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INTRODUCCIÓN

Cuando hablamos de las características de los tejidos de las


plantas tenemos que tener en mente la historia ocurrida hace
500 millones de años, cuando las plantas conquistaron la tierra.
El medio terrestre ofrece ventajas respecto al medio acuático:
más horas y más intensidad de luz, y mayor circulación libre de
CO2. Pero a cambio las plantas tienen que solventar nuevas
dificultades, casi todas relacionadas con la obtención y
retención de agua, con el mantenimiento de un porte erguido
en el aire y también con la dispersión de las semillas en medios
aéreos. Para ello las plantas se hacen más complejas: agrupan
sus células y las especializan para formar tejidos con funciones
especializadas que son capaces de hacer frente a estas
nuevas dificultades. Atendiendo a razones topográficas, los
tejidos se agrupan en sistemas de tejidos (Sachs, 1875), que
se usan para resaltar la organización de los tejidos en
entidades más amplias. Los sistemas de tejidos se agrupan
para formar los órganos.
Tradicionalmente los tejidos de las plantas se agrupan en tres
sistemas de tejidos: sistema de protección (epidermis y
peridermis), fundamental (parénquima, colénquima y
esclerénquima) y vascular (xilema y floema). El sistema de
protección permite superar un medio ambiente variable y
seco, aparece un sistema protector formado por dos tejidos:
la epidermis y la peridermis. Las células de estos tejidos se
revisten de cutina y suberina para disminuir la pérdida de agua,
y aparecen los estomas en la epidermis para controlar la
transpiración y regular el intercambio gaseoso. El sistema
fundamental lleva a cabo funciones metabólicas y de sostén.
Una gran cantidad del tejido de las plantas es el parénquima, el
cual realizará diversas funciones, desde la fotosíntesis hasta el
almacén de sustancias. Para mantenerse erguidas sobre la
tierra y mantener las forma y estructura de muchos órganos las
plantas tienen un sistema de sostén representado por dos
tejidos: colénquima y otro más especializado
denominado esclerénquima. La función de mantener el cuerpo
de la planta erecto pasará a los sistemas vasculares en plantas
de mayor porte. Sin embargo, uno de los hechos más
relevantes en la evolución de las plantas terrestres es la
aparición de un sistema vascular capaz de comunicar todos
los órganos del cuerpo de la planta, formado por dos
tejidos: xilema, que conduce mayormente agua, y floema, que
conduce principalmente sustancias orgánicas en solución. Sólo
hablamos de verdaderos tejidos conductores en las plantas
vasculares.
Los tejidos también se pueden agrupar de otras formas. Por
ejemplo, por la diversidad celular que los componen. Así, hay
tejidos simples o sencillos que sólo contienen un tipo celular,
como los parénquimas, mientras que otros son complejos como
los de protección o conductores.
Los tejidos y sistemas de tejidos se agrupan para formar
órganos que pueden ser vegetativos, como la raíz(órgano de
captación de agua y sales), tallo (órgano para el transporte,
sostén y a veces realiza la fotosíntesis) y hoja (órgano que
capta la energía solar, realiza la fotosíntesis y es el principal
responsable de la regulación hídrica de la planta), o bien
reproductivos como la flory sus derivados, la semilla y el fruto.
Los sistemas de tejidos se distribuyen en modelos
característicos dependiendo del órgano.

CONCLUSIONES
·   Se pudo observar que al aplicar el colorante de tionina tanto en
dicotiledóneas como en monocotiledóneas se aprecia de una
mejor forma los diferentes tejidos a diferencias de los otros
colorantes.
·   
     El desarrollo de los cortes a las diferentes muestras vegetales
fueron de gran importancia ya que permitieron reconocer las
diferentes estructuras de los diferentes tejidos.
·    
    Los tejidos vegetales presentes en las plantas superiores,
realizan funciones  específicas que desempeñan de acuerdo a
su localización. Lo que permite identificar los tejidos
meristemáticos a través de la estimulación del crecimiento y
desarrollo de nuevas estructuras vegetales, el transporte de
agua y nutrientes que realizan los tejidos de conducción, y la
función protectora ante agentes internos y externos que
lesionan el cuerpo vegetal. Distinguieron las principales
características que diferencian el tejido de una planta
monocotiledónea y plantas dicotiledóneas.
LA CÉLULA VEGETAL

La célula es la unidad biológica, funcional y estructural básica de cualquier ser


viviente y a la vez, la célula es el organismo más pequeño de todos, capaz de
realizar las funciones de nutrición, relación y reproducción.
Todo ser vivo está formado por células. Absolutamente todos los organismos,
los tejidos que los componen y los órganos internos que los forman. La piel, el
cabello, los ojos, los pulmones, el hígado y todos los demás.
La parte de la Botánica que se especializa en el estudio de la Célula es la
Citología Vegetal. El estudio de la célula es de gran importancia, puesto que es
la unidad de estructura, el asiento de los procesos fisiológicos vitales del
organismo y, en el caso de las células reproductoras, de la transmisión de los
materiales hereditarios de una generación a otra.
Cada una de las células vegetales es, al menos en parte, autosuficiente, y está
aislada de sus vecinas por una membrana celular o plasmática y por una pared
celular. Membrana y pared garantizan a las células la realización de sus
funciones; al mismo tiempo, unas conexiones citoplásmicas llamadas
plasmodesmos mantienen la comunicación con las células contiguas.
Una célula vegetal es el tipo de célula eucariota de la que están compuestos
muchos tejidos vegetales. A menudo, es descrita con los rasgos de una célula
del parénquima de una planta vascular. Pero sus características no pueden generalizarse
al resto de las células meristemáticas o adultas de una planta y menos aún a las de los
muy diversos organismos imprecisamente llamados vegetales.
Las células adultas de las plantas terrestres presentan rasgos comunes, convergentes con
las de otros organismos sésiles, fijos al sustrato, o pasivos, propios del plancton, de
alimentación osmótrofa, por absorción, como es el caso de los hongos, pseudohongos y
de muchas algas. Esos rasgos comunes se han desarrollado independientemente a partir
de protistas unicelulares fagótrofos desnudos (sin pared celular). Todos los eucariontes
osmótrofos tienden a basar su solidez, sobre todo cuando alcanzan la pluricelularidad, en
la turgencia, que logran gracias al desarrollo de paredes celulares resistentes a la tensión,
en combinación con la presión osmótica del protoplasma, la célula viva. Así, las paredes
celulares son comunes a los hongos y protistas de modo de vida equivalente, que se
alimentan por absorción osmótica de sustancias orgánicas, y a las plantas y algas, que
toman disueltas sales minerales del medio y realizan la fotosíntesis. Y también cabe
agregar que no tienen centriolos en su interior.

Sus tipos
 Las células del parénquima son células vivas que tienen funciones que van desde el
almacenamiento y el soporte hasta la fotosíntesis y el transporte de nutrientes en el
floema (células de transferencia). Aparte del xilema y el floema en sus haces
vasculares, las hojas se componen principalmente de células del parénquima. Algunas
células del parénquima están especializadas en la penetración de la luz y en la
regulación del intercambio gaseoso, como en la epidermis, pero otras están entre las
menos especializadas del tejido vegetal y pueden permanecer totipotentes, capaces
de dividirse para producir nuevas poblaciones de células indiferenciadas a lo largo de
sus vidas. Las células parenquimatosas tienen paredes primarias delgadas y
permeables que permiten el transporte de pequeñas moléculas entre ellas, y
su citoplasma es responsable de una amplia gama de funciones bioquímicas como la
secreción de néctar o la fabricación de productos secundarios que desalientan a
los herbívoros. Las células del parénquima que contienen muchos cloroplastos y
participan principalmente en la fotosíntesis se llaman células del clorenquima. Otras,
como la mayoría de las células del parénquima en los tubérculos de patata y
los cotiledones de las semillas de las leguminosas, tienen una función de
almacenamiento.1
Corte transversal de una hoja que muestra varios tipos de células vegetales

 Las células del colénquima: las células del colénquima están vivas en la madurez y
solo tienen una pared primaria. Estas células maduran a partir de derivados
del meristema que inicialmente se parecen al parénquima, pero las diferencias se
hacen evidentes rápidamente. Los plastidios no se desarrollan, y el aparato secretor
(ER y Golgi) prolifera para secretar la pared primaria adicional. La pared es más
comúnmente más gruesa en las esquinas, donde tres o más células entran en
contacto, y más delgada donde solo dos células entran en contacto, aunque son
posibles otras disposiciones del engrosamiento de la pared.
La pectina y la hemicelulosa son los constituyentes dominantes de las paredes
celulares del colénquima de las dicotiledóneas angiospermas, y pueden contener solo
el 20% de celulosa en las Petasites. 2 Las células del coléenquima son típicamente
bastante alargadas, y pueden dividirse transversalmente para dar un aspecto septado.
El papel de este tipo de células es apoyar a la planta en ejes que siguen creciendo en
longitud y conferir flexibilidad y resistencia a la tracción en los tejidos. La pared
primaria carece de lignina que la hace resistente y rígida, por lo que este tipo de célula
proporciona lo que podría llamarse un soporte plástico. Proporciona flexibilidad a
los tallos jóvenes, a los pecíolos y a los nervios de las hojas. Los hilos en el apio son
colénquima.
 Células del esclerénquima: las células de esclerénquima (del griego skleros, duro) son
células duras con una función de apoyo mecánico. Son de dos tipos
amplios: esclereidas o células duras y fibras. Las células desarrollan una pared celular
secundaria extensa que se deposita en el interior de la pared celular primaria. La
pared secundaria está impregnada con lignina, haciéndola dura e impermeable al
agua. Por lo tanto, estas células no pueden sobrevivir por mucho tiempo ya que no
pueden intercambiar suficiente material para mantener el metabolismo activo. Las
células de esclerénquima están típicamente muertas en la madurez funcional y les
falta el citoplasma, dejando una cavidad central vacía.
Las funciones de las células escleróticas (células duras que dan a las hojas o frutos
una textura arenosa) incluyen la de desalentar a los herbívoros, al dañar los conductos
digestivos en las primeras etapas de las larvas de los insectos y la protección física
(un tejido sólido de células escleróticas duras forma la pared del hueso de un
melocotón y de muchas otras frutas). Las funciones de las fibras incluyen el suministro
de soporte de carga y la resistencia a la tracción de las hojas y tallos de las plantas
herbáceas. 1 Las fibras del esclerénquima no están implicadas en la conducción, ya
sea de agua y nutrientes (como en el xilema) o de compuestos de carbono (como en el
floema), pero es probable que hayan evolucionado como modificaciones de las células
iniciales del xilema y del floema en las primeras plantas .
Tipos de tejido

células epidérmicas de Arabidopsis thaliana

Los tipos principales de células se diferencian de las células meristemáticas (análogas a


las células madre de los animales) para formar las estructuras tisulares de
la raíz, hojas, flores y estructuras reproductivas.
Células del xilema:3 son células alargadas con espesamiento secundario lignificado de las
paredes celulares. Las células del xylema se especializan para la conducción del agua, y
primero aparecieron en las plantas durante su transición a la tierra en el período
Silúrico hace más de 425 millones de años (véase Cooksonia). La posesión del xilema
define a las plantas vasculares o traqueofitas. Las traqueidas del xilema son células de
xilema alargadas y puntiagudas, las más simples de las cuales tienen paredes celulares
primarias continuas y engrosamientos de paredes secundarias lignificadas en forma de
anillos, aros o redes reticulares. Las traqueidas más complejas con perforaciones similares
a válvulas, llamadas fosas, distinguen a las gimnospermas. Las helechos y
otros pteridófilos y las gimnospermas solo tienen xilema, mientras que
las angiospermas también tienen vasos del xilema. Las células del recipiente son células
de xilema huecas sin paredes y que están alineadas extremo con extremo para formar
tubos continuos largos. Los briofitas carecen de verdaderas células de xilema, pero
su Esporófito tiene un tejido que conduce el agua conocido como el hidroma que está
compuesto de células alargadas de construcción más sencilla.
Floema: es un tejido especializado para el transporte de nutrientes en plantas superiores.
Las células del floema transportan principalmente sacarosa a lo largo de los gradientes de
presión generados por la ósmosis. Este fenómeno se llama translocación. El floema se
compone de dos tipos de células, el tubo criboso y las células asociadas íntimamente. Las
células del tubo criboso carecen de núcleos celulares y ribosomas y su metabolismo y
funciones están regulados por las células complementarias nucleadas adyacentes. Los
tubos cribosos se unen de extremo a extremo con placas extremas perforadas entre las
denominadas placas del tamiz, que permiten el transporte del fotosintato entre los
elementos de tamiz. Las células complementarias, conectadas a los tubos de tamiz a
través del plasmodesmo, son responsables de cargar el floema con azúcares.
Los briofitos tienen un falso floema, pero los musgo esporófitos tienen un tejido más simple
con función análoga conocida como el leptoma.
Una micrografía electrónica de las células epidérmicas de una hoja de Brassica chinensis. Los
estomas también son visibles.

Las células epidérmicas de las plantas son células especializadas del parénquima que
cubren las superficies externas de las hojas, tallos y raíces. Las células epidérmicas de los
órganos aéreos surgen de la capa superficial de células conocidas como la "túnica" (capas
L1 y L2) que cubre el vértice de la planta. La corteza y los tejidos vasculares surgen de la
capa más interna del ápice del brote conocido como el "corpus" (capa L3). La epidermis de
las raíces se origina de la capa de células existente inmediatamente debajo de la caliptra
de la raíz.
La epidermis de todos los órganos aéreos, pero no de las raíces, se cubre con una cutícula
de la planta hecha de poliéster y de polímero de hidrocarburo (cután) con una capa
superficial de cera epicuticular. Se cree que las células epidérmicas del brote primario son
las únicas células vegetales con la capacidad bioquímica para sintetizar la cutina. 4 En la
epidermis puede haber varios tipos de células. Entre ellas destacan las células de
protección estomática, los pelos glandulares y los pelos radiculares de las raíces primarias.
En la epidermis de los brotes de la mayoría de las plantas, solo las células de guarda
tienen cloroplastocontrato
s. Los cloroplastos contienen la clorofila, el pigmento verde necesario para la fotosíntesis.

Conclusión
Después de haber realizado nuestro informe, ya sabemos que los seres vivos
están compuestos por células, y que éstas son su unidad básica.

Además, conocemos los distintos tipos de células que existen: procariotas y


eucariotas; y sabemos que estas últimas pueden ser células animales o
vegetales. Sabiendo que nuestra célula en específica a trabajar fue la célula
vegetal, la cual observamos su definición, función, etc.

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