emocional excesiva, aumen- cales de la Clínica de Epilepsia del Instituto Neu-
tando de manera general la actividad del enfermo rológico de Montreal (Profesor Peufield).
y su interés y habilidad en las relaciones sociales.
Reuter (22), además de modificaciones psico-
Selección de sujetos
dinámicas y del comportamiento, similares a las
descritas por Binder, constató una mejoría consi- Nuestro estudio comprende todos los pacientes
derable en la patología convulsiva en 69,6% de referidos por los neurólogos de la clínica que reu-
los enfermos que la padecían y una completa desa- nan las siguientes condiciones:
parición de crisis convulsivas en 8,7% del total.
Estas observaciones han sido confirmadas en 1. Trastornos psicopatológicos o psicosociales
otros estudios, considerándose como importante suficientemente severos como para necesitar a-
para la eliminación o disminución de las crisis con- tención psiquiátrica, y/o evidencia de que aparen-
vulsivas la constancia y regularidad en la práctica tes factores emocionales juegan un papel en la
de los ejercicios autógenos. Cuando las convul- precipitación de crisis.
siones tienen lugar, el período postconvulsivo de 2. Imperfecto control de sus crisis solamente
recuperación es significativamente más corto, y con medicación.
los trastornos psíquicos que podían presentarse 3. Evidencia electroencefalográfica de epilepsia.
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4. Buena salud física, esto es, ausencia de tras- primeras fórmulas básicas, según metodología
tornos físicos graves aparte de la epilepsia. estandarizada (27).
5. Coeficiente intelectual superior a 80. La asignación de los pacientes en los dos dife-
rentes grupos fue efectuada mediante un proce-
El empleo del entrenamiento autógeno en el dimiento ciego de números aleatorios bien des-
tratamiento de psicosis está aún en el estudio ex- crito por Bahn (28).
perimental, y los resultados no son conclusivos, Una vez realizadas las entrevistas de evalua-
existiendo cierta evidencia de que puede incluso ción, incluyendo el electroencefalograma, los pa-
ser perjudicial en algunos casos. Por esta razón, cientes de ambos grupos encuentran al investiga-
pacientes con psicosis declarada no fueron acep- dor, que es al mismo tiempo el responsable de su
tados para el estudio. tratamiento. El método ciego no puede ser, for-
Un total de 38 pacientes fueron referidos en los zosamente, respetado en esta fase del estudio,
tres meses previos a la iniciación del tratamiento. por conocer el investigador la afiliación de cada
De estos, 27 reunieron las condiciones necesarias paciente, sea al grupo «entrenamiento autógeno»,
para ser incluidos en el estudio. Por diferentes ra- sea al grupo «control» y conocer precisamente el
zones, 6 pacientes de estos 27 rehusaron su par- método de tratamiento psicoterapéutico que cada
ticipación, quedando el número total de pacientes uno de los pacientes recibe.
participantes en el estudio reducido a 21. Sin embargo, el empleo de un sólo terapeuta
permite eliminar las variables dependientes de la
Características demográficas personalidad del terapeuta, de la devoción a su
actividad y de su grado de interés en el trata-
AT C miento psicológico de la epilepsia, así como la in-
Sexo - Masculino 40 30 fluencia que otros diversos factores individuales
Femenino 60 70 pueden tener en el proceso terapéutico (29).
Los pacientes de ambos grupos continuaron su
Edad - 20-30 50 40
medicación antiepiléptica regularmente, sin cam-
30-40 40 40
bios o con cambios mínimos. Algunos pacientes
40-50 10 20 del grupo AT habían recibido , con anterioridad
Estado - Solteros 60 50 medicación psicotropa, que en la mayoría de los
Casados 40 50 casos fue reducida o eliminada. En el grupo con-
trol, se mantuvo la medicación psicotropa de
Ocupación: Estudiantes, amas de aquellos pacientes que la necesitaban, tratando de
casa, desocupados 70 70 reducirla o eliminarla en los restantes. Durante la
Empleados 30 20 duración del estudio no hubo aumento de dosis
Profesionales - 10 de medicación psicotropa, ni iniciación de psico-
Diagnóstico - Epilepsia
farmacoterapia, a excepción de un paciente del
Temporal 100 80 grupo control, que fue tratado con antidepresivos
durante el curso del estudio.
Generalizada 10 20
Diagnóstico psiquiátrico
Neurosis 50 30 Evaluación del tratamiento
Trastorno caracterial 50 70 Con objeto de cuantificar las posibles variacio-
nes clínicas, cada paciente es evaluado, antes y
AT: Grupo Tratamiento / C: Grupo control después del período de tratamiento, en cada una
de las siguientes escalas:
Método de investigación 1. La escala breve de evaluación psiquiátrica
Con objeto de controlar la influencia de la per- (Brief Pschiatric Rating Scale, BPRS), descrita por
sonalidad del terapeuta, de las entrevistas de eva- Overall y Gorham (30), y adaptada en España por
luación y de los aspectos no específicos del trata- V. Conde (31). Esta escala consiste en 18 ítems,
miento, un grupo control siguió una pauta de tra- reflejando diversos aspectos de psicopatología,
tamiento similar al grupo tratado con entrena- graduados en una escala de siete puntos. La su-
miento autógeno, controlándose así el efecto in- ma de la puntuación de cada ítem constituye la
específico de las relaciones interpersonales entre cifra total de patología, más elevada cuanto más
médico y enfermo. marcados son los síntomas de trastorno mental.
La modalidad terapéutica empleada con el gru- 2. El «Cornell Index». (CI), elaborado por Wel-
po control puede calificarse como de «psicotera- der en 1946 (32) consiste en un inventario de 100
pia de apoyo», usando persuasión, sugestión, con- preguntas, destinado a revelar diversos síntomas
sejo, clarificación, disuasión y comprensión. Inter- emocionales y psicosomáticos. Es un cuestionario
pretaciones psicodinámicas fueron evitadas cuida- autoadministrado, a diferencia del BPRS, y en el
dosamente. se elimina el factor de subjetividad del evaluador.
El grupo terapéutico sigue el entrenamiento au- Sin embargo, introduce un nuevo factor de subje-
tógeno básico, practicando únicamente las dos tividad del paciente, por lo cual es interesante
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mente tampoco se ajustó a una norma rígida, si- ambos pacientes. Otra paciente del grupo control
no que, a pesar de las recomendaciones iniciales hubo de ser hospitalizada durante mes y medio
de practicar los ejercicios tres veces al día, el nú- por razones psiquiátricas, aunque, exceptuando
mero de ejercicios diarios varió de 1 a siete se- el período de hospitalización a causa de intensa
gún los pacientes y las fases de tratamiento, para depresión con tentativa de suicidio, su asistencia
cada uno de ellos. a las entrevistas psicoterapéuticas fue regular.
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J.D 3 4 5 9 4 33 S.C 4 4 5 5 5 33
J.L. 5 7 11 12 8 52 J.O. 4 5 7 4 6 34
S.P. 5 6 10 11 5 48 L.M.. 9 4 9 5 3 43
D.D. 4 9 11 8 6 59 M.B. 2 5 9 6 3 33
S.L. 3 5 13 11 6 53 S.F 3 3 6 11 4 39
P.M. 2 4 6 7 5 30 M.M. 2 3 6 4 2 24
T.P. 4 5 14 13 5 54 J.R 2 5 7 5 2 31
R. H. 5 4 4 10 8 37 B.G. 6 7 8 7 5 41
L.B. 11 5 6 14 4 54 F.W. 4 3 7 10 4 40
V.B. 11 5 12 10 2 53 L.C. 2 4 4 9 6 42
TP = Trastorno del Pensamiento; IP = Inhibición Psicomo- TP = Trastorno del Pensamiento; IP = Inhibición Psicomo-
triz; H = Hostilidad; A = Angustia; D = Depresión; IGP = triz; H = Hostilidad,- A = Angustia; D = Depresión; IGP =
índice Global de Psicopatología; X = media aritmética; d.s. Indice Global de Psicopatología; X = media aritmética; ds.
= desviación standard. = desviación estandard.
TABLA IV
Las medias aritméticas y las desviaciones stan-
dard correspondientes a los valores asignados a BPRS: Evaluación post-tratamiento,
cada paciente dentro de un mismo agregado son grupo control
similares entre los agregados respectivos de los
grupos AT y control (C). El test estadístico de com- Paciente TP IP H A D IGP
paración de las diferencias entre agregados co-
rrespondientes de los dos grupos muestra que las J.D 2 4 6 6 3 27
diferencias no son significativas. J.L 2 6 5 11 6 45
Ambos grupos presentan similar dispersión de S.P 5 5 8 5 5 42
valores alrededor de medias muy similares, y es D.D. 5 5 9 9 8 57
posible considerar, con absoluto grado de confian- S.L 5 5 9 10 7 52
za, que ambas muestras son equivalentes y que P.M. 3 5 5 5 3 27
la división de la muestra inicial en dos grupos no T.P 4 5 9 11 4 46
ha introducido variaciones significativas en los va- R.H. 4 3 3 8 3 29
lores globales de las variables a considerar. L.B. 11 4 11 15 2 61
V.B. 7 4 10 8 4 44
BPRS en la segunda evaluación (post-trata-
miento: En las tablas III y IV se presentan los Total 48 46 75 88 45 430
X 4.8 4.6 7.5 8.8 4.5 43
datos obte nidos mediante la administración del
BPRS a los grupos AT y C, después de un período d.s. 2.65 0.8 2.59 3.11 1.95 12.12
de tratamiento de 10 meses. TP = Trastorno del Pensamiento; IP = Inhibición Psicomo-
triz; H = Hostilidad,- A = Angustia; D = Depresión; IGP =
Los dos grupos parecen ahora claramente
Indice Global de Psicopatología; X = media aritmética; ds.
diferentes con respecto a los valores de los = desviación estandard.
diversos agregados sintomáticos obtenidos con el
BPRS.
grupos presentan, de acuerdo con los valores del
Análisis estadístico de BPRS mejoría, es preciso saber si esta mejoría es
significativa, esto es, si es superior a lo que ca-
las diferencias entre los valores del bría esperar por variación aleatoria de los sínto-
BPRS pre y post-tratamiento mas considerados. Finalmente, en el caso que los
La primera pregunta a plantearse es si verda- pacientes de ambos grupos presenten niveles sig-
deramente ha habido mejoría en los pacientes nificativos de mejoría, debemos averiguar si los
tratados con entrenamiento autógeno; el trata- pacientes de un grupo mejoraron significativamen-
miento control, además del efecto placebo, con- te más que los del otro, esto es, si un tratamien-
tiene un verdadero esfuerzo psicoterapéutico y to posee una eficacia terapéutica superior a la del
por lo tanto cabe esperar una cierta mejoría en otro.
este grupo. Si realmente los pacientes de ambos a) Grupo tratado con entrenamiento autógeno
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TOTAL 46 23 49 53 24 37 235
X 4.6 2.3 4.9 5.3 2.4 3.7 23.5
TABLA XIII
s.d. 2.9 2.08 3.17 4.1 1.57 2.05 11.83
Comparación de los valores pre- y post
I = incompetencia y autodepreciación; D = depresión; A = tratamiento del test de Cornell.
angustia; P = síntomas psicosomáticos; HS = hipersenbili-
Grupo control
dad y desconfianza; l,A = irritabilidad y agresividad; IC =
índice de Cornell (patología total medida por el test)
PRE- POST- DIF. d.s. valor t. signif
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n= 10 en ambos grupos.
Resultados electroenfefalográficos
AT= grupo en entrenamiento autógeno
Los trazados electroenfefalográficos de todos los
C= grupo control
+ p<0,01 pacientes del estudio fueron realizados con una
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más frecuentemente que en los no epilépticos, esta actitud menos tensa, más relajada. Los pa-
hospitalización y con frecuencia institucionaliza- cientes se presentan ante el psiquiatra evaluador
ción. de manera que aparecen menos deprimidos, más
Sin embargo, pacientes con un grado de pato- comunicativos, menos hostiles y desconfiados y
logía no tan exagerado, o con manifestaciones expresando menos ideas paranoides y rencorosas
que no causan gran trastorno en el ambiente, ra- contra otros.
ra vez reciben atención específica por su sufri- La mejoría de la depresión, la hostilidad y las
miento psicológico. Ello es, en parte, debido a la ideas paranoides no parece tan evidente cuando
dificultad de hallar un empleo satisfactorio de las se juzga por las respuestas al cuestionario del
terapéuticas psiquiátricas en estos pacientes. Cornell test, aunque la mejoría de las variables
La psicoterapia del epiléptico es tarea difícil, su relacionadas con la angustia es tan clara como se
personalidad plantea grandes problemas contra- ha podido observar con la evaluación psiquiátrica.
transferenciales en el psiquiatra, su patología or- El carácter rígido de un test como el Cornell no
gánica, manifestada en trastornos de la atención permite la flexibilidad de una entrevista psiquiá-
y de la memoria, impide el flujo satisfactorio de trica, pero es también posible que, aun sintiéndo-
la relación psicoterapéutica, y finalmente, con ra- se mejor, el paciente tiene la impresión de que
zón o sin ella, el epiléptico achaca todos sus pro- no han cambiado mucho las cosas, sino, sobre to-
blemas psicológicos a la epilepsia, eliminando así, do, su manera de reaccionar. En una de las pre-
de base, toda posibilidad de modificación caracte- guntas del test de Cornell, «Tiene usted la impre-
rial. sión de que sus compañeros le observan y criti-
Los pacientes que hemos estudiado en el pre- can en el trabajo», la misma paciente respondió
sente trabajo presentan, en las evaluaciones ob- «Sí» en las dos ocasiones, antes y después del
jetivas del psiquiatra colaborador, un alto nivel de período de tratamiento. Sin embargo, en el test
angustia, depresión, trastorno formal del pensa- post-tratamiento, debajo del espacio previsto pa-
miento y, con frecuencia, del contenido del pen- ra la respuesta, añadió: «Pero ya no me impor-
samiento, con preponderancia de elaboraciones ta». Este pequeño matiz no puede ser captado
paranoides. Su contacto afectivo, en cambio, pa- por un rígido test objetivo, para el que no se es-
rece intacto, la colaboración con el médico es en tablece diferencia entre ideas de referencia que
la mayoría de los casos excelente y, en general, son aceptadas sin mucha preocupación y trastor-
todos parecen funcionar en su vida de relación de no, y obsesiones paranoides que causan extraor-
manera mejor a lo que cabría esperarse, tenida en dinaria angustia, hostilidad y medidas retaliato-
cuenta sus manifestaciones psicopatológicas. rias.
En el test de Cornell se revelan las mismas ca- En contraste con sus indudables efectos tera-
racterísticas, más una tendencia a las quejas or- péuticos en las variables emocionales, el entrena-
gánicas vagas, que podríamos denominar, en un miento autógeno no parece tener ningún efecto
sentido laxo del término, sintomatología psicoso- apreciable en los trastornos del pensamiento, tan-
mática. to en su forma como en su contenido.
La mejoría en el cuadro clínico observada en el Respecto al control de crisis convulsivas, el en-
grupo tratado con psicoterapia de apoyo sola- trenamiento autógeno parece ser más efectivo en
mente es posiblemente más aparente que real, va reducir la actividad convulsiva en aquellos pa-
acompañado de considerable dependencia en el cientes con crisis leves y muy frecuentes, espe-
terapeuta y se produce después de un período cialmente si las crisis parecen estar relacionadas
relativamente largo de un contacto intenso y fre- con factores emocionales. En pacientes con crisis
cuente, requiriendo considerable esfuerzo por par- poco frecuentes, el entrenamiento autógeno no
te del terapeuta. parece ejercer una gran influencia en la frecuen-
En contraste, el tratamiento autógeno parece cia de las crisis, y, si acaso, parece en algunos pa-
producir una mejoría clínica de orden netamente cientes aumentarla ligeramente.
superior, la dependencia en el médico tratante es El fenómeno, reportado por otros autores, (10,
considerablemente menor, y el esfuerzo terapéu- 25) de prevención de las crisis inminentes me-
tico requerido es asimismo menor que en la psico- diante técnicas autohipnóticas de relajación o me-
terapia de apoyo. diante la práctica de ejercicios autógenos tan
Los pacientes con entrenamiento autógeno me- pronto como los pródromos se hacen sentir, no
joran de manera altamente significativa en las ha podido ser observado en nuestros pacientes.
variables relacionadas con angustia, tensión, mo- Si acaso, lo contrario parece producirse, esto es,
lestias psicosomáticas e hipocondríacas. precipitación de crisis durante el estado autóge-
En todos ellos se observa una actitud más rela- no.
jada, que se traduce en mejoría de las relaciones Respecto a la intensidad de las crisis, es evi-
interpersonales, mejor apetito, desaparición de dente que todos los pacientes tratados con entre-
los trastornos del sueño y considerable mejoría namiento autógeno consideran sus crisis como
de las relaciones maritales y sexuales. siendo de menor duración, con menor obnubila-
La disparidad observada entre los resultados ción de la conciencia, y seguidas por menor se-
de la evaluación psiquiátrica con el BPRS y los re- cuelas desagradables.
sultados en el test de Cornell pueden explicarse Este cambio en la percepción de las crisis pue-
por la mejoría de las relaciones interpersonales y de reflejar un cambio auténtico en la intensidad
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