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S2. Actividad 1.

Las personas

No obstante que se ha tratado a la persona y la personalidad desde el módulo 1 “Hecho,


acto y sujetos de Derecho”, como parte del presente módulo serán profundizados
considerando otras categorías vinculadas a ellas. Como parte de este propósito, realiza la
siguiente actividad:
1. Lee el texto de apoyo en los apartados correspondientes.
2. Responde a los siguientes puntos y presenta ejemplos:
 Distinción entre persona y personalidad.
 Definición de personería.
 Definición de legitimación.
 Tipos de representación.
Introducción.
Abordar el tema de las personas es hablar de eventos jurídicos a los cuales se enfrentan
éstas desde su nacimiento hasta su muerte. El derecho de las personas forzosamente
tiene que evolucionar a la par de la vida cotidiana de las mismas, es por ello que en la
actualidad las personas físicas no se enfrentan únicamente a los procesos de nacimiento
y muerte, sino que además en esta época surgen situaciones jurídicas que se dan desde
antes de la muerte como el aborto, o también llamado derecho a nacer y asuntos
posteriores a la muerte, como son los testamentos, las herencias, las sucesiones etc. Una
vez que se ha comprendido a la persona física en lo individual, se procederá al estudio de
la interacción que tienen estás cuando forman un conjunto con una finalidad común y
específica. Como resultado de esta interrelación, nacen figuras jurídicas en diferentes
ámbitos del Derecho, y el Derecho Civil se encargará de regular algunas de ellas. Por lo
que el contenido a desarrollar en este trabajo aportará un panorama general de las
personas físicas y morales, su desarrollo en la vida cotidiana y las leyes aplicables para
su regulación dentro de la esfera del Derecho Civil.
Desarrollo.
Definición de Persona.
Persona es aquel ser o ente, a quien el ordenamiento jurídico le reconoce voluntad para
ser titular de derechos subjetivos y de deberes.
Los primeros antecedentes de su actualización se encuentran en el Derecho Romano, en
el cual, si bien todos los seres humanos eran considerados personae, los esclavos eran a
la vez persona y res, (persona y cosa). “Etimológicamente persona deriva del latín
‘personae’ ó ‘personare’, descompuesta en dos términos ‘per’, y ‘sonare’, cosa de
resuena, y ‘per’ la partícula que refuerza el significado. ‘Personare’, prosopón’, ‘phersu’
indica la máscara o careta del actor con finalidad de aumentar el sonido, pero también
para significar el carácter o representación por la cual se actúa. ‘Personae’ era una
máscara que utilizaban los actores en el teatro griego y romano al desempeñar un papel.
La palabra designaba, en el sentido propio, la máscara de la cual se servían en escena
los actores romanos dando amplitud a su voz (personare) y también mostrar un actitud
trágica o jocosa, según el papel que les tocara representar en escena. De aquí se empleó
en sentido figurado para expresar el papel que el individuo pueda representar en la
sociedad” (Petit, 2000, p. 139).

Con el transcurso del tiempo ‘personae’ se refería ya al rol, ya no a la máscara. Y con el


devenir del tiempo incluso el significado de rol se perdió, actualmente con persona ya nos
referimos al ser humano. Y por esa figura del lenguaje y de la vida real se considera que
cada ser humano cumple un rol en la vida. En la antigüedad la persona no tuvo gran valor,
porque el mismo sólo le venía otorgado por su adscripción al grupo (gens, polís, fratría,
oikós). Fue el estoicismo quien difundió el concepto de persona como un valor, que, con
la extensión de la ciudadanía romana a todos los habitantes del Imperio, sería recogido
por el cristianismo, concibiendo a la persona como ‘rationalis naturae individua
substantia’.

Clasificación de Jurídica de las Personas


El concepto jurídico de persona resulta ser un término que integra a una entidad material
y apreciable mediante los sentidos, tal y como lo es el ser humano, así como una ficción
jurídica, tal como lo son las personas jurídico colectivas.
No obstante, el progresivo desarrollo del término, es de indicar que la ciencia jurídica
romana no consideró la persona jurídico colectiva como un sujeto de derecho, al limitarse
exclusivamente a los individuos, ya que el Estado formaba parte del Ius publicum,
resultado de una primitiva soberanía no reconocida como permanente, en tanto el Estado
podía ser sometido o conquistado ya que para el sistema jurídico la persona es una
abstracción, es decir, una operación intelectual por la cual podemos obtener, posterior a
un análisis, una noción o esencia, que en el caso que nos ocupa, persona es aquel ser
que tiene aptitud para intervenir en una relación jurídica como actor o pretensor o como
sujeto obligado. Persona es aquel ser o ente, a quien el ordenamiento jurídico le reconoce
voluntad para ser titular de derechos subjetivos y de deberes. Persona es todo ser o ente
de derechos y deberes siendo este un producto de la soberanía, hasta establecer la idea
de personas jurídicas, que a la postre incluyó al Estado.
La Persona en el Derecho
Si se entiende por sujeto de derecho aquel que actualmente tiene un derecho o deber, el
concepto de persona es más amplio porque comprende también a quien puede llegar a
tener un derecho o un deber, aunque actualmente no lo tenga. Pero tomada la expresión,
"sujeto de derecho" en abstracto, o sea sin referirla a ningún derecho o deber concreto,
viene a ser sinónimo de persona.
Persona, o sujeto de derechos, era el hombre que a esa calidad agregaba otras
condiciones esenciales exigidas por la ley, a saber: ser libre y no esclavo (status
libertatis), ciudadano romano (status civitatis), y jefe de familia (status familiae).
La posesión de esos tres status daba al ser humanos plana capacidad jurídica y la calidad
de persona, por lo cual a la capacidad jurídica se le suele denominar también
personalidad. De esta manera, en el ámbito jurídico, la persona se comprende como los
protagonistas que en el sistema normativo desempeñan un papel, orientándose como
alguien calificado para participar en actos jurídicos, además de explicar la razón por la
que el sistema normativo vigente no ofrece una definición de persona.
Entre las innumerables definiciones de persona en Derecho, podemos citar tres, todas
equivalentes:
1. Persona es todo ente susceptible de tener derechos o deberes jurídicos.
2. Persona es todo ente susceptible de figurar como término subjetivo en una relación
jurídica
3. Persona es todo ente susceptible de ser sujeto
Es menester agregar que en la actualidad para la determinación de un ente como persona
aún presenta reminiscencias a la idea de estado civil, tal y como se aprecia en el artículo
2 del ordenamiento federal citado, a saber:
Artículo 2.- La capacidad jurídica es igual para el hombre y la mujer; en consecuencia, la
mujer no queda sometida, por razón de su sexo, a restricción alguna en la adquisición y
ejercicio de sus derechos civiles.
Distinción entre persona y personalidad.
En el ámbito jurídico la persona incluye dos especies, a saber: la persona física y la
persona jurídica colectiva; el término “persona jurídica” hace referencia al sujeto de
derecho, pero hay que tener en cuenta que el concepto de persona jurídicamente
considerado es una creación del Derecho y alude al “individuo o entidad que ostenta
derechos y obligaciones”. Cada ordenamiento jurídico establece quiénes son los
destinatarios de las normas y, en consecuencia, quiénes pueden ser titulares de los
derechos y deberes que esas normas establecen. Las normas que establecen quiénes
pueden actuar jurídicamente pueden ser consideradas como un tipo de normas ónticas,
pues, aunque no siempre utilicen el verbo “ser” siempre pueden ser reducidas a
expresiones de ese tipo. En este sentido, la persona física se identifica claramente con la
idea de homo, es decir, el ser humano, en tanto que la persona jurídica-colectiva,
pertenece al ámbito de la ficción jurídica.
La persona física, desde el punto de vista biológico, es todo individuo de la especie
humana, sin tomar en consideración la forma empleada para la concepción, este es el
sentido que prescribe la hipótesis normativa, pues señala que la capacidad jurídica de las
personas físicas se adquiere por el nacimiento y se pierde por la muerte. La aptitud para
participar en los actos jurídicos comienza al momento de nacer y concluye con la muerte,
tal y como prescriben los Códigos Civiles Federal:
Artículo 22.- La capacidad jurídica de las personas físicas se adquiere por el nacimiento y
se pierde por la muerte; pero desde el momento en que un individuo es concebido, entra
bajo la protección de la ley y se le tiene por nacido para los efectos declarados en el
presente Código.
No siempre ha bastado el hecho de ser hombre para ser considerado sujeto de derechos
y obligaciones como pone de manifiesto la existencia en diferentes épocas y en diferentes
países de la esclavitud. Además, también se ha considerado en ocasiones como
personas a entidades formadas por un grupo de individuos o un conjunto de bienes.
El ordenamiento jurídico español regula la atribución de la condición de persona a los
individuos en los artículos 29 a 34 del Código civil y a los conjuntos de individuos o bienes
en los artículos 35 a 39 del mismo cuerpo legal.
La personalidad es la cualidad de ser persona, o sea, la aptitud para ser titular de
derechos o deberes jurídicos. De allí que en el lenguaje ordinario se diga que se es
persona y que se tiene personalidad.
La personalidad es también una creación del Derecho y se manifiesta en la capacidad
para ser titular del conjunto de derechos y deberes atribuidos a un mismo ente y
determina la capacidad para relacionarse jurídicamente, es decir, dentro de la
personalidad jurídica podemos diferenciar entre la “capacidad jurídica” y la “capacidad de
obrar”.
Muchos autores consideran como sinónimas las expresiones personalidad y capacidad
jurídica o de goce; pero, en sentido estricto, personalidad es la aptitud dicha, y capacidad
jurídica o de goce es la medida de esa aptitud. De allí que pueda decirse que la
personalidad no admite grado (simplemente se tiene o no se tiene), mientras que la
capacidad sí (puede ser mayor en una persona que en otra.
Por una parte, el Derecho vigente reconoce la personalidad jurídica a todos los individuos
de la especie humana, independientemente de su edad, sexo, salud, situación familiar y
otras circunstancias.
El precepto legal transcrito incorpora la denominada teoría del naciturus, por la cual el
nonato goza de los derechos consagrados en el orden jurídico y para tal efecto, por ficción
jurídica, se le considera como nacido para los efectos de los actos jurídicos en los que
puede participar, tal y como sucede con la donación, la herencia o el reconocimiento de
filiación, la concepción, por sí misma, no permite concluir que el concebido no nacido sea
persona, por el contrario, solo le otorga cierta capacidad, específicamente de goce a
condición de que dicho nonato sea viable, cumplidas las condiciones anteriores, puede
considerarse como persona al neonato, tal y como el Código Civil Federal señala:
Artículo 337.- Para los efectos legales, sólo se reputa nacido el feto que, desprendido
enteramente del seno materno, vive veinticuatro horas o es presentado vivo al Registro
Civil. Faltando alguna de estas circunstancias, nunca ni nadie podrá entablar demanda
sobre la paternidad.
El sistema jurídico considera como una unidad para que actúe en los actos jurídicos que
correspondan. Tal como se mencionó anteriormente, la idea de actuación permitió
considerar la idea de personificar a una comunidad, tal y como sucedió con el populus o
pueblo o civitas, es decir, ciudades, desde perspectiva romana que correspondió a la idea
de un ente metafísico y, por tal razón, constituyó un problema de reconocimiento de
capacidad. Por tal motivo, se han creado teorías que tienen como objeto solucionar el
problema, tal y como sucede con la teoría de la ficción de Von Savigny o la teoría realista
de Von Gierke.
Cabe agregar que, en nuestra normatividad vigente, las personas morales pueden crearse
por voluntad de personas físicas y de otras personas morales a través de apoderado
legal. En nuestro sistema jurídico vigente, las personas jurídico-colectivas se encuentran
señaladas en forma limitativa en el artículo 25 del Código Civil Federal, que a la letra
prescribe:
Artículo 25.- Son personas morales:
I. La Nación, los Estados y los Municipios;
II. Las demás corporaciones de carácter público reconocidas por la ley;
III. Las sociedades civiles o mercantiles;
IV. Los sindicatos, las asociaciones profesionales y las demás a que se refiere la
fracción XVI del artículo 123 de la Constitución Federal;
V. Las sociedades cooperativas y mutualistas;
VI. Las asociaciones distintas de las enumeradas que se propongan fines políticos,
científicos, artísticos, de recreo o cualquiera otro fin lícito, siempre que no fueren
desconocidas por la ley.
VII. Las personas morales extranjeras de naturaleza privada, en los términos del
artículo 2736.
Realizando una clasificación que establezca como diferencia específica del sistema
normativo que contenga las hipótesis normativas podemos dividirlas en tres que son.
 Personas jurídico-colectivas de Derecho Público
 Personas jurídico-colectivas de Derecho Privado
 Personas jurídico-colectivas de Derecho Social
Personas jurídico-colectivas de Derecho Público
Las personas jurídicas colectivas son “las entidades formadas para la realización de los
fines colectivos y permanentes de los hombres, a la que el derecho objetivo reconoce
capacidad para tener derechos y obligaciones”. Las personas jurídicas colectivas pueden
ejercitar todos los derechos que sean necesarios para realizar su objeto, siempre y
cuando no contravengan el interés público.
Las personas jurídicas colectivas se rigen por las leyes correspondientes, por su acto
constitutivo y por sus estatutos, actúan y se obligan por medio de los órganos que las
representan.
¿Quiénes son personas jurídicas colectivas públicas? Personas jurídicas de derecho
público: son aquéllas que representan a la autoridad en sus funciones administrativas.
En esta categoría se encuentran todas las entidades contempladas en las fracciones I y II
del citado artículo 25 del Código Civil Federal.
I. La Nación, los Estados y los Municipios;
II. Las demás corporaciones de carácter público reconocidas por la ley;
En el caso de las entidades de la fracción I, no puede afirmarse que se trate de una mera
localización de una hipótesis normativa, pues la creación de los Estados no es un acto
formal, por el contrario, es resultado de movimientos sociales, normalmente violentos, por
los que los individuos que participan (por razones económicas, políticas, sociales, entre
otras), combaten para hacer valer la idea de soberanía y, como consecuencia, establecen
su propio orden jurídico.
En el caso de las personas morales de la fracción II, el fundamento legal de todas ellas se
encuentra de forma general en leyes orgánicas, como las entidades de la administración
pública federal, o en decretos de creación como es el caso del Instituto Politécnico
Nacional y su Ley Orgánica.
Son aquéllas que dependen de la iniciativa particular, siendo de dos tipos: las que
persiguen fines de lucro llamadas sociedades civiles y comerciales. las que no persiguen
ganancias, como las corporaciones y las fundaciones. Las corporaciones son personas
jurídicas que no persiguen fines de lucro y que están formadas por un cierto número de
personas asociadas para conseguir la realización de un fin o interés común. Las
fundaciones si bien tienen un fin lícito de interés general, éste se realiza por medio de
bienes determinados afectos permanentemente a su consecución. Ambas requieren la
autorización del poder público.
Personas jurídico-colectivas de Derecho Privado
Personas Jurídicas Colectivas Privadas son: Las sociedades civiles o mercantiles. Los
sindicatos, las asociaciones profesionales. Las sociedades cooperativas y mutualistas.
Las asociaciones que se propongan fines políticos, científicos, artísticos, de recreo o
cualquier otro fin lícito.
Son los entes privados que se constituyen voluntariamente de acuerdo con la legislación
aplicable que regula su constitución, organización, funcionamiento y extinción. En todo
caso, las disposiciones legales que son de aplicación prevén unos requisitos formales de
carácter esencial para que sean válidos los actos fundamentales de dichas personas
jurídicas. Y el cumplimiento de tales disposiciones conlleva siempre un determinado
control por parte de la Administración.
Habitualmente, las personas jurídicas de derecho privado están animadas de un propósito
de beneficio para las personas físicas integradas en aquéllas. Por ello, suele coincidir el
que sean personas jurídicas de derecho privado, con el que sean personas jurídicas de
interés particular. Las normas reguladoras de todas ellas se encuentran en el Derecho
civil y en el Derecho mercantil.
Las formas más conocidas que revisten son: asociaciones, fundaciones, sociedades
civiles y sociedades anónimas. Todas ellas se rigen por sus propios estatutos, que han de
redactarse de acuerdo con la legislación aplicable.
Por exclusión todas las personas morales que no pertenezcan al Derecho Público, al
Derecho Social a al Derecho Internacional. En este caso, por las diversas legislaciones
que integran el sistema jurídico, podemos crear tres grupos que las integran que son:
 Personas jurídico-colectivas de Derecho Civil
 Personas jurídico-colectivas de Derecho Mercantil
 Personas jurídico-colectivas de Derecho Bursátil
Personas jurídico-colectivas de Derecho Social
Son todos los entes susceptibles de adquirir derechos y obligaciones que no sean de
existencia visible.
Resultado del acuerdo de voluntades para concurrir en un mismo núcleo dotado de
personalidad, que contribuye con su misma actividad con sus mismos actos que en el
orden jurídico habrá de imputarse a la personalidad del núcleo.
Esto lo podemos encontrar en el Artículo 15 del Código Civil.
En derecho también se considera como personas a ciertas agrupaciones de individuos
que se proponen la realización de determinados fines, para lo cual la reconocen y les
otorga personalidad jurídica. Los fines que se proponen estas agrupaciones son de
diversa naturaleza.
Elementos necesarios para la existencia de una persona jurídica, colectiva, social o moral:
 Personales: Necesitan de dos o más personas individuales, que formen un ente
de carácter abstracto.
 Formales: Para constituirse necesitan de un documento en que coste su
constitución, de acuerdo con lo que el particular lo prescribe el código civil y sus
reglamentos respectivos en los siguientes artículos 16 y 20.
 Patrimoniales: Capital de bienes que constituye todo el patrimonio social.
 Nombre o razón social: Para distinguirlas de otras entidades semejantes.
Estas personas también se le definen como entes abstractos, que persiguen fines de
naturaleza colectiva, a los cuales la ley reconoce capacidad de goce y ejercicio para la
realización de los mismos.
Las personas jurídicas morales o colectivas son entonces agrupaciones de personas
individuales, vinculadas para la realización de ciertos fines, alas que el ordenamiento
jurídico precisamente a la realización de dichos fines, convirtiéndolas en sujetos de
derechos y obligaciones, se les otorga personalidad jurídica.
Definición de Personería.
La personería jurídica o personalidad jurídica es el reconocimiento a un ser humano, una
organización, una empresa u otro tipo de entidad para asumir una actividad o una
obligación que produce una plena responsabilidad desde la mirada jurídica, tanto frente a
sí mismo como respecto a otros.
A lo largo de la Historia muchas han sido las teorías y estudiosos que han abordado el
término que ahora estamos analizando. Así, por ejemplo, entre aquellos destacan la teoría
de Kelsen, llevada a cabo por el jurista austríaco que le da nombre y que plantea una
diferenciación entre las personas morales y físicas, o la teoría organicista. Esta última
destaca porque establece que las personas jurídicas son realidades vivas.
La capacidad se define, genéricamente, como la aptitud para ser sujeto de derechos y
obligaciones, o bien, como la facultad para ejercitar dichos derechos y obligaciones. Es de
señalar que la capacidad contiene dos especies:
 Capacidad de goce: Se hace uso de las prerrogativas o beneficios que la ley
concede, como el derecho a la vida o a la salud, así como los que se derivan del
carácter de acreedor en una obligación.
 Capacidad de ejercicio: Implica el ejercicio de los derechos que la legislación
concede, asumiendo las posibles conductas exigibles en su carácter de deudor en
una obligación.
A mayor abundamiento, desde el momento de nacer, las personas físicas cuentan con la
capacidad de goce, más no con la capacidad de ejercicio, la cual solo será posible hasta
alcanzar la mayoría de edad, requisito normativo para poder tener el carácter de deudor
en una obligación.
La regulación de la personería jurídica depende de cada nación. A nivel general, puede
decirse que la personería jurídica no tiene por qué coincidir siempre con la persona física:
se trata de una noción más amplia que incluye aquellas acciones desarrolladas por
entidades que tienen validez jurídica plena.
Por su parte, las personas jurídico-colectivas cuentan con la capacidad de goce desde el
momento en que se cumplen las formalidades que la normatividad exige para cada tipo de
ente colectivo.
La personería jurídica nace a partir de un acto jurídico (conocido como acto de
constitución) que incluye el reconocimiento por parte de un organismo administrativo o de
una autoridad. Lo habitual es que dicho acto constitutivo incluya la inscripción de la
personería en un registro público. Es por ello que la participación de las personas morales
en los actos jurídicos se ejecuta a través de personas físicas facultadas para la
celebración de determinados actos, siendo dichas personas llamadas apoderados legales.
El origen de la personería en el caso de la persona moral no es por mandato de la ley
vigente, de tal manera que entre los individuos que realizaron los actos de creación de la
persona jurídico colectiva y la persona que será el apoderado legal debe celebrarse un
contrato de mandato en el que se contemplen los poderes que podrán realizarse por el
personero, con lo expuesto anteriormente, podemos afirmar que la personería es “el
conjunto de elementos que permiten constatar las facultades de alguien para representar
a otro, generalmente una persona moral”.
Definición de legitimación
La legitimación es un concepto que define la posibilidad de acceder a los Tribunales y las
condiciones y circunstancias que permiten hacerlo, en función de la relación que se tiene
con el objeto del procedimiento. Consiste en un derecho a la jurisdicción y en la facultad
de accionar ante los Tribunales un determinado derecho, por lo que puede decirse que es
la facultad de promover e intervenir en un proceso concreto como parte activa o pasiva.
En términos jurídicos, la legitimación hace referencia a un supuesto normativo por el cual
se autoriza a un sujeto de derecho a adoptar una conducta determinada; es el
reconocimiento que por virtud de orden normativo vigente permite que un acto jurídico se
realice con eficacia por un sujeto de derecho, haciendo referencia a la idoneidad de las
personas para que, dentro del marco normativo vigente, los actos jurídicos que realicen
sean apropiados para las consecuencias jurídicas que sean procedentes.
La legitimación proviene de la relación del sujeto del proceso con el derecho material que
se ejercita en él. De ahí que se trate de una cuestión que afecta al fondo del asunto
debatido en el juicio y traspase la frontera de las condiciones procesales para actuar en
él.
La persona física
Son todos los seres humanos con capacidad de adquirir derechos y contraer obligaciones.
En algunas legislaciones es posible encontrar esta misma figura jurídica denominada
como persona natural o de existencia real. Las personas físicas gozan de los derechos
que la Constitución y las demás normas le otorgan. La cual determinar su calidad de
persona por lo cual debemos atender a sus atributos, en el entendido de que a la
propiedad de un ser y que, desde el punto de vista lógico, el cual consiste en
categoremas de propiedad que deben reunirse para determinar a un ente como persona
en sentido amplio.
Solo basta con el hecho de existir para que las personas físicas sean protegidos por la ley
y para que se le reconozcan los atributos que gozan los individuos sujetos a un estado de
derecho. Los atributos de las personas físicas son:
 Personalidad jurídica. Es el reconocimiento a un ser humano, una organización,
una empresa u otro tipo de entidad para asumir una actividad o una obligación que
produce una plena responsabilidad jurídica.
 Capacidad. Aptitud de una persona para adquirir derechos y contraer obligaciones
por sí misma ✓ Nombre. Es la designación que sirve para individualizar a una
persona, tanto en la vida social, como jurídica
 Domicilio. Atributo de la personalidad, que especifica el lugar donde la persona ya
sea física o jurídica tiene su residencia con el ánimo real o presunto de
permanecer en ella.
 Estado Civil. Relación en que se encuentran las personas que viven en sociedad
respecto a los demás miembros de esta misma
 Patrimonio. Conjunto de los bienes y derechos que pertenecen a a una persona,
física o jurídica
 Nacionalidad. Sometimiento de una persona a un ordenamiento jurídico concreto
Las personas físicas no tienen ese carácter por su conformación biológica, pues de llegar
a ese extremo, los seres humanos que no tuvieran dos piernas dejarían de ser personas,
lo que evidentemente es un absurdo, al igual que sucede con los seres humanos que
presentan enfermedades mentales y por tal motivo, son considerados personas, pero
carecen de capacidad de ejercicio.
La ley faculta a las personas físicas para actuar en nombre propio o en representación de
otra persona física o de una persona moral.
La existencia de los derechos naturales de las personas físicas termina con la muerte
pudiendo también extinguirse al presentarse la presunción de ausencia.
Tipos de representación.
La representación es la declaración de voluntad destinada a producir efectos en un ámbito
jurídico distinto del sujeto que la realiza. Es una figura jurídica por la cual lo que una
persona ejecuta o celebra en nombre de otra, facultada por la propia persona
representada o designada por la ley para representarla, y que produce efectos jurídicos
de esa actuación en la esfera patrimonial y jurídica del representado.
La representación en sentido general, es un fenómeno jurídico que implica la actuación de
una persona a nombre de otra, es una de las instituciones más utilizadas y uno de los
mejores inventos jurídicos, ya que a partir de ella, una persona capaz adquiere el don de
la ubicuidad, es decir, puede romper con esa barrera física, la cual no le permitiría estar
en dos lugares apartados a la vez para celebrar actos jurídicos, permitiéndole celebrar el
mayor número de ellos y obtener los mayores provechos posibles al celebrarlos, haciendo
que no sufra ningún menoscabo, en esa libertad contractual que tutela el Derecho.
Tradicionalmente se distingue entre representación directa e indirecta y representación
voluntaria o legal.
También es a través de esta figura que los menores, incapaces e interdictos, pueden
hacer valer sus derechos u obligarse, de otra manera no tendrían posibilidad de actuar en
el ámbito del Derecho Válidamente. De igual manera es de vital importancia para las
personas Jurídicas o Morales, ya que como sabemos se trata de entes idearios, que solo
tienen vida en el mundo de las ideas y pensamientos, por lo cual necesariamente entes
físicos deben actuar en su nombre y representación. Dados estos tres supuestos en
donde encontramos claramente la figura de la representación, podemos decir que existen
tres tipos, a saber:
Representación voluntaria o convencional: El concepto de representación voluntaria
hace referencia a aquellos supuestos en los que el representado otorga poder al
representante para que realice un negocio jurídico en su nombre y por cuenta del mismo
(representación directa) o a aquellos en los que el representante, aun actuando por
cuenta del representado, lo hace en su nombre (representación indirecta). Tiene su origen
en la autonomía privada, en un acto de voluntad del representado. Es un acto jurídico
cuyo origen se encuentra exclusivamente en la voluntad de las partes. Es por eso que la
representación convencional también es conocida por el término de representación
voluntaria.
En el marco de la representación voluntaria, distingue la doctrina la representación directa
y la representación indirecta.
Representación legal: Es aquel tipo de representación que no parte del ámbito de la
autonomía de la voluntad, o, si se quiere, de la "voluntariedad", sino que se produce por
disposición normativa, esto es, por imperativo legal; en contraposición, es la facultad
otorgada por la ley a una persona para obrar en nombre de otra, recayendo en ésta los
efectos de tales actos. El ejercicio de esa representación puede ser obligatorio para el
representante.
Representación orgánica: establece en lo conducente que las personas morales obran y
se obligan por conducto de sus órganos de representación, sin distinguir expresamente
sobre representación legal o voluntaria (delegación de facultades). En tal caso, los
órganos de las personas jurídicas legitimados para ello, designan representantes, directos
o indirectos, de la misma manera que las personas propiamente dichas.
En atención a lo anterior, la interpretación literal del precepto en comento, implica que el
término “incluso” no es limitativo ni excluyente, al contrario, es facultativo, por tanto, el
Corredor Público puede actuar como Fedatario Público en todos los actos previstos en la
Ley General de Sociedades Mercantiles, y conforme a la segunda parte que comentamos,
además puede expresamente hacer constar los actos de representación orgánica.

Atributos Persona Física y Moral.


Personas Físicas
Los atributos de las personas físicas son: la capacidad, estado civil, patrimonio, nombre,
domicilio y nacionalidad.
 La capacidad de goce es la aptitud para ser titular de derechos o para ser sujeto
de obligaciones. Todo sujeto debe tenerla.
 El estado civil de una persona consiste en la situación jurídica concreta que
guarda en la relación con la familia y se descompone en las distintas calidades de
hijo, padre, esposo o pariente por consanguineidad, por afinidad o por adopción.
 El patrimonio es el conjunto de obligaciones y derechos susceptibles de una
valorización pecuniaria.
 El domicilio es el lugar en que una persona reside habitualmente con el propósito
de radicarse en él.
 El nombre de una persona está compuesto del (los) primer(os) nombre(s) del
sujeto, su apellido paterno y su apellido materno.
Persona Moral
Grupo de personas asociadas, formando una personalidad jurídica distinta a la de sus
integrantes, ejemplo de ello lo tenemos en una asociación civil o sociedad anónima.
Existe una correspondencia entre los atributos de las personas físicas y las morales, con
excepción del estado civil, que sólo puede darse en las personas físicas, ya que deriva del
parentesco. Atributos de la persona moral: Es la denominación o razón social que reciben
las personas morales y que sirve para distinguirlas unas de otras y para que puedan
entrar en relaciones jurídicas con los demás sujetos de derecho.

✓ Nombre

✓ Domicilio

✓ Patrimonio

Tipo de persona su capacidad de goce y ejercicio.


Antes de adentrarnos por definir los conceptos de capacidad de goce y capacidad de
ejercicio, debemos entender primeramente el significado de la palabra capacidad.
El diccionario de la Real Academia Española define la capacidad como la “aptitud, talento,
cualidad que dispone a alguien para el buen ejercicio de algo”.
En ese sentido, debemos de entender la palabra capacidad en el ámbito legal como la
aptitud de una persona física y moral para ser titular de derechos y obligaciones,
ejercitarlos de conformidad código civil federal artículo 22 que a la letra dice “La
capacidad jurídica de las personas físicas se adquiere por el nacimiento y se pierde por la
muerte; pero desde el momento en que un individuo es concebido, entra bajo la
protección de la ley y se le tiene por nacido para los efectos declarados en el presente
Código” y comparecer en un Tribunal para ejercerlos por propio derecho.
Fundamenta jurídicamente que sustenta la capacidad de goce y ejercicio de cada
una. Una vez definida la capacidad como la aptitud jurídica para ser sujeto de derechos,
deberes y obligaciones y de ejercitarlos, se retoma que la capacidad jurídica se clasifica
en dos:
Capacidad de goce: Es la aptitud que posé una persona física para ser titular de
derechos y obligaciones que adquiere desde antes de ser concebido.
Es decir, una persona no concebida aún, como un embrión humano, tiene derechos de
acuerdo a la legislación mexicana y tratados internacionales que hemos firmado. A eso se
le llama capacidad de goce, siendo una aptitud –ser persona- para poder ser titular de
derechos y obligaciones antes de ser concebida y una vez concebida.
La manera en que podemos entender más fácilmente la capacidad de goce, se refiere a
que el ser humano, con independencia de si cuenta o no con alguna discapacidad mental,
puede ser titular de derechos y obligaciones, así es, por el simple hecho de ser un
humano.
En el caso de las personas morales, ellas cuentan con capacidad de goce y ejercicio al
momento de su nacimiento.
Capacidad de ejercicio: Es la aptitud de una persona física o moral para poder contraer
derechos y obligaciones, así como también ejercitar sus derechos compareciendo en un
juicio por propio derecho.
En ese sentido la capacidad de ejercicio es la “capacidad de ejercer” directamente sus
derechos, por lo que puede celebrar en nombre propio o en representación de alguien
más: actos jurídicos, contraer obligaciones y ejercer acciones legales en Tribunales.
Violencia Intrafamiliar.
Planteamiento.
De acuerdo a la exposición de un sujeto del sexo femenino que declara que en su hogar
se vive la violencia intrafamiliar hacia sus hijos y a ella por parte de su concubino, con la
cual procreo dos menores del sexo femenino. Abuso que se lleva a cabo dentro del
núcleo familiar, por razones económicas a la vista, por lo cual las menores son las
principales víctimas, al constatar ella, que cuando está en convivencia familiar nota
empujones y golpes menores hacía las pequeñas, con tendencia a repetirse
continuamente y a incitar a su hermano mayor a prácticas de violencia hacia las menores,
siendo este hijo de la parte acusada de una relación anterior a la de la persona
acusadora.
Violencia que se manifiesta durante las horas no laborables del sujeto acusado, y que se
atestigua por parte de una vecina que declara ver como el hermano mayor uno de sexo
masculino de 13 años, y el concubino dan patadas a una de las menores cuando va
rumbo a la escuela y asegura ver a la pequeña de 3 años llorando en la ventana cuando
la dejan sola dentro del domicilio.
Hipótesis normativa en la que se señalan obligaciones
Es la realización de acciones o sucesos de cuya realización dependerá la acción jurídica.
En el caso expuesto observamos que el concubino concurre en la agresión física a
menores de edad, violencia verbal a menores de edad y a la persona acusadora, acciones
en el hogar que concurren en un mal ejemplo como fumar e ingerir bebidas alcohólicas,
descuido infantil, abandono de hogar y exposición de los menores a riesgos al salirse de
su casa.
La violencia familiar es un hecho que se analiza tratando de entender las causas de quien
la realiza ya que tradicionalmente es ejercido por quien goza de privilegios de poder en el
seno familiar, excusándose en razones, económicas, culturales o simplemente por ejercer
su fuerza física, de no detenerse a tiempo la violencia puede incrementar y llegar a casos
extremos de internación hospitalaria o hasta la muerte del agredido.
Código Civil Federal vigente de la CDMX nos dice sus artículos:
Artículo 323 Bis. Los integrantes de la familia tienen derecho a que los demás miembros
les respeten su integridad física y psíquica, con objeto de contribuir a su sano desarrollo
para su plena incorporación y participación en el núcleo social. Al efecto, contará con la
asistencia y protección de las instituciones públicas de acuerdo con las leyes.
Artículo 323 ter. Los integrantes de la familia están obligados a evitar conductas que
generen violencia familiar.
Por violencia familiar se considera el uso de la fuerza física o moral, así como las
omisiones graves, que de manera reiterada ejerza un miembro de la familia en contra de
otro integrante de la misma, que atente contra su integridad física, psíquica o ambas
independientemente de que pueda producir o no lesiones; siempre y cuando el agresor y
el agredido habiten en el mismo domicilio y exista una relación de parentesco, matrimonio
o concubinato.
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos nos dice en su Artículo 1º. En
los Estados Unidos Mexicanos todas las personas gozarán de los derechos humanos
reconocidos en esta Constitución y en los tratados internacionales de los que el Estado
Mexicano sea parte, así como de las garantías para su protección, cuyo ejercicio no podrá
restringirse ni suspenderse, salvo en los casos y bajo las condiciones que esta
Constitución establece. (Reformado mediante Decreto publicado en el Diario Oficial de la
Federación el 10 de junio de 2011)
Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes señala lo siguiente:
Artículo 1. La presente Ley es de orden público, interés social y observancia general en
el territorio nacional, y tiene por objeto:
I. Reconocer a niñas, niños y adolescentes como titulares de derechos, de
conformidad con los principios de universalidad, interdependencia, indivisibilidad y
progresividad; en los términos que establece el artículo 1o. de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos;
II. Garantizar el pleno ejercicio, respeto, protección y promoción de los derechos
humanos de niñas, niños y adolescentes conforme a lo establecido en la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y en los tratados
internacionales de los que el Estado mexicano forma parte;
Artículo 2. Para garantizar la protección de los derechos de niñas, niños y adolescentes,
las autoridades realizarán las acciones y tomarán medidas, de conformidad con los
principios establecidos en la presente Ley. Para tal efecto, deberán:
Garantizar un enfoque integral, transversal y con perspectiva de derechos humanos en el
diseño y la instrumentación de políticas y programas de gobierno;
Promover la participación, tomar en cuenta la opinión y considerar los aspectos culturales,
éticos, afectivos, educativos y de salud de niñas, niños y adolescentes, en todos aquellos
asuntos de su incumbencia, de acuerdo a su edad, desarrollo evolutivo, cognoscitivo y
madurez, y
Establecer mecanismos transparentes de seguimiento y evaluación de la implementación
de políticas, programas gubernamentales, legislación y compromisos derivados de
tratados internacionales en la materia.
Artículo 10. En la aplicación de la presente Ley se tomarán en cuenta las condiciones
particulares de niñas, niños y adolescentes en los diferentes grupos de población, a fin de
proteger el ejercicio igualitario de todos sus derechos.
Las autoridades federales, de las entidades federativas, municipales y de las
demarcaciones territoriales del Distrito Federal, en el ámbito de sus respectivas
competencias, adoptarán medidas de protección especial de derechos de niñas, niños y
adolescentes que se encuentren en situación de vulnerabilidad por circunstancias
específicas de carácter socioeconómico, alimentario, psicológico, físico, discapacidad,
identidad cultural, origen étnico o nacional, situación migratoria o apatridia, o bien,
relacionadas con aspectos de género, preferencia sexual, creencias religiosas o prácticas
culturales, u otros que restrinjan o limiten el ejercicio de sus derechos.
Artículo 116. Corresponden a las autoridades federales y locales de manera concurrente,
las atribuciones siguientes:
IV. Adoptar medidas de protección especial de derechos de niñas, niños y
adolescentes que se encuentren en situación de vulnerabilidad por circunstancias
específicas de carácter socioeconómico, psicológico, físico, discapacidad, identidad
cultural, origen étnico o nacional, situación migratoria o bien, relacionadas con aspectos
de género, preferencia sexual, creencias religiosas o prácticas culturales, u otros que
restrinjan o limiten sus derechos;
La Ley para la Prevención y Atención de la Violencia Familiar
Artículo 5. Para los efectos de esta Ley se entiende por:
l. Tipos de Violencia:
a. Violencia Familiar: Es el acto abusivo de poder u omisión intencional, dirigido a
dominar, someter, controlar, o agredir de manera física, verbal, psicológica, patrimonial,
económica y sexual, dentro o fuera del domicilio familiar, ejercida por personas que
tengan o hayan tenido relación de parentesco, por consanguinidad hasta el cuarto grado
ascendente y colateral, por afinidad, por adopción, o por relación de matrimonio,
concubinato o mantengan o hayan mantenido una relación de hecho con la víctima.
b. Violencia Física: Es cualquier acto que infringe daño, usando la fuerza física o algún
tipo de arma u objeto que pueda provocar o no lesiones ya sean internas, externas, o
ambas.
d. Violencia Psicológica: Es cualquier acto u omisión que dañe la estabilidad
psicológica, que puede consistir en negligencia, abandono, descuido reiterado, celotipia,
insultos, humillaciones, devaluación, marginación, indiferencia, infidelidad, comparaciones
destructivas, rechazo, restricción a la autodeterminación y amenazas, las cuales pueden
conllevar a la víctima a la depresión, al aislamiento, a la devaluación de su autoestima e
incluso al suicidio.
f. Cualesquiera otras formas análogas que lesionen o sean susceptibles de dañar la
dignidad, integridad o libertad de los integrantes del Grupo Familiar;
VI. Generador de Violencia Familiar: Es quien realiza actos de maltrato físico, verbal,
psicoemocional y sexual, así como el daño patrimonial a la persona con la que tenga o
haya tenido algún vínculo familiar, así como el lesionar los derechos de los miembros del
Grupo Familiar.
Atributos de la personalidad de las personas que conforman el caso.
Es la cualidad que poseen los seres y que los diferencian de los demás siendo esenciales
e inherentes a cada persona personas con capacidad jurídica, ya que cuentan con aptitud
de ser sujetos de derechos y obligaciones, o bien con la facultad para ejercer dichos
derechos y obligaciones, señalándose de lo anterior la capacidad de goce y ejercicio.
 Acusado
 Acusadora
 Testigo
El menor sin capacidad jurídica propia de 14 años de edad hijo de él de su primer
matrimonio en este caso tanto son víctimas de alienación parental (Síndrome no
comprobado, pero si aceptadas sus consecuencias por la SCJN en proceso de
publicación de una contradicción constitucional del CDMX) pero fungen como victimario,
de sus hermanas menores.
No sin tomar en cuenta que, para la Ley de Justicia para Adolescentes, el menor de 14
años, ya está sujeto de la ley, ya que es considerada adolescente y se le atribuye o
comprueba la realización de una conducta antisocial.
Las tres menores de 10 años que en este caso son las víctimas de los sucesos, son
incapaces de ejercicio, así que la madre como progenitora será la que cuente con la
personalidad jurídica de la patria potestad para demandar a nombre de ellas.
Sujeto facultado para exigir el cumplimiento de la o las conductas indicadas en la
hipótesis normativa.
La madre de las menores está facultada para exigir el cumplimiento de normas ya que es
progenitor y representante jurídicamente de las tres menores afectadas física y
psicológicamente.
Capacidad de goce y ejercicio.
La capacidad, es la aptitud para ser sujetos de derechos y obligaciones o la facultad para
ejercitar dichos derechos y obligaciones, dicho lo anterior la capacidad de goce y ejercicio.
Dado el caso antes mencionado y la hipótesis normativa fue colmada, se considera la
consecuencia jurídica a la que se ha hecho imputable de los hechos al concubino.
Referenciado lo anterior la madre de las menores afectadas, es la que cuenta con la
capacidad de goce y ejercicio, para hacer valer los derechos que se tengan y para asumir
por si misma los deberes jurídicos a los que se haga imputable.
 Capacidad de goce: Se hace uso de las prerrogativas o beneficios que la ley
concede, como el derecho a la vida o a la salud, así como los que se derivan del
carácter de acreedor en una obligación.
 Capacidad de ejercicio: Implica el ejercicio de los derechos que la legislación
concede asumiendo las posibles conductas exigibles en su carácter de deudor en
una obligación.
Características de la personería.
Un individuo o un colectivo tienen personería jurídica por el simple hecho de existir. Esto
implica que personería jurídica es básicamente un concepto abstracto que expresa el
reconocimiento del ser humano como individuo libre y no sometido a ninguna forma de
esclavitud. En consecuencia, todas las personas que no sean esclavos tienen personería
jurídica.
Persona con capacidad jurídica nombrada o autorizada para representar a personas
incapacitadas por alguna razón. Conjunto de elementos que permiten constatar las
facultades de alguien para representar a otro.
Desde el momento de nacer, las personas físicas cuentan con la capacidad de goce, más
no con la capacidad de ejercicio, la cual solo será posible hasta alcanzar la mayoría de
edad, requisito normativo para poder tener el carácter de deudor en una obligación. De lo
anterior, se deduce que los menores de edad no cuentan con capacidad jurídica de
ejercicio, tal y como prescribe la fracción I del artículo 450 del código sustantivo federal.
En el caso de las personas físicas mayores de edad, es posible que tengan trastornos
mentales que no les permitan una correcta comprensión de las consecuencias de sus
actos, y en especial de los actos jurídicos. Por tal motivo, el orden jurídico permite que
sean declarados incapaces como una forma de protección, tal y como se prescribe en la
fracción II del artículo anteriormente citado.
Artículo 450.- Tienen incapacidad natural y legal:
III. Los mayores de edad disminuidos o perturbados en su inteligencia, aunque tengan
intervalos lúcidos; y aquellos que padezcan alguna afección originada por
enfermedad o deficiencia persistente de carácter físico, psicológico o sensorial o
por la adicción a sustancias tóxicas como el alcohol, los psicotrópicos o los
estupefacientes; siempre que debido a la limitación, o a la alteración en la
inteligencia que esto les provoque no puedan gobernarse y obligarse por si
mismos, o manifestar su voluntad por algún medio. Los incapaces, al requerir
participar en un acto jurídico, realizan dicha participación por medio de otra
persona física que recibe el nombre de representante legal, pues su designación
normalmente es por mandato de ley, de tal manera que será el incapaz quien
resienta las consecuencias jurídicas de los actos celebrados por el representante.
Conforme a lo anterior, en la realización actos a nombre de otro, cuenta con
personería y no con personalidad, lo cual en la práctica profesional ambos
términos tienden a confundirse.
En el caso mencionado el padre es el personero capaz de hacer valer los derechos de él
y de las menores.
Fundamento de la legitimación.
La legitimación hace referencia a un supuesto normativo por el cual se autoriza a un
sujeto de derecho a adoptar una conducta determinada. En otras palabras, es el
reconocimiento que por virtud de orden normativo vigente permite que un acto jurídico se
realice con eficacia por un sujeto de derecho.
Es de observarse que la legitimación hace referencia a la idoneidad de las personas para
que, dentro del marco normativo vigente, los actos jurídicos que realicen sean apropiados
para las consecuencias jurídicas que sean procedentes.
Conclusiones.
La violencia intrafamiliar es un problema que enfrenta un alto porcentaje de la familia de la
ciudad de México, producto de la crisis que en general se vive. Esta violencia al interior de
las familias afecta directamente a aquellos y aquellas que son más vulnerables: mujeres,
niños/as y ancianos/as.
De manera específica un número significativo de tales casos de violencia se judicializan
en los Tribunales de familia, en particular, en la ciudad de México, el cual ocupa el
deshonroso cuarto lugar nacional en violencia familiar con 52.3%, solo superado por el
estado de Mexico con 57.6%, Nayarit 54.5%, y Sonora con 55%, en todos ellos se
presentan niños y niñas que se ven envueltos en los problemas que viven sus padres los
cuales se tomaron como población de estudio para este trabajo.
Los niños y las niñas forman uno de los grupos denominados vulnerables. Se considera
que un grupo vulnerable es aquel que por razón de la edad, sexo, raza, color, idioma,
religión, opiniones políticas, origen nacional o posición económica, nacimiento,
características físicas o culturales están en mayor riesgo de sufrir de discriminación,
disminución o negación de sus derechos fundamentales.
Aun cuando el acervo internacional en materia de instrumentos jurídicos que contienen
disposiciones en materia de protección a menores es abundante, el marco jurídico del
maltrato al menor se limita, en el caso de nuestro país, a las disposiciones de algunos
documentos que han sido ratificados en los términos del artículo 133 de la Constitución,
entre los que encontramos fundamentalmente a la Convención sobre los Derechos del
Niño, la Convención sobre los Aspectos Civiles de la Sustracción Internacional de
Menores, la Convención sobre la Protección de Menores y la Cooperación en Materia de
Adopción Internacional, la Convención sobre la Obtención de Alimentos en el Extranjero,
la Convención Interamericana sobre Obligaciones Alimentarias, la Convención
Interamericana sobre Restitución Internacional de Menores y la Convención Americana
sobre Derechos Humanos.
Por otro lado, si bien es cierto que se han creado diversos espacios, no sólo en el Distrito
Federal y Estado de México sino en todo el país, con el fin de dar difusión a la gravedad
del problema del maltrato infantil, sus consecuencias y sus posibles soluciones desde un
punto de vista multidisciplinario, también lo es que esto todavía no ha sido suficiente para
disminuir o erradicar la violencia en contra de los niños y tampoco para concientizar, en
primer lugar, a una sociedad como la nuestra, con una ideología arraigada en la
concepción de que el menor debe incondicionalmente someterse a la autoridad del adulto,
y en segundo lugar a los padres que creen que en su derecho a corregir pueden ejecutar
cualquier tipo de actos para educar, encaminar y sancionar al menor.
Es necesario reforzar las acciones, programas y medidas que están siendo aplicadas
tanto por la sociedad civil como por el Estado y que tienen como objetivo inculcar en la
población la concepción del respeto a la persona y dignidad humana, lo que permitirá
luchar abierta y eficazmente contra este fenómeno que al repetirse de generación en
generación sólo produce individuos con más conflictos y una sociedad con más
problemas, lo que definitivamente afecta al desarrollo nacional.

Referencias.
Petit, Eugène, Tratado Elemental De Derecho Romano, Buenos Aires, Argentina:
Universidad, 3ª, 2006, página 89; Argüello, Luís Rodolfo, Manual de Derecho Romano,
Buenos Aires, Argentina: Astrea, 7ª, 2000

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