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CÓMO RESPETAR A LOS PADRES

A veces, parece que tus padres no te comprenden y eso suele generar una relación negativa con ellos. Sin
embargo, es importante mantener el respeto hacia ellos. Si quieres respetar más a tus padres, puedes
reconsiderar tus pensamientos y acciones hacia ellos para asegurarte de tratarlos con la amabilidad que se
merecen.
CAMBIAR TUS PENSAMIENTOS Y SENTIMIENTOS RESPECTO A TUS PADRES
Sé agradecido. 

Esto implica mostrar agradecimiento y aprecio por lo que tienes. Aparte de haberte traído al mundo, los
padres sacrifican su tiempo, energía y esfuerzo para satisfacer tus deseos y necesidades. Mostrarles que
aprecias sus esfuerzos manifiesta un grado de respeto hacia ellos.
 Díselos cara a cara. La manera más fácil de mostrar gratitud es agradecerles y decirles que aprecias
quienes son y lo que hacen.
 Realiza un gesto sencillo, pero significativo. Por ejemplo, limpia la cocina al terminar la cena o saca la
basura sin que te lo pidan. Tus padres notarán y apreciarán tus actos amables.
 Felicítalos por ser buenos en algo. Por ejemplo, dile a tu madre lo buena cocinera que es o dile a tu
padre lo impresionante que es en el trabajo.

Comprende las distintas perspectivas. 

El respeto de las distintas opiniones es una capacidad de por vida que sirve en todo desde la política hasta las
profesiones. El hecho de decidir comprender la procedencia de tus padres, no significa que pierdas tus
creencias. En vez de eso, si miras las situaciones desde su perspectiva, ambas partes comprenderán y
aceptarán un poco más respecto al otro.
 Hazles preguntas para aprender más de ellos. Comprende que tus padres pertenecen a una generación
distinta y mucho cambia con el paso del tiempo. Conversar con ellos acorta la brecha para comprenderse
mejor entre sí.
 Escribe en un diario sobre las interacciones con tus padres. Cuando revises el diario, verás las cosas con
mayor sinceridad en vez de reinterpretar los sucesos de una forma que solo te beneficia a ti.
 Habla con una parte neutral. Hablar con una tercera parte te ayudará a ver las cosas desde las
perspectivas de los demás, entre ellas las de tus padres. Aprender a ver "de dónde provienen" permite
desarrollar una relación respetuosa mutua.

Valora su sabiduría. 

Esta se refiere a la capacidad de integrar el conocimiento y un entendimiento de la vida para afrontar las
incertidumbres que pueden presentarse. Aunque no lo creas, tus padres pasaron por gran parte de las cosas
que has atravesado siendo niño o adolescente. Por eso, es importante reconocer que poseen conocimientos y
criterio que debes respetar.
 Por ejemplo, si vas al doctor, quieres que alguien con experiencia y capacitación diagnostique y trate tu
enfermedad. Lo mismo se aplica para los padres. Aprende a verlos como profesionales en la vida para
ayudarte a desarrollar un grado distinto de respeto por ellos.

Recuerda lo mucho que te aman. 

No existe manera de medir en cifras o porcentajes el amor de un padre por su hijo. Los padres no solo tienen a
los hijos, sino que también los crían, los orientan, les ayudan a superar los obstáculos, entregan su tiempo y
esfuerzo y brindan su amor incondicional. Como hijos, solemos olvidar lo mucho que han hecho en nuestras
vidas. Dedica un momento a pensar en su amor y apoyo para crear vínculos de amor y respeto.
 Reconoce que cuando los padres aparentemente interfieren en tu vida, lo hacen por una buena razón.
Con frecuencia, actúan como un escudo para proteger a sus hijos de todo lo que consideren dañino.
 Tus padres se preocupan por tu éxito futuro porque te aman. Cuando ellos perciben tu conducta como
una amenaza que limita tus potenciales logros, puede crearse un conflicto en tu relación. Date cuenta de que
esto suele provenir de un sentimiento de amor.

CAMBIAR TU CONDUCTA HACIA TUS PADRES

Sigue las reglas. 

Los hijos con frecuencia no aceptamos las reglas que han establecido nuestros padres, pero no nos damos
cuenta de que estas existen por una razón. Las reglas son importantes porque las personas somos
interdependientes. Ignorarlas trae consecuencias que no solo te afectan a ti, sino también a los demás (entre
ellos tus padres). Al seguir las reglas, les demuestras a tus padres que respetas su criterio y previsión.
 Ten una idea clara de sus expectativas. Debes saber cuáles son las reglas de tus padres para evitar
confusiones y romper cualquier regla sin querer.
 Detente por un segundo y piensa en las consecuencias. Reflexiona sobre qué efecto dominó podrían
tener tus acciones y de qué manera te afectarán a ti y a tu entorno. Pregúntate si de verdad valen la pena.

Practica buenos modales. 

Los modales no solo se tratan de cuál tenedor debes utilizar en la mesa, sino que también implican ser
consciente de los sentimientos de los demás. Preocuparte por ser cortés con tus padres (a quienes conoces de
toda la vida) manifiesta un grado de respeto y reverencia.
 Recuerda decir "por favor" y "gracias". Las palabras tienen mucho poder y cada una de estas lleva un
significado. Aparte de ser cortés, esta es una muestra de gratitud y aprecio, dos elementos que forman parte
del respeto hacia los padres.
 Cuida tu lenguaje. Ten cuidado con tus temas de conversación y las palabras que utilizas delante de tus
padres. Ellos siempre verán a sus hijos como sus bebés (sin importar su edad). Prefieren mirarlos con ojos
limpios y puros.

Pasa tiempo de calidad con ellos. 

Hay momentos en la vida (sobre todo en la adolescencia) en que prefieres hacer otra cosa que pasar tiempo
con tus padres y ellos lo saben y lo aceptan. Pero imagina el amor, la admiración y el respeto que sentirían si
decides pasar tiempo de calidad inesperado con ellos.
 Aprovecha sus intereses. Interésate por lo que hacen tus padres en su tiempo libre. No importa si les
gustan los deportes, el baile, la música o la jardinería, hazles preguntas al respecto y muéstrales que te
interesas por ellos.
 Haz que sean una prioridad eligiendo pasar tiempo con ellos en vez de tus amigos, de vez en cuando.
Apreciarán mucho ese gesto.

Bríndales afecto.

 Conforme envejeces, tiendes a olvidar dar abrazos y besos a tus seres queridos. Si eliges acercarte a tus
padres mediante las demostraciones de afecto, les mostrarás que reconoces, respetas y aprecias sus
posiciones de padres y cuidadores.
 Diles que los amas en cualquier momento y no solo cuando lo esperan de ti o cuando quieres conseguir
algo.
 Sorpréndelos con abrazos o besos espontáneos, sin un motivo especial. Si tus padres te preguntan a
qué se debe esa acción inesperada, diles "Es solo por ser tú".

MEJORAR LA COMUNICACIÓN CON TUS PADRES

No les contestes. 

Contestar es responder de forma irrespetuosa a un padre, por ejemplo: gritando, maldiciendo, volteando los
ojos o incluso siendo sarcástico. Se produce como una manera de expresar oposición, pero solo genera
conflicto. Aprender a controlar las reacciones precipitadas les demostrará a tus padres que respetas su
autoridad.
 Reconoce primero el problema. Si te percatas del problema y deseas cambiarlo, ya has dado el paso
más importante. Se requiere madurez para entender las distintas perspectivas y reacciones entre los hijos y
los padres.
 Discúlpate con ellos. Diles que les has faltado el respeto y pídeles su ayuda mientras te esfuerzas por
cambiar tu conducta.
 Haz una pausa en tu mente. La próxima vez que te veas tentado a expresarte de forma irrespetuosa,
tómate un momento para reorganizar tus ideas antes de hablar movido por tus emociones. Toma en cuenta lo
que tus padres están diciendo y de dónde provienen.
Presta atención a tu lenguaje corporal. 

Gran parte de la comunicación no proviene de las cosas que decimos, sino de la forma de decirlas. Esto implica
el tono de tu voz, el contacto visual y la manera de moverte. Asegúrate de que tu lenguaje no verbal
demuestre comprensión y respeto.
 Trata de no cruzar los brazos. Esto manifiesta una actitud defensiva y cerrada a la comunicación.
 Ten cuidado con tu tono de voz. Evita subir tu tono de voz o ser sarcástico. Así das la impresión de que
te estás dejando dominar por tus emociones en vez de usar la lógica. Intenta hablar con calma y control.
 Haz contacto visual. De este modo, demuestras que eres sincero con tus palabras y que te interesa oír
lo que tus padres quieren decirte.

No saques a relucir el pasado. 

Cuando la discusión se pone más intensa, puedes desviarte del tema y discutir de cualquier cosa que te
produzca cólera, dolor o estrés. Intenta centrarte en un solo tema de discusión, de modo que puedas
solucionar tus problemas uno a la vez, sin sentirte agobiado.
 Ocúpate de tus problemas sin resolver antes de empezar la conversación. Si sabes que te estás
aferrando a la cólera o el dolor, esto puede obstaculizar una comunicación eficaz. Aclara los asuntos sin
resolver (uno por uno) antes de tratar de seguir adelante.
 Al inicio de la conversación, haz un trato con tus padres de que solo te centrarás en un asunto a la vez.
Si cualquiera de ustedes se desvía del tema, recuérdense unos a otros que deben mantenerse en él.

Acepta las discrepancias. 

Los padres no siempre están en lo cierto, pero eso no significa que debas faltarles el respeto para demostrar
tu punto de vista. En vez de pelearte a gritos con ellos, intenta hacerles ver tu opinión con tranquilidad y de
manera racional.
 Escríbelo. Considera qué punto de vista estás intentando hacer entender a tus padres y anota las
razones y ejemplos que lo sustenten.
 Háblales posteriormente. Reprograma la discusión para un momento en el que los ánimos no estén
encendidos. Elige un momento en que tus padres estén desocupados o libres de estrés para sentarte con ellos
y presentar tus argumentos con tranquilidad.
 Utiliza frases en primera persona para transmitir tu punto de vista sin ponerte a la defensiva. Hablar en
primera persona implica expresar la conducta que te molesta, lo que sientes a causa de esta y lo que necesitas
cambiar. Por ejemplo, en vez de decirles "Nunca me escuchan", podrías afirmar lo siguiente: "Siento que no
me escuchan y quisiera que mi opinión cuente más".
Sostén una conversación abierta con ellos. 

Deja que tus padres conozcan tu mundo. Háblales de la escuela, el trabajo, la persona que te gusta o de
cualquier otro tema interesante que nunca antes les hayas contado. Comparte tus preocupaciones o temores
con ellos, puesto que es probable que hayan atravesado algo similar antes. Si los haces partícipes de una
conversación sincera, les mostrarás que confías en ellos y que te importa su opinión.
 Confíales tus secretos. Evidentemente, no te sentirás cómodo contándoles todo, pero puedes
demostrarles que aprecias su sabiduría si compartes un secreto pequeño con ellos.
 No temas manifestar tus emociones. No hay nada de malo en mostrar tu miedo, cólera, nerviosismo,
alegría o cualquier otra emoción a tus padres. Permitirles la entrada a tu vida es solo un gesto pequeño que
les demuestra que te importan.

CONSEJOS

 Los padres se esfuerzan día a día para asegurarse de que no te falte nada. Ellos merecen respeto.
Aunque no siempre te lleves bien con ellos, muéstrales respeto y diles que los aprecias.
 Dales regalos de manera espontánea, incluso cuando no sea una ocasión especial. Puedes
demostrarles lo mucho que te importan con una caja pequeña de chocolates o una botella de vino.
 Ten presente que no son perfectos. Como cualquier ser humano, han cometido errores y seguirán
cometiéndolos. Aprende a amarlos de forma incondicional, como su amor hacia a ti.
 Recuerda que la vida solo te da un par de padres. Trátalos bien mientras aún están allí para apreciarlos.
 La vida es una sola. Demuéstrales a tus padres lo mucho que los amas antes que partan de este
mundo.

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