RESUMEN SEGUNDA HORA - Derecho Penal Humano con Eugenio Raúl Zaffaroni

La dogmática jurídica como método tiene sus implicaciones según su ubicación

geográfica, puesto que no es lo mismo hablar del tema en el hemisferio norte que en el
hemisferio sur, por lo tanto, esta ciencia se aplica como técnica la cual tiene un Objetivo
practico y este objetivo depende o puede variar si se encuentra en una sociedad
igualitaria o completamente desigual. La aplicación de la dogmática en el futuro de
américa latina puede estar encaminada al realismo, se espera la formación de operadores
jurídicos, con sensibilidad de lo real, capaces de programar una contención del poder
punitivo conforme a las características que se tienen en nuestras sociedades.

A mediados y finales del siglo XIX, en América Latina el derecho penal era positivista, era
la ideología de la republica oligarcas, las cuales se fueron debilitando con la incorporación
de estados populares, buscando el derecho penal basado en sistemas dogmáticos, con
técnicas que buscan mejorar el sistema anterior, referenciados por un sistema alemán
que ha sufrido los cambios políticos más dramáticos de la historia en una realidad
cambiante.

Nuestro modelo acusatorio escrito tiene más garantía que un modelo inquisitorio, mixto o
anglosajón en el que prima la técnica y el oficio sobre la misma ciencia. Un código penal
es gratis, en la medida en que no cuestan, salen rápido, mientras que el código procesal
cuesta y depende del presupuesto de acuerdo a los delitos. En América Latina no se tiene
establecido un orden de acuerdo a todos los delitos existentes, establecer un
procedimiento escrito para cada delito puede ser complejo, costoso, riguroso e inestable,
casi imposible de tramitar todo ese volumen conflictividad, llevando a ser una negociación
de tienda de abarrotes pidiendo descuento, resultando presos sin condena y condenados
sin juicio. Se debe degradar esas pequeñas contravenciones de acuerdo a el delito, como
pequeños hurtos y grandes hurtos.

La pena es un hecho político o de poder, nuestra función es filtrar el avance de poder

punitivo de mayor racionalidad, es igual a cualquier otro hecho de poder, tiene
demasiadas funciones formales e informales indistintas. La pena repercute en cualquiera
de las acciones penales que ni siquiera alcanzamos a imaginar, por su parte la
culpabilidad se da de acuerdo al grado de autonomía con el que actuamos. Raúl
Zaffaroni resalta que las cárceles de nuestra sociedad están llenas de los más torpes o
más burdos que por lo general son de clase baja, muchas veces no están ahí por el acto
sino por su vulnerabilidad, salidos de la miseria en donde solo muestran su cara para ser
captados. En una dictadura el genocida puede indicar que un diplomático lo apoyo, pero
es lo que hay porque si no se actúa de tal forma puede correr riesgo de vida hasta del
mismo juez.

Un sistema ideal penal Latino américo no existe, pueden existir principios generales por la
desigualdad de la sociedad, pero si nos podemos acercar a reducir la vulneración de los derechos
humanos.