Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Por supuesto, así como la Torá nos prohíbe hablar Lashon Hará/lengua malvada, así también nos prohíbe escucharlo. (Lo
cual tiene mucho sentido – ya que si yo no puedo escuchar Lashon Hará, ¡entonces tú no puedes hablarlo!). Al escuchar
palabras negativas sólo alimentamos nuestro lado negativo y nos hacemos insensibles al efecto que tienen sobre los
demás.
A partir de esto, podemos entender una sección de la parashá de esta semana, Levítico 13:45-46. La Torá dice que
cuando a alguien se le diagnosticaba Tzarat, tenía que salir de los límites de la ciudad y gritar "¡estoy contaminado!", a
cualquier persona que se le acercara. El castigo es medida por medida: si promueves la división entre los demás,
entonces también sufrirás la división al separarte de la comunidad. (una cuarentena espiritual, hasta que haya sanidad).
Mucha gente comete el error de pensar que la prohibición de la Torá acerca de hablar negativamente se limita sólo a
decir falsedades y mentiras. Pero esto no es así. El mentir se define como una prohibición distinta, expresada en el libro
de Shemot (Éxodo 20:13, 23:7).
Lashon Hará mientras tanto, es la prohibición de decir cualquier cosa negativa o peyorativa acerca de otra persona –
¡aún cuando sea verdad!
Para que tomemos conciencia, aquí hay algunas formas de Lashon Hará que comúnmente utilizamos:
1. "¡Pero si es verdad!"
2. "¡Pero yo ni siquiera mencioné su nombre!"
3. "A mi no me importaría si alguien dice lo mismo acerca de mí"
4. "De todas maneras, ¡todo el mundo ya lo sabe!"
5. "A él no le importaría"
6. "Yo se lo diría incluso en su cara"
7. "¡Sólo estaba bromeando!"
8. "Otra vez lo mismo..."
9. (No decir nada... pero demostrar algo con un gesto)
10. "La gente de esa ciudad es tan..."
11. "¡Lo digo por una buena razón!"
12. "Esto que voy a decir puede ser Lashon Hará, pero..."
13. "Vamos, puedes decírmelo..."
¡Es un problema de baja autoestima! Cuando una persona tiene baja autoestima, tiene dos opciones, 1) hacer el
esfuerzo de auto-construirse, de levantarse a si misma (¡y esto requiere de mucho trabajo!), o, 2) Bajar a los demás. El
razonamiento es muy simple, si puedo bajar a los demás, entonces ¡yo no me veo tan mal en comparación a ellos! Pero
ese es el camino fácil, la "subida rápida". ¿Acaso es ese el tipo de persona que quieres ser?
El primer paso para evitar Lashon Hará es reconocer nuestras propias faltas y comprometernos a mejorarlas. Cuando
acepto que 'yo' soy el responsable de mis insuficiencias, entonces, asimismo seré menos crítico y más tolerante con los
demás.
Si sientes que tu autoestima o la de alguien más está pasando por un mal momento, intenta concentrarte en las virtudes
y no en los defectos. Eso te ayudara a salir de la negatividad.
La Torá dice: Si te sientes mal, no elijas la salida fácil. ¡Trabaja duro y mejórate a ti mismo!
No hay mejor momento que hoy para llevar a cabo este desafío. Nos encontramos en los tiempos de la redención. En
Pesaj celebramos nuestro surgimiento de la esclavitud hacia la libertad. También en esta época del año contamos el
omer, el camino hacia la recepción de la Torá en el Monte Sinai. Ahora es el momento de romper el disentimiento y la
división que atacan a nuestro pueblo.