CONCLUSION

Considerando el hecho que los valores éticos organizacionales comprende todos aquellos
valores, normas y principios que se reflejan en la cultura de la empresa, a manera de
finiquitar este trabajo ponemos a consideración lo que se podría considerar como los pilares
de la ética organizacional:

1. Responsabilidad social. Una compañía empoderada socialmente favorece a

optimizar los entornos de vida de las zonas donde trabaja inspirando iniciativas que
desarrollen la evolución de la comunidad.

2. Transparencia y honestidad. Realizar una notificación diáfana con los clientes y

proveedores y permitir que las cuentas económicas sean de dominio público son
componentes que refuerzan la confianza en la empresa.

3. Creatividad e innovación. Estimular la creatividad y la invención dentro de la

empresa es esencial para lograr una mayor eficiencia, rentabilidad y competitividad.

4. Respeto por la vida familiar. La avenencia es cada vez más transcendental para los
trabajadores, por lo que el respeto por la vida familiar debe ser uno de los
compendios cardinales de la ética organizacional.

5. Cuidado del medio ambiente. Todas las empresas tienen una huella

medioambiental, ya sea en términos de consumo energético, emisiones de gases,
ruido o producción de desechos. Por eso, uno de los valores básicos de la ética
organizacional reside en salvaguardar el medio ambiente.