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Sanidad Sexual – USTED COMO

MINISTRO DE SANIDAD SEXUAL

PREPARARSE PARA MINISTRAR SANIDAD


Usted Como Ministro

1. Pídale al Señor que le muestre cualquier cosa en su propia vida que pueda dificultar el
trabajo que Él quiere hacer a través suyo para ayudar a otros. Responda haciendo lo que
sea que Él le pida.

2. Pídale al Señor que le revele el orgullo que yace oculto dentro suyo de manera que pueda
ministrar a un mismo nivel a aquellos que se han involucrado en actividades depravadas.
Muéstreles amor y respeto.

3. Pídale al Señor que le dé el corazón de siervo de Cristo. Continúe pidiendo hasta que
haya recibido tal corazón y haya cambiado verdaderamente.

4. Profundice su propia intimidad con el Señor de manera que El brille a través suyo,
trayendo esperanza a aquellos que usted ministra.

5. Incremente, a través de la práctica, su facilidad para oír la voz de Dios.

6. Pida a Dios que le dé una pasión por Jesús y por las cosas que le apasionan a Él. Pídale al
Padre que haga que usted sienta lo mismo que El siente por Jesús.

7. Pídale al Señor que no permita que usted ministre con un corazón codependiente, uno
que busca llenar sus propias necesidades disfuncionales a través del ministerio a los otros,
dependiendo de la necesidad de otros para sentirse seguro. Si Dios le muestra que usted
tiene tendencias de codependencia, busque un buen consejero cristiano para resolver ese
problema de manera que usted pueda ministrar bien.

8. Cuando ministre, dependa de Dios para que le dé revelación y poder. No dependa de su


propio entendimiento. Pídale a Dios que le muestre cuando usted esté dependiendo de sí
mismo.

9. Aprenda cómo es la guerra espiritual y úsela. Lea los libros escritos sobre este tema por
autores reconocidos. Estudie y aprenda sobre los temas relacionados con la sexualidad. Para
esto recomendamos los libros «Perversiones Sexuales» y «Sexualidad y Erotismo en la
Pareja» de Bernardo Stamateas, y «Sanidad Sexual» de David K. Foster, entre otros.
10. Especialícese en comunicar «esperanza» y «certidumbre de transformación». Pase
tiempo hablando acerca de quiénes son ellos en Cristo, el propósito de la vida, el Reino de
Dios, y la bondad y misericordia de Dios. Continúe mostrándoles el camino hacia el Padre y
el hecho de que su sanidad vendrá únicamente a través de una búsqueda diligente de una
relación de intimidad con El.

Extracto del libro “Sanidad Sexual”

Por David K. Foster

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