STHEFANNY RODRIGUEZ ALVILDO LITERATURA

JURIDICA
NRC 8275-8276
COMO SE PARECE EL DERECHO A LA LITERATURA
La relación entre el derecho y la literatura es más profunda que la simple antología de
litigios o casos judiciales manejados por poetas, narradores y otros escritores. A lo
largo del siglo XX, el desarrollo de una gran hermenéutica en el campo de la
investigación jurídica ha abierto nuevas vías para la investigación jurídica. La relación
entre las dos disciplinas se revitaliza por la naturaleza compartida de su interpretación.
La relación entre derecho y literatura es diversa. La historia de esta relación también
varía. En algún momento, el abogado cambió de un modelo de la Ilustración (personas
de una cultura amplia, nobleza intelectual) a un profesional especializado en la rama
del conocimiento legal. Al convertirse en expertos, los abogados pueden mejorar la
precisión del conocimiento, pero aunque es necesario realizar una investigación
detallada y rigurosa sobre los problemas derivados de la especialización, también
pierden su universalidad.

LA HERMENEUTICA JURIDICA
La hermenéutica adquiere un significado filosófico completo, apareció como una teoría general
de interpretación y compresión. Presenta datos históricos y lingüísticos con la finalidad de
comprender y explicar, es decir, reconstruir el origen del texto.
También, identifica al autor más allá de comprender el texto, pero si comprende el conjunto,
entonces la hermenéutica jurídica es literatura, derecho, doctrina, interpretación legal

EL MOVIMIENTO DERECHO Y LITERATURA

El movimiento derecho y literatura y su surgimiento hacen del positivismo legal un problema.
Es una respuesta a la falta de herramientas interpretativas del paradigma positivista para
explicar el mundo cambiante e incluso la ley. En otras palabras, la literatura puede examinar
permanentemente la ley, guiarla para pensar y comprender su división, y así estimular su
variación. Desde esta perspectiva, las personas reconocen la complejidad de establecer
fenómenos legales en los campos del lenguaje, la sociedad, la política, la historia y la moral.
Esta visión compleja se combina perfectamente con la estructura tridimensional de la ley
(tesis). Según esta estructura tridimensional, además de la dimensión normativa propuesta por
Kelsen, la ley también consta de la dimensión fáctica y la dimensión axiológica. En este sentido,
la ley también es un hecho o fenómeno social (dimensión factual), que establece un conjunto
de normas obligatorias reconocidas para el comportamiento social (dimensión normativa) y
juicios de valor que conllevan y garantizan valores más altos (dimensión de la teoría del valor).