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CONTRATO DE MANDATO

El contrato de mandato es un contrato nominado, es decir, está regulado en la ley y tiene un


régimen jurídico propio. Esta regulación se encuentra tanto en el Código Civil en sus artículos
2142 y subsiguientes, como en el Código de Comercio en los artículos 1262 y subsiguientes

Civil

El contrato de mandato es aquel en el que una persona contrata a otra para que gestione sus
negocios, para que se haga cargo de ellos, o para que lo represente en determinada tarea,
actividad o gestión. Además es un contrato bilateral, donde una parte actúa como mandante, y
la otra como mandatario. el mandante el que manda y el mandatario es el
mandadero.

El contrato de mandato puede ser gratuito o remunerado, pero lo normal es que quien delega
a otro sus negocios remunere al mandatario o delegado. La remuneración puede ser una
comisión o una remuneración fija por la tarea o encargo realizado.

El contrato de mandato se puede hacer verbal o por escrito como lo señala el artículo 2149 del
código civil colombiano:

“El encargo que es objeto del mandato puede hacerse por escritura pública o privada, por
cartas, verbalmente o de cualquier otro modo inteligible, y aún por la aquiescencia tácita de
una persona a la gestión de sus negocios por otra” consentimiento o acuerdo

Por lo general el contrato de mandato puede hacerse mediante documento privado, no


obstante se deben otorgar mediante escritura pública los siguientes mandatos:

 Apoderado especial ante notario público para la celebración del matrimonio.


 Cuando se otorga mandato general, es decir, se encargan todos los negocios del
mandante al mandatario.
 Cuando se otorga poder a un abogado para que asista a una persona en un proceso
judicial.

MANDATO GENERAL Y ESPECIAL.

El mandato puede ser general o especial según las facultades que se otorguen al mandatario.
Al respecto señala el artículo 2156 del código civil:

“Si el mandato comprende uno o más negocios especialmente determinados, se llama especial;
si se da para todos los negocios del mandante, es general; y lo será igualmente si se da para
todos, con una o más excepciones determinadas. La administración está sujeta en todos casos
a las reglas que siguen”

El mandato general ofrece amplias facultades y representación al mandatario, por lo que este
queda facultado para gestionar los negocios del mandante como si fuere aquél.
Respecto a lo que puede o no hacer el mandatario el código civil regula algunos aspectos
particulares que nos parece oportuno resaltar a continuación.

FACULTAD DEL MANDATARIO PARA VENDER.

Señala el artículo 2168 que el poder especial otorgado para vender implica también la facultad
de recibir el precio.

En consecuencia, si solo se quiere facultar al mandatario para que haga la venta más no para
que reciba el pago o precio, esa limitación se debe incluir expresamente en el respectivo
contrato.

FACULTAD DEL MANDATARIO PARA HIPOTECAR.

El artículo 2169 del código civil señala que la facultad otorgada para hipotecar no comprende
la facultad para vender y viceversa.

Es decir que si el encargo del mandatario es hipotecar una propiedad, es lo único que puede
hacer.

Esto implica que para que las dos cosas se puedan hacer (hipotecar y/o vender), el contrato de
mandato debe considerarlo expresamente.

OBLIGACIONES DEL MANDANTE.

El artículo 2184 del código civil contempla las siguientes obligaciones especiales del mandante:

“1. A proveer al mandatario de lo necesario para la ejecución del mandato.

2. A reembolsarle los gastos razonables causados por la ejecución del mandato.

3. A pagarle la remuneración estipulada o usual.

4. A pagarle las anticipaciones de dinero con los intereses corrientes.

5. A indemnizarle de las pérdidas en que haya incurrido sin culpa, o por causa del mandato”

No podrá el mandante disculparse de cumplir estas obligaciones, alegando que el negocio


encomendado al mandatario no ha tenido buen éxito o que pudo desempeñarse a menos
costo; salvo que le pruebe culpa.

OBLIGACIONES DEL MANDATARIO.

El mandatario está obligado a desarrollar su mandato dentro de los límites en que se concibió
el encargo, como lo señala el artículo 2157 del código civil:

“El mandatario se ceñirá rigurosamente a los términos del mandato, fuera de los casos en que
las leyes le autoricen a obrar de otro modo”.
TERMINACIÓN DEL CONTRATO DE MANDATO.

El contrato de mandato se termina por cualquiera de las causales contempladas en el artículo


2189 del código civil:

“1. Por el desempeño del negocio para que fue constituido.

2. Por la expiración del término o por el evento de la condición prefijados para la terminación
del mandato.

3. Por la revocación del mandante.

4. Por la renuncia del mandatario.

5. Por la muerte del mandante o del mandatario.

6. Por la quiebra o insolvencia del uno o del otro.

7. Por la interdicción del uno o del otro”.

COMERCIAL

La Corte Suprema de Justicia en sentencia 24 de agosto de 1998


expediente 4821, se refirió al contrato de mandato de la siguiente
manera:
“Es aquel contrato por el cual una persona, denominada mandataria, se obliga

a celebrar o ejecutar uno o más actos de comercio por cuenta de otra, llamada

mandante. El mandatario se obliga primordialmente a cumplir la gestión en

encomendada, con la realización de los actos o negocios señalados por el

mandante, labor en la cual debe ceñirse a sus instrucciones, contando en todo

caso con la facultad para ejecutar los actos que sean necesarios para

cumplimiento. El mandatario debe ejecutar el encargo procurando en todo

momento favorecer los intereses del mandante, lograr el mayor provecho con

el menor costo”

Según el artículo 1262 del código de comercio nos dice que:

“El mandato comercial es un contrato por el cual una parte se obliga a celebrar o ejecutar uno
o más actos de comercio por cuenta de otra. El mandato puede conllevar o no la
representación del mandante”
En el mandato comercial una persona se encarga en virtud de lo encomendado por otra de

realizar los actos comerciales comprendidos en el contrato.

El mandato comercial es un contrato de carácter bilateral ya que tanto el mandante como el

mandatario tienen obligaciones; es un contrato nominado se encuentra regulado en el código

de comercio a partir del artículo 1262 al 1286.

También es un contrato oneroso debido a que al mandatario le corresponde por ley una

remuneración, se puede decir que es un contrato de tracto sucesivo si los actos de comercio

que debe ejecutar el mandatario son sucesivos.

El contrato de mandato comprende además de los actos establecidos en el contrato todos

aquellos que sean necesarios para lograr el cumplimiento de este. Entonces el contrato de

mandato solo comprende las actividades del giro ordinario del negocio encomendado, solo se

podrán ejecutar actos por fuera del giro ordinario del negocio o negocios encomendados

cuando así haya sido autorizado de manera expresa por el mandante.

El articulo 1266 nos dice que: “El mandatario no podrá exceder los límites de su encargo. Los
actos cumplidos más allá de dichos límites sólo obligarán al mandatario, salvo que el mandante
los ratifique. El mandatario podrá separarse de las instrucciones, cuando circunstancias
desconocidas que no puedan serle comunicadas al mandante, permitan suponer
razonablemente que éste habría dado la aprobación”

El mandatario deberá informar al mandante de la marcha del negocio; rendirle cuenta


detallada y justificada de la gestión y entregarle todo lo que haya recibido por causa del
mandato, dentro de los tres días siguientes a la terminación del mismo.

Extinción pagina
El mandato puede ser revocado total o parcialmente, a menos que se haya pactado la
irrevocabilidad o que el mismo se haya conferido también en interés del mandatario o de un
tercero, en cuyo caso solo podrá revocarse por justa causa; en los casos en que el mandato es
terminado abusivamente, (tanto por el mandante como por el mandatario) se hará exigible la
correspondiente indemnización de perjuicios. Respecto del mandato conferido, también en
interés del mandatario o de un tercero, este no terminará por la muerte o inhabilitación del
mandante.

DIFERENCIAS

El criterio para determinar si una u otra regulación le es aplicable depende de si el


encargo conferido por el mandato versa o no sobre actos de comercio. En el primer
caso, le será aplicable al mismo la regulación comercial; de lo contrario, le sería
aplicable la regulación civil. Tanto la regulación comercial como la civil del contrato de
mandato desarrollan los elementos esenciales, naturales y accesorios del mismo. Dentro
de estos elementos se encuentran su objeto, su forma de perfeccionamiento, su
revocabilidad, las obligaciones de las partes, la extensión de los efectos del encargo, las
prohibiciones al mandante y la extensión de la responsabilidad del mandatario, entre
otras.

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