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UNIVERSIDAD PRIVADA NORBERT WIENER

Facultad de Ingeniería y Negocios


Escuela Profesional de Contabilidad y Auditoría

Tema : Delito de Cuello Blanco- Tarea 4 - Grupo 3

Docente :
Dr. Pineda Villavicencio, German Alexis

Integrantes :
- Auccapuclla Mallqui, Monica
- Castillo Castañeda, Alejandro Junior
- Huaytan Cori, Marisol
- Leon Ramos, Edgar
- Millan Mendoza, Breisy Yazmin

Curso :
Peritaje Contable

Sección :
CA9N2

Lima - Perú
2021
INTRODUCCION

El gran daño social que genera la delincuencia en nuestro país se evidencia con
el crimen organizado, la corrupción y la criminalidad económica. La corrupción
empresarial del caso Lava Jato junto con el de los cuellos blancos han generado
un gran terremoto político, económico y social.

Asimismo, hay un ineficiente sistema de justicia junto con las limitaciones que
posee el derecho penal para prevenir estos comportamientos que se suceden a
la vista de todos nosotros, esto genera especialmente la corrupción en el sector
público por aquellos que tiene poder político o económico dentro de la sociedad.

Los delitos socioeconómicos que se cometen hoy en día se camuflan dentro de


los negocios lícitos y la validez de la categoría de delito de cuello blanco.
DELITO DE CUELLO BLANCO

Años atrás la realidad criminal ha desbordado los planteamientos teóricos y


vigencia de las normas. Las conductas de los señores cuello blanco han sido
nefastas ya que han ayudado a evadir las obligaciones impositivas de las
personas, asimismo han favorecido a recaudar dinero ilícito que se han obtenido
de una organización criminal. Las diversas formas en que comenten actos de
criminalidad organizada crean sinergias y se colaboran entre si sacando
provecho los avances tecnológicos, facilitando más la forma en cómo realizar
diversos delitos. Como se ve hoy en día esto no se puede controlar de manera
idónea con el uso de instrumentos jurídicos, lo que repercute a tener una
sociedad azotada por estos actos de criminalidad organizada trayendo consigo
la inseguridad ciudadana, violencia, mayores índices de corrupción, economía
informal, etc.
Los aspectos comunes en las formas de criminalidad del delito organizado y el
cuello blanco se tienen que la conducta ilegal es mucho más extensa de lo que
indican las acusaciones y denuncias, el hombre de negocios que viola las leyes
para regular los negocios generalmente no pierde su status entre sus asociados,
los hombres de negocios generalmente sienten y expresan desprecio hacia la
ley, el gobierno y el personal del gobierno.
Desde un punto de vista positivista el delito cuello blanco solo sería aquella
conducta descrita por la ley y varios de los comportamientos que se comenten
en el ámbito de las finanzas no están tipificados como delitos, o solo lo han sido
muy recientemente, como sucedió con el delito de tráfico de influencias o
administración desleal.
Las percepciones sociales de la criminalidad de cuello blanco suelen ser formas
de actuar incluso imperceptibles por los propios miembros del grupo en tanto
están normalizadas, de ahí la inexistencia de una conciencia en la ilicitud de la
conducta.
En esta cultura en la que vivimos se premia a quien tiene poder y dinero, y al
relativizarse los valores, no importa cómo se obtienen. He ahí el trasfondo del
doble tratamiento penal de la delincuencia de cuello blanco y la delincuencia
marginal por parte de la Política Criminal moderna que despenaliza los
comportamientos de los primeros y demanda rigor para los segundos.
Conclusiones
 A nivel mundial los delitos económicos siguen existiendo y una de las
preocupaciones más importantes de la política criminal actual es analizar y
verificar a través de las evidencias empíricas, la reacción de la sociedad, que
la criminalidad de las grandes ganancias ilícitas (criminalidad organizada,
criminalidad empresarial, corrupción privada, corrupción pública) discurre
detrás de negocios lícitos, lo cual fomentan la corrupción y contaminan toda
la sociedad.

 En muchos casos, estamos ante lo que Sutherland denomina que este tipo
de delito era cometido por personas con elevado status socioeconómico:
sujetos a los que la selectividad penal no logra capturar por una serie de
factores culturales por los medios de comunicación que en muchos casos
distraen su atención, por la confluencia de valores sociales que fomentan la
corrupción, motivos por los cuales se produce una baja persecución penal.
Asimismo, la baja percepción social sobre su dañosidad social dificulta aún
más su persecución.

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