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Doctorado en Educación
Axiología de la educación
Autor: Yuraima Ramírez
Profesora: Dra. Yaurelys Palacios Revete
El primer autor que refiere la palabra axiología como concepto fue el francés
Paul Lapie (1902) dándole un sentido restringido, usándola estrictamente para
los valores de orden espiritual y trascendental, específicamente para las
nociones de orden moral y ético. Posteriormente Von Hartmann (1908) se
refiere a este concepto empleado por Lapie (1902) para fundamentar sus
estudios, y así consolidar a la axiología no ya como término, sino como una
disciplina autónoma de la filosofía, que se referiría a un sistema formal para
identificar y medir los valores.
Es claro que estos autores poseen una relevancia importante, sin embargo,
no son ellos los que inician una reflexión sobre los valores y sus juicios. Es
Hume (1748), quien muestra por primera vez una preocupación,
principalmente, por la reflexión de los valores morales y estéticos, con su teoría
antimetafísica y nominalista de los mismos, oponiéndose a los sistemas éticos
del racionalismo que hacen una distinción entre el bien y el mal y, por ende, en
la vida moral del individuo. Para Hume (1748) algo es bueno o malo, no porque
la razón indique alguna cualidad en el objeto, sino por lo que genera en la
persona, sentimiento de agrado o desagrado, de aprobación o rechazo al
observar o vivir el objeto o fenómeno, de acuerdo, a las características propias
de la naturaleza humana.
Por otro lado, Kant (1788) nos dice que los valores, ya no estarán en relación
con la inspiración religiosa, sino con la razón. Ya que, para este autor, los
ideales o los valores corresponden a la subjetividad del hombre. Desde esta
visión, las ideas relativas propias de la persona, son las que dirigen y
determinan la conducta del mismo. De este modo, el conocimiento moral se
formula en juicios del deber ser. Entonces, se trata de asumir o no asumir la
noción trascendental de razón, puesto que para Kant (1788) existe una
separación entre el valor y el ser, sin que haya un desligamiento entre el
individuo y la moralidad, siendo el valor una “idea” y un “ideal” de la razón
práctica.
Visión antropológica
Los valores según la concepción scheleriana de los mismos están fuera del
tiempo y del espacio, son inmutables, indestructibles. Son independientes de
los bienes que hacen las veces de portadores de valor y de las mentes que los
piensan. Los valores son independientes a un Yo que los perciba. Si bien una
de las conclusiones, sino las más importante a las que llega Karol Wojtyla en
su tesis doctoral en Filosofía, publicada bajo el nombre de Max Scheler y la
ética cristina2 (1980), corresponde a la afirmación de que el sistema ético de
Scheler no es válido para interpretar una ética objetivista como la cristiana
(1980, p.105), también es claro que tanto para Scheler como para Wojtyla hay
un retiro de la ética de la forma pura construida por Kant , en la que el bien o el
mal de los actos está determinado por la concordancia o discrepancia de la
disposición subjetiva con la ley como forma a priori de los actos (Wojtyla, 1980,
p. 106).
Por otra parte, hay un fenómeno nuevo con los valores, según Cooley, que
no existe a nivel biológico, conocido como “valores individuales”, “valores
sociales”, y, “valores públicos”, los primeros referidos a la socialización intensa
del hombre, los segundos producto de que los valores individuales ya son
sociales en gran parte, y los últimos, son aquellos que no pertenecen a un solo
individuo en particular, sino que son el resultado de las interacciones sociales
que ellos practican. Por lo tanto, se puede afirmar que tanto los valores
individuales como los públicos son el resultado de procesos sociales, para
Cooley, los valores públicos son la clave para entender, tanto el funcionamiento
como la evolución de una sociedad, su pasado, su presente y sus posibles
evoluciones futuras.
Conclusiones.
En primer lugar, los valores son visibles a partir las creencias de una persona
o grupo de personas. Dicho de otro modo, los valores de un individuo o grupo
se mantienen en diferentes áreas tales como la social, la idiosincrática, la
biológica o la cultural, las cuales son mutuamente interdependientes entre si,
debido a que al modificarse una puede tener influencia en las otras.
REFERENCIAS
Chinese Culture Connection (1987). Chinese values and the search for
culture-free.
Gouveia, V.V., Martínez, E., Meira, M., & Milfont, T.L. (2001). A estrutura e o
conteúdo universais dos valores humanos: análise fatorial confirmatória da
tipologia de Schwartz. Estudos de Psicologia (Natal), 6(2), 133-142.