Está en la página 1de 3

Reflexión 15

Saludos

Nosotros los seres humanos podemos comparar nuestra vida con un lápiz. Esta parábola

del lápiz comienza con una comparación de un lápiz en una caja y lo podemos relacionar de un

punto diferente en el cual los seres humanos, durante su proceso de crecimiento, estamos

guardados en una caja y no sabemos cual es nuestra función. Vamos creciendo, formándonos y

es allí cuando viene una pregunta difícil ¿Para que fuimos creados? Y la única forma de saberlo

es teniendo una relación con nuestro Dios. Cuando tenemos esta relación con Dios, no nos

dejamos controlar por fuentes contrarias a Dios que nos harán caer en funciones no apropiadas

para la que fuimos creados y por medio de esta relación con Dios vamos a tener nuestra punta

afilada porque Dios será nuestra guía y nos estará fortaleciendo para soportar cualquier situación.

Siempre vamos a cometer errores, pero Dios nos dio su hijo por el cual murió por nosotros para

borrar nuestros pecados y nosotros solo tenemos que pedir perdón y no volver a repetirlo.

Lo que hace un lápiz es su grafito, pero lo que nos hace a nosotros es Dios en nuestros

corazones. Por tal razón debemos guardar nuestro corazón. Vamos a ser luz en medio de las

tinieblas, siempre vamos a dejar marca donde quiera que vayamos al igual que el lápiz porque

nosotros cuando tenemos a Dios y conocemos nuestra función vamos a ser la diferencia donde

quiera que vayamos. Por medio de esta reflexión nos hace analizar que nosotros fuimos creados

por un propósito; un creador nos pensó y nos dio funciones, pero lamentablemente muchos de

nosotros tomamos otras funciones en nuestra vida para la cual no fuimos creados. Vamos a pasar

por momentos difíciles en nuestra que nos pondrán a prueba cuan fuerte fuimos creados, pero

como nuestro creador divino nos creó y mora en nosotros donde veremos que nada podrá contra
nosotros y seguiremos realizando sus propósitos hasta que algún día nos llame y partamos de

este mundo.

Saludos

Por medio de esta reflexión podemos aplicarla a nuestra vida debemos y poder también

compararla. Dios nos creó y permitió que viviéramos porque tenemos una razón de ser en esta

tierra. Tenemos un propósito y durante el trayecto de la vida iremos desarrollando y encontrando

el propósito que tiene Dios para con nosotros. Pero muchas veces nosotros mismos somos el

obstáculo para que el propósito no se cumpla en nosotros. Por tal razón debemos orar y siempre

estar dispuesto a que Dios nos guie hacia las metas que debemos cumplir.

Como enfermeros el propósito principal de esta profesión es el servicio. Debemos cada

día desarrollarnos para poder ejercer y demostrar el mejor servicio posible. Todo esto se alcanza

preparándonos académicamente, práctica y también teniendo a Dios en nuestras vidas. Cuando

nos dejamos usar por Dios podemos ofrecer el mejor servicio. Para esto debemos cada día

buscarlo y formar un pacto con Dios y él nos bendecirá cada día.

Bendiciones

Saludos
Nuestra vida la podemos comparar como un lápiz. Con el lápiz se puede realizar un sin

número de cosas, pero es durante el proceso que conocemos cual es el propósito. Van a haber

momentos que para poder cumplir las metas debemos afilar ese lápiz para que vuelva a volver a

escribir bien. Y es que muchas veces nos desviamos y dejamos de escribir como antes. Vamos en

ocasiones escribir errores; el borrador nos ayudará a borrarlos, pero siempre se quedará la marca

para no volver a cometer el mismo error. Así es nuestra vida, como la de un lápiz.

Como enfermeros vamos a escribir en las vidas de los pacientes. Pero muchas veces no

será un lápiz, sino un bolígrafo porque nuestro trabajo es con vidas humanas y errores que se

cometen, muchos son irreversibles. Por tal razón debemos prepararnos y afilarnos bien, porque

en el transcurso vamos a ir aprendiendo a cumplir las metas y a disminuir los errores. A tocar

vidas de forma positiva teniendo a Dios a nuestro lado. Usemos nuestro lápiz, nuestros dones, el

propósito de Dios en nosotros para bendecir a los demás.

Bendiciones

También podría gustarte