Está en la página 1de 3

“ El preludio de un glorioso milagro”

Juan 11.14-32

Juan 11:14 Entonces Jesús, por eso, les dijo claramente: Lázaro ha muerto;
Juan 11:15 y por causa de vosotros me alegro de no haber estado allí, para que creáis;
pero vamos a donde está él.
Juan 11:16 Tomás, llamado el Dídimo, dijo entonces a sus condiscípulos: Vamos
nosotros también para morir con El.
Juan 11:17 Llegó, pues, Jesús y halló que ya hacía cuatro días que estaba en el
sepulcro.
Juan 11:18 Betania estaba cerca de Jerusalén, como a tres kilómetros;
Juan 11:19 y muchos de los judíos habían venido a casa de Marta y María, para
consolarlas por la muerte de su hermano.
Juan 11:20 Entonces Marta, cuando oyó que Jesús venía, fue a su encuentro, pero
María se quedó sentada en casa.
Juan 11:21 Y Marta dijo a Jesús: Señor, si hubieras estado aquí, mi hermano no habría
muerto.
Juan 11:22 Aun ahora, yo sé que todo lo que pidas a Dios, Dios te lo concederá.
Juan 11:23 Jesús le dijo: Tu hermano resucitará.
Juan 11:24 Marta le contestó: Yo sé que resucitará en la resurrección, en el día final.

1………….

Martha y Maria tuvieron el mismo problema del noble y su hijo sanado por la Palabra
de Jesús …..Pat 65-66… Adrián Rogers…
2………….
3…………
4…………

Su fe es genuina… como la de su hermana… pero está a puertas de ver la Gloria de su


Salvador… en inminencia de experimentar un milagro…

La fe en Cristo suele ser diferente a la fe en los milagros….

A tantos de nosotros nos importa sólo nuestra salud, nuestro bienestar, nuestras
familias y nuestro futuro, pero no la voluntad y el reino de Jesús. Ese tipo de fe no es
fuerte. Adrián Rogers. Lo cierto es que no podemos amar a nuestras familias como
deberíamos hasta que nuestro amor más grande sea consagrado al propio Jesús.

A muchos de nosotros nos preocupa demasiado la salud física pero no la espiritual.

Juan 11:25 Jesús le dijo: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque
muera, vivirá,
Juan 11:26 y todo el que vive y cree en mí, no morirá jamás. ¿Crees esto?
Juan 11:27 Ella le dijo: Sí, Señor; yo he creído que tú eres el Cristo, el Hijo de Dios, el
que viene al mundo.
Juan 11:28 Y habiendo dicho esto, se fue y llamó a su hermana María, diciéndole en
secreto: El Maestro está aquí, y te llama.
Juan 11:29 Tan pronto como ella lo oyó, se levantó rápidamente y fue hacia El.
Juan 11:30 Pues Jesús aún no había entrado en la aldea, sino que todavía estaba en el
lugar donde Marta le había encontrado.
Juan 11:31 Entonces los judíos que estaban con ella en la casa consolándola, cuando
vieron que María se levantó de prisa y salió, la siguieron, suponiendo que iba al
sepulcro a llorar allí.
Juan 11:32 Cuando María llegó adonde estaba Jesús, al verle, se arrojó entonces a sus
pies, diciéndole: Señor, si hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto.

Un milagro es una obra sobrenatural de Dios en el nombre de Cristo y por El Espíritu


Santo en circunstancias de absoluta imposibilidad humana.

Y nada tan irrediable, irreversible e imposible de resolver para el hombre como la


muerte… física … espiritual ¡!!

Hay obstaculos para la fe…. Hay debilidad en nuestra comunión y experiencia con el
Espíritu Santo… regularmente fragmentada por nuestra incredulidad y concupisencia.

La fe con reproches a Jesus está a punto de convertirse en incredulidad.

La fe de estas mujeres era grande … si Jesus hubiera estado ahí… Dios estuvo ahí,
involucrado en su enfermedad y muerte… ellas lo ignoraban … no era como la presunta
fe de los fariseos … y aún del noble al cual le sano su hijo…

Juan 4:47 Cuando él oyó que Jesús había venido de Judea a Galilea, fue a su encuentro
y le suplicaba que bajara y sanara a su hijo, porque estaba al borde de la muerte.
Juan 4:48 Jesús entonces le dijo: Si no veis señales y prodigios, no creeréis.
Juan 4:49 El oficial del rey le dijo: Señor, baja antes de que mi hijo muera.

Mateo 12:39… la demanda de una generación adúltera para creer…

Mateo 27:42… Está es la solicitud más mezquina del incrédulo… una solicitud que
precede a la condenación y el infierno…

NO! NO! NO! No es VER ES CREER sino CREER ES VER …

Cuando demandamos señales estamos deshonrando a Dios… lo que estamos haciendo


es decir… no me basta tu palabra dame una prueba…. Entonces ya no es Fe…es un
insulto al Padre… Recuerdan a Tomas?...

Juan 20:27 Luego dijo a Tomás: Acerca aquí tu dedo, y mira mis manos; extiende aquí
tu mano y métela en mi costado; y no seas incrédulo, sino creyente.
Juan 20:28 Respondió Tomás y le dijo: ¡Señor mío y Dios mío!
Juan 20:29 Jesús le dijo: ¿Porque me has visto has creído? Dichosos los que no vieron,
y sin embargo creyeron.
Juan 20:30 Y muchas otras señales hizo también Jesús en presencia de sus discípulos,
que no están escritas en este libro;
Juan 20:31 pero éstas se han escrito para que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de
Dios; y para que al creer, tengáis vida en su nombre.

La no consiste tanto en recibir de Dios las cosas que quiero sino aceptar de Dios las
cosas que él me da.

Las señales que pidió Gedeon no era falta de fe en Dios … no es que dudara de Dios…
es que no confiaba en sí mismo..

Jueces 6:14 Y el Señor lo miró, y dijo: Ve con esta tu fuerza, y libra a Israel de la mano
de los madianitas. ¿No te he enviado yo?
Jueces 6:15 Y él respondió: Ah Señor, ¿cómo libraré a Israel? He aquí que mi familia es
la más pobre en Manasés, y yo el menor de la casa de mi padre.
Jueces 6:16 Pero el Señor le dijo: Ciertamente yo estaré contigo, y derrotarás a Madián
como a un solo hombre.
Jueces 6:17 Y Gedeón le dijo: Si he hallado gracia ante tus ojos, muéstrame una señal
de que eres tú el que hablas conmigo.

Es cierto que las señales son herramientas muy eficaces en el evangelismo….

Juan 2:23 Cuando estaba en Jerusalén durante la fiesta de la Pascua, muchos creyeron
en su nombre al ver las señales que hacía.
Juan 2:24 Pero Jesús, por su parte, no se confiaba a ellos, porque conocía a todos,
Juan 2:25 y no tenía necesidad de que nadie le diera testimonio del hombre, pues El
sabía lo que había en el hombre.

Las personas creían en Jesus pero él no creía en ellos , pues no lo seguían por lo que El
era … El Mesías… sino por los milagros…

Ellos no tenían hambre de Dios, sino del milagro… una hambre natural, terrenal, de sus
vientres como cuando multiplico panes y peces para alimentar a 5.000 y sus familias.

Juan 6:26 Jesús les respondió y dijo: En verdad, en verdad os digo: me buscáis, no
porque hayáis visto señales, sino porque habéis comido de los panes y os habéis
saciado.
Juan 6:27 Trabajad, no por el alimento que perece, sino por el alimento que
permanece para vida eterna, el cual el Hijo del Hombre os dará, porque a éste es a
quien el Padre, Dios, ha marcado con su sello.

También podría gustarte