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El relleno sanitario
Hasta la fecha, el Relleno Sanitario es la técnica que mejor se adapta a nuestra región para
disponer de manera sanitaria las basuras, tanto desde el punto de vista técnico como
económico.
2.1 ¿Qué es un relleno sanitario? El Relleno Sanitario es una técnica de eliminación final de
los desechos sólidos en el suelo, que no causa molestia ni peligro para la salud y seguridad
pública; tampoco perjudica el ambiente durante su operación ni después de terminado el
mismo. Esta técnica utiliza principios de ingeniería para confinar la basura en un área lo más
pequeña posible, cubriéndola con capas de tierra diariamente y compactándola para reducir su
volumen. Además, prevé los problemas que puedan causar los líquidos y gases producidos en
el relleno, por efecto de la descomposición de la materia orgánica.
Este método se utiliza en regiones planas y consiste en excavar periódicamente zanjas de dos
o tres metros de profundidad, con el apoyo de una retroexcavadora o tractor de oruga. Es de
anotar que existen experiencias de excavación de trincheras hasta de 7 m de profundidad para
relleno sanitario. La tierra que se extrae, se coloca a un lado de la zanja para utilizarla como
material de cobertura. Los desechos sólidos se depositan y acomodan dentro de la trinchera
para luego compactarlos y cubrirlos con la tierra.
Se debe tener cuidado en época de lluvias dado que las aguas pueden inundar las zanjas. Por
lo tanto, se deben construir canales perimetrales para captarlos y desviarlas e incluso
proveerlas de drenajes internos. En casos extremos, puede requerirse el bombeo del agua
acumulada. Las paredes longitudinales de las zanjas tendrán que ser cortadas de acuerdo con
el ángulo de reposo del suelo excavado.
FIGURA2.1
Método de trinchera para construir un relleno sanitario
2.2.2 Método de área
En áreas relativamente planas, donde no sea factible excavar fosas o trincheras para enterrar
las basuras, éstas pueden depositarse directamente sobre el suelo original, elevando el nivel
algunos metros. En estos casos, el material de cobertura deberá ser importado de otros sitios
o, de ser posible, extraído de la capa superficial. En ambas condiciones, las primeras se
construyen estableciendo una pendiente suave para evitar deslizamientos y lograr una mayor
estabilidad a medida que se eleva el relleno. Figura 2.2.
FIGURA2.2
Método de área para construir un relleno sanitario
El relleno se construye apoyando las celdas en la pendiente natural del terreno, es decir, la
basura se vacía en la base del talud, se extiende y apisona contra él, y se recubre diariamente
con una capa de tierra de 0.10 a 0.20 m de espesor; se continúa la operación avanzando sobre
el terreno, conservando una pendiente suave de unos 30 grados en el talud y de 1 a 2 grados
en la superficie.
FIGURA2.3
Método de área para rellenar depresiones
FIGURA2.4
Combinación de ambos métodos para construir un relleno sanitario
Es necesario mencionar que, dado que estos dos métodos de construcción de un Relleno
Sanitario tienen técnicas similares de operación, pueden combinarse lográndose un mejor
aprovechamiento del terreno del material de cobertura y rendimientos en la operación.
El relleno sanitario, como método de disposición final de los desechos sólidos urbanos,
es sin lugar a dudas la alternativa más conveniente para nuestros países. Sin
embargo, es esencial asignar recursos financieros y técnicos adecuados para su
planificación, diseño, construcción, operación y mantenimiento.
Recuperar gas metano en grandes rellenos sanitarios que reciben más de 200
ton/día, lo que constituye una fuente alternativa de energía.
Su lugar de emplazamiento puede estar tan cerca al área urbana como lo permita la
existencia de lugares disponibles, reduciéndose así los costos de transporte y
facilitando la supervisión por parte de la comunidad.
Existe un alto riesgo de transformarlo en botadero a cielo abierto por la carencia de voluntad
política de las administraciones municipales, ya que se muestran renuentes a invertir los fondos
necesarios para su correcta operación y mantenimiento.
Los asentamientos más fuertes se presentan en los primeros dos años después de
terminado el relleno, por lo tanto se dificulta el uso del terreno. El tiempo de asentamiento
dependerá de la profundidad del relleno, tipo de desechos sólidos, grado de compactación y
de la precipitación pluvial de la zona.
Si tenemos en cuenta que el área promedio a rellenar para disponer los desechos sólidos de
estas pequeñas poblaciones no es muy grande, los volúmenes de percolado entonces serán
también pequeños. Por lo tanto, se puede optar por su infiltración en el suelo dado que,
con el paso del tiempo, la carga contaminante de los lixiviados disminuye una vez terminado el
relleno; además, el suelo actúa como filtro natural (ref. 23). No obstante, para proteger las
aguas superficiales y subterráneas, se deben tomar las siguientes medidas:
Verificar que las aguas subterráneas y superficiales cercanas no estén siendo utilizadas para
el
consumo humano o animal.
Establecer una altura mínima de 1.0 - 2.0 m (depende de las características del suelo) entre la
parte
inferior del relleno y el nivel de agua subterránea.
Interceptar, canalizar y desviar el escurrimiento superficial y los pequeños hilos de agua, a fin
de
reducir el volumen del líquido percolado, y de mantener en buenas condiciones la operación
del
relleno.
Construir un sistema de drenaje para posibilitar la recolección del líquido percolado y facilitar
su
posterior tratamiento en caso necesario.
Cubrir con una capa de tierra final de unos 0.40 a 0.60 m, compactar y sembrar las áreas del
relleno
que hayan sido terminadas con pasto o grama para disminuir la infiltración de aguas de
lluvias.
2.7 Gases
La aerobia es la etapa en la que el oxígeno está presente en el aire contenido en los intersticios
de la masa de residuos enterrados, siendo rápidamente consumido.
El gas metano reviste el mayor interés porque, a pesar de ser inodoro, es flamable y explosivo
si se concentra en el aire en una proporción de 5 a 15% en volumen; los gases tienden a
acumularse en los espacios vacíos dentro del relleno; aprovechan cualquier fisura del terreno o
permeabilidad de la cubierta para salir, pudiendo originar altas concentraciones de metano con
el consiguiente peligro de explosión en las áreas vecinas. Por lo tanto, es necesario llevar a
cabo un adecuado control de la generación y migración de estos gases.
Este control se puede lograr, construyendo un sistema de drenaje vertical en piedra, colocado
en diferentes puntos del relleno sanitario, para que éstos sean evacuados a la atmósfera.
Como el gas metano es combustible, se puede quemar simplemente encendiendo fuego en la
salida del drenaje, una vez concluido el relleno sanitario. También se puede aprovechar este
gas como energía en el empleo de una pequeña cocina para calentar alimentos o como
lámpara para iluminar el terreno. Es de anotar que la recuperación y aprovechamiento del gas
metano con propósitos comerciales, sólo se recomienda para rellenos sanitarios que reciban
más de 200 ton/día (ref. 7), y siempre que las condiciones locales así lo ameriten.
Una de las diferencias fundamentales entre un relleno sanitario y un botadero a cielo abierto es
la utilización de material de cobertura para separar adecuadamente las basuras del ambiente
exterior y confinarlas al final de cada jornada diaria.
El cubrimiento diario de los desechos sólidos con tierra es de vital importancia para el éxito
del relleno sanitario, debido a que cumple las siguientes funciones:
El relleno sanitario manual se presenta como una alternativa técnica y económica, tanto para
las poblaciones urbanas y rurales menores de 40,000 habitantes, como para las áreas
marginales de algunas ciudades que generan menos de 20 toneladas diarias de basura.
Mediante la técnica de la operación manual, sólo se requiere equipo pesado para la adecuación
del sitio y la construcción de vías internas, y excavación de zanjas o material de cobertura, de
acuerdo con el avance y método de relleno.
En cuanto a los demás trabajos, todos pueden realizarse manualmente, lo cual permite a estas
poblaciones de bajos recursos, incapacitadas de adquirir y mantener equipos pesados
permanentes, disponer adecuadamente sus basuras y utilizar la mano de obra que en los
países en desarrollo es bastante abundante.
Se estima que es posible llevar a cabo un relleno sanitario manual hasta llegar a la cantidad de
20 ton/día. Sin embargo, se precisa de un análisis minucioso de las condiciones locales de
cada región, puesto que según sea el costo de la mano de obra, el tipo de relleno, las
condiciones climáticas, etc., tal vez resulte preferible el uso de equipo pesado en el relleno
sanitario, ya sea en forma parcial o permanente.
Este sistema ofrece los servicios de recolección y transporte, sirviendo además de apoyo en la
disposición final de las basuras.
El tractor agrícola puede operar como unidad independiente y emplearse en el relleno sanitario
con la adaptación de accesorios, tales como: cuchilla topadora, cargador frontal,
retroexcavadora y rodillo para compactar los desechos sólidos, permitiendo lograr unos
rendimientos más altos en la operación del relleno sanitario, lo que implica poder manejar
también una mayor cantidad de basuras diariamente. De este modo, se dispone de un equipo
mucho más versátil, dado que trae beneficios de tipo técnico y económico para todo el sistema
de aseo urbano, pudiendo además servir en casos especiales, para desempeñar algunas
labores de obras públicas en el municipio, con lo que se aprovecha al máximo la inversión
hecha por el municipio. Figura 3.1.
Recolección y transporte de
los desechos sólidos.
FIGURA 3.1
Empleo del tractor agrícola para el servicio de aseo
3.1 Planeación
El relleno sanitario manual, aunque es una pequeña obra, no deja de ser un proyecto de
ingeniería, en el que gran parte de los problemas potenciales se previenen por medio de una
buena planeación desde las etapas iniciales, puesto que de esta manera resulta más sencillo y
económico que si se efectúan correcciones en el transcurso de las operaciones.
La planeación inicial desarrollará las bases para las diferentes actividades a cumplir, tales
como: selección del sitio; diseño; construcción; operación y mantenimiento; y teniendo en
cuenta que se debe contar con la información básica sobre la población a servir, la
procedencia, calidad y cantidad de desechos sólidos a disponer, los posibles sitios disponibles,
el uso futuro del terreno una vez terminado el relleno, los recursos para su financiación y la
asesoría de un profesional competente.
La planeación inicial deberá incluir un programa de información pública que explique cuáles son
los pro y los contra de la implantación del relleno.
El apoyo del público es una de las metas que debe procurar cualquier administración local que
esté interesada en construir esta obra de saneamiento básico puesto que, sin este apoyo, es
muy probable que la misma no pueda llevarse a la práctica.
Toda comunidad debe tener presente que un relleno sanitario manual, como cualquier obra,
requiere de recursos para su financiación, tanto para los estudios y diseños, como para su
construcción, operación y mantenimiento.
La selección apropiada del lugar destinado para la construcción del relleno sanitario, eliminará
en el futuro muchos problemas operacionales.
La elección debe hacerse en consulta con las autoridades locales de planificación, salud y
protección del agua. Figura 3.2.
FIGURA 3.2
Presentación del proyecto ante las autoridades locales
En muy pocas ocasiones, un terreno reunirá las condiciones ideales del sitio para la
construcción de un relleno sanitario. Por lo tanto, se deben clasificar aquellos que presenten
buenas características, analizando sus inconvenientes en función de los recursos técnicos y
económicos disponibles. Se recomienda seguir los siguientes pasos:
Cuarto, elaborar los cálculos y diseños definitivos del relleno sanitario, evaluar los
costos, buscar su
financiación y proceder a su ejecución.
Las relaciones públicas son las actividades que las autoridades municipales y los técnicos
descuidan con mayor frecuencia durante la selección del sitio. Desde el inicio del proceso de
selección, el público debe tener la oportunidad de participar, comentar y objetar las propuestas
realizadas. En todos los casos, es esencial asegurar el apoyo de los distintos sectores de la
comunidad, durante todas las fases de selección, diseño, construcción, operación,
mantenimiento, y uso futuro del relleno sanitario.
Este aspecto es muy importante dada la confusión que existe por parte de la comunidad,
originada por la creencia que un relleno sanitario es un botadero a cielo abierto. Se recomienda
entonces efectuar una campaña de educación e información a través de las escuelas y
colegios, asociaciones, casa de cultura, clubes, etc., haciendo uso de los medios de
comunicación local.
Desde el punto de vista técnico, el ingeniero sanitario debe tener en cuenta los siguientes
factores:
Es de anotar que no existen reglas fijas; mucho dependerá de la disponibilidad de terrenos,
de su topografía, la vida útil del relleno, y del número de establecimientos vecinos. Se
recomienda que los límites de un relleno, estén trazados a una distancia mayor de 200 metros
del área residencial más cercana.
Vías de acceso. El terreno debe estar cerca a una vía principal, para que su acceso sea
fácil y resulte más económico el transporte de los desechos sólidos y la construcción
de las vías internas de penetración. Estas deben permitir el ingreso fácil, seguro y
rápido a los vehículos recolectores hasta el frente de trabajo en todas las épocas del
año. Figura 3.4.
FIGURA 3.4
Vías de acceso
Vida útil del terreno. La capacidad del sitio debe ser suficientemente grande para
permitir su utilización a largo plazo (más de cinco años), a fin de que su vida útil sea
compatible con la gestión, los costos de adecuación y las obras de infraestructura.
Obviamente, todo depende de su disponibilidad.
Material de cobertura. El terreno debe tener abundante material de cobertura, ser fácil
de extraer y, en lo posible, con buen contenido de arcilla por su baja permeabilidad y
elevada capacidad de absorción de contaminantes. Cuando sea escaso en el propio
sitio, se debe garantizar su adquisición en forma permanente y suficiente, teniendo en
cuenta su disponibilidad en lugares vecinos y los costos de transporte. De no ser así,
es preferible desechar el lugar antes del inicio de cualquier trabajo, puesto que se corre
el riesgo de convertirlo en un botadero a cielo abierto. Figura 3.5.
FIGURA 3.5
Disponibilidad de material de cobertura
Costos. Antes de proceder a elaborar los cálculos y diseños del relleno sanitario, es
necesario conocer los costos del terreno y cuán factible es su adquisición. Además, se
debe efectuar una estimación de la inversión necesaria para su adecuación y para la
construcción de las obras de infraestructura. En ocasiones, el costo de estas últimas
es tan alto que el municipio no tiene los recursos suficientes para su ejecución, por lo
que se recomienda buscar otros sitios disponibles.
FIGURA 3.6
Dirección del viento
Propiedad del terreno. Un proyecto de relleno sanitario debe iniciarse solamente cuando
la entidad responsable del relleno (generalmente el municipio), tenga en su poder el
documento legal que acredite su propiedad sobre el terreno y autorice (Acuerdo
Municipal) a construirlo con sus obras complementarias, estipulando también la
utilización futura, ya que los posibles usos pueden facilitar algún desarrollo, como por
ejemplo, área recreativa o zona de reforestación.
FIGURA 3.7
Compatibilidad con los usos del suelo
Las visitas de campo se realizarán conjuntamente con las autoridades locales y los
responsables de la protección de las aguas y del ambiente. En estas visitas es conveniente
contar con planos topográficos de la región en escala 1:10000-1:25000, con el propósito de
ubicar los posibles sitios con respecto a las vías de acceso y salidas del área urbana, las
corrientes de agua más próximas y la distribución de los suelos típicos.
Una vez en la oficina de planeación local, con ayuda del Plan Regulador, se consultan los usos
del suelo y sus restricciones, así como las áreas de futura expansión del área urbana para
analizar la compatibilidad o no de ubicar el relleno sanitario en estos sitios.
Entre los mejores sitios visitados se investigarán mayores detalles, siendo los más importantes
la probabilidad o no de contaminar pozos de abastecimiento de agua para consumo, las
características del suelo y el nivel freático, además de identificar puntos de referencia,
accidentes topográficos, nacimientos de agua en el terreno, caminos y construcciones.
El siguiente cronograma puede servir para orientar y programar las actividades y ejecución de
las obras del relleno sanitario manual. Tabla 3.1
Tabla 3.1
Relleno Sanitario Manual - Cronograma de Actividades
- Levantamiento topográfico
- Estudios y diseño
Infraestructura periférica.
- Vías de acceso
- Drenaje pluvial
- Limpieza y desmonte
- Cortes
- Drenaje de gases
- Acceso interno
Construcciones auxiliares.
- Cerca perimetral
- Arborización perimetral
- Caseta o portería
- Caseta
- Instalaciones sanitarias
- Pozo de monitoreo
- Avisos
Una vez definido el sitio y adquirido el terreno por el municipio, se debe realizar el
levantamiento topográfico con todos los detalles, en escala 1:250-1:500, con curvas de nivel
c/m y acotadas c/5 m, para elaborar los cálculos y el diseño definitivo del relleno sanitario.
El levantamiento topográfico del terreno, así como la elaboración de los planos (planta y cortes)
pueden ser contratados por el municipio, aunque siempre queda el recurso de solicitar este
servicio al Ministerio o Secretaría de Obras Públicas, de Salud o de Desarrollo de la
Comunidad.
El diseño básico debe incluir en lo posible la delimitación del área total del sitio y del terreno a
ser rellenado sucesivamente, indicando el método constructivo, el origen de la tierra de
cobertura y la disposición de las obras de infraestructura.
Es necesario además presentar en las memorias de cálculo la vida útil, el uso futuro y el costo
global estimado del proyecto.
El diseño se debe presentar en planos con plantas y perfiles del proyecto que contengan como
mínimo:
Con el propósito de hacer más comprensible este documento, todo lo concerniente a la etapa
de estudios de la información básica, cálculos y diseño del Relleno Sanitario Manual serán
presentados en el Capítulo 5, prefiriendo ilustrar a continuación las obras de preparación del
sitio y de la infraestructura necesaria para recibir los desechos sólidos, así como la
construcción, operación y mantenimiento requeridos.
Esta etapa comprende los proyectos de ingeniería, paisaje y detalles de construcción; en vista
de las circunstancias que las gobiernan, debe realizarse en función de la simplicidad y rapidez
necesarias para este tipo de obras, y tratando también de cumplir al máximo con los requisitos
sanitarios.
Al relleno sanitario se debe llegar por una vía pública de acceso, la que debe ser una vía
principal de uso permanente y que reúna las condiciones aceptables de diseño, sin importar
que haya sido construida en afirmado. Figura 4.1.
Es necesario destacar que el tiempo empleado en el acarreo de basuras hasta y desde el sitio
del relleno sanitario, es más importante que la distancia.
FIGURA 4.1
Vías de acceso al relleno sanitario
Es importante estudiar la precipitación pluvial del lugar para prever las características de los
drenajes y las obras que se vayan a necesitar a fin de atenuar la producción de lixiviado. Así,
se evitará también la contaminación de las aguas, y se logrará definir las áreas de operación e
instalaciones para los trabajadores.
Las aguas de lluvias que caen sobre las áreas vecinas al relleno sanitario muchas veces
escurren hasta éste, causando serias dificultades de operación. Interceptar y desviar el
escurrimiento del agua de lluvias fuera del relleno sanitario, contribuye significativamente a
reducir el volumen del líquido percolado y también a mejorar las condiciones de la operación.
Por lo tanto, es necesario construir un canal en tierra o suelo-cemento de forma trapezoidal, y
dimensionarlo de acuerdo con las condiciones de precipitación local, área tributaria,
características del suelo, vegetación y topografía. Figura 4.2.
FIGURA 4.2
Drenaje perimetral del agua de lluvias
Para una pequeña cuenca se recomienda usar un canal con las dimensiones que presenta la
Figura 4.3. No obstante, si así lo estima el ingeniero y si debido a las características del lugar
se requiere de mayor precisión, se puede calcular el caudal aportante mediante el método
racional y las dimensiones del canal.
Qp = K i Ad
3.6 x 106
donde:
El canal debe ser trazado por la curva de nivel máximo a que llegará el relleno, y deberá
garantizar una velocidad máxima promedio (0.5 m/seg) que no provoque erosión excesiva; el
tamaño de la sección del canal se podrá calcular usando la siguiente ecuación:
A = Qp
_
v
donde:
Una vez hallada el área de la sección se deciden las dimensiones, con base en las
recomendaciones anteriores.
La adecuación del terreno es importante para mejorar sus condiciones y facilitar las
operaciones de ingreso de los desechos sólidos, así como para la construcción de las celdas y
las operaciones del relleno sanitario en general. Por lo tanto, se deben realizar los siguientes
trabajos.
En el terreno se debe preparar un área que servirá de base o suelo de soporte al relleno,
siendo por lo general necesaria la tala de árboles y arbustos, puesto que éstos constituirán un
obstáculo para la operación. Esta limpieza debe hacerse por etapas, de acuerdo con el avance
de la obra, evitando así la erosión del terreno. Figura 4.4.
FIGURA 4.4
Limpieza y desmonte del terreno
FIGURA 4.5
Movimiento de tierras para la preparación del sitio
Una de las mayores dificultades que se presentan en las pequeñas poblaciones -aparte de la
adquisición del terreno para la construcción del relleno sanitario- es el préstamo o arriendo del
equipo pesado, que realice el movimiento de tierras inicial para abrir el acceso a los vehículos
recolectores y preparar el suelo de soporte. En esta labor se pone a prueba la capacidad de
gestión del funcionario encargado de la administración local para lograr este objetivo.
Cuando sólo se cuenta con terrenos cenagosos o pantanosos, éstos pueden aprovecharse
para construir un relleno sanitario manual, bajando el nivel freático permanentemente, mediante
el siguiente procedimiento:
Excavar una o varias zanjas de drenaje en la parte inferior del terreno a la profundidad que
se requiera
en cada caso, hasta determinar que las primeras capas de basura del relleno estén como
mínimo de
0.60 m a 1.00 m sobre el nivel más alto del agua.
Colocar una tubería perforada de concreto y llenar con piedra la zanja, a manera de filtro, a
todo lo
largo de la misma.
Cubrir con tela de ingeniería (geotextil) o material similar el drenaje de piedra para evitar que
se
colmate.
Colocar una capa de 0.60-1.00 m de material arcilloso sobre la tela para alcanzar el
aislamiento entre
la superficie superior del drenaje y los desechos sólidos, a fin de evitar una posible
contaminación del
agua. Figura 4.6.
Se debe tener cuidado de no cruzar los drenajes del líquido percolado con la zanja de drenaje
para
abatir el nivel del agua.
FIGURA 4.6
Drenaje para terrenos de alto nivel freático
4.1.2.4 Cortes
Los taludes del terreno se dejan de tal manera que no causen erosión y puedan darle buena
estabilidad al relleno. Estos pueden ser desde verticales hasta 3:1 (H:V), dependiendo del tipo
de suelo, y los cortes de uno a tres metros. Las terrazas deben tener una pendiente del 2%
hacia los taludes interiores para conducir las aguas de lixiviado a los drenajes, y evitar
encharcamientos cuando se usen como vías temporales de acceso; lo anterior contribuye
también a brindar mayor estabilidad a la obra. Figura 4.7.
Se debe evitar construir el relleno sanitario manual "sobre" alguna pequeña corriente o
nacimiento de agua, sin antes bajar su nivel, canalizarla y entubarla para evitar su contacto
directo con el percolado.
El manejo del líquido percolado es uno de los mayores problemas que se presentan en un
relleno sanitario. En algunos casos, a pesar de contar con los canales periféricos para
interceptar y desviar las aguas de escorrentía, la lluvia que cae directamente sobre la superficie
del relleno aumenta significativamente el volumen del lixiviado. (Ver operación en época de
lluvias).
FIGURA 4.7
Cortes de los taludes y del suelo de soporte
Por lo tanto, es de vital importancia construir un sistema de drenaje en el terreno que servirá de
base al relleno sanitario antes del depósito de las basuras. En lo posible, este sistema debe
retener el percolado en el interior del relleno, para dar lugar a un mayor tiempo de infiltración y
disminuir su aparición a nivel superficial. Lo anterior tiene el propósito de evitar al máximo su
tratamiento, el cual es demasiado complejo y económicamente poco factible para estas
localidades, dados sus altos costos.
Para obtener una mayor eficiencia, se recomienda construir también estos drenajes en todas
las bases de los taludes interiores y exteriores de las terrazas o niveles que conforman el
relleno sanitario, a fin de evitar su escurrimiento por la superficie de los taludes inferiores y
además interconectarlos con el drenaje vertical de gases.
Se prepara el trazado por donde se ubicará el drenaje en el terreno, el cual puede ser
similar al de
un sistema de alcantarillado (p. ej. espina de pescado). Figura 4.8.
Se excavan las zanjas y se construyen las pantallas cada 5 a 10, con un ancho de 0.20 a
0.30 o
simplemente se dejan intactos en la zanja estos pequeños espacios del suelo. Para que el
percolado pueda escurrir sin rebosar las zanjas, se les dará en el fondo una pendiente del
2% y un
borde libre de unos 0.30 m. entre la pantalla y el nivel de la superficie.
FIGURA 4.8
Distribución del sistema de drenaje del percolado
Se llenan las zanjas con piedra de 4" ó 6", de manera que permitan más espacios libres, para
evitar
su rápida colmatación. Una vez que se tengan las zanjas llenas con piedra, se recomienda
colocar
sobre ellas un material que permita infiltrar los líquidos y retener las partículas finas que lo
puedan
colmatar. Este efecto se consigue con ramas secas de helecho, pasto e incluso hierba, las
que
reemplazan el geotextil. Figura 4.9.
Otra manera de construir este drenaje en la base del terreno, es utilizando las llantas
desechadas de los automotores, con lo cual se aprovecha un material voluminoso de difícil
manejo en el relleno, obteniendo una mayor capacidad de almacenamiento para el líquido
percolado. Una vez enterradas las llantas en sentido vertical -una junto a la otra- se coloca
encima una capa de 0.20-0.30 m de piedra, y las ramas secas como en el caso anterior. Es de
anotar que la zanja tendrá una conformación especial para recibir las llantas. Figura 4.9.
FIGURA 4.9
Detalles del drenaje de percolado
Cuando ocurran períodos de lluvias fuertes, y la cantidad de lixiviado sea tal que exceda la
capacidad de los drenajes en el interior del relleno, se recomienda prolongar y orientar el
sistema de drenaje de las mismas características y conformar por fuera del relleno un campo
de infiltración que permita por lo menos almacenar este líquido durante estos días de lluvia.
Figura 4.10.
FIGURA 4.10
Sistemas de infiltración en zanjas o trincheras
En este drenaje fuera del relleno pueden dejarse algunos tramos alternos entre pantalla y
pantalla sin efectuar el llenado de piedras. Esto se hace con varios propósitos, entre ellos:
Estimar el volumen del percolado que sale del relleno.
Verificar la cantidad de material sólido que se ha sedimentado, lo que nos puede indicar
el momento de efectuar la limpieza del drenaje exterior del relleno.
Sin embargo, existen regiones que presentan condiciones extremas de precipitación pluvial
(más de 3,000 mm/año), en las que la lluvia que cae directamente sobre el área rellenada
puede generar una gran cantidad de lixiviado difícil de manejar. En estos casos, de acuerdo
con los cálculos, el volumen de lixiviado que se espera puede ser tal, que incluso el terreno
disponible para el sistema de drenaje que permita su almacenamiento e infiltración, sea
insuficiente y/o que su construcción resulte económicamente poco factible.
Proceder a aplicar la cobertura final e inmediatamente sembrar grama sobre las áreas
terminadas del relleno.
Generalmente, en las regiones donde la precipitación anual no exceda los 300 mm y se cuente
con un canal apropiado para interceptar y desviar las aguas de lluvia, se espera que no se
presenten problemas significativos con el lixiviado que se produce, el cual estará en función del
tipo de residuos y de su capacidad de campo. Se recomienda, sin embargo, construir
igualmente los drenajes en el suelo que sirve de base al relleno y en las terrazas que lo
conforman; no obstante, el tamaño de las zanjas será menor.
Tratamiento
En caso de que el suelo no permita la infiltración o que el acuífero esté siendo usado como
fuente de abastecimiento en una zona cercana, se requerirá tratar el lixiviado.
Dado que el percolado de los residuos sólidos municipales presenta características semejantes
a las aguas residuales domésticas (con gran porcentaje de materia orgánica biodegradable de
difícil decantación), se deben realizar estudios de tratabilidad para aplicar los tratamientos
biológicos con el fin de mejorar en lo posible la calidad de este líquido 4/. Entre los procesos
biológicos que pueden ser utilizados en el tratamiento del percolado, se tienen los filtros
percoladores y las lagunas de estabilización.
A continuación se ilustra la manera de construir las chimeneas o ventilas de gases. Figura 4.11.
FIGURA 4.11
Método constructivo del drenaje de gases
Se deben interconectar los drenes, a fin de lograr una mayor eficiencia en el drenaje de líquidos
y gases en el relleno sanitario. Figura 4.12.
FIGURA 4.12
Interconexión de los sistemas de drenaje (Corte de terrazas)
Luego de tenerse prevista la conclusión de la última celda, se colocan dos tubos de concreto: el
primero, perforado para facilitar la captación y salida de gases; además, para que los desechos
sólidos o la tierra de cobertura no obstruyan los orificios del tubo, se reviste en piedra o cascajo
a manera de camisa de protección. El segundo tubo, en cambio, no será perforado, a fin de
colectar el gas y quemarlo, eliminando los olores producidos por otros gases. Figuras 4.13 y
4.14.
FIGURA 4.13
Detalle constructivo del filtro para drenaje de gases
FIGURA 4.14
Distribución de las chimeneas en el relleno
Durante la planeación del relleno sanitario, se deben estudiar cuidadosamente los caminos de
acceso interno dentro del recinto del relleno, ya que por el permanente desplazamiento de
estas rutas, aumenta la posibilidad de originar serios trastornos en épocas lluviosas.
Para entregar los desechos en el frente de trabajo, se acepta como vía interna una pequeña
carretera de 6 m de ancho en simple afirmado con sus drenajes, la cual debe mantenerse en
buenas condiciones durante todo el año. La pendiente máxima podrá ser de 7 a 10%, según el
estado de los vehículos y si remontan la pendiente cargados o vacíos.
Aunque se acepte el hecho que en un relleno sanitario manual las vías de acceso al sitio de
operación y control del mismo pueden ser rústicas, hechas en tierra, piedra y restos de
demoliciones, estas vías deben mantenerse en buen estado y drenadas.
Las construcciones auxiliares que se proponen son pequeñas y de bajo costo, tratando de
hacerlas compatibles con la vida útil prevista, puesto que entre las características de esta obra
de saneamiento básico, están las de atender los requerimientos sanitarios con la máxima
economía y utilización intensiva de la mano de obra en todas sus actividades, a fin de
minimizar las inversiones temporales.
Se debe construir una cerca de alambre de púas de cuatro hiladas, con un portón de entrada
para darle seguridad y disciplina a la obra. Es importante también para impedir el libre acceso
del ganado al interior del relleno, dado que aquél no sólo entorpece la operación, sino también
destruye las celdas, especialmente cuando se retiran los trabajadores al fin de la jornada diaria.
Figura 4.15.
FIGURA 4.15
Cerco perimetral
FIGURA 4.16
Siembra de árboles en la periferia
4.1.3.2 Caseta
FIGURA 4.17
Caseta e instalaciones sanitarias
El sitio debe contar con instalaciones mínimas que aseguren la comodidad y bienestar de los
trabajadores. Para conseguir lo anterior, se debe llevar agua al relleno para los servicios
sanitarios; como mínimo, se requiere construir una letrina o pozo negro. Figura 4.17. Además,
en períodos secos, es aconsejable esparcir un poco de agua sobre la superficie del relleno con
ayuda de una manguera, para obtener una mejor compactación y evitar la presencia de polvo.
Es conveniente preparar una zona de aproximadamente 200 m 2 (10 x 20) para que los
vehículos recolectores puedan maniobrar y descargar las basuras en el frente de trabajo, sin
mayores dificultades.
Los materiales del cartel pueden ser dos hojas de zinc y un marco de madera. Se pintará
inicialmente con anticorrosivo, y posteriormente con pintura del color deseado, sobre la cual irá
una breve descripción del proyecto y una leyenda cívica. Este cartel también puede ser
solicitado a una empresa comercial. Figura 4.18.
FIGURA 4.18
Cartel de presentación de la obra
Es de anotar que se debe elegir desde el comienzo un NOMBRE OFICIAL para el relleno
sanitario. Este nombre debe usarse en adelante, en todos los documentos y correspondencia
pertinentes.
Para que el relleno sanitario se integre perfectamente al ambiente natural, no sólo la superficie
final del relleno, sino también la entrada y el contorno de la obra en ejecución, deben merecer
consideraciones paisajísticas.
La cobertura final compactada de 0.40 a 0.60 metros como mínimo, y los drenajes de gases y
aguas de escorrentía, son esenciales para la vida vegetal sobre el relleno, la que se restringe a
algunas especies mientras el relleno se estabiliza. Se recomienda sembrar en toda el área del
relleno grama y plantas de raíces cortas superficiales, que no traspasen la cobertura,
admitiéndose también el plantío en hoyos llenos de tierra abonada.
A fin de evitar la erosión y el aumento del lixiviado, a medida que se terminan algunas áreas del
relleno, conviene realizar el plantío de pasto, sin necesidad de esperar la finalización de las
operaciones. Esta tarea es más sencilla si, al realizarse el movimiento inicial de tierras, se
almacenó la capa vegetal del terreno.
4.2 Construcción
Luego de realizado el diseño del relleno sanitario, se ejecuta el proyecto. Obviamente, el mejor
diseño no significará nada si no existe voluntad político-administrativa para que sea
ejecutado debidamente. La construcción de un relleno sanitario es de importancia fundamental
en comparación con la de otras obras, debido a la duración de su ejecución y al permanente
mantenimiento que requiere.
Para planificar el avance de la obra, es conveniente disponer de los planos topográficos del
proyecto, con sus perfiles longitudinales y transversales en los que se indique la configuración
parcial de las áreas rellenadas en cada etapa. Sobre estos planos se programa la marcha de la
obra, el frente de trabajo y su avance, calculando los volúmenes ocupados y las alturas, de
acuerdo con las curvas de nivel y cotas alcanzadas.
La celda diaria se define como la unidad básica de construcción del relleno sanitario; se
asemeja a un pequeño bloque, y está constituida por la cantidad de basura que se entierra en
un día y por la tierra necesaria para cubrirla.
4.2.2.1 Dimensiones
Las dimensiones de la celda diaria varían en cada caso y se definen teóricamente como un
paralelepípedo. Su ancho equivale al frente de trabajo necesario para que los vehículos
recolectores (generalmente no más de dos), puedan descargar la basura. El largo o avance
está definido por la cantidad de basura que llega al relleno en un día, y la altura se limita a un
metro o metro y medio para lograr una mayor compactación. Figura 4.19.
FIGURA 4.19
Celda típica diaria
4.2.2.2 Construcción
Las basuras deben ser descargadas en el frente de trabajo, los trabajadores las esparcen
sobre el talud de las celdas ya terminadas en capas sucesivas de 0.20 a 0.30 m, empleando
para ello horquillas (garfio de tres dientes) o rastrillos (ocho o diez dientes); se nivela la
superficie superior y se compacta con el rodillo, a diferencia de las superficies laterales que son
compactadas por medio de los pisones de mano hasta darles una relativa uniformidad.
4.2.2.3 Cobertura
Para concluir la celda, se cubre ésta con una capa de tierra del orden de 0.10 a 0.15 m; se
esparce con ayuda de carretillas de mano, palas y azadón, y se compacta empleándose el
rodillo y pisones de mano, siguiéndose el mismo procedimiento efectuado con la basura.
Conviene recordar que la cobertura diaria controla la presencia de insectos, roedores y
gallinazos, así como el fuego, los humos, los malos olores, la humedad y la basura dispersa.
Es claro que la cobertura debe aplicarse como mínimo una vez por cada día de recolección. De
este modo, al terminar la jornada no debe quedar ningún desecho sólido expuesto y, menos
aún, al final de la semana.
No se debe ser exigente en cuanto a la calidad del material de cobertura para un relleno
sanitario manual. Se recomienda simplemente aprovechar la tierra que se encuentre más
accesible, puesto que el objetivo fundamental es el cubrimiento de los desechos.
Método de área
Si se excava en el propio sitio, los costos de acarreo de la tierra de cobertura son mínimos. Se
recomienda extraerla de los taludes del terreno, conformando terrazas, para evitar la erosión;
además, resulta aconsejable ampliar la capacidad del sitio y por ende su vida útil, o también
aprovechar la tierra sobrante de las excavaciones de las nuevas construcciones en el área
urbana. Esto se consigue haciendo público el recibimiento de tierra en el relleno y/o el contacto
directo con el constructor; el costo de transporte puede estar a cargo de este último.
En los períodos secos, se recomienda extraer y acumular la tierra para cobertura utilizándose
un tractor o retroexcavadora; de esta forma, se obtienen mejores rendimientos. La tierra puede
ser acumulada en otra celda terminada y de allí descender a la celda en conclusión.
Método de trinchera
4.2.2.4 Compactación
Dado que esta obra de saneamiento básico ha sido concebida para emplear tecnología al
alcance de la región, y con el propósito de promover el uso extensivo de mano de obra, la
conformación de las celdas y la compactación se harán con herramientas de albañilería, por lo
que las densidades alcanzadas en el relleno sanitario manual serán relativamente bajas (400-
500 kg/m3), pero suficientes para los fines propuestos. No obstante, existen otros mecanismos
que inciden en la compactación de los residuos sólidos, siendo los más importantes:
El tránsito de los vehículos sobre las celdas terminadas; esta práctica debe estimularse
en los períodos secos.
El peso propio de las celdas superiores sobre las inferiores también produce una carga
que aumenta el grado de compactación.
La construcción del relleno sanitario debe planearse de manera que se pueda orientar y
controlar su avance, de acuerdo con el diseño y el uso futuro proyectado. Por lo tanto, se
recomienda construir el relleno sanitario manual en terrazas de tres metros de altura, las cuales
a su vez estarán conformadas por tres celdas de un metro. Cada terraza corresponderá a una
fase de construcción del relleno. Entre cada terraza es conveniente dejar una berma de unos
tres a seis metros de ancho para darle mayor estabilidad a la obra.
Del mismo modo, al combinar los métodos de trinchera y de área para aprovechar mejor el
terreno, cada fase constructiva corresponderá a un método de operación.
En las Figuras 4.20 a 4.24 se ilustra el plan de operación de un relleno sanitario, dependiendo
del método.
FIGURA 4.20
Plan de manejo del terreno para la construcción
del relleno sanitario manual por el método de trinchera
FIGURA 4.21
Relleno sanitario terminado y construido por la
combinación de los métodos de trinchera y área
FIGURA 4.22
Plan de operación para una cantera profunda 13/
FIGURA 4.23
Formación de los niveles del relleno en la cantera 13/
FIGURA 4.24
Plan de operación para un sitio plano
5.1.1.1 Población
Es necesario conocer el número de habitantes a servir para definir las cantidades de desechos
sólidos que se han de disponer. Es de anotar que la producción de desechos sólidos se debe
discriminar entre la producción rural y la urbana. La primera, debido a la baja producción,
presentará menos exigencias, pero su recolección resulta más difícil. En cambio, la producción
urbana es más notoria por razones de concentración, aumento de población, y desarrollo
tecnológico y urbanístico, mereciendo nuestra atención en este caso.
Es además de suma importancia estimar la producción en el futuro, para definir las cantidades
de desechos sólidos que se deben disponer durante el período de diseño, lo cual conlleva a
realizar una proyección de la población, al igual que en cualquier obra de servicio público. La
Tabla 5.1 facilitará la síntesis de la información básica.
El crecimiento poblacional se podrá estimar por métodos matemáticos, o vaciando los datos
censales en una gráfica y haciendo una "proyección" de la curva dibujada.
TABLA 5.1
Volumen y área requerida
ño Población PPC CANTIDAD DESECHOS SOLIDOS VOLUMEN DESECHOS SOLIDOS AREA REQUERIDA
(hab) kg/hab-día
Diaria Anual Acumu- Compactados Estabi- Rellenos Relleno Total
A A
(kg) (ton) lada lizados RS T
(ton) Anual (m2) (m2)
(m3)
Diario Anual (DS+MC) Acum.
(m3) (m3) anual (m3)
(1) (2) (3) (4) (5) (6) (7) (8) (9) (10) (11) (12)
0
1
2
3
4
5
(6) La producción de DS de una semana ingresa al RS en los días "x" de recolección (7 días/ x días hábiles). Densidad
de la basura
(9) V relleno sanitario = desechos sólidos + tierra (20 a 25%) promedio general.
A
(11) ARS = VRS/HRS ( RS = Area a rellenar) DENSIDAD DE LA BASURA .
Suelta - 200-300 kg/m3
(12) AT = F ARS F (factor para área adicional) .
Compactada - 400-500 kg/m3
.
Estbilizada - 500-600 kg/m3
2
Area/hab -------(m /hab) actual
Sin embargo, se recomienda comparar los resultados obtenidos con otros métodos de
proyección.
Entre los parámetros más importantes que debemos conocer para el manejo adecuado de los
desechos sólidos que se producen en una población, se encuentran la composición y la
cantidad.
5.1.2.1 Composición
Los desechos sólidos en las áreas urbanas se pueden diferenciar de acuerdo con su
procedencia en: residencial, comercial, industrial, barrido de vías y áreas públicas mercado e
institucional. Tabla 5.2.
a) Sector residencial
Las basuras o desechos sólidos domésticos están compuestos de papel, cartón, latas,
plásticos, vidrios, trapos y materia orgánica putrescible principalmente.
b) Sector comercial
La composición de los desechos es similar a la del tipo residencial, con una mayor proporción
en los materiales de empaque (papel, cartón, vidrio y plástico).
c) Sector industrial
d) Mercados
El mercado presenta un carácter más definido, dado que allí se concentran los expendios de
carne, pescado, vegetales, frutas y otros, lo que indica que gran parte de los residuos están
constituidos por materia orgánica, y una reducida cantidad de ellos por material de empaque;
para estos desechos puede ser recomendable la producción de compost con métodos
manuales.
TABLA 5.2
Proyección de la producción y composición de los desechos sólidos (*)
(*) ton/año
f) Sector institucional
No es necesario considerar el hospital o centro de salud como un sector que incida de manera
importante en la producción total de desechos, pues la capacidad en camas es generalmente
baja, aunque en algunos casos es de mediana magnitud. Sin embargo, en lo que respecta a su
calidad, es necesario distinguir entre los residuos propios de toda vivienda (de la limpieza,
cocina, basura común), y los originados por las actividades específicas que producen residuos
potencialmente infecciosos, tales como materiales punzocortantes, gasas, vendas, algodón,
vísceras provenientes del quirófano, etc., llamados "DESECHOS PATOGENICOS O
INFECCIOSOS", los cuales se consideran peligrosos.
Desde el punto de vista del almacenamiento y recolección, estos desechos deben ser
presentados en forma separada y en bolsas cerradas de polietileno (color especial), evitando
en lo posible el derrame de su contenido y el contacto por parte del personal de recolección, así
estén provistos de guantes y ropa adecuada. La disposición final de estos desechos debe ser
en lo posible local, ya sea mediante la incineración o enterrándolos en un pozo de
dimensiones adecuadas, cuya profundidad se encuentre por lo menos a dos metros de la capa
freática, para evitar el contacto con el agua.
De ser recogidos por la municipalidad, deben tomarse las medidas antes mencionadas y su
disposición final podrá realizarse en el relleno sanitario manual, colocándolos en cuanto lleguen
al pie del talud, cubriéndolos de inmediato con otras basuras y tierra.
En nuestro caso, para este tipo de desechos sólidos y estas pequeñas cantidades, la
composición química no reviste mayor importancia dado que el método de disposición final se
realiza a través de la técnica del relleno sanitario.
Donde:
7 = días de la semana
Es de anotar que también es posible relacionar la cantidad de desechos sólidos producidos por
vivienda, o sea, kg/vivienda-día, dado que la basura es entregada por vivienda y además tiene
la ventaja de la facilidad de contar las casas.
Con base en los muestreos de desechos sólidos realizados en algunas poblaciones pequeñas,
rurales y áreas marginales en la Región Latinoamericana, sobre las características que se
analizan en este trabajo, se ha encontrado que la ppc presenta rangos entre 0.2 - 0.5 kg/hab.-
día. Estos valores son bastante representativos y se podrían asumir para la casi totalidad de
estas poblaciones.
Se recomienda tener presente lo anterior, puesto que una investigación de campo (muestreo)
en la mayoría de los casos no se justifica. La diferencia obtenida con el empleo de la ecuación
5-2 no es muy significativa, ya que las cantidades de desechos sólidos son pequeñas. En los
lugares turísticos deben considerarse los desechos dejados por la población flotante que los
visita.
Donde:
La producción anual de desechos sólidos se debe estimar con base en las proyecciones de la
población y la producción per cápita.
Como vimos, la proyección de la población puede estimarse por métodos matemáticos pero, en
cuanto al crecimiento de la ppc, conviene anotar que difícilmente se encuentran cifras que den
idea de cómo puede variar anualmente, para tratar de evaluar cambios. No obstante, para
obviar este punto y, conociendo que con el desarrollo y el crecimiento urbanístico y comercial
de la población los índices de producción aumentan, se recomienda calcular con una tasa de
incremento del 1% anual, la producción per cápita total (Tabla 5.1).
5.1.2.5 Densidad
Para calcular y dimensionar la celda diaria y el volumen del relleno se pueden estimar las
siguientes densidades así:
La producción diaria de desechos sólidos si se espera tener una cobertura del 100% o,
en su defecto, de la cantidad de desechos sólidos recolectados.
La densidad de los desechos sólidos estabilizados en el relleno sanitario manual.
La cantidad de material de cobertura (20-25%) del volumen estabilizado de desechos
sólidos.
Con los dos primeros parámetros se tiene el volumen diario y anual de desechos sólidos que se
requieren disponer, (Tabla 5.1, columnas 6, 7 y 8), es decir:
Donde:
Drsm = Densidad de los desechos sólidos recién compactados, (400-500 kg/m 3) y estabilizados
(500-600 kg/m3)
De esta manera, se puede calcular el volumen del relleno sanitario para el primer año,
afectando el valor anterior por el material de cobertura así:
Donde:
Los datos obtenidos se vacían en la Tabla 5.1, columna 9, y para conocer el volumen total
ocupado durante la vida útil se tiene:
[5-7]
Donde:
n = Número de años
que serían los datos que aparecen en la Tabla 5.1, columna 10, es decir, los valores
acumulados anualmente.
Con el volumen calculado, se puede estimar el área requerida para la construcción del relleno
sanitario, solamente si se puede estimar en forma aproximada la profundidad o altura del
relleno. Esta solo se conocerá si se tiene una idea de la topografía de los alrededores.
El relleno sanitario manual debe proyectarse para un mínimo de cinco años, aunque
preferiblemente debe ser suficiente para 10 años. Sin embargo, algunas veces es necesario
proyectarlo incluso para menos de cinco años, ante la dificultad de encontrar terrenos
disponibles. Este tiempo se llama vida útil o período de diseño.
A partir de la ecuación 5-6 podremos estimar las necesidades de área, así: (Tabla 5.1, columna
11).
Donde:
Donde:
F = Factor de aumento del área adicional requerida para las vías de penetración, áreas de
aislamiento, caseta para portería e instalaciones sanitarias, patio de maniobras, etc. Este se
considera entre un 20-40% del área a rellenar.
En la Tabla 5.1 se incorporan los parámetros mencionados para el cálculo del volumen del
relleno sanitario. El área se estimará para cada sitio alternativo cuando se conozca la
profundidad promedio del relleno (ver ejemplo 2 del Anexo 1).
Como ya se mencionó, el diseño del relleno sanitario depende del método adoptado (trinchera,
área o su combinación), de acuerdo con las condiciones topográficas del sitio, las
características del suelo y la profundidad del nivel freático.
El diseño debe presentar entonces los planos que orienten la construcción del relleno sanitario,
así:
La conformación del terreno original es obtenida a partir del levantamiento topográfico del sitio
donde se construirá el relleno sanitario, y se requiere para elaborar los cálculos y el diseño de
la obra. Figura 5.1.
La configuración final del relleno es la conformación del terreno una vez se termine su vida útil.
Es importante representarla en un plano topográfico para presentar los niveles máximos que
alcanzará la obra de acuerdo con el proyectista. Figura 5.3.
FIGURA 5.1
Conformación del terreno original
FIGURA 5.2
Configuración inicial del desplante o suelo de soporte
FIGURA 5.3
Configuración final del relleno sanitario
Dado que con frecuencia estas pequeñas poblaciones no cuentan con un tractor de orugas o
una retroexcavadora, se recomienda su arriendo o préstamo, para la excavación periódica de
las zanjas que deberán tener una vida útil entre 30 y 90 días, para evitar así su empleo
constante. La excavación de las zanjas entonces se deberá planificar para todo el año,
dependiendo de la disponibilidad del equipo.
Antes de que se complete el período de vida útil de la zanja, se debe disponer del equipo para
proceder a la excavación de una nueva zanja, para poder continuar con una disposición
sanitaria final de los desechos sólidos y proteger el ambiente. De lo contrario, el servicio sería
interrumpido y se podría convertir el lugar en un botadero abierto.
VZ = t x DSr x MC [5-10]
Drsm
Donde:
Para efectos de la operación manual, las dimensiones de la zanja estarán limitadas por:
La profundidad de la zanja, de dos a tres metros de acuerdo con el nivel freático, tipo de suelo,
tipo de equipo y costos de excavación.
El ancho de la zanja entre 3 y 6 metros (ancho del equipo) es conveniente para evitar el
acarreo de larga distancia de la basura y material de cobertura, lo cual implica mejores
rendimientos de trabajo, de tal manera que puede ser planeada la operación dejando un lado
para acumular la tierra y el otro para la descarga de los desechos sólidos. Dependiendo del
grado de compactación y del clima, puede usarse la superficie de una zanja terminada para la
descarga de los desechos.
El largo está condicionado al tiempo de duración o vida útil de la zanja, entonces se tiene que:
Donde:
a = Ancho (m)
hz = Profundidad (m)
Donde:
De la Tabla 5.1, columna 12, podemos conocer el área requerida sólo si se conoce la
profundidad promedio del relleno sanitario. Sin embargo, en la práctica nos encontramos con
un terreno al que hay que calcularle su vida útil (ver ejemplo 4 del Anexo I).
En lo que respecta al método de zanja, una vez calculado el volumen de la misma, suponemos
un factor para las áreas adicionales (separación entre zanjas (*), vías de circulación, aislamiento,
etc.) y se estima el número de zanjas que se podrían excavar en el terreno, por lo tanto:
Donde:
n = Número de zanjas
Vu = tz x n
365
Donde:
Como ya se mencionó, el método de área se emplea para construir el relleno sanitario sobre la
superficie del terreno o para llenar depresiones. A continuación se presenta una metodología
para evaluar la capacidad volumétrica del sitio.
La capacidad volumétrica del sitio es el volumen total disponible del terreno para recibir y
almacenar la basura y el material de cobertura que conforman el relleno sanitario. Es decir, es
el volumen comprendido entre la superficie de desplante y la superficie final del relleno, para lo
cual es indispensable determinar la capacidad volumétrica del terreno.
Una vez calculada el área de las distintas secciones, puede hallarse el volumen del material
contenido en el corte o relleno por medio de la regla de Simpson, que es la misma que se
emplea para las áreas, a excepción de que las áreas de las secciones reemplazan las
ordenadas en la fórmula. Figura 5.5. (Ver ejemplo 5 del Anexo I).
FIGURA 5.5
Volumen longitudinal alrededor de un eje
Esta es la regla del prismoide, que puede usarse para hallar el volumen de cualquier prismoide,
siempre que se pueda conocer el area de la sección media (ver ejemplos 6 del Anexo I).
El prismoide se define como un sólido que tiene dos caras planas y paralelas de forma regular
o irregular, unidas por superficies planas o alabeadas en las que se puedan trazar rectas desde
una hasta la otra cara paralela. En la figura 5.6 se dan algunos ejemplos de prismoides.
FIGURA 5.6
Prismoides
Para determinar su volumen por la regla de Simpson, es necesario dividir la figura de forma que
resulte un número impar de secciones equidistantes y tres es el menor número que cumple
esta condición.
FIGURA 5.7
Volumen de un zanjón
A partir del eje del proyecto y de la nivelación por franjas de un terreno, se puede calcular el
volumen entre dos secciones transversales consecutivas, multiplicando el promedio de las
áreas de las secciones por la distancia que las separa (para estar más ceñido a la realidad se
recomiendan tramos de 20 m).
Donde:
Esta fórmula será más precisa a medida que A 1 y A2 tiendan a ser iguales. En general, la
precisión de este método es más que suficiente, puesto que se supone que el terreno será
nivelado uniformemente entre las dos secciones, aunque se sabe que el volumen real es un
poco diferente (ver ejemplo 7 del Anexo I).
El grado de precisión que se obtenga será mayor mientras más pequeños sean los cuadrados
de la retícula. (Ver ejemplo 8 del Anexo 1).
Consiste en determinar la capacidad existente en el terreno entre los planos horizontales, para
lo cual es necesario calcular las áreas de las intersecciones de esos planos con el terreno y
multiplicarlas, luego de promediarlas, por la diferencia de altura que las separa. Se parte de la
ecuación 5-19.
Donde:
Por tanto, la capacidad volumétrica del sitio está dada generalmente por la siguiente ecuación:
V = (A1 + A2) h1 + (A2 + A3) h2 + (A3 + A4 ) h3
+ ... [5-20]
2 2 2
Mientras más pequeño es el incremento h mayor será la precisión del método, y su uso se
facilita mucho cuando se tiene el levantamiento topográfico con curvas de nivel cada metro, y
se usa un planímetro para el cálculo de las áreas. En grandes rellenos sanitarios, éste es el
método más común.
FIGURA 5.8
Planta y sección de un terreno
Cuando las curvas de nivel están muy separadas, para obtener cierta precisión al calcular el
volumen, se puede emplear la fórmula del prismoide. Al aplicar esta fórmula se debe considerar
que los planos de las curvas de nivel dividen a la depresión en una serie de prismoides. El
volumen de cada prismoide puede hallarse por aplicaciones sucesivas de la regla del prismoide
o, en casos favorables, por la aplicación directa de la regla de Simpson.
Al utilizar la fórmula del prismoide se toman las áreas de tres curvas cada vez y la de la central
se usa como sección media. La precisión del resultado depende principalmente de la diferencia
de nivel entre las curvas. En general, a menor intervalo, mayor exactitud en el volumen.
El volumen del relleno, o sea el volumen comprendido entre las configuraciones inicial y final
del terreno, calculadas mediante cualquiera de los métodos descritos anteriormente, nos dará
el volumen total disponible. La Tabla 5.3 facilita la recolección de esta información. El cálculo
de la vida útl se puede estimar así:
El volumen total disponible del terreno se compara con los valores de la Tabla 5.1, columna 10,
en la que aparecen los volúmenes acumulados del relleno, hasta encontrar un valor similar o
ligeramente mayor, y por la misma línea en la columna 0, se encontrará el número de años que
equivalen a la vida útil del relleno.
Como se sabe, las celdas están conformadas básicamente por los desechos sólidos y el
material de cobertura, y serán dimensionadas con el objeto de economizar tierra, sin perjuicio
del recubrimiento, y con el fin de que proporcionen un frente de trabajo suficiente para la
descarga y maniobra de los vehículos recolectores.
TABLA 5.3
Capacidad volumétrica del sitio para el relleno sanitario
PARA CADA PROMEDIO ENTRE ACUM. CORTE ACUM.
CURVA DE NIVEL ENTRE CURVAS CURVAS DE
DE NIVEL NIVEL
Se recomienda mantener una altura de un metro con un máximo de metro y medio, para la
celda diaria, debido a la baja compactación alcanzada por la operación manual, brindando así
una mayor estabilidad mecánica a la construcción del relleno sanitario, y un frente de trabajo
lo más estrecho posible, los cuales, junto con el avance (largo), se calcularán dependiendo del
volumen diario de desechos, así:
La cantidad de basura para diseñar la celda diaria se puede obtener de dos maneras, así:
Donde:
dhab = Días hábiles o laborales en una semana (normalmente d hab= 5 ó 6 días, y aún menos en
los municipios más
pequeños)
Donde:
Drsm = Densidad de los desechos sólidos recién compactados en el relleno sanitario manual,
400-500 kg/m3
Debe notarse que la densidad usada para la basura recién compactada es menor que la de la
basura estabilizada que se usa para el cálculo del volumen.
Dimensiones de la celda
- Area de la celda
Donde:
hc = Altura de la celda (m) - límite 1.0 m a 1.5 m. Flintoff reporta alturas entre 1.5 y 2.0 m para
rellenos sanitarios con operación manual, con lo que se consigue una disminución del material
de cobertura necesario.
a = Ancho que se fija de acuerdo con el frente de trabajo necesario para la descarga de la
basura por los vehículos
recolectores (m). Téngase en cuenta que en pequeñas comunidades serán uno o dos
vehículos como máximo
descargando a la vez, lo que determina el ancho entre 3 y 6 m.
Como los taludes (perímetro) también requieren cubrirse con tierra la relación del ancho al
largo de la celda que menos material de cobertura requerirá sería la de un cuadrado. Esta
medida se obtendría entonces como la raíz cuadrada del área de la celda, así:
[5-26]
Cuando no se puede cumplir con esto por ser el ancho resultante muy estrecho para la
descarga de los vehículos, entonces se fija el ancho y se calcula el avance como se explicó,
con la fórmula [5-25].
La mano de obra necesaria en la operación manual del relleno sanitario para conformar la
celda diaria depende de:
- Número de trabajadores
Flintoff, reporta los siguientes requerimientos de mano de obra de tres sitios, en los cuales se
operaron rellenos sanitarios manualmente.
Las densidades de los desechos distribuidos en estos sitios estuvieron entre 250 y 400 kg/m 3;
así para un tonelaje dado, el volumen a ser manejado podría ser similar o mayor que en los
países en desarrollo.
La siguiente tabla indica la escala probable de los requerimientos de mano de obra y material
de cobertura con una tasa de generación y densidad típicas en América Latina.
V O L U M E N (m3/día)
20,000 10 30 20 4 4
50,000 25 75 50 10 10
Además del número de hombres que ejecutarán las labores propias de la construcción del
relleno, es necesario otra persona que dirija y oriente las operaciones en el relleno sanitario
manual en calidad de SUPERVISOR.
tecnólogo en saneamiento, o
Es de anotar que la "presencia del Supervisor" en el relleno sanitario es importante durante casi
toda la jornada laboral en los primeros meses. Con la experiencia de trabajo, es posible reducir
el tiempo de permanencia a dos horas diarias: una hora en la mañana y otra en la tarde. Así, se
podría dedicar a la supervisión del aseo urbano en general, y velar por la mejor prestación del
servicio.
En última instancia, esta labor de supervisión puede ser llevada a cabo por el Jefe de Obras
Públicas del Municipio, con el apoyo de los Promotores de Saneamiento de los Servicios de
Salud.
Como en todo diseño se debe incluir una evaluación o presupuesto como información básica
del proyecto. Los costos se discriminan en:
costos de inversión, y
costos de operación.
Para los costos de inversión es necesario asociar cada concepto o item con la vida útil, en este
caso la del relleno, puesto que las obras de infraestructura serán construídas para el periódo de
diseño.
Costos de inversión
a) Estudios y diseños
- Limpieza y desmonte.
- Drenaje perimetral.
- Drenaje de percolado.
- Arborización perimetral.
- Caseta.
- Instalaciones sanitarias.
- Cartel de identificación.
- Otros.
- Estudios y diseño.
- Alquiler maquinaria.
- Compra de material de cubierta (si no hay en el sitio).
- Siembra de vegetación.
Costos de operación
- Mano de obra.
- Herramientas.
- Elementos de protección.
- Mantenimiento.
- Cobertura final.
- Drenajes.
a) Estudios y diseños. Los estudios previos y el proyecto ejecutivo del relleno tendrán costos
para la Alcaldía o
Municipio, que variarán según se contraten con un consultor o se pueda conseguir el apoyo
de alguna entidad que
proporcione este tipo de asistencia técnica. En otros casos, la alcaldía solo pagará los
viáticos, o el levantamiento
topográfico.
TABLA 5.4
Costos de inversión
ONCEPTO Parcial Total Vida Util Costo Anual IMA Costo Capit. Rend. Anual (i)
(b) (c) (años) ($/año) ($/año) ($/año) (t/año)
(d) (e) (f) (g) (h)
Estudios y Diseños
AdquisiciónTerreno
Instalaciones y Obras Preparatorias
Limpieza y desm.
Mov. tierras
Vías de acceso
Drenaje pluvial
Drenaje lixiviados
Cercas y puerta
Arborización
Caseta
Instal. sanitarias
Cartel
Otros
Clausura Basurero
Estudios y diseño
Alquiler maquinaria
Material de cubierta
iembra vegetación
OTAL
b) Adquisición del terreno. En la columna (b) se pondrá el costo del terreno si este es particular,
si es municipal el
costo será cero. Otra posibilidad es que el terreno sea alquilado, y entonces el valor en la
columna (b) deberá ser
cero y el costo debe ser transladado a los costos recurrentes o de operación.
c) Preparación del terreno y obras complementarias. Este concepto se estima cuantificando los
volúmenes de obra de
cada uno de los componentes como; limpieza y desmonte, movimiento de tierras, vías de
acceso, etc., las cuales
se deben colocar en la columna (b) de la Tabla 5.5 (esta tabla se usa como tabla auxiliar
para facilitar el llenado de
la 5.4). Para estimar las cantidades de obra se utilizan los planos constructivos,
principalmente los similares a los
de las Figuras 5.1 y 5.2 y los planos de detalles.
En la columna (c) se han colocado las unidades en que generalmente se miden los
volúmenes de obra y pueden
ser cambiados si fuera necesario.
En la columna (d) se colocan los costos unitarios de obra. Estos costos generalmente son
conocidos en la
localidad por los ingenieros, maestros de obra y personas relacionadas con la construcción
de obras públicas o
privadas. Muchos ministerios, corporaciones de desarrollo, etc. tienen catálogos de costos
unitarios, que revisan
periódicamente. Si no se tienen datos habrá que calcularlos con manuales o con datos de
fabricantes.
Finalmente, en la columna (e) de la Tabla 5.5 se coloca el costo de cada componente, que
es igual al producto de
las columnas (b) y (d). Los costos obtenidos se colocan en la columna (b) de la Tabla 5.4.
Cerrar un basurero a cielo abierto es relativamente fácil si se cuenta con la maquinaria y el
material de cubierta.
Sin embargo, para estimar las cantidades de obra y evitar daños al ambiente o riesgos a la
salud, es necesario
hacer un plan que incluya el uso posterior del sitio. Para esto deberá procederse, como en el
caso anterior, con la
misma tabla 5.5 y si es necesario agregar algunos conceptos a la misma.
TABLA 5.5
Costo de apertura del relleno y de clausura del basurero
c) Apertura Relleno
- Limpieza y desmonte
- Mov. de tierras m2
- Vías de acceso m3
- Drenaje pluvial m
- Drenaje lixiviados m
- Cercas m
- Arborización m
- Instal. sanitarias m2
- Cartel unid.
- Puerta m2
- Otros unid
- Estudios y diseño
- Alquiler maquinaria
- Vegetación hr.
m3
m2
TOTAL
Finalmente una vez completada la Tabla 5.5 sus resultados se vacían en la Tabla 5.4 en la que
la suma de la columna (c) dará la inversión inicial que habrá que conseguir. Esta inversión
podría obtenerse a través de un préstamo que causaría intereses.
Donde:
n = Vida útil de la obra o del concepto (p. ej. de 5 ó 10 años para un relleno sanitario)
R = Rendimiento por año o por hora (p. ej. para un relleno manual de 10t/día que trabaja 300
días al año, sería 10 x 300 = 3,000 t/año)
En la Tabla 5.4 los costos totales están consignados en las columnas (b) y (c). Los tiempos "n"
de la fórmula [5.27] se consignan en la columna (d) de la misma Tabla. En general "n" coincide
con la vida útil del relleno sanitario, sin embargo, hay algunos elementos que pudieran tener
una vida menor a la del relleno. En general se recomienda depreciar todo en la vida útil del
relleno. El costo anual que también se llama depreciación anual, se calcula en la columna (e)
con la fórmula [5-27], es decir dividiendo la columna (c) entre la (d).
En la columna (f) Tabla 5.4, se consigna el interés medio anual que permite la recuperación del
capital invertido. El interés puede ser calculado con una fórmula aproximada:
Donde:
i = Interés anual
Con la suma de las columnas (e) y (f), se obtiene la columna (g) o sea el costo anual del
capital. El costo anual del capital (g) también se puede calcular directamente a partir del costo
total (d), usando las tablas o las fórmulas de recuperación del capital. En los libros de ingeniería
económica se tienen tablas que dan el factor de recuperación del capital (FRC), en función del
interés anual y de la vida útil. También puede calcularse con las fórmulas:
Donde:
i = Interés anual del préstamo o interés bancario municipal (si el interés fuera del 13%, i = 0.13)
Una vez calculado el costo del capital por cualquiera de los métodos anteriores (col. (g), Tabla
5.4), se divide entre la producción o rendimiento anual R (ver col. 5, Tabla 5.1) para obtener el
costo unitario en la columna (i) de la Tabla 5.4. Como podrá observarse, el rendimiento anual, o
sea la cantidad de toneladas que se reciben en el relleno, aumentará de año en año, y el costo
unitario de capital bajará anualmente. Si se quiere evitar esto se puede tomar un rendimiento R
promedio de toda la vida útil del relleno.
Los costos de operación o costos recurrentes sirven para poder estimar el presupuesto anual
del que se deberá disponer para poder operar correctamente el relleno y para cobrar una tarifa
justa.
Donde:
Fps = Factor de prestaciones sociales generalmente entre 1.4 y 2.0. Incluye seguridad social,
fondo de pensiones, vacaciones, etc.
P = Proporción del tiempo o de la jornada que el supervisor dedica al relleno (0.2 a 0.25 en
rellenos pequeños)
Las herramientas utilizadas dependerán del tamaño del relleno y son como las descritas en el
punto 6.1.4. Se considera que su duración es de un año.
Los elementos de protección podrían ser dos uniformes por año, un par de botas, gafas,
mascarilla y guantes. Sus costos serán evaluados según los precios locales.
Cada año deberán evaluarse según los planos y el avance de la obra, los costos de los
drenajes y caminos que deberán hacerse, las horas máquina que deberán alquilarse y los
materiales y mano de obra temporal que se requiere para estas obras.
La suma de los tres conceptos anteriores nos dará el costo anual o presupuesto anual de
operación:
Donde:
El costo unitario de operación será el costo anual calculado anteriormente dividido entre las
toneladas enterradas durante el año.
Donde:
Donde:
5.7.4.2 Tarifas
Las tarifas que hay que aplicar a la población varían según las políticas que establezca la
municipalidad o alcaldía y pueden ser:
a) Recuperación total sin subsidio cruzado. En este caso las familias pagan por el servicio a
su costo real, independientemente de su situación económica. La tarifa media mensual sería
Donde:
Cat = Costo anual total del servicio según fórmula [5-35], ($/año)
b) Recuperación total con subsidio cruzado. En este caso el servicio se cobra de modo que
las familias con mayores ingresos paguen más, y las de menores ingresos menos, pero de tal
modo que los ingresos totales por tarifa cubran los costos de operación e inversión, es decir
Cat. Una manera de hacer esto es asociar la cobranza a otro servicio preferentemente el
eléctrico que tiene mayor cobertura, o al predial o de agua. El porcentaje que habría que aplicar
sobre el costo del otro servicio estaría dado por:
Donde:
Las tarifas medias de la población también pueden ser calculadas del modo siguiente, según su
producción:
Donde:
Tmf = Tarifa mensual familiar para el estrato social "i" ($/mes fam.)
PPCi = Generación de basuras en el estrato socio-económico "i" (kg/hab/día)
Cut = Costo unitario total ($/ton). Puede sustituirse por Cao si el servicio está subsidiado
N = Número medio de personas por familia
30, 1000 = Parámetros dimensionales en (día/mes) y en (kg/ton), respectivamente
5.7.5 Cobranza
En el inciso anterior, ya se dijo que la tarifa por relleno sanitario puede cobrarse con algún otro
servicio. En general el costo de la cobranza que se agrega a la tarifa de recolección de basuras
y a la del relleno sanitario debe variar entre un 10 y 20% de la tarifa total.
El servicio de aseo urbano también puede cobrarse por separado de otros servicios, pero esto
casi siempre sale muy caro y no tiene medidas de coerción, ya que si le cortan el servicio de
basuras, el usuario no se preocupa tanto como si le suspenden la electricidad o el agua
potable.
Operación y mantenimiento
Para la exitosa operación del sistema proyectado, se debe programar y clausurar el botadero
tradicional del municipio así como los demás botaderos existentes en la zona.
Para la operación de clausura del botadero, en lo posible se deben realizar las siguientes
acciones:
Hacer pública la clausura del botadero, anunciando que ya no se permitirá la disposición
de basuras en el lugar e informar además a la comunidad sobre la existencia del relleno
sanitario para que se dirijan al mismo y su ubicación para obtener su cooperación.
FIGURA 6.1
Exterminio de roedores
Inmediatamente después del exterminio, se procede a cubrir con tierra bien compactada
todos los botaderos con una capa de 0.20 a 0.40 m de espesor, y se proveen los
drenajes necesarios para evitar la erosión.
Las labores en el relleno sanitario deben ser organizadas y supervisadas estrictamente para
alcanzar los objetivos propuestos. Esto se logra con:
En el relleno sanitario manual, como su nombre lo indica, todas las operaciones están basadas
en el trabajo desarrollado por obreros del municipio o comunidad. El número de trabajadores
necesarios depende de la cantidad de
TABLA 6.1
Control de Ingreso de Desechos SólidosMes:
Mes:
Fecha OBSERVACION
Día No. DESECHOS MATERIAL DE
Viajes SOLIDOS COBERTURA
m3
Volumen Cantidad
m3/día Kg/sem.
Lunes
Martes
Miércoles
Jueves
Viernes
Sábado
Subtotal
Lunes
Martes
Miércoles
Jueves
Viernes
Sábado
Subtotal
Lunes
Martes
Miércoles
Jueves
Viernes
Sábado
Subtotal
TOTAL
desechos sólidos a enterrar, de las condiciones del clima y del método de construcción del
relleno entre otros (ver Capítulo 5, numeral 6).
Es necesario contar además con un responsable o supervisor de aseo que tenga los
conocimientos necesarios para dirigir esta obra en constante operación.
6.1.4 Herramientas
Para la operación del relleno sanitario manual, el equipo necesario se reduce al empleo de
herramientas o utensilios de albañilería, tales como: carretillas de llanta neumática, palas,
picas, azadones, barras, pisones de madera, así como de horquillas o rastrillos y un rodillo
compactador. Figuras 6.2 a 6.4.
FIGURA 6.2
Herramientas de trabajo
FIGURA 6.3
Carretilla de llanta neumática de 120 litros
FIGURA 6.4
Barril de 55 galones acondicionado como rodillo compactador
Para el acarreo del material de cobertura o basura, sobre las celdas ya construidas se
recomienda la colocación en la superficie del relleno de unos tablones en forma lineal para
facilitar el desplazamiento de las carretillas, sobre todo en época de lluvias, mejorando así los
rendimientos en la operación. Figura 6.5.
FIGURA 6.5
Desplazamiento de carretillas sobre el relleno
El relleno sanitario manual debe llevarse a cabo siguiendo un plan general preconcebido, pero
el supervisor estará facultado para obrar según su criterio cuando haya que resolver
situaciones inesperadas como cambios de clima o emergencias.
Antes del inicio de la descarga de la basura, todas las obras de infraestructura del relleno
deben estar construidas.
Es importante adiestrar a todos los trabajadores del servicio de aseo en las prácticas no sólo de
construcción, operación y mantenimiento del relleno sanitario, sino también en todo el proceso
del manejo de las basuras, destacando la importancia de cada actividad y el papel de su
participación para lograr un buen trabajo.
Una vez completada la primera base de celdas, se recomienda hacer transitar el vehículo por
encima de ellas en los períodos secos para lograr una mayor compactación. Se descargan los
desechos en el frente de trabajo y se esparcen de arriba hacia abajo, manteniendo una
pendiente de 3:1 (H:V).
En las Figuras 6.6 a 6.24 se puede apreciar el método constructivo y la operación manual del
relleno.
Método de área
FIGURA 6.6
Terreno preparado para la construcción del relleno
FIGURA 6.8
Esparcimiento de los desechos en el área limitada para la celda
FIGURA 6.9
Compactación de los desechos con el pisón de mano
FIGURA 6.10
Extracción de la tierra para cubrir la basura
FIGURA 6.11
Cubrimiento de los desechos sólidos
FIGURA 6.12
Compactación de la celda terminada (Primera Celda)
FIGURA 6.13
Construcción del drenaje de gases
FIGURA 6.14
Construcción de la segunda celda apoyada en la primera
FIGURA 6.15
Construcción de la primera terraza del terreno
FIGURA 6.16
Construcción de la última terraza del terreno
FIGURA 6.18
Descenso y nivelación de los desechos
FIGURA 6.19
Conformación de la celda diaria
FIGURA 6.20
Compactación manual
FIGURA 6.21
Trinchera en proceso de rellenado
FIGURA 6.23
Segunda trinchera
FIGURA 6.24
Avance del relleno en zanja o trinchera
Difícil ingreso de los vehículos recolectores por encima de las celdas ya conformadas y
posibles atascamientos debidos a la baja densidad alcanzada con la compactación
manual.
Mayor producción de lixiviado debido a la lluvia que cae directamente sobre las áreas
rellenadas.
Reservar algunas áreas en los lugares menos afectados por las lluvias, con accesos
conservados para operar en las peores condiciones.
Construir una vía artificial, empleando para ello troncos de madera de 3 m de largo,
conformando un "empalado o entarimado". Estos troncos deben ir unidos por medio de
alambrón de 1/8" de diámetro. Una vez armado el módulo, se cubre con cascajo para
evitar que los vehículos patinen sobre ellos.
Este camino artificial se construye de acuerdo con las necesidades y avance del
relleno en módulos de 3 m de longitud por 3 m de ancho, dado que éste es el tamaño
comercial de estos troncos, los cuales (los módulos) pueden ser reusados en el futuro.
Se recomienda que los módulos sean armados en el sitio; el terreno debe estar bien
compactado, para disminuir asentamientos, procurando además darle un buen drenaje
provisional en tierra. Figuras 6.25 y 6.26.
FIGURA 6.25
Construcción del módulo para el empalmado
FIGURA 6.26
Colocar cascajo sobre el módulo
Durante uno o varios días en la semana reforzar la mano de obra, con una cuadrilla de
dos o tres trabajadores más, para mantener el relleno en buenas condiciones mientras
subsistan los factores adversos.
Programar el movimiento de tierra para los períodos secos, ya sea para la extracción
del material de cobertura como para la apertura de las trincheras, dejando para la
época de lluvias sólo el enterramiento de la basura.
Introducir como práctica de rutina en la operación del relleno, el cubrir las celdas con
material plástico para impedir que las aguas de lluvia se infiltren a través de las
basuras.
Mantener áreas estrechas de trabajo, apoyando las celdas sobre el talud del terreno, y
superponer tres o más celdas cerca a la vía interna para que el avance sea más en
altura que en extensión. Figura 6.27.
FIGURA 6.27
Operación del relleno en áreas estrechas para zonas lluviosas
Debido al tipo de labores del servicio de aseo urbano (recolección, transporte y disposición final
de basuras), los trabajadores están constantemente expuestos a accidentes en la vía pública
como a enfermedades infecto-contagiosas por tener que trabajar con desechos potencialmente
contaminados. Estos accidentes pueden tener dos orígenes: uno por condiciones inseguras de
trabajo y otro por negligencia por parte del propio trabajador.
Por lo tanto, se deben identificar cuidadosamente todas las condiciones inseguras así como las
causas más comunes de accidentes de trabajo y riesgos a que esté expuesto el trabajador, con
el objeto de darles la solución adecuada.
Tratar de evaluar las causas de accidentes más comunes y adoptar las medidas
preventivas del caso.
Elaborar normas de seguridad de trabajo, con las respectivas indicaciones para el uso
del equipo.
Establecer un programa de exámenes médicos para que puedan ser identificados los
riesgos potenciales de contaminación, relacionados con su actividad.
Dotar a los trabajadores de guantes, botas y por lo menos de dos uniformes al año.
Figura 6.28.
FIGURA 6.28
Implementos de protección
6.2 Mantenimiento
6.2.1 Recursos
6.2.2 Supervisión
Uno de los elementos más importantes en el relleno sanitario es el jefe o supervisor de aseo,
quien debe organizar, dirigir y controlar las operaciones; además, debe contar con el pleno
respaldo de la Administración Municipal.
Si el relleno sanitario manual no cuenta con una buena supervisión ni con un adecuado
mantenimiento técnico y económico, fácilmente podrá convertirse en un botadero a cielo
abierto, con todos sus perjuicios.
"Un relleno sanitario exige una constante supervisión para poder evitar fallas futuras"
Las vías de acceso, frente de trabajo, redes de drenaje pluvial y superficie terminada del
relleno, deben mantenerse en buenas condiciones operativas.
Una vez concluidas las labores diarias, las herramientas deben dejarse limpias y, en caso de
daños o quiebras, deben ser reparadas o sustituidas a la mayor brevedad.
TABLA 6.2
Control de herramientas e implementos de trabajo
NOMBRE TRABAJADOR HERRAMIENTAS IMPLEM. PROTECCION F
D
E
P
Nombre
Trabajador a
R l
a a
C s o R G
A a t L o O u
z B r r a P d v B a G
a a r i m P i i e o n a
d r e l p i s l r t t f
ó r t l a c ó l o a e a
n a a o a n o l s s s
1
2
3
4
5
6
7
8
1
2
3
4
5
6
7
8
Es importante mantener limpias las áreas adyacentes al frente de trabajo diario, puesto que en
algunas ocasiones, cuando se dejan acumular los papeles volantes arrastrados por el viento,
se brinda un mal aspecto a la apariencia estética del relleno. Se aconseja que uno de los
trabajadores, utilizando un saco o costal, recoja todos estos materiales dispersos al término de
la jornada diaria, y los deposite en el sitio donde se construye la celda. Figura 6.30.
FIGURA 6.30
Recolección de material disperso en el área del relleno
Se debe conservar en buen estado el drenaje pluvial periférico (canal en tierra, cunetas) y la
superficie del relleno. Asimismo el frente de trabajo debe tener drenajes para no perjudicar el
movimiento de los vehículos.
Debido a la gran cantidad de material fino arrastrado por las aguas que percolan en el interior
del relleno, los drenajes se van colmatando poco a poco, lo que hace necesaria su limpieza. Se
debe extraer este material de la zanja que conduce los lixiviados hacia el campo de infiltración,
pues de lo contrario, con el tiempo se obstruirán y el líquido escurrirá por la superficie.
Debido a los asentamientos del relleno, al tránsito vehicular por encima de las celdas y demás,
las chimeneas de gases se van deformando e inclinando, por lo que es necesario mantenerlas
verticales a medida que se eleva el nivel del relleno, para evitar su obstrucción y pérdida.
La colocación de la cobertura final y el engramado requiere gran atención, pues no sólo incide
en el funcionamiento, sino también en la imagen final del relleno terminado.
Con el transcurso del tiempo, los desechos sólidos se descomponen (parte se transforma en
gas y parte en líquido), y la tierra de cobertura y la humedad penetran en sus vacíos,
asentándolo. Después de dos años, el asentamiento se reduce mucho y prácticamente
desaparece a los cinco años. Como el asentamiento no es uniforme, se producen depresiones
en la superficie del relleno, donde se acumula el agua de lluvia; por lo tanto, se deben hacer
nivelaciones al terreno y procurar su drenaje.
La administración local debe velar para que una vez concluya la vida útil del relleno sanitario,
se le dé el acabado final y el mantenimiento necesarios, para que el terreno sea disfrutado por
la comunidad, tal como fue previsto al inicio del proyecto. De no ser así, la población no
obtendrá uno de los beneficios de esta obra de saneamiento básico. Esto podría ser una causa
del rechazo de nuevos sitios, lo que implicaría ubicaciones más lejanas de las áreas urbanas,
aumentando los costos de transporte de los desechos y del servicio de aseo.
Se recomienda colocar un nuevo letrero o cartel con el nombre de la obra, parque o campo
deportivo, indicando que está construido sobre un relleno sanitario.
Administración y control
7.1. Administración
Para garantizar que el relleno sanitario manual se construya y opere de conformidad con las
especificaciones y recomendaciones dadas en el estudio o informe final del proyecto, y para
tener la certeza de que se cumplan los objetivos propuestos, es necesario que éste cuente con
una administración. Siendo la disposición final de los desechos sólidos la última actividad del
servicio de aseo, es obvio entonces que el relleno sanitario manual esté a cargo del
administrador de este servicio público. Generalmente en nuestro medio, este administrador es
un funcionario de la oficina de servicios de limpieza, servicios varios u obras públicas del
municipio.
La administración del relleno sanitario debe considerar las relaciones públicas como un factor
prioritario tanto durante la construcción como después de clausurado el relleno, puesto que la
opinión pública juega un papel definitivo para la promoción y divulgación de esta obra de
saneamiento básico en otras zonas donde se requiera la ubicación de un nuevo relleno.
7.1.1 Supervisión
Para mejorar la calidad del servicio de aseo en los municipios pequeños se recomienda
contratar a un tecnólogo o promotor de saneamiento, quien tendrá las funciones de Jefe de
Aseo Urbano o Supervisor de Aseo.
Este funcionario será entonces el encargado de coordinar tanto el relleno como todo el servicio
de aseo, sirviendo de interlocutor entre los usuarios, los trabajadores y la administración.
Los administradores del servicio de aseo deben estar constantemente enterados de la calidad
de las operaciones del relleno sanitario.
Entre otras funciones, el supervisor de aseo realizará las siguientes actividades específicas:
Dar las instrucciones y distribuir adecuadamente las tareas asignadas con base en
la programación definida por la dirección en lo que respecta a cada una de las
actividades del servicio (recolección, transporte y disposición final de basuras).
Ejercer los controles del caso, tanto en la recolección como en el propio relleno
sanitario.
Dentro de lo posible, se recomienda que las personas que hayan recibido una adecuada
capacitación en las distintas actividades del aseo urbano -especialmente en la construcción y
operación del relleno sanitario- no sean cambiadas con frecuencia, pues esto se traduce en
bajas eficiencias y mayores costos.
Para mantener un adecuado manejo de las distintas actividades, el administrador del servicio
de aseo tendrá que analizar dos aspectos fundamentales: los costos y la productividad.
Es necesario entonces realizar una serie de medidas y controles que permitan detectar las
fallas, aplicar correctivos y evaluar su eficacia, con el propósito de obtener los mejores
rendimientos y prestar un servicio eficiente al menor costo posible.
A continuación se presentan algunos indicadores que se consideran útiles para dirigir,
administrar y representar la administración del relleno sanitario:
UNIDADES
A pesar de la poca magnitud de esta obra de saneamiento básico, representa sin embargo una
actividad fundamental en lo relacionado con el manejo de los desechos sólidos a nivel de
cualquier comunidad, motivo por el cual debe prestársele sumo interés para que se desarrolle
en las mejores condiciones.
Por lo tanto, es importante realizar evaluaciones periódicas para mantener buen control en
los siguientes aspectos.
Ocurrencias extraordinarias.
Es importante mantener el alineamiento de las plataformas, así como los niveles señalados
para las alturas de las celdas, los cuales se podrán controlar con base en los planos de diseño
del proyecto, o incluso por simple observación. Las pendientes de los taludes deben brindar la
estabilidad que se requiere para la obra de acuerdo con la topografía del terreno.
De otro lado, se puede demostrar que el porcentaje que representa el relleno sanitario manual
en el gasto global del servicio de aseo en el municipio, oscila entre un 10-20%, y desvirtuar así
la imagen equivocada que tienen los administradores locales respecto a los costos de esta
obra. De esta forma además se calculará de una manera más real el valor de la tasa o tarifa
de aseo, la cual se constituye en un elemento vital para garantizar la solvencia económica del
servicio y por consiguiente optimizar su calidad y eficiencia.
Entre los factores a considerarse para efectuar los costos operacionales se tienen:
Herramientas
Material de cobertura
Mantenimiento
Costos indirectos