Está en la página 1de 318

2

A nuestros hijos

Foto de portada y contraportada: Manuel Pérez Cámara.


Enfermero de la USMC de Úbeda (Jaén)

3
4
INDICE

Prólogo Pág.7
Introducción Pág.9
Capítulo 1.En qué se basa la FAP (PAF) y qué aporta Pág.11
Capítulo 2. El Yo, sus problemas y su terapia Pág.53
Capítulo 3.La PAF de Grupo en contextos previos Pág.83
Capítulo 4.Adaptación de la PAF de Grupo a nuestro contexto Pág.103
Capítulo 5. Relación entre FAP y ACT: Aspectos comunes y divergentes Pág.133
Capítulo 6.Ejemplos de diálogos clínicos relevantes en la experiencia Pág.151
grupal. La importancia de la supervisión en FAP.
Capítulo 7.Una investigación comparando dos modalidades de Terapia Pág.255
de Grupo: FAP de Grupo y ACT de Grupo.
Epílogo Pág.299
Bibliografía Pág.301
Relación informativa de los autores de esta obra Pág.315

5
6
Prólogo

El libro que el lector tiene en sus manos debería haber sido, de alguna forma, el
nacimiento natural de la Psicoterapia Analítica Funcional (FAP). Como es sabido FAP
nació en un formato de terapia individual; sin embargo, no deja de ser
contradictorio que una Psicoterapia contextual que da importancia a la relación
aparezca como un vis a vis. Si existe una forma de establecer una equivalencia
funcional entre el contexto de la vida y el contexto terapéutico ésta es el grupo.
¿Cómo es que FAP no ha sido, desde el principio, una Psicoterapia de grupo?
Posiblemente porque FAP sea una terapia difícil de hacer. El terapeuta tiene que
estar pendiente de lo que ocurre en sesión, relacionándolo con los problemas del
cliente en su vida, al tiempo que interviene de forma natural y observa si lo que ha
hecho hasta ese momento ha servido o no para cambiar la conducta del cliente…
¿Muy difícil para involucrar a personas legas? Todo lo contrario, las personas que se
mueven en el mismo contexto serán las primeras en saber actuar de forma natural,
serán las primeras en identificar las funciones y serán las primeras en ver si cambian
o no las conductas. Siempre, claro está, que estén bien guiadas.
Todo esto podría parecer una propuesta, pero no lo es; es ya una realidad. Es el
resultado del trabajo de psicólogos en el ámbito clínico que lo llevan a la práctica en
sus correspondientes ámbitos laborales, públicos o privados. Es una muestra más de
la innovación, de la generosidad y de la altura de la Psicología clínica en nuestro
país. Una Psicología que sabe buscar sus propios huecos y que se adapta a las
necesidades reales de los sistemas en que se integra y de las personas a las que se
dirige.
Quisiera agradecer a Juan José Ruíz Sánchez y al resto de autores (¡cuantos amigos y
amigos de muchos años entre ellos!) la oportunidad que me han brindado para
redactar el Prólogo de este libro e invitar al lector a leer y seguir innovando.

Almería, 7 de Diciembre de 2017

José Manuel García Montes.

7
8
Introducción

La Psicoterapia Analítica Funcional (PAF) es una terapia contextual funcional de


tercera generación que usa las relaciones interpersonales, incluida la relación
terapéutica, para producir cambios significativos en la vida de las personas. Se basa
en postulados skinnerianos sobre las funciones del lenguaje y utiliza como formas de
intervención directa, en los encuentros terapéuticos, las llamadas conductas
clínicamente relevantes y las 5 reglas para producir cambios en las mismas sesiones.

Igualmente hace operativos el trabajo interpersonal de las relaciones


transferenciales y contratransferenciales desde una perspectiva conductista radical.

La Terapia de Grupo supone la oportunidad de que las personas afectadas de


distintos problemas emocionales contacten entre si y pongan en juego sus
repertorios habituales de relación creando oportunidades para observar cómo se
afectan entre si y provocar cambios en los mismos a través del moldeamiento y el
refuerzo social natural.

La Psicoterapia Analítica Funcional de Grupo aprovecha la intersección de las


conductas clínicamente relevantes y las 5 reglas de intervención terapéutica con el
contexto de interacciones grupales para producir cambios en cómo nos
relacionamos los unos con los otros y con nosotros mismos.

En este libro exponemos los principios y fundamentos de la PAF, su aplicación a la


terapia grupal en las experiencias anglosajonas y la adaptación y resultados
obtenidos en dos conjuntos de experiencias grupales, uno en el contexto de trabajo
comunitario de la salud mental pública andaluza, en la Unidad de Salud Mental
Comunitaria de Úbeda (Jaén, España) y la otra en un contexto privado en Santa Cruz
de Tenerife (Tenerife, Canarias, España) en el centro de Psicología Clotilde Acosta
López; ambos a su vez en colaboración e intercambio de experiencias con el Master
de Terapias Contextuales de la Universidad de Almería.

Una novedad de este libro, respecto a otras experiencias grupales anglosajonas


desde FAP, es el mayor énfasis en el doble papel “actor-director” de los clientes que
les convierte en protagonistas del cambio y no solo a los terapeutas; aumentando
las probabilidades de que “las equivalencias funcionales” tengan efectos.

Enero de 2018

Los autores

9
10
Capítulo 1. En qué de basa la FAP (PAF) y qué aporta
(Juan José Ruiz Sánchez e Inmaculada Ruiz Miñarro)

1-Psicoterapia Analítico Funcional: orígenes y fundamentos.

1.1. ¿Qué es la PAF?

La Psicoterapia Analítico-Funcional –FAP en inglés- surgió a finales de los años 80 y


comienzos de los 90 del pasado siglo como una nueva aportación y desarrollo de la
terapia de conducta clásica y una alternativa a la psicoterapia tradicional. Se
presentó por primera vez en un libro publicado en 1987 por Jacobson sobre la
actuación de los psicoterapeutas conductuales y cognitivos en la práctica clínica, y
donde Kohlenberg y Tsai (1987) desarrollaban los principios de la FAP. Más tarde,
Kohlenberg y Tsai (1991) publicaron el manual donde desarrollaban extensamente
las características y técnicas de la FAP.

La psicoterapia analítico-funcional está basada en los principios del conductismo


radical, y se centra fundamentalmente en las contingencias que ocurren durante la
sesión terapéutica, el contexto terapéutico, la equivalencia funcional entre los
ambientes, el reforzamiento natural y el moldeamiento (Kohlenberg y Tsai, 1991,
1994a, 1995). La FAP usa dos principios básicos del Análisis de Conducta: la
evaluación funcional de los problemas del cliente, y la aplicación de la intervención
en vivo dentro de la propia sesión terapéutica (Kanter et al., 2004). Forma parte
junto a la Terapia de Aceptación y Compromiso(Acceptance and Commitment
Therapy –ACT) (Hayes, Strosahl, y Wilson, 1999) del movimiento o perspectiva más
amplia denominado Análisis de la Conducta Clínica y está incluida como terapia de
conducta de tercera generación (Hayes, 2004; Kohlenberg, Bolling et al., 2002), junto
con la ya mencionada ACT, la Activación Conductual y la Terapia Conductual Integral
de Pareja (Cautilli, Riley-Tillman, Axelrod y Hineline, 2005;Hayes y Bissett, 2000;
Mulick, Landes y Kanter, 2005).

Aunque desde sus inicios la FAP ha hecho diversas aportaciones a la terapia de


conducta, sin duda la más relevante es el uso de la relación terapéutica como una
manera de promover el cambio en la conducta del paciente. Como indica Pérez
Álvarez, en la FAP se toma la relación terapéutica más como una condición natural
que como un lugar de entrenamiento. La terapia se basa en el análisis funcional de
las conductas del cliente y del terapeuta dentro de la propia sesión, en la que se
propone llevar a cabo la intervención dirigida a obtener un cambio significativo en el
comportamiento del cliente. En palabras de Pérez Álvarez (2004), la FAP convierte la
relación terapéutica en una auténtica relación terapéutica. Según este autor, hacer
terapéutica la propia relación terapéutica consiste en utilizar la relación clínica como
un lugar para promover un cambio personal del cliente, trabajando de manera tan

11
natural que los resultados se generalicen por sí solos. Las aportaciones más
desarrolladas de la FAP se han centrado en la terapia, pero también en la
conceptuación de diversas alteraciones y fenómenos conductuales como el
trastorno depresivo, el trastorno por estrés post-traumático, trastornos de
personalidad, problemas en la relación de parejas, o aspectos psicológicos del dolor
crónico. Al margen de las aplicaciones clínicas otra de sus aportaciones es su teoría
de la personalidad desde una visión plenamente conductual.
En ella se explica cómo surge el concepto de “uno mismo” (self) de una manera
funcional, considerándolo como un fenómeno de conducta verbal.

1.2. Fundamentos teóricos

La FAP tiene un marcado carácter ideográfico, se fundamenta en el análisis de la


conducta del cliente que ocurre durante la sesión, especialmente la conducta
verbal, las contingencias de reforzamiento natural y el moldeamiento, y la
equivalencia funcional del contexto clínico con la vida diaria de éste (Kohlenberg &
Tsai, 1991, 1995).

La relación terapéutica es esencialmente una relación verbal. De hecho casi todas las
psicoterapias son terapias verbales. Así pues, desde la FAP es algo principal entender
cuáles son las funciones de la conducta verbal en esa relación. Siguiendo los
planteamientos skinnerianos, se presta especial atención a dos de las funciones del
lenguaje. Los tactos (Skinner, 1957/1981) se refieren a la conducta verbal que es
evocada y diferenciada por situaciones concretas y particulares. Depende por tanto
de un control discriminativo y está mantenida por reforzadores generalizados. Estos
representan la clásica función “referencial” del lenguaje. Así pues, los tactos
suponen acciones como: nombrar, describir, identificar, anunciar, referir, denotar,
mencionar, hablar acerca de algo, etc. Por otro lado, los mandos se definen (Skinner,
1957/1981) como una operante verbal en la que la respuesta es reforzada por una
consecuencia característica y, por consiguiente, está bajo el control de las
condiciones de privación o estimulación aversiva. Serían, por tanto, operantes
verbales no discriminadas que por lo general implican acciones como: pedir,
demandar, requerir, ordenar, mandar, etc. Es frecuente que la relación verbal se
presente con una morfología de tacto pero con función de mando. Skinner los
definió como tactos impuros y Kohlenberg y Tsai, se refirieron a ellos como mandos
disfrazados. Este tipo de mandos disfrazados tienen una importancia capital en la
FAP por cuanto que sirven para identificar correctamente las Conductas
Clínicamente Relevantes (CCR) y son una manera de promover la generalización y la
equivalencia funcional entre ambos contextos: clínico y cotidiano.

La tarea fundamental del terapeuta será clasificar la conducta del cliente según su

12
función (tacto, mando, mando disfrazado) y si está referida a la situación clínica, a su
vida cotidiana o tiene causación múltiple (Kohlenberg & Tsai, 1991) En algunos casos
parece que se nos anuncia algo y por tanto se diría que son tactos, sin embargo un
análisis detallado de la secuencia conductual nos aporta elementos suficientes para
concluir que nos están mandando algo. Otros ejemplos de mandos disfrazados son
más sofisticados y llegan a abarcar secuencias conductuales más amplias.
Como señalábamos antes, mediante la observación natural de la conducta del
cliente, el terapeuta debe identificar las CCR y clasificarlas. Relacionar lo que el
cliente hace dentro de la consulta y fuera de ella será una constante en la FAP;
además de resultar funcional para el terapeuta en cuanto a la identificación de CCR
también será funcional para el cliente identificar y tomar perspectiva sobre sus
problemas y la solución.

La herramienta fundamental que tiene el terapeuta de FAP será su propia reacción


como posible contingencia respecto a la conducta del cliente. De forma continua va
a estar utilizando el moldeamiento y el reforzamiento diferencial. El procedimiento
de moldeamiento por aproximaciones sucesivas fue ya descrito por Skinner
(1938/1975), y consiste en reforzar diferencialmente las respuestas aproximativas
hasta la respuesta-objetivo final que se desea conseguir, en este caso las mejorías.
Además, ese reforzamiento diferencial supone que el terapeuta irá reforzando las
conductas consideradas como adecuadas, y extinguiendo las no deseadas. En FAP se
emplea el reforzamiento social de manera natural en la propia interacción. En lugar
de utilizar formas de reforzamiento artificial (como por ejemplo felicitarlo por algo
que haya hecho bien), el terapeuta de FAP sigue la conversación, reaccionando con
gestos a esa exposición expresada, manteniendo la sonrisa y el contacto ocular,
alegrándose; o haciendo gestos negativos si quiere castigar alguna afirmación del
cliente, etc. El contexto clínico es un espacio protegido, un sitio seguro, con un
terapeuta que escucha y no juzga, que va a prestar atención de manera natural a lo
que dice, que va a reforzar muchas de esas afirmaciones, que va a validar lo que
diga. El terapeuta, pues, va a ser una “audiencia no punitiva” (Skinner (1953/1981),
no tanto porque el cliente pueda expresar emociones y “desahogarse”, sino porque
va recibir atención y contingencias diferentes a las que se dan en su vida diaria. A lo
largo de la relación terapéutica se va a ir creando una relación profunda, lo que
suele conocerse como “empatía” o “alianza terapéutica”. Pero en FAP no es un
efecto añadido de la terapia, sino que es el efecto que se busca expresamente. Para
lograrlo, el terapeuta ha de tener en su repertorio ya esa forma de respuesta
inmediata y natural, que difícilmente se puede aprender por reglas, sino por
experiencia directa. En el manual Kohlenberg y Tsai (1991) sugieren distintos estilos
de reforzamiento natural directo o indirecto a seguir por parte del terapeuta.

Otra fundamentación de FAP son los conceptos de “equivalencia funcional” y


“transferencia de función”. Para conseguir que los avances dentro de la terapia se

13
generalicen fuera, no se utiliza la simulación o role-playing sino la equivalencia
funcional que se establece entre lo que ocurre dentro y fuera de la consulta. Se
habla de equivalencia funcional cuando los factores de control de una conducta son
similares, es decir, si las variables antecedentes y consecuentes son las mismas en
ambos contextos. Los problemas del cliente deben ser tratados como clases de
respuestas. Todas ellas serían una única clase de respuestas, con una equivalencia
funcional con la sumisión que muestra en su vida diaria. Por su parte, el concepto de
“transferencia de función” implica no solo que las conductas en ambos contextos
sean equivalentes funcionalmente, sino que la función que tienen en un contexto
puede hacer que cambie en el otro. Así, en ese mismo ejemplo, si el terapeuta
consigue que el cliente se rebele, se enfrente a él, se espera que, de forma similar,
esa nueva función en terapia se transfiera a su vida diaria y también conteste.

Kohlenberg y Tsai (1991) defienden que la conocida “transferencia psicoanalítica”


no es sino una conducta operante que ocurriría debido a la similitud entre la
situación presente durante la terapia y aquellas otras situaciones similares
experimentadas por el cliente en su pasado o en su vida social actual. En este
sentido, desde FAP se va a proporcionar la transferencia de fuera-adentro, creando
situaciones dentro que provoquen los problemas para que el terapeuta tenga
ocasión para moldearlas, y también transferencia dentro-afuera para que lo
cambiado durante la sesión se generalice a la vida diaria de esa persona.

1.3. Transferencia y Contratransferencia del Psicoanálisis a la FAP: Como se


maneja la relación terapéutica en otros enfoques y en la FAP.

1.3.1. La relación terapéutica y las ciencias del cerebro

Las neurociencias están de moda en el campo de la salud mental tanto en su


vertiente investigadora como en formato de teoría explicativa. El “cerebro
centrismo” (Pérez, 2011) es el nuevo modelo “epistémico” desde el que abordan
científicamente los problemas humanos.

Desde esa óptica, todos los problemas, dificultades y eventos de la vida humana
son cosas del cerebro (Damasio, 2010; Gazzaniga, 2012). ¿Pero esas aportaciones
son tan relevantes para el psicólogo y su cliente concreto? ¿Acaso le orienta sobre
cómo tratar los asuntos de la vida y las personas que habitan y transcurren en la
misma? ¿Esas neuroimágenes cerebrales, esos datos neurofisiológicos o
bioquímicos, además de su verdadera utilidad en casos con déficit orgánicos reales,
y no solo inferidos, le van a decir de cómo abordar al señor Z., o a la adolescente M.
más allá de que su colega psiquiatra le recete unos fármacos que pueden ser

14
necesarios, según qué casos, y totalmente irrelevantes en muchos de ellos? .

Al menos en el terreno de la atención sanitaria ambulatoria (sea médica o


psicoterapéutica), aproximadamente el 50% de los pacientes abandonan el
seguimiento tras una primera consulta (Jennings & Ball, 1982), independientemente
del modelo usado y el contexto cultural de referencia. Además la investigación
replicada sobre los factores que hacen que un tratamiento psicológico sea efectivo
(y extensible quizás a muchos aspectos de la relación médico-paciente) concluyen
de manera repetitiva (Lambert, 1992; Lambert & Bergin, 1992) que los ingredientes
efectivos del tratamiento son: el 40% de los efectos dependen de las características
del propio paciente o cliente; el 15% de los eventos que concurren en la vida del
cliente durante la terapia, el 15% de las técnicas usadas y el 30% de cómo se maneja
la relación terapéutica. Es decir casi 70% de la varianza del cambio pasa por conocer
las características del cliente y el manejo de la relación con éste; siendo ambos
componentes esenciales de cualquier tratamiento psicológico.

La tradición relacional en salud mental sin embargo no es algo nuevo, sino que se
retrae a los orígenes mismos de la psicoterapia y en concreto al psicoanálisis
freudiano y actualmente encuentra una acogida positiva sorprendente en la
tradición cognitiva-conductual; una perspectiva presentada como puramente
reduccionista y tecnológica. De hecho, se encuentran más afinidades de las
supuestamente esperadas entre la tradición psicoanalítica y las nuevas terapias
conductistas radicales-contextualistas de tercera generación (Pérez, 2013):
perspectiva biográfica de ambos enfoques, la referencia a lo no consciente bien
como lo deseado inconscientemente o la función inadvertida de la conducta, lo
esencial de la relación terapéutica como eje del cambio, la radicalidad del peso de
las experiencias tempranas, la reivindicación de lo relacional frente al
cerebrocentrismo, preponderancia de la epigenética frente a la genética (genética
abierta a la influencia ambiental frente al código genético cerrado e inmodificable),
etc.

Consideramos tres perspectivas que utilizan conceptos relacionales básicos de larga


tradición: la transferencia y contratransferencia. A pesar de las diferencias reales
entre los modelos psicoanalíticos, los cognitivos y los contextualistas-conductistas,
su sinergia complementaria enriquecen el potencial del/la terapeuta.

15
1.3.2. La perspectiva psicoanalítica y sus variantes: Desde el modelo pantalla
neutral al modelo participante activo.

Transferencia y contratransferencia son dos conceptos de origen psicoanalítico que


desde una postura restrictiva solo pueden ser aplicados y explicados desde la
práctica clínica psicoanalítica, pero que para muchos autores sobrepasan el marco
de referencia tradicional original. Según Laplanche y Pontalis (1968) la
transferencia solo tiene sentido en la cura psicoanalítica y se define como una
repetición de prototipos infantiles donde los deseos inconscientes se actualizan
sobre ciertas relaciones objétales. Así desde la perspectiva clásica hay una
transferencia positiva débil donde se movilizan sentimientos amistosos y afectuosos
del paciente hacia el terapeuta y una transferencia positiva erotizada que en la
práctica se muestra como negativa, ya que es sinónimo de resistencia, en cuanto
detiene el trabajo asociativo del analizado. La transferencia propiamente negativa se
caracteriza por la expresión de sentimientos hostiles y de enojo hacia el
psicoanalista. Lacan (1981) sostuvo que conviene una transferencia negativa suave
para el mejor fluir del tratamiento. Según los autores anteriores se caracteriza por
las reacciones inconscientes del analista hacia el analizado y más concretamente la
transferencia de este.

En 1914 Freud y sus afines entendían la transferencia como resistencia a la cura,


pues la repetición de modelos anteriores deviene en una resistencia a analizarlos,
pudiendo conllevar la interrupción del tratamiento. Por ello hay que analizar la
transferencia para llegar a la cura por el desenmascaramiento de la misma mediante
el trabajo interpretativo del análisis. Existen muchas variantes de claves
transferenciales: los signos de enamoramiento hacia el terapeuta; la tendencia a
comprobar el poder de sus atractivos haciendo descender al analista al puesto de
amante, la tendencia a seguir las indicaciones del terapeuta sin apenas
cuestionamiento, las rápidas mejorías sin trabajo y esfuerzo paralelo, y otros signos
más sutiles como llegar frecuentemente tarde a las citas, alusiones frecuentes a
otros profesionales, etc. Igualmente entre las claves contratransferenciales podrían
encontrase interpretaciones del terapeuta excesivamente sarcásticas, sentir que los
comentarios del analizado hacia su persona son importantes, discutir con el
paciente, ayudar al paciente más allá de la sesión, impulsos de pedirle favores al
paciente, soñar con el paciente, interés excesivo en el paciente, incapacidad para
entender el material a analizar cuando el paciente refiere temas similares a los
vividos por el analista, descuido en mantener el encuadre, reacciones emocionales
intensas, maniobras de apoyo narcisista al paciente, fomentar la dependencia
excesiva del paciente a través del apoyo excesivo a este, compulsión a hablar
frecuentemente del paciente, etc. Freud había llegado a plantear ambos fenómenos
a través de un proceso de años de trabajo y reflexión clínica; siendo dos casos

16
paradigmáticos en ésta formulación el caso de Ana O. atendida por Breuer (Freud &
Breuer, 1895) donde la transferencia ya no es una carga de energía corporal sino
unos deseos afectivos dirigidos hacia el propio medico (de hecho se enamoró de
Breuer con el consiguiente enfado de la esposa de éste, abandonando el
tratamiento que continuo Freud); y por otro el caso de Dora de 1905, que es un
análisis de un fracaso del tratamiento por interrupción prematura del mismo tras
haber manifestado una resistencia transferencial inadecuadamente abordada. Ya en
1904 Jung había propuesto a Freud que el propio analista fuera analizado. Así, 40
años después en la década de los años 1950-1960 la contratransferencia se veía
desde dos posiciones psicoanalíticas contrapuestas; como un obstáculo a superar
(Reich, Glover, Fliess) o como un instrumento valioso para entender el
posicionamiento del paciente y fomentar el cambio o cura (Heimman, Racket,
Winnicot).

Otto Kernberg (2005) siguiendo los delineamientos clásicos pero con ciertas
modificaciones personales que le llevan hacia la teoría de las relaciones objetales,
propone interesantes implicaciones para los psicólogos y psiquiatras (y no solo los
psicoanalistas) a la hora de tratar un caso: En cada sesión buscaremos dónde se
concentra el afecto máximo en cada momento. Para ello nos serviremos de observar
tres canales de expresión afectiva; el canal 1 de tipo verbal (lo que dice y como lo
dice el paciente), el canal 2 de tipo no verbal del paciente (los gestos y movimiento
corporal del paciente), y el canal 3 del terapeuta que supone las reacciones
subjetivas del terapeuta hacia el paciente, que es como un radar que capta los
afectos del paciente proyectados en él terapeuta en particular, sobre todo los que
aquel tolera mal. El terapeuta además debe preguntarse hasta qué punto sus
propios afectos provienen del problema del paciente o de sus propios conflictos
irresueltos. La atención a los 3 canales determina el diagnostico dinámico del
paciente. Además para Kernberg, los pacientes graves tendrían dificultad para
integrar los afectos negativos con los positivos (escisión entre amor y odio, entre
amor y agresión). Como terapeutas debemos trabajar en la integración de esos
afectos, en especial los que el paciente proyecta sobre nosotros.

Posteriores modificaciones de las terapias breves psicoanalíticas plantean que las


reacciones transferenciales y contratransferenciales se pueden dar y manejar en
formatos breves de terapia como eje central del proceso de cambio. Malan (1983)
es quizás el autor de referencia más citado en estos enfoques de psicoterapia breve
dinámica, y es paradigmático su enfoque de trabajar con los dos triángulos
dinámicos en cada sesión; el triángulo del conflicto (con tres vértices: impulso,
angustia y defensa) y el triángulo de relaciones (con tres vértices: otros, terapeuta
y progenitores). A nivel práctico el terapeuta trabajaría con el triángulo del conflicto
en la secuencia defensa-ansiedad-impulso inconsciente, proceso contrario a la
formación del síntoma o sea impulso inconsciente-ansiedad-defensa; y con el

17
triángulo de las relaciones mediante confrontaciones interpretativas en la secuencia
otros-terapeuta-progenitores.

Otra propuesta deriva del enfoque psicoanalítico de la teoría del apego de J. Bowlby
(Marrone, 2001) que cuestiona el enfoque proyectivo de la transferencia como un
impulso o deseo inconsciente reprimido y propone que a la base de esos fenómenos
están modelos de representación mental derivados de experiencias tempranas de
apego reales (modelo muy influyente en algunas concepciones cognitivas de
terapia). Además cuestiona el modelo pulsional por los potenciales peligros que
conlleva como la invalidación de percepciones acertadas del paciente por el
supuesto saber del terapeuta, la invalidación de la autonomía del paciente al
interpretarse como paso al acto o defensa narcisista, la frialdad afectiva de la
distancia del analista ante pacientes con experiencias y carencias de apego
anómalas y sobretodo la atribución de resistencias al paciente ante sus
interpretaciones obviando circunstancias psicosociales externas y ambientales
difíciles que dañan al paciente.

La variante más novedosa dentro del psicoanálisis actual es la llamada perspectiva


relacional. El método terapéutico básico del psicoanálisis clásico se basa en tres
procesos fundamentales: La asociación libre, el análisis de los fenómenos de
transferencia y contratransferencia y el análisis de la resistencia. Tales análisis se
acompañan de unos elementos de encuadre o reglas de trabajo para el paciente
(regla básica de la asociación libre) y el terapeuta (regla de abstinencia y de la
atención flotante) (Ruiz y Cano, 1999). Ahora bien, el psicoanálisis relacional de
ímpetu actual viene a cuestionar todo lo anterior en mayor o menor medida.
Postula la importancia de la relación que se establece aquí y ahora en la sesión
terapéutica es un producto de la historia y espontaneidad de ambos contribuyentes
(Coderch, 2010). Plantean que la neutralidad absoluta del terapeuta es imposible, y
que la contratransferencia debe ser considerada para la buena marcha del proceso
de la terapia. La transferencia, la contratransferencia y la resistencia son fenómenos
co-creados del terapeuta y paciente; y el terapeuta debe preguntarse siempre cómo
ha contribuido desde su perspectiva e historia personal a los mismos. Además
retoman una relectura de Freud desde la clínica frente al de la teoría, y le presentan
como mucho más activo en las sesiones que como se presupone. Defienden que el
psicoanálisis debe estar abierto a otras disciplinas como las neurociencias y la
psicología cognitiva. Argumentan que la interpretación de la transferencia no es el
factor terapéutico fundamental sino la relación entre el psicoanalista y el paciente,
siendo este una especie de objeto bueno. El paciente no solo puede presentar un
problema conflictivo sino también uno deficitario o pragmático que requiere de
intervenciones diferentes más activas (como defendieran Ferenczi, Fairbairn o
Winnicot). Así, distinguen entre la transferencia de conflicto (inconsciente,
reprimida e interpretable) y la transferencia de déficit (que representan

18
necesidades dirigidas a objetos) que requieren intervenciones y puestas en escena
por parte de ambos contribuyentes (enacment) y que se formulan teóricamente
introduciendo conceptos nuevos como el de inconsciente procedimental versus el
declarativo, etc. Se cuestiona fuertemente la concepción pulsional tradicional donde
los deseos inconscientes endógenos se repiten en las relaciones, minimizando el
papel de la realidad que suele aparecer como limitante del deseo inconsciente. En
cambio, desde el psicoanálisis relacional los deseos inconscientes derivan de
relaciones reales. La realidad está presente en la relación del sujeto con su entorno,
de hecho de esa relación derivan todos los fenómenos psíquicos. El self social donde
lo afectivo-relacional es lo central y no lo pulsional. Es llamativa que la visión anti-
cartesiana también es compartida por la tradición conductista skinneriana y post-
skinneriana y por la psicología cognitiva anti-mentalista (Piaget, Vigostsky).

1.3.3. La perspectiva cognitiva relacional: Observación participante y


metacomunicación.

La terapia cognitiva nace como una revisión del psicoanálisis (Ellis & Grieger, 1990;
Beck, Rush, Shaw & Emery, 1983) en un momento de crisis de la teoría
metapsicológica del psicoanálisis y como una alternativa heurística para comprender
el sufrimiento del paciente mediante la identificación del significado personal que
da este a su experiencia. Se propone renovar la teoría y la praxis a partir de lo que
piensa y siente realmente el paciente deshaciéndose de elucubraciones
metapsicológicas. Sin embargo, en la tradición cognitiva estándar (Ellis y Beck) la
relación terapéutica tiene un papel secundario a la conceptualización cognitiva e
intervención técnica. Este punto es fuertemente cuestionado desde dentro de la
misma tradición cognitiva por diversos motivos. La Terapia Cognitiva de Beck y la
Terapia Racional Emotiva Conductual de Ellis consideran que los fenómenos de la
transferencia, contratransferencia y resistencia derivan de cogniciones
disfuncionales del terapeuta o el paciente que normalmente aparecen en la
aplicación de la evaluación y tareas entre sesiones. La transferencia derivaría de una
percepción errónea o irracional del paciente sobre el terapeuta, lo que se puede
esperar de éste, y que le lleva a experimentar una serie de sentimientos positivos o
negativos y a manifestar una seria de conductas (resistencias) que impedirían el
desarrollo adecuado de la terapia. La contratransferencia entraría en la misma
concepción. Esos fenómenos que pueden aparecer en la terapia, sin embargo para
Ellis o Beck no tienen un papel especial, y se abordan como otras distorsiones o
creencias disfuncionales. Sin embargo, en honor a la realidad, ambos autores han
dedicado una especial atención a estos temas refiriendo una serie de cogniciones
disfuncionales que contribuyen a estos problemas y cómo manejarlas.

19
Desde una perspectiva cognitiva más constructivista, Guidano y Liotti (1983)
plantean que la resistencia es un proceso normal que se genera al revisar los
esquemas cognitivos tácitos y es un proceso que hay que respetar más que eliminar
si se pretende que el cambio sea progresivo, en vez de regresivo. Aquí esas
resistencias se contextualizan en el marco de la historia personal donde aparecieron
y el papel que tuvieron en ese momento.

En suma, recogiendo ambas perspectivas (preconstructivista y constructivista), o


bien se plantea una estrategia de modificación o bien de respeto de la resistencia,
en base a la comprensión de su significado personal. Ya en 1992 (Ruiz, 1992) y
después en revisión del año 2002 (Ruiz y Cano, 2002) presentaron la importancia
central de la relación terapéutica desde el modelo cognitivo: las cogniciones tienen
historia que se generan en un contexto biográfico y evolutivo; tienen fuerzas y
grados de accesibilidad variables; las cogniciones pueden interactuar entre sí, siendo
conflictivas a veces (fenómenos de conflicto, disociación, etc.) y existe un fuerte
vínculo entre los significados personales más importantes y los vínculos afectivos
tempranos significativos. También se plantearon en esos trabajos la importancia del
manejo de la cognición interpersonal y el cambio terapéutico en la misma sesión
detectando los aspectos puestos en ella y los significados relacionados con el aquí y
el ahora de la sesión (Ruiz y Cano, 2002; pp. 107-143).

Paralelamente, Safran y Segal (1994) presentaron un modelo cognitivo relacional


basado en la teoría interpersonal de Sullivan, la teoría del apego de Bowlby, los
modelos cognitivos, las modernas teorías de las emociones y otros aportes
psicodinámicos. Es de notar que Jeremy Safran es un exponente relevante del
psicoanálisis relacional que ha contribuido también a la terapia cognitiva en su doble
condición de psicoanalista y terapeuta cognitivo al menos en esos años. Safran, más
recientemente ha continuado contribuyendo al campo general de la psicoterapia
con sus aportaciones sobre la alianza terapéutica como componente esencial del
cambio relacional (Safran & Muran, 2005). El manejo cognitivo relacional de Safran
y Segal (1994) expone que a través de las relaciones con otras personas significativas
se generan reglas inconscientes que guían el procesamiento de la información
emocional y generan actitudes disfuncionales. En la terapia se suelen activar esos
esquemas y es necesario trabajar con ellos de modo inmediato. La principal
herramienta del terapeuta cognitivo interpersonal es la observación participante
(concepto originario de Sullivan) que permite por parte del terapeuta sentir cómo la
relación con el paciente le afecta y como se ve impulsado a participar en ella. En ese
proceso de observación el terapeuta metacomunica sus observaciones, sobre todo
aquellas que desmienten los ciclos complementarios que confirman los esquemas
disfuncionales del paciente, siendo necesario que el mismo advierta sus propios
sentimientos e impulsos a la acción; y expresando en sus palabras y acciones una
nueva perspectiva descentrada y diferente de los esquemas relacionales del

20
paciente. Para ello el terapeuta se debe a una disciplina emocional que conlleva
hacerse con frecuencia una seria de preguntas básicas: (1) “¿Cómo me siento ahora
mismo con este paciente y qué me veo impulsado a hacer? Una vez que observo
esto tengo posibilidades de desengancharme y completar los esquemas
disfuncionales de este paciente”, (2) “¿Qué marcadores interpersonales del paciente
(conductas de aquel, cosas que dice o hace éste suscitan mis reacciones
emocionales?” y (3) “¿Cómo puedo metacomunicar esta experiencia al paciente de
modo que desmienta la experiencia complementaria y le descentre de sus
esquemas relacionales disfuncionales? (Safran & Segal, 1994, p. 187-243).

El manejo de la relación terapéutica ha ido ganando preponderancia en las terapias


cognitivas actuales, sobre todo cuando se abordan problemas complejos como los
trastornos de personalidad (Young, Klosko & Wrishaar, 2013). Otros terapeutas
cognitivos, como la argentina Sara Baringoltz (2005) destacan la importancia de
exponer al paciente a temas que son evitados emocional y conductualmente, el uso
de procedimientos que no evoquen resistencia del paciente, así como en caso de
pacientes con gran resistencia al cambio, usar procedimientos provenientes de
otras tradiciones como la estratégica, mediante la prescripción de la continuidad del
síntoma apuntando sus ventajas, los peligros de cambiarlo, etc.

1.4. La perspectiva conductista radical-contextualista: Funciones de la conducta


verbal, relaciones de equivalencia y conducta clínicamente relevante

Supuestamente el conductismo murió sobre finales de los años 60 con el nacimiento


de la revolución cognitiva, debido a argumentos que lo describían como simplista y
reduccionista en extremo; especialmente por haber dejado de lado temas
importantes como los fenómenos cognitivos subjetivos, el análisis de los aspectos
inconscientes, los aspectos relacionales, el lenguaje, los problemas existenciales, la
psicosis y los trastornos de personalidad. En palabras del español Marino Pérez
(2004, 2011 y 2013), el caso es que no solo sigue vivo, sino que además ha crecido y
se ha multiplicado. La psicología cognitiva se hizo el paradigma predominante en
muchas universidades a nivel mundial; pero treinta años después ni esta desterró al
conductismo; ni este último desterró al psicoanálisis; estando vigentes todas estas
corrientes en la actualidad. De hecho, asistimos a una puesta en escena desde
finales de los 90 de toda una revolución de las llamadas terapias de terceras
generación (terapia de aceptación y compromiso, psicoterapia analítica funcional,
terapia dialéctica conductual, terapia de activación conductual, terapia integral de
pareja, terapia cognitiva basada en mindfulness, etc.); en su gran mayoría en la
estela del conductismo radical skinneriano y postskinneriano. Las nuevas
contribuciones tienen varias señas de identidad: nuevas formas de hacer

21
psicoterapias alejadas del modelo médico de lucha contra el síntoma o trastorno,
papel del contexto socio-verbal en la creación y mantenimiento de los problemas
psicológicos, importancia de un cuerpo de investigación que respalde la terapia y sus
fundamentos teóricos, papel del lenguaje en la conformación de la subjetividad y un
fuerte énfasis en el análisis funcional de la conducta verbal y no verbal desde nuevas
teorías contextuales-conductuales (p.e teoría del marco relacional de Hayes y cols.
2001).

Las terapias conductistas-contextualistas de tercera generación se caracterizan por


la importancia del análisis funcional, es decir conocer al servicio de qué propósito
está la conducta en cuestión; la explicación conductual de los fenómenos cognitivos
y emocionales subjetivos sin requerir constructos mentalistas, computacionales o
neurobiológicos de complicada réplica; la importancia de la regulación conductual
para llevar una vida significativa; es decir orientada a valores y no a la evitación del
malestar a toda costa (evitación experiencial); análisis del lenguaje y sus funciones
de manera funcional (teoría del marco relacional) , e importancia de la relación
terapéutica en muchos casos, incluso más que las técnicas conductuales. Dentro de
estas nuevas psicoterapias, la psicoterapia analítica funcional (FAP) de Kohlenberg y
Tsai (2007) basada en el conductismo radical de Skinner, sus autores se centran en
la importancia de la relación terapeuta-cliente dentro del contexto de la sesión y en
la importancia de replicar en investigación clínica los resultados de esta terapia que
ha sido aplicada a multitud de problemas, desde trastornos de ansiedad, depresivos,
de alimentación, trastornos de personalidad; etc.; y especialmente combinada a
otros enfoques de tercera generación, en especial a la terapia de aceptación y
compromiso. Para la FAP la conducta relevante es la que ocurre en la misma sesión,
y no tanto la referida o relatada fuera de ella (salvo que esta se relacione con lo
presentado en la sesión aquí y ahora). Todas las conductas que ocurren en la sesión
están sujetas a las condiciones de refuerzo, y el terapeuta trata de identificar
aquellas que son relevantes para el caso en cuestión a fin de moldear y modificar
esas conductas en la misma sesión a fin de que esos cambios se generalicen a la vida
de paciente; contando en especial con el análisis de las funciones de la conducta
verbal del paciente (Ferro Valero & López, 2009).

La FAP no expone la transferencia y la contratransferencia en términos mentalistas


como un proceso inconsciente que ocurre en la mente del paciente y el terapeuta
sino en términos de intercambio conductual operante que ocurre en la misma
sesión y que puede ser observado en la misma a través de las conductas
clínicamente relevantes (CCRs). Las CCRs son las conductas del cliente que ocurren
en la sesión. Analizar las CCRs conlleva conocer las funciones de la conducta verbal y
no verbal del cliente en la misma sesión. Esas CCRs son los problemas, las mejorías e
interpretaciones del cliente de sus dificultades que manifiesta en la consulta. El
abordaje de las CCRs no se plantea en términos mentalistas sino a través de una

22
serie de reglas flexibles para el terapeuta para evocar, identificar-discriminar,
reforzar e interpretar funcionalmente a conducta del cliente. La transferencia es la
presentación de las CCRs en la sesión misma ya sean porque han sido evocadas
involuntariamente (condicionamiento clásico) o voluntariamente (mediante
discriminación operante antecedente o reforzamiento consecuente) por el
terapeuta en esa sesión. Esas CCrs son las conductas problemáticas del cliente que
aparecen en la consulta y que tienen relaciones de equivalencia funcional con sus
dificultades en su vida diaria, es decir tienen funcione similares o se presuponen que
las tiene. Esas conductas clínicamente relevantes derivan de la historia personal
experiencial del cliente en gran parte relacional, y que ahora aparecen aquí en
nuestra presencia en consulta. La contratransferencia deriva de las reacciones
emocionales y las conductas del terapeuta ante las CCRs del cliente, es decir a la
relación con éste; y deben servir para interpretar y reforzar de manera discriminada
la conducta del cliente de modo que produzcas mejorías visibles en la misma sesión
e interpretaciones que faciliten esos cambios. También el terapeuta FAP suele
combinar los métodos tradicionales de la terapia cognitiva-conductual o de la
terapia de aceptación o compromiso, según las necesidades de cada caso; e incluso
con los provenientes de otros enfoques como los psicodinámicos o los estratégicos,
pero no de manera aleatoria sino según el análisis funcional del caso. Desde la FAP
se conceptualiza conductistamente temas relevantes en las psicoterapias como el
papel de las emociones, la cognición, la relación terapéutica, la formación del yo, los
recuerdos y otros tópicos que se presuponen erróneamente ajenos a la tradición
conductista. Para los terapeutas en formación supone unas estrategias muy claras
de que hay que evocar, reforzar e interpretar en cada sesión y de cómo comprobar
los efectos reales de las intervenciones del terapeuta. Pero hay que advertir que
lejos de su aparente simplicidad, requiere una buena formación teórica y práctica en
el análisis funcional, sobretodo del lenguaje y sus funciones (Skinner, 1984). Skinner
en su obra “Conducta verbal” de 1957 analiza las funciones del lenguaje no desde su
forma o estructura fonética sino desde sus causas y efectos, es decir desde las
funciones que cumple.

Desde el punto de vista clínico son importantes tres funciones: (1) Los Tactos:
Conducta verbal semejante a cuando se hace un relato o descripción de algo, y que
está bajo control antecedente de diversos estímulos discriminativos concretos y
reforzadores secundarios generalizados (como cuando se pregunta ante la presencia
de un objeto que es tal cosa y ante la respuesta correcta se le dice al sujeto que lo
ha hecho muy bien, se le sonríe, se le gratifica, etc.). (2) Los mandos : Conducta
verbal similar a las peticiones, ordenes, demandas y preguntas que están bajo el
control de un amplio rango de estímulos discriminativos, estados de privación o
estimulación aversiva y de reforzadores específicos (p. e.: tener sed ante una
situación de esfuerzo, ponerse a beber cuando el sujeto se encuentra ante un
momento complicado, etc.; y presenta la conducta de pedir beber a alguien con

23
funciones de evitación, distracción, etc.) y (3) Los mandos disfrazados: de tactos
pero que cumplen funciones de mandos y que dependen de una causación múltiple
y reforzadores especiales y que explican los fenómenos tradicionalmente descritos
como inconscientes, ocultos, latentes, inconscientes o relacionados con alusiones
indirectas a la transferencia.

El terapeuta FAP se suele guiar por 5 reglas flexibles: (1) “Observa la conducta
clínicamente relevante en la hora de la consulta (no tanto la relatada sino la que se
observa aquí y ahora)” ; (2) “Provoca o evoca las conductas clínicamente relevantes
en la hora de la consulta”; (3) “Refuerza las conductas de mejoría presentes en la
hora de consulta de manera natural y no tanto de modo artificioso”; (4) “Observa
los efectos potencialmente reforzantes de tus conductas como terapeuta en
relación a las conductas clínicamente relevantes de tu cliente (incluida las
reacciones privadas que provoca en ti esa relación)” ; y (5) “Ofrece a tu cliente
interpretaciones funcionales sobre las variables que suelen causar su conducta
disfuncional y sus mejorías” (Kohlenberg & Tsai, 2007, pp. 36-53). También entre las
CCRs se incluyen las reacciones contratransferenciales del terapeuta a las conductas
del cliente, entendidas también como problemáticas o inadecuadas (ccr1),
adecuadas y pertinentes (ccr2) y sus propias reacciones subjetivas (emociones,
recuerdos, cogniciones, etc.) que suponen su disposición adecuada o inadecuada a
reforzar, moldear, castigar o extinguir-ignorar las conductas del paciente.

De hecho, en la conceptualización FAP del caso en cuestión se incluyen tanto las


CCrs del paciente como la del terapeuta (Ferro, Valero & López, 2007 y 2009). Una
cuestión también relevante en FAP es la importancia de aumentar el contacto del
cliente con las variables causales de control aversivo de su conducta. Para ello se le
presenta reiteradamente el estímulo aversivo, se observa cómo trata de evitar ese
afecto, y se relaciona esa evitación afectiva con situaciones equivalentes de su vida
diaria, a fin de llevar conductas voluntarias de cambio a las mismas.

24
Cuadro Comparativo en la conceptualización del rol de las Relaciones Terapéuticas
(Ruiz, 2017)

Aspecto Psicoterapias Psicoterapias FAP


psicoanalíticas cognitivas
1.Concepto de Transferencia y A) Psicoanálisis clásico: A)Psicoterapia cognitiva estándar .Son clases de conductas
Contratransferencia (Ellis, Beck..) operantes con funciones en las
.Repetición de prototipos relaciones de terapia relacionadas
infantiles donde los deseos .Creencias irracionales o con la historia y contextos de vida
inconscientes se actualizan en disfuncionales sobre la relación y de los sujetos
ciertas relaciones objetales. . lo que cabe esperar de ella
.Aparecen como sentimientos del .Detectar las creencias .La mayoría de estas operantes
paciente al terapeuta y de este a disfuncionales y someterlas a relacionales funcionan y tienen
aquel de causa inconsciente. . invalidación empírica y/o racional sus efectos a través de la
.Supone una resistencia a la cura conducta verbal/lenguaje
y conlleva trabajar la asociación B) Psicoterapias cognitivas
libre, el análisis de la resistencia, constructivistas y relacionales .Conductas de diferentes
la transferencia y la topografías pueden tener
contratransferencia. Obstáculos a .Las cogniciones tiene historia y funciones similares en
superar se generan y aprenden en un determinados contextos y
contexto histórico y evolutivo conductas de similar topografías
B) Desarrollos postfreudianos: donde los vínculos de apego pueden tener funciones distintas
temprano son claves en diferentes contextos
.La transferencia derivada de .Pueden ser tácitas y guiadas por
estilos de vinculación afectiva procesamiento emocional no .Las funciones de tacto y mando
previos más que de proyecciones consciente son esenciales en la relación
de deseos inconscientes infantiles .En las relaciones se perpetúan o terapéutica
.La contratransferencia como cambian y pueden interactuar
indicador del posicionamiento del entre si .Observar e intervenir en las
paciente en terapia conductas clínicamente
relevantes es el objetivo:
problemas de la vida cotidiana
que se manifiestan en el aquí y
ahora de la relación de terapia
2.Formas de trabajar en terapia (1)Buscaremos dónde se (1)Practicar una disciplina (CCR1); mejoras no solo relatadas
con la Transferencia y la concentra el máximo afecto en emocional por parte del sino observadas en las mismas
Contratransferencia esta sesión. terapeuta sesiones (CCR2) y explicaciones
(2) Usaremos tres canales o (2) Tres preguntas claves: ¿Cómo que se van moldeando para
indicadores: lo que dice-como me siento con este paciente hacerlas participes de los cambios
dice las cosas el paciente, ahora y qué me veo impulsado a dentro-fuera de la sesión (CCR3)
cambios en su lenguaje no verbal hacer?; ¿Que marcadores
y las reacciones subjetivas del interpersonales de lo que dice o
terapeuta hacia el paciente hace el paciente suscitan mis Puesta en marcha de 5 reglas
(3) Trabajo con los triángulos del reacciones hacia el?; y ¿Cómo para el manejo relacional: (1)
conflicto (emoción evitada- metacomunico esta experiencia al Observar las conductas
defensa-síntoma/angustia) y de paciente de modo que lo clínicamente relevantes, (2)
las relaciones (otros-terapeuta- descentre de complementar sus Evocar las conductas clínicamente
personas significativas) esquemas disfuncionales? relevantes en la misma sesión, (3)
(4) Trabajo con los “enacments” y Reforzar las conductas de cambio
efectos en el self que aparecen en la misma sesión,
(4) Observar el efecto/potencial
reforzante o aversivo de la
relación con el paciente para el
mismo terapeuta y (5) Ofrecer
explicaciones moldeadas que
favorezcan el cambio en la vida
diaria del paciente

25
2. ¿Qué aporta la FAP?

La FAP aporta tres elementos claves a los terapeutas interesados en usar los
aspectos relacionales para producir cambios significativos en las vidas de sus
clientes:

.Cómo analizar las relaciones terapéuticas y qué hacer con ellas para que sean
motores del cambio.

.Una conceptualización funcional de los trastornos de personalidad como problemas


del yo y cómo intervenir en ellos.

.Un punto de encuentro con otras terapias, en especial con las de tercera
generación, aún más con la Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT).

2.1. Cómo analizar las relaciones terapéuticas y qué hacer con ellas para que sean
motores del cambio

Trabajar con FAP para que esta terapia sea un motor de cambio supone discriminar
y emplear básicamente 6 aspectos fundamentales derivados del conductismo radical
en las sesiones de terapia (Ferro, Valero y López,2016): (1) Realizar un Análisis
Funcional de la conducta (AFC) del cliente en la sesión, (2) Usar el reforzamiento
natural y el moldeamiento de la conducta en las sesiones , (3) Observar la relación
de equivalencia funcional entre la conducta del cliente relatada en su vida diaria y la
presentada en la misma sesión, (4) Discriminar tres tipos de conductas clínicamente
relevantes, (5) Usar 5 orientaciones en formas de reglas verbales para ayudar a que
las intervenciones del terapeuta sean realmente terapéuticas y (6) Usar la
conceptualización que hace FAP de los problemas del yo para tratar los problemas
de personalidad de los clientes.

Tanto la FAP como otras terapias contextuales funcionales de tercera generación


comparten el énfasis en el Análisis Funcional del Lenguaje, especialmente en el caso
de las conductas regidas por las reglas y las relaciones de equivalencia entre
estímulos. Sin embargo es en FAP donde pone un especial énfasis en emplear el AFC
de la relación terapeuta-cliente; o en el caso de los grupos, terapeuta-clientes o
clientes-clientes. Estas relaciones son el escenario vivo donde ocurren los problemas
del cliente (CCR1), sus progresos (CCR2) y sus interpretaciones sobre lo que sucede
en esos problemas y progresos (CCR3). Asume que la psicopatología ocurre y se
relaciona directamente con los contextos interpersonales o relacionales entre las
personas (Baruch, Kanter, Busch, & Juskiewicz, 2009).

26
La FAP como la mayoría de las psicoterapias consiste en intercambios verbales entre
pacientes/clientes y terapeutas. En FAP es muy importante para producir cambios
entender las funciones del lenguaje, de la conducta verbal. Para ello se vale de los
planteamientos de Skinner (1957/1981) centrados en el análisis funcional de la
conducta verbal. En este terreno de la conducta verbal son muy importantes en los
intercambios terapeuta-cliente (y cliente-cliente en los grupos) dos tipos de
funciones del lenguaje: los Tactos y los Mandos.

Los Tactos son conductas verbales relacionadas con antecedentes concretos y


particulares (control discriminativo concreto) y consecuencias o reforzadores
generalizadas. En las sesiones individuales o grupales se relacionan habitualmente
con situaciones donde se le pregunta algo concreto de la vida del cliente (por
ejemplo por problemas o progresos concretos de su vida diaria o de la misma sesión
en curso) y este hace un relato de cómo le van las cosas en esos aspectos que puede
tener consecuencias o efectos muy generales y variados (por ejemplo la atención,
interés de quienes le escuchan, más preguntas de estos, etc.). Estos representan la
función “referencial” del lenguaje. Los tactos suponen acciones como nombrar,
describir, identificar, anunciar, referir, denotar, mencionar, hablar acerca de algo,
etc. Habitualmente cuando los pacientes o clientes refieren sus problemas y
progresos en su vida diaria están bajo el control de las funciones de tacto; aunque
veremos que no siempre es el caso.

Los Mandos son conductas verbales relacionadas con antecedentes relacionados


con estados de privación o situaciones aversivas concretas y consecuencias
específicas reforzantes. Incluyen las típicas funciones del lenguaje de pedir, de
requerir, ordenar, mandar, etc. En las sesiones de psicoterapia es habitual que las
personas, y más aquellas con control público de sus experiencias privadas que llegan
a desconectar del contacto con sus propias necesidades y deseos, menos
frecuentemente emplean conducta verbal en sus interacciones con el terapeuta y
sus compañeros/as de grupo con funciones de mando; al menos aparentemente o
directamente. En estos casos es más frecuente que empleen lo que Skinner llamó
“tacto impuro” (Skinner, 1957/1981) o los llamados “mandos disfrazados” (de
tactos) por Kohlenberg y Tsai (1991). Los mandos disfrazados son claves en la FAP
para detectar las conductas clínicamente relevantes (CCRs) y a través de ellos se
promueve el trabajo con las equivalencias funcionales y la generalización entre la
vida cotidiana de los clientes y las situaciones de terapia (Ferro, 2016). En muchas
ocasiones de la terapia parece que los clientes con sus relatos nos están relatando
algo (a nosotros o a sus compañeros del grupo), pero un AFC más detallado de las
secuencias apuntan hacia demandas o peticiones con funciones de Mandos, y aún a
pesar de que los mismos clientes no se percaten de ello. Detectar y trabajar con
estos mandos disfrazados como CCR1 o CCR2 es clave en FAP. Por ejemplo una
persona que en varias sesiones de grupo se queja de que los médicos no hacen caso

27
a sus problemas físicos, que su familia no le hace mucho caso puede estar
demandando atención, consideración, lástima y acercamiento del terapeuta del
grupo y sus compañeros y/o emitiendo una queja solapada del poco apoyo del
grupo hacia él/ella.

- Tactos y Mandos disfrazados-


Mientras los clientes nos están relatando acontecimientos de sus vidas y como los
experimentan (tactos), nos pueden estar demandando cosas, que no
necesariamente son advertidas o percatadas por ellos mismos y que nosotros
averiguaremos en función de sus efectos (¿mandos disfrazados?)

Respecto al tipo de reforzamiento que utiliza el terapeuta con las CCRs de los
clientes se prefiere el natural al artificial o arbitrario. Aquí se entiende
reforzamiento como las consecuencias o contingencias que actúan aumentando o
disminuyendo la frecuencia o fuerza de una conducta; cosa que solo podemos saber
después de haberlo aplicado. El reforzamiento natural se suele aplicar a clases de
conductas del cliente más que a ejecuciones concretas de este, se aplica a conductas
que ya existen en el repertorio del cliente aunque sean poco frecuentes, va dirigido
a beneficiar los objetivos del propio cliente y suelen encontrarse en el ambiente del
cliente, aunque este los haya “contactado” escasamente (Kohlenberg y Tsai, 1991).

También el/la terapeuta irá reforzando por moldeamiento progresivo que los
clientes se pongan cada vez más en contacto con las experiencias personales
evitadas y tengan relaciones de mayor intimidad en revelar sus deseos, opiniones y
sentimientos más personales, disminuyendo el control aversivo externo, y
reforzando empáticamente a sus clientes (la audiencia no punitiva de Skinner
1957/1981).

Respecto al AFC y en especial de la conducta verbal lingüística en las sesiones de


terapia son relevantes los conceptos de “equivalencia funcional” y “transferencia de
función” (Ferro, Valero y López, 2016). Para generalizar los cambios producidos en
las sesiones a la vida diaria del cliente en la terapia FAP no se utiliza con frecuencia
el entrenamiento en habilidades o el “rol playing” en las sesiones sino los parecidos
entre lo que ocurre en estas sesiones y la vida diaria. Estos “parecidos” se
contemplan mediante la semejanza de funciones o efectos; es decir las conductas,
que aunque a veces pueden tener formas, presentaciones o topografías distintas
tienen efectos similares en ambos tipos de situaciones dentro-fuera de la sesión,
contemplando la semejanza también de la triple contingencia de funciones A-B-C,
en sus antecedentes (A) y Consecuencias (C). Ferro, Valero y López (2016) ponen el
ejemplo de un cliente con una historia previa de sumisión a su padre que presenta

28
una clase de conducta (más que respuestas concretas) de sumisión similar ante el
terapeuta dándole la razón e todo, obedeciendo ciegamente todo lo que este
parece indicarle, etc, evitando cualquier consecuencia aversiva. Igualmente este
cliente puede presentar ante determinadas acciones del terapeuta que se rebele
ante este y proteste, enfrentándose a él. Si el terapeuta consigue que este cliente
haga lo mismo en su vida diaria ante situaciones similares se habrá producido una
“transferencia de función” de la situación terapéutica a la vida diaria del cliente en
esos contextos. Es decir la transferencia de función conlleva la función de
equivalencia de los contextos dentro/fuera de la terapia, más la producción de un
cambio en un contexto que implica o hace cambiar la conducta en otro distinto; en
este caso en su vida diaria.

Las CCRs y las 5 reglas para intervenir de manera terapéutica se desarrollan en otros
apartados de este libro, en especial en el capítulo 2.

2.2. Una conceptualización funcional de los trastornos de personalidad como


problemas del yo y cómo intervenir en ellos

La conceptualización de los problemas del yo o personalidad unifica los


planteamientos conductistas radicales skinnerianos de la FAP con los
postskinnerianos de la Teoría del Marco Relacional que nutre a otros enfoques
contextuales funcionales de tercera generación, en especial a la Terapia de
Aceptación y Compromiso ( Valero y Ferro, 2015; Ruiz , 2015) .

En España la extensa obra de Marino Pérez Álvarez hace un desarrollo conceptual


sobre el Yo con implicaciones prácticas, aún más elaborado y extenso que los
originales de la FAP , la Teoría del Marco Relacional y ACT; complementando a estos
y aun aumentando su potencial horizonte Pérez Álvarez, 1991, 1996, 2004, 2012,
2014).,

Desde los años 90 en el campo de las terapias-cognitivas conductuales se viene


produciendo una revolución” llamada terapias de tercera generación que suponen
un retorno al conductismo radical skinneriano y post-skinneriano y un abandono del
mentalismo cognitivista anterior. Esto básicamente se debe a la investigación
experimental y al desarrollo de nuevas formas de terapia psicológica que están
dando cuenta de los fenómenos cognitivos y lingüísticos en términos conductuales-
funcionales (teoría del marco relacional) sin recurrir a constructos mentalistas
reificadores, y que están especificando modos concretos y precisos de intervenir y
modificar estos procesos, conllevando nuevos cambios en el modo de entender los
procesos cognitivos-lingüísticos, los procesos de la relación terapéutica y de hacer
terapia psicológica. En estos desarrollos se incluyen nuevas conceptualizaciones

29
funcionales del Yo, su génesis, trastornos y terapia.

Aunque hay muchas escuelas conductistas en la actualidad (por ejemplo el


interconductismo, el conductismo psicológico, el conductismo teleológico, etc.) aquí
referimos el conductismo radical de Skinner y sus derivaciones post-skinnerianas por
ser la versión más influyente en la actualidad en el campo de la psicología y la
psicoterapia. Comenzamos por la propia exposición del tema del yo por Skinner y
después seguimos con las principales exposiciones derivadas de este cuya línea más
representativa es la psicoterapia analítica funcional y por las posiciones post-
skinnerianas, especialmente la teoría de los marcos relacionales y su aplicación
terapéutica en la terapia de aceptación y compromiso (ACT); axial como en la
conceptualización que hace el psicólogo español Marino Pérez Álvarez que contiene
algunas novedades y aportes distintivos muy significativos respecto a las posiciones
conductistas previas.

A) En el planteamiento de Skinner: El yo como sistemas de respuestas


funcionalmente unificados muy relacionados con la conducta verbal

Las primeras conceptualizaciones conductistas radicales del Yo se encuentran en


Burrus F. Skinner (1904-1990) expuestas en obras como), “Ciencia y conducta
humana” (Skinner 1953/1977 “Conducta verbal” (Skinner, 1957/1981) y “Sobre el
conductismo” (Skinner, 1974/1986).

En Ciencia y Conducta Humana (Skinner, 1953) analiza el self/si mismo partiendo de


que la mayoría de las veces se utiliza el sí mismo como causa hipotética de la acción.
Esto se debe a que no conocemos las variables externas que son causa de la
conducta y ese lugar de desconocimiento es ocupado por la atribución de una
instancia dentro del organismo, en este caso el yo, el si-mismo. Esto, añade Skinner,
forma parte de la historia de la humanidad donde antaño los precursores de la
ciencia física atribuyan mediante un proceso de personalización, que Eolo desataba
el viento o Júpiter Pluvius hacia caer la lluvia, etc.

Otros problemas asociados al sí mismo como personalización, continua Skinner en


esta obra, es cuando el individuo actúa de manera distinta en diferentes ocasiones o
cambia de conducta, teniendo que recurrirse de nuevo a entidades interiores como
la personalidad o los rasgos de personalidad para explicar las conductas observadas.
Conceptos como el ello, el ego y el superego de Freud seguirían los mismos
derroteros. El ello sería le grupo de conductas reforzadas por reforzadores biológicos
primarios como el alimento, agua, contacto sexual y otras similares. El superego o
conciencia de la teología judeo-cristiana seria el uso de los medios de autocontrol
aprendidos del grupo de referencia, produciendo un conflicto con el ello;

30
recurriendo al ego como compromiso entre ambas instancias. Aunque Skinner no
está de acuerdo con estos constructos le reconoce a Freud que sus referencias a las
tres instancias representan importantes características de la conducta en un medio
social.

Aunque para Skinner el concepto de yo/sí mismo no es necesario para explicar la


conducta es un hecho social que se utilice el mismo; por lo que el busca explicarlo
conductualmente. Para ello recurre al sí mismo como un sistema de respuestas
funcionalmente unificado. Esto quiere decir que un conjunto de diferentes formas de
conductas (con diferentes topografías diría Skinner) tienen funciones similares tanto
en situaciones similares como distintas. Aquí se entienden como conductas no solo a
las acciones visibles, sino a toda la actividad del organismo como pensar, sentir,
recordar, hablar, etc. Esos sistemas de respuestas son los que suelen caer bajo la
personificación errónea, ya que a veces se espera que el individuo se comporte
según su personalidad atribuida y aparecen inconsistencias en sus conductas. Eso se
debe en que las causas de la conducta no están en la personalidad, ni en el
constructor interno (mental o fisiológico) sino en su historia personal y en las
contingencias actuales de sus conductas, que se refieren a la triple contingencia de
situación discriminativa antecedente-conducta-efecto/consecuencia de
reforzamiento.

Debido a que los sistemas de respuestas pueden estar controlados por triples
contingencias diferentes pueden darse “contradicciones, incongruencia en el
yo/personalidades” entre las personalidades o aparecer los yoes diferentes, con sus
respectivos roles, y así “El hombre piadoso que los domingos asiste a la iglesia puede
convertirse los lunes en un hombre agresivo y sin escrúpulos” (Skinner, pp. 312;
1977).

La comunidad verbal se interesa desde el inicio de la vida por preguntar a los


individuos “¿qué estás haciendo?” y preguntas similares que se relacionan a su vez
con los sistemas unificados de respuesta y que en un elaborado proceso de
aprendizaje social da lugar a mayores o menores grados de autoconocimiento. Hay
casos que por distintos procesos de aprendizaje aparecen problemas de ausencia de
autoconocimiento. Una persona puede hacer algo y no saber porque lo ha hecho, un
matemático quizás no pueda describir el proceso de resolución de un problema, o
alguien no saber por qué se enojó, o porque tuvo un fallo verbal (lapsus), etc. Puede
también incluso no percatarse o darse cuenta de que está haciendo algo como en
casos de conductas automáticas, reacciones corporales o gestos o palabras
inadvertidas propias. En suma una persona puede no reconocer o percatarse de las
variables de las cuales su conducta es función.

Muchas veces esa falta de conocimiento de las causas de la propia conducta se

31
atribuye a la represión. La represión generalmente es una forma de hablar para
describir la conducta castigada y sus efectos. Todas las circunstancias relacionadas
con la conducta castigada generan aversión y tendencia a actuar con la evitación, en
distintas formas, llamadas mecanismos de defensa. Los olvidos selectivos, ciertas
amnesias, etc. suelen ir relacionadas con esto.

Las conductas simbólicas y el uso de símbolos descritos por el psicoanálisis (Skinner


vuelve a reconocer sus importantes contribuciones sin compartir sus análisis), y que
se refiere al campo de los sueños, las fantasías y las obras artísticas se relacionan en
parte con las conductas perceptivas en ausencia de estimulación antecedente que se
identifique. Las interpretaciones de Freud sobre los sueños son plausibles para
Skinner. “Freud pudo demostrar ciertas relaciones plausible entre los sueños y
ciertas variables existentes en la vida del individuo” (Skinner, pp. 319, 1977). En
general comparte los descubrimientos freudianos en esta área pero lo relaciona,
también, con las circunstancias e historia de la vida del individuo pero en términos
de triple contingencia del análisis funcional. El análisis funcional es el método de
identificación de la triple contingencia relacionada con cualquier conducta interna o
externa.

Una de las aportaciones más importantes de Skinner es el análisis del lenguaje bajo
la perspectiva funcional que expone en su obra Conducta Verbal (Skinner, 1957)
pasada casi desapercibida para toda la tradición conductual y cognitiva conductual y
recuperada ahora con fuerza en las terapias de tercera generación y toda el
movimiento actual post-skinneriano. El análisis de las funciones del lenguaje es la
alternativa más fuerte frente a los análisis mentalistas del lenguaje, los procesos
mentales y las relaciones humanas basadas en este (incluido el tema del yo/self).

En la obra de Conducta Verbal, Skinner realiza un análisis funcional del lenguaje


como conducta verbal desde la perspectiva de la triple contingencia. En la obra
presenta cinco funciones de la conducta verbal que tiene lugar en las interacciones
humanas y en el sujeto mismo a solas (donde el mismo es el que se-habla y la
audiencia que se-escucha). Estas funciones o efectos del lenguaje está relacionadas
con múltiples situaciones de interacción humana, la propia relación terapéutica, el
yo y otros “tópicos mentalistas” que van desde la resolución de problemas, la
conducta inconsciente y la conducta creativa, entre otros múltiples tópicos
relacionados con el lenguaje. Todo ello desde una perspectiva no mentalista.

Las cinco funciones del lenguaje, que no hay que confundir nunca con la forma o
topografía de este, que presenta en esta obra son: (1) los mandos (respuesta verbal
controlada por las consecuencias que adoptan la forma de peticiones o mandatos);
(2) los tactos (respuesta verbal que está controlada por los estímulos discriminativos
antecedentes y que adoptan la forma de descripciones); (2) las ecoicas (respuesta

32
verbal bajo control de una estimulación verbal antecedente y con el reforzamiento
social como consecuencia que adopta la forma de imitación o repetición verbal); (4)
las intraverbales (respuestas verbales bajo el control de otras respuestas verbales y
del refuerzo social que adoptan la forma de responder y preguntar tipo ¿qué?,
¿quién?, cómo?, ¿Cuándo?, ¿por qué?, completar frases del otro, etc.) y (5) los
autoclíticos (respuestas verbales autorreferidas que tratan de perfeccionar o
corregir la propia conducta verbal del hablante, lo que se llama cambios
gramaticales). Los autoclíticos relacionales han sido desarrollados por los post-
skinnerianos de la teoría del marco relacional/Acto y el caso de los marcos deícticos
relacionados con las perspectivas del yo, que veremos en el apartado de los marcos
relacionales.

En su obra Sobre el conductismo (Skinner, 1974) responde en el capítulo llamado “El


yo y los otros” a varias cuestiones y malentendidos frecuentes sobre el conductismo.
Uno de ellos es que el conductismo descuida los aspectos subjetivos, que solo se
basa en la conducta observable externamente y que descuida los temas del yo, la
personalidad, etc. Skinner responde a estas críticas argumentando que en realidad
lo que se evita es cualquier forma de animismo o mentalismo pero sin negar el
estudio y explicación de los eventos privados como había hecho el conductismo
metodológico, que no debe confundirse con su conductismo radical (del latín “radix”
ir a la raíz de las cosas). La persona sin ser un agente generador de la conducta si es
un locus donde confluyen muchas condiciones ambiéntales y genéticas. Su identidad
está formada por esa confluencia en su historia personal.

En la obra referida antes analiza otros tópicos sobre el yo, como el tema de
autoconocimiento y como las personas suelen dar razones internalistas para su
conducta argumentando como se sentí o que pensaba justo antes de actuar de una
determinada manera (explicación que es idéntica a las de las psicologías
mentalistas), sin analizar a su vez a qué condiciones se deben esos sentimientos y
esos pensamientos, que siempre se van a relacionar con el análisis funcional de las
tres contingencias y la historia personal de cada individuo; ya que las explicaciones
internalistas son estaciones intermedias a su vez necesitadas de explicación.
También expone el autocontrol que afecta tanto a las respuestas fisiológicas como a
conductas operantes externas (hacer, decir-hablar) e internas (sentir, pensar, etc.)
donde una conductas se ponen bajo el control de otras en relación al manejo
siempre de sus consecuencias, y como este proceso de aprendizaje puede volverse
“automático” e “internalizado” a partir de acciones abiertas que al principio suelen
relacionarse con las instrucciones sociales de otros, hasta llegar a ser el propio
sujeto actor-receptor de su propia conducta sin necesidad del control externo de
terceros. También en ese texto se analizan otros temas como el control que ejercen
unas personas sobre otras a través de diversa prácticas sociales como la educación,
las prácticas gubernamentales o la psicoterapia.

33
Todos los temas referidos se relacionan con el origen y la modificación del yo, o sea
las pseudoexplicaciones mentalistas (muchas veces como reglas inadecuadas de
explicación; el autocontrol que suele aparecer con terminología mentalista como
auto-actualización y auto-realización (y que tiene que ver también con la
responsabilidad, añadimos nosotros); y los modos de control y cambio de la
conducta operante (voluntaria) mediante diversas instancias y organizaciones
sociales como las medidas gubernamentales, las prácticas de la enseñanza o la
misma psicoterapia.

B) En la Psicoterapia Analítica Funcional (FAP): El yo como unidad funcional verbal

La Psicoterapia Analítica Funcional (FAP) es una terapia de tercera generación que


surge en los años 90 y que tiene sus fundamentos en el conductismo radical de
Skinner y que se centra en la relación terapéutica como motor del cambio. Se basa
en el análisis funcional de la relación cliente-terapeuta, con referencia importante a
la conducta verbal, y desarrolla una conceptualización del yo, sus problemas-
trastornos y como intervenir en ellos. Junto a la terapia de aceptación y compromiso
(ACT) es la máxima exponente del conductismo radical en el campo de la
psicoterapia en la actualidad.

Sus creadores son Robert J. Kohlenberg y Mavis Tsai psicólogos norteamericanos de


la Universidad de Washington. En el planteamiento de FAP es esencial que los
problemas que refiere el cliente que le ocurren en su vida diaria como se hacen
presentes en la misma sesión de la terapia a fin de poder intervenir directamente en
su modificación aquí y ahora. A las conductas, en su mayor parte verbales, que se
relacionan con esas equivalencias fuera-dentro de la sesión (relaciones de
equivalencia) y que se presentan o se provocan en la misma sesión se les denomina
conductas clínicamente relevantes (CCRs). Son tres las CCRs con las que se trabaja en
terapia (a veces en combinación con otros procedimientos cognitivos-conductuales):
problemas del cliente que ocurren en la misma sesión (CCR1) cuya frecuencia se
busca disminuir; las mejorías de cliente que ocurren en la misma sesión (CCR2) cuya
frecuencia se busca aumentar sobre todo a través del refuerzo natural (evitando el
refuerzo artificial arbitrario), y el moldeamiento de las interpretaciones del cliente
sobre sus problemas y mejorías (CCR3) con el fin de la generalización de los cambios
a su vida diaria, todo ello mediante la aplicación de unas reglas terapéuticas que se
pueden observar y reproducir en múltiples contextos de relación terapéutica
(Kohlenberg y Tsai, 2007).

En la terapia de adultos Kohlenberg y sus colaboradores se encuentran a menudo


con problemas de los clientes referidos a su Yo, como autorreferencias verbales a
dificultades relacionadas con su yo, por ejemplo dificultades para saber lo que uno

34
quiere o siente, para ser auténtico y espontáneo, problemas de autoestima,
sensación de vacío interno, de tener varias personalidades, etc. que suelen caer en
las categorías clínicas de trastornos de personalidad.

Así para ellos es importante contar con una teoría del yo y sus problemas que le
permita intervenir sobre estos problemas en la sesión, siguiendo los criterios de FAP
en el marco conductista radical.

Kohlenberg y Tsai (2007) parten de una formulación conductual del yo. Se basan en
la identificación de la condiciones ambientales-relacionales que afectan al informe
verbal de la experiencia de hablar de su yo; asumiendo que en esa experiencia va
incluida también la experiencia no-verbal del yo. Este enfoque se aplica a la
comprensión del yo y sus términos equivalentes con la misma función. Para ellos es
fundamental identificar los estímulos que controlan la palabra “yo” ya que esos
estímulos en general, controlan la experiencia verbal y no verbal del yo.

De esa definición anterior se deriva de que el yo es esencialmente una hipótesis


sobre la conducta verbal referida al yo y sus equivalencias. Así se torna esencial
identificar diferentes aspectos de la conducta verbal como el control de estímulos,
las funciones de tacto verbal y la emergencia de las unidades funcionales verbales
que dan lugar a yo.

Aquí se parte del “hablo luego existo” (Kohlenberg y Tsai, 2001) como experiencia
que da lugar a que aparezca el yo. Hay que analizar que es el yo y como se forma,
siendo este el punto de partida fundamental (Valero y Ferro, 2015).

Habitualmente las formulaciones no conductistas del yo lo presentan como la


experiencia de sí mismo, como el origen de nuestras acciones, como gestos de acción
espontánea y como identidad personal; todas formulaciones ajenas al análisis
funcional de la conducta. Por otro lado las cuestiones del yo son importantes en el
contexto social y clínico. Para ello se hace necesaria una formulación conductual del
yo que para estos autores parte de la concepción de la conducta verbal de Skinner y
se complementa con la teoría del marco relacional de Hayes y cols.

La formulación conductual del yo se basa en varios aspectos (Valero y Ferro, 2015):


una serie de conceptos provenientes del análisis funcional de la conducta verbal (un
control estimular antecedente, una respuesta de tacto, unas unidades funcionales y
la emergencia de unidades funcionales); el proceso de aprendizaje de unidades
funcionales y su control privado y una serie de tres etapas del desarrollo del yo
(desde el yo verbo-x, al yo-x y por último al yo propiamente dicho).

Se entiende por unidad funcional a una secuencia o seria de conductas (en este caso

35
verbal) que se da en una situación que la hace probable (estímulo discriminativo
antecedente) y el reforzador contingente a la misma. El tamaño de la unidad
funcional depende de las condiciones que dieron lugar a su aprendizaje y puede
variar gradualmente desde decir “nana” a “manzana”, “veo una manzana”, en el
proceso de aprendizaje del niño/a. El asunto se vuelve más complejo cuando se
trata de aprender o moldear aspectos privados no accesibles a la observación
directa, como es el caso de necesidades del bebe de hambre, calor, etc.; teniendo
los adultos que echar mano de señales externas como el tiempo que pasó desde la
última ingesta, el calor de la habitación ante el llanto del bebe, etc. El caso aquí es
identificar las condiciones funcionales que dan lugar a las unidades verbales de tipo
yo.

Se proponen tres etapas en el desarrollo del yo como unidad funcional donde los
adultos juegan un papel esencial en el proceso de aprendizaje verbal del yo.

En la primera etapa se crean y refuerzan condiciones donde los adultos en


interacción con el niño tactan (describen lo que necesita el niño no visible ante
señales o estímulos externos visibles) las posibles condiciones privadas del niño (sus
necesidades privadas) ante señales externas en secuencias o unidades del tipo: “yo
quiero un helado, yo quiero un zumo, yo quiero a mamá, etc.-unidades
funcionales yo quiero”; “yo siento frío, yo siento alegría, yo me siento mal,
etc.unidades funcionales yo siento”; “yo tengo hambre, yo tengo sueño, yo tengo
muñeco, etc.unidades funcionales yo tengo; yo oigo, yo veo, yo hago, yo
pienso…etc.; YO VERBO X. Es esencial que los padre o cuidadores puedan tactar (ver
Skinner, conducta verbal de tacto) adecuadamente las condiciones privadas del niño.
Los fallos de tacto después pueden generar problemas del yo en su control
privado/público respecto a condiciones internas y externas asociadas a la
experiencia del yo.

En la segunda etapa de emergencia de unidades funcionales o respuestas verbales


yo tipo, se generan unidades del tipo “Yo quiero”, “Yo siento”, “Yo tengo”, Yo
pienso”, etc.; ese decir YO X. En la tercera etapa ya aparecería una experiencia
unificada del tipo YO (Kohlenberg y Tsai, 2007).

La Teoría de los Marcos Relacionales (Hayes, Barnes-Holme y Roche, 2001)


complementa la explicación de la emergencia de las unidades funcionales del tipo
Yo. Un marco relacional es una respuesta verbal relacional entre varios elementos
de referencia aplicada de forma arbitraria, controlada contextualmente
(contingencia de tres términos) y que cumple una seria de funciones concreta
(vinculación mutua, vinculación combinatoria y transformación de funciones).
Respecto a la cuestión del Yo explica la cuestión de las perspectivas o puntos de vista
subjetivos mediante los llamados marcos relacionales deícticos, donde tres de ellos

36
son importantes para esto: yo-tú (personas identidades), aquí-allí (espaciales) y
ahora-antes (temporales).

Toda esta conceptualización ayuda a los terapeutas conductuales para entender e


intervenir en procesos como los trastornos de la personalidad o trastornos del yo o
usar el mindfulness desde una perspectiva distinta. Por ejemplo aquí el mindfulness
se entiende no tanto como una técnica sino como un tipo de conducta que genera
un tipo de autoconciencia en el cliente que le ayuda a estar en presencia de
estímulos discriminativos aversivos tipo sensaciones, pensamientos, recuerdos, etc.
que le suelen evocar respuestas de evitación, sin recurrir a ellas (Valero y Ferro,
2015).

Respecto a los trastornos del yo (personalidad) la FAP genera toda una serie de
procedimientos de evaluación e intervención basados en el manejo de estos a través
de la relación terapéutica, con un cúmulo de investigaciones cada vez mayores que
dan cuenta de la afectividad de este planteamiento. La mayoría de los problemas del
yo son conceptualizados con un mayor o menor control privado de las experiencias
subjetivas en relación a condiciones públicas, como por ejemplo no saber que se
desea estando solo o en presencia de terceros, etc. (Valero y Ferro, 2015).

Desde FAP se ordenan los problemas del Yo en trastornos leves y trastornos graves
del yo (Kohlenberg y Tsai, 2007 y Valero y Ferro, 2015) en función de su control
privado vs. público de las respuestas “yo x” (yo pienso, yo siento, yo deseo, yo
necesito, etc.). La clave de la terapia consiste en transferir el control de las
respuestas “yo x” de lo público a lo privado.

Describen tres tipos de problemas del Yo de tipo leve: el yo inseguro, el yo inestable y


el yo con problemas para la creatividad y espontaneidad. El yo inseguro se
caracteriza a una persona que no sabe que siente, que quiere, que piensa. Suele
ocurrir en historias de aprendizaje donde los padres tienen dificultades para separar
sus propias necesidades de las de sus hijos; es decir supeditan las necesidades de
estos a las suyas propias. El yo inestable se caracteriza por personas con dificultades
para establecer relaciones íntimas, ya que les resulta aversivas como fuente de
inestabilidad y sufrimiento, recurriendo a la evitación de estas. Suelen relacionarse
con historias de castigo a la expresión de necesidades personales en situaciones de
intimidad, empezando con los progenitores, y se puede asociar al tipo inseguro. El
yo con problemas de creatividad y espontaneidad deriva de historia igualmente de
castigos a las propias conductas originales o creativas y a ambientes muy
normativizados y reglamentistas.

Los trastornos graves del yo van relacionados con ambientes y relaciones con
progenitores que suelen invalidar o actuar de manera muy inconsistente la

37
formación de unidades funcionales yo-x del niño/a que desembocan en
funcionamiento personal y social más limitado del individuo. Los más relevantes son
el trastorno narcisista de la personalidad y el trastorno límite de la personalidad. Los
narcisistas suelen provenir de ambientes donde no se ha atendido adecuadamente
sus necesidades básicas, ni se les ha valorado sus opiniones de manera congruente y
se ha tendido a un control público superficial con reforzamiento de mostrarse bellos,
mentirosos, poderosos, exigentes, encantadores o manipuladores. El control privado
de su yo es escaso a nulo y se hacen dependientes del control público externo en
exceso. Las personas con yo límite se caracterizan por la ausencia de control privado
de sus necesidades y emociones con gran control público de sus emociones y deseos
personales. Suelen provenir de ambientes familiares altamente invalidantes. Los
otros problemas de personalidad descritos en los manuales diagnósticos también
pueden ser analizados desde esta perspectiva, pero hasta el momento los más
estudiados han sido los apuntados aquí.

La intervención terapéutica con los trastornos del yo consiste en un conjunto de


intervenciones que conlleva la puesta en marcha de varias estrategias conductuales
básicas: (1) Reforzar el hablar en ausencia de claves externas específicas moldeando
la no directividad de la terapia gradualmente, (2) Ajustar las tareas terapéuticas al
grado de control privado presente en el repertorio del cliente, (3) Reforzar tanta
expresiones “yo x” como sea posible y (4) Usar técnicas de promoción del
mindfulness en la línea apuntada en párrafos anteriores (Valero y Ferro, 2015).

C) En la Teoría los Marcos Relacionales (RFT). La Terapia de Aceptación y


Compromiso (ACT): El yo como contenido, el yo como proceso y el yo como
contexto

La Teoría del Marco Relacional (RFT, por sus siglas en inglés, de Relational Frame
Theory) es una teoría del lenguaje y la cognición asentada en el conductismo post-
skinneriano del contextualismo funcional. La Terapia de Aceptación y Compromiso
(ACT, se pronuncia así, sin deletrear) se basa en la RFT.

El contextualismo funcional tiene una teoría de la verdad basada en el pragmatismo


filosófico y representa una versión del conductismo radical que pone énfasis en los
desarrollos postskinnerianos en el estudio de la conducta verbal para el tema del
lenguaje y la cognición (Pérez Álvarez, 2014).

La RFT se basa en el desarrollo de la investigación básica sobre la conducta verbal


para dar soporte a la ACT. Se centra en la habilidad humana para establecer
relaciones arbitrarias entre eventos a través de la conducta verbal y derivar

38
funciones nuevas sin que se hayan entrenado previamente. Es un campo potente
que parte del aprendizaje social de la conducta verbal y supone una alternativa a la
génesis del lenguaje basada en las teorías mentalistas de una supuesta gramática
universal y generacional o un equipamiento mental que da lugar al lenguaje
(Chomsky p.e).

Dentro de la gran variedad de relaciones funcionales la RFT se ha centrado


básicamente en los marcos relacionales de la vinculación mutua, la vinculación
combinatoria y la transformación de funciones. La vinculación mutua implica una
relación bidireccional entre dos eventos (p.e “una moneda de un euro es mayor que
una moneda de veinte céntimos”) se deriva una relación inversa en la otra dirección
(p.e “una moneda de veinte céntimos es menor que un euro”). Lo importante es
que el niño aprende en este caso no solo es aprender la noción del valor o tamaño
de la moneda, sino la arbitrariedad convencional del marco de relaciones en ese
contexto social. La vinculación combinatoria implica una relación transitiva de en la
que se combinan dos relaciones para derivar una tercera nueva función (p.e “Si
Juan es más rápido corriendo que José, y José es más rápido corriendo que Antonio,
Juan será más rápido corriendo que Antonio, etc.”). El caso de esto tan simple y
obvio es que constituyen casos donde se establecen nuevas funciones derivadas
que no han sido entrenadas ni reforzadas previamente, y eso sucede a través de la
conducta verbal. La transformación de funciones se refiere a cambios en las
funciones de los estímulos verbales mediante las que estos forman parte de una red
o marco verbal relacionados con un tercero (p.e “un niño preferirá un euro a una
moneda de cincuenta céntimos para comprar algo, aunque esta sea de menor
tamaño y nunca la haya usado antes, en virtud del marco vale más qué). En este
último caso tampoco son necesarias las contingencias directas para derivar nuevas
funciones sin entrenamiento previo (Pérez Álvarez, 2014).

Todo el poder funcional de las relaciones arbitrarias y de la derivación de funciones


se relaciona con la génesis del Yo y los problemas psicopatológicos donde a través
de la conducta verbal se generan marcos relacionales que devienen en inflexibilidad
psicológica, sobretodo en relación a la regulación de la evitación del malestar
emocional a toda costa y de manera lo más inmediata con el precio de apartarse de
una vida potencialmente valiosa (evitación experiencial) donde precisamente la ACT
tiene su campo.

Se han propuesto cuatro causas, desde la RFT, relacionadas con los problemas
psicológicos (incluidos los del yo). Estas cuarteo causas son: (1) la literalidad, (2) la
formación de categorías como contexto de evaluación y comparación, (3) la
búsqueda de coherencia y de dar razones y (4) el control de los eventos privados
(Gómez-Martín, López-Ríos y Mesa-Manjón, 2007).

39
La literalidad se relaciona con la función arbitraria de relacionar eventos verbales
con situaciones aversivas, por ejemplo la pérdida de un ser querido o el haber
pasado por una experiencia de temor o amenaza no genera malestar solo por el
contacto directo con esas situaciones sino con todo el marco relacional verbal en
torno a esto, como por ejemplo hablar o recordar lo sucedido, incluso por la
transformación de funciones suceder en situaciones diametralmente opuestas
como estar tranquilo o en situaciones supuestamente neutrales, etc.; conllevando
todo ello una evitación generalizada para no experimentar tales eventos. Además
la literalidad no distingue entre el contenido y el contexto de nuestra conducta
verbal. Por ejemplo cuando una persona piensa de sí misma “Yo soy una persona
miedosa e insegura” se da desde la RFT una equivalencia funcional (tiene la misma
función o efecto) el contenido (“yo soy tal…”) con el contexto (la persona global
donde se da ese contenido verbal). Así no discrimina, no diferencia ambos niveles,
estando la persona atada a su yo-concepto, y funcionando por este en su vida.

La formación de categorías con comparaciones y evaluaciones consiste en dividir el


mundo en categorías arbitrarias que sirve para evaluar, juzgar y comparar como
criterios los eventos y las personas. Esto puede generar distanciamiento o
separación psicológica (por ejemplo, “nosotros los castellanos frente a los gitanos”,
“los clínicos versus los pacientes”, etc.) o servir de base a la formación de prejuicios,
estereotipos o visiones sesgadas de las personas. También podemos aplicar estos
marcos relacionales para juzgar y evaluar nuestra propia conducta y nuestro propio
yo al definirnos como “tímidos”, “torpes”, “nerviosos”, etc. También esta función
está implicada en los conflictos relacionales cuando “etiquetamos” a los otros bajo
categorías (p.e “egoísta”, “intransigente”) que nos restringe otras posibilidades
relacionales. Y también cuando nos comparamos nuestras actuaciones con un
marco de referencia de autoevaluación, por ejemplo cuando usamos referencias a
estándares de acción que no hemos cumplido (p.e “no fui lo suficiente capaz de…y
por lo tanto no me merezco tal”, etc.). El efecto “etiqueta” nos puede llevar a
actuar según las mismas sin la suficiente flexibilidad para afrontar la variedad de
situaciones de la vida.

La búsqueda de coherencia y de dar razones se relaciona con la presión y


aprendizaje social a que seamos coherentes entre nuestro decir y hacer, y que
demos sentido a nuestra experiencia según unos cánones de referencia social que
se hacen personales; incluido el “llevar razón”, etc. Una implicación es la necesidad
de “hacernos historias coherentes respecto a nosotros mismos, nuestra experiencia
etc.” y de buscar soluciones también coherentes con esos criterios, llevando
muchas veces a una rigidez extrema. El extremo mayor de esto es cuando nos
importa más llevar la razón aunque la evidencia real sea la contraria (Gómez-Martín,
López-Ríos y Mesa-Manjón, 2007). Los propios estados internos se pueden convertir
en razones coherentes para hacer o dejar de hacer cosas; como en el caso muy

40
frecuente de que la persona diga, “estoy triste y no tengo ganas de salir y por lo
tanto no voy a salir” o en el caso de coherencia sobre el yo a “como soy así no
puedo cambiar eso”. En todos estos casos se aumenta la inflexibilidad psicológica.

Y respecto al control de los eventos privados como condición necesaria para llevar
una vida adecuada o feliz (Gómez-Martín, López-Ríos y Mesa-Manjón, 2007). La
función aprendida es la regla verbal o creencia de que para llevar una vida feliz es
necesario eliminar el malestar. Toda esta concepción está al día en la vida social
cotidiana y hasta en las prácticas médicas y psicológicas. El problema es que en
muchas situaciones de la vida es necesario convivir y estar dispuesto a tener
malestar si queremos avanzar en direcciones valiosas. El fenómeno de la evitación
experiencial conlleva la máxima aplicación del control de los eventos privados, y por
lo tanto la disminución del horizonte de una vida valiosa más allá de la mera
reducción del malestar sintomático, o la reducción del sufrimiento que muchas
veces no solo es imposible, sino que reduce el llevar una vida significativa. Si la vida
de una persona gira por ejemplo en evitar a toda costa experimentar ansiedad,
tristeza, etc. suele generar más problemas que los que resuelve y caer en una
restricción de movimiento y desenvolvimiento en la vida. Esto no quiere decir que
todas las evitaciones de malestar sean disfuncionales, sino solo aquellos que
conllevan el alejamiento de una dirección valiosa en la vida.

Dentro de la RFT y de la ACT se distinguen tres dimensiones del Yo o del si-mismo


(Wilson y Luciano, 2007; Hayes, Strosahl y Wilson, 2014):

1-Yo conceptual o Yo contenido: El niño va aprendiendo a responder a quién es el,


que hace el mismo, que hace los otros que le rodean, que siente, piensa y quiere. A
través de este proceso de aprendizaje de discriminaciones él/ella aprende a definir
su si-mismo en relación a conceptos o contenidos donde se describe como es, sus
virtudes y defectos, sus preferencias, etc. El hecho es que muchos problemas
posteriores de los clientes que acuden a terapia se deben a una extrema fusión
(apego o identificación con contenidos mentales) de los clientes a su yo-conceptos.
La ACT considera que esa fusión al yo-concepto restringe muchas posibilidades de
flexibilidad psicológica, y no solamente cuando por ejemplo el autoconcepto de sí
mismo es negativo, sino incluso cuando es positivo. Por ejemplo una persona puede
funcionar con el autoconcepto de “ser muy bondadosa” y tener muchos problemas
en relaciones donde otras “abusan” de ella. En ACT un objetivo básico es disminuir
la fusión de la persona con su yo-concepto usando sobre todo los marcos deícticos
de toma de perspectiva a través de intervenciones que buscan alterar el marco
relacional verbal, no trabajando con los contenidos, por ejemplo como haría la
terapia cognitiva con el cuestionamiento de autoconceptos negativos mediante el
diálogo socrático o la comprobación empírica de esos autoconceptos tanto fuera
como dentro de la sesión, sino trabajando con la modificación de las funciones del

41
marco relacional (mediante prácticas metafóricas, ejercicios experienciales, etc.;
consistentes con la evaluación funcional verbal previa). Las intervenciones de ACT
se suelen combinar con las de FAP en la práctica clínica.

2-Yo como proceso de autoconciencia: Cuando en ACT se asume y se practica que a


vinculación del yo a cualquier tipo de contenido conceptual es una seria limitación.
Consiste en aprender a situarse en el aquí y ahora de la experiencia inmediata y
observar desde ella los distintos contenidos mentales que fluyen continuamente.
Por lo que está relacionada con el mindfulness y como el “piloto automático” de los
contenidos mentales tratan de empujarnos a secuencias habituales de acción,
mientras la observamos sin juzgarlos ni precipitarnos en ellos, mediante nuestro
“yo observador”. En la vida cotidiana este proceso se fomenta de manera más
general indirecta cuando aprendemos a responder a las preguntas de qué sentimos,
pensamos, deseamos, etc.

3-Yo como contexto o perspectiva: Deriva de los marcos deícticos de la perspectiva y


como lo aprendemos en el desarrollo. Implica los marcos de distinción de
identidades (yo vs tú, otros, etc.); los marcos espaciales (aquí vs allí, etc.) y los
marcos temporales (ahora vs antes/después, etc.) y como en todos ellos subyace el
yo como contexto. Es decir el mismo yo que está presente en todos los marcos
deícticos como autoconciencia es el mismo yo cuando estamos con otras personas
con sus identidades particulares, el mismo yo cuando cambiamos de situación
espacial y el mismo yo cuando desde el presente continuo pensamos o recordamos
el pasado o planteamos el futuro. A base de practicarlo se produce la trascendencia
del yo como perspectiva básica a todas las demás perspectivas y marcos
relacionales.

En ACT es también un objetivo básico el trabajo con el yo contexto para defusionar


o desvincular el yo de sus contenidos restrictivos y limitadores que derivan de la
literalidad del lenguaje, sus marcos evaluativos-comparativos, la búsqueda de
coherencia y razones excesivas y el control de los eventos privados a toda costa. El
yo contexto es el mayor antídoto a la inflexibilidad psicológica y a la evitación
experiencial.

D) En el planteamiento de conductual-fenomenológico de Marino Pérez Álvarez: El


yo como cuerpo, alteridad y excentricidad

Marino Pérez Álvarez psicólogo español, posiblemente sea el autor conductista


actual que más ha desarrollado una concepción conductual del sujeto más completa
y elaborada a nivel internacional, nutriéndose no solo del conductismo sino también

42
de la filosofía para dar a entender una elaboración de la subjetividad y del yo
bastante elaborada (Pérez Álvarez, 1991, 1996, 2004, 2012, 2014).

Lejos y en contra de la imagen popular del conductismo, y que es asumida por otras
perspectivas psicológicas, cuando se refieren a la imagen que tienen del sujeto
como pasivo y reactivo a los estímulos ambientales, el conductismo radical presenta
una noción del sujeto de carácter activo (Pérez Álvarez, 1991).

Ese sujeto activo es el sujeto operante. Aunque la conducta es de los sujetos, está en
función de ciertas condiciones ambientales específicas. El sujeto de la conducta está
“sujeto” y es función del ambiente socio-cultural e histórico. Si queremos modificar
la conducta hay que producir cambios en el ambiente no en la mente o en la psique.

La conducta está en función de sus consecuencias no de los estímulos antecedentes.


Así lo principal es la causa final (las consecuencias) y no la causa antecedente
mecánica estimular. A través de las consecuencias (ley del efecto) la conducta se
fortalece (se refuerza), se debilita (se extingue) o se selecciona (se discrimina).
Ahora bien la conducta logra sus efectos en una condiciones que se denominan
contingencia de tres términos (aunque puede ser de cuatro y más), conformada por
una situación antecedente no determinante sino ocasional que la hace más
probable (estímulo discriminativo), la propia conducta y las consecuencias
reforzantes, dando lugar al esquema A-B-C.

Respecto a la subjetividad el planteamiento de Pérez Álvarez en 1991 (Pérez Álvarez,


1991) que presenta en un capítulo de un libro sobre modificación de conducta,
titulado “El sujeto en la modificación de conducta: un análisis conductista” (Pérez
Álvarez, 1991) es identificar los llamados procesos psicológicos con operaciones
conductuales que suponen la interacción del sujeto con los objetos del mundo,
ambiente externo e interno, pues parte del ambiente está en su interior, debajo de
su piel. La historia de interacciones sujeto-objetos del mundo, llamada historia de
aprendizaje da lugar a un sujeto que va cambiando globalmente por completo y de
manera unitaria sin tener que recurrir a explicaciones mentalistas con recurrencia a
esquemas cognitivos y constructos similares. Hay que tomar nota que esa
interacción con el mundo no se da en términos de su dimensión física, sino en su
sentido psicológico. El sentido psicológico surge aquí mediante las operaciones del
sujeto en el mundo, de las funciones o efectos de su conducta en el mundo, de
cómo le va en la vida mediante sus acciones en esas circunstancias. La recurrencia
de Pérez Álvarez a Ortega y Gasset es constante en sus textos sobre el sujeto. Al
menos hasta esta fecha de 1991 la concepción del sujeto operante sigue en general
los delineamientos skinnerianos tradicionales.

En 1996, Pérez Álvarez que introduce en España las primeras referencias

43
postskinnerianas de las terapias de tercera generación (que tienen una versión
mentalista también) comienza a replantearse la cuestión del yo con ciertas
novedades significativas (Pérez Álvarez, 1996) presentadas en su obra “La
psicoterapia desde el punto de vista conductista” (Pérez Álvarez, 1996). Por lo
pronto al plantear la cuestión del yo afirma que los conductistas en general han
maltratado o repudiado esta cuestión; y que es necesario retomarlo desde un
planteamiento fenomenológico.

El nuevo planteamiento fenomenológico conlleva a afirmar que el yo no es la


conducta, ni el sistema organizado de respuestas (Skinner) o de repertorios de la
conducta (conductismo psicológico de Staast). El problema para Pérez Álvarez (Pérez
Álvarez, 1996) es que el yo no es la conducta pero al mismo tiempo no es algo
distinto a ella. Es decir no es esta o aquella conducta concreta, ni si quiera todo el
conjunto de las conductas, afirma, pero solo a través de ellas se puede hacer
referencia al yo. En esta especie de paradoja se mueve su argumentación en esta
fecha.

Continúa en la exposición anterior refiriendo que el yo no es ninguna sustancia


interna ni la agencia o causa de la conducta ni una parte de la conciencia ni ninguna
instancia metafísica o mentalista interna. Se pregunta entonces “¿qué es el yo?” y
responde a esta pregunta desplegando tres aspectos: la construcción cultural del yo,
la versión dramática de ser conducta sin agotarse en ella y las implicaciones
prácticas del yo en la clínica.

Respecto a la construcción cultural del yo (Pérez Álvarez, 1996) se inicia en la


interacción del niño con sus cuidadores y sigue un largo proceso de interacción
social donde el lenguaje se convierte en el elemento discriminante distintivo donde
el sujeto desarrolla una identidad para ser-si-mismo sobre la base de su cuerpo,
identidad que se basa en la seguridad como elemento fenoménico existencial. De
todos modos dice Marino que el yo no se reduce ni al cuerpo ni al lenguaje aunque
debe contar con ellos para conformar su identidad. Sobre esta base primaria va a
surgir un yo fenoménico o psicológico como continuidad de conciencia (ver
apartado de los marcos relacionales) de sí misma que por vía reflexiva repara en el
sentido de su trayectoria en la vida. Mediante prácticas socioculturales de tipo
verbal (Kohlenberg y Tsai. 1991) surge la configuración del yo operatorio (ver
apartado de FAP) como unidad funcional y mediante el aprendizaje relacional (ver
apartado de ACT) aprenderá las perspectivas y la referencia a su yo como la
perspectiva particular propia.

Lo que este autor pone de nuevo en esta concepción del yo no es desde luego las
referencias a la FAP o la ACT en la construcción del yo sino la referencia al aspecto
fenoménico del cuerpo como base de la identidad referencia ausente en las

44
construcciones norteamericanas de ACT y FAP. Sigue en ello el análisis de Sartre
sobre la triple dimensión del cuerpo: el cuerpo-para-mi como estructura
permanente que da soporte a mi conciencia del mundo y proyecto personal hacia mi
futuro; el cuerpo-para-otro que resulta un instrumento para la utilidad o la aversión
en las relaciones recíprocas y el cuerpo-para-otro en cuanto cosificación en cuanto a
la mirada del otro que me reduce a objeto y punto de vista ajeno. Aquí el yo se
configura como cuerpo en relación a otros cuerpos, donde aparezco bien como útil o
como obstáculo y expuesto a su mirada. Así se desarrolla la autoconciencia primero
habiendo sido objeto para los demás como cuerpo y de la percepción de los cuerpos
ajenos. Los cuidados y la presentación del propio cuerpo se vuelven así importantes
en la vida cotidiana. De esto deriva que la vergüenza posiblemente sea el afecto
más perturbador del yo y de las relaciones interpersonales ya que se relaciona con la
presentación del cuerpo que cae bajo la mirada ajena. Otros fenómenos como el
narcisismo está relacionado con la presentación del cuerpo como elemento salvador.
(Pérez Álvarez, 1996).

La otra gran referencia constitutiva del yo, además de los aspectos fenoménicos del
cuerpo, tampoco recogida en FAP y ACT ni en los textos skinerianos, es la seguridad
ontológica (Pérez Álvarez, 1997). Esta se relaciona con la confianza aprendida o su
falta en las atenciones afectuosas y protectoras de los cuidadores y que se ha
descrito en el psicoanálisis relacionado con la confianza básica (Erikson), un espacio
potencial (Winnicott), los vínculos afectivos (Bowlby), etc. La sensación de seguridad
existencial se relaciona con la presencia/ausencia de los demás, la espera de su
presencia, etc. Marino apunta que esta dimensión del yo es muy importante en una
concepción conductual abierta que haga referencia a las aportaciones de otras
perspectivas de la psicología. Este no es un hecho vano, ya que algunos
psicoanalistas reconocen por su parte las interesantes aportaciones del “conductista”
Marino (Pérez Álvarez, 2013).

El sujeto operatorio, la identidad fenoménica corporal y la seguridad ontológica


ofrecen una continuidad y una trayectoria en la vida que configuran un Estilo de
Vida (Adler) como conjunto de hábitos y orientaciones en la vida con sensación de
unidad y continuidad. El propio estilo de vida puede verse envuelto en dilemas de
posibilidades y dificultades entrando en una especie de remolino donde el estilo de
vida se puede sostener de modo inauténtico mediante ilusiones y ficciones y
arreglos neuróticos descritos por Adler (Pérez Álvarez, 1996).

Respecto a la cuestión del doble aspecto del yo como actor y personaje, sujeto y
objeto, que configura su dimensión dramática, recurre a la aportación de Ortega y
su formulación de “yo soy yo y mis circunstancias” anotando que se trata de un par
conjugado donde cada termino se define por el otro recíprocamente y de modo
circular dialécticamente sin referencias tautológicas (explicaciones circulares que

45
son frecuentes en la psicología mentalista cognitiva y en los sistemas diagnósticos
donde los constructos se justifican por la conducta y esta se explica por ellos). El
individuo puede que esté tan envuelto en los papeles de la vida realiza sin la
suficiente distancia cayendo en la neurotización mecánica de la vida. Puede al
contrario actuar desde una hiperreflexividad incrementada en exceso quedando
abrumado por su propia subjetividad y enredamiento interior (“mental”). También
uno se puede percibir a si mismo construyendo personajes inauténticos y
codificadores e incluso produciendo una disociación entre el mismo como actor y
como personaje con el efecto de un fingimiento o falso yo. Las implicaciones clínicas
están en incorporar a la terapia todas estas cuestiones junto a las aportadas por ACT
y FAP en torno a los problemas del yo (Pérez Álvarez, 1996).

En este momento de la teorización de Pérez Álvarez (Pérez Álvarez, 1997) se observa


en sus planteamientos como incorpora a su noción de sujeto operante inicial
aspectos provenientes de la fenomenología, del psicoanálisis, de la psicología
adleriana y otras fuentes de la filosofía (sobretodo Ortega) y otras disciplinas que
ponen el acento en la necesidad de desarrollar una visión del sujeto y del yo
conductista pero flexible a las aportaciones de otras perspectivas que sean útiles
tanto para la comprensión como para el tratamiento de los problemas del yo.

La siguiente formulación del yo que esta vez titula “La persona entra en escena” en
su libro “Contingencia y drama” (Pérez Álvarez, 2004) parte de la afirmación de que
la noción de persona es necesaria en el conductismo, y que la persona no es el
organismo, desafiando un concepto habitual en la tradición conductista previa. Hace
un repaso a las concepciones conductistas de la persona en el conductismo que él
considera oblicua e indirecta, mencionando de nuevo al sistema organizado de
respuestas de Skinner, el repertorio de conductas de Staast y la noción de unidad
funcional de Kohlenberg y Tsai, no para rechazarlas, sino para viéndolas
fundamentales las percibe como insuficientes en ciertos puntos.

Un aspecto extraño a la tradición conductista es la experiencia del yo o del sujeto


como un todo. De nuevo remite a la corporalidad como fundamento primero de la
formación de la identidad personal, pero esta vez destacando el cuerpo como un
todo sensible a dos experiencias fundantes, como el orgullo y la vergüenza como
experiencias positivas y negativas que constituyen la base de las experiencias auto-
reflexivas principales (Pérez Álvarez, 2004). Aquí orgullo se refiere al amor propio
que cada uno se debe a sí mismo como persona. “La vergüenza es el sentimiento
más profundo de la persona por que se da sobre todo en la cara” (Pérez Álvarez, pp.
167. 2004). El orgullo y la vergüenza construyen así la unidad y el centro del control
privado como referente discriminativo que confirma o desconforma como operación
emocional la presencia de la persona (Pérez Álvarez, 2004).

46
En esta obra de 2004 también se hace referencia a varias cuestiones como las cuatro
causas aristotélicas refiriéndose a los procesos operatorios de cualquier conducta
que en psicología mentalista se suele presentar bajo el oscurantismo y la aberración
del procesamiento de la información cual homúnculo dentro de la cabeza para
explicar la relación contingente e interactiva sujeto-ambiente. Además de referir los
tópicos del yo mencionado en la Teoría de los Marcos Relacionales (RFT) y las causas
de la psicopatología del yo (ver apartado de ACT y FAP) al hablar de la persona como
sujeto operante hace mención a la cuestión de la responsabilidad tema
prácticamente inédito en la tradición conductista (Pérez Álvarez, 2004).

Para argumentar la cuestión de la responsabilidad (y de a voluntad) no la minimiza


ni la rechaza fuera del campo conductista sino que la resitúa no en un origen
misterioso en el interior de la persona sino en su historia personal en el proceso de
socialización donde el individuo va “interiorizando” el control social de su conducta
hasta llegar al autocontrol del que se suele hablar como “fuerza de voluntad”. El
control último de la conducta siempre está en las contingencias, aún el autocontrol y
la responsabilidad que deriva de este. (Pérez Álvarez, 2004).

Las contingencias no operan de modo determinista y mecanicista sobre la conducta,


sino de modo probabilista, y la conducta operante (voluntaria) es una posibilidad
que cabe llevarse a cabo o no, de modo que existe un ámbito de libertad de acción
que se recoge en el mismo conductismo en lenguaje técnico como la “operante libre”
(Pérez Álvarez, 2004), aspecto que afirma Marino no debe resultar raro al
conductista donde el mecanicismo determinista no es su lugar, sino el probabilismo
que sugiere un efecto condicional más que una determinación absoluta. El apartado
de la persona del texto referido acaba con una frase significativa; “Por más que
“sujeto” a todo tipo de controles, es un sujeto responsable capaz de operar con
voluntad. Dentro del determinismo de la gran voluntad personal, que el propio
Schopenhauer reconocería como para no reconocerlo un conductista” (Pérez Álvarez,
pp. 190; 2004).

La perspectiva fenomenológica conductual de Marino Pérez Álvarez se sigue


desarrollando en obras posteriores ya aplicada a temas como la psicopatología y la
psicoterapia como aparecen en sus obras “Las raíces de la psicopatología moderna.
La melancolía y la esquizofrenia” (Pérez Álvarez, 2012) y “Las terapias de tercera
generación como terapias contextuales” (Pérez Álvarez, 2014). En la obra referida de
la psicopatología de la melancolía y la esquizofrenia presenta la paradoja de la
autoconciencia en el dilema humano ya que esta puede volverse problemática
mediante la hiperreflevidad como condición general subyacente a la mayoría de los
trastornos psicopatológicos incluyendo como ámbito más abarcador a la
inflexibilidad psicológica y la evitación experiencial de ACT y otras formulaciones
transdiagnósticas. La hiperreflexividad se refiere a varias formas de autoconciencia

47
intensificada donde el sujeto se toma a sí mismo como objeto de preocupación y
reflexión excesiva que le lleva a interrumpir su necesaria articulación con el mundo
circundante.

En el libro de las terapias de tercera generación (Pérez Álvarez, 2014) vuelve a la


necesidad de una noción de persona como una teoría del sí mismo como otro que
recoge las aportaciones sobre el yo de ACT y FAP pero trata de ampliarla para dar
cabida a las diversas demandas de psicoterapia, comprenderlas y tratarlas. En esta
obra expone que la unidad personal de cada cual, su identidad no es auto-originaria
sino construida con “materiales de segunda mano” como el lenguaje; y que esta
identidad no solo se mueve en el doble aspecto que enunció en obras anteriores
como sujeto-objeto (persona/personaje), sino también en el doble aspecto de la
permanencia y cambio, mediante la que uno permanece como identidad, a lo largo
de un permanente cambio, a lo largo de la vida, donde uno es a la vez uno mismo y a
la vez otro. Aquí aparece de nuevo el cuerpo como base de la identidad personal y
como medio de nuestra relación con el mundo, concepción ajena a los procesos
mentales inferidos de los constructos que necesitarían a su vez explicación. El
cuerpo como medio y como un objeto más del mundo entre los demás cuerpos y
objetos del mundo, donde los demás pueden usarlo, cosificarlo mediante la mirada y
los usos abusivos o instrumentalizarlo para diversos usos (Pérez Álvarez, 2014).

En la obra anterior hace mención a la obra de Paul Ricoeur el “Si mismo como otro”
(Ricoeur, 1990) donde la concepción del yo se mueve entre el polo de la exaltación
iniciada desde Descarte hasta Husserl y su disolución iniciada por Hume continuada
por Nietzsche y que llega hasta el budismo. Es decir la concepción del yo se mueve
entre la exaltación del cogito como centro agente de los actos y el cogito despojado
y descentrado de su poder fundante. Pues bien, la obra de Ricoeur se trata de abrir
paso entre esas dos concepciones polarizadas, que Marino considera fundamental y
relevante para el abordaje de problemas clínicos desde tres ángulos (Pérez Álvarez,
2014): (1) La permanencia de la identidad perdurable en la dialéctica con la alteridad.
(2) La estructura heterogénea de la persona como un si-mismo como otro. (3) Papel
de la narrativa como configuración de una identidad a partir de la heterogeneidad,
que Marino resume en dos cuestiones:

(1)Idem-Ipse: permanencia y variabilidad. La identidad ídem se refiere a la identidad


que permanece a lo largo del tiempo idéntica a la misma (llamada también
mismidad). La identidad ipse se refiere a la identidad que permanece la misma pero
como alteridad que integra el otro y lo otro (ipseidad). La mismidad responde a la
pregunta que soy y la ipseidad a la pregunta quién soy. Ambas son facetas de la
misma personalidad sin contradecirse. El desarrollo del carácter se relaciona con la
mismidad, aunque lleva incorporada la contribución de los otros y del otro como
ipseidad. El dar la palabra o prometer algo a alguien, empeñando su palabra, es la

48
expresión mayor de la ipseidad ya que no nace del carácter de cada cuál sino de
quién que empeña su palabra con otro, aunque cambien los deseos, las ganas, e
incluso las circunstancias. En la promesa, dice Marino, la mismidad y la ipseidad
dejan de coincidir. La promesa es el modelo de la ipseidad, pero también abarca a
los proyectos de la vida, que vienen a ser promesas que uno se hace a sí mismo y
compromisos que contrae uno con los demás.

(2)La identidad narrativa como poética de sí mismo. Cuando nos comprometemos


en las promesas y los proyectos nos distanciamos de nuestra propia mismidad
contando con nuestras posibilidades. Ese proceso produce a la larga una
incorporación de las discordancias a nuestra propia identidad en el doble aspecto
idem-ipse. También el orientarnos por los valores y los acontecimientos de la vida
pueden ser discordantes con la mismidad y formar parte de este proceso. Los
eventos inesperados y los reveses de la vida suponen una discordancia de nuestra
identidad a las que tratamos de dar sentido mediante las narrativas. La narrativa
trata de responder por el quién es el autor de la acción, quién hizo tal cosa o a quién
le sucedió tal evento. Todo ello se simboliza en el nombre propio que nos da soporte
de permanencia en el tiempo. Es una poética o poiesis en el sentido de que
componemos una configuración de sentido a partir de acciones y acontecimientos de
la vida.

Otro aspecto sobre la identidad al que hace mención Marino es la “esencial


excentricidad humana” basándose en la antropología de Helmuth Plessner (1892-
1985) que expone la posición excéntrica. Esta es la posición que cada uno de
nosotros podemos adoptar respecto a nosotros mismos, respecto a los si-mismos,
posibilitada por nuestra doble condición de ser un cuerpo y de tener un cuerpo.
Cuando vivimos nuestro cuerpo lo sentimos como centro de sensaciones, acciones y
relaciones, y cuando lo vivimos como objeto desde fuera lo percibimos de modo
descentrado (Pérez Álvarez, 2014). Así la posición excéntrica puede ser fuente de
posibilidades ante una distancia del cuerpo adecuada o problemática si se vive con
extrañeza y separación excesiva.

Basándose en la identidad fundamentada en el cuerpo, la alteridad como otro y la


posición excéntrica, Marino (Pérez Álvarez, 2014) expone las implicaciones para la
psicoterapia de todo esto: Para comprender las experiencias de los clientes es
necesario comprender a la persona en sus circunstancias como se propone desde el
conductismo contextual, pero también es necesaria una hermenéutica
fenomenológica de las que carecen las terapias contextuales de tercera generación,
y que den cuenta de las cuestiones de la corporalidad, la identidad y la
intersubjetividad de un modo más abarcador y comprensivo. También es necesario
comprender su espacio vivido como conjunto de relaciones interpersonales e
intrapersonales que incluyan el horizonte de sus posibilidades (proyectos, valores,

49
compromisos etc.) en relación con su ambiente. Y como tercera implicación
terapéutica crear un contexto experiencial y experimental que ayude a la persona a
salir de la situación problemática aumentando su flexibilidad y libertad psicológica
pero siendo realista sin promesas excesivas. La terapia es más bien un “rito de paso”
que una intervención clínica a imagen médica, desde la perspectiva de dramas
personales-sociales en vez de enfermedades.

Desde nuestro punto de vista la obra de Marino está “a la última” de los avances del
conductismo contextual, pero “siempre un paso más delante de estas”,
reconociendo sus aportaciones, pero sin dejarse seducir completamente por ellas,
señalando sus carencias y proponiendo alternativas desde una concepción filosófica
y clínica relevante.

También consideramos que sus aportaciones con muy interesantes para ampliar los
horizontes de otras perspectivas de la psicoterapia y para acercar posturas no
necesariamente bajo la integración forzada, sino más bien en el reconocimiento
mutuo de aportaciones a un tema tan complejo como el de la persona y su contexto
de vida.

2.3. Un punto de encuentro con otras terapias, en especial con las de tercera
generación, aún más con la Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT).

La FAP con su conceptualización de las CCRs y sus 5 reglas de intervención se ha


combinado de manera efectiva con numerosas terapias de segunda generación (por
ejemplo la terapia cognitiva de Beck) y de tercera generación (como la Terapia de
Aceptación y Compromiso, La Terapia de Activación Conductual y la Terapia
Dialectica Conductual); así como también con terapias que trabajan con el
Mindfulness, aumentando la eficacia previa de aquellas terapias (Valero y Ferro,
2015). También se ha combinado de manera efectiva con otros enfoques de terapia
no cognitivos-conductuales como las terapias psicodinámicas y las terapias
feministas (Kanter, Tsai y Kohlenberg, 2010).

Respecto a la integración de FAP con la Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT)


Kanter, Tsai y Kohlenberg (2010) destacan los siguientes aspectos:

1º-Complemento de los aspectos intrapersonales de la ACT en cuanto a la relación


del sujeto con sus experiencias emocionales evitadas y su horizonte valorativo; con
los aspectos interpersonales de FAP. Su integración sin embargo está en proceso más
que ya realizada en la actualidad y admite muchas variantes y perspectivas.

50
2º-Un autor conductual, Callaghan y cols. (2004), refiere al menos tres formas de
vincular FAP y ACT:

a)-Usar la propia relación terapéutica según las 5 reglas de FAP para fomentar la
flexibilidad psicológica mediante la promoción de habilidades de aceptación y
acciones comprometidas. Mediante el trabajo con la relación se buscan los objetivos
intrapersonales de la ACT.

b)-Utilizar elementos de la ACT mientras se hace terapia FAP de modo que se ayuda
a los clientes a responder de manera diferente y defusionada as sus contenidos
verbales y emocionales para que reconecten mejor con la experiencia relacional y
sus potenciales cambios. Aquí se utilizan las estrategias de aceptación, mindfulness
con atención plena y clarificación de valores con acciones comprometidas con el
objetivo de que el cliente genere relaciones interpersonales más significativas
dentro y fuera de la terapia.

c)-Utilizar tanto elementos de ACT como de FAP desde el principio haciendo


intervenciones en los aspectos intra/interpersonales desde el aquí y ahora de la
situación de la terapia y la relación en curso.

Una forma poderosa en que ACT viene al auxilio de los terapeutas que están
trabajando FAP con sus clientes es cuando estos terapeutas experimentan
sentimientos difíciles hacia sus clientes y que afectan a la relación con estos, ya que
se suelen evitar alejando a ambos del contacto con experiencias potenciales de
cambio. Usando las prácticas de ACT sobre el darse permiso y aceptar esos
sentimientos, dándoles cabida, defusionándonos de las charlas que empujan para
alejarlos y reconectando con nuestros valores de ayuda hacia los clientes, podemos
manejar con más posibilidades de ayuda estas “reacciones contratransferenciales”.

También es importante recordar las diferencias esenciales entre ACT y FAP (Kanter,
Tsai y Kohlenberg, 2010):

1º-ACT puede emplearse en terapia directa de tipo individual, de pareja, familiar, de


grupo y hasta psicoeducativa; como indirectamente mediante otros medios
audiovisuales escritos o hablados, ya que pone énfasis en el lenguaje y sus
funciones. FAP requiere siempre de la presencia de relaciones en vivo y de las
acciones contingentes en estas relaciones. FAP por ejemplo no se puede hacer en
formato autoayuda mediante libros o videos o audio que no impliquen relación
directa.

2º-En FAP se necesita un espacio relacional que implique contingencias directas y


naturales a las CCRs; mientras que en ACT las contingencias pueden ser demoradas

51
mediante las acciones de los ejercicios experienciales y las metáforas.

3º-La evaluación en FAP de aspectos funcionales relevantes se centran en los


aspectos relacionales que considera este enfoque relevantes en el cambio; o sea las
CCRs; que son evaluadas mediante la Plantilla de Evaluación Ideográfica Funcional
(FIAT, Callaghan, 2006). El FIAT se basa en una evaluación precisa del
comportamiento clínicamente relevante, cuya información se usara en la
intervención. Otros cuestionarios similares empleados en FAP, como La Escala de
Experiencias del Yo (EOSS, Kanter, Parker y Kohlenberg; 2011; Valero, Ferro y cols.,
2013 ) tienen la función similar de detectar CCRs relevantes para la terapia. En ACT
como se suponen otros mecanismos de cambio, las evaluaciones se centran en
evaluar funcionalmente la flexibilidad psicológica, la evitación experiencial y el
horizonte valorativo de los clientes; ya que con esa información ideográfica se
establecerá el tratamiento. Es decir ambas terapias usan el Análisis Funcional de la
Conducta (AFC) pero poniendo énfasis en aspectos o mecanismos de cambio
diferentes.

4º-Tanto FAP como ACT dan importancia al tema de los valores. Sin embargo en
ACT estos pueden ser evaluados de manera más sistemática que en FAP. Sin
embargo en FAP en la misma sesión se pueden ver como CCR2 en vivo como se
presentan, mientras que en ACT pueden ser simplemente verbalizados sin esa
presentación en el aquí y ahora.

En nuestra opinión todos los puntos anteriores no agotan ni mucho menos el tema
de la relación entre la FAP y la ACT: ya que como hemos mostrado incluso desde la
perspectiva ACT se pueden concretar bastante las CCRs, usando por ejemplo las
referencias de la Matrix de Kevin Polk (Ruiz y cols. 2017) como apuntamos en el
capítulo 3 de este libro. Quizás entender que las relaciones humanas los son en su
mayor parte a través del lenguaje y sus funciones (Skinner, 1957; Villate, Villatte y
Hayes, 2016) puede ser el marco relacional futuro entre FAP y ACT que están
llamadas a encontrarse dada su raíz común en el conductismo radical.

52
Capítulo 2. El Yo, sus problemas y su terapia
(José Manuel Sánchez Olid)

"¿Quién está escribiendo estas letras?"

Con una simple pregunta, podemos poner en desacuerdo a numerosos


profesionales y pensadores de casi todas las disciplinas del conocimiento. No debe
extrañar: la cuestión del Yo es, posiblemente, de las más complejas a las que
podamos enfrentarnos como individuos y como especie.

En opinión del que escribe (y de su "yo"), posiblemente no hayamos nacido en la


época en que se responda a esa pregunta, aunque podemos contribuir sin duda a
ello de una manera u otra. La respuesta, se sospecha, puede venir de disciplinas
dispares, no sólo de la Psicología que nos ocupa: seguramente, el mayor
descubrimiento futuro sobre el Yo o la conciencia venga de un equipo de
neurocientíficos expertos en diseño de redes neuronales y machine learning antes
que de un equipo de psicólogos.

Como científicos de la conducta es nuestra responsabilidad aportar conocimiento


sobre aquello que nos compete, como profesionales de la práctica clínica podemos
utilizar el conocimiento sobre la conciencia para aplicarlo en problemas que
pudieran estar relacionados.

Para el primer punto, sobre el conocimiento científico, la ciencia de la conducta está


en disposición de hacer una revisión a la cuestión del Yo, y a la vez de realizar una
propuesta útil: en ello se van a ocupar los tres primeros puntos de este capítulo.

Para el segundo punto, sobre la aplicación de este conocimiento a la práctica clínica,


un terapeuta de conducta tiene herramientas para valorar y abordar las
problemáticas que afecten a la salud psicológica del individuo y que estén
relacionados con el asunto del Yo, la personalidad y la conciencia de sí mismo.

Este capítulo trata sobre estas cuestiones.

1. El mundo mágico del Yo

Imagínese el lector que tuviera que explicar el origen de una llamarada súbita que
observa salir justo detrás de un edificio, quedando oculto el origen de la misma a

53
simple vista: ¿qué probabilidad habría de que esa explicación implicase la existencia
de un poderoso ser mitológico alado cuya fisionomía le permite expeler fuego por la
boca? Posiblemente hasta finales del siglo XVIII, incluido quizás el XIX y XX (si
tenemos en cuenta culturas ajenas a la nuestra) la probabilidad sería alta, y en algún
momento de la historia simplemente tuvimos mejor conocimiento tecnológico que
permitía realizar explicaciones más parsimoniosas y ajustadas a la realidad. Así, hoy
en día se explicaría que esa llamarada seguramente se deba a una explosión o a
algún tipo de herramienta de construcción.

Este ejemplo, en el que se atribuyen ciertas propiedades o fenómenos a orígenes


mitológicos o mágicos, tiene su mayor reflejo psicológico en el concepto de alma.
Bien se podría decir que la esencia del individuo reside en su alma, en esa parte más
íntima y propia, de cuyo desligue se produce el mayor de los sufrimientos: "se me ha
roto el alma" decimos cuando estamos explorando nuevos límites para nuestra
capacidad de sufrir; "eres un desalmado", esgrimimos con ímpetu contra quién nos
ha agraviado, para herirle en lo más hondo, en su esencia. Si bien no hay alma rota
ni ser sin alma (ni con ella, opina el que escribe aunque admite no tener pruebas de
nada de ello), entendemos muy bien aquello a lo que nos estamos dirigiendo y la
intencionalidad de esas palabras. Incluso, el alma se ha modernizado y convertido, a
menudo, en "temperamento" o "personalidad": unos constructos internos, privados
y no observables, cuya utilidad radica en ser agrupaciones de descripciones sin valor
predictivo por sí mismos (aparte de tautológicos), se utilizan ya como explicación
y/o causa de la conducta pública manifiesta. Y aunque esto pudiera parecer claro, a
menudo seguimos atribuyendo nuestra esencia, nuestro ser, nuestro Yo, a "algo", a
un recipiente, y podemos sospechar una idea de fondo: "debe estar en algún lugar",
ante la cual un científico debe responder, inevitablemente, con una pregunta: ¿por
qué?

Usemos un segundo ejemplo: imagínese el lector una conversación telefónica entre


dos amigos, Luis y Paco. Paco le cuenta que está presenciando una competición de
judo y Luis, que es un apasionado de las artes marciales, le pregunta por el lugar el
evento. Paco le dice que tiene lugar en el Palacio de Deportes Vista Alegre, de su
ciudad, pero Luis no se da por satisfecho y le pregunta por el lugar exacto dentro del
edificio. Paco le contesta que la competición se da en el pabellón principal. Luis
sigue insatisfecho, le pregunta por la localización exacta dentro del pabellón, y Paco
empieza a tener dificultades, quizás le conteste: "Bueno Luis, está teniendo lugar en
todo el pabellón, es decir, ocupan todo el espacio disponible". Luis le contestaría que
esa respuesta es muy general, inexacta y poco válida, y le pide que le enseñe en una

54
foto la localización exacta en el espacio de la competición. Paco accede, y le manda
una foto tan amplia como puede, gracias a su smartphone: ahora Luis puede saber
exactamente donde está teniendo lugar la competición, y puede ver que la
competición está delimitada en un espacio concreto y limitada al pabellón en
cuestión. Si alguien le preguntase a Luis "¿qué/cómo es la competición?", él
contestaría enumerando cada uno de los elementos que la componen
(competidores, árbitros, público, reglas, atuendos, etc.), pero en ningún caso parece
probable que Luis dijera "la competición es el pabellón", y tampoco diría algo así
como "la competición es los competidores". La competición es los competidores, los
árbitros, el pabellón, el público, las reglas, los atuendos y demás, es todos esos
elementos además en una relación concreta y temporal entre sí, y la competición es
todo eso de manera conjunta, sin poder separarse; porque en la medida en que se
saque y se aísle a un competidor (a un elemento) de la competición (del conjunto),
ya no forma parte de la misma aunque antes sí, y aunque sus características físicas
permanezcan inalteradas.

A la hora de abordar el asunto del Yo, debemos tener cuidado de no caer en los
errores ilustrados en los ejemplos superiores, a saber: sería un error suponer que el
Yo está en algún lugar, sería un error suponer que tiene sustancia, y sería un error
suponer que el Yo puede ser estudiado de manera discreta y separada de su
contexto.

Hasta la fecha no hay evidencia de ninguno de esos supuestos, por lo tanto


deberíamos seguir cuestionándolos si fuera posible falsarlos.

La psicología cognitiva y social hace esfuerzos en medir, localizar, dar entidad, a


aquello que conocemos como personalidad o Yo: intentan responder al qué y al
dónde. Quizás no sea un conocimiento estéril, en cualquier caso parece no
responder a una pregunta muy, muy interesante: cómo.

El pensamiento científico se interesa por la manipulación de variables, y para ello


debemos contar con modelos que permitan operativizar y predecir los diferentes
parámetros del objeto de estudio.

Un estudio científico del Yo requiere abandonar explicaciones y concepciones cuasi-


mágicas, meros resquicios del animismo ancestral y del no tan moderno "fantasma
en la máquina". El cerebro como recipiente y a la vez causa del Yo y la conciencia es
una versión más elegante y refinada, afín a nuestros tiempos, de la falacia
anteriormente citada.

55
2. Mi Conciencia y Yo

¿Existe conciencia sin cerebro? Difícilmente. Esta respuesta funciona bien en un


sentido, aunque si le damos la vuelta nos topamos con algunos problemas de base:
¿el cerebro causa la conciencia? Exploremos esta cuestión, ¿cómo podríamos llegar
a un conocimiento útil sobre ello?

Planteemos una hipótesis:

 Existe relación entre la presencia de una estructura cerebral determinada y la


presencia de conciencia.
En esta primera hipótesis, nos encontramos con algunas dificultades, a saber: esas
estructuras, ¿en función de qué criterios las determinamos? ¿qué ocurre si existen
ciertas estructuras y otras no? ¿qué ocurre si ciertas estructuras cerebrales se
comportan de manera diferente a otras? Por otro lado, ¿cómo determinamos la
presencia de conciencia? ¿Qué debemos observar para afirmar que un organismo
presenta conciencia?

La neurociencia se encarga de investigar asuntos parecidos, y gracias a ello se está


llegando a conocimiento útil que sirve para describir y para proponer posibles
estructuras implicadas, incluso para intervenir a nivel de mapeado cerebral previo a
una intervención quirúrgica; en este punto, se plantea que es la ciencia del
comportamiento la que está dando "palos de ciego": debiera ser la responsable de
determinar qué debemos observar en un organismo, qué conductas, se
corresponden con aquello que debemos delimitar como conciencia, frente a todo
aquello que resulta no-conciencia.

Tenemos tecnología, actualmente, para estimular zonas concretas de la masa


encefálica y provocar respuestas emocionales, cognitivas y motrices. Con esta
información, bien podría pensarse que todo se reduce a estímulo y respuesta dentro
de aquello que encontramos protegido por el cráneo. Si somos algo curiosos, igual
podemos preguntarnos "¿cómo llegó todo eso ahí dentro?"

Podemos decir que estimulando tal zona encefálica, disparamos una respuesta
cognitiva concreta, por ejemplo que la persona experimente ciertos recuerdos.
Ahora bien, esos recuerdos primero tuvieron que "introducirse" en la persona, se
introdujeron esos recuerdos y no otros, y cabe de nuevo preguntarse, ¿cómo fue
eso así? ¿Cómo se ha creado aquello que ahora se evoca?

56
Para responder a esa pregunta, se propone "romper el cráneo", salir del cerebro, y
mirar ahí afuera: al entorno, al contexto, de esa persona, donde se encuentran las
causas cuyo conocimiento nos permita contestar a las preguntas que, se considera,
son la base para lo que venga después.

No sólo son la base, sino que además nos permiten el control y la predicción, más
allá de la evocación mediante estimulación. Buscar el origen de los pensamientos y
de las emociones, y su control y predicción, fuera del cerebro, parece algo útil y
además totalmente compatible con el conocimiento que nos aporta la ciencia que
estudia cómo se comporta el cerebro.

Volviendo al tema que nos ocupa, la conciencia, parece existir cierta similitud. Si
bien podemos situarla, más o menos, dentro del cráneo, ¿cómo llegó ahí? No parece
muy descabellado pensar y proponer que la vía fue la misma: gracias a la interacción
con el propio entorno y contexto.

Esto nos lleva a las siguientes pseudo-hipótesis:

1. La conciencia puede localizarse dentro del cráneo.

2. La conciencia está en función del contexto.

Pero, más allá de la actividad cerebral concreta y volviendo a la pregunta inicial,


¿qué clase de comportamiento se puede englobar en aquello que podemos
considerar conciencia? ¿qué comportamientos debe presentar un organismo?
Planteamos ahora una tercera pseudo-hipótesis:

3. La conciencia es un conjunto concreto de comportamiento verbal: un organismo


tendrá conciencia cuando emita un conjunto concreto de verbalizaciones.

Así, que un organismo pueda referirse a sí mismo, es un indicador de conciencia;


muy a grandes rasgos, tengo conciencia de mí mismo porque afirmo tener
conciencia. Esto implica una construcción compleja: implica que existe un "yo" que
tiene un "algo", y aquí lo importante no es el algo que se tiene, lo importante es el
"yo" desde el que se afirma el algo que se tiene.

Estamos en disposición de proponer una tentativa sobre el Yo que no venga de una


postura mentalista, dualista y cerebro-centrista (sin que esto implique un ataque o
renuncia a las neurociencias), y viene de la mano de la Psicoterapia Analítico
Funcional, tal y como se va a desarrollar en el siguiente punto.

57
3. Mi Conducta y Yo

Kohlenberg y Tsai (1991) proponen que el Yo es algo aprendido, y que se va


construyendo a partir de unidades funcionales al principio grandes e inespecíficas y
poco a poco cada vez más discretas y específicas.

¿Qué significa esto? Significa que un niño aprende a tener conciencia de la misma
manera en que aprende a tener preferencias, gustos o actitudes: mediante
principios básicos de aprendizaje.

Los autores de FAP proponen tres etapas o fases en la creación del Yo, que se
recordarán a grandes rasgos aquí:

1. El niño aprende unidades amplias que tienen significado global, sin que cada
palabra tenga significado por sí misma, como puede ser: "yo tengo hambre".
En este punto, "yo tengo hambre" es idéntico a "yo tengo hambre", cumple
una función, no se diferencia el concepto de "yo" ni el de "tengo" ni el de
"hambre". Posiblemente, acudiendo a la clasificación skinneriana, actuaría
antes bajo función de mando o mando sutil.

2. En la segunda fase, las unidades van siendo más específicas, y surge la


respuesta de "yo quiero" o "yo tengo". Ya empieza a existir una respuesta de
"yo" que puede "querer" o que puede "tener", como construcción
independiente y función de discriminación diferente. "Yo quiero", en este
caso, empieza a estar bajo control interno, y no tanto dependiente de
estimulación externa. Empezaría a primar una función de tacto, antes quizás
que de mando.

3. En la última etapa del desarrollo del Yo, se discrimina el "yo" como la parte
común de verbalizaciones tales como "yo quiero", "yo tengo", "yo X". Aquello
que uno es empieza a estar bajo control privado en la mayoría de las
situaciones y bajo control público en situaciones específicas. El Yo bien
desarrollado implica, según Deikman (1973) "una conciencia permanente,

58
tranquila, sin rasgos distintivos e inmutable, un algo central que es testigo de
todos los eventos, interiores y exteriores."

Aquí el lector inquieto podría preguntarse, con acierto: ¿cómo ocurre cada uno de
esos pasos? Es cierto que lo que anteriormente se ha enunciado corresponde a una
mera descripción: siendo honestos, no hay evidencia alguna sobre ello.

Hace falta proponer un mecanismo que explique por qué y cómo ocurre ese
desarrollo de las respuesta tipo Yo, y de nuevo para que el análisis conductual
aplicado puede dar cuenta de esto.

Podemos utilizar el principio de moldeamiento verbal y/o de refuerzo diferencial/


aproximaciones sucesivas como mecanismo según el cual se refuerzan las
expresiones tipo Yo, de manera sucesiva, hasta tener la unidad funcional Yo bajo la
cual el individuo elabora respuestas que pasan a denominarse propias.

Gracias a esto podemos tener una propuesta que poner a prueba, y diseñar primero
observaciones y después experimentos en los que controlar las variables
independientes, en este caso reforzamiento diferencial, y medir las variables
dependientes, en este caso respuestas verbales tipo Yo. Aun así, este tipo de
diseños entrañarían dificultades éticas, por supuesto, que deben contemplarse.

Volviendo a la propuesta original de los autores de la Psicoterapia Analítico


Funcional, un Yo trastornado, o un Yo problemático, es aquel cuya expresión no fue
adecuadamente reforzada por los principales interventores en la crianza del niño, en
la mayor parte de las personas sus padres.

De esta manera, ellos proponen los siguientes trastornos del Yo y sus características:

 Trastornos menos graves del Yo

o Yo inseguro o inestable

1. Dificultad para saber lo que uno siente o quiere

2. Sensibilidad extrema a las opiniones de los demás

3. Dificultad para la espontaneidad y la creatividad

59
o Trastorno narcisista de la personalidad

1. Dificultad para diferenciar sus necesidades de las de otra persona

2. Confianza extrema en los reforzadores externos (admiración o


elogio)

3. Manipulación y control de los demás para hacer más tolerables


sus relaciones

 Trastornos graves del Yo

o Trastorno límite de la personalidad

1. Localización externa de los estímulos que evocan el Yo: evocación


del Yo en función de agentes externos y cambiantes

2. Sensación de vacío: fruto de la incapacidad para encontrar el


"yo", tan variable y cambiante, que no está bajo control privado.

o Trastorno de personalidad múltiple

1. Presencia de trauma o similar

2. Repertorio de conducta de evitación de un Yo con la elaboración


o adopción de otro Yo

4. Evaluando los problemas del Yo

Evaluar y trabajar con el Yo, como el lector puede sospechar ya, consiste en evaluar
y trabajar con las verbalizaciones que impliquen construcciones tipo "Yo", y que
tengan que ver con el motivo de consulta.

Utilizando una forma diferente, se puede decir que el material de trabajo es todo el
repertorio verbal de la persona que tiene que ver con la concepción de sí mismo en
relación a sí mismo y en relación a lo opuesto a sí-mismo, es decir, los otros y/o lo
otro.

Para ello, se propone utilizar principalmente dos herramientas: la escala EOSS, y la


entrevista basada en el sistema FIAT.

60
ESCALA EOSS

Se trata de un instrumento de medida que valora el control público y privado para la


experiencia o verbalización del Yo (Parker, Beitz y Kohlenberg, 1996), que ha sido
adaptado al castellano traducida como Escala de Experiencia del Yo (Valero, Ferro,
López y Selva, 2014).

Compuesto por cuatro secciones, los ítems de cada una de ellas valoran los
siguientes apartados:

1. Experiencia del Yo de forma global. Una puntuación alta se relaciona con un


control público del yo, trastorno del yo y conducta disociativa.
2. Expresión de necesidades, opiniones, actitudes y acciones en relación a
personas poco conocidas sin que implique una relación estrecha con ellos.
Una puntuación alta se relaciona con un control público del yo.
3. Expresión de necesidades, opiniones, actitudes y acciones en relación a
personas familiares, seres queridos y relaciones estrechas. Una puntuación
alta se relaciona con un control público del yo en relación a esas relaciones.
4. Concepción del yo en cuanto a espontaneidad, opiniones y críticas, tanto en
relación a uno mismo como en relación a los demás.

La manera de utilizar la escala es como medida pre y post intervención: sus


propiedades psicométricas muestran que las puntuaciones específicas y globales
varían tras una intervención en la cual se modifican comportamientos relacionados
tipo Yo.

ENTREVISTA FIAT

Se trata de una herramienta para valorar diferentes clases de respuesta todas


relacionadas con el desempeño conductual en cuanto a relaciones con uno mismo y
los demás, cuya principal ventaja es proporcionar información funcional con la que
poder diseñar una intervención basada en el desarrollo de repertorios tipo Yo.

Publicado en The Behavior Analyst Today, Número 3, V.7 (2006), Callaghan describe
el manual FIAT como una herramienta que permite a los psicólogos valorar las
fortalezas y debilidades propias de las relaciones interpersonales en el contexto
tanto de la relación terapéutica como de aquellas relaciones interpersonales fuera
de sesión.

61
El manual está organizado alrededor de cinco áreas (llamadas clases de respuesta)
que tienen que ver con el funcionamiento interpersonal.

En este capítulo, se usa una traducción e interpretación realizada como material


propio a partir del original en inglés de Callaghan (2006).

A continuación, se enumeran las cinco clases de respuesta, y posterior a ello el


lector podrá encontrar la manera de trabajar con ellas en consulta.

CLASE A - Necesidades en relación a otras personas

CLASE B - Percepción del impacto que causa en otros

CLASE C - Comportamientos sobre conflictos interpersonales

CLASE D - Comportamientos sobre auto-revelación

CLASE E - Comportamientos de evitación emocional

VALORACIÓN PARA CLASE A - Necesidades en relación a otras personas

Incluye comportamientos como los siguientes:

 El cliente no puede identificar o especificar sus necesidades o valores.


 El cliente no puede discriminar las situaciones en las que sería apropiado
expresar sus necesidades o valores para tener relaciones más eficaces.
 El cliente no llega a completar una petición totalmente, o evita hacer
peticiones o expresión de necesidades.
 El cliente muestra poca habilidad para comunicar directamente lo que
necesita.
 El cliente niega que él mismo o alguien esté realizando una petición o una
expresión de necesidad, cuando eso mismo está ocurriendo.
 El cliente realiza peticiones excesivas.
 El cliente realiza peticiones de manera aversiva, dando como resultado que
quien la recibe no la atienda.

62
Preguntas a realizar al cliente

Las siguientes preguntas tienen que ver con la manera en la que manejas las
necesidades que tienes.

1. Piensa sobre algún momento cercano en el cual necesitaste algo de


alguien. ¿Qué hiciste?
a) ¿Cómo decidiste hacer esa petición?
b) ¿A quién le preguntaste?
c) ¿Cómo preguntaste por aquello que quisiste?

2. Descríbeme brevemente algún momento en el que preguntaste algo a


alguien y fue bien. Llamaremos a esto situación A.
a) ¿Esa manera es representativa de la manera en que te suele salir
las cosas?
b) ¿Por qué piensas que te salió bien?
3. Ahora cuéntame alguna situación en la que pediste algo a alguien pero no
fue demasiado bien. Vamos a llamar esto situación B.

a) ¿Esa manera es representativa de la manera en que te suele salir las


cosas?
b) ¿Por qué piensas que las cosas no fueron bien?
4. Si ponemos en un extremo todas las cosas que te fueron bien (como la
situación A), y ponemos en el otro extremo las cosas que no te salieron bien
(como la situación B), ¿En qué punto te colocarías en la siguiente escala?

A---------------------------------------------------------------------------------------B

5. ¿Estás teniendo problemas o dificultades ahora mismo a la hora de


satisfacer tus necesidades con otros?

6. ¿Crees que este asunto puede salir aquí en terapia entre nosotros?

a) Si este asunto saliera entre nosotros, ¿cómo lo sabríamos?


b) ¿Qué harías si yo te diera feedback sobre algo que te importase?

63
Preguntas de comprobación para el terapeuta

1. ¿Tiene el cliente problemas para satisfacer sus necesidades?

2. ¿Hay veces en las que el cliente tiene problemas a la hora de satisfacer sus
necesidades en consulta?

3. ¿Es capaz el cliente de discriminar cuando necesita algo y saber qué es


aquello que necesita tal y como ocurre en consulta con el terapeuta?

4. ¿Es capaz el cliente de hacer peticiones al terapeuta?

5. ¿Qué tipo de peticiones hace el cliente?

6. ¿ Es capaz el cliente de discriminar que la terapia es un lugar apropiado


para hacer peticiones?

7. ¿Son las peticiones del cliente apropiadas para la terapia o el terapeuta?

8. ¿Empieza el cliente a pedir algo al terapeuta y entonces deja de hacerlo


debido a que percibe malestar o estrés de algún tipo?

9. ¿Falla el cliente a la hora de hacer peticiones incluso cuando estas son


razonables?

10. ¿Es el cliente capaz de hacer peticiones en consulta de manera directa, o


lo hace de manera indirecta, dificultando saber aquello que está pidiendo?

11. ¿Hace el cliente alguna petición realizando una afirmación o una


observación antes que haciendo la petición?

12. ¿Hace el cliente un excesivo número de peticiones al terapeuta en sesión?

13. ¿Hace el cliente peticiones de alguna manera que resulte desagradable


para el terapeuta?

64
VALORACIÓN PARA CLASE B - Percepción del impacto que causa en
otros

Incluye comportamientos como:

 El cliente no puede identificar el impacto que su comportamiento tiene


en otros.
 El cliente no discrimina situaciones en las que sería importante estar
pendiente del efecto de su comportamiento en otros.
 El cliente tiene dificultades a la hora de tener en cuenta el feedback que
los demás le dan.
 El cliente es insensible a su impacto en otros (e incluso esto puede
llegar a aumentar la respuesta).
 El cliente es hipersensible a sus observaciones sobre el feedback que los
demás le ofrecen.
 El cliente tiene problemas a la hora de proveer de feedback eficaz a los
demás.

Preguntas a realizar al cliente

Te voy a preguntar sobre tu impacto en otros en situaciones sociales.

1. Piensa en la última vez que interactuaste con alguien y recibiste algún tipo
de feedback de la persona sobre cómo estaba yendo la interacción. ¿Qué
hiciste?

a) ¿Cómo sabías que te estaban dando feedback?


b) ¿Cómo sabías que el feedback que te dieron era cierto?
2. Cuéntame alguna vez en la que recibieras feedback de otros y la situación
mejorase porque tu cambiaste tu comportamiento como resultado del
feedback. Llamemos a esto situación A.

a) ¿Esta es la manera en la que salen las cosas generalmente en estas


situaciones?
b) ¿Por qué piensas que salen bien?

65
3. Ahora dime algún momento en el cual recibiste feedback de otras personas
y las cosas no fueron bien ni mejoraron (ni entonces ni en otra situación).
Llamaremos a esto situación B.

a) ¿Es así como suelen ir las cosas generalmente?


b) ¿Por qué piensas que no van bien?
4. Si ponemos en un extremo aquellas cosas que fueron bien (situación A), y
en el otro extremo ponemos las cosas que no fueron tan bien (situación B)
¿En qué punto te situarías en la escala a la hora de recibir feedback de otros?

A---------------------------------------------------------------------------------------B

5. ¿Estás teniendo actualmente algún problema a la hora de recibir feedback


de otros o de darte cuenta del impacto que causas?

6. ¿Crees que este problema puede darse en terapia entre tú y yo?

a) ¿Cómo lo sabríamos?
b) ¿Qué harías si recibieras feedback de mi parte sobre algún asunto que
te importase?

Preguntas de comprobación para el terapeuta

1. ¿Tiene el cliente problemas identificando el impacto interpersonal que


tiene en el terapeuta?

2. ¿Tiene el cliente la capacidad de reconocer cuando está recibiendo


feedback por el terapeuta?

3. ¿Discrimina el cliente momentos en los cuales su comportamiento tiene un


efecto en el terapeuta durante la sesión?

4. ¿Valora el cliente el feedback que hace el terapeuta?

5. ¿Resulta coherente la importancia que le cliente deposita en el terapeuta


con la naturaleza o el desarrollo de la relación terapéutica?

6. ¿Responde el cliente al terapeuta cuando recibe feedback sobre su propio


comportamiento?

7. ¿Tiene problemas el cliente a la hora de responder de manera eficaz


cuando el terapeuta le da feedback?

66
8. ¿Cambia el cliente su comportamiento de manera consistente al feedback
realizado por el terapeuta?

9. ¿Rechaza el cliente de manera diferencial el feedback cuando es crítico,


pero acepta el feedback cuando es positivo?

10. ¿Continúa el cliente comprometido con la relación terapéutica, o aumenta


su capacidad de respuesta, incluso cuando se le da feedback directo sobre su
respuesta?

11. ¿Se comporta el cliente de una manera no colaborativa cuando recibe


feedback?

12. ¿Tiene el cliente reacciones desmesuradas en relación al impacto que


tiene en el terapeuta?

13. ¿Tiene el cliente reacciones desmesuradas cuando recibe feedback por


parte del terapeuta?

VALORACIÓN PARA CLASE C - Comportamientos sobre conflictos


interpersonales

Se describen problemas como los siguientes:

 Problemas a la hora de identificar que está ocurriendo una situación


problemática
 Problemas especificando situaciones en las cuales se requiere una solución de
problemas o similar.
 Escape o evitación de situaciones que requieren resolución de problemas,
incluyendo ser simpático y agradable cuando no se debería.
 Intentos indirectos e ineficaces para resolver los conflictos.
 Falta de voluntad para tomar la responsabilidad propia en un conflicto.
 Intentos de resolución que agravan el conflicto antes que solucionarlo.

Preguntas a realizar al cliente

Te voy a realizar algunas preguntas sobre aquello que haces o la manera en que te
sientes cuando ocurre un conflicto en las relaciones de las que formas parte.

67
1. ¿Qué haces si estás enfadado con alguien con quien tienes una relación?

2. ¿En qué manera intentas resolver los conflictos con otros?

3. Piensa en algún momento reciente en el que tuvieras algún conflicto con alguna
persona. ¿Qué hiciste?

a) ¿Cómo sabías que lo que estaba ocurriendo era un conflicto?


b) ¿Qué hiciste en esa situación?
c) ¿Intentaste resolver el conflicto?
d) ¿Piensas que tu opinión fue escuchada?
e) ¿Intentaste entender aquello que la otra persona intentaba decir?
4. Háblame de algún momento en el cual tuvieras algún tipo de conflicto con alguien
y la interacción fuera buena para ti. Llamemos a esta situación

a) ¿Intentaste resolver el conflicto?


b) ¿Es esta la manera habitual en la que las cosas suelen ir para ti cuando te
involucras en un conflicto?
c) ¿Por qué piensas que fue bien?
5. Ahora dime alguna situación en la que tuvieras un conflicto con alguien y no fuera
bien para ti. Llamaremos a esto situación B.

a) ¿Trataste de resolver el conflicto?


b) ¿Es esta la manera habitual en la que las cosas suelen ir para ti cuando te
involucras en un conflicto?
c) ¿Por qué piensas que no fue bueno para ti?
6. Si ponemos en un extremo las veces en que las cosas salieron bien (situación A) y
en el otro extremo las veces en que las cosas no salieron bien (situación B), ¿dónde
crees que te sitúas habitualmente en relación a estar en conflicto con otros?

A-----------------------------------------------------------------------------------------------B

7. ¿Estás teniendo algún problema o alguna dificultad ahora mismo en relación a


tener conflictos o resolverlos con otras personas?

8. ¿Crees que este asunto puede surgir entre nosotros en terapia?

a) Si ocurriera, ¿cómo lo sabríamos?


b) ¿Qué harías si sintieras que existe un conflicto entre nosotros?

68
Preguntas de comprobación para el terapeuta

1. ¿Se involucra el cliente en algún tipo de interacción conflictiva con el terapeuta en


sesión?

2. ¿Se da cuenta el cliente de que existe un conflicto cuando este ocurre durante
sesión?

3. ¿Reconoce el cliente que puede existir algún conflicto entre él y el terapeuta?

4. ¿Hace el cliente algún tipo de intento de parar cualquier conflicto cuando ya ha


empezado en sesión?

5. ¿Cede el cliente ante el terapeuta, sin informar sobre sus propias necesidades u
opiniones?

6. ¿Retira el cliente su opinión cuando tiene un conflicto con el terapeuta?

7. ¿Se comporta el cliente de una manera excesivamente conciliadora o


complaciente cuando ocurre un conflicto con el terapeuta?

8. Cuando el cliente intenta resolver un conflicto con el terapeuta, ¿queda claro


cómo quiere hacerlo?

9. ¿Se compromete el cliente con el conflicto?

10. ¿Realiza el cliente estrategias de solución del conflicto que producen que se
amplifique o empeore el conflicto?

11. ¿Intenta el cliente de manera deliberada empeorar el conflicto?

VALORACIÓN PARA CLASE D - Comportamientos sobre auto-revelación

Problemas específicos de la clase D pueden ser:

1. Incapacidad para discriminar situaciones en las que la auto-revelación


no es adecuada.
2. Involucrarse en muy pocos comportamientos para conseguir relaciones
cercanas interpersonales que pueden proporcionarle refuerzo social.
3. Involucrarse en auto-revelaciones afectivas inútiles o poco claras.

69
4. Involucrarse en auto-revelaciones excesivas que funcionan para reducir
la disponibilidad de futuras interacciones.
5. Fallo en responder a los intentos de otras personas de establecer
interacciones cercanas interpersonales, incluyendo no responder a las
peticiones que otros le hacen.

Preguntas a realizar al cliente

A la hora de hablar al paciente sobre la apertura interpersonal, podemos referirnos a


ello como a "estar conectado con", "mostrarse cercano" o "tener relaciones
cercanas" con otras personas. Debe diferenciarse de los contactos superficiales que
forman parte de la vida social cotidiana. Relaciones cercanas interpersonales son
aquellas en las que participamos con otros diciéndoles como nos sentimos, aquello
que pensamos, si nos sentimos entendidos, y apreciando lo que otros nos dicen en
este sentido. No se trata tan sólo de hacer monólogos sobre lo que uno piensa o
sobre la experiencia que uno tiene.

1. ¿Cómo sabes si alguien se preocupa por ti o es cercano a ti?


2. ¿Cómo sabes que alguien siente que le importas?
3. ¿Sueles hablar de cómo te sientes o de cómo ves las cosas con otras
personas?
4. Piensa en algún momento en el que sentías que podías hablar con alguien
sobre cómo te sientes. ¿Qué hiciste?
a. ¿Decidiste hablar con otra persona sobre cómo te sentías?
b. ¿Cómo decidiste hablar o no hablar de lo que estabas sintiendo?
c. ¿Cómo hiciste que la otra persona entendiera tu experiencia?
5. Háblame de algún momento en el que hablaste con alguien sobre tus
experiencias y la charla fue bien para ti. Llamemos a esto situación A.
a. ¿Hablaste de cómo te sentías o describiste una situación personal?
b. ¿Es esto consistente con la manera en la que tú generalmente hablas
de tu experiencia?
c. ¿Por qué piensas que fue bien?
6. Háblame de algún momento en que hablaste con alguien sobre tus
experiencias, y la experiencia no fue bien. Llamemos a esto situación B
a. ¿Estabas hablando de cómo te sentías o describiendo una experiencia
personal?

70
b. ¿Es esto consistente a la manera en que sueles hacer las cosas cuando
hablas de tus experiencias?
c. ¿Por qué piensas que no fue una buena experiencia para ti?
7. Si ponemos en un extremo las veces en que las cosas salieron bien (situación
A) y en el otro extremo las veces en que las cosas no salieron bien (situación
B), ¿dónde crees que te sitúas habitualmente en relación a hablar de tus
experiencias?

A---------------------------------------------------------------------------------------B

8. ¿Estás teniendo actualmente algún problema o dificultad en ese área?


9. ¿Crees que este problema puede ocurrir entre nosotros en terapia?
a. Si ocurriera, ¿cómo lo sabríamos?
b. ¿Qué harías si quisieras hablar de tu experiencia mientras estamos en
sesión, conmigo?

Preguntas de comprobación para el terapeuta

1. ¿Hace el cliente explícito algún deseo o necesidad para tener una relación
terapéutica cercana?
2. ¿Hace el cliente alguna auto-revelación durante la sesión?
3. ¿Reconoce el cliente que el terapeuta es una persona activa en la interacción
que está teniendo lugar?
4. ¿Realiza el cliente auto-revelaciones en momentos adecuados con el
terapeuta?
5. ¿Reconoce el cliente que el terapeuta es una persona con la que puede
realizar auto-revelaciones?
6. ¿Se involucra el cliente en auto-revelaciones de manera completa, llevándolo
a término?
7. ¿Falla el cliente a la hora de auto-revelar en el contexto de terapia incluso
aunque eso pueda ser beneficioso para él?
8. ¿Auto-revela el cliente de una manera poco clara cuando se lo pide el
terapeuta?
9. ¿Realiza el cliente un alto número de auto-desprecios en forma de
comentarios que no son consistentes con las percepciones del terapeuta o de
otros?

71
10.¿Realiza el cliente un número elevado de exageraciones o comentarios
grandiosos sobre sí mismo con el terapeuta?
11.¿Realiza el cliente tantos comentarios sobre sus propias experiencias que
resulta problemático y molesto para el terapeuta?

VALORACIÓN PARA CLASE E - Comportamientos de evitación emocional

Todos los comportamientos de la clase E tienen que ver con inhibir o reducir las
interacciones interpersonales entre el cliente y el terapeuta o entre el cliente y otras
personas, debido a que el cliente tiene poca tolerancia a experimentar respuestas
emocionales. Esta clase también puede incluir somatización de conflictos
psicológicos en el intento de no hablar directamente de ellos o de no expresar
emociones negativas.

Preguntas a realizar al cliente

1. ¿Te resulta más fácil sentir unas emociones que otras?


2. ¿Te resulta más fácil expresar unas emociones que otras?
3. Piensa en un momento que sentiste algo muy fuerte:
A. ¿Cómo supiste lo que estabas sintiendo?
B. ¿Cómo lo expresaste?
C. ¿Comunicaste esa sensación o ese sentimiento alguien?
4. Cuéntame algún momento en el cuál sentiste algo fuerte y la experiencia
estuvo bien. Llamaremos a esto situación A.
A. ¿Se lo expresaste a alguien?
B. ¿Lo que hiciste es lo que generalmente sueles hacer cuando tienes
emociones fuertes?
C. ¿Por qué crees que fue bien?
5. Cuéntame algún momento en el cuál sentiste algo fuerte y la experiencia
estuvo mal. Llamaremos a esto situación B.
a) Se lo expresaste a alguien.
b) Lo que hiciste es lo que generalmente sueles hacer cuando tienes
emociones fuertes?
c) ¿Por qué crees que fue mal?

72
6. ¿Cómo es generalmente?
A---------------------------------------------------------------------------------------B

7. ¿Estás teniendo actualmente un problema a la hora de expresar


emociones y sensaciones?
8. ¿Crees que estos problemas pueden surgir entre tú y yo?
a) ¿Cómo podríamos saber que está sucediendo esto?
b) Si experimentases en este momento una emoción fuerte. ¿Qué
harías?

Preguntas de comprobación para el terapeuta

1. ¿Tiene el cliente problemas a la hora de expresar sus emociones?


2. ¿Es capaz el cliente de identificar cuando está teniendo experiencias
emocionales?
3. ¿Realiza el cliente esa discriminación en vivo, justo mientras está teniendo
lugar esa experiencia emocional?
4. ¿Es capaz el cliente de discriminar las diferentes experiencias emocionales
que puede tener?
5. ¿Identifica el cliente al terapeuta como alguien con quién él puede
compartir sus experiencias emocionales?
6. ¿La experiencia emocional del cliente y su expresión es infrecuente en
relación a lo que está ocurriendo en terapia, quizás evitándolas o
escapando de su expresión?
7. ¿Muestra el cliente reglas de comportamiento dirigidas a no experimentar
las emociones tal y como ocurren?
8. ¿Escapa o termina el cliente aquellas respuestas emocionales después de
que hayan empezado, como estrategia de escape?
9. ¿Realiza el cliente estrategias de evitación para prevenir una respuesta
emocional?
10.¿Etiqueta de manera correcta el cliente sus experiencias emocionales tal y
como ocurren?
11.¿Comunica el cliente sus experiencias emocionales de manera clara y que
provoque una fácil respuesta?
12.¿Expresa el cliente de manera vaga sus experiencias emocionales?
13.¿Expresa el cliente demasiado o de manera sobrecargante sus experiencias
emocionales?

73
La manera de utilizar la entrevista FIAT que se propone en este capítulo es a modo
de guía de entrevista, siendo su propio uso algo terapéutico en sí mismo dado que
puede provocar respuestas que sean clínicamente relevantes para las clases de
respuesta propuestas. No se trata, por tanto, de una entrevista a utilizar de manera
estructurada para puntuar o evaluar la ocurrencia o no de respuestas determinadas.

En cambio, en la propuesta original de los autores (Callaghan, 2006), se propone el


uso de la FIAT junto al cuestionario elaborado para valorar las clases de respuesta,
de manera conjunta. El lector debe saber que si bien la adaptación propuesta aquí
difiera de la original, siempre puede consultar esta última para su mayor
comprensión.

5. Tratando los problemas del Yo

En consonancia al resto del manual, y al uso de las herramientas para la valoración


del Yo, podemos elaborar una matriz de aplicación de reglas terapéuticas de la
Psicoterapia Analítico Funcional a cada una de las clases de respuesta que
anteriormente han debido ser valoradas.

La tabla siguiente puede utilizarse a modo de selección de objetivo a trabajar, así


como guía sesión a sesión, e incluso según el caso compartirlo con el propio cliente.

Clase A Clase B Clase C Clase D Clase E


Necesidades Impacto Conflictos Auto-revelación Evitación
Regla 1
Observar
Regla 2
Provocar
Regla 3
Reforzar
Regla 4
Observar refuerzos
Regla 5
Dar
interpretaciones

74
Se comentan y se proponen ejemplos a continuación para cada una de las
posibilidades de intervención.

REGLA 1
Clases A, B, C, D y E

En la aplicación de la primera regla, el terapeuta debe tener en su repertorio de


conducta ejemplos de las propias clases de respuesta, y debe haber mostrado
habilidad en la discriminación y detección de dichas clases de respuesta.

REGLA 2

Clase A

El terapeuta puede poner en marcha cualquier estrategia que provoque dificultades


o que ponga a prueba la habilidad del cliente de solicitar ayuda o realizar peticiones
sobre aquello que siente o piensa. Intervenciones básicas como "¿qué crees que
puedo hacer yo por ti?" o "si tuviera algo que tú necesitases, ¿qué sería?" pueden
ser buenos ejemplos de primeras.

En función del nivel base presentado por el cliente, se pueden realizar otras
intervenciones:

 "Quizás no pueda ayudarte justo en lo que tú quieres, ¿has pensado en esa


posibilidad?, ¿cómo afectaría eso a tu visión de ti mismo?"
 "No entiendo lo que me estás pidiendo, ¿puedes explicármelo de otra
manera?"
 "Creo que no puedo ayudarte en lo que me pides"

Clase B

Se puede realizar cualquier verbalización que haga que el cliente deba poner en
marcha herramientas de valoración de su comportamiento en el propio terapeuta.

 "Ahora mismo, mientras me estabas contando esto, ¿cómo crees que me he


sentido?, ¿qué te ha hecho pensar justo eso?, ¿qué dice eso de ti?"
 "¿Crees que ahora mismo me siento cómodo contigo?, ¿cómo te hace ser
justo eso?"

75
 "Si tuvieras que decidir si me ha sentado bien o mal justo esto que acabas de
decirme, ¿qué dirías?, ¿serías honesto contigo mismo?"
La idea es que el cliente entrene su capacidad de observar y manifestar la manera
en que tu comportamiento afecta a un auditorio, en este caso el único posible: el
terapeuta.

Se recomienda que el propio terapeuta sea bien consciente de sus eventos privados
y sea genuino en ello, sin fingirlos.

Clase C

Cualquier comportamiento que pueda ser aversivo para el cliente, por parte del
terapeuta, a menudo puede ser una fuente de conflicto entre ambos.

 "Estuve pensando ayer en la posibilidad de que suban el alquiler del


despacho, me gustaría plantearte la posibilidad de una subida en la tarifa del
10%, ¿estarías de acuerdo? ¿por qué?, ¿qué dice eso de ti?"
 "No estoy nada de acuerdo en lo que acabas de decir, creo que tú estás
totalmente equivocado al respecto, con todo mi respeto, y me gustaría que
hablásemos sobre ello"
 Retrasarse a propósito, excusarse de manera frívola: "Espero que no estés
molesto con esto, porque no creo que tú pudieras estarlo; ¿lo estás?"
Este tipo de situaciones deben manejarse con cuidado y con pericia por parte del
terapeuta, sin que sean artificiales y estando dispuesto a que la respuesta del
paciente pueda ser un abandono. Por ello, se sugiere ante todo establecer una
graduación atendiendo a la línea base que la propia entrevista FIAT ha podido
facilitarnos.

Clase D

Simples peticiones que pongan a prueba la capacidad de relatar información íntima


pueden servir como estímulo discriminativo a respuestas problemáticas en el área
de la auto-revelación.

De nuevo, se sugiere graduar, siempre, siendo prudentes, dado que una petición de
información de este tipo puede desatar respuestas condicionadas muy aversivas en
el cliente, en función de su propia historia de aprendizaje.

76
 "Si te pido que imagines aquello de lo que más te avergüenzas, quizás lo estés
haciendo justo ahora aunque no lo digas; ¿estarías dispuesto a decírmelo?,
¿hay algún problema?, ¿cómo afecto eso a quién eres?"
 "¿Cómo te sientes al recordar alguna parte de ti que te cuesta mostrar?,
¿podrías mostrarlo aquí conmigo?, ¿en qué manera eso puede afectarte a tu
visión de ti mismo?"

Clase E

Simplemente hablar sobre aquello que no quiere pensar o sentir es ya un estímulo


discriminativo que puede poner en marcha intentos de supresión, control o
evitación de los contenidos internos. Suele ser buena idea ponerlo en relación a la
imagen de uno mismo sintiendo o evitando sentir el contenido en cuestión.

 "¿Qué pasaría contigo si sintieras aquello que no quieres sentir?"


 "Si pensases justo lo opuesto, ¿te ayudaría a ser más tú mismo?"

REGLA 3

A la hora de reforzar clases amplias de respuesta, debemos tener en cuenta que


prestar atención a la historia de aprendizaje y a la función antes que a la forma es
especialmente relevante.

A menudo, podemos utilizar el mero interés al cliente como estimulación apetitiva


que juegue un papel reforzante de la conducta clínicamente relevante de tipo 2 que
estemos observando.

A continuación se comentarán brevemente algunas ideas de conductas a observar


que pudieran ser objetivo a reforzar por el terapeuta; eso sí, lo que el lector va a
encontrar en la siguiente lista son formas de comportamiento, siempre debe valorar
su función y, ante todo, conocer la historia de la persona.

Clase A

 Información sobre peticiones directas, que puedan ser categorizadas como


mandos. Un caso ejemplar podría ser que el cliente tuviera poco dinero y

77
quisiera seguir con las sesiones: si el cliente ha tenido poca habilidad a la hora
de realizar peticiones de manera directa, podría ser un objetivo a reforzar la
siguiente verbalización: "Tengo poco dinero, y quiero seguir con las sesiones,
así que me gustaría pedirte una rebaja en tus honorarios, sería estupendo
para mí". Aquí, el terapeuta puede reforzar de manera natural y experiencial
accediendo y bajando el precio. Un caso que el terapeuta debería evitar
reforzar sería si el cliente muestra la siguiente verbalización: "Voy a tener que
dejar de venir, no me lo puedo permitir". De igual manera, puede pasar con el
horario de las sesiones. Tanto honorarios como horarios son asuntos sobre los
cuales podemos observar conductas clínicamente relevantes a reforzar por
parte del terapeuta. No obstante, debemos tener en cuenta que en nuestro
contexto social-verbal, concretamente Andalucía (España), existe fuerte
castigo social a determinadas operantes relacionadas con expresión directa
de necesidades, siendo bien difícil y poco probable que una persona
simplemente pida aquello que quiere de manera directa.

Clase B

 Verbalizaciones que impliquen lo que comúnmente llamamos ponerse en la


piel del otro, relacionadas con respuestas de empatía. El paciente puede
relatarnos como hace unos días prefirió no seguir insistiendo porque notó que
la otra persona se estaba sintiendo incómoda (posible conducta clínicamente
relevante de tipo dos fuera de sesión) o podría presentar la siguiente
verbalización en consulta: "No sé lo que estarás pensando de mí, y tampoco
pretendo hacerte sentir incómodo, pero no quiero ser la persona que mienta
en consulta, así que prefiero decirte que no me siento cómodo haciendo el
ejercicio que me propusiste". En casos en que el cliente haya mostrado un
exceso de verbalizaciones en cuanto a impacto en otros bajo control público,
este tipo de conductas deberían ser reforzadas de manera natural por el
terapeuta, quizás interesándose por cómo se ha sentido y teniendo en cuenta
su feedback para proponer otro ejercicio.

Clase C

 El terapeuta puede reforzar aproximaciones conductuales que impliquen


gestión eficaz de conflictos. Un ejemplo puede ser la negación del terapeuta a
cambiar el día o adelantar la siguiente cita bajo demanda del cliente. En este

78
caso, si observamos respuestas relacionadas con expresión suave y búsqueda
de alternativas, o incluso aceptación de la negativa seguida de silencio o
cambio de tema en el caso en que el cliente tuviera dificultades con las
negativas, implicaría un avance que podemos reforzar. Una manera natural de
reforzar es que el terapeuta verbalice de manera cercana por qué es
importante para él no acceder a la petición, por ejemplo, de cambio de
horario, y hablarle de que gracias a que ambos están de acuerdo finalmente
en mantener la cita en su horario habitual, él puede pasar algo más de tiempo
con su hija, lo cual es sumamente importante; de esa manera puede decirle al
cliente que gracias a que no ha insistido más, eso le permitirá estar en
contacto con su hija, y que lo valora mucho. A menudo, las personas podemos
aprender a dejar estar la frustración ante las negativas si conectamos ese
esfuerzo nuestro con el bienestar de otros, o si vemos que ese esfuerzo
nuestro en el presente nos puede beneficiar en el futuro.

Clase D

 Podría pensarse que los pacientes deben contarnos todo aquello que les
ocurre y hablarnos mostrándonos sus intimidades, porque al fin y al cabo
están en consulta para ello: estaríamos cometiendo un error, es posible que la
persona que tenemos delante tenga una historia con dificultades a la hora de
revelar información íntima en contextos de ayuda y/o autoridad clínica. En
otras palabras, ocurre que verbalizaciones tipo Yo bajo estimulación
discriminativa interna antes que pública fueran castigadas a menudo e
intensamente, y el terapeuta debe estar atento a aproximaciones en ese
sentido. Una manera natural de reforzarlo es expresándole lo importante que
es para el propio tratamiento, y para él o ella como terapeuta, escuchar justo
lo que está diciendo en relación a él o ella misma; así mismo, el terapeuta
puede expresar que se siente cómodo escuchándole, y satisfecho por ser
capaz de estar construyendo una relación entre ambos en la que se permitan
expresarse sobre aspectos realmente íntimos.

79
Clase E

 Los clientes pueden tener respuestas evitativas tipo Yo en relación a su


historia personal o aspectos que conformen su percepción de sí mismo, de sus
actitudes o de sus preferencias. Preguntar a una persona sobre aquello que
prefiere en ausencia de claves contextuales públicas puede poner a prueba su
capacidad de hacer hueco a sensaciones difíciles. Podemos reforzar
comportamientos de expresividad sobre preferencias y sobre reconocimiento
de su historia mostrando interés genuino sobre aquello que comparte con
nosotros. Quizás le cueste muchísimo hablar sobre su gusto por los comics,
porque se avergüence (evite que sea suya esa preferencia): podemos
entonces reconocer nuestro desconocimiento (si es así) y pedirle que nos
hable sobre ello, dedicando el tiempo necesario.

REGLA 4

Clases A, B, C, D y E

A la hora de observar el efecto reforzante de las conductas del paciente en el


terapeuta, es sumamente importante que comprobemos la manera en que nos hace
sentir la persona que tenemos delante, y cómo eso puede tener que ver con nuestra
propia historia de aprendizaje.

Esto es especialmente relevante cuando nos encontramos con un paciente que tiene
una historia realmente diferente a la nuestra: sus mejorías y asuntos a reforzar en
consulta pueden resultarnos ajenos y podemos sentirnos incómodos/as incluso
conforme el paciente avanza en su repertorio conductual relacionado con él mismo.

Quizás debamos evocar y reforzar actitudes agresivas en la persona que tenemos


delante, o tal vez tengamos que conseguir que el paciente exprese ideas que chocan
con las nuestras. Esto va a tener un impacto en nosotros, y teniendo consciencia de
ello podremos manejarlo y seguir al servicio de la persona que tenemos delante.

Suele ser útil, en ausencia de supervisión, pararse antes y después de cada sesión y
tener en cuenta en qué manera se siente uno cuando está teniendo terapia con el

80
paciente en cuestión; la intención de esto no tiene nada que ver con llegar a alguna
conclusión reflexiva: el simple hecho de tactar es útil porque nos ayuda a
discriminar estímulos discriminativos y clases de respuesta, y esto nos acerca a
poner en práctica repertorios de conducta mucho más amplios.

REGLA 5

Clases A, B, C, D y E

A la hora de entrenar la relación entre las conductas de los pacientes, en este caso
conductas tipo Yo, debemos tener en cuenta los elementos que componen una
explicación funcional, a saber:

a) Contexto en el que ocurre


b) Discriminación o etiquetaje privado
c) Discriminación o etiquetaje público
d) Reflejo y/o anticipación de la consecuencia
e) Extrapolación a otras situaciones
Un ejemplo podría ser:

"Parece ser que cuando estás con tu padre (a) y te sientes inferior (b) te comportas
retraído y muestras poco interés por lo que te está diciendo (c); esto no parece estar
acercándote a involucrarte más con él (d), ¿hay otros momentos parecidos en tu día
a día? (e)"

Este tipo de interpretaciones no deben tenerse como reglas de cumplimiento o


motivacionales que el terapeuta da, antes bien como reglas de seguimiento que
lleven al paciente a generar y verbalizar reglas motivacionales

81
6. Conclusión y reflexiones

Hasta aquí, el capítulo sobre el Yo.

El lector debe saber que se mueve, al igual que el que escribe, en terreno muy
inexplorado, y por tanto lo que debe primar ante todo es la prudencia.

Lo que aquí puede encontrarse, las sugerencias de valoración y tratamiento,


consisten en una extrapolación de principios que han sido validados, y toda
extrapolación es arriesgada y peligrosa.

En esta propuesta, se reconoce que quedan sin respuestas las siguientes preguntas:

 ¿Es útil frente al no tratamiento esta manera de trabajar en problemas


relacionados con el Yo?
 ¿Es mejor esta manera de trabajar que otras propuestas por otras corrientes o
sistemas?

Quizás la investigación futura arroje luz sobre estas cuestiones.

De igual manera en que los astrobiólogos hipotetizan que si encuentran vida en


otros planetas no debería diferir demasiado de la vida que conocemos en la Tierra,
dado que se trata de eventos que están sujetos a las mismas leyes y principios que
rigen nuestro universo, lo que sí parece claro es que un tratamiento eficaz para
problemas tipo Yo, desde una perspectiva conductual-contextual, no debiera
alejarse de ni ser plenamente ajena a esta propuesta, que al fin y al cabo parte del
conocimiento sobre el cual ya tenemos cierta validez e información.

No queda más que seguir avanzando e investigando, y ante todo seguir siendo
escépticos en cada paso que demos, si pretendemos caminar con verdadera
firmeza.

82
Capítulo 3. La PAF de Grupo en contextos previos
(Inmaculada Ruiz Miñarro y Juan José Ruiz Sánchez)

3.1. Psicoterapia Analítico-Funcional de Grupo

Hay una gran variedad de enfoques conductuales y cognitivo-conductual aplicados a


la psicoterapia grupal. Los grupos cognitivo-conductual a menudo se centran en la
capacitación de habilidades y utilizan intervenciones prácticas centradas en los
déficits de afrontamiento y cambios en el pensamiento.

Vinogradov, Cox y Yalom (2003) sugieren que los grupos orientados al


comportamiento son generalmente limitados en el tiempo y se caracterizan por el
uso de técnicas de modificación del comportamiento.

Las terapias de grupo conductuales para grupos orientados al proceso que se centran
en las interacciones interpersonales a medida que ocurren en el grupo parecen ser
menos comunes. Varios autores han abordado el comportamiento aplicado en el
contexto de la psicoterapia de grupo interpersonal. Rose (1977) ofrece
principalmente enfoques estructurales y aplicados a la psicoterapia grupal. Flowers y
Upper (1994) identifican intervenciones conductuales que pueden integrarse en
grupos, y Hollander y Kazaoka (1998) sugieren que aunque los enfoques
conductuales generalmente involucran intervenciones prácticas, casi siempre se
presta poca o ninguna atención a cuestiones teóricas o conceptuales.

3.2. Aplicación de la Psicoterapia Analítico-Funcional a Grupos

El marco para FAP se formula en tres clases funcionales de comportamiento:


problemas (1), mejoras (2) y la conciencia verbal de las relaciones funcionales (3).

En FAP, las clases funcionales de comportamiento se identifican como conductas


clínicamente relevantes, o CCR. Los comportamientos problemáticos se clasifican
como CRR1, las mejoras en el comportamiento del cliente se clasifican como CCR2, y
la conciencia verbal de estas relaciones funcionales se clasifica como CRR3.

Para ello sería necesario identificar las conductas clínicamente relevantes (CCR) en el
grupo.

CRR1: En una sesión de grupo, el cliente habla constantemente. El contenido de su


discurso se centra en el detalle y es generalmente una descripción de lo que ha
hecho a través del día. Este cliente puede iniciar todas las sesiones de grupo. Este
tipo de comportamiento podría interferir con sus relaciones con otros debido a que
los miembros del grupo podrían percibirla como de larga duración o aburrida. Así,

83
para este cliente, uno de sus CCR1 puede ser identificado como una persona que
habla sin parar. Sería difícil para otros miembros del grupo entablar un diálogo con
esta persona y además empezarían a sentir que no podrían responderle porque no
tendrían oportunidad de hablar. El resultado podría generar molestia y
resentimiento por parte de otros miembros que creen que está persona está usando
demasiado tiempo para sí mismo.

CCR2: Un ejemplo de CCR2 puede ser difícil de identificar durante las primeras
etapas del tratamiento, ya que normalmente no se observan cuando se han
producido CCR1.En las etapas iniciales del grupo, normalmente no suelen hacer
pausas en el diálogo. Una pausa accidental puede proporcionar una oportunidad
para la intervención del terapeuta, que con suerte alentaría al cliente a hacer una
pausa por su cuenta (CCR2). Este gesto no verbal permitiría que otros miembros del
grupo se involucren e interactúen, lo que provoca conversación y potencial para
hacer conexiones con otros. También le da la oportunidad de ver si otros están
recibiendo lo que está diciendo. Si la persona no lo hace en todas sus relaciones, lo
más probable es que mantenga un sentido de aislamiento. A medida que el grupo
avanza, una CCR2 podría ser hablar de las cosas que importan, como sus relaciones
y tener en cuenta el feedback del grupo.

CCR3: Las CCR3 son esencialmente las explicaciones que los clientes hacen del por
qué se comportan de una determinada forma. A medida que el tratamiento
progresa, el cliente puede comenzar a verbalizar las relaciones funcionales entre los
eventos y los comportamientos. Por ejemplo, puede decir que se preocupa
realmente de que no tendrá tiempo para hablar en el grupo; de manera que decide
hablar mucho. También puede suceder que se sienta presionado para hablar porque
crea que los demás miembros del grupo no tienen mucho que decir o lo que tengan
que decir no es muy importante. Otro ejemplo sería que estuviese asustado de que
nadie quisiera escuchar lo que tuviera que decir, de sus expresiones faciales o del
comportamiento no verbal de los miembros del grupo y decidiese no asistir
(evitación de CCR1).

Yalom (1995) habla de la importancia de las CCR3 (en sus términos) al sugerir que las
razones que los clientes generan para su propio comportamiento dan como
resultado un sentido de libertad. Él sugiere que generar razones proporciona
motivación para entender, identificar y controlar lo desconocido. Propone que es un
aspecto esencial del proceso de cambio porque mueve a la gente de una "postura
pasiva y reactiva a una postura activa, actuante y cambiante". Si los clientes son
capaces de vincular cómo su comportamiento funciona en su vida, pueden
reconocer las áreas en las que el cambio es necesario y hacer los ajustes necesarios
a medida que la terapia de grupo progresa.

84
3.3. Como convertir el proceso de FAP en grupo

3.3.1. Evaluación

En la entrevista preliminar, el terapeuta busca entender cómo se relacionan las


metas del cliente con sus problemas; se describe la forma de actuar del cliente que
ha tenido con respecto a sus problemas y el comportamiento que haya tenido sobre
cómo afrontar o solucionar éstos. Ambos tipos de comportamientos se definen en
términos de sus efectos en contextos interpersonales relevantes. Para esta tarea
existen varios inventarios como la plantilla de evaluación ideográfico-funcional de
Callaghan (The Functional Idiographic Assessment Template-Questionnaire, FIAT,
2006), que incorpora categorías funcionales como la afirmación de las necesidades,
la comunicación bidireccional, el conflicto, la divulgación y la autorevelación y la
cercanía. El terapeuta utiliza una hoja de cálculo en la que se especifican las
conductas objetivo, junto con toda la información sobre la historia, como en FAP
individual (Kohlenberg, Kanter, Bolling, Parker y Tsai, 2002).

Se identifican las fortalezas y recursos relevantes de los clientes, ya que ayudan a


crear nuevos repertorios en su vida diaria. Se deben evaluar también las
explicaciones y razones que da el cliente para explicar sus dificultades, ya que
ayudaría a facilitar cambios y observar por qué se está prolongando una
determinada conducta problemática. La historia de aprendizaje del cliente es un
aspecto necesario de la conceptualización del caso: Aclara las funciones que
configuraron los comportamientos problemáticos y explica por qué no se desarrolló
un comportamiento más adecuado. Por lo tanto, muestra qué clases de
consecuencias son propensas a reforzar estos comportamientos. Completando la
conceptualización del caso, se establecen objetivos de tratamiento que irán
desarrollándose a lo largo de toda la terapia y se dividen en metas más específicas,
de modo que durante cualquier sesión el terapeuta tenga una visión clara de qué
oportunidades de aprendizaje serían relevantes o qué comportamientos podrían ser
evocados e influenciados.

Las hojas de trabajo ayudan a los terapeutas a identificar rápidamente eventos


relevantes. Permiten una observación rápida de conductas que en primer momento
puedan resultar similares pero que impliquen consecuencias diferentes
dependiendo de la persona afectada. Por ejemplo, criticar a otro participante puede
ser una mejora in vivo para un cliente y un comportamiento in vivo del problema
para otro. Sin la conceptualización del caso, el terapeuta estará perdido en cuanto a
qué comportamiento fortalecer o qué bloquear. Por otro lado, la observación del
comportamiento interpersonal del cliente in vivo también proporcionará pistas sobre
áreas problemáticas que no pudieron ser identificadas previamente y, por tanto,
proporcionará nueva información que debe anotarse en la hoja de trabajo. Las

85
acciones del terapeuta para promover el cambio in vivo deben basarse en una
revisión exhaustiva de la conceptualización del caso del cliente, que puede requerir
una revisión frecuente.

Con la ayuda de una buena conceptualización acerca de los casos de cada uno de los
participantes del grupo, el terapeuta podrá adoptar la FAP como una estrategia de
grupo organizando el contexto, la estructura y el contenido de las sesiones de tal
manera que se hagan frecuentes las oportunidades de aprendizaje in vivo. Los
comportamientos del cliente que ocurran entre sesiones también deberán
examinarse, ya que podrían detectarse conductas que agraven los problemas. La
estrategia de la FAP también implica monitorizar las reacciones que el cliente evoca
en el terapeuta y en los otros miembros del grupo para que éstas puedan usarse para
dar forma a repertorios relevantes en la vida diaria.

3.3.2. Tácticas

A lo largo del curso de la terapia, la estrategia FAP se desarrolla a través de


secuencias de movimientos tácticos. Una táctica es un curso de acción que el
terapeuta emplea para promover una meta específica en sesión (Vanderberghe,
2009). Las tácticas pueden ser infinitas en número, y constituyen un aspecto del
tratamiento en el cual el terapeuta pone de manifiesto su creatividad

Introducir un contrato que especifique las reglas de los procedimientos evoca


conductas clínicamente relevantes. Un cliente cuya inestabilidad crea problemas en
las relaciones y en el entorno de trabajo, puede en un principio aceptar dicho
contrato y luego no cumplirlo. En el extremo opuesto del espectro, cabe esperar un
cumplimiento excelente por parte de un cliente cuyos problemas de la vida cotidiana
están relacionados con el seguimiento de reglas rígidas. Proponer un contrato puede
ofrecer oportunidades para dirigir comportamientos tales como expresar
desacuerdo. Un cambio en algún aspecto del contrato que se establezca puede
evocar comportamientos destinados al desarrollo como escuchar, negociar o tener
en cuenta la perspectiva de uno defendiendo los derechos de uno.

Las actividades de modelado que se usan con frecuencia en la terapia de grupo


conductual pueden ser tácticas para formar repertorios imitativos. Una vez más, la
conceptualización del caso del cliente determinará si mejorar en la imitación es una
mejora o lo contrario. Además, discutir el propio desempeño después del juego de
roles o imitación, dar feedback a otros miembros o recibirlo puede ser
oportunidades de aprendizaje in vivo para algunos clientes.

A veces, las mejoras más importantes son demasiado sutiles para afectar a los

86
miembros del grupo y pueden ser extinguidas en medio de la interacción en curso.
La mejor táctica en estos casos es volver a rescatar dicha mejora, una vez haya
terminado el hilo de la interacción en curso del grupo, para que así el refuerzo
natural actúe. Por ejemplo, un cliente que propone de forma tímida un tema o con
poco entusiasmo puede ser ignorado o pasar desapercibido. Sin embargo, si el
terapeuta propone: “Escuchad esto, parece algo distinto” puede evocar que ese
cliente se reafirme y diga su propuesta de una manera más convincente, de forma
que el grupo la adopte.

Alentando a los participantes a dar feedback en tiempo real sobre los efectos que el
comportamiento de otro miembro está teniendo en ellos es una táctica muy común
que permite influir en este comportamiento. Cuando un participante no está
teniendo en cuenta a otros o no se sensibiliza con ellos, el terapeuta puede
preguntar a los otros clientes cómo consideran esa conducta y cómo les afecta eso.
De otra manera, si el cliente escucha a los demás y los tiene en cuenta, puede usar
las respuestas que le dan para mejorar. Otro ejemplo podría venir de un cliente que
use respuestas dañinas. Aquí el terapeuta podría volver a preguntar cómo les afecta
este tipo de feedback. Escuchar las reacciones de los compañeros del grupo puede
convertir determinadas situaciones en oportunidades de aprendizaje.

3.3.3. Técnicas

Las técnicas son las formas habituales del terapeuta de actuar en un momento a otro
durante las sesiones. Son formas consistentes de abordar lo que está sucediendo
(Vanderberghe, 2009). Su naturaleza habitual puede a veces ser reconocida cuando
los terapeutas los usan involuntariamente en otros contextos, por ejemplo cuando
enseñan clases. Las principales técnicas de la FAP incluyen la observación, la
evocación, el refuerzo o el bloqueo y de extinción de conductas clínicamente
relevantes (Kohlenberg y Tsai, 1991).

En la observación el terapeuta atiende a los comportamientos clínicamente


relevantes y los efectos de su propio comportamiento en el comportamiento del
cliente. Además, el terapeuta observa los efectos de los miembros del grupo el uno
sobre el otro. Estas observaciones están guiadas por preguntas derivadas
directamente de las hojas de trabajo, por ejemplo, ¿Está él/ella reaccionando al
desafío del otro participante de la misma manera que él/ella reacciona a los desafíos
de su pareja en casa? ¿Qué sucedió para que el cliente se expresara más? ¿Tuvieron
las consecuencias impacto sobre sus problemas y metas? ¿Esta clase de
consecuencias está disponible en su ambiente de vida cotidiana? ¿Esta conducta
particular conducirá a los mismos resultados en su entorno de vida diaria como lo
hace en sesión?
La evocación, por otro lado, significa actuar de manera que sea más probable que el

87
cliente emita un comportamiento objetivo. Lo más frecuente es que el terapeuta
incite un comportamiento que ya fuese apuntado como una forma de mejora; pero
en ciertos casos será necesario incitar una conducta problemática para poder crear
una oportunidad de aprendizaje y afrontamiento. Además, la conducta problemática
de un participante o la mejora in vivo a menudo evoca el comportamiento en otro
participante y pueden presentarse en el grupo cadenas de comportamientos
clínicamente relevantes.
Reforzar comportamientos significa reaccionar al comportamiento del cliente de
manera que aumente la probabilidad de que un comportamiento similar ocurra en
situaciones similares. La técnica opuesta, es decir, extinguir un comportamiento,
significa retener el refuerzo relevante cada vez que se produce el comportamiento
objetivo. La extinción requiere que el comportamiento sea ejecutado libremente por
el participante, pero las consecuencias de refuerzo son evitadas por el terapeuta.
El bloqueo puede definirse como una forma de impedir que la conducta se ejecute
de forma lo suficientemente completa para que ponga en marcha una secuencia de
refuerzo. Por ejemplo, el bloqueo puede hacerse interrumpiendo al cliente,
confrontando al cliente con los problemas causados por ese comportamiento o
insistiendo en una actividad que hace que la evitación o el escape sean ineficaces. El
bloqueo es más complejo en el grupo que en el FAP individual. Un cliente puede
facilitar el comportamiento inadecuado de otro. Cuando esto sucede, el terapeuta
debe considerar la conceptualización del caso de ambos participantes. La
interrupción de la secuencia contraproducente debe ocurrir al impulsar alternativas
más adecuadas, creando así oportunidades de aprendizaje in vivo para ambos
participantes.
Como se puede ver, no existe una relación uno a uno entre las tácticas (que
definimos de acuerdo con su topografía) y las técnicas (que fueron definidas
funcionalmente). Cuando el terapeuta comparte sus pensamientos o sentimientos,
esto puede castigar, reforzar, evocar o bloquear conductas clínicamente relevantes.
Proponer un cambio en el contrato puede debilitar la conducta problemática de un
cliente que insiste en seguir las reglas de forma rígida. De forma alternativa, puede
reforzar conductas que signifiquen una mejora, como por ejemplo un cliente que
comenta al terapeuta que el contrato no satisfaría sus necesidades.

3.4. Reglas de la Psicoterapia Analítico-Funcional aplicada a la Terapia de Grupo

La FAP se formula en cinco reglas, que se consideran "sugerencias para el


comportamiento del terapeuta”.

Regla 1: Observar las conductas clínicamente relevantes (CCR)

Esta regla es esencial, ya que permitirá al terapeuta saber qué bloquear y qué

88
suscitar. Pongamos como ejemplo una persona que habla del comportamiento de su
gato. Si bien podría parecer una CCR1 (ya que hablaría en detalle sobre temas que
no son importantes), podría ser que el gato del cliente murió recientemente y estaría
tratando de hablar sobre un tema que realmente le importa. Hablar sobre cosas que
son importantes es una manera de establecer conexiones con otros miembros del
grupo (CCR2).

Es por ello que hay que atender bien a las CCR, siendo este aspecto el más
importante del tratamiento. De esta forma, se pondría en relieve el papel funcional
de la respuesta del terapeuta en reforzar o extinguir el comportamiento de un
cliente. Según Kholenberg y Tsai (1991), "la consecuencia primaria del
comportamiento del cliente es la reacción del terapeuta, sin una clara observación
del comportamiento del cliente por parte del terapeuta, las reacciones pueden ser
inconsistentes o anti-terapéuticas y el progreso estará comprometido”.

La regla 1 es el aspecto más importante del tratamiento (Hoekstra y Tsai, 2010) ya


que permite numerosas oportunidades en la experiencia grupal para que el
terapeuta identifique que conductas bloquear y que conductas evocar y reforzar de
manera natural. Aquí lo esencial es que el papel del terapeuta es saber que
conductas reforzar y extinguir de los clientes del grupo. Las consecuencias primarias
del comportamiento de los clientes en los grupos son las respuestas del terapeuta y
sus compañeros del grupo.

Básicamente el/la terapeuta habrá seleccionado previamente unos 8 pacientes


voluntarios para cada grupo, excluyendo de estos habitualmente a pacientes con
clínica psicótica, disociativa, violentos o suicidas graves, con composición
proporcional aproximada de hombres y mujeres y de una amplia gama de
problemas.

Regla 2: Producir conductas clínicamente relevantes (CCR)

La terapia de grupo es un entorno en el que es probable que se produzcan CCR. Los


grupos proporcionan beneficios tales como un sentido de universalidad y cohesión y
oportunidades para dar y recibir (Yalom, 1995). Según Rutan y Stone (2001), "El
grupo ofrece oportunidades de evocar asociaciones con las relaciones de la vida
actual o con las experiencias de la familia de origen". Por lo tanto, si una persona ha
sido incapaz de responder a las oportunidades de dar y recibir en la vida, tener un
sentido de conexión y cohesión con los demás, y relacionarse hábilmente con los
miembros de la familia el grupo sería un ambiente perfecto para ellos. El grupo
proporciona una oportunidad para hacer conexiones con otros, y las personas que
tienen dificultad para hacerlo por lo general se involucran en CCR1 sin conciencia de

89
que su comportamiento sirve para aislar a los demás. Por ejemplo, una persona que
comienza la sesión proporcionando información excesivamente detallada sobre su
día, sería un CCR1.

Una persona que tiene dificultad para hablar con los médicos puede beneficiarse de
un grupo de proceso si el terapeuta puede obtener CCR. Por ejemplo, este cliente
podría dejar de hacer contacto visual con los médicos, murmurar al hacerles
preguntas, o evitar asistir a las citas médicas (CCR1). Si el cliente solicita ayuda con
estos problemas, pero sus CCR1 no se producen al interactuar con el líder del grupo,
el líder puede evocar CCR1 pidiendo a otro miembro que desempeñe el papel del
médico.

En otro ejemplo, una mujer que tiene dificultades en las relaciones íntimas con los
hombres, pero no con las mujeres, puede no recibir los beneficios directos de un
grupo de mujeres que podría recibir en un grupo de proceso de género mixto. Por
ejemplo, esta mujer podría evitar a los hombres que expresan afecto (CCR1). Esta
CCR1 sólo podría ocurrir en un grupo mixto, ya que en un grupo exclusivamente de
mujeres no sucedería y tampoco podría darse cuenta de que lo estaría evitando.

Es importante en este aspecto que el/la terapeuta (Hoekstra y Tsai, 2010) estructure
el entorno del grupo para que sea evocador de CCRS y centrarlo en las relaciones
dentro del grupo. Esto suele conllevar en las primeras sesiones un trabajo de
psicoeducación sobre los objetivos y procedimientos de la FAP grupal en la premisa
principal de esta terapia: buscar como los problemas de la vida diaria se hacen
presentes aquí en las sesiones de la terapia grupal, y como esto ayuda a producir
cambios importantes.

Un formulario-tipo de psicoeducación de FAP grupal puede ser el siguiente (Hoekstra


y Tsai, 2010): Se presenta la PAF Grupal, se evoca que hagan preguntas sobre ella y
se firma un contrato verbal o por escrito de consentimiento en participar en la
misma.

Lo que puede esperar del grupo de Psicoterapia Analítica Funcional (PAF):

Los clientes entran en terapia de grupo con historias de vida complejas de alegría y angustia,
sueños y esperanzas, pasiones y vulnerabilidades, dones y habilidades únicas. Su terapia de grupo
se llevará a cabo en un ambiente de cuidado, respeto y compromiso en el que se aprenden nuevas
formas de acercarse a la vida. Embarcarse en un viaje de exploración y crecimiento con otros es un
privilegio, y es importante tratar lo que otros comparten con reverencia y cuidado. La validación de
los sentimientos y experiencias de los miembros del grupo creará un ambiente seguro para sanar y
crecer. El tipo de terapia en el que está entrando se llama Psicoterapia Analítica Funcional (PAF),
una terapia que se centra en la eficacia interpersonal y la intimidad. Tendrás la oportunidad de
explorar cómo estás en las relaciones, experimentar con diferentes maneras de relacionarte, y
aprender a expresarte más plenamente conectando con los demás más profundamente. Usted
será desafiada a ser más abierto, vulnerable, consciente y presente. En concreto, nos centraremos

90
en cinco clases de habilidades interpersonales: identificar y expresar las necesidades, dar y recibir
comentarios sobre el impacto interpersonal, lidiar con el conflicto, revelar sentimientos de cercanía
hacia los demás y revelar la experiencia emocional y la expresión de sentimientos. Estas
habilidades aumentarán la capacidad del grupo para trabajar juntos para que todos puedan
generar y beneficiarse de la compasión y la cercanía.

Un principio básico en PAF es que las relaciones dentro del grupo son un microcosmos de sus
relaciones de la vida diaria, y es especialmente importante que usted se centre en los problemas
(positivos o negativos) o dificultades que surgen en el grupo que también se pueden relacionas con
otros problemas que tiene con otras personas en su vida. Identificará sus propios
comportamientos problemáticos que interfieren con la cercanía, y aprenderá a entender cómo se
protege en las relaciones humanas que funciones o fines tiene hacer esto.

Practicar comportamientos que promueven la intimidad y confiar en los otros miembros del grupo
para proporcionar retroalimentación es útil. Así que estaremos explorando cómo interactúas en el
grupo de una manera similar a cómo interactúas con otras personas en tu vida diaria, qué
problemas surgen en el grupo que también aparecen con otras personas en tu vida diaria, y qué
comportamientos positivos puedes desarrollar en el grupo que puedas aplicar a tus relaciones con
otras personas en tu vida diaria.

La terapia tiene un mayor impacto cuando se habla de tu experiencia en el momento presente en


lugar de informar sobre las cosas que sientes durante la semana. Por ejemplo, compartir lo que
estás pensando, sintiendo o necesitando, o tu experiencia con otro miembro del grupo, incluso si te
siente asustado o inseguro. Cuando miramos algo que está sucediendo en el momento, podemos
obtener retroalimentación inmediata de otros miembros del grupo, podemos experimentarlo y
entenderlo más plenamente, y el cambio terapéutico es más rápido y más fuerte. Sin embargo,
existe un nivel óptimo de asunción de riesgos en cualquier situación, y es importante que
supervisemos cuánto estás fuera de tu zona de confort para sea lo mejor para ti en un momento
dado.

En general, el grupo PAF se centrará en sacar adelante tu mejor versión de tu yo mismo. Las
personas más satisfechas están en contacto con ellas mismas, son capaces de hablar y actuar
compasivamente sobre sus verdades y dones, y son capaces de dar y recibir amor completamente.
Cuando uno siente el poder de expresar sus pensamientos, sentimientos y deseos de una manera
auténtica, cariñosa y asertiva, uno está más conectado a los demás y tiene un mayor sentido de
dominio en la vida. Este grupo será un lugar ideal para que practiques compartir tu voz interior en
un ambiente que sea capaz de recibir y responder.

Acepto la declaración anterior, y me han dado una copia para mí mismo. He tenido la
oportunidad de hacer preguntas y expresar mis reacciones. Estoy comprometido a hacer todo lo
posible en esta terapia de grupo.

El/la terapeuta PAF (FAP) puede evocar que los miembros del grupo se enfoquen en las
relaciones internas al mismo grupo con preguntas del estilo:

. "¿A quién sientes más cercano aquí?"

. "¿Quién es la persona del grupo en la que puede confiar más?"

."¿Quién es más parecido a ti?”

91
. ¿Qué es lo que más te gusta o admiras de esta persona?"

En sesiones más avanzadas se pueden usar preguntas más comprometidas e


íntimas del estilo:

.”Me pregunto (el/la terapeuta lo dice en voz alta) si podemos compartir algunas cuestiones que
vengo viendo que nos resultan difíciles en el grupo”

.”¿Podemos compartir lo que cada uno se va dando cuenta hasta ahora en estas sesiones de
grupo?”

.”¿Hay algo que nos decepcionó sobre la sesión de hoy?”

.”¿Cómo os sentí ahora mismo aquí en el grupo?”

.”¿Hay algo que podamos hacer para que te sientas más conectado al grupo?

Regla 3: Reforzar CCR2

Como se mencionó anteriormente, la regla más importante es la observación de


CCR. Si el terapeuta no observa la mejora del cliente cuando ocurre, la probabilidad
de que el nuevo comportamiento se fortalezca y se acerque a la mejora es mínima.
Si el terapeuta es consistente en responder inmediatamente a las mejoras del
cliente, por pequeño que sea, se fortalecerá la relación entre el nuevo
comportamiento y la respuesta contingente. Un líder del grupo que responda
positivamente a un cliente de una manera cálida y genuina cuando el cliente intenta
comportamientos diferentes puede aumentar naturalmente la probabilidad de que
los nuevos comportamientos continúen ocurriendo. Sin embargo, este tipo de
respuesta necesita ser reforzante para el cliente. Según Kohlenberg y Tsai (1991) "El
refuerzo no puede definirse así porque es un proceso, un objeto se convierte en un
refuerzo sólo en el contexto del proceso y no puede ser identificado
independientemente de él" Por lo tanto, pensar en la relación entre el
comportamiento del cliente y las consecuencias naturales puede ayudar al terapeuta
a identificar cómo se puede reforzar el comportamiento del cliente. Desde esta
perspectiva, el comportamiento de grupo siempre está reforzando si un cliente
vuelve al grupo. Los clientes que quieren contactos sociales y relaciones genuinas,
naturalmente, son reforzados por un grupo que expresa interés en el cliente. Por
otro lado, un cliente que tiene una amplia gama de relaciones satisfactorias y esté
seguro puede no ser reforzado por el grupo, ya que le haga sentir que el grupo le
resulte agotador debido a la energía que tiene que invertir en mantener a la gente
informada de su progreso.

El liderazgo del grupo exige flexibilidad, autenticidad y la capacidad de cambiar con

92
el proceso grupal. Un terapeuta puede hacer hipótesis sobre lo que es el refuerzo
basado en la identificación de CCR (Regla 1), y puede emplear una serie de
respuestas naturales que podrían estar reforzando al cliente. Estos son algunos
ejemplos de lo que un terapeuta podría decir al cliente utilizado en el ejemplo: "Me
gusta cuando haces una pausa y dejo que el resto del grupo se ponga al día. Poder
responderte a lo que nos estás contando, sienta bien.”; “Quiero que prestes atención
al hecho de que los demás tienen algunas cosas que decir que son positivas y
cariñosas". En el segundo ejemplo, el terapeuta está aumentando el contacto del
cliente con contingencias de control (el interés de otros miembros del grupo).

Esencialmente, el líder fomenta una relación entre el miembro del grupo


identificado y el líder. El líder también fomenta las relaciones entre el cliente
identificado y otros miembros del grupo con el fin de reforzar CCR2. Si el cliente está
gravemente carente de una conexión con otros, es probable que declaraciones
como las anteriores sean bienvenidas por su parte. Sin embargo, las declaraciones
del terapeuta que tienen la intención de reforzar el comportamiento del cliente
deben ser flexibles y depender de la mejora del cliente.

El comportamiento grupal refuerza a cada miembro del grupo si este vuelve a las
siguientes sesiones (Hoekstra y Tsai, 2010).

“Un líder fomenta las relaciones entre los miembros del grupo y entre estos y él mismo con el fin
de promover el refuerzo natural de CRR2s. Es esencial para el proceso de refuerzo el concepto de
moldeamiento de aproximaciones a un comportamiento objetivo. Si estamos enganchados por el
comportamiento interpersonal de un miembro del grupo, el valor terapéutico se produce si no
participamos en el comportamiento típico que el cliente provoca en los demás, ya que hacer eso
sólo refuerza los ciclos habituales. Por ejemplo, si un cliente habla extensamente sobre cuestiones
tangenciales, una respuesta típica sería ignorar a este cliente ya que eso no nos ayuda a conocerlo
mejor. En el grupo FAP, la responsabilidad del terapeuta es ayudar a este cliente: (1) reconocer la
CRR1 cuando está ocurriendo, (2) entender la función de la CRR1 (por ejemplo, proteger al cliente
de hacer conexiones con otros Y la eventual decepción y daño que ha ocurrido en las relaciones
pasadas), (3) hacer aproximaciones sucesivas a un comportamiento más adaptativo (hablar más
brevemente, hablar sobre los sentimientos primero y sobre cuestiones externas, luego” (Hoekstra y
Tsai, , pp.256, 2010)

Regla 4: Observar los efectos potencialmente reforzantes del comportamiento del


terapeuta en relación con los CCR del cliente

El terapeuta debe ser consciente de cómo sus respuestas a los clientes afectan,
interfieren o influyen en la terapia. Si el terapeuta hace que su respuesta dependa
de la mejora del cliente, el terapeuta tendrá una poderosa herramienta para facilitar
e influir positivamente en el resultado del tratamiento. Si el terapeuta ignora cómo
su comportamiento afecta al cliente o si el terapeuta no es consciente de que su
respuesta influye en el comportamiento del cliente, el terapeuta estará carente de
una forma de facilitar el cambio de comportamiento.

93
Así como los clientes son reforzados por el comportamiento del terapeuta, los
terapeutas también son reforzados por la mejora del cliente. .Por ejemplo, en la
situación descrita anteriormente (cliente que habla demasiado y no deja a los demás
interactuar), el terapeuta puede creer que interrumpir al cliente sería grosero o
irrespetuoso. Es posible que el terapeuta provenga de un entorno en el que
interrumpir a alguien parecería grosero o irrespetuoso. En este caso, sin embargo, la
falta de voluntad del terapeuta para hacer esta intervención podría interferir con su
capacidad para intervenir de manera efectiva. Es probable que otros miembros del
grupo se aburran o se sientan frustrados y no quieran volver. Estas experiencias
privadas de otros miembros del grupo son consecuencias naturales del
comportamiento del cliente y es necesario que el terapeuta intervenga.

La regla 4 es especialmente significativa porque requiere que el terapeuta preste


atención a eventos y experiencias privadas. Esto puede ser un recurso útil para
ayudar al terapeuta a identificar los CCR del cliente. En el ejemplo anterior, el cliente
identificado está hablando con mucho detalle y extensamente acerca de lo que le
sucedió ese día. Es probable que el terapeuta se sienta aburrido, frustrado o incapaz
de llegar hasta el cliente. Dado que esta experiencia puede ser solitaria, el terapeuta
puede recordar que la preocupación del cliente era la soledad. Esto puede permitir
que el terapeuta observe conexiones funcionales entre la experiencia privada del
terapeuta, la preocupación de presentación del cliente y la CCR1 del cliente.

La aplicación de la Regla 4 ha recibido considerable atención incluso por parte de


teóricos que no practican una orientación conductual. Por ejemplo, Gabbard y
Wilkinson (1994), McCleary (1992), Ogden (1979), Preston (1998), Sampson (1991) y
Solomon (1997) han escrito acerca de la importancia de las experiencias privadas del
terapeuta en la comprensión de la terapia. Mientras que los sentimientos y
reacciones de los terapeutas hacia los clientes a menudo son acuñados bajo
terminología como la contra-transferencia o la identificación proyectiva, estas
formulaciones psicodinámicas son consistentes con la Regla 4 si el enfoque de las
reacciones del terapeuta está en la relación funcional entre el comportamiento del
cliente y la respuesta del terapeuta.

La manera práctica y real que tiene un/a terapeuta de saber si su conducta refuerza
las conductas de los miembros de un grupo es observar si esas conductas aumentan
en las sucesivas sesiones del grupo tras sus intervenciones con ellas.

Además es importante que el terapeuta sea consciente de sus experiencias


privadas y como pueden interferir en las sesiones. Por ejemplo un terapeuta con una
historia personal donde interrumpir a otros cuando hablan se considera inadecuado,
puede dejar hablar en exceso a un cliente que monopoliza un grupo, reforzando con
su atención inadecuadamente estas CCR1; produciendo además aburrimiento y
nerviosismo en el resto del grupo (Hoekstra y Tsai, 2010). Si el terapeuta es

94
reforzado por observar sus propios problemas en vivo y como le afecta en relación a
los miembros del grupo en las sesiones, habrá dado un gran paso para facilitar
cambios en él/ella misma y el resto del grupo. Para ello puede evocar preguntas a los
miembros del grupo preguntándoles cómo se sienten con sus intervenciones y
comprobando que efectos tienen.

Regla 5: Dar interpretaciones de las variables que afectan el comportamiento del


cliente, generando un repertorio de descripción de las relaciones entre la acción y la
relación interpersonal

Para comprender mejor este punto, lo hemos dividido en dos aspectos. Además, se
han proporcionado ejemplos de cómo el terapeuta podría usar la Regla 5 con el
cliente descrito anteriormente (volvemos al ejemplo del cliente que habla en exceso
y no deja a los demás interactuar).

Primero, el terapeuta hace declaraciones de observación sobre los CCR1 del cliente.
En este caso, el terapeuta podría decir: "Me doy cuenta de que ha estado hablando
mucho acerca de los detalles de su día, como su ropa y sus platos". Esto es un
resultado de la observación de la Regla 1.

En segundo lugar, el terapeuta hace declaraciones o hipótesis sobre la función del


comportamiento del cliente. El terapeuta podría decir: "Tal vez hablar de cosas no
importantes es una manera de evitar hablar de las cosas que importan. Cuando no
tienes que correr el riesgo de decirle a la gente cómo te sientes realmente sobre lo
que está pasando, no tienes que hacerte vulnerable. "No dejar que otros digan ni
una palabra puede ser una manera de evitar averiguar si a la gente realmente le
importa lo que tengas que decir”.

El líder del grupo bloquea la evitación (impide que el cliente proporcione detalles
sobre su día durante toda la sesión del grupo) y aumenta la probabilidad de que el
cliente experimente una conexión que sería percibida con otros miembros del grupo.
El líder del grupo emplea la Regla 5 para hacer hipótesis sobre la función del
comportamiento del cliente y para obtener nuevas respuestas del cliente.

La Regla 5 también puede permitir al líder del grupo aplicar la Regla 3 al involucrar a
otros miembros del grupo en reforzar naturalmente el comportamiento del cliente.
Por ejemplo, el líder del grupo puede hacer preguntas como "¿Por qué pensáis el
resto que él está hablando tanto acerca de su ropa en este momento? ¿Vosotros
alguna vez no habéis divagado hablando sobre un tema? ¿A qué creéis que se debe
eso? ¿Por qué no habla de relaciones con la gente? ". A medida que el grupo formula
una hipótesis acerca de la función del comportamiento del cliente, el cliente será
capaz de establecer conexiones relacionándose e identificándose con otros

95
miembros del grupo. Además, el líder puede crear una norma de grupo en la que se
refuercen las declaraciones funcionales sobre el comportamiento de los miembros
del grupo.

Se podría suponer que el cliente en cuestión tiene una historia en la que su


comportamiento actual era funcional de alguna manera. Tal vez este cliente tenía
muchos hermanos que hablaban sobre él, la inhibían de hablar, o la ignoraban.
Debido a que su experiencia de grupo actual es similar a estar rodeando a muchos
hermanos, el cliente puede sentirse ansioso por no tener la oportunidad de hablar.
Si habla incesantemente, no tendrá que observar que otros no están escuchando.

El trabajo del terapeuta es exponer al cliente a una situación en la que el entorno


inmediato no responda de manera punitiva. Conocer la función histórica del
comportamiento del cliente puede ayudar tanto al cliente como al grupo a trabajar
con CCR. En esta situación, el terapeuta podría decir: "No escucho a nadie aquí en
grupo tratándote como tus hermanos solían tratarte". El terapeuta obtiene nuevas
respuestas alentando al cliente a considerar el feedback positivo.

3.5. Estudios de la FAP de Grupo en distintos problemas

3.5.1. Experiencia del dolor crónico en grupo

Un grupo, descrito por Vandenberghe, Cruz y Ferro (2003) se formó por iniciativa de
estos autores con la intención de ayudar a las personas remitidas de un centro de
dolor. Se trataba de pacientes que no respondían al tratamiento médico para el
dolor oro facial crónico.

El grupo comenzó en agosto de 2001 y sería el primero de una larga serie de


tratamiento en grupo de FAP para el dolor crónico (Vandenberghe, Ferro & Cruz,
2003; Vandenberghe y Ferro, 2005; Martins-Queiroz & Vandenberghe, 2006).

Existe una evidencia de que el dolor crónico se relaciona de muchas maneras con el
estrés (Melzak, 1998), lo que hace que se ponga interés en aspectos del
comportamiento del cliente vinculados al ajetreo y el bullicio de la vida cotidiana y a
patrones interpersonales que le resulten estresantes. La terapia conductual de la FAP
trata estas variables.

El trabajo de Fordyce (1976) define el dolor como parte de la comunicación entre


personas. Esto nos proporciona una visión operante del comportamiento del dolor;
además de otros objetivos para el tratamiento como el miedo al dolor (Vlaeyen,

96
Kole-Snijders, Boeren y Van Eek, 1995; Crombez, Vlaeyen, Heuts, & Lysens, 1999), o
visión catastrófica (Turner, Jensen y Romano, 2000). , Thorn, Boothy y Sullivan,
2002).

La evitación experiencial (Luciano, Visdómine, Guthiérrez & Montesinos, 2001) es


uno de los aspectos que más llama la atención como objeto de cambio, ya que
observamos que el cliente, al intentar controlar el dolor, se queda
permanentemente encerrado en un bucle en el que lucha con el dolor;
desatendiendo otros problemas más importantes de la vida. Al ser éstos no
atendidos, se crean contextos cada vez más estresantes (Martins-Queiroz &
Vandenberghe, 2006). Desde la perspectiva de la FAP, vimos que todos estos
aspectos (que tratan de la vida cotidiana, comunicación a través del dolor,
catastrofización, miedo y evitación experiencial) son patrones que también ocurren
en el entorno del tratamiento y por lo tanto pueden ser influenciados in vivo.

Una lectura al trabajo de Curran & cols. (1995) nos señala que un número
significativo de participantes en los grupos de dolor crónico reporten historias de
trauma. En muchos casos, estas historias producen repertorios para controlar las
sensaciones negativas por medio de la evitación a la proximidad interpersonal. El
trabajo de Kohlenberg y Tsai (1994) sobre la intimidad curativa de las relaciones
promueve la proximidad interpersonal para reducir el trauma.

En los últimos años se ha hecho hincapié en el estudio de las emociones positivas en


la resiliencia y el afrontamiento (Frederickson, 2000, Folkman y Moskowitz, 2001;
Zautra, Johnson & Davis, 2005), proporcionando nuevos conceptos de sensibilización
que son útiles para movilizar recursos del cliente y trabajar en regulación emocional.
Este enfoque en la conciencia emocional ya estaba presente en el primer grupo de
Vandenberghe, Cruz y Ferro en el 2001, aunque los grupos posteriores desarrollaron
este enfoque integrando ejercicios formales de mindfulness (Ferro & Vandenberghe,
en prensa) así como tácticas de aceptación y defusión cognitiva (Martins- Queiroz &
Vandenberghe, 2006).

3.5.2. Experiencia de la depresión en grupo

A principios de 2004, se puso en marcha un primer grupo para el tratamiento de la


depresión. Éste se originó como un servició comunitario gratuito para
desfavorecidos. Ocho mujeres deprimidas, que habían respondido a un anuncio en
un boletín de la iglesia local, fueron seleccionadas. El grupo se reuniría dos horas por
semana durante seis meses (Oliveira & Vandenberghe).

97
La psicoterapia interpersonal y la terapia cognitiva proporcionaron muchas de las
ideas para el trabajo. La observación de conductas interacciónales e interpersonales
describen los comportamientos relevantes de los clientes deprimidos, como la
búsqueda de tranquilidad inadecuada, el desánimo de las actitudes útiles de otras
personas y la inducción de reacciones contraproducentes en otros (Coyne, 1999), así
como cuestiones como los conflictos interpersonales, el papel de las transiciones o
déficits interpersonales (Klerman, Weissman, Rounsaville & Chevron, 1984).

La terapia interpersonal enfatiza el apoyo al cliente en la elaboración de soluciones a


las áreas problemáticas identificadas como relevantes para su depresión. Hemos
observado que este enfoque pragmático de la terapia tiende a evocar los problemas
dirigidos in vivo durante las sesiones de maneras que se pueden tratar con FAP. En el
proceso de elaborar soluciones junto con el terapeuta y los otros miembros del
grupo, la participante a menudo experimentará las mismas dificultades que
subyacen en sus conflictos interpersonales y mostrará los mismos comportamientos
problemáticos que le dificultan hacer frente a cambios o se relacionan con las
personas en la vida cotidiana. Por ejemplo, cuando el grupo trata de ayudar a un
miembro a dejar las actitudes de búsqueda de la gente en su entorno de vida
cotidiana, reacciona de manera igualmente desalentadora a los esfuerzos del grupo.
En otro ejemplo, discutir las formas disfuncionales en las que un cliente se ocupa de
los conflictos interpersonales en otros entornos, puede conducir a conflictos entre el
cliente y los miembros del grupo que le están pidiendo que cambie. Esto hace
posible que el terapeuta influya en el comportamiento relevante in vivo. Kohlenberg,
Kanter, Bolling, Parker y Tsai (2002) exponen cómo el terapeuta que utiliza la terapia
cognitiva puede influir, mediante su interacción, en los problemas del cliente.
También muestran cómo estos últimos pueden responder de manera contingente a
los comportamientos relevantes del cliente.

El protocolo de terapia cognitiva grupal en términos de tácticas FAP sigue un


esquema similar a éste (White, 2000a, 2000b): a menudo comienza con los
participantes compartiendo los registros diarios de pensamientos que ocurrieron
durante la semana, o seleccionando un pensamiento o creencia que surgió durante
la sesión. El grupo reúne evidencia a favor y en contra de estos pensamientos o
creencias, mientras que el terapeuta facilita las interacciones lanzando preguntas
como: ¿Hay otras maneras de ver esta situación? ¿Alguien más experimentó algo
similar? ¿Cómo lo trataste? Al principio, el terapeuta lidera la reestructuración
cognitiva pero gradualmente, los participantes aprenden a discutir más libremente.
Esta práctica ofrece una gran variedad de oportunidades de aprendizaje in-vivo. Al
participar en estas actividades de grupo, los participantes tendrán que dar y recibir
críticas, obtener ayuda de otros, lidiar con el conflicto o defender sus necesidades.
Otro ejemplo de ello sería la manera tradicional cognitivo-conductual de usar
asignaciones de tareas.

98
Esta técnica ofrece oportunidades de aprendizaje en grupo, tanto en la sesión en la
que se selecciona la asignación como en la sesión en la que se reportan los
resultados. Cuando cada participante elige una actividad para la semana (White,
2000a; 2000b) basada en una idea que el grupo produjo, los comportamientos que
se van desarrollando a su vez producen nuevas ideas para futuras actividades, hace
que se discutan o se acepten sugerencias de otros. Los informes sobre la tarea
completada a menudo evocan emociones relevantes in vivo y ofrecen oportunidades
para aprender a recibir y criticar, para hacer frente a las evaluaciones de otros y para
negociar públicamente la interpretación de los eventos reportados. El grupo 2004
(Oliveira & Vandenberghe, presentado) hizo un uso intensivo de las actividades y
juegos en sesión para promover la intensidad emocional, evocar los problemas de
los clientes durante las sesiones y darles la oportunidad de tratar directamente con
ellos. En muchos casos, las dificultades de un cliente proporcionan oportunidades de
aprendizaje en vivo para otro cliente, esto ocurre por ejemplo cuando un
participante es excesivamente crítico mientras que otro tiene dificultades para hacer
frente a las críticas. Cuando esto ocurre, el terapeuta transforma el problema en una
única oportunidad de aprendizaje in vivo para muchos miembros del grupo a la vez,
incitando a los participantes a darse mutuamente feedback y pidiendo a otros
miembros del grupo que den su opinión sobre lo que sucedió entre los dos
protagonistas.

Muchos terapeutas conductistas de tercera generación son partidarios de combinar


la FAP y la ACT dada sus raíces funcionales comunes y las semejanzas en sus
planteamientos sobre las funciones del lenguaje, que aunque en FAP parte de
planteamientos skinnerianos y en ACT del planteamiento postskinneriano de la
Teoría del Marco Relacional, tienen aún más cercanía cuando se plantean la génesis
del Yo y sus problemas, en particular en el papel terapéutico del trabajo con
perspectivas desde los llamados marcos de relaciones deícticas (Naranjo, 2010;
Montolla y Molina, 2015). Se trata con esto de utilizar el lenguaje en la experiencia
de la terapia mediante ejercicios experienciales (Marcos Yo-Tu, Aquí-Allí, Ahora-
Entonces) que desvinculen o defusionen a los sujetos sobre las funciones del
excesivo control verbal en relación a determinados eventos pasados de su historia
personal y circunstancias presentes, para aumentar su flexibilidad psicológica y
empoderarlos en relación a lo que valoran y desean para sus vidas.

En el siguiente cuadro hacemos una propuesta de ejemplos prácticos que vincula


elementos de FAP-ACT en una línea que hemos trabajado en terapia de grupo ACT
con ciertos elementos de FAP, en especial identificando las conductas de evitación
experiencial con CCR1, el darse cuenta o discriminaciones con CCR3 y el llevar a cabo
acciones concretas en una dirección valiosa con CCR2 (Ruiz y Trillo, 2017).

99
3.6. Ejemplos prácticos (De ACT+FAP y FAP)

CONDUCTAS CLÍNICAMENTE RELEVANTES, RELACIONANDO ACT-FAP, Y ACCIONES


DEL TERAPEUTA CON ELLAS (Ruiz y Ruiz, 2017)

CCR1 CCR3 CCR2


Cómo se presentan en las Cómo se presentan en las Cómo se presentan en la
sesiones: sesiones: sesiones:

Intentos de control y evitación Explicaciones de por qué hace/ Acciones concretas que activan
del dolor derivado de para qué o deja de hacer lo que a la persona hacia compromisos
pensamientos, sentimientos y hace y sobre lo que le pasa con áreas valiosas de su vida
sensaciones relacionadas con
diversas circunstancias de la Acciones de aceptación del
vida y conductas relacionadas malestar haciéndole espacio, y
con estas evitaciones-control estando dispuesto/a
(compulsivas, impulsivas, etc.). experimentarlo cuando se
Cómo se presentan aquí y ahora mueve en direcciones valiosas
en la relación terapéutica

Qué hacer con ellas: Qué hacer con ellas: Qué hacer con ellas:

Observarlas, evocarlas e Observarlas y Evocarlas Observarlas y Evocar ocasiones


Intervenir verbal y mediante Moldeándolas progresivamente para que tengan lugar y
acciones para derivar funciones para que la persona se dé Reforzarlas de manera natural
de reducción de las evitaciones cuenta de aquello que le cuando se presenten o se
e intentos de control funciona y no le funciona a aproximen (moldeamiento) a
experiencial poniendo a la largo plazo sobre lo que para las mismas en pasos pequeños
persona en contacto ella es valioso en su vida o más grandes según el caso
funcionalmente con lo
infructuoso de esas acciones y “Diferenciar los contenidos “Acciones comprometidas con
sus consecuencias en la vida: mentales del mundo de los las rosas, regarlas y abonarlas
“Anclarse y estructurar su vida cinco sentidos, diferenciar lo aún en presencia del malestar”
en torno a la mala hierba que es mala hierba de lo que es
alejándole de las rosas” rosa, y darse cuenta de que
él/ella es observador de todo
ese proceso”

En el siguiente ejemplo el terapeuta evocaría CCR1 mediante la interacción de otros


miembros del grupo .Por ejemplo, el cliente A presta poca atención a las expresiones
faciales y a las respuestas emocionales de otros. Como resultado, el cliente A tiende
a hacer afirmaciones contundentes que son irrelevantes para lo que está sucediendo
en el grupo (CCR1). El cliente B grita constantemente e informa que nadie parece
escuchar lo que tiene que decir (CCR1). Pedir al Cliente A que preste atención a las
expresiones afectivas del Cliente B puede servir para obtener nuevas respuestas del
Cliente A y satisfacer la solicitud del Cliente B atendiendo a lo que está diciendo.

100
Diálogo:

-Cliente A: Tengo que hacer algunos recados hoy (CCR1: Se estaría hablando de un
tema superficial).

-Cliente B: (llorando). Parece que nadie está escuchando nada de lo que tengo que
decir. (CRR1).

-Terapeuta: (al Cliente A). ¿Qué crees que le está sucediendo? (Hace uso de la Regla
3 bloqueando la CRR1 del Cliente B y obteniendo nueva respuesta del Cliente A).

-Cliente A: No lo sé.

-Terapeuta: ¿Quieres saberlo?

-Cliente A: ¿eh?

-Terapeuta: Bueno, parece que esté bastante molesto. ¿No te interesa saber por
qué?

-Cliente A: Está bien. (Mira al cliente A expectante- CCR2).

-Cliente B: Estoy muy triste.

-Terapeuta. (Al cliente B). Estoy notando que alguien más en grupo está prestando
atención a lo que estás sintiendo. ¿Cómo te hace sentir esto?

-Cliente B: Bien, mejor al saber que prestó atención (CCR2)

-Terapeuta: (Para el cliente A): Fíjate en cómo prestar atención a otra persona puede
hacer que se sienta mejor o más cómoda. (Regla 3- Reforzar CCR2). ¿Qué piensas?
En este diálogo, el terapeuta está alentando la comunicación cruzada de los
miembros del grupo, además también hace declaraciones verbales sobre el
comportamiento durante la sesión, que son consistentes con las metas del cliente.

3.7. Conclusiones

La terapia FAP es ideal para una estructura de grupo, ya que ofrece muchas más
oportunidades de interacción y se evocan más conductas clínicamente relevantes;
debido a la mayor cantidad de miembros que participan en ésta.
Requiere de un terapeuta hábil, ya que en un primer momento, las CCR1 pueden
pasar desapercibidas y es más complejo al tener que manejar, reforzar o bloquear
muchas de las conductas presentes. Además, no todas las conductas afectan del

101
mismo tipo a los miembros del grupo por lo que escoger reforzar o inhibir una
conducta puede ser más difícil de lo que pueda parecer en un principio y quizá se
deba hacer uso de la propia interacción entre los participantes. En general, requiere
mucha flexibilidad y dominio.
Por otro lado nos permite un ambiente donde la conducta puede ser reforzada o
inhibida de forma mucho más natural, ya que la participación de los otros miembros
del grupo puede modelar las CCR de otros participantes sin necesidad de que el
terapeuta intervenga (permitir que los demás debatan o dejen un feedback positivo
sobre la conducta de otra persona puede ser una forma de refuerzo). De esta
manera, se logra una forma de estructurar la terapia mucho más dinámica. Además
de ello, los miembros del grupo pueden a su vez entrar a discutir o dar su opinión no
sólo acerca de otros participantes, si no de la conducta del propio terapeuta que
maneja la sesión; pasando así a resultar una forma de evocar conductas
clínicamente relevantes y convirtiéndose en una nueva situación de aprendizaje.

102
Capítulo 4. Adaptación de la PAF de Grupo a nuestro
contexto
(Juan José Ruiz Sánchez, Inmaculada Ruiz Miñarro y Francisco Trillo Padilla)

1. Justificación de la adaptación de la PAF de Grupo a nuestro contexto

El trabajo habitual de un/a psicólogo de la red de salud mental pública que


trabaje en un equipo o centro comunitario es una agenda diaria de 8-9 clientes
por día y listas de espera entre las citas de seguimiento que varían entre el mes,
en los mejores casos, a los 3-4 meses en los peores. Esto hace realmente difícil
trabajar cualquier enfoque de terapia individual en este contexto, y es uno de los
motivos principales para haber elegido la terapia de grupo como alternativa,
imperfecta, pero más optimizada para este tipo de situaciones de la demanda en
atención de la salud mental.

Desde aproximadamente el año 2000 venimos trabajando en la Unidad de Salud


Mental Comunitaria de Úbeda (Jaén)-España con diversos enfoques de
psicoterapia grupal, sobre todo con las modalidades cognitivas-conductuales de
segunda y tercera generación, la psicoterapia adleriana y la terapias estratégicas,
aplicada a adultos con problemas de la topografía ansioso-depresiva, trastornos
de personalidad y psicosis; así como en ocasiones con grupos de niños y padres
(alternos). Hasta el momento nuestra experiencia indican que los grupos más
efectivos y eficientes han sido los que hemos trabajado con la Terapia de
Aceptación y Compromiso de Grupo (Ruiz y cols. 2017) al menos con adultos con
problemas ansiosos-depresivos y psicóticos. Otros compañeros de la red pública
y privada de la salud mental han tenido experiencias similares con la ACT de
grupo aplicadas a otras poblaciones, en especial a la de los pacientes psicóticos y
sus familiares (Roldán, Garrido y Bonilla, 2017a y Roldan, Garrido y Bonilla,
2017b). También existen experiencias grupales relevantes con población clínica y
no clínica con ACT de Grupo y diferentes patrones de inflexibilidad psicológica
realizados en instituciones privadas (Aznárez, Izquierdo y Garrido, 2017).

En los grupos ACT desde la Unidad Comunitaria de Úbeda hemos incorporado


elementos de FAP sobretodo vinculando las barreras referidas en la vida
cotidiana (“las malas hierbas de la metáfora del jardín”) y que se presentaban en
el aquí y ahora de las sesiones como CCR1; el darse cuenta de que les ayudaba o
les perjudicaba a largo plazo para moverse en dirección a sus valores (“las rosas
del jardín de la metáfora del jardín”) como CCR3 y las acciones concretas que
referían en su vida diaria de activación y compromisos con actividades valoradas
(“cómo se proponen y terminan cultivando sus rosas de las metáforas del jardín) ,
junto a los cambios observados en las mismas sesiones en relación a esas

103
actividades concretas como potenciales CCR2 (Ruiz y Trillo, 2017). Nuestra
experiencia global, valorada estadísticamente mediante varios cuestionarios (de
evitación experiencial, de experiencia grupal, de flexibilidad psicológica, de
incremento de acciones valoradas, etc.) y los propios testimonios de las personas
participantes en estas experiencias grupales apuntan que el 80% de los
participantes en estas terapias hacen cambios relevantes en sus vidas en
dirección a la aceptación y compromisos con acciones valoradas.

En este nuevo periodo hemos aplicado la FAP (o PAF) Grupal como terapia
específica a personas adultas con “problemas ansiosos-depresivos diversos” y
ciertos “trastornos de la personalidad” adaptada a nuestro contexto de trabajo
con personas adultas que voluntariamente deciden participar en las mismas y
que no presentan (principales criterios de exclusión) sintomatología psicótica
activa ni reiterados intentos suicidas. En estos casos se remiten a otro tipo de
intervenciones alternativas como grupos de Terapia Dialéctica Conductual (DBT)
en la Comunidad Terapéutica de Linares (Jaén) o grupo de psicóticos y trabajo
con Mindfulness en la Unidad Comunitaria de Úbeda (que realiza principalmente
un enfermero entrenado en ello), una vez reducida la actividad psicótica que
interfiera con su estancia en un grupo.

En el capítulo 6 se describen diálogos relevantes de nuestra experiencia con FAP


y en el 7 presentamos un estudio comparativo y sus resultados de esta
experiencia con los grupos ACT; así como las reflexiones que derivamos de tales
experiencias y datos.

2. Protocolos generales y flexibles: Usarlos como tácticas y técnicas para


provocar CCRs.

Básicamente el protocolo general (modificable en el contenido de la agenda y no


rígido en función de la marcha del grupo) consiste en 12 sesiones de dos horas de
duración con grupos de entre 8-10 personas adultas que sigue la secuencia siguiente:

104
-Sesiones 1-3
1.Psicoeducación del grupo:
-Presentación de la PAF de grupo y de los papeles de “actor y director” en el grupo
-Presentación de las 5 reglas
-Presentación de la hoja de trabajo voluntaria de las CCRs
-Presentación del concepto de “equivalencia funcional”

2.Cuestionarios de evaluación inicial:


-AAQ-II (Evitación experiencial)
-EOSS (Experiencias del Yo)
-ODA y ODA-CN

3.Apertura a la experiencia grupal:


-Presentación de que nos trae y esperamos del grupo
-Relatos de problemas en la vida cotidiana como “actores”
-Observación y devolución de CCRs con y sin la hoja de trabajo como “directores”

-Sesiones 4 a 7:
1.Ejercicios de trabajo de moldeamiento con dimensiones del Yo bajo control
público:
-Ejercicios iniciales para aumentar el control privado de los miembros del grupo:
.Cine de tu mente
.Ejercicio de mindfulness
.Ejercicio adicional (si se da el caso)
.Observaciones mutuas del lenguaje no verbal y feedback de esto
.Terminar al final de las sesiones dando el parecer personal de lo que le ha
resultado más y menos agradable de la sesión de hoy

2.Trabajo con las CCRS y las 5 reglas con o sin hoja de trabajo
-Relatos de problemas en la vida cotidiana como “actores”
-Observación y devolución de CCRs con y sin la hoja de trabajo como “directores”

105
-Sesiones 8 a 12:
1.Ejercicios de trabajo de moldeamiento con dimensiones del Yo bajo control
público:
-Ejercicios avanzados para aumentar el control privado de los miembros del grupo:
.Ejercicio de asociación libre por escrito
.Ejercicio de Mindfulness “ARA”
Ejercicio adicional (si se da el caso)
.El terapeuta comunica al final de la sesión que ha experimentado en la sesión de
hoy, sin añadir ninguna indicación más, y espera que los miembros del grupo hagan
algo similar…después va diciendo vamos llegando al final…”¿alguien desea decir
algo?”, y similares

2.Trabajo con las CCRS y las 5 reglas con o sin hoja de trabajo
-Relatos de problemas en la vida cotidiana como “actores”
-Observación y devolución de CCRs con y sin la hoja de trabajo como “directores”

3. 2.Cuestionarios de evaluación final:


-AAQ-II (Evitación experiencial)
-EOSS (Experiencias del Yo)
-ODA y ODA-CN

4.Despedida del grupo:


-Compartir “que han aprendido y qué se llevan de esta experiencia grupal”.
-Puede ser pertinente introducir el tema de las pérdidas y terminación de las
relaciones como evocación de CCRs ante la finalización de la experiencia grupal.

106
PSICOTERAPIA DE GRUPO ANALITICA FUNCIONAL.
SESIÓN Nº 1 (y alguna más si precisa)-PRESENTACION (Ruiz, 2017)

En esta sesión inicial de presentación hablaremos de varias cosas que nos van a servir para trabajar y
producir cambios a lo largo de las sesiones de grupo.

1º-Haremos una ronda para presentarnos cada uno/a al resto del grupo. Cada uno dirá su nombre, que le trae
al grupo y qué objetivos le gustaría alcanzar en estas reuniones de grupo que nos vamos a ver. “¿Qué te trae
al grupo y que te gustaría conseguir viniendo al grupo?”. En la sesión inicial y final haremos alguna
valoración adicional con cuestionarios

2º-Explicamos los dos papeles o roles que vais a tener cada uno en este grupo para que venir aquí os sea de
utilidad: Vais a hacer de pacientes y terapeutas unos de otros en cierto modo.

A) Papel de actor: Como actor cada uno/a contará los problemas que tiene en su vida cotidiana y como lo
maneja.
B) Papel de director: Como director podéis decir como os hace sentir lo que los demás dicen y hacen aquí
en el grupo para ayudarles a manejar sus dificultades en su vida cotidiana.

3º-Nuestros papel como terapeutas (de los psicólogos y/o enfermeros, y de vosotros mismos como directores)
en este grupo consistirá fundamentalmente en hacer 5 cosas que buscan que hagáis cambios en vuestra vida
hacia aquello que valoráis y os importa:

-Estar atentos a como se presentan aquí mismo en estas reuniones de grupo los problemas que contáis tenéis
en vuestra vida cotidiana. En estos nos ayudareis vosotros con vuestro papel de directores. Esta es la Regla
nº1: Observar las conductas problemáticas en el mismo grupo. ¿VEIS QUE LO QUE CUENTA
FULANITO APARECE AQUÍ EN LA MISMA SESIÓN DE GRUPO?

-Producir en el mismo grupo situaciones que produzcan vuestros problemas y alternativas a los mismos aquí
mismo para tener la oportunidad de ir cambiándolos. Igualmente pediremos colaboración al grupo en esto
como directores. Esta es la Regla nº 2: Evocar las conductas problemáticas y evocar cambios en el mismo
grupo. ¿CÓMO PODEMOS PROVOCAR ESE PROBLEMA Y UN PASO DE CAMBIO AQÚI Y AHORA
EN LA MISMA SESIÓN DE GRUPO DE LO QUE NOS COMPARTE FULANITO?

-Reforzar los progresos hacia los objetivos que os importa y valoráis, no solo los que contéis que vais
haciendo en vuestra vida cotidiana, sino sobre todo los cambios positivos que entre todos veamos que vais
mostrando aquí mismo en las sesiones del grupo en vuestro papel de directores. Esta es la Regla nº 3:
Reforzar las conductas de cambios visibles en el mismo grupo. ¿QUÉ CAMBIOS LE VAIS VIENDO AQUÍ
MISMO EN LA SESIÓN DE GRUPO A FULANITO?

-Comprobar cómo afecta al resto del grupo y a nosotros como terapeutas vuestros problemas y progresos
visibles en las reuniones de grupo y usar esto para producir cambios. En esto también os pediremos que
actuéis como directores. Esta es la Regla nº 4: Comprobar los efectos de los problemas y progresos en los
demás y los terapeutas en el mismo grupo. ¿CÓMO NOS HACE SENTIR ESTO QUE DICE O HACE
FULANITO AQUÍ Y AHORA EN LA SESIÓN DE GRUPO?

-Daremos interpretaciones de los problemas y progresos que observamos en las mismas sesiones en los
demás insistiendo en lo que nos damos cuenta como directores que parece perjudicar o ayudar a los otros.
Esta es la Regla nº 5: Dar interpretaciones de lo que nos damos cuenta ayuda o perjudica a los demás.
¿QUÉ VEMOS Y NOS DAMOS CUENTA AQUÍ EN LA MISMA SESIÓN DE GRUPO QUE LE
AYUDA O PERJUDICA A FULANITO?

107
VUESTROS DOS PAPELES EN ESTA TERAPIA (Ruiz y Ruiz, 2017)

AC ¿Cuál es mi papel como actor/actriz en esta


TO
R/A terapia?:
CT
RIZ
Contar que problemas tengo en mi vida
cotidiana y como los manejo
¿Cuál es mi papel como director en esta terapia?:

Decir como os hace sentir las cosas que hacen y dicen vuestros
compañeros de grupo aquí en las mismas sesiones con ellos
para ayudarles en su vida cotidiana

¿Y cómo haremos eso?: Haciendo 5 cosas

1º-¿Que veo que cuenta fulanito/a que le pasa en su vida


cotidiana y que aparece aquí en estas reuniones de terapia?
(PROBLEMAS DE SU VIDA QUE LE VEO AQUÍ)

2º-¿Cómo podemos provocar los problemas que cuenta


DIRECTOR/DIRECTORA fulanito/a de su vida cotidiana aquí en la misma reunión del
grupo para dar pasos para que lo vaya cambiando?
(PROVOCAR SUS PROBLEMAS AQUÍ PARA AYUDARLE)

3º-¿Qué cambios le ves a fulanito/a conforme nos vamos


reuniendo en estas sesiones de grupo?
(PROGRESOS QUE LE VEO AQUÍ MISMO)

4º-¿Cómo te hace sentir esto que dice o hace fulanito/a en estas


reuniones de grupo?
(COMO ME HACE SENTIR A MI LO QUE DICE Y HACE)

5º-¿Que ves y te das cuenta en estas reuniones de grupo que le


perjudica o ayuda a fulanito/a?
(QUE VEO QUE LE AYUDA Y PERJUDICA)

108
Hoja de anotaciones para todos los miembros del grupo y los terapeutas.
(Ruiz, 2017). SESIÓN Nº:______

Nombre y problema que Interpretación que Cambios positivos que le


le observo aquí en el ofrezco: Me doy cuenta observo aquí en el grupo
grupo (Regla 1 y 2) de que él/ella aquí en (Regla 2 y 3)
grupo….(Regla 4 y 5)

Nota: La hoja de anotaciones no es obligatoria que la rellenéis en cada sesión aunque puede
ser de mucha ayuda para todos/as ya que nos pone a trabajar como actores y directores del
grupo.

109
HOJA DE TRABAJO EN EL GRUPO.VERSIÓN SIMPLE (Ruiz, 2017). SESIÓN Nº FECHA:

PERSONA DEL GRUPO COMO ACTOR/ACTRIZ QUE COMO DIRECTOR/A COMO


PROBLEMAS CUENTA DE SU VIDA ME HACE SENTIR A MI LO
DIARIA, COMO LO ENFRENTA Y EN QUE DICE Y HACE EN EL
QUE LO VEO REFLEJADO EN EL GRUPO ESA PERSONA Y QUE
MISMO GRUPO ME LLEVA A DECIRLE A
EL/ELLA

Nota: La hoja de anotaciones no es obligatoria que la rellenéis en cada sesión aunque puede
ser de mucha ayuda para todos/as ya que nos pone a trabajar como actores y directores del
grupo.

110
PSICOTERAPIA ANALÍTICA FUNCIONAL DE GRUPO. SESIÓN Nº 2.
EQUIVALENCIA FUNCIONAL Y EFECTOS “INESPERADOS” DE
NUESTRA CONDUCTA” (Ruiz, 2017)

Llamamos equivalencia funcional a la semejanza de los fines, propósitos o efectos


que tiene las conductas de las personas entre las situaciones que viven en su vida
diaria en las relaciones con otras personas y las que viven en las situaciones de la
terapia, en este caso de la terapia de grupo en la relación con sus compañeros y
terapeutas del grupo.

A esto algunos psicólogos le llaman también relaciones de transferencia y


contratransferencia, sobre todo cuando relacionan experiencias pasadas de las
personas con situaciones que viven en la actualidad.

Por ejemplo personas que han sido educadas en un contexto familiar en su infancia y
juventud muy severo y autoritario y no han tenido la oportunidad de conectar y
expresar sus deseos más personales e íntimos cuando se han relacionado con sus
padres que eran quienes dirigían su vida, y le castigaban si expresaran sus opiniones
y deseos. Cuando posteriormente se relacionan con otras personas adultas que tienen
un estilo muy directivo de aconsejarles o de orientarles (pongamos por ejemplo un
médico, un psicólogo) pueden actuar de manera similar, acatando, obedeciendo,
evitando expresar sus opiniones y deseos, incluso con desconocimiento de los
mismos, y actuando según “la autoridad experta” evitando las reprimendas o críticas
a sus opiniones personales.

En este caso existiría una equivalencia funcional o “parecido” entre las situaciones
(Un padre que le dirige de manera autoritaria y un profesional de la salud que le
dirige de manera experta) y los efectos o consecuencias que ocurren en ambas
situaciones o momentos de su vida cuando la persona actúa obedeciendo los consejos
sin expresar ningún reparo a los mismos, evitando así el castigo o reprimenda que
vivió en su historia personal.

Un caso de equivalencia funcional parecido, pero distinto seria si el niño o joven se


rebeló ante sus padres que intentaban imponerle unos criterios educativos y con su
rebeldía consiguió lo que deseaba evitando las consecuencias negativas. En este caso
en situaciones parecidas donde un experto le orienta y dirige, puede rebelarse de
nuevo, oponiéndose por ejemplo a sus consejos y consiguiendo el efecto,
consecuencias o propósito de “salirse con la suya”.

Sin embargo la “equivalencia funcional” no se limita a la relación pasado-presente


entre los padres o figuras importantes de la infancia o juventud de la persona y las
situaciones actuales (que para algunos psicólogos son la transferencia y
contratransferencia que hemos referido antes). Otras situaciones y consecuencias-
propósitos similares pueden estar relacionados, es decir tienen las mismas funciones
o fines.

111
En estos casos no solo nos interesan las relaciones pasadas-presentes sino también
las relaciones entre lo que hacemos fuera del grupo en nuestra vida cotidiana y como
nos relacionamos aquí en las sesiones del mismo grupo; y aún más en concreto; los
problemas que tenemos en nuestra vida cotidiana fuera del grupo relacionados con
otras personas y cómo nos relacionamos aquí en el grupo con nuestros compañeros y
terapeutas, observando las semejanzas y parecidos entre las situaciones fuera-dentro
del grupo y las consecuencias de nuestras acciones o funciones en ambos contextos
de nuestra vida.

Por ejemplo si una persona ante situaciones donde recibe críticas en su vida cotidiana
opta por callarse y no expresar sus opiniones para escapar a que le sigan criticando
(consecuencia con su función o finalidad) y en las sesiones de grupo cuando un
compañero le refiere su escasa participación en las sesiones y se queda callado,
cesando las observaciones sobre su conducta de escasa participación. Otro ejemplo
es una persona que refiere que en su vida cotidiana tiene discusiones con su pareja
por que esta le achaca que no participa en la vida familiar actuando yéndose de su
casa por largas horas para evitar más reprimendas (consecuencias con su función o
finalidad) y que llega reiteradamente tarde a las sesiones de grupo siendo complicado
que exponga sus dificultades con más detenimiento. Y un tercer ejemplo es una
persona que refiere que en su vida cotidiana sus familiares no le hacen mucho caso
cuando se queja de que está deprimida y que le critican por sus quejas continuas, al
parecer como forma de conseguir su atención (consecuencia con su función o
finalidad) y en las sesiones de grupo suele monopolizar gran parte del tiempo
contando con todo detalle lo mal que está dificultando la participación de sus
compañeros en el grupo.

De esta forma en la equivalencia funcional tendríamos una referencia histórica entre


(1) pasado y presente y otra entre (2) situaciones actuales dentro y fuera del grupo.
Hay que advertir que en este caso lo que puede ser un problema en una situación, en
otra puede ser una ventaja o progreso. A esto nos referimos con que la conducta está
contextualizada. Por ejemplo: Callarse y no responder a una persona más fuerte que
nosotros que nos insulta airadamente y con gestos agresivos puede ser una forma
(consecuencia con su función finalista o propósito) de evitar que nos agreda
empeorando la situación, y por ejemplo en la situación; o de manera similar si un
agente de tráfico nos da el alto para referirnos una infracción y evitamos discutir con
este para que no nos suba el monto de la infracción. Sin embargo en otras situaciones
donde todos hablan y esa misma persona que antes solía callarse con frecuencia o
emplear un tono de voz casi inaudible, en esta ocasión emplea un tono de voz más
alto atrayendo la atención del entorno, por ejemplo del resto de los miembros del
grupo.

También es importante que la mayoría de las relaciones que establecemos las


personas lo hacemos a través de nuestro lenguaje, de nuestra conducta verbal. Por lo
tanto las equivalencias funcionales que vemos en la mayoría de las sesiones de grupo
tienen que ver con las funciones o fines del lenguaje (nos demos cuenta de ellas o

112
no) entre lo que contamos de cómo nos va en nuestra vida cotidiana y como afecta al
entorno de las personas del grupo, ya sea produciendo un acercamiento positivo de
estas hacia nosotros (refuerzo) o más bien un alejamiento crítico de estas hacia
nosotros (castigo) o bien que nos ignoren cuando relatamos o hacemos ciertas cosas
en el grupo (extinción). Esto a su vez afectará a como nos relacionamos con
nuestras propias experiencias personales internas. Esto a veces sucede de manera
inadvertida o inesperada aunque termina afectando a nuestra conducta de relación con
otras personas y con nosotros mismos.

“Una buena herramienta para trabajar en el grupo son las sensaciones y


sentimientos que tenemos ante los demás. Es posible que si nos sentimos de una
determinada manera cuando hablamos con alguien, las personas de su entorno se
sientan a veces igual. Por eso es importante prestar atención durante las sesiones
a cómo nos sentimos cuando una persona participa"

Todos nos comportamos con ciertas intenciones y propósitos en nuestras relaciones


sin darnos cuenta muchas veces del efecto que provocamos en otros sin saberlo,
llamando a esto “reacciones inconscientes”, precisamente porque no nos damos
cuenta del efecto que tiene nuestras conductas en otras personas.

113
En esta sesión de hoy (trabaja esto en casa por tu cuenta)…..
A) ¿Qué equivalencias funcionales has detectado en las conductas de tu
compañeros/as de grupo? Pon un ejemplo de conducta de un/a compañero/a

B) ¿Qué equivalencias funcionales has detectado en tu propia conducta?. Pon un


ejemplo de tu propia conducta

114
EJERCICIOS EN FAP CON PERSONAS CON PROBLEMAS DEL YO EN TERAPIA DE
GRUPO
(Ruiz, 2017. Adaptado de Valero y Ferro, 2015)

1. Reforzar el hablar en ausencia de claves externas específicas:

.Objetivo: Ir moldeando el control privado de la conducta del propio cliente

-Intervenciones iniciales:
“Vamos a hacer una ronda en el grupo para que cada uno diga que le ha resultado
más y menos agradable de la sesión de hoy”. Por ejemplo: “A mí (el/la terapeuta) lo
que me ha resultado más y menos agradable de la sesión de hoy ha sido tal”.

-Intervenciones más avanzadas:


“Hoy en esta sesión he experimentado tal cosa” (el terapeuta puede hacer esto y
esperar a que otros miembros del grupo comuniquen su experiencia; hasta que ellos
la comuniquen sin más intervención del terapeuta).

2. Ajustar las tareas terapéuticas al nivel de control privado del cliente

.Objetivo: Ir moldeando el control privado de la conducta del propio cliente

-Ejercicio de la asociación libre estructurada de “El cine de tu mente”: Intervención


inicial

“Cerrad los ojos e imaginar que estáis sentados en una butaca del cine. Miráis la
pantalla que está completamente en blanco ahora. Ahora comienza la película y la
primera escena que sale en la pantalla es veros aquí todos sentados conmigo en este
círculo del grupo. Las siguientes escenas que salen en la pantalla del cine es veros
viniendo hace u rato por la calle hacia este lugar del grupo, la siguiente es veros
donde estabais antes de salir para acá, y así las escenas van pasando hacia atrás
cada vez a mayor velocidad haciendo que las imágenes que se ven en la pantalla
sean borrosas debido a la velocidad de las escenas en retroceso. Bien, ahora en ese
pase de imágenes borrosas se hace un alto de golpe. ¿Qué veis ahora? Vamos a
hacer una ronda de lo que habéis visto en ese alto. Es importante que nos
escuchemos sin hacer ningún tipo de comentario a los compañeros que hacen su
relatos, sea el que sea.”

-Ejercicio de asociación libre escrita: Intervención más avanzada.


“Ahora en un folio en blanco durante unos minutos vais a escribir todo lo que se os

115
pase por la cabeza y sintáis aquí y ahora sin censura. Antes de ponerlo en común en
el grupo podéis seleccionar lo que deseáis comunicar o no al resto del grupo, aunque
es deseable que comuniquéis de los escrito lo máximo posible. El resto del grupo se
limitará a escuchar sin emitir ningún juicio de valor o crítica”

3. Reforzar tantas expresiones “Yo quiero, pienso, siento, opino X” como sean
posibles:

.Objetivo: Ir moldeando el control privado de la conducta del propio cliente

-Intervenciones iniciales: “Vamos a hacer una ronda de cómo veis en los gestos,
caras, movimientos y lenguaje no verbal, aquí y ahora, mirándonos los unos a los
otros en silencio que cada uno de vuestros compañeros se sienten. Después haremos
una ronda para que veamos hasta qué punto nuestras observaciones están
ajustadas a lo que cada uno/a observa que siente”

-Intervenciones avanzadas: “¿Alguien desea expresar cómo se siente aquí en el


grupo ahora? El resto le escucharemos con atención sin emitir ningún juicio de valor
ni crítica., salvo que cada uno/a vive las cosas a su manera, y respetaremos todas las
perspectivas diferentes que ofrece cada persona”

4. Usar técnicas de mindfulness:

.Objetivo: Ir moldeando el control privado de la conducta del propio cliente


permaneciendo en este caso en presencia de experiencias internas aversivas sin
evitación experiencial.

“Os voy a proponer un ejercicio de meditación que tiene la finalidad de que


permanezcamos en contacto con experiencias internas y personales que nos resultan
desagradables, sin huir ni a apartarse de ellas. Esto lo haremos para que cada uno/a
se ponga en contacto con sus sentimientos personales y privados sin huir de ellos.
Después haremos una ronda de lo que cada uno/a se ha dado cuenta en el ejercicio,
respetando lo que digan los compañeros que se han dado cuenta”

-Intervenciones iniciales: Comenzar con ejercicios que supongan un grado de


contacto con las experiencias privadas de menor dificultad. Los ejercicios de
relajación muscular progresiva de Jacobson, los de Schultz o la meditación de la
respiración pueden formar parte de los ejercicios iniciales de mindfulness.

-Intervenciones más avanzadas: Se usa el ejercicio ARA (awareness-relaxation-

116
acceptance-conciencia-relajación-aceptación). Se explica al grupo que este
ejercicio puede serles útil cuando se encuentran en situaciones difíciles de relación
con otras personas, y que pueden practicarlo en casa también buscando que sean
conscientes de sus experiencias internas difíciles en esos momentos, se relajen y las
acepten sin evitarlas. El ejercicio consta de tres pasos: (Todo se hace en unos 10-20
minutos)

(1) Cada miembro del grupo elige una palabra o frase que para él/ella sea
importante y le motive a enfrentar situaciones complicadas con otras personas.
Observa su respiración aquí y ahora y al soltar el aire o expirar se va repitiendo esa
palabra o frase

(2) En una posición cómoda se va haciendo un repaso lento del cuerpo de la cabeza
a los pies, y cualquier tensión que se vaya encontrando en esa zona se va soltando
apoyándose en respiraciones lentas y profundas.

(3) Se van repitiendo las palabras o frases elegidas junto a la respiración, y si


aparecen sentimientos y pensamientos distractores o molestos se observa su
presencia, permitiendo que estén sin luchar con ellos y volviendo sin críticas y juicios
a la frase/palabra y respiración lenta y profunda.

117
EJERCICIOS ADICIONALES PARA EVOCAR CCRS EN LA FAP DE GRUPO
(Ruiz, 2017. Adaptado de Valero y Ferro, 2015)

1. Usar al principio de las sesiones ronda de preguntas para valorar el “riesgo


emocional” en la semana: ¿Entre 0 y 10 que grado de cercanía, intimidad y
confianza habéis tenido con algunas personas importantes para ti en esta
semana pasada? ¿Y hasta cuanto esperáis llegar en esto en la sesión de hoy
con tus compañeros/as de grupo? ¿A qué atribuyes esa puntuación?

2. Al final de las sesiones usar rondas de preguntas sobre las opiniones,


reconocimientos y quejas de la sesión del día: ¿Qué te os ha servido más de
esta sesión? ¿Habéis experimentado algo que sea similar a lo que os pasa en
vuestra vida diaria? ¿Hay algo de lo que hemos vivido que os sea útil para
vuestra vida diaria? ¿Algo importante que os haya quedado pendiente en la
sesión de hoy? ¿Algo que os haya molestado o dolido mucho de la sesión de
hoy?

3. Ejercicio de la mano no dominante: “Ahora os voy a pedir que en un papel


escribáis durante 5 minutos, con la mano que no soléis escribir normalmente,
vuestras mayores y más profundos sentimientos, necesidades y miedos”

4. Inventario de pérdidas: Se utiliza en las sesiones finales, pidiendo a los


miembros del grupo que hagan una relación de las mayores pérdidas de su
vida, tanto de personas, ilusiones, proyectos, indicándole que buscamos que
contacten con emociones que han estado evitando, dándose cuenta del
efecto que ha tenido estas evitaciones en sus vidas. Se puede ayudar el
ejercicio con recopilación avisada antes de hacer esto de traer fotos y
documentos relevantes relacionados con esas personas y proyectos perdidos.

5. Ejercicio de las voces internas: Se utiliza más con clientes que rumian sobre sí
mismos, se sienten inseguros con frecuencia de si tomar un rumbo de acción
u otro sin decidirse y que presentan un “Yo inestable o Inseguro”. Se les pide
a los miembros de grupo que hagan un listado de las “voces” o conceptos que
tiene de sí mismos. Con ese listado se observa la complejidad y se trabaja
algún ejercicio de aceptación de las voces por muy vergonzosas que sean, sin
huir o evitarlas; mientras van tomando decisiones con sus riesgos incluidos.

6. Declaración de la misión personal: Plantear al grupo que escriban una carta


que describa cuál es su misión personal en la vida, que quieren ser y hacer en
y con sus vidas, y el legado o ejemplo que quieren dejar a los demás.
Procedimiento similar al trabajo con valores de ACT.

118
7. Listas de cosas por hacer: Se plantea a los miembros del grupo que hagan un
listado de las cosas pendientes que le gustarían hacer en sus vidas tras
terminar la terapia y que son objetivos importantes en sus vidas, concretando
también como lo harían a nivel de actividades y pasos concretos. Ejercicio en
la línea de la Terapia ACT de los compromisos valorados.

8. 100 positivos: Se pide a los miembros del grupo que comiencen a escribir un
listado de sus puntos personales débiles y sus fallos. Al poco de comenzar se
les interrumpe por un momento y se les dice que escriba al lado el opuesto a
cada uno de eso que van escribiendo. Al acabar se le pide que haga un listado
de 100 cosas positivas o cualidades de sí mismo/a. Se emplea con clientes que
se centran en los aspectos negativos o en la anticipación de aspectos
negativos en su vida.

9. Carta de enfado o gratitud: Se pide a los miembros de grupo que escriban


una carta (sin enviarla) dirigida a alguien a quienes quieran expresar enfado o
gratitud. La empleamos más con clientes que han tenido conductas de
evitación de expresión de emociones hacia otros. Usar la “silla vacía” por
parejas puede ser un ejercicio similar para hacer lo mismo.

10.Usar cualquier ejercicio proveniente de cualquier enfoque de terapia


conductual o no, que evoque potenciales CCRs.

119
LAS 5 REGLAS APLICADAS A LA PSICOTERAPIA ANALÍTICA FUNCIONAL DE GRUPO
MEDIANTE LOS ROLES DE ACTORES Y DIRECTORES

(Ruiz e Izquierdo, 2017)

1º-Hacemos una ronda de cómo les ha ido durante la semana, qué


problemas y/o progresos han tenido y cómo han manejado esas
circunstancias de sus vidas (Papel de actores)

2º-Observamos cómo les afecta lo que han relatado sobre lo ocurrido


fuera de la sesión dentro del grupo (Papel de directores. Regla 1).

3º- Si lo relatado sobre lo que ha ocurrido fuera no se ve reflejado en


conductas con funciones equivalentes dentro de la sesión grupal, la
provocaremos o evocaremos para que se presente en la sesión ante todos.
Esto lo podemos hacer con ejercicios comunes para contactar con esas
experiencias, o bien, preguntando como se sienten aquí y ahora ante el
grupo, tras hablar de cómo le ha ido durante la semana y que/cómo le
afecta esto aquí delante del grupo (Papel de directores y de actores para
el/la que se le pregunta. Regla 2).

4º-Si expresan progresos en su vida diaria y además se observan en la


misma sesión, lo reforzamos de manera natural expresando nuestros
sentimientos y comentarios al respecto (Papel de directores. Regla 3)

5º-Comentamos entre todos los miembros del grupo como nos hace
sentir, pensar y hacer lo que expresan los compañeros sobre lo que les
ocurre fuera en su vida diaria, y sobre todo, de lo que le observamos aquí
y ahora. También observamos cómo le hace sentir y actuar a la persona
que recibe nuestros comentarios (Papel de actores y directores. Regla IV).

6º-Ofecemos a nuestros compañeros/as de grupo (y/o evocamos hablar


de esto en el grupo) nuestras interpretaciones de qué problemas les
observamos, qué circunstancias y acciones de ellos les favorecen y
perjudican y que cursos de acción alternativos les proponemos para su
vida diaria (Papel de directores. Regla V)

Nota: Procurar, si las circunstancias lo permiten y son pertinentes, tocar


esos 5 puntos en cada sesión, pero sin que sea algo rígido.

120
LAS 5 REGLAS DE LA FAP EN TERAPIA DE GRUPO. VIÑETAS (Ruiz, 2017)

121
122
123
124
125
126
SESIONES FINALES DE LA TERAPIA DE GRUPO

127
128
129
130
131
Importancia de relacionar lo que hablan que les pasa/hacen fuera del grupo y lo
que experimentan y observan dentro de las sesiones grupales:

Problemas/Progresos fuera Equivalencia Problemas


del grupo (Vida diaria) funcional (CCR1)/Progresos (CCR2)
dentro del grupo

Importancia del doble papel Actor/Actriz vs Director/Directora:

Como Actor/Actriz (Respondiendo a las Como Director/Directora (Aplicando las


5 reglas terapéuticas) 5 reglas terapéuticas)

-Hablar de cómo le va, que hace y siente


respecto a sus problemas en su vida -Hablar de lo que observa en las
diaria dificultades y progresos en sus
compañeros/as mientras estos hablan y
-Hablar de cómo le va, que hace y siente actúan en el grupo (Regla 1 y 3)
respecto a sus progresos en su vida
diaria -Hablar para provocar en sus
compañeros/as experiencias relevantes
-Hablar de cómo le va, que hace y siente en las sesiones (Regla 2)
respecto a sus problemas en las
sesiones de grupo en el aquí y ahora -Hablar de cómo ven que se afectan
mutuamente en las sesiones de grupo
-Hablar de cómo le va, que hace y siente (Regla 4)
respecto a sus progresos en las sesiones
de grupo en el aquí y ahora -Hablar a qué cree que se deben las
dificultades y vías de progresos
alternativos en sus compañeros/as
(Regla 5)

132
Capítulo 5. Relación entre FAP y ACT: Aspectos comunes y
divergentes
(Francisco Trillo Padilla)

Introducción

Enmarcadas en la terapia de conducta, en las últimas décadas, y concretamente a


nivel de investigaciones empíricas en los últimos años, ha habido una eclosión y
propagación de una serie de terapias que representan una tercera generación de
terapias o de tercera ola. En este grupo de terapias se incluyen la Terapia de
Aceptación y Compromiso: ACT (Hayes, Strosahl y Wilson, 1999), la Psicoterapia
Analítico Funcional: FAP (Kohlenberg y Tsai, 1991), la Terapia de Activación
Conductual: BA (Martell, Addis y Jacobson, 2001), la Terapia Integral de Pareja: IBCT
(Jacobson y Christensen, 1996), la Terapia Conductual Dialéctica: DBT (Linehan,
1993), la Atención Plena o Mindfulness (Kabat-Zinn, 1990; Segal, Williams y
Teasdale, 2002) y otras variantes de la terapia cognitivo-conductual.

En la propuesta de definición de tercera generación por parte de Hayes (2004)


este tipo de terapias y formas de trabajo terapéutico tiene un planteamiento común
contextual, otorgando un énfasis singular al análisis funcional de la conducta, la
flexibilidad cognitiva como criterio de adaptación a los problemas frente a centrarse
en la desaparición del síntoma y la despsiquiatrización/desetiquetización de las
categorías diagnósticas tradicionales. Dicho esto, y como bien ha defendido Pérez
Álvarez (2006), aunque todas ellas poseen puntos o características claramente de
unión, a la hora de ponerlas en práctica se diferencian en sus dinámicas y modo de
intervención.

Este capítulo pretende centrarse en los aspectos comunes y diferencias entre la


Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT) y la Psicoterapia Analítico Funcional
(FAP), dos de las terapias con más evidencia científica de las terapias contextuales.
Puede ocurrir que el psicólogo con formación contextual integre al mismo tiempo,
FAP y ACT, utilizando los principios de cambio conductual para alterar las
contingencias de los eventos privados. Aunque utilizar estas dos terapias
simultáneamente puede ser de gran ayuda y hacer sentir al terapeuta muy cómodo
con la terapia, existen algunos puntos o distinciones entre ellas que merecen una
discusión y reflexión sosegada. Las diferencias existentes entre ACT y FAP pueden
dirigir al terapeuta hacia diferentes direcciones aunque conozca ampliamente la
terapia de conducta. Conocer el origen de ambas terapias y explorar cuáles son sus
similitudes y diferencias nos ayudarán a considerar su uso al mismo tiempo.

133
Los Orígenes

La primera publicación de FAP data de finales de los años 80 en Psychotherapists


in Clinical Practice (Jacobson, 1987) desarrollada por Robert J. Kohlenberg y Mavis
Tsai. En este trabajo se describen los diferentes eventos que estimularon la creación
de FAP como una terapia propia a partir de fuentes intelectuales, la experiencia
adquirida en terapia de conducta a lo largo de los años y de las experiencias
interpersonales de los propios autores creadores. Para no redundar en lo expuesto
en capítulos anteriores al libro y hacer al lector más amena la incursión por este
libro, sólo incidir en estos aspectos en la descripción de FAP y remarcar que es una
intervención firmemente arraigada en el conductismo radical y con una sensibilidad
analítica funcional.

Por otro lado, ACT fue originalmente desarrollada por Steve Hayes y en la primera
publicación donde describió esta terapia (bajo el título en inglés “Comprehensive
Distancing”) también fue publicada Psychotherapists in Clinical Practice (Jacobson,
1987). En este capítulo Hayes describe el origen de ACT incluyendo un análisis
académico de la progresión de los enfoques conductuales del lenguaje y la
cognición. Hayes sostuvo que un “análisis skinneriano” no explica adecuadamente
algunos fenómenos importantes basados verbalmente, y propuso una nueva
explicación. Más adelante describió el tipo de problemas por las que las personas
acuden a terapia y, como en parte es, debido al contexto verbal en el cual ocurren
dichos problemas. Su relato terapéutico se centró en el desarrollo de métodos de
alteración de los elementos contextuales verbales que dan lugar al sufrimiento
humano. De alguna manera, este contexto verbal es problemático porque el
lenguaje mismo puede ser una barrera para entrar en contacto con la experiencia de
directa de uno mismo en el momento presente.

Hayes no estaba satisfecho con la falta de profundidad hacia el sufrimiento


humano vista en algunos enfoques conductuales y miró hacia otros enfoques
terapéuticos, como tratamientos experimentales, para de esta forma aprender más
acerca de los métodos de comprensión y ayudar a las personas. Este científico
reflexivo y riguroso, lidió, compaginó y aprendió de los enfoques conductuales
existentes y su aplicación para adaptarlos a las profundidades del sufrimiento
humano así como a la compasión y aparente eficacia de los tratamientos no
experimentales y experienciales. En sus numerosos estudios y experiencias en el
campo de la clínica, concluyó que había problemas fundamentales con las
explicaciones del comportamiento a través del lenguaje y se centró en el desarrollo
de una teoría que explicaría este vacío. Es ahí donde surge la Teoría del Marco
Relacional (TMR), como un enfoque conductual de la cognición que tenía más
potencial para entender y tratar los tipos de sufrimiento que sufren los seres

134
humanos. Para conocer más profundamente la teoría leer a Hayes, Barnes-Holmes y
Roche (2001).

Zettle (2005), en su visión general de la evolución de ACT, divide la historia de ACT


en tres fases. La primera fase la describe como un período inicial de formación a
finales de los años 70, cuando se aplicaron enfoques analíticos básicos del
comportamiento verbal y regido por reglas a los fenómenos clínicos. Esto fue
seguido por un período de transición, comenzando en los años 80, en el cual la
teoría del marco relacional (TMR) se desarrolló como una explicación post-
skinneriana del lenguaje. En las dos últimas décadas, ya en la tercera fase, ACT se ha
desarrollado y difundido, y es descrito por Zettle como "un enfoque funcionalista
totalmente integrado de la psicoterapia basado en TMR".

FAP y ACT comparten un “background” común en cuanto a la filosofía de análisis


funcional y radical de la conducta. Para sus autores, Kohlenberg y Hayes (ambos
considerados así mismos skinerianos), este hecho ha sido de interés común y la
prioridad para desarrollar ambas terapias. Ambos utilizaron el conductismo radical y
los principios del análisis de conducta aplicado a diferentes áreas de interés en
psicología. Del mismo modo, tanto Kohlenberg como Hayes comenzaron a
interesarse por las luchas y problemas humanos que parecían caracterizarse por
diferentes tipos de contenido que normalmente trataban las terapias conductuales
y cognitivas-conductuales tradicionales. ACT y FAP surgieron de la misma tradición
conductual, y por lo tanto en su núcleo, comprenden y cambian el comportamiento
examinando las relaciones contingentes (Kohlenberg, Hayes y Tsai, 1993). Ambos
FAP y ACT pueden ser pensados como tratamientos pioneros, ya que impulsaron la
innovación teórica y tecnológica conductual en el ámbito clínico.

Al mismo tiempo que la Terapia de Conducta (TC) y la Terapia Cognitivo-


Conductual (TCC) eran consideradas a nivel experimental como terapias muy fiables
y con gran evidencia científica para el tratamiento de diferentes problemas
psicológicos, ACT y FAP emergen para aportar evidencia sobre las limitaciones
específicas de estas. Los enfoques conductuales tradicionales se enfocaban en
comportamientos específicos que requerían cambios, ya sea aumentando estos o
disminuyendo (moldeamiento, extinción…) siendo estudiados estos en entornos
restrictivos donde podían ser manipulados y observados. Por ejemplo, en las
terapias conductuales las fobias y problemas de conducta en aulas fueron
satisfactoriamente abarcados por estas terapias. Con respecto a la TCC incluyeron
pensamientos y sentimientos en los casos de comportamiento problemático
enfatizando en la importancia de ayudar a las personas a intentar cambiar estos
(pensamientos y sentimientos). Sin embargo para los autores de ACT y FAP esto no
era suficiente y en la época de mayor proliferación científica de la TCC sus autores
empiezan a focalizarse en conceptos como la intimidad y las relaciones, en el caso

135
de FAP y en el sufrimiento humano y su significado (ACT). Tanto FAP como ACT
comienzan a emerger a través de interesarse más en ayudar a las personas a aceptar
y, por tanto, a cambiar su relación con sus pensamientos y sentimientos, en lugar de
ayudar a cambiar o erradicar pensamientos o sentimientos específicos como
pretende la TCC. Existen a su vez intereses y aspectos compartidos por ambas
terapias, por lo que se consideran un enfoque más constructivista que eliminador.
(Kohlenberg y Callaghan, 2010). Así, tanto FAP como ACT tratan de aprovechar las
historias, modo de vida y dirección vital de los clientes y usuarios para desarrollar
estrategias de experiencia de emociones poderosas y cultivar habilidades para
interactuar de manera que sirvan mejor a sus necesidades y valores. No pretenden
eliminar pensamientos o emociones y reemplazarlos por creencias, pensamientos o
sentimientos más efectivos o precisos. De esta forma hoy día se podría hablar de un
enfoque constructivista compartido por ambas terapias y que es coherente y
complementario al conductismo.

Aportaciones únicas de FAP a la psicoterapia

Los terapeutas de FAP crean contextos evocadores dentro de la terapia


ofreciendo a sus clientes la oportunidad de practicar, refinar y reforzar nuevos
comportamientos más adaptativos que luego se pueden generalizar en sus vidas
fuera de la sesión. Los avances de FAP a nivel experimental han ido creciendo de
manera exponencial en los últimos años, contrarrestando así una de las críticas que
más ha acaparado este modelo, su poca producción científica. Su propuesta de
naturaleza idiosincrática y funcional además de su aplicabilidad hacen de FAP un
reto para definir claramente variables independientes (Ferro y Valero, 2015). Sin
embargo, hay un claro consenso en las aportaciones que la terapia tiene sobre el
resto de modelos y que claramente puede contribuir para ayudar al terapeuta a
comprender a su cliente. A continuación, y sin ánimo de redundar mucho más en las
características ya aportadas en el resto del manual, se ponen en valor tres
cualidades valiosas de FAP.

I. Relación terapéutica

La relación terapéutica es una contribución significativamente interesante de la


FAP a la terapia psicológica, utilizándose como motor del cambio del
comportamiento a través de las contingencias y reacciones del cliente durante la
sesión. El concepto de alianza terapéutica ha sido desarrollado (Bordin, 1979; Safran
y Muran, 2000) de manera profunda y como la interacción cliente-profesional puede
favorecer la comprensión de la situación del cliente y producir cambios
conductuales que ayuden a este en el devenir de su vida. FAP ayuda a los terapeutas
de conducta a pasar de comprender la relación terapéutica como elemento útil de

136
adhesión por parte del cliente, a abordar completamente el complejo proceso
interpersonal que ocurre entre dos personas que trabajan para crecer, cubrir
necesidades y enfocar su vida hacia lo que realmente importa al cliente. Aunque se
puede decir que la FAP utiliza la relación terapéutica para afectar el cambio clínico,
su uso está en manejar las contingencias ricas que ocurren durante la sesión para
ayudar a los clientes a alcanzar eficaz y eficientemente sus metas en la intervención
(Kohlenberg y Callaghan, 2010).

Para resaltar y dejar constancia de la importancia de la relación terapéutica en


FAP se hace implícita en su propuesta las Reglas Terapéuticas (Kohlenberg et al.,
2005); que ayudan al profesional a identificar, evocar, reforzar y comprender las
conductas del cliente. Es específicamente en la regla 2 donde se propone construir
un ambiente terapéutico que evoque las Conductas Clínicamente Relevantes (CCR).
La regla 1 consiste en observar las posibles CCR durante la sesión para que con la
regla 3 se refuerce positivamente las CCR tipo 2 (mejoras del cliente que ocurren en
sesión). La regla 4 trata de desarrollar un repertorio para observar las propiedades
reforzantes de la conducta del terapeuta en relación con las CCR del cliente.
Finalmente, la regla 5 consiste en generar en el cliente un repertorio de descripción
de las relaciones funcionales entre las variables de control y las conductas. De esta
forma, y con este breve resumen del papel que juegan las reglas terapéuticas en
FAP, la alianza o el vínculo que el profesional genera en la terapia se hace
fundamental para conseguir los objetivos terapéuticos.

Incluso es importante en FAP el cierre con su cliente de la terapia, Tsai et al.


(2017) en “Saying Good Goobyes to your clients” da algunas claves para despedirse
del cliente. Como en cualquier buen proceso de cierre, es importante revisar con el
cliente su progreso, lo que ha aprendido, lo que ha dejado de hacer que reforzaba el
problema y las habilidades que quiere seguir implementando para prevenir la
recaída y mantener sus logros terapéuticos. En estas claves, los autores enfatizan el
cierre con: (a) enfocar las reacciones del cliente al final de la relación de terapia
explorando y atando las pérdidas que han experimentado en la vida y CCR
relacionadas; (b) enfatizar que el terapeuta es valiente y vulnerable al evocar y
reforzar CCR del cliente relacionadas con la vulnerabilidad por última vez.

II. Relaciones interpersonales

Estrechamente ligado a la relación terapéutica se encuentra el trabajo en las


relaciones interpersonales por parte del terapeuta FAP, casi no se podrían separar o
delimitar cuando acaba una y empieza la otra, es un proceso contextualizado en la
terapia. El ser humano es social, por ese motivo gran parte de los problemas que
tenemos están directamente conectados con las relaciones que tenemos con otras
personas. Es por eso que el terapeuta FAP tiene una especial sensibilidad con los

137
problemas de la vida cotidiana de las personas y trabaja para aumentar la habilidad
en el área del espacio íntimo de cada persona, evocando emociones relacionadas
con las relaciones personales.

En FAP, la capacidad de crear relaciones íntimas satisfactorias se considera como


una parte esencial de una vida con un significado valioso. De hecho, se puede
argumentar que este es un punto de partida lógico de la FAP como un enfoque de la
psicoterapia. Trabajar con las personas en el desarrollo y la mejora de los
repertorios implicados en la creación de relaciones cercanas y amorosas es un área
particular de sensibilidad en FAP (Kohlenberg y Callaghan, 2010).

Centrándose principalmente en la relación interpersonal contingente en la


terapia, la relación cliente-terapeuta se entiende como una de las muchas relaciones
que el cliente tiene en su vida cotidiana, una en la que también pueden ocurrir
comportamientos de los clientes que se producen en el contexto de otras
interacciones humanas fuera de la sesión. Estos comportamientos también son
reales, por lo que se tratan de generalizar a otros contextos y con otras personas.
Estas CCR “in vivo” con el terapeuta en sesión, es el material y foco principal de FAP
en su trabajo diario.

III. Supervisión del terapeuta

Otra de las grandes aportaciones de FAP es la plena consciencia del terapeuta de


estar atento a discriminar aspectos relevantes de su propia conducta en sesión
(Desarrollado más profundamente en el capítulo 6 de este libro). Para el terapeuta
FAP es importante observar sus propias respuestas que pueden derivar otras en el
cliente. Por lo tanto, la habilidad de ser consciente o de autoconocimiento es
esencial para focalizarse en la supervisión. Para mejorar las habilidades del
terapeuta, Callaghan (2006b) creó la Functional Assessment of Skills for
Interpersonal Therapists (FASIT). Esta escala evalúa y clasifica los problemas que el
terapeuta puede tener durante el proceso de la terapia.

La supervisión también se encarga de generar y entrenar habilidades del


terapeuta para realizar discriminaciones sobre las conductas clínicamente
relevantes y para evocar o reforzar estas en sesión. De esta forma también hace
hincapié en reconocer y desafiar las evitaciones y emociones que ocurren en sesión
al terapeuta cuando se encuentra en determinados momentos de la sesión. En
palabras de Callaghan (2010), la supervisión clínica del terapeuta FAP es una especie
de “laboratorio de aprendizaje” donde las habilidades se practican y refuerzan,
evocándose y respondiendo a las contingencias que aparecen en la propia sesión de
supervisión. Este entrenamiento hace que el terapeuta FAP se forme y se prepare
para crear un repertorio personal más rico y por lo tanto sea un psicólogo FAP más

138
competente a la hora de trabajar con sus clientes.

Aportaciones únicas de ACT a la psicoterapia

I. El sufrimiento humano

La experiencia de la dimensión sufrimiento-placer ha sido históricamente


aceptada como parte intrínseca de la vida desde diferentes tradiciones religiosas así
como por diferentes antropólogos, médicos, filósofos y literatos (Hayes, Stroshal y
Wilson, 1999; Luciano, 2001; Wilson y Luciano, 2002). La experiencia muestra que el
sufrimiento y el placer están en la misma dimensión, o dicho de otro modo, que son
los dos lados de una misma moneda (Luciano y Valdivia, 2006). Uno no podría ir sin
el otro, lo que significa que es inevitable tener la posibilidad de disfrutar sin que ello
lleve ligado la posibilidad, antes o después, de recordar situaciones que traigan al
presente sensaciones negativas. Esta dualidad sufrimiento y placer se amplía cuando
consideramos al ser humano un ser verbal, compartir nuestras acciones
verbalmente, en su reforzamiento positivo y negativo, alimenta el sufrimiento (es
aquí donde la TMR explica este fenómeno).

ACT no es sólo una propuesta terapéutica, es un modelo terapéutico que incluye


una concepción filosófica, una aproximación psicopatológica y una terapia. Desde el
punto de vista de la ACT, el sufrimiento psicológico es una parte inseparable de la
existencia humana. Sin embargo y paradójicamente, vivimos en un contexto cultural
en el que hay creencias muy extendidas de que hay que eliminar el sufrimiento. En
este contexto, tratar de alterar o eliminar las sensaciones, los pensamientos, los
sentimientos desagradables o angustiosos es algo considerado normal, adecuado,
propio de personas cabales, aunque en ocasiones, las consecuencias de tales
intentos sean muy negativas (León-Quismondo, Lahera y López-Ríos, 2014).

La terapia ACT, se da cuenta que todas las personas tienen en algún momento de
su vida un periodo de aflicción donde creen que el mundo se acaba y que todo está
en su contra. En estos momentos se ven incapaces de abordar o conseguir sus
objetivos vitales y entran en una espiral de “incapacidad” que se va reforzando con
el paso del tiempo. Sentirse así, atrapado, de forma persistente en el malestar y en
el sufrimiento de no saber salir de ahí también forma parte de la condición humana.
Es por ello que entender ese sufrimiento es fundamental para que el terapeuta
pueda ayudar a esa persona. ACT ha planteado la idea de que el sufrimiento va más
allá de los problemas particulares, encontrándose en la propia naturaleza del
lenguaje y la cognición en sí. ACT, de manera significativa, se une a muchas
tradiciones espirituales, religiosas y de psicoterapia al intentar ayudar a los seres
humanos a desarrollar una nueva relación con su sufrimiento, en lugar de ayudar a

139
las personas cambiar o regular su sufrimiento como tratan de hacer otros modelos
terapéuticos.

El conocimiento de este funcionamiento paradójico ha desembocado en la


investigación de la conducta verbal. La explicación de este funcionamiento que en
ocasiones atrapan a las personas se localiza en las características que compartimos
los seres humanos con repertorio verbal/relacional y las reglas de la cultura en las
que estos repertorios se desarrollan. Todos estos estudios e investigaciones en este
ámbito concreto son las que ha permitido el desarrollo de una teoría funcional del
lenguaje.

II. Teoría del Marco Relacional (TMR)

Esta teoría, con sus siglas en inglés RFT (Relational Frame Theory) y desarrollada
por Hayes, Barnes-Holmes y Roche en 2001 es una aproximación al estudio del
lenguaje y de la cognición humana manteniendo los principios del análisis de
conducta al centrarse en cómo los humanos aprenden el lenguaje a partir de
interacciones con el ambiente.

La TMR tiene un marco filosófico, que en este caso es el Contextualismo


Funcional, que confluye con el Conductismo Radical de Skinner y el
Interconductismo de Kantor. Se conceptúa el análisis psicológico considerando al
organismo como un todo siempre en acción donde priman las funciones que
controlan el comportamiento (Ver Dougher y Hayes, 2000; Hayes y Wilson, 1995;
Luciano y Hayes, 2001). Es una posición monista, no mentalista, funcional, no
reduccionista, e ideográfica. Defiende que los eventos privados (como contenidos y
esquemas cognitivos) se conforman en la historia individual, y que las relaciones
entre eventos privados y acciones (la regulación verbal del comportamiento)
responden a relaciones arbitrarias potenciadas socialmente y no a relaciones
mecánicas. Desde esta filosofía, el criterio de validez de cualquier teoría será que
sea efectiva, útil para un objetivo no sólo para predecir, sino para controlar o influir,
propiciando las condiciones que permitan la prevención y el cambio o alteración del
comportamiento.

La TMR contempla el efecto de las contingencias, pero su foco de análisis es el


lenguaje y la cognición concebidos como aprendizaje relacional. Se mantiene que el
aprendizaje relacional es una respuesta operante que consiste en aprender, desde
muy temprano y a través de numerosos ejemplos, a relacionar eventos
condicionalmente hasta que se produce la abstracción de la clave contextual que los
relaciona y se aplica a eventos nuevos distintos a los que permitieron la abstracción.
Esto permite:

140
1. Que el organismo responda, sobre la base de la clave abstraída, a un evento en
términos de otro con el que no comparte elementos físicos en común.

2. Que las funciones del primero se transformen en base a la aplicación de la clave


abstraída en relación con el segundo.

De esta forma podemos decir que la TMR establece que las relaciones derivadas
entre estímulos son consecuencia de los marcos relacionales que son:

 Respuestas a relaciones arbitrarias y no arbitrarias entre estímulos. Con tres


propiedades:
- Derivación de condicionamientos por implicación mutua
- Por implicación combinatoria
- Con transformación de funciones

 Respuestas que se aprenden: Son operantes generalizadas, es decir, clases de


respuestas con la misma función y diferente topografía (un ejemplo ilustrativo
es la imitación, que cuando imitamos estamos dando una respuesta de
imitación, aunque hagamos cosas muy diferentes).

 Son aplicables arbitrariamente: Dependen del contexto en el que se marque


arbitrariamente.

Así podemos definir un marco relacional como una conducta operante


generalizada a relaciones entre estímulos que pueden ser arbitrarias, con tres
propiedades: implicación mutua, implicación combinatoria y transformación de
funciones.

En este aprendizaje aparece la conducta gobernada por reglas y aquí la TMR


diferencia funcionalmente tres tipos de regulación del comportamiento: Pliance,
Tracking y Augmenting. A continuación se explican brevemente a partir del texto de
la profesora López Ríos “ACT: Fundamentos y aplicaciones” (2013):

1. Pliance: Consisten en el seguimiento de reglas cuyas consecuencias están


mediadas socialmente. Es el primer tipo de reglas que se adquiere a lo largo
del desarrollo y su función es recibir reforzamiento por seguir
instrucciones, es decir, establecer el seguimiento de instrucciones como
una operante generalizada. Por ejemplo, si una madre le dice a su hijo:
“bébete este vaso de agua”, el hijo puede seguir la instrucción para obtener
el refuerzo de su madre (alago, beso…) no porque tenga sed. Las
contingencias implicadas en el Pliance son arbitrarias, con lo que el cambio

141
en las consecuencias propias de seguir la regla no implica cambio en el
comportamiento de seguimiento, con lo que puede constituir la base de
patrones de comportamiento “rígido” o “inflexible”.

2. Tracking: Se trata del comportamiento de seguimiento de reglas reforzado


por las consecuencias naturales de seguir la regla (sean sociales o no). Son
las consecuencias propias del seguimiento las que mantienen dicho patrón,
si las consecuencias cambian, el comportamiento de seguimiento de la
regla se modificará en función de las nuevas contingencias, es decir,
diríamos que es un tipo de comportamiento “sensible a las contingencias” o
“flexible”. En el ejemplo anterior, el niño bebería para quitarse la sed o
refrescarse y ésta sería la consecuencia que reforzaría el seguimiento de la
instrucción, no las consecuencias sociales (si las hubiere, del mismo).

3. Augmenting: Es el seguimiento de reglas en las que se modifica la función


de las consecuencias. Cuando el cambio implica ensalzar las características
de las consecuencias del seguimiento se denomina “Augmenting
motivador”. Un ejemplo de ello sería ir al médico señalando que se trata de
un especialista de sumo prestigio, o ir a un restaurante que nos han
recomendado por su reconocida calidad. Cuando el Augmenting extiende
sus funciones a nuevos eventos se denominan formativos. Esto es, las
consecuencias reforzantes del seguimiento de unas reglas o instrucciones
se transfieren al seguimiento de otras reglas. Así por ejemplo, si compartir
es ser solidario y ser solidario es positivo (ser calificado de solidario es
reforzante), dicho tipo de consecuencias funcionará como reforzador del
seguimiento de reglas que impliquen “ser solidario”. En este caso, el
Augmenting permite mantener el control del comportamiento a través de
contingencias muy demoradas, abstractas o desconocidas a través de la
experiencia directa.

Como conclusión, según la TMR y siguiendo las implicaciones para la psicoterapia


de Gómez, López y Mesa (2007), se podría decir que hay algunas propiedades del
lenguaje, que hacen que el sufrimiento psicológico pueda ser algo muy común e
incapacitante. Una de ellas sería, precisamente, el contexto de la literalidad o la
capacidad de creernos literalmente lo que nuestros pensamientos, emociones,
sensaciones nos marcan y actuar siguiendo sus dictados. Así, si una persona piensa
de sí misma que es "basura" y que "no vale para nada", probablemente esto limite
enormemente su manera de comportarse, produciéndose una falta de flexibilidad.

142
III. Flexibilidad Psicológica

La manera de concebir el trabajo terapéutico desde ACT pretender producir


flexibilidad cognitiva o psicológica ayudando a las personas a adquirir habilidades
para responder o afrontar su propia experiencia. De esta forma a partir de un
proceso de aceptación, de atención a las contingencias y eventos privados, el
compromiso hacia los valores propios y un cambio en el comportamiento, el cliente
puede responder más eficazmente a sus pensamientos y sentimientos de malestar.
De esta manera ACT pretender dar otra visión a la terapia y pretender alejarse de
eliminar sensaciones o pensamientos (eventos privados) y ayudar al cliente a
aprender a experimentar estos eventos de forma diferente y comprometerse con
acciones orientadas al servicio de sus valores.

ACT, de muchas maneras, ofrece un rico compendio de habilidades diseñadas


para ayudar a las personas a responder más compasivamente a sus propios
pensamientos y sentimientos, liberándolos de los efectos negativos del
enredamiento con su propio lenguaje y promoviendo un progreso conductual en la
vida que sea congruente con sus valores. En el trabajo de terapéutico se utilizan
diferentes estrategias en cada una de las fases para lograr esta flexibilidad cognitiva.
Cuando hablamos de fases de ACT debemos considerar que no son fases
secuenciales, o al menos, no necesariamente. Sino entender como un proceso
contextualizado en la vida del cliente y utilizar cada una de estas estrategias en pro
de conseguir una mayor flexibilidad psicológica. Brevemente se señalan las
diferentes fases de ACT (Hayes, Strosahl y Wilson, 1999):

1. Desesperanza creativa: Pretende desafiar o hacer ver a la persona su


conducta cotidiana ante el problema, y cómo esta no ha resultado eficaz.
2. El control como problema: Controlar las sensaciones y emociones no es la
solución, sino insistir en el problema.
3. Aceptación: Mientras se de-fusiona el lenguaje.
4. Yo como contenido/Yo como contexto: Defusionando el Yo
5. Valores: La elección que te dirige en tu camino vital
6. Compromiso: Vincularse con las acciones que tengan que ocurrir.

Desde la perspectiva de ACT el objetivo de las técnicas de “Difusión Cognitiva” es


reducir la credibilidad y el impacto de los pensamientos negativos; NO mediante la
disputa y la lógica sino aprendiendo a ver los pensamientos como lo que son,

143
pensamientos, y no como ellos dicen ser. Dicho de otro modo, intentan alterar las
funciones negativas de los pensamientos en lugar de su forma, contenido o
frecuencia. Se trata de no cambiar el contenido del pensamiento sino la relación que
tenemos con ese pensamiento (Hayes, 1999). A partir de trabajar el momento
presente y ejercicios experienciales en cada una de las fases se pretende entrenar
habilidades en el cliente para socavar los contextos verbales. Para ello se utilizan:

a) Metáforas: Se considera que la metáfora puede “crear realidad”, mediante la


utilización de la metáfora en el proceso psicoterapéutico se ánima al sujeto a
ejecutar, actuar y ponerse en contacto con su propia experiencia. En la terapia
ACT se utiliza la metáfora como forma de reforzar el proceso de clarificación
de los valores del sujeto y trabajar la flexibilidad psicológica. A través de estas,
según Wilson y Luciano (2002), se produce una reflexión cuidadosa donde la
persona puede llegar a darse cuenta de cuáles son sus valores, lo que
realmente quiere, y no lo que está haciendo ahora mismo. De esta forma la
metáfora puede ser interpretada por cada persona de manera diferente, en
función de su situación y sus valores, no son una regla, no hay una forma
correcta o incorrecta de seguir una metáfora. Para que la metáfora produzca
un efecto terapéutico y abrir la puerta hacia posibles soluciones es
fundamental conocer la historia personal del cliente para que este pueda ver
la similitud de su propia situación con la que se le plantea a nivel metafórico
(Trillo, 2017).

b) Ejercicios experienciales: Este tipo de ejercicios ayudan al cliente a aceptar


los eventos privados ligados a lo que no puede cambiar. Implica el abandono
de la realización de acciones que no han sido efectivas hasta ahora y flexibiliza
la elección de generar nuevas respuestas o acciones. Del mismo modo
fortalece el “yo como contexto” que es la experiencia cierta y estable de uno
mismo, la realidad percibida a través de los 5 sentidos. Entre muchos otros
encontramos el ejercicio de sacar la mente a pasear, el observador, la china
en el zapato o el del funeral.

c) Mindfulness: La atención plena o Mindfulness es la capacidad de llevar la


atención a las experiencias que se están experimentando en el momento
presente, de un modo particular, aceptándolas y sin juzgar. (Kabat-Zinn,
1990). Es una conciencia basada en el presente, no elaborativa, de modo que
cada pensamiento, emoción o sensación que aparece a nuestra atención es
reconocida, observada y aceptada tal y cómo es. Este trabajo en el momento
presente es fundamental para trabajar en el cliente la aceptación de cualquier
sensación o pensamiento que aparezca en su mente.

144
FAP ACT
Relación Terapéutica Sufrimiento Humano
Aportaciones Relaciones Teoría de los Marcos
Interpersonales Relacionales
Supervisión del Terapeuta Flexibilidad Psicológica

Tabla 1. Resumen aportaciones únicas de ambas terapias

Aspectos comunes e integradores FAP y ACT

La influencia mutua entre las dos corrientes es evidente. Al menos en la práctica,


en la experiencia que el terapeuta tiene con su cliente, es difícil si este está formado
en Terapias Contextuales utilizar una “versión pura” de ACT o de FAP sin que haya
algún tipo de influencia de la otra. Si desde un punto de vista conceptual pueden
compartir y ajustarse perfectamente la una a la otra, desde el punto de vista
práctico es perfectamente compresible su dificultad a la hora de utilizar sólo ACT o
FAP para hacer terapia. A lo largo de este capítulo se ha intentado ofrecer las
aportaciones, y a su vez complementos, de cada una de las terapias ayudando así al
terapeuta a entrenarse para ofrecer una asistencia psicológica más ajustada a las
necesidades de cada cliente.

En un intento por describir las estrategias de integración Callaghan, Gregg, Marx,


Kohlenberg, y Gifford (2004), en su trabajo “FACT” ofrecieron tres enfoques
diferentes para usar FAP y ACT juntos que brevemente se intenta describir a
continuación:

 Utilizar la relación terapéutica en FAP, al hacer ACT: Se conforman


directamente las habilidades de aceptación y atención plena al servicio de la
flexibilidad psicológica y de las acciones a comprometerse. El objetivo aquí es
utilizar la relación terapéutica para lograr los resultados intrapersonales
establecidos por ACT. En este caso según, Callaghan et al. (2004) el terapeuta
no puede responder al impacto social aversivo que el cliente tiene sobre el
terapeuta, arriesgándose así a que el cliente desarrolle un repertorio eficaz en
consulta pero no así en otras situaciones sociales. Aunque el terapeuta de ACT
se enfoca en reemplazar las estrategias de evasión y evitación del cliente,
puede no ayudar a desarrollar las habilidades interpersonales del cliente lo
suficiente como para interactuar con otras personas de manera efectiva.

145
 Utilizar los repertorios de aceptación de ACT al hacer FAP: Ayuda a los
clientes a responder de manera diferente a sus pensamientos y sentimientos
para que puedan participar en un nuevo comportamiento que afecta a la
relación de terapia y es susceptible de consecuencias contingentes. El objetivo
de este enfoque es intentar utilizar estrategias de aceptación y acción basadas
en la atención plena para crear relaciones interpersonales más significativas
para los clientes tanto dentro como fuera de la terapia. Callaghan describe
que el desafío en este enfoque aparece cuando el cliente se involucra en un
comportamiento que afecta adversamente al terapeuta debido a la manera
en que el cliente está tratando de evitar sus sentimientos, el terapeuta FAP
debe hablar de cómo esta evitación le afecta, mientras que el ACT terapeuta
ayuda al cliente a aprender a experimentar esos sentimientos a medida que
ocurren. Sin integrar adecuadamente los dos tratamientos, el terapeuta
estaría en conflicto acerca de qué estrategia utilizar con el cliente.

 Plena integración tanto de ACT y FAP: Presentes ambas en cualquier


momento utilizando los procesos interpersonales de la relación terapéutica
para dar forma a los procesos de evitación y aceptación en el aquí y ahora en
el curso de la terapia. Permitir que ACT y FAP se conviertan en el contexto de
cada uno resuelve el dilema de decidir cuál terapia debe servir como la
fundación del otro y proporciona un acercamiento más comprensivo.

Es difícil imaginar que el proceso de alteración de los repertorios


interpersonales (utilizando FAP) no requiere la disposición del cliente a
experimentar experiencias emotivas aversivas (ACT). Del mismo modo, es
igualmente desafiante sugerir que la evitación experiencial y las estrategias
empleadas para participar en la aceptación (ACT) no ocurren en el contexto
de las relaciones interpersonales (FAP). Cada terapia requiere los supuestos
del otro para captar las complejidades de los fenómenos psicológicos.

Por lo tanto, FAP necesita ACT para lograr nuevos repertorios interpersonales,
se requiere una habilidad para experimentar estados afectivos aversivos. Ahí
es donde ACT permite al cliente desarrollar una capacidad para soportar o
aceptar estos pensamientos y sentimientos. Y del mismo modo, ACT requiere
de FAP. Ninguna experiencia psicológica ocurre en el vacío. La mayoría, si no
todos, nuestros pensamientos y sentimientos ocurren en el contexto de otras
personas, incluso si esas personas no están físicamente presentes. De hecho,
en el contexto de la relación terapéutica en el que se realiza la terapia ACT, es
fundamental aprovechar esta oportunidad para mejorar el desarrollo de
habilidades por parte del cliente.

146
La forma en que estos dos enfoques tienen de coexistir tanto conceptual como
prácticamente está abierto a la discusión. La publicación científica y los ensayos
experimentales son fundamentales para conocer mejor sus formas de integrarse.
FAP y ACT se han utilizado juntos en varios diseños experimentales. Paul, Marx y
Orsillo (1999) utilizaron ACT y FAP consecutivamente para tratar a un cliente
etiquetado como exhibicionista. El tratamiento consistió en ayudar al cliente a
adquirir las habilidades para aceptar estados afectivos indeseables e intolerables, así
como la ansiedad social, el exhibicionismo y el uso de la marihuana. Gifford et al.
(2004) desarrollaron un tratamiento psicosocial diseñado para el abandono del
hábito de fumar que usó los procesos de ACT para ayudar a socavar la evitación
experiencial, al mismo tiempo que hacía elecciones basadas en el valor basado en el
comportamiento. Baruch, Busch, Juskiewicz y Kanter (2009) emplearon FAP y ACT de
manera consecutiva para tratar a un cliente con comportamientos depresivos
mayores y paranoicos. Del mismo modo, Schoendorff y Steinwachs (2012) que
sugirieron que añadir FAP a la formación ACT puede ser una forma eficaz de
desarrollar la competencia terapéutica y la adhesión al modelo ACT.

Divergencias entre FAP y ACT

Tras hacer un repaso profundo a lo largo de este capítulo sobre ACT y aún más
profundamente y reflexivo sobre la FAP a lo largo del presente manual, a
continuación se muestran algunas diferencias que existen entre las dos terapias.
Estas son vienen determinadas por la relación terapéutica, la manera de evaluar, el
contexto donde se producen y los valores.

El principal punto de divergencia de la PAF respecto al análisis de la conducta más


tradicional es también su principal aportación: considerar la relación terapéutica
como el centro del proceso terapéutico. Una de las diferencias más grandes que
existe entre FAP y ACT es el contexto en el que se produce la intervención. Mientras
que ACT ha sido llevada tanto a terapia individual como grupal así como a talleres y
materiales (textos, libros…) de ayuda, FAP necesita un contexto donde aparezca una
relación interpersonal. Por su propia definición en la intervención FAP es necesaria
que aparezcan relaciones interpersonales entre el terapeuta y cliente (o grupo de
clientes) donde se pongan de manifiesto las conductas, evocaciones, problemáticas
cotidianas, etc.

Aunque ambos tratamientos, naturalmente, también emplean medidas


tradicionales de la psicopatología, particularmente cuando el propósito del
tratamiento es la investigación otra de las diferencias existentes entre ellas es la
evaluación. FAP se enfoca en el análisis funcional y puede utilizar una estrategia de

147
evaluación desarrollada, como la Plantilla Funcional de Evaluación Ideográfica (FIAT,
Callaghan, 2006a). La FIAT evalúa con gran precisión del comportamiento
clínicamente relevante, con esta evaluación ligada estrechamente a la intervención
clínica y la evaluación. En ACT, se hace hincapié en la evaluación de los valores y los
resultados se miden en función del progreso hacia los valores, Cuestionario de
Valores, (Wilson et al., 2002) Además, los procesos de ACT se miden mediante
cuestionarios de auto-reporte, como el Cuestionario de Aceptación y Acción (AAQ)
(Ruiz et al. 2013), y el progreso se evaluará en parte sobre la base de cómo este
proceso mide los cambios.

El contexto donde aparecen los problemas y cómo se resuelven estos es otra


diferencia entre las dos terapias. Como hemos visto a lo largo del capítulo en FAP el
comportamiento clínicamente relevante será observado, evocado, reforzado o
moldeado en sesión por parte del terapeuta a partir de la interacción entre cliente y
terapeuta. Sin embargo en intervención ACT en la propia sesión se realizan
metáforas, ejercicios experienciales y de meditación que pretenden ayudar al
paciente discernir entre darse cuenta de su situación y comprometerse con el
cambio. De esta forma, este proceso puede aparecer no sólo ni necesariamente en
sesión, sino en la interacción del cliente con su medio. Por lo tanto en FAP, es
esencial que los problemas y mejoras clínicamente relevantes sean notados y
consecuentes por el terapeuta mientras en ACT, esta respuesta contingente
inmediata no está disponible, ya que puede que ni siquiera haya un terapeuta si el
tratamiento se lanza leyendo un libro.

Por último la clarificación de valores, que consiste en esclarecer qué es lo


importante en la vida de la persona, intentando promover las actuaciones que vayan
en dirección con sus valores. Este concepto bien podría ser definido por la famosa
frase de Ortega y Gasset “Encuentra tu vocación”.

En ACT la exploración de los valores y su compromiso con ellos es el punto central


de la intervención (junto con la Aceptación), debe hacerse referencia a ellos en cada
sesión. Es así que se le recalca a la persona objeto de intervención que esta irá
dirigida por sus valores, descubrir y trabajar los valores es recalcar que la
intervención se centra en el cliente y en la vida que él o ella elige construir y
considera valiosa. La aceptación sólo no vale, hay que buscar qué es lo que merece
la pena para el cliente. Si aparecen los valores reales para el paciente, el resto de las
cosas salen solas. En la FAP, aunque los valores no son un concepto tan central
como en ACT, se recalca que los valores deben ser relevantes tanto fuera de sesión
como en sesión. De esta manera, las mejoras durante la sesión, o evidencia de
problemas, son directamente moldeados por las reacciones contingentes que
ocurren en la sesión de terapia. Así el trabajo en valores en sesión hace que se
generalice un comportamiento efectivo y coherente con el valor fuera de la sesión.

148
Para ambas ACT y FAP el tema de los valores es importante para construir una
brújula que permita detectar si las c acciones y conductas del cliente están en la
dirección que ha elegido (valores) y que realmente importa (y se subraya, que
realmente le importa al usuario), aunque a veces ir en la dirección de sus valores sea
difícil o incluso doloroso sabremos que tiene un significado valioso para el cliente.

Conclusiones

A lo largo del capítulo el lector ha podido observar el trabajo y la filosofía tan rica
de ACT y FAP a nivel de intervención, con un enfoque filosófico de compasión y
ayuda para mejorar la calidad de vida de las personas. Ambas terapias con raíces en
el análisis de conducta, se enriquecen la una de la otra a través de la gran variedad
de técnicas y recursos de los que disponen, lo que permite convertirse, con ayuda
de la evidencia científica y estudios, en más eficaces y útiles para profesionales y
clientes. Del mismo modo, al igual que las terapias flexibilizan y ayudan en el devenir
vital de sus clientes, los psicólogos que trabajan con estas experimentan los mismos
picos de euforia y frustraciones que sus clientes, ayudando así, a ajustarse a la
idiosincrasia de cada uno de sus clientes y mejorando la calidad de las
intervenciones.

Este texto ha pretendido aportar algo de luz y material de reflexión al profesional


que trabaja en terapias contextuales para la comprensión de ambas terapias con el
fin de que pueda prestar un mejor servicio en su día a día con sus pacientes. Aún
quedan muchos estudios por realizar donde podamos afinar mejor nuestras
intervenciones, sin embargo, sí estamos en disposición de afirmar que las terapias
ACT y FAP son tratamientos eficaces para ayudar a nuestros clientes a dar el
significado que desean a su vida.

149
Bases comunes de ACT y FAP (Trillo y Ruiz, 2017)

1-Se basan en un enfoque filosófico de compasión y ayuda para mejorar la calidad


de vida de las personas.

2-Ambas tienen sus raíces en la terapia de conducta de filiación conductista radical.

3-Se basan en la investigación de procesos básicos y en la evidencia de las


aplicaciones.

4-La flexibilidad y el análisis funcional adaptado a las características de cada cliente


o grupo son fundamentales y no el seguimiento de reglas o protocolos prefijados. El
papel del terapeuta también es considerado desde esta perspectiva.

5-Ambas se centran en buscar significado valiosos para las vidas de los clientes.

6-Ambas utilizan la aplicación de la observación y uso de las funciones de la


conducta verbal (lenguaje) en la relación terapéutica para producir cambios en la
vida de la persona hacia su horizonte valorativo.

7-Ambas trabajan con la observación del Yo como contexto: ACT desde las
discriminaciones experiencia directa vs experiencia verbal para derivar acciones
valiosas y defusionarse de la evitación experiencial; y FAP desde la observación de
los efectos de la conducta personal (ley del efecto) en las relaciones interpersonales
mediante las equivalencias funcionales.

150
Capítulo 6.Ejemplos de diálogos clínicos relevantes en la
experiencia grupal. La importancia de la supervisión en
FAP
(Juan José Ruiz Sánchez, José Manuel Sánchez Olid y Francisco Trillo Padilla)

Grupo Viernes-USMC de Úbeda

Este es el grupo más pequeño de los tres que se recogen en esta experiencia de
FAP (PAF) de grupo en Úbeda. Está conformado solo por 4 personas inicialmente,
tres hombres y una mujer, todos entre los 50-60 años.

SESIÓN Nº 1: 1-9-2017

Los mayores problemas que manifiestan en su vida cotidiana y lo que esperan


conseguir viniendo al grupo:

1-Pepe: Recién separado después de 40 años de matrimonio. Manifiesta que se han


separado a iniciativa de su esposa y de mutuo acuerdo, aunque a él le hubiera
gustado seguir en la relación; pero que habían llegado a un punto en que la relación
no iba bien. Dice que lo lleva bastante bien tras haber pasado un par de semanas
muy malas. Ahora dice sentirse libre. Refiere venir al grupo para afianzar el
sobreponerse a estas circunstancias.
.“Diagnosticado de Trastorno Adaptativo con Ánimo Depresivo”

2-María Teresa: Refiere llevar casada 30 años y que su vida de matrimonio es un


desastre desde el principio pero que es muy dependiente económicamente y
emocionalmente de su pareja y que tiene mucho miedo a quedarse sola si se separa.
Dice necesitar mucho cariño que no tiene de su familia. Añade que su marido le trata
de malas maneras verbalmente culpándole de la situación que tienen de matrimonio.
Ella se refugia en las amigas que le animan a ser más autónoma, pero a duras penas
le planta cara al marido, dice, ya que si expresa su parecer este suele montar en
cólera. Le gustaría ser menos dependiente del marido.
.“Diagnosticada de Distímia Depresiva”.

3-Juan: Refiere llevar muy mal un conflicto con una compañera de trabajo que tras
una relación estrecha con él ha desembocado en procedimientos judiciales por
denuncias mutuas en su ámbito de trabajo. Le da muchas vueltas a esto y oculta la
situación a su madre mayor y delicada que tenía mucha afinidad con esa compañera.
Intenta comprender a que se debe todo esto que ha pasado que le resulta muy

151
inexplicable. Le gustaría sobreponerse a esta situación.
.“Diagnosticado de Trastorno Adaptativo con Ánimo Depresivo”

4-Manuel: Refiere que se le mete en la cabeza ruidos como una “chicharra” que le
acompaña desde hacen muchos años o que se le meten canciones o voces que ha
escuchado en la cabeza durante todo el día; y que a pesar de haber tomado mucha
medicación y de intentar distraerse por todos los medios escuchando música, ruido
blanco, meditación, etc.; no se le van. La única manera en que se siente aliviado es
acostándose y durmiendo, aunque eso incomoda a su esposa (en tratamiento por
cáncer) ya que necesita de que él se implique más en la vida familiar. Se le ha
descartado problemas físicos como acufenos y otros. Solo sale a pasear una hora,
limitándose desde hace años a llevar una vida muy casera, la mayor parte acostado
y durmiendo. Añade que su padre se suicidó y un tío porque tenían problemas
mentales graves y que teme terminar como ellos. Le gustaría que se le quitaran los
ruidos o al menos como le ha dicho el enfermero del equipo de salud mental
aprender a vivir con esto.
.“Diagnosticado de Trastorno Obsesivo”

Tras la presentación el psicólogo del grupo (Juan José) les presenta la modalidad de
grupo PAF incidiendo en la importancia de los dos papeles como “actores” contando
los problemas que tienen en su vida cotidiana y cómo lo afrontan; y como
“directores” observado cómo les hace sentir aquí mismo en las sesiones lo que sus
compañeros dicen y hacen. Se les añade que el papel de director tiene otros
aspectos que iremos viendo poco a poco. Rellenan los cuestionarios de la línea base
inicial y se les da unos folios con los elementos básicos de esos dos papeles
actor/director. Se le plantea que cuentan con una hoja de anotaciones donde
pueden, si lo desean, tomar nota como directores de que problemas le ven a sus
compañeros en la misma sesión en relación a lo que cuentan les pasa en su vida
diaria (primera columna), como les hace sentir y opinar eso aquí y ahora (segunda
columna) y que cambios le van viendo en las sesiones a sus compañeros de grupo,
aunque ahora acabamos de iniciar la terapia y eso lo iremos viendo si esta
experiencia nos ayuda (tercera columna).

Para moldear la experiencia de centrarnos en las conductas clínicamente relevantes,


se les pide permiso si desean aprender paso a paso, como tomar nota de estos
aspectos, y compartirlos con el resto del grupo al final de la sesión. Acceden a ello,
aunque dejamos la experiencia para los últimos 20 minutos de la sesión de 2 horas.

Antes de ello van comentando sus problemas en la vida diaria, en la misma línea que
lo referido antes, siendo Pepe el más activo en dar opiniones. Todos en esta sesión
dan opiniones pero menos de cómo se siente escuchando a sus compañeros (este es
un punto a moldear en sucesivas sesiones); es decir asumen con facilidad el papel de

152
actores y el de directores “intelectuales”, pero menos el de directores
“emocionales”, incluido en este caso el propio terapeuta (T1).

Al final de la sesión se les dice que estén un rato en silencio y que vayan tomando
nota de las tres columnas (CCR1, CCR3 y CCR2 en ese orden). Las observaciones son
las siguientes en resumen:

1-Sobre Pepe: Casi todos coinciden en que parece llevar con mucha fortaleza la
separación, que eso lo admiran y que debe seguir en la misma línea (potencial CCR2).
María sin embargo le dice que debe ser mar duro de lo que él manifiesta realmente
(potencial CCR1), respondiéndole este que lo lleva muy bien que la que se siente
culpable ahora de la separación es su ex pareja (potencial CCR3).

2-Sobre Juan: Pepe le dice que tal como relata Juan su compañera le tomó celos
profesionales, Juan admite que eso puede ser cierto y que le da un rayo de luz
(potencial CCR3); añade que debe dejar eso atrás aunque le va a costar mucho. El
resto del grupo le dice lo mismo. Juan dice que le llama la atención la actitud de Pepe
de sentirse libre y que acoge con su corazón sus sinceras palabras y como enfrenta la
situación (potencial CCR2). Todos le dicen que habla mucho en la sesión sobre el
pasado con su compañera (potencial CCR1).

3-Sobre María Teresa: Todos refieren que está inmersa en una relación de pareja
muy problemática y que la actitud de su marido no es adecuada y que como le dicen
sus amigas debe de tener más autonomía e independencia (potencial CCR3). Ella
refiere que lleva haciendo danza del vientre, gimnasia y otras actividades e incluso
hace poco se rebeló al marido en un asunto particular, cosa que no suele hacer, e
incluso en el grupo se atreve a contradecir el supuesto bienestar de Pepe tras la
separación (potencial CCR2; al terapeuta se le escapó señalar esto, aunque le
preguntó que le llevo a “rebelarse con el marido”, diciendo que ya está harta). Ella
misma se dice dependiente emocionalmente (potencial CCR1). Manuel y Juan le
conminan a hablar más con su marido, ante esto María permanece callada (otra
potencial CCR1)

4-Sobre Manuel: Todos le refieren que no conocen muy bien su problema de los
ruidos en la cabeza, pero que estar acostado y hacer girar su vida en torno a eso le
limita aún más (potencial CCR1), que el hecho que otros familiares optaran por el
suicidio no lo tiene que reproducir el también, que puede optar por buscar
actividades más placenteras e implicarse en ellas (potenciales CCR3 y CCR2).

-Reflexiones del terapeuta (Juan José): Moldear las discriminaciones de los tres tipos
de CCRs en los miembros del grupo es básico va requerir varias sesiones. El uso de la
hoja simple de notas más que las de las 5 reglas es pertinente para empezar este

153
trabajo de moldeamiento en las próximas sesiones.

SESIÓN Nº 2: 15-9-2017:

Iniciamos la sesión introduciendo el concepto de equivalencia funcional y la


conducta funcional, que nos ayuda o perjudica a la larga para lo que deseamos y
valoramos, según qué contextos/situaciones. La equivalencia funcional es expuesta
con ejemplos impersonales para pasar después a que lo relaciones con ejemplos
personales, insistiendo de que “repetimos incluso sin darnos cuenta” formas de
actuar en nuestras relaciones con unos fines, y que darnos cuenta de esto, si nos
ayuda o perjudica a la larga nos permite ir haciendo cambios aquí mismo en el grupo.

Todos participan de esta experiencia y la sesión es bastante productiva para sus 4


integrantes.

1-Pepe: Comenta que en su vida diaria en la última semana ha experimentado que


su hijo mayor le culpe de la separación de su madre (esposa anterior) y que a pesar
de la lógica y sus razonamientos con este, le ha entristecido y dolido esto (Vida
diaria). Le pido que pare un momento, contacte aquí y ahora con lo que siente por
dentro y nos dice que mucho dolor, desengaño, soledad, rechazo de algunos de sus
hijos, que hablar de esto le entristece (CCRS) pero que compartirlo con el grupo le
ayuda (CCR2). En la sesión anterior parecía demasiado entero y desenvuelto, como si
él estuviera por encima emocionalmente del grupo, en una especie de evitación
experiencial por negación parcial de su dolor (CCR1). Hoy al contactar con esto se
abre más al grupo e íntima con este (papel de actor). Recibe del resto del grupo que
le ven con más tristeza pero que se ha abierto más a ellos y que expresar esto le
puede ser de ayuda al enfrentarlo en vez de rehuirlo; él está de acuerdo (papel de
directores). Al final de la sesión expresa que se siente más cercano al grupo (CCR2)

2-María Teresa: Comenta que en su vida diaria va haciendo pequeños pero


importantes progresos que comparte con nosotros como darse pequeños caprichos
en comidas, aficiones, etc. (Vida diaria). En el grupo refiere estar más contenta de
tomar las riendas de su vida y no estar excesivamente supeditada a los deseos de su
marido. Por ahora desea seguir con él, pero le va quitando algo de dramatismo a si
la relación no fuera bien, ya que otros han pasado por esto y siguen adelante, nos
dice (CCR2 y CCR3 potencial). Todo esto en su rol de actriz es expresado. Sus
compañeros como directores le perciben más relajada y desenvuelta en el grupo
(otra potencial CCR2). Al final de la sesión manifiesta sentirse a gusto en el grupo y
que esto le sirve (CCR2).

3-Manuel: Comenta que en su vida diaria está pendiente de unas pruebas médicas
que le están realizando de pulmón y corazón y que esto le da cierto miedo, y que

154
además sigue con sus ruidos de cabeza (Vida diaria). Reconoce la presencia de ese
miedo y como en casa suele comer y dormir básicamente para manejar lo aversivo
de su vida (CCR3). El psicólogo le pide explícitamente que nos diga cómo se siente
aquí con nosotros hablando y escuchando todo esto de hoy y el expresa que muy
bien, resume los aspectos positivos de sus compañeros (rol de director de él hacia él
grupo), aquí y ahora, descentrándose de sus exclusivas preocupaciones (CCR2) y
recibe comentarios positivos de todos que le ven más animado, centrado y relajado
en el grupo y todo ello a pesar de sus problemas, el reconoce que es cierto (como
directores).

4-Juan. Refiere estar inquieto/nervioso por la evolución del juicio pendiente con su ex
compañera (Vida diaria). En el grupo le pido notar si se percata de la presencia de
esta ansiedad/inquietud (en su papel de actor) y nos dice que la nota en el pecho, y
esto le hace hablar del desengaño con su compañera (aspectos de CCR1/CCR2-
Desengaño si le lleva a ampliar sus actividades más allá del recuerdo y rumiación con
de esta). Como director recibe el comentario de Manuel que dice verlo más entero y
relajado que la semana anterior, lo que provoca una carcajada en él, ya que se ha
sentido sorprendido y él se veía peor pero…. (CCR3), pidiendo a Manuel que le
especifique más al respecto. Manuel le dice que le ve como una persona resolutiva y
capaz, que comprende su situación (CCR2 de Manuel, más participativo hoy). Juan
agradece todo esto y devuelve a Manuel y el resto del grupo comentarios muy
positivos, lo que desencadena en todos como directores mutuos los cambios que van
viendo en solo estas dos sesiones.

Se hace ronda final pidiendo como se sienten ahora al final. El terapeuta comunica
que se siente muy bien al observar como todos se van abriendo y reforzándose
mutuamente sus progresos. Todos se expresan de manera similar. No ha hecho falta
si quiera usar los registros de actor/director ya que con evocaciones de preguntarles
cómo se han sentido y que perciben en los compañeros ha sido más que suficiente.
La sesión ha sido reforzante para todos/as.

SESION Nº 3: 6-10-2017

Acuden Pepe, María Teresa, Juan y Manuel. Por diversas circunstancias hace tres
semanas de la sesión anterior.

A)-Problemas/Progresos en su vida diaria: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

155
1-Pepe: Nos refiere que cada vez lleva mejor la separación, que su nueva casa donde
vive ya la experimenta como suya y que le ha agradado que uno de sus hijos le diga
que le echa de menos.

2-Maria Teresa: Refiere llevar tres semanas mal desde que ha muerto uno de sus
perros que le hacían mucha compañía y le daban mucho cariño y que su marido
crítica sin comprenderla esta pena.

3-Juan: Refiere que estaba ansioso ante el juicio con la ex compañera y que después
se ha sentido aliviado al demorarse este.

4-Manuel. Refiere que solo encuentra alivio de sus obsesiones durmiendo con la
medicación y que su psiquiatra le ha dicho que le viene bien hacer eso de dormir
mucho.

B)-Regla 1: Observación de CCRS: (“Los demás como directores/as”):

1-Pepe: Todos le dicen que le ven muy relajado y tranquilo y él dice que también se
percibe a sí mismo así.

2-Maria: Le decimos que la vemos más tristona en la reunión aunque al mismo


tiempo se abre más al grupo y contacta más con todos.

3-Juan: Hoy le vemos que le vemos como enfadado, elevando el tono de voz y con
gesto serio cuando nos habla de cosas que le ha hecho perder su ex compañera de
trabajo. Le referimos que está hoy más en contacto con sus emociones, aunque él
dice que como abogado duda de si esto le puede perjudicar ya que antes mantenía
más distancia con sus clientes y ahora empática más con ellos, sobre todo con
parejas en conflicto.

4-Manuel: Le vemos callado la mayor parte de la reunión, aunque responde a las


preguntas de los demás y opina sobre ellos con “cada uno ve las cosas a su manera”
y cada uno tiene sus problemas”, aunque viene puntual a todas las reuniones, e
incluso Pepe le dice que le vio por la calle paseando a su perro con buen semblante,
añadiendo el que sale de casa y procura acompañar a su mujer y no estar todo el día
en casa durmiendo.

C)-Regla 2: Provocar CCRS: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

1-Pepe: Expresa que el necesita sentir que puede dar afecto a alguien y necesita el
contacto físico de otras personas queridas, que abraza más ahora a sus hijos, pero

156
que le cuesta encontrar a alguien a quién dar afecto, aunque lo lleva con paciencia

2-Maria Teresa: Dice que la pérdida de su mascota-perro es como si hubiese perdido


a un ser querido ya que ante la falta de afecto por rechazo de su padre ya mayor y
hermanos (padres separados) y la incomprensión de su marido le hace refugiarse en
sus perros que le dan afecto.

3-Juan: Vuelve a decir que su ex compañera le ha hecho mucho daño tanto a nivel
profesional como personal y que el antes pensaba más las cosas, y ahora además las
siente más-

4-Manuel: Mientras los demás intercambian opiniones el sigue observando en


silencio y solo responde si le pregunto directamente.

D)-Regla 3: Reforzar progresos observados en la misma sesión de CCR2: (“Los demás


como directores/as”):

1-Pepe: Recibe del grupo que se le ve cada vez más relajado y tranquilo a lo que él
responde con una sonrisa de que debe ser verdad eso

2-Maria Teresa: Se le dice que el dolor que siente es legítimo (por su perro) y que ella
cada vez se abre más al grupo

3-Juan: Le digo que el hecho de enfadarse le pone más en contacto con descubrir
aspectos de su ex compañera no tan bondadosos y que en general está más en
sintonía con los sentimientos y no solo con sus pensamientos, aunque él hable solo
de la ansiedad.

4-Manuel: Se le dice que aunque esté callado, viene a las sesiones y eso parece que
en algo e ayuda; él dice que sí que sigue las “indicaciones de su psicólogo y
psiquiatra”, pero que lo que no quiere hacer es como su padre que se suicidó cuando
él tenía 18 años, y que él no lo va a hacer por su mujer e hijos, y que el grupo le sirve
para afirmarse en esta idea.

E)-Regla 4: Influencias reforzantes mutuas en el grupo: (“Cada uno/a como


actores/actrices”):

No elaboramos este apartado hoy, aunque al final todos dicen que le grupo les
ayuda en su vida, sin definir hoy en qué y cómo. Elaboraremos esto más en próximas
sesiones.

157
F)-Regla 5: Interpretaciones funcionales a moldear y orientaciones dadas por el
grupo: (“Los demás como directores/as”):

La regla 4 y 5 son las menos trabajadas en la sesión de hoy tras tres semanas de
parón. Solo recojo algunos apuntes

1-Pepe: A pesar de llevar la separación mejor echa de menos actividades y contactos


que le permitan sentirse que da afecto a otras personas, aunque en el grupo es muy
positivo en general con sus compañeros

2-María Teresa: Refiere que se refugia en sus animales ante sus carencias afectivas,
aunque a su marido le pone más límites cuando este critica sus reacciones de pena
ante la muerte de su perra.

3-Juan: Le dice Pepe que ahora tiene más empatía y no es solo un abogado que ve a
sus clientes como casos, él le dice que no sabe si eso es tan positivo ya que puede
interferirle en su trabajo. Le pregunto si ha notado esa interferencia perjudicial, sin
que nos precise que ese ha sido el caso, sobretodo en temas de pareja.

4-Manuel: Le dice María que si basa su solución en las pastillas y dormir está
perdiendo muchos aspectos de su vida y que ella misma antes se refugiaba
demasiado en las pastillas. Manual agradece su opinión pero dice que el necesita
esas pastillas. A esto le digo que puede ser el caso, pero si hay vida más allá de ellas
y de dormir, diciendo que sí, que su mujer y sus hijos.

SESIÓN Nº 4: 13-10-2017

Acuden 5 personas a esta sesión: Paco (recién incorporado), Manuel, Pepe, María
Teresa y Juan. Les pido hacer una presentación a su nuevo compañero de que les
trae al grupo y cómo les ha ido la semana.

A)-Problemas/Progresos en su vida diaria: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

1-Paco: Refiere que le ha pasado de todo. Un cáncer de colón en revisión aún, que
parece ir bien por el momento, desfalco de su hermano en un negocio a medias y
problemas con su pareja a punto de la separación. Esta semana refiere que va a
iniciar trámites con abogado de separación ya que su relación es inexistente. Dice

158
que para él, el sexo es el 90% de una relación de pareja y que su mujer siempre está
cansada desde hace meses, y le da por pensar si le es infiel, ya que en una ocasión
anterior tonteó con otro hombre, aunque ella dice que no llegaron a nada sexual.
Llora mientras relata todo esto.

2-Manuel: Refiere que el psiquiatra le ha reducido la medicación y está muy bajo de


ánimo, que le cuesta hablar porque está desanimado. Sin embargo después en el
grupo habla más que en todas las sesiones anteriores.

3-Pepe: Refiere haber pasado una semana malísima, ya que él creía que tenía todo
esto superado y sin embargo al requerirle su pareja reunión para dirimir los trámites
de separación le ha dicho textualmente, dice, que podía haber seguido von ella
aunque no estuvieran bien ya que así no da que hablar a los conocidos. Dice, “he
constatado de que no me quiere y soy un objeto para ella”. Todo ello cabizbajo y con
las manos en el mentón y los codos en sus rodillas.

4-María Teresa: Dice que todo lo que llevan diciendo sus compañeros le recuerda
que una vez tras intentarse suicidarse su marido estaba más preocupado por el que
dirán el vecindario que por ella. Dice estar desanimada también, pero aun así más
autónoma de su marido. Por ejemplo, dice y nos lo muestra, un tatuaje que se ha
hecho en el brazo con el nombre de su perrita fallecida en contra del criterio de su
marido que dice que eso no le gusta a la gente.

5-Juan: Refiere que esta semana ha estado en la universidad a arreglar papeles para
ver si se puede volver a reincorporar y pasó cerca del despacho que compartía con su
ex compañera, que le han venido recuerdos y se ha entristecido.

B)-Regla 1: Observación de CCRS (“Los demás como directores/as”)+ C)-Regla 2:


Provocar CCRS: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

Evoco con una pregunta a todo el grupo. “Veo que hoy tenéis algo en común que
estáis mostrando aquí mismo al hablar de todo esto”. Todos dicen que están de
bajón. Les pregunto qué pasa si están de bajón, refiriendo Manuel que su padre y un
tío se suicidaron porque tenían depresión y que a él se la pasa a veces por la cabeza.
En este punto los demás están callados y nadie añade nada más. Aprovecho la
ocasión para preguntarles a todos/as: “¿Vosotros sois pilas alcalinas que cuando se
descargan ya dejan de funcionar, o incluso con menos energía podéis seguir dando
pasos hacia lo que os importa? Todos dicen que pueden seguir a pesar de la tristeza,
y entonces les propongo ejercicio ACT de “fisicalizar” la tristeza que sienten en este

159
momento de la dinámica grupal y una vez que la han situado delante como un
objeto, les pregunto, “¿qué abanico de posibilidades se abren si vemos que ella está
en nosotros, pero que como un vaso lleno de agua algunas veces, otra de refresco,
otras de aceite, no cambia la esencia del vaso?”, junto a otra pregunta casi seguida
de “¿Qué da sentido y valor a vuestras vidas a pesar de la tristeza?”. Manuel a esto
dice que por sus hijos y mujer sigue adelante a pesar del bajón, Teresa que ella asiste
a un grupo de oración que le da fuerzas, Juan que también es creyente, y que
además tiene de ejemplo a un primo que se quedó minusválido en sillas de ruedas
con 18 años y tiene unas ganas de vivir inmensa. Juan dice que él tiene que ir a la
Universidad porque él desea seguir dando clases en el futuro. Paco y Pepe
permanecen más callados en este momento.

D)-Regla 3: Reforzar progresos observados en la misma sesión de CCR2: (“Los demás


como directores/as”):

1-Paco: Le digo que se ha abierto mucho al grupo expresando lo que siente y que eso
nos da más posibilidades de ayudarle.

2-Manuel: Le digo de que a pesar del bajón es la sesión donde más ha participado.
Incluso al decir que le ha bajado la medicación y Teresa decirle que eso de tanta
medicación es inadecuado él se encara con ella y conmigo mismo al decirle Teresa y
yo que a medicación a veces “congela a las personas como al pescado” y nos dice
que si hay psiquiatras es porque hacen falta un poco con el tono elevado. A ello le
respondo que hace bien en defender su opinión, que aquí todos opinamos con
respeto y el hace muy bien en defender sus argumentos, y más aún le digo el
psiquiatra parece haber acertado en bajarte la medicación, hoy estás más
participativo (el esboza una sonrisa).

3-Pepe: Recibe la opinión de Juan al decirle que aunque está más triste hoy, eso le
permitirá asimilar mejor la situación ya que ha tocado fondo y ya solo le queda ir a
mejor. Teresa le dice lo mismo. Pepe dice, ¿y si aún hay más pozo? A esto le digo yo
mismo que puede que sí o no, pero que contactar con el dolor y no evitarlo nos da la
oportunidad de hacer algo con la distinta a lo que este puede hacer con nosotros si
lo evitamos.

4-María Teresa: Todos le dicen que no la ven más triste que antes sino en la misma
línea y que por lo que cuenta es más dueña de su persona. Ella dice que sí que está
en esa línea

160
5-Juan: Le pregunto si está dispuesto a seguir hiendo a la universidad a pesar de que
ella esté allí. Dice que sí.

E)-Regla 4: Influencias reforzantes mutuas en el grupo: (“Cada uno/a como


actores/actrices”)+F)-Regla 5: Interpretaciones funcionales a moldear y
orientaciones dadas por el grupo: (“Los demás como directores/as”):

Estos punto a penas se tocan en esta sesión, aunque Paco dice que en su primera
sesión se ha visto muy comprendido por sus compañeros/as y que cosas que le han
dicho le refuerzan en sus decisiones. Pepe y Teresa le piden permiso para
preguntarle sobre su relación con su esposa, pequeños detalles de compartir no solo
sexo sino más cosas y muestras de cariño, diciendo Paco que eso le ayuda para darse
cuenta de que su relación está prácticamente acabada y que va tomar decisiones al
respecto. Manuel en esto nos comparte que él y su mujer llevan 5 años sin sexo por
su “enfermedad” y la “medicación” y que sin embargo se quieren y se apoyan en
otros aspectos. Teresa le dice a Paco: “¿Tú te ves envejeciendo, tú que eres tan joven
(45 años) con tu mujer así?”. Paco responde que no y agradece al grupo sus
comentarios.

Notas: Hoy la sesión ha sido menos lineal que en ocasiones anteriores y todos se
han visto “contagiados” (Sd) por el malestar de la tristeza y las relaciones de pareja
que han sido los temas de la sesión. En este punto pararnos en estos aspectos y
trabajarlos nos acerca a la experiencia viva del grupo en el momento, sin necesidad
imperiosa de seguir un guion de puntos o las 5 reglas de manera literal, actos que
nos apartarían de la experiencia del grupo. Esto conlleva también aceptación y
apertura del terapeuta y del grupo al “malestar en curso” y aprovecharlo como
oportunidad para comprobar el control evitativo que tienen en sus vidas y a partir
de ahí construir acciones alternativas. A esto habrá que volver más en este grupo y
otros

SESION Nº 5: 20-10-2017

Acuden a esta sesión Paco, Pepe, Manuel y María Teresa. Ausente Juan.

Hoy comenzamos la sesión provocando CCRS directamente mediante un ejercicio


consistente en que anoten que pensamientos/preocupaciones les sueles influir más
en la actualidad, que hacen a continuación o como les influye tanto en su vida diaria

161
o en el grupo si se presenta (CCR1). A continuación en relación a esto si se quedan
“pillados” y alejados de lo que desean y valoren se les propone a metáfora de ACT
del invitado grosero para moldear alternativas (CCR2) generales para todo el grupo.
Curiosamente a pesar de que para el terapeuta es importante mantener la pregunta
de cómo les ha ido en la semana, no se formula directamente (y se lo dicen al final),
no se realiza esta pregunta (en relación a las sugerencias de las 5 reglas FAP),
aunque la introducen en algunas de sus respuestas de hoy a otras cuestiones.
Tampoco se trata de hacer la terapia lineal y rígido el planteamiento, sino de “tocar-
contactar” lo que de tiempo de las 5 reglas FAP en cada sesión, sin “cortar” en
exceso lo que sucede en la misma sesión, de modo que todos ellos, y yo mismo
como terapeuta contactemos con lo que sucede en cada momento de modo que
regulen sus conductas por la experiencia grupal más que por las instrucciones
verbales en forma de reglas rígidas.

A)-Regla 2: Provocar CCRS: (“Cada uno/a como actores/actrices” y relación de


cómo les va en su vida diaria y en el grupo con esto

1-Paco: Dice que sus pensamientos o preocupaciones más frecuentes son la


inseguridad de saber si podrá hacer frente a las dificultades económicas y que eso le
lleva a veces a quedarse en casa sin tomar decisiones y otras a pesar de su presencia
actúa y gestiona el tema. En el grupo dice que no se deja llevar por esto y está
atento a lo que se habla y que le es de mucha ayuda, aunque él había pensaba que
podía resolverlo todo por sí mismo reconoce su necesidad de ayuda y la buena
decisión de haber venido al grupo.

2-Pepe: Dice que a veces a solas piensa que ha sido muy ingenuo con su ex pareja,
pero que la mayor parte piensa que él es capaz de enfrentar su nueva situación, que
tiene mucha suerte de contar con buenos amigos y con el apoyo de sus hijos. Todo
esto le ayuda a seguir adelante y a verse seguro de sus decisiones. Se ve igual tanto
fuera como dentro del grupo, dice. Comenta que ha ido a pedir ayuda a su padre de
tipo económico, pudiendo este, y que no se la ha prestado y que eso ha sido un palo
esta semana; que lo fácil sería dejar de llevar a sus hijos a ver a su abuelo (su padre)
pero que él no hace eso porque los niños disfrutan de este.

3-Manuel: Refiere que lo que más le viene a la mente son ecos de las voces que
escucha en los demás cuando hablan, ahora la propia voz del psicólogo, pero que eso
en su vida diaria lo maneja acostándose y tomando la medicación; y en el grupo,
aquí y ahora a pesar de los ecos es capaz de escucharnos y escucharme.

4-María Teresa: Dice que tiene tres frentes de pensamientos o preocupaciones. Uno
el miedo a sentirse sola y que la abandonen. Dos, la sensación de haber perdido su

162
vida no buscando un trabajo antes para ella y no tener que depender de su marido.
Eso le cabrea. El tercer frente es no tener el afecto de su marido que dice que tiene
mucho odio a la familia de ella por haber dado lugar a que ella misma esté tan mal.
En su vida diaria le aleja de su marido y aquí dice que lo habla y no se aleja de
nosotros.

B)-Regla 1: Observación de CCRS: (“Los demás como directores/as”):

1-Paco: Le dicen sus compañeros que le ven muy pillado con el tema de su hermano y
su padre, pero que es normal, que está ahora en la cresta de la ola de todo o en el
epicentro del terremoto, le digo yo. Parece más triste en la sesión de hoy.

2-Pepe: Le ven muy seguro de sí mismo y bien.

3-Manuel: Le dicen que le ven cabizbajo y menos participativo en la sesión, aunque


al final le hago hablar y hasta reír cuando el mismo dice que no sale ni a tomarse
una cerveza fuera de casa solo sin su mujer, y le digo “¿Y qué pasa si un día te veo
tomando una en un bar a solas o te pido yo tomarte una conmigo?”. El responde que
si eso pasa es que se ha enfadado con su mujer, que alguna vez lo ha hecho
raramente; y le digo pues a ver como conseguimos que tu mujer se enfade contigo,
se ríen todos, y él mismo.

4-María Teresa: Le dicen que la ven oscilante, por un lado tranquila y relajada por
ratos, y hasta firme cuando habla de sus decisiones cotidianas ajenas a la opinión de
su marido cuando se ha plegado mucho a él y otras más triste cuando habla de su
pasado con su familia.

C)-Regla 4: Influencias reforzantes mutuas en el grupo: (“Cada uno/a como


actores/actrices”) y D) Regla 3: Reforzar progresos observados en la misma sesión
de CCR2: (“Los demás como directores/as”) y algo de pasada sobre la Regla 5:
Interpretaciones funcionales a moldear y orientaciones dadas por el grupo: (“Los
demás como directores/as”):

1-Paco: Dice que cree que el grupo le percibe como con bastante carga y que lleva
bastantes desgracias acumuladas. El grupo valida esto.

2-Pepe: Cree que el grupo le percibe capaz de salir adelante tras su separación. El
grupo valida esto

163
3-Manuel: Cree que el grupo le ve como un enfermo que desea mejorar su situación.
Recibe por mi parte el comentario de que tener una diabetes no convierte a una
persona en un diabético y punto, y que creo que él tiene más cualidades que esa
etiqueta de TOC. Teresa y Pepe le dicen que le ven instalado en la enfermedad y el
diagnóstico con cierta comodidad dentro de su malestar. El escucha y calla, aunque
al final vuelve a sonreír cuando le digo que tenemos que quedar para tomar una
cerveza.

4-María Teresa: Cree que el grupo no entiende la gravedad de sus dificultades y su


pasado y que eso puede que les lleve a hacerse una idea limitada de ella. Todos
callan. Le digo que nos adelante algo más de esto de su pasado ahora mismo para
que podamos “entenderla mejor”. Relata que su padre maltrataba a su madre
siendo ella niña y al preguntarle yo por “¿y qué mensaje-regla aprendiste de esta
experiencia” nos dice que callar y sufrir sin margen de movimiento, y que con mi
marido “he tropezado en la misma piedra”. A esto le digo si puede hacer algo
distinto para no repetir ese patrón, y me dice que buscar trabajo, y que si no lo
encuentra al menos tomar decisiones diarias para no ser tan dependiente del
marido. Reconoce que su propio malestar acrecienta el odio de su marido hacia su
familia y lo que le han hecho a ella (esto podría indicar otras posibilidades, como que
parece que sí que le importa ella a su marido, aunque esto no lo tocamos hoy).

SESION Nº 6: 27-10-2017

Acuden a esta sesión 5 personas: Pepe, Paco, Manuel, María Teresa y Juan.

Hoy comenzamos la sesión aumentando la probabilidad de provocar (Sd) CCRs. Para


ello usamos “la escena de la pantalla de cine con escenas hacia atrás hasta ir a
mucha velocidad y parar de repente”.

A)-Regla 2: Provocar CCRS: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

1-Pepe: La escena que le ha venido ha sido viéndose en casa muy relajado haciendo
sus comidas y limpiando. Esto le produce relajación y paz. Dice que ese es el tono
habitual de su vida actual.

2-Paco: En un primer momento, a pesar de tomar nota de la escena, se le saltan las


lágrimas y le cuesta hablar, diciendo que prefiere quedarse para el último en
compartir esto. Cuando los demás acaban nos relata que esta misma semana acaba

164
de descubrir que su mujer le ha sido infiel desde hace tiempo y como en la escena
sale esto, a raíz de que su hija ve mensajes en un móvil del amante de la madre. Nos
lo dice llorando y nos añade que se fue a la nave donde trabaja y en un primer
momento buscó un cable para ahorcarse; luego pensó en sus hijos y no lo hizo. Esta
verbalización moviliza la sesión e intervención en gran parte de la sesión por parte
de sus compañeros de grupo.

3-Manuel: Dice que la escena que recuerda es a su madre dejándole el cargo de su


casa en contra de la oposición de sus hermanos. Esto le incomoda y le irrita aunque
no todo el día, dice.

4-María Teresa. La escena que le viene es una reciente donde una persona maltrata
un cachorro de un perro, y ella y otra chica lo encaran, interviniendo al final la policía
que le retira el animal a esta persona. Otro recuerdo que le viene es su madre
muriendo en sus brazos sin que sus hermanos se preocuparan por ella. Esto le
produce rabia y tristeza, aunque en su vida diaria le afecta solo en relación a sus
hermanos.

5-Juan: Llega tarde y no realiza el ejercicio de la escena del cine.

B)-Problemas/Progresos en su vida diaria: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

1-Pepe: Refiere haberse encontrado muy tranquilo en su vida diaria, sale con
amigos, asiste a diversas actividades como la universidad de mayores, viaja con
amigos a pueblos cercanos. Hablando de esto, dice que le cuesta un poco decirlo
ante la situación de Paco, aunque le dice que él en su separación ya pasó por eso y le
entiende.

2-Paco: Vuelve a referirse a la infidelidad descubierta de su esposa. Nos refiere que


se está asesorando con un abogado. Aún vive en el domicilio con su esposa. A ella no
le ha dicho nada aún de este descubrimiento, aunque ha acordado con su hija, que
no se meta en esto, que debe resolverlo con su madre mediante los abogados, y que
ella debe seguir teniendo buena relación con su madre.

3-Manuel: Dice que está más activo, sale a pasear, y junto a su esposa se han
apuntado a una actividad deportiva semanal.

165
4-María Teresa: Nos vuelve a relatar lo de la denuncia a esa persona por maltrato y
que ella ayuda a una amiga diagnosticada de esquizofrenia paranoide, y que eso le
hace sentir bien.

5-Juan: Dice que tiene como procurador y abogado ha tenido una semana frenética
de actividades. Además como hobby está reparando y acondicionando un viejo Seat
600 y eso le ayuda a no rumiar con el asunto de su compañera.

C)-Regla 1: Observación de CCRS: (“Los demás como directores/as”) y D) )-Regla 3:


Reforzar progresos observados en la misma sesión de CCR2: (“Los demás como
directores/as”):

1-Pepe: Todos le observan muy relajado y con cara de felicidad en la sesión y recibe
la felicitación de todo el grupo por ello, e incluso le dicen que les ayuda como
ejemplo a enfocar la vida diaria.

2-Paco: Le dicen que le ven más afectado que al resto del grupo y recibe consejos de
cómo poner distancia en su propia casa con su mujer para evitar situaciones de
tensión. Él dice que tiene muy claro que no van a producirse por su parte ninguna
violencia y que tiene el teléfono de su abogado por si sucede algo imprevisto.

3-Manuel: Todos le felicitan por estar más activo junto a su mujer, e incluso le ven
sonreír en el grupo y se lo dicen. Aunque le digo que aún deseamos que hable más, le
veo más relajado y más sonriente en ciertos momentos de la sesión en que se hacen
ciertas bromas.

4-María Teresa: Le vemos más triste. Dice que aunque le vemos hoy más triste o
callada, ella se siente feliz de ayudar a su amiga, y que lo que tiene es un poco de frio
y des-templamiento, pero no que esté peor hoy.

5-Juan: Le vemos relajado a pesar de contarnos tanta actividad. Dice que está más
ocupado, aunque tiene que preparar el juicio con su ex-compañera; pero que está
más activo haciendo cosas que le gustan.

Todos dicen salir reforzados para su vida diaria, aunque no nos da más tiempo a
desarrollar esto hoy.

SESION Nº 7: 3-11-2017

Hoy dedicamos la primera parte de la sesión a comparar resultados tests-postest de

166
lo que llevamos de sesiones, teniendo en cuanta que lo hacemos en la sesión nº 7 de
las 12 programadas y que Paco solo lleva 3 sesiones (sus datos individuales no
reflejan aún cambios significativos) pero si el resto del grupo. Hoy acuden 5
personas: Pepe, Paco, María Teresa, Manuel y Juan.

A)-Problemas/Progresos en su vida diaria: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

1-Pepe: Refiere al grupo que su vida transcurre con actividades que le satisfacen y
que lleva muy bien su nueva vida de separado.

2-Paco: Refiere haber tenido una semana de mucho malestar en el estómago en


relación a fuerte discusión con su esposa al encararle la infidelidad y que en vez de
aceptarla le ha acusado de varias cosas desproporcionadas y le ha amenazado con
que si continúa con los trámites de separación ella se quedará con los niños. Nos dice
que esta misma tarde coge sus cosas y se va a casa de la madre, y sigue con el
asesoramiento de su abogado

3-María Teresa: Dice que ha tenido una semana desastrosa con el marido, que ella
desde que ha cambiado el tiempo está más deprimida y este en vez de ayudarla se
ha marchado a un congreso dejándola sola, teniendo que recurrir a sus amigas.
Añade titubeando que hay otro tema que le cuesta contarnos y que le da apuro
referirnos. Le decimos que puede guardarlo si así lo desea. Al final lo comparte. Nos
relata que ella desde pequeña siente los espíritus que han muerto en accidentes o
situaciones dramáticas que le piden ayuda y le roban energía, “metafóricamente
hablando”, que su marido sabe de esto y que sabe que es verdad, pero que tampoco
le ayuda con esto.

4-Manuel: Nos refiere que lleva 7 años sin tener relaciones íntimas con su esposa
debido a los antipsicóticos que le ha recetado el psiquiatra para sus obsesiones, y
que el mismo psiquiatra le ha dicho que mientras las tome no podrá tener una
relación sexual adecuada. Por otro lado dice que un día se le olvidó tomarla y se
puso muy malo. Nos dice que no le gustaría estar el resto de su vida así, y que a
veces se le pasa por la cabeza la idea de suicidio.

5-Juan: Refiere estar triste porque por un lado hace una semana se ha muerto de
cáncer un amigo y por otro la madre de un cliente que el asesora como abogado está
hundida tras meter a su hijo en la cárcel por supuesta falsa acusación de su espesa y
que esto le afecta a él, aunque como profesional y persona trata de ayudarla lo
mejor que puede.

167
B)-Regla 1: Observación de CCRS: (“Los demás como directores/as”) y C)-Regla 3:
Reforzar progresos observados en la misma sesión de CCR2: (“Los demás como
directores/as”), D)-Regla 4: Influencias reforzantes mutuas en el grupo: (“Cada
uno/a como actores/actrices”) y E) -Regla 5: Interpretaciones funcionales a moldear
y orientaciones dadas por el grupo: (“Los demás como directores/as”): (En conjunto
al ser una sesión más corta por la evaluación)

1-Pepe: Todo el grupo le sigue viendo animado y participativo en las sesiones y le


dicen que hace bien en contar como le va ya que les sirve a ellos de ejemplo. Dice
sentirse triste y con ganas de llorar al ver cómo viene Teresa y Paco y que no le cabe
en la cabeza como puede haber personas así. A esto le dice Juan Simón y yo mismo
que por desgracia el maltrato de familiares es una realidad y que no todos los
familiares actúan con afecto y cuidados en todos los casos.

2-Paco: Le decimos que está en el epicentro del terremoto ahora y que es normal que
se sienta desbordado (validación), que su herida está recién abierta que le vemos
tenso y triste en consulta, pero que al mismo tiempo está haciendo lo que él
considera adecuado. Le aconsejan que busque amigos comunes que estén con él en
casa esta tarde al ir a coger sus cosas para evitar problemas o falsas acusaciones de
maltrato si se da el caso; y que su hija al ser mayor de 12 años puede decidir con
quién quiere estar; que en su caso, por lo que nos dice es con él. El añade que tiene
muy claro que no quiere estar con la persona que ha sido su pareja, que es la
segunda vez que le es infiel, que la primera vez le perdonó, pero esta vez no. Pepe le
dice a Paco que es demasiado ingenuo y que el mismo lo fue y pasó por esto mismo.

3-María Teresa: El grupo la ve más triste. Le pregunto a Teresa que cuánto tiempo
lleva contando a sus amigas contándole su situación conyugal y estás diciéndole que
hable con su marido y siendo infructuoso hacerlo. Dice que muchos años. A esto le
cuento caso de un amigo que lleva 25 años contándome lo mismo que ella, y que
está en un bucle que lo único que consigue con esto es un poco de atención y cariño
ocasional y que si ella desea pasar el resto de su vida en ese “bucle”. Dice que no,
pero que económicamente depende de él, que si tuviera trabajo y dinero se
independizaría y lo mandaría a la porra. Juan y Pepe le dicen que ella si se separa
tiene derecho a tener una ayuda por parte de su marido y que por lo que cobra este
no iba a pasar ningún problema, que su relación tiene otros aspectos que no son
precisamente el económico. Reconoce al final su dependencia emocional y temor a
estar sola. Le digo que un cambio conlleva correr riesgos y que ella decide si los corre
o no. Del tema de las presencias de “almas”, salvo que Paco dice que eso le da miedo,
el resto del grupo no le hace ningún comentario de nada de esto.

4-Manuel: Le decimos que le vemos triste, aunque viene a las sesiones a pesar de sus

168
dificultades. A esto dice que tiene un compromiso conmigo y que por eso viene. Le
devuelvo que el compromiso lo decide él, que le agradezco que lo haga pero que así
se impone a sus desganas.

5-Juan: Validamos que lo esté pasando mal por la muerte de su amigo y que tenga
las acciones de ayudar a la madre de esa persona encarcelada a pesar de su dolor.
Dice que en esto está.

El mismo refleja el sentir final del grupo al decir que hoy se va con una sensación de
tristeza de haber oído tanto dolor en el grupo. A esto le digo que efectivamente hoy
ha sido una sesión “dura” pero que si queremos estar al lado de quienes nos
importan tenemos que estarlo también en momentos “difíciles”. Añado historia de la
película “El Clic” sobre la marcha donde una persona podía cambiar los momentos
“desagradables de su vida” apretando un botón de un mando como se hace con el
pase de canales en la tele, pero cae en la cuenta de que haciendo esto, perdía
aspectos y momentos importantes de su vida. El grupo escucha atentamente esto.

SESION Nº 8: 24-11-2017

Tenemos esta sesión casi a las 3 semanas de la anterior por diversas circunstancias
del servicio (baja del terapeuta tras operarse de cataratas). Acuden: Paco, Pepe,
María Teresa, Manuel y Juan. Básicamente, dado el largo periodo de tiempo
pasamos la sesión recabando los progresos/problemas entre las sesiones y lo que
hemos observado en la misma sesión de hoy.

A)-Problemas/Progresos en su vida diaria: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

1-Paco: Refiere venir más contento tras haber tomado la dedición de separarse de su
mujer tras segundo episodio de esta de infidelidad. En el primero la perdonó, pero
este no. Además nos dice que su ex mujer le ha pedido quedarse con ella aunque no
se quieran; y él se ha dado cuenta de que esa petición es por comodidad de esta para
que él se haga cargo de los niños y tal, y le ha planteado que se hará cargo cuando le
toque su turno de régimen de visitas.

2-Pepe. Refiere que su ex mujer le ha declarado la guerra abiertamente, y le ha dicho


a través de terceros que no le va a dejar tranquilo ya que no ha seguido con ella para
que la gente no hable. Él dice que por guardar una imagen social no va a seguir con
ella y que aunque tiene cierto miedo de sus amenazas va a seguir con su vida.

3-María Teresa. Refiere que su marido le ha dicho explícitamente que no le puede


dar cariño y que nunca se lo va dar, que él es así y punto. Ella dice que peor no

169
puede estar.

4-Manuel: Refiere estar igual que siempre, que se ha caído en la casa y se ha dado
un golpe en la cabeza y que esta le duele aún un poco. No añade mucho más y pasa
gran parte de la sesión escuchando a sus compañeros y solo interviniendo si se le
pide hacerlo.

5-Juan: Llega 10 minutos tarde. Nos dice que él desea ir a la Universidad pero teme
encontrarse con su ex compañera y que esta le acuse de hacerle algo sin que él lo
haga y le complique la vida, ya que se ha dado cuenta del tipo de persona que es y
no se fía de ella nada

B)-Regla 1: Observación de CCRS: (“Los demás como directores/as”) y C)-Regla 3:


Reforzar progresos observados en la misma sesión de CCR2: (“Los demás como
directores/as”), D)-Regla 4: Influencias reforzantes mutuas en el grupo: (“Cada
uno/a como actores/actrices”):

1-Paco: Todos le refieren que le ven muy relajado y animado en la sesión, que la
decisión que ha tomado parece irle bien, pero que sepa que el proceso de separación
traerá complicaciones y momentos más complicados. Él dice que posiblemente sea
así. Teresa añade que “!vaya tres mujeres que habéis tenido por compañeras!, peor
imposible. “. Pepe dice que esto son sus versiones, y que habría que escucharlas a
ellas, y Juan Simón dice que Juan José (terapeuta) tendría que hacer un grupo con
ellas. A esto les respondo que tal como me la describen iba a ser realmente
complicado hacer eso. Añaden todos (Manuel no opina) que en el caso de Teresa es
lo mismo pero a la inversa y que no se puede generalizar con los “hombres o las
mujeres”. Todos asienten.

2-Pepe: Le refieren que a pesar de las amenazas de su ex mujer le siguen viendo


desenvuelto y capaz de enfrentar esto. Él dice que sí, y que aunque espera
complicaciones con sus ex en torno a bienes comunes y otros asuntos, no va a
renunciar a todo lo que le ayuda, que es su vida social y actividades diversas.

3-María Teresa: Le dice Paco que “todos sabemos lo que tienes que hacer”,
refiriendo a tomar una decisión con su marido; aunque Juan Simón y yo mismo le
decimos que eso es una decisión de ella. Yo le pregunto, “¿y deseas pasar el resto de
tu vida en esta situación o ya has tocado fondo?”. Ella dice que no sabe si ha tocado
fondo o no, pero que así no va a seguir toda su vida. Observo que en este grupo los
problemas conyugales o de pareja son la tónica general (salvo en Manuel que tiene
una buena relación con su mujer).

170
4-Manuel. Todos le refieren que el por lo que nos cuenta tiene problemas distintos al
resto del grupo, ya que se centra más en sus preocupaciones y ruidos de la cabeza,
incluso Juan Simón, le dice “él tiene un problema más psiquiátrico”. En este punto
intervengo y les digo, que todos tienen problemas, y que quizás para Manuel salir de
la rutina y de hacer girar todo en torno al “tratamiento psiquiátrico” sea darle a su
vida más posibilidades. El mismo dice que lleva un tiempo hiendo al gimnasio con su
esposa, que sale a pasear y que pasa por lo tanto menos tiempo metido en casa
durmiendo. En este punto el grupo le felicita por ella, e incluso Juan le dice que
aunque le vea más callado está muy atento en su marida y gestos en escuchar a sus
compañeros. Él lo confirma.

5-Juan: Pepe le dice que le ve aún muy centrado en las conversaciones del grupo en
el tema de su ex compañera y la universidad y que tiene que buscar otras fuentes de
satisfacción que no sean exclusivamente estas. Juan Simón le responde que es cierto
pero que él tiene que enfrentar también y no rehuir el ir a la universidad, que desea
seguir con su actividad allí, aunque lo hará con precauciones. Manuel, al pedirle yo
que resuma como percibe al grupo, le dice que él cree que Juan Simón tiene
capacidad de manejar su situación, que le ve muy capaz, Juan Simón sonríe y le
agradece el comentario. Todos apoyan el comentario de Manuel.

Se termina el grupo y se les pide que digan cómo se han sentido en la sesión de hoy.
Pepe dice que cada vez aprecia más a sus compañeros de grupo y empatiza con ellos,
el resto hace comentarios similares.

C)-Regla 2: Provocar CCRS: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

La persona del grupo que más comentarios provoca con “equivalencias funcionales”
es María Teresa.

1-Juan: Refiere que él se siente aquí ya como formando parte de una familia y que le
duele oír lo que cuenta María Teresa, y comienza a bromear con Pepe sobre su
afición a viajar a pueblos cercanos y a visitar monumentos y cuevas de la zona, y
entre risas de Juan, Pepe y Paco, les dice que tienen que visitar una de esas cuevas,
invitar al marido de María Teresa, junto a ella, ir todos y dejarlo allí perdido. Como
terapeuta esta “broma” hace referencia parece hacer referencia a un “mando
disfrazado” de proteger a María Teresa y separarla de su marido. Ella misma en esta
sesión dice que se refugia en sus amigas y actividades porque no puede hacer otras
cosas.

2-Paco: Hace referencia a su propia decisión, y le dice a Teresa, “todos aquí sabemos
lo que tienes que hacer”. A todo esto María Teresa permanece callada.

171
3-Pepe: Refiere que se siente mal con la situación de María Teresa, pero que es ella
quién debe tomar sus decisiones.

4-María Teresa: Ante los comentarios anteriores lo que dice es que ella no puede
hacer otra cosa que lo que hace (o sea permanecer en la situación conyugal que
describe como adversa por falta de recursos laborales, y a medias reconociendo lo
que ella llama “dependencia emocional”). Sin embargo al plantearle el terapeuta si
se ve así con 80 años, ella dice que no, pero sin plantear ningún curso de acción
alternativo. Esto lo que me suscita como terapeuta (que no lo planteo abiertamente
en la sesión) es que María Teresa recibe mucha atención, consejos y afecto (del que
carece) de los demás en el grupo y amigas al plantear esta queja, pero que eso es a
corto plazo.

5-Manuel: Se limita a decir que la situación de María Teresa es muy complicada y


poco más añade.

El grupo presiona a María Teresa para que realice un cambio en su situación, incluso
al final le digo, “sí que puedes hacer algo concreto: Plantearle a tu marido cara a
cara que la situación es muy insatisfactoria para ambos y si vais a tomar decisiones o
no al respecto”. En este grupo hay tres hombres que han tomado decisiones respecto
a sus parejas-compañeras de trabajo, dos de ellos de separación (Pepe y Paco) y el
otro de denuncia judicial (Juan). Sin embargo María Teresa por ahora permanece en
el mismo papel desde el principio, de hecho en el resumen de la “evolución del grupo”
(Regla 3) es la que más comentarios recibe de “está estancada”. Incluso a Manuel se
le dice que el hecho de alterar sus rutinas, venir al grupo, ir al gimnasio con su mujer,
salir a pasear con más frecuencia ya es un progreso importante en su vida.

SESIÓN Nº 9: 1-12-2017

Acuden a esta sesión Paco, Pepe, Manuel y Juan (llega casi hora y cuarto tarde).
Ausente Teresa. Comenzamos la sesión con un ejercicio de provocación de CCRs
(Regla 2) de la “asociación libre por escrito”.

A)-Regla 2: Provocar CCRS: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

1-Paco: “Estoy buscando una nueva vivienda, he conocido a una chica con la que he
comenzado a salir. Estoy muy tranquilo y bien”

2-Pepe: “Se acerca la navidad, estoy solo en mi casa, tengo a veces bajones pero me
las apaño solo. ¿Qué habrá pasado para que Teresa no venga hoy?”

172
3-Manuel: “Sigo con mis ruidos en la cabeza, hoy hace mucho frio, a lo mejor a
Teresa le ha pasado algo para no venir, siempre es la primera que llega”.
Comentamos sus asociaciones y ellos la relacionan con dos cuestiones:

-“¿Qué pasa con Teresa para que no haya venido a la sesión?”:

.Paco: Opina que quizás se le ha puesto de manifiesto que solo quejarse sin actuar no
conduce a nada

.Pepe: En realidad no sabemos qué ha pasado

.Manuel: Puede haber tenido algún problema con su marido y haberle pasado algo

-“Qué ha pasado con nuestra relación con nuestras mujeres o ex parejas?:

Empiezan Paco y Pepe a comentar (posibles mandos disfrazados) que en el tema de


la violencia de género se ocultan muchas realidades diversas y que hay también
casos de agresiones de mujeres hacia hombres, aunque sea más solapada.

.Pepe comenta que muchas de las amigas comunes de él y su ex pareja son


“feministas” como su ex pareja misma, y que a él le han acusado, algunas de
machista de manera errónea. Añade que bajo la etiqueta de violencia de género se
esconde una diversidad de problemas distintos que no se pueden resumir bajo esa
misma etiqueta.

.Paco. Comenta que él no ha tenido un papel machista para nada en su relación, que
a veces empatiza con el 1% de los hombres que usan la violencia porque algunas
mujeres le llevan al límite, aunque él no ve bien usar la violencia, pero que
comprende que pase eso en algún caso. En esto Pepe le dice que nunca está
justificada y que si una pareja se lleva mal lo mejor es separarse y ya está. Paco dice
que sí, pero que imaginemos por un momento que su relación sigue, como le
propuso su mujer, y cuando él esté mejor situado económicamente le dice ella que ya
no le quiere porque está (por segunda vez) con otra persona. Le decimos que eso
sería bien doloroso y hasta irritante pero que se puede actuar de muchas maneas
incluso ante esa ira, por ejemplo poniendo distancia como el mismo ha hecho

.Manuel. Refiere que él está muy bien con su mujer y que no concibe una vida sin ella.
Añade que tuvo una época donde se alteraba mucho con ella pero que desde que
toma la medicación ambos están mejor entre ellos, ya que él está más calmado

173
.Juan: Se incorpora tarde al grupo, pero en este momento sobre esta cuestión
expresa que las mujeres han pasado mucha discriminaciones y han estado
marginada y que ahora luchan legítimamente por la igualdad, aunque hay casos
donde la violencia es al contrario, como en su caso, donde nos lee correos de su ex
compañera donde en un principio lo que eran cualidades para ella de él se convierten
después en elementos para criticarlo.

En este punto el terapeuta les dice que en realidad estamos teorizando sobre sus
vivencias, pero que es mejor volver a sus experiencias directas y le pregunta al grupo
sobre qué relación le gustaría tener de pareja y que roles tendrían ambos en esa
relación que ellos desean o no.

-Paco: Dice que está conociendo a una chica y que le va bien. Añade que él no es un
hombre de estar un rato con una mujer para tener solo sexo, aunque reconoce que
ha estado muy insatisfecho sexualmente, pero que le gustaría evidentemente, dice
satisfacer esas carencia sexuales pero que el basa la relación en un compromiso y
una estabilidad.

-Pepe. Dice que él es heterosexual pero que aunque no descarta conocer a una mujer,
a lo mejor descubre que está bien como está, o sea, solo.

-Manuel: Dice que está bien con su pareja, y añade de nuevo que sin ella no sabría
vivir.

-Juan: No se pronuncia sobre esto hoy en esta sesión.

Nota:

Me resulta curioso que en un grupo de todos hombres hoy (no vino Teresa) surjan
estos temas que dan pie a muchas cuestiones sobre la identidad masculina vs
femenina, rol de género, etc.; pero que veo más adecuado encauzar hacia sus
necesidades personales, como la comunican y el papel que dan a sus congéneres
actuales o futuribles., todo ello como Conductas Clínicamente Relevantes.

Aunque este grupo se prevé que tenga 12 sesiones, por agenda de fechas de
publicación del libro solo recabamos hasta la sesión 9.

174
Grupo Lunes-USMC de Úbeda

A este grupo son convocada 10 personas y se presentan 6 a la primera sesión,


avisando que dos más se pueden incorporar a la siguiente sesión. Las 6 personas
asistentes son todas mujeres entre los 45-65 años.

SESIÓN Nº 1: 4-9-2017

Los mayores problemas que manifiestan en su vida cotidiana y lo que esperan


conseguir viniendo al grupo:

1-María Ángeles: Refiere que es muy indecisa y que tiene una manera de ser que le
lleva a sus problemas. Especifica que se siente muy culpable de haber malcriado a
sus hijos y que con uno de ellos tiene problemas para decirle que no y ponerles
límites. Hace varios años perdió a su marido y se siente muy sola para encarar su
nueva situación de vida. Le gustaría ser más fuerte para poner límites y superar sus
miedos que no termina de especificar del todo, pero que apunta a perder el contacto
con el hijo si le pone límites. No sabe qué hacer y se siente muy insegura.
.“Diagnosticada de Distímia Depresiva”

2-Pilar: Refiere que no se siente a gusto con ciertas personas de su familia, en


concreto con sus hermanos varones ya que han hecho una serie de gestiones para
tratar de quedarse con la herencia familia, apoyados previamente por sus padres ya
fallecidos. Esto le hace sentir mucha tristeza por no tener esa unión. También
episodio de separación previa del marido por infidelidad de este. Le gustaría llevar
mejor esta tristeza por la actitud de sus hermanos.
.“Diagnosticada de Trastorno Adaptativo con Ánimo Depresivo”

3-Maria Teresa: Refiere tener miedo y tristeza porque el banco le embargue su casa
y sobretodo tristeza por el suicidio de su sobrino (hijo difunto de Amparo que
también acude a este grupo) estando casi todo el día rumiando con esto sin hacer
nada. Se queja de que otro psicólogo del servicio le ha dicho con dureza en una cita
individual que si ella no pone de su parte que poco va a sacar solicitando nuestra
ayuda. Le gustaría que la depresión se le fuera.
.“Diagnosticada de Distímia Depresiva”

4-Amparo: Refiere suicidio del hijo hace 2 años y sentimiento de culpa por no
haberse percatado de esto. Añade que sus familiares no entienden su pena y que le

175
insisten en que debe poner más de su parte y que no hace por dónde. Añade que está
igual que su cuñada María Teresa muy pasiva. Le gustaría llevar mejor la pérdida del
hijo.
.”Diagnosticada de Duelo complicado”

5-Teresa: Refiere sentirse identificada con María Ángeles ya que en lugar de aquella
se las tiene que ver con las exigencias de un hijo de 40 y tantos separado al que le
cuesta poner límites. Piensa que lo ha malcriado y ahora paga las consecuencias.
Añade que su marido es muy pasivo y no le ayuda nada con este tema. Le gustaría
ser más fuerte para poner límites al hijo; pero teme igualmente su rechazo definitivo.
.“Diagnosticada de Trastorno Adaptativo con Ánimo Depresivo”

6-María: Refiere tener diversos problemas que le producen impotencia. No especifica


que problemas son. Le gustaría poder enfrentar estos problemas.
.“Diagnosticada de Distímia Depresiva”

De manera similar se va moldeando la dinámica funcional del grupo, pero en este


caso, dada la experiencia previa del grupo del viernes, los terapeutas desde el
principio tomando el caso de María Ángeles como ejemplo, con su permiso, vamos
refiriendo que es muy importante (usando la hoja simple de CCRs) que miremos
aquí hoy mismo “qué problemas de los que cuenta se están viendo reflejado ahora
delante de nuestros ojos y que además escuchamos” , diciendo cosas como que “se
le ve muy inquieta, mueve mucho las piernas, da vueltas al bolígrafo, llora, se pone
roja y en suma lo está pasando muy mal mientras habla de los problemas que tiene
en su vida diaria con su hijo” (una CCR1).

Igualmente se les dice que en esta terapia es muy importante (tras comentarle los
dos papeles actrices/directoras) “que comuniquemos que nos hacen sentir estas
cosas que vemos y oímos aquí de las compañeras” (CCR3) y como esto no solo nos
afecta a todas, sino que también puede afectar de manera similar a otras personas
en su vida diaria, y estas responderle de manera similar. Ella confirma que le dicen
que es muy miedosa y que ella desde luego “es así” (problema del yo inestable,
probablemente con fusión a esos contenidos verbales).

También se les plantea que es importante que vayamos observando, los progresos
que vemos aquí en la sesiones, no solo los que nos cuenta sino lo que vemos;
poniendo ejemplos de cómo una persona con ánimo depresivo y conductas pasivas
puede intervenir muy poco en el grupo, y que si vemos que se arregla más, se cuida
más, habla y participa más en el grupo, serian ejemplos de mejoras visibles aquí y
ahora (CCR2). En esa línea se les sugiere que se atrevan a opinar y dar sugerencias
de qué y cómo podrían mejorar (moldear CCR2).

176
Se toma como referencia la hoja de notas simples de CCRs y se hace un repaso final
de “lo que han observado de los problemas contados que se reflejan aquí y ahora”
(CCR1); “qué les hace sentir y opinar” (CCR3, aunque también pueden ser CCR1 de
las observadoras) y “por donde podrían sugerirle acciones alternativas en función de
lo que cada una busca en el grupo” (moldear CCR2)
El resumen de las hojas simples de observaciones de CCRs sobre cada persona de
esta sesión es el siguiente:

1-Sobre María Ángeles: Todas observan que se muestra también indecisa en la


sesión con gran inquietud y malestar (CCR1). A la mayoría les produce sensaciones
de impotencia, culpa por malcriar a los hijos y la necesidad de poner límites (CCR3
pero con potenciales visos de CCR1). Opinan que debe centrarse más en ella misma,
hacer cosas por agradarse a sí misma y dar pasos para poner límites aún con el
miedo (potenciales CCR2).

2-Sobre Pilar: Todas observan que a pesar de parecer algo triste (CCR1), se le ve muy
serena en el grupo y desenvuelta y que debe seguir haciendo más de lo que
comparte que es cuidarse y cuidar de su hermana (CCR2). Al grupo le transmite un
ejemplo a seguir por las demás (CCR3).

3-Sobre María Teresa: Todas coinciden que le ven triste en el grupo (CCR1) pero que
con su actitud pasiva no cambia nada de su situación-léase comentario “brusco” del
psicólogo en su cita individual-(CCR3), que debe dar pasos más activo e implicarse
más en otras actividades que le agraden a ella (potenciales CCR2).

4-Sobre Amparo: Todas le ven muy triste en consulta (CCR1). Le dicen que es muy
comprensible que como madre experimente esa profunda pena y que es legítimo que
tenga su ritmo de recuperación aunque otros no la comprendan (CCR3), pero que no
debe quedarse anclada en esto y hacer cosas para sí misma que le importen y le
satisfagan (potenciales CCR2).

5-Sobre Teresa: Al igual que a María Ángeles el grupo considera que en el grupo se
culpa por sus errores pasados por no haber puesto límites (CCR1), pero que ella los
acepta (CCR3) y eso le ayuda a tomar nuevas decisiones respecto a este, en la línea
de ponerles límites (potencial CCR2).

6-Sobre María: Todas coinciden que se ha abierto poco al grupo y ha estado muy
callada y poco participativa y que eso parece ir en la línea de que en su vida diaria se
suele callar cuando lo está pasando mal (CCR1), ella admite que esto es verdad. Dice
que en la próxima cita participará más (potencial CCR2) y que se ha sentido, a la
final, más confiada para abrirse a sus compañeras, sus compañeras dicen que se ha
entristecido de verla así (CCR3).

177
Con el objetivo de abrirse aún más a la experiencia grupal, intimar y reforzar la
experiencia grupal (CCR2 global) se les pide al final que refieran lo que más le ha
desagradado y gustado de la sesión de hoy, haciendo esto también los terapeutas
asistentes (psicólogo y enfermero de salud mental). Todas coinciden que lo están
pasando mal en sus vidas con sus problemas, y que esto se refleja en lo que
cuentan y cómo lo cuentan en el grupo, pero que se ha generado un clima de
satisfacción donde pueden compartir estas experiencias y ayudarse mutuamente.

A diferencia del grupo del viernes que se le pidió rellenar los cuestionarios al
principio de la sesión grupal, en esta ocasión lo comentamos por encima y se les
pide rellenarlos en casa y entregarlo en la próxima cita. Veremos si esto evoca algún
tipo de CCRS además de recabar sus contenidos.

SESIÓN Nº 2: 11-9-2017

A esta sesión acuden 4 personas: Manoli (no vino a la primera), Pilar (llegar media
hora tarde), María y Teresa. Faltan María Ángeles, Amparo y Teresa que no han
avisado previamente ni excusado su falta a esta sesión (este tema ocupará parte de
la sesión como posible CCRs).

Comenzamos la sesión observando la ausencia de varias compañeras que no nos


han avisado (papel de actores/directores) y el mismo terapeuta expresa que esto le
resulta desagradable y algo irritante; diciendo ellas que también (recuérdese la
dificultad generalizada de la operante de expresar opiniones en este grupo-CCR1).
A continuación enlazamos esto con el tema que les presento de “la equivalencia
funcional” que les digo es similar a los “parecidos” de como actuamos en distintas
situaciones buscando/evitando cosas y como estos parecidos de pueden dar entre
como hemos actuado ante en nuestra vida (por ejemplo en la infancia y
adolescencia en determinadas situaciones familiares) y seguimos actuando ahora y
entre lugares fuera y dentro de la sesión, en los parecidos del “tiempo/espacio-
situaciones con funciones o fines parecidos.
Se plantea al grupo que vayan hablando de estos parecidos y se utiliza un repaso
donde cada una se fija (trata de discriminar) en otra compañera y los parecidos
(equivalencias funcionales) que detectan en esta sesión.

1-Manoli sobre si misma (autotacto) refiere que ella de niña era muy rebelde y que
cuando le decían algo que no quería o le molestaba protestaba y no se callaba, dice
que esto lo hace con el marido que trabaja fuera y se ven una vez al mes un fin de
semana y que eso les hace discutir. Está en este grupo por las consecuencias
emocionales de accidente de tráfico donde pierde a dos familiares (viajaba con ellos

178
como pasajera no como conductora y les dijo que tomaran ciertas precauciones,
cosa que no hicieron) y que va progresando con esto pero que tiene cierto rencor al
no poder expresarle lo mal que lo hicieron esos familiares en el coche (cuñada y
sobrina que fallecen en el mismo, solo ella se salva). Esto lo relaciona a su vez con su
padre fallecido hace poco al que no pudo expresarle (tenia Alzheimer) ciertas
cuestiones pendientes tanto de pedirle perdón por ciertas cosas como recriminarle
otras, o sea hace equivalencias entre distintas situaciones pasadas; pero no dentro-
fuera del grupo; por lo que el terapeuta le plantea que experimenta aquí y ahora
sobre todo esto, advirtiéndole que seguimos con “el tema de los parecidos de antes
en tu vida y ahora aquí”, refiriendo que tiene rabia (CCR1 o CCR2 por dilucidar).Lo
relaciona con el marido y la educación de los hijos, verse sobrecargada, etc-CCR3.
Hace observaciones sobre Pilar que esta acepta como adecuadas (en cuanto asumir
roles pasivos y ahora más activos en su relación con familiares).

2-Pilar nos relata que fue educada de manera distinta a los hermanos varones y que
sus padres daban preferencia a estos a ella y su hermana asumiendo ella con rabia
un rol pasivo y sumiso y que es hasta hace un par de años en que ella comienza a
expresar sus opiniones a sus familiares, cosa que hace también con las compañeras
del grupo (CCR2)

3-Teresa al igual que Pilar nos relata que ella ha sido siempre muy callada con
asuntos familiares y que igualmente fue educada en un rol pasivo y sumiso, y que
también observa que tiende a asumir más responsabilidades de las que le competen
(CCR3) ; contándonos un caso donde ella trabajando de limpiadora en una casa llegó
a hacer labores de cuidado de ancianos, por iniciativa de ella y dejadez de los
familiares y otras tareas similares; y como esto lo ha ido repitiendo en distintas
situaciones con los hijos y marido, llegando a un punto de estallar, discutir con el
marido (que describe de siempre muy pasivo, llevando con él casado 40 años) para
que este cambie, sin resultado. Le pido que se pare en este punto y nos diga que
experimenta aquí y ahora al relatarnos todo esto. Se le saltan las lágrimas y dice que
se siente muy impotente y con ahogos y que no sabe qué hacer, aunque su
pensamiento le dice de alguna manera que tome distancia (potenciales CCR1 y CCR2).

4-María se centra en su relato más bien en equivalencias entre su vida familiar


actual y laboral diciendo que cuando le critican se suele callar por no liarla más pero
que sabe que eso no es solución (CCR3). Refiere que en su trabajo de auxiliar de
enfermería la tienen de cambio de servicio frecuente, que eso no le da pie a terminar
de desarrollarse y adaptarse del todo a ninguno, que lo habló con el subdirector de
enfermería y que este le dijo que no estaba preparada para ningún trabajo en el
hospital, notando mucha rabia y callándose. Igualmente, le digo que experimenta
aquí y nos dice que rabia y que de hecho sí que ha formulado a esto a un sindicato
para reclamar sus derechos, haciendo que el enfermero que hace de co-terapeuta en

179
este grupo (en este grupo hay un enfermero de salud mental con este rol, en los
otros está el psicólogo solo), le oriente al respecto (CCR2). Esta vez está algo más
participativa en el grupo (CCR2).

En este punto para todas el psicólogo refiere que en este grupo en particular es
esencial que se den cuenta de que necesitan para sus vidas y como encaminar todo
esto y que ya hoy lo han estado haciendo todas. Se añade que a partir de la próxima
cita nos vamos a centrar más en las equivalencias o parecidos de lo que cuentan de
cómo le va en su vida diaria y como se refleja esto aquí en las sesiones, para producir
cambios con esto que se puedan aplicar a sus vidas.

SESIÓN Nº 3: 18-9-2017

Se presentan 8 personas a esta sesión, alguna por primera vez diciendo que no le
habían avisado previamente desde el servicio de secretaria.

La sesión comienza con dos “ejercicios de calentamiento” que en realidad lo son de


evocación de CCRS. En el primero se les plantea el grado de intimidad (0-10) que han
tenido con personas relevantes de su entorno y el que desean tener hoy en la sesión
(ver ejercicios adicionales en el capítulo 5); afirmando que todas, menos Noelia
(nueva incorporación al grupo) que han tenido en su vida diaria un grado de
intimidad y confianza elevado y que esperan tenerlo hoy en la sesión. En el segundo
ejercicio se trabaja con “la pantalla de cine hacia atrás a alta velocidad”(ídem
capítulo 5). Aquí se provocan CCRS relevantes, que resumimos a continuación:

1-Manuela: “Me veo en medio del accidente, mi sobrina tendida desangrándose, mi


cuñada sin vida”…todo ello expresado con tensión corporal y entonación tensa.

2-Noelia (Diagnosticada de “Trastorno de personalidad límite”): “Me veo que acabo


de discutir con mi madre porque me obliga a ir a ver a mi padre, ellos están
separados y mi padre no me agrada. Tras la discusión me veo sola en mi cuarto
llorando”. Esto lo expresa con voz entrecortada y con los ojos líquidos sin terminar de
llorar.

3-Amparo: “Me veo hablando con mi hijo antes de hacer lo que hizo (suicidio) y
tengo eso metido en la cabeza, si pude hacer más”. Se le ve más calmada que en
ocasiones anteriores hablando de esto.

4-María Teresa (cuñada de Amparo): “Me acuerdo de mi sobrino”. Se echa a llorar


diciendo que lleva toda la semana mal

180
5-María: “Escena en el despacho del subdirector de enfermería diciéndome que
tengo que rotar por varios servicios que ni hay más opción, y yo callada”. Lo dice con
un tono de seriedad

6-Teresa: “Mi imagen es ver a mi hijo viniendo a Úbeda a dejar su hija conmigo sin
querer saber nada de mí; pidiendo ayuda a mi marido para que interceda,
diciéndome que no va a discutir con él y que no quiere saber nada”. Le vemos tensa y
cabizbaja

7-Maria Ángeles: “Verme esta mañana levantándome con arcadas, comprándole


comida al hijo en un supermercado, llevándosela a mi hijo y éste dándole las gracias,
porque se estaba muriendo de hambre”. Después habla de su hermana como se
siente abandonada por ella en estas circunstancias, que la empujaría (hace el gesto)
pero que no quiere hacerlo pues ella no es así. Rompe a llorar.

8-Pilar: “Escena donde en su pueblo coincide por la calle con uno de sus hermanos y
siente la impotencia y las ganas de decirle a la cara lo mala persona que es; pero
respiró hondo y fuerte y sigue con su vida, que ha aprendido mucho de estas
terapias”. Le vemos tranquila y firme en sus declaraciones.

A continuación, y siguiendo en estas primeras sesiones con el trabajo-moldeamiento


en las 5 reglas o “encuadre del grupo”, se les presenta viñetas con diferentes
escenas de los grupos y cómo sacarle partido a estas sesiones (ver viñetas del
capítulo 5), que vamos recorriendo, a ritmo del grupo y rondas de participación de
todas comenzando por preguntarles como les ha ido la semana, que se observan las
unas a las otras mientras nos cuentan su evolución, que cambios se ven desde el
principio de la sesión hasta este momento (y desde la primera sesión si estaban en
ella), que sienten aquí y ahora, como ven que se influyen unas a otras y que ven que
les perjudica y seria de ayuda. Llegamos por el tiempo de la sesión hasta la regla 4
prácticamente.
Todas al final dicen que se llevan una experiencia positiva del grupo destacando que
a pesar del dolor, aquí pueden expresarse con libertad sin temor a ser juzgadas.
Considero en retomas esto y plantearles en próximas sesiones algo así: “¿Y si nos
juzgan negativamente y eso nos duele, entonces abandonamos lo que nos importa y
deseamos”

SESIÓN Nº 4: 25-9-2017

181
A esta sesión asisten 7 personas: María, Pilar, Teresa, Amparo, María Ángeles, María
Teresa y Noelia. A partir de esta sesión hago un uso más sistemático de la “Hoja de
Anotaciones de las sesiones FAP” (Ruiz, 2017) que veo me sirve para focalizar el
grupo en CCRS/reglas FAP.

Comenzamos la sesión con la pregunta del grado de intimidad hacia personas de su


entorno y hacia el grupo (0-10) , como forma de valorar la “apertura” y “contacto”
(CCRS) con relaciones de intimidad fuera/dentro del grupo.

A)-Grado de intimidad fuera/deseada para la sesión de hoy:

1. María: En su vida diaria le da un 10 a como le ha ido con su madre y un 5 a como


le ha ido con una de sus hermanas de las que se ve más distante. Desea tener hoy un
10 de intimidad y cercanía en esta sesión y sentirse muy cercana al grupo.

2. Pilar: En su vida diaria se ha encontrado (ella y su hermana) con varias tías


mayores que median con los hermanos varones en el asunto de la herencia familiar
y se ha sentido muy cercanas a ellas (10) permitiéndole contar su versión de los
hechos con el asunto de la herencia familiar respecto a sus hermanos varones. Desea
tener hoy un 10 de intimidad y cercanía en esta sesión y sentirse muy cercana al
grupo.

3. Teresa: En su vida diaria se ha acercado a su marido Antonio (10) que por primera
vez, estando ella más calmada le ha respondido a sus demandas de ayuda respecto a
su hijo. Desea tener hoy un 10 de intimidad y cercanía en esta sesión y sentirse muy
cercana al grupo.

4. Amparo: En su vida diaria se ha sentido muy cercana a uno de sus hijos y su


cuñada que le acompaña a la sesión (10). Desea tener hoy un 10 de intimidad y
cercanía en esta sesión y sentirse muy cercana al grupo.

5. María Ángeles: Se siente muy cercana y apoyada por su pareja Miguel (10) y
menos con su hijo Borja (5) al discrepar de como este no decide trabajar y trata de
que ella lo costee. Desea tener hoy un 10 de intimidad y cercanía en esta sesión y
sentirse muy cercana al grupo.

6. María Teresa: Se ha sentido cercana a su hijo Johantan que le anima (8) y menos
con su madre (4) que dice tiene inicio de demencia y le repite mucho las cosas
molestándola. Desea tener hoy un 10 de intimidad y cercanía en esta sesión y
sentirse muy cercana al grupo.

182
7. Noelia: Llega 15 minutos tarde por venir de Madrid (entra a la sala con las
maletas) de echar currículos y no ha podido por ello participar en esta tarea de inicio
de la sesión.

En general el hecho de que en sus vidas diarias tengan una o varias personas con las
que se sientan cercanas parece un buen indicador de sus posibilidades de manejo
de problemas interpersonales y del efecto potencial del grupo. Esto aún se refuerza
más con sus deseos de que la sesión en intimidad, apertura y cercanía sea máxima.
De hecho como veremos a continuación se refleja de manera “equivalente” en toda
la sesión de hoy.

B)-Problemas/Progresos en su vida diaria: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

1. María: Sigue sus conversaciones con los sindicatos para defender sus derechos. Se
ve dando pasos en defender sus derechos laborales y personales.

2. Pilar: Ha conseguido reunirse con sus tías que tienen mucha influencia en la
familia y ha quedado con estas y sus hermanos para hablar cara a cara del tema de
la herencia ya que estos suelen eludirlo, nos dice. A la expectativa de que se deriva
de esta reunión.

3. Teresa: Se ha visto más calmada y no ha discutido con su marido. Dice que lo


aprendido en el grupo le ha servido para esto. Han hablado calmadamente de esto y
ella lo ha escuchado más y mejor.

4. Amparo: Dentro de la pena que tiene ha conseguido tener más cercanía y apoyo
hacia otro hijo, aunque han discutido por la actitud, para ella, que tiene este
demasiado benevolente con una ex pareja que le ha sido infiel a él.

5. María Ángeles: Ha conseguido decirle a su hijo Borja que no a determinadas


peticiones y amenazas de este y decirle que se tiene que buscar trabajo que ya tiene
edad y condiciones para ello.

6. María Teresa: Refiere que su madre le tiene agobiada con sus frecuentes olvidos y
que discute mucho con esta y que se ve ansiosa al estar sin ver varios meses a un
hijo que trabaja fuera.

7. Noelia: Nos cuenta que acaba de venir de Madrid de echar currículos y que el

183
tema de trabajo de maestra lo tiene difícil pues piden nivel de inglés C1 y ella tiene
el B2.

C)-Regla 1: Observación de CCRS: (“Los demás como directores/as”):

1. María: Le ven cabizbaja, aunque se expresa más y mejor.

2. Pilar: Le ven firme en sus declaraciones, con fuerza y ejemplo para las demás.

3. Teresa: La ven más relaja, sonriente y participativa después de lograr ese cambio
con su marido.

4. Amparo: La ven tensa en la sesión, pero menos triste que en sesiones anteriores,
más participativa.

5. María Ángeles: La ven sonriente, no se mueve en la silla como la sesión anterior, le


ven más firme, con “más fuerza”.

6. María Teresa: La ven fuerte, hoy no llora en la sesión, con más contacto ocular con
todos a pesar de lo difícil de su situación.

7. Noelia: La ven insegura, aunque también decidida a dar pasos, vemos que ha
llegado con las maletas tras venir de Madrid de buscar trabajo.

D)-Regla 2: Provocar CCRS: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

1. María: Dice que el grupo es un espacio que le permite desahogarse y que eso le
ayuda, que siente que se desahoga aquí hoy y habla más, expresa más y mejor.

2. Pilar: Se nota triste por la situación con sus hermanos, pero al mismo tiempo
siente que tiene fuerza y decisión para continuar y que el grupo le ayuda en esto.

3. Teresa: Contar los progresos con su marido le hace sentirse aquí relajada con
nosotros y animada.

4. Amparo: Contarnos como lleva su pena (duelo) le hace sentir aquí bien.

5. María Ángeles: Dice que pensaba no venir hoy y que está muy contenta de haberlo
hecho y contarnos como le va.

6. María Teresa: Se siente desahogada al poder contarnos como le va.

184
7. Noelia: Se siente desahogada al contarnos su evolución

Nota: Por falta de tiempo no entramos en provocar/evocar CCR1 más específicas, y


dado el grado de CCR2 presentes. En la próxima sesión dedicaremos más tiempo a
esto (lo comunico al grupo, que está de acuerdo), ya que “aquello que evitamos tiene
control sobre nuestras vidas” (Regla5).

E)-Regla 3: Reforzar progresos observados en la misma sesión de CCR2: (“Los demás


como directores/as”):

1. María: Aunque algunas le ven cabizbaja, Pilar insiste en que está dando pasos
para defender sus derechos laborales, a lo que ella responde mirándola y más
sonriente.

2. Pilar: Le dicen que siga con esa firmeza y decisiones que está tomando, ella
asiente.

3. Teresa: Le dicen que siga en la misma línea con su marido, a lo que responde que
esa es su intención.

4. Amparo: Le dicen que siga expresando su dolor con nosotros y que es muy fuerte
al hacerlo y compartirlo.

5. María Ángeles: Le ven más tranquila sentada hoy, más chistosa y habladora, ella
sonríe a esos comentarios.

6. María Teresa: Le dicen que comprenden su situación, y que hoy dentro de su


malestar la ven más tranquila y comunicativa con el grupo, ella dice que sí.

7. Noelia: Le dicen que a pesar de que ella misma se dice insegura, en una situación
familiar caótica busca trabajo, tiene estudios, es joven, inteligente y con muchas
posibilidades. Yo le digo que su mente le dice “insegura” pero que ella con sus actos
(maleta tras venir de Madrid) va unos pasos por delante de eso y hace cosas que le
importan a pesar de eso (en una línea más de ACT).

F)-Regla 4: Influencias reforzantes mutuas en el grupo: (“Cada uno/a como


actores/actrices”). Esto se recoge al final de la sesión con las preguntas de cierre
sobre utilidad de lo experimentado en la sesión para sus vidas diarias, lo más
positivo y lo más desagradable o pendiente de abordar en la sesión y sesiones

185
próximas:

1. María: Dice que venir al grupo le apoya en defender sus derechos laborales

2. Pilar: Contarnos sus decisiones le apoya en su vida diaria en seguir manejando la


relación con sus hermanos de esta manera que nos cuenta y que lo tiene claro. Hoy
le han visto algo afectada a pesar de su fortaleza, cuando habló de su padre fallecido
en un momento, diciendo que expresar estas emociones le puede ayudar aunque sea
difícil.

3. Teresa: El grupo le sirve para enfocar las relaciones con su marido escuchando
más y no dejándose llevar por su genio.

4. Amparo: Contarnos su pena la hace algo más llevadera.

5. María Ángeles: Venir al grupo a pesar de sus dudas le sirve para sentirse más
segura y decidida

6. María Teresa: A pesar de sus dificultades venir le ayuda a tratar de sobreponerse a


las mismas.

7. Noelia: No le gusta que le vean insegura aunque sabe que esto debe tratarlo aquí
con nosotros.

G)-Regla 5: Interpretaciones funcionales a moldear y orientaciones dadas por el


grupo: (“Los demás como directores/as”):

1. María: Se le dice que si no defiende sus derechos la usan más.

2. Pilar: Que a pesar de verse fuerte, expresar emociones le puede servir de ayuda
para manejarlas de otra manera (respecto a asuntos pasados)

3. Teresa: Que al estar más receptiva en el grupo lo está también con su marido

4. Amparo: Le dice Noelia que es normal que las madres sean sobreprotectoras con
sus hijos a veces, pero que el exceso de eso le puede generar problemas.

5. María Ángeles: Ponerle límites a los abusos de su hijo le hace sentirse más segura.

6. María Teresa: Que las madres también necesitan apoyarse, que sea más
comprensiva con su madre en demencia, que discutir no le lleva a nada.

186
7. Noelia: Que sus acciones son más que sus pensamientos de inseguridad,

SESION Nº 5: 2-10-2017

A esta sesión acuden 7 personas: Pilar, Manuela, Teresa, María, Amparo, María
Teresa y Noelia. Desde el inicio de la sesión nos centramos en las 5 reglas de la FAP
directamente tras compartir como le ha ido la semana. Se les entrega nuevamente
viñetas de las 4 reglas más pregunta de problemas/progresos en su vida diaria y
preguntas de cierre. El terapeuta utiliza para tomar notas de las 5 reglas la Hoja de
Anotaciones de las sesiones FAP (Ruiz, 2017). Esta sesión además, con
consentimiento informado es grabada en vídeo.

A)-Problemas/Progresos en su vida diaria: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

1-Pilar: En general dice que le ha ido bien con sus relaciones con pareja y hermana,
pero se ve algo triste al haberse producido un robo en su casa y que su pareja le
comenta que habla mucho en sueños.

2-Manuela: Dice que hace dos semanas que no venía y que aunque estaba tranquila,
en la última semana está más intranquila frente a la revisión de su cáncer ocular que
tiene en las próximas semanas con oncólogo en Madrid, llevando en revisión de esto
ya 19 años.

3-Teresa: En general dice estar tranquila, con el marido no han vuelto a discutir, pero
si con su hermana por cuestiones de echarle en cara que prioriza respecto a ella
sabiendo que ella está mal con el tema de su hijo; y que esto le ha hecho dolerle el
estómago.

4-Maria: Refiere estar en general tranquila con su familia, aunque algo inquieta
esperando la respuesta del hospital sobre su ubicación laboral.

5-Amparo: Aunque lleva la pena del hijo fallecido está mejor; en parte porque tiene
el apoyo de su otro hijo y porque este ha seguido sus consejos y le va bien, incluso
encontrando trabajo temporal.

187
6-Maria Teresa: Dice que más o menos va igual. Con su madre discute menos porque
tiene una demencia y entiende sus cosas. Ahora preocupada por su hijo que vive en
Tarragona con respecto al asunto de la independencia, aunque este no se mete en
esas cuestiones, pero no se fía de sus amistades; y con su hija porque tiene gastritis y
a ver cómo va. De hecho a los pocos minutos de estar contando esto le llama su hija
al móvil, se levanta, pide disculpas y contesta la llamada.

7-Noelia: Llega unos minutos tarde. Nos comenta que sigue buscando trabajo, que
se está preparando en academia de idiomas y que se ve con más estima y
desenvoltura. Solo cuenta discusión con su novio porque su suegra prioriza a terceros
sobre ella en algunos asuntos como hacerle un paño de croché.

B)-Regla 1: Observación de CCRS: (“Los demás como directores/as”):

1-Pilar: Dicen que la ven hoy algo más preocupada en la sesión pero al mismo
tiempo serena en la sesión en general.

2-Manuela: A pesar de que la ven preocupada respecto a su revisión con el oncólogo


la perciben fuerte en general ante estas situaciones.

3-Teresa: A Teresa dicen verla sonriente en consulta, que cuenta chistes y anima al
grupo. Sin embargo Noelia discrepa del grupo y dice notarla algo triste y preocupada.
Teresa lo confirma.

4-Maria: Hoy la ven más callada, seria y menos participativa. María dice que es
verdad pero que es por la espera de la contestación del hospital.

5-Amparo: Todos la ven mejor, muy fuerte. Ella dice que lleva mejor lo de su hijo.

6-Maria Teresa: Aunque la ven preocupada, todos la perciben menos llorosa y más
tranquila que en sesiones anteriores.

7-Nolelia: La perciben más animada, participativa y todos se sorprenden del cambio


positivo que está dando. Ella sonríe y asiente a esto.

C)-Regla 2: Provocar CCRS: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

El terapeuta en este punto provoca CCRS pidiéndoles que durante 5 minutos en un

188
folio en blanco y con la mano con la que no suelen escribir habitualmente, escriban
sus miedos y necesidades más profundos y que después se limiten a leer que han
escrito sin añadir nada más. A continuación se realiza un ejercicio grabado propio de
ACT para permanecer en presencia de esos miedos, permitiéndolos mientras ellos
siguen con lo que les importa. Para ello se les dice que observen que se permiten en
este momento de aquí y ahora.

1-Pilar: “Necesito cariño que me abracen cosa que no hacia mi madre de pequeña.
Mis miedos es volver atrás en mi vida”. Las compañeras de ambos lados la abrazan y
le cogen la mano.

2-Manuela: “Tengo miedo a que el tumor se reactive y muera. Necesito cariño y


afecto”. Las compañeras le tocan el brazo y la cogen de la mano.

3-Teresa: “Necesito tener el cariño de mi hijo mayor. Temo no tenerlo”

4-Maria: “Tengo miedo al sufrimiento y la soledad. Necesito confiar en mí misma”.


Las compañeras le dicen que puede contar con ellas.

5-Amparo: “Tengo miedo a la noche, mi hijo fallecido salía y bebía de noche.


Necesito ver a mis hijos bien”.

6-Maria Teresa: “Temo que mi hija tenga algo malo. Necesito un sitio digno para
vivir y que el banco nos deje en paz”.

7-Noelia: “Temo que mis nervios me traicionen. Necesito seguridad en mí misma”

A continuación se les pide que nos digan cómo afrontan esos temores y la mayoría
menos Pilar y Noelia que dicen centrarse en el presente mientras hacen lo que les
importa, el resto trata de distraerse de ellos de varias maneras sin éxito a la larga.
En este punto se comparte el ejercicio de ACT de permitirse sus miedos mientras
toman contacto con sus necesidades y se vuelve a compartir que se han permitido
aquí y ahora, observando que pueden hacerlo salvo en algunas de ellas como María
Teresa que sigue rumiando durante el ejercicio.

D)-Regla 3: Reforzar progresos observados en la misma sesión de CCR2: (“Los demás


como directores/as”):

1-Pilar: En general le dicen que la siguen viendo fuerte y resolutiva

189
2-Manuela: Le dicen que ese temor es normal, pero que su trayectoria de revisiones
ha ido bien hasta ahora y que la ven fuerte también, aunque es muy normal y
legítimo tener estas preocupaciones ante la revisión oncológica.

3-Teresa: Dice que Noelia ha dado en el clavo y que está algo más triste, aunque
todos la ven mejor que semanas atrás.

4-Maria: Dice que hoy está más callada, pero ella dice que se siente acompañada
por el grupo. El grupo le dice que su estilo es de estar más callada pero que ella está
dando pasos.

5-Amparo: Todos ven que lleva el proceso de duelo mejor. Ella comparte esto.

6-Noelia: Todo el grupo se ha sorprendido con sus progresos y la felicitan. Ella sonríe
y lo agradece.

E)-Regla 4: Influencias reforzantes mutuas en el grupo: (“Cada uno/a como


actores/actrices”). ¿Cómo creéis que se sienten hoy vuestras compañeras con
vosotras en esta sesión?

Uso esta pregunta a sugerencia de José Olid, en este punto dado el juego
discriminativo que hace probable el intercambio de influencias mutuas.

1-Pilar: Dice que el grupo la verá fuerte y resolutiva y que eso le ayuda. El grupo lo
confirma.

2-Manuela: Dice que el grupo le ve fuerte a pesar de sus miedos, que confían en ella
y que eso le da mayor confianza en afrontar dificultades.

3-Teresa: Vuelve a decir que aunque las demás la ven sonriente y bromista, Noelia
ha dado en el clavo y que podía sustituirme como psicólogo en el grupo (risas). Que
no se le va la tristeza.

4-Maria: Que el grupo le ve en general más callada que al resto, pero que se siente
fortalecida y acompañada por el apoyo ofrecido en el grupo.

5-Amparo: El grupo dice que le verá más fuerte en cómo lleva su duelo. El grupo así
se lo confirma.

6-Noelia: Cree que hoy transmite más felicidad al grupo al ver sus progresos. El
grupo le confirma esto.

190
F)-Regla 5: Interpretaciones funcionales a moldear y orientaciones dadas por el
grupo: (“Los demás como directores/as”):

Este punto por ahora está menos desarrollado, y en próxima sesiones hay que
ampliarlos para aumentar las probabilidades de que el cambio interno al grupo se
generalice a sus vidas diarias. Solo tomo nota de algunos esbozos de la regla 5
referidas de pasada en ellos.

1-Pilar: Le dicen que hay cosas que se escapan de nuestras manos, en relación a la
actitud de su madre con ella en la infancia.

2-Manuela: Le dicen que es normal que tenga esos temores ante la revisión
oncológica.

3-Teresa: Le dicen que por lo que cuenta su hermana le tiene celos a ella.

4-Maria: Le dicen que su encargado del hospital parece tenerle inquina y que apunta
a malos tratos y problemas de este que paga con ella.

5-Amparo: Le dicen que su duelo tiene un proceso y que va mejor.

6-Maria Teresa: Le dicen que se “ahoga en un vaso de agua” (esto no parece ser muy
reforzante, retomarlo en próxima sesión).

SESION Nº 6: 9-10-2017

Acuden 4 personas: Desiré (no ha acudido a las 5 anteriores por diversos motivos en
torno a enfermedad de abuela. Ella está diagnosticada de “Trastorno límite de la
personalidad”), María Ángeles, Teresa y María.

A)-Problemas/Progresos en su vida diaria: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

1-Desiré: Nos comenta de que ella vive con la abuela paterna y que sus padres
residentes en Barcelona le prometen cosas que después no cumplen, como apoyarla
en un plan de atención comunitaria de salud mental, que no desean que les visite y
que prefieren a su hermana a ella, conviviendo esta hermana con ellos. Esta semana
se comprometieron a participar con ella en este programa y se marcharon a
Barcelona sin llevarlo a cabo. Una vez más la abandonan, comenta.

191
2-María Ángeles: Nos relata que uno de sus hijos la llamó reclamándole su parte de
la herencia a voces por teléfono y ella con tranquilidad le dijo que está dispuesta a
hablar con él y sus hermanos de esto para resolver el asunto de la herencia pero no a
voces por teléfono.

3-Maria: Refiere que aún no le han resuelto el tema de las rotaciones en el hospital
pero que se ve apoyada sindicalmente en ello y que ella ha tomado decisiones para
tener este apoyo.

4-Teresa: Comenta que su nieta le trata de manipular con que le compre un perro,
con rabietas y su hijo le pide dinero para pagar manutención de su separación. Ella
no ha cedido a ambos y le ha dicho al hijo que este asunto lo tiene que hablar con su
padre (marido de ella); y que ella ahora reparte las cargas de todo esto con su
marido.

B)-Regla 1: Observación de CCRS: (“Los demás como directores/as”):

1-Desirée: Le vemos sonriente y bromista a pesar de la dureza de lo que cuenta. Ella


dice que quiere hacer cursos y estar activa, además de ayudar a su abuela.

2-Maria Ángeles: Le vemos bastante tranquila en la sesión, hablando de tomar


decisiones con sus hijos y llevándolas a cabo.

3-Teresa: Le vemos algo preocupada, pero más en sintonía con su marido al hacerle
participar en las decisiones familiares.

4-Maria: Le vemos un poco preocupada por el tema de las rotaciones laborales pero
más tranquila que en sesiones anteriores.

C)-Regla 2: Provocar CCRS: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

Se les plantea el ejercicio A.R.A en relación al control emocional que ejercen sobre
ellas ciertas personas de su entorno (hijos, padres) y se les pide elegir una frase de
apoyo para motivarse y encarar estas situaciones mientras se relajan, aflojan y
permiten que vengan las emociones sean cuáles sean sin luchar con ellas, mientras
ellas siguen el camino de lo que les importa. Se induce que imaginen escenas
recientes donde lo pasaron más con estas personas mientras realizan el ejercicio
A.R.A

-Desiré al final del ejercicio dice que es importante que ella haga lo que le importa y

192
no estar tan pendiente de lo que digan o hagan sus padres.

-María Ángeles experimenta el coraje de enfrentar las consecuencias de sus


decisiones respecto a sus hijos.

-Teresa refiere que experimenta pena por el hijo, pero que va a seguir con la toma de
decisiones compartidas con su marido y no como antes imponiéndolas ella.

-María la sensación de que le dejen en paz con sus turnos reglados sin tantos
cambios.

D)-Regla 3: Reforzar progresos observados en la misma sesión de CCR2: (“Los demás


como directores/as”):

Básicamente todas se ven entre si más decididas en sus acciones ante aquello que
les molesta y duele que se relaciona con acciones de terceros (hijos, padres y
compañeros de trabajo) y así se lo dicen unas a otras.

E)-Regla 4: Influencias reforzantes mutuas en el grupo: (“Cada uno/a como


actores/actrices”):

Todas expresan que creen verse comprendidos por el grupo y apoyados por este,
cosa que confirma. Desiré manifiesta que el grupo puede quizás sentirse molesta
con ella (historia de abandonos-rechazo familia previo), refiriendo el grupo que no
es así, y que ella ha participado y se han sentido cómoda con ella.

F)-Regla 5: Interpretaciones funcionales a moldear y orientaciones dadas por el


grupo: (“Los demás como directores/as”):

Este punto no es elicitado en esta sesión

SESION Nº 7: 16-10-2017

Hoy acuden 5 personas al grupo: Noelia, Silvia (por primera vez. Joven de unos 23
años con problemas de relación social, habla poco y le cuesta exponer sus deseos
personales y opiniones), María, Amparo y Pilar.

A)-Regla 2: Provocar CCRS: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

193
Hoy comenzamos el grupo con una tarea para provocar CCRS llamada “Declaración
de misión personal”, consistente en escribir una carta durante 10 minutos
comentando que desean ser/hacer en el resto de su vida y qué legado quieren dejar
a los demás; y compartirla si lo desean en grupo.

1-Noelia: Refiere que quiere ser una persona normal (está etiquetada de TLP) sin
experimentar el vacío interior que le acompaña en su vida de manera constante dice.
No necesitar estar en salud mental ni de psicólogos toda su vida. Al preguntarle
cómo se siente compartiéndonos esto, dice que regular.

2-Silvia: Refiere que quiere ser feliz y sonreír, aunque esto lo hace con pocas
personas. Ser auxiliar de cirugía, ayudar a los demás y relacionarse más y mejor con
otras personas. Dice que se siente bien compartiéndonos esto.

3-Maria: Le gustaría trabajar en una ONG. Escribir un libro sobre su vida.


Compartirnos esto le hace sentir bien.

4-Amparo: Seguir siendo una luchadora y ser fuerte para su familia. Apoyar a su
familia. Se siente bien compartiéndonos esto.

5-Pilar: Tras una serie de desgracias pasadas ser feliz, aunque vengan cosas
negativas, que vendrán. Ser una luchadora. Dice sentirse bien compartiéndonos esto.

Nota. Podíamos haber aprovechado aún más el ejercicio si les hubiera preguntado
entre 0-10 cuán de cerca se ven de esa misión en la vida, que barreras se interponen,
como las manejan y que sucede con esto. Lo haré en los siguientes grupos; y en este
en próximas ocasiones.

B)-Problemas/Progresos en su vida diaria: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

1-Noelia: Nos relata que esta semana pasado estuvo en Madrid haciendo entrevistas
de trabajo. Había tres pruebas. Las dos primeras la superó y la última era una
entrevista con la directora de la guardería que quedó con ella en llamarla, cosa que
no hizo. Ante su inquietud la llamó a esta, diciéndole esta, nos dice, de manera muy
“seca” que si no la habían llamado es porque habían escogido a otra persona. Dice
que se sintió muy mal, “humillada” y comenzó a pensar que “nunca voy a conseguir
lo que quiero”, “no sirvo para nada” y se autolesionó la muñeca con una cuchilla,
después de llevar meses sin hacer esto. Se hecha a llorar, traga saliva y se calla en
este punto. Algunas de sus compañeras del grupo, la abrazan (Pilar y Silvia
inicialmente, al final todo el grupo, incluyendo el terapeuta) y cesa de llorar, aunque
sigue triste y cabizbaja por un rato.

194
2-Silvia: Dice que ha pasado una mala semana con vómitos sin saber muy bien
porqué. En clase de preparación de auxiliar de cirugía dicen que no se relacionan con
ella, porque ella no les sigue el juego a sus compañeras. Nos dice que ensucian
mucho las clases con bolsas de chucherías y después regañan a todas y que eso le
hace sentir mal. Esto lo refiere entre cortada y con un tono de voz bastante bajo.
Provoca que Pilar le diga que tiene que pasar de eso e ir a sus intereses con sus
estudios.

3-Maria: Dice que lleva unos días nerviosa, no sabe si por el cambio del tiempo,
aunque por otro lado pasa más de su jefe y se centra en el aquí y ahora y eso le
ayuda (María tuvo experiencia previa de ACT). Pilar le dice que pasa en el buen
sentido, y todos le decimos que tiene las cosas más claras.

4-Amparo: Refiere que está mal de estómago, nerviosa, aunque muy ocupada con
sus nietos y eso le ayuda a llevar mejor lo de su hijo. Ha discutido con su marido
porque este también lo está pasando mal y se refugia mucho en fumar demasiado.
La escuchan con atención sin hacerle ningún comentario en este momento.

5-Pilar. Refiere que fue de viaje con su pareja a Galicia aunque su mente le decía que
le iba a pasar desgracias o que iba a perder el control de sí misma, pero se acordó de
los ejercicios de ACT (también hizo antes grupos ACT) y se centró en el presente,
viendo sus pensamientos como chácharas y continuo con ello. Recibe la felicitación
de todo el grupo por esto.

C)-Regla 1: Observación de CCRS: (“Los demás como directores/as”) y D)-Regla 3:


Reforzar progresos observados en la misma sesión de CCR2: (“Los demás como
directores/as”) y E)-Regla 5: Interpretaciones funcionales a moldear y orientaciones
dadas por el grupo: (“Los demás como directores/as”):

1-Noelia: Llora al relatar la frustración de la semana y sus cortes. Y llega a decirnos


que ella no es una “etiqueta” de “la que se corta”. A esto le digo que observo que
ella reivindica situarse de otra manera en su vida y que es muy normal que se frustre
a estar a las puertas de casi haber conseguido esto, pero que hay aspectos que no
dependen de ella. Cuento anécdota de otros clientes que atiendo muy preparados
donde en selecciones privadas deciden por criterios muy subjetivos, pero que ella
tiene todo el derecho a sentirse de esta manera, pero que nos hable de qué le llevó a
cortarse y nos refiere lo de sus pensamientos de “no vales, no conseguirás nunca lo
que te propones”. A esto le digo que si esos pensamientos o voces de su mente se lo
han dicho antes en su vida otras personas; diciendo que sí, que se lo decía su padre
cuando ella intentaba valerse por sí misma en diferentes momentos de su vida; a lo
que le digo “incorporaste estas voces” que realmente no son las tuyas. Dice que sí y

195
que se siente ahora bastante mejor en este punto de la sesión.

2-Silvia: Recibe del grupo que parece ser una chica muy responsable y sensible y que
eso parece es ocasión para que sus compañeras le ataquen; y que “tiene que echarle
valor si desea seguir con su proyecto de vida”. Ella se calla en este punto.

3-Maria: Le dicen que su “pasotismo” con su jefe le ayuda, que una cosa es que le
lleguen comunicados oficiales y otra que ella se coma la cabeza, cosa que está
haciendo menos. Sonríe y dice que así es.

4-Amparo: El grupo le vuelve a decir que la ve luchadora, y al mismo tiempo valida


que tenga momentos malos, que no es para menos.

5-Pilar: La ven serena en el grupo y que centrarse en el presente y distinguir lo que


son los pensamientos de sus experiencias reales le ayuda mucho. Ella lo confirma.

F)-Regla 4: Influencias reforzantes mutuas en el grupo: (“Cada uno/a como


actores/actrices”):

Noelia, dice que la sesión le ha venido muy bien, al igual que sus compañeras.
Dedicamos unos minutos finales para hacer un ejercicio donde ellas dibujan una
mano que mueve unos hilos sobre un muñeco. Les digo que esa mano es su mente
que a veces las maneja a ellas con pensamientos negativos y que les llevas a actuar
lejos de su misión en la vida (conectando el principio con el final de la sesión) en una
forma más cercana a ACT.

Les digo que compartan que pensamientos las maneja como marionetas, a que le
lleva esto (es decir el AFC en sus términos B-C, hablando en general de A como “en
los peores momentos”) refiriendo cada una los suyos más negativos: Noelia: “No vas
a conseguir lo que te propones” y se lesiona a veces; Silvia: “Eres muy insegura” y se
aparta de la gente; María: “No trabajas por ti misma lo suficiente” y se culpa y
detiene; Amparo: “Tenía que haber hecho más por mi hijo y no regañarle cuando
bebía y conducía muy rápido” y se culpa y llora; Pilar: “Vas a perder la cabeza”.

A continuación les pregunto si hoy han visto en el grupo que van cortando esos hilos
(conexiones funcionales) y dicen todas que sí. Incluso en el caso de Amparo,
pregunto a ella, “¿cómo imaginas que piensan tus compañeras sobre lo que nos dice
de tu hijo suicidado?”. Ella dice, “quizás piensen que no debía regañarle a mi hijo
como hacia”, todo ello seguido de opiniones coincidentes de que es muy normal y
legítimo lo que ella hacía (validación), diciendo ella que esto le alivia mucho.

196
SESION Nº 8: 23-10-2017

Hoy acuden 9 personas: Manoli, Pilar, María Ángeles, Teresa, María, Silvia, María
Teresa (llevaba dos semanas sin venir), Amparo y María Ángeles M. (por primera vez,
problemas de pareja, físicos de movilidad con su mano derecha y con su padre).

A)-Problemas/Progresos en su vida diaria: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

Comenzamos esta sesión preguntando por esta área.

1-Manoli: Ha estado en revisión de su tumor cerebral y le han dicho que está


estabilizado y eso le tranquiliza. Pero se entera en el grupo de muerte de amiga y
dice estar impacta hoy aquí y ahora y no saber que decir más

2-Pilar: Refiere seguir practicando el centrarse en el presente y que eso le funciona.


Que en cualquier momento nos podemos morir (en alusión a la noticia de la amiga
de Manoli ) y que el tiempo a vivir es el presente.

3-María Ángeles: Nos relata que su hijo ha llegado a pegarle y que ella ha tenido que
denunciarle y pedir ayuda del centro de la mujer. Tiene muy claro que va a ayudar a
este hijo, pero poniéndoles una seria de límites legales (orden de alejamiento le ha
puesto) y que dinero no le va a dar (aconsejado por abogado del centro de la mujer),
que le comprará comida mediante terceros.

4-Teresa: Aunque ha tenido problemas económicos y se desmoralizó, con ayuda de


su marido que ha conseguido mayor cooperación de este, y de otro hijo, está
remontando, además de apuntarse actividades como la zumba.

5-Maria: Sigue con la actitud de seguir en el trabajo actual sin estar pendiente si el
supervisor la llama o no (cosa que no ha ocurrido) y que eso le ayuda y funciona.

6-Silvia: Dice irle mal, que algunas de sus compañeras le refieren con insistencia que
pasa con ella que no tiene pareja; y que ella les dice que ya llegará, y después con
estas se calla.

7-María Teresa: Con lágrimas en los ojos nos dice que están a punto de embargarle
la casa y que además una sobrina con cáncer a pesar de la insistencia de ella y sus
padres de que retome tratamiento previo, se niega. Lo que hace con esto es llorar y
acostarse, nos dice.

8-Amparo: Refiere que está muy ocupada con sus sobrinos, y aunque le afecta lo de

197
su sobrina (ídem a la de María Teresa), no se ha decaído, estando muy activa con los
críos.

9-María Ángeles M.: Nos relata que está en el grupo porque sus padres están
separados y que cuando va a visitar a su padre este a veces le trata de malas formas.
Además este verano se ha dado cuenta de que con su novio ha sido tratada de forma
muy autoritaria por este (como su padre) y que está poniendo distancia con este.
Nos añade que tiene limitaciones físicas en su brazo derecho, pero que ella se apaña
así más o menos. Reconoce que a su novio le pone excusas para no quedar con él, en
vez de abordar la situación con este directamente.

B)-Regla 1: Observación de CCRS: (“Los demás como directores/as”) y C)-Regla 3:


Reforzar progresos observados en la misma sesión de CCR2: (“Los demás como
directores/as”):

Como hoy somos muchos en el grupo para hacer observaciones cruzadas de todos;
les digo que elijan a dos de sus compañeras para que las hagan. Eligen a Manoli y
Pilar, que la van haciendo de cada uno de ellos. Yo hago la de ambas.

1-Manoli: Le digo que refiere con frecuencia ir adelante a pesar de su tumor y


pérdidas de familiares y que suele apoyar y hacer comentarios precisos de sus
compañeras. Que es perfectamente legítimo haberse emocionado tras tan
lamentable noticia de su amiga. Lo admite. El grupo apoya esto.

2-Pilar. Le digo que su actitud de centrarse en el presente le es de mucha ayuda. Ella


dice que así es. El grupo apoya esto.

3-María Ángeles: La perciben cada vez más segura y decidida y que ha hecho un
cambio positivo muy grande desde las primeras sesiones. Dice que sí, que aunque le
sea muy duro poner límites a su hijo, tenía que hacerlo así.

4-Teresa: Le dicen que tiene muchos cambios, que “sube y baja” según nos va
contando su evolución. Ella dice que así es.

5-María: Le dicen que la decisión que ha tomado de estar centrada en su trabajo y


no pendiente del supervisor le ayuda. Ella dice que sí. Le ven relajada en la sesión.

6-Silvia: Le dicen que habla en un tono excesivamente bajo, y le piden abiertamente


que suba la voz, haciendo esto. Le añado que a ciertos ejercicios de grupo ella me ha
“desobedecido” y hasta pedido ayuda, y que esos comportamientos son importantes,

198
que lo mismo podía hacer en clase con sus compañeras si lo ve viable.
7-Maria Teresa: Le perciben como muy sensible y excesivamente preocupada por su
entorno y le aconsejan (regla 5) que priorice más en ella misma y que no abuse de
llorar y la cama, ya que ella misma reconoce que eso no le ayuda en nada.

8-Amparo: Le perciben muy fuerte, viene maquillada y se lo dicen (sonríe); y ella dice
que lleva el duelo de su hijo bastante mejor.

9-María Ángeles M.: Le dicen que en esta primera asistencia al grupo la ven un tanto
perdida e insegura sobre que va a hacer. Silvia se atreve a decirle que deje a su novio
(ella a esto sonríe).

D)-Regla 2: Provocar CCRS: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

Decido en la última media hora evocar CCRS además de las anteriores mediante tres
ejercicios comunes para todo el grupo que vamos haciendo en intervalos de 10
minutos cada uno aproximadamente. El primero es una “asociación libre” aquí y
ahora de todo lo que estén pensando y sintiendo y que lo pongan por escrito,
después lo lean (seleccionando lo que dicen si lo desean, pero animándolas a que
sea lo máximo posible); seguido de ejercicio de por escrito “hacer un listado de
cosas importantes que me gustaría hacer cuando termine la terapia y qué pasos voy
a dar para ello” y el tercero el ejercicio “A.R.A” de conciencia corporal-relajación-
aceptación para usar en relaciones o momentos que les produzcan incomodidad o
malestar y como pararse y no poner el “piloto automático de huir o escapar” cuando
eso les lleva a soluciones improductivas para ellas. De modo resumido, esto es lo
que recabo de cada una de ellas:

1-Manoli: Rabia al enterarme de lo de mi amiga (asociación) pero salgo con fuerzas


para seguir adelante, quiero recuperar mi vida (listado de cosas) y he visto que
puedo permitirme el malestar mientras estoy en situaciones difíciles haciendo lo que
me importa. Salgo reforzada de aquí (A.R.A)

2-Pilar: Siento un poco de angustia al enterarme de la noticia de la conocida de


Manoli, yo también la conocía (asociación), quiero ser feliz y estar tranquila y para
eso me ayuda no hacer todo lo que otros querían de mí (listado de cosas) y he visto
que puedo permitirme el malestar mientras estoy en situaciones difíciles haciendo lo
que me importa (A.R.A)

3-María Ángeles: Siento más seguridad y más rabia (asociación), necesito quererme
más (listado de cosas) y he visto que puedo permitirme el malestar mientras estoy en
situaciones difíciles haciendo lo que me importa (A.R.A)

199
4-Teresa: Aunque me he hundido algo, puedo salir a flote (asociación), necesito vivir
mi vida sin pensar tanto en otros, vivir y vivir (listado de cosas) y he visto que puedo
permitirme el malestar mientras estoy en situaciones difíciles haciendo lo que me
importa (A.R.A)

5-María: Estoy cansada de buscar tanto agradar y la aprobación de los demás


(asociación), quiero retomar una O.P.E y valorarme más a mí misma (listado de
cosas) y he visto que puedo permitirme el malestar mientras estoy en situaciones
difíciles haciendo lo que me importa (A.R.A)

6-Silvia: Me gustaría que me dejen en paz (asociación), quiero acabar auxiliar de


enfermería, ser una buena auxiliar de enfermería, aunque sé que necesito ayuda
para acabar esto, también al acabar la sesión de hoy necesito que Juan José me
explique algunas dudas sobre los cuestionarios que nos entregó (listado de cosas).
Accedo a esto último ya que considero que en su caso es una CCR2 importante. En
este punto le digo que en clase podría hacer algo parecido con los profesores cuando
no se entera, aunque me dice que estos son más rígidos que yo. Y he visto que puedo
permitirme el malestar mientras estoy en situaciones difíciles haciendo lo que me
importa (A.R.A)

7-Maria Teresa: Estoy muy recaída y depresiva pero con ayuda salgo (asociación).
Voy a mirar unas cortinas que me hacen falta (listado de cosas), dice que entendió
para hoy no para el final de la terapia. Y he visto que puedo permitirme el malestar
mientras estoy en situaciones difíciles haciendo lo que me importa (A.R.A)

8-Amparo. Me veo fuerte y capaz de superar esto (asociación). Tengo que salir más y
andar más (listado de cosas). Y he visto que puedo permitirme el malestar mientras
estoy en situaciones difíciles haciendo lo que me importa (A.R.A)

9-María Ángeles M.: Que me dejen en paz y llevarme bien con Antonio (asociación).
Tengo que hablar con Antonio y fortalecer mis brazos (listado de cosas). Y he visto
que puedo permitirme el malestar mientras estoy en situaciones difíciles haciendo lo
que me importa (A.R.A)

Notas: Como la regla 2 ha sido usada en media hora y ha dado mucho juego, en
próximas sesiones se puede moldear sobre lo que han referido para ver qué pasos
pueden ir dando entre sesiones para esos listados de cosas por hacer que les
importa. Además las próximas sesiones pueden empezar por las reglas 4 y 5 menos
contactadas en las sesiones anteriores. Por ejemplo podemos empezar la próxima
sesión con la pregunta: “¿Cómo creéis que se sienten vuestras compañeras aquí en
el grupo con lo que le venís refiriendo, quién desea empezar a compartir esto con
nosotros?” y después continuar con la pregunta: “¿Y qué os hace sentir aquí vuestra

200
compañera habitualmente?; para relacionarlo después (si da tiempo) con la
pregunta: “¿ Y a qué creéis que se deben los problemas de cada una de vuestras
compañeras y que pensáis que pueden hacer para ir mejorándolos?” y para terminar
la sesión: ¿Veis si esto os puede ser de ayuda en vuestra vida diaria, cómo sería eso?”
(Esto como agenda flexible para próxima cita, junto a preguntar por cómo les ha ido
la semana). Hacer lo mismo en el grupo del martes.

SESIÓN Nº 9: 30-10-2017

Hoy acuden 8 personas al grupo: Amparo, Teresa, Silvia, María Ángeles, Desiré,
María, María Ángeles M. y María Teresa.

La primera hora del grupo la usamos para pasar cuestionarios post-test para evaluar
evolución. La segunda hora comenzamos con el ejercicio A.R.A poniéndolo en
relación a personas con las que se relacionan y “le enganchan con malestar”, aun
pensando en ellos sin su presencia física y continuamos con un repaso general de
cómo les ha ido la semana como actrices; y como directoras que observan en sus
compañeras hoy en la sesión.

A)-Regla 2: Provocar CCRS: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

Con el ejercicio A.R.A (conciencia-relajación-aceptación) en relación a personas de


su vida cotidiana con las que se sienten mal y “gastan mucho tiempo y energía
calentándose la cabeza y sintiéndose mal”, solo María dice haberle funcionado hoy
lo de aceptar esos sentimientos sin luchar con ellos; el resto manifiesta
verbalizaciones de enganches con esas personas en mayor o menor medida, por lo
que sus experiencias privadas con estas dependen de la presencia física o relacional
verbal que hacen con estas.

B)-Problemas/Progresos en su vida diaria: (“Cada uno/a como actores/actrices”) y


C)-Regla 1: Observación de CCRS: (“Los demás como directores/as”):

1-Amparo: Ha estado al cuidado de su nieto de tres años que se queja de no poder


estar con su madre (padres separados) o de no poder estar con el padre, y que
aunque esto le resulta muy doloroso ha continuado con sus cuidados. Esto a su vez lo
relaciona con la ausencia de su hijo fallecido y dice que para eso no hay cura que
valga.
-El grupo valida su dolor y le dice que es muy fuerte de cómo está llevando su
situación tan complicada.

201
2-Teresa. Dice que se acerca la navidad y que ellos son de estar todos unidos al
celebrarla y que esto le entristece ya que por la situación de su hijo no va a poder
reunirse con este.
-El grupo valida su experiencia y le dice que hoy le ve más triste y menos habladora
y partícipe que otras veces.

3-Silvia: Refiere entre sollozos que en el colegio la siguen acosando y que no tiene
ayuda de los tutores que no la comprenden.
-El grupo se moviliza e incluso varios de ellos la abrazan y me piden informe para que
yo medie con el centro escolar en esto, cosa a la que me comprometo.

4-María Ángeles M.: Refiere que se está dando cuenta que está con su pareja está al
50% de afecto y que está en proceso de tomar una decisión después de 9 años con
este, que se ha dado cuenta de que ella se ha callado demasiado y este ha hecho y
deshecho a su gusto, y que ella no es subnormal como para no poder tomar sus
propias decisiones. Es la segunda vez que viene al grupo.
-Silvia le dice que se separe, el resto del grupo que tome sus decisiones, la que ella
crea mejor para sí misma.

5-María Ángeles: Refiere que continúa con el proceso de poner límites a sus hijos,
asesorada por el centro de la mujer y con el apoyo del grupo. Con estos apoyos se ve
“protegida” y capaz de tomar estas decisiones.
-Refiere verse más fuerte, cosa que valida el grupo.

6-Desirée: Es la segunda vez que acude a este grupo, ha faltado 7 sesiones. Al


preguntarle al respecto dice que es que ha estado indecisa de marcharse o no con
sus padres a Barcelona. Después empieza a llorar diciendo que se siente muy sola y
que nadie atiende a sus necesidades.
-Parte del grupo le dan pañuelos para secarse las lágrimas, pero le dicen que ella
tampoco ha tomado decisiones de aprovechar las oportunidades previas de venir al
grupo. Por mi parte le digo que se le ha ofrecido varias veces otras alternativas a las
que ella accedió (por ejemplo vivir en un piso de baja supervisión de la red de salud
mental) a la que ella renuncia en varias ocasiones. Dice que esta vez desea ir al piso
(yo en privado dudo que esto sea así, pero le digo que lo hablaremos en el servicio de
salud mental).

7-Maria: Continua “pasando” de su supervisor y muy tranquila


-El grupo le ve efectivamente bastante relajada y más participativa.

8-María Teresa: Refiere estar muy preocupada por las molestias estomacales de su
hija y la lista de espera que tienen para ser atendida, y que mientras esto no se
resuelva no va a estar tranquila.

202
-El grupo le presenta alternativas al percibirla preocupada (aunque sin llanto como
en ocasiones anteriores). Le informan de especialistas privados o como usar
urgencias para estos casos. Ella toma nota de lo que le dicen (teléfono de
especialista del estómago).

SESION Nº 10:6-11-2017

A)-Problemas/Progresos en su vida diaria: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

1-María: Refiere ir bien en el trabajo. Su madre la presiona para salir y relacionarse


más, pero ella está a gusto con la vida que lleva fuera del trabajo en casa
tranquilamente. Antes discutía con su madre, ahora la oye y toma sus decisiones.

2-Maria Teresa: Refiere que está más activa y se relaciona más con su familia. Ha
estado en un bautizo familiar. Ansiosa ante juicio con su ex pareja y las amenazas de
este; aunque va a ir acompañada de hijo y familiares y eso le da más seguridad,

3-Silvia: Continúa con los problemas escolares, aunque ya nos hemos puesto en
contacto con ese colegio desde salud mental y esperamos las intervenciones al
respecto. Más contenta con haber retomado contacto con su hermano que era quién
le protegía ante los demás de su edad.

4-Maria Ángeles T. : Dice estar empezando a tomar decisiones con el novio, y por
ejemplo le ha pedido que le dejara en un centro comercial mientras este acudía a
otros compromisos que a ella no le gustan.

5-Amparo: Aunque lo pasó mal el día de los santos al visitar el cementerio y la tumba
de su hijo, ha continuado entretenida cuidando a sus nietos.

6-Pilar: Aunque ha tenido una recaída en la tristeza, no se ha aumentado las dosis de


medicación ni se ha metido en cama, y ha decidido continuar con su vida familiar y
de pareja que le gusta.

7-María Ángeles: Refiere que está mejorando. Se ve más segura y firme con sus hijos,
gracias a la psicóloga del centro de la mujer, venir a este grupo y sus decisiones.

8-Teresa: Ayuda económicamente a su hijo con una pequeña cantidad ocasional, que
no parece bien al marido, pero sin que esto se haga conflicto de pareja.

9-Manoli: Al igual que Teresa lo pasó mal el día de los santos e ir al cementerio y ver
la tumba de su sobrina, le vinieron recuerdos del accidente, ver a su sobrina muerta

203
a su lado, pero se ha repuesto de nuevo y continua con su vida adelante.

B)-Regla 1: Observación de CCRS: (“Los demás como directores/as”) y C)-Regla 3:


Reforzar progresos observados en la misma sesión de CCR2: (“Los demás como
directores/as”):

Dado que hoy somos muchos en el grupo y que parte de la sesión se usó con la
segunda evaluación de cuestionarios, pido una voluntaria para que nos haga un
resumen de que viene observando en sus compañeras, tanto hoy como desde que
se inició la terapia, pudiendo las demás, si así lo desean, hacer algún comentario
adicional a sus observaciones. Pilar decide hacer este rol de “directora”.

1-Maria: Participa más en las sesiones, ha hecho un cambio a mejor sorprendente


con evolución muy positiva. Ella y el grupo lo confirman.

2-Maria Teresa: Acude más arreglada a consulta, cuida más de ella, ya no llora tanto
como al principio y se relaciona más tanto dentro como fuera del grupo por lo que
cuenta. Todos confirman estas observaciones.

3-Silvia: Habla mucho en el grupo cuando da consejos a sus compañeras y con un


tono de voz elevado, pero cuando cuenta sus problemas disminuye el tono que a
veces se hace casi inaudible. Le hace falta aplicarse a sí misma lo que aconseja a las
demás (“enfrentarse y tomar decisiones”). Ella y el grupo admiten estas
observaciones.

4-María Ángeles T.: Parece titubeante ante la toma de decisiones y parece


demorarlas por lo que nos cuenta. Esto puede perjudicarle a la larga. Ella lo admite.
El grupo lo apoya.

5-Amparo: Parece llevar el duelo mucho mejor. Hacer cosas con su familia le ayuda.
Al grupo acude arreglada y cuidada en su aspecto. Ella y el grupo apoya esto.

6-Pilar: (Recibe la observación tras hacerlo ella con todas sus compañeras de María)
Afectada por la situación de su familia pero hace muchas cosas que le ayudan a no
dejarse arrastrar por el desánimo. Ella y el grupo lo confirma.

7-María Ángeles: Al principio “daba botes en la silla”, ahora muy tranquila. Se le va


más fuerte y segura de sus decisiones. Ella y el grupo apoyan estas observaciones.

8-Teresa: Aunque parece que hace mal con el hijo, al aclararnos que le pasa una
pequeña cantidad no puntual cuando lo ve necesario y no de modo sistemático y sin
perjudicar su propia economía y relación de pareja, parece que le ayuda a ella. En las

204
reuniones se le va ahora tranquila. Añado que ella es capaz de mantener su opinión
aunque al grupo le parezca otra cosa a veces. Ella dice que quizás no especificó bien
y sus compañeras se confundieron, pero que ahora sí lo han entendido y bien.

9-Manoli: Un ejemplo de fortaleza para todo el grupo, ante adversidades extremas.


Todo el grupo lo apoya. Ella misma dice que efectivamente, aunque tiene momentos
de malestar normales, se ve fuerte de afrontar situaciones complicadas. El grupo
valida que tenga esos momentos de bajón.

“Al finalizar la sesión les pregunto a todas que ha sido lo más negativo de la sesión
de hoy, lo más positivo y que se llevan que les sea útil para su vida diaria de esta
sesión”. En pocos minutos todas coinciden que lo peor es cuando lo están pasando
mal, muestran dolor ante situaciones adversas, que son escuchadas con atención y
respeto. Mejor cuando van compartiendo sus progresos semanales. Lo que coindicen
todas que les resulta más útil en sus vidas diarias fuera del grupo es el “ejemplo de
las demás para enfrentar sus dificultades” y recordarlas en momentos de su propio
malestar.

SESION Nº 11: 27-11-2017

Acuden 6 personas: Teresa, Amparo, María Teresa, Manoli, Silvia y Pilar.


Retomamos el grupo tras dos semanas de intervalo por operación de cataratas del
terapeuta. Todas me preguntan por la operación y lo bien que voy sin gafas.

1-¿Qué cambios habéis hecho en vuestra vida diaria desde que estáis viniendo al
grupo?:

Les planteo que estamos en la penúltima sesión y vamos a ir hablando de cómo ha


sido la experiencia del grupo para ellas en distintos aspectos. Comenzamos con esta
pregunta y quién desea compartirnos al respecto.

1-Teresa: Comienza diciendo que ella creía que había hecho cambios pero que en
realidad no ha hecho ninguno, ya que ha recibido un mensaje reciente de su ex nuera
con amenazas de que no va a ver a su nieta por el conflicto con su hijo y ella está
muy afectada. A esto le sigo preguntando si realmente es así, si ella desde que viene
al grupo sigue respondiendo ante esa situación exactamente igual que al principio.
Reconoce que no, que antes se ponía a discutir con su ex nuera y con su marido por
“no decirle nada a esta” y que se ha dado cuenta de que no entrando al trapo ni
discutiendo con su marido las cosas no se ponen tan mal como antes, y que con sus
marido lleva mejor relación.

205
Nota personal: Mi experiencia con grupos me dice que algunos de sus
componentes al acercarse el final de la experiencia grupal suele “reincidir en
aspectos negativos” como conducta para alargar la terapia y no darle termino
(mando disfrazado). Esto lo podemos comprobar cuando le preguntamos por cómo
actúan y si hay diferencias respecto al inicio de la terapia.

2-Amparo: Refiere que al igual que Teresa ella no está mejor ni puede superar de
ninguna de las maneras la muerte por suicidio del hijo. Adopto con ella la misma
táctica que con Teresa y le pregunto si actúa exactamente igual que al principio de la
terapia. Nos dice que realmente no, que antes se encerraba a llorar y ahora tiene
más contacto con el resto de sus hijos vivos y nietos y comparte más cosas con ellos.

3-Maria Teresa: Dice estar peor que al inicio de la terapia y refiere que es porque a
su ex marido le ha salido una sentencia negativa donde tiene que indemnizar a ella
y su hija con siete mil euros y cumplir una condena de cárcel y que a partir de esto ha
amenazado a ella y su hija con matarlas. Ella dice que no ha denunciado esto porque
su hija de 31 años no quiere hacerlo. Le digo que parece que tiene al menos dos
opciones una arriesgarse con que la amenaza sea real y comunicarlo a la policía y
otra no hacer nada y arriesgarse a que pasa algo por no quedar mal con su hija, que
ella lo decida. Ya se había quejado del psicólogo que la vio en terapia individual
cuando esto le dijo que la veía muy pasiva y que él no estaba por hacer un rol de
rescate, que ella actuara al respecto. Parece que ahora que se acerca el final de la
terapia despliega un patrón de conducta similar.

4-Manoli: Refiere que aunque se sigue acordando del accidente con fallecimiento de
familiares se ve mucho más fuerte y mejor anímicamente y que la experiencia del
grupo le ha servido para ello, sobre todo comunicarse con otros y compartir
experiencias.

5-Silvia: Dice que en el colegio debido a mis llamadas al centro, las chicas que la
acosaban han dejado de hacerlo y le han pedido perdón incluso. Ella destaca que
mantiene un grupo de washap con sus compañeras del grupo donde se expresa con
más libertad. Sus compañeras dicen que por escrito y teléfono parece otra persona
más abierta y directa.

6-Pilar: Dice que venir aquí al grupo le ha servido mucho y que una cosa que ha
aprendido es no responsabilizarse de todo y aceptar que ciertas personas no van a
cambiar y vivir con eso haciendo lo que más le importa y le gusta.

206
2- ¿Cómo os sentí hoy escuchando a las compañeras y a que os mueve eso decirles a
ella? (Regla 2 y 4):

1-Sobre Teresa: Manoli dice que le entristece y le da pena oírla sobre su ex nuera y la
situación de su hijo. Silvia le dice que su ex nuera se aprovecha de ella, ella dice que
sí pero que lo hace por contactar con su nieta. Manoli le añade que parece haberse
dado cuenta de que la reacción del marido parece más sensata para no aumentar los
problemas. El resto del grupo apoya la expresión de Manoli. Incluso ella misma dice
que haber entendido esto ha mejorado la relación con su marido; e incluso nos dice
medio en broma que no quería venir hoy al grupo por el malestar que tenía y que
escuchar esto evita discusiones con su marido.

2-Sobre Amparo: Yo mismo le digo que perder a un hijo y en esas circunstancias es


muy duro y eso me entristece; el resto del grupo le dice lo mismo (validación); pero
que como ella misma dice tiene más hijos y nietos, marido y otros familiares que le
importan, y que aunque es duro vivir con esta pena tiene más personas que le
importan. Ella dice que así es.

3-Sobre María Teresa: El grupo le dice que le preocupa su situación, incluso Teresa se
hecha a llorar cuando la escucha y nos dice que su hijo tampoco pasa la
manutención a su ex nuera y que entiende el disgusto de esta. Sin embargo el grupo
le dice de nuevo que tiene la opción de denunciarlo antes esas amenazas, que les
parece lo más adecuado.

4-Sobre Manoli: Le dicen que le ven realmente fuerte ante las adversidades, ella lo
confirma.

5-Sobre Silvia: Le dicen que en las sesiones la perciben muy insegura, no así en el
washap donde las anima incluso a varias de sus compañeras de grupo. Ella nos
cuenta en voz baja como le va en el colegio, y solo eleva la entonación cuando le
hago un gesto con la mano de hacerlo.

6-Sobre Pilar: Recibe comentarios de fortaleza similares a los de Manoli.

En este punto “provoco la pregunta” de cómo se sienten ante la inminente


terminación de la experiencia de la terapia de grupo y todas dicen que le entristece,
que les gustaría que se demorara la terminación, que aquí hay un buen ambiente de
confianza y que eso les ayuda. A esto le digo que me agrada oírlas hablar de la
confianza que se tienen, que eso sin duda les ayuda, pero también, usando la
“metáfora de aguilucho herido” (un aguilucho herido que es encontrado por un
granjero que le cuida y da de comer tratándolo como un pollo más de su granja,
hasta que un día un naturista lo ve y pregunta al granjero por si puede ayudarle a

207
retomar el vuelo de los cielos, agradeciendo el cuidado ofrecido previamente , y el
granjero le dice que sí pero que se comporta ya de hecho como un pollo, etc.); les
pregunto a todas: “¿Queréis comportaros como pollos o como el aguilucho?”. Todas
responden que como aguiluchos pero algunas de ellas con dudas de si podrán volar
por su cuenta (más Teresa y María Teresa). A ellos le digo, “os doy la oportunidad
durante los próximos 6 meses que lo comprobéis”, diciendo Teresa que eso parece
mucho, con respuesta mía de “compruébalo”. También les añado, dado la alta
frecuencia de alusión a los hijos en las sesiones previas: “¿La labor de un padre o una
madre es preparar a los hijos para que se desenvuelvan por si solos en la vida,
aunque necesiten nuestra ayuda puntual, o tenerlos en casa con 30-40-50 años
dependiendo de nosotros?” Discriminan a la perfección el planteamiento.

SESIÓN Nº 12: 4-12-2017

A esta sesión final acuden nueve personas. María Ángeles, María, Amparo, Pilar,
Teresa, Silvia, Manoli, María Teresa y María Ángeles T.

Usamos las preguntas de cierre del grupo.

1-Lo que habéis experimentado en las sesiones de grupo es parecido a lo que habéis
experimentando en vuestra vida diaria?

1-María Ángeles: Dice que venía nula y que en el grupo progresivamente ha ido
ganando seguridad en sí misma y que eso lo ha puesto en práctica en su vida diaria
cm sus hijos poniéndoles más límites a sus demandas inadecuadas (Equivalencia
funcional: Venir al grupo y hablar de lo que deseaba y hacia le ha hecho ganar
seguridad y fuera de este a puesto más límites).

2-Maria: Dice que sentirse no juzgada ni valorada en el grupo le ha servido para


defender sus derechos en el trabajo y pasar más del supervisor (Equivalencia
funcional: Dentro del grupo no se ha sentido juzgada y valorada y fuera ha
defendido sus derechos laborales)).

3-Amparo: No aislarse y participar en el grupo, hablando de la pérdida de su hijo le


ha ayudado a llevar mejor su vida diaria (Equivalencia funcional: Venir al grupo y no
aislarse, hablando de la pérdida de su hijo y lo que comparte con otros familiares le
ha ayudado fuera del grupo a llevar mejor su vida diaria compartiendo con otros).

4-Pilar: Venir al grupo le ha servido para tener más paciencia y no dejarse llevar ni
arrastrar por una fuerte corriente de agua, esperar a que pase y después actuar
(metáfora que usa). Eso hace en su vida diaria respecto a los familiares con los que

208
tenía conflicto, e incluso ha dejado a tras la ira y la rabia que les tenia (Equivalencia
funcional: Venir al grupo y hablar de sus problemas familiares y recibir opiniones de
los otros le ayuda a llevar con paciencia y más distanciamiento en su vida diaria
estas dificultades).

5-Teresa: Venir al grupo y hablar de sus dificultades le ha ayudado a tener más


paciencia y a tener mejor relación con su marido en su vida diaria (Equivalencia
funcional: Venir al grupo y hablar de sus dificultades familiares le ha ayudado fuera
a tener más paciencia y llevar mejor la relación con su marido).

6-Silvia: Nos relata que ahora tiene otros problemas con otras compañera en el
centro, y no refiere nada de la cuestión expuesta (Equivalencia funcional: Contarnos
sus dificultades con sus compañeras escolares ha hecho que le apoyemos pero ella
fuera por sí misma no ha hecho cambios en esto, salvo que el terapeuta llamo al
centro escolar-¿mando disfrazado?)

7-Manoli: Refiere que antes afrontaba todo sola, que se ha dado cuenta que aunque
es muy fuerte, ella a veces necesita apoyo y ayuda de otros, que eso es el
aprendizaje mayor que ha hecho de la experiencia del grupo (Equivalencia funcional:
Contarnos sus esfuerzos por afrontar sus pérdidas y enfermedades dentro del grupo
le ha hecho aprender dentro y fuera del grupo que a veces necesita ayuda de otros
por muy fuerte que desee actuar-ser).

8-María Teresa: Habla de que el grupo le ha ayudado a desahogarse pero que sus
dificultades en su vida diaria persisten (Equivalencia funcional: Venir al grupo le ha
ayudado a desahogarse pero fuera no ha visto cambios relevantes).

9-María Ángeles T.: Refiere que aunque ha faltado a muchas sesiones de grupo por
enfermedad lo poco que ha venido compartiendo con sus compañeras le sirve para
expresar sus deseos de manera más directa y firme a su pareja (Aunque ha venido a
pocas sesiones grupales en ellas nos ha compartido sus dificultades de pareja y
familia y fuera del grupo se comporta más asertivamente con su pareja ).

2-¿Qué ha sido lo más útil que habéis experimentado en las sesiones de grupo que
os sirva en vuestra vida diaria?

Como la mayoría ya ha respondido con la pregunta anterior (equivalencia funcional)


a esta cuestión, les pido que en una o pocas palabras respondan a esta pregunta

1-María Ángeles: Seguridad.

2-María: Valorarme

209
3-Amparo: Confianza

4-Pilar: Empatía

5-Teresa: Paciencia

6-Silvia: Todas somos unas mosqueteras

7-Manoli: Ánimo

8-María Teresa: Desahogo

9-María Ángeles T.: Valorarme

3-¿Hay alguna cuestión importante que no habéis tenido la oportunidad de


compartir con el grupo a lo largo de todas estas sesiones?

Todas dicen que no. Silvia añade que le preocupa que su hermano tiene que viajar
(21 años) por primera vez en tren y teme que se pierda. Las compañeras le dicen
que eso es poco probable. Parece que Silvia encuentra apoyo afectivo en el grupo
pero que después por ella misma le cuesta más manejarse en su vida diaria.

4-¿Hay algo que os haya resultado molesto o desagradable del trato de vuestras
compañeras a lo largo de las sesiones del grupo?

Todas dicen que no, que la experiencia del grupo ha sido muy positiva para ellas en
relación a sus compañeras.

5-¿Alguien quiere expresar , antes de terminar, que ha supuesto la experiencia del


grupo para ella, algo que quiera añadir a lo que habéis compartido antes?

María Ángeles nos dice que haber compartido con sus compañeras, abrirse al grupo
le ha ayudado a estar más firme en su vida. Pilar y seguido el resto del grupo apoyan
que compartir estas experiencias es quizás lo que más les ha ayudado a todas.

Algunas de ellas le gustaría participar en nuevas ediciones de grupo para fortalecer


los cambios (María Ángeles), tener más sesiones debido a que por su enfermedad
faltó a muchas sesiones (María Ángeles T.) y dos de ellas para tener otras
oportunidades para lograr cambios (María Teresa y Silvia).

Después nos quedamos compartiendo unos dulces que llevaron y nos despedimos
deseándonos los mejores parabienes mutuamente y de nuevo agradeciéndonos la

210
ayuda prestada. Incluso María me pregunta que como me siento yo (Juan José) al
llegar el final de la terapia. Le respondo ante todas que por un lado triste de que
haya llegado el final, ya que les he cogido aprecio y cariño y por otro satisfacción y
alegría al comprobar como a todas o casi todas la experiencia grupal les ha ayudado
para su vida.

Problemas/Progresos Equivalencia funcional Problemas


fuera del grupo (Vida (CCR1)/Progresos (CCR2)
diaria) dentro del grupo

Grupo Martes-USMC de Úbeda

A este grupo son convocada 11 personas y se presentan 5 a la primera sesión. Las


6 personas asistentes son todas mujeres entre los 40-50 años. La mayoría de las
integrantes de este grupo habían participado hace 3 meses en Terapia de Grupo ACT
previa y por diversas circunstancias repiten de nuevo en esta modalidad de FAP de
Grupo.

SESIÓN Nº 1: 5-9-2017

Al igual que en los grupos anteriores se les presenta los dos papeles de trabajo en el
grupo (actriz/directora) y se inicia la sesión presentándose, refiriendo que les trae al
grupo y qué esperan del mismo. Se va modelando ambos papeles usando la “hoja
simple”. Los cuestionarios se les comenta para hacer en casa y entregarlos en la
próxima sesión.

1-Juani: Refiere que sus mayores problemas en su vida diaria es la preocupación


frecuente que tiene por uno de sus hijos con esclerosis múltiple y cómo evoluciona
este; además de que su marido le deja todo el cargo de la educación y que de vez en
cuando se irrita con ella sin venir a cuento, porque, dice está diagnosticado de un
TDAH en adultos. Le gustaría llevar todo esto mejor.
.”Diagnóstico Distimía Depresiva”

2-Nati: Dice sentirse bloqueada y no poder hacer todo lo que quiere; a raíz de
quiebra de cooperativa de aceituna donde habían invertido todos sus ahorros
familiares de hace años, donde dice ha habido una estafa y han engañado a muchos
socios con grandes pérdidas económicas. Añade que antes no se quería creer que
esto había pasado y se engañaba a sí misma, ahora ve las consecuencias de todo
esto y se viene abajo. Le gustaría llevar esto mejor también.

211
.”Diagnóstico Distimía Depresiva”

3-Paqui: Historia previa de maltrato laboral con un largo proceso judicial. Ahora
refiere son 7 hermanas y solo ella se hace cargo de su madre que refiere le dio un
ictus y tiene delirios con un vecino médico. Añade que está muy irritada con sus
hermanas que se evaden de compartir la situación con su madre. Le gustaría llevar
esto también mejor.
.”Diagnóstico Distimía Depresiva”

4-Maria Antonia: Dice que se estaba recuperando de una depresión previa pero
ahora una sobrina por parte de su marido se ha operado de un cáncer de mama,
tiene mucha sobrecarga familiar (la sobrina) y ella se ha convertido en su paño de
lágrimas, descargando todas sus preocupaciones con ella, y que ella a pesar de
insistirle en que debe resolverlo con los familiares con los que convive, no toma
decisiones, preocupándola a ella reiteradamente con sus problemas y a ella le cuesta
poner límites a esto. Le gustaría poner límites a esta situación.
.”Diagnóstico Distimía Depresiva”

5-Rosario: Dice que ella misma es muy indecisa y cobarde, que por ejemplo en el
reparto de cuidado de su madre con otros hermanos le cuesta gestionar esto cuando
llega el turno de cuidados de los hermanos que se ponen evasivos y ella tiene que
insistirles, pero teme el conflicto con ellos si se pone más firme. Le gustaría ser más
decidida y valiente con esto.
.”Diagnóstico Distimía Depresiva”

En el modelado de los papeles actriz/ directora en la sesión de hoy recabamos lo


siguiente como resumen general de las observaciones de todos/as; incluidos las
propias referenciadas:

1-Juani: Dice darle “caloradas” aquí en la sesión cuando habla de la incertidumbre


del futuro del hijo, que eso lo vemos en su inquietud en la silla (CCR1). Añade que el
psicólogo que le atiende en citas individuales (otro distinto al de esta terapia de
grupo) le ha dicho que está rehuyendo ciertas cosas y que eso le ha dado por pensar,
y que se relaciona con el conflicto de su marido (CCR3); y que a partir de ahora va a
poner límites si le falta el respeto a ella (potencial CCR2). El resto del grupo apoya
esto.

2-Nati: Participa poco en el arranque del grupo (CCR1) en relación a sus “bloqueos”.
El terapeuta le anima a hablar de sus sentimientos y expresar lo que opina sobre lo
que le han hecho los de la cooperativa (evocación), que nos lo cuente. Dice estar muy
indignada, pero también muy triste (CCR2), que se calla demasiado para evitar
conflictos con otros; se identifica en esto con otras compañeras del grupo dice; que

212
se ha engañado a sí misma “cómo si todo esto no hubiera ocurrido” y que ahora está
viendo que sí, que ha ocurrido (CCR3) y se hecha a llorar diciendo que ahora ve la
realidad de todo esto aunque es muy triste (otra CCR2).

3-Paqui: Todas observan y se lo hacen saber que cuando comienza a hablar de sus
hermanas, se va alterando, subiendo el tono de voz, interrumpe los comentarios de
las compañeras y no deja que le devuelvan su opinión (CCR1). Reconoce que esto es
cierto y que sus allegados en su vida diaria le dicen que no deja hablar a otros; ella
se justifica diciendo que sabe lo que le van a responder; pero sus compañeras le
dicen que no tiene porqué saberlo, etc. (CCR3). A partir de estas observaciones
modera su intervención y dice “si tengo que escuchar más” y se pone a escuchar algo
más lo que le dicen sus compañeras (CCR2).

4-Maria Antonia: Permanece muy pasiva ante las interacciones de sus compañeras,
solo interviniendo cuando el terapeuta en esta sesión lo solicita (CCR1). Le plantean
que así con su sobrina, debe tomar decisiones (potencial CCR2), ella parece acatar,
sin dar su opinión (otra CCR1). Dice que hace todo esto para evitar conflictos con
otros a pesar de pasarlo mal (CCR3) en la línea de otras compañeras del grupo.

5-Rosario: También permanece muy pasiva en parte de la sesión y cuando nos relata
sus dificultades de su vida diaria no le terminamos de comprender, pues cuenta
cosas pasadas como si fueran actuales (CCR1), reconociendo que ella mezcla pasado
y presente y que esto nos confunde (CCR3). Se le insiste en que nos cuente progresos
y problemas presentes, y si habla del pasado que nos los diga (potencial CCR2).

La sesión de grupo se alarga 20 minutos más de lo previsto, lo que puede indicar que
tienen interés en trabajar con esto. El terapeuta cierra la sesión refiriendo que
parece que el tema de callarse vs expresar es relevante y que posiblemente “evocar”
(crear ocasiones) para que expresen sus temores y necesidades, con mucho respeto
de los que escuchamos, pueda ser muy importante en este grupo.

El terapeuta después a solas (Juan José, que escribe este capítulo), tras marchar el
grupo de la sala, y quedarse a solas unos minutos apagando el aire acondicionado y
cerrando la sala experimenta la sensación de “sentirse perdido”, con pensamientos
del tipo: “no nos hemos centrado suficientemente en los aspectos relevantes de la
terapia, etc.” y con necesidad de “organizar esto más” (posible T1-CCR1). Se dice
después en casa que “organizar demasiado” puede ser una forma de evitar el
malestar propio y perder el contacto con lo que ofrece el grupo realmente (T1-CCR3);
y que lo mejor es que, aunque con la FAP en mente, permita que el grupo fluya a su
ritmo (T1-CCR2).

213
.Trabajar intercambiando experiencias con otros terapeutas que trabajen FAP que
actúen como supervisores de nuestra actividad, además de contrastar nuestras
experiencias con los participantes de los propios grupos es muy importante como
veremos al final de este capítulo donde Juan José Ruiz Sánchez supervisa con su
colega José Manuel Sánchez Olid aunque sea de manera puntual y no sistematizada,
debido al ritmo de vida y ocupaciones de cada cual. También se ofrece como
supervisor nuestro colega Francisco Trillo

Igualmente el intercambio de experiencias en grupo de terapeutas también actúa


como ocasiones de supervisión mutua. De esta manera podemos tener
supervisiones de pares (supervisado y supervisor) o supervisiones en grupos de
terapeutas donde todos actúan como supervisados y supervisores; básicamente en
la línea de los dos papeles de “actores y directores” de los propios miembros de los
grupos FAP. Estas formas de supervisión son muy relevantes en el trabajo de los
terapeutas que trabajan con FAP (Callaghan, 2006a, 2006b). Al final de este capítulo
expondremos por qué esto es tan importante para el trabajo con FAP individual o
grupal.

SESIÓN Nº 2 : 12-9-2017

Acuden a esta sesión Loli (que no vino a la primera), Rosario, Antonia, Paqui y Nati.
Juani excuso su falta previamente por viaje a Portugal.

Como en el resto de grupo se introduce el tema de las equivalencias funcionales o


parecidas de lo que hacemos en distintos momentos de la vida y situaciones
actuales y las consecuencias de las mismas en esos momentos y situaciones de la
vida.

Se recaban dos grupos de cuestionarios iniciales (ver tablas de datos abajo).


Seguimos modelando los dos papeles de actor-director en relación a discriminar o
tomar conciencia de las equivalencias funcionales progresivamente (moldeamiento)

Mis notas para la sesión de hoy son estas:

1-Rosario: Nos relata cómo evita llamar a su hija que lo está pasando mal porque
esta le ha dicho que no sea tan pesada con ella y que se tiene que resolver sus
problemas por ella misma; un hijo le dice lo mismo (Algunos de sus problemas en su
vida diaria). En la sesión comienza a dar detalles de esto, diciendo que todo esto es
muy complejo para ella, teniendo el terapeuta que pedirle que resuma para dar
tiempo a compañeras (CCR1); además cuando le pregunto si todo esto le acerca a lo

214
que ella desea, ser más decidida, dice que no lo sabe (CCR3). Aquí opto por no seguir
con esto. Cuando hacemos ronda grupal del impacto de su relato como actora aquí
y ahora en el grupo (como directoras) le refieren globalmente que quizás es
demasiado insistente (pesada) y que puede comunicarse con su hija sin excederse en
dirigirla (CCR3 alternativa).

2-Loli: Viene al grupo por problemas depresivos, de fibromialgia y sus consecuencias


y relacionales, sobre todo con su madre de 86 años. Nos relata que su madre le
chantajea de diversas maneras con sus salidas de casa, reclama con frecuencia su
atención, pero que es incapaz de decirla nada porque le da mucha lástima
(Problemas en su vida diaria). Le pido que nos diga cómo se siente aquí contándonos
esto y nos dice que siente rabia (equivalencia funcional y contacto con expresiones
personales), pero dice que no sabe qué hacer, que por un lado prefiere callarse
(CCR1). Las compañeras experimentan también rabia y la sensación de que la
chantajea animándola a hablar con la madre, e incluso Nati refiere como hizo esto
en un caso similar con sus padres. Loli se calla ante estas expresiones del grupo
(CCR1).

3-Antonia: Refiere que ella ha trabajado de costurera durante muchos años pero
que ahora ya no está para echar tanto tiempo en esto, que a veces por no decir que
no (por ejemplo a petición de sus sobrinas para que le hagan vestidos de gitana para
la feria) tiene problemas con su marido que se queja de que entonces ella no podrá
acompañarle por hacer este trabajo (Problemas en su vida diaria). Dice que ella no
tiene estudios y que por eso se calla ya que se siente inferior a los demás (CCR3 y
CCR1). El grupo y el terapeuta le animan a expresarse aquí, diciendo ella que se
siente abrumada con todo esto, explicando con detalle su situación (sin necesidad de
estudios se le dice y que lo hace muy bien por cierto) (CCR2).

4-Paqui: Refiere que ha descubierto hace poco que el hijo consume marihuana y que
eso le preocupa mucho que ha hablado con este recientemente, diciéndole que ha
sido una cosa puntual, pero que ella no se fía del todo; y que esto se lo oculta al
padre porque este está muy delicado y un disgusto sería fatal para este (Problemas
en su vida diaria y CCR3). Se pone a llorar tras relatar esto diciendo que cuando está
mal se aísla (CCR1). El grupo entiende su preocupación pero le anima a seguir
pendiente del hijo como viene haciendo. Hoy en el grupo monopoliza menos el
tiempo y está más pendiente de sus compañeras escuchando sus comentarios, ya
que el llanto es puntual (CCR2).

5-Nati: Nos refiere que sigue con la espina clavada de la gran pérdida económica
sufrida, pero que ahora ya es capaz de hablar de esto con su marido, ya que ambos
evitaban el tema antes y eso parece acercarlos más entre sí (Problemas y progresos
en su vida). En el grupo concreta algo más sobre sus progresos personales a pesar

215
del dolor (CCR2) y esto le pone en mejor conexión con nosotros, le digo esto (CCR3).

Notas sobre esta sesión: En el grupo se evoca en su dinámica de hoy, y todas están
de acuerdo en ello en el resumen final que les pido en la sesión preguntándoles que
se ven en común, que es frecuente en este grupo que por aprendizaje de roles y
experiencias personales previas casi todas evitan el contacto con sus propias
necesidades y la expresión de las mismas en contextos relacionales redundando eso
en sus “depresiones”. Este es un punto a evocar en próximas sesiones y a moldear
alternativas.

SESIÓN Nº 3 : 19-9-2017

Seguimos un delineamiento similar al del resto de los grupos, dedicando más tiempo
en estas primeras sesiones al moldeamiento de las 5 reglas de encuadre del grupo
FAP con algunos ejercicios de evocación (apertura puntuada de 0-10 y pantalla hacia
atrás).
Acuden a esta sesión 7 personas; alguna que habían faltado a las primeras sesiones
por diferentes motivos (Mariani).
De manera resumida elementos de esta sesión son:

1-Juani: Nos refiere que en su vida diaria es más asertiva con su marido respecto a
colaboración en casa y que eso le ha funcionado con este. En consulta se muestra
directa dando opiniones a las compañeras (CCR2) ; y recibe de ellas que le ven más
fuerte y valiente, que eso dice ella agradarle pues muchas veces se ve cobarde
(CCR3).

2-Loli: Nos vuelve a contar que en su vida diaria su madre le sigue chantajeando a
pesar de verla con dolores. En el grupo dice varias veces que no sabe qué hacer
(CCR1). El grupo le dice que debe poner más límites a su madre (Regla V y CCR3);
pero ella se calla (CCR1).

3-Nati: Nos dice que esta semana está muy triste ella y su marido. En el grupo casi
rompe a llorar, todos le dicen que es muy duro la pérdida que ha sufrido de
inversiones, años de trabajo y esfuerzo (Regla IV). Ella cabizbaja en la sesión, le
cuesta hablar (CCR1). Ella expresa que contagia negativamente al grupo, y que eso
no le gusta. En este punto recibe del terapeuta una interpretación y del grupo apoyo
que ella termina agradeciendo. En concreto le digo: “Parece que tu cargas con todo
el dolor como haces con tu marido, eso te lleva a aislarte y a separarte de quienes te
importan; si haces esto en el grupo y en tu vida entonces pierdes oportunidades de
acercarte, aún con el dolor a quienes te quieren y te importan, y aquí tú eres
importante para nosotros” (Regla IV de nuevo y CCR3).

216
4-Mariani: Nos cuenta que en su vida diaria está sobrecargada de cosas, que por no
discutir con el marido, pasa y que eso le tranquiliza. Sin embargo sus compañeras y
yo le vemos que está con las lágrimas saltadas, se cambia de postura, mueve los pies
(CCR1) y se le dice que no coincide lo que dice con cómo esta (CCR1 y Regla 1). Ella
admite que lo está pasando muy mal y que la ayuda de sus compañeras para hablar
de esto le ayuda de alguna manera (potencial CCR2) expresando esto aquí (Regla IV
y V).

5-Rosario: Nos cuenta que ha hablado con su hija que está en trámites de separación,
que va aceptando que es su decisión y que ella no puede obligar a nadie a funcionar
por su criterio y que esto le proporciona tranquilidad. Recibe del grupo que la ven
cambiada, más serena y tranquila en la sesión (Regla IV, CCR2). Ella dice que
efectivamente se siente mejor aquí y en su vida diaria con esta aceptación (CCR3).

6-Paqui: Nos cuenta que en su vida diaria su marido insiste en que ella debe retomar
los pleitos jurídicos con las personas que le maltrataron laboralmente y que ella le
dice que no a pesar de las continuas reiteraciones de este; que teme aún que su hijo
mayor consuma droga y que está de mudanza; y que todo esto lo lleva paso a paso,
aunque se siente sola y cansada. En el grupo se le percibe tensa hablando de esto
(Regla I), aunque se le dice que eso de hacer las cosas una a una quizás sea lo mejor
en sus circunstancias (Regla V) cosa que dice ella misma que sí

7-Antonia: Refiere que se encuentra muy cercana a sus familiares y que eso le
satisface. Todas le dicen que le ven con cara de felicidad, que le ven mejor (Regla I y
CCR2) y que puede seguir haciendo esto que le funciona (CCR3, Regla V). Ella
agradece los cumplidos y dice que efectivamente las cosas las lleva así y que eso es
lo que quiere (CCR2, Regla IV y Regla V).

SESIÓN Nº 4: 26-9-2017

Se presentan a la sesión 6 personas: Nati, Paqui, Antonia Juani, Loli y Nieves (nueva
incorporación).

Se inicia la sesión valorando el grado de contacto íntimo con personas de su entorno


en la última semana (0-10) y el deseado para la sesión de hoy.

A)-Grado de intimidad fuera/deseada para la sesión de hoy:

1-Nati: En su vida diaria da al conjunto un 7, ya que con su marido e hijas se viene


sintiendo cercana pero no con otros socios de la cooperativa aceitunera que tratan

217
de desanimarla con sus reclamaciones económicas. En el grupo dice desear llegar a
una apertura e intimidad con sus compañeras de 10.

2-Paqui: En su vida diaria le da un 4 ya que se siente sola y apartada de marido e


hijos que no la comprenden. En el grupo dice desear llegar a una apertura e
intimidad con sus compañeras de 10.

3-Antonia: En su vida diaria se da un 9 al sentirse muy cercana a su marido e hijos.


En el grupo dice desear llegar a una apertura e intimidad con sus compañeras de 10.

4-Juani: En su vida diaria se da un 7 por que a su marido e hijos se siente muy


cercana pero no así con su madre a la que da un 3. En el grupo dice desear llegar a
una apertura e intimidad con sus compañeras de 10.

5-Loli: En su vida diaria se da un 5 ya que se siente cercana a su marido pero esta


semana más distante de su madre e hijos que dicen no entender la situación de ella y
le presionan para que siga con la abuela en casa. En el grupo dice desear llegar a
una apertura e intimidad con sus compañeras de 10.

6-Nieves: Básicamente nos cuenta que su hija de 19 años la desobedece y los límites
que pone ella lo boicotea su marido que dice que la hija tiene que hacer lo que quiera
(discuten sobre normas educativas respecto a los estudios que esta no desea). Esta
semana la hija con el apoyo de su padre desobedeció quedarse en casa castigada (le
da un 4 a esto) .En el grupo dice desear llegar a una apertura e intimidad con sus
compañeras de 10.

B)-Problemas/Progresos en su vida diaria: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

1-Nati: Refiere que sale poco de casa por su tristeza, que le da muchas vueltas a las
pérdidas económicas, que se quiere olvidar de esto pero no puede y se pone además
ansiosa.

2-Paqui: Refiere que echa de menos a su padre fallecido meses atrás que era un
consuelo ante sentirse sola.

3-Antonia: Se ha enterrado de enfermedad grave de una cuñada y ha está dándoles


muchas vueltas a esto con más ansiedad y tristeza esta semana, aunque eso no le
aparta de su marido e hijos.

218
4-Juani: Esta semana siente el nido vacío en casa la marcharse su hijo a estudiar
fuera; además lo llama con frecuencia para ver como está y calmar pasajeramente
su preocupación (el hijo tiene diagnosticado enfermedad degenerativa ahora
estabilizada).

5-Loli: Refiere que su madre sigue con muchas exigencias y manipulaciones y que
ella solo tiene momentos de descanso e intimidad con su marido en el dormitorio y
aun así su madre pone el oído y le pregunta sobre que hablan o ríen a solas.

6-Nieves: Refiere fuerte discusión con la hija por engañarla con tema de estudios,
poniéndole ella castigo de no salir con el novio el fin de semana y el marido
contradecirla y decir que tiene mucha edad como para obligarla a estos castigos. Ta
situación a solas con la hija llevo hasta que se pegaran ambas, contándoselo al
marido y este, dice no hizo nada.

C)-Regla 1: Observación de CCRS: (“Los demás como directores/as”):

1-A Nati la perciben triste pero más serena, comunicativa y tranquila que en la
sesión anterior. Le dicen que habla y se expresa más al grupo (CCR2).

2-A Paqui la perciben con tristeza y pena pero que al contrario de lo que dijo al inicio
que no confiaba en nadie se está abriendo más al grupo (CCR2).

3-A Antonia la perciben preocupada y tensa en la sesión al hablar de su cuñada,


aunque le dicen que en general es positiva y cercana (CCR2).

4-A Juani le ven rostro de estar hoy más triste y baja de ánimo.
5-A Loli la perciben un poco más animada y sonriente a pesar de seguir con los
problemas con su madre (CCR2).

6-A Nati a pesar de lo duro de lo que cuenta con marido e hija, le dicen que la ven
abierta, comunicativa y tranquila para lo que tiene (CCR2).

D)-Regla 2: Provocar CCRS: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

En este punto se le presenta al grupo ejercicio para provocar CCRS de “la pantalla de
cine con escenas hacia atrás cada vez más veloces hasta parar en un punto de
repente. Pretendemos que se conecten con CCR1 bajo control aversivo en vez de

219
evitarlas y exponerlas en el grupo para poder trabajarlas. También se les va
preguntando como se sienten aquí y ahora con estas experiencias.

1-Nati: La escena que visualiza en su pantalla de cine es verse hablando con marido
e hijas de hacer proyectos para todos de futuro, pero que ahora esto está más
limitado .Se hecha a llorar y cuenta cosas que deseaba para el futuro de las hijas que
ahora no van a poder realizarse.

2-Paqui: La escena que visualiza es verse en el hospital con su padre moribundo (se
echa a llorar) y como le hacía compañía a ella.

3-Antonia: Visualiza a su cuñada con el Alzheimer y eso e pone ansiosa pues puede
morir tal como evoluciona.

4-Juani: Se ve en la playa a gusto con el marido e hijos pero dice ahora la realidad es
que el hijo no está en casa (se le saltan las lágrimas).

5-Loli: Se ve acostada junto con su marido al finalizar el día y relajada por poner
distancia con su madre.

6-Nieves: Ve la discusión del pasado viernes con su hija en la que se pegaron. No le


observamos que se altere al relatarlo, aunque ella dice que lo lleva por dentro.

En este punto señalo (regla 5) que parecen todas hablar de pérdidas y sentirse
impotentes y que eso les lleva a realizar acciones de evitación (quedarse en casa,
rumiar, comunicarse menos con el entorno, etc.) por lo que refieren; y que les voy a
proponer un ejercicio para que “conecten con sus necesidades personales” y
hablemos de como encauzarlas en acciones para las próximas semanas. Acceden a
ello. Realizamos “ejercicio de meditación de la respiración” y en mitad del mismo,
paro el ejercicio, les digo que permanezcan en silencio y se pregunte pausadamente,
dejando reposar las preguntas: “¿Qué es lo que más necesito?” y “¿Cómo quiero
poner esto en marcha en mi vida, dar pasos para llevarlo a cabo?”. Estas respuestas
las considero potenciales CCR2 por las que las pongo en el siguiente apartado.

E)-Regla 3: Reforzar progresos observados en la misma sesión de CCR2: (“Los demás


como directores/as”):

1-Nati: Dice que necesita irse de Úbeda lejos alejarse de esta ciudad donde le ha

220
pasado esta pérdida económica, pero que no puede hacer eso (¿CCR1 o CCR2?). Para
moldear esa clase de respuesta se le pregunta. ¿Y te puedes ir fuera de Úbeda
aunque sea temporalmente? Dice que sí, que en los próximos días puede irse sola
unos días con su hermana de Valladolid.

2-Paqui: En una línea similar a Nati, dice que irse sola fuera de Úbeda sin familia
ninguna; pero que eso es imposible (¿CCR1 o CCR2?). Se le hace una pregunta similar
a Paqui, contestando que puede darse un paseo por Jaén con su marido y familia y
que eso le haría salir más de casa y compartir otros momentos con los suyos.

3-Antonia: Necesita desbloquearse y dejar de rumiar tanto, comunicarse más y


expresar más lo que siente y desea (potenciales CCR2). Se le pregunta que cuando ha
estado menos rumiativa y nos dice que cuando comparte conversaciones y
actividades con su familia.

4-Juani: Necesita manejar su sensibilidad, enfrentar sus miedos (potencial CCR2). Se


le pregunta sobre cómo enfrentar esto paso a paso “haciendo espacio a su malestar”
(al estilo ACT) y dice que en vez de llamar tanto al hijo a ver como está, llamándolo
algo menos.

5-Loli: Necesita más espacio de intimidad y expresar su opinión de esto a sus hijos
(potencial CCR2).Se le dice que como puede canalizar y llevar a cabo esos espacio s
de intimidad y dice que el primer paso es hablarlo con sus hijos esta semana que
viene.

6-Nieves: Necesita más apoyo y si no lo tiene defender y expresar sus opiniones y


deseos (potenciales CCR2). Igualmente se le plantea como llevar eso a cabo, y dice
que buscar el momento para hablar con la hija de esto primero.

Nota: Es importante generar ocasiones para evocar respuestas alternativas y que la


pongan en marcha en sus vidas y nos cuenten cómo funcionan en base a su
experiencia y –observar- como esto “se refleja” (equivalencias funcionales) también
en las sesiones de grupo (CCR2).

Una mayoría de mujeres del grupo apuntan a la necesidad de expresar y comunicar


emociones y sentimiento de manera más firme y directa.

F)-Regla 4: Influencias reforzantes mutuas en el grupo: (“Cada uno/a como


actores/actrices”). Esto se recoge al final de la sesión con las preguntas de cierre
sobre utilidad de lo experimentado en la sesión para sus vidas diarias, lo más
positivo y lo más desagradable o pendiente de abordar en la sesión y sesiones
próximas:

221
Básicamente todas coinciden en que van expresando más cosas difíciles evitadas o
calladas al y en el grupo.

G)-Regla 5: Interpretaciones funcionales a moldear y orientaciones dadas por el


grupo: (“Los demás como directores/as”):

No alcanzamos en esta sesión a elaborar con detenimiento este punto; salvo decirse
todas que abrirse a comunicarse sus deseos, anhelos y penas les ayuda en su vida
diaria. Hay que ver esto con más detenimiento tanto dentro como en lo que cuentan
fuera del grupo. Preguntar en la próxima sesión en que notan que venir a las
sesiones les sirve en su vida diaria y que temas difíciles les cuesta aún exponer en el
grupo.

SESION Nº 5: 3-10-2017

Acuden a esta sesión 5 personas: Loli, Nieves, Juani, Paqui y Rosario.

A)-Problemas/Progresos en su vida diaria: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

1-Loli: Expresa que ha tenido febrícula toda la semana y que esto ha coincidido con
cumpleaños de su madre. La familia le propuso celebrarlo en su casa, accediendo
ella con el compromiso previo de que le iban a ayudar en la preparación, juntando a
17 personas, y terminando ella haciéndose cargo de nuevo de casi todo. Ella accede
a disgusto y se calla. Reconoce que este tipo de patrón de funcionamiento se repite a
lo largo de su vida.

2-Nieves: Nos relata que su hija le pide perdón y que al proponerle ella hablar con la
tutora para retomar su enfoque de estudio, le dice de nuevo que no, que hable ella,
ante la pasividad de su marido. Reconoce que ella espera desde hace años que su
hija se haga responsable y su marido la apoye sin resultado alguno.

3-Juani: Nos comparte que esta semana ha llamado menos a su hijo sin producirle
más ansiedad. Le preocupa ex novia del hijo que le acosa por teléfono a este.

4-Paqui: Refiere que se han reunido con todos sus hermanos y han expresado su
opinión respecto al cuidado de su madre y su herencia, exponiendo ella su punto de
vista con claridad.

222
5-Rosario.: Nos cuenta que su hijo se va a trabajar a Múnich y se ha visto con él en
Granada y otros familiares estando en sintonía con ellos.

B)-Regla 1: Observación de CCRS: (“Los demás como directores/as”):

1-Loli:Todas observan que Loli a pesar de decir que está bien, le ven cara de disgusto
y parece cabreada, cosa que esta admite; ya que no expresó sus deseos. A esto le
digo que si su “febrícula” se podía relacionar con esto, y dice que sí. Durante la
sesión le vemos cara de malestar y nerviosa, se mueve en la silla, etc.

2-Nieves: Vuelve a contarnos que espera que los demás (hija mayor y marido
cambien) y a esto le digo: “¿Desde cuando llevas esperando que lleguen los “reyes
magos”? y ¿Qué dice tu experiencia?, respondiendo que si los otros no cambian debe
hacerlo ella.

3-Juani: Le dicen que le ven menos triste que la semana pasada aunque se le nota
algo preocupada, admite que es así.

4-Paqui: Nos cuenta con mucho detenimiento casi media hora la reunión con sus
hermanas, insistiéndole yo que hay más personas en el grupo que desean hablar, a
lo que me responde que necesita hoy desahogarse y continua con su relato; cosa que
dejo lo haga sin volver a interrumpirle.

5-Rosario: Le vemos más tranquila, Juani le dice que explica las cosas con mayor
coordinación y se sigue bien el hilo de lo que dice. Ella a esto dice que antes estaba
como bloqueada con tantas cosas y ahora lo tiene más claro todo.

C)-Regla 2: Provocar CCRS: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

Les planteo ejercicio de escribir con su mano no dominante sus mayores


necesidades y miedos.

1-Loli: “Lo que más necesito es dialogar con mi familia. Mis mayor miedo es el
enfado de mi madre”.

2-Nieves: “Lo que más necesito es que me dejen tranquila y que me hagan caso. Mi
mayor miedo es enfrentarme a los demás”

3-Juani: “Lo que más necesito es cariño y reconocimiento. Mi mayor miedo es que
mi hijo enferme y quedarme sola en casa”

223
4-Paqui: “Lo que más necesito es ser querida. Mi mayor miedo es perder a mi hijo
Raúl”

5-Rosario: “Lo que más necesito es que me comprendan. Mi mayor miedo es no


valerme por mi misma”.

En la sesión de hoy solo nos da tiempo a que compartan que hacen cuando aparece
ese miedo, coincidiendo todas que les limita y les hace sentir menos protagonistas y
personas. Algunas de ella evitan exponer sus opiniones ante esos miedos (Loli),
otras se retiran a dormir (Nieves); otras evitan quedarse sola en casa por si ocurre
alguna noticia desgraciada (Juani); otras están muy pendientes de sus hijos (Juani
antes más, y Paqui ahora) o bloquearse (Rosario). Retomaremos esto en sucesivas
sesiones. Es necesario retomar esto junto con sus necesidades en próximas sesiones,
ya que apuntan al control/contingencias funcionales de tipo aproximativo y evitativo
de sus vidas y la relación con aspectos interpersonales (FAP y ACT**)

D)-Regla 3: Reforzar progresos observados en la misma sesión de CCR2: (“Los demás


como directores/as”):

Tampoco nos da hoy mucho tiempo en detenernos en esto; aunque dicen que a
Juani le ven menos triste y a Rosario más coherente y conectada con el grupo.
Apunto por mi parte que Paqui ha tomado una serie de decisiones con firmeza
respecto a un asunto que le preocupa.

E)-Regla 4: Influencias reforzantes mutuas en el grupo: (“Cada uno/a como


actores/actrices”):

Este es otro aspecto casi no tocado hoy, aunque todas afirman al final que venir les
ayuda en genera, diciendo Paqui que ella sale reforzada en la decisión con sus
hermanos aunque sea dolorosa.

F)-Regla 5: Interpretaciones funcionales a moldear y orientaciones dadas por el


grupo: (“Los demás como directores/as”):

1-Loli: A Loli le digo usando una comparación histórica que para hacer ciertos
rituales o ceremonias religiosas los incas hacían sacrificios humanos, si ella se ve en
ese caso, y dice que sí. Esto es seguido (por mí y otras compañeras del grupo) de que
esas reuniones tienen mucho de paripé si no se atienden a sus necesidades y ella no

224
la expresa, aunque hacer eso puede tener el riesgo de que le retiren el contacto. A
estos comentarios pone cara de disgusto, diciendo que es verdad.

2-Nieves: Usé con ella la historia de los reyes magos, preguntándole que si son los
demás los que tienen que cambiar, y su experiencia le dice que no. ¿Qué opciones te
quedan? Dice que actuar ella de otra manera.

3-Juani: No se le dice nada de este punto

4-Paqui: Le digo que parece que expresar tus necesidades a tus hermanos en el
asunto de tu madre y herencia te hace sentir más firme. Dice que sí, que sale hoy del
grupo convencida de que lo que ha hecho es lo adecuado. Después dice que muchas
veces es mejor callarse. Le digo que depende de cada circunstancia, que no
buscamos una regla para todo sino que ella aprenda de su experiencia en cada
momento y circunstancia.

5-Rosario: Nos llama la atención que al preguntarle como maneja su miedo llega a
de nuevo a bloquearse en la sesión, diciendo que no sabe explicarse. Sin embargo le
decimos que sus decisiones de tomar distancia con su hermano, por lo que cuenta,
le hace ir mejor, a lo que dice que así es.

SESION Nº 6: 10-10-2017

Acuden a la sesión 6 personas: Antonia, Nati, Paqui, Nieves, Loli y Juani. Hoy en vez
de comenzar por compartir como les ha ido durante la semana y que han hecho al
respecto (“vuestras decisiones”) comenzamos por prestar atención a otras reglas
FAP menos trabajadas en las sesiones anteriores, en concreto la Regla 3: “¿Qué
progresos notáis en vuestras compañeras desde la primera vez que la conocisteis en
el grupo hasta ahora?” y la Regla 5 que la formulo como: “¿A qué pensáis que se
deben los problemas de vuestras compañeras y cómo podemos ayudarla y ayudarse
ellas a sí mismas?”

225
A)- Regla 3: Reforzar progresos observados en la misma sesión de CCR2: (“Los demás
como directores/as”):

1-Antonia: Le dicen que se ha ido abriendo al grupo, que participa más y que la ven
relajada y a gusto en el mismo. Ella asiente.

2-Nati. Que habla más y que tiene mejor aspecto. Ella dice que sí, pero que la
procesión va por dentro.

3-Paqui: Le dicen que se expresa más y que al principio decía que no quería saber
nada de nadie ni confiaba en nadie y que se ha ido acercando, participando y
tomando confianza con todas. A estos comentarios sonríe.

4-Nieves: Lleva menos sesiones que las demás y aún le falta tomar decisiones en su
vida diaria le dicen. Ella dice que se culpa de todo, tras culparla su marido por la
mala relación con su hija mayor.

5-Loli: La perciben más firme y muy participativa en el grupo.

6-Juani: La ven resolutiva y que toma decisiones importantes en su vida diaria, a


pesar de sus dificultades con la enfermedad de su hijo.

B)- Regla 5: Interpretaciones funcionales a moldear y orientaciones dadas por el


grupo: (“Los demás como directores/as”):

1-Antonia: Le dicen que la ven muy sensible y buena persona y que en su familia
funcionan de manera muy unida y que ese es un soporte muy importante para ella.
Es una interpretación muy genérica y en parte “de la psicología de los rasgos” pero
apunta a un aspecto funcional que es la disposición de una importante red de apoyo
familiar la que ella forma parte. Le dicen que continúe en esa sintonía con su familia.

2-Nati: Le dicen que es muy duro lo que vive de las perdidas (validación) pero que la
ven que se arregla más y aprovecha las oportunidades que surgen en su familia para
compartir con ellos y que eso le ayuda a llevar el dolor mejor. A esto le añado yo que
veo que tiene espacios y momentos para su dolor y otros para compartir con las
personas que la quieren y a las que quiere de manera activa. Que siga en esa línea
3-Paqui: Le dicen que toma decisiones, que aunque algunas no salgan como desea
respecto a sus familiares, ella ha conectado mejor con sus valores y que lo tiene muy
claro; todo en relación a la posición respecto al cuidado de su madre y las opiniones
de sus hermanas. Le decimos que siga siendo fiel a sus valores.

4-Nieves: Recibe interpretaciones dualistas mentalistas-conductuales, por un lado

226
que tiene baja autoestima y que por eso se deja llevar por las opiniones de su marido
e hija mayor negativas y que tiene que hacerse valer ante ellos. Pregunto al grupo
que cómo se hace esto, y le pregunto a ella si con su marido antes las cosas eran
distintas y mejores, diciendo que sí que entiende que debe estar muy cansado de sus
continuos malestares. Le planteo si podría probar a hablar con él de esto en el
sentido de: “Llevo mucho tiempo con malestar y pareces muy cansado de toda esta
situación y hasta bastante molesto, ¿podemos hablar de esto?”. En esta línea se
apunta a los problemas relacionales y potenciales pequeñas oportunidades de
cambio. Quizás faltó proponerle en qué ocasiones plantear esto y observar las
consecuencias, aunque sean pasitos pequeños. Le añaden las compañeras que si esto
no funciona y el marido no colabora más con ella, quizás tenga que tomar otras
decisiones como la separación. Ella dice que esta última opción no, que quiere
mucho a su marido.

5-Loli: Le dicen que su madre parece “chantajearla emocionalmente” cuando ella le


pide hacer ciertos cambios como irse todos a la casa de ella y que ella entonces se
pliega y siguen las cosas igual. Que está dando pasos para no dejarse llevar por este
chantaje expresando su opinión y cuando su madre llora por esto, dejarla que se
desahogue sin entrarle al trapo. Que siga en esta línea. Su marido le apoya en esto.

6-Juani: Le dicen que es normal que se preocupe por sus hijos, hay varias madres en
el grupo y también lo hacen (validación) pero que también siga atendiendo a sus
propias necesidades, cosas que ha venido haciendo, sobre todo respecto al marido.
En este punto nos dice, mirando a Nieves, que ella se callaba todo por no oír los
enfados del marido pero que poco a poco fue expresando su opinión e incluso él la
respeta mucho más ahora, aunque le costó mucho.

C-Problemas/Progresos en su vida diaria: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

1-Antonia: Dice que tiene necesidad de ir a ver a su cuñada muy enferma que va a
hablar con otros familiares a ver si van juntos a verla y que está en esta tarea.

2-Nati: Dice que esta semana incluso, a pesar de su pena y momentos de


desesperación ha salido a comer con una hija y bailar con su marido y lo ha pasado
muy bien, que hay además amigas que la quieren mucho y se lo han dicho al salir y
relacionarse.
3-Paqui: Nos dice que se ha enfrentado a las opiniones adversas de sus hermanas
respecto a donde tiene que estar su madre, que ellas la metieron en una residencia
sin contar con ella y su propia madre y que ella ha defendido el criterio de que su
madre decida por ella misma, y en ello va a seguir.

4-Nieves: Dice que nuevamente le dice a su hija que no podía irse a la casa del novio,

227
por anginas de esta; y que después de ello hizo caso omiso, des-autorizándola el
marido al darle permiso para hacerlo, ya que ella es mayor para tomar sus
decisiones le dijo.

5-Loli: Nos cuenta que le ha dicho a su madre que se van a ir a casa de ella todos ya
que allí tienen más condiciones, que esta empezó a llorar culpándola de ser muy
mala hija, pero que ella no ha cedido a esos chantajes y han tomado esa decisión con
el apoyo de su marido.

6-Juani: Preocupada por el hijo menor con anginas y por el mayor por su mala
relación con su ex novia anterior. Además dice que el hijo mayor lo pasó mal al
decirles que quizás no pueda sacar matrícula en la ingeniería que estudia y teme
defraudarles a sus padres, hablando ella y su marido con este diciéndole que
estudiar es su trabajo pero que también disfrutar como persona joven que es, y que
valoran más esto que el hecho de las notas altas. Parece que el hijo se quedó algo
más tranquilo después de este mensaje de ambos padres al parejo.

Nota: Observo que como refieren los autores de la FAP, las reglas son sugerencias
no indicaciones estrictas a seguir. Seguirlas como reglas a hacer en todas las
sesiones con independencia de la dinámica y tiempo grupal genera inflexibilidad y
desconexión con las dinámicas de contingencias en curso en el grupo. El hecho de
alterar la secuencia de las intervenciones es una herramienta poderosa para
provocar conductas clínicamente relevantes según el momento de las relaciones
grupales y lo que cuentan de sus vidas diarias y para “tocar/contactar” con
cuestiones no abordadas en sesiones anteriores. Así, mi experiencia me dice que
en grupos más numerosos podemos por el tiempo limitado centrarnos en una o
dos reglas por sesión, sin perder el potencial del grupo, en vez de correr y forzar el
tiempo por tocar/provocar de manera rígida las 5 reglas. Quizás el elemento a
conservar en todas las sesiones sea el que comenten como les va en sus vidas
diarias, ya que en la FAP un punto clave son las equivalencias funcionales dentro-
fuera de las sesiones tanto para los problemas (CCR1) como para los progresos
(CCR2).

SESION Nº 7: 17-10-2017

Acuden 6 personas: Nieves, Loli, Antonia, Paqui, Nati y Juani.

A)-Regla 2: Provocar CCRS: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

Comenzamos la sesión provocando CCRS mediante el ejercicio de la “Declaración de


tu misión personal en la vida”. Esta vez añado que valoren entre 0-10 lo cerca que

228
están de ir moviéndose en esa dirección en su vida actual, y después le hago
preguntas sobre qué obstáculos se interponen en esto, como los manejan y que
resulta de ello: un análisis funcional de la conducta sobre los obstáculos respecto a
la vida/proyecto de vida que valoran.
1-Nieves: Refiere que le gustaría hacerse respetar más y poder expresarse mejor sin
bloquearse cuando le insultan o contradicen. Le da un 4 sobre 10. Aún le cuesta
expresar sus opiniones a su hija mayor, ya que cuando le llama la atención a esta,
esta vocifera y ella se calla, sintiéndose anulada.

2-Loli: Compartir con las personas que quiere y cultivar el cariño y la tolerancia. Se
da un 6 sobre 10. Dice ir dando pasitos para expresar sus opiniones, sobre todo con
su madre y hermanos.

3-Antonia: Le da vergüenza leer lo que ha escrito (CCRS) ante la gente. Le animo a


que lo haga y se imponga a su vergüenza. Termina leyendo y refiriendo que desea
ayudar a quienes le necesiten y despejar su mente. Dice que a veces se sobre implica
en asuntos familiares y eso le hace preocuparse en demasiado. Se da un 7 sobre 10.

4-Paqui: Lo más importante es cuidar a su familia y cultivar el respeto y la tolerancia.


Dice que con sus hermanos ha tomado una serie de decisiones que le ayudan. Se da
un 6 sobre 10.

5-Nati: Dice que lo más importante es ser ella misma y que se haga justicia.
Reconoce que se calla demasiado las cosas en determinados momentos y después
estalla. Se da un 8 sobre 10.

6-Juani: Ser feliz con quienes me quieren y ayudarles. Se da un 6 sobre 10. Dice que
no estar excesivamente pendiente de su hijo con esclerosis múltiple le ayuda a estar
mejor.

Nota: las siguientes preguntas al grupo se hacen sobre esto. “¿Y esta semana como
os ha ido con aquello que da sentido a vuestra vida y los obstáculos o problemas
que han surgido con esto?”

B)-Problemas/Progresos en su vida diaria: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

1-Nieves. Nos comparte que esta semana ha tenido el apoyo de su marido con su
hija mayor, regañándole este en su presencia ante una mala contestación de aquella
hacia ella; y que además ella y su marido compartieron una actividad conjunta de un
curso de ordenador. Que aunque su hija le vociferó al regañarle ella en una cosa, su
marido intervino a su favor después de muchos años. Dice que esto lo ha conseguido
hablando calmadamente con el marido. Todo el grupo le felicita por esto.

229
2-Loli: Se ha vuelto a atrever a decirle a su madre que se tienen que ir a casa de esta,
y aunque después se quedó con mala sensación de hacer esto, considera que está
dando pasos para expresar sus deseos y necesidades.
3-Antonia. Ha estado muy preocupada con su cuñada que tiene Alzheimer y
deambula a veces por la calle. A pesar de hablar con el marido de su cuñada y sus
hijos estos hacen caso omiso a la gravedad de la situación, por lo que ella ha optado
por no implicarse más de lo que ya ha hecho, aunque le preocupe.

4-Paqui. Refiere que ha estado cuidando a su madre en la residencia y a varios


asuntos familiares estando agotada y necesitando descansar. Dice que esto le llevó a
enfadarse con sus hijos y maridos por su sobrecarga y falta de ayuda de estos, y que
después se sintió mal por enfadarse. Recibe la validación del grupo de que eso es
normal, que a veces reaccione así ante tanto estrés. Dice que termino de buenas con
sus hijos y marido que terminaron reconociendo su malestar.

5-Nati: Refiere haberse sentido esta semana muy indignada con sus hermanos que
no le ayudan con su madre ni reconocen lo que hace ella por esto, solo le dan
consejos como si ella no supiera ya hacer esto por sí misma. Dice que se calla pero
que cuando llegue el momento lo hablará con ellos.

6-Juani: Ha tenido una semana muy buena. No ha estado tan pendiente de su hijo,
solo le llamó una vez, y ha salido, dice de “pingoneo” con su marido, pasándolo muy
bien; además su hijo va bien.

C)-Regla 1: Observación de CCRS: (“Los demás como directores/as”) y D)-Regla 3:


Reforzar progresos observados en la misma sesión de CCR2: (“Los demás como
directores/as”):

Entre Nati, Nieves y Juani hacen el papel de directoras que resumen que observan
sus compañeras hoy aquí en la sesión. El resto del grupo abala sus observaciones,
aunque se le preguntan si quieren añadir algún detalle o algún dato que ellas no
percibieron.

1-Nieves: Le dicen que la ven más contenta en la sesión y que está dando pasos
efectivos. Ella sonríe a estos comentarios.

2-Loli: Le dicen que está actuando y que eso le acerca más a expresar lo que ella
desea y necesita. Loli dice que así es.

230
3-Antonia: Le dicen que es comprensible su preocupación y que la ven hoy un poco
más cabizbaja, y que además la ven con cara de enfado y con motivo (validación).
Ella dice que ya ha hecho lo que podía que ahora le toca a la familia de su cuñada.

4-Paqui. Todos la ven más tranquila y relajada en el grupo. Ella sonríe ante estos
comentarios.

5-Nati: Le dicen que aunque esté indignada con sus hermanos, y que está en su
derecho, lo expresa más al grupo y cada vez más saca de dentro lo que necesita y
siente. Ella dice que así es.

6-Juani: La ven relajada y tranquila en el grupo y le dicen que está dando pasos por
no estar excesivamente pendiente de su hijo, y que si este estuviera peor, que no es
el caso es muy normal preocuparse por este (validación).

E)-Regla 4: Influencias reforzantes mutuas en el grupo: (“Cada uno/a como


actores/actrices”):

No abordamos este aspecto explícitamente en esta sesión, aunque si al final de la


misma cuando les pregunto que se llevan para sus vidas diarias que consideran
útiles de la sesión de hoy.

1-Nieves: Dice que se alegra de ver evolucionar a todo el grupo y que vive esto como
una familia unida y que eso le ayuda en su vida diaria sin especificar más.

2-Loli: Que se va con ganas y fuerzas que le transmiten sus compañeras para su vida
diaria.

3-Antonia: Refiere que aquí nos encontramos mejor que en la familia. Esto provoca
una carcajada de aprobación de todo el grupo.

4-Paqui: Tiene la sensación de compañerismo.

5-Nati: Tengo ganas que llegue cada martes para venir al grupo.

6-Juani: Voy a seguir de pingoneo esta semana, todas sonríen.

Todas refieren que han quedado este sábado para hacer una comida en común. Les
digo que les veo un grupo muy cohesionado (“unidas que vais todas a una, que es
ayudaros entre vosotras) y que esto es el principal factor según muchos estudios
que hacen efectiva a una terapia de grupo. Todas sonríen, y me dicen que se debe
también a lo que yo les voy proponiendo. Les agradezco estos comentarios, y les

231
devuelvo que el grupo lo hacemos entre todos.

F)-Regla 5: Interpretaciones funcionales a moldear y orientaciones dadas por el


grupo: (“Los demás como directores/as”):

En este punto como vengo observando que casi todas viven demasiado en un rol de
cuidadoras de terceros, les pregunto, ¿Qué es lo que más necesitáis y cómo podéis
dar salida a esto esta próxima semana?, usando una expresión de Paqui hoy en el
grupo, “Querernos más a nosotras”

1-Nieves: Llevo la ropa puesta de mis hijas. No me compro nada para mí. Esta
semana voy a comprarme ropa para mí que me guste.

2-Loli: Voy a seguir hiendo a la piscina climatizada que me alivia mis dolores aunque
mi madre se queje de que la dejo sola un rato (ella se vale perfectamente por sí
misma).

3-Antonia: Arreglarme y salir más con mi marido. Por mi cuñada ya he hecho


bastante.

4-Paqui. Buscarme tiempo para descansar y no hacer nada más que eso.

5-Nati: Necesito que me reconozcan y voy a expresar cuando venga al caso a mis
hermanos mis opiniones.

6-Juani: Le dice a Nieves que ella se sentía antes “como un mueble más de la casa” y
que ahora también desea disfrutar de las cosas de la vida y que además de atender a
sus hijos va a seguir con el pingoneo con su marido.

Todas reciben el apoyo de sus propósitos para la semana.

SESION Nº 8: 24-10-2017

A la sesión de hoy acuden 5 personas: Antonia, Nieves, Rosario, Paqui y Nati.


Comenzamos la sesión centrándonos en la Regla 4 y 5 sobre todo. Loli a través de
Nieves excusa que no ha venido por problema de salud física.

232
A)-Regla 4: Influencias reforzantes mutuas en el grupo: (“Cada uno/a como
actores/actrices”): Hoy con la pregunta-¿Cómo crees que tus compañeras te ven en
el grupo y cómo crees que se sienten contigo aquí?. Y a continuación preguntando al
grupo-¿Y cómo os hace sentir y que pensáis de ella?.

1-Antonia: Creo que me ven como la más torpe del grupo y que me cuesta
expresarse, aunque se sienten a gusto conmigo y yo con ellas. Esto hace que sus
compañeras le digan que no la ven así, que no todo el mundo lo hace bien en todo (a
veces ella nos ha dicho que tiene muchas faltas de ortografía), y que ella sabe hacer
muchas cosas que ellas no saben, como sus habilidades de costurera. Esto hace que
nos diga que su madre cuando le enseñaba a leer la dejaba por imposible diciendo
que era muy torpe. Es seguido de que para ellas eso no es así.

2-Nieves: Refiere que pensaran que es muy indecisa y reservada. El grupo le dice que
cada vez se expresa más y va dando pasos en esto.

3-Rosario: Refiere que ellas piensan sobre ella que es muy indecisa a veces ya que
ella se enjuicia mucho, aunque cree que se sienten a gusto con ella, igual que yo con
ellas, por eso seguimos viniendo (el grupo sonríe sonoramente). Nati le dice que lo
que nos comparte es normal (validación) y que ella nos relata su situación; que
todos nos equivocamos y no tenemos por qué hacerlo todo bien, que ella tampoco se
explica bien, porque se bloquea o por lo que sea, pero que eso es lógico. Rosario
responde que ella se enjuicia mucho, incluso por la calle si la miran y piensa de que si
lo ha hecho mal y al preguntarle yo a que le lleva eso con la gente nos dice que a
encerrarse mucho, pero que en la experiencia del grupo se abre y eso le sirve. Nos
añade que de nuevo va a tener a su padre a su cuidado como antes que recayó en
depresión por sobrecargarse mucho y no afrontar la opinión crítica de sus hermanos.
Le dicen que es normal en esas situaciones de sobrecarga experimentar esto con sus
dudas y dificultades (validación).

4-Paqui: Nos comparte que la pueden percibir como aparentemente bien pero que
sale a veces de las sesiones con la impresión de que se ha pasado y que no tenía que
haber dicho ciertas cosas. El grupo le responde que venía más reservada al principio
y que se ha ido abriendo más, aunque sí que parece que se guarda ciertas cosas.

5-Nati: Nos dice que la ven bien y fuerte pero que da una apariencia de fortaleza
cuando por dentro está mucho peor que lo que aparenta. Que ella se pone a si
misma cada día un nombre y que hoy se ha puesto a sí misma “Apariencias
engañosas” (risas). Ellos le dicen que la ven arreglada y fuerte en general, aunque
nos diga esto.

233
B)-Regla 5: Interpretaciones funcionales a moldear y orientaciones dadas por el
grupo: (“Los demás como directores/as”):

1-Antonia: Que la influencia de su madre le ha hecho actuar desde verse torpe y eso
hace que en ciertas ocasiones se muestre callada o hable menos para evitar
supuestas torpezas, pero que en realidad ella sabe hacer muchas cosas y que
recuerde que a todas las personas se nos dan unas cosas mejor que a otras. Yo le
digo que una manera posible de no dejarse llevar por eso es decirnos las cosas que
hace bien ya.

2-Nieves: Me ven que me cuesta expresarme y me bloqueo mucho. Al preguntarle al


grupo si ven que se “bloquea mucho” (se calla, le cuesta continuar y expresar lo que
siente y piensa), Paqui dice que al principio le notaba que se bloqueaba pero que
ahora menos

3-Rosario: Le dicen que se deja llevar mucho por las opiniones de los demás (en este
caso sus hermanos).Nati le dice que haga lo que haga siempre le van a criticar
alguien y que ella tiene que tomar decisiones al respecto. Le digo que si se repite la
misma secuencia y ella actúa igual (sobrecarga) es probable que pase lo mismo. Ella
dice que si eso pasa “pedirá un respiro familiar” para no llegar a lo mismo. Le dice
Nati que ella se pare y vea realmente lo que puede hacer, a esto añado que atienda
a sus propias necesidades.

4-Paqui: Le dicen que aunque a veces se muestra algo reservada va compartiendo


más. La vemos que ha tomado decisiones firmes y drásticas con sus hermanas (por
ejemplo no seguir la relación con algunas de ellas dada la oposición de estas a su
madre). Ella dice que cuenta con el apoyo de su marido. Respeto a la situación con
sus madre y hermanas que es de lo que más nos habla se plantean varias
posibilidades como la búsqueda de otra residencia, un piso o la combinación de
ambas posibilidades, dependiendo de la evolución de su madre. A esto Rosario le
dice que lo único que le espera es “aguantarse” como ella hace.. Esto es seguido por
contestación de ella misma, “que de eso nada” que va a seguir viendo posibilidades
aunque sea sola respecto al resto de sus hermanos y aunque estos la critiquen, con el
apoyo de su marido.

5-Nati: Validan de nuevo que es normal que estas pérdidas tan grandes le afecten
pero que ella es fuerte para encararla. Yo le expongo metáforas de “querer parar las
olas desagradables y dejar de andar por el puerto marítimo”. Esto es seguido de
comentarios de ella misma de que a veces se ve en una lucha entre las olas de los
sentimientos que le dicen que abandone todo y la del querer (valores) que le dicen
que tiene que seguir adelante por ella y su familia, y que salir y contactar con ciertos
amigos y su marido e hijas le ayudan a alejarse de las olas, aunque están vuelven y

234
vuelven. Le dicen que es un proceso de duelo, que lleva su tiempo y que siga
haciendo esas cosas que nos dice que le ayudan. Le ayuda también compartirnos su
dolor. A esto le añado que además participa y da sus opiniones con mucho respeto y
está muy activa en el grupo. Nos relata que esta semana su marido sufrió un
desmayo y que ella aunque podía vengarse ignorándolo, le ayudó a recuperarse,
aunque este se niega a ir al médico.

C)Preguntas de cierre: ¿De la experiencia que llevas en el grupo qué te resulta útil
en tu vida diaria entre semana?

1-Antonia: Acordándome en mi casa de lo de aquí para seguir adelante, y eso me


sirve. Y al preguntarle si vuelve al tema de si soy torpe fuera de aquí nos dice que
volver a recordar lo hablado del grupo. Le digo que se explica perfectamente, sonríe.
Nati le dice que escriba muchas veces soy inteligente y no torpe.

2-Nieves: Intento hacer lo que me dices y mis compañeras en mi vida diaria. Que ha
conseguido un poco de progreso, aunque le digo a esto que lleva menos tiempo en el
grupo que sus compañeras.

3-Rosario: Me resulta útil en el día a día. A mí me ha dado vergüenza incluso estar


aquí y lo voy superando; y creía que tenía problemas que me pasaban a mi sola, y
veo que no.

4-Paqui: Muchísimo me ayuda. Yo soy superreservada y aquí me desahogo. Además


veo el esfuerzo que vosotras hacéis y eso me ayuda entre la semana. He trabajado
antes otras terapias, pero en esta como tú dices (dirigiéndose al terapeuta) es como
escribir un libro y no quiero repetir esos capítulos sino dejarlos atrás y seguir mi vida.

5-Nati: Podía coger y arrinconarme en mi casa diciendo que desgracia hemos pasado
y sin embargo eso no lo hago. Le digo que parece que desobedece a sus
pensamientos negativos y desganas y al preguntarle si venir al grupo le ayuda en
esto nos dice que sí. El dolor que he pasado no me lo va a quitar nadie, y que eso es
más grande que la pérdida económica y que quiere verlo como algo pasado.

D)-Regla 2: Provocar CCRS: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

Se les plantea la asociación libre por escrito en un par de minutos, el listado de cosas
por hacer cuando termine la terapia y una introducción al ejercicio A.R.A para
dejarse controlar menos por las opiniones ajenas, que hoy solo comentamos, y que
trabajaremos más despacio en próximas sesiones. En este último aspecto les digo

235
que tomen nota de la persona o personas con las que se siente más molestas e
influyen en su vida.

1-Antonia: “Siento miedo por mis dolencias verme en una silla de ruedas” (asociación
libre escrita). “Pensar en estudiar cuando termine la terapia” ríe el grupo (listado por
cosas por hacer). “Mi cuñada María” (A.R.A).

2-Nieves: “Superar el miedo, valorarme yo misma y no culparme por todo”


(asociación libre escrita). “Enfrentar situaciones, centrarme en el presente no en el
pasado y quererme a mí misma” (listado de cosas por hacer). “Mi hermano Antonio
y mi madre (ya fallecida) que se llamaba Cati” (A.R.A).

3-Rosario: “Cuando llegue a casa no poner mucha atención sobre temas que me
habla de su familia” (asociación libre escrita). “Necesito hacer cosas para valorarme
pero veo que no llego y me quedo en blanco” (listado de cosas por hacer). “Mi
hermana María Angustias” (A.R.A).

4-Paqui: “Necesitaba desahogarme demasiado y lo he hecho y que al final la decisión


la voy a tener que tomar yo” (asociación libre escrita). “Formarme en varias cosas, y
hacer pintura”(listado de cosas por hacer).”Mi cuñada Raquel” (A.R.A).

5-Nati: “Disfrutar del tiempo es mejor que pase rápido” (asociación libre escrita).
“Solucionar situaciones pendientes del tiempo” (listado de cosas por hacer).
“Hermanos Antonio y Joaquina” (A.R.A).

SESION Nº 9: 31-10-2017

Al igual que en el grupo del lunes hoy se les administra re-test de cuestionarios
iniciales, ejercicio A.R.A de provocación de CCRs con personas con las que tienen
relaciones disfuncionales y se utiliza la pregunta de cómo les ha ido la semana y qué
observan sus compañeras en ellas en la sesión (papel actrices/directoras) ya que no
da tiempo a nada más.
Acuden a la sesión 6 personas; Nieves, Loli, Paqui, Antonia, Rosario y Juani.

A)-Regla 2: Provocar CCRS: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

Todas reconocen que hay personas con las que conviven o han conocido que les
sigue afectando negativamente en sus vidas. Hablamos de como lo que sienten
respecto a ellas, “las engancha” como obstáculos para moverse en la direcciones
deseadas (similar a la ACT) y como trabajar esto con el ejercicio A.R.A. entre

236
sesiones si así lo desean. Se practica el ejercicio y todas reconocen su dificultad para
desengancharse de esto.

B)-Problemas/Progresos en su vida diaria: (“Cada uno/a como actores/actrices”):

1-Nieves: Refiere que ha convencido a su marido de ir al médico para que vea esto de
los desmayos, que le expone sus deseos de manera más clara y directa y que la
relación de pareja ha mejorado.

2-Loli: Refiere que su madre se ha caído y lesionado y que es ella nuevamente con la
ayuda de su marido quién asume todos los cuidados aún sin estar bien.
3-Paqui: Refiere que sigue en contacto con su madre y ha roto las relaciones con sus
hermanas, que solo se habla con su hermano. Todo, dice que se debe a que sus
hermanas le tiene como rencor a su madre, sin explicarnos a que se debe. Yo “sé a
qué se debe” pero no lo relata al grupo, solo que ellas culpan de sus fracasos a sus
padres; por ejemplo una hermana de su separación.

4-Antonia: Refiere que está mejor de salud con un preparado del herbolario para el
dolor de hueso y que su vida transcurre tranquila.

5-Rosario. Nos relata que aunque tenga que hacerse cargo de su padre ya no se
culpa como antes por todo, y que el grupo le ha ayudado en ello.

6-Juani: Refiere que esta semana ha tenido que encarar a su marido, ya que este sale
a deshoras, vuelve de madrugada, y le dijo que si a él le parecía bien es lo que había.
Nos dice que le ha dicho que ya estaba buscando abogado que ha descubierto que
funcionaba con mucha sumisión y que eso se acabó. Una vez que ha planteado esto,
el marido ha cambiado de actitud de manera más favorable.

C)-Regla 1: Observación de CCRS: (“Los demás como directores/as”) y D)-Regla 3:


Reforzar progresos observados en la misma sesión de CCR2: (“Los demás como
directores/as”):

Dada la falta de tiempo para hacer una ronda de observadoras, una a una, le pido a
Rosario que lo haga ella, y que sus compañeras o yo mismo añadimos lo que nos
parezca adecuado si lo vemos necesario.

-Sobre Nieves: La ve que participa más en el grupo, más abierta, expresa más lo que
quiere y esto lo hace también con el marido. Todo el grupo apoyamos estos
comentarios.

237
-Sobre Loli: Le decimos que está atrapada en una forma de funcionamiento que a la
larga le perjudica al no poner límites a su madre y hermanos. Le vemos tensa en el
grupo.

-Sobre Paqui: Le digo que tomar esa actitud tan extrema rompe toda posibilidad de
llegar a acuerdos. Nos dice que la ha tomado porque son ellos (hermanas) quienes
no quieren saber nada de su madre.

-Sobre Antonia: Le digo en plan broma (todas ríen) que al paso que va, veo a Buda
recibiendo lecciones de ella. Dice que está muy tranquila.

-Sobre Rosario: Le decimos que efectivamente la vemos más abierta al grupo, que ya
no se culpabiliza y que eso está realmente bien. Ella vuelve a decir que el grupo le ha
ayudado en esto.

-Sobre Juani: Que al relatar lo de su marido se ha emocionado, pero que es una


decisión firme y valiente que parece le está ayudando. Ella lo confirma.

SESION Nº 10: 21-11-2017

Acuden a esta sesión 7 personas: Rosario, Paqui, Nati, Juani, Loli, Nieves y Antonia

Como es una de las tres últimas sesiones, adaptamos las cuestiones a tratar de las 5
reglas pero en función de este tramo final de la terapia. Casi 45 minutos lo
empleamos previamente en recabar datos de cuestionarios de seguimiento.

1-¿Qué cambios habéis realizado en vuestra vida diaria desde que estáis viniendo al
grupo?:

-Rosario: Básicamente nos comparte que ha puesto distancia con problemas y


preocupaciones familiares y las deja “soltar”. Nos relata con detenimiento
problemas previos con el alcoholismo de su pareja y su toma de decisiones al
respecto,

-Paqui: Aunque refiere no haber superado aún el efecto de ciertas experiencias


traumáticas previas se ve en una actitud de aceptación de su situación actual con su
madre y hermanas, con las que va tomando decisiones de manera más firmes, y
dedicando no solo hacer cosas para sus seres querido sino para ella misma también.

-Nati: Refiere que el problema de la pérdida económica no está resuelto y tiene

238
muchas incertidumbres respecto al futuro de este tema, pero añade que se siente
apoyada por el grupo en llevar esto adelante.

-Juani: Aunque ha tenido una semana con mucha ansiedad y sensaciones de pánico
reconoce que antes se escondía ante los problemas en sus relaciones con familia y
pareja y ahora los habla con más firmeza y decisión.

-Loli: Dice que ha ido tomando decisiones respecto a sus familiares y poniendo más
límites a estos.

-Nieves: Al igual que Juani dice que ha ido dando pasos para expresar a sus
familiares sus opiniones y sentimientos en vez de callarlos y que aunque a veces se
sienta agobiada el hablar y expresar sus opiniones le ayuda.

-Antonia. Aunque viene algo triste por la muerte inesperada de un amigo y conocido,
nos refiere que venía muy depresiva con ideas suicidas y que todo esto ha
desaparecido en su vida.

2-¿Qué hemos ido observando a lo largo de las sesiones en nuestras compañeras de


grupo aquí en las sesiones cuando nos han ido compartiendo cómo les va en sus
vidas (Regla 1) y ¿Qué progresos le hemos visto aquí mismo a lo largo de las
sesiones de grupo (Regla 3)

1-Rosario: Todas sus compañeras le dicen que ha hecho un cambio exageradamente


positivo, ya que al principio le veían bloqueada, le costaba articular las palabras y
argumentos; y poco a poco se expresa con más claridad, argumenta con más firmeza
y se le ve más segura y comunicativa en general. Le dicen que se ha superado y
mucho. Ella asiente esto y nos cuenta detalles de ello, como la toma de decisiones
con su marido y familiares.

2-Paqui: Le refieren que aunque tenga problemas difíciles, el mayor cambio que le
han observado es que al principio nos decía que ella no confiaba en nadie y que no
podía contar ciertas cosas, y que poco a poco se ha ido abriendo al grupo, confiando
y compartiendo cosas íntimas de su vida. Ella afirma que es así. Juani le dice que eso
a ella al principio le ponía tensa, pero que ahora se siente muy bien con ella en el
grupo. Incluso le recuerdan que al principio hasta rechazaba tomarse un café o
pararse a hablar fuera del grupo con ellas, cosa que ha cambiado en sentido positivo.

3-Natividad: Le refieren que aunque en general actúa con mucha reserva (ella lo
admite), en comparación con las sesiones anteriores ha mejorado su contacto con el
grupo, no está ese tiempo llorando o con emociones a flor de piel, y que es un
ejemplo de fortaleza para el grupo ante las adversidades.

239
4-Juani: Todo el grupo le refiere que ha sido un ejemplo de fortaleza para todas a
pesar de sus recaídas ocasionales. Ella misma dice que quizás ha cargado con
demasiadas responsabilidades y preocupaciones y eso le llega a veces a producir
ataques de ansiedad y que cuando no se propone tener que hacerse cargo de todo ni
sostener una línea de acción continua (en esto le ayudo con una metáfora de
sostener cargas continuas y preguntándole por sus necesidades) dice que lo lleva
mejor (Regla 5 en esto). Todas la perciben como una persona que ante las
adversidades toma decisiones firmes, aunque en el proceso a veces esto conlleve
malestar.

5-Loli: Le refiere si amiga y compañera de grupo Nieves que a pesar de su sentido


del humor que tanto gusta al grupo ella a veces no expresa suficientemente su
malestar y lo oculta con esa actitud desenfadada (Regla 5). Lolo lo admite, pero
afirma que hacer eso le ayuda en realidad a llevar situaciones difíciles de su vida y su
malestar físico. Añade que ella tiene muy claro cómo va a plantear ciertas as
cuestiones con sus hermanos respecto a su madre poniendo más límites con el
ejemplo de que antes cuando quedaban en su casa ella se echaba toda la carga de
las comidas, limpieza, etc.; y como eso ahora se lo plantea de otra manera. Ella dice
verse con más iniciativa y posibilidades ante el tema anterior.

6-Nieves: Aunque su compañera y amiga Loli le dice que tiende a culpabilizarse de


muchas cosas (por ejemplo si la ve a ella seria piensa que es por motivo de algo que
ha hecho ella y no por otras causas), ve que ha ido realmente dando pequeños pasos
en expresar de manera más directa sus opiniones a las personas con las que convive
y que eso es un progreso. El resto del grupo apoya esta afirmación y Nieves así lo
reconoce, aunque le haga falta más tiempo para seguir progresando.
7-Antonia: Le dice Loli, y el resto del grupo asó lo apoya también, que el hecho de
venir de un pueblo de fuera a terapia y participar en la misma para ella ha sido de
mucha ayuda. Ella conforma que es así realmente y dice que esto le ha ayudado a
dejar de pensar en el suicidio como solución a sus problemas, que de hecho eso ha
desaparecido completamente de su vida.

3-¿Cómo nos hemos ido sintiendo a lo largo de la terapia en las sesiones con las
compañeras y lo que nos han ido compartiendo? (Regla 2):

1-Con Rosario: Los cambios que ha ido experimentando de progresos le dicen todas
sus compañeras les ha alegrado y satisfecho y lo viven como un ejemplo de
superación.

2-Con Paqui: La han vivido al abrirse y confiar con sus compañeras más cercana y

240
accesible y se han sentido, todas, más cómoda con ella.

3-Con Nati: La han percibido más habladora a pesar de sus reservas y se sienten a
gusto con ella cuando les opina sobre sus dificultades y alternativas.

4-Con Juani: Todas se sienten a gusto cuando le escuchan sus decisiones, aunque
Paqui le dice que quizás hay algún aspecto que no termina de lleva a cabo del todo,
pero no le sabría especificar más. Ella misma dice que es más bien que ha llevado
mucha carga y eso le ha tensado, además le dice que no le gusta llevar las cosas tan
al extremo como a Paqui en algunos puntos, y que al “recular” su marido, ella ha
manejado esto mejor ( aspectos de la Regla 5 en este punto). El grupo en general se
siente bien y la perciben como ejemplo de fortaleza. En este aspecto le digo que
también ella tiene necesidades, además de sus fortalezas. Ella dice que de ser
querida y que en el malestar reciente ha recibido apoyo afectivo de sus hijos y
marido.

5-Loli: Todos se sienten bien con sus bromas frecuentes en las sesiones, aunque
reconoce que a veces quizás así evita temas más dolorosos (aspectos de la Regla 5),
pero que eso le ayuda en su vida.

6-Nieves: Todos se alegran de sus progresos, aunque Paqui le dice que como lleva
menos tiempo en el grupo, quizás necesita más tiempo de terapia adicional. En este
punto le digo a Paqui, que efectivamente ella se ve con más confianza de opinar
sobre sus compañeras y recibir igualmente opiniones de ellas.

7-Antonia: Todas igualmente se alegran de su evolución y le conforman que su


decisión de participar en grupo le ha ayudado en alejarse de sus ideas suicidas.

SESION Nº 11: 28-11-2017

A esta sesión acuden 6 personas: Antonia, Loli, Nieves, Rosario, Paqui y Nati.

Seguimos con las sesiones de cierre del grupo y abordamos cuestiones relacionadas
con las 5 reglas de la FAP no tratadas la sesión anterior (reglas 4 y 5):

1-¿Cómo esperabais encajar en este grupo desde la primera vez que vinisteis y cómo
veis que habéis encajado en el grupo? (Regla 4):

1-Antonia: Refiere que venía con miedo ya que ella pensaba que como le cuesta
explicarse iban a pensar que es tonta y poco desenvuelta; y que se ha encontrado
con un grupo de compañeras comprensivas y que valoran lo que dice y hace y eso es

241
muy distinto a lo que esperaba. Hago el comentario que es la primera vez que ella se
ofrece a hablar la primera de grupo y que eso merece un aplauso (todas aplauden y
la felicitan), sonriendo ella abiertamente ante esto.

2-Loli. Dice que ya hizo terapia de grupo con anterioridad y esperaba una rutina más,
pero que realmente se ha sentido formando parte de este grupo y se ha abierto más
y mejor que en experiencias previas.

3-Nieves: Refiere igualmente que venía con mucho miedo al rechazo y que se ha
encontrado un ambiente de grupo donde se encuentra muy a gusto hablando de sus
dificultades y progresos.

4-Rosario. Al igual que sus compañeras dice que venía con mucho miedo y ahora
está deseando que cada sesión llegue para venir a ella, que esto le ha ayudado
mucho.

5-Paqui: Dice que venía muy cortada y reservada y se ha ido abriendo con confianza
a sus compañeras, y se ha abierto mucho al grupo.

6-Nati. Refiere que de por si es una persona muy reservada pero que la experiencia
del grupo le hace sentir bien entre sus compañeras y hablar de su vida.

Nota. Todas refieren haber venido con diversos temores y desconfianzas que la
experiencia del grupo ha corregido.

2-Por lo que habéis visto y escuchado de vuestras compañeras qué pensáis que les
perjudica más en sus vidas y que les ayuda más en ellas? (Regla 5):

1-Sobre Antonia: El hacerse de menos y “acomplejarse” le aparta de la gente, y


participar en este grupo y otras actividades sociales le ayuda a sentirse una más
entre todos, no menos, sino una igual. Ella lo confirma.

2-Sobre Loli: Parece que hablar con sus hermanos es insuficiente, ya que termina ella
con el cargo de su madre. Quizás hablarlo con su marido, tomar una decisión
conjunta y además no “aparentar fortaleza” sino dejar de hacer ciertas cosas cuando
está al límite es una forma alternativa de enfocar sus dificultades sin sentir que
abandona a su madre o la quiere menos.

3-Sobre Nieves: Yo le pregunto, y el grupo me apoya, que nos hable de cosas que ella
considera que ha hecho por sí misma y de las que se siente satisfecha o bien cosas
que han hecho sus allegados familiares y a ella le molesta, ya que parece sentirse

242
culpable de incomodar a otros. Ella nos refiere que su padre se portó muy mal con
ella, y que en realidad, dice hablo cosas de su madre que a ella le hace sentir que fue
en ese momento un “hijo de puta y un cabrón” y que su marido incluso le dijo que la
respetara a ella, marchándose de casa airado. De eso dice no tengo nada de culpa, y
hablarlo me ayuda.

4-Sobre Rosario: Se vuelve a repetir la secuencia con ella de la sesión anterior,


refiriéndole que la sobrecarga de responsabilidades ajenas la desorientaba
literalmente y que conectar con sus necesidades le ha ayudado mucho a volver a
sentirse persona. Ella lo confirma

5-Sobre Paqui: Se le dice que ha tomado una serie de decisiones duras en relación a
sus hermanas, dado el rechazo de estas a su madre, y que ella se le ve firme y
convencida de esto. Ella lo confirma.

6-Nati: Se le dice que a pesar de que la pérdida económica se llevó como un huracán
(metáfora que usa el terapeuta con ella) muchos ahorros y muchos proyectos que se
iban a invertir con ese dinero, ella, sus hijas y su marido se han mantenido firmes
apoyándose y dándose afecto sin que el huracán se haya llevado eso. Ella lo
confirma.

Quedamos en comentar en la próxima y última sesión que les supone el final de la


terapia, ya que tanto Loli como Nieves dice que les gustaría continuar.

SESIÓN Nº 12: 5-12-2017

A la última sesión acuden 6 personas: Antonia, Nieves, Loli, Nati, Juani y Rosario.

1-Lo que habéis experimentado en las sesiones de grupo es parecido a lo que habéis
experimentando en vuestra vida diaria? y 2-¿Qué ha sido lo más útil que habéis
experimentado en las sesiones de grupo que os sirva en vuestra vida diaria?

1-Antonia: Dice que abrirse al grupo, compartir con las compañeras le ha ayudado a
dejar de lado los pensamientos suicidas y la depresión. (Equivalencia funcional:
Dentro del grupo me abro y comparto—Fuera me abro y comparto fuera-dejo de
lado pensamientos suicidas)

2-Nieves: Hablar más en el grupo le ha ayudado a hablar más con su marido e hijas
ante los problemas. (Equivalencia funcional: Dentro del grupo hablo-Fuera del grupo
hablo más con marido e hijas-me ayuda)

243
3-Loli: Hablar de los problemas con mi madre y hermanos me ha ayudado a hablar
más directamente con mi madre y ponerle más límites. (Equivalencia funcional:
Dentro del grupo hablo problemas familiares-Fuera del grupo hablo y pongo más
límites a mi madre)

4-Nati: Compartir en el grupo mis perdidas económicas grandes, hace que comparta
aún más con mi familia, y que a pesar de estas pérdidas permanezcamos unidos.
(Equivalencia funcional: Dentro del grupo hablo-comparto problemas de pérdidas
económicas-Fuera del grupo hablo y comparto con mi familia a pesar de las pérdidas
económicas)

5-Juani: Me ha ayudado venir al grupo a distinguir lo que está en mi mano cambiar y


lo que no. (Equivalencia funcional: Dentro del grupo hablo problemas familiares-
Fuera del grupo distingo mejor lo que puedo y no cambiar)

6-Rosario: Hablar con mis compañeras me ha ayudado a aclarar mi situación,


aclararme yo misma y ser más fuerte. . (Equivalencia funcional: Dentro del grupo
hablo problemas y lo que deseo me aclara la mente-Fuera del grupo hablo y pongo
más en orden mi mente y acciones)

3-¿Hay alguna cuestión importante que no habéis tenido la oportunidad de


compartir con el grupo a lo largo de todas estas sesiones?

Casi todas refieren que por falta de tiempo, les hubiera gustado profundizar más en
sus experiencias pasadas y como les ha afectado esto en su vida

Nota: Poner en relación el malestar y progresos actuales con la historia personal


puede ser importante para validar a los clientes y dar sentido a sus experiencias.

4-¿Hay algo que os haya resultado molesto o desagradable del trato de vuestras
compañeras a lo largo de las sesiones del grupo?
Todas dicen que no, que se han sentido apoyadas, aceptadas, comprendidas y a
gusto con sus compañeras y el terapeuta.

5-¿Alguien quiere expresar , antes de terminar, que ha supuesto la experiencia del


grupo para ella, algo que quiera añadir a lo que habéis compartido antes?

1-Antonia: Refiere que aunque ella y su marido tienen problemas económicos,


permanecen muy unidos, así como con sus hijos.

244
2-Nieves: Dice que aún le cuesta aceptar que ella era muy activa y ahora por
problemas médicos se ve más limitada (Nieves solo ha hecho 6 sesiones de las 12).Le
gustaría continuar en próximas ediciones de grupo y hacer el tratamiento completo,
ya que esta experiencia le ha ayudado.

3-Loli: Dice que aunque se siente culpable a veces de ponerle límites a su madre
(mientras nos cuenta esto tiene un episodio de mareo y bajada de tensión, que se le
pasa cuando le animo a expresarnos su rabia y ganas de llorar) va dando pequeños
pasos.

4-Nati: Aunque ha perdido muchísimo dinero dice que su familia permanece muy
unida.

5-Juani: Refiere que debido a problemas médicos a veces está muy inactiva y
desganada, incluso apática y que se ha propuesto hacer un curso de ofimática y
contabilidad para ayudar a su pareja en un negocio común.

6-Rosario: Refiere que ella antes trabajaba fuera de casa y que a pesar de que echa
de menos esa actividad, acepta que ya es bastante mayor y no puede llevar el ritmo
de antes.

Comparto con ellas que he pasado buenos momentos cuando iban progresando y he
experimentado malestar cuando sufrían, pero que la experiencia global ha sido muy
satisfactoria. Me dan las gracias y se la dan entre ellas, con muestras de afectos
visibles (abrazos y besos de despedida). También entre ellas se piden móviles para
quedar de vez en cuando por su cuenta (esto es frecuente en muchas de mis
experiencias grupales y suponen la “derivación” hacia la creación de redes y grupos
de apoyo naturales).

Problemas/Progresos Equivalencia funcional Problemas


fuera del grupo (Vida (CCR1)/Progresos (CCR2)
diaria) dentro del grupo

245
LA SUPERVISIÓN EN FAP. LA SUPERVISIÓN DE LOS TRES GRUPOS EN LA USMC DE
ÚBEDA:

La evaluación de las habilidades y experiencias del terapeuta en las sesiones FAP es


un aspecto clave en la práctica de este tipo de terapia contextual (Valero y Ferro,
2015).

Existen una serie de cuestionarios que se han mostrado útiles y fiables para evaluar
y mejorar estas habilidades y experiencias (Valero y Ferro, 2015):

-Functional Assesment of Skills for Interpersonal Therapists (FASIT; Callaghan, 2006b).


Evalúa por áreas los problemas que puede tener el terapeuta en las sesiones con el
fin de mejorar sus competencias en las mismas en el desarrollo de las sucesivas
sesiones, a través de ejemplos específicos de cada área: (1) aserción de las
necesidades; (2) comunicación bidireccional (dar y recibir feedback), (3) manejo de
problemas con la resolución de conflictos; (4) habilidades relacionadas con la
expresión de conductas relacionales de intimidad; (5) y dificultad en el contacto y
expresión de emociones

-Therapist In-Session Strategy Scale (THISS). Recaba las áreas de: (1) habilidades
cognitivas para la terapia, (2) habilidades de terapia en vivo, (3) habilidades FAP y (5)
habilidades de terapia interpersonal. Tal diversidad de áreas se debe a su uso en
varios enfoques de terapia cognitiva-conductual, interpersonal y FAP. En concreto
las habilidades FAP se refieren a: (1) Atender a emociones y pensamientos del
cliente, (2) explicar las razones de la terapia FAP y (3) Hacer autorrevelaciones del
terapeuta.

-FAP Impact Scale (FAPIS). Recaba las siguientes áreas de competencias: (1) estar
atentos al cliente, (2) atención a las propias reacciones, (3) autorrevelaciones, (4)
competencia de análisis de la conducta y (5) focalización en la sesión.

El objetivo fundamental en la supervisión de terapeutas que trabajen con FAP es


mejorar en estos un repertorio terapéutico más eficaz a partir de sus fortalezas y
debilidades (Callaghan, 2006a).

En relación a este repertorio terapéutico mejorado y mejorable, siguiendo la


exposición de Callaghan (2006a) son aspectos relevantes los siguientes:

(1º) Entender los problemas/progresos de los clientes en relación a clases


funcionales no a su forma o topografía. Es decir lo que es adecuado/bueno o
inadecuado/malo para un cliente depende de la función, finalidad o efectos de sus

246
clases de conductas en las interacciones. Si un cliente llora en las sesiones y tiene
como efecto relacional recibir apoyo y afecto que necesita, contactando y
expresando este tipo de emociones, se considera adecuado; en caso contrario
podría ser disfuncional. Atender a los efectos relacionales de la conducta en
determinados contextos (dentro y fuera de las sesiones) se torna fundamental. En
términos de la Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT) si la clase de conducta
acerca a la persona a su senda valorada o a la evitación experiencial alejamiento) va
en la misma línea funcional reseñada. “Definir lo que es efectivo o ineficaz para el
cliente en este forma funcional depende al menos de conocer las metas del cliente en
las relaciones y de consecuencias de las respuestas dirigidas a esas relaciones”
(Callaghan, 2006a).

(2º) Conseguir que los comportamientos efectivos aprendidos en las sesiones


ocurran en su vida diaria. Esto se trata de conseguir de varias maneras: (a)
Mediante instrucciones directas del terapeuta que no deben ser excesivas ni
reiterativas para no convertirse en reglas que quizás no contacten con el ambiente
natural del cliente en su vida diaria, (b) reforzando de manera natural los progresos
observados en la misma sesión (CCR2) y evocando-preguntando como podría el
cliente trasladar esto a su vida diaria, (c) estando atento a los comentarios
generalizadores de los clientes del tipo “Ah entonces lo que tengo que hacer es esto
o lo otro”, recordándoles que las interacciones con otras personas y situaciones
pueden variar y tener efectos diferentes, que lo importante es que él/ella observe
esos efectos (vaya realizando sus propios análisis funciónales) siguiendo la triple
contingencia funcional: en qué ocasión-que hace/dice-que resulta de ello.

(3º) Enfocar los problemas de los clientes desde la perspectiva interpersonal de que
sus dificultades son siempre problemas que se producen entre el cliente y otros,
incluyendo al terapeuta. Todo el listado nosológico de los DSM/CIE y similares
pueden conceptualizarse como problemas relaciones desde FAP.

(4º) Las intervenciones FAP siguen un planteamiento del análisis operante de la


conducta. (a) Se comienza identificando el comportamiento que va a ser moldeado,
(b) se evoca si no se presenta en ese momento; (c) diferencialmente se refuerza las
conductas específicas que suponen acercamiento a la meta deseada procurando
que los reforzadores sean naturales y disponibles en el medio de vida del cliente y (d)
se busca la forma de generalizar los progresos a la vida diaria del cliente como se
reseñó antes.

(5º) Usar los 4 aspectos previos en la propia supervisión de los terapeutas FAP:
La supervisión puede ser vista como un trabajo en 4 áreas: (1) como aumentar las
habilidades de conceptualización funcional de los supervisados; (2) como desarrollar
habilidades terapéuticas específicas en los supervisados; (3) habilidades para el

247
propio supervisor-ra y (4) como generalizar lo aprendido en la supervisión al trabajo
clínico con FAP del/la supervisado/a.

5.1. Habilidades de conceptualización del caso del cliente:

5.1.1. Evaluar el grado de conocimientos de conceptualización de análisis funcional


que tiene el/la supervisado/a: En caso de necesidad de mejora se usa ilustraciones
clínicas de casos concretos, además de bibliografía e instrucción didáctica. Un
problema frecuente en esta supervisión de conocimientos funcionales es la
información inexacta que traen los supervisados de estas cuestiones o sus barreras
teóricas previas que le pueden llevar a prejuicios sobre el análisis de la conducta.
Enseñar a pensar en términos funcionales es la vía para superar estos obstáculos.
Los terapeutas deben aprender a pensar en términos de clases y equivalencias
funcionales; y en forma de contingencia de tres términos (SD/Ocasiones-
RS/Conductas-RF/Consecuencias, empleando todo esto en las sesiones
progresivamente desde el lenguaje común y ordinario al más conductual

5.1.2. Como aplicar el análisis funcional a la conceptualización del caso concreto: Se


usan ejemplos de otros casos y del caso en cuestión, usando tanto el lenguaje
común como el más técnico. Se destaca que la conceptualización del caso no es algo
para hacer una vez como una foto fija, sino que está en constante evolución según
marche la relación con el cliente. Manejar las clases funcionales de las conductas
clínicamente relevantes, las funciones de las conductas verbales y las 5 reglas de
FAP en cada caso es central en esta área. Los casos “resistentes” son abordados
como casos donde el análisis funcional es deficiente o bien no se han detectado las
variables funcionales adecuadas para que el cliente se “involucre” en la terapia
mediante respuestas efectivas.

5.2. Conceptualización de las habilidades del terapeuta:

5.2.1-Preguntarse con frecuencia por la triple contingencia en cada caso: “¿Qué está
ocurriendo en el ambiente de este/esta cliente y bajo qué condiciones aparece este
comportamiento, y qué lo sigue que apoya o impide que el comportamiento ocurra
o no en el futuro?” (Dentro/ Fuera de la consulta)

5.2.2-El análisis funcional también incluye la conducta del/la terapeuta en relación a


cada cliente: Se enseña a los terapeutas que tanto ellos como sus clientes tienen
fortalezas y debilidades, sus excesos y déficits conductuales. Es importante que el
terapeuta discrimine que respuestas suyas ayudan o entorpecen las sesiones de

248
terapia en relación a la ayuda al cliente.

5.2.3-Es importante entrenar “la paciencia” del terapeuta distinguiendo la diferencia


entre aplicar una serie de contingencias a respuestas específicas del cliente y el
cambio-más lento- de clases de respuestas de este. Con frecuencia los terapeutas
supervisados se quejan de que hacen análisis y conceptualizaciones funcionales
correctas y aplican las contingencias de manera adecuada y se sienten frustrados
con los clientes que parecen no cambiar. El cambio de clases de conductas es
muchas veces lento y difícil. También se les indica que la empatía con sus clientes es
un elemento útil pero insuficiente sin una labor, “trabajosa” con la aplicación de
contingencias pertinentes.

5.2.4-Enseñar a los supervisados un repertorio adecuado y suficiente para hacer FAP:


No hay un criterio universal o un catálogo a mano de estas habilidades. La
conceptualización funcional de cada caso puede requerir distintas habilidades . En
general se consideran necesarias:

5.2.4.1-Que este haga conceptualizaciones funcionales de cada caso. Esto es básico.


Sin esto no sabemos qué hacer ni a donde dirigirnos en la terapia. Entender que las
habilidades del terapeuta consisten básicamente en discriminar señales contextuales
y aplicar reforzamiento diferencial contingente en relación a la conceptualización
funcional del caso.

5.2.4.2-Que el terapeuta supervisado contacte y exprese sus necesidades a través del


contacto con su supervisor, no con los clientes, que no están en terapia para esa
función o finalidad, y se canalicen estas adecuadamente (incluso si se da el caso
terapia personal para estos). Esto a su vez puede mejorar las habilidades de este
para discriminar y responder a las necesidades de sus clientes.

5.2.4.3-Que el terapeuta se dé cuenta, discrimine el impacto que tiene sobre el


cliente y el cliente sobre él/ella. Esto conlleva proporcionar retroalimentación
(refuerzo, indicaciones o avisos) al cliente y pedirle como le impacta a estos su
propia conducta (preocupaciones, acciones concretas, etc.).

5.2.4.4-Que el terapeuta maneje los conflictos entre los objetivos del cliente y los
suyos como terapeuta que en algunos casos se pueden mostrar con hostilidad más o
menos abierta. Se aplica el análisis funcional a esa relación conflictiva sus efectos y
alternativas.

5.2.4.5-Manejo de problemas relacionados con la cercanía e intimidad entre cliente y


terapeuta: Habitualmente el terapeuta está enfocado en los objetivos de sus
clientes por lo que es poco habitual, aunque a veces puede hacerlo cuando es

249
pertinente según el análisis funcional, que comparta su historia personal con el
cliente. En estas relaciones pueden surgir problemas a manejar como las excesivas
muestras de afecto del terapeuta hacia el cliente o las carencias de muestras
afectivas del terapeuta hacia el cliente en relación a cada caso concreto. La
regulación del comportamiento del terapeuta se hace en función de los objetivos
terapéuticos para el cliente no en función de las necesidades o aversiones del
terapeuta.

5.3. Conceptualización del proceso de supervisión y objetivos para el/la


supervisor/ra:

5.3.1-Los objetivos del rol de supervisión son realizar una conceptualización de las
fortalezas y debilidades del/la supervisado/a y a continuación maximizar la
capacidad de estos para manejarse eficazmente con los clientes.

5.3.2-Para ello se evoca que el supervisado exponga las dificultades que tiene en la
terapia FAP y se modelan alternativas para el manejo de las mismas, siguiendo las
CCRS y las 5 reglas en este caso a través de la relación entre ambos. Otros
problemas personales-relacionales ajenos a los de los objetivos con los clientes no
deben ser abordados en el proceso de supervisión, ya que esta no es una terapia.
Observar y confrontar gradualmente y buscar alternativas como estos problemas
ocurren en la relación con el supervisor en vivo, de modo similar a las CCR1 de los
clientes es esencial. Puede ser necesario que el supervisor evoque respuestas
difíciles en la misma sesión de supervisión relacionadas con las dificultades o
evitaciones del supervisado con el cliente en cuestión, a fin de producir cambios en
vivo y no solo referirlos como si ocurrieran fuera en otro lugar. Usar el análisis
funcional en las entrevistas con los supervisados es la forma más pertinente de hacer
este trabajo (¿En qué ocasión ocurrió eso?-¿Cómo respondiste a eso?-¿Qué pasó a
continuación contigo y con el/la cliente?”).

5.3.3-Puede ser de mucha ayuda al/la supervisado/da que el supervisor exponga sus
propias dificultades en el proceso de supervisión y se observen las complejidades de
las interacciones humanas y evitar una imagen inmaculada y sin faltas. Esto a su vez
puede modelar las relaciones con los clientes para reconocer impases o dificultades
y como comunicarlas para manejarlas entre ambos.

5.4. Generalización del repertorio FAP del terapeuta:

5.4.1. Es importante enseñar a los supervisados un repertorio flexible de respuestas


para una amplia variedad de clientes y problemas y no guiones al estilo de “cuando
el cliente diga o haga tal, responda usted de esta manera”. Una manera de hacer

250
esto es probar en sus vidas diarias, no solo con los clientes estos nuevos repertorios
supervisados y comprobar sus efectos. Esto se puede moldear desde la puesta en
práctica en contextos relacionales más seguros y cercanos a otros más difíciles o
ajenos.

5.4.2. Además de la supervisión individual, la supervisión en grupos de terapeutas


puede ser otra forma poderosa de generalización de estos repertorios más flexibles
al estar expuestos a una amplia gama de variedades relacionales. Los supervisados
pueden formas equipos de trabajo para conceptualizar y abordar los casos, trabajar
dificultades comunes o más personales, etc.

5.4.3. Importancia de evaluar empíricamente la supervisión tanto mediante


cuestionarios fiables y validos (véase referencias anteriores) como observando los
efectos en la eficacia de los terapeutas FAP con variedad de clientes y problemas.

En resumen los aspectos esenciales de la supervisión de terapeutas FAP tomando


como referencia a Callaghan (2006a, 2006b) son los siguientes:

-ASPECTOS IMPORTANTES EN LA SUPERVISIÓN DE TERAPEUTAS FAP-

1. ¿Cómo conceptualiza funcionalmente el caso de su relación con el cliente en cuestión? ¿Cómo


moldear en el/la supervisada estas habilidades?:

.Conocimientos que tiene sobre el Análisis Funcional de la Conducta (AFC)


.Cómo aplica el AFC al caso en cuestión

2. Potenciar las habilidades de relación terapéutica en los supervisados a partir de sus fortalezas
y debilidades:

.Preguntando mediante el análisis funcional por aspectos problemáticos en la relación con


los clientes moldeando la diferencia entre respuestas específicas y clases de conductas y
los cambios más pausados en estas últimas.
.Moldeando cómo manejar de manera flexible varias cuestiones que suelen aparecer en
las relaciones terapéuticas: (1) Canalizar las necesidades del terapeuta y discriminar las del
cliente, (2) Discriminar el impacto de uno sobre el otro, (3) Manejar los conflictos de
objetivos entre ambos y (4) Manejar los problemas que surgen en la cercanía e intimidad
entre ambos.

251
LA SUPERVISIÓN DE LOS TRES GRUPOS FAP DE ÚBEDA:

-Primera sesión de supervisión (45 minutos) mediante Skype. Desarrollada el 6-9-


2017. -Supervisado: Juan José Ruiz Sánchez. –Supervisor:-José Manuel Sánchez Olid.

-Resumen (Juan José Ruiz Sánchez):

Habíamos quedado en que previamente a exponer las dificultades de los casos me


compartiera sus impresiones y opiniones sobre algunas partes del libro, cosa que
hace exponiendo sus opiniones al respecto sobre varios apartados del libro en
común. Le percibo serio por Skype (a José) pero no le digo nada de esto al menos de
manera inmediata.

A continuación me pide que le hable de los tres grupos con los que trabajo y mis
sensaciones con ellos. Nos da tiempo a compartir mis dificultades iniciales solo con
el grupo de los viernes, formado por mujeres que antes habían participado en su
mayoría en terapia de grupo ACT y se encuentran ahora en este grupo sin que la
terapia previa le fuera de mucha ayuda (el 20% de personas que en mi experiencia
no respondieron bien a aquella está representado en este grupo). Con preguntas
funcionales de cuando/que pasó- que hice/dije- como efecto como me sentí; me va
a ayudando a discriminar (aclarar) mi sensación al final de la terapia de “sentirme
perdido” (ver resumen de sesión nº 1 del grupo del martes) y la relación funcional
de mi respuestas emocionales a lo acontecido en esa sesión, por cierto con un
paralelismo de equivalencia funcional donde observé que una de las participantes le
sonó el móvil (sabe de sesiones anteriores que deben apagarse) y me pidió salir un
momento en mitad de la sesión para atender la llamada sin decirnos si era urgente
o no, callándome pero molesto con esto. También me he callado al percibirlo serio
por Skype (a José que hace de supervisor).

A continuación elicita con preguntas como podría abordar esto en la próxima sesión
con este grupo, diciéndole que puedo exponerle al grupo mis sensaciones, y
moldeando una forma pertinente de hacerlo, como “he estado preocupado este fin
de semana con la cuestión de que estáis casi todas de nuevo aquí en este grupo
porque al parecer el anterior no fue lo suficientemente efectivo para vosotras y me
pregunto cómo podríamos convertir esta nueva ocasión en algo más eficaz para
todas”.
También voy a generalizar esto al compartir con José, en la próxima supervisión en
la que hemos quedado, esto mismo sobre mi percepción de seriedad.

252
-Segunda sesión de supervisión (60 minutos) mediante Skype. Desarrollada el 10-9-
2017

-Hoy habíamos quedado en “comparar” (discriminar) los aspectos comunes y


diferentes entre los tres grupos y qué intervenciones potenciales se pueden realizar
y moldear con cada uno -para que sus miembros se acerquen a sus objetivos
terapéuticos (CCR2).

-Antes de empezar con esto le comparto mi percepción de que le vi serio,


comentándome que suele ser su forma de plantear estos asuntos cuando está
inmerso en un tema, y a partir de aquí está más sonriente durante toda la sesión de
supervisión de hoy. Esto es un ejemplo entre nosotros de como la regla IV de la FAP
puede usarse para producir cambios en una interacción humana.

-Básicamente José va tomando nota de mis respuestas a las 5 reglas FAP como
forma de realizar la supervisión conmigo (así me lo comunica al final). Usando estas
reglas nos damos cuenta (discriminamos) lo siguiente:

.El grupo del viernes es más activo en general, compuesto mayoritariamente por
varones de mayor nivel cultural que el resto de los grupos. Presenta problemas de
pareja en su mayoría con los que hay que trabajar sus implicaciones relacionales
(CCR1, CCR2 y CCR3).

.El grupo del lunes compuesto por mujeres que presentan problemas de relación con
sus hijos adolescentes o ya maduros. Parece que trabajar con ellas la autonomía, el
autocuidado y la activación conductual son CCR2 generalizadas en este grupo.

.El grupo del martes, también compuesto por mujeres le parece a José (el
supervisor) el más tedioso, tal como él va sintiendo lo que yo le relato (su papel de
“director” de mi relato de “actor”) usando la regla IV de la FAP. Me comenta la
“metáfora de la silla en el pasillo”: “Imagina que vas caminando por un pasillo y te
encuentras con una silla en la trayectoria, si no la ves la arrastras y entorpece tu
paso; si la ves puedes hacer con ella varias cosas, como llevarla sin arrástrala,
dejarla a un lado”. La silla es como el tedio o “pesadez” que empecé a experimentar
con este grupo. Discriminar (tomar conciencia, darme cuenta) de cuando y como
aparece para usar esto como SD para actuar de manera distinta con este grupo que
quedarme atrapado (fusionado desde ACT) a esto. Además quedé para la próxima
semana en compartirle a este grupo mis sensaciones (mi papel de director y actor al
unísono).
.Usar las 5 reglas de la FAP en la supervisión nos ayuda a manejar dificultades en
nuestro trabajo como terapeutas.

253
-Tercera sesión de supervisión (60 minutos) mediante Skype. Desarrollada el 27-9-
2017

-Resumen (Juan José Ruiz Sánchez):

-Hoy básicamente comparto mis dificultades con el grupo del lunes y del martes en
el periodo actual de sus 4º sesiones de 12 programadas. El grupo del viernes por
coincidencias locales festivas y de revisión médica oftalmológica del psicólogo se le
emplaza para dentro de dos semanas.

-En el grupo del lunes hablamos de cómo trabajar la regla 4 provocando en el grupo
la pregunta (Sd) de “¿Cómo pensáis que me siento con vosotras en esta sesión?”. En
este momento nos centramos más en las reglas 1 a 3 y escasamente en la 4-5 por
falta de tiempo y por la gran abundancia rápida de CCR2; lo que nos hace pensar en
que hay que discriminar la viabilidad de esas CCR2 en sus vidas; por ejemplo alguien
puede decir “que está harta de su marido y se ha enfadado con él” y recibir el
refuerzo grupal sin comprobar si realmente eso está en la línea valorada y contexto
de esa persona. O sea no reforzar “indiscriminadamente”. No tengo yo esa
sensación le digo a mi supervisado (dada mi experiencia previa con ACT) pero desde
luego es algo a tener en cuenta y mucho. También apuntamos a generar las CCR1
ante la rapidez de las CCR2 que potencialmente podrían “enmascarar” otros
problemas no tratados. Esto ya lo había apuntado, y mi compañero me lo confirma,
o sea me lo refuerza.

-Respecto al grupo del martes le comunico que expresaron sensaciones de pérdidas


en sus vidas y sensación de impotencia casi generalizada en todas, “contagiándome
yo como terapeuta” (TTR1) de esa desesperación y evocando en mi recuerdos de
pérdidas familiares, planteándoles “rápidamente” un ejercicio para evocar CCR2 de
potencia ante la impotencia haciéndoles contactar con sus necesidades personales y
el curso que se les podía dar; que aunque redundó en provocar potenciales CCR2,
quizás fuera mejor comunicarles al grupo (regla 4) mis sensaciones d impotencia,
recuerdos, etc.; y “hacerles un espacio parándonos en ellas de modo unificado para
todo el grupo” (apertura de la ACT a las emociones) sin cambiar de tema
rápidamente para reducir la evitación experiencial generalizada de todos (incluido el
terapeuta) y una vez parados preguntarnos a que nos conduce esto aquí en el grupo
(por ejemplo huir, cambiar de tema, etc.)…y en nuestra vida (evitar hablar con
ciertas personas de temas dolorosos y hablar en general menos con la gente, etc.)
siguiendo una secuencia de análisis funcional; y a la postre debilitar el poder de las
emociones de “impotencia” o actuar a pesar de su presencia.

254
Capítulo 7. Una investigación comparando dos
modalidades de Terapia de Grupo: FAP de Grupo y ACT de
Grupo
(Juan José Ruiz Sánchez, Inmaculada Ruiz Miñarro, Francisco Trillo Padilla, Juan Jesús
Aznárez Acosta, Idaira Izquierdo Hidalgo, Guacimara González González, Salvador
Arjona Moreno, Manuel Pérez Cámara y María Dolores Ruiz Fuentes)

Nuestros datos de investigación previos trabajando con distintas modalidades de


terapia de grupo en la Unidad Comunitaria de Salud Mental de Úbeda (Jaén, España)
nos ha venido demostrando tanto en los datos recabados que comparan diversas
medidas de cuestionarios, como en los informes verbales no escritos de los
participantes en estos grupos, que estas experiencias grupales son efectivas para
ellos en diversos aspectos de sus vidas. Como apuntamos en el capítulo anterior,
tanto la terapia de Grupo Adleriana (foco en las relaciones interpersonales de
cooperación), la terapia de grupo Estratégica (foco en el trabajo con las excepciones
a los problemas) como la terapia de grupo ACT (foco en la flexibilidad psicológica en
relación a aumentar la implicación en actividades valiosas) son intervenciones
efectivas y eficientes. Todas estas intervenciones produjeron cambios en todas las
medidas valoradas, salvo en evitación experiencial, donde solo hubo cambios
significativos para los grupos de terapia ACT (y no en los adlerianos y estratégicos).
Es decir solo las terapias de grupo ACT produjeron reducción en la evitación
experiencial mientras las personas se activaban en direcciones valiosas para sus
vidas (Ruiz y Ruiz, 2015).

La segunda fuente de datos de experiencias relevantes proviene del ámbito


privado del Centro de Psicología Clotilde Acosta López, situado en San Cristóbal de
La Laguna, Santa Cruz de Tenerife, Tenerife, Islas Canarias, integrado por los
psicólogos Acosta, Aznárez, Izquierdo y González, y concretamente obtenidos a
través del Proyecto de Terapia de Grupo: “Toma Las Riendas Psicología” dirigido por
Juan Jesús Aznárez Acosta y Guacimara González González, donde el grupo de
trabajo Aznárez, Izquierdo y González vienen trabajando con terapias contextuales
funcionales de grupo desde hace varios años con muy buenos resultados, tanto con
población clínica como no clínica. Los datos aquí expuestos pertenecen a las 4
primeras ediciones de un taller grupal con una base contextual y ecléctica, centrada
principalmente en ACT (RFT), pero con muchos componentes de entrenamiento en
Mindfulness, y de FAP en la gestión de las sesiones por parte de los terapeutas.
Dentro de los resultados más relevantes que hemos obtenido destacan, en términos
generales, una reducción significativa en la frecuencia del malestar, y en la evitación
experiencial, así como un aumento de las conductas orientadas a valor y en la
percepción de vida significativa (Aznárez, González e Izquierdo, 2017). En la

255
actualidad, las ediciones en curso se están adaptando en contenidos y duración,
además de en la batería de pruebas, para facilitar el trabajo comparativo con el
grupo de Úbeda, es por esto que con los datos actuales de Tenerife únicamente
proponemos una exposición de los mismos, quedando pendiente una comparativa
más completa de los resultados entre los dos equipos (y por ende entre
ACT/FAP/FACT) para las siguientes ediciones de este trabajo.

Tanto el grupo de trabajo de Úbeda, como el de Tenerife a su vez, estamos en


contacto de intercambio de experiencias y conocimientos con el Master de
Terapias Contextuales de la Universidad de Almería, dirigido por José Manuel
García Montes.

En este capítulo, nuestro objetivo es exponer la comparación de los resultados en


diversas medidas de tres grupos: uno desde la ACT y otro desde la FAP realizados
en Úbeda (Jaén, Andalucía, España), y un tercer grupo de aplicación conjunta
ACT/FAP en Santa Cruz de Tenerife (Tenerife, Canarias, España) con personas con
problemas clínicos “ansiosos-depresivos”, aunque en estos grupos también hay
personas con diagnósticos de “trastornos de personalidad”. El Grupo de
psicólogos de Tenerife también ha trabajado con muestras clínicas y no clínicas.
Lo habitual es que en los grupos ACT se incluyan elementos de la FAP (Ruiz y Trillo,
2017), pero en el caso del equipo de Úbeda nuestra intención es la comparativa
con un grupo “puro” (en lo posible) de FAP.

Sabemos que la “ansiedad y la depresión” suelen ser los problemas más


habituales donde se comparan casi todas las modalidades de terapia (Pérez
Álvarez y García Montes, 2001; Pérez Álvarez, 2013), sin embargo, nuestras
experiencias con distintas modalidades grupales nos muestra que no todas las
terapias obtienen resultados similares en todas las medidas, como el caso que
apuntamos de la reducción de la evitación experiencial “exclusiva” para los
grupos ACT.

En este estudio pretendemos comprobar la comparativa de dos terapias de


tercera generación en modalidad grupal (ACT y FAP).

La comparativa proveniente de los grupos tenidos en Úbeda se basa en


los aspectos reseñados en los siguientes cuadros:

256
LOS FOCOS DE TRABAJO DE LOS DOS TIPOS GRUPOS QUE SE COMPARAN

Grupo PAF Grupo ACT

.Ccrs (Ccr1, Ccr2, Ccr3) .Moldeamiento de discriminaciones d1


(experiencia vs lenguaje), d2 (evitación
.5 Reglas experiencial vs acciones valiosas) y d3
(Yo contenido vs Yo contexto)
.Equivalencias funcionales
pasado/presente y vida diaria/grupo .Uso de la Matrix

.Uso de ejercicios adicionales para problemas .Metáforas y ejercicios experienciales


del control público de la experiencia del Yo

ASPECTOS QUE SE COMPARAN ENTRE LAS DOS MODALIDADES DE GRUPOS

Evitación Experiencial Control privado vs público Obstáculos,


de la experiencia del Yo discriminaciones y
acciones valiosas
.Cuestionario AAQ-2 .Cuestionario EOSS .Cuestionarios ODA y
ODA-CN
-Se comparan las tres medidas entre el inicio y el final de las experiencias grupales
-Se comparan las tres medidas entre los dos tipos de grupos (PAF y ACT)

COMPOSICIÓN DE LOS GRUPOS


-Entre 5 a 12 personas adultas por grupos.
-Asignadas a cada grupo por azar y con decisión de participación voluntaria en ellos.
-Presentan demandas de problemas emocionales/relacionales a la Unidad de Salud
Mental Comunitaria de Salud Mental de Úbeda.
-Se descartan de estos grupos personas con problemas referidos como Psicóticos.
-Las personas incluidas en los tres grupos ellos están “diagnosticadas” en la topografías
nomotéticas como Trastornos Adaptativos, Trastornos de Ansiedad de diferentes tipos,
Distimia y Trastornos de la Personalidad

Estructura de las agendas flexibles para las sesiones de grupo ACT:

-Sesión nº 1:
.Presentación de la terapia de grupo: roles, confidencialidad y objetivos del trabajo en
ACT
.Metáforas del piloto automático de la nave y metáfora del jardinero
.Presentación de la Matrix con un ejemplo simulado
,Meditación de la respiración
.Medidas iniciales: AAQ-2/7 ítems, EOSS, ODA y ODA-CN

257
-Sesión nº 2:
.Meditación de las emociones
.Metáfora del autobús
.Ejercicio Mundo/Cuerpo/mente de Polk
.Matrix de seguimiento

-Sesión nº 3:
.Meditación de la autocompasión
.Ejercicio de defusión de manos en la cara
.Ejercicio de ejemplos de procesamiento de Polk
.Matrix de seguimiento

-Sesión nº 4:
.Meditación de fisicalizar
.Metáforas de defusión: las gafas oscuras, la radio siempre encendida y fisicalizar
.Ejercicio de experiencias internas vs soluciones de Polk
.Matrix de seguimiento

-Sesión nº 5:
.Meditación de preguntas importantes
.Metáfora de las olas y mirarlas, andando hacia lo que nos importa, desde el paseo
marítimo
.Ejercicio de las reglas del juego de Polk
.Matrix de seguimiento

-Sesión nº 6:
.Meditación de un año de vida
.Metáfora del campo de hoyos
.Ejercicio de dolor vs sufrimiento de Polk
.Matrix de seguimiento

-Sesión nº 7:
.Meditación/ejercicio de escritura con la mano no dominante
.Metáfora de las arenas movedizas
.Ejercicio de enganchado vs desenganchado de Polk
.Matrix de seguimiento

-Sesión nº 8:
.Meditación de lo que menos me gusta de mi
.Metáfora de evitar vs aceptar
.Ejercicio de la vida valiosa de Polk
.Matrix de seguimiento

-Sesión nº 9:
.Meditación de los pensamientos inaceptables
.Ejercicio de abrazando tus demonios
.Ejercicio de la isla desierta de Polk
.Matrix de seguimiento

258
-Sesión nº 10:
.Meditación de las crisis
.Ejercicio del sentido de mi vida con la lápida-epitafio
.Repaso de cuestiones básicas en ACT
.Matrix de seguimiento

-Sesión nº 11:
.Meditación de la montaña
.Ejercicio problemas en la cabeza vs en la vida de las personas
.Repaso de cuestiones básicas en ACT
.Matrix de seguimiento

-Sesión nº 12:
.Medidas finales de la terapia: AAQ-2/7 ítems, EOSS, ODA y ODA-CN
.Meditación de los troncos en el rio
.Ejercicio de las perspectivas
.Repaso de cuestiones básicas en ACT
.Matrix final de lo conseguido y de lo que falta
.Compartir experiencia de grupo y agradecernos mutuamente estas oportunidades

Nota: En el capítulo 5 hemos detallado la estructura de las agendas de los grupos


FAP en la USMC de Úbeda

A. Los Datos de Úbeda (Juan José Ruiz Sánchez, Inmaculada Ruiz Miñarro
y Francisco Trillo Padilla):

Datos de los grupos de la USMC de Úbeda con el SPSS:

Entre Febrero y Mayo de 2017 trabajamos en la USMC de Úbeda con dos grupos de
personas con Terapia de Aceptación y Compromiso de Grupo (Grupos 1 y 2 de ACT).
Cada uno de estos grupos estaba constituido por 7 personas adultas con diversos
problemas “ansiosos-depresivos” y algunas con algún diagnóstico adicional de
trastorno de personalidad. Usamos varias medidas para evaluar los cambios en
estos grupos en dos momentos temporales entre el inicio de la terapia y su final
después de 12 sesiones en 3 meses a razón de sesión semanal de 2 horas de
duración.

Usamos él AAQ-2 versión de 7 ítems (Bond, Hayes y cols.2011) para medir la

259
evitación experiencial inicial, el EOSS (Kanter, Parker y Kohlenberg, 2001) para medir
el control público de la experiencia del yo, el SA-45 (Davison y cols.1997) para medir
diversos síntomas psicopatológicos y el Cuestionario de Experiencia de Grupo (CEG,
Ruiz, 2017) medir los factores comunes en los grupos.

Los resultados con estos dos grupos fueron los siguientes: Ver tablas

-Se redujo la evitación experiencial de manera estadísticamente significativa


medida por el AAQ-2-7 items en ambos grupos de ACT.

-Se redujo el control público de la experiencia del yo medidos por el EOSS tanto en
relaciones íntimas como en relaciones sociales, pero no así en general ni se
incrementó en aspectos positivos de manera significativa en ambos grupos de ACT.

-En cuanto a cambios sintomáticos (que no es el foco de ACT) se produjeron


cambios significativos medidos por el SA-45 en la reducción del malestar
sintomático en todas las medidas menos en somatización (en los grupos había
muchas personas con problemas crónicos de dolores asociados a diversas patologías)
y solo en un grupo respecto a otro en fobias sociales y experiencias psicóticas
(hemos tenido alguna personas diagnosticada de esquizofrenia en algunos de estos
grupos). Cambios significativos en síntomas de ansiedad, depresión, obsesividad,
hostilidad, sensibilidad interpersonal, paranoidismo, etc.

-Respecto a los factores comunes de los grupos medidos por él CEG no se


produjeron cambios significativos entre el inicio de la terapia y su final ni en el
altruismo ni en la cohesión grupal y solo en uno de los grupos en la recapitulación de
la experiencia familiar previa. En el resto de medidas cambios significativos como en
universalidad de la experiencia, aprendizaje interpersonal, aprendizaje por
modelamiento, insghit, catarsis, esperanza y contacto con cuestiones existenciales.

260
Grupo 1-ACT-7 personas en este grupo

261
Grupo 2-ACT-7 personas en este grupo

Con los resultados anteriores y experiencias previas, podemos afirmar que la ACT de
Grupo es efectiva para reducir la evitación experiencial (cosa que no ocurre en otros
tipos de terapia de grupo), reducir la sintomatología (aunque ese no es su foco) e
incrementar las experiencias (factores) comunes con otros tipos de terapia de grupo.

En el momento actual lo que nos interesa investigar es si la ACT de Grupo y la FAP


de Grupo tienen efectos diferentes o similares entre sí.. Para ello pretendemos
compararlas en varias medidas cuantitativas mediante la valoración de la evitación
experiencial (AAQ-2 7 items, Bond, Hayes y cols.2011) y del control público de la
experiencia del yo (EOSS, Kanter, Parker y Kohlenberg, 2001) y una medida
cuantitativa y cualitativa centrada en la propia experiencia de los participantes en
los grupos (ODA y ODA-CN, Ruiz, Ruiz y Trillo, 2017) en cuanto a la identificación de

262
obstáculos internos y externos que se interponen en la dirección valiosa de sus vidas,
que discriminan que le ayudan a acercarse y les alejan de esas direcciones valiosas y
que acciones emprenden que funcionalmente les ayuda en esa dirección; todo ello
haciendo las “medidas” más coherentes con la filosofía contextual-funcional de
estas terapias y que unifica aspectos de ACT y FAP.

Hemos de advertir que algunos de los cuestionarios que hemos empleado (C.E.G,
O.D.A y O.D.A-CN) no están validados en la actualidad, y aunque nos aportan datos
interesantes para nuestro trabajo, no se pueden tomar con rigor sus resultados,
salvo para construir hipótesis funcionales, que es uno de nuestros objetivos en este
estudio, aunque más adelante habría que emprender un trabajo de validación
mucho más consistente y riguroso.

Nuestra experiencia en el periodo Septiembre-Noviembre de 2017 con tres grupos


FAP en la USMC de Úbeda se ha centrado en usar medidas cuantitativas y
cualitativas más contextuales-funcionales y más coherentes con nuestro marco de
trabajo, dejando de lado las medidas de síntomas y de factores comunes de los
grupos, que ya hemos comprobado que en general, salvo excepciones puntuales,
cambian en todos los tipos de grupo.

1. DATOS CUANTITATIVOS DEL GRUPO LUNES-USMC-ÚBEDA-COHESION GRUPAL:

También se midió la Cohesión Grupal mediante el Cuestionario GCQ-S de


McKenzie (1985-ver anexos de cuestionarios) en test-postest (T de Student
tras comprobar normalidad de las variables) entre el inicio y el final de grupo
con los siguientes resultados significativos:

263
Estos indican que:

1-Que durante las sesiones de grupo ha mejorado significativamente la


atmósfera de trabajo conjunta comparando las sesiones iniciales con las
finales

2-Que no hubo tensiones o conflictos entre los miembros de los grupos


significativas a lo largo de las sesiones ni diferencias entre estas a lo largo del
proceso grupal

3-Que durante las sesiones de grupo no hubo cambios en la evitación de la


responsabilidad de trabajo grupal comparando las sesiones iniciales con las
finales.

2. DATOS CUALITATIVOS DEL GRUPO LUNES-USMC-ÚBEDA:

Fueron recabados por el O.D.A (ver anexos de cuestionarios)

1-Silvia
Al empezar la terapia Al finalizar la terapia
(O) Comentarios de compañeras de (O) Lo mismo (No cambio)
estudio sobre su vida sentimental y
sentirse insegura con estima por los
suelos y no poder acabar auxiliar que
es su sueño de vida
(D) Le perjudican los comentarios de (D) Lo mismo (No cambio)
compañeros y de su padre y le ayuda
el apoyo de su madre y el grupo
(A)Ver series o películas de miedo (A)Lo mismo (No cambio)

En esta persona, que lleva unas 4 citas, no se aprecian cambios relevantes. Se


incorporó al grupo cuando este llevaba ya más de 6 sesiones.
2-María A. M.
Al empezar la terapia Al finalizar la terapia
(O) El comportamiento de su novio de (O) Lo mismo (No cambio)
hacerla sumisa, miedo a romper la
relación y conocer a otra persona
(D) Le perjudica la relación actual con (D) Lo mismo (No cambio)
el novio. Se apoya en su madre y una
tía
(A)Indecisa en dejar o no al novio (A)Lo mismo (No cambio)

264
En esta persona, que lleva unas 3 citas, no se aprecian cambios relevantes. Se
incorporó al grupo cuando este llevaba ya más de 6 sesiones.

3-Pilar
Al empezar la terapia Al finalizar la terapia
(O) Enfrentamiento con familiares y (O) Lo vivo como recuerdos algo más
preocupaciones y sentimientos al distantes (Cambio **)
respecto
(D) Le daba muchas vueltas a la (D) Le doy un punto de vista menos
situación familiar con mucho drástico a esta situación familiar
dramatismo (Cambio **)
(A)Pedir ayuda profesional (A)Lo mismo y veo que me ayuda
(Cambio **)

3-Teresa
Al empezar la terapia Al finalizar la terapia
(O) Circunstancias de mi vida familiar (O) Han desaparecido esas
y de pareja circunstancias (Cambio **)
(D) Mucha ansiedad pensando en el (D) Pienso en el problema pero no me
mismo problema siempre del rechazo produce ansiedad. Ha mejorado la
con mi hijo. Problemas con mi marido relación con mi marido (Cambio **)
(A)No hacía nada (A)Le doy menos importancia, aunque
en ocasiones me supera (Cambio **)

4-Manuela
Al empezar la terapia Al finalizar la terapia
(O) Fuera de mi camino de vida tras el (O) Me veo más fuerte (Cambio **)
accidente de tráfico con familiares
fallecidos.
(D) Evitaba a mis familiares para no (D) Tener contacto con ellos, ya eso
hablar del tema del accidente no me perjudica (Cambio **)
(A) Alejarme de la realidad y de mis (A)Hablar y tener contacto con mis
familiares vivos familiares (Cambio **)

265
5-María Ángeles
Al empezar la terapia Al finalizar la terapia
(O) Inseguridad, miedos y temblores (O) Un poco más segura y mejor en
al tratar con mis hijos mi personalidad (Cambio **)
(D) Estaba muy mal (D) Diferente, un poco mejor
(Cambio **)
(A) No poner límites a mis hijos (A) Poner límites a mis hijos, y apoyo
del grupo y profesionales (Cambio **)

6-Amparo
Al empezar la terapia Al finalizar la terapia
(O) Suicidio del hijo y darle vueltas a (O) Cuidar de mis nietos aunque me
eso pongan nerviosa a veces (Cambio **)
(D) Mi marido no quiere hablar del (D) Lo mismo (No cambio)
tema y eso no me ayuda
(A) Antes solo darle vueltas a lo de mi (A) Ocuparme de mis nietos, salir
hijo más, me da resultado (Cambio **)

7-Maria Teresa
Al empezar la terapia Al finalizar la terapia
(O) Presiones y amenazas de mi ex (O) Lo mismo de mi ex. (No cambio)
(D) Mi marido no quiere hablar del (D) Lo mismo (No cambio)
tema y eso no me ayuda
(A) Antes solo tomar medicación, (A) Estar con mis nietos y mis hijos
acostarme y llorar (Cambio **)

8-Maria
Al empezar la terapia Al finalizar la terapia
(O) Presiones de mi jefe, sensación de (O) No me importa lo que diga de mí,
no existir, no tener mi lugar. Triste, paso. No estoy ya deprimida ni
humillada e insegura ansiosa (Cambio **)
(D) Encerrada en mis estado de ánimo (D) Tomar decisiones me ha ayudado,
darme cuenta que tengo apoyos
(Cambio **)
(A) Evitar relaciones con compañeros (A) Me valoro y me relaciono bien con
de trabajo los compañeros de trabajo
(Cambio **)

266
3. DATOS CUANTITATIVOS DEL GRUPO MARTES-USMC-ÚBEBA-COHESION GRUPAL:

La Cohesión Grupal mediante el Cuestionario GCQ-S de McKenzie (1985-ver anexos


de cuestionarios) en test-postest (T de Student tras comprobar normalidad de las
variables) entre el inicio y el final de grupo son los siguientes:

Los datos indican que no hay un cambio en la cohesión grupal desde su inicio hasta
esta sesión de evaluación nº 10. En general la cohesión grupal se ha mantenido
idéntica a lo largo de la terapia (con una media alta) sin que sus componentes hayan
sufrido cambios a lo largo de la misma (compromiso alto desde el principio sin
cambios, baja conflictividad grupal sin cambios y baja evitación de tareas grupales
sin cambios).

Otro cuestionario administrado es el la Experiencia Grupal inicial y final (C.E.G, Ruiz,


2017) que recaba información de los efectos de los 12 factores comunes de Yalom
en los grupos, tanto de la experiencia grupal en las mismas sesiones, dentro del
grupo y su equivalencia funcional fuera del grupo, en la vida diaria de los clientes
que han participado en el grupo. Los resultados, que en este caso solo
comprobamos para el grupo del martes (lo entregan solo 5 personas), se presentan
en la siguiente tabla (T de Student y Shapiro Wilk para muestras normales, como en
este caso, inferiores a 50):

267
Los resultados indican que no hay diferencias significativas entre el efecto de la
experiencia grupal dentro del grupo en los factores comunes (que es alta) y la
experiencia diaria de estos mismos factores comunes, lo que podría indicar que lo
han realizado tanto fuera como dentro del grupo.

4. DATOS CUALITATIVOS DEL GRUPO MARTES-USMC-ÚBEBA: Fueron recabados por


el O.D.A (ver anexos de cuestionarios)

1-Rosario:
Al empezar la terapia Al finalizar la terapia
(O) Problemas familiares. Me sentía (O) Lo mismo respecto a mi familia.
insegura y confundida Tengo más confianza en mí
(Cambio**)
(D) Mis miedo y darle vueltas a estos (D) Aprender a no encerrarme en mí,
levantarme y seguir adelante
(Cambio**)
(A) Hacia cosas que me costaban mucho (A) Hago casi las mismas cosas pero
trabajo con más satisfacción (Cambio **)

2-Paqui:
Al empezar la terapia Al finalizar la terapia
(O) Recuerdos negativos de la experiencia (O) Lo mismo respecto al malestar
laboral con ansiedad y depresión vivido

(D) Apartarme de todo el mundo y estar (D) Venir a terapia, tomar medicación
solo con mi marido e hijos y apoyarme en mi familia cercana me
ayuda
(Cambio**)
(A) No hacía nada (A) Más activa, aunque tenga
frustraciones a veces (Cambio **)

268
3-Nati:
Al empezar la terapia Al finalizar la terapia
(O) Entorno familiar y económico (O) Continúa la misma situación.
negativo. Muy angustiada Tengo días, aunque me cuesta
superarme (Cambio **)

(D) No compartir mi situación con nadie, (D) Me ayuda compartir mi situación


encerrarme con las compañeras de grupo
(Cambio**)
(A) ¿? (No anota nada) (A) Enfrentarme con lo que me rodea
(Cambio **)

4-Juani
Al empezar la terapia Al finalizar la terapia
(O) Mala relación con mi familia política y (O) Ahora me afectan un poco menos
mi cuñada. Preocupada por la situación sus ataques (Cambio **). Sigo
de enfermedad de mi hijo. preocupada por la enfermedad de mí
hijo.

(D) Mis problemas familiares y mis (D) Buscar actividades que me alejen
propios pensamientos de mis preocupaciones
(Cambio**)
(A) Evitaba enfrentarme a los problemas y (A) Intento enfrenarme aunque lo
pensamientos pase mal (Cambio **)

5-Loli:
Al empezar la terapia Al finalizar la terapia
(O) Problemas de relación con mi madre, (O) Impotencia y rabia, aunque voy
hermanos, mala economía, avanzando (Cambio **)
enfermedades, ansiedad, sensación de no
ser comprendida, miedos.
(D) El callarme, dudaba que esta terapia (D) Me ayuda la terapia y compartir
me pudiera ayudar con amigos
(Cambio**)
(A) Sufría la situación sin tomar decisiones (A) Tomar las riendas poco a poco me
hace sentirme un poco mejor
(Cambio **)

269
6-Nieves:
Al empezar la terapia Al finalizar la terapia
(O) Problemas familiares (O) Los mismos

(D) Antes me callaba y no sabía cómo (D) Expresar mis opiniones me ayuda
afrontar mis problemas (Cambio**)
(A) Antes no hacía nada (A) Aunque me siento preocupada no
me callo y afronto los problemas
(Cambio **)

7-Antonia:
Al empezar la terapia Al finalizar la terapia
(O) Preocupaciones y pensamientos (O) Ahora no tengo esos
suicidas pensamientos suicidas (Cambio **)

(D) Darle vueltas a los problemas (D) Compartir con mi marido, familia
y el grupo
(Cambio**)
(A) Darle vueltas a los pensamientos (A) Ya no tengo esos pensamientos y
suicidas seguir en compartir con marido y
familia (Cambio **)

270
DATOS CUANTITATIVOS DEL GRUPO VIERNES-USMC-ÚBEBA-COHESION GRUPAL:

La Cohesión Grupal mediante el Cuestionario GCQ-S de McKenzie (1985-ver anexos


de cuestionarios) en test-postest (T de Student tras comprobar normalidad de las
variables) entre el inicio y el final de grupo son los siguientes:

Los datos indican que no hay un cambio en la cohesión grupal desde su inicio hasta
esta sesión de evaluación nº 8. En general la cohesión grupal se ha mantenido
idéntica a lo largo de la terapia (con una media alta) sin que sus componentes hayan
sufrido cambios a lo largo de la misma (compromiso alto desde el principio sin
cambios, baja conflictividad grupal sin cambios y baja evitación de tareas grupales
sin cambios).

6. DATOS CUALITATIVOS DEL GRUPO VIERNES-USMC-ÚBEBA:

1-Manuel:
Al empezar la terapia Al finalizar la terapia
(O) Ninguna (O) Lo mismo

(D) Escuchar voces, ruidos y palabras. (D) Salgo un poco más y me distraigo
Tomar medicación, dormir y quedarme en (Cambio **)
casa
(A) Dormir y quedarme en casa (A) Salgo 2 veces al gimnasio con mi
mujer y voy a andar (Cambio **)

271
2-Paco:
Al empezar la terapia Al finalizar la terapia
(O) Relación con la mujer. Incertidumbre, (O) Se ha separado de ella y más
dudas y muchos miedos tranquilo (Cambio **)

(D) Estar en casa con la mujer y la mala (D) Más relación con amigos que le
relación con ella ayudan (Cambio**)
(A) Esperando a ver qué pasaba con la (A) Ha tomado la decisión de
relación separarse tras el segundo episodio de
infidelidad de ella y más tranquilo
(Cambio **)

3-Pepe:
Al empezar la terapia Al finalizar la terapia
(O) Relación con ex pareja complicada (O) Lo mismo

(D) Inseguridad por el futuro (D) Menor intensidad de la


inseguridad por el futuro. Relación
con amigos y grupo que le ayudan
(Cambio **)
(A) Participación en actividades sociales (A) Lo mismo pero con más
diversas, andar, clases en la universidad, frecuencia aún y disfrute (Cambio**)
etc.

4-Teresa:
Al empezar la terapia Al finalizar la terapia
(O) Relación insatisfactoria con el marido (O) Lo mismo
y circunstancias laborales adversas
(D) Inseguridad, indecisión, miedos. Me (D) Lo mismo
ayudan mis amigas
(A) Mis aficiones (A) Salgo más y tengo más actividades
fuera de casa (Cambio **)

5-Juan:
Al empezar la terapia Al finalizar la terapia
(O) Comentarios adversos sobre mí de (O) Algo menos de esos comentarios.
compañeros de la universidad. Ansiedad, Algo menos de todo lo anterior
inseguridad, miedos, bajo de moral (Cambios **)

(D) Ir a la Universidad, estar con amigos (D) Lo mismo


(A) Darle vueltas a las cosas (A) Afrontar mis miedos (Cambio**)

272
7. DATOS CUANTITATIVOS GLOBALES DE LOS 3 GRUPOS-USMC-ÚBEDA

Se realiza previamente una prueba de normalidad (muestra global de 17 sujetos,


prueba de Shapiro-Wilk), comprobando que de las 22 variables se distribuyen de
manera normal, por lo que se realiza la prueba T de Student para dos muestras
relacionadas (test-postest) a un nivel de significación del 95 % y con error
significativo (p) igual o menor de 0.05. Los resultados son los siguientes:

1-Hay reducción significativa de la evitación experiencial medida por el AAQ2 entre


el inicio y el final de la terapia (AQ2GI-AQ2GF)

2-Hay reducciones significativas en varios aspectos del control público de la


experiencia del yo medida en el EOSS entre el inicio y el final de la terapia: En
concreto en las experiencias de relaciones íntimas (INGII-INGIF) y en las relaciones
sociales (SOGII-SOGIF).

3-Hay una reducción en la percepción de que las experiencias subjetivas de malestar


sean obstáculos para realizar acciones valiosas (OGII-OGIF), y hay paralelamente a
lo anterior, un incremento de las acciones valiosas, todo entre el inicio y final de la
terapia (AVGII-AVGIF) medido en el ODA-Cn.

273
274
Al comparar los resultados entre los grupos ACT y FAP realizados en la USMC-Úbeda
durante 2017 con personas diagnosticadas de Trastorno Mental Común
(Básicamente distintos problemas ansiosos-depresivos con dificultades relacionales
añadidas; y algunos casos de trastorno de personalidad y Trastorno Mental Grave) ,
y teniendo en cuenta que en ellos se han utilizado medidas similares en la evitación
experiencial (AAQ2), la derivación hacia actividades valiosas (Cuestionario del Jardín,
O.D.A y O.D.A-Cn) y el control interpersonal de las experiencias subjetivas (medidas
por el EOSS) los resultados generales indican que:

-En ambas modalidades de grupo se disminuye la evitación experiencial entre el


inicio y el final de las dos modalidades de terapia de grupo en una cantidad de
sesiones similar (medidas por el AAQ2-7 items)

-En ambas modalidades de grupo se incrementan las acciones dirigidas hacia


valores en una cantidad de sesiones similares (medidas por el cuestionario del Jardín
o su equivalente el O.D.A/O.D.A-Cn).

-Que se reduce el control público del Yo (medido por el EOSS) de manera similar y
en la misma cantidad de sesiones en ambas modalidades de Terapia de grupo en
solo dos aspectos: El control público en las relaciones íntimas y el control público en
las relaciones sociales.

Estos resultados indican que ambas terapias tienen aspectos comunes que producen
resultados similares en los aspectos reseñados por lo que en posteriores estudios
profundizaremos en los aspectos comunes y también en investigar si tienen
aspectos diferenciales que sean relevantes. Quizás la focalización en las CCR2 hacia
acciones valiosas (aunque definidas en ambas terapias con cuerpos teóricos
distintos) sea el aspecto clave que hace que estos resultados sean similares.

También usamos un grupo de control formado por personas que reciben


tratamiento habitual individual en el servicio de Salud Mental Comunitaria de
Úbeda que han recibido al menos un tiempo similar de tratamiento a las personas
del grupo. El grupo de control está conformado por 20 sujetos seleccionados al azar
que han recibido tratamiento individual durante 3 meses o más y con 12 sesiones o
más, que bien reciben tratamiento psicológico, farmacológico psiquiátrico o bien
apoyo psicológico de enfermería de salud mental; o algunas de las tres
combinaciones anteriores. A Todas ellas se les administra el AAQ 2 7 items en dos
momentos (test-postest) medido en un intervalo similar a las personas en terapia
de grupo. Los resultados del grupo de control y la lectura de mismo aparece en la
siguiente tabla de datos (Muestra normal comprobada con Shapiro-Wilk, y prueba T

275
de Student para muestras relacionadas):

Como se puede comprobar no hay diferencias significativas en la reducción de la


evitación experiencial (aumento de la flexibilidad psicológica) en el grupo de control
que recibe el tratamiento habitual de salud mental mediante citas individuales con
psicólogo, enfermería o psiquiatras, o combinaciones de los tratamientos anteriores.
Esto puede ser explicado desde la perspectiva habitual que adoptan estos enfoques
hacia el control y la reducción del malestar emocional, muy distinto a los objetivos
habituales de ACT p FAP. En cambio en nuestra experiencia con grupos ACT y FAP de
Grupo en igualdad de citas y tiempo si se produce esa reducción significativa de la
evitación experiencial (aumento de la flexibilidad psicológica).

Podría argumentarse que cualquier otro tratamiento grupal o individual con una
frecuencia semanal similar a los grupos ACT o FAP tendría resultados similares.
Nuestra experiencia con otras modalidades de grupo en condiciones similares
(Terapias de Grupo Cognitiva-Conductual, Terapia Estratégica de Grupo, Terapia
Adleriana de Grupo: Ruiz y Ruiz, 2015) sin embargo demuestran que esta reducción
solo se produjo en los grupos de ACT; y ahora recientemente en FAP de Grupo.

En conclusión: Las Terapias Grupales ACT y FAP producen reducción de la evitación


experiencial de manera significativa; cosa que no ocurre con otras experiencias
grupales -en igualdad de condiciones- ni con el tratamiento habitual individual
que reciben las personas en el servicio de Salud Mental de Úbeda.

276
ANEXOS CUESTIONARIOS:

CUESTIONARIO C.E.G-I (Ruiz, 2017)


Nombre: Fecha:

Utiliza la siguiente escala para responder a las siguientes cuestiones, según la frecuencia en que
experimentas eso

0 1 3 4 5 6 7 8 9 10
Nada frecuente Intermedio Muy frecuente

AL PRINCIPIO DE LA EXPERIENCIA DE GRUPO: (Rellenar cuando se le indique)

1.En mi vida diaria pongo en práctica el ayudar a otras personas lo que me hace
experimentar sentimientos positivos (altruismo)
2.En mi vida diaria cuento con algún grupo de familiares, amigos o compañeros de
trabajo al que siento que pertenezco y me aceptan a pesar de mis limitaciones y fallos
(cohesión)
3.En mi vida diaria cuento con algún grupo de familiares, amigos o compañeros con
los que puedo compartir sentimientos comunes y darme cuenta de que mis
problemas son muy similares a los suyos (universalidad)
4.En mi vida diaria cuento con algún grupo de familiares, amigos o compañeros que
me enseñan a darme cuenta de cómo mis acciones y palabras afectan a otras
personas (aprendizaje interpersonal input)
5.En mi vida diaria cuento con algún grupo de familiares, amigos o compañeros que
me enseñan a mejorar mis habilidades para relacionarme mejor con otras personas
(aprendizaje interpersonal output)
6.En mi vida diaria cuento con algún grupo de familiares, amigos o compañeros que
me ayudan a dar pasos concretos para resolver problemas o dificultades que me
importan (orientación a la resolución de problemas)
7.En mi vida diaria cuento con algún grupo de familiares, amigos o compañeros que
me ayudan a expresar sentimientos difíciles o conflictivos hacia otras personas, en
vez de guardármelos para mí (catarsis)
8.En mi vida diaria cuento con algún grupo de familiares, amigos o compañeros de los
que aprendo de su ejemplo para funcionar mejor en mi vida (imitación/identificación)
9.En mi vida diaria cuento con algún grupo de familiares, amigos o compañeros que
me ayudan a resolver asuntos de mi pasado familiar aún pendientes (reactualización
de asuntos familiares pendientes)
10.En mi vida diaria cuento con algún grupo de familiares, amigos o compañeros que
me ayudan a darme cuenta de aspectos de mí mismo que antes desconocía, evitaba o
reprimía y como esto se relaciona mis dificultades actuales con experiencia de mi
pasado (insight)
11.En mi vida diaria cuento con algún grupo de familiares, amigos o compañeros que
me ayudan a tener esperanza en mejorar mi situación al ver como ellos la han
mejorado también (infundir esperanza)
12. En mi vida diaria cuento con algún grupo de familiares, amigos o compañeros que
me ayudan a reconocer y aceptar los problemas de la vida y aprender a afrontar cosas
que pueden cambiarse y las que no y saber la diferencia entre ambas (factores
existenciales)

277
CUESTIONARIO C.E.G-F (Ruiz, 2017)
Nombre: Fecha:

Utiliza la siguiente escala para responder a las siguientes cuestiones, según la frecuencia en que
experimentas eso

0 1 3 4 5 6 7 8 9 10
Nada frecuente Intermedio Muy frecuente

AL FINAL DE LA EXPERIENCIA DE GRUPO: (Rellenar cuando se le indique)

1.En este grupo he tenido la oportunidad de poner en práctica el ayudar a otras


personas, lo que me ha hecho experimentar sentimientos positivos (altruismo)
2. En este grupo he tenido la oportunidad de sentir que pertenecía al mismo y de que
me aceptaban a pesar de mis limitaciones y fallos (cohesión)
3. En este grupo he tenido la oportunidad de compartir sentimientos comunes y
darme cuenta de que mis problemas son muy similares a los suyos (universalidad)
4. En este grupo he tenido la oportunidad de darme cuenta de cómo mis acciones y
palabras afectan a otras personas (aprendizaje interpersonal input)
5. En este grupo he tenido la oportunidad de aprender a mejorar mis habilidades para
relacionarme mejor con otras personas (aprendizaje interpersonal output)
6. En este grupo he tenido la oportunidad de aprender a dar pasos concretos para
resolver problemas o dificultades que me importan (orientación a la resolución de
problemas)
7.En este grupo he tenido la oportunidad de recibir ayuda para expresar sentimientos
difíciles o conflictivos hacia otras personas ,en vez de guardármelos para mí (catarsis)
8. En este grupo he tenido la oportunidad de aprender del ejemplo de algunos de mis
compañeros/as para funcionar mejor en mi vida (imitación/identificación)
9. En este grupo he tenido la oportunidad de recibir ayuda para resolver asuntos de
mi pasado familiar aún pendientes (reactualización de asuntos familiares pendientes)
10. En este grupo he tenido la oportunidad de recibir ayuda para darme cuenta de
aspectos de mí mismo que antes desconocía, evitaba o reprimía y como esto se
relaciona mis dificultades actuales con experiencia de mi pasado (insight)
11. En este grupo he tenido la oportunidad de recibir ayuda para tener esperanza en
mejorar mi situación al ver como ellos la han mejorado también (infundir esperanza)
12. En este grupo he tenido la oportunidad de recibir ayuda para reconocer y aceptar
los problemas de la vida y aprender a afrontar cosas que pueden cambiarse y las que
no, y saber la diferencia entre ambas (factores existenciales)
T=

278
O.D.A-CN (Ruiz, Ruiz y Trillo, 2017)

Nombre:
Fecha:

Utiliza la siguiente escala de 0 a 10 para valorar la frecuencia en que se presenta en


tu vida actual las siguientes cuestiones:

0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
Nunca Intermedio Muy frecuentemente

1.Las acciones y opiniones de ciertas personas de mi entorno son


obstáculos que me dificultan moverme hacia aquello que a mí me
importa, valoro y da sentido a mi vida
2.Mis preocupaciones, recuerdos, sentimientos, estados de ánimo y
sensaciones internas son obstáculos que me dificultan moverme
hacia aquello que a mí me importa, valoro y da sentido a mi vida
3. Me doy cuenta de aquello que me dificulta moverme hacia
aquello que a mí me importa, valoro y da sentido a mi vida
4. Me doy cuenta de aquello que me ayuda para moverme hacia
aquello que a mí me importa, valoro y da sentido a mi vida
5. Estoy haciendo cosas en la actualidad que me funcionan para
moverme hacia aquello que a mí me importa, valoro y da sentido a
mi vida

279
O.D.A (Ruiz, Ruiz y Trillo, 2017)

¿En qué momento estás de la terapia de grupo? Marcar con (X). INICIAL ( ) FINAL ( )

1-¿Cuáles son los obstáculos mayores en tu vida que te impiden o dificultan moverte en la dirección de lo
que a ti te importa, da sentido y valor a tu vida? (O)

Obstáculos externos (Acciones y opiniones de otras personas. Circunstancias de la vida)

Obstáculos internos (pensamientos, sensaciones, sentimientos, estados anímicos, recuerdos)

2-¿De qué te das cuenta que te perjudica y te ayuda para acercarte a aquello que te importa, valoras y
da sentido a tu vida? (D)

Me perjudica:

Me ayuda:

3-¿Qué vienes haciendo en concreto para comprometerte con aquello que te importa y valoras y que a ti
te funciona para moverte en esa dirección valiosa? (A)

280
GCQ-S de MacKenzey, 1985. (Traducción Ruiz, 2017)

Nombre: Fecha:

Lee cada una de las preguntas siguientes pensando en el grupo en su conjunto al responder a las
mismas. Usa la siguiente escala para puntuar cada pregunta:

0 1 2 3 4 5 6
Nada Intermedio Mucho

PREGUNTAS INICIO DE MOMENTO


LA TERAPIA ACTUAL
1. Me gustan y me importan cada uno de los miembros
del grupo
2. Los miembros del grupo se ayudan para entender y
razonar por qué hacen las cosas que hacen
3. Los miembros del grupo evitan mirar los problemas
que ocurren entre ellos
4. Los miembros del grupo sienten que lo que sucede en
las sesiones es importante y participan en ello
5. Los miembros del grupo dependen del líder (terapeuta)
para dirigir las sesiones (hablar, participar, etc.)
6. Hay momentos de fricción y enfado entre los miembros
del grupo
7. Los miembros del grupo se muestran distantes y
retraídos en las sesiones
8. Los miembros del grupo se estimulan, confrontan y
desafían entre sí para resolver sus dificultades
9. Los miembros del grupo solo hacen las cosas que
parecen aceptables para el grupo
10. Los miembros del grupo se rechazan y desconfían entre
si
11. Los miembros del grupo revelan información y
sentimientos personales sensibles (íntimos)
12. Los miembros del grupo parecen tensos y ansiosos
ESCALA 1-COMPROMISO (Atmósfera positiva de trabajo)(1+2+4+8+11)/5=

ESCALA 2-CONFLICTO (La tensión y enojo en el grupo)(6+7+10+12)/4=

ESCALA 3-EVITACION (Comportamientos de evitación de la responsabilidad personal del trabajo


grupal)(3+5+9)/3=

281
B. Los Grupos de Terapias Contextuales de Tenerife (Juan
Jesús Aznárez Acosta, Guacimara González González e Idaira Izquierdo Hidalgo):

1. Descripción del Proyecto de Terapia de Grupo “Toma Las Riendas Psicología”:

El proyecto de Terapia de Grupo Toma Las Riendas Psicología, se crea desde una
doble visión:

-El trabajo en grupos como una forma de Intervención Comunitaria, que aborda un
espacio normalmente “olvidado” por los Centros de Psicología Privados, basados en
la mayoría de los casos en el tratamiento psicológico individual, y que puede, tanto
prevenir problemas psicológicos futuros, como dar respuesta y/o detectar personas
del entorno con necesidades de tipo psicológico con distintos niveles de
significación o importancia, al incluir participantes de la Comunidad General.

-Potenciar y maximizar el trabajo que hacemos desde la psicoterapia individual.

Dentro de ambos grupos pueden existir personas sin sintomatología clínica y con
sintomatología clínica.

Dentro del proyecto se incluyen los siguientes talleres de grupo:

-Ansiedad (4 sesiones de 2 horas de duración cada una).


-Amor a uno mismo y Autoestima. Desde un enfoque de mindfulness centrado en
prácticas de compasión (2 sesiones intensivas de 3 horas de duración cada una).
-Curso de Básico de Mindfulness – Intensivo de 3 meses (12 sesiones, de hora y
media de duración).
-“Toma Las Riendas: Aprende a Vivir, Aprende a Elegir”, que es el que da nombre al
Proyecto y en el que nos basamos en esta aportación a este capítulo, puesto que su
mayor duración nos permite poder llevar a cabo una investigación en condiciones
óptimas.

2. Descripción del Taller “Toma Las Riendas: Aprende a Vivir, Aprende a Elegir”:

El enfoque desde el que partimos a la hora de realizar nuestra intervención grupal


está basado en las Terapias Contextuales, fundamentalmente en ACT, integrando

282
complementariamente el Mindfulness como una herramienta para nuestros
participantes desde la que facilitarles la toma de conciencia, perspectiva y el
distanciamiento de sus eventos internos a la hora de tomar decisiones en el día a día.
Y, por otra parte, utilizando elementos de la FAP en el modelado de las conductas
que suceden durante el transcurso de las sesiones, y de una forma más flexible
también los objetivos de esta terapia.

Los objetivos principales del taller se presentan en el recuadro que se muestra a


continuación:

1. Facilitar la defusión cognitiva, propiciando que el comportamiento no


esté guiado de forma estricta por los contenidos mentales
(pensamientos, creencias o emociones), sino que sea elegido por la
persona de forma flexible, adecuándose a la experiencia directa y el
contexto inmediato.
2. Mejorar la regulación emocional, a través de estrategias que incluyen
la aceptación, la tolerancia al sufrimiento vs. evitación del malestar y la
compasión hacia uno mismo y hacia los demás.
3. Generar desesperanza creativa en relación a las conductas de
evitación experiencial.
4. Redireccionar a los participantes hacia sus valores y potenciar la toma
de decisiones, facilitando conductas alternativas a las propias/previas de
evitación, que les han alejado de vivir una vida con sentido, en una o
varias áreas relevantes de su vida.

Y, en referencia a los objetivos internos en cuanto a la gestión de las situaciones


durante la sesión, incluimos como clave las 5 reglas de FAP:

Regla 1: Observar las conductas clínicamente relevantes (CCR).

Regla 2: Producir conductas clínicamente relevantes (CCR).

Regla 3: Reforzar CCR2.

Regla 4: Observar los efectos potencialmente reforzantes del comportamiento del


terapeuta en relación con los CCR del cliente.

Regla 5: Dar interpretaciones de las variables que afectan el comportamiento del


cliente, generando un repertorio de descripción de las relaciones entre la acción y la
relación interpersonal.

283
Las sesiones son llevadas a cabo por los psicólogos Juan Jesús Aznárez Acosta y
Guacimara González González, se realizan normalmente los sábados por la mañana,
el taller se compone de 8 sesiones, de 3 horas de duración cada una, con un
descanso de media hora hacia la mitad de la sesión, que facilita la cohesión de grupo
y mejora el clima grupal (a excepción de la última sesión que tiene una duración
superior al resto, de 6 horas, de 10:00-13:30 y de 15:00-17:30 con un almuerzo de
convivencia en medio). La duración del taller es de aproximadamente 4 meses, ya
que la frecuencia es de dos veces al mes.

En el momento actual contamos con 5 ediciones realizadas y una sexta en curso, y


con los resultados estadísticos de las 4 primeras, junto a parte de la evaluación del
grupo de la quinta edición y de la que se está realizando en estos momentos, donde
hemos equiparado el protocolo de investigación con el del grupo de Úbeda (la nueva
batería de pruebas está indicada en el desglose de sesiones del siguiente recuadro).

Para una profundización más detallada sobre aspectos como nuestra forma de
trabajo con ejemplos prácticos o sobre nuestra gestión del liderazgo entre dos
terapeutas, recomendamos la lectura del trabajo previo sobre estos grupos
realizado en: Aznárez, González e Izquierdo, 2017.

• Estructura de Contenidos del Programa.

Se especifican en el cuadro que aparece a continuación, los contenidos del


programa en dos grandes bloques de sesiones, este diseño tiene también un
formato flexible al igual que en el caso del equipo de investigación de Úbeda.

• Sesiones 1-4:

-Investigación: Pase de pruebas inicial (Presentamos la batería actual de


pruebas, igualada en la edición actual a la del equipo de Úbeda:
Acceptance and Action Questionnaire (AAQ-2), Registro de Malestar y
Acciones valiosas (RMAV), Escala de Experiencia del yo (EOSS),
Cuestionario de Experiencias de Grupo (CEG)).
-Presentación del Programa, los participantes y los terapeutas.
-Definición e introducción al mindfulness. A través de explicaciones de
los terapeutas y de la propia experiencia al hacer los ejercicios,
aprendizaje por descubrimiento, y a través de videos para ver entre
sesiones.
-Prácticas formales básicas: Respiración, Tacto, Body Scan, Sensaciones

284
Corporales y Vista, sonido,...
-Metáfora del jardín: Presentación, identificación de cómo está su jardín
con un ejercicio de visualización, identificación de áreas de valor más
relevantes en este momento de sus vidas, y acciones valiosas (regar), o
comportamientos de evitación (arrancar malas hierbas).
Escenificaciones de jardines de diferentes personas del grupo.
-Ejercicios experienciales orientados desde ACT.
-Discriminación de eventos privados y defusión: Con prácticas guiadas
de mindfulness y ejercicios vivenciales.

• Sesiones 5-8:
-Investigación: En la sesión 5, se pasa una medida de proceso con el
cuestionario RMAV, y en la sesión 8 de cierre del grupo se hace entrega
a los participantes del protocolo de pruebas que se indicó
anteriormente, para su cumplimentación, entrega y posterior análisis,
entre los momentos inicial y final. Los participantes los cumplimentan en
sus casas o al finalizar la sesión 8 del taller.
-Regulación emocional y autoconocimiento. Identificación de
emociones, y su correlato corporal. Toma de conciencia de nuestro
patrón de respuestas emocionales automáticas aprendidas. Trabajando
a través de ejercicios guiados de mindfulness de aplicación en grupo y
ejercicios vivenciales, que persiguen la identificación de la respuesta
conductual condicionada por los eventos privados y la creación de una
“respuesta alternativa” basada en las áreas valiosas para la persona “a
pesar” de las emociones o pensamientos que tengan.

*El desglose que aparece en el siguiente cuadro se rige por la estructura


que ha ido tomando el Taller Toma Las Riendas en su 6ta Edición, en
curso en estos momentos, encontrándose en el momento de escribir la
colaboración en este capítulo en su sesión 6. No obstante, se estima que
tiene un porcentaje de equivalencia con los anteriores de un 80%.

4. Formación y descripción de las características generales de los grupos:

Cada grupo de “Toma Las Riendas” cuenta con entre 6 y 12 participantes, con un
alto grado de heterogeneidad, puesto que incluye tanto personas con

285
sintomatología subclínica, que buscan su desarrollo personal, como personas con
sintomatología clínica.
Desde nuestro Centro de Trabajo no trabajamos con diagnósticos categoriales, ya
que el funcionamiento de un Centro Privado no consta con los filtros con los que
cuenta el Sistema Nacional de Salud, donde una persona que entra en el servicio de
psicología, previamente ha pasado ya por el de psiquiatría, donde es clasificada
según la clasificación de la CIE-10.
El ejercicio de la práctica clínica, desde el ámbito privado, requiere una actuación
rápida sin poder dedicar demasiado tiempo a la evaluación, más allá de la primera
entrevista, donde nos ponemos en situación sobre la demanda de la persona y sus
necesidades, a partir de ahí empezamos a trabajar en el análisis funcional en cada
sesión, a la vez que avanzamos en el tratamiento.
Por lo general, en la formación de los grupos no tenemos conocimiento de tales
etiquetas salvo que la persona del grupo esté con nosotros previamente en terapia
individual, lo cual sucede en un 50% de los casos aproximadamente, con lo que
tenemos más información a pesar de no trabajar con tales diagnósticos ni pasar,
normalmente, ningún tipo de cuestionario, obviamente, en el análisis del caso,
tenemos en cuenta la sintomatología que presenta la persona y su compatibilidad
con un diagnóstico concreto y especialmente para la elección del tratamiento, pero
apoyándonos mayoritariamente en una concepción funcional-contextual del
diagnóstico.

En la formación de los grupos nos basamos fundamentalmente en dos grandes


fuentes de participantes:

-Personas que están en terapia individual con alguna persona del equipo y que por
sus características nos parecen idóneas para su inclusión en este taller grupal, en
estos casos hacemos coordinaciones de equipo para valorar su evolución y definir la
línea a seguir a nivel individual y en el propio grupo.

-Personas de la Población General, de las cuales no existe una valoración psicológica


previa por nuestra parte, que directamente se interesan por nuestros talleres por
otras personas que ya los han realizado en otras ediciones o, a través de la difusión
que hacemos de los mismos a través de diferentes medios divulgativos
(fundamentalmente Redes Sociales).

Esta circunstancia hace que aumente la probabilidad de que se cree un grupo


demasiado heterogéneo en cuanto a necesidades, que nos va a limitar a la hora de
materializar objetivos, pero que por contra, nos ofrece la oportunidad de trabajar
desde la prevención, y también de poder atender a personas que no pueden
costearse una terapia privada y tampoco han encontrado respuesta por el SCS

286
(Servicio Canario de Salud) dada la saturación de los servicios de psiquiatría y
psicología en nuestra provincia.

Los perfiles que con más frecuencia nos encontramos serían personas que
presentan…
-Fobia o inseguridad social.
-Falta de habilidades sociales.
-Una situación de vida donde se aprecia una crisis de valores, y dificultad para tomar
decisiones en base a ellos, existiendo una desconexión tanto de sus valores como un
desconocimiento de cómo gestionar sus emociones de forma más adaptativa.

Además de personas que…


… se encuentran ante una etapa de desafío personal o cambio.
… buscan su desarrollo personal.

Todos estos perfiles pueden o no coexistir con la presencia de algún tipo de


trastorno ansioso depresivo o de la personalidad.

Un análisis de lo dicho anteriormente, nos lleva a considerar que las características


del grupo pueden variar enormemente de un grupo a otro, además de tener, desde
nuestro ámbito de actuación un menor número de variables controladas, debido a la
forma en la que hemos de ejercer la práctica privada, con una mayor optimización
del tiempo (en relación al número de sesiones) y los recursos, debido a la presión
económica que supone asistir a una terapia psicológica en un Centro Privado para la
mayoría de las personas que acuden a nuestro Centro.

5. Datos de los grupos de Tenerife:

Los resultados del trabajo que realizamos, con los grupos desde la ACT en conjunto
con otras terapias contextuales, son obtenidos de dos fuentes principales de
evaluación.

La primera es puramente observacional, totalmente personal y funcional,


relacionada directamente con el contexto histórico y actual de la persona, y
con los avances que observamos a nivel conductual a lo largo del proceso,
tanto en sesión como en la vida cotidiana (a través de sus relatos). Por ende
es una fuente de información poco comparable entre un individuo y otro más
que en términos funcionales, en torno a la rigidez/inflexibilidad versus
flexibilidad/adaptabilidad de sus conductas, entendiendo sus conductas y
costumbres previas para poder comprender si realmente existe un cambio de
conducta, funcional y no exclusivamente topográfico, teniendo en cuenta el
claro componente de subjetividad que estas observaciones e interpretaciones

287
conllevan.

Esta fuente de información la utilizamos en el entorno de observación y discusión


por parte de los terapeutas, tanto para el diseño previo de las sesiones que
proseguirán una vez obtenida la información relevante sobre cada uno de los
participantes, como para la mejora del trabajo que se va realizando sobre la marcha
con las conductas que surgen en sesión, y para la exposición o devolución dentro del
proceso grupal cara a los mismos clientes, por ello influyendo de una forma directa
sobre las intervenciones basadas en la FAP. Pero esta información no llega a darnos
una perspectiva más objetiva, que nos sirva cara a posteriores investigaciones y
revisiones de nuestro trabajo y sus resultados.

La segunda fuente de información es un protocolo de investigación amplio, en


el que participan los clientes que estén dispuestos a ello, a cambio de una
reducción en el coste/tarifa del proceso grupal. Este protocolo de
investigación, que ha tenido diferentes versiones desde su primera edición
hasta la que está actualmente en curso, se compone de una serie de
aproximadamente diez pruebas de lápiz y papel, aplicadas en su mayoría en
cuatro momentos del proceso: (1) Pre-tratamiento: en primera/segunda
sesión, (2) Tratamiento: aproximadamente un mes y medio o dos meses
después del comienzo del proceso, (3) Post-tratamiento: al finalizar el proceso,
y (4) Seguimiento: entre seis y ocho meses después de finalizar el proceso.

El conjunto de estos datos nos da una fuente objetiva de información relevante,


parte de la cual exponemos en este apartado ya que entendemos que nos aporta
información estadística y visual sobre la dinámica de funcionamiento general de
este tipo de procesos. Cabría hacer un examen pormenorizado de todos los
resultados obtenidos en la multitud de variables medidas con la batería original,
pero quizás ese objetivo vaya más allá del motivo de este trabajo sobre psicología
aplicada, por lo que nos centraremos aquí en los resultados de dos cuestionarios
específicos que miden aspectos centrales en nuestra intervención, el RMAV
(Registro de Malestar y Acción Valiosa) (Wilson y Luciano, 2002), y el MAAS (Mindful
Attention Awareness Scale) (Original de Brown y Ryan (2004); Validado por Soler et
al. (2012)), y haremos mención puntual a los resultados previos obtenidos con el
AAQ-9Items (Barraca, 2004) antes de cambiarlo por el de 7 ítems en la batería actual.

La primera fuente de información (observacional), resulta ser la más útil para


nuestro trabajo terapéutico de grupo, y, desde esta perspectiva, nuestra experiencia
ha sido enormemente enriquecedora. Afectando gradualmente nuestras
observaciones, y las reuniones para compartirlas, en la mejora de nuestra capacidad
de observación y en la modificación y flexibilización de nuestras intervenciones y de
los contenidos de nuestro programa. En la actualidad, creemos que una clara

288
mayoría de los participantes han realizado cambios suficientemente significativos en
sus conductas, como para indicar que la reducción de las conductas de evitación y el
aumento de su flexibilidad psicológica, redunda en la mejora de su calidad de vida, y
en su satisfacción general con ella tras pasar por este proceso grupal. Datos que
también parecen confirmar los resultados estadísticos.

Los casos “exitosos” nos han aportado información tremendamente útil sobre la
dificultad que afrontaban y los mecanismos que les permitieron “superarla”, y de
qué manera la experiencia grupal compartida pudo aportar elementos clave para
esa superación.

No obstante, también los casos “infructuosos” o “atascados”, nos han aportado


muchísima información y han afectado directamente a la programación, centrándola
cada vez más en componentes de activación conductual in situ y flexibilizando
enormemente nuestras actuaciones para intervenir con mayor asiduidad cada vez
sobre las conductas que van desarrollándose sobre la marcha y que son
funcionalmente equivalentes a las otras conductas “disfuncionales” del cliente más
“atascado”.

Datos de los grupos de Tenerife con el SPSS:

Entre los años 2014 y 2016 trabajamos en Tenerife con 4 grupos de personas, con
Terapia de Aceptación y Compromiso de Grupo, complementada con elementos de
FAP y Mindfulness. Cada uno de estos grupos fue heterogéneo en cuanto a los
motivos de participación y a las dificultades clínicas o subclínicas de los participantes.
Utilizamos varias medidas para evaluar los cambios en estos grupos en diferentes
momentos de la terapia, entre el inicio de la misma y su final después de 8 sesiones
en 4 meses a razón de 2 sesiones por mes de 3 horas de duración.

Utilizamos una serie de pruebas sobre estado de salud general, sintomatología


clínica, apoyo social percibido, etc.,…, pero exponemos en este capítulo
únicamente los resultados antes y después del tratamiento de las pruebas: RMAV
(Wilson y Luciano, 2001), que usamos para medir la intensidad y frecuencia del
malestar experimentado, la evitación del malestar, la acción orientada a valores y
la percepción de vida valiosa, en un total de 25 sujetos, y el MAAS (Soler et al.,
2012) para medir los cambios en la capacidad atencional de los sujetos tras el
entrenamiento intensivo en mindfulness, en un total de 7 sujetos.
En una edición intermedia en la que solo participaron 3 personas en la
investigación (dos de ellas con sintomatología clínica) se aplicó el AAQ, versión de
9 items (Barraca, 2004) para medir la evitación experiencial, datos que se

289
adjuntan a continuación (en la actualidad trabajamos con la versión del AAQ-II de
7 items (Bond, Hayes y cols.2011), datos que serán presentados en futuros
trabajos).

Los resultados con estos 4 grupos fueron los siguientes: Ver tablas

-Hubo una reducción significativa de la frecuencia del malestar, pero no fue


significativa la reducción de la intensidad de tal malestar, ambas medidas
mediante el RMAV (Tabla 1). Su reducción no es de por sí un objetivo en la
intervención dado que buscamos un cambio en la conducta independiente de lo
desagradable que sean los sentimientos, emociones o pensamientos que se
experimenten. Por ello, el hecho de que aumentasen las conductas orientadas a
valor, a pesar de que no hubiese una reducción significativa del malestar, sería un
resultado claramente definitorio del tipo de intervención que se busca.

-Encontramos una reducción significativa del esfuerzo dedicado a evitar el


malestar, medido a través del RMAV. Y también en el grupo en que se midió la
evitación experiencial mediante el AAQ de 9 ítems (Tabla 3), ésta redujo de forma
estadísticamente significativa. Datos que concuerdan a su vez con los objetivos de
la intervención, con los resultados de investigaciones previas y con los resultados
del trabajo del equipo de Úbeda.

-Respecto a la activación conductual orientada a valores, claro objetivo de nuestra


intervención, de nuevo encontramos un cambio estadísticamente significativo.
Este es un aspecto clave de las intervenciones centradas en ACT, relacionado
directamente a la reducción de la evitación, dado que “a pesar” de existir
experiencias desagradables, éstas no se evitan mediante conductas de evitación
(inefectivas a largo plazo) sino que se produce un aumento de las conductas
orientadas a valor; facilitando más posibilidades de contactar con reforzadores
naturales de la propia conducta y garantizando una mayor efectividad de nuestras
conductas a medio y largo plazo, en los aspectos en los que realmente podemos
llevar algún tipo de control (Conducta).

-En cuanto a la percepción de una vida con significado, de nuevo encontramos un


aumento significativo en las puntuaciones obtenidas en la medida Post.
-Por último, en cuanto a la conciencia y atención plena, la puntuación que nos
ofrece el MAAS (Tabla 2) resulta estadísticamente significativa, mejorando las
puntuaciones al término de la intervención grupal.

290
Tabla1. Resultados SPSS - Prueba de muestras emparejadas RMAV (N=25)

Tabla2. Resultados SPSS - Prueba de muestras emparejadas MAAS (N=7)

Tabla3. Resultados SPSS - Prueba de muestras emparejadas AAQ (N=3)

Cabe destacar que, dado el interés que nos ocupa en este capítulo, el aspecto más
relevante que encontramos es que, siendo un grupo o intervención compuesta de
ACT y FAP, los resultados son congruentes con los obtenidos en las
investigaciones de grupos exclusivos de ACT, no marcando una diferencia clara en
cuanto resultados, aunque es algo que deberemos evaluar en mayor profundidad
posteriormente en las siguientes ediciones, con la batería de pruebas igualadas,

291
además de comprobar el efecto de esta intervención mixta sobre las variables
más relacionadas con la FAP, ya que no han sido medidas en las ediciones aquí
presentadas.

Resulta curioso que en nuestro caso, al contrario que en las experiencias de


Úbeda, la medida de Intensidad del Malestar no disminuyó significativamente (a
pesar de que sí redujo su frecuencia), aspecto que está en concordancia como ya
comentamos con el modelo de ACT (aunque resulta difícil hacer válida esta
comparación dados los tipos de pruebas utilizadas).

Hemos de advertir que, para la medida de la evitación experiencial, algunos de los


cuestionarios que hemos empleado son medidas diferentes a la empleada por el
equipo de Úbeda, una de ellas a través de la misma prueba (AAQ) pero en otra
versión de la misma, y la segunda a través del tercer ítem de un registro que no
compartimos en nuestros protocolos previos, el RMAV, prueba no validada en la
actualidad. Todos estos resultados aportan datos interesantes cara al tema que
nos ocupa pero no deben tomarse estrictamente sus resultados, sino con enorme
cautela, como reflexión cara a los trabajos que continuamos en la actualidad y a
encaminar otras líneas de trabajo, siéndonos útiles a un nivel funcional como
veremos más adelante también en la descripción pormenorizada.

Hacemos a continuación una descripción pormenorizada de la evolución del proceso


terapéutico, utilizando las medidas intermedias (Tratamiento) del RMAV, además de
las ya mencionadas de Pre y Post del RMAV y del MAAS y el AAQ, utilizando gráficas
para facilitar la comprensión de lo que hemos podido observar.

*Gráfica 1: Puntuaciones medias grupo - RMAV (Registro de Malestar y Acción


Valiosa) y MAAS (Mindful Attention Awareness Scale).

292
La gráfica 1 nos muestra la evolución de las puntuaciones del total de los sujetos de
la investigación, a los que se les ha aplicado estas pruebas en específico (RMAV -
Registro de Malestar y Acción Valiosa, y MAAS - Mindful Attention Awareness Scale)
a lo largo del proceso terapéutico (N=25; 20 mujeres y 5 hombres, con edades
comprendidas entre los 20 y los 65 años), en las 5 variables medidas (de 0 a 10 en:
Frecuencia Malestar, Intensidad Malestar, Evitación/Esfuerzo, Fidelidad con los
Valores y Vida Significativa) a lo largo de las medidas Pre-tratamiento- Tratamiento -
Postratamiento.

Podemos observar un descenso general de la frecuencia del malestar a lo largo de


las tres medidas, sin embargo en el caso de la intensidad de tal malestar
observamos un claro descenso en la medida de tratamiento (“Trat”), y un ligero
aumento a la hora del término de la intervención (“Post”).

En cuanto al nivel de evitación/esfuerzo, encontramos en general un claro descenso


desde la primera medida (“Pre”) hasta la segunda medida (“Trat”), y posteriormente
un descenso muy gradual hasta el final de la intervención (“Post”).

Finalmente, tanto en la fidelidad con los valores como en la vida significativa


encontramos un patrón de aumento de las puntuaciones a lo largo de las medidas
desde la primera hasta la última, al igual que lo encontramos en los resultados de la
capacidad atencional o discriminativa en la prueba MAAS.

Desde otros modelos de intervención, y sobre todo, desde la principal queja que
acostumbran a hacer los clientes, nos centraremos probablemente en las dos
primeras variables (Frecuencia de Malestar e Intensidad del Malestar), como señales
de la evolución favorable del tratamiento. Sin embargo, desde esta perspectiva, nos
resultan mucho más relevantes la disminución de las conductas “improductivas” de
evitación y el mantenimiento de las conductas orientadas a valor, a pesar de que en

293
un momento dado haya un aumento de malestar o sufrimiento subjetivo, lo que
denota una mayor flexibilidad psicológica ante las experiencias, a través de un
compromiso profundo con nuestra dirección de valor.

Como el lector puede observar en las gráficas 2, 3, 4, 5 y 6, correspondientes a los


sujetos 3, 6, 13, 24 y 25, comprobamos en ejemplos individuales que, como suele
suceder en muchos casos, en primera instancia las personas tratan de utilizar lo
aprendido para encontrar nuevas formas de evitar su malestar.

*Gráfica 2: Puntuaciones Sujeto 3.

*Gráfica 3: Puntuaciones Sujeto 6.

294
*Gráfica 4: Puntuaciones Sujeto 13.

*Gráfica 5: Puntuaciones Sujeto 24.

*Gráfica 6: Puntuaciones Sujeto 25.

Estas nuevas formas de evitación pueden llegar a ser bastante eficientes a corto

295
plazo, aunque su efecto suele quedar en entredicho a medio y largo plazo. Nuestro
trabajo es muy persistente en detectar estas conductas de evitación y promover la
búsqueda de alternativas de valor para el cliente. En el caso de estos sujetos, a pesar
de una primera disminución del malestar (acompañada de un mayor esfuerzo para
evitarlo en los sujetos 3 y 13), al regresar el malestar al poco tiempo siguen
manteniendo las conductas de valor, denotando una flexibilidad que antes no se
daba ante esas experiencias.

Yendo aún más allá, hemos encontrado ya en numerosas ocasiones, tanto a través
de nuestra experiencia subjetiva como de los resultados de las pruebas, una
sobreestimación del compromiso con los valores al inicio del proceso grupal. Y,
posteriormente, una disminución de ese nivel subjetivo que estiman de su
compromiso con sus propios valores. Detectando que quizás estaban más alejados
de lo que pensaban y abriéndose a sentir lo que ello les evoque, todo esto
acompañado lógicamente de un aumento del malestar a medio plazo, algo que
tiende a estabilizarse al final de la intervención, como podemos observar levemente
en la gráfica 7, correspondiente al sujeto 1.

*Gráfica 7: Puntuaciones Sujeto 1.

En este sentido, interpretamos que el proceso en sí implica, tanto enfrentarnos a los


aspectos más complicados de nuestra vida, como a la toma de decisiones en
diferentes aspectos de nuestra vida, así como al consecuente reasentamiento de
nuestros “cimientos” y recalibrado de valores, de aquello que creemos relevante
para nosotros (esta característica del trabajo personal que hacemos en nuestro
taller, es señalada abiertamente por ambos terapeutas en varias ocasiones a lo largo
del desarrollo).

Esta nueva forma de dirigir sus vidas les “obliga” a los participantes, a dejar de lado
la búsqueda del sentirse bien (y no mal) como objetivo prioritario, porque les impide

296
avanzar en algunos momentos, al hacerse inflexibles, y les hace pagar unas
consecuencias (o costes) cada vez más visibles para ellos, y es precisamente gracias
a este “nuevo” contexto donde logran desarrollar la flexibilidad buscada al
comprometerse con unos valores de mucha mayor profundidad y sentido para
ellos/as, que el moverse únicamente hacia simples sensaciones pasajeras de
bienestar o malestar.

Curiosamente, aunque no sea nuestro objetivo en primera instancia, el nivel de


malestar suele disminuir significativamente en más de la mitad de los casos al llegar
al término de la intervención, como ejemplo tipo nos servimos de nuevo del sujeto 1.

Por último, como conclusión, tras llevar ya cinco ediciones de este proceso grupal,
hemos podido comprobar a nivel de resultados objetivos y subjetivos, el cambio que
el mismo aporta a la vida de los/las participantes, conllevando como norma general,
la disminución de la evitación de aquellos eventos desagradables, que en algunos
casos no llegan a desaparecer, y un mayor acercamiento a sus valores personales o
una vida plena y significativa.

El trabajo grupal resulta muy satisfactorio en ese sentido, ya que potencia y


amplifica los resultados de la terapia individual, siendo el contexto grupal de gran
ayuda y apoyo dentro del trabajo terapéutico que realizamos. Asimismo, el realizar
del taller en exclusiva, también resulta terapéutico por sí mismo, incluso si la
persona no está realizando un trabajo personal, aunque su grado de trasformación y
su aprovechamiento estará condicionado por el perfil psicológico y el grado de
Inflexibilidad Psicológica que presente.

A la vista de los resultados que hemos expuesto, animamos a la implementación de


este tipo de trabajo grupal tanto como intervención exclusiva, como de forma
complementaria a un proceso terapéutico individual, no sólo por su mayor duración
en tiempo por sesión frente a la terapia individual, que permite poder enseñarles a
nuestros/as clientes/as las habilidades que se han descrito de forma más intensa y
profunda, sino porque a través del grupo “se despiertan” las capacidades dormidas,
y se facilita el entrenamiento y la puesta en práctica de los procesos necesarios para
el aumento de la “flexibilidad psicológica”.

297
298
Epílogo (Juan José Ruiz Sánchez):

Un grupo no es una caja de Skinner. El mundo de las relaciones no es una caja de


Skinner. La vida no es una caja de Skinner. Nosotros no somos los animales de esas
cajas.

Sin embargo Skinner identifica; usando también su caja experimental, los efectos de
la triple contingencia que opera en la vida, las relaciones y los animales en su caja
experimental.

-¿Qué ocasiones se establecen en un grupo para hacer más probable unas acciones
que otras? (A)

-¿Qué hacen los miembros del grupo (incluido el/los terapeutas) al relacionarse los
unos con los otros en esas ocasiones? (B)

-¿Qué consecuencias, resultados o efectos tienen esas acciones dentro y fuera del
grupo para sus integrantes? (C).

Los humanos además tenemos un lenguaje elaborado con el que nos decimos y
hacemos cosas continuamente los unos a los otros y a nosotros mismos. Nuestro
lenguaje tiene efectos en nuestra vida. El lenguaje en los contextos de las
relacionales en que participamos es como el aire que respiramos. Analizar las
funciones de la triple contingencia y del lenguaje como conducta verbal es esencial
para comprender el comportamiento humano e influir en el mismo. Esta es la base
fundamental del conductismo o contextualismo funcional pre y post-skinneriano. La
Psicoterapia Analítica Funcional utiliza las equivalencias funcionales entre ambientes
dentro del grupo y fuera del grupo, en la vida cotidiana; conectados, precisamente
mediante el lenguaje, como uno de los elementos fundamentales para su trabajo
como psicoterapia.

299
300
Bibliografía:
-Aznárez, J.J., Izquierdo, I., y González, G. (2017). Trabajo en ACT de Grupo ante
diferentes patrones de inflexibilidad psicológica. En: Ruiz, J.J (coordinador) y cols.
(2017). Terapia de Aceptación y Compromiso de Grupo. Lulú Editores

-Baringoltz, S. (2005). La importancia del estilo personal del terapeuta y el vínculo


como herramientas terapéuticas. International Congress of Cognitive Pychotherapy,
Sweden, June.

-Barraca Mairal, J.(2004). Spanish Adaptation of the Acceptance and Action


Questionnaire. International Journal of Psychology and Psychological Therapy, pp.
515.

-Baruch, D. E., Kanter, J. W., Busch, A. M., & Juskiewicz, K. (2009). Enhancing the
therapy relationship in Acceptance and Commitment Therapy for psychotic
symptoms. Clinical Case Studies, 8, 241-257

-Beck, A., Rush, A. J., Shaw, B. F. & Emery, G. (1983). Cognitive therapy of depresión.
Gilford Press; New York.

-Bond, F. W., Hayes, S. C., Baer, R. A., Carpenter, K. M., Guenole, N., Orcutt, H. K.,
Waltz, T., & Zettle, R. D. (2011). Preliminary psychometric properties of the
Acceptance and Action Questionniare - II: A revised measure of psychological
flexibility and experiential avoidance. Behavior Therapy, 42, 676-688.

-Bordin, E. (1979). The generalizability of the psychoanalytic concept of the working


alliance. Psychotherapy, 16, 252–260.

-Brown, K. W., & Ryan, R. M. (2004). Perils and promise in defining and measuring
mindfulness: observations from experience. Clinical Psychology: Science and Practice,
11, 242-248.

-Callaghan, G. M., Gregg, J. A., Marx, B., Kohlenberg, B. S., & Gifford, E. (2004). FACT:
The utility of an integration of Functional Analytic Psychotherapy and Acceptance
and Commitment Therapy. Psychotherapy: Theory, Research, Practice, Training, 41,
195–207.

-Callaghan, G.M. (2006a). Functional Analytic Psychotherapy and Supervision.


International Journal of Behavioral and Consultation Therapy Volume 2, No. 3,
Summer.

301
-Callaghan, G. M. (2006b). The Functional Idiographic Assessment Template (FIAT)
System. The Behavior Analyst Today, 7, 357–398.

-Cautilli, J., Riley-Tillman, T.S., Axelrod, S. and Hineline, P. (2005). The Role of Verbal
Conditioning in Third Generation Behavior Therapy. The Behavior Analyst Today,
6.(2), Page 138-143.

-Coderch, J. (2010). La práctica de la psicoterapia relacional. El modelo interactivo


en el campo del psicoanálisis. Madrid: Ágora Relacional.

-Crombez, G., Vlaeyen, J. W. S., Heuts, P. H. T. G. & Lysens, R. (1999). Pain-related fear
is more disabling than pain itself: Evidence on the role of pain-related fear in chronic
back pain disability. Pain, 80, 329-339.

-Coyne, J. C. (1999) Thinking Interactionally about Depression: A Radical


Restatement. In: Thomas E. Joiner and James C. Coyne (Eds.). The Interactional
Nature of Depression: Advances in Interpersonal Approaches. Washington: APA.

-Curran, S.; Sherman, J.; Cunningham, L.; Okeson, J.; Reid, K. & Carlson, C. (1995).
Physical and sexual abuse among orofacial pain patients: Linkages with pain and
psychological distress. Journal of Orofacial Pain, 9, 340-346.

-Davison, M.K., Bershadsky, B., Bieber, J., Silversmith, D., Maruish, M.E., y Kane, R.L.
(1997). Development of a brief, multidimensional, self-report instrument for
treatment outcomes assessment in psychiatric set-tings: Preliminary findings.
Assessment, 4, 259-276.

-Damasio, A. (2010): Y el cerebro creó el hombre. Editorial Planeta.

-Dougher, M.J. y Hayes, S.C. (2000). Clinical behaviour analylsis. En M.J. Dougher
(Ed.), Clinical behavior analysis (pp.11-26). Reno, NV. Context Press.

-Ellis, A. & Grieger, R. (1990). Handbook of rationalemotive therapy. New York:


Springer Publishing Company.

-Ferro, R., Valero, L. & Lopez, M. A. (2007). Novedades y aportaciones desde la


psicoterapia analítica funcional. Psicothema, 19 (3), 452-458.

-Ferro, R., Valero, L. & López, M. A. (2009). La conceptualización de casos clínicos


desde la psicoterapia analítica funcional. Papeles del Psicólogo, 30 (3), 255-263.

302
-Ferro, Valero y Bermúdez (2009). La conceptualización de casos clínicos desde la
psicoterapia analítica funcional. Papeles del psicólogo, 2009. Vol 30 (3), pp. 255-264.

-Ferro, R. & Vandenberghe, L. (submitted). A práctica de mindfulness na psicoterapia


analítica funcional de grupo para dor crônica. *Mindfulness practice in a functional
analytic group for chronic pain.+

-Ferro García, R., y Valero Aguayo, L. (2015). Avances en la Psicoterapia Analítica


Funcional. Avances en Psicología Latinoamericana, 33(1).

-Ferro, R.; Valero, L. y López, M.A (2016). Fundamentos, características y eficacia de


la Psicoterapia Analítica Funcional. Análisis y Modificación de Conducta, Vol. 42, Nº
165-166, 51-73

-Folkman, S. & Moskowitz, J. T. (2000). Positive affect and the other side of coping.
The American Psychologist, 55, 647-654.

-Fordyce, W. (1979). Behavioral methods for chronic pain and illness. St Louis:
Mosby.

-Fredrickson, B. L. 2000 Cultivating positive emotions to optimize health and well-


being. Prevention and Treatment 3.
http://journals.apa.org/prevention/volume3/pre0030001a.html.
Accessed 17 September 2003

-Frederickson, B. L. (2001). The role of positive emotions in positive psychology. The


broaden-and-build theory of positive emotions. American Psychologist, 56, 218-226.

-Freud, S. & Breuer, J. (1895/2012). Estudios sobre la histeria. En: S. Freud: Obras
completas. Editorial Biblioteca Nueva.

-Freud, S. (1914/2012). Observaciones sobre el amor de transferencia. En: S. Freud:


Obras completas. Editorial Biblioteca Nueva.

-Gabbard G.O, Wilkinson S.M (1994). Management of Countertransference with


Borderline Patients. American Psychiatric Press

-Gabbard G.O (2007). Gabbard's Treatments of Psychiatric Disorders. American


Psychiatric Press.

-Gómez Martín, S.; López Ríos, F. y Mesa Manjón, H. (2007).Teoría de los marcos
relacionales: algunas implicaciones para la psicopatología y la psicoterapia.

303
International Journal of Clinical and Health Psychology. Vo. 7 Nº 2. pp. 491-507

-Guidano, V. F & Liotti, G. (1983). Cognitive proceses and emocional disorders. New
York. Guilford Press.

-Gifford, E. V., Kohlenberg, B. S., Hayes, S. C., Antonuccio, D. O., Piasecki, M. M.,
Rasmussen-Hall, M. L., & Palm, K. M. (2004). Acceptance-based treatment for
smoking cessation. Behavior therapy, 35(4), 689-705.

-Gómez, S., López, F., y Mesa, H. (2007). Teoría de los Marcos Relacionales: algunas
implicaciones para la psicopatología y la psicoterapia. International Journal of
Clinical and Health Psychology, 7, 491-507.

-Hayes, S.C., y Wilson, K.G. (1995). The role of cognition in complex human behavior:
A contextualistic perspective. Journal of Behavior Therapy and Experimental
Psychiatry, 26, 241-248.

-Hayes, S. C., Strosahl, K., & Wilson, K. G. (1999/2003). Acceptance and Commitment
Therapy: An experiential approach to behavior change. New York: Guilford Press.
Traducción Desclée de Brouwers de 2014

-Hayes, S. C. y Bissett, R. T. (2000). Behavioral psychotherapy and the rise of clinical


behavior analysis. En J. Austin y J. E. Carr (Eds.), Handbook of applied behavior
analysis (pp. 231-245). Reno: Context Press

-Hayes, S. C., Barnes-Holmes, D., & Roche, B. (Eds.). (2001). Relational Frame Theory:
A Post-Skinnerian account of human language and cognition. New York: Plenum
Press.

-Hayes, S. C. (2004). Acceptance and Commitment Therapy and the New Behavior
Therapies. Mindfulness, Acceptance and Relationship. En S. C. Hayes, V. M. Follette y
M. M. Linehan (Eds.), Mindfulness and Acceptance. Expanding the Cognitive-
Behavioral Tradition (pp. 1-29). Nueva York: Guilford Press

-Hoekstra, R. and Tsai, M. Fap for Interpesonal Process Group. (2010). In: Kanter,
J.W. and Kohlenberg, R.J. (editors): The Practique Functional Analytic Psychotherapy.
Springer, New York, 2010.

-Hollander, M., Kazaoka, K. (1998). Behavior therapy groups. Long, S. (Ed.). Six group
therapies. (pp. 257342). NY: Plenum Press

-Jacobson, N. (1987). Psychotherapists in clinical practice: Cognitive and behavioral


perspectives. New York: Guilford Press.

304
-Jacobson, N. S. y Christensen, A. (1996). Integrative couple therapy: Promoting
acceptance and change. Nueva York: Norton.

-Jennings, R. M. & Ball, J. D. (1982). Patient compliance with CHAMPUS mental


healts referrals. Professional Psychology, 13, 172-173.

-Kabat-Zinn, J. (1990). Full catastrophe living: Using the wisdom of your body and
mind to face stress, pain, and illness. Nueva York: Delacorte.

-Kanter, J. W., Parker, C. & Kohlenberg, R. J. (2001). Finding the self: A behavioral
measure and its clinical implications. Psicotherapy: Theory, Research and Practice,
38, 198-211

-Kanter, J. W., Kohlenberg, R. J. y Loftus, E. F. (2004). Experimental and


psychotherapeutic demand characteristics and the cognitive therapy rationale: An
analogue study. Cognitive Therapy and Research, 28, 229-239.

-Kanter, J.W; Tsai, M. and Kohlenberg, R.J. (2010). The Practice of Functional Analytic
Psychotherapy. Springer. New York

-Kanter, J.W., Parker, C. & Kohlenberg, R.J. (2001). Finding the self: A behavioral
measure and its clinical implications. Psychotherapy: Theory, Research and Practice,
38, 198-211.

-Kernberg, O. (2005). Teoría de las relaciones objetales y el psicoanálisis clínico.


Barcelona: Paidós Ibérica.

-Klerman GL, Weissman MM, Rounsaville BJ, Chevron E. Interpersonal


psychotherapy of depression. Basic Books; New York: 1984.

-Kohlenberg, R. J., & Tsai, M. (1987). Functional Analytic Psychotherapy. En N.


Jacobson (Ed.), Psychoterapists in clinical practice: Cognitive and behavioral
perspectives (pp. 388-443). Nueva York: Guilford Press.

-Kohlenberg, R. J., & Tsai, M. (1991). Functional analytic psychotherapy: Creating


intense and curative therapeutic relationships . Nueva York: Plenum Press.

-Kohlenberg, R. J., Tsai, M., & Dougher, M.J. (1993). The dimensions of clinical
behavior analysis. The Behavior Analyst, 16, 271-282.

-Kohlenberg, R. J. y Tsai, M. (1994a). Functional Analytic Psychotherapy: A


behavioral approach to treatment and integration. Journal of Psychotherapy
Integration, 4, 175-201.

305
-Kohlenberg, R. J., & Tsai, M. (1994b) Functional Analytic Psychotherapy: A radical
behavioral approach to treatment and integration. Journal of Psychotherapy
Integration, 4, 174-201

-Kohlenberg, R. J., & Tsai, M. (1995). Functional Analytic Psychotherapy: A


behavioral approach to intensive treatment. En W. O’Donohue, & L. Krasner (Eds.),
Theories of behavior therapy. Exploring behavior change (pp. 637-658). Washington:
APA.

-Kohlenberg, R. J., & Tsai, M.. (1998). Healing interpersonal trauma with the
intimacy of the relationship. En V. M. Follette; J. I. Ruzeg, & F. R. Abueg (Eds.),
Cognitive-Behavioral Therapies for trauma. (pp. 305-320). New York: Guilford.

-Kohlenberg, R. J., & Tsai, M. (2000). Radical behavioral help for Katrina. Cognitive
and Behavioral Practice, 7, 500-505.

-Kohlenberg, R.J., Kanter, J.W., Bolling, M.Y., y Parker, C.R. (2002). Enhancing
cognitive therapy for depression with functional analytic psychotherapy: Treatment
guidelines and empirical findings. Cognitive and Behavioral Practice, 9, 213-229.

-Kohlenberg, R. J., & Tsai, M. (2001). Hablo, luego existo: una aproximación
conductual para entender los problemas del yo. Escritos de Psicología, 5, 58-62.

-Kohlenberg, R. J., Kanter, J., Bolling, M., Parker, C. y Tsai, M. (2002). Enhancing
cognitive therapy for depression with Functional Analytic Psychotherapy: Treatment
guidelines and empirical findings. Cognitive and Behavioral Practice, 9, 213-229.

-Kohlenberg, R. J., Tsai, M., Ferro, R., Valero, L., Parra, A., & Virues, J. (2005).
Functional Analytic Psychotherapy and Acceptance and Commitment Therapy:
Theory, applications and its relationships with traditional behavior analysis.
International Journal of Clinical and Health Psychology, 5, 349-371.

-Kohlenberg, R.J y Tsai, M. (2007). Psicoterapia Analítica Funcional. Creación de


relaciones terapéuticas intensas y curativas. Universidad de Málaga. Traducción
del original de 1991

-Kohlenberg, R. J., & Tsai, M. (1991/2008). Functional Analytic Psychotherapy.


Creating intense and curative therapeutic relationship (Trad. Servicio de
Publicaciones de la Universidad de Málaga). New York: Plenum Press.

306
-Kohlenberg, R. J. y Tsai, M. (2008).FAP. Psicoterapia Analítica Funcional. Creación de
relaciones terapéuticas intensas y curativas. Ciencia Biomédica. Universidad de
Málaga.

-Kohlenberg, R.J., & Tsai, M. (1994a). Improving cognitive therapy for depression
with Functional Analytic Psychotherapy: Theory and case study. The Behavior
Analyst, 17, 305-319.

-Kohlenberg, R. J., Tsai, M., & Kanter, J. W. (2009). What is Functional Analytic
Psychotherapy? En M. Tsai, R. J. Kohlenberg, J. W. Kanter, B. Kohlenberg, W. C.
Follette, & G. M. Callaghan, G.M. (Eds.), A Guide to Functional Analytic
Psychotherapy. Awareness, Courage, Love and Behaviorism. (pp. 1-19). New York:
Springer.

-Kohlenberg, R. J., Tsai, M., Kanter, J. W. y Parker, C. R. (2009). Self and mindfulness.
En M. Tsai, R. J. Kohlenberg, J. W. Kanter, B., Kohlenberg, W. C. Follette, & G. M.
Callaghan (Eds.), A guide to Functional Analytic Psychotherapy. awareness, courage,
love and behaviorism. (pp. 103-130). New York: Springer.

-Kohlenberg, R. J., Kanter, J. W., Tsai, M., & Weeks, C. E. (2010). FAP and Cognitive
Behavior Therapy. En J. W. Kanter, M. Tsai, & R. J.

-Kohlenberg, B. S., y Callaghan, G. M. (2010). FAP and Acceptance Commitment


Therapy (ACT): Similarities, Divergence, and Integration. In The practice of
functional analytic psychotherapy (pp. 31-46). Springer New York.

-Kohlenberg (Eds.),(2010).The Practice of Functional Analytic Psychotherapy (pp. 11-


30). New York: Springer.

-Holman, G.I.; Kanter, J.; Tsai, M.; and Kohlenberg, R. (2017). Analytic Psychotherapy
Made Simple. A Practical Guide to Therapeutic Relationships. New Harbinger
Publications Inc. Oakland.

-Lacan, J. (1981): Seminario VIII. La transferencia en su disparidad subjetiva. Versión


Anónima.

-León-Quismondo, Leticia, Lahera, Guillermo, y López-Ríos, Francisca. (2014).


Terapia de aceptación y compromiso en el tratamiento del trastorno obsesivo-
compulsivo. Revista de la Asociación Española de Neuropsiquiatría, 34(124), 725-
740.

-Lambert, M. J. (1992). Implications of Outcome Research for Psychotherapy

307
Integration. In: J. C. Norcross & M. R. Goldstein. (Eds.) Handbook of Psychoteraphy
integration. (pp. 94-129). New York: Basic Books.

-Lambert, M. J. & A. E. Bergin (1992). The Effectiveness of Psychotherapy. In: J. C.


Norcross & M. R. Goldstein (Eds.). (pp. 143-89). Handbook of Psychoteraphy
integration. (pp. 94-129). New York: Basic Books.

-Laplanche, J. & Pontalis, J. B. (1968). Diccionario de psicoanálisis. Editorial Labor.

-Linehan, M. (1993). Cognitive-behavioral treatment of borderline personality


disorder. Guilford Press.

-López Ríos, F. (2013). ACT: Fundamentos y aplicaciones. Sin publicar.

-Luciano, C.; Visdómine, J.; Guthiérrez, O. & Montesinos, F. (2001). ACT e dolor
crónico. *ACT and chronic pain.+ Analisis y Modificación de Conducta, 27, 473-502.

-Luciano, M. C. (2001). Sobre el trastorno de evitación experiencial (TEE) y la terapia


de aceptación y compromiso (ACT). En C. Luciano (Ed.),Terapia de aceptación y
compromiso (ACT). Libro de casos (pp. 3-18). Valencia: Promolibro.

-Luciano, M.C., y Hayes, S. C. (2001). Trastorno de evitación experiencial. Revista


Internacional de Psicología Clínica y de la Salud, 1, 109-157.

-Luciano Soriano, M. C., y Valdivia Salas, M. S. (2006). La terapia de aceptación y


compromiso (ACT). Fundamentos, características y evidencia. Papeles del
psicólogo, 27(2).

-MacKenzie, K. R. (1983). The clinical application of a Group Climate measure. In


R. R. Dies & K. R. MacKenzie (Eds.), Advances in group psychotherapy:
Integrating research and practice (pp. 159-170). New York: International
Universities Press.

-Malan, D. (1983). Psicoterapia individual y ciencia de la psicodinámica. Barcelona:


Paidós.

-McCleary, R.W. (1992). Conversing with uncertainty. Hillsdale, NJ: Analytic Press.

-Marrone, M. (2001). La teoría del apego. Un enfoque actual. Madrid. Editorial


Psimática.

-Martins-Queiroz, M. A. & Vandenberghe, L. (2006). Psicoterapia no tratamento da

308
fibromialgia: Mesclando FAP e ACT. [Psychotherapy in the treatment of fybromialgia:
Interweaving FAP and ACT]. In: H. J. Guilhardi & N. Aguire (Eds.). Sobre
Comportamento e Cognição (Vol. 18; pp. 238-248). Santo André: ESETec.

-Mavis, T.; Kohlenberg, R.J; Kanter, J.W. ; Kohlenber, B.; Follette, W.C. and Callaghan,
G.M. A . (2009). A Guide a Functional Analytic Psychotheray. Awareness, Courage
and Behaviorism. Springer, New York.

-Mavis, T.; Kohlenberg, R.J; Kanter, J.W. ; Holman, G.I. and Loudon, M.P. (2012).
Functional Analytic Psychotheray.Distinctives Features. Routledge. Francis & Taylor
Group., New York.

-Melzack, (1998). Pain and stress: Toward understanding chronic pain. In: Saborin,
M.; Craik, F. & Robert, M. (Eds.). Advances in psychological science. Vol. 2. London:
Taylor and Francis.

-Montesinos, F., y Blarrina, M. (2016). Tratando con Terapia de Aceptación y


Compromiso. Madrid: Pirámide.

-Montoya. M. y Molina, F.J. (2015). Evaluación de relaciones deícticas y teoría de la


mente con una muestra de estudiantes universitarios. International Journal of
Psychology and Psychological Therapy, 15, 2, 191-203

-Mulick, P. S., Landes, S. & Kanter, J. W. (2005). Contextual behaviour therapies in


the treatment of PTSD: A Review. International Journal of Behavior Consultation
and Therapy, 1 , 223-238.

-Naranjo, G. (2010). Evaluación y entrenamiento de la toma de perspectiva: una


propuesta analítica funcional. Diversitas vol.6 no.1 Bogotá Jan./June.

-Ogden, T. (1979). On projective identification. International Journal of


Psychoanalysis, 60, 357-372

-Oliveira, M. L. P. & Vandenberghe, L. (Submitted). (2004) Functional analytic group


therapy for depression

-Parra y Ferro (2006). Psicoterapia Analítico-Funcional: Una aproximación contextual


funcional al tratamiento psicológico. eduPsykhé, 2006, Vol. 5, No. 2, 203-229

-Paul, R. H., Marx, B. P., & Orsillo, S. M. (1999). Acceptance-based psychotherapy in


the treatment of an adjudicated exhibitionist: A case example. Behavior Therapy,
30, 149–162.

309
-Pérez Álvarez, M. (1991). El sujeto en la modificación de conducta: un análisis
conductista. En: Caballo, V.E (comp.). Manual de técnicas de terapia y modificación
de conducta. Siglo XXI de España Editores S.A. Madrid.

-Pérez Álvarez, M. (1996). La Psicoterapia desde el punto de vista conductista.


Biblioteca Nueva. Madrid.

-Pérez Álvarez, M., y García Montes, J.M. (2001). Tratamientos psicológicos eficaces
para la depresión. Psicothema. 2001. Vol. 13, nº 3, pp. 493-510

-Pérez Álvarez, M. (2004). Contingencia y drama. La psicología según el


conductismo. Minerva Ediciones S.L. Madrid

-Pérez Álvarez, M. (2006). La terapia de conducta de tercera generación. EduPsykhé,


5, 159-172.

-Pérez Álvarez, M. (2011). El mito del cerebro creador. Cuerpo, conducta y cultura.
Madrid: Alianza Editorial.

-Pérez Álvarez, M. (2012).Las raíces de la psicopatología moderna. La melancolía y la


esquizofrenia. Ed. Pirámide. Madrid.

-Pérez Álvarez, M. (2013). Entrevista a Marino Pérez Álvarez. El conductista radical.


Temas de psicoanálisis. Revista de la sociedad española de psicoanálisis. Disponible
en: http://www.temasdepsicoanalisis.org/entrevista-a-marino-perez-alvarez-el-
conductista-radical-i
-Pérez Álvarez, M. (2013). Anatomía de la Psicoterapia: El Diablo no Está en los
Detalles. Clínica Contemporánea. Volumen 4 nº 1, 2013-Pag. 5-28.

-Pérez Álvarez, M. (2014).Las terapias de tercera generación como terapias


contextuales. Editorial Síntesis. Madrid.

-Preston, L. (1998). Expressive relating: The intentional use of the analyst's


subjectivity. In A. Goldberg (Ed.), The world of self-psychology. (pp. 203-218).
Hillsdale, NJ: Analytic Press

-Roldán, G.; Garrido, L., y Bonilla, G. (2017a). Psicoterapia de grupo con pacientes
diagnosticados de Trastornos Mentales Graves en un hospital de Día. En: Ruiz, J.J
(coordinador) y cols. (2017). Terapia de Aceptación y Compromiso de Grupo. Lulú
Editores

310
-Roldán, G., Garrido, L., y Bonilla, G. (2017b). Psicoterapia en grupo para familiares
de pacientes con Trastornos Mentales Graves. En: Ruiz, J.J (coordinador) y cols.
(2017). Terapia de Aceptación y Compromiso de Grupo. Lulú Editores

-Ruiz, F. J., Langer Herrera, Á. I., Luciano, C., Cangas, A. J., & Beltrán, I. (2013).
Measuring experiential avoidance and psychological inflexibility: the Spanish
version of the Acceptance and Action Questionnaire-II. Psicothema, 25(1).

-Ruiz, J. J. (1992) Manual de terapia cognitiva. A Demanda, Jaén.

-Ruiz, J. J & Cano J. J. (2002). Manual de terapia cognitiva (revisado). Jaén: R & C
Editores.

-Ruiz, J. J & Cano J. J. (1999). Las psicoterapias. Introducción a las orientaciones


psicoterapéuticas para profesionales sanitarios. Ruiz y Cano Editores. Jaén.

-Ruiz, J.J. (2013). Transferencia y Contratransferencia. Del psicoanálisis a la


Psicoterapia Analítica Funcional. REALITAS. Revista de Ciencias Sociales, Humanas y
Artes. 1 (2), pp. 52-58.

-Ruiz, J.J. ¿Qué es el Yo?. (2015). De la Antropología filosófica a la Psicología. A.E.P.A.


Úbeda.

-Ruiz, J.J., y Ruiz, I. (2015). Comparativa de resultados en tres modalidades de


terapia de grupo. La evitación experiencial como diferencia. Trabajo no publicado.
USMC de Úbeda (Jaén).

-Ruiz, J.J (coordinador) y cols. (2017). Terapia de Aceptación y Compromiso de


Grupo. Lulú Editores.

-Ruiz Sánchez, Juan José (Coordinador) et al. (2017). Terapia de Aceptación y


Compromiso de Grupo. Basada en la Teoría del Marco Relacional y el
Socioconductismo. Madrid: Lulú (Ed.). *Capítulo: Aznárez Acosta, Juan Jesús,
González González, Guacimara, Izquierdo Hidalgo, Idaira Natalia. Trabajo de ACT en
grupo ante diferentes patrones de Inflexibilidad Psicológica. pp. 525-556.

-Ruiz, J.J y Trillo, F. Última sesión de un grupo de ACT en la USMC de Úbeda y otras
notas relevantes (2017). En: Ruiz, J.J (coordinador) y cols. (2017). Terapia de
Aceptación y Compromiso de Grupo. Lulú Editores

-Ruiz, J.J. Cuestionario de Experiencia de Grupo (C.E.G). Medición de los factores


comunes en la terapia de Grupo (2017). Trabajo en prensa sin publicar.

311
-Ruiz, J.J; Ruiz, I., y Trillo, F. (2017). Obstáculos, discriminaciones y acciones valiosas
(O.D.A y O.D.A-CN) como medida funcional de los cambios en terapia. Trabajo en
prensa sin publicar

-Rutan, J. S. & Stone, W. N. (1984). Psychodynamic group psychotherapy. New York:


McMillan.

-Safran, J. D. & Segal, Z. V. (1994). El proceso interpersonal en la terapia cognitiva.


Barcelona: Paidós.

-Safran, J. D., y Muran, J. D. (2000). Negotiating the therapeutic alliance: A relational


treatment guide. New York: The Guilford Press.

-Safran, J. D. & J. C. Muran. (2005). La alianza terapéutica: una guía para el


tratamiento relacional. Bilbao: Descleé de Brouwers.

-Sampson, H. (1991). Experience and insight in the resolution of transferences.


Contemporary Psychoanalysis, 27, 200-207.

-Schoendorff, B. y Steinwachs, J. (2012). Using Functional Analytic Therapy to train


therapists in Acceptance and Commitment Therapy, a conceptual and practical
framework. International Journal of Behavioral Consultation and Therapy, 7(2-3),
135.

-Segal, Z. V., Williams, J. M. G. y Teasdale, J. D. (2002). Mindfulness-based cognitive


therapy for depression. Nueva York: Guilford Press.

-Skinner, B.F (1981). Conducta verbal. Trillas. Obra original de 1957.

-Skinner, B.F. (1975). Sobre el conductismo. Fontanella. Barcelona

-Skinner, B.F. (1977).Ciencia y conducta humana” Fontanella. Barcelona. Original de


1953

-Skinner, B. F. (1981). Selection by consequences. Science, 213, 501-504

-Soler, J. et al. (2012). Propiedades Psicométricas de la versión Española de la escala


Mindful Attention Awareness Acale (MAAS). Actas Españolas de Psiquiatría; 40
(1):18-25.

-Solomon, M. (1997). On love and lust in the counter-transference. Journal of the


American Academy of Psychoanalysis, 25, 71-90.

312
-Thorn, B.; Boothy, J. & Sullivan, M. (2002). Targeted treatment of catastrophizing
for the management of chronic pain. Cognitive and Behavioral Practice, 9, 127-138

-Trillo Padilla, F.J. (2017). Uso y aplicabilidad de la metáfora en psicoterapia. En J.J.


Ruiz (Ed.) Terapia de Aceptación y Compromiso de Grupo (pp.285-300). España:
Lulú Ediciones.

-Tsai, M. y Kohlenberg, R. J. (2013). Introduction to Functional Analytic


Psychotherapy (FAP): Using Beahvioral Principles to Create Intense and Curative
Therapeutic Relationships. World Conference 11. Association for Contextual
Behavioral Science 2013

-Tsai, M., Gustafsson, T., Kanter, J., Plummer Loudon, M., y Kohlenberg, R. J. (2017).
Saying good goodbyes to your clients: A functional analytic psychotherapy (FAP)
perspective. Psychotherapy, 54(1), 22.

-Turner, J.A., Jensen, M.P. y Romano, J.M. (2000). Do beliefs, coping and
catastrophizing independently predict functioning in patients with chronic pain?
Pain , 85, 115-125

-Turner, E. H., Matthews, A.M., Linardatos, E., Tell, R. A. y Rosenthal, R. (2008).


Selective publication of antidepressant trials and its influence on apparent efficacy.
New England Journal of Medicine, 358, 252-260.

-Upper, D., Flowers, J. (1994). Behavioral group therapy in rehabilitation settings. In


Bedell, J.R. (Ed.). Psychological assessment and treatment of persons with severe
mental disorders. (pp. 191-214). Washington, DC: Taylor and Francis.

-Valero-Aguayo, L., Ferro-García, R., López-Bermudez, M. A., & Silva, M. A.


(2012).Reliability and validity of the Spanish adaptation of Experiencing of Self
Scale (EOSS) comparing nor-mal and clinical samples. Internacional Journal of
Behavioral Consultation and Therapy.7(2-3), 151-158

-Valero, L. y Ferro, R. (2015). Psicoterapia Analítica Funcional. El análisis funcional de


la sesión clínica. Editorial Síntesis. Madrid.

-Vandenberghe, L.; Cruz, A. C. F. & Ferro, C. L. B. (2003). Terapia de grupo para


pacientes com dor crônica orofacial. *Group therapy for patients with chronic
orofacial pain.+ Revista Brasileira de Terapia Comportamental e Cognitiva, 5, 31-40.

313
-Vandenberghe, L.; Ferro, C. L. B. & Cruz, A. C. F. (2003). FAP-enhanced group therapy
for chronic pain. The Behavior Analyst Today, 4, 369-375.

-Vandenberghe, L. & Ferro, C. L. B. (2005). Terapia de grupo embasada em FAP como


abordagem terapêutica para dor crônica: Possibilidades e perspectivas. [FAP
enhanced group therapy as a treatment for chronic pain: Possibilities and
perspectives.] Psicologia: Teoria e Prática, 7, 137-152

-Vanderberghe, L. (2009). A Functional Analytic Approach to Group Psychotherapy.


The Behavior Analyst Today Volume 10, Number 1.

-Vinagrov, S., Cox, P., Yalom, I. (2003). Group therapy. In Hales, R.E. & Yudofsky, S.C.
(Eds.). Textbook of clinical psychiatry. (4th Edition, pp. 1333-1371). Washington D.C.:
American Psychiatric Publishing

-Vlaeyen, J. W. S., Kole-Snijders, A. M. J., Boeren, R. G. B. & Van Eek, H. (1995). Fear
of movement (re)injury in chronic low back pain and its relation to behavioral
performance. Pain, 62, 363-372.

-White, J. R. (2000a). Introduction. In: White, J. R. & Freeman, A. S. (Eds.). Cognitive-


behavior therapy in group for specific populations and problems. (pp. 3-28).
Wahington: American Psychological Association.

-Wilson, K.G. y Luciano, M.C.(2007). Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT). Un


tratamiento conductual orientado a los valores. Editorial Pirámide. Madrid.

-Yalom, I. (1995). The theory and practice of group psychotherapy. NY: Basic Books.

-Young, J. E., Klosko, J. E. & Weishaar, M. E. (2013). Terapia de esquemas. Guía


práctica. Bilbao: Descleé de Browers.

-Zautra, A. J.; Johnson, L. M. & Davis, M. C. (2005). Positive affect as a source of


resilience for women in chronic pain. Journal of Consulting and Clinical Psychology,
73, 212-220

-Zettle, R. D. (2005). The evolution of a contextual approach to therapy: From


Comprehensive Distancing to ACT. International Journal of Behavioral and
Consultation Therapy, 1, 77–89.

314
RELACIÓN INFORMATIVA DE LOS AUTORES DE ESTA OBRA:
-Juan José Ruiz Sánchez:

.Psicólogo Clínico-Unidad de Salud Mental Comunitaria de Úbeda-Servicio Andaluz de Salud.

.Experiencia en Terapias de Grupo Cognitivo-Conductual, Adleriana, Estratégica y Contextuales.

.Enlaces:

http://fapcontexto.blogspot.com.es/ (Conductismo Contextual)

http://adleriana.blogspot.com.es/ (Adleriana)

https://www.lulu.com/shop/search.ep?keyWords=juan+jose+ruiz+sanchez&type=

(Relación de algunos libros como co-autor)

.Colaborador como docente del Master de Terapias Contextuales de la Universidad de Almería en


2016, 2017 y 2018 en Psicología Adleriana y Terapias Contextuales de Grupo.
http://www2.ual.es/contextual/

-Inmaculada Ruiz Miñarro:

.Psicóloga. Barcelona

.Enlaces:

https://www.lulu.com/shop/search.ep?keyWords=inmaculada+ruiz+mi%C3%B1arro&type=

(Relación de algunos de sus libros como co-autora)

-Francisco Trillo Padilla:

.Psicólogo. Doctorando en la Universidad de Almería. Especialista en: Terapia de Aceptación y


Compromiso. Psicología del Deporte y Psicología General Sanitaria.

.Enlaces:

https://www.lulu.com/shop/search.ep?keyWords=francisco+trillo&type=

(Relación de algunos libros como co-autor)

-ResearchGate: https://www.researchgate.net/profile/Francisco_Trillo-Padilla
-Twitter: @chescotrillo

315
-José Manuel Sánchez Olid:

.Psicólogo General Sanitario. Máster Práctica Clínica. Doctorando Universidad de Málaga.


Formador y Supervisor de Psicólogos en Terapias Contextuales.

.Enlaces:

-Portal de formación y difusión sobre Terapias Contextuales

http://www.terapiascontextuales.com

-Página web de tratamiento y supervisión ofrecido por José Olid

http://www.joseolid.com

https://www.lulu.com/shop/search.ep?keyWords=jose+manuel+olid&type=

(Relación de algunos libros como co-autor)

-Salvador Arjona Moreno:

.Psicólogo Clínico-Unidad de Salud Mental Comunitaria de Úbeda-Servicio Andaluz de Salud.

.Experiencia en Terapia de Grupo Multifamiliar.

-Manuel Pérez Cámara:

.Enfermero--Unidad de Salud Mental Comunitaria de Úbeda-Servicio Andaluz de Salud.

.Experiencia en intervenciones basadas en Mindfulness.

-María Dolores Ruiz Fuentes:

.Enfermera--Unidad de Salud Mental Comunitaria de Úbeda-Servicio Andaluz de Salud.

.Experiencia en intervenciones basadas en Mindfulness.

-Juan Jesús Aznárez Acosta:

. Psicólogo General Sanitario.

. Máster en Ciencias de la Familia, Especialidad en Terapias Breves, y Sistémicas y Familiares” (Universidad


de Santiago de Compostela)

. Especialista en Terapia de Aceptación y Compromiso (Instituto ACT Madrid)

. Coordinador de la Comisión de Terapias Contextuales del Colegio Oficial de Psicólogos de Santa Cruz de
Tenerife

Página web:

316
http://www.psicologialalaguna.com/

Enlace Libro como Co-autor:

http://www.lulu.com/shop/juan-jos%C3%A9-ruiz-s%C3%A1nchez-and-pilar-and%C3%BAjar-
rodr%C3%ADguez-and-gin%C3%A9s-l%C3%B3pez-d%C3%ADaz-and-inmaculada-ruiz-
mi%C3%B1arro/terapia-de-aceptaci%C3%B3n-y-compromiso-de-grupo/paperback/product-23189609.html

-Guacimara González González:

Psicóloga General Sanitaria

Máster en Psicología Clínica: Evaluación, Diagnóstico y Tratamientos Psicológicos del Colegio


Oficial de Psicología de Tenerife (2008).

Experta en Terapias de Tercera Generación (Universidad de Almería).

Página web:

http://www.psicologialalaguna.com/

Enlace Libro como Co-autora:

http://www.lulu.com/shop/juan-jos%C3%A9-ruiz-s%C3%A1nchez-and-pilar-and%C3%BAjar-
rodr%C3%ADguez-and-gin%C3%A9s-l%C3%B3pez-d%C3%ADaz-and-inmaculada-ruiz-
mi%C3%B1arro/terapia-de-aceptaci%C3%B3n-y-compromiso-de-grupo/paperback/product-
23189609.html

.Idaira Izquierdo Hidalgo:

Psicóloga General Sanitaria. Doctoranda en la Universidad de Almería.

Psicóloga Perinatal

Experta en Terapias de Tercera Generación (Universidad de Almería)

Enlace Libro como Co-autora:

http://www.lulu.com/shop/juan-jos%C3%A9-ruiz-s%C3%A1nchez-and-pilar-and%C3%BAjar-
rodr%C3%ADguez-and-gin%C3%A9s-l%C3%B3pez-d%C3%ADaz-and-inmaculada-ruiz-
mi%C3%B1arro/terapia-de-aceptaci%C3%B3n-y-compromiso-de-grupo/paperback/product-
23189609.html

317
318

También podría gustarte