Los mil días

Es el período más significativo de una persona que puede diferenciar toda su vida. Sin el cuidado y
atención apropiados durante los primeros tres años de vida, el desarrollo puede estar afectado de manera
irreversible.
La inversión en la primera infancia es la clave para el desarrollo humano y económico de una nación
Evidencia científica: En los primeros mil días de vida, se produce la mayoría de circuitos y conexiones
neuronales, que definen el lenguaje, las emociones, las formas de socializar y la afectividad
Las capacidades que no se estimulan y se refuerzan en esta ventana de tiempo, serán imposibles de
desarrollar a lo largo de la vida.
La nutrición: La OMS recomienda 6 meses de lactancia materna, una buena nutrición, y lo más
importante, debe ser proporcionada con mucho amor.
La estimulación temprana apropiada se da en un ambiente familiar armonioso y con condiciones
ambientales favorables. En experiencias negativas repetidas, como el maltrato físico o psicológico, la
falta de estimulación o afecto, la pobreza, una nutrición deficiente y otras situaciones conflictivas,
generan estrés o la muerte de las neuronas y el menor desarrollo infantil integral.
El estrés infantil causa:

 Afección a los circuitos cerebrales;

 Miedo y ansiedad al ingresar a la escuela frente a experiencias nuevas;
 Problemas de conducta y aprendizaje;
 Menor desarrollo del lenguaje;
 Hiperactividad;
 Problema de salud mental y;
 Bajo rendimiento académico.
Las ciencias sociales demuestran que desde la gestación y en el desarrollo temprano del niño/a, influye
directamente su entorno, las condiciones de vida, la educación de los padres, el entorno físico y social
donde el niño nace, crece, juega y se educa.
Los estudios económicos demuestran que la pobreza desencadena riesgos que influyen en la infancia, y
pueden desembocar en:

 Menor disposición para ir a la escuela

 Deserción escolar
 Menores calificaciones para el mercado laboral
 Un empleo precario
 Bajos salarios
Así mismo, estos fenómenos pueden resultar en problemas de desadaptación social y marginalidad
En conclusión, un ambiente favorable, una estimulación apropiada, el afecto y nutrición en los primeros
tres años de vida, resulta en un adecuado desarrollo cerebral para crear bases de seguridad y confianza
para toda la vida.