El Cine en La Asunción

El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

Hernán José Núñez

La Asunción, octubre de 2008

FONDO EDITORIAL “VALLE DE SANTA LUCÍA”

SERIE: CUADERNOS DE SABERES II
Escritos y Repaso de Vivencias Comunitarias de La Asunción
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

FONDO EDITORIAL “VALLE DE SANTA LUCÍA” DEDICATORIA

Presidente
Lic. Hernán José Núñez
A mi sempiterna madrecita, Eugenia María Núñez “Mencha”
Administradora A mis amados nietos Marianna Sofía y Daniel Ernesto
Lic. Carmen Malaver de González
A mi esposa Olga Ferrás de Núñez
Consejo editor A mis hijas Isabel Cecilia y Ana Beatriz Núñez Ferrás
Lic. Hernán José Núñez A Lourdes Margarita Figueroa (La muda)
Lic. Luis Eduardo Acosta Anés A mi ahijado Eduardo José Acosta Sánchez
Prof. Antonio Hernández
Lic. Luis Marcano Boadas A Félix Ramón Silva Torcat
Al bachiller Rafael Marcano “Nofucho”
Edición al cuidado de Luis Eduardo Acosta Anés A Angelita Salazar Lárez
Diseño y diagramación
A Ramón Espinoza Reyes
Lic. Laura Teotiste Marcano Marcano A Francisco Lárez “Pancho Villa”
A Luis Silva Moreno
Portada
Laura Marcano
A Dámaso Silva “Pulapo”
A Ramón Acosta (músico y munícipe)
1ª edición (2008), impresa por: A Humberto Piñero
Centro Gráfico González (Litografía y tipografía)
A Jesús Hidalgo Hernández “Chuchú”
Editor: Fondo Editorial “Valle de Santa Lucía” A Asdrúbal Marcano
A Asdrúbal Gutiérrez
Hecho el Depósito de Ley A Nicolás Narváez “Colacho”
Depósito legal: lf09520087914573
A José Fernández “Talega”
Dr. Héctor Enrique Soto A Braulio D’Jesús
Ministro del Poder Popular para la Cultura A Oswaldo Silva “Morocho”
Lic. Iván Padilla Bravo
Viceministro para el Desarrollo Humano A Filiberto Acosta Noriega
Lic. Emma Elinor Cesín Centeno A Antonio Hernández Güichez
Viceministra para el Fomento de la Economía Cultural A Luis Eduardo Acosta Anés
Lic. Juan Carlos Losada
Viceministro de Identidad y Diversidad Cultural
A Luis Marcano Boadas
A Víctor Luckert
Lic. Iris Tocuyo Llovera
Directora General del Gabinete ministerial del estado Nueva Esparta
Lic. Inés Ruiz Pacheco
Coordinadora regional de la Plataforma del Libro y la Lectura

Dirección: Casa de la Cultura “Mons. Dr. Nicolás Eugenio Navarro”, calle Fermín, frente
a la Catedral y a la plaza Simón Bolívar, La Asunción, isla de Margarita, estado Nueva
Esparta. Telefax: 0295 - 242 40 38
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

AGRADECIMIENTO

Al Ministerio del Poder Popular para la Cultura

Al Gabinete ministerial de Cultura del estado Nueva Esparta
A la Plataforma estadal del Libro y la Lectura
A la Alcaldía Bolivariana del Municipio Arismendi
Al Instituto de Cultura y Patrimonio del municipio Arismendi (ICPMA)
A la Casa de la Cultura “Mons. Dr. Nicolás Eugenio Navarro”
A Braulio D’Jesús
A Isabel Rondón de Silva y familia
A la Lic. Laura Teotiste Marcano Marcano
Al Lic. Luis Eduardo Acosta Anés
Al Lic. Luis Marcano Boadas
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

PRESENTACIÓN
El Cine en La Asunción
NOTAS AL LECTOR
Esta obra no significa trabajo de investigación exhaustivo. Las
fuentes documentales son limitadas, porque no ha habido la cul-
tura del registro pormenorizado, como bitácora de los hechos y
acontecimientos suscitados, a través del tiempo, en lo que al cine
se refiere.
Se sustenta en opiniones, pareceres y recuerdos difusos de lo que se
pudo presenciar, vivir e imaginar. Este trabajo sirve para que quienes
tengan materiales documentales o preserven bien la memoria de los
acontecimientos vividos como experiencia, y otras referencias grá-
ficas y hemerográficas que, algún acucioso y en cualquier momento,
pueda esculcar y traer del pasado a nuestro presente y futuro.
Tiene como finalidad proporcionar a las juventudes de hoy, y por ve-
nir, enunciados sobre una cultura transcurrida en las comunidades
de esta ciudad y convoca a las generaciones estudiantiles, docentes,
investigadores e interesados en la recreación cinematográfica, a nu-
trirse de tales vivencias e incrementar con ello la fuerza y el valor del
pasado y el presente, en las manifestaciones sociales.
El libro que aquí presentamos, no pretende ocupar los espacios
de cronistas y literatos consagrados en esas esferas del saber, es un
aporte para dar inicio a reflexiones, a meditaciones y a discusiones
enriquecedoras, del saber humano, coloquial y académico.
Sherlok y Watson
- 10 -
El Cine en La Asunción
EL CINE EN LA ASUNCIÓN
(Apuntes para su historia)
CORTOS INDISPENSABLES
Rebobinando la cinta de las fuentes primarias (*)
El nacimiento del cine: El 28 de diciembre de 1895, los herma-
nos Lumière presentan la primera película de cine. Estas primeras
proyecciones no eran más que un conjunto de fotografías y su du-
ración no era superior a los tres minutos. Su intención era mera-
mente documental.
En 1896, Georges Meliés descubrió las posibilidades de los trucos
fotográficos del cine. Introdujo la imaginación a la pantalla y se dio
cuenta que la cámara podía hacer aparecer y desaparecer objetos vi-
vos e inanimados o cambiarlos de forma. Introdujo las disoluciones,
la cámara lenta y rápida, las superposiciones, los fundidos, etc.
Más tarde, el inventor estadounidense Edwin Porter, a quien se le
atribuye la paternidad del cine ficción, se encargó de componer la
unidad narrativa por medio del montaje.
Las películas mudas: Entre 1909 y 1912, Italia era el cine más po-
tente del mundo y esto llevó a los productores estadounidenses a la
acción, viéndose obligados a hacer películas más largas, donde los
actores figuraran en los títulos de crédito y en las que los directores
tuvieran mayor libertad artística.
El cineasta más influyente del período mudo fue Griffith, quien
hizo evolucionar la puesta en escena, formó y dirigió su propia
compañía de actores hacia un modo más naturalista. Además, ex-
perimentó libertad con la iluminación, los ángulos de cámara, la
descomposición de las escenas en planos diferentes y descubrió
que la base de la expresión fílmica está en el montaje.
El traslado a Hollywood: Entre 1915 y 1920 las grandes salas
de cine proliferaron por todo el territorio de los Estados Unidos,
- 11 -
El Cine en La Asunción
mientras que la industria se trasladaba de los alrededores de Nueva
York a Hollywood (…), donde los productores independientes
construyeron sus estudios.
Películas cómicas mudas: Entre 1912 y 1916, Mack Sennett, llegó
a ser entonces el rey de la comicidad, introduciendo en la pantalla
el estilo de payasada de los espectáculos de variedades. Entre su
grupo de actores estaba Charlie Chaplin, un excelente cómico cuya
sola presencia aseguraba el éxito comercial de cualquier película.
Comenzó en la pantalla en 1914, fue la primera estrella internacio-
nal y una leyenda viva desde su juventud, rompiendo récords de
taquilla. Chaplin trajo la humanidad a la comedia.
El cine sonoro: En 1926, la productora Warner Brother, introdujo
el primer sistema sonoro eficaz, conocido como Vitaphone, consis-
tente en la grabación de las bandas sonoras musicales y los textos
hablados en grandes discos que se sincronizaban con la acción de
la pantalla. Posteriormente es superado por el Movietone, que gra-
baba el sonido directamente en la película.
La transición del Cine Mudo al Sonoro fue muy rápida. Las salas de
cine fueron adaptadas al sonido. El público pronto se cansó de los
diálogos monótonos y de las situaciones estáticas de las películas,
en las que un grupo de actores se acercaban a un micrófono fijo.
Tales problemas se solucionaron al principio de 1930, cuando se
restableció un sentido fluido del cine y descubrir las ventajas de la
postsincronización, que permitía la manipulación del sonido y de
la música una vez rodada y montada la película. Se empezaron a
hacer diálogos especialmente elaborados para la pantalla para que
sirvieran a la acción.
Las películas de gangsters y musicales dominarían la pantalla
a comienzos de 1930, en época de la mafia en pleno apogeo y la
tendencia a producir películas de baile, con coreografía que darían
paso a musicales de baile y canciones.
- 12 -
El Cine en La Asunción
Luego vinieron las películas donde se destacaban más las es-
trellas de cine que el tema de la película en sí. También sobresalen
las películas fantásticas que salen completamente de la realidad,
como King Kong y Drácula.
Posterior a las películas fantásticas, surgen las artísticas que se
caracterizan por ser más serias y realistas, donde se realzan temas
dramáticos.
El cine a color: Los experimentos con película en color habían
comenzado en 1906, pero en 1933, el tecnicolor se había perfeccio-
nado, y durante los años 40´ la empleó la MGM. En la década de
1950, el uso del color se generalizó tanto que, prácticamente, el
blanco y negro quedó relegado.
El cine comercial después de la Segunda Guerra Mundial: En la
postguerra, la llegada de la televisión supuso un desafío a la indus-
tria del cine. En 1953, la Twentieth Century Fox, estrenó un nuevo
sistema denominado Cinemascope, que inició la revolución de los
formatos panorámicos. Luego de varios sistemas, quedó en defini-
tiva el Todd–AO y el estándar de 35 mm, su éxito cambia definitiva-
mente la forma de las pantallas de cine.
Evolución del Cine en Venezuela
1896: Primera proyección. El 11 de julio de 1896 se presenta, por
primera vez, en Maracaibo, el Vitascopio de Edison, posteriormente
en Caracas, Valencia y Barquisimeto.
1897: Primeras vistas venezolanas. El 28 de enero, en el Teatro Baralt
de Maracaibo, se estrenan los cuadros: Un célebre especialista
sacando muelas en el Gran Hotel Europa y Muchachas bañán-
dose en la laguna de Maracaibo, primeros registros cinematográ-
ficos realizados en suelo venezolano.
1907: Ese año comienzan a aparecer pequeños reportajes cinematográficos,
que se sucederán, ininterrumpidamente, hasta la regularización de
noticieros nacionales, a comienzos de los años 30.
- 13 -
El Cine en La Asunción
1916: Primera película de larga ficción. Se realiza en Caracas, La
Dama de las Cayenas, de Enrique Zimmermann.
1918: Se rueda Don Leandro, el inefable, de Lucas Manzano, es-
crita por Rafael Otazo.
1924: Se estrena La Trepadora, adaptación al cine de la novela de
Rómulo Gallegos.
1925: Primera Gran Sala de Cine. Se inaugura en Caracas, el Cine
Ayacucho, diseñado por Alejandro Chataing, con capacidad para
más de 1.300 localidades.
1927: Se crean los Laboratorios Nacionales del Ministerio de Obras
Públicas, primer establecimiento moderno y completamente equi-
pado para la producción cinematográfica.
1928: Amábilis Cordero funda los Estudios Cinematográficos Lara,
en Barquisimeto, e inicia la producción del mediometraje Los
milagros de la Divina Pastora.
1930: Primera proyección sonora. El 3 de julio, en Maracaibo, se
proyecta con un equipo Western Electric, El Cuerpo del Delito,
una de las primeras producciones sonoras en doble versión espa-
ñol-inglés, de la Paramount.
1932: Primer filme con sonido incorporado: La Venus de Nácar,
ficción musicalizada, realizada en los Laboratorios Nacionales.
1938: Primer filme con sonido sincrónico: Taboga, un cortometraje
con diálogos y musicalización.
* Primera película sonora de largometraje rodada en Venezuela, El
rompimiento, de A.M. Delgado Gómez.
* Se inicia el auge del cine mexicano en Venezuela, con la exitosa
proyección en el país de Allá en el Rancho Grande, de Fernando
de Fuentes.
(* Op. Cit). LUZZI, Michelangelo.- El Cine como Medio Publicitario en Venezuela
- 14 -
El Cine en La Asunción
ANTESALA
Entre el Silente y el Parlante
El carrete recoge el impacto social del momento. Aparición del
cine sonoro, en los estudios franceses y norteamericanos, a partir
de 1928, con El Cantante de Jazz; Charles Chaplin y Greta Garbo
se niegan a incursionar en las filmaciones habladas; la depresión
económica de 1929 (crack); primer intento de instalar una pequeña
sala de cine, en predios de los guarapotú, cerca de la plaza Arismendi
(1930); el inicio y desarrollo de la Segunda Guerra Mundial; y, por
supuesto, las restricciones provocadas por el intercambio comercial
internacional, afectó la economía venezolana, acentuada con mayor
intensidad en la producción y consumo de la dieta alimentaria.
CARTEL PRELIMINAR
Poniendo los trailer a tiro (**)
* El 5 de marzo de 1918, se exhibió en el Porlamar Cine la primera
película silente.
* El 6 de setiembre de 1919, comenzó a exhibir películas en Porla-
mar el “Motiograph Ideal Cine”, propiedad del señor Ciriaco Rafael
Hernández. Posteriormente tomó el nombre de “Paramount”.
* El 13 de febrero de 1927, se inauguró el servicio de Luz Eléctrica
de La Asunción.
* El 26 de agosto de 1927, arribó la maquinaria destinada a la planta
eléctrica de esta ciudad.
* El 18 de octubre de 1932 se proyecta por primera vez en Porlamar,
una película parlante.
* El 6 de setiembre de 1934, se inauguró un proyector de cine par-
lante en el Teatro “Paramount” de Porlamar.
(** Op. Cit). SUBERO, Jesús Manuel.- Pespunteo en la cronología histórica de Margarita, 1996
Libro de La Asunción, 1997
- 15 -
El Cine en La Asunción
PRIMER TIMBRE
Ayer Santa Lucía y luego La Asunción. Es una hermosa, apacible
y generosa comunidad, cuyos habitantes se han caracterizado por
una templanza sencilla, educada y amigable. De gente emprende-
dora, formada en distintos escenarios escolares, de una cultura mar-
cada por la amistad y el buen trato entre los conciudadanos. Villa,
Ciudad, Catedral, río, serranías, costas, cabildo, conventos, templos,
hospital, murallas, túneles, fortificaciones, imprenta, biblioteca, ra-
dio (¿tranvía?), y los primeros centros educativos y culturales de la
región Insular.
SEGUNDO TIMBRE
En esa misma semblanza, podemos señalar el cultivo, promoción
y desarrollo de la literatura, las artes plásticas, el teatro, la música,
la danza, y la difusión y vigencia de las proyecciones de películas
en la capital neoespartana. Como caso curioso, la vida transcurrida
en el país, y específicamente, en La Asunción, estuvo encadenada
y subordinada a los acontecimientos internacionales, sucediéndose
en ese momento.
TERCER TIMBRE
El desenvolvimiento de la vida en esta ciudad, estuvo signado por
muchas carencias de servicios, como los que se derivaban de la
planta generadora de energía eléctrica que funcionaba en horario
restringido en las noches; la construcción de calles y avenidas es-
trechas y el precario transporte vehicular, esto forzaba a que los
ciudadanos tuviesen que refugiarse en sus hogares a muy tempra-
nas horas nocturnas. Entonces, el cine se constituyó en un aliciente
vigoroso para ilustrar la vida y animarla en todas sus connotaciones
literaria, poética, musical e informativa.
- 16 -
El Cine en La Asunción
ABIERTAS LAS CORTINAS. ILUMINADA LA SALA.
Taquilla. Se ocultan las sombras y se aviva el bullicio
de los espectadores.
Entre 1947 y 1948, el Ministro de Educación, Maestro de América,
Dr. Luis Beltrán Prieto Figueroa, dispone instaurar, a través de la
Oficina de Alfabetización de Adultos (a cargo del Prof. Antonio
Seijas), la Campaña Nacional de Alfabetización, tomando como
base el programa “Abajo Cadenas” o método Blau Bach y apoyán-
dose en el recurso del registro y la proyección de documentales y
películas de corte educativo, recreadas en locaciones de la geografía
venezolana.
Para cumplir con la misión de implantar ese novedoso esquema
didáctico, en todas las escuelas del antiguo Distrito Arismendi, fue
enviado, en julio de 1947, el Dr. Humberto Piñero. Dado el éxito al-
canzado, fue preciso extenderlo a otras jurisdicciones. Formó equi-
po con los maestros Gaspar Landáez y Víctor Finamore, supervisores
distritales de Arismendi y Maneiro, respectivamente.
Luego de la capacitación del personal docente y técnico, Piñero hizo
trasladar a Margarita tres unidades móviles, incidiendo para ello el
servicio audiovisual incorporado, que no solo atendía los planteles
educacionales, sino que también recorría, en distintas frecuencias
semanales, las más apartadas poblaciones y caseríos, exhibiendo el
catálogo de cintas con material ilustrativo.
Este proyecto constituyó el primer intento del cine itinerante en
el estado Nueva Esparta, siendo, además, un éxito de animación
socio-comunitaria y produjo un hito que trascendió las esferas y
limitaciones de la sala convencional; sin embargo, esto trajo como
consecuencia, la formación de los nuevos espectadores y el apego al
séptimo arte, por parte de una sociedad con tradición cinéfila.
Posteriormente, el Ministerio de Educación, contrató a una em-
presa de cine suizo, para que filmara documentales de los diversos
- 17 -
El Cine en La Asunción
paisajes, cuadros de la fauna, flora y otros aspectos prominentes de
la cultura venezolana, comenzando por la isla de Margarita, especí-
ficamente, la ciudad de La Asunción, para lo cual fue comisionado
el Prof. Eduardo Rivas Casado.
El Dr. Piñero hace un ejercicio de memorización para señalar que
acompañó a aquel personal al alambique “Carmen Pastora”, de
Tiburcio Sanabria, en el otrora Camino Hondo de El Mamey, y re-
cuerda que “allí el cineasta organizó al conjunto de personas asis-
tentes, solicitándoles improvisaran una estampa tradicional de esa
localidad asuntina, de donde se originó la filmación de “El Juego de
Dominó”, una suerte de corto o registro audiovisual ligero y divertido”.
- 18 -
El Cine en La Asunción
APAGUEN LAS LUCES. SILENCIO.
Certificado por Antonio Espinoza Prieto (“Toñito”), testigo de
época, en su libro “Mi arboleda recobrada”, relata, cito: “…Teatro
Principal-Cine Columbia; así se llamaba la sala de espectáculos del
Bachiller Marcano. En su pantalla se proyectaban las películas del
cine norteamericano; mi madre recordaba a Rodolfo Valentino,
ambicioso y cautivador con sus trajes de luces de torero andaluz, en
las escenas de sangre y arena (…); y nosotros, las obras de Tarzán,
en las interpretaciones de Johnny Weissmüller (…); y las series de
episodios continuados, que durante tres días mantenía la tensión de
la clientela, el alma en vilo (…) Por varios años, el Bachiller man-
tuvo la competencia del otro cine de La Ciudad, Cine La Asunción
de Félix Silva Torcat (…)”, fin de la cita.
Con ello recordamos la anécdota de Cecilio Figueroa “Galán” que,
en una noche de su asidua costumbre de ver las películas, éstas de
Tarzán, sorprendido al ver que Weissmüller había pasado a ser “Jim
de la Selva”, de retorno a su casa, saludando a la emotiva concurren-
cia de mujeres en casa de Mencha, al preguntarle qué le había pare-
cido la película, él respondió muy desilusionado: “¡Ay, Mencha,
después que Tarzán se puso los pantalones se metió a marico!”.
A decir verdad, el cine en La Ciudad apareció como un relámpago
destellante sobre la tantas veces cantada y celebrada acrópolis de
Margarita, La Asunción, hasta la década del ‘90.
- 19 -
El Cine en La Asunción
LAS SALAS, PIONEROS Y APERADORES
Las únicas tres salas establecidas en la jurisdicción del municipio
Arismendi, de la que se tenga noticia, en los anales de la histo-
ria, fueron: Teatro Principal-Cine “Columbia” (antes Teatro de La
Asunción), del bachiller Rafael Marcano “Nofucho” (de finales de
los años ’30 a principios del ’40), luego regida por Simeón Rodríguez
(hasta mediados de los años ‘40), “La Asunción”, de Félix Ramón
Silva Torcat (de postrimerías de la década del ’40 a mediados de
los años ‘70) y, posteriormente, “Guayamurí”, de Braulio D’Jesús
(segunda mitad de los años ’70 hasta comienzos de los años ‘90,
cuando cerró sus puertas).
De la primera, lo poco que sabemos es que funcionó en las insta-
laciones del otrora “Coliseo” o Teatro de la plaza de las Escuelas,
en la calle Independencia, en un local ubicado entre el museo
“Nueva Cádiz” y la Casa-Cuna, donde se construyó el Centro de
Arte “Omar Carreño”, mientras que “La Asunción”, llegó a formar
parte de la cotidianidad y del ambiente citadino, en dos ambientes
y cinco tiempos.
Félix Ramón Silva Torcat, un asuntino emprendedor de mucha
valía, dispuso de un amplio espacio, donde antes estuvo un Mer-
cado Libre, en su residencia (una vieja casona -que perteneció a
Manuel Plácido Maneiro-, frente al antiguo convento franciscano),
para que los puntuales e inquietos concurrentes encontraran allí un
momento de pasatiempo, diversión o celebración.
Una vez demolido el caserón que dio paso a una moderna vivienda,
se mantuvo la afición, esta vez en proyecciones sobre un extenso
paredón del patio, contiguo a la casa de familia del Dr. Ramón Espinoza
Reyes. Los cartelones estaban a cargo de Carlitos Torcat.
A mediados de los años ’40, ante la demanda de espectadores en el
improvisado ambiente, al inicio de la calle Libertad, se produjo el
forzado traspaso de la empresa de Nofucho, a Simeón Rodríguez,
- 20 -
El Cine en La Asunción
y, posteriormente, cedida a Félix Silva Torcat; de esta manera, el
cine “La Asunción” es mudado al perímetro donde estuvo antes el
“Columbia”, constituyéndose en todo un acontecimiento, frente a
la Catedral.
El cine “Columbia”, bajo la regencia y atención de máquinas de
Nofucho, tuvo de aperador y creador de carteles, a su hijo, Rafael
y su nieto Agustín Marcano, respectivamente; mientras que en la
administración de Simeón Rodríguez, el encargado era Ramón
Benítez “Moncho” y Operador Tomás Brito “Gusanero”.
“La Asunción”, en su nueva sede, a mediados del siglo pasado, como
dijimos anteriormente, fue regentada por Félix Silva Torcat, y tuvo
un personal rotativo, a saber: Pintor de cartelones: Asdrúbal Marcano.
Apoyo técnico: José Fernández “Talega”. Taquillero y carteles:
Asdrúbal Gutiérrez. 1º Operador: Tomás Brito “Gusanero”.
2º Operador: Jesús Hidalgo “Chuchú” y su Ayudante: Francisco
Santaella “Pachico”. Celador: Trino Torcat “Totó”.
El “Guayamurí”, lo gerenció Braulio D’Jesús, con 5 aperadores o en-
cargados, en diferentes fechas: José López (de Porlamar) y asistente:
Antonio Rodríguez, luego vinieron Oswaldo Silva “Morocho”, José
Miguel Prieto “Nené”, Manuel Caraballo “Macaví” y Germán
Navarro Acosta, siendo operador Amílcar León, entre otros.
Jesús Hidalgo “Chuchú”, se mantuvo de operador, hasta 1980,
cuando fue sustituido por Francisco Santaella “Pachico” y Francisco
Rodríguez “Chico Pelúo”. Fungieron de taquilleros: María Hernán-
dez “Paloma” y Jesús Rivera “Chuito”. Acomodadores y aseadores:
Luis Fernández “Saporrita” y Rosendo Tabasca “Chendito”. Porte-
ros: Pedro Rojas (Perucho peluquero), Antonio Guevara “Platillo”,
Jesús Hernández, Antonio Figueroa “Cuevo”, Jorge Rivas y Toribio
López.
Ese pionero salón, que lo fue “La Asunción”, representó para los
asiduos espectadores, un punto de encuentro y posterior tertulia,
- 21 -
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

acerca de los filmes que se exhibían en su pantalla. Ocupó un lugar

privilegiado, durante mucho tiempo, la exposición de cintas meji-
canas, donde destacaron María Félix, Mario Moreno “Cantinflas”,
Jorge Negrete, Dolores del Río, Pedro Infante, Germán Valdés “Tin
Tan” y Pedro Armendáriz, sin duda, sus más celebrados artistas.

El imponente recinto, exhibiendo una encantadora fachada, ani-

mada por un amplio balcón, se constituyó en la primera sala en po-
seer la mayor cantidad de butacas instaladas en la región Insular,
en el siglo XX, compartiendo sus instalaciones y programas, con la
promoción, producción y difusión del arte teatral, a través de las fa-
mosas y variadas “Veladas”, donde participaban compañías locales,
regionales, nacionales e internacionales, con las actuaciones de re-
conocidos artistas como Emma Soler, Olimpia Portocarrero (“La
Pequeña Quijanito”), Ramirito, entre otros.

Con el devenir del tiempo, transformada la denominación del cine

“La Asunción”, en Teatro “Guayamurí”, a cargo de Braulio D’Jesús,
ocupó el cargo de aperador, Oswaldo Silva “Morocho”. Además,
se responsabilizó por el manejo de la sala “Arestinga”, en Porlamar,
atendiendo con esmero las exigencias que requería un trabajo de tal
naturaleza.

El desempeño de “Morocho”, significó un esfuerzo constante por

impedir que los recintos destinados a la promoción y proyección de
películas, bajo su gestión, cerraran sus puertas y desaparecieran de Casona del prócer Manuel Plácido Maneiro, adquirida posteriormente por Félix Silva
los pueblos y ciudades de Margarita. Torcat, ubicada frente al antiguo convento de San Francisco. En uno de sus amplios
salones funcionó, inicialmente, el Cine “La Asunción”.

- 22 - - 23 -
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

Fachada del edificio donde funcionó las salas de cine “La Asunción” y “Guayamurí”.
Anteriormente, hubo otra estructura, para el Teatro Principal o Cine “Columbia”

Félix Ramón Silva Torcat. Exitoso empresario y pionero de las salas y las proyecciones
cinematográficas en La Ciudad.

- 24 - - 25 -
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

Oswaldo Silva “Morocho”

Pase de cortesia

María Félix. Celebrada actriz del cine mejicano.

Oficio de Braulio D’Jesús a Oswaldo Silva

- 26 - - 27 -
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

INTERÍN:
RETRETA, CACAO, ROCKOLA, ESTRENOS Y FIGURAS

Así como La Asunción tuvo sus granados poetas, compositores,

músicos, bailarinas, cantantes y actores, igual los artistas y personajes
que actuaban en las realizaciones cinematográficas de Nuestra
América, sobrecogieron al público exigente, contagiando de pasión
y amor, de tristeza y dolor, según la trama que encerrara cualquier
película que se proyectara en aquel concurrido auditorio.

Quizá esta ciudad, desde hace tiempo, ha tenido nostalgia y ha vivi-

do pasiones entre sus seres, por eso las noches cuando se presentaba
alguna película de acuerdo con el género que esta tuviese, la gente
podía agotar la taquilla y abarrotar, en algunos casos, la llamada sala
de “Preferencia”, y en otros momentos, la de “General”.

Teníamos funciones vespertinas y de noche, todos los días, y el

domingo era muy especial porque estaba acompañado de la distin-
guida e inolvidable retreta de la banda “Francisco Esteban Gómez”,
que sonaba sus piezas musicales en la Lira del parque “Luisa
Cáceres de Arismendi”, destacándose con ello las figuras prominentes de
maestros como Augusto Fermín y Pedro Marcano Rosas (“Perucho
Rosas”).

Las noches capitalinas, estaban muy alteradas por la asistencia de

los constantes amantes de las creaciones mejicanas, argentinas o
chilenas, menos difundidas. Los asientos duros de la Lira, servían
como sala de espera, antes de abrir las puertas del local, mientras
que en las adyacencias de la iglesia Catedral, Antonia Gil “Toña” y
Catalina Silva, preparaban y servían el suculento cacao caliente.

Hubo éxitos fascinantes inmemorables, como “Allá en el rancho

Grande”, “El gran dictador”, “El jorobado de Nuestra Señora de
París”, “La dama de las camelias”, “Lo que el viento se llevó”, “Ahí
está el detalle”, “El conde de Montecristo”, “Casa blanca”, “La luz
que agoniza”, “La guerra y la paz”, “Por vivir en quinto patio”,

- 29 -
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

“El peñón de las ánimas”, “Huapango”, “Dos tipos de cuidado”,

“Callejera”, “La Potranca”, esta última, polémica, por sus imágenes
obscenas, y tantas otras que gustaron muchísimo.

Esa sala sirvió de escenario para conocer en vivo a artistas consagra-

dos como Libertad Lamarque, Pedro Infante, la Tongolele, Mauricio
Garcés, Almeidine y su compañía teatral colombiana, Armando Bo,
Isabel Sarly, Mario Suárez, Lila Morillo, y otras singulares estrellas
del mundo del espectáculo.

Fue muy interesante para el cine en La Asunción, el hecho que du-

rante la Semana Santa, se proyectaran películas de corte religioso,
como “Jesús de Nazareth” (con la actuación y portento de voz de
Enrique Rambal), “Jesús en el huerto”, “Juana de Arco”, “Genoveva de
Bravante”, “Quo Vadis” (con Robert Taylor y Débora Kerr), “Oliver
Twist”, “Los 10 mandamientos” (dirigida por Cecil B. DeMille, con
la actuación de Charlton Heston), esta última, primero en blanco y
negro y luego a colores, entre otras.

Al lado de la entrada del cine, atendía en su botiquín Dámaso Silva,

“Pulapo”, local que poseía una rockola, muy provista de los más
variados éxitos del momento; expendía cerveza y ahí los parroquia-
nos libaban hasta quedar eufóricos. Hubo un momento notable en
el perímetro de la plaza Luisa Cáceres, la plaza Simón Bolívar y la
iglesia Catedral, cuando el señor Ramón Acosta, siendo presidente
del Concejo Municipal, promovió la ornamentación de estos pa-
rajes, inaugurando nueva arborización e iluminación; un acto muy
festivo, animado y gozoso para todos los asistentes, se brindó
piscolabis o canapés y las bebidas espirituosas preferidas, conoci-
das como “Chelía”, “Carmen Pastora”, “Don Simón” y “Doca”.

Retreta de la Banda “Francisco Esteban Gómez”, en la Lira del parque “Luisa Cáceres
de Arismendi”, frente al cine “La Asunción”

- 30 - - 31 -
El Cine en La Asunción
Cartelón promocional de la película “Casablanca”
Cartelón promocional de la película “Quo Vadis”
- 32 -
El Cine en La Asunción
PREPARATIVOS DE ENTRADA
Antes de empezar cada función, se proyectaban comerciales que
venían acompañando las películas. Recordamos la promoción de
las marcas de cigarrillo Viceroy, Chester Field, Lucky Strike, L&M,
Winston o Marlboro, que se anunciaban con grupos musicales de
origen estadounidense, verbigracia The Plathers, entre muy variados.
Asimismo, las películas estaban acompañadas de noticieros interna-
cionales; entre ellos había un noticiario denominado “Movietone”,
reflejaba las noticias sobre acontecimientos sociales, políticos, cul-
turales y deportivos, como fue el caso, en 1959, de la célebre pelea
por el campeonato mundial del peso mosca, entre los inolvidables
Ramoncito Arias (venezolano), contra Pascual Pérez (argentino).
Se recuerda en ese evento, la presencia del Contralmirante Wolfgang
Larrazábal y tantas otras personalidades del mundo político na-
cional. Además, se informaba sobre los clásicos hípicos en el hipó-
dromo La Rinconada, en la voz inconfundible del bien ponderado
Emilio de La Torre.
Igualmente, para satisfacción del público, se exhibía el noticiero
de la Bolívar Film, que recreaba lo más selecto de la cotidianidad
de Caracas, entre otras cosas la elegancia, el gourmet, los bailes de
gala, los conciertos, espectáculos danzarios y obras teatrales, en el
Aula Magna de la UCV y los teatros Municipal y Nacional, narra-
dos por la sobria e imponente voz del afamado locutor y actor Tomás
Henríquez.
Era de admirar, en pantalla, las hazañas de grandes toleteros del béisbol
de Grandes Ligas, como Mickey Mantle, Joe Dimaggio, Phil
Rizzuto, Willie May, Nellie Fox, Alfonso Carrasquel, Yogi Berra,
Beto Ávila, Warren Sphan, White Ford, Don Larcen, Roberto
Clemente, Frank Torre, Elton Howard, Minnie Miñoso, Ramón
Monzant, Luis Aparicio, Jim Owwens y Al Caline.
- 33 -
El Cine en La Asunción
Por ellos, pudimos celebrar la existencia de los equipos de la gran
carpa, Yankees y Los Gigantes de New York, Dodgers de Brooklyn,
Indios de Cleveland, Phillis de Philadelphia, Bravos de Milwauke,
Tigres de Detroit, Piratas de Pittsbourgh, entre otros.
Mientras que, desde la capital de la República, se reseñaban los jue-
gos entre los conjuntos Venezuela, Vargas, Magallanes y Cervecería
Caracas, los cuatro equipos integrantes de la Liga Venezolana de
Béisbol Profesional (LVBP).
Esto sirvió como recurso audiovisual, cuando aún no había llegado
la televisión a Margarita. Cosa curiosa: El público se mantenía al día
con situaciones de actualidad informativa, que satisfacían el cono-
cimiento, el entendimiento y los argumentos para conversar en las
tertulias diarias. La gente estaba enterada de lo que sucedía en los
límites, más allá de su entorno local.
- 34 -
El Cine en La Asunción
CARTELONES CON GRACIA Y ARTE
También es de grata recordación las brillantes pinturas de los anun-
cios, promocionando las virtudes de las cintas a proyectarse cada
día, recostados del cotoperís macho de la plaza Luisa Cáceres de
Arismendi, del otro cotoperís, frente al reloj equinoccial, y del
no-me-olvides del antiguo mercado municipal.
En los nuevos tiempos, los carteles eran elaborados por las ma-
nos prodigiosas de Asdrúbal Marcano, en principio, y de Asdrúbal
Gutiérrez, después; artistas que mostraban un dominio casi per-
fecto del trazado de los colores y el arreglo de las letras, más dibu-
jos ligeros que pudiesen ameritar la presentación respectiva de los
filmes.
Aunque no fuese originario de La Asunción, pero si hijo de un asun-
tino, destacó también José Pérez (o “Chepérez”) o “José González”;
imprimió su habilidad o destreza, en papel de traza, para darle con-
figuración completa a un afiche, con imágenes, letras y comentarios,
como el que diseñó para la imborrable película romántica mejicana,
“Rayito de Luna”.
- 35 -
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

LAS DISTRIBUIDORAS Y EL DESPACHO DE PELÍCULAS

Salvador Cárcel: Exitoso empresario español, radicado en Caracas.

Tenía a su cargo la colocación de películas de habla hispana, a través
de la empresa Distribuidora Salvador Cárcel (luego pasó a llamarse
Pelimex), desde mediados de los años ’40, ocupando todos los es-
pacios de difusión cinematográfica en las ciudades de Pampatar,
Juangriego, Punta de Piedra, La Asunción y Porlamar (esta última
poseía tres salas de envergadura: “Paraguachí”, “Paramount” y
“Porlamar”).

El auge del cine en Margarita se debió a la distribuidora Salvador

Cárcel que, además, de una variada y exitosa cartelera, presentó a
grandes figuras del espectáculo cinematográfico de Nuestra América.

Para los especialistas, esto permitió en Margarita conocer los más

destacados actores del cine latinoamericano, muy queridos por
toda la generación de entonces, entre ellos: los hermanos Julián,
Andrés y Fernando Soler, Tito Guizar, Jorge Tuero, Ramón Armengol,
Jorge Negrete, José Mojica, Pedro Infante, David Silva, Pedro
Armendáriz, Rafael Baledón, Carlos Gardel, Hugo del Carril, Luis
Sandrini, entre otros, y las destacadas actrices María Félix, Sara
García, Dolores del Río, Gloria Marín, Zoe Ducós, Libertad
Lamarque, Silvia Pinal, Zully Moreno, Elsa Aguirre, entre otras.

Braulio D’Jesús: Oriundo de Barcelona, estado Anzoátegui.

Voluntarioso empleado del negocio de la distribución de películas
de cine en Caracas y el Oriente del país. En su ciudad natal, centró
sus operaciones para atender la demanda de la zona nororiental.
Vino a Margarita en el último tercio de los años 50, como represen-
tante de Distribuidores de Películas Asociados (DPA).
Braulio D’Jesús
Introdujo en esta región, las películas producidas en Hollywood,
con títulos en español, como “Twenty Century Fox”, Warner Brother,
Universal International, Paramount Picture, Metro Golding Meyer
(MGM), Organization RANK y Tropical Film.

- 36 - - 37 -
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

EL PERSISTENTE OPERADOR DE MÁQUINAS

Jesús Antonio Hidalgo Hernández “Chuchú”: Un personaje habili-

doso en eso de hacer funcionar e ingeniárselas para el mantenimiento
de un equipo que apenas contaba con un proyector, de marca Honey
Well (estadounidense), para seis rollos, de 1 hora y tres cuartos de
duración, que apenas disponía de una sola unidad, ante un público
cada vez más exigente.

Comenzó el apasionante oficio de operador de máquina, en el cine

“La Asunción”, alrededor de 1950, como asistente de Tomás Brito
“Gusanero”, evocando la hermosa edición de imágenes del célebre
film “Cinema Paraíso”, y se mantuvo hasta 1980, cuando se retiró de
aquellos gratos quehaceres, sin que se le retribuyera beneficio social
alguno por sus 30 años de servicio.

Chuchú expresa con orgullo que, no era muy difícil operar una
máquina alemana de la Zeiss-Ikon, estrenada para proyectar, en
1961, el extraordinario film de corte religioso “Los 10 Mandamientos”
(1923-1956), dirigida por Cecil B. DeMille, quien se valió de sub-
terfugios técnico-artesanal, para resolver la imagen de la separación
de las aguas del río Nilo, cuando aún no existían los llamados efectos
especiales.

Eran películas muy viejas y Chuchú tenía que remendarlas con una
hojilla y glicerina, y algunas veces era protestado, con el mote de
“Orejón”. Esas películas tantas veces puestas, a la medida que recorrían
las salas de Venezuela, se deterioraban y había que arreglarlas para
que pudieran ser proyectadas sin interrupción. “Cuando las pelícu-
las estaban muy maltratadas se quemaban, entonces se veía en la
pantalla, el celuloide un poco derretido”, comenta nostálgico.

Jesús Antonio Hidalgo Hernández “Chuchú”

- 38 - - 39 -
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

LAS PERIPECIAS DEL HIJO DE MENCHA
Para los buenos amigos Héctor Narváez “Heitico” y Horacio Navarro
“Acho”, fue muy recordada la presencia de Hernán José Núñez, el
hijo de Eugenia María Núñez “Mencha”. En 1957, a la edad de 13
años, ingresó al equipo de trabajadores del cine “La Asunción”,
como Portero de Preferencia (con un salario de sesenta bolívares
mensuales), en sustitución de Carlitos Acosta; acompañaba a Juan
Hernández (“Juan Millán”), quien atendía la sala de General.
Apuntan: “Conocimos la del famoso cantante y trompetista Luis
Amstromg, la del guitarrista Archie Shaw, la del pianista Benny
Goodman, la del baterista Frank Cupra (reflejado en la película “El
hombre del brazo de oro”, con Frank Sinatra), la de Jimmy Durcey,
la de Duke Ellinton, la de Glen Miller o la de Gilliespi; también, los
famosos restoranes de Nueva York, como el Picadilly o el Tiffany”.

Heitico recuerda, con apremio que, Hernán fue designado, en

aquellos tiempos, programador, y se ocupó de introducir las pelícu-
las de corte holivudense, como por ejemplo “Ursus”, “Odiseo”,
“Cleopatra”, entre otras. Compartió con Jesús Hidalgo, Francisco
Lárez, Victoria Lárez, Asdrúbal Gutiérrez (quien venía de suplan-
tar a Nicolás Narváez “Colacho”), y una vez que éste se dedicó a la
gestión docente, Hernán también se encargó de la pintura y rótulos
de los cartelones.

Por su parte, “Acho” refiere nostálgico que, Hernán se ocupaba, ma-

ñana y tarde de cada sábado, de elaborar, pintar y fijar los avisos
panorámicos. La lista de películas disponibles enviadas por D’Jesús
a Félix Silva, era confiada, por este último, a aquel inquieto y acu-
cioso jovencito, para que seleccionara el ciclo que se proyectaría,
durante un mes, en el inolvidable cine “La Asunción”.

Estos apreciados testigos de excepción coinciden que, a partir de

ese entonces, el cine norteamericano se hizo de fácil entendimiento
y comenzó a entronizarse en el gusto del público, pues al ser de “la
meca del cine” las películas tenían más que mostrar: las viviendas,
las calles y avenidas, los parques, otras atracciones o la recurren-
cia de los atiborrados negocios nocturnos, simplemente conocidos
como night club, bares o botiquines y las apariciones de las bandas
musicales de jazz. Cartelón promocional de la película “Spartacus”

- 40 - - 41 -
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

EN LA ASUNCIÓN RESURGE LA ESTRELLA DEL CINE temático, técnicas de filmación adelantadas, representación actoral
de mucha calidad interpretativa y escenarios vigorosos, deslum-
Todo este trayecto recorrido en el tiempo, en el espacio y en la histo- brantes y reconfortantes, para mantener viva la flama de un nuevo
ria, permite presenciar con júbilo, en La Asunción, la primera edición cine que recoja vicisitudes y tramas de profundo pensar a realizar.
del Festival de Cine Nacional Margarita 2008, con el sugerido lema
“La estrella del Caribe”. Del 9 al 15 de octubre, la sala del municipio Un cine nuevo impregnado de connotaciones ideológicas, pro-
Arismendi, ubicada en la Casa de la Cultura “Mons. Dr. Nicolás gresistas y de avanzada que llega a combinar lo imaginario en lo
Eugenio Navarro”, de esta ciudad, se convirtió en la sede central de precioso, lo transformador y lo revolucionario.
este magnífico encuentro del séptimo arte.
Por ahora, …cerramos la cortina.
No cesan los aplausos para celebrar este maravilloso acontecimiento
que ha sido instituido, anualmente, para promover la creación, pro-
ducción y proyección de películas venezolanas, a través de un circuito
de salas comunitarias.

Hay que reconocer lo acertado de esta extraordinaria idea, que

echa por tierra aquella máxima “sólo en salas restringidas y elitescas
puede encontrarse buen cine”. La Distribuidora Amazonia Films y
otros entes culturales del Estado, entrejuntaron recursos, técnicas,
materiales y conceptos, para que el evento consagrara una acción
que en el porvenir rendirá frutos, ofreciendo al país y, en especial, a
Nueva Esparta, una respuesta idónea de convocatoria cultural, edu-
cativa y política que los eleve en formación y desarrollo social.

Complacidos estamos por siempre y para siempre, con tan aprecia-

da decisión, a Amazonia Films, Fundación Cinemateca Nacional,
Centro Nacional Autónomo de Cinematografía (CENAC), Fun-
dación Villa del Cine y Plataforma del Cine y Medios Audiovisuales,
todos bajo la tutela del Ministerio del Poder Popular para la Cul-
tura. También hay que destacar la disposición de apoyo de la Alcal-
día Bolivariana del municipio Arismendi, a través de su Instituto
de Cultura y Patrimonio (ICPMA) y su equipo de activadores y
personal obrero.
Afiche promocional del
El festival, que recrea las vivencias de ese cine que se niega a “Festival de Cine Nacional de Margarita 2008”
desaparecer, presentó de forma estelar, películas de gran contenido

- 42 - - 43 -
El Cine en La Asunción
LO SOCIOLÓGICO, SICOLÓGICO Y CULTURAL
El cine creó un alta estimación de sus habitantes, tanto que sirvió
de fundamento para conocer otras realidades: cantantes, bailari-
nas, intérpretes (como Pérez Prado y Beni Moré, entre otros), ad-
mirar nuevos paisajes, conocer la ambientación donde se filmaban
las películas; era un viaje fantástico para conocer nuevas latitudes
y experiencias, así como el contenido de las obras que servían de
modelo para filmar historias de amor y de dolor, despechos, jolgo-
rios, traiciones, suspenso, intrigas, todo lo que reflejaba la vida en
general.
Ese mágico cine de aquel entrañable tiempo, avivaba los espíritus
sombríos que se veían en una ciudad postergada, y los cinéfilos de
entonces encontraban un refugio para la plática íntima o el primer
encuentro amoroso, pero también para divertirse, charlar, cuestio-
nar y emular a los personajes de su preferencia.
Como el caso del cómico y cineasta británico Charles Chaplin
Charlot (El chico, 1920, La quimera del oro, 1925, o Luces de la
ciudad, 1931) y del actor de doblaje y comediante mejicano,
Germán Valdés, Tin Tan (El niño desobediente, 1945, El niño per-
dido, 1947, También de dolor se canta, 1950, o Suicídate mi amor,
1961), que a decir de su amada madre, Mencha, ello ejerció en su
adolescente hijo magnetismo e influjo para moldear la conducta del
“buen gusto”, en el desenvolvimiento de las relaciones juveniles.
Con orgullo podemos afirmar que, los cuadros de la filmografía
universal mostrados en nuestras salas, enseñó a conocer la gente,
la cultura, la geografía, la fauna, los exuberantes paisajes, parques y
bosques del mundo, y apreciar el extraordinario histrionismo de
actores y actrices, provenientes de las escuelas de teatro de influen-
cia española, italiana, francesa y anglosajona.
Para quienes atesoramos la noble misión de impulsar, la reivindi-
cación del sitial de honor que históricamente es querencia asuntina
- 44 -
El Cine en La Asunción
y, con ello, aupar la inaplazable idea y planificación de reconstrucción de
la morfología urbana, que devuelva la inmarcesible figura de ciudad
altiva. Aún así, duele mucho y no tiene consolación, la situación de
vacío que dejara la desaparición de los recintos para la proyección
cinematográfica, otrora símbolos de la “bella época” de La Asunción.
Sin quizá, desde la creación del Instituto de Cultura y Patrimonio
de la Alcaldía Bolivariana del municipio Arismendi, mediante or-
denanza se erige el Plan de Acción Cultural anual, instaurando el
programa Cinearte Comunitario de La Ciudad, desde la Sala
“Augusto Fermín”, de la Casa de la Cultura “Mons. Dr. Nicolás
Eugenio Navarro”, para la promoción y difusión de las mejores
producciones de todos los tiempos, con los auspicios del cineclub
“Hernán Núñez”, cineclub “Filiberto Acosta”, Fundación Artística
“Sobretablas”, Asociación por un Buen Cine (ABC) y Cooperativa
de Cine “Insularia”.
Afortunadamente, hoy, gracias al proceso de transformación social
que vive el país, el Ministerio del Poder Popular para la Cultura,
a través de la Plataforma del Cine y Medios Audiovisuales y los
demás organismos descentralizados, cubren esa plaza adormecida,
con la producción y difusión de cortos y largometrajes clásicos y
novedosos, para resarcir la carencia de inolvidables producciones
internacionales y venezolanas.
Hernán José Núñez
- 45 -
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

EL CINEARTE COMUNITARIO DE LA CIUDAD

La Alcaldía bolivariana del municipio Arismendi, a través del In-

stituto de Cultura y Patrimonio (ICPMA), por medio del pro-
grama CINEARTE COMUNITARIO DE LA CIUDAD, hace
un esfuerzo encomiable por brindar al público amante del mejor
cine, realizado en los mas famosos centros de rodajes, presenta una
colección de cintas inmejorables, entre directores de afamada pos-
tura creativa y los mejores actores y actrices de reconocida fama.
Es importante para cualquiera que sienta el gusto y disfrute de las
proyecciones, valorar lo que eso significa, lo que eso comporta para
conservarlo y asegurar que lo han presenciado y lo han vivido.

El conjunto de obras selectas que se ofrece, son piezas de un valor

imponderable, reservadas en un archivo filmográfico que no es de
fácil acceso para cualquiera. Con ello, vamos a los más apartados
pueblitos.

Estas películas del Cinearte Comunitario de La Ciudad, no

pueden ser estimadas, como sucede con las carpas de los circos que,
una vez concluida su temporada, tardan mucho para poder ser exhi-
bidas, el andamiaje circense se va y cuando vuelva ya el programa
ha cambiado y muchos de los actores o personajes serán otros. En
cambio, los filmes proyectados se mantienen como joyas imborra-
bles en el tiempo y, además, son obras que no se agotan en una sola
generación; al contrario, contribuyen al aprendizaje de la gente que
ha vivido en muchas etapas del tiempo. Gracias a su solidaridad,
ahora formamos un circuito, al instaurar el subprograma de exten-
sión para las populosas poblaciones del municipio, cada lunes, a las
7 PM.

Luis Eduardo Acosta Anés, Filiberto Acosta Noriega,

Afiche promocional del programa “Cinearte Comunitario de La Ciudad”, ideado y
ejecutado en la Sala “Agusto Fermín” de la Casa de la Cultura “Mons. Dr. Nicolás Hernán José Núñez y Wilfredo Salazar
Eugenio Navarro”, por el Instituto de Cultura y Patrimonio del municipio Arismendi
(ICPMA)

- 46 - - 47 -
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

EL CINEARTE COMUNITARIO DE LA CIUDAD

El programa CINEARTE COMUNITARIO DE LA CIUDAD,

auspiciado por la Alcaldía bolivariana del municipio Arismendi y
el Instituto municipal de Cultura y Patrimonio (ICPMA), tiene
como finalidad proporcionar al cinéfilo una gama de filmes que se
produjeron en épocas primigenias de la promoción del séptimo arte,
ofreciendo al público amante de las buenas películas, dramáticos
apasionados, de aventura, western, e intrigas políticas que satis-
facen los sentidos de la gente.

Cintas que entran en el renglón de lo clásico y que aportan al es-

pectador conocimientos, técnicas y experiencias, a manera de
confeccionar un producto de buena calidad, de lo más granado e
inteligente, para saber apreciar lo sustancial de cualquier tema
cinematográfico. Cinearte Comunitario de La Ciudad, presenta
una oferta, sinigual, de las más variadas y agradables filmaciones
efectuadas en Hollywood, Europa y en Latinoamérica.

Esta cartelera alternativa puede ser disfrutada, gratuitamente, en la

Sala “Augusto Fermín”, de la Casa de la Cultura “Mons. Dr. Nicolás Eu-
genio Navarro”, los días martes y jueves, y, por extensión, el progra-
ma Cine Comunitario “Guarapotú”, en el Teatro “Santa Lucía”,
cada lunes. Todos a las 7:00 PM.

Luis Eduardo Acosta Anés

Filiberto Acosta Noriega
Hernán José Núñez

Afiche promocional del programa “Cinearte Comunitario de La Ciudad”, ideado y

ejecutado en la Sala “Agusto Fermín” de la Casa de la Cultura “Mons. Dr. Nicolás
Eugenio Navarro”, por el Instituto de Cultura y Patrimonio del municipio Arismendi
(ICPMA)

- 48 - - 49 -
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

FILMES
de todos los tiempos Maria Antonieta, 1938. Director: W.S. Van Dyke

Mi mujer no es soltera, 1941. Director: Leigh Jason

- 50 - - 51 -
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

El gran pecador, 1949.

Director: Robert Siodmak

La Madona de las site lunas, 1945. Director: Arthur Crabtree

Mi adorado Juan, 1950.

Teatro Apolo, 1947. Director: Rafael Gil Director: Jerónimo Mihura

- 52 - - 53 -
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

Yo confieso, 1953.
Director: Alfred Hitchcock

La corona negra, 1951. Director: Luis Saslavsky

Crimen perfecto, 1954.

Cantando bajo la lluvia, 1952. Directores: Stanley Donen y Gene Kelly Director: Alfred Hitchcock

- 54 - - 55 -
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

Samson y Dalilah, 1949. Director: Cecil B. DeMille

Bolero inmortal, 1958. Director: Rafael López Portillo

Sissi Emperatriz, 1956. Director: Ernst Marischka El gran pillo, 1960. Director: Gilberto Gazcón

- 56 - - 57 -
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

Sofía Loren
Deborah Kerr (Actriz norteamericana)

Ana Bertha Lepe (Actriz mejicana) María Antonieta Pons (Actriz y bailarina cubana)

- 58 - - 59 -
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

Jane Mansfield (Actriz norteamericana) Rosita Quintana y Luis Aguilar (Cine Mejicano)

Hedy Lamarr Lucho Gatica y Ana Bertha Lepe

- 60 - - 61 -
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

Frank Sinatra y Gina Lollobrigida

- 62 -
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

COLOFÓN

Hernán José Núñez nos entrega en esta corta, pero vigorosa inves-
tigación, una página que ritualiza el querer y el amor por la ciudad
de La Asunción. De sus entrañas saca a relucir el recuerdo por las
películas y el cine, como pasatiempo del hombre en sus horas de
ocio. Cierto que fue en Maracaibo y su lago donde comenzaron los
fotogramas de la cinemateca nacional y la autoría nadie se la discute
a Manuel Trujillo Durán.

A lo grande y con el mejor de los capotes, Hernán plasma la viven-

cia de ese trío de pequeños empresarios, que envuelve la historia
local de nuestro cine, como lo fueron el bachiller Marcano, Félix
Ramón Silva y Simeón Rodríguez.

Lo asuntino se extiende con el recuerdo de los hombres y mucha-

chos que estuvieron acompañando, a cada empresario, en eso de
pintar cartelones, acomodar las salas, manipular los equipos y hacerles
las cirugías a las cintas para que el público las disfrutara.

Aquí Hernán se pasa de humilde, no obstante debo reconocer que

es un gran trabajo, en eso de recoger los recuerdos que marcaron
el comienzo de las tantas actividades que se iniciaron en la ciudad
capital y que los años, como las nuevas tendencias comerciales y
empresariales, se han encargado de eliminar las salas de cine en
todo el territorio nacional.

Como agregado, yo agrego al anís nostálgico, las humeantes tazas

de chocolate que debajo del toco ofrecía Toña Gil a los cinematecos
asuntinos y las domingueras tardes, entre los límites de las puertas
del bar de Pulapo y el cine, donde los muchachos intercambiaban
sus cuentos.

Luis Marcano Boadas (Palinga).

Cronista de La Asunción.

- 65 -
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

BIBLIOGRAFIA, HEMEROGRAFÍA Y Muestra: “Tras las huellas de La Ciudad: Una mirada cercana a
OTRAS FUENTES CONSULTAS nuestro pasado”. MUSEO HISTÓRICO DE LA ASUNCIÓN.
2008.
SUBERO, Jesús M.- Pespunteo de la Cronología Histórica de Mar-
garita, FONDENE, 1996. PIÑERO, Humberto.- Fuente oral.
Libro de La Asunción. Fondo Editorial del
estado Nueva Esparta-Alcaldía de Arismendi. La Asunción, 1997. HIDALGO HERNÁNDEZ, Jesús Antonio “Chuchú”.- Fuente oral.

LUZZI, Michelangelo.- El Cine como Medio Publicitario en NÚÑEZ, Eugenia María.- Fuente oral.
Venezuela. Trabajo de Grado como Técnico Superior Universitario
en Publicidad. Instituto Universitario de Nuevas Profesiones. D’JESÚS, Braulio.- Fuente oral.
Especialidad: Publicidad. Cátedra: Medición de Medios Publici-
tarios. Caracas, 2001. NARVÁEZ, Héctor.- Fuente oral.
ACOSTA ANÉS, Luis Eduardo.- Tesis de grado “El Teatro en Nueva
NAVARRO, Horacio.- Fuente oral.
Esparta, antes y durante la Zona Franca y el Puerto Libre”. Escuela
de Artes, UCV, Caracas, 1991.

ESPINOZA PRIETO, Antonio.- Mi arboleda recobrada. Ediciones

Fundación Luis Beltrán Figueroa. Caracas, 2007.

MARCANO ROSAS, José.- Historia y Habla Popular en Margarita.

Ediciones Fundaconferry. Caracas, 1978
Testimonios Margariteños. Imprenta
Oficial del estado Nueva Esparta. La Asunción, 1971.

MARCANO BOADAS, Luis Elexe.- Honras que Honran a los

Arismendi. Dirección de Cultura. Gobernación de Nueva Esparta.
La Asunción, 1994.

ACOSTA, Rosa Rosauro.- Diccionario Margariteño. Fondo

Editorial del estado Nueva Esparta. 1996.

Revista CINÉFILO. Varias ediciones. Madrid, España.

Muestra iconográfica. FUNDACIÓN CASA DE LA HISTORIA.

La Asunción, 2008.

- 66 - - 67 -
El Cine en La Asunción
FONDO EDITORIAL “VALLE DE SANTA LUCÍA”
¿QUIÉNES SOMOS? ¿DE DÓNDE VENIMOS?:
El Fondo Editorial “Valle de Santa Lucía”, fue creado el 25 de enero
del año 2005, por el Instituto de Cultura y Patrimonio del municipio
Arismendi (ICPMA), del estado Nueva Esparta, como una necesi-
dad de acercar, comunicar y reconstruir la memoria cultural y la his-
toria local de nuestras comunidades, en función de su poder par-
ticipativo y protagónico, basado en los valores, ideas, convicciones
y creencias, siendo un bien irrenunciable de los derechos culturales
y educativos, establecidos en la Constitución de la República Boli-
variana de Venezuela. Así entonces, se han producido afiches, ca-
tálogos, programas, volantes, folletos y la edición de la primera obra
bibliográfica, intitulada “La Asunción: Vi, viví y me lo contaron”,
anecdotario del farmacéutico Víctor Acosta Rodríguez (diciembre
de 2006), correspondiente a la Colección Cuadernos de Saberes.
ESCRITOS Y REPASO DE VIVENCIAS COMUNITARIAS
DE LA ASUNCIÓN, es una iniciativa que busca reivindicar y
valorar el talento, la creación y el conocimiento de los pobladores
del municipio Arismendi del estado Nueva Esparta que, por méri-
tos propios, han trascrito en páginas, estampas y colores, la queren-
cia elevada de espíritu y alma.
Este proyecto ofrece a todas las personas que con vocación de narrar
experiencias, saberes, costumbres, vivencias, pasiones, dolores y
alegrías, puedan hacerlo por medio de textos ensamblados en cuader-
nos, periódicos, revistas o libros, para la lectura masiva y el cono-
cimiento de la mayoría de la comunidad.
Con ello, se pretende repasar y editar fuentes ligadas a la historia
patria, a la cultura pueblerina, a las distintas vivencias y acon-
tecimientos, donde nuestra gente celebre sus propias experiencias y
manifestaciones, como testimonio escrito perdurable en el tiempo.
- 68 -
El Cine en La Asunción
ASCENDENCIA COMUNITARIA:
Propiciar y fortalecer los recursos técnicos y artísticos del Fondo
Editorial “Valle de Santa Lucía”, para editar, coeditar y reeditar en
versiones de libros, revistas, periódicos, afiches, álbumes, catálogos,
desplegables, volantes, folletos, suplementos, calcomanías, pen-
dones, rotulaciones, servicios de comunicación en Internet, regis-
tro de voces y sonidos en CD, DVD y video beam, y todas aquellas
publicaciones cuyos autores sean naturales o residentes de esta
jurisdicción, con temas de ascendencia comunitaria y de rele-
vante trascendencia social, garantizando la difusión de la memoria
bibliográfica y hemerográfica del municipio Arismendi, del estado
Nueva Esparta.
COLECTIVOS Y SABERES POPULARES:
A) Promover la divulgación y distribución masiva del libro, otras
fuentes impresas y producciones literarias de registro audiovisual,
en las organizaciones comunales populares, bibliotecas, escuelas,
agrupaciones artísticas y otras instituciones socio-culturales. B)
Sistematizar la investigación documental, testimonial y crítica de
las expresiones o manifestaciones culturales populares del muni-
cipio. C) Contribuir con la proyección de nuestros valores históri-
cos, literarios, tradicionales, religiosos, científicos, tecnológicos,
entre otros, atendiendo las necesidades de edición o publicación de
trabajos de autores inéditos y de propuestas colectivas.
¿QUÉ NOS PROPONEMOS?:
1) Editar dos (2) publicaciones en el segundo semestre de 2008,
dentro de la Colección Cuadernos de Saberes, destinada a recopilar
y divulgar la micro-historia y temas de actualidad del municipio
en las distintas áreas del quehacer cultural. 2) Editar un (1) libro
colectivo o antológico, en el segundo semestre del año), dentro de
la Colección Monográfica Cultores, acerca de los patrimonios vivi-
entes, escritores, poetas, artistas diversos y/o artesanos. 3) Realizar
el Taller de Expresión Oral y Escrita “Sobre Vivencias Comunitarias de
- 69 -
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción

La Asunción” (en el segundo semestre del año), dedicado al cono-
cimiento, debate y proyección de las expresiones tradicionales del
municipio Arismendi y su relación con el pensamiento crítico lati-
noamericano y bolivariano, así como la divulgación de los hechos
y de las acciones entorno de las artes y la cultura en general, con
especial interés en el estado Nueva Esparta.
CORAZÓN ADENTRO:
Como quiera que se trata de un proyecto de promoción y par-
ticipación comunitaria, nos hemos planteado involucrar el mayor
número de niños, niñas, adolescentes y adultos de las comunidades
que integran la jurisdicción del municipio Arismendi (especial-
mente, las que se encuentran distantes y deprimidas), con cobertu-
ra en todo el estado Nueva Esparta. Asimismo, motivar el concurso
de la Casa de la Diversidad Cultural del estado Nueva Esparta, la
Plataforma del Libro y la Lectura, la Fundación Librerías del Sur,
los responsables del área cultural de los Consejos Comunales, los
activadores de la Misión Cultura, Misión Sucre y los cursantes de
Comunicación Social de la Universidad Bolivariana de Venezuela y
Lengua y Comunicación de la UNEFA.
en protagonistas y líderes comunitarios que les permita, además,
conocer y formarse en un promotor o activador del hecho socio-
cultural, en la comprensión, preservación y proyección de la idios-
incrasia y de la identidad regionales.
Asimismo, para los efectos de garantizar el éxito del proyecto, en
esta nueva etapa, serán convocados los demás entes organizados
de la comunidad, para que el trabajo a ser ejecutado se convierta
en un medio de cohesión espiritual, de acción comunitaria eficaz y
transformadora, de cara a la integración, el crecimiento intelectual y
el desarrollo armónico del estado Nueva Esparta, todo ello enmar-
cado en la firme decisión de ir abonando el terreno hacia la construcción
del socialismo bolivariano de este siglo revolucionario.

COMPONENTES DE INTEGRACIÓN:
Para la ejecución del proyecto Escritos y Repaso de Vivencias Co-
munitarias de La Asunción, el Fondo Editorial “Valle de Santa
Lucía”, basa su accionar en componentes fundamentales como: La
Formación, la Investigación, la Promoción, la Distribución, la Publi-
cación y la Producción del Hecho Cultural y Literario.

IMPACTO SOCIO-CULTURAL:
Comprometidos, como estamos, con el genuino y patriótico proce-
so de transformación social que vivimos y aupamos en la República
Bolivariana de Venezuela, nos persuade el hecho de dar la mayor
participación a los hombres y mujeres del pueblo llano, donde se
brinda la posibilidad de desarrollar acciones colectivas, convirtiéndose

- 70 - - 71 -
El Cine en La Asunción El Cine en La Asunción
El Cine en La Asunción