Padres, madres, y organizaciones de la sociedad civil a la Corte Constitucional y la
Asamblea Nacional En las manos de sus magistraturas se decide un momento de enorme importancia para la niñez y adolescencia del Ecuador. Por muchos años hemos visto a nuestros hijos crecer lejos de nosotros, sobra decir que el tiempo perdido jamás se recupera. ¿Qué sucede si la constitucionalidad genera confusión y pugna, debería pasar algo así cuando hablamos de la niñez y adolescencia de nuestro país y es nuestra responsabilidad garantizar su Interés Superior? Un nuevo Código de la niñez y adolescencia requiere ser coherente con la Constitución de la República y demás normas de protección a la niñez y por la misma razón las figuras ortodoxas y descontinuadas de la Patria Potestad y la Preferencia materna deben evolucionar en la norma ecuatoriana. Como país requerimos cambiar el enfoque sobre el proceso judicial y brindar las condiciones que los estados partes acordaron garantizar en la Convención de los Derechos del Niño, en sus artículos 18, 19, 29, 32, 39, 42, 44. Rechazamos que el cuidado y protección de la niñez genere pugnas de poder y por eso invitamos a la sociedad y todos sus sectores a construir diálogos para garantizar la vida digna de la niñez y adolescencia del Ecuador. Que nunca más vuelva a crecer un hijo sin uno de sus padres por obstrucción de vínculos. De esta manera queremos dar a conocer los postulados principales entregados a la Asamblea Nacional el 10 de agosto del presente año, en la Comisión de la niñez y adolescencia, de manera formal y ampliada. Consideramos esta triangulación imprescindible para viabilizar a una sociedad que en su mayoría tiene conciencia de cuidado, protección y respeto. Postulamos la Responsabilidad Parental y la inclusión del Principio de Corresponsabilidad parental, toda vez que en el 2do proyecto de ley es necesario especificar las responsabilidades conjuntas del cuidado en una figura que permita habilitar nuevos procesos de relación familiar, siempre sujetos al cumplimiento del principio básico del Interés Superior. De esta manera la eliminación de la Patria Potestad y la adopción de una figura actual de Responsabilidad parental es prioritaria. Consideramos que su accionar con las demás leyes de protección a la niñez y adolescencia intervendrá de manera positiva, constructiva y transformadora de la ansiada equidad en las obligaciones parentales, respetuosas y armónicas. Exhortamos a adoptar la Justicia Terapéutica como el enfoque pertinente para los procesos judiciales en procesos de separación de progenitores. Dentro del principio de corresponsabilidad social es necesario evitar la profundización de los conflictos, atender las diversas necesidades sicológicas y terapéuticas de los casos y ejercer una justicia especializada y específica en el tratamiento de los conflictos de separación donde hay hijos. La Justicia Terapéutica es un enfoque que requiere incorporarse como metodología jurídica de intervención social en la búsqueda del cumplimiento integral de los derechos de niñas, niños y adolescentes, en especial para la humanización del tratamiento de los conflictos. En tal sentido, respaldamos a la niña Liuba Mora quien desde el Azuay exige la adopción de este enfoque y así mismo a la Dra. Francisca Fariña, Presidenta de la Sociedad Iberoamericana de Justicia Terapéutica, ambas fueron escuchadas en la Comisión de la niñez ocasional en el año 2020 y requieren volver a hacerlo nuevamente, sobre todo bajo el derecho a la escucha atenta a NNA. Exigimos el restablecimiento del Sistema Nacional de Protección Especializado de niñez y adolescencia para garantizar el correcto funcionamiento de las operaciones del sistema judicial, así como la inscripción de una disposición derrogativa en el nuevo Código de la niñez de toda disposición de norma que contradiga el nuevo marco legal de protección a niñas, niños y adolescentes. Tenemos absoluta confianza que la triangulación de estas acciones permita construir un sistema de protección que no prive a niñas, niños y adolescentes de uno de sus progenitores, evite las consecuencias críticas de la separación, prevenga violencias y ofrezca la posibilidad del restablecimiento de nuevas vidas saludables y armónicas. Tenemos la responsabilidad de construir familias en el respeto y el amor. Nuestras niñas, niños y adolescentes necesitan el amor de papá y mamá.
Firman,
FUNDENIF PAPÁS POR SIEMPRE SANTO DOMINGO más adherentes…
Introducción al derecho internacional privado: Tomo III: Conflictos de jurisdicciones, arbitraje internacional y sujetos de las relaciones privadas internacionales