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PORTAFOLIO

 . ¿Qué se lee?

Se lee una imagen, un texto, en síntesis todo lo que vean nuestros sentidos.

 ¿Qué es un texto?

Un texto es una composición de signos codificados en un sistema de escritura


que forma una unidad de sentido. También es una composición de caracteres
imprimibles generados por un algoritmo de cifrado que, aunque no tienen
sentido para cualquier persona, sí puede ser descifrado por su destinatario
original.

 . ¿Qué es lo último que he leído?

ORGULLO Y PREJUICIO DE JANE AUSTEN

 . ¿Qué es leer?

Ser capaz de leer, interpretar o comprender. Es situarnos frente a un texto


escrito y decodificar el mensaje que nos quiere transmitir el autor. La lectura es
un proceso mental y visual. En este proceso se deduce el significado de un
texto, se interpreta su contenido, se comprende el mensaje, se realizan
inferencias y cuestionamientos.

 ¿Cuándo sé que comprendí un texto?

Cundo hablo del tema con propiedad y comprendo la intensión del autor en
torno al tema que este plasmado en la lectura.

 ¿Qué estrategia de lectura es la que más favorece su proceso de


comprensión?
Siempre uso el método de imaginarme lo que leo ya que mi mente recuerda
más fácil imágenes y así me resulta más sencillo la compresión.
Leer detenidamente, resaltando ideas claves y haciendo micro-sintesis a lo largo
del texto.
PASOS PARA LECTURA EN VOZ ALTA
1. Escoger texto
2. Analizar y reconocer la estructura
3. División (inicio, nudo, desenlace)
4. Búsqueda de elementos locales y contextuales
5. Reconocimiento de voces, ritmo y suceso relevante del texto
6. Practicar su lectura
7. Exposición de su lectura
06-08-2021

1. A caballo regalado no se le mira el colmillo.


2. Más vale pájaro en mano que 100 volando.
3. Más sabe el diablo por viejo que por diablo.
4. Aunque la mona se vista de seda, mona se queda.
5. La curiosidad mató al gato.
6. Después de la tormenta viene la calma.
7. Camarón que se duerme se lo lleva la corriente.
8. A cada marrano le llega su san pedro.
9. Casa de herrero, cuchillo de palo.
10. Lo que no mata engorda.
11. El que madruga dios le ayuda.
12. Más vale maña que por fuerza.
13. Por la boca muere el pez.
14. No juzgues un libro por su portada.
15. No todo lo que brilla es oro.
16. Perro que ladra no muerde.
17. A mal tiempo, buena cara.
18. Ojos que no ven, corazón que no siente.
19. Lento pero seguro.
20. El dinero no da la felicidad.
21. Desafortunado en el juego, pero fortuna en el corazón.

BIOGRAFIA EMILIA PARDO


Es doña Emilia una figura reconocida en la vida literaria, cultural y social. En
1908 comienza a utilizar el título de Condesa de Pardo Bazán, que le otorga
Alfonso XIII en reconocimiento a su importancia en el mundo literario, fue una
mujer brillante, preparada y pionera en su tiempo. Las posibilidades
económicas de su familia le permitieron recibir una educación que supo
aprovechar y cultivar hasta convertirse en novelista, poetisa, periodista,
traductora, crítica literaria, editora, catedrática universitaria, conferenciante. Y
ser la introductora del naturalismo francés en España. Pero casi nada de eso le
sirvió en vida ni le reportó el reconocimiento que merecía, sino más bien lo
contrario: críticas, insultos machistas y discriminación hasta por sus propios
compañeros escritores, que le negaron hasta tres veces el ingreso en la Real
Academia Española (RAE) a pesar de sus méritos.

Pero tal vez por su inteligencia, Emilia vivió siempre según sus convicciones, y
por eso antepuso la literatura en su vida, defendió la instrucción y los derechos
de las mujeres en sus publicaciones pero también en la vida pública y
ejerciéndolos hasta convertirse en la primera catedrática de Literatura en la
Universidad Central de Madrid, en la primera presidenta de la sección de
Literatura Ateneo y ser la primera corresponsal de prensa en el extranjero, en
Roma y en París. Emilia Pardo Bazán nace el 16 de septiembre de 1851 en La
Coruña, ciudad que siempre aparece en sus novelas bajo el nombre de
«Marineda». Hija única de don José Pardo Bazán y Mosquera y de doña
Amalia de la Rúa Figueroa y Somoza, recibe una educación esmerada. Lectora
infatigable desde los ocho años, a los nueve compuso sus primeros versos, y a
los quince su primer cuento, «Un matrimonio del siglo XIX, que envió al
Almanaque de La Soberanía Nacional, y que sería el primero de los
numerosísimos cuentos -cerca de 600- que publicaría a lo largo de su vida.
EJERCICIO LECTURA:
Trabajo sobre cuentos de amor de Emilia Pardo Bazán
Escoger el texto
Analizar y reconocer la estructura del texto (parte del texto)
División del texto: inicio, desarrollo y final
Búsqueda de los elementos locales y contextuales
Reconocimiento de las voces, del ritmo, en el suceso más importante del texto
Ensayar la lectura
Presentación de la lectura
Lectura del texto:

El corazón perdido
Yendo una tardecita de paseo por las calles de la ciudad, vi en el suelo un
Objeto rojo: me bajé: era un sangriento y vivo corazón que recogí
Cuidadosamente. Debe de habérsele perdido á alguna mujer—pensé al
Observar la blandura y delicadeza de la tierna víscera que, al contacto de mis
Dedos, palpitaba como si estuviese todavía dentro del pecho de su dueña.—
Lo envolví con esmero en un blanco paño, lo abrigué, lo escondí bajo mi
ropa, y me dediqué á averiguar quién era la mujer que había perdido el
corazón en la calle. Para indagar mejor, adquirí unos maravillosos anteojos,
que permitían ver, al través del corpiño, de la ropa interior, de la carne y de
las costillas—como por esos relicarios que son el busto de una santa y tienen
en el pecho una ventanita de cristal—el lugar que ocupa el corazón.
Apenas me hube calado mis anteojos mágicos, miré ansiosamente á la
primera mujer que pasaba, y ¡oh asombro! la mujer no tenía corazón. Ella
debía de ser, sin duda, la propietaria de mi hallazgo. Lo raro fué que, al
decirla yo cómo había encontrado su corazón y lo conservaba á sus órdenes
por si gustaba recogerlo, la mujer indignada juró y perjuró que no había
perdido cosa alguna; que su corazón estaba donde solía y que lo sentía
perfectamente pulsar, recibir y expeler la sangre. En vista de la terquedad de
la mujer, la dejé y me volví hacia otra, joven, linda, seductora, alegre. ¡Dios
santo! En su blanco pecho vi la misma oquedad, el mismo agujero rosado, sin
nada allá dentro, nada, nada. ¡Tampoco ésta tenía corazón! Y cuando la ofrecí
respetuosamente el que yo llevaba guardadito, menos aún lo quiso admitir,
alegando que era ofenderla de un modo grave suponer que ó la faltaba el
corazón, ó era tan descuidada que había podido perderlo así en la vía pública
sin que lo advirtiese.
Y pasaron centenares de mujeres, viejas y mozas, lindas y feas, morenas y
pelirrubias, melancólicas y vivarachas; y á todas las eché los anteojos y en
todas noté que del corazón sólo tenían el sitio, pero que el órgano, ó no había
existido nunca, ó se había perdido tiempos atrás. Y todas, todas sin excepción
alguna, al querer yo devolverles el corazón de que carecían, negábanse á
aceptarlo, ya porque creían tenerlo, ya porque sin él se encontraban
divinamente, ya porque se juzgaban injuriadas por la oferta, ya porque no se
atrevían á arrostrar el peligro de poseer un corazón.—Iba desesperando de
restituir á un pecho de mujer el pobre corazón abandonado, cuando por
casualidad, con ayuda de mis prodigiosos lentes, acerté á ver que pasaba por
la calle una niña pálida, y en su pecho ¡por fin! distinguí un corazón, un
verdadero corazón de carne, que saltaba, latía y sentía. No sé por qué—pues
reconozco que era un absurdo brindar corazón á quien lo tenía tan vivo y tan
despierto—se me ocurrió hacer la prueba de presentarla el que habían
desechado todas; y he aquí que la niña, en vez de rechazarme como las
demás, abrió el seno y recibió el corazón que yo, en mi fatiga, iba á dejar otra
vez caído sobre los guijarros.
Enriquecida con dos corazones, la niña pálida se puso mucho más pálida
aún: las emociones, por insignificantes que fuesen, la estremecían hasta la
médula; los afectos vibraban en ella con cruel intensidad; la amistad, la
compasión, la tristeza, la alegría, el amor, los celos, todo era en ella profundo
y terrible; y la muy necia, en vez de resolverse á suprimir uno de sus dos
corazones, ó los dos á un tiempo, diríase que se complacía en vivir doble vida
espiritual queriendo, gozando y sufriendo por duplicado, sumando
impresiones de esas que bastan para extinguir la vida. La criatura era como
vela encendida por los dos cabos, que se consume en breves instantes. Y, en
efecto, se consumió. Tendida en su lecho de muerte, lívida y tan demacrada y
delgada que parecía un pajarillo, vinieron los médicos y aseguraron que, lo
que la arrebataba de este mundo era la ruptura de un aneurisma. Ninguno
(¡son tan torpes!) supo adivinar la verdad: ninguno comprendió que la niña se
había muerto por cometer la imprudencia de dar asilo en su pecho á un
corazón perdido en la calle.
Palabras desconocidas:
CARPIÑO: Prenda de vestir femenina tipo corsé.
ARROSTRAR: Hacer frente a los peligros o dificultades con valor.
GUIJARROS: Piedra pequeña y redondeada a causa de la erosión que se
encuentra generalmente a orillas de ríos y arroyos.
LIVIDA: Pálido
ANEURISMA: Un aneurisma es una protuberancia en un punto débil de una
pared arterial. Las paredes de un aneurisma puede ser lo suficientemente
delgadas como para que se produzca una rotura.
FRASE: La parte donde la mujer indignada juro y perjuró que no había perdido
cosa alguna que el corazón estaba donde debía y que lo sentía.
INTRODUCCION: El personaje recoge el sangrento corazón, el cual pensó que
se le debió caer a alguna mujer.
NUDO: Esta en la parte donde todas las mujeres a las que les pregunta si
había perdido el corazón les respondían que no o se negaban a aceptarlo
porque creían tenerlo o no necesitarlo.
DESELANCE: La niña que murió por cometer el error y la imprudencia de
refugiar y recibir el corazón perdido en la calle.
CONCEPTOS DE LEER: Leer es situarnos frente a un texto escrito y
decodificar el mensaje que nos quiere transmitir el autor.

La lectura es un proceso mental y visual. En este proceso se deduce el


significado de un texto, se interpreta su contenido, se comprende el mensaje,
se realizan inferencias y cuestionamientos.

Leer no es solo reproducir un texto en sonidos, sino que es una actividad de


interacción. Cuando escribimos un texto organizamos el contenido de nuestro
pensamiento de manera que el otro pueda comprenderlo mediante la lectura.

Se aprende a leer a muy temprana edad, pero es necesario profundizar en


técnicas de comprensión lectora para que la lectura no sea sólo superficial sino
de aprendizaje. Lo más importante no es leer rápido sino leer bien. Leer bien
implica comprender lo que se lee y así poder adquirir conocimiento.

ESTRUCTURA Y CARACTERISTICAS DEL CUENTO CORTO:

La estructura del cuento se compone de tres partes: introducción, desarrollo o


nudo y desenlace. A través de la introducción el autor nos presenta la situación
que dará forma a los sucesos de la historia mediante la intervención de los
personajes. Esos sucesos avanzan en acción ascendente y progresivamente
creando un problema o conflicto hasta llegar al punto culminante o clímax de
máxima tensión. Luego, le sigue una acción descendente en la que se presenta
la solución del problema o conflicto en el desenlace. Existen unos elementos
que son imprescindibles al momento de trabajar el relato de un cuento, estos
son: personajes, acción y ambiente. Veamos. Entre las principales
características de un cuento se destacan que: Puede estar narrado en primera,
segunda o tercera persona. A diferencia de la novela, es una narración breve
con trama simple y pocos personajes. Mantiene la misma estructura que una
novela: tiene una introducción, un nudo y un desenlace.

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