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PHOTOSHOP:

Domina los Conceptos Básicos 2

9 técnicas para llevar tus habilidades


de Photoshop al siguiente nivel

James Carren
© 2018 Sender Publishing
Contenido:

Introducción
Capítulo 1: Galería de filtros

Capítulo 2: Ediciones simples de retratos


Capítulo 3: Uso de la herramienta licuar
para un retoque más avanzado + otras
técnicas Capítulo 4: Coloración
Capítulo 5: Realce del color

Capítulo 6: Eliminación del fondo


Capítulo 7: Camera RAW
Capítulo 8: HDR
Capítulo 9: ¿Qué es un objeto inteligente? +

Filtros inteligentes + Edición por lotes


Conclusión
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Introducción

Bienvenido a la segunda entrega de mi libro sobre Photoshop, o más


específicamente, sobre el uso del Photoshop que se encuentra en Adobe
Creative Cloud. Otras versiones recientes de Photoshop también serán
similares, pero trato de mantenerme bastante actualizado.
En la primera edición de Photoshop discutimos todos los aspectos básicos:
cómo familiarizarse con el espacio de trabajo y configurarlo para optimizar tu
propio flujo de trabajo personal, qué herramientas están disponibles, para qué
sirven y cómo aplicarlas. Una vez establecida la orientación, se discutió la
preparación de la imagen. De paso, quiero hablar nuevamente de la
importancia que tiene el estar seguro de que tu imagen esté bien preparada
antes de seguir adelante con cualquier tipo de edición o cambio. Como sabes,
ese es el pilar fundamental para crear una imagen que será de la más alta
resolución. El tipo de archivo inicial influye en todo esto, así que ten cuidado
desde el principio y tendrás un buen comienzo.
El otro pilar fundamental discutido en el libro anterior fueron las capas. Las
capas evitan que trabajes directamente sobre la imagen, lo que quiere decir
que, si lo necesitas, puedes utilizar la herramienta historial para volver al
principio. Esta herramienta también permite apagar y encender las capas,
permitiéndote ver lo que has hecho y si está funcionando o no. Las capas van
a ser tus mejores amigas, así que úsalas, y hazlo a menudo. Etiqueta siempre
todo lo que haces de forma clara y precisa para que sepas a qué se refiere
cada capa. Ahora que has tenido una actualización de la configuración de tu
imagen, pasemos a lo que se tratará en este libro.
▪ La Galería de filtros; dónde está y por qué es importante. La
Galería de filtros se puede utilizar para todo tipo de cosas, desde
hacer que la edición sea mucho más fácil, hacer que una foto
parezca más natural, hasta divertidas y locas aplicaciones de bellas
artes.
▪ Edición simple de retratos; nada elegante, esta sección incluye
información sobre cómo eliminar el enrojecimiento de la piel,
cómo suavizar las arrugas o los poros grandes, y cómo eliminar
los ojos rojos y los cabellos sueltos. Básicamente, se trata de tomar
el atractivo natural del sujeto y hacerlo resaltar sin que parezca
que se han hecho correcciones.
▪ Retoque más avanzado de retratos; esto no es para el retrato que
tomas todos los días. Este capítulo se centra en lo que haces
cuando trabajas con fotos de belleza o de moda. Comienza con el
uso adecuado de la herramienta licuar, que permite al usuario
remodelar los cuerpos y los rasgos faciales tan sutil o
dramáticamente como sea necesario. También hay otras técnicas
que mencionaré que dan ese aspecto de alta gama y aerografiado.
▪ Luego del retrato, hay un capítulo sobre la coloración.
Coloración es una especie de retroceso a la época de los inicios de
fotografía, donde los fotógrafos pintaban las fotografías en blanco
y negro para que parecieran a todo color. Hoy en día, la técnica es
muy parecida, excepto que es mucho más fácil y los errores se
pueden corregir más fácilmente con la ayuda de Photoshop.
Discutiré cómo colorear porciones seleccionadas de una imagen,
así como todo el conjunto.
▪ El realce de color simplemente se refiere a tomar lo que tienes en
una imagen de color existente y sacarle el máximo provecho.
Implica asegurarse de que los colores y los niveles de luz sean
limpios y adecuadamente vibrantes, sin estar demasiado saturados.
Es esencialmente un retoque básico para una fotografía de un
paisaje o de naturaleza muerta.
▪ La eliminación de fondos es mucho más sencilla de lo que
podrías pensar. También es una habilidad útil, especialmente en lo
que tiene que ver con el mundo de la fotografía de productos y del
collage.
▪ Camera RAW, por supuesto, tiene su propio capítulo, porque es
absolutamente importante para crear buenas fotografías. Si eres un
profesional en ciernes, es importante fotografiar siempre en
formato RAW y adquirir el hábito de por lo menos realizar
desarrollos preliminares dentro del cuadro de diálogo Camera
RAW. Esto te permitirá sacar el máximo provecho de la imagen
base, y luego podrás aplicar otras cosas como filtros y efectos
fabulosos dentro del programa principal de Photoshop.
▪ HDR es un sistema de imágenes de alta definición, que consiste
en combinar varias exposiciones para obtener la mejor exposición
general de la escena. Las imágenes son nítidas y casi surrealistas.
Lo creas o no, este proceso es increíblemente simple de lograr.
▪ Los objetos inteligentes te permiten renderizar elementos 3D
dentro de la imagen. Explicaré qué son y cómo funcionan, así
como algunos ejemplos fotográficos para su uso. Por último, la
vida será mucho más fácil cuando entiendas cómo utilizar el
cuadro de diálogo Edición por lotes en tu beneficio, para que te
ayude a gestionar tus configuraciones predeterminadas.

Dicho esto, pasemos al primer capítulo, sobre la Galería de filtros.


Muchas gracias por darle una oportunidad a este audiolibro, espero
sinceramente que lo disfrutes. Lo único que te pido es que, por favor, dejes
una breve reseña después de escucharlo. Te lo agradecería mucho.
Capítulo 1:
Galería de filtros

La Galería de filtros se encuentra en la barra de navegación de Photoshop.


Tiene su propio lugar en cada versión del programa. Al desplegar el menú,
verás una variedad de opciones. Por supuesto, hay una selección que te
permitirá aplicar el último filtro que utilizaste junto con todos sus ajustes a la
siguiente fotografía en la que estés trabajando. He descubierto que esta
opción, en mi caso particular, no me es funcional, a menos que la
configuración de todas las fotos en las que esté trabajando sea casi la misma.
Al hacer clic en la Galería principal de filtros, se abrirá un cuadro de diálogo
con todos los filtros que se pueden utilizar, y automáticamente aparecerá en
la pantalla el que hayas utilizado más recientemente. Me gusta ir
directamente a toda la galería de filtros al experimentar, superponer capas, o
cuando no estoy seguro de qué efecto exactamente estoy buscando. Por otra
parte, existen otros filtros de uso común que se utilizan principalmente como
correcciones o con otros procesos, y se clasifican en submenús. Si entras al
submenú, aparece otra lista desplegable con los filtros. Algunos de ellos
pueden requerir algunas pruebas, pero la mayoría son bastante
autoexplicativos. Sin embargo, si no estás seguro sobre alguna selección, no
te preocupes. Ya sea que elijas ir a la Galería de filtros en su totalidad o
utilizar los menús desplegables, aparecerá un cuadro de diálogo que te
permitirá ver la imagen actual en una ventana, de modo que a medida que
ajustes los controles deslizantes, podrás ver los cambios que estás realizando
antes de que se apliquen.
En la galería principal, todo está agrupado bajo un título de categoría para
hacer las cosas más fáciles. Verás términos como: Artístico, Pinceladas,
Distorsión, Dibujo, Estilismo y Textura. Algunas categorías tienen más filtros
que otras, y Photoshop siempre viene con una cantidad preestablecida de
filtros, aunque a medida que avanzas en tus habilidades, podrás elegir
descargar más de otras fuentes y colocarlos en tu galería.
Aunque cada filtro aparece representado con una pequeña miniatura, si tienes
tiempo, te sugeriría que juegues con el diálogo y apliques unos cuantos a una
imagen de prueba solo para ver qué se te ocurre. Igual que con los modos de
mezcla, las posibilidades son casi infinitas. No te olvides de jugar con los
controles deslizantes proporcionados y ver cómo eso también altera el efecto.
Algunos filtros, dependiendo de su complejidad e intensidad, pueden tardar
un minuto en cargarse una vez que los has aplicado. Es normal, solo ten
paciencia. Además de ciertos ajustes de lentes y otras correcciones que
puedes hacer, muchos artistas utilizan la Galería de filtros para alterar
completamente el aspecto y la sensación de la imagen. Si solo utilizas un
filtro, el efecto puede ser bastante obvio, pero después de varias capas, se
puede transformar para que parezca una pintura, un grabado o un collage.
Debajo de la galería principal de filtros hay un filtro llamado Ángulo ancho
adaptable, que se utiliza para corregir o añadir cualquier aspecto de distorsión
de la lente que puedas tener o desear. Si no estás seguro de lo que hace una
herramienta en este cuadro de diálogo, solo tienes que pasar el ratón por
encima de ella y Photoshop te ayudará. Ángulo ancho adaptable se usa
principalmente para añadir ese toque artístico y distorsionado. Si realmente
tienes una aberración que no puedes soportar, te sugiero que uses el filtro de
Corrección del lente en su lugar.
Más adelante en el libro discutiremos sobre Camera Raw y por qué me
encanta, pero por ahora debes saber que justo debajo del Ángulo ancho
adaptable está el filtro Camera Raw. Es particularmente útil si tienes un
archivo RAW y has hecho las correcciones, cerraste el cuadro de diálogo, lo
abriste en el espacio de trabajo principal de Photoshop y te has dado cuenta
de que has hecho algo mal, o que no lo has hecho tan bien como pensabas
inicialmente.
Ahora bien, sé que ya hemos discutido el filtro Ángulo ancho adaptable, pero
también está el filtro Corrección del lente, que es mucho más específico.
Mientras que con el Ángulo ancho adaptable eliges añadir cualquier
distorsión del lente, aquí se trata de corregir cualquier error o distorsión
extraña que tu lente pueda haber causado. Este filtro es una herramienta
realmente buena para usar todo el tiempo, e incluso sugeriría que ejecutes un
filtro de Corrección del lente en todas tus imágenes finales, después de que se
hayan hecho las correcciones básicas.
La forma en que funciona la Corrección del lente es muy específica.
Comenzando por la pestaña Corrección automática, puedes seleccionar la
marca y el modelo de la cámara, así como el modelo de lente con el que
tomaste la imagen. Esto ayuda al programa a identificar los problemas
comunes que esa cámara o lente en particular puede tener y corregirlos. A
medida que añadas perfiles de lentes, Photoshop los guardará para que más
adelante puedas seleccionar el perfil correcto en el menú desplegable.
Luego te moverás a la pestaña Correcciones personalizadas, donde podrás
corregir aspectos como la distorsión geométrica, la aberración cromática
(también conocida como franjas de color; algunos lentes, por ejemplo, se
sabe que son ligeramente magenta o verde, etc.), añadir una viñeta a tu
imagen (simplemente no lo hagas, utiliza siempre el control deslizante y
utilízalo para eliminar cualquier viñeta que puedas tener) o corregir la
perspectiva con las herramientas de transformación.
El Punto de fuga se usa para corregir la perspectiva. Como siempre, antes de
empezar el Punto de fuga, debes crear una nueva capa para que los cambios
que realices se registren en ella. Después de crear esta capa, abre el cuadro de
diálogo Punto de fuga. Trabajar sobre una capa también es excelente, porque
permite que puedas controlar las áreas que la corrección de perspectiva afecta
utilizando máscaras de capa. También podrás conservar todas las demás
configuraciones de la imagen original. Además, puedes copiar y pegar
imágenes o partes de imágenes en perspectiva, siempre y cuando hagas la
copia, y luego pegues dentro del cuadro de diálogo para cada imagen. Por
ejemplo, si quieres copiar algo, abre Punto de fuga, haz tus correcciones,
copia, cierra Punto de fuga, vuelve a abrirlo con tu segunda imagen y luego
pega. Las correcciones se mantendrán. Puedes hacer lo mismo con
selecciones que realices de partes de imágenes.
Ahora hablemos de las funciones de la herramienta en sí. Primero, se te
pedirá que hagas clic en las cuatro esquinas del plano, para definir dónde vas
a trabajar. Es muy posible que no estés completamente satisfecho con tu
selección inicial, y tendrás que hacer algunos ajustes. Utilizando la
herramienta Editar plano, puedes modificar la forma arrastrando las esquinas,
ajustar el tamaño de la cuadrícula para dar visualmente los límites de los
detalles que desees, hacer clic y arrastrar para mover el plano por completo, o
escalar el plano arrastrando los nodos de los bordes dentro de tus límites.
Si en este momento sientes como si te estuvieran hablando en un idioma
desconocido, te sugiero que juegues con esta opción. Sabemos intuitivamente
cómo funciona la perspectiva, por lo que solo tenemos que usar esta
herramienta como un ajuste para asegurarnos de que todo esté alineado
correctamente.
Con la finalidad de mantener todo de manera perfecta, es muy probable que
necesites crear planos superpuestos, por lo tanto, lo que harás será retirar un
plano nuevo de uno ya existente. Esto se hace yendo a Editar plano y
Comando, arrastrando un nodo de borde (no un nodo de esquina) del cuadro
delimitador. ¡Voilà! Tienes un segundo plano y, si es necesario, puedes
retirarlo también. Asegúrate de ajustar siempre los ángulos de los planos
dentro de la caja de diálogo. Los nuevos planos se arrancan automáticamente
en un ángulo de 90 grados, pero eso no siempre va a ser suficiente. Si no
estás seguro del ángulo, simplemente coloca un valor aproximado y luego
juega con él hasta que se vea bien.
Es importante entender lo que significa cuando tu cuadrícula cambia de color.
Si tienes una cuadrícula azul, quiere decir que tienes un plano adecuado.
Todo esto significa que todos los puntos de fuga de la cuadrícula se pueden
resolver, aunque esto no garantiza que la perspectiva a la que has corregido la
imagen sea correcta. Recuerda que Photoshop es solo una herramienta, y
requiere que prestes atención a que la cuadrícula, que es tu guía, se alinee con
los elementos existentes. Rojo significa que el plano es inválido, y amarillo
significa que partes del plano son inválidas. Es posible trabajar desde un
plano inválido, pero tus resultados se verán afectados. He podido ver dónde
la herramienta de perspectiva podría ser valiosa dentro del arte conceptual,
para crear completamente imágenes que desafían las leyes de la perspectiva,
pero creo que es importante aprender a usar la herramienta para su uso
previsto antes de llegar a ese punto.
Ten presente que definitivamente deseas utilizar selecciones y clonación,
estampado, movimiento, rotación y escalado dentro del Punto de fuga. De
esta manera, una vez que la perspectiva es correcta dentro de la imagen,
puedes asegurarte de que todos los elementos, como ventanas, puertas y
detalles, estén en el lugar correcto. Por otra parte, puedes rellenar selecciones
(puertas, ventanas, etc.) si no deseas que estén allí. Aunque lograr una
perspectiva perfecta produce una imagen más cercana a la realidad visual, es
posible que desees utilizar estas herramientas para mantener el flujo o la
estética dentro de la imagen. Todo depende de tu elección estética. Yo
sugeriría este filtro para cosas como paisajes de gran ángulo, fotos de
interiores, o patrones abstractos muy geométricos.
Explora la Galería de filtros para hacer que tu trabajo se vea mucho más
creativo, profesional, y organizado. Tómate el tiempo para experimentar con
cada uno, preferiblemente en la misma imagen, de modo que puedas ver lo
que hacen todos los diferentes filtros.

Capítulo 2:
Ediciones simples de retratos
Comencemos con algunas ediciones simples de retratos. Cuando digo
ediciones simples de retratos, me refiero al tipo de arreglos que no parecen
obvios, que retienen la belleza natural o el atractivo del sujeto. Al trabajar
con este tipo de ediciones, no deseas que alguien (que no sea un profesional)
sea capaz de ver la imagen y saber que se le ha hecho algo. Básicamente, lo
que buscas es optimizar la apariencia que el sujeto ya tiene. Por supuesto,
querrás comenzar con una foto bien expuesta, nítida y compuesta de manera
hermosa. Las cosas que seguramente desearás arreglar son: hacer que la piel
luzca lisa de forma natural, sin perder el tono, la textura y los atributos como
las pecas, eliminar el acné; hacer que las arrugas profundas alrededor de los
ojos, la nariz y la boca sean menos severas, pero que aún estén presentes;
eliminar cualquier enrojecimiento de la piel o manchas; iluminar y afinar los
ojos y las pestañas, y mantener la textura en el cabello, los labios y las cejas,
al mismo tiempo que te aseguras de que no haya cabellos sueltos, ni polvo.
Comencemos con la eliminación del acné, que también funciona con la
eliminación del enrojecimiento de la piel.

Eliminación de Acné/enrojecimiento de la piel


Empecemos con la capa de ajuste. Debes crear una capa de ajuste de
tonalidad/saturación que no solo te permitirá trabajar en una capa separada de
la imagen, sino que también hará posible que te dirijas solo a los colores rojos
de la foto. Esta técnica también va a ser el mismo punto de partida básico que
utilizarás cuando se trate de eliminar manchas de calor, rosácea, o algo
similar.
En la nueva capa de Tono/saturación, ve al menú desplegable Principal y
selecciona los canales rojos. Lleva los controles deslizantes de Tono y
saturación al máximo. Esto va a hacer que tu foto se vea muy extraña, pero
no te preocupes. Es solo para que puedas ver lo que todos los controles
deslizantes están afectando actualmente y reduzcas ese rango, de manera que
los cambios solo afecten a las áreas que deseas que se vean afectadas.
Observa que en la parte inferior hay un deslizador doble, que convierte al
color seleccionado por el deslizador de arriba en el color seleccionado por el
deslizador de abajo. Si mueves eso un poco, la imagen comenzará a verse
más normal, y podrás ver claramente qué colores están siendo afectados. Lo
que buscas es asegurarte de que todas las áreas rojas o afectadas por el acné
estén resaltadas con ese otro color. Así es como haces que Photoshop apunte
a esas áreas cuando vas a arreglarlas. La idea es reducir esa área tanto como
sea posible para que realmente solo los rojos del acné se vean afectados, a
diferencia de cada rojo presente en la foto. Sabrás que lo tienes en el rango si
los labios del sujeto también están ligeramente afectados.
A continuación, vuelve a normalizar el tono y la saturación, dejando los
controles deslizantes inferiores donde están. También aumenta un poquito la
luminosidad. Debería ser posible ver que la cara del sujeto luzca mucho
menos roja de lo que estaba al principio. Si tienes alguna parte de la foto que
debería ser roja, como los labios, el cabello o una pared, simplemente entra
con el pincel en la máscara de capa y recupera ese color.
Ahora, abordemos el acné. Aquí es donde la herramienta pincel entra en
juego para corregir manchas. Asegúrate de crear una nueva capa en la que
elimines el acné, de modo que no estés afectando directamente la imagen
principal. Una vez que la tengas seleccionada, haz un zoom en la foto hacia el
área donde está el acné. Si hay mucho de este, está bien, de todas maneras
querrás realizar el zoom, para estar seguro de que vas a afectar solo los
píxeles que quieres y necesitas con tu pincel. También asegúrate de ajustar
continuamente el tamaño del pincel mientras trabajas; no desearás usar un
pincel muy grande en un área pequeña, porque afectará partes de la piel que
no tenías la intención de tocar.
Para esto, ten la certeza de que el botón en la parte superior de la etiqueta
Según contenido (Content aware) está seleccionado. Si bien Photoshop
trabaja para corregir las imperfecciones que seleccionas, querrás tener la
seguridad de haberle indicado que preste atención al contenido de la imagen.
Al usar el pincel para corregir manchas, asegúrate de hacer clic en las partes
que deseas afectar, en lugar de cometer el error de arrastrar para cubrir más
terreno más rápidamente. Esto no solo es muestra de pereza, sino que
también afectarás a los píxeles que inicialmente no tenías la intención de
tocar. Puede que tengas que hacer clic varias veces para eliminar
completamente una mancha, pero solo se eliminará en esa área, en lugar de
afectar incorrectamente a toda la imagen.

Alisado de la piel
Siempre es apropiado eliminar el enrojecimiento de la piel y el acné antes de
pasar al alisado de la piel. De esa manera, tendrás una piel limpia y bonita
con la cual trabajar. No importa la edad del sujeto, querrás alisar algo la piel,
aunque la edad y las preferencias personales realmente determinarán cuánto
haces. Para este paso, debes duplicar la capa de fondo con todas las
correcciones que has aplicado hasta ahora. A estas alturas, puede ser una
buena idea considerar agrupar las correcciones por carpeta, de manera que no
te confundas o reordenes accidentalmente algo y retrocedas.
Entonces, duplica la imagen de fondo con la que deseas empezar. Cambia el
modo de fusión de la copia a superposición y ve a Filtro>Otro>Paso alto. Lo
que hace el filtro de Paso alto es volver más nítida una imagen, por lo que vas
a ver un gran aumento en la nitidez. Podrías estar pensando, ¿por qué razón
querría hacer eso? Pero hacerlo es bueno, porque va a servir para que tengas
la seguridad de que a medida que suavizas, también puedes mantener cosas
como los ojos, los labios y el cabello muy nítidos. Cuando aparezca el cuadro
de diálogo Paso alto, verás lo que parece una versión gris de la imagen. Lo
que se hace es aumentar el radio hasta que puedas ver los detalles en los ojos
y alrededor de la boca. El radio será diferente para cada imagen, pero yo diría
que cualquier valor entre 6 u 8 es bueno, pero asegúrate de observar los
detalles, como las arrugas alrededor de los ojos o la boca. Cuando le des a
Aceptar, no entres en pánico. La imagen se va a ver demasiado nítida, lo que
realmente es la antítesis de lo que estamos tratando de hacer. Así que ahora,
presiona el comando más la tecla I, para invertir la imagen. Lo que tendrás a
cambio es una imagen muy suave, que es impresionante para la piel, pero no
tan buena para elementos como los ojos y el cabello.
Para corregir esto y crear la imagen final, vas a necesitar añadir una máscara
de capa a la capa de copia. Utilizando el pincel, pásalo por las partes de la
imagen que necesitan ser nítidas. Además, permite que estén presentes
algunas de las arrugas alrededor de los ojos y la boca.

Arrugas
Si bien la técnica anterior debería ser útil para encargarse de las arrugas
mínimas o para hacer que las arrugas sean menos notorias sin deshacerse por
completo de ellas, cuando haya arrugas profundas, tendrás que emplear otras
técnicas. Una es usar el Pincel corrector. Esta es la herramienta hermana del
Corrector de puntos, y puede usarse para cubrir grandes áreas. Como de
costumbre, debes crear una nueva capa para trabajar antes de empezar.
También debes hacer unas configuraciones, y asegurarte de que esté
seleccionado "tomar muestras de todas las capas" en el menú desplegable en
la parte superior. Además, mira que la casilla de verificación de Alineado no
esté marcada. Esto hace más fácil trabajar con todas las herramientas de
corrección en general.
El siguiente paso es encontrar un área de piel buena y lisa para tomar
muestras. A menos que estés trabajando con una persona muy mayor, esto no
debería ser muy difícil de hacer, pero te sugeriría que mantuvieras las áreas
en las que tomas las muestras lo más cerca posible del área de la arruga con la
que estás trabajando, y también haría un zoom y buscaría un área pequeña. A
medida que te muevas alrededor de la cara, asegúrate de tomar una muestra
de una nueva área de piel. Por ejemplo, no trates de usar la misma muestra de
alrededor de los ojos para un área alrededor de la boca. Esto ayudará a que la
imagen se vea más natural. Para obtener una muestra, Photoshop te pedirá
que mantengas presionada la opción y hagas clic.
Si estás trabajando con una persona relativamente joven, es posible que
elimines una arruga por completo, o que simplemente dejes un pequeño
indicio de ella, y que la imagen aún se vea natural. Sin embargo, si la persona
es mayor y/o tiene arrugas y cicatrices más profundas, no querrás eliminarlas
por completo, o la imagen tendrá un aspecto extraño. Por lo tanto, comienza
con la parte más pequeña de la arruga y sigue subiendo. Asegúrate de que tu
pincel sea un poco más grande que la arruga con la que trabajas, pero no
demasiado. Puedes usar fácilmente las teclas de corchetes para hacer más
pequeño o más grande al pincel, según sea necesario. También desearás
tomar muestras de diferentes porciones de piel a medida que te desplazas,
para evitar que la foto se vea extraña, como si tuviera la misma información
repasada una y otra vez en diferentes áreas. Nunca he encontrado que trabajar
en grandes extensiones sea muy efectivo en lo que respecta a la calidad del
reemplazo. Además, si cometes un error, será más lo que tendrás que rehacer.
Trabaja en pequeñas pinceladas para ahorrar tiempo y energía.
Si estás trabajando con alguien que tiene muy pocas arrugas, debes estar por
terminar en este momento. Sin embargo, si estás trabajando con alguien con
muchas arrugas, no es conveniente que su rostro se vea muy liso, así que baja
la opacidad de tu capa de correcciones, para que el efecto se vea más natural.

Iluminación de dientes y ojos


Es probable que a estas alturas la imagen se vea bastante bien, pero hay otras
cosas que puedes hacer para añadir más toques. Dos de ellas son iluminar los
ojos y los dientes. Afortunadamente, ambas se pueden hacer con la misma
herramienta, Sobreexponer. Es posible que tengas que jugar un poco con ella,
pero lo más probable es que tanto los dientes como la parte blanca de los ojos
caigan en el rango de los tonos medios. Haz una capa blanqueadora, y
siéntete libre de usar la misma tanto para los dientes como para los ojos.
Adapta la exposición en la barra superior para ajustar cuánto deseas que se
blanquee el área. Empieza con un 30 o 40 por ciento, y ve aumentando si es
necesario. Si encuentras que el trabajo de sobreexponer es demasiado blanco
para tu gusto, simplemente ve a la barra de herramientas Editar y verás una
opción llamada herramienta Desvanecer sobreexposición. Selecciona esta
opción y aparecerá un cuadro de diálogo en el que podrás ajustar el
porcentaje de desvanecimiento.
Ten cuidado al trabajar en los ojos, para que no se afecte demasiado el color
del iris.

Cabellos sueltos
Aunque queremos que nuestras imágenes tengan un aspecto lo más natural
posible para esta sección, siempre es un poco molesto cuando tu foto se ve
perfecta y luego hay uno o dos cabellos fuera de lugar.
Una vez más, debes crear una nueva capa. Si logro dejarte con una impresión
en este libro, será con lo importante que son las capas.
Si tienes un sólido fondo detrás del sujeto, la solución será bastante fácil.
Crea una nueva capa, elige la herramienta Tampón de clonar, consigue un
pincel suave que sea lo suficientemente grande (pero no demasiado) para el
área que te gustaría cubrir, y pinta sobre el cabello. Solo traes el fondo para
cubrir el cabello que no quieres ver. Si accidentalmente has quitado el cabello
que no querías, puedes traerlo de vuelta mediante el uso de una máscara de
capa. Ten en cuenta que esta corrección solo funcionará bien con imágenes o
áreas de estas que tengan un fondo sólido del cual tomar muestras. Una
solución es jugar con el modo de fusión de la portada, y ver si algo funciona.
Si es así, ¡genial! Si no, es hora de añadir un poco de desenfoque.
Específicamente, necesitas crear una nueva capa y añadir un poco de
desenfoque superficial. Lo que se debe hacer es establecer tu umbral en un
punto tal que la herramienta sepa (mediante un cambio de color) cuándo
detener el desenfoque. Utilizando la vista previa en el cuadro de diálogo,
observa el desenfoque hasta que comience a afectar áreas que no deseas que
afecte. Mantenlo justo por debajo de ese punto, y la herramienta conservará
porciones grandes de ese color (por ejemplo, el cabello), pero no de los más
pequeños (los "sueltos"). Juega con el radio para ver en qué punto deja de
tener un efecto limpiador. Tampoco se quiere que sea demasiado bajo, o el
color comenzará a filtrarse en el fondo, y esto no es bueno.
Esto debería acercarte bastante a la meta, pero ten presente que tal vez tengas
que crear una segunda capa de desenfoque y ejecutar el desenfoque de la
superficie una vez más, para limpiar otras partes. Simplemente haz zoom en
las secciones que aún necesitan ayuda, y clona para eliminarlas. Nota: NO
intentes hacer esto si no has hecho zoom al área en la que estás trabajando. El
zoom también te ayudará si el fondo tiene algunas gradaciones; de esa
manera te aseguras de que solo estés afectando a los mismos colores. Utiliza
Comando+Opción+Mayús+E, que creará una capa de Sello visible. Esto te
permitirá deshacerte de las capas de trabajo que están debajo de ella, y este en
realidad es un buen truco para recordar después de haber hecho la corrección
del acné, pero antes de alisar la piel. Añade una máscara de capa a la capa de
Sello visible. Esto ocultará todo el alisado que has hecho, y ahora solo
tendrás que usar la herramienta pincel para volver a introducir las
correcciones, o, en otras palabras, ocultar las partes que no deseas.
Por cierto, si estás disfrutando de este audiolibro, me encantaría que fueras a
Audible y dejaras una breve reseña.
Capítulo 3:
Uso de la herramienta licuar para un
retoque más avanzado + otras técnicas
A manera de renuncia de responsabilidad, me gustaría señalar que, como
regla general, no apruebo la remodelación de todo el cuerpo a menos que se
utilice en el arte conceptual para hacer algún tipo de declaración. Aunque
creo que es totalmente aceptable utilizarla para hacer una ligera remodelación
o para permitir una mayor simetría en la forma de un cuerpo, si el modelo es
completamente irreconocible al final del proceso, probablemente debería
preguntarte, en primer lugar, por qué fue necesario hacer que él o ella se viera
tan diferente.
Dicho esto, hablemos de la herramienta licuar. Esta herramienta utiliza
básicamente mucho empuje, tracción y distorsión de píxeles para crear una
nueva forma. Las herramientas que se encuentran en el diálogo de licuar son:
deformar hacia adelante, reconstruir, desinflar, hinchar, empujar a la
izquierda, la herramienta de mano y la de zoom. Asegúrate de que mientras
trabajas, te acercas al área en la que estás enfocado. Siempre puedes hacer un
alejamiento más tarde, para hacer correcciones generales más grandes.
Empieza con la herramienta desinflar, o una combinación de ella y la
herramienta de empujar a la izquierda, para comenzar a mover los píxeles a
donde desees que vayan. Mi sugerencia sería tratar de trabajar en un área del
cuerpo a la vez, sin perder de vista la imagen como un todo. Lo último que
deseas es que la parte superior del cuerpo se vea bien y que la parte inferior
se vea completamente desproporcionada. También es importante prestar
atención a si estás o no afectando accidentalmente partes de la imagen que no
quieres tocar. Esto puede suceder si el pincel es demasiado grande, o si tienes
dificultades para controlar tus movimientos con solo un ratón.
Las herramientas máscara de congelación y la de descongelación, que se
encuentran en la pestaña avanzada de licuar, te ayudarán con este tema. Estas
herramientas se aseguran de que la imagen esté protegida mientras ajustas
otras partes en licuar, y luego te da la capacidad de quitar esa protección
cuando has terminado.
Lo mejor de licuar es que se puede salvar lo que se conoce como una malla.
Una malla contiene toda la información de todas las correcciones que has
hecho en una imagen. Si decides que has terminado por hoy, puedes guardar
tu malla y luego cargarla cuando estés listo para trabajar en esa imagen de
nuevo.
Puedes cambiar de una herramienta a otra según sea necesario, y sé paciente.
Como dije antes, va a involucrar mucha conciencia por tu parte qué tamaño
de pincel necesitas, qué herramienta está funcionando, y mover los píxeles de
arriba abajo y de un lado a otro para conseguir que las cosas sean perfectas.
Capítulo 4:
Coloración

La gente a menudo nos pregunta a mí y a mis otros amigos fotógrafos si


podemos hacer que las imágenes en blanco y negro tomen color. Aunque la
respuesta es sí, en realidad no funciona de la manera en que se podría pensar.
Si bien puedes tomar una imagen en color y convertirla a blanco y negro
haciendo clic en un botón o dos, para llevar de blanco y negro a color, el
proceso es un poco más exhaustivo.
En primer lugar, si estás trabajando con una foto antigua que podría tener
algunas rasgaduras, lágrimas o manchas, tienes que limpiarla. Haz una
eliminación rápida de cualquier mancha de polvo o errores antes de
comenzar.
Para comenzar el proceso de coloración, debes seleccionar el objeto al que
deseas agregarle color. Puedes hacerlo usando cualquier herramienta de
selección, y aunque yo prefiero la herramienta de Selección rápida, algunas
personas prefieren el Lazo magnético. Ve a
Imagen>Ajustes>Tono/saturación, y juega hasta que obtengas el color que
deseas en tu selección. Si al principio parece que no pasa nada en la imagen,
asegúrate de que la casilla para la verificación de colorear esté marcada. Una
vez que estés satisfecho, haz clic en Aceptar y pasa a la siguiente parte. Si
encuentras que la imagen es demasiado plana (o de apariencia coloreada)
para tu gusto, puedes añadir un poco de ruido, o el efecto de grano de
película, accediendo a este en la Galería de filtros. Juega no solo con el filtro
de ruido, sino también con el de grano hasta que consigas el efecto que te
guste. Básicamente, vas a repetir este proceso con todas las partes que quieras
colorear hasta que termines. Una vez completado el proceso, es posible que
tengas que hacer algunas correcciones o aclaraciones generales, utilizando
una combinación de niveles, curvas e incluso una capa de ajuste del balance
de color. Sin embargo, ten presente que por muy hermosa que sea una imagen
coloreada, nunca se va a ver exactamente igual a una imagen que fue tomada
a color. Sin embargo, puedes agregar gradaciones de luz por medio de filtros
en la parte superior de las selecciones de tono/saturación.
Capítulo 5:
Realce del color
El realce del color es básicamente solo retocar el color, y también implica la
calidad de la luz. Hay muchas maneras que puedes abordar para ajustar el
color, y no tienen que ver con la opción de los controles deslizantes de la
vibración y la saturación. De hecho, este es uno de los peores errores que los
principiantes cometen a menudo. Piensan que sus colores se ven deslucidos o
apagados, y en lugar de considerar cuál es el problema, ya sea la exposición,
las sombras y los reflejos, o un tinte extraño de color, simplemente aumentan
la saturación y lo dan por terminado. De lo que quiero hablar en este capítulo
es del uso de curvas y niveles, y un método para aumentar el color que utiliza
el canal LAB en el menú desplegable Modo.
En primer lugar, para una solución rápida, sugeriría trabajar en dos pasos.
Haz un nivel de ajuste de niveles primero, porque, para que puedas tener la
certeza de que el color está bien hecho, debes asegurarte de que fue tomado
con la iluminación correcta. Hay todo tipo de ajustes por defecto para elegir,
disponibles en la parte superior del panel. Aunque puedes desplazarte por
ellos y utilizarlos como puntos de partida para determinar adónde quieres ir
con la imagen, no te sugeriría que te detengas ahí. Esto es especialmente
importante porque, sin importar a dónde quieras ir de manera creativa con tu
foto, debes tener una imagen buena, bien iluminada y con un balance de color
para trabajar, de lo contrario todo se pierde.
Por lo tanto, antes de mover un control deslizante, considera qué es lo que
está mal en la imagen. ¿Tiene reflejos intensos y apagados o sombras no
deseadas? Si es así, ahí es donde tienes que empezar. Mover el control
deslizante de tonos oscuros a la derecha va a oscurecer la imagen general, el
control deslizante gris mueve los tonos medios hacia arriba y hacia abajo, y
mover el control deslizante de luces hacia la izquierda va a aclarar la imagen.
Utiliza el histograma proporcionado como guía; te mostrará dónde están los
valles y picos de las luces y sombras en la imagen. Lo excelente de trabajar
en una capa de ajuste en lugar de simplemente acceder a los niveles desde el
menú desplegable, es que se pueden aplicar máscaras de capa según sea
necesario, de modo que solo se colocan correcciones ligeras donde se desee.
Esto es ideal para situaciones en las que puedes tener una imagen bien
expuesta, excepto en un punto molesto. Con la capa de ajuste, puedes dejar la
mayor parte de la imagen como está y cambiar las cosas que necesitas.
Las curvas son un poco más complicadas, pero funcionan bajo el mismo
principio. Verás un histograma que representa los patrones de luz en la
imagen, junto con un gráfico de líneas móviles. Puedes moverlo a mano para
afectar tus cambios, o puedes utilizar las herramientas de resaltado, tonos
medios y sombras para hacer clic directamente sobre la imagen y afectarla de
esa manera.
Una vez que estés satisfecho con todos los cambios de iluminación, es hora
de mirar los colores. Vas a crear una capa de ajuste del balance de color y
luego le darás un buen vistazo a la imagen. Como puedes ver, el cuadro de
diálogo tiene un conjunto de tres controles deslizantes: cian y rojo, magenta y
verde, y amarillo y azul. Ajusta estos controles deslizantes según sea
necesario y presta atención a si tienes resaltados, sombras o tonos medios
seleccionados en el menú desplegable de la parte superior. Tendrás que hacer
correcciones mínimas cada vez que hagas un cambio, y asegurarte de que los
tres elementos se vean equilibrados en color. Para que tengas la certeza de
que no tendrás ningún otro cambio de color extraño al imprimir o publicar en
línea, debes verificar que tu pantalla esté calibrada correctamente. Una vez
que tengas el balance de color normal, entonces puedes preocuparte por cosas
como si los colores necesitan o no más vitalidad, saturación o falta de ella.
A pesar de que todo esto puede sonar a mucha corrección, en realidad no es
tanto, especialmente si ya tienes una buena imagen con la cual empezar.
Recuerda usar las capas de ajuste en lugar de solo el menú desplegable para
mayor facilidad en caso de que te equivoques.
Hablemos de otra manera de hacer resaltar la luz y el color. Esto también
implica el uso de Curvas, pero en conjunto con el modo de color LAB. El
canal LAB es diferente porque su uso afecta la luminosidad de la imagen en
lugar del color. Escoge una imagen plana y cambia el modo a LAB. Como
siempre, duplica la capa de fondo, porque aquí es donde vas a aplicar los
cambios. Ahora abre Curvas, y otra vez, este es uno de los pocos casos en los
que NO usarás una capa de ajuste, porque la imagen en la que estás
trabajando necesita permanecer plana. En este caso, debido a que el canal L
controla la luminosidad, ni siquiera tendrás que abrir un segundo diálogo para
trabajar sobre el color y la luz; se puede hacer todo a la vez. Después de
ajustar el canal L, selecciona A, que es el canal magenta y verde. El verde
está a la izquierda y el magenta a la derecha, y desearás arrastrar cada lado en
el mismo número de cuadrados. Repite el mismo proceso con la curva B.
Aplica la curva y, a continuación, vuelve a cambiar el modo de imagen a
RGB. No aplanes la capa. A continuación, ajusta la opacidad de la capa
superior hasta que veas que el original comienza a fundirse de nuevo.
Ajústalo hasta que las correcciones de color afecten la imagen tanto como
desees. También deberías experimentar con los modos de fusión para ver
cómo afectan tu arreglo.
Capítulo 6:
Eliminación de fondos

Hay muchas maneras en las que puedes elegir hacer una eliminación de
fondo, y muchas razones por las que podrías hacerlo. La eliminación del
fondo es especialmente buena, por ejemplo, para las fotos de productos,
donde se quiere poder pegar la imagen del producto en un diseño de
anuncios. Típicamente, las tomas de producto van a ser el tipo más fácil de
eliminación de fondo, porque generalmente se toman sobre un fondo limpio
de color blanco o sólido. Sin embargo, si no estás trabajando con una toma de
producto, el proceso puede ser un poco más difícil, debido a que las
herramientas de Photoshop captan píxeles de color no deseados. Sin
embargo, se puede limpiar. La eliminación del fondo generalmente es un
proceso rápido, a menos que haya muchos elementos diminutos involucrados,
(como un grupo grande de personas o un fondo de color muy similar detrás
de un objeto; blanco sobre blanco es difícil de separar), pero tiene múltiples
pasos.
Ten presente que como con cualquier cosa en Photoshop, puedes encontrar
un método o tutorial que funcione mejor para ti, y como tal, te sugeriría que
experimentes con todas las herramientas que son útiles para la eliminación de
fondos, incluyendo Selección rápida, Varita mágica, y Lazo. Sin embargo,
para este método, comenzaremos con una Selección rápida, que es mi forma
favorita de comenzar las cosas.
Con Selección rápida, debes asegurarte de que el pincel en la parte superior
con el signo más esté seleccionado. Esto te permitirá seleccionar los píxeles.
Dibuja libremente con el ratón alrededor del sujeto. La herramienta de
Selección rápida va a hacer un trabajo bastante bueno, pero puede que se le
pasen por alto algunas secciones pequeñas o detalles a las que necesitarás
hacer zoom y asegurarte de seleccionar. Si el pincel selecciona demasiados
píxeles, deberás ajustar el tamaño del pincel, y también seleccionar el pincel
negativo, lo que te permitirá deseleccionar los píxeles. Funciona exactamente
de la misma manera, solo tienes que pasar el pincel sobre el área que deseas
eliminar. Una vez más, es posible que tengas que acercar y alejar el zoom
para asegurarte de que esté bien, pero no te preocupes de que todavía no sea
perfecto.
Arriba, en la parte superior, junto con los pinceles, hay una casilla de
verificación llamada "Perfeccionar bordes". Una vez que sientas que tu
selección es bastante buena, haz clic en ese cuadro y aparecerá otro cuadro de
diálogo. Tu selección aparecerá aislada en un fondo blanco, y de esta manera
puedes comprobar cuán limpios realmente están los bordes. Sugiero marcar la
casilla Radio inteligente para usarla como punto de partida, y hacer uso de los
deslizadores para perfeccionar aún más desde allí. También puedes borrar o
añadir la selección que ves, utilizando las herramientas de pincel y borrador
que aparecerán en la esquina superior izquierda. Prueba también la casilla de
verificación para Perfeccionar radio. Entiendo que esto puede ser un poco
confuso, porque cuando haces clic por primera vez, Photoshop te da un plano
blanco sin nada en él. Pero, si te das cuenta, en la sección de Detección de
bordes, el radio se maneja por un control deslizante y por defecto, y siempre
comienza en cero. Si mueves dicho control deslizante, comenzarás a ver los
bordes de tu selección. Debes seguir arrastrándolo hasta que tengas un buen
contorno y puedas ver que Photoshop está recogiendo todos los pequeños
detalles que deseas, pero asegúrate de no llevarlo demasiado lejos. Si tu
selección es un poco desordenada, podrías empezar a seleccionar partes del
fondo. Muchos de estos ajustes requieren mirar una y otra vez en la vista
previa, mirar el radio, jugar con los bordes y así sucesivamente. Podrías
tomar un par de intentos para conseguir que la imagen quede exactamente
como deseas que esté. Cuando estés satisfecho, haz clic en Aceptar.
Ahora, selecciona el reverso de la imagen haciendo clic con el botón derecho
del ratón. Algo muy importante a tener en cuenta: esto no es lo mismo que
invertir la imagen. Al hacer clic con el botón derecho, aparecerá un menú.
Selecciona Invertir y, a continuación, añade una máscara de capa. El fondo
desaparecerá y el sujeto quedará flotando en una capa vacía. Si encuentras
que todavía tienes porciones de fondo que no deben estar allí, simplemente
usa el pincel negativo para quitar más. También puedes volver al diálogo
Refinar bordes y hacer una corrección final. Si lo prefieres, en este punto
también puedes elegir trabajar directamente en la máscara de capa
seleccionando la herramienta pincel. Lo bueno de invertir para crear una
máscara de capa es que si decides que quieres recuperar tu fondo, puedes
simplemente desechar dicha máscara.
Insisto, hay otras maneras de hacer esto, pero primero prueba este método.
También añadiría que si tienes problemas (debido a las similitudes de color)
con los píxeles no deseados de los sujetos, pruebes cambiar a la herramienta
Varita mágica antes de terminar. Con la Varita mágica, puedes configurar la
tolerancia y el punto de muestra para recoger solo ciertos colores.
Ahora, si lo deseas, puedes copiar y pegar o arrastrar tu selección a un nuevo
fondo.
Capítulo 7:
Camera RAW

Me parece que nunca hablo suficiente sobre lo mucho que valoro a Camera
RAW. No voy a repasar todas sus funciones, ya que eso podría llenar otro
libro entero, pero sí quiero expresar la importancia que tiene el hecho de que
siempre debes tomar tus imágenes como un archivo raw y hacer la gran
mayoría de las correcciones que puedas necesitar en Camera Raw. El
programa puede ayudarte a sacar mucho más provecho de una imagen de lo
que sería posible si se tratara de un archivo jpeg. Como siempre, si necesitas
guardar la imagen como jpeg, asegúrate de guardar una copia maestra en
formato CR2, de modo que si es imperativo, puedes volver atrás y hacer los
cambios necesarios accediendo a Camera Raw a través del menú de filtros.
Incluso si aun así prefieres hacer tus correcciones en el Photoshop común y
corriente, por lo menos haz los ajustes de exposición y balance de blancos en
Camera Raw, ya que esto hará que todo lo demás sea mucho más fácil de
trabajar.
A medida que aprendes a manejar el programa, es posible que te des cuenta
de que te gusta aún más que Photoshop, y puedes reservar Photoshop para
correcciones que solo se pueden llevar a cabo en la Galería de filtros.
Capítulo 8:
HDR
HDR es una de esas cosas que parece muy complicada, pero que en realidad
no es tan difícil de hacer. Para empezar, vas a necesitar por lo menos una
imagen. La forma en que funciona el HDR es utilizando diferentes
exposiciones para poder combinarlas y darte la mayor cantidad de
información posible en la imagen. HDR significa: imágenes de Alto Rango
Dinámico. Eso es lo que hace que la imagen se vea tan nítida y clara, y en
algunos casos casi surrealista. Típicamente, en imágenes normales, el sensor
toma un promedio de la escena, y por lo tanto tendrás algunas áreas que caen
profundamente en la sombra o pueden estar subexpuestas. Con HDR, esto no
sucede, porque al combinar las imágenes, se obtiene la exposición adecuada
en cada parte de la escena.
Tomas la exposición como lo harías normalmente para el sujeto. Una vez
determinada esa exposición apropiada, debes ir a una parada por encima y
otra por debajo de ella. Esto te dará el rango mínimo que necesitas, tanto para
el detalle de la sombra como para el de la iluminación. Una vez más, esto es
lo mínimo, y si deseas capturar aún más matices de detalle, sugiero que hagas
dos paradas por encima y dos por debajo de la exposición base.
Después de tener tus imágenes, vas a entrar en Photoshop, y tu primer
impulso puede ser abrir todas estas imágenes que acabas de tomar, pero todo
lo que tienes que hacer es elegir Archivo>Automatizar>Combinar para HDR
Pro. Cuando selecciones Combinar para HDR Pro, se abrirá un cuadro de
diálogo en el que se te pedirá que selecciones tus archivos. Selecciona todos
los archivos que tomaste de la escena y presiona Aceptar. Dependiendo de si
la imagen está configurada en modo 8, 16 o 32 bits, tendrás diferentes
opciones para su edición. Si está configurada en 8 o 16 bits, verás varias
opciones. Si eres un estudiante visual, te sugeriría que también busques
algunas imágenes guía para acompañar estas instrucciones.
Las imágenes de 8 y 16 bits van a mostrar varias secciones de edición en el
cuadro de diálogo. La primera es una casilla de verificación denominada
Eliminar fantasmas. Marca esta casilla si ves que tienes algún desagradable
efecto desenfocado, que normalmente se debe a sacudidas de la cámara o a
salpicaduras extrañas de luz por la noche. A continuación se encuentra el
Contorno de resplandor, que, tal como suena, controla la cantidad de luz, o
halo, que tienes alrededor del sujeto. Puedes hacer que afecte más o menos a
la imagen con el control deslizante de radio, y también ajustar el brillo.
Luego están los controles deslizantes de tono y detalle, seguidos de controles
deslizantes y curvas que controlan las sombras, las luces, la vibración y la
saturación, como en cualquier foto. Ajústalos de la misma manera como lo
harías normalmente, hasta que estés satisfecho con la apariencia de tu foto.
Cuando termines de ajustar la imagen en su estado de 8 o 16 bits, convierte el
modo a 32 bits mediante el menú desplegable situado en la parte superior del
cuadro de diálogo. Cuando utilices el control deslizante para la vista previa
del punto blanco, no verás mucha diferencia a medida que vayas moviendo el
control deslizante. Aunque HDR funciona mejor como un archivo de 32 bits,
es difícil para los monitores de computadores mostrar toda esta información,
por lo que el control deslizante para la vista previa del punto blanco está
realmente ahí como una guía visual. Las inmersiones y puntos del histograma
representan dónde y cómo la información cae dentro de la fotografía.
Una vez que todos estos pasos preliminares se han hecho, es hora de hacer un
poco de mapeo de tonos, que es el paso donde realmente vas a obtener el
máximo control y creatividad de la imagen. Si estás usando Creative Cloud,
como en este libro, tienes la opción de hacer tu mapeo de tonos en Camera
RAW. Solo asegúrate de que la casilla esté marcada si deseas esa opción. En
versiones anteriores de Photoshop (o solo en función de tus preferencias
personales), puedes seguir trabajando en el cuadro de diálogo HDR. Debes
asegurarte de que haces todo el mapeo de tonos con la imagen en modo de 32
bits, pero siempre que estés satisfecho con tu imagen, guárdala como una
imagen de 8 o 16 bits. De la misma manera que con cualquier trabajo de
edición en una foto normal, va a ser necesario que juegues con los controles
deslizantes para que tu imagen se vea exactamente como te gustaría. También
ten en cuenta que siempre y cuando hayas guardado una copia maestra de tu
imagen de 32 bits, puedes utilizar el mapa de tonos una y otra vez para
crearle una estética diferente a la misma foto.

En el cuadro de diálogo principal de HDR, también hay ajustes


preestablecidos que le darán a tus fotos un aspecto diferente. Aunque
realmente no sugeriría que se seleccione una configuración preestablecida y
ya, definitivamente puedes usarlo como punto de partida o para ver cuál
podría ser tu preferencia estética. Mis consejos personales para HDR son que
lo utilices como una herramienta para mejorar una foto ya de por sí hermosa.
El objetivo del HDR es hacer que las cosas se vean más reales, y aunque
empujar el límite hacia el hiperrealismo puede ser algo genial, no hay que
exagerar o parecerá increíblemente obvio.
En lugar de hacer HDR verdadero, puedes hacer algo llamado tono HDR.
Esto se puede hacer con cualquier archivo normal PNG, JPEG u otro archivo
que hayas tomado, y solo necesitas uno. Para abrir el cuadro de diálogo, ve a
Imagen>Ajustes>Tono HDR, y cuando hagas clic en él, la imagen pasará a
tener un aspecto HDR automático, y luego podrás realizar tus ajustes.
Aunque esto no es un verdadero HDR, los controles deslizantes funcionan de
la misma manera y afectarán la estética en un abrir y cerrar de ojos. El cuadro
de diálogo presenta exactamente los mismos deslizadores que el HDR
verdadero. Cuando estés satisfecho, haz clic en Aceptar.

Independientemente de la ruta que elijas, HDR es una forma de experimentar


con Photoshop, divertirse y hacer que tus imágenes destaquen.
Capítulo 9:
¿Qué es un objeto inteligente? + Filtros
inteligentes + Edición por lotes
Los objetos inteligentes se pueden crear a través del panel Capas haciendo
clic con el botón derecho del ratón cuando deseas crearlos. Un Objeto
Inteligente te permite incorporar cosas como gráficos vectoriales o
ilustraciones en el plano de imagen. La transformación de algo en un objeto
inteligente te permite evitar la pérdida de calidad de imagen. Es más fácil de
archivar digitalmente, al guardar una copia vinculada de la información en la
imagen original. De esta forma, los objetos inteligentes guardan lo que haces,
de la misma manera que las capas preservan lo que has realizado. Los objetos
inteligentes archivan menos que los vectores, en el sentido de que cuando se
redimensiona, se pierde calidad de imagen, pero definitivamente archivan
más que cuando solo se trabaja con píxeles planos.
Los objetos inteligentes también hacen que las herramientas de
Transformación libre archiven más, debido a que guardan todos los píxeles y
la transformación, de modo que si es necesario, puedes volver a ella y hacer
cambios más adelante. Y si compartes, o copias y pegas un objeto inteligente,
cuando haces un cambio en una versión de la imagen, tienes la opción de
hacer el cambio en todas ellas, agilizando así cualquier trabajo que tengas que
hacer. Los objetos inteligentes también pueden vincularse, compartirse
mediante copia e incluir filtros inteligentes no destructivos, que pueden
apilarse y editarse individualmente. Nunca he tenido muchas razones para
usar un Objeto Inteligente en el pasado, pero dado el advenimiento de los
Filtros inteligentes también puedo tener que hacer más investigación sobre
ellos y darles una oportunidad.
Lo último que quería mencionar es lo que se llama edición por lotes. La
edición por lotes es exactamente como suena, y te permite realizar cambios
en muchas imágenes a la vez. Para crear un lote, vas a Ventana>Acción y
creas un nuevo lote haciendo clic en el icono de la carpeta en la parte superior
del menú desplegable que aparece. Nombra el lote en la carpeta y luego
nombra la acción debajo de este. Hazlo descriptivo, y relacionado con
cualquier arreglo que tengas que hacer.

Lo que hace Photoshop es registrar cualquier acción que realices en la


pantalla como parte de ese lote de acción. De esta manera, solo tienes que
realizar todas las acciones en una foto. Presiona la tecla de parada cuando
hayas terminado. Posteriormente, podrás cargar esa acción y aplicarla al lote.
Para aplicar la acción, ve a Archivo>Automatizar>Lotes. Selecciona la
acción, establece la fuente y el destino del lote en ninguno. Presiona Aceptar,
y Photoshop realizará tus ediciones en lotes por ti, esto debería ayudarte a
ahorrar tiempo con ediciones similares de la misma sesión o serie.
Conclusión
Como espero que hayas aprendido de este artículo, hay una multitud de cosas
que se pueden hacer en Photoshop, y muchísimas maneras de hacerlas. De
hecho, dado que estás utilizando las herramientas apropiadas para el trabajo y
un flujo de trabajo no destructivo, es probable que haya muchas maneras de
hacer las mismas tareas, además de las descritas anteriormente. Junto con este
libro, también sugeriría que realices una investigación sobre los tipos de
correcciones que más se utilizan, y averigües qué flujo de trabajo y
combinación de herramientas es la más beneficiosa para ti.
Ten siempre presente la importancia de las capas para preservar una imagen
principal, así como el seguimiento de todos los cambios que realices. Etiqueta
todo, y si alguna vez estás haciendo muchos cambios en una imagen,
colócalos como ediciones en tus propias carpetas para una organización más
fácil.
También considera que aunque todos los arreglos que se han mencionado en
este libro son bastante fáciles de entender, se basan en los principios de los
demás y pueden necesitar algún tiempo para dominarlos. Si te encuentras
luchando con la motricidad fina de ciertos arreglos, como me ha sucedido en
el pasado, podría ser una buena idea invertir en una pantalla de escritorio más
grande en lugar de una computadora portátil, y un Wacom u otra marca de
tabletas que te permiten tener un estilo de control más natural. Las tabletas
también requieren práctica para aprender a usarlas, pero una vez que se las
domina, valen la pena y son muy útiles.

Y, con cada nueva edición de Photoshop, asegúrate de repasar los cambios y


correcciones que se han hecho, ya que Adobe trabaja constantemente para
mejorar la facilidad de uso de sus productos.
¿Te gustó “Photoshop, Domina los
Conceptos Básicos 2”?
Antes de que te vayas, me gustaría darte las gracias por comprar mi
audiolibro.
Sé que podrías haber escogido entre docenas de otros sobre este tema, pero te
arriesgaste con el mío, y te lo agradezco mucho.
Así que, una vez más, muchas gracias por descargar este libro y escucharlo
hasta el final; realmente lo aprecio.
Ahora me gustaría pedirte un pequeño favor, si no te importa:
¿Serías tan amable de tomarte un minuto de su tiempo y dejar una reseña para
este audiolibro en Audible?
Esta retroalimentación me ayudará a continuar escribiendo el tipo de libros
que te ayudarán a obtener resultados. Y si te gustó, por favor, ¡no dudes en
decírmelo!

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