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Documentos de Cultura
la cultura es el cultivo del espíritu que resulta de un proceso de progreso de la especie hacia
la realización plena y perfecta de la verdadera naturaleza del ser humano.
De ahí que este concepto de cultura remita a las obras más excelsas de la literatura, el
saber, el arte, la filosofía, el cine, la ética o el conocimiento, pero también, por extensión,
a todo aquello que nos hace mejores, que nos aproxima a la virtud
COMPONENTES DE LA CULTURA
Los elementos constituyentes de la cultura son únicamente tres: las ideas, los valores y
las emociones. Toda unidad cultural, simbólica o comunicativa (expresión humana) estará
en alguna medida compuesta por elementos cognitivos, valorativos y emotivos.
A. IDEAS
Entendemos por ideas los conocimientos considerados verdaderos que una cultura tiene
sobre el mundo, sea natural o social, en tanto realidad externa y objetiva. Las ideas son
conceptos, modelos o representaciones cognitivas que nos informan sobre qué y cómo
son, o cómo funcionan, etc., las cosas existentes en nuestro entorno (incluidas las
personas).
A. VALORES
Los valores son principios o criterios generales mediante los que juzgamos la bondad de
las cosas, las acciones o los agentes. Están íntimamente relacionados con lo que
consideramos bueno, importante, preferible o deseable y, por ello, fundamentan los
objetivos y metas que anhelan las personas y las sociedades.
. EMOCIONES
Todos sabemos por propia experiencia subjetiva qué son las emociones, así como la
importancia que tienen en nuestras vidas y en todos los fenómenos sociales. Sin embargo,
mucho más difícil es llegar a definirlas. Experimentamos las emociones como cambios
fisiológicos que acontecen en el interior de nuestro organismo (temblamos, lloramos,
palidecemos, se agita el pulso, sudamos), pero las emociones son algo más que eso
porque somos conscientes de ellas (algo nos duele, entristece, enamora, irrita, alegra,
atemoriza, avergüenza).
CULTURA Y PODER
De ahí que la cultura sea también un recurso de poder simbólico, y mantenga siempre una
íntima conexión con la estructura, la distribución y el ejercicio del poder.
En este contexto, las ideologías y los discursos tienen una especial relevancia.