Los derechos económicos, sociales y culturales incluyen los
derechos a la alimentación, a la vivienda adecuada, a la
educación, a la salud, a la seguridad social, a la participación en la vida cultural, al agua y saneamiento, y al trabajo. Para más información, por favor consulte: Preguntas Frecuentes sobre los Derechos Económicos, Sociales y Culturales Que 800 millones de personas sufran malnutrición crónica o que más de 100 millones de menores no tengan acceso a la educación primaria no son desgraciadas realidades, sino un escándalo para los derechos humanos.
Todos los derechos humanos son indivisibles e interdependientes. Las
violaciones de los DESC (por ejemplo, no proteger los derechos sobre las tierras de los pueblos indígenas, negar los derechos de educación a las minorías y prestar servicios de atención médica de manera no equitativa) a menudo están relacionadas con violaciones de los derechos civiles y políticos en forma de negaciones reiteradas. Del mismo modo que para el pleno disfrute del derecho a la libertad de expresión es necesario concentrar esfuerzos en favor del derecho a la educación, para el disfrute del derecho a la vida es preciso tomar medidas encaminadas a la reducción de la mortalidad infantil, las epidemias y la malnutrición. Constitución política de la República 1956 La Constitución Política de la República de Guatemala de 1956 fue aprobada el 6 de febrero de 1956 y luego promulgada el 1 de marzo de 1956 por el gobierno de facto liberacionista del coronel Carlos Castillo Armas, a fin de que la situación del país consiguiera una posición intermedia entre las reformas sociales y laborales que había decretado el período de la Revolución de Octubre y el retorno al sistema semifeudal que estaba vigente durante el gobierno del general Jorge Ubico Castañeda. La Constitución también reconoció la personalidad jurídica de la Iglesia Católica, con derecho a adquirir y disponer de sus bienes, se autorizó el culto privado y público, se admitió la enseñanza religiosa optativa en escuelas estatales y el derecho de asociación con propósitos religiosos pero con prohibición a intervención en a política. La Constitución de 1956 fue derogada en 1963, tras el golpe de Estado que el Ministro de la Defensa Enrique Peralta Azurdia perpetró en contra del entonces presidente Miguel Ydígoras Fuentes cuando este último insinuó que permitiría al expresidente revolucionario Juan José Arévalo ser candidato presidencial en las elecciones que se avecinaban.
Constitución política de la República de 1965
El 5 de mayo de 1966 cobró vigencia la Constitución Política de la República que había sido promulgada el 15 de septiembre de 1965, durante el gobierno militar de Enrique Peralta Azurdia. La Asamblea Nacional Constituyente formada un año antes quedó disuelta al tomar posesión el Congreso Nacional ese mismo día.
La nota periodística de Prensa Libre del día 6 de mayo de 1966 daba
detalles del comienzo de labores del Legislativo: “Este congreso, como depositario de la confianza del pueblo de Guatemala, tiene plena conciencia de su alta responsabilidad y sabrá corresponder a ella, poniendo al servicio de ese pueblo todos los esfuerzos y sacrificios que fueren necesarios, para cumplir con el alto mando que se le ha otorgado”.
Constitución política de la República 1985
La actual Constitución Política de la República es la ley suprema de la República de Guatemala, en la cual se rige todo el Estado y sus demás leyes y recoge los derechos fundamentales de su población. Fue creada 31 de mayo de 1985 por la Asamblea Nacional Constituyente de ese año, convocada por el entonces Presidente de facto de la República de Guatemala, general Óscar Humberto Mejía Víctores, tras las elecciones a la Asamblea Nacional Constituyente celebradas el 1 de julio de 1984. Dicha Carta Magna se hizo efectiva el 14 de enero de 1986. Fue suspendida el 25 de mayo de 1993 por el entonces presidente de la República de Guatemala Jorge Antonio Serrano Elías; reinstaurada el 5 de junio de 1993 acto seguido del derrocamiento del presidente; enmendada en noviembre de 1993. Las reformas constitucionales de 1993 incluyeron un incremento en el número de Magistrados de la Corte Suprema de Justicia de 9 a 13. Los períodos de cargo para presidente, vicepresidente, y diputados del Congreso de la República de Guatemala fueron reducidos de 5 a 4 años; para los magistrados de la Corte Suprema de Justicia de 6 a 5 años, y se incrementaron los períodos de los alcaldes y concejos ciudadanos de 2 1/2 a 4 años. El presidente y vicepresidente son elegidos directamente por medio de sufragio universal y están limitados a un período. Un vicepresidente puede ser candidato a presidente después de 4 años fuera del cargo, toda vez no haya ejercido el cargo de presidente por un tiempo mayor a un año. Los magistrados de la Corte Suprema de Justicia son elegidos por el Congreso de la República de Guatemala de entre los integrantes de una lista enviada por los decanos de las Facultades de