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IGLESIA JESUS LA LUZ DEL MUNDO

CASAS DE DISCIPULADO
SERIE 3: VIDA ESPIRITUAL
TEMA 2: LA ORACIÓN

BASE BIBLICA: MATEO 6:9-13

Indudablemente la oración es el único medio que Dios ha establecido para cambiar


vidas, familias, naciones y continentes. El Señor nunca le enseñó a sus discípulos como
predicar, pero si como orar, Él dio instrucciones claras y sencillas de cómo debería
desarrollarse una oración eficaz.

¿QUE ES LA ORACIÓN?

La oración es hablar con Dios, es presentar nuestras necesidades, abrir el corazón


delante del Señor; es decirle y reconocer nuestra necesidad de Él, es expresar las
cosas más profundas que hay en nuestro ser, confesarle nuestras luchas, tentaciones y
problemas.

La oración es la llave maestra que abre la puerta para comunicarnos directamente con
Dios. Cuando iniciamos la vida cristiana es importante entender este principio y
enseñarle al nuevo creyente la importancia de la oración para tener una vida de éxito.

ALGUNOS BENEFICIOS DE LA ORACIÓN

1. Activa los ángeles para que actúen a tu favor:


Hechos 12:7 Los apóstoles en los momentos en que estuvieron en la cárcel
vieron ángeles que los sacaron libres. Los ángeles actúan a través de la oración,
cuando empezamos a orar los ángeles se mueven y nos dan la victoria en el
nombre de Cristo Jesús; por eso, nosotros tenemos que empezar a mover el
poder de los ángeles a través de la oración, ellos para poder actuar, necesitan
que nosotros pidamos las cosas a Dios.

2. Experimentaras cambios en tu carácter:


Salmos 139:23-24. Los cambios que comenzamos a experimentar son en esos
momentos íntimos de oración, diciéndole al Señor: “Señor yo te necesito, quiero
estar contigo”. Muchas veces sentimos ira, resentimiento y dolor por alguna
situación y queremos vengarnos, pero es allí cuando el Señor en oración cambia
ese resentimiento en perdón, el odio en amor y el Espíritu Santo toma el control
de nuestras emociones, dándonos la victoria sobre ellas.

3. Quita los temores:


Salmo 34:4. Algunas veces sentimos miedo al fracaso, a que las cosas no
salgan; pero después de un tiempo de oración algo pasará en tu vida y
empezarás a llenarte de seguridad, de autoridad y de confianza porque en la
oración somos revestidos de la unción del Espíritu Santo, y tendrás la fe para
derrotar todo obstáculo que se presente delante de ti.
¿CUANDO NO RECIBIMOS RESPUESTA?

1. Cuando estamos en pecado:


Salmo 66:18 El pecado impide que la oración llegue a los cielos. Por eso lo
primero que tenemos que hacer cuando necesitamos que Dios nos bendiga es
pasar por un genuino arrepentimiento, una limpieza en nuestras vidas.

2. Cuando la oración va en contra de la voluntad de Dios:


1 Juan 5:14. Cuando oremos no es para decirle al Señor lo que tiene que hacer,
es para preguntarle ¿Qué debo hacer yo? Y estar dispuesto a atender Su
voluntad.

3. Cuando oramos con rebeldía y queja:


Dios nunca responde la oración de rebeldía y de queja, tenemos que ser muy
cuidadosos en la forma en que nos expresamos delante de Dios, Moisés en una
ocasión le dijo al Señor: “Señor si no vas a perdonar a este pueblo quítame la
vida” y el Señor le habló y dijo: “Moisés, al que pecare ese morirá y el que no,
no tendrá porque sufrir, no me pidas eso”. Habrá momentos en que Dios nos
diga no.

ORACIONES EFICACES

1. La oración que se hace con un corazón sincero:


David dice” oye o Jehová la causa justa, está atento a mi corazón escucha mi
oración hecha de labios sin engaño” (Salmos 17:1) La oración no son palabras,
son las expresiones de lo que hay en nuestro corazón. Cuando oramos con una
actitud correcta Dios comienza a moverse y a hacer cosas sobrenaturales.

2. Con santidad:
De corazón limpio no para engañar ni para destruir, no para quebrantar la
palabra de Dios, sino para obedecerla.

3. Pedir que la palabra de Dios se cumpla:


La oración que Dios responde es cuando tu le dices Señor prospérame, porque
tu palabra dice: “tu suplirás mis necesidades”, o sáname, porque tu palabra
dice: “por tu llaga hemos sido nosotros curados”

4. Es importante que nosotros oremos involucrando todo nuestro ser:


Es orar con inteligencia, con entendimiento, con el corazón A veces oramos con
nuestra mente en un lugar y nuestra boca está expresando. Lo que nuestra boca
hable con Dios debe concordar con lo que hay en nuestro corazón.

5. Solo se recibe respuesta a la oración cuando se pide en el Nombre de


Jesús:
Decir en el nombre de Jesús es decir tengo a Cristo en mi corazón, mi vida está
rendida a Jesús y todo lo que hago y vivo lo vivo para Él. La palabra dice que no
recibimos porque no sabemos pedir, y hace énfasis en que todo lo que pidamos
debe ser en el nombre de Jesús.

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