PRECES EN TIEMPO DE PANDEMIA - 2

Oremos con total confianza a Dios, lleno de misericordia. Digamos: Señor,

muestra tu poder y misericordia.

1. Por los enfermos e infectados: Señor, te rogamos por su salud. Te pedimos que los
ayudes, y que sostengas sus cuerpos y espíritus. Te pedimos que se acerquen a ti y
busquen tu rostro. Te suplicamos que, conforme a tu infinita bondad y
misericordia, detengas la propagación de la infección.
2. Intercedemos por nuestra población vulnerable: Dios, protege a nuestros ancianos
y a los que sufren de enfermedades crónicas. Líbralos de esta infección. Te
pedimos por los pobres y para que a nadie falte la asistencia sanitaria.
3. Te pedimos también por los jóvenes y los más fuertes: Señor, dales la precaución
necesaria para evitar que propaguen involuntariamente esta enfermedad.
Muévelos a ayudar y a ejercer la solidaridad con los enfermos y necesitados.
4. Padre, te rogamos por nuestro gobierno: ayuda a nuestros gobernantes a tomar
decisiones sabias y justas para el gobierno de nuestra nación y para designar los
recursos necesarios para combatir esta pandemia.
5. Oramos por la comunidad científica. Por los que llevan la carga de estudiar esta
enfermedad, desarrollar medicamentos y comunicar información veraz y útil para
todos nosotros: Señor, dales conocimiento, sabiduría y acierto en sus
investigaciones y proyectos.
6. Señor, te pedimos por los medios de comunicación: ayúdalos a proporcionar
información actualizada y veraz, siendo agentes de transmisión de la verdad y
promotores de caridad y esperanza.
7. Padre, intercede, por aquellos con problemas de salud mental, o quienes sufren la
soledad o están ansiosos e indefensos; ayúdales a sentir tu presencia donde quiera
que estén, y a encontrar en ti la paz y el consuelo.
8. Señor, te suplicamos por las personas sin hogar, quienes están pasando por
pruebas muy duras en este tiempo. Protégelos de la pandemia y provee para sus
necesidades.
9. Te pedimos por los líderes empresariales que toman decisiones difíciles que
afectan la vida de sus empleados y empresas: Señor, dales sabiduría y generosidad.
Toca sus corazones y ayúdalos a ser líderes dispuestos a sacrificarse y a promover
iniciativas e innovaciones para ayudar a los trabajadores y a la sociedad.

Atiende, oh Jesús, médico divino, las suplicas de aquellos a quienes has

redimido con tu Sangre preciosa, tú que vives y reinas por los siglos de los
siglos. Amén.