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1S84
I N D I C E
EN POCAS PALABRAS
Muchos hechos con trascendencia de épocas pasadas sobre los ana-
les del Beni, se escribieron incompletos porque los nombres de q\iienes
fueron actores principales se reservaron^ ocultos hasta iioy por erróneos y
simplistas criterios de nuestros historiadores. A ello Fe sumó la carcoma
incineradora cual torbellino de fuego oculto, que liquidó los legajos de la
Notaría de Hacienda de Trinidad, enemiga mayúscula de la cultura (1).
El autor
fl) Aperlara del fascismo en Rolivia: gobierno del Gra!, René Barrientos
Ürtufto, Prefectura dei Cnl. Juan Ortiz Aubroma, 1968, Y en 1914-75,
el Cnl. Jalio Herrera quemó el saldo, en la dictadora Banzer—FSB,
Recuérdese que en es tu época las Unioersidades fueron cerradas, s todos
los maestros exonerados y los años lectivos escolares incompletos debido
a las permanentes clausuras, justificando su desprécio a la cultura.
(I) Gilberto Terrazas, Dr. Htrnán Gutiérrez Lozano, Prof. Pedro Vargas,
Mariano Méndez Roca. Lola Cesvnooas, Simona Gutiérrez de Gutiérrez,
Sergio Becerra Casanouas, Guillermo Burlón Rodríguez, Nataniel Becerra
fikntelo, [jermógenes Mendoza, José Barberg, Angela Solazar, Gilfredo
Cortés Candia, Virginia Chávez, Dr. Sócrates Parada Suárez. Marías
del Castillo [libro: Bolivia).
ACASO Y OCASO DE LA
PRINCIPAL, F O R T U N A
DEL B E N I
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ADICIONES I1IST05ÍUAS
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m ADICIONES HISTORICAS
'. •;? Por la particular actitud de don Nicolás Suárez que ¿cumuló mu.
una .en este suelo, pero que en contraste con muchos que despa-
aua caudales a buen recaudo en el exterior, .no ' sacó: tus riquezas. aagay
sino que; por el contrario, diversificó-su economía para .beneficio
^ f u n d a n d o pueblos, escudas,-incluso un instituto de profeBiona- m
a agronomía én la Loma " M o n j i " (después Suárez)' y estableci- " V t ' V
por BU organización y confort casi so-diría fueron c i u d j d e - ' . ^ y
las hey en lamentables escombros, nuestro Departamento d o - .. f r f c j
a perpetuidad la memoria de este ilustre cruceño dsl Beni;
don Nicolás n o sólo dio nombre a una Firma, sino qué a través '
iuel emporio, magnificó también el nombre de este jirón patrio; Jal
* r del mar. Así, pues, la ingente riqueza se hizo en el Behi, y
e acabó. ' * / - ¿ .'"S
Valga este otro dato. Cuando alguien le preguntó dónde- había ''
j , don Nicolás respondió: " H a c e tanto tiempo que nací, q u é me he i'p-i !
í" < o ^ t d f f d o " . P a l a b r a s ' q u e encierran la pluralidad del concepto nacional d é -
Í5Í-J
éste hijo nacido, no precisamente en su seno, pero de manifiesta gratitud
" h a c í a l a geografía que le cobijara.
Sólo por estos ligeros datos salta pnes a la vista del menos avila-
do, el ladino proceder de Solares en contraposición con el generoso crite-
rio del magnate que, no o b s t a n t e estar el gobierno en deuda con él, ni
siquiera en esta oportunidad en la cual se haya justificado el cobro de
las libras esterlinas, jámas hizo mención alguna.
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Hay algo más que señalar para justificar la defensa de aquella prin-
cipal fortuna del Beni.
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Paraninfo Universitario,
Trinidad, noviembre 30 de 1976.
Publicado en El Diario, La Paz, juevss 3 de febrero de 1S77.
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GLOSARIO
(6) He aquí algunos nombres del "Frente Unico": Serafín Rivero Car-
valho, Jesús Rioja Aponte, Sócrates Parada Suárez, Juan Manuel
Hurlado Soliz, Gonzalo Suárez Dorado.
(1) Napoleón Solares, en carta dirigida al Comité Cívico del Beni. en te-
cha 18 de setiembre de 1968, en el tercer acápite dice: "SI estamos
ligados por la tradición, la geografía y la sangre, debemos estarlo a
su vez en el propósito indeclinable de integrarnos económica, cultu-
ral y socialmente. Esos ideales hicieren posible la formación del
Sector Oriental en la Convención del 38, que trabajó unido y firme
para lograr la vinculación ferroviaria de Santa Cruz y alcanzar
oíros conquistas en favor de ambos Departamentos". Y en lineas
teguidas, expresa: "Los documentos originales qae entrego al acer-
vo histórico del Beni, evidencia que benianos y craceños fueron siem-
pre solidarios en la defensa de los recíprocos intereses de ambos
pueblos; g qae Sania Cruz hacía causa común con el Beni, no sólo
para compensarlo por los recarsos qae se le privan a éste para des-
liarlos al financiamiento del F.Q. Corambá—Sonta Cruz, sino que
entendí': qae su calidad de hermano mayor lo obligaba a contribuir
al progreso g el desarrollo de nuestro Deparlamento".
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Santa Craz, Beni g NC., como Sector Oriental, ratiflctnd• el "Pac-
to de Caballeros", en el Inciso a) del panto 2o, la Representación
cruceña se compromete: "A ceder al Departamento del Beni el 3%
(tres por cienl») de la asignación del 11% (once por ciento) de ta
participación que tiene el Departamento de Sánta Crpz en la pro-
ducción petrolífera o sea el 36 6% de las rentas de dicho Departa-
mento para tal concepto. Bste porcentaje será aplicable a la vinca-
Iación de ambos Departamentos g hasta qae el Bent tenga explota-
ción petrolífera g cago rendimiento sea equivalente a la participa-
ción qae recibe de Santa Cruz". Firman: Germán Cháoez, Mario Or-
tlz Suárez, Daniel Antelo, Sixto Montero Hoqos, V/alter Suárez Lan-
dívar, Facundo Flores Jiménez, Fernando justiniano, Napoleón So-
lares Arias, Sócrates Parada Suárez.
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Sócrates Cháoez Suárez, Robín Vaca Monasterio, Jallj Vargcg Ve-
lasco, Miguel Angel Roca, Carlos Loalza Bellrán. Entre los "pirls-
tas" gamonales liog, figuran: Rigoberlo Suárez Canales, Assob Si-
món, Guillermo Ttneo Leigne, Germán Vargas Marlinez, Félix Pin-
to Saucedo, Pablo Dermizakg, Aldo Bravo Monasterio g otros que
se escapan de la memoria:
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A UN ILUMINADO
En estas páginas presento a un iluminado, a uno de esos hombres que
cruzaron por la vida derramando el tesoro de sus versos en estrofas aladas
como las mariposas blancas que poblaron el Monte Helicón.
—;—.— -—— : ——MMtlK?
Es de Hormando Orliz Chávez de quien he de referirme.
De origen hidalgo, nació en la ciudad de Trinidad (1) el 4 de octu-
bre de 1896. Fueron sus padres doña Etaín Chávez Vaqueros y don Mi-
guel O/t'Z Roca.
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Y es por esto también que el gran psso que unos cuantos hombres
animados de espíritu patriótico, habían decidido dar para sustraer a la
juventud beoiana de lás garras inexerables de la ignorancia, adquiere cou
el correr del tiempo mayor magnitud y más honda significación cívica
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El primer Rector fue el Dr. Ju»r. Lorenzo Campero, que en ese enton-
ce? desempeñaba el importante cargo de Secretario de la Prefectura del
Beni. Los alumnos fundadores del Colegio Oficial fueron 18 en total
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Años después funcionó en un local que ahora es la casa dsl Dr. 16-
li\ l'into Saucedo, sobre la calle "Manuel Limpias": y posteriormeato ocu
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Paraninfo Universitario,
Triaidad, 14 de julio de 1976.
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Nadie cegará jsmás ese amor al Beni: nadie podrá borrsr su nombre
ligado como a su propio aliento, inspirado en su sentir hecbo canción.
Horacio Rivero Egüez enfrentó larga enfermedad y al cabo de mu-
chos afios, falleció el 19 de agosto de 1973. Los suyos lloraron su muerte.
Y la lloraron también de todo corazón, todos sus amigis. •
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Era y o aún muy niño cuando concci a Gil Coímbra, por cao no pue-
do precisar el año en que iniciamos nuestra amistsd." Recuerdo sí, c o m o
si estuviera sucediendo en este momento, que la familia Coímbra Ojopi
llegó a Trinidad 8 vivir al lado de la casa que alquilaba mi madre, situa-
da sobre la calle 18 de Noviembre, exactamente la que ahora lleva el nú-
mero 556. A. pesar de llevarme con algunos años de edad, la veocidad du
su familia con la mía hizo que nos uniéramos como si fuésemos coetáneos.
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MAYA TANAKA
Muy breve será lo que tenga que escribir sobre la calidad artística
del solista más activo y delicado del conjunto vocal "Los Taitas" de la
capital beniana. Y con estos apuntes no guardo la pretensión de que mi
relato sed inobjetable. Por tanto, lo que anote enseguida, no es novela,
sino bocetos biográficos del sendero que, como cantante abrió Maya Ta
naka, destinados a perpetuar algunos recuerdos, simplificando tanto como
sea posible, todos los triunfos y los goces, así como también el acabado
cortejo de sufrimientos, dolores irradiantes y desgarradores de sste sobre-
saliente personaje.
He aquí el cuadro a tratarse:
Silvio Tanr.ko, era su nombre. Le llamabamos Maga.
Nació en Trinidad (Beni-Bolivia) el 30 de abril de 1932.
Como cantor, Maya fue p»ra nosotros los benlanos, el intérprete
criollo de mayor jerarquía. Sus méritos fueron brillantes, realzados y
prestigiados. En el cancionero benianeño (taquirari), pleno de calor, vis-
lumbró su renglón de exegético remarcable.
Su promoción y tu contacto de acercamiento con el público, ee pro-
yectaron en forma excepcional, porquo sus interpretaciones jamás cansaron
a sus admiradores.
Advino como cantor en las reuniones nocturnas que solía efectuar
con sus inseparables amigos Naco Kim, Oscar Velarde, Carlos Pérez, Chan-
go Chévez y otros, en casa de los hermanos Lacoa y donde doña Severa,
allá en la calle " S u c r e " , de Trinidad- Y esa inquietud y amor al canto,
casi a diario, le indujeron a organizar conjuntos de vocalistas.
El primer intento de estos inicios que, si bien no participó como
cantante en el conjunto, más sí lo dirigía, fue "Li'S darlos". Con este
éxito, organizó el cuarteto " irienlai", de breve existencia, integrado por
Sergio Suárez, Hugo Mercado y Oscar Rivero; él como figura central.
En 1952, funda el trío " Voces del Oriente": Maya, Abel (hoy Artu-
ro) Sobsnes y Oscar Velarde. Al retirarse Velarde, ingresó Ignacio Kim.
Este mismo año (1952), en la ciudad de La Paz, con Rubén Tudor y Car-
melo Guzmán crea el "Tilo Tropicui.".
El año 1960, el conjunto "'Mojos", integrado por Carlos Parada,
Chacho Viruez, Carmelo Guzmán y Maya como Bolista principal.
Después, en 1961, formó otro cuarteto: "Los Trinitarios", actuando
como esencial vocalista. Lo compusieron: Carlos Parada, Viruez, Maese,
Jesús Mansilla.
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como otras grabaciones; esta vez con los siguientes integrantes: Pepe Mae-
se, Hugo Mercado, Alfredo Aukel y Maya, que marcaron el sendero fy-rue
del prestigio, convirtiendo al conjunto en el exponente artístico de mayor
aceptación nacional.
Aparecen otros discos con versiones originales de Maya y de auto-
res locales, cuyas melodías ejecutadas con sentimiento profunda, señalan
«1 senoillo estilo del cancionero benianeño.
Cuando se escuchan los discos de Maya con su conjunto, ts inevi-
table recordar su afabilidad personal relacionada con su actividad de artis-
ta bohemio, poseído de un gran sentido dsl humor. Fue el cantor mas
apreciado por todo su pueblo.
Su vida, tempranamente truncada, perdurará en el recuerdo de sus
amigos. Su voz se apagó, pero sus canciones y su memoria no desapare-
cerán; seguirán viviendo en cada hogar que reponga eus discos y en cada
radiodifusora que repita estos surcos. Su figura queda ligada a la histo-
ria del sentimiento de su Hem amado, como un legado magnífico de tan-
tas penas, alegrías y esperanzas que supo proporcionarnos.'
Maya marchó hacia las multitudes cuando estaba en la plenitud de
su capacidad artística. Sus méritos suficientes de cantante exquisito, el
Beni los supo valorar. Por eso su temprana partida puso un manto os-
curo de profunda nostalgia. Su nombre es recordado con hondo penar y
sus canciones, conservadas como tesoros imborrables, evocadas con calor
y reparo.
El sábado 28 de de noviembre de 1979, Maya y "Los Taitaasis-
tieron invitados a la casa del entonces Agente del Lloyd Aéroo Boliviano
de Trinidad. Allí el cantor de los barrios populares de su ciudad de na-
cimiento eantó y chisteó gozosamente. Todos los asistentes al ágape,
reían y aplaudían también sus canciones que las ejecutaba con su estilo
inconfundible.
Cuando el sol había ya dejado de iluminar sus cálidos resplandores
y lá noche lanzaba radiante claridad, Maya aquel eábado 28 de noviem-
bre, abandona el festín y se dirige a su hogar.
Allí, ¿qué ocurriría. . . ? Lo evidente es que el artista retorna pavo-
rosamente al lugar de la fiesta para reagruparse con sus amigos, pero és-
tos ya no se encontraban ahí; estaban donde la amiga Chon Hurtado.
Maya acudió hasta ellos; su semblante reflejaba extrañas manifestaciones.
Sin exteriorizar lo que sentía, ocultando su dolor, bordonea su guitarra y
dice: "Paru despedirme de ustedes, uoy a ejecutar mi última canción"
(1). Al concluir sale violentamente del local con pasos desesperados, que-
dando el grupo de amigos con un interrogante; aunque esa actitud no era
sorpresiva, pues Maya acostumbraba retirarse "sin vísperas".
Pasaron pocos minutos. Una noticia venida como vendaval, llegó al
punto dejado antes por el cantor, con el triste e insubsanable mensaje de
que Maya habíase suicidado. El reloj marcaba las 22:00 horas. Un bala-
zo disparado en la boca truncó su existencia, dejándole tendido en el suelo.
Conjeturas y comentarios en todos los tonos, se pronunciaron desde
ese instante durante todo su velorio.
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Santiago de Chile f e x i l i o ) ,
m a y o de 1973.
MiiiMaat(aM*«**steMi(ii(M»«MM**»isiii*iiiii*i»*iiiiitiittiiiiiiii(isiei*iiii*i<«t«i>«iiiiiii«ii*i<tiissstii«iiiiiii(iiiiit«iiiti***4iiiiiiilisiiu»
GLOSARIO
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SALUDO A COCHABAMBA
Henos squí presentes por haber sido hoDradoe con la gentil invita-
ción formulada por la primera autoridad edilicia de la capital del Tunari
para estrechar el abrazo fraterno entre todos los Alcaldes de los Departa-
mentos de nuestra amada Bolivia y para celebrar dos magnos aconteci-
mientos históricos: el setquicenlenuno de nuestra creación de Estado
Soberano y la conmemoración de una fecha particularmente importante:
el 74 fie Stpnemb-r, que trasluce el profundo sentimiento de aquellas
almas grapdcs hacia el plano sublime de la libertad.
Por eso. aprocimando ese común espíritu de civismo para admirar los
festejos de tan excelsa fecha que justifican el permanente esfuerzo de un
pueblo que lucha con denuedo por^un integral desarrollo, hemos venido
v e n c e n d o barreras geográficas para traerles el efusivo saludo del alma
trinideña.
La institución de los pueblos es factura privilegiada de sus hoúibres
insignes que, rompiendo incomprensiones coetáneas, supieron audazmente
consolidar el prestigio solar para gloria, no únicamente del terruño, sino
de trancendencia Nacional.
Así perpetuarán en la memoria popular, omnipresente en la historia,
hombres de IB estructura moral de un Francisco del Rivero, Esteb' n Ar-
re y Melchor Villa de Guzrnán Quitón, genuinos forjadores de la libertad
de América.
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la divita del Ben'\ porque él, en sua 1.931 km. de recorrido navegable, es
un vitul itinerario de conexión interpartamental, además de ser pintoresco
por su abundancia de olas erizadas, siempre cubiertas de espuma, presen-
tando en todo su trayecto a ambos contornos de sus riberas, un copioso
bosque tropical de riquezas inexploradas; 1 y en aquella vegetación salvaje y
colosal que es excelente c o b i j o de fieras, mamíferos, reptiles, aves e insec-
tos, corno tú describes, se modela un enredo tétrico por el pleonasmo m i s -
terioso de "murmullos y gritos de animales invisibles..."
T e repito que no vayas a considerar como una destrucción crítica a
tu libro esta sugestión; al contrario debes tomarla c o m o una colaboración
honenta con que te aporta un pariente, un exalumuo y colega, además.
Creo, con sinceridad, que si tienes presente mi observación y apuntas las
reflexiones c o m o un complemento para tu importante historia sobre el Be-
ni, tu libro cumpliría un mejor contenido cultural para alilftjbrarle m e j o r
el camino al lector ávido de datos. Y o solamente espero haber hecho un
cumplido en esta tarea, c o m o beniano, al contribuir a que la palabra
Mniiwéee unlversalice c o m o expresión nativa de nuestra raza m a d r e . T e -
nemos que dar a la palabra una raíz moxeña pura, surgida del idioma de
los verdaderamente llamados M o x o s , o sean aquellos que habitaban la
parte media del Mamoré, para hacerla vernacular, propia de nosotros. Los
de más arriba y los de más abajo de este río pertenecieron a la misma
provincia, recién cuando la reducción por misioneros de la Compañía de
Jesús.
P o r lo demás, en mi sencilla manera de ¡.preciar y aún con ceñida
inteligencia sobre el panorama mamorefto, el contenido de tu paciente es-
tudio es muy luminoso y su esencia una invalorable contribución al conoci-
miento de nuestras riquezas y heredad nacionales.
Ilay además do» cualidades que distinguen a la obra y a tu estilo:
elegancia iitereria alejada del academismo vulgar y amenidad precisa en
el relato. Pintas con viveza lo profundo de lo que no debo imaginarse el
lector: la sencillez aterradora de nuestra exuberante naturaleza sintetiza-
da en una exacta expresión que los primitivos moxeños, en profunda de-
voción y admiración telúrica, férvidamente dijeron, " ¡ M é m u r e l "
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ño, desde donde vigilaba lúa oficinas de Trinidad, las estancias ganaderás
de Moxos y el tráfico fluvial entre Santa Cruz y el Beni.
Este sátrapa, dueño y señor" de vidas, fue muy indolente con los
trabajadores a sus órdenes. La esclavitud era brutal. Se solazaba con el
espectáculo resignado de la gente. Constituido en propietario absoluto de
las familias del lugar que perdieron la alegría d« vivir, convirtió su villa en
úña cavérna tenebrosa plagada de angustia y de muerte, poblada de es-
panto, donde la ponzoña del sadismo crecía como herbazal malsano. A b u -
saba de las hijas de los obreros. Todas las chicas de buen talante, desde
la edad de 12 a 14 años, las quitaba a sus padres para engrosar el harén
que el canalla creara para sus placeres infames; y cuando las renovaba por
otras mozas vírgenes, lus anteriores las despachaba a los siringales para
mujeres de los fregueses. A loa jovenzuelos les castraba, de cuya "opera-
c i ó n " muchos morían.
Ccntaba con una serie de calabozos que la bárbara imaginación del
opresor inventara para castigar a hombres > mujeres, torturándoles a mo-
do de sujetarles a su funesto yugo.
Don Félix Jiménez que fuera muchacho de mano y criado desde
niño por duu Rómulo, siendo el amnuense de su confianza, según declara-
ciones del mismo qu« v i v i ó , y murió ya centenario en esta quinta a fines
de la década de 19fi0 ó principios de 1970, refirió que su patrón llevó
desde Santa Cruz, con engaño, a una joven mujer muy bellá, llamada El-
vira M-.rcó, con la promesa de matrimoniarse. Pero llegada a la Loma,
fue una más da las domésticas incorporados al serrallo de aquel ser
inhumano.
Una mañana que don Félix conversaba sin ninguna malicia con la
hormona rhiq iilla, fue sorprendido por don Rómulo. Al instante le hizo
.'itirantíir sujeto a una escalera, descargándole cien azotes a "nalga pelada"
> seguidamente, con l..s posaderas chorreando sangre, le mandó componer
poteras en el techado dt; fedificio principal, en pleno sol abrasador, que
aíectó las heridas, cuyas huellas quedaron pintadas hasta su muerte.
Este mismo informante fue testigo de varios crímenes ocurridos en
I.omii Suárez. Los muertos -decía- eran arrojados a la laguna donde resi-
día el "presidente" (caimán), para su cernida.
Dicha fermentación en los ánimos de los indígenas ebferos, indicaba
ya prepararse un gran golpe, fruto de la indignación, largo tiempo compri-
mida, a semejanza de un río que aumenta do caudal a medida que se aleja
uo sus nacientes.
Era semana santa cuando don Rómulo se encofraba en Trinidad. El
jueves, en vez de ir a misa, ensilla su caballo y presurosamente viaja a la
Loma, donde tenía sentenciadas a muerte a varias mujeres que dejó engri-
lladas en las ctldas. La señora Baibiuá Lozano vda. de Gutiérrez fue la
última con quien charló ese día don Rómulo, en Trinidad, cuando viajaba
tras sus presas...
Vino la quieta noche de ese estío ardientemente pro'metedor. Nada
alteraba aquel silencio. El tiempo se mostraba amigo de la soledad. Ni un
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ta civil-militar; pues aquí tiene asiento una guarnición del Distrito Naval
ÍVo. 2, y también funciona la Escuela de Marinería " L i t o r a l " , astillero,
etc. . ^ .
El magisterio rural cuenta en ceta cindadela con una eseuela'prima-
mafir completa, ciclo imtermedio, cuyo edificio fue gestionado por el se-
ñor Guillermo Burton Rodríguez, como asesor de la Junta Vecinal de la
Loma Suárez.
La pi-blaclón se halla ubicada en una altura artificial y el nombre
de " l o m a " se origina de tal cima.
Loma Monji parece haber sido algún cementeaio de los antiguos
estantes nativos Existen muchos restos humanos sepultados en cántaros
que, por el desvastamieuto a través del tiempo, sueleo asomar cráneos a
flor de tierra.
Loma Suárez ha sido declarada Monumento Histórico por la Casa
~de la Cultura clel Beni.
A la fecha tiene rango de cantón. Existe Alcaldía Municipal, Gobier-
no Civil, en caso de ape'ación, para hacer cumplir las órdenes del Corregi-
dor. También funciona la Cooperativa de Luz Eléctrica y un Club de
.Madres.
Algunos ambiciosos por la fortuna, pusieron en peligro de destruc-
ción esta hermosa y panorámica altura de tantas tradiciones, en procura
de entierros ricos. I'ues existe la torpe creencia que don Rómulo enterró
muchos miles de libras esterlinas remesadas desde Cachuela Esperanza.
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Por otra parte, Daza Palmero debía ser eliminado, dándole muerte,
siendo esta la base para el éxito del plan que perseguía el objeto de
tomar el control de la capital beniant, con anuencia, complicidad y
aprobación del prefecto Pando, que en tal forma traicionaba la confianza
que la junta de gobierno había depositado en su persona al designarle
prefecto del Beni.
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GLOSARIO
Crímenes y Fusilamiento
de Julio Coímbra
La hifltoria dramática d i la vida departamental desde los primeros
años de la creación del Beni, siguió debatiéndose con otros lamentables
,aconteceres. Esa tranquila alegría y sencillez de su gente, "producto de
la naturaleza pampeana", fue afteruda sin interrupción; pues con dema-
siada frecuencia el genio del mal parece .detenerse pera adquirir nuevas
tuerzas e inferir duros golpes Por tanto, transmitir episodios para reco-
nocer con claridad y sin ambages su exacto contenido, se torna algo
escabroso.
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Así fue andando el tiempo, hasta que un mal día Coímbra amaneció
con el signo de matar. Invita al hijo de la señora Carnargo, de nombro
Antonio Arteaga que era el Administrador de los trabajos de la tatancia,
para ir de cacería; se embarcan en una canoa y cruzan la laguna. Solo»
los dos, Coímbra le dispard*un tiro de fusil n su compañ-ro y le arroja al
agua. Regresa y con engaño lie va al hermano Fabriciano, haciendo con és-
te lo propio. Nuevamente retorna «1 "iiesto ganadero en procura de otras
presas pero esta vez doña Dcmitila tuvo malos presentimientos al verle a
Coímbra bajar de la canoa manchado de sangre y sin sus familiares. Corre ha-
cia él y se abraza de sus.piernis; le suplica que no la mate. Por trágico
capricho del destino, da muerte a In esposa de Fabriciano para culminar
la hazaña con su protectora,, a pesar do los ruegos de su consorte, a quien
Coímbra respetó mucho.
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las madrea para que "sepan educar .a sus hijos desde temprana e d a d " , po-
niéndose él como ejemplo y culpando a sus padrea que no le castigaron u
orientaron desde su primera aventura criminal, cometida a los siete años
utilizando una tijera, con el hijito de la doméstica de su caca mientras el
pequeño dormfa en una hamaca. ' _
Fue complacido. Leamos y reflexionemos serenamente el testimonio de
^¿te singular mensaje:
Señores:
Señores:
ña llegado el momento en qae la susciila v!clim&, se honre
en dirigirles las últimas expresiones de un alma: No me juzguéis, her-
manos míos, porque el juicio que vosotros, formáis de mi persona, os
será aplicado con más severidad a vosotros, qqe creéis ser humilde cor-
dero de este mundo, y tal vez tenéis necesidad de indulgencia por los
pecados qae cometéis sin cesar. No sabéis pues hay muchas acciones, que
no son crímenes ante los ojos de Dios, y que el mundo considera como
fallas ligeras. Se acercarán, hermanos míos, los, tiempos en que la gran
fraternidad reinará en este globo; la ley de Cristo es la que regirá a
los hombres y yo os pido, procurad el senderomque yo he emprendido:
amaos como hijos de un mismo padre• no hagáis diferencia entre los
desgraciados porque he comprendido que Dios es quien a cada uno defi
ne su destino, para tener igualdad de derecho en la vida; pnes a nadie es
permitido quitar la vida a otro, y los criminales di'.ben tener sanción
para que sirva de ejemplo en la posteridad.
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niiiiiiii:iiiiiiiiiiiiiiiiiiiMiiiiiiiitHiiMtiiiiiit(iMiiiiiiiiiiiiitliiliiitiiiiiniiiiiiiiiiiMiniiiiiiiiiiiiilitli>iifitliittiiiiiiiiiiiiliiiitiit
GLOSARIO
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La Noche Hillmann
Bien conocidas son las hazañas de Adolfo Hillmann, de quien deli-
nearemos en seguida. Ya, en forma novelada, sus acontecimientos fue-
ron relatados por el Cnl. Alfredo Vaca Medrano, con el título: "Olien-
do Pedraza".
En estas líneas a modo de complemento y siguiendo la huella de
provisión de apuntes en probanza, sin salimos de la esfera del testimonio
oral de la señora Virginia Chávez, la misma que PII BU juventud presencia^
ra los crímenes de don Julio Coímbra (¡qué sino!), fe pone de relieve la
exactitud con que se produjo el epílogo concatenado del hecho de este pro-
tagonista, de manera que no quede grieta donde pueda guarnecerse la
incertidumbre.
Lob resultados que se extraen de tales informaciones, no pueden ser
más terminantes y autorizados. La señora Chávez fue vecina de un busca-
dor de fortuna y de aventuras que fuera el armazón definitivo del futuro
plan.
La relación es estimable por proceder de fuentes allegadas espiri-
tualmente Doña Virginia era comadre de los asesinados. Consiguientemen-
te. no quepa ninguna duda, constituyendo perfecta demostración del conoci-
miento de aquellos actos vigorosamente veraces, prueba de alta valía, alejado
de las imaginaciones fantásticas o suposiciones ficticias.
Así, con el acopio de elementos de convicción, concebido en los térmi-
nos de que hace crédito lo aseverado por la señora Virginia Chávez, se
relatan esos antecedentes y consecuentes más o menos prolijos, recoi'iiendo
brevemente el marco de la configuración geográfica que da mayor luz y
refuerza el tema sobre lo ocurrido en el período que estos crímenes germi-
naron.
Cualesquiera hayan sido los motivos, lo cierto es que el principal ac-
tor fue un cochabanibino. falsificador de billetes que pronto fuera descubierto
por la policía, allá por el año 1931-52. Este maleante alquiló al señor Lucas
Terrazas una habitación sobre la calle " h o n d a " o "Portachuelo", llamada
así por la profundidad, una, y por residir sobre el barrio muchos porta-
chueleños, casi final de la avenida Santa Cruz, enfrente de la familia de
doña Virginia Chávez.
Hillmann hizo amistad con el falsificador de billetes y a m ' o s , a la
vez. se acercaron a la familia del señor Terrazas, poseedor de uní tejería.
Los Terrazas acostumbraban celebrar el fin de semana con picantes y
chicha ' colla", fuente propicia, para la intimidad de llillma ui y el falsifica-
dor de billetes.
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ADICIONES "HISTORICAS
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ADICIONES HISTORICAS
CONSUMMATUN EST
Podrían aún ¡asertarse muchas huellas de distintos colores originales
sobre tantos sucesos ocurridos en tiempos lejanos; verídicos unos y nove-
lescos otros.
FIN
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Esta edición de 300 ejemplares de
ADICIONES HISTORICAS BE-
N I A N A S , se terminó de imprimir el
30 de octubre de 1984, en los Talle-
res Tipográficos de "Imprenta San An-
tonio", de los hermano Vélez Chávez.
Trinidad, Beni, Bolivia.