Está en la página 1de 7

Décima Sesión

¡Lo logramos! ¿Lo logramos?

Llegó el momento. ¿Por qué pensar positivo?


Esta  es  la  última  sesión  del  Taller  de  Pensamiento  Positivo. 
Positivo Quiero 
agradecerte tu trabajo personal y seguimiento a esta experiencia. Espero 
sigas al pendiente de nuevos temas. Y cómo lo prometí, 10 de las mejores 
actividades  de  trabajo  que  me  han  enviado  serán  seleccionadas  para 
asistir a un taller presencial de Pensamiento Positivo totalmente GRATIS.
Puedes aún mandar tu trabajo. En esta ocasión será presentar tus puntos
de conclusión del presente taller de Pensamiento positivo a través de estas
10 lecciones. Tienes toda la próxima semana hasta el 30 de Junio para
hacerme llegar tus conclusiones y publicarles la lista de las mejores
actividades.
Comencemos:
Debemos pensar positivamente, porque lo que pensamos lo
visualizamos y se manifiesta en el mundo físico. No por arte de
magia, sino porque, de lo que pensamos, hablamos. De lo que
hablamos, hacemos. Y de nuestros actos viene la calidad de
nuestra vida.
2

No debemos expresarnos con palabras pesimistas en relación a lo


que acontece en nuestra vida. Cuando nosotros comprendemos el
poder del pensamiento, se refleja en nuestro interior. El poder
ilimitado esta dentro de mí. Dios nos ha dado ese poder y aceptarlo
parece ser lo más difícil.

Repite conmigo:
"Yo confío en mi poder personal. Soy creador de mi éxito. Mi mente esta en
completa paz“

El éxito esta en mi mente


Si eres de los pesimistas que siempre se quejan de la situación. "Si
pudiera hacer esto o aquello" y después de hacerlo seguimos sin
ser felices… La felicidad proviene de tu actitud mental. y se expresa
fuera de nosotros.

Repite conmigo:
"Hoy yo acepto la felicidad en mi mente"

¿Cómo anular pensamientos negativos en mi mente?


Para anular pensamientos negativos siéntate en forma cómoda.
Cierra tus ojos y repite pausadamente: “LA PAZ DE DIOS ME
ENVUELVE Y YO ESTOY TRANQUILO… EL AMOR DE DIOS ME RODEA Y
ME LIBERÁ DE TODO PENSAMIENTO NEGATIVO Y PREOCUPACIÓN. YO
ESTOY EN COMPLETO BALANCE Y EN COMPLETA PAZ”

El poder del pensamiento positivo


Cuando escuchamos el canto de un pájaro, cuando vemos la
sonrisa de nuestros hijos, cuando nuestro cuerpo suda después de
hacer ejercicio, cuando dedicamos tiempo para dar y recibir amor,
estamos sembrando gran cantidad de pensamientos positivos.
3

Toda dificultad que surje en nuestra vida es una oportunidad que se


nos brinda para generar más amor. Cada persona o momento difícil
es una oportunidad. Derrama sobre estos, mucho amor. Ama y
bendice todo lo que tengas y generarás más energía positiva.
Lee con atenció
atención la siguiente historia

MALEZA O FLORES

Cuando llegó Juan, Pedro estaba protestando:


- Pero no puede ser. ¿Por qué me pasan estas cosas a mí?
Luego mirando hacía el cielo preguntó:
- ¿Por qué la vida es tan injusta conmigo?
No entendiendo cuál era el problema, Juan le pidió que le contara.
- Es que, -empezó Pedro- hace más de cuatro meses y poco a
poco me fui convirtiendo en una persona con pensamiento
positivo. He ido cambiando mi actitud hacia la gente. Soy más
solícito, más educado, más sensible a los problemas de los demás.
En fin lo que se podría llamar una "buena persona". Y mira lo que
obtengo a cambio… Y le mostró la carta documento que había
recibido de su ex socio, y a continuación le contó la historia de
cómo se separaron.
Juan lo escuchó tranquilo y luego le preguntó:
- Y , ¿en qué mes se produjo ese conflicto con tu ex-socio, y qué
dio origen a la carta documento?.
Luego de pensar un poco Pedro contestó:
- Hace aproximadamente unos seis meses. Fue cuando estaba tan
mal anímicamente, tan enojado con todos y con razón. ¿Te
acuerdas Juan, cómo estaba yo en esa época?
Juan asintió con la cabeza, y Pedro siguió:
- Fue entonces cuando le dije a mi ex socio unas cuantas
verdades que tenía atoradas en la garganta -luego se quedó
pensando un poco y agregó- o por lo menos cosas que yo creía en
ese momento que eran verdades, y le demostré que cuando me
hacía enojar, yo podía ser más malo que él.
4

- Si, fue hace unos seis meses, -se dijo para sí, pensativo, luego
continuó.
- Si me acuerdo, porque al mes siguiente empecé a leer ese curso
por Internet sobre pensamiento positivo.
Luego Pedro volvió al presente, y como despertando preguntó:
- ¿Qué importancia tiene cuando sucedió?, lo importante es que
ahora, justo ahora que estoy cambiando de actitud me sucede
esto...
Juan lo interrumpió y le dijo:
- Realmente me pregunto, Pedro, si tú puedes, en tu enojo,
distinguir entre plantar flores o maleza.
- Déjate de metáforas Juan, -contestó Pedro- la realidad es que
estoy empezando a creer que todo esto del pensamiento positivo,
de ser bueno, de perdonar a los demás, no sirve para nada.
Y Pedro empezó a caminar nervioso por la habitación, luego
agregó:
- Estoy empezando a creer de nuevo que esta vida es una selva y
que hay que poner cara de perro y mostrar los dientes, para que
el otro no te muerda. Realmente estoy pensando en ir a buscar a
mi ex socio y agarrarlo del pescuezo. Apretó la carta , y la tiró al
bote de basura.
- Me parece que estás un poco alterado -contesto Juan, mientras
se agachaba y sacaba del cesto la carta documento y la planchaba
como si fuese un blanco pañuelo.
- ¿Por qué la sacas de ahí? Déjala en el cesto la basura, mañana
voy y lo agarro a trompadas -casi gritó Pedro.
- Comportarte como un animal no te va a servir de mucho. Esta
es maleza que tu sembraste hace unos cuantos meses, -le dijo
Juan, mientras le mostraba la carta- y llegó el momento de la
cosecha.
Luego se quedó como pensando y agregó:
- Pero, si tú crees que el mejor lugar es el cesto de basura, así
será. -y volvió a hacer un bollo con la carta y la tiró de nuevo a la
basura.
5

- Basta de tonterías Juan, ya entendí que contigo no se puede


ganar. Ya se que quieres contarme una de tus metáforas e
intentar que, de ese modo, yo cambie de actitud. Y como haga lo
que yo haga, finalmente me la vas a contar, cuéntame de una
vez, así terminamos rápido y luego voy a agarrar a trompadas a
mi ex socio.
Y Pedro se sentó con aire desafiante mirándolo a Juan, a los ojos
y apoyando su cabeza entre sus puños cerrados.
Juan se acomodó feliz, y empezó:
- Hace mucho tiempo y en un país muy lejano...
Pedro interrumpió:
- Ya que te tengo que aguantar, ¿no puedes saltarte esa parte
inicial e ir directamente al grano?.
Juan hizo como que no escuchaba y siguió:
- Sí.. En un país muy lejano había dos amigos, uno se llamaba
Juanito y el otro Pedrito.
- Perdoname si te interrumpo de nuevo, -dijo Pedro- pero además
de predecible en el modo de contar, ahora ni siquiera eres original
con los nombres.
Juan siguió:
- En ese país lejano un labrador llamado Pedrito estaba
protestando, mientras miraba su cosecha cuando llegó su amigo
Juanito. Este labrador decía:
- Pero no puedes ser. ¿Porqué me pasan estas cosas a mí?
Luego mirando hacía el cielo preguntó:
- ¿Por qué la vida es tan injusta conmigo?
El amigo Juanito, no entendiendo cuál era el problema, le pidió
que le contara. - Es que, -empezó Pedrito- hace más de cuatro
meses y poco a poco dejé de sembrar maleza, y me he puesto a
plantar flores. En fin, me fui convirtiendo en lo que se podría
llamar un "buen sembrador de flores". Y mira lo que obtengo a
cambio.
Y le mostró la hermosa maleza que crecían lozana en el campo.
- ¿No te das cuenta que lo único que crece en mi campo es
maleza?
6

Mira el campo de al lado, está lleno de flores, -mientras lo


señalaba con su mano extendida. Luego suspiró, se secó con su
pañuelo la frente, bajo el sol del medio día, y agregó:
- No es que yo sea envidioso, pero ¿te parece justo que él coseche
flores mientras yo con el mismo esfuerzo, que digo con el mismo,
con más esfuerzo que él, lo único que cosecho es maleza?
El amigo Juanito lo escuchó tranquilo y luego le preguntó:
- Dime, ¿en qué mes fue que plantaste las últimas semillas de
maleza?
Y luego de pensar un poco Pedrito contestó:
- Hace, aproximadamente unos seis meses. Fue cuando me sentía
tan mal anímicamente que plantaba la primer semilla que
encontraba a mano, o quizás la peor semilla que encontraba.
Y a modo de disculpa, dijo:
- Es que estaba tan mal, tan enojado con todos, y con razón. ¿Te
acuerdas Juanito cómo estaba yo en esa época?.
Juanito asintió con la cabeza, y Pedrito siguió:
- Fue entonces que planté casi todo el campo, con todo mi coraje,
con semillas de maleza.
- Si fue hace unos seis meses, -se dijo para sí, y se rascó la
cabeza pensativo, luego continuó:
- Si me acuerdo porque al mes siguiente empecé a leer ese libro
que me trajiste sobre cómo cultivar flores, y luego empecé con un
curso en el pueblo de cómo lograr buenas plantaciones.
- ¡Basta! -gritó Pedro, levantándose enojado- esta metáfora es
estúpida, sin sentido, predecible. No existe un labrador, un
sembrador como el que tú cuentas. Hasta el más tonto se da
cuenta de que si sembró maleza, va a cosechar maleza, aunque
ahora se ponga a sembrar flores.
Pedro hizo una pausa, se sentó con aire triunfante, pues podía por
una vez demostrarle a Juan que sabía más que él, y luego con voz
seria afirmó:
- Hay un dicho muy antiguo que dice "cosecharás lo que
siembras" y es tan tonta tu metáfora que me parece ver a ese
estúpido labrador diciéndole a la maleza: ¡Que hermosa flor
hubieses sido si yo te hubiese sembrado distinto!.
7

Y Pedro si rió con ganas, como no lo hacía desde hace mucho


tiempo, mientras repetía:
- ¡Que labrador más estúpido!, ¡Que labrador más estúpido!
Luego, de golpe, se quedó como paralizado, se le puso toda la
cara roja, se levantó, se fue directo al tacho de basura, sacó la
carta documento y mientras la planchaba como si fuese un blanco
pañuelo, se puso a pensar en cómo solucionar el problema
usando "pensamiento positivo" y todos los demás conocimientos
que había aprendido durante esos meses. Luego suspiró, miró
detenidamente la carta, y mientras se reía de sí mismo se dijo:
- ¡Que hermosa planta hubieses sido yo si te hubiese sembrado
distinto!

Me despido de ti esperando que apliques todo lo


visto. Te invito a estar pendiente del próximo taller.
Cómo siempre en espera de tu respuesta.

Tu Amiga y cómplice
Blanca Mercado

CONTRATERAPIA DESARROLLO HUMANO


Av. Salto del Agua 2223, Jardines del Country, Guadalajara, Jalisco. Tel. (33) 38230606

También podría gustarte