Natacha Álvarez

Andy Estuardo
Javiera Guerra

INERVACIÓN Bárbara Rivera

RECIPROCA
Daniela Valdebenito
Laboratorio de Fisiología
NRC 3368 – T52
Doc. Ricardo Morales
Introducción
La mayoría de los órganos cuenta
con una inervación simpática y
parasimpática. Estas inervaciones
funcionan de forma recíproca o
sinérgica para producir respuestas
coordinadas.
Cuando hablamos de inervación
recíproca también nos podemos
referir a la ley de Sherrington que
afirma que, cuando se contrae un
músculo como resultado de una
acción nerviosa, los músculos
antagonistas de aquel reciben una
señal simultánea que los inhibe.
<<Cuando el sinergista se contrae, el
antagonista se relaja>>, esta ley
propia de todos los músculos del
cuerpo, simplemente enuncia que
algunos músculos reciben una orden
excitatoria y otros inhibitoria.
 Primera Ley; Un músculo
cuando recibe un estiramiento
máximo, sufrirá como efecto
una aproximación intensa de
sus bordes, ocasionando una
contracción máxima, lo que
quiere decir que a un
estiramiento extremo el
músculo se contraiga como
mayor potencia que en
condiciones de trabajo normal.
 Segunda Ley; Cuando un
músculo agonista de
movimiento que se está
ejecutando se contrae por
inervación y sucesiva, el
músculo antagonista se relaja
al máximo. Pero quedará
preparado este antagonista
para efectuar una contracción
más efectiva.
Desarrollo
Funciones reciprocas; Simpáticas
y parasimpáticas
El corazón está inervado por nervios
simpáticos y parasimpáticos, que
juntos regulan la frecuencia cardíaca
y la velocidad de conducción. Las
paredes del músculo liso del tracto
gastrointestinal y la vejiga están
inervadas por nervios simpáticos
(relajación) y parasimpáticos
(contracción); el esfínter del tracto
gastrointestinal y la vejiga también
están inervados por nervios
simpáticos y parasimpáticos. Los
músculos radiales del iris son
responsables de la dilatación de la
pupila y están inervados por nervios
simpáticos; los músculos circulares
del iris son responsables de la
contracción de la pupila y están
inervados por nervios parasimpáticos.
En este ejemplo de músculos
oculares, diferentes músculos
controlan el tamaño de la pupila, pero
la influencia general de la actividad
simpática y parasimpática es mutua.
En los genitales masculinos, la
actividad del inervación simpática
controla la eyaculación y la actividad
del inervación parasimpática controla
la erección; la combinación de los dos
es responsable de la respuesta
sexual masculina.
En lo siguiente presentaremos tres
ejemplos donde se muestran la
reciprocidad y la sinergia de las
divisiones simpática y parasimpática;
  Nódulo sinoauricular
La inervación autónoma del nódulo
sinoauricular (SA) del corazón es un
buen ejemplo de control coordinado
de la función. El nodo SA es el
marcapasos normal del corazón y su
tasa de despolarización determina la
frecuencia cardíaca general. El nodo
SA está inervado por nervios
simpáticos y parasimpáticos, que
interactúan para regular la frecuencia
cardíaca. Por lo tanto, el aumento de
la actividad del nervio simpático
aumentará la frecuencia cardíaca y el
aumento de la actividad del nervio
parasimpático la disminuirá. La
función de estas interacciones es la
siguiente: si la presión arterial
desciende, el centro vasomotor del
tronco encefálico responde a esta
disminución, y al mismo tiempo
conduce a un aumento de la actividad
simpática del nódulo SA y una
disminución de la actividad
parasimpática. Cada una de estas
acciones está dirigida y coordinada
por el centro vasomotor en el tronco
del encéfalo y tiene el efecto de
aumentar la frecuencia cardíaca. Las
acciones parasimpáticas y simpáticas
no compiten entre sí, sino que actúan
sinérgicamente para aumentar la
frecuencia cardíaca (que ayuda a
recuperar la presión arterial normal).
 Vejiga urinaria
La vejiga es otro ejemplo de la
división de los nervios simpático y
parasimpático. En los adultos, debido
a que el esfínter externo está
compuesto por músculo esquelético,
la micción o el vaciado de la vejiga se
controla de forma voluntaria. Sin
embargo, el reflejo de la micción en sí
mismo está controlado por el sistema
nervioso autónomo. Este reflejo
ocurre cuando la vejiga se detecta
como <<llena>>. El detrusor de la
pared de la vejiga y el esfínter de la
vejiga están compuestos de músculos
lisos, cada uno inervado por nervios
simpáticos y parasimpáticos. La
inervación simpática del detrusor y el
esfínter interno se origina en la
médula espinal lumbar (L1-L3) y la
inervación parasimpática se origina
en la médula espinal sacra (S2-S4).
Cuando la vejiga está llena de orina,
domina el control simpático. Esta
actividad del nervio simpático provoca
la relajación del detrusor a través de
los receptores Beta2 y la contracción
del esfínter interno a través de los
receptores Alpha1. El esfínter externo
se cierra al mismo tiempo mediante
una acción voluntaria bien entrenada.
Cuando la pared muscular se relaja y
el esfínter se cierra, la vejiga se llena
de orina.
Cuando la vejiga está llena, los
mecanorreceptores de la pared de la
vejiga detectan que está llena y las
neuronas aferentes transmiten esta
información a la médula espinal y
luego al tronco del encéfalo. El reflejo
de la micción está coordinado por el
centro del mesencéfalo y ahora
predomina el control parasimpático.
La actividad del nervio parasimpático
contrae el músculo detrusor (para
aumentar la presión y drenar la orina)
y relajar el esfínter interno. Al mismo
tiempo, el esfínter externo se relaja
mediante movimientos voluntarios.
Los efectos simpáticos y juego armónico de las actividades
parasimpáticos de la estructura de la musculares que se requieran.
vejiga son obviamente opuestos. Por
lo tanto, la acción del nervio simpático
inerva el llenado de la vejiga,
mientras que la acción del nervio
parasimpático inerva el vaciado de la Bibliografía
vejiga.
 Constanzo, L. S. (s. f.).
 Pupila Fisiología (Cuarta edición).
El tamaño de la pupila está Elsevier.
http://www.untumbes.edu.pe/b
controlado por dos músculos del iris:
medicina/libros/Libros10/libro1
el dilatador de la pupila (radial) y el 18.pdf
constrictor de la pupila (esfínter). Los
músculos dilatadores de la pupila
están inervados por nervios
simpáticos y controlados por
receptores Alfa1. La activación de
estos receptores Alfa1 hace que el
músculo radial se contraiga, lo que
conduce a la dilatación o dilatación de
las pupilas. Los músculos
constrictores de la pupila reciben
inervación parasimpática a través de
receptores muscarínicos. La
activación de estos receptores hace
que el esfínter se contraiga, con
contracción pupilar o miosis.

Conclusión

La inervación recíproca es la
inervación mutua de distintas partes
del cuerpo o músculos, se da un
control consecutivo de agonistas y
antagonistas. Están completados por
el control de la sinergia para una
buena coordinación espacial y
temporal del movimiento. Para esto,
se requiere que haya una correcta
modulación de la excitación e
inhibición en el SNC que lleve a un