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Base para Pintura
Base para Pintura
Glyptal, son resinas alquídicas comunes. Las pinturas glyptal crean una película
más gruesa en la superficie de la carrocería del automóvil. El recubrimiento final
no requiere pulido. Pero estas ventajas se reducen a nada debido al largo período
de secado de la pintura. A temperaturas de 20-25 grados, el recubrimiento se
endurece solo después de 24 horas, y la sensibilidad a los solventes y al impacto
mecánico se pierde solo después de 15-30 días. Las pinturas glyptales se basan
en resinas de obtenidas por la interacción de glicerina (alcohol trihidroxilado),
anhídrido ftálico y aceite vegetal.
COLORIMETRÍA
La composición de la pintura para autos
Cualquier pintura automotriz (esmalte automotriz) consiste en un pigmento, un
aglutinante, un agente de capa, un relleno, aditivos, un pigmento especial y un
solvente:
Entre los efectos que pueden lograrse mediante el uso de tecnologías de pintura
modernas, hay “brillo”, “mate”, “metálico”, “camaleón”, “nácar”.
El efecto mate se utiliza tanto para pintar la carrocería como para marcar
elementos individuales. Por lo general, se elige un esmalte alquídico para hacer
mate la superficie del cuerpo.
Aportar dureza, resistencia y durabilidad para soportar las agresiones a las que se
ve sometida cualquier pieza del vehículo (condiciones ambientales, pequeños
roces, etc).
La relación de mezcla y el número de manos que aplicar debe ser acorde a las
indicaciones del fabricante.
Son productos nocivos para la salud y el medio ambiente, con lo cual su aplicación
precisa de la utilización de EPIs (mascarilla con filtros químicos, guantes de nitrilo,
etc.) y de las medidas de prevención colectiva necesarias (sala de mezclas,
aplicación en cabinas de pintura o plenums, etc.)
Barnices estándar. Son las lacas de uso común en los talleres de carrocería.
Existen barnices muy económicos concebidos para el pintado de flotas de coches
o vehículos de ocasión y barnices de alta calidad destinados a conseguir mejores
acabados.
Barnices de alto brillo. Son los barnices de más calidad comercializados por las
distintas marcas. Están diseñados para obtener unos acabados extremadamente
brillantes sin necesidad de recurrir a técnicas más costosas o arriesgadas como el
doble barnizado, la aplicación de un mayor número de capas de barniz o la
sobrecarga.
Barnices mate. Estos barnices permiten obtener acabados totalmente mates o con
distintos niveles de brillo cuando son mezclados en proporciones concretas con
barnices con brillo. Actualmente, el desarrollo de estos barnices ha hecho que
algunas marcas obtengan los satinados a través de la mezcla de lacas mate
específicas en distintas proporciones sin necesidad de utilizar barnices con brillo.
Cuando una gama o marca determinada de barniz no dispone de productos de
acabado mate, el satinado se obtiene utilizando proporciones concretas de
productos específicos denominados matizantes.
Barnices para faros. Se trata de una laca diseñada para ser aplicada sobre las
tulipas de policarbonato de los faros delanteros y pilotos. Estas lacas evitan que se
alteren los niveles de luminosidad propios de una tulipa de origen. Además,
ofrecen una mejor adherencia sobre sustratos plásticos.
Lijado en seco y con interface con grano mínimo P-600, aunque se aconseja lijar o
afinar hasta P-800. Los bordes deben lijarse como mínimo con esponja ultrafina o
P-800. De esta forma queda garantizada la no aparición de rayas de lijado que,
además, restarían brillo al barniz. También se pueden utilizar los discos de lijado
tridimensionales más finos de cada fabricante.
Lijado al agua con grano mínimo P-1200, aunque es aconsejable lijar con P-1500
para evitar la aparición de rayas.
Por otro lado, cuando se realiza un parche perdido, además de estas opciones de
lijado, es fundamental complementar la preparación del soporte con un pulido
previo en la zona del difuminado que elimine restos de suciedad (para evitar que
tras el pulido del difuminado aparezcan cercos) y un posterior lijado con el
abrasivo tridimensional más fino que suministre el fabricante (utilizar otro abrasivo
más grueso puede hacer que se aprecien las rayas tras los procesos de pulido).
Por último, en ambos casos, el proceso de preparación del soporte finaliza con el
desengrasado de la pieza, por ejemplo con un limpiador como TEROSON VR 20,
y con el posterior soplado y eliminación de motas de polvo residuales con un paño
atrapapolvos.
El barniz para coche es la pintura que culmina el proceso de pintado del vehículo,
por lo que su relevancia dentro del proceso de reparación está más que evidente.
La correcta elección, mezcla y aplicación del barniz, y la preparación adecuada del
soporte específico son fundamentales para obtener unos acabados óptimos.
El proceso que debemos seguir para modificar el color del automóvil es largo y
trabajoso pero puede quedar hecho un auténtico pincel. Para ello, lo primero que
debemos hacer es lijar la superficie o, si se requiere, decaparla. El uso del
disolvente es la mejor solución para eliminar cualquier elemento que contenga
restos de aceite o suciedad. Es necesario para que los materiales de trabajo se
agarren con la fuerza suficiente.
Tras ello, aplicamos imprimación con pistola, en su color base (normalmente color
crema). Volvemos a lijar siguiendo de forma más concienzuda la silueta del
coche. Una vez esté completamente lijado, pasamos a la preparación de la
pintura. Para este proceso es necesario saber las proporcionas justas que
debemos elaborar y seguir las indicaciones del fabricante.
Eso sí, la primera de las capas tiene que estas más diluida en proporción
disolvente. Recordamos que entre capa y capa deben pasar unos 15 o 20
minutos. A partir de ahí y teniendo en cuenta los tiempos, podemos lanzar las
manos que creamos oportunas. Siempre, mínimo dos manos.
Tras haber pintado la última mano, la espera se debe alargar hasta en una hora.
De este modo, podremos comenzar con el proceso de lacado. Es recomendable,
si no se ha hecho antes, hacer pruebas en un trozo de chapa para no provocar
destrozos innecesarios. Es el proceso más delicado y el que más maña y
paciencia requiere. A esto hay que sumarle que gotea con mucha facilidad. De
aquí depende tanto el matiz como el brillo del coche.
Una vez lacado, hay que esperar a que se seque completamente. Es en este
momento donde hay que tener mayor cuidado con pelos, polvo, etc., ya que el
coche será un auténtico imán para ellos. Por ese motivo es importante que el
coche esté en un lugar ajeno a todas estas partículas.
Difuminado
Son dos las apreciaciones con respecto al difuminado, una es la degradación o
disminución de la aplicación del color, al pintar a cierta distancia de la pieza. De
esta forma la transición entre el color el resto de las piezas es más tenue.
Difuminado en seco
El difuminado en seco es diferente, no requiere de productos auxiliares como en la
técnica húmedo sobre húmedo. En esta técnica se respetan los tiempos de
secado en cada uno de los productos, entre aplicaciones.
La pistola de gravedad, funciona con aire comprimido por lo que necesita estar conectada
a un compresor de aire que mantenga la presión que la pistola necesite, que será
dependiendo de la pistola que utilicemos entre 2 y 3,5 bares, la presión se calcula
mediante el reloj manómetro que pondremos en la entrada de aire.
Las más actuales se denominan híbridas y trabajan con muy poca presión además de
ahorrar material, las pistolas que tienen la carga de pintura o taza arriba se llaman de
gravedad y las que la tienen abajo de succión, el inconvenientes de esta ultima es que no
aprovecha el producto a tope y gastan más pintura y aire, buenas para camiones o
autobuses pero para trabajos en coches o furgonetas pequeñas va mejor la de gravedad.
Para las imprimaciones utilizaremos una boquilla de un paso más ancho ya que la
imprimación es más espesa. Aunque lo recomendable es usar una pistola económica,
solo para imprimar.
Este modelo puede parecernos más practico y asequible, con un buen caballaje dará de
sobra para todo. Como se puede apreciar en la imagen tiene el calderin y el motor juntos,
en la parte inferior del calderin tienen una válvula para el vaciado de agua que va
generando, es importante vaciar el agua periódicamente, ya que suele acumular bastante
y termina saliendo por la pistola junto con la pintura.
Otra cosa que debemos de usar siempre es un regulador de aire que además es filtro de
líquidos y partículas, el aire del compresor es húmedo y esto no nos beneficia a la hora de
aplicar fondos y lacas, también hay que purgarlos periódicamente en la válvula sito en la
parte inferior para sacarles el agua.
La instalación sería: compresor de aire unido al calderín, de aquí a una goma o manguera
para aire comprimido, pasando por el regulador y finalmente mediante otra manguera de
quita y pon con una conexión tipo enchufe rápido a la pistola. Lo ideal es que el primer
tramo, desde el compresor al regulador sea mediante una instalación fija de tubería de
cobre. Al final de la instalación colocaremos el regulador y del regulador daremos servicio
a la pistola mediante la manguera para aire comprimido.
Equipo y materiales
En el área de chapa se realizan trabajos sobre piezas de la carrocería de distintos
materiales. Las tareas más significativas son las siguientes:
Desmontaje y montaje de los elementos atornillados del vehículo.
Reparación, conformado e igualado de daños sobre las piezas de metal.
Sustitución de elementos metálicos soldados.
Reparación, soldadura e igualado de piezas de plástico.
Sustitución de lunas.
Para poder llevar a cabo los trabajos mencionados, en primer lugar, es necesario
disponer de un carro provisto de utillaje que permita proceder al desmontaje de
componentes atornillados. Este carro ha de disponer, como mínimo, de las
siguientes herramientas:
Distintos juegos de destornilladores.
Un maletín de carraca de ¼.
Un kit de desmontaje de guarnecidos.
Grapas (de plástico, a ser posible, para evitar que al usarlas se generen
rayas en la pintura).
Alicates variados (universales, de punta fina, etc.).
Botadores.
Granetes.
Martillo de bola y de nailon.
Brocas de taladrado.
Distintos juegos de llaves fijas, de carraca y acodadas.
Para la reparación de chapa manual, ya sea de acero o de aluminio, es
imprescindible contar con mazas de hierro y de goma, martillos de carrocero,
palancas con distinta geometría, limas de batir y sufrideras o tases. Sin embargo,
para la reparación en zonas de difícil o nulo acceso, es necesario disponer de
un equipo multifunción SPOT, para la reparación de acero, y uno de descarga de
condensadores, para la reparación de aluminio.
Para sustituir elementos soldados de la carrocería, además de herramientas de
golpeo como los martillos, se necesita el siguiente utillaje básico:
Bancadas universales para reparaciones estructurales de mayor
envergadura o minibancadas para efectuar pequeños tiros en daños de
intensidad menor que llevan asociados deformación de componentes
anexos y que no se sustituyen, como largueros, pisos de maletero, etc.
Equipos auxiliares de medición, como los compases de varas o los gatos
hidráulicos expansores para la corrección de deformaciones.
Herramientas de corte, como radiales o sierras neumáticas.
Herramientas y útiles de limado y cepillado que permitan limar pinturas y
restos de metal. Para ello, se utilizan radiales, taladros o cepilladoras con
sus respectivos discos específicos para cada tarea.
Utillaje para retirar puntos de soldadura, como despunteadoras, brocas de
despunteado y soldaduras láser (láser cúter).
Herramientas para separar los paneles, como cinceles, cortafríos y buriles.
Útiles de sujeción, como mordazas autoblocantes.
Caballetes o bancos de trabajo donde colocar las piezas desmontadas.
Equipos de soldadura MAG para realizar las sustitución de piezas soldadas
de acero y equipos MIG cuando se trata de aluminio. Además, la sustitución
de elementos de aluminio obliga a disponer de un equipo de remachado
específico que permita la colocación de remaches estampados.
Herramientas para aplicar adhesivos, como pistolas de extrusión y otros
productos como antigravillas o ceras de cavidades.
Por otro lado, en la reparación de plásticos se utilizan algunas de las herramientas
ya mencionadas y otras distintas, como las pistolas de calor para soldar el plástico
o corregir deformaciones y fresas de limado para efectuar biseles.
En la reparación de lunas es fundamental que se disponga de herramienta de
eliminación del cordón de poliuretano. Las más tradicionales son el cable acerado
o trenzado y la herramienta quitalunas neumática. No obstante, existen en el
mercado herramientas novedosas, como TEROSON ET MultiCut o los equipos de
inducción, que mejoran el resultado y facilitan el trabajo del profesional del taller.
Por último, para efectuar los procesos de lijado e igualado en el área de carrocería
se utilizan rotorbitales de órbita 5 o 7 con plato duro o semiduro, aspiradores de
polvo, tacos y calas de lijado y espátulas de masillado.
Herramientas imprescindibles en el área de pintura
En el área de pintura se efectúan tareas de lijado y de aplicación de pinturas para
las que son imprescindibles los siguientes equipos:
Compresor de aire. Este equipo se comparte con el área de carrocería,
aunque en esta zona se podría llegar a prescindir de él si se trabajara con
herramientas que no sean neumáticas. En cambio, en pintura es un equipo
necesario para poder aplicar la pintura. Su cometido es el de absorber e
aire ambiental para comprimirlo y suministrarlo totalmente filtrado a las
distintas herramientas neumáticas.
Otros equipos necesarios en el taller son los equipos de pintado (cabinas o
plenums) y de secado. De entre ellos destacan la cabina de pintura y los equipos
de infrarrojos:
La cabina o el plenum de pintura es el equipo que posibilita que las pinturas
sean aplicadas en un entorno seguro y libre de polvo. Para ello, se hace
circular una corriente de aire en su interior que va pasando por distintos
filtros que retienen las partículas de polvo y la pintura pulverizada residual,
o eliminan la carga contaminante de estos productos (filtros de carbón
activo). Además, estos equipos también permiten el secado de la pintura
gracias a un quemador que integran.
Los infrarrojos están diseñados para llevar a cabo un secado más efectivo y
completo de la pintura que el generado por la cabina. Están indicados para
ser utilizados tanto dentro como fuera de la cabina. Su principal ventaja es
que reduce los tiempos de curado de la pintura y obtiene un secado que se
inicia desde el interior de la pintura hacia el exterior, lo cual significa que al
estar seco superficialmente ya se puede trabajar (el secado de la cabina es
producido desde el exterior hacia el interior, por lo que que esté seco
superficialmente no es indicativo de que se pueda trabajar).
Por otro lado, en lo referido a herramientas, en el área de pintura no puede faltar el
siguiente utillaje:
Máquinas de lijado rotorbitales. Se utilizan para lijar y afinar los distintos
productos de fondo y superficies antes de aplicar la pintura, por lo que
deben ser de órbita 3 y han de montar platos blandos con uso de interface
cuando corresponda.
Espátulas de masillado.
caballetes o bancos de trabajo.
Pistolas aerográficas. Son las encargadas de pulverizar la base de color o
el barniz sobre la superficie reparada del vehículo. Según la forma en la que
la pintura se introduce en el interior de la pistola, quedan clasificadas en
pistolas de succión o de gravedad, de manera que estas últimas son las
más utilizadas en los talleres de vehículos. A su vez, existen tres tipos de
pistolas según su funcionamiento: convencionales, HVLP (high volume low
pressure) e híbridas.
Útiles de enmascarado, como los cúteres o los carros dispensadores que
faciliten la protección de ciertos elementos de la carrocería más complejos
de empapelar.
Máquina de básicos en la que queden dispuestas de forma ordenada todas
las bases de color. Esta máquina también permite que se pueda mover
cada uno de los botes de pintura antes de iniciar la mezcla del color.
Ordenador con software del fabricante de pintura. Esta herramienta permite
disponer de la formulación de todos los colores y sus variantes de los
distintos fabricantes, así como de información adicional (FDS de los
distintos productos, fichas técnicas de utilización, etc.). El conjunto se
completa con cartas de colores para la comprobación del color de repintado
escogido con el del vehículo y, opcionalmente, con otras herramientas de
comprobación que facilitan las tareas de colorimetría del pintor.
Útiles para pesar y mezclar la pintura. Básicamente hay que disponer de
una balanza bien calibrada para efectuar el pesaje de los distintos básicos
que integra cualquier color, de vasos donde introducir la pintura y reglas o
útiles para mover la pintura.
Secadores manuales de pintura al agua denominados venturi. Es un tipo de
pistola que acelera el proceso de evaporación de la pintura al agua.
Pulidoras y útiles de corrección defectos de pintado. Tras los procesos de
pintado es común que pueda aparecer algún tipo de defecto de pintado
como motas de polvo o descuelgues. Para eliminar el defecto se emplean
abrasivos, al agua o en seco, colocados sobre distintos soportes o
máquinas, mientras que la pulidora se utiliza para devolver el brillo a la
superficie
Lámpara de secado por onda infrarroja
Las ondas infrarrojas son un tipo de radiación electromagnética que no es
perceptible por el ojo humano. Sin embargo, se caracterizan por su capacidad de
emitir calor y calentar la superficie. Es por ello por lo que este sistema de secado
se utiliza desde hace años para el secado de algunas de las distintas pinturas de
fondo.
El equipo puede ser móvil o corredero a través de carriles montados sobre cabinas
y plenums. Dispone de una o varias carcasas preparadas para emitir ondas
infrarrojas, se puede ajustar su posición en altura y ángulo e integra un panel de
regulación que permite ajustar el funcionamiento del equipo.
Dentro de las carcasas se alojan las lámparas de onda infrarroja y un reflector que
puede ser elíptico o parabólico. Este componente suele estar fabricado en acero
inoxidable, y posibilita que las ondas emitidas se concentren y abarquen una
extensión determinada.
Por otro lado, los tipo de onda que emiten estas lámparas quedan clasificados
como emisores de onda larga, media o corta. De estas tres opciones, todos
ofrecen una temperatura de secado de unos 100 ºC que posibilita que el curado
de la película de pintura sea el ideal para las pinturas actuales. A pesar de ello, el
de onda corta es el que se ha de utilizar en el taller, ya que presenta las siguientes
ventajas respecto al resto:
Mayor penetración del calor sobre la capa de pintura. Esto permite que el secado
se produzca desde el interior de la pintura hacia el exterior, lo que supone que,
una vez que esté seca la superficie, se podrá trabajar sobre ella sin ningún
problema; al contrario de lo que ocurre con el secado efectuado con el horno de la
cabina de pintura.
Alcanza rápidamente la temperatura de secado, lo que reduce el tiempo empleado
para ello, y permite agilizar las reparaciones y la corrección de defectos de
pintado.
A pesar de estas ventajas, hay que tener en cuenta que el uso de estos equipos
supone un gasto adicional. Además, ante determinados sustratos, como es el caso
de los plásticos y las superficies masilladas, es fundamental respetar ciertas
indicaciones (controlar los tiempos de evaporación y secado, respetar la distancia
de secado, etc.) para evitar que aparezcan daños.
Igual que los infrarrojos, este equipo de secado se comercializa en carros móviles
y está indicado para reparaciones de menor envergadura. Las lámparas utilizadas
disponen de reflexión dicroica, son más sensibles, requieren un tiempo de
precalentamiento antes de utilizarla (unos 2 minutos) y un tiempo de enfriamiento
tras su uso (unos 10 minutos).