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REDAR-780; No. of Pages 9 ARTICLE IN PRESS


Rev Esp Anestesiol Reanim. 2017;xxx(xx):xxx---xxx

Revista Española de Anestesiología


y Reanimación
www.elsevier.es/redar

FORMACIÓN CONTINUADA

Valoración ecográfica de la función diafragmática y sus


aplicaciones en el paciente crítico, en ventilación
mecánica y en la anestesia del plexo braquial
F. de B. de la Quintana Gordon ∗ , B. Nacarino Alcorta y M. Fajardo Pérez

Servicio de Anestesia Reanimación y Tratamiento del Dolor, Hospital Universitario de Móstoles, Móstoles Madrid, España

Recibido el 5 de septiembre de 2016; aceptado el 3 de enero de 2017

PALABRAS CLAVE Resumen La valoración de la función diafragmática ha sido clásicamente poco considerada
Ecografía del debido a la dificultad de su exploración. La aparición de la ecografía diafragmática ha aportado
diafragma; luz al problema y ofrece un terreno amplio que mejora significativamente nuestra capacidad
Parálisis diagnóstica y terapéutica en el paciente crítico o en los pacientes sometidos a anestesia regio-
diafragmática; nal del plexo braquial. La parálisis o la hipoquinesia diafragmática aparece como un problema
Parálisis mucho más frecuente de lo que se creía. La ecografía permite su diagnóstico precoz así como
diafragmática y la cuantificación dinámica del problema facilitando la toma de decisiones preventivas y tera-
anestesia del plexo péuticas precoces. También se está delineando como un instrumento de guía en el proceso de
braquial destete de la ventilación mecánica y en el abordaje más seguro del plexo braquial. En este
trabajo presentamos la sistemática de su exploración y su utilización clínica.
© 2017 Sociedad Española de Anestesiologı́a, Reanimación y Terapéutica del Dolor. Publicado
por Elsevier España, S.L.U. Todos los derechos reservados.

KEYWORDS Ultrasound evaluation of diaphragm function and its application in critical patients,
Diaphragmatic mechanical ventilation and brachial plexus block
ultrasonography;
Diaphragmatic Abstract Before diaphragm ultrasonography, assessment of diaphragm function was very dif-
paralysis; ficult due to the complex nature of its exploration. The use of this new technique has shed light
Diaphragmatic on diagnostic problems and treatment with an improvement in final outcomes for critically ill
paralysis and brachial patients, in whom the incidence of diaphragm weakness or dysfunction has been underestima-
plexus block ted. Better knowledge of diaphragm function enables us earlier diagnosis by quantification of
diaphragm contractile activity or evaluation of functional status after delivery of plexus block

∗ Autor para correspondencia.


Correo electrónico: borjaquintana@hotmail.es (F.d.B. de la Quintana Gordon).

http://dx.doi.org/10.1016/j.redar.2017.01.001
0034-9356/© 2017 Sociedad Española de Anestesiologı́a, Reanimación y Terapéutica del Dolor. Publicado por Elsevier España, S.L.U. Todos
los derechos reservados.

Cómo citar este artículo: de la Quintana Gordon FdB, et al. Valoración ecográfica de la función diafragmática y sus
aplicaciones en el paciente crítico, en ventilación mecánica y en la anestesia del plexo braquial. Rev Esp Anestesiol
Reanim. 2017. http://dx.doi.org/10.1016/j.redar.2017.01.001
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anaesthesia, facilitating therapeutic decisions. It is also being used as a guide in the process
of weaning from mechanical ventilation or as the safest approach for braquial plexus block. In
this review we present how to perform a systematic exploration of diaphragm function and its
clinical implications.
© 2017 Sociedad Española de Anestesiologı́a, Reanimación y Terapéutica del Dolor. Published
by Elsevier España, S.L.U. All rights reserved.

Introducción
frénico, colocación de catéteres centrales y, por supuesto,
El diafragma es una estructura musculotendinosa que se la ventilación mecánica, que se ha descrito como causa de
inserta a nivel anterior en la apófisis xifoides, lateralmente la aparición de alteraciones metabólicas diafragmáticas en
en los bordes costales hasta los extremos de la undécima animales y en humanos como luego veremos con más detalle.
y duodécima costilla. Y a nivel posterior, en las vértebras La disfunción puede ser unilateral o bilateral. En algunos
lumbares mediante 2 pilares: el derecho en el cuerpo de L3 estudios, la prevalencia de la disfunción bilateral fue del
y el izquierdo en L2. Visto desde el plano medio-sagital, se 24% en pacientes críticos sometidos a ventilación mecánica,
curva hacia atrás y hacia abajo, desde el xifoides (T8) hasta llegando en otros hasta el 30%. El inicio de la recupera-
su inserción en el ligamento arqueado medio, a nivel de T12. ción ocurrió de media (pacientes no quirúrgicos) en 4 días,
En su estructura podemos encontrar una porción cilíndrica, tras su detección. Sin embargo, la normalización llegó a
de naturaleza muscular, que va por la zona de aposición cos- necesitar de 5 a 25 meses, siendo algo menor si la causa
tal; la cúpula, de naturaleza tendinosa; la zona posterior, de la disfunción diafragmática era iatrogénica9 . Summerhill
formada por la cúpula, los músculos crurales y los ligamen- en este mismo trabajo asegura que según datos de Ale-
tos arcuatos. Cuando estos músculos se contraen, desplazan xander, hasta un 6% de los sujetos sanos pueden presentar
el diafragma hacia abajo y hacia delante. La inervación llega movimiento paradójico durante la inspiración9 . De lo ante-
sobre todo por los nervios frénicos, que surgen de las ramas riormente expuesto se deduce la posibilidad de encontrar
ventrales de las raíces cervicales C3, C4 y C5, con mayor una parálisis diafragmática uni o bilateral en el paciente
contribución de C4. Cada nervio frénico inerva el hemidia- posquirúrgico y la necesidad de su diagnóstico por las impli-
fragma ipsilateral, por lo que en caso de lesión unilateral se caciones que conlleva. Existen ya estudios que analizan la
producirá una parálisis hemidiafragmática. Esta inervación parálisis diafragmática en cirugía abdominal como fuente de
explica su parálisis en los bloqueos del plexo braquial. complicaciones respiratorias tras la intervención10 .
El diafragma contribuye a generar el 75% del volumen Se han empleado diferentes técnicas para el diagnóstico
corriente en la respiración tranquila1 . Sin embargo, en la de la parálisis diafragmática. De ellas, el gold estándar es la
respiración forzada, este porcentaje se reduce por entrada medición de la variación de la presión transdiafragmática11
en acción de la musculatura extrínseca, por más que el mediante 2 balones colocados en esófago y estómago. Sin
trabajo realizado por el diafragma también se hace máximo. embargo, no es posible hacerla en condiciones clínicas
El fallo de un hemidiafragma en un paciente sano apenas normales y resulta inútil en la detección de la parálisis uni-
genera problemas en la respiración tranquila, pero supone lateral, pues el otro lado es suficiente como para generar
disnea en caso de esfuerzo físico2 . En el paciente crítico la variación de presión12 . La fluoroscopia, por su parte, es más
disfunción diafragmática se ha descrito como una de las cau- útil en caso de parálisis unilateral que bilateral (veremos
sas de insuficiencia respiratoria y fallo en el destete3-7 . Se una elevación del hemidiafragma paralizado). Sin embargo,
trata de un problema infradiagnosticado y que debería des- genera muchos falsos negativos debido a que muestra la
cartarse en todo paciente con disnea inexplicada. Entre las zona más alta del diafragma, que es la menos móvil11 .
posibles causas de esta disfunción destacan las siguientes1 : La radiografía de tórax presenta una sensibilidad del 90%
en primer lugar y en nuestro ámbito, la anestesia regional y una especificidad del 44%13 para la parálisis unilateral.
del miembro superior que puede bloquear el nervio frénico Pero en la bilateral, la simetría del movimiento hace que
causando parálisis unilateral. Una segunda causa la constitu- sea inútil. La resonancia magnética nuclear tiene buena
yen la cirugía torácica, la cardiaca o la abdominal. En tercer correlación entre imagen y funcionalidad14 , pero no siem-
lugar, la sepsis. Demoule et al.8 encuentran una mayor pre es posible trasladar a un paciente a la resonancia. Los
mortalidad en pacientes con disfunción en el contexto de test de función pulmonar (espirometría) muestran una dis-
sepsis y sugieren que podría tratarse de un fallo orgánico minución en la capacidad vital, que de forma aislada es
específico. Aunque en este estudio no se ha visto una poco específica y no pueden discriminar entre una parálisis
mayor tasa de reintubación en los pacientes con disfunción, hemidiafragmática o bilateral. Como mucho pueden hacer
otros trabajos con mayor muestra sí la han encontrado3 . sospechar debilidad global. Finalmente, la electromiogra-
Otras causas destacadas son los procesos abdominales fía, en respiración espontánea o tras estimulación eléctrica
yuxtadiafragmáticos y los procesos en áreas pulmonares del nervio frénico, resulta especialmente útil para dife-
adyacentes (atelectasias, neumonías, abscesos o masas renciar causas neuropáticas y miopáticas de la disfunción
basales), enfermedades cerebrovasculares, enfermeda- diafragmática9 , pero no tiene aplicación fácil en nuestro
des neuromusculares, neuropatías que afecten al nervio entorno.

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Valoración ecográfica de la función diafragmática en el paciente crítico 3

La ecografía ofrece por su parte una técnica incruenta,


sin radiación, realizable a pie de cama, repetible cuantas
veces sea necesario y que permite medir la excursión dia- Posterior
fragmática (destinada a diagnosticar disfunciones), medir

Lateral
Medial

Medio
Medio
el engrosamiento diafragmático durante el ciclo respira-
torio en la zona de aposición costal (que representa la
contractilidad del diafragma), medir el esfuerzo diagramá- Anterior

tico, distinguir entre hipoquinesia y parálisis monitorizando


su evolución en el tiempo, y distinguir las parálisis unilate-
rales y las bilaterales. En los videos 1, 2 y 3 del material
suplementariodisponible en la versión electrónica podemos
observar las diferentes etapas de la parálisis diafragmática: Posterior
movimiento normal, hipoquinesia y parálisis.
El primer estudio ecográfico sobre el diafragma fue
Postero
realizado en 1975 por Haber et al.15 , y desde entonces Postero
Postero
medio medial
se han publicado multitud de trabajos. Sin embargo, la lateral
mayoría de los estudios publicados sobre la capacidad de
la ecografía para el diagnóstico de las alteraciones diafrag- Medio Medio Medio
Lateral Medial
máticas son series de casos, lo que les resta potencia. Pero lateral medio medial
eso no significa que no sea válida, sino que es una prueba
en evolución cuya validación va realizándose poco a poco; Antero
de hecho, el número de estudios publicados sobre el tema lateral Antero Antero
medio medial
crece cada año.
En nuestro entorno, la afectación diafragmática se suele
manifestar en el postoperatorio de pacientes que presentan Anterior
una evolución respiratoria tórpida y con frecuencia desarro-
llan derrames pleurales y atelectasias asimétricos (mayor en Figura 1 Denominación de las regiones diafragmáticas para
un lado que en el otro), o neumonías, sin que exista una clara definir la zona de exploración.
explicación a esa evolución. La exploración ecográfica mues- En la imagen se observa en negra la imagen de la sonda de
tra con frecuencia como el lado más afectado presenta un ecografía y la posición de las zonas insondables. En la imagen A
menor movimiento diafragmático que el otro o una parálisis se observa un corte completo de ambos hemitórax y en B solo
completa. Descubrir este problema no solo tiene implica- de un lado con el resumen de las 9 zonas definidas.
ciones diagnósticas. Su detección precoz permite tomar
medidas también precoces frente a las complicaciones, ambas cosas: engrosamiento y movimiento. Y para ello,
rehabilitación precoz o medidas terapéuticas específicas: podemos emplear diferentes sondas y ventanas ecográficas,
existen derrames pleurales cuyo volumen en condiciones que se resumen de la siguiente manera: la sonda lineal es útil
normales no precisaría de una toracocentesis; sin embargo, para ver el engrosamiento, mediante la ventana de «zona de
cuando ese derrame se presenta como consecuencia de una aposición». Y las sondas convex y microconvex resultan úti-
hipoquinesia o parálisis unilateral, la probabilidad de que les para ver el movimiento en las ventanas lateral y anterior.
evolucione pronto se reduce, pues la falta de movimiento Un aspecto problemático de la exploración diafragmática
lleva a la atelectasia y la falta de expansión impide la es la definición de cada área topográfica. ¿Qué es posterior
reabsorción del líquido. En esas circunstancias podría ser anterior, lateral medial y medio? Para aclarar ese concepto
beneficioso su drenaje. También vemos casos de pacien- la figura 1 establece esa topografía que nos servirá para
tes con destete complicado de la ventilación mecánica, por describir nuestras exploraciones.
alteración diafragmática3-6 . Finalmente, los bloqueos del
plexo braquial provocan parálisis transitorias que son motivo
de estudio cada vez con más frecuencia y cuya detección Medición del engrosamiento a través de la ventana
puede ayudar en el postoperatorio de ciertos pacientes pro- de la «zona de aposición» mediante la sonda lineal
pensos a desarrollar una insuficiencia respiratoria. de alta frecuencia
Pero para emplear esta técnica diagnóstica es necesario
saber cómo mirar y qué mirar. En los siguientes párrafos, Durante la inspiración, el grosor diafragmático aumenta a
explicaremos cómo hacer una exploración diafragmática y medida que se contrae y acorta el músculo16 . Pero este
qué debemos buscar. engrosamiento no es lineal a lo largo de la inspiración: si
realizamos una inspiración desde la capacidad residual fun-
cional hasta que alcanzamos el 50% de la capacidad vital, el
¿Cómo podemos explorar el diafragma aumento del grosor se relaciona con la contracción muscu-
mediante ecografía? lar pues la resistencia del tórax es escasa y uniforme; pero
cuando el volumen inspiratorio supera el 50% de la capacidad
Cuando el diafragma se contrae, su parte muscular experi- vital, la resistencia aumenta progresivamente por la aproxi-
menta un engrosamiento proporcional a dicha contracción y mación a la capacidad total del tórax y eso obliga a realizar
un desplazamiento hacia abajo con el fin de expandir la caja un mayor esfuerzo muscular, lo que condiciona que el mayor
torácica. Por tanto, para su estudio, deberemos analizar porcentaje de engrosamiento tenga lugar durante la segunda

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Figura 2 Imagen del diafragma a nivel de la zona de aposición


costal en la que se aprecia la triple capa correspondiente a la
pleura visceral, el músculo diafragmático y el peritoneo.

mitad del ciclo respiratorio17 . Esto, como luego veremos,


tiene implicaciones importantes. Para poder observar esta
variación del grosor, colocaremos la sonda a nivel del 8.o
a 10.o espacio intercostal en la línea medio axilar. A ese
nivel, el diafragma está unido a las costillas («zona de apo-
sición costal») y se ve como una triple banda, que representa
el peritoneo, el músculo y la pleura parietal. Puede distin-
guirse, además, porque su movimiento es independiente del
de la pared torácica o las estructuras subyacentes (fig. 2).
La observación en movimiento del diafragma a este nivel
permite ver como durante el ciclo respiratorio, su grosor se Figura 3 Medición del thickening fraction. En la imagen
modifica o permanece estable en función de su contractili- vemos el diafragma con su estructura formada por una triple
dad. En esta ventana se puede usar el modo B, o el modo M capa hiperecogénica, hipoecogénica y nuevamente hipereco-
en el que se observa la variación de grosor en el tiempo. génica correspondientes a la pleura visceral, el músculo y el
A la hora de analizar el cambio de grosor, hay que tener en peritoneo. En la imagen superior se observa el grosor en espi-
cuenta que actualmente los límites de normalidad se basan ración y en la inferior, en inspiración.
en series de pacientes normales, y que estas establecen unos
rangos de grosor amplios. Por otro lado, el engrosamiento
para valorar la probabilidad de éxito en la extubación. El
en la zona de aposición puede variar significativamente
valor de la TFdi se calcula de la siguiente manera:
en función del peso y altura del paciente, pudiendo osci-
lar en un rango amplio (según los datos disponibles entre TFdi = [(grosor tele inspiratorio Tdi(Insp)
0,14-0,9 cm)18 . Esto significa que un paciente podría perder
mucho grosor por disfunción y seguir siendo considerado nor- − grosor tele espiratorio Tdi(Esp)]/
mal y que, por lo tanto, la medición aislada del grosor no (grosor tele espiratorio ∗ 100)(4)
tiene valor18 . Esto tiene una implicación clínica importante:
es necesario conocer el valor basal del paciente concreto
para poder hacer un seguimiento evolutivo del mismo. Se considera normal un TFdi ≥ 20%, en condiciones basa-
Con el fin de resolver la no linealidad del incremento les sin ningún tipo de soporte ventilatorio. En sujetos sanos
de grosor, las mediciones deben hacerse partiendo de en respiración espontánea el valor del TFdi es del 30-40%17
una espiración total (a capacidad residual funcional) y (fig. 3).
terminando en la capacidad vital, ya que en esos extremos Pero llegados a este punto, cabe preguntarse si esta
la variabilidad se reduce significativamente. Con esas medición es suficientemente reproducible. En algún estu-
premisas, se ha propuesto el uso de la fracción de engrosa- dio, la medición del TFdi fue poco reproducible presentando
miento (TFdi, de diaphragmatic thickening fraction) para variaciones intra o interobservador de hasta el 16-17%17 . Sin
valorar la actividad diafragmática. Este índice solo tiene embargo, el estudio de Boussuges et al.20 analizó la repro-
en cuenta el grosor inicial y final durante una inspiración ducibilidad de la observación de engrosamiento obteniendo
desde la capacidad residual funcional hasta la capacidad una reproducibilidad intraobservador del 94-96% e interob-
vital, y refleja la eficiencia del diafragma como generador servador del 91-95%. Otros trabajos coinciden con Boussuges
de presión. Di Nino et al.19 , por ejemplo, lo han utilizado et al. y sitúan la reproducibilidad en el 88-99%11 , y Vivier
junto con el cociente entre TFdi y la frecuencia respiratoria et al.6 obtuvieron coeficientes de correlación por encima

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Valoración ecográfica de la función diafragmática en el paciente crítico 5

de 0,97. También hay que determinar si la ventana de explo- lineal, engrosamiento y volumen no la siguen1 . Finalmente,
ración es accesible de forma habitual o no. Goligher et al.17 se estima que hasta un 6-7% de los sujetos sanos tienen
encontraron que el engrosamiento del hemidiafragma dere- una hipoquinesia o una parálisis hemidiafragmática9 . En
cho fue medible en el 96% de los casos, mientras que el condiciones de respiración tranquila, esto no representa
engrosamiento izquierdo no fue medible de manera consis- ningún problema. Pero en situaciones de esfuerzo, se
tente ya que su visualización era peor que la del derecho, lo manifiesta como una disnea mayor de lo normal. Lo mismo
que no coincide con el trabajo de Haji et al. en el que, aun- se ha descrito en pacientes que han sufrido un accidente
que el lado izquierdo se ve peor que el derecho, se logra cerebrovascular16 .
visualizar en el 72% de los casos21 . Finalmente, hay que Para la exploración del movimiento emplearemos la
reseñar que el movimiento izquierdo es mayor que el dere- sonda convex, que ofrece una gran penetración y alcanza
cho y esto hace que la observación de un lado y otro no sean sin problemas a la cúpula diafragmática, o la sonda micro-
intercambiables. convex que añade la ventaja de adaptarse bien e los espacios
Tras toda esta información podemos concluir que lo lógico intercostales. Y disponemos de 2 ventanas de exploración.
es hacer un estudio inicial bilateral del TFdi para conocer la Ventana anterior: colocaremos la sonda a nivel de la línea
situación basal del paciente en riesgo de alteración de la clavicular media, a nivel infracostal y, perpendicular a
función diafragmática y realizar un seguimiento del mismo. las costillas, de forma que el haz de ultrasonidos entra
Para ello, es recomendable marcar en el paciente el punto perpendicular al tercio posterior del correspondiente hemi-
exacto en el que hacemos la medición para evitar proble- diafragma. Para la identificación del diafragma mediante
mas de reproducibilidad (video 4 del material suplementario este abordaje, se utiliza el hígado como ventana acústica
disponible en la versión electrónica). derecha y el bazo en el lado izquierdo. Esto supone colocar
la sonda a diferente nivel en cada lado. La identificación del
diafragma a través de un abordaje anterior puede resultar
Medición del movimiento a través de las ventanas difícil debido a la presencia de aire intestinal, la interposi-
lateral y anterior mediante la sonda convex ción del pulmón, la presencia de apósitos quirúrgicos, etc.,
lo que resulta particularmente cierto en el lado izquierdo.
Durante la inspiración, el diafragma genera un movimiento De hecho, Gerscovich et al.1 encontraron que mientras que
activo hacia abajo que expande la caja torácica. Y en espi- el hemidiafragma derecho fue visualizable en todos los
ración, se invierte el sentido del movimiento hasta alcanzar voluntarios y en toda la excursión respiratoria, el izquierdo
una posición de reposo. Pero este movimiento se puede no pudo verse en 15 de 23 casos cuando la excursión res-
modificar por diferentes factores que debemos conocer. piratoria fue mayor de 5 cm debido a la interposición de
Por un lado, existen factores fisiológicos que modifican el estructuras (pulmón y colon). Se ha postulado que el despla-
movimiento1,20 tales como edad (la posición del diafragma es zamiento del hígado y el diafragma pueden ser sinónimos del
más alta en niños y jóvenes); sexo (es mayor en hombres que movimiento diafragmático, pero hay estudios que no avalan
en mujeres); peso (a mayor peso, mayor movimiento pues el este concepto y, de hecho, ese movimiento puede también
diafragma se coloca más alto); altura (a mayor altura, mayor ser debido a la deformidad del órgano con la respiración21 .
desplazamiento); posición (es mayor en decúbito supino que Ventana lateral: en este caso, la sonda se coloca entre la
sentado o de pie, pues se desplaza hacia una posición más línea medio axilar y axilar posterior en los espacios inter-
cefálica empujado por las vísceras abdominales. De hecho, costales bajos, en una orientación perpendicular. Con este
a la hora de valorar la movilidad diafragmática, en supino corte, veremos, en la zona superior de la pantalla, el área
existe menor variabilidad entre las observaciones de ambos lateral del diafragma, en la zona media de la imagen, la
hemidiafragmas, obteniendo mejor reproducibilidad en las cúpula, y en la zona distal, el área medial del diafragma.
mediciones); el lado (se sabe que en la respiración a capa- Por otro lado, con esta proyección, lo que podemos analizar
cidad vital en un sujeto normal en bipedestación, el lado es preferentemente el tercio posterior del diafragma, que
izquierdo baja más que el derecho, lo cual tiene implicacio- se mueve un 40% más que la anterior (mayor contribución al
nes en la exploración pues un mayor descenso puede hacer movimiento craneocaudal del diafragma), mientras que las
que se interponga el pulmón y no pueda observarse bien), y regiones medial y media se mueven de manera semejante y
finalmente, la región del diafragma (las regiones medial y son intercambiables a la hora de valorar la movilidad21 .
media del diafragma se mueven más). Por ello es importante En estas 2 ventanas podemos emplear el modo B para ver
definir la posición en la que se realizan las exploraciones. un video del diafragma en movimiento o el modo M anató-
Deben estandarizarse para minimizar las variaciones de las mico en el cual veremos una onda de movimiento que nos
medidas. Hay que saber que en los trabajos analizados, se permitirá cuantificar el desplazamiento. Para ello, debemos
utilizó en ocasiones la posición semisentada4 o supino con colocar la sonda de forma que el haz de ultrasonidos alcance
cabecero a 30◦5 . No se ha medido la variación en la función el diafragma en perpendicular (fig. 4).
diafragmática en el mismo paciente, tumbado y sentado. Puesto que según el tipo de esfuerzo al que sometamos
Se ha visto que el 65% del desplazamiento total se al diafragma, su movimiento puede modificarse, alterarse o
alcanza al llegar al tiempo mesoinspiratorio1 existiendo una permanecer estable, a la hora de valorar la capacidad de
relación lineal entre volumen y movimiento. Pero, atención, cada hemidiafragma, deberemos aplicar diferentes condi-
no hay que confundir movimiento y engrosamiento: Cohn ciones de esfuerzo para analizar su movilidad en cada una
et al.16 afirman que la mayor parte del engrosamiento se de ellas. Para eso se establecen 3 mediciones diferentes del
produce por encima del 50% del volumen, lo que sería algo movimiento (utilizando modos B y M). En respiración tran-
inverso a lo que ocurre con el movimiento. Y parece que quila la excursión ha sido descrita con distintos valores según
mientras que desplazamiento y volumen siguen una relación los autores; Umbrello et al. la estiman en 1,8 ± 0,3 cm4 .

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Tabla 1 Valores medios de la excursión diafragmática en la literatura


Gerskocvich E. (valor medio en cm) Boussuges (valores en cm)

Hombres n = 5 Mujeres n = 17 Hombres n = 140 Mujeres n = 55

Derecho Izquierdo Derecho Izquierdo


Respiración tranquila 1,39 1,65 1,54 1,55 1,8 ± 0,3 1,6 ± 0,3
Respiración a capacidad vital 6,76 7,89 5,32 6,23 7 ± 0,6 5,7 ± 1
Respiración en esnifeo 2,03 2,15 1,53 1,65 2,9 ± 0,6 2,6 ± 0,5

cuando realizamos las mediciones en modo M, nos permite


calcular la velocidad de contracción diafragmática y esto
equivale a la potencia. En un trabajo realizado sobre suje-
tos sanos se observó que el valor medio de la velocidad fue
de 1,3 ± 0,4 cm/s22 . En respiración a capacidad vital se des-
criben desplazamientos de 7-9 cm (tabla 1). Y en esnifeo
(respiraciones cortas, profundas y rápidas, iniciadas al final
de una espiración normal) podemos valorar la potencia de
la contracción y la presencia de una parálisis diafragmática
(observaríamos un movimiento paradójico). En la valoración
del esnifeo, lo que buscamos es, una vez más, la pendiente
de ascenso de la curva en modo M para inferir la máxima
potencia de contracción del diafragma. Es decir, que se
trata de una prueba que busca medir la máxima potencia
de contracción diafragmática (fig.).

Estudio de la disfunción diafragmática


asociada a la ventilación mecánica

La ventilación mecánica se utiliza entre el 30-50% de los


pacientes admitidos a unidades de críticos y su uso se ha aso-
ciado a disfunción diafragmática de aparición precoz (entre
las 24-48 h de inicio de la ventilación) presentando múlti-
ples posibles causas7 . Estas pueden estar relacionadas con el
propio diafragma (aumento del metabolismo oxidativo, dis-
minución de la fuerza de contracción diafragmática, atrofia
de las fibras musculares diafragmáticas, etc.7 ), asociadas
a la situación del paciente (miopatía de causa medica-
mentosa, por ej. benzodiacepinas, relajantes musculares,
antibióticos como aminoglucósidos, linezolid, etc.), trastor-
nos de la glucemia, desnutrición, estados de sepsis, y la
generada después de la cirugía (restricción de volúmenes
Figura 4 Ventanas anterior y lateral. Foto de colocación de pulmonares, afectación de troncos nerviosos, etc.21 ) o ser
la sonda e imágenes B y M. A) Plano anterior. B) Plano lateral. El debidas a una inadecuación de los parámetros ventilatorios
diafragma se presenta como una línea arqueada hiperecogénica (cuanto mayor es el soporte, menor es el esfuerzo que el
cuyo movimiento genera en el modo M una onda sinusoidal medi- paciente hace para lograr el volumen deseado y eso genera
ble en centímetros que representa el desplazamiento durante disfunción diafragmática inducida por el respirador4 ). La
la respiración. incidencia de esta alteración, analizada mediante la TFdi,
fue del 34% de los pacientes en el estudio de Lu et al.23 , y eso
se asoció a una mayor duración de la ventilación mecánica
Otro trabajo la sitúa en 0,9 a 2 cm21 , pero podríamos decir y de días de ingreso en la UCI.
que la excursión media es de de 2,5-3 cm en ambos lados, Los primeros trabajos sobre ecografía diafragmática en
con valores mínimos de 1,6 cm en mujeres y 1,8 cm en ventilación mecánica solo realizaban mediciones del grosor
hombres20 . Se ha definido la disfunción durante la respira- de diafragmas paréticos, observando que este era menor de
ción tranquila como un desplazamiento menor de 11 mm5 . 2 mm, y que existía relación entre la paresia y la atrofia que
En los trabajos de Gerscovich et al.1 y Boussuges et al.29 desarrollaban24 . Sin embargo, esta medición aislada ofre-
se obtuvieron los valores como normales (tabla 1) (videos cía valores no fiables en determinados pacientes (sujetos
5, 6 y 7 del material suplementario disponible en la ver- pequeños o parálisis agudas, aún sin atrofia). Tras la intro-
sión electrónica). La medición de la pendiente de ascenso, ducción del concepto de TFdi ese inconveniente se resolvió

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aplicaciones en el paciente crítico, en ventilación mecánica y en la anestesia del plexo braquial. Rev Esp Anestesiol
Reanim. 2017. http://dx.doi.org/10.1016/j.redar.2017.01.001
+Model
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Valoración ecográfica de la función diafragmática en el paciente crítico 7

aumentar la PS, el esfuerzo diafragmático se reduce y no


hay forma de saber qué parte ocupa cada cual17 . De hecho,
existe una disminución paralela de TFdi y de los paráme-
tros de esfuerzo respiratorio de forma que a medida que
aumenta la PS, se genera una correlación negativa entre
el TFdi y el volumen tidal6 . Y, por otro lado, existe una
gran variabilidad en el engrosamiento diafragmático para
un determinado nivel de esfuerzo inspiratorio entre dife-
rentes sujetos en ventilación mecánica, lo que limita su
uso para hacer comparaciones interpacientes17 . Pero sí sirve
para hacer comparaciones intrapaciente. Recientemente, Di
Nino et al.19 han planteado que un TFdi > 30% puede predecir
éxito en el destete (sensibilidad del 88%; especificidad del
71%; valor predictivo positivo del 91%). Sin embargo, hay
que decir que para que esto sea real se debería hacer con
el paciente en ventilación espontánea, sin más PS que la
necesaria para compensar el trabajo respiratorio del tubo
endotraqueal y tras al menos media hora de trabajo respira-
torio, pues un paciente puede presentar pruebas normales al
principio y claudicar al cabo de un tiempo. Si las mediciones
se hacen al principio, pueden estar sesgadas por un dia-
fragma descansado. En consecuencia, podemos decir que el
TFdi es un parámetro que refleja el esfuerzo diafragmático y
que nos orienta en la aparición de alteraciones diafragmáti-
cas. Sabemos que un TFdi < 20% indica trastorno muscular
diafragmático y que si es > 30% podría ayudarnos a guiar
el destete, pero que debido a las limitaciones descritas, lo
ideal es hacer mediciones seriadas con una medición basal
que nos permita hacer comparaciones en el mismo paciente,
y que esa medición basal debe volverse a hacer si se realizan
cambios en el soporte ventilatorio.
Y si el parámetro que analizamos con relación a la ven-
tilación mecánica es la excursión diafragmática, veremos
que se mantiene igual de manera independiente al nivel de
soporte. Es decir, que la distancia que el diafragma recorre
siempre es constante. Eso es debido a que el soporte lo
programamos para lograr un objetivo de volumen tidal y
por lo tanto de desplazamiento4 . Si no logramos el volu-
men deseado, subimos el soporte hasta lograrlo. Por lo
tanto, la medición del desplazamiento nos sirve en pacien-
tes en ventilación mecánica sin soporte ventilatorio (lo que
ocurre pocas veces) o en pacientes con soporte constante,
para ver su evolución en el tiempo facilitando, por ejem-
plo, el manejo del destete. Estudios recientes investigan
Figura 5 Mediciones con la sonda convex. Combinado de el uso de la ecografía diafragmática para esta función. Se
respiración tranquila, capacidad vital y esnifeo en B y M. A) Res- ha usado el desplazamiento del hígado y el bazo en las
piración tranquila. B) Respiración a capacidad vital. C) Maniobra pruebas de respiración espontánea25 (durante la inspira-
de esnifeo. ción, el hígado se desplaza hacia abajo empujado por el
diafragma y algún autor ha planteado que ese movimiento
era equivalente a descenso diafragmático) o el estableci-
y Summerhill et al.9 establecieron que el límite inferior de miento de puntos de corte en la excursión diafragmática
la normalidad para el TFdi era ≤ 20%. Por debajo de ese para predecir el fallo en el destete (lado derecho: 10-
valor, se podía hablar de una disfunción diafragmática clíni- 14 mm; lado izquierdo: 7-12 mm), siendo este similar a
camente relevante, sirviendo tanto para el diagnóstico como otros predictores clásicos como el rapid shallow breathing
para la monitorización de la evolución. Pero esto no era así index (RSBI), que se relaciona con la magnitud del volumen
de simple en los pacientes en ventilación mecánica pues tidal3,26,27 .
el TFdi presenta muy buena correlación con la capacidad También es útil en la monitorización del paciente recién
contráctil del diafragma siempre que, como ahora veremos, extubado o en el paciente con insuficiencia respiratoria
no se empleen modos de soporte ventilatorio (presión de como parámetro indicador de fatiga respiratoria y de nece-
soporte [PS] o ventilación no invasiva [VMNI])9 . El uso de sidad de intubación o reintubación. Cuando la excursión
modalidades asistidas hace que parte de la excursión ins- diafragmática es medida tras la extubación y su valor se
piratoria se deba al diafragma, pero otra al soporte. Al reduce a lo largo de las horas, nos estará indicando un

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8 F.d.B. de la Quintana Gordon et al.

agotamiento del paciente y nos permitirá estar alerta de la contingencia. Una identificación de estos sujetos puede
necesidad de reintubación. hacerse con rapidez evitando situaciones indeseables.
Otro aspecto en el que podría resultar de utilidad la
ecografía diafragmática es en la valoración de asincronías Conclusiones
paciente-respirador. Se observa una buena correlación entre
el grosor y los cambios de presión en la vía aérea. La medi- La exploración ecográfica del diafragma se nos presenta
ción simultánea de la contracción diafragmática y del ciclo como una ventana abierta a una visera cuya alteración
mecánico permitiría detectar dichas asincronías facilitando implica graves trastornos en el paciente crítico y cuyo fun-
el ajuste de los parámetros ventilatorios11 . Sin embargo, cionamiento puede verse afectado por multitud de causas
este terreno está aún por explorar. patológicas o anestésicas. Hasta ahora, resultaba invisible
dada la dificultad de su exploración, por lo que habi-
tualmente no era tenido en cuenta en el diagnóstico y
Anestesia regional tratamiento de muchas insuficiencias respiratorias.
La ecografía diafragmática ha ido evolucionando hasta
El análisis de la función diafragmática es un aspecto muy poder ofrecer una exploración reglada del funcionamiento
poco estudiado en la anestesia del plexo braquial. Sin diafragmático y nos permite detectar la existencia y la
embargo, sabemos que en función del tipo de abordaje y evolución de las alteraciones de su movilidad así como la
del volumen inyectado tendremos un porcentaje diferente potencia de contracción, constituyendo una herramienta de
de casos de afectación del hemidiafragma ipsilateral por gran utilidad en la exploración y manejo del enfermo crí-
bloqueo del nervio frénico28 . Así, en el bloqueo interesca- tico o tras la anestesia del plexo braquial. Sin embargo, aún
lénico, se produce este problema en más de un 99% de los no hay suficientes estudios como para poder afirmar que los
casos cuando se inyectan volúmenes ≥ 30 ml, reduciéndose datos de referencia de la normalidad son exactos, lo cual no
este porcentaje cuando el volumen inyectado se aproxima resta valor a la técnica pues el análisis comparado de la evo-
a 10 ml. Y en el bloqueo supraclavicular, y debido a que lución de cada paciente tiene ya en sí mismo un gran valor
el nervio frénico se encuentra también localizado cerca de diagnóstico.
la arteria subclavia, se produce un bloqueo frénico en un Podemos decir que la ecografía diafragmática ha dado
25-50% de los casos29 . También puede haber parálisis dia- visibilidad al diafragma que hasta ahora escasamente existía
fragmática por lesión directa del nervio frénico durante la en nuestros diagnósticos.
punción. Para comprender esto, basta con conocer la ana-
tomía del paquete vasculonervioso a ese nivel. El nervio
frénico discurre en paralelo y en proximidad a los compo- Conflicto de intereses
nentes del plexo braquial al tener un origen común.
En un paciente sano y joven, la parálisis hemidia- El Dr. Mario Fajardo Pérez declara recibir soporte material
fragmática es fácilmente compensable gracias al otro en forma de préstamo de ecógrafos, para la realización de
hemidiafragma y a la musculatura accesoria. Recordemos cursos prácticos organizados por él, de las marcas SonoSite,
que, según hemos comentado, un 6-7% de la población Hitachi-Aloka, Mindray y General Electric.
normal presenta alteraciones de la movilidad de un hemidia-
fragma. Sin embargo, estos bloqueos pueden representar un Anexo. Material adicional
problema más grave en pacientes que presenten patología
pulmonar. También se debe tener precaución en pacientes Se puede consultar material adicional a este artículo en
con una cirugía de cuello del lado contralateral como la su versión electrónica disponible en http://dx.doi.org/
cirugía de vaciamiento cervical o cirugía de carótida30 , y 10.1016/j.redar.2017.01.001.
están estrictamente contraindicados en pacientes en quie-
nes exista una lesión previa del nervio frénico contralateral. Bibliografía
No existen estudios que demuestren con qué rapidez e
intensidad se produce la parálisis frénica, ni se han realizado
1. Gerscovich EO, Cronan M, McGahan JP, Jain K, Jones CD, McDo-
exploraciones de la movilidad diafragmática antes, durante nald C. Ultrasonographic evaluation of diaphragmatic motion.
y después de hacer un bloqueo del plexo braquial31 . Tampoco J Ultrasound Med. 2001;20:597---604.
sabemos cuánto dura la parálisis frénica en función de la 2. Hart N, Nickol AH, Cramer D, Ward SP, Lofaso F, Pride NB,
dosis de anestésico local utilizada. Ni tan siquiera si la afec- et al. Effect of severe isolated unilateral and bilateral diaph-
tación se traduce en hipoquinesia o parálisis hemidiafragmá- ragm weakness on exercise performance. Am J Respir Crit Med.
tica. Sin embargo, la ecografía diafragmática puede ser una 2002;165:1265---70.
herramienta muy útil para valorar al paciente antes y des- 3. Kim WY, Suh HJ, Hong SB, Koh Y, Lim CM. Diaphragm dysfunc-
pués de una anestesia de este tipo. En el preoperatorio, la tion assessed by ultrasonography: Influence on weaning from
mechanical ventilation. Crit Care Med. 2011;39:2627---30.
identificación de aquellos pacientes con un déficit de movi-
4. Umbrello M, Formenti P, Longhi D, Galimberti A, Piva I, Pezzi
lidad diafragmático permitiría evitar bloqueos que pudieran
A, et al. Diaphragm ultrasound as indicator of respiratory effort
comprometer la respiración durante la cirugía. Y en el posto- in critically ill patients undergoing assisted mechanical ventila-
peratorio, y a partir del estudio preoperatorio, puede ayudar tion: A pilot clinical study. Crit Care. 2015;19:161.
a identificar aquellos pacientes en quienes un alta precoz 5. Mariani LF, Bedel J, Gros A, Lerolle N, Milojevic K, Laurent V,
puede ser peligrosa. No hay que olvidar que un paciente con et al. Ultrasonography for screening and follow-up of diaphrag-
una parálisis hemidiafragmática puede estar respirando con matic dysfunction in the ICU: A pilot study. J Intensive Care
normalidad en reposo, pero puede claudicar ante la mínima Med. 2016;31:338---43.

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Valoración ecográfica de la función diafragmática en el paciente crítico 9

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