Está en la página 1de 236

VIVIENDA

INFONAVIT

1
VIVIENDA INFONAVIT 54 Tierra vacante
Alfonso Iracheta
VOL. 3 NÚM. 1 Políticas de dispersión, saturación y crecimiento de zonas
periféricas de las ciudades mexicanas.

58 Densidad urbana
Sara Topelson
Premisas sobre la densidad en zonas centrales
de la ciudad.

FLUJOGRAMA

62 Densidad(es)
5 PRÓLOGO Ximena Rios-Zertuche
David Penchyna Habitantes por hectárea en zonas metropolitanas y
vivienda desocupada en México.
7 PRESENTACIÓN
Carlos Zedillo

CASOS DE ESTUDIO
Ensayos fotográficos sobre las reglas, normas,
INVESTIGACIÓN excepciones y formas de la densidad urbana.

10 Ciudades densas 66 Urbanismo salvaje


Néstor García-Canclini Santiago Arau
¿Ruinas con porvenir?
86 Alta densidad
12 Densidad múltiple Jorge Taboada
Jorge Tejeda
Habitación y supermanzana: de centro a conjunto urbano. 96 Arquitectura libre
Adam Wiseman
16 Unidad Independencia
Enrique X. De Anda 104 Vivienda retratada
Equipamiento colectivo, diversidad habitacional, salud, Onnis Luque
deporte e integración plástica.
112 Palo Alto
22 Villas Olímpicas Livia Radawanski
Concepción J. Vargas Pablo Landa
Residencias y villas olímpicas con motivo del cincuenta
aniversario de la XIX Olimpiada en México. 116 Unidades independientes
Luis Young
30 La ciudad en la ciudad
Juan José Kochen 122 Regeneración
Infonavit constructor. Sobre los primeros conjuntos Jaime Navarro + Sandra Pereznieto
habitacionales proyectados por Infonavit entre 1972 Alonso de Garay / Taller ADG
y 1992.

38 Vivienda y espacio público


Ernesto Alva + Cecilia Solís CONVOCATORIA PARA ENSAYOS
Crecimiento, transformación y contención de la ciudad a 133 Urbanización desordenada y periferia
partir del espacio colectivo de la vivienda. Elisa G. Garibay
El ideal de vivienda de interés social-ambiental.
44 Paisaje natural-paisaje urbano
Jesica Amescua 137 La ciudad intensa
Origen, crecimiento, evolución, transformación Lucía Martín
sociohistórica y ordenamiento territorial en Valle de Estrategias urbanas de zonificación y densificación
Chalco Solidaridad. a partir de vivienda colectiva.
142 El trazo y el calco 178 Laboratorio de Investigación y Experimentación
Juan Pablo Montes Práctica de Vivienda Infonavit
Reflexiones sobre el método y modelo de producción Carlos Zedillo
de vivienda. Desarrollo experimental para la producción
de vivienda social.
145 Mi casa, mi negocio
Leticia Peña 180 Taller de Vivienda Social Sostenible
Tipologías híbridas y propuesta de casa-negocio Karla Aguilar
para el futuro habitacional. Enseñanza y formación académica a través de ejercicios
de habitabilidad y sostenibilidad.
148 Ciudad vacía
Eduardo Zaragoza 184 Redensificación urbana
Territorialización y redensificación para el análisis Julia Gómez
de la vivienda urbana. Proyecto de resistencia, transformación urbana
y vivienda asequible.

190 Territorio de gigantes


VINCULACIÓN Dellekamp Arquitectos, Dogma, HHF Architekten, MAIO
Architects, MOS Architects y Tatiana Bilbao Estudio
152 Elasticidad e informalidad Plan maestro de vivienda de colaboración multidisciplinar
Armando Hashimoto y desarrollo urbano en Aguascalientes.
¿La ciudad informal es consecuencia de la densidad?
194 Habitar el territorio. Resiliencia y autoproducción
154 Vivienda al centro Sexto Concurso de estudiantes. Habitar el territorio.
Pablo Vaggione Resiliencia y autoproducción.
Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y vivienda
en México.

156 Foro Urbano Mundial RADIOGRAFÍA


Luis Jeremías Diez-Canedo 204 Métrica y rectificación
La participación de Infonavit en el Foro Urbano Mundial Diego Rabasa
convocado por ONU-Hábitat. ¿Qué entendemos por densidad?

158 La casa entre la historia 207 El sueño de la densidad


Juan Fronjosá + Camilo Restrepo + AGENdA Rodrigo Díaz
Memoria colectiva, centros históricos y vivienda Sobre la traza urbana, la densificación y la movilidad
intraurbana. en las ciudades.

162 Pabellón comunitario 210 Habitabilidad


Al Borde + Taller General José María Gutiérrez Trujillo (1924–2018)
Reutilización del Pabellón Infonavit en Hábitat III. Sumar viviendo.

164 Plan Jojutla


Jesús Aguirre
Proyectos de reconstrucción en Morelos tras el sismo MEMORIA VIVIENDA
del 19 de septiembre de 2017. Artículos históricos sobre la revista Vivienda, primera
y segunda época.
172 Riesgo sísmico y precios de la vivienda
Emilio Gutiérrez + María E. Rodríguez 212 Saturación de lotes urbanos baldíos
+ Kensuke Teshima Mario Schjetnan
Sobre los créditos hipotecarios, zonas sísmicas y
ubicación de las viviendas financiadas por Infonavit. 222 Los centros experimentales de vivienda
Enrique Linares + Enrique Ortiz + Fermín Estrella
176 Del territorio al habitante
José de Villar
Proyecto de investigación, publicación y exposición
sobre la vivienda rural. 233 COLABORADORES
David Penchyna

PRÓLOGO

De 2013 a lo que va de este año, el Instituto del Fondo La vivienda requiere estrategias de ahorro y rendimiento,
Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) ha así como mecanismos de asociación, vinculación y alianzas
entregado 3.1 millones de créditos. Al concluir 2018 se pre- estratégicas; es decir, de una lectura más amplia del sector.
vé que sean alrededor de 3.5 millones, por lo que se trata En más de cuatro décadas, la cantidad de empresas que
del sexenio en el que más financiamientos se han entre- desarrollan vivienda en el país pasó de aproximadamente
gado en los 46 años de historia del Instituto. Tan sólo en 200 a 3 mil. Los tiempos cambian y los actores evolucio-
2017 se otorgaron 533 mil 865 créditos, es decir, 68 mil por nan. El Infonavit ha fomentado nuevas formas de valor patri-
arriba de la meta anual. monial compartido. Recientemente lanzamos el programa
Hoy tenemos un Infonavit más fuerte, más útil y más “Cambiavit”, una alternativa para cambiarse de casa aún
cercano a la gente; un ejemplo de equidad para la vivienda sin haber terminado de pagar la hipoteca, y con mejores
en nuestro país. Y a pesar de este dinamismo, más de 16 condiciones de crédito, a fin de que los acreditados puedan
millones de derechohabientes aún no han ejercido su dere- acceder a una mejor solución de vivienda.
cho a un crédito; además, el éxito de la reforma laboral nos A lo largo de los años, el monto máximo del crédito para
indica que la demanda seguirá creciendo. Por ello, este nú- financiamiento de vivienda ha crecido en más de 230 por
mero de la revista Vivienda Infonavit muestra los desafíos ciento hasta llegar a 1.8 millones de pesos. Hemos procurado
de la densidad, el crecimiento urbano y la movilidad. mecanismos de prosperidad y bienestar, ya que para cons-
En Infonavit estamos preparados para este gran reto, truir un país mejor se requieren mejores condiciones de em-
pues actualmente se administra más de un billón de pe- pleo, estabilidad económica y confianza en las instituciones.
sos del ahorro de los trabajadores, lo que es equivalente a En este tercer volumen refrendamos la labor sustantiva
una cuarta parte del Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR). del Centro de Investigación para el Desarrollo Sostenible
El Instituto ha pagado un rendimiento a la Subcuenta de (CIDS) a través de la revista Vivienda Infonavit, que mues-
Vivienda de más de 317 mil millones de pesos; de hecho, tra los desafíos de la densidad con miras a la implementa-
en 2017 se concluyó con el mejor rendimiento nominal de ción de la Agenda 2030: la vivienda en el centro del cumpli-
los últimos 13 años, que fue de 8.3 por ciento. miento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

5
6
Carlos Zedillo

PRESENTACIÓN

Durante las últimas tres décadas, la expansión territorial en México


ha prevalecido sobre el crecimiento demográfico, generando ciuda-
des extensas y de baja densidad. Esta gran expansión afecta la in-
tegración de servicios públicos, el medio ambiente y la calidad de
vida de las personas, además del desarrollo inadecuado de la ciu-
dades, causante de problemáticas de movilidad, sostenibilidad y co-
hesión social.
Algunos de los aspectos que tuvieron mayor influencia en estos
procesos fueron la migración masiva del campo a la ciudad durante
los años cincuenta y sesenta; y la promoción del otorgamiento ma-
sivo de financiamiento y producción de vivienda de baja densidad
en las periferias sin tomar en cuenta conceptos como las zonas de
riesgo, el uso eficiente de la tierra y el acceso a fuentes de empleo,
transporte y servicios, entre otros.
La política de vivienda actual se abordó con base en un enfoque
integral entre la vivienda y el territorio para controlar la expansión,
consolidar las ciudades, reducir el rezago de vivienda, rehabilitar el
parque habitacional existente y promover sistemas de movilidad sos-
tenible. Esta política generó nuevos retos alrededor de la creación de
instrumentos para fomentar un modelo de desarrollo urbano como
pieza central del crecimiento económico.

7
Aunque la densificación urbana ofrece una vía apropiada para ha-
cer frente a los problemas de expansión y dar solución a la consoli-
dación de las ciudades, como cualquier política pública depende de
un buen análisis para su implementación y monitoreo, además de la
coordinación entre diversas instituciones, de tal forma que se genere
un equilibro integral sostenible entre población, servicios, comercio e
infraestructura.
Aquí reunimos casos de estudio para el análisis crítico y diagnós-
tico sobre la vivienda colectiva y el futuro de la densificación en ciu-
dades prósperas. Cuestionamos qué y cómo es la densidad, pasamos
de congestión a saturación, de gentrificación a centralización, de dis-
persión a periferia. ¿Qué estrategias son necesarias para fomentar el
acceso al suelo con equidad y asequibilidad?, ¿qué instrumentos pro-
mueven una ciudad compacta en vez de una ciudad dispersa?, ¿por
qué fomentar la construcción de vivienda agrupada o rehabilitada en
lugar de la unifamiliar?, ¿cómo se vinculan e informan los derecho-
habientes con la oferta-demanda de vivienda?, ¿la producción de vi-
vienda responde a las necesidades económicas y sociales del país?,
¿qué aspectos legales y financieros incentivan la densificación?
La tercera entrega de Vivienda Infonavit explora las definiciones,
implicaciones y retos —pretéritos y actuales— de la vivienda en cen-
tralidades urbanas sujetas a redensificación. La densidad no sólo
debe visualizarse como un asunto urbano para acumular viviendas
ni como estrategia para reducir vacíos en las ciudades; se trata del
equilibro entre la población, la infraestructura y las relaciones socia-
les en una prosperidad vinculante.

¿Cómo transformar el territorio a partir de óptimos principios de sos-


tenibilidad? El Infonavit, a través del Centro de Investigación para
el Desarrollo Sostenible (CIDS), ha liderado la implementación de la
Agenda 2030 en México, poniendo junto con ONU-Hábitat a la vivien-
da como el elemento central e integrador para el logro de lo Objeti-
vos de Desarrollo Sostenible (ODS). En el noveno Foro Urban Mundial

8
(WUF9) celebrado en Kuala Lumpur, el Instituto participó en la asam-
blea de negocios; la sesión especial sobre vivienda asequible para
todos; la conferencia sobre el análisis de datos para medir la realidad
urbana, y el diálogo abierto sobre el Índice de Ciudades Prósperas,
en el que México destaca como el país con más localidades evalua-
das en el mundo, cubriendo más del 90 por ciento de la población que
integra el Sistema Urbano Nacional (SUN).
En mayo de este año, se reconoció el diagnóstico transversal del
Instituto con el Premio Dubái en la categoría de Mejores Prácticas
de Transferencia en el Monitoreo de la Nueva Agenda Urbana y de
los ODS. Un jurado internacional calificó 89 proyectos y decidió pre-
miar el esfuerzo institucional que evaluó a 153 municipios en Méxi-
co, y que al cierre de 2018 se convertirán en 305. El índice propone
un escrutinio en el desarrollo urbano y la sostenibilidad con seis di-
mensiones: productividad, infraestructura, calidad de vida, equidad
e inclusión, sostenibilidad ambiental, gobernanza y legislación urba-
na. Esta herramienta genera nueva información y análisis que infor-
ma la toma de decisiones a nivel municipal y estandariza la medición
del desarrollo urbano. En suma, es un lenguaje común entre nuestras
ciudades para fomentar un crecimiento ordenado e incluyente.
De igual forma, en esta edición continuamos la labor de investi-
gación y generación de conocimiento con trabajos fotográficos que
inciden —positiva y negativamente— en el crecimiento urbano y los
conjuntos de vivienda en México para luego analizar las formas de la
densidad, edificada y habitada. Por último, relatamos los ejercicios
de vinculación, análisis y diagnóstico sobre la densificación como re-
sistencia al desbordamiento urbanístico. Los ensayos, producto de
una convocatoria abierta, consolidan nuestra perspectiva de amplio
espectro sobre la vocación plural de la revista, y los artículos finales
concluyen con la reflexión sobre la memoria institucional y visionaria
de quienes contribuyeron a esta notable iniciativa de divulgación crí-
tica y científica del Instituto.

P R E S E N TAC I Ó N 9
CIUDADES DENSAS

Néstor García Canclini

10
El desorden atraía tanto por su complejidad oscura como por los
imaginarios que incita. Algunos equipos reúnen a técnicos y
políticos para proyectar cambios en las ciudades divagando sobre
lo que podrían ser en 2050; otros, formados por antropólogos y
arquitectos, exploran las fantasías de los ciudadanos, que oscilan
entre sospechar catástrofes y registrar los olores y colores, los pai-
sajes y el grafiti, que distinguirán la marca de cada urbe. No me
atrae tanto cómo se narran ahora esas ciudades por sus habitan-
tes y sus turistas, sino comprender las intenciones originarias y los
desacuerdos con los que se observan años después. Veo en las
ciudades zonas donde averiguar cómo se estropean las utopías,
qué dramaturgia del desastre las reemplaza.
No pretendo dar soluciones, sino comprender los imaginarios.
Por ejemplo, cómo se vinculan las nociones arquitectónica y
antropológica de densidad para captar otros movimientos de las
ciudades, invisibles para quienes planifican. El debate urbanístico
sobre la densidad urbana está dedicado a la densidad edilicia:
qué ganamos y qué perdemos al construir más edificios de vivien-
das, oficinas y centros comerciales en zonas hiperpobladas. Si escu-
chamos a los movimientos de resistencia vecinal, los que se oponen
a la multiplicación de torres, algunos lo hacen en nombre de la
escala en que se habituaron a vivir, otros quieren detener el colapso.
Cada uno fantasea por voracidad o por miedo. Si busco cifras y
documentos es para no perderme cuando los imaginarios deliran.
La densidad de experiencias relativiza las estadísticas. Es nece-
sario mirar cómo y cuándo se viaja, qué experiencias impulsan a
habitar en una zona u otra zona de la metrópoli: según donde pue-
den escoger mejor el horario para hacer compras, la escuela en
la que inscribirán a sus hijos si los van a llevar en su propio coche
y luego irán al trabajo en transporte público o compartido.
Las experiencias de ciudad corren entre túneles de metro, co-
mer parado en el puesto de alguna esquina, esperar el Metrobús
hasta que llegue uno con lugares libres, contestar mensajes, quizá
leer o escuchar música en la red sociotécnica. Como contó una
arquitecta mexicana, antes los vecinos se encontraban en el patio;
ahora en el elevador y el estacionamiento.
¿Ruinas con porvenir?

* Fragmento de “Ciudades densas”, publicado originalmente en GARCÍA


CANCLINI, Néstor (2018) Pistas falsas, México, Sexto Piso, pp. 53–64. I N V E S T I G AC I Ó N 11
DENSIDAD MÚLTIPLE

Jorge Tejeda

12
Para que la habitación popular pueda disfrutar de todos los
servicios urbanos, en terrenos de alto valor, próximos al centro
de la ciudad y los lugares de trabajo, será necesario construir
en supermanzanas, mediante la edificación en altura, pro-
porcionada a los espacios abiertos y servicios sociales, para
evitar en el futuro, sobresaturaciones nocivas… La superman-
zana no es una manzana amplificada, de la cual difiere esen-
cialmente en su concepto. Todo el movimiento es centrífugo
porque, aparte de habitar, todas las otras funciones se desa-
rrollan fuera: el trabajo, la escuela, el mercado diario, el depor-
te, la diversión, etc. Los pequeños espacios libres del interior
no son aprovechables para el conjunto…
Por lo expuesto, la densidad de construcción, área de ocu-
pación en planta y total, y altura de edificación, son resul-
tantes de cumplir con la premisa: la densidad humana debe
ser adecuada a la demanda de espacio libre. Estas son las
bases para una de las importantes herramientas de la zoni-
ficación, el “control de la edificación”, que consiste en relacio-
nar “el área construida con el espacio abierto” estableciendo
un volumen de construcción derivado de las densidades de
máximas humanas.

Este sería el preámbulo de las “normas que orientan la so-


lución” descritas en Arquitectura México No. 94–95 por el
ingeniero Víctor Vila —colaborador en el Taller de Arquitec-
tura de Mario Pani—, en el que se resaltan las virtudes de la
supermanzana moderna: densidad humana, densidad de
construcción y espacio libre-verde. Empero, la historia del
modelo comienza con los primeros centros urbanos de Pani:

El sentido colectivo se ha ido perdiendo totalmente por lo mis-


mo que ha desaparecido esa célula urbanística que lo hace
posible. En México no sentimos la proximidad de nuestros
vecinos porque nuestros hijos no van en la misma escuela, ni
a los mismos cines, vivimos bastante solos, sin un sentimien-
to colectivo que nos guíe y acompañe….

Aunque en la Ciudad de México ya existía una larga tra-


dición de vivienda comunal, que se manifiesta en la larga
tradición de las vecindades, los llamados conjuntos o uni-
dades habitacionales “multifamiliares” representaron un
parteaguas en el modo de vida de sus residentes, no sólo
porque constituían en sí mismos el imaginario de la vida
moderna sino porque el concepto de equipamiento cambia-
ba las relaciones de los inquilinos y empezaban a convertir-
los en “comunidad”.
Al cambiar las normativas y políticas de vivienda se vis-
lumbró el cúmulo de problemas en dos escalas: la autosu-
ficiencia de la supermanzana y sus dinámicas cotidianas
de civismo colectivo. El modelo propuesto por Pani fue ha-
cer ciudades dentro y fuera de la ciudad central para rege-
nerarla, reordenarla y revitalizarla, planteando la necesidad
de que el crecimiento fuera siempre vertical para densifi-
car el uso del suelo. Con esta estrategia pensaba contro-
lar la expansión desmedida, concentrar los servicios para
disminuir los costos de la infraestructura y evitar o reducir
el desplazamiento continuo y distante de sus habitantes.
Para ello fue necesario proponer y hacer uso de normas
Centro Urbano Presidente Alemán
Colección ICA, Acervo Histórico Fundación ICA, 1947
I N V E S T I G AC I Ó N 13
urbanísticas que delimitaran físicamente y permitieran
una estructura de comunidades urbanas agrupando es-
cuelas, comercio, deporte y diversión en centros comuna-
les, los cuales fomentarían intercambios de conocimiento y
socialización. Pani buscó satisfacer las necesidades dia-
rias dentro del conjunto y dotar de los servicios con super-
manzanas mediante edificaciones de gran altura para la
época, proporcionando espacios abiertos para evitar sobre-
saturaciones nocivas.

La ciudad se ha hecho con base en dos acciones, malas las


dos: las invasiones de los campesinos que vienen a la ciudad
y se instalan como pueden, donde pueden y como quieren, y
que después de muchos años, el gobierno les da la tenencia de
la tierra con el trazo que hicieron, o sea, desastroso. Y el otro
aspecto malísimo del crecimiento del tejido urbano han sido
los fraccionamientos para negocio. Es decir, un señor cambia
un ejido o un rancho para hacer un fraccionamiento como se
le pega la gana, sin tomar en cuenta las ligas con la ciudad […].
La ciudad sí tiene remedio, pero para ello se requieren dos
acciones: la acción de prever su crecimiento, es decir, la acción
“fuera de la ciudad”; y la acción de corregir los errores dentro
de la ciudad (mediante la ordenación, la reconstrucción y la
regeneración). En otras palabras, la “acción fuera de la ciudad”,
que es el proyecto que hicimos para Ciudad Satélite; y el de la
“ciudad dentro de la ciudad”, que fueron los multifamiliares
Alemán, Juárez y Tlatelolco.1

Este ensayo muestra una comparativa de las densidades


propuestas por el Taller de Mario Pani respecto a la ciuda-
des dentro de la ciudad en el Centro Urbano Presidente
Alemán (CUPA), el Centro Urbano Presidente Juárez (CUPJ)
y el Conjunto Urbano Nonoalco-Tlatelolco, de 1947 a 1964.
A pesar de que fueron varios los gobiernos durante ese
tiempo: Manuel Ávila Camacho (1940–1946, Miguel Alemán
Valdés (1946–1952), Adolfo Ruiz Cortines (1952–1958) y
Adolfo López Mateos (1958–1964), es evidente la continui-
dad de una ideología y un mismo proyecto de nación en el
cual se definen circunstancias que permiten referirnos a
esta época como un periodo histórico e institucional de mo-
dernización por la política social, económica y cultural, den-
tro de la cual la arquitectura ocupó un sitio específico en la
construcción de la modernidad que constantemente apare-
ció tanto en el discurso del gobierno como en el imaginario
social. Vivienda para burócratas, pensionados y erradica-
ción de “herraduras de tugurios”.
La arquitectura de mediados del siglo XX representó el
momento de mayor auge en el país. Fue una época definida
por la confianza en la tecnología, la fe en el progreso y la
creación de la ciudad cosmopolita: aquella conformada
por torres de oficinas, fábricas modernas, aeropuertos y
multifamiliares. Entre 1940 y 1960, la capital triplicó su po-
blación, y en los años cincuenta rebasó los límites de las
demarcaciones políticas, extendiéndose hacia el estado de
México. Con Pani como promotor y proyectista se inventó

1 Entrevista a Mario Pani realizada por Graciela de Garay, Programa
de Historia Oral, Instituto Mora, México, 1990.
Revista Arquitectura México No. 94–95,
México, junio-septiembre 1966
14
en aquella época el primer condominio, la primer superman- serían identidad, sentido de pertenencia a la comunidad,
zana, el primer hotel internacional, la primera ciudad sa- seguridad física y emocional del usuario, oportunidades
télite y el primer multifamiliar. Su labor como arquitecto de progreso. Y la “regla fundamental” es que las viviendas
urbanista-promotor fue decisiva en la reconfiguración de la comunitarias formaran parte de la ciudad, es decir, estar
ciudad, sobre todo en función de la vivienda colectiva.2 integradas a ella, enriqueciéndola y siendo enriquecidas
Con los Juegos Olímpicos de 1968 se concluyó una eta- con ella.
pa de grandes proyectos urbanos de modernización para la Más allá de las virtudes y desaciertos de los tres conjun-
ciudad, así como de los conjuntos habitacionales de una tos referidos, tanto en el CUPA como en el CUPJ y Tlatelolco
época. Pani fue “el último estratega que se sentó delante convergen coincidencias de edificios verticales para liberar
del tablero metropolitano para mover las fichas que res- el espacio en planta baja y generar equipamiento urbano,
pondían a un plan”, y representa el final de una arquitectura lo que favorecía la integración de los habitantes, una solu-
entendida como proyecto de nación. Sus obras plasma- ción masiva al problema de la vivienda; la priorización al
ron una visión de vivienda comunitaria en la ejecución del peatón dejando estacionamientos fuera del área peato-
desarrollo urbano al estructurar, ordenar o reordenar una nal (perímetro); las circulaciones exteriores —aunque no en
unidad espacial integral, el trazo de la infraestructura todos los edificios—; la diversidad habitacional; los equipa-
vial, la división del suelo, la ubicación de edificios y la ima- mientos urbanos y áreas verdes predominantes; y la revi-
gen urbana del sector territorial de un centro de población talización u ocupación de zonas por urbanizarse.
o de una región. De tal forma, la tradicional vivienda habi- Para Pani, los barrios como Tepito dentro de la zona de
tación se presentaría como solución aplicable en la cons- tugurios, podrían seguir existiendo de acuerdo con su voca-
trucción masiva de vivienda. ción como una entidad especializada en ciertas actividades
para conservar aquello que los diferencia y les da carácter:
El equipamiento urbano —producto de la supermanzana— “sus afanes, sus gestos, su lenguaje”. La conservación de un
resultó fundamental en el modelo multifamiliar. Con la in- barrio no podía darse de manera escenográfica y perder
corporación de estos servicios de infraestructura social se su vocación original. “La condición indispensable para que
buscó que las actividades primordiales de los habitantes un barrio [subsista] como tal, [es mantener su] estructura
se cumplieran sin tener que desplazarse fuera del conjunto original”. ¿Cómo insertar densidades múltiples? ¿Trabajo,
o bien hacerlo caminando y a una distancia corta. Las cua- comercio, diversión, escuela, deporte…?
lidades que debía tener el medio habitacional serían cali-
dad en el espacio para las actividades diarias, localización
adecuada con respecto a los servicios urbanos y fuentes de 2 CANALES, Fernanda (2014) Arquitectura en México. 1900–2010. La
trabajo, tenencia segura de su propiedad. Y las necesida- construcción de la modernidad. Obras, diseño, arte y pensamiento,
des que deben ser satisfechas por el medio habitacional México, Fomento Cultural Banamex, Arquine.

I N V E S T I G AC I Ó N 15
UNIDAD
INDEPENDENCIA

Enrique X. de Anda

16
Colección ICA
Acervo Histórico Fundación ICA, 1969

El 20 de septiembre de 1960, Adolfo López Mateos, Presidente de


la República, rodeado de su gabinete, el cuerpo diplomático
acreditado en México y cientos de invitados, inauguró la “Unidad
Independencia”, primer conjunto de viviendas, clínica y edificios
de seguridad social construido por instrucciones de Benito Coquet,
Director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) durante
el sexenio lopezmateísta (1958–1964). En su discurso, y al margen
de la habitual grandilocuencia del comunicado de un político,
Coquet expuso varios conceptos sobre el origen de la unidad de
vivienda: “ […] el hombre concibió la utopía, teórico mundo de la
felicidad […]. En México, la utopía se ha vuelto y se vuelve realidad
[…]. El valor de la Unidad Independencia […] aspira a realizar una
nueva manera de vida.1 Coquet hablaba desde un podio junto a las


1 IMSS. Unidad Independencia de Servicios Sociales y Habitación, Mé-
xico (1961), “Discurso en la inauguración de la Unidad Independen-
cia (Benito Coquet), pp. 1–6.

I N V E S T I G AC I Ó N 17
esculturas de Miguel Hidalgo y de Quetzalcóatl, relie- tectura argumental para la que se desarrolló en el periodo
ves sobre la ciudad de Tula y el emblema del IMSS (la mu- lópezmateísta, distinta a la de la etapa anterior (1930–1955)
jer cobijada por el águila), todo dentro de una “plaza cívica” funcionalista y moderna. Con “argumental” refiero a una
como antes no se había construido en México. arquitectura que en formas y espacios resuelve los temas
Explicar el sentido de la utopía, las esculturas emble- de un discurso con conceptos que trascienden el interés
máticas y la razón de la “plaza cívica” es el propósito de este único de solucionar problemas estéticos de geometría y
ensayo sobre una de las obras de más alta calidad arqui- composición, más allá de la incorporación del “funciona-
tectónica y alegóricamente más significativa de la eta- lismo” convertido en el ariete ideológico de la arquitectura
pa posterior al predominio del “Movimiento Moderno” en durante la primera mitad del siglo en México.
México, así como de la escuela del programa arquitec- ¿Qué resolvió arquitectónicamente la Unidad Inde-
tónico de José Villagrán. El conjunto diseñado por Alejandro pendencia? El proyecto de utopía establecido por Coquet
Prieto Posada y José María Gutiérrez, concitó la colabora- radica en lo cultural con apoyo en el teatro y la identidad a
ción de los artistas plásticos Jorge González Camarena, partir del orgullo por la historia, propuesto por Adolfo López
Federico Cantú y Francisco Eppens, y ocupa una superficie Mateos. A partir de estos dos temas, Alejandro Prieto, como
de 32 hectáreas sobre lo que fue un vivero en la zona de San director de proyectos, y Jorge González Durán junto con
Jerónimo, al sureste de la Ciudad de México. Julio Prieto, como creadores del proyecto cultural del IMSS,
La Unidad Independencia es una obra emblemática dieron lugar a un programa arquitectónico para un nuevo
del periodo 1958–1964 de la arquitectura del IMSS, aun- tipo de edificación, estableciendo el “argumento” que habría
que no es la única con las cualidades de esta etapa de la de ser traducido en edificios y secuencias con otros valores
cultura arquitectónica mexicana, subsecuente del gran pe- plásticos y nuevas jerarquías.
riodo “modernizador” que tuvo su apogeo con el proyecto En el caso de la Unidad Independencia se hizo una “pla-
de Ciudad Universitaria (1948–1952). Son muchas las dife- za cívica” (concepto de Alejandro Prieto) para vincularse con
rencias entre las obras de ambas visiones arquitectónicas; la ciudad. Lo que el usuario vería en este espacio serían los
propongo como nueva denominación el término de arqui- símbolos de identidad (el pasado prehispánico), los de la

18
Colección ICA
Acervo Histórico Fundación ICA, 1969

soberanía (Miguel Hidalgo) y el de la protección del IMSS siempre que los automóviles invadieran áreas peatonales,
(la madre amamantando con el águila de protección). Los concepto de supermanzana (anterior a la “Carta de Atenas”),
edificios visibles en primer término fueron los del ámbito núcleos de servicios con edificios escolares y la forma de
artístico (dos teatros) y los de la reunión social (“Casa de la agrupación barrial. La presencia de la “plaza cívica” men-
Asegurada” y Administración), en segundo término los edi- cionada por Alejandro Prieto obedece a los conceptos del
ficios para la vivienda, y formando “barrios internos” los de VIII CIAM de Hoddesdon 1951,3 en el cual el tema a discutir
comercio, escolares y deportivos. fue “El centro urbano”, idea arquitectónica apoyada en la
Con esta secuencia de prioridades en la vista y posición tradición latinoamericana y de algunas ciudades europeas,
de los edificios, y en donde de manera general el centro en donde la “plaza principal” era el espacio simbólico y de
hospitalario no fue el centro de atención de la composición, primera importancia para la ciudad, rodeada de los edificios
los arquitectos proyectistas contratados por el IMSS resol- emblemáticos y con ello pasando a ser el espacio público
vieron más de 50 conjuntos de seguridad social construi- que apoyaba al enriquecimiento de la identidad colectiva.4
dos en la República. Dicho tanto por Alejandro Prieto como
por José María Gutiérrez, hubo en la concepción de la Uni-
dad Independencia mucho del urbanismo propuesto en la 2 Congresos Internacionales de Arquitectura Moderna (CIAM’s) pro-
“Carta de Atenas” (orquestada por Le Corbusier), documen- puestos por Le Corbusier, el primero se celebró en el Castillo de la
to acordado en el Congreso Internacional de Arquitectura Lasarraz, Suiza en 1928, y el último en Dubrovnik, 1956.
Moderna (CIAM) de 1933,2 desarrollado a bordo del Barco 3 Estrictamente hablando, no se encontró en la biblioteca de Ale-

“Patris II”, en el trayecto Marsella-Atenas-Marsella, ante jandro Prieto ningún pasaje señalando un interés particular para el
CIAM de Hoddesdon, aunque sí tenía el libro publicado por José Luis
la imposibilidad de llevar a cabo el CIAM en Moscú) y que
Sert, El corazón de la ciudad, con las ponencias de ese congreso.
recogió las nuevas ideas de los arquitectos europeos sobre
4 DE ANDA ALANÍS, Enrique (2016), “Vivienda social en la Ciudad de
el urbanismo moderno. México durante el periodo 1945–1965”, en: Carlos Sambricio et al.
De ahí la estructura del conjunto de la unidad: circulación Ciudad y Vivienda en América Latina, Lampreave, Madrid, pp. 369–
rodada perimetral, estacionamientos periféricos evitando 395.

I N V E S T I G AC I Ó N 19
Unidad Independencia
Fondo Aerofotográfico Oblicuas
Acervo Histórico Fundación ICA, 1967

Una cualidad muy importante de la Unidad Independen- determinante en los edificios de Ciudad Universitaria; tres
cia es el ambiente vegetal (de las 32 hectáreas del terre- torres de departamentos de “lujo” (sic, por los autores) se
no, 21.5 fueron dedicadas a jardines y áreas de convivencia diferencian por materiales con dominante blanco. El otro, el
colectiva)5 que se ha mantenido a la fecha. Hubo dos razo- grupo de los edificios de las tareas sociales, es completa-
nes para crear este ambiente vegetal: la preexistencia del mente distinto: volúmenes horizontales (el centro de segu-
vivero (el de la familia y empresa “Matsumoto”) y la muy ridad social, el edificio de administración, la clínica, y las
importante voluntad de los dos autores para mantener escuelas), tienen recubrimientos de cantera, ventanería se-
el ambiente natural, incluido el acueducto que conducía el riada, rompimiento de la regularidad con terraza y parabo-
agua al vivero, como temas a partir de los cuales habría de loides en el edificio de la administración, donde también se
desarrollarse el diseño de las distintas áreas del conjunto. dejó la planta baja libre. También son parte de este seg-
La densidad poblacional6 fue de un porcentaje insólito, y el mento los edificios comerciales cubiertos con sistema trabe-
único con esta condición en un desarrollo arquitectónico no losa (superficie quebrada), el club deportivo con alberca y
privado en México durante la segunda mitad del siglo XX. gimnasio como temas preponderantes, y columnas polifa-
Los valores plásticos de esta arquitectura se reparten en seteadas en la clínica “de barrio”. Un tema fundamental del
los dos grandes grupos de edificios: el habitacional (2 mil edificio de administración aparece en la fachada oriente
487 unidades en forma de vivienda unifamiliar y depar- recubierta con cantera roja: un friso en medio relieve de la
tamentos), integrado por casas dúplex formando calles autoría de Federico Cantú (responsable también de los re-
siempre con un frente a zonas de recreo, y edificios “multi- lieves que con esta técnica se hicieron en Xalapa, León, San
familiares” (nombrados así por los autores) de cuatro nive-
les con bandas verticales hechas con piedras multicolores
formando figuras con evocación del mundo prehispánico
5 IMSS, Unidad Independencia de Servicios Sociales Habitación, p. 31.
(de la autoría de Francisco Eppens). El resto de los muros 6 Población calculada 12 mil habitantes; superficie construida 23 por
de estas dos tipologías son de block de barro vidriado a alta ciento y 77 por ciento para jardines, circulaciones y usos colectivos;
temperatura, siguiendo la tradición de materiales aparentes la densidad resultante fue de 25.73 m²/h.

20
Luis Potosí y otros en la Ciudad de México, a partir del escu- que modifica las cosas y es la que trata del “discurso cultu-
do del IMSS, con una calidad de elaboración como en México ral” que los solicitantes de los edificios —los funcionarios
no se veía, quizá desde el periodo mesoamericano en Pa- públicos— proponen para individualizar la arquitectura que
lenque, en particular en el siglo VII D. C. Otro relieve del han solicitado sobre todo algunos de los hombres del poder
mismo autor se labró sobre la fachada norte del teatro con político, hombres cultos, sensibles y con un proyecto nacio-
el tema “Quetzalcóatl en Tula”, personaje que aparece tam- nal. A cuatro personajes de primera línea cualitativa del
bién en su carácter de rey (Ce Acatl Topoltzin Quetzalcóatl) periodo 1958–1964 podemos citar con esta condición para
y de monstruo mítico en forma de serpiente con plumas. nuestro ensayo: Adolfo López Mateos, Presidente de la Re-
Luis Ortiz Monasterio labró estas dos piezas y es autor pública, con un discurso de identidad nacional basado en el
también del Miguel Hidalgo, cuya actitud altiva y firme no imaginario de la soberanía; Jaime Torres Bodet, con el pro-
oculta el sentido de dignidad por la soberanía alcanzada grama de alfabetización y el Plan Nacional de Museos, crea-
que se encuentra presente en los discursos del entonces dor además de un discurso de integración cultural a partir
presidente. También de Ortiz Monasterio son las columnas de la educación básica; Benito Coquet con el tema de la
serpentiformes (originarias de Chichén Itzá) del teatro al “utopía” para los trabajadores y Ernesto P. Uruchurtu, con
aire libre, y los medallones alusivos a Tláloc de la fuente que su concepto de la modernización a partir de la calidad ar-
cierra la cabecera poniente de la plaza. quitectónica de las obras públicas.
De ningún modo se podría pensar que esta colección de Los trabajos realizados por el IMSS corresponden por
piezas escultóricas (como las que hubo en otros conjun- supuesto a estos modelos, pero también la de los museos
tos) obedecieran solo un propósito de “ornato escultórico”: de Pedro Ramírez Vázquez, sobre todo el Nacional de Antro-
son parte de un programa estético-cultural institucional pología, que comparte con la obra del IMSS varios aspectos
dirigido por Benito Coquet y detallado y operado por Jorge del género propuesto como “arquitectura discursiva”: la ima-
González Durán y Julio Prieto. El programa partía del de- gen mesoamericana subyacente en el proyecto de conjunto
recho a la asistencia social incluyendo la educación extra (el grupo de las “monjas” de Uxmal), recubrimientos pétreos
escolar en los tiempos libres —sobre todo de las mujeres—, (mármol, en este caso) y bajo relieves en muros; simbología
la recreación deportiva y la enseñanza técnica para varo- en la posición de las piezas (el “Calendario Azteca”, la es-
nes, así como la aproximación a la práctica artística a través cultura azteca más representativa en el imaginario popu-
del espectáculo y de la instrucción del baile, la pintura y el lar), murales en todas las salas y los relieves del poste del
teatro mediante programas gratuitos. paraguas del patio.
Esta es la razón para haber incorporado un teatro aquí La Unidad Independencia, junto con los conjuntos del
y en la mayoría de los conjuntos, por lo general en la par- IMSS construidos en toda la República, trascendieron a la
te frontal y más visible de las composiciones. Si junto a este solución de clínicas de distintas dimensiones para propo-
proyecto propio del IMSS tomamos en cuenta la insisten- ner, desde su ubicación y claridad de significados en los
cia presidencial por exaltar los valores nacionales del tiem- propios edificios, nuevas formas de convivencia social e
po reciente, sobre todo a partir de la Revolución de 1910 y identidad histórica a partir de lo que fue la marca del pro-
su traducción en el imaginario escultórico del IMSS en las yecto social de Benito Coquet: modificar al núcleo familiar
figuras de Quetzalcóatl, Hidalgo, Morelos, Cuauhtémoc trasladando el poder social hacia la madre, para quien se
y Gómez Palacio, podemos comprobar la hipótesis de que creó toda una estructura de aleccionamiento y sociabili-
estos trabajos no cumplían con funciones de mero “ornato” zación, mientras que los varones fueron atendidos con de-
o arreglo decorativo: las figuras escultóricas que se coloca- porte y talleres de capacitación, ubicando con todo ello a la
ron en este periodo en los conjuntos del IMSS obedecen a sociedad en uno de los niveles más altos de sensibilización
un plan de contacto estético para fortalecer la identidad artística habida en México gracias también al programa
y el orgullo nacional partiendo de las emociones que provo- nacional de teatros. En este periodo, Eurípides, Calderón de
ca la relación visual con la plástica escultórica. la Barca y Sófocles, estuvieron más cerca de la población
Respecto de la arquitectura, se trata de una obra pública, que nunca.
en el entendido de que en México —como en muchos otros
países—, los autores de las obras privadas lo son también de
los edificios públicos. En este sentido es fácil entender
que los motivos que se ejercitan en un género aparezcan en
el otro, en un proceso derivado de las teorías propias de la
arquitectura tanto como de la visión de la cultura arqui-
tectónica de los autores. Sin embargo existe una condición

I N V E S T I G AC I Ó N 21
VILLAS OLÍMPICAS

Concepción J. Vargas

Villa Olímpica Libertador Miguel Hidalgo


Villa Olímpica Narciso Mendoza
Fondo Aerofotográfico Oblicuas
Acervo Histórico Fundación ICA, 1969
I N V E S T I G AC I Ó N 23
Villa Olímpica Narciso Mendoza
Fondo Aerofotográfico Oblicuas
24 Acervo Histórico Fundación ICA, 1969
En octubre de 1968 (hace cincuenta años) se celebraron en
México los XIX Juegos Olímpicos. Esta fue la primera oca-
sión en que un país latinoamericano era sede de esta im-
portante justa deportiva en la que participaron atletas de
113 países. Otro aspecto que daba realce al evento era que
las competencias se transmitían por primera ocasión a todo
el mundo a través de la televisión vía satélite, en directo y
en color. El gobierno mexicano consideró que ésta era una
magnífica oportunidad que habría que aprovechar para que
el mundo pudiera ser testigo de la modernización alcanzada
por el país, así como para difundir su valioso patrimonio
cultural, pieza fundamental de nuestra identidad. En esta
década se generaron en nuestro país y en el mundo impor-
tantes transformaciones sociales, económicas y políticas,
que pusieron en riesgo la celebración de los juegos.
Aunque algunas de ellas estuvieron presentes de ma-
nera indirecta durante la celebración de los Juegos Olímpi-
cos en México, el Comité Olímpico Internacional consideró
que había las condiciones adecuadas para que se celebrara
la justa olímpica en nuestro país. Ante este panorama, el
Comité Organizador de los XIX Juegos Olímpicos se enfren-
tó al reto de hacer de éste un evento inolvidable, para lo cual
organizó, además de la justa deportiva, una Olimpiada
Cultural con un programa de actividades durante todo el
año con el propósito de difundir nuestro patrimonio cul-
tural y conocer y reconocer el de los países participan-
tes. Estas olimpiadas fueron todo un fenómeno cultural y
deportivo con el que se beneficiaron todos los asisten-
tes locales e internacionales, directos e indirectos, ya que
el mundo entero pudo disfrutarlas, lo que llevó a que las
llamaran La Olimpiada Moderna.
Para la celebración de los XIX Juegos Olímpicos, el go-
bierno federal y el Comité Organizador, presidido por el ar-
quitecto Pedro Ramírez Vázquez, identificaron varios pro-
blemas: el primero de ellos era la insuficiencia de recursos
económicos para construir una villa olímpica que alber-
gara en un solo terreno todas las instalaciones, por lo que
identificaron las instalaciones deportivas y el equipamiento
cultural con que contaba la ciudad, así como los terrenos
donde se construirían las nuevas instalaciones deporti-
vas, con el propósito de crear polos de desarrollo urbano y
centros deportivos que impulsaran posteriormente las ac-
tividades competitivas de la comunidad y así no correr el
riesgo de que éstas quedaran abandonadas más tarde,
como había sucedido en otros países.

I N V E S T I G AC I Ó N 25
LAS VILLAS OLIMPICAS

La regla 37 de la Carta Olímpica, estipula que el Comité Organizador


proporcionará una villa para hombres y otra para mujeres en que los
competidores y oficiales de equipo puedan ser acomodados juntos y
alimentados por un precio razonable”; que las Villas estén localizadas “tan
cerca como sea posible de¡ estadio principal, de los campos de práctica y de
las otras instalaciones”; y, asimismo, que deben hacer los arreglos necesarios
“para acomodar a los jueces, árbitros, inspectores, tomadores de tiempo, etc.
que sean designados por las Federaciones Deportivas Internacionales según las
reglas de¡ COI.”

A fin de dar cumplimiento a estos requerimientos y después de realizar los


estudios correspondientes, el Comité Organizador determinó la necesidad de
construir dos conjuntos: a) uno para competidores y oficiales -considerando
separadamente a hombres y mujeres- y para reporteros acreditados por los
Comités Olímpicos Nacionales y agencias de noticias, b) otro para jueces
y árbitros, participantes en actos del programa Cultural e informadores no
acreditados. El primero de estos conjuntos fue denominado, por acuerdo del
presidente de la República, Patrono de los Juegos, Villa Olímpica libertador
Miguel Hidalgo”, y el segundo también por disposición presidencial, “Villa
Narciso Mendoza”.

las obras se empezaron el 2 de mayo de 1967 e iniciaron sus servicios el 12


de septiembre de 1968. Fueron inauguradas oficialmente por el presidente
Gustavo Díaz Ordaz el 17 del mismo septiembre.

A la llegada de cada delegación deportiva a la Villa se


celebraba una ceremonia de izamiento de banderas. J.
Miranda, gobernador de ésta (enfrente, abajo izquierda)
acompañado por M. Andrade de] Rosal, jefe de la
sección femenina y de un grupo de edecanes (arriba)
dan la bienvenida a los atletas de uno de los 113 países
participantes. El Destacamento Militar Olímpico tomó
parte en las ceremonias y una banda militar tocó el himno
nacional de la delegación.

Todos los días, un gran número de invitados visitaba El personal de una de las 6 grandes cocinas “respira” entre
la Villa. Enfrente, el Príncipe Harald de Noruega y su dos avalanchas olímpicas (3 comidas diarias, más “pisco- Los seis restoranes sirvieron muy variados platillos
esposa (arriba izquierda), María Félix, actriz mexicana labis”) de 6 mil atletas y varios miles de participantes. Los -chutney indio, palmitos, almejas importadas-. Un total de
(arriba derecha), el estupendo atleta Jesse Owens (abajo 1230 empleados de los restoranes de autoservicio con- 350 variedades. Más de 214 toneladas de frutas frescas,
izquierda) y los príncipes de Mónaco (abajo derecha) taron con las instalaciones más modernas. El Centro de 118 toneladas de carne, 31 de pescados y mariscos y 68
departen con los atletas mientras hacen el recorrido del Control de Calidad instaló en la Villa un laboratorio para la mil litros de leche fresca se consumieron durante las 84947
enorme complejo arquitectónico. supervisión de los alimentos e higiene general. comidas servidas a los residentes de Villa Olímpica.

Lo suficientemente alejada “del mundanal ruido”, la


Villa Olímpica Miguel Hidalgo fue el marco ideal para el
ejercicio físico y para el descanso. Después de un duro
entrenamiento los atletas regresan con alegre trote a
su residencia, o bien se tumban sobre el mismo tartán
de la pista. Otros, más sibaritas, prefieren los céspedes
salpicados de rocas volcánicas y la tranquila sombra de los
pirulíes (páginas siguientes).

Al parejo de los otros escenarios de entrenamiento de


la capital, la Villa Olímpica fue testigo de los rigurosos
ejercicios que se llevaban a cabo en casi todos los
deportes. Un mes antes de verificarse los Juegos, los
atletas entrenaban ya en los gimnasios, pistas, campos
e incluso en las avenidas (prohibidas a la circulación de
coches) de la Villa Olímpica.

A 9.6 kilómetros de la Villa Miguel Hidalgo, y conectada


a ésta por el Anillo Periférico, estaba ubicada la segunda
Villa, conjunto residencial totalmente nuevo construido
por un grupo de arquitectos bajo la dirección de Martínez
Ostos (arriba). Durante los Juegos, una sección de Villa
La Villa Olímpica contó con un programa de diversiones Coapa fue reservada a los 1668 jueces y oficiales, otra
muy variado, en el que se incluían eventos de la Olimpiada El evento más sensacional en la vida de la Villa Olímpica fije a los 1150 participantes de la Olimpiada Cultural, y una
Cultura En su anfiteatro (arriba), próximo a las restauradas la recepción ofrecida a los recién casados Vera Caslavska y última a los 555 miembros de la prensa. Como en el caso
pirámides de Cuicuilco, se presentó el Ballet ldla de Suecia. Josef Oldozil. Después de la ceremonia religiosa, celebrada de la Villa Miguel Hidalgo, Coapa constituyó un complejo
El auditorio principal -con cupo para 800 espectadores- en la Catedral Metropolitana, la espléndida gimnasta autosuficiente con restorán, auditorio, tiendas, servicios
fue escenario de funciones nocturnas de grupos de “rock”, olímpica y el elegante corredor checo se tapan con un médicos y salones de ensayo para uso de los grupos
teatrales, o de músicos populares (enfrente). sarape mexicano, en el salón del Club Internacional. culturales, como es el caso del Ballet ldla (derecha).

26
“Las Villas Olímpicas. Capítulo 7” en Comité
Organizador de los Juegos de la XIX Olimpiada,
México 68 (1969), México.

VILLA OLIMPICA LIBERTADOR MIGUEL HIDALGO África y Asia; el 3, para las delegaciones latinas; el 4 para VILLA NARCISO MENDOZA Dicha Administración General tuvo tres departamentos:
las de Europa Occidental; el 5, para las de habla inglesa, y Administrativo y Contable, de Relaciones de Personal El Club Internacional, inaugurado el 15 de septiembre
Erigida al sur de la ciudad, en la Delegación de Tlalpan, D. el 6 tuvo carácter internacional. Estas instalaciones fueron Enclavada al sureste de la ciudad (en Coapa) ocupó los y de Control de Información. Además, creó 6 jefaturas de 1968, presentó 24 funciones de¡ Festival Mundial de¡
F., ocupó una superficie de nueve hectáreas propiedad del construidas entre junio y septiembre de 1968. bloques 1 y 3 de un gran conjunto habitacional propiedad y se formaron grupos de supervisión para vigilar el Folklore; 25 veladas ofrecidas por la Asociación Nacional
Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos, ampliadas del Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos. Sumaron funcionamiento de los servicios concesionados. de Actores y 9 representaciones organizadas por la
posteriormente con 20 mil prestados a las autoridades El Club Internacional, contiguo a la plaza central de la Villa, 686 casas y 470 departamentos, con 3474 cuartos y Dirección de Acción Social de¡ Departamento de¡ Distrito
municipales por una empresa privada. Aun que el contó con lugares de reposo y recreo para los atletas; su 1314 baños, y fueron construidos entre agosto de 1967 Las Villas alojaron 13 835 huéspedes con una estancia Federal.
proyecto arquitectónico quedó a cargo de la Secretaría de capacidad fue para 1500 personas simultáneamente y y septiembre de 1968. A diferencia de la Villa Olímpica, promedio de 20 días atendidos por más de 6 mil
Obras Públicas, fue el Banco citado el que, por disposición para 800 espectadores en su auditorio. Tenía además salas la Narciso Mendoza estuvo constituida por viviendas para personas. Para las competencias de vela escenificadas en el puerto
presidencial, financió la construcción de la parte de descanso y de billar, cafetería y alberca exterior. Fue una o varias familias, pero siempre en edificios bajos. En de Acapulco, la Villa Olímpica se localizó en el Hotel
habitacional del conjunto, quedando el correspondiente a construido entre junio y septiembre de 1968. Dos clínicas este caso también el Comité Organizador pagó al Banco La cuota cobrada por el Comité Organizador a las Caleta. En ella se alojaron 503 atletas, entrenadores,
las demás instalaciones a cargo de la referida Secretaría. Por médicas construidas y operadas por el Instituto Mexicano Ubicada en el extremo sur de la capital, la Villa Olímpica citado, por concepto de renta, el interés de la inversión delegaciones deportivas por persona, que comprendía capitanes de equipo y jefes de delegación de 43 países que
su parte, el Departamento del Distrito Federal se encargó del Seguro Social dispensaron los servicios médicos y Miguel Hidalgo sumó 5044 habitaciones con 2572 baños en la zona ocupada y los gastos correspondientes a las habitación, comidas y transportes, fue de $ 100 diarios contaron además con servicios médicos. El subcentro de
de los servicios municipales correspondientes. Al Comité fisiátricos. Los gimnasios para entrenamiento de box y distribuidos en 904 departamentos. De sus 29 edificios de adaptaciones. entre el 12 y el 27 de septiembre; gratuitamente del 28 de prensa funcionó en el Hotel Club de Pesca, en donde se
Organizador tocó la ejecución de los trabajos de adaptación lucha contaban con oficina administrativa, vestidores, diez niveles, 24 constituyeron la sección masculina, 3 la septiembre al 11 de octubre, de acuerdo con la obligación proporcionó alojamiento y alimentación a los reporteros.
para el servicio olímpico y el pago, por concepto de renta, lockers, sanitarios, baños sauna, baños de vapor y bodega. femenina, y 2 fueron ocupados por la prensa. Entre otras Para hacer posibles otros servicios que el Comité contraída por el Comité Olímpico Mexicano en Baden-
del interés correspondiente a la inversión realizada. Al Fueron realizados entre julio y septiembre de 1968. El Instalaciones de la Villa Olímpica se contaron: la Admin- Organizador brindó a los huéspedes, se construyeron Baden, de $ 50 diarios por persona, del 12 de octubre Para las pruebas ecuestres, llevadas a efecto en Avándaro,
concluir los Juegos los departamentos fueron puestos a la Centro de Prensa, ubicado al suroeste de la Villa, contó istración, el edificio de Control y Registro, seis edificios con carácter desmontable las siguientes instalaciones: bar, al 7 de noviembre. Los demás huéspedes pagaron $ 50 Valle de Bravo, el Motel Avándaro constituyó la Villa
venta en régimen de propiedad en condominio. con todos los servicios detallados en el capítulo X, más temporales donde se alojaron los comedores, el Club cafetería, restorán y cocina; salón de ensayos, equipado diarios en habitación compartida y $ 100 si la ocuparon Olímpica para los 139 miembros de las 13 delegaciones
estacionamiento para 200 vehículos. Su construcción, Internacional, el Centro de Prensa, un anfiteatro, pistas de con los implementos necesarios para la práctica de la solos. Las cuotas cubrían el alojamiento, desayuno y inscritas. Contaba con Casa Club, en donde se instalaron
Los veintinueve edificios -de los cuales 24. Se destinaron desmontable, ocupó un mes de trabajos. tartán, dos gimnasios y campos de entrenamiento, oficinas danza; auditorio con pantalla gigante de televisión, unidad servicio de transportes. La comida y la cena tuvieron un las oficinas administrativas, locales comerciales, baños,
a los varones- reunían un total de 5044 habitaciones de mantenimiento, almacenes, estación de bomberos, la- de servicios telefónicos y de comunicación; comedor para precio nominal de $ 25 cada una. A los participantes del vestidores, bar cubierto, terrazas, sala-comedor e
y 2572 baños en 904 departamentos. La sección Las obras ejecutadas en el exterior de la Villa, con carácter vandería y locales concesionados. La construcción, empe- el Destacamento Militar Olímpico, y centro comercial con Programa Cultural no se les confirió el tiempo de cortesía instalaciones de cocina; el edificio “Aquarine”, fue adaptado
femenina constaba de tres edificios y los dos restantes permanente, fueron las siguientes: teatro al aire libre; zada el 2 de mayo de 1967, se terminó el 12 de septiem- siete locales. del periodo de adaptación. como Subcentro de Prensa. Estuvieron a disposición de
se destinaron al Centro de Prensa. Estos tres conjuntos pistas de tartán y áreas de entrenamiento similares a las del bre de 1968. El proyecto fue desarrollado por un equipo los huéspedes canchas de tenis, alberca, chapoteadero,
estaban construidos independientemente como exige el Estadio Olímpico de la Ciudad Universitaria. Finalmente, de arquitectos encabezado por Héctor Velázquez. Para su operación fue dividida en cinco secciones, la Villa El esfuerzo de organización y el volumen del trabajo así como “greens” de golf. Los reporteros fueron alojados
reglamento. las otras instalaciones de la Villa Olímpica se fueron reconstruidas dos pirámides y explorada otra más, Árbitros y Jueces, a la cual se destinaron 356 casas y 110 desarrollado se ponen de relieve con las siguientes en el Motel Refugio del Salto, próximo al escenario de
describen a continuación. que fueron encontradas al iniciarse los trabajos de esta departamentos; Villa Conjuntos Culturales, con 156 casas estadísticas: se atendieron diariamente 8 500 cuartos; competencias.
Villa, colindante con la riquísima zona arqueológica de y 150 departamentos; Villa Prensa, con 174 casas y 210 se sirvieron 1.2 millones de raciones alimenticias; se
El edificio de administración, control y registro, al igual Cuicuilco. departamentos; la Sección Militar y, finalmente la de Oficinas distribuyeron 10 mil piezas de correspondencia postal, Las ciudades de Puebla, león y Guadalajara, contaron
que la mayoría de las construcciones que se describen Generales. Para la operación de las dos Villas, el Comité 28 151: telegramas y 303 mil piezas diversas (libros, con servicios similares a los descritos. Los precios de
más adelante, fue proyectado y construido por la Otros edificios provisionales se enumeran a continuación: Organizador otorgó en concesión a empresas privadas de programas, invitaciones, álbumes, guías, etc.), se duplicaron alojamiento, en todos los casos, fueron igualados con los
Secretaría de Obras Públicas con carácter desmontable el que albergó el laboratorio de Genética y Biología prestigio los siguientes aspectos: alimentación, hotelería, 481 mil documentos a partir de 1855 originales; se dio de las Villas de la Ciudad de México.
y sirvió de acceso a la Villa. Contó con un área cubierta Humanas; el destinado a la administración de Villa Prensa; aseo y servicios generales, operaciones bancarias, venta acceso a 20 mil personas del público diariamente y se
para estacionar 100 vehículos y varios andenes para el el empleado para la edición W libro de resultados; los de mercancías, peluquería y otros servicios. La atención atendió a un total de 57 mil visitantes oficiales.
movimiento simultáneo de 40 autobuses; vestíbulo de que alojaron los talleres de mantenimiento, almacenes médica fue confiada al Instituto Mexicano del Seguro
entrada y oficinas para la acreditación de las delegaciones; generales, estación de bomberos, centro de lavado; los de Social, y las oficinas de correos y telégrafos a la Secretaría Los principales artículos que se consumieron en los
barras de información incluyendo servicios bancarios, la zona comercial y las habitaciones para el Destacamento de Comunicaciones y Transportes. comedores de las delegaciones, en kilogramos, fueron
de correo y telégrafos; salas para entrevistas de prensa, Militar Olímpico. los siguientes: 62 115 de nueve clases de aderezos; 9
radio y televisión, y estancias para reuniones de los Por su parte, el Comité Organizador se reservó los 925 de tres tipos de azúcar; 76 780 de carnes de aves
participantes. Su construcción se realizó entre el 15 de Un lienzo charro, al suroeste de la Villa, se utilizó para aspectos administrativos y la coordinación y supervisión de (pollos, pavos y patos); 118 706 de carne de res, ternera,
julio y el 13 de septiembre de 19,68. Los comedores festivales folklóricos en honor de los huéspedes de la todos los servicios. La administración se planeó en tal forma carnero, cerdo y fiambres; 31811 de pescados y mariscos
constaron de seis unidades desmontables, compuestas misma. Además el día 8 de octubre de 1968 se abrió al Nestor Escalante, del Banco Nacional de Obras Públicas que permitió el manejo independiente de cada Villa -y aun frescos y enlatados; 9 568 de flanes, gelatinas y pudines;
cada una por dos salones comedores, cocina, patio de culto la Capilla Olímpica dirigida por dignatarios católicos, (arriba), explica algunos detalles del proyecto de de cada edificio- en cuanto a su funcionarniento cotidiano 214 694 de frutas frescas; 17 275 de frutas en almíbar;
maniobras, cuarto de máquinas, frigorífico, comedor evangelistas, ortodoxos, judíos y budistas, quienes oficiaron construcción de la Villa Olimpica al licenciado Gustavo y al control del conjunto. La dirección U sistema estuvo a 14938 de granos y semillas; 9567 de cinco variedades de
para empleados, servicios sanitarios, almacén general y conforme a un horario convenido. Díaz Ordaz. los acompañan (de izquierda a derecha) cargo de una Administración General, responsable ante la harina; 3 102 de crema y 10 827 de ¡eches condensada,
oficina. Para el efecto, los comedores fueron asignados Carlos Garcia, el director del citado Banco Jesús Robles Presidencia, dependiente de la Secretaría general y de la descremada, evaporada y en polvo. Se utilizaron, además
a las delegaciones agrupadas de la manera siguiente: el Martínez y Carlos Humberto Chávez. Oficialía Mayor. 836040 huevos y 68855 litros de leche pasteurizada y
Número 1, para las de Europa Oriental; el 2 para las de homogeneizada.

174 178 179

La Villa Olímpica fue proyectada como un complejo


autosuficiente capaz de proveer a todas las necesidades
de los participantes. En la capilla (derecha) se celebraban
los ritos de las principales religiones. Los locales
concesionados, S, sujetos a un severo control de precios,
vendían diversos artículos, mientras que el servicio de
información dispuso una mesa para cada deporte.

Las excavaciones hechas en la Villa Olímpica descubrieron


una parte del centro ceremonial de Cuicuilco, cubierto
por la lava del Xitle desde el primer milenio A.C. Una
de las pirámides, restauradas bajo la dirección de los
arqueólogos, preside los entrenamientos de los atletas.
(Estos campos de entrenamientos estaban equipados
exactamente igual que los de competencias).

Entre los entrenamientos y competencias, los atletas


jugueteaban y se divertían dentro y alrededor de la alberca Si las salas de juego del Club Internacional fueron escenario
de agua tibia del Club Internacional. Las instalaciones de de competencias extra-olímpicas, el clima de alegría de
este popular club, en constante uso durante los juegos, los salones dio pie a encuentros más significativos. Tenía
patrocinaron la amistad entre los participantes de tan también este Club, una cafetería, dos auditorios, o incluso,
diversos países. un pequeño museo con las piezas rescatadas en las
excavaciones de Cuicuilco.

Los residentes de Villa Coapa se reúnen en la explanada


central en la que se colocó una plataforma para los Los pintorescos conjuntos folklóricos se reunían en Villa
espectáculos culturales. Los edificios que rodean la plaza Coapa antes y después de las numerosas funciones que
alojaron 3474 habitaciones disponibles para el periodo de daban en la ciudad. Aparecen en esta página (arriba, izqui-
los erda) un grupo de huicholes del norte de México; otro de
Juegos. En un salón de ensayos (arriba) las bailarinas del peruanos (izquierda, centro), de la República Dominicana
Ballet de Dinamarca hacen los ejercicios de barra previos (izquierda abajo), cantantes de Nigeria (arriba) y una baila-
al ensayo. rina del Ballet de Guinea (enfrente).

I N V E S T I G AC I Ó N 27
Villa Olímpica Libertador Miguel Hidalgo
Acervo Histórico Fundación ICA, 1969–1970

El Comité Olímpico Mexicano seleccionó la zona sur- en tres de ellas se localizaron las primeras viviendas termi-
poniente de la ciudad como la más adecuada, ya que la nadas que fueron entregadas a sus propietarios en el ter-
sede para la inauguración y clausura sería el Estadio de cer trimestre de 1968. Durante las olimpiadas se destinaron
Ciudad Universitaria, al cual denominaron como Estadio 2 mil 828 viviendas al alojamiento de los cronistas de pren-
Olímpico México 68. La celebración de los juegos impul- sa, jueces, árbitros, artistas y personal administrativo que
só la construcción de obras de arquitectura, principalmente participó en los juegos. Inicialmente, su diseño fue conside-
las deportivas, como el Palacio de los Deportes de Félix rado para alojar a una población total de 53 mil 500 habi-
Candela, Enrique Castañeda y Antonio Peyrí; la Alberca y el tantes en 9 mil 244 viviendas. En cada supermanzana se
Gimnasio Olímpico por Manuel Rosen, Edmundo Gutiérrez consideraron áreas destinadas a servicios comerciales, edu-
Bringas, Antonio Recamier y Javier Valverde; el Velódromo cativos y recreativos. La superficie libre que incluye a las
y la Ciudad de los Deportes en la Magdalena Mixhuca; el vialidades y a las áreas verdes, representa casi las dos ter-
Canal de Cuemanco y las adaptaciones al Estadio Olímpico ceras partes del total del terreno (62.8 por ciento), mientras
de la Ciudad Universitaria de la UNAM, obra de Augusto que la superficie ocupada por los edificios es la restante
Pérez Palacios, con murales de Diego Rivera. (37.18 por ciento). El área destinada a los servicios educa-
Para atender el alojamiento de los deportistas invitados tivos corresponde a 4.36 por ciento y a la de los servicios
y representantes de la prensa se solicitó el apoyo del Banco complementarios representa 3.71 por ciento.
Nacional de Obras y Servicios, Sociedad Nacional de Cré- En ambos casos no cabe duda que el compromiso de las
dito (Banobras), organismo gubernamental encargado de la autoridades mexicanas para realizar los XIX Juegos Olím-
construcción de vivienda de interés social, el cual tenía pre- picos mostró a un México moderno y capaz de generar mo-
supuesto para construir conjuntos habitacionales, de los delos para otros países, al planificar y realizar obras que
cuales se acordó construir dos: la Unidad Habitacional Villa tuvieron plena justificación por la utilidad social en la vida
Olímpica Libertador Miguel Hidalgo y la Unidad Habitacio- y desarrollo normal del país.
nal Villa Olímpica Narciso Mendoza.
La primera villa fue el primer conjunto habitacional
cerrado en la Ciudad de México. Su diseño (urbanización
de calles, plazas, agua drenaje, alumbrado; 29 torres de 10
niveles y 904 departamentos; administración, oficinas del
comité, escuela pre-primaria, primaria, edificio de control
y registro, oficina administrativa y villa olímpica deporti-
va] rompió con los antiguos modelos de las colonias y los
grandes multifamiliares que se habían construido —régi-
men de propiedad en condominio— y fungió como uno de
los detonadores de la expansión del surponiente de la Ciu-
dad de México sobre las tierras de delegaciones más dis-
tantes. Fue proyectada por los arquitectos Agustín Hernán-
dez, Manuel González Rul, Ramón Torres, Carlos Ortega y
Héctor Velázquez como un espacio funcional, con un len- * Publicado originalmente en AYALA, Enrique, VARGAS, J. Concepción
guaje arquitectónico propio y con un espacio urbano de alta y ÁLVAREZ, Gerardo (2017), La construcción de la Ciudad de México si-

calidad donde se gestaron nuevas formas de vivir y pensar glos XIX y XX. Barrios colonias y fraccionamientos, “Unidad habitacional
Villa Olímpica Libertador Miguel Hidalgo. Historia, estructura y arqui-
la ciudad.
tectura”, México, UAM, pp. 237–257; y AYALA, Enrique, VARGAS y ÁLVA-
El segundo conjunto habitacional se denominaría Con-
REZ, Gerardo (2013) El espacio habitacional en la arquitectura moder-
junto Habitacional Narciso Mendoza, que se caracterizaría na. Colonias, fraccionamientos, unidades habitacionales, equipamiento
por tener la oferta más grande de tipos diferentes de vivien- urbano y protagonistas, “Conjunto Habitacional Narciso Mendoza Villa
da en México. Está compuesto por siete supermanzanas, y Coapa, México, UAM, pp. 219–233.

28
I N V E S T I G AC I Ó N 29
LA CIUDAD
EN LA CIUDAD

Juan José Kochen


Unidad Habitacional El Rosario | J. Paul Getty Trust,
Julius Shulman Photography Archive, Research Library,
Getty Research Institute I N V E S T I G AC I Ó N 31
32
El Infonavit construyó ciudades. Su historia fundacional riores. La estructura general consistió en un grupo de uni-
sería producto y consecuencia de movimientos sociales, dades vecinales y supermanzanas, cada una de ellas con
modelos de unidades habitacionales y necesidad de vi- servicios establecidos alrededor de un gran centro comercial
vienda plural. En 1961, la revista francesa L’Architecture y cultural.
d’Aujourd’hui publicó un número sobre el “hábitat” en el que En “Razones de nuestro desarrollo formal urbano” (re-
promovía el debate sobre las nuevas formas de habitabi- vista Calli 9, 1963) Domingo García Ramos destacaría la
lidad y distribución espacial. El tema no sólo formó parte serialización de este conjunto teniendo en cuenta las expe-
de la agenda política para resolver espacios habitables. riencias de la vivienda obrera que concentraba los servicios
Dos años después, en 1963, la Comisión de Urbanismo del y las instalaciones fomentando un cambio en el curso de la
Distrito Federal rindió un informe presentado en las Jor- brújula al destinar vivienda a una clase social de menores
nadas Internacionales de Arquitectura, en el que hizo un recursos, a diferencia de los multifamiliares y unidades ve-
recuento de las colonias y los conjuntos habitacionales cinales construidos en años anteriores para la clase media
construidos desde finales de los cuarenta hasta ese año o “burocrática”. García Ramos pondría sobre la mesa que la
como parte de incipiente programa de “remodelación urba- modificación al parámetro de la densidad tiene sus límites
na”. El objetivo era mejorar las condiciones de habitabilidad dadas ciertas circunstancias culturales que no se habían
de las ciudades hacia una dinámica de regeneración que sopesado del todo y consideraba que la conviven-
permitiese que las familias que habitaban zonas de “tugu- cia unifamiliar sería el límite ideal para ciertos estratos de
rios” pudieran integrarse a regiones “urbanísticamente ade- la población mexicana.
cuadas”, haciendo desaparecer las primeras. Como respuesta a las experiencias acumuladas de
Entre 1963 y 1964 se realizaron grandes proyectos de vivienda, y un híbrido entre la ciudad dentro y fuera de la
infraestructura que fueron trascendentales para la Ciudad ciudad, este modelo sería el inicio de muchos otros cons-
de México. Mientras se inauguraba el Conjunto Urbano truidos en los años sesenta con diversidad habitacional
Nonoalco-Tlatelolco, también se abrían las puertas del Con- y alturas medias como la Unidad Habitacional John F.
junto Habitacional San Juan de Aragón, la Unidad Habi- Kennedy, la Villa Olímpica Libertador Miguel Hidalgo, la
tacional Adolfo López Mateos, la creciente e informal Ciu- Villa Olímpica Narciso Mendoza, la Unidad Cuitláhuac,
dad Nezahualcóyotl, y en otro frente, el Instituto Politécnico Lomas de Sotelo, Lindavista-Vallejo, La Patera, El Altillo,
Nacional de Zacatenco, el Museo de Antropología, el Mu- la Unidad Habitacional Plateros, Torres de Mixcoac y la Uni-
seo de Arte Moderno, el Museo de Historia Natural y el dad Habitacional Morelos, entre otras, hasta las primeras
Museo de la Ciudad de México, entre otros referentes urba- unidades habitacionales construidas en los setenta por el
nos que cerraban el sexenio de López Mateos. Nonoalco- Infonavit. ¿Qué cambió para entonces?
Tlatelolco —que en 1968 sería asociado con el siguiente En el tercer cuarto del siglo XX, los cimientos de la mo-
mandatario, Gustavo Díaz Ordaz— como macro-conjunto dernidad mexicana mutarían su forma de coerción. Si bien
habitacional es lo más cercano a una realización cabal de cuatro organismos fungieron como la base con la cual el
cuanto fuera propuesto por el movimiento moderno. Con mil Estado intervino en la “solución” del problema de la vivien-
habitantes por hectárea, 75 por ciento de área verde y to- da en nuestro país —la Dirección de Pensiones Civiles, el
dos los servicios integrados en los edificios, se planeó para Banco Nacional Hipotecario y de Obras Públicas, el Insti-
15 mil viviendas distribuidas en edificios multifamiliares de tuto Mexicano del Seguro Social y el Instituto Nacional de
distintas alturas; alta densidad conformada por bloques la Vivienda—, un nuevo actor replanteó las reglas del juego.
de vivienda monolítica. El tablero mostraba multifamiliares, unidades vecinales,
En cambio, San Juan de Aragón surgió como respuesta conjuntos habitacionales, conjuntos urbanos y ciudades
a la voluntad por mejorar las condiciones de grupos de po- satélite. En tanto, la nueva partida estaría supeditada por el
blación de bajos ingresos reubicando a 120 mil colonos, de movimiento obrero que levantaría las banderas para exigir
los cuales 70 mil pertenecían al Cerro del Tepeyac y 50 mil el cumplimiento del artículo constitucional 123, que señala
más a otras áreas periféricas. En mil hectáreas se desarro- la obligación de los patrones de proporcionar viviendas en
lló todo el conjunto de 18 mil viviendas unifamiliares alre- renta a sus trabajadores, así como la obligación de dotarlos
dedor de un gran parque con espacios verdes incluyendo de escuelas, servicios médicos y un conjunto de satisfac-
zona habitacional, centro vecinal, centro de barrio, centro tores colectivos. Durante 53 años se habían evitado los pro-
comercial y campos deportivos. Se consideró a la vivien- cedimientos con los cuales hubiera sido posible materiali-
da como un generador de patrimonio familiar; un cambio de zar este objetivo, por lo que se presentó una propuesta de
rumbo con relación a lo que se había hecho en años ante- modificación constitucional.

I N V E S T I G AC I Ó N 33
34
I N V E S T I G AC I Ó N 35
Tres eran los impedimentos para aplicar la ley: dificulta- calco, Vicente Guerrero, La Esmeralda y las primeras sec-
des en las empresas para asumir la carga económica, dife- ciones de Culhuacán y Cuautitlán Izcalli. La construcción
rencias entre las empresas que obstaculizaban la existencia de El Rosario duró nueve años, de 1974 a 1983, y se diseñó
de una ley que contemplara a todas, y contrastes salariales a partir de bloques de vivienda unifamiliar y dúplex, así
entre regiones. como edificios multifamiliares, espacios comunales y diver-
Las propuestas de solución promovieron una incipiente sos equipamientos, entre ellos, dos grandes lagos. La dife-
asociación público-privada en la cual las empresas afronta- rencia sustancial radicó en el número de viviendas. Se pasó
ran su responsabilidad de forma mancomunada y no inde- de proyectos para 20 y 30 mil personas a un conjunto pen-
pendientemente, haciendo extensiva la obligación a todos sado para 100 mil habitantes, de 5 mil a 16 mil viviendas.
los patrones, de tal manera que no hubiera excepción a la El plan maestro de 200 hectáreas, posiblemente el único
regla evitando la relación personal de cada patrón con el proyecto colectivo de tal magnitud posterior a Ciudad Uni-
trabajador. A su vez, se priorizó la adquisición de vivienda versitaria, estuvo a cargo de Ricardo Legorreta, con edificios
por encima del alquiler y el texto constitucional modificado de Pedro Ramírez Vázquez, Juan Sordo Madaleno, Augusto
estableció mecanismos para utilizar recursos financieros y H. Álvarez, Enrique Carral, Vladimir Kaspé y equipamien-
crediticios al crear un fondo nacional de vivienda que cons- to urbano-paisajístico de Luis Sánchez Renero, Pedro Span
tituyera depósitos en favor de los trabajadores para estable- y Mario Schjetnan. Sus premisas de diseño: repetición de
cer un sistema de financiamiento que permitiera obtener unidades; industrialización de elementos y componentes;
crédito accesible y suficiente para adquirir la propiedad. tipos de vivienda según costo; análisis de vivienda existen-
Así, en abril de 1972, se creó el Infonavit para la coordi- te; flexibilidad de la vivienda; integración de locales comer-
nación y realización de estos objetivos. Se establecieron ciales; procesos constructivos e instalaciones. Al norte del
cuatro líneas de crédito que subsistieron hasta 1992: adqui- Valle de México, entre Azcapotzalco y el Estado de México,
sición de vivienda financiada por el instituto, adquisición de El Rosario se convirtió en una zona comercial y habitacional.
vivienda financiada por terceros, construcción de vivien- Pensado como una gran ciudad con escuelas, jardines
da en terreno propio, y crédito para pago de pasivos ad- de niños y comercios medianos en las intersecciones de
quiridos por cualquiera de los conceptos anteriores. De tal andadores que comunican diversos barrios, con paradas
manera, la política nacional de vivienda se instrumentó me- de transportes urbanos y circulaciones perimetrales, el con-
diante un esquema que construiría y adjudicaría vivienda junto incluyó “plazas de barrio”, valles y áreas verdes.
por vía de los sectores laborales. No sólo cambiaría la es- En un documento titulado La ciudad en la ciudad, publi-
tructura del Estado benefactor paternalista sino el futuro cado por el Patronato Cultural del Infonavit con motivo de
de la habitación. la inauguración del conjunto en 1974, se describía el ideal
El crecimiento poblacional y los movimientos migratorios urbano de la unidad con metáforas, recursos literarios y
trajeron como consecuencia un fuerte incremento del par- extractos de poemas que en su momento mostraron los
que habitacional: de 8.2 millones de viviendas registradas fundamentos de la ciudad del mañana. El texto de la pu-
en el censo de 1970 se pasó a 16.2 millones registradas en blicación haría referencia a una ciudad con distintas ciu-
1990. El incremento demográfico fue puntal para la metás- dades que mostraba una alternativa ante el caos urbano, las
tasis urbana. El país dejó de ser mayoritariamente rural; descomunales horas de traslado y la saturación de las peri-
57.4 por ciento de la población residía en áreas urbanas, ferias. Se presumía un “proyecto urbanístico poco común,
lo cual generó una expansión del territorio urbano y, ante la una ciudad dentro de la ciudad… una ciudad requiere un
demanda de vivienda, se dio un crecimiento informal por tiempo… requiere de varios tiempos… un tiempo para cons-
dos razones: en primera, la producción de vivienda ocupó truirla, otro para habitarla y otro más para adaptarse a
individual o colectivamente terrenos sin urbanizar, por lo ella y para moldearla con el carácter propio de sus habitan-
general en la periferia de las ciudades y al margen de los tes… Nos propusimos construir una ciudad. Supimos que
reglamentos de construcción, sin asesoría técnica, legal la casa es adentro y es afuera. Es el techo, el lugar cubierto,
o administrativa; y en segunda, por el surgimiento de la fi- los lugares de estar, de descansar; también las plazas, los
gura del constructor social organizado que solía tener ase- jardines, los pasos a desnivel, los sitios para jugar y para
soría de organizaciones no gubernamentales. aprender; los servicios municipales”.
En este contexto, el Infonavit mostró su músculo como El modelo de ciudad pregonado sería más que una unidad
constructor. La Unidad Habitacional El Rosario fue uno de habitacional. Se priorizaría a la calle con función informa-
sus primeros desarrollos urbanos de gran escala. Para en- tiva, simbólica y de esparcimiento, la circulación peatonal y
tonces el Instituto había construido las unidades de Izta- los lugares de encuentro para manifestarse en ella. De igual

36
forma, en “El Rosario. Dónde vives y cómo vives”, se vin- y su proyección en la Tierra. “La ciudad en su historia es el
culaba al habitante con las reglas de civismo y armonía experimento perenne para dar forma a la contradicción, al
en la unidad: conflicto”, escribe Massimo Cacciari en La ciudad. La revo-
“Te encuentras vivienda en la Unidad Habitacional El lución de la vivienda debiese ser cuestión de tres. La res-
Rosario. Eso ya lo sabías desde que aquí llegaste. Pero qui- ponsabilidad es compartida pues mientras uno financie,
zás viniste de un punto lejano o de un ambiente muy dis- otro construya y venda, y otro adquiera y habite, la vivienda
tinto y tu costumbre apenas está naciendo. Si miras a tu seguirá siendo un problema de cuatro muros, a diferencia
alrededor encontrarás espacio y más espacio construido o de la vivienda colectiva de la modernidad pensada y proyec-
en construcción. Edificios de viviendas, centros de activida- tada extramuros. El equista no debe ser un inmobiliario en
des diversas, para los servicios que requieres, plazas, calles, solitario. A pesar de los contornos y la suma de buenas in-
lagos, todo en un ámbito que define tu estancia y tu paso, y tenciones, la nueva política de vivienda necesita menos
el de tus familiares. Vives en un edificio determinado, en un metros cuadrados y más espacio común. El porvenir de las
departamento o en una casa. Es lo tuyo. Pero también vi- ciudades exige otro tipo de ecuación.
ves en todo este espacio, con tantos edificios y puntos de
encuentro y de cruce, con los vecinos. Con ellos convives.
Por eso has de considerar tuyo no sólo tu sala y tus habita- Referencias
ciones, tu cocina y tus ventanas, sino cuanto lo rodea, que Cacciari, Massimo (2010), La ciudad, Barcelona, Gustavo
viene a ser como la sala grande de tu casa. Lo que usas para Gili.
llegar a tu casa, cuanto desde ella ves en los límites de esta Calli, Revista del Colegio Nacional de Arquitectos de México,
unidad habitaciones, que es, más grande que un pueblo, “Habitaciones Colectivas”, No. 1, México, Distrito Fede-
como una ciudad en aledaños de la gran ciudad rebosante ral, 1960, pp. 23–26.
de gentes. Es tuyo como parte también tú de ello, porque González Pozo, Alberto (1996) “Las ciudades: el futuro y
pertenece a todos, a los 110 o 120 mil personas que vivirán, el olvido”, en González Gortázar, Fernando (1996), La ar-
conviviendo, contigo en El Rosario. Aunque claro, tu casa, quitectura mexicana del siglo xx, México, Conaculta,
tu departamento, es solo tuya, de los tuyos”. p. 308
El conjunto ha evolucionado y envejecido con infinitos Gómez Mayorga, Mauricio (1949) “El problema de la ha-
cambios en más de cuatro décadas fomentando estrategias bitación en México: realidad de su solución”, en revista
de apropiación, aunque no siempre óptimas. Con 16 mil vi- Arquitectura México No. 27.
viendas, el paradigma de la densidad se modificó y adaptó Infonavit (1993) “Avance del tren de vivienda de 1973 al
a la realidad social, dando pauta a una ciudad intraurba- 31 de diciembre de 1993 para el D.F. y el Estado de Mé-
na de escala metropolitana. La regulación de propiedades, xico”, Sistema Integral de Información, México.
mantenimiento y conservación de espacios públicos así Infonavit (1974) La ciudad en la ciudad. Unidad Habitacio-
como la gestión vecinal, la llegada del Metro en los ochenta, nal El Rosario, México, Patronato Cultural del Infonavit.
la inseguridad y el crecimiento poblacional han sido pro- Minaya, Fernando (2017) “Conjunto Habitacional El Rosa-
blemas recurrentes. A pesar de esto, El Rosario y los prime- rio” en Ayala, Enrique; Vargas Concepción J. y Álvarez
ros conjuntos del Infonavit marcarían su fundación como Gerardo (2017) La construcción de la Ciudad de México,
constructor de ciudades hasta los años noventa. En sus siglos XIX y XX. Barrios colonias y fraccionamientos, Mé-
primeras dos décadas el Instituto construyó 228 mil 806 xico, UAM, pp. 259–270.
viviendas en 256 conjuntos habitacionales. Se decía que Schteingart, Martha y Graizbord, Boris (coord.) (1998)
“el Infonavit seguirá siendo una actitud de cambio mental Vivienda y vida urbana en la Ciudad de México. La acción
en favor de la clase trabajadora por ser un instrumento de del Infonavit, México, El Colegio de México.
justicia social y vigilante permanente de la marcha de un Schteingart, Martha (2001) Los productores del espacio
organismo revolucionario” (Informavit no. 5, novena época, habitable. Estado, empresa y sociedad en la Ciudad de
México, Infonavit, 1987). México, México, El Colegio de México.
En el pensamiento antiguo griego, el fundador de la Valenzuela, Alfonso (2014) Urbanistas y visionarios. La
ciudad, llamado equista, recibía la inspiración divina sobre planeación de la ciudad de México en la primera mitad del
cuándo, dónde y cómo sería la ciudad creada. De tal for- siglo xx, México, Porrúa.
ma, el rito fundacional se iniciaría con un plano trazado so-
bre un solar que a su vez reflejaba la estructura del mundo,
comprendida entre el movimiento de las esferas celestes

I N V E S T I G AC I Ó N 37
VIVIENDA Y
ESPACIO PÚBLICO

Ernesto Alva + Cecilia Solís

38
El problema de la densidad habitacional en la zona intraurbana de
la Ciudad de México desde el espacio público debiese significar
una relación intrínseca y simbiótica con la misma vivienda. Si se les
atiende juntos, es un beneficio mutuo para la ciudad y el habitante.
La vivienda está conformada por más que cuatro paredes y un
techo; su ámbito de conceptualización comprende que el espacio
interior tiene una relación con el exterior inmediato hacia donde
se extiende / expande, se relaciona / integra y se complementa / adi-
ciona. En la relación entre vivienda y espacio público urbano existe
el potencial desarrollado entre ambos: un elemento de transición
y un espacio público intermedio concebido como común y colectivo
a nivel de barrio. Esta cualidad permite extender actividades diarias
domésticas en las que el usuario-habitante acaba de satisfacer
las necesidades que empiezan adentro, desde la privacidad de su
vivienda y posible extensión a través de recorridos que tienen como
meta destinos y servicios en los que se llevan a cabo ciertas activi-
dades o encuentros sociales.
El espacio público visto como un elemento que integra y articula
a la vivienda, y otros usos de suelo, aporta un potencial de habita-
bilidad y la posibilidad de una ciudad de alta densidad intraurbana.
¿Por qué es importante el espacio público para la vivienda? El espa-
cio público es prioridad para la estrecha necesidad que tiene la
vivienda como producto de calidad; en tanto mejor atienda las nece-
sidades de la población con la que está estrechamente vinculada,
la vivienda se enriquece de ello y permite a su vez que se apliquen
conceptos de “ciudad compacta” y “redensificación de la ciudad
central” a través de vivienda intraurbana. Es el espacio público, en
sus niveles urbano e inmediato o colectivo, el elemento clave
que podría permitir que esto suceda al ser el que contiene en su ha-
ber una de las características indispensables para su relación con
otros usos de suelo.

I N V E S T I G AC I Ó N 39
Para entender como elemento clave la relación entre el espa-
cio público y la vivienda, es necesario analizar el vínculo que existe
entre la ciudad y la vivienda, entendiendo que, siguiendo a Aldo
Rossi en La arquitectura de la ciudad, “la ciudad está conformada
por partes, por formas y por características; estas características
son la síntesis de funciones y de valores. […] Entonces, la ciudad
está distinguida en partes diversas y, desde el punto de vista formal
e histórico, constituyendo hechos urbanos complejos”. Si bajamos
la escala de análisis hacia las partes de la ciudad, las cuales se dife-
rencian unas de otras, y lo aplicamos a la Ciudad de México, con-
cebida como una “ciudad de ciudades”, la complejidad aumenta y se
enriquece, siendo que cada una de éstas está constituida a la vez
por una diversidad de áreas caracterizadas como “barrios”.
Si las viviendas se reducen en dimensiones, se requieren mejores
elementos que respondan a un “diagnóstico de barrio”, como lo ase-
guraba José María Gutiérrez en su metodología habitacional. Esto
permite atender los elementos clave que necesitan ser considerados
para así aumentar la densidad intraurbana e incluso permitir cierta
reducción en la dimensión de sus espacios interiores siempre y cuan-
do se compense con la existencia de un espacio público comunal de
calidad que ofrezca y conecte cómodamente con lo que no se tiene
en la vivienda. Si no hay espacio suficiente para estudiar se requiere
de una biblioteca cercana; si no se cuenta con un área de lavado
y planchado, se requiere de una lavandería o tintorería; si no se tiene
tiempo y espacio para comer, se requieren restaurantes diversos
y accesibles; si no se tiene donde jugar se necesita un parque, y así
sucesivamente, completando lo que por sus reducidas dimensiones
no se puede ofrecer en un departamento.
Es importante que existan elementos que refuercen la privaci-
dad de las viviendas para que sea muy fácil identificar lo que es
privado y lo que es público. Esto ayuda a que exista un espacio de

40
transición entre ambos, ya sea un espacio común, cualidad muy
rescatable y de la que gozan las unidades habitacionales, conjuntos
de vivienda, vecindades, fraccionamientos o privadas. “Reforzar
la privacidad” es mejorar las condiciones de habitabilidad, y si esta
necesidad de “privacidad” se satisface, se puede disfrutar mejor el
afuera y lo público aportando el espacio necesario para conciliar
el “sentido de comunidad” que promueve el civismo y la convivencia
con un potencial de armonía entre sus usuarios-habitantes, per-
mitiéndoles una mejor apropiación del espacio que resulte en una
identificación positiva.
Entonces, ¿qué papel juega el espacio público con relación a la
vivienda? Las dinámicas urbanas en la Ciudad de México han
cambiado y cuentan con una gran influencia en las dinámicas glo-
bales. Siendo estos cambios más rápidos de lo que puede cam-
biar para adaptarse y acogerlos en la ciudad construida, la inercia
de operatividad, la concepción de sus proyectos, así como de la
materialización de éstos a través del desarrollo de su construcción,
son algunos ejemplos de lo que no logra cambiar a la par de las
nuevas dinámicas urbanas. Por otro lado, el cambio de lo urbano
radica en una población que sigue creciendo pero, sobre todo, en la
demanda de hogares unipersonales. A esto habrá que sumar el
rezago habitacional existente que aumenta el número necesario de
unidades de vivienda, a la vez que cambia la dinámica en la que
se han concebido las viviendas.
El tiempo que pasamos dentro de la vivienda también se reduce
simplemente por el hecho de que el habitarla no permite realizar y
satisfacer todas las actividades por sí mismo sino que requiere diná-
micas fuera de ella. Todos estos cambios en el modus viviendi se
reflejan en el tipo de viviendas que se demandan y afectan la forma
en la que concebimos a la ciudad como tal. De tal forma, la vivienda
no requiere grandes dimensiones si cumple con una condicionante

I N V E S T I G AC I Ó N 41
importante: que la persona que habita una compacta unidad de
vivienda pueda establecer vínculos y actividades fuera de su vivien-
da casa; de manera sencilla, cómoda y práctica. La calidad de la
vivienda es prioritaria al salir de la vivienda, al cruzar la puerta en
umbrales de espacio público hacia la ciudad.
El modus vivendi contemporáneo de “ciudad informacional”,
como una revolución tecnológica de proporciones históricas, está
transformando las dimensiones fundamentales de la vida humana:
el tiempo y el espacio. Los nuevos descubrimientos científicos
y las innovaciones industriales están ampliando la capacidad pro-
ductiva de las horas de trabajo, a la vez que suplantan la distancia
espacial en todos los ámbitos de la actividad social. Fenómeno
que demanda una estrecha relación con una “ciudad vital”, las cuales
para existir necesitan estructuras urbanas compactas, una densi-
dad razonable de población, distancias óptimas para ser recorribles
a pie o en bicicleta y una buena cualidad espacial urbana. Como
lo refiere Gutiérrez en el “diagnóstico de barrio” antes mencionado,
al existir cambios en la distancia espacial de las actividades de
los ciudadanos se demanda vitalidad en las ciudades para mantener
la calidad de vida. Para lograr esto se debe contrarrestar el tiempo
que se pasa inmerso en el trabajo y/o en casa, a veces sin la necesi-
dad de relacionarse físicamente e incluso sin la necesidad de mo-
verse de la computadora o el celular.
El hecho de que una persona pueda pasar gran parte del día en
un mismo espacio desarrollando todas sus actividades para satisfa-
cer sus necesidades básicas permite pensar en lo compacto e
indica que se debe atender con mucha más atención el espacio
público que conecta estos núcleos celulares del habitar. La carencia
de lo público se debe apuntalar como potencial oportunidad
con nuevas estrategias para la ciudad, no sólo de mejoramiento de
lo existente sino de diseño y planeación de origen.

42
Es abrazar una nueva forma de hacer vivienda, analizarla,
entenderla y atenderla. El espacio público se vuelve clave en la aso-
ciación de la vivienda con la ciudad, en su relación con el espacio
privado (hogar o de trabajo) y el encuentro con satisfactores a sus
necesidades básicas y de esparcimiento que ayuden y fortalezcan a
la vivienda como un recinto habitable, y sólo entonces, con carac-
terísticas de compactación y alta densidad.

Unidad Infonavit Iztacalco, 1973


Centro de Información Documental
Biblioteca Infonavit

I N V E S T I G AC I Ó N 43
PAISAJE NATURAL 
PAISAJE URBANO

Jesica Amescua
En los últimos cincuenta años, el área metropolitana de la Ciudad
de México se ha triplicado y alrededor del 60 por ciento de su
territorio (Connolly 2005) se ha conformado mediante procesos de
urbanización popular que, hoy en día, muestran una diversidad
de paisajes urbanos en la ciudad. Sin embargo, desde 1980 el creci-
miento demográfico de su área metropolitana ha estado muy por
debajo del crecimiento de la superficie urbanizada, lo cual se ha de-
bido al empobrecimiento continuo de los trabajadores desde la cri-
sis de 1982, causando movimientos de relocalización de los sectores
populares —en busca de mejores oportunidades— hacia las perife-
rias de la ciudad, principalmente al norte y oriente de la Ciudad
de México (Hiernaux & Lindón 2000).
La urbanización popular, aquella que hoy en día domina la super-
ficie construida de la Zona Metropolitana de la Ciudad de México,
más que ser un crecimiento urbano espontáneo e improvisado, es
un crecimiento urbano evolutivo que presenta múltiples variaciones
en sus procesos de consolidación. Estos son determinados por la
interrelación histórica de las condiciones económicas, políticas, geo-
gráficas, ambientales, espaciales y socioculturales específicas de
cada lugar, lo cual se refleja en el carácter provisional o definitivo
de sus construcciones y su entorno. Asimismo, los asentamientos
populares del área metropolitana presentan distintas formas de
ocupación del espacio y grados de densidad de acuerdo con las
características de su contexto físico, la economía de sus habitantes,
la relación de su territorio con la ciudad central y los procesos
sociopolíticos detrás de la regularización de la tierra. Tal es el caso
de la conformación y expansión urbana del asentamiento popu-
lar del municipio Valle de Chalco Solidaridad,1 el cual se ubica al
suroriente de la Ciudad de México y ha sido resultado de un
conjunto de procesos interdefinibles que, con el paso de los años,
han dictado sobre la transformación sociohistórica y espacial
de su territorio pasando de un paisaje natural a un paisaje urbano.


1 El municipio de Valle de Chalco Solidaridad forma parte de la re-
gión del valle de Chalco, delimitada principalmente por el área del
fondo plano del Lago de Chalco y que se configuró hasta 1994 por
cinco municipios: Chalco, Chicoloapan, Chimalhuacán, Ixtapaluca
y La Paz. En este año el municipio de Chalco se dividió para crear el
sexto municipio de la región: Valle de Chalco Solidaridad. Actual-
mente, consta de una zona urbana que ocupa el 59 por ciento de su
superficie, mientras el resto del territorio corresponde a uso agríco-
la y pecuario, distribuido en grandes extensiones de lagunas y áreas
susceptibles a inundaciones. I N V E S T I G AC I Ó N 45
Entre el siglo XVII y principios del siglo XIX, la cuenca Chal- Entre los principales estragos ambientales que provocó
co Amecameca, lugar de origen de uno de los asentamien- la desecación del lago se encuentra la desecación de los ma-
tos populares más grandes del mundo, estaba constituida nantiales que abastecían de agua a la zona y la fuerte sequía
por una planicie endorreica con tierras altamente produc- de las tierras de cultivo, lo cual conllevó a la exposición de
tivas que dieron cabida a que, durante esta época, Valle de salitre en el suelo y provocó una disminución significa-
Chalco se convirtiera en el centro alimentario de la Ciudad tiva en la productividad y rentabilidad del trabajo agrícola.
de México. En aquel tiempo, su primer ordenamiento terri- Durante mediados de los años setenta, frente a la baja o
torial estaba conformado por la subdivisión de tierras de casi nula productividad de las tierras y al empobrecimiento
cultivo —nombradas “tablas”—, separadas entre sí por me- acelerado de la población, los ejidatarios de Valle de Chalco
dio de canales de agua cristalina que corrían de este a oes- no fueron capaces de resistir económicamente la fuerte
te y de norte a sur (Torres et al. 2016), formando una traza disminución del trabajo agrícola en la zona, por lo que en
reticular en el territorio. Su función estaba destinada al conjunto con fraccionadores pirata —o “corredores”— co-
riego de los cultivos, así como a establecer vías de trans- menzaron a lotificar las tierras ejidales para su venta ilegal.
porte entre los dieciséis ejidos existentes y comunicar la La irregularidad en la venta de los terrenos de propiedad
zona de Valle de Chalco con la Ciudad de México. La alta ejidal, la baja capacidad del suelo y las tierras inundables y
productividad de sus tierras y su proximidad con la capital, salitrosas, generaron que el costo de los terrenos fuera mu-
convirtieron a Valle de Chalco en el centro alimentario de la cho más bajo que en resto de la metrópoli, con lo cual Valle
Ciudad de México. Sin embargo, a partir de 1850 el sector de Chalco se convirtió años más tarde en una válvula de
productivo tuvo un giro rotundo con el auge industrial, lo escape (Iracheta 2000) de la creciente demanda de vivien-
que provocó la introducción del ferrocarril en la zona como da en la ciudad. De esta manera se conformó un macroa-
sustitución de parte del sistema de transporte tradicional sentamiento humano popular en condiciones sumamente
por medio de canales de agua, así como la instalación de adversas en términos ecológicos, sociales, económicos y
nuevas fuentes productivas como la cría de ganado, centros urbanísticos, a lo cual habría que sumar también en térmi-
lecheros y fábricas de textiles. Para poder lograr la introduc- nos culturales, ya que la conformación de dicha área urbana
ción del ferrocarril en Valle de Chalco, se ordenó la primera conllevó a la absorción de pueblos tradicionales ubicados
desecación del lago, seguida de una segunda desecación en en la zona sur de la región: antiguo pueblo de San Miguel
1957, casi cien años después (Lacombe et al. 1992). de Xico.

Es a partir de este momento que se presenta, además de


un reordenamiento territorial, un cambio de vocación del
territorio a través de la transición de una zona agrícola al-
tamente productiva a una nueva zona urbana en las perife-
rias de la Ciudad de México, sustituyéndose así el valor de
uso de la tierra por su valor de cambio. En su gran mayoría,
la urbanización de Valle Chalco no se llevó a cabo a partir
de actos espontáneos o de grupos organizados, sino a par-
tir de iniciativas individuales seguidas y apoyadas de un
conjunto de acuerdos basados en la confianza mutua de sus
actores (Lacombe et al. 1992): ejidatarios, “corredores” y
familias que buscaban comprar un terreno a un precio ac-
cesible para la autoconstrucción de su vivienda.
El inicio del proceso de lotificación irregular de las tie-
rras provocó la necesidad de negociar acuerdos entre los
ejidatarios y las autoridades municipales de Chalco y de
Ixtapaluca,2 lo cual configuró una nueva traza urbana y,


2 Antes de 1994, año en que se conformó el nuevo municipio Valle de
Chalco Solidaridad, los municipios de Chalco e Ixtapaluca compar-
tían el área urbana actual de Valle de Chalco.

Mapa de Valle de Chalco Solidaridad: primer y


46 segundo ordenamiento territorial.
por ende, un segundo ordenamiento territorial, tomando parejas jóvenes del poblamiento popular de las zonas ale-
como base la retícula existente que había sido producto de dañas para la conformación de nuevos hogares, lo cual tuvo
la división de las tierras de cultivo por medio de canales. como resultado una ocupación urbana caracterizada por
Bajo estos acuerdos, ejidatarios y gobierno, determinaron hogares de reciente constitución y con una población pre-
en conjunto la dimensión y ubicación de las futuras zonas dominantemente joven (Lindón 1999) en la década de los
de servicios y equipamiento para mercados, escuelas, cen- noventa. Sin embargo, esta movilización residencial repre-
tros de salud y parques, siendo que cada ejidatario debía sentó para estos nuevos pobladores una pérdida de las con-
ceder al menos un área de su ejido para dichos usos. Por diciones materiales urbanas con las que ya contaban, para
otro lado, los ejidatarios tomaron el acuerdo de que cada así llegar a un territorio desierto, con grandes carencias en
uno dejaría trazado en su lotificación 10 metros libres para servicios, infraestructura y equipamiento, además del gran
las calles, más un metro a cada lado para banquetas, ade- reto de construir una nueva vivienda.4
más de que se fraccionarían los lotes con áreas entre 200 y Aún hasta finales de los años ochenta y principios de los
300 metros cuadrados3 —áreas mucho mayores a las que noventa, los nuevos pobladores se enfrentaron ante una
se ofertaban en el resto de la ciudad. condición ecológica altamente deteriorada del territorio,
Los primeros años de ocupación urbana de Valle de a un suelo fragilizado y a los crecientes costos de infraes-
Chalco, durante la segunda mitad de la década de los se- tructura hidráulica y de transporte hacia las zonas centra-
tenta, se llevaron a cabo a través un ritmo lento y pausado. les de la ciudad. Durante estos años, Valle de Chalco era
Sin embargo, durante la década de los ochenta el proceso considerada como una ciudad dormitorio, sin servicios ni
de poblamiento se aceleró significativamente por medio de equipamientos urbano. El acelerado crecimiento urbano
la autoconstrucción de viviendas bajo un patrón disperso y requería cada vez más de la organización de los habitan-
horizontal, con bajas densidades de población, lo cual fue tes para la introducción de transporte en la zona, de servi-
incorporando nuevas zonas de suelo urbano, pero sin que cios básicos y la gestión de procesos de regularización, por
otras aún se hubieran saturado (Iracheta 2000). La expan- lo que se crearon luchas populares a través de movimien-
sión de la zona urbana se llevó a cabo desde la Carretera tos sociales independientes como: la Unión Popular Revo-
México-Puebla ubicada en la zona norte del municipio, y lucionario Emiliano Zapata (UPREZ), el Movimiento Popu-
también desde la expansión del pueblo de San Miguel Xico lar Independiente (MPI), el Comité Popular Independiente
ubicado en la zona sur, cuya población rural quedó años más (CPI) y el Sindicato de Trabajadores de Ruta 100 (SUTAUR-
tarde incorporada a la mancha urbana del área metropo- 100), entre otros (Torres et al. 2016). Durante los prime-
litana de la ciudad a través de un proceso de superposición ros quince años, los colonos lucharon por tener alumbrado
cultural entre dos modos de vida: el urbano y el rural (Lin- público y agua potable en los hogares, así como por mejorar
dón 1999). las condiciones de las principales vialidades. La ocupa-
La nueva población de Valle de Chalco se conformó ción del territorio natural de Valle de Chalco significó para
a partir de movimientos migratorios intrametropolitanos los pobladores un proceso constante y dual de adaptación
(Lindón 1999) en la Zona Metropolitana de la Ciudad Mé- y domesticación del medio ambiente en las situaciones
xico, principalmente desde Nezahualcóyotl, Iztapalapa e más extremas.
Ixtacalco hacia Valle de Chalco, los cuales —como ya se Es durante esta etapa inicial que los procesos sociales
mencionó anteriormente— más que aumentar la población en Valle de Chalco tuvieron como resultado los primeros
de la metrópoli, incrementaron la extensión territorial de la procesos de transformación de un mero espacio geográ-
ciudad. La intensa migración hacia Valle de Chalco entre fico a un espacio social que comenzaba a forjar una identi-
1985 y 1990 conformó una población mayoritariamente dad colectiva:
de pobladores provenientes de la Ciudad de México con un
44 por ciento, y del Estado de México con un 45 por ciento
(Núñez 2000). Dichas migraciones tuvieron lugar a partir

del encarecimiento de las rentas en las zonas centrales y 3 Se pueden identificar los diferentes patrones de lotificación que

periféricas de la ciudad, del terremoto de 1985 y de la con- cada ejidatario realizó sobre el plano de la traza urbana de Valle de
Chalco, pues dichos cambios coinciden con los límites entre un eji-
formación de nuevos grupos residenciales por la expansión
do y otro.
del número de integrantes de núcleos familiares ubicados
4 La diversidad de las colonias de Valle de Chalco y sus distintos gra-
en otros asentamientos populares de la ciudad. Los ba- dos de consolidación radica en la diferencia de lugares de proce-
jos costos de los terrenos debido al fraccionamiento ilegal dencia de sus pobladores, su antigüedad, nivel de marginación y for-
y especulativo de los ejidos en Valle de Chalco atrajo a las maciones profesionales de sus habitantes.

I N V E S T I G AC I Ó N 47
Arriba: Zona norte de Valle de Chalco Solidaridad, Abajo: Zona sur de Valle de Chalco Solidaridad,
48 Estado de México Estado de México
“[…] No debe faltar mencionar a los miles y miles de colonos ridad— introdujo servicios municipales (agua, luz y drenaje),
que llegamos y quienes fuimos los auténticos constructores, realizó amplias obras de pavimentación y se aceleraron los
los que en la práctica levantamos las casas, escuelas, mer- procesos de regularización de la tenencia de la tierra. Alre-
cados y parques de nuestro Valle de Xico” —como nombran al dedor de 1990, las familias tenían que esperar entre uno y
municipio Valle de Chalco Solidaridad—. “En este recordatorio cinco años para lograr obtener sus títulos de propiedad,
—también— deberían ser mencionados sin falta, los presiden- sin embargo, a partir de las reformas constitucionales al
tes de comisariado ejidal de los diversos ejidos que aportaron artículo 27 en 1992, el gobierno agilizó dicho proceso al le-
sus terrenos a este gigantesco esfuerzo fundador […]”.5 galizar la venta de tierras ejidales, con lo cual para el año
2000 el 90 por ciento de los hogares ya contaban con escri-
Aún cuando el inicio de la urbanización del municipio Valle turas notariales (Núñez 2000).
de Chalco se llevó a cabo a través de grandes esfuerzos
colectivos por parte de sus pobladores, su proceso de con- La decidida intervención del gobierno en el proceso de con-
solidación durante las primeras dos décadas fue muy lento. solidación de Valle de Chalco tuvo como resultado un claro
A finales de los años ochenta, el paisaje urbano aún estaba cambio de rumbo en el mejoramiento de la calidad de vida
dominado por viviendas inacabadas, algunas incluso cons- de sus pobladores. Sin embargo, también se modificaron
truidas con materiales de desecho. Por más de diez años, las prácticas sociales y espaciales de un orden urbano6
el asentamiento popular de Valle de Chalco quedó fuera en el cual hasta el momento la búsqueda por el bien común
del radar y control de las políticas públicas de vivienda y había regido, ya que se instauraron prácticas clientelares
ordenamiento territorial. Sin embargo, años más tarde, y ya por parte del gobierno que poco a poco debilitaron la orga-
muy avanzada su expansión urbana, los intereses políticos nización social de sus habitantes, así como el poder de de-
y electorales aprovecharon las grandes necesidades de la cisión que estos en algún momento tuvieron para dirigir el
población para convertir a Valle de Chalco en el centro de rumbo de la transformación de sus colonias.
acción del régimen salinista, incluso en centro de la aten-
ción mundial debido a las decisiones políticas que se hicie-

ron en la región (Núñez 2000).
5 TORRES, L., LÓPEZ, M., VENTURA, AMARO, G., YESCAS, R. (2016):
A partir de 1988 Valle de Chalco se convirtió en un pro-
Cuadernos de historia del Valle de Xico. La isla de Xico. Un volcán
yecto político del entonces presidente Carlos Salinas de
que se extingue, México, Museo Comunitario del Valle de Xico.
Gortari a través del Programa Nacional de Solidaridad 6 La antropóloga Angela Giglia describe el concepto “orden urbano”
(PRONASOL). Para llevar a cabo dicho proyecto el gobierno como el conjunto de reglas entre los actores sociales, así como en-
constituyó un nuevo municipio —Valle de Chalco Solida- tre los actores y el propio espacio (Giglia 2016).

Matriz de transformación morfológica y actores sociales


del espacio público: Deportivo San Miguel de Xico I N V E S T I G AC I Ó N 49
Actualmente, dichas prácticas clientelares se han tradu- Referencias
cido en el surgimiento de liderazgos en busca de beneficios AZUELA, A., TOMAS, F. (coord) (1997), El acceso de los po-
particulares que controlan y manejan la toma de decisio- bres al suelo urbano, México, Universidad Nacional Au-
nes locales en torno a la infraestructura y equipamiento tónoma de México, Instituto de Investigaciones Sociales.
urbano del municipio. Ejemplo de esto son, por un lado, los CONNOLLY, Priscilla (2005), Tipos de poblamiento en la Ciu-
líderes de las colonias que se han convertido en el vínculo dad de México, México, Observatorio Urbano de la Ciudad
entre las demandas de los habitantes y los intereses de los de México.
partidos políticos. Y, por otro lado, se encuentran los res- GIGLIA, A. (2012), El habitar y la cultura. Perspectivas teóri-
ponsables de las áreas deportivas: particulares quienes, cas y de investigación, Barcelona, Anthropos Editorial.
al obtener un beneficio económico por organizar las ligas HIERNAUX, D; LINDON, A; NOYOLA, J. (coords.) (2000), La
de las canchas deportivas, deben colaborar con los inte- construcción social de un territorio emergente: Valle de
reses políticos del partido en el poder y además asumir Chalco, México, Ayuntamiento del Valle de Chalco Soli-
la responsabilidad del mejoramiento y mantenimiento de daridad, El Colegio Mexiquense.
los espacios públicos con sus propios recursos económicos. IRACHETA, A. (2000), “La urbanización metropolitana des-
De esta manera, debido al control político actual del uso, capitalizada: El Valle de Chalco” en HIERNAUX, D; LIN-
transformación y mejoramiento de los espacios públi- DON, A; NOYOLA, J. (coords.) La construcción social de un
cos, éstos se han convertido en moneda de cambio para la territorio emergente: Valle de Chalco (167–204), México,
obtención de beneficios particulares, ya sean de orden eco- Ayuntamiento del Valle de Chalco Solidaridad, El Cole-
nómico o de poder. gio Mexiquense.
Aún cuando la urbanización popular de Valle de Chalco LACOMBE, B; MARTÍNEZ, R.; JUÁREZ, J.M. (1992), Polvo y
Solidaridad se conciba como aquella que ilustra el para- Lodo, México, CCE-ORSTOM.
digma del crecimiento periférico del área urbana de la Zona LINDÓN, A. (1999), De la trama de la cotidianidad a los mo-
Metropolitana de la Ciudad de México, en el cual sus pobla- dos de vida urbanos: el Valle de Chalco, México, El Cole-
dores por muchos años se enfrentaron a condiciones suma- gio de México, El Colegio Mexiquense.
mente adversas —falta de acceso a la vivienda, adaptación LÓPEZ, R., PLATAS, F., ROMERO, G., SALCEDA, J. (2014), La
a las condiciones inhóspitas de un territorio y falta de ser- complejidad y la participación en la producción de arqui-
vicios, infraestructura y equipamiento urbano—, las formas tectura y ciudad, México, Facultad de Arquitectura, Uni-
de producción de su espacio urbano, tanto de la vivienda versidad Nacional Autónoma de México.
como del espacio público, han sido resultado de un sistema NÚÑEZ, J.M. (2000): Territorio e identidad social en el Valle
de procesos interdefinibles y de relaciones recursivas en- de Chalco. En HIERNAUX, D; LINDON, A; NOYOLA, J.
tre lo social y lo espacial, los cuales han cambiado a lo lar- (coords.), La construcción social de un territorio emergen-
go del tiempo debido a las transformaciones sociohistóri- te: Valle de Chalco (245–272), México, Ayuntamiento del
cas y espaciales enunciadas anteriormente: (1) transición de Valle de Chalco Solidaridad, El Colegio Mexiquense.
un paisaje natural a un paisaje urbano, (2) expansión urba- TORRES, L., LÓPEZ, M., VENTURA, AMARO, G., YESCAS, R.
na y superposición cultural, (3) nuevo municipio como pro- (2016), Cuadernos de historia del Valle de Xico. La isla de
yecto político. Xico. Un volcán que se extingue, México, Museo Comu-
nitario del Valle de Xico.
La historicidad del surgimiento y evolución de esta nueva
zona urbana se ha relacionado directamente con el con-
texto social y político, bajo el cual sus principales actores
—ejidatarios, vecinos organizados y autoridades municipa-
les— han sustituido con el paso del tiempo las lógicas so-
ciales por las lógicas de ganancia y de poder. En testimonios
* Este ensayo es producto del proyecto de investigación: AMESCUA,
recabados, los pobladores reconocen un cambio en su pa-
Jesica (2015–2019), “Los paradigmas de la complejidad en la trans-
pel, pasando de agentes activos —durante los primeros años
formación morfológica de los espacios públicos en los asentamientos
de la expansión urbana— a agentes pasivos en cuanto a la populares”. Tesis Doctoral en Arquitectura en el Posgrado de Maestría
toma de decisiones para las transformaciones físicas y me- y Doctorado en Arquitectura de la Universidad Nacional Autónoma de
joramiento de sus colonias. México.

50
Arriba: Uso y apropiación de los espacios: Deportivo Darío Martínez Abajo: Uso y apropiación de los espacios: Colonia
1ra. Sección. Valle de Chalco Solidaridad, Estado de México Xico I. Valle de Chalco Solidaridad, Estado de México I N V E S T I G AC I Ó N 51
Sistema complejo: conjunto de relaciones entre los
procesos interdefinibles que han incidido en la
transformación sociohistórica y espacial de Valle de
Chalco a lo largo de tiempo.

52
I N V E S T I G AC I Ó N 53
TIERRA VACANTE

Alfonso Iracheta

54
Buena parte de las ciudades mexicanas enfrentan un serio vacías dentro del tejido urbano de la metrópoli, sumando un
problema por la existencia de grandes superficies de terre- total de 18 mil 188 hectáreas de suelo que ya está disponi-
nos libres de construcción identificados al interior del casco ble para ser ocupado con usos fundamentalmente habita-
urbano. Estos predios cuentan con importantes inversio- cionales (2014). Esta superficie es equivalente a 30.5 veces
nes en infraestructura pública que no es aprovechada, por- el suelo anual requerido para todo uso urbano en la zona
que en general sus propietarios los mantienen vacantes metropolitana (escenario máximo) o 78.3 veces según el
esperando que incrementen su precio y debido a que los escenario mínimo. Adicionalmente, existían 80 mil vivien-
gobiernos locales carecen de condiciones para hacer exi- das en proceso de construcción, venta u ocupación en los
gible su ocupación acorde con los planes y programas de 6 municipios metropolitanos.
desarrollo urbano. Además del exceso fuera de toda proporción y su eviden-
Al mismo tiempo, desarrolladores e inversionistas pro- te incongruencia con el desarrollo metropolitano, la locali-
mueven proyectos de todo tipo (vivienda, industria, comer- zación de los proyectos carece de orden y estructura, eviden-
cio, entre otros) en lugares fuera del casco urbano y lejanos ciando la incapacidad del sistema de planificación espacial
del centro urbano que en la gran mayoría de los casos, son urbana y del sistema de ordenamiento ecológico territorial;
aprobados por las autoridades municipales. Se ha llegado se ubican en toda la región, fracturando la selva baja que
a excesos que no solo reducen —o inclusive cancelan— la es característica de Yucatán y provocando un grave proble-
posibilidad de alcanzar un modelo territorial urbano más ma urbanístico y ambiental por la expansión y dispersión de
eficiente, sostenible y compacto, sino que ponen en riesgo estos proyectos y la destrucción de la biodiversidad.
el mercado inmobiliario. La razón de estos excesos es, por una parte, la incapaci-
Solo a manera de ejemplo, en el caso de la zona metro- dad estructural de los sistemas de planeación gubernamen-
politana de Mérida (Programa Regional Metropolitano de tal para orientar y controlar los mercados inmobiliarios y,
Mérida) se realizó un inventario de proyectos habitaciona- por la otra, la existencia de suelo vacante dentro del casco
les como parte del programa de desarrollo metropolitana de urbano al que se agrega la tierra periférica que se ha cali-
la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente del ficado como urbanizable, cuya magnitud no se corresponde
Gobierno del Estado de Yucatán (SEDUMA). Los hallazgos con las necesidades reales de crecimiento urbano; prác-
de este análisis son sorprendentes. Por una parte, se esti- ticamente en su totalidad, el suelo vacante y el periférico
maron las necesidades de suelo urbano de todo uso para están sujetos a especulación inmobiliaria ante la expecta-
2040, a partir de dos escenarios, en el primero (escenario tiva de urbanizarlos.
máximo) se aplicaron densidades similares a las observadas La suma de estas superficies, tiende a ser mucho mayor
en la actualidad y en el segundo (escenario mínimo) se apli- que la requerida por la ciudad (o metrópoli) para su creci-
caron políticas de incremento a las densidades promedio, miento en las próximas décadas, de acuerdo con las pro-
dando por resultado para el escenario máximo, la necesidad yecciones de población y las perspectivas de crecimiento
de 8 mil 200 hectáreas para el periodo de 25 años (328 económico y urbano. Si se considera que México alcanzará
hectáreas por año) y de 4 mil 407 hectáreas (176 hectáreas su máximo crecimiento demográfico alrededor de 2040 a
por año) para el escenario mínimo. 2050, muchas ciudades, si pretenden ocupar toda la tie-
Por otra parte, se descubrió que al momento del estu- rra vacante, además de la autorizada en su periferia, esta-
dio existían 258 proyectos de desarrollos habitacionales- rían condenadas a no tener nunca más una estructura com-
residenciales en diverso grado de autorización, sea en el pacta y organizada, ya que cada desarrollador y propietario
gobierno estatal y/o en el municipal; es decir, son proyectos pretenderá vender su proyecto y al no haber demanda su-
reales en polígonos concretos que se encuentran en pro- ficiente, buena parte de los proyectos se quedarán sin con-
ceso de ejecución, que cuentan con la tierra y existen las solidar y mucha tierra vacante se quedará sin ocupar.
empresas que los realizarán. El inventario es detallado e Frente a estos problemas, las políticas de ocupación de
incluye la localización, superficie, número de lotes, empresa tierra urbana vacante, se utilizan para incentivar y/o pre-
desarrolladora, y fue compulsado entre diferentes fuentes sionar a propietarios y desarrolladores inmobiliarios, para
para evitar duplicidades: SEDUMA, los gobiernos municipa- que ocupen los predios vacíos dentro de los cascos urbanos,
les de la zona metropolitana (Conkal, Kanasin, Mérida, Ucú, de acuerdo a lo establecido en los planes de desarrollo ur-
Uman, Progreso) y la Cámara Nacional de Desarrollo de la bano. Muchos países en el mundo, y recientemente en Amé-
Vivienda (CANADEVI). rica Latina, utilizan estas políticas ante la indiferencia de
La superficie total del conjunto de proyectos es de 15 mil los actores sociales frente a los problemas de dispersión
678 hectáreas, a las que se agregan 2 mil 510 hectáreas de construcciones e instalaciones dentro de las ciudades y

I N V E S T I G AC I Ó N 55
en sus periferias, que tienen como consecuencia que gran- tando una caída en la dinámica poblacional, lo que resulta
des superficies se mantengan vacantes y sujetas a proce- determinante para la toma de decisiones cuando se pro-
sos especulativos. mueven cambios en los usos del suelo en las ciudades y
La consecuencia de esta indiferencia, es el incremento metrópolis. En el México urbano, buena parte del nego-
indiscriminado de espacios vacíos dentro de la ciudad que, cio inmobiliario no tiene límites ni reglas claras, por ello,
teniendo condiciones de ocupación inmediata (infraestruc- es de esperarse que tanto propietarios como desarrolla-
tura y servicios urbanos) no son aprovechadas de acuerdo dores sigan promoviendo cambios en los usos del suelo de
a lo que establecen los planes de ordenamiento urbano. Una rural a urbano y, lo más probable, es que la oferta de tierra
razón de esta indiferencia es que la propiedad privada del para la urbanización crezca. Esto no implica que los pre-
suelo otorga a sus propietarios el derecho de decidir cuándo cios disminuyan ya que se utiliza la incorporación o retiro
y en qué ocupar su predio, situación que debería ser orien- de suelo del mercado como mecanismo de control de pre-
tada por la legislación urbanística y los procesos de planifi- cios (especulación).
cación urbana a través de los cuales la autoridad municipal De ese modo, si no se instrumentan mecanismos efi-
define consensuadamente con los actores sociales el futu- caces para controlar la especulación sobre el suelo urbani-
ro de las instalaciones y edificaciones, cuándo hacerlo y en zable, no será posible que la ciudad logre una estructura
qué proporciones y condiciones, es decir, establece las obli- urbana compacta y eficiente. Lo anterior implica decisiones
gaciones “de hacer” que corresponden a los ciudadanos y serias y profundas con visión de largo plazo y ampliamente
sus organizaciones y empresas. consensuadas con los actores sociales. De ahí que las polí-
Lamentablemente, los sistemas de planeación y con ellos ticas de suelo para incentivar y/o presionar la ocupación de
los planes urbanos, han mostrado sus insuficiencias para vacíos urbanos y ordenar el crecimiento periurbano don-
este propósito porque en general, no representan el acuerdo de se localizan los nuevos desarrollos y los asentamientos
socio-político que es fundamental entre los actores socia- precarios e informales, son fundamentales para reducir
les y el gobierno para que las decisiones de localización y los costos promedio de urbanización y de mantenimiento
aprovechamiento del suelo urbano y urbanizable se cum- de la infraestructura, además de ser mecanismos de reduc-
plan. Hasta hoy, el resultado es que los vacíos urbanos be- ción de las disparidades socio-espaciales y de ordenación
nefician a sus propietarios y a los especuladores inmobi- física y ambiental de la ciudad. Estas políticas deben ser de
liarios porque conforme se incrementa la inversión pública aplicación general al espacio urbano y urbanizable de las
—y privada— en el entorno de estos predios la tendencia ciudades y las metrópolis.
es el incremento de los precios. Dichos aumentos son en Estas políticas deben perseguir la consolidación espa-
una proporción muy importante, el resultado del esfuerzo cial de las ciudades y consisten en administrar las densi-
comunitario que, a través de la obra pública, y las decisio- dades de la ciudad, elevándolas cuando las condiciones
nes de planificación principalmente, mejoran las condi- del entorno así lo permitan; es decir, el objetivo NO es ele-
ciones promedio de la urbanización y por ello, la valorización var las densidades, sino ocupar los vacíos urbanos y contro-
de los predios. lar el crecimiento periurbano a fin de consolidar y compactar
Al no existir una estrategia de redistribución de estos el área urbanizada. Desde una perspectiva general, estas
incrementos de valor del suelo entre los que los generan, las políticas implican la adopción de un modelo de crecimiento
autoridades locales asumen los costos crecientes de cons- inteligente y sustentable, que aproveche de manera óptima
trucción y mantenimiento de infraestructuras que implica la inversión ya instalada a través de la ocupación del suelo
mantener predios vacíos servidos y abrir nuevos frentes vacante y que racionalice la ocupación de la periferia urba-
de urbanización para cubrir las necesidades de la ciudad na procurando al mismo tiempo la preservación de los es-
que podrían racionalizarse bajo el modelo de ciudad com- pacios de valor ambiental.
pacta. Lo anterior implica que cualquier adición o cambio Lo anterior implica que la política de ocupación del sue-
del uso del suelo, afectará de forma directa la capacidad de lo vacante del casco urbano debe estar enfocada claramen-
la ciudad para proveer servicios y equipamientos de for- te a compactar y consolidar la ciudad, a la vez que satisfaga
ma eficiente porque la tierra urbanizables y/o autorizada las necesidades de suelo y vivienda especialmente de los
para la urbanización es en general superior para satisfa- grupos de muy bajo ingreso, ya que son los que más apo-
cer las necesidades que tendrá la ciudad (metrópoli) en los yos requieren y los que son fuente de los problemas más
próximos años, como hemos evidenciado en el caso de la importantes de la ciudad, en términos de crecimiento pe-
zona metropolitana de Mérida. riférico e ineficiencia urbanística y ambiental. Por su par-
Si bien la recomposición de los hogares de México im- te, la política de controlar el problema del crecimiento ur-
plica más viviendas en el país, al tiempo se está experimen- bano periférico, sobre todo derivado de la construcción de

56
desarrollos habitacionales de mediano y bajo ingreso tiene rios con el gobierno, principalmente el municipal, no solo
múltiples aristas. Entre ellas, destaca la urgencia de contro- como gestor y facilitador del desarrollo, sino como promotor
lar los cambios de usos del suelo y priorizar la conservación del desarrollo económico y ordenador del espacio urbano.
de las áreas de uso público o de protección ambiental, entre Destaca la política fiscal urbana que se materializa por la
otras. Sin embargo, en este caso, el ámbito de políticas que integración de un conjunto de incentivos para promover
corresponde, es el de crear una estructura de incentivos (y la ocupación y aprovechamiento de predios vacíos dentro
presiones), que permitan aprovechar los vacíos urbanos del casco urbano, a través de créditos, subsidios, condona-
para satisfacer la demanda de suelo que se ubica en la pe- ciones y facilidades, que promueven los tres ámbitos de
riferia, es decir, principalmente la demanda de vivienda de gobiernos, con énfasis en el estatal y municipal, con el ob-
bajo ingreso. Como consecuencia de lo anterior, los propó- jetivo de influir en el ánimo del propietario, desarrollador y/o
sitos principales de estas políticas son: constructor para ocupar en plazos cortos dichos predios,
destacando el impuesto predial como mecanismo de pro-
1. Determinar participativamente en dónde NO se debe urba- moción de acciones urbanísticas que funciona a manera de
nizar por razones de riesgo: ambiental, patrimonial y agro- incentivo. Destaca también el uso del impuesto predial
lógico, entre otros, y establecer los instrumentos, incentivos como elemento de presión, cuando los incentivos no alcan-
y desincentivos para que esto se cumpla. El resto del terri- zan sus objetivos.
torio se considera con posibilidades de ser urbanizado para
lo cual se deberán cumplir las normas urbanísticas de los Para no concluir y continuar los análisis y debates sobre
programas vigentes. el presente y el futuro de las ciudades mexicanas, es fun-
2. Ocupar prioritariamente los lotes vacíos del casco de la damental reconocer que la política urbana es ahora estra-
ciudad enfatizando los usos habitacionales de bajo ingreso tégica, como lo son las de seguridad nacional o la macro-
desde una perspectiva mixta que incluya los equipamien- economía; implica un cambio esencial en las prioridades
tos, empleo y servicios que requieren y muy especialmente gubernamentales, ya que lo que ocurra en las ciudades afec-
el espacio público. ta directamente el desarrollo nacional y conforme obser-
3. Promover en todos los espacios de nuevos crecimiento una vamos que nuestas ciudades y metrópolis se descontrolan
mezcla compatible de usos del suelo para reducir las pre- y tienden al desorden y la insustentabilidad, más compro-
siones ambientales y de movilidad que provocan los usos misos debemos asumir para enfrentar estos retos antes que
urbanos monofuncionales. no haya vuelta atrás.
4. Desalentar y desincentivar con políticas fiscales, finan-
cieras, de obra pública y normativas, la expansión urbana
periférica, incentivando, por otra parte, los usos no urbanos
(agropecuarios, ambientales, otros).
5. Elevar la eficiencia promedio de la ciudad y reducir los cos-
tos de la infraestructura (construcción y mantenimiento).

Estos propósitos requieren para su aplicación que las dos


políticas (la de promover la ocupación de vacíos urbanos y
la de controlar el crecimiento periférico de la ciudad) se
asuman como complementarias y su aplicación debe es-
tar estrechamente vinculada, de modo que se genere una
solución conjunta a los problemas mencionados. Por las
condiciones y la inmensa superficie vacante que tienen
las ciudades mexicanas, la implementación conjunta de las
políticas se debe entender como una oportunidad muy va-
liosa en la que es posible satisfacer la demanda habitacio-
nal, espacio público, equipamientos sociales y preservación
ambiental que representan las mayores carencias en nues-
tras ciudades.
Ambas políticas requieren sistemas diferenciados de es-
tímulos —y presiones— a la inversión privada y social, que
fomente la participación de los propietarios y los empresa-

I N V E S T I G AC I Ó N 57
DENSIDAD URBANA

Sara Topelson
Derivado del acelerado proceso de urbanización que ha ca- Las aglomeraciones urbanas tienen el potencial de ge-
racterizado a nuestro país durante las últimas cuatro dé- nerar impactos positivos en sus habitantes, derivados de la
cadas, hoy el 72 por ciento de la población en México vive cercanía al trabajo, los servicios, espacios públicos y cultu-
en ciudades; desafortunadamente el proceso urbano para rales, comercios, desarrollo económico, productividad y la
albergar esta población ha sido de una continua expan- proximidad de la población. Igualmente permiten la inver-
sión de las manchas urbanas, por encima del crecimien- sión en infraestructura de calidad en materia de transporte
to poblacional, generando un uso extensivo e inadecuado público y no motorizado, así como redes de agua y energía.
del territorio. Una densidad media-alta en la ciudad es un atributo
Esta situación ha provocado una constante baja en la de sostenibilidad, pues en general las ciudades hoy se de-
medición de la densidad poblacional o de unidades de vi- sarrollan desde la premisa de incrementos en la densidad y
vienda por hectárea. el desarrollo orientado al transporte, lo que se conoce como
La baja densidad en los conjuntos de vivienda en las smart growth (crecimiento inteligente). La baja densidad
periferias de nuestras ciudades ha provocado igualmente no es sostenible porque basa el desarrollo en el uso inten-
un deterioro en la calidad de vida de los habitantes, no ha sivo o exclusivo del automóvil.
propiciado esquemas urbanos integrales, al contario, ha ge- La localización de la vivienda social debe estar articulada
nerado fragmentación urbana, ausencia de redes de trans- a la accesibilidad, el equipamiento y los empleos; reducir el
porte público y lejanía de los equipamientos y servicios de tema de movilidad: el objetivo es que la gente se mueva lo
cercanía generando el abandono de estas zonas desconec- menos posible al encontrar a distancias caminables los sa-
tadas y escasa densidad habitacional. tisfactores que requiere en su cotidianeidad.
Es por ello que el concepto de densidad habitacional está Múltiples oportunidades se generan al tener como meta
presente en todas las decisiones de desarrollo, mejoramien- entornos integrados de densidades medias, específicamente
to y ordenamiento de las ciudades o áreas urbanas. en materia de planeación y relaciones espaciales múltiples.
Podemos definir la densidad como la relación entre nu- Recordemos que el Derecho a la ciudad es el derecho de
mero de unidades de vivienda y el territorio en el que se los ciudadanos a vivir en territorios propicios a la convi-
ubican en una métrica por hectáreas. vencia, ricos en usos diversos en los que el espacio y los
Una densidad media, (100 viv/ha) o media alta (200 equipamientos públicos sean factores de desarrollo colec-
viv/ha) permite desarrollar entornos integrales centrados tivo e individual.
alrededor del espacio público, equipamientos de cercanía y
transporte público de calidad.

I N V E S T I G AC I Ó N 59
60
Fotografías: Santiago Arau
I N V E S T I G AC I Ó N 61
100%
1.5M

2.5M

3.5M

4.5M

10%

20%

30%

40%

50%

60%

70%

80%

90%
.5M
200
400
600
700

1M

2M

3M

4M
AGS. AGS.
B.C. B.C.
B.C.S. B.C.S.
C A M P. C A M P.
CHIS. CHIS.
CHIH. CHIH.
C OA H . C OA H .
COL. COL.
CDMX CDMX
5,967
D G O. D G O.
G TO. G TO.
G RO. G RO.
H G O. H G O.
JAL. JAL.
MEX. MEX.
MICH. MICH.
MOR. MOR.
N AY. N AY.
N.L. N. L .
OA X . OA X .
PUE. PUE.
Q RO. Q RO.
Q. R O O . Q. R O O .
S . L . P. S . L . P.
SIN. SIN.
S O N. SON.
TA B . TA B .
TA M P S . TA M P S .
TLAX. TLAX.
VER. VER.
YUC. YUC.
ZAC. ZAC.

Habitantes por km . 2 1
To t a l d e v i v i e n d a s . 2
% de habitantes en condiciones
de hacinamiento.3
C A M P.
B.C.S.
AGS.

B.C.

1970 - 80
1960 - 70

1990 - 2000
C OA H .

2000 -2010
CHIH.

1950 - 60
CHIS.

COL.

1980 - 90
3.6
3.4
3.1 3.2
2.9
CDMX

2.8 2.9
D G O.

G TO.

G RO.

2.7

1.9 2.0
1.8
1.4
MICH.
H G O.

MEX.
JAL.

Ta s a d e c r e c i m i e n t o . 4

Vivienda
vs Población
MOR.

OA X .
N AY.

N.L.
Q. R O O .

S . L . P.
Q RO.
PUE.

TA M P S .
SON.

TA B .
SIN.
TLAX.

YUC.
VER.

ZAC.

Parque Habitacional.2

%vivienda habitada
%vivienda uso temporal
%vivienda desocupada

1. I N E G I . D en s i d a d d e Po bl a c i ó n p o r en t i d a d f ed e r ati va , 2 0 1 5 . E n c u e s ta I n t erc e n s a l 2 0 1 5 .
2. C O N AV I c o n i n f o r m a c i ó n d e l I N E G I , c o n d a t o s a 2 0 1 0 . P a r q u e h a b i t a c i o n a l - N a c i o n a l .
3. INEGI. Encuesta nacional de los hogares, 2015.
62
4. INEGI. Censos Generales de Población y Vivienda , 1950, 1960, 1970, 1980, 1990, 2000, 2010.
5. Infonavit. Atlas del abandono de vivienda, 2015.
DENSIDAD(ES)
Ximena Rios-Zertuche

L a Ldai s dt ai sntcaina c ai al tarl a tbraajboa ej os leas pl ar i pn rciinpcailp a l


c a ucsaau sdae ld ae bl aanbdaonndoo ndoe dv ei v vi ei vnidean.d a .

E l iE n cl rienm c reenm
t oe ndteo 1dkem1 kd m e ddi es t da insct iaan ca i al o as lcoe sn tcreonst rdoes edme pel m
e op l e o
i m p il m
i c pa l iucna auunmaeunm t oe ndteo 5d0e0 5v0i 0v i ve invdi ae ns deans sei nt u saict iuóanc idóen adbea na bd ao n do o. n5 o . 5

FLUJOGRAMA 63
X i m eXniam R
e ni oa s R- i oZ se r- t uZcehr et uBc h
. e B.
DE LA
INVESTIGACIÓN…
…A LA DENSIDAD
Santiago Arau

Urbanismo salvaje

Las ciudades consumen. El territorio modifica su condi- urbano recurre a una manufactura uniforme y unívoca
ción por una línea voraz que abre brecha, inserta redes e de monólogos en automático. ¿Cómo es que se ha llegado
infraestructura, seca los cimientos naturales, divide, en- hasta aquí en materia de vivienda social, y en específico,
capsula y se expande como líquido corrosivo. Con lógica en el urbanismo generado por esto? Como todo produc-
y cadencia, la vivienda en serie tapiza de una forma “rec- to, el de la vivienda social ha caducado. El principal reto
ta, ordenada, ortogonal y serial” mientras la autocons- que encararán las ciudades mexicanas para los próxi-
trucción parece asirse a las raíces regionales. De norte a mos años es hacer frente al aumento de la población
sur y sur a norte (Tijuana-Playa del Carmen) se cons- urbana, la cual pasará de 80.4 millones (2010) a 103.3
truye la misma vivienda. Verona Residencial, colonia millones en 2030 (75.2 por ciento del total nacional).
Francisco Zarco, en el árido desierto fronterizo y Villas Lo anterior implica construir ciudades con capacidad
del Sol, en el paraíso del sureste, son muestra de esta para acomodar nuevas generaciones urbanas a través de
transformación del aterrizaje urbano en el paisaje na- soluciones de vivienda, cobertura de servicios y alterna-
tural. La despersonalización de la vivienda es parte tivas de movilidad. Se espera que para 2030, de los más
del trueque hipotecario y un crédito que se paga a kiló- de 130 millones de habitantes, 75 por ciento residirán en
metros de distancia con el trabajo diario en las zonas centros urbanos. La nueva población requerirá entre 83
turísticas de Quintana Roo o las armadores de coches y 290 mil hectáreas de suelo para todos los usos urbanos.
y naves industriales en el norte del país. El desarrollo ¿Vivienda en dónde, con qué y para quién?

66
Tijuana

CA S O S D E E S T U D I O 67
68
CA S O S D E E S T U D I O 71
72
CA S O S D E E S T U D I O 73
74
CA S O S D E E S T U D I O 75
Playa del Carmen

76
CA S O S D E E S T U D I O 77
78
CA S O S D E E S T U D I O 79
80
CA S O S D E E S T U D I O 81
82
CA S O S D E E S T U D I O 83
84
CA S O S D E E S T U D I O 85
Jorge Taboada

Alta densidad

Imágenes desde arriba. La urbe liberada de sus histo- sualmente confortante pero angustiante. Despersonali-
rias, presentada como vestigio arqueológico, fuera de zación de la vivienda y estandarización de necesidades,
escala, con todos sus habitantes y ninguno. Las perso- extinción de la individualidad. La ciudad como resultado
nas pierden su rostro e identidad, se vuelven invisibles. de modelos matemáticos, fractales que se organizan en
Registro del hacinamiento en esos nuevos espacios lla- monocromías. Testigo de piedra, repetición infinita, mi
mados “hogar”. Modelo expansionista que se repite en fascinación geométrica por el “paraíso siniestro” en Apo-
los suburbios de las grandes manchas urbanas a lo largo daca, Cadereyta, Ciénega de Flores, Ecatepec, Escobedo,
y ancho de México y Latinoamérica. Casas con espacios García, Querétaro, Río Bravo y Salinas Victoria.
mínimos; juntas y frente a otras formando un paisaje vi-

86
Apodaca

CA S O S D E E S T U D I O 87
Cadereyta

88
Cienega de Flores

CA S O S D E E S T U D I O 89
Ecatepec

90
Escobedo

CA S O S D E E S T U D I O 91
García

92
Querétaro

CA S O S D E E S T U D I O 93
Río Bravo

94
Salinas Victoria

CA S O S D E E S T U D I O 95
Adam Wiseman

Arquitectura libre

Ha habido más mexicanos que regresan de Estados Uni- Puebla, Querétaro y Zacatecas— son una expresión abier-
dos que los que migran hacia el país americano (Encues- ta de lucha y recompensa; de un sueño o una fantasía
ta Nacional de la Dinámica Demográfica 2014). La in- realizada. No están restringidas por las tendencias arqui-
dustria de la construcción ha perdido más de 570 mil tectónicas o la vivienda financiera acotada a un modelo
trabajadores mexicanos desde 2007 (John Burns Real serial pues sólo están limitadas por la imaginación e iden-
Estate Consulting) mientras las remesas en México au- tidad del constructor. Incorporan todos y cada uno de
mentaron sin precedente en más de diez años (Reuters). los estilos de arquitectura y desafío estructural: castillos
La relación bicultural y crisis de la vivienda en México franceses, pináculos rusos, cúpulas y geodésicas, colum-
ha provocado arquitecturas libres y construcciones ecléc- nas neoclásicas, torretas bizantinas, chalets con techos
ticas en paisajes espectaculares. La creatividad suma a a dos aguas, pórticos californianos, plantas libres, loca-
la capacidad de autoconstrucción, la habilidad con el les comerciales y vívidos colores de una sociedad mes-
concreto y el anhelo de una casa; de un pedazo de tierra tiza, contemporánea y desigual.
propia. Estas casas —en el Estado de México, Tlaxcala,

96
97
98
CA S O S D E E S T U D I O 99
100
CA S O S D E E S T U D I O 101
102
CA S O S D E E S T U D I O 103
Onnis Luque

Vivienda retratada

Como parte de un proceso de arqueología urbana deri- virtudes y carencias de la vivienda. La selección es una
vada de un proyecto fotográfico, estas "tácticas de apro- síntesis monográfica producto de trabajos de documen-
piación" muestran la permanencia y transformación de tación fotográfica en conjuntos habitacionales como el
los cojuntos habitacionales modernos desde sus formas Centro Urbano Presidente Alemán, la Unidad de Ser-
de ocupación y modos de habitar. Así surgen arquitectu- vicios Sociales y de Habitación Santa Fe, el Conjunto
ras expansivas, intervenciones en áreas comunes, nuevos Urbano Nonoalco Tlatelolco y las unidades Infonavit
pisos, composiciones abstractas de las fachadas, elemen- Cuemanco, Belén, Pedregal de Carrasco, Culhuacán,
tos decorativos y renovaciones de la modernidad… prác- Demet, Hueso-Periférico, Iztacalco, Nativitas, Prados
ticas cotidianas de la vivienda colectiva, pero sobre todo, Churubusco y Hueso-Vergel, entre otras. Más allá de
de cómo los habitantes resuelven, configuran y diseñan las líneas, ángulos, texturas y grandes bloques de vivien-
la arquitectura de su propia ciudad. Esta serie de retra- da, aquí se distingue al habitante, vecino, inquilino, de-
tos muestra otro tipo de densidad, a nivel de banqueta. rechohabiente, comerciante, visitante —o todas las an-
A partir de rasgos e identidades se pueden avizorar las teriores— en su modo de habitar.

104
105
106
107
108
CA S O S D E E S T U D I O 109
110
CA S O S D E E S T U D I O 111
Livia Radawanski

Palo Alto

Ante el riesgo de ser desalojados en 1971, los trabajado- mayoría ha llegado a su etapa final. Se trata de un caso
res de una mina de arena al poniente de la Ciudad de singular en el que la transformación de las viviendas a
México la ocuparon y fundaron la primera cooperativa lo largo de décadas ha contribuido a la mejora del con-
de vivienda en el país. Los antiguos mineros vivían en junto y sus espacios comunes. Si bien ha enfrentado pro-
casas de cartón; con la ayuda del Centro Operacional de blemas legales, la cooperativa sigue activa y represen-
Vivienda y Población (COPEVI) y otras organizaciones, ta un punto de resistencia contra la especulación de la
diseñaron y edificaron casas permanentes de manera tierra. Los terrenos baldíos a su alrededor han sido
colaborativa. Las mujeres tuvieron un papel central en ocupados por edificios de oficinas corporativas y colo-
los procesos de formación de la comunidad. Los coope- nias cerradas que conforman el paisaje corporativo y
rativistas construyeron sus casas con block y prefabri- contrastante de Santa Fe.
cados de ladrillo hechos ahí mismo. Las unidades fueron
diseñadas para crecer de manera progresiva. Hoy, la gran Pablo Landa

112
113
114
115
Luis Young

Unidades independientes

116
La vida sucede afuera. La Unidad Independencia es una su inauguración, ¿cuántos conjuntos habitacionales pue-
suma de aciertos dependientes entre sí, independientes den presumir obras artísticas en su cotidianidad? Repen-
en su conjunto. El diseño de Alejandro Prieto y José Ma- sar los espacios compartidos va más allá de elegir piezas
ría Gutiérrez ensambla y evidencia la multicitada “inte- de un catálogo genérico de mobiliario público. La inde-
gración plástica” en fachadas, andadores, mobiliario y pendencia de esta unidad radica en su origen entre jardi-
espacios públicos con obras de Jorge González Cama- nes y apuesta por la construcción sanitaria del Instituto
rena, Federico Cantú y Francisco Eppens. Tanto el arte Mexicano del Seguro Social (IMSS). De ahí su nombre
como la utopía de salud pública institucional permean las oficial: Unidad de Servicios Sociales y de Habitación In-
áreas de este enorme vivero de más de treinta hectáreas dependencia. La vivienda es consecuencia, un ideal que
al sur de la Ciudad de México. A más de cinco décadas de va más allá de los cuatro muros de la construcción.

CA S O S D E E S T U D I O 117
118
CA S O S D E E S T U D I O 119
120
CA S O S D E E S T U D I O 121
Regeneración

La regeneración urbana es un concepto que se planteó y forma imaginar juegos en montículos de caucho o cés-
analizó en Europa, en el documento titulado Dictamen ped, y experimentar el espacio entre cubos de concreto
del comité de las regiones sobre el papel de la regeneración de distintas alturas con zonas para parkour, juegos in-
urbana en el futuro del desarrollo urbano en Europa se lee fantiles, mesas de picnic, asadores, bancas o mesas de
lo siguiente: “convendría que las ciudades vuelvan a ser ping-pong.
lugares atractivos, capaces de colmar las aspiraciones de Las ideas de “rehabilitación”, “rescate” o “recicla-
cada cual [referido a las regiones] independientemente je” no son más que conceptos aplicables a la arquitec-
de su nivel de ingresos […] las zonas urbanas en dificultad tura, a la forma construida. La regeneración urbana
no deben ni pueden abandonarse pues constituyen una busca brindar el espacio físico como extensión individual
fuente de talentos sin explotar y representan un gasto y colectiva para la revaloración de su entorno y arraigo
de recursos en términos de capital humano y físico…”. consecuente. El “Esquema Integral de Regeneración
En los programas de gobierno de nuestro continente, la Urbana Social” del Infonavit se reforzó con la finali-
regeneración urbana es tendencia, y con toda pertinen- dad de llevar a cabo intervenciones físicas y sociales de
cia y conocimiento de causa, Infonavit se ha dedicado a manera preventiva en conjuntos habitacionales. El pro-
ello para una transformación positiva. Se han acumulado yecto “Regeneración” está destinado a conjuntos habita-
experiencias: un área en la que se generaba un ambiente cionales en las principales zonas metropolitanas con alta
inseguro y con mala calidad de convivencia se transforma densidad de créditos activos del Infonavit (mayor al 40
en ese espacio público que debe ser, siguiendo a Jordi por ciento del total); Índice de Cohesión Vecinal (ICV)
Borja, posibilitanto un “elemento de cohesión comunita- superior a la media de cada estado y análisis de tendencia
ria y autoestima colectiva”. de plusvalía/minusvalía a través de la Plataforma de In-
Se han privilegiado los materiales y la vegetación de teligencia Hipotecaria. Se realizaron siete diagnósticos y
la zona, respetado la configuración del terreno y obte- proyectos arquitectónicos iniciales y se inició la cons-
nido el máximo provecho de la topografía para los más trucción de la Unidad Habitacional Manuel M. Ponce en
diversos fines. En suma, un argumento para defender el Fresnillo, Zacatecas (Rozana Montiel Estudio de Arqui-
concepto de regeneración versus la construcción de nue- tectura), la Unidad Habitacional Los Sauces en Tepic,
vos desarrollos es que ya se cuenta con todos los servi- Nayarit (Taller ADG), la Unidad Habitacional Hogares
cios. Todo comienza con pláticas y dinámicas de partici- Castera, Tultitlán y la Unidad Habitacional El Tenaya,
pación con los habitantes para luego diseñar. La relación Tlanepantla (PRODUCTORA), así como la Unidad Habita-
con la comunidad debe ser la misma que con un cliente. cional Colinas del Sol, Amoloya y la Unidad Habitacional
Se ha apostado por servir a la ciudadanía con mobiliario Los Héroes III, Toluca (Francisco Pardo Arquitecto).
urbano y espacios polivalentes; que los paseantes puedan
emplearlo tan libre y creativamente como deseen. De tal Alonso de Garay / Taller ADG

122
Unidad Habitacional Manuel M. Ponce
Fresnillo, Zacatecas

Jaime Navarro

CA S O S D E E S T U D I O 123
Sandra Pereznieto

124
CA S O S D E E S T U D I O 125
Unidad Habitacional Los Sauces
Tepic, Nayarit

Jaime Navarro

126
127
Unidad Habitacional Hogares Castera
Tultitlán, Estado de México

Erick Cuevas

128
Unidad Habitacional El Tenayo
Tlanepantla, Estado de México

129
Unidad Habitacional Los Heroes III
Toluca, Estado de México

Jaime Navarro

130
Unidad Habitacional Colinas del Sol
Almoloya, Estado de México

131
Convocatoria
para ensayos
Elis G. Garibay

Urbanización desordenada
y periferia

La Ciudad de México se divide administrativamente torial (PAOT) se estima que almacena entre 2 y 2.5 millo-
en dos zonas definidas en función de los usos de suelo nes de toneladas de carbón, con efectos positivos directos
permitidos en estas áreas: el suelo de conservación y el en la salud de la población. El SCCM es un reservorio de
suelo urbano. El Suelo de Conservación de la Ciudad de biodiversidad que regula el microclima de la región, dis-
México (SCCM) se refiere a las zonas que provee servi- minuye los procesos de erosión eólica, reduce la cantidad
cios ecosistémicos necesarios para el mantenimiento de de azolve que se traslada al drenaje, evitando con esto
la calidad de vida de los habitantes. Se localiza princi- inundaciones en las zonas bajas. Además proporciona
palmente al sur de la ciudad, en el límite del área urbana, belleza paisajística y es la principal fuente de recarga de
y está distribuido en las delegaciones Tlalpan, Xochimil- los acuíferos.
co, Milpa Alta, Tláhuac, Cuajimalpa de Morelos, Álvaro La expansión de la ciudad desde el centro hacia la
Obregón y Magdalena Contreras, además de una peque- periferia en forma desordenada pone en riesgo los ser-
ña porción en la delegación Gustavo A. Madero. vicios ecosistémicos que los bosques proporcionan a
La cubierta vegetal del suelo de conservación permi- los habitantes del núcleo urbano. Se calcula que en suelo
te fijar gases de efecto invernadero. De acuerdo con datos de conservación existen 2 mil 742.2 hectáreas ocupadas
de la Procuraduría Ambiental y de Ordenamiento Terri- por asentamientos humanos irregulares (SEDEMA 2015).

C O N VO CATO R I A PA R A E N S AYO S 133


En un intento por incluir tanto crecimiento económico Ciudad de México pretenden cumplir con la definición
como aprovechamiento sustentable de recursos natu- de desarrollo sustentable3 deben cubrir estos 3 aspectos:
rales, las leyes vigentes en la Ciudad de México, sus or-
ganismos y dependencias, tienen objetivos y funciones 1. Garantizar crecimiento económico y avance téc-
contrastantes e incluso contradictorios dando como re- nico.
sultado la ocurrencia de situaciones tales como: activi- 2. Mantener el uso de recursos naturales en un nivel
dades agrícolas, explotación forestal, desarrollo inmo- que garantice su aprovechamiento futuro hasta
biliario y pagos por servicios ambientales dentro de una encontrar sustitutos aceptables.
misma área del SCCM. 3. Seguir una lógica de justicia social atendiendo las
La Ley de Construcción en la Ciudad de México, necesidades de los sectores de ingresos medios y
publicada en la Gaceta Oficial del Distrito Federal en ene- bajos. Las cuestiones económica y ecológica no
ro de 2004, establece en su artículo 47 que “no procede están necesariamente en oposición. Instrumentos
el registro de manifestación de construcción cuando el de mercado pueden ser utilizados para asegurar el
predio o inmueble se localice en suelo de conservación”. uso sostenible de los recursos. Los pagos por licen-
Sin embargo, en el artículo 57, se enlistan las modalidades cias de cacería y pesca pueden ayudar a contro-
de licencias de construcción especial: “…edificaciones lar los efectos de estas actividades de una manera
en suelo de conservación, demoliciones, excavaciones y más eficiente que la prohibición. Del mismo modo,
otras…”; continúa en los artículos 58 y 59 donde se enlis- la creación de un mercado de derechos de urbani-
tan los requisitos para obtener la licencia de construc- zación sirve a los reguladores y a los propietarios
ción especial: “para el caso concreto de suelo de conser- para obtener fondos y al mismo tiempo establecer
vación el plazo de entrega de licencia será de 30 días extensiones fijas de hectáreas con cambios en uso
hábiles contados a partir de la fecha de recepción de la de suelo. Se sugiere un instrumento cap and trade
solicitud… si cumplido el plazo no existe resolución se para determinar un número límite de hectáreas
entenderá negada la licencia”. susceptibles de conversión y permisos negocia-
Si una prohibición en la ley tiene “huecos”, existe bles. De esta manera se pueden comerciar “dere-
un espacio propicio para la urbanización desordena- chos de urbanización” y recibir beneficios por
da. Se aprovechan estas fallas en el diseño de las leyes reducciones en la tasa de conversión de la tierra.
para hacer frente a la demanda de espacios de vivienda
mediante un mercado irregular altamente especulativo La creación de este mercado de bonos de urbanización
y potencialmente nocivo para zonas de alto valor am- en la periferia de la ciudad debe ser acompañado de una
biental. Es entonces el mercado y no el Estado quien de- política ambiental basada en tecnología. La construcción
fine la conformación del territorio. sustentable no tendría que ser resultado de una suge-
Se mantendrá, por tanto, la tendencia a propiciar rencia y convertirse en norma para los desarrolladores
cambios de uso de suelo en la zona periurbana de la ciu- inmobiliarios. Desde la perspectiva ambiental, las prác-
dad de México, a pesar de la promoción de esquemas de ticas de construcción convencional son extremadamen-
pago por servicios ambientales e incentivos para la con- te intensivas en cuanto al uso de recursos y provocan un
servación en la zona. Si las políticas de vivienda de la impacto negativo. El sector de la construcción es uno de

134
los mayores emisores de gases de efecto invernadero, ciento más costosa que la convencional, y no solamente
sobrepasando a la industria (Levin 2013). Si se construye eso, sino que genera ahorros de más de 30 por ciento en
vivienda en el SCCM (y en el resto de la ciudad) tendría consumo de agua, gas doméstico y electricidad.
que contarse con certificación de construcción ecológica Finalmente, estos instrumentos deben incluir un
no en el contexto de una licencia especial de construc- componente social. El derecho a una vivienda de ba-
ción que sugiere utilizar ecotecnologías sino como un jo costo no es suficiente; esta vivienda debe garantizar
requisito ineludible. el bienestar de sus habitantes y la conservación de los
Los edificios construidos bajo lineamientos ambien- alrededores. El reciclaje de estructuras preexistentes, en
tales mejoran significativamente el bienestar de sus ocu- particular aquellas que aparentemente han completado
pantes. Existe evidencia de que las viviendas, edificios su vida útil es una opción mucho más sustentable y ase-
corporativos y vecindarios verdes pueden ayudar a regu- quible que la demolición y reconstrucción de edificios
lar el clima en los alrededores de la zona en la cual se debido a los costos y desechos generados.
ubican y aportar beneficios a la salud, desde ayudar a No existe una clara política de acceso a la vivienda
personas con problemas de asma hasta incrementar la para los habitantes de la ciudad. Complejos habitaciona-
esperanza de vida (Min Ho et al. 2017; Wells & Laquatra les de departamentos de lujo de alta densidad proliferan
2009). Además, la construcción verde considera la for- en la ciudad, valorizando el suelo y haciendo cada vez
ma en que el edificio terminará su vida útil a través de más inaccesible el espacio de vivienda en áreas centrales.
prácticas que permiten la deconstrucción más que la de- Lo que se promueve con este tipo de normas es la po-
molición, haciendo posible el reciclaje de algunos com- larización y segregación entre vivienda de lujo a un alto
ponentes (Wells & Laquatra 2009). La política ambien- costo económico y ambiental e inalcanzable para la gran
tal debe considerar un instrumento de regulación basado mayoría de los habitantes de la ciudad y vivienda irregu-
en tecnología para todo tipo de construcciones en la zona lar en la periferia, sin acceso a servicios, dada la prohibi-
periurbana de la ciudad, pero también en la zona cen- ción de construcción en dicha zona.
tral de modo que no sólo se frene la transformación de Para los tomadores de decisiones existen dos opcio-
zonas de alto valor ambiental en la periferia, sino que nes: el derecho a la vivienda de las personas que no pue-
también inserte el verde en la ciudad en una transforma- den acceder a casas dentro de la zona propiamente urba-
ción hacia atrás. na; la invasión de espacios de conservación ambiental
El abastecimiento de agua es asimismo una preocu- en la periferia de la ciudad. Sin embargo, puede existir
pación constante. Una práctica típica consistía en cons- una tercera vía en que la ciudad no se entienda como una
truir casas para eventualmente proveerlas de servicios dicotomía entre dos zonas antagónicas sino que, apro-
básicos, aunque esto no siempre se cumplía dando pie a vechando las ventajas que la gran urbe pueda ofrecer,
casas sin servicios; lo que propiciaba su posterior aban- se integre de una manera menos invasiva en las zonas de
dono. La planeación debería ser en sentido inverso y cons- suelo de conservación.
truir casas una vez asegurado el suministro de agua y Para adoptar políticas que realmente cubran las 3
energía para sus ocupantes. La construcción ecológica esferas del desarrollo sustentable se debe repensar la ciu-
que considera cuestiones como sistema de recolección dad como una micro consumidora de recursos que de-
de agua pluvial y reciclaje de materiales, es sólo un 6 por manda mucho menos de la naturaleza y genera muchos

C O N VO CATO R I A PA R A E N S AYO S 135


menos desechos, reciclando sus propios materiales y el PÉREZ-CAMPUZANO,Enrique(2011),“DesarrolloUrbano
agua. La ciudad no puede ser un espacio gris completa- Sustentable” en Medio ambiente, sociedad y políticas
mente cubierto de concreto, sino uno que integre y recu- ambientales en el México Contemporáneo, México,
pere zonas arboladas y procure el uso de transporte más Porrúa, pp. 45–67.
limpio. Promover la vivienda verde y de bajo costo es una PERNILLA,Hagbert;MIKAEL,Mangold;FEMENÍAS,Pau-
manera de construir comunidades sustentables y redefi- la (2013) “Paradoxes and Possibilities for a ‘Green’
nir el concepto de urbanización. La idea de vivienda de Housing Sector: A Swedish Case”, Sustainability,
interés social debe transformarse en “vivienda de interés vol. 5, núm. 5, pp. 2018–2035.
social-ambiental”. Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial
del Distrito Federal (2008), “Estudio de zonas impac-
tadas por tiraderos clandestinos de residuos de la
Referencias construcción”, México, pp. 1–21; y (2010) “Evaluación
HERNÁNDEZ,Silverio;MEJÍA,Marcos;MENDIOLA,Ger- de la vulnerabilidad ambiental que presenta el sue-
mán; SÁNCHEZ, René L.; HERNÁNDEZ, José Antonio lo de conservación por la pérdida de servicios ecosis-
(2017) “Green Building rating systems and their témicos a consecuencia del cambio de uso de suelo”,
application in the Mexican context”, Theoretical & México, pp. 1–287.
Empirical Researches in Urban Management, vol. 12, STERNER, Thomas (2011), Policy Instruments for Envi-
núm. 4, pp. 20–32. ronmental and Natural Resource Management, Nue-
HU,Hong;GEERTMAN,Stan&HOOIMEIJER,Pieter(2015), va York, Routledge, pp. 50–120.
“Planning support in estimating green housing op- WELLS, Nancy, LAQUATRA, Joseph (2009), “Why green
portunities for different socioeconomic groups in housing and green neighborhoods are important to
Nanjing, China”, Environment and Planning B-Plan- the health and well-being of older adults”, Genera-
ning & Design, vol. 42, núm. 2, pp. 316–337. tions, vol. 33, núm. 4, pp. 50–57.
LEVIN, Erica R. (2013), “Building Communities: The Im-
portance of Affordable Green Housing”, National
Civic Review. vol. 102, núm. 2, pp. 36–40.
MERLÍN,Yair;CONTRERAS,Armando;ASTIER,Marta;JEN-
SEN,OlafP.;ZARAGOZA,Rigel;ZAMBRANO,Luis(2012),
“Urban expansion into a protected natural area in
México City: alternative management scenarios”,
Journal of Environmental Planning and Management,
vol. 1, núm. 14.
MINHO,Shin;HWANYONG,Kim;DONGHWAN,Gu;HYOUNG-
SUB, Kim (2017), “LEED, Its Efficacy and Fallacy in a
Regional Context–An Urban Heat Island Case in Ca-
lifornia”, Sustainability, vol. 9, núm. 9, pp. 1–11.

136
Lucía Martín

La ciudad intensa

La ciudad es multifuncional, concentra la diversidad y Tras el análisis de estos posicionamientos y las estra-
está en permanente construcción-reconstrucción por- tegias que sus principales teóricos proponen para evitar
que nunca se acaba; se trata de un “producto social” en la ciudad dispersa se identificó lo multi-programático;
proceso de cambio constante que tiene historia (Carrión el crecimiento programado; el consumo inteligente del
2001). El análisis de la densificación de las ciudades es espacio; la participación y la alta conectividad como las
una herramienta significativa para evitar el desarrollo cinco estrategias principales a aplicar en el diseño de la
descontrolado de éstas. Existen diferentes acercamien- vivienda con la finalidad de obtener una ciudad más in-
tos al fenómeno desde distintas ramas del conocimiento tensa. Entendiendo que mediante acciones estratégica-
a través de los cuales se proponen múltiples estrategias mente diseñadas de menor escala que las urbanas se pue-
para la creación de ciudades inteligentes. En este texto de construir o consolidar un tejido urbano para que sea
se abordan y comparan estos acercamientos a través más denso, diverso, activo y adaptable.
de tres conceptos: ciudad densa —definido por ONU- Para explicar e ilustrar estas cinco estrategias se pre-
Hábitat—, ciudad compacta —descrito por Dempsey— sentan tres casos de estudio mexicanos muy diferentes
y ciudad intensa —con base en los textos de The Nep- entre sí y que se describirán en los siguientes apartados.
tis Foundation—. El primero, las viviendas diseñadas por Carlos González

C O N VO CATO R I A PA R A E N S AYO S 137


Lobo para la Calle Lerdo que formaban parte de los ca- La ciudad compacta o de las distancias cortas es una
sos atípicos del Programa de Renovación Habitacional conceptualización del diseño urbano que promueve den-
Popular que se instauró tras el sismo de 1985; el proyecto sidades residenciales relativamente altas en terrenos en
MOD10 que presentó S-AR en el Concurso Internacional los que se propone mezcla de usos. Además de esto, está
Elemental Chile (2003) y la rehabilitación de una cons- basada en un sistema de transporte público eficiente y
trucción en la Colonia Roma con la propuesta de usos posee una disposición urbana que incentiva a caminar
mixtos de ReUrbano y Cadaval & Solà-Morales. y a usar bicicleta, lo que reduce el consumo de energía,
Se entiende como ciudad densa aquella cuya den- la polución y la construcción de más infraestructura, pro-
sidad poblacional es alta, teniendo en cuenta que la piciando una ciudad más económica, segura y con inte-
densidad poblacional describe el número de personas racción social (Dempsey 2010).
que habitan un área determinada y que por lo general Por otro lado, la ciudad intensa es aquella en la que
se expresa como el número de personas por hectárea la población se acomoda en altas densidades, se declina
(p/ha) o el número de unidades de vivienda por hectá- el uso del automóvil a favor del tránsito peatonal o en
rea. (ONU-Habitat 2017). En 1933, Le Corbusier propo- bicicleta, donde existe un sobredimensionamiento de las
ne la Ville Radieuse de alta densidad con cifras de hasta infraestructuras contemplando el crecimiento poblacio-
mil habitantes por hectárea. Mientras que en 1961 Jane nal en las áreas ya urbanizadas (lo que hace más eficien-
Jacobs establece 100 viv/ha (aproximadamente 400 ha- te el uso no sólo de infraestructuras básicas como las del
bitantes por hectárea) como la densidad mínima nece- agua o el saneamiento, sino también de la llamada in-
saria para que se desarrolle una vida urbana partici- fraestructura blanda, compuesta por escuelas públicas
pativa. En la actualidad, por otro lado, la densidad de y servicios sociales, entre otros). Propone por tanto el
Manhattan es de 215 habitantes por hectárea y la de Ne- desarrollo de puntos fuertes existentes en lugar de ex-
zahualcóyotl es de 175.3 habitantes por hectárea, dos pandir la ciudad en un territorio cada vez más amplio
tejidos urbanos densos que se manifiestan espacialmen- (The Neptis Foundation 2010).
te de muy diferente manera. La percepción de la densi- A través de estas dos ideas, ciudad compacta y ciu-
dad alta es una variable subjetiva que varía con el tiempo dad intensa: “se entiende la densidad bajo un enfoque de
y el contexto. sustentabilidad que atiende varios frentes: proximidad,
Esta definición se centra únicamente en el número de conectividad, población y actividad, transporte alter-
pobladores que existen en un territorio determinado nativo, habitabilidad del espacio público, complejidad
dejando de lado importantes factores como los sociales, urbana, dotación de espacios verdes y biodiversidad, au-
económicos, culturales y sostenibles, entre otros, que de- tosuficiencia energética, autosuficiencia hídrica, adap-
terminan la configuración y funcionamiento adecuado tación y mitigación al cambio climático, cohesión social
de la ciudad. Dentro de los objetivos de desarrollo sos- y dotación de equipamientos” (Hermida, Hermida, Ca-
tenible podemos encontrar el objetivo 11 que aboga por brera, & Calle 2015).
lograr que las ciudades y los asentamientos humanos sean Con base en las definiciones de ciudad compacta y
inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles. ciudad intensa, la International City/Council Manage-

138
ment Association (ICMA) propone un decálogo para el generando a través de nuevas tipologías de vivienda,
crecimiento inteligente de las ciudades en el que se re- comercio, servicios, equipamiento y espacios públicos
gistran las siguientes acciones: el desarrollo de zonas de de calidad entendidos como punto de encuentro y de
usos mixtos; la utilización de edificaciones compactas; creación de comunidad e identidad urbana. De esta ma-
la creación de viviendas diferentes; la provisión de cen- nera no sólo se consiguen comunidades diversas que fo-
tros caminables; el fomento de comunidades distintivas menten la inclusión y la diversificación socioeconómica,
y con un fuerte sentido de lugar; la conservación de los si no también lugares más seguros, al activar los espacios
espacios abiertos, los campos agrícolas, la belleza natural 24 horas.
y las áreas ambientales decisivas; el fortalecimiento de En el caso de Cadaval & Solá-Morales, además de
los enlaces y el desarrollo entre comunidades existentes; incrementar la densidad existente en el lote mediante
el suministro de opciones varias de transporte; la toma esta rehabilitación, la propuesta combina oficinas, vi-
de decisiones de desarrollo predecibles, visiblemente viendas, uso comercial y huertos auto gestionados en
justas y evidentemente rentables y la búsqueda de la co- un único edificio de cuatro plantas donde se combinan
laboración de todos los interesados en las decisiones de diversas tipologías de vivienda y un patio central activo
desarrollo de los barrios (International City/Country de uso común que favorece el intercambio. En el caso de
Management Association (ICMA) 2006). Carlos González Lobo se combina el uso residencial con
A partir de este decálogo se extrajeron cinco estrate- el cultural aportando dos espacios anexos (teatro y gra-
gias que impactan de manera directa a la escala arquitec- derío al aire libre, que únicamente se proyectaron y no
tónica y que, aplicadas al diseño de vivienda colectiva, llegaron a construirse) y que estimulaban el encuentro,
que se entiende propiciarán un tejido más denso que la el intercambio y la inclusión social. Mientras que el caso
vivienda unifamiliar aplicada a modo de patrón exten- de S-AR combina viviendas con lavandería en planta alta
dido, impulsará la creación de tejidos urbanos como los y áreas de uso comunal en planta baja proponiendo di-
descritos anteriormente. El Instituto Municipal de In- versos tipos de vivienda con distinto número de espa-
vestigación y Planeación de Ciudad de Juárez indica cios y diferente cantidad de metros cuadrados.
que: “el manejo de usos de suelo es la herramienta más La segunda estrategia hace énfasis en el crecimiento
poderosa que se tiene a disposición de la planificación, programado de la vivienda como herramienta para in-
y a través de su adecuado uso se podrán generar espa- crementar de forma progresiva la densidad de un lote de
cios pensados con un esquema de usos mixtos, que faci- acuerdo a las necesidades y los tiempos de sus habitantes.
liten esa diversidad y además generen más intensidad Este dimensionado temporal de la arquitectura ofrece
de uso” (Instituto Municipal de Investigación y Planea- una mayor adaptabilidad a las viviendas y potencia de
ción 2016). nuevo la diversidad y la inclusión social si se propone
Es por esto que la primera estrategia propone lo como una exploración hacia la mezcla tipológica. Este
multi-programático frente a la especialización de las fenómeno se puede contemplar en el caso de MOD10. Una
ciudades reduciendo al máximo la zonificación mono- estructura cruda a modo del “bottle rack” de Le Corbu-
funcional. Se busca por tanto la mezcla de usos de suelo sier que posibilita su relleno para aumentar la superficie

C O N VO CATO R I A PA R A E N S AYO S 139


útil de las distintas viviendas. Igualmente, el caso de las vechando todas las infraestructuras y conectividad exis-
viviendas de la calle Lerdo contempla el crecimiento pro- tentes en el lugar y utilizando una distribución por lotes
gramado, esta vez mediante otros dos mecanismos de densos en los que proyectaron viviendas unifamilia-
ampliación distintos: el vertical adding-on y adding-in. res con todos sus usos característicos (acceso indepen-
El primero funciona por adición de un cuerpo so- diente, jardín, terraza/tendedero, sala, comedor, cocina,
bre la estructura sobredimensionada existente, mientras baño de tres usos independientes y recámaras) adqui-
que el segundo mecanismo, que se puede dar simultá- riendo la densidad de un bloque habitacional compacto.
neamente, permite la incorporación de un tapanco gra- La cuarta estrategia aquí descrita es la de la partici-
cias al espacio interior de gran altura propuesto. La ter- pación del usuario en la toma de decisiones. Esta es una
cera estrategia para obtener una ciudad más intensa se de las principales estrategias a tener en cuenta cuando se
basa en el consumo inteligente del espacio. Esta se re- trabaja sobre tejidos urbanos existentes y mucho más
fiere no sólo al diseño de una célula individual de vivien- en el caso de asentamientos irregulares. “Es clave consi-
da, sino también a la inserción de un conjunto de estas derar a los habitantes de los asentamientos irregulares
en el tejido urbano. Esta estrategia promueve en pri- como parte integral del sistema urbano para poder tratar
mer lugar el intervenir sobre la ciudad existente, conser- el problema de su informalidad y vulnerabilidad en con-
vando el patrimonio y consolidando el tejido urbano junto. Si las estrategias de densificación no consideran la
mediante el desarrollo de predios vacantes, espacios provisión de espacio habitable para familias de escasos
abandonados o en desuso. Y en el caso de que esto no sea recursos, seguirán apareciendo (estos) desarrollos” (Ins-
posible, y se tengan que proyectar conjuntos ex-novo, tituto Municipal de Investigación y Planeación 2016).
se propone el empleo de vivienda colectiva en conjun- Se busca por tanto la aprobación y el apoyo popu-
tos o lotes compactos de manera que se obtenga la ma- lar en el desarrollo de planes y proyectos y el fomento
yor densidad razonable con el menor consumo de suelo del sentido de pertenencia entre los habitantes hacien-
e infraestructura. do que se involucren en los impactos y beneficios de las
Los tres ejemplos aplican esta estrategia de manera propuestas, de forma que se creen comunidades com-
distinta. En el ejemplo MOD10 se escoge edificar desde pactas donde igualmente se tenga respeto por el hábi-
cero vivienda colectiva progresiva, que permite aumen- tat y la naturaleza consiguiendo gracias a esta unión que
tar con el tiempo su densidad. Por el contrario, el caso del en la mayoría de los casos los proyectos lleguen a un ma-
proyecto Re-Urbano, es una intervención sobre el patri- yor éxito.
monio existente que se respeta y se adapta a unos nue- Por último, se propone la estrategia de alta conecti-
vos usos y una mayor densidad. Mientras que el caso de vidad. Esta abarca numerosos aspectos de la ciudad que
las viviendas en la calle Lerdo forman parte del Progra- no sólo atienden a la creación de un sistema de transpor-
ma de Renovación Habitacional Popular que se dio des- te colectivo eficiente y accesible o al aumento de las áreas
pués del sismo de 1985 en el que en el mismo lote en el peatonales y la reducción de la velocidad del automóvil
que habitaban las familias damnificadas se levantaron en las calles, como en un primer momento se podría pen-
nuevas viviendas para estos con la misma densidad, apro- sar. La estrategia igualmente contempla aspectos que

140
impactan de manera directa a la escala arquitectónica profile/Nicola_Dempsey/publication/240791883_
que se convierten en elementos operativos para el diseño Revisiting_the_Compact_City/links/54f5bc7a0cf2
de vivienda colectiva. En un primer lugar, se defiende la ca5efefd1544/Revisiting-the-Compact-City.pdf
creación de economías de aglomeración para una mayor GARCÍA-HUIDOBRO, Fernando.; Torres, Diego.; TUGAS,
eficiencia económica. Esto se puede conseguir, no sólo Nicolás (2008), ¡El tiempo construye! Time builds!,
con la incorporación de los usos mixtos, si no también Barcelona, Gustavo Gili.
promoviendo el concepto de la hypercasa (García-Hui- GONZÁLEZ LOBO, Carlos (1999), Vivienda y ciudad posi-
dobro, Torres Torriti, & Tugas 2008) en el que la vivien- bles, Colombia, Escala.
da se entiende como un elemento productivo que le apor- Hermida, M., Hermida, C., Cabrera, N., & Calle, C.
ta al barrio lo que le falta, reduciendo las distancias (septiembre de 2015). La densidad urbana como va-
casa-trabajo y aminorando el número de desplazamien- riable de análisis de la ciudad. El caso de Cuenca,
tos diarios. Estas acciones se pueden complementar con Ecuador. Eure. Revista Latinoamericana de Estudios
la reducción de espacios de estacionamiento gracias a la Urbano Regionales, 41(124), 25–44.
incorporación de sistemas alternativos de transporte a International City/Country Management Association
la propia vivienda. (ICMA) (2006), This is Smart Growth, USA: United
En la búsqueda de una ciudad más densa, com- States Enviromental Protection Agency (EPA).
pacta e intensa, no sólo hay que centrarse en acciones ONU-Hábitat. (2017), Hacer de la densidad una variable
de escala urbana, sino que también se puede obtener un fundamental. Consultado en onuhabitat.org.mx/
impacto en este aspecto con aportes comprometidos index.php/hacer-de-la-densidad-una-variable-fun
y conscientes desde una escala arquitectónica menor. damental
Es interesante seguir investigando en la identificación The Neptis Foundation (2010), Implementing Residen-
de otras acciones que se puedan realizar a escalas meno- tial Intensification Targets. Lesson from research on
res en las que no sólo se incremente la densidad urbana, Intensification rates in Ontario, Ontario, The Neptis
si no que se aporten otras cualidades positivas de acuer- Foundation.
do a otros indicadores de valor urbano que igualmente
habrá que integrar con el tiempo.

Referencias
CANALES, Fernanda (2017), Vivienda colectiva en México.
El derecho a la arquitectura, Barcelona, Gustavo Gili.
CARRIÓN, Fernando (2001), Las nuevas tendencias de la
urbanización en América Latina, Ecuador, Flacso.
DEMPSEY, Nicola (2010), Revisiting the Compact City.
Built Enviroment. Consultado en researchgate.net/ Apoyo gráfico: Regina Martínez, Américo de Deus Andrade.

C O N VO CATO R I A PA R A E N S AYO S 141


Juan Pablo Montes

El trazo y el calco

Tras una expresión estética y social hay siempre un plan- etimológico ‘crecimiento’— resultó ser transitivo y abrió
teamiento filosófico-ideológico. En los esquemas urba- la puerta al pensamiento posmoderno, que es en su esen-
nos, por ejemplo, el pensamiento moderno privilegió el cia cínico (Sloterdijk 1983); a partir del cinismo como
modelo centro-periferia; no fue sólo un modelo orga- filosofía contemporánea, masificada y difusa, se quiere
nizativo, sino además, ideológico. Hay que recordar, por explicar la forma de crecimiento y desarrollo de la ciudad
ejemplo, las teorías de la tierra como centro, y después el y sus nodos habitacionales, fenómenos como la migra-
heliocentrismo; de ahí también surge la idea de los cen- ción, las nuevas formas experimentales de vivienda,
tros históricos y de acuerdo a esta misma postura dialéc- la informalidad, los asentamientos irregulares, la movi-
tica de la modernidad se reivindicarán también, como lidad urbana o los desplazamientos que no han logrado
consecuencia lógica, la periferia, que se acentúa cada que explicarse a partir de las políticas de sustrato moderno,
se enfatiza el centro. Los modelos espaciales modernos positivistas que eventualmente llevaron a una realización
fueron jerárquicos, y en consecuencia centralistas. del descontento.
Esta condición proviene de una herencia fundamen- La promesa alquímica del Movimiento Moderno
talmente occidental que devino en cotos y estructuras de transformar cantidad en calidad mediante la abs-
territoriales de poder y de la influencia que éste irradia- tracción y la repetición ha sido un fracaso, una trampa:
ba, por ejemplo, Europa fue ombligo del mundo. La ma- magia que no funcionó. Sus ideas, su estética y su estra-
quinaria extendida a todos los ámbitos de la vida moder- tegia están acabadas. En conjunto, todos los intentos de
na en la arquitectura y el urbanismo cumplía una función empezar de nuevo sólo han servido para desacreditar
de bucle retroalimentador de fuerza centrífuga y centrí- la idea de un nuevo comienzo. La vergüenza colectiva
peta que alimentó a la vivienda. producto de este fiasco ha dejado un enorme cráter en
En la posmodernidad, que es para bien o para mal el nuestra forma de entender la modernidad y la moderni-
periodo histórico con el que se identifica a la humanidad zación (Koolhaas 1995).
a partir de la segunda mitad del siglo XX, se da en térmi- Antes de profundizar en el cinismo como ideología
nos generalizados, el fenómeno de explosión urbana, que posmoderna, es importante entenderlo, más allá de la
está determinado por el concepto de superabundancia acepción generalizada —negativa— y al menos en los tér-
(que a su vez tiene su base ideológica en un periodo tran- minos en los que lo piensa la filosofía contemporánea,
sitivo llamado ‘sobremodernidad’) y que se define pre- como ‘quinismo’. Peter Sloterdijk afirmaba que en la pos-
cisamente por el exceso: de ideas, espacios, teorías, esti- modernidad “el malestar en la cultura ha adoptado una
los y recursos. Este paso, o mejor, crisis —en el sentido nueva cualidad: ahora se manifiesta como un cinismo

142
universal y difuso. Ante él, la crítica tradicional de la Los centros habitacionales diseñados para el indi-
ideología se queda sin saber qué hacer y no ve dónde viduo resultaron estructuras de representación, enten-
habría que poner en la conciencia cínicamente lúcida dida en el sentido aristotélico como némesis de la rea-
el resorte para la Ilustración”. Hay en los planteamien- lidad. Hay que recurrir aunque sea a modo de ejemplo a
tos de vivienda un desfase entre lo que se hace y lo que una Brasilia impermeable , o a la dinamitación de Pruitt-
se piensa, entre cerebro y cuerpo. La ciudad, por tan- Igoe. A ello se une la mala calidad espacial de la unidad
to, se convulsiona. habitacional de Marsella de Le Corbusier. De la Uni-
Por un lado, el pensamiento posmoderno ha conta- dad de Marsella, Blake afirma que es “una formidable
giado el cinismo a las densidades metropolitanas y por escultura de concreto” pero que “como conjunto de uni-
extensión a la arquitectura, por otro, la moderna crítica dades habitables correspondientes a las necesidades de
de la ideología no sabe qué hacer con estas expresiones la vida del siglo XX, tanto en la planta, alzado y sección
contraculturales que se manifiestan en muchos niveles y como en la organización espacial, la unidad es una farsa.
que reclaman también el derecho a la ciudad como casa Sus apartamentos no tienen el menor requisito de priva-
común. Hacia el siglo XX, tal postura sobrevive, a pesar cidad, las habitaciones para los niños son en realidad
de todo, en dos formas de recepción del fenómeno cínico: trasteros con puertas corredizas con más o menos 1.80
masas, densidades metropolitanas, históricamente des- metros de profundidad; no hay espacios para que los ni-
preciadas por su condición identitaria, de disolución del ños puedan escapar de sus padres o viceversa”.
individuo y no subjetividad (en oposición, lo idéntico, Los apartamentos de Le Corbusier, obras maes-
lo que remite a sí mismo). tras de virtuosismo volumétrico, destruyen toda hipóte-
Las multitudes subjetivadas se adhieren al cinismo sis de vida familiar (Portoghesi, 1981). El funcionalismo
de forma casi instantánea. Por otro lado, están aquellos ha demostrado ser una expresión poco humana de la ar-
que se desprenden de la masa, los que ejercen el po- quitectura, en la medida que el hombre fue pensado
der, no únicamente político, sino la toma de decisiones como máquina… Las manifestaciones culturales, no idea-
y la implantación de criterios y políticas públicas, como les, de la ciudad contemporánea, tradicionalmente se
las de la vivienda en los territorios académicos, políti- atacaron desde un punto de vista y con ideologías mo-
cos, urbanos y arquitectónicos. En ellos hay un desprecio dernos, y se cae por tanto, en un anacronismo al pre-
racional del cinismo, que convierten en una estrategia tender entender y construir para lo contemporáneo con
operativa de suma importancia, puesto que son estos herramientas que están claramente fuera de contexto.
pequeños grupos segregados y segregacionistas, por la Los desarrollos de ciudad y vivienda en su realidad com-
naturaleza propia de la selección y discriminación le- pleja “se deberán construir no a partir de una referen-
gitimista, los que determinan a partir de criterios sub- cia inamovible, sino con la necesidad de proponer para
jetivos, disfrazados de objetividad, el valor de la vivienda cada paso, simultáneamente el objeto y su fundamento”
(en términos tanto económicos como monetarios). (De Solá-Morales 1995).
Por su lado, la realidad evidencia que el descontento Ello plantea un problema radical, el elefante en la
con la ciudad contemporánea no ha llevado al desarro- habitación que ciertamente a nadie le gusta quiere ver;
llo de una alternativa creíble, por el contrario, las for- los problemas son impopulares, las soluciones siempre
mas tradicionales políticamente correctas de construir son heroicas, por lo que se prefiere lo último y se rehúye
vivienda (específicamente en el contexto mexicano) a lo primero. El gran problema de la vivienda en México,
han sido redundantes en sus procesos y se cae en un por tanto, se vuelve arquetípico. Quiere decir que el error
círculo vicioso al inspirar maneras más refinadas de ar- está en la base, en el fundamento, en el origen: es un pro-
ticular el descontento. Desde esta postura reincidente se blema de repetición y no de diferencia (Deleuze 2002).
es incapaz de concebir estrategias comprometidas que El problema radica en que se calca y no se traza.
puedan influenciar, redirigir o tener éxito en términos Dicho en términos menos filosóficos, se copia, y no se
limitados, incluso empezar desde cero, aunque nunca experimenta. Esto es válido tanto para el arquitecto,
restablezcan el control. como para el desarrollador y el político. Al reproducir

C O N VO CATO R I A PA R A E N S AYO S 143


arquetipos-modelos probados no se innova. Pero el pro- y euclidiano, completamente transparente, objetivo,
blema no radica ahí (podemos vivir sin el adjetivo ‘in- neutral, como un espacio vacío e inerte, a un espacio
novación’, después de todo es necesaria la mirada al pa- social: “es el resultado de las prácticas, de las relaciones,
sado, ¿o no?), sino en el desentendimiento de las nuevas las experiencias sociales, pero a la vez es parte de ellas.
formas de habitar de la sociedad y la cultura posmoder- Es soporte, pero también es campo de acción. No hay
na, que sigue morando en casas con esquemas, zonifica- relaciones sociales sin espacio, de igual modo que no
ciones y estereotipos diseñados a principios del siglo hay espacio sin relaciones sociales” (Lefebvre 2013).
veinte. Hay un desfase anacrónico de casi cien años. El espacio cotidiano va más allá de la dotación de terri-
Las políticas de vivienda en México siguen repro- torio —público o privado— para la gente, es la prepon-
duciendo estos modelos ante la falta de estrategias abier- derancia del espacio vital, lo que implica un espacio sub-
tas a la experimentación. Ciertamente este problema no jetivo y la mayor parte del tiempo individual, lo que no
es el único; en el contexto socioeconómico la vivienda concuerda con la ideología de la igualdad (la repetición)
en México se enfrenta a los altos costos de producción por encima de la libertad (la diferencia).
y consumo, al subdesarrollo (el desarrollo sigue sien- Los términos igualdad y libertad dieron origen en su
do, aunque de suma vigencia, un planteamiento y un base a los grandes sistemas de pensamiento de la moder-
valor moderno), al derecho a la casa (consagrado en la nidad: el socialismo y el capitalismo. Estas ideas se rela-
ley, pero no en la práctica), y a la especulación, entre cionan con el pensamiento filosófico y psicoanalítico de
otros. Pero aquí se quiere señalar un problema de raíz Deleuze y Guattari: la diferencia y la repetición, que tam-
que se afianza en lo conceptual y se presenta en términos bién son cercanos a las tipologías urbano-arquitectónicas
abstractos para establecer conexiones mano-cerebro. y que sirven para entender ideas, como la repetición,
Entre lo que se hace y lo que se piensa. las normas cuyo fin último es el orden, la uniformidad
Este argumento no busca denostar, sino reflexionar y las políticas públicas.
sobre la importancia de la investigación-experimenta-
ción, es decir, crear una diferencia en medio de la repe-
tición (y acaso superarla). En su raíz, los planteamientos Referencias
de diseño de los núcleos de vivienda siguen un com- DE SOLÁ-MORALES, Ignasi (1995), Diferencias. Topografía
ponente funcionalista, pero no heterotópico. El desarro- de la arquitectura contemporánea, Barcelona, Gustavo
llador, además está constreñido por normas que le de- Gili, p. 183.
jan márgenes mínimos de maniobrabilidad, ahora que DELEUZE, Gilles (2002), Diferencia y repetición, Buenos
además se agregan los criterios y reglas de sustentabili- Aires, Amorrotu, p. 460.
dad. Todo ello es eficiente, pero, como se dijo, se plantean FOUCAULT, Michel (2010), “Los espacios otros (las hete-
espacios funcionales y se deja de lado lo subjetivo —como rotopías)”. Conferencia radiofónica, 21 de diciembre
la calidad de vida— que no deriva necesariamente de la de 1966 en “France-culture”. Publicado en El cuerpo
‘función’ de la casa, sino de aspectos heterotópicos: utópico (las heterotopías), Buenos Aires, Nueva vi-
la memoria, la experimentación, lo lúdico, lo surreal, lo sión, p. 112.
onírico, la fantasía, la belleza de la experimentación, que FOUCAULT, Michel (2013), Vigilar y castigar, México,
son experiencias deseables para la sociedad posmoderna. Siglo XXI.
Suena idílico, pero ello enfatiza la diferencia de la que se KOOLHAAS, Rem y MAU, Bruce (1995), S, M, L, XL, Nueva
habló antes, las dos filosofías que coexisten en el trasfon- York, The Monacelli Press.
do ideológico del México del siglo veintiuno. El espacio LEFEBVRE, Henri (2013), La producción del espacio, Ma-
contemporáneo, no dialéctico, apunta a la concepción ya drid, Capitán Swing Libros, p. 451.
no de un lugar de poder y representación, escenario del PORTOGHESI, Paolo (1984), Después de la arquitectura
instante privilegiado, sino a la conciencia de lo cotidiano, moderna, Barcelona, Gustavo Gili, p. 311.
del día a día, del instante cualquiera. Lefebvre es claro al SLOTERDIJK, Peter (1983), Crítica de la razón cínica, Ma-
afirmar esta condición que pasa del espacio geométrico drid, Siruela, 2007, p. 786.

144
Leticia Peña

Mi casa, mi negocio

La base de la economía popular en México se funda- demandando. Se evitan hacer un largo recorrido por algo
menta en la organización que las familias, individuos y básico o urgente para el hogar, alimentos, ropa o artículos
grupos establecen para “producir, intercambiar, comer- de temporada.
cializar, financiar y consumir bienes y servicios”, misma Las reformas instrumentadas en el país a partir del
que se fortalecía por medio de las cooperativas de con- modelo económico neoliberal (1988) favorece los nego-
sumo y producción hasta antes de 1988. Actualmente, se cios con fines lucrativos y recaudatorios, ajenos a los es-
logra con estrategias de tipo individual por familias que tablecidos mediante programas de economía solidaria
han constituido su patrimonio con base a las ventas o y organización social, o por las cooperativas de abasto
producción de artículos, logrando aportar al modelo de popular. En sectores con población que obtiene ingre-
micronegocios o microchangarros en lugares cuyo abasto sos bajos, los negocios con modelos de economía subsi-
está desatendido. diaria, considera formas de organización para “producir,
Estas familias mantienen una tradición de vende- intercambiar, comercializar, financiar y consumir bienes
dores por varias generaciones, ya que obtienen ingre- y servicios” que proveen opciones de subsistencia a las
sos por medio de la venta y elaboración de productos. familias que viven en lugares alejados de la ciudad.
El principal beneficio para los habitantes es contar con Con base en la investigación CONAVI-CONACYT sobre
el abasto que productos y así evitar las distancias de has- “Habitabilidad ambiental en las viviendas construidas
ta siete kilómetros para abastecerse en el centro comer- en serie en México, indicadores de beneficios, impactos
cial más cercano. Es decir, cuentan con un mercado cau- sociales y calidad de vida” realizado en Ciudad Juárez,
tivo que consume los productos básicos o los que van Chihuahua; Mérida, Yucatán y Mexicali, Baja California

C O N VO CATO R I A PA R A E N S AYO S 145


Norte, es que aquí se establece una reflexión sobre la trasladarse fuera para resolver compras de urgencia o
casa-negocio, una alternativa para zonas alejadas. Las recibir algún servicio o bien especializado.
familias de vendedores en los fraccionamientos con vi- Durante la visita a los sectores periurbanos se ob-
vienda de interés social, son una alternativa para grupos servó que la mayoría de los micronegocios se ubican en
de población de escasos recursos, ya que se promueven las arterias conectoras a la entrada de los fracciona-
beneficios de consumo mediante el ahorro (tanda), prés- mientos, así como en sectores alejados de estos accesos.
tamo previo (sistema de fiado) y solidaridad (coopera- En los casos localizados dentro de calles locales, en su
ción entre vecinos) con fundamento en la ayuda mutua. mayoría, son negocios menos especializados e incluso
El crédito y mercancía accesible, para habitantes que algo improvisados.
no cuentan con tiempo y medios de movilización para Se observa que son pocos los establecimientos ins-
salir a comprar, genera una clientela que cuenta con op- talados en área comercial, en general la mayoría de los
ciones de consumo, no por su costo sino por las ventajas micronegocios se ubican en espacios de la vivienda o es-
de ubicación. pacios con adecuaciones fuera de ésta, independien-
La falta de opciones para el abasto en estos fraccio- temente de las áreas comerciales planeadas en los frac-
namientos ha favorecido varios tipos de negocios, aten- cionamientos, estas son rentables para los negocios de
didos por familias que tienen la tradición de vendedores. conveniencia tipo cadena. No se atiende en estos casos,
Las distintas modalidades son: el concepto de negocio de barrio o casa-negocio (LEED-
ND 2010).1
• Casa-negocio. Se utiliza una parte de la vivienda Los mercados de segunda o tianguis son una opción
para colocar la mercancía y despachar la venta, y responden a los requerimientos o demandas del sector,
generalmente es el espacio de la sala y/o comedor. estas necesidades se resuelven de manera temporal y
• Negocio independiente. Se ubica en parte del te- aunque pagan cuotas por instalarse en la vía pública, esto
rreno de la propiedad, la vivienda. reduce la carga tributaria de un comercio establecido.
• Negocio exclusivo. Ocupa toda la vivienda y la Es decir, se mueve mediante una economía flexible que
familia habita en otro sector o casa del fraccio- ajusta las ventajas del negocio a las demandas del lugar.
namiento. Los tianguis o mercados de segundas, se caracterizan
• Negocio fuera. Se aplica a la venta por catálogo, por incorporar mayor diversidad de servicios y produc-
venta en segundas o en la vía pública durante la tos que convierten algunas calles, en verdaderos días
semana y/o fines de semana. El hogar provee los de feria para los habitantes de estos sectores alejados.
espacios para el almacenaje de los productos que Se basa en una organización de tipo local en el cual dife-
se venden. rentes comerciantes se unen para aprovechar algún bal-
dío, calle principal o área en desuso propiciando con ello
El mejor negocio es el cercano a la vivienda. La prolife- áreas con gran afluencia de peatones o autos mediante la
ración de “tienditas” o pequeños negocios en las colonias exposición de productos de manera informal con lonas,
periurbanas responden al abasto al por menor, con de- plásticos o telas para protegerse de la intemperie.
mandas básicas que coadyuvan a resolver las necesida- Estos mercados se instalan en horarios que respon-
des de alimentación, artículos escolares y/o servicios de den a la dinámica de trabajo de los habitantes, en días de
salud, recreativos o culturales de los habitantes. fin de semana jueves, viernes, sábado y domingo, y por las
Los principales negocios son abarrotes, estilistas o tardes o noche para capturar a los empleados que regre-
salón de belleza, vulcanizadora o desponchadora, cos- san de laborar. La variedad de negocios que se instalan
tureras, papelerías, renta de video, talleres mecánicos,

herrerías, carpinterías, etc. El impacto económico para
1 LEED-ND, significa, por sus siglas en inglés, en el sistema de cer-
el sector se refleja en medios de auto empleo, comple- tificación sobre Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental para
mento del ingreso y como forma de subsistencia para sus el Desarrollo de Vecindarios, del Consejo de Construcción Ver-
propietarios. Los habitantes por su parte no requieren de de los Estados Unidos.

146
en los mercados de segundas o tianguis, es interesante, Los familiares o amigos, tienen la oportunidad de
pues se vuelven lugares especializados en ventas que trabajar para incrementar su ingreso, satisfaciendo una
difícilmente se podrían obtener cerca del lugar que ha- necesidad de los vecinos y por ende un beneficio eco-
bitan. También, los vendedores buscan afianzar su clien- nómico en el sector. La familia que tiene un microne-
tela, resolviendo las solicitudes que los habitantes hacen; gocio, realmente favorece a estas zonas habitacionales
por ejemplo, la oferta de vestidos de graduación, trajes que carecen de todo tipo de servicios. La distancia entre
de fiesta, zapatos o tenis de marca, cosméticos de marca, los lugares de abasto o tiendas de conveniencia y la vi-
en junio y julio; los artículos escolares en septiembre; los vienda en sectores periurbanos, evita que los habitan-
juguetes y regalos para la navidad en diciembre. tes realicen recorridos por baldíos, o de gran extensión
En diferentes entrevistas los propietarios de negocios de calles sin arborizar, en muchos casos en un ambiente
establecidos ven con ventaja la localización del tianguis inhóspito y agreste, teniendo un impacto positivo para el
por la misma calle, pues en esos días se incrementa la desarrollo de micronegocios.
venta. En las descripciones de los propietarios respec- Los tianguis o mercados de segundas en los sectores
to a un día específico de ventas, se distinguen formas periurbanos favorecen la dinámica comercial de estos
de organización familiar que han modificado su estilo de lugares ya que diversifica los productos que tendrían que
vida y convivencia social; en muchos casos, la demanda adquirirse con un mayor costo social. La incursión de la
de tiempo del negocio, indica que la forma de entreteni- mujer empleada en los micronegocios es un clara expre-
miento es vender, conversar con los clientes, oír música, sión de las dificultades que enfrenta para poder compa-
salir por las compras, entre algunos. Los micronegocios ginar las actividades del hogar y un trabajo formal con
por su estructura barrial responden a dinámicas propias horarios rígidos y en sectores alejados de su vivienda,
del sector donde se ubican, con base a la demanda del condición que la ubica con mayor vulnerabilidad de ser
servicio o producto, a las condiciones de seguridad y cos- víctima de asalto o violencia cuando no existen solucio-
tumbres de consumo ayudando a consolidar el sector. nes a la problemática delictiva de las zonas periurbanas.
En cuanto al perfil de los tenderos encuestados, se La visibilidad que se hace de los micronegocios de
obtuvieron datos que responden a las dinámicas sociales las zonas periurbanas, es una excelente alternativa para
de la ciudad, en el que las mujeres prefieren permane- reflexionar sobre la trascendencia de incorporar por
cer en negocios ya que facilitan atender el hogar por los parte del Infonavit, el financiamiento a la ampliación de
horarios flexibles, siendo el 55, 64 y 49 por ciento de la casa-negocio, que favorezca las condiciones de habita-
los casos en Juárez, Mérida y Mexicali, respectivamente. bilidad de las familias proveedoras y que incremente las
El grado de vulnerabilidad que viven las mujeres a cargo alternativas de diversificar la oferta institucional.
de estos negocios, es elevado ya que se enfrentan a asal-
tos, violencia por delincuencia o cobro de cuotas, debido
a las zonas alejadas y con poca atención de la seguridad Referencias
pública, teniendo en consideración que estos fracciona- SARRIA, Ana Mercedes; TIRIBA, Lia (2003), "Economía
mientos, registran el mayor número de incidentes por popular" en A outra economía, Porto Alegre, Veraz.
asalto y delitos a la propiedad. Ley Orgánica de Economía Popular y Solidaria (2011),
En cuanto a las edades se observa que para las perso- Ecuador, Artículo 1.
nas de 51 años y más, es una opción de empleo ya que
concentra al 28, 18 y 25 por ciento de los entrevistados
en los establecimientos de Juárez, Mérida y Mexicali,
respectivamente (CONAVI-CONACYT 2017).2 También se
observa que es un modo de subsistencia para los habi-
tantes de las ciudades estudiadas, y un complemento del 2 Las citas de CONAVI-CONACYT (2017) hacen referencia a los re-
ingreso de la pensión o para personas que ya no son con- sultados de la investigación sobre habitabilidad ambiental, reali-
tratadas en el mercado laboral formal. zada en las tres ciudades que se mencionan.

C O N VO CATO R I A PA R A E N S AYO S 147


Eduardo Zaragoza

Ciudad vacía

Al hablar de redensificación es común que hagamos re- cuestiona si las capacidades actuales de la ciudad están
ferencia únicamente al aumento de la relación que exis- saturadas, si todo el suelo habitable está previamente
te entre viviendas y habitantes por hectárea, relación ocupado. Este análisis evidencia que existen actualmen-
únicamente de uso y ocupantes en el territorio que cada te espacios en la ciudad consolidada disponibles para re-
vez preocupan más debido a que están siempre a la baja, habitarse, por ello la importancia de poner en evidencia
asegurando que por las restricciones de las políticas esta capacidad real aparentemente inexistente. De Solá-
públicas de desarrollo urbano y que requerimos se mo- Morales (1995) indicaba el vacío como ausencia pero
difiquen para poder actuar en incrementar los índices. también como promesa y como espacio de lo posible.
Nunca pensamos en evaluar la ocupación que tenemos En muchas ocasiones la limitante en la planeación urba-
en relación a las normas vigentes. Para ello se requiere na es no contar con los instrumentos suficientes, ni la
una herramienta de contraste urbana que ayude a reco- sensibilidad para encontrar estas posibilidades y enten-
nocer la cantidad de vacío urbano como alternativa para der las dinámicas actuales y necesarias para re-habitar
la redensificación. Actualmente el suelo en zonas conso- sin comprometer lo existente ni cerrase a la construcción
lidadas resulta cada vez menos asequible y en consecuen- de lo nuevo.
cia el número de habitantes en los centros urbanos dis- En síntesis, la planeación urbana busca obtener la
minuye y la edad promedio en los mismos aumenta; por diferencia en el territorio entre lo construido y la capa-
otro lado, los usos de suelo comercial van desplazando cidad máxima permitida por la normativa vigente.
al habitacional. En este estudio se demuestra que en la mayoría de los
Las iniciativas de redensificación apuestan por la ver- predios hay lugar para una recámara adicional, más vi-
ticalización de las ciudades, por lo que inicialmente se viendas, más habitantes y actividades adicionales.

148
Completar la ciudad es una alternativa a la expan- des en las extensas vialidades existentes que no promue-
sión. Aquí se hace evidente que sin modificar la nor- ven ni protegen al peatón. Son todos los anteriores, los
mativa, la ciudad consolidada presenta posibilidades de espacios construidos o no, posibilidades reales urbanas
aprovechar sobre sus espacios construidos hacia el exte- que no requieren grandes cambios en las políticas pú-
rior e interior. Los espacios construidos y no ocupados blicas para su desarrollo, por lo que su ocupación puede
representan un gran activo para la ciudad. Las herra- ser casi inmediata.
mientas básicas para poder evidenciar esto son el mapa Los planes de desarrollo en la entidad mencionan y
y el diagrama. establecen terreno disponible, pero solo se refiere a los
El mapa incluye datos con elementos construidos, lotes baldíos registrados, cualquier otro predio con mí-
como el equipamiento escolar o intangibles relaciona- nima construcción o uso ya no se considera como área
dos con los niveles de educación de la población, así potencial para el desarrollo; reconociendo esta perspec-
mismo se pueden combinar para lograr una lectura tiva sólo en el desarrollo de lo etiquetado como baldío.
de interrelación entre algo material y comportamiento Así como Josep Maria Montaner (1997) indica que
humano. Estos mapas siempre están abiertos a más in- la arquitectura y el urbanismo no pueden entenderse sin
formación, son la representación de los procesos del ha- tener en cuenta sus continuas relaciones con el arte, tam-
bitar y pueden ser legibles a todos los que forman parte bién el urbanismo puede referirse a conceptos tecno-
de la ciudad. lógicos como la desfragmentación, utilizado en el área
La territorialización de las experiencias urbanas se computacional, sobre el proceso de localización de la
puede codificar en diagramas que son la síntesis de la discontinuidad en los fragmentos de la información don-
complejidad anterior y hacen comprensible la lectura de un archivo pudo haber sido dividido en su almace-
de la realidad y tal como lo describe Montaner (2014): namiento en menos fragmentos, reduce el tiempo de ac-
“el diagrama como una herramienta gráfica que visualiza ceso y permite almacenar de manera más eficiente.
fenómenos o flujos, tanto de la realidad como del pro- Para el caso de desfragmentar la ciudad, primero hay
yecto”. Por esto mismo se requiere desarrollar una capa- que reconocer el espacio total urbanizado, segundo el
cidad de síntesis gráfica alimentada del conocimiento de espacio ocupado en desplante y en total de construcción,
los procesos en sus diferentes escalas, mapeando las di- por último, el espacio no ocupado que tenemos dispo-
ferentes experiencias de sus actores y resultando en la nible en lo ya construido y urbanizado, resultado de la
imagen de los hallazgos y de las posibles respuestas. diferencia de lo anterior menos la capacidad estipulada
La morfología urbana está compuesta por el contex- por la normativa aplicable vigente: esto hará evidente las
to natural, el sistema de calles, lotes y edificaciones, es cantidades y los lugares donde hay espacio vacante den-
decir, por lo que vemos. Es necesario, también reconocer tro de la ciudad.
la forma de aquellos espacios que no son visibles, lo no Primero, análisis puntuales para evidenciar condi-
ocupado, lo no construido pero disponible, y así pre- ciones del espacio construido con posibilidades de ha-
visualizar la ciudad completa según la normativa vigente. bitarse; esto se hizo primeramente sobre la localidad
Las tipologías de los diferentes vacíos van del baldío, completa para tener una radiografía general de la ciu-
el excedente de terreno no aprovechado, la azotea, el uso dad, considerando los datos por manzana, para así obte-
caducado, las ruinas, las bodegas o las nuevas posibilida- ner un matiz más claro de los posibles contrastes y áreas

C O N VO CATO R I A PA R A E N S AYO S 149


homogéneas. Esto mediante mapeos con variables urba- pado, los números se han presentado de manera gene-
nas socio-demográficas, con referencias geográficas y en ralizada, dado que son reportes nacionales y no se han
proporción a las densidades de población, estas fueron: encontrado datos que hagan evidentes a nivel manzana,
densidad de viviendas, de habitantes, nivel de escolari- cuáles son las zonas más o menos densas.
dad, hacinamiento, población mayor de 65 y menores de Es por ello que se hace evidente la ocupación ac-
14 años, con límites en la actividad, población económi- tual del suelo, en contraste con las posibilidades que, bajo
camente activa, derechohabiencia, ubicación de vivien- las regulaciones actuales, muestran para completar la
das con actividad económica, establecimientos, comer- ciudad; se toman zonas muestra de la ciudad, en las dos
cio, servicios profesionales, banca múltiple, escuelas, escalas, barrio y biopsia; este trabajo incluye los datos de
supermercados, consultorios, estacionamientos, talleres la morfología urbana, como son lotificación y construc-
mecánicos y oficinas de gobierno. ción sobre los mismos, que son vitales y hacen posible
Después de esto, las “áreas barrio” de la ciudad que distinguir particularidades.
incluyen condiciones de alto contraste entre ellas, resul- En este tipo de mapas se evidencia el contraste que
tado del mapeo anterior, evaluando sobre estas las condi- presentan tres zonas en específico con base en las cir-
ciones de espacio vacante, bajo circunstancias estadís- cunstancias anteriores se buscó identificar si las con-
ticas totalmente diferentes. Las dimensiones de estos diciones de ocupación del espacio construido estaban
sectores están delimitadas por los límites de las áreas condicionadas por la cualidad socioeconómica de la
geo estadísticas básicas (AGEB) del Instituto Nacional de zona. Estos datos se combinaron con la superficie total
Geografía y Estadística; abarcan cada una la superficie de estudio neta y bruta, la primera solo incluye el área
equivalente a un radio recorrido en veinte minutos a pie: privativa y la segunda incluye además las vialidades, para
esta referencia se basa en lo que un habitante puede cami- de esa manera generar los índices de ocupación, que por
nar como máximo para realizar sus actividades de mane- sus siglas en inglés denominaremos Ground Space Index
ra cómoda diariamente y con una dimensión de cada una (GSI), en nuestro contexto denominado también Coefi-
de estas áreas con escala barrio, se toman aleatoriamente ciente de Ocupación del Suelo (COS), Floor Space Index
tres “biopsias urbanas”, para revisar los posibles contras- (FSI) o Coeficiente de Utilización del Suelo (CUS) y Open
tes o coincidencias y lograr una lectura de las condiciones Space Ratio (OSR) o índice de espaciosidad y la diferencia
que en global forman parte de un sector o un barrio. de estos con los límites máximos de construcción, mar-
Lo que se hace evidente en este estudio son todos cados por la normativa vigente. Así resulta el Índice del
aquellos espacios que no se han ocupado en la ciudad y Vacío (V) (void).
en qué cantidades están disponibles en relación a lo ya Establecer qué tan vacía está una zona o predio de
construido; este espacio vacante es dentro de las con- la ciudad debe ser una combinación no sólo del espa-
diciones de la normativa actual. En el 2012, la Secreta- cio construido sino de factores como: qué tan ocupado
ría de Desarrollo Social de México publicó datos de den- o habitado está y su proporción con relación a su cons-
sidades de habitantes y vivienda con relación al territorio trucción u ocupación del territorio y con el total de zona
ocupado: La expansión de las ciudades 1980–2010. Más no de estudio. El índice muestra la relación de la combi-
se ha hecho en relación a lo que está construido y ocu- nación de índices de ocupación del suelo (GSI), de uti-

150
lización (FSI), niveles (L), densidades de habitantes y Referencias
viviendas permitidos o establecidos en la normativa vi- BERGHAUSER Pont, M; HAUPT, P. (2010), Spacematrix:
gente. El resultado es la diferencia que existe entre lo que Space, Density and Urban Form, Róterdam, NAi Pub-
está construido o se pretende construir y el máximo per- lishers.
mitido. A mayor el índice del vacío mayor espacio no uti- CIOCOLLETO, A. (2015), Espacios para la vida cotidiana,
lizado del permitido. Barcelona, Comanegra.
Resulta necesario aclarar que los cálculos realiza- Consejo Nacional de Población (2012). Consultado en
dos para la elaboración del índice se consideran los datos conapo.gob.mx/work/models/CONAPO/indices_mar
existentes de catastro y la normativa de construcción gina/2010/anexoc/AnexoC.pdf
vigente. Si las nuevas políticas de desarrollo plantean DE SOLÀ-MORALES, Ignasi (2006), Terrain Vague. Any-
esquemas de redensificación, deben incluir y tomar place, Anyone Corporation, Nueva York, The MIT
en cuenta el espacio abierto y público que en combina- Press.
ción es lo que genera ciudades agradables para habitar. DUANY, A.; LYDON, M; SPECK, J. (2010), The Smart Growth
Este índice no puede ser replicado si los datos de catastro Manual, Nueva York, Mc Graw Hill.
no son similares a los considerados en este estudio, es HEIDEGGER, Martin, (1971), “Building Dwelling Think-
elemental poder cuantificar el espacio construido en sus ing” en HEIDEGGER, Martin, Poetry, Language,
diferentes alturas para poder hacer el análisis del estado Thought, Nueva York, Harper & Row.
actual de la ciudad no solo en los espacios baldíos, sino MONTANER, Josep Maria (2014), Del diagrama a las expe-
en lo ya ocupado pero subutilizado o en ruinas. Estos riencias, hacia una arquitectura de la acción, Barce-
baldíos son el único dato que consideran los programas lona, Gustavo Gili.
de re-densificación, generando un desaprovechamien- MONTEYS, Xavier (2014), La habitación, Barcelona, Gus-
to del espacio potencial de regeneración y reocupación tavo Gili.
de la ciudad. UYTENHAAK, R. (2008), Cities Full of Space: Qualities of
Con esta herramienta se puede dimensionar la pro- Density, Róterdam, Uitgeverij 010.
porción del espacio construido, cómo y cuántos lo ocu-
pan y la proporción de lo que esta desaprovechado, así
como de la proporción de habitantes que pudieran ser
parte de él. Los resultados generan una herramienta de
planeación y estratégica para la redensificación y reha-
bitación de la ciudad consolidada. Con ella se puede me-
dir el estado actual de la ocupación espacial del territo-
rio y que tanta población lo habita. Al hablar de vacío no
como defecto y como potencial en el espacio y en el tiem-
po, el límite entre lo construido y lo imaginado, entre el
requerimiento y lo disponible, entre lo efímero y lo diná-
mico, aportados a lo evidentemente invisible.

C O N VO CATO R I A PA R A E N S AYO S 151


Elasticidad
e informalidad
Armando Hashimoto

Aunque mucho se habla de la expansión desproporcionada de nues-


tras ciudades debido a la producción de vivienda de bajos recursos
en la periferias, es cierto que la mayor cantidad de espacio urbano se
hace en la informalidad. Y ésta entendida como un “enredo de reglas
sociales, procesos económicos, arreglos políticos de desarrollo urba-
no y experiencias cotidianas, y aunque más aparentes en asentamien-
tos de bajos ingresos, permea, sin embargo, en todas las formas de
producción urbana” (Gilbert, De Jong 2015).
Si tomamos como ejemplo la Ciudad de México, el 60 % de lo
construido se hace de manera informal en distintos grados de inten-
sidad, desde el centro de la ciudad hasta la periferia. Sin embargo,
este modo de urbanización, no sólo está ocurriendo en las grandes
ciudades, sino también en ciudades intermedias y de menor escala.
Por lo tanto, es importante entender que la urbanización periférica es
notoriamente generalizada y sucede en muchas ciudades del sur, in-
dependientemente de sus distintas historias de urbanización y espe-
cificidades políticas (Caldeira 2016).
Es crítico sobrepasar el estigma de que los asentamientos infor-
males son lugares de marginación con alta criminalidad y pobreza,
desorganizados e ineficientes, y entenderlos al mismo tiempo como
expresiones subversivas de producción de ciudad con alta permeabi-
lidad a las necesidades individuales y a lo local, en contraposición a
esquemas de desarrollo desde arriba, normalizantes, estereotipados,
limitados por filtros representatividad.

152
Aquí la idea de una ciudad es un condición urbana inteligencia compartida en la producción espacial multitu-
elástica, no una gran visión, sino un “gran ajuste” (Rahul dinaria? ¿Es posible cambiar nuestra concepción profesio-
Mehrotra, 2010). Podríamos estar ante una alternativa de nal del proyecto a uno más responsable e inmediato y en el
producción de vivienda y ciudad con ingredientes inheren- que tal vez no preveamos su materialización con exactitud?
tes a los modos de operación de países en desarrollo y me- ¿Es posible que la interacción digital pueda ser utilizada
nos determinada por ajanes realidades socio políticas, lega- para catalizar la participación en estos entornos? ¿Es posi-
les y económicas del occidente desarrollado. Estamos ante ble mantener la diferencia y la multiplicidad de soluciones
el entendimiento de un esquema de desarrollo de vivienda arquitectónicas particulares a gran escala?
y ciudad que aunque presente siempre, no hemos sabido Sabemos que solo un porcentaje muy menor de la cons-
reconocer sus posibles ventajas en la medida en la que es trucción se realiza con la participación de los arquitectos
capaz de integrar innovación, conocimiento, flexibilidad y y equipos profesionales multidisciplinarios. Los protoco-
mejoras operativas. Más aún, la formalidad y la informali- los actuales de planeación urbana sólo alcanzan impacto
dad en gran medida se entrelazan en una “lógica de urba- en zonas muy delimitadas que algunos han llamado urba-
nización dialéctica” (Gilbert, De Jong 2015). nismo de polos. Es necesario diseñar e implementar mode-
En cualquier caso, estos modos de producción espacial los que incidan en la participación de los actores necesa-
han estado presentes, siguen hoy y lo estarán en los diver- rios en la producción espacial y material de vivienda de la
sos futuros imaginables en décadas por venir. Los recursos ciudad informal.
monetarios, humanos y materiales con los que esta ciudad Hoy, una mayoría de los entornos urbanos del sur global
informal se produce seguirán su flujo en mayor en mayor o se producen con variaciones de informalidad. Si pensamos
menor medida dependiendo de las condicionantes políti- que una gran cantidad de decisiones espaciales pueden ser
cas, normativas y económicas. Es completamente necesa- influenciadas positivamente en cuestiones tan sencillas
rio diseñar e implementar esquemas de involucramiento como iluminación natural, ventilación y ganancia térmica
intensivo y multitudinario de los arquitectos en este contex- o tan complejas como disposiciones de espacios públicos o
to de producción espacial. La mera concepción de proyecto zonas de riesgo, el impacto en términos sociales, de calidad
arquitectónico ejecutivo como hoy lo conocemos tendría de vida, seguridad, salud y resiliencia urbana serían enor-
que ser evaluada con miras a extender el impacto que la mes. Podemos tomar acción o seguir siendo espectadores.
competencias del arquitecto pueden ofrecer. En estos proyectos de vinculación se entrevé un compro-
La rigidez de un esquema que corresponde a un ámbito miso compartido por estas inquietudes sobre el desarrollo
legal, político y productivo ordenado y predecible no es ca- urbano. El Movimiento Moderno acuñó reglas y normas para
paz de contener tácticas de respuesta dadas las condi- hacer arquitectura en una ciudad constreñida. La ciudad no
ciones económicas y temporales de la ciudad informal. se estaciona en factores unívocos de desarrollo ni puede
¿Es posible conceptualizar un modelo operativo con el que producirse bajo la premisa de una perpetuidad de las mis-
una gran cantidad de arquitectos y equipos multidiscipli- mas condiciones. Al contrario, supone y exige elasticidad
nares con distintos grados de experiencia y líneas de pen- y paradigmas reactivos a las condiciones de los países en
samiento intervengan en la ciudad informal? ¿Es posible desarrollo. Podemos imaginar otros modelos de producción
que el pensamiento de diseño aporte de manera masiva en urbana que contemplen lo que no estaba previsto; el escru-
un contexto rápidamente cambiante? ¿Es posible generar tinio de lo que damos por sentado.

V I N C U L AC I Ó N 153
Vivienda al centro

Pablo Vaggione

Desde la adopción de la Declaración Universal de Derechos derecho a una vivienda adecuada y la mejora de los barrios
Humanos en 1948, el acceso a una vivienda adecuada ha marginales como elementos fundamentales para el desa-
sido reconocido como un elemento fundamental para el de- rrollo sostenible.
sarrollo. En las últimas décadas, el debate sobre la vivienda En octubre de 2016, la Conferencia Hábitat III dio ori-
en el contexto internacional ha tenido una notable evolución gen a la NAU, un marco orientador para el desarrollo ur-
hasta llegar a plasmarse en la Agenda 2030 y la Nueva bano sostenible para las próximas dos décadas que coloca
Agenda Urbana (NAU). la vivienda en el centro de la urbanización sostenible y la
La adopción del Programa Hábitat en la conferencia convierte en un elemento esencial para acelerar el logro de
Hábitat II de Estambul de 1996 estableció el compromiso los ODS. El reconocimiento de las ciudades y, por extensión,
de una “vivienda adecuada para todos” y marcó un cambio de las viviendas como instrumentos cruciales para el desa-
radical en la función del Estado en la política de vivienda, rrollo no ha sido casual. El pasaje de un mundo mayorita-
pasando de la provisión directa a un rol de facilitador. Sin riamente rural hacia uno eminentemente urbano identifica
embargo, la reducción de la participación del Estado tuvo el proceso de urbanización como una de las tendencias
implicaciones directas en la disminución de acceso a la vi- globales más significativas del siglo XXI. Esta transfor-
vienda, lo que ha contribuido a exacerbar la segregación de mación, que ha ocurrido de manera temprana y acelerada
los grupos más vulnerables. en América Latina, continúa generando desafíos importan-
Después de dos décadas de escasez de respuestas tes para satisfacer las necesidades de vivienda de las per-
frente a la problemática de la vivienda, la posición de la sonas que viven en ciudades en todo el mundo.
comunidad internacional empezó a cambiar. En septiem- De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y
bre de 2015, la Asamblea General de las Naciones Unidas Geografía (INEGI) y con el Consejo Nacional de Población
adoptó la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. Dos (CONAPO), entre 2015 y 2050 la población mexicana cre-
terceras partes de las metas de los Objetivos de Desarrollo cerá de 119.5 a 150.8 millones de personas. Este crecimien-
Sostenible (ODS) que integran la Agenda están vinculadas to demográfico —y el proceso de consolidación urbana
con lo local y deberán ser planteadas desde las ciuda- que traerá consigo— implicará la construcción de entre
des. Especialmente el ODS 11 (“lograr que las ciudades y 561 y 632 mil viviendas por año hasta 2030 (CONAVI
los asentamientos humanos sean inclusivos, seguros, re- 2014). Numerosos estudios han señalado que en muchas
silientes y sostenibles”) destaca al desarrollo urbano, el ciudades de México el déficit de viviendas adecuadas y el

154
incremento del número de personas que viven en asen- para volver accesible la vivienda a diferentes grupos so-
tamientos informales se contrapone con un importante cioeconómicos (ONU-Hábitat 2015).
número de viviendas vacías. Además, la asequibilidad de En síntesis, la vivienda es un imperativo del desarrollo
la vivienda, especialmente en áreas consolidadas, se ha socioeconómico; juega un papel trascendente en el creci-
convertido en un desafío prioritario que expone aún más la miento de la economía, generación de empleo y es un com-
desigualdad en el acceso a las oportunidades. De manera ponente de la consolidación de la sociedad, pero, sobre todo,
sistemática, la forma en que se produce y consume la vi- tiene un papel central en el desarrollo de las personas. En
vienda ha dado forma a un patrón de crecimiento expan- la implementación de la Agenda 2030 y la NAU, los países
sivo y de baja densidad, con los elevados costos económi- y ciudades tienen la oportunidad de integrar la vivienda en
cos, sociales y ambientales que ello implica. Esto ha sido esfuerzos concertados para trascender de la concepción de
favorecido, en gran parte, por una descoordinada gestión la vivienda adecuada hacia la idea de vivienda como ele-
del suelo y por la desvinculación entre las políticas de vi- mento integrador del desarrollo sostenible.
vienda y desarrollo territorial y urbano. El enfoque de la vivienda en el centro es uno de los ejes
Es evidente que nuestras ciudades requieren un cam- fundamentales de la asistencia técnica que la oficina de
bio de paradigma que avance desde la construcción de vi- ONU-Hábitat para México y Cuba desarrolla con el apoyo
viendas hacia la construcción de ciudad, a través de un mar- del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Tra-
co holístico y sostenible, fundamentado en los derechos bajadores (Infonavit). Desde 2015, y de forma coordinada
humanos y donde la vivienda está en estrecha relación con con las entidades del sector, ambas instituciones han suma-
el entorno urbano en el que se localiza. Por ello, es indispen- do esfuerzos para que la vivienda en México ocupe la posi-
sable coordinar la política de vivienda con la política de ción central que le confieren las agendas globales en la
desarrollo urbano y ordenamiento territorial, impulsando mejora de la calidad de vida de las personas.
los usos mixtos del suelo para integrar la vivienda con las
fuentes de empleo, educación y recreación; promoviendo
las densidades adecuadas para favorecer la productividad,
mejorar la eficiencia y competitividad urbana, disminuir la
huella ecológica y promover formas de movilidad alternati-
vas y proponiendo una variedad de modalidades de tenencia

V I N C U L AC I Ó N 155
156

Diseño: Esrawe Studio


Diseño gráfico: Ápice I Diego Beauroyre + Maira Fragoso
Foro Urbano Mundial

Luis Jeremías Diez-Canedo

El Foro Urbano Mundial (WUF) es una conferencia técnica Los eventos en los que participó el Infonavit, a través del
convocada por ONU-Hábitat en la que se reúnen expertos de Centro de Investigación para el Desarrollo Sostenible, fueron
gobiernos locales y federales, ONG’s, profesionales del sector los siguientes:
público y privado, investigadores y académicos para exa-
minar una de las problemáticas que enfrenta el mundo de • “La vivienda al centro de los Objetivos de Desarrollo
hoy: la rápida urbanización y su impacto en comunidades, Sostenible” en el que se mostró a la vivienda como
ciudades, economías, cambio climático y políticas públi- elemento central e integrador para el cumplimiento de
cas. El foro se ha convertido en una de las reuniones más los Objetivos de Desarrollo Sostenible así como el li-
importante en la arena internacional, para el intercambio de derazgo del Infonavit en el sector hacia el cumplimien-
puntos de vista y experiencias en desafíos urbanos. to de la Agenda 2030.
Malasia fue anfitrión de la novena sesión del WUF con el
tema Ciudades 2030 - Ciudades para todos: Implementando • La Asamblea Empresarial y el llamado a la acción de
la Nueva Agenda Urbana. El WUF9 fue la primera sesión en la Nueva Agenda Urbana para que las empresas apli-
enfocarse en la aplicación de la Nueva Agenda Urbana apro- quen su creatividad e innovación para resolver los de-
bada en Hábitat III y contribuyó a la movilización global para safíos del desarrollo sostenible en áreas urbanas.
apoyar la visión común sobre desarrollo urbano para avan-
zar en el logro de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desa- • La Sesión Especial de vivienda asequible para todos
rrollo Sostenible. (ingresos diversos y ciudades multigeneracionales)
El Infonavit fue parte de la delegación oficial mexicana cuyo objetivo fue explorar y promover políticas y so-
que asistió al foro junto con la Secretaría de Desarrollo Agra- luciones técnicas a favor de viviendas asequibles, así
rio, Territorial y Urbano (SEDATU), la Comisión Nacional de como medios para monitorear y registrar el progreso
Vivienda (CONAVI), gobiernos locales y universidades, entre en esta área.
otros. La participación del Instituto abarcó cinco eventos
(asambleas, sesiones especiales, eventos paralelos y diá- • El Evento paralelo sobre “La percepción importa de
logos) además de un espacio permanente en la exposición las personas hacen ciudades prósperas”, donde la
a través de un stand que mostró información gráfica y au- Federación Internacional de Bienes Raíces FIABCI
diovisual, además de funcionar como un espacio flexible presentó una variante del CPI, que es una herramienta
para llevar a cabo conferencias, reuniones y pláticas bilate- en línea para capturar las percepciones de las perso-
rales. Dentro de los principales temas referidos se encuen- nas sobre el progreso de su ciudad para ser más in-
tran los siguientes: cluyentes, seguras, resilientes y sostenibles.

• Desafíos de la vivienda en México • El Diálogo “Big data públicos: medir la realidad urba-
• “La vivienda al centro de los Objetivos de Desarrollo na”, en el cual se presentaron las diversas herramien-
Sostenible” tas y metodologías relacionadas con el desarrollo y uso
• El rol del Infonavit en la implementación de la nueva de datos e información para el monitoreo y la presen-
Agenda Urbana tación de informes efectivos sobre la Nueva Agenda
• Continuación de la implementación del CPI en México Urbana, así como para profundizar en el conocimien-
• Alineación del Infonavit a la Agenda 2030 de Desa- to sobre qué constituye la información crítica nece-
rrollo Sostenible saria para la formulación de políticas de desarrollo
• Proyectos de soluciones urbanas y vivienda: Labo- urbano a nivel global, regional, nacional y local.
ratorio de Vivienda Infonavit, estudios de redensifi-
cación, atención a desastres naturales (Plan Jojutla) y
propuestas de vivienda rural (Del territorio al habitan-
te), entre otros.

V I N C U L AC I Ó N 157
La casa
entre la historia

Juan Fronjosá

Conocemos los problemas y perjuicios que se generan por la expansión


descontrolada de las manchas urbanas: contaminación, servicios caros,
carencia de infraestructura, lejanía de los centros de trabajo, deforestación,
la expansión sobre terrenos de importancia para el equilibrio del ecosis-
tema y demás afectaciones que son consecuencia de las antes menciona-
das. Adicionalmente sabemos que estas expansiones se caracterizan
por su baja densidad que acaba generando altos niveles de segregación
social y estamos conscientes de que todo esto se refleja en un deterioro
ambiental y en la calidad de vida de los habitantes. Ante esto, es claro que
antes que continuar la expansión de la mancha urbana, es necesario
potenciar al máximo el área ya ocupada. Esto nos lleva al centro histórico
de la ciudad, el corazón de la urbe, donde hay servicios, infraestructura,
comercio, fuentes de empleo, escuelas, espacios públicos y todo lo que
forma parte de la vida urbana.
Con base en la misión del Infonavit y los objetivos de la Nueva Agenda
Urbana aprobada en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre la Vivien-
da y el Desarrollo Urbano Sostenible (Hábitat III) celebrada en Quito,
Ecuador (20 de octubre de 2016) en la que se “busca promover ciudades
más incluyentes, compactas y conectadas mediante la planificación
y diseño urbano, gobernanza y legislación urbana, y la economía urbana”
(Nueva Agenda Urbana, Hábitat III), pensamos en una vivienda que se aleja
de la visión meramente comercial de las inmobiliarias para promover una
vivienda integrada a la ciudad que la envuelve, comprometida con el desa-
rrollo sostenible y que mejore la calidad de vida de sus habitantes.
158
Camilo Restrepo + AGENdA

El proyecto de vivienda para el Centro Histórico de Puebla de la ciudad. El concreto debería ser vaciado con base un
busca la convergencia de tres elementos fundamentales patrón particular ya existente en la ciudad, pero por su be-
para la apropiación, recuperación y estímulo de la habita- lleza y densidad ornamental, pensamos haría una buena
bilidad del centro, así como una nueva opción de asequibi- expresión de la fachada. La decisión del concreto se debe
lidad de vivienda en lugares estratégicos de la ciudad, ge- particularmente a la oportunidad de tener un material ma-
nerando valor social y urbano. Para esto concebimos tres leable, y que al mismo tiempo es capaz de hacer resonancia
estrategias: el uso de la historia como sistema de continui- con las formas de la historia y garantizar un bajo manteni-
dad; el uso de los materiales como estrategia de compren- miento. Otras partes de la fachada deben ser en cerámica
sión y dialogo y la tipología como instrumento. de talavera artesanal blanca y azul, tipo Puebla, articulando
El reto de intervenir en un Centro Histórico requiere obli- y vinculando saberes ancestrales haciendo eco de las tradi-
gatoriamente mirar los antecedentes, lo que ha sucedido. ciones artesanales.
Entendemos la historia como ese texto abierto que está La tipología juega un papel especial en la organización
disponible para ser editado, es decir, para ser interpretado del espacio intermediario, aquel espacio que articula lo pú-
de acuerdo al espíritu del tiempo. Para este fin hemos mi- blico con lo privado, es este aquel espacio que construye
rado de manera detenida y responsable, dos cuestiones comunidad. Para este fin hacemos uso del espacio tipoló-
particulares: la tipología entendida como esa forma de or- gico fundamentado en la casa poblana de patio. Pensamos
ganizar el espacio a través del tiempo y que produce un que esta tipología permite articular no solo la condición
orden espacial particular, articulado con las variaciones climática sino también la oportunidad de abrir espacios de
sociales y sus oportunidades; la segunda es precisamente integración y encuentro social. A otra escala, hemos optado
la materialidad. La materia es la forma de organización que por una tipología de viviendas que se distribuyen en tercios.
permite no solo que los órdenes de la tipología perduren, Insertando en el segundo tercio (tercio central) todas aque-
sino también que se exprese el tiempo de una manera par- llas funciones que implican instalaciones técnicas, con el
ticular y se enlace con el saber hacer propio del lugar y sus firme propósito de dejar disponible los extremos para ma-
culturas. Es por eso que esta articulación entre tipología y yor funcionalidad y así garantizar ventilación cruzada. Para
material permite adaptarse y abrir la conversación con el este fin hemos propuesto 5 tipologías para garantizar una
tejido urbano y la intimidad doméstica. mezcla social e intercambio. Estas buscan ser adaptables a
Al recorrer las calles de Puebla notamos cómo la gama los cambios sociales y a sus posibles adaptaciones. Desde
material se expresaba de múltiples formas; nos llamó par- la posibilidad de tener un local comercial en la planta baja,
ticularmente la atención el valor del ornamento y sus im- hasta la posibilidad de albergar familiares no directos y que
plicaciones técnicas y estéticas; pensamos que ese orna- estos tengan su propia independencia a pesar de compartir
mento debe prevalecer y ser readaptado a las condiciones el mismo techo. Creemos que la mejor vivienda es aquella
actuales por lo que recomendamos que el material sea un que no solo brinda oportunidades, sino también es capaz de
concreto prefabricado, pigmentado de color terracota. Este reaccionar a las demandas del tiempo y las organizaciones
material debe ocupar parte de la superficie de las fachadas sociales que surgen súbitamente.
ya que este color da continuidad a la identidad cromática

V I N C U L AC I Ó N 159
160
161
Pabellón comunitario
Al Borde + Taller General

Este proyecto nace de cuando la voluntad se une con la casualidad.


En 2016, para la Conferencia Mundial de ONU Hábitat III en Quito, el
Pabellón de Infonavit diseñado por el Centro de Investigación para
el Desarrollo Sostenible (CIDS) y La Metropolitana (“Agenda urbana”,
Vivienda Infonavit 1) planteó la posibilidad de su reutilización. A po-
cos metros estaba nuestro proyecto, el Pabellón Alemán, que de igual
forma se desarrolló para el reúso de todo el material con base en las
experiencias de prototipos de vivienda tras el sismo del 16 de abril
de 2016.
De tal suerte, el pabellón se desmontó y guardó para su rein-
serción en Ecuador. La estructura consiste en dos naves entrelazadas
con posibilidad de separarlas para generar dos espacios más amplios.
Esta acción permitió tener espacio suficiente para acondicionar au-
las, comedor, taller, invernadero y salón de usos mixtos. Se habilitó el
espacio para generar actividades que congregan gente de manera
muy distinta a una exposición.
La ubicación, en la comunidad de Guadurnal, se decidió por el
trabajo previo y los apoyos brindados por Taller General en la zona.
Debido a la condición inundable del lugar se elevó la estructura crean-
do un espacio más efímero en planta baja, aprovechando la sombra
para generar encuentros a partir de una serie de redes para brindar
un carácter lúdico la construcción.
El proyecto se volvió icónico y, por sus propios medios, la comu-
nidad decidió colocar un recubrimiento de cemento a las paredes de
caña. Además, se incluyó el trabajo del artista urbano y diseñador
gráfico David Sur, quien realizó un mural sobre la reconstrucción y la
identidad del comedor. Con esta suma de voluntades, el pabellón
pasó a ser el depositario de la historia de esta comunidad que tiene
un antes y un después del terremoto.

162
163
Plan Jojutla
Jesús Aguirre

A raíz del sismo del 19 de septiembre del 2017, el Infona- munitario de la Ranchería el Higuerón, Santuario del Se-
vit ratificó su compromiso con el bienestar de las familias ñor de Tula, Auditorio Municipal, Espacios Públicos de la
del país al poner en marcha una serie de medidas extraor- Unidad Habitacional el Higuerón, puente peatonal Panchi-
dinarias para apoyar a la población afectada. Una de ellas malco-Panteón y puente peatonal Colonia Juárez-Centro-
fue un donativo que autorizó el Consejo de Administración Panchimalco.
a Fundación Hogares, destinado a proyectos de reconstruc- Adicionalmente, el Instituto puso en marcha talleres co-
ción de equipamiento urbano y espacios públicos en el mu- munitarios para apoyar a la población afectada en temas de
nicipio de Jojutla, Morelos. El donativo es implementado por construcción, diseño arquitectónico y carpintería para mo-
la Fundación con proyectos coordinados desde el CIDS. biliario. Por último, como parte de la vinculación académica,
El CIDS colabora con 11 oficinas para el desarrollo de se impartió un seminario de titulación en la Facultad de
11 proyectos, mismos que se definieron a partir de un diag- Arquitectura de la UNAM enfocado en Jojutla para atender
nóstico social y la elaboración de un plan maestro: Escuela la situación de desastre y mejorar la calidad del espacio
Emiliano Zapata, Puente de los Suspiros, alameda, zóca- público del municipio.
los y jardín municipal, Capilla de la Santa Cruz, Centro Co-

164
Análisis de sitio

Plan regional

V I N C U L AC I Ó N 165
Zócalo y Jardín Ricardo Sánchez
Estudio MMX
166 Fotografía: dane alonso
Puente de los Suspiros + Lavaderos Ayudantía y Centro Comunitario
RZERO estudio de la Ranchería del Higuerón
Espacios públicos de la Unidad AGENDa Agencia de Arquitectura +
Habitacional el Higuerón Dellekamp Arquitectos
Escuela Emiliano Zapata
Rozana Montiel Estudio de Arquitectura
TAX Alberto Kalach

Puente Peatonal Panchimalco-Panteón


Hernan Diaz Alonso, HDA-x

Talleres de mobiliario
La Metropolitana

Alameda
Auditorio Municipal
DAFDF Arquitectura y Urbanismo
Juan Antonio Tlaxcoapa Santuario del Señor de Tula
Taller de Arquitectura Mauricio Rocha + AGENDa Agencia de Arquitectura +
Capilla de la Santa Cruz Gabriela Carrillo Dellekamp Arquitectos
TAX Alberto Kalach

167
168
FA UNAM
MarÍa Luisa Ríos, Diego Antonio Portilla, María Magdalena de Jesús,
Hugo Alberto Mejía, Miguel Ángel Rosas
FA UNAM
Natalia Elizondo, Juan Carlos Morales, Petra Pekarova,
Xóchitl Urbina, Luis Iván Cruz

169
170
FA UNAM
Alberto Aguilar, Mateo Torres,
Andrés Millán, Adrián Acevedo
FA UNAM
María Andrea Contreras, Tatiana Miranda,
Priscilla Orozco, Jimena Piña

171
Riesgo sísmico
y precios de la vivienda
Emilio Gutiérrez + María E. Rodríguez + Kensuke Teshima

El sismo del 19 de septiembre de 2017 (7.2 grados) causó el


derrumbe de 38 edificios, al menos 229 muertes y dejó más de
5 mil construcciones dañadas en la Ciudad de México. Distintas
organizaciones, entre las que destaca el Infonavit, han ofrecido
asistencia a los propietarios de las viviendas dañadas para su
refuerzo o reconstrucción. En otros contextos se ha mostrado que
los precios de la vivienda responden a distintos factores como
niveles de contaminación (Currie et al. 2015; Chay y Greenstone
2005), crimen (Linden and Rockoff 2008), calidad de las escuelas
(Black 1999), otros riesgos a la salud (Davis 2004) además de
desastres naturales como inundaciones y accidentes nucleares
(Gallagher 2014; Kawaguchi et al. 2017).
En un contexto en el que las instituciones financieras están
relativamente bien desarrolladas, si la información sobre el riesgo
sísmico en distintas zonas de la ciudad es conocida, el precio de
la vivienda en zonas de alto riesgo sísmico debe ser menor. Debido
a que los trabajadores del sector formal tienen acceso a una gran
variedad de productos financieros, si los precios respondieran al
riesgo sísmico, podrían protegerse ante éste comprando un seguro
por daños a sus viviendas. Apoyos como los ofrecidos por Infonavit
a este grupo de trabajadores podrían traslaparse con las compen-
saciones pagadas por las compañías de seguros privados.
¿El riesgo sísmico se refleja en los precios de la vivienda antes
del sismo? Si los precios de la vivienda cambian drásticamente
alrededor de la frontera del antiguo Lago de Texcoco, que determina
una discontinuidad importante en el riesgo sísmico, nuestros resul-
tados sugieren que en la Ciudad de México, a diferencia de otros

172
contextos, el precio de las viviendas no responde al riesgo sísmico.
Para ello utilizamos información de todos los créditos hipotecarios
financiados parcial o totalmente por Infonavit entre enero de
2010 y diciembre de 2016. Para cada uno de éstos conocemos las
coordenadas geográficas exactas de la vivienda, si se trata de
vivienda horizontal o vertical o si es de segunda mano, entre otras
características. Identificamos si están dentro del antiguo Lago de
Texcoco, pues la intensidad de las ondas sísmicas es mayor en
estas zonas (Seed et al. 1985); y para aislar el impacto del riesgo
sísmico dividimos a la ciudad en cuadrados de 1 × 1 kilómetros
suponiendo que, excepto por el riesgo sísmico asociado a que se
encuentren dentro o fuera del lago, las características de las vivien-
das al interior de cada cuadrado son similares.
La siguiente ecuación describe nuestra estrategia empírica:

Log (precio)ict = γt + θc + β1 Lagoi + X'i δ + εict 

Donde Log (precio)ict es el logaritmo natural del precio por metro


cuadrado de la vivienda i, ubicada en el elemento c de la cuadrícula,
vendida en el año t.

Lago Lagoi es una variable dicotómica que toma valor de uno si la


vivienda se encuentra al interior del lago;

X’i es un vector de características observables;

γt indica efectos fijos por año;


θc indica efectos fijos por elemento de la cuadrícula presentada
en la Figura 1;

Y εict es el término de error.

Nuestro coeficiente de interés es β1 , pues identifica si los precios


de la vivienda dentro del antiguo Lago de Texcoco son efectivamen-
te distintos de los precios de las construcciones fuera del mismo.

En el siguiente cuadro se muestran los resultados: la columna 1 in-


cluye el total de viviendas ubicadas a menos de 750 metros de la
frontera del lago mientras las columnas 2 y 3 restringen la muestra

V I N C U L AC I Ó N 173
a aquéllas ubicadas a menos de 500 y 250 metros del lago, respec-
tivamente. La primera columna muestra que no existen diferen-
cias importantes en el precio por metro cuadrado de la vivienda que
se encuentra dentro o fuera del lago. El coeficiente de interés es
cercano a cero y no es significativamente distinto de cero. Las co-
lumnas 2 y 3 confirman el resultado pues incluso reduciendo la
muestra a viviendas ubicadas a menores distancias de la frontera
del lago, el coeficiente de interés se mantiene cercano a cero
y nunca es significativamente distinto de cero. No parece que, en el
contexto de la Ciudad de México, los precios de la vivienda refle-
jen el riesgo de daños por sismos asociado al subsuelo sobre el cual
están construidas.

Resultados de regresión discontinua geográfica. Riesgo sísmico y logaritmo del precio


de venta de las viviendas por metro cuadrado

750 m del lago 500 m del lago 250 m del lago


Interior del lago -0.014417 -0.0134893 -0.0060796
[0.0119491] [0.0125642] [0.016509]

Efectos fijos por cuadrícula Sí Sí Sí
Efectos fijos por año de compra Sí Sí Sí
Controles por características Sí Sí Sí
de la vivienda
Observaciones 13,625 8,915 3,992
R-cuadrada 0.5977 0.6023 0.6205
Desviación estándar entre corchetes
Nivel de significancia: *10%, **5%, ***1%.

Los resultados sugieren que en la Ciudad de México los precios de


las unidades habitacionales no reflejan el riesgo sísmico asociado
a la zona en que se encuentran y contrastan con los resultados obte-
nidos para otros contextos pues, al menos para Japón, los precios
de la vivienda son menores en zonas de mayor riesgo sísmico (Naka-
gawa et al. 2007; Naoi et al. 2009; Hidano et al. 2015).1 Lo anterior
resulta fundamental para las autoridades que diseñan los códigos


1 Hanaoka et al. (2018) encuentra que las preferencias por riesgo
también cambian como resultado de la ocurrencia de sismos.

1 74
de construcción, las organizaciones que ofrecen créditos hipote-
carios y los ciudadanos en general. En el corto plazo, la evidencia
sugiere que los propietarios que desconocían el riesgo sísmico
asociado a su vivienda exijan mayores esfuerzos de las instituciones,
productoras de vivienda, organizaciones gubernamentales y
no-gubernamentales. Esto contribuirá a que las personas afectadas
cuenten con los recursos necesarios para reforzar o reconstruir su
vivienda. En el mediano y largo plazos, la información sobre el riesgo
sísmico de distintas construcciones debe ser provista oportuna-
mente con mucha mayor precisión y claridad, y tanto el gobierno de
la ciudad como las instituciones crediticias deben contribuir a su
diseminación.

Referencias
BLACK, Sandra E. (1999), “Do better schools matter? Paren- Great East Japan Earthquake” en American Economic
tal valuation of elementary education” en The Quarterly Journal: Applied Economics 10, no. 2, pp. 298–330.
Journal of Economics 114, no. 2, pp. 577–599. HIDANO, Noboru, HOSHINO, Tadao y SUGIURA, Ayako (2015),
CHAY, Kenneth Y., y GREENSTONE, Michael (2005), “Does “The effect of seismic hazard risk information on proper-
air quality matter? Evidence from the housing market” ty prices: Evidence from a spatial regression disconti-
en Journal of political Economy 113, no. 2, pp. 376–424. nuity design” en Regional Science and Urban Economics
CURRIE, Janet, DAVIS, Lucas, GREENSTONE, Michael y 53, pp. 113–122.
WALKER, Reed (2005) en “Environmental health risks and KAWAGUCHI, Daiji y YUKUTAKE, Norifumi (2017), “Estima-
housing values: evidence from 1,600 toxic plant openings ting the residential land damage of the Fukushima nuclear
and closings” en American Economic Review 105, no. 2, accident” en Journal of Urban Economics 99, pp. 148–160.
pp. 678–709. LINDEN, Leigh, y ROCKOFF, Jonah E. (2008), “Estimates
DAVIS, Lucas W (2004), “The effect of health risk on hous- of the impact of crime risk on property values from
ing values: Evidence from a cancer cluster” en American Megan’s laws” en American Economic Review 98, no. 3,
Economic Review 94, no. 5, pp. 1693–1704. pp. 1103–27.
DELL, Melissa (2010), “The persistent effects of Peru’s mi- SEED, Harry Bolton, ROMO, M. P., SUN, J., JAIME, A., y
ning mita” en Econometrica 78, no. 6, pp. 1863–1903. LYSMER, J. (1987) “Relationships between soil conditions
GALLAGHER, Justin (2014), “Learning about an infrequent and earthquake ground motions in Mexico City in the
event: evidence from flood insurance take-up in the Uni- earthquake of Sept. 19, 1985” en Earthquake Engineer-
ted States”, American Economic Journal: Applied Econo- ing Research Center, University of California, Berkeley,
mics 6, no. 3, pp. 206–33. EERC, Report UCB/EERC-87/15.
HANAOKA, Chie, SHIGEOKA, Hitoshi y WATANABE, Yasutora
(2018), “Do Risk Preferences Change? Evidence from the

175
Del territorio al habitante
José de Villar

Desde su fundación, el Infonavit ha realizado estudios de investi-


gación para orientar su aproximación urbana, arquitectónica, econó-
mica y social sobre la vivienda en México. Esta iniciativa resulta de
una abundante colección de propuestas de vivienda rural y autopro-
ducción que enfatizan la diversidad de las costumbres y los modos
de construir del México contemporáneo. Se trata de un “festín” de
84 propuestas que se estructura en dos grandes bloques: mesas
con bancas en donde la información de los proyectos se presenta
categorizada en un formato en el que se puede realizar un aná-
lisis comparado entre sí, colocado en una gran mesa corrida simu-
lando un mantel estampado; y un apartado de síntesis compuesto
por otras cinco mesas que contienen el material expositivo en
horizontal e impreso con distintas gráficas y estéticas que también
rememoran la estética de los populares manteles de vinilo. La expo-
sición hace énfasis en la investigación, en el gusto por el análisis
y la extracción de datos útiles, de manera que se revelan ciertos
aspectos de las propuestas al visitante propiciando lecturas y con-
clusiones propias sobre lo mostrado.

Diseño y museografía: José de Villar, Carlos Chacón, Lucia Martín, Alejandro


Cuevas, Diego Beauroyre y Maira Fragoso | Fotografía: Jaime Navarro

176
V I N C U L AC I Ó N 177
Laboratorio de Investigación
y Experimentación Práctica
de Vivienda Infonavit

Carlos Zedillo

Cuando uno visita un museo que llama a la re- confort térmico de una casa es un elemento funda-
flexión de lo construido a lo largo de la historia, los mental para el habitar? ¿La ventana es una norma
objetos exhibidos se cubren por espacios delimita- o una fuente de luz y ventilación? ¿La cimentación
dos por fronteras que impiden la conexión sensorial es la base o el umbral que hace contacto con el te-
y el contacto físico entre visitante y pieza. Lo mis- rritorio? ¿La vegetación es ornamento o necesidad?
mo ocurre cuando uno visita alguna casa diseñada Estas preguntas, indicadores y análisis históri-
por algún arquitecto relevante, que a lo largo de los cos, fundamentales para el Centro de Investigación
años fue habitada por circunstancias extraordina- para el Desarrollo Sostenible (CIDS), motivaron la
rias y que con el tiempo se vuelve patrimonio. Este creación de un laboratorio para diseñar y habitar 32
es el caso de la vivienda vernácula, los palacetes, prototipos de vivienda, cuyo antecedente histórico
las haciendas, las villas de Palladio, las casas fun- es el ideal de construcción del Infonavit y sus “cen-
cionalistas de Le Corbusier y las más orgánicas de tros experimentales de vivienda” de los años ochen-
Wright, las casas de cristal de Johnson, Saarinen, ta. El proyecto actual fue elaborado por el CIDS y
Mies van der Rohe y los Eames o los ejercicios de MOS (Hillary Sample + Michael Meredith) e inclu-
la Bauhaus, el Wiesenhof, las Case Study Houses ye un centro de bienvenida que alberga maquetas,
de California y las casas de Juan O’Gorman o Luis planos, talleres, auditorio, comedor y biblioteca. Las
Barragán, entre otros ejemplos notables. viviendas ensambladas nacen de una convocatoria
La vivienda para los más desfavorecidos sigue abierta y la participación de más de 400 equipos re-
siendo el reto de las ciudades; se estima que en gistrados en un padrón de especialistas interesados
México se requiere más de un millón de viviendas en la vivienda social y el territorio. La selección de
al año. La pregunta es: ¿Por qué no estamos satis- 84 equipos conformó la investigación “Del Territo-
fechos con lo construido y por qué la vivienda se rio al habitante” a partir de la cual se construyen 32
percibe como un problema y no como la solución al proyectos para el uso y la difusión del laboratorio. El
desarrollo del territorio? ¿Es posible que la idealiza- alcance abarca contenedor y contenido, es decir, el
ción de ciertas estructuras construidas no se consi- mobiliario interior como componente primordial del
dere en el diseño de políticas públicas de vivienda espacio habitable.
o en la transición de la imagen, al papel y la idea? Aprendamos a reducir riesgos, utilizar atlas, in-
¿Es más fácil describir las bondades del bambú y la dicadores, datos, evidencia y otras cartografías de
madera mientras se les oye crujir o madurar con el fuentes oficiales, además de las generadas por el
paso del tiempo? ¿Los materiales que usamos en CIDS, como base para la planeación y desarrollo de
la vivienda son renovables y sostenibles? Al obser- soluciones de financiamiento para la vivienda y la
var un muro de ladrillo se reconoce que el material planeación. El Infonavit cada vez más se posiciona
es más eficiente y más aún cuando se deja intacto como líder de investigación, vinculación académi-
y a la intemperie. ¿La relación y mezcla de tipolo- ca, innovación y divulgación de conocimiento espe-
gías nos hace reflexionar sobre la monotonía de la cializado en vivienda y ciudades sostenibles.
construcción en serie? ¿Se puede demostrar que el

178
Fotografía: Erick Cuevas

V I N C U L AC I Ó N
179
Taller de Vivienda Social Sostenible
Karla Aguilar

Charles W. Moore, director del departamento de Arquitec- Los 112 alumnos participantes realizaron 28 proyectos,
tura de la Universidad de Yale en colaboración con Kent de los cuales se seleccionó uno para ser construido. Duran-
Bloomer, profesor de esta facultad, fundaron en 1967 el te tres semanas los estudiantes de todas las universidades
primer “Yale Building Project”, el cual consistía en la cons- trabajaron conjuntamente para desarrollar el proyecto eje-
trucción de un proyecto de vivienda a escala real diseñado cutivo considerando tanto técnicas constructivas y materia-
durante el taller. Moore descubrió que para los estudiantes les como políticas de vivienda, restricciones presupuestarias
salir de las aulas tenía diversos beneficios, tales como el y programas de trabajo, además de tratar con agencias re-
conocimiento de los procesos constructivos, sensibilidad a gulatorias, políticas y comunitarias y buscar patrocinios
la escala y la administración de recursos materiales y mo- para financiar la construcción.
netarios. Durante la crisis estudiantil de los años sesenta, lo Derivado del aprendizaje, el intercambio y los resultados
vio como una oportunidad para comprometer a la comuni- del taller, se organizó una segunda edición a nivel nacional
dad universitaria con la acción social, al dirigir el taller para con siete campus del Tecnológico de Monterrey (Ciudad de
atender a familias de escasos recursos. México, Toluca, Estado de México, Querétaro, Guadalajara,
Tomando como referencia este proyecto, el Centro de Puebla y Monterrey), esta vez con la participación de 130
Investigación para el Desarrollo Sostenible (CIDS) identi- alumnos y Grupo Sadasi, quien proporcionó cinco lotes para
ficó la oportunidad de reforzar la educación y formación el desarrollo de la propuesta.
de las futuras generaciones de arquitectos involucrando a Durante este segundo taller los estudiantes visitaron
los estudiantes en temas de vivienda social, buscando un diversos desarrollos de vivienda en sus ciudades, además
impacto positivo en la calidad arquitectónica de la vivien- de estar en contacto cada semana con un habitante con el
da. De esta forma, se promovió la inclusión del Taller de cual plasmaron en una postal las ideas acerca del signi-
Vivienda Social Sostenible (TVSS) en los programas acadé- ficado del hogar y el futuro de la vivienda en México. Ter-
micos de instituciones de enseñanza de arquitectura en minado el taller de verano se continuó con el desarrollo de
México. Como lo menciona Adam Hopfner, actualmente la propuesta seleccionada y el análisis para la construcción
director del mencionado “Yale Building Project”, se trata de de la misma. Actualmente se desarrolla una tercera versión
“atender a una población que a menudo está desatendida con siete campus del Tecnológico de Monterrey, siendo en
por la comunidad arquitectónica”. esta ocasión el tema a desarrollar la vivienda vertical in-
El primer TVSS se llevó a cabo con la colaboración de las traurbana, siguiendo la estructura y logística de los talleres
principales escuelas de arquitectura de la Ciudad de Mé- anteriores.
xico: la Universidad Nacional Autónoma de México, Univer- La colaboración interinstitucional e intercampus que
sidad La Salle, Universidad Anáhuac, Universidad Iberoa- por primera vez se llevó a cabo a nivel local y nacional, más
mericana e Instituto Politécnico Nacional. Conjuntamente allá de enfrentar a los estudiantes a resolver un problema
se trabajó con el grupo inmobiliario Hogares Unión, quienes real de diseño de manera colaborativa, los llevó a enten-
proporcionaron un lote para el desarrollo de la vivienda. der que en la escuela se incuban ideas relativas a los mayo-
El planteamiento general combinó el análisis y el diseño res problemas de la sociedad,1 con el objetivo de contar con
individual y colaborativo. Durante la primera etapa, las ex- la sensibilidad necesaria para analizar, diseñar, construir y
ploraciones de diseño en rangos de escalas desafiaron a desarrollar proyectos y estrategias que generen vivienda
los estudiantes a considerar diversas técnicas, culturales, adecuada y asequible en México.
sociales y ambientales en la formulación conceptual y de
diseño. Más adelante, el problema de diseño se situó en un
sitio especifico, el cual definió el funcionamiento y gene-
ró oportunidades y demandas espaciales. Durante la ter-
cera etapa cada equipo desarrolló una propuesta de diseño 1 Bilbao Tatiana (2018), Mexican Social Housing: Promises Revisis-
detallada. ted, Yale School of Arquitecture, México.

180
V I N C U L AC I Ó N 181
Tecnológico de Monterrey Campus Monterrey
182 Equipo: Juan Carlos López, Juan Manuel Rois, Roberto García / Ivette Andrea Cavazos, Juan Pablo Carrera, Pavel Martínez
Universidad Iberoamericana Campus Ciudad de Mèxico
Equipo: Jorge Alessio / Manuela Demichelis, Fernando Izeta, Regina Sánchez Aedo, Sarah Tarrab 183
Redensificación urbana
Julia Gómez

“Si no plantas árboles, no esperes lluvias” (B. Alrich. en De- las ciudades existentes para mejorar la calidad de vida de
fensa de la dehesa). En el Reporte Nacional de Tendencias los derechohabientes. “Redensificación urbana” implica una
de la Prosperidad Urbana en México, realizado en 2016 por transformación en la concepción de la vivienda abandonada
Infonavit en colaboración con ONU-Hábitat, se predice que en sintonía con una evolución institucional, la cual identifi-
de no acelerarse las políticas de oferta de suelo habitacional ca iniciativas que salvaguardan la integridad patrimonial,
bien localizado para las familias más pobres en las ciuda- estructural y estética de los procesos de densificación y
des, y no replantearse la política de vivienda social, se incre- consolidación de las ciudades. Con estos proyectos consi-
mentarán los procesos de ocupación de suelo en zonas de deramos que la forma más eficiente para no consumir el
riesgo y de manera irregular. suelo es a través de la densificación de lo ya construido.
La densidad es un criterio que, al margen de los benefi- En esta investigación se presentan tres proyectos piloto
cios y desafíos que presentan las ciudades más compactas y 32 proyectos de investigación que buscan dar respuesta
y densas, es determinante del urbanismo ecológico.¹ Como al problema de la vivienda abandonada para dar una alter-
lo refiere Vishan Chakrabarti,² la densidad contribuye a la nativa a la expansión de las ciudades en 15 municipios de
prosperidad, sostenibilidad y salud de las ciudades. Las ciu- 13 estados de la República Mexicana. Los arquitectos pro-
dades menos dispersas, con distancias más cortas y menor ponen, a través de los prototipos de vivienda vertical, re-
terreno urbanizado, significan ciudades compactas, lo cual comendaciones para fomentar patrones territoriales más
es el escenario más viable para un futuro urbano sostenible. consolidados y compactos que impliquen combinar tiem-
La densidad es sólo un criterio para distribuir a la pobla- pos, procesos y actores como una plataforma de gestión-
ción en un territorio y pocas veces se asume como una po- acción en favor de la calidad de vida.
lítica pública. Se trata de proyectos con diferentes tipologías que pro-
La proximidad, recordando a Edward Glaeser, es proba- muevan la diversidad social: propuestas que definen nuevas
blemente una de las cualidades más relevantes de la ciudad
compacta. La densidad, y en especial la densidad vertical,
debe estar planificada alrededor del transporte, los espacios 1 MOSTAFAVI, Moshen (2014), ¿Por qué urbanismo ecológico? ¿Por
públicos y la infraestructura. La premisa de la investigación qué ahora? URBANISMO ECOLÓGICO, Boston, Harvard University, Gra-
que a continuación se presenta es que, a través de la utili- duate School of Design, p. 32.
zación de viviendas recuperadas por el Infonavit, es posible 2 CHAKRABARTI, Vishan (2013), A Country of Cities: A Manifesto for an
controlar la expansión de las manchas urbanas y consolidar Urban America, Nueva York, Distributed Art Publishers, p. 145.

184
01 ROZANA MONTIEL |
ESTUDIO DE ARQUITECTURA |
Saltillo, Coah.

01

V I N C U L AC I Ó N 185
02 RNTHOMSEN ARCHITECTURE | 08 JC ARQUITECTURA, O’GORMAN
San Juan del Río, Qro. & HAGERMAN | Villahermosa, Tab.
03 ACCIDENTAL ESTUDIO 09 CRO STUDIO | Apodaca, NL.
DE ARQUITECTURA | Soledad 10 DCPP | Veracruz, Ver.
de Graciano Sánchez, SLP. 11 DELLEKAMP ARQUITECTOS |
04 AGRAZ ARQUITECTOS S.C. | Tepic, Nay. DEREK DELLEKAMP & JACHEN
05 AMBROSI | ETCHEGARAY | Tepic, Nay. SCHLEICH | Silao, Gto.
06 BGP ARQUITECTURA | 12 DVCH DEVILLARCHACON
Soledad de Graciano Sánchez, SLP. ARQUITECTOS | Culiacán, Sin.
07 CANO | VERA ARQUITECTURA |
Mineral de la Reforma, Hgo.

02

necesidades y espacios que permitan la flexibilidad Si bien los proyectos urbanos de gran escala son
de usos. Son proyectos que priorizan la generación de los principales impulsores de la modificación urbana,
espacios colectivos y de transición a través de pla- en este ejercicio proponemos una serie de proyectos
zas, terrazas o balcones. Iñaki Ábalos lo explica al sus- de acupuntura viables para modificar el desarrollo ac-
cribir que hoy nos encontramos con que cualquier tual y contener la explosión descontrolada de las ciu-
construcción vertical mixta en una ciudad contempo- dades. Con estos proyectos resistimos la expansión de
ránea es una oportunidad para repensar, al mismo las ciudades.
tiempo, la unidad residencial, la organización espacial
y programática, el modo de aplicar los conocimientos
termodinámicos para lograr, en definitiva, el modelo de 3 ÁBALOS, Iñaki (2015–2016), Dualisms: A House, A Palace, Bos-
ciudad de alta densidad.³ ton, Harvard University, Graduate School of Design.

186
03

04 05 06

07 08 09

10 11 12

V I N C U L AC I Ó N 187
13 14 15

16 17 18

19 20 21

22 23 24

188
25 26 27

28 29 30

31 32 33

13 FERNANDA CANALES | 19 MOS ARCHITECTS PLLC | Saltillo, Coah. 26 TALLER | MAURICIO ROCHA +
San Juan del Río, Qro. 20 NUÑO - MAC GREGOR - DE BUEN GABRIELA CARRILLO | Veracruz, Ver.
14 FRANCISCO PARDO ARQUITECTO | ARQUITECTOS S.C. | Morelia, Mich. 27 TALLER 4:00 AM | Gómez Palacio, Dgo.
Veracruz, Ver. 21 PITA & BLOOM | Saltillo, Coah. 28 TALLER ADG | Tepic, Nay.
15 FRIDA ESCOBEDO | San Juan del Río, Qro. 22 PRODUCTORA | Culiacán, Sin. 29 TALLER DE ARQUITECTURA X |
16 GAETA-SPRINGALL ARQUITECTOS | 23 ROJKIND ARQUITECTOS + VOX Benito Juárez, Q. Roo.
Saltillo, Coah. ARQUITECTURA | Aguascalientes, Ags. 30 TATIANA BILBAO ESTUDIO | Apodaca, NL.
17 GRIFFIN ENRIGHT ARCHITECTS | 24 SAYA + ARQUITECTOS | Durango, Dgo. 31 ZAGO ARCHITECTURE | Durango, Dgo.
Saltillo, Coah. 25 TACTIC-A | León de los Aldama, Gto. 32 ZELLER & MOYE | Durango, Dgo.
18 LABORATORIO DE VIVIENDA 33 ZOOBURBIA | Veracruz, Ver.
DE LA FACULTAD DE ARQUITECTURA DE
LA UNAM | Saltillo, Coah.

V I N C U L AC I Ó N 189
Territorio de gigantes

190
El Plan Maestro de Territorio de gigantes en
Aguascalientes surge como resultado de la
liberación de terrenos actualmente ocupados
por la Comisión Federal de Electricidad con
torres de alta tensión. Se trata de un creci-
miento urbano compuesto principalmente de
desarrollos de vivienda social y popular con el
objetivo de tejer el centro de la ciudad y la zona
más oriental de la misma. Estas acciones
ayudan a paliar la problemática social existente a través de de manzana a través de la calle principal que conecta los
la integración y convivencia de unos con otros. La intención barrios este y oeste. El eje central crea un corredor en el
es generar un tejido de transición donde ahora sólo existe corazón del conjunto que se activa incorporando comercio
una trinchera. y servicios comunitarios como una aportación que brin-
Dentro del plan se eligieron dos manzanas como proyec- da mayor vida al centro de las manzanas. A continuación se
to piloto: manzana prototipo 1 o norte y manzana prototipo 2 abordan las partes arquitectónicas de los proyectos esen-
o sur. En este artículo hablaremos del segundo de los casos ciales en la tipología de la manzana.
que se está desarrollando con la colaboración de Infonavit y
en el que participan seis oficinas locales e internacionales. 1. El tablero | Dellekamp Arquitectos
El hecho de invitar a equipos de diferentes países aporta Es a través del reconocimiento histórico del potencial que
heterogeneidad en el método de trabajo y enriquece la pro- tiene la vivienda social para hacer ciudad, con una visión
puesta con nuevas ideas y estrategias que servirán de refe- integral de urbanismo, arquitectura y desarrollo social, que
rencia para el futuro desarrollo del área en los próximos años. cuestionamos al sistema de vivienda actual, que dirige su
Tras el taller de trabajo realizado con todas las oficinas esfuerzo al financiamiento y a la macroeconomía. Aguasca-
que participarán en el prototipo de Manzana Sur (Dellekamp lientes, tiene la oportunidad de potencializar su desarrollo,
Arquitectos, Dogma, HHF Architekten, MAIO Architects, en una franja de aproximadamente 13 kilómetros de largo
MOS Architects y Tatiana Bilbao Estudio) se estableció una que se encuentra condicionada por el cruce de una línea
serie de criterios comunes de diseño de manzana. La planta eléctrica de alta tensión que genera una sección urbana,
general conforma un damero: una retícula de llenos (edifi- continua y vacía, próxima a desaparecer, liberando un terri-
cios) y vacíos (plazas) de proporciones similares que recuer- torio en pleno centro de la ciudad. Un acierto importante
da al origen del uso de la palabra manzana para referirse al de este proyecto es la idea de juntar a seis arquitectos,
espacio urbano destinado a la edificación. que aunque comparten el interés y pasión por la vivienda y
Este plan maestro también aborda el espacio público en la ciudad, provienen de contextos variados y tienen visio-
busca del diseño de áreas acotadas e interconectadas nes distintas al buscar un objetivo en común reconociendo
en planta dentro de la manzana que propicien la relación las diferencias en estas ideas y perspectivas así como la
entre vecinos y donde se puedan realizar diferentes activi- diversidad y la inclusión como piezas claves para construir
dades que beneficien a la comunidad, al estilo del urbanis- el tipo de ciudades que valoramos.
mo catalán. Además, se diseña el parque lineal adyacente La estrategia, a través de una retícula que se remite a un
directamente conectado con el espacio público del interior tablero de ajedrez, propone un dimensionamiento equitativo

V I N C U L AC I Ó N 191
del vacío sobre lo construido generando una plataforma más, espacios neutrales y reprogramables que puedan
que permite diversidad de usos y usuarios. Encontra- dar respuesta a una mayor diversidad social. Los cam-
mos una base urbana ideal para integrar esta diver- biantes hábitos sociales y la necesidad de pensar es-
sidad, para tejer en la ciudad una mezcla de vivienda y pacios domésticos que permitan una flexibilidad a lo
servicios entre lo público y lo privado que gestione los largo de su vida útil con el mínimo número de cam-
distintos intereses y necesidades cambiantes dentro bios permiten imaginar una casa definida por espacios
de una base lógica flexible y ordenada. Territorio de genéricos que pueden albergar diferentes estructuras
Gigantes es un método que unifica dos o mas zonas y necesidades familiares donde el uso de cualquier ha-
que viven, a su propia escala, diferentes condiciones bitación no está predeterminado y puede cambiar con
sociales, entrelazando a través de ellas un mismo ele- el tiempo.
mento, el espacio público. Con ese objetivo en mente, hemos propuesto una
La mejor prueba de que la vivienda social puede te- tipología de vivienda que enfatiza una jerarquía es-
ner un impacto positivo en el desarrollo social y econó- pacial; el programa doméstico no está fijado de una
mico de la ciudad es la vivienda que va adquiriendo manera inamovible. La casa se define por un conjunto
plusvalía. De inicio este proyecto acierta en la ubica- de cinco habitaciones similares conectadas en las es-
ción, resolviendo el principal problema de conectividad quinas a través de puertas correderas, que permiten
y conexión con la red de oportunidades que es la ciu- conectar o ampliar temporalmente las estancias. Las
dad, y así garantiza ser parte de esta lógica de la vi- puertas ofrecen, de manera sencilla, una gran diver-
vienda como patrimonio. Quizás, desde el icónico de- sidad de configuraciones espaciales. El acceso a las
sarrollo del Proyecto Experimental de Vivienda (PREVI) viviendas se realiza a través de grandes balcones co-
en 1967 no se había realizado un proyecto en América lectivos, espacios potencialmente apropiables y ambi-
Latina que integrara todos estos ingredientes. Nuestra guos que aceptan su condición de límite y permiten
visión para este fragmento de ciudad es sumarla a la redefinir condiciones cotidianas de privacidad y publi-
ciudad y a su contexto para generar un espacio rico por cidad, de lo doméstico y lo urbano.
su oferta de servicios, calidad de espacio público y se-
guridad que agregue valor a sus habitantes. 3. El patio | Dogma
Desarrollamos un complejo de vivienda coherente y
2. La casa | MAIO Architects simple en el que el ethos de la colectividad prevalezca
La casa y la calle no pueden entenderse como dos en- sobre la individualidad del espacio doméstico. Tradi-
tidades independientes. Ambas pertenecen, de una cionalmente el proyecto de vivienda se desarrolla de
manera difusa y compleja a un mismo cuerpo. Si du- adentro hacia afuera: primero la casa y todo lo demás
rante la primera parte del siglo XX algunos arquitec- como una consecuencia de la privacidad y el espacio
tos imaginaron una división de la ciudad por funciones, doméstico. Con este proyecto invertimos esta tradición
como sucedía en la Carta de Atenas de 1933, durante al desarrollar las viviendas alrededor de patios cuyo
las siguientes décadas estas ideas fueron ampliamen- propósito es convertirse en habitaciones públicas. Si
te cuestionadas. Hoy vemos que casi imposible esa bien se trata de un plan sencillo, la retícula abre una
división que resultó extremadamente problemática y multiplicidad de vistas y circulaciones que brindan a
simplificadora. En nuestras ciudades, los usos y las todo el complejo de una traza casi laberíntica.
funciones se fusionan cada vez más tanto en el ámbito Además, este plan brinda una forma definida al es-
urbano como en el doméstico. La casa se ha expan- pacio abierto haciendo que las casas parezcan más un
dido a la calle y viceversa, borrando los límites entre fondo que una serie de bloques autónomos. Por esta
lo doméstico y lo urbano, y redefiniendo conceptos razón, el acceso a cada bloque habitacional juega un
como intimidad o la redefinición de los límites entre lo papel muy importante en el esquema general. Cada
público y lo privado. vivienda ofrece un carácter público, casi dramático, a
Por ello, la vivienda no puede entenderse sin su con- las entradas de las casas para reforzar el enfoque en el
texto, sin incluir los servicios urbanos que permiten exterior de los edificios de vivienda. La característica
ampliar los espacios domésticos facilitando la vida dia- principal es una galería que permite el acceso a todos
ria. Diseñar viviendas implica diseñar el barrio en sus los departamentos y se convierte en el balcón de cada
distintas escalas, diseñar todos aquellos lugares que departamento, mientras que su organización cruci-
mejoran y hacen posibles los cuidados cotidianos: el forme une todos los balcones en un espacio común
cuidado común de niños y gente mayor, la proximidad compartido. Cada planta está organizada alrededor
de los espacios de salud y educación. La vivienda no se de un núcleo que concentra todas las instalaciones
limita al espacio privado doméstico sino que incluye, a domésticas (baños, cocinas, alacenas, almacenes) y
una escala accesible, todos aquellos espacios colec- se encuentra subdividida por muros colocados a dis-
tivos que mejoran el bienestar social. tancias equivalentes entre ellos. Esta sencilla organi-
La forma en que ocupamos nuestras viviendas y sus zación permite diferentes combinaciones de espacios
distintas estancias es cada vez más frágil y efímera. sin cambiar el ritmo constante de los muros y las aber-
Los usos se superponen. Por ello necesitamos, cada vez turas. Este ritmo se refleja en la fachada cuya carac-

192
terística principal es la distribución equitativa de claros, grapa central o vestíbulo. Esta área sirve a dos depar-
que tienen las mismas dimensiones, ya sean puertas o tamentos y funciona como un lugar doméstico de en-
ventanas. El uso de dos colores —verde y rojo— busca cuentro y relación para los vecinos. Además, permite
enfatizar la diferencia entre las casas y la galería, ha- iluminar y ventilar naturalmente todos los servicios y
ciendo que la última sea la protagonista visual de todo cocinas de cada vivienda evitando la utilización de sis-
el complejo. temas mecánicos más costosos.
La vivienda se distribuye desde una grapa central
4. La terraza | HHF Architekten que contiene accesos y núcleo de servicios naturalmen-
Se trata de una geometría eficiente de vacíos y llenos te ventilado. Ésta se desplaza a un lado a otro confi-
que facilita la diversidad de los edificios y los espacios gurando las distintas tipologías y provocando que la
exteriores dentro de un marco de trabajo denso y alta- única variable en todas ellas sea la zona de día que
mente racional. Organizado como una amplia retícula, alberga el comedor y la sala. En respuesta a la alta ocu-
los volúmenes de las casas se dividen y combinan en pación que se espera en estas viviendas y con el fin de
una manera que resalta la circulación vertical de los evitar que una familia numerosa se vea obligada a com-
edificios como un claro espacio social. La propuesta partir un único espacio diáfano, nuestra propuesta se
arquitectónica para los dos pares de edificios de vivien- adelanta a los posibles acontecimientos y brinda un
da colectiva, los edificios 6 y 14, es muy similar pero alto grado de adaptabilidad. Así, aunque la vivienda
permite reaccionar a las diferentes condiciones visua- esté compactada, nos aseguramos de que los ocupan-
les. La escalera principal es un objeto visual volante en tes puedan alojar una tercera recámara en la variable
el espacio entre las dos esquinas del edificio mientras denominada zona de día de la tipología catalogada
la escalera del edificio 14 es redonda y la del edificio 6 como interés medio sin comprometer el resto del pro-
es rectangular, ambas conducen a las terrazas en el grama ni el espacio destinado a sala-comedor.
techo de las casas. Las escaleras en metal oscuro crean
un fuerte contraste con las casas pintadas en blanco. 6. La ventana | MOS Architects
El proyecto de los departamentos presenta un giro No hay nada más importante que una ventana en la
de 45 grados para asegurar la ventilación natural en arquitectura, y especialmente en la arquitectura habi-
todos los espacios, así como privacidad. El resultado es tacional. Una ventana nos dice todo lo que necesitamos
que este plano girado con fachadas plegadas propor- saber sobre la vida dentro de un edificio y sus habitan-
ciona la posibilidad de minimizar las ventanas con ex- tes. Grandes ventanas permiten la entrada de mucha
posición directa al sol. Dentro del edificio 6 se encuen- luz natural. Las ventanas que se abren proporcionan
tran las instalaciones para una guardería. aire fresco. Las cortinas amortiguan o permiten a am-
bos, al aire y a la luz, entrar, al tiempo que facilitan la
5. La escalera | Tatiana Bilbao Estudio privacidad. Dispuestas a lo largo de la fachada de un
Dentro de la diversidad que genera el trabajo en equipo edificio, las ventanas revelan u ocultan las actividades
y a distancia presentamos un modelo de vivienda que interiores de sus residentes. Con la repetición de las
brinda una transición pautada desde lo público hasta mismas ventanas, se crea una escena, una que es un
lo privado, desde la calle hasta el interior de la vivienda. telón de fondo a la vida diaria. Una residencia permite
Esta estrategia proporciona una configuración de vi- la inclusión social con más ventanas, no con menos.
vienda equivalente para las tres tipologías requeridas, El incremento en la unidad de la ventana es mínimo
social, popular y media; un engranaje dividido en cinco materialmente, pero de fácil mantenimiento. Como
áreas que configuran el espacio: acceso, zona de día, parte del plan maestro propuesto con 26 unidades —un
zona de noche, núcleo de servicios y cocina. trabajo de retazos de concreto, plazas terraceadas de
Ambos lados del edificio cuentan con una escalera ladrillos y jardines, y bloques residenciales pareados—
independiente que facilita el acceso a los diferentes estos cuatro edificios trabajan en miras de apertura,
niveles y resuelve al mismo tiempo los desniveles entre transparencia, flexibilidad e inclusión social. Algunas
las plataformas sobre las que se asientan. La escalera de las trece ventanas operables de piso a techo en el
de herrería, liviana, en espiral, se desplaza de forma perímetro de cada departamento puede abrirse, ofre-
lateral en la fachada alcanzando los accesos en las tres ciendo alivio en un día caliente o ventilación cruzada
plantas y provocando así un efecto de torsión de toda mientras se cocina. Algunas se pueden cubrir con cor-
la fachada. Siguiendo la lógica de adecuación de las tinas, bloqueando al sol para tomar una siesta vesper-
tres tipologías apiladas y el efecto provocado por el mo- tina. Algunas pueden revelar interiores llenos de plan-
vimiento en fachada de la escalera, las aberturas tam- tas en macetas. Algunas quizá se abran y dejen salir el
bién se configuran siguiendo un patrón similar y adop- sonido de la radio o de un músico practicando. Todas,
tando un movimiento análogo, más enfatizado en las cerradas o abiertas, muestran o esconden la vida de
fachadas norte y sur, en donde se sitúan las zonas de sus habitantes en una especie de interacción social
día y las recámaras. con su comunidad en las circulaciones, las plazas y los
La llegada a cada planta se realiza mediante un des- edificios vecinos.
canso en la escalera, muy contenido, que conecta con la

V I N C U L AC I Ó N 193
Habitar el territorio.
Resiliencia y autoproducción |
Sexto Concurso
de estudiantes

La sexta edición del concurso se enfocó en el desa-


rrollo de proyectos capaces de adaptarse a las
condiciones específicas del territorio y de quienes lo
habitan. Mas allá de la definición de un prototipo
de vivienda, se buscó encontrar procesos y entender
procedimientos replicables. Para ello, se pidió
a los estudiantes involucrarse con la comunidad,
escuchar sus historias y conocer sus dinámicas
y costumbres.
El jurado, integrado por Félix Sánchez, Julio
Gaeta, Luby Springall, Mauricio Rocha y Francisco
Pardo, seleccionó diez equipos entre 285 pro-
puestas de 100 universidades provenientes de 32
estados del país. Los finalistas formaron parte
de un taller de verano que se llevó a cabo del 23
194
al 27 de julio del 2018 en las oficinas del Infonavit.
Durante cuatro días los estudiantes tuvieron la opor-
tunidad de mejorar sus propuestas con el apoyo
de especialistas y colaboradores del Instituto y pos-
teriormente se llevó a cabo una presentación final.
Las propuestas de los estudiantes fueron evaluadas
respecto a los siguientes puntos: diseño de los
lineamientos de un proyecto de vivienda de auto-
producción asistida; elaboración de una propuesta
arquitectónica; determinación de un programa
mínimo; optimización de la vivienda existente y
su entorno; mejoramiento de la calidad de vida
del habitante y resiliencia, conocimiento pleno del
territorio que se habita.

V I N C U L AC I Ó N 195
196
Primer lugar C-CIFV-156 | Querétaro
Universidad Autónoma de Querétaro
Hugo Humberto Arteaga, Fernanda Denisse Duarte, Eber Granados Ávalos, Lupita Monserrat Ramírez
Asesor: Paola Bárcena
197
198
Segundo lugar C-CIFV-226 | Guadalajara
Universidad de Guadalajara
Diego Malo Araiza
Asesor: Diego Ángel Vergara
199
200
Tercer lugar C-CIFV-171 | Monterrey
ITESM
Ivette Andrea Cavazos, Juan Pablo Carrera, Lorenzo Andrés De Anda, Pavel Martínez
Asesor: Roberto García
201
202
Mención C-CIFV-239 | Monterrey
CEDIM
Saúl Eduardo López E., Karen Fernanda Mariscal
Asesor: Marco Antonio Ríos
203
Métrica y rectificación
Diego Rabasa

204
Pensamos a través de palabras. Sin embargo, la obsesión otra manera. Por otra parte, la razón se ha urdido como
métrica de nuestra época ha cometido el error garrafal el único y último “remedio para todos los males” (Ca-
de pensar que éstas existen o tienen valor de manera lasso dixit). La modernidad ha encumbrado el desarrollo
aislada. Medimos la cantidad de veces que tal político tecnológico como la constatación última de la fuerza de
utilizó tal o cual término (como si éste, sin su contex- la razón y ha enarbolado el dominio de la técnica como
to o mediante el análisis de la vinculación semántica síntoma inequívoco de progreso.
irrenunciable que guarda con el hablante tuviera algún En su libro, El silencio de los animales. Sobre el pro-
sentido); observadores informáticos tratan de mapear greso y otros mitos modernos, el filósofo inglés John Gray
conductas sociales (casi siempre con fines mercadoló- matiza esta perspectiva. “El encanto de un modo de vida
gicos) a partir de la aparición de ciertos términos en liberal —nos dice Gray— consiste en que permite que la
los discursos digitales y ciudadanos convertimos tér- mayoría de la gente renuncie a su libertad sin saberlo”.
minos retóricos (democracia o sustentabilidad) en ad- El neoliberalismo —esa doctrina cuasitotalitaria que rige
verbios sin sustancia (ser democrático o ser sustentable). nuestras interacciones políticas, sociales y económicas—
En su magnífico ensayo “Fe y razón”, el italiano ha construido su muy específica forma de razón. Una que
Roberto Calasso desmenuza el quid de este asunto: “Lo implica, de acuerdo al politólogo español Jorge Alemán
que nuestro mundo requiere con urgencia es aquella en la transformación del ser como “capital humano”.
operación que, según Confucio, debería anteceder a Sin el valor simbólico de la fe (la creencia en lo in-
cualquier otra: la rectificación de los nombres. Como visible) y al rendirnos ante la certeza abstrusa en “lo
se lee en sus dichos: “Una vez un discípulo le pregun- racional”, perdemos la capacidad de calibrar la subjeti-
tó: ‘Si un rey un día os encargara un territorio para go- vidad y quedamos a merced de un discurso vacío en el
bernarlo según vuestras ideas, ¿qué haríais en primer que se piensa en palabras, no en discursos. ¿Y por qué
lugar?’. Confucio contestó: ‘Rectificaría los nombres’. viene a cuento todo esto? La contribución de este texto
Y luego le explicó a su desconcertado discípulo: si los apunta hacia la necesidad de mirar con reserva las con-
nombres no son correctos, si no corresponden a la rea- ceptualizaciones implicadas en el desarrollo social (ur-
lidad, el lenguaje no tiene objeto. Si el lenguaje no tiene bano, colectivo, humano) a partir del entendimiento de
objeto, la acción se vuelve imposible —y así todos los que aquello que se da por pensamiento crítico y en oca-
asuntos humanos se disgregan y administrarlos llega siones científico, se enmarca en un credo, en una forma
a ser fútil e imposible. Por lo tanto, la primera tarea específica de entender el desarrollo, y que esta for-
de un verdadero hombre de Estado es la de rectificar ma específica de entender el desarrollo en la que vivimos
los nombres”. ahora ha acercado mucho al hombre a la estancia que
Calasso advierte dicha necesidad para explorar la Lewis Mumford ha denominado como “post-histórica”,
confusión moderna en torno a dos conceptos fundamen- una dinámica que conduce a lo que otros filósofos como
tales en su obra: fe y razón. La fe, desprendida del senti- Jean-Didier Vincent, Anne Dufourmantelle o Edgar
do proferido por Calasso a partir de la definición que Morin han llamado como transhumanismo: una forma
Dante ofrece en la Divina Comedia (“Fe es la certeza de de reducción humana en la que el individuo (como las
lo que se espera / y la convicción de lo que no se ve”), ciudades) se ha convertido en un instrumento que debe
se ha transformado en uno de los únicos entes aglutina- ser “mejorado” para ser “más rentable”.
dores de una sociedad que lejos de una visión utópica y Las analogías son útiles cuando nos enmarañamos
quizá naif del verdadero sentido de lo común, adscribe de más. Saquemos la palabra densidad del contexto ur-
a la mera coexistencia de individuos al interior de cier- banístico y llevémoslo a un terreno literario. Densidad
tos márgenes la noción de comunidad. Creemos que so- sí o densidad no. Contrastemos estos textos:
mos mexicanos, o chilangos, o tapatíos … porque habita- ''LEO. Leo que leo. Mentalmente me veo leer que
mos en la misma demarcación geográfica y política que leo y también puedo verme ver que leo. Me recuer-
otros sin que esto realmente nos cohesione de ninguna do leyendo ya y también viéndome que leía. Y me veo

CA S O R
S ADDEI O
ESGTRU
ADF IÍ O
A 205
recordando que me veo leer y me recuerdo viéndo- sigo el tiempo (la asimilación del “estar-en-el-mundo”
me recordar que leía y leo viéndome leer que recuerdo que cambia de generación en generación) hasta alcanzar
haberme visto leer que me veía leer que recordaba ha- un punto en el que el medio de interacción, protección
berme visto leer que leía y que leía que leo que leía. Tam- y seguridad ha terminado por engullir a sus habitantes.
bién puedo imaginarme leyendo que ya había leído “Habría que preguntarnos si el transhumanismo es
que me imaginaría leyendo que había leído que me ima- una forma moderna de esclavitud. Una forma de conver-
ginaba leyendo que me veo leer que leo”, de Salvador tir al ser humano en sólo un cuerpo productivo conde-
Elizondo, “El grafógrafo”. “Hubo una vez un rayo que nado a la materialidad. Tenemos que preguntarnos
cayó dos veces en el mismo sitio; pero encontró que ya si estamos dispuestos a separar nuestra forma de vida
la primera había hecho suficiente daño, que ya no era y nuestro cuerpo”, se pregunta el poeta Ernesto Kavi.
necesario, y se deprimió mucho”, de Augusto Monte- De la misma forma, preguntémonos si estamos dispues-
rroso, “El rayo que cayó dos veces en el mismo sitio”. tos a que el espacio que habitamos separe nuestra po-
Ubicados ambos textos, de dos escritores geniales en tencia como individuo dual (mente y espíritu) en favor
las antípodas de la densidad literaria, nos muestran que de la eficiencia de una maquinaria destartalada y voraz
más allá de aspectos técnicos, la dicotomía den- que reduce nuestra existencia a un mero engrane que
sidad sí / densidad no, no puede ser resuelta desde una tiene dos posibilidades ante sí: buscar la rondana que le
óptica conceptual reduccionista. ¿Densidad sí o densi- imprima tracción o desaparecer. La densidad está en
dad no?: depende. En la convocatoria para participar del otra parte.
presente número de la revista ya se advierte el asunto:
“La densidad no puede visualizarse como un asunto ur-
bano para acumular viviendas ni como mecanismo para
reducir vacíos en las ciudades, se trata del equilibro en-
tre la población, la infraestructura y las relaciones socia-
les”. En The Fire Next Time, el escritor James Baldwin
advierte que un hombre no puede sentirse nunca en casa
si no tiene un territorio pero tener un territorio tampo-
co necesariamente implica que un hombre pueda sen-
tirse en casa.
En La cultura de las ciudades, Lewis Mumford nos
dice que “La ciudad, tal y como la encontramos en la
historia, es el punto de máxima concentración del po-
der y la cultura de una comunidad. […] La ciudad es la
forma y el símbolo de una relación social integrada […]
Es aquí donde el ser humano transforma su experiencia
en signos visibles, símbolos, patrones de conducta y sis-
temas de orden. Es aquí donde se concentran los esfuer-
zos de la civilización y donde en ocasiones el ritual se
transforma en el drama activo de una sociedad total-
mente diferenciada y consciente de sí misma”. “Las ciu-
dades son producto de la tierra”, ahonda. Entidades que
parten del dominio de la técnica, de la búsqueda de un
habitar permanente y estable que han ido transformán-
dose a partir de “choques fortuitos”, de la interacción
entre el vecino ancestral, el viajero, el nómada, el exilia-
do y el desplazado; de las transformaciones que trae con-

206
El sueño de la densidad
Rodrigo Díaz

CA S O R
S ADDEI O
ESGTRU
ADF IÍ O
A 207
De acuerdo con lo informado en notas periodísticas una ciudad. Sin embargo, rara vez ocurre esto. Si hay una
de coyuntura, el corredor de Avenida Insurgentes fue el certeza en las ciudades mexicanas es la de saber que los
que más amplió su oferta de oficinas en la Ciudad de programas de desarrollo urbano, débiles, básicos, caren-
México en la última década: 840 mil metros cuadrados tes de visión y recursos, usualmente se plantean y ma-
en el periodo 2007–2017. Este fenómeno de cambio de nejan sin pensar en la manera en que se resolverán los
uso de suelo y densificación en gran medida se vio gati- viajes generados por la manera en que se ocupa el terri-
llado por la puesta en marcha de la Línea 1 del sistema torio. Lo de Insurgentes no es excepción ni accidente.
de Bus de Tránsito Rápido (BRT en inglés) Metrobús en Es el resultado lógico de políticas guiadas por intereses
2005, que supuso la salida de circulación de cientos de inmobiliarios que han actuado de manera salvaje sin con-
microbuses lentos, incómodos y contaminantes, y su re- tar con la guía y regulación de un cuerpo de planificación
cambio por modernas unidades de alta capacidad que coherente y robusto en que los distintos componentes de
circulan por un corredor exclusivo. El resultado: meno- una ciudad (viviendas, espacios públicos, infraestructu-
res tiempos de viaje, mayor comodidad y seguridad para ras y servicios) actúen de manera colaborativa.
los usuarios, y menores emisiones de gases contaminan- No sólo es voracidad inmobiliaria: también hay mu-
tes y efecto invernadero. cho de adopción incompleta y fragmentada de mode-
Nada puede ser tan perfecto en un país y una ciudad los urbanos que no son implementados con el grado
tan poco dados a la planificación. La Línea 1 fue origi- de coordinación y detalle que la escala y complejidad de
nalmente calculada para satisfacer una demanda dia- la ciudad contemporánea demanda. Así, de un tiempo
ria de 350 mil pasajeros. Sin embargo, al mes de abril a esta parte, el dogma de la densificación por la densi-
de 2018 ese número se había estirado a unos apretados ficación se tomó del discurso del urbanismo local (asu-
e incómodos 480 mil usuarios diarios, es decir, un 37 miendo que hay algo parecido a un discurso). Esto no es
por ciento más de lo contemplado en un inicio. Esto ha necesariamente malo. Más bien responde a una necesi-
significado que las ganancias en tiempos de viaje rápi- dad real. Se densifica porque esto permite un mejor
damente se desvanecieran en largas esperas en estacio- aprovechamiento de un bien escaso como es el suelo
nes tan abarrotadas como los buses que en fila india urbano, salvándonos de paso de consumir valioso terri-
avanzan a vuelta de rueda por un carril que hace rato les torio agrícola. Se densifica porque, en teoría, al hacer un
quedó chico. uso más intensivo de los terrenos urbanos se hace más
El problema es que se sigue construyendo a lo largo accesible la vivienda a los sectores de menos recursos.
del corredor. Tan sólo durante el tercer trimestre de Se densifica porque esto hace que los viajes intraurba-
2017 se sumaron 100 mil metros cuadrados de superfi- nos sean más cortos, lo que a su vez se traduce en menos
cie de oficinas en renta en Insurgentes Sur (Inmobi- tiempo en el tráfico y más tiempo para hacer lo que
liare). ¿Cómo se van a mover los miles de nuevos traba- nos gusta hacer. Se densifica porque las distancias cortas
jadores que llegarán a ocupar estos edificios? ¿Cómo se hacen más atractiva la caminata o el pedaleo a la hora de
ampliará la capacidad de un sistema que bajo las condi- movernos y esto significa, aparte de un saludable ejer-
ciones actuales es incapaz de brindar condiciones dignas cicio para el cuerpo y la mente, menos emisiones de ga-
de espera y viaje en horas de alta demanda? Misterio. ses contaminantes y efecto invernadero. Se densifica
El tema sencillamente no existe en la agenda de trans- porque las altas concentraciones de orígenes y destinos
porte de la ciudad. Quien otorga los nuevos permisos de crean la demanda necesaria para la implementación de
edificación no anda en transporte público. Tampoco el sistemas de transporte masivo, que a su vez nos hacen
que planifica y gestiona el sistema de autobuses. Ambos menos dependientes del automóvil y de los combustibles
dirán que “el sistema es víctima de su éxito”. fósiles que éste consume.
Las políticas de desarrollo urbano y transporte de- Y, sin embargo, a pesar de todos estos innegables
berían ir siempre de la mano. Finalmente, la localización beneficios, la densificación goza de escasa populari-
de actividades es la que determina el patrón de viajes en dad entre la ciudadanía. La mala fama no es gratuita.

208
La experiencia dice que en México los atributos positivos no tiene mayor sentido si no se plantea dentro de una
de la densificación desaparecen apenas se empieza a estructura vial altamente conectada que facilite la circu-
construir un edificio al lado de nuestra casa. Ahí lle- lación de transporte colectivo y haga efectivas las dis-
gan las sombras eternas, el deterioro del espacio público, tancias cortas geográficas que favorecen caminar o pe-
el tráfico constante, la pelea por el estacionamiento, los dalear en la ciudad.
problemas con el abastecimiento de agua. O cuando la La densificación es un medio, no un fin. Es la res-
oferta de vivienda de interés social se reduce a peque- puesta construida a la necesidad de aprovechar las eco-
ños departamentos ubicados en edificios construidos nomías de escala y aglomeración que supone el habitar
en periferias lejanas y desconectadas (lo peor del campo urbano. La densificación tiene reglas, y éstas son deli-
y la ciudad en un mismo lugar). Es en ese instante cuan- cadas y complejas. Involucran tanto la planificación de
do la promesa de la densificación deviene en la disto- gran escala y a largo plazo, como el diseño detallado
pía del amontonamiento. de los espacios de convivencia y la adopción de medi-
¿En dónde está el problema? Con el esquema adop- das de mitigación de posibles situaciones de fricción o
tado en nuestras ciudades, la densidad queda acotada conflicto. Abordar este desafío en toda su complejidad
a lo meramente constructivo, olvidando que las redes, es lo que finalmente hace la diferencia entre el adecuado
servicios y espacios públicos deben también adaptarse aprovechamiento del suelo urbano y el simple amonto-
a una utilización intensiva del suelo urbano. La pesadilla namiento de actividades.
del amontonamiento aparece cuando la densidad se
reduce a la maximización de ganancias inmobiliarias
a costa de las expectativas de calidad de vida de la po-
blación urbana. La distancia que separa la densificación
del amontonamiento (cuando no del hacinamiento) es
extremadamente corta. Mantener los atributos positivos
de la densidad urbana es un ejercicio tanto de planifi-
cación en lo macro como de diseño en lo micro. Implica
entender como un todo las construcciones y los sistemas
de transporte que las comunicarán. No hay densidad de
calidad favoreciendo el uso del automóvil privado pues-
to que sus grandes necesidades de espacio, tanto para
circular como para estacionar, son incompatibles con un
modelo que busca hacer más eficiente el uso del suelo.
Tampoco hay densidad de calidad si no se cuenta con
redes de transporte masivo con capacidad suficiente
para satisfacer las altas demandas de viaje derivadas de
la elevada concentración de actividades.
La densificación deriva en simple amontonamiento
si no se cuenta con espacios públicos generosos, bien
diseñados, que reemplacen colectivamente el sacrifi-
cio del patio individual. La densificación urbana pierde
todos sus atributos si no se plantea desde un modelo
de usos de suelo mixto en el que la vivienda convive con
oficinas, comercio, equipamiento y actividades produc-
tivas, situación que permite disminuir distancias y ha-
cer más eficientes los viajes. A su vez, la densificación

CA S O R
S ADDEI O
ESGTRU
ADF IÍ O
A 209
Habitabilidad
José María Gutiérrez Trujillo (1924-2018)

Una tercera parte de la población se encuentra en condiciones económicas que le


permiten acceder a los financiamientos públicos. Me referiré al 70 por ciento
restante que autoproduce su vivienda. Hasta el cansancio se han repetido verdades
tales como que es muy grande la demanda de vivienda. La mayor parte de ésta
proviene de gente de muy bajos ingresos. No hemos tenido respuestas adecuadas
al volumen y las condiciones que esta población requiere, por lo que la gente ha
construido colonias y viviendas en procesos progresivos, de tal suerte que más
del 50 por ciento de las áreas urbanas de nuestras ciudades se han construido de
esta manera.
La mayor parte de las viviendas que existen en nuestro país se han levantado
a través de procesos de autoproducción social de vivienda, es decir, sin fines
de lucro y bajo control director de los beneficiarios, lo cual implica que se involucran
en todas las fases del proceso habitacional, desde la planeación, la construcción,
la adjudicación y el uso de la vivienda.
Habitar no es simplemente poseer una casa con los servicios de transporte, agua,
drenaje y electricidad, sino conformar núcleos de desarrollo social y económico
que cuenten con adecuados usos de suelo y equipamiento.
Quienes ahora dirigen las políticas en materia de vivienda tienen experiencia
empresarial y formación financiera, por lo que seguramente las tasas de interés y
el retorno de capital van a ser su gran preocupación. Humildemente les apunto que
no olviden que también hay una tasa de retorno social. Tres hechos principales
caracterizan el problema de la vivienda en nuestro país para los próximos 25 años:

1. La enorme dimensión de la demanda, ya que habrá que construir otras


12 millones de viviendas para dar alojamiento al doble de familias existentes
en las áreas urbanas.

* Fragmentos de GAYTÁN, Alejandro (comp.) (2015) Sumar viviendo.


Arquitecto José María Gutiérrez Trujillo. Una vida profesional, gre-
210 mial y magisterial, México, UNAM, pp. 45–79.
2. Para atender el mejoramiento necesario de las viviendas existentes se requiere
que de cada vivienda nueva, por lo menos, dos viviendas se mejoren.
3. La capacidad de pago de la mayor parte de las familias que demandan vivienda
es precaria, ya que el 65 por ciento de éstas percibe mensualmente menos de
tres veces el salario mínimo.

Para tomar acciones que nos permitan coadyuvar al desarrollo de vías alternativas
de crecimiento urbano, que consigan elevar el nivel y la calidad de vida de sus
habitantes, sobre todo de aquellos que menos recursos económicos tienen, debe-
mos plantearnos el problema desde la célula primera que integra la sociedad y
el espacio habitable: el barrio y la vivienda.
Ambos pertenecen al sistema social y económico total de la ciudad, por lo que
es necesario situarlos en relación con el contexto urbano en el que se desarrollan.
Si queremos comprender las necesidades de vivienda de la familia en la Ciudad
de México, más allá de informarnos, es preciso tomar cuenta las relaciones existen-
tes entre el sistema económico y el sistema social, es decir, tratar de entender la
forma en que los factores demográficos y culturales repercuten sobre la utilización
de los espacios públicos y privados en un área geográfica determinada.
La mejora de la vivienda debe concebirse en forma integral, como una estrate-
gia para optimizar la construcción existente, no sólo para la adición o mejora
de un cuarto. Debe analizarse el predio completo y proyectar su desarrollo en bene-
ficio de todas las familias ocupantes, dar condiciones de habitabilidad, planear el
desdoblamiento de las viviendas, la delimitación clara de las áreas comunes
y las áreas privadas de cada unidad familiar, y así dar certeza jurídica y constituir
el condominio, construir viviendas dignas que en conjunto vayan formando una ciu-
dad compacta con mejores condiciones para las generaciones futuras.

211
212
Memoria Vivienda
213
214
215
216
217
218
219
220
221
222
223
224
225
226
227
228
229
230
231
232
COLABORADORES

David Penchyna Ernesto Alva


Licenciado en derecho por la UNAM con posgrados en políticas Doctor por la División de Estudios de Posgrado de la Facultad de
públicas y ciencias políticas por el ITAM y la Universidad Ibe- Arquitectura de la UNAM con estudios en planeación en el Insti-
roamericana. Se ha desempeñado senador de la República y dipu- tuto Latinoamericano de Planificación Económica y Social (CEPAL).
tado federal. Actualmente es director general del Infonavit. Trabajó en Infonavit, Sedesol y actualmente es profesor titular y
coordinador de FA Vivienda.
Carlos Zedillo
Arquitecto, maestro y profesor invitado por la Universidad de Yale. Cecilia Solís
Formó parte del equipo de transición de la Nueva Política de Vi- Arquitecta con estudios de maestría en Análisis, Teoría e Historia
vienda y fue Subdirector General de Sustentabilidad del Infonavit. por la Posgrado Facultad de Arquitectura de la UNAM. Es profe-
Actualmente es titular del Centro de Investigación para el Desa- sora adjunta en la licenciatura de Arquitectura de la Universidad
rrollo Sostenible. La Salle.

Néstor García Canclini Jesica Amescua


Escritor, profesor y antropólogo, es doctor por la Universidad Na- Arquitecta egresada de la Universidad Iberoamericana y maestra
cional de La Plata y la Universidad de París y profesor e investiga- en Análisis, Teoría e Historia de la Arquitectura por la UNAM. Fue
dor en la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) desde 1990. becaria del Programa de Fomento a Proyectos y Coinversiones
Culturales del FONCA y socia de COMUNAL: Taller de Arquitectura.
Jorge Tejeda
Arquitecto por la Universidad Popular Autónoma del Estado de Alfonso Iracheta
Puebla (UPAEP) con estudios de maestría en ciudad por Centro. Es Arquitecto por la Universidad Autónoma del Estado de México,
director de proyecto en III S.A. de C.V. Empresa del Grupo SENER. maestro en Planeación Urbana, por la Universidad de Edimburgo
y doctor en Estudios Regionales por la Universidad de Varsovia.
Enrique de Anda X. Alanís Es miembro del Consejo Asesor de la Red Mundial de Investiga-
Arquitecto y doctor en historia del arte por la UNAM, investigador ción en Asentamientos Humanos de ONU-Hábitat.
de arte moderno en el Instituto de Investigaciones Estéticas de la
UNAM y profesor en las Facultades de Arquitectura y Filosofía y Sara Topelson
Letras de la misma universidad. Arquitecta por la UAM con estudios de teoría de la arquitectura en
el Instituto Politécnico Nacional y de historia del arte en el Ins-
Concepción J. Vargas tituto Nacional de Bellas Artes. Directora Grinberg y Topelson
Investigadora y profesara titular de la División de Ciencias y Artes Arquitectos y presidenta de la Fundación Centro de Investiga-
para el Diseño y el Centro de Investigaciones y Estudios de Pos- ción y Documentación de la Casa (CIDOC).
grado Facultad de Arquitectura de la UAM.
Ximena Rios-Zertuche
Juan José Kochen Arquitecta por la Universidad Iberoamericana y la Escuela Téc-
Arquitecto y maestro por la Facultad de Arquitectura de la UNAM nica Superior de Arquitectura de Madrid, es becaria del Programa
con estudios de periodismo en la EPCSG. Escribió para el perió- Jóvenes Creadores del FONCA.
dico Reforma, fue editor de Arquine, consultor del Infonavit, beca-
rio del programa Jóvenes Creadores del FONCA y de la Graham
Foundation. Es profesor en la Universidad Iberoamericana y ge-
rente general de Fundación ICA.

COLABORADORES 233
Santiago Arau Armando Hashimoto
Fotógrafo y documentalista de ciudad, territorio y arquitectura Arquitecto por el ITESM Campus Monterrey y maestro en Dise-
con cámaras y drones. Su trabajo se ha exhibido en la 16. Mues- ño Arquitectónico por la Universidad de Columbia. Ha sido pro-
tra de Arquitectura de la Bienal de Venecia y en el cortometraje fesor en la Universidad Iberoamericana, CENTRO, la Universidad
“19 de septiembre”. Anáhuac y la UNAM. Es Gerente de Colaboración Interinstitucional
del Centro de Investigación para el Desarrollo Sostenible.
Jorge Taboada
Fotógrafo con estudios de arquitectura en el Instituto Tecnológico Pablo Vaggione
de Estudios Superiores de Monterrey y máster en Architectural Coordinador de la oficina de ONU-Hábitat para México y Cuba.
Photography in Digital Era, en 1996 funda Idea Cúbica, empresa Tiene 20 años de experiencia en el ámbito del desarrollo urbano y
especializada en fotografía arquitectónica. territorial. Es autor del libro Planeamiento Urbano para Autorida-
des Locales de ONU-Habitat.
Adam Wiseman
Egresado de la Universidad de Nueva York con estudios en Cine Luis Jeremías Diez-Canedo
Etnográfico, cursó el programa de fotoperiodismo en el Interna- Economista por la Universidad Iberoamericana y maestro por la
tional Center of Photography y como editor de las revistas DF, Escuela de Administración de Yale. Trabajó en la Dirección Gene-
Fahrenheit y National Geographic en español. ral de Operaciones de Banca Central del Banco de México y actual-
mente es Gerente de Investigación Aplicada y Divulgación de Mé-
Onnis Luque todos del Centro de Investigación para el Desarrollo Sostenible.
Fotógrafo y miembro del Sistema Nacional de Creadores del FON-
CA Es autor de La unidad Santa Fe y ha sido colaborador en publi- Juan Fronjosá
caciones como Mario Pani. Arquitectura en proceso, Arquitectura Arquitecto por la Facultad de Arquitectura de la UNAM. Actual-
escolar. SEP 90 años y Citámbulos. mente colabora como consultor en el Centro de Investigación para
el Desarrollo Sostenible del Infonavit.
Livia Radwanski
Fotógrafa, documentalista y cineasta brasileña radicada en la Ciu- Camilo Restrepo / AGENdA
dad de México desde 2007, estudió cine, animación, video y foto- Camilo Restrepo y Juliana Gallego fundan AGENdA en 2010. Ca-
grafía en la Universidad de Diseño de Rhode Island. milo Restrepo Ochoa es arquitecto graduado de la Universidad
Pontificia Bolivariana en Medellín en 1998 y ha sido profesor invi-
Luis Young tado en la Escuela de Diseño de Harvard.
Arquitecto por la Facultad de Arquitectura de la UNAM con estu-
dios en la Technische Universität de Berlín y práctica profesional Al Borde
como fotógrafo de arquitectura. Oficina Ecuatoriana de Arquitectura, liderada por Pascual Gango-
tena, David Barragán, Marialuisa Borja y Esteban Benavides. Entre
Jaime Navarro sus reconocimientos más relevantes están: Schelling Architec-
Fotógrafo mexicano por adopción con estudios de fotografía arqui- ture Prize 2012, Global Award for Sustainable Architecture 2013,
tectónica por el Círculo de Bellas Artes de Madrid. Lafarge Holcim Award Acknowledgment Latin America 2014, Fi-
nalistas Design of the Year 2015, Selección Oficial en la Bienal de
Sandra Pereznieto Venecia 2016.
Fotógrafa mexicana radicada en Barcelona y dedicada a la foto-
grafía de arquitectura con estudios de comunicación y cine. Jesús Aguirre
Ingeniero Industrial, por la Universidad de Sonora, fue Director
Alonso de Garay / Taller ADG Jefe de Recursos Materiales de la Administración Portuaria Inte-
Equipo integral de diseño dirigido por Alonso de Garay, arquitecto gral de Manzanillo, actualmente es Jefe de la Oficina del Titular
y maestro por la Universidad Anáhuac con estudios de posgrado del Centro de Investigación para el Desarrollo Sostenible.
en arquitectura y planeación urbana en la Universidad de Colum-
bia. Está enfocado en la exploración de las diversas posibilidades Emilio Gutiérrez
del patrimonio cultural, histórico y social. Doctor en economía por la Universidad de Brown y profesor inves-
tigador del Departamento de Economía del ITAM.
Rozana Montiel | Estudio de Arquitectura
Equipo interdisciplinario dedicado al diseño arquitectónico, la Kensuke Teshima
aproximación artística del espacio y el urbanismo, encabezado por Doctor en economía por la Universidad de Columbia y profesor e
Rozana Montiel, arquitecta por la Universidad Iberoamericana y investigador del Centro de Investigación Económica del ITAM.
maestra en teoría y crítica arquitectónica por la Universidad Poli-
técnica de Cataluña. María Esther Rodríguez
Economista por el ITAM y colaboradora del Centro de Investiga-
ción para el Desarrollo Sostenible del Infonavit.

234
José de Villar Martínez Diego Rabasa
Arquitecto por la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Editor, director comercial y miembro permanente del consejo edi-
la Universidad Politécnica de Madrid con diploma de estudios torial de Editorial Sexto Piso. Edita Reporte SP, revista mensual
avanzados en el programa de Doctorado en Teoría y Práctica del publicada por Editorial Sexto Piso y conduce el programa “Tele-
Proyecto. En 2008 funda DVCH con sede en Madrid y la Ciudad grafía sin hilos” en Convoy.
de México.
Rodrigo Díaz
Julia Gómez Consultor en desarrollo urbano y movilidad, es arquitecto por la
Arquitecta por la Facultad de Arquitectura de la UNAM y maes- Universidad Católica de Chile, maestro en Planificación Urbana
tra en Arquitectura por la Universidad Politécnica de Madrid. por el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) y Director
Colaboró en distintos estudios de arquitectura y proyectos de arte de Investigación y Desarrollo del Instituto de Políticas para el
en espacio público en España. Actualmente es Gerente de Mejo- Transporte y el Desarrollo.
ramiento de Calidad y Valor Patrimonial del Centro de Investiga-
ción para el Desarrollo Sostenible. José María Gutiérrez Trujillo (1924-2018)
Arquitecto por la UNAM con estudio de posgrado en el Centro In-
Dellekamp Arquitectos teramericano de la Vivienda en Bogotá, Colombia sobre vivienda
Derek Dellekamp fundó su taller en 1999 con Jachen Schleic. Su de interés social. Recibió el Premio Nacional de Arquitectura en
investigación arquitectónica fomenta un laboratorio de ideas 1999 y el Premio Nacional de Vivienda por el programa de mejo-
formando campos académicos y pedagógicos, así como de es- ramiento de vivienda en 2002 con el INVI y el CAM.
tudios y participación en conferencias, publicaciones, bienales y
exposiciones. Mario Schjetnan
Arquitecto por la UNAM con estudios de paisaje y diseño urbano
MAIO Architects en la Universidad de California en Berkeley y la Universidad de
Oficina de arquitectura con sede en Barcelona que trabaja en Harvard. Participó en la creación del Infonavit y dirigió la Oficina
sistemas espaciales que permiten la materialización de posicio- de Vivienda. Es miembro y socio fundador de la Sociedad de Ar-
nes teóricas. Está conformada por María Charneco, Alfredo Lérida, quitectos Paisajistas de México (1975), del Colegio de Arquitectos
Guillermo López y Anna Puigjaner. de la Ciudad de México (1975) y de la American Society of Land-
scape Architects (1982). Dirige GDU Grupo Diseño Urbano.
Dogma
Fundada en 2002 por Pier Vittorio Aureli y Martino Tattara, Dog- Enrique Ortiz
ma ha trabajado la relación entre la arquitectura y la ciudad cen- Arquitecto por la UNAM, profesor de la UAM y Doctor Honoris
trándose en el diseño urbano y los proyectos a gran escala además Causa por la Universidad Autónoma de Tamaulipas. Fue Director
de la enseñanza, escritura e investigación. de COPEVI, FONHAPO y Secretario de Asentamientos Humanos y
Obras Públicas. Actualmente dirige la Oficina Regional de la Coa-
HHF Architekten lición Internacional para el Hábitat.
Fundada en 2003 en Basilea por Tilo Herlach, Simon Hartmann y
Simon Frommenwiler, promueve la colaboración con arquitectos Kimura + Varela
y artistas para ampliar la visión de sus proyectos y enriquecer la Estudio de diseño gráfico y editorial fundado por Gabriela Varela
calidad del mismos. y David Kimura en 2005. Ambos son egresados de la Universidad
Iberoamericana con estudios de posgrado en la Universidad de
Tatiana Bilbao Estudio Reading y la Escuela Superior de Diseño y Arte de Basel, respec-
Fundado en 2004 en por Tatiana Bilbao, el estudio comprende la tivamente.
arquitectura desde lo multicultural y multidisciplinario para crear
espacios humanizados ante el capitalismo global, con la finalidad
de abrir nichos para el desarrollo cultural y económico.

MOS Architects
Hilary Sample and Michael Meredith fundaron MOS en 2003 y se
ha posicionado como una práctica colaborativa en la que se desa-
rrollan proyectos a través de un sistema de trabajo experimental
y lúdico basado en un método de investigación riguroso.

Karla Aguilar
Arquitecta por el Instituto de Estudios Superiores de Monterrey
campus Ciudad de México, maestra en Ciencias en Arquitectura
y Diseño Urbano por la Universidad de Columbia y consultora
de la Gerencia de Colaboración Interinstitucional del Centro de
Investigación para el Desarrollo Sostenible del Infonavit.

235

COLABORADORES
Vivienda Infonavit Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda Centro de Investigación para
Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) el Desarrollo Sostenible (CIDS)
para los Trabajadores
David Penchyna Grub Carlos Zedillo Velasco
David Penchyna Grub Dirección General del Infonavit Titular del Centro de Investigación para
Director General el Desarrollo Sostenible
Mario Macías Robles
Carlos Zedillo Velasco Dirección Sectorial de los Trabajadores Oficina del Titular
Titular del Centro de Investigación para Jesús Aguirre
el Desarrollo Sostenible Sebastián B. Fernández Cortina María de Lourdes Suárez
Dirección Sectorial Empresarial Álvaro Hernández
Universidad Nacional Autónoma de México, Alfonso Pérez
Facultad de Arquitectura Rafael Riva Palacio Pontones Alejandra De La Mora
Instituto Politécnico Nacional, Escuela Superior de Sindicato Nacional de Trabajadores del Infonavit Javier Garcíadiego
Ingeniería y Arquitectura Unidad Tecamachalco Carlos Farah
Universidad Iberoamericana Ciudad de México, Omar Cedillo Villavicencio
Departamento de Arquitectura Secretaría General y Jurídico 71
Centro, Maestrías en Ciudad y Vivienda Gerencia de Mejoramiento de Calidad
Universidad La Salle Ciudad de México, Facultad Mexicana María de la Luz Ruiz Mariscal y Valor Patrimonial
de Arquitectura, Diseño y Comunicación Contraloría General Aracely Baca
Universidad Anáhuac México, Escuela de Arquitectura Rafael Cardona
Tecnológico de Monterrey, Escuela de Arquitectura, Jorge Alejandro Chávez Presa Josefa Díaz
Arte y Diseño (EAAD) Subdirección General de Planeación y Finanzas Juan Fronjosá
Comité de Investigación Julia Gómez
Elías Saad Gánem Hugo Gutiérrez
Armando Hashimoto Subdirección General de Crédito Raúl Jiménez
Gerente de Colaboración Interinstitucional Brenda López
Alejandro Somuano Ventura Xanat Morales
Karla G. Aguilar Subdirección General de Administración de Cartera Dafne Oliva
José Esparza Alfredo Phillips
Nora Núñez Gustavo Reséndiz Serrano David Romero
Coordinación editorial Subdirección General de Atención y Servicio Fernando Santillán
Fernando Velasco
Selene García Hugo Rubén Pérez Ramírez Lizbeth Zetina
Luis Roberto Ruiz Subdirección General de Administración
Coordinación administrativa y Recursos Humanos 72
Gerencia Investigación Aplicada
Juan José Kochen José Luis Antón Alvarado y Divulgación de Métodos
Edición Subdirección General de Comunicación Emmanuel Carballo
Francisco Ceballos
Gabriela Varela + David Kimura Rubén Alberto Bravo Piñán Alan Contreras
Diseño Subdirección General de Tecnologías Jeremías Diez-Canedo
de la Información Rafael Escandón
Elena Coll Lydia Hernández
Corrección de estilo José Manuel Pelayo Cárdenas Mariana Lugo
Coordinación General de Riesgos Víctor Minero
Ethel Muro
Óscar Augusto López Velarde Rosa María Ortiz
Coordinación General de Delegaciones Martha Pacheco
Judith Soto
Arturo Núñez Serrano María Esther Rodríguez
Vivienda Infonavit, Año 3, Núm. 1, octubre de 2018, es Coordinación General de Movilidad
una publicación anual editada por el Centro de Investi- 73
gación para el Desarrollo Sostenible (CIDS) del Instituto Roberto Khalil Jalil Gerencia de Colaboración Interinstitucional
Nacional del Fondo Nacional de la Vivienda para los Coordinación de Auditoría Interna Karla Aguilar
Trabajadores (Infonavit), Barranca del Muerto Núm. 280, Lucio Bernal
Col. Guadalupe Inn, Ciudad de México, C.P. 01029, Carlos Zedillo Velasco Selene García
Tel. 5322 6688, Editor Responsable Juan José Kochen Centro de Investigación para el Desarrollo Sostenible Mario Gutiérrez
Gómez, Marca Registrada otorgada por el Instituto Armando Hashimoto
Mexicano de la Propiedad Industrial, Núm. 1739678, Fernando Diarte Martínez Rogelio Hernández
Reserva de Derechos al Uso Exclusivo Núm. 04-2018- Coordinación General de Recaudación Fiscal Arturo Hernández
01209540600-102, otorgado por el Instituto Nacio- Javier López
nal del Derecho de Autor, ISSN 2594-0767, Certificado Gabriel Cerda Erdmann Berenice Martínez
de Licitud de Título y Contenido Núm. 17162. Impresa Coordinación General Jurídica Nora Núñez
por El Atril Tipográfico, S.A. de C.V., con domicilio Esmeralda Reyes
en Copilco 76 A-2/504, Copilco Universidad, 04360 Arturo García de León Pereyra Luis Ruiz
Ciudad de México. Este número se terminó de imprimir Coordinación General de Recursos Humanos Salvador Esparza
en noviembre de 2018 con un tiraje de 2 mil ejemplares.
Becados cursando estudios de posgrado
en el extranjero
Fotografía de portada Rodrigo Solé
“Casitas”, 1974, Pedro Friedeberg. José Esparza

236

También podría gustarte