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Incompetencia cervical: diagnóstico y tratamiento

Alvaro Monterrosa Castro*

RESUM EN : La incompetencia cervical es una causa relativamente poco frecuente de pérdida gestacional, que se considera se ha
sobrediagnosticado, más sinembargo es una importante razón para aborto repetido en el segundo trimestre de la gestación. El diagnóstico
debe sustentarse en los antecedentes obstétricos y tratar de evidenciar su existencia de forma preconcepcional para simultáneamente
desca rtar otras causas de pérdidas repetidas. Alcanzada la gestación y de forma temprana debe realizarse cerclaje cervical, utilizando
técnica de Shirodkar o McDonald, que prese ntan iguales ratas de supervivencia fetal e iguales ratas de complicaciones. En nuestra
experiencia hemos tenido buenos resultados con téc nica de McDonald y seda en forma de trenza, como material de sutura, pasando la rata
de supervh•encia fetal del10 % pre-cerclaje a l 88% post-cerclaje. En aquellas pacientes en que no se puede realizar cerclaje cervical, se
recomienda cerclaje cérvico-istmico vía abdominal.

PALABRAS CLAVES: Cerclaje cervical, incompetencia cervical, técnica de McDonald, técnica de Shirodkar, cerclaje cérvico ístmico
abdominal, aborto espontáneo repetido, aborto habitual, parto pretérmino.

SUMMA RY: Cervical is a relatively litle common cause ofgestatorialloss, which is considered lo ha ve been diagnosticated, nevertheless,
it is an importan! reason for repeted abortion in the second trimester of gestation. Diagnostic should be based on proceding diagnostic and
try lo evidence its existence in a preconceptional way lo simultaneously disco rd other causes of repeled losses. As gestation takes place and
in an early stage cenical ce relaje should be practiced using either Shirodkar or McDonald technique which show equal rates of complication.
[n our practice we ha ve had good results withMcdonald Tecnique and thread in braid way as suture material increasing the rate of fetua
survival from JO % re cerclaje lo 88 % post-ccrclaje. On those patients who can not take cervical cerclaje, abdominal cenical isthmical
ccrclaje is recommended.

KEY WORDS: Cervical cerclaje, cervical incompetence, McDonald technique, Shirodkar technique, abdominal cervical isthmic
cerclaje, repeled spontaneus abortion, habitual abort ion, preterm birth.

Ri veriu s, Culpepern y Cole 1658 relacionaron pér- in co mpeten cia cervical complica el 0 .05 % al 1.8% de
dida fetal habitu al co n defectos cervicales, y Gream en todos lo s embarazos, es ca usa del 16 al 20% de todas las
1865 utilizó e l término inco mpetencia cervical (1 ). pérd idas gestacionales del segundo trime stre (2, 9-1 0).
Ocurre en el 0.2 % de todo s los abortos (2) y es respon sa-
Definición ble del 25% de Jos partos pretérminos (11 ).
In co mpete ncia cervical es la in capacid ad del cérvix Etiología
uterino para mantener el embarazo in-útero hasta el
términ o, deb ido a defecto s anatómicos o fun c io nales (2 - No se conoce con certeza la importancia relativa de
3), siendo frecuente la pérdida de la ges tac ió n en el cada uno de los fac tores etiológicos, lo s cuales pueden
segund o trimestre (4). La incompetencia cervical es ser:
factor de riesgo a parto prematuro , y éste frecuenta causa (A) Adquiridos, lesión anatómica producida por trau-
de morbi-m ortalidad perinatal (5). Cuando el embarazo mat is mo obstétrico : dilatación y le g rado o p a rto
a lca nza un peso crítico, se ve nce la resisten cia del in strumentado (2, 7, 10), o por cirugía ginecológica,
orifi cio cervica l, se protruyen la s membranas amnióticas generalmente conización del cérv i,x (12). Las lesiones
y posterior a un corto e indo loro trabaj o de parto se adq uirid as se consideraban la mayor causa de debilidad
produce expulsión fetal (6). en el esfínterinterno cérvico-uterino (6). (B) Congénitos,
defectos hi sto lógi cos en cuello macro scópicamente in-
Incidencia ta cto (9- 10). Pal mer y Lacomme en 1948 (7) sospechan
causa congénita en mujeres nulíparas , por la existencia
Ex iste gran controversia en la frecuencia de la incom- de debilidad en la mu sc ul atura del extremo superior del
petencia cervica l con respecto al número de parto s nor- c uell o y del orificio cervical interno (6).
males (7 -8 ). Weissman et al (9) informan que la (C) Fi siol óg icos, cuando la dilatación es secundaria a
irritabilid ad uterina (contracc io nes) a normalmente per-
sistente (3) . (D) Anatómicos, por di storsión morfológica
* Instructor. Departamento de G ineco logía y Obstetricia. Facultad uterin a, sea por malformac ión uterina congénita o por
de Med ic in a. Un iversid ad de Cartage na. Colombi a. mioma s (13).

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Diagnóstico et al, quienes aseveran que el diámetro del orificio


Por no di sponerse de un método fiable y objetivo, no cervic al interno mayor de 19 mm , puede ser indicativo de
existen criterios bien definido s para el diagnóstico de incompetencia cervical. Otros (24) consideran importan-
in competen cia ce rvical ( 13). La hi storia de los embarazos te la medici ón seriada ultrasonográfica de la longitud del
previos es muy importante y decisiva para sospechar la cérvix en el embarazo, para fijar el riesgo de parto
entidad. Las pacientes suelen ser multigestantes con uno pretérmino. Consideran valor normal de 52± 12 mm ha sta
o más abortos en el seg undo trimestre ( 14 ). Se debe las 34 se manas de gestación . La ultrasonografía vaginal es
interrogar sobre antecedente de partos precipitados, par- valiosa en la valoración de estas pacientes (29). Zlatnik y
tos instrumentados, dilatación y legrado (7). Es importan- Burmein staer (2 0) estudiaron con hi sterosa lpin gografía,
te el antecedente de cauterización o conización cervic al tes t de Hegar y prueba de tracc ión del catéter en pac ient es
(2 , 12). Artículos de Shirodkar (15) y McDonald (16) no embarazadas con antecedentes de pérdidas en el seg un-
seña lan la hi storia típi ca de incompetenci a cervical: pér- do trimestre de la gestación y establecen que la elasticidad
di da del embarazo en el segundo trimestre, ruptura prema- cervical puede tener valor predi ctivo en el éxito de un
tura de membranas sin actividad uterin a dolorosa, trabajo embarazo pos terior.
de pa rto breve y expulsi ón de feto usual mente vivo. En
un a revi sión nuestra (17), 100% de las pac ientes eran Tratamiento
mul ti ges tantes, 100% tenían abortos en el seg undo trimes- Los tratamientos para esta condición han sido quirúr-
tre y el 82.3% habían sido previamente dilatadas para gicos (7), colocando una sutura alrededor del cuello in-
legrado, datos simil a res a los de McDonald : 95.5%, 93.3 %, co mpetente. En 1902 Herm a n (26) realiza con éxito
68 .8% respectivamente (6). No existe un método exacto traquel orrafía en mujeres con aborto habitual. En 1922,
qu e co nfirme el cuello incompetente (13-14 , 18), ba sán- Chile! (27) reporta el valor de la sutura para preservar el
do e el diagnóstico en los antecedentes obstétricos (6-7 ). orificio cerv ical interno en las mujeres con abortos repe-
Nada sustituye a la historia obstétrica en el diagnóstico de tidos. Palmer y Lacomme (28) en 1948 informan un caso
la i ncompetencia cervical ( 1, 19). Debe realizarse de exitoso, retirando una cuña e n la pared anterior del istmo,
forma preconcepcional para adelantar manejo preventivo. cerca alorificio interno y la sutura de los borde s con
Cuand o el diagnóstico no se ha realizado, y antes de la ca tgut. Lash y Lash (29) realizan resección romboidal a
ru tura de membran as, debido a la dilataci ón cervical la nivel cérvico-vaginal, seg uido de reparación del defec to,
pa iente suele experimentar peso en hemiabdomen infe- reportan casos en 1950 (29) y otros en 1957 (30), consi-
ri or y la sensación de plenitud vaginal. A la especuloscopia guiendo embarazos en el 60 % y productos vi ables en el
se observa el cuello parcialmente dilatado o la presenci a 50% de ellas. Sin embargo un a cuarta parte de las pacien-
de membranas que salen por el orificio cervical. tes no pudieron tener nueva ges tac ión (10). En 1955 ,
Shirodkar ( 15) describe su téc nica en la paciente embara-
Estudios auxiliares de diagnóstico zada , vía vaginal, lev antando la mu cosa del cérvix y
ingún estudio, realizado antes o durante la gestación suturando con una tira de fascia lata para cerrar el cérv ix
es preciso para confirmar el di ag nóstico. dilatado, reportó éx ito s en el 79 % de sus casos. La técni ca
E l T est de Hegar se rea liza estando la paciente no continú a siendo de gran valor (2 , 7 , 18). En 1957 McDonald
gráv ida, se evalúa el canal cervical, utilizando dilatadores ( 16) describe una técni ca usa ndo hilo de mersilene y
de Hega r, sie ndo la prueba positiva el paso fácil del puntos en "bolsa de tabaco" circund ando el cuello, por vía
dil atador No . 8 (2-3 , 20) . La prueba de tracción del catéter, vaginal y con la paciente gestante . Técnica sencilla de
o de la sond a de Foley, consiste en colocar y llenar co n 1 amplio uso en la ac tualid ad (2, 9-l 0-, 16, 18 , 31 ). Barker
ce el balón de la sonda de Foley y luego traccionar para tuvo buenos resultados con la téc nica de McDon ald con
evidenciar la laxitud y rel ajación del orificio cervical tira de fascia lata y po steri ormente con el uso de cinta de
inte rno (2, 20). mersil e ne, Page manejó cinta de Catgut y tira de gasa de
Histero salpingografía (14) , para medir el orificio cer- Oxycel (1 0). En 1965 Benso n y Durfee (32) propu sieron
vical interno, se ha utilizado y cifras superiores a seis mm el cerclaje transabdomin al cérvico-itsmico, colocando cinta
so sugestivas de incompetencia cervical (3) , aunque el de Mersilene al nivel de los útero-sacros y cardinales,
método puede tener numerosos falsos positivos y falsos teniendo la paciente ele 10-14 semanas de gestación, co n
negativo s (2). Recientemente Hricak et al (21) destacan el tasas ele supervivencia fetal superior al 90% (32-36), pero
valor que puede tener la resonancia nuclear magnética. má s riesgos reales y potenc iales que las técnicas vag inales,
En la paciente embarazada, la ultrasonografía se ha sobre todo de hemorragia, mayo r es tanci a ho spitalaria y la
in cl uido como método auxiliar de diagnóstico (11, 14, 22- obligatorieelael de cesárea (2, 32-37). Hoy día el cerclaje
23 ). Nzeh y Adetoro ( 14) encontraron mediciones del cérvico-itsmico transabdo min al se relega para casos con
di ámetro del orificio cervical interno en pacientes con cerclajes cervicales previo s fallidos o para cérvix con
in c mpetenci a cervical de 16 mm a 22.5 mm desde la 1O severo desgarro (2-3, 32-37).
a 27 se man as de gestación, mientras que en población El cerclaje cervical es el mé todo quirúrgi co más
control de mujeres sanas tenían di ámetros entre 7.7 a 14 usado para prevenir la pérdid a habitual en el segundo
mm en igu a l intervalo gestacional. Existe evidencia trim estre debido a incompete nc ia cervical , debe ser elec-
ultrasonográfica de estar incrementando el di ámetro del tivo, aplicado antes que se prese nten cambios en el cuello
ori fi cio cervica l interno en pacientes con incompetencia ( 17), sie ndo de elección la téc nica de McDon ald o
cerv ical ( 11 , 14) . Los mi smo s autores ( 14) citan a Brook Shirodkar (7, 15 -16), proced imientos que tienen iguales

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índices de supervivencia fetal (2-3 , 4, 6, 19, 38) . Diver- uterina, rompen las fibras de colágena e inducen madu-
sos materiales de sutura han sido utilizados (6). Está ración cervical (40) . La manipulación quirúrgica puede
definido que el material debe ser no absorbible (3, 41- ser un factor facilitador de migración bacteriana . Pacien-
42).: Mersilene o hiladillo. Seda, trenza ndo varias hebras tes con dilatación cervical en elsegundo trimestre tiene
y usando técnica de McDonald , la proponemos (17) como una mayor frecuencia de invasión microbiana a la cavi-
un buen material de sutura, con iguales altas tasas de dad amniótica. Romero et al (46) encontraron una preva-
supervivencia perinatal e iguales bajas tasas de compli- lencia del 51 %, siendo los gérmenes más frecuentes: el
caciones que las encontradas con otros materiales (2, 18, Ureaplasma Urealítucum , la Gardnerella Vaginalis, la
38). El cerclaje se puede realizar exitosamente como Canclicla Albicans y la Fusobacterias sp. La tasa de
cirugía ambulatoria (17), lo mismo aseveran Wetchler et infección es mayor en cerclajes de urgencias, que en
al (43) y Trehan et al (44). El momento oportuno para la electivos (10, 38). Nuestra experiencia con 17 pacientes
cirugía son las 14 semanas (17), lo cual permite el intervenidos ele forma electiva, no tuvimos ningún caso
diagnóstico previo de anormalidades del huevo o errores ele infección severa (17). Si la paciente presenta activi-
de implantación (45). Ayhan et al (18) dad uterina, fiebre y taquicardia posterior al cerclaje,
encontraronsupervivencia fetal del 74 % si se interviene sobre todo si fue después de las 19 semanas ele gestación,
antes de las 12 semanas, 84% entre 12 y 18 semanas y debe realizarse amniocentesis y cultivo para descartar
68% después de las 18 semanas. Entre más avanzada sea corioamninitis (8). Si el cultivo es negativo, tiene menor
!?. edad gestacional, se puede encontrar mayor grado de pronóstico que si es positivo (46). La incidencia de
borramiento cervical y dilatación, con menores posibili- corioamnionitis posterior a cerclaje es del 1 a 5% (3).
dades de éxito. Uso ele antibióticos profilácticos y hormonas para
El cerclaje de urgencia, se realiza cuando hay modifi- · minimizar el riesgo infeccioso y la irritabiliclacl uterina ,
caciones cervicales y/o protrusión de membranas, pueden sonmecliclas sugeridas por algunos autores (17) y cuestio-
no tener los mismos niveles de supervivencia fetal (2, 10, nadas por otros (2, 7, 44). Harger (1) dice que no hay
38-39), o como sugieren Novy et al (40): requerir útero- pruebas ele que estas medidas perioperatorias tengan al-
inhibición, posición de Trenbdelemburg, antibióticos gún beneficio. Se prohíben los coitos y se limita la activi-
parenterales, aminocentesis y reducción de las membra- dad física durante el resto de la gestación (17, 19).
nas protruidas. A esta condición no se debe permitir que La más frecuente complicación tardía es la actividad
lleguen las pacientes con antecedentes de abortos repeti- uterina de pretérmino y la ruptura prematura de membra-
dos en el segundo trimestre . nas (18). Es frecuente la actividad uterina prematura (3,
Deben proscribirse por completo hoy en día las técni- 18) . Estudios tocográficos suelen señalar contracciones
cas de cerclaje preconcepcional (7, 17). esporádicas o aumento transitorio del tono basal (7). Son
ele valor el uso ele agentes tocolíticos, para prevenir la
Complicaciones del manejo quirúrgico instalación de l trabajo de parto pretérmino (3, 5, 47).
Laceraciones cervicales y ruptura uterina han sido
Con la técnica de McDonald puede formarse un anillo descritas en la literatura (7). Entre nuestro s 17 casos no
fibrótico en el cérvix a nivel del cerclaje, pero suele ser tan tuvimos estas complicaciones graves (17). Raras compli-
delgado que rara vez constituye obstáculo para la dilata- caciones como fístula útero-vaginal y vesico vaginal han
ción plena del cuello (6, 9). La incidencia de cesárea suele sido reportadas (2).
ser igual a otras condiciones médicas u obstétricas (lO,
14). La Di stocia cervical es común complicación de falla Contraindicaciones para cerclaje cervical
en la progresión del trabajo de parto y aumenta las tasas de
cesárea (11). El cerclaje cervical está contraindicado en: ruptura
La comp li cación más grave puede ser el fracaso de la prematura de membranas , sangrado uterino, dilatación
ci rugía , por inicio de contractilidad uterina en el mayor ele cuatro centímetros, borramiento total cervical,
postoperatorio inmediato o ruptura accidental de las mem- gran desgarro cervical, infección cérvico -vaginal severa,
branas durante el procedimiento (18). anomalías fetales conocidas (3).
La infección en la línea de sutura, absceso,
corioamnionitis, sepsis, pudieran presentarse (19, 46). Eficacia del cerclaje cervical
Aunque el cérvix puede ser reservorio de agentes poten- Con el cerclaje cervical profiláctico , técnica de
cialmente patógenos, existen pocos reportes de infeccio- Shiroclkar o McDonalcl , cabe esperar una frecuencia de
nes graves como complicaciones del cerclaje cervical (8). productos vivos entre 80 y 90% (8, 17-19, 45).Si el
N o hay diferencia en la incidencia de sepsis entre las cerclaje se realiza ele forma tardía , cuando ya hay dilata-
técnicas de Shirodkar y de McDonald (8) . Charles y ción marcada del cérvix o con protru sión de las membra-
Edwards (8) en su revisión informan mayor riesgo de nas, cerclaje ele urgencia , las tasas de éxito son menores al
corioamnionitis como complicación infecciosa del cerclaje, 50% (6, 18-19, 38-39). Más sin embargo, Novy et al (40)
cuando éste es aplicado después de 19 semanas de gesta- tienen experiencias con técnica de Shirodkar, en pacientes
ción, lo cual puede ser debido a la presencia de infección con estados avanzados de dilatación cervical y protrusión
focal en las membrana s por mayor área de exposición a de membranas , reportando tasas de éxito superiores al
la microflora cérvico-vaginal. La flora vaginal y su 80%.
reacción inflamatoria liberan proteasas, colagenasas , pros- La eficacia del procedimiento ha sido evaluado por
taglandinas y linfoquinas que favorecen la actividad la rata de supervivencia fetal post-cerclaje, con la rata

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de supervivencia fetal de los embarazos previos al 19, 38) . Esta metodología evaluativa es cuestionada.
cerclaje, en las mismas pacientes (18). En nuestra serie No existen trabajos prospectivos, controlados que sus-
( 17) la rata de supervivencia post-tratamiento fue del tenten la validez del cerclaje, pero las observaciones
8 .2%, comparada con ell0.3% pre-tratamiento. Datos indirectas enunciadas sugieren que pueden ser solucio-
sim ilares son expuestos por muchos autores (2-3, 8, 18- nes adecuadas (2).

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