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c- El quiebre de la cristiandad.
UNIDAD I La “Modernidad” naciente: (las grandes rupturas)
Introducción.
De la España de las tres religiones a la España inquisitorial.-
(La inquisición es una institución política y religiosa, a la vez que está bajo la autoridad del
poder civil es normal qué apoye las iniciativa del gobierno)
Entre 1478 y 1502 Isabel de Castilla y Fernando de Aragón tomaron tres decisiones complementarias:
obtienen del papa la autorización para crear la inquisición, expulsan a los judíos y obligan a los
musulmanes de la corona de Castilla convertirse al catolicismo. Estas tres medidas obedecen a un
mismo propósito: pretenden instaurar la unidad de la Fe
rompiendo así con el período anterior de tolerancia a las confesiones no cristianas.
En realidad esa tolerancia era sólo aparente. Durante el siglo XIII y XV no hay nada parecido a la
tolerancia en la península, tanto cristianos como musulmanes es están convencidos de que poseen de
verdad.
Tanto judíos como cristianos eran victimas de discriminaciones civiles y jurídicas en cambio los no
creyentes estaban sometidas a gravosas contribuciones.
Los judíos se integraron rápidamente en la sociedad musulmana, se habían especializado en el
comercio, la banca y el préstamo con interés. La gran mayoría vivía en condiciones modestas. La
prosperidad de los judíos en esta época sólo fue posible gracias a la dejadez de las autoridades
musulmanas y además es una prosperidad precaria. Dejó de ser consecuencia de una política
deliberada de apertura y tolerancia y dependía por entero de la buena voluntad, Es decir de la
arbitrariedad y del Capricho de los soberanos.
En la segunda oleada de judíos Los Monarcas de España cristiana animaron a que éstos se instalen en
su territorio en contra de la opinión de la iglesia católica que a partir del cuarto Concilio solamente
quería que el contacto con los judíos fuese meramente comercial prohibiendo a su vez también los
matrimonios mixtos y a los cristianos como empleados de los musulmanes. También se les prohibía a
los cristianos comer con los judíos, utilizar nodriza judía ni tener relaciones sexuales con los judíos
obligándoles a llevar un signo distintivo.
En la España medieval coexistieron por lo tanto tres religiones: la musulmana, la cristiana y la judía
pero sólo dos de ellas eran las dominantes: la civilización árabe luego la cristiana.
En la España medieval las comunidades judías están dotadas de una autonomía relativa teniendo su
propia administración y sus propias sinagogas. gozaban del estatuto jurídico que le garantiza una
existencia legal y teóricamente les protegía frente a diversas arbitrariedades. En esta comunidad había
más pobres Qué ricos. Llevaban una existencia Modesta y se dedicaban a la artesanía, sastrería,
zapatería o al pequeño comercio. Sólo unos pocos se dedicaban a los grandes negocios pudiendo así
en ocasiones prestar dinero a los reyes, obispos o señores particulares por lo que se les confía la
gestión de algunos asuntos, lo que a su vez despertaba el odio del pueblo contra los judíos. El
antisemitismo dependía de las circunstancias económicas. En España durante el siglo XIV se pasa de
un período de apertura y tolerancia relativa a una fase de conflictos donde lo que cambia no son las
mentalidades sino las circunstancias. El período anterior de tolerancia hacia las tres religiones
coincidía con una expansión demográfica y económica no teniendo que competir judíos y cristianos
en el mercado ya que tanto unos como otros contribuían a la prosperidad general y compartían los
beneficios.
Los cambios económicos, sociales y políticos del siglo XIV Las Guerras y las catástrofes naturales,
siguiendo la peste negra eran una nueva situación.Ya nada volverá a ser como antes siendo este un
fenómeno que va más allá de la Península ibérica extendiéndose por toda Europa, Francia y Alemania.
La sociedad creía estar siendo castigada por su pecado Por lo que el clero Llama a volver a Dios y
arrepentirse de los pecados.
La sociedad se volverá contra los judíos y de Francia procederá a la primera oleada de persecución
donde se asesinaran y saquearon la casa de los judíos quedando así instalado el antisemitismo en
España.
Los judíos se encargaban del crédito ya que faltaba un organismo especializado en esto, era una
actividad reglada desde la Edad Media, entonces al venir el momento de la crisis se acumulan las
deudas de estos préstamos. También los judíos trabajaron como recaudadores de impuestos de las
autoridades por los que se forzó un estereotipo del judío que chupa la sangre de los pobres y es
instrumento y beneficiario de la opresión fiscal.
Los judíos sufrían al igual que el resto de la sociedad a los efectos de la crisis.
El antisemitismo se convierte en un arma de propaganda para los nobles de castilla. Incluso se los
utilizaba en conflictos políticos de las que nada tenía que ver. El antisemitismo es explotado
políticamente adoptando formas violentas presentándose como la justificación ideológica de
conflictos que no tenían raíces religiosas el hambre el alza de precios la presión fiscal son
enfrentamientos entre pobres y ricos y el antisemitismo ha servido para desviar la violencia contra los
judíos.
Por otra parte los judíos saben que solamente un poder real y fuerte podrá defenderlos por ellos se
muestran leales a la corona.
Los acontecimientos de 1391 deben interpretarse como una explosión de odio de clase dirigido contra
los judíos y favorecido por la ausencia de poder. Los predicadores domingo tras domingo decían que
los judíos eran seres perversos culpables de la complicidad en la muerte de Cristo teniendo como
resultado el odio de los fieles y este odio adquiría formas violentas generalizándose la idea de que los
judíos no hacen otra cosa que prestar dinero.
Ante numerosos hechos muy violentos los que pueden huyen al extranjero, otros hayan Refugio junto
a señores que los toman Bajo su protección, abandonan las grandes ciudades y se instalan en
poblaciones más modestas. Las masacres y la emigración son las que empobrecen al judaísmo
España.
Se les prohíbe también ejercer algunas profesiones fuera de los guetos. Ya no podrán ser médicos,
farmacéuticos, drogueros, herreros, constructores, sastres, carnicero, zapateros comerciantes,
recaudadores de impuestos. Los judíos no pueden disponer más que de una sinagoga por Aljama y
están obligados a asistir a tres sermones al año y se le obliga todo el tiempo a convertirse.
Más de la mitad de los judíos en España recibieron el bautismo entre 1391 y 1415. El judaísmo
español nunca se repondrá de esta catástrofe que fue el preludio de la expulsión que tendrá lugar un
siglo más tarde.
Entre 1419 y 1422 los reyes Juan II de Castilla y Alfonso V de Aragón derogan la mayor parte de las
medidas discriminatorias tomadas por sus predecesores pudiendo ahora los judíos recuperar las
sinagogas que se les habían confiscado y ejercer de nuevo las profesiones que se les habían prohibido
y la obligación de llevar el distintivo rojo.
Se re ordenarán las aljamas dotándolas de autonomía interna y Estableciendo impuestos especiales
para la financiación del curso y de la educación religiosa; esto es ratificado por el rey, es decir que la
comunidad judía forma parte integrante del reino recuperando el judaísmo una existencia legal al
menos en castilla. Pero de todos modos el judaísmo ya no es lo que era está ahora mucho más
reducido.
En la corona de Aragón no no hay ningún judío que ocupe puestos destacados en la cúpula del estado
y en Castilla los judíos apenas se encargan de recaudar la cuarta parte de los impuestos.
Los conversos constituyen grupos numerosos atraídos por los negocios a menudo son burgueses en el
doble sentido de la palabra: viven en un medio urbano y son los elementos de una clase media que se
está formando. Se forman auténticas dinastías de comerciantes conversos que ocupan posiciones
dominantes. La conversión también le permite ocupar puestos prohibidos a los judíos y ya son
bastantes los que ocupan cargos públicos y hacienda en rápidamente instalando hacer municipios
Incluso ingresando en el clero.
Esta promoción social de los conversos no pasa desapercibida y suscita reacciones en los medios
populares.
En efecto si bien las elites, es decir el poder real, aristocracia y la jerarquía eclesiástica estimulan la
asimilación de los conversos, las masas sólo tienen una actitud hostil y el antisemitismo de antaño se
dirige ahora indistintamente tanto contra los judíos como contra los conversos porque se sigue
creyendo que tanto unos como otros explotan y ocupan los cargos importantes.
Ante los conflictos, los partidos y los demagogos aprovechan la situación de exasperación del pueblo
y dirigen la violencia hacia los Conversos Y con estas escenas de violencia termina el reinado de
Enrique IV teniendo que afrontar la situación Isabel de Castilla y Fernando de Aragón cuando ocupan
el trono en 1474.
Al convertirse en reyes de Castilla en diciembre de 1474 y acceder más tarde al Trono de Aragón en
enero de 1479 deberá afrontar el problema el crecimiento del antisemitismo durante el siglo 14.
En las cortes de 1480 Los Monarcas adoptan medidas discriminatorias Respecto a los judíos, La
primera es que deciden que deberán vivir en Barrios separados de donde podrán salir de día para
atender sus asuntos pero tendrán que regresar para comer y dormir y la segunda es que les impone la
obligación de llevar un distintivo de color en la ropa. Ambas medidas Ya habían sido tomadas en
1412 pero nunca se habían aplicado.
Estas medidas para restablecer el orden público en la corona de Castilla beneficia por igual a los
judíos y a todos los súbditos de Los Monarcas cesando los atentados contra los bienes y las personas.
La reina dejaba terminantemente prohibido cualquier ataque hacia estos del tipo que sea y a quienes
hicieron la vista gorda hacia esto. Es decir a quienes al percatarse de que los judíos estuviesen siendo
vejados y no hiciesen nada al respecto.
No hay duda de que la situación mejoró desde el punto de vista del orden público pero no en las
mentes. El antisemitismo no había disminuido ni en los ambientes populares en las ordenes
mendicantes.
Pero este antisemitismo como dijimos se dirige más contra los Conversos que contra Quienes se han
mantenido fieles al judaísmo ya que lo acusaban de llevar una doble vida cumpliendo en público con
sus obligaciones de católicos en la misa, seguir los oficios, distinguirse los menos posibles de los
cristianos, y en la intimidad de su hogar los ritos y prácticas de la ley de Moisés.
A los judíos conversos qué pesar de haber sido bautizados regresan al judaísmo se les consideraba
herejes y la iglesia podía explicar la colaboración del Estado para castigarlos ya que era un delito.
Los Reyes acceden a la inquisición ya que estaban seguros que esto obligaría los conversos a
integrarse definitivamente. El antisemitismo decían desaparecería al desaparecer las razones que
le habían dado vida a través de este razonamiento se expulsa a los judíos que no quieren
pronunciar su fe.
La mera presencia de los judíos representaba para los conversos una invitación constante a
judaizar.
Lo que pretendían no era la eliminación de los judíos sino su integración y la erradicación del
judaísmo confiaban en que muchos judíos enfrentados a una elección tan dolorosa terminarían por
convertirse y permanecer en España. El argumento de la codicia, es decir el deseo de apropiarse de la
fortuna de los Conversos condenados por la inquisición y de los judíos obligados expatriarse tampoco
tenía sentido Ya que la corona no se quedaría sin unos contribuyentes tanto dóciles.
Cabe preguntarse en que podrían estorbar los judíos, aun remitiendo a qué los judíos y conversos
hubieran sido los elementos constitutivos de una burguesía naciente.
Lo que se quería era crear una situación Irreversible, es decir disuadir a los judaizantes eliminando el
judaísmo.
De modo que la creación del Inquisición y la expulsión de los judíos no deben interpretarse en nuestra
opinión como manifestaciones de antisemitismo por parte de los reyes. Pero aunque no puso fin al
antisemitismo lo prolonga y lo refuerza.
Los conversos no se oponen a la idea de que en una sociedad cristiana se castiga los herejes sino que
lo que reprochan a los inquisidores es que establezca una distinción entre esos herejes siendo la
judía solo una mas, optando por perseguir únicamente a los judíos.
So pretexto de castigar a los judaizantes se desacredita todos los cristianos de origen judío tanto si son
judaizantes como si no lo son.
Desde el momento que se toma la decisión de ir solo a esta clase de herejes todo converso se convierte
en un criminal en potencia con sus pechos o una paria.
Muy pronto instituciones como las órdenes religiosas, grandes escuelas, órdenes militares etcétera se
negaron a aceptar conversos exigiendo a los postulados que puedan demostrar que no han sido
perseguido jamás por el santo oficio y más tarde se exigirá lo mismo para padres y abuelos y se
desconfiara de todos aquellos con un antepasado judío
LOS MORISCOS.-
Junto a los judíos existían España medieval una segunda minoría religiosa, los musulmanes llamados
mudéjares que también gozaban de un estatuto que les permite el libre ejercicio de su culto.
Entre 1502 y 1526 estos fueron obligados a convertirse al catolicismo Y a partir de Entonces se
denominan moriscos. Estos al igual que los judíos vivían al margen de la sociedad por lo que
planteaban mas un problema social que religioso. En 1526 se decide convertir por la fuerza a todos los
musulmanes de la corona de Aragón Y a partir de esa fecha oficialmente ya no hay musulmanes en
España.
De todos modos saben que los moriscos seguirán siendo musulmanes pero confían en que no lleguen
hacerlo sus hijos o nietos. Para acelerar la integración, se pide que renuncien a sus fiestas, a su
vestimenta tradicional y el uso del lenguaje árabe pero no se toman medidas coercitivas. En 1556 el
consejo de Castilla decide aplicar las medidas promulgadas en 1526 que no eran de carácter coercitivo
Pero ahora sí decidirá implantarlas duramente: le prohíbe a los moriscos hablar árabe, celebrar sus
fiestas tradicionales, usar su ropa especial. Todo esto se sumaba a las múltiples vejaciones que sufrían
los moriscos. Torquemada había recomendado expulsar a los judíos pero en 1609, la inquisición se
opone a esta medida debido a que los moriscos habían sido bautizados por lo que se les consideraba
cristianos.
LA LIMPIEZA DE SANGRE.-
La distinción entre cristianos viejos y nuevos en la España del Antiguo régimen es más sociológico
que religiosa. La limpieza de sangre da fé de la constante ortodoxia cristiana de una familia. La
sangre manchada suponía tener antepasados heréticos.
En la España del siglo XVI la frontera religiosa se establece entre dos clases de fieles: los nacidos en
el seno de una familia cristiana y los otros los descendientes de conversos judíos o musulmanes.
La exigencia de limpieza de sangre se mantuvo como disposición reglamentaria en determinadas
asociaciones, órdenes religiosas, militares etcétera. Todo postulante estaba obligado a someterse a una
investigación previa destinada a probar sus ascendiente.
Esto en la práctica no estaba tan extendido. La constatacion de sangre limpia se hace a través de
testimonios de vecinos, allegados, etcétera y muchos se quejaban de que para obtener tal certificado
había que tener dinero o no tener enemigos. La limpieza de sangre actúa como una barrera
adicional de discriminación para quién es aspiraban a los honores y a la consideración social
reservando los puestos para una minoría privilegiada.
El asunto Lucero.-
Este asunto Está ya en el momento en que la corona de Castilla pasa por una situación política difícil
tras la muerte de la reina Isabel en 1504 y del conflicto surgido entre su marido Fernando de Aragón y
sus hijos.
Lucero fue nombrado inquisidor de Córdoba en 1499 y llegando a tal ciudad agitada por tendencias
milenaristas, convencidos de que el final del mundo estaba próximo, algunas conversos habrían
seguido judaísmo por lo que Lucero efectuará numerosas detenciones.
Debido a los excesos y la corrupción del inquisidor se ordenará su detención.
La inquisición confirmada.-
Con la muerte de Fernando en 1516 los enemigos del santo oficio cuentan con un nuevo rey que será
Carlos V para poder acabar con los aspectos más discutibles del tribunal. Muchos conversos ofrecen
dinero a Carlos y apelan al papa León X haciéndole saber su preocupación por los excesos de los
inquisidores que por ejemplo aumentan el número de condenas para apoderarse de los bienes
confiscados, abusan de mujeres y persiguen delitos que nada tienen que ver con la herejía.
La revolución religiosa que se está gestando en Alemania preocupada la clase dirigente y de este
modo la inquisición encuentra una justificación nueva. Se cuenta con esta institución para impedir que
la herejía del Lutero se extienda por España. Hasta 1524 de Inquisición sólo se había ocupado de
los judaizantes y en ese mismo año Aparecen las primeras acciones contra los falsos místicos
contra los erasmistas y contra los luteranos.
EL ILUMINISMO.-
El erasmismo No es más que una de las formas que adoptan en España las inquietudes religiosas. Los
iluministas preconizan un abandono Sin Control a la inspiración divina y una interpretación libre de
los textos evangélicos afirmando que actúan conmovidos únicamente por el amor de Dios careciendo
de voluntad propia ya que es Dios el que dicta su conducta y de ello se sigue que no pueden pecar.
Los “alumbrados” rechazan la autoridad de la iglesia, su jerarquía y sus dogmas así como la forma de
Piedad tradicional y consideran atadura las prácticas religiosas, es decir las devociones, obras de
misericordia, caridad, Sacramento. Por esto serán perseguidos por la inquisición.
Alumbrados y erasmistas tienen en común su rechazo de la escolástica y algunas formas de Piedad
cercanas a la Superstición pero difieren en todo lo demás: los erasmistas son humanistas expertos en
disciplinas universitarias y dotadas de espíritu crítico mientras los alumbrados son gente simple que
sólo poseen una formación elemental. Erasmo y sus discípulos preconizaba una religión interior
ilustrada y sometida al control de la nación. El erasmismo sigue siendo sospechoso ante los ojos de
los inquisidores pero goza de cierta indulgencia.
LA FE Y LAS COSTUMBRES.-
Inquisición se preocupa por lo que la gente cree, no de lo que hace, de la fe y no de las
costumbres. Sin embargo algunas conductas implican una ignorancia del dogma o incluso una burla.
Allí es donde interviene la inquisición pero no para castigar un pecado sino para recordar un artículo
de fe inculcar conocimientos. Es recomendado no confundir al blasfemo con el hereje; Pues no hay
razón alguna para detener al primero. No obstante a partir de la segunda mitad del siglo XVI el santo
oficio comienza a perseguir a los cristianos viejos que blasfeman, que no observan los diez
mandamientos de Dios o que no saben lo que es un Sacramento. Lo que sucede es que los
judaizantes son cada vez menos y yo no tienen medios para justificar su existencia.
La inquisición continúa ampliando su margen de aplicación mientras que las Cortes consideraban que
esto debía limitarse a los delitos de herejía.
De todas las situaciones que hemos examinado en este capítulo, solamente las que refieran a los
protestantes o a las sectas iluministas tienen relación con la defensa de la Fe en los otros casos la
relación con la ortodoxia es más discutible.
Sin embargo la inquisición extendió sus competencias a estas conductas dudosas animada por el deseo
de perpetuarse. Hacia 1500-1510 el santo oficio ha concluido la misión que se le había encomendado
el 1480. Es decir Haber puesto fin al problema criptojudaísmo que no resurgirá hasta finales del siglo
16 con la llegada a España de Los Marranos portugueses.
EL FIN DE LA INQUISICIÓN.-
Varios autoridades coinciden en qué hay que devolver a los obispos sus responsabilidades y
competencias en materia de energías allá que estaban mucho más preparados para llevar a cabo esta
labor que unos monjes ignorantes. Consideraban que los inquisidores imponían una censura estúpida a
los libros arruinando el prestigio de España en el extranjero sino que además introducían la esclavitud
en los Espíritus para desgracia de la humanidad.
España se había convertido en el hazmerreír de Europa donde se le consideraba el país del fanatismo y
el oscurantismo donde La minoría ilustrada de la época apareció obsesionada con el tema de la
brujería siendo este un anacronismo en pleno siglo de las luces.
Algunos reformadores consideraban que una Inquisición renovada y mejor controlada podría ofrecer
unas ventajas que el estado haría mal en despreciar.
En eso radica la Ilustración española, se quieren introducir reformas pero sin grandes trastornos. No
son los reformadores españoles quienes tienen la idea de suprimir la inquisición sino Napoleón. Este
decide entonces tomar las riendas y se pone enfrente del Gran ejército que invade España. El 4 de
diciembre de 1808 se halla ya en las puertas de Madrid Pero antes de entrar en la capital, el emperador
firma una serie de acuerdos acabando con el Antiguo régimen en España: la inquisición es una de
las primeras instituciones suprimidas. Algunos se adhieran a estas reformas y muchos otros la
rechazan por Patriotismo respecto a que estas reformas Son impuestas por un ejército de ocupación y
empieza la lucha por la independencia nacional y también por la regeneración de España. A
través de un decreto en 1813 es que se afirma que la religión católica apostólica y Romana gozará de
la protección de la Constitución y de la ley y que por lo tanto el tribunal de la inquisición es
incompatible con la constitución devolviéndole a los obispos la jurisdicción en materia de se
conforma el derecho canónico aplicándose así la legislación medieval habilitando a la justicia secular
la imposición a los herejes de las penas previstas por la ley.
Es dudoso que realmente sea suprimida la inquisición, ya que la institución se declara fuera de
la ley pero el crimen de herejía subsiste y es castigado por la ley. La diferencia es que ahora los
obispos asumen competencias que hasta entonces habían estado bajo el yugo de los inquisidores