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Marcos Manuel Islas Pacheco

Matricula: 102683

Grupo: LP30

Materia: (33) SEMINARIO DE TITULACIÓN I

Docente: Dr. Sergio Josué Torres Zarco

Actividad de Aprendizaje 1. Desarrollo de protocolo

San Pedro Cholula, Puebla. 08 de noviembre de 2021


1. Planteamiento del problema

Los trastornos de la conducta alimentaria englobando todos sus tipos puede llegar a
abarcar
hasta el 4% de la población de adolescentes y adultos jóvenes, siendo más comunes en
el sexo femenino y su edad de aparición más usual antes de los 20 años y estudiantes, en
muchas ocasiones no cumplen los criterios específicos para cada enfermedad, pero ya
presentan indicios de alguna de ellas.

Cada época está señalada por un modelo estético del cuerpo, basado en determinados
estereotipos e ideales, que marcan el límite entre lo bello y lo que no lo es, esto depende
de la formación y cambio de estereotipos, así como de modelos de cuerpo según la moda
y la época. Los ideales sobre belleza en algunas personas, genera el deseo de estar más
delgados de lo que su cuerpo tiende a ser naturalmente. En este contexto la imagen física
cobra importancia, como parte esencial para el ser humano.

Cada día se tiene la práctica o costumbre de observarnos en el espejo: para ir al trabajo,


escuela o por arreglo personal; esta práctica en algunas personas permite experimentar
ambigüedad en sus sentimientos, como resultado de esa percepción hacia su propia
imagen; sin embargo no existe un estándar específico de ésta, que establezca cual es el
físico perfecto, por el contrario varía a lo largo de la vida a raíz de diversas situaciones
que influyen en la persona para que cambie su autopercepción (estados de ánimo,
preocupaciones, autoestima, obesidad, estereotipos de belleza entre otros).

Debido a que son muchos los factores que pueden llevar al desarrollo de trastornos de la
conducta alimentaria en la juventud, con mayor frecuencia en las jóvenes de clase social
alta y educada y en las edades de la adolescencia tardía y adultez joven, según las
fuentes de literatura internacional, además, puede presentar múltiples consecuencias
psicológicas, sociales y fisiológicas, las cuales pueden tener una repercusión de por vida,
dentro de éstas tenemos: depresión, alteraciones cognitivas, amenorrea, hipotiroidismo,
alteraciones hidroelectrolíticas, caquexia, arritmias, bloqueos cardíacos, entre muchas
otras.
Las influencias sociales se presentan desde la niñez para ello se hace referencia en los
últimos años, cuando lanzan el ícono de la belleza infantil en las películas de princesas y
superhéroes presentándolos como modelos de estética corporal, manifestando que
delgadez es sinónimo de belleza, inculcando esta idea desde la infancia y durante el
desarrollo del individuo cobrando mayor importancia en la adolescencia.

La Organización Mundial de la Salud define a la adolescencia como el período de


crecimiento que se produce después de la niñez y antes de la edad adulta, entre los 10 y
19 años. Independientemente de la dificultad para establecer un rango exacto de edad es
importante el valor adaptativo, funcional y decisivo que tiene esta etapa, se desarrolla el
aspecto cognitivo, que involucra cambios en el joven en cuanto a percepción, sensación,
identificación, asociación, pensamiento, concepción de ideas, juicio, raciocinio, solución
de problema y memoria.

Conforme a la madurez que cada joven desarrolle, así será la forma de enfrentarse a los
cambios que irá presentando, también influye la nutrición y la condición de vida en la que
el adolescente se encuentre involucrado. Cabe destacar que durante la adolescencia
también se presenta la necesidad de independencia de los padres y pertenencia a grupos
sociales, haciéndolos vulnerables a influencias, por los diferentes medios de
comunicación quienes se encargan de hacer hincapié a la delgadez mediante anuncios de
medicamentos, literatura, artículos en internet sobre cómo perder peso o ganar
musculatura, programas televisivos engañosos que terminan prometiendo dar la
apariencia de los presentadores de los programas, desarrollo de certámenes de belleza
los cuales establecen estereotipos de cómo las personas deberían ser.
Es común que las personas incluyendo adolescentes, se sometan a dietas para obtener el
cuerpo ideal. Cabe mencionar que una dieta saludable ayuda a protegernos de la
malnutrición en todas sus formas, así como de las enfermedades no transmisibles, entre
ellas la diabetes, las cardiopatías, los accidentes cerebrovasculares y el cáncer.
Para muchos realizar una dieta adelgazante es un martirio de sufirmiento en sí mismo
más que un medio transitorio para alcanzar un estado de salud adecuado.
En la actualidad muchas personas luchan contra una supuesta obesidad lo que hoy en día
se le denomina trastornos de la alimentación, que comúnmente se centra en anorexia y
bulimia nerviosa; ambas reflejan drásticos estándares de peso corporal impuestos por la
sociedad sobre la belleza al exaltar la delgadez.
La Anorexia Nerviosa: síndrome específico, cuyas características esenciales son las
descritas en el DSM-IV, o sea, rechazo a mantener el peso corporal mínimo normal,
miedo intenso a ganar peso, alteración significativa de la percepción de la forma o tamaño
del cuerpo y la aparición de la amenorrea en las mujeres. Existen 2 subtipos de anorexia
nerviosa: el restrictivo y el compulsivo/purgativo.

La anorexia nerviosa se presenta fundamentalmente en el sexo femenino (menos del 10


% de las personas anoréxicas son del sexo masculino). Por tal motivo, usaremos el
término anoréxica para referirnos a pacientes con esta entidad, comprendiendo a
pacientes de uno y otro sexo.

La evolución de la anorexia nerviosa puede ser variada: algunas personas se recuperan


totalmente después de un único episodio; otras presentan episodios fluctuantes, con
ganancia de peso seguido de recaídas; y en otros casos, si no se establece un programa
terapéutico, puede surgir un desarrollo de progresiva desnutrición con la posibilidad de
desembocar en estados caquécticos, y la muerte por inanición, suicidio o desequilibrio
metabólico

La Bulimia Nerviosa: es un trastorno de la alimentación que se caracteriza por episodios


repetidos de ingesta excesiva de alimentos en un periodo corto de tiempo. Esto se une a
una preocupación excesiva por el control del peso corporal, lo cual le puede llevar a
utilizar métodos para controlar el aumento de peso.

La persona que padece bulimia se ve gorda, tiene una idea distorsionada de su propio
cuerpo, aunque presenta un peso normal y presenta sentimientos permanentes de
insatisfacción corporal, miedo a engordar, no es capaz de controlar sus impulsos con la
comida y no puede resistir el deseo de realizar un atracón.

Los trastornos de alimentación, como se observó anteriormente afectan a los


adolescentes, aunque también existen consecuencias generadas por la inconformidad de
la imagen corporal, lo que podría afectar directamente los estados de ánimo,
específicamente en la aparición de depresión que aquí se define como: una pérdida de la
capacidad de interesarse y disfrutar de las cosas, disminuyendo la vitalidad causando una
reducción del nivel de actividad y cansancio exagerado, que aparece tras un esfuerzo
mínimo.
La depresión surge de manera progresiva y gradual, lo que puede establecer una
depresión leve, moderada o grave. Esto llega a afectar dramáticamente el
comportamiento y la relación con los demás, lo que posiblemente conllevaría a que el
adolescente se sienta inseguro, tenso, lleno de dudas etc. La depresión en algunos
jóvenes podría ser resultado de la inconformidad de su cuerpo ya que para ellos no se ve
como les gustaría que fuera.
2. Pregunta de investigación

¿Cuáles son los trastornos de la conducta alimentaria que generan complicaciones graves
en jóvenes menores de 20 años?

3. Objetivos de investigación

General.

 Determinar la prevalencia de los trastornos de la conducta alimentaria en jóvenes


menores de 20 años.

Específicos.

1. Determinar la prevalencia de Bulimia Nerviosa, Anorexia Nerviosa.


2. Determinar medidas de tendencia central en cuanto a índice de masa corporal en
la población estudiada.
3. Identificar los posibles factores asociados para desarrollar trastornos de la
conducta alimentaria.
4. Identificar las conductas purgativas y la frecuencia de éstas.
5. Establecer las conductas no purgativas con fines adelgazantes y la frecuencia de
éstas.
6. Determinar el subtipo de Anorexia Nerviosa más frecuente en la población en
estudio.
7. Identificar el subtipo de Bulimia Nerviosa más frecuente la población estudiada.
8. Identificar la frecuencia de los subtipos de Trastornos de la conducta alimentaria
no especificados en la población estudiada
4. Alcances y limitaciones

Alcances:

 Se obtendrá información sobre los trastornos alimenticios a través de entrevistas a


profundidad con expertos en el tema.
 La investigación de campo se realizará a jóvenes menores de 20 años de
bachillerato particular
 Se identificarán los factores más importantes que fomentan la anorexia y la
bulimia.
 Se establecerán las bases para la creación de una campaña social para la
prevención de la anorexia y la bulimia basada en redes sociales.
 Se impartirá platica de apoyo para jóvenes que deseen saber más del tema

Limitaciones:

 En este estudio no se hablará de los problemas alimenticios que se presentan en


los adultos.
 En esta investigación no se tratarán otro tipo de desórdenes alimenticios, que no
sean la anorexia y la bulimia nerviosa.
 La propuesta no se implementará por lo que no se podrán evaluar resultados.
 El grupo focal se realizará únicamente con jóvenes estudiantes de Bachillerato
particular.
 Este trabajo no se basa en resultados de estudios cuantitativos sino cualitativos.
 Poca cooperación de los jóvenes por apenamiento.
5. Resumen de los principales supuestos teóricos, que
compondrán un marco teórico.

Los trastornos de la conducta alimentaria: Anorexia y Bulimia Nerviosa, son conocidos


desde los principios de la civilización occidental. Si bien la ingesta masiva y la conducta
de purgarse están ciertamente descritas en la civilización romana, el trastorno de Bulimia
Nerviosa, tal como lo definimos actualmente, no está bien documentado.
Un trastorno de la conducta alimentaria puede ser definido como una alteración
persistente de los patrones alimentarios o una conducta que trata de controlar el peso
corporal, que ejerce efectos deletéreos en la salud física y en el desenvolvimiento social, y
que no son secundarios a otras condiciones médicas o psiquiátricas de base.
Los trastornos alimentarios más reconocidos son la Anorexia Nerviosa (AN) y la Bulimia
Nerviosa (BN). El sobresaliente de la Anorexia es la negativa a mantener un peso corporal
normal mínimo. La Bulimia se caracteriza por episodios recurrentes de comilonas
seguidas por conductas inapropiadas dirigidas a evitar la ganancia de peso, como por
ejemplo la auto-provocación del vómito. Existen otras dos formas clínicas, menos
reconocidas como lo son los Trastornos alimentarios no especificados por sus siglas en
inglés: Binge-Eating Disorder).
El término Anorexia Nerviosa, significa literalmente: “pérdida nerviosa del apetito”,
derivada del griego orexis: apetito. El trastorno fue descrito por primera vez en la literatura
médica casi simultáneamente por Sir William Gull en Inglaterra y Ernest-Charles Lasegue
en Francia, en los 1870. Sus descripciones de las características principales son: pérdida
de peso severa, amenorrea, alteraciones psicológicas y actividad aumentada, son
reflejadas con solo pequeñas modificaciones en los criterios diagnósticos modernos
respectivos más utilizados: DSM- IV TR.
El término de Bulimia, se piensa que proviene de las palabras griegas bous y limos, que
literalmente significan: “hambre de buey”. La ingesta de comida en exceso “comilonas”,
han sido un problema de la humanidad por milenios y la práctica del vómito auto-inducido
también data desde los mismos tiempos (siglos XIV). Sin embargo, no fue hasta 1979 que
el trastorno clínico de BN fue formalmente descrito, en un artículo publicado por Russell.
En 1980, BN fue reconocida como diagnóstico en el DSM- III. Pequeñas modificaciones
fueron realizadas para dar paso a los criterios estipulados en el DSM- IV-TR3.

Anorexia Nerviosa
La mayoría de los pacientes que padecen Anorexia Nerviosa (95%) son mujeres. La
prevalencia de Anorexia Nerviosa ha sido estimada en aproximadamente 1% de las
mujeres adolescentes, aunque puede ser subclínico en hasta el 5-10% de las mujeres
jóvenes entre edades de 16-25 años, con la edad de inicio más común entre 14 y 18
años. Aunque la AN, es típicamente considerada propia de las razas caucásicas, los
trastornos alimentarios y la insatisfacción corporal parece pertenecer también a las razas
afroamericanas, asiáticas e hispánicas. Otros factores de riesgo para la AN incluyen
pertenecer clase social media a alta, sexo femenino, participación en actividades en las
que se sobrevalora la delgadez (por ejemplo: ballet, gimnasia, modelaje), e historia
familiar de desórdenes alimentarios. Los episodios de Anorexia Nerviosa son típicamente
desencadenados por eventos estresantes. La AN puede ser asociado con otras entidades
psiquiátricas: incluyendo un estimado de prevalencia a lo largo de la vida del 25% con el
Trastorno Obsesivo-Compulsivo, y un 50 a 75% con distimia, 65% con depresión, fobia
social 34%. Aproximadamente un 40 a 45% de los anoréxicos se recuperan
completamente, 30% mejoran y un 25% presentan cronicidad. La mortalidad es la más
alta de todos los trastornos psiquiátricos: 10-15%. La mortalidad está aumentada en
aquellos con una edad tardía de inicio, larga duración de la enfermedad y pérdida de peso
severa. Un mal pronóstico se asocia con un peso escaso al inicio de la enfermedad,
relaciones intrafamiliares inadecuadas, sexo masculino, la presencia de vómitos, la mayor
duración de los síntomas o la falta de respuesta al tratamiento temprano.
Bulimia Nerviosa
La prevalencia estimada de la BN es del 3 al 10% de las adolescentes y estudiantes
universitarias en los Estados Unidos; sin embargo, ya que los bulímicos aparentan un
buen
estado de salud, la enfermedad es más difícil de detectar. La BN, al igual que la AN, es
más
común en el sexo femenino, aunque su edad de aparecimiento es un poco mayor que la
de la AN. La BN típicamente aparece luego de un intento insatisfactorio para perder peso
o cuando el paciente descubre que purgarse, ayunar o el ejercicio puede compensar las
comilonas. Los factores asociados con el aparecimiento de BN incluyen historia previa de
abuso sexual, abuso o dependencia de drogas psicoactivas, historia familiar de
alcoholismo y depresión. La depresión y los trastornos del ánimo son comunes entre los
bulímicos. El pronóstico de la BN es generalmente mejor que el de la AN: más del 50% se
recupera completamente, unos cuantos se vuelven anoréxicos, aproximadamente 30%
mantienen un trastorno alimentario no especificado. De entre aquellos que se recuperan,
aproximadamente un 25 % retienen hábitos alimentarios anormales. Muchos pacientes
identificados en la atención primaria no reúnen todos los criterios del DSM- IV-TR para el
diagnóstico de AN o BN, pero exhiben patrones de alimentación y ejercicio anormales,
incluyendo la alimentación restrictiva o las comilonas con o sin comportamientos de
purga. Cuando son identificados estos criterios en los pacientes jóvenes pueden
representar una evolución de la enfermedad más leve, lo cual la hace más difícil de
detectar, pero que implica un mejor pronóstico. Al contrario, en los pacientes mayores
puede mostrar secuelas crónicas de recuperación parciales. En este último grupo, las
opciones de tratamiento psiquiátricas y nutricionales pueden haber sido agotadas, y el
médico general será el responsable para monitorizar el curso de la enfermedad. Es de
hacer notar que aproximadamente un 20% de las mujeres universitarias experimentaran
síntomas bulímicos transitorios durante sus años de estudio universitario. Aunque la BN
usualmente se presenta en personas con un peso normal, puede tener antecedentes de
obesidad.

6. Marco contextual
Esta investigación estará se realizará de forma experimental dentro de un bachillerato
particular, por el momento como medida de seguridad y por la pandemia de covid-19 se
estará realizando un test virtual sobre una alimentación adecuada y gustos sobre los
alimentos, haciendo grupos de alimentos con diferentes valores calóricos, para tener una
referencia de qué tipo de alimentación se lleva a cabo en cada joven, por lo consiguiente
se les pedirá a los maestros de cada alumno que agreguen algún comentario sobre algún
caso particular que ellos consideren necesita una atención específica, ya que ellos y los
padres son quienes de cierta forma tienen más contacto con los jóvenes.

La finalidad de esta investigación es reconocer cuales son los trastornos de alimentación


más graves que pueden generar una complicación en los jóvenes menores de 20 años,
así como conocer los motivos que puedan llegar a causar alguno de estos trastornos, de
igual manera saber la opinión de los jóvenes sobre el tema abarcado.
Referencias:
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