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Los conceptos de profesión y disciplina están íntimamente relacionados, lo que a veces provoca que sean utiliza­

dos indistintamente. Sin embargo, aunque en la configuración de una actividad representan significados diferentes,
uno y otro se complementan. Al hacer referencia a la disciplina enfermera se está hablando del conocimiento enfer­
mero, desarrollado científicamente desde la perspectiva de la enfermería, conocimiento que es reconocido por la
comunidad científica. Cuando se hace referencia a la profesión enfermera, se refiere al ejercicio de la práctica de
la enfermería, basada en los conocimientos disciplinares. Es necesario, por tanto, que el desarrollo disciplinar se
adelante a la practica profesional, y ofrezca así las explicaciones que la fundamenten. En este capítulo se pone un
énfasis especial en la diferenciación de ambas conceptualizaciones, que, por otra parte, facilitarán la comprensión
de este texto.

Si bien en la evolución de la enfermería, primero como ocupación y más tarde como profesión, intervienen múlti­
ples aspectos ya desarrollados en el capítulo anterior, en esta parte se aborda el proceso de profesionalización
desde la perspectiva de la evolución del conocimiento en el que sustenta su práctica, entendiendo que tanto para
la construcción de este conocimiento como para su adquisición y aplicación han sido determinantes tanto los ele­
mentos del contexto general en los que tiene lugar la enfermería (corrientes de pensamiento, concepto de salud,
tipo de atención que se ofrece, etc.) como las características propias de la profesión y de sus componentes que la
configuran de manera específica. Sobre esta base se desarrolla su práctica. A lo largo del capítulo se pone de mani­
fiesto la importancia de la formación especifica para su ejercicio, y es el reconocimiento de ello lo que la caracte­
riza como profesión.

L a s c o r r ien t es de p en sa m ien to
Y El CONOCIMIENTO ENFERMERO
Tanto la construcción del conocimiento enfermero como
la adquisición del mismo han estado condicionadas por
las concepciones de salud, de enfermedad y el tipo de
atención que se ofrece a la persona y por los aspectos
que han influido en el proceso de evolución de la enfer­
mería. Colliére [ 1] apunta hacía "la doble filiación feme­
nina y religiosa de la profesión" como causa por la que
las enfermeras se han mantenido alejadas del saber,
pues, ya que ni como mujeres ni como religiosas eran
merecedoras de conocimiento, lógicamente no iban a
serlo como enfermeras, que reúnen las dos condiciones.

Pero aún más, a estos dos aspectos, femenino y religio­


so, hay que añadir su relación con la medicina que, por
una parte, se convierte en su "benefactora" y decide
qué es lo que necesita saber y qué lo que no debe
saber y, por otra parte, depende de ella para sus actua­
ciones. Además, se da la diferente naturaleza de cono­ desarrollar la inteligencia y a la mujer no, hasta la actua­
cimientos entre una y otra (Ver Cuadro 1). lidad, como demuestran los estudios de Moreno [2],

Tradicionalmente se ha considerado a la mujer sin dere­ El conocimiento enfermero (ciencia o saber) encuentra
cho a la formación, desde Santo Tomás de Aquino, que su origen en la idea de los cuidados de salud de las per­
consideraba al hombre dotado para la noble obra de sonas y los grupos. Su construcción y evolución han ido
parejas a la evolución general del conocimiento. La pro­
pia evolución de la ciencia y las corrientes de pensa­
miento científico han determinado el devenir de la
construcción del conocimiento enfermero, al igual que
el conocimiento relacionado con otras áreas.

Esta evolución ha estado definitivamente marcada por


la influencia de la propia naturaleza de su área de inte­
rés: los cuidados de salud de la persona (que se desarro­
llan en el siguiente capítulo) y por los elementos, (ya
estudiados en el capítulo anterior) que han condiciona­
do la evolución de la enfermería.

El objeto de conocimiento enfermero se ocupa de algo


esencial pero aparentemente poco importante, los cui­
dados de salud de la persona y los grupos, pues cuan­
do se cubren normal y autónomamente no se valoran, La construcción, la evolución y el desarrollo del conoci­
ya que forman parte de la cotidianidad de la persona. miento enfermero y la fundamentación sobre los cuida­
Sin embargo, cuando se necesita ayuda para satisfacer­ dos de salud están íntimamente relacionados en cada
los produce un cierto pudor hacerlos visibles al pertene­ periodo de la historia con el concepto de salud, de
cer al área de lo íntimo. enfermedad y el tipo de atención que se presta a estos
estados. A su vez, todo ello está en relación con la evo­
Lo relacionado con la enfermedad adquiere un signifi­ lución que ha experimentado el pensamiento como
cado más público. De una persona se espera que al lle­ forma elaborada de conocimiento (Ver Tabla 1).
gar a un determinado grado de madurez sea capaz de
cuidar de sí misma, y que no lo sea cuando sus estruc­ Además, en la evolución del conocimiento enfermero
turas y funciones biológicas han sido lesionadas o están han influido, la mayoría de las veces como interferen­
enfermas. Una cosa y otra son vitalmente importantes, cias negativas, los aspectos que se han analizado como
pero socialmente están consideradas de diferente mane­ propios en la evolución de la profesión: las característi­
ra, tal como señala Savater [3]. cas femeninas y su relación con lo religioso, lo militar y
lo médico. De esta manera, el conocimiento enfermero
se adapta a las necesidades que se demandan de los
cuidados de salud en cada momento.
Por ello, para analizar la evolución del cono­
cimiento enfermero es necesario hacerlo en
los distintos contextos de los cuidados sobre la evolución del conocimiento
la base de las dos premisas siguientes (Ver
Cuadro 2):
enfermero
• El conocimiento en el que se sustentan los Cuando la salud tiene un valor como supervivencia, los
cuidados enfermeros tiene su origen en lo cuidados se realizan sobre la base de los fenómenos
público, en conocimientos empíricos, al igual observados en la naturaleza y sus métodos de conoci­
que las explicaciones en las que se basan miento son la experiencia y la herencia. Su desarrollo y
todas las ciencias. Sin embargo, las formas abordaje se circunscriben al ámbito doméstico reserva­
de expresión de los cuidados de salud, por do a la mujer.
tratarse de las necesidades de la persona, se
cargan de sentimientos y se circunscriben al Los cuidados de salud tienen como finalidad la supervi­
área de lo privado.
vencia de la persona y del grupo; los conocimientos en
• El saber que da origen al conocimiento en­ los que se sustentan las actividades cuidadoras se rela­
fermero ha sido tradicionalmente consti­ cionan con la experiencia y la magia. Son prácticas ins­
tuido desde la propia experiencia de la tintivas basadas en la intuición y el conocimiento corrien­
práctica. te, que se hereda de generación en generación a través
de la transmisión oral.
Tabla 1. Evolución del pensamiento como forma elaborada de conocimiento

Corrientes de Animismo filósofos Cristianismo Positivismo Otras


pensamiento griegos corrientes

Orientación • Magia • Intelectual frente • Caridad • Método científico • lógica


a manual • Humildad • Semántica
• Epistemología

Concepta de salud • Supervivencia • Sobrenatural • Valor religioso - Ausencia ■ Equilibrio


• Primeras de enfermedad • Bienestar
explicaciones
racionales

Cuidados • Instintivos • Sobrenaturales • Espirituales • Técnicos • Integrales


■ Mágicos • Higiene • Religiosos • Diagnóstico y • Atención a la
- Imitación de la tratamiento de la salud
naturaleza enfermedad

Las primeras concepciones sobre cuidados de salud y


Cuando se inicia la construcción del conoci­
las actividades relacionadas con ellos tienen lugar en
miento de forma ordenada, en la Antigüedad
un mundo que basa sus creencias en el animismo, con clásica, con el advenimiento de lo que hoy se
elementos sobrenaturales y mágicos, y en la existencia llam a civilización, se produce un desplaza­
de seres superiores que dan sentido, al igual que a las miento de la magia por la religión y con el des­
concepciones de salud y otros fenómenos, a las mani­ arrollo de la cultura impresa, que permite el
almacenamiento de saberes, el conocimiento
festaciones que se repiten y se observan en diferentes
se va tornando científico. La enfermedad se
situaciones de la naturaleza que son inexplicables y se empieza a concebir y a estudiar como un acon­
relacionan con las personas, los animales y los seres tecimiento endógeno a la persona, la medicina
vivos en general. se torna científica, estructurando sus conoci­
mientos, y el médico se convierte en "sabio",
algo que no ocurre ni con los cuidados de
En las épocas de la historia en las que la salud se ha
salud, que se siguen considerando como una
explicado desde argumentos sobrenaturales y religiosos, actividad manual, ni con la enfermera, quien
que coinciden con los inicios del desarrollo del conoci­ se considera que no necesita conocimientos
miento, los cuidados se basan en actividades manuales especiales para ejercer su labor.
y, en ese tiempo, lo manual no puede considerarse con
entidad para ser tratado científicamente.

Dentro de las explicaciones precientíficas sobre los cui­ además es objeto de una doble desconsideración, pues
dados se encuentran las que se basan en los fenóme­ se practican en el ámbito doméstico por mujeres, ser-
nos naturales y sobrenaturales, según las cuales la vos y esclavos.
enfermedad es considerada como un fenómeno sobre­
natural, como un acontecimiento exógeno a la persona, Las consecuencias de la diferenciación tan marcea
y las habilidades para hacerle frente se basan en pode­ entre la teoría y la práctica se traducen en un i mpedí-
res divinos y los conocimientos en una sabiduría funda­ mento para el desarrollo del conocimiento e n fe rmero,
mentada en la experiencia empírica. como apuntan Hernández-Conesa y Este ban -Al t> e rt[4],
basándose en reflexiones de Aristóteles.
Además, se produce una diferenciación entre lo cientí­
fico y el trabajo manual. La ciencia se desarrolla mien­ El desarrollo de la medicina científica se relacionaren
tras que el trabajo manual es objeto de desprecio. Entre Hipócrates de Cos (460-370 a. C.). Para él, la enferme­
las actividades que son consideradas manuales están lo dad no tenía un origen sobrenatural. Aporta las. pile­
que hoy se identifica con los cuidados enfermeros, que ras explicaciones epidemiológicas (importan cía iel
entorno) y de equilibrio biológico entre los distintos
humores: sangre, flema, bilis amarilla y bilis negra. El
método hipocrático supuso una gran aportación para la
medicina. Consistía en la observación, en examinar a la
persona más que a la enfermedad, en hacer una eva­
luación imparcial y ayudar a la naturaleza. En los escri­
tos hipocráticos se recogen orientaciones y pautas para
el uso de remedios como cataplasmas, dietas, la utili­
zación del frío, el calor y el vino, etc., prácticas que rea­
lizaban los ayudantes de los médicos. Los médicos las
indicaban y, por lo tanto, eran ellos quienes tenían que
conocer sus propiedades y efectos, mientras que los
ayudantes sólo requerían habilidades prácticas para su
aplicación.

En la Baja Edad Media, según apunta Durán [5] desde


una perspectiva sociológica, las profesiones son consi­
deradas tanto un modo de vida como una cualificación
o saber. Pero, por otra parte, quienes practican una
misma actividad comienzan a unirse en gremios para
mejorar las condiciones de su trabajo. Entre las formas
de mejora que pretenden está la formación de los aspi­
rantes al ejercicio de una actividad. Quienes practican
los cuidados, mujeres y religiosas fundamentalmente,
no tienen esta necesidad y el inicio de creación de
conocimiento y formación se retrasará en relación a __
otras actividades con las que conviven. Im agen 1. lo oración de los niños Uñosos. I. Pils, 1853. Musée
de l'Assistance Publique - Hôpitaux de Paris

El cristianismo como filosofía, además de en las formas


de entender la salud, la enfermedad y la expresión de
los cuidados, influye también en la construcción del A partir del s. XII, a los planteamientos cristia­
conocimiento. Las ideas sobre la caridad como elemen­ nos se añaden explicaciones físicas, con lo que
to básico del cuidado relegan a un plano muy secunda­ los conocimientos relacionados con la salud y la
rio la necesidad de desarrollar conocimiento. La práctica enfermedad adquieren una nueva doble pers­
enfermera se basa en arengas de los responsables de pectiva: por una parte, características sobrena­
turales y, por otra, biologicistas.
las comunidades, para ensalzar la importancia de los
valores espirituales de quienes cuidan y la caridad como
fundamento de los cuidados, además de en la experien­
cia y la transmisión oral. Durante la Edad Media, aparte
de las cortes principales, los centros religiosos (monas­ La concepción de la salud y la enfermedad desde los
terios, principalmente) se convierten en verdaderos cen­ aspectos orgánicos de la persona se ve influida en su
tros culturales, artísticos y científicos, y contrasta esta estudio e interpretaciones por la filosofía moderna de
riqueza interior de la Iglesia con el oscurantismo del la ciencia, que impone la primacía del método en la
mundo exterior. construcción de conocimiento. El positivismo de Comte
(1798-1857) consolida los trabajos de Francis Bacon
Un aspecto de interés dentro de los monasterios es el (1561-1626) y de David Hume (1711-1776), que culmi­
relativo al estudio de la enfermedad y la persona enfer­ nan en el método hipotético deductivo como método
ma. En muchos casos las comunidades religiosas se universal de la ciencia.
convierten en comunidades sanitarias en las que se
acumula saber y se buscan remedios para las enferme­ Con la Revolución industrial, se produce un fuerte desa­
dades. Un ejemplo de este tipo de organización se rrollo de la ciencia y la técnica, potenciadas principal­
encuentra en las leproserías (Ver Imaqen 1). m ente en las necesidades de la industria con las co n .
siguientes repercusiones en el terreno sanitario como Según Hernández-Conesa [6], los elementos constituti­
son una mayor cualificación de los profesionales sanita­ vos del cuidado, como prácticas valoradas de diferente
rios y un avance espectacular en los campos de la pre­ manera en la historia, han estado cambiando a lo largo
vención y la curación de las enfermedades. del tiempo sobre la base de conocimientos ajenos en
lugar de hacerlo sobre los elementos específicos del
Se puede decir que el desarrollo del conocimiento cuidado, a pesar de que por estar presentes y ser nece­
enfermero se inicia a mediados del s. XIX, que es cuan­ sarios desde el origen de la humanidad han tenido
do comienza el proceso de profesionalización de la siempre características propias.
enfermería, que coincide con cambios espectaculares
en el ámbito social (políticos y económicos, reivindica­ La práctica científica se ha visto influida a lo largo del s.
ciones sociales, mejoras en las condiciones de vida y, XX por diferentes corrientes científicas; así, están los
consecuentemente, en la salud de la población, etc.). postulados neopositivistas, que renuevan las ideas del
En el ámbito de la enfermería surge la figura de positivismo con los elementos procedentes de la lógica
Florence Nightingale que, aprovechando esta corriente, formal (el Círculo de Viena: Schilick, Carnap, etc.; y el
trabaja por la profesionalización de la enfermería y la grupo de Berlín, Reichenbach). Popper, defensor del
formación de las enfermeras. Sobre esta destacada racionalismo crítico, da paso a las corrientes historicis-
enfermera se profundizará al analizar el proceso de pro­ tas de Kuhn y Lakatos y a las concepciones semánticas
fesionalización en este mismo capítulo. y modeloteoréticas, que inspiran el estructuralismo
metateórico y el empirismo constructivo (Ver Cuadro 3).
Si se parte de la consideración del método científico
como un procedimiento para explicar y enseñar las Estos enfoques de la filosofía de la ciencia tienen como
cosas desde sus principios y sus causas, la enfermería concepción central que las teorías constituyen, más que
trata de incorporar este instrumento a su realidad y lo sistemas de leyes, sistemas de modelos, y ponen su
hace, inicialmente, como procedimiento para las activi­ énfasis en el estudio de la lógica, la semántica y la epis­
dades que llevan a cabo las enfermeras y, más tarde, temología.
para la elaboración de la teoría enfermera.
Para Medina [7], la enfermería es una ciencia humana
La utilización del método científico como procedimien­ práctica que precisa las ciencias naturales (generales)
to para sistematizar los cuidados enfermeros a través y humanas, para explicar la unicidad y particularidad
del proceso de atención de enfermería en sus etapas de de la persona y para entender y desarrollar la práctica
valoración, diagnóstico, planificación, ejecución y eva­
luación, no significa hacer la enfermería científica. Es
necesaria su utilización para la construcción de un cuer­ Cuadro 3. Corrientes del pensamiento científico
po de conocimientos propio, que represente la forma
particular del saber enfermero, la teoría general de la
enfermería y desarrolle la práctica sobre la base de los
principios y causas expresados en la teoría general de M éto d o
P o sitiv ism o
la enfermería. c ie n t íf ic o

R a c i o n a li d a d
N e o p o sitiv ism o
El proceso de atención de enfermería, como t é c n ic a
método de trabajo de los profesionales, sólo
sirve para organizar las actividades de las enfer­
meras, sean o no éstas específicas de su marco H isto ricism o
S i s t e m a de
de conocimientos. Así, se ha empleado en dife­ m odelos
Estructu ralism o
rentes lugares para organizar las actividades
delegadas por la medicina, sin que esto signifi­
que ni consolidación profesional ni avance disci­ i
plinar. El proceso de atención de enfermería Lógica
adquiere sólo su verdadero significado, para la Se m ántica
E p iste m o lo g ía
profesión y la disciplina, con una teoría enfer­
mera como referencia.
cuidadora. Para que la práctica enfermera no se trans­ ganan ese derecho, en parte, a través del estableci­
forme en técnica se debe basar en las teorías de las miento de una relación de confianza con las personas a
ciencias naturales y humanas y en las interrelaciones las que sirven: el reconocimiento de su aportación parte
entre ambas, con objeto de que los cuidados sean efec­ de quienes la reciben.
tivos y la persona comprenda su importancia. Los cui­
dados enfermeros, además de estar orientados para Martín-Moreno y De Miguel [12], basándose en refle­
contribuir al buen funcionamiento humano basados en xiones de Hughes, ponen de manifiesto que una activi­
principios éticos, han de ser compatibles con las expec­ dad se profesionaliza a medida que se institucionaliza y
tativas y los valores de la persona. lo hace por medio de dos mecanismos: la licencia y el
mandato.
Actualmente, se establece una diferencia entre los
modelos más adecuados para el estudio de las ciencias • La licencia: acredita la capacitación a través de la titu­
naturales y las ciencias humanas. El método hipotético lación para su ejercicio.
deductivo parece adecuado para el estudio de las cien­ • El mandato: consiste en la definición de deberes en
cias naturales por el objeto de estudio de éstas; sin relación a los pacientes, materializado en un código
embargo, el dinamismo de las ciencias humanas y de ética, una definición de estatutos y el derecho de
sociales marca la necesidad de su estudio desde el para­ remuneración por sus servicios. Para Colliére [1], la
digma sociocrítico, según el cual las acciones humanas profesión está constituida por un grupo de personas
deben ser analizadas por el estudio de las razones que que ha conseguido un título, un estatus, mediante
las fundamentan y en el medio en el que se producen. una formación con el fin de ejercer una actividad.
De acuerdo con este enfoque, es la realidad social la
que ofrece la referencia para la explicación de los fenó­
menos.
Desde esta perspectiva, el proceso de profesio­
nalización de la enfermería hay que relacionar­
El hecho de que la enfermería haya sido tradicional­ lo con dos aspectos claves (Ver Cuadro 4):
mente cosa de mujeres también ha influido en la cons­
• El acceso al conocimiento estructurado.
trucción del conocimiento enfermero a todos los nive­
les. Las mujeres han sufrido trabas para incorporarse al • La percepción de retribución por su práctica.
mundo de la instrucción; los estudios de Capel [8] vie­
nen a poner de manifiesto que, en la década de los
años 30 del s. XX, el porcentaje de mujeres en la uni­
versidad era de un insignificante 0,2%. El acceso al conocimiento
Por otra parte está la propia forma de transmisión del En cuanto al conocimiento, hay que volver a la influen­
conocimiento a través del lenguaje, ya que éste, según cia del género ya que al ser la enfermería una actividad
Buxó [9] y Rivera [10], ha sido siempre, bien en forma relacionada con lo femenino, hay que tener presente
de tabúes, mitología, proverbios o como construcciones
conceptuales, del dominio de los hombres. Para estos
autores la mujer ha sido objeto de discriminación Cuadro 4. El proceso de profesionalidad
sexual y lingüistica y, sin duda, esto dificulta la transmi­
sión de lo que se sabe y se hace, y también el acceso y
la adquisición de conocimientos.
Co no cim ie n to \ í R e m u n e ra ció n
en ferm ero / \ p o r la p r a c t i c a
EL PROCESO DE +
PROFESIONALIZACIÓN
DE LA ENFERMERÍA
El sociólogo y médico Elliot Freidson [11] describe lo
que es una profesión como "un grupo ocupacional que
se reserva a si mismo la autoridad poro juzgar la cali-
d a d d e su p r o p io tr a b a jo # y a fir m a q u e la s p r o fe s io n e s y
que la educación le ha sido negada a la mujer durante la formación enfermera, pues el objetivo era el diag­
mucho tiempo. En España, hasta mediados del s. XX, no nóstico, el tratamiento y la rehabilitación de la enfer­
existían escuelas que fomentaran en la mujer el desa­ medad.
rrollo intelectual (reflexión, análisis, oratoria, desarrollo
de ideas, lectura de los clásicos, filosofía, etc.). La edu­
cación de la mujer se desarrollaba en colegios de mon­ La percepción de retribución
jas y se orientaba hacia la lectura, la escritura, la reli­
gión, labores del hogar, etc., potenciando el desarrollo La percepción de retribución por la práctica enfermera,
de cualidades como la abnegación, la pureza, la renun­ como elemento de reconocimiento social, representa
cia, la entrega, el servicio y el sacrificio, por lo que así mucho más que lo que suponen los aspectos puramen­
la mujer quedaba al margen de los espacios del saber te económicos de recibir un salario o minuta por la
y del pensar [2]. práctica enfermera. Como apuntan Martín-Moreno y De
Miguel [12], citando a Hughes, la retribución tiene un
Esta orientación general se pone de manifiesto de mane­ significado dentro de la propia profesión que se relacio­
ra muy llamativa, como se veia anteriormente y se verá na con la asunción de una serie de responsabilidades
más adelante, en las enseñanzas que se desarrollan en que, según este autor, se ponen de manifiesto en la
las escuelas de enfermeras. Diversos estudios sobre la responsabilidad de ofrecer un servicio específico que
formación enfermera, entre los que cabe destacar los de protege a sus clientes mediante el respeto a un código
Cohén [13], confirman esta tendencia. de ética profesional.

Aunque en 1798 aparece en EEUU la primera institu­ la retribución por la práctica enfermera está ligada a la
ción para la formación de enfermeras, será realmente secularización de la enfermería. Los servicios ofrecidos
como consecuencia de las necesidades derivadas de la por las enfermeras han ido variando y adaptándose a
Guerra de Secesión, en pleno s. XIX, cuando se produz­ las necesidades sociales y de las personas, como se ha
ca el verdadero desarrollo de la formación de dichos ido viendo a lo largo de su evolución, donde la organi­
profesionales. Norteamérica no contaba con un grupo zación social reconoce su aportación y, paralelamente,
de enfermeras preparadas, por lo que durante este se le exige la formación adecuada. La propia profesión,
conflicto diversas órdenes religiosas y hombres y por otra parte, asume su función social y, a través de
mujeres laicos se incorporaron al cuidado de los heri­ sus diversas organizaciones, desarrolla, fundamenta y
dos. A partir de este momento son muy diversos los da a conocer los contenidos de su práctica, entre ellos
programas de formación que se van estableciendo y su código ético.
las instituciones que se hacen cargo de ellos. Cada hos­
pital tenía su propia escuela y estaba al amparo de Desde este punto de vista, el proceso de profesionaliza-
sociedades médicas, pero, progresivamente, se va ción de la enfermería ha de ser analizado desde una
estableciendo cada vez más formalmente un sistema perspectiva amplia: su consideración dentro de la socie­
de formación. dad. Mompart [14] analiza los aspectos que definen la
profesión en función de su impacto social. Según esta
Desde el inicio de la formación reglada, los saberes autora, determinan la posición de la profesión aspectos
médicos constituyen la base de los saberes enfermeros. internos y externos. Entre los internos incluye la compe­
La formación enfermera ha estado en manos de los tencia profesional, el servicio a la sociedad y la autono­
médicos, que les transmitían aquellos conocimientos mía profesional, y como componentes externos señala
que consideraban necesarios así como los valores para el liderazgo, la cohesión grupal y los valores éticos.
la práctica, con lo que se dificultaba el crecimiento de
la enfermería. Para Colliére [1], un oficio no puede pre­ Partiendo de estos elementos como condicionantes de
tender ser reconocido ni valorado en función de otro la evolución de la enfermería, que han determinado
porque pierde su propia identidad y razón de ser. diferentes formas de considerarse y de ser considerada,
y aceptando que el reconocimiento profesional se
Por tanto, en los inicios de la enfermería, hay que decir caracteriza por la percepción que de un grupo especia­
que al coincidir con una orientación de la atención sani­ lizado tiene la sociedad según los elementos que lo
taria centrada en luchar contra la enfermedad Instaura­ avalan, se analiza a continuación la evolución de la pro-
da, todas las actividades que se llevaban a cabo tenían fesionalización de la enfermería en España con las dis­
un marcado carácter biologicista y medicocérrtrico, incluida tintas influencias de las que ha sido objeto.
Antecedentes del proceso de de un gran reconocimiento dentro de la profesión (el 12
profesionalización. Florence de mayo, fecha de su nacimiento, ha sido elegido para
Nightingale conmemorar el Día Internacional de la Enfermería),
también lo tiene entre la población general. Su nombre
Durante la Edad Moderna comienza la incorporación de aparece con frecuencia en la literatura. Hablar de enfer­
mujeres laicas a los hospitales, con salario y con hora­ mería entre no profesionales, sobre todo en el Reino
rio. Sin embargo, no tienen, ni se les exige, ningún tipo Unido, es hablar de Florence Nightingale: su imagen es
de preparación. Por tanto, esto no significa la profesio­ el argumento de los billetes de diez libras y de diferen­
nalización de la enfermería. tes emisiones postales (Ver Imagen 2).

En pleno auge de la sociedad industrial se produce un


fuerte desarrollo de la atención sanitaria, con la conse­
cuencia lógica de una importante demanda de médicos y En esta enfermera confluyen influencias de
todos los aspectos que han configurado la
enfermeras. En el campo de la enfermería tiene lugar la
imagen de la enfermería y de las enfermeras:
secularización, por lo que se puede empezar a señalar el
comienzo de su profesionalización. Unido a las necesida­ • Es una mujer y participa en los movimien­
des de atención está el avance en las tecnologías sanita­ tos reivindicativos de las mujeres de su
rias, exigiendo al profesional más que buena voluntad o tiempo, la Inglaterra victoriana, que centra­
ban sus esfuerzos en conseguir el derecho
espíritu de sacrificio. El mundo hospitalario comienza a ser
al voto.
un mundo técnicamente complejo, con el desarrollo ace­
lerado de la cirugía, la aparición y aplicación de técnicas • Sus primeros contactos con la enfermería
de asepsia, el desarrollo de los fármacos, etc. los realiza con las diaconisas de Kaisers­
werth y con las Hermanas de la Caridad,
La enfermera empieza a recibir instrucción, es decir, se por lo que se puede afirmar que los princi­
pios filantrópicos y religiosos influyeron en
cualifica. Esta cualificación procede de los médicos,
su concepción de la enfermería, como se
quienes también organizan, distribuyen y supervisan
pone de manifiesto en sus escritos.
al trabajo haciendo rotar a las enfermeras, tanto
Jurante su periodo de formación como en el ejercicio • Una buena parte de su actividad la lleva a
profesional, por los departamentos en los que estaban cabo en hospitales militares, lo que le obli­
ga a asumir el reglamento militar.
os enfermos o que tenían relación con su atención,
:como por ejemplo la farmacia, y aquéllos de carácter • Finalmente, su trabajo se desarrolla con
hotelero: lavadero, cocina, etc. médicos y una buena parte de sus trabajos
sobre epidemiología han servido para el
L mediados del s. XIX, Theodor Fliedner crea el Instituto desarrollo de la disciplina médica.
le Diaconisas de Kaiserswerth (Alemania) que primero
e dedica a la reforma de las cárceles y, más tarde, a la
tención y cuidado de los enfermos, con la creación de
na escuela para la formación de diaconisas junto a su Nightingale tuvo una visión de la salud de la persona
mujer Federica Münster. El programa de formación relacionada ya con las condiciones del entorno y el esti­
uraba tres años. Esta experiencia sirvió como modelo lo de vida. La calidad del hábitat, la luz, la temperatu­
ara la formación y organización de la enfermería euro- ra, la ventilación y la higiene eran aspectos que consi­
epa y americana. deraba importantes para la salud.

entre las enfermeras que pasaron por el Instituto de Su primera actividad consistió en la planificación y
iaconisas de Kaiserswerth para conocer de cerca el puesta en marcha de un hospital en Londres, con un sis­
p
oyecto que se estaba desarrollando, estaba Florence tema organizativo minucioso y completo, que sirvió de
iNghtingale, que permaneció un tiempo en esta escue- modelo para proyectos posteriores.
,la cuya filosofía influyó en su obra posterior.
Tras el éxito de este trabajo, el gobierno inglés le encar­
figura representativa por excelencia en el inicio de la gó la organización de la enfermería en los hospitales de
pofesionalización de la enfermería es Florence Nigh- campaña. Eran mediados del s. XIX y los heridos recla­
tin
gale (1820-1910). Esta enfermera, además de gozar maban cuidados humanitarios como los que proporcio-
naban las Hermanas de la Caridad [15]. Su aportación a
la profesión es definitiva y tiene lugar en un momento
histórico que facilita su reconocimiento.

La eficacia de los cuidados organizados por Nightingale


a los heridos de la guerra de Crimea coincide con una
serie de hechos derivados de la Revolución industrial
(fenómenos tan importantes como la urbanización, la
industrialización, la proletarización, el crecimiento de
las poblaciones, etc.), que provocan un aumento signi­
ficativo de la percepción que sobre sus necesidades
tiene la población. Así, se hace necesaria una distribu­
ción de funciones en el campo de la atención a la salud
basada en la profesionalización y en la preparación. El
avance de la medicina requiere la preparación de la
enfermería y su incorporación al equipo, en total subor­
dinación, pero con unas funciones específicas que ya no
se pueden dejar en manos de personas sin formación.

Posteriormente, se dedica a la preparación de enferme­


ras profesionales y, a través de la Fundación Nightin­
Imagen 2. Florence Nightingale. Dibujo de su hermana gale, crea en 1860 una escuela de enfermería en el
Parténokpe (1855)
Hospital de Santo Tomás (Londres), con el fin deformar
profesionales para atender a los enfermos en los hospi­
tales (enfermeras de hospital), en sus casas (enferme­
ras de distrito) y para formar a su vez a otras enferme­
Nightingale parte de una serie de principios ras (enfermeras docentes). El modelo de escuela de
que deben regir en la organización de la enfer­
Nightingale sirve como modelo de referencia durante
mería:
mucho tiempo para las escuelas de América y Europa.
• Como aspectos profesionales: la contepción
de la enfermería como un trabajo y no como
imperativo moral. La edad para ingresar en la escuela era entre 25 y 35
• Como aspectos técnicos: la definición y proto­
años, la enseñanza teórica duraba un año y los gastos
colización de las tareas específicas, que hará de las estudiantes sin recursos corrían a cargo de la
disminuir notablemente la mortalidad de los Fundación Nightingale.
heridos. Da gran importancia a la limpieza
personal y del entorno (la mayoría de los
heridos morían como consecuencia de la gan­
grena, el tifus exantemático, la peste bubóni­ Según Florence Nightingale había dos principios
ca, etc., y no como consecuencia directa de las fundamentales para el buen funcionamiento de
heridas), establece un orden en el horario de una escuela de enfermeras:
la administración de la medicación, se propor­
ciona a los enfermos una alimentación ade­ • Que la escuela estuviese anexa a un buen
cuada, se lleva a cabo el registro de la evolu­ hospital.
ción de los heridos y se les clasifica según la • Que las estudiantes estuviesen en régimen
gravedad en las camas más cercanas al lugar de internado para que adoptasen, en comu­
donde se encuentran las enfermeras etc. Se nidad, la práctica de virtudes que pare ella
desechan así criterios que estaban muy arrai­ eran básicas en la formación humana de las
gados basados en la escala militar. enfermeras: disciplina, sobriedad y orden.
• Otros aspectos importantes eran los cuidados
que tenían como finalidad el bienestar de los
heridos, que iban desde mantener la limpie­
za y ventilar los pabellones hasta proporcio­
nar estímulos a los soldados, facilitándoles el Después, las alumnas pasaban dos años, con remune­
correo, la lectura, etc. ración, dedicadas a trabajar aunque sin responsabilidad
total en el hospital
Estos principios estuvieron presentes en la formación ñolas, hasta la década de los anos 60 del s. XX (Ver
de enfermeras en las escuelas influidas por la concep­ Imagen 3).
ción Nightingale, entre ellas las españolas.
A finales del s. XIX, se crea en Inglaterra la primera aso­
Durante mucho tiempo, prácticamente hasta la incorpo­ ciación profesional de enfermeras. Desde entonces, y a
ración de los estudios a la universidad, las escuelas lo largo del s. XX, la enfermería comenzó a desarrollar­
femeninas estaban anexas o dentro de los hospitales. se de manera intensiva. Prueba de ello es la creación
Las escuelas masculinas y las facultades de medicina en 1899 del Consejo Internacional de Enfermeras (CIE),
estaban en las actuales ciudades o campus universita­ la publicación en EEUU del primer número de la Revista
rios. Estas últimas siguen estando, al igual que las Americano de Enfermeras (1900), que actualmente
actuales escuelas universitarias de enfermería, cerca de sigue publicándose, y la creación de consejos naciona­
los hospitales, pero con una diferencia sustancial: se les de profesionales en diferentes países.
acerca el hospital a la facultad buscando el beneficio
mutuo, no se introducen éstos (escuelas y facultades) La Primera Guerra Mundial, y en España la Guerra
en el hospital, como ocurrió durante mucho tiempo con Civil, fueron el momento determinante del proceso
las escuelas de enfermería (¿qué se pensaría de la for­ por su repercusión social, por cuanto la demanda sani­
mación de abogados, jueces y fiscales dentro de los juz­ taria fue muy importante y supuso un fuerte tirón en
gados?). La explicación se encuentra en que la forma­ la incorporación de cientos de mujeres a la práctica de
ción de las enfermeras se orientaba, desde sus inicios, la enfermería. La profesión se incrementó de una
a satisfacer las necesidades de los hospitales. manera irreversible no sólo cuantitativa, sino también
cualitativamente.
La eficacia del tipo de instrucción que propugna Nightin­
gale está fuera de toda duda. Las enfermeras salían de
las escuelas en condiciones óptimas para incorporarse
a las tareas de creciente complejidad que la organiza­
ción hospitalaria demandaba de ellas. Por esto, la obra
de Florence Nightingale está reconocida como la base
de la profesión enfermera, además de lo que supuso
en lo que se refiere a la formación, y a partir de ella la
sociedad comenzó a estimar y valorar la profesión.

Sus experiencias, reflexiones y trabajos han quedado


reflejados en su obra, en textos tales como Notes on
nursing (1858), Hints on hospitals (1859), Observations
on the sanitary stote of the army in India (1863), Life
or death in Indio (1873), Health teaching in towns and
villoges (1894). Entre sus trabajos, el más significativo
es Notes on nursing (1858), que fue un libro de texto
para la formación de enfermeras en las escuelas de
diferentes países. En España ha sido traducido como
Notas sobre enfermería. Qué es y qué no es [16],
Según la autora, con sus contenidos trata de aportar
referencias para el pensamiento de quienes cuidan a
otros. Actualmente esta finalidad sigue estando vigen­
te. Lo más relevante de la concepción enfermera de
Florence Nightingale es que fue capaz de ofrecer las
aportaciones que la sociedad requería y dar las solucio­
nes más oportunas para su época.

Prueba de ello es que la experiencia se extendió a


toda Europa y Norteamérica, permaneciendo vigentes Imagen 3. Enfermera aprerdiendo a vendar sobre un maniquí.
Musée de l'Assistance Publique-Hôpilaux de París
sus D rin c D io s en la fo rm a c ió n de la s enfermeras e s n a -
En España se puede empezar a denominar a la enferme­
ría como profesión a finales del s. XIX y principios del XX.
En la Ley de Instrucción Pública de 1857 se expresa el
reglamento que determina los conocimientos prácticos
requeridos para obtener el título de practicante. La for­
mación y práctica de estos profesionales tiene un marca­
do carácter técnico como ayudantes de los médicos. En
1902 se establece un programa de enseñanza para la
formación de practicantes que constaba de 78 temas.

Poco después se regulan los estudios de matrona, y


uno y otro pasan a cursarse dentro de las facultades de
medicina. Finalmente, en 1915 se establecen los
requisitos para el ejercicio de la enfermería, para lo
Im agen 4. Monumenlo al Dr. Federico Rubio y Galí, Madrid
que es preciso aprobar un examen similar al de practi­
cante y matrona ante un tribunal compuesto por tres
catedráticos de la facultad de medicina. Las enferme­
ras tituladas con estos requerimientos convalidaron del papel de la enfermera es claramente dependiente
posteriormente su titulación y han estado en activo en hasta niveles tales como la selección, fundamental­
el sistema de salud hasta la década de 1970, cuando mente basada en cualidades físicas, personales y, espe­
cesaron por jubilación. cialmente, vocacionales.

La Ley de Bases de Sanidad Nacional de 1944 estable­ La enfermera es el auxiliar del médico, con escasa fci-
ce tres colegios de auxiliares sanitarios, que integran a mación, y su misión se centra en tareas que, por rutin¡-
enfermeras, matronas y practicantes. Es necesario per­ rias y mecánicas, el médico delega al ir asumiendo tui­
tenecer al colegio para ejercer la profesión, que regula ciones más complejas. Como se vio con anterioridad, la
las competencias de las tres titulaciones. Dentro de la atención se centra en la enfermedad, en el órgaio
organización colegial estaban divididas las tres áreas y, afectado y la formación teórica de los enfermeros, e n a
cada una de ellas, en razón del sexo (femenina y mas­ patología y el desarrollo de habilidades técnicas relacii-
culina). nadas con el diagnóstico y tratamiento médico: sorra-
jes, técnicas de asepsia, administración de medicado,
Con anterioridad a la regulación de los requisitos que etc.
debían superarse para la práctica de la enfermería, se
había creado en 1896 la Real Escuela de Santa Isabel de En España, hasta el año 1953 existen tres titulacions:
Hungría en Madrid. Su fundador, el Dr. Federico Rubio y enfermera, matrona y practicante. Cuando se unificar,
Galí, había sido embajador en Londres y tomó como se hace con el nombre de Ayudante Técnico San itrio
modelo, para esta primera escuela, el desarrollado en (ATS). La formación de este profesional estaba basala
Inglaterra por Nightingale, que posteriormente también en el modelo médico, en aspectos de las patología s,m
servirá como referente para otras (Ver Imagen 4). La el diagnóstico y tratamiento de la enfermedad, corta
segunda escuela fue creada en Barcelona en 1917 y es inculcación, durante el proceso de formación, de idas
la de Santa Madrona. Un año después se crea la de Cruz de subordinación al médico y de abnegación c o m o de
Roja de Madrid. Estas dos últimas escuelas, la de Santa valor para la práctica [17], El papel que desarro l a f¡s-
Madrona y la de la Cruz Roja, siguen en la actualidad teriormente como profesional es claramente d e po­
desarrollando la formación de enfermeras, se han ade­ diente y sin necesidad de preguntarse el porqué d?lo
cuado a los cambios de estudios habidos desde su fun­ que hace ni buscar respuestas sobre el para qué d e u s
dación y han sido centros que han gozado de gran pres­ acciones. De esta unificación, M. Santo Tomás [18 ] n-
tigio. sidera una serie de repercusiones tanto positivas c omo
negativas para la evolución de la profesión:
El aspecto más positivo se centra en el reconocimiento
de la necesidad de los cuidados enfermeros como tales • Repercusiones positivas: destaca la propia unifi c a cio
n
en la atención a la salud. Sin embargo, también se en una sola titulación, el mayor nivel de estud i o la
puede afirmar que en esta primera etapa la concepción unificación de criterios para todas las escuelssjel
país, la vinculación de éstas a la universidad (a las La práctica de los ATS se centra en ayudar al médico en
facultades de medicina) como escuelas profesionales, la realización de técnicas dirigidas al diagnóstico y al
la destreza técnica que se adquiere, la secularización tratamiento de la enfermedad y, en un plano más
de los cuidados, la pérdida de la exclusividad femeni­ secundario, en la atención a las necesidades de los cui­
na y, en general, la mejora en la formación y su reper­ dados de salud de la persona cuando padece una enfer­
cusión en la calidad de los cuidados. medad y en la participación en programas de preven­
• Repercusiones negativas: resalta el nuevo nombre de ción a través de campañas de detección precoz de
ATS que desvirtúa la auténtica naturaleza de la enfer­ enfermedades (como lo fueron las destinadas a detec­
mería y supone la pérdida de identidad, la gran proli­ tar la tuberculosis) y de vacunación.
feración de escuelas que responde más al aumento de
la demanda de profesionales por el creciente aumen­ Se produce una organización del trabajo basada en téc­
to de los hospitales que a un desarrollo planificado y nicas y en una valoración de la persona en función de
estructurado, la orientación de los estudios de corte la dependencia que le produce su enfermedad. Se da
médico y el control de las escuelas por parte de los gran importancia a la técnica que requiere la práctica
médicos (Ver Imagen 5). del cuidado y se considera que el dominio de esa téc­
nica da poder y prestigio. Posteriormente va adquirien­
Dentro de los estudios de ATS se desarrollan una serie do cada vez más valor la consideración del cuidado en
de especialidades, con un tiempo de formación entre sí mismo y su importancia en función de su repercusión
uno y dos años. Unas estaban orientadas desde las en la salud y el bienestar de la persona, y el hecho de
especialidades médicas y otras para desarrollar técnicas que la técnica no significa desarrollo salvo en el campo
dirigidas al diagnóstico y tratamiento médico: fisiotera­ estrictamente técnico.
pia y podología (posteriormente, las dos se constituirán
como enseñanzas independientes), matrona, urología y La consolidación del proceso de profesionalización
nefrología, pediatría y puericultura, neurología, psiquia­ En el proceso de profesionalización de la enfermería
tría. análisis clínicos y radiología y electrología. Colliére [1] describe dos corrientes:

• La corriente que se desarrolla vinculada a la técnica y


centrada en la enfermedad: el trabajo de las enfer­
meras se caracteriza por el predominio de lo relacio­
nado con la enfermedad, la prescripción y el trata­
miento médico, el trabajo se divide y se distribuye
por tareas.
• La corriente que se desarrolla como revalorización de
la relación cuidador-persona cuidada: los cuidados de
salud de la persona son la razón de ser de la práctica
enfermera y la relación con el enfermo es el eje de
los cuidados.

Para profundizar en el conocimiento del proceso de pro­


fesionalización de la enfermería en España se recomien­
da el estudio de las publicaciones de la Asociación
Española de Enfermería Docente (AEED) y de la revista
ROL de Enfermería. Estos trabajos dejan constancia de la
evolución de la enfermería en los últimos años. Tanto la
AAEO, con sus actividades y orientaciones desde 1979,
como la revista ROL de Enfermería (desde 1978), con la
difusión de los avances profesionales y disciplinares,
han jugado un papel determinante en la evolución de la
enfermería española.

Autores españoles también identifican la enfermería


la enfermería de dependencia médica, la tecnificada y • Proporcionar cuidados enfermeros a la perso­
la de salud integral. Alberdi [20], en esta misma línea, na sana y enferma, a la familia y a la comuni­
describe diferentes formas de concebir la enfermería: dad en su medio ambiente natural y en el hos­
los ATS, que establecen una relación clara de su actua­ pital.
ción alrededor del médico, la enfermera tecnológica, • Orientar los cuidados enfermeros a la promo­
que relaciona sus actividades con el diagnóstico y trata­ ción de la salud, la prevención, el tratamien­
miento médico, y la enfermera cuidadora, que relacio­ to y la rehabilitación de la enfermedad y su
na su actividad con las necesidades del paciente. restablecimiento.
• Integración en el equipo multidisciplinar para
realizar las funciones propias de los cuidados
En EEUU, la primera escuela de enfermería que se inte­
enfermeros.
gra en la universidad lo hace en el año 1909. Poste­
• Poder contribuir a la formación del equipo y
riormente se van incorporando otras y simultáneamen­
a la educación para la salud de la población.
te se amplían los programas de formación, aunque no
• Investigar en el ámbito científico de la enfer­
va a ser hasta la segunda mitad del s. XX y como con­
mería.
secuencia del Informe Goldmark (1923), resultado de
los trabajos del Comité para el Estudio de la Formación
de Enfermería, cuando se empieza a orientar la ense­
ñanza de la enfermería sobre la base de los cuidados
de salud [15]. Para la reforma de los estudios de ATS se crea una
comisión interministerial compuesta por representantes
En España es a partir de los años 70 cuando se comien­ del Ministerio de Educación, la Dirección General de
za a adoptar una identidad más propia y específica, Sanidad, el Instituto Nacional de Previsión, el Sindicato
menos dependiente. Esto va precedido de una serie de de Actividades Sanitarias, el Consejo General de Ayudan­
hechos que van a posibilitar la transformación de la for­ tes Técnicos Sanitarios y asesores médicos y ayudantes
mación y la práctica enfermera. técnicos sanitarios.

En 1971, la Ley General de Educación abre la posibilidad En este decreto se reflejan aspectos que van a ser deci­
de que la formación de enfermería se regule como for­ sivos para la formación enfermera, tales como la
mación profesional o como formación universitaria. estructuración de las escuelas, la elaboración de unos
Entre los años 1975 y 1976 se produce una fuerte movi­ planes de estudios adecuados, la creación de organis­
lización de los profesionales para que los estudios se mos profesionales, el control de la calidad de la ense­
integren en la universidad. ñanza, la incorporación de enfermeras a los cuerpos
docentes universitarios, la formación continuada, la
Cabe destacar los trabajos de diferentes grupos de convalidación de las titulaciones y el desarrollo de las
docentes y las movilizaciones del colectivo, entre ellas funciones docente e investigadora. El nuevo plan de
lo que se dio en llamar la Coordinadora Nacional, que estudios de 1977 introduce diferencias sustanciales en
propiciaron la integración de los estudios en la univer­ relación con los anteriores; los aspectos más destaca-
sidad. bles pueden concretarse en los contenidos y orientacio­
nes siguientes:

• Estudio de la persona desde una perspectiva integral,


La integración en la universidad de las escuelas mediante la incorporación de las ciencias humanas y
de ATS como escuelas universitarias de enfer­
sociales en el currículo.
mería se establece por Real Decreto en 1977.
Posteriormente se dictan las directrices para la • Perspectiva científica de los estudios, mediante el
elaboración de los planes de estudios. estudio del método científico.
Una comisión de estudios del Consejo General • Proporcionalidad simétrica entre teoría y práctica, lo
de Enfermería (rama femenina) elabora las que supone la importancia de sustentar los conoci­
áreas de actuación de los profesionales y, sobre mientos y habilidades necesarios para la práctica en
esta base, se construyen los planes de estudio. conocimientos teóricos.
Estas áreas quedan definidas de la manera - La formación en el ámbito comunitario.
siguiente:
• Inclusión de contenidos para capacitar a los profesio­
nales en la asunción de funciones más complejas (admi-
nistración y gestión), hacer juicios críticos, tomar deci­ impartición de clases desde los inicios de los estudios en
siones y reorientar sus actividades de acuerdo a las la universidad, la Ley de Reforma Universi taria de 1983
transformaciones sociales y a las demandas y necesi­ y el posterior desarrollo de su Título V, supuso un ele­
dades de la comunidad. mento importante en el desarrollo de la enfermería, ya
que establece el acceso a las plazas de profesor titular
La formación de la enfermería en la universidad, en la por áreas de conocimiento.
línea que se ha descrito, además de posibilitar una for­
mación universitaria permite la adquisición del conoci­ Al ser determinadas éstas por el Consejo de Universida­
miento en su medio natural, la vivencia con otros estu­ des, se reconoce la enfermería como un área específica
diantes, salir del hospital y compartir experiencias. de conocimiento, lo que posibilita a las enfermeras la
incorporación a la docencia en la universidad con la titu­
Hay que destacar en este punto del proceso de profe­ lación de diplomatura, y que la enfermería pueda ser
sionalización de la enfermería que, paralelamente a enseñada por profesionales.
que los nuevos profesionales adquieran la formación
con la orientación descrita, los enfermeros y enferme­ Simultáneamente a la instauración de los estudios en la
ras formados con el sistema anterior ATS que ya esta­ universidad, se plantea la necesidad de completar, desde
ban desarrollando la actividad profesional tuvieron la la nueva realidad, el desarrollo profesional a través de
posibilidad de nivelar conocimientos y homologar la especialidades de enfermería, y el desarrollo disciplinar
titulación académica a través de lo que se denominó el a través de la instauración de la licenciatura y el docto­
Curso de Nivelación de Conocimientos para Ayudantes rado. En el desarrollo de ambas reivindicaciones se
Técnicos Sanitarios, a través de la Universidad Nacional viene trabajando desde entonces. Sobre la importancia
de Educación a Distancia (UNED). del desarrollo de la licenciatura se profundiza al tratar
sobre la disciplina en el apartado siguiente.
Con una importante red de escuelas como centros cola­
boradores de la UNED, el compromiso de los centros de En cuanto a las especialidades, su razón de ser viene
trabajo, la disposición de bibliografía específica elabora­ determinada por la necesidad de especialización de las
da por profesionales españoles para este fin (la UNED enfermeras generalistas que proporciona la formación
publicó los textos correspondientes a todas las materias básica. Diversos grupos han venido trabajando y elabo­
que componían el Curso de Nivelación de Conocimientos rando diferentes propuestas.
para ATS. Son textos cuyos contenidos hoy siguen sien­
do de interés: conceptos de enfermería, salud pública, El Real Decreto 992/1987 por el que se regula el título
ciencias de la conducta, administración, etc.). Los ATS de especialista enfermero, venía a establecer las
respondieron masivamente a este nuevo reto y así, siguientes: enfermería obstétrico-ginecológica (matro­
entre los años 1980 y 1990, convalidaron su título a tra­ na), pediátrica, salud mental, salud comunitaria, cuida­
vés de la nivelación de los conocimientos el 60% de los dos especiales, geriátrica y gerencia y administración
profesionales existentes [21]. Este curso tenía las carac­ de enfermería. A pesar del reconocimiento en el real
terísticas de ser a distancia, como todos los estudios de decreto mencionado, sólo se han desarrollado hasta el
la UNED, pero durante su desarrollo se impartieron cur­ momento la de matrona y enfermera especialista en
sos de seguimiento y apoyo en los hospitales, escuelas, salud mental.
colegios profesionales, etc.

Para las enfermeras esto supuso mucho más que la


Dos hechos acontecidos en 1984 han sido fun­
adquisición de los conocimientos de los contenidos del damentales en la consolidación del proceso de
programa: significó el necesario debate y la reflexión profesionalización de la enfermería:
alrededor de la unidad de criterios que suponía una for­
• El desarrollo de la atención primaria, con la
mación homogénea. Las consecuencias fueron el impul­ creación de las estructuras básicas de salud.
so para situarse en una perspectiva disciplinar. Mediante Real Decreto se definen las funcio­
nes que desarrollará el equipo de salud, en el
Aunque los profesionales habían sido habilitados para la que se incorporan las enfermeras haciendo
una aportación específica, los cuidados enfer­
docencia universitaria a través de disposiciones transito­ meros, de gran valor para la salud de la
rias del Ministerio de Educación y Ciencia, que permitían población.
l a c o n t r a t a c i o n 1 •
• El nuevo modelo de gestión, en el que en su na reflexionando, en este mismo trabajo, sobre la nece­
apartado "Nuevo modelo de gestión en sidad de continuar desarrollando competencias profe­
enfermería" reconoce la necesidad de la sionales y la fundamentación disciplinar, basado todo
organización de la estructura funcional de la
enfermería por los propios profesionales. A ello en la investigación.
partir de este modelo de gestión en los hos­
pitales (del Instituto Nacional de la Salud) y, En la actualidad, la formación de los profesionales es,
posteriormente, en las áreas de atención pri­ según Arroyo y Mompart [23], de una alta cualificación
maria, se incorporan las direcciones de enfer­
mería, con lo que se constata la importancia en aspectos clínicos y tecnológicos, humanísticos, de
que se concede a los cuidados enfermeros. promoción de la salud y de gestión, lo que sin duda
posibilita que su aportación a la salud de las personas
y los grupos sea muy significativa. Sin embargo, según
estas autoras, no está siendo utilizada esta capacitación
Según pone de manifiesto Durán [22], en un análisis de las enfermeras en el sistema de salud.
sobre la enfermería en la década de la reforma sanita­
ria (1982-1992), a finales de los años 80 y principios de Como se ha argumentado en otros momentos, un todo
la década de los 90, la enfermería experimenta un se desarrolla cuando lo hacen de forma armónica y
avance singular, con la incorporación de las enfermeras complementaria cada una de las partes, y cada vez que
a los órganos de toma de decisiones y con las compe­ se consolida una mejora en la formación repercute en
tencias que les asignan en la atención hospitalaria y, la práctica, con lo que se produce un definitivo desarro­
especialmente, en la atención primaria. Aunque termi­ llo profesional (Ver Imagen 6).

Im agen 6. En la actualidad destaca la alta cualificación de los profesionales españoles


LA DISCIPLINA ENFERMERA metodológicos con los que se lleva a cabo esta contri
bución y la intervención en el campo enfermero.

Los conocimientos constitutivos de la disciplina son el


Se entie n d e como disciplina enfermera la cien­ objeto de este texto y las explicaciones científicamente
cia enferm era. Como profesión enfermera se
construidas constituyen el conjunto ordenado de saberes,
e n tiend e el ejercicio o práctica de la enfermería
basado en ese conocimiento. sistemático e interrelacionado que explica el objeto de la
enfermería: la persona, que en constante interacción con
su entorno tiene problemas de cuidados de salud.

Para Donati [24], la disciplina y la profesión no siempre


avanzan a un mismo ritmo. Esto ha ocurrido con la evo­ En la realidad actual el objeto de estudio de la
lución de ambos en la enfermería. La disciplina, en rela­ disciplina lo constituyen:
ción con la profesión, puede sufrir retraso en algunos • El marco teórico enfermero: las teorías y los
aspectos, ir por delante o ser distorsionada. En la profe­ modelos de cuidados enfermeros.
sión ocurre algo similar, se pueden estar desarrollando • El método para aplicarlos en la práctica enfer­
prácticas y presentando problemas que no se contem­ mera: el proceso de atención de enfermería.
plen en la teoría y análisis disciplinares.

El verdadero avance está en armonizar y hacer recípro­


cos los adelantos en ambos campos (Ver Cuadro 5). El inicio de la ciencia enfermera se puede situar en la
Para el desarrollo del todo es necesario el desarrollo de década de 1950, que es cuando se empieza a desarro­
las partes, por tanto, el progreso de la enfermería sólo llar la investigación en el campo de la enfermería. Los
es posible con el crecimiento armónico entre conoci­ resultados de las investigaciones se plasman en las teo­
mientos e intervenciones, entre la teoría y la práctica. rías enfermeras o modelos de cuidados, que ofrecen las
explicaciones teóricas de las situaciones enfermeras y
La construcción de la disciplina enfermera pasa por el el método con el que deben ser aplicados en la prácti­
establecimiento de un marco teórico que contemple la ca, y cuyos resultados validan los conocimientos expre­
finalidad y el sentido de la enfermería -su contribución sados en las construcciones teóricas.
a la salud de las personas y los grupos-, los aspectos
Si bien no se va a entrar aquí en el desarrollo de las
teorías y los métodos enfermeros, por ser ampliamen­
te tratados en capítulos posteriores, sí que se va a pro­
Cuadro 5. La disciplina enfermera fundizar en un elemento imprescindible para el desa­
rrollo de la disciplina: la licenciatura en enfermería [25],
por ser ésta fundamental para la investigación enfer­
mera. La licenciatura en enfermería es una realidad

'
r desde mediados del s. XX en EEUU y, posteriormente,
en el Reino Unido, algunos países de Iberoamérica, etc.
Profesión
La licenciatura representa la posibilidad de la investiga­
Disciplina
enfermera enfermera ción en el campo de la enfermería y el desarrollo disci­
plinar.

Desde que los estudios se estructuran dentro de la uni­


versidad se argumenta sobre el desarrollo del segundo
y tercer ciclo de formación enfermera, para contemplar
Conocimiento Práctica
enfermero enfermera así la formación y la capacitación investigadora de la
enfermería y de los profesionales [26, 27].

En las sociedades actuales, con cambios e innovaciones


t permanentes v con una necesidad constante de Drofun-
mente necesario un nivel de formación que capacite
para la investigación. Los resultados van a permitir ofre­
cer las respuestas más oportunas a las demandas socia­
les de su área de competencia, y esto sólo es posible a
través de la licenciatura y del doctorado en enfermería.

Para Blasco [28] es imprescindible estructurar la forma­


ción enfermera en la universidad en tres ciclos y hace
la propuesta siguiente: un primer ciclo básico que capa­
cite para la práctica, que se correspondería en el con­ Imagen 7. El Plan de Convergencia de la UE pretende unificar los
texto europeo con el de enfermera generalista; un estudios universitarios a nivel europeo. Sede del Parlamento
Europeo, Estrasburgo
segundo ciclo que capacite para la gestión y la ense­
ñanza con un amplio contenido (alrededor de un 50%)
sobre teorías, modelos, profundización en cuidados,
etc., y otro 50% que proporcione instrumentos para la Escuelas Estatales de Enfermería y tomado como refe­
gestión y forme sobre el cuidar y, finalmente, un tercer rencia para los proyectos posteriores, como el de la
ciclo que faculte para investigar y permita progresar en Universidad Autónoma de Madrid y el de la Universidad
la ciencia enfermera. de Zaragoza. Este proyecto coincide en lo sustancial con
la propuesta de Blasco antes mencionada. Sin duda, lo
Actualmente se cuenta con un nivel de desarrollo pro­ que acaba de iniciarse deberá culminar con el reconoci­
fesional y disciplinar que está dando lugar a una miento de los títulos propios como título oficial y su
corriente de opinión materializada en diferentes traba­ transformación en máster siguiendo las recomendacio­
jos, propuestas y acciones que propugna el desarrollo nes de la Unión Europea para la convergencia de los
de la licenciatura como título propio. En los inicios del planes de estudio universitarios. Será entonces cuando
año 2000 se empieza a desarrollar la licenciatura como se pueda profundizar en el desarrollo disciplinar: esto
titulo propio en las universidades de Alicante, Huelva y contribuirá al desarrollo profesional y éste, a su vez,
Tarragona, con un proyecto desarrollado inicialmente repercutirá en la mejora de los cuidados enfermeros y
en la Universidad de Alicante y posteriormente asumi­ en la aportación a las mejoras de la salud de las perso­
do en lo esencial por la Conferencia de Directores de las nas y los grupos.

| RESUMEN
• Se ha relacionado la evolución y consolidación de la enfermería como profesión y como disciplina con la
evolución de la construcción del conocimiento enfermero, la formación estructurada y la práctica d e los
cuidados, por ser los elementos que caracterizan a las profesiones.

• A lo largo del s. XX se ha producido en el Reino Unido y en EEUU un desarrollo espectacular de la profe­


sión y de la disciplina. En España, los avances más significativos tuvieron lugar en las últimas décadas y
han sido consecuencia de la evolución general y la del propio colectivo.

• Se tiene un interés muy especial en poner de manifiesto que la evolución y los cambios que se van pro­
duciendo en la enfermería están determinados más por el contexto social y cultural general que por los
esfuerzos concretos de personas o grupos, pues es el contexto general el que posibilita o dificulta la evo­
lución, como por ejemplo se ha tratado de constatar en relación con el análisis de las aportaciones de
Florence Nightingale o en la implicación de diferentes grupos en el curso de nivelación de conocimientos.

/
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