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Segunda Época
Año 1 - Nº 1
Subdirector
Diego A. Rulz
Coordinación editorial
Juan Carlos Verzello
Corrección
Claudia Paredes
Investigaciones
Prof. Miguel Ruffo
Lic. Carlos Larrosa
Secretaría
María del Carmen Lucero
Judith Miró
Luisa Freyre
Relaciones institucionales
Lic. Sllvlna Pedrelra
Presentación
por el Dr. Juan José Cresta.............................................. ll
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PALABRAS DE LA Sra. SECRETARIA DE CULTURA DE LA NACIÓN,
Dra. BEATRIZ GUllERR~ WALKER -
La historia no es sólo la relación mós o menos ordenada de los hechos
del pasado sino la selecclón que el presente hace de ese pasado
Inabarcable. Esa selección lmpllca. entre otras cuestiones. un criterio que
prlooza unos hechos slgnlflcatlvos y un lenguaje que los expóne. Esto revela la
Importancia de la Investigación histórica que cuenta con el apoyo lmprescln-
dlble de todo un mundo circundante compuesto por archivos y blbllotecas.
por museos y monumentos que son la cantera viva a la que acuden los histo-
riadores para descifrar objetos. para Interpretar documentos y construir. desde
el presente, una visión del pasado.
De la gran histooa. con batallas, con héroes. con fechas señeras. hasta la
lntra-hlstoria cotidiana. la historia de la moda, de las mujeres. del gusto ... todo
es historia cuando la perspectiva y el objetivo es rescatar nuestro paso por el
mundo, Investigar el sentido que han Ido desarrollando los pueblos y que sirve
de rumbo para la construcción del futuro. '
1. La vieja casona
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Intendente Antonio F. Crespo pensó en hacer del Parque un lugar públlco, al
que llamaña "Paseo del sud·. SU antecesor, Torcuato de Alvear, había abierto
un camino y desde su cargo de Intendente había embellecldo las diferentes
plazas de la ciudad que, desde entonces, podían llamarse tales, así como
creado diversos paseos públlcos que ciaron nueva fisonomía la ciudad y pro-
porcionaron a su gestión un reconocimiento histórico.
En 1857 Lezama formó parte de la Comisión Popular para levantar un
monumento a Rlvadavla por suscripción públlca; en 1858 habllltó un lazareto
en su quinta con motivo de la peste que asoló el barrio de San Telmo; protegió
más tarde a hombres de letras -entre ellos a José Hernández- y sostuvo a nu-
merosas famlllas de lndgentes. Al casar con una nieta del alcalde Martín de
Álzaga, emparentó con las famlllas más tradlclonales de Buenos Aires.
2. El Museo Histórico
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lla, padre de la historiografía correntina, y el coronel José lgnaclo Garmenda
en esos cfas un escritor popular. '
• Bajo la dirección de Carranza, el museo se Instaló en Esmeralda 848, entre
Cordoba y Paraguay, el 3 de enero de 1890, donde recibió algunos objetos his-
tóricos del museo general que dirigía Germán Burmelster, así como las primeras
donaciones. Lo personalidad agradable e Idealista de Carranza la hizo recepto-
ra de toda dese de objetos históricos procedentes de sus amistades, muchas de
ellas vinculadas por tradición a los próceres de la Independencia, de tal modo
que el local quedó chico y pasó a Moreno 330, donde abrió sus puertas el 15 de
febrero de 1891. Poco después el presidente Pellegrlnl aceptó el ofrecimiento
del Intendente para que el museo, cuyo crecimiento era vertiginoso. pasara a
depender de la Nación. por lo que adoptó el nombre actual de "Museo Históri-
co Naclonar. Desde entonces ha sido la sede de todos los objetos del pasado
de cualquier acontecimiento ocurrido en toda la geografía nacional.
El Museo crecía y el local era otra vez pequeño. En marzo de 1893 pasó a
un edificio del Departamento de Agricultura. en Santa Fe 3951. hoy Jardín Bo-
t_ánico. En 1895. cuando ya Lezama había fallecido. su viuda doña Ángela
Alzaga de Lezarna entró en tratos con la Municipalldad para la venta del pre-
dio y de la finca. La suma pedida fue de un rnlllón y medio de pesos. conside-
rada por todos los organismos técnicos y legales de la ciudad corno un nego-
cio para las orcas públicos. y la operación se pactó con el pago en bonos de
la deuda y bajo la condición establecida por la vendedora de que quedaría
residiendo en la ftnco por dos años más sin pago de ningún Impuesto y que el
parque que la rodeaba llevaría por siempre el nombre de su extinto esposo.
condiciones que fueron aceptadas y que culminaron con la forrnallzaclón de
la operación. Hé aquí, entonces. que aunque don Gregorlo Lezarna no fue un
prócer ni murió en acto heroico por la patria, aunque no menos Importante es
la labor que los ciudadanos anónimos realizan coda día, lo cierto es que uno
de los más bellos parques de la ciudad llevo justificadamente su nombre por el
amor que le prodigó su esposo.
Transcurridos los dos años consignados en la operación de venta. la
casona fue desalojado, en cuyo oportunidad el doctor Carranza, titular
del Museo sito en Santa Fe 3951. y en atención o lo estrechez del lugar Yal
crecimiento del repositorio patrlrnonlal, solicitó aquello coso que Lezorno
hizo un orgullo de Buenos Aires. El 24 de abril de 1897 se llevó a cabo la
permuta entre el Intendente Alcobendos y el presidente José Evarlsto
Urlburu: lo ciudad cedió lo casona de la calle Defensa y la Nación el Jar-
dín Botánico. Dos figuras grandes y queridas del país quedaron
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Involucradas en esta operación: Adolfo Carranza y Ca~os ThOls, el arqui-
tecto paisajista a quien tanto le debe la poste~dad.
º
El 1 de octubre de 1897 el Museo abrió sus puertas en la nueva casa
y aquí estarnos desde entonces. En la década del treinta de este slglo la
casona fue ampliada. Es un sector no hlstóñco del edificio pero que guar-
da el mismo estilo de continuidad que el casco fundacional. A lo largo de
una centuria, millares de objetos fueron paulatinamente Incorporados
para dar coherencia con sus testimonios materiales de los hechos esplrl-
tuales y reales ocurridos en nuestro pasado. El año 1997, al cumplirse el
centenario de nuestra vida en la casona, en un lucldo acto y con presen-
cia de autoridades nacionales y de la ciudad, se acuñó una medalla con-
memorativa que es representativa del Museo.
3. Las publicaciones
14
4. Las prmeras publlcaclones
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como los diarios ·La Prensa" y ·La Nación"- plasmaron sus proyectos, Ideas y
comentarlos, mas no el Museo como tal.
Las obras del Museo se fueron espaciando en el tiempo, si bien tuvieron
una cierta continuidad, de tal modo que hubo treinta y una entregas en un
plazo que se extiende entre 1935 y 1964, es decir prácticamente tres décadas.
Para una mejor Información brindamos a continuación la nómina de las mis-
mas, con sus autores y los temas tratados. Como podrá apreciarse por la di-
versidad de unos y otros, abarcaron los procesos de la historiografía naclonal
sin exclusiones, aun en épocas en que se exaltaron algunos valores con carác-
ter político en desmedro de otros por Iguales motivos. Explicar y desarrollar a
cada una de ellas no es tarea de esta presentación, pero queda en ple la po-
sibilidad de hacerlo más adelante.
1935 Homenaje al Libertador José de San Martín. Ricardo Levene: San Martín.
Síntesis de la Historia Argentina. Federico Santa Coloma Brancjsen. El Mu-
seo Histórico Nacional e inauguración de las Nuevas Salas. Buenos Aires.
34páglnas.
1935 Ricardo Levene. Síntesis Sobre la Revolución de Mayo. Buenos Aires,
1935. 28 páginas.
1936 Gustavo Franceschl. Síntesis Biográfica de Fray Justo Santa María de Oro.
Buenos Aires, 1936, 8 páginas.
1939 Cincuentenario del Museo. Homenaje a su fundador Adolfo P. Carranza.
Discurso del Dr. Ricardo Levene. Palabras de los doctores, Ramón J.
Cárcano y Adolfo P. Orma. Discurso del Sr. Antonio Apralz. Buenos Aires,
1939, 32 páginas.
1939 El Museo Histórico Nacional en su Cincuentenario. 1889-1939. Buenos Ai-
res, 1939. 277 páginas.
1940 Benjamín Villegas Basavilbaso. Significación Moral del Testamento de San
Martín. (Conferencia). Buenos Aires, 1942, 32 páginas.
1941 Plano expllcattvo del Museo Histórico Nadonal. 6 páginas.
1941 Emilio Ravlgnanl. Nuevas Aportaciones Sobre San Martín Ubertador del
Perú. (Conferencia). Buenos Aires, 1942, 32 páginas.
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1942 J. C. Raffo de la Reta. Fiiosofía Sanmartiniana. El Deber, como Causa De-
terminante de su Acción. (Conferencia). Buenos Aires, 1942, 39 páginas.
1943 Juan Pablo EchagOe. La Ultima Lección de San Martín. (Conferencia).
Buenos Aires, 1943, 42 páginas.
1944 Mario Belgrano. San Martfn y Be/grano. (Conferencia). Buenos Aires, 1945,
36páglnas.
1945 Héctor R. Ratto. Aspectos Navales de la Estrategia del Ubertador. (Con-
ferencia). Buenos Aires, 1947, 31 páginas.
1947 Gabinete Numismático del Museo Histórico Nacional. Buenos Aires, 1947,
8páglnas.
1948 Eduardo Acevedo Díaz. El Paso de los Andes, camino a través de Cuatro
Cordllleras. (Conferencia). Buenos Aires, 1948, 60 páginas.
1949 El Gabinete Numismático del Museo Histórico Nacional. Ciudad de Bue-
nos Aires. Año MCMXLIX. 64 páginas.
1951 Catálogo del Museo Histórico Nacional. Tomos 1y11. Buenos Aires, 1951.
1952 Catálogo de Documentos del Museo Histórico Nacional. Tomos l. 11y111.
Buenos Aires 1952.
1952 Selecclón de Documentos del Museo Histórico Naclonal. Tomo l. Buenos
Aires, 1952.
1956 Ricardo R. Calllet Bols. San Martín y el Ejército del Norte. (Conferencia).
Buenos Aires. 1956. 33 páginas.
1957 Raúl A. Molino. San Martín en Buenos Aires hasta el Combate de San Lo-
renzo. (Conferencia). Buenos Aires, 1957, 36 páginas.
1958 Carlos M. Gelly y Obes. General lndaleclo Chenaut. 1808-21 de mayo-
1958. (Conferencia). Buenos Aires. 1958. 54 páginas.
1958 Ricardo Plclrllll. San Martín y la Logia Lautaro. (Conferencia). Buenos Ai-
res, 1958, 40 páginas.
1959 Osear E. Carbone. El Patrimonio de San Martín. (Conferencia). Buenos Ai-
res, 1960, 40 páginas.
1960 Bonlfaclo del Carrll. Notas sobre la Vida y Obra de San Martfn. (Confe-
rencia). Buenos Aires, 1961. 43 páginas.
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1960 Catálogo del Perlodsmo e Imprenta Argentina. Inauguración del Salón Ex-
posición en el Museo Histórico Nacional, 7 de junio de 1960. 233 páginas.
1960Humberto F. Burzlo. Museo Histórico Nacional. (Conferencia). Buenos Aires,
1962, 48 páginas.
1961 Armando Braun Menéndez. San Martín y la Expedición Libertadora del
Perú. (Conferencia). Buenos Aires, 1962, 48 páginas.
1962 Guía explicativa del Museo Histórico Naclonal. Buenos Aires, 1962, 8pp,
1962 J. C. Raffo de la Reta. San Martín en Mendoza. (Conferencia). Buenos Ai-
res, 1962, 48 páginas.
1963 Horado C. Rlvarola. San Martín en la Educación Argentina. (Conferen-
cia). Buenos Aires, 1963, 32 páginas.
1964 José Carlos Astolfl. San Martín el Hombre y el Medio. Ensayo de Interpre-
tación de una conducta. Buenos Aires, 1965, 68 páginas.
6. En síntesis
Sale a la luz una publicación del más grande. completo y rico Museo de
historia de la Nación Argentina, como verdadera representación de un pasa-
do que nunca debió abandonarse. y lo pretende hacer con la Jerarquía que
tuvieron sus antecesoras. Que así sea.
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TEMAS
,
HISTORICOS
-
ICONOGRAFIA DE LA REVOLUCION DE MAYO -
POR M1GUEL J. RuFFO
Introducción
En este trabajo nos proponemos analizar los prtnclpales cuadros que Inte-
gran la lconografia de la revolución de Mayo; la casi totalldad de ellos data
de la época del Centenario.
En 191 Ose organizaron grandes festejos conmemorativos de la revolución
de Mayo. Por entonces, Buenos Aires era el centro de una nueva y dinámica
economía agroexportadora y la principal metrópoli sudamericana. La
agroexportaclón, la Inmigración masiva y el movimiento Internacional de capl-
tales habían transformado en pocos decenios a la otrora Gran Aldea. Los
cambios se registraban no sólo a nivel socloeconómlco y polítlco, sino también
en lo cultural. El Estado Nacional. 'que se había consolidado después del 80,
frente a la sociedad aluvlal. entre otras funciones, debió lnternalizar en la con-
ciencia social valores culturales que relacionasen a la nueva sociedad crlollo-
lnmigratoria con el pasado, el de las luchas Independentistas que habían for-
jado a la Nación, a fin de formar, desarrollar y consolldar, en la conciencia so-
cial, un arquetipo de la nacionalidad. La revolución de Mayo y la guerra de la
Independencia a través, primero de la hlstortografia de Mitre y López y des-
pués por medio de numerosíslmos actos, comisiones de homenaje a los guerre-
ros de la Independencia, comisiones de repatriación de restos, actos patrtos
en ias escuelas y otros eventos públicos, se convirtieron en un pasado épico
que debía y merecía ser evocado a través de actos oficiales, del sistema de
enseñanza y de producciones artísticas, en la escultura y la pintura. Los sujetos
sociales que protagonizaron la revoluclón de Mayo y la guerra de la Indepen-
dencia fueron Interpretados y percibidos como los héroes o padres fundado-
res de una nueva Nación. La tarea ·era encontrar las formas adecuadas para
que estos héroes y epopeyas recreados se encarnasen en la sociedad. El pro-
blema radicaba, precisamente, en establecer qué ámbitos y a través de qué
canales -en una sociedad que se rehacía día tras día- podían los recién llega-
dos o los más Jóvenes vincularse con el pasado argentino, al cual se remitían
los rasgos de la Identidad nadonar .1
Esto llevaría a promover los actos patrios en las escuelas, la transforma-
ción de determinados ámbitos, como la Casa de Tucumán, en monumentos
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históricos, el desarrollo de una escultura patriótica. ·porque Buenos Aires ape-
nas contaba con templos o Imágenes para el culto de la patria; la Plaza de
Mayo, cuya rernodelaclón, luego de la dernollclón de la Recova. clo lugar a
una entusiasta celebraclón en 1884, y la vieja pirámide; el resto de los edlflclos
antiguos remitía al pasado colonlal. Sólo algunas estatuas: la de San Martín
ecuestre. Inaugurada en 1862 y la de Belgrano. también a caballo. erigida en
1873 en la Plaza de Mayo; en la Catedral. el nuevo mausoleo con los restos de
San Martín. Instalados allí en 1880. completa el conjunto de referentes históri-
cos materiales con los que movilizar el entusiasmo patrlótlco-popula( 2; la fun-
dación del Museo Histórico Nacional. anteriormente de la Capital. en 1889.
contrlbuiria a la preservación y desarrollo de una conciencia nacional.
Corno es sabido, este museo fue fundado con el objeto de evocar las
tradiciones de la revolución de Mayo y la guerra de la Independencia. Su pri-
mer director, Adolfo P. Carranza. consideraba que ·1a revolución de Mayo es
la base de la naclonalldad argentina y debe mantenerse. sin complacencias
que la deblllten, ni cosmopolltisrno que hagan oMdarld •. 3
Dentro de esta perspectiva. cuando se celebró el Centenario. a
Carranza le cupo. entre otras, una importantísima labor en cuanto al asesora-
miento histórico a artistas, escultores y pintores, cuyas obras remitían a los
acontecimientos y hombres fundadores de la nacionalidad. En lo que hace a
los cuadros por éste encargados, en esa oportunidad, cabe mencionar. los
óleos de Pedro Subercaseaux Mariano Moreno en su mesa de trabajo, El Ca-
blldo Abierto del 22 de Mayo de 181 Oy El Himno Nacional en casa de
Mariquita Sánchez de Thompson; el óleo de Egldlo Querciola, Los últimos mo-
mentos de Mariano Moreno y los bocetos de Guillermo Da Re, La noche del 20
de Mayo en casa de Rodríguez Peña y La Jura de la Junta Gubernativa del 25
de Mayo de 1810. SI prestamos atención a esta Iconografía en su conjunto, ve-
remos que remite, por lo que evoca, a las nociones y conceptos básicos que
de la revolución de Mayo había establecido la historiografía llberal y que for-
maron y aún hoy forman parte del ·imaginarlo colectivo" de la Revolución de
Mayo, en la conciencia social: Mariano Moreno, corno el numen Impulsor de
los acontecimientos revolucionarlos, el Cablldo Abierto del 22 de Mayo corno
ámbito de la revolución, y la casa de Nicolás Rodriguez Peña, corno ámbito
de reunión de los revoluclonarlos.
Debernos tener en cuenta, también, que hacia 1910 prácticamente no
hay Imágenes pictóricas de la revoluclón de Mayo, con excepción del boceto
de Juan Manuel Blanes El Cabildo Abierto del 22 de Mayo y algunas acuarelas
de la jornada del 25 de Mayo, corno la de Nlcolau Catanea.
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Los cuadros del Centenario, en particular los de Pedro Subercaseaux,
son, podemos decir, los que han terminado por formar, en el ·imaginarlo co-
lectivo·, una Imagen visual de los acontecimientos de 1810.
La Iconografía de Mayo, la que se desarrolló en el Centenario, two por
comitente oftclal a Adolfo P. Carranza y por pintores a Pedro Subercaseaux,
Guillermo Da Re y Egldlo Querclola.
Dedcaremos unas breves palabras a estos pintores. Pedro Subercaseaux,
·descendiente de prominentes famlllas chilenas cuyos apellidos aparecen n-
gados a la polítlca y a la Industria del vino de su país· ,4 desde temprana edad
sintló lnclinaclón por el arte y encontró en la pintura la posibilidad de expresar
su vocación humanística y estética. En Europa -había nacido en Roma en
1881- estudió en diversas escuelas y talleres de pintura obteniendo sus primeros
premios como artista. ·cuando regresó a Chile en 1902 encaró el tema históri-
co en telas gigantescas. realizando hechos épicos de la historia chilena y ame-
ricana, con gran fidelidad de detalles y pura expresión plástlca·.s La pintura
histórica de Subercaseaux era representativo del arte de fin de slglo, ·cuando
los pintores, dominados aún por la técnica de la perfección académica, en-
caran a todo volumen los temas históricos para legar a la posteridad recons-
trucciones, muchas veces ftdedlgnas, de los grandes hechos de armas con va-
lor de documentos•.
Fue Pedro Subercaseaux un pintor formado en la escuela académica.
·No sería posible pintar la epopeya de una nación con cuadros cubistas o
dadaístas (...) El pintor de la historia patria compone la realidad como un bello
escenario para las fiestas. M pintó Subercaseaux durante su Jwentud. cuando
lo entusiasmaba el propósito de perfeccionar su arte•.
Las tradclones orales que escuchaba entre sus famlllares y allegados, sus
propias búsquedas en archivos y bibliotecas, vlncularon a sus pinturas con el
"tiempo de los origenes· de las naciones americanas. Esta época encontró en
los pinceles de Subercaseaux los medos capaces de crear "gestos nobles, ac-
titudes definitivas, una atmósfera de héroes, en fin, espectáculos, que única-
mente pueden ser episodios patrióticos. Ésta es su contribución a la
Iconografía de la epopeya americana·.
En 1908 Pedro Subercaseaux estwo en Buenos Aires; para entonces ya
era un pintor consagrado. Teniendo en cuenta las proximidades del Centena-
rio, Adolfo PCarranza le encargó un conjunto de pinturas históricas para con-
memorar a la Revoluclón de Mayo.
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Gulllermo Da Re fue un pintor veneciano que se radicó en nuestro país
probablemente a ftnes del slglo XIX. Su producción pictórica Incluye retratos,
lienzos históricos. naturalezas. recuerdos venecianos y temas clásicos. "De la
historia argentina ha tomado asuntos dramáticos y patrióticos para cuadros
que le valieron juicios favorables, tan Importantes como el que emitió, hace
años. el general Bartolomé Mitre, en presencia de una de sus obras·.
La pasión por los temas históricos lo Impulsó a una paciente búsqueda
testimonial para documentOf sus obras. Así su bosquejo de "La Independencia
Argentina· lo Impulsó a viajar a Tucumán, para estudiar. In sltu, la atmósfera
ambiental de los hombres que participaron en el Congreso de 1816. ·oa Re
fue uno de los primeros artistas que se dedicó entre nosotros a la pintura histó-
rica e hizo el primer bosquejo de la Jura de la Independencia en Tucumán,
ayudado por los consejos del general Mitre, del poeta y escritor doctor Tobal y
del doctor Justlnlano Carranza·.
En 1900, Guillermo Da Re era conocido en el medio local por su produc-
ción artística; algunas de sus pinturas históricas, como La Independencia del
Paraguay habían recibido el elogio de la crítica; Carranza, le encargó enton-
ces a este pintor otros dos cuadros para conmemorar la revolución de Mayo.
En 1911, en ocasión del Centenario de la muerte de Mariano Moreno,
Egldlo Querclola, pintor que se había destacado retratando a presidentes de
la República, fue comisionado por Adolfo P. Carranza para pintar un óleo so-
bre el fallecimiento del secretarlo de la Primera Junta.
Completamos esta Iconografía con un boceto de Juan Manuel Bienes, El
Cabildo Abierto del 22 de Mayo de 1810, que pintara en 1876. De Bienes po-
demos decir que ·aparece como una flgura clave en el proceso de surgimien-
to de un arte nacional en el Río de la Plata por la poderosa Influencia que
ejerció no sólo en el ámbito artístico sino sobre toda una época en la vida cul-
tural y polítlca tanto de Montevideo como de Buenos Aires (...) Bienes tuvo un
concepto personal de estilo, Indisolublemente unido a la ftnalldad que él con-
cebía para el arte: se sabía artista americano y sentía sobre sí la responsablll-
dad de dar forma senslble a los hechos e Ideas slgnlflcatlvos de su pasado his-
tórico, para hacerlo comprensible a todos sus compatriotas. Una y otra vez
aparece en sus escritos la Idea de que el arte debía ser útll y edlflcante, lncul-
cqndo a la gente grandes Ideales·.
Finalmente, Incluimos un bosquejo a pluma de Nlcolau Cotando, titulado
"El 25 de Mayo de 1810 en Buenos Aires·. ·
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El CABILDO ABIERTO DE 1810
Óleo sobre tela
Boceto
Autor: Juan Manuel Blanes
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cultor chlleno Nlcanor Plaza lnscrlbléndolo alrededor del medallón que mode-
ló en Santiago.
Con la visión plena de su Muro cuacto y aprovechando que Iba a per-
manecer en Buenos Aires una temporada más larga que las de ordinario, re-
quirió Bienes a sus amigos porteños Información más precisa y ampllatorla de
lo que ya sabía por las lecturas y los datos colectados en nuestra capital
(Montevideo).
causará extrañeza a los que no conozcan el modo de ser del artista
montevideano y su probidad como pintor de historia, la minuciosidad de estas
investigaciones y el detallismo -algunas veces agudo- que parecía
atormentarlo. Pero se trata de algo orgánico, por decirlo así, que habrá de
reproducirse cada vez que Blanes se embarque en una tarea semejante.
Ahí, previas a la composición de cada tela histórica, están sus largas y
reiteradas cartas, dirigidas a los amigos sabios en la materia, a los actores o a
los testigos del hecho. Cartas escritas sin prisa y con admirable caligrafía, ce-
nas de cuestionarios, de dudas a esclarecer y de pormenores Inverosímiles,
donde en ocasiones acompañci. un croquis marginal para mejor explicación
de las preguntas.
La documentación para El Cabildo Abierto, realizada sobre el terreno y
entre una pléyade de hombres de historia, debió revestir caracteres excepcio-
nales: el tema era amplísimo, los personajes muy numerosos, los asesores ama-
bles y eruditos ...
Desde luego, Blanes y sus versados amigos discutieron el tema y el de-
sarrollo del cuadro conforme el pintor lo había concebido en su estudio de
Montevideo. Al atravesar el estuario llevaba consigo el artista algo más que
una composición Ideológica.
Hay un croquis hecho a lápiz Compté sobre una hoja de papel en calien-
te tonalidad verdosa. que acaso es el croquis primitivo de ese lienzo no pinta-
do nunca. Un esbozo apenas, pero un esbozo de mano maestra, que marca
en trazos firmes un conjunto de figuras definidas, puestas en sitio.
El desarrollo de la escena es hábll. El corredor de la casa del Cabildo, to-
mado a lo largo, se cierra al fondo por una cortina plegada, delante de la
cual aparece la mesa de la presidencia, obteniendo de este modo que el ele-
mento realista pase sin esfuerzo a un plano secundarlo.
Confrontados el croquis primario y el boceto del Museo Histórico, man-
. chado al óleo, nótanse las modificaciones o las adiciones posteriores, corno
por ejemplo el grupo de personajes colocado a la Izquierda, merced al cual el
conjunto se equlllbra ganando mucho la flgura de Castelll. Como los persona-
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jes reunidos en el cuadro pasaban de cincuenta, había para eleglr entre los
numerosos Invitados para el Cablldo abierto de Mayo.
·Puede agregarse al grupo prlnclpal -dice una anotación de Bienes- Don
Antonio Luis Berutl. de Mendoza·. Y en otra: ·pociía echarse mano de Floro
Zamudlo, hombre bajo, delgado, de cara chupada y más larga que la de
Paso·.
Hay muchas acotaciones semejantes, llustratlvas. breves y sin desperct-
cio, marginando los apuntes. hechos con certeza de trazo y singular frescura.
Consigue y copla una miniatura del Doctor Argerlch, y al lado para ayu-
da de memoria escribe ·parecido a don Pedro León Pereda· (un conocido de
Montevideo), añadiendo enseguida: "Blanco subido, cabello rublo oscuro, es-
tatura regular, más bien grueso·. Otras veces un parecer o una palabra le
bastan para caracterizar el sujeto.
Debajo del retrato de don F.X. Rlglos, pone esta advertencia: "Hermo-
so como Peris·. De d<;>n Francisco Pico no es posibl~ hallar retrato -ni óleo anti-
guo. ni miniatura, ni daguerrotipo-, pero hay referencias sobre su buena figura.
el color de la tez y su natural: "Robusto con bastante clrculaclón·. Pero ade-
más sus amigos le hacen conocer a don Pedro Pico, a quien se le atribuye mu-
cho parecido con el personaje del cuadro y Bienes toma del natural un retrato
pequeño, de lo más expresivo, en la misma posición que en el llenzo tiene
asignada don Francisco.
De Matheu encuentro este resumen: ·Blanco. algo calvo, pelo blanco, fi-
sonomía muy serena, regular y simpática, cejas graciosamente unidas e Inme-
diatamente sobre los ojos, que son velados y azules, boca chica, nariz Igual-
mente abultada y poco sobresaliente·.
Tiene a la vista (y han llegado hasta nosotros con un resto de archivo)
viejas fotografías clrectas, reproducciones y vistas de las más antiguas del Inte-
rior del Cablldo, coplas amarlllas Impresas sobre placas al colodión húmedo,
pero va a requerir los orlglnales donde estén.
En la sacristía de Monserrat hay el retrato de un sacerdote que necesita;
en la Biblloteca Pública, el 18 de Setiembre, copla un óleo del obispo Lué, con
los ojos desmesuradamente grandes que le Imprimen una extraña marca de
poseído. Las acotaciones que algulen le debe dctar allí mismo le servirán para
Interpretar mejor en el estudio aquella factura primitiva y sin expresión.
Para pintar a don Alejo Castex tiene un boceto hermoso cuya fuente ori-
ginarla no consta, y de Dosal-apunta- hay otro retrato para sustituir al que ya
tiene. Cuenta con formal promesa de que le conseguirán uno de Terrada.
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Pascual Rulz Huldobro parece haberle dado mucho que hacer: ªMuy buscado
y nada encontrado". Logra al ftn dibujar un busto expresivo. de tres cuartos
vuelto a la Izquierda. Probablemente es una reconstrucción. En la cabeza del
doctor Jullán Segundo de Agüero acierta a dibujar una pequeña obra maes-
tra.
Perrnanecen desconocidas los motivos que hicieron que el cuacto del
Cablldo abierto no se pintase. Seguramente no fue viable la financiación de
·una tela de dimensiones ton aventajadas hecha por un artista que fljaba alto.
precio por sus trabajos. Tal vez fue cuestión de unos centenares de pesos. tal
vez de un mil.
No pensó el ministro de la época, ordenado y 1ímldo, que las Muras ge-
neraciones nunca le habrían de acreditar en su cuenta aquella economía.
una miseria al fin. todo lo Justificada en su momento que se quiera. sucede así.
y debería servir de ejemplo. El dinero turnante y eterno deja de tener valor sufi-
ciente por eso mismo. La ocasión. en cambio. única y efimera. no hay precio
que la pague.
Nadi·e ha de decir a estas horas: el juicioso ministro que discutió aquellos
pesos y no dejó que se gastaran en una pintura ... Muchos. en cambio, delan-
te de la tela prestigiosa del maestro, habrían repetido: "Fue el ministro Tal el
que hizo pintar este gran cuadro·.
También Fernando García Esteban en su trabajo ·Juan Manuel de
Bienes. pintor", se refiere brevemente a este boceto diciendo: "Otro nivel de lo
que podríamos denominar bravura histórica -pincelada muy suelta,
abocetarniento seguro. tensa versión climática tonal al modo del mejor
Daumler. que es excelente ejemplo- llega a reconocerse en La sanción de la
Constitución Argentina en Santa Fe, 1853 y también en El Cabildo Abierto de
Mayo de 1B10. dos breves anotaciones al óleo que tampoco llegaron a la es-
cala real".
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tístlcamente el momento lnstltuclonal de la revoluclón de 1810 en la perspecti-
va evocatlva del Centenario. En la misma se relaclonan tres factores:
l) La tradición de Mayo hacia la época del Centenario.
2) El Interés de Adolfo PCarranza por dotar al Museo Histórico Naclonal
de pinturas que evocasen las tradiciones mayas; ímpetu que no se agotaba
en el encargo de las obras sino que se continuaba en el asesoramiento históri-
co a los artistas.
3) Las Inquietudes artísticas e históricas de Pedro Subercaseaux, su partl-
cular forma de percepción vlsuaL sus Inquietudes estéticas fundadas en la es-
cuela académica y su formación en los cánones de las tradiciones vinculadas
a la guerra de la emancipación americana.
Nos vamos a centrar en el anállsls de la documentación de la pintura,
determinando sus prlnclpales fuentes orales, literarias y pictóricas, anállsls que
permitirá tener en cuenta la lntenclonalldad del artista y de su comitente, las
bases desde las cuales se realizó la producción artística.
La pintura de Pedro Subercaseaux es una pintura documentada. Alejo
González Garaño señala que Adolfo P. Carranza "fue el consejero y animador
del pintor chileno Pedro Subercaseaux, Interviniendo Igualmente, en la adquisi-
ción de sus grandes cuadros de carácter histórico, con destino al Museo· .6 De
esta manera las conversaciones entre Carranza y Subercaseaux y las cartas
intercambiadas entre ambos constituyen fuentes Ineludibles de sus pinturas.
En lo que se refiere a la documentación para El Cabildo Abierto del 22
de Mayo de 1810 no se ha conservado, si la hubo. carta o nota donde direc-
tor b pintor describiesen la escena que pretendían representar para evocar el
Cabildo Abierto. En la carta de noviembre de 1908, Subercaseaux decía que
"de acuerdo con las Ideas que hemos camblado· 1 había proyectado el óleo.
En efecto, en la reunión del 16 de noviembre de 1908, Subercaseaux y
Carranza conversaron acerca de la reallzaclón de tres óleos. Uno de ellos ten-
dria por motivo el Cablldo Abierto del 22 de Mayo. Pero Subercaseaux no dice
nada en relación a las caracteñstlcas de la escena que se proponían repre-
sentar. Sólo dice que el trabajo se realizará conforme a las Ideas
Intercambiadas y que sería ·digno del asunto ... siendo las dimensiones del
cuadro de 4 m. de ancho por 3 m. de atto• .8
· ¿Cuáles fueron las Ideas que Intercambiaron? ¿Qué le aconsejó
Carranza a Subercaseaux?. Sólo podemos Inferir estos consejos de una mane-
ra parcial a partir de la comparación entre lo que observamos en el óleo y las
historias de Bartolomé Mitre y Vicente Fldel López cuando hacen referencia al
Cablldo Abierto del 22 de Mayo.
31
¿Cuól es el fundamento de esta comparación? Tenemos por un lado el
óleo. que es el producto de una producción artística documentada; por el
otro, consejos que no podemos reconstruir directamente. Pero sabemos que
Adolfo P Carranza no escribió una historia de la revolución de Mayo, que su
resumen de Historia Argentina se basa en la historia de Vicente Fldel López,
que este resumen fue sometido a la consideración de Bartolomé Mitre, que
carranza mantenía relaciones con ambos hombres públicos. que López fue
consejero del Museo Histórico. Mitre miembro de la comisión patrocinadora y
que las historias de Mitre y López eran hacia 1910 las principales en cuanto a
la lectura historiográfica dominante de las jornadas de Mayo.
Aquí. de lo que se trata, ante todo. es de ver en la pintura. por la compo-
sición del dibujo, representaciones que correspondan, aunque sea aproxima-
damente, a los momentos descriptivos del Cabildo del 22 de Mayo, en las na-
rraciones de Mitre y López.
En nuestra opinión Carranza debió manifestarte a Subercaseaux Ideas si-
milares a las expresadas por López en su Historia Argentina. Esta afirmación la
basamos en las siguientes consideraciones:
l) En el cuadro se ve claramente que una parte de los concurrentes es-
tán sentados en sillas; pues bien. en lo que hace al amoblamlento de las gale-
rías altas de la Casa Conslstorial. Mitre habla de escaños. mientras que López
menciona escaños, bancas y sillas.
2) El Obispo Lué, resaltado en su asiento. lujosamente vestido, con
atributos de su dignidad eplscopal. con una cruz pectoral y el solideo, jun-
to a uno de los familiares eclesiásticos, parado Inmediatamente detrás de
él. Esto concuerda aproximadamente con López cuando dice "el obispo
había tornado asiento con anticipación. vestido con un lujo eclesiástico
excepciona!. Llevaba todas las cadenas y cruces de su rango, riquísimos
escapularios de oro y cuatro familiares, de ple detrás de él. tenían la mitra
el uno, un magnífico rnlsal el otro, las leyes de Indias y otros volúmenes con
que se había preparado a hundir a sus adversarlos·.9 Por el contrario. Mitre
sólo hace referencia a lo manifestado por Lué sin describir cómo estaba
vestido o quiénes lo acompañaban.
3) Castelll representado Inmediatamente detrás de Paso. Es López quien
dice que Castelll empujó a Paso al centro de la sala, mientras que Mitre afirma
que fueron José A. Escalada. Rodríguez Peña y Castelll quienes Incitaron a
~aso a replicar a Vlllota. Toda esta parte de la composición, donde un Castelll
ngldo Yenmudecido se encuentra ubicado Inmediatamente detrás de Paso.
al momento en que éste pronuncia su discurso, se corresponde a la siguiente
32
descripción de López: ·castelll mismo. demasiado Impresionado. parecía re-
miso para volver a la discusión ¿Dudaba acaso de sus fuerzas? Sí: dudaba; y
así fue que desesperado tomó convulslvamente en peso al doctor Paso. hom-
bre pequeñísimo de formas. y lo lanzó al medio del recinto para que recobra-
se el campo que todos creían perdldo·. 10
4) Las señales que se Intercambiaban los revoluclonarlos en la Asamblea
del 22 de Mayo. Mitre las centraliza en Belgrano. al que le adjudica portar un
pañuelo blanco. ocupando un lugar en el extremo de uno de los escaños;
mientras que López las deja en el anonimato de ·gentes que subían y baJa-
oon •.11 En el óleo. Belgrano. sentado de brazos cruzados. Inmediatamente de-
trás de Luis José de Chorroarín. no tiene ningún pañuelo blanco; mientras el
Juego de señales es reallzado con sombreros por personajes no reconoclbles.
uno de los cuales se encuentra delante de una de las puertas del Cablldo. No
olvldemos que López dice que subían y bajaban las escaleras para comuni-
carse con la plaza.
5) Mariano Moreno representado en el extremo inferior derecho del óleo.
sentado y pensativo. como en una Instancia distinta al discurso de Paso. co-
rresponde a lo afirmado por López. al decir que después de la votación,
cuando los revolucionarlos creían haber triunfado, el Dr. Vicente López (padre)
se encontró con Mariano Moreno. que se encontraba sumamente preocupa-
do. Dice López "Muy tarde ya. al pasar don Vicente López por delante de una
de las bancas más excusadas. reparó en el Dr. Don Mariano Moreno. que acu-
rrucado en un rincón(. ..) parecía cabizbajo. -¿Está Ud. fatigado, compañero?
-Estoy caviloso y muy Inquieto. -Por qué?. Todo nos ha salldo bien. -No, amigo;
yo he votado con ustedes por la insistencia y majadería de Martín Roctíguez.
pero tenía mis sospechas de que el Cabildo podía traicionarnos y ahora le
digo a usted que estamos traicionados. Acabo de saberlo y si no nos preveni-
mos. los godos nos van a ahorcar antes de poco: tenemos muchos enemigos.
y algunos que andan entre nosotros y quizás sean los primeros en echarnos el
guante·. 12 En el óleo. Mariano Moreno, que como ya hemos señalado. se en-
cuentra sentado y meditativo. en suma preocupado. tiene detrás a Vicente
López. que se acerca. como queriendo Interrogarlo por su preocupación. SI
nos hemos detenido a citar extensamente a López. en este dlálogo entre
Mariano Moreno y el Dr. Vicente López. se debe a que ello es de fundamental
Importancia para la Interpretación del óleo. como luego veremos. Por el
contrario. Mitre no hace referencia alguna a Moreno en el Cablldo del 22 de
Mayo.
De esta manera este óleo de Pedro Subercaseaux tiene por base docu-
33
mental Indirecta la historia de López, tal como el pintor la expresó estética-
mente, a partir de los consejos de Carranza como fuente directa.
Hemos señalado su fuente llterarla y oral; cabe señalar ahora las pictóri-
cas. Es decir, aquellos retratos que pucleron servirle a Subercaseaux para la re-
presentación de los rasgos ftsonómlcos de los personajes.
Considerando exclusivamente los óleos, dibujos o lltografias Ingresadas al
museo con anterioridad a 1909, las siguientes bien pudieron ser fuentes de
Subercaseaux para la fisonomía de los rostros y las características de las vesti-
mentas.
En relación a Paso, el Museo dispone de un retrato que consiste en un di-
bujo al pastel. de Ernesto Chartón, realizado en 1872, y que ingresó en 1901
como parte de la colección Ángel J. Carranza. En ese dibujo, Paso está repre-
sentado con escaso cabello oscuro, peinado hacia atrás, afeitado, los ojos
claros y la tez rosada. Tiene las cejas muy marcadas, la nariz es grande y se
notan numerosas arrugas en la frente. Viste un frac de paño oscuro con doble
hilera de botones, camisa blanca plegadiza con cuello alto y corbatín con
moño. En el óleo, un Paso avejentado en relación al hombre de 1810, nos indi-
ca este retrato corno fuente pictórica. La ftsonornía de su rostro es muy similar
a la de Chartón. En su vestimenta se distingue el cuello alto de su camisa blan-
ca, el corbatín con moño y una de las dos hileras de botones de su frac.
En el caso de Fellclano Antonio Chlclana, el Museo dispone de un óleo
que data de 1860, de autor anónimo, donde aquél aparece representado en
3/4 de busto hacia la derecha, con traje de época y donde su ftsonornía y
vestimenta son Iguales a las recreadas por Subercaseaux.
En cuanto a Tomás M. de Anchorena, se dispone de un óleo de F. García
Ingresado en 1893, donde el cabildante aparece representado de perfil. con
cabello y patillas oscuras, traje clvU de la época, gran cuello y gola blancas.
Este óleo representa un Anchorena con una ftsonornía muy slrnllar a la dibuja-
da por Subercaseaux. Se cambió el perfil. pero los rasgos faclales son muy slm-
lares, se destaca en su vestimenta el gran cuello de la camisa blanca.
En lo que respecta a Lezlca, debernos decir que en el mismo año de 1909
Gulllermo Da Re realiza un óleo sobre tela, cuyo rostro sólo se asemeja parcial-
mente al representado por Subercaseaux. Da Re había dibujado a Lezlca con
traje clvll de la época, negro, cuello alto y pechera blancos, corbatón negro y
cabello claro. El Lezlca de Subercaseaux tiene traje oscuro, cuello alto y cabe-
llo claro, pero el corbatón es blanco.
Saavedra tal vez pueda estar Inspirado en la lltograña de Andrea Bacle.
34
Aunque en ésta se encuentra de frente y en el óleo de perfil. son coincidentes
la coloración de la tez, el color de los cabellos y las patlllas tupidas.
El rostro de Lué encuentra en el dibujo de Manuel Pió y Valor una poslble
base Inspirativa. En el dbujo se lo ve con el solldeo y el crucifijo, al Igual que en
el óleo; los cabellos son claros en ambas representaciones; pero el dibujo lo re-
presenta de frente y el óleo de perfil.
Flnalmente, en cuanto al rostro de Mariano Moreno, cabe señalar
que Subercaseaux se basó en la lltograña de Mariano Moreno de Edmond
Narclse Desmadryl publlcada en la Galería de Celebridades Argentinas
publicada en 1857.
Subercaseaux recuerda en relaclón a la composición de este cuadro:
·oespués de estudiar detenidamente el tema, me construí una maqueta, a es-
cala. de la sala del Cabildo de Buenos Alres a fin de obtener los Juegos de luz y
perspectiva y lograr así el efecto realista que yo deseaba. En este cuadro apa-
recen unas sesenta figuras, de las que treinta son retratos sacados de docu-
mentos auténticos· .13 •
El Cabildo Abierto del 22 de Mayo de 1810 es un óleo ilustrativo-didácti-
co. La perspectiva lineal es el recurso para crear espacio, con un punto de
fuga central, por sobre el rostro de Lezlca; es una pintura dlbujístlca, sin saltos
bruscos de color o de luz. El espacio está equlllbradamente organizado. Por su
técnica es neoclásico. El artista se adentra en el estudio psicológico de los per-
sonajes. la Identidad de sus emociones está claramente manifiesta y se logra
una composición de fuerte dinamismo expresivo, con agitaciones y pasiones
disímiles. A un mismo tiempo el gusto de Subercaseaux por las sensaciones ex-
tremas y definidas lo ha llevado a intelectualizar un momento de la sensación
de cada uno de los personajes y la dinámica expresiva no se manifiesta en tér-
minos medios sino en las oposiciones de sensaciones diversas. Esta agitación
expresiva tiene diversos ·centros espaciales de referencia·, pero un mismo
centro de atención Intelectual. que es el generador de las emociones y que
compenetra a los distintos personajes de lo que está aconteciendo.
El discurso de Paso es el centro radial de las emociones, es el foco de
atención común de los personajes representados, con la excepción de More-
no que está como fuera de esos sentimientos encontrados, sumergido en sus
propios pensamientos que parecen discurrir por un carrll distinto al despertado
por las palabras de Paso. El óleo presenta, como veremos. dos momentos: el
discurso de Paso y la preocupación de Moreno en el Cablldo del 22 de Mayo;
dos momentos que se entrecruzan y que nos dan la clave de la Interpretación
temática del óleo.
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Pasaremos a una descrtpclón de la escena. El Pacte Cayetano Bruno se-
ñala: ·Entre los personajes que se han ldentlflcado. al fondo, sentado. apare-
ce el Alcalde de Prtmer Voto Juan José Lezlca. Luego, en prtmer plano, pro-
nunciando su discurso, Juan José Paso. Detrás de él. Juan José Castelll. Dos de
los personajes de ple que siguen detrás son Francisco Ortlz de Ocampo y José
Agustín Donado. Sentado se apoya en su bastón Metías de Yrtgoyen; e lnme-
o1atamente después asoma la cabeza de Miguel de Azcuénaga (...) En la par-
te central. arriba. sentado en el medio. en actitud pensativa. el obispo Lué y
Riega. A su derecha, también sentado. más abajo, el Padre Luis José de
Chorroarín; e Inmediatamente después asoma Manuel Belgrano. El último sen-
tado hacia acá, es Tomás Manuel de Anchorena (... }En la parte derecha del
cuadro, de derecha a izquierda: Juan Ramón Balcarce; Antonio Luis Berutl; de
cuerpo entero y con el capote militar, Comelio de Saavedra; siguiendo la mis-
ma línea. apenas visibles: Domingo Matheu; Martín Rodríguez; mirando hacia
acá, Feliciano Antonio Chiclana; detrás de él, poco visible, Hipólito Vleytes;
abajo, sentado, Mariano Moreno·. 14
Ahora bien, Paso avanza pronuncladamente hacia el centro de la esce-
na. Es el personaje central. Extiende su brazo Izquierdo hacia adelante, con la
palma de la mano abierta. en un movimiento que abre su capa española y
pronuncia su discurso. El razonamiento vibrante y emotivo del mismo se deno-
ta no sólo en la expresividad de la figura de Paso. con la boca entreabierta y
la tensión de los músculos faciales, sino también y fundamentalmente en el
conjunto de la representación, que hace _de Paso el centro convergente de
las acciones del resto de los personajes. Estos acompañan su razonamiento
con diferentes actitudes y estados emotivos.
Carranza decía, a propósito de la escultura de Paso, que era necesario
representarte como un hombre que razona y no como un tribuno. Pensamos
que los conceptos que Paso fue expresando en su discurso, su Incisivo razona-
miento, está siendo evocado por Subercaseaux en el meditado Interés que
despiertan sus palabras en el conjunto de los asistentes, que focallzan su aten-
ción en aquellas palabras.
Castelll, Inmediatamente detrás de aquél. en una posición tensa y rígida,
que deja traslucirse en la comisura de los labios fuertemente apretados el uno
contra el otro. en sus ojos que se abren plenamente mirando hacia Paso. des-
de atrós. parece transmitir, con su rigidez corporal. una seriedad patética,
conmovida. que alude a su desorientación tras la refutación de Vlllota y a un
mismo tiempo, a la últlma esperanza. depositada en ese hombre, al que aca-
ba de arrojar hacia el centro del debate.
Frente a Castelll y Paso. que son los oradores de la revoluclón. se encuen-
tran Balcarce. Berutl y Saavedra. en un relatlvo agrupamiento de los represen-
tantes de las mlllclas en el Cablldo del 22 de Mayo. Saavedra representado de
perfll y mirando directamente a Paso. acompaña la tensión de este y a un mis-
mo tiempo admira su discurso. Asi el movimiento hacia adelante de Paso pa-
rece ser acompañado por el avance del ple Izquierdo de Saavedra (los plle-
gues abundantes de su pantalón denotan la Intención del artista por Indicar
que momentos antes se encontraba parado en otra posición) Su pose. que se
caracteriza por un perfil erguido y majestuoso. donde una gran capa españo-
la cubre la espalda del comandante de Patricios. cayendo como en casca-
das desde los hombros hasta las botas de su uniforme. acompaña a un rostro
con el entrecejo fruncido. que transmite la decisión del patricio de apoyar una
resolución favorable a las argumentaciones de Paso en el Cabildo Abierto. Los
tres militares dirigiendo su mirada hacia Paso Indican el respaldo de las milicias
a la revolución.
Aunque Paso refuta a Villota, la oposición entre r~voluclonarios y metro-
politanos está representada en la contraposición Paso-Lué.
El obispo, cuya autoridad está resaltada en un asiento que se destaca
sobre un estrado escalonado y alfombrado. dirige su mirada hacia abajo,
mientras lleva el brazo derecho hacia el mismo perfll. apoyándolo en su rostro.
Se encuentra en una actitud meditativa. preocupado ante el avance Impe-
tuoso de los razonamientos de Paso.
El grupo ecleslástlco merece un anállsls más detallado. Agrupados los sa-
cerdotes en su conjunto en la parte central del óleo. son el único grupo social
totalmente reunido en el ámbito de la galena. Mientras las vestimentas nos
permiten distinguir aparte del obispo. sacerdotes mercedarios (hábito blanco).
dominicos (hábito blanco y negro) y franciscanos (hábito marrón), las actitu-
des evidencian la atención con que el grupo sigue las palabras de Paso.
En cuanto al dnamlsmo de la escena debemos Indicar que los razona-
mientos del orador siembran entre los sacerdotes, comentarlos. dudas y re-
flexiones. Obsérvese. si no. el diálogo entre los dos mercedarios mientras diri-
gen su mirada a Paso; al sacerdote franciscano avanzando su rostro en direc-
ción al orador. como Intentando seguir con mayor atención sus palabras; la ya
señalada preocupación meditativa de Lué; los ojos que se entornan del domi-
nico, que cierra hacia la Izquierda el grupo ecleslástlco. mientras su mente se
concentra en los razonamientos que se pronuncian en la asamblea. Hay un
cllma de agitación Intelectual. compartido por el conjunto de la escena. una
agitación que va a dlvlcJr al clero en el momento de la votación. Así en el gru-
37
po ecleslóstlco estón representados los tres partidos del Cabildo abierto: el
metropolltano (Lué). el conclllador (luis José de Chorroarín, cura rector del Co-
leglo de San Cartos. que se distingue por su vestimenta de canónigo). el revo-
luclonarlo (Manuel Alvarlño. el dominico sentado. que siguió el voto de
Saavecta).
La escena en su conjunto revela suma atención a los razonamientos de
Paso. Los personajes representados están compenetrados en su discurso. Unos
evidencian su atención dirtgléndoles sus miradas. otros entornan los ojos y se
abstraen en sus propias meditaciones. hay también quienes giran el rostro.
como pretendiendo avanzar con los mismos hacia el orador poro seguir con
mayor atención sus palabras. Es como si el conjunto de lo asamblea. conmovi-
da. reflexionase en torno o los razonamientos de Paso.
Por otro parte, el juego de señales por medio de los galeros es sumamen-
te significativo. porque apunto hacia el exterior. hacia lo plazo público que se-
guía con atención al Cabildo abierto, o por lo menos la plaza que se Imagina-
ban nuestros primeros historiadores.
Otro análisis merece Mariano Moreno. Representado en el extremo infe-
rior derecho del óleo, como al margen de la escena, pero o un mismo tiempo
en un primer plano que lo destaca. configura un momento Importantísimo
para la interpretación temótlca de lo pintura.
Moreno es una Instancia distinto a la que corresponde al discurso de
Paso. Estó sumergido en sus propias dudas. en sus propias preocupaciones,
hay algo que no lo convence y es si la votación que ha dejado en el Cabildo
la facultad de elegir al nuevo gobierno ha garantizado con ello el triunfo de la
revolución.
El personaje que aparece inmediatamente detrás de Moreno. el Dr. Vi-
cente López. avanza hacia éste como Inquiriéndole por sus cavilaciones. Esta
porte de la escena remite al diálogo entre Moreno y el Dr. López. Inmediata-
mente después de la votación. cuando los revoluclonarlos creían haber triun-
fado. pero Moreno advirtió. según Vicente López (hijo). que la revolución co-
rría serlo pellgro.
Que Moreno representa uno Instancio distinto al resto de la escena. se re-
vela por lo forma en que contrastan los primeros planos Inferiores Izquierdo y
derecho. el primero centrado en Paso. porque los personajes representados.
d~ espaldas al espectador. dirigen su mirada a aquél; y el segundo aislado.
respecto del resto de la composición. constituyendo ya. no sólo un centro es-
paclal distinto. sino otro centro Intelectual. Obsérvese que mientras todos
38
confluyen en Paso, Moreno está sobre sí msmo y esto despierta la atención del
Dr. López que hacia éste se. dirige.
De esta manera, en el óleo, el artista ha sincronizado dos momentos dis-
tintos del Cabildo del 22 de Mayo:
1) La exposición de Paso anterior a la votación.
2) Las dudas de Moreno posteriores a la votación.
Es muy Importante tener esto presente para la dllucldclclón temática del
cuadro.
Señalemos, en primer término, que del conjunto de los acontecimientos
de Mayo, Subercaseaux eligló el Cabildo Abierto, que fue la Instancia culml-
nante del momento institucional de la revolución, del debate Jurídlco-poíitlco,
de los títulos legales; pero lo evoca en una instancia particular: la del discurso
de Paso, cuando los argumentos ya no son sólo juridlcos, sino que se apela a
los testimonios de la historia, a las actitudes de las grandes ciudades, como
Atenas o Roma, para fundamentar los derechos de BtJenos Aires a deponer a
una autoridad virreinal y coloca en ese instante las dudas de Moreno, poste-
riores a la votación que siguió al debate y que pueden sintetizarse así: el Cabil-
do traicionará, la revolución no ha triunfado.
De am que, si tenemos en cuenta: 1) la referencia a lo que acontece en
el exterior del Cabildo, mediante el juego de señales y que alude a lo que en
el Centenario se denominaba ·gobierno de la plaza públlca"; 2) la elección
del discurso de Paso y no el de Castelll, para evocar los fundamentos de la re-
volución y haber expresado las contraposiciones del debate jurídco-polítlco, a
través de la oposición Paso-Lué y no Castelll-Vlllota, que constituyen el mo-
mento más importante del debate desde el punto de vista Juridco; 3) la repre-
sentación de Moreno, en un momento que corresponde a la situación poste-
rior a la votación, sincrónicamente con el discurso que cierra el debate y abre
paso a la misma, tendremos entonces que el óleo remite temáticamente a la
necesidad de superar la Instancia lnstltuclonal (Cabildo) poro que la revolu-
ción tenga asegurado su triunfo.
Podemos por tonto Inferir que El Cabildo Abierto del 22 de Mayo de 1810
presento las formas lnstltuclonales en que se desarrolló la revoluclón y a un mis-
mo tiempo la necesidad de superarlas. De lo anterior consideramos que el
tema del óleo es: los límites del momento lnstltuclonal de la revolución, límites
que estaban dados por la propia lnstltuclonalldad en que se desarrollaba.
Este óleo fue pintado en Chile y trasladado a Buenos Aires en ocasión de
la Exposición de Arte del Centenario. Recuerda Subercaseaux :
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·No bastaba con pintar los dos cuadros: había que hacerlos llegar a
Buenos Aires vía cordillera. enrollados en sólidos tubos de latón. Partí con ellos
vigilando por el camino a los arrieros. Por el Espinazo del Diablo los perdí de
vista. Al encontrarlos de nuevo, ¡oh espanto!, para mayor comodidad los arrie-
ros habían doblado en dos el tubo de latón.
·uegado a Buenos Aires hallé en el convento de los Franciscanos una
sala grande donde pude desenvolver las telas. Por fortuna no habían sufrido
sino daños de poca consideración. que pude reparar sin gran dificultad.
"En la Exposición del Centenario recibí calurosas felicitaciones, pero el ju-
rado encargado de dar los premios creyó prudente y diplomático no otorgar
en este concurso ningún primer premio, sino darme un segundo premio para
cada una de mis telas. Uno de los miembros del jurado, con modo muy ama-
ble, me explicó: Todos estamos de acuerdo en que merece Ud. los dos prime-
ros premios. pero desgraciadamente Ud. no es argentino....
"De todos modos consideraron mis amigos que la expedición había sido
un éxito, pues el Gobierno Argentino. además de las dos telas ya nombradas
(El Cabildo Abierto del 22 de Mayo de 1810 y El Himno Nacional en Casa de
Mariquita Sánchez de Thompson), me adquirió El Abrazo de Maipú y varios
cuadros más de menor tamaño para diversos museos· .15
Los cuadros de Pedro Subercaseaux Ingresaron al Museo Histórico Nacio-
nal por compra. Las condiciones de adquisición de los óleos se derivan de las
cartas intercambiadas entre Carranza y Subercaseaux y Carranza y la Comi-
sión del Centenario.
Se compraron simultáneamente diversos cuadros, tal como queda espe-
cificado en la carta de Subercaseaux a Carranza del 27 de noviembre de
1908. En lo que se refiere específicamente al costo y compra de El Cabildo
Abierto del 22 de Mayo de 1810 decía Subercaseaux: ·oe acuerdo con las
Ideas que hemos cambiado sobre un cuacto que represente la sesión del Ca-
bildo Abierto del 22 de Mayo de 181 Oy de la seguridad que Ud. me da de que
no faltará medio paro adquirirlo. si como lo espero. resulto dgno del asunto,
me resuelvo a emprender esto obra prevléndole a Ud. que en caso que lo rea-
lice a satisfacción, su valor seria de S 15.000 siendo las dimensiones del cuadro
de 4 m. de ancho por 3 de a1to·. 16
Carranza encontró dificultades para financiar la adquisición de este
óleo. No obstante, desde un primer momento estimuló a Subercaseaux a reali-
zar el cuadro. Así en carta de diciembre de 1908, le decía: ·En cuanto al que
representa al Cabildo Abierto del 22 de Mayo de 181 Oy cuyo precio será de
40
$15.CXX> por las dmenslones que me dce, no puedo por el momento compro-
meterme a su adquisición, pero me complace expresarle que creo debe em-
prender la obra en la seguridad de que si es como lo espero, clgno del asunto
y de lo que puede Ud. hacer, no faltará medio de obtenerla, siendo preferido
en tal caso el estableclmlento que yo dlrijo·. 11
Para conseguir el dinero destinado a la adquisición de los trabajos de Pe-
dro Subercaseaux, Carranza recurrió al ministro Rómulo Naón. En carta de cl-
clembre de 1908 le decía: "La circunstancia de encontrarse en esta Capltal el
Sr. Pedro Subercaseaux, artista de mérito notorio y cuyas obras pictóricas se re-
comiendan por su correcta ejecución y en el deseo de enriquecer el establecl-
mlento a mi cargo con cuadros de carácter histórico, solicito de V. E. se sirva
autorizarme para encargar algunos trabajos relaclonados con el Centenario
próximo a celebrarse, cuyo valor se abonará con la partida de gastos señala-
da por el presupuesto• .18
Finalmente en carta del 5 de setiembre de 1910 a la Comisión del Cente-
nario, Carranza señalaba:
"Las bases del concurso organizado para dar cumplimiento a la Ley
6286, que mandó adquirir tres cuacios para el Museo de Bellas Artes, Instituye-
ron tres primeros premios de $ 20.00J c/u.
"De esos tres primeros premios sólo dos fueron asignados, de suerte que
quedan disponibles a la comisión $ 20.000 del otro que no se discernió.
"Entre los cuadros concurrentes figuran dos del pintor Pedro Suber-
caseaux (El Cabildo Abierto del 22 de Mayo de 1810y El Himno Nacional en
Casa de Mariquita Sánchez de Thompson), que obtuvieron segundos premios
y cuyos asuntos son de carácter histórico.
"Por esta razón creo que podrian ser destinados al Museo Histórico Na-
cional que dirijo. En este concepto había hablado al Sr. Ministro, Dr. Gálvez,
quien persuadido como yo de la conveniencia de dotar al Museo Histórico
Nacional con ambas telas, me permito adquirirlas para este fin.
·como tengo entendido que la comisión está para resolver sobre ese
asunto, me he permitido, por creer oportuno, hacer esta manlfestaclón·. 19
Una circunstancia histórica distinta, la conmemoración del Centenario, el
celo de Adolfo Carranza por dotar al Museo Histórico Naclonal de las pinturas
históricas de Pedro Subercaseaux, hicieron que los trabajos de éste no corrie-
ran la suerte del boceto de Blanes, señalada por Femández Saldaña, tal como
quedó de manifiesto en páginas anteriores.
41
MARIANO MORENO EN SU MESA DE TRABAJO
Óleo sobre tela
Autor: Pecio Subercaseaux
42
de sus protagonistas: el de Mariano Moreno; los otros remiten a acontecimien-
tos: El Cabildo Abierto del 22 de Mayo de 1810, La Noche del 20 de Mayo en
Casa de Rodríguez Peña y La Jura de la Junta Gubernativa del 25 de Mayo de
1810.
Tampoco debe resultamos Incomprensible que aconsejase a Suberca-
seaux pintar a Moreno ·de cuerpo entero. sentado en su mesa de trabajo. en
actitud de escribir algún asunto grave y que le muestre meditando lo que
debe expresar su pluma·. 23 De esta manera Moreno sería representado en ple-
no trabajo intelectual. indagando la resolución de un problema. en una
nocturnidad que alude a una prolongación de sus horas de trabajo a medida
que las tareas que abordaba como secretarlo de la Primera Junta se multlpll-
caban con los problemas que ésta debía afrontar como órgano de gobierno.
Subercaseaux. aceptando aquellos consejos, en carta del 27 de noviembre
de 1908 le decía que •tendría mucho placer de ocuparme en ese trabajo y
pondría todo el empeño posible para dejarlo digno del tema y del Centenario
de Mayo·. 24 Y agregaba en la misma carta: ·En ·cuanto a lo que Ud. se sirve
decirme respecto del retrato del Dr. Mariano Moreno. me parece que lo po-
dría representar de tamaño natural. sentado en su mesa de trabajo. de no-
che. en actitud de escribir el asunto grave y que lo muestra meditando lo que
deba expresar su pluma· .25 El pintor chileno logró un retrato de Mariano More-
no donde el rasgo más Importante de su personalidad queda al descubierto:
la de haber sido un pensador de valía que volcaba la fuerza de sus pensa-
mientos en meditados escritos.
Asimismo. Carranza decía en la carta anteriormente mencionada ·cten-
go para Ud.) elementos que le servirán para ese cuadro·. 26 Indudablemente
se refería al tintero de plata y la mesa de trabajo que pertenecían a Moreno y
que fueran donados, el primero por el nieto del secretarlo de la Primera Junta
en 1891 y la segunda por Abraham Moreno en 1909.
Tintero de plata y mesa de trabajo transportados por la Imaginación de
Subercaseaux a un Mariano Moreno en plena actividad Intelectual. expresan
con la ayuda de la Imagen artística su slgnlftcatlvldad trascendente. No se tra-
ta de un tintero más, sino del tintero de Mariano Moreno, el tintero de un hom-
bre que fue un trabajador Intelectual. un escritor político. Aquí vemos la
complementarledad entre un testimonio material de la personalidad de More-
no y un testimonio del Centenario, que lo comprendió en su dmenslón Intelec-
tual y supo asociarlo en una composición artística slgnlftcante.
En Mariano Moreno en su mesa de trabajo SUbercaseaux presenta las
cualidades de Moreno: sus pasiones Intelectuales, sus dotes de pensador. su In-
43
fatlgable voluntad de trabajo; todo ello estó presente en el retrato; también la
pasión Intelectual, a través de su actitud reflexiva, a través de los once llbros
que se encuentran sobre su mesa de trabajo, a través del anaquel, al fondo,
donde se destaca otro grupo de Ubros. Cabe señalar que uno de los llbros re-
presentados sobre la mesa de trabajo de Martano Moreno es un ejemplar en-
cuadernado de números del pertódco La Gaceta de 181 O, como alcanza a
verse en la escritura de su lomo. La Gaceta había sido el pertódlco de la Junta
de Gobierno del cual Martano Moreno fue su fundador y primer director.
Las numerosas hojas escritas que se encuentran sobre el escrltorto, el uso
que manifiestan los llbros, uno de ellos abierto, con sus hojas arrugadas y ama-
rillentas, y por sobre todo su actitud meditativa, ratifican su condición de Inte-
lectual.
Su concentración en el problema que debe resolverse, aunque las horas
de la noche obllguen a continuar el trabajo a la luz de una lámpara, restán-
dole horas al sueño, nos lo muestran como trabajador lnfatlgable, decidido a
consagrar sus esfuerzos cognoscitivos a la resolución de los problemas que se
plantean.
Todo el retrato expresa movimiento: las hojas desparramadas en el escrlto-
rto, los libros irregularmente distribuidos; uno de ellos abierto frente al escrito, otro
en el que asoma una hoja como marcando la señalización de una página; ft-
nalmente algunos más, formando grupos de a tres, sobre los que se han coloca-
do más hojas; todo esto denota un movimiento cuyo eje es la producción
Intelectual. Una producción que exige concentración, que genera tensiones In-
ternas: la mirada abstraída, el detalle de los muy marcados nudillos de los de-
dos y la tensión de los músculos de las manos son, al respecto, muy significativos.
Todos los elementos del retrato se conjugan en una acción; el pensa-
miento que Indaga, que se lanza a razonar más allá de lo inmediato, aludido
por esos ojos abiertos cuya mirada se pierde en sus propias abstracciones. La
mano Izquierda levantada sobre la sien; la derecha, sosteniendo la pluma,
pero apartada de la hoja que está escrtblendo, tal vez una más entre las ante-
rtores versiones descartadas Indicadas por esas hojas escritas, desparramadas
sobre el escrttorto; todo ello refuerza ese mundo lntertor meditativo, que mide
la resoluclón que debe adoptarse. La relatlva oscurtdad hacia el fondo permi-
te valorar el conjunto de la acción que se concentra en el ámbito de trabajo
de Martano Moreno.
. El retrato de Subercaseaux evoca a Moreno en su dimensión de pensa-
dor Y escritor. Todo apunta hacia un eje temático: la fuerza pensativa de
Mariano Moreno que se traduce en producciones escritas.
44
La luz misma puede ser más que la lámpara que llumlna el escritorio y
aludlr a las luces tantas veces Invocadas por Moreno en sus escritos y damos
pautas del sustrato fllosóftco de sus obras.
En síntesis, un retrato expresivo de la vibrante personalldad de Moreno,
como pensador y escritor.
Por consiguiente, este óleo del Centenario capta y recrea a Mariano Mo-
reno en la función central que la lectura hlstorlográflca le había adjudicado
como numen de la revolución. Para decirlo en palabras de Gabriel Levene:
Moreno, escritor político de la Revolución de Mayo.
En el centenario de la muerte de Mariano Moreno, en relación a su cR-
menslón Intelectual, La Razón señalaba: "Moreno ni hablando ni escribiendo
divagaba: todos sus escritos son sintéticos, sin digresiones, comprimidos, cada
párrafo, cada frase polariza una Idea y como éstos tienen en sus labios un va-
lor único, no endosable -diremos- no vuelve nunca sobre ello. tienen el valor
de lo que dicen, como un códlgo·. 27
El óleo de Subercaseaux. por consejo de Carrania, captó la esencia Inte-
lectual de Moreno hasta tal punto que se Inserta en una lectura historiográfica
de las funciones que desempeñó el secretarlo de la Primera Junta y se proyec-
tó dinámicamente hacia el futuro, dejando una Imagen fidedigna de la labor
de Mariano Moreno. A'i, en el sesquicentenario de su muerte, en marzo de
1961. Alfredo R. Vítolo, entonces ministro del Interior, pronunció un discurso
radiofónico donde dijo: "Estaba en el fragor de la batalla y en el gabinete de
la alta noche, tal como lo vio para pintarlo la Imaginación de Subercaseaux.
Hasta su despacho llegan los ecos del combate, los partes de guerra, el recla-
mo de los pueblos, las banderas tomadas, las tropas heridas y ollendo todavía
a pólvora, el secretarlo ya estaba en la urgencia de los asuntos de estado y
redactando los famosos decretos que crearon La Gaceta y la Blblloteca Na-
clona1· .21
Por su parte, en ocasión del mismo aniversario, Hemán M. Glralt, Inten-
dente munldpal, en un discurso pronunciado en Plaza Lorea, Indicaba: ·y hoy,
al cumplirse el sesquicentenario de su muerte, queremos exteriorizarte al genlal
revoluclonarlo de Mayo, al gran escritor político, al héroe clvll que Ilumina con
Id llama de su pasión y la luz de su pensamiento, los caminos de la democra-
cia argentlna·.29
Flnalmente señalemos que también el óleo Mariano Moreno en su mesa
de trabajo Ingresó por compra al Museo Histórico Nacional. En la ya citada
corta de Subercaseaux del 27 de noviembre de 1908, éste decía: "Las
45
dimensiones del cuadro serán de 1,80 m. por cada lado. El precio la suma de
S3.000 m/n· .30
LA NOCHE DEL 20 DE MAYO EN CMA DE RODRÍGUEZ PEÑA
Aguada sobre cartón
Autor: Guillermo Da Re
46
quedaron encerrados en sus cuarteles y completamente municionados; Igno-
rando todo el motivo de esta novedad, como lo Ignoraba también el pueblo.
Empezamos, pues, a tratar sobre los prtmeros pasos que debían darse, y
se resolvló mandar una comisión a Intimar a Clsneros la cesación del mando.
"Resultó el nombramiento en el Dr. Castelll y yo, y para asegurarnos mejor
pedimos que el comandante de Granaderos de Infantería Terrada, fuese con
nosotros; pues su batallón estaba acuartelado en el fuerte y bajo los balcones
del mismo Cisneros, y como en él había muchos oflclales españoles, temíamos
que al momento de la Intimación se asomase Clsneros a un balcón, llamase a
los granaderos y nos hiciese amarrar. El comandante Terrada fue con nosotros,
se puso a la cabeza de sus granaderos y nosotros subimos. Entramos en la sala
de recibo y encontramos a Cisneros jugando a los naipes con el brigadier
Quintana. el flscal Caspe y un tal Golcoelea, edecán suyo. Nos dirigimos a la
mesa. Tomó la palabra Castelll y dijo:
"Excelentísimo señor: Tenemos el sentimiento de venir en comisión por el
pueblo y el ejército que están en armas, a Intimar: a V. E. la cesación en el
mando del Virreinato.
·A la vez se levqntaron todos, al oír tal aflrmaclón. Clsneros se levantó lle-
no de fuego hacia CastellL diciendo. que qué atrevimiento era aquél: Que
cómo se atropellaba la persona del Rey, que él representaba, que era el más
grande atentado que allí se podía cometer contra la autoridad. Castelll le
contestó que no se acalorase, que la cosa no tenía remedio. Entonces tomé
yo la palabra y le dije: Señor: cinco minutos es el plazo en que se nos ha dado
para volver con la contestación, vea V. E. lo que hace.
"Entonces, Caspe lo llamó a su despacho, estuvieron un momento juntos,
salieron y Clsneros más templado: Señores, nos dgo, cuánto siento los grandes
males que van a venir sobre este pueblo de resultas de este paso. Bien pues,
puesto que el pueblo no me quiere y el ejército me abandona, hagan ustedes
lo que quieran. Entonces, nos despedimos y al dar la vuelta nos dice: ¿Y bien,
señores, ¿qué es fo que Uds. piensan respecto de mi persona y familia?.
Castelll le contestó: Señor: la persona de V. E. y su familia están entre america-
nos y esto debe tranquilizarlo.
"Salimos de allí y nos dirigimos a la casa de la reunión, diciendo: Se-
ñores, Ja cosa es hecha: Clsneros ha cedido de plano y dice que hagamos
fo que querramos. Nos empezamos a abrazar, a dar vivas, a tirar los som-
breros por el aire.
"En el acto salleron Berutl, Peña y Donado, con varios crtados y canastas.
a recolectar todos los dulces y llcores que hubiese en las conflterías. Se puso
47
una gran mesa en casa de Rodríguez Peña que duró tres das cubriéndose de
continuo para que entrara todo el mundo que quisiera refrescarse· .32
También Bartolomé Mitre en Historia de Be/grano y de la Independencia
Argentina hace referencia a la reunión en casa de Nicolás Rodíguez Peña:
·una reunión patriota se había verificado durante el cfa en la casa de don
Martín Rodríguez y alff se había acordado volverse a reunir en la casa de
Rodríguez Peña, a espaldas del hospltal de San Miguel, para Imponerse de los
resultados de la conferencia de los jefes mllltares con el virrey (... ) Reunléronse
en la noche en la Indicada casa, Belgrano, Francisco Antonio Ortlz de
Ocampo, Terrada, Thompson, don Metías lrlgoyen, Berutl, Chldono, Posso, Don
Hlpóllto Vleytes y su hermano, don Agustín Donado y otros Jefes mllltores que
habían asistido a la conferencia con el virrey, constituyéndose todos ellos en
sesión. Esta Junta revolucionaria que de su propia autoridad había asumido la
dirección, mandando en los cuarteles y en las calles, sin que el pueblo cono-
ciese su existencia, era obedecida en todas partes y de su centro partían to-
das las direcciones que Imprimían a la masa popular en movimiento. El resulta-
do de la conferencia del alcalde Lezlca y de los Jefes con el virrey. respecto de
la cuestión del da, que era la convocatoria Inminente del Cabildo Abierto, no
debió satisfacer a sus miembros, visto que después de tres das de agitación la
situación no se definía por ningún acto ni declaración oficial. Para poner tér-
mino a estas Incertidumbres y fijar las vacilaciones de Clsneros, decidieron asu-
mir una actitud decidida que comprometiese a todos en la acción. A este fin
se acordó que una diputación de su seno fuese a requerir al virrey en nombre
del pueblo y de las tropas la convocatoria Inmediata del Cabildo Abierto,
dando así el últlmo paso en el sentido de allanar los obstáculos que se opo-
nían o la reunión del Congreso Popular. que el partido español quería evitar a
todo tronce, por cuanto dueños los patriotas de la opinión y de la fuerza, su
consecuencia necesaria tenía que ser la deposición del virrey. "El Dr. Juan José
Castelll y el Comandante Martín Rodríguez fueron nombrados para desempe-
ñar esta delicada comisión.
"(...)(finalmente Clsneros cedió y los emisarios salieron a dar cuenta del
resultado de su misión. Todos los patriotas, al saber que el virrey cedía por fin.
empezaron a abrazarse arrojando sus sombreros al aire·. 33
SI nos hemos detenido en la descripción que Martín Rodríguez y
Bartolomé Mitre realizan de lo reunión en la casa de Rodríguez Peña, ha sido
para fijar conceptualmente el tema del trabajo de Guillermo Da Re. En las Jor-
nadas de Mayo los patriotas realizaban reuniones en casas de algunos de
48
ellos. para driglr un movimiento contrario a la continuidad de Clsneros en el
mando y asegurar su deposición. Carranza explícitamente en La Ilustración His-
tórica dice que la base documental de La noche del 20 de Mayo en Casa de
Rodríguez Peña son las Memorias de Martín Roctíguez. Y esto es Importante.
porque de acuerdo a Martín Roctíguez, conjuntamente con Juan José CastelH.
Intimaron a Clsneros para que cesase en el mando y no para que convocase
un Cablldo abierto; de esta manera. al ceder Clsneros. lo que están festejan-
do los patriotas reunidos en casa de Rodriguez Peña es la deposición del vi-
rrey. Es posible que éste sea un error de Martín Rodriguez y que de acuerdo
con Bartolomé Mitre. lo que se demandó fue un Cablldo abierto. Más allá de
estas contradicciones. la reunión de los patriotas en casa de Roctíguez Peña,
el festejo que éstos realizan -de acuerdo a Carranza- reviste un significado es-
pecial. ·Esta escena -die~ es sin duda una de las más Interesantes de los días
de Mayo, la que ha sabido Interpretar el artista Guillermo Da Re de una mane-
ra satlsfactoria •. 34
En cuanto a la aguada sobre cartón. La Noche del 20 de Mayo en Casa
de Rodríguez Peña. desde el punto de vista pictórico cabe destacar los con-
trastes entre luz y sombra. La luz Irradiada por la araña que pende del techo
parece bañar con su numlnaclón a los revolucionarios en el momento que fes-
tejan la concreción de sus aspiraciones. Esta luz lrraclada hacia abajo. hacia
el centro de la escena. contrasta con la oscuridad de la zona superior y de los
laterales que quedan al margen del cono lumínico que se desprende de la
araña. Es como si la luz presidiese el nacimiento de la nación; porque ella Ilu-
mina a los que estuvieron bregando por deponer a la autoridad virreina!. Las
pinceladas subrayan la drecclón de la luz. parecen como abrtrse en sucesivas
líneas descendentes. hacia los asistentes a la reunión. que reciben el calor de
sus rayos. La luz envuelve a los personajes. crea mediante el juego de contras-
tes. una atmósfera de conjunto, de unión de los grupos de revoluclonartos re-
unidos. alrededor de una mesa rectangular. Un nacimiento de marcada ale-
gría y festejo. Una visión de la aguada. de los personajes representados. nos
permite apreciar, ímpetu, vítores y aclamaciones. El color rojo del personaje
sentado hacia el centro. que es Nicolás Rodríguez Peña, marca la energía, el
Impulso hacia la acción. la tensión del momento, la energía lntertor. por mu-
cho tiempo contenida, que ahora se vuelca hacia la extertortdad. Carranza
decía que Rodríguez Peña ·es un carácter, es una abnegación, actividad.
energía. es quien Impulsa a la acción a los otros. sin esquivar responsabllldades
y afrontando los peligros y los sacrificios. Es el alma del movimiento de mayo
de 1a10·.35
49
LA JURA DE LA JUNTA GUBERNATIVA DEL 25 DE MAYO DE 1810
Aguada sobre cartón
Autor: Guillermo Da Re
so
Frente a los miembros de la Junta. hacia el lado derecho. se disponen de
ple los capltulares. delante de uno de los escaños de la sala capitular. El
estrado está claramente representado. con su sitial y una mesita. encontrán-
dose tras ella los alcaldes mencionados.
Los trabajos que Carranza le encargó a Gulllermo Da Re estaban desti-
nados a ser convertidos en sendos óleos. Pero en el transcurso del trabajo sur-
gió la poslbllldad de emplear reproducciones de las aguadas de Da Re, en es-
tamplllas conmemorativas del Centenario. Da Re lnlclalmente no estuvo de
acuerdo con esta Iniciativa y Carranza hubo de convencerlo de esa poslblll-
dad. ·A las l Oa.m. -dice- estuvo Da Re, quien se resistió a que se pusiesen sus
cuadros en las estampillas, pero lo convencí de que era un honor y que gestlo-
naria a fin de que se pusiese su nombre al ple· .37
El 12 de setiembre de 1909 el Director de Correos y Telégrafos Justlnlano
Posse le escribía a Da Re, dldéndole:
·Deseando esta Dirección General, realizar en la mejor forma poslble los
propósitos que se han tenido en cuenta al resolverse la emisión de estampillas
conmemorativas del centenario de la revolución de Mayo de 1810, que debe-
rán ponerse en circulación el año entrante, tengo el agrado de dirigirme a Ud.
por Indicación del Sr. Director del Museo Histórico Nacional, estimándole quie-
ra tener la deferencia de autorizar la reproducción de los bocetos históricos
de su propiedad que existen en el referido Museo.
"Esperando que Ud. tendrá la gentileza de acceder a este peddo, me es
grato ofrecerle las seguridades de mi consideración más dstlngulda· .38
A lo que Gulllermo Da Re contestó el 6 de setiembre de 1909: "Me es gra-
to contestar su atenta nota de fecha 12 del corriente para manifestar que
efectivamente el Señor Director del Museo Histórico Naclonal Doctor Adolfo P.
Carranza me pidió que facllltase se tomara copla del cuadro que él me ha
encargado y que estoy haciendo -Juramento de lo Juntcr y que permitiese lo
mismo del boceto Salón de Rodríguez Peflo el 20 de Moyo de 181 O. para que
figurasen en las estamplllas con que el señor Director quiere conmemorar el
centenario de la revoluclón de Mayo.
·como me he Impuesto de que esa Indicación fue aceptada y esto me
complace, cumplo con llevar a su conocimiento que autorizo esa reproduc-
ción siempre que aparezca en la forma que sea posible, en la estampllla, la
firma del autor. Saludo al Señor Director con la mayor conslderaclón •. 39
Consecuentemente, en la época del Centenario los bocetos de Gui-
llermo Da Re circularon. a través de reproducciones. en estampillas. Pero esta
clrculaclón pública de las Imágenes de Da Re. este consumo concreto de su
51
obra de arte, no nos debe hacer perder de vista que sus trabajos estaban des-
tinados a transformarse en grandes cuactos.
Guillermo Da Re, poco después de estos pormenores, regresó a Italia
pero continuó trabajando en estas pinturas históricas, como lo muestra la
carta que le escribiera a Carranza desde Mllón, el 14 de abril de 1910,
donde le dice en relaclón al Juramento de la Junta Gubernativa del 25 de
Mayo de 181()'.
"(...)Creo que mi cuadro por los muchos retratos que en él flguran y por
él (Ilegible), tiene el mérito de ser eminentemente histórico. Es el cuadro que
con más singular empeño estoy pintando, dedicóndome completamente sin
medir tiempo, ni esfuerzo, ni trabajo para no desmentir el Interés que Ud. siem-
pre se ha tom.ado y la preferencia que me ha honrado, eligiéndolo para ador-
nar el Museo.
·Por esto creo que la demora aumentará el mérito de mi obra aunque
me sea perjudicial Olegible en el texto) por los enormes gastos que causa el es-
tudio flel en la naturaleza.
"La historia argentina me atrae y me interesa pues me dediqué más que
la mitad de mi vida, porque he vivido en la Argentina y porque es la patria de
mi hijo. Así por eso solo se explica mi desinterés, no tengo otra Inspiración que
el sincero amor al arte y en él reproducir lo que admiro.
"Desearía señor, saber y ver cómo han salldo las copias de mis cuadros en
las estampillas. Le ruego de no dejar copiar a nadie los bocetos de mis cuadros.
Ud. que sabe con qué empeño y cuánto trabajo me costaron, yo siempre he
tenido un desencanto en todos mis trabajos, así que le ruego su protección.
"Desearía también me Informara de los cuactos que hicieron los pintores
por la Comisión del Centenario y quién ganó la palma·. 40
Finalmente en 1914 concluyó el cuadro sobre el juramento de la Junta
Gubernativa. "El conocido pintor Italiano don Guillermo Da Re, que estuvo ra-
dicado en Buenos Aires -decía La Nación del 17 de enero de 1914-, hace al-
gún tiempo, y ahora reside en Miián, ha cumplido su gran cuacio de asunto
histórico argentino, que titula Juramento de la Primera Junta del 25 de Mayo
de 1810. El señor Da Re ha obtenido feliz éxito en varias exposiciones lnterna-
clonales y probablemente el cuadro al que hacernos referencia sea enviado
a Buenos Aires en breve'.41
No sabernos lo que sucedió con el cuadro de Da Re, si fue remitido a
Buenos Aires y, si lo fue, en qué lugar se encontró; pero lo valedero para este
anállsls es que los trabajos de Da Re estaban destinados a convertirse en gran-
des óleos.
52
SI tenemos en cuenta los cuadros encargados por Carranza a
Subercaseaux y a Querclola. e Insertamos en este conjunto las obras de
Gulllermo Da Re. tendremos un conjunto de pinturas históricas que reflejaron
en Imágenes el proceso revoluclonarlo de 181 Otal como lo transmitió la
historiografía liberal. Están. en estas obras. Instantes medulares de la Revolu-
clón de Mayo, desde esta perspectiva historiográfica: los Instantes previos a la
revolución. Ilustrados en su momento conspirativo (La noche del 20 de Mayo
en casa de Rodríguez Peña), la revolución en su momento Institucional (El Ca-
bildo Abierto del 22 de Mayo de 1810), la formación de la Primera Junta (Jura-
mento de la Junta Gubernativa del 25 de Mayo de 1810) y el numen de la re-
volución de Mayo, Mariano Moreno (Mariano Moreno en su mesa de Trabajo y
Los últimos Momentos de Mariano Moreno).
Básicamente. a través de estas pinturas. el Centenario dejó su Imagen de
Mayo. Un Mayo donde se destaca a Mariano Moreno y a los momentos
institucionales de la revolución.
53
rnos en esta pequeña efemérides que Moreno era pensado corno ·el alma y
genio de la Revolución de Mayo·.
Por su parte La Prensa, en un extenso artículo donde reseñaba la vida y
la obra de Mariano Moreno, Indicaba entre otros-conceptos: ·Moreno ya en-
tonces había sido considerado corno el alma de la Junta de patrtdos que car-
gó con la responsabllldad de Iniciar la emancipación del virreinato del Río de
la Plata y fundar los poderes políticos y administrativos del concebido estado
nuevo y positivamente fue el cerebro mejor preparado, el pensamiento más
claro puesto al servicio de la causa argentina y la energía más notoria de la
época·.43
Consecuentemente, Moreno es pensado corno "el alma de la junta·,
corno "el cerebro mejor preparado". como el poseedor del "pensamiento
más claro·~
La Razón, en un artículo titulado "Mariano Moreno. primer centenario de
su muerte". Ilustrado por un dibujo de Fortuny, Indicaba:
·comprendió aquella alma grande que era necesario retirarse y suavi-
zando el ardor con que sus amigos le rogaban que no se fuera, les Impuso y se
impuso a sí mismo el sacrificio de su separación que, ¡ay! debía ser eterna". 44
Seguía La Razón en la descripción de las circunstancias de la muerte de More-
no, a la blograña escrita por su hermano; ya hemos Indicado que ésta es la
base documental del óleo de Querclola. seguiremos a Manuel Moreno en sus
conceptos fundamentales, en su descripción de la agonía de Moreno, para
descubrir los elementos constitutivos de la Imagen visual a partir de la narra-
ción hlstórtca.
"El doctor Moreno vio venir su muerte con la serenidad de Sócrates. Ya a
los principios de la navegación le pronosticó su corazón este terrible lance. No
sé qué cosa funesta se me anuncia en mi viaje, nos decía con una seguridad
que nos consternaba. No pudiendo proporcionarse a sus padecimientos nin-
guno de los remedios del arte, ya no nos quedaba otra esperanza de conser-
var sus preciosos días, que en la prontitud de la navegación; mas por desgra-
cia tuvimos ésta extraordinariamente morosa y todas las Instancias hechas al
capitán para que arribase al Janelro o al Cabo de Buena Esperanza no fueron
escuchadas. Después de éstos, el doctor Moreno se entregó tranquilamente a
su duro destino. A las cuidadosas atenciones que le pagaba nuestra amistad y
respeto, correspondía con una suavidad admirable, pero con el triste desen-
gaño de que serían sin efecto. (...) Su últlrno accidente fue precipitado por la
administración de un emético ,que el capitán de la embarcación le suministró
Imprudentemente y sin nuestro conocimiento.
54
·A ésto siguió una terrible convulsión que apenas le dó tiempo para des-
pedirse de su patria, de su famllla y de sus amigos. Aunque quisimos estorbario,
desamparó su cama ya en este estado y con visos de mucha agitación, acos-
tado sobre el piso solo de la cámara, se esforzó en hacernos una exhortación
admlrable de nuestros deberes en el país en que íbamos a entrar y nos dló Ins-
trucciones del modo como debíamos cumplir los encargos de la comisión, en
su falta. Pidió perdón a sus amigos y enemigos de todas sus faltas; llamó al ca-
pitán y le recomendó nuestras personas; a mí en particular me encomendó,
con el más vivo encarecimiento. el cuidado de su esposa Inocente; con este
dictado la llamó muchas veces. El último concepto que pudo producir fueron
las siguientes palabras: ¡Viva mi patria. aunque yo perezca/Ya no pudo artlcu-
lar más. Tres días estuvo en esta situación lamentable: murió el 4 de marzo de
1811, al amanecer. a los ventlocho grados. ventlslete minutos sur de la línea. a
los 31 años. 6 meses y un día de edad· .45
Murió con la serenidad de Sócrates dice su biógrafo. Fijémonos que el
óleo de Querclola no lo representa en el momento· de la convulsión. ésta ya
ha transcurrido, Moreno se encuentra en sus últimos Instantes, tal vez en algún
momento de esos tres cfas últimos de su vida. Ya se ha despedido de sus ami-
gos y de su Patria.
Mariano Moreno agonizando. Lo asisten dos amigos. Seguramente Ma-
nuel Moreno y Tomás Guido. Uno de ellos. con sus dos manos, toma la mano
derecha de Moreno y como Interrogándolo, dirige su mirada al moribundo. El
otro, al ple de la cama, se Inclina levemente sollozando la muerte del amigo.
La luz se concentra sobre un Moreno extenuado, que está viviendo sus úl-
timos momentos y que parece querer transmitir sus pensamientos con su agu-
da mirada.
El color blanco de las sábanas, de la almohada y la camisa de Moreno,
por contraste con lo oscuro y las sombras en oposición a él, refuerzan el senti-
do de la composición. Todo se centra en un último mensaje transmitido por
Moreno a su Patria.
La luz como símbolo de su pensamiento. de la razón Humlnlsta, del pensa-
miento que descorre las tinieblas, se concentra en el pensador, en el alma más
esclarecida. de la generación que protagonizó la revolución de Mayo.
· La Intelectualidad de Moreno está reforzada por los libros y papeles que
como manifestación del trabajo Intelectual lo acompañaron, Incluso en los úl-
timos días de su vida. Ynos recuerda que después de embarcarse y ·para en-
tretener el ocio de una navegación larga y aburrida, se dedicó a traducir del
Inglés. Los Viajes del Joven Anacharsls'.46
55
Los Últimos Momentos de Mariano Moreno parecen estar teatralmente
compuestos. La escena que se deja ver, tras la cortina recogida, está acotada
a un rústico camarote. Pareceria ser la Instantánea de una fotograña especial-
mente preparada, en la disposición de sus personajes. para ser contemplada
por el espectador.
No hay un solo gesto de más en cada uno de los personajes del óleo.
Todo en ellos se encuentra contenido por la muerte.
La mirada, el requerimiento y el llanto son los contenidos de este conti-
nente del óleo que es la muerte como radical finitud del hombre.
Querciola representó la muerte de Mariano Moreno, no en él momento
de sus convulsiones. sino cuando este ya extenuado. espera serenamente la
muerte. en su cama del camarote de la nave «Fama».
Señalemos finalmente que el dibujo de Fortuny publicado por La Razón el
4 de Marzo de 1911. bajo el título Muerte de Mariano Moreno presenta mu-
chas semejanzas con el óleo de Querciola. Está representado el camarote, en
el que alcanza a verse una claraboya. Mariano Moreno en la cama. agoni-
zando. bastante levantado el torso por una almohada. sus dos asistentes
acompañándolo en ese Instante crucial. El color blanco se concentra en Mo-
reno, el negro sobre los asistentes. También la cama, se abre. tras un
cortinado.
V. Nlcolau Cotando. a fines del siglo XIX, ejecutó este bosquejo a pluma
titulado El 25 de Mayo de 1810 en Buenos Aires. Podemos apreciar el Cabildo.
con todas sus arcados, la torre relativamente desproporcionada por su altura
en relación al edificio y a la derecho de éste una porte de la Caso de Policía.
En el balcón se puede ver a los cabildantes en el momento de Interrogar al
pueblo congregado en lo Plaza de la Victoria. Se destacan en ella mlllclanos y
clvlles aclamando el petitorio presentado ante el Cabildo, relativo a la forma-
ción de una nueva junta de gobierno. Debemos tener en cuenta que en los
días de mayo, el Cabildo, representante de los Intereses peninsulares. fue re-
basado por las milicias y el pueblo, que en la Jornada del 25, le Impuso la for-
mación de una Junta elegido al margen de la Instancia capitular, haciendo
fracasar definitivamente la maniobra poíltlca tendiente a perpetuar la autor1-
58
dad del virrey Baltasar Hldalgo de Clsneros. nombrándolo presidente de la
Junta el 24 de Mayo.
Este dibujo está basado en la Historia Argentina de Vicente Fldel López.
cuando éste dice en su tomo 111: •Antes de aceptar y consignar en sus actas
este ultlmátum el Cabildo mismo salló en cuerpo al extenso balcón que da so-
bre la plaza y mandó leer en alta voz. punto por punto el contenido, para que
el pueblo agrupado en el espado Inferior proclamase su adhesión o negativo.
La aprobación fue dado con numerosos aclamaclones y retirado el Cablldo a
su salón. mandó colocar a los miembros de la junta gubernativa para que se
presentasen a jurar su cargo y tomasen posesión de un poder que hasta en-
tonces sólo habían ejercido los virreyes· .47
En el dibujo de Cotando podemos ver que algunos concurrentes a la Pla-
za de la Vlctor-la llevan paraguas. El día lluvioso y el terreno aguado definen las
condiciones meteorológicas y ambientales de la jornada del 25 de Mayo de
1810.
La lluvia y el paraguas caracterizan a la tradlclon de las jornadas mayas.
Vicente Fldel López dice en su historio: ·La tarde estaba lluviosa y destempla-
da; el piso de todo la ciudad era un empapado barrlol. Las veredas escasas y
de malíslmo ladrillo sobrenadaban en un fondo acuoso e Insubsistente. Pero a
pesar de todo eso. la plaza se llenó en un momento de damas y señoritas.
con los colores celestes que distinguían el penacho tan popular de los
patricios .. : .43
Y Pastor Obligado en sus Tradiciones de Buenos Aires en el artículo sobre
Los colores de la Patria señala: ·roda la semana de mayo fue lluviosa. En la
nublada mañana del 25 de Mayo de 1810, frío y melancóllca, como de lejana
esperanza. grupos del pueblo se aumentaban sobre la vereda ancha(...)
como frecuentemente sucede durante largos días de llwla. en esos momentos
aclaraba un poco .. :.49
57
NOTAS
59
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LOS "PEINETONES" DE CESAR HIPOLITO BACLE
POR D1EGO Ruiz
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Lámina 4
MARIANO MORENO EN SU MESA DE TRABAJO
Pedro Subercaseaux
Óleo sobre tela
Manuel Belgrano.1° entre otros, y la ·Ejecución de Vicente y Guillermo Relnaté
y de Santos Pérez,11 quedando de su labor como miniaturista tan sólo el retrato
de su esposo, que éste obsequió al pintor García del Molino. Dice del mismo
Rodolfo Trostlné: 12 ·Es una pieza de groo belleza, de hermoso colorido sobre lo-
grado dibujo y que, de momentos, aún supera a las de Jeat P. Gou/ú, el mejor
de los miniaturistas que trabajaron en Buenos Aires·.
Respecto de la obra que nos ocupa, ·rrages (sic) y Costumbres de la Pro-
vincia de Buenos Aires·, la primera serle es Iniciada por Bacle en 1830, alcan-
zando a publicarse sólo tres láminas, ·un gaucho", ·Repartidor de pan" y ·E1
lechero", delineadas por Onslow.
En 1832, tras haber tenido Inconvenientes con el gobierno y su Decreto
de Imprenta del 12 de febrero, Bacle debe abandonar su establecimiento de
la calle 25 de mayo 110 (actual 210), transflrléndolo a D. José Álvarez como
administrador y cesar el 13 de febrero la publicación del "Boletín del Comer-
cio", iniciada el 6 de septiembre de 1830. Solidariamente, su esposa cerró el
·Ateneo Argentino", Institución educativa para señoritas que había abierto sus
puertas el año anterior -tras innumerables trámites y solicitudes de permiso
ante las autoridades- en la calle Florida 122 (actual 210 aproximadamente).
Ante esta situación y deslluslonados con el país, los Bacle parten con sus hijos,
el 5 de marzo de 1832, a la Isla de Santa Catalina para estudiar su historia na-
tural. Dice González Garaño: "Bacle era un hombre cultíslmo. Poseía versaclón
en muchas materias, siendo un destacado artista, cartógrafo, entendido en
trabajos de geodesia y topograña y, además, un naturalista y botánico dlstln-
guldo ".13
Allí, durante diez meses, escriben una ·Historia Natural de la Provincia de
Santa Catallna" que "formaría una obra dMdlda en cuatro volúmenes, más
uno de láminas, vistas del puerto, de la rada y de un gran número de plantas y
flores, algunas no descritas hasta entonces, tomadas del natural por la señora
de Bac/e. Forman, además, colecciones considerables, compuestas de 2.000
pájaros embalsamados, así como de cuadrúpedos, Insectos, de 12.000 prepa-
raciones botánicas, etc. •. 14
A principios de 1833 reciben noticias de Buenos Aires que les aseguran
poder reabrir el estableclmlento lltográflco. por lo cual emprenden el regreso,
con tanta mala suerte que el 18 de marzo, a la altura de la Isla de los Lobos, el
buque naufraga, perdiendo Bacle treinta y dos cajones con el trabajo realiza-
do. Ya en Buenos Aires, Bacle escribe, compone y publlca una "Relatlon du
naufrage de la Po/acre Sarde Vigilante, Copita/ne Pletro De/pino~ durísimo
alegato contra este capitán, que publicó las prensas de Pedro de Angells. En
61
su texto agradece al napolltano. a W. de Mendevllle y otros Integrantes de la
colectMdad francesa y, lo que nos es de partlcular Interés. a Mr. Macklnlay por
la ayuda prestada. A pesar del quebranto moral y económico, Bacle
peticiona nuevamente al gobierno y obtiene el permiso para dirigir la Litogra-
fía del Estado. Reinicia entonces la publicación de los "Trages y Costumbres... ••
editados ahora en forma de cuadernos de seis láminas cada uno. Se realiza-
ron dos ediciones. una en blanco y negro y la otra coloreada a mano. entre
los años 1833 y 1835. Son ellos:
62
publicados por Gandorlllas en 1819 y otras de autor anónimo, publicadas en
el folleto ·Primera parte de la vida del General San Marlin ·, de 1825 y atribuido
a Carlos María de Alvear. 16 Asimismo, existen dos caricaturas de 1820 atribui-
das a Bulewsky17y que pertenecieron al general Bartolomé Mitre cuyo blanco
son Hllarlón de la Quintana y Manuel de Sorratea.16
Existen en el Museo Histórico Nacional, por otro lado, otros grabados que,
si bien no podemos considerar un antecedente por ignorar si tuvieron alguna
difusión en Buenos Aires o si los Bacle los conocieron en Europa -cosa más bien
improbable debido al bloqueo continental napoleónico-, presentan similares
características. Son ellos las caricaturas relacionadas con las invasiones Ingle-
sas, de las que podemos citar corno ejemplo la caricatura del general
Whitelocke titulado • The Ghost of Bying·, publicado por W Fores, Picadilly,
Marzo 28 de 1828, 19 que se ve a continuación.
63
·Extravagancias...• la continuidad de una línea satírica cuyos grandes expo-
nentes son el Inglés Hogarth 22 y el francés Debucourt.23
Por otra parte. creemos factlble que los Bacle hubiesen conocido dos pu-
blicaciones francesas de la época. una Le Bon Genre. de neto corte satírico
de la cual reproducimos dos láminas: La moda de las colas y Cabalgata de
Longchamp.24
64
En las "Extravagancias... • que estamos estudiando, son los pelnetones el
blanco de la benévola crítica, si bien González Garañ<>27 acota que ·A Bacle
llegaron a Inspirarte verdadero horror y se dedicó por todos los medios de que
disponía a ridlcullz.arfos·. La peineta, parte lnsustltulble por entonces del ajuar
femenino, ya sea sola o como sostén de la mantilla o el rebozo y fabrtcada
con carey, había adqulrtdo en la tercera década del pasado slglo proporcio-
nes descomunales "de hasta dos varas·. Son múltiples los ejemplos que nos ha
legado la lconograña de época, las vemos en Pellegrlnl, en Pueyrredón, etc.
Podemos conjeturar la importancia de este accesorto por los peineteros que
figuran en el Almanaque de comercio para la ciudad de Buenos Aires de
1830, editado por J. J. M. Blondel. 28 En la pequeña ciudad consigna cinco ca-
sas establecidas, dejándonos margen para suponer que muchos otros artesa-
nos abastecían del Indispensable adminículo a los menos pudientes. Veamos
el listado haciendo la salvedad de que Victoria, Cuyo y Piedad son las actua-
les Hipóllto Yrigoyen, Sarmiento y Bartolomé Mitre y que hemos puesto entre
paréntesis la actual numeración:
65
tros. leyéndose en lo porte supe~or. centrado, lo leyendo "Extravagancias de
1834'. A lo derecho de lo mismo, se consigno el número de cuaderno. en este
coso el 5 y o su Izquierda el de lo Ilustración, esto es del N2 1al N2 6. Al ple de
lo Ilustración, otro leyendo lndco el lugar de lo acción y, más abajo, uno frase
o parte de diálogo alusivo o lo mismo.
66
pelnetones. estando roto el de la señora de la calle por efectos del pico.
Nótense las ampllas mangas, ceñidas hacia la muñeca. del vestido de la due-
ña de casa, moda de la cual tenemos amplla muestra en la Iconografía de
época.
67
que asomo por ambos puertos. Otras dos señoras, una en la calle, para desd-
cha de dos caballeros, y otra en una ventana, exhiben sus "velámenes·.
68
pueden ver numerosos detalles de la edificación y, en la que sería Perón, la
clara pendiente de la barranca. También es perceptlble que este paseo no es-
taba empedrado.
La leyenda al ple. que expresa ·¡Auxilio, que el ventarrón se arrebata a
mi setiora!' si bien exagerada. nos permite Imaginar los apuros de las damas
cuando una sudestada. corno aún hoy ocurre, mostraba su humor en una ciu-
dad de casas balas. sin el reparo y efecto amortiguador de nuestra elevada
edificación. No nos extraña. pues. la atribulada expresión del caballero que In-
tenta retener a su esposa quien. siguiendo la moda de envolver el pelnetón
con una mantilla. rebozo o pañoleta. se ha convertido en una especie de
aladelta.
69
ros Intentan hacerlo a través de las caladuras ornamentales de los mismos.
Otro señor ha optado, directamente, por dar vuelta su asiento y echar una
siesta, o lo que se refiere la leyenda al ple: ·¡Imposible es que veamos con es-
tas pantallas!... Por eso es mejor que yo me duerma·. Esta interesante Imagen,
que nos recuerda otras slmllares. de Charles H. Pellegrlnl o, muy posterlor, de
Palllere, se ubica. creemos, en el Teatro Argentino, conocido hasta 1838 como
Coliseo Provtstonal y que estaba situado frente a la Iglesia de la Merced, en la
esquino noroeste de Perón y Reconquista. Acotemos que esta sala fue por mu-
chos años la única de la ciudad. A raíz de la destrucción por el fuego de La
Ranchería en 1792, los espectáculos se celebraban en "huecos· arrendados al
Cabildo, o en galleras o salones particulares. En 1804 se resuelve la construc-
ción de un ·coliseo estable de Comedlas' en el "hueco de las ánimas·, actual
esquino noreste de Rlvadavla y Reconquista, pero dversas vicisitudes, ya eco-
nómicos, ya poíltlcas, lo mantwleron Inconcluso hasta la concreción del prl-
mer Teatro Colón en 1857, por lo que en 1806 José Olaguer Fellú obtuvo per-
miso paa construir uno provlslonal. que es el que nos ocupa. Las descrlpclo-.
70
nes de su sala por Arsenlo lsabelle y Martano Bosch coinciden con la represen-
tada en la lltografía. 31 Taullord. en la obra antes citada. ubica la Ilustración en
el Teatro de la Victoria. en 1838. por lo cual el Coliseo Provlsorto cambia su
nombre. como djlmos. a Teatro Argentino. No sabemos en qué basa su opi-
nión. Dicho teatro fue Inaugurado el 25 de moyo de 1838. siendo construido
en tiempo récord por don José Sartorto. el arquitecto de Rosas, mientras que
estos lltograñas fueron editadas en 1834 y 1835 y Bacle había fallecldo el 4 de
enero del año de dicha Inauguración. Agreguemos que la sala, demollda a
fines del slglo. estaba situada en Victorta entre Tacuarí y Buen Orden (Bernardo
de lrtgoyen).
Pasemos. ahora al Interior de una cosa. La llustraclón N2 5, denominada
•Peinetones en el baile", (pág. ant.) Ilustra precisamente uno sala donde se
desarrollo una tertulia. Vemos el pequeño plano de época -sobre el que se en-
cuentran una partitura y un candelabro- ejecutado por una niña
empeinetonada, como todas las demás. Es de notar la decoración, en la que
se destacan la alfombra de colortdo diseño y las paredes, que creemos cu-
71
blertas de papel pintado. con un motivo que aparenta flores de lls. Comple-
tan los detalles un candelabro de pared y dos paisajes colgados en la pared
del fondo. La anécdota de la lámlna representa un señor al que un pelnetón
le ha arrebatado el bisoñé y exclama: ·¡MI peluca! ¡MI peluca, se,.,orlta! ¡Por
Dios, no se la lleve Ud. r
"El enlace de los pelnetones·, N2 6 y última del cuaderno (ver pág. ante-
rior), vuelve a presentarnos una calle del antiguo Buenos Aires. Nuevamente
presenciamos los inconvenientes causados por la envergadura de estos
adminículos. En el primer plano, dos señoras no han guardado las debidas dis-
tancias (o, como aún ocurre, no han querido hacerlo) y se ha producido el In-
evitable enganche de velámenes. Ambas parecen haber perdido el equilibrio.
Sobre la Izquierda, otra tragedia: el pelnetón de otra dama se ha engancha-
do en el fardo que sobre su cabeza lleva un changador y se ha partido por la
mitad.
Podemos. como anteriormente. apreciar en detalle el empedrado de la
calle, el poste esquinero del edificio de fondo. que está coronado por un pretil
con rejos de hierro que se repiten en la ventana. La leyenda expresa: ·¡Jesús,
apártese Ud.! ¡Dénme lugar, por Dios! ¡Ay, que me la quiebra!'
Cesar Hlpóllto Bacle llevó una vida romántica y, lamentablemente, tam-
bién lo fue su fin. A medados de 1836 viajó a Chlle pensando emigrar, dados
los múltiples Inconvenientes y encontronazos que le deparaba la situación polí-
tica local. A su regreso, Callxto Vera, un familiar político de Bernardlno
Rlvadavla, urdió una celada que llevó a Bacle, engrillado, a la cárcel el 4 de
marzo de 1837. Hasta el Retiro se acercó su esposa, pero ni su llanto ni las pos-
teriores diligencias y súplicas de destacados miembros de la colectividad fran-
cesa y su cónsul, Almé Roger, lograrán conmover a Rosas. Es posible que tam-
bién haya Intercedido Daniel Macklnlay, quien como vimos socorrió a los
Bacle tras el naufragio de la "Vigilante', dueño entonces de la quinta que lle-
gará a ser el Parque Lezama. Podemos suponer que por sus Jardines y por las
salas del hoy Museo Histórico Nacional pasearon Bacle y su esposa su encanto
Y mundanidad. Flnalmente. al borde de la locura y con la salud deshecha.
Bacle es llberado. sin explicaciones, en los últimos días de 1837 para morir,
como dijimos. el 4 de enero de 1838. Pocos das después, el juez ordenó el em-
bargo y venta de los pocos bienes que quedaban a la familia. Andrea Bacle.
acompañada por sus dos hijos. embarcó para Europa el 2 oo marzo de 1838.
para mortr en Ginebra el 22 de octubre de 1855. Diez años habían pasado
desde su llegada, llena de Ilusiones. a estas tierras.
72
NOTAS
73
reado). Para el folleto atribuido a Alvear: Catálogo N2 2066, Objeto N2 1256
(grabado en cobre con leyenda) y Catálogo N2 2067, Objeto N2 1255 (gra-
bado coloreado con leyenda).
17) Valerlo Bulewsky fue un mllltar polaco que participó en las guerras
napoleónlcas. En 1818 llegó a Buenos Aires, Incorporándose al Ejército de los
Andes. Participó en la campar"la de la Sierra de la Ventana dirigida por Mar-
tín Rodríguez y fue muerto por los Indios el 31 de enero de 1824, cuando se
dirigía a parlamentar con los mismos. Cfr. Gesualdo, Blgllone, Santos: Op. cit.
18) ·caricatura del General Hllorión de la Quintana·. Acuarela sobre papel. Ca-
tálogo N2 2061. Objeto N2 1839. ·caricatura de Manuel de Saffatea·. Acua-
rela sobre papel, Catálogo N2 2068, Objeto N2 1836.
19) Museo Histórico Naclonal. Catálogo N2 929, Objeto N2 715. Grabado en
colores con leyenda, 323 x 232 mm. Donación de Dn. Carlos Roberts, 23-
11- 1943. Existen asimismo, del mismo autor, dos caricaturas más de
Whitelocke en relación a su corte marcial y degradación, denominadas
"Winging a Shy Cock· (Catálogo 930, Objeto N2 728) y "The Bell-Weather
and the Bel/ Hanger or the Chesunt Blacksmith-atue Story· (Catálogo 931,
Objeto N2 716), entre otras de idéntica época y procedencia integrantes
de la misma donación.
20) Alejo González Garaño: Op. cit.
21) Rodolfo Trostlné: Op. cit.
22) Hogarth, Willlam: Londres, 1697 • Chiswick, 1764.
23) Debucourt, Phlllbert-Louls. París, 1755 - Bellevllle, 1832.
24) Extraído de Max von Boehn: La Moda. Historia del traje en Europa.
Barcelona, Salvat Editores, 1928.
25) Ibídem.
26) Ibídem.
27) Alejo González Garar"lo: Op. cit.
28) Almanaque de Comercio de la Ciudad de Buenos Aires para el año 1830, por
J. J. M. Blondel. Buenos Aires, Imprenta Argentina, Calle de las Piedras N2 31.
29) Alfredo Taullard: Nuestra antigua Buenos Aires. Buenos Aires, Jacobo Peuser,
1927-
30) Entre las numerosas descripciones que nos han dejado viajeros y vecinos co-
etáneos, podemos citar a Arsenlo lsabelle: Viaje a Buenos Aires y a Porto
Alegre, por la Banda Orienta/, las Misiones de Uruguay y la Provincia de ~o
Grande do Su/ (de 1830 a 1834 y a Manuel Blbao en sus Tradiciones y Re-
cuerdos de Buenos Aires.
31) Cf. Arsenlo lsabelle, Op. cit. y Mariano G. Bosch: Historia del teatro en Bue-
nos Aires. Buenos Aires, Establecimiento Tipográfico El Comercio, 1910.
74
TEMAS
INSTITUCIONALES
NUEVAS AUTORIDADES•
Una nación sin pasado no tiene Identidad, no es una nación, no concita
lealtades ni sentimientos greganos y aglutlnantes y es pasible de disgregación
de la manera más simple y sutil. Sin hlstona, no hay costumbres propias ni cultu-
ra propia de una sociedad. Hace muchos años escnbí que si una población
de cualquier lugar del planeta no consolida una cultura se lanzaria en busca
de cualquier otra porque ella es Inseparable de la vida y se enajenará en bus-
ca de otra cultura dominante. No será necesario ni declarar una guerra ni ne-
var a cabo Invasiones mllltares porque será harto suflclente la dominación de
los espíritus.
La educación y los museos cumplen ese rol fundamental a través del pa-
tnrnonlo del espíntu y de allí su Importancia perfectamente cornprendda por
las naciones del Primer Mundo que han destinado a su preservación, expan-
sión. exposición e Introducción cuantiosas porciones de sus presupuestos. La
exportación de la cultura es de una Importancia capttal porque sus récltos son
rnatenales y espirituales. de una dimensión muy dlfícll de cuantificar. Las fronte-
ras políticas tienen límites Juridlcos en el mundo de las naclonalldades Iniciados
hacia el pnnclplo de la Edad Moderna y hasta allí llegan las leyes y la auton-
dad de algún centro de poder admitido y reconocido Internacionalmente,
pero las fronteras culturales tienen otras delineaciones que pueden ser coinci-
dentes o no con aquéllas y son las que debernos preservar con mucha aten-
ción. El cine de Hollywood, vaya corno ejemplo, hizo más por Estados Unidos
que muchos bancos Internacionales. Buffalo Blll, un cazador de búfalos, el ga-
nado que alimentaba a las tnbus Indígenas, es un símbolo universal de su
·epopeya hacia el Oeste•; el Louvre. antiguo palacio de los reyes franceses es
hoy un gigantesco museo que exhibe las glorias de Francia y su Imagen se ex-
porta universalizando su histona; Napoleón Bonaparte, consciente de su lrn-
. portancla, saqueó prácticamente las obras de arte de los palacios Itálicos y
los Ingleses llevaron de Egipto sus ruinas rnllenarlas, de tal modo que para estu-
diar ·egiptología· es lndlspensable visitar y residir en el ·srltlsh Museurn' de
Londres; los comunistas, en el peor periodo stallnlsta exhibían con orgullo el
museo del Herrnltage, en Lenlngrado, el antiguo palacio lrnpenal que conser-
va reliquias Imperecederas; muchos han olvidado a Julio 11, salvo los hlstorJado-
res, pero está vivo en nosotros su contemporáneo excepcional Miguel Angel
• Palabras pronunciados por el nuevo Director del Museo Histórico Noclonal,
Dr. Juan José Cresto. en el acto de asunción en la Sala Migue! Cané de la Se-
cretaría de Cultura de lo Noción. el 15 de agosto de 1996.
77
Buonarottl y ya nadie recuerda a los validos y a los ministros de Felipe 11, pero
sigue cabalgando por todos los caminos Alonso Quljano el Bueno. Y es que la
cultura da récltos; la cultura atrae al hombre que quiere apreciar la obra del
hombre.
El Museo Histórico Nacional fue durante muchos años, hasta principios de
este siglo, el gran reservorlo de los objetos materiales que testimoniaban los
acontecimientos de nuestro pasado. Mantener Intactas sus colecclones, acre-
centarlas en lo posible y sobre todo exhibirlas para conocimiento del público.
ha sido la tarea noble y desinteresada de directores y funcionarios que a lo lar-
go de los años pasaron por esa vieja casona. Directores y funcionarios de todas
las jerarquías que pusieron allí sus esfuerzos, su talento, su desinterés y -sobre
todo- su amor por el pasado argentino que representa nuestra fldelldad al país.
El Museo fue creado en 1889 con carácter municipal por el Intendente
Francisco Seeber. Era pequeño y se Instaló en Esmeralda 848, pero su primer
director Adolfo J. Carranza le dló un Impulso de tal magnitud que bien pronto
debió trasladarse a Moreno 330. Allí quedó chico al poco tiempo y pasó al
Jardín Botánico y de allí a la vieja casona de don Gregorio Lezama, en 1897.
En ese sitio, en ese parque, la comisión del cuarto centenario de la primera
fundación de Buenos Aires atribuyó la construcción del primitivo real o fuerte
construido por orden de don Pedro de Mendoza. La casona, que fuera antes
del americano Home, fue ampliada y embellecida por Lezama desde 1857.
¿Por qué crecía el museo? Porque Carranza visitaba a sus amistades vincula-
das con famlllas que tuvieron participación en los hechos de la Independen-
cia y en las guerras civiles y recibía objetos que acrecentaban el acervo co-
mún de los argentinos.
Son lugares comunes repetidos aquellos conceptos de que no existe el
Muro si no hay pasado, que cuando más hondas y vitales son las raíces, más
alta es la copa del árbol, que dará sombra y frutos bajo su amparo. Una na-
ción es lo que ha sido y quiere seguir siendo, es un sistema de lealtades hacia
Instituciones comunes que consideramos propias. La historia es aquello que
nos ocurrió a nosotros y, mós aún, aquello en que nosotros, sin haberlo vivido,
lo sentimos nuestro, sufrimos las derrotas, somos felices en los triunfos y nos sen-
timos orgullosos del crecimiento, de la riqueza de nuestro pueblo, de la belleza
de nuestras ciudades, en fln, de nuestras realizaciones. Mudos testigos, los ob-
jetos materiales que allí estuvieron son para nosotros sagradas rellqulas de
aquellos sentimientos. Y viven. Viven entre nosotros y viven con nosotros. Ellos
enriquecen el espíritu y forman parte de la conciencia colectiva, son
coadyuvantes de la educación y aglutinan el sentimiento de naclonalldad .en
78
el mejor sentido de la palabra. Por eso un museo es una entidad viva, vigente,
palpttante.
Un antiguo docente universitario vinculado a la Investigación histórica se
hace cargo de este museo, pero lo hace no sólo para trabajar en él sino para
pedir a sus conciudadanos comprensión y colaboración.
El museo no tiene presupuesto y la Nación argentina, que tantos logros
ha tenido en estos años, tiene hoy graves ctflcultades presupuestarlas que no
pueden soluclonarse de un e.fa para otro. No me cabe duda de que si el señor
secretarlo de Estado dispone de fondos los dará. Pero el museo necesita un ct-
nero Importante para Instalar sus piezas, que exceden de trece mil. Necesita
actualizar su acervo bibliográfico, necesita vitrinas, necesita espacio. Instalar
este museo cuyas piezas están en depósito demandará un cierto tiempo por
lo que no podrá habilitarse de un día para otro. Luego es nuestra Intención
informatizar todas sus fichas, filmar su acervo, llevar al Interior y al exterior del
país gran parte de sus bienes y hacer Intercambio de piezas y bienes de valor
museístlco. Es evidente que el personal existente no es suficiente para tal tarea,
por lo menos hasta que todo se ponga en marcha.
Yen este punto quiero rendir homenaje sincero a los empleados que hu-
mildemente han trabajado y en los últimos dos años, convivido con una obra
en construcción, sin quejarse, sin faltar, haciendo lo posible para mantener en-
cendda la llama de la '1Jstorla. Vayan con estas palabras mi encendido elogio
desde su director, el doctor Barbagallo, hasta el último empleado, muchos de
ellos profesionales de reconocido valor. Yquiero darles a todos un agradecido
abrazo desde este lugar, sin distinciones a todos ellos.
· Hay que señalar con claridad que el Museo que vamos a trabajar es ct-
ferente al que existía. Se han tirado paredes- al suelo y se han levantado otras,
se le ha dado temperatura homogénea, se le ha cambiado la fachada Inte-
rior, se han acortado los recorridos de la exposición. Es otro Museo y debemos
trabajar con otro criterio acorde con lo que ya se ha hecho y no se puede
modificar.
No puedo dejar de mencionar a la Asociación de Amigos. ¿Qué motiva
a una persona a dar su tiempo, su esfuerzo, sus desvelos y a veces su dinero
por alguna Institución? Yo tengo la respuesta: la generosidad del amor, la de
sentirse consustanclado con la obra, la de sentirse parte del país, la de estar
enraizado con la historia. A veces se trata de prolongados esfuerzos que llevan
años Yen esa persistencia se entrega el único capital que disponemos, que es
nuestro tiempo, esa finitud temporal. Hoy precisamos ampliar esa Asociación
con empresarios y con empresas que quieran ayudarnos a poner en marcha
79
este enorme reservorlo moral y a ellos les hago un llamamlento que tiene algo
de ctamátlco porque debemos contar con los fondos que un da revertirán en
ellos mismos a través de una nación más Integrada.
A~ como hoy está el Museo no podria reunir todas sus piezas museístlcas,
que exceden las trece mll, en una sola exposición. En los últimos cuarenta años
el Incremento de su patrimonio ha sido escaso, y no guarda ninguna relación
con los cuarenta años Inmediatamente anteriores. Tampoco ha crecido
slgnlflcatlvamente su haber blbllográflco y todo ello nos está Indicando un ver-
dadero anquilosamiento equivalente a un olvido de la memoria naclonal por
parte de los poderes públicos. Menores presupuestos, falta de mantenimiento,
escaso Incremento de piezas museístlcas, poco personal. abandono. SI el Mu-
seo Histórico Nacional hubiera crecido en el último medio siglo tanto como en
el primero. su exposición debería recorrer todas las embajadas argentinas y se-
ría motivo de atracción turística. Pero no lo es. Por eso -dicho a titulo de simple
sugerencia- tal vez estemos necesitando revertir esta situación de manera to-
tal: otro edificio, partidas para comprar objetos, adquisición de donaciones
que han sido la fuente de su existencia y otra visión de la cosa.
La historia se ha hecho con todos. El historiador no discrimina. El pasado
es como es. No podemos suponer situaciones diferentes en caso de hipótesis
históricas también distintas. Sea dicho esto para aplicar al museo de hoy y
aquí. Él está como está y es como es. Así lo recibimos y desde aquí partimos.
Por eso quiero terminar con las palabras de aquel gran ciudadano, escritor,
poíltlco, poeta, filósofo y estadista que fue Bartolomé Mitre: "En la Argentina la
obra es de Dios y de los hombres. Trabajemos para que con la ayuda de Dios
y de los hombres hagamos otra nación· .
•••
REAPERTURA PARCIAL DE LAS SALAS *
Es para mí una satisfacción inefable poder presentar este día a un museo
que apenas entreabre sus ventanas y sus puertas para que podamos verlo
casi a hurtadillas. como escondidos, esperando apreciar más adelante la to-
talldad de su riqueza.
No es un museo un depósito de objetos. Mucho menos lo es un museo de
Palabras del Director del Museo, Dr. Juan José Cresto, el 16 de diciembre de
1996.
80
historia y aún mucho menos este museo. Porque éste es ·e1 Museo·; es el teso-
ro vivo de los argentinos, la memoria de sus hazañas Yde sus desgracias por-
que guarda los testimonios de todo aquello que nos ocurrió.
Su enorme patrimonio pertenece al pueblo argentino y nosotros somos
apenas transitorios tesoreros cuyas llaves guardamos para trasferirlas a nues-
tros sucesores, acrecentada su riqueza materlal y elevada su concepción espl-
rltual con la prosapia que otorga el tiempo.
Cada objeto nos permite comprender el entorno en el que transcurrió su
vida: acá una silla que usó un comerciante de la colonia y que con sus dos
siglos de existencia muestra un estilo, más allá un espejo de una anciana
dama, más lejos el sable de un hombre que un día lo usó en defensa de nues-
tra bandera y tal vez frente a ellos la figura lejana e Inquisidora del retrato de
algún funcionario real.
Nunca como en este sitio sentimos la fragilidad de la vida, la brevedad
de la existencia, porque el tiempo para un historiador tiene una dimensión di-
ferente. Todo ocurrió hace tiempo. Es el mundo animado de las cosas muer-
tas, son los hombres y mujeres queridos que nos miran para siempre desde un
lienzo y que para nosotros representan las reliquias de nuestro pasado. Todos
son nuestros abuelos en espíritu. Muchas veces he repetido los conceptos de
García Venturtnl de que la historia no es lo que ocurrió, sino lo que nos ocurrió
a nosotros. Yasí todo lo que acá se testimonia es un pasado nuestro. Cuando
las glorias nacionales ocurrieron, muchos de nuestros abuelos inmigrantes aún
vivían en la vieja Europa en los trabajos más modestos, pero hacemos nuestras
las hazañas de aquéllos que nos dieron patria y un nombre en el mundo.
Por los gruesos muros de esta casona moran los espíritus de quienes la ha-
bitaron. Por estos sitios el primitivo dueño salía a caballo o en la volanta hasta
la Plaza Victoria; por aquí venía Rosas a Jugar al tresillo; en sus corredores las
familias de la colectividad Inglesa y de los amigos de don Gregorto Lezama -
muchos años después- paseaban o veían descender el sol de la tarde en
aquel Buenos Aires chato recostado sobre el rio.
En las fiestas Jullas de 1860 Urqulza residió en esta casa Invitado por
Lezama y hasta aquí vino el pueblo de Buenos Aires para agasajarle. Es nece-
sqrlo leer las crónicas de la época, las cartas de Mariquita a Alberd o del co-
rresponsal de La República de Mendoza para ver la Importancia de esta casa
y de su Ilustre y ocasiona! residente.
Ni, pues, parece un Juego borglano, pero cada casa tiene una sombra
que la engendra y que pervive, algo así como la fuerza telúrlca que empuja al
destino a sus Infinitos laberintos. Nada puede hacer la obra humana pero
81
todo se Impregna de nosotros sin damos cuenta ni pretenderto. Por eso esta
casona es la justa receptora de los objetos que la contienen. ¿Quién sabrá Ja-
más el mlstertoso dálogo entre unos y otros? ¿Quién podrá decir qué Idioma
hablan los objetos que para nosotros son sagrados? Es nuestro deber tratar de
Interpretar el mudo Idioma de aquello que ha traspasado los slglos y acumula-
do la vastedad del tiempo en su Intimidad y en sus entrañas. Bellos cuadros,
monedas de oro, o slrnples prendas de ropa desteñida, todos son para noso-
tros joyas de valor Imperecedero que debernos custodiar con celo y exhibir
con orgullo. Tenernos aquí, entre otras cosas, 1195 óleos, 31 pasteles, 1812 gra-
bados, 420 dibujos, 175 acuarelas y 40 gouaches, 14.130 documentos, 2W6 lm-
presos, 101 banderas, 1196 textiles que Incluyen vestidos antiguos, trajes y uni-
formes de próceres, 555 armas (blancas y de fuego), centenares de muebles y
otros rnlllares de objetos, muchos de ellos prestados a Instituciones y otros mu-
seos. cuyo reingreso a nuestro patrimonio procuraremos.
Esperarnos hacer la segunda etapa de la obra. La primera se ha realiza-
do en función de la segunda. Hay cuadros que no se pueden exhibir porque
no pueden pasar por las puertas. simplemente porque la obra ha quedado in-
completa. pero esperamos -en ese caso- Intervenir activamente para darle al
conjunto un sentido más homogéneo y a poseer depósitos con garantía de se-
guridad.
La obra comenzó el 8 de abril y en sus principales aspectos se ocupó de
la renovación de las Instalaciones eléctricas e iluminación, instalación de pro-
tección de Incendios con última tecnología que permita accionar dispositivos
en una central de seguridad. Instalación de un sistema de climatización frío-
calor. que ya está en su ernplazamlento pero aún no funciona porque hubo
que construir una habitación especia! para ubicar el transformador que sumi-
nistra energía eléctrica; se realizó un cambio total de solados con pisos y
contraplsos a nuevo, con sus correspondientes conexiones eléctricas soterra-
das; se reparó toda la carpintería metálica y de madera, se hizo tratamiento
externo e Interno de paredes y pintura general. aún no concluida. Este trata-
miento de paredes, clelorrasos y pisos no se efectuaba desde hace medio si-
glo. La segunda etapa tenderá. además de extender las superficies de exhibi-
ción que son Indispensables para tener un guión histórico más o menos com-
prensible, a adecuar las áreas de reserva. En un museo de historia es Indispen-
sable contar con ellos por la antigüedad de los objetos y, a veces, por su volu-
men. No es lo mismo guardar 4000 óleos que cincuenta planos, clavicordios y
pianolas y dos centenares de camas, armarios, muebles, mesas y slllas.
H?Y· así como están las cosas. gran parte del Inmenso y velloso patrimo-
nio esta en estado de deterioro. Es necesario no ya traer algún restaurador als-
82
lado sino Incorporar restauradores especlallzados en equipo y por contrato
transitorio. Los tenemos en el país. salvo algún especlallsta. No consideramos
conveniente enviar gente al exterior sino. por el contrario. traer por seis meses
algún especlallsta que clcte cursos y prepare personal en nuestro medo.
Necesitamos fondos. Este patrtmonlo pertenece a todos y es conveniente
y justo que todos lo cuidemos. No es posible que solamente el Estado deba
cargar con la total responsabllldad de bienes comunes. La Asociación de Ami-
gos, en este sentido, merece dos palabras. Dos palabras o muchas palabras.
porque el idioma nos resulta insuficiente para eloglar tanto esfuerzo y tanta hu-
mildad, todo a la vez. La señora de Araujo. su presidenta e hija del general
Sarobe que yo mismo he citado en varios llbros. es de una asombrosa activi-
dad y quiero en este acto público agradecer sus nobles esfuerzos. extensivos
al arquitecto Blanchl y a otros. Quiero destacar la lucidez y la bien probada
fama del arquitecto Mario Roberto Álvarez. que ha actuado
desinteresadamente en la reforma y. asimismo, aun con sus pequeñas
falencias, a la empresa constructora. No sería justp no reconocer que, aun
cuando se excedieron los plazos. lo que tantas preocupaciones causó a este
Director. con actas y actos. detrás de ello hubo buena voluntad. espíritu de
corrección y deseos de hacer siempre lo mejor. Nada es fácil. Nada que me-
rezca la pena.
Quiero. además. dedicar dos palabras a mi antecesor. el doctor
Barbagallo. modelo de humildad y de grandeza moral.
Sin embargo precisamos tener otra Institución paralela a la Asociación
de Amigos con la presencia de empresas que se ocupen de un activo
mecenazgo y que trabaje de consuno con esta Dirección. De lo contrario.
nada se podrá hacer. Hay restricciones presupuestarlas y debemos cuidar
cada centavo que gastamos. pero un museo de estas características necesa-
riamente implica hacer Inversiones para su mantenimiento.
Esperamos. en el año 1997. no sólo abrirlo sino Informatizar su repositorio.
publicar Investigaciones periódicas. publicar el ·ubro del Centenario· para el
que hemos comprometido a Importantes historiadores argentinos y hacer ci-
clos de conferencias sobre diversos temas del quehacer histórico naclonal Y
universal. De esta manera habremos cubierto un vacío; el Museo lo debe a la
comunidad como razón de ser. Usaremos la moderna tecnología que nos per-
mita, con la lectograbadora. vender la Imagen de los objetos que poseemos.
La fotograña en colores y su ficha podrán ser entregadas en pocos Instantes.
Toda esta tarea de Informatización esperamos realizarla en 1997.
Finalmente deseo Informar que el Museo trataró de Incorporar nuevos li-
bros a su biblioteca y nuevos objetos históricos que acrecienten su patrimonio.
83
El día de hoy, al término de esta ceremonia, Incorporaremos dos Importantes
donaciones. Inicio de lo que será una serle mucho mayor.
El personal de esta Institución es de gran calldad humana y profesional.
Han vuelto a sentir orgullo por su torea en este museo. Tienen exacto medida
de que tienen en sus manos las glorias y los sueños de un pueblo o través de
objetos. Imponentes o humlldes, pero que son Irrepetibles. SI algo tiene de ve-
lloso es saber que cualquier cosa que se compre no puede retroceder en el
tiempo. Nada de lo que hoy se haga, aunque sea una obra maestra, disfruta
del componente del tiempo, ese ·verdadero valor agregado· que tienen las
cosas que aquí manejamos y que nadie puede Incorporar si no es el mismo
tiempo. Eso nos diferencia de los museos de arte: la autenticidad del pasado.
Acá nada es sucedáneo, ni supletorio. ni reciente. ni actual: todo es antiguo.
Esta consustanclaclón del personal con el Museo tiene a veces contornos
francamente conmovedores. Hace una semana encontré, en un día feriado.
a un simple operario que por su cuenta. silenciosamente, limpiaba un cuadro.
Le pregunté qué hacía y con una sonrisa me contestó: "Estoy haciéndolo más
presentable a don Álzaga·.
Ese amor generalizado por el Museo me permite decir que podemos lle-
gar a hacer de éste un lugar de visita para todo extranjero que llegue a Bue-
nos Aires, Incorporarlo a todas las cartillas turistlcos, a todos los expertos y a to-
dos los hombres y mujeres del mundo que quieran conocernos a través de
nuestra historia. Es lo que hacen México, Brasll y los países europeos. Tenemos
algo más que las cataratas y el magnífico Aconcagua que no hemos fabrica-
do: tenemos la obro del hombre.
En efecto. el traslado de verdaderas masas humanas que sin mucho re-
cato semántico se denomino •turismo· no los sorprenderá esta muestra de
nuestro pasado. Queremos saber siempre qué es y qué hizo lo gente y este sitio
será un lugar de obllgada aunque voluntaria visita para conocer nuestro pa-
sado. Esto vieja casona volverá a decirle al mundo los riquezas que guarda
con el orgullo de nuestra historia. Ymientras una sencilla maestra visite el lugar
con sus pequeños alumnos, un grupo de especialistas extranjeros simultánea-
mente visitará sus salas y todos juntos podrán apreciar sus viejos testimonios.
Este Museo es el resultado de los esfuerzos de grandes directores que de-
jaron aquí su pasión argentina y construyeron un pasado museístlco. Desde
Adolfo Carranza hasta González Garaño, con Delleplane, Pradere, Santa
Coloma Brandsen en el largo camino, mucho le debemos a aquellos esclareci-
dos patriotas. Seo, pues, esto puesta en el renovado caserón, un homenaje a
todos elos.
CENTENARIO DE LA LLEGADA Al PAÍS
DEL SABLE CORVO DEL GENERAL SAN MARTÍN •
• Palabras pronunciadas el 4 de marzo de 1997, por el Dr. Juan José Cresto, con
motivo de la entrega al Museo Histórico Nacional de una réplica del sable del
Libertador por el Regimiento de Granaderos a Caballo ·General San Mar1fn·.
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de se reúnen y guardan los recuerdos de épocas y hombres que pertenecie-
ron a la historia, donde se encuentran como se Impondrá V. por el catálogo
adjunto muchas de las rellqulas del grande hombre, me permito sollcltar de V.
con destino al Museo que dirijo, aquella espada redentora de un mundo, para
que aquí, en el seno de la Patria que le dio el ser, pueda ser contemplada por
los que la habitan y sea ella en todo tiempo la que los Inspire para defender la
soberanía naclonaL como en la ocasión que originó se la obsequiaran a su se-
ñor padre·. Más adelante agrega: •... animado de propósitos patrióticos y
persuaddo de que no apelo en vano a ese sentimiento que debe palpitar pe-
renne en su corazón por la tierra de su amor y de sus ascendientes, vengo a
rogar a V. haga donación al Museo Histórico, en nombre de su señor padre,
del sable que recibió .. : .
Es necesario comprender que no fue fácil desprenderse del seno de la fa-
milia de la reliquia mas Importante de la Nación Argentina. Sin embargo el 26
de noviembre contesta en un párrafo:· ... al fin mi esposo, con la entera apro-
bación mía y de nuestros hijos, se ha decidido en donar a la Nación Argentina
este monumento de gloria para ella. reconociendo que el verdadero hogar
del sable del Libertador debiera ser en el seno del país que libertó. Por lo tanto,
puede Ud. señor Carranza contar con que al recibo de pedido oficial que us-
ted ofrece. la contestación será el envío del sable·.
El hijo de Manuelita, Rodolfo J. Terrero en carta a su primo en Buenos Ai-
res. Juan Manuel Ortlz de Rozas, le pide que se haga cargo de los trámites y le
pregunta si la entregará al presidente de la República para depositarla en el
Museo o directamente al director del mismo. El 1º de Febrero de 1897, Máximo
Terrero le escribe a Carranza otra carta donde se lee: "MI contestación es el
envío de la prenda a Buenos Aires acompañada de una nota dirigida al presi-
dente de la República. supllcando a S.E. se sirva aceptarla en calldad de do-
nación hecha a la Nación Argentina, en nombre mío, el de mi esposa y de
nuestros hijos, y al mismo tiempo manifestando el deseo de que sea deposita-
da en el Museo Histórico Naclonar.
El 5 de febrero de 1897 salló el sable en un cofre forrado en plomo con
sus correspondientes llaves, en el vapor ·oanube' a cargo del capitán
Dlcklnson, de la Royal Mall, que llegó a La Plata el 28 de dicho mes, donde se
.transbordó a la corbeta ·La Argentina·.
El 3 de marzo de 1897, el presidente de la Repúbllca, José Evarlsto Uriburu
decretó depositarlo en el Museo Histórico Nacional y una comisión presidida
86
por el general Donato ftJvarez, en una ceremonia, acompañado por algunos
Jefes de la Comisión Mllltar designados, así lo hizo.
Un Museo de historia permite un dólogo Intemporal y rico en sugerencias
entre un objeto y su Interlocutor. Cada cosa tiene el agregado de siglos, el tes-
timonio de un mundo que existía antes que el Interlocutor, una expertencla ver-
dadera que nos habla desde un tiempo pasado.
El Museo Histórico Naclonal, que tengo el honor de dirigir, es el mós gran-
de repositorio histórico de la Nación Argentina. Guarda los bienes de toda la
historia, de todas las provincias, de todos los próceres, de todos los tiempos
que permiten comprender cómo fue nuestro pasado y también los objetos co-
munes para reconstruir la vida cotidiana. Sus mlllares y mlllares de objetos no
podrían exhibirse todos juntos porque no tendrian suficiente espacio. No obs-
tante estamos empecinados en recuperar la enorme cantidad de piezas
desperdigadas por el país y por el exterior que fueron entregadas en préstamo
y nunca reintegradas.
Todos los objetos desean volver y volverón porque lo gestionaremos y exi-
giremos, todos, menos uno. Y ese objeto, que es sagrado para los argentinos,
es el sable que usó el Padre de la Patria en su abnegada vida para darnos
libertad e Independencia. Conservamos y debemos seguir conservando entre
tantísimas cosas la primera bandera, el primer escudo que hizo hacer la Asam-
blea del Año XIII, redivivo Imagen de la Patria, la primera medalla, los primeros
documentos, los primeros testimonios, pero creemos que el sable de San
Martín, del que el Museo es el destinatario, debe ser conservado con la vene-
ración y custodia que merece. por los hijos del Libertador, que fueron sus queri-
dos granaderos. Sus hijos deben seguir guardando la rellqula de su padre.
El Museo Histórico Nacional no acepta répllcas, salvo para ornamenta-
ción y ambientación escenogróflca del guión histórico. Sin embargo. el Museo
va a recibir una répllca del sable que ublcaró en lugar de prlvlleglo ante la vis-
ta de mlllares de admiradores y ciudadanos que nos visiten, del país y del ex-
terior y lo tomaremos como si fuera el mismo que empuñara aquel austero Y
talentoso hombre de armas que solamente lo usó para nobles propósitos Y
que en el momento culminante de su vida dijo: ·MI causa es la causa del gé-
nero humano".
Seró la única réplica que para nosotros tendró carócter de legitimo hasta
que alguna vez se disponga no sólo la custodia, sino el destino permanente en
el hogar de los granaderos.
87
lnvocacl6n
y hoy, a den años de la llegada de este sable a América,
¡Oh Padre de la Patria!, permíteme que te Invoque.
Permíteme que te diga desde este conflictivo mundo, que seguimos
comprendiendo tu obra, que la seguiremos admirando.
Tú nos diste lo que mejor pudiste hacer.
Te debemos la Ubertad y la Independencia como pueblo.
Vamos por el mundo exhlblef19o con orgullo el nombre de argentinos
porque nos diste una y otra. ¡Ese es tu legado!
Por eso ¡padre nuestro! que el sable que usaste para libertar pueblos sea
hoy prenda de unión entre los argentinos. Ycuando este tesorero de las glorias
argentinas que hoy te Invoca haya desaparecido de la tierra, siga aún brillan-
do por siglos tu nombre y fulgure la espada que acompañó tu gloria.
¡Que así sea!
•••
18 de marzo de 1997
- DE UNA BANDERA DEL COMBATE DE OBLIGADO
DEVOLUCION
En oportunidad de la visita a la Argentina del presidente de Francia
Jacques Chlrac, fue devuelta a nuestro país una bandera argentina del com-
bate de la Vuelta de Obllgado, que hoy se exhibe en una vitrina lateral del hall
central del Museo Histórico Nacional.
El sábado 15 de Marzo de 1997 el gobierno de Francia hizo entrega de
esta legendaria enseña -que se encontraba en los Inválidos- durante un acto
realizado en el Patio de Armas de la Residencia de Olivos, en presencia de los
mandatarios Jacques Chlrac y Dr. Carlos Saúl Menem, el Director del Museo
Histórico Naclonal Dr. Juan José Cresto y otras autoridades.
El martes 18 de Marzo la bandera fue trasladada al Museo, con un solem-
ne acompañamiento clvll y militar, donde permanecerá en custodia, según lo
acordado entre los gobiernos de ambos países.
En reciprocidad al gesto del gobierno de Francia, la Argentina entregó,
también en custodia, dos bombas de l 00 llbras cada una debidamente acon-
dicionadas, pertenecientes al patrimonio del Museo Histórico, cuyo estudio his-
tórico y autenticidad estuvo a cargo de su Director.
88
14 de mayo de 1997
- DEL "LIBRO DEL CENTENARIO"
PRESENTACION
89
23 de Junio de 1997
HOMENAJE AL ALMIRANTE GUILLERMO BROWN
Con motivo del fiJ aniversario de su egreso de la Escuela Naval Militar, la
promoción 74 reallzó, en el salón de actos del Museo Histórico Nacional, un
acto de homenaje al Almirante Gulllermo Brown.
En la oportunidad, el capitán de navío D. Carlos Reslo expresó el objetivo
y contenido del acto, mencionando la presencia de representantes de dicha
promoción y condiscípulos suyos.
Seguidamente hizo uso de la palabra la Prof. Emilio Menotti, Presidenta
del Instituto Brownlano. quien realizó una pormenorizada exposición de la vida
del prócer.
Finalmente habló el Dr. Juan José Cresto, director del Museo Histórico Na-
cional. sumándose al acto recordatorio del bravo precursor de la Armada Na-
cional.
Al finalizar la ceremonia se mencionó especialmente al marino desapare-
cido E. González Lonziéme, integrante de la promoción 74 e Ilustre historiador.
El Capitán de Navío D. Cortos Reslo hizo entrega al director del Museo. de
sendos ejemplares del ·ubro de Bitácora#. redactado por miembros de la cita-
da promoción.
•••
"BROWN EN SU ANIVERSARIO" *
La Nación Argentina levanta sus ojos al mundo orgullosa de su pasado,
heredado de los hombres que nos dieron libertad, Independencia, una cultura
y una personalidad Internacional. Uevamos con orgullo el nombre de argenti-
nos por el mundo.
Cuando el tiempo pasa, comprendemos aún más a aquéllos que con
medios tan precarios nos dieron ejemplos de humildad, de coraje, de sacrlfl-
clo, de grandeza.
Hoy recordamos al más grande marino de nuestra historia, al hombre
que, al decir de Mitre, valía por sí solo más que toda la flota junta, al hombre
que con sólo tres barcos enfrentó la escuadra española, al marino que sopor-
90
tó todas las tormentas en todos los mares y en las aguas del Plata custodiando
a la ciudad desde su puente de mando, al hombre respetado por el enemigo,
querido por sus subordnados y adorado con fldelldad por el pueblo de la ciu-
dad del puerto y por el país todo.
Pocos hombres hubo tan populares en Buenos Aires como el gran almi-
rante. En el combate de Los Pozos, la poblaclón pudo asistir al espectáculo
béllco desde las azoteas y de las torres de las lgleslas. Allí comprendó cuánto
valía este marino sencillo y circunspecto que enfrentaba con medios tan des-
iguales o su poderoso enemigo exterior.
En un principio los españoles contemplaron nuestros barcos mercantes
artillados con cierto desprecio y hasta conmiseración. Mos después compren-
dieron que aquellos modestos leños eran, en los manos del olmlronte, elemen-
tos mortales poro sus aspiraciones poírtlcos.
Por eso el país le debe o Brown gran porte de su propio existencia. Sin él
no hubiera existido el país porque la Banda Oriental ~lguló en manos realistas y
luego de los imperiales. Argentina estaría hoy limitada en muchos aspectos.
Brown es, por otra parte, el prototipo de una gran figura humana, el
ejemplo vivo de un ser humano excepcional que ofrendó sus conocimientos su
lealtad y su capacidad marinera a la nueva patria que abrazó con lealtad y
fidelidad. Su pasión de bien público lo llevó a defender a su gobierno pres-
cindiendo de cualquier menguado Interés. ·
Después de Caseros el viejo almirante era una glorla nacional, a nadie se
le ocurrió molestarlo por haber servido a Rosas, porque aquél sólo había servi-
do a "su" gobierno, a las autoridades de ·su" patria.
La quinta de Barracas, lejos del ruido y del movimiento de una noción
que crecía. rodeado de los plantas de su jardín que él mismo cuidaba, era
centro de reunión de viejos amigos y adversarios que llegaban para testimo-
niar su afecto y su admiración.
Mitre, una de las grandes figuras de la ciudad, llegó muchas veces hasta
su retiro para escuchar con criterio de historiador y oído de admirador las
aventuras y luchas del viejo marino, envuelto ya en el hálito de la glorlo.
. Triste y solltarlo por sus desgracias familiares, el almirante se retiró de este
mundo en 1857. Su muerte enlutó o todo el país porque con él se Iba un peda-
zo de historio y uno epopeya viviente.
Hoy se cumple un nuevo aniversario de su nacimiento. Hace 202 años Ini-
ció su vida, pero hace ya mucho tiempo que su vida espiritual nació y creció
en el corazón de nuestro pueblo.
91
" •
ACTO OFICIAL DE REINAUGURACION
Después de un largo sllenclo de alrededor de tres años, desde el propósi-
to lnlclal de reformas hasta la completa terminación y puesta museológlca, re-
abre sus puertas el Museo Histórico Nacional.
No es éste un museo más, como los muchos y bellos museos que tiene
nuestro país, sino el reposltorto de toda nuestra historia, el mayor y más com-
pleto de su tipo y el que guarda toda la memorta nacional y, como conse-
cuencia, la Identidad de los argentinos.
Lo que se muestra a partir de hoy es solamente un sector del edificio
remodelado, en espera de una segunda parte programada hace tres años. El
guión histórico actual se Inicia con Amértca precolombina y llega hasta 1950,
centenarto de la muerte del Libertador bajo cuya advocación está puesto
este Museo, siendo el Cuerpo de Granaderos su custodo.
Con mayor superficie, el guión sería más completo y con la tercer refor-
ma. ocupando una pequeña porción de la plaza seca del Parque Lezama
con autorización de la ciudad de Buenos Aires, la visión de la historia sería más
coherente. Aún así no podríamos exhibir ni la mitad de los tesoros que guar-
dan nuestros depósitos.
Señor presidente: su presencia en esta vieja casona de las glortas argenti-
nas es para nosotros un aliciente y muestra su particular Interés por la cultura
con hechos concretos. Es usted -de toda la historta argentina- el segundo pre-
sidente que en la vigencia de su mandato visita este Museo. El otro fue el doc-
tor Roberto M. Ortlz.
Por otra parte esta muestra que se Incorpora a la oferta cultural de la Na-
ción no hubiera sido posible sin la preocupación de la Secretaría de Cultura y
por la Importancia y trascendencia que le han dado tanto el antertor secretarto,
doctor O'Donnell, como la actual secretarta, doctora Gutlérrez Walker, en clara
comprensión de que es necesarto rescatar los genuhos valores de la Patrta.
Más aún: este Museo. que durante décadas ha recibido muy pocos obje-
tos y en cambio ha entregado en préstamo mlles de piezas que tenemos el
propósito de recuperar, este Museo, repito. ha comenzado a recibir
donaciones de todos lados y, sobre todo, ha adqulrtdo bienes. Quiero resaltar
aquí que el 18 de julio pasado se compraron tres valores lnestlmables, que
sospecho de no ser así hubieran tomado el camino del extertor. Un marco
Discurso del Director del Museo Histórico Nacional. Doctor Juan José Cresto. el
11 de agosto de 1997.
92
altoperuano de más de 250 años. dorado a la hoja y varios documentos: una
serle de partes de guerra enviados por el general Mansllla el día anterior a la
batalla en los que dice que se sostendrá allí con el valor de su vida y otro fir-
mado por todos los miembros de la Primera Junta de Gobierno patrio en jullo
de 161 O. Y desde esto tribuna agradezco a la secretarla. doctora Gutlérrez
Walker, su lnmectata disposición para comprarlo y al vendedor. mi amigo el
doctor OOrnhOfer, que los sacó del remate y renunció al precio probable para
venderlo por la ínfima base.
No es éste un museo de arte. pero el arte brota o cada paso; no es un
museo de nostalglas pero cada cosa cobra vida; es la muestra concreta de
objetos que acompañaron a los hombres y mujeres que nos dieron patria, 11-
bertad, Independencia, organización y un nombre en el mundo del que esta-
rnos orgullosos. Siempre querremos saber qué somos y qué hicimos: en los ve-
nerables testimonios que nos rodean. cargados de años, y a veces de slglos,
con el valor agregado del valor "tiempo·, que nada reemplaza ni hay tecno-
logía disponible que lo Incorpore, la historia nos cuenta la vida de ayer. el
mundo que pasó o, mejor dicho, que nos pasó. porque nos sentimos partícipes
de ese pasado en una trama generacional que entrelaza una solidaridad des-
conocida. La fldelldad al pasado es la que nos mantiene unidos y esa leal-
tad a nuestros símbolos nos da la verdadera cohesión de ser una nación. Po-
dremos diferir en todos los temas pero debemos mantener unidas la raíz de los
orígenes y hacerla nuestra, aun en este crlsol de razas y de credos de todas las
procedendas.
Quiero agradecer desde aquí. a un año que ocupo este cargo, el apoyo
permanente del señor presidente; a los dos secretarlos de Cultura sucesivos; a
la Comisión de Monumentos. Museos y Lugares Históricos, en especial a Mag-
dalena Falllace; a la Asociación de Amigos del Museo. en esP,eclal a su noble
presidenta, la señora d.e Araujo; al arquitecto Mario Roberto Alvarez por su la-
bor; al almirante Enrice, por sus consejos y permanente colaboración; al jefe
del Regimiento de Granaderos a Caballo "General San Martín·, Coronel
Relmundes. cuya buena disposición y eflclencla exceden todo elogio; a mis
colegas, los historiadores, museólogos y escritores que. con Manrlque Zago. me
permitieron publicar el "Libro del Centenario·; y, muy especialmente. al Insufi-
ciente en número pero sumamente laborloso personal de esta casa, que con
esfuerzo. dedicación, trabajando sin descanso y sin medir horarios hicieron to-
dos los esfuerzos necesarios para poner en marcha esta obra en tiempo ré-
cord. Me siento. por lo tanto, deudor de todos.
Pero debo decir que sólo puedo pagarlo con la dedicación y la pasión
93
por la hlstorta de mi patrta y espero que ella redima toda deuda. Porque soy
de aquellos que piensan que la Identidad naclonal es una cultura y un senti-
miento y que el ejemplo de nuestros mayores debe ser el espejo de nuestra
conducta. Por eso. aquí conservamos el prtmer plano de Buenos Aires. la pri-
mera bandera. el primer escudo. el prtmer Himno, las actas llmlnares de la Na-
ción; pero por encima de todo. pretendemos conservar y transmitir el espírttu
de los hombres y mujeres que convivieron con ellos. corno una forma de res-
peto a su obra y a sus hazañas.
El valor económico no cuenta. Tenemos lujosas Joyas de oro que ostenta-
ron en sus pechos dlplornátlcos argentinos o extranjeros o también pequeñas y
modestas medallas de bronce borroneado cuya lectura nos enternece: ·sol-
dado Fulano de Tal. Homenaje post mortem. Caído al ple de la bandera·.
¿Puede haber algo más sagrado que aquel que dio su vida para que nuestro
país sea lo que es?
Señor presidente: hace cien años el Intendente Alcobendas. de la ciu-
dad de Buenos Aires, y el presidente José Evaristo Urlburu permutaron el Jardín
Botánico por esta vieja casona de Gregorlo Lezama. Aquí. el fundador de este
Museo y primer director, Adolfo Pedro Carranza, desarrolló su obra. A un siglo
de distancia, venimos el día de hoy a rendirte homenaje con la reapertura del
museo de la argentinldad.
Señor presidente: sean este libro y esta medalla testimonio de gratitud
por su presencia en esta Casa.
•••
ANIVERSARIO DE LA MUERlE DEL DR. ADOLFO P. CARRANZA•
La vida de Adolfo Pedro Carranza fue ejemplar. Pocos hombres de nues-
tra vida públlca tuvieron su ldeallsmo -hasta casi llegar a la más bella Ingenui-
dad- en su simple amor a la Patria, traducido en el testimonio de los objetos
que recuerdan el pasado.
Tenía treinta y dos años cuando reunió en la confitería París a los
prohombres de su tiempo, para expllcartes su Idea y su sueño: hacer un museo
de historia, reunir bajo un mismo techo los venerables objetos que testimonia-
• Palabras del Director del Museo Histórico Naclonal, Dr. Juan José Cresto, en la
Recoleta, el 15 de agosto de 1997.
94
ron la historia argentina. No sólo fue ésa una manera de elevar a nlvel home-
naje a aquellos que nos dieron llbertad, Independencia, organización e Institu-
ciones. sino también poder elevar a nlvel de estudio científico la verdadera
historia del país a través de la vida cotidiana de aquellas figuras.
Era historiador de raza. SUpo revivir el pasado con su problemática, con
sus situaciones, con sus avatares. B museo que él creó fue un foco de Intenso
estudio que Irradió saber y dlfundó las glorias nacionales.
Habiendo nacido en Buenos Aires, fue uno de los primeros en compren-
der la enorme magnitud de la figura de Urqulza y aqullatar su obra de organi-
zación y de progreso. Por otra parte. sus estudios sobre la Independencia le
permitieron complementar la obra clásica de Mitre, su admirado amigo y
maestro.
Cuando el Intendente Seeber, uno de los más preclaros Intendentes,
nombró la Comisión Organizadora, allí estaban -entre otros- el polígrafo An-
drés Lamas, el escritor y ensayista Juan María Gutlérrez y también los generales
Roca y Mitre. ex presidentes de la Repúbllca que. aun mllitando en partidos
poíiticos opuestos y en pleno enfrentamiento por la crisis financiera. se unieron
para adoptar una medida que sería clave para el Muro nacional sin distin-
ción de banderías. de divisiones. de opiniones divergentes, de matiz poírtlco.
de concepción económica, de Idea rellglosa, cual es la fundación de un mu-
seo de Historia. que abraza a todos, que Incluye a todos, que cuenta con to-
dos porque pertenece a todos.
Todo el resto de su vida dedicó Carranza al Museo. Fue ampllando año
tras año su repositorio. Le pidió a unos y a otros. Mitre fue uno de los primeros
que generosamente entregó muchos objetos que poseía, tanto propios como
de terceros que se los habían entregado y que él entencfa que debían perte-
necer a la comunidad.
Fue su obra verdaderamente clclópea. Quiero señalar que como historia-
dor fue el primero que se ocupó de la mujer argentina, que rescató a las da-
mas y a las mujeres de pueblo que dieron mucho por la Nación y que perma-
necían en el anonimato.
Todo dato que recibía era bienvenido, así corno toda donación. Pedía,
visitaba, rogaba. No era soberbio, pero sí ldeallsta.
· Cuando entabló contacto con los descendentes de San Martín recibió de
su digna nieta todo el apoyo que esperaba. Cuando contactó con los descen-
dientes de Rosas también encontró el eco necesario. Cuando visitó las provin-
cias del Norte, habló con gobernadores y funcionarios descendientes de próce-
res. pero también con sencilla gente de pueblo que le dio en cada rancho al-
95
gún querido recuerdo. ¡Cómo no custodar con unción cada uno de los objetos
de que ctsponemos. si han sido parte de algún patrimonio de argentinos!
No hubo objeto despreclable para él. Todo lo llenó con su ldeallsmo. Re-
construyó una Nación con sus preciados bienes. que custodió como un tesore-
ro de tesoros Intangibles.
Voy a dar lectura a la última foja de su Diario:
·Agosto 9: El presidente Roque Sóenz Peña ha muerto a las 2 de la ma-
drugada. Era muy deferente y afectuoso conmigo, como que me conocía
desde que era niño. Había estrecha vinculación de amistad entre nuestros pa-
dres y de él con mi hermano Ángel, de quien era contemporáneo. Su título es
haber dado la libertad electoral y por eso merecerá honores yel homenaje de
todos los ciudadanos bien intencionados y patriotas.
ªAgosto 11: Vengo del entierro del presidente Sáenz Peña. Muy concurri-
do. Ha muerto en el momento que se puede elegir para hacerlo, rodeado del
aprecio y consideración de todos. Me ha parecido que el discurso más senti-
do es el del Dr. Plaza. Los demás con f]lás literatura que dolor·.
Tres días después una mano piadosa escribió en su libreta de apuntes:
"Murió •. El día 15 de agosto-como hoy-fue sepultado.
Había terminado su obra. había dejado todos sus bienes al Museo y mo-
ña corno el hombre más pudiente del mundo: no tenía riquezas materiales.
pero dejaba una obra formldable a la consideración de la posteridad.
Han posado ochenta y tres años. Hoy. sus descendientes. los hijos esplrltua-
les del Museo que siguen lo obro que él trazó. vienen o este lugar. donde repo-
san sus restos -eso envoltura carnal que nos acompaño en lo Tierra- para rendir
el admirado y conmovido homenaje de las generaciones a la patria común .
•••
11
BICENTENARIO DE JUAN LAVALLE"*
El 27 de agosto de 1812. un adolescente de 14 años 1Omeses y 10 días era
dado de alta como cadete en el Regimiento de Granaderos a Caballo, que su
Jefe y fundador. el coronel San Martín, estaba formando. Respondía a las prue-
Palabras del Director del Museo Histórico Naclonol. Dr. Juan José Cresto. en el
homenaje rendido por el Ejército Argentino ante lo tumbo en el Cementerio de
la Recoleto. el 17 de octubre de 1997.
96
basa que fue sometido, después de su petitorio de unos das antes: ªDon Juan
Galo de La Valle, hijo legítimo de Don Manuel José de Lavale y de doña Merce-
des González. según lo acredta la adjunta fe de bautismo, hace presente a v.s.
con todo respeto que. uniendo sus deseos a los de su padre, aspira a seguir la
carrera mllltar en el escuadrón de Granaderos de Cabdleria... •.
Se Inicia así la vida mllltar de uno de los héroes de mayor relevancia en
América española. que supo unir a su temeridad constante, un noble espíritu
de grandeza y hasta de romanticismo. Fue un héroe del tipo que las sagas me-
dievales elevaron en sus cuentos como paradigma del caballero andante,
pero en este cáso. al permanente servicio de su patria y de la libertad. No
supo de desfallecimientos. Fue un verdadero conductor de hombres, querido
por sus subordinados, admirado por sus amigos, reverenciado por los pueblos.
No conoció ni la Indignidad ni la bajeza. Su ascendiente fue tal que sus hom-
bres lo siguieron en los días de triunfo y en los de derrota y aun en el mayor
Infortunio.
En el Museo Histórico Nacional en cuyo nombre hablo en esta circunstan-
cia tan solemne y tan cara a nuestros sentimientos, se extiende en el salón de
actos ·Adolfo P. Carranza·, un enorme cuadro de Nlcanor Blanes de unos cin-
co metros de ancho por cuatro de altura. En él puede verse a un grupo de
hombres vestidos de paisanos que, a través de la árida y majestuosa quebra-
da de Humahuaca. conducen el cadáver de un hombre a lomo de caballo.
Es el cuerpo Inerte del valiente general Lavalle a quien, con fidelidad conmo-
vedora, aún siguen después de muerto, como al Cid Campeador, para prote-
ger sus restos mortales. ¡Magnífico ejemplo de fldelldadl ¿Qué prendas perso-
nales tenía aquel hombre que aun muerto convocaba a sus fieles amigos -no
ya soldados, no ya un ejército- que lo seguía hasta más allá de las fronteras de
la Patria?
No tengo respuesta para esta pregunta. Pero sí sé que la grandeza de
alma se labra diariamente con la conducta cotldano. Sí sé que Lovalle fue el
primero en entrar en combate, que Jamás vaclló en Jugarse por la defensa de
un camarada en peligro, que nunca supo de prlvlleglos personales con la tropa,
que fue un condJctor de hombres porque fue un conductor de corazones.
Quiero expresar el último concepto sobre su grandeza moral. Paro mí. el
momento culminante de su vida no es el triunfo de Rlobamba ni las medallas
obtenidos una a una por su gloriosa espado. Lo es cuando. sabiéndose derro-
tado, rechaza la propuesta francesa de hacerlo mariscal de Francia y darle la
97
pensión para una vejez tranquila. A'i le contesta al Capitán Halley. represen-
tante del barón de Mackau: ·¿Cómo puedo entregar atados de ples y manos
a las venganzas de Rosas a todos los que me han seguidor. Yvencido el pla-
zo de respuesta. agradece. pero dice: "MI honor me prohibe aceptar las pro-
puestas que usted me ha dirigido .. : . Sabía él que Iba a la muerte pero no se
permitía abandonar a los suyos. ¡Cómo no lo Iban a seguir más allá de la
muerte!
¡Ilustre granadero de la gloria! ¡Noble soldado sanmartiniano! ¡Grande y
valiente general Lavalle! En nombre del Museo Histórico Nacional. cuyas reli-
quias conservamos con unción. cuya espada está entre nosotros. ¡que tu nom-
bre viva más allá de nuestras vidas. porque eres la representación verdadera
de la gesta nacional!
•••
6 de noviembre de 1997
- FEDERAL ARGENTINA
- DE LA POLICIA
DIA
El día 6 de noviembre se celebró el Día de la Policía Federal Argentina en
dependencias del Museo Histórico Nacional especialmente cedidas por su di-
rector. el Dr. Juan José Cresto.
Asistieron al acto el señor jefe de la comisaría 14º. comisario Emilio B.
Cancelllere: el segundo jefe, subcomlsario Mario E. Couronne; el jefe de la
Agrupación Policía Federal Argentina. Inspector Fernando Flores Martínez; Invi-
tados especiales, escolares. representantes de la prensa y público en general.
Dio especial marco a la ceremonia la presencia de una delegación del Regi-
miento de Granaderos a Caballo ·General San Martín".
Durante el acto fueron entregados premios especiales. que bendijo el
cura párroco de San Telmo. R.P. José Ignacio Ferro. a personal policial que se
destacó en el cumplimiento del deber.
El Dr. Cresto condujo a los visitantes a recorrer las Instalaciones y, tras ha-
cer uso de la palabra en el salón de actos. hizo entrega del premio "Museo
Histórico Nacional" al subinspector Pablo Carcaccl. por la cantidad de delitos
esclarecldos durante 1997.
•••
98
1Ode noviembre de 1997
HOMENAJE A REMEDIOS DE ESCALADA DE SAN MARTIN
EN EL BICENTENARIO DE SU NATALICIO
El día 10 de noviembre se reallzó. en el salón de actos ªAdolfo P.
Carranza" de la Institución, un acto conmemorativo del bicentenario del nata-
licio de Remedos de Escalada de San Martín.
Tras reallzar una breve visita guiada por las lnstalaclones del Museo. hizo
uso de la palabra la señora presidente de la ·Asociación de Damas Patricias
Remedios de Escalada de San Martín". Bety Andrés de Levingston.
A continuación. la profesora y académica Oiga Fernóndez Latour de Bo-
tas disertó sobre ªEl tiempo de Remedios" y el director del Museo. Dr. Juan José
Cresto se refirió a la mujer en la historia argentina en la ªEvocación" que sigue:
En las labores creativas de la paz fecunda del último siglo. la mujer se fue
incorporando a la sociedad activa de manera masiva y creciente. ocupando
hoy un lugar lgualltarlo en la sociedad argentina. en los campos de la produc-
ción. la comerclallzaclón, los servicios y las profesiones liberales. Inclusive tiene
ya destacada labor en la magistratura. la poíitlca y los cargos ejecutivos de
gestión y dirección. Nada le está vedado desde el punto de vista legal y, en
ese sentido. su lugar ha ido creciendo en capacidad de desarrollo. en espe-
cial en el arte y las letras. No es. sin embargo, el propósito de esta evocación
mencionar y destacar la Importancia que la mujer tiene en la sociedad actual
porque seria materlalmente lmposlble hacer una reseña y nombrar figuras va-
liosas cuya presencia hoy es Indispensable y permite reflejar a una nación mo-
derna y a una concepción humanista del rol femenino.
El objeto de esta evocación es diferente porque tiene un propósito de re-
cuerdo histórico. teñido de admiración. recogimiento y gratitud.
La mujer argentina tiene un papel relevante en nuestra historia patria. No
solamente acompañó a su marido. a su padre y a sus hijos en campañas mlll-
tares sino que fue la reserva moral de los soldados. la seguridad del hogar leja-
no. cuidado con ftdelldad y dignidad.
La convulslonada historia argentina del siglo XIX la vio en las luchas por la
Independencia. en las guerras clvlles y en la organización naclonal al lado de
99
los bravos, sin concesiones. Acompañó a los soldados en las largas y penosas
marchas de los ejércitos, pero también en los perddos fortines de la lucha
contra los malones Indígenas, expuestas al saqueo y a la prtslón en los aduares
de las tolderías. Nada la arredró. Joven o anciana se Interpuso en favor de IC>S
suyos y dejó la vida en todos los caminos de la Patrta. No siempre comprendó
las motivaciones de la lucha y de la guerra, pero sí supo del amor del compa-
ñero a quien seguía y no preguntaba otra cosa ni quería otra respuesta que el
bienestar de su ser quertdo que seguía hasta la muerte. No sé si la historia uni-
versa! tiene mejores ejemplos de abnegación y sacrificio que la chinlta modes-
ta que acompañaba al soldado en marchas extenuantes a caballo para dor-
mir en el sucio campamento y poder cebar un mate al soldado que a su lado
seguía a un Jefe mllltar o a un caudlllo.
Fresco está en el recuerdo la mujer de Lamadrid que tiene un parto en
una carreta, camino del exlllo; la de Brown, que besa a la niña obnubilada y
muerta en las aguas del Plata, la de Padilla, la mítica Juana Azurduy que pier-
de cuatro hijos en campaña y abraza al último ya frío con amor para deposi-
tario en la Iglesia de Charcas; la madre de los Paz -el después general José
María Paz- que entrega sus hijos al general Belgrano en marcha hacia el norte
con el Ejército, recomendándole que no lo maten por la espalda; las centena-
res que, en época de tanta miseria, hacen entrega de sus joyas más precia-
das, que es todo el patrtmonlo que poseían; la chica anónima salteña que en
la noche oscura conduce un pelotón de españoles en las montañas de la
Puna en su carácter de baqueana y, conscientemente se arroja al precipicio
sabiendo que todos caerían detrás suyo, anlqullándolos con su sacrificio. Es
nuestra historia una conmovedora muestra de Incontables esfuerzos y sacrifi-
cios que lindan con el martlrologlo de mujeres conocidas o desconocidas, que
no han trepado al recuerdo ciudadano, que no ostentan con su nombre la
denominación de calles, plazas y ciudades pero que con el sacrificio nos han
dado un nombre en el mundo y la conformación de una patria.
Me asalta la Idea de que Ana Díaz es, de nuestras mujeres, la precursora.
Viuda y con cuatro hijos, acompaña a Garay y como cabeza de famllla obtie-
ne un solar en la hoy esquina noroeste de Flortda y Corrientes. Tierra propia. Es-
critura legltlmada por la autoridad. Derecho a poseer la tierra. Derecho a ha-
cer su vida, en la libertad de una tierra plana, agreste, sin límltes. Ella debió en-
frentar a las allmañas y a las fieras, al Indio agresor que merodeaba y a los cul-
tivos que salían de su mano encallecida. Ana Díaz: primera mujer de una estlr-
100
pe que dio tantos nombres a esta tierra y que ganó un lugar en la historia por
ser valiente pionera.
De la misma estirpe, dos siglos después Maria Josefa Balbastro, la herede-
ra de nea fortuna que siguió a su mando el capitán de navío Diego de Alvear
y Ponce de León, noble hombre de ciencia, a las selvas misioneras para trazar
la línea de fronteras del Tratado de San_lldefonso en~e Espar'\a y Portugal. AHí
en la soledad de la selva, en la reducclon de Santo Angel Custodio permane-
ce 18 años, nacen sus ocho hijos. levanta una empresa de productos absolu-
tamente sola porque su mando debía recorrer por meses largas distancias sel-
váticas para establecer hitos y dibujar límltes. Sola con su destino, caerá al fon-
do del mar con todos sus bienes y siete hijos el 5 de octubre de 1804, cerca de
Cádiz, cuando los Ingleses echan a pique su barco mercante.
Doña Casllda lgarzábal de Rodríguez Peña, cuyo retrato hemos recibido
en donación hace poco tiempo en este Museo, fue quien Impulsó a Saavedra
a la convocatoria del virrey para el Cabildo Abierto del 22 de mayo: ·coronel,
no hay que vacilar; la patria lo necesita para que la salve; ya ve usted lo que
quiere el pueblo y usted no puede volvernos la espalda, ni dejar perdidos a
nuestros maridos, a nuestros hermanos y a nuestros hijos·. ·venga usted a mi
quinta. donde se reunirá con Belgrano, Vleytes, Castelll, lrlgoyen, Chlclana y
otros'. Así, pues, por la resolución de una mujer se reunió el decisivo Cabildo
del 22 de mayo, mucho más Importante que el del 25, que fue la simple culml-
naclón del otro.
La bandera de Los Andes que tremoló en las altas cumbres andinas fue
confeccionada en Mendoza por Remedios de Escalada de San Martín,
Laureana Ferrarl, Margarita Corvalán, Mercedes ftJvarez de Segura y Dolores
Prats de Huisl. La bandera fue Jurada el 5 de enero de 1817. De las damas
patricias, Mercedes ftJvarez fue la única que la volvló a ver después de setenta
años en la casa de gobierno de Mendoza ... La carta de Laureana Ferrarl, des-
pués esposa del coronel de la Independencia Manuel de OlazábaL de 1856,
da cuenta del esfuerzo hecho para lograr tener a tiempo la bandera y el des-
prendimiento de sus Joyas y bienes -muy escasos por cierto, para adornar la
bandera-. Se guardan en este santuario de la Patria, que es el Museo Histórico
Nacional, los abanicos de aquellas nlr'\as, apenas adolescentes o simplemente
Jóvenes, despojados de sus Joyas y pedreria, purlftcados en el amor a la Patria.
Laureana Ferrarl, nacida el 4 de jullo de 1803 tenía en 1817 apenas 14
años; Remedios, esposa del gobernador, nacida el 20 de noviembre de 1797,
101
solamente 20 años; Dolores Prats de Hulsl. viuda de éste en la batalla de
Rancagua, tenía 32 años. Esta dama chilena, aún muy Joven, era la mayor del
grupo y a su Ingenio se debió poder s?ftear la falta de elementos. ¡Le faltaban
hasta los hllos de colores! Mercedes Alvarez había nacido el 8 de septiembre
de 1800 y tenía, entonces, 17 años. No Importó nada. En sólo once cfas la ban-
dera estaba llsta. Monumento de amor y de patriotismo, a su ple cantaron la
canción patria o murmuraron el último suspiro, en la tierra pedregosa de·los
Andes, en fértlles llanuras del Pacífico o en las sierras peruanas centenares, mi-
nares de hombres animados del soplo de eternidad, siguiendo un Ideal que
honra aún en la muerte.
Sea, pues, este sencillo ejemplo -entre miles- un Imperfecto homenaje
que este Museo Histórico, reservorlo de toda la memoria de los argentinos, le
tributa a la Joven Remedios -la niña Remedltos- que fuera ·esposa y amiga del
general San Martín#, como éste quiso que dijera su lápida, en el bicentenario
de su nacimlento. Ysea también un vehículo paradigmático para difundir el
perfil de la mujer argentina en nuestra historia .
•••
ENTREGA DE DIPLOMAS Y MEDALLAS
A LOS AUTORES DEL LIBRO DEL CENTENARIO" •
11
102
de la Historia. pero también lo hicieron pensadores y escritores Independientes
que pudieron dejar plasmados sus pensamientos y reflexiones.
Fue un enorme esfuerzo Intelectual y también económico y -personal-
mente- nunca agradeceré lo suficiente a las autortdades que administran la
cultura nacional por su visión clara de lo que ello slgnlflcaba para el país.
No era para menos. Había que Informar que el Museo despertaba de un
largo sueño. que estaba vivo y que tenía muchas cosas que mostrar y que de-
cir con el lenguaje mudo de los objetos cargados de años y a veces de siglos
que nos reviven el mundo de ayer. Suponer que un museo es un escaparate
estético es no comprender el alto valor didáctico que tiene. pero en este caso
especial, el museo es un lugar único que alberga los recuerdos y a veces los
documentos o los libros que pertenecieron a quienes en el trayecto de sus vi-
das nos dieron una patrta y una Identidad en el mundo. No se trata. por lo tan-
to. de un museo más. sino de ·e1 museo" de la historia. el reservorto donde
conviven bajo un mismo techo los manes de aquellos que tal vez estuvieron
enfrentados en el curso de sus vidas pero ahora contemplan el paso del tiem-
po con la serenidad de la hlstorta.
Ésta es la misión de nuestro museo. ¿Qué lenguaje usará la espada de
Beresford, la del virrey Clsneros. la de Santiago de Unlers, o la de Belgrano, en-
frentadas desde una vitrina y expuestas a la mirada Inquisitiva de nuevas gene-
raciones? Dialogan un discurso Infinito las armas y los utensilios dlartos de tiem-
pos dferentes en un lenguaje Intemporal que el historiador debe Interpretar.
Esta comprensión del mágico mundo del museo ha sido captada en
el libro por la multlfacétlca interpretación de los grandes que aceptaron
escribir sobre el Museo. sus riquezas. su desarrollo y sus misterios. SI la
chatura ambiente nos Impide ver y, sobre todo, admirar los enigmas del
pasado, no tendremos una cabal dimensión de la historia. constituida con
todos los elementos de la vida, esfuerzos matertales y concretos de supervi-
vencia y supremacía y hondas aspiraciones que enaltecen al ser humano
y lo distinguen de la escala zoológlca.
El libro contó con ocho grandes capítulos: en el prtmero -a mi cargo- na-
rramos la hlstorta misma del Museo y la vida de sus grandes directores muertos;
el segundo, el escenarto de Buenos Aires. la ciudad. San Telmo, el barrto chico.
Yel Museo mismo como lugar físico; en el tercero. denominado ·un slglo de
historia". hemos señalado los grandes hitos de la centuria que celebramos; en
el siguiente. ·instituciones y entidades centenarias", hemos tomado algunas
de las grandes entidades culturales y sociales que forman parte de nuestro
103
país. El capítulo sexto trató las biografías emblemáticas que forman parte del
acervo del Museo; en el sépttmo, propiamente museístlco, describimos algunos
repositorios que se guardan en sus depósitos o que, dentro de la escasa super-
ficie de exhibición, se muestran actualmente. Flnalmente, en el último, ·Re-
flexiones y reminiscencias·, hemos agrupado lúcldos pensamientos sobre el
pasado del hombre, la función de los museos o las experiencias de algunos de
los autores.
El llbro es un esfuerzo, como hemos dcho, que honra a quienes lo han rea-
lizado. No sólo quienes escribieron. Aquí hubo un intenso trabajo de selección
de personalidades. de búsqueda. de encuentros. de toreos de coordinación y,
como si fuera poco. de transcripción de notas, corrección y compaginación -un
trabajo ciclópeo hecho en pleno verano-. Las beneméritas personas que Intervi-
nieron están aquí también recibiendo el reconocimiento.
Agreguemos el rico material fotográfico de Graclela García Romero. A su
eficacia. pero también a su ductilidad y a su modestia se le debe gran parte
del mérito de esta joya bibllográflca.
Pero al llegar aquí debo mencionar a la empresa editora y, muy espe-
cialmente. a Manrlque Zago. Manrique es el más cabal ejemplo de un
renacentista a quien el desttno ubicó en el siglo XX. Fiiósofo, pintor. escritor, mú-
sico. poeta de fino sentido artístico. hombre de negocios como lo era
Leonardo, fotógrafo, todo junto en una misma persona.
Nada suyo pasa Inadvertido. Todo lo mira y todo lo controla y sin ese es-
píritu de aventura. de amor a lo perfecto , de realización, -me acompañó con
su equipo día tras día-, el libro no hubiera podido salir en el tiempo récord en
que se lizo.
Hoy miramos el lejano horizonte pasado y damos la recompensa. Yquie-
ro aún señalar o una persona que me acompaña en el estrado, la doctora
Beatriz Gutlérrez Walker. Sencilla, lúclda, constante. pertinaz. eficiente. atenta
a todos los detalles, bulle detrás una tremenda voluntad de servir. de ser útil.
de trabajar por nuestra sociedad, con los medios, escasos o abundantes. que
la misma sociedad pone en sus manos para administrarlos. No me sentina satts-
fecho si no le rindiera este sencillo homenaje en esta circunstancia.
El llbro está en el mundo. Es autónomo y como tal ttene que hacer su pro-
pio vida aventurera. Que tenga buen desttno es nuestro deseo de todos los
pactes y madres que acá tiene. El resto lo dirán los ttempos .
•••
104
#
16 de clclembre de 1997
IMPOSICION DE UNA PLACA DE HOMENAJE
#
Una vez más este hlstórtco museo se viste de fiesta. porque a las numero-
sas condecoraciones que ostentan las paredes centenartas se agrega ahora
la bella placa Impuesta por el representante de nuestra hermana Chile en ho-
menaje al general San Martín.
Nada tan justo y nada tan hermoso. Durante mucho tiempo he visto es-
tas placas conmemorativas y siempre pensé que faltaba una de la tierra del
Libertador O'Higgins. el amigo dilecto de San Martín. compañero de armas y,
ambos. confidentes personales de sus respectivas vidas.
Faltaba, pero está ahora aquí. Podemos verta. tocarla. sentirla. Pero so-
bre todo podremos en el Muro apreciar lo que ella significa en el hondo gesto
del representante del gran país cuya ·cordillera nos une·. como hemos dicho
en un libro de confraternidad recientemente publlcado.
Hoy el Museo Hlstórtco Nacional se viste de gala como en sus mejores
fiestas para recibir al representante_ de Chile. el embajador Rodríguez
Guarachl. para Incorporar esta placa conmemorativa y de homenaje que
perdurará sin duda más allá de nuestras vidas. Unida y cementada en las pa-
redes centenartas quedará por los tiempos.
Fue San Martín un amigo permanente de Chile y fue Chile una nación
amiga de San Martín con continuidad aun cuando el Libertador se hallaba al
otro lado del mundo en su exlllo voluntarto, alejado de todos los vaivenes polí-
ticos. y cuando su propia tierra de nacimiento parecía haberlo olvidado. Ya al
flnal de sus días el prtmer reconocimiento público de su vida y su obra hecho
por exlllados argentinos en la hermosa tierra trasandina y acompañado de In-
mediato por Ilustrados ciudadanos. La obra de García del Río escrtta en Lon-
dres en 1824 y publlcada después por Alberdl en 1844, la de Sarmiento recor-
105
dando la batalla de Chacabuco en 1841 y la de ~lvador Sanfuentes en San-
tiago. comenzaron a crear un sentimiento de admiración por el Libertador de
medio continente. Flnalmente. hay que señalar que la estatua que se erige en
Buenos Aires. en la Plaza San Martfn. antiguo Campo de Marte y sede del glo-
rioso regimiento de Granaderos a Caballo. es una réplica de la que el escultor
oaumas hiciera primero en Santiago. con la sola excepción de ·1a espada re-
emplazada por la mano y el dedo índce señalando el horizonte. B propio ar-
tista tundió una réplica. Tal es. pues. el homenaje que Chlle le tributó por siem-
pre a San Martín en correspondencia con el entrañable afecto que éste sintió
por la patria chilena.
No es de extrañar que así ocurriera. San Martín. como O'Hlgglns. como
Bolívar. como Miranda. Jamás Imaginaron una América parcelada. La decla-
ración de Independencia del 9 de Jullo de 1816. hecha en gran medida a Ins-
tancias de San Martín y sostenida por su ejército desde Mendoza. sancionó la
"Independencia de Sudamérica#. porque no suponían una y otra nación.
Sean. pues. estas palabras. mi imperfecto homenaje a este acto. tan sim-
ple pero de tanta trascendencia.
Muchas gracias.
•••
#
• Palabras pronunciadas por el Dr. Juan José Cresto ante el sepulcro de los pa-
dres de San Martfn en la Recoleta.el 25 de febrero de 1998
106
los sagrados restos de los progenitores del Libertador y lo hacemos consciente-
mente como forma dellberada de homenaje porque sabemos que ésta es la
primera etapa para arrancar de esta tierra los sagrados despojos del Padre de
la Patria en procesos posteriores.
Y lo sabemos porque así lo han declarado las autoridades locales de
Yapeyú, de la provincia de Corrientes y hasta de Misiones, para transformar el
santuario sagrado en una visita turística que devengue réditos económicos
aunque erosione para siempre el delicado tejido espiritual de la Nación.
Nos oponemos primeramente al traslado de los restos de los padres del
Libertador y aún con mucha mayor firmeza para con los de su hijo, que perte-
nece a todos los argentinos sin distinción de provincias y es, por encima de
todo y de todos. la prenda de unión que asegura la cohesión moral de la
argentinidad. Jamás un negocio turístico o de cualquier naturaleza podrá em-
pañar la imagen de un país y eso es lo que se logrará. aunque los autores de
corta vista no lo comprendan hoy.
Hoy estamos aquí frente a una tumba vacía que albergó hasta hace po-
cos días los sagrados restos de los progenitores del Libertador. Es ésta una
reafirmaclón de fidelldad y de homenaje. Ante su ausencia recordamos aque-
llo que se ha Ido y que queremos que retorne para que el homenaje de los
argentinos de todos los rincones del país se lleve a cabo en este panteón na-
cional que es el Cementerio de la Recoleta.
Nada material nos mueve. Nada prosaico, nada lndgno. Un alto y noble
sentimiento de lealtad para con nuestra Patria, nuestras leyes, nuestras Institu-
ciones y, sobre todo, como homenaje a aquellos que un día todo lo dieron y
nada pidieron.
Por otra parte, nada más justo que el venerable funcionario colonial don
Juan de San Martín resida en esta ciudad donde pasó nueve años de su vida
contra apenas cinco en el departamento de Yapeyú.
Y desde ya, seamos todos los argentinos solldarlos con aquel pequeño
pueblo para darte fuentes de trabajo y de progreso, para bienestar de sus ve-
cinos. pero sin necesidad de alterar la trama esplrltual del prócer de la Patria;
¡Oh, tumba vacía que guardas solamente recuerdos, abre tu desierto es-
pacio para que quepa el recuerdo querido de tus hijos!
¡Oh, tumba vacía que albergaste una conciencia argentina, sigue con-
servando en la ausencia el mismo sacrosanto sentimiento de aquellos que nos
dieron Patria!
107
Que desde la Quiaca hasta Ushuala. una columna de treinta y cinco ml-
llones de argentinos te salude siempre. aun en tu ausencia. porque estáis en
nuestros corazones. que no saben de traslados ni de urnas. ¡Que así sea!
•••
18 de marzo de 1998
DONACIÓN DE UN MANUSCRITO ORIGINAL
,
DEL MARTIN FIERRO"
11
•••
, de 1998
Abril - Mayo
EL MUSEO HISTORICO NACIONAL
EN LA FERIA DEL LIBRO •
•
El Museo Histórico Naclonal participó este año en la XXIV2 Feria Interna-
cional "El Libro del Autor al Lector-. reallzada entre el 16 de abril y el 4 de
mayo en el Predio Munlcipal de Exposiciones. En una vitrina del Pabellón
lnstltuclonal fueron exhibidos clversos objetos de sus colecclones.
108
DONACIONES RECIBIDAS
NOVIEMBRE 1996
"Retrato de Catalina Rodríguez Pei\a de caz6n". Óleo sobre tela. Autor anónimo.
(Antigüedad: aproximada 140 al'los). Donante: Srta. Julia Elena Herrera.
"Retrato de Joaquín caz6n". Óleo sobre tela. Autor anónimo. (Antigüedad: aproxi-
mada 140 al'los). Donante: Srta. Julia Elena Herrera.
"Retrato de Nicolás Rodríguez Pena•. Litografía. Autor: N. Desmadryl. (Antigüedad
aproximada 140 al'los). Donante: Srta. Julia Elena Herrera.
"Retrato de Casllda lgarzábal de Rodríguez Pei\a". Fotografía coloreada. Autor:
Witcomb. Tomada del original (Antigüedad aproximada 140 al'los).
Donante:Srta. Julia Elena Herrera.
DtCIEMBRE DE 7996
"Bernardlno Rlvadavla". Busto de bronce. Última obra del escultor Luis Perlottl. Do-
nante: Dol'la Blanca Blanchl Vda. de Perlottl.
MAYO DE 1997
"Retrato del General Giuseppe Garibaldi". Óleo sobre telá. Autor anónimo. Antigüe-
dad aproximada 120 al'los. Donante: Prof. Arnaldo José Cuniettl Ferrando.
Manuscrito. Anotación realizada por Doña Dolores Cuenca de Moreno en enero de
1811. Donante: Dr. Eduardo O. DürnhOfer.
Lapicero con estuche. Perteneció al Gral. Juno Argentino Roca. Con documento
autentlcatorlo y boleta comercial de la época que certifica la adquisición del
estuche. Donante: Cnel. Orlando Mario Punzl.
Carta. De Nicolás Avellaneda. fechada en París el 3 de octubre de 1885. Donante:
Prof. Carlos A. Telesca Ferrando.
Certificado. Correspondiente a una condecoración por la Campal'la del Paraguay,
fechado el 8 de agosto de 1894, otorgada al Ayudante Mayor Faustlno Jorge.
Donante: Prof. Carlos A. Telesca Ferrando.
Juuo DE 1997
Bandera. Tomada por los franceses en la batalla de La Vuelta de Obligado. el 20 de
noviembre de 1845. Entregada en comodato por 10 al'los por el gobierno de
Francia en oportunidad de la visita a nuestro pais por el Presidente de dicha
Nación. Sr. Jacques Chirac.
C6moda. Estilo Imperio, de cuatro cajones, marquetería, baldaquinos labrados Y re-
pisa separada. Antigüedad: aprox. 120 al'los. Donante: Susana Esther Pina Mom.
Libro. "Manual Compendio del Reglo Patronato Indiano·. por Antonio de
. Ribadeneyra. Madrid, 1752. Donante: Dr. Juan José Cresto.
Medalla. De bronce. "Homenaje al Ubertador por el Museo Sanmartiniano". Pieza
muy rara. Medidas: 3 x 5 cm. Donante: Dr. Juan José Cresto.
Parte de la batalla de Tuyulf. Documento original. Donante: Dr. Mario Velasco, Presi-
dente de la Asociación de Descendientes de Guerreros del Paraguay.
Ubros, medallas, obJetos y documentos. Monedas y medallas: 1) Creación de la Admi-
nistración del Puerto de la Plata. 1906; 2) Inauguración del puerto de la Plata.
109
1890. 3) Repatriación de los restos de Las Heras. 1906; 4) Homenaje a la repatria-
ción de los restos de Las Heras. 1906; 5) Primer centenario del natalicio de
Rlvadavla. 1880; 6) Inauguración de las obras del Puerto de Santa Fe. 1904; 7)
Inauguración del Monumento a San Martín. Santa Fe. 1902; 8) Inauguración del
Monumento a San Martín. Santa Fe. 1902; 9) Colocaclón de la piedra funda-
mental del monumento a la Revolución de Mayo. 1910; 10) Revista Militar de
Campo de Mayo. 1903; 11) Recepción de Mitre; 12) San Martín. 1899. 13) Colo-
cación de la piedra fundamental de la Escuela Normal de Corrientes; 1904; 14)
Colocación de la piedra fundamental del colegio de la Inmaculada Concep-
ción, 1908; 15) República Argentina a Chile. 1903; 16) Creación del Banco Hipo-
tecarlo. 1911; 17) Inauguración del monumento a Rlvadavla, 1909; 18) Inaugu-
ración de la Avenida de Mayo. 1894; 19) Inauguración del Puerto de Paranó;
20) Colocación de la piedra fundamental de la Escuela Militar. 1904; 21) Comi-
sión reformadora de la Constitución de la Pela. de Santa Fe; 22) Colocación de
lo piedra fundamental del Cuartel de Infantería. 1904; 23) Homenaje a San Mar-
tín del Municipio de Buenos Aires; 24) Creación del Asilo de Huérfanos Militares.
1903; 25) Inauguración de cincuenta y cuatro edificios para escuelas. 1886; 26)
Colocación de la piedra fundamental del Campo de los Granaderos. 1904; 27)
Inauguración de la Casa de Gobierno. 1908; 28) Inauguración del monumento
a Belgrano. 1903; 29) Inauguración del monumento a San Martín. Santa Fe.
1902; 30) Inauguración del monumento a San Martín. Mendoza. 1904; 31) Colo-
cación de la piedra fundamental del Cuartel de Caballería. 1904; 32) Centro
del Cnel.. Niceto Vega. 1899; 33) Inauguración del Puerto de Rosario. 1902; 34)
Homenaje al Jockey a C. Pellegrinl. 1906; 35) Ferrocarril a Bolivia. 1908; 36) A
Santo Domingo. del Pueblo de Acebol. 1904; 37) Una medalla en Italiano. 1882;
38) Homenaje a Sarmiento, 1900; 39) Octogésimo Aniversario del nacimiento
de Mitre. 1901; 40) Inauguración de lo estatua de Laprida en San Juan. 1904;
41) Inauguración del monumento a Urqulzo. 1901; 42) Colocación de la piedra
fundamental del edificio de Correos. 1907; 43) Wencesloo Paunero. 1915; 44)
Colocación de lo piedra fundamental del Cuartel de Inválidos. 1904; 45) Argen-
tino o Chile. 1905; 46) Creación del Archivo de Huérfanos Militares. 1903; 47)
Colocación de la piedra fundamental del Cuerpo de Granaderos. 1904; 48)
Leandro Alem. 1907; 49) Revista Militar de Campo de Mayo. 1908; 50) Octogési-
mo aniversario del nacimiento de Mitre, 1901; 51) Colocación de la piedra fun-
damental del Palacio de Justicio. 1906; 52) Aniversario del fallecimiento de
Francisco Bosch. 1901; 53) Inauguración del monumento a San Martín. Santa Fe.
1913; 54) Primer Ferrocarril a Parque Floresta. 1906/1907; 55) Hospital de Caridad
de Junín 1901; 56) Homenaje a Belgrano, 1903; 57) Romerías espar'lolas de San
Antonio de Areco. 1907; 58) Colegio Militar. 1904; 59) Homenaje a Buenos Aires
a los delegados de Chile. 1903; f:IJ) Monumento o Laprlda; 61) Primer Centena-
rio de la Revolución de Mayo. 1910. Plaquetas: 1) Inauguración del edificio del
Banco Municipal de Préstamos y Caja de Ahorro, 1909; 2) Fallecimiento de
Mitre. 1906; 3) Fallecimiento de Mitre. 1906; 4) Creación del Hospital Penitencia-
rio. 1908; 5) Inauguración del Teatro Colón 1908; 6) San Martín. Belgrano.
Pueyrredón, Moreno. Rlvadavla. Mitre. 1910. Correspondencia: Dirigida a Loren-
zo Vlntter. entre 1900 y 1915. Charreteras, cortapapel y sellos. Pertenecieron al
110
Gral. Lorenzo Vlntter: Donantes: Dra. Graclela Hllda Saucedo y Dr. Carlos Alber-
to Saucedo.
Fotograria sobre papel, en blanco Y negro. Grupo de mllltares y clvlles en el Colegio
Miiitar. entre los que se destacan los generales Agustín Pedro Justo y José Félix
Urlburu. Medidas: 17 cm. por 8 cm .. Donante: Sr. Diego Rulz.
Fotograrfa sobre papel, en blanco Y negro Grupo de personas en el foyer del Teatro
Odeón enjullo de 1932. Se destacan el Presidente de la Nación. Gral. Agustín
Pedro Justo. el maestro Carlos López Buchardo. los escritores Enrique García ve-
lloso y Agustín Remón y el Dr. Enrique Telémaco Suslnl. Medidas: 38 cm. por 30
cm .. Donante: Sr. Diego Rulz
MARZO DE 1998
Manuscrito. De José Hemóndez. Fragmento Inicia! de "El Gaucho Martín Rerro·. Con-
serva ocho de los doce cantos del poema conocido con el nombre de "La /da'.
Donante: Dr. Pedro Slmonclnl, presidente de la Productora Santa Clara S.A.
ABRIL DE 1998
Bastón. De saúco. con empui'laduro de ónix focetado y virola labrada de bronce.
Donante: Sr. Presidente de la Noción. Dr. Carlos Saúl Menem.
Cal'lón. Sistema Krupp, 1899. Marca Schnelder. de Mbntai'la. calibre 75 mm. con tren
de marcha. Donante: Jefatura del Estado Mayor General del Ejército.
"Batalla de la Tablada". Óleo sobre tela. Autor: Fumagalll. Medidas: 145 x 174 cm.
Donante: Sra. Julla Grotta de Fumagalll.
"Retrato del Cnel. BHbao La Vieja". Óleo sobre tela. Medidas: 105 x 118 cm. Donan-
te: Sr. Juan Alberto Bilbao La Vieja.
"Estatua del General Don José de San Martín en la República Francesa" De bronce.
Autor: Mtro. Juan Carlos Ferroro. Donante: Mtro. Juan Carlos Ferroro.
"Retrato de Carmen Puch de Güemes". Óleo sobre tela. Medidas: 49 x 68 cm. Do-
nantes: Sras. A. R. Carranza Casares de Girado y Silvia Boyó Carranza de
Lagache.
"Retrato del Gral. José María Paz". Óleo sobre tela. Medidos: 51 x 60 cm. Donantes:
Donante: Sras. A. R. Carranza Casares de Girado y Silvia Boyó Carranza de
Lagoche.
"Retrato de Carmen Puch de Güemes". Óleo sobre telaMedidas: 49 x 68 cm. Donan-
tes: Donante: Sras. A. R. Carranza Casares de Girado y Siivia Boyó Carranza de
Lagoche.
"Retrato de Dolores Correas de Lavalle". Óleo sobre tela. Medidos: 69 x 77 cm. Do-
nante: Sras. A. R. Carranza Casares de Girado y Siivia Boyó Carranza de
Logoche.
"Retrato de Manuela Mónica Belgrano". Témpero. Medidas: 54 x 65 cm. Donante:
Sras. A. R. Carranza Casares de Girado y Silvia Boyó Carranza de Logoche.
"Retrato de Josefa Baleare e y San Martín de Gutlérrez Estrada". Reproducción sobre
daguerrotipo. Medidos: 50 x 64 cm. Donante: Sras. A. R. Carranza Casares de Gi-
rado y Siivia Boyó Carranza de Logoche.
Mesa. De cedro. lustrada. Donante: ICI.
Ararlas. Dos. con tulipas de alabastro. Donante: Dr. De Al.
Mueble pionera. Arlo 1880. Donante: Aguas Argentinos S. A.
111
ADQUISICIONES
El Museo Histórico Naclonal, tras largas décadas sin Incorporar objetos
para su patrtmonlo ha adqulrtdo, a través de la Secretaría de Cultura de la
Nación, tres piezas de un valor Inestimable, pertenecientes a la colección
DúrnhOfer, quien ha accedido a retlrarto del público remate de la flrma
Bullrtch, Gaona y Wernlcke y venderto por base mínima:
112
HACIENDO
HISTORIA
- -
INFORMACION DE LA SECRETARIA DE CULTURA DE LA NACIÓN
ACTIVIDADES AGOSTO - NOVIEMBRE 1997
Encuentro Teatral Personas con Discapacidad", denominado
"Doscientas ciudades cuentan su histo- "Integrándonos por la Cultura·. El mismo se
ria, mitos y leyendas" inscribe en el marco del decreto presiden-
cial Ng 1101/87 que expresa "es responsa-
El pasado 6 de setiembre se realizó, en bilidad del Estado atender a la plena inte-
forma simultánea en todo el país, el en- gración de las personas discapacitadas,
cuentro Teatral "Doscientas ciudades cuen- con iguales derechos y obligaciones que el
tan su historia, mitos y leyendas", proyecto resto de la población", por lo que la Secre-
impulsado por la Dirección Nacional de taría de Cultura de la Nación ha asumido el
Teatro con el objeto de "mostrar al teatro compromiso de asegurar el acceso a los
como una celebración comunitaria, no sola- bienes culturales de toda la comunidad, es-
mente en la Capital, sino en cada rincón de pecialmente a las personas con
nuestro país". discapacidades.
El acontecimiento -desarrollado en es- En la fec~a mencionada se representó
cuelas, clubes, teatros, etc., demandó más la obra teatral "La visita de la vieja dama·,
de tres meses de producción y consistió en a cargo de artistas nacionales de primera lí-
la presentación de espectáculos cuya direc- nea, a la que se incorporaron las modifica-
ciones correspondientes a este programa
ción, musicalización, coreografía y actua-
de integración consistentes, entre otras, en
ción estuvo a cargo de artistas residentes
la incorporación del sistema de subtitulado
en cada región, con elencos conformados
electrónico y la edición de programas en
en un 70% por nil'los y adolescentes. sistema Braille.
I"' Festival Nacional de Mimo Ciclo "Fantasmas de la Historia"
Organizado por la Dirección Nacional de En la sala Miguel Cané de la Secretaría
Teatro y la Asociación Argentina de Mimo, de Cultura se desarrolló, todos los días
se realizó el /" Festival Nacional de Mimo martes entre el 28 de octubre y el 18 de no-
en el teatro Margarita Xirgu, entre el 14 y el viembre pasados, este ciclo coordinado por
18 de octubre pasados. Se presentaron la escritora María Luisa Biolcati, consisten-
elencos y solistas representando a Buenos te en "la aproximación a la intimidad de im-
Aires y todo el país, desarrollándose asi- portantes personajes históricos a través del
mismo talleres, muestras y conferencias a diálogo", con la particularidad de que éstos
cargo de destacados especialistas. fueron representados por destacadas per-
sonalidades actuales. Asl, Domingo
"Integrándonos por la cultura" Faustino Sarmiento estuvo personificado
por Félix Luna, Victoria Ocampo por Jaime
En el Teatro Nacional Cervantes, el 23 Barylko, Franz Kafka por Beda Docampo
de octubre de 1997 fue lanzado el progra- Feijoó, y María Antonieta por Ester de
ma "Acción Cultural para la Integración de lzaguírre.
115
XIH' Fiesta Nacional de Teatro Víctor Winer por "Buena Presencia"; y ter·
cer premio($ 5000) para Angélica Claro por
Organizada por la Dirección Nacional su obra •Fuera de Tiempo.,.
del área, se realizó en la ciudad de
Catamarca del 3 al 17 de noviembre la "Con vos y con todos". Misa rock.
·x1111 Fiesta Nacional de Teatro", con la par-
ticipación de elencos representativos de la En el Jardín del Museo ·casa de
Capital Federal y del Interior, surgidos de Yrurtia", O'Higgins 2390, la Secretaría de
las respectivas fiestas provinciales. En for· Cultura presentó el pasado 15 de noviem·
ma simultánea se desarrollaron seminarios bre la misa rock ·con vos y con todos", pri·
sobre actuación, dirección e iluminación a mera obra del grupo musical "Aquilae", en
cargo de destacados profesionales y el la cual sus temas se insertan en los respec·
XXl9 Taller de la Escuela Internacional de tivos momentos de la liturgia.
Teatro de América Latina y el Caribe
(EITALC), destinado a actores y directores. Programa "El nlfto y la música".
116
Abierto al público de lunes a domingo de Guión para Cine y TV - Pesebrismo • Li-
14 a 19 horas. terario - Tango Danza - Expresión Re-
Exposición permanente: planta principal, flexiva - Danza Griega - Programa
patrimonio permanente: artes decorativas Master en Conservación Del Patrimonio .
(mobiliario, tapices, orfebrería, marfiles, Teatro y Actuación - Mercado de las Lu-
porcelanas, biombos) y pintura, escultura ces - Exposiciones - Teatro - Cine - Actos
e imaginarla de los siglos XVI al XIX. Vi- y conferencias - Visitas Guiadas .
sitas guiadas los jueves, 17 horas. Instituto Nacional de Antropologla y
Horario de las exposiciones: lunes a do- Pensamiento Latinoamericano
mingo de 14 a 19 horas. Tres de Febrero 1378 - Tel: 784-3371
Museo Nacional Del Grabado Muestra Permanente "Aborígenes argen-
Defensa 372 - Tel. 345-5300 tinos del pasado a la actualidad".
Horarios de visita: lunes a viernes de 14 Museo Nacional del Hombre
a 18 hs, domingos de 14 a 18 - Visitas Tres de Febrero 1378 Lunes a Viernes de
guiadas: Domingos 15 hs. 10 a 18 hs.
Museo Nacional del Traje Museo Histórico Nacional del Cabildo y
Chile 832 la Revoluclon de Mayo
Biblioteca especializada: atención de lu- Bolívar 65 - Tel: 334-1782
nes a viernes de 13 a 18 hs. Museo Roca
Teatro Nacional Cervantes Vicente López 2220 - Tel: 803-2798
Libertad 815 Museo Mitre
Tel: 815-0085 /8881/8817 San Martín 336 - Tel 394-7659/8240
Biblloteca Nacional Museo Histórico Sarmiento
Agüero 2502 - Tel: 807-0886 Cuba 2079 - Tel: 78-7555 I 788-5157
Orquesta Sinfónica Nacional Museo Ricardo Rolas
Temporada 1998 - 502aniversario Charcas 2837 - Tel: 824-4039
Director: Pedro Calderón.
Museo de Arte Oriental MUSEOS DEL INTERIOR
Av. del Libertador 1902, piso 12
Tel: 801-5988 Museo Histórico Nacional
"Casa Del virrey Llnters"
Museo Nacional de Bellas Artes
Alta Gracia (5186) Córdoba
Av. del Libertador 1473
Tel Fax 0547-21303
Tel: 803-0802 / 4691
Museo Jesultlco Nacional
de Jesús Maria
SALAS NACIONALES DE CULTURA
Pedro de Onafe sin º
Jesús Maria, Córdoba Tel. (0525) 20126
Palals de Glace
Museo Histórico Nacional
Posadas 1725 - Tel:805-4354 "Casa del Virrey Llnlers"
Manzana de las Luces Av. Del Tajamar y Solares s/nº- (5186)
Perú 222 - Tel: 342-4655 Alta Gracia - Córdoba Tel. (0547) 2130
Actividades: Cursos y Talleres - Cerámi- Museo Regional de Pintura José A. Terry
ca Y Dibujo - Arte Cinematográfico - Rivadavia 459 - (4264) Tilcara, Jujuy
117
-
RESUMENES
PRESENTACIÓN, tire countty.
por Juan José Cresto On May 24, 1889, Buenos Aires's Mayor, Francisco Seeber,
arranged the creation of the 'Federal District Historical
El Museo Histórico Nacional está ubicado en el Museum'. Aoo/fo P. Carranza was elected irs Wrst Director. In
Parque Lezama, donde Pedro de Mendoza estable- ordtr to organize the Museum, an Executive Board was
ció el real fundacional de la Patria. created, wilh Gtneral Balto/ami Mite and Gtneral Julio Argen-
El 24 de mayo de 1889, el intendente de Bue- tino Roca, bolh former presidllnts of Argentina, as its /eaáng W·
nos Aires Francisco Seeber dispuso la creación gures. Although they both belonged to, and were active
del 'Museo Histórico de la Capital" a pedido del jo- members of opposile po/íttal parties, they gave l.f' their perso-
ven doctor Adolfo Pedro Carranza, quien habla re· nal politica/ rivalries in arder to contribute to the foundaaon of
nunciado a su cargo diplomático por convicciones such a transcendental institution. As Carranza said, the
políticas y fue designado su primer director. El Historical Museum 'lfHpS witllin its wans ali our naliona/ glo-
intendente organizó una comisión integrada por los ries: and for tlVs reason its management should be maintained
gen.,rales Bartolomé Mitre y Julio Argentino Roca. beyond cirrumstantial polilical faclions, provided that national
Estos ex presidentes, en 1889, vísperas de la Re- values and memories belong to every Argenline citizen.
volución del Noventa, aunque militaban en partidos On October 1", 1897, the Museum moved to a new
políticos opuestos, dejaron de lado sus preferen- Mding, where it has been operating since then. In 1997 the
cias personales para coadyuvar en la fundación de Museum ~lebrated the 100" anniversary of irs placement in
una institución que, como dijo Carranza, ·guardara Lezama Square. The celebrations included an emotive act, with
bajo su techo todas las glorias nacionales" y por lo the participation of national and provincial authorities and a
tanto estuviese más allá de las facciones políticas ccmmemorative meda/ was specially coined.
y de la política del momento, en el entendimiento Arry museum should be apermanent center for exhibition
de que los valores y los acontecimientos naciona- and research. The /alter requisite, that of being an active ~nter
les nos pertenecen a todos. of research, enables a museum to cope with the expectations
El 1g de octubre de 1897 el Museo abrió sus that society puts on it Enthusiastic support to these centers of
puertas en la nueva casa y aquí estamos desde study and research permits a museum to develop sarisfactorily
entonces. El ano 1997, al cumplirse el centena- its educarional role towards society.
rio de nuestra vida en la casona, en un lucido
acto y con presencia de autoridades nacionales ICONOGRAFÍA DE LA REVOLUCIÓN DE MAYO,
y de la ciudad, se acuM una medalla conmemo- por Miguel Ruffo
rativa que es representativa del Museo.
Un museo debe ser un centro de exposición y La iconografía de la Revolución de Mayo com-
de investigación. De no cumplir con este segundo prende un conjunto de pinturas (óleos, aguadas,
requisito carece de la idoneidad y de las expectati- bosquejo a pluma) evocativas de las jornadas de
vas que una sociedad pone en sus bienes, cual- 1810. La mayoría de estas datan de la época del
quiera sea la temática de que se ocupe. La función Centenario. Su comitente fue Adolfo P. Carranza,
revalorada de estos centros de estudio es comple- primer director y fundador del Museo Histórico Na·
mentaria de su educación y fundamento de las so- cional, y sus pintores fueron Pedro Subercaseaux,
ciedades civilizadas que han concluido por ser el Guillermo Da Re y Egidio Querciola.
rostro de la cultura de un país con su representa- Teniendo como único antecedente iconográfico
ción más objetiva puesta al alcance de los pueblos del Cabildo Abierto del 22 de Mayo de 181 O, el bo-
y de sus visitantes de toda condición e indepen- ceto respectivo de Juan Manuel Blanes, cuando se
diente de su heterogénea preparación cultural pre- organizaron los festejos conmemorativos de la Re·
via. volución de Mayo, Adolfo P Carranza encargó un
conjunto de pinturas, con la finalidad de crear un
lntroduction, by Juan José Cresta conjunto de imágenes, que expresasen en la crea-
ción estética, los acontecimientos de 1810.
The National Historica/ Museum is placed in Lezama A Pedro Subercaseaux, destacado pintor chile·
Square, where Pedro de Mendoza established the ini~al site of no de lienzos históricos, le encargó un gran óleo
·119
sobre el Cabildo Abierto del 22 de Mayo de 181 Oy M~ipú fueron realiza~os en Francia, en 1819, por
un gran retrato de Mariano Moreno. el ¡oven Teodoro Gericault, a pedido de Ambrosio
A Guillermo Da Re, pintor veneciano radicado en Crámer. En 1827, Juan Bautista Douville asociado
la Argentina a fines del s~glo XIX, Adolfo PCarranza, con Louis Laisney, publicó retratos de personajes
le encomendó dos traba¡os, a saber: •La noche del de! momento. Pero es recién con la llegada de los
20 de Mayo en Casa de Rodríguez Pena.. y •La Jura suizos-franceses César Hipólito Sacie y su espo-
de la Junta Gub.ernativa el 25 de Mayo de 181 o... sa, Adrienne Macaire alrededor de 1827 en el
A Egidio Querci~la! en 1911 e~ ocasión del marco de la llamada 'inmigración ilustrada" fomen-
centenario del fallec1m1ento de Mariano Moreno, tada por el presidente Rivadavia, que este arte se
se le encomendó por el director del museo, un desarrolla plenamente. Establecen la llamada ·u-
óleo sobre los últimos momentos de quien se ha- ~ogr~ff~ del Estado" y o~t~enen la concesión para
bla desempenado como secretario de la Junta. 1mpnm1r la papelerla of1c1al. Publica, entre otras
Mariano Moreno en estado de agonfa es repre- obras, el 'Boletfn del Comercio", un monumental
sentado en el camarote del barco que lo trasla- 'Registro de marcas de ganado de la provincia de
daba a Inglaterra. Son los últimos instantes de Buenos Aires" y la revista 'Museo Americano" am-
su vida, recreados por Ouerciola, a partir del tra- bas sin parangón, por su contenido y alarde técni-
bajo de Manuel Moreno, sobre la vida de su her- co, para la época. Pero la obra más difundida del
mano. artista, aún 170 anos después, son los retratos, es-
tampas y cuadros costumbristas que tuvieron una
lconography of lfay Revolution, byl.tgue/ Ru,,o extraordinaria popularidad entre sus contemporá-
The May Revolurion iconography comprises a sel of neos. Uno de los cuadernos está especialmente
paintings (oil and gouache painlings, among orhers) dedicado a un'a extravagante moda: el uso de des-
represenring rhe evenrs occurred in may 1810. Many of lhem comunales peinetones de carey, prenda indispen-
can bll daled around 1910, as lhey were speciaHy prepared for sable del ajuar femenino de aquellos tiempos,
rhe so-called 'Cenlenary ce/ebra00ns·. In lhar momenr, Adolfo
P Carranza, founding figure and firsl drecror of lfle Nalional Cesar Hipolito Bacle'• "Ornamental Combs", by Diego Ruiz
Hisrorical Museum, asked severa/ imporlant painlers such as
Pedro Subllrcaseaux, Guillermo Da Re and Egidio Querciola, ro Lilhography deve/oped early in Argentina. Porrraits of
re-creare lhe ·evenrs of May'. They were mainly based upan lhe heroes such as San Marrfn and Be/grano, as well as rep
original sketch of Juan Manuel Blanes, who had porlrayed lhe resenlalions of Chacabuco and Maipu bartl6s, were made in
sessions of lhe crucial Open Town Council Meeting ("Cabildo France in 1819 by the young arrist Teodoro Gericaulr,
Abierto") of may 22, 1810. byrecommendaffon ofAmlxosio Cram111. In 1827, Juan Baudsra
Pedro Subercaseaux, renowned chilean painler of hislorical Douvi/e, togedl111 wi1h L.ouis Laisney, published some porrraits
canvases, was lhe aurhor of a huge oi/ painling on lhe Open of personalities of lfle moment. But it is only around 1827 lflat
Town Council Mee#ng of May 22, and of anorher big porrrair of rhis art became fuRy developed, with die arrival of the swiss-
Mariano Moreno. french couple Cesar Hipoliro Bacle and his wife, Adrienne
Guillermo Da Re, Venetian painrer esrablished in Argentina Macaire. They botfr blllonged to the so-called 'illusrrated
by rhe end of lhe nmereenth cenrury, painred 'The Evening of immigra#on' fomented by presiden! Rivadavia.
May 20 ar Rodríguez Pena s House: and "The Oalfl of thll They settled an inslitution named 'l.itograffa del Estado'
Government Board on May 25, 1810'. (Narional Lithography) and obtained rhe concession to prinr
Eg1d10 Querciola was asked in 1911 an oil painting on lhe official stationery. This institution published, among orher things,
/asr moments of Mariano Moreno, lhe secrerary of the the "Bu/letin of Comm6'C8: an impressive 'Regist8/" of Cattfe
Governmenr Board early dead in 1811. Mariano Moreno is Trademarks in tire State of Buenos Aires', and the journal
depicred by Querciola in agony, in his chamber on the ship rhal 'American Museum: al of them unriva/ed at that ffme for ils
was supposed ro take him to England. exceplionally high quality content and technical procedure.
N8vertheless, rhe most recognized work of tfris artisr, ev1111 .1 ~O
LOS "PEINETONES" DE CESAR HIPÓLITO years later, consist of lhe many porrrairs, stamps .and artlSllC
BACLE, por Diego Rulz representations of regional customs, ali of wh1ch had a~
extraordinary popularily among !Ws fel/ow citizens. One of hts
La litograffa llegó tempranamente a la Argenti- most famous books was especially devoted to depict an
na. Retratos de próceres como San Martfn y Bel- extravagant fashion: the use of huge ornamental combs,
grano Y cuadros de las batallas de Chacabuco y essen#al feature of 1111111811'5 dressing in lhose days.
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