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CAPÍTULO 51 Afectación cardiovascular en el recién nacido

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TABLA
51.1  Parámetros hemodinámicos sistémicos y regionales más comúnmente monitorizados en neonatos

Parámetro Tecnología/método Propósito y adquisición (C, I, o C/I)


Perfusión sistémica Frecuencia cardíaca ECG (electrodos) Junto con el volumen sistólico ofrece el estado
(PA o GC) del flujo (C)
PA Manguito arterial (oscilometría, Presión de perfusión (C/I)
ecografía Doppler)
Volumen sistólico/GC Ecocardiografía Flujo sanguíneo sistémico, pulmonar (GC)
y en los órganos, función cardíaca (I)
VIE Flujo sanguíneo sistémico (GC) (C)
Oxigenación sistémica SPo2 Pulsioximetría Oxigenación del lado arterial (C)
Estado de CO2 MTco2 Difusión de CO2 a través de la piel Efecto en la vasculatura cerebral (cambios
en el FSC) (C)
Perfusión regional Saturación regional de O2 NIRS Oxigenación tisular e (indirectamente) perfusión
de órganos (C)
Perfusión periférica Microcirculación (oxigenación; Tecnología de luz visible Perfusión periférica (C)
velocidad de flujo sanguíneo; Flujometría láser Doppler Perfusión periférica (C)
reclutamiento capilar) Imágenes por PEO y SDF Perfusión periférica (C)
Evaluación indirecta Tiempo de llenado capilar Visual Perfusión sistémica (indirectamente) (I)
de perfusión ∆T (C-P) Temperatura Perfusión sistémica (indirectamente) (I)
Color Visual Perfusión periférica (I)
Función de órganos Actividad eléctrica cerebral EEGa Evaluación de la actividad cerebral (C)
Diuresis Sonda vesical Evaluación de la función renal (I)

Varios componentes de la perfusión sistémica (presión arterial [PA] y gasto cardíaco [GC]), y la oxigenación, la producción y eliminación de dióxido de carbono, la perfusión regional (órgano) y periférica
(microcirculación), y la función de órganos (electroencefalografía de amplitud integrada [EEGa]) pueden ser monitorizados a la cabecera del paciente junto con los métodos indirectos utilizados en la
práctica clínica para evaluar la perfusión y la función de los órganos. La adquisición puede ser continua (C), intermitente (I) o ambas (C/I). ECG, electrocardiograma; FSC, flujo sanguíneo cerebral; MTco2,
monitorización transcutánea de CO2; NIRS, espectroscopia de infrarrojo cercano; PEO, polarización espectral ortogonal; SDF, campo oscuro lateral de la corriente; ∆T (C-P), diferencia de temperatura
central y periférica; VIE, velocimetría de impedancia eléctrica.
Modificado de Azhibekov T, Noori S, Soleymani S, Seri I. Transitional cardiovascular physiology and comprehensive hemodynamic monitoring in the neonate: relevance to research and clinical care. Semin
Fetal Neonatal Med. 2014;19:45–53.

El rango normal de presión arterial dependiente de la edad ges-


tacional y posnatal no se conoce, principalmente debido a que se ve
afectado por factores adicionales, como gravedad de la enfermedad,
antecedente de lesión perinatal, presencia de infección o cortocircuito
ductal, y variación interindividual (Engle, 2012; McLean et al., 2012).
Además de la definición epidemiológica de hipotensión, el aumento
en la gravedad de la hipotensión puede definirse desde un punto de
vista fisiopatológico como la presión arterial en la que el FSC pasa
a ser pasivo de presión (umbral autorregulador de presión arterial;
definición utilizada en la población de pacientes pediátricos y adultos),
afectación de la función cerebral (umbral funcional de presión arterial)
y desarrollo de isquemia tisular (umbral isquémico de presión arterial;
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.

fig. 51.11) (McLean et al., 2012). Existe información disponible sobre


el umbral autorregulador y funcional de la presión arterial en neo-
natos muy prematuros durante los primeros días posnatales (Munro
• Figura 51.10  Nomograma para las presiones arteriales medias en los et al., 2004; Victor et al., 2006b). Sin embargo, no hay información
neonatos durante los primeros 3 días de vida posnatal dependiente de respecto al umbral isquémico en los neonatos muy prematuros, y muy
la edad gestacional y la edad posnatal. El nomograma está derivado de poco se conoce acerca de estos valores fisiopatológicos de hipotensión
mediciones continuas de la presión arterial obtenida de 103 neonatos en los neonatos a término o en ningún neonato más allá del período
con edades gestacionales de entre 23 y 43 semanas. Cada línea repre- transicional. Quizás el mejor método para definir hipotensión sería la
senta el límite inferior del intervalo de confianza del 80% de la presión demostración causal entre la presión arterial dependiente de edad ges-
arterial media para cada grupo de edad gestacional. Por lo tanto, se tacional y edad posnatal y la medición de eventos clínicos relevantes,
espera que el 90% de los niños de cada grupo de edad gestacional como mortalidad o trastornos en el neurodesarrollo a largo plazo. Sin
tengan una presión arterial media igual o mayor al valor indicado por embargo, debido a que no hay información disponible respecto a esta
la línea correspondiente (el límite inferior del intervalo de confianza). interacción, tampoco hay certeza acerca de estos valores normativos.
(Por cortesía de Nuntnarumit P, Yang W, Bada-Ellzey HS. Blood pressure Además, el tratamiento puede tener sus propios efectos adversos; por
measurements in the newborn. Clin Perinatol. 1999;26:981–996.) lo tanto, existe controversia sobre cuándo y cómo intervenir en el

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• Figura 51.11  Definición de hipotensión por tres fenómenos fisiopatológicos de gravedad aumentada:
umbrales autorreguladores, funcionales e isquémicos de hipotensión. FSC, flujo sanguíneo cerebral;
PAM, presión arterial media. (Por cortesía de McLean CW, Noori S, Cayabyab R, Seri I. Cerebral circulation
and hypotension in the premature infant—diagnosis and treatment. In Perlman JM, ed. Controversies in
Neonatal Neurology. Philadelphia, PA: Saunders; 2012:3–25.)

neonato con enfermedad crítica con sospecha de hipotensión y afec- en la frente, el esternón y el primer dedo del pie, y la presión arterial
tación circulatoria (Barrington y Dempsey, 2006; Noori et al., 2012; media, la diuresis y el flujo en la VCS (Miletin et al., 2009). Un estudio
Batton et al., 2016). previo documentó una similar falta de estrecha relación en neonatos
En la práctica clínica, la hipotensión durante el primer día pos- con MBPN; solo cuando el TRC era mayor de 5 s tenía un grado
natal se define usualmente de una de tres maneras: presión arterial clínico de relevancia o especificidad (Osborn et al., 2001). Aunque
media menor a 30 mmHg, presión arterial media en milímetros de un TRC de 3 s o menos se acepta tradicionalmente como normal, un
mercurio por debajo de la edad gestacional del paciente en semanas en TRC de 4,23 ± 1,47 s con un rango de 1,63-8,78 s fue reportado
el momento del nacimiento (Lee et al., 1999) o, más recientemente, en una extensa población de recién nacidos saludables durante las
presión arterial que se acompañe de evidencia clínicamente detectable primeras 72 h posnatales. El TRC no parece variar durante las prime-
de afectación circulatoria (diuresis disminuida, pobre perfusión peri- ras 72 h posnatales en los recién nacidos a término saludables (Raju
férica y/o acidosis láctica) (Dempsey et al., 2009). Como se mencionó et al., 1999). Se ha reportado que temperaturas ambientales, axilares,
previamente, existe una débil relación entre presión arterial media y de la mano y del pie se relacionan indirectamente con el TRC (Raju
flujo de VCS, una medición alternativa de flujo sanguíneo sistémico et al., 1999). La duración de la presión aplicada cuando se mide el
en neonatos con conductos fetales abiertos en el período posnatal TRC afecta a la medición en neonatos a término con menos de 4 h
inmediato (Kluckow y Evans, 1996; Lopez et al., 1997; Kluckow y después del parto (LeFlore y Engle, 2005). Ese estudio halló también
Evans, 2000a; Pladys et al., 1999). Por lo tanto, si se emplea solo la una moderada correlación directa no anticipada entre presión arterial
presión arterial para dirigir el tratamiento, los pacientes en fase com- y TRC, con una prolongación del TRC a mayores presiones arteriales
pensada del shock no identificada pueden no ser tratados de manera en esta población de pacientes (LeFlore y Engle, 2005). En general, se
apropiada. Por ejemplo, en los neonatos prematuros extremos con reportó una aceptable variabilidad interobservador, con una variación
presión arterial media entre 20 y 40 mmHg durante el período pos- en la medición entre los diferentes sitios (esternón, frente, mano y pie)
natal inmediato, el estado del flujo sanguíneo sistémico y el FSC no que puede ser significativa, aunque este punto precisa estudiarse más
puede determinarse con seguridad solo sobre la base de las presiones sistemáticamente.
arteriales. Avances recientes en nuestra capacidad para aplicar una
compleja y continua monitorización cardiovascular que nos provee
información en números absolutos utilizando cardiometría eléctrica
Diferencia de temperatura central y periférica
basada en impedancia, NIRS y EEG de amplitud integrada combinado Poca información hay al respecto para apoyar la precisión de este
con el uso intermitente de mediciones de flujo por Doppler apoyan la examen en bebés mayores (Tibby et al., 1999). En neonatos prematuros
esperanza de conseguir una mejor comprensión de los cambios hemo- de menos de 30 semanas de edad gestacional tampoco hubo relación
dinámicos que ocurren durante la transición y más allá en la población entre esta medición y el flujo de la VCS durante el período posnatal
de pacientes neonatales (Noori et al., 2009; Soleymani et al., 2012). inmediato (Osborn et al., 2001). Sin embargo, como las mediciones
de flujo de la VCS tienen sus limitaciones, estos estudios precisan
repetirse cuando una medida de evaluación más precisa y continua del
Tiempo de llenado capilar flujo sanguíneo sistémico se encuentre disponible para neonatos con
Muchos estudios han intentado validar la precisión de esta herramienta conductos fetales abiertos.
clínica ampliamente utilizada. Sin embargo, no hay un estándar vali-
dado para evaluar la perfusión periférica disminuida y su relación con Diuresis disminuida e hiperpotasemia
el flujo sistémico en el recién nacido. Además, en los diferentes tipos
de shock (shock caliente frente a shock frío), el estado de la perfusión La diuresis es una medición clínica utilizada con frecuencia para evaluar
periférica es diferente (vasodilatación frente a vasoconstricción). Por la perfusión y la función renales. Sin embargo, debido a que la diuresis
lo tanto, es imposible evaluar objetivamente la utilidad práctica de es baja durante el primer día posnatal, producto del incremento en
esta herramienta clínica en neonatos. Por consiguiente, se encontró los niveles asociados a perfusión de hormonas de estrés (catecola-
una escasa correlación en neonatos con MBPN entre el TRC evaluado minas, vasopresina, renina-angiotensina) causando vasoconstricción

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renal y aumento de la reabsorción tubular de sodio y agua, su valor ción (Tyszczuk et al., 1998; Meek et al., 1999b; Tsuji et al., 2000;
para evaluar el shock compensado durante el período transicional es Fortune et al., 2001; Lemmers et al., 2008; van Bel et al., 2008;
limitado. Después de los primeros 2-3 días, sin embargo, una dis- Caicedo et al., 2011; Alderliesten et al., 2013; Noori et al., 2014a;
minución en la diuresis puede ser el signo clínico más precoz de shock Verhagen et al., 2010). Además, con una mejor comprensión de los
compensado en neonatos de todas las edades gestacionales. Además, principios biofísicos que gobiernan el comportamiento de la luz
en bebés muy prematuros ha sido documentada una fuerte relación en los tejidos, y los avances asociados en algoritmos de software y
entre bajo flujo de la VCS y subsiguiente disminución de la diuresis e desarrollo de sofisticadas sondas de NIRS, la evaluación continua de
hiperpotasemia (Kluckow y Evans, 2001). Sin embargo, debido a que la oxigenación tisular regional (SrO2) se encuentra disponible y ha
la hiperpotasemia puede ocurrir en el neonato muy prematuro sin ganado aplicabilidad basada en la evidencia en unidades de cuidado
oliguria (p. ej., hiperpotasemia no oligúrica del neonato prematuro intensivo neonatal (Adcock et al., 1999; Andropoulos et al., 2004;
extremo) (Vemgal y Ohlsson, 2007), y porque podrían existir otras Lemmers et al., 2008; Nagdyman et al., 2008; van Bel et al., 2008;
causas de hiperpotasemia (acidosis), la hiperpotasemia por sí sola no da Costa et al., 2015).
debería utilizarse como medida de pobre perfusión sistémica. Monitores disponibles comercialmente con hasta cuatro canales
pueden utilizarse ahora en niños en la frente para estimar la SrO2 cere­
bral y en el flanco, con el fin de medir la SrO2 renal. Aunque se precisen
Ácido láctico, pH y exceso de base más validaciones para el uso de mediciones invasivas (Nagdyman
En niños muy prematuros, la relación entre bajo flujo de la VCS y pH et al., 2008; Rhee et al., 2012), resulta evidente que, cuando el gasto
(y/o exceso de base) es aún incierta (Holberton et al., 2012). Esto se cardíaco y/o la presión arterial caen, la SrO2 renal declina. Primero,
debe posiblemente a la ausencia de una relación estrecha entre pH, la SrO2 cerebral puede hallarse preservada, pero la interferencia en el
exceso de base y niveles de ácido láctico en neonatos (Deshpande y FSC global puede detectarse con este monitor, siempre y cuando se
Platt, 1997). Sin embargo, debido a que los niveles plasmáticos de lacta- reúnan ciertas condiciones. Estos monitores son útiles durante pro-
to pueden seguirse secuencialmente de rutina con valoraciones de gaso­ cedimientos quirúrgicos en niños (Andropoulos et al., 2004; Azakie
metría sanguínea y porque los cambios en los niveles plasmáticos et al., 2005; Farouk et al., 2008), donde una caída abrupta de la SrO2
de lactato son informativos de los cambios en el estado cardiovas- cerebral puede ser el único signo de alarma de mal posicionamiento
cular, esta medición indirecta de aporte celular de oxígeno y consumo de cánulas venosas o arteriales cuando se realiza una derivación cardio-
se ha utilizado en la práctica clínica. Una combinación de un TRC pulmonar. Además, hallazgos recientes sugieren que la monitorización
mayor de 4 s con una concentración sérica de lactato elevada mayor de la SrO2 en neonatos con enfermedad crítica y en prematuros sin
de 4 mmol/l posee una especificidad del 97% para detectar un estado cardiopatía congénita durante la transición a la vida extrauterina
de bajo flujo de la VCS en neonatos con MBPN durante el primer (van Bel et al., 2008) y durante el tratamiento de varias condiciones,
día posnatal (Miletin et al., 2009). Hay que tener en mente que un como el CAP en neonatos prematuros (Lemmers et al., 2008; Cayab-
determinado nivel de lactato plasmático representa principalmente un yab et al., 2009) o asfixia en niños con o sin enfriamiento (Meek
evento hemodinámico previo y no necesariamente el presente estado et al., 1999a; Toet et al., 2006; Ancora et al., 2009), y en neonatos a
de función cardiovascular. Así, como con la diuresis, para cuando la término que reciben oxigenación de la membrana extracorpórea (van
acidosis láctica se haya desarrollado y detectado, el evento iniciante Heijst et al., 2004; Fenik y Rais-Bahrami, 2009), aporta información
puede o no estar presente. Por tanto, no resulta sorprendente que los de utilidad clínica (van Bel et al., 2008; da Costa et al., 2015). Aún es
niveles de lactato en aumento sean mejores predictores de eventos incierto si la titulación terapéutica basada en mediciones de la SrO2 en
adversos que un valor inicial elevado y una subsiguiente disminución neonatos en condiciones críticas que no sean cardiopatías congénitas
en el seguimiento (Deshpande y Platt, 1997). que requieran intervención quirúrgica (Andropoulos et al., 2004)
mejora los resultados (Hyttel-Sorensen et al., 2015). En nuestra expe-
riencia, sin embargo, la SrO2 renal disminuye fielmente antes de la
Flujo sanguíneo de los órganos aparición de signos de shock descompensado, como la hipotensión o
la acidosis, lo que permite una intervención precoz (v. más adelante)
Con la utilización de ecografía Doppler y el más reciente NIRS, el flujo
(Azhibekov et al., 2014).
sanguíneo de varios órganos puede ser evaluado a la cabecera del pacien-
te. Para el FSC, se han estudiado varios métodos en neonatos prematuros
y a término, incluida la ecografía Doppler, el aclaramiento de xenón y la Mediciones ecocardiográficas del flujo
NIRS (Greisen et al., 1984; Seri et al., 1998; Tyszczuk et al., 1998; Tsuji
et al., 2000; Toet et al., 2005, 2006; Lemmers et al., 2006). Debido sanguíneo sistémico
a que las arterias periféricas son demasiado pequeñas para medir su En la circulación madura, el flujo sanguíneo sistémico es el gasto car-
tamaño, el estudio Doppler en dichos vasos está limitado a paráme- díaco. Aunque el gasto de ambos ventrículos será el mismo, el gasto
tros de velocidad a partir de los cuales no es posible estimar el flujo cardíaco se mide tradicionalmente como el gasto ventricular izquier-
sanguíneo. En consecuencia, la ecografía Doppler de arterias periféricas
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.

do. En la práctica clínica, la ecografía Doppler ofrece un método no


tiende a ser de mayor utilidad para evaluar cambios en un marco de invasivo, pero no continuo, para evaluar el gasto cardíaco. La medi-
tiempo en el cual no es probable que el tamaño del vaso haya cambiado ción del flujo sanguíneo de manera directa en la arteria pulmonar
(Seri et al., 1998). El aclaramiento de xenón no es práctico fuera de y la aorta ascendente nos permite evaluar los gastos del ventrículo
los campos de investigación. Sin embargo, avances en la tecnología derecho e izquierdo respectivamente (Alverson et al., 1982; Walther
NIRS han permitido la evaluación continua de la oxigenación cerebral, et al., 1985; Evans y Kluckow, 1996). Sin embargo, como se discutió
renal, mesentérica y muscular (p. ej., flujo sanguíneo) a la cabecera antes, en la circulación transicional del recién nacido, ninguno de los
del neonato con enfermedad crítica (Fortune et al., 2001; Lemmers gastos ventriculares reflejará de manera consistente el flujo sanguíneo
et al., 2008; van Bel et al., 2008) (v. apartado siguiente). debido a los cortocircuitos a través de los conductos fetales (Evans y
Iyer, 1994; Evans y Kluckow, 1996; Kluckow y Seri, 2012). El uso del
flujo de la VCS como alternativa al flujo sanguíneo sistémico ha sido
Espectroscopia de infrarrojo cercano una importante herramienta de investigación que ofrece información
La NIRS utiliza la diferencia en el espectro de absorción de hemoglo- respecto a los eventos hemodinámicos reveladores durante el período
bina oxigenada y desoxigenada para evaluar el flujo indirectamente. posnatal inmediato cuando la presencia de cortocircuitos a través de los
Esta tecnología ha sido muy útil como herramienta de investiga- conductos fetales imposibilita el empleo de mediciones tradicionales

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para la evaluación del flujo sanguíneo sistémico (v. anteriormente) de una presión arterial aceptable con la utilización y el control del
(Evans, 2012). rango de presión arterial normal para la edad gestacional y la edad
La medición Doppler del gasto ventricular izquierdo se ha validado posnatal, y siguiendo los signos clínicos indirectos y de laboratorio
frente a mediciones más invasivas en neonatos e individuos mayores de perfusión tisular (diuresis, niveles plasmáticos de lactato, TRC).
(Mellander et al., 1987). El gasto ventricular derecho y el flujo de De no contar con acceso inmediato a ecocardiografía o la NIRS, el
la VCS no tienen el mismo nivel de validación, pero observan una clínico deberá apoyarse en la monitorización continua de la presión
correlación aceptable con el gasto ventricular izquierdo en neonatos arterial, reconociendo las limitaciones de esta herramienta. En los
sin cortocircuitos concomitantes (Evans e Iyer, 1994; Kluckow y últimos años está disponible el entrenamiento para neonatólogos
Evans, 2000a; Tsai-Goodman et al., 2001). A pesar de esto, la validez en ecocardiografía funcional a través de programas en EE. UU. y
de estas mediciones ha sido cuestionada basándose en mediciones del otros países (Kluckow et al., 2008; Mertens et al., 2011), aunque las
gasto cardíaco por termodilución en pacientes en cuidados críticos implicaciones médico-legales de dicho entrenamiento se desconocen
(Notterman et al., 1989). Sin embargo, la termodilución de por sí ampliamente (Nguyen et al., 2016).
adolece de un error intrínseco: el volumen de infusión de solución
salina fría influencia el gasto cardíaco (Tournadre et al., 1997).
Recientemente, la resonancia magnética (RM) funcional se ha Evaluación del flujo sanguíneo sistémico
convertido en la técnica de referencia para evaluar el gasto cardíaco. por velocimetría de impedancia eléctrica
Sin embargo, este método se usa principalmente con fines de inves-
La velocimetría eléctrica mide el gasto ventricular izquierdo por medi-
tigación, y su utilización para la evaluación a la cabecera del neonato
ciones continuas y no invasivas de la bioimpedancia eléctrica torácica
se ve limitada por diversas dificultades técnicas y logísticas (Groves
(Osypka y Bernstein, 1999). Esta técnica también se ha validado
et al., 2011). Por eso el hallazgo de un método de referencia ideal
frente a métodos invasivos de medición del gasto cardíaco, con muy
capaz de realizar mediciones continuas en números absolutos del gasto
buen correlato en animales (Osthaus et al., 2007) y niños (Norozi
cardíaco a la cabecera del paciente es aún esquivo.
et al., 2008), y frente a la ecocardiografía en neonatos a término saluda-
Existen errores intrínsecos significativos en la medición de flujo
bles durante los primeros 2 días posnatales (Noori et al., 2012c). Sin
Doppler también. Las tasas de variabilidad intraobservador rondan un
embargo, su valor basado en la evidencia en la práctica clínica pediátrica
10%, e interobservador, hasta un 20% (Hudson et al., 1990; Kluckow
en general (Coté et al., 2015) y la neonatología en particular no está
y Evans, 2000a). La mayoría de los errores se relacionan con la medi-
aún establecido (Azhibekov et al., 2015).
ción del tamaño del vaso que se deriva de su diámetro. Así, pequeñas
En resumen, los avances en tecnología biomédica y el desarrollo
diferencias se magnifican en la conversión a un área de sección trans-
de nuevos métodos sofisticados para la monitorización hemodinámica
versal. El otro problema mayor de la medición de flujo Doppler es
exhaustiva pueden aportar percepciones adicionales en la fisiopatología
que existe una dependencia de la tecnología de ultrasonido y que la
de la inestabilidad cardiovascular y, potencialmente, en el diagnós-
herramienta ecocardiográfica puede no estar disponible 24 h al día en
tico precoz de afectación circulatoria; sin embargo, su utilización está
muchas unidades de cuidado intensivo neonatal.
mayormente limitada a aplicaciones de investigación, y aún deben
En neonatos, la mayoría de los estudios citan un rango normal
validarse para su uso clínico de rutina (Azhibekov et al., 2015).
de gasto ventricular izquierdo y derecho de entre 150 y 300 ml/kg
por minuto (Alverson et al., 1982; Walther et al., 1985; Evans y
Kluckow, 1996; West et al., 2006). Es importante destacar que en la Tratamiento del shock neonatal
circulación transicional neonatal el gasto ventricular izquierdo puede
verse afectado por cortocircuito ductal en mayor grado que de lo La selección de la estrategia terapéutica más apropiada para el shock
que el gasto ventricular derecho se afecta por cortocircuito auricular. neonatal requiere identificar su patogenia (Noori y Seri, 2012). Como
Por lo tanto, el gasto ventricular derecho es un mejor parámetro de ya se describió previamente, los factores etiológicos más frecuentes
bajo flujo que el gasto ventricular izquierdo durante los primeros responsables de la afectación cardiovascular neonatal son la vasorre-
1-2 días tras el nacimiento. En consecuencia, se ha documentado gulación periférica inapropiada, que causa vasodilatación o vasocons-
relación entre mediciones indirectas de perfusión sistémica (y, por tricción, y la disfunción del miocardio inmaduro (Noori y Seri, 2012).
tanto, cerebral), como gasto ventricular derecho y presión arterial (y Aunque se pensaba que la hipovolemia absoluta era una causa primaria
función cerebral), en niños prematuros durante los primeros 2 días menos frecuente de hipotensión neonatal, especialmente en niños
posnatales. Este es un período donde el cortocircuito ductal dis- prematuros en el período posnatal inmediato (Barr et al., 1977; Wright
minuye significativamente la precisión de gasto ventricular izquierdo y Goodhall, 1994), hallazgos recientes sugieren que esta suposición
como reflejo de flujo sanguíneo sistémico (West et al., 2006). El flujo es incorrecta (Baenziger et al., 2007; Hosono et al., 2009; Sommers
de la VCS puede también utilizarse para estimar el flujo sistémico en et al., 2012; Katheria et al., 2015).
el período posnatal precoz. El rango normal en bebés prematuros es
entre 40 y 120 ml/kg por minuto, con la mediana aumentando de
70 ml/kg por minuto a las 5 h de edad a 90 ml/kg por minuto a las Asociación de la hipotensión sistémica,
48 h (Kluckow y Evans, 2000a). la hipoperfusión y su tratamiento, con la
En resumen, el pilar para el diagnóstico de afectación circulatoria mortalidad o los trastornos del neurodesarrollo
neonatal es una combinación entre la medición de la presión arterial y
la evaluación de los parámetros clínicos antes descritos. Sin embargo, El impacto de la hipotensión y/o su tratamiento sobre la disminución
ninguno de estos parámetros posee un suficiente grado de precisión de la mortalidad, lesión cerebral o trastornos del neurodesarrollo es
para permitir utilizarlos como único evaluador del flujo sanguíneo sis- incierto, principalmente porque se asume que el tratamiento mejo-
témico y la perfusión tisular. Por eso, el agregado de ecocardiografía y rará los resultados y, por tanto, la práctica habitual ha sido tratar la
evaluación hemodinámica con NIRS, la monitorización de la presión hipotensión (Noori et al., 2009). Por lo tanto, no hay estudios pros-
arterial y una evaluación clínica exhaustiva y continua del paciente pectivos que evalúen el impacto de la hipotensión no tratada con
son necesarios para comprender mejor los cambios en el flujo sanguí- resultados clínicos relevantes a corto y largo plazo. Un estudio clínico
neo de los órganos y la perfusión tisular, especialmente en neonatos aleatorizado (ECA) en el presente con una rama de no tratamiento no
prematuros durante el vulnerable período de transición inmediato es factible, al menos en EE. UU., debido principalmente a la dificultad
a la vida extrauterina. El objetivo es mantener un flujo sanguíneo para obtener consentimientos, pero también debido a la tendencia por
sistémico normal y, por tanto, un aporte de oxígeno en presencia parte de los clínicos a instaurar tratamiento (Batton et al., 2012). Para

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resolver el tema del consentimiento, algunos han sugerido enfoques una precoz y agresiva resucitación con fluidos en niños y neonatos con
alternativos a los consentimientos para procedimientos tradicionales sepsis demostró una disminución de la mortalidad (Han et al., 2003) y
prealeatorización, como renuncia al consentimiento informado con está recomendada por el American College of Critical Care Medicine
opción de optar por el no después de la aleatorización e inclusión (Vain (Brierley et al., 2009).
y Barrington, 2012). Además de la escasez de información acerca de Se ha suscitado una controversia respecto al tipo de fluido
resultados provenientes de ECA sobre el tratamiento, no está estable- administrado a neonatos prematuros con afectación cardiovascular.
cida una definición de hipotensión dependiente de la edad gestacional La mayoría de los estudios han demostrado que la solución salina
y la edad posnatal basada en la fisiología, la fisiopatología y las medidas isotónica es igual de efectiva que la albúmina al 5% para aumentar
de eventos clínicos relevantes (Engle, 2012). la presión arterial (So et al., 1997; Oca et al., 2003). Además, la
Un ECA prospectivo halló que neonatos hipotensos con MBPN albúmina puede perjudicar el intercambio gaseoso e inducir des-
presentaron una tasa mayor de HP/IV grave que su contraparte sin plazamiento de fluido del espacio intracelular (Ernest et al., 1999),
hipotensión (Pellicer et al., 2009). Niños hipotensos que respondían y se asocia con aumento de la mortalidad (Nadel et al., 1998). Por lo
con un aumento de la presión arterial a la titulación dirigida de vaso- tanto, dada la eficacia comparable documentada de la solución salina
presores/inótropos presentaron similares tasas de HP/IV cuando se isotónica y la albúmina frente a la diferencia de coste y la sugerida
compararon con el grupo control de no hipotensos. Los autores del morbilidad y mortalidad aumentada asociada con la administra-
estudio tampoco encontraron asociación entre hallazgos anorma- ción de albúmina (Van Marter et al., 1990; Kavvadia et al., 2000;
les en el ultrasonido y el uso de dopamina o adrenalina. Durante el Lundstrom et al., 2000), la solución salina isotónica es la elección
seguimiento a largo plazo hasta los 2-3 años de edad, no se encontró inicial para el tratamiento en la población de pacientes neonatales.
diferencia en la tasa de estado neurológico anormal y/o retraso del desa- Sin embargo, un ECA halló que, en los neonatos con hipotensión,
rrollo entre los pacientes hipotensos tratados con éxito y los pacientes sobre todo prematuros, la administración de albúmina aumentó la
control. Aunque los resultados sugieran que la cuidadosa titulación de probabilidad de alcanzar la normotensión y disminuir la consiguiente
dopamina o adrenalina en niños prematuros con hipotensión puede utilización de vasopresores comparado con la solución salina isotónica
ser segura e incluso tener potenciales beneficios, el pequeño tamaño (Lynch et al., 2008). Los hallazgos de este estudio precisan ser repro-
de la muestra y la falta de controles con hipotensión no tratados no ducidos antes de considerar a la albúmina como tratamiento inicial
permite la generalización de los hallazgos. Es importante destacar que, en la afectación cardiovascular neonatal. Por lo tanto, a menos que
aunque se haya encontrado que la dopamina sea neuroprotectora en un exista evidencia de hipovolemia o hipoalbuminemia, el soporte con
modelo de cordero asfixiado en un estudio reciente (Brew et al., 2016), fluidos en niños a término o prematuros se realizará con 10-20 ml
hace falta evidencia en el neonato humano para establecer la relevancia de solución salina isotónica por kilogramo (Noori y Seri, 2012). Es
clínica de este hallazgo. importante destacar que, debido a la naturaleza no equilibrada de
Por último, a pesar de que la hipotensión como está actualmen- la solución salina isotónica, se deben administrar con precaución
te definida es poco probable que sea un predictor de lesión cerebral grandes cantidades en períodos cortos, ya que ello puede empeorar
(Limperopoulos et al., 2007; McLean et al., 2012), es importante en la acidosis metabólica (Mirza et al., 1999; Prough y Bidani, 1999).
la valoración de la asociación entre hipotensión y su tratamiento, así En caso de que la administración limitada de volumen no sea
como en los trastornos del neurodesarrollo. efectiva, se recomienda soporte farmacológico cardiovascular con
vasopresor/inótropo o inótropo (Noori y Seri, 2012). Sin embargo,
Administración de volumen basándose en hallazgos recientes en los estudios mencionados ante-
riormente respecto al pinzamiento tardío del cordón o succión, es
La administración de volumen es la intervención más comúnmente posible que la práctica clínica cambie por las recomendaciones de un
utilizada en el tratamiento de la hipotensión en neonatos (Stranak panel de expertos (Committee on Obstetric Practice, American Colle-
et al., 2014). Sin embargo, observaciones acerca de que la hipotensión ge of Obstetricians and Gynecologists, 2012; Perlman et al., 2015),
arterial se asocia frecuentemente con gasto cardíaco normal o incluso y la necesidad de administrar volumen en el período transicional
elevado y bajo índice de resistencia (Pladys et al., 1999), y que la dopa- inmediato disminuirá.
mina es más efectiva en elevar la presión arterial más que la administra- Si hay una pérdida de volumen identificable, el tipo de fluido
ción de volumen (Lundstrom et al., 2000), replantean la efectividad de perdido es el que debe reemplazarse. En casos de pérdida de sangre,
la administración de volumen principalmente cuando se usa solución la transfusión de concentrado de eritrocitos tras un bolo inicial con
salina isotónica. Por lo tanto, particularmente en los niños prematuros cristaloide o coloide, o concentrado de eritrocitos en suspensión de
durante el período posnatal inmediato, y con cautela, se recomienda plasma fresco congelado con un hematocrito alrededor del 55%,
una limitada resucitación con fluidos (Noori y Seri, 2015a). Además, puede ser una estrategia. En casos de aumento de pérdida de agua
como ya se discutió previamente, la expansión de volumen sanguíneo transepidérmica, está indicada la administración de agua libre sin
por pinzamiento tardío del cordón umbilical o succión del cordón ha aumento en el suplemento de sodio. Cuando exista poliuria, la com-
demostrado mejorar la hemodinámica sistémica en niños prematuros posición y el volumen del fluido de reemplazo debe ajustarse al sodio
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(Baenziger et al., 2007; Hosono et al., 2009; Sommers et al., 2012; urinario y a las pérdidas de agua libre. Sin embargo, el reemplazo de
Katheria et al., 2015). la mitad de las pérdidas urinarias excesivas suele ser suficiente con
Aún no hay estudios que evalúen la seguridad y la eficacia de la solución salina al 0,45%.
transfusión sanguínea en el tratamiento de la hipotensión y shock en
neonatos durante el período transicional y en adelante. Además, debido Dopamina y dobutamina
a que la disfunción miocárdica frecuentemente contribuye al desarro-
llo de hipotensión neonatal (Gill y Weindling, 1993) y la adminis- El tratamiento con dopamina y dobutamina fue introducido en el
tración agresiva de volumen en esta población de pacientes aumenta manejo de la hipotensión neonatal a principio y mediados de la década
la morbilidad y mortalidad pulmonar, cardiovascular, gastrointestinal de los ochenta, respectivamente, sin estudios clínicos apropiadamente
y del sistema nervioso central (Van Marter et al., 1990; Kavvadia diseñados, aleatorizados y ciegos. Por lo tanto, como ya se ha mencio-
et al., 2000; Lundstrom et al., 2000), una juiciosa administración nado, no contamos con una clara evidencia de que la utilización de
de fluidos estaría justificada. Por otro lado, la hipovolemia relativa estas aminas simpático-mimética (o cualquier otra amina simpático-
o absoluta combinada es claramente un factor etiológico mayor que mimética) reduzca la mortalidad o la morbilidad neonatal. Al examinar
contribuye al shock neonatal en neonatos con sepsis y/o en el período el efecto de los fármacos en la contractilidad miocárdica neonatal, el
postoperatorio en pacientes sometidos a cirugías mayores. De hecho, flujo sanguíneo sistémico o el flujo sanguíneo de órganos, los estudios

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han extendido su enfoque más allá de los cambios inducidos por la significativo del CAP está frecuentemente presente en los niños con
dopamina y la dobutamina en la frecuencia cardíaca y la presión arterial MBPN, la evaluación de los efectos cardiovasculares por vasopresores/
(Roze et al., 1993; Seri et al., 1998; Zhang et al., 1999; Lundstrom inótropos por ecocardiografía es un desafío. Esto es especialmente
et al., 2000; Osborn et al., 2002; Seri et al., 2002; Pellicer et al., 2005; cierto con respecto a la estimación de la magnitud del cortocircuito
Noori et al., 2006a; Bouissou et al., 2008; Bravo et al., 2015). Algunos del CAP. Por lo tanto, uno necesita ser cauteloso al interpretar estos
de los primeros estudios, sin embargo, utilizaron el gasto ventricular estudios. Con esta advertencia en consideración, muchos estudios
izquierdo para evaluar el impacto de estas medicaciones en el flujo sugieren que la dopamina no empeora el cortocircuito izquierda-
sanguíneo sistémico aun cuando había cortocircuitos a través de los derecha del CAP. En cambio, en neonatos prematuros hipotensos
conductos fetales (Roze et al., 1993; Zhang et al., 1999; Lundstrom con cortocircuito izquierda-derecha significativo a través del CAP,
et al., 2000). Por eso las conclusiones derivadas de estos estudios pre- la administración de dopamina incrementa la presión arterial sis-
cisan revaluarse cuidadosamente (Kluckow y Seri, 2012). témica, la presión pulmonar y el flujo de la VCS, y se emplea como
alternativa de flujo sanguíneo sistémico en estos pacientes (Bouissou
Efectos hemodinámicos de la dopamina et al., 2008). De manera similar, la administración de dopamina no
La dopamina, una catecolamina endógena, es la amina simpático- se ha asociado con evidencia en el aumento en la resistencia vascular
mimética más frecuentemente utilizada para el tratamiento de la pulmonar y la disminución del gasto ventricular derecho en neonatos
hipotensión en niños prematuros (Seri, 1995; Stranak et al., 2014). con cortocircuito izquierda-derecha significativo a través del CAP
Ejerce su acción cardiovascular a través de la estimulación depen- (Wardle et al., 1999; Clark et al., 2002). Este hallazgo sugiere que,
diente de la dosis de receptores cardiovasculares dopaminérgicos, cuando el flujo sanguíneo pulmonar está elevado, los mecanismos
α-adrenérgicos, β-adrenérgicos y serotoninérgicos. Además, al vasoconstrictores pueden aumentar su actividad en la circulación
estimular los receptores dopaminérgicos y adrenérgicos epitelial y pulmonar, lo que causa una vasoconstricción inducida por dopamina
neuronal periférico, el fármaco ejerce efectos significativos a nivel más efectiva mediada por α-receptor. Los hallazgos de un estudio
renal y endocrino independientemente de su acción a nivel cardio- que demuestra una respuesta variable a la dopamina de la resistencia
vascular (Seri, 1995). Aunque la dopamina afecta a los tres mayores pulmonar en neonatos prematuros con CAP hemodinámicamente
determinantes de la función cardiovascular (precarga, contractilidad significativo apoyan este concepto (Liet et al., 2002).
miocárdica y poscarga), los incrementos de la contractilidad mio- Los receptores vasodilatadores de dopamina se encuentran princi-
cárdica (Zhang et al., 1999; Lundstrom et al., 2000) y la resistencia palmente en la circulación renal, mesentérica y coronaria (Seri, 1995).
vascular periférica (poscarga) (Roze et al., 1993; Zhang et al., 1999; La dopamina ha demostrado disminuir selectivamente la resistencia
Lundstrom et al., 2000) inducidos por el fármaco son los factores vascular renal (Seri et al., 1998, 2002) y aumentar la tasa de fil-
más importantes para aumentar la presión arterial y mejorar el estado trado glomerular (Seri et al., 1993) en niños prematuros a partir
cardiovascular. de la semana 23 de gestación. Sin embargo, la dopamina parece
El rango original de dosificación de 2-20 µg de dopamina por disminuir la resistencia vascular mesentérica en niños prematuros
kilogramo por minuto se basaba en información farmacodinámica solo después del primer día posnatal (Hentschel et al., 1995; Seri
obtenida de adultos sin afectación cardiovascular. Sin embargo, et al., 1998, 2002; Robel-Tillig et al., 2007), y el efecto puede ser
cambios en la expresión del receptor adrenérgico cardiovascular variable (Zhang et al., 1999). De manera similar, existen diferencias
causados por enfermedad crítica (Hausdorff et al., 1990) e insu- en la magnitud reportada del incremento en la función ventricular, el
ficiencia suprarrenal absoluta o relativa e inmadurez (Watterberg gasto cardíaco y la resistencia vascular sistémica inducida por el fár-
y Scott, 1995; Watterberg, 2002), así como la producción des- maco (Roze et al., 1993; Zhang et al., 1999; Lundstrom et al., 2000;
regulada de vasodilatadores a nivel local durante una enfermedad Clark et al., 2002). Estos hallazgos pueden explicarse mejor por las
grave disminuyen la sensibilidad del aparato cardiovascular a la diferencias en la condición del volumen intravascular, la edad ges-
dopamina, lo que genera una hipotensión refractaria emergen- tacional y posnatal, el desarrollo de la expresión regulada de receptores
te a las dosis convencionales del fármaco (Ng et al., 2001; Seri adrenérgicos y dopaminérgicos cardiovasculares, y la gravedad del
et al., 2001; Ng et al., 2006; Noori et al., 2006a). Así, con la decremento de receptores adrenérgicos entre diferentes poblaciones
progresión del proceso patológico, pueden requerirse dosis mayores de niños con enfermedad crítica estudiados. Es importante des-
de dopamina y otras aminas simpático-miméticas para ejercer tacar que ninguno de estos estudios encontró evidencia de un efecto
una respuesta cardiovascular de la misma magnitud. Por lo tanto, directo de la dopamina en el FSC siempre y cuando la presión arterial
la administración de dopamina debe titularse individualmente haya estado en el rango autorregulador (Seri et al., 1998; Zhang
según sus efectos farmacodinámicos a la cabecera del paciente et al., 1999; Lundstrom et al., 2000; Seri et al., 2002). Por lo tanto,
en lugar de regirse por las dosis convencionales recomendadas la administración de dopamina parece estar desprovista de efectos
basadas en información obtenida de adultos saludables. De hecho, hemodinámicos potencialmente dañinos en el cerebro. Como es de
aunque muchos neonatólogos no aumentan la dosis de dopamina esperar en neonatos con hipotensión, la dopamina (y la adrenalina)
por encima de 20 µg/kg/min, no existe evidencia de que, cuan- aumenta la presión arterial y el FSC (Pellicer et al., 2005).
do se requiera normalizar la presión arterial, el tratamiento con
dosis elevadas de dopamina con o sin administración adicional Efectos hemodinámicos de la dobutamina
de adrenalina tenga efectos vasoconstrictores perjudiciales (Perez A diferencia de la dopamina, la dobutamina es una amina simpático-
et al., 1986; Seri et al., 2001). Sin embargo, no hay información mimética relativamente cardioselectiva, con un significativo efecto
disponible respecto a los cambios en el gasto cardíaco y el flujo inótropo directo mediado por receptores α y β-adrenérgicos y limitada
sanguíneo de órganos en respuesta a tratamiento con catecolaminas acción cronótropa (Ruffolo, 1987). La administración de dobutamina
en altas dosis en el shock neonatal refractario a vasopresores, por lo está habitualmente asociada con un descenso variable de la resistencia
que debe prestarse especial atención a signos de vasoconstricción vascular periférica total y, al menos en adultos, mejoría en el flujo san-
inapropiada cuando se aplique esta terapia. La administración de guíneo coronario y la perfusión miocárdica de oxígeno (Ruffolo, 1987).
bajas dosis de hidrocortisona en la última década ha demostrado Además, a diferencia de la dopamina, la dobutamina incrementa la
reducir la necesidad de administrar altas dosis de vasopresores en la contractilidad miocárdica exclusivamente a través de la estimulación
mayoría de los pacientes (Ng et al., 2001; Seri et al., 2001; Noori de los receptores adrenérgicos miocárdicos. Debido a que los depósitos
et al., 2006a; Seri, 2006; Cole, 2008). miocárdicos de noradrenalina son inmaduros y se agotan con rapidez
Dado que la hipotensión y el fallo circulatorio son más comunes en el recién nacido, y debido a que la dobutamina puede disminuir
en los primeros días posnatales, un período en el cual el cortocircuito la poscarga, los recién nacidos con disfunción miocárdica primaria

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CAPÍTULO 51 Afectación cardiovascular en el recién nacido 761

y una elevada resistencia vascular periférica son los más propensos a de vasoconstricción periférica, en especial en neonatos con MBPN
beneficiarse del tratamiento con dobutamina (Martinez et al., 1992; durante el primer día posnatal, un tratamiento con dosis altas de
Osborn et al., 2002). Sin embargo, la dobutamina puede ofrecer escasos dopamina debe implementarse solo si el flujo sanguíneo sistémico
beneficios hemodinámicos si la fisiopatología primaria subyacente no es puede monitorizarse con ecocardiografía funcional, NIRS y/u otras
pobre contractilidad miocárdica. Un estudio piloto reciente controlado técnicas avanzadas de monitorización de perfusión. Sin embargo, en
con placebo mostró que la dobutamina no tiene efecto en el flujo de la práctica clínica, estas técnicas de monitorización del flujo sanguí-
la VCS (Bravo et al., 2015). Aunque el agregado de dobutamina al neo, con la posible excepción de la NIRS, no están disponibles de
tratamiento con dopamina en niños prematuros con síndrome de rutina, y los neonatólogos deben basarse en la monitorización de la
dificultad respiratoria fue efectivo para aumentar la presión arterial, se presión arterial y medidas indirectas de la función cardiovascular. Si
asoció con estados de gasto cardíaco supranormal y baja resistencia vas- hay evidencia de vasoconstricción con dosis elevadas de dopamina
cular periférica (Lopez et al., 1997). Para saber si los beneficios del gasto (o adrenalina), el neonatólogo debería considerar aceptar valores
cardíaco supranormal que permiten una adecuada perfusión tisular de de presión arterial en el rango inferior para la edad gestacional y la
oxígeno en el cuerpo sobrepasan los riesgos de la hipercontractilidad edad posnatal, y disminuir la dosis del vasopresor/inótropo a niveles
sostenida, que puede derivar en lesión miocárdica, se necesita más donde la significativa estimulación de los receptores α-adrenérgicos
investigación. sea menos probable (Seri, 1995; Kluckow y Seri, 2012). En estos
Existe poca información disponible respecto a los efectos directos casos, y dependiendo de la fisiopatología de la afectación cardiovas-
de la dobutamina sobre la hemodinámica renal, cerebral o pulmonar cular, debería considerarse agregar dobutamina o milrinona, y la
en el recién nacido. Un estudio no aleatorizado comparó los efectos presión arterial debería mantenerse en el rango bajo-normal. Como
de la dopamina y la dobutamina en la presión arterial y el flujo san- la hipotensión sistémica se ha asociado a pobres resultados en el
guíneo mesentérico en niños prematuros, y halló que ambos fármacos neurodesarrollo a largo plazo en la población de pacientes neonatos
aumentan la presión arterial y fueron igual de efectivos para disminuir con MBPN (Miall-Allen et al., 1987; Bada et al., 1990), se sugiere
la resistencia vascular mesentérica (Hentschel et al., 1995). Debido una cuidadosa consideración de la mínima presión de perfusión
a que la dobutamina no estimula los receptores dopaminérgicos, la aceptable en estos pacientes. Una combinación de dobutamina o
vasodilatación selectiva inducida por los receptores β-adrenérgicos milrinona con baja dosis de dopamina puede alcanzar las metas
puede ser responsable de la vasodilatación mesentérica observada en más importantes del tratamiento al mantener la presión arterial y
pacientes tratados con dobutamina. el flujo sanguíneo sistémico en rangos aceptables siempre que la
monitorización de ambos parámetros cardiovasculares sea posible.
Dopamina comparada con dobutamina En la mayoría de estos pacientes, el reemplazo con hidrocortisona
Estudios aleatorizados han demostrado de manera uniforme que la del glucocorticoide y el mineralocorticoide fisiológicos es efectivo,
dopamina es más efectiva que la dobutamina para aumentar la presión aunque los potenciales efectos adversos de la administración precoz
arterial en niños prematuros, y un metaanálisis de estos estudios confir- de hidrocortisona en neonatos prematuros debe tenerse en cuenta
mó mayor éxito en el tratamiento de la hipotensión con dopamina que (v. más adelante) (Seri et al., 2001; Seri y Noori, 2005; Cole, 2008;
con dobutamina, con menos niños en el grupo de dopamina que hayan Kluckow y Seri, 2012; Biniwale et al., 2013). En resumen, mantener
experimentado fracaso del tratamiento (Subdehar y Shaw, 2000). Sin una presión de perfusión apropiada es necesario (flujo sanguíneo sis-
embargo, no hubo diferencias en los eventos adversos neurológicos a témico y de los órganos) y, debido a que tanto la hipotensión como
corto plazo entre los dos grupos. En ausencia de información respecto el bajo flujo sanguíneo sistémico se asocian con trastornos del neu-
a eventos a largo plazo, no se pueden realizar recomendaciones firmes rodesarrollo, la meta principal del tratamiento de la hipotensión en
respecto a la elección de cada fármaco para el tratamiento de la hipo- neonatos muy prematuros debe ser la corrección de ambas mediciones
tensión en niños prematuros durante el período posnatal inmediato. de función cardiovascular.
Además, no hubo información disponible respecto a cambios en el flujo En neonatos a término y prematuros con hipotensión después del
sanguíneo sistémico. Sin embargo, con una cuidadosa titulación hasta período posnatal inmediato, cuando es más probable que se presente
un efecto hemodinámico «óptimo» predeterminado, la dopamina (y el shock por vasodilatación, la administración cautelosa de dopamina
la adrenalina) aumenta la presión arterial y el FSC en neonatos con (o adrenalina) en dosis tituladas a la respuesta cardiovascular parece
MBPN hipotensos durante el primer día posnatal (Pellicer et al., 2005). ser beneficiosa (DiSessa et al., 1981; Martinez et al., 1992; Pellicer
El seguimiento del neurodesarrollo en pacientes incluidos en este et al., 2005; Seri y Noori, 2005), a menos que exista evidencia de dis-
estudio a los 2-3 años de edad no reveló evidencia de un aumento en función miocárdica primaria (Seri, 1995, 2001).
la morbilidad independiente asociado a vasopresores/inótropos (Pellicer
et al., 2009; v. anteriormente). Aunque los hallazgos de este estudio Efectos epiteliales y neuroendocrinos
refuerzan la falta de probabilidad morbilidad aumentada en el neu- Independientemente de los efectos cardiovasculares antes menciona-
rodesarrollo asociado al uso de dopamina (o adrenalina) en neonatos dos, la dopamina ejerce efectos directos a nivel renal (Seri, 1995) y
con MBPN durante el primer día posnatal, el estudio original (Pellicer endocrino (Seri, 1995) en el recién nacido. Por medio de su acción
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et al., 2005) no tuvo el poder estadístico suficiente para establecer una en el flujo sanguíneo renal y en la tasa de filtración glomerular, como
postura definitiva al respecto. a través de su efecto directo sobre el sodio, el fósforo y el proceso
Como se comentó anteriormente, debido a la débil relación entre de transporte de agua y la actividad de la bomba Na+,K+-ATPasa en
la presión arterial y el flujo sanguíneo sistémico en neonatos muy los túbulos renales, la dopamina aumenta la excreción de sodio, fós-
prematuros durante el período posnatal inmediato, un incremento foro y agua libre (fig. 51.12), y puede aumentar el umbral hipóxico
en la presión arterial no garantiza necesariamente que la perfusión de la célula del túbulo renal durante episodios de hipoperfusión e
tisular haya mejorado junto con la presión arterial (Kluckow y hipoxemia (Seri, 1995). A través de su acción a nivel vascular renal
Evans, 1996; Lopez et al., 1997; Kluckow y Evans, 2000a; Pladys y epitelial, la dopamina también potencia el efecto diurético de la
et al., 1999; Kluckow y Seri, 2012). Aunque un estudio reciente furosemida (Tulassay y Seri, 1986) y la teofilina (Bell et al., 1998).
que utilizó mediciones con láser Doppler no mostró evidencia de Aunque la dopamina posea el potencial teórico de atenuar los efectos
vasoconstricción periférica incluso con dosis de dopamina mayores adversos renales de la indometacina, la información disponible en
de 10 µg/kg/min (Ishiguro et al., 2012), otros estudios demostra- la literatura es contradictoria (Seri, 1995). Diferencias en el grado
ron disminución del flujo sanguíneo sistémico en un subgrupo de de madurez, la gravedad de la enfermedad, el cortocircuito ductal,
pacientes a pesar de la mejoría en la presión arterial con dosis elevadas el estado del volumen intravascular y la dosis de indometacina pue-
de dopamina (Osborn et al., 2002). Por lo tanto, si hay evidencia den ser las responsables de dichos resultados conflictivos. Entre sus

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762 PA RT E XI Aparato cardiovascular

• Figura 51.12  Efectos de la dopamina en la nefrona. La dopamina aumenta el flujo sanguíneo renal
(FSR) por vasodilatación selectiva y por aumento del área de superficie celular mesangial y de la presión
hidrostática glomerular mediante la dilatación preferencial de la arteriola aferente (flechas negras). Estos
cambios producen un incremento en la filtración glomerular (FG) en cada nefrona. La administración de
dopamina a neonatos prematuros normotensos genera un aumento en la excreción de sodio, fósforo y
agua libre (Seri, 1993, 1995). Estos efectos son causados principalmente por inhibición farmacológica de
la bomba Na+,K+-ATPasa, el intercambiador Na+/H+ y el cotransportador Na+/fosfato inorgánico (Pi) en el
túbulo proximal, así como por la fosforilación en el túbulo colector inducida por inhibición de la hormona
antidiurética (ADH) (Seri, 1995). El incremento resultante propuesto en la excreción de bicarbonato
no se ha documentado en niños prematuros. La X en rojo representa inhibición enzimática o función
de transporte. (Por cortesía de Kelly L, Seri I. Renal developmental physiology: relevance to clinical care.
NeoReviews. 2008;9:e150–e161.)

a­ cciones endocrinas, el descenso plasmático de prolactina, tirotropina Adrenalina, noradrenalina, y otros agentes
y hormona de crecimiento inducido por dopamina (Seri, 1995) puede
ser de relevancia clínica. El descenso de los niveles plasmáticos de
y hormonas cardiovasculares
prolactina puede atenuar la propensión de los niños prematuros a la Adrenalina
formación de edema, pero puede también tener un efecto modulador En un ECA, dosis bajas a medias, tituladas a respuestas hemodinámicas
en la función inmunitaria (Seri, 1995). La inhibición en la liberación óptimas, demostraron incrementar la presión arterial y el FSC en neo-
de tirotropina necesita la postergación de la monitorización tiroidea natos con MBPN hipotensos (v. anteriormente) (Pellicer et al., 2005).
neonatal de rutina hasta que se haya suspendido la administración de Debido al significativo efecto de la adrenalina en la glucogenólisis, su
dopamina (Seri, 1995; Filippi et al., 2007). La dopamina, comparada administración se asocia con aumento en los niveles plasmáticos de lac-
con la dobutamina, disminuye los niveles plasmáticos de la hormona tato, independientemente de las acciones cardiovasculares del fármaco
estimulante tiroidea aproximadamente un 70-80 y un 50%, res- (Valverde et al., 2006). Este efecto debe tenerse en cuenta cuando uno
pectivamente (Filippi et al., 2007). Como la dobutamina no estimula está siguiendo los niveles plasmáticos de lactato para evaluar cambios en
los receptores dopaminérgicos, su administración está exenta de efectos el estado cardiovascular debido a la administración de adrenalina. Por
neuroendocrinos. El impacto potencial a largo plazo en el neurodesa- lo tanto, la mejoría en la perfusión inducida por adrenalina no puede
rrollo y la función inmunológica de las alteraciones inducidas por cerciorarse por el seguimiento aislado de niveles plasmáticos de lactato,
el fármaco en la función neuroendocrina del neonato a término y debido a que estos niveles van a estar aumentados independientemente
prematuro no se conoce. de la mejoría del estado cardiovascular inducido por el fármaco.

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CAPÍTULO 51 Afectación cardiovascular en el recién nacido 763

No se conoce si existe diferencia en la respuesta cardiovascular y/o a la administración del fármaco (Samiee-Zafarghandy et al., 2015). La
en los efectos adversos de las aminas simpático-miméticas con el uso hipotensión arterial inducida por la administración de vasopresores/
combinado de adrenalina y dopamina comparado con el uso de dosis inótropos y la trombocitopenia fueron los efectos adversos hallados
creciente de dopamina más allá de 20 µg/kg/min con o sin dobutamina. con mayor frecuencia.
En publicaciones preliminares no se han reportado efectos vasocons- Un ECA controlado con placebo investigó si la utilización de milri-
trictores perjudiciales con la utilización de altas dosis de adrenalina, ya nona minimizaría o prevendría el aumento sospechado de la resistencia
sea con o sin dopamina o noradrenalina en niños y neonatos enfermos vascular sistémica y la perfusión sistémica asociada en niños con MBPN
(Derleth, 1997; Campbell y Byrne, 1998; Seri y Evans, 1998). Estos durante el primer día posnatal (Paradisis et al., 2009). Sin embargo,
hallazgos pueden explicarse mejor por el decremento de los receptores no hubo reducción en la incidencia de bajo flujo de la VCS utilizado
adrenérgicos cardiovasculares y, por ende, su disminuida sensibilidad como alternativa para evaluar el flujo sanguíneo en pacientes tratados
cardiovascular a catecolaminas en niños prematuros con enfermedad con milrinona comparados con los del grupo placebo. Estos hallazgos
crítica, precisando una escalada del soporte simpaticomimético. Sin pueden explicarse, al menos en parte, por la poco apreciada com-
embargo, uno debe ser extremadamente cuidadoso con la escalada tera- plejidad fisiopatología de la afectación cardiovascular en neonatos muy
péutica con vasopresores/inótropos potentes para disminuir el riesgo de prematuros después del parto (Wu et al., 2016). Esto sugiere que la
vasoconstricción grave no deseada y afectación de la perfusión tisular. hipoperfusión sistémica y cerebral en esta población de pacientes puede
Como se mencionó antes, con el uso adecuado de dosis bajas de hidro- ocurrir no únicamente por la incapacidad del miocardio inmaduro de
cortisona en pacientes con evidencia de insuficiencia suprarrenal relati- bombear contra el incremento súbito posnatal de la resistencia vascular
va (v. anteriormente), rara vez se requiere una dosis alta de vasopresores. sistémica (Noori et al., 2009, 2014a).

Noradrenalina Vasopresina
La noradrenalina es el fármaco de elección para el tratamiento del shock El principal efecto cardiovascular de la vasopresina en la circulación sis-
séptico (vasodilatador) en pacientes adultos, y se ha incrementado la témica es la vasoconstricción. Sin embargo, en la circulación pulmonar,
utilización en niños con shock séptico (Lampin et al., 2012; Dellinger dosis bajas de vasopresina han demostrado inducir vasodilatación en
et al., 2013). Sin embargo, debido a una cantidad de factores regu- adultos. En neonatos con hipertensión pulmonar, incluidos pacientes
ladores del desarrollo, la farmacocinética y la farmacodinamia de la con hernia diafragmática congénita, varias series de casos han reportado
noradrenalina son diferentes en los neonatos. Lamentablemente, existe mejoría en la oxigenación y la disminución de la presión pulmonar
poca información disponible respecto a la efectividad y la seguridad de después de la administración de vasopresina en dosis bajas (Radicioni
la noradrenalina en la población neonatal (Oualha et al., 2014). Hasta et al., 2012; Acker et al., 2014; Mohamed et al., 2014). Sin embargo,
hace poco, solo se han publicado hallazgos en forma de resumen res- como la expresión de receptores de vasopresina está regulada por el
pecto a los efectos cardiovasculares de la noradrenalina en los neonatos desarrollo, es incierto si la vasopresina induce verdaderamente vaso-
(Derleth, 1997). Sin embargo, un estudio observacional más reciente dilatación pulmonar selectiva en la población neonatal (Enomoto
en neonatos prematuros y a término con hipertensión pulmonar persis- et al., 2014).
tente del recién nacido (HPPRN) tratada con óxido nítrico inhalado Su perfil farmacodinámico sistémico convierte a la vasopresina en
(iNO) que tenían además signos de fallo circulatorio encontró que dosis buen candidato para el tratamiento del fallo circulatorio cuando la
medias de noradrenalina mejoran la función cardiovascular sistémica fisiopatología subyacente es principalmente por vasodilatación, como
y pulmonar al disminuir el gradiente de presión arteria pulmonar- es el caso del shock séptico sin disfunción miocárdica o respuesta
aorta, y mejoran el desempeño cardíaco (Tourneux et al., 2008a). Otro inflamatoria sistémica secundaria a cirugía cardíaca. Sin embargo, solo
estudio observacional halló mejoría de la presión arterial, la diuresis existen reportes de series de casos acerca de la mejoría en la hemodi-
y la acidosis láctica en niños a término con hipotensión refractaria al námica sistémica en niños prematuros y a término con hipotensión
tratamiento habitual (Tourneux et al., 2008b). Aunque estos hallazgos refractaria o shock séptico (Meyer et al., 2006a, 2006b; Bidegain
son alentadores, la utilización rutinaria de noradrenalina en el trata- et al., 2010; Ikegami et al., 2010). Un piloto de ECA reciente comparó
miento de neonatos con HPPRN y afectación cardiovascular requiere la vasopresina con la dopamina como primera línea de tratamiento
eventual confirmación. en niños prematuros con hipotensión (Rios y Kaiser, 2015). Halló
que la vasopresina provocó una mejoría similar de la presión arterial
Milrinona y la diuresis comparada con la dopamina. Además, el grupo de vaso-
Existe escasa información disponible respecto al efecto cardiovascular presina presentó menos taquicardia. Sin embargo, es necesaria más
de la milrinona, un inhibidor de la fosfodiesterasa 3 en la población de información acerca de la seguridad y la eficacia de la vasopresina antes
pacientes neonatales (Samiee-Zafarghandy et al., 2015). Se ha utilizado de que pueda introducirse en el cuidado clínico de rutina en neonatos
ampliamente para reducir la poscarga en neonatos con cardiopatía con enfermedad crítica por shock vasodilatador (Shivanna et al., 2013).
congénita con síndrome de bajo gasto cardíaco postoperatorio (Hoff-
man et al., 2003). Con respecto a su utilización en niños a término sin Administración de corticoesteroides
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cardiopatía congénita, la administración de milrinona ha demostrado


en una serie pequeña de casos mejoría del índice de oxigenación sin Administración de corticoesteroides como tratamiento
afectar a la presión arterial cuando se administraba a neonatos a término primario o de rescate
con HPPRN tratados con iNO durante los primeros 2 días posnatales Un pequeño ECA demostró que la hidrocortisona en dosis bajas mejora
(McNamara et al., 2006). Otro estudio pequeño retrospectivo halló la presión arterial, pero es menos efectiva que la dopamina en niños
mejoría en los índices de función cardíaca después de las 24 h de prematuros con hipotensión (Bouchier y Weston, 1997). Dada la preo-
comienzo de tratamiento con milrinona en niños prematuros con cupación respecto a los efectos adversos a largo plazo de los corticoes-
hipertensión pulmonar tratada con iNO (James et al., 2015). El efecto teroides (principalmente dexametasona) y la imprecisa información de
preferencial de la milrinona en la circulación pulmonar de neonatos su eficacia, los corticoesteroides no están recomendados como primera
con HPPRN tratados con iNO puede deberse al incremento de fos- línea de tratamiento en niños con hipotensión (Ibrahim et al., 2011).
fodiesterasa 3 en los vasos pulmonares en respuesta a la administración Para el tratamiento de rescate, en cambio, existe evidencia con-
de iNO (Chen et al., 2009). No está claro si la milrinona tiene un tundente aportada por estudios descriptivos (Helbock et al., 1993;
efecto inótropo positivo en neonatos (Barrington y Dempsey, 2006). Ng et al., 2001; Seri et al., 2001; Heckmann y Pohlandt, 2002;
Un estudio retrospectivo de 1.446 neonatos expuestos a milrinona Noori et al., 2006a) y confirmada por ECA prospectivos doble ciego
halló que el 42% de los neonatos tuvieron efectos adversos atribuidos (Bouchier y Weston, 1997; Gaissmaier y Pohlandt, 1999; Watterberg

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764 PA RT E XI Aparato cardiovascular

et al., 1999; Efird et al., 2005; Ng et al., 2006) de que el tratamiento sensibilidad del aparato cardiovascular a las catecolaminas en respuesta
breve con corticoesteroides estabiliza el estado cardiovascular y dis- al estrés agudo o a la enfermedad crítica.
minuye la necesidad de soporte vasopresor/inótropo en el recién Tercero, debido al papel de los glucocorticoides en la regulación fisio-
nacido a término y prematuro con enfermedad crítica con hipo- lógica de expresión de receptores adrenérgicos (Hausdorff et al., 1990),
tensión refractaria al tratamiento vasopresor. Debido a la evidencia la aparición de refractariedad vasopresora en sí misma puede indicar un
contundente de que dosis precoces y/o medias a altas de dexame- estado de insuficiencia suprarrenal relativa. Los hallazgos de múltiples
tasona tienen un efecto perjudicial sobre el cerebro en desarrollo estudios recientes indican que los niños prematuros y a término con
(O’Shea et al., 1999; Shinwell et al., 2000; Halliday et al., 2003; enfermedad crítica son propensos a desarrollar insuficiencia supra-
Baud, 2004; Yeh et al., 2004; Hitzert et al., 2012), y porque además rrenal relativa debido a su inmadura función suprarrenal (Watterberg y
de los glucocorticoides, los mineralocorticoides también tienen un Scott, 1995; Watterberg, 2002; Ng et al., 2004) y del eje hipotalámico-
efecto significativo en el aparato cardiovascular (Wehling et al., 1995; hipofisario (Fernandez et al., 2008; Fernandez y Watterberg, 2009),
Wehling, 1997), incluso la administración de bajas dosis de dexame- respectivamente. Es importante enfatizar que, según estos hallazgos,
tasona para el tratamiento de la hipotensión refractaria a vasopresores parece que la falta de respuesta a la corticotropina endógena o exógena
ha caído en desuso en los últimos años. Este apartado, por tanto, en los neonatos con MBPN (Watterberg, 2002; Ng et al., 2004) y
menciona solo las acciones, los efectos adversos, las dosis recomenda- la falta de respuesta al estrés del eje hipotalámico-hipofisario en los
das y los eventos clínicos relevantes con respecto a la administración neonatos prematuros y a término (Fernández et al., 2008; Fernández
de hidrocortisona en el tratamiento de la hipotensión refractaria a y Watterberg, 2009) son las principales causas para el desarrollo de
vasopresores en el neonato enfermo crítico. Hay que destacar que la insuficiencia suprarrenal relativa. Por eso estos pacientes tienen una
evidencia disponible respecto a la efectividad de la hidrocortisona en capacidad limitada de realizar incrementos adaptativos suficientes en
dosis bajas para incrementar la presión arterial y disminuir el reque- la producción de corticoesteroides endógenos para prevenir el desa-
rimiento de vasopresores/inótropos en el neonato prematuro es tan rrollo de decremento de receptores adrenérgicos cardiovasculares y la
fuerte que requeriría 74 y 188 futuros estudios, respectivamente, para desensibilización a catecolaminas del aparato cardiovascular durante
demostrar la ausencia de efecto de la hidrocortisona en el aumento de su enfermedad. Por lo tanto, en niños prematuros y a término con
la presión arterial y en la disminución del requerimiento vasopresor enfermedad crítica e hipotensión refractaria al tratamiento vasopresor,
para eliminar el poder estadístico de los hallazgos actuales (Higgins la administración de corticoesteroides sirve también como terapia de
et al., 2010). reemplazo hormonal.

Fundamentos del tratamiento con hidrocortisona Aplicaciones clínicas de la hidrocortisona


Debido a que, en la mayoría de los pacientes, y después de un tiempo, Como se mencionó previamente, el empleo de hidrocortisona como
la estabilidad cardiovascular se alcanzará con la utilización de vasopreso- tratamiento primario de la hipotensión en niños prematuros no
res/inótropos e/o inótropos únicamente, es importante la comprensión está recomendado. Por otro lado, aunque los efectos a largo plazo
de los fundamentos en la administración de hidrocortisona, en especial no requieran mayor investigación (v. más adelante), la utilización
porque el fármaco tiene efectos adversos propios (v. más adelante). de hidrocortisona está justificada como tratamiento secundario de
Primero, está ampliamente aceptado, aunque no probado, que lo rescate. La información disponible nos indica que la hidrocortisona
más rápido que uno normalice la presión arterial y la perfusión sis- en niños prematuros o a término con hipotensión refractaria a vaso-
témica, especialmente en el neonato con MBPN durante el período presores aumenta la presión arterial a partir de las 2 h de comienzo
posnatal inmediato, mejor será el resultado. Sin embargo, como la del tratamiento, (efectos no genómicos) y disminuye el requerimiento
presión arterial normal en las primeras 24 h puede no garantizar una de vasopresores a partir de las 8-12 h de la primera dosis del fármaco
perfusión cerebral normal (v. anteriormente), y porque una asociación (efectos genómicos) (fig. 51.13) (Seri et al., 2001; Ng et al., 2006;
no casual se ha documentado entre hipotensión y eventos adversos, la Noori et al., 2006a). Un estudio en niños prematuros sin CAP docu-
estabilización del estado cardiovascular con pequeña fluctuación de mentó que la mejoría en la presión arterial inducida por hidrocortisona
presión arterial continúa siendo una meta intuitivamente deseable, se asocia con mejoría de la función cardiovascular en todo aspecto,
pero una sin mucha evidencia directa que la apoye. incluido el volumen sistólico y la perfusión tisular (fig. 51.14) (Noori
Segundo, y más importante, la hidrocortisona se dirige específi- et al., 2006b). Es importante destacar que, debido al aclaramiento
camente a la causa subyacente de la inestabilidad cardiovascular en la disminuido de hidrocortisona, dosis menores y menos frecuentes son
mayoría de los neonatos enfermos críticos y, por tanto, es la elección de suficientes para inducir los efectos hemodinámicos deseados en niños
tratamiento lógica. De hecho, los hallazgos respecto a la endocrinología prematuros y a término (Noori et al., 2006b; Vezina et al., 2014;
y la fisiología cardiovascular en desarrollo como información clínica Watterberg, 2016).
reciente apoyan el rol que desempeña la utilización de hidrocortisona
en neonatos enfermos críticos con hipotensión, especialmente en neo- Efectos adversos a corto plazo
natos con MBPN (Biniwale et al., 2013). En la enfermedad crítica, la Con respecto a los efectos adversos derivados de la administración pre-
desensibilización del aparato cardiovascular a las catecolaminas ocurre coz o tardía de hidrocortisona en dosis bajas, la potencial aparición de
a través del decremento cardiovascular de receptores adrenérgicos y sis- secuelas a corto y largo plazo es de particular interés. Para los efectos
temas de segundo mensajero (Hausdorff et al., 1990). Este proceso se adversos a corto plazo, se documentó repetidamente que la exposición
atenúa o previene por las acciones regulatorias de los glucocorticoides conjunta de neonatos prematuros a indometacina e hidrocortisona
en la expresión de receptores adrenérgicos y sistemas de segundo men- durante la primera semana posnatal aumenta significativamente el
sajero cardiovasculares (Hausdorff et al., 1990). Además, el incremento riesgo de perforación gastrointestinal espontánea (en su mayoría
directo de la contractilidad en el miocardio y las células del músculo por el íleo) (Watterberg et al., 2004; Peltoniemi et al., 2005). Este
liso vascular inducida por mineralocorticoides también juega un rol grave efecto indeseable restringe la utilización de hidrocortisona en
efectivo (Wehling et al., 1995; Wehling, 1997). Aún más, los corticoes- el neonato con MBPN durante la primera semana posnatal, la mis-
teroides contribuyen al mantenimiento de la integridad capilar, inhiben ma población de pacientes en los cuales la hipotensión refractaria a
el metabolismo de catecolaminas y recaptura de noradrenalina en las vasopresores e insuficiencia suprarrenal relativa son más prevalentes
terminales nerviosas simpáticas, aumentan la expresión de receptores durante el período posnatal inmediato. Los hallazgos preliminares en
de angiotensina de tipo 2 en el miocardio, e inhiben la producción uno de estos estudios podrían sugerir que los neonatos con MBPN
de prostaciclinas y la inducción de óxido nítrico sintetasa inducible. con bajos niveles basales de cortisol plasmático pueden tener menor
Cada una de estas acciones de los corticoesteroides ayuda a mantener la riesgo de desarrollar perforación ileal cuando son tratados con dosis

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CAPÍTULO 51 Afectación cardiovascular en el recién nacido 765

• Figura 51.13  Efecto de la hidrocortisona en la presión arterial media y dosis de dopamina durante
las primeras 24 h de tratamiento con hidrocortisona en 23 neonatos con shock refractario a vaso-
presores. Presión arterial media (A) y requerimiento medio de dopamina (B) durante las 12 h previas
y las primeras 24 h posteriores a la primera dosis de hidrocortisona (HC). Antes de la administración
de HC, la presión arterial se mantuvo baja (A), a pesar de incrementos significativos en las dosis de
dopamina (B; asterisco P < 0,05 frente al comienzo [0 h]). Sin embargo, la presión arterial media aumentó
significativamente a las 2 h después de la primera dosis de HC (A; *P < 0,05 frente al comienzo
[0 h]) y continuó subiendo hasta las 6 h de tratamiento con HC, permaneciendo estable en adelante
(A; *P < 0,05 frente al comienzo [0 h]; P < 0,05 frente a la terapia con HC [2 h]). Además, la dosis de
dopamina disminuyó significativamente a las 12 y las 24 h de tratamiento con HC (B; *P < 0,05 frente al
comienzo [0 h]). (Por cortesía de Seri I, Tan R, Evans J. Cardiovascular effects of hydrocortisone in preterm
neonates with pressor resistant hypotension. Pediatrics. 2001;107:1070–1074.)

bajas de hidrocortisona y un inhibidor de ciclooxigenasa durante neonatos prematuros a una edad mediana de 18 días y dosis acumuladas
los primeros días posnatales (Peltoniemi et al., 2005). Sin embargo, que sobrepasen los 50 mg, no interfiere con el desarrollo cerebral
esta observación precisa ser confirmada antes de que pueda utilizarse (Lodygensky et al., 2005). Además, estudios de casos y controles no
para predecir la probabilidad de perforación intestinal espontánea han demostrado diferencia de volumen tisular cerebral y cerebeloso en
basada únicamente en niveles basales de cortisol plasmático. Para los RM en niños prematuros equivalentes a término con displasia bronco-
otros efectos adversos a corto plazo de la hidrocortisona, un estudio pulmonar tratados con hidrocortisona comparados con los controles
previo halló un incremento en la incidencia de micosis sistémicas (Benders et al., 2009; Kersbergen et al., 2013). Un ECA pequeño de
(Botas et al., 1995). Sin embargo, ninguno de los otros estudios ha hidrocortisona con dosis acumulada de 17 mg/kg y comienzo mode-
documentado un incremento significativo de infecciones bacterianas radamente precoz (a los 10-21 días) tampoco mostró diferencia en el
o micosis en neonatos. Por último, la hiperglucemia y la hipertensión volumen cerebral regional en equivalentes a término comparado con
asociadas a la administración de hidrocortisona se han reportado en los controles (Parikh et al., 2013). Sin embargo, otro ECA pequeño
pocos casos de la literatura. halló una tendencia a mayor tasa de trastorno del neurodesarrollo en
el grupo de hidrocortisona comparado con el grupo placebo (61 frente
Efectos adversos a largo plazo a 39%) en la edad escolar (Peltoniemi et al., 2016).
Respecto a los potenciales efectos adversos a largo plazo, la pregunta Aunque en términos generales la hidrocortisona parece ser más
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más urgente es si dosis bajas a moderadas de hidrocortisona interfieren segura que la dexametasona, la falta de poder de los ECA y la naturaleza
en el neurodesarrollo, especialmente en neonatos prematuros. retrospectiva de los estudios observacionales o retrospectivos justifican
Un estudio controlado con placebo mostró que el tratamiento precaución antes de que la utilización precoz o tardía y con dosis baja
precoz con dosis bajas de hidrocortisona en la prevención de displasia a mediana de hidrocortisona puede declararse segura en neonatos
broncopulmonar utilizada en los primeros 10 días posnatales no se prematuros, al menos desde el punto de vista del neurodesarrollo.
asoció con aumento en la incidencia de parálisis cerebral (Watterberg
et al., 2004) y puede haber estado asociado con evidencia de mejoría en Medidas de soporte
algunas medidas de eventos en el neurodesarrollo a los 18-22 meses de
edad corregida comparado con los controles (Watterberg et al., 2007). Mantener normales el volumen intravascular, el pH arterial y la concen-
Con respecto a la utilización de dosis mayores y acumulativas de tración de calcio iónico plasmático es necesario para una óptima res-
hidrocortisona en el tratamiento de la displasia broncopulmonar evo- puesta cardiovascular a las catecolaminas. Un estudio previo halló que la
lucionada fuera del período transicional inmediato, los resultados de acidosis metabólica (pH < 7,25) puede afectar a la función miocárdica
un estudio que examinó el desarrollo estructural y funcional cerebral en niños prematuros (Fanconi et al., 1993) y, por tanto, se recomienda
a una edad de 8 años sugiere que la hidrocortisona, utilizada para el que el pH arterial se mantenga por encima de este rango en casos de
tratamiento de displasia broncopulmonar asociada a ventilación en acidosis con componente metabólico significativo. Por otro lado, se ha

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766 PA RT E XI Aparato cardiovascular

• Figura 51.14  Efecto de la hidrocortisona en la hemodinámica sistémica y requerimiento de dopamina


durante las primeras 48 h de tratamiento con hidrocortisona en 15 neonatos prematuros con shock
refractario a vasopresores. Cambios en la presión arterial media (PAM; A) y dosis de dopamina (DD; B)
y cambios porcentuales relativos al comienzo (0 h) en la resistencia vascular sistémica (RVS; C),
el volumen sistólico (VS; D), la frecuencia cardíaca (FC; E) y el gasto ventricular izquierdo (GVI; F) 1,
2, 6-12, 24, y 48 h después de la primera dosis de hidrocortisona (HC). Las flechas indican el tiempo
aproximado de dosis de hidrocortisona. Se muestran valores de P significativos para comparación por
pares frente al comienzo (0 h) con ajuste para múltiples comparaciones (Bonferroni). Véase el texto
para más detalles. (Por cortesía de Noori S, Friedlich P, Wong P, et al. Hemodynamic changes following
low-dose hydrocortisone administration in vasopressortreated neonates. Pediatrics. 2006;118:1456–1466.)

demostrado que la acidosis respiratoria tiene escaso o nulo efecto en la gaseoso pulmonar. Por otro lado, una excesiva presión positiva y una
función cardíaca, la contractilidad miocárdica y la resistencia vascular hiperexpansión pulmonar se asocian a disminución del flujo sanguíneo
sistémica en niños prematuros con estabilidad hemodinámica durante pulmonar y sistémico.
el período transicional (Noori et al., 2013). Sin embargo, y como ya se En resumen, la sostenida estabilización del estado cardiovascular
discutió antes, la acidosis respiratoria presenta efectos significativos en con provisión de adecuados parámetros de presión arterial, gasto
la hemodinámica cerebral, y su efecto cardiovascular en neonatos que cardíaco, y perfusión tisular y oxigenación continúa siendo una tarea
reciben soporte cardiovascular se desconoce (v. «Soporte respiratorio difícil en la mayoría de los neonatos hipotensos con enfermedad crí-
y hemodinámica»). Por lo tanto, es necesaria una mayor informa- tica. El tratamiento de estos pacientes requiere la posibilidad de una
ción al respecto para definir el pH óptimo y el estado acidobásico en continua monitorización de las medidas de función cardiovascular
niños prematuros y a término que reciban soporte respiratorio. La (presión arterial, flujo sanguíneo sistémico y oxigenación tisular), una
administración de bicarbonato de sodio (Fanconi et al., 1993) o, en exhaustiva comprensión de la patogenia y la fisiopatología del shock
neonatos con acidosis respiratoria y metabólica grave combinada, la neonatal, una exhaustiva comprensión de los mecanismos de acción,
administración de trometamina mejora rápidamente el pH arterial. Sin la farmacodinámica y los potenciales efectos adversos de las aminas
embargo, la eficacia y potenciales efectos adversos a corto y largo plazo simpático-miméticas y otras medicaciones utilizadas en el manejo del
de dichas medidas de tratamiento de soporte no se han estudiado en shock neonatal.
la población de pacientes neonatales y, por tanto, hay escasa evidencia
de que la administración de bicarbonato para el manejo de la acidosis Lecturas recomendadas
metabólica causada por hipoperfusión tisular sea beneficiosa (Aschner y
Poland, 2008). Finalmente, aunque la ventilación con presión positiva Azhibekov T, Soleymani S, Lee BH, et al. Hemodynamic monitoring of
pueda elevar la presión pleural y tenga el potencial de reducir el retorno the critically ill neonate: an eye on the future. Semin Fetal Neonatal
venoso, puede también reducir la poscarga ventricular izquierda al Med 2015;20:246-254.
reducir la presión transmural y disminuir o eliminar el trabajo de res- Da Costa CS, Greisen G, Austin T. Is near-infrared spectroscopy clini-
pirar. Disminuir o eliminar el trabajo de respirar disminuirá o eliminará cally useful in the preterm infant? Arch Dis Child Fetal Neonatal Ed
también el gasto cardíaco concomitante desviado a los músculos res- 2015;100:F558-F561.
piratorios. Por lo tanto, el efecto hemodinámico neto de la ventilación Dellinger RP, Levy MM, Rhodes A, et al. Surviving Sepsis Campaign:
con presión positiva es mejoría en la perfusión sistémica de oxígeno international guidelines for management of severe sepsis and septic
independiente de cualquier otra mejoría potencial del intercambio shock, 2012. Intensive Care Med 2013;39:165-228.

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767.e6 PA RT E XI Aparato cardiovascular

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CAPÍTULO 51 Afectación cardiovascular en el recién nacido 767.e7

Puntos clave
• Resulta difícil diagnosticar el shock neonatal en su fase des-
compensada durante el período transicional inmediato, y es un
reto aún mayor el diagnosticarlo en su fase compensada mediante
la monitorización clínica estándar y el enfoque clínico.
• Es incierto determinar según la edad gestacional –y la edad
posnatal– qué valores representan hipotensión y mala perfusión
tisular respectivamente, para poder llevar a cabo una inter-
vención a tiempo en el neonato, dependiendo de la presión
arterial, el flujo sistémico y el flujo sanguíneo. Además, no hay
certeza respecto a qué medicación cardiovascular o combinación
de medicamentos hay que utilizar en el shock neonatal debido
a sus diferentes causas (hipovolemia, disfunción miocárdica,
alteraciones vasorreguladoras, o una combinación de dos o todos
estos factores).
• Existe muy poca evidencia de que el manejo de la hipotensión
neonatal y/o el flujo sanguíneo sistémico tengan relevancia
clínica en el desarrollo de eventos.
• Una exhaustiva comprensión de los principios de la fisiología
cardiovascular en desarrollo y de la causa, fisiopatología y pre-
sentación clínica del shock neonatal, junto con los mecanismos
de acción y farmacocinética y farmacodinamia de la medicación
utilizada en el tratamiento de la afectación cardiovascular, son
esenciales para el neonatólogo con el fin de poder aplicar el
enfoque más razonable en el tratamiento de la afectación car-
diovascular neonatal basado en la experiencia colectiva y en la
escasa evidencia disponible en la literatura.
• Avances recientes en la tecnología de monitorización, como la
espectroscopia de infrarrojo cercano, la velocimetría de impe-
dancia eléctrica, los sistemas de alarma basados en la variabilidad
de la frecuencia cardíaca y el electroencefalograma (EEG) inte-
grado de amplitud, junto con el uso de la ecografía en el punto
de atención, nos permitirán estudiar la afectación circulatoria
neonatal sistemática y exhaustivamente. Estos progresos, junto
con la introducción y el modelado matemático de marcadores de
genotipo y fenotipo que identifican subpoblaciones con mayor
riesgo de desarrollar shock antes de que suceda, van a llevar
sin duda a un diagnóstico temprano y un manejo basado en la
evidencia del shock neonatal, lo que provocará una mejoría de
los eventos a corto y largo plazo.

Palabras clave
Shock neonatal
Hipotensión
Presión arterial
Gasto cardíaco
Flujo sanguíneo de los órganos
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Aporte de oxígeno
Monitorización hemodinámica
Vasopresores
Inótropos
Lusítropos
Hidrocortisona

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52
Hipertensión pulmonar persistente
ROBIN H. STEI NHORN Y STEVEN H. ABMAN

PUNTOS CLAVE con dificultad respiratoria precoz, en particular después de rotura de


membranas prolongada e hipoplasia pulmonar (Aikio et al., 2012; de
• La hipertensión pulmonar persistente del recién nacido (HPPRN) puede Waal y Kluckow, 2015). La hipertensión pulmonar crónica se asocia
presentarse con enfermedad parenquimatosa, con hipoplasia pulmonar con enfermedades pulmonares, como displasia broncopulmonar (DBP)
o sin enfermedad pulmonar asociada (idiopática), y tiene una incidencia y HDC, y es una complicación común de las cardiopatías congénitas.
del 0,2% en recién nacidos a término y hasta del 2% en recién nacidos Este capítulo repasará la fisiopatología de la HPPRN, el tratamiento
prematuros. clínico de los recién nacidos con enfermedad grave y la información
• Factores maternos, como la diabetes, un índice de masa corporal respecto a los resultados.
aumentado, el tabaquismo, el consumo de inhibidores selectivos de
receptores de serotonina o antiinflamatorios no esteroideos, y el parto
por cesárea aumentan el riesgo de HPPRN. Los factores posnatales Desarrollo y transición de la vascularización
incluyen asfixia, hiperoxia, hipoxia, infección e inflamación pulmonar. pulmonar fetal normal
• El manejo médico de la HPPRN requiere una cuidadosa optimización
de la función ventricular tanto izquierda como derecha. Las estrategias Durante la vida fetal, la resistencia vascular placentaria es baja y la RVP
de reclutamiento pulmonar deben ser aplicadas en pacientes con alta. Este estado de hipertensión pulmonar fisiológica es necesario para el
enfermedad pulmonar parenquimatosa. mantenimiento de los patrones de flujo sanguíneo que sostienen el inter-
• El óxido nítrico inhalado mejora la oxigenación y disminuye la necesidad cambio gaseoso en la placenta. En el feto humano, solo el 10-20% del
de soporte mediante oxigenación con membrana extracorpórea en gasto ventricular combinado está dirigido al lecho vascular pulmonar, y
recién nacidos a término y prematuros con HPPRN. la mayor parte del gasto ventricular derecho cruza el conducto arterioso
• El soporte mediante oxigenación con membrana extracorpórea está hasta la aorta descendente. Durante la gestación tardía existe un marcado
indicado para neonatos a término y prematuros con hipertensión
incremento del área transversal en los lechos vasculares pulmonares.
pulmonar grave y/o hipoxemia refractaria al tratamiento con óxido
Durante este mismo marco de tiempo, los vasos pulmonares se hacen
nítrico inhalado y optimización de la función respiratoria y cardíaca.
• La hipertensión pulmonar crónica aparece en un subgrupo de recién
más sensibles a los mediadores vasoconstrictores, como endotelina e
nacidos con hernia diafragmática congénita y displasia broncopulmonar, hipoxia, lo que provoca una vasoconstricción pulmonar activa y un
y aumenta morbilidad y mortalidad. incremento neto de la RVP. La respuesta dilatadora al incremento de
• Los recién nacidos que sobreviven a HPPRN moderada a grave tienen oxígeno también aparece en la gestación tardía. La vasoconstricción
mayor riesgo de presentar trastornos del neurodesarrollo y deben pulmonar está también promovida por la baja producción basal de
someterse a seguimiento del neurodesarrollo y con técnicas de vasodilatadores como prostaciclina y óxido nítrico (NO), y la baja
neuroimagen. actividad arterial pulmonar de guanilato ciclasa soluble.
Con el nacimiento, un rápido y drástico descenso en la RVP redirige
la mitad del gasto ventricular combinado al pulmón e incrementa
8-10 veces el flujo sanguíneo pulmonar. El flujo sanguíneo pulmo-
nar aumentado incrementa el retorno venoso pulmonar y la presión

L
a insuficiencia respiratoria neonatal afecta al 2% de todos los auricular izquierda, promoviendo el cierre funcional de la válvula
nacidos vivos y contribuye con más de un tercio a la mortali- unidireccional del agujero oval. El pinzamiento del cordón umbilical
dad neonatal global (Angus et al., 2001). La hipertensión pul- remueve la circulación placentaria de baja resistencia, incrementando
monar persistente del recién nacido (HPPRN) es una complicación así la resistencia vascular sistémica. La mayor caída en la RVP y la
frecuente de la enfermedad respiratoria neonatal y se define como la presión arterial pulmonar ocurre poco después del nacimiento, aunque
imposibilidad de alcanzar o mantener el descenso normal en la resis- ambas continuarán descendiendo durante los primeros meses de vida
tencia vascular pulmonar (RVP) al nacer. La HPPRN puede producir hasta que se alcancen los bajos niveles que son típicos de la circulación
dificultad respiratoria grave e hipoxemia debido al importante remo- adulta. Mientras la RVP cae por debajo de niveles sistémicos, el flujo a
delado patológico vascular pulmonar (fig. 52.1) en recién nacidos través del conducto arterioso persistente revierte. Durante las primeras
a término y prematuros. Son frecuentes la muerte y la morbilidad horas de vida se cierra el conducto arterioso funcional, mayormente en
(Kinsella y Abman, 1995; Walsh-Sukys et al., 2000), que incluye respuesta a la incrementada presión de oxígeno del recién nacido. Esto
enfermedad pulmonar crónica y secuelas en el neurodesarrollo. Aunque separa efectivamente las circulaciones pulmonar y sistémica, y establece
la HPPRN puede ser idiopática, está más comúnmente asociada con el patrón de circulación posnatal normal.
un amplio espectro de enfermedades pulmonares, incluido el síndrome Estos cambios transicionales en la vascularización pulmonar se
de aspiración de meconio, la asfixia perinatal, la hernia diafragmática inician por la ventilación del pulmón y el incremento en la presión de
congénita (HDC), la neumonía y el síndrome de dificultad respiratoria. oxígeno, y están mediados por varios componentes vasoactivos. El feto
La HPPRN puede también tener lugar en recién nacidos prematuros se prepara para la transición durante la gestación tardía incrementando
768 © 2019. Elsevier España, S.L.U. Reservados todos los derechos

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CAPÍTULO 52 Hipertensión pulmonar persistente 769

• Figura 52.1  Apariencia histológica de un vaso pulmonar de un recién nacido con hipertensión
pulmonar persistente del recién nacido (HPPRN) que ilustra el drástico remodelado que puede asociarse
a la HPPRN grave.

• Figura 52.2  Vías de señalización de óxido nítrico (NO) y prostaciclina (PGI2) que regulan el tono
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vascular pulmonar del pulmón en desarrollo. AMPc, monofosfato de adenosina cíclico; ATP, trifosfato
de adenosina; COX-1, ciclooxigenasa 1; GMPc, monofosfato de guanosina cíclico; GTP, trifosfato de
guanosina; NOS, óxido nítrico sintasa; PDE3, fosfodiesterasa 3; PDE5, fosfodiesterasa 5; PGIS, pros-
taciclina sintasa.

la expresión de NO sintasa y guanilato ciclasa soluble en la vasculariza- el período neonatal inmediato (Hanson et al., 1998; Sánchez et al.,
ción pulmonar (fig. 52.2). La producción endotelial pulmonar de NO 1998). La vía del ácido araquidónico-prostaciclina también desempeña
aumenta marcadamente en el momento del nacimiento, parte en res- un rol importante en la transición al nacimiento (v. fig. 52.1). La
puesta al incremento de la presión de oxígeno y a la presión tangencial. enzima ciclooxigenasa actúa sobre el ácido araquidónico para producir
El NO ejerce su acción a través de la guanilato ciclasa soluble, una endoperóxidos de prostaglandina. Las prostaglandinas activan la ade-
enzima cuyo nivele hace pico en la gestación tardía (Bloch et al., 1997) nilato ciclasa para incrementar las concentraciones de monofosfato de
e incrementa los niveles de monofosfato de guanosina cíclico (GMPc), adenosina cíclico (AMPc) en las células del músculo liso vascular, el
un mediador central responsable de la relajación vascular. La fosfodies- cual, de manera similar a los incrementos en las concentraciones de
terasa 5 (PDE5) cataliza la rotura de GMPc y, de manera similar a la GMPc, lleva a vasorrelajación. La fosfodiesterasa 3A cataliza la rotura
guanilato ciclasa soluble, exhibe un pico de expresión y actividad en de AMPc.

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770 PA RT E XI Aparato cardiovascular

• Figura 52.3  Patogenia de la hipertensión pulmonar persistente del recién nacido (HPPRN).
AINE, antiinflamatorios no esteroideos; AOP, agujero oval permeable; CA, conducto arterioso;
ISRS, inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina; RVP, resistencia vascular pulmonar.

Múltiples eventos pueden alterar la transición perinatal y contribuir de enfermedad pulmonar parenquimatosa y evidencia ecocardiográfica de
a la patogenia de la HPPRN (fig. 52.3). El parto por cesárea electiva cardiopatía estructural (Gersony et al., 1969; Levin et al., 1976). En estos
retrasa el descenso de la presión arterial pulmonar, aumentando el pacientes, la hipoxemia era causada por marcadas elevaciones de la RVP
riesgo de HPPRN (Makihara et al., 1993), y el parto antes de las 39 que llevaban a un cortocircuito (shunt) extrapulmonar derecha-izquierda
semanas de gestación de manera similar amplifica este efecto. Cuando a través del conducto arterioso persistente o el agujero oval permeable.
se compara con controles emparejados, es más probable que recién Debido a la persistencia de una RVP elevada y flujo sanguíneo a través
nacidos con HPPRN hayan nacido por cesárea, y el riesgo elevado de estos «cortocircuitos fetales», originalmente se empleó el término
de HPPRN está también asociado a diabetes materna, asma e índi- circulación fetal persistente para describir estos hallazgos.
ce de masa corporal elevado (Hernández-Diaz et al., 2007; Wilson En consecuencia, se reconoció que estos patrones fisiológicos podían
et al., 2011). La asfixia perinatal modifica la adaptación perinatal a complicar el curso clínico de neonatos a término o prematuros con
través de un número de mecanismos que retrasan la caída de la RVP diversas causas de insuficiencia respiratoria hipoxémica. Como resulta-
e incrementa el riesgo de HPPRN (Lapointe y Barrington, 2011), así do, el término hipertensión pulmonar persistente del recién nacido denota
como la hipoxemia fetal, la isquemia, la acidosis, la aspiración de meco- ahora un síndrome caracterizado por características fisiopatológicas en
nio y la disfunción ventricular. La asfixia aguda se asocia con vasocons- común, que incluye elevación sostenida de la RVP e hipoxemia debido
tricción pulmonar reversible, pero la asfixia crónica intrauterina puede al cortocircuito extrapulmonar derecha-izquierda a través del conducto
inducir remodelado vascular (Murphy et al., 1984). El implemento de arterioso o el agujero oval. Estos hallazgos fisiológicos pueden encon-
la hipotermia terapéutica para el manejo de la asfixia perinatal suscitó trarse asociados a un amplio rango de trastornos cardiopulmonares,
muchas preguntas respecto a su capacidad de incrementar el riesgo de como aspiración de meconio, sepsis, neumonía, asfixia, HDC y sín-
HPPRN en recién nacidos asfixiados. Niveles de hipotermia profunda drome de dificultad respiratoria. El término se emplea habitualmente de
(30-32 °C) aumentaron la presión arterial media en corderos neonatos manera intercambiable con insuficiencia respiratoria hipoxémica, aunque
(Toubas et al., 1978) y se han asociado con un incremento en la utili- el término hipertensión pulmonar persistente del recién nacido debería
zación de oxigenación con membrana extracorpórea (ECMO) y óxido reservarse para describir recién nacidos en los cuales el cortocircuito
nítrico inhalado (iNO) en estudios en humanos. Además, la hipotermia extrapulmonar contribuye a la hipoxemia y a la disfunción cardiopul-
desplaza la curva de disociación de oxígeno a la izquierda y disminuye monar. La mayoría de los estudios sugieren una incidencia general de
la Pao2 a una determinada saturación periférica de oxígeno (Spo2). Sin HPPRN de 1,9 en 1.000 nacidos vivos o un estimado de 7.400 casos
embargo, el análisis agrupado de estudios aleatorizados de hipotermia por año en EE. UU., aunque estas tasas difieren considerablemente
estándar (33,5 °C) no demostró mayor incidencia de HPPRN (25 entre hospitales (Walsh-Sukys et al., 2000; Huybrechts et al., 2015).
frente a 20%) en recién nacidos tratados (Thoresen, 2011). La clasificación de Niza del año 2013 de hipertensión pulmonar fue
expandida para incluir el rango de enfermedad pediátrica y neonatal
(Ivy et al., 2013). Debido a sus específicas características anatómicas y
Fisiopatología de la hipertensión pulmonar fisiológicas, la HPPRN se asignó a una subcategoría aparte en el grupo
persistente del recién nacido 1 (hipertensión arterial pulmonar). En el grupo 3 de hipertensión pul-
monar (hipertensión pulmonar debido a enfermedad pulmonar o hipo-
El fracaso en la transición cardiopulmonar después del nacimiento provo- xia), se listan específicamente enfermedades del desarrollo pulmonar
ca HPPRN. Los primeros trabajos de HPPRN describían recién nacidos debido al importante rol que el crecimiento vascular pulmonar anor-
a término con profunda hipoxemia con ausencia de evidencia radiográfica mal desempeña en la patogenia del desarrollo pulmonar alterado y la

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CAPÍTULO 52 Hipertensión pulmonar persistente 771

hipertensión pulmonar. La HDC, la DBP y otros trastornos del desa- entre recién nacidos que requieran soporte con ECMO (Southgate
rrollo pulmonar, como la deficiencia de proteína surfactante y la dis- et al., 2001). Polimorfismos genéticos del receptor de proteínas morfo-
plasia capilar alveolar, se consideran actualmente importantes causas génicas óseas u otros receptores del factor de crecimiento transformador
de hipertensión pulmonar en recién nacidos. β, otros factores de crecimiento críticos o enzimas vasoactivas (p. ej.,
La HPPRN se describe habitualmente de acuerdo con su causa pri- NO sintasa, fosfodiesterasa) no han demostrado aumentar el riesgo
maria. La HPPRN idiopática es la menos frecuente, con una incidencia de HPPRN. En un rigoroso análisis de genotipo en 88 neonatos con
alrededor del 10% de los casos. Se refiere a la ausencia de enferme­ HPPRN documentada (Byers et al., 2012) hubo una significativa aso-
dad pulmonar parenquimatosa que explique la elevada presión arterial ciación con variantes genéticas para la señalización de cortisol (CRHR1
pulmonar, e implica remodelado vascular pulmonar intrauterino. Sin y CRHBP), así como niveles aumentados de 17-hidroprogesterona.
embargo, la HPPRN está generalmente asociada a otra enfermedad Estos datos se sustentan por información de animales que indican que
respiratoria aguda, como síndrome de aspiración de meconio, sín- el tratamiento esteroideo prenatal o posnatal normaliza la función de
drome de dificultad respiratoria o neumonía, y nos referimos a ella la NO sintasa y mejora la función vascular pulmonar en la HPPRN
como HPPRN secundaria. La vascularización hipoplásica, como se experimental (Chandrasekar et al., 2008; Perezet al., 2012).
aprecia en la HDC, se asocia con subdesarrollo de la vascularización y Las alteraciones en las vías de señalización de NO-GMPc, prostaci-
el parénquima pulmonar, y con frecuencia progresa a enfermedad vas- clina-AMPC y endotelina cumplen un rol importante en las anomalías
cular pulmonar crónica. En muchos casos puede ser más difícil separar vasculares asociadas a HPPRN. La vía de NO-GMPc en particular ha
un remodelado intrauterino crónico de una vasoconstricción pulmonar sido un tema importante de intensa investigación en las dos últimas
aguda debida a enfermedad pulmonar parenquimatosa. Por ejemplo, décadas. La expresión y la actividad disminuida de la óxido nítrico
recién nacidos con aspiración de meconio frecuentemente presentan sintasa endotelial (NOSe) se han documentado en modelos de cordero
evidencia clínica de enfermedad parenquimatosa y vasorreactividad con hipertensión pulmonar crónica intrauterina (Shaul et al., 1997;
alterada, pero frecuentemente se halla una excesiva muscularización Villamor et al., 1997), y una expresión disminuida de NOSe se halló
por remodelado vascular intrauterino en la autopsia. en cultivos de células endoteliales venosas umbilicales de recién nacidos
Sobre la base del significativo remodelado hallado en casos letales de humanos con tinción meconial que desarrollaron HPPRN (Villaneuva
HPPRN, se presume que eventos intrauterinos afectan al crecimiento et al., 1998). Estos importantes hallazgos fueron seguidos rápidamente
vascular, la reactividad y la estructura pulmonar (Geggel y Reid, 1984; por evaluaciones clínicas de iNO, que llevaron a su adopción como el
v. fig. 52.1). El desarrollo de la vascularización pulmonar puede verse principal tratamiento vasodilatador en la HPPRN. Sin embargo, diver-
afectado por influencias ambientales, placentarias, tóxicas u otras (v. sas anomalías en la señalización limitan el efecto del NO endógeno o
fig. 52.3). Estudios de vigilancia de casos y controles indican que los exógeno. En la HPPRN, la expresión y la actividad de la guanilato cicla-
factores de riesgo maternos, como raza negra o asiática, índice de masa sa soluble están disminuidas, y la actividad de la GMPc fosfodiesterasa
corporal elevado (> 27 kg/m2), diabetes y asma, predicen un mayor aumentada, lo que lleva a menores niveles de GMPc y a la limitación
riesgo de HPPRN. Los factores de riesgo neonatal incluyen sexo mas- en la vasodilatación inducida por NO. El estrés oxidativo asociado con
culino, grande para la edad gestacional, parto por cesárea y parto antes disfunción vascular y/o exposición a hiperoxia puede oxidar y reducir
de la semana 37 de gestación o después de la semana 41 de gestación la actividad de la guanilato ciclasa soluble y aumentar la actividad de la
(Hernández-Diaz et al., 2007). GMPc fosfodiesterasa, acentuando estas anomalías vasculares.
Estudios recientes epidemiológicos y en animales también sugieren La prostaciclina es importante en la transición vascular pulmonar
que la exposición materna puede alterar el desarrollo y la función de normal, aunque poco se sabe respecto a la anormal señalización de
la vascularización pulmonar fetal. Existen estrechas asociaciones entre prostaciclina-AMPc en la HPPRN. Datos de modelos animales sugieren
HPPRN y tabaquismo materno, y también se han implicado dos tipos reducciones en la síntesis de prostaciclina y disminución en la respuesta de
de medicaciones maternas, los antiinflamatorios no esteroideos y los la adenilato ciclasa análogas a las anomalías reportadas en la señalización
inhibidores selectivos de la recaptación de serotoninas. La exposición a para NO-GMPc (Shaul et al., 1991; Lakshminrusimha et al., 2009a).
fármacos antiinflamatorios no esteroideos, como el ácido acetilsalicílico Además, la producción de tromboxano, un metabolito vasoconstrictor
o el ibuprofeno, durante el tercer trimestre puede provocar constricción del ácido araquidónico, cumple un rol en la hipertensión pulmonar
del conducto arterioso fetal, que puede desencadenar remodelado producida por hipoxia crónica (Fike et al., 2005). Los niveles circulantes
vascular pulmonar e HPPRN. Basado en los hallazgos de un reciente del potente vasoconstrictor endotelina 1 (ET-1) se encuentran elevados
estudio epidemiológico, la relación es compleja y puede depender del en corderos y recién nacidos con HPPRN (Rosenberg et al., 1993; Chris-
agente específico y el momento de la exposición al mismo (Van Marter tou et al., 1997). Los efectos de la endotelina son mediados a través de
et al., 2013), aunque la utilización de ácido acetilsalicílico durante dos receptores: receptores ETA en células del músculo liso que median la
el embarazo tardío sigue siendo un factor de riesgo consistente para vasoconstricción y receptores ETB en células endoteliales que median
HPPRN. La utilización de inhibidores selectivos de la recaptación de la vasodilatación, y el equilibrio de receptores de endotelina está desviado
serotonina durante la última mitad del embarazo se ha asociado con hacia la vía vasoconstrictora (ETA) en la HPPRN (Ivy et al., 1998b). La
una incidencia aumentada de HPPRN en varias poblaciones estudiadas, endotelina puede afectar al tono vascular al incrementar la producción
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aunque la gravedad de la HPPRN no se ha descrito, y otros estudios no de especies de oxígeno reactivo vasoconstrictores, como superóxido y per­
hallaron esta asociación (Kieler et al., 2012; Grigoriadis et al., 2014; óxido de hidrógeno (Wedgwood et al., 2001), y al disminuir la expresión
Huybrechts et al., 2015). La depresión materna es un factor de riesgo y la actividad del receptor γ activado por el proliferador de peroxisoma,
para eventos adversos en el embarazo, por tanto, el bienestar físico y el cual mantiene el equilibrio vasodilatador en el pulmón fetal.
psicológico de la madre puede ser el principal factor para prescribir
terapia antidepresiva durante el embarazo y en el período posparto.
A diferencia de la hipertensión pulmonar en adultos y recién nacidos Otras causas de hipertensión pulmonar
mayores, han sido identificados pocos factores de riesgo genéticos del recién nacido
para HPPRN. Los recién nacidos con síndrome de Down (trisomía
21) frecuentemente desarrollan hipertensión pulmonar asociada a Hernia diafragmática congénita
defectos cardíacos estructurales, pero también tienen un riesgo 10 veces
mayor de padecer HPPRN idiopática. En una cohorte holandesa, se La HDC afecta aproximadamente a 1 de cada 2.500-3.000 embarazos
documentó HPPRN en el 5,2% de recién nacidos con síndrome de cuando se hace diagnóstico prenatal y representa aproximadamente
Down (Weijerman et al., 2010), y otros estudios han mostrado que el 8% de todas las anomalías congénitas mayores. La HDC incluye
recién nacidos con síndrome de Down están por demás representados desarrollo diafragmático anormal, herniación de vísceras abdominales

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772 PA RT E XI Aparato cardiovascular

en el tórax y un grado variable de hipoplasia pulmonar. La herniación tensión pulmonar en el recién nacido (Bishop et al., 2011). Poco des-
ocurre con mayor frecuencia en los segmentos posterolaterales del pués del nacimiento, los recién nacidos afectados presentan típicamente
diafragma, y el 80% de los defectos ocurren en el lado izquierdo. La cianosis, mínima enfermedad parenquimatosa y dificultad respiratoria
HDC grave se desarrolla precozmente durante el curso del desarro- refractaria a todos los tratamientos conocidos, incluido el soporte extra-
llo pulmonar e implica una detención en los patrones normales de corpóreo, aunque se han identificado presentaciones tardías (a varias
ramificación en la vía respiratoria de ambos pulmones, generando semanas o meses de edad). Más del 50% de los recién nacidos presentan
una reducción del volumen pulmonar y alveolización defectuosa. otras anomalías, que afectan más frecuentemente a los sistemas genito­
El anómalo crecimiento vascular distal y del espacio aéreo es posible urinario, cardiovascular y gastrointestinal. El diagnóstico se establece
debido a la pérdida de la estimulación del desarrollo pulmonar inducido por examen directo del tejido pulmonar por biopsia o autopsia. Los
por movimientos de estiramiento abolidos en la respiración fetal a causa hallazgos característicos incluyen simplificación de la arquitectura
de la alteración en el diafragma. Los hallazgos en la vascularización pulmonar, tabicación celular pobre o ensanchada con escasez capilar, y
pulmonar incluyen remodelado vascular superpuesto con hipoplasia llamativas pequeñas arteriolas muscularizadas. El «mal alineamiento de
o lechos vasculares pulmonares podados, lo que produce un tono vas- venas pulmonares» se ha descrito dentro de la misma capa adventicia de
cular aumentado y vasorreactividad alterada después del nacimiento las arterias pulmonares; estas fueron recientemente identificadas como
(Pierro y Thebaud, 2014). venas bronquiales congestivas que representan anastomosis vascular
Después del nacimiento, la RVP con frecuencia se mantiene en intrapulmonar que genera cortocircuitos derecha-izquierda intrapul-
niveles suprasistémicos, provocando hipertensión pulmonar aguda, monares y profunda hipoxemia refractaria (Galambos et al., 2014).
cortocircuito extrapulmonar derecha-izquierda a través del agujero Aproximadamente el 10% de los casos de displasia alveolocapilar
oval y conducto arterioso, e hipoxemia profunda. La elevada RVP en comunicados tienen una asociación familiar, y la mutación o supresión
el recién nacido con HDC se asocia con múltiples factores, incluidos en el gen FOXF1 (forkhead box F1) se ha identificado en el 40% de los
la pequeña área transversal de las arterias pulmonares, el remodelado recién nacidos con displasia alveolocapilar (Stankiewicz et al., 2009).
estructural vascular y la vasoconstricción con reactividad alterada. Los Se ha realizado un modelo murino de deficiencia del FOXF1, el cual
mediadores de la reactividad vascular pulmonar alterada en la HDC demuestra la importancia del FOXF1 en el desarrollo embrionario de
aún se investigan, con evidencia sustancial que apunta a trastornos en la vascularización pulmonar (Kalinichenko et al., 2001).
la señalización de NO-GMPc y ET-1 (Keller et al., 2010). El nivel
de factor de crecimiento del endotelio vascular, un estimulador clave
de angiogenia, se encuentra incrementado en los pulmones de recién Hipertensión pulmonar en recién nacidos
nacidos con HDC que han fallecido, lo que se ha interpretado como prematuros
un mecanismo compensatorio para la expresión y producción reducida
de NOSe y NO, respectivamente (Pierro y Thebaud, 2014). En algunos Estudios fisiológicos en fetos de cordero y humanos han mostrado
recién nacidos, la hipertensión pulmonar crónica persistirá por meses que la respuesta vascular pulmonar al oxígeno no se desarrolla hasta la
o años, incluso anomalías estructurales y funcionales de la circulación última parte de la gestación (Morin et al., 1988; Rasanen et al., 1998).
pulmonar en el pulmón homolateral y contralateral. El cateterismo Sin embargo, la vasoconstricción y la reactividad pulmonar pueden
cardíaco de recién nacidos con hipertensión pulmonar prolongada contribuir a elevar la RVP en corderos prematuros, como se demues-
ha revelado numerosas anomalías vasculares, incluidas hipoplasia o tra por un incremento en la RVP con inhibición de la NO sintasa y
estenosis de la arteria pulmonar izquierda, estenosis venosa pulmonar marcada respuesta a iNO (Kinsella et al., 1994). El nacimiento entre
y retorno venoso retardado (Kinsella et al., 2005). las semanas 23-26 de edad gestacional está asociado con tasas elevadas
Además de la enfermedad vascular pulmonar, es importante destacar de HPPRN (Aikio et al., 2012), particularmente cuando se asocia
que las anomalías estructurales y funcionales del ventrículo izquier- con oligohidramnios, y se han reportado tasas elevadas de uso clínico
do crean una hipoplasia ventricular izquierda relativa que impide el de iNO para estas edades gestacionales en bases de datos regionales
llenado y genera hipertensión venosa pulmonar. Con frecuencia, los (Handley et al., 2016). Además, hallazgos ecocardiográficos sugestivos
recién nacidos con HDC presentan hipertensión arterial grave con de hipertensión pulmonar, como adelgazamiento septal ventricular y
cortocircuito derecha-izquierda a través del conducto arterioso, pero dilatación ventricular derecha, se hallaron aproximadamente en el 40%
tienen cortocircuito izquierda-derecha en el tabique auricular debido de los bebés con bajo peso en el nacimiento a los 7 días de edad, y
a la elevada presión auricular izquierda producto de la disfunción predijeron DBP e hipertensión pulmonar tardía (Mourani et al., 2015).
ventricular izquierda (Gien y Kinsella, 2016). Este patrón circulatorio La DBP ha emergido como una causa importante de hipertensión
disminuirá la respuesta clínica al iNO durante los primeros días después pulmonar crónica, con una incidencia del 16-25% en recién nacidos
del nacimiento, y produce una significativa inestabilidad hemodinámica con DBP (Mourani y Abman, 2015). La hipertensión pulmonar grave
pulmonar y sistémica. Algunos recién nacidos, de manera excepcional, o prolongada aumenta el riesgo de morbilidad tardía y muerte casi
presentan disfunción ventricular izquierda que lleva a dependencia hasta el 50% (Khemani et al., 2007). La patogenia de la hipertensión
del ventrículo derecho para la perfusión sistémica; este subgrupo de pulmonar asociada a DBP involucra complejas interacciones entre
pacientes podría beneficiarse de un enfoque terapéutico que mantenga factores prenatales, como retraso del crecimiento, preeclampsia, oligo­
la persistencia del conducto arterioso, reduzca la poscarga ventricular hidramnios o inflamación fetal, y lesión posnatal debida a lesión
izquierda y postergue la utilización de iNO hasta que la función ven- pulmonar inducida por ventilación, hiperoxia, estrés hemodinámico
tricular izquierda mejore (McNamara et al., 2013; Abman et al., 2015). e infección. El resultado es angiogenia alterada, señalización vascular
Además de su rol en la presentación aguda, la disfunción ventricular anormal y poda vascular, lo que genera una reducción del área de
izquierda puede contribuir a la gravedad de la hipertensión pulmonar superficie alveolocapilar. Identificar la hipertensión pulmonar en recién
durante el curso tardío y crónico de recién nacidos con HDC. nacidos con DBP requiere un alto índice de sospecha y una evaluación
longitudinal sistemática. La ecocardiografía continúa siendo la herra-
mienta de cribado más práctica y debe considerarse en recién nacidos
que continúan presentando crisis hipoxémicas o requieren suplemento
Displasia alveolocapilar de oxígeno a las 36 semanas de edad gestacional corregida. En recién
A diferencia de la hipertensión pulmonar pediátrica y adulta, se han nacidos con evidencia de hipertensión pulmonar significativa por eco-
identificado pocos factores genéticos para la HPPRN. Una notable cardiograma, el cateterismo cardíaco puede proveer una cuantificación
excepción es la displasia alveolocapilar con mal alineamiento de las más precisa de la gravedad de la enfermedad, así como realizar un test
venas pulmonares, una rara, pero invariablemente letal, causa de hiper- de vasorreactividad (Mourani et al., 2008).

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CAPÍTULO 52 Hipertensión pulmonar persistente 773

Evaluación clínica de la hipertensión pulmonar • CUADRO 52.1  Trastornos asociados a hipertensión


persistente del recién nacido pulmonar del recién nacido

La HPPRN se presenta típicamente como dificultad respiratoria y Pulmonares


cianosis a las pocas horas de nacimiento, y puede estar asociada a Síndrome de aspiración de meconio
una variedad de trastornos pulmonares y/o cardíacos (cuadro 52.1). Síndrome de dificultad respiratoria (recién nacidos a término y prematuros)
Clínicamente, la HPPRN se reconoce más frecuentemente en los recién Hipoplasia pulmonar primaria
nacidos a término o prematuros, pero debe también considerarse en Hernia diafragmática congénita
Neumonía/sepsis
neonatos prematuros que presenten cianosis desproporcionada para su
Hipertensión arterial pulmonar idiopática
enfermedad pulmonar parenquimatosa (Kinsella et al., 2016). Mientras
Taquipnea transitoria del recién nacido
que la HPPRN se asocia con frecuencia a signos de estrés perinatal, Enfermedades pulmonares del desarrollo y genéticas, incluidas:
como asfixia, baja puntuación de Apgar o tinción meconial, la HPPRN • Displasia alveolocapilar (p. ej., FOXF1)
idiopática puede presentarse sin signos de dificultad aguda perinatal. • Enfermedad pulmonar genética asociada a proteínas del surfactante,
La HPPRN está caracterizada por hipoxemia con pobre respuesta al ABCA3, TTF-1 y otras proteínas
suplemento de oxígeno. Una importante meta para la evaluación clínica • Glucogenosis intersticial pulmonar
inicial es descartar una cardiopatía cianótica y determinar si un niño • Enfisema lobular congénito (asociación infrecuente)
hipoxémico presenta fisiología de tipo HPPRN. Debido a la presencia • Malformación adenomatoide quística (asociación infrecuente)
habitual de agujero oval permeable y a que el conducto arterioso persis-
te en los primeros días, la elevada RVP elevada en el recién nacido Cardiovasculares
producirá cortocircuito extrapulmonar de sangre a través de estos Disfunción miocárdica (asfixia; infección; estrés)
conductos fetales, llevando a una hipoxemia grave y potencialmente Cardiopatías estructurales:
refractaria. En presencia de cortocircuito derecha-izquierda a través del • Estenosis mitral, corazón triauricular
conducto arterioso persistente, es frecuente la presencia de «cianosis • Fibroelastosis endocárdica
diferencial», difícil de observar en el examen físico, pero que puede • Enfermedad de Pompe
detectarse por gradiente de Pao2 y/o de saturación de oxígeno entre • Atresia aórtica, coartación de aorta, interrupción del arco aórtico
• Transposición de los grandes vasos
la arteria radial derecha y la aorta descendente. Considerando que la
• Anomalía de Ebstein, atresia tricuspídea
arteria subclavia izquierda puede tener un origen tanto preductal como
Atresia pulmonar
posductal desde la aorta, el oxímetro debe colocarse en un pie para Malformaciones arteriovenosas hepáticas
la monitorización de la oximetría de pulso posductal. Diferencias de Malformaciones arteriovenosas cerebrales
saturación mayores al 5-10% son por lo general un signo significativo Anomalías venosas pulmonares:
de HPPRN, pero es importante recordar que un patrón de desaturación • Retorno venoso pulmonar anómalo total
posductal similar puede observarse en cardiopatías dependientes del • Estenosis de venas pulmonares (aislada)
conducto, incluido el síndrome del corazón hipoplásico izquierdo, la • Hemangiomatosis capilar pulmonar
coartación de aorta o la interrupción del arco aórtico. • Enfermedad pulmonar venooclusiva
En muchos recién nacidos, el cortocircuito intrapulmonar o des­
equilibrio ventilación-perfusión producto de la enfermedad pulmonar Asociaciones con otros trastornos
parenquimatosa es la anomalía predominante más que el cortocircuito Enfermedad neuromuscular
de sangre a través del conducto arterioso persistente o el agujero oval Metabolopatía
permeable. En esta presentación, la hipoxemia es el resultado de la sangre Policitemia
arterial pulmonar que perfunde regiones pulmonares no ventiladas. Aun- Trombocitopenia
que la RVP esté con frecuencia elevada en recién nacidos hipoxémicos sin Consumo materno de drogas o tabaco
HPPRN, la elevada RVP no contribuye significativamente a la hipoxemia ABCA3, miembro A3 de la familia del casete de unión a ATP; TTF-1, factor de transcripción
en estos casos. La rápida mejoría en respuesta al suplemento de oxígeno tiroidea 1.
o al incremento de la presión media en la vía respiratoria sugiere des­
equilibrio ventilación-perfusión debido a enfermedad pulmonar primaria,
aunque esto puede no ser obvio en presencia de enfermedad pulmonar
parenquimatosa grave. Además, la mayoría de los recién nacidos con (p. ej., coartación de la aorta, retorno venoso pulmonar total anómalo),
HPPRN presentan al menos una mejoría transitoria en la oxigenación en determina la dirección predominante del cortocircuito en el agujero
respuesta a intervenciones como tratamiento con alta concentración de oval permeable y el conducto arterioso persistente, y evalúa la función
oxígeno y/o ventilación mecánica. Por lo tanto, estos hallazgos clínicos ventricular. El diagnóstico de certeza de HPPRN se realiza con la obser-
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pueden solo sugerir y no confirmar el diagnóstico. En la actualidad no vación de cortocircuito bidireccional o predominantemente derecha-
existe un biomarcador que haya surgido con suficiente sensibilidad y izquierda a través del agujero oval o el conducto arterioso, aunque
especificidad para el diagnóstico y manejo de la HPPRN. otros signos, como aplanamiento o desviación a la izquierda de la
Los hallazgos radiológicos son variables, dependiendo de la pato- velocidad intraventricular, velocidad de regurgitación tricuspídea y
logía primaria asociada a la HPPRN. Clásicamente, el pulmón en dilatación ventricular derecha aumentada también sugieren el diagnós-
una radiografía de tórax en la HPPRN idiopática es oligohémico, está tico. El ecocardiograma es también crítico para la evaluación de la
normal o ligeramente hiperinsuflado, y hay ausencia de infiltrados función ventricular derecha e izquierda. En algunos recién nacidos, la
parenquimatosos. Por lo general, el grado de hipoxemia es despro- observación de un cortocircuito predominante derecha-izquierda en
porcionado a la gravedad de la evidencia radiográfica de enfermedad el conducto arterioso asociado con cortocircuito izquierda-derecha en el
pulmonar. Hallazgos de laboratorio pueden incluir hipoglucemia, agujero oval indica una significativa contribución de la disfunción ven-
hipocalcemia, policitemia y trombocitopenia. tricular izquierda a la fisiopatología subyacente. Cuando la hipertensión
La ecocardiografía es la técnica de referencia para confirmar el pulmonar se acompaña de disfunción ventricular izquierda grave, la
diagnóstico y es una herramienta importante para monitorizar la res- vasodilatación pulmonar por sí sola puede no resultar efectiva para
puesta al tratamiento. La evaluación ecocardiográfica inicial descarta mejorar la oxigenación y debe acompañarse de tratamientos dirigidos
cardiopatía estructural que cause hipoxemia o cortocircuito ductal a mejorar la función cardíaca y disminuir la poscarga ventricular

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774 PA RT E XI Aparato cardiovascular

izquierda. Por lo tanto, una rigurosa evaluación ecocardiográfica • CUADRO 52.2  Recomendaciones de tratamiento
proporciona información de gran valor acerca de la fisiopatología
subyacente y ayudará a guiar el curso del tratamiento.
de la American Heart Association
y la American Thoracic Society
Tratamiento general para la hipertensión pulmonar
persistente del recién nacido
La American Heart Association y la American Thoracic Society desarro-
llaron recientemente las guías para el manejo de la hipertensión pulmonar 1. El tratamiento con óxido nítrico inhalado está indicado para reducir
pediátrica, incluida la HPPRN (Abman et al., 2015; cuadro 52.2). el requerimiento de soporte mediante oxigenación con membrana
Los principios de manejo general de la HPPRN incluyen mantener extracorpórea (ECMO) en recién nacidos a término y casi a término con
hipertensión pulmonar persistente del recién nacido (HPPRN) o insuficiencia
valores normales de temperatura (excepto en los sometidos a hipotermia
respiratoria hipoxémica que presentan un índice de oxigenación superior
terapéutica), electrólitos (particularmente calcio), glucosa, hemoglobina
a 25 (clase I, nivel A)
y volumen intravascular. Por lo general se requiere ventilación mecánica 2. Las estrategias de reclutamiento pulmonar pueden mejorar la eficacia del
para optimizar los volúmenes pulmonares, aunque existen pocas guías tratamiento con óxido nítrico inhalado y deben aplicarse en pacientes con
que estandaricen el manejo ventilatorio. Algunos recomiendan «ventila- HPPRN asociada a enfermedad pulmonar parenquimatosa (clase I, nivel B)
ción suave», evitando parálisis y metas de gases sanguíneos consistentes en 3. El soporte con ECMO está indicado en recién nacidos a término y casi
Pao2 de 50-70 mmHg y Paco2 de 40-60 mmHg. Esta estrategia nunca a término con hipertensión pulmonar grave y/o hipoxemia refractaria a
se testó rigurosamente (Wung et al., 1985), pero puede ser la estrategia tratamiento con óxido nítrico inhalado y optimización de la función
óptima en recién nacidos que aún se encuentran en fases tempranas de la respiratoria y cardíaca (clase I, nivel A)
enfermedad. Cuando existe una enfermedad pulmonar parenquimatosa 4. Una evaluación de trastornos del desarrollo pulmonar, como la displasia
significativa, las estrategias de reclutamiento pulmonar, como la venti- alveolocapilar y las enfermedades genéticas de proteínas del surfactante,
lación a alta frecuencia, mejoran la expansión pulmonar y amplifican la es razonable en recién nacidos con HPPRN grave cuya situación no mejora
respuesta al iNO (Kinsella et al., 1997; Kinsella y Abman, 2000). Sin después de tratamiento vasodilatador, reclutamiento pulmonar y/o ECMO
embargo, se debe tener cuidado y evitar configuraciones que puedan (clase IIa, nivel B)
causar sobredistensión pulmonar que genere cambios inflamatorios, 5. El empleo de sildenafilo es un tratamiento coadyuvante razonable en recién
edema pulmonar y disminución de la distensibilidad pulmonar, ya que nacidos con HPPRN refractaria a tratamiento con óxido nítrico inhalado,
todas estas pueden exacerbar la hipertensión pulmonar. especialmente con índice de oxigenación superior a 25 (clase IIa, nivel B)
La utilización de surfactante debe considerarse solo para recién 6. Los análogos de prostaciclina inhalados pueden considerarse como
nacidos con enfermedad pulmonar parenquimatosa. Diversos estudios tratamiento coadyuvante en recién nacidos con HPPRN refractaria
en un único centro han demostrado que el surfactante mejora la oxige- a tratamiento con óxido nítrico inhalado y que presentan un índice
de oxigenación superior a 25 (clase IIb, nivel B)
nación, reduce la pérdida de aire y reduce el requerimiento de ECMO
7. La administración intravenosa de milrinona es un tratamiento razonable
en recién nacidos con aspiración de meconio (Findlay et al., 1996).
en recién nacidos con HPPRN y signos de disfunción ventricular izquierda
Un estudio multicéntrico mostró beneficio en recién nacidos con (clase IIa, nivel B)
enfermedades pulmonares parenquimatosas, así como en síndrome 8. El óxido nítrico inhalado puede ser beneficioso en recién nacidos
de aspiración de meconio y sepsis (Lotze et al., 1998). Este estudio prematuros con hipoxemia grave que se debe principalmente a la fisiología
también demostró el mayor beneficio en recién nacidos con enfermedad de la HPPRN más que a enfermedad pulmonar parenquimatosa (clase IIa,
temprana o leve (índice de oxigenación 15-22), pero sin beneficio en el nivel B)
subgrupo de recién nacidos con HPPRN idiopática. Una sistemática 9. El tratamiento con óxido nítrico inhalado y otros tratamientos
revisión y un metaanálisis reciente sobre el tratamiento con surfactante farmacológicos dirigidos a la hipertensión arterial pulmonar deben
en recién nacidos con síndrome de aspiración de meconio mostró que emplearse con cuidado en individuos con hernia diafragmática congénita,
los que recibieron bolo de surfactante requirieron ECMO con menor especialmente en los que tienen disfunción ventricular sospechada
frecuencia que los controles. Sin embargo, el limitado número de o confirmada (clase IIa, nivel B)
estudios y neonatos enrolados llevaron a los autores a concluir que se Reproducido con autorización. Circulation. 2015;132:2037–2099 ©2015, American Heart
requieren más estudios con urgencia para evaluar la eficacia y el coste- Association, Inc.
efectividad de este tratamiento (Natarajan et al., 2016). Estudios de
registro indican que el tratamiento con surfactante no beneficia a los
recién nacidos HDC (Van Meurs, 2004).
La acidosis ejerce un efecto vasoconstrictor pulmonar, particular- La hipotensión sistémica puede empeorar el cortocircuito derecha-
mente cuando se combina con hipoxia (Rudolph y Yuan, 1966), y el izquierda, dificultar el aporte de oxígeno y empeorar el intercambio
pH debería mantenerse por encima de 7,3. Sin embargo, la alcalosis gaseoso en pacientes con enfermedad pulmonar parenquimatosa.
(pH > 7,45) no está recomendada. El empleo de alcalosis era frecuente Además, la elevada presión sistólica ventricular derecha reduce el flujo
antes de la aprobación del tratamiento con iNO, basado en estudios sistólico a través de la arteria coronaria derecha, y la baja presión arterial
que encontraron aumentos transitorios de la Pao2 después de hiper- sistémica lleva a un descenso del flujo diastólico en la arteria coronaria
ventilación aguda (Drummond et al., 1981). Sin embargo, la respuesta derecha, por lo que la corrección de ambas alteraciones hemodinámicas
vascular pulmonar a la alcalosis es transitoria, y la alcalosis prolongada es clave para evitar la isquemia ventricular derecha (Giesinger y McNa-
puede, paradójicamente, empeorar el tono vascular pulmonar, Wung mara, 2016). Sin embargo, el objetivo es más complejo que simplemen-
reactividad y el edema por permeabilidad (Laffey et al., 2000). Además, te aumentar la presión arterial, y debe prestarse especial atención a la
la alcalosis produce vasoconstricción cerebral, con reducción del flujo función ventricular derecha e izquierda y a la selección de medicación.
sanguíneo cerebral y aporte de oxígeno al cerebro, y puede estar aso- Entre los agentes de primera línea se incluyen la dopamina (5-20 µg/
ciada con peores resultados del neurodesarrollo (Ferrara et al., 1984). kg/min) y la milrinona (0,2-0,99 µg/kg/min). La milrinona, que inhibe
De manera similar, no existe evidencia que sugiera que la infusión de la actividad de la AMPc fosfodiesterasa 3 (PDE3) en miocardiocitos
bicarbonato de sodio para inducir alcalosis provea ningún beneficio a y músculo liso arterial pulmonar y sistémico, se considera como un
corto y largo plazo (Walsh-Sukys et al., 2000). «inodilatador» que podría ser especialmente útil en el contexto de dis-
La hemodinámica sistémica debe optimizarse con la utilización de función ventricular izquierda e hipertensión pulmonar venosa (James
volumen para aportar suficiente precarga, así como tratamiento cardio- et al., 2015). Evidencia reciente de tipo anecdótico apoya la utilización
tónico para mejorar el gasto cardíaco y el transporte sistémico de O2. de la arginina-vasopresina para la HPPRN grave (tabla 52.1), basándose

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CAPÍTULO 52 Hipertensión pulmonar persistente 775

TABLA
52.1  Tratamiento farmacológico de la hipertensión pulmonar persistente del recién nacido

Reacciones adversas/
Fármaco Dosis Mecanismo de acción monitorización de seguridad Indicaciones
Óxido nítrico 5-20 ppm Activa la guanilato ciclasa HP de rebote con la interrupción Insuficiencia respiratoria
inhalado soluble en células del abrupta del tratamiento hipoxémica con
músculo liso vascular con óxido nítrico inhalado HPPRN
Vasodilatador pulmonar Metahemoglobinemia con dosis
selectivo más altas
Bajas dosis (< 10 ppm)
mejoran el equilibrio
ventilación-perfusión
con enfermedad
pulmonar parenquimatosa
(«efectos microselectivos»)
Sildenafilo Intravenoso: dosis de carga, Inhibidor selectivo de la PDE5 Hipotensión (particularmente HPPRN refractaria a
0,4 mg/kg en 3 h que aumenta los niveles con dosis de carga rápida) tratamiento con óxido
Dosis de mantenimiento, de GMPc vascular Hipoxemia nítrico inhalado y
1,6 mg/kg/día y la relajación vascular otros tratamientos
pulmonar convencionales
Milrinona Intravenosa: dosis de carga, Inhibidor de la PDE3 Hipotensión, trombocitopenia, Disfunción ventricular
0,75 µg/kg/min durante 3 h que aumenta los niveles arritmias izquierda, bajo gasto
(para recién nacidos con de AMPc cardíaco
hipotensión o enfermedad Mejora la función cardíaca
grave, se puede optar por no al reducir la poscarga
administrar la dosis de carga) sistémica, aumenta
Dosis de mantenimiento, la contractilidad y la
0,2-0,33 µg/kg/min. Aumente vasodilatación pulmonar
0,33 µg/kg/min hasta un máximo
de 0,99 µg/kg/min
Prostaciclinas Epoprostenol: Activación de la adenilato Un desequilibrio HPPRN refractaria a iNO
Inhalado: 20-100 ng/kg/min. Empiece ciclasa en células del ventilación-perfusión puede y otros tratamientos
con 2 ng/kg/min y aumente hasta músculo liso vascular complicar su utilización en convencionales
20 ng/kg/min en 3 h Vasodilatador pulmonar el contexto de la enfermedad
Infusión continua intravenosa: dosis pulmonar
inicial, 1 2 ng/kg/min, aumentos Vasodilatador no selectivo, puede
incrementales según tolerancia, causar hipotensión sistémica
monitorice a los recién nacidos Riesgo de HP de rebote por
por taquifilaxia suspensión abrupta
Treprostinil: Enrojecimiento, diarrea
Infusión continua: 1,25 ng/kg/min
para empezar, aumente
lentamente hasta 10 ng/kg/min
Puede administrarse por vía
subcutánea en el mismo rango
de dosis
Bosentán Enteral: 1-2 mg/kg cada 12 h Inhibición dual de receptores Hepatotoxicidad, edema, anemia, HPPRN refractaria a iNO
ETA y ETB teratógeno y otros tratamientos
Monitorización mensual convencionales
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de los resultados de la PFH Generalmente utilizado


en HP crónica (HDC,
DBP)
Vasopresina 0,0003-0,004 unidades/kg/min Utilizado predominantemente Hipotensión, arritmias
para mejorar Hiponatremia: aumenta los niveles
la hemodinámica sistémica de AMPc en túbulos distales,
en la HPPRN grave lo que lleva a una disminución
Puede tener efecto de la diuresis
vasodilatador pulmonar
a través de la activación
de la NOSe

AMPc, monofosfato de adenosina cíclico; DBP, displasia broncopulmonar; GMPc, monofosfato de guanosina cíclico; HDC, hernia diafragmática congénita; HP, hipertensión pulmonar; HPPRN, hipertensión
pulmonar persistente del recién nacido; iNO, óxido nítrico inhalado; NOSe, óxido nítrico sintasa endotelial; PDE3, fosfodiesterasa 3; PDE5, fosfodiesterasa 5; PFH, prueba de función hepática.

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776 PA RT E XI Aparato cardiovascular

en su capacidad para aumentar la presión sistémica a través de los et al., 2000). Un estudio grande subsecuente evaluó la utilización precoz
receptores V1 y de reducir la presión arterial pulmonar por medio de de iNO en recién nacidos con insuficiencia respiratoria moderada
la activación de NO sintasa (Mohamed et al., 2014). (índice medio de oxigenación de aproximadamente 20), pero no reportó
En los recién nacidos en los cuales el tratamiento médico fracasa, reducción en la utilización de ECMO/muerte con respecto a los con-
como evidencia la imposibilidad de sostener mejoría en la oxigenación troles (16,7 frente a 19,5%; Konduri et al., 2004, 2007). Una vez
con buena función hemodinámica, se puede requerir tratamiento con que el recién nacido se haya estabilizado, el destete puede conseguirse
ECMO (UK Collaborative ECMO Trial Group, 1996). El ECMO es generalmente a los 4-5 días. Requerimientos prolongados de trata-
la única modalidad de rescate probada para HPPRN grave, aunque es miento con iNO sin resolución de la enfermedad deberían llevar a una
también costoso, demandante y asociado con efectos adversos poten- evaluación más exhaustiva para determinar la presencia de otra enferme­
ciales, como hemorragia intracraneal y ligadura de la arteria carótida dad pulmonar o cardiovascular subyacente, como estenosis de las venas
común derecha. El índice de oxigenación (calculado como [presión pulmonares, displasia alveolocapilar e hipoplasia pulmonar grave.
media de la vía respiratoria × Fio2 × 100]/Pao2) se utiliza para estimar Hasta un 40% de los recién nacidos no responderán ni sostendrán
la gravedad de la enfermedad, con un índice de oxigenación mayor su respuesta al iNO. Las razones para una respuesta inadecuada son
de 40 como indicación para derivar a centros con ECMO. A pesar diversas y requieren que el clínico analice cuidadosamente los roles
de todos los tratamientos disponibles, la mortalidad de la HPPRN se relativos de enfermedad pulmonar parenquimatosa, enfermedad vas-
mantiene entre el 5 y el 10%. cular pulmonar y disfunción cardíaca en cada recién nacido. Por ejem-
plo, si se asocia enfermedad del espacio aéreo con HPPRN, estrategias
Oxígeno como ventilación a alta frecuencia que optimice la expansión pulmonar
es probable que sean efectivas, y los dos tratamientos utilizados en
El suplemento de oxígeno es un pilar terapéutico en la HPPRN con el conjunto son más efectivos que cada uno individualmente (Kinsella
fin de mantener el aporte de oxígeno al cerebro y otros tejidos, y por sus et al., 1997). Considerando que el iNO por lo general se adminis-
propiedades vasodilatadoras pulmonares. La hipoxia alveolar y la hipo- tra con altas concentraciones de oxígeno, estos tratamientos podrían
xemia deben evitarse, ya que ambas son vasoconstrictores pulmonares y interactuar y llevar a una producción aumentada de metabolitos de
contribuyen a la fisiopatología de la HPPRN. Por otro lado, el grado de oxígeno reactivo y nitrógeno reactivo, los cuales pueden contribuir a
ventilación hiperóxica necesaria para conseguir vasodilatación pulmonar la vasoconstricción y/o respuesta inadecuada al iNO.
se encuentra en investigación. La utilización de concentraciones de
oxígeno mayores del 60% no ha demostrado aportar ningún beneficio Otros agentes terapéuticos
adicional en la vasodilatación pulmonar. Por otro lado, la ventilación
hiperóxica aumenta el estrés oxidativo y la lesión pulmonar, y paradó- Inhibidores de la fosfodiesterasa
jicamente puede dificultar la respuesta vasodilatadora al iNO. Por lo
tanto, la concentración de oxígeno y Pao2 debe titularse para maximizar Se ha reportado una actividad incrementada consistente de la PDE5
la vasodilatación pulmonar. Estudios en corderos recién nacidos sugieren en modelos experimentales de HPPRN (Hanson et al., 1998; Farrow
que una menor RVP puede mantenerse con Spo2 preductales en el rango et al., 2010). Más recientemente, estudios in vitro e in vivo han demos-
del 91-97% con Pao2 preductal entre 60-80 mmHg (Lakshminrusimha trado que incluso períodos breves de hiperoxia aumentan independien-
et al., 2007, 2009b). En líneas generales, el oxígeno debe utilizarse como temente la actividad de la PDE5, por un mecanismo que parece involu-
cualquier otro fármaco en el contexto terapéutico, considerando sus crar especies de oxígeno reactivo (Farrow et al., 2008, 2010, 2012). Este
potenciales beneficios y efectos adversos. hallazgo en particular podría explicar por qué algunos recién nacidos
no responden favorablemente al iNO.
Óxido nítrico inhalado El sildenafilo es el inhibidor de la fosfodiesterasa disponible mejor
estudiado y puede administrarse por vía enteral e intravenosa. Un
El objetivo principal del tratamiento de la HPPRN es la vasodilata- pequeño estudio aleatorizado halló que la administración enteral de
ción pulmonar selectiva. El iNO está aprobado por la Food and Drug sildenafilo mejoró la oxigenación y la supervivencia en recién nacidos
Administration (FDA) para el tratamiento de la HPPRN como un a término y prematuros con HPPRN (Baquero et al., 2006). En un
vasodilatador pulmonar selectivo, basado en extensa información acerca estudio posterior para hallar la dosis óptima, la administración de
de su seguridad y eficacia a partir de grandes estudios controlados con sildenafilo intravenosa mejoró la oxigenación en neonatos con y sin
placebo (Abman et al., 2015). Está bien establecido como tratamiento de tratamiento concomitante con iNO (Steinhorn et al., 2009), lo que
la HPPRN. Es un potente y rápido vasodilatador, y, debido a que el NO sugiere que el sildenafilo puede ser útil en pacientes con respuesta
es una molécula de gas pequeña, puede administrarse como tratamiento parcial o poco sostenida al iNO. Teóricamente, el sildenafilo puede
inhalatorio a espacios aéreos cercanos al lecho vascular pulmonar. El ser particularmente efectivo en recién nacidos con HPPRN seguido de
NO inhalado mejora inmediatamente la oxigenación y disminuye la ventilación hiperóxica prolongada, considerando que la expresión y la
necesidad de ECMO en recién nacidos con HPPRN y un índice de actividad de la PDE5 están aumentadas después de la ventilación con
oxigenación mayor de 25. La dosis inicial apropiada es 20 ppm; dosis altas concentraciones de oxígeno y la exposición a especies de oxígeno
mayores en no respondedores no mejoraron las respuestas inmediatas reactiva. El sildenafilo generalmente se tolera bien, aunque puede pro-
o los resultados (Neonatal Inhaled Nitric Oxide Study Group, 1997), ducir hipotensión, particularmente si se administra una dosis de carga
y el tratamiento con altas dosis de NO (80 ppm) aumenta el riesgo de muy rápida (Steinhorn et al., 2009). La disponibilidad del sildenafilo en
metahemoglobinemia (Davidson et al., 1998). De manera similar a los preparación enteral también hace factible el tratamiento a largo plazo
recién nacidos a término, los recién nacidos prematuros con HPPRN en recién nacidos con hipertensión pulmonar crónica asociada a HDC
precoz, particularmente después de la rotura de membranas prolongada u (Keller et al., 2006) y DBP (Mourani et al., 2009), aunque este aspecto
oligohidramnios, mostrarán una marcada mejoría en la oxigenación des- del tratamiento requiere mayor estudio y seguimiento a largo plazo.
pués del tratamiento con iNO (Kinsella et al., 2016). Trabajos recientes Otros inhibidores de la fosfodiesterasa son el tadalafilo y el vardenafilo,
indican que los rangos de utilización del iNO en recién nacidos prema- pero aún no se ha reportado su uso en la HPPRN.
turos extremos es del 4-8% (Handley et al., 2016).
La ventana óptima para introducir el tratamiento con iNO aún es Prostanoides
incierta. Los primeros estudios aleatorizados estudiaron a recién nacidos
a término y pretérmino con HPPRN grave y un índice de oxigenación La prostaciclina (epoprostenol) fue aprobada por la FDA en 1995
de 25-40 (Neonatal Inhaled Nitric Oxide Study Group, 1997; Clark para el tratamiento de la hipertensión arterial pulmonar del adulto.

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CAPÍTULO 52 Hipertensión pulmonar persistente 777

Mientras que la prostaciclina administrada por vía intravenosa es ET-1 están aumentados en los pulmones y en las células endoteliales
un pilar terapéutico de la hipertensión pulmonar en el adulto, con arteriales pulmonares en el modelo fetal de HPPRN de corderos (Ivy
frecuencia se necesita una rápida escalada en la dosificación para la et al., 1998a; Gien et al., 2013). El bloqueo intrauterino a largo plazo
enfermedad aguda y puede producir hipotensión sistémica. Su utilidad del receptor ETA seguido de ligación ductal disminuye la presión
en la unidad de cuidados intensivos neonatales es también limitada arterial pulmonar y la muscularización distal de pequeñas arterias
por la necesidad de un catéter venoso central exclusivo, el potencial pulmonares in utero, disminuye la hipertrofia ventricular derecha y
empeoramiento del equilibrio ventilación-perfusión y otros efectos aumenta la caída de la RVP en el momento del parto en corderos recién
adversos sistémicos, incluido el dolor. nacidos con HPPRN (Ivy et al., 1997). Por lo tanto, es probable que la
La prostaciclina en aerosol se ha adoptado ampliamente en unidades ET-1, actuando a través del receptor ETA, contribuya en la patogenia y
de cuidados intensivos para adultos para el tratamiento de la hipertensión fisiopatología de la HPPRN. La utilización de bosentán, un bloqueador
pulmonar (Walmrath et al., 1996). Aunque hay pocos trabajos respecto a no específico del receptor de ET-1, es un tratamiento establecido para
su utilización en recién nacidos, hay algunas series de casos que indican la hipertensión pulmonar en adultos. Dos estudios recientes mostraron
que el tratamiento continuo con prostaciclina inhalada (50-100 ng/ que el bosentán se tolera bien en neonatos con HPPRN. Un estudio
kg/min) se tolera bien y mejora la oxigenación en recién nacidos con unicéntrico reportó que el bosentán llevó a mejoras sustanciales en la
HPPRN grave y respuesta inadecuada al iNO (Kelly et al., 2002; Porta y oxigenación en una población de neonatos con HPPRN no tratada
Steinhorn, 2012). Los riesgos incluyen irritación de la vía respiratoria por con iNO previamente (Mohamed e Ismail, 2012), pero el estudio
la solución alcalina necesaria para mantener la estabilidad del fármaco, multicéntrico FUTURE-4 halló que el bosentán como tratamiento
hipertensión pulmonar de rebote si la utilización del fármaco es inte- agregado al iNO no mejoró los resultados en la HPPRN, la reducción
rrumpida abruptamente y aporte inconsistente del fármaco por pérdida del tiempo en recibir tratamiento con iNO o la reducción del tiempo
del mismo en el circuito. Nuevas preparaciones, más estables, han surgido de extubación, posiblemente debido en parte a una absorción intestinal
y son específicamente diseñadas para la nebulización intermitente, como variable (Steinhorn et al., 2016).
el iloprost o el treprostinil. El treprostinil es particularmente prometedor
debido a que también es adecuado para su administración sistémica, Resultados
incluida la vía subcutánea (Ferdman et al., 2014).
La inhibición de la PDE3, que metaboliza el AMPc, puede también Los primeros trabajos comenzaron por establecer los resultados del alto
mejorar la señalización de AMPc en la HPPRN (Chen et al., 2009). La riesgo de muerte y anomalías en el neurodesarrollo en supervivientes de
milrinona, un inhibidor de la PDE3, ha demostrado disminuir la presión HPPRN (Bifano y Pfannenstiel, 1988). Al menos un trabajo mostró
arterial pulmonar y resistencia pulmonar, y actuar aditivamente con que la oxigenación (medida por la diferencia de oxígeno alveolar-
iNO en estudios animales (Thelitz et al., 2004). Un trabajo indica que arterial) tenía una buena correlación con la supervivencia, pero no
el agregado de tratamiento con milrinona intravenosa en neonatos con con resultados a largo plazo (Hageman et al., 1988). Algunos trabajos
HPPRN y pobre respuesta al iNO se asoció con mejorías en la oxigena- posteriores indicaron que bajas puntuaciones en el test de Apgar e
ción sin afectación del estado hemodinámico (McNamara et al., 2006). hipocapnia prolongada eran predictoras de resultados adversos en el
neurodesarrollo (Bifano y Pfannenstiel, 1988; Marron et al., 1992).
Antagonistas de los receptores de endotelina La información respecto a resultados a largo plazo de los estudios
más grandes sobre iNO se encuentra resumida en la tabla 52.2, que
La ET-1 es un potente vasoconstrictor sintetizado por células del también aporta datos de resultados para recién nacidos con HPPRN
endotelio vascular que actúa a través de dos receptores, ETA y ETB. tratados con y sin iNO. En general, estos resultados resaltan que los
El receptor ETA desempeña un rol crítico en la vasoconstricción, y el trastornos del neurodesarrollo son altos en esta población (14-30%) y
bloqueo selectivo del receptor ETA produce vasodilatación pulmonar no se reducen con el tratamiento con iNO (Neonatal Inhaled Nitric
fetal (Ivy et al., 1994). La expresión génica de ET-1 y los niveles de Oxide Study Group, 2000; Lipkin et al., 2002; Clark et al., 2003;

TABLA
52.2  Resultados sobre neurodesarrollo de los principales estudios clínicos con óxido nítrico inhalado

ESCALA DE BAYLEY ESCALA DE BAYLEY


DE DESARROLLO DE DESARROLLO PARÁLISIS
Edad en el
TND (%) MENTAL PSICOMOTOR CEREBRAL (%)
Número de seguimiento
Estudio participantes IO inicial (meses) Control iNO Control iNO Control iNO Control iNO
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Neonatal Inhaled 235 44 18-24 30 35 87 85 93,6 85,7 10,3 11,8


Nitric Oxide
Study Group
(2000)
Clark et al. 248 39 12 14 19 95 95 85 92 1,4 4
(2003)
Davidson (2002)a 155 24,7 12 20 18 –b –b –c –b 6 8
Konduri et al. 299 19,2 18-24 25 28 86,1 83,3 98 89 6,3 8,2
(2007)
a
La referencia que comunica los resultados para el estudio de Davidson figura como Lipkin 2002.
b
El 71% del grupo control y el 69% del grupo de óxido nítrico inhalado (iNO) fueron comunicados como normales (escala de desarrollo mental ≥ 85).
c
El 82% del grupo control y el 76% del grupo con iNO fueron comunicados como normales (escala de desarrollo psicomotor ≥ 85).
IO, índice de oxigenación; TND, trastornos del neurodesarrollo.

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778 PA RT E XI Aparato cardiovascular

Konduri et al., 2007). En cada uno de estos estudios se observó una a graves en el 15-25% de los supervivientes neonatales con ECMO (van
tendencia mayor a trastorno motor en el grupo iNO, y en el estudio Heijst et al., 2014). Sin embargo, determinar el rol del ECMO frente
de iNO reportado por Konduri et al. (2007), la diferencia en la escala a otros factores patológicos en los resultados del neurodesarrollo
de Bayley de desarrollo psicomotor fue estadísticamente significativa. para supervivientes de ECMO es difícil. Desde la era pre-iNO,
El Neonatal Inhaled Nitric Oxide Study Group (2000) reportó que el UK Collaborative Randomized Trial of ECMO ha aportado la
la tasa de discapacidad no fue afectada por la necesidad de ECMO, lo comparación más directa de resultados después de ECMO frente a
que llevó a los autores a especular que el tiempo de lesión cerebral era tratamiento convencional e incluye evaluaciones del neurodesarrollo
más probable antes del ECMO. a las edades de 1, 4 y 7 años. Al año de edad, se observó un beneficio
Los trastornos del neurodesarrollo son elevados incluso en los recién significativo en la supervivencia (68 frente a 41%) en el grupo tratado
nacidos con HPPRN moderada (índice de oxigenación de 15-25). Las con ECMO frente al grupo tratamiento convencional (UK Collabo-
tasas generales de trastornos del neurodesarrollo fueron similares a las rative ECMO Trial Group, 1998), y los supervivientes demostraron
de otros estudios que enrolaron pacientes con enfermedad más avan- tasas similares de trastornos o discapacidad. En el seguimiento a 4
zada, y el empleo precoz de iNO no se tradujo en mejores resultados años siguió habiendo una mayor proporción de supervivientes sin
(Konduri et al., 2007). La proporción de recién nacidos con problemas discapacidad en el grupo tratado con ECMO frente al grupo con
médicos, como necesidad de medicación y oxígeno domiciliarios, y tratamiento convencional (50 frente a 37%) (Bennett et al., 2001),
alimentación por gastrostomía, también tendió a ser mayor en el grupo aunque las tasas de discapacidad fueron similares a los 7 años (55
con iNO precoz, aunque estas diferencias no fueron estadísticamente frente a 50%) (McNally et al., 2006). La tasa elevada de trastornos
significativas. del neurodesarrollo en ambos grupos sugiere que el proceso patoló-
La ECMO es el único tratamiento para HPPRN que ha demos- gico subyacente, más que el tratamiento, es la mayor influencia en
trado salvar vidas, pero continúa siendo un tratamiento técnicamente resultados de neurodesarrollo. Varios estudios más recientes también
complejo e invasivo con muchas complicaciones potenciales. Más de indican que los supervivientes de ECMO pueden presentar riesgo de
27.000 recién nacidos con insuficiencia respiratoria han sido tratados problemas académicos (Ijsselstijn y van Heijst, 2014), por lo que estos
con ECMO, con una supervivencia general acumulada del 75% al alta recién nacidos se beneficiarían de evaluación minuciosa al alcanzar
(Paden et al., 2014). Se describen trastornos del neurodesarrollo leves la edad escolar.

Resumen
La hipertensión pulmonar persistente complica el curso hasta en el aunque el manejo clínico exitoso requiere un meticuloso cuidado de
10% de neonatos con insuficiencia respiratoria. Está también asociada todos los aspectos de la enfermedad pulmonar y cardíaca asociada.
con un conjunto diverso de alteraciones cardiopulmonares, y sus La investigación actual está enfocada en desarrollar un mejor enten-
mecanismos fisiopatológicos están caracterizados por disfunción vas- dimiento de las respuestas celulares en la vascularización remodelada
cular, lesión y remodelado que ocurren antes del nacimiento. En los y probablemente pueda dilucidar vías de señalización adicionales que
últimos 20 años, el trabajo experimental en los mecanismos básicos lleven a nuevas estrategias terapéuticas. Se precisa más trabajo para
de la regulación vascular de la circulación pulmonar en desarrollo reducir la mortalidad y mejorar los resultados del neurodesarrollo en
ha mejorado el rango de enfoques terapéuticos para neonatos con recién nacidos enfermos con hipertensión pulmonar, especialmente en
HPPRN. En particular, el iNO ha demostrado ser un efectivo y pacientes con hipoplasia pulmonar y enfermedad vascular estructural
selectivo vasodilatador pulmonar para recién nacidos con HPPRN, avanzada.

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778.e4 PA RT E X I Aparato cardiovascular

Puntos clave
• La hipertensión pulmonar persistente del recién nacido
(HPPRN) puede presentarse con enfermedad parenquimatosa,
con hipoplasia pulmonar o sin enfermedad pulmonar asociada
(idiopática), y tiene una incidencia del 0,2% en recién nacidos
a término y hasta del 2% en recién nacidos prematuros.
• Factores maternos, como la diabetes, un índice de masa corporal
aumentado, el tabaquismo, el consumo de inhibidores selectivos
de la recaptación de serotonina o antiinflamatorios no esteroi-
deos, y el parto por cesárea aumentan el riesgo de HPPRN. Los
factores posnatales incluyen asfixia, hiperoxia, hipoxia, infección
e inflamación pulmonar.
• El manejo médico de la HPPRN requiere una cuidadosa optimi-
zación de la función ventricular tanto izquierda como derecha.
Las estrategias de reclutamiento pulmonar deben aplicarse en
pacientes con enfermedad pulmonar parenquimatosa.
• El óxido nítrico inhalado mejora la oxigenación y disminuye
la necesidad de soporte mediante oxigenación con membrana
extracorpórea en recién nacidos a término y prematuros con
HPPRN.
• El soporte mediante oxigenación con membrana extracorpórea
está indicado para neonatos a término y prematuros con hiper-
tensión pulmonar grave y/o hipoxemia refractaria al tratamiento
con óxido nítrico inhalado y optimización de la función res-
piratoria y cardíaca.
• La hipertensión pulmonar crónica aparece en un subgrupo de
recién nacidos con hernia diafragmática congénita y displasia
broncopulmonar, y aumenta la morbilidad y la mortalidad.
• Los recién nacidos que sobreviven a la HPPRN moderada a grave
tienen mayor riesgo de presentar trastornos del neurodesarrollo y
deben someterse a seguimiento del neurodesarrollo y con técnica
de neuroimagen.

Palabras clave
Vascularización pulmonar
Desarrollo pulmonar
Hipertensión pulmonar
Óxido nítrico
Vasodilatadores pulmonares

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53
Ecocardiografía fetal y neonatal
MARGARET M. VERNON Y MARK B. LEWIN

PUNTOS CLAVE tejido que las ondas de alta frecuencia de ultrasonido. Sin embargo,
las ondas de mayor frecuencia proporcionan una mayor resolución
• La ecocardiografía se utiliza para evaluar la anatomía y la fisiología espacial de estructuras finas. Este principio está determinado por una
cardíacas. ley fundamental de la física que define la relación entre frecuencia y
• Una interpretación apropiada requiere comprender sus limitaciones. longitud de onda del ultrasonido:
Velocidad = frecuencia × longitud de onda
La distancia de longitud de onda de ultrasonido es el límite físico a
partir del cual dos estructuras no pueden ser distinguidas. Por lo tanto,

L
a ecocardiografía es la aplicación de ultrasonido para la evaluación a menor longitud de onda (p. ej., a mayor frecuencia), mayor capacidad
del aparato cardiovascular. Durante las últimas décadas, la eco- de distinguir dos puntos, uno del otro.
cardiografía se ha establecido como l técnica de referencia para el Miremos el siguiente ejemplo: dos estructuras se encuentran a
diagnóstico de cardiopatías congénitas (CC) y cardiopatías adquiridas. 0,5 mm. La velocidad del sonido en el tejido biológico es una cons-
El instrumental se ha vuelto más sofisticado, y su utilización ha pasado tante, aproximadamente a 1.540 m/s. Aplicar una frecuencia de energía
de ser meramente una evaluación anatómica a incluir valoración de la de ultrasonido de 2 MHz causará una longitud de onda de 0,77 mm,
función miocárdica; la comprensión de los principios básicos y las limi- mientras que aplicar una frecuencia de energía de ultrasonido de
taciones de la ecografía es muy valiosa para los clínicos. Este capítulo 8 MHz causará una longitud de onda de 0,19 mm. Por lo tanto, para
revisa los principios básicos de la ecocardiografía y sus aplicaciones en el operador que utiliza un transductor de 2 MHz, las dos estructuras no
escenarios prenatales y del recién nacido. serán distinguibles una de la otra y parecerán una sola (en ese caso, la
distancia entre ellas es menor que la longitud de onda del ultrasonido),
Aplicación de la ecografía en las pruebas mientras que al operador que utiliza un transductor de 8 MHz le será
posible diferenciar las estructuras con mayor facilidad. De acuerdo con
de imagen cardíacas esto, mayores frecuencias, de un mínimo de 5 MHz y habitualmente
entre 8 y 12 MHz, se utilizan en el escenario neonatal debido a que
Física del ultrasonido la penetración es menos importante, y el objetivo es maximizar la
El ultrasonido es el empleo de ondas sonoras de ultraalta frecuencia (las resolución fina estructural.
que son tan altas que no son audibles para el oído humano) para crear
una imagen. La ecocardiografía es la aplicación de ultrasonido para Componentes básicos de las imágenes
crear una imagen del corazón. En ambas, la energía es generada por la
estimulación de cristales piezoeléctricos alojados en un pequeño dis- Modo M
positivo de mano llamado transductor. Cuando el transductor se coloca El modo más primitivo de imagen en ecocardiografía, el modo M,
en el tórax o el abdomen, las ondas de ultrasonido son transmitidas muestra las estructuras cardíacas visualizadas a lo largo de un plano
al tejido. La mayoría de estas ondas son absorbidas; sin embargo, único de insonación. La imagen obtenida muestra las estructuras mien-
una pequeña porción es reflejada (eco) de vuelta al transductor. Estas tras cambian a lo largo del ciclo cardíaco. Hoy en día, la ecocardiografía
ondas reflejadas son procesadas, y la imagen resultante se muestra en en modo M se usa principalmente para la medición del espesor parietal
la pantalla. Tejidos blandos (cómo el hígado) y fluidos (como la sangre ventricular, las dimensiones cavitarias y el cálculo de la fracción de
y el líquido amniótico) son un medio excelente para la transmisión del acortamiento ventricular –una estimación de la función ventricular–.
ultrasonido y proporcionan ventanas óptimas para imágenes cardíacas Si se angula el plano de insonación a través del eje corto del ventrículo
detalladas (Weyman, 1994). La dispersión de ultrasonido, que impacta izquierdo a nivel de la punta de los músculos papilares, uno puede
negativamente en la claridad de la imagen es mayor en las interfaces obtener una imagen en modo M del cambio en la dimensión de la
entre tejidos biológicos con amplia dispersión de densidades. Por lo cavidad ventricular en el tiempo (fig. 53.1). La razón de la diferencia
tanto, hueso y aire, cuando se encuentran adyacentes a tejidos blandos entre el diámetro telediastólico ventricular izquierdo (DTDVI) y el
como el corazón, crean una ventana acústica deficiente para la trans- diámetro telesistólico ventricular izquierdo (DTSVI) sobre el diáme-
misión del ultrasonido. tro telediastólico ventricular izquierdo es la fracción de acortamiento
El término ultrasonido generalmente hace referencia a frecuen- ([DTDVI – DTSVI]/DTDVI × 100 = %FA). El rango normal es del
cias de onda sonora superiores a 20.000 Hz (ciclos por segundo), 28 al 38%, y se correlaciona con una fracción de eyección volumétrica
con un rango de frecuencias utilizadas para la evaluación diagnós- ventricular del 55-65%.
tica de tejidos biológicos entre 2 y 12 megahercios (MHz) (megaher- Al interpretar la fracción de acortamiento, es importante notar la
cio = 1.000.000 Hz). Las ondas de baja frecuencia penetran mejor el dimensión del ventrículo izquierdo. Por ejemplo, un niño con una
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780 PA RT E XI Aparato cardiovascular

• Figura 53.1  Trazado en modo M de las dimensiones del ventrículo


izquierdo a lo largo del tiempo obtenidas en el eje corto. El trazado • Figura 53.2  Trazado en modo M de las dimensiones del ventrículo
electrocardiográfico ayuda a identificar el momento del ciclo cardíaco izquierdo a lo largo del tiempo obtenidas en el eje corto. El trazado
en la sístole y la diástole. La medición A muestra la dimensión teledias- electrocardiográfico ayuda a identificar el momento del ciclo cardíaco
tólica ventricular izquierda, y la medición B, la dimensión telesistólica en la sístole y la diástole. El tabique interventricular presenta movimiento
ventricular izquierda. La fracción de acortamiento calculada es del 35%. paradójico (flecha) debido a una elevada presión en el ventrículo dere-
cho. Por lo tanto, la fracción de acortamiento no puede calcularse con
precisión.

sobrecarga de volumen ventricular causada por un amplio conducto


arterioso persistente (CAP) puede presentar fracción de acortamiento
normal; sin embargo, la gravedad hemodinámica la sugiere la presen- que se encuentran disponibles para su comparación. Con el fin de
cia de un ventrículo izquierdo dilatado cuando se normaliza para la conseguir consistencia, cada ecocardiografista pediátrico debe decidir
superficie de área corporal. cuál de estos conjuntos de datos utilizará. Varios calculadores nor-
La fracción de acortamiento (%FA) también puede ser útil al inves- mativos (puntuación Z) se encuentran disponibles online (http://
tigar causas de hipotensión en neonatos. En hipotensión causada por www.parameterz.com y http://zscore.chboston.org/) con referen-
disfunción miocárdica, el niño tendrá una %FA disminuida frecuen- cias y descripciones para facilitar el uso. La identificación de una
temente acompañada de un ventrículo izquierdo dilatado. De manera estructura patológicamente agrandada o disminuida es especialmente
alternativa, cuando la hipotensión es secundaria a vasodilatación sis- problemática cuando el paciente es un prematuro extremo. Los datos
témica, como en la sepsis, el neonato puede tener una %FA normal comparativos para dichos pacientes son escasos y se basan frecuente-
o hiperdinámica, con frecuencia superando el 40%. Finalmente, los mente en datos obtenidos de una muy pequeña cantidad de pacientes
niños con depleción de volumen exhibirán una %FA normal con un «normales». Determinar dimensiones (p. ej., ventrículo izquierdo,
tamaño cavitario del ventrículo izquierdo pequeño. válvula aórtica o arteria pulmonar) en pacientes tan prematuros está,
Aunque la %FA es fácil de calcular y es comúnmente utilizada, tiene por tanto, sujeto a un cierto grado de interpretación; en estos casos,
una serie de limitaciones. Proporciona una evaluación de solo un único la consulta al cardiólogo pediátrico es obligada con el fin de tomar
plano de la contracción ventricular y no tiene validez en condiciones decisiones apropiadas en el tratamiento.
donde haya posición o movimiento anormal del tabique interven- La imagen 2D también permite una medición alternativa de las
tricular, como en la hipertensión ventricular derecha, el agrandamiento dimensiones telediastólica y telesistólica para estimar la contractilidad
ventricular derecho o el bloqueo de rama derecha (fig. 53.2). ventricular sistólica.

Imágenes bidimensionales Doppler


El desarrollo de transductores con disposición en fases (phased-array) La aplicación del principio Doppler permite determinar la dirección
ha permitido el análisis sectorial en vez de lineal y la obtención de del flujo y la velocidad de objetos en movimiento. Como la sangre y el
imágenes bidimensionales (2D). Hoy en día, la ecocardiografía 2D tejido miocárdico están en movimiento a lo largo del ciclo cardíaco,
de alta resolución es la modalidad ecocardiográfica más comúnmente ambos pueden valorarse por ecocardiografía Doppler. La imagen
empleada. Pueden obtenerse imágenes detalladas, confiables y reprodu- Doppler puede realizarse de varias maneras. En la ecocardiografía Dop­
cibles de las estructuras cardíacas, y, cuando estas imágenes de múltiples pler de onda pulsada, un solo cristal de ultrasonido alterna pulsos de
planos se combinan mentalmente, se pueden realizar diagnósticos energía y después «escucha» la señal de retorno reflejada. Este modo
cardíacos precisos. permite determinar la posición espacial de la señal, pero es limitado
La adquisición de imágenes sigue típicamente un protocolo están- en su capacidad de medir con precisión la sangre que se desplaza a
dar. Se valoran los sitios cardíaco y abdominal, se realiza una evalua- altas velocidades. En la ecocardiografía Doppler de onda continua,
ción completa de la estructura anatómica cardíaca y la vascularización la mitad de los cristales del transductor transmiten continuamente,
proximal en múltiples planos, y se realiza una determinación de las mientras que la otra mitad reciben continuamente, y todas las señales
propiedades funcionales (sistólica y diastólica) miocárdicas. recibidas se muestran como un conjunto. Este modo permite la eva-
Para obtener una determinación precisa respecto a las dimensiones luación inequívoca de velocidades aumentadas, pero es limitado en la
de las cámaras, válvulas y vasos se requiere la comparación con un capacidad para determinar con precisión la localización en la cual se
conjunto de datos normalizados. La metodología más común implica obtiene dicha velocidad. En combinación, los modos Doppler de onda
la normalización de acuerdo con mediciones de la superficie de área pulsada y onda continua aportan una imagen completa de la dirección
corporal. Se han publicado un cierto número de datos normalizados, y la velocidad del flujo sanguíneo.

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CAPÍTULO 53 Ecocardiografía fetal y neonatal 781

La ecocardiografía Doppler color utiliza principios de onda pulsada son una herramienta clínica clave para monitorizar la hipertensión
para crear visualización sectorial 2D de todas las velocidades com- pulmonar y optimizar planes terapéuticos en los que tienen riesgo o
prendidas en una región de interés dada. Se identifica un sector dentro presencia de enfermedad pulmonar crónica. La presión ventricular
de la imagen 2D, y los píxeles de color se muestran sobre el área de derecha (y la presión arterial pulmonar) puede estimarse utilizando la
interrogación. Cada píxel de color refleja la dirección del movimiento; velocidad del flujo regurgitante tricuspídeo como evidencia cualitativa
la sombra de color refleja la velocidad. Por convención, colores «cálidos» de hipertensión pulmonar (aplanamiento del tabique interventricular
como rojo y naranja designan dirección del flujo hacia el transductor, y e hipertrofia ventricular derecha). Recientemente se han introducido
colores «fríos» como azul y blanco designan flujo que se aleja del trans- nuevos parámetros ecocardiográficos, incluido el índice de rendimiento
ductor (fig. 53.3). Cuando las velocidades del flujo exceden las carac- (performance) miocárdico (índice de Tei), un marcador de disfunción
terísticas del transductor, el patrón suave y laminar del color cambia ventricular calculado por la suma de los tiempos de contracción y
a un patrón de color moteado, lo que sugiere una región de flujo más relajación isovolumétrica dividido por el tiempo de eyección. Este
turbulento. Para determinar si esto representa una variación patológica índice es elevado en la hipertensión pulmonar primaria y puede estar
de la velocidad se requiere la evaluación con Doppler pulsado. elevado en quienes padecen DBP. Mediciones con Doppler tisular
Las técnicas Doppler se aplican también para evaluar la motilidad se correlacionan con la gravedad de la DBP, incluida la relación de
miocárdica (p. ej., Doppler tisular), aportando información útil para la velocidad Doppler de entrada con la velocidad Doppler tisular
comprobar parámetros de la función miocárdica. Aunque las seña­ miocárdica precoz (E/E’). Además, las anomalías cardiovasculares son
les tisulares se desplazan a velocidades mucho menores que las señales frecuentes en muchos casos con DBP, incluidos grandes colaterales
sanguíneas, la determinación de velocidades tisulares derivadas de aortopulmonares, estenosis de venas pulmonares y CAP. La función
Doppler puede ayudar a comprender complejos estados en la dis- ventricular derecha es un importante determinante del pronóstico en
función sistólica y diastólica. Se han descrito patrones distintivos de la hipertensión pulmonar. La evaluación no invasiva de la función ven-
motilidad normal y anormal de varios segmentos miocárdicos (Mertens tricular derecha está frecuentemente limitada por una compleja geome-
y Friedberg, 2009). tría y la escasa definición endocárdica. El grado de desplazamiento del
Los niños prematuros extremos presentan riesgo de displasia bron- anillo tricuspídeo (desplazamiento sistólico del plano anular tricuspídeo
copulmonar (DBP), también llamada enfermedad pulmonar crónica [TAPSE, tricuspid annular plane systolic excursion]) es una medición
del prematuro (v. capítulo 48). Principalmente en los nacidos con eco derivada muy útil para evaluar la función ventricular derecha con
menos de 26 semanas de gestación, el crecimiento vascular y el alveo- significado pronóstico en la hipertensión pulmonar, y ha sido validada
lar pulmonar están interrumpidos, lo que puede causar intercambio recientemente para la población neonatal y pediátrica. El TAPSE es un
gaseoso y vasorreactividad anormal. El remodelado vascular pulmonar marcador realizable y reproducible de la función ventricular derecha
resultante puede acompañarse de elevación persistente de la resistencia sistólica en niños con hipertensión pulmonar y tiene correlación con
vascular pulmonar (RVP) y consecuente hipertensión pulmonar, que, la gravedad de la hipertensión pulmonar (Zakaria et al., 2015).
en cambio, puede llevar a disfunción ventricular derecha e insuficiencia. Los datos derivados de la ecocardiografía Doppler se utilizan para
La ecocardiografía transtorácica y la comparación de estudios de series obtener información fisiológica. Utilizando los principios de hidráulica
de flujo a través de un sistema tubular con discreto estrechamiento, los
datos de velocidad pueden traducirse en datos de presión por medio de
la modificación de la ecuación de Bernoulli (fig. 53.4).
Las velocidades cardíacas normales son raramente mayores de 2 m/s
y típicamente menores de 1 m/s. Estas bajas velocidades proximales
a un área de estrechamiento (V1) pueden ignorarse y la ecuación de
Bernoulli simplificarse a:
Diferencias de presiones = 4 × V2
Este principio puede aplicarse a una variedad de escenarios clí-
nicos. Por ejemplo, en presencia de insuficiencia tricuspídea (IT),
el pico de presión ventricular derecho (que igualará la presión de la
arteria pulmonar en ausencia de obstrucción en la eyección pulmonar)
puede estimarse midiendo la velocidad pico del flujo regurgitante.
Una velocidad pico de IT de 2 m/s sugiere una diferencia de pre-
sión entre la aurícula derecha y el ventrículo derecho de 16 mmHg
(4 × [2]2). Expresamos esto como una presión ventricular derecha de
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• Figura 53.3  Imágenes de lado a lado de ecocardiografía bidimen-


sional y Doppler color de un conducto arterioso. El flujo del conducto
arterioso persistente (CAP) es rojo, lo que indica flujo hacia el trans-
ductor (en este caso de izquierda a derecha) y se dirige hacia el tronco
de la arteria pulmonar (TAP) desde la aorta. La señal en color del CAP
es moteada, lo que indica una región de flujo más turbulenta. El estado
normal en el CAP es la alta velocidad, lo que indica presiones apropia-
damente elevadas en la aorta comparadas con las menores presiones
en la arteria pulmonar. El flujo en la arteria pulmonar izquierda (API) es
azul, lo que indica flujo que se aleja del transductor. La señal en color • Figura 53.4  Ecuación de Bernoulli sobre dinámica de fluidos. Esta
de la API es laminar (suave), lo que indica una velocidad de flujo baja. ecuación describe la relación entre diferencias de presiones y diferencias
El flujo turbulento en esta porción de la API en un neonato se asocia de velocidades a través de un área de estrechamiento en un sistema
comúnmente a estenosis fisiológica de ramas de la arteria pulmonar, de fluidos cerrado. P1, presión proximal; P2, presión distal; V1, velocidad
un fenómeno transitorio asociado a la fisiología transicional neonatal. proximal; V2, velocidad distal.

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782 PA RT E XI Aparato cardiovascular

16 mmHg + presión auricular derecha (o venosa central). En bebés y zón neonatal. La ecocardiografía está ampliamente disponible y
niños, la presión auricular derecha se estima entre 3 y 10 mmHg, y no es invasiva. Además, la información obtenida es en tiempo real,
5 mmHg es la típicamente escogida como suposición estimada. Por reproducible y adquirida en la cabecera. Estas propiedades permiten
lo tanto, en el ejemplo previo, el paciente tendría una presión ventri- la evaluación y comparación de datos en serie. La ecocardiografía
cular derecha de 21 mmHg, la cual se encuentra dentro de los límites está establecida como técnica de referencia para el diagnóstico de
normales. En contraste, un niño con enfermedad pulmonar crónica CC, y las imágenes obtenidas apoyan frecuentemente la evaluación
grave puede presentar un pico de flujo de IT de 4,1 m/s (fig. 53.5). clínica en el manejo de una variedad de condiciones neonatales. Las
Esto se traduciría en una presión estimada de 68 mmHg (4 × [4,1]2); indicaciones para realizar un ecocardiograma en salas posparto o
68 mmHg más la presión auricular derecha estimada de 5 mmHg unidades de cuidados intensivos neonatales incluyen la evaluación
provoca una presión ventricular derecha de 73 mmHg, lo que sugiere del neonato con condiciones sindrómicas o genéticas con alto riesgo
hipertensión pulmonar. La ecuación de Bernoulli también se utiliza de cardiopatía (p. ej., trisomía 21), el niño con una lesión no cardíaca
comúnmente para valorar gradientes de presión a través de válvulas o donde haya riesgo asociado incrementado de CC (p. ej., onfalocele)
vasos estenóticos: por ejemplo, la estenosis valvular aórtica o la coar- y el neonato con un cuadro que pueda afectar de manera adversa a
tación de la aorta. Utilizando la velocidad máxima, derivamos el gra- la hemodinámica (p. ej., malformaciones arteriovenosas). Estas se
diente «pico instantáneo» a lo largo del sitio de obstrucción. Cuando resumen en la tabla 53.1.
se interpreta una velocidad derivada del Doppler, es esencial reconocer Las evaluaciones ecocardiográficas seriadas son con frecuencia
que las estimaciones más precisas se obtienen cuando la dirección del necesarias para el cuidado del neonato, en particular cuando suceden
flujo sanguíneo es paralela al haz de ultrasonido. Pequeñas variaciones cambios en la condición clínica del paciente. Las dimensiones de las
en el ángulo de interrogación pueden introducir grandes errores en la cámaras auricular y ventricular izquierdas pueden seguirse según la RVP
velocidad calculada; por lo tanto, el ecocardiografista angula el haz de caiga con el fin de determinar el impacto de cortocircuitos (shunts)
ultrasonido hasta que la mayor señal acústica se detecte, y se intenta izquierda-derecha en presencia del CAP o comunicación interven-
la evaluación desde diferentes ventanas ecocardiográficas para obtener tricular (CIV); comprobar la dilatación auricular o ventricular izquierda
la mayor velocidad. La superposición de imágenes Doppler color con en estos escenarios sugiere la presencia de sobrecirculación pulmonar.
ondas pulsadas o continuas hace posible alinear visualmente el haz El espesor interventricular puede medirse de manera seriada, así como
Doppler con el flujo máximo. el patrón Doppler y la velocidad pico a través de la obstrucción del
tracto de salida ventricular izquierdo, en hijos de madre diabética
para evaluar el impacto en la hemodinámica basal y la mejoría en el
Ecocardiografía neonatal: tiempo. El sistema cardiopulmonar neonatal es un sistema altamente
objetivos del estudio de imagen fluido, sujeto a perturbaciones por numerosas influencias externas y,
por tanto, requiere una estrecha monitorización en el niño lábil. La
Como ya se mencionó previamente, la ecocardiografía es la moda- ecocardiografía es una herramienta más del arsenal de neonatólogos y
lidad de imagen más comúnmente utilizada para evaluar el cora- cardiólogos para asistir en la monitorización.

TABLA  Indicaciones de evaluación ecocardiográfica


53.1 en el neonato
Trastornos asociados a cardiopatías congénitas
Sindrómicos No sindrómicos
Trisomías 13, 18, 21 Hernia diafragmática congénita
Síndromes de microdeleción 22q11: Gastrosquisis
• DiGeorge Onfalocele
• Velocardiofacial Fístula traqueoesofágica
Asociación VACTERL
Asociación CHARGE
Síndrome de Holt-Oram
Síndrome de Goldenhar
Síndrome de Lange
Síndrome de Turner
Síndrome de Noonan
Síndrome de Williams
• Figura 53.5  Ejemplo de una señal Doppler. El tiempo está en el eje Síndrome de Marfan infantil
x, y la velocidad está en metros/segundos en el eje y. La señal Doppler Trastornos asociados a impacto en el aparato cardiovascular
se obtiene al colocar un marcador justo proximal al anillo de la válvula
tricúspide con el fin de ver el flujo de la insuficiencia tricuspídea (IT). Hernia diafragmática congénita
En este ejemplo, el pico de velocidad de la IT es 4,1 m/s. Utilizando la Enfermedad pulmonar crónica
ecuación modificada de Bernoulli, la presión ventricular derecha predicha Diabetes mellitus gestacional
es 4 × (4,1)2 = 68 mmHg + presión auricular derecha. Esto predice una Teratoma sacrococcígeo
elevada presión ventricular derecha (lo normal es típicamente en el rango Síndrome de transfusión intergemelar
de 20 mmHg). En ausencia de obstrucción al flujo a través de la arteria Malformación arteriovenosa
pulmonar, la presión ventricular derecha es equivalente a la presión de la Asfixia perinatal
arteria pulmonar. Por tanto, podemos cuantificar la presión de la arteria Anemia grave
pulmonar basándonos en la velocidad del flujo de la IT.

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CAPÍTULO 53 Ecocardiografía fetal y neonatal 783

Fisiología transicional fetal-neonatal: predecir la diferencia de presión entre aorta y arteria pulmonar. Por
último, la determinación de la lateralidad del arco aórtico y el patrón
valoración ecocardiográfica de ramificación puede sugerir el requerimiento de ligadura quirúrgica
(Murdison et al., 1990). El hallazgo más común es el de un arco aórtico
Durante la vida fetal, la placenta sirve como órgano de intercam-
izquierdo con un conducto arterioso izquierdo; sin embargo, puede
bio gaseoso. Esta diferencia fundamental entre la circulación fetal y
presentarse un arco aórtico derecho con conducto arterioso derecho y
neonatal está detrás de la compleja transición fisiológica que tiene
alterar el enfoque quirúrgico de la ligadura ductal.
lugar después del parto y el pinzamiento del cordón umbilical. Con
el comienzo de la respiración y la expansión pulmonar, el oxígeno
llega a los alvéolos. Esto provoca una drástica caída de la RVP, con un Evaluación de la hipertensión pulmonar
incremento del flujo sanguíneo pulmonar. Simultáneamente, el cordón persistente
umbilical es pinzado, resultando en un incremento súbito de la resis-
tencia vascular sistémica (RVS). La combinación de incremento súbito La hipertensión pulmonar persistente del recién nacido (HPPRN),
de la RVS y caída de la RVP lleva a una reversión de flujo a través del referida previamente como circulación fetal persistente, resulta cuan-
conducto arterioso. In utero, el flujo sanguíneo a través del conducto do falla la transición neonatal normal con grave vasoconstricción
arterioso era de derecha a izquierda (de arteria pulmonar a aorta des- persistente de la vasculatura pulmonar generando presiones arteriales
cendente), mientras que, después del nacimiento, la dirección del flujo pulmonares y ventricular derecha elevadas. La sangre continúa pasando
se invierte y es ahora de izquierda a derecha (de la aorta descendente de un pulmón a otro, cruzando a través del agujero oval y el conducto
a la arteria pulmonar). Por último, debido al marcado incremento en arterioso, y dando lugar a desaturación sistémica. Los factores de riesgo
el flujo sanguíneo pulmonar, el retorno venoso a la aurícula izquierda para HPPRN incluyen aspiración meconial, asfixia neonatal, infección
aumenta y la presión auricular izquierda supera a la presión auricular y la presencia de una anomalía congénita asociada con subdesarrollo
derecha, llevando al cierre del agujero oval. pulmonar, como es el caso de hernia diafragmática.
Cuando ciertos hallazgos clínicos, como la taquipnea, la taquicardia En niños con HPPRN, la ecocardiografía transtorácica confirma
o la cianosis persistente sugieren alteraciones en la fisiología transicio- la ausencia de cardiopatía estructural (específicamente, retorno venoso
nal, la ecocardiografía es una herramienta diagnóstica no invasiva de pulmonar total anómalo con obstrucción), demuestra los cortocircuitos
gran utilidad. Mientras que cualquier causa que aumente la RVP o que a nivel auricular y ductal, y proporciona un estimado de la presión
retrase su caída, como acidosis, hipoxemia, policitemia, enfermedad arterial pulmonar al medir la velocidad del flujo de IT, si está presente.
pulmonar o inmadurez, puede impedir la transición neonatal normal, El patrón Doppler en el conducto arterioso establece dirección del
es la singularidad de la circulación fetal la que permite que muchas flujo, así como su velocidad. A partir de la velocidad del flujo, un
lesiones complejas puedan ser silenciosamente toleradas in utero para gradiente de presión (o la ausencia de este) entre la aorta y la arteria
desenmascararse durante el período transicional. pulmonar puede estimarse aplicando la ecuación de Bernoulli (Musewe
et al., 1990). La apariencia del patrón Doppler obtenida en las ramas de
la arteria pulmonar puede proporcionar también información acerca
Sospecha de cardiopatía congénita de la RVP y respuesta al tratamiento.
Las alteraciones en la transición fetal-neonatal se asocian con frecuencia Además, la ecocardiografía puede utilizarse para evaluar la función
a la presencia de un CAP y/o RVP elevada persistente, y confirmar la ventricular en un niño con HPPRN (fig. 53.6). Los neonatos con
ausencia de cardiopatía estructural puede ser de gran utilidad para HPPRN típicamente presentan disfunción ventricular derecha (Valdes-
el equipo al cuidado del neonato enfermo, particularmente en el Cruz et al., 1981). Aunque la etiología de la disfunción cardíaca en la
que tiene una anomalía extracardíaca reconocida. Dicho esto, en quienes HPPRN no es clara, la constricción prenatal del conducto arterioso se
tienen CC confirmada, las imágenes 2D de alta calidad combinadas propuso como un posible mecanismo (Morin, 1989).
con Doppler color pulsado o continuo son habitualmente suficientes La oxigenación con membrana extracorpórea (ECMO) se utiliza fre-
para el desarrollo de una estrategia terapéutica integral, incluida la cuentemente en niños con HPPRN grave cuya hipoxemia no responde
necesidad de tratamiento con prostaglandinas o intervenciones por al soporte ventilatorio mecánico y a los vasodilatadores pulmonares,
cateterismo o quirúrgicas (Tworetzky et al., 1999). como suplemento de oxígeno y óxido nítrico. La ecocardiografía puede
utilizarse para documentar mejorías e identificar la causa de un flujo
insuficiente.
Evaluación del conducto arterioso
Antes del empleo rutinario de la ecocardiografía, un CAP hemodiná- Técnicas de imagen neonatal
micamente significativo era diagnosticado clínicamente por la presencia
de soplo, precordio hiperdinámico, pulso saltón, mayor requerimiento de Un enfoque sistemático y estandarizado es clave para realizar un
soporte ventilatorio y evidencia radiográfica de cardiomegalia con ecocardiograma neonatal completo. Los estudios de seguimiento
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aumento de la trama vascular pulmonar. En la era actual, se recomienda pueden ser restringidos y limitados en su alcance; sin embargo, una
un ecocardiograma transtorácico completo no solo para confirmar la evaluación inicial debe incluir una detallada valoración de la anatomía
presencia de CAP, sino también para descartar la presencia de cardio- intracardíaca y de los grandes vasos empleando modos 2D, Doppler,
patías estructurales. Por lo general, no se considera un tratamiento a Doppler color y modo M. Se obtienen imágenes tanto por marco como
menos que haya evidencia clínica y ecocardiográfica de significancia por cine. Fragmentos cortos de cine capturan tanto el movimiento
hemodinámica (Condo et al., 2012). La evaluación ecocardiográfica estructural a lo largo del ciclo cardíaco como cortes tomográficos del
del CAP incluye una valoración de su tamaño y dirección del flujo a corazón mientras el transductor se va abanicando a través del mismo.
través del mismo. El tamaño se valora frecuentemente como la razón Estos «barridos» 2D adquiridos permiten la «reconstrucción mental»
del diámetro del coducto hacia la arteria pulmonar izquierda, con tridimensional del corazón y cualquier variación de lo normal. La
valores superiores a 1 sugiriendo un conducto arterioso extenso (Ramos localización estándar de imágenes se utiliza para crear una imagen
et al., 2010). Un conducto arterioso extenso también lo sugiere un completa del corazón y los grandes vasos (fig. 53.7). Estas incluyen
porcentaje del flujo retrógrado a anterógrado en la aorta descendente imágenes obtenidas en el tórax medio (imágenes del plano paraes-
superior al 50% y la presencia de agrandamiento ventricular izquierdo ternal), proyección de cuatro cámaras (imagen apical), y abdominal a
(Sehgal y McNamara, 2009). Adicionalmente, el Doppler pulsado través del hígado y el diafragma (imagen subcostal) y entre las clavículas
y continuo puede utilizarse para establecer la velocidad del flujo y (proyección desde la hendidura supraesternal). La ventana subcostal

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784 PA RT E XI Aparato cardiovascular

es única en pacientes neonatos y pediátricos. El hígado actúa como


realzador de la transmisión acústica, y la proximidad del transductor
con el corazón optimiza la resolución de la imagen.
Aunque la ecocardiografía sea una evaluación diagnóstica no inva-
siva, se debe emplear monitorización durante la realización de un eco-
cardiograma, particularmente en niños prematuros pequeños, ya que
el estudio completo de rutina tarda 30-60 min y, si se identifica CC,
puede durar mucho más. Aplicar gel frío de ecografía y la exposición
ambiental puede causar inestabilidad en la temperatura. Ejercer presión
en el abdomen durante la proyección subcostal o extender el cuello
durante la proyección supraesternal puede provocar desestabilización
del paciente debido a afectación cardíaca o pulmonar. Incluso en recién
nacidos, ocasionalmente se requiere sedación con el fin de obtener un
estudio completo.

Limitaciones de la ecocardiografía neonatal


• Figura 53.6  Imagen de los ventrículos en el eje corto. Normalmente, Aunque la ecocardiografía es una herramienta extremadamente útil que
la presión ventricular izquierda (VIp) supera la derecha (VDp), lo que ha revolucionado la evaluación diagnóstica del aparato cardiovascular
provoca arqueo del tabique ventricular hacia el ventrículo derecho. En neonatal, presenta una serie de limitaciones:
la hipertensión pulmonar persistente del recién nacido, la VDp puede ser • Discrepancias entre gradientes «derivados de la ecografía» y «derivados
igual o superar la VIp, alterando la posición del tabique ventricular, como del catéter». La ecocardiografía Doppler mide la diferencia de
se aprecia en esta imagen, donde el tabique se arquea anormalmente presión pico instantánea en cualquier punto en el tiempo durante
hacia el ventrículo izquierdo. Esta posición septal sugiere que la VDp el flujo a través de una válvula estenótica. En el caso de la estenosis
es mayor que la VIp. valvular aórtica, esto puede ocurrir durante el ascenso sistólico, y

• Figura 53.7  A. Demostración de la posición del transductor de ecografía utilizando la ventana


subcostal en un neonato. B. Moviendo el transductor en múltiples ventanas alrededor del corazón, las
imágenes ecocardiográficas bidimensionales aportan una visión tridimensional del corazón por medio de
la «reconstrucción mental» una vez que se haya examinado cada una de las ventanas correspondientes.
C. Las proyecciones del corazón en el eje largo, el eje corto y el eje de las cuatro cámaras contribuyen
a la visualización en detalle de la compleja anatomía cardíaca. Ao, aorta; AD, aurícula derecha;
AI, aurícula izquierda; VD, ventrículo derecho; VI, ventrículo izquierdo. (Por cortesía de American Society
of Echocardiography [B, C].)

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CAPÍTULO 53 Ecocardiografía fetal y neonatal 785

no en el pico sistólico. Se obtienen mediciones de presión basadas TABLA


en el catéter en el pico de la sístole; por lo tanto, los gradientes de 53.2  Indicaciones de la ecocardiografía fetal
presión derivados de la ecografía no son iguales y, por lo general,
superan, a los medidos derivados del catéter. Esta discrepancia no Indicaciones maternas Indicaciones fetales
invalida las mediciones de cada modalidad, pero resalta en cambio
Historia familiar de CC, incluidos hijo Control obstétrico con ecografía
el punto de que son mediciones de gradientes que tienen lugar o embarazo previos con CC anómala
en dos puntos diferentes de la sístole. Históricamente, la decisión Metabolopatías (p. ej., diabetes) Anomalía extracardíaca
clínica se ha basado en información obtenida por derivados del Exposición a teratógenos Anomalía cromosómica
catéter; por lo tanto, los datos derivados ecocardiográficamente Exposición a inhibidores de Arritmia
deben interpretarse a la luz de este hecho. Otros factores que prostaglandina sintetasa Hidropesía
pueden tener impacto en las diferencias entre los gradientes (ibuprofeno) Pliegue nucal del primer
ecocardiográficos y los basados en el catéter son los niveles de Infección (rubéola, virus de trimestre aumentado
sedación, el estado de hidratación, las medicaciones (inótropos) Coxsackie, parvovirus B19) Gestación múltiple y sospecha
y la estrategia ventilatoria. Diagnóstico autoinmunitario (p. ej., de síndrome de transfusión
• Visualización inadecuada de las estructuras. La enfermedad pulmonar síndrome de Sjögren, LES) intergemelar
puede provocar impedancia acústica, limitando la capacidad de Trastorno familiar heredado
visualizar las estructuras. El aire contenido en el tórax producido (síndromes de Marfan
por atrapamiento aéreo, neumotórax o neumopericardio puede y de Noonan)
causar un dramático deterioro en la nitidez de la imagen. Fecundación in vitro
• Señal Doppler inadecuada para medición de velocidad. Los pequeños CC, cardiopatía congénita; LES, lupus eritematoso sistémico.
volúmenes de sangre que viajan a baja velocidad pueden ser difíciles
de identificar con ecocardiografía. Ejemplos son las arterias corona-
rias en el niño prematuro muy pequeño y el flujo venoso pulmonar
en pacientes con enfermedad pulmonar grave, en los cuales el flujo
sanguíneo pulmonar puede estar limitado. La identificación de la más frecuentemente omitidas, con tasas siempre menores que las
anatomía venosa pulmonar y su flujo en niños tratados con ECMO predichas.
también puede ser dificultosa como resultado de la circulación La meta final de la ecocardiografía fetal es la definición precisa
pulmonar reducida. La ecocardiografía transesofágica (ETE) puede de cualquier anomalía anatómica del corazón durante el período
estar indicada en estos pacientes debido a la resolución aumentada prenatal. Una vez establecido un diagnóstico, la meta secundaria
de esta modalidad. de la ecocardiografía fetal, el consejo parental, puede empezar. El
consejo parental completo incluye no solo la discusión de la ano-
malía identificada, sino también el riesgo aumentado de anomalías
Ecocardiografía fetal: objetivos del estudio extracardíacas y cromosómicas (si aplica), la estrategia de manejo y
de imagen los resultados a largo plazo en los que tienen lesión identificada. Los
planes de manejo prenatal precisan discutirse, incluida la legislación
La CC, que se refiere principalmente a malformaciones anatómicas local respecto a la terminación del embarazo. Por último, pueden
cardíacas, constituye una de las anomalías congénitas más comunes. crearse planes de manejo perinatal para aliviar la transición al período
La tasa de incidencia reportada por cada 100 nacidos vivos es cercana posnatal. En el feto con diagnóstico de CC dependiente del conducto
al 1 al final del primer año de vida (Bjornard et al., 2013). El interés arterioso, la detección prenatal ha mostrado mejorar los resultados al
en la detección prenatal de malformaciones congénitas mayores, reducir la acidosis posnatal, la morbilidad y la mortalidad (Tworetzky
incluida la CC, ha florecido en las últimas dos o tres décadas a et al., 2001; Verheijen et al., 2001).
partir de los avances tecnológicos que han mejorado la calidad de
la imagen, y tanto es así que una evaluación anatómica completa, Técnicas de imagen fetales
incluidas las proyecciones de cribado del corazón fetal, puede obte-
nerse en casi todas las mujeres a partir de la semana 18 de gestación La formación cardíaca está completa a las 8 semanas después de la
y muchas en el primer trimestre. Además, las tasas de detección concepción, y la contracción ventricular puede detectarse por ecografía
prenatal han mejorado como consecuencia de la adopción de reco- en ese momento. El momento óptimo para realizar un ecocardiograma
mendaciones publicadas por sociedades obstétricas para la evaluación fetal transabdominal completo es a las 18-20 semanas de gestación;
anatómica completa del feto en el segundo trimestre, incluido el sin embargo, como la resolución ha mejorado, son posibles diagnós-
corazón fetal. La proyección cardíaca de cuatro cámaras se incluyó ticos más precoces y seguros a finales del primer trimestre (Smrcek
en las recomendaciones publicadas en 2004 por el American Ins- et al., 2006).
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titute of Ultrasound in Medicine junto con el American College of De manera similar al ecocardiograma transtorácico pediátrico,
Radiology, el American College of Obstetricians and Gynecologists un ecocardiograma fetal comprende una evaluación de la anato-
y la Society of Radiologists in Ultrasound; sin embargo, no fue hasta mía cardíaca en una serie de planos de imágenes estandarizados.
2013 que los tractos de salida se identificaron como componentes Los componentes de una evaluación completa se enumeran en la
esenciales (American Institute of Ultrasound in Medicine Practice tabla 53.3, aunque no todos podrán visualizarse en cada feto en cada
Guideline, 2013). exploración. Además, algunas lesiones pueden evolucionar in utero.
De manera similar a la ecocardiografía neonatal, la ecocardiografía Las imágenes iniciales establecen la posición fetal in utero (cefálica,
fetal es el pilar de las técnicas de imagen del aparato cardiovascular fe­ podálica, transversa). Una vez que se establecen la izquierda y la
tal. La ecocardiografía fetal se refiere a la evaluación cardiovascular derecha fetal, se confirma la situación abdominal fetal, así como la
completa más que a las limitadas proyecciones obtenidas en el escaneo posición del corazón en el tórax. Aunque infrecuente como conjunto,
anatómico del segundo trimestre. Se recomienda un ecocardiogra­ la CC y las anomalías de lateralidad (síndrome heterotaxia) se hallan
ma fetal a quienes tienen factores de riesgo materno o factores de juntas con frecuencia.
riesgo fetales (tabla 53.2). Sin embargo, la mayoría de las CC se iden- Las demás imágenes siguen un orden menos predecible y frecuen-
tifican en fetos sin factores de riesgo conocidos. A pesar de esta aproxi- temente no secuencial, aceptando la incapacidad de posicionar al feto
mación escalonada, la CC continúa siendo una de las malformaciones en una posición estándar debido al frecuente movimiento durante

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TABLA
53.3  Componentes del ecocardiograma fetal

Vista general Número y posición fetales


Posición estomacal y espacio abdominal
Posición cardíaca
Exploración biométrica Índice cardiotorácico
Diámetro biparietal y perímetro cefálico
Longitud femoral
Perímetro abdominal
Imágenes cardíacas Vista de cuatro cámaras
TSVI
TSVD
Grandes vasos
Vista de tres vasos
Vista bicava
Arco ductal
Arco aórtico
Exploración Doppler Vena cava inferior y superior • Figura 53.8  Proyección de cuatro cámaras de un corazón fetal nor-
mal. Las cuatro cámaras son visibles, con relativa simetría de tamaño
Venas pulmonares
entre ventrículos y aurículas. El ventrículo derecho se identifica por la
Conductos venosos
presencia de la banda moderadora y mayor cantidad de trabeculaciones
Agujero oval
miocárdicas en comparación con el ventrículo izquierdo. La aorta des-
Válvulas auriculoventriculares
cendente se observa directamente por detrás de la aurícula izquierda.
Válvulas semilunares
Conducto arterioso
Arco aórtico transverso
Arteria umbilical
Vena umbilical
Mediciones Diámetro de las válvulas auriculoventriculares
Diámetro de las válvulas semilunares
Tronco de la arteria pulmonar
Aorta ascendente
Ramas de la arteria pulmonar
Arco aórtico transverso
Espesor ventricular
Dimensiones ventriculares en el eje corto
Exploración de Evaluación en modo M de la motilidad parietal
frecuencia y ritmo auricular y ventricular
Evaluación Doppler de los patrones de flujo
auricular y ventricular
• Figura 53.9  Proyección de cuatro cámaras de un corazón fetal con
TSVD, tracto de salida del ventrículo derecho; TSVI, tracto de salida del ventrículo izquierdo. cardiopatía congénita compleja. Hay una gran comunicación interven-
tricular, así como una gran comunicación interauricular de tipo sep-
tum primum. Existe discrepancia de tamaño entre las dos cámaras
ventriculares. Este feto fue diagnosticado de comunicación auriculoven-
tricular completa con desequilibrio.

la exploración. El aparato cardiovascular se evalúa, comenzando por pulsado. Se puede evaluar la insuficiencia y/o la estenosis valvular, así
debajo del diafragma y finalizando en la apertura torácica superior como se puede observar el movimiento valvular. A partir de imágenes
con una serie de planos de imágenes. La proyección de cuatro cámaras 2D, las estructuras pueden medirse y compararse con las normas esta-
(fig. 53.8) es la más importante en la evaluación completa del corazón blecidas para las diferentes edades gestacionales. Una vez realizada
fetal. En esta proyección, pueden valorarse la posición cardíaca, el una completa evaluación de la anatomía cardíaca, se documenta la
tamaño, la frecuencia y el ritmo, y la contractilidad cualitativa. Además, frecuencia cardíaca (fig. 53.10). La frecuencia y el ritmo del corazón
se pueden detectar muchas CC (fig. 53.9). Después de que se haya fetal se evalúan por eventos mecánicos alternativos, específicamente
obtenido la proyección de cuatro cámaras, se dirige la atención a la el movimiento de aurículas y ventrículos o el flujo sanguíneo a través
visualización de los tractos de salida ventricular izquierdo y derecho de las válvulas.
y a la valoración de la concordancia ventriculoarterial. Establecer el
origen del tronco de la arteria pulmonar del ventrículo derecho y la Limitaciones de la ecocardiografía fetal
aorta del ventrículo izquierdo es obligatorio. Por último, se evalúa el
retorno venoso sistémico y pulmonar. Muchas de las mismas limitaciones asociadas con la ecocardiografía
Las estructuras se evalúan en planos de imágenes ortogonales con pediátrica se aplican a la ecocardiografía fetal, incluso la valoración
el propósito de formar una imagen compuesta del corazón, incluida Doppler inadecuada para medir la velocidad y la visualización limitada
cualquier malformación identificada. Además de obtener imágenes de las estructuras cardíacas. Además, existe un número de limitaciones
nítidas de cada estructura, se evalúa el flujo mediante Doppler color y propias de la ecocardiografía fetal, incluidas:

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CAPÍTULO 53 Ecocardiografía fetal y neonatal 787

• Figura 53.11  Imagen de Doppler color transesofágica obtenida en


• Figura 53.10  Frecuencia cardíaca fetal documentada mediante eco- el quirófano antes del cierre quirúrgico de una comunicación interven-
grafía Doppler en la válvula aórtica. Se mide el tiempo entre los latidos tricular membranosa moderada. La señal en color es azul, lo que indica
sucesivos y se calcula una frecuencia cardíaca por minuto. flujo que se aleja del transductor, en este caso de izquierda a derecha.
AI, aurícula izquierda; CIV, comunicación interventricular; VD, ventrículo
derecho; VI, ventrículo izquierdo.

• Fisiología intrauterina. La circulación fetal descarta la exclusión de


persistencia de conducto arterioso de manera posnatal. Además, es
difícil o imposible excluir defectos del septum secundum auricular los niños. Tecnología similar permitió el desarrollo de ETE neo-
(CIA) debido al requerimiento fetal de un agujero oval permeable. natal, en el cual un transductor puede introducirse en el esófago,
La presencia de un flujo preferencial derecha-izquierda a través del y con la tecnología disponible se expande el rango de tamaño para
CAP puede convertir la valoración de coartación de aorta en un ETE donde niños prematuros con pesos apenas por encima de 1 kg
desafío a menos que exista hipoplasia grave del arco aórtico. pueden estudiarse con seguridad. La ETE es útil para distinguir
• Limitaciones de la imagen. Mientras que existen algunas ventajas en estructuras en el mediastino posterior, como las venas pulmonares,
la imagen fetal, como poder utilizar un número ilimitado de planos, y sortear impedimentos acústicos de la superficie, como aire y hueso
las desventajas potenciales incluyen la calcificación evolutiva de (Randolph et al., 2002). Y, lo más importante, la ETE ha permitido
estructuras óseas, la edad gestacional precoz cuando las estructuras obtener imágenes durante procedimientos intervencionistas en
cardíacas se encuentran en el límite inferior de resolución, y las quirófano o laboratorio de hemodinámica (fig. 53.11). Esto elimina
anomalías no cardíacas que pueden complicar la comprensión de la necesidad de colocar un transductor de manera directa en el tórax
la anatomía y/o la fisiología cardíaca fetal (algunos ejemplos son o el abdomen, por lo que se evita así la potencial contaminación
la hernia diafragmática y la malformación adenomatoide quística del campo quirúrgico. Los procedimientos intervencionistas pueden
congénita o la malformación congénita de la vía área pulmonar). dirigirse por ETE, arrojando una respuesta inmediata al médico
• Hábito corporal materno. La prevalencia de obesidad en EE. UU. intervencionista, y es un medio validado para mejorar los resultados
es una epidemia. Esto ha causado una población cada vez mayor generales.
de mujeres embarazadas con sobrepeso. La obesidad dificulta la
obtención de imágenes cardíacas fetales por la distancia y la masa
incrementadas entre el corazón fetal y el transductor de eco que Ecocardiografía intracardíaca
reducen la resolución de la imagen. Recientemente, la tecnología del transductor de ecografía se ha incor-
• Evolución en el tiempo. La predicción del grado de cianosis posnatal porado a la punta de catéteres, permitiendo la obtención de imágenes
causado por obstrucción del tracto de salida pulmonar (p. ej., tetra- intracardíacas (Hijazi et al., 2009). Esto se utiliza principalmente en
logía de Fallot) puede ser un desafío, dada la elevación normal en el laboratorio de hemodinámica durante procedimientos del cierre
la presión arterial pulmonar en el feto. Además, la restricción en el percutáneo de CIA con dispositivo (fig. 53.12). Aunque estos caté-
tabique auricular (p. ej., síndrome del corazón izquierdo hipoplásico teres aportan una modalidad de imagen adicional, el tamaño de los
y dextrotransposición de las grandes arterias) y la obstrucción en
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catéteres (8 French) excluye su utilización en venas femorales de neo-


el contexto de retorno venoso pulmonar total anómalo pueden ser natos y niños pequeños.
difíciles de predecir. Los especialistas en eco fetal han desarrollado
herramientas y técnicas (p. ej., test de hiperoxigenación materna)
que han conseguido mejoras en nuestra capacidad para predecir la Ecocardiografía tridimensional
morbilidad posnatal temprana.
La integración de datos de imágenes multiplanares tridimensionales
(3D) en tiempo real ha sido un objetivo de la ecocardiografía. Los
Otras modalidades de estudios de imagen primeros métodos requerían adquisición de datos que luego requerían
cardiovasculares traducción de la imagen 3D fuera de línea. En los últimos años están
disponibles sistemas capaces de mostrar imágenes ecocardiográficas 3D
Ecocardiografía transesofágica «en directo» (fig. 53.13). Esto ha conseguido que seamos capaces de
interpretar los datos mientras se están obteniendo, lo que hace posible
Los avances tecnológicos en la miniaturización han llevado al desa- una visualización en tiempo real desde la cabecera. La ecocardiografía
rrollo de transductores diminutos que permiten que el ecocardio- 3D permite una identificación aumentada de las relaciones espaciales
grama transtorácico puede realizarse hasta en el más prematuro de y las malformaciones estructurales (Marx y Su, 2007). La tecnología

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• Figura 53.12  Imágenes de lado a lado bidimensional y Doppler color


de una comunicación interauricular de tipo septum secundum obtenidas
por ecocardiografía intracardíaca. La señal en color es roja y laminar, lo
que indica baja velocidad y flujo izquierda-derecha a través de la comu-
nicación interauricular. La aurícula derecha está dilatada en comparación • Figura 53.13  Imagen ecocardiográfica tridimensional de una válvula
con la izquierda debido a la carga de volumen en el corazón derecho mitral patológica. Utilizando esta técnica, la visión obtenida de la posi-
causada por el cortocircuito. AD, aurícula derecha; AI, aurícula izquierda; ción mitral en la cavidad ventricular izquierda permite una comprensión
CIA, comunicación interauricular. detallada de la naturaleza de la anomalía. En este caso, la válvula mitral
se ve en corte transversal, desde el eje corto, asomando en la cavidad
ventricular izquierda. El orificio mitral es hipoplásico, lo que provoca
una obstrucción en el tracto de entrada. VI, ventrículo izquierdo; VM,
válvula mitral.

ecocardiográfica 3D se ha miniaturizado de tal manera que hoy está Tomografía computarizada y resonancia
disponible en tamaños del de un transductor de ETE adulto. Esto
permite que los beneficios de la ETE (mejor resolución de imagen
magnética
y facilidad de adquisición de imágenes durante procedimientos) se Mientras que la ecocardiografía continúa siendo la técnica de referencia
combinen con los datos mejorados disponibles en las imágenes 3D. para el diagnóstico de CC, la resonancia magnética y la tomografía
En un futuro previsible, la ETE 3D estará disponible en transductores computarizada han incrementado su utilidad como modalidades
pequeños y fáciles para el estudio de recién nacidos y niños pequeños. diagnósticas coadyuvantes, especialmente en casos donde existe preo-
La ecocardiografía 3D continuará evolucionando y promete conver- cupación respecto a la vascularización extracardíaca (p. ej., patología
tirse en una modalidad importante mientras los avances tecnológicos de ramas de la arteria pulmonar y anomalías del arco aórtico) (Sigal-
continúen. Cinqualbre et al., 2011).

Resumen
La evaluación ecocardiográfica se ha vuelto inseparable del manejo afectan, y son afectadas, por el estado cardíaco. Además, la comprensión
efectivo del neonato críticamente enfermo. La capacidad de brindar una de la problemática cardíaca neonatal (p. ej., anomalías anatómicas,
evaluación no invasiva y en tiempo real en la cabecera no solo ayuda a alteraciones del ritmo, función miocárdica) puede realizarse solamente
la identificación de CC, sino también, con igual importancia, facilita la a través de la ecocardiografía fetal. Los resultados neonatales son, por
exhaustiva comprensión del estado fisiológico actual. La toma de deci- lo tanto, dependientes de la precisión diagnóstica de la ecocardiografía
siones farmacológicas, ventilatorias y quirúrgicas está necesariamente fetal y posnatal, y la aplicación de esta información al cuidado general
basada en la claridad que aporta y en cómo estas estrategias terapéuticas multidisciplinario del recién nacido.

Lecturas recomendadas Marx GR, Su X. Three-dimensional echocardiography in congenital heart


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CAPÍTULO 53 Ecocardiografía fetal y neonatal 789

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CAPÍTULO 53 Ecocardiografía fetal y neonatal 789.e1

Puntos clave
• La ecocardiografía se utiliza para evaluar la anatomía y la fisio-
logía cardíacas.
• Una interpretación apropiada requiere comprender sus limita-
ciones.
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54
Conducto arterioso persistente
en recién nacidos prematuros
RONALD I. CLYMAN

PUNTOS CLAVE nacimiento, la constricción del conducto arterioso y la obliteración


de su luz separan las circulaciones pulmonar y sistémica. En recién
• Los signos clínicos de un conducto arterioso persistente (CAP) aparecen nacidos a término, la obliteración del conducto arterioso se lleva a cabo
por lo general después de los signos ecocardiográficos y están a través de un proceso de vasoconstricción y remodelado anatómico.
relacionados con el grado de cortocircuito (shunt) ductal de izquierda En los prematuros, suele fracasar el cierre del conducto arterioso.
a derecha, y se asocian con los cambios del flujo sanguíneo en los Las consecuencias clínicas de un conducto arterioso persistente (CAP)
pulmones, el cerebro, los riñones y el intestino. se relacionan con el grado del cortocircuito ductal izquierda-derecha y
• Los factores conocidos que tienen un papel prominente en la regulación con el cambio asociado en el flujo sanguíneo hacia los pulmones, los
de la persistencia ductal son los que promueven la vasoconstricción riñones y el intestino.
(oxígeno, endotelina, canales de calcio, catecolaminas y cinasa Rho) y
los que se oponen a ella (presión intraluminal, prostaglandinas, óxido
nítrico, monóxido de carbono, canales de potasio, y monofosfato de Diagnóstico
adenosina cíclico y monofosfato de guanosina).
• El cierre del conducto arterioso ocurre en dos fases: 1) cierre «funcional» La resonancia magnética en contraste de fase ofrece las mediciones más
de la luz por constricción del músculo liso, en las primeras horas precisas del volumen de cortocircuito ductal, y los efectos de un CAP en
después del nacimiento, y 2) oclusión «anatómica» de la luz a lo largo los volúmenes de flujo sanguíneo ventricular y sistémico (Broadhouse
de los próximos días, debido a aumento del espesor nuevo de la íntima y et al., 2014). Desafortunadamente, estas mediciones son de difícil
pérdida de células musculares lisas de la media muscular interna. obtención en recién nacidos prematuros extremos enfermos. Como
• El mecanismo más importante que impide la constricción del conducto resultado, se ha empleado la ecocardiografía bidimensional y Doppler
en prematuros después del nacimiento es su sensibilidad aumentada color para mapeo de flujo como técnica de referencia para la valoración
a los efectos vasodilatadores de prostaglandina E2. Como resultado, los de la magnitud y dirección del cortocircuito en CAP. Un diámetro
inhibidores de la producción de prostaglandina (p. ej., indometacina, ductal ≥ 1,5 mm (o > 50% del diámetro de la arteria pulmonar
ibuprofeno, paracetamol) son usualmente efectivos para promover el izquierda), una razón aurícula izquierda/raíz aórtica (AI/RAo) ≥ 1,5,
cierre ductal en recién nacidos prematuros. la reversión del flujo anterógrado en aorta descendente durante la diás-
• La ligadura quirúrgica precoz, a la vez que elimina los efectos perjudiciales tole y la velocidad de flujo en fin de diástole en la arteria pulmonar
del CAP en el desarrollo pulmonar, puede crear su propio conjunto izquierda ≥ 0,2 m/s son signos consistentes con un cortocircuito ductal
de problemas en el recién nacido prematuro que contrarresta dichos moderado a grave (tabla 54.1) (El Hajjar et al., 2005). Desafortuna-
beneficios (p. ej., hipotensión posligadura, displasia broncopulmonar, damente, la reproducibilidad interobservador de todos los parámetros
parálisis de cuerdas vocales, trastornos del neurodesarrollo). ecocardiográficos es relativamente baja (Schwarz et al., 2016).
• A pesar de que pueda haber un consenso general sobre la eficacia de la
Los signos clínicos de un CAP (soplo sistólico, choque de punta
indometacina en el tratamiento del CAP, preguntas respecto a la dosis
hiperdinámico, pulsos saltones, presión de pulso amplia y/o empeo-
apropiada, la duración del tratamiento, el momento óptimo y los criterios
terapéuticos aún son controvertidas.
ramiento del estado respiratorio) aparecen usualmente después de
• Aunque un CAP moderado o grave aumente el flujo sanguíneo pulmonar los signos ecocardiográficos y son menos sensibles para determinar
y produzca edema, y disminuya la presión arterial, no está claro qué el grado de cortocircuito izquierda-derecha. Ciertos signos, como el
es preferible: 1) cerrar el CAP (quirúrgica o farmacológicamente), soplo continuo o el choque de punta ventricular hiperdinámico, son
o 2) manejar el edema pulmonar y la hipotensión por otros medios, relativamente específicos para el CAP, pero carecen de sensibilidad;
mientras se espera el cierre ductal espontáneo. por el contrario, el empeoramiento del estado respiratorio, aunque
• Se precisa una mayor investigación para determinar qué recién nacidos sensible, es un marcador relativamente inespecífico para el CAP. La
prematuros se beneficiarían del cierre ductal y cuáles estarían mejor sin taquicardia no es un indicador útil o confiable de CAP en recién
tratamiento. nacidos prematuros. Recién nacidos con grandes cortocircuitos
izquierda-derecha pueden presentar evidencia de cardiomegalia y
aumento en la trama arterial pulmonar en su radiografía de tórax;
sin embargo, por lo general, la radiografía de tórax y el electrocardio-

E
l conducto arterioso representa la persistencia de la porción grama no son de utilidad en el diagnóstico de CAP. Aunque unas altas
terminal del sexto arco branquial. Durante la vida fetal, el concentraciones plasmáticas de péptido natriurético cerebral (BNP)
conducto arterioso sirve para desviar sangre de los pulmones y pro-BNP N-terminal (NT-pro-BNP) se han correlacionado con
llenos de fluido hacia la aorta descendente y la placenta. Después del la presencia de un cortocircuito por CAP de tamaño moderado, los

790 © 2019. Elsevier España, S.L.U. Reservados todos los derechos

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CAPÍTULO 54 Conducto arterioso persistente en recién nacidos prematuros 791

TABLA  Tasas de cierre espontáneo del conducto pués del nacimiento por constricción del músculo liso, y 2) oclusión
54.1 arterioso en neonatos que sobreviven a las 72 h «anatómica» de la luz a lo largo de los días siguientes debido a un
aumento del espesor nuevo de la íntima y pérdida de células musculares
Cerrado Cerrado Cerrado lisas de la media muscular interna.
Gestación el día 4 (%) el día 7 (%) al alta (%)
Término 100 100 100 Equilibrio entre vasoconstricción
≥ 30 semanas 90 98 98 y vasorrelajación
28-29 semanas 45 67 94 El CAP está determinado por el equilibrio entre fuerzas dilatadoras y
26-27 semanas 16 32 78
constrictoras. Los factores conocidos que tienen un papel prominente
en la regulación del conducto arterioso involucran a quienes pro-
24-25 semanas 4 13 54 mueven la vasoconstricción (oxígeno, endotelina, canales de calcio,
catecolaminas y cinasa Rho) y a quienes se oponen a ella (presión
intraluminal, prostaglandinas [PG], óxido nítrico [NO], monóxido
cambios en las concentraciones de BNP y NT-pro-BNP tienen escasa de carbono, canales de potasio y monofosfato de adenosina cíclico
sensibilidad y especificidad para predecir aumentos o descensos en [AMPc] y monofosfato de guanosina cíclico [GMPc]). La importancia
la magnitud del cortocircuito y no pueden emplearse como reem- relativa de cada uno de estos factores depende del ambiente intra- y
plazo de la ecocardiografía en el manejo de cortocircuitos por CAP extrauterino, el grado de maduración del conducto, y los antecedentes
(Chen et al., 2010). Aunque en el pasado haya habido poco consenso genéticos y especies estudiadas.
acerca de qué es lo que constituye un CAP con importancia clínica,
estudios recientes han demostrado que, aunque los cortocircuitos Regulación intrauterina
moderados a graves del CAP se asocian con morbilidades neonatales El conducto fetal normalmente tiene un elevado nivel de tono intrínse-
significativas, los cortocircuitos pequeños presentan resultados simi- co (Kajino et al., 2001). El tono intrínseco se debe a mecanismos que
lares a los que no tienen cortocircuito por CAP (Sellmer et al., 2013; son tanto dependientes como independientes del calcio extracelular
Schena et al., 2015). Mientras que la magnitud del cortocircuito por (Kajino et al., 2001). Las proteínas contráctiles (miosina del músculo
CAP tiene un papel importante en generar morbilidad neonatal, liso, calponina y caldesmona) son más diferenciadas en el conducto
otros factores de igual importancia son la duración de exposición que en la aorta y la arteria pulmonar adyacente (Sakurai et al., 1996).
al cortocircuito y la capacidad del recién nacido de compensar la Además, el conducto arterioso fetal es más sensible a los efectos
presencia del cortocircuito. contráctiles del calcio que la aorta y la arteria pulmonar (Crichton
et al., 1997). Esto puede deberse, en parte, a la actividad de la cinasa
Incidencia Rho en el conducto (Clyman et al., 2007). La endotelina 1 también
parece desempeñar un papel en la producción de tono basal elevado
El cierre funcional del conducto ocurre casi en el 50% de los recién del conducto arterioso fetal (Coceani et al., 1999).
nacidos a término a las 24 h, en el 90% a las 48 h, y casi en el 100% La relativa importancia de estos factores que se oponen a la cons-
a las 72 h después del nacimiento (Reller et al., 1993). La tasa de tricción del conducto arterioso intraútero está mejor definida que
cierre del conducto está demorada en recién nacidos prematuros; sin la de los factores que promueven la constricción. La elevada pre­
embargo, esencialmente todos los recién nacidos prematuros que tienen sión vascular en la luz del conducto (debido a la constricción del lecho
30 semanas de gestación o más (incluidos los que padecen síndrome de vascular pulmonar) desempeña un papel importante en oponerse a la
dificultad respiratoria) cerrarán su conducto al cuarto día después del constricción ductal (Clyman et al., 1989). El conducto fetal también
nacimiento. Los recién nacidos con menos de 30 semanas de gestación produce varios vasodilatadores que mantienen la persistencia del con-
presentan una incidencia del 65% de CAP más allá del día 4. Incluso ducto. Las PG vasodilatadoras parecen ser vasodilatadores dominantes
entre los recién nacidos más inmaduros (≤ 27 semanas de gestación), que se oponen a la constricción del conducto durante la última parte
el cierre espontáneo puede ocurrir durante el período neonatal. Sin de la gestación. Inhibidores de la síntesis de PG constriñen el conducto
embargo, cuando esto ocurre, usualmente sucede tardíamente duran- fetal tanto in vitro como in vivo. La prostaglandina E2 (PGE2) es la PG
te la hospitalización en la unidad de cuidados intensivos neonatales más potente producida por el conducto (Clyman et al., 1978; Coceani
(UCIN) (la edad promedio es 61 ± 37 días) (Reller et al., 1993; Koch et al., 1978). El músculo liso del conducto es extraordinariamente
et al., 2006; Nemerofsky et al., 2008; Herrman et al., 2009; Rolland sensible a los efectos vasodilatadores de la PGE2. La PGE2 produce
et al., 2015). Entre los recién nacidos prematuros dados de alta del relajación en el conducto al interactuar con los receptores de PGE
hospital con CAP, el 86% conseguirán el cierre del CAP al año de EP2, EP3 y EP4. En el conducto, los tres receptores EP participan en
edad. Los restantes requerirán observación continua o cierre con espiral la vasodilatación al activar la adenilato ciclasa (Bouayad et al., 2001).
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(Herrman et al., 2009) (v. tabla 54.1). Las concentraciones elevadas de AMPc inhiben la sensibilidad al calcio
Factores como la administración de surfactante, la infección, un de las proteínas contráctiles. Los inhibidores de la fosfodiesterasa (la
bajo peso para la edad gestacional y la administración excesiva de fluido enzima que degrada el AMPc) relajan el conducto intrauterinamente
aumentan la probabilidad de desarrollar CAP sintomático (Cotton (Toyoshima et al., 2006). Los bajos niveles de fosfodiesterasas en
et al., 1981; Alpan et al., 1995; Gonzalez et al., 1996; Bell et al., el conducto fetal explican su elevada sensibilidad a la PGE2 (Liu
2001; del Moral et al., 2007; Rakza et al., 2007). Sin embargo, recién et al., 2008).
nacidos no caucásicos y recién nacidos que reciben glucocorticoides Ambas isoformas de la enzima responsable de sintetizar PG
prenatales presentan un riesgo reducido de CAP (Clyman et al., 1981; (ciclooxigenasa 1 [COX-1] y COX-2) se expresan en el conducto
Furzan et al., 1985; Cotton et al., 1991; Chorne et al., 2007; Durrme- fetal. En el feto de ratón, la COX-2 parece ser la isoforma de COX
yer et al., 2010; Waleh et al., 2015). responsable de producir las PG que regulan el conducto (Loftin
et al., 2001), mientras que en el feto de carnero tanto la COX-1
Regulación del conducto arterioso persistente como la COX-2 desempeñan un papel en la persistencia del con-
ducto (Takahashi et al., 2000). Además de las PG que se producen
En el recién nacido a término, el cierre del conducto arterioso ocurre en el conducto, el conducto fetal está también bajo la influencia
en dos fases: 1) cierre «funcional» de la luz en las primeras horas des- de las concentraciones circulares de PGE2. Las concentraciones

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792 PA RT E XI Aparato cardiovascular

circulantes de PGE2 parecen ser de origen placentario y están • CUADRO 54.1  Vías afectadas en la inhibición
elevadas en el feto debido al reducido aclaramiento pulmonar de
las PG circulantes producto del bajo flujo sanguíneo pulmonar fetal
crónica de la producción
(Clyman et al., 1981). intrauterina de prostaglandinas
El NO, formado principalmente por la óxido nítrico sintasa y señalizaciones que contribuyen
endotelial (NOSe), es producido por el conducto arterioso fetal y al conducto arterioso persistente
parece desempeñar un papel importante en mantener la persistencia tras el nacimiento
del conducto en fetos de roedores en la gestación temprana (Momma
et al., 1999). La PGE2 y el NO parecen estar preferencialmente aco- Vías involucradas en la contracción del músculo liso
plados para la compensación recíproca, ya que la inhibición de la • Expresión disminuida de genes de canales de CaL y K+ (CaLalpha1c,
COX aumenta el NO (Sodini et al., 2008). Aunque el NO se produce CaLbeta2, Kir6.1 y Kv1.5) que facilitan la entrada de calcio al citoplasma
también en el conducto de especies de mayor tamaño, su importancia durante la constricción inducida por oxígeno
en mantener la persistencia del conducto bajo condiciones intrauterinas • Producción aumentada de óxido nítrico
normales no se ha demostrado concluyentemente (v. más adelante el • Expresión disminuida de fosfodiesterasa. Las fosfodiesterasas disminuyen la
papel del NO en fetos expuestos a tocólisis con indometacina y recién sensibilidad del conducto a vasodilatadores dependientes de AMPc o GMPc
nacidos prematuros). • Expresión disminuida de miocardina, un importante coactivador
transcripcional que regula la producción de proteínas contráctiles de células
El monóxido de carbono relaja el conducto arterioso. Bajo con-
del músculo liso
diciones fisiológicas, la cantidad de monóxido de carbono producido
• Activación de miocardina por Wnt/β-catenina disminuida
por el conducto no parece afectar al tono ductal; sin embargo, en
circunstancias donde su síntesis está aumentada, por ejemplo, en la Vías involucradas en la formación de cojinetes nuevos
endotoxemia, puede ejercer una influencia relajadora en el conducto de la íntima
(Coceani et al., 1997). El sulfuro de hidrógeno también se ha iden- • Producción disminuida de ácido hialurónico, que es importante en la
tificado como otro factor endógeno que inhibe el tono ductal fetal formación de cojinetes nuevos de la íntima
(Baragatti et al., 2013). • Disminución de la migración de músculo liso a los cojinetes nuevos de
Aunque a corto plazo la inhibición farmacológica de la síntesis y la íntima dependiente de ácido hialurónico y de proteína de intercambio
señalización de PG produce constricción ductal intrauterina (Mom- activada por AMPc (Epac)
ma et al., 2005), la inhibición crónica de la síntesis y señalización • Disminución de la fragmentación de fibras elásticas y aumento de la
de PG produce el efecto opuesto: un conducto persistente intra­ formación de fibras elásticas por las células de músculo liso del conducto
útero y un conducto persistente después del nacimiento (Nguyen
et al., 1997; Loftin et al., 2001). Está claro ahora que, además de su Vías adicionales involucradas cuando el conducto arterioso
papel manteniendo la permeabilidad del conducto fetal, la PGE2 es depende de los vasos vasculares para el aporte de oxígeno
esencial para la inducción de vías necesarias para el cierre posnatal. a la pared externa del vaso (p. ej., fetos mayores de 28 semanas
Bloquear la actividad de la PGE2 al interrumpir los receptores de PG de gestación)
EP4 disminuye la expresión de una serie de genes que contrapesan • Colapso de los vasos vasculares en la muscular media
la constricción ductal posnatal inducida por oxígeno (v. «Regulación • Hipoxia isquémica de las células de músculo liso en la muscular media
intrauterina»). Específicamente, la PGE2 aumenta la expresión de • Producción aumentada de óxido nítrico
• Muerte celular de músculo liso
genes de canales L de calcio (CaL) y potasio (K +) (CaLalpha1c,
CaLbeta2, Kir6.1, y Kv1.5), que regulan la entrada de calcio, sin AMPc, monofosfato de adenosina cíclico; CaL, canales L de calcio; GMPc, monofosfato de guanosina
afectar genes que regulan la sensibilización al calcio (genes asociados cíclico; K+, ion potasio.
a cinasa Rho). La inhibición crónica de la síntesis de PG disminuye
la expresión de genes de canales de CaL y K+. La expresión de fos-
fodiesterasa, que disminuye la sensibilidad del conducto a vasodila-
tadores dependientes de AMPc o GMPc, está también disminuida Regulación posnatal
por inhibición crónica de COX (Reese et al., 2009). La inhibición Existen una serie de eventos que promueven la constricción ductal en
de la señalización de PG puede también contribuir al cierre demo- el recién nacido a término después del parto: 1) un incremento en la
rado al inhibir la producción de ácido hialurónico y la formación Pao2; 2) una disminución de la presión arterial en la luz ductal (debido
del cojinete de la íntima en el conducto (Yokoyama et al., 2006). a la disminución de la resistencia vascular pulmonar posnatal); 3) una
Los cojinetes de la íntima desempeñan un papel importante en el disminución de la PGE2 circulante (debido a la pérdida de producción
cierre permanente del conducto después del nacimiento (v. «Cierre placentaria de PG y al aumento de remoción de PG por parte del
anatómico: cambios histológicos»). La PGE2, actuando a través pulmón), y 4) una disminución en el número de receptores PGE2 en
de su receptor EP4, ha demostrado afectar el espesor de la íntima, la pared del conducto. Aunque el conducto del recién nacido continúe
elastogenia, y genes relacionados con la contracción a través de vías siendo sensible a los efectos vasodilatadores del NO, pierde su capaci-
que involucran el AMPc, la AMPc proteína cinasa A, la proteína de dad de responder a PGE2 (Abrams et al., 1995). Todos estos factores
intercambio activada por AMPc, la fosfolipasa C y la Wnt/β-catenina promueven la constricción del conducto después del nacimiento.
(Yokoyama, 2015). El incremento posnatal de la Pao2 desempeña un importante papel
Es interesante destacar que la inhibición farmacológica de la síntesis en la constricción del conducto. La constricción inducida por oxígeno
de PG en el embarazo humano está también asociada con una inciden- ocurre en presencia de inhibidores de señalización de PG, NO y endo-
cia aumentada de CAP después del nacimiento (Norton et al., 1993). telina. Esto sugiere que estas sustancias vasoactivas no son esenciales
Sin embargo, esto parece deberse a la capacidad de la indometacina para la constricción normóxica. En la mayoría de las especies, el oxígeno
de producir constricción intrauterina del conducto. La constricción parece constreñir el conducto arterioso tanto a través de mecanismos
intrauterina produce hipoxia isquémica, aumento de la producción de que involucran despolarización del músculo liso y mecanismos que son
NO y muerte celular de músculo liso en la pared ductal (v. «Relación independientes de la despolarización de la membrana (Roulet et al.,
entre vasoconstricción y cierre anatómico»). Estos factores impiden 1981). El oxígeno despolariza las células de músculo liso del conducto
que el conducto se contraiga después del nacimiento y lo vuelven resis- al inhibir los canales de K+ (Michelakis et al., 2000). Después de la
tente a los efectos constrictores de la indometacina posnatal (Clyman despolarización de la membrana, el calcio ingresa al músculo liso del
et al., 2001; Goldbarg et al., 2002) (cuadro 54.1). conducto a través de canales de calcio dependientes del voltaje de tipo L

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CAPÍTULO 54 Conducto arterioso persistente en recién nacidos prematuros 793

(Clyman et al., 2007) y de tipo T (Yokoyama et al., 2006). Varios • CUADRO 54.2  Factores que afectan
canales de K+ sensibles al oxígeno se han hallado en el conducto fetal
(incluyendo Kv1.5 y Kv2.1). Estos varían con la especie y la edad
a la constricción del conducto
gestacional, y pueden dar cuenta de la diferente sensibilidad del con- arterioso tras el nacimiento:
ducto al oxígeno (Hayama et al., 2006; Wu et al., 2007). El oxígeno comparación de conductos
parece tener también un efecto directo en los canales de CaL (Thebaud arteriosos en recién nacidos
et al., 2008) y en los canales de calcio operados por depósito (Hong prematuros y a término
et al., 2006). Además, el oxígeno puede aumentar la sensibilidad del
músculo liso al calcio proactivación de vías mediadas por cinasa Rho Constricción del conducto arterioso tras el nacimiento: conducto arterioso
(Hong et al., 2006). de prematuros comparado con el de recién nacidos a término:
Se han identificado sensores específicos de oxígeno en la pared del • Isoformas inmaduras de músculo liso y tono intrínseco disminuido
conducto; sin embargo, su importancia relativa no se ha dilucidado • Entrada disminuida de calcio a través de los canales L de calcio
debido a variaciones de especies además de la interacción de múlti- • Actividad disminuida de cinasa Rho
ples vías de regulación. En algunas especies, un sensor de oxígeno • Canales de potasio KCa aumentados (que no son regulados por oxígeno)
• Canales de potasio Kv disminuidos (que son regulados por oxígeno)
mitocondrial en las células de músculo liso del conducto regula los
• Producción disminuida de endotelina
canales de K+ y calcio, así como la actividad de la cinasa Rho a través
• Aclaramiento pulmonar de prostaglandina E2 circulante disminuido
de la producción de moléculas de oxígeno reactivas, como peróxido de • Número de receptores de prostaglandina (EP4) posnatal aumentado
hidrógeno (H2O2). La elevada Pao2 causa fisión mitocondrial, lo que • Acoplamiento de EP4 con adenilato ciclasa aumentado y producción
aumenta la producción de H2O2 (Hong et al., 2013; Dunham-Snary aumentada de AMPc
et al., 2016). En contraste, en otras especies, H2O2 actúa como un • Degradación de AMPc por fosfodiesterasas disminuida
vasodilatador (Clyman et al., 1989) o como ambos, vasodilatador
y vasoconstrictor (dependiendo de su concentración) (Van der Sterren AMPc, monofosfato de adenosina cíclico; KCa, canal de potasio activado por calcio; Kv, canal de
potasio iónico sensible al oxígeno.
et al., 2014).
La constricción inducida por oxígeno puede también involucrar
una hemoproteína del citocromo P450 (Baragatti et al., 2011; Ciofini
et al., 2013). Esta es una observación intrigante, ya que los recién calcio de tipo L parece estar alterado en el conducto inmaduro (espe-
nacidos prematuros presentan una incidencia aumentada de CAP cialmente bajo condiciones hipóxicas) (Clyman et al., 2007; Thebaud
cuando son tratados con inhibidores del citocromo P450 (Cotton et al., 2008). Los canales de potasio que promueven la relajación del
et al., 2013). El oxígeno también activa el receptor del factor de creci- conducto también se modifican durante la gestación, cambiando de
miento epidérmico (EGFR) en las células de músculo liso del conducto, canales KCa (los cuales no son regulados por la presión de oxígeno)
y la inhibición del EGFR atenúa la constricción inducida por oxígeno. a canales KV (que pueden ser inhibidos por concentraciones elevadas de
La vasoconstricción por el EGFR parece estar mediada por tirosina oxígeno). La expresión y la función reducida de los canales KV sensores
cinasas y fosfatasas (Hong et al., 2014). de oxígeno putativos parecen contribuir a la persistencia del conducto
El oxígeno también aumenta la producción de isoprostanos que en conejos, ovejas, babuinos, ratones y polluelos prematuros (Thebaud
pueden modular la constricción posnatal (Chen et al., 2012), así como et al., 2004; Cogolludo et al., 2009; Waleh et al., 2009). En contras-
un potente vasoconstrictor, endotelina 1 (Coceani et al., 1989). El te, una disminución en la expresión de los canales KV ocurre con la
papel de la endotelina 1 en el cierre posnatal del conducto es aún incier- gestación avanzada en ratas, lo que sugiere que en algunas especies el
to debido a las marcadas variaciones entre especies en su contribución cierre del conducto arterioso puede ocurrir al eliminar los canales KV
con la constricción ductal inducida por oxígeno. La estimulación del (Wu et al., 2007).
receptor de endotelina es responsable del 44% de la constricción Los recién nacidos prematuros tienen concentraciones circulantes
inducida por oxígeno en ratas, pero solo del 13% en conejos. En el con- elevadas de PGE2, lo cual puede desempeñar un papel significativo en
ducto humano, la inhibición de la producción de endotelina no inhibe mantener el conducto permeable durante los primeros días después del
la constricción inducida por oxígeno (Fineman et al., 1998; Coceani nacimiento. Esto se debe a la capacidad disminuida del pulmón pre-
et al., 1999; Michelakis et al., 2000; Shen et al., 2002). El incremento maturo de aclarar la PGE2 circulante (Clyman et al., 1981). Además,
posnatal de la PaO2 tiene también profundos efectos moduladores en durante episodios de bacteriemia y enterocolitis necrosante (ECN), las
otros sistemas vasoactivos (Smith, 1998). Presiones de oxígeno elevadas concentraciones circulantes de PGE2 alcanzan rango farmacológico y
pueden aumentar la respuesta contráctil del conducto a mediadores con frecuencia se asocian a reapertura del conducto arterioso (González
neurales (Ikeda et al., 1973) y disminuir la formación de PG vasodilata- et al., 1996).
doras (Kajino et al., 2001). Aunque los efectos contráctiles del oxígeno El mecanismo más importante que previene que el conducto del
desempeñan un papel importante en la constricción ductal posnatal, prematuro se contraiga después del nacimiento es su aumentada sensi-
puede que no sean esenciales para el cierre del conducto posnatal. Por bilidad a los efectos vasodilatadores de la PGE2. La sensibilidad aumen-
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ejemplo, ratones con déficit de receptor de endotelina A presentan tada a la PGE2 se debe tanto a la incrementada producción de AMPc
una constricción del conducto inducida por oxígeno disminuida; sin (por acoplamiento aumentado del receptor con adenilato ciclasa) como
embargo, su conducto se cierra con normalidad después del nacimiento a la degradación disminuida de AMPc por la fosfodiesterasa (Waleh
(Coceani et al., 1999). et al., 2004; Liu et al., 2008). Como resultado, los inhibidores de la
producción de PG (p. ej., indometacina, ibuprofeno, ácido mefenámico
Regulación del desarrollo y paracetamol) son agentes usualmente efectivos en promover el cierre
En contraste con el conducto a término, el conducto prematuro es del conducto en recién nacidos prematuros.
menos propenso a constreñirse después del nacimiento (cuadro 54.2). Los factores responsables de los cambios que tienen lugar con la
Esto se debe a múltiples mecanismos. El tono intrínseco del conducto gestación avanzada se desconocen en la actualidad. La administración
inmaduro extremo (< 70% de gestación) está disminuido comparado prenatal de vitamina A ha demostrado aumentar tanto la respuesta
con el conducto a término (Kajino et al., 2001). Esto puede deberse intracelular de calcio como la respuesta contráctil a oxígeno en los
a la presencia de isoformas inmaduras de miosina en el músculo liso, conductos de prematuros (Wu et al., 2001). Sin embargo, la adminis-
con una capacidad contráctil más débil (Colbert et al., 1996; Saku- tración de vitamina A no mejora la tasa de cierre de conducto en recién
rai et al., 1996), y expresión y actividad de cinasa Rho disminuida nacidos prematuros (Ravishankar et al., 2003). Durante el desarrollo
(Kajimoto et al., 2007). El ingreso de calcio a través de los canales de fetal normal hay incrementos en la concentración de hormonas tiroi-

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794 PA RT E XI Aparato cardiovascular

deas circulantes y cortisol con el avance de la gestación. Las hormonas otros estudios. Existe un creciente cuerpo de evidencia que sugiere
tiroideas pueden desempeñar un papel en la maduración del conducto que los SNP en TFAP2B pueden ser responsables de algunos de los
arterioso, dado que los recién nacidos a término con hipotiroidismo CAP que ocurren en recién nacidos prematuros. TFAP2B únicamente
congénito presentan una incidencia aumentada de CAP que parece se expresa en el músculo liso del conducto; regula otros genes que
responder a la terapia de reemplazo hormonal tiroidea (Guarnieri son importantes en el desarrollo del músculo liso del conducto;
et al., 2008). De manera similar, se halló una menor incidencia de mutaciones en TFAP2B producen CAP en ratones y humanos (Zhao
CAP en recién nacidos prematuros tratados con hormona tiroidea et al., 2001); y polimorfismos de TFAP2B están asociados con CAP
(Osborn et al., 2007). Las concentraciones elevadas de cortisol en el en prematuros (especialmente los no respondedores a indometacina)
feto también fomentan la maduración del conducto al disminuir la (Dagle et al., 2009).
sensibilidad de este a los efectos vasodilatadores de la PGE2 (Clyman
et al., 1981). La administración prenatal de glucocorticoides reduce
significativamente la incidencia de CAP en prematuros humanos y Cierre anatómico: cambios histológicos
animales (Thibeault et al., 1978; Clyman et al., 1981). La adminis- En el recién nacido a término existe engrosamiento de la íntima pro-
tración posnatal de glucocorticoides también reduce la incidencia gresivo y fragmentación de la lámina elástica interna después del parto.
de CAP (Vermont Oxford Network Steroid Study Group, 2001). Mientras la íntima aumenta en tamaño, forma por último cojinetes
Sin embargo, el tratamiento posnatal con glucocorticoides también que ocluyen la ya contraída luz. El aumento del engrosamiento de la
incrementa la incidencia de otras varias morbilidades neonatales íntima se debe a: 1) migración de células de músculo liso desde la mus-
(Watterberg et al., 2004). cular media hacia la íntima, y 2) proliferación de células endoteliales
Aunque las PG desempeñen un papel dominante en el mante- luminales. El proceso de formación de cojinetes de la íntima comienza
nimiento de la persistencia del conducto en prematuros, también con la acumulación de ácido hialurónico (HA) debajo de las células
contribuyen a la persistencia del conducto en recién nacidos a tér- endoteliales luminales. Esto se acompaña de la pérdida de laminina
mino. La indometacina puede producir un grado sustancial de cons- y colágeno IV de la membrana basal de las células endoteliales y la
tricción del conducto incluso entre recién nacidos a término (Takami subsiguiente separación de la lámina elástica interna. Estas propiedades
et al., 2007), así como en recién nacidos con cardiopatías congénitas higroscópicas del HA causan un ingreso de agua y ensanchamiento del
(Takami et al., 2013). espacio subendotelial; esto crea un ambiente adecuado para migración
celular (Boudreau et al., 1991). Las células endoteliales y de músculo
Regulación genética liso del conducto arterioso difieren de las de los vasos adyacentes en su
Tanto las bases genéticas como de especie desempeñan un papel sig- capacidad de formar nuevos cojinetes de la íntima. Células endoteliales
nificativo en determinar la importancia relativa de las vías regulatorias aisladas del conducto arterioso presentan una tasa aumentada de acu-
del conducto. Existe una marcada diferencia de especies entre varias de mulación de HA comparado con las de la aorta o la arteria pulmonar;
estas vías; por ejemplo, la persistencia del conducto es críticamente este aumento parece deberse al factor de crecimiento transformador
dependiente de las PG vasodilatadoras en la mayoría de las especies; sin β (Boudreau et al., 1992), el cual está marcadamente incrementado
embargo, existen notables excepciones en conductos de conejillos de en el conducto después del nacimiento. Las PG, actuando a través
indias, polluelos y emús, donde las PG de derivación local no parecen del receptor EP4, también parecen desempeñar un papel crítico en
desempeñar un papel en su persistencia (Bodach et al., 1980; Agren la producción de HA en el conducto (Yokoyama et al., 2006). La
et al., 2007; Dzialowski et al., 2008). fibronectina y el sulfato de condroitina también desempeñan un papel
Estudios recientes de análisis de transcriptoma de genoma ampliado importante al facilitar la migración de células de músculo liso en el
para evaluar diferencias en la expresión de genes entre el conducto y la conducto (Boudreau et al., 1991).
aorta (así como los efectos del oxígeno y el nacimiento en la expresión La formación del cojinete de la íntima en el conducto también está
de genes del conducto) (Costa et al., 2006; Liu et al., 2013; Shelton asociada con notables alteraciones en el ensamblaje de fibras de elas-
et al., 2014) hallaron que la expresión de genes que controlan moléculas tina. En la aorta, una bien desarrollada lámina elástica de la muscular
de la matriz (como fibronectina y lisilo oxidasa), interacciones actina- media provee elasticidad y previene el colapso de la pared vascular.
miosina, señalización iónica de potasio y calcio, y genes involucrados En contraste, las células de músculo liso de la muscular media del
con PG, endotelina y señalización de angiotensina II está aumentada conducto están rodeadas por fibras de elastina delgadas y fragmentadas
en el conducto. Mutaciones en muchos de estos genes dominantes que no previenen su colapso y cierre cuando sufre vasoconstricción. La
del conducto (examinados en modelos de ratones o síndromes gené- alteración del ensamblaje normal de las fibras de elastina en el conducto
ticos humanos) están asociadas con cierre demorado del conducto o no parece deberse a actividad de elastasa incrementada o producción
CAP en neonatos a término (Huang et al., 1998; Segi et al., 1998; disminuida de tropoelastina. En cambio, parece deberse a mecanismo
Coceani et al., 1999; Bergwerff et al., 2000; Morano et al., 2000; del desarrollo que reduce la insolubilización de elastina y previene
Loftin et al., 2001; Zhao et al., 2001; Mani et al., 2002; Trivedi la formación de láminas elásticas intactas. La PGE2 y su receptor
et al., 2006; Zhu et al., 2006; Chang et al., 2007; Huang et al., 2008; EP4 parecen desempeñar un papel crítico al inhibir la formación de
Ko et al., 2008; Newbern et al., 2008; Anderson et al., 2009; Choudhary fibras densas de elastina en el conducto. La lisilo oxidasa, que cataliza
et al., 2009; Chang et al., 2010; Feng et al., 2010; Peng et al., 2010; el entrecruzamiento (cross-linking) de elastina, se degrada cuando el
Sinibaldi et al., 2010; Banka et al., 2011; Fallahi et al., 2011; Shen receptor EP4 es estimulado. De manera interesante, el conducto de
et al., 2011; Zhang et al., 2011; Zhao et al., 2011; Gruzdev et al., 2012; ratones privados de EP4 presenta un aumentado fenotipo elástico que
Paterick et al., 2013; Cooper et al., 2014; Roulez et al., 2014). es similar a la aorta (Yokoyama et al., 2014).
Otros factores genéticos o familiares también podrían desempeñar La relación exacta entre un ensamblaje alterado de elastina y la
un papel en la persistencia del conducto en recién nacidos prematuros migración de músculo liso hacia la nueva íntima está aún abierta a
(Lavoie et al., 2008; Bhandari et al., 2009). Varios polimorfismos especulación. El ensamblaje alterado de láminas elásticas densas puede
de nucleótido único (SNP) se han asociado recientemente con CAP facilitar la migración celular de músculo liso al remover la barrera física.
en prematuros: gen receptor de angiotensina α (T/C) polimorfismo Además, la tropoelastina truncada puede actuar como quimioatrayente
Pvu II (ATR) de tipo 1 (Treszl et al., 2003), interferón γ (IFN-γ) de células de músculo liso (Mecham et al., 1984). Por el contario, en
(Bokodi et al., 2007), receptor α de estrógeno PvuII (Derzbach algunas formas genéticas de CAP, la lámina elástica del conducto parece
et al., 2005), factor de transcripción AP-2 β (TFAP2B), prostaci- anormalmente bien desarrollada y similar a las de la aorta; cuando esto
clina sintasa (PGI) y factor 1 asociado al receptor de TNF (TRAF1) ocurre, los cojinetes de la íntima fracasaron en desarrollarse (de Reeder
(Dagle et al., 2009). Estas asociaciones necesitan ser replicadas en et al., 1990; Hsieh et al., 2014; Yokoyama et al., 2014).

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CAPÍTULO 54 Conducto arterioso persistente en recién nacidos prematuros 795

Relación entre vasoconstricción


y cierre anatómico
En animales a término, la pérdida de respuesta a la PGE2 poco después
del nacimiento previene la reapertura del conducto arterioso una vez
que se ha contraído (Clyman et al., 1983; Abrams et al., 1995). Esto
se debe, en parte, a la disminución en la síntesis de receptores PGE2 en
el conducto después del nacimiento. Tanto la pérdida de la regulación
vasodilatadora y los eventos anatómicos que llevan al cierre permanente
parecen ser controlados por el grado de constricción muscular liso
del conducto. Modelos experimentales que alteran la capacidad del
conducto de contraerse a término también previenen los cambios
histológicos normales que ocurren después del nacimiento (Clyman
et al., 1989; Nguyen et al., 1997; Loftin et al., 2001). La constricción
produce hipoxia isquémica de la pared vascular (Clyman et al., 1999).
Debido al espesor del conducto a término, se necesitan vasos vas-
culares (vasa vasorum) intramurales para proveer oxígeno y nutrientes a
la mitad externa de su pared. Estos vasos vasculares intramurales colap-
sables proveen al conducto de un particular mecanismo para controlar
• Figura 54.1  Remodelado del conducto: papel de la constricción, la
la máxima distancia de difusión de oxígeno y nutrientes a lo largo de
hipoxia y la adhesión celular mononuclear en la formación de nueva
su pared. La constricción del conducto oblitera el flujo de los vasos íntima y la muerte celular de músculo liso. La constricción posnatal
vasculares a la muscular media externa, convirtiendo el espesor de la produce hipoxia en la pared del conducto. El músculo liso hipóxico y
muscular media en una zona virtual avascular (Kajino et al., 2002). las células endoteliales aumentan la expresión de factor de crecimiento
La profunda hipoxia isquémica que sigue a la constricción inhibe de endotelio vascular (VEGF) y VCAM-1, respectivamente. El VEGF
la producción local de PGE2 y NO, induce la producción local de se requiere para la proliferación celular endotelial. El VEGF también
factores inducibles por hipoxia, como factor inducible por hipoxia atrae células mononucleares circulantes (que expresan VLA-4) a la
(HIF) 1α y factor de crecimiento del endotelio vascular (VEGF), y superficie celular endotelial. En condiciones de muy bajo flujo, las células
produce apoptosis del músculo liso en la pared del conducto. El VEGF mononucleares VLA-4+ débilmente adherentes se unen al VCAM-1 en la
desempeña un papel crítico en la migración de las células de músculo superficie celular endotelial y liberan factor de crecimiento derivado de
liso hacia la nueva íntima y en la proliferación de vasos vasculares plaquetas y metaloproteinasa de la matriz de tipo 9 (que promueve la
intramurales (Clyman et al., 2002). Después de la constricción pos- migración de músculo liso hacia la nueva íntima). La fuerte constricción
natal del conducto, varios genes conocidos por ser esenciales para el y la pérdida de flujo luminal son esenciales para la expresión de VEGF,
remodelado vascular (HIF1α, VCAM-1, E-selectina, interleucina [IL] la adhesión de células mononucleares, la nueva formación de la íntima y
8, MCSF-1, CD154, IFNγ, IL-6 y factor de necrosis tumoral [TNF] α) la oclusión luminal. HIF, factor inducible por hipoxia; PDGF-β, subunidad
están aumentados en la pared del conducto. Células mononucleares β del factor de crecimiento derivado de plaquetas; VCAM-1, molécula
circulantes son atraídas hacia el conducto, y, una vez adheridas a la de adhesión endotelial 1; VEGF, factor de crecimiento del endotelio vas-
pared del conducto, se convierten en monocitos/macrófagos activados cular; VLA-4, integrina VLA-4.
y producen factor de crecimiento derivado de plaquetas (PDGF), el
cual estimula la migración de músculo liso y la proliferación en la del prematuro no desarrolla el grado de hipoxia isquémica necesario
nueva íntima. La respuesta inflamatoria que sigue a la constricción para inducir muerte celular y remodelado anatómico, continuará res-
posnatal del conducto parece ser necesaria para el remodelado de pondiendo a los vasodilatadores y continuará siendo susceptible a la
la íntima, dado que la extensión del remodelado está determinada reapertura del vaso.
por el grado de adhesión celular mononuclear (Waleh et al., 2005) Aunque los inhibidores de la producción de PG son muy efectivos
(fig. 54.1). para el cierre del conducto cuando se administran en el día 1 posnatal,
En recién nacidos prematuros, el conducto permanece abierto con se vuelven menos efectivos al final de la primera semana posnatal.
frecuencia durante varios días después del nacimiento. Incluso cuando Un diverso número de factores confluyen para hacer al conducto del
se contrae, no se suele desarrollar hipoxia profunda ni remodelado ana- prematuro altamente resistente al cierre inducido por indometacina
tómico. El recién nacido prematuro requiere un mayor grado de cons- e ibuprofeno. En contraste con los conductos de los recién nacidos
tricción ductal que el recién nacido a término para desarrollar un grado a término, en los que todos los receptores EP de PGE2 se reducen
comparable de hipoxia. En contraste con el conducto del recién nacido tras el nacimiento, el conducto del recién nacido prematuro aumenta
a término, la delgada pared del conducto del prematuro no depende la síntesis del receptor de PGE2 dominante, el EP4, y continúa res-
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de vasos vasculares intramurales para obtener oxígeno y nutrientes a pondiendo a la PGE2 después del nacimiento. Además de su persistente
su pared. Antes de las 26 semanas de gestación, los vasos vasculares respuesta a la PGE2, el conducto del prematuro sintetiza cantidades
intramurales están ausentes en las paredes del conducto. La ausencia incrementadas de otros vasodilatadores (p. ej., NO, TNF-α, e IL-6)
de vasos vasculares intramurales deja al conducto del prematuro sin un después del nacimiento en respuesta a la hipoxia parietal ductal pos-
mecanismo para incrementar rápidamente la distancia de difusión a natal (Waleh et al., 2005). Como resultado, ocurre un cambio en el
través de su pared durante la constricción posnatal. Mientras que exista equilibrio relativo de vasodilatadores que mantienen la permeabilidad
cualquier grado de persistencia luminal, la delgada pared del conducto del conducto después del nacimiento. La persistencia del conducto se
del prematuro fracasa en volverse profundamente hipóxica y fracasa vuelve menos dependiente de la generación de PG y más dependiente
en sufrir el remodelado anatómico después del nacimiento. Como de otros vasodilatadores después de los primeros días que siguen al
resultado, el conducto del prematuro requiere un cese completo del nacimiento. Además, las concentraciones de trifosfato de adenosina
flujo luminal antes de que pueda desarrollar el mismo grado de hipoxia están significativamente alteradas en el CAP prematuro. Las concen-
hallado a término. Una vez que el conducto del prematuro desarro- traciones disminuidas de trifosfato de adenosina impiden la contracción
lla el mismo grado de hipoxia isquémica que el conducto del recién vigorosa del conducto neonatal inmaduro, tan vigorosa como la del
nacido a término, ocurrirán la mayoría de los cambios anatómicos conducto fetal (Levin et al., 2005). Como resultado de estos cambios
vistos en el término (Seidner et al., 2001). Sin embargo, si el conducto posnatales, la efectividad de la indometacina y el ibuprofeno disminuye

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796 PA RT E XI Aparato cardiovascular

con el avance de la edad posnatal (Clyman, 1996). En animales y pia se haya asociado con persistencia de CAP, los ECA no han hallado
humanos prematuros, el uso combinado de un inhibidor de NO sintasa que la protección radiológica torácica altere la incidencia o la gravedad
e indometacina produce un mayor grado de constricción ductal que la del CAP (Bhola et al., 2015).
indometacina sola. Por lo tanto, fármacos que interfieran con la síntesis En animales prematuros, un CAP amplio abierto aumenta la pre-
de NO podrían ser adyuvantes útiles, especialmente en situaciones sión hidráulica en la vascularización pulmonar tanto en los lechos
donde la indometacina no resulta efectiva (Seidner et al., 2001; Keller capilares arteriales como en los venosos. Además, el flujo sanguíneo
et al., 2005). pulmonar aumentado y el inmaduro tono arterial precapilar aumentan
la distribución de la presión hidráulica intravascular hacia sitios de fil-
Alteraciones hemodinámicas y pulmonares tración de fluido capilar (Perez Fontan et al., 1987). Esto, en cambio,
aumenta la tasa de trasudación de fluido en el intersticio pulmonar
Las características fisiopatológicas del CAP dependen tanto de la mag- (Alpan et al., 1991). Cualquier incremento en la presión de perfusión
nitud del cortocircuito izquierda-derecha como de la respuesta cardíaca microvascular en recién nacidos prematuros con síndrome de dificultad
y pulmonar al cortocircuito. Existen diferencias importantes entre la respiratoria puede aumentar el fluido intersticial y alveolar pulmonar
capacidad cardíaca de los recién nacidos inmaduros y los maduros de debido a su baja presión oncótica en el plasma y al aumento de la
manejar la sobrecarga de volumen. Los ventrículos fetales inmaduros permeabilidad capilar. La fuga de proteínas plasmáticas hacia el espacio
poseen menor inervación simpática, son menos distensibles que en los alveolar inhibe la función surfactante, aumenta la tensión superficial
a término y generan menos fuerza por gramo de miocardio (Romero y disminuye la distensibilidad del espacio aéreo inmaduro (Ikegami
et al., 1979). La relativa falta de distensibilidad ventricular izquierda et al., 1983), los cuales ya están afectados por deficiencia de surfactante.
en recién nacidos inmaduros es más una función de los constituyentes El aumento en la fracción inspirada de oxígeno y la presión media de
tisulares que de la pobre función ventricular. Como resultado, la disten- la vía respiratoria requeridas para superar estos cambios precoces en
sión ventricular izquierda secundaria a un gran cortocircuito izquierda- la distensibilidad pueden desempeñar un papel en el desarrollo de
derecha por el CAP puede producir una presión de fin de diástole enfermedad pulmonar crónica. Dependiendo de la edad gestacional y
ventricular izquierda elevada a menores volúmenes ventriculares. El de las especies examinadas, cambios en la mecánica pulmonar pueden
incremento de la presión ventricular izquierda aumenta la presión suceder tan temprano como el día 1 de nacimiento o no antes de varios
venosa pulmonar y provoca congestión pulmonar. días de exposición al cortocircuito izquierda-derecha del CAP (Perez
Estudios en recién nacidos prematuros animales y humanos Fontan et al., 1987; McCurnin et al., 2008).
(Clyman et al., 1987; Shimada et al., 1994) han mostrado que, a Aunque los animales prematuros con CAP presenten aumento del
pesar de estas limitaciones, los recién nacidos prematuros son capaces de aclaramiento de fluido y proteínas en el intersticio pulmonar (que
aumentar el gasto ventricular izquierdo y mantener su flujo sanguíneo se debe a un incremento en la presión de filtración microvascular
sistémico «efectivo», incluso con cortocircuitos izquierda-derecha por pulmonar), un aumento simultáneo en el flujo linfático pulmonar
CAP mayores del 50% del gasto ventricular izquierdo. En presencia de parece eliminar el exceso de fluido y proteínas del pulmón (Alpan
cortocircuitos mayores del 50% del gasto ventricular izquierdo, el flujo et al., 1991). Este aumento compensatorio en la linfa pulmonar actúa
sanguíneo sistémico «efectivo» cae, a pesar del continuo incremento como «factor de seguridad de edema», inhibiendo la acumulación
del gasto ventricular izquierdo. El incremento en el gasto ventricular de fluido en los pulmones. Como resultado, no hay incremento
izquierdo asociado a CAP se alcanza no por aumento en la frecuencia neto en la acumulación de fluido y proteínas en el pulmón, y no hay
cardíaca, sino por un aumento en el volumen sistólico. El volumen cambio en la mecánica pulmonar (Pérez Fontan et al., 1987; Alpan
sistólico se incrementa principalmente como resultado del descenso et al., 1989; Clyman, 1996). Este delicado equilibrio entre filtración
simultáneo de la resistencia en la poscarga del corazón y el aumento de la de fluido inducida por CAP y reabsorción linfática es consistente
precarga ventricular. A pesar de la capacidad del ventrículo izquierdo de con la observación hecha en recién nacidos humanos de que el cierre
incrementar su gasto en presencia de un cortocircuito ductal izquierda- del conducto arterioso en las primeras 24 h tras el nacimiento no
derecha, la distribución del flujo sanguíneo es significativamente tiene efecto en el curso de la enfermedad de la membrana hialina del
reestructurada. El flujo sanguíneo al tubo digestivo y los riñones está recién nacido. Sin embargo, después de varios días de ventilación
disminuido debido a una combinación de disminución de la presión de mecánica, hay un descenso en el área de superficie capilar pulmonar
perfusión y vasoconstricción localizada. El flujo sanguíneo mesentérico (Mokres et al., 2010), lo que aumenta tanto la presión microvascular
está disminuido tanto en estados de ayunas y alimentación en presencia pulmonar y la tasa de filtración hidráulica de fluidos. Como resultado,
de CAP (McCurnin, Clyman, 2008). Descensos significativos del no es raro que recién nacidos con CAP desarrollen edema pulmonar
flujo sanguíneo de órganos ocurren antes de que existan signos de y alteraciones en la mecánica pulmonar a los 6-10 días después del
afectación ventricular izquierda (Shimada et al., 1994) y pueden con- nacimiento. En estos recién nacidos, mejorías en la distensibilidad
tribuir al descenso de la tasa de filtrado glomerular (Clyman, 1996) pulmonar tienen lugar después del cierre del CAP (Clyman 1996;
observada en presencia de CAP. El flujo sanguíneo cerebral y la oxige- Szymankiewicz et al., 2004).
nación se encuentran también afectados en presencia de cortocircuito Se han utilizado babuinos recién nacidos prematuros con el 67% de
izquierda-derecha por CAP debido a la capacidad limitada del recién gestación a término ventilados mecánicamente durante 2 semanas para
nacido prematuro de autorregular su lecho vascular cerebral (Lemmers examinar los efectos del CAP en la mecánica pulmonar (McCurnin
et al., 2010). et al., 2008). Los babuinos prematuros fueron tratados con inhibidores
La capacidad disminuida del recién nacido prematuro para man- de COX para el cierre del CAP o se les permitió dejar el CAP. La exposi-
tener la vasoconstricción pulmonar activa puede ser la responsable en ción a CAP por 2 semanas no pareció alterar la secreción de surfactante,
parte del desarrollo temprano de un cortocircuito izquierda-derecha permeabilidad epitelial pulmonar a proteínas o presencia de proteínas
por CAP «extenso». Algunos estudios clínicos aleatorizados (ECA) inhibidoras de surfactante en los alvéolos, ni tampoco la presencia de
han mostrado que la presencia de CAP aumenta la incidencia de ede- CAP alteró la expresión de genes proinflamatorios o remodeladores
ma pulmonar hemorrágico/hemorragia pulmonar precoz (Al Faleh tisulares. En contraste con los babuinos a término, que movilizaron
et al., 2008; Aranda et al., 2009; Kluckow et al., 2014). Las maniobras fluidos pulmonares rápidamente después del nacimiento, los recién
terapéuticas o las condiciones prenatales que llevaron a una rápida nacidos prematuros (tanto con CAP abierto o cerrado) movilizaron
caída posnatal de la resistencia vascular pulmonar, como suplemento los fluidos pulmonares de manera mucho más lenta. Como resultado,
surfactante o restricción del crecimiento intrauterino, pueden exacerbar un CAP llevó a un pequeño, pero significativo, incremento en el agua
la cantidad de cortocircuito izquierda-derecha y llevar a hemorragia pulmonar 2 semanas después del parto. Además, el cierre del CAP con
pulmonar (Alpan et al., 1995; Rakza et al., 2007). Aunque la fototera- indometacina o ibuprofeno produjo expresión aumentada de canales

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CAPÍTULO 54 Conducto arterioso persistente en recién nacidos prematuros 797

de sodio en el epitelio alveolar, que facilita la remoción de fluido del de no contar con cirujanos expertos, puede requerirse la derivación
compartimento alveolar (McCurnin et al., 2008). Este hallazgo puede neonatal a otra institución. Por lo tanto, evitar o retrasar la ligadura
dar cuenta de la incidencia disminuida de edema pulmonar significativo parece ser beneficioso, ya que muchas de las morbilidades asociadas
y hemorragia en recién nacidos tratados con indometacina profiláctica con la ligadura (hipotensión posligadura [Teixeira et al., 2008],
después del nacimiento (Al Faleh et al., 2008; Aranda et al., 2009; parálisis de las cuerdas vocales [Smith et al., 2009], DBP [Clyman
Kluckow et al., 2014). et al., 2009]) y trastornos del desarrollo neurocognitivo (Wickrema-
El cierre farmacológico del CAP se asoció con mejoría en el desarro- singhe et al., 2012) parecen verse reducidas cuando la ligadura se
llo pulmonar en babuinos prematuros. En contraste con los animales pospone (Sung et al., 2014).
con conducto abierto, donde una interrupción en el desarrollo alveolar La inhibición de la síntesis de PG con inhibidores no selectivos de
(el hito de la «nueva» displasia broncopulmonar [DBP]) fue evidente COX-1 y COX-2 (indometacina e ibuprofeno) parece ser una alter-
2 semanas después del nacimiento, el cierre farmacológico del CAP nativa efectiva a la ligadura quirúrgica. Sin embargo, ambos han sido
llevó a una alveolización mejorada (McCurnin et al., 2008). Si la asociados con varios efectos adversos potenciales en el recién nacido. La
mejoría en la alveolización se debió al cierre del conducto o a los agentes indometacina produce reducciones significativas en el flujo sanguíneo
farmacológicos (indometacina/ibuprofeno) utilizados para el cierre, no renal (Pezzati et al., 1999), mesentérico (Van Bel et al., 1990) y cerebral
está claro actualmente. (Van Bel et al., 1989). La indometacina también reduce la oxigenación
Las mismas mejorías en la mecánica pulmonar y en el área de cerebral (Patel et al., 2000). Alteraciones en el aclaramiento de crea-
superficie alveolar no se observaron después de la ligadura quirúrgica tinina y oliguria (con escasa respuesta al tratamiento con dopamina o
del CAP. La ligadura quirúrgica aumenta la expresión de genes involu- furosemida) son problemas comunes. De hecho, la furosemida, cuando
crados con inflamación pulmonar y disminuye la expresión de genes se utiliza en combinación con indometacina, aumenta la incidencia
asociados con canales de sodio de epitelio pulmonar (los cuales son de insuficiencia renal aguda (Brion et al., 2001). La función renal se
críticos para el aclaramiento de agua alveolar) (Waleh et al., 2011). normaliza después de las dosis iniciales de indometacina o después de
Estos cambios pueden contribuir a la falta de mejoría en la mecánica la interrupción del fármaco (Seyberth et al., 1983). Existen algunos
pulmonar después de la ligadura del CAP. Además, la ligadura quirúr- reportes de que los inhibidores de la COX pueden afectar al desarro-
gica temprana impide el crecimiento pulmonar (Chang et al., 2008). llo glomerular en neonatos animales; sin embargo, estos hallazgos
Estos hallazgos aumentan la posibilidad de que la ligadura precoz del no se han observado consistentemente (Bueters et al., 2013; Kent
conducto, mientras elimina los efectos perjudiciales del CAP en el et al., 2014; Bueters et al., 2015). La acción de la indometacina en
desarrollo pulmonar, puede crear su propio conjunto de problemas estos sistemas puede no deberse completamente a su inhibición de la
que contrarrestan muchos de los beneficios derivados del cierre del síntesis de PG (Chemtob et al., 1991; Malcolm et al., 1993; Speziale
conducto (Clyman et al., 2009). et al., 1999). La indometacina también tiene efectos en la actividad
No todos los cambios asociados con el CAP son necesariamente de la lipooxigenasa y la liberación de histamina y endotelina, aunque
perjudiciales para el recién nacido inmaduro con síndrome de dificultad la relevancia de estos efectos en las morbilidades neonatales aún se
respiratoria. La persistencia del cortocircuito izquierda-derecha mantie- desconoce.
ne una Pao2 elevada en presencia de atelectasias. Este fenómeno se debe Aunque la indometacina produce alteraciones fisiológicas significa-
a la recirculación de sangre arterial oxigenada a través de los pulmones tivas y se ha asociado con varias morbilidades, ninguno de los ECA que
que no están completamente expandidos (Clyman et al., 1987). El han examinado la relación entre indometacina y morbilidad neonatal
cierre del CAP puede llevar a disminuciones en el contenido de oxígeno han hallado un aumento en la incidencia de ECN, perforación diges-
arterial sistémico a pesar de la ausencia de cualquier alteración en la tiva, retinopatía de la prematuridad (ROP), enfermedad pulmonar
mecánica pulmonar. crónica o lesiones de la sustancia blanca cerebral después del trata-
miento con indometacina (Fowlie et al., 2003). La indometacina, por
Tratamiento sí misma, no ha demostrado incrementar la incidencia de perforaciones
digestivas; sin embargo, la combinación de indometacina y esteroides
Opciones terapéuticas para el cierre del CAP posnatales, administrados simultáneamente, sí aumenta la incidencia
de perforaciones digestivas/ECN (Watterberg et al., 2004; Peltoniemi
En recién nacidos a término, la ligadura del CAP transcatéter es el et al., 2005).
tratamiento de elección para el cierre del CAP. Sin embargo, su uti- Los efectos vasoconstrictores cerebrales de la indometacina se citan
lización en la población de prematuros está empezando a explorarse con frecuencia como una preocupación para los neonatólogos (Edwards
(Zahn et al., 2015). et al., 1990); sin embargo, una revisión sistemática de Cochrane halló
La ligadura por cirugía abierta produce cierre definitivo del con- que la indometacina profiláctica es más propensa a disminuir que a
ducto arterioso; sin embargo, está asociada con varias morbilidades aumentar la incidencia de la leucomalacia periventricular (Fowlie et al.,
importantes: toracotomía y exposición a anestesia quirúrgica, neu- 2003). No hay evidencia de que la indometacina profiláctica presente
motórax, quilotórax, escoliosis e infección. Además, después de la ningún efecto adverso en el neurodesarrollo a los 18 meses (Schmidt
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ligadura del CAP, entre el 20 y el 60% de recién nacidos con peso et al., 2001); de hecho, existe evidencia de que puede tener beneficio
extremadamente bajo al nacer (PEBN) desarrollarán parálisis de las a largo plazo, a 4,5 y 8 años (Vohr et al., 2003; Ment et al., 2004).
cuerdas vocales unilateral (lo que aumenta los requerimientos de Mientras que puede haber consenso general respecto a la eficacia de
alimentación por sonda y soporte respiratorio, que persiste después la indometacina para el tratamiento del CAP, dudas acerca de la dosis
del período neonatal) (Nichols et al., 2014; Strychowsky et al., 2014). adecuada, la duración del tratamiento y el momento óptimo para el
La hipotensión profunda durante el período postoperatorio es otra tratamiento son, aún, motivo de controversia. El aclaramiento plas-
complicación que afecta al 30-50% de los recién nacidos con peso mático de la indometacina depende de la edad posnatal. Por lo tanto,
al nacer de 1.000 g o menos. La incidencia de hipotensión profunda un régimen de dosificación recomendado para recién nacidos al final
postoperatoria está inversamente relacionada con la edad corregida de la primera semana (cuando la vida media del fármaco es 21 h) (Yaffe
del recién nacido y parece deberse a una alterada estimulación supra- et al., 1980; Yeh et al., 1989) puede llevar a elevadas y prolongadas
rrenal, baja liberación de cortisol y disminución del tono vascular concentraciones plasmáticas cuando se utiliza en recién nacidos el día
(Clyman et al., 2014; Noori et al., 2015). La ligadura quirúrgica 1 (cuando la vida media es 71 h). A la inversa, una única dosis de carga
precoz también contribuye al desarrollo de DBP (Chorne et al., 2007; de indometacina (0,2 mg/kg), sin dosis de mantenimiento, puede ser
Clyman et al., 2009). Los trastornos en el neurodesarrollo también efectiva en cerrar el CAP cuando se administra en el curso de las 24 h
son más frecuentes después de la ligadura precoz del CAP. En caso tras el nacimiento (Krueger et al., 1987).

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798 PA RT E XI Aparato cardiovascular

Se han evaluado diversas variaciones en regímenes de dosificación e insuficiencia renal transitoria (Ohlsson et al., 2015). La adminis-
(Gork et al., 2008). Un esquema de baja dosis prolongada de indo- tración orogástrica del ibuprofeno parece ser tan efectiva como la
metacina (0,1 mg/kg cada 24 h durante 5-7 días) puede aumentar administración intravenosa (Ohlsson et al., 2015). En contraste con
la tasa de cierre permanente, especialmente en recién nacidos que la indometacina, el ibuprofeno no parece afectar al flujo sanguíneo
aún presentan flujo residual en el conducto después de haber com- mesentérico y tiene menor efecto en la perfusión renal, la oliguria y
pletado el esquema estándar (2-3 dosis en 24 h), y puede disminuir el flujo sanguíneo cerebral (Malcolm et al., 1993; Mosca et al., 1997;
la alteración de la función renal por indometacina (Hammerman Pezzati et al., 1999; Speziale et al., 1999; Patel et al., 2000). Estudios
et al., 1990). Este régimen de dosificación precisa todavía una mayor en animales sugieren que el ibuprofeno puede tener algunos efectos
evaluación, dado que una tasa mayor de ECN se observó en recién citoprotectores en el tracto intestinal (Grosfeld et al., 1983). Desafor-
nacidos que recibieron indometacina de mantenimiento prolongada tunadamente, la mayoría de los estudios que compararon ibuprofeno
(Herrera et al., 2007). Aunque algunos autores han sugerido que se con indometacina no incluyeron recién nacidos con PEBN (≤ 25
aumente la dosis de indometacina cuando la dosis convencional haya semanas de gestación), que es el grupo con mayor resistencia al cierre
fallado en producir el cierre del conducto (Sperandio et al., 2005), un farmacológico del conducto y donde el esquema de dosis apropiado
ECA que examinó esta propuesta halló que la tasa de cierre ductal no para la edad con ibuprofeno se encuentra aún bajo consideración
se mejoró sustancialmente a pesar de casi triplicar la concentración (Hirt et al., 2008). Algunas de las opciones de altas dosis de ibu-
plasmática de indometacina. Más preocupante fue el hecho de que las profeno son preocupantes debido a los efectos del ibuprofeno en las
mayores concentraciones de indometacina produjeron incrementos concentraciones de bilirrubina plasmática libre (Zecca et al., 2009).
significativos en la incidencia de ROP moderada/grave y disfunción El ibuprofeno no tiene los mismos efectos que la indometacina en la
renal tardía (Jegatheesan et al., 2008). autorregulación cerebral. Como resultado, el ibuprofeno profiláctico
La edad posnatal a la que se administra la indometacina desempeña no parece tener el mismo efecto de ahorro de hemorragia intracraneal
un importante rol que determina su efectividad. Con el avance de la (HIC) que se ve con la indometacina (v. «Indometacina y hemorragia
edad posnatal, las PG dilatadoras desempeñan un papel menor en el intracraneal»). El ibuprofeno oral ha reportado tener una mayor
mantenimiento del CAP (v. «Relación entre vasoconstricción y cierre incidencia de eventos adversos digestivos cuando se administra de
anatómico») (Cotton et al., 1991; Chorne et al., 2007). Incluso cuando manera profiláctica (Kanmaz et al., 2013).
las concentraciones de indometacina se hayan mantenido en el rango El paracetamol puede ser un agente efectivo para inducir el cierre
«deseable», la capacidad del fármaco de producir el cierre completo del del CAP. Aunque su mecanismo de acción no se ha dilucidado com-
conducto disminuye durante los primeros días después del nacimiento. pletamente, el efecto vasoconstrictor del paracetamol parece estar
A pesar de su efectividad disminuida, puede ser aconsejable intentar el mediado por la inhibición de la mitad de la peroxidasa PGH2 sin-
cierre del CAP con indometacina antes de la ligadura quirúrgica incluso tetasa (Allegaert et al., 2013). Tres ECA hallaron que el paracetamol
en casos de edad posnatal avanzada (Sterniste et al., 1998). oral presenta efectividad comparable del cierre del CAP con ibu-
La recurrencia de un CAP sintomático puede ocurrir después de profeno oral o indometacina intravenosa (Dang et al., 2013; Oncel
un tratamiento inicial exitoso. La tasa de reapertura, que es mayor et al., 2014; Dash et al., 2015). Estos resultados deben interpretarse
entre los recién nacidos más inmaduros, parece estar relacionada con precaución, dado que solo un número limitado de neonatos
con el tiempo de cierre del conducto y que sea completo después relativamente maduros (edad gestacional promedio mayor de 28
del primer esquema de tratamiento (Narayanan et al., 2000). El semanas) han sido tratados con paracetamol en ECA hasta ahora.
cierre anatómico completo requiere una fuerte constricción de la Además, dado que la utilización del paracetamol en el embarazo se
luz del conducto y el desarrollo de hipoxia parietal del conducto ha asociado con un riesgo incrementado de autismo infantil con
(v. «Relación entre vasoconstricción y cierre anatómico»). Desafor- síntomas de hipercinesia (Liew et al., 2014), se precisan estudios
tunadamente, existen limitaciones en la capacidad del ultrasonido con seguimiento a largo plazo antes de que el paracetamol pueda
Doppler para detectar el cierre luminal completo. Incluso cuando adoptarse completamente como una alternativa a la indometacina
no hay evidencia de persistencia del conducto en el ecocardiograma y el ibuprofeno.
Doppler, un número significativo de recién nacidos prematuros
tendrán una luz diminuta del conducto permeable. Además, cuanto Indometacina y hemorragia intracraneal
más delgada sea la pared del conducto, menor es la probabilidad de
que ocurra hipoxia profunda y remodelado anatómico. Tanto los Estudios previos mostraron que la indometacina puede disminuir la
grados altos de inmadurez, como los grados altos de restricción del incidencia de HIC en recién nacidos prematuros y animales expe-
crecimiento, aumentan la tasa de fracaso del tratamiento (Madele- rimentales (este no es el caso del ibuprofeno o el paracetamol). Los
neau et al., 2015). El 22% de los CAP en neonatos nacidos antes efectos de la indometacina en la HIC no parecen deberse a su efecto
de la semana 26 se reabren a pesar de la evidencia ecocardiográfica en el CAP (Ment et al., 1988). La indometacina disminuye el flujo
de cierre; en contraste, solo el 9% de esos neonatos nacidos en las sanguíneo cerebral, disminuye la hiperemia reactiva cerebral postasfixia
semanas 26 y 27 se reabrirán si el conducto se encuentra cerrado y acelera la maduración de la matriz germinal de la microvasculatura
en la ecocardiografía. El tratamiento precoz produce un grado más (Ment et al., 1992; Ballabh, 2014). Dado que la mayoría de las HIC
estrecho de constricción del conducto y, como resultado, produ- ocurren dentro los primeros 3 días de nacimiento, uno esperaría ver
ce mayores tasas de hipoxia parietal ductal y cierre permanente efectos beneficiosos solo cuando la indometacina se administra como
(Narayanan et al., 2000). La recurrencia del CAP puede también estrategia profiláctica (en cualquier momento durante las primeras 18 h
ocurrir después de infecciones bacterianas (Gonzalez et al., 1996). después del nacimiento [Mirza et al., 2013]). Cuando se administra
Las endotoxinas bacterianas aumentan la producción de NO, pero indometacina profiláctica a recién nacidos con ecoencefalogramas
no de PG, en la pared del conducto (Kajimura et al., 2016). Esto normales, hay una significativa reducción de todos los grados (I-IV),
podría explicar por qué la indometacina es menos efectiva en cerrar así como de los grados más graves (III-IV) de HIC. Afortunada-
el CAP después de una infección. mente, cuando la indometacina se administra a recién nacidos con
El ibuprofeno, otro inhibidor no selectivo de la COX, parece igual hemorragia intraventricular (HIV) preexistente, no parece haber un
de efectivo que la indometacina en producir el cierre del CAP (al riesgo aumentado de extensión parenquimatosa de la hemorragia
menos en recién nacidos con una edad gestacional promedio de 28 (Ment et al., 1994). Sin embargo, cabe destacar que recién nacidos
semanas) (Van Overmeire et al., 2000). Comparado con la indome- con coagulopatías o recuentos bajos de plaquetas (por debajo de
tacina, el tratamiento con ibuprofeno causa tasas reducidas de ECN 100 × 109/l) en el momento en que se administran los inhibidores

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CAPÍTULO 54 Conducto arterioso persistente en recién nacidos prematuros 799

de la COX presentan un riesgo aumentado de sangrado intracerebral observada. Ellos atribuyeron la causa de morbilidad respiratoria al
(Brunner et al., 2013). «extenso uso de ventilación mecánica», utilizada para controlar el
edema pulmonar inducido por CAP (Cotton et al., 1978).
El papel del CAP en el desarrollo de perforación intestinal espontá-
CAP y morbilidad neonatal: cerrar o no cerrar nea o ECN es incluso más controvertido aún. Estudios retrospectivos
Falta evidencia clara tanto a favor como en contra de muchos enfoques basados en observaciones poblacionales reportaron resultados opuestos.
terapéuticos respecto al CAP. Aunque un prolongado y persistente No hay ECA en la literatura médica que específicamente responda
cortocircuito izquierda-derecha moderado a grave a través del CAP a esta cuestión, ni tampoco hay información respecto al consejo de
acorta el lapso de vida en animales y humanos (Campbell 1968; Loftin continuar o detener la alimentación enteral en presencia de CAP o
et al., 2001), ha habido un creciente debate en los últimos años acerca durante su tratamiento. Aunque se conozca que la presencia de CAP y
de si el CAP necesita o no cerrarse durante el período neonatal (Bose el tratamiento con indometacina disminuyen el flujo sanguíneo mesen-
et al., 2006; Benitz et al., 2016). Los recién nacidos prematuros tienen térico posprandial, varios estudios basados en grandes poblaciones
una alta tasa de cierre espontáneo del CAP durante los primeros 2 años. (Kelleher et al., 2014; Louis et al., 2016) y un reciente ECA (Clyman
Por tanto, el tratamiento temprano corre el riesgo de exponer a recién et al., 2013) hallaron que los recién nacidos que recibieron escasa
nacidos a fármacos o procedimientos que podrían no necesitar. Aunque alimentación «trófica» enteral durante el tratamiento con indometacina
un CAP moderado a grave aumente el flujo sanguíneo pulmonar y el alcanzaron alimentación enteral completa (sin ningún evento adverso
edema, y disminuya la presión arterial sistémica, no está claro que es digestivo) a una tasa más rápida que los mantenidos en ayuno total
preferible: 1) cerrar el CAP (quirúrgica o farmacológicamente), o durante el tratamiento.
2) lidiar con el edema pulmonar e hipotensión a través de otros medios En EE. UU., el 95% de los neonatólogos creen que un CAP mode-
mientras se aguarda el cierre espontáneo del conducto. Por ejemplo, rado a grave debe tratarse si persiste en recién nacidos con PEBN que
la dopamina puede disminuir el cortocircuito a través del CAP al continúan requiriendo ventilación mecánica o soporte vasopresor;
aumentar la resistencia vascular pulmonar (Bouissou et al., 2008); en contraste, menos del 30% utilizan indometacina profiláctica (Jhaveri
la restricción de fluidos puede minimizar los síntomas de CAP (Bell et al., 2009). El número de neonatólogos que tratan un CAP cuando
et al., 2001), pero fracasa en reducir el cortocircuito por CAP (y ocurre en recién nacidos que no requieren ventilación mecánica o
también se asocia con flujo sanguíneo sistémico reducido [De Buyst soporte vasopresor varía significativamente por región geográfica. Hay
et al., 2012]), y modestos incrementos en la presión espiratoria final marcadas diferencias en la voluntad de los neonatólogos de alimentar
pueden mejorar el edema pulmonar y la distensibilidad, pero tienen recién nacidos en presencia de CAP, y ello parece dar cuenta de las
solo un modesto efecto en el cortocircuito izquierda-derecha del CAP amplias variaciones geográficas en el uso de indometacina y tasas de
(Fajardo et al., 2014). ligadura de CAP. Es interesante destacar que, anteriormente, el 70% de
Los ECA publicados proveen solo una limitada cantidad de infor- los neonatólogos de EE. UU. creían que la alimentación enteral debía
mación que ayude a guiar las posibilidades terapéuticas actuales para ser interrumpida en presencia de CAP, mientras que, al mismo tiempo,
el CAP. La mayoría de nuestra información acerca de los riesgos y los neonatólogos del resto del mundo tenían exactamente la opinión
beneficios del tratamiento con indometacina proviene de estudios opuesta: el 70% creían que la alimentación enteral debía continuarse
que compararon dos formas de tratamiento con indometacina: trata- en presencia de CAP (Jhaveri et al., 2009).
miento profiláctico (p. ej., comenzar con indometacina en el curso de
las 12 h tras el nacimiento, antes de la aparición de síntomas) frente Enfoque personalizado
a tratamiento sintomático (p. ej., demorar el tratamiento hasta que
aparezcan síntomas relacionados con el CAP, lo cual generalmente Un cortocircuito por un CAP moderado a grave puede llevar a hipo-
ocurre 2-8 días después del nacimiento). Desafortunadamente, los tensión sistémica dependiente de dopamina e incremento de las
estudios no fueron diseñados para responder a la pregunta de cerrar el necesidades ventilatorias. El enfoque en las UCIN de la University
CAP o dejarlo a su curso. El tratamiento profiláctico (comparado con of California, San Francisco (UCSF), fue el de utilizar tratamiento
esperar hasta el final de la primera semana posnatal antes de decidir farmacológico temprano en el recién nacido, dado que la farmaco-
tratar el CAP) no disminuyó la incidencia de morbilidades impor- terapia precoz se ha asociado solo a disfunción renal transitoria, y
tantes, como DBP, ECN o trastornos del neurodesarrollo, y provocó el tratamiento precoz es más probable que provoque un cierre del
un sobretratamiento del 40-50% de los recién nacidos que hubieran conducto exitoso. En ciertos escenarios (donde la HIC, la hemo-
presentado cierre espontáneo el día 7. Por otro lado, el tratamiento rragia pulmonar y la ligadura del CAP son incidencias frecuentes), la
profiláctico disminuyó un número de morbilidades a corto plazo: indometacina profiláctica puede incluso ser una alternativa preferible.
1) hemorragias pulmonares graves precoces; 2) grados graves de HIV; Por otro lado, la ligadura del conducto, mientras que elimina una
3) riesgo de desarrollar CAP sintomático; 4) hipotensión dependiente potencial causa de morbilidad neonatal, puede introducir su propio
de dopamina; 5) necesidad de niveles mayores de soporte ventilatorio, conjunto de problemas. Se precisa una mayor investigación para
y 6) necesidad de ligadura quirúrgica de CAP (Schmidt et al., 2001; determinar qué recién nacidos se beneficiarán de ligadura quirúrgica
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Fowlie et al., 2003; Koch et al., 2006; Al Faleh et al., 2008; Clyman y a qué recién nacidos es mejor dejarlos sin tratamiento cuando los
et al., 2008; Kluckow et al., 2014). enfoques farmacológicos ya no son una opción.
Existe poca información acerca de las consecuencias de exposiciones
más largas a un cortocircuito por CAP, moderado a grave, sintomático.
Solo dos pequeños ECA, realizados hace más de 30 años, examinaron
Lecturas recomendadas
específicamente el papel de un CAP sintomático no tratado en la Benitz WE. Committee on Fetus and Newborn, American Academy
morbilidad neonatal (Cotton et al., 1978; Kaapa et al., 1983). Ambos of Pediatrics. Newborn patent ductus arteriosus in preterm infants.
estudios hallaron que la persistencia de un CAP prolongó la necesidad Pediatrics 2016;137:1-6.
de soporte respiratorio y aumentó la morbilidad pulmonar. Hay que Clyman RI. The role of patent ductus arteriosus and its treatments in
reexaminar si estos hallazgos son aún aplicables en el escenario del the development of bronchopulmonary dysplasia. Semin Perinatol
cuidado respiratorio neonatal moderno, con «ventilación suave» y 2013;37:102-107.
admisión de elevadas presiones parciales de dióxido de carbono arterial. Clyman RI, Couto J, Murphy GM. Patent ductus arteriosus: are current
Es interesante que incluso los autores de los estudios originales espe- neonatal treatment options better or worse than no treatment at all?
cularan que el CAP podía no ser la causa de la morbilidad respiratoria Semin Perinatol 2012;36:123-129.

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CAPÍTULO 54 Conducto arterioso persistente en recién nacidos prematuros 800.e5

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800.e6 PARTE XI Aparato cardiovascular

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CAPÍTULO 54 Conducto arterioso persistente en recién nacidos prematuros 800.e7

Palabras clave
Conducto arterioso
Prostaglandinas
Indometacina
Ibuprofeno
Paracetamol
Remodelado vascular
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55
Cardiopatías congénitas
THOMAS SCHOLZ Y BENJAMIN E. REINKING

PUNTOS CLAVE vena cava inferior (VCI), retornando como sangre relativamente rica
en nutrientes (Edelstone et al., 1978). La posición lateral de la VCI res-
• La cardiopatía congénita (CC) es el defecto cardíaco más común hallado pecto de la aurícula derecha causa un flujo de sangre rica en nutrientes
en el escenario clínico del nacimiento, y afecta al 1% de los nacidos a través del agujero oval y a la aurícula izquierda. La sangre más desa-
vivos. turada que retorna a la aurícula derecha proviene del seno coronario,
• Los resultados quirúrgicos para todas las formas de CC continúan que se combina con el retorno venoso de la vena cava superior (VCS)
mejorando. La detección precoz por medio del examen y se dirige a través de la válvula tricúspide al ventrículo derecho.
con ecocardiografía fetal, exploración física y monitorización En el feto, la presencia de un conducto arterioso, el cual no es res-
de pulsioximetría permite un mejor tratamiento neonatal y disminución trictivo, provoca que ambos ventrículos estén sometidos a poscargas
de la morbilidad a corto y largo plazo.
comparables. Comparado con el corazón posnatal, esto causa un incre-
• La etiología de las CC es aún elusiva en muchos casos. Avances
mento en la carga de trabajo ventricular derecha y algo de restricción
en biología celular y test genéticos continuarán mejorando nuestra
comprensión respecto a sus orígenes.
al llenado del ventrículo derecho. La sangre rica en nutrientes derivada
• Es necesaria una profunda comprensión de la anatomía y la fisiología de la vena umbilical, que ha atravesado el agujero oval para ingresar al
cardíaca neonatal para el adecuado tratamiento de niños con CC. lado izquierdo del corazón, provee predominantemente al corazón y al
cerebro. El gasto del ventrículo derecho provee a los pulmones (menos
del 8% del gasto cardíaco combinado) y fluye de derecha a izquierda a
través del conducto arterioso para proveer al resto del cuerpo.
En el momento del nacimiento tienen lugar varias transiciones

L
a cardiopatía congénita (CC) es el defecto cardíaco más común importantes que permiten al feto adaptarse a la vida extrauterina. En
hallado en el escenario clínico del nacimiento. La prevalencia de primer lugar, la disminución gradual de la resistencia vascular pulmonar
todas las formas de lesiones de CC es aproximadamente del 1% (RVP) que venía ocurriendo desde el último trimestre de embarazo
de los nacidos vivos, aunque las estimaciones en el recién nacido estén sufre una caída abrupta con la primera inspiración de aire del recién
posiblemente afectadas por el infradiagnóstico de algunas lesiones, nacido (fig. 55.1). Esta caída en la RVP causa un incremento de 20
como la válvula aórtica bicúspide, y el sobrediagnóstico de estructuras veces el flujo sanguíneo pulmonar y reversión del flujo (izquierda-
normales que están en transición, incluidos el agujero oval y el con- derecha) en el conducto arterioso antes de su cierre (Teitel, 1988). En
ducto arterioso. La presentación del recién nacido con CC puede variar segundo lugar, los cortocircuitos centrales presentes en el feto sufren
desde estar asintomático hasta el colapso cardiovascular completo. Más el cierre, por lo que la sangre fluye en serie a través del cuerpo. El
comúnmente, los neonatos con CC se presentan con soplo, cianosis y/o conducto venoso se cierra en gran parte debido a la falta de flujo seguida
insuficiencia cardíaca congestiva (ICC). Las lesiones que provocan cada a la separación de la placenta, aunque algunos elementos contráctiles
uno de estos hallazgos clínicos se considerarán por separado, aunque pueden estar presentes en las paredes del vaso (Adeagbo et al., 2004). El
existe una considerable superposición entre los tres grupos. agujero oval se ocluye cuando la hoja del septum primum se apoya en el
septum secundum tras el incremento del flujo sanguíneo pulmonar que
Consideraciones generales aumenta el llenado de la aurícula izquierda. Pequeños cortocircuitos
residuales izquierda-derecha en el agujero oval pueden persistir, aun-
Transición fetal-posnatal que generalmente van a disminuir con el tiempo (v. «Comunicación
interauricular», más adelante). El cierre del conducto arterioso está
El estado hemodinámico del feto es muy diferente al del recién nacido. mediado por una variedad de vías, aunque la persistencia del conducto
En el feto, existe una relativa baja resistencia vascular sistémica debido arterioso usualmente puede mantenerse con la administración de pros-
a la presencia de la placenta, y la vascularización pulmonar mantiene taglandinas exógenas. La tercera transición importante del nacimiento
una alta resistencia. Existen cortocircuitos centrales que proveen rutas es un incremento del gasto ventricular combinado debido a que las
circulatorias alternativas en el lado venoso (conducto venoso), en el demandas metabólicas del cuerpo se incrementan con el nacimiento.
corazón (agujero oval) y en lado arterial (conducto arterioso). Los drásticos cambios hemodinámicos que ocurren con el naci-
El conducto venoso recoge predominantemente sangre rica en miento continúan evolucionando a lo largo de los siguientes meses.
oxígeno y nutrientes de la placenta a través de la vena umbilical y lleva Hay un continuo descenso de la RVP durante las primeras 6-8 semanas
esta sangre directamente a la aurícula derecha, pasando del sistema después del nacimiento. Además, el ventrículo derecho se remodela en
venoso hepático al portal. Basado en estudios en fetos de oveja, menos un ventrículo más delgado y distensible. El hallazgo de un agujero oval
de la mitad del retorno venoso umbilical entra en el lóbulo izquierdo permeable puede persistir durante años, aunque en la mayoría de los
del hígado y alcanza el conducto venoso cercano a su inserción en la individuos el tabique se vuelve adherente.

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802 PA RT E XI Aparato cardiovascular

si los órganos que aparecen en ambos lados son estructuras laterales


derechas (hígado, aurícula derecha y pulmón trilobulado) o latera­
les izquierdas (estómago/bazo, aurícula izquierda, pulmón bilobulado),
dado que esto puede tener una importancia pronóstica y terapéutica.
Por ejemplo, pacientes con lateralidad derecha bilateral presentan
típicamente ausencia de bazo y requieren antibióticos profilácticos de
por vida para organismos encapsulados y presentan malrotación del
intestino.
Las conexiones venosas de los sistemas venosos superior e inferior
también deben delinearse. La conexión habitual de la VCS con la
aurícula derecha puede también acompañarse de una VCS izquierda
persistente al seno coronario, con o sin vena braquiocefálica como
puente. La VCI deriva de varios vasos embriológicos y puede presentar
su segmento suprahepático interrumpido, en cuyo caso la conexión
• Figura 55.1  Cambio en la resistencia vascular pulmonar. Se aprecia
normal de la VCI con la aurícula derecha no ocurre. En este caso, el
una caída gradual en la resistencia vascular pulmonar durante la última
parte de la gestación, seguida de una caída abrupta en el momento
flujo sanguíneo de la mitad inferior del cuerpo se desvía a la VCS a
del nacimiento. Una caída posnatal gradual ocurre a lo largo de las 6-8 través de los sistemas ácigos o hemiácigos. Varias conexiones pulmo-
semanas siguientes. nares venosas se describen más adelante.
Las aurículas pueden ser solitus con la aurícula derecha morfoló-
gica a la derecha (normal), inversus, en imagen de espejo, comunes o,
Nomenclatura raramente, indeterminadas. La aurícula derecha se identifica típica-
mente por sus conexiones venosas (en particular, el seno coronario),
La descripción completa de cualquier corazón requiere algo más la presencia de cresta terminal, la amplia orejuela en forma de vela y
que la descripción de presencia o ausencia de un defecto cardíaco los gruesos músculos pectíneos de la pared libre. La aurícula izquierda
congénito específico. Cada corazón tiene un conjunto específico se caracteriza por sus paredes lisas y su orejuela angosta en forma de
de estructuras y conexiones que pueden ser normales o anormales. dedo. La morfología auricular puede discernirse típicamente con
Mientras que la terminología utilizada para las lesiones cardíacas es ecocardiografía, aunque la angiografía puede también ayudar en su
relativamente consistente entre los cardiólogos pediátricos, se han distinción. Cuando la aurícula derecha morfológica se conecta con
desarrollo diferentes nomenclaturas para definir completamente la el ventrículo derecho morfológico (y de manera similar en el lado
anatomía cardíaca, y varios sistemas han evolucionado basados en izquierdo), la conexión es concordante. Una conexión discordante
enfoques quirúrgicos, origen embriológico o relaciones espaciales, ocurre cuando la aurícula derecha morfológica se conecta con el
lo cual ha obstaculizado la comunicación entre individuos e ins- ventrículo izquierdo morfológico, como en la transposición de los
tituciones. Un método común para describir la anatomía cardíaca grandes vasos (TGV) corregida. Cuando ambas aurículas se conectan
sería beneficioso, pero parece improbable un consenso en el futuro con un ventrículo (como en el ventrículo izquierdo de doble entrada)
cercano. Mientras que el breve resumen de nomenclatura aportado o un ventrículo único, nos referimos a este tipo de conexión como
aquí se basa en el enfoque por segmentos de Anderson et al. (1984), univentricular. Una conexión ambigua ocurre en casos de isomería
el enfoque embriológico de Van Praagh (1972) es igualmente válido auricular.
y se utiliza en varias instituciones. Las válvulas AV usualmente viajan con su ventrículo. Por tanto,
El enfoque por segmentos para describir la anatomía cardíaca la válvula tricúspide, cuando está presente, se conecta con el ventrículo
incluye: derecho morfológico, y la válvula mitral se conecta con el ventrí­
1. Posición cardíaca. culo izquierdo morfológico. La válvula tricúspide tiene tres valvas y se
2. Lateralidad visceral. distingue de la válvula mitral por la inserción septal de sus músculos
3. Conexiones venosas sistémica y pulmonar. papilares y la ligera posición inferior de la valva septal de la válvula
4. Lateralidad auricular y sus conexiones. tricúspide en relación con la valva anterior de la válvula mitral. Cuando
5. Válvulas auriculoventriculares (AV). las válvulas AV fracasan en sufrir la tabicación, se encuentra una válvula
6. Lateralidad ventricular. AV común, como en los niños con comunicación AV completa. La
7. Conexiones ventriculoarteriales. posición de las válvulas AV y sus inserciones cordales se utilizan para
8. Número y posición de grandes vasos. definir si las válvulas están mal alineadas o a horcajadas. Una válvula AV
La descripción de la posición cardíaca en el tórax puede separarse mal alineada no está completamente posicionada sobre su respectivo
en dónde está ubicado el corazón y la dirección a la cual apunta el ventrículo, a lo cual se refiere a veces como acabalgada. Si las inserciones
vértice del corazón. Normalmente, el corazón está en el tórax izquierdo cordales de una válvula AV atraviesan el tabique y se conectan con el
y el vértice apunta a la izquierda. La dextroposición (derecha) o la otro ventrículo, nos referimos a válvula AV a horcajadas.
mesoposción (línea media) del corazón pueden ocurrir con volumen La morfología de los ventrículos, la válvula AV asociada y la porción
pulmonar derecho disminuido, escoliosis grave o diafragma izquierdo del tracto de salida del ventrículo pueden utilizarse generalmente
elevado. Típicamente, la posición del corazón en el tórax se determi- para identificar los ventrículos derecho e izquierdo. El ventrículo
na con una radiografía de tórax. La disposición normal del vértice derecho, además de estar asociado con la válvula tricúspide, presenta
apuntando a la izquierda (levocardia) puede variar a mesocardia (en mayor trabeculación en el vértice y la pared libre anterior que el ven-
muchos síndromes de heterotaxia) o dextrocardia (en la transposición trículo izquierdo. Además, existe un anillo infundibular o cónico en
visceral). La orientación del vértice del corazón se define usualmente el ventrículo derecho que separa la válvula tricúspide de la válvula
por ecocardiografía. semilunar. El ventrículo izquierdo, además de tener paredes más lisas
La lateralidad visceral se define frecuentemente de manera separada con trabeculaciones más finas en su vértice que el ventrículo dere-
en los órganos abdominales, las estructuras cardíacas y los pulmones, cho, presenta continuidad fibrosa entre la válvula mitral y la válvula
aunque frecuentemente se sigan uno al otro. La lateralidad se refiere semilunar. Cuando la morfología ventricular es incierta, se dice que
a solitus (normal), inversus (imagen de espejo) o ambigua (isomería o los ventrículos son indeterminados. Un ventrículo común se define por
indeterminada). En la última situación se hace un esfuerzo para definir la ausencia virtual de tabique interventricular.

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CAPÍTULO 55 Cardiopatías congénitas 803

Los grandes vasos se definen por su patrón de ramificación. La adelante). Un hermano con CC duplica la posibilidad de futuros hijos
arteria pulmonar se bifurca poco después de salir del corazón en con CC (Nora y Nora, 1988). Una historia de CC en cualquiera de los
las arterias pulmonares derecha e izquierda, que sufren la subsi- padres también aumenta la probabilidad de desarrollar una alteración
guiente ramificación para proveer a los segmentos del pulmón. La cardíaca congénita (Nora y Nora, 1987; Whittemore et al., 1994).
arteria pulmonar derecha se posiciona anterior al bronquio principal La exploración física del recién nacido debe incluir inicialmente
derecho, mientras que la arteria pulmonar izquierda es posterior una evaluación en busca de características dismórficas y el grado de
al bronquio principal izquierdo. Las arterias pulmonares siguen sufrimiento del niño. El niño con fisiología cardíaca obstructiva puede
típicamente la ubicación de los pulmones, y así la ramificación de la presentar respiración superficial y rápida con retracción intercostal y
arteria pulmonar en imagen de espejo se puede ver en la transposición supraesternal. La cianosis puede o no depender del grado de desa-
visceral, las ramas de arterias pulmonares bilaterales anteriores a los turación de hemoglobina (grosso modo, 5 g de hemoglobina deben
bronquios fuente pueden verse en la isomería derecha y las ramas de estar desaturados para ser clínicamente evidentes). Los signos vitales,
arterias pulmonares posteriores a los bronquios fuente en la isomería incluida la presión arterial en las cuatro extremidades, deben determi-
izquierda. La aorta se encuentra normalmente a la izquierda, trans- narse junto con la medición de la saturación de oxígeno preductal y
curre a la izquierda de los bronquios fuente y da nacimiento a los posductal. La palpación del precordio puede identificar un impulso
tres vasos del cayado. Un arco aórtico derecho pasa a la derecha del cardíaco hiperactivo o desplazado, o la sensación de frémito por la
bronquio fuente antes de cruzar por detrás al lado izquierdo de la presencia de flujo turbulento. La palpación del abdomen para evaluar
columna en el tórax y da nacimiento a arcos vasculares en imagen de el reborde costal o la punta del bazo con frecuencia son indicadores
espejo, por lo que el primer vaso del cayado, la arteria braquiocefálica, de sobrecarga de volumen o infección neonatal. La evaluación de los
se bifurca para dar nacimiento a la subclavia derecha y la carótida pulsos femorales y de los miembros superiores es esencial. La palpación
derecha. Mientras que la aorta se encuentra típicamente posterior y simultánea del pulso braquial derecho y femoral derecho permite una
a la derecha del tronco de la arteria pulmonar, la posición relativa evaluación comparable de tiempo e intensidad de las pulsaciones. Es
de los vasos puede variar bastante. Más comúnmente, en la D-TGV, también importante determinar la perfusión y el llenado capilar de las
la aorta es anterior y derecha al tronco de la arteria pulmonar. En extremidades.
situaciones donde solo está presente una única válvula semilunar, se La auscultación del neonato enfermo constituye con frecuencia un
halla un tronco arterioso (o arteria troncal común) que da nacimiento desafío. Sin embargo, la caracterización de la presencia, el tiempo, la
tanto a la aorta como a la arteria pulmonar. intensidad, la posición y la irradiación de los soplos presentes puede
Se dice que las conexiones ventriculoarteriales son concordantes proveer un indicio del diagnóstico subyacente. En el niño taquipneico
cuando el ventrículo derecho se conecta con la arteria pulmonar y taquicárdico, es crítico auscultar el cuello y el hígado en busca de
y el ventrículo derecho da nacimiento a la aorta. La conexión ven- un soplo continuo que puede indicar malformación arteriovenosa
triculoarterial es discordante cuando ocurre lo opuesto. La conexión (MAV). La presencia de un clic o galope en el precordio puede indicar
ventriculoarterial también puede ser doble, individual o común. Si enfermedad valvular o insuficiencia cardíaca. La evaluación del segundo
ambos grandes vasos emergen de un ventrículo, ocurre una doble sali- ruido cardíaco es particularmente importante. Se ha sugerido que la
da. La definición de conexión con doble salida es controvertida. Por presencia de un desdoblamiento fisiológico del segundo ruido cardíaco
ejemplo, en el caso de doble salida ventricular derecha (DSVD) con casi siempre sugiere un corazón estructuralmente normal (El-Segaier
apropiada conexión de grandes vasos, algunos clínicos han propuesto et al., 2007).
basar la definición en si más del 50% de la aorta está acabalgada sobre Los signos de ICC en el recién nacido pueden ser sutiles, e incluyen
el ventrículo derecho, mientras que otros definen la doble salida si taquipnea de reposo (sin variación periódica), taquicardia sinusal
existe un cono subaórtico que provoque la discontinuidad mitral- y hepatomegalia. La taquipnea puede acompañarse de aleteo nasal y
aórtica. Desde el punto de vista del tratamiento de un paciente, retracción intercostal y supraesternal, particularmente en situaciones
ambas situaciones son relevantes para colocar un parche para corregir donde hay presencia de presiones venosas pulmonares elevadas. El
la comunicación interventricular (CIV) o el potencial de desarrollar quejido respiratorio es un signo preocupante en el recién nacido y con
una obstrucción subaórtica, respectivamente. Una salida única ocurre frecuencia se acompaña de insuficiencia cardíaca grave y perfusión
cuando hay grave hipoplasia pulmonar y no hay segmento de tronco sistémica disminuida.
de arteria pulmonar. Una salida común ocurre en el tronco arterioso. Debido a que muchos niños con CC se presentan asintomáticos
durante el período de recién nacido y tienen una exploración física
Evaluación clínica del recién nacido normal, y debido a que el ultrasonido prenatal de rutina no detecta
todos los defectos, se ha recomendado incluir la pulsioximetría al
A pesar de los avances tecnológicos en ecocardiografía prenatal y panel de evaluación de rutina del recién nacido (Mahle et al., 2012).
posnatal y en la evaluación genética, una cuidadosa historia clínica y El cribado apunta específicamente a defectos cardíacos congénitos
exploración física son imprescindibles en cada recién nacido con sos- críticos o aquellos que usualmente requieren una intervención en el
pecha de CC. Es importante documentar antecedentes del nacimiento, primer mes de vida y que pueden llevar a la muerte o a morbilidades
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incluyendo complicaciones durante el embarazo, el trabajo de parto significativas de no diagnosticarse en tiempo y forma. A raíz de esta
y el parto propiamente dicho. Con frecuencia, el niño con cianosis recomendación, ha habido varios estudios enfocados en la posibilidad
debido a una cardiopatía estructural no tiene una historia detallada de realización, la implementación y el impacto de esta detección sis-
del nacimiento. Un trabajo de parto o un nacimiento dificultoso temática (Garg et al., 2013).
pueden apuntar a causas de cianosis no cardíacas, como persistencia
de circulación fetal, infección o neumotórax. En el niño con mala Pruebas analíticas y de imagen en el neonato
perfusión sistémica, una historia de rotura prematura de membranas o
fiebre materna puede sugerir sepsis como causa de la función cardíaca Como se mencionó previamente, las pruebas analíticas iniciales deben
disminuida. Alteraciones hematológicas que pueden causar disfunción incluir mediciones de la saturación de oxígeno preductal (mano dere-
cardiovascular en el neonato, como policitemia o anemia, pueden cha) y posductal (pie). Valores por debajo del 93% se consideran anor-
ser sugestivas de desprendimiento de placenta o transfusión gemelo males. La prueba de hiperoxia se realiza aumentando la concentración
a gemelo. del oxígeno inspirado al 100% durante al menos 5 min. Los valores de
Es crítica la revisión de historia familiar con los padres biológicos. saturación de oxígeno que aumentan hasta un rango normal pueden
Hay una base genética para una cantidad en aumento de CC (v. más ser útiles para distinguir la mezcla de defecto cardíaco cianótico de

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804 PA RT E XI Aparato cardiovascular

TABLA
55.1  Estándares según la edad

Edad Eje QRS PR QRS QV6 (mm) RV1 (mm) SV1 (mm) RV6 (mm) SV6 (mm) SV1 + RV6
< 1 día 59-163 0,08-0,16 0,031-0,075 2 5-26 0-23 0-11 0-9,5 28
1-2 días 64-161 0,08-0,14 0,032-0,066 2,5 5-27 0-21 0-12 0-9,5 29
3-6 días 77-163 0,07-0,14 0,031-0,068 3 3-24 0-17 0,5-12 0-10 24,5
1-3 semanas 65-161 0,07-0,14 0,036-0,08 3 3-21 0-11 2,5-16,5 0-10 21
1-2 meses 31-113 0,07-0,13 0,033-0,076 3 3-18 0-12 5-21,5 0-6,5 29
3-5 meses 7-104 0,07-0,15 0,032-0,08 3 3-20 0-17 6,5-22,5 0-10 32
6-11 meses 6-99 0,07-0,16 0,034-0,076 3 1,5-20 0,5-18 6-22,5 0-7 32
1-2 años 7-101 0,08-0,15 0,038-0,076 3 2,5-17 0,5-21 6-22,5 0-6,5 39
3-4 años 6-104 0,09-0,16 0,041-0,072 3,5 1-18 0,2-21 8-24,5 0-5 42
5-7 años 11-143 0,09-0,16 0,042-0,079 4,5 0,5-14 0,3-24 8,5-26,5 0-4 47
8-11 años 9-114 0,09-0,17 0,041-0,085 3 0-12 0,3-25 9-25,5 0-4 45,5
12-15 años 11-130 0,09-0,18 0,044-0,087 3 0-10 0,3-21 6,5-23 0-4 41
Adulto −30-90 0,12-0,2 0,05-0,1 0-10 0,5-23 4-23 0-4 35

una enfermedad pulmonar, aunque esta prueba no logra discriminar tamente en el recién nacido debido a la relativamente alta RVP, y
perfectamente. Deben incluirse los antecedentes y la exploración física puede tardar días o semanas en volverse evidente. Frecuentemente,
para guiar la necesidad de una mayor evaluación. Una disminución en una trama vascular pulmonar disminuida en alteraciones con dis-
la saturación de oxígeno posductal comparada con valores preductales minución del flujo sanguíneo pulmonar, como en la atresia tricus-
sugiere la presencia de cortocircuito (shunt) derecha-izquierda debido pídea o pulmonar, se evidenciará en el período de recién nacido.
a un aumento de la RVP. La situación inusual en la cual la lectura de La presencia de un CAP, sin embargo, mejorará el flujo sanguíneo
saturación preductal es menor que la lectura posductal sucede cuando pulmonar en este tipo de alteraciones.
una TGV está asociada con hipertensión pulmonar y un conducto La ecocardiografía es realmente el pilar diagnóstico de CC en el
arterioso persistente (CAP). neonato (descrita en detalle en el capítulo 53). Mientras que nosotros
Debe realizarse un electrocardiograma (ECG) en la evaluación alentamos la realización de una evaluación cardiovascular completa
inicial del recién nacido con sospecha de CC, aunque, en ausencia de y una consulta con el cardiólogo pediátrico en todos los niños con
arritmias, rara vez aporta un diagnóstico específico. El ECG neonatal sospecha de CC, más programas están realizando ecocardiogramas en
muestra desviación de los vectores hacia la derecha y puede presentar neonatos sin la evaluación directa del recién nacido por un cardiólogo
una onda T picuda en las derivaciones precordiales derechas durante pediátrico. En estos casos, es crítica la revisión de la examinación
los primeros días después del nacimiento, que pueden no ser diagnós- ecocardiográfica por un cardiólogo pediátrico con conocimiento de
ticas de hipertrofia ventricular derecha. Los estándares según la edad se la condición clínica del niño. Posteriormente, el cardiólogo pediátrico
encuentran disponibles y deben consultarse cuando se evalúa el ECG que evalúe el ecocardiograma discutirá los hallazgos directamente con
(tabla 55.1). Ciertas lesiones pueden cursar con hallazgos distintivos en los intensivistas con el fin de definir un enfoque terapéutico relevante
el ECG, como una desviación extrema del eje hacia la derecha y ondas en equipo y el seguimiento.
Q en derivaciones DI y aVL (conducto AV completo), preexcitación
y sobrecarga auricular derecha (anomalía de Ebstein), y ondas Q en Genética y cardiopatía congénita
derivaciones V1-V3 (TGV corregida).
También se debe realizar una radiografía de tórax en el niño Nuestra comprensión de las bases genéticas de las CC está progresando
evaluado por CC. La radiografía de tórax puede ayudar a determinar a un ritmo acelerado. La identificación precoz de la asociación entre
si la enfermedad pulmonar está contribuyendo a la cianosis. El síndromes específicos con CC sugirió que sería posible identificar
tamaño cardíaco, la forma y los bordes de la silueta deben evaluarse genes relevantes en la morfogenia cardíaca anómala. Una vez com-
en la radiografía de tórax junto con la trama vascular pulmonar. pletado el Proyecto Genoma Humano y la disponibilidad de técnicas
Una sombra tímica prominente en el recién nacido puede dificultar de secuenciación a gran escala, las causas genéticas de CC progresaron
la identificación de los hallazgos clásicos en la radiografía, como hasta volverse altamente refinadas. Por ejemplo, la variación en el
el corazón en «botellón» en la tetralogía de Fallot (TF), el signo número de copias, un término utilizado para reflejar la cantidad de
del «huevo en una cuerda» en la transposición y la apariencia de genes expresados cuando segmentos largos de ADN son amplificados o
«muñeco de nieve» supracardíaco en el retorno venoso pulmonar eliminados, contribuye en la CC sindrómica hallada en el síndrome de
total anómalo (RVPTA), aunque el incremento masivo del tamaño DiGeorge, donde ocurre una interrupción de 3 megabases en 22q11.
cardíaco hallado típicamente en la anomalía de Ebstein no pasará Se han identificado una variedad de variaciones en el número de copias
desapercibido. Una sombra tímica ausente puede sugerir síndrome que contribuyen a la enfermedad tanto sindrómica como no sindrómica
de DiGeorge (deleción 22q11), aunque se requieren test genéticos. en la CC (Fahed et al., 2013).
El aumento en la trama vascular pulmonar hallado típicamente en La lista de mutaciones puntuales que causan una CC en particular
los cortocircuitos izquierda-derecha puede no ser aparente inmedia- continúa creciendo a medida que individuos y familias son estudiados

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CAPÍTULO 55 Cardiopatías congénitas 805

utilizando secuenciación de segunda generación. Se precisa información indicaciones de trasplante cardíaco pediátrico (adaptado de Canter
considerable en el posprocesado de secuencia para excluir polimorfis- et al., 2007):
mos comunes en la secuencia. La CC sindrómica hallada en el síndrome 1. Necesidad de soporte inótropo intravenoso continuo o soporte
de Alagille, el síndrome de Noonan y el síndrome de Holt-Oram ha mecánico circulatorio.
sido asociada a mutaciones puntuales. La lista de mutaciones puntuales 2. CC compleja no pasible de reparación quirúrgica convencional o
no sindrómicas que causan CC aislada continúa creciendo (Allen paliación o en aquellos en que el procedimiento quirúrgico acarrea
et al., 2008; Fahed et al., 2013). mayor riesgo de mortalidad que el trasplante.
A pesar de los avances en la comprensión de las bases genéticas 3. Deterioro progresivo de la función ventricular o del estado funcional
en la CC, se desconocen las bases genéticas de más de la mitad de a pesar del tratamiento médico óptimo.
niños con CC. Es posible que la interacción alterada con regiones no 4. Arritmia maligna o superviviente de parada cardíaca no respon-
codificantes del genoma impacte en el grado en el cual se expresan dedora a tratamiento médico, ablación por catéter o desfibrilador
los genes que regulan el desarrollo cardíaco. También pueden existir automático implantable.
interacciones gen-ambiente, aún no definidas, que impacten en el 5. Hipertensión pulmonar progresiva que pueda imposibilitar tras-
desarrollo cardíaco. plante futuro.
Un niño con sospecha de CC debe ser evaluado cuidadosamente 6. Fallo del crecimiento secundario a ICC grave que no responde a
en busca de características dismórficas que puedan indicar la pre- tratamiento médico convencional.
sencia de un síndrome asociado. A la inversa es también cierto que, 7. Inaceptable mala calidad de vida.
si se sospecha que un recién nacido presenta un síndrome, debe Existen diversas lesiones en el neonato para las cuales el trasplante
considerarse una cuidadosa evaluación cardíaca, incluyendo un cardíaco se ha utilizado como paliación primaria. Estas incluyen
ecocardiograma. ventrículo izquierdo hipoplásico, atresia pulmonar con tabique ven-
El cribado de cromosomas es un importante paso inicial en la tricular intacto y la presencia de sinusoides coronarios, heterotaxia
evaluación genética del recién nacido con un presunto síndrome. compleja o conducto AV completo no equilibrado con pobre función
Asociaciones bien descritas entre lesiones cardíacas congénitas con ano- de válvula AV común, y corazones con ventrículo único donde la
malías cromosómicas incluyen la trisomía del par 21 con comunicación válvula semilunar es gravemente insuficiente. Cuando se considera
AV completa, el síndrome de Turner (45 XO) con coartación de la el trasplante cardíaco en estos pacientes, existe un equilibrio entre el
aorta, el síndrome de William (deleción 7q11) con estenosis valvular y éxito de la cirugía paliativa y la disponibilidad de órganos para ser tras-
supravalvular pulmonar, y el síndrome de DiGeorge o velocraneofacial plantados. Por ejemplo, a lo largo de la última década, la supervivencia
(deleción 22q11) con anomalías conotroncales. Estos síndromes, y de pacientes sometidos a cirugía paliativa de síndrome del corazón
otros, hacen del análisis de cariotipo con hibridación in situ fluores- izquierdo hipoplásico (SCIH) ha continuado mejorando (Alsoufi
cente (FISH) un paso inicial importante en la evaluación del recién et al., 2007a; Gordon et al., 2008). Con el escaso incremento en la
nacido con estas lesiones. disponibilidad de donantes pediátricos en este período de tiempo
Debe realizarse una evaluación genética en todos los recién nacidos (tabla 55.2), el equilibrio en el tratamiento de estos recién nacidos ha
con sospecha de síndromes en presencia o no de CC. Estudios para aumentado hacia la cirugía paliativa con procedimientos de Norwood
deleciones 22q11 con FISH deben realizarse en todos los niños con o Norwood híbrido.
anomalías conotroncales, como TF, tronco arterioso e interrupción del Los pacientes con las otras alteraciones mencionadas en este aparta-
arco aórtico. Otros estudios mediante FISH pueden solicitarse específi- do continúan teniendo relativamente pobres resultados quirúrgicos, lo
camente en la mayoría de las instituciones, aunque el número máximo que sugiere que la paliación con trasplante cardíaco puede ser el mejor
de sondeos fluorescentes es de cuatro o cinco debido a limitaciones de enfoque. Dada la limitada disponibilidad de órganos, sin embargo,
detección para el rango de longitud de onda disponible. El cribado debe reconocerse que algunos de estos niños no sobrevivirán al tras-
genético por técnicas de arreglo de hibridación genómica comparativa plante (Kirklin et al., 2006). La supervivencia a largo plazo de niños
está disponible, y es capaz de detectar deleciones y duplicaciones a lo sometidos a trasplante cardíaco es bastante buena. La supervivencia
largo del genoma. a 10 años en niños continúa mejorando, con tasas actuales del 66%
La evaluación genética no es solo útil como ayuda para aportar (Boucek et al., 2007). Es interesante saber que es mayor la supervi-
información pronóstica para un paciente específico, sino también para vencia en niños que reciben su trasplante antes del mes de vida frente
proveer consejo a la familia. La derivación de consulta a un profesio- a los que lo reciben entre el mes 1 y los 12 meses (del Rio, 2000).
nal especializado en genética debe considerarse cuando un cariotipo, Aunque no se conoce el mecanismo por el cual los neonatos más
estudio de FISH o arreglo de hibridación genómica comparativa sea jóvenes presentan mejor supervivencia, puede reflejar una ventana
anormal. Deben revisarse la consideración de los servicios disponibles inmunológica donde el rechazo al trasplante y la enfermedad coronaria
para el niño, el cribado en otros miembros familiares el riesgo de futuros se encuentran limitados.
embarazos durante la consulta genética y que impactarán en el cuidado
general del paciente.
Dispositivos de asistencia ventricular
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Trasplante cardíaco A lo largo de los últimos años se ha incrementado el desarrollo de dis-


positivos de soporte circulatorio mecánico para la población pediátrica
La cirugía paliativa de lesiones cardíacas congénitas permite que la
mayoría de las anomalías estructurales en el período de recién nacido
puedan corregirse o paliarse. En situaciones donde la anomalía es
principalmente miocárdica o donde la reparación quirúrgica no con- TABLA  Número de donantes disponibles para
sigue corregir suficientemente la hemodinámica del niño, el trasplante 55.2 trasplante cardíaco pediátrico por año en EE. UU.
cardíaco puede ser la única opción terapéutica.
El primer trasplante cardíaco en un niño se reportó en 1968 (Kan- Año 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015
trowitz et al., 1968). Desde entonces, la comprensión de la inmuno- Donantes 89 87 100 116 105 110 106 117 120 126
logía del trasplante y el tratamiento médico ha hecho del trasplante
cardíaco en niños una opción para pacientes inoperables para los que Datos tomados de la Organ Procurement and Transplant Network Database (http://optn.
tienen una cardiopatía terminal. En una publicación científica reciente transplant .hrsa.gov/).
de la American Heart Association (Canter et al., 2007) se definen las

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806 PA RT E XI Aparato cardiovascular

que sirven como puente en la recuperación de cirugías cardíacas o en el El diagnóstico de CAP, cuando se sospecha durante el examen, casi
trasplante cardíaco. Mientras que la disponibilidad de los dispositivos siempre puede confirmarse por medio de una ecocardiografía. Incluso
para neonatos está retrasada respecto a aquellos para niños mayores y en presencia de RVP elevada con cortocircuito izquierda-derecha limi-
adultos, ahora hay opciones disponibles. tado, la diferencia en la morfología de la onda de pulso entre la aorta
El dispositivo de soporte circulatorio mecánico aprobado para su y la arteria pulmonar permitirá que el cortocircuito izquierda-derecha
uso en niños es el dispositivo de asistencia ventricular (DAV) pediá- y/o derecha-izquierda se observe por Doppler color. La ecocardiografía
trico EXCOR. Este es un dispositivo activado neumáticamente que también puede aportar información respecto al grado de cortocircuito
se fabrica en cinco tamaños, el más pequeño de los cuales administra izquierda-derecha, como dimensiones aumentadas de la aurícula izquier-
un volumen de 10 ml por latido. Uno o dos dispositivos pueden ser da y del ventrículo izquierdo, y la relación aurícula izquierda/aorta
implantados para dar soporte a uno o ambos ventrículos, respecti- aumentada. Además, se podrá observar el flujo retrógrado en la aor-
vamente. Los estudios han buscado supervivencia y complicaciones ta descendente proximal en presencia de un amplio cortocircuito. El
en niños en el rango de 3-5 kg y una edad gestacional corregida de cateterismo cardíaco raramente es necesario, a menos que se considere
al menos 37 semanas, en comparación con niños mayores (Almond un cierre del CAP con espiral.
et al., 2013). La mortalidad temprana estuvo aumentada en asociación El pronóstico de los CAP pequeños es bastante bueno, y existe deba-
con un menor peso corporal. En los 33 niños incluidos en el estudio te acerca de si se debe realizar el cierre de CAP «silentes», identificados
que pesaban menos de 5 kg, el 64% murieron después del implante incidentalmente con ecocardiografía (Giroud y Jacobs, 2007). Con
del DAV. las recomendaciones más recientes de la American Heart Association,
Dados los desafíos del uso de los DAV actuales en niños, otros dis- donde se sugiere que los CAP no requieren profilaxis para endocarditis
positivos continúan en desarrollo (Baldwin et al., 2011; Vanderpluym bacteriana subaguda (Wilson et al., 2007), existe escasa necesidad de
et al., 2014) y se encuentran en etapas experimentales o disponibles cerrar estos pequeños vasos.
para uso compasivo, en parte, por el Pediatric Circulatory Support Debido a la preocupación por la sobrecirculación pulmonar y el
Program of the National Heart, Lung, and Blood Institute. Varios desarrollo de enfermedad venooclusiva pulmonar, el cierre de CAP al
dispositivos se encuentran en diferentes etapas de evaluación (Baldwin año de edad está recomendado cuando hay presencia de cortocircuito
et al., 2011), algunos de los cuales son lo suficientemente pequeños izquierda-derecha significativo. La ligadura quirúrgica y la división
para su utilización en niños. pueden realizarse fácilmente por toracotomía lateral. Sin embargo, las
espirales y los dispositivos de cierre en el laboratorio de hemodinámica
presentan menor morbilidad e iguales tasas de éxitos que la cirugía
Soplos en el recién nacido: lesiones cardíacas (Arora, 2005). Como resultado, el cierre por catéter del CAP se ha
convertido en el método de preferencia en niños no prematuros. El
congénitas éxito del cierre con dispositivos depende en parte del peso del niño
y el tamaño y forma del CAP. Con el conjunto de dispositivos dis-
Conducto arterioso persistente y ventana ponibles en la actualidad, el cierre puede realizarse con seguridad en
aortopulmonar la mayoría de los niños que pesen más de 4 kg, y puede considerarse
en algunos niños que pesen entre 2,5 y 4 kg (Brunetti et al., 2010;
Como ya se discutió antes, prácticamente todos los niños nacen con Dimas et al., 2010).
un CAP que típicamente se cierra durante la primera semana de La ventana aortopulmonar (AP) ocurre cuando hay una comunica-
vida. La prematuridad es un factor de riesgo para CAP y se trató en ción directa entre la aorta y el tronco de la arteria pulmonar, y es una
el capítulo 54. El CAP en niños a término se presenta más común- lesión rara que puede fácilmente confundirse con CAP tanto en la
mente en el sexo femenino y puede tener un componente genético exploración física como en las pruebas analíticas. Casi la mitad de los
en algunos pacientes, como sugiere el modelo animal endogámico pacientes con una ventana AP tendrán una anomalía cardíaca asociada.
con caniches (Knight et al., 1973) y vinculación al cromosoma 12 Estas lesiones casi siempre causan un defecto amplio con alto grado de
(Mani et al., 2002). cortocircuito izquierda-derecha. Los pacientes mostrarán signos de ICC
La fisiopatología del CAP depende en gran parte del grado de en la evaluación y presentarán hallazgos en la exploración física y las
cortocircuito desde la aorta a la arteria pulmonar, el cual está determi- pruebas analíticas similares a aquellos con CAP amplios. Generalmente,
nado por el diámetro interno y la longitud del CAP, y las resistencias todas las ventanas AP deberían cerrarse una vez que se identifican. El
pulmonar y sistémica relativas. Si el diámetro del CAP es pequeño, el cierre de una ventana AP debe realizarse quirúrgicamente, generalmente
conducto arterioso en sí mismo proveerá el principal sitio de resistencia con parche de cierre del lado de la arteria pulmonar, y es la técnica
al flujo, y el cortocircuito será pequeño. En el caso de un CAP amplio, de elección.
la baja RVP puede permitir un cortocircuito significativo que coloca al
paciente en riesgo de desarrollar insuficiencia cardíaca y, eventualmente, Comunicación interventricular
enfermedad venooclusiva pulmonar. La vía de baja resistencia a través
de los pulmones proporciona una ruta de escape diastólico desde la Las CIV son el tipo más común de CC (excluyendo la válvula aór-
aorta que puede provocar disminución de la presión de perfusión tica bicúspide). Generalmente, las CIV se clasifican en cuatro tipos
coronaria. El robo diastólico por la arteria pulmonar puede llevar a (fig. 55.2):
isquemia miocárdica. 1. Perimembranosa.
Clínicamente, los pacientes con cortocircuitos pequeños perma- 2. Muscular.
necerán asintomáticos. Con cortocircuitos más amplios por CAP, la 3. De entrada.
progresiva caída de la RVP posnatal causará un incremento en el flujo 4. Infundibulares.
a través del cortocircuito izquierda-derecha con signos de insuficiencia La CIV perimembranosa CIV es la más común de los cuatro
cardíaca progresiva. El soplo en un niño con CAP es generalmente tipos y se conoce como membranosa, paramembranosa o infracrestal.
continuo, y ha sido descrito como soplos en «maquinaria» en la región Desde el lado ventricular derecho del corazón, estos defectos yacen
infraclavicular izquierda. La característica del soplo, sin embargo, varía bajo la valva septal de la válvula tricúspide por debajo de la cresta
ampliamente, aunque la naturaleza de continuidad está generalmente supraventricular y posterior al músculo papilar del cono. La CIV
presente una vez que la RVP ha caído. La exploración del paciente con muscular puede presentarse de manera aislada o múltiple («tabique en
CAP también incluye una amplia presión de pulso debido a la presión queso suizo») y, como el nombre implica, puede ocurrir en cualquier
diastólica disminuida y pulsos saltones. parte del tabique muscular. Las CIV musculares apicales son las más

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CAPÍTULO 55 Cardiopatías congénitas 807

• Figura 55.2  Variantes anatómicas de la comunicación interventricular. A. Subpulmonar. B. Mem-


branosa. C. De entrada (tipo auriculoventricular). D. Muscular apical. (Tomado de Mavroudis C, Backer
CL. Pediatric Cardiac Surgery. St. Louis, MO: Mosby Year Book; 1994.)

comunes y a veces son difíciles de medir con precisión por ecocardio- aórtica no generarán restricción del flujo que pase del ventrículo
grafía debido a las trabeculaciones del vértice del ventrículo derecho. izquierdo al ventrículo derecho. En este caso, el grado del cortocircuito
Las CIV de entrada están localizadas posterior e inferior a las CIV se determinará por la resistencia relativa al flujo en los lechos vas-
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.

perimembranosas, y, aunque la nomenclatura es controvertida, esta es culares pulmonar y sistémico. La caída posnatal normal de la RVP
la localización del defecto en pacientes con comunicaciones auriculo- provocará un progresivo incremento del cortocircuito izquierda-dere-
ventriculares completas. La localización de la CIV en pacientes con cha y signos de ICC. Un pequeño porcentaje de niños no presentan
defectos infundibulares es por encima de la cresta supraventricular y la habitual caída posnatal de la RVP, y puede que nunca desarrollen
típicamente socava la valva coronaria derecha de la válvula aórtica. signos de sobrecirculación pulmonar e insuficiencia cardíaca a pesar
Se han usado una gran variedad de sinónimos para describir las CIV de la presencia de una amplia CIV. Esta es una indicación de cierre
infundibulares, incluyendo subarterial, subaórtica, supracrestal y quirúrgico precoz del defecto.
conal. Cuando la CIV es pequeña con respecto a la válvula aórtica, el
La importancia clínica de cualquier CIV depende del tamaño defecto en sí mismo será el principal punto de resistencia al flujo del
del defecto y la resistencia relativa pulmonar-sistémica, las cuales, en cortocircuito. En este caso, cambios en la RVP tendrán poco impacto
conjunto, determinan el grado de cortocircuito izquierda-derecha. en el grado de cortocircuito izquierda-derecha.
Una consideración adicional con las CIV infundibulares es el grado en Una importante lesión asociada que es crucial descartar es la coar-
que la valva coronaria derecha de la válvula aórtica prolapsa dentro del tación de la aorta. La coartación provoca una elevación fija de la resis-
defecto, lo que da como resultado insuficiencia aórtica. Los defectos tencia vascular sistémica que puede causar un cortocircuito izquierda-
cuya área transversal es igual o mayor al área transversal de la válvula derecha importante incluso en presencia de una CIV pequeña. En este

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808 PA RT E XI Aparato cardiovascular

caso, el tratamiento médico suele ser incapaz de controlar los síntomas virtualmente nunca cierran y tienen el riesgo asociado de insuficiencia
de ICC, y se requiere cirugía. aórtica progresiva debido al prolapso de la valva coronaria derecha
El volumen de la sangre a través del cortocircuito se cuantifica con dentro de la comunicación.
mayor precisión con el cateterismo cardíaco basado en el salto en la La consideración a corto plazo en el seguimiento de pacientes con
saturación de oxígeno de la aurícula derecha (venosa mixta) a la arteria CIV es el tratamiento de la ICC si el cortocircuito izquierda-derecha
pulmonar, y se representa como la relación entre el flujo sanguí­neo pul- es excesivo. Las medicaciones que se utilizan incluyen furosemida
monar y el sistémico (Qp:Qs). Generalmente, una Qp:Qs menor (típicamente 1 mg/kg por dosis dos veces al día), digoxina (5 µg/
de 1,5 se considera por debajo del umbral quirúrgico, mientras que kg por dosis dos veces al día) y reducción de la poscarga con enala-
una Qp:Qs mayor de 2 es una indicación de cirugía. La Qp:Qs puede pril (dosis inicial de 0,05 mg/kg por dosis dos veces al día, hasta
también estimarse por ecocardiografía y resonancia magnética (RM). 0,2 mg/kg por dosis dos veces al día, mientras se monitoriza la presión
El examen del paciente con una CIV depende de la magnitud del arterial). La meta principal en controlar la ICC es permitir al recién
cortocircuito. Defectos pequeños que generan una restricción consi- nacido crecer adecuadamente y, si es posible permitir, el progresivo
derable al flujo por lo general presentan soplos de mayor intensidad. cierre de la CIV. La ganancia de peso es una medida útil y objetiva
La rápida caída de la RVP inmediatamente después del nacimiento para el seguimiento.
permite con frecuencia que los soplos de CIV se escuchen en el recién El objetivo a largo plazo del tratamiento o intervención es la pre-
nacido, aunque la extensión completa del soplo y quizás un frémito vención del desarrollo de enfermedad venooclusiva pulmonar irrever-
en el borde esternal inferior izquierdo no puedan apreciarse hasta sible. Los cortocircuitos con una Qp:Qs mayor de 2 presentan riesgo
pasadas varias semanas. El soplo puede tener una cualidad eyectiva de desarrollar enfermedad de Eisenmenger a largo plazo, y el cierre
en un principio en presencia de una RVP elevada y una presión ven- de la comunicación está justificado más allá de los 2-4 años de edad
tricular derecha levemente elevada. El típico soplo holosistólico será cuando es poco probable una mayor disminución de la comunicación.
más aparente en cuanto caiga la RVP. Si el tratamiento médico fracasa en controlar la insuficiencia
En presencia de CIV amplias, se puede auscultar un pequeño soplo o cardíaca y el niño no mejora, se requiere el cierre quirúrgico de la
ausencia del mismo dependiendo de la RVP. Con baja RVP, es probable comunicación en los primeros 6 meses de vida. El cierre quirúrgico
que existan signos de insuficiencia cardíaca, incluyendo taquipnea con también está indicado en el niño de 6-12 meses de vida con CIV
aleteo nasal y retracciones, taquicardia, diaforesis, pobre alimentación amplia que no ha demostrado signos y síntomas de ICC debido a
y ganancia de peso disminuida. Un soplo sistólico en el borde esternal la ausencia de caída de la RVP. En estos niños, cambios irreversibles
inferior izquierdo (causado por flujo incrementado a través del tracto en la vascularización pulmonar pueden ocurrir si no se elimina la
de salida del ventrículo derecho [TSVD]) puede escucharse junto con presión de carga de los pulmones. Como se mencionó previamente,
un murmullo diastólico de llenado (una ausencia de silencio) en el comunicaciones con Qp:Qs mayor de 2 y comunicaciones infun-
vértice. Si la RVP es elevada, el componente pulmonar del segundo dibulares también requieren cierre. El empleo de cerclaje (banding)
ruido cardíaco puede estar aumentado, aunque es difícil de apreciar. de las arterias pulmonares está cayendo en desuso para la paliación
Ocasionalmente, los defectos amplios pueden permitir que aparezca de pacientes con CIV a menos que la condición clínica del paciente
un cortocircuito transitorio derecha-izquierda, particularmente cuando haga insostenible la reparación completa. Hay un creciente uso de
el niño está llorando. procedimientos híbridos donde el cirujano y el cardiólogo interven-
En pacientes con CIV infundibular, el soplo holosistólico está cionista trabajan juntos para cerrar estos defectos en niños pequeños
presente frecuentemente, pero el soplo se localiza en el borde esternal (Contrafouris et al., 2009). Este enfoque combinado se ha aplicado
superior izquierdo. Debe auscultarse con cuidado para distinguir el exitosamente en el cierre de CIV musculares en niños que están
decrescendo diastólico de insuficiencia aórtica en el borde esternal posicionadas en una localización que es difícil de visualizar para el
izquierdo medio o en el vértice. cirujano desde un abordaje auricular derecho. Indicaciones adicio-
La evaluación analítica del niño con sospecha de CIV debería nales para el enfoque híbrido en el cierre de CIV probablemente se
incluir un ECG, una radiografía de tórax y un ecocardiograma. En determine en los próximos años.
los niños, el ECG puede no ser distintivo a menos que exista una
CIV de entrada. La obtención de una radiografía de tórax, incluso Comunicación interauricular
en el neonato, es importante con el fin de evaluar el tamaño cardíaco
y la trama vascular pulmonar. Puede ser también una herramienta Aunque las comunicaciones interauriculares (CIA) rara vez producen
importante en el seguimiento de recién nacidos con CIV cuando se soplos en el período neonatal, el soplo sistólico que generan después las
utiliza para evaluar la progresión del cortocircuito izquierda-dere- hace apropiadas para este apartado. Como ya se discutió previamente,
cha a medida que la RVP cae. La ecocardiografía es la técnica de el cortocircuito auricular intrauterino a través del agujero oval permite
referencia para caracterizar la localización y el tamaño de la CIV. Las a la sangre placentaria rica en nutrientes acceder al ventrículo izquierdo
lesiones asociadas, como la coartación de la aorta, pueden también y a la aorta ascendente. En el período posnatal inmediato, un cuidadoso
evaluarse fácilmente con ecocardiografía. Los estudios Doppler pue- examen con ecocardiografía del tabique interauricular generalmente
den estimar el grado de restricción calculando la caída de presión en identificará cortocircuito residual izquierda-derecha o bidireccional a
el defecto (v. capítulo 53). Mediciones en modo M pueden utilizarse través del agujero oval. La medición del tamaño del cortocircuito aporta
para determinar las dimensiones del ventrículo izquierdo, las cuales una indicación sobre si habrá una comunicación persistente. Una
estarán aumentadas en presencia de un cortocircuito izquierda-dere- apertura menor de 6 mm en un niño a término lo más factible es que se
cha significativo. Como ya se mencionó previamente, el cateterismo cierre, y nos referimos a ella como agujero oval permeable (AOP) para
cardíaco puede cuantificar con precisión el grado de cortocircuito, distinguirla de una verdadera CIA. Las CIA que representan lesiones
pero rara vez es necesario en la evaluación inicial del recién nacido congénitas se clasifican en:
con CIV. 1. Secundum.
Hasta el 80% de las CIV musculares pequeñas y entre el 30 y el 2. Primum.
50% de las perimembranosas se cerrarán espontáneamente. No es 3. Seno venoso.
habitual que estos defectos aumenten de tamaño, aunque el grado 4. Seno coronario.
de cortocircuito izquierda-derecha puede aumentar según caiga la Las CIA de tipo secundum son las más comunes y, cuando están
RVP. Ocasionalmente, las CIV de entrada sufren cierre secundario a presentes en el neonato, permiten el cortocircuito izquierda-derecha
adherencias cordales de las válvulas AV, pero el cierre está generalmente o bidireccional. La dirección del cortocircuito y la razón por la que
presente en el nacimiento si es que va a ocurrir. Las CIV infundibulares el soplo de una CIA es típicamente inaudible en el neonato es que la

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CAPÍTULO 55 Cardiopatías congénitas 809

distensibilidad del ventrículo derecho permanece baja hasta el remo- Comunicaciones auriculoventriculares
delado posnatal del ventrículo derecho. La reducida distensibilidad
del ventrículo derecho aumenta la presión auricular derecha y limita Se han utilizado una variedad de términos para describir las comuni-
el monto del cortocircuito izquierda-derecha a nivel auricular. Las caciones AV, incluidos defecto del conducto AV, defecto de los cojines
CIA de tipo secundum están asociadas con síndrome de Holt-Oram endocárdicos y orificio AV común. Además, existen diversos tipos de
(radios anormales, bloqueo AV de primer grado, y CIA). Las CIA de comunicación AV:
tipo primum se encuentran dentro del espectro de comunicaciones 1. Completa: la válvula AV común se presenta junto con una CIA de
auriculoventriculares y se considerarán en el apartado siguiente. Las tipo primum y CIV de entrada.
CIA de tipo seno venoso ocurren cuando la pared que separa la vena 2. Intermedia: anillo valvular AV común, aunque con válvulas AV
pulmonar derecha superior o inferior es deficiente, por lo que el retorno separadas junto con CIA de tipo primum y CIV de entrada.
venoso pulmonar de una o ambas venas desemboca en la aurícula dere- 3. Transicional: válvulas AV completamente separadas junto con una
cha. Esto provoca un cortocircuito izquierda-derecha. Esta variante de CIA de tipo primum y CIV de entrada.
retorno venoso pulmonar anómalo será considerada con mayor detalle 4. Parcial: válvulas AV separadas con una CIA de tipo primum y sin CIV.
más adelante en el capítulo. La CIA tipo seno coronario resulta de un Estos cuatro grupos presentan cierta relevancia terapéutica con res-
seno coronario «sin techo» por lo que este desemboca en la unión entre pecto al grado de anomalía de la válvula AV que debe considerarse en
la aurícula izquierda y la aurícula derecha donde el tabique es deficiente. cirugía, aunque cada una tiene una hendidura entre la valva anterior
Con frecuencia, esta lesión está asociada con una VCS izquierda persis- que puentea y la valva lateral de la válvula del lado izquierdo (mitral) que
tente que desemboca en el seno coronario. debe tenerse en cuenta. En niños con comunicación AV completa,
Durante la infancia avanzada, cuando la distensibilidad del ventrí- es importante evaluar si los ventrículos derecho e izquierdo están
culo derecho aumenta y el cortocircuito izquierda-derecha a través de la equilibrados, esto es, igualmente desarrollados para que la reparación
CIA aumenta, aparecen los hallazgos físicos clásicos de desdoblamiento biventricular sea posible, y el grado de insuficiencia AV, el cual tiene
fijo del segundo ruido cardíaco. Un soplo sistólico eyectivo en el borde importancia pronóstica en el resultado quirúrgico. Las comunicaciones
esternal superior izquierdo y un soplo de llenado diastólico ventricular AV son comunes en niños con síndrome de Down.
derecho en el borde esternal inferior izquierdo se hacen aparentes en En el período posnatal inmediato, las variaciones en la RVP, parti-
lesiones con Qp:Qs mayor de 2. El ECG con frecuencia mostrará un cularmente en niños con síndrome de Down, pueden resultar en un
patrón rsR’ en las derivaciones precordiales derechas con evidencia de cortocircuito derecha-izquierda a través de la CIA de tipo primum no
hipertrofia ventricular derecha. En la radiografía de tórax se apreciará restrictiva y/o CIV de entrada y dar como resultado desaturación sis-
cardiomegalia con segmento prominente del tronco de la arteria pul- témica. Muchos niños con comunicaciones AV completas desarrollarán
monar y aumento de la trama vascular. El ecocardiograma continúa insuficiencia cardíaca en los primeros 2 meses de vida según caiga la
siendo la técnica de referencia para la identificación y medición de RVP. Un pequeño porcentaje de niños no tendrán caída de la RVP,
estas comunicaciones. y la ausencia de insuficiencia cardíaca será un signo problemático e
No es común que los neonatos y niños con una CIA aislada desa- indicación de reparación quirúrgica precoz.
rrollen insuficiencia cardíaca. Típicamente, la intervención de una CIA Mientras que el diagnóstico reside generalmente en el ecocardio-
significativa se realiza para prevenir el desarrollo de la secuela a largo grama, las comunicaciones AV pueden sospecharse por el ECG con
plazo de enfermedad venooclusiva pulmonar. Por lo tanto, el cierre rara presencia de un eje de QRS superior (entre –30 y –120°), evidencia
vez se realiza antes de los 3-4 años de edad. El cierre con dispositivo de hipertrofia ventricular derecha y onda Q en derivaciones DI y aVL.
de la CIA de tipo secundum se realiza de rutina en los laboratorios de El ecocardiograma se utiliza para definir el tipo de comunicación
hemodinámica cuando los niños pesan más de 15 kg, aunque el cierre AV e identificar anomalías asociadas (fig. 55.3). Como se mencionó
quirúrgico se sigue realizando cuando las lesiones son amplias o el anillo antes, la evaluación crítica del tamaño ventricular relativo y el grado de
de tejido entre la CIA y la aorta es deficiente. insuficiencia valvular AV es necesaria. El examen del TSVD también
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• Figura 55.3  Vista ecocardiográfica de una comunicación auriculoventricular completa. A. Vista


de cuatro cámaras que muestra la válvula auriculoventricular común que separa las aurículas de los
ventrículos, los cuales en este paciente están bien equilibrados. Se observan la amplia comunicación
interauricular de tipo primum y la comunicación interventricular de entrada. B. Con Doppler color, se
aprecia flujo de entrada a través de la válvula auriculoventricular.

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810 PA RT E XI Aparato cardiovascular

es necesario, debido a la estenosis pulmonar o TF asociada, que puede la presión ventricular derecha aumenta, junto con el grado de estrés
presentarse con comunicaciones AV completas. parietal del ventrículo derecho. Se desarrollará hipertrofia ventricular
La corrección de las comunicaciones AV completas se realiza qui- derecha si no se trata la estenosis. En los casos de estenosis pulmonar
rúrgicamente a los 4-6 meses de edad. Mientras se espera la cirugía, grave o crítica (v. más adelante en este apartado) puede desarrollarse
se debe tener cuidado de no tratar episodios de desaturación menor insuficiencia cardíaca en el neonato acompañada de cianosis debido al
con excesivo oxígeno, dado que el descenso en la RVP inducido por cortocircuito derecha-izquierda a nivel auricular.
oxígeno puede empeorar rápidamente la insuficiencia cardíaca y llevar El grado de estenosis se clasifica generalmente basándose en la
a mayor desaturación, una espiral de difícil reversión. La furosemida, la caída de la presión a través de la válvula pulmonar, y se define como
digoxina y la reducción de la poscarga se requieren con frecuencia para estenosis a un gradiente menor de 30 mmHg, estenosis moderada un
controlar la insuficiencia cardíaca, y algunos cardiólogos comienzan gradiente entre 30 y 60 mmHg, y estenosis grave un gradiente mayor de
con esta medicación en el período posnatal inmediato debido a la alta 60 mmHg. Mientras que estas definiciones se basaron inicialmente en
probabilidad de que estos niños desarrollen ICC. La reparación com- el cateterismo cardíaco, el seguimiento actual de pacientes con estenosis
pleta (tabicación auricular, ventricular y de válvulas AV) es la preferida. pulmonar utiliza el ecocardiograma, el cual sobreestima el gradiente
Es raro que el cerclaje paliativo de la arteria pulmonar sea necesario para comparado con la medición hemodinámica obtenida por cateterismo.
controlar los síntomas de insuficiencia cardíaca. Como se mencionó Por lo tanto, algunos utilizan un ecogradiente de más de 40 mmHg para
antes, la reparación precoz debe considerarse en niños que no presentan definir como leve a la estenosis pulmonar.
caída de la RVP ni desarrollo de insuficiencia cardíaca, debido a la La consideración del gradiente valvular es crítica, debido al signifi-
preocupación de desarrollo temprano de incrementos irreversibles de la cado pronóstico del valor hallado. En niños mayores, la estenosis leve
RVP, particularmente en los pacientes con comunicación AV completa raramente progresa (Nugent et al., 1977). En los niños, sin embargo,
sin síndrome de Down. en el seguimiento de pacientes con gradientes ecocardiográficos por
encima de 40 mmHg se halló que el 29% desarrollaron estenosis
valvular progresiva, y la mitad de estos mostraron un incremento en
Estenosis pulmonar periférica los primeros 6 meses de vida (Rowland et al., 1997). Neonatos con
estenosis valvular moderada pueden enfrentarse a una probabilidad
La estenosis pulmonar periférica (EPP) puede variar en rango de
incluso mayor de desarrollar estenosis progresiva, aunque existe limi-
gravedad. En muchos casos, el estrechamiento leve de las ramas de
tada información.
la arteria pulmonar ocurre en el neonato y produce un soplo que se
Un soplo sistólico eyectivo de estenosis pulmonar puede escucharse
escucha ampliamente a lo largo y a lo ancho del tórax. El soplo causado
durante el período neonatal en el borde esternal superior izquierdo.
por esta EPP leve se considera por algunos como un «soplo inocente»
Típicamente, aunque la rápida frecuencia cardíaca en el neonato haga
de la infancia y usualmente se resuelve a los 2-4 meses de edad. Esta
difícil la apreciación, un clic sistólico eyectivo justo después del primer
lesión posiblemente refleje una leve hipoplasia de las ramas arteriales
ruido cardíaco (R1) puede escucharse en la mayoría de estos niños y
pulmonares debido a un flujo sanguíneo pulmonar intrauterino dis-
es una característica importante para distinguir la estenosis pulmonar
minuido y la transición posnatal donde estos vasos deben adaptar todo
de otras lesiones. Parecido a la EPP (v. anteriormente), el soplo de la
el gasto cardíaco después del cierre ductal.
estenosis pulmonar irradia a los campos pulmonares. A medida que
Hay casos de EPP más graves en el síndrome de rubéola congénita
el gradiente valvular empeora, puede palparse un frémito en el borde
o en asociación con los síndromes de Williams o Noonan. La estenosis
esternal superior izquierdo. A medida que el grado de estenosis progresa
de las ramas de la arteria pulmonar puede también tener lugar en la
y se vuelve grave, el soplo y el clic disminuirán, y pueden incluso estar
TF. En estos casos pueden existir múltiples niveles de obstrucción que
ausentes a medida que la disfunción ventricular derecha empeora. Es
requieran intervención por cateterismo o quirúrgica.
importante destacar que, a pesar de que la estenosis pulmonar pro-
En la EPP aislada o leve ocurre una mínima sobrecarga de presión
gresiva puede estimarse basándose en el soplo, la condición clínica del
en el ventrículo derecho. Con el aumento de la estenosis, la sobrecarga
niño puede no cambiar de manera apreciable hasta que el grado de la
de presión en el ventrículo derecho generará hipertrofia ventricular
estenosis sea grave.
derecha y, en etapas avanzadas, agrandamiento auricular derecho en el
Los hallazgos en los exámenes complementarios en los niños con
ECG. El ecocardiograma puede examinar los segmentos proximales de
estenosis pulmonar variarán dependiendo del grado de estenosis. El
las arterias pulmonares, pero las lesiones más distales requieren otras
ECG mostrará hipertrofia ventricular derecha en la mayoría de los
modalidades de imagen, como RM o cateterismo.
pacientes con estenosis moderada, aunque el estudio puede ser normal
La intervención para tratar la estenosis grave de la rama debe con-
en presencia de estenosis leve. La radiografía de tórax es frecuente-
siderarse cuando la presión ventricular derecha es mayor del 75% de
mente normal a menos que se haya desarrollado dilatación postes-
la presión sistémica o en presencia de evidencia clínica o analítica de
tenótica del tronco de la arteria pulmonar. La ecocardiografía será
disfunción ventricular derecha. El tratamiento quirúrgico es posible
diagnóstica. La válvula puede presentar grados variables de displasia
para las áreas proximales de estenosis, aunque el tratamiento preferido
caracterizada por valvas engrosadas y poco móviles que se abomban
por la mayoría de los clínicos es dilatación con balón o implante de
durante la sístole. Se puede ver turbulencia distal a la válvula por
una endoprótesis expansible en el laboratorio de hemodinámica.
Doppler color (fig. 55.4), mientras el Doppler pulsado se utiliza para
Puede que se necesiten reiteradas intervenciones para dilatar los vasos
determinar el grado de estenosis. Como ya se discutió previamente,
a medida que el paciente crece o dilatar otras áreas que hayan desa-
el eco Doppler generalmente aporta un valor de estenosis que es el
rrollado estenosis.
20-30% mayor que el gradiente de presión pico-pico medido por
cateterismo cardíaco.
Estenosis pulmonar El tratamiento de la estenosis pulmonar aislada, incluso en neona-
tos, puede realizarse fácilmente por valvulotomía con balón de manera
La estenosis aislada de la válvula pulmonar es una causa común de soplo percutánea en el laboratorio de hemodinámica. La excepción puede ser
sistólico eyectivo durante el período neonatal. Mientras que los casos en niños con síndrome de Noonan, donde el grado de displasia valvular
ocurren típicamente de manera esporádica, más del 50% de los niños puede impedir un resultado adecuado, aunque la mayoría realiza un
con síndrome de Noonan presentarán estenosis pulmonar y, por lo intento inicial con valvulotomía con balón antes de progresar a cirugía.
tanto, la válvula pulmonar debería evaluarse en todos estos niños. La valvulotomía debe considerarse en niños con casos superiores a
El grado de estenosis pulmonar determina la fisiopatología del estenosis leve. La insuficiencia pulmonar leve o moderada, que suele
proceso de la enfermedad. A medida que la estenosis valvular empeora, desarrollarse después de la valvulotomía con balón, usualmente se tolera

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CAPÍTULO 55 Cardiopatías congénitas 811

• Figura 55.4  Estenosis pulmonar. A. Vista del eje corto de una estenosis pulmonar con válvula
pulmonar que parece engrosada. B. Utilizando Doppler color, se ve turbulencia en el tronco de la
arteria pulmonar por encima de la válvula pulmonar.

bien. La estenosis recurrente y grados más significativos de insuficiencia El tratamiento inicial de la estenosis valvular aórtica es la valvulo-
pulmonar se hallan con mayor frecuencia cuando se requiere la valvu- tomía con balón en el laboratorio de hemodinámica. El balón se mide
lotomía en el período neonatal (Garty et al., 2005). con el fin de limitar la insuficiencia aórtica, la cual se tolera mucho
peor que la insuficiencia de la válvula pulmonar. Si existe insuficiencia
aórtica significativa o esta se desarrolla, será necesarios la reparación
Estenosis aórtica quirúrgica o el reemplazo valvular. En neonatos y niños, la cirugía de
De manera similar a la estenosis de la válvula pulmonar, la estenosis Ross es usualmente el procedimiento de elección (Elkins et al., 1994).
de la válvula aórtica puede producir un soplo en el período neonatal. En este procedimiento, la válvula pulmonar se remueve del paciente
Sin embargo, la estenosis aórtica es más probable que sea progresiva de manera intacta y suturada en posición aórtica, y un homoinjerto se
con respecto a la estenosis pulmonar. Los niveles de obstrucción del coloca en posición pulmonar. De manera interesante, el autoinjerto
tracto de salida ventricular izquierdo pueden también ocurrir a nivel pulmonar generalmente exhibe adecuado crecimiento y excelente
subvalvular y supravalvular. La estenosis subvalvular raramente se funcionamiento en la posición aórtica. Mientras que el niño crecerá
diagnostica durante el período neonatal, pero habitualmente progresa más que el homoinjerto pulmonar, su reemplazo y tratamiento de la
durante la vida como una cresta fibromuscular por debajo de la válvula estenosis pulmonar progresiva son mucho más fáciles que intervenir
aórtica. La estenosis supravalvular puede estar presente en el período la válvula aórtica.
neonatal y frecuentemente se asocia a síndrome de Williams.
Como con la estenosis pulmonar, la fisiopatología y los hallazgos
físicos asociados con estenosis valvular aórtica dependen del grado de Cianosis en el recién nacido
obstrucción. Ciertamente, el hallazgo más frecuente de anomalía aórti- Las CC que se presentan con cianosis lo hacen debido a un cortocir-
ca durante el período neonatal es la estenosis aórtica crítica asociada con cuito derecha-izquierda. El cortocircuito provoca una mezcla de los
función ventricular izquierda disminuida. Esta situación médica emer- retornos venosos pulmonar y sistémico que puede ocurrir entre las
gente se describe en detalle después. La estenosis aórtica leve (gradiente aurículas, los ventrículos o los grandes vasos. Los defectos que se pre-
valvular aórtico < 30 mmHg) y la moderada (gradiente valvular entre sentan predominantemente con cianosis pueden subclasificarse también
30 y 60 mmHg) no se hallan habitualmente en el período neonatal. por la cantidad de sangre pulmonar asociada. Si no hay restricción
Cuando esto sucede, estas formas leves de estenosis generalmente se al flujo sanguíneo pulmonar, el gasto cardíaco hacia los pulmones se
asocian con válvula aórtica bicúspide y tienden a progresar con la edad. incrementará a medida que la RVP posnatal normal cae. Clínicamente,
La tasa de cambio de progresión a lo largo de la infancia y la niñez es esto produce taquipnea, pobre alimentación, hepatomegalia y edema
bastante variable, y precisa seguimiento frecuente de estos pacientes. pulmonar. Gran parte del tratamiento neonatal se dirige a equilibrar la
El soplo en el recién nacido con estenosis aórtica puede ser de proporción entre flujo sanguíneo sistémico y pulmonar. Los defectos
difícil localización en el borde esternal superior derecho al igual que con restricción al flujo sanguíneo pulmonar se presentan típicamen­
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en los niños mayores. Un frémito es normalmente palpable en el hueco te con cianosis sin síntomas de ICC asociados. Si la restricción es grave,
supraesternal incluso en presencia de estenosis aórtica leve, con la el flujo sanguíneo pulmonar puede depender de un cortocircuito
percepción de un frémito precordial a medida que el grado de estenosis izquierda-derecha a través del conducto arterioso. Estos pacientes
se incrementa. Habitualmente se escucha un clic de la válvula aórtica presentan típicamente algún grado de hipertensión ventricular derecha.
estenótica en el vértice o el borde esternal inferior izquierdo. Si el conducto arterioso se cierra, genera profunda cianosis. Las lesiones
El ECG puede tener limitaciones en el recién nacido con estenosis que se presentan principalmente con cianosis en el período neonatal
valvular aórtica leve e incluso moderada, aunque se puede apreciar se discuten más adelante.
cierto grado de hipertrofia ventricular izquierda. La radiografía de
tórax posee beneficios limitados para el seguimiento de estos pacientes,
y el foco de la evaluación diagnóstica es el ecocardiograma. En el Transposición de los grandes vasos
ecocardiograma se puede caracterizar la válvula aórtica. Las valvas
fusionadas están engrosadas, y puede observarse abombamiento. El La TGV da cuenta de un 5% de todos los casos de CC cianóticas y
Doppler pulsado se utiliza para determinar el gradiente a través de la es el defecto cardíaco cianótico más común en el recién nacido. Hay
válvula, mientras que el Doppler color puede definir la presencia de una clara predominancia en el sexo masculino (60-70%), pero no
insuficiencia aórtica. hay asociación clara entre TGV y condiciones maternas, exposición a

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812 PA RT E XI Aparato cardiovascular

Mientras que la TGV es usualmente una lesión aislada, el 40-45%


de los pacientes tienen una CIV asociada, el 10% tienen una CIV con
obstrucción del tracto de salida del ventrículo izquierdo y el 5% tienen
solo obstrucción al tracto de salida del ventrículo izquierdo. Además,
existe una amplia variedad en la anatomía de las arterias coronarias
en pacientes con TGV. La presentación clínica de los pacientes con
TGV y CIV depende del tamaño de la CIV. Los que tienen una CIV
restrictiva se presentan como pacientes con TGV y tabique ventricular
intacto. Los que tienen una CIV amplia pueden no mostrar síntomas
inicialmente. A medida que la RVP cae, se desarrollan síntomas de
sobrecirculación pulmonar. Los pacientes con flujo sanguíneo res-
tringido (TGV con CIV y estenosis pulmonar) parecen clínicamente
similares a los pacientes con TF. El momento y el tipo de reparación
quirúrgica en pacientes con TGV complejas es variable y excede el
• Figura 55.5  Circulaciones en serie y en paralelo. Circulación en serie propósito de este capítulo.
normal en el recién nacido comparada con la circulación en paralelo en
la transposición de los grandes vasos (TGV). En la TGV, la supervivencia
después del nacimiento depende de la mezcla auricular, ventricular Doble salida ventricular derecha
o de los grandes vasos. AD, aurícula derecha; AI, aurícula izquierda;
La DSVD es relativamente rara, con diversos grupos de lesiones
Ao, aorta; AP, arteria pulmonar; VD, ventrículo derecho; VI, ventrículo
izquierdo. (Tomado de Wernovsky G: Transposition of the great arteries.
caracterizadas por el origen de ambos grandes vasos a partir del
In: Allen HD, Gutgesell HP, Clark EB, Driscoll DJ, eds. Moss and Adams’ ventrículo derecho y por la persistencia de cono subaórtico y sub-
Heart Disease in Infants, Children, and Adolescents: Including the Fetus pulmonar. Existen múltiples variantes anatómicas de esta lesión que
and Young Adult, 6th ed. Philadelphia, PA: Lippincott Williams & Wilkins; se clasifican habitualmente por la relación de los grandes vasos uno
2001:1027–1084.) con otro y/o por la localización de la CIV respecto de los grandes
vasos (fig. 55.7) (Anderson et al., 1983; Stellin et al., 1991; Mahle
et al., 2008). Con esto en mente, existen cuatro tipos de DSVD,
teratógenos o anomalías congénitas. La TGV es típicamente un defecto cada una con una ligera diferencia en la presentación neonatal y el
aislado, como menos del 10% de los casos asociados con malforma- tratamiento quirúrgico.
ciones extracardíacas. La DSVD del tipo tetralogía típicamente tiene relación de los
En la forma más común de TGV (D-TGV, transposición completa grandes vasos normal con una CIV subaórtica. Debido a que el cono
o transposición simple), la aorta nace del ventrículo derecho de manera subaórtico se tira en sentido anterior, el cono subpulmonar es típica-
anterior y ligeramente a la derecha de la arteria pulmonar, que nace mente más pequeño, lo que da como resultado una obstrucción variable
del ventrículo izquierdo. La sangre desaturada retorna al ventrículo al flujo sanguíneo pulmonar. La presentación clínica y el tratamiento
derecho y es recirculada al cuerpo a través de la aorta, mientras que quirúrgico son similares a la TF.
la sangre oxigenada retorna al ventrículo izquierdo y es recirculada a La DSVD de tipo transposición presenta típicamente grandes vasos
los pulmones. El resultado final son dos circulaciones separadas y en mal posicionados con la aorta localizada anterior o a la derecha de la
paralelo (fig. 55.5). La supervivencia depende de la comunicación arteria pulmonar. La CIV es subpulmonar y dirige el flujo a la arteria
entre las dos circulaciones, típicamente en la forma de cortocircuito pulmonar, lo que provoca una fisiología del tipo transposición. Esta
bidireccional en el AOP y el CAP. En el caso de comunicaciones lesión está frecuentemente asociada con obstrucción variable del flujo
pequeñas o ausentes entre las circulaciones, se desarrolla acidosis sanguíneo aórtico y coartación de aorta. La reparación quirúrgica
sistémica grave e hipoxia después del nacimiento, lo que provoca la consiste en desviar el flujo por la CIV a la válvula pulmonar y realizar
muerte. el intercambio arterial. En presencia de anomalías de las arterias coro-
La cianosis es aparente al cabo de las primeras horas de vida y no narias que impidan un intercambio arterial, el ventrículo izquierdo se
responde al oxígeno. El examen cardíaco es típicamente normal con la desvía a las válvulas aórtica y pulmonar, y se coloca un conducto de
excepción de un R2 único y aumentado. Debido a la disposición de ventrículo derecho a la arteria pulmonar. La obstrucción del cayado se
los grandes vasos, el cierre de mayor intensidad de la válvula aórtica corrige en caso de ser necesario.
anterior oculta el cierre de la válvula pulmonar más posterior. La radio- En la DSVD con CIV «doblemente relacionada», la CIV está por
grafía de tórax puede ser normal o revelar un mediastino estrecho con debajo de ambos grandes vasos. La fisiología y presentación clínica
leve predominancia del ventrículo derecho, dando una apariencia son variables, dependiendo del tamaño y orientación de la CIV y el
de «huevo en una cuerda». La trama vascular pulmonar es normal o grado de obstrucción del tracto de salida. La reparación quirúrgica está
levemente aumentada. El ECG es típicamente normal, pero puede dirigida a cerrar la CIV sin obstruir ninguno de los tractos de salida
mostrar hipertrofia ventricular derecha. El ecocardiograma revela la ventriculares.
TGV y se usa para determinar el tamaño del AOP y el CAP, y definir La variedad menos común de DSVD es aquella en la cual la CIV está
cualquier defecto cardíaco asociado. alejada de ambos grandes vasos. Debido a la distancia entre la CIV y
El tratamiento inicial de niños con TGV apunta a mantener la los grandes vasos, una reparación biventricular es difícil y frecuente-
comunicación entre las circulaciones sistémica y pulmonar. Se admi- mente imposible. El cerclaje pulmonar se realiza habitualmente en el
nistra prostaglandina E1 (PGE1) para mantener la persistencia del período neonatal para limitar el flujo sanguíneo pulmonar, demorando
conducto arterioso (dosis de 0,03-0,1 µg/kg/min). En pacientes con el intento de reparación paliativa biventricular o univentricular hasta
AOP restrictivo, o con hipoxia persistente y acidosis a pesar del CAP, varios meses de edad. Recientemente, ha habido un creciente interés en
se realiza una septostomía auricular con balón en las primeras 24-48 h la reparación biventricular de esta lesión a través de «creativos» desvíos
de vida para favorecer la mezcla a nivel auricular. En condiciones de intracardíacos (Lacour-Gayet, 2002).
una adecuada mezcla, la sobrecirculación pulmonar puede desarro-
llarse a medida que la RVP cae. El tratamiento quirúrgico consiste Tronco arterioso
en el reposicionamiento arterial (fig. 55.6), realizado típicamente en
la primera semana después del nacimiento (Castaneda et al., 1989; En el tronco arterioso, un único tronco arterial da nacimiento a la
Prifti et al., 2002). circulación pulmonar, sistémica y coronaria. Típicamente el tronco

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CAPÍTULO 55 Cardiopatías congénitas 813

• Figura 55.6  Intervención de desplazamiento arterial en la dextrotransposición de los grandes vasos. A. Las
líneas discontinuas muestran la localización planeada de la sección transversal de los grandes vasos.
B. Las arterias coronarias se separan con pared aórtica circundante como «botones». C. Los botones coronarios
se translocan a la nueva raíz aórtica posterior. D. La maniobra de Lecompte trae ambas arterias pulmonares
anteriores a la nueva aorta. La línea de sutura aórtica se completa, incorporando los botones coronarios.
Los sitios coronarios donantes se rellenan con parches de pericardio autólogo, y la anastomosis pulmonar
se completa. (Tomado de Wernovsky G, Jonas RA. Transposition of the great arteries. In: Chang AC, Hanley FL,
Wernovsky G, Wessel DL, eds. Pediatric Cardiac Intensive Care. Baltimore, MD: Williams & Wilkins; 1998:289–301.)
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• Figura 55.7  Vistas ecocardiográficas de una doble salida ventricular derecha. A. La aorta está
unida al ventrículo derecho, y la comunicación interventricular está por debajo de la válvula aórtica.
B. Los grandes vasos están transpuestos en este paciente con la arteria pulmonar acabalgada sobre
la comunicación interventricular.

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814 PA RT E XI Aparato cardiovascular

• Figura 55.8  Tipos de tronco arterioso. La clasificación del tronco


arterioso está determinada por el origen de las arterias pulmonares
(v. el texto para más detalles).

arterial esta acabalgado sobre una CIV. El tronco se clasifica por el


origen de las arterias pulmonares (fig. 55.8). En el tipo I, una peque-
ña arteria pulmonar emerge del tronco arterial y se bifurca en las
ramas derecha e izquierda de la arteria pulmonar. Las ramas derecha
e izquierda de la arteria pulmonar también pueden nacer de aberturas
separadas que están cerca la una de la otra (tipo II) o a cierta distancia
(tipo III) (Collett y Edwards, 1949). El tipo IV es similar a la TF con
atresia pulmonar. La válvula troncal posee entre una y seis valvas.
Ocasionalmente es insuficiente, pero casi nunca estenótica. El tronco
usualmente ocurre como un defecto cardiovascular aislado, aunque se
ha asociado con microdeleción del cromosoma 22q11 (McElhinney • Figura 55.9  Anatomía y reparación del tronco arterioso. Después de
et al., 2003). separar las ramas de la arteria pulmonar del tronco (y de cerrar el defecto
aórtico resultante), se realiza una ventriculotomía. La comunicación inter-
A medida que la RVP cae a lo largo de las primeras semanas
ventricular se cierra a través de esta incisión, y se coloca un conducto
después del nacimiento, ocurre un incremento en el cortocircuito
desde el ventrículo derecho hasta las arterias pulmonares. (Tomado de
desde el tronco arterial a las arterias pulmonares, y se desarrolla Behrendt DM, Dick M. Truncus repair with a valveless conduit in neonates.
sobrecirculación pulmonar. Si no se trata, se desarrollan síntomas J Thorac Cardiovasc Surg. 1995;110:1148–1150.)
de insuficiencia cardíaca. A largo plazo ocurre enfermedad veno­
oclusiva pulmonar.
La presentación clínica del tronco cambia con la RVP. Inicialmente,
los niños presentan mínima cianosis y no parecen tener dificultad res- abastece el gasto cardíaco sistémico. Si la CIA es restrictiva, el gasto
piratoria. A medida que la sobrecirculación tiene lugar, se desarrollan sistémico se verá limitado.
síntomas de insuficiencia cardíaca. La evaluación cardíaca revela un Se han descrito varios patrones comunes de retorno venoso
precordio hiperdinámico y un R2 único e intenso. A medida que la pulmonar anómalo (fig. 55.10) (Edwards y Helmholz, 1956). Más
RVP cae, los pulsos se vuelven saltones y la presión de pulso se ensancha comúnmente, las venas anómalas drenan de manera supracardíaca,
debido a la fuga hacia las arterias pulmonares. Un murmullo diastólico entrando en la vena innominada izquierda o en la VCS a través de
de llenado de baja tonalidad puede escucharse en el vértice del corazón. una vena vertical y drenando en la aurícula derecha a través de la VCS.
Además, puede estar presente un soplo sistólico eyectivo y puede escu- El drenaje cardíaco ocurre cuando las venas anómalas drenan en la
charse un soplo diastólico de tonalidad media a alta producto de la aurícula derecha a través del seno coronario. Alternativamente, una
insuficiencia valvular troncal. La radiografía de tórax revela típicamente vena descendente puede pasar a través del hiato diafragmático e ingresar
cardiomegalia con una trama vascular pulmonar que aumenta durante al sistema hepático o portal, lo que da como resultado un drenaje
las primeras semanas de vida. El ECG demuestra hipertrofia ventricular infracardíaco. Raramente puede existir un patrón de drenaje mixto, o
derecha, izquierda o ambas. El ecocardiograma se utiliza para demostrar las venas anómalas pueden drenar directamente en la aurícula derecha.
la anatomía y evaluar defectos cardíacos asociados como arco aórtico El drenaje directo en la aurícula derecha ocurre casi exclusivamente en
derecho, anomalías en las arterias coronarias, interrupción del arco pacientes con heterotaxia.
aórtico y CIA de tipo secundum. La presentación clínica del RVPTA varía, dependiendo del grado
Inicialmente, los síntomas de insuficiencia cardíaca se manejan con de obstrucción al flujo venoso pulmonar. Los pacientes con flujo
medicación. La reparación quirúrgica se hace típicamente en el curso venoso pulmonar sin obstrucción presentarán mínima sintomatología
de los primeros 2 meses de vida debido a la dificultad para controlar durante el período neonatal, y la cianosis usualmente no es apreciable.
la insuficiencia cardíaca. La reparación habitual implica cierre de la Los síntomas de insuficiencia cardíaca derecha se desarrollan con el
CIV para que el tronco arterial emerja desde el ventrículo izquierdo. tiempo debido a la progresiva sobrecarga de volumen en el ventrículo
Se coloca un conducto del ventrículo derecho a la arteria pulmo­ derecho. La exploración física puede revelar palpación del latido de
nar (fig. 55.9). El conducto del ventrículo derecho a la arteria pulmonar ventrículo derecho, desdoblamiento fijo del R2 y un soplo sistólico
necesita reemplazarse varias veces a lo largo de la vida del paciente. eyectivo suave en el foco pulmonar. La radiografía de tórax puede
mostrar cardiomegalia debido al agrandamiento auricular derecho,
ventricular derecho y del tronco de la arteria pulmonar. La trama
Retorno venoso pulmonar total anómalo vascular pulmonar aumenta con el tiempo. El ECG revela ondas
P picudas e hipertrofia ventricular derecha. Los pacientes con res-
En el RVPTA, las venas pulmonares retornan a una vena sistémica o tricción moderada al flujo sanguíneo pulmonar son típicamente
directamente a la aurícula derecha. Tanto el retorno venoso sistémico cianóticos en el período neonatal. Habitualmente existe una adecuada
como el pulmonar pasan a través de la aurícula derecha, el ventrículo mezcla del retorno venoso que permite el aporte de oxígeno a los
derecho y la arteria pulmonar, generando sobrecirculación pulmonar tejidos. Sin embargo, estos pacientes pueden beneficiarse de oxígeno
y sobrecarga de volumen ventricular derecha. Una CIA está presente suplementario, ventilación mecánica y sedación para disminuir el
en todos los casos. El cortocircuito aurícula derecha-aurícula izquierda consumo de oxígeno. La presentación de pacientes con obstrucción

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CAPÍTULO 55 Cardiopatías congénitas 815

talidad quirúrgica es baja y los resultados a largo plazo son buenos. La


obstrucción venosa pulmonar tardía ocurre aproximadamente en el
20% de los casos, y los resultados de la cirugía y el intervencionismo
cardíaco percutáneo son relativamente insatisfactorios.

Tetralogía de Fallot
La TF consiste en CIV, acabalgamiento aórtico, obstrucción del
TSVD e hipertrofia ventricular derecha (fig. 55.11). La gravedad y
la localización de la obstrucción al TSVD son variables. La hiper-
trofia infundibular, una válvula pulmonar pequeña y frecuentemente
bicúspide, y un tronco de la arteria pulmonar pequeño pueden crear
obstrucción a nivel subvalvular, valvular o supravalvular respectiva-
mente, de manera conjunta o independiente. La obstrucción completa
del TSVD (atresia pulmonar) con una CIV es una forma extrema
de TF. La TF está asociada con arco aórtico derecho en el 20% de
los casos y arterias coronarias aberrantes en el 5-10% de los casos, los
cuales pueden afectar el abordaje quirúrgico. La etiología de la TF es
heterogénea. La diabetes materna, la fenilcetonuria y la exposición al
ácido retinoico se han asociado con TF. Además, síndromes genéticos,
incluida la deleción 22q11, el síndrome de Alagille y la asociación
VACTERL/VATER se han asociado con TF.
La fisiopatología y la presentación clínica de la TF están directa-
mente relacionadas con la gravedad de la obstrucción del TSVD. Con
una obstrucción del TSVD leve, el cortocircuito predominante a través
de la CIV es izquierda-derecha. La cianosis es mínima, y los síntomas
de insuficiencia cardíaca son los síntomas típicos de presentación. El
tronco y las ramas de la arteria pulmonar habitualmente son de tamaño
normal. En casos de obstrucción moderada del TSVD, el cortocircuito
a través de la CIV es derecha-izquierda, pero el flujo anterógrado a
través del TSVD es adecuado, lo que da como resultado una cianosis
leve. El tronco y las ramas de la arteria pulmonar pueden presentar
áreas de estenosis focal o ser difusamente pequeñas. En caso de obs-
trucción grave del TSVD, el flujo anterógrado a través del TSVD es
mínimo o está ausente. El flujo sanguíneo pulmonar es, por tanto,
dependiente del cortocircuito izquierda-derecha a través del CAP. Estos
pacientes presentan cianosis grave. El cierre del CAP lleva al colapso
cardiovascular. El tronco y las ramas de la arteria pulmonar pueden
ser confluentes y pequeños. En caso de atresia pulmonar (CIV por
atresia pulmonar o tetralogía de atresia pulmonar), el lecho vascular
pulmonar es variable. Las arterias pulmonares pueden ser confluentes,
de tamaño normal y alimentarse exclusivamente por el conducto arte-
rioso; confluentes y pequeñas, con un conducto arterioso pequeño, o
virtualmente ausentes, con un flujo sanguíneo pulmonar suministrado
por múltiples vasos colaterales aortopulmonares.
El tratamiento inicial depende de la cantidad de flujo sanguíneo
• Figura 55.10  Variantes anatómicas de retorno venoso pulmonar pulmonar. Los pacientes sin síntomas significativos o hipoxemia son
total anómalo. A-C. Supracardíaco. D y E. Cardíaco. F. Infracardíaco.
sometidos a una reparación completa en los primeros 6 meses después
G y H. Mixto. Véase el texto para más detalles. AD, aurícula derecha;
AI, aurícula izquierda; pulm., pulmonar; SC, seno coronario; V. vena;
del nacimiento. La reparación completa consiste en el cierre de la CIV y
VCI, vena cava inferior; VCS, vena cava superior; VPD, vena pulmonar derecha; la liberación de la obstrucción al TSVD por medio de una combinación
VPI, vena pulmonar izquierda. (Tomado de Eimbcke F, Enriquez G, Gomez de resección de músculo infundibular, valvulotomía pulmonar o parche
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O, Zilleruelo R. Total anomalous pulmonary venous connection. In: Moller en el TSVD, que puede extenderse a las ramas de la arteria pulmonar
JH, Hoffman JIE, eds. Pediatric Cardiovascular Medicine. Philadelphia, PA: según necesidad (fig. 55.12). En pacientes con cianosis significativa o
Churchill Livingstone; 2000:409–420.) circulación dependiente de CAP, las opciones de tratamiento incluyen
paliación con una derivación sistémica hacia la arteria pulmonar en
el período neonatal (derivación modificada de Blalock-Taussig [BT])
al flujo sanguíneo pulmonar se discutirá más adelante en este capítulo y una reparación completa en un segundo tiempo o una corrección
dentro de las lesiones obstructivas. anatómica completa en el período neonatal. Recientemente se ha
El tratamiento del RVPTA es quirúrgico. En la mayoría de los casos tendido a realizar una corrección completa en niños sintomáticos
se puede ver una confluencia pulmonar venosa cerca de la aurícula (Reddy et al., 1995; Ooi et al., 2006; Tamesberger et al., 2008).
izquierda. El cateterismo cardíaco se utiliza para definir la anatomía
venosa pulmonar en caso de que las venas pulmonares no se puedan Tetralogía de Fallot con agenesia de válvula
ver bien por ecocardiografía. Durante la cirugía, la confluencia venosa pulmonar
pulmonar se anastomosa a la aurícula izquierda, se cierra la CIA y se
ligan las conexiones a las venas sistémicas. En ausencia de obstrucción La TF con agenesia de válvula pulmonar (AVP), o síndrome de AVP,
venosa pulmonar y en contexto de anatomía no complicada, la mor- es un espectro de trastornos con una válvula pulmonar rudimentaria.

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• Figura 55.11  Vista ecocardiográfica de una tetralogía de Fallot. A. Algunas de las características
de la tetralogía de Fallot se observan fácilmente en la vista ecocardiográfica del eje largo, incluidas la
hipertrofia del ventrículo derecho, la comunicación interventricular (CIV) y la aorta acabalgada sobre
la CIV. B. La vista del eje corto en el ecocardiograma muestra la estenosis infundibular o del tracto de
salida del ventrículo derecho.

La estenosis y la insuficiencia valvular pulmonar resultantes causan


dilatación del ventrículo derecho y del tronco y las ramas de la arteria
pulmonar evidenciable in utero (fig. 55.13). La gran mayoría de los
casos también se presentan con una CIV mal alineada. Presumiblemen-
te secundaria a compresión de la vía respiratoria por la vascularización
pulmonar dilatada, este síndrome se asocia comúnmente con anomalías
en la vía respiratoria. Existe una alta prevalencia de deleción 22q11
entre los pacientes con AVP.
La exploración física revela un soplo en «vaivén» característico de
estenosis e insuficiencia pulmonar. Se presenta con un shock de punta
ventricular derecho prominente y hepatomegalia secundaria a la sobre-
carga de volumen en el ventrículo derecho. Existe un amplio rango de
síntomas, dependiendo del grado de sobrecarga de volumen en el ven-
trículo derecho y el grado de enfermedad de las vías respiratorias. En
un extremo del espectro se encuentran los neonatos asintomáticos con
cianosis leves y desarrollo gradual de síntomas de insuficiencia cardíaca
durante la caída posnatal normal de la RVP. En el otro extremo del
espectro se encuentra el niño con enfermedad crítica, cianosis grave e
insuficiencia respiratoria causada por la combinación de cortocircuito
derecha-izquierda a través de la CIV y la enfermedad de vías respiratorias
subyacente. La ventilación mecánica es necesaria y ocasionalmente no
exitosa a causa de la compresión de la vía respiratoria por la vasculari-
zación pulmonar dilatada. Se requiere la cirugía urgente en estos niños.
La cirugía consiste en el cierre de la CIV, plicatura de la arteria pul-
monar, liberación de la obstrucción al TSVD e inserción de una válvula u
homoinjerto en la posición del TSVD. Existen significativas variaciones
en la técnica quirúrgica entre los diferentes centros (Alsoufi et al., 2007b;
Tissot et al., 2007). La mortalidad quirúrgica y los resultados a corto y largo
plazo están relacionados principalmente con la gravedad de la dilatación de
• Figura 55.12  Reparación de la tetralogía de Fallot. A. La línea dis- las arterias pulmonares y la compresión de la vía respiratoria. Los niños más
continua muestra una incisión no transanular, utilizada cuando la válvula
gravemente afectados presentan mayor mortalidad quirúrgica y la necesi-
pulmonar y el anillo son de tamaño adecuado. B. Se utiliza una incisión
transanular (línea discontinua) cuando hay hipoplasia anular. C. Ejem-
dad de ventilación postoperatoria prolongada. Los que tienen dilatación
plo de exposición transventricular de la comunicación interventricular.
menos significativa de las arterias pulmonares presentan menor mortalidad
Alternativamente, la comunicación interventricular puede cerrarse por postoperatoria y resultados a largo plazo similares a los que presentan TF.
medio de una auriculotomía derecha a través de la válvula tricúspide.
D. Vista externa del parche de cierre de la incisión transanular. (Tomado Atresia pulmonar con tabique íntegro
de Spray TL, Wernovsky G. Right ventricular outflow tract obstruction. In:
Chang AC, Hanley FH, Wernovsky G, Wessel DL, eds. Pediatric Cardiac En la atresia pulmonar con tabique ventricular íntegro, las valvas de
Intensive Care. Baltimore, MD: Williams & Wilkins; 1998:257–270.) la válvula pulmonar están fusionadas o no han conseguido formarse.

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CAPÍTULO 55 Cardiopatías congénitas 817

• Figura 55.13  Tetralogía de Fallot y agenesia de válvula pulmonar. Se • Figura 55.14  Angiograma lateral de un recién nacido con atresia
observa dilatación grave del tronco y las ramas de la arteria pulmonar, pulmonar y tabique ventricular íntegro. Después de la inyección de
que frecuentemente se asocia a compresión bronquial y enfermedad de contraste a través del ventrículo derecho hipertrófico y diminuto, se
las vías respiratorias inferior y superior. La anatomía intracardíaca suele evidencia llenado retrógrado de las tortuosas arterias coronarias a través
ser similar a la de la tetralogía de Fallot estándar. (Tomado de Spray TL, de las conexiones sinusoidales al ventrículo derecho (flechas). VD, ven-
Wernovsky G. Right ventricular outflow tract obstruction. In: Chang AC, trículo derecho.
Hanley FH, Wernovsky G, Wessel DL, eds. Pediatric Cardiac Intensive Care.
Baltimore, MD: Williams & Wilkins; 1998:257–270.)

Sin salidas desde el ventrículo derecho, el retorno venoso sistémi-


co pasa a través del AOP y se mezcla con el retorno venoso pul­
monar. El flujo sanguíneo pulmonar es dependiente del CAP, y el
ventrículo izquierdo es el que provee el gasto cardíaco para ambas
circulaciones, sistémica y pulmonar. La válvula tricúspide y el ven-
trículo derecho varían en tamaño, desde estructuras casi normales a
válvulas tricúspides prácticamente atrésicas y cámaras ventriculares
derechas diminutas. Este tipo de pacientes pueden tener conductos
sinusoidales en el miocardio ventricular derecho que comunican con
la circulación coronaria. La elevada presión ventricular derecha da
como resultado perfusión retrógrada de las arterias coronarias, lo
que determina una circulación coronaria dependiente del ventrículo
derecho (fig. 55.14).
La atresia pulmonar con tabique ventricular íntegro se presenta
con cianosis. El examen cardíaco revela un segundo ruido cardíaco
único e intenso. Típicamente existe ausencia de soplo, diferente
al perteneciente al CAP. El ECG revela típicamente una relativa
ausencia de fuerzas del lado derecho con un eje de QRS entre 0 y
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90°. La onda P es picuda por agrandamiento auricular derecho. La


trama vascular pulmonar en la radiografía de tórax está típicamente • Figura 55.15  Paliación quirúrgica neonatal de atresia pulmonar con
disminuida. La ecocardiografía confirma el diagnóstico y puede tabique ventricular íntegro y arterias coronarias normales. Se coloca un
utilizarse para buscar sinusoides coronarios. El cateterismo cardía- parche en el tracto de salida ventricular derecho, el conducto arterioso
co se realiza en pacientes con presencia o sospecha de sinusoides se liga y se divide, y se coloca una derivación de Blalock-Taussig modi-
coronarios para definir completamente la extensión y la conexión ficada. (Tomado de Wernovsky G, Hanley FL. Pulmonary atresia with intact
de los sinusoides. ventricular septum. In: Chang AC, Hanley FL, Wernovsky G, Wessel DL,
Inicialmente, la PGE1 se emplea para mantener la persistencia del eds. Pediatric Cardiac Intensive Care. Baltimore, MD: Williams & Wilkins;
conducto arterioso hasta que se provea una fuente de flujo sanguíneo 1998:265–270.)
pulmonar más permanente. En pacientes con circulación coronaria
dependiente del ventrículo derecho, el resultado de la reparación del ventrículo derecho, se crea una salida del ventrículo derecho a las
quirúrgica suele ser pobre. La realización de una derivación sis­ arterias pulmonares por valvulotomía quirúrgica o aumento del TSVD
témico-pulmonar seguida de paliación del ventrículo único puede o perforación valvular, y valvuloplastia en el laboratorio de hemodi-
intentarse, pero lo apropiado puede ser proceder directamente a un námica (fig. 55.15) (Justo et al., 1997). En ocasiones, se aporta flujo
trasplante cardíaco. En pacientes sin circulación coronaria dependiente sanguíneo pulmonar adicional por BT modificado u otra derivación

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818 PA RT E XI Aparato cardiovascular

• Figura 55.16  Variantes anatómicas en la atresia tricuspídea. A. Grandes vasos relacionados normal-
mente con comunicación interventricular (CIV) amplia y arterias pulmonares (AP) de tamaño normal.
B. Grandes vasos relacionados normalmente con CIV y AP pequeñas. C. Grandes vasos transpuestos
(ventrículo izquierdo alineado con la AP, ventrículo derecho alineado con la aorta) con una CIV y una
aorta relativamente pequeñas. Muchos pacientes con esta variante presentan también coartación
(v. texto). D. Grandes vasos transpuestos con CIV, obstrucción subpulmonar y AP pequeñas. (Tomado
de Fyler DC. Tricuspid atresia. In: Fyler DC, ed. Nadas’ Pediatric Cardiology. Philadelphia, PA: Hanley
& Belfus; 1992:659–667.)

sistémico-pulmonar. El curso postoperatorio puede verse complicado Quienes tienen un adecuado flujo sanguíneo pulmonar son sometidos
por bajo gasto cardíaco o derivación circular. a una anastomosis de la VCS con la arteria pulmonar (Glenn bidi-
reccional) aproximadamente a los 6 meses de vida, completando el
procedimiento de Fontan alrededor de los 3 años de vida. Los pacientes
Atresia tricuspídea con transposición o anatomía más compleja inicialmente son sometidos
En la atresia tricuspídea no hay tracto de salida de la aurícula derecha a procedimientos paliativos más extensos, pero continúan en camino
al ventrículo derecho. El retorno venoso sistémico pasa de la aurícula a la paliación de Fontan.
derecha, a través de un AOP o una CIA, hacia el ventrículo izquierdo.
Más del 90% de los pacientes con atresia tricuspídea presentan una Anomalía de Ebstein de la válvula tricúspide
CIV asociada, lo que permite a la sangre pasar del ventrículo izquierdo
a las arterias pulmonares (fig. 55.16). El tamaño de la CIV determina La anomalía de Ebstein es una forma rara de CC con presentación
el monto de flujo sanguíneo pulmonar. Los pacientes con una CIV variable. La característica que la define es la displasia de la válvula
pequeña o ausente presentan el ventrículo derecho y las arterias pul- tricúspide, con desplazamiento apical de las valvas septal y posterior
monares muy hipoplásicos. La mayoría del flujo sanguíneo pulmonar (fig. 55.17). La valva anterior, aunque esté normalmente posicionada
pasa a través del CAP. Si hay presencia de una CIV amplia, el flujo en el anillo valvular, frecuentemente presenta inserciones cordales
sanguíneo pulmonar es anterógrado a través de la válvula pulmonar, y el anormales y es amplia y redundante. La anomalía de la válvula tricús-
conducto arterioso no es necesario. Una variante de atresia tricuspídea pide puede estar acompañada de regurgitación tricuspídea, dilatación
está asociada con TGV. El flujo sanguíneo pulmonar se deriva desde el de aurícula derecha, miocardio ventricular derecho anormal y ries-
ventrículo izquierdo, y el flujo sanguíneo sistémico debe pasar a través go aumentado de síndrome de Wolff-Parkinson-White. Además,
de la CIV. Puede haber una coartación asociada o un arco aórtico puede presentarse atresia pulmonar verdadera o funcional con la
hipoplásico en estos pacientes. malformación grave de Ebstein. Con el desplazamiento de la válvula
Clínicamente, la cianosis está presente desde el nacimiento, y la tricúspide, una porción significativa del ventrículo derecho se auri-
extensión de la misma depende del grado de restricción al flujo san- culiza, convirtiéndolo en una cámara inefectiva de bombeo. En este
guíneo pulmonar. En la exploración física están presentes un soplo escenario puede ser difícil diferenciar la atresia pulmonar funcional
holosistólico consistente con una CIV y un latido del vértice ven- de la verdadera atresia pulmonar. La anomalía grave de Ebstein de la
tricular izquierdo prominente. El ECG es casi diagnóstico y revela válvula tricúspide está asociada con insuficiencia cardíaca intraútero
desviación del eje a la izquierda con hipertrofia ventricular izquierda. (Tongsong et al., 2005).
La radiografía de tórax revela una trama vascular pulmonar variable, La presentación clínica es variable y depende del grado de des-
dependiendo del tamaño de la CIV y la relación de los grandes vasos. plazamiento de la válvula tricúspide y la gravedad de la obstrucción del
El ecocardiograma demuestra una placa fibromuscular en el lugar de TSVD. En muchos pacientes, los síntomas son leves y no se presentan
la válvula tricúspide y un ventrículo derecho y una válvula pulmonar hasta más tarde durante la vida. En la enfermedad más grave, la cianosis
variablemente pequeños. La relación de los grandes vasos también es resultado de la presencia de cortocircuito derecha-izquierda a nivel
puede determinarse por ecocardiograma. El grado de obstrucción en auricular, secundaria a la regurgitación tricuspídea y presiones elevadas
la CIV o a través del TSVD puede evaluarse. en aurícula derecha. El examen cardíaco revela un soplo holosistólico
La PGE1 se utiliza inicialmente para mantener el CAP. Si hay a nivel del borde esternal inferior izquierdo con galope y clics aso-
restricción al flujo a nivel auricular, se realiza una septostomía con ciados. Los neonatos con Ebstein grave presentan marcada cianosis,
balón. El tratamiento posterior depende del monto de flujo sanguíneo cardiomegalia y flujo sanguíneo pulmonar dependiente del conducto
pulmonar y la relación de los grandes vasos. En los pacientes con flujo arterioso. La radiografía de tórax es característica en casos con evidente
sanguíneo pulmonar dependiente del conducto arterioso se realiza una cardiomegalia grave al nacimiento (fig. 55.18). La muerte puede ocurrir
derivación sistémico-arterial pulmonar (derivación de BT modificada). debido a la significativa insuficiencia cardíaca e hipoxemia. Puede haber

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CAPÍTULO 55 Cardiopatías congénitas 819

mejoría clínica a medida que la RVP cae, mejorando la capacidad del


ventrículo derecho de contribuir al flujo sanguíneo pulmonar.
Inicialmente, el tratamiento de niños gravemente cianóticos está
dirigido a promover el flujo sanguíneo pulmonar. La PGE1 se utiliza
para mantener la permeabilidad del conducto arterioso. El oxígeno
suplementario, el óxido nítrico inhalado y la alcalosis respiratoria leve
pueden tener un éxito marginal en mejorar el flujo sanguíneo pulmo-
nar al disminuir la RVP. Después de varios días, se hacen intentos de
retirada gradual de PGE1. En caso de no ser exitoso, se consideran las
opciones quirúrgicas. Estas opciones incluyen reparación o reemplazo
de la válvula tricúspide, reparación de tipo uno y medio ventricular u
otros procedimientos paliativos, como la exclusión ventricular derecha
con parche fenestrado y realización de derivación de BT modificada
(Reemtsen et al., 2007). Mientras que los resultados quirúrgicos han
mejorado, la necesidad de reparación neonatal en la enfermedad sin-
tomática continúa siendo un factor de riesgo de muerte (McElhinney
et al., 2005; Sarris et al., 2006).

Lesiones que se presentan principalmente


con insuficiencia cardíaca
Síndrome del corazón izquierdo hipoplásico
• Figura 55.17  Desplazamiento inferior de la válvula tricúspide den- El SCIH es una lesión anatómicamente heterogénea caracterizada por
tro de la cavidad ventricular derecha. Las puntas de flecha blancas grados variables de subdesarrollo del ventrículo izquierdo, hipoplasia
indican el anillo valvular tricuspídeo en posición normal. Los asteris- o atresia de las válvulas aórtica y mitral, e hipoplasia del cayado aór-
cos (*) indican los grados variables de desplazamiento inferior o tico. Mientras que explica solo el 1,4-3,8% de todas las CC, el SCIH
apical de la valva septal de la válvula tricúspide. El área entre el anillo da cuenta del 23% de las muertes por causa cardíaca en la primera
verdadero y la valva desplazada se considera «auriculada». (Tomado semana de vida y del 15% de las muertes cardíacas en el primer mes
de Epstein ML. Congenital stenosis and insufficiency of the tricuspid después del nacimiento (Samanek, 2000). El SCIH es posiblemente
valve. In: Allen HD, Gutgesell HP, Clark EB, Driscoll DJ, eds. Moss and multifactorial en sus causas. Existe una pequeña predominancia en el
Adams’ Heart Disease in Infants, Children and Adolescents: Including sexo masculino. Mientras que no existe una causa genética clara, se ha
the Fetus and Young Adult. Philadelphia, PA: Lippincott Williams & notado un agrupamiento familiar de varias lesiones obstructivas del
Wilkins; 2001:810–819.) corazón izquierdo.
Una posible teoría es que el crecimiento de estructuras vasculares
en desarrollo depende del flujo. El SCIH posiblemente resulte de
una obstrucción intraútero del tracto de entrada o salida ventricular
izquierdo. El ventrículo izquierdo fetal se llena predominantemente
con sangre que pasa a través del agujero oval. La restricción al flujo o
la reversión del flujo a través del agujero oval podría entonces causar un
flujo disminuido al corazón izquierdo y su subdesarrollo. De manera
similar, varios estudios han documentado la progresión de estenosis
aórtica grave a SCIH intraútero (Danford y Cronican, 1992; Horn-
berger et al., 1995). La hipertrofia ventricular izquierda progresiva, la
dilatación y la fibrosis asociada con estenosis aórtica pueden llevar a
una distensibilidad ventricular disminuida, presiones elevadas en la aurí-
cula izquierda y reversión del flujo a través del agujero oval intraútero.
La intervención cardíaca prenatal aún está en sus comienzos, y se
continúa aprendiendo mucho respecto a la intervención fetal, pero
los resultados favorables con la dilatación con balón de la válvula
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aórtica intraútero sugieren que la progresión a SCIH puede modificarse


(Makikallio et al., 2006; McElhinney et al., 2010).
Debido al subdesarrollo de las estructuras del corazón izquierdo,
el retorno venoso pulmonar debe salir de la aurícula izquierda a través
del agujero oval. La sangre venosa pulmonar se mezcla con el retorno
venoso sistémico en la aurícula derecha y pasa al ventrículo derecho.
El gasto cardíaco derecho entonces pasa o a la circulación pulmonar o
a través del conducto arterioso a la circulación sistémica; esto significa
que las circulaciones pulmonar y sistémica están en paralelo. El cociente
entre el flujo sanguíneo sistémico y el pulmonar se determina por la
resistencia relativa de los lechos vasculares. A medida que tiene lugar
la caída posnatal normal de la RVP, el flujo pulmonar aumenta a expen-
• Figura 55.18  Radiografía de tórax de un recién nacido de 1 día de sas del flujo sistémico. Por lo tanto, el tratamiento del SCIH depende
vida con anomalía de Ebstein de la válvula tricúspide. Destacan la masiva del adecuado regreso desde la aurícula izquierda y el equilibrio de las
cardiomegalia, y la oligohemia y la hipoplasia pulmonar relativas. resistencias de los lechos vasculares pulmonar y sistémico.

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820 PA RT E XI Aparato cardiovascular

La mayoría de los casos de SCIH ahora se diagnostican de manera disminuir la Qp:Qs y disminuir la saturación de oxígeno. Solo la hiper-
prenatal cuando se advierte en el ultrasonido obstétrico de cribado una capnia ha demostrado mejorar el aporte de oxígeno sistémico (Tabbutt
vista de cuatro cámaras del corazón anormal. Idealmente, el parto debe- et al., 2001). El objetivo de esta terapia es mantener normal el lactato y la
ría realizarse en un centro con cuidados de tercer nivel. En ausencia de saturación de oxígeno sistémico en el 75-85% y la saturación de oxígeno
diagnóstico prenatal, la presentación posnatal es en cierto punto variable venosa mixta aproximadamente un 25% por debajo de las saturaciones
y depende de la persistencia ductal y del grado de restricción al flujo en el sistémicas. La ventilación mecánica se requiere típicamente cuando se
tabique auricular. El niño con un tabique auricular no restrictivo y CAP manipulan gases inspiratorios. La ventilación mecánica por sí sola se ha
es ampliamente asintomático en el momento del nacimiento y puede asociado con elevado riesgo de infección, hemodinámica preoperatoria
pasar desapercibido durante el período neonatal. La cianosis es mínima, más lábil y aumento de la mortalidad. Tanto la ventilación mecánica
y la sobrecirculación pulmonar es leve mientras la RVP sea alta. La electiva como la alteración de la mezcla de gas inspirado pueden ser
examinación cardíaca es relativamente nada especial. El segundo ruido menos beneficiosas en la era actual (Johnson et al., 2008).
cardíaco es único e intenso. Un tercer ruido se hace presente a medida Se puede utilizar medicación vasoactiva para alterar la resistencia
que se desarrolla insuficiencia cardíaca. A medida que la RVP cae y el vascular sistémica y mejorar la función ventricular. La utilización de esta
cierre ductal tiene lugar, se manifiestan dificultades en la alimentación medicación está determinada por la presentación clínica y los hallazgos
y dificultad respiratoria con rápida progresión a colapso cardiovascular. ecocardiográficos. Puede utilizarse milrinona para aportar una reducción
La exploración física posterior a la restricción ductal es significativa y de la poscarga, siempre y cuando sea tolerada por la presión arterial. Los
presenta letargia, palidez y pulsos disminuidos o ausentes. La radiografía efectos inótropos de la milrinona también son ventajosos si la función
de tórax revela típicamente un corazón de tamaño relativamente normal ventricular está deteriorada. Además de disminuir el flujo sanguíneo
con edema pulmonar. El ECG no es específico, pero puede mostrar una pulmonar, la reducción de la poscarga tiene el beneficio adicional de
relativa ausencia de fuerzas izquierdas. disminuir la regurgitación tricuspídea en caso de que esta esté presente.
El paciente con un tabique auricular restrictivo se presenta con La milrinona también dilata los lechos vasculares pulmonares, por lo que
taquipnea y cianosis profunda poco después del nacimiento. Las debe tenerse cuidado cuando se utiliza. Aunque no resulta nada intui-
elevadas presiones auricular izquierda y venosa pulmonar dan como tivo, en presencia de un paciente no operado con elevada saturación de
resultado una congestión venosa pulmonar que es evidenciable en la oxígeno y baja presión arterial periférica, el agregado sutil de milrinona
radiografía de tórax. puede mejorar la presión arterial simplemente por incrementar el flujo
El tratamiento prequirúrgico de los pacientes con SCIH está dirigido sanguíneo sistémico (Johnson et al., 2008).
a equilibrar la proporción entre flujo sanguíneo pulmonar y sistémico El objetivo inmediato de la paliación quirúrgica es el de proveer flujo
(Qp:Qs) para permitir una suficiente oxigenación de la sangre mientras sanguíneo sistémico y coronario estable y no restringido y flujo sanguí-
se mantiene un gasto cardíaco sistémico adecuado. Se debe comenzar neo pulmonar confiablemente restringido. Existen varias estrategias para
de inmediato con prostaglandinas posnatalmente para asegurar la per- la paliación en estadio I. Tradicionalmente, se realizaba reconstrucción
meabilidad del conducto arterioso. La ecocardiografía se utiliza para del cayado aórtico utilizando tejido de la arteria pulmonar, y el flujo
confirmar la anatomía cardíaca y para determinar el grado de restricción sanguíneo pulmonar era suministrado a través de una derivación de BT
al flujo a través del agujero oval. Si el cortocircuito auricular es restrictivo modificada (técnica de Norwood, fig. 55.19). Se ha usado recientemente
con profunda cianosis y acidosis metabólica, se debe realizar una septos- una modificación del conducto ventrículo derecho-arteria pulmonar
tomía auricular con balón, septectomía quirúrgica o paliación de estadio para suministrar flujo sanguíneo (modificación de Sano, fig. 55.20). La
emergente I (v. más adelante en este apartado). Si la restricción estaba modificación de Sano tiene el beneficio presunto de aportar flujo pulsátil
presente intraútero, tiene lugar fibrosis patológica y arterialización de a las arterias pulmonares sin pérdida AP diastólica y robo coronario.
las venas pulmonares, así como hipertrofia de la capa media de arteriolas La desventaja de este procedimiento es la necesidad de una ventricu-
pulmonares. Incluso después de la septostomía auricular, la enferme­ lotomía. Un procedimiento híbrido que combina el implante de una
dad pulmonar puede persistir, y la RVP, mantenerse elevada. Puede endoprótesis en el conducto arterioso por el cardiólogo y el cerclaje de
requerirse oxígeno para mantener la saturación en rangos apropiados. la arteria pulmonar por el cirujano es un abordaje empleado por una
El subgrupo de pacientes presenta una elevada tasa de mortalidad. serie de instituciones y aporta una paliación en estadio I relativamente
Un pequeño grupo de pacientes tendrá un adecuado equilibrio de no invasiva para el SCIH (Caldarone et al., 2007). Cada uno de estos
flujo sanguíneo pulmonar y sistémico en el momento de la presenta- procedimientos presenta pros y contras, y partidarios y detractores
ción. Un pequeño grado de restricción al flujo a través del agujero oval (Malec et al., 2003; Ghanayem et al., 2006; Caldarone et al., 2007).
puede estar asociado con cianosis leve, pero tiene el efecto beneficioso Se necesitan estudios más a largo plazo para determinar el enfoque
de restringir el flujo sanguíneo pulmonar. En ausencia de acidosis o óptimo en el estadio I de paliación. En el paciente de bajo riesgo, la
disfunción de órgano blanco, el estado generalmente se tolera hasta supervivencia seguida a la primera etapa ronda el 80-90%.
que se realiza la paliación en estadio I. El resto de las cirugías paliativas tienen lugar fuera del período
Una CIA no restrictiva permite un flujo sanguíneo aumentado a neonatal. La paliación en estadio II descarga el ventrículo derecho
medida que la RVP cae. Debido a la disposición en paralelo de las y comienza a separar la circulación pulmonar de la sistémica. La
circulaciones, el flujo sanguíneo pulmonar aumentado disminuye el anastomosis cavopulmonar superior (Glenn bidireccional) se realiza
flujo sistémico. En este escenario existe una saturación de oxígeno en habitualmente entre los 4 y los 6 meses de edad. Durante este proce-
aumento con aporte de oxígeno a los tejidos inadecuado. Sobrevienen dimiento, el conducto que suministra flujo pulmonar se remueve, y la
empeoramiento de la acidosis metabólica y disfunción del órgano VCS se anastomosa a la arteria pulmonar.
blanco. La Qp:Qs está equilibrada por manipulación de las resis- La paliación en estadio III separa completamente las circulaciones
tencias de los lechos vasculares pulmonar y sistémico. El éxito de estos pulmonar y sistémica. Una anastomosis cavopulmonar inferior (Fontan
tratamientos se monitoriza por la medición de la saturación de oxígeno, completa) se realiza por una de varias técnicas.
saturación venosa mixta, lactato y gases arteriales.
La RVP puede manipularse por medio de ventilación mecánica y
alteración de la cantidad de oxígeno aportado. La ventilación mecáni- Retorno venoso pulmonar total anómalo
ca con presión positiva al final de la espiración puede limitar el flujo con obstrucción
sanguíneo pulmonar. La RVP también puede incrementarse al adherir
dióxido de carbono o nitrógeno al circuito del ventilador para reducir El RVPTA con obstrucción representa una de las pocas emergencias
la fracción inspirada de oxígeno (FiO2) a 0,17 (Riordan et al., 1996; quirúrgicas remanentes en la cardiología pediátrica. Mientras que la obs-
Shime et al., 2000). Tanto el CO2 como el nitrógeno han demostrado trucción puede ocurrir en cualquier tipo de RVPTA, es más común en

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CAPÍTULO 55 Cardiopatías congénitas 821

• Figura 55.19  Paliación en estadio I para el síndrome del corazón izquierdo hipoplásico: procedimiento
de Norwood clásico. A. Se realiza sección transversal del tronco de la arteria pulmonar y se sutura
el extremo distal. Se liga el conducto arterioso, y se realiza una incisión desde la aorta ascendente
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proximal alrededor del cayado aórtico a nivel del conducto arterioso. B. Se utiliza un homoinjerto
pulmonar para crear un parche para reconstruir la nueva aorta. C y D. Este parche de homoinjerto se
utiliza para conectar el tronco de la arteria pulmonar proximal y la válvula pulmonar (neoaórtica) a la aorta
descendente y el cayado aórtico. E. Se coloca una derivación de Blalock-Taussig modificada desde la
base del tronco braquiocefálico hasta la arteria pulmonar derecha. F. Técnica alternativa que utiliza un
injerto de tubo circunferencial desde el tronco de la arteria pulmonar proximal hasta el cayado aórtico
distal. No se muestra: se realiza una septectomía auricular para permitir la salida sin obstrucción desde
las venas pulmonares al ventrículo derecho. (Tomado de Castañeda AR, Jonas RA, Mayer JE Jr, Hanley
FL. Cardiac Surgery of the Neonate and Infant. Philadelphia, PA: WB Saunders; 1994.)

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822 PA RT E XI Aparato cardiovascular

• Figura 55.20  Reconstrucción en estadio I, modificación de Sano, • Figura 55.21  Radiografía de tórax de un recién nacido de 1 día de
o ventrículo derecho-arteria pulmonar. La reconstrucción del cayado vida con retorno venoso pulmonar total anómalo.
es similar a la mostrada en la figura 55.19. La derivación de Blalock-
Taussig se reemplaza con un tubo de Gore-Tex insertado desde el ven-
trículo derecho hasta la arteria pulmonar. (Tomado de Sano S, Ishino K, pequeña y restrictiva, la presentación clínica es similar a la del RVPTA
Kawada K, et al. Right ventricle–pulmonary artery shunt in first-stage obstructivo. Si la apertura no es restrictiva, no hay síntomas presentes.
palliation of hypoplastic left heart syndrome. J Thorac Cardiovasc Surg. La resección quirúrgica de la membrana que separa la aurícula izquierda
2003;126:504–510.) de la vena pulmonar común es un tratamiento efectivo. La presencia
prequirúrgica de obstrucción venosa pulmonar significativa aumenta
la mortalidad quirúrgica.
el RVPTA infradiafragmático. Fisiológicamente, la obstrucción al flujo
venoso pulmonar genera hipertensión venosa pulmonar que se trans-
mite a los lechos capilares pulmonares, lo que da como resultado edema Estenosis mitral
pulmonar. El flujo sanguíneo pulmonar está gravemente limitado. Los La estenosis mitral congénita es una forma rara de CC con varios
recién nacidos, por tanto, se presentan con cianosis profunda y dificultad subtipos. La estenosis puede ocurrir en la región supravalvular, en el
respiratoria, que no responde al tratamiento médico. Las prostaglandinas anillo valvular o en el soporte del aparato valvular. La estenosis mitral
pueden ayudar a minimizar la obstrucción al mantener la permeabilidad congénita típica se caracteriza por engrosamiento de las valvas, cuerdas
del conducto venoso, pero la permeabilidad del conducto arterioso tendinosas cortas o ausentes, obliteración del espacio intercordal y dos
no mejora el cuadro clínico, ya que la limitación al flujo sanguíneo músculos papilares separados. El anillo mitral supravalvular ocurre
pulmonar no se debe a un insuficiente flujo anterógrado, sino a obs- cuando hay sobrecrecimiento de tejido conectivo en la superficie auri-
trucción del tracto de salida. La radiografía de tórax revela una silueta cular de las valvas de la válvula mitral, lo que lleva a un orificio mitral
cardíaca normal con congestión venosa pulmonar que puede interpre- disminuido. El orificio valvular mitral también puede ser estenótico
tarse como neumonía intersticial (fig. 55.21). La ecocardiografía puede secundario a una válvula mitral en paracaídas, cuando la mayoría o
causar un desafío en estos pacientes. Las venas pulmonares pueden ser todas las cuerdas tendinosas se insertan en solo un músculo papilar.
pequeñas debido al flujo limitado, haciendo difícil su detección por Otra forma de obstrucción ocurre con el doble orificio valvular mitral,
método bidimensional y Doppler color. El tratamiento quirúrgico es donde una lengüeta de tejido conecta las valvas anterior y posterior de la
el mismo que para el RVPTA sin obstrucción. El curso posquirúrgico válvula mitral. La válvula mitral en hamaca o en arcada ocurre cuando
está frecuentemente marcado por labilidad en la RVP, hipertensión las valvas están conectadas directamente o por cuerdas cortas a los mús-
ventricular derecha y síndrome de bajo gasto cardíaco. El riesgo de culos papilares. La estenosis mitral congénita ocurre frecuentemente en
mortalidad, la necesidad de ventilación prolongada y la incidencia de conjunto con otras lesiones obstructivas del lado izquierdo.
aparición tardía de obstrucción posquirúrgica están aumentados en Los síntomas de la estenosis mitral usualmente ocurren en el curso de
presencia preoperatoria de obstrucción (Frommelt et al., 2010). los primeros 2 años de vida y pueden consistir en dificultad para respirar,
dificultad respiratoria, sibilancias, cianosis y palidez. El examen cardía-
Corazón triauricular co re­vela un soplo diastólico apical que retumba, primer ruido cardíaco
intenso, y segundo ruido cardíaco desdoblado e intenso. Puede auscultarse
Embriológicamente, las venas pulmonares ingresan a una vena pulmo- el chasquido de apertura de la válvula mitral. La radiografía de tórax revela
nar común que inicialmente no tiene conexión con la aurícula izquierda agrandamiento de aurícula izquierda y congestión venosa pulmonar. El
(Neill, 1956). Durante el desarrollo normal, la vena pulmonar común ECG revela hipertrofia ventricular derecha con onda P normales, en doble
se incorpora a la aurícula izquierda, lo que da como resultado el patrón lomo o picudas, lo que sugiere sobrecarga auricular izquierda (SAI). El
habitual de dos venas pulmonares derechas y dos venas pulmonares ecocardiograma se utiliza para definir la anatomía de la válvula mitral y
izquierdas que desembocan en la aurícula izquierda. La incorporación localizar el área de obstrucción. El Doppler puede utilizarse para determinar
anormal de la vena pulmonar común puede causar corazón triauricular, el gradiente valvular y estimar la presión ventricular derecha.
una condición en la cual la vena pulmonar común se incorpora a la Las opciones de tratamiento de la estenosis mitral congénita inclu-
aurícula izquierda a través de una única apertura. Si la apertura es yen valvuloplastia mitral con balón, valvuloplastia mitral quirúrgica

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CAPÍTULO 55 Cardiopatías congénitas 823

y reemplazo valvular mitral. A pesar de las recientes mejoras en los lado izquierdo, con posible subdesarrollo de las estructuras del corazón
resultados, el reemplazo valvular mitral tiene malos resultados a corto izquierdo. Estos hallazgos pueden alterar el plan terapéutico y llevar a
plazo (Baird et al., 2015; Myers et al., 2015). En los pacientes con paliación de ventrículo único. Los modelos publicados han intentado
lesiones obstructivas del lado izquierdo adicionales o defectos asociados identificar los hallazgos ecocardiográficos que predicen la probabilidad de
frecuentemente es necesaria la paliación de ventrículo único. reparación biventricular en neonatos con estenosis aórtica crítica (Rhodes
et al., 1991; Lofland et al., 2001; Colan et al., 2006).
El tratamiento inicial de niños con estenosis aórtica crítica está dirigi-
Estenosis aórtica crítica do al tratamiento del shock cardiógeno. Frecuentemente son necesarios
Los pacientes con estenosis aórtica crítica presentan una obstrucción la intubación endotraqueal, la ventilación mecánica, el acceso vascular
grave del tracto de salida ventricular izquierdo que limita el gasto seguro, el soporte inotrópico, la sedación y la parálisis. La PGE1 man-
cardíaco sistémico (fig. 55.22). El resultado es una perfusión sistémi- tiene permeable el conducto arterioso y aporta un gasto sistémico. Un
ca dependiente del conducto arterioso. Mientras que la obstrucción pequeño AOP debe estar presente para que el retorno venoso pulmonar
puede ocurrir por debajo de la válvula, en la válvula, por encima de atraviese el tabique auricular e ingrese a la vascularización sistémica a
la válvula o en una combinación de estas, este apartado se centra en través del ventrículo derecho y el conducto arterioso. Puede ser necesaria
la obstrucción del tracto de salida que resulta de las alteraciones mor- una septostomía con balón para descomprimir la aurícula izquierda.
fológicas de la válvula aórtica. La estenosis valvular aórtica grave se El tratamiento posterior depende del tamaño ventricular izquierdo
define por un gradiente de presión mayor de 60 mmHg derivado de y de la presencia de otras lesiones obstructivas en el corazón izquierdo.
Doppler. La estenosis moderada se define por un gradiente entre 30 En los pacientes con obstrucciones en múltiples niveles del corazón
y 60 mmHg, mientras que la estenosis leve tiene un gradiente pico izquierdo, una pequeña válvula mitral, un cayado aórtico hipoplásico
menor de 30 mmHg. En el contexto de función ventricular izquierda o un pequeño ventrículo izquierdo pueden convertirlo en candidato a
deprimida, el gradiente derivado de ecocardiografía Doppler puede paliación de ventrículo único. Las opciones para paliación biventricular
ser significativamente menor y subestimar la gravedad de la estenosis. incluyen valvuloplastia con balón en el laboratorio de hemodinámica,
La estenosis valvular aórtica es detectable intraútero. La sobrecarga valvulotomía quirúrgica o cirugía de Ross neonatal (fig. 55.23) (Alsoufi
de presión persistente en el ventrículo izquierdo causa hipertrofia et al., 2007b). Los resultados de todos los procedimientos depen-
izquierda y cicatrices en el ventrículo izquierdo (fibroelastosis endocár- den, en parte, de aliviar la obstrucción, la presencia de insuficiencia
dica). En algunos casos, como se discutió previamente, la enfermedad valvular aórtica, lesiones cardíacas asociadas y la gravedad de la dis-
progresa a SCIH. La creciente experiencia en intervencionismo fetal función del órgano blanco en el momento de la presentación inicial.
sugiere que, con una adecuada selección de los pacientes, es posible La mortalidad de cada uno de los procedimientos es relativamente alta.
alterar el curso de la estenosis aórtica crítica en el feto por medio de Independientemente del tratamiento elegido, la estenosis aórtica crítica
intervención precoz (Freud et al., 2014; Friedman et al., 2015). es una enfermedad terminal. Estos pacientes requieren un estrecho
Clínicamente, la estenosis aórtica crítica se presenta en el recién seguimiento y múltiples procedimientos a lo largo de su vida.
nacido con signos de perfusión sistémica disminuida: palidez, pulsos
disminuidos y rellenado capilar prolongado. Un soplo eyectivo rudo es Coartación de la aorta
audible en el área aórtica. El volumen y la calidad del soplo se correlacio-
nan con la gravedad de la estenosis en contexto de la función ventricular La coartación puede ocurrir en cualquier lugar desde el cayado aórtico
izquierda conservada. Si la función ventricular izquierda está deprimida, hasta la bifurcación de las arterias ilíacas. Más comúnmente, existe un dis-
el soplo puede ser suave a pesar de una estenosis grave. El ECG revela creto estrechamiento distal a la arteria subclavia izquierda, que va desde
hipertrofia ventricular izquierda con posibles ondas T anormales. En la la inserción aórtica del conducto arterioso en una posición yuxtaductal.
radiografía de tórax, el corazón es típicamente de tamaño normal, aunque Por el contrario, puede existir un segmento extenso de estrechamiento
el botón aórtico puede ser prominente y puede haber presencia de con- del cayado aórtico, también llamado cayado aórtico hipoplásico. Hay
gestión pulmonar. El ecocardiograma se utiliza para definir la localización presencia de válvula aórtica bicúspide en el 70% de los casos. Otras
y gravedad de la obstrucción del tracto de salida ventricular izquierdo. La lesiones obstructivas del lado izquierdo tienden a ocurrir en presencia
estenosis aórtica se halla comúnmente con otras lesiones obstructivas del de coartación de la aorta. Existe una preponderancia masculina de 2:1
con respecto a las mujeres y una asociación con el síndrome de Turner.
En neonatos con leve estrechamiento yuxtaductal, el CAP ensancha el
área estrechada y aporta un alivio a la obstrucción. El cortocircuito neto
a través del CAP es izquierda-derecha. Estos pacientes presentan iguales
saturaciones de oxígeno en las extremidades superiores e inferiores
del cuerpo. En pacientes con coartación grave o un cayado aórtico
hipoplásico difuso, el flujo aórtico descendente se origina a partir de
un cortocircuito derecha-izquierda a través del conducto arterioso. La
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saturación de oxígeno diferencial entre las extremidades superiores e


inferiores tiene lugar en estos pacientes, y es mayor en las extremidades
superiores que en las inferiores.
La presentación clínica de la coartación de la aorta depende de la
gravedad del estrechamiento. La coartación leve con frecuencia no se
manifiesta durante la infancia. La detección ocurre típicamente cuando
se constata hipertensión en los miembros superiores y pulsos femorales
disminuidos o ausentes durante la exploración física. En los niños
con grados más graves de coartación o cayado aórtico hipoplásico se
presenta con perfusión disminuida de los miembros inferiores posterior
al cierre del conducto arterioso. La exploración física demuestra un
• Figura 55.22  Estenosis aórtica congénita. La vista frontal a través de niño con pobre perfusión y ausencia de pulsos femorales. El examen
la aorta abierta muestra la válvula aórtica estenótica y dismórfica con cardíaco puede revelar un clic sistólico eyectivo en presencia de válvula
fusión comisural. (Tomado de Litwin SB. Color Atlas of Congenital Heart aórtica bicúspide. Se ausculta un soplo sistólico eyectivo que se irradia
Surgery. St. Louis, MO: Mosby; 1996.) al dorso y al área infraclavicular izquierda. La radiografía de tórax

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• Figura 55.23  Cirugía de Ross: reemplazo valvular aórtico con «autoinjerto». A. Las líneas discontinuas
muestran las incisiones quirúrgicas alrededor de las arterias coronarias, la aorta y la arteria pulmonar.
B. Después de la separación de las arterias coronarias y los «botones» adyacentes, y de la válvula
aórtica enferma, la válvula pulmonar nativa del paciente («autoinjerto») se coloca en la raíz aórtica. C. Re­
paración completa con arterias coronarias reimplantadas y homoinjerto valvular cadavérico insertado
en posición pulmonar. (Tomado de Chang AC, Burke RP. Left ventricular outflow tract obstruction. In:
Chang AC, Hanley FH, Wernovsky G, Wessel DL, eds. Pediatric Cardiac Intensive Care. Baltimore, MD:
Williams & Wilkins; 1998:233–256.)

muestra un corazón aumentado de tamaño con incremento de la trama puede utilizar material de parche para aumentar el arco y realizar una
vascular pulmonar. El ECG revela hipertrofia ventricular derecha. El anastomosis terminoterminal mayor. La angioplastia con balón de la
ecocardiograma se utiliza para definir la localización y extensión del coartación nativa no se realiza típicamente durante la infancia debido al
estrechamiento aórtico. También se descarta la presencia de otras riesgo de aneurisma, recoartación y lesión vascular en el sitio de acceso.
lesiones obstructivas de lado izquierdo. Se describen frecuentemente La mortalidad quirúrgica es apenas superior al 5% (Mery
hipertrofia e hipertensión ventricular derecha. et al., 2015). La recoartación ocurre en el 10-15% de los niños y se
El tratamiento de los niños que se presentan con coartación de maneja exitosamente a través de angioplastia con balón. En caso de
aorta es similar al de los niños con estenosis aórtica. La intubación y la presencia de CIV, esta es típicamente cerrada durante la cirugía.
ventilación mecánica son necesarias. Los accesos vasculares se obtienen
para la administración de inótropos. La PGE1 se inicia para abrir el Interrupción del arco aórtico
conducto arterioso. Se corrigen los desarreglos metabólicos. Idealmente,
se estabiliza al niño antes de la cirugía. La cirugía está típicamente indi- La interrupción del arco aórtico es una anomalía relativamente rara
cada en el momento del diagnóstico, incluso en pacientes relativamente que se define simplemente como la separación de la aorta ascendente
asintomáticos. En la mayoría de los casos se realiza una toracotomía y descendente. La interrupción del arco aórtico puede clasificarse por
lateral, el área de coartación se extirpa, y se realiza una anastomosis la localización de la interrupción en relación con los vasos de la cabeza
terminoterminal. Si hay un estrechamiento de un segmento largo, se y el cuello (fig. 55.24): tipo A, distal a la arteria subclavia izquierda;

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CAPÍTULO 55 Cardiopatías congénitas 825

perfusión de la arteria coronaria ocurre principalmente durante la


diástole. A medida que la presión de la arteria pulmonar disminuye
posnatalmente, la presión de perfusión de la arteria coronaria izquierda
cae, lo que causa isquemia e infarto del ventrículo izquierdo. Si los vasos
colaterales conectan las circulaciones coronarias derecha e izquierda,
el flujo en la arteria coronaria izquierda se invierte. Ocurre un corto-
circuito izquierda-derecha que provoca robo coronario. Se desarrolla
insuficiencia valvular mitral secundaria a isquemia del músculo papilar
y dilatación ventricular izquierda.
Clínicamente, los síntomas se desarrollan en el primer mes des-
pués del nacimiento. Si existen adecuados vasos colaterales y aporte
miocárdico de oxígeno, el paciente puede presentar síntomas de tipo
anginoso con el tiempo. En el niño, es común la presentación con ata-
ques de irritabilidad, palidez y diaforesis con la alimentación. El examen
cardíaco revela un punto de máximo impulso (PMI) desplazado, ritmo
de galope y soplo inespecífico. En caso de que hubiese insuficiencia
mitral asociada, se puede auscultar un soplo holosistólico regurgitante.
La radiografía de tórax revela cardiomegalia masiva. El ECG demuestra
un patrón QR y ondas T invertidas en las derivaciones I y aVL. Las
derivaciones V5 y V6 también pueden presentar ondas Q profundas,
ondas T invertidas y depresión del segmento ST. La ecocardiografía
puede sugerir el diagnóstico, pero no siempre es confiable, ya que la
• Figura 55.24  Clasificación anatómica de los tipos A, B y C de inte- coronaria izquierda ocasionalmente parece nacer de la aorta. El Doppler
rrupción del arco aórtico. Las líneas discontinuas indican las posibles color puede demostrar el flujo retrógrado en la coronaria izquierda con
áreas de discontinuidad (interrupción) del arco aórtico. Véase el texto flujo hacia la arteria pulmonar. El cateterismo cardíaco es diagnóstico.
para más detalles. (Tomado de Castañeda AR, Jonas RA, Mayer JE Jr, Los síntomas de ICC se manejan médicamente. La reimplantación
Hanley FL. Cardiac Surgery of the Neonate and Infant. Philadelphia, PA: quirúrgica de la arteria coronaria izquierda a la aorta restaura la presión
WB Saunders; 1994.) de perfusión coronaria normal. Si se restablece el suministro coronario
habitual de dos vasos, hay una gradual normalización del tamaño y la
función ventricular izquierda, apreciable por ecocardiografía (Lange
tipo B, entre la subclavia izquierda y la carótida izquierda, y tipo C, et al., 2007; Kuroczynski et al., 2008). Si el daño miocárdico es grave o
entre la carótida izquierda y el tronco braquiocefálico. Todos los tipos la arteria coronaria izquierda no puede reimplantarse quirúrgicamente,
de interrupción ocurren en conjunto con desplazamiento posterior del se realiza un trasplante cardíaco.
tabique infundibular; lo que causa una CIV y grados variables de obs-
trucción del tracto de salida del ventrículo izquierdo. Las disposiciones
aberrantes de los vasos de la cabeza y el cuello son comunes, con el Malformaciones arteriales sistémicas
50% de los pacientes con interrupción de tipo B que presentan una Las anomalías vasculares se dividen en dos grandes grupos: hemangio-
arteria subclavia derecha aberrante que nace de la aorta descendente. mas y malformaciones. Los hemangiomas son tumores que demuestran
La interrupción del arco aórtico está asociada con deleción de 22q11. hiperplasia endotelial y que experimentan un período de proliferación e
La presentación clínica de la interrupción del arco aórtico es similar involución. Las malformaciones son el resultado de morfogenia vascular
a la de otras lesiones obstructivas del lado izquierdo. El flujo de la anormal. Presentan renovación celular endotelial y crecimiento normal
aorta descendente es enteramente dependiente del cortocircuito dere- de acuerdo con las estructuras circundantes. Las malformaciones vas-
cha-izquierda a través del CAP. El cierre del conducto arterioso causa culares se subcategorizan por el tipo de tejido vascular involucrado
colapso cardiovascular. El tratamiento inicial es como el descrito para (arterial, venoso y linfático). Debido a su asociación con la insuficiencia
la coartación de la aorta. La PGE1 debería iniciarse lo antes posible, cardíaca con gasto aumentado en el período neonatal, se discutirán dos
ya que el resto de los esfuerzos de resucitación no tendrán beneficio tipos de malformaciones vasculares sistémicas: MAV y fístu­las arte-
hasta que no esté establecida la circulación posductal. riovenosas (FAV). Una MAV resulta de múltiples microfístulas entre
Se realiza una reparación quirúrgica después de la resolución de pequeñas arterias y venas. Una FAV resulta de la conexión entre una
la acidosis metabólica y cuando la función del órgano diana se haya arteria y una vena de mayor tamaño.
mejorado. Se establece una continuidad entre la aorta ascendente y des- Las FAV y las MAV hemodinámicamente significativas se presentan
cendente por medio de una anastomosis terminoterminal, una inserción con insuficiencia cardíaca con gasto aumentado y cianosis en el período
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de homoinjerto/ampliación con parche para conectar los dos segmentos neonatal. Tiene lugar un amplio y efectivo cortocircuito izquierda-
o injertos de puente (fig. 55.25). La CIV es típicamente cerrada. En derecha a través de las conexiones directas arteriovenosas. La frecuencia
pacientes con hipoplasia grave del ventrículo izquierdo, la reparación cardíaca, el volumen sistólico, el volumen plasmático y el gasto cardíaco
biventricular puede no ser posible, y se realiza una reparación en etapas o se encuentran elevados. La conexión de la fístula disminuye la resis-
paliación de ventrículo único (Tchervenkov et al., 2005). La mortalidad tencia vascular sistémica, promoviendo un cortocircuito derecha-
quirúrgica es menor del 10%, pero mayor en pacientes con anomalías izquierda a través del conducto arterioso, particularmente si aún no
adicionales (Shinkawa et al., 2012). Son comunes tanto la reintervención ha sucedido la caída posnatal normal de la RVP. El retorno venoso
debida a obstrucción del tracto de salida del ventrículo izquierdo, como sistémico incrementado aumenta las presiones en la aurícula derecha y
la angioplastia con balón para la obstrucción recurrente del cayado. promueve el cortocircuito derecha-izquierda a través del agujero oval.
El examen cardíaco revela un precordio hiperdinámico. Pueden
Origen anómalo de la arteria coronaria izquierda auscultarse un segundo ruido cardíaco prominente, R3, y R4. Puede
desde la arteria pulmonar haber soplos sistólicos secundarios a insuficiencia tricuspídea o por el
aumento de flujo a través de la válvula pulmonar. El flujo incrementado
Cuando la arteria coronaria izquierda emerge de la arteria pulmonar, a través de la válvula tricúspide puede originar un sonido diastólico.
provoca un aporte inadecuado de oxígeno al ventrículo izquierdo. La Pueden auscultarse soplos vasculares sobre la malformación vascular.

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• Figura 55.25  Reparación quirúrgica de la interrupción del arco aórtico de tipo B. A. Las ramas de
la arteria pulmonar y los vasos del cayado se enlazan, y se coloca una ligadura alrededor del conducto
arterioso. B. Se controla la aorta descendente proximal con una abrazadera. Para movilizar adecuada-
mente la aorta descendente, puede ser necesario dividir la arteria subclavia izquierda (como se muestra).
Después de la resección del conducto arterioso, el extremo proximal (arteria pulmonar) se sutura. C. La
aorta descendente se anastomosa directamente a la aorta ascendente. Una estrategia alternativa es
la anastomosis de las arterias subclavia izquierda y carótida común izquierda combinadas con parche
de homoinjerto y aumento de la superficie inferior del cayado. En caso de presencia de comunicación
interventricular, también se realiza el cierre (no se muestra). (Tomado de Castañeda AR, Jonas RA,
Mayer JE Jr, Hanley FL. Cardiac Surgery of the Neonate and Infant. Philadelphia, PA: WB Saunders; 1994.)

Cuando se sospecha una malformación, se debe prestar especial aten- tamiento de la miocardiopatía fetal y del recién nacido. Cuando se nos
ción a la auscultación de áreas donde sean posibles las malformacio- presenta un recién nacido con signos de ICC, debe descartarse una
nes, como la cabeza, el hígado y el tórax. Las arterias proximales a la cardiopatía estructural. En ausencia de problemas estructurales, debe
malformación se encuentran típicamente dilatadas con pulsos saltones, considerarse el diagnóstico de miocardiopatía. Las causas de miocar-
mientras que las distales son pequeñas y con pulsos disminuidos. El diopatía neonatal incluyen infecciones prenatales (citomegalovirus,
ECG no es específico y puede mostrar sobrecarga auricular y ventricular virus de la inmunodeficiencia humana, parvovirus), causas familiares o
derecha. La radiografía de tórax revela cardiomegalia con aumento de la genéticas, enfermedad materna autoinmunitaria con anticuerpos anti-
trama vascular pulmonar. El ecocardiograma demuestra cardiomegalia Ro o anti-La, exposición prenatal a drogas, miocardiopatía inducida
generalizada. El tratamiento, en caso de ser necesario, requiere cierre por arritmia y síndrome de transfusión intergemelar. La evaluación
intervencionista de las conexiones vasculares anómalas o la remoción posnatal debe incluir una búsqueda de la causa.
quirúrgica de las anormalidades anatómicas asociadas. El tratamiento inicial es similar al empleado para otros tipos de car-
diopatías. La estabilización inicial puede requerir ventilación mecánica,
Miocardiopatía utilización de inótropos, reducción de la poscarga y control de diuresis.
El tratamiento a largo plazo depende en cierto punto de la causa de la
Existe gran cantidad de literatura que describe el diagnóstico y el miocardiopatía, ya que algunas formas pueden ser reversibles. El tras-
tratamiento de las CC estructurales en el feto y el recién nacido. Sin plante cardíaco debe considerarse si la función cardíaca es pobre o no
embargo, hay escasez de información respecto al diagnóstico y el tra- hay signos de mejoría.

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CAPÍTULO 55 Cardiopatías congénitas 827

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CAPÍTULO 55 Cardiopatías congénitas 827.e3

Palabras clave
Cardiopatía congénita
Recién nacido cianótico
Comunicaciones
Miocardiopatía
Enfermedad valvular
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56
Arritmias perinatales
TERRENCE CHUN Y BHAWNA ARYA

PUNTOS CLAVE Sistema de conducción del corazón humano


• El término taquicardia supraventricular (TSV) engloba diferentes Para comprender apropiadamente los mecanismos arritmógenos,
arritmias que pueden tener diferentes requisitos diagnósticos es importante reconocer los elementos principales del sistema de
y terapéuticos. conducción normal del corazón. La embriogenia del corazón y del
• Los mecanismos responsables de la taquicardia pueden estar sistema de conducción se escapa al alcance de este capítulo. Sin
provocados por reentrada, alteración del automatismo o actividad embargo, los componentes del sistema de conducción cardíaca están
desencadenada. relativamente establecidos para el segundo trimestre de gestación y
• La ectopia auricular y ventricular aislada es común en el feto proveen el sustrato de muchas de las arritmias observadas (Moorman
y en el neonato, y usualmente no requiere ningún tratamiento.
et al., 2005).
• Las formas congénitas de bloqueo cardíaco completo pueden
presentarse con baja frecuencia cardíaca, pero puede que no requieran
implante de marcapasos. Nodo sinusal
• Las arritmias fetales son infrecuentes, pero, cuando están presentes,
pueden provocar una significativa afectación hemodinámica. El nodo sinusal reside en el área entre la vena cava y la aurícula
• El tratamiento de las arritmias fetales es complejo e implica derecha, y está predominantemente localizado cerca de la unión
una evaluación de múltiples factores, incluyendo: 1) gravedad entre la vena cava superior y la aurícula derecha (Christoffels
de la anormalidad del ritmo; 2) comorbilidades fetales y signos et al., 2010). Sin embargo, no existe una característica anatómica
de insuficiencia cardíaca; 3) comorbilidades maternas, y 4) edad que sea visible en la inspección a simple vista. Los estudios que
gestacional en el momento del diagnóstico. evaluaron la electrofisiología funcional y los estudios en animales
han demostrado que el tejido nodal puede abarcar la pared lateral
de la aurícula derecha, extendiéndose desde la vena cava superior
a la vena cava inferior.

E
l sistema de conducción cardíaco en el corazón humano El tejido nodal sinoauricular es histológicamente diferente del
normal permite una activación sincronizada y ordenada miocardio auricular y no tiene componentes contráctiles. Los impulsos
del miocardio y las cámaras para aportar un gasto cardíaco eléctricos se generan por comportamiento automático del potencial de
óptimo. Esta secuencia comienza incluso en las etapas más preco- acción. La activación del miocardio auricular adyacente por el tejido
ces del desarrollo cardíaco. Sin embargo, los trastornos del ritmo del nodo sinusal causa una onda de despolarización que se propaga por
cardíaco pueden ocurrir en cualquier etapa de la vida, desde el feto activación célula a célula en sentido superior a inferior y de derecha a
hasta la infancia y la edad adulta. Pueden variar desde trastornos izquierda (en el corazón estructuralmente normal).
transitorios y leves del ritmo a arritmias recurrentes o persistentes
que pueden tener consecuencias hemodinámicas significativas. Nodo auriculoventricular
Algunas alteraciones, como la ectopia auricular o ventricular ais-
lada, pueden ser más molestas para el cuidador que para el paciente. El nodo auriculoventricular (AV) es un área de conducción más orga-
Otras alteraciones, como las taquiarritmias incesantes, pueden nizada en la aurícula derecha próximo a la cruz del corazón. Mejor
progresar a insuficiencia cardíaca y colapso hemodinámico. Mien- definido que el nodo sinusal, el nodo AV compacto está localizado
tras que la incidencia de arritmias cardíacas aumenta en el contexto en la porción posterior del tabique interauricular justo anterior a la
de cardiopatías congénitas (CC), muchas de estas alteraciones se válvula tricúspide y (en la mayoría de los casos) provee un canal de
asocian habitualmente con corazones estructuralmente normales. Es conducción singular hacia el haz de His y el sistema de conducción
importante conocer el espectro de alteraciones del ritmo cardíaco distal (Moorman et al., 2005).
para su adecuado reconocimiento, derivación y tratamiento. En La mayor parte de la onda de propagación auricular despolariza la
este capítulo se discutirán la etiología y los mecanismos comunes masa de las aurículas. Sin embargo, los impulsos que alcanzan el área del
de varias arritmias, así como el diagnóstico diferencial y estrategias nodo AV entran en la zona de transición «de entrada» de conducción
terapéuticas, en diferentes apartados. También se desarrollarán las del nodo AV. La velocidad general de conducción disminuye a través del
cuestiones particulares que rodean el diagnóstico y el tratamiento nodo AV compacto, pero luego sale del nodo hacia las fibras de con-
de las arritmias en el feto. ducción especializada del sistema de His-Purkinje.

828 © 2019. Elsevier España, S.L.U. Reservados todos los derechos

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CAPÍTULO 56 Arritmias perinatales 829

Sistema de His-Purkinje pués de un número de latidos (usualmente dos o tres, aunque puede
ser más largo) hay un fallo para conducir a un único latido. La onda
En el corazón normal, el miocardio auricular y el ventricular se encuen- P subsiguiente es conducida con un intervalo PR normal, y el ciclo
tran aislados eléctricamente uno del otro por los anillos AV (anillos comienza de nuevo. El bloqueo de conducción de tipo Mobitz II está
tricuspídeo y mitral). El haz de His penetrante es usualmente el único presente cuando existe una falta de conducción cíclica; sin embargo, la
tejido de conducción que atraviesa los anillos AV hacia los ventrículos. progresiva prolongación del PR vista en el patrón de Wenckebach está
El haz de His se encuentra aislado del miocardio ventricular hasta que se ausente. La conducción de tipo Mobitz I puede verse en condiciones
divide en ramas. La primera rama del haz de His permite la activación de tono vagal aumentado (como se describió anteriormente), mientras
del tabique. Después, el haz se bifurca en las ramas izquierda y derecha. que la de tipo Mobitz II es prácticamente inaudita en el neonato en
La rama izquierda se divide en los fascículos anterior y posterior. Al final ausencia de otra cardiopatía.
de cada una de estas ramas, los tractos de conducción especializados
se abren en forma de abanico en una intricada red de fibras cortas de
Purkinje que se insertan en múltiples sitios del miocardio ventricular. Bloqueo auriculoventricular de tercer grado
Los impulsos eléctricos que son conducidos a través del sistema de His- El bloqueo AV de tercer grado, o bloqueo AV completo, ocurre cuando
Purkinje causan la activación del miocardio ventricular de un modo hay una ausencia completa de conducción entre las aurículas y los ven-
altamente organizado y sincronizado, que se traduce en una eficiente trículos. En la mayoría de las situaciones de bloqueo AV completo existe
contracción mecánica de ambos ventrículos, izquierdo y derecho, casi un mecanismo de despolarización de escape, de origen en la unión o
simultáneamente. ventricular, el cual asegura el mantenimiento del gasto cardíaco. El
bloqueo AV completo puede ser congénito o adquirido. El bloqueo
Alteraciones en la conducción cardíaca AV congénito es una entidad particularmente desafiante y se describirá
en el apartado siguiente. Las causas más comunes de bloqueo AV com-
Cuando la secuencia normal de activación cardíaca está alterada, el pleto adquirido son infecciones o miocarditis neonatal. Además, el
resultado puede ser una irregularidad en el ritmo cardíaco. Sin embar- bloqueo AV completo puede presentarse como complicación de cirugía
go, en muchos casos, estas alteraciones solo se detectarán con electro- cardíaca neonatal en el 1-3% de los casos que involucran intervención
cardiografía o monitorización de ritmo y no tienen manifestaciones en quirúrgica cercana al tabique interventricular (Gross et al., 2006).
el examen físico. El bloqueo AV puede ocurrir en cualquier nivel de las
vías de conducción y por cualquier impedimento de la propagación del
impulso a través del segmento de conducción. Este puede ser funcional Preexcitación ventricular
(debido a estimulación vagal negativa) o anatómico (como puede verse La preexcitación ventricular ocurre cuando el miocardio ventricular
después de cirugías cardíacas). se activa de manera anormal por una vía accesoria. El patrón de des-
polarización ventricular es, por lo tanto, una combinación (fusión) de
Bloqueo auriculoventricular de primer grado una activación precoz de una porción de los ventrículos a través de una
vía accesoria, y el resto de la activación tiene lugar a través de la vía
Cualquier retraso de la conducción que prolongue el intervalo PR normal del sistema de His-Purkinje. En general, estos tractos puentean
más allá del rango normal para la edad se considera un bloqueo AV el nodo AV que separa típicamente las aurículas de los ventrículos y dan
de primer grado. Por definición, los impulsos deben conducirse de como resultado una conexión eléctrica anómala con los ventrículos.
manera que la relación AV 1:1 persista. En el neonato, el intervalo Existen tres características electrocardiográficas que definen este
PR normal generalmente es entre 80 y 120 ms, hasta 140 ms en los patrón de «Wolff-Parkinson-White»: 1) intervalo PR corto; 2) «onda
primeros meses de vida, y hasta 160 ms en los primeros 6 meses de δ» empastada, y 3) duración del QRS aumentada. El grado de evidencia
vida (Davignon et al., 1980). Normalmente, el bloqueo AV de primer de este patrón en el electrocardiograma (ECG) puede variar depen-
grado es benigno y no requiere ningún tratamiento especial. Puede diendo de la localización de la vía accesoria (y, por lo tanto, de cuán
ser una variante normal o puede ser el resultado de influencias que precozmente se activa la porción preexcitada) y de cuán rápidamente
prolongan la conducción en general a través del nodo AV y el sistema se activan también los ventrículos por el sistema de His-Purkinje. En
de His-Purkinje. El tono vagal aumentado es una causa común de el corazón del recién nacido, el tránsito rápido de tiempo a través del
prolongación del PR. En el recién nacido, esto puede ser una manifes- nodo AV y el sistema de His-Purkinje puede provocar una cantidad
tación de estimulación vagal causada por una sonda nasogástrica u mínima de preexcitación evidenciable, y poder apreciar la presencia
orogástrica que está estimulando la orofaringe. Entre las causas más de un patrón de Wolff-Parkinson-White puede tardar, a veces, algunos
patológicas de prolongación del PR podemos incluir el síndrome de años (Cain et al., 2013). Normalmente, este diagnóstico se realiza solo
lupus neonatal o la miocarditis. Aunque existe evidencia de que la cuando el paciente recién nacido experimenta una taquiarritmia (como
prolongación significativa del PR tiene un impacto negativo en el gasto se discutirá más adelante).
cardíaco del corazón adulto, no hay indicios de que esto sea cierto en
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el neonato con corazón estructural y funcionalmente normal. Incluso Alteraciones del ritmo cardíaco
cuando el intervalo PR es extremadamente prolongado, generalmente
no hay impacto hemodinámico, y el examen cardíaco permanece Las alteraciones del ritmo cardíaco normal pueden ocurrir por uno de
esencialmente inalterado. varios mecanismos y a veces por una combinación de los mismos. Estos
incluyen: 1) automatismo; 2) reentrada, y 3) actividad desencadenada.
Bloqueo auriculoventricular de segundo grado Determinadas áreas del corazón tienen una tendencia a exhibir
automatismo espontáneo, como el nodo sinusal y la unión AV. En
Se define el bloqueo AV de segundo grado por la existencia de una ocasiones, un conjunto anormal de células puede tener una tendencia
conducción incompleta desde la aurícula al ventrículo; es decir, no particular a este tipo de comportamiento. La despolarización gradual
todas las ondas P conducen a un complejo QRS. Esto se manifies- del tejido durante la fase 0 del potencial de acción (diástole eléctrica)
ta usualmente como un latido omitido en el examen físico o en la eventualmente cruza el umbral del potencial de acción, generando
monitorización cardíaca. El bloqueo de conducción de tipo Mobitz I, una secuencia despolarización-repolarización, después de la cual retor-
también conocido como patrón de Wenckebach, describe un patrón na a la diástole eléctrica hasta que la despolarización gradual vuelva
en el cual la conducción AV se prolonga progresivamente con cada a ocurrir (Moorman et al., 2005). Después de que el potencial de
latido sucesivo. El intervalo PR se hace gradualmente más largo, y des- acción comience en el foco ectópico anormal, el miocardio adyacente

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830 PA RT E XI Aparato cardiovascular

también se despolariza y propaga un frente de onda hacia fuera desde distinguirse por la presencia de una onda P precedente. Los complejos
ese lugar. Los ritmos automáticos tienden a exhibir comportamiento prematuros auriculares pueden estar bloqueados si el latido ectópico
de «calentamiento» y «enfriamiento», gradualmente (aunque a veces tiene lugar lo suficientemente precoz tras el latido precedente. Mien-
de manera enérgica) acelerando y desacelerando la vuelta a lo nor- tras que este efecto es más pronunciado cuando hay una conducción
mal. Incluso cuando son persistentes, hay tendencia a la variabilidad AV alterada, se observa más comúnmente en el contexto de conduc-
latido a latido, y la frecuencia puede verse también influenciada por ción nodal normal, y resulta del impulso auricular precoz incapaz de
factores externos, como el tono autonómico, y estados metabólicos u conducir debido al período refractario del nodo AV o del sistema de
hormonales. Además, los ritmos automáticos pueden suprimirse por His-Purkinje. Lo complejos prematuros auriculares bloqueados se
«sobreestimulación» cuando se estimula a mayor frecuencia desde una identifican por la presencia de onda P ectópica (usualmente con la
fuente externa. onda T del latido precedente) que no presenta un complejo QRS que
La actividad desencadenada ocurre cuando el tejido excitable se des- le suceda. Frecuentemente, habrá una pausa sinusal antes del próximo
polariza espontáneamente hasta el umbral de activación, comenzando latido sinusal de retorno conducido. En la mayoría de los casos, los
un potencial de acción en esa célula o células que luego se perpetúa complejos prematuros auriculares aislados en el recién nacido no
al miocardio adyacente. Esto puede ocurrir en tejido prácticamente requieren ningún tratamiento.
normal, pero puede verse particularmente facilitado por condiciones
de acidosis, estimulación mecánica, lesión miocárdica o inflamación. Complejos prematuros ventriculares
Con frecuencia se observa un automatismo aumentado en presencia de La ectopia ventricular aislada se observa frecuentemente en el neonato
ciertos fármacos, como es el caso de inótropos, como la dopamina o la normal, aunque en menor medida que la ectopia auricular (Nagas-
adrenalina, o medicaciones estimulantes, como la cafeína. hima et al., 1987). Los latidos ventriculares ectópicos se distinguen
Los ritmos por reentrada son algunas de las taquiarritmias más usualmente por un complejo QRS ancho con eje de onda T diferente
fácilmente reconocibles en el neonato y en el niño. En contraste con cuando se compara con el complejo QRS-T normal. Hay que des-
la naturaleza gradual de los ritmos automáticos, la reentrada presenta tacar que no hay onda P que preceda el complejo QRS prematuro. De
comienzo y terminación muy abruptos. Durante el ritmo, la frecuencia manera aislada, la ectopia ventricular no tiene implicaciones patológicas
tiende a ser bastante fija y consistente. Los ritmos por reentrada preci- en los niños que no presenten otros signos o síntomas que sugieran
san de varios requisitos previos para perpetuarse. Primero debe haber cualquier otra patología cardíaca.
un «circuito» arrítmico presente con brazos de conducción anterógrada
y retrógrada. Después, debe existir conducción diferencial entre los Taquiarritmias
brazos del circuito de la arritmia, donde un brazo debe exhibir bloqueo
en decremento o unidireccional. Finalmente, todos los elementos del Mientras durante la niñez se pueden observar un número diverso de
circuito de la arritmia deben ser capaces de sostener un ritmo repetitivo taquiarritmias, solo un subconjunto de arritmias distintas se observa
a una frecuencia fija. con frecuencia relativa en el feto y en el neonato (tabla 56.1). Las más
comunes son la taquicardia por reentrada AV (TRAV), la taquicardia
auricular y el aleteo auricular.
Latidos ectópicos
Complejos prematuros auriculares Taquicardia por reentrada auriculoventricular
La ectopia auricular aislada se observa con frecuencia en la infancia
y, en particular, durante el período neonatal. No existe predilección La TRAV es la forma más común de taquicardia supraventricular
étnica respecto a la presencia de ectopia. Los complejos prematuros (TSV) en el feto y en el neonato (Spearman y Williams, 2014). Es el
auriculares pueden observarse durante la monitorización fetal, y se mecanismo arritmógeno más comúnmente asociado con TSV, por lo
ha reportado una incidencia de entre el 25 y el 50% en los recién que los términos se utilizan con frecuencia de manera intercambia-
nacidos normales (Nagashima et al., 1987); sin embargo, en la gran ble. El circuito de la taquicardia para esta arritmia reentrante utiliza
mayoría de los casos, esto se resuelve en los primeros meses de vida. Los el sistema de conducción normal como brazo anterógrado, y una vía
complejos prematuros auriculares los causa una despolarización precoz
en gatillo de la aurícula desde un foco ectópico que está separado del
nodo sinusal. En el ECG de superficie, esto se manifiesta como una
onda P que es más prematura de lo que se esperaría de acuerdo con el TABLA
ritmo precedente, y la onda P ectópica tiene un eje y una morfología 56.1  Diferenciación de taquiarritmias neonatales
diferentes de la onda P sinusal normal. De este modo, se puede diferen-
ciar el complejo prematuro auricular, que se origina en una localización Relación VA Diagnóstico diferencial
diferente a la del nodo sinusal. A>V Taquicardia auricular ectópica
La mayoría de las ectopias auriculares del neonato se conducen de Aleteo auricular
manera normal, lo que significa que el complejo prematuro auricular
se sigue de un complejo QRS de apariencia normal. El intervalo PR VA corto (VA < AV) TRAV (TSV)
TEU (asociado a VA)
puede ser diferente del normal, lo que refleja una despolarización
auricular que comienza en una localización anormal (y, por lo tanto, VA largo (VA ≥ AV) Taquicardia sinusal
más cerca o más lejos del nodo sinusal), más que algún tipo de defecto Taquicardia auricular ectópica
en la conducción AV. Cuando un complejo prematuro auricular FPTRU
se acopla cerca del latido precedente, el complejo QRS conducido pue-
V>A Taquicardia ventricular
de tener una apariencia anormal. Esta «conducción aberrante» puede
TEU (no asociado a VA)
ser ligeramente más ancha que la normal o puede tener la apariencia
de un bloqueo completo de rama. Esto lo causa la incapacidad de A, actividad auricular; AV, auriculoventricular; FPTRU, forma permanente de taquicardia
conducir el impulso precoz, cuando el período refractario para dicho recíproca de la unión; TEU, taquicardia ectópica de la unión; TRAV, taquicardia por reen-
segmento ha sido superado. Los complejos prematuros auriculares trada auriculoventricular; TSV, taquicardia supraventricular; V, actividad ventricular;
conducidos de forma aberrante se confunden frecuentemente con VA, ventriculoauricular.
complejos prematuros debido a su apariencia más ancha, pero pueden

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CAPÍTULO 56 Arritmias perinatales 831

accesoria aporta el brazo retrógrado para la taquicardia (fig. 56.1). pueden ser evidentes para el observador externo palidez, diaforesis o un
Cuando las condiciones son apropiadas, los impulsos conducidos a cambio en el patrón respiratorio. Sin embargo, a pesar de las elevadas
través del sistema de His-Purkinje a los ventrículos son transportados frecuencias cardíacas, las TSV generalmente se toleran bien. La mayoría
de manera retrógrada por una vía accesoria a la aurícula, que después de los episodios de TRAV son autolimitados, y solo persisten durante
alcanza el nodo AV para comenzar nuevamente el ciclo. En caso de segundos o minutos en cada episodio; a veces, los episodios pueden
no encontrarse en período refractario, las aurículas, el nodo AV y el
sistema de His-Purkinje, los ventrículos y la vía accesoria perpetúan
un ritmo de TSV rápido y repetitivo. En el corazón fetal y neonatal,
esta forma de TSV se manifestará con frecuencias fijas, cuyo rango
típicamente está entre 240 y 300 latidos/min. La denominada onda
P retrógrada puede ser visible en el segmento ST o en la onda T,
como evidencia del tiempo de conducción entre la activación de
los ventrículos, el paso a través de la vía accesoria y la subsecuente
reactivación de la aurícula. El intervalo RP medido puede utilizarse
para ayudar al diagnóstico diferencial de varias formas de TSV, y
así usarlo como guía para el tratamiento específico y establecer el
pronóstico.
Cuando una vía accesoria solo conduce en dirección retrógrada, se
denomina vía accesoria oculta; esto quiere decir que no hay evidencia
de conducción a través de la vía durante el ritmo sinusal normal, y
la vía solo conduce de ventrículo a aurícula durante la taquicardia
reentrante. Una vía accesoria manifiesta es aquella cuya presencia se
visualiza durante el ritmo sinusal normal. Estas son las vías que causan
el síndrome de preexcitación ventricular de Wolff-Parkinson-White
(discutido anteriormente). Las vías manifiestas normalmente conducen
bidireccionalmente; la conducción anterógrada genera la preexcitación
en el ECG de reposo, y la conducción retrógrada se utiliza durante la
taquicardia reentrante, lo que provoca una taquicardia de QRS estrecho
sin preexcitación (fig. 56.2).
Para el neonato bajo monitorización continua de la frecuencia
cardíaca en la unidad de cuidados intensivos, tales episodios de TSV
son por lo general bastante reconocibles por el comienzo abrupto y la • Figura 56.1  Mecanismo de la taquicardia por reentrada auriculoven-
terminación espontánea de la frecuencia cardíaca rápida. En ausencia tricular. La conducción anterógrada a través del sistema de His-Purkinje
de monitorización, el desarrollo de la TSV puede no ser tan obvio. despolariza los ventrículos. La conducción retrógrada va desde los
En contraste con niños mayores que son capaces de referir moles- ventrículos, por una vía accesoria, hasta las aurículas. (Reproducido con
tias por las palpitaciones, los neonatos y niños pequeños raramente autorización a partir de Circulation. 2008;117:2820-2840 © 2008, American
dan ningún indicio de que tenga lugar una taquiarritmia. A veces, Heart Association, Inc.)
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• Figura 56.2  Síndrome de Wolff-Parkinson-White. Terminación espontánea de la taquicardia por


reentrada auriculoventricular. Obsérvese el cambio de QRS estrecho en taquicardia a QRS ancho con
preexcitación durante el ritmo sinusal subsiguiente.

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832 PA RT E XI Aparato cardiovascular

durar 30-60 min o más antes de terminar espontáneamente. En raras habitualmente una vía accesoria oculta, localizada típicamente en el
ocasiones, la TSV puede ser incesante y durar horas, o a veces 1 día o tabique posterior o en el anillo tricuspídeo posterior. La conducción
más. En estos casos, el retraso en reconocer y diagnosticar puede llevar a de velocidad de este brazo retrógrado es más lenta que en la mayoría
miocardiopatía dilatada inducida por taquicardia y puede posiblemente de los otros tipos de vías accesorias, y causa un intervalo RP muy
generar colapso cardiovascular. largo. Otra característica distintiva es la presencia de ondas P retró-
El tratamiento agudo de la TRAV está dirigido a la terminación de gradas negativas en las derivaciones inferiores, particularmente en II
la taquicardia y la restauración del ritmo sinusal. El mecanismo por el (fig. 56.3). Con frecuencia estos niños escapan a la detección pre-
cual funcionan la mayoría de los tratamientos consisten en disminuir coz, ya que la frecuencia de la taquicardia no está dramáticamente
o bloquear transitoriamente la conducción por el nodo AV e incluye elevada, lo que puede llevar a un diagnóstico tardío y presentación
maniobras vagales (posición rodilla-tórax o reflejo de inmersión) y la con miocardiopatía inducida por taquicardia o insuficiencia cardíaca
administración de adenosina. Una dosis inicial de adenosina de 0,05- congestiva (Kang et al., 2014). El tratamiento puede ser un reto, ya
0,1 mg/kg en bolo rápido intravenoso (i.v.) es la recomendada para el que la arritmia tiene una tendencia al reinicio espontáneo después
neonato, con dosis ascendentes según necesidad. La cardioversión eléc- de haber dado fin a la taquicardia. El tratamiento médico incluye
trica directa puede también considerarse para la terminación inmediata los fármacos descritos anteriormente, aunque la mayoría de los
de la arritmia en caso de que el niño progrese al colapso inminente, niños con FPTRU van a requerir múltiples agentes para el control
aunque deben contemplarse los riesgos frente a los beneficios de este exitoso de esta arritmia.
abordaje. Para el tratamiento médico crónico en el niño propenso a
recurrencia de TSV, los β-bloqueantes, como el propranolol, se utilizan
habitualmente como agentes de primera línea. En algunas instituciones, Taquicardia auricular ectópica
la digoxina se usa sola o en combinación con el propranolol. Mientras La taquicardia auricular ectópica (TAE) es una causa menos común de
que los bloqueantes de los canales de calcio se utilizan principalmente en TSV que la TRAV, pero aun así está bien representada entre las taquia-
niños mayores y adultos para esta indicación, esta clase generalmente rritmias perinatales. Esta también se conoce por otros seudónimos,
se evita en el niño pequeño debido a la potencial depresión miocárdica como taquicardia ectópica auricular o taquicardia auricular focal. En
significativa. Los agentes de segunda línea incluyen sotalol, flecainida contraste con las taquicardias recíprocas, la TAE no la causa una vía
y amiodarona. Estos fármacos se discuten con mayor detalle en el accesoria, sino más bien un foco de células en la aurícula que son más
apartado «Consideraciones en el tratamiento de las taquiarritmias excitables que el nodo sinusal y exhiben un automatismo alterado o
neonatales», más adelante. desencadenado. Como la activación auricular se origina de una localiza-
ción que no es el nodo sinusal, las ondas P en el ECG de superficie son
Forma permanente de taquicardia recíproca usualmente bastante diferentes a las normales (fig. 56.4). El resultado
son ráfagas paroxísticas de taquicardia, aunque también se puedan ver
de la unión taquicardias prolongadas e incesantes, que pueden llevar al desarrollo de
Una inusual, pero particularmente irritante variante de TRAV, es la miocardiopatía inducida por taquicardia (Gopinathannair et al., 2015).
forma permanente de taquicardia recíproca de la unión (FPTRU). Esta arritmia es frecuentemente sensible a las catecolaminas, con un
Esta es una forma reentrante de TSV que presenta frecuencias incremento de signos clínicos durante los períodos de actividad o
que son usualmente bastante más lentas que la forma habitual de estimulación. Las frecuencias cardíacas habitualmente varían durante
TRAV, a veces en los límites superiores de los rangos normales del la taquicardia sostenida, y pueden ir desde apenas más rápidas que el
recién nacido, alrededor de 180-200 latidos/min. Sin embargo, ritmo sinusal hasta bien por encima de 300 latidos/min en ocasiones.
la FPTRU tiene una tendencia a ser una arritmia incesante, con Dado que la taquicardia no depende de la intacta conducción nodal
frecuente reinicio de manera espontánea inmediatamente después AV, el bloqueo AV intermitente (tanto conducción 2:1 como patrón
de la terminación de la taquicardia. El mecanismo de la FPTRU es de Wenckebach) puede verse a veces, y esta característica se utiliza con

• Figura 56.3  Forma permanente de taquicardia recíproca de la unión. Apariencia típica de la forma
permanente de taquicardia recíproca de la unión, con tiempo ventriculoauricular largo (ventriculoauricular
> auriculoventricular) y ondas P negativas evidentes en derivaciones inferiores II, III y aVF.

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CAPÍTULO 56 Arritmias perinatales 833

• Figura 56.4  Taquicardia auricular ectópica. Ondas P con eje inusual que «marchan a lo largo» del
trazado, con más ondas P que complejos QRS en el trazado. Complejos QRS anchos conducidos de
forma aberrante causados por el «fenómeno de Ashman» de conducción.

frecuencia para ayudar al correcto diagnóstico. Del mismo modo, el origina el patrón característico en «diente de sierra» en las derivaciones
bloqueo nodal no afecta en mucho a esta arritmia. La administración de inferiores, particularmente II y III (fig. 56.5). La frecuencia auricular
adenosina normalmente solo bloquea transitoriamente la conducción es extremadamente consistente y completamente independiente de los
del nodo AV, mientras que la arritmia auricular continúa sin disminuir. ventrículos, aunque se pueden observar grados variables de conducción
Mientras que la cardioversión directa puede interrumpir la arritmia, AV. Mientras que los niños mayores pueden conducir cada dos (2:1)
es probable que se reinicie espontáneamente, debido a su naturaleza o cada tres (3:1) impulsos auriculares, el nodo AV neonatal presenta
paroxística. una gran capacidad de conducción, por lo que puede conducir cada
impulso (1:1), provocando una frecuencia ventricular muy rápida.
Taquicardia ectópica de la unión La administración de adenosina puede ser diagnóstica al bloquear la
conducción del nodo AV, mientras que las ondas de aleteo continúan
Otra arritmia supraventricular automática de la niñez es la taquicardia ininterrumpidas.
ectópica de la unión (TEU). Esta la causa un automatismo anormal de El tratamiento médico puede utilizarse para disminuir la frecuencia
las células que rodean la unión AV provocando una activación directa ventricular. Sin embargo, en la mayoría de los casos se requiere una
del sistema de His-Purkinje. Las frecuencias cardíacas oscilan entre 170 cardioversión eléctrica directa; esta es altamente efectiva y el riesgo de
y 210 latidos/min, y exhiben el habitual comportamiento de calenta- recurrencia es bajo (Casey et al., 1997). En el feto habitualmente hay
miento y enfriamiento. La actividad auricular puede ser conducida conducción 1:1 con una frecuencia ventricular muy rápida. Cuando no
de manera retrógrada por el nodo AV o puede estar completamente se detecta ni trata, esta puede provocar insuficiencia cardíaca conges-
disociada. La TEU puede ser adquirida o congénita. La forma adquirida tiva, la cual se manifiesta como hidropesía fetal. La detección y el
puede ocurrir hasta en el 20% de los pacientes sometidos a cirugía de diagnóstico pueden ser difíciles, ya que resulta inusual ser capaz de
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derivación cardiopulmonar por ciertas CC (Moak et al., 2013) y puede obtener un registro de ritmo o un ECG. Un ecocardiograma fetal
causar entorpecimiento hemodinámico debido a la inherente naturaleza puede demostrar la rápida contracción auricular (como se discute más
de estos pacientes, incluso cuando la arritmia en sí está autolimitada. adelante). Cuando sea necesario, el aleteo auricular puede tratarse
La forma congénita de TEU es bastante rara, pero, como la taquicardia administrando medicamentos antiarrítmicos a la madre, aunque se
auricular, puede ser una arritmia incesante. Dichos pacientes pueden requieren elevadas dosis maternas para alcanzar una adecuada trans-
presentar miocardiopatía inducida por taquicardia (Gopinathannair ferencia transplacentaria hacia el feto.
et al., 2015).
Taquicardia ventricular
Aleteo auricular neonatal
La taquicardia ventricular (TV) es una arritmia bastante infrecuente
El aleteo auricular es una arritmia por macrorreentrada que ocurre en el período perinatal. Puede presentarse en una variedad de formas,
completamente dentro de la aurícula, con un frente de despolariza- desde un ritmo ventricular acelerado benigno a una TV polimórfica
ción que avanza típicamente en dirección antihoraria alrededor del con riesgo de la vida. Esta última se encuentra rara vez y ocurre solo
anillo valvular tricuspídeo. La frecuencia auricular habitualmente en el contexto de alteraciones metabólicas o electrolíticas graves, o en
es de 300 latidos/min o mayor, y la activación auricular continua el contexto de un síndrome arrítmico primario congénito subyacente.

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834 PA RT E XI Aparato cardiovascular

• Figura 56.5  Aleteo auricular. La frecuencia auricular es aproximadamente de 360 latidos/min, con


«ondas de aleteo» visibles en las derivaciones II, III y aVF. Obsérvese que no todas las ondas P del
aleteo conducen al mismo número de complejos QRS.

La TV puede sospecharse al presentar una taquicardia de QRS ancho, Consideraciones en el tratamiento


aunque el diagnóstico diferencial de dicho ritmo incluye un ritmo
supraventricular conducido de forma aberrante, como sucede en los de las taquiarritmias neonatales
patrones de preexcitación (como ya se discutió anteriormente) o cuando
es conducido con bloqueo de rama. Sin embargo, en la mayoría de los El tratamiento apropiado de las taquiarritmias neonatales depende
casos, la TV monomorfa generalmente es una entidad benigna en la completamente de un adecuado reconocimiento y un preciso diagnós-
infancia y raramente requiere otra intervención más que terapia médica tico. Los sustratos más comunes para la taquicardia en este grupo
(Levin et al., 2010). son la TRAV y la TAE, además del aleteo neonatal. La taquicardia
El ritmo idioventricular acelerado (RIVA) es una arritmia benig- ortodrómica puede responder de forma aguda a las maniobras vagales
na. A veces considerado como una «TV lenta», el RIVA lo causa un y (con mayor seguridad) a la administración de adenosina i.v., aunque
automatismo alterado de los ventrículos y usualmente se debe a esta- estos métodos tendrán poco o nulo efecto tanto en la TAE como en el
dos catecolaminérgicos intrínsecos, alteraciones electrolíticas u otras aleteo neonatal. Debido a la probabilidad aumentada de recurrencia de
condiciones que predisponen al aumento del automatismo. Es típi- taquicardia por reentrada durante la infancia temprana, el tratamiento
co un ritmo monomorfo que se origina en los ventrículos, pero a médico se suele utilizar para disminuir dicha probabilidad. Muchos
frecuencias que son solo apenas más rápidas que las frecuencias sinusales niños pueden mostrar ausencia de signos de que estén experimentando
normales. Esto generalmente se tolera bien hemodinámicamente, a taquicardia hasta que la taquiarritmia incesante provoque miocardio­
menos que el niño esté extremadamente afectado por otros factores patía dilatada y colapso cardiovascular. Los niños mayores generalmente
médicos. van a manifestar más signos de encontrarse en taquiarritmia, por lo
En contraste con la estabilidad de las arritmias ventriculares mono- que son menos propensos a presentarse con miocardiopatía y colapso
morfas, la TV polimorfa es una arritmia mucho más desorganizada cardiovascular.
y potencialmente letal, y debe ser reconocida y manejada como una El tratamiento médico para las taquicardias neonatales varía con-
emergencia. El ECG en la TV polimorfa exhibe un complejo QRS siderablemente entre las diferentes instituciones (Seslar et al., 2013).
ancho y rápido, y la morfología del QRS varía con cada latido, lo que La digoxina inhibe selectivamente la bomba NA+,K+-ATPasa, lo que
indica generalmente una despolarización ventricular desorganizada. causa una concentración incrementada de sodio intracelular. Otros
El gasto cardíaco puede verse gravemente reducido. Una variante efectos cardíacos incluyen un efecto inótropo positivo y un efecto
particular de TV polimorfa se conoce como torsades de pointes (TdP). vagotónico incrementado. Es este último efecto el que se sospecha que
Literalmente la expresión significa «torsión de puntas», y consiste en contribuye a las propiedades antiarrítmicas del fármaco. En muchas
que la amplitud y el eje de la morfología del QRS rota y ondula, y instituciones, la digoxina se utilizó históricamente más comúnmente
puede eventualmente degenerar en una fibrilación ventricular más para el tratamiento agudo y crónico de las TSV, aunque su uso varía
caótica. Casi nunca se ve en el neonato, excepto en el contexto de sín- ampliamente (Guerrier et al., 2016).
dromes arrítmicos primarios que están asociados con muerte súbita, El propranolol (clase II de Vaughan-Williams) es un fármaco
como el síndrome de QT largo (SQTL) (v. más adelante). β-bloqueante no específico que se une a los receptores β-adrenérgicos.

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CAPÍTULO 56 Arritmias perinatales 835

Esto disminuye la sensibilidad general a la estimulación adrenérgica y causa, la etiología suele estar frecuentemente relacionada con síndromes
tiene algún efecto directo en el potencial de membrana del miocito. de arritmias congénitas, comúnmente SQTL (como se discutirá más
Mientras que el éxito global del propranolol frente a la digoxina es com- adelante). En los niños más afectados puede utilizarse tratamiento
parable (Moffett et al., 2015), la digoxina tuvo menos oportunidad de médico con β-bloqueantes, y en casos graves con episodios recurrentes
conseguir éxito terapéutico inicialmente como monoterapia. Además, de TdP o fibrilación ventricular, en los cuales el riesgo anticipado de
la digoxina está contraindicada en el síndrome de Wolff-Parkinson- parada cardíaca súbita es excesivo, puede considerarse el implante de un
White debido a que mejora las propiedades de conducción de la vía marcapasos o de un desfibrilador; sin embargo, esto debe equilibrarse
accesoria, por lo que la preexcitación ventricular debe excluirse antes con las complicaciones agudas y a largo plazo del implante.
del inicio del tratamiento con digoxina. El fármaco es también por
lo general inefectivo para la TAE. La administración enteral de pro- Bradiarritmias
pranolol está en aumento como terapia de primera línea en las TSV
neonatales, preferencialmente en centros terapéuticos de alto volumen Las formas neonatales de bradiarritmias son escasas. En general, la
(Guerrier et al., 2016). Particularmente en el recién nacido prematuro, bradicardia se define como una frecuencia cardíaca sostenida menor
existe riesgo de hipoglucemia asociada a β-bloqueantes, por lo que se de 100 latidos/min. Esto puede ser el resultado de causas fisiológicas
recomienda la monitorización de glucosa en sangre durante el inicio normales o secundario a arritmias o trastornos de la conducción. La
del tratamiento con propranolol. bradicardia sinusal representa el mecanismo más común en el neona-
Los fármacos de segunda línea incluyen la flecainida y el sotalol, to. Esta puede ser una variante fisiológica normal (no es infrecuente
así como la amiodarona, y son muy efectivos para controlar la arritmia encontrar un neonato a término normal con una frecuencia sinusal
en sus formas incesantes de TSV neonatal (Price et al., 2002). Estos de 90 latidos/min en las primeras 24-48 h después del nacimiento,
fármacos precisan monitorización estrecha debido a sus efectos pro­ especialmente durante el sueño) o secundaria a otras causas (como
arrítmicos. Los tres pueden prolongar potencialmente el intervalo QT hipotermia terapéutica). Otro mecanismo común es la estimulación
y provocar potencialmente arritmias ventriculares. La flecainida (clase vagal, que puede ser provocada por la presencia de sondas de alimen-
Ic de Vaughan-Williams) inhibe la corriente de ingreso rápida de sodio tación orales o nasales, tubos endotraqueales o episodios de reflujo
del potencial de acción miocárdico y prolonga la conducción a través gastroesofágico.
de todos los tejidos cardíacos, particularmente los del sistema de His-
Purkinje y el miocardio ventricular. Esto puede provocar capacidad Complejos prematuros auriculares bloqueados
disminuida del sistema de conducción para perpetuar la TSV, y es un
fármaco muy efectivo para el tratamiento de las TSV. La flecainida La ectopia auricular se encuentra de manera común en el feto y en el
se liga a la proteína de la leche, y se ha reportado una fluctuación recién nacido (discutido anteriormente). En la mayoría de los casos,
significativa del fármaco en los niveles plasmáticos en neonatos durante los complejos prematuros auriculares (CPA) conducen normalmente
la transición a la alimentación oral (Russell y Martin, 1989); también a un complejo QRS de apariencia normal. Sin embargo, los CPA que
puede prolongar el complejo QRS. ocurren antes en relación con el complejo QRS precedente pueden
Los fármacos de clase III de Vaughan-Williams utilizados para el encontrar el sistema de conducción o el miocardio ventricular refrac-
tratamiento de las TSV perinatales incluyen sotalol y amiodarona. Esta tario a la estimulación. Por tanto, el CPA no se sigue de ninguna des-
clase de fármacos prolongan la duración del potencial de acción al polarización ventricular. Esto se describe como un «CPA bloqueado».
extender la fase de repolarización del miocardio, por lo que aumentan Más frecuentemente, esto se observa cuando hay un CPA en la por-
el período refractario tisular global. Esto disminuye la capacidad del ción temprana de la onda T precedente, por lo que los ventrículos se
miocardio de soportar las repetidas despolarizaciones necesarias para encuentran aún en su período refractario y no se pueden despolarizar.
sostener la TSV. El sotalol exhibe efectos β-bloqueantes (clase II) en Las condiciones que afectan a la refractariedad de la conducción
bajas dosis, y en dosis más altas muestra efectos más de clase III. La nodal AV y del miocardio, como tono vagal aumentado o acidosis
amiodarona es altamente efectiva para el tratamiento agudo y crónico metabólica, pueden aumentar también la probabilidad de que un
de taquiarritmias en el neonato; sin embargo, debe utilizarse con cui- CPA se bloquee. Después de la despolarización auricular prematura,
dado, ya que puede presentar efectos como hipotensión, bradicardia, existe una demora típica antes del siguiente latido sinusal. Cuando
bloqueo AV completo, colapso cardiovascular e hipotiroidismo. Se ha la ectopia auricular es frecuente, como en el bigeminismo auricular
reportado que causa «síndrome de jadeo (gasping) neonatal» y filtra bloqueado, el efecto neto es una disminución de la frecuencia sinusal
el plastificado de cloruro de polivinilo de contenedores y jeringas «a la mitad» (fig. 56.6).
(Centers for Disease Control and Prevention, 1982). Debido a la
farmacocinética de la amiodarona, se administra habitualmente con Síndrome de QT largo
dosis de carga (tanto i.v. como enteral) durante 7-10 días, tras los cuales
la dosis se disminuye a una dosis de mantenimiento. En las formas graves de SQTL congénito, la prolongación del intervalo
Aunque se realiza habitualmente en niños mayores, la ablación QT puede causar bradicardia en el feto o el recién nacido. Cuando
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percutánea con catéter de arritmias supraventriculares se hace rara la fase de repolarización se prolonga significativamente, la onda P
vez en neonatos y niños pequeños. Diversas cuestiones técnicas y el sinusal subsiguiente puede fallar en su conducción normal, mien-
tamaño de los catéteres limitan el mapeo convencional y las técnicas tras el miocardio ventricular es aún refractario a la estimulación.
de ablación. Se han descrito también complicaciones tardías y muerte Como resultado, la frecuencia cardíaca funcional se ve disminuida a
causadas por lesiones a estructuras adyacentes a las arterias coronarias la mitad debido a que la frecuencia ventricular se conduce a 2:1 de la
(Al-Ammouri y Perry, 2006). frecuencia sinusal. Esto puede tener implicaciones significativas, ya
Mientras que la mayoría de las arritmias ventriculares en el neonato que la bradicardia puede no ser tolerada por el paciente. La medica-
son controlables y autolimitadas, ciertas condiciones pueden predis- ción cronótropa para esta condición puede hacer poco para mejorar
poner a formas de TV con riesgo de muerte. Particularmente en los la frecuencia cardíaca funcional, ya que incrementar la frecuencia
casos en los cuales debe realizarse una desfibrilación debido a TV de la onda P sinusal no acorta el período refractario del miocardio
con inestabilidad hemodinámica o fibrilación ventricular, se deben ventricular. Puede que sea necesario el implante de un marcapasos
considerar otros tratamientos adicionales. Se deben identificar las causas permanente. Además, la naturaleza funcional de este bloqueo «2:1»
reversibles de TdP, como alteraciones electrolíticas o TdP inducida por puede generar irregularidades en el patrón de conducción (fig. 56.7).
fármacos, y realizar una corrección de cualquier desequilibrio o retirada Esto puede provocar una gran prolongación del intervalo QT, así como
del fármaco agresor. Sin embargo, cuando no se puede identificar dicha desencadenar TV y TdP.

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• Figura 56.6  Complejos prematuros auriculares. Los complejos prematuros auriculares (CPA) que
ocurren durante los segmentos ST fracasan en conducirse a los ventrículos, generando un «bigeminismo
auricular bloqueado».

• Figura 56.7  Síndrome de QT largo con bloqueo cardíaco funcional 2:1. La frecuencia sinusal es
de 110 latidos/min. El intervalo QT está muy prolongado (QTc = 751 ms), por lo que una de cada dos
ondas P sinusales no puede conducirse debido al período refractario ventricular.

Bloqueo auriculoventricular completo congénito individuales. Cuando se detecta, el feto se monitoriza frecuentemente
en búsqueda de hidropesía fetal, un signo de insuficiencia cardíaca
El bloqueo AV completo congénito (BAVCC) es la ausencia de congestiva en el feto.
conducción AV. No es muy común, y se presenta solo en 1 de cada El bloqueo cardíaco completo también puede suceder en el feto o
15.000 a 1 de cada 20.000 nacimientos (Bordachar et al., 2013). Está recién nacido en el contexto de una CC, más comúnmente los defectos
comúnmente asociado con lupus materno, aunque también ocurre en que involucran «L-transposición de los grandes vasos» o «inversión ven-
ausencia de cualquier enfermedad materna conocida. La exposición tricular». En estas condiciones, el plegamiento cardíaco fetal provoca
fetal a autoanticuerpos maternos (más comúnmente a anticuerpos que el haz de His sea una estructura mucho más superficial que lo
anti-SSA/Ro y anti-SSB/La) provoca fibrosis de las estructuras nodales normal, y, por lo tanto, propensa a fibrosis. El desarrollo de bloqueo
AV, lo que lleva a un proceso destructivo progresivo. Hay alguna cardíaco completo en este contexto puede ocurrir en cualquier etapa
evidencia de que el tratamiento materno precoz con altas dosis de del desarrollo y con frecuencia no ocurre hasta la niñez tardía o la
corticoides podría retrasar o incluso detener este proceso (Jaeggi edad adulta.
et al., 2004); sin embargo, los estudios posteriores no han sido capaces En la mayoría de los casos de BAVCC, la región alrededor del
de demostrar una mejoría en la conducción en los fetos tratados haz de His permanece intacta y puede exhibir propiedades de auto-
(Fesslova et al., 2009; Hayashi et al., 2009), por lo que la relación matismo normales. Este «ritmo de escape de la unión» típicamente
riesgo-beneficio de este tratamiento debe ser sopesada en términos da como resultado un complejo de QRS estrecho y contractilidad

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CAPÍTULO 56 Arritmias perinatales 837

• Figura 56.8  Bloqueo auriculoventricular completo congénito. La frecuencia del nodo sinusal es
aproximadamente de 150 latidos/min, pero hay disociación auriculoventricular completa con frecuencia
de escape de la unión de 50 latidos/min.

ventricular normales, a pesar de la falta de conducción AV. Tiene • CUADRO 56.1  Indicaciones de estimulación
la apariencia de un latido sinusal conducido normalmente, pero
está completamente disociado de las ondas P sinusales que tienen
permanente en el bloqueo
lugar más arriba (fig. 56.8). La frecuencia de escape en el feto y el auriculoventricular completo
neonato suele ser 60-80 latidos/min y puede aportar un adecuado congénito
gasto cardíaco. Existen muchas instancias en las cuales el BAVCC es
• El implante de marcapasos definitivo está indicado en el bloqueo AV de
completamente indetectable en el período neonatal y permanece así
tercer grado congénito en niños con frecuencias ventriculares menores
durante muchos años. El complejo QRS puede ser ancho (mayor
de 55 latidos/min o con cardiopatía congénita y frecuencias ventriculares
de 70 ms en el recién nacido) si existe daño extenso en la región menores de 70 latidos/min
de la unión, lo que implica que el ritmo de escape nace de una • El implante de marcapasos definitivo está indicado en el bloqueo AV
localización inferior del tabique o desde el miocardio ventricular de tercer grado congénito con ritmo de escape con QRS ancho, ectopia
mismo. ventricular compleja o disfunción ventricular
Sin embargo, un ritmo de escape de la unión más lento, usual- • El implante de marcapasos definitivo es razonable en el bloqueo AV de
mente cuando la frecuencia es menor de 50 latidos/min, es inade- tercer grado congénito más allá del primer año de vida con una frecuencia
cuado para sostener el gasto cardíaco normal. Pueden manifestarse promedio menor de 50 latidos/min, pausas bruscas de la frecuencia
signos de insuficiencia cardíaca congestiva. En la circulación fetal, ventricular que sean dos o tres veces la duración del ciclo básico o que
donde el lecho vascular pulmonar es ampliamente puenteado por estén asociadas con síntomas debido a la incompetencia cronótropa
el conducto arterioso, esto se manifestará como hidropesía fetal o • El implante de marcapasos definitivo puede considerarse en el bloqueo AV
muerte fetal intrauterina. El tratamiento del feto con frecuencia de tercer grado congénito en niños o adolescentes asintomáticos con una
inadecuada de escape de la unión y signos de bajo gasto cardíaco frecuencia aceptable, complejo QRS estrecho y función ventricular normal
se desarrolla en el apartado «Ritmos fetales» de este capítulo. Para
el paciente posnatal, los signos de bajo gasto cardíaco incluirán AV, auriculoventricular.
dificultad respiratoria (con congestión pulmonar), hipoperfusión, Tomado de Epstein AE, DiMarco JP, Ellenbogen, KA, et al. ACC/AHA/HRS 2008 guidelines for
device-based therapy of cardiac rhythm abnormalities: a report of the American College of Cardiology/
acidosis metabólica, diuresis disminuida y edema franco. Esto puede American Heart Association Task Force on Practice Guidelines (Writing Committee to revise the ACC/
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presentar un desafío clínico. La frecuencia cardíaca y la presión arte- AHA/NASPE 2002 guideline update for implantation of cardiac pacemakers and antiarrhythmia
rial pueden estar aumentadas por medicación inótropa y cronótropa, devices) developed in collaboration with the American Association for Thoracic Surgery and Society of
como isoproterenol, adrenalina y dobutamina. En algunos centros, Thoracic Surgeons. J Am Coll Cardiol. 2008;51:e1–e62.
la estimulación cardíaca temporal transvenosa se utiliza como rescate
de emergencia, pero esto puede ser un desafío debido a la disparidad
en tamaños entre los electrodos para registro del ritmo disponibles
comercialmente y el pequeño tamaño de los vasos de esta población Ritmos fetales
(Doshi y Lokare, 2011). El implante de marcapasos definitivo está
indicado cuando hay evidencia de disfunción ventricular o bajo Las arritmias fetales ocurren en el 1-2% de los embarazos, con
gasto cardíaco en el neonato con una frecuencia cardíaca menor de afectación hemodinámica resultante, hidropesía fetal y muerte fetal
55 latidos/min (o menor de 70 latidos/min en el contexto de CC que ocurren en el 10% de los casos (Naheed et al., 1996; Simpson,
concomitante), o si hay evidencia de un complejo QRS ancho del et al., 1997). Las arritmias se pueden desarrollar tarde en el segundo o
ritmo de escape (Epstein et al., 2008). El cuadro 56.1 resume las el tercer trimestre; y esto es particularmente cierto para las extrasístoles,
indicaciones absolutas y relativas del implante de marcapasos en el las taquicardias auriculares y las TV, las cuales rara vez se manifiestan
neonato con BAVCC. antes de la semana 25-26 de gestación, y en algunos casos solo en el

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tercer trimestre (van Engelen et al., 1994; Simpson et al., 1998). Las tratamiento médico (Srinivasan y Strasburger, 2008). El parto puede
arritmias fetales requieren estricta monitorización, ya que incluso los considerarse como estrategia de tratamiento primaria si el feto se
ritmos benignos pueden presentar bajo riesgo de complicaciones. La encuentra cercano a término y si el parto no implica un aumento del
modalidad estándar de evaluación prenatal para las arritmias fetales es riesgo significativo para el neonato (Donofrio et al., 2014).
a través de la ecocardiografía, enfocada en la sístole mecánica auricular
y ventricular y la relación entre ellas (fig. 56.9) como sustituto de
sincronía/desincronía AV (Jaeggi et al., 1998; Fouron et al., 2003; Taquicardia por reentrada auriculoventricular
Carvalho et al., 2007). La investigación del feto por un ritmo anormal La TRAV da cuenta aproximadamente del 70% de las taquicardias
debe enfocarse en causas de conducción AV alterada y causas de ritmos fetales (Strasburger, 2005). Generalmente se presenta con frecuencias
auriculares o ventriculares anormales, incluyendo los grados variables intermitentes o sostenidas en el rango de 240-260 latidos/min. Se iden-
del bloqueo AV, SQTL congénito, miocarditis, tumores intracardíacos tifica en el ecocardiograma fetal por el intervalo RP corto (tiempo de
y CC estructural. La diferenciación entre los tipos de mecanismos de activación ventriculoauricular [VA]), relación AV 1:1 y rápida frecuen-
arritmias es de gran ayuda para determinar el tratamiento óptimo y la cia ventricular (fig. 56.11). Este ritmo es el resultado de la conducción
probabilidad de éxito terapéutico de la arritmia. por el nodo AV hacia los ventrículos y retrógrada hacia la aurícula a
través de una vía accesoria. Generalmente, la TRAV se presenta entre las
Arritmias benignas semanas 28-33 de gestación (Hornberger y Sahn, 2007). La progresión
a hidropesía no es rara, y los factores de riesgo son la duración de la
Una de las causas más comunes de derivación al cardiólogo fetal son taquicardia, la inmadurez fetal y la presencia concomitante de car-
los ritmos cardíacos fetales irregulares, advertidos en el 1-3% de los diopatía estructural (Naheed et al., 1996; Hornberger y Sahn, 2007).
embarazos (Strasburger, 2005). Las causas de estos ritmos irregulares Se recomienda el tratamiento fetal intrauterino si el parto no ofrece
son frecuentemente extrasístoles auriculares (Srinivasan y Strasbur- menor riesgo. La elección de tratamiento antiarrítmico de primera y
ger, 2008). En raras ocasiones, el origen puede ser ventricular. La segunda línea es controvertida, así como las estrategias de tratamiento
vasta mayoría de estos latidos auriculares ectópicos son benignos; las después del fracaso terapéutico inicial. El uso de tratamientos combi-
extrasístoles auriculares tienen un bajo riesgo (0,5-1%) de progresar a nados presenta mayor riesgo de complicaciones maternas y/o fetales, y,
taquicardia fetal (Wacker-Gussmann et al., 2014). Sin embargo, el 2% por lo tanto, se recomienda la monoterapia. La digoxina, la flecainida
de los casos pueden estar asociados con SQTL fetal, aleteo auricular y y el sotalol como monoterapia se han utilizado con éxito como trata-
bloqueo AV de segundo grado (Cuneo et al., 2006). mientos de primera línea para TSV reentrantes (Oudijk et al., 2000;
Jaeggi et al., 2011; Shah et al., 2012), aunque el uso de la digoxina es
Tratamiento de las arritmias benignas controvertido debido al muy bajo riesgo de fibrilación auricular con
conducción anterógrada rápida a través de una vía accesoria (Kleinman
Las guías de 2014 de la American Heart Association para el diagnóstico y Nehgme, 2004). No hay estudios hasta la fecha que respalden una
y el tratamiento de fetos con ritmos irregulares (Donofrio et al., 2014) opción terapéutica frente a otra. Las tres medicaciones, así como la
recomiendan que a los fetos con latidos ectópicos frecuentes (bigeminis- amiodarona, también se han usado como tratamiento de segunda línea
mo, trigeminismo o más de 3-5 latidos en promedio) se les debe realizar (Donofrio et al., 2014). La amiodarona tiene un perfil de toxicidad más
un ecocardiograma fetal basal para evaluar la estructura y la función significativo para la madre y para el feto, y debe reservarse como tercera
cardíaca, y para determinar el mecanismo de la arritmia (fig. 56.10). El línea de tratamiento para arritmias que pongan en riesgo la vida. Debe-
tratamiento médico no está recomendado para las extrasístoles auricula- ría suspenderse una vez que la hidropesía se resuelva. El verapamilo y
res. Si la ectopia frecuente continúa, se debe realizar una monitorización la procainamida no se usan ya para el tratamiento de taquiarritmias
semanal de la frecuencia cardíaca en la consulta obstétrica hasta la fetales (Donofrio et al., 2014). La transferencia transplacentaria de
resolución. En fetos con extrasístoles menos frecuentes, el ecocardio- fármacos está reducida en el contexto de la hidropesía, por lo que se
grama fetal está indicado si el ritmo irregular persiste más allá de 1-2 ha descrito el tratamiento fetal directo (en la nalga/muslo del feto o
semanas o si hay dificultad para diferenciar un ritmo benigno de uno intracordal) concomitantemente con el tratamiento transplacentario
patológico (Donofrio et al., 2014). Se debe realizar un ECG posnatal para la restauración del ritmo sinusal. Estas estrategias deben limi­
en caso de que se ausculte un ritmo irregular después del nacimiento. tarse para los fetos con hidropesía grave que son inviables debido a la
escasa edad gestacional, ya que existe un riesgo asociado de muerte fetal
Taquicardias fetales (Hansmann et al., 1991; Cuneo y Strasburger, 2000).
Después del parto, hasta el 50% de los casos de TSV reentrantes
La taquicardia fetal constituye una rara, pero importante, causa de no tendrán recurrencia posnatal (Naheed et al., 1996). Por ello el
morbimortalidad. Las TSV incluyen TRAV (70%), aleteo auricular tratamiento médico debe revaluarse en relación con el lapso de tiempo
(30%) y taquiarritmias raras, que normalmente se presentan con fre- desde la última presentación y el mecanismo de la taquicardia clínica.
cuencias mayores de 220 latidos/min (Strasburger, 2005). El tipo de
TSV puede determinarse utilizando el intervalo PR mecánico derivado Aleteo auricular
tanto del Doppler espectral del flujo de ingreso mitral y el flujo de
regreso aórtico, como de la vena cava superior y la aorta. El tratamiento El aleteo auricular constituye aproximadamente el 30% de las taqui-
para un feto en particular puede, por lo tanto, valorarse basándose en cardias fetales (Strasburger, 2005). Está asociado con miocarditis fetal,
el tipo de TSV sospechada. La TV es una causa mucho menos común CC estructural y exposición intraútero a anticuerpos SSA/SSB. Se
de taquicardia fetal, como las taquicardias auriculares multifocales o caracteriza típicamente por frecuencias auriculares de 300-500 latidos/
caóticas. min y frecuencias ventriculares más lentas (150-170 latidos/min)
En general, el objetivo del tratamiento intraútero de las taquicardias debido a un bloqueo fisiológico en el nodo AV. Se identifica mejor en
fetales no es la conversión del 100% a ritmo sinusal, sino establecer el ecocardiograma fetal utilizando el modo M a lo largo de una pared
suficiente ritmo sinusal que permita la resolución de la hidropesía y la libre auricular, el tabique interventricular y la pared libre ventricular
disfunción ventricular. El tratamiento depende de la edad gestacional (fig. 56.12). El aleteo auricular es más probable que se presente más tar-
en el momento de la presentación, el grado de afectación fetal, las de en el embarazo que las TSV por reentrada, alrededor de las semanas
condiciones maternas y los riesgos maternos potenciales del tratamiento 31-34 de gestación. Generalmente es un ritmo bien tolerado, debido
(Donofrio et al., 2014). El parto de emergencia debe reservarse para a las frecuencias ventriculares más bajas (Jaeggi et al., 1998; Strasbur-
el feto con hidropesía que exhiba taquicardia persistente refractaria al ger, 2005). Sin embargo, el ritmo puede permanecer no diagnosticado

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• Figura 56.9  Ecocardiograma fetal realizado desde una vista frontal del feto que demuestra una vista
de cuatro cámaras del corazón con frecuencia cardíaca fetal normal (146 latidos/min) y conducción
auriculoventricular 1:1 mediante Doppler espectral (A) del flujo de entrada valvular mitral y el flujo
de salida valvular aórtico. La medición entre el flujo de entrada y el de salida es el intervalo PR (XX
y ++ = 116 ms). B. El modo M diagonalmente a lo largo de las cuatro cámaras del corazón mide el
movimiento de la pared libre auricular (A) y la pared libre ventricular (V). FC-VA, frecuencia cardíaca
medida por Doppler en la válvula aórtica; lpm, latidos por minuto.

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• Figura 56.10  Modo M del corazón fetal que muestra una extrasístole auricular aislada. Hay con-
ducción auriculoventricular normal a una frecuencia normal hasta el quinto latido auricular etiquetado
(A), que es precoz (ectópico) y provoca un latido ventricular bloqueado (V).

• Figura 56.11  Doppler espectral fetal del flujo de entrada mitral y el flujo de salida aórtico que
demuestra una taquicardia supraventricular reentrante. La conducción auriculoventricular es 1:1 (A y
V) a una frecuencia fija de 238 latidos/min. El intervalo RP es 100 ms.

• Figura 56.12  Modo M del corazón fetal que demuestra aleteo auricular 2:1 con una frecuencia
auricular de 260 latidos/min y una frecuencia ventricular de 120 latidos/min. A, ondas de aleteo auricular;
V, activación ventricular.

prenatalmente debido a la frecuencia ventricular relativamente normal disponible después de la cardioversión. Debe revaluarse el tratamiento
(Fouron et al., 2003). La ausencia de variabilidad en la frecuencia médico posnatal, dado que el aleteo auricular puede que no recurra
cardíaca aporta un indicio para el diagnóstico. El aleteo auricular puede (Donofrio et al., 2014).
coexistir con una TSV reentrante en el 12-33% de los fetos afectados
(Casey et al., 1997). Taquicardia ventricular sostenida
El sotalol ha demostrado ser efectivo en la cardioversión del 50-80%
de los fetos con aleteo auricular sin mortalidad (Shah et al., 2012) y está La TV fetal está asociada con bloqueo AV, tumores cardíacos, miocardi-
considerado como tratamiento de primera línea. La digoxina también tis y canalopatías iónicas. El SQTL debe sospecharse cuando coexisten
está recomendada como tratamiento de primera línea, y se puede consi- taquiarritmia y bradiarritmia (Cuneo et al., 2003). Los fetos con SQTL
derar la amiodarona; sin embargo, la procainamida está contraindicada pueden desarrollar TdP rápida y TV monomorfa con eventual desarro-
(Strasburger et al., 2004). Se recomienda la estimulación transesofágica llo de disfunción ventricular, insuficiencia de válvulas AV e hidropesía.
después del parto con la cardioversión sincronizada para restaurar el La magnetocardiografía fetal y el ECG pueden confirmar el diagnóstico
ritmo sinusal. La supresión del nodo sinusal raramente ocurre debido al identificar un intervalo QTc prolongado (Strasburger y Wakai, 2010;
a la terapia intraútero, y la estimulación externa de respaldo debe estar Cuneo et al., 2013; Arya et al., 2015). Se recomienda el magnesio i.v.

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CAPÍTULO 56 Arritmias perinatales 841

intrauterino como tratamiento de primera línea para TV superior a transferencia transplacentaria disminuida en el contexto de hidropesía,
200 latidos/min, y el tratamiento debe limitarse a menos de 48 h. Si los con una disminución en la eficacia de la digoxina del 25% (Srinivasan y
niveles maternos de magnesio son inferiores a 6 mEq/l y no hay signos Strasburger, 2008). Sin embargo, la flecainida y el sotalol han mostrado
de toxicidad, se puede considerar la redosificación. La lidocaína i.v., el ser eficaces en el contexto de hidropesía (Donofrio et al., 2014). En
propranolol p.o. o la mexiletina pueden también considerarse en con- caso de notar una prolongación materna del PR, QRS o QT durante
junto con el magnesio, especialmente en el contexto de hidropesía. Si el tratamiento con digoxina, flecainida o sotalol, respectivamente, se
se excluye el SQTL, el sotalol, la flecainida y la amiodarona pueden ser deben disminuir las dosis y se recomienda una estricta observación.
alternativas terapéuticas y han demostrado ser eficaces en la terminación Los efectos adversos maternos graves son raros y se han resuelto con la
de la TV fetal. La dexametasona y la infusión de inmunoglobulina i.v. interrupción del tratamiento (Donofrio et al., 2014).
(IGIV) se han utilizado en el contexto de TV mediada por anticuerpos
o asociada a miocarditis (Donofrio et al., 2014). Bradicardia fetal
La bradicardia fetal se define como una frecuencia cardíaca persistente
Taquicardias infrecuentes menor de 120 latidos/min. Las causas incluyen bradicardia sinusal
Las taquicardias menos comunes, como la TAE y la FPTRU, pueden secundaria a disfunción del nodo sinusal, canalopatías, exposición/
diferenciarse por el intervalo RP largo (tiempo VA) en el ecocar- condición materna o afectación del sistema nervioso central fetal y
diograma fetal. Las dos pueden diferenciarse por la fase gradual de bigeminismo auricular bloqueado, que se asocia con un 10% de riesgo
calentamiento y el bloqueo del nodo AV variable a frecuencias más de conversión a TSV. La causa más común de bradicardia fetal es el blo-
rápidas características de la TAE, y la instauración súbita y la frecuencia queo AV congénito, con una frecuencia de aproximadamente 1:20.000
cardíaca constante de la FPTRU. La TAE generalmente se presenta con nacidos vivos (Kertesz et al., 1997). Aproximadamente el 50% de los
frecuencias de 180-250 latidos/min y es más refractaria al tratamiento bloqueos AV fetales son secundarios a cardiopatía estructural, el 40% se
tanto antes como después del nacimiento (Strasburger, 2005). Estas deben a mecanismos inmunomediados (Schmidt et al., 1991; Machado
taquicardias fetales se presentan tarde en el segundo trimestre o en el et al., 1988) y un 10% adicional son idiopáticos. El bloqueo cardíaco
tercer trimestre. La taquicardia auricular multifocal es rara (asociada congénito a baja frecuencia cardíaca se asocia con una significativa
con el síndrome de Costello) y habitualmente ocurre en las últimas morbilidad y mortalidad, especialmente cuando está asociado con
semanas del embarazo (Lin et al., 2011). La TEU está comúnmente trastornos autoinmunitarios maternos. El tratamiento de la bradicardia
asociada con exposición fetal a anticuerpos SSA y puede verse en pre- fetal está dirigido a evaluaciones ecocardiográficas fetales frecuentes
sencia o ausencia de bloqueo AV. Para la TAE y la taquicardia auricular para valorar el desarrollo de disfunción ventricular, hidropesía o fre-
multifocal se recomienda el tratamiento con frecuencias cardíacas cuencia cardíaca fetal menor de 55 latidos/min. El tratamiento del
mayores de 200 latidos/min con función cardíaca normal o mayores bloqueo cardíaco no inmunomediado se dirige a aumentar la frecuencia
de 160 latidos/min con disfunción cardíaca (Donofrio et al., 2014). ventricular fetal. Para el bloqueo AV inmunomediado, se pueden
La digoxina está recomendada como primera línea terapéutica, aunque considerar varias terapias, que son controvertidas (Jaeggi et al., 2004).
pueden considerarse la flecainida y el sotalol. La flecainida y el sotalol
están recomendados para la FPTRU o la TAE rápida. Terapias similares
pueden utilizarse para el tratamiento médico de la TEU fetal, aunque
Bradicardia fetal benigna
también se ha empleado la amiodarona. Los fetos que desarrollan El uso materno de β-bloqueantes, sedantes y otros medicamentos se
TEU en contexto de exposición a anticuerpos anti-SSA pueden tra- ha asociado con depresión del nodo sinusal. Los fetos con exposición a
tarse también con dexametasona. Después del parto de un feto con anticuerpos maternos anti-SSA/SSB o los que tienen miocarditis pueden
estas taquicardias raras, generalmente se requiere la continuación del desarrollar inflamación y fibrosis del nodo sinusal. Finalmente, los fetos
tratamiento médico. con síndrome de heterotaxia pueden desarrollar bradicardia secundaria
a ritmo auricular bajo en la isomería auricular izquierda o doble nodo
sinusal en la isomería auricular derecha. En estas condiciones, la frecuen-
Taquicardia sinusal cia cardíaca fetal se encuentra entre 90 y 130 latidos/min. Se recomienda
La taquicardia sinusal a frecuencia de 180-190 latidos/min puede no tratar (Donofrio et al., 2014).
imitar a otras taquicardias patológicas; sin embargo, la disfunción ven- El bigeminismo auricular bloqueado puede provocar frecuencias
tricular y la hidropesía no son frecuentes. La taquicardia sinusal está cardíacas fetales entre 75 y 90 latidos/min con conducción AV 2:1
asociada con infección materna, anemia, consumo de drogas/fármacos, y confundirse con bloqueo AV de segundo grado. Existe un riesgo
hipertiroidismo o trauma. Se recomienda el tratamiento de la causa aumentado de desarrollar TSV fetal, que tiene lugar en el 10% de los
subyacente (Donofrio et al., 2014). fetos con bigeminismo auricular bloqueado (Donofrio et al., 2014). La
ecocardiografía fetal puede mostrar conducción AV normal seguida de
un latido auricular precoz acoplado al latido ventricular previo, en cuyo
Fármacos antiarrítmicos
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caso el nodo AV es refractario. Esto produce incapacidad de conducir


Se deben administrar dosis relativamente altas de agentes antiarrítmicos al ventrículo (v. fig. 56.10). El tratamiento del bigeminismo auricular
durante el embarazo debido a que tanto el volumen sanguíneo circu- bloqueado es el mismo que para las extrasístoles auriculares aisladas.
lante como el aclaramiento renal maternos se encuentran aumentados.
En la mayoría de los casos, el tratamiento debe iniciarse en el hospital Canalopatías iónicas
con estrecha observación del bienestar materno y fetal. Antes de iniciar
el tratamiento con fármacos antiarrítmicos se debe obtener un ECG y El SQTL congénito debe considerarse en el contexto de bradicardia
electrólitos basales maternos, así como una consulta cardiológica, para persistente en un feto por demás asintomático (Horigome et al., 2010).
evaluar factores de riesgo maternos, como preexcitación o SQTL. La medición del QTc se puede realizar por magnetocardiograma o
A lo largo de la duración del tratamiento ha de realizarse una monito- ECG fetal (Strasburger y Wakai, 2010; Cuneo et al., 2013; Arya
rización seriada de ECG, electrólitos y niveles del fármaco maternos. et al., 2015). No se recomienda el tratamiento fetal; sin embargo, el
Se recomienda la administración de medicación vía oral, excepto por desarrollo de TV requiere tratamiento como se describe en el apartado
magnesio y lidocaína i.v., y la dosis de carga de digoxina (Donofrio «Taquicardias fetales». El tratamiento implica una estricta observación
et al., 2014). La mayoría de los fármacos antiarrítmicos demuestran prenatal, la corrección de alteraciones electrolíticas maternas y evitar la

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842 PA RT E XI Aparato cardiovascular

exposición materna a fármacos que prolonguen el QT. La evaluación las semanas 16-26 de gestación (Buyon et al., 1998). El riguroso
posnatal incluye un ECG y la observación continua y el tratamiento seguimiento con ecocardiograma fetal para valorar la frecuencia
de las arritmias asociadas al SQTL (Donofrio et al., 2014). cardíaca fetal, la prolongación del intervalo PR y la función ven-
tricular está recomendado cada 2 semanas durante este período de
Bloqueo auriculoventricular tiempo crítico para todos los fetos con exposición a anticuerpos
anti-SSA/SSB. La monitorización de la frecuencia cardíaca fetal
Las CC estructurales son el origen del 50% de los bloqueos AV feta- debe ser realizada de forma periódica por el obstetra.
les. Los fetos con síndromes de heterotaxia con isomería auricular El tratamiento del bloqueo AV depende de la causa, la frecuencia
izquierda, transposición congénita corregida y conducto AV presentan ventricular y el grado de insuficiencia cardíaca. Los agonistas β-simpa-
mayor riesgo de desarrollar bloqueo AV. En un feto, la combinación ticomiméticos, como la terbutalina, el salbutamol y la isoprenalina,
de bloqueo AV congénito, CC estructural compleja e hidropesía fetal son de uso razonable en fetos con frecuencias cardíacas menores de
está asociada con una alta tasa de muerte intraútero (Anandakumar 55 latidos/min o con frecuencias cardíacas superiores si existiese CC
et al., 1996). El bloqueo AV puede diagnosticarse con ecocardiograma significativa o signos de disfunción cardíaca o hidropesía. Aunque la
fetal al evaluar las frecuencias auriculares y ventriculares y las relaciones terbutalina puede aumentar la frecuencia cardíaca fetal, no se ha demos-
AV (fig. 56.13). trado aumento de la supervivencia. La terbutalina se tolera bien; sin
Los anticuerpos maternos anti-SSA (Ro) y anti-SSB (La) están embargo, se han reportado frecuencias cardíacas maternas hasta de 100-
presentes en la mayoría de los fetos que desarrollan bloqueo AV ais- 120 latidos/min y ectopia benigna (Cuneo et al., 2007). El bloqueo
lado. El presunto mecanismo es que las estructuras cardíacas fetales AV inmunomediado puede beneficiarse con dexametasona (4-8 mg/
son diana para depósitos de complejos inmunitarios, es decir, el día) o tratamiento con IGIV. La dexametasona ha mostrado reducir
nodo AV y el miocardio. El anticuerpo específico Ro-52 ha demos- la inflamación, revertir o estabilizar el bloqueo de segundo grado, y
trado una asociación muy estrecha con bloqueo AV congénito inmu- mejorar la hidropesía o la fibrosis miocárdica y su función (Krishnan
nomediado (Sonesson et al., 2004). El riesgo de bloqueo cardíaco et al., 2014). Los riesgos asociados con el empleo de dexametasona
en madres con anticuerpos anti-SSA/SSB es del 2-3%, con una incluyen restricción del crecimiento intrauterino, oligohidramnios,
tasa de recurrencia después de un hijo afectado tan alta como del efectos en el sistema nervioso central y diabetes materna. Un ensayo
12-17% (Buyon et al., 1998; Costedoat-Chalumeau et al., 2004). con dexametasona puede considerarse en fetos con bloqueo AV de
Los especímenes de autopsias muestran típicamente fibrosis pro- segundo grado o bloqueo AV de primer grado con signos de inflama-
gresiva de las estructuras del nodo AV en los fetos afectados. El ción cardíaca (insuficiencia valvular, disfunción ventricular, efusión)
proceso típicamente evita el sistema de His-Purkinje, por lo que el para prevenir la progresión a bloqueo AV completo, aunque su utilidad
«ritmo de escape» más lento tiende a ser relativamente confiable. no se ha establecido bien (Donofrio et al., 2014). El tratamiento de las
También se hallan en los fetos afectados daño al miocardio ven- madres con hidroxicloroquina antes de las 10 semanas de gestación se
tricular y presencia de fibroelastosis endomiocárdica (Krishnan ha asociado con un riesgo reducido de cardiopatía fetal mediada por
et al., 2014). El riesgo de transferencia de anticuerpos maternos al feto anticuerpos anti-SSA/SSB y podría utilizarse en embarazos de alto
y, por lo tanto, el riesgo de desarrollo de bloqueo AV es mayor entre riesgo (Izmirly et al., 2012).

• Figura 56.13  A. Doppler espectral fetal del flujo de entrada mitral y del flujo de salida aórtico.
B. Modo M del corazón fetal que demuestra bloqueo auriculoventricular 2:1 con una frecuencia auri-
cular de 120 latidos/min y una frecuencia ventricular de 60 latidos/min. A, actividad auricular sinusal;
V, despolarización ventricular.

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CAPÍTULO 56 Arritmias perinatales 843

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CAPÍTULO 56 Arritmias perinatales 843.e1

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843.e2 PARTE XI Aparato cardiovascular

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CAPÍTULO 56 Arritmias perinatales 843.e3

Resumen
Las arritmias cardíacas ocurren frecuentemente en el feto y el neo-
nato. Muchas arritmias son transitorias y benignas, pero algunas
pueden ser persistentes y potencialmente poner en riesgo la vida.
El reconocimiento de las alteraciones específicas del ritmo halladas
en el período perinatal es importante para el adecuado diagnóstico
y el tratamiento apropiado. Sin embargo, el tratamiento de estas
bradicardias y taquicardias puede ser un desafío. Se revisan los
patrones de conducción normal y anormal, con especial énfasis en
el diagnóstico diferencial de las arritmias y sus tratamientos especí-
ficos. Las arritmias en el feto pueden presentar un particular desafío
para el clínico debido a las limitaciones técnicas de las modalidades
diagnósticas y la administración terapéutica. La ecocardiografía
fetal puede utilizarse en lugar del electrocardiograma directo para
el diagnóstico de arritmias. Se discutirán las técnicas para el uso
del ecocardiograma fetal y las estrategias para el tratamiento de las
taquicardias y las bradicardias fetales.

Palabras clave
Arritmia
Taquicardia
Bradicardia
Conducción
Taquicardia supraventricular
Aleteo auricular
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57
Resultados neurológicos a largo plazo
en niños con cardiopatía congénita
SHABNAM PEYVANDI Y PATRICK MCQUILLEN

PUNTOS CLAVE intervenciones quirúrgicas cardíacas neonatales. Sin embargo, en épocas


recientes se ha vuelto aparente que los factores de riesgo específicos de
• La cardiopatía congénita (CC) es un defecto de nacimiento con una cada paciente desempeñan papeles esenciales en la determinación de
supervivencia mayor en los recién nacidos con lesiones complejas que resultados definitivos en el ND y, aún más, que la interacción entre
requieren cirugía cardíaca. el cerebro y la circulación es compleja, teniendo lugar en múltiples
• Los trastornos del neurodesarrollo (ND) son frecuentes en niños y niveles a lo largo del desarrollo fetal y posnatal. Este capítulo repasará
adolescentes en edad escolar después de cirugías cardíacas neonatales. los mecanismos que influyen en los resultados neurológicos en la CC,
• Los ensayos con resonancia magnética (RM) han demostrado evidencia incluidos: 1) los efectos fisiológicos de las lesiones cardíacas congénitas
de lesión cerebral y retraso del desarrollo cerebral, incluso antes en el flujo sanguíneo cerebral; 2) el desarrollo cerebral en el contexto
de someterse a la cirugía correctiva, en pacientes con síndrome de CC; 3) el tiempo, aspecto y mecanismo del daño cerebral adquirido,
del corazón izquierdo hipoplásico y transposición de los grandes vasos.
y 4) el conocimiento actual de los resultados del ND en CC crítica a
• Los estudios con RM fetal sugieren que este desarrollo demorado
corto y largo plazo.
comienza en el tercer trimestre.
• La fisiología fetal aberrante producto de la disminución de aporte
de oxígeno y nutrientes al cerebro puede provocar estas imágenes Alteraciones estructurales y del desarrollo
y trastornos del ND, además de otros factores de riesgo perioperatorios.
• Niños con CC complejas presentan una prevalencia de problemas cerebral en la cardiopatía congénita
cognitivos sutiles, pero relevantes, denominados perfil de
neurodesarrollo característico de las cardiopatías congénitas complejas. El desarrollo cardíaco humano está completo en gran parte en la sép-
tima semana gestacional (Srivastava, 2006). En contraste, el desarrollo
del cerebro se extiende por un período de tiempo mucho más largo, con
eventos morfológicos (proliferación celular, migración, proyección axó-
nica y selección de la diana) que tienen lugar de manera predominante

L
en los primeros dos trimestres, seguidos por un período prolongado
a cardiopatía congénita (CC) grave que requiere cirugía correc- de refinamiento de los circuitos que comienza en el tercer trimestre y
tiva se presenta en 6-8 de cada 1.000 nacidos vivos, con reque- se extiende hasta la infancia. Esta etapa del desarrollo cerebral incluye
rimiento hasta en la mitad de los casos de cirugía en el período un dramático crecimiento, mielinización e incremento de la actividad
neonatal para poder sobrevivir (Hoffman y Kaplan, 2002). Con téc- eléctrica neuronal, y depende de la recepción de un adecuado aporte de
nicas quirúrgicas mejoradas, la mortalidad para CC se ha reducido nutrientes y oxígeno. Consecuentemente, el flujo sanguíneo al cerebro
de manera sostenida (Karamlou et al., 2010). De hecho, el número de en desarrollo se incrementa, y se estima que representa un cuarto del
adultos que viven con una CC ha sobrepasado el número de niños con gasto ventricular combinado en el tercer trimestre, lo que demuestra la
CC en EE. UU. (Gilboa et al., 2016). particular interacción corazón-cerebro, que es crucial para el desarrollo
Dada la cambiante epidemiología de las CC, se ha dedicado un cerebral normal (Rudolph, 2011).
esfuerzo considerable para evaluar tanto los resultados del neurodesa-
rrollo (ND) como la calidad de vida de los pacientes con CC. La
evidencia sugiere que, aunque los niños con CC pueden no presentar Circulación fetal en la cardiopatía congénita:
signos evidentes de disfunción neurológica, pueden exhibir déficits en efectos en el flujo sanguíneo cerebral
múltiples dominios, incluyendo habilidades visoespaciales, memoria,
función ejecutora, habla y lenguaje, y función motriz fina y gruesa La circulación fetal es única en una serie de aspectos que pueden
(Newburger et al., 2012; Sananes et al., 2012; von Rhein et al., 2012). impactar en el flujo sanguíneo y el desarrollo cerebral. En el feto
Los datos del seguimiento a largo plazo sugieren que estos déficits normal, el flujo sanguíneo cerebral lo aporta sangre altamente oxige-
continúan hasta la adolescencia y adultez joven con potencial impacto nada desde el conducto venoso preferencialmente fluyendo a través
significativo en la contribución a la sociedad (Schaefer et al., 2013; del agujero oval a la aurícula y ventrículo izquierdo (fig. 57.1). En
Bellinger et al., 2009, 2011, 2015a,b). contraste, en los fetos con transposición de los grandes vasos (TGV),
Una suposición natural ha sido que estos eventos adversos estaban la aorta y la arteria pulmonar están transpuestas y, por tanto, la san-
directamente relacionados con daño cerebral sostenido durante las gre altamente oxigenada alcanza, por el contrario, la vascularización

844 © 2019. Elsevier España, S.L.U. Reservados todos los derechos

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CAPÍTULO 57 Resultados neurológicos a largo plazo en niños con cardiopatía congénita 845

• Figura 57.1  Circulación fetal normal y alterada. A. Flujo sanguíneo fetal normal. B. D-transposición de
los grandes vasos (D-TGV). C. Síndrome del corazón izquierdo hipoplásico (SCIH) con atresia aórtica.
La sangre desoxigenada (azul-púrpura) fluye hacia la placenta a través de la arteria umbilical. La sangre
con mayor contenido de oxígeno (rojo) retorna a través de la vena umbilical y el conducto venoso hacia
la vena cava inferior (VCI). La sangre con mayor saturación de la VCI se dirige preferentemente a través
del agujero oval hacia el ventrículo izquierdo, la aorta ascendente y los vasos de la cabeza y el cuello
en el feto normal. La sangre desaturada también retorna al lado derecho del corazón y se dirige a la
aorta descendente a través del conducto arterioso. En el feto con D-TGV, la aorta nace del ventrículo
derecho, por lo que el cerebro recibe sangre menos oxigenada, mientras que la sangre con mayor
saturación se dirige a la aorta descendente a través del conducto arterioso. En el SCIH, la eyección
ventricular izquierda reducida o ausente provoca elevadas presiones en la aurícula izquierda, limitando
o revirtiendo el flujo en el agujero oval, y genera una mezcla completa de la sangre desaturada y
saturada en la aurícula y el ventrículo derechos. El flujo sanguíneo a la cabeza y el cuello puede ocurrir
de manera retrógrada desde el conducto arterioso a través del istmo aórtico. AU, arteria umbilical;
CV, conducto venoso; D-TGV, D-transposición de los grandes vasos; SCIH, síndrome del corazón
izquierdo hipoplásico; VCI, vena cava inferior; VP, vena porta; VU, vena umbilical. (Reproducido con
autorización a partir de McQuillen PS, Goff DA, Licht DJ. Effects of congenital heart disease on brain
development. Prog Pediatr Cardiol. 2010;29(2):79-85.)

pulmonar y no la vascularización cerebral. De manera similar, en el pulmonar debido a una menor resistencia vascular pulmonar que la
síndrome del corazón izquierdo hipoplásico (SCIH), una estructura habitual.
cardíaca izquierda inadecuada lleva a una reversión del flujo sanguíneo El ultrasonido cerebral Doppler puede valorar la resistencia vascular
en el agujero oval, mezclando sangre oxigenada y desoxigenada en el cerebral fetal en la arteria cerebral media (ACM) y aportar una per-
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ventrículo derecho y, en casos de atresia aórtica, al flujo retrógrado cepción de los patrones de flujo sanguíneo cerebral fetal. Al calcular el
en la aorta ascendente. Los efectos de estos patrones de flujo anorma- índice de pulsatilidad de la ACM (IP, una medida de resistencia vascular
les en el desarrollo cerebral son inciertos, pero pueden involucrar a en el lecho vascular distal al punto de obtención Doppler), los estudios
diferentes mecanismos, a pesar del hecho de que ambos disminuyen han identificado un patrón de «conservación cerebral (brain-sparing)
el contenido de oxígeno de la sangre suministrada al cerebro. Otros en los fetos con restricción del crecimiento intrauterino e insuficiencia
mecanismos pueden ser responsables, como el aporte inadecuado de placentaria como mecanismo de autorregulación del flujo sanguíneo
sustrato (glucosa) debido a la disminución de la presión de perfusión cerebral fetal (Wladimiroff et al., 1987; Mari y Deter, 1992). En los
y del flujo al cerebro (Rudolph, 2016). En la D-transposición de los embarazos normales, la relación de IP cerebral/umbilical es mayor de 1,
grandes vasos (dextroposición [D]-TGV), la pulsatilidad y la presión mientras que en muchos con restricción del crecimiento la relación es
de perfusión de la circulación cerebral son normales. Sin embargo, en menor de 1 y predice eventos adversos perinatales y neurológicos (Rizzo
el SCIH, el istmo hipoplásico y el cayado aórtico pueden funcionar et al., 1989; Gramellini et al., 1992). Este mecanismo autorregulador
como resistencias, disminuyendo potencialmente la pulsatilidad y la es, por tanto, paradójicamente un presagio de pobres resultados en el
presión de perfusión de la circulación cerebral. En contraste, en la contexto de la restricción del crecimiento fetal.
D-TGV, una disminución del pulso y la presión de perfusión al cerebro Ha habido múltiples ensayos que han examinado los patrones de
puede provocar un flujo sanguíneo preferencial a la vascularización flujo sanguíneo intrauterino de fetos humanos con CC. Estos han

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846 PA RT E XI Aparato cardiovascular

• Figura 57.2  Patrones Doppler de la arteria cerebral media en un feto normal y un feto con síndrome
del corazón izquierdo hipoplásico (SCIH). El índice de pulsatilidad (velocidad máxima sistólica – velo-
cidad telediastólica/velocidad media) en el feto con SCIH es menor (panel derecho), lo que sugiere
impedancia disminuida en la vascularización cerebral. IP, índice de pulsatilidad.

demostrado menor IP de la ACM en fetos que tienen lesiones con un 10% menor). Al comparar estos hallazgos con los obtenidos en
mayor mezclado intracardíaco, como el SCIH (fig. 57.2). De hecho, los recién nacidos prematuros sin CC, los recién nacidos a término con
fetos con SCIH han mostrado tener una relación de IP cerebral/umbi- CC parecen aproximadamente retrasados 1 mes (Miller et al., 2007).
lical más baja entre los diferentes tipos de CC (Donofrio et al., 2003; Estas observaciones han sido reproducidas en ensayos que evaluaron el
Kaltman et al., 2005). Es probable que esto sea secundario al menor desarrollo cerebral por escalas morfológicas semicuantitativas, especí-
contenido de oxígeno de la sangre suministrada al cerebro, así como los ficamente la escala de maduración total (EMT) cerebral. Se halló que
trastornos en la perfusión cerebral con un istmo aórtico hipoplásico. la EMT fue significativamente inferior en los recién nacidos a término
Las características del flujo sanguíneo cerebral han mostrado ser con D-TGV y SCIH comparados con una cohorte de recién nacidos
predictoras de eventos en el ND en los fetos con CC. En un ensayo normales (Licht et al., 2009). Finalmente, los estudios morfométricos
retrospectivo multicéntrico de niños con SCIH, un IP de la ACM han demostrado volúmenes cerebrales totales y regionales inferiores en
bajo intraútero predijo mejores resultados en el ND a los 14 meses de los recién nacidos con CC comparados con los controles (von Rhein
edad evaluado por las escalas de Bayley de desarrollo infantil (BSID) II et al., 2015). Estos hallazgos ayudan a explicar el crecimiento somático
(Williams et al., 2013). Estos hallazgos sugieren que la respuesta autor­ anormal visto en el recién nacido con CC. Específicamente, aquellos
reguladora de la vasodilatación cerebral en este escenario de SCIH con D-TGV y SCIH tienen circunferencias cefálicas más pequeñas
puede ser suficiente y adaptativa a un estado de hipoxemia crónica, que están desproporcionadas con su peso (Rosenthal, 1996). Estos
el cual contrasta con lo observado en el contexto de restricción del hallazgos en la RM cerebral del recién nacido con CC, vistos antes
crecimiento fetal. Se precisan más estudios prospectivos de mayor de que se lleve a cabo cualquier cirugía correctiva, han llevado a la
dimensión para comprender la utilidad predictiva de los patrones de teoría de que el desarrollo cerebral anormal y la susceptibilidad al daño
flujo sanguíneo cerebral en fetos con CC. cerebral adquirido comienzan intraútero.

Evidencia preoperatoria de restricción La resonancia magnética cerebral fetal identifica


del desarrollo cerebral por resonancia magnética anomalías del desarrollo en la cardiopatía
Se han identificado malformaciones estructurales cerebrales en neo-
congénita
natos con CC, incluso en ausencia de un síndrome genético definido. Los avances técnicos en la RM fetal la han convertido en una impor-
Los estudios de autopsias han revelado múltiples anomalías congénitas tante herramienta en la evaluación clínica de fetos con sospecha de
cerebrales en neonatos con SCIH, incluyendo microcefalia, formación anomalías cerebrales. Un estudio comparó volúmenes cerebrales y
anormal del manto cortical y malformaciones del sistema nervioso E-RM entre fetos normales y fetos con CC entre 25 y 37 semanas de
central evidentes, como agenesia del cuerpo calloso u holoprosencefalia gestación que mostraron evidencia definitiva de desarrollo cerebral
(Glauser et al., 1990). demorado (Limperopoulos et al., 2010). Durante el tercer trimestre
Además de las anomalías estructurales, existe evidencia en las se observó un progresivo estancamiento en los volúmenes cerebra-
imágenes de resonancia magnética (RM) de que el desarrollo cerebral les, particularmente en los fetos con obstrucción del lado izquierdo.
está retrasado en las CC antes de la cirugía correctiva. Las técnicas Adicionalmente, se observaron retrasos mayores en los incrementos
de RM cuantitativa, como la imagen con tensor de difusión (DTI), esperados en la relación NAA/Cho y un mayor estancamiento en el
miden la dirección y la magnitud del movimiento de agua y, por crecimiento del volumen cerebral en fetos con atresia aórtica, que no
tanto, el desarrollo cerebral microestructural (Hüppi y Dubois, 2006). tenían flujo anterógrado en el cayado aórtico. Estas observaciones
Durante el desarrollo cerebral normal, la magnitud del movimiento apoyan el concepto de que el desarrollo cerebral está alterado durante
de la difusión del agua disminuye (coeficiente de difusión aparente la vida fetal debido al flujo sanguíneo cerebral y al aporte de oxígeno
[CDA]) y direccionalidad regional aumenta en la sustancia blan- y nutrientes alterado, y que los mecanismos compensatorios (es decir,
ca (anisotropía fraccional [AF]). De manera similar, el desarrollo el efecto brain-sparing) pueden no ser adecuados.
metabólico cerebral puede medirse a través de espectroscopia por Recientemente se han utilizado técnicas novedosas en la RM cardía-
resonancia magnética (E-RM) al medir componentes metabólicos ca fetal para comprender la interacción corazón-cerebro en la CC. Estas
mayores, como N-acetilaspartato (NAA), colina (Cho), creatina (Cr) técnicas permiten mediciones de flujo y saturación de oxígeno en los
y lactato. Utilizando estas técnicas, los investigadores han descubierto vasos sanguíneos fetales. Al combinar la RM fetal cerebral y la cardio-
que los recién nacidos con CC (D-TGV y ventrículo único) presentan vascular, los investigadores hallaron una correlación entre consumo de
hallazgos sugerentes de un cerebro inmaduro con DTI anormal (CDA oxígeno cerebral fetal y tamaño cerebral (peso cerebral estimado) entre
un 4% mayor y AF un 12% menor) y E-RM (relación NAA/Cho 30 fetos con CC en la gestación avanzada (Sun et al., 2015). Hubo

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una correlación directa entre el peso cerebral estimado y el consumo resolución que con ultrasonido o tomografía computarizada. Las lesio-
cerebral de oxígeno. Además, hubo una modesta asociación entre aporte nes cerebrales más comúnmente observadas en los recién nacidos con
de oxígeno cerebral y tamaño cerebral. El valor predictivo de estos CC son lesiones focales de la sustancia blanca (SB) y pequeños infartos
hallazgos para eventos posnatales, como lesión cerebral y resultados focales (menos de un tercio o dos tercios de la distribución arterial;
en el ND, permanece incierto. Se necesita una mayor exploración fig. 57.3). Estas lesiones son en gran parte silentes desde el punto de
para identificar blancos potenciales y métodos de intervención para vista clínico y pueden pasarse por alto con el cribado de rutina clínico
modificar los resultados en el ND en presencia de CC. con ultrasonido craneal.
Las lesiones de la SB tienen características de imagen definidas por
lesiones punteadas periventriculares vistas como hiperintensas en la RM
Trayectoria del desarrollo cerebral ponderada en T1. La identificación de este patrón de lesión fue ines-
en la cardiopatía congénita perada debido a que se pensó que estaba restringido a los recién nacidos
Aunque la mayor parte de la literatura se ha enfocado en la identificación prematuros con lesión cerebral (leucomalacia periventricular). Los factores
del desarrollo anormal cerebral en el feto y el recién nacido con CC, de riesgo para lesión cerebral se resumen más adelante y en la tabla 57.1.
los estudios en pacientes más grandes sugieren que estos retrasos
continúan en los años de la adolescencia. En un estudio de pacientes Factores de riesgo de lesión cerebral
con ventrículo único sometidos a cirugía de Fontan, la frecuencia de
cualquier anomalía estructural en la RM fue 11 veces mayor que en
preoperatoria
el grupo control (Bellinger et al., 2015b). De manera similar, en un Se han llevado a cabo múltiples grandes ensayos prospectivos utilizando
estudio con RM de adolescentes con D-TGV, la AF estaba significati- RM cerebral pre- y posquirúrgica para determinar la frecuencia de daño
vamente reducida en varias regiones de la sustancia blanca comparada cerebral adquirido y los factores de riesgo asociados en recién nacidos
con el grupo control (Rivkin et al., 2013). Muchos autores han pos- con CC (tabla 57.2). La lesión cerebral preoperatoria en forma de lesión
tulado que la trayectoria del desarrollo cerebral a lo largo del tiempo de la SB o infarto está presente en el 28-39% de estos recién nacidos
puede depender de la lesión cardíaca específica y de si el tratamiento (v. tabla 57.2) (Mahle et al., 2002; Licht et al., 2004; Miller et al., 2004;
quirúrgico fue correctivo (es decir, D-TGV) o principalmente paliativo McQuillen et al., 2007; Mulkey et al., 2014). Este fue un hallazgo sor-
(es decir, SCIH). En particular, se halló que pacientes con atresia aórtica presivo, dado el foco en factores operativos que causaban trastornos en el
presentaron un desarrollo cerebral microestructural menos robusto ND en estos pacientes. Los factores de riesgo para lesión cerebral preope-
(Sethi et al., 2013). Otro estudio demostró, a 2,5 años de edad, mayor ratoria incluyen hipoxemia y tiempo hasta la cirugía (Petit et al., 2009),
atrofia cortical y menores volúmenes cerebrales en quienes presentaban déficit de base prequirúrgico, paro cardíaco preoperatorio y la necesidad
SCIH comparados con los que tenían D-TGV, lo que sugiere una de septostomía auricular con balón (McQuillen et al., 2006). Otros
influencia específica de lesión en la trayectoria a largo plazo del desa- factores de riesgo específicos del paciente incluyen sexo masculino y la
rrollo cerebral (Ibuki et al., 2012). presencia de atresia aórtica (ausencia de flujo anterógrado en la aorta)
en quienes tienen SCIH (Goff et al., 2014).
Daño cerebral adquirido en la cardiopatía
congénita: características y factores de riesgo Factores de riesgo de lesión cerebral
Los neonatos con CC presentan también riesgo para nuevos daños cere-
intraoperatoria
brales adquiridos. El desarrollo cerebral retrasado en sí mismo puede Los factores de riesgo propuestos para lesión cerebral intraoperatoria
ser un factor de riesgo para nuevas lesiones cerebrales, particularmente se relacionan predominantemente con los métodos de derivación
lesiones prequirúrgicas. cardiopulmonar y/o paro circulatorio total hipotérmico. El Boston Cir-
La lesión cerebral focal en el recién nacido a término puede detec- culatory Arrest Trial comparó dos métodos de soporte de órganos vitales
tarse de manera clara y confiable con RM convencional y con mayor en niños sometidos a cirugía a corazón abierto para reparar D-TGV

TABLA
57.1  Factores de riesgo para una lesión cerebral

Preoperatorios Intraoperatorios Postoperatorios


Baja saturación de hemoglobina arterial Paro circulatorio total prolongado (> 40 min) Baja presión arterial
Lapso hasta la cirugía Saturación de oxígeno cerebral disminuida (NIRS) Baja Pao2 arterial
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Procedimientos basados en catéter Estrategia de derivación cardiopulmonar (perfusión Saturaciones de oxígeno cerebral regional
(p. ej., septostomía auricular con balón) cerebral regional) prolongadas (NIRS < 45% durante > 3 h)
Deficiencia de base preoperatoria Émbolos aéreos o de partículas Cerebro morfológicamente inmaduro (escala
de maduración total)
Paro cardíaco preoperatorio Inflamación Fisiología de ventrículo único
Cerebro morfológicamente inmaduro (escala
de maduración total)
Sexo masculino
Atresia aórtica

NIRS, espectroscopia de infrarrojo cercano; Pao2, presión parcial de oxígeno.

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• Figura 57.3  Resonancia magnética con imágenes de patrones de lesión cerebral en la cardiopatía
isquémica. A y B. Lesión de la sustancia blanca (LSB) moderada en un recién nacido con síndrome del
corazón izquierdo hipoplásico (SCIH) vista en imágenes T1 sagitales en el estudio postoperatorio. La LSB
parece pequeñas áreas focales hiperintensas en T1 (brillantes). C y D. Recién nacido a término con SCIH
estudiado el día 17 de vida postoperatorio, después de un procedimiento de Norwood modificado. Un
infarto pequeño en la distribución de la arteria cerebral media se ve como hiperintensidad cortical en T2
(flechas blancas en C) y corresponde a difusión reducida (flechas blancas en D) en el lóbulo parietooccipital
derecho. E y F. Recién nacido a término con transposición de los grandes vasos estudiado en el preo-
peratorio después de una septostomía auricular con balón. Se observa un foco único de hiperintensidad
en T1 en la sustancia blanca periauricular en la secuencia frontal (E). Este mismo foco presenta difusión
de agua disminuida en el mapa de difusión promedio (F, punto oscuro). Este punto es mayor que la típica
lesión solitaria de la sustancia blanca y puede representar un pequeño infarto embólico.
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CAPÍTULO 57 Resultados neurológicos a largo plazo en niños con cardiopatía congénita 849

TABLA  Evidencia en la resonancia magnética de lesión cerebral preoperatoria en recién nacidos con cardiopatía
57.2 congénita
Estudio Muestra CC Hallazgos Factores de riesgo
Mahle et al., 2002 CC = 24 Mezcla LPV = 16% N/A
Infarto = 8%
Lactato cerebral elevado = 53%
Miller et al., 2004 CC = 10 TGV Lesión cerebral (accidente N/A
Control = 5 cerebrovascular) = 40%
Lactato cerebral elevado = 2,7 × superior
a los controles
Licht et al., 2004 CC = 25 Mezcla LPV = 28% • Flujo sanguíneo cerebral disminuido
• Hipercapnia
McQuillen et al., 2007 CC = 62 Mezcla LSB = 18% • Puntuación de Apgar baja a los 5 min
Accidente cerebrovascular = 21% • SAB
HIV = 8%
Petit et al., 2009 CC = 26 TGV LPV = 38% • Menor saturación de oxígeno preoperatoria
• Mayor tiempo hasta la cirugía
Andropoulos et al., 2010 CC = 68 Mezcla LSB = 16% • Puntuación en la escala de maduración total
Infarto = 18% baja (inmadurez cerebral)
Glass et al., 2011 CC = 127 Mezcla LSB = 24% • Bacteriemia en sujetos con TGV
Goff et al., 2014 CC = 57 SCIH LPV = 19% • Sexo masculino
• Atresia aórtica
• Puntuación en la escala de maduración total
baja (inmadurez cerebral)
Peyvandi et al., 2016 CC = 153 Mezcla LSB = 24% Diagnóstico posnatal de CC
Accidente cerebrovascular = 20%
Hipóxico-isquémico = 1%

CC, cardiopatía congénita; HIV, hemorragia intraventricular; LPV, leucomalacia periventricular; LSB, lesión de la sustancia blanca; N/A, no aplica; SAB, septostomía auricular con balón; SCIH, síndrome del
corazón izquierdo hipoplásico; TGV, transposición de los grandes vasos.

con una operación de intercambio arterial (Newburger et al., 1993). Otras variables examinadas fueron el tratamiento del pH en la san-
Esta operación es «correctiva», dado que se reestablece la fisiología gre hipotérmica (α-stat frente a pH-stat), hemodilución/hematocrito
cardiovascular normal con baja mortalidad y excelentes resultados (25 frente a 35%) y el mantenimiento de la perfusión regional cerebral
funcionales cardíacos a largo plazo. Aunque el paro circulatorio con durante la reconstrucción del cayado aórtico (Jonas et al., 2003; Wypij
hipotermia profunda, el cual presenta al cirujano un corazón vacío y et al., 2008). Muy pocos de estos estudios han identificado resultados
relajado, permite la realización de cirugías complejas, en su momento neurológicos definitivamente mejorados. De hecho, los pacientes
se temió el desarrollo de eventos adversos neurológicos a largo plazo, sometidos a perfusión regional cerebral tendieron a presentar peores
y la duración «segura» del paro circulatorio se desconocía. Un método resultados, y esta técnica se asoció con nuevas lesiones cerebrales post­
alternativo (derivación de bajo flujo) parecía permitir un aporte razo- operatorias en la RM.
nable de oxígeno cerebral, ofreciendo al mismo tiempo al cirujano Estos resultados sugieren que, aunque los riesgos persistan durante
un campo quirúrgico con relativa ausencia de sangre. Este estudio el período intraoperatorio, una mayor carga de riesgo para lesiones
paradigmático enroló 171 niños en un ensayo clínico aleatorizado adquiridas tiene lugar fuera del período operatorio. Sin embargo, la
unicéntrico que comparó un paro circulatorio total por hipotermia posibilidad de que factores de riesgo intraoperatorios no identificados
profunda con derivación cardiopulmonar de bajo flujo. Todas las varia- contribuyan a la lesión cerebral no puede excluirse. El análisis com-
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bles de resultados tempranas apuntaban a un beneficio con derivación binado de las cohortes de sujetos que han requerido cirugía cardíaca
de bajo flujo en comparación con el paro circulatorio. Específicamente, neonatal en un período de 13 años no identificó una mejoría sustancial
el grupo con paro circulatorio tuvo mayor frecuencia de convulsiones en los resultados tempranos del ND a pesar de una mejor supervivencia
postoperatorias, mayores niveles plasmáticos de enzimas cerebrales (Gaynor et al., 2015).
específicas (creatina cinasa), peores resultados motrices a 1 año (BSID-
Índice de Desarrollo Psicomotor [IDP]) y alteraciones en el examen
neurológico. En contraste, no se hallaron diferencias en el desarrollo Factores de riesgo de lesión cerebral
cognitivo (BSID-Índice de Desarrollo Mental [IDM]) o en la RM al postoperatoria
año de edad. De manera importante, estas diferencias entre los grupos
desaparecieron cuando los pacientes fueron evaluados a edades mayores, Los factores de riesgo para lesión cerebral postoperatoria incluyen
pero ambos grupos permanecieron por debajo de la norma poblacional hipotensión e hipoxemia relacionada con el síndrome de bajo gasto car-
en el desempeño en test estandarizados (detallado más adelante en este díaco, definido como una combinación de signos clínicos (taquicardia,
capítulo) (Wypij et al., 2003). Otros estudios han identificado el paro oliguria, extremidades frías o paro cardíaco) y una diferencia mayor
circulatorio como factor de riesgo para nuevas lesiones de la SB post­ del 30% en la saturación de oxígeno arterial y venoso mixto, o acidosis
operatorias identificadas por RM (Beca et al., 2013). láctica. Múltiples estudios han identificado la hipotensión como factor

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850 PA RT E XI Aparato cardiovascular

de riesgo para nuevas lesiones en la SB postoperatorias, incluyendo la lesión y el desarrollo cerebral (Majnemer et al., 2009). Además, hay
baja presión sistólica en el momento del ingreso, baja presión arterial una mayor prevalencia de trastornos en la alimentación (disfunción
media durante el primer día del postoperatorio y baja presión diastólica en la deglución o succión) en neonatos sometidos a cirugía cardíaca,
durante los días 1-2 del postoperatorio (Galli et al., 2004; McQuillen lo que puede ser un indicador precoz de eventual trastorno del ND
et al., 2007). (Medoff-Cooper et al., 2015).
Los estudios que utilizaron espectroscopia de infrarrojos cerca-
na cerebral también han sugerido que la baja saturación regional
cerebral de oxígeno (< 45%) durante más de 3 h era un factor de Resultados neurológicos a corto y largo plazo
riesgo para nuevas lesiones isquémicas (Hoffman et al., 2013). En tras la reparación quirúrgica
general, los pacientes con un ventrículo único tienen mayor riesgo
Aunque haya habido varios reportes de resultados en el ND de una
de lesión cerebral postoperatoria, lo cual se correlaciona con la
mezcla de tipos de CC, es importante reconocer que los resultados
mayor inestabilidad hemodinámica postoperatoria, la morbilidad
pueden variar significativamente según la lesión cardíaca. Se han llevado
y la mortalidad.
a cabo estudios de resultados en dos poblaciones específicas de pacientes
de alto riesgo: los que tienen D-TGV y los que tienen defectos que
Inmadurez cerebral como factor de riesgo requerían paliación de ventrículo único (es decir, SCIH).
de lesión cerebral En pacientes con D-TGV después de la cirugía de intercambio
arterial, el Boston Circulatory Arrest Trial (descrito anteriormente)
La relación entre inmadurez cerebral y lesión cerebral se ha explora- ha demostrado que los resultados del cociente intelectual (CI), aun-
do en la literatura, aunque con resultados variables. Técnicas de RM que por debajo de la media nacional, caían dentro del rango normal a
cualitativa (EMT) han sugerido una asociación entre inmadurez cere- los 8 y 16 años de edad (Bellinger et al., 2009; Bellinger et al., 2011).
bral y el riesgo de lesión cerebral pre- y postoperatoria (Andropoulos Sin embargo, los pacientes con D-TGV a los 16 años de edad con-
et al., 2010). Sin embargo, las técnicas de RM cuantitativas (DTI y tinúan exhibiendo déficits en logros académicos, memoria, función
E-RM) han demostrado una asociación entre inmadurez y el riesgo ejecutora, habilidades visoespaciales, atención y cognición social.
de lesión cerebral preoperatoria, pero no de lesión cerebral postope- Se catalogó a un alto porcentaje de niños de tener problemas de
ratoria (Dimitropoulos et al., 2013). Ambos estudios sugieren que la comportamiento por padres y docentes; el 37% requirieron servicios
inmadurez cerebral puede ser un factor de riesgo para lesión cerebral de educación compensadora y el 10% repitieron curso. Es interesante
con resultados apenas diferentes. Estas diferencias probablemente estén señalar que, en un modelo de regresión multivariable, el estatus
relacionadas con el método de medición del desarrollo cerebral. La socioeconómico fue un fuerte predictor de resultados en el ND en
E-RM y la DTI exhiben cambios con el desarrollo cerebral y pueden estos pacientes a los 16 años de edad. Estos estudios demuestran
estar influenciadas por daño cerebral adquirido basado en gravedad, que la evaluación precoz del ND puede subestimar la carga final
tiempo y mecanismo. Aunque no se hayan identificado lesiones cere- de impedimentos funcionales en sujetos con sutiles, pero difusas,
brales evidentes en el período neonatal, lesiones cerebrales solapadas lesiones cerebrales.
pueden estar presentes e influir en cambios en el desarrollo y un mayor Los pacientes con lesiones de ventrículo único, en particular SCIH,
grado de lesión en el período pre- y postoperatorio. presentan mayor riesgo de trastornos en el ND basados en la fisiología
subyacente, la hemodinámica y la complejidad de la reparación qui-
rúrgica. Estos niños deben someterse a una serie de procedimientos
Resultados en el neurodesarrollo quirúrgicos paliativos que culminan típicamente en la operación de
Cada vez más estudios ofrecen resultados a corto y largo plazo en Fontan. Varios estudios han demostrado que niños con SCIH tienden
el ND en pacientes con varios tipos de CC. A pesar de la heteroge- a presentar CI más bajos (típicamente por debajo de la media de la
neidad entre estos reportes debido a las diferentes metodologías de población general) y problemas con las habilidades visuoespaciales,
seguimiento para la edad, las herramientas de evaluación utilizadas y lenguaje expresivo, atención y comportamiento externo. En la serie
el tipo de lesión cardíaca, esta información de los resultados nos ha más extensa reportada a la fecha, los niños con SCIH a los 12 meses
aportado un mayor conocimiento respecto a resultados en el ND y han de edad tenían un IDM medio de 90 (rango 50-129) y un IDP menor
aportado los cimientos para comprender la información de técnicas de 73 (rango 50-117) (Newburger et al., 2012). Los factores de riesgo
de imagen y clínica en el período fetal y neonatal. Faltan ensayos para pobres resultados fueron principalmente específicos del pacien-
que estudien el valor predictivo de las imágenes fetales y neonatales, te e incluyeron síndromes genéticos, menor edad gestacional en el
y se necesitan más estudios longitudinales para valorar la trayectoria momento del parto e inestabilidad perioperatoria. Otros estudios han
típica del crecimiento cerebral y el patrón de lesión a medida que evaluado el impacto de cuestiones de crecimiento y alimentación en
estos niños crecen. los resultados del ND. Los niños que requirieron alimentación asis-
tida por dispositivos y con menor peso, altura y perímetro cefálico
a los 3 meses de edad presentaban mayor riesgo de retraso del ND a
Resultados neurológicos inmediatos los 6 y 12 meses de edad (Medoff-Cooper et al., 2015). Estudios
tras la reparación quirúrgica a largo plazo han identificado alteraciones persistentes del ND en
adolescentes con fisiología de Fontan, incluido menor CI y evaluación
Aunque la prevalencia de disfunción neurológica evidente postoperato-
neuropsicológica anormal comparados con la población normativa
ria haya declinado, un pequeño porcentaje de niños continúa exhibien-
(Bellinger et al., 2015b).
do alteraciones neurológicas, incluidas convulsiones clínicas, hipotonía
y asimetría del tono. Entre varios reportes combinados, la prevalencia
de convulsiones subclínicas postoperatorias parece ser del 4-11% y se Susceptibilidad genética a alteraciones
ha detectado por monitorización con electroencefalograma continuo del neurodesarrollo
hasta en el 20% de las pacientes en el período postoperatorio inme-
diato (Ehyai, et al., 1984; Newburger et al., 1993; Miller et al., 1995; Un punto importante que hay que considerar es el impacto de comor-
Clancy et al., 2005; Gaynor et al., 2005; Gaynor et al., 2006). En un bilidades genéticas en los resultados del ND en el contexto de CC.
estudio más reciente, un amplio porcentaje de niños pequeños presentó Aproximadamente un tercio de los niños con CC presentan un tras-
evidencia de alteraciones en el ND previas a la cirugía, lo que sugiere torno genético subyacente, como aneuploidía o síndromes de deleción
que los factores fetales y neonatales desempeñan un rol significativo en (p. ej., síndrome de deleción 22q11.2). Los estudios han demos-

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CAPÍTULO 57 Resultados neurológicos a largo plazo en niños con cardiopatía congénita 851

trado mayores discapacidades en el aprendizaje, el CI, las habilidades Conclusiones


motrices, las auditivas y las visuales en estos niños, comparados con
niños con CC que no tenían una comorbilidad genética (Pierpont Los avances en el diagnóstico y los cuidados prenatales, y en las técni-
et al., 2007; Marino et al., 2012). Se han realizado varios estudios en cas quirúrgicas cardiovasculares han contribuido al incremento de la
niños con CC que también tenían síndrome de deleción 22q11.2. supervivencia en general de neonatos nacidos con una CC. Dada esta
Esta microdeleción engloba 3 megabases de ADN, que representan mejoría en la supervivencia, actualmente se enfatiza más en mejorar
entre 30 y 40 genes, y el síndrome es altamente heterogéneo con un los resultados del ND. Más específicamente, el entendimiento del
fenotipo variable. También se ha notado que estos pacientes presen- valor predictivo de las imágenes, tanto en el feto como en el neonato,
tan trastornos psiquiátricos, como ansiedad, síndrome de déficit de aporta una oportunidad de potenciales ensayos de intervención para
atención e hiperactividad, y psicosis. Es interesante que la presencia mejorar los resultados entre esta población de pacientes. Además, a
de CC no cambia la prevalencia de estos trastornos psiquiátricos (Yi medida que la detección prenatal de CC aumenta, es fundamental
et al., 2014). informar a las familias acerca de los potenciales efectos adversos no
Los estudios también identificaron factores de riesgo genéticos cardíacos para asegurar el reconocimiento y la intervención a tiempo
específicos de cada paciente que pueden modificar los resultados del de trastornos del ND.
ND. Esto se ha descrito para alelos de la apolipoproteína E (APOE),
en los cuales el alelo ApoE ε4 está asociado con eventos adversos en Lecturas recomendadas
muchas enfermedades adultas (p. ej., enfermedad de Alzheimer, lesión
cerebral traumática, ictus y hemorragia subaracnoidea). Esto se ha Bellinger DC, Newburger JW, Wypij D, et al. Behaviour at eight years in
explorado en niños con CC, y el alelo ApoE ε2 está asociado con children with surgically corrected transposition: the Boston Circulatory
peores resultados (Gaynor et al., 2014). En general, es probable que Arrest Trial. Cardiol Young 2009;19:86-97.
múltiples genes y factores ambientales influyan en los resultados del Bellinger DC, Wypij D, Rivkin MJ, et al. Adolescents with d-transposition
ND en estos pacientes. of the great arteries corrected with the arterial switch procedure: neu-
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inteligencia en el rango de la población normal, hay una prevalencia infants with complex congenital heart defects. J Thorac Cardiovasc Surg
de sutiles, pero relevantes, problemas cognitivos, que algunos han 2009;137(3):529-536 discussion 536-537.
llamado patrón distintivo del neurodesarrollo en la cardiopatía congénita Marino BS, Lipkin PH, Newburger JW, et al. Neurodevelopmental out-
compleja. Estos niños exhiben problemas de comportamiento y aten- comes in children with congenital heart disease: evaluation and mana-
ción que frecuentemente no se detectan en las evaluaciones estándar, gement: a scientific statement from the American Heart Association.
pero tienen pobres resultados académicos. Entre una larga cohorte Circulation 2012;126:1143-1172.
de niños que fueron seguidos prospectivamente después de haberse McQuillen PS, Barkovich AJ, Hamrick SE. Temporal and anatomic risk
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sometido a cirugía cardíaca, un 28% presentaron alteraciones en el
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examen neurológico de ingreso escolar, aunque menos del 5% fueron
Miller SP, McQuillen PS, Hamrick S, et al. Abnormal brain develop-
graves. La mayoría de estas alteraciones involucraron coordinación ment in newborns with congenital heart disease. N Engl J Med
motriz fina y tono. Se identificó una dificultad cognitiva y problemas 2007;357(19):1928-1938.
del comportamiento en el 30%. Ciertamente, los supervivientes de Newburger JW, Jonas RA, Wernovsky G, et al. A comparison of the perio-
CC exhiben un «perfil de neurodesarrollo» que cambia en cada etapa perative neurologic effects of hypothermic circulatory arrest versus
de la vida y afecta a la calidad de vida y a la capacidad de realizar low-flow cardiopulmonary bypass in infant heart surgery. N Engl J Med
tareas de la vida cotidiana (Majnemer et al., 2009). Es importante 1993;329(15):1057-1064.
destacar que la American Heart Association emitió un comunicado Newburger JW, Sleeper LA, Bellinger DC, et al. Early developmental
recomendando evaluaciones del ND seriadas en quienes tenían ries- outcome in children with hypoplastic left heart syndrome and rela-
go con CC (Marino et al., 2012). Esto incluye recién nacidos que ted anomalies: the single ventricle reconstruction trial. Circulation
requieran cirugía a corazón abierto (antes de los 30 días de vida) y 2012;125(17):2081-2091.
otras lesiones cardíacas cianóticas, como la tetralogía de Fallot, que Peyvandi S, De Santiago V, Chakkarapani E, et al. Association of prenatal
puede no requerir una operación neonatal. Además, la evaluación diagnosis of critical congenital heart disease with postnatal brain deve-
seriada está recomendada siempre que se observe CC en combina­ lopment and the risk of brain injury. JAMA Pediatr 2016;170:e154450.
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recibido reanimación cardiopulmonar, hospitalización perioperatoria
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las técnicas de neuroimagen. en www.expertconsult.com

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CAPÍTULO 57 Resultados neurológicos a largo plazo en niños con cardiopatía congénita 851.e3

Puntos clave Palabras clave


• La cardiopatía congénita (CC) es un defecto de nacimiento Cardiopatía congénita
con una supervivencia mayor en los recién nacidos con lesiones Resultados del neurodesarrollo
complejas que requieren cirugía cardíaca. Desarrollo cerebral
• Los trastornos del neurodesarrollo (ND) son frecuentes en niños Daño cerebral adquirido
y adolescentes en edad escolar después de cirugías cardíacas Fisiología cardíaca
neonatales.
• Los ensayos con resonancia magnética (RM) han demostrado
evidencia de lesión cerebral y retraso del desarrollo cerebral,
incluso antes de someterse a la cirugía correctiva, en pacientes
con síndrome del corazón izquierdo hipoplásico y transposición
de los grandes vasos.
• Los estudios con RM fetal sugieren que este desarrollo demorado
comienza en el tercer trimestre.
• La fisiología fetal aberrante producto de la disminución de
aporte de oxígeno y nutrientes al cerebro puede provocar estas
imágenes y trastornos del ND, además de otros factores de riesgo
perioperatorios.
• Niños con CC complejas presentan una prevalencia de pro-
blemas cognitivos sutiles, pero relevantes, denominados perfil
de neurodesarrollo característico de las cardiopatías congénitas com-
plejas.
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PA RTE XII Sistema nervioso

58
Desarrollo del sistema nervioso central
BOBBI FLEISS, HELEN STOLP, VALÉRIE MEZGER Y PIERRE GRESSENS

PUNTOS CLAVE la superficie cortical, y una expansión radial, que conlleva el aumento
del grosor. Se calcula que el número total de neuronas en el cerebro
• El cerebro del recién nacido prematuro y el recién nacido a término se humano maduro oscila entre 3.000 y 100.000 millones. La corteza
está desarrollando activamente. Algunos de los pasos clave tienen lugar se genera a partir de una monocapa de células neuroepiteliales proli-
durante el tercer trimestre, como el final de la migración neuronal, la ferativas que recubren las paredes de los ventrículos laterales (la zona
muerte celular programada, la generación de los axones y las dendritas, ventricular [ZV]). Estas células tienen una disposición radial. En los
y la primera tanda de sinaptogenia. seres humanos, alrededor de la séptima semana gestacional (SG) aparece
• Aunque estos procesos están controlados por programas genéticos, una segunda zona proliferativa, la zona subventricular (ZSV) interna,
también son muy sensibles a factores ambientales. derivada de los precursores de la ZV (Fietz y Huttner, 2011). Las células
• Parece que los mecanismos epigenéticos desempeñan un papel
de la ZSV interna no adoptan una disposición radial. Recientemente
fundamental en estos procesos, y pueden tener consecuencias a largo
se ha identificado una tercera zona proliferativa durante el desarrollo
plazo y posiblemente transgeneracionales.
de la neocorteza, la ZSV externa, que aparece alrededor de la SG 11
en los seres humanos. En estos, esta zona muestra una proliferación
prolongada, mientras que en los roedores estas células sufren una única
división. Esta diferencia en el comportamiento de los precursores
neuronales podría explicar la impresionante expansión y los procesos

E
l desarrollo cerebral es el resultado de la expresión de sucesivos de pliegue observados en la superficie de la neocorteza a lo largo de
programas genéticos a lo largo de las diferentes etapas ontogé- la evolución.
nicas. Comienza con la individualización de la placa neural al Estas zonas proliferativas, situadas en la zona posterior de los
comienzo de la tercera semana tras la fecundación y está casi finalizado ventrículos laterales, dan lugar a las neuronas excitadoras (glutama-
en la adolescencia. Sin embargo, existe una cierta producción neuronal térgicas) de las distintas capas corticales (la corteza de los mamíferos
durante toda la vida. Esta neurogenia tardía se ha descrito en el bulbo está formada por seis capas), así como a una fracción de neuronas
olfatorio y en el giro dentado del hipocampo, aunque aún está por inhibidoras (interneuronas de ácido γ-aminobutírico [GABAérgi-
demostrar su importancia para la neocorteza asociativa. cas]). Las demás neuronas inhibidoras derivan de otra estructura
Las principales fases del desarrollo cerebral pueden resumirse de proliferativa localizada en la pared lateral de los ventrículos laterales,
la siguiente manera: inducción del neuroectodermo, formación del la eminencia ganglionar, que es también la fuente de las neuronas
tubo neural, seguido por el telencéfalo, neurogenia (producción de talámicas. Durante la migración, las neuronas pueden adoptar una
neuronas germinales y posteriormente de neuronas maduras), migra- trayectoria radial al migrar en contacto con neurogliocitos especiali-
ción neuronal, muerte neuronal programada, generación de neuritas zados, la glía radial, que les sirven de guía (Gressens y Evrard, 1993;
(axones y dendritas), eliminación de neuritas superfluas, sinaptogenia, Haydar et al., 2003). Por el contrario, las neuronas que nacen en la
eliminación y estabilización selectiva de las sinapsis, angiogenia, glio- eminencia medial adoptan inicialmente una trayectoria tangencial,
genia (producción de astrocitos y oligodendrocitos) y mielinización independiente de la glía radial, aunque existen algunos indicios de
(fig. 58.1). Estas fases del desarrollo y de la maduración cerebral están migración radial en la etapa final.
controladas por factores intrínsecos (determinados genéticamente) Una vez concluido el ciclo mitótico, las neuronas migran desde las
y modulados por factores extrínsecos (ambientales). La modula- zonas proliferativas hacia la futura corteza (Fietz y Huttner, 2011).
ción ejer­cida por los factores ambientales puede suponer la participación La primera tanda de neuronas migratorias forma la placa cortical
de mecanismos epigenéticos. primitiva o placa precursora (fig. 58.2). La segunda tanda de estas
La perturbación del progreso de cualquiera de las distintas fases del neuronas divide esta placa primitiva en dos, alrededor de la sép-
desarrollo cerebral conduce al retraso en el crecimiento cerebral y/o a tima SG, y da lugar a una estructura de tres capas: la capa I, que
malformaciones cerebrales. Las consecuencias funcionales para el niño contiene las neuronas Cajal-Retzius, se localiza justo debajo de
dependerán de la fase del desarrollo en cuestión, lo que nos lleva a la las meninges, la capa VI, que contiene neuronas que ya han com-
noción de períodos críticos. pletado su migración, y, por último, la subplaca (SP), una estruc-
tura temporal que se localiza bajo la futura neocorteza. Sucesivas
Producción y migración neuronal tandas de neuronas migratorias atraviesan posteriormente la SP y
las capas corticales ya depositadas, pero se detienen bajo la capa I,
La expansión de la corteza tiene lugar mediante dos procesos que acon- formando así sucesivamente las capas V, VI, III y II a lo largo de
tecen paralelamente: una expansión lateral, que permite el aumento de lo que se conoce como un gradiente «mediolateral» (Angevine y
852 © 2019. Elsevier España, S.L.U. Reservados todos los derechos

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CAPÍTULO 58 Desarrollo del sistema nervioso central 853

Sidman, 1961) (v. fig. 58.2). Hasta hace poco se pensaba que la Dichas moléculas pueden dividirse esquemáticamente en cuatro cate-
migración de las neuronas de la neocorteza se completaba alrede- gorías (Diaz y Gleeson, 2009):
dor de la SG 24 (Sidman y Rakic, 1973). Sin embargo, estudios 1. Moléculas citoesqueléticas, que desempeñan un papel importante
recientes sugieren que las interneuronas GABAérgicas continúan en el comienzo y el avance del movimiento neuronal (extensión
añadiéndose a la neocorteza prácticamente hasta el final del embarazo del ápex y nucleocinesis). Entre las moléculas que controlan el
(Xu et al., 2011), por lo que un parto prematuro puede afectar a comienzo están la filamina A (una proteína de unión a la actina
esta migración tardía (Leviton y Gressens, 2007). Curiosamente, que está implicada en las heterotopias nodulares periventriculares)
en un estudio de partos prematuros llevado a cabo en babuinos, y la Arfgef2 (una molécula que desempeña un papel en el tráfico
se demostró un enrarecimiento de las interneuronas de la corteza vesicular y participa en las heterotopias nodulares periventriculares
occipital primaria cuando se comparaba con fetos de la misma edad asociadas a microcefalia). Entre las moléculas que controlan el
gestacional (Verney et al., 2010). avance están la doblecortina (una proteína asociada a los microtú-
Se han identificado varias moléculas implicadas en el control de bulos [MAP] implicada en el síndrome de doble corteza), la Lis1
la migración neuronal y su navegación hasta los destinos apropiados. (una MAP implicada en la lisencefalia de tipo 1 y en el síndrome
de Miller-Diecker) y la tubulina α1 (involucrada en la formación
de heterodímeros de tubulina).
2. Moléculas de señalización, que desempeñan un papel en la lamina-
ción, como la reelina (una glucoproteína implicada en un trastorno
que se presenta en humanos y que combina la lisencefalia con la
hipoplasia cerebelosa).
3. Moléculas que modulan la glucosilación al proporcionar una señal
de parada a las neuronas en migración, como la POMPT1 (proteína
O-manosiltransferasa, asociada al síndrome de Walker-Warburg),
la POMGnT1 (proteína O-manosa β-1,2-N-acetilglucosaminil-
transferasa, implicada en la enfermedad músculo-ojo-cerebro) y la
fukutina (una glucosiltransferasa implicada en la distrofia muscular
congénita de Fukuyama). Estos tres trastornos humanos cursan con
lisencefalia de tipo 2.
• Figura 58.1  Representación esquemática de los principales sucesos 4. Además de por estos tres principales grupos de moléculas, la migra-
ontogénicos que tienen lugar en la neocorteza humana. ción neuronal puede estar regulada por otros factores, como ciertos
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• Figura 58.2  Ilustración esquemática de la formación de la neocorteza y la migración neuronal en los


mamíferos. I, capa cortical I o capa molecular; II a VI, capas corticales II a VI; SP, subplaca; ZG, zona
germinativa; ZI, zona intermedia (futura sustancia blanca); ZPP, zona primitiva plexiforme. Las flechas
y los círculos verdes señalan la migración neuronal.

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854 PA RT E XI I Sistema nervioso

neurotransmisores (glutamato y GABA), moléculas derivadas del resonancia magnética (Ball et al., 2013), así como a los trastornos
metabolismo peroxisómico y algunos factores ambientales (alcohol cognitivos y/o motores relacionados.
y cocaína).
Crecimiento axonal y dendrítico
Muerte neuronal programada
La morfología última de las neuronas y la formación de las conexiones
Dependiendo de la región cerebral estudiada, entre el 15 y el 50% de entre las mismas depende de complejas interacciones celulares. Las
las neuronas producidas mueren como consecuencia de un proceso neuronas maduras presentan dendritas y axones. Paralelamente, los
fisiológico denominado muerte celular programada o apoptosis. Parece axones en crecimiento migran hacia sus neuronas diana, que secretan
que, en humanos, aproximadamente el 70% de las neuronas que desa- factores quimiotácticos y moléculas de adhesión, con objeto de formar
parecen mueren entre las SG 28 y 41 (Bhutta et al., 2001). las sinapsis adecuadas. Estas moléculas quimiotácticas, que guían al
La muerte celular programada es un mecanismo complejo que axón atrayéndolo o repeliéndolo, interactúan con los receptores pre-
pone en juego un equilibrio entre las señales inductoras de muerte sentes en el cono de crecimiento y estimulan su avance o su retirada.
celular y las inductoras de su supervivencia, los programas gené- Esta interacción entre los diferentes ligandos y sus receptores conduce a
ticos involucrados en la muerte o la supervivencia celular, y los modificaciones en la concentración de calcio en el cono de crecimiento,
efectores de la muerte celular y los inhibidores de estos efectores que desempeña un papel clave en la motilidad y la orientación de
(Polleux et al., 2001). Los programas genéticos se activan mediante dicho cono. Esta fase ontogénica tiene lugar principalmente, pero no
una combinación de factores endógenos y exógenos (como refleja exclusivamente, durante la segunda mitad del embarazo y se prolonga
el término «muerte celular programada»), y son capaces de superar hasta el período posnatal.
los mecanismos de defensa propios de la neurona. Una vez que la La formación de proyecciones corticoespinales tiene lugar en las
célula muere, las células de la glía circundante la fagocitan rápida- fases iniciales desde la SP y después desde las neuronas que habitan
mente sin que ello active el proceso inflamatorio ni la formación de las capas corticales profundas (V y VI). También aparecen las proyeccio-
cicatrices. En los primeros momentos de la apoptosis se producen nes corticotalámicas, tanto desde la SP como desde las capas corticales
cambios en la composición de la membrana celular que facilitan profundas. Las proyecciones corticocorticales aparecerán más tarde.
este proceso. Dentro del proceso de muerte celular, la activación Se ha demostrado que diversos factores de transcripción (p. ej.,
de las caspasas (enzimas proteolíticas), a modo de cascada, es una Ctip2, Satb2, Fezf2) regulan las proyecciones interhemisféricas, cor-
fase clave que culmina con la fragmentación del ADN y la muerte ticotalámicas y corticoespinales de la corteza. Aunque los programas
de la neurona. genéticos controlan los mecanismos moleculares del crecimiento
Parece que la actividad eléctrica es un factor crítico para la supervi- axonal y dendrítico y determinan el patrón inicial de estas conexiones,
vencia neuronal. Durante el período de máximo crecimiento cerebral la experiencia y el entorno afinan a posteriori este patrón global para
en roedores, la administración de sustancias que bloquean la actividad generar el conjunto final de conexiones (mediante la plasticidad
eléctrica acentúa de manera importante la muerte neuronal programada cerebral).
en diversas regiones cerebrales. Estas sustancias incluyen inhibidores
del receptor del N-metil-d-aspartato (MK-801 o ketamina), agonis- Sinaptogenia
tas del receptor de la GABAA, como los antiepilépticos (fenitoína,
fenobarbital, diacepam, clonacepam, vigabatrina y ácido valproico), y Los primeros en proponer el concepto de estabilización sináptica
anestésicos (una combinación de midazolam, óxido nítrico e isoflurano) (mediante la eliminación de las sinapsis inestables) fueron Changeux
(Turski y Ikonomidou, 2012). y Edelman (Changeux y Danchin, 1976). Durante el desarrollo
cerebral hay una superproducción sistemática de sinapsis lábiles en
Organización del sistema nervioso central fases sucesivas que conduce a la redundancia de conexiones de una
manera bastante aleatoria. Esta etapa está controlada principalmente
por factores genéticos. Cada tanda de superproducción se sigue de
Neuronas de la subplaca un período de estabilización de las sinapsis que tienen un valor fun-
Las neuronas de la SP forman una estructura temporal durante el desa- cional y la eliminación de las redundantes o inútiles. Este período de
rrollo cerebral (Kostovic y Judas, 2002). Se producen alrededor de la estabilización y eliminación se ve influido fuertemente por estímulos
SG 7, y la SP propiamente dicha aparece alrededor de la SG 10. Esta ambientales y por la experiencia. En este modelo, el incremento
estructura, que se localiza bajo la placa neocortical, alcanza su máximo moderado del número de genes involucrados en la sinaptogenia
espesor entre las SG 22 y 36. durante el transcurso de la evolución ha creado un sustrato más rico
Las neuronas de la SP expresan diversos neurotransmisores, neuro­ sobre el que el entorno y la experiencia actúan para generar una red
péptidos y factores de crecimiento. Reciben sinapsis y forman cone- más compleja.
xiones con las estructuras corticales y subcorticales. Estas neuronas En la neocorteza occipital del mono se han descrito cinco tan-
desempeñan un papel importante durante el desarrollo cerebral: 1) pro­ das sucesivas de sinaptogenia (Bourgeois, 1997). Basándose en los
ducen axones para la cápsula interna, que actúan como guías para datos obtenidos de la corteza occipital humana (Lagercrantz y Rings-
las neuronas de las capas V y VI; 2) entre las SG 25 y 32, producen tedt, 2001), se ha propuesto la siguiente cronología para la corteza
axones para el cuerpo calloso, y 3) constituyen un «zona de espera» humana: 1) una primera fase que comienza en las SG 6-8 y se limita
para los axones talamocorticales (con los que establecen sinapsis) antes a las capas profundas, como la SP; 2) una segunda fase que comien-
de que estos últimos invadan la placa neocortical para alcanzar la ca­ za en las SG 12-17, con relativamente pocas sinapsis en la corteza;
pa IV. Esta área de espera es necesaria para la captación adecuada de 3) una tercera fase que comienza hacia la mitad del embarazo y termina
los aferentes talamocorticales. en torno al octavo mes de vida (esta fase se caracteriza por una tasa de
Los recién nacidos prematuros con lesiones en la sustancia blanca producción que se calcula en torno a las 40.000 nuevas sinapsis por
periventricular pueden presentar destrucción de las neuronas de la SP segundo en los monos); 4) una cuarta fase que se prolonga hasta la
(Sarnat y Flores-Sarnat, 2001), un hallazgo que se ha confirmado en pubertad y también se caracteriza por una tasa elevada de formación
modelos animales con lesiones de la sustancia blanca periventricular sináptica, y 5) una fase final que se prolonga hasta la edad adulta, pero
(McQuillen et al., 2003; Sfaello et al., 2005). Este daño de la SP que se ve enmascarada en cierta medida por la pérdida significativa de
podría contribuir a las anomalías de la conexión talamocortical que las sinapsis con la edad. En los experimentos, las dos primeras fases no
se han demostrado recientemente en lactantes prematuros mediante se ven influidas por la privación de estímulos sensoriales. La tercera

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CAPÍTULO 58 Desarrollo del sistema nervioso central 855

fase es parcialmente dependiente de los estímulos sensoriales, y la de los oligodendrocitos (Billiards, et al. 2008; Verney et al., 2010;
cuarta está controlada en gran medida por los estímulos sensoriales y Buser et al., 2012), en el que la vía Wnt juega un papel (Fancy
la experiencia. et al., 2011).
La mielinización tiene lugar durante un período prolongado, y se
mantiene durante la infancia. La cronología y el grado de mieliniza-
Proliferación, diferenciación y mielinización ción varían en las distintas estructuras cerebrales estudiadas. No se ha
de la neuroglía detectado ningún tipo de mielinización en el prosencéfalo antes del
séptimo mes de embarazo. En el telencéfalo, la mielinización es más
Astrocitos intensa durante el tercer trimestre y tras el parto, para completarse
prácticamente hacia los 2-3 años de edad. Las vías olfativa y auditiva y
Las astrocitos neocorticales tienen dos orígenes (Gressens et al., 1992). la corteza sensomotora son las primeras en mielinizarse, mientras que
Al final de la migración neuronal, los gliocitos radiales (que son células las vías de proyección y asociación (en especial la corteza prefrontal)
germinales nerviosas, además de actuar como guía en la migración neu- son las últimas (Girard et al., 2007).
ronal) se transforman en astrocitos, que residen en las capas corticales
profundas y en la sustancia blanca. Por el contrario, los astrocitos de las
capas corticales superficiales derivan fundamentalmente de precursores
Microglía
de la glía que se multiplican en la ZSV para migrar después hacia la La microglía constituye el 5-15% del total de las células cerebrales.
corteza. El trabajo reciente en roedores sugiere que la microglía cerebral
En la neocorteza humana, la proliferación de astrocitos comienza procede de una reserva de precursores monocíticos que invaden el
probablemente alrededor de la SG 24 y alcanza su pico aproxima- saco amniótico en los primeros momentos del desarrollo y, a partir
damente en las SG 26-28. Aunque se desconoce la fecha exacta en de esta reserva, se infiltran en el cerebro en desarrollo (Ginhoux
la que finaliza la producción de astrocitos, se puede suponer que la et al., 2010). En los seres humanos, durante el primer trimestre
mayor parte de esta ha acabado hacia el final del embarazo normal. del embarazo, la microglía que penetra en el cerebro presenta una
Este pico en la producción de astrocitos en las SG 26-28 puede ser morfología ameboide, que evoluciona progresivamente hacia un
de especial importancia en los recién nacidos prematuros. De hecho, fenotipo intermedio y posteriormente maduro, con un cuerpo celular
los astrocitos desempeñan varios papeles importantes, como la guía pequeño y largas prolongaciones. Hacia la mitad del embarazo, la
axonal, la estimulación del crecimiento neuronal, la formación de población microglial se detecta principalmente en los fascículos de
sinapsis, el transporte de metabolitos entre los vasos sanguíneos y la sustancia blanca, como las cápsulas interna y externa, el cuerpo
las neuronas, el establecimiento del patrón de ciertas estructuras calloso y los cruces axónicos (Monier et al., 2007). Es precisamente
cerebrales, la producción de componentes de la matriz extracelular, en estas regiones de gran densidad microglial donde los lactantes
la producción de factores tróficos, la supervivencia neuronal, la prematuros desarrollan la mayoría de las lesiones de la sustancia
mielinización y el mantenimiento de la barrera hematoencefálica. blanca (Verney et al., 2010). Los datos de laboratorio apoyan la
Por ejemplo, se ha visto que el bloqueo temporal de la producción hipótesis de que la microglía desempeña un papel importante en el
de astrocitos en la neocorteza de roedores, llevado a cabo en experi- origen de estas lesiones (Tahraoui et al., 2001). Los experimentos
mentos, induce un aumento en la muerte celular programada de las demuestran que, durante el desarrollo cerebral, estas células parti-
neuronas y cambios a largo plazo en el equipo sináptico neocortical cipan de manera significativa en los fenómenos fisiológicos de la
(Zupan et al., 2000). remodelación sináptica y neurítica (Graeber, 2010). Se desconoce
la manera en la que el síndrome de respuesta inflamatoria fetal, que
induce la activación de la microglía, influye en estos fenómenos
Oligodendrocitos y mielinización propios del desarrollo.
Los oligodendrocitos pueden dividirse en cuatro tipos dependiendo
del grado de maduración: Entorno y epigenética
1. Los precursores de los oligodendrocitos que se producen en la ZSV
son bipolares, con mitosis activas. Su diferenciación en preoligoden- Las diferentes fases del desarrollo cerebral están controladas minuciosa-
drocitos se produce durante su migración hacia la futura/supuesta mente por diversos programas genéticos. Sin embargo, la experiencia,
sustancia blanca. el entorno o la estimulación pueden regular, adaptar o refinar el patrón
2. Los preoligodendrocitos son células multipolares que conservan su inicial para permitir al cerebro adaptarse al entorno. Estos procesos
capacidad proliferativa. Este segundo tipo celular predomina en adaptativos son la expresión de la gran plasticidad del cerebro en desa-
la sustancia blanca periventricular durante la segunda mitad del rrollo y permiten adquirir nuevas habilidades durante la infancia y la
embarazo. adolescencia. Esto ocurre incluso en las fases del desarrollo que en un
3. Los oligodendrocitos inmaduros son células multipolares que apa- principio se supusieron casi exclusivamente controladas por la progra-
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recen durante el tercer trimestre y envuelven a los axones como mación genética, como la proliferación de los precursores neuronales.
preparación para su mielinización. Los estudios experimentales han demostrado que un factor materno
4. La última fase es la diferenciación en oligodendrocitos maduros (péptido intestinal vasoactivo) puede cambiar la capacidad prolifera-
mielinizados y extremadamente multipolares. tiva de estos precursores hasta en un 20% (Passemard et al., 2011).
Los precursores de los oligodendrocitos y los preoligodendroci- Sin embargo, el entorno también puede tener efectos nocivos en la
tos, las variedades predominantes en el cerebro de los recién nacidos maduración cerebral. En particular, los recién nacidos prematuros
prematuros, son extremadamente vulnerables al estrés oxidativo, la están expuestos a numerosos estímulos que un feto de la misma edad
cascada excitotóxica y las alteraciones hipóxicas e isquémicas (Vol- no recibe o recibe tan solo esporádicamente, como una estimulación
pe, 2001). Se ha relacionado la muerte de los preoligodendrocitos sensorial excesiva o repetida, estímulos dolorosos, estrés, diversos fár-
con la leucomalacia periventricular quística. La incidencia de este macos neuroactivos, al tiempo que se le priva repentinamente de los
tipo de lesiones graves ha ido disminuyendo progresivamente, para factores maternos y placentarios. Cualquier factor ambiental o fármaco
ser remplazada por lesiones más difusas (Ferriero y Miller, 2010). con efecto sobre el cerebro es capaz de alterar algunas o muchas fases
Recientes datos neuropatológicos y experimentales sugieren que, de su desarrollo.
en este nuevo tipo de lesión de la sustancia blanca en los lactantes Los principales mecanismos por los que estos factores ambientales
prematuros, el fenómeno primario es un bloqueo en la maduración (positivos o negativos) actúan en la maduración cerebral dependen de

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856 PA RT E XI I Sistema nervioso

los sucesos epigenéticos que controlan la organización y la compacta- integridad del cerebro adulto (como BDNF, Reelina y GAD67) (Graff
ción del genoma y, por tanto, la expresión de los genes. Los cromo- et al., 2011). Por tanto, las mujeres que padecen depresión o tras-
somas en los eucariotas son el resultado de un complejo denominado tornos de ansiedad durante el tercer trimestre del embarazo dan a luz
cromatina, formado por ADN y una vaina proteínica, cuya unidad a recién nacidos en los que la región promotora del gen del receptor del
básica es el nucleosoma, alrededor del cual se dispone el ADN. Cada glucocorticoide está hipermetilado. Además, la plasticidad neuronal,
nucleosoma está compuesto por un octámero de histonas (H2A, H2B, el aprendizaje y la memoria dependen de sucesos epigenéticos y, en
H3 y H4). La compactación del ADN –y, por tanto, la accesibilidad especial, la actividad neuronal modifica los patrones de la metilación
de la información genética para los mecanismos de transcripción– está del ADN (Guo et al., 2011).
regulada, por un lado, por las modificaciones covalentes del ADN y, En resumen, se podría hablar de «neuroepigenética» y todo lo que
por otro, por las modificaciones postranslacionales que decoran las esta puede suponer en términos de futuras posibilidades terapéuticas,
regiones N-terminales (colas) de las histonas (acetilación, fosforilación ya que un conocimiento profundo de los sucesos epigenéticos y su
y metilación). La combinación de estos dos tipos de sucesos gobierna reversibilidad abre la puerta a la búsqueda de compuestos que consigan
la apertura o el cierre de la cromatina (y, por tanto, la transcripción o remodelar el epigenoma del cerebro y reprogramar las células nerviosas.
la represión del gen en cuestión). En este contexto, resulta interesante destacar que se han utilizado
La metilación del ADN en los islotes CpG localizados en las ampliamente dietas pobres en metionina (el precursor de la SAM) y
regiones que regulan la transcripción de los genes inhibe su trans- los inhibidores de HDAC (como el ácido valproico) para los trastornos
cripción al bloquear la unión de los factores de transcripción al ADN psiquiátricos como la esquizofrenia o el trastorno bipolar, así como en
(Jones, 2012). Las metiltransferasas del ADN catalizan la metilación diversas formas de adicción (Graff et al., 2011).
del ADN mediante la S-adenosilmetionina (SAM), que dona un grupo
metilo. Además, la información añadida mediante la metilación del Lecturas recomendadas
ADN es «leída» y «traducida» por proteínas que reconocen el ADN
metilado, las proteínas de unión a metil-CpG (MBP). Estas MBP Ball G, Boardman JP, Aljabar P, et al. The influence of preterm birth on the
reclutan histonas desacetilasas (HDAC) (que constituyen así el enlace developing thalamocortical connectome. Cortex 2013;49:1711-1721.
entre la metilación del ADN y las modificaciones postranslacionales de Bystron I, Blakemore C, Rakic P. Development of the human cerebral cor-
histonas), así como otros remodeladores de la cromatina, y contribuyen tex: Boulder Committee revisited. Nat Rev Neurosci 2008;9:110-122.
al establecimiento de la cromatina transcripcionalmente inactiva. El Diaz AL, Gleeson JG. The molecular and genetic mechanisms of neocortex
papel crucial de la acetilación de las histonas en el desarrollo del cerebro development. Clin Perinatol 2009;36:503-512.
se ve, por ejemplo, en el papel de la proteína de unión a CREB (CBP), Ferriero DM, Miller SP. Imaging selective vulnerability in the developing
una histona acetiltransferasa cuya mutación en el estado heterocigótico nervous system. J Anat 2010;217:429-435.
es característica del síndrome de Rubinstein-Taybi en humanos y Fietz SA, Huttner WB. Cortical progenitor expansion, self-renewal
conduce a anomalías en la formación de circunvoluciones corticales, and neurogenesis—a polarized perspective. Curr Opin Neurobiol
una reducción de la sustancia blanca y una hipoplasia regional que se 2011;21:23-35.
relaciona con un retraso intelectual (Graff et al., 2011). Graff J, Kim D, Dobbin MM, Tsai LH. Epigenetic regulation of gene
Cabe destacar que el grado de metilación del ADN es mucho mayor expression in physiological and pathological brain processes. Physiol
Rev 2011;91:603-649.
en el cerebro que en otros tejidos y es básico para el desarrollo cerebral
Jones PA. Functions of DNA methylation: islands, start sites, gene bodies
en ratones (Jones, 2012). La metilación del ADN afecta especialmente
and beyond. Nat Rev Genet 2012;13:484-492.
a la diferenciación y la supervivencia neuronal y al «arranque» de la Lagercrantz H, Ringstedt T. Organization of the neuronal circuits in
neurogenia/gliogenia. En humanos, son varios los síndromes que the central nervous system during development. Acta Paediatr
incluyen un retraso intelectual cuyo origen embrionario está ligado 2001;90:707-715.
a la vía de metilación del ADN. Este es el caso del síndrome de Rett, Leviton A, Gressens P. Neuronal damage accompanies perinatal white-
que se asocia a mutaciones de la MBP MeCP2, y del síndrome de matter damage. Trends Neurosci 2007;30:473-478.
inmunodeficiencia, inestabilidad de la región centromérica y dismorfia Monier A, Adle-Biassette H, Delezoide AL, et al. Entry and distribution
facial, causado por mutaciones en el Dnmt3b (Xu et al., 1999; Graff of microglial cells in human embryonic and fetal cerebral cortex.
et al., 2011). J Neuropathol Exp Neurol 2007;66:372-382.
Por último, múltiples genes improntados (es decir, aquellos cuya Nieuwenhuys R, Voogd J, van Huijzen C. The Human Central Nervous
expresión depende únicamente del alelo paterno o materno), que se System. 4th ed. Springer-Verlag Berlin and Heidelberg GmbH & Co;
ven afectados por la regulación epigenética, se expresan en el cerebro, y 2007:7-59.
una mala regulación de su expresión se asocia con frecuencia a retraso Turski CA, Ikonomidou C. Neuropathological sequelae of developmental
intelectual. Este es el caso, por ejemplo, de los síndromes de desarrollo exposure to antiepileptic and anesthetic drugs. Front Neurol 2012;3:120.
neural de Prader-Willi y de Angelman (Chamberlain y Lalande, 2010).
Curiosamente, el sufrimiento fetal modifica el patrón de metilación La bibliografía completa utilizada en este capítulo puede consultarse online
del ADN de los genes clave que participan en el desarrollo neural y la en www.expertconsult.com

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CAPÍTULO 58 Desarrollo del sistema nervioso central 856.e1

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856.e2 PARTE XII Sistema nervioso

Palabras clave
Desarrollo cerebral
Sinaptogenia
Neurología
Microglía
Mielinización

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59
Anomalías congénitas del sistema
nervioso central
SARAH BAUER HUANG Y DAN DOH ERTY

PUNTOS CLAVE las semanas quinta y sexta del desarrollo embrionario, la estructura del
prosencéfalo se define por su división en tres planos principales. A me­
• Las malformaciones cerebrales son una causa importante de morbilidad dida que el neuroporo anterior se cierra, el primer evento importante
y muerte en los neonatos. es la formación de las vesículas ópticas y las placas nasales, separadas
• En la actualidad, los avances en la radiología y la genética permiten por el plano horizontal. Cuando el embrión ha alcanzado una longitud
diagnósticos más específicos. de unos 5 mm, ambos neuroporos se han cerrado, aislando el sistema
• El diagnóstico precoz y específico permite una estimación más precisa ventricular en desarrollo del líquido amniótico. Las placas retiniana
del pronóstico, la obtención de datos comunes, una mejor vigilancia y óptica también se desarrollan en este momento. En el romboencé­
para la detección de complicaciones y una guía para el tratamiento.
falo, comienza a formarse el cerebelo, junto con los núcleos eferentes
• El diagnóstico y el tratamiento precoz de los pacientes con
somático y visceral, la vía aferente común y los ganglios de la mayoría
malformaciones cerebrales exige la participación de un equipo
multidisciplinario.
de los nervios craneales. Alrededor del día 32 de gestación, cuando el
embrión tiene unos 5-7 mm de longitud, el prosencéfalo se divide a
lo largo del plano sagital para dar lugar a las estructuras parejas. Áreas
específicas, como el hipotálamo, el núcleo amigdalino, el hipocampo y
la región olfatoria, pueden definirse en este momento. El tercer suceso

E
ste capítulo se centra en las malformaciones congénitas del sis­ importante en el desarrollo del prosencéfalo tiene lugar poco después,
tema nervioso central (SNC), incluidos los trastornos embrio­ cuando este se divide a lo largo del plano frontal. Como resultado,
narios de la médula espinal, y el prosencéfalo, el mesencéfalo el telencéfalo se separa del diencéfalo, y se definen el epitálamo, el
y el romboencéfalo. Siempre que sea posible, se usarán ejemplos de subtálamo y el hipotálamo. Durante lo que queda del segundo mes y
imágenes del período fetal o neonatal para exponer estas anomalías. el tercer mes de gestación, se forman múltiples estructuras mediales,
En cada epígrafe se revisará la embriología relevante, discutiremos como el cuerpo calloso, los surcos anterior y del hipocampo, los nervios
los factores de riesgo genéticos o ambientales que se conocen y se ópticos, el quiasma óptico y el hipotálamo.
discutirá brevemente el tratamiento, si corresponde. La clasificación
de las malformaciones cerebrales ha ido cambiando con el tiempo.
Las primeras categorías se basaban exclusivamente en las caracterís­ Anomalías de las estructuras derivadas
ticas clínicas y patológicas. La radiología encefálica ha mejorado del prosencéfalo
enormemente nuestra capacidad para distinguir las distintas mal­
formaciones, seguida por importantes avances en genética y por el Las alteraciones en el desarrollo del prosencéfalo incluyen algunas
esclarecimiento de los mecanismos moleculares. Las clasificaciones malformaciones graves, como la atelencefalia, la aprosencefalia y la
continuarán cambiando con los futuros avances en todas estas estas holoprosencefalia (HPE). Defectos más leves son la agenesia del cuerpo
áreas. calloso (ACC), la displasia septoóptica (DSO) y la ausencia aislada de
la cavidad del septo pelúcido (CSP).

División prosencefálica y sucesos


Aprosencefalia y atelencefalia
relacionados
La aprosencefalia y la atelencefalia son dos anomalías cerebrales poco
Desarrollo prosencefálico normal frecuentes y muy graves. En la aprosencefalia no se desarrollan ni las
estructuras prosencefálicas ni las diencefálicas. En la atelencefalia se
El prosencéfalo corresponde a la región anterior del encéfalo maduro, e conserva un prosencéfalo rudimentario. Las anomalías craneofaciales
incluye el telencéfalo y el diencéfalo, estructuras que darán lugar a los son secundarias a la deformidad más que a la malformación (Siebert
hemisferios cerebrales y al tálamo y al hipotálamo. El prosencéfalo se et al., 1987). Estos trastornos pueden ser el resultado de la heren­
desarrolla tras el cierre del neuroporo anterior, gracias a procesos que cia autosómica recesiva de una anomalía del cromosoma 13 (Ippel
inducen la bifurcación del polo cefálico del tubo neural (fig. 59.1), et al., 1998). También se han descrito aprosencefalia o atelencefalia en
que se encuentra lleno de líquido, para formar las estructuras derechas una familia con mutaciones en el gen SIX, que también se ha asociado
e izquierdas del prosencéfalo (Rubenstein y Beachy, 1998). Durante a HPE (Pasquier et al., 2005). Generalmente, estas anomalías se

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858 PA RT E XI I Sistema nervioso

• Figura 59.1  Formación del tubo neural. A. Durante la gastrulación, en la fase de placa neural, la pola­
ridad dorsoventral y la regionalización anteroposterior temprana se definen por un proceso de inducción
vertical estimulado por el factor de crecimiento fibroblástico 8 y otros factores (flechas largas grises)
derivados del mesodermo (notocordio y placa precordal). La inducción neural plana tiene lugar gracias
a las proteínas morfogénicas óseas (BMP) y a los inhibidores de estas que se derivan del ectodermo
lateral (flechas cortas gris claro) y el nódulo de Hensen (flechas cortas gris oscuro), respectivamente.
B. Continúa el proceso de neurulación con la aproximación de los pliegues neurales hacia la línea media
dorsal. Antes del cierre del tubo neural, las células de la cresta neural se diseminan y migran alejándose
de los pliegues neurales. Los factores dorsalizantes (BMP; flecha gris oscuro), que proceden de la zona
dorsal medial de la placa cefálica (PC), y los factores ventralizantes (sonic hedgehog [SHH]; flecha
gris claro), de la placa podálica (PP), establecen gradientes dorsoventrales para estas moléculas de
señalización clave que inducen la formación de la placa alar (PA) y la placa basal (PB) desde la pared
lateral del tubo neural. (Adaptado de Vieira C, Pombero A, García-Lopez R, Gimeno L, Echevarria D,
Martínez S. Molecular mechanisms controlling brain development: an overview of neuroepithelial secondary
organizers. Int J Dev Biol. 2010;54:7–20, por cortesía del Dr. Salvador Martínez,Instituto de Neurociencias,
Universidad Miguel Hernández, San Juan de Alicante, España.)

diagnostican durante el embarazo mediante ecografía y resonancia Holoprosencefalia


magnética (RM) fetal (Nagaraj et al., 2016). Aunque estas anomalías
se consideran «mortales», es importante que el neonatólogo esté La HPE incluye un abanico de anomalías en el desarrollo del prosencé­
preparado para tratar a recién nacidos con malformaciones graves falo y es la malformación cerebral más habitual (Norman et al., 1995;
que vivan más de lo esperado o a los que incluso se les dé el alta Barr y Cohen, 1999), aunque la mayoría de los fetos afectados se
hospitalaria. pierden en los primeros estadios de la gestación. La HPE supone la

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CAPÍTULO 59 Anomalías congénitas del sistema nervioso central 859

• Figura 59.2  Espectro de holoprosencefalia confirmada por reso­


nancia magnética. A y B. Resonancia magnética (RM) cerebral en
un paciente con holoprosencefalia alobular. El corte axial ponderado
en T1 (A) revela la ausencia de separación de los dos hemisferios y
núcleos grises profundos. Se observa un quiste dorsal (qd) de gran
tamaño en la región posterior. El corte sagital ponderado en T1 (B)
revela un ventrículo único (vu) en la línea media que se comunica en
la región posterior con el quiste dorsal (qd). C y D. RM de un paciente
con holoprosencefalia semilobular. El corte axial ponderado en T2 (C)
indica la separación de los hemisferios en la región posterior, pero no
en la anterior. Los cuernos anteriores de los ventrículos laterales están
ausentes, mientras que los cuernos posteriores están bien formados y
separados. Obsérvese la formación de un quiste dorsal (qd) posterior.
También hay una separación incompleta de los ganglios basales. El
corte frontal ponderado en T2 (D) revela una carencia de hendidura
interhemisférica y un ventrículo único (vu). E y F. RM cerebral en un
paciente con holoprosencefalia lobular. El corte axial ponderado en T1
(E) revela que los dos hemisferios están bastante bien separados, como
se comprueba por la presencia de una hendidura interhemisférica tanto
anterior como posterior. Obsérvese que los cuernos frontales de los
ventrículos laterales son únicamente rudimentarios (puntas de flecha
negras). El corte frontal ponderado en T1 (F) documenta la separación
incompleta de los lóbulos frontales inferiores cerca de la línea media.
G y H. RM cerebral en un paciente con la variante interhemisférica medial
de la holoprosencefalia. Los cortes axial (G) y frontal (H) ponderados
en T1 demuestran la continuidad de la sustancia gris en los lóbulos
frontales posteriores a través de la línea media (flechas). (Tomado de
Hahn SJ, Plawner LL. Evaluation and management of children with holo-
prosencephaly. Pediatr Neurol. 2004;31:79–88.)

olfativas, el cuerpo calloso, el surco anterior y los nervios ópticos.


Además, las estructuras mediales profundas, como los ganglios basales,
el hipotálamo y las estructuras talámicas, están fusionadas, y también
puede haber malformaciones vasculares (Winter et al., 2015). En las
formas semilobulares y lobulares, más leves, también hay hemisferios
diferenciados y una porción del cuerpo calloso posterior. Es sugestiva
de formas semilobulares una fusión de los lóbulos frontales de más de
un 50%, y una posible fusión del tálamo y el hipotálamo. La HPE
lobular se asocia a una fisura a lo largo de la casi totalidad de la línea
media y la separación o la casi completa separación del tálamo y la
ausencia de la CSP. Se ha descrito una variante hemisférica intermedia,
en la que los lóbulos posteriores frontal y parietal no se separan, lo que
provoca la ausencia del cuerpo calloso (Barkovich y Quint, 1993; Lewis
et al., 2002). Generalmente, los pacientes con la variante interhemis­
férica intermedia no se identifican en el período neonatal a menos
que dicha variante se haya diagnosticado durante el embarazo. Por
último, se ha sugerido un tipo septopreóptico, donde la ausencia de
separación se limita a las áreas septal y preóptica (revisado en Solomon
et al., 2013).
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Diagnóstico
Gracias a la llegada de la ecografía prenatal, suele identificarse a los
pacientes con HPE antes del nacimiento. La HPE alobular puede
separación incompleta del prosencéfalo, en un grado variable, a lo largo identificarse ya en la semana 10 de gestación y puede identificarse de
de uno o más de los tres planos principales (discutidos anteriormente). manera fiable hacia la semana 14. Son habituales los falsos positivos
La clasificación de DeMyer incluye las divisiones «alobular», «semilo­ en la ecografía (Kaliaperumal et al., 2016), por lo que la RM fetal
bular» y «lobular» (DeMyer et al., 1964), y un subtipo interhemisférico puede ser muy útil para aclarar el diagnóstico y la gravedad de la mal­
menos grave, al que también se denomina sintelencefalia, aunque puede formación, especialmente si se plantea la interrupción del embarazo.
ser difícil clasificar la HPE en un determinado paciente. En la HPE Hallazgos sutiles, como la ausencia de la CSP, pueden sugerir formas
alobular (fig. 59.2) hay un ventrículo anterior único incluido en una leves de HPE, aunque la ausencia de la CSP puede aparecer como
holoesfera con una ausencia completa de separación del prosencéfalo. hallazgo único o asociarse a ACC (Winter et al., 2015). Dada la elevada
Las anomalías alobulares pueden clasificarse mediante pruebas radio­ tasa de anomalías cromosómicas, está indicada la amniocentesis para la
lógicas fetales. Dependiendo de la gravedad de la anomalía, pueden selección de cromosomas y la posible secuenciación del ADN (Solomon
estar afectadas otras estructuras mediales, como el bulbo o las vías et al., 2013).

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860 PA RT E XI I Sistema nervioso

Manifestaciones clínicas ponsables hasta de un 25% de las formas sindrómicas (p. ej., síndromes
Hasta el 80% de los niños con HPE presentan una anomalía craneofa­ de Smith-Lemli-Opitz, Meckel, Rubinstein-Taybi, Kallmann y Pallis­
cial (revisada por Solomon et al., 2013). Los hallazgos pueden oscilar ter-Hall) (Muenke y Beachy, 2000). Se han identificado claramente
entre ciclopía (un ojo central único), con una estructura similar a la seis genes que causan HPE aislada: SHH, ZIC2, SIX3, TGIF, GLI2 y
nariz (probóscide) sobre el ojo, pasando por la cebocefalia (una única PTCH1. SHH es responsable hasta del 40% de los casos congénitos
fosa nasal aplanada que se sitúa en posición central entre los ojos), hasta de HPE (Roessler et al., 1996; Nanni et al., 1999).
el labio leporino medial. Los casos leves pueden presentar un hipote­
lorismo o un incisivo central único. El concepto de «la cara predice el Variabilidad genotipo-fenotipo
cerebro» hace referencia al hecho de que las malformaciones faciales La HPE se caracteriza por una extrema variabilidad intrafamiliar. Los
más graves se asocian con frecuencia a las malformaciones cerebra­ miembros de la familia asintomáticos o con afectación leve pueden ser
les más graves. Así, los pacientes con HPE alobular pueden tener caras portadores de la deleción de un gen asociado a la HPE, mientras que, en
normales, mientras que los que padecen HPE lobulares o semilobulares una generación posterior, la descendencia con la misma carencia puede
pueden presentar malformaciones faciales graves (DeMyer et al., 1964; presentar una afectación grave. La penetrancia incompleta puede dar
Cohen, 1989; Plawner et al., 2002). lugar a «microformas», como el hipotelorismo, la hipoplasia hemifacial
Los recién nacidos con HPE presentan bajo tono muscular y micro­ o un incisivo central único (revisado por Petryk et al., 2015). Una de las
cefalia, a menos que aparezca hidrocefalia (Hahn y Plawner, 2004) explicaciones de estas observaciones se extrae de estudios que sugieren
debido al bloqueo del flujo de líquido cefalorraquídeo (LCR) a través que el modo de transmisión de la HPE puede ser multigénico (Ming
del tálamo fusionado, y esta se acompaña a menudo de un quiste y Muenke, 2002). La expresión del fenotipo de la HPE en una misma
dorsal de gran tamaño (Simon et al., 2001). Las derivaciones ventri­ familia puede estar influida por la participación de múltiples factores
culoperitoneales pueden aliviar los síntomas del aumento de la presión genéticos y de efectos ambientales o teratógenos.
intracraneal (Levey et al., 2010). Con el paso del tiempo, los pacientes Han aparecido algunas correlaciones entre el genotipo y el fenotipo.
pueden desarrollar espasticidad y distonía. Es frecuente la disfunción Los pacientes con mutaciones en el gen ZIC2 pueden presentar una
oromotora, y muchos niños con HPE precisan alimentación por sonda. apariencia facial característica (estrechamiento bitemporal, fisuras
Como ocurre con otras anomalías del mesencéfalo, las anomalías palpebrales ascendentes, orejas grandes y una nariz pequeña con las
endocrinas son muy habituales. La diabetes insípida se presenta has­ fosas nasales invertidas). Parece que las mutaciones del ZIC2 también
ta en el 70% de los pacientes, mientras que el hipotiroidismo, la son las mutaciones de nueva aparición más habituales y tienen una
insuficiencia suprarrenal y el déficit de la hormona del crecimiento penetrancia elevada (Solomon, Gropman y Muenke, 2013).
son menos frecuentes (Hahn et al., 2005). Estas anomalías endocrinas
pueden desarrollarse con el tiempo, por lo que precisan una vigilancia
periódica. La disfunción hipotalámica también puede provocar tras­ Factores ambientales
tornos del sueño, de la regulación de la temperatura, del apetito y Los factores ambientales (p. ej., alcohol, toxicidad de la vitamina A)
de la sed. pueden producir ciclopía durante la primera fase de la gastrulación.
Tan solo el 40% de los niños presentan epilepsia, aunque solo un Una diabetes mellitus materna aumenta el riesgo de HPE hasta afectar a
tercio de estos presentarán epilepsia incurable (Plawner et al., 2002; alrededor del 1-2% de todos los embarazos. Se han relacionado los fár­
Levey et al., 2010). Las convulsiones también pueden estar provocadas macos que reducen el colesterol con la HPE (Edison y Muenke, 2003),
por anomalías endocrinas, como la hipernatremia o la hipoglucemia. presuntamente por sus efectos en la señalización del SHH. El síndrome
Dado el amplio abanico de posibles problemas médicos, la atención de Smith-Lemli-Opitz se debe a un defecto en el último paso de la
de estos niños requerirá un enfoque multidisciplinario, así como una biosíntesis del colesterol, y la HPE se expresa en alrededor del 5% de
vigilancia continuada para la detección de posibles complicaciones, los individuos afectados. Además, la ingestión de alcaloides vegetales
como la hidrocefalia, las convulsiones y la insuficiencia hipofisaria. ha causado epidemias de ciclopía en ovejas mediante procesos que
El pronóstico dependerá de la gravedad de la anomalía, la afectación inhiben la biosíntesis del colesterol. Algunos estudios de caso o estudios
de otros órganos y la causa genética (Winter et al., 2015). La muerte en animales han sugerido la asociación con otros factores ambientales
fetal o neonatal es habitual en la mayoría de los individuos con anoma­ (infección por citomegalovirus [CMV], fármacos y tecnologías de
lías cromosómicas (Croen et al., 1996). Por el contrario, más del 50% reproducción asistida) (revisado por Petryk et al., 2015).
de los pacientes con cualquier tipo de HPE, pero citogenéticamente
normales, continúan vivos a los 12 meses (Olsen et al., 1997; Barr y
Cohen, 1999), y se han descrito casos de supervivencia hasta la adoles­ Agenesia del cuerpo calloso
cencia tardía y la edad adulta (Plawner et al., 2002; Levey et al., 2010).
El cuerpo calloso consta aproximadamente de 190 millones de axones y
se forma gracias a un complejo proceso de diversos pasos que supone la
Epidemiología y etiología proliferación y la migración celular, el crecimiento axónico y un patrón
La prevalencia de HPE oscila entre 1 de cada 10.000 y 1 de cada medial (Raybaud, 2010). La formación del cuerpo calloso está media­
20.000 nacidos vivos (Croen et al., 1996; Rasmussen et al., 1996; da por múltiples genes y tarda al menos 11 semanas en completarse
Croen et al., 2000; Orioli y Castilla, 2010). La prevalencia es mayor (O’Driscoll et al., 2010). Su desarrollo continúa durante la adoles­
en embriones y fetos resultantes de abortos, y ocurre hasta en 50 de cencia, cuando estas conexiones se afinan (Palmer y Mowat, 2014).
cada 10.000 embarazos. La formación del cuerpo calloso se ve influida por factores genéticos
La causa de la HPE es multifactorial, con la influencia tanto de y ambientales, y puede causar una ACC completa o hipoplasia. Los
factores genéticos como ambientales en el amplio abanico de presenta­ síndromes congénitos asociados a ACC también presentan malforma­
ciones (Norman et al., 1995; Golden, 1998; Muenke y Beachy, 2000). ciones adicionales, como hipoplasia cerebelosa, microcefalia y poli­
Hasta el 45% de las HPE se deben a anomalías cromosómicas detecta­ microgiria (PMG) (O’Driscoll et al., 2010).
bles mediante un cariotipo estándar (Winter et al., 2015). Las anoma­ La ACC da como resultado la formación de circunvoluciones anó­
lías cromosómicas más habituales son las trisomías 13 y 18 (Solomon malas en la porción medial de cada hemisferio, la eversión de la cir­
et al., 2010c). Las micromatrices cromosómicas pueden identificar cunvolución del cíngulo y la formación de surcos perpendiculares al eje
variantes del número de copias más pequeñas en el 10-20% de los longitudinal del hemisferio (Barkovich y Norman, 1988). Los ángulos
individuos con HPE y cariotipo normal (Bendavid et al., 2009). La externos del ventrículo lateral tienen una orientación paralela y ascen­
HPE se ha asociado a mutaciones al menos en 14 genes, que son res­ dente, y los fondos de saco están muy separados. Si están presentes, un

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CAPÍTULO 59 Anomalías congénitas del sistema nervioso central 861

rasgo distintivo útil son los haces de Probst (fig. 59.3), que son haces abstracto, la resolución de problemas y la fluidez categorial (Fischer
de fibras que discurren paralelas al ventrículo en dirección anteropos­ et al., 1992; David et al., 1993). Se ha demostrado la dificultad con
terior. La ACC puede ser parcial, y generalmente supone la pérdida de tareas lingüísticas más complejas, como la comprensión de la sintaxis y
los segmentos posteriores (Schaefer et al., 1991; Roessmann, 1995). la pragmática lingüística (Banich y Brown, 2000). Estos hallazgos restan
Además de la ACC, puede haber hallazgos adicionales, como quistes valor a la necesidad de un seguimiento continuado de las dificultades
o lipomas (v. fig. 59.3). Entre las anomalías del SNC que se observan en el aprendizaje y en el lenguaje en estos pacientes.
en relación con la ACC se encuentran la heterotopia y anomalías en la
formación de los surcos, las hendiduras y la sustancia blanca, así como
malformaciones de la fosa posterior (Hetts et al., 2006). Displasia septoóptica
La DSO clásica es una tríada compuesta por ausencia del septo pelúci­
Epidemiología y etiología do, hipoplasia del nervio óptico y disfunción hipofisaria. El diagnóstico
La prevalencia de la ACC oscila entre 0,5 de cada 10.000 indivi­ de DSO se establece cuando aparecen dos o más rasgos de la tríada
duos en la población general y 600 de cada 10.000 individuos en (Webb y Dattani, 2010), aunque el 30% de los pacientes presentan
niños con alteraciones del desarrollo nervioso (revisado por Palmer los tres rasgos (Morishima y Aranoff, 1986). La DSO es un grupo de
y Mowat, 2014). La ACC también puede asociarse a infecciones trastornos muy diversos a nivel clínico y etiológico, y se solapa con la
prenatales, problemas vasculares y efectos teratógenos (Palmer y hipoplasia aislada del nervio óptico (Garcia-Filion y Borchert, 2013).
Mowat, 2014). Sin embargo, la infección suele provocar adelgazamien­ Esta diversidad hace difícil proporcionar información sobre el pronós­
to más que agenesia, y es una causa poco frecuente de ACC aislada. tico y los problemas médicos asociados.
La exposición al alcohol muestra la mayor asociación a la ACC, que
se ha descrito en el 7% de los niños con síndrome alcohólico fetal en
una serie (Roebuck et al., 1998).
Diagnóstico y pronóstico
La ACC es un hallazgo en cientos de trastornos diferentes, y se han Durante el embarazo, puede sospecharse DSO en fetos sin CSP o con
observado todos los tipos de transmisión hereditaria. Glass et al. (2008) ACC, aunque la mayoría de los que únicamente carecen de CSP no
descubrieron que las anomalías del cuerpo calloso estaban asociadas a presentan DSO, lo que supone un reto para el consejo de la embara­
anomalías cromosómicas en un 17% de los casos, habitualmente aneu­ zada. Tras el nacimiento, puede sospecharse DSO en un paciente con
ploidía (cromosomas 13, 18 y 21). La ACC puede asociarse con varian­ retraso en el crecimiento, anomalías visuales o anomalías genitales.
tes del número de copias, bien heredadas, bien de nueva aparición, y El diagnóstico precoz es importante para reducir el riesgo de insufi­
algunas de ellas coinciden con las que se encuentran en los pacientes ciencia suprarrenal aguda e hipoglucemia, y exige una RM cerebral,
con autismo (Sajan et al., 2013). La ACC es además un rasgo primario una exploración oftálmica y pruebas analíticas para la valoración de la
de varios trastornos importantes, como el síndrome de Mowat-Wilson, insuficiencia hipofisaria.
el de Aicardi y el acrocalloso, la paraplejía espástica relacionada con la Los niños con DSO pueden estar ciegos o tener déficits visuales,
L1CAM y la lisencefalia ligada al cromosoma X con ACC y genitales como mirada errante, nistagmo o estrabismo. El pronóstico del desa­
ambiguos. Dado el número de síndromes congénitos asociados a la rrollo nervioso es controvertido y puede depender de la presencia
ACC, Palmer et al. (2014) han sugerido una subdivisión en grupos de otras anomalías cerebrales. En los primeros estudios se detectó
basada en las enfermedades asociadas (craneofaciales, metabólicas, parálisis cerebral en el 57% de los niños con DSO, retraso intelectual
oculares o ciliopatías), lo que ayuda a la evaluación diagnóstica de en el 71%, epilepsia en el 37% y trastornos del comportamiento en
estos pacientes. el 20% (Acers, 1981; Margalith et al., 1984). Un estudio posterior
Durante el embarazo, la realización de una RM fetal en las semanas sobre el desarrollo nervioso de siete niños con hipoplasia unilateral o
20-22 de gestación maximiza la detección de otras anomalías cerebrales, bilateral del nervio óptico en ausencia de la CSP describió un desarrollo
cuando aún puede decidirse sobre la interrupción del embarazo. La cognitivo normal, un estado neurológico intacto, un desarrollo normal
realización de la RM antes de este momento del embarazo arroja más del lenguaje y un comportamiento adecuado para su edad en seis de los
falsos negativos y algunos cambios estructurales pasan desapercibidos. siete niños (Williams et al., 1993). Por el contrario, una serie descriptiva
Otras opciones diagnósticas son las pruebas genéticas (micromatrices de tres niños con displasia cortical además de DSO mostró hallazgos
cromosómicas, ADN fetal libre de células) e infecciosas (serologías, patológicos en la exploración neurológica y del desarrollo de los tres
reacción en cadena de la polimerasa en el líquido amniótico). Dadas (Miller et al., 2000). El seguimiento de estos niños deben realizarlo
las dificultades de lograr un diagnóstico prenatal preciso, debe reali­ especialistas en desarrollo, neurología, endocrinología y oftalmología.
zarse una RM cerebral al recién nacido poco después del nacimiento Se observa insuficiencia hipofisaria hasta en el 80% de los pacientes,
(cuando aún no es necesaria sedación) y debe consultarse con otras y el déficit de la hormona de crecimiento es el déficit más común. Es
especialidades (neurología, oftalmología, genética, pediatría del desa­ necesario un seguimiento de por vida, ya que la insuficiencia hipofisaria
rrollo, otorrinolaringología). Debe contemplarse la realización de empeora con el tiempo (Webb y Dattani, 2010).
pruebas analíticas (micromatrices cromosómicas, secuenciación del
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ADN y pruebas metabólicas) dependiendo de la exploración física y Epidemiología y etiología


los resultados de la RM. Se recomienda realizar un seguimiento para
La prevalencia de la DSO es de 1 de cada 10.000 nacimientos, con un
detectar anomalías del desarrollo neural, déficits visuales e insuficiencia
mayor riesgo en las madres más jóvenes (Murray et al., 2005). Aunque
hipofisaria (Palmer y Mowat, 2014).
la DSO se ha asociado a mutaciones en diversos genes (p. ej., HESX1,
SOX2, SOX1, OTX2) (Webb y Dattani, 2010; McCabe et al., 2011),
Pronóstico en la mayoría de los pacientes no se ha identificado un origen genético,
Los resultados de la ACC son diversos. Una revisión sistemática de la lo que sugiere causas ambientales o genéticas complejas. El trastorno
literatura específica desveló que hasta el 75% de los pacientes con una es de nueva aparición en la mayoría de los pacientes, y la DSO puede
ACC aislada confirmada por RM se desarrollaban típicamente en el presentar un tipo de herencia dominante o recesiva. Aunque algunos
comienzo de la edad escolar, mientras que el 11% presentaban una casos de DSO se han asociado a la exposición prenatal a fármacos y
discapacidad grave (Sotiriadis y Makrydimas, 2012). La microcefalia, a alcohol o a patología vascular (Lippe et al., 1979; Lubinsky, 1997;
la epilepsia, la parálisis cerebral y la disgenesia cerebral se asocian a un Stevens y Dobyns, 2004), asociaciones que aún no se han podido
mayor riesgo de anomalías del desarrollo nervioso. Estudios neuropsi­ demostrar. El riesgo de recurrencia es inferior al 1% en ausencia de
cológicos han demostrado una dificultad específica en el razonamiento consanguinidad.

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• Figura 59.3  Hallazgos asociados a agenesia del cuerpo calloso confirmada por resonancia mag­
nética. A. Corte frontal de una resonancia magnética (RM) fetal que confirma la presencia del cuerpo
calloso. Obsérvese que la corteza medial se curva hacia la línea media. B. Corte frontal de una RM
fetal que confirma la agenesia del cuerpo calloso (ACC). Obsérvese que la corteza medial se curva
alejándose de la línea media. C. Corte axial ponderado en T2 posnatal de una ACC que muestra
una colpocefalia y husos de Probst clásicos (flechas). D. Corte sagital ponderado en T1 que muestra una
ACC casi completa (se conserva el pico). E. Corte axial posnatal ponderado en T2 que muestra
estructuras quísticas multiloculadas (flecha) que pueden observarse en caso de ACC. F. Corte sagital
ponderado en T1 que muestra un lipoma (área blanca clara) que puede observarse en caso de ACC.

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CAPÍTULO 59 Anomalías congénitas del sistema nervioso central 863

• Figura 59.4  Resonancia magnética (RM) fetal y posnatal con ausencia de la cavidad del septo
pelúcido. A. RM fetal que muestra la cavidad del septo pelúcido (CSP) esperada en la semana 21 de
gestación (flecha). B-D. RM que muestra la ausencia de la CSP (flecha) en las semanas 20 (B) y 34 (C)
de gestación, y al nacer (D). El feto en B presenta, además, una ventriculomegalia leve.

Ausencia de la cavidad del septo pelúcido incluye intervenciones tanto médicas como quirúrgicas para el control
de las convulsiones, terapia de apoyo para las discapacidades motoras y
La CSP es un hallazgo habitual en la ecografía y la RM de fetos y recién cognitivas, una vigilancia adecuada y la consulta a otros especialistas si es
nacidos prematuros. Este hallazgo normal representa un espacio lleno preciso. El desarrollo de la corteza cerebral se ha empleado para clasificar
de líquido entre las láminas del septo pelúcido, las cuales se fusionan las malformaciones corticales y se actualiza a medida que aumenta el
habitualmente a medida que el encéfalo fetal madura. La ausencia de conocimiento genético (Barkovich et al., 2012).
la CSP, cuando se espera, puede asociarse a anomalías neuroanatómicas
(Damaj et al., 2010). Puede ser un hallazgo aislado (fig. 59.4), pero se
recomienda la RM para una evaluación más exhaustiva (Hosseinzadeh
Defectos corticales de la proliferación
et al., 2013). Además, una CSP más ancha de lo normal debe llevar y la supervivencia neuronal
a una evaluación ecográfica detallada, ya que esta anomalía puede
observarse en fetos con aneuploidía (Abele et al., 2013). Microcefalia
Entre los trastornos causados por alteraciones en la proliferación se
Anomalías corticales de tamaño encuentran la microcefalia (encéfalo de pequeño tamaño) y la megalo­
y organización encefalia (encéfalo de gran tamaño). La microcefalia (un perímetro
occipitofrontal al menos dos desviaciones estándar [DE] por debajo de
Las anomalías en la proliferación y la supervivencia neuronal inclu­ la media) puede clasificarse en primaria (evidente al nacer) o secundaria
yen la microcefalia y la macrocefalia, así como la displasia cortical. (un perímetro occipitofrontal en el nacimiento de normal a pequeño
Los defectos en la migración provocan la alteración de la estructura que evoluciona hacia más de dos DE por debajo de la media tras el
capeada de la corteza, que puede ser macroscópica (como ocurre en nacimiento). Las causas pueden ser genéticas o adquiridas y pueden
la lisencefalia) o microscópica (displasia focal). También se discutirán acompañarse de otras malformaciones extracraneales (microcefalia
las alteraciones corticales, como la heterotopia, la PMG, la corteza de sindrómica), o puede ser un hallazgo aislado. Von der Hagen et al.
aspecto adoquinado, la esquisencefalia y otras lesiones destructivas. (2014) realizaron un estudio de cohortes retrospectivo de 680 niños
No se discutirán trastornos de migración de la cresta neuronal (p. ej., con microcefalia y descubrieron que el 28,5% tenían una causa genética
neuroblastoma, enfermedad de Hirschsprung). de diversos tipos (aneuploidías, variantes del número de copias de
Las neuronas de proyección se originan en la zona periventricular nueva aparición, autosómica dominante, autosómica recesiva y ligada
y las zonas subventriculares, y sufren divisiones celulares simétricas al cromosoma X). Los casos restantes fueron secundarios a lesiones
y asimétricas para poblar las células nerviosas germinales (revisado durante el nacimiento o después de este (donde se incluyen com­
por Lui et al., 2011). La corteza cerebral se desarrolla de dentro hacia plicaciones del parto, infección, enfermedad materna, exposición a
afuera, con las primeras células formando las capas más profundas y las teratógenos, infarto, craneosinostosis), pero en el 40% de los casos no
células más tardías poblando las capas superficiales. Este proceso ocurre pudo identificarse la causa.
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durante las semanas 7-11 de gestación. Las señales de parada dirigen Aunque las pruebas radiológicas pueden sugerir un encéfalo normal,
la adecuada supresión de la migración y la disposición de las capas la oligogiria, la alteración de la sustancia gris y la hipomielinización pue­
celulares finales. La alteración de todos estos procesos puede provocar den estar presentes a nivel microscópico. Los pacientes con microcefalia
las malformaciones que discutimos (revisado por Pang et al., 2008). también pueden presentar otras malformaciones corticales, lo que sugie­
La mayoría de las interneuronas nacen en las eminencias ganglionares re mecanismos solapados. Los defectos genéticos que causan microcefalia
mediales y migran de forma tangencial para poblar el encéfalo. Se está primaria afectan a la progresión del ciclo celular, la proliferación celular,
estudiando el origen de los astrocitos y otros tipos celulares. No se han la formación de husos mitóticos y la reparación del ADN. Las causas
descrito las malformaciones cerebrales que afectan fundamentalmente genéticas más habituales (como las mutaciones del ASPM) afectan a la
a estos tipos celulares. función centrosómica y a la división celular (Verloes et al., 2013). La
Estos trastornos pueden ser genéticos o causados por problemas microcefalia secundaria puede deberse a microcefalia posmigracional y
durante la vida intrauterina (hipoxia, isquemia, alteraciones metabólicas, se asocia a diversos síndromes, como el de Rett y el de Angelman, y se
toxinas e infecciones), y el diagnóstico se basa en el cuadro clínico, las ha observado la participación de los genes involucrados en la síntesis
pruebas radiológicas, la patología y las pruebas genéticas. Las malforma­ proteínica y de las sintetasas del ácido ribonucleico de transferencia
ciones pueden dar lugar a epilepsia y retraso intelectual, y pueden formar (revisado por Jamuar y Walsh, 2015). Muchas causas son recesivas,
parte de síndromes que afectan también a otros órganos. El tratamiento por lo que el riesgo de recurrencia se sitúa a menudo en torno al 25%.

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864 PA RT E XI I Sistema nervioso

La microcefalia primaria puede detectarse mediante ecografía focal cortical, la hemimegaloencefalia y la megaloencefalia) se debe
durante la vida intrauterina y, cuando es grave, se asocia a un riesgo en parte a mutaciones en la ruta PI3K/AKT (Jansen et al., 2015). El
elevado de anomalías en el desarrollo nervioso. Entre otras pruebas PIK3CA también se asocia a otros trastornos de exceso de crecimiento,
complementarias prenatales se encuentran la RM fetal, el cribado como el síndrome de MCAP, pero también al síndrome de exceso de
de infecciones y las pruebas genéticas. Recientemente, se ha consi­ crecimiento lipomatoso congénito, malformaciones vasculares, heman­
derado al virus del Zika como el agente causal de la microcefalia en giomas epidérmicos y anomalías esqueléticas y espinales (CLOVES), e
recién nacidos cuyas madres se han visto expuestas al virus durante el hiperplasia fibroadiposa (Mirzaa et al., 2013).
embarazo (Plosa et al., 2012; Mlakar et al., 2016). El diagnóstico de La hemimegaloencefalia supone un sobrecrecimiento parcial, de
microcefalia secundaria se obtiene mediante la medición rutinaria del un hemisferio o bilateral, que lleva a displasia cortical, anomalías de la
perímetro cefálico tras el nacimiento, y la evaluación posterior más sustancia blanca y de los tipos celulares y patrones de circunvolución
detallada puede incluir pruebas radiológicas cerebrales (ecografía o anómalos. Este hallazgo se ha asociado con un número de síndromes
RM), el cribado de enfermedades infecciosas y la consulta con otras genéticos y se asocia con retraso intelectual y epilepsia incurable, y suele
especialidades (p. ej., neurología, genética, oftalmología), tal y como aparecer en el primer año de vida (revisado por Pang et al., 2008). En
se ha indicado. ciertos pacientes puede lograrse un mejor resultado realizando una
El pronóstico depende de la gravedad de la microcefalia (Ashwal hemisferectomía ya en el período neonatal (Battaglia et al., 1999).
et al., 2009), así como de la presencia de otras anomalías cerebrales La hemimegaloencefalia también puede asociarse a síndromes neuro­
o malformaciones somáticas y del diagnóstico genético. Se observan cutáneos, como el síndrome del nevo sebáceo, la hipomelanosis de Ito,
alteraciones en el desarrollo y anomalías en las pruebas radiológicas el lipoma facial y la esclerosis tuberosa (Montagna et al., 1991; Dodge
aproximadamente en el 80% de los niños con microcefalia grave y Dobyns, 1995; Guerra et al., 2007; Leventer, et al., 2008; Gowda
(definida como un perímetro cefálico de más de tres DE por debajo et al., 2015). El pronóstico y el riesgo de recurrencia de la macrocefalia
de la media), mientras que el riesgo es mucho menor en niños con un y la megaloencefalia dependen de la causa subyacente.
perímetro cefálico de más de dos DE por debajo de la media. Entre
las comorbilidades encontramos el retraso intelectual, la epilepsia, la Defectos corticales de la migración
parálisis cerebral y los trastornos oftalmológicos.
Además de la proliferación adecuada, el desarrollo cortical exige una
Macrocefalia y megaloencefalia migración neuronal adecuada. La alteración en el comienzo, la con­
tinuación o la supresión de la migración neuronal provocan diversos
La macrocefalia hace referencia a un gran tamaño de la cabeza (más de trastornos, como la heterotopia, la lisencefalia y la corteza con aspecto
dos DE por encima de la media), que puede deberse a diversas causas, adoquinado. Estas anomalías se acompañan a menudo de otras mal­
como hidrocefalia, un cráneo grueso o megaloencefalia (gran tamaño formaciones, como hipoplasia o ACC, lo que apunta a una compleja
encefálico). La megaloencefalia es poco frecuente en recién nacidos, interacción entre los mecanismos que determinan la migración neuro­
ya que suele deberse a un aumento progresivo del tamaño encefálico nal y la vía del axón. Las pruebas de imagen estructurales han logrado
con el tiempo, pero a menudo se asocia a un retraso en el desarrollo y identificar muchos defectos en la migración radial de las neuronas de
a epilepsia (Winden et al., 2015). Un perímetro cefálico aumentado proyección, pero no suelen identificarse los defectos en la migración
durante el primer año de vida precisa un estrecho seguimiento, y se tangencial de las interneuronas.
debe considerar la realización de pruebas radiológicas para evaluar las
causas de un aumento de la presión intracraneal en el recién nacido. En Heterotopia
ausencia de otras malformaciones o problemas del desarrollo nervioso,
un crecimiento cefálico acelerado con un aumento del líquido extra­ La heterotopia puede ser, bien periventricular (lo que sugiere una
axial durante el primer año o los primeros 2 años de vida suele consi­ alteración en el comienzo de la migración), bien subcortical (como
derarse benigno, y puede deberse a un desequilibrio en la producción ocurre en la heterotopia en banda), causada por la desregulación de
y la absorción de LCR por granulaciones subaracnoideas inmaduras la migración, o completa (como ocurre en caso de traumatismo). La
(Neveling y Truex, 1983; Barlow, 1984). heterotopia periventricular (HPV) se caracteriza por masas de material
La macrocefalia puede observarse en un grupo variado de trastornos gris adyacentes a las paredes de los ventrículos laterales (fig. 59.5). Los
que se caracterizan por un encéfalo de gran tamaño y se presenta más pacientes refieren a menudo convulsiones parciales. La HPV bilateral
habitualmente como un hallazgo aislado en casos familiares y de nueva puede acompañarse de otras malformaciones (como la hipoplasia
aparición. En el nacimiento, el perímetro cefálico es mayor del 90%. La del cuerpo calloso). Las mutaciones de FLNA provocan una HPV
macrocefalia también puede observarse en el síndrome del cromosoma bilateral contigua en mujeres y con menos frecuencia en hombres, si
X frágil y el síndrome de Klinefelter, y en trastornos neuroendocrinos son hemicigóticos, ya que en estos suele ser mortal. La implicación
(síndrome de Beckwith-Wiedemann, gigantismo encefálico y acon­ del gen FLNA sugiere una alteración de la motilidad celular como
droplasia) (DeMeyer, 1972; Dodge et al., 1983). El pronóstico y el uno de los mecanismos causantes de esta malformación (revisado
riesgo de recurrencia dependen de la causa. por Leventer et al., 2008). Entre los casos de HPV familiar, el 80%
Las causas de megaloencefalia pueden clasificarse en dos categorías: presentan mutaciones de FLNA. El 20% de los casos de nueva apari­
metabólicas y anatómicas. Algunas causas metabólicas son las acidu­ ción presentan mutaciones de FLNA, lo que indica la importancia de los
rias orgánicas (p. ej., aciduria glutárica), los trastornos por depósito factores ambientales o las causas genéticas aún sin identificar (Lu y
lisosómico y las leucoencefalopatías, mientras que la megaloencefalia Sheen, 2005). Dados los problemas cardíacos asociados a la HPV
anatómica puede deberse a mutaciones en los genes que afectan a relacionada con FLNA, se recomienda realizar un ecocardiograma y una
las vías involucradas en el crecimiento celular, como MTOR, Ras/ vigilancia cardíaca. Los resultados del desarrollo nervioso son diversos
MAPK y SHH (revisado en Winden et al., 2015). En casos raros, la y pueden asociarse a trastornos del aprendizaje (Chen y Walsh, 2015).
megaloencefalia forma parte de un síndrome denominado síndrome También se han identificado mutaciones de ARFGEF2 en los pacientes
de megaloencefalia, polimicrogiria, polidactilia e hidrocefalia (MPPH) con HPV (Bardon-Cancho et al., 2014).
(Colombani et al., 2006; Pisano et al., 2008). Otro síndrome rela­ La heterotopia subcortical en banda se caracteriza por una banda de
cionado con la megaloencefalia es el síndrome de megaloencefalia y sustancia gris heterotópica dentro de la sustancia blanca (fig. 59.6). Las
malformación capilar (MCAP). Se han implicado tres genes: AKT3, mutaciones somáticas en DCX y LIS1 se han asociado a la heterotopia
PIK3R2 y PIK3CA (Lee y Gleeson, 2010; Riviere et al., 2012; D’Gama, subcortical en banda (revisado por Jamuar y Walsh, 2015). El cuadro
et al., 2015). Este abanico de trastornos (que incluyen la displasia clínico típico consiste en retraso en el desarrollo, retraso intelectual

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CAPÍTULO 59 Anomalías congénitas del sistema nervioso central 865

mediante la apolipoproteína E y los receptores lipoproteínicos de muy


baja densidad (Hong et al., 2000; Ross y Walsh, 2001). Las mutaciones
en los VLDLR se traducen en un fenotipo más leve con circunvolucio­
nes corticales ligeramente engrosadas y simplificadas, y con hipoplasia
cerebelosa (Boycott et al., 2005).

Manifestaciones clínicas
La lisencefalia se diagnostica intraútero, o los pacientes que la padecen
presentan hipotonía, retraso del desarrollo y/o convulsiones durante el
primer año de vida. La espasticidad puede aparecer más adelante
durante el primer año. La lisencefalia aislada conlleva un mal pronós­
tico a largo plazo marcado por retraso cognitivo, tetraparesia espástica
y epilepsia. Las anomalías craneofaciales pueden ser sutiles en pacientes
con mutaciones en LIS1 o más pronunciadas, como en el síndrome
de Miller-Dieker causado por la deleción de LIS1 y YWHAE (Dobyns
et al., 1984). El síndrome de Miller-Dieker se caracteriza por lisence­
falia grave, una frente ancha con hundimiento bitemporal, nariz corta,
narinas hacia afuera, labio superior delgado y una mandíbula pequeña
(Dobyns y Das, 2014). El perímetro cefálico es generalmente normal
en el nacimiento, pero la microcefalia aparece progresivamente durante
el primer año. Puede haber convulsiones neonatales y generalmente se
desarrolla epilepsia mioclónica grave en la segunda mitad del primer
• Figura 59.5  Resonancia magnética que confirma una heterotopia año (p. ej., espasmos infantiles o síndrome de Lennox-Gastaut) (Gue­
periventricular nodular. Las masas nodulares periventriculares (puntas rrini y Carrozzo, 2001).
de flecha) se visualizan al lado de los ventrículos laterales en este corte
frontal ponderado en T2. (Por cortesía del Dr. Martin Salinsky, Department
of Neurology, Oregon Health and Science University, Portland, OR.) Síndromes complejos con aspecto adoquinado
La corteza con aspecto adoquinado (anteriormente denominada lisen-
y/o epilepsia, pero con una discapacidad más leve que los que presen­ cefalia de tipo II) se caracteriza por la apariencia nodular de la corteza,
tan lisencefalia, y el 25% cuentan con una inteligencia normal o casi debido a la alteración de la detención normal de células en la superficie
normal. Los déficits neurológicos se corresponden grosso modo con el pial (revisado por Pang et al., 2008). En la RM, la señal de recuperación
grosor y la extensión de la banda subcortical (Dobyns et al., 1996). atenuada por líquido en T2 suele mostrar un marcado aumento en la
sustancia blanca cortical. La corteza de aspecto adoquinado se observa
Lisencefalia en las distrofias musculares congénitas: síndrome de Walker-Warburg,
enfermedad de músculo-ojo-cerebro y distrofia muscular congénita de
Las lisencefalias se caracterizan por la ausencia o reducción de las Fukuyama (revisado por Sparks et al., 2012). Estos trastornos autosó­
circunvoluciones, lo que da a la superficie cortical una apariencia lisa micos recesivos (Cormand et al., 2001) pertenecen a una clase de dis­
o casi lisa (Kato y Dobyns, 2003). Los pacientes presentan retraso trofias musculares por déficit de glucosilación, las distroglucanopatías,
intelectual, hipotonía, epilepsia y problemas con la alimentación que están relacionadas con mutaciones en enzimas que catalizan la
(revisado por Leventer et al., 2008). La clasificación de las lisence­ O-glucosilación postranslacional de un pequeño número de gluco­
falias refleja la rápida evolución de las moléculas en estos trastornos proteínas en mamíferos (Grewal y Hewitt, 2003; Toda et al., 2005).
(Barkovich et al., 2001; Jissendi-Tchofo et al., 2009; v. fig. 59.6). El síndrome de Walker-Warburg es el más grave de los tres (War­
La mayoría de los pacientes se incluyen en el espectro de heterotopia burg, 1987). La macrocefalia está presente en el nacimiento o se desa­
subcortical en banda/lisencefalia clásica (antes de tipo 1), que se rrolla durante el primer año de vida, y se debe a hidrocefalia. El tronco
asocia a mutaciones de deleción o cambio de sentido en LIS1 (Torres encefálico de Kinked, la hipoplasia cerebelosa y una elevación en la
et al., 2004). Otros genes asociados son DCX (Hehr et al., 2011), concentración de creatina cinasa sugieren claramente el diagnóstico.
YWHAE y varios genes de codificación de la tubulina. Los produc­ Entre las alteraciones oculares se encuentran el desprendimiento de
tos de estos genes desempeñan un papel en la motilidad celular, la retina, la hipoplasia del nervio óptico, la microftalmía y el coloboma;
neurogenia y la polimerización microtubular (des Portes et al., 1998; la debilidad muscular suele ser muy acusada (Volpe, 2000). No es
Gleeson et al., 1998). Las mutaciones en el gen ARX, que codifica un frecuente la supervivencia pasado el primer año de vida. Aunque las
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factor de transcripción, dan como resultado otra lisencefalia ligada alteraciones cerebrales y los defectos del desarrollo nervioso en pacientes
al cromosoma X con genitales anómalos, y se caracterizan por gan­ con enfermedad músculo-ojo-cerebro son menos graves, los pacien­
glios basales anómalos, sustancia blanca inmadura y ACC (Kitamura tes presentan de todos modos una discapacidad importante y a menudo
et al., 2002). convulsiones. Los individuos con distrofia muscular congénita de
También se puede observar lisencefalia con hipoplasia cerebelosa Fukuyama pueden presentar anomalías corticales y oculares diversas.
(Barkovich et al., 2001; Ross y Walsh, 2001; Kato y Dobyns, 2003; Pueden observarse hipoplasia, quistes y PMG en el cerebelo. Puede
Lu y Sheen, 2005; Jissendi-Tchofo et al., 2009). La causa más habitual observarse un retraso cognitivo moderado, y algunos pacientes pueden
de este fenotipo son mutaciones dominantes en diversos genes de caminar de manera independiente (revisado por Sparks et al., 2012).
codificación de la tubulina, que a menudo pueden distinguirse por Las mutaciones en la subunidad β1 de la laminina (codificada por
una displasia cerebelosa, del tronco encefálico y de los ganglios basales LAMB1), que se localiza en la membrana basal pial, también dan como
característica (Bahi-Buisson y Cavallin, 2016). Con menos frecuencia, resultado una corteza con aspecto adoquinado y otros trastornos cere­
la lisencefalia con una corteza moderadamente gruesa, hipoplasia brales, pero estas malformaciones no se acompañan de las anomalías
cerebelosa global grave y una malformación del hipocampo está causada oculares ni musculares observadas en los síndromes mencionados con
por mutaciones recesivas en el gen RELN, que codifica una proteína anterioridad (Radmanesh et al., 2013). De la misma manera, las muta­
de la matriz extracelular de gran tamaño involucrada en la señalización ciones de GPR56 pueden causar un síndrome recesivo con una corteza

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• Figura 59.6  Lisencefalia clásica/heterotopia subcortical en banda. A. Corte axial ponderado en T2 de


una resonancia magnética (RM) cerebral de un niño con mutación de LIS1. B. Corte axial ponderado en
T2 de una RM cerebral de un niño con una mutación de TUBA1A. C. Muestra histológica en la que se
observa la presencia de una banda ancha de sustancia gris heterotópica (flecha) que se sitúa dentro de
la sustancia blanca encefálica y se distingue de la corteza cerebral (asterisco) en una paciente con una
mutación de DCX. D. Corte axial ponderado en T1 de una RM que muestra la naturaleza circular de la
banda subcortical heterotópica (flechas) en otra paciente con una mutación de DCX. (Por cortesía del
Dr. Joseph G. Gleeson, Department of Neurology, School of Medicine, University of California, San Diego,
CA; M. Elizabeth Ross, Department of Neurology, University of Minnesota, Minneapolis, MN; Christopher A.
Walsh, Department of Neurology, University of Minnesota, y Christopher A. Walsh, Department of Neurology,
Harvard Medical School, Boston, MA.)

de aspecto similar a la adoquinada, una señal de la sustancia blanca Polimicrogiria


anómala y quistes cerebelosos (Quattrocchi et al., 2013). La PMG
frontoparietal bilateral puede asociarse a las mutaciones en el receptor La PMG se definió inicialmente sobre la base de hallazgos histopatoló­
56 vinculado a la proteína G (Piao et al., 2002). Las pruebas de imagen gicos. Con la aparición de la RM cerebral, el término pasó a emplearse
neurológicas muestran cambios bilaterales en la sustancia blanca, un para referirse a una variedad de trastornos con un borde irregular entre
tronco encefálico pequeño y un cerebelo dismórfico pequeño, único la sustancia gris y la blanca con múltiples circunvoluciones de muy
en los síndromes de PMG (Chang et al., 2003; Barkovich, 2010). pequeño tamaño o un lazo cortical engrosado (fig. 59.7). La PMG

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• Figura 59.7  Espectro de hallazgos de la polimicrogiria. Cortes axiales ponderados en T2 (A-C)


que muestran la variedad de hallazgos de la polimicrogiria en una resonancia magnética. A. Polimicro­
giria frontal y perisilviana. B. Polimicrogiria fundamentalmente perisilviana. C. Corteza globalmente
engrosada.

o las apariencias similares a esta pueden estar causadas por muta­ llo, esotropía o mirada desconjugada, y signos motores cerebelosos y
ciones en diversos genes, así como por infecciones (CMV, toxoplas­ piramidales bilaterales (Chang et al., 2003).
mosis), trastornos isquémicos o vasculares y trastornos metabólicos.
Pueden observarse otras malformaciones acompañando a la PMG,
como esquisencefalia. Recientemente se ha descubierto que algunas Disgiria asociada a tubulinopatía
etiologías isquémicas tienen un origen genético (mutaciones de OCLN
Las mutaciones en los genes de la tubulina α y β se han relacionado
o COL4A1, deleciones de 22q11 y síndrome de Sturge-Weber) (Squier
con un abanico de malformaciones corticales (Cushion et al., 2013).
y Jansen, 2014).
Se ha demostrado que las mutaciones en seis genes de codificación de
Hasta el momento se han propuesto dos tipos principales de
tubulina causan tubulinopatías, generalmente debido a mutaciones
PMG: capeada y no capeada. La PMG capeada presenta cuatro en
dominantes de nueva aparición, con algunos ejemplos de recurrencia
lugar de seis capas corticales diferenciadas. Esta forma «clásica»
causada por mosaicismo de la línea germinal (Bahi-Buisson y Cava­
se localiza al lado de las regiones de encefalomalacia y se cree que
llin, 2016). Una malformación más sutil, denominada disgiria asociada
una causa frecuente es una lesión. La PMG no capeada consiste en una
a tubulinopatía, muestra un sutil patrón de circunvoluciones corticales
corteza que carece de capas corticales distintivas y se asocia a otros
irregulares con displasia del tallo cerebeloso y los ganglios basales,
trastornos de la migración, como heterotopia subcortical nodular,
asociada a mutaciones de TUBA1A, TUBB2B y TUBB3, que aparecen
lisencefalia y esquisencefalia. Más recientemente, se han objetivado
por primera vez o que se heredan de un progenitor mosaico (Oegema
múltiples tipos de PMG en el mismo paciente (Judkins et al., 2011),
et al., 2015). Los pacientes pueden presentar un retraso motor, cogni­
y el término se ha empleado para referirse a una variedad de apa­
tivo y del lenguaje que puede ser leve, movimientos oculares anómalos,
riencias en la RM estructural sin una correspondencia con hallazgos
trastornos del comportamiento y convulsiones.
patológicos (v. fig. 59.7). Aunque la PMG suele ser esporádica, puede
acompañar a diversos síndromes, especialmente si es bilateral, y tam­
bién se ha observado en múltiples modos de transmisión hereditaria
en casos familiares poco frecuentes (Barkovich et al., 1999; Ross y Lesiones destructivas
Walsh, 2001). La esquisencefalia, la porencefalia y la hidranencefalia son malforma­
ciones que resultan de lesiones destructivas durante el desarrollo. La
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esquisencefalia puede ser unilateral o bilateral y de «labios abiertos» o


El cuadro clínico depende de la extensión de la displasia cortical y de «labios cerrados» (fig. 59.8). Cuando es grave, ambos ventrículos laterales
la causa subyacente, pero es difícil de predecir basándose únicamente se comunican ampliamente con el espacio extraaxial (bilateral de labios
de las pruebas radiológicas. La PMG bilateral o la afectación de más de abiertos). No resulta sorprendente que los pacientes tengan dificultades
la mitad de un hemisferio conllevan un riesgo elevado de presentar un cognitivas, motoras y comunicativas significativas, ni que la epilepsia sea
retraso en el desarrollo de moderado a grave y una disfunción motora habitual (revisado por Granata et al., 2005). La gravedad de la epilepsia
significativa (Barkovich et al., 2005). A menudo se observa hemiparesia no se corresponde con la gravedad de las malformaciones cerebrales, y dos
o tetraparesia. La aparición de epilepsia refractaria al tratamiento con estudios demostraron que, en los pacientes con esquisencefalia unilateral,
convulsiones complejas parciales o convulsiones múltiples generalizadas las convulsiones comenzaban a una edad más temprana y que estos pre­
puede retrasarse más allá del período neonatal. sentaban más epilepsia refractaria al tratamiento que los que presentaban
La PMG perisilviana bilateral es el patrón que se observa más esquisencefalia bilateral (Granata et al., 1996; Denis et al., 2000). El
habitualmente. Es probable que los pacientes con PMG perisilviana diagnóstico se establece mediante RM, y los hallazgos pueden incluir otras
bilateral presenten epilepsia y retraso intelectual (Guerrini et al., 1992; malformaciones cerebrales, como la displasia cortical, la disgenesia del
Kuzniecky et al., 1993; Guerreiro et al., 2000). En la PMG frontopa­ cuerpo calloso y la ausencia de septo pelúcido. Entre las supuestas causas
rietal bilateral, los pacientes presentan un retraso general del desarro­ se encuentran episodios destructivos, como la isquemia y la infección.

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tribuyen a la formación de la membrana basal. Se cree que la porencefalia


vinculada al colágeno es secundaria a problemas vasculares. Las mutacio­
nes en COL4A1 y COL4A2 pueden asociarse a accidente cerebrovascular y
otras manifestaciones clínicas muy variables en los miembros de la familia
con la misma mutación, de manera que el recién nacido afectado y los
miembros de la familia que tengan riesgo de padecerlo deben someterse
a estudios neurológicos, oftalmológicos, renales y cardíacos.
La hidranencefalia se debe a la sustitución de los hemisferios por
un saco lleno de líquido y puede considerarse una forma extrema de
porencefalia. Se han propuesto diversos mecanismos para este tras­
torno poco frecuente, como el infarto, la leucomalacia, la necrosis y la
infección, frente a la presencia de material tromboplásico procedente
de un gemelo. Además de estas etiologías, puede existir una relación
entre lesiones destructivas, como la porencefalia, la hidranencefalia y
la esquisencefalia, y la exposición intrauterina a fármacos vasoactivos,
como la cocaína, la heroína y la metanfetamina (Eller y Kuller, 1995).
Un trastorno congénito poco frecuente, denominado síndrome de
Fowler, causado por mutaciones en FLVCR2, provoca hidrocefalia grave,
pero también hipocinesia, vasculopatía del SNC y artrogriposis. Este tras­
torno también recibe el nombre de síndrome de vasculopatía proliferativa
e hidranencefalia-hidrocefalia (VPHH). Aunque Kvarnung et al. (2016)
describieron el caso de dos hermanos que superaron los 2 años de vida,
la mayoría de los recién nacidos no superan el primero (Gentry y Con­
nell, 2013). La hidrocefalia y las dificultades para la alimentación son
complicaciones frecuentes, y puede resultar difícil tomar decisiones sobre
si tratar al recién nacido con una derivación de LCR o alimentación por
sonda debido a su limitada capacidad de desarrollo y esperanza de vida.

Malformaciones de las estructuras


de la fosa posterior
Desarrollo normal del mesencéfalo
y el romboencéfalo
El tronco encefálico comprende el mesencéfalo, el puente y la médula,
mientras que el cerebelo consta de un vermis y hemisferios. Estas
estructuras se desarrollan tras el cierre del tubo neural, que coincide
con el desarrollo del prosencéfalo (Ten Donkelaar y Lammens, 2009).
El desarrollo del cerebelo, al igual que el de la corteza, se ve influido
• Figura 59.8  Resonancia magnética que confirma una esquisencefalia tanto por factores intrínsecos (genéticos) como extrínsecos (inducti­
bilateral de labios abiertos. A. Corte axial ponderado en T1. Obsérvese vos/ambientales) (Leto et al., 2016). Las estructuras del mesencéfalo
que las hendiduras bilaterales (flechas) se extienden hasta los ven­ proceden del mesencéfalo y el mielencéfalo, y el romboencéfalo deriva
trículos laterales. B. Corte frontal ponderado en T1. Obsérvese que las del romboencéfalo hacia la semana 4 de gestación. El vermis cerebeloso
hendiduras (flechas) están revestidas por sustancia gris (asteriscos). (Por procede tanto del tercio caudal del mesencéfalo como del romboen­
cortesía del Dr. A. James Barkovich, Department of Radiology, School céfalo (Shekdar, 2011). El desarrollo cerebeloso continúa durante el
of Medicine, University of California, San Francisco, CA.) segundo año de vida, lo que convierte al cerebelo en una estructura
especialmente vulnerable en los recién nacidos prematuros. La fosa
posterior se evalúa mediante ecografía o RM durante el segundo y el
La recurrencia en algunas familias sugiere un origen genético (revisado por tercer trimestres del embarazo, pero la RM es la modalidad de elección
Leventer et al., 2008). La esquisencefalia también puede ser el resultado si se sospechan anomalías (Bosemani et al., 2015).
de un fracaso extremo de la migración neuronal. El análisis histológico Para este epígrafe, definiremos las malformaciones de la fosa pos­
confirma esta teoría al mostrar rasgos de alteraciones migratorias en la hen­ terior en función de los resultados de las pruebas radiológicas (Doherty
didura esquisencefálica, como una heterotopia neuronal extensa bordeada et al., 2013). También se han empleado clasificaciones embrionarias y
por PMG circundante (Bird y Gilles, 1987). Se observa insuficiencia genéticas (Barkovich et al., 2007, 2009). Otra alternativa es clasificar
hipofisaria en un subgrupo considerable de pacientes, especialmente si las malformaciones de la fosa posterior dependiendo de si se deben a
también presentan hipoplasia del nervio óptico. causas congénitas (metabólicas, estructurales, neurodegenerativas o
La porencefalia consiste en una cavidad rellena de líquido dentro de los ataxias espinocerebelosas) o a causas adquiridas (vasculares, encefalopatía
hemisferios cerebrales que se debe a una pérdida de tejido secundaria a un hipóxica o isquémica, infección, alteraciones del desarrollo, tóxicas, neo­
traumatismo, una infección o una hemorragia. Esta puede desarrollarse plásicas o teratógenas) (Klein et al., 2016). Aunque las manifestaciones
antes o después del parto. Las mutaciones en COL4A1 se asocian a una clínicas de las anomalías de la fosa posterior son inespecíficas, puede
forma congénita de porencefalia autosómica dominante. Las mutaciones observarse hipotonía, retraso en el desarrollo, nistagmo y una reduc­
en COL4A1 también pueden causar lesiones en los riñones, los ojos, el ción de la atención visual. Dependiendo de la malformación, pueden
músculo cardíaco o el músculo esquelético (revisado por Meuwissen presentarse convulsiones y apnea, así como signos de disfunción de los
et al., 2015). El gen COL4A2 se ha asociado a la porencefalia familiar y a pares craneales. El diagnóstico preciso requerirá la combinación de la
la esporádica. Estos dos genes codifican subunidades de colágeno que con­ información clínica y los resultados de las pruebas de imagen y genéticas.

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CAPÍTULO 59 Anomalías congénitas del sistema nervioso central 869

Malformaciones con afectación también es un rasgo habitual que puede manifestarse en el período
neonatal con macrocefalia (Hart et al., 1972; Costa y Hauw, 1995).
cerebelosa mayor
Epidemiología y etiología
Malformación de Dandy-Walker La estimación de la prevalencia de la MDW se ve afectada por la
ausencia de acuerdo en lo que refiere a su definición. Parece que la
La malformación de Dandy-Walker (MDW) se caracteriza por aplasia MDW se da al menos en 1 de cada 5.000 nacidos vivos (Parisi y
o hipoplasia del vermis cerebeloso, dilatación quística del cuarto ventrí­ Dobyns, 2003). La MDW puede ser aislada o asociada a cierto número
culo e hipertrofia de la fosa posterior con un desplazamiento ascendente de síndromes (p. ej., el síndrome de Walker-Warburg o el síndrome
de los senos laterales, el tentorial y la torcular (Benda, 1954; D’Agostino de Meckel), así como a las trisomías 9, 13 y 18. Como indica su bajo
et al., 1963; Hart et al., 1972; Friede, 1989; fig. 59.9). El tronco ence­ riesgo de recurrencia, del 1 al 3%, es probable que la MDW se deba
fálico puede presentar hipoplasia de la protuberancia (Shekdar, 2011). a mutaciones de nueva aparición, a problemas ambientales o a causas
Puede diagnosticarse intraútero mediante ecografía y RM fetal. Aunque vasculares y multifactoriales. Aunque se han identificado mutaciones en
cada vez se emplean con más frecuencia la ecografía y la RM prenatal, la FOXC1 y ZIC1/ZIC4 en un pequeño número de pacientes, en general
definición anatómica precisa de estas malformaciones continúa siendo no puede identificarse una causa genética específica.
un desafío para ambas técnicas (Malinger et al., 2009). La hipertrofia
de la fosa posterior y el desplazamiento de su contenido pueden estar Manifestaciones clínicas y tratamiento
relacionados con la comunicación del cuarto ventrículo con un quiste La MDW puede asociarse a otras anomalías presentes en las pruebas
retrocerebeloso, a menudo de tamaño considerable. La hidrocefalia de imagen cerebrales, especialmente ACC e hidrocefalia. Además,
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• Figura 59.9  Anomalías de la fosa posterior. Cortes sagitales de un encéfalo normal (A), del encéfalo
de un niño con síndrome de Joubert (B) y del encéfalo de un niño con malformación de Dandy-Walker (C)
que ilustran los rasgos de estas malformaciones del romboencéfalo. Obsérvese la presencia de
hipoplasia del vermis cerebeloso (flecha) tanto en B como en C. Por el contrario, el paciente con sín­
drome de Joubert (B) presenta únicamente un cuarto ventrículo ligeramente aumentado de tamaño,
mientras que en la malformación de Dandy-Walker (C) el cuarto ventrículo está dilatado de forma
masiva. D y E. Signo del molar. Comparación de los cortes axiales de un encéfalo normal (D) y del
encéfalo de un niño con síndrome de Joubert (E). Obsérvense los dos rasgos clave del signo del
molar: una fosa interpeduncular más profunda (flecha) y unos pedúnculos cerebelosos superiores
alargados (punta de flecha). (Por cortesía del Dr. Joseph G. Gleeson, Department of Neurology, School of
Medicine, University of California, San Diego, CA, y el Dr. William B. Dobyns, University of Chicago School
of Medicine, Chicago, IL [A-C], y del Dr. Joseph G. Gleeson, Department of Neurology, School of Medicine,
University of California, San Diego, CA [D, E].)

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870 PA RT E XI I Sistema nervioso

• Figura 59.10  Romboencefalosinapsis confirmada mediante resonancia magnética. A. Corte sagital


ponderado en T1 que muestra un exceso de sustancia blanca en posición central en el cerebelo y la
ausencia de hendiduras primarias y horizontales. Los cortes frontal (B) y axial (C) ponderados en T2
muestran láminas continuas a través de la línea media y la superficie cerebelosa dorsal lisa causada
por la agenesia del vermis y la fusión de los hemisferios.

pueden presentarse malformaciones cardíacas y de otros órganos. El retraso en el desarrollo. Se ha calculado su prevalencia en 1 de cada
tratamiento es similar al de otros trastornos del desarrollo nervioso y 100.000 nacidos vivos. La apnea y la taquipnea pueden ser notables
puede consistir en la corrección quirúrgica de la hidrocefalia con la durante el primer año de vida (Romani et al., 2013), y las primeras mani­
colocación de una derivación en los ventrículos laterales y/o la fosa festaciones pueden ser titubeo de la cabeza (Poretti et al., 2014), que
posterior. El resultado es amplio, con un mayor riesgo de anomalía consiste en un movimiento sutil de asentimiento con la cabeza que se
del desarrollo neural en los pacientes con malformaciones adicionales observa en el SJ y otras malformaciones de la fosa posterior. El SJ
y trastornos genéticos específicos. se relaciona con ciertos trastornos que pueden definirse por el «sig­
no del molar» en las pruebas de imagen (v. fig. 59.9): hipoplasia
o aplasia del vermis cerebeloso, fosa interpeduncular profunda y
Romboencefalosinapsis pedúnculos cerebelosos superiores engrosados y alargados. Los tras­
La romboencefalosinapsis (RES) es única entre las hipoplasias del tornos que presentan el signo del molar en las pruebas radiológicas se
vermis cerebeloso. En lugar de existir la amplia separación habitual han asociado a productos de genes relacionados con ciliopatías, lo que
entre los hemisferios cerebelosos, los hemisferios, la sustancia blan­ sugiere una vía común. Antiguamente se emplearon otros términos
ca y los núcleos cerebelosos profundos presentan diversos grados de para referirse al SJ, como síndrome renal ocular cerebeloso, hipoplasia
fusión (Paprocka et al., 2012; fig. 59.10). En cuanto al cuadro clínico, o aplasia cerebelosa, oligofrenia, síndrome de hipoplasia o aplasia del
los pacientes con RES pueden presentar ataxia, hipotonía muscular, vermis cerebeloso, oligofrenia, ataxia congénita, coloboma ocular
movimientos oculares anómalos, disartria, temblores cefálicos y retraso y fibrosis hepática (COACH), y síndrome de Varadi-Papp (Sattar y
en el desarrollo de diversa gravedad. La RES puede aparecer aislada Gleeson, 2011). Se han identificado mutaciones de más de 30 genes
o en combinación con otros síndromes, como el de anomalías verte­ en más del 50% de los pacientes con SJ (Parisi y Glass, 2013), con
brales, anales, cardíacas, traqueoesofágicas, renales y de las extremidades cinco genes responsables de alrededor del 40% de los casos (AHI1,
(VACTERL), y puede acompañarse de otras malformaciones del SNC, CC2D2A, CEP290, TMEM67 y C5ORF42) (Bachmann-Gagescu
como la hidrocefalia (Ishak et al., 2012; Tully et al., 2012; Poretti y et al., 2015). Es esencial distinguir el SJ de otras malformaciones
Boltshauser, 2015). No se ha identificado ninguna causa definitiva, del telencéfalo, ya que el riesgo de recurrencia es del 25% y un sub­
pero entre las causas que se barajan se encuentran los defectos congé­ grupo considerable de pacientes desarrolla distrofia retiniana pro­
nitos y los factores ambientales (como exposición a diabetes materna gresiva, nefropatía fibroquística y fibrosis hepática, que precisa una
y otras exposiciones) (Paprocka et al., 2012). vigilancia y un tratamiento de por vida. Algunas causas genéticas
La RES puede diagnosticarse durante el embarazo mediante RM fetal se asocian a un mayor riesgo de complicaciones (p. ej., la pérdida
y debe sospecharse en fetos con ventriculomegalia e hipoplasia cerebelosa del CEP290 se asocia a distrofia de retina), por lo que las pruebas
que se hayan identificado en la ecografía. En ausencia de ventriculomegalia genéticas pueden emplearse para orientar el tratamiento (Bachmann-
u otras alteraciones de las pruebas radiológicas, es poco frecuente que la Gagescu et al., 2015).
RES se diagnostique durante el embarazo. Además, cuando se sospecha
estenosis del acueducto antes o después del parto, debe llevarse a cabo un
estudio minucioso del cerebelo para descartar la RES (Ishak et al., 2012). Hipoplasia pontocerebelosa
La hipoplasia pontocerebelosa (HPC) es un grupo variado de
Malformaciones con afectación tanto trastornos principalmente autosómicos recesivos que se caracte­
del cerebelo como del tronco encefálico rizan por un grado variable de hipoplasia del puente y el cerebelo
(fig. 59.11). Se han propuesto 10 subtipos, que se solapan, muchos
de los cuales aparecen en el período neonatal (revisado por Klein
Síndrome de Joubert y trastornos relacionados et al., 2016). La HPC puede acompañarse de trastornos congénitos
El síndrome de Joubert (SJ) es un trastorno autosómico recesivo que de glucosilación, trastornos mitocondriales y distrofias musculares
generalmente cursa con hipotonía, movimientos oculares anómalos y congénitas. Se han identificado múltiples causas genéticas, princi­

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CAPÍTULO 59 Anomalías congénitas del sistema nervioso central 871

• Figura 59.11  Hipoplasia pontocerebelosa. Corte sagital ponderado en T1 (A) y corte frontal ponderado
en T2 (B) de un paciente con hipoplasia pontocerebelosa (HPC) relacionada con TSEN45. Se han identi­
ficado mutaciones de TSEN45 en los tipos 1, 2, 4 y 5 de la HPC, y pueden asociarse a malformaciones
adicionales, como la corteza atrófica y la hipoplasia del hemisferio cerebeloso más que la hipoplasia
del vermis. Corte sagital ponderado en T1 (C) y corte frontal ponderado en T1 (D) de un paciente con
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HPC relacionada con CASK. La HPC relacionada con CASK puede asociarse a un puente y un cerebelo
ligeramente pequeños, con hipoplasia proporcional del vermis y los hemisferios cerebelosos.

palmente mutaciones en TSEN54, aunque hasta en el 40% de los rrollo, anomalías del tono muscular, problemas de alimentación y
pacientes no puede identificarse la causa (Dyment et al., 2013). dificultad respiratoria (Klein et al., 2016).
Debido al solapamiento genético y fenotípico de estos subtipos,
la combinación de los hallazgos genéticos, clínicos y radiológicos
es más específica en la descripción de estos trastornos (tabla 59.1; Malformaciones con afectación
Aldinger y Doherty, 2016). En los pacientes con HPC relacionada del tronco encefálico
con TSEN, a menudo el vermis está relativamente conservado en
comparación con los hemisferios, a diferencia de lo que ocurre en Trastornos de la secuencia de Möbius
la mayoría de las HPC restantes. Los datos sobre los resultados
son escasos y dependen en cierta medida del tipo de HPC, aunque Algunos trastornos se incluyen entre los trastornos de desnervación
típicamente los pacientes tienen un retraso significativo del desa­ craneal congénita, que son trastornos neuromusculares esporádicos o

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872 PA RT E XI I Sistema nervioso

TABLA
59.1  Hipoplasia pontocerebelosa*

Hipoplasia Genes asociados (los principales


pontocerebelosa Manifestaciones clínicas Hallazgos radiológicos enumerados primero)
Tipo 1 Atrofia muscular espinal Hipoplasia leve del puente, con una hipoplasia EXOSC3, RARS2, TSEN54, VRK1
proporcional del vermis y los hemisferios
Tipo 2 Encefalopatía neonatal, microcefalia Microcefalia posmigracional, cerebelo y puente TSEN54, TSEN2, TSEN34
progresiva, aumento del tono muscular, de pequeño tamaño, corteza atrofiada con un
discinesia, convulsiones, alteración cuerpo calloso delgado, vermis menos afectado
visual cortical que los hemisferios
Tipo 3 Hipotonía, hiperreflexia, convulsiones Cerebelo y puente de pequeño tamaño, menor PCLO
infantiles, retraso del desarrollo cantidad de sustancia blanca encefálica
Tipos 4 y 5 Tipo 2 grave Como el tipo 2 TSEN54, TSEN2, TSEN34
Tipo 6 Cifras de lactato elevadas en el LCR Cerebelo y puente de pequeño tamaño, afectación RARS2
del vermis más grave que la de los hemisferios
Tipo 8 Microcefalia adquirida, aumento del tono Cerebelo y puente de pequeño tamaño CHMP1A
y las contracturas, retraso del desarrollo con hipoplasia proporcional del vermis
de moderado a grave y los hemisferios
Tipo 9 Microcefalia progresiva, convulsiones que Cerebelo pequeño con atrofia, puente con AMPD2
debutan el primer año de vida, hipertonía aplanamiento ventral, megacisterna magna
y alteraciones visuales. Retraso y tronco encefálico con forma de ocho, atrofia
del desarrollo grave de la corteza cerebral e hipoplasia del cuerpo
calloso
Tipo 10 Microcefalia progresiva y neurodegeneración Cerebelo pequeño, puente y cuerpo calloso CLP1
hacia los 6 meses, ausencia o retraso con atrofia
del habla, espasticidad progresiva,
convulsiones espontáneas, alteración
grave del desarrollo

*Todos con herencia autosómica recesiva.


LCR, líquido cefalorraquídeo.
Modificado de Aldinger KA, Doherty D. The genetics of cerebellar malformations. Semin Fetal Neonatal Med. 2016;21(5):321–332.

familiares que incluyen movimientos anómalos oculares, palpebrales o El tratamiento incluye la alimentación, terapia del lenguaje y otras
faciales debido a una desnervación primaria o secundaria de los pares terapias complementarias, así como la corrección quirúrgica de las
craneales. La secuencia de Möbius representa un grupo de trastornos anomalías nerviosas y musculares. Los desafíos para los niños de
con debilidad facial unilateral o bilateral, pérdida de abducción ocular más edad incluyen problemas de dicción, lenguaje e intelectuales,
y disfunción de otros pares craneales, que también puede cursar con así como autismo (Briegel, 2006).
malformaciones orofaciales, y anomalías de las extremidades y de
la pared torácica (Briegel, 2006; Oystreck et al., 2011; Gutowski y Síndromes de mutación de HOXA1A
Chilton, 2015).
Los trastornos de la secuencia de Möbius cuentan con una preva­ Se ha descubierto que las mutaciones del gen HOXA1, que codifica
lencia de 2 de cada 10.000 a 20 de cada 10.000 nacidos vivos (revisado el factor de transcripción, causan dos síndromes relacionados: el sín­
por Briegel, 2006). La secuencia de Möbius puede ser secundaria a una drome de Bosley-Salih-Alorainy en una familia de Arabia Saudí (y un
isquemia que afecta a la zona tegmentaria marginal (Sarnat, 2004). individuo turco) y el síndrome de disgenesia del tronco encefálico ata­
Otra causa vascular es la alteración de las arterias subclavias primi­ bascano en la población nativa americana atabascana (Erickson, 1999).
tivas antes del establecimiento de la perfusión sanguínea al tronco El síndrome de Bosley-Salih-Alorainy se caracteriza por un síndrome
encefálico, que puede deberse a calcificaciones en el tronco encefálico de retracción bilateral Duane de tipo 3, sordera, malformaciones vas­
(Briegel, 2006). culares cerebrales y autismo, mientras que el síndrome de disgenesia
Se ha planteado la participación de ciertos teratógenos en la del tronco encefálico atabascano cursa con restricción del campo visual
secuencia de Möbius, como la hipertermia, el shock eléctrico, el horizontal, sordera, retraso intelectual, debilidad, hipoventilación cen­
alcohol, drogas (benzodiacepinas, alcohol y cocaína) y fármacos tral, malformaciones vasculares cerebrales y malformaciones cardíacas.
como el misoprostol (da Silva Dal Pizzol et al., 2006). Se ha teori­ No todos los pacientes presentan una restricción del campo visual
zado sobre el papel que desempeñan algunos genes, como MBS1, horizontal o dificultades auditivas. El síndrome de retracción bilateral
MBS2 y MBS3. Los recién nacidos pueden presentar dificultades Duane o las anomalías cardíacas pueden ser la única expresión de las
para la alimentación y precisar biberones especiales o alimentación mutaciones del gen HOXA1 y pueden concurrir otras manifestaciones
por sonda. Dada su asociación con el síndrome de Kallmann, es clínicas (como sordera, autismo y anomalías cerebrovasculares) (Bosley
necesario llevar a cabo una evaluación del corazón y los riñones. et al., 2008).

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CAPÍTULO 59 Anomalías congénitas del sistema nervioso central 873

Malformaciones de Chiari pana y menor en la población afroamericana. Tras un primer embarazo


con este problema, el riesgo de recurrencia aumenta en una medida
Hasta el momento se han definido tres tipos numerados de malforma­ desproporcionada con cada embarazo posterior. El riesgo puede llegar
ciones de Chiari, aunque su etiología no tiene nada que ver. casi a triplicarse tras cada embarazo (Elwood et al., 1992).
La malformación de Chiari de tipo I se caracteriza por una ectopia Se ha producido un marcado descenso en la prevalencia tanto de
inferior de las amígdalas cerebelosas en el conducto espinal, a menudo la anencefalia como de la espina bífida en el nacimiento en las últimas
con compresión de las amígdalas y un flujo del LCR restringido. Su décadas. En 1960, la prevalencia en Inglaterra y Gales era de alrededor
diagnóstico en neonatos es poco frecuente. El diagnóstico se basa en de 6 de cada 1.000 nacimientos; en 1990 esta tasa descendió hasta
los hallazgos clínicos y radiológicos. Así, los pacientes pueden presentar alrededor de 1 de cada 1.000. El descenso de estos índices es el
cefaleas y disfunción del tronco encefálico, del cerebelo y de los pares reflejo de dos intervenciones principales: el diagnóstico intraútero
craneales inferiores. Una hernia de las amígdalas de más de 5 o 10 mm con la interrupción de los embarazos afectados y el tratamiento de la
en presencia de síntomas es diagnóstica, pero puede observarse una her­ madre con folatos en el momento de la concepción. Se calcula que
nia similar en ausencia de síntomas. Otros hallazgos son la siringomielia el tratamiento de la madre con folatos previene aproximadamente el
y la escoliosis (Cotes et al., 2015). Es habitual la ectopia amigdalina 60-70% de los DTN (Smithells et al., 1981; Czeizel y Dudas, 1992;
inferior leve sin compresión de las amígdalas ni restricción del flujo MRC Vitamin Study Research Group, 1991; Oakley et al., 1994;
del LCR, y no suele acompañarse de síntomas. La malformación de Castilla et al., 2003; Frey y Hauser, 2003; Mills y Signore, 2004;
Chiari de tipo I puede ser congénita o adquirida: la forma congénita Zohn y Sarkar, 2008). Se sabe que se precisan aproximadamente
se presenta en niños y jóvenes, mientras que la forma adquirida puede 200 genes para la neurulación, muchos de los cuales participan en el
aparecer en un momento posterior. En las malformaciones de Chiari metabolismo o el transporte del ácido fólico (Harris y Juriloff, 2007).
adquiridas, la fosa posterior tiene un tamaño normal. Aun así, el tratamiento con ácido fólico no consigue prevenir hasta
La malformación de Chiari de tipo II se observa casi exclusiva­ un tercio de los DTN, por lo que puede ser necesario combinar
mente acompañada de defectos del tubo neural (DTN) abiertos y se diversas medidas para la óptima prevención de estos (Greene y Copp,
caracteriza por el desplazamiento del vermis cerebeloso, la médula 2014), y es necesario considerar otros factores. Por ejemplo, el déficit
y el cuarto ventrículo hacia el interior del conducto espinal, y se de inositol también puede desencadenar DTN en roedores, y la
acompaña de una fosa posterior pequeña y, con frecuencia, hidro­ administración de suplementos de inositol previene un porcentaje
cefalia. La RM puede emplearse para confirmar estos hallazgos y, a significativo de estos defectos (revisado por Greene et al., 2017).
menudo, para demostrar la hipoplasia cerebelosa y la ACC, aunque El tratamiento con inositol puede reducir el riesgo de desarrollar
estos hallazgos no se han relacionado con un mayor riesgo de pro­ diabetes gestacional, mejorar el estado metabólico de la madre y no
blemas del desarrollo nervioso. Aunque es poco frecuente, pueden se ha asociado a otras complicaciones (Noventa et al., 2016). Aun
observarse trastornos de la migración, HPE y quistes interhemis­ así, en la actualidad únicamente se recomienda la administración de
féricos (Cotes et al., 2015). suplementos de folato para las mujeres en edad reproductiva en
El término malformación de Chiari de tipo III se ha empleado para EE. UU. (U. S. Preventive Services Task Force, 2009). En la mayoría
referirse a una variedad de malformaciones del romboencéfalo, como el de los países se recomienda actualmente una dieta saludable y la
encefalocele occipital y a menudo la obstrucción del tronco encefálico administración de suplementos de folato antes de la concepción
o la médula espinal cervical. En ausencia de unos buenos criterios hasta la semana 12 de la gestación, con un suplemento adicional en
diagnósticos y de datos sobre los resultados asociados, recomendamos función del riesgo (Gomes et al., 2015).
acudir a los hallazgos específicos en cada paciente. La literatura médica
sobre los resultados es extremadamente escasa, pero se han registrado
varios casos con una esperanza de vida limitada y una discapacidad Relación gen-ambiente en los defectos
importante. del tubo neural
La etiología de los DTN es compleja y multifactorial, y tanto los
Defectos del tubo neural y mielodisrafia factores genéticos como ambientales interactúan para definir el riesgo;
la mayoría de los defectos ocurren de forma esporádica (Blom 2009;
Los DTN abiertos son el resultado del fracaso en el cierre del tubo neu­ Au et al., 2010). Los factores de riesgo ambientales relacionados con los
ral primario durante la cuarta semana de gestación (Roessmann, 1995). DTN son la hipertermia materna, la hiperglucemia, el estatus socio­
La anencefalia es el resultado del fracaso en el cierre del neuroporo económico bajo, los factores dietéticos y la exposición prenatal a ciertos
anterior, mientras que la espina bífida y el mielomeningocele (MMC) fármacos, como antiepilépticos como el valproato y la carbamacepina
son el resultado del fracaso en el cierre del neuroporo posterior. La (Jones et al., 1989; Frey y Hauser, 2003; Yerby, 2003; Blom, 2009; Au
craneorraquisquisis total se debe al fallo completo en el cierre del tubo et al., 2010; Wilde et al., 2014). Además, la toxina fúngica fumonisina
neural, y el resultado característico es el aborto espontáneo durante se ha relacionado con los DTN. La prevalencia de DTN fue de cuatro
la embriogenia o las primeras fases del desarrollo fetal. El resto de los a cinco veces mayor en la población hispana debido a las fumonisinas
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DTN que se discutirán dan lugar a malformaciones del SNC y a la en la harina de maíz empleadas para hacer tortillas (Suarez et al., 2012;
superposición del esqueleto axial, las meninges y la piel que se asocian Wilde et al., 2014). Los DTN se han relacionado con los genes que
a diversos grados de viabilidad en el período neonatal. participan en la diabetes mellitus, la obesidad, y la glucosa y el estrés
oxidativo. Además, los mecanismos epigenéticos (como la modificación
de histonas, la metilación y la remodelación nucleosómica) pueden
Epidemiología y etiología desempeñar un papel en la neurulación (Wilde et al., 2014).
Los DTN siguen siendo una de las malformaciones congénitas más
habituales en los recién nacidos, y afectan a entre 0,5 y 2 de cada 1.000 Diagnóstico fetal de los defectos
embarazos a nivel mundial (Mitchell, 2005; Au et al., 2010). La preva­
lencia varía enormemente y depende especialmente de la etnicidad, el
del tubo neural
área geográfica y el estatus socioeconómico (Frey y Hauser, 2003). En El diagnóstico de DTN abiertos puede sospecharse en caso de elevación
EE. UU., por ejemplo, el riesgo de DTN es mayor en la población his­ de la concentración sérica de la α-fetoproteína (AFP) en la madre y

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874 PA RT E XI I Sistema nervioso

• Figura 59.12  Defectos del tubo neural.


A. Meningocele. Las meninges se hernian
a través del defecto óseo (espina bífida) y
forman un quiste lleno de líquido cefalorra­
quídeo. La médula espinal no participa en la
hernia y puede ser anómala o no. B. Mielo­
meningocele. Espina bífida con mielomenin­
gocele; la médula espinal se hernia hacia el
quiste y finaliza ahí o puede continuar anor­
malmente hacia abajo. C. Mielocistocele o
siringomielocele. La médula espinal muestra
hidromielia; la pared posterior de la médula
espinal está adherida al ectodermo e indife­
renciada. D. Mielocele. La médula espinal es
arráfica; una cavidad quística se sitúa frente
a la pared anterior de la médula espinal.
E. Resonancia magnética fetal de disrafia lum­
bosacra. Obsérvense la ventriculomegalia y
la fosa posterior ocupada. F-H. Tres ejem­
plos de defectos del tubo neural cubiertos
por la piel. F y G. Lesión que se presenta
en la nalga izquierda como un tumor firme,
bien delimitado y lobulado que se tensa
cuando el recién nacido llora. G. Erosiones
maculares y hoyuelo y acrocordón congé­
nitos sobre la superficie. Este último rasgo
puede ser un hoyuelo pilonidal desplazado
por el tumor. H. Imagen ponderada en T2 de
un lipomielomeningocele. I. Recién nacido
con un gran mielomeningocele dorsolumbar.
La musculatura distal en las extremidades
inferiores es débil. (Tomado de Benda CE.
Developmental Disorders of Mentation and
Cerebral Palsies. New York, NY: Grune and
Stratton; 1952 [A-D], y por cortesía del Dr.
Marjorie Grafe, Department of Pathology, Ore-
gon Health and Science University, Portland,
OR [F-H].)

puede confirmarse mediante ecografía o RM fetal (fig. 59.12; Cameron los DTN cubiertos por la piel no se acompañan de una elevación de
y Moran, 2009). El cribado de la AFP está diseñado para detectar la concentración sérica de AFP en la madre (Milunsky et al., 1980).
DTN abiertos y el síndrome de Down (Anderson y Brown, 2009). El Puede obtenerse un falso positivo de AFP si hay un error en el cálculo
momento ideal para su determinación en el suero materno es entre las de la edad gestacional (si es mayor de lo que se predijo) y en caso de
semanas 16 y 18 de la gestación, y en el líquido amniótico entre embarazo múltiple (Brock, 1976). Otras causas de concentración
las semanas 14 y 16 de la gestación. En los DTN abiertos (anencefalia, sérica de AFP elevada en la madre son la contaminación del líquido
espina bífida abierta y encefalocele abierto), la AFP fetal pasa direc­ amniótico con sangre fetal (lo que puede ocurrir en casos de atresia
tamente al líquido amniótico, lo que aumenta de manera indirecta esofágica y duodenal), onfalocele, gastrosquisis, nefrosis congénita,
la concentración sérica de proteínas en la madre. Por el contrario, riñones poliquísticos, agenesia renal, páncreas anular o muerte fetal.

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CAPÍTULO 59 Anomalías congénitas del sistema nervioso central 875

Aunque puede emplearse la ecografía ya al final del primer trimestre algunos casos se han descrito restos de los huesos del cráneo, con tejido
para la evaluación de los signos radiográficos de DTN, lo más habitual encefálico bajo los huesos protectores (Roessmann, 1995).
es diagnosticarlos durante el segundo trimestre. Una forma anómala La mayoría de los recién nacidos nacen muertos y su exploración
de la cabeza y el cerebelo (los signos del «limón» y la «banana») son física se caracteriza por la ausencia de encéfalo y de bóveda craneal
indicadores ecocardiográficos más sensibles para el diagnóstico de DTN (Copp et al., 2013). Los recién nacidos que nacen vivos viven menos
que los hallazgos radiológicos de la médula espinal. Históricamente, la de 1-2 meses como máximo (Baird y Sadovnick, 1984; Peabody
RM fetal no ha sido mejor que la ecografía para la identificación de los et al., 1989). No se ha registrado supervivencia más allá del período
defectos de la médula espinal; sin embargo, la RM se empleará para neonatal en ausencia de cuidados intensivos. En una serie de 211
la planificación quirúrgica en los pacientes en los que se programe mujeres que escogieron dar a luz a fetos con un diagnóstico intrauterino
cirugía intrauterina. de anencefalia, el 72% nacieron vivos, aproximadamente el 67% de
los nacidos vivos murieron en las primeras 24 h y seis recién nacidos
vivieron 6 días o más (con un máximo de 28 días). Este estudio sugería
Defectos abiertos del tubo neural que algunas mujeres preferían continuar con el embarazo tras recibir
Los DTN se caracterizan, bien por lesiones abiertas (craneorraquis­ información sobre los resultados esperados (Jaquier et al., 2006).
quisis, anencefalia, MMC o mielosquisis), bien por lesiones cerradas
(v. más adelante). Mielomeningocele
El MMC y otras malformaciones asociadas de la médula espinal se
Anencefalia deben al fallo en el cierre del neuroporo posterior, probablemente
La anencefalia es el resultado del fallo en el cierre anterior, donde antes del día 26 de gestación. Los DTN espinales abiertos son lesio­
la exencefalia se convierte en anencefalia por degradación del tejido nes expuestas en la espalda sin una cobertura vertebral ni dérmica
neural (Copp et al., 2013). Se trata del trastorno más grave del cierre (v. fig. 59.12; Menkes, 1991). El abanico de estas malformaciones
del tubo neural anterior. La anencefalia es la responsable de alrededor de la médula espinal incluye el MMC y el meningocele. El MMC se
de la mitad de todos los DTN abiertos (Au et al., 2010). Dado que caracteriza por la hernia de las meninges y la médula espinal en el punto
es un defecto de la neurulación temprana, sucede antes de los 24 días del defecto. Los MMC son alrededor de cuatro veces más habituales
de gestación. La anencefalia puede diagnosticarse mediante ecografía que los meningoceles (lesiones recubiertas por piel) (Friede, 1989;
fetal (fig. 59.13) durante el primer o el segundo trimestres (Goldstein y Menkes, 1991) y suelen presentarse en la zona lumbar o lumbosacra.
Filly, 1988; Crane, 1992), y se asocia con frecuencia a polihidramnios El diagnóstico suele realizarse durante el embarazo mediante eco­
(Nichols y Schrepfer, 1966). grafía y/o la determinación de una concentración de AFP elevada
La anencefalia afecta más habitualmente al prosencéfalo y al tronco (revisado por Copp et al., 2013). El MMC suele acompañarse de otras
encefálico superior. Se caracteriza por la ausencia de bóveda craneal, anomalías del SNC clínicamente significativas, como la malformación
y el contenido intracraneal se ve sustituido por tejido glial vasculari­ de Chiari de tipo II y la hidrocefalia (Del Bigio, 2010). Basándonos
zado y desorganizado (área cerebrovascular) (Menkes, 1991; Roes­ en datos históricos, el 60% de los pacientes con lesiones occipitales,
smann, 1995). El hipotálamo y el cerebelo suelen presentar malfor­ cervicales, torácicas o sacras desarrollan hidrocefalia, en contraste
maciones, el lóbulo anterior de la hipófisis está presente y las carótidas con el 90% de los que presentan lesiones dorsolumbares, lumbares o
internas son hipoplásicas, lo que puede deberse a anomalías en la lumbosacras (Lorber, 1961). Debido a la descompresión derivada de
formación encefálica. Dado que el recién nacido anencefálico atraviesa la fuga de LCR del MMC al nacer, la hidrocefalia y el aumento de la
un período de exencefalia, donde el tejido encefálico protruye a través presión pueden hacerse evidentes únicamente tras el cierre quirúrgico
de la bóveda craneal sin formar y se degrada por exposición al líquido de la espalda (Stein y Schut, 1979).
amniótico, algunos investigadores han formulado la hipótesis de que El tratamiento clínico del recién nacido con un DTN debe ser
el defecto primario es una anomalía en la formación del cráneo. En individualizado. En la actualidad, se aboga por el cierre quirúrgico en la
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.

• Figura 59.13 Anencefalia. A. Recién nacido con anencefalia. B. Ecografía de un feto con anencefalia.
Obsérvese la ausencia de las estructuras craneales normales (flechas) por encima de las órbitas (O).
(Por cortesía del Dr. Marjorie Grafe, Department of Pathology, Oregon Health and Science University,
Portland, OR.)

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876 PA RT E XI I Sistema nervioso

mayoría de los recién nacidos, lo que lleva a una reducción de la infec­ en los DTN abiertos (Copp et al., 2013). Los encefaloceles se carac­
ción y una mejoría de las habilidades cognitivas, la deambulación, una terizan por defectos en el cráneo a través de los cuales protruye tejido
menor prevalencia de la incontinencia y una menor mortalidad (Hunt encefálico. Los defectos más leves son el cráneo bífido, donde hay
y Holmes, 1975; Stein et al., 1975; McLone, 1992). Generalmente, el un fallo en la fusión de la línea media del cráneo y los meningoceles
tratamiento quirúrgico del defecto espinal se lleva a cabo en las 48-72 h craneales que contienen tejido meníngeo, pero no neural. Hasta en
posteriores al nacimiento. Debe contemplarse la participación de un el 80% de los pacientes, los encefaloceles son occipitales (fig. 59.14),
cirujano plástico, especialmente en el caso de lesiones extensas o com­ con el resto en las regiones parietales, frontonasales, intranasales o
plicadas. Puede ser necesaria la derivación simultánea del LCR o una nasofaríngeas. La localización de la lesión se ve influida por factores
vez que la espalda haya cicatrizado. Pueden ser precisas intervenciones geográficos o étnicos y genéticos. Los encefaloceles frontales tienen
quirúrgicas adicionales en caso de malfuncionamiento o infección una mayor prevalencia en el Sudeste asiático, y las lesiones occipitales
de la derivación, secuelas de la malformación de Chiari de tipo II son más habituales en las poblaciones occidentales (Mahapatra y
(apnea, estridor, disfagia), médula anclada o siringohidromielia. La Agrawal, 2006). La participación de factores genéticos se ve res­
evaluación inicial de todos los neonatos con sospecha de DTN debe paldada por ciertos síndromes autosómicos recesivos asociados al
incluir la evaluación de la función sensorial y motora de las extremi­ encefalocele (p. ej., los síndromes de Meckel y Joubert; v. anterior­
dades inferiores. Se debe prestar especial atención a los movimientos mente) (Brown y Sheridan-Pereira, 1992). En total, alrededor de
espontáneos, la respuesta al tacto y al dolor, al patrón de vaciamiento la mitad de los recién nacidos con encefaloceles presentan otras
vesical y anal (especialmente retención urinaria y goteo posmiccional). anomalías congénitas mayores, como microcefalia, arrinencefalia,
Debe hacerse una evaluación minuciosa de los bebés para descartar anoftalmía, labio leporino o fisura palatina, craneosinostosis, car­
otras malformaciones, como cardiopatías congénitas, a menos que diopatía congénita compleja y otras anomalías sistémicas (Brown y
estas se hayan descartado mediante ecografía prenatal. También es Sheridan-Pereira, 1992).
preciso vigilar a los neonatos en busca de síntomas de Chiari (apnea, Los encefaloceles también se asocian a otros defectos del SNC
estridor, dificultades para la alimentación) y signos de aumento de la que influyen en el tratamiento quirúrgico y la gravedad del resultado.
presión intracraneal. El enfoque general debe ser multidisciplinario, En una serie de 129 pacientes con encefaloceles anteriores (incluidos
con la participación del departamento de neurocirugía, urología y frontoetmoidal, orbital, transetmoidal, transelar e interfrontal), 22 pre­
fisioterapia, como mínimo. El tratamiento a largo plazo del niño con sentaban hidrocefalia asociada, y se observó ACC en 16 (Mahapa­
MMC también exige el tratamiento sintomático de la vejiga e intestinos tra, 2011). Además de la hidrocefalia, otras anomalías incluyen venas de
neurógenos, así como atención endocrina, ortopédica, rehabilitadora drenaje anómalas y heterotopia nodular (Diebler y Dulac, 1987; Men­
y neuropsiquiátrica (revisado por Apkon et al., 2014). Los especialistas kes, 1991). La presencia de encefalocele del lóbulo occipital inferior
en rehabilitación, neurología y pediatría del desarrollo son a menudo junto con defectos de la base del cráneo y malformaciones del cerebelo
los principales puntos de contacto para el tratamiento a largo plazo, y del tronco encefálico inferior es característica de las malformaciones
dependiendo de los recursos disponibles. de Chiari de tipo III.
La cirugía fetal se ha convertido en una opción para la reparación La evaluación del recién nacido con un encefalocele puede ayudarse
quirúrgica del MMC. Un estudio aleatorizado demostró que la cirugía con transiluminación, radiografías de cráneo, ecografías craneales,
fetal se asociaba a una menor tasa de colocación de derivaciones y tomografías computarizadas y RM. Habitualmente, la RM con angio­
posiblemente una función motora mejor hacia los 3 años de vida, pero grafía y venografía es el estudio de elección, especialmente para la
también se asociaba a parto prematuro y complicaciones maternas planificación de la cirugía. Los encefaloceles frontonasales sobresalen o
(Adzick et al., 2011; Grivell et al., 2014). Además, las madres pueden laten con la compresión breve de ambas venas yugulares, lo que indica
precisar reposo absoluto prolongado durante el embarazo y no ser comunicación con el espacio subaracnoideo. Los gliomas nasales,
capaces de dar a luz por vía vaginal. No se han observado mejoras en dermoides y teratomas pueden presentarse en la misma región. El
la vejiga/intestinos neurógenos cuando se compara con los que reciben encefalocele intranasal debe sospecharse cuando se localiza una masa
cuidados posnatales estándar (Holmes et al., 2001), y los efectos en la intranasal en un niño con un puente nasal ancho y ojos muy separados.
movilidad a largo plazo, la capacidad cognitiva y otros aspectos están Algunos de estos niños también pueden presentar meningitis recu­
aún a estudio. A la luz de estos resultados positivos, algunos centros rrente (Menkes, 1991). Los encefaloceles basales no suelen diagnos­
fomentan la cirugía fetal como el estándar de cuidado. Sin embargo, ticarse hasta la infancia y pueden localizarse en la nasofaringe, los senos
el American College of Obstetricians and Gynecologists recomienda esfenoidales o la órbita posterior.
un enfoque que equilibre los riesgos y los beneficios tanto para el feto En la mayoría de los pacientes, el tratamiento neuroquirúrgico
como para la madre (ACOG, 2013). está indicado en las primeras etapas de la vida; sin embargo, las
lesiones de gran tamaño u otras anomalías graves del SNC pueden
Mielosquisis descartar la intervención, ya que habitualmente el tejido encefálico
La mielosquisis se diferencia del MMC en que no hay espacio para el localizado en el exterior del cráneo no puede salvarse. Es imprescin­
LCR tras la placa neural localizada contra la pared anterior de la médula dible un tratamiento temprano en los recién nacidos con alto riesgo
espinal; este defecto también carece de piel o vértebras que lo cubran, lo de meningitis debido a lesiones que presentan una comunicación
que lleva a una fuga continua de LCR. Dependiendo de la localización externa y fuga de LCR. Los objetivos de la reparación quirúrgica
anatómica del defecto, los déficits neurológicos pueden afectar a las son el cierre dural y la corrección estética. Entre las complicaciones
extremidades inferiores, la vejiga y el tubo digestivo. El cierre puede podemos encontrar la fuga postoperatoria de LCR o la formación
ser más difícil que en el MMC, y puede haber una hidrocefalia tras su de un seudomeningocele (Hervey-Jumper et al., 2011). Para los
cierre (Jeelani y McComb, 2011). Al igual que ocurre con el MMC, pacientes que no son candidatos a la cirugía, debe llevarse a cabo
este defecto se diagnostica inicialmente por la concentración elevada el tratamiento paliativo, aunque puede suponer un desafío decidir
de AFP y por la ecografía prenatal. qué intervenciones son adecuadas para un determinado paciente.
Son básicas las discusiones continuadas que incluyan a la familia,
otros especialistas e, idealmente, profesionales de cuidados paliativos
Defectos del tubo neural cubiertos por la piel específicos para proporcionar una buena atención.
Los encefaloceles pueden acompañarse de convulsiones refractarias
Encefalocele al tratamiento médico que pueden responder a la resección quirúr­
El encefalocele se considera un trastorno posterior a la neurulación y gica (Faulkner et al., 2010). La supervivencia y el resultado siguen
es probable que se deba a mecanismos distintos de los que participan siendo difíciles de predecir, dada la variabilidad de presentaciones

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• Figura 59.14  Imágenes fetales y posnatales de un encefalocele occipital. A. Corte axial de resonancia
magnética fetal. B. Recién nacido con un encefalocele occipital de gran tamaño. C. Corte axial de
resonancia magnética posnatal ponderada en T2 en un paciente con un encefalocele occipital. D. Cor­
te sagital de resonancia magnética posnatal ponderada en T1 en un paciente con un encefalocele
occipital. (Por cortesía del Dr. Marjorie Grafe, Department of Pathology, Oregon Health and Science Uni­
versity, Portland, OR [A, B].)

e intervenciones quirúrgicas. Un estudio de una serie de niños con una amplia experiencia en ecografías, la RM es el estudio de elección,
encefaloceles describió una mortalidad global del 29% (el 45% en y la tomografía computarizada se emplea fundamentalmente para
recién nacidos con defectos posteriores; el 0% en recién nacidos con determinar las referencias óseas. La malformación de Chiari de tipo II
defectos anteriores) (Brown y Sheridan-Pereira, 1992). Los déficits no suele observarse con meningocele posterior (Gupta et al., 2013).
neurológicos fueron graves en el 33% de los supervivientes. Se encon­
traron déficits neurológicos leves en el 17% de los supervivientes con Mielodisrafias ocultas
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defectos anteriores y en el 50% de los supervivientes con defectos Las mielodisrafias ocultas son defectos cerrados de la parte distal de la
posteriores. El pronóstico de retraso intelectual depende de la cantidad médula espinal con una cobertura dérmica intacta, y son el resultado de
de tejido neural incluido en el defecto (revisado por Hervey-Jumper defectos de la formación del tubo neural caudal (neurulación secunda­
et al., 2011), y el resultado puede ser bastante favorable en pacientes ria). En algunos casos, estos defectos están realmente ocultos sin mos­
con una anatomía encefálica normal. trar ninguna anomalía en la piel y pueden pasar desapercibidos hasta
que se hacen sintomáticos. Tras el parto, pueden detectarse mediante
Meningocele RM fetal (Schwartz y Rossi, 2015). En la inmensa mayoría de los recién
Los meningoceles son lesiones cubiertas por piel que contienen tejido nacidos, una mielodisrafia oculta se acompaña de estigmas cutáneos,
meníngeo que se ha herniado a través de la pared posterior de la colum­ como mechones de pelo anómalos, hemangiomas, puntos pigmenta­
na vertebral (Copp y Greene, 2013). Esto sucede más habitualmente en dos, acrocordón, aplasia de cutis congénita, hoyuelos o tractos cutáneos
la columna lumbosacra que en la cervical, y, aunque el defecto no afecta (especialmente en caso de fuga del LCR), o una masa subcutánea,
a la médula espinal, esta puede verse comprimida y causar síntomas. a menudo perceptible dada la asimetría del surco interglúteo (Hall
Tras el parto, los meningoceles pueden evaluarse mediante ecografía o et al., 1981; Albright et al., 1989; Scatliff et al., 1989). Los hoyuelos
RM espinal para evaluar la compresión de la médula, siringohidromielia sacros o las hendiduras glúteas profundas entre las nalgas en ausencia
y diastematomielia (Ladino Torres y DiPietro, 2014). En los centros sin de otros hallazgos pocas veces se asocian a mielodisrafia, mientras que

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878 PA RT E XI I Sistema nervioso

los hoyuelos situados claramente por encima de la hendidura glútea se lo que permite una evaluación dinámica de la movilidad de la médula
asocian a un mayor riesgo de mielodisrafia. espinal inferior y la RM para definir las anomalías estructurales de
La clasificación de las mielodisrafias se realiza siguiendo criterios la médula. Debe llevarse a cabo la evaluación tan pronto como se
clínicos, radiológicos y del desarrollo (Schwartz y Rossi, 2015). Cuando sospeche una mielodisrafia cerrada. El momento para el tratamiento
esté disponible, la RM está indicada para la evaluación y el diagnóstico. quirúrgico depende de la presencia o la evolución de los síntomas y
Para disrafias cerradas, la distinción inicial se basa en la presencia de una signos neurológicos. El cuidado de estos niños requiere un enfoque
masa subcutánea (Badve et al., 2011). Las lesiones cubiertas por piel multidisciplinario para el tratamiento de los trastornos y las comorbi­
sin una masa subcutánea deben examinarse en busca de acrocordón, lidades neuroquirúrgicos (Cornette et al., 1998).
indicios de disfunción medular y malformaciones anorrectales. Los
defectos con masas subcutáneas se clasifican en función de los tipos Agradecimientos
de tejido afectados: lipomielocele (tejido adiposo y meninges), lipo-MMC
(tejido adiposo, nervioso y meninges), meningocele (únicamente Nuestro agradecimiento especial a Stephen Back y Lauren Plawner,
meninges) y mielocistocele terminal, que es una lesión compleja con autores de la versión anterior de este capítulo. Se empleó su texto como
persistencia de la cavidad siringohidromiélica terminal (Schwartz y base para esta revisión/actualización.
Rossi, 2015).
Otras lesiones medulares asociadas a la disrafia oculta son la dias­ Lecturas recomendadas
tematomielia-diplomielia, el lipoma, el teratoma y otros tumores, senos
dérmicos con o sin quistes dermoides o epidermoides, y la compresión Adzick NS, Thom EA, Spong CY, et al. A randomized trial of prenatal ver­
medular (Menkes, 1991; Anderson y Brown, 2009). Entre las lesiones sus postnatal repair of myelomeningocele. N Engl J Med 2011;364:993-
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878e.4 PARTE XII Sistema nervioso

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CAPÍTULO 59 Anomalías congénitas del sistema nervioso central 878e.5

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878e.6 PARTE XII Sistema nervioso

Palabras clave
Anomalía congénita del SNC
Desarrollo neural
Malformación cerebral
Malformación de la fosa posterior
Defectos del tubo neural
Espina bífida
Displasia cortical

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60
Lesión cerebral en el recién nacido
prematuro
STEPHEN A. BACK Y STEVEN P. MILLER

PUNTOS CLAVE cerebral comienza con dos mecanismos previos principales, la isquemia
y la infección/inflamación, que pueden interactuar y potenciarse. Dado
• La hemorragia intraventricular (HIV) sigue siendo una causa habitual que el cerebro en desarrollo evoluciona rápidamente, la gravedad de la
de patología neurológica crónica. A pesar de la disminución gradual alteración y el momento en el que ocurre son críticos en el grado de sus-
en la incidencia de la mayoría de los grados de HIV, la mayor supervivencia ceptibilidad a la lesión. A medida que el cerebro se desarrolla, algunas
de los recién nacidos con muy bajo peso al nacer da como resultado poblaciones celulares son más vulnerables a la lesión, mientras que otras
un aumento del número total de recién nacidos con HIV. presentan una mayor resistencia. Los patrones de vulnerabilidad de las
• En la actualidad, los recién nacidos prematuros presentan un riesgo células cambian a medida que el cerebro madura. Es más, una gran
mucho menor de lesión de la sustancia blanca (LSB) grave, que variedad de factores adicionales pueden modificar la susceptibilidad del
habitualmente lleva a una necrosis quística focal y a una degeneración
cerebro a la lesión. El cerebro prematuro puede estar expuesto a una
secundaria de la sustancia gris. La LSB quística se asocia habitualmente
gran variedad de factores subclínicos que por sí solos no son lesivos,
a parálisis cerebral, a déficit visual cortical, y a un abanico
de dificultades cognitivas y del aprendizaje.
pero que, combinados, potencian la lesión. Entre estos factores están
• La mayoría de los recién nacidos prematuros suelen mostrar LSB el estado nutricional, las enfermedades sistémicas, la exposición a los
difusas más leves que llevan fundamentalmente a problemas glucocorticoides, los sedantes o las drogas, procedimientos dolorosos
en la mielinización como consecuencia de la muerte de los precursores y otras fuentes de estrés neonatal. Resulta igualmente importante
de oligodendrocitos (pre-OL). Parece que tanto la ecografía craneal considerar el concepto de tolerancia, por el que una alteración previa
como la resonancia magnética (RM) se quedan cortas en el diagnóstico no lesiva reduce la gravedad de otra posterior. Por ejemplo, una infec-
de la extensión de las LSB difusas. ción fetal leve puede proteger al feto frente a una alteración posterior
• Las LSB difusas crónicas llevan a una reducción en la proliferación hipóxica o isquémica más grave.
de la sustancia blanca cerebral como consecuencia de una serie de procesos Este capítulo aborda tres formas de lesión del cerebro prematuro
de falta de maduración que llevan a una regeneración de pre-OL que no habituales que se solapan con frecuencia: la hemorragia intraven-
llegan a diferenciarse en oligodendrocitos mielinizados. La LSB difusa tricular (HIV), la lesión de la sustancia blanca (LSB) y la lesión de
crónica se acompaña también de una reducción en la proliferación la sustancia gris. El impacto de la lesión del cerebro prematuro es
de la sustancia gris cerebral que parece deberse a extensas alteraciones considerable. De los niños muy prematuros, incluso con los cuidados
en la maduración neuronal más que a la pérdida de neuronas en desarrollo. intensivos neonatales modernos, el 5-10% presentan déficits motores
• La LSB difusa, que a menudo se objetiva como una LSB punteada en la graves, como parálisis cerebral secundaria a una LSB significativa, y
RM diagnóstica, está relacionada con un amplio abanico de trastornos más de la mitad presentan significativos déficits cognitivos, senso-
neurológicos del comportamiento persistentes, que incluyen alteraciones riales y del comportamiento (Vohr, 2014). Estos déficits cognitivos
de las habilidades motoras y cognitivas. La LSB punteada se diagnostica y nerviosos se observan cada vez con más frecuencia en ausencia de
con más facilidad en las RM de los prematuros más tempranos. La
alteraciones motoras significativas o parálisis cerebral (Gonzalez y
carga de la LSB punteada (volumen y localización de la lesión) predice
Miller, 2006), lo que también sugiere la alteración primaria de múlti-
la disfunción motora y cognitiva. El abanico de alteraciones del desarrollo
neurológico que siguen a la LSB en el neonato prematuro es compatible
ples estructuras de sustancia gris. La lesión de la sustancia gris se
con la falta de maduración descrita en la sustancia cerebral blanca y gris. atribuyó previamente a una LSB necrótica quística que llevaba a una
• Estas formas debidas a la falta de maduración de la sustancia cerebral degeneración secundaria de la sustancia gris cortical y subcortical.
gris y blanca, descubiertas recientemente, suponen nuevos desafíos Aunque los actuales estudios de cohortes realizados en supervivientes
en el diagnóstico y sugieren nuevas estrategias terapéuticas que prematuros muestran habitualmente lesiones más leves, estas formas
fomenten la reversión de los procesos que detienen la maduración de lesión más leves se asocian a una menor proliferación de la sustan-
de las neuronas y los pre-OL. cia cerebral, tanto gris como blanca. La alteración en la proliferación
cerebral surge como consecuencia de complejas y dispares respuestas
de las neuronas y la neuroglía que no consiguen madurar completa-
mente durante el período ventana crítico para el desarrollo del circui-
Principios generales de la lesión del cerebro to neural. Estas observaciones apoyan el concepto de que gran parte
prematuro de las alteraciones motoras y neurológicas del comportamiento que
se observan actualmente en los supervivientes prematuros se deben
El cerebro prematuro es propenso a sufrir un amplio abanico de lesio- a alteraciones de la maduración cerebral en lugar de a una lesión
nes, que van desde lesiones difusas no necróticas, pasando por hemo- franca (Back y Miller, 2014). Así, niños prematuros con un cociente
rragias, hasta la extensa destrucción de tejido por necrosis. La lesión intelectual normal presentan actualmente dispraxia motora (Miller
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880 PA RT E XI I Sistema nervioso

et al., 2000; Sanger et al., 2006), déficits de atención y funciones • CUADRO 60.1  Factores patógenos que llevan
ejecutoras (p. ej., flexibilidad cognitiva, control de la inhibición,
memoria activa) (Anderson y Doyle, 2004; Marlow et al., 2005;
a hemorragia intraventricular
Diamond et al., 2007), y dificultades visuales en el procesamiento Aumento en el flujo sanguíneo cerebral
de la información y el lenguaje (Grunau et al., 1990; Whitfield Fluctuación en el flujo sanguíneo cerebral
et al., 1997; Grunau et al., 2002; Taylor et al., 2004; Saavalai- Aumento en la presión venosa cerebral
nen et al., 2007; Luu et al., 2009). Estos problemas cognitivos y del Lesión endotelial
comportamiento persisten hasta la edad adulta (Curtis et al., 2002; Capilares de la matriz germinal vulnerables
Hack et al., 2002; Grunau et al., 2004; Taylor et al., 2004; Linds- Alteraciones de la coagulación
trom et al., 2007; Nosarti et al., 2007; Saavalainen et al., 2007). Aumento de la fibrinólisis
Por tanto, la alta prevalencia de estas alteraciones neurocognitivas
apoya la idea de alteraciones diseminadas en el desarrollo cerebral
y en la conectividad, tanto en la sustancia gris como en la blanca
(Doesburg et al., 2011).
La lesión celular en recién nacidos con una HIV de grado III o
grado IV (infarto hemorrágico periventricular [IHPV]) puede ocurrir
Hemorragia intraventricular y periventricular a partir de una lesión isquémica previa, una disminución del flujo
sanguíneo cerebral, un aumento de la presión intracraneal o por vasoes-
en el recién nacido prematuro pasmo. La HIV más grave se asocia a LSB cerebral, lesión cerebelosa
(v. más adelante) y, con menos frecuencia, necrosis neuronal pontina
Patogenia (Volpe, 2008). En este contexto, el infarto venoso lleva a la muerte
neuronal, así como a la muerte glial. La hidrocefalia posthemorrágica
La HIV es una lesión habitual en el cerebro prematuro que tiene su
(HPH) es una secuela habitual de la HIV grave y del IHPV. El tra-
origen en la matriz germinal subependimaria (Ballabh, 2010). Los
tamiento óptimo de la HPH para favorecer unos resultados óptimos
precursores de los gliocitos y las neuronas corticales se desarrollan a
del desarrollo neurológico sigue siendo controvertido, aunque algunos
partir de la matriz germinal y la zona germinal ventricular adyacente
datos recientes favorecen la intervención precoz (de Vries et al., 2002;
al final del segundo trimestre y al principio del tercero. La matriz
Srinivasakumar et al., 2013).
germinal subependimaria es una región altamente vascularizada cuya
circulación arterial procede de las arterias cerebrales anterior y medial,
así como de la arteria coroidea anterior. Estas arterias alimentan una Localización, incidencia y momento
elaborada red de capilares de pared estrecha que se continúa con un de la hemorragia
sistema venoso profundo que termina en la vena de Galen. Las venas
terminal, coroidea y talamoestriada discurren en posición anterior para En los recién nacidos prematuros, la hemorragia de la matriz germinal
formar la vena cerebral interna, que discurre en posición posterior se observa con más frecuencia en el cruce de las venas terminal, coroidea
para unirse a la vena de Galen, lo que forma un giro en forma de U en y talamoestriada de la matriz germinal que cubre el cuerpo del núcleo
la dirección del flujo sanguíneo. La involución de la matriz germinal caudado a nivel del agujero de Monro. La hemorragia parenquimatosa
tiene lugar a medida que avanza la gestación. se da con más frecuencia en la región frontoparietal (aproximadamente
La predisposición del recién nacido prematuro a la HIV se debe el 15% de los casos), donde no parece haber una extensión de la HIV,
a diversos factores. Existe una presión-circulación pasiva debido a la sino más bien un proceso independiente, un infarto hemorrágico.
falta de autorregulación de la circulación sanguínea en las arteriolas La hemorragia suele ser unilateral o, en menos del 30% de los casos,
cerebrales del cerebro prematuro. En presencia de una matriz germi- bilateral asimétrica.
nal subependimaria altamente vascularizada, el riesgo de HIV se ve La incidencia y la gravedad de la HIV aumentan cuando decrece
aumentado por la ausencia de una membrana basal de apoyo en los la gestación. La HIV tiene lugar únicamente en alrededor del 5% de
vasos sanguíneos de la matriz, el aumento en la actividad fibrinolí- los recién nacidos a término. La HIV afectaba antes al 40-60% de los
tica de la matriz y la disminución en la presión tisular extravascular recién nacidos con muy bajo peso al nacer (MBPN, menos de 1.500 g
en los primeros días de vida extrauterina. Así, la HIV puede tener de peso al nacer). En los últimos 20 años ha tenido lugar una reducción
lugar en el contexto de una presión venosa elevada o un aumento global de un 15-25% en la incidencia de HIV en recién nacidos con
en las fluctuaciones de la velocidad del flujo sanguíneo cerebral MBPN (Paneth et al., 1993; Vohr et al., 2000; McCrea y Ment, 2008).
(FSC) desencadenados por factores como dificultad respiratoria, Aun así, la tasa de IHPV parece estable (Hamrick et al., 2004b). Los
neumotórax, asfixia, insuficiencia miocárdica, conducto arterioso índices de HIV de grado III y de IHPV permanecen en el 16%
persistente, hipotensión, hipotermia e hiperosmolaridad (Ment y en recién nacidos con MBPN (Stoll et al., 2010). Dado que son más los
Schneider, 1993). La pasividad en la fluctuación de la presión es recién nacidos más pequeños que sobreviven, la HIV grave y el IHPV
habitual en recién nacidos prematuros y puede asociarse a HIV (Soul aún constituyen una buena parte de los malos resultados del desarrollo
et al., 2007; O’Leary et al., 2009). neurológico.
Se ha reproducido la HIV en experimentos tras una hipoten- Aunque ha habido una reducción gradual en la incidencia de la
sión seguida de reperfusión (Goddard-Finegold et al., 1982; Ment mayoría de los grados de HIV, el aumento en la supervivencia de recién
et al., 1982). Estos estudios apoyan la teoría de que la HIV es más pro- nacidos con MBPN ha llevado a un incremento en el número total de
bable cuando un período temprano de hipotensión prolongada se sigue recién nacidos con HIV.
de un aumento de la presión arterial (Miall-Allen y Whitelaw, 1987; El riesgo de HIV es máximo en los primeros 3 o 4 días de vida.
Miall-Allen et al., 1987). La hipertensión aislada acompañada de La hemorragia es poco frecuente en el nacimiento, aunque se ha des-
convulsiones, intubación y aspirado también predispone a que el cere- crito ya en la primera hora de vida (Ment et al., 1984). Puede haber
bro presente una HIV. Incluso la alimentación por sonda y la adminis- hemorragias prenatales, especialmente en caso de trombocitopenia
tración de surfactante pueden llevar a cambios en la hemodinámica isoinmunitaria neonatal. El 25% de las hemorragias tienen lugar hacia
cerebral que lleva a HIV, como ha podido medirse mediante espec- la sexta hora de vida, y el 50% durante las primeras 24 h de vida. Menos
troscopia de infrarrojo cercano (Roll et al., 2000; Baserga et al., 2003; del 5% de los recién nacidos desarrollan HIV después del cuarto o
Kaiser et al., 2004). El cuadro 60.1 enumera los factores clave que quinto días de vida (Ment y Schneider, 1993). La hemorragia puede
pueden interactuar para producir una HIV. extenderse durante los primeros días debido a alteraciones en el FSC.

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CAPÍTULO 60 Lesión cerebral en el recién nacido prematuro 881

Cuadro clínico cerebelosos pueden ser especialmente vulnerables a la toxicidad de los


restos sanguíneos resultantes de la HIV, detectados por la RM como
El cuadro clínico de la HIV en el recién nacido depende de la extensión depósitos de hemosiderina en la superficie del tronco encefálico y
de la hemorragia. Puede variar desde una HIV asintomática hasta el el cerebelo (Volpe, 2009). La acentuada vulnerabilidad de los precursores
deterioro repentino catastrófico que se manifiesta con signos neurológi- cerebelosos es compatible con estudios neurológicos seriados realizados
cos como el estupor o el coma, convulsiones, postura de descerebración en supervivientes humanos prematuros que demostraron una alteración
o apnea. Una fontanela tensa, unida a la disminución repentina del del crecimiento cerebeloso en respuesta a la exposición posnatal a
hematocrito, la hiperglucemia, la hiperpotasemia, la hipotensión o glucocorticoides (Tam et al., 2011a).
la bradicardia, puede anunciar una HIV. Puede haber una secreción
inadecuada de hormona antidiurética. No obstante, el cuadro clínico
más habitual consiste en un deterioro clínico gradual con alteración Resultado y pronóstico
del nivel de conciencia, hipotonía y movimientos anómalos de las Las hemorragias aisladas de grado I y II suelen resolverse sin haber
extremidades o los ojos. En el 25-50% de los casos no aparecen signos empeorado. Las hemorragias de grado III empeoran durante un período
clínicos (Dubowitz et al., 1998). de 1-3 semanas y pueden producir una reacción fibrótica que obstruye
el espacio subaracnoideo con las consecuentes dilatación ventricular
Clasificación de la hemorragia intraventricular e hidrocefalia. Los síntomas clínicos de la hidrocefalia progresiva,
La ecografía es una técnica fiable y sensible para la evaluación de la
gravedad de la HIV en la unidad de neonatos y puede hacerse en la
propia cuna. Papile et al. (1978) adaptaron la clasificación estándar
que se aplicaba originariamente a las imágenes de HIV obtenidas
por tomografía computarizada a las imágenes ecocardiográficas.
Clasificaron la HIV en cuatro grados de gravedad en función de la
localización y la extensión de la hemorragia (fig. 60.1 y tabla 60.1).
Este sistema de clasificación se usó habitualmente para estudiar los
resultados a largo plazo. En la actualidad, el sistema de clasificación
que más se usa es el propuesto por Volpe (2008), que se basa en la eco-
grafía craneal para definir la extensión de la hemorragia ventricular.
Dado que la afectación parenquimatosa es un proceso diferenciado,
no se incluye en la clasificación continua de la gravedad de la HIV
(v. tabla 60.1). Parece que el IHPV aparece como consecuencia de
un infarto venoso en la sustancia blanca periventricular más que por
la propagación directa de la HIV al parénquima (Volpe, 2008). De
ahí que la presencia de una hemorragia intracerebral o de lesiones
parenquimatosas se describa aparte y no se designe como de grado IV.
De 1 a 8 semanas tras la hemorragia intraparenquimatosa aparece
la destrucción tisular y la formación de un quiste porencefálico.
Es especialmente importante llevar a cabo ecografías seriadas para
relacionar la gravedad de la HIV con los resultados del desarrollo
neurológico (Rademaker et al., 2005).
Además de diversas formas de LSB cerebral, la HIV puede causar
diversos grados de lesión en el cerebelo (fig. 60.2), que se manifiestan en • Figura 60.1  Grados progresivos de hemorragia intraventricular,
la resonancia magnética (RM) como cambios definidos en la microes- de la más leve a las más grave. A. La hemorragia de grado I afecta a
tructura (Tam et al., 2009) y retrasos en el crecimiento cerebeloso menos del 10% del volumen ventricular de los ventrículos laterales.
(Tam et al., 2011b). Parece que este menor crecimiento se debe a una B. La de grado II afecta al 10-50% del volumen ventricular. C. La de
gran población de granulocitos proliferativos externos, que son los grado III afecta a más del 50% del volumen ventricular y se asocia con
precursores que generan la capa interna de granulocitos, responsable frecuencia a dilatación ventricular. D. Hemorragia asociada a infarto
esta de la mayoría de las células del cerebro humano. Estos precursores parenquimatoso.

TABLA
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60.1  Clasificación de la hemorragia intraventricular en función de los resultados de la ecografía craneal

Clasificación de Papile Clasificación de Volpe*


I Hemorragia subependimaria con HIV mínima o sin ella I Hemorragia de la matriz germinal HIV < 10%
II HIV definida sin distensión de los ventrículos II HIV 10-50%
III Aumento de tamaño de los ventrículos secundaria a una distensión III HIV > 50%, generalmente con distensión
por sangre del ventrículo lateral
IV Extensión de la hemorragia hacia el parénquima junto con HIV Categoría separada Ecointensidad periventricular que muestra lesión
y aumento de tamaño parenquimatosa

*Por ecografía craneal.


HIV, hemorragia intraventricular.

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• Figura 60.2  La hemorragia intraventricular se asocia a una alteración en el crecimiento del cerebelo.
A y B. Aspecto normal del encéfalo y el cerebelo en un neonato prematuro nacido a las 28 semanas
de gestación al que se le realizó una resonancia magnética (RM) a las 30,3 semanas. C y D. Cerebelo
más pequeño (punta de flecha) asociado a hemorragia intraventricular (HIV) (flecha) en un neonato
prematuro nacido a las 28 semanas de gestación al que se le realizó una RM a las 30,1 semanas.

como un crecimiento cefálico rápido, una fontanela anterior tensa o la En el 15% de los casos de HIV aparecen áreas de IHPV que se aso-
separación de las suturas craneales, aparecen a menudo días o semanas cian a tasas de mortalidad casi un 50% mayores que las de los recién
después de la aparición de la dilatación ventricular. El retraso en la nacidos sin HIV (Brouwer et al., 2008; Sarkar et al., 2009; Bolisetty
aparición de los síntomas clínicos se debe a la presencia de un amplio et al., 2014).
espacio subaracnoideo, así como a la escasez de mielina en los recién Diversos estudios se han centrado en la relación entre la HIV y
nacidos prematuros. los resultados del desarrollo neurológico posteriores. En los super-
Los resultados varían en los distintos estudios, pero, en general, las vivientes con peso extremadamente bajo al nacer (PEBM), incluso
tasas de mortalidad no muestran un aumento significativo en recién las HIV de grado I y II se han asociado a un modesto aumento de
nacidos con hemorragias de grado I o II. En recién nacidos con MBPN, la morbilidad en relación con los recién nacidos sin HIV en algu-
el 10-15% presentan hemorragias más graves (McCrea y Ment, 2008). nos estudios (Patra et al., 2006; Vavasseur et al., 2007; Klebermass-
Estas hemorragias de grado III o IV se asocian a una mayor mortalidad. Schrehof et al., 2012), pero no en todos (Payne et al., 2013). Dada la

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CAPÍTULO 60 Lesión cerebral en el recién nacido prematuro 883

considerable morbilidad en presencia de prematuridad extrema, puede se recomienda la estrecha vigilancia de la PAM, no hay pruebas de que
resultar un desafío valorar de manera independiente el mayor riesgo la manipulación farmacológica de la presión arterial sistémica (p. ej.,
de complicaciones neurológicas relacionado con los grados más bajos con vasopresores, corticoides o expansores de volumen) para conseguir
de HIV. Un estudio más reciente de casi 1.500 supervivientes con un determinado efecto (p. ej., PAM > 30 mmHg) modifique la inci-
PEBM descubrió que las HIV de grado I y II se asociaban a una tasa dencia de HIV ni mejore el resultado neonatal. En los primeros estu-
de malos resultados en el desarrollo neurológico un 7% mayor, tras la dios, parecía que la administración de fenobarbital era beneficiosa, ya
exclusión de otras anomalías ecográficas craneales como la LSB o la que prevenía las fluctuaciones de la presión arterial (Donn et al., 1981;
porencefalia (Bolisetty et al., 2014). Así, es posible que el pronóstico Arroyo-Cabrales et al., 1998). Sin embargo, un estudio multicéntrico
en recién nacidos con HIV de grado I y II no sea bueno si existe una posterior sobre la administración prenatal de fenobarbital (10 mg/kg)
lesión cerebral asociada. Este mayor riesgo de resultados anómalos a 110 mujeres no supuso la reducción de la incidencia posnatal de HIV
puede relacionarse con LSB o lesiones de la sustancia gris sin detectar en recién nacidos prematuros de entre 24 y 33 semanas de gestación
(Inder et al., 1999; O’Shea et al., 2012). Los estudios de seguimiento (Kaempf et al., 1990). Un estudio de mayor tamaño confirmó estos
han demostrado que el grado de HIV en el nacimiento y la presencia hallazgos, y el seguimiento a largo plazo a los 18 y 22 meses no encon-
de ventriculomegalia son factores que predicen el estado neurológico tró diferencias en los resultados del desarrollo neurológico (Shankaran
a una edad corregida de 24 meses. Las secuelas neurológicas están et al., 1997, 2002). Un metaanálisis de 10 estudios sobre la adminis-
presentes hasta en el 35% de los recién nacidos con HIV de grado III tración posnatal de fenobarbital no mostró diferencias en los índices
y el 55% de los que presentan HIV de grado IV (Brouwer et al., 2008). de HIV grave ni de ventriculomegalia (Whitelaw y Odd, 2007). Por
En un estudio longitudinal de recién nacidos prematuros con un peso lo tanto, no parece que la administración posnatal de fenobarbital sea
al nacer de menos de 1.750 g, tan solo los recién nacidos con HIV de beneficiosa para la prevención de HIV.
grado III o IV mostraban diferencias en los resultados de la exploración La administración de dosis farmacológicas de vitamina E, un
neurológica en comparación con los recién nacidos a término de con- antioxidante, se asoció a una reducción en la incidencia de HIV en
trol a la edad de 2 años (Vohr et al., 2000). A diferencia de lo que recién nacidos con bajo peso al nacer cuando se administraba por vía
ocurría con la función motora, la función cognitiva se deterioraba en intramuscular (Speer et al., 1984). Sin embargo, tras registrarse la
los primeros 18 meses de vida, como mostraban las puntuaciones de asociación de estas grandes dosis de vitamina E con sepsis y enterocolitis
Bayley. La persistencia de ventriculomegalia en la HIV de grado III necrosante, se restringió su uso para la prevención de la HIV (Finer
o IV se asocia a un mayor riesgo de secuelas neurológicas más graves, et al., 1984; Johnson et al., 1985).
como convulsiones, parálisis cerebral y un déficit grave de la visión En un principio se creyó que la indometacina, un inhibidor de la
o la audición (Ancel et al., 2006). La presencia de hidrocefalia con síntesis de las prostaglandinas, disminuía la incidencia de HIV en recién
o sin comunicación en un neonato a término aumenta el riesgo de nacidos con un peso menor de 1.250 g (Ment et al., 1985). Sin embar-
un mal resultado del desarrollo neurológico (Radic et al., 2015). Los go, estudios posteriores sobre los efectos a largo plazo de la profilaxis
resultados negativos son significativamente peores en los recién nacidos con indometacina en estos recién nacidos con PEBM no demostraron
con PEBM y HPH que precisaron una derivación, lo que señala la un incremento en la tasa de supervivencia sin alteración neurosensorial,
importancia de una intervención adecuada a tiempo (Adams-Chapman a pesar de la reducción en la tasa de HIV grave (Schmidt et al., 2001;
et al., 2008). Vohr et al., 2003). Un metaanálisis de 19 estudios y 2.872 recién
nacidos demostró un mayor riesgo de oliguria, que, sin embargo, no se
asociaba a una alteración renal importante. No se detectaron diferen-
Prevención cias en la incidencia de enterocolitis necrosante ni en las alteraciones
neurosensoriales a largo plazo, y se detectó una modesta reducción en
La prevención del parto prematuro es el método más eficaz para el número de recién nacidos con HIV grave (Fowlie y Davis, 2002). La
reducir la incidencia de HIV. En el caso de un parto prematuro, administración prenatal de indometacina, como tocolítico para detener
se recomienda que el neonato nazca en un centro especializado el parto prematuro, se asocia a un mayor riesgo de HIV grave y LSB
en partos de alto riesgo. El riesgo de HIV es mayor en neonatos (Hammers et al., 2015). Aun así, pruebas recientes sugieren un menor
que nacen fuera del entorno hospitalario y son trasladados tras el riesgo de LSB en el neonato prematuro con exposición prolongada a
nacimiento. La administración prenatal de corticoides se asocia a un la indometacina tras el parto (Miller et al., 2006; Gano et al., 2015).
menor riesgo de HIV y parálisis cerebral (Roberts y Dalziel, 2006), La administración prenatal de corticoides (Elimian et al., 2000;
pero la administración prenatal de sulfato de magnesio no reduce Smith et al., 2000; Canterino et al., 2001; Eriksson et al., 2009; Abbasi
los índices de HIV (Canterino et al., 1999; Rouse et al., 2008). et al., 2010; Wong et al., 2014) y el tratamiento de reposición del
Los cuidados intensivos neurológicos óptimos del recién nacido surfactante (Soll y Dargaville, 2000; Kribs et al., 2015) disminuyen
prematuro suponen reducir la exposición a la hiperventilación, la la incidencia de HIV, así como la mortalidad neonatal en los recién
hipocapnia o la hipoxia, así como el mantenimiento de una presión nacidos con bajo peso al nacer. No obstante, puede darse un aumento
arterial media (PAM) adecuada. Las elevaciones repentinas del FSC en la incidencia de HIV con la administración del surfactante como
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pueden estar desencadenadas por una manipulación excesiva o la resultado del modo de instilación (Cowan et al., 1991; Hellstrom-Wes-
aspiración traqueal. Otras situaciones que suponen un riesgo de HIV tas et al., 1991, 1992) y la caída en la Paco2 al mejorar la ventilación.
son el neumotórax, la acidosis, las perfusiones rápidas de bicarbonato Dado que puede darse una caída significativa de la PAM y del volumen
sódico y expansores de volumen. del FSC durante la administración del surfactante, debe prestarse
Dado el mayor riesgo de secuelas neurológicas en recién nacidos atención a la velocidad y al volumen de la instilación.
con HIV, se han llevado a cabo diversos estudios clínicos para evaluar La ventilación mecánica puede asociarse a un mayor riesgo de HIV
el papel de la parálisis neuromuscular prolongada en recién nacidos (Cools et al., 2015). Diversos estudios evaluaron el empleo precoz de
prematuros. Un metaanálisis de cinco estudios llegó a la conclusión una ventilación de alta frecuencia frente a la ventilación convencional
de que, aunque la parálisis neuromuscular con pancuronio puede para los recién nacidos con síndrome de dificultad respiratoria. Estos
ayudar a reducir el riesgo de HIV y neumotórax en recién nacidos estudios describieron, bien un mayor riesgo de HIV con la ventilación
con respiración asincrónica, no se recomienda su uso rutinario debido oscilatoria de alta frecuencia (HIFI Study Group, 1989; Cools y Offrin-
a la incertidumbre sobre la seguridad y los efectos neurológicos y ga, 1999; Moriette et al., 2001), bien una ausencia de aumento del
pulmonares a largo plazo (Cools y Offringa, 2000). riesgo de HIV (Clark et al., 1996; Keszler et al., 1997). Los resultados
Una PAM baja o grandes fluctuaciones de la presión arterial se han de un metaanálisis reciente de 19 estudios y 4.096 recién nacidos no
asociado a un mayor riesgo de HIV (Perlman y Volpe, 1982). Aunque muestran ningún incremento en el riesgo de HIV grave ni de LSB en

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884 PA RT E XI I Sistema nervioso

recién nacidos prematuros tratados con ventilación de alta frecuencia to médico de la HPH para prevenir temporalmente la evolución de
frente a la ventilación convencional (Cools et al., 2015). la hidrocefalia e intentar mitigar la necesidad de colocación de una
Es importante evitar tanto la hipocapnia (Pco2 < 30 mmHg) como derivación. Una revisión sistemática de cuatro estudios controlados
la hipercapnia (Pco2 > 55 mmHg), ya que ambas tienen un efecto descubrió que la retirada precoz de los restos de coágulos sanguíneos
significativo en el FSC (Young y Yagel, 1984; Gleason et al., 1989; licuados no reducía la mortalidad, las alteraciones del desarrollo ni
Pryds et al., 1989, 1990; Habgood et al., 1991; Pryds, 1991). Estudios el riesgo de depender de una derivación permanente, y sí se asociaba
en animales han demostrado que evitar una Pco2 baja tiene un efecto a un mayor riesgo de infección del sistema nervioso central (SNC)
neuroprotector (Sola et al., 1983; Vannucci et al., 1995). La hipocapnia (Whitelaw, 2001; Mazzola et al., 2014). No obstante, estudios más
se asocia a hipotensión y a un mayor riesgo de HIV y LSB (Erickson recientes sugieren que un tamaño ventricular en aumento predice
et al., 2002; Fabres et al., 2007). La hipercapnia favorece una mayor peores resultados del desarrollo neurológico, y que una intervención
perfusión cerebral, lo que, en combinación con otras terapias que pre- más temprana con punciones lumbares y/o reservorios puede reducir
tendan incrementar la presión arterial, aumenta el riesgo de HIV (Fabres la necesidad de colocar finalmente derivaciones ventriculoperitoneales
et al., 2007; Vela-Huerta et al., 2009; Ambalavanan et al., 2015). (VP) (de Vries et al., 2002; Srinivasakumar et al., 2013).
Se ha demostrado que los radicales libres y el hierro dañan los Un estudio controlado aleatorizado sobre el uso combinado de
precursores de oligodendrocitos (pre-OL) tanto en los cultivos celulares furosemida y acetazolamida en 177 recién nacidos con HPH también
como en los estudios en animales (Back et al., 1998; Dommergues concluyó que no resultaban eficaces en la reducción de derivaciones VP
et al., 1998), y los quelantes del hierro como la deferoxamina son y se asociaban a un mayor riesgo de resultados neurológicos adversos
neuroprotectores en estudios en animales (Sarco et al., 2000). No obs- (Kennedy et al., 2001). Diversos estudios tampoco encontraron ningún
tante, los estudios clínicos no evalúan el beneficio de los antioxidantes beneficio en la administración intraventricular precoz de un fibrino-
en el contexto de un infarto posthemorrágico. Dado que el 80% del lítico (activador del plasminógeno tisular, urocinasa o estreptocinasa)
transporte de hierro tiene lugar durante el tercer trimestre, también para reducir las complicaciones derivadas de la HPH (Whitelaw, 2000;
es importante enfatizar que unos depósitos adecuados de hierro son Mazzola et al., 2014). En un estudio clínico multicéntrico aleatorizado
necesarios para el adecuado desarrollo del cerebro, por lo que la sus- que comparaba el drenaje, la irrigación y el tratamiento fibrinolítico
pensión de la administración de hierro puede ser perjudicial. (DRITF) con la extracción del exceso de líquido cefalorraquídeo (LCR)
mediante un reservorio, el DRITF reducía el déficit cognitivo grave
en los supervivientes y las cifras globales de muerte o discapacidad
Tratamiento grave, a pesar de mostrar un incremento en el sangrado intraventricular
secundario (Whitelaw et al., 2010).
Debido al elevado riesgo de HIV y LSB isquémica en los primeros La colocación temprana de una derivación VP que desvíe el LCR
momentos del período perinatal, el tratamiento inmediato debe cen- de los ventrículos laterales a la cavidad peritoneal en un recién nacido
trarse en la eliminación de los factores que han demostrado favorecer prematuro que pese menos de 2,5 kg es problemática, debido al riesgo
las fluctuaciones excesivas del FSC (Perlman y Volpe, 1982) y en la de deterioro de la piel, obstrucción de la derivación e infección. La
prevención de infecciones nosocomiales (Chau et al., 2012). Entre colocación de un dispositivo de acceso ventricular (p. ej., un reservorio
las técnicas clínicas que limitan las fluctuaciones del FSC están el Ommaya/Rickham), un drenaje ventricular externo o una derivación
mantenimiento de los gases sanguíneos y el estado metabólico dentro ventriculosubgaleal es una medida temporal para el tratamiento precoz
del rango de normalidad, evitar una manipulación o una aspiración de la HPH. Un pequeño estudio de cohortes retrospectivo demostró
excesiva, y la detección y el tratamiento de las convulsiones. Debe que las derivaciones ventriculosubgaleales pueden reducir la necesidad
mantenerse la presión arterial sistémica, prestando especial atención de aspiración diaria de LCR cuando se comparan con los dispositivos de
al ritmo de administración de los líquidos. Debe someterse a un acceso ventricular (Lam y Heilman, 2009). No obstante, ambas técnicas
cribado mediante ecografía a los recién nacidos con pesos al nacer mostraban índices de complicación similares y números similares
inferiores a 1.500 g o una edad gestacional de menos de 32 semanas de recién nacidos que terminaban por precisar la colocación de una
para detectar una HIV. derivación VP (Limbrick et al., 2010). La colocación de derivaciones
Las ecografías craneales seriadas siguen siendo la técnica diagnós- VP o la ventriculostomía endoscópica del tercer ventrículo son opciones
tica óptima para la detección de HIV y LSB en neonatos durante el terapéuticas a largo plazo para la HPH, y ambas presentan resultados
período perinatal y en la misma cuna, cuando el riesgo de HIV es clínicos similares (Limbrick et al., 2014).
máximo (Benders et al., 2014). Una ecografía en el cuarto día de vida
detecta el 90% de las lesiones (de Vries et al., 2004). Dado que la
hemorragia puede extenderse durante los días siguientes, es necesario Lesión de la sustancia blanca
realizar una nueva ecografía 5 días después para determinar la extensión
de la HIV. Con frecuencia es necesario realizar ecografías seriadas, ya Espectro de lesiones de la sustancia blanca
que alrededor de la mitad de los recién nacidos con hipertrofia ven- en seres humanos
tricular secundaria a una HIV desarrollan rápidamente una dilatación
ventricular progresiva en las siguientes 4-8 semanas. En el contexto El espectro de LSB en los seres humanos incluye tres formas principales
de una HIV grave, las ecografías regulares para revaluar al neonato en de la enfermedad: necrosis quística focal, necrosis microscópica focal y
busca de una hidrocefalia de progresión lenta deben acompañarse de lesiones difusas no necróticas. Las lesiones necróticas quísticas grandes
la medición del perímetro cefálico, la exploración de las fontanelas y (más de 1 mm de diámetro) son las más graves, pero su incidencia ha
una evaluación del estado clínico durante las primeras 4 semanas de disminuido notablemente en los últimos años (fig. 60.3). En varias
vida. La decisión de continuar con los cuidados intensivos se toma en series se detectaron lesiones quísticas focales por RM en menos del
parte en función de la gravedad de la HIV y la lesión cerebral asociada, 5% de los casos (Maalouf et al., 2001; Counsell et al., 2003; Inder
que se valorará mediante una combinación de ecografía craneal y RM. et al., 2003a; Miller et al., 2003; Hamrick et al., 2004a; Groenen-
La RM es la técnica óptima para detectar hemorragias cerebelosas más daal et al., 2010). De hecho, se descubrió que la incidencia de todas las
pequeñas y posibles formas de LSB no quísticas más sutiles (de Vries formas de LSB necrótica había disminuido unas 10 veces en los estudios
et al., 1998; Inder et al., 2003a; Miller et al., 2003). de cohorte actuales en comparación con los estudios retrospectivos de
Aún carecemos de directrices basadas en la evidencia para el trata- décadas anteriores (Buser et al., 2012). Aunque la incidencia de lesiones
miento clínico óptimo de la HPH. Anteriormente se han empleado necróticas de gran tamaño ha disminuido notablemente, parece que la
punciones lumbares seriadas o drenajes ventriculares en el tratamien- presencia de pequeños focos independientes de necrosis microscópica

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CAPÍTULO 60 Lesión cerebral en el recién nacido prematuro 885

• Figura 60.3  Lesión de la sustancia blanca grave que provoca una destrucción tisular focalizada o
difusa (leucomalacia periventricular). A. Autopsia cerebral de un recién nacido que falleció debido a
complicaciones derivadas de la prematuridad; se observan focos de gran tamaño de necrosis quís-
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tica grave (puntas de flecha) en la sustancia blanca periventricular frontal (muestra superior) y parietal
(muestra inferior). B. Análisis histológico de una lesión frontal (teñida con hematoxilina y eosina) que
muestra un foco de necrosis de gran tamaño (puntas de flecha) adyacente al ventrículo lateral. El recua-
dro muestra un detalle resaltado del borde de la lesión (flechas), donde puede apreciarse una alteración
notable del tejido adyacente a una región de gliosis en la zona inferior izquierda. C. Aspecto de una
lesión necrótica quística de la sustancia blanca en la resonancia magnética. Imágenes de un recién
nacido prematuro nacido a las 33 semanas de gestación al que se realizó la prueba a las 5 semanas de
vida (38 semanas de edad gestacional corregida). Se aprecian pequeñas áreas de cavitación (puntas
de flecha) como hipointensidades en el corte sagital ponderado en T1 y como hiperintensidad en el
corte axial ponderado en T2 (D). (Por cortesía del Dr. Marjorie Grafe, Oregon Health & Science University,
Portland, OR, y del Dr. Ken Poskitt, Children’s and Women’s Hospital, University of British Columbia,
Vancouver, BC.)

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886 PA RT E XI I Sistema nervioso

• Figura 60.4  En la lesión de la sustancia blanca cerebral previa al parto suele presentarse necrosis
microscópica, pero constituye una pequeña fracción de la carga total de dicha lesión. A-C. Distribución
dispersa típica de microquistes visualizada con un marcador de axones en proceso de degeneración en
una autopsia de un cerebro humano a las 32 semanas de gestación. B y C. Detalle a mayor aumento de
los axones en proceso de degeneración en el microquiste observado en el recuadro en A. D. Microquiste
visualizado mediante una resonancia magnética de alto campo (12 T) ex vivo como una lesión focal
hipointensa (F-hipo) en T2. Esta lesión se detectó 2 semanas después de una isquemia cerebral global
en un feto de oveja con una lesión de la sustancia blanca (LSB) previa al parto (Riddle et al., 2011).
Obsérvese la LSB difusa circundante, que se ve como una señal difusa hiperintensa (D-hiper). E. Gráfico
circular que muestra los porcentajes relativos de la LSB difusa, la leucomalacia periventricular quística
(LPQ) y la necrosis microscópica en humanos. Obsérvese que los microquistes a menudo se solapan
en su distribución con regiones de LSB difusa. F. Carga relativa de microquistes humanos (puntos
azules) comparada con la LSB difusa (sombreado), que habitualmente constituye más del 80% de la
carga total de la LSB. Escala: A. 500 µm. B. 100 µm. C. 25 µm. (Tomado de Back SA, Miller SP. Brain
injury in premature neonates: a primary cerebral dysmaturation disorder? Ann Neurol. 2014;75:469–486.)

(microquistes) de menos de 1 mm de diámetro es mucho más habitual focos de necrosis (v. fig. 60.4E-F). A diferencia de lo que ocurre con la
(Pierson et al., 2007). Al igual que en la necrosis quística, los microquis- lesión necrótica, la LSB difusa se define por la degeneración selectiva
tes son lesiones destructivas compuestas de restos celulares, axones en de pre-OL tardíos, mientras que los axones suelen estar intactos, salvo
proceso de degeneración y macrófagos fagocíticos (fig. 60.4A-C). Dado en los focos necróticos (Haynes et al., 2008; Riddle et al., 2012). Los
su pequeño tamaño, los microquistes no suelen detectarse en las RM pre-OL en humanos son los precursores de todas las células productoras
clínicas realizadas con fuerzas de campo de 3 teslas (T), pero sí pueden de mielina del SNC y son especialmente sensibles al daño oxidativo
detectarse en experimentos con fuerzas del campo magnético más altas significativo, como el que ocurre con la hipoxia-isquemia (HI) en un
de 12 T (Riddle et al., 2011; fig. 60.4D). En un estudio llevado a cabo contexto clínico (Back et al., 2005b). La susceptibilidad a las LSB antes
sobre autopsias en seres humanos, actuales y de archivo, se observaron del parto es máxima entre las semanas 23 y 32 de gestación, cuando
microquistes al menos en el 30% de los casos, pero estos constituían se da un período ventana en el desarrollo en el que los pre-OL predo-
alrededor del 1-5% de la carga total de la LSB (Buser et al., 2012). Por minan en la sustancia blanca cerebral del individuo. Paradójicamente,
tanto, aunque la incidencia de la necrosis microscópica es alta, la carga los experimentos han demostrado que la isquemia es necesaria, pero
es generalmente baja (fig. 60.4E-F). No obstante, debemos recalcar que no suficiente, para causar LSB. Incluso en condiciones de isquemia
la importancia clínica de estas pequeñas lesiones necróticas continúa moderadamente grave, algunas regiones de la sustancia blanca pueden
siendo una cuestión importante, pero clínicamente inaccesible, ya estar relativamente sanas. Las regiones de especial vulnerabilidad a las
que los microquistes no son fácilmente detectables con la RM clínica. LSB se definen tanto por el momento de aparición como por la dis-
Por lo tanto, es posible que los microquistes sean asintomáticos o que tribución de pre-OL susceptibles (Riddle et al., 2006).
contribuyan de manera significativa a las discapacidades motoras o Aunque la ecografía craneal es la técnica radiológica de elección
cognitivas, dependiendo de la medida en la que se localicen en regiones para el diagnóstico de la LSB necrótica desde la propia cuna, tiene
de la sustancia blanca funcionalmente importantes. una sensibilidad limitada para el diagnóstico de la LSB difusa (Maa-
La LSB difusa es el tipo de lesión que se observa con más frecuen- louf et al., 2001; Inder et al., 2003a; Miller et al., 2003). La RM es
cia en los estudios de cohortes actuales realizados en recién nacidos el método de elección para visualizar la LSB difusa (fig. 60.5A-C).
prematuros (Buser et al., 2012). La LSB difusa tiene una distribución En las RM diagnósticas, la LSB se visualiza, bien como áreas focales
más amplia de la que se había detectado en un principio, e incluye independientes, bien como áreas más difusas de anomalía de la señal de
microglía y astrocitos activados que se extienden mucho más allá de los la RM (Chau et al., 2013). El abanico de LSB no quísticas o lesiones

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CAPÍTULO 60 Lesión cerebral en el recién nacido prematuro 887

• Figura 60.5  Resonancia magnética (RM) diagnóstica y experimental para definir los procesos de
ausencia de maduración relacionados con las lesiones de la sustancia blanca difusas. A. Lesión de
la sustancia blanca (LSB) difusa en una RM diagnóstica (1,5 T; T1) que tiene el aspecto de hiperinten-
sidades bilaterales multifocales (flechas). B. RM con tensor de difusión, que define la microestructura
de los trazos de sustancia blanca y puede usarse para el seguimiento de la evolución de LSB difusas a
largo plazo. C. RM espectroscópica, que puede emplearse para determinar las anomalías bioquímicas
y metabólicas asociadas a la LSB difusa. Tanto la RM con tensor de difusión como la espectros-
cópica detectan anomalías más allá de las áreas de señal anómala en las imágenes ponderadas
en T1. D. LSB difusa confirmada por una RM de alto campo ex vivo realizada a 12 T en un feto de
oveja prematuro con isquemia cerebral global. La LSB difusa se objetiva como regiones hipointensas
extensas (D-hipo) en una imagen ponderada en T2 1 semana después de la isquemia. E. Hallazgos
típicos histopatológicos de la LSB difusa observados en la RM. Obsérvese la tinción pronunciada de
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los astrocitos reactivos (verde) y la microglía/macrófagos (rojo y detalle), indicativa de una respuesta
inflamatoria difusa cuantificada en F; los asteriscos indican P < 0,05. Escala en E, 100 µm. GFAP, pro-
teína ácida fibrilar de la glía.

«punteadas» se ha descrito recientemente como lesiones lineales o en sugiere que las fuerzas del campo empleadas en la actualidad para la
racimo con distintas evoluciones a lo largo del tiempo (Kersbergen RM clínica de 1,5-3 T pueden ser un factor limitante para detectar
et al., 2014). Sin embargo, hay una variabilidad en la naturaleza de las tanto las LSB difusas como los microquistes.
lesiones que se detectan en distintos centros que no se puede explicar, También debe recalcarse que los supervivientes prematuros presen-
y que puede ser un reflejo de las diferencias en el tratamiento, la pericia tan a menudo anomalías difusas en la maduración de la sustancia gris
clínica o las técnicas de detección. En especial, es posible que la RM y blanca debido al parto prematuro que pueden ser más habituales que
no defina claramente las lesiones difusas iniciales, y se han percibido la LSB focal o difusa (Chau et al., 2013). Estas anomalías difusas son
a menudo disparidades entre el cuadro clínico y la distribución de las objetivables en la RM como espacios subaracnoideos aumentados de
lesiones detectadas en la RM. Los estudios experimentales (fig. 60.5D-F) tamaño, una reducción en la cantidad de sustancia blanca, ventricu-
demostraron que las LSB tempranas se visualizan especialmente bien lomegalia y alteración del desarrollo de las circunvoluciones (Skranes
con un campo magnético más alto (12 T) (Riddle et al., 2011), lo que et al., 2013; Engelhardt et al., 2015). No obstante, muchos prematuros

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888 PA RT E XI I Sistema nervioso

no presentan estas anomalías tan dramáticas, y hasta el 20% de los Factores que influyen en la distribución
que presentan resultados adversos no muestran anomalías cualitativas
significativas en la RM (Miller et al., 2005; Boardman et al., 2007).
de la lesión de la sustancia blanca
Múltiples factores que influyen en el FSC o en el metabolismo de la
sustancia blanca determinan la gravedad de la LSB. En un principio
Factores fisiológicos relacionados con se propuso que la topografía de las LSB más graves estaba determinada
la patogenia de la lesión de la sustancia blanca por la distribución de los extremos arteriales y las zonas fronterizas
dentro de la sustancia blanca. Esta atractiva hipótesis proporcionó
Papel de la hipoxia-isquemia una explicación a la propensión de las lesiones necróticas más quísticas
La HI contribuye a la patogenia de la lesión cerebral previa al parto, al a localizarse en la sustancia blanca periventricular más profunda. Se
afectar a diversos mecanismos dependientes de la maduración. Dado propuso que, cuando el flujo de sustancia blanca periventricular dis-
que la medición del FSC supone un desafío técnico en los neonatos minuye por debajo de un umbral crítico, la sustancia blanca periven-
prematuros en humanos, se ha recurrido a menudo a los estudios tricular podría sostener una LSB mayor de la que podría sostener una
experimentales para definir el papel de las alteraciones del FSC en la corteza cerebral supuestamente mejor perfundida. Aunque ha sido
generación de la LSB cerebral. La fase del desarrollo en la que tienen posible comprobar esta hipótesis en experimentos, no ha sido así en
lugar las alteraciones del FSC es un factor crítico que influye en la humanos. Se han llevado a cabo mediciones cuantitativas del FSC fetal
sensibilidad a la HI. Por ejemplo, la lesión aguda de la corteza cerebral intraútero en regiones histopatológicamente definidas de la corteza
es relativamente pequeña en comparación con la de la sustancia blanca cerebral y de la sustancia blanca en fetos de oveja prematuros (McClure
en el feto de oveja prematuro, incluso en caso de isquemia prolonga- et al., 2008). En el contexto de una isquemia moderadamente grave, no
da, mientras que la necrosis cortical panlaminar grave se presenta en se detectaron gradientes significativamente patológicos de flujo sanguí-
animales a término (Reddy et al., 1998; Riddle et al., 2006). Tras una neo fetal entre la corteza cerebral y la sustancia blanca periventricular
hipoperfusión cerebral global, las ovejas en la mitad de la gestación ni durante la isquemia ni durante la reperfusión. Es más, aunque la
mostraron una predilección por LSB periventriculares y subcorticales, LSB se localiza preferentemente en las regiones de sustancia blanca
mientras que los animales que se encontraban cerca del término de la más profundas, estas no eran sensibles a una isquemia más acentuada
gestación mostraban predominantemente lesiones neuronales corticales (fig. 60.6), ni tampoco lo eran las regiones superficiales de sustancia
parasagitales (Reddy et al., 1998; Raad et al., 1999; Riddle et al., 2006). blanca menos vulnerables, que se caracterizaron por un mayor flujo
Parece que la combinación de isquemia cerebral e hipoxia es un factor sanguíneo durante la isquemia. Como se ha descrito previamente, la
crítico para producir una LSB previa al parto significativa. La LSB se distribución de la LSB se explicaba por la densidad relativamente más
observó en pocos casos cuando la restricción en la perfusión utero- alta de pre-OL en las regiones de sustancia blanca sensibles.
placentaria llevaba a un menor aporte de oxígeno y a acidemia leve en En la actualidad, tampoco está claro si la HI recurrente predispone
el feto, pero sin hipotensión sistémica ni hipoperfusión cerebral (Rees a una LSB más grave. En ratas neonatales equivalentes a recién nacidos
et al., 1997; Mallard et al., 1998; Rees et al., 1999). Del mismo modo, humanos prematuros, se observó un aumento pronunciado de muerte
en modelos de infección fetal materna, la LSB previa al parto en ovinos celular en la LSB crónica tras la HI recurrente (Segovia et al., 2008). Sin
se observó únicamente cuando la exposición repetida a endotoxinas sis- embargo, en fetos de oveja prematuros, cuyas lesiones se asemejan más
témicas fetales llevaba tanto a hipoxemia como a hipotensión transitoria a las de los humanos, la HI recurrente no desencadenaba un aumento
(Duncan et al., 2002; Dalitz et al., 2003). de la LSB, lo que sugería que la HI recurrente puede proteger frente a
una LSB más grave mediante un mecanismo de tolerancia a la isquemia
Presión-circulación pasiva (Hagen et al., 2014).
Parece que las alteraciones en la autorregulación cerebral son un factor
clave que predispone a los neonatos prematuros a LSB cerebral secun-
daria a hipoxia e isquemia. La autorregulación cerebral hace referencia al Factores clínicos relacionados con la gravedad
mantenimiento de un FSC constante en presencia de una serie de cam- de la lesión de la sustancia blanca
bios en la presión arterial sistémica o en la presión de la perfusión cere-
bral (Lassen y Christensen, 1976; Paulson et al., 1990; Greisen, 2009). Distintos trastornos clínicos habituales se han asociado a un mayor ries-
Este margen de autorregulación tiene un límite superior y uno inferior. go de LSB más grave (cuadro 60.2). Entre ellos se encuentra la sepsis
Cuando la presión arterial se sale de estos límites, el FSC pierde la neonatal, que se presenta hasta en el 25% de los recién nacidos prematuros
estabilidad y aumenta o disminuye de forma pasiva con los cambios que pesan menos de 1.500 g en el nacimiento (Stoll et al., 2002b; Bizzarro
en la presión arterial. Los recién nacidos prematuros son especialmente
propensos a mostrar una «presión-circulación pasiva», sobre todo en
el contexto de una enfermedad crítica. Las alteraciones en la auto- • CUADRO 60.2  Factores patógenos que contribuyen
rregulación cerebral en los recién nacidos prematuros se estudiaron a las lesiones de la sustancia blanca
inicialmente mediante el aclaramiento de xenón y el Doppler, y más
más graves
recientemente mediante espectroscopia de infrarrojo cercano y espec-
troscopia resuelta en el espacio (du Plessis, 2008; Greisen, 2009). La La sepsis posnatal puede favorecer la hipotensión cerebral posnatal o modificar
asfixia perinatal grave, la hipoxia, el traumatismo craneal y la acidosis la respuesta a la hipoxia-isquemia.
con hipercapnia, incluso cuando es relativamente leve, atenúan o Una hipoxemia más grave combinada con hipotensión puede aumentar
incluso suprimen la autorregulación (Busija y Heistad, 1984; Tweed la magnitud del fallo energético mediado por la hipoxia-isquemia.
et al., 1986; Jones et al., 1988). Parece que la autorregulación cerebral La hipocapnia puede agudizar la hipoxia-isquemia al favorecer
está relacionada con una propiedad intrínseca de las células del músculo una hipoperfusión más grave.
liso arterial por la que estas responden a los cambios en la presión trans- La hipoglucemia puede agudizar el fallo energético asociado
mural y modifican el tono muscular. La autorregulación puede estar a la hipoxia-isquemia.
mediada en parte por el equilibrio de factores endoteliales de derivados La exposición a los corticoides (p. ej., dexametasona) puede aumentar el riesgo
celulares constrictores y dilatadores (Iadecola y Nedergaard, 2007). de lesión de la sustancia blanca.
Algunas de las preguntas fundamentales sobre la autorregulación cere- La exposición a múltiples procedimientos dolorosos o estresantes puede
bral siguen sin respuesta, incluyendo la práctica clínica óptima para la aumentar el riesgo de lesión de la sustancia blanca.
regulación de la presión sanguínea (Greisen, 2009).

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CAPÍTULO 60 Lesión cerebral en el recién nacido prematuro 889

• Figura 60.6  La lesión periventricular de la sustancia blanca no se explica por gradientes de flujo
sanguíneo cerebral (FSC) reducido en la sustancia blanca cerebral. A. Análisis del FSC en la sustancia
blanca cerebral previa al parto de un feto de oveja durante una hipoxia-isquemia y reperfusión. El FSC
se midió en las regiones inferior, media y superior de la sustancia blanca, como se muestra (gradiente
gris). Habitualmente, la lesión de la sustancia blanca se localiza en la región inferior de la sustancia
blanca. B. No hay diferencias entre los valores del FSC basal y los obtenidos durante la isquemia o la
reperfusión 15 o 60 min después de una isquemia en las regiones inferior, media y superior de la sus-
tancia blanca. Por tanto, la lesión de la sustancia blanca no se asocia necesariamente con las regiones
que habían sufrido la isquemia más aguda. VI, ventrículo izquierdo. (Tomado de McClure M, Riddle A,
Manese M, et al. Cerebral blood flow heterogeneity in preterm sheep: lack of physiological support for
vascular boundary zones in fetal cerebral white matter. J Cereb Blood Flow Metab. 2008;28:995–1008.)

et al., 2005; Makhoul et al., 2005) y se asocia a un riesgo significativamente quística y la DBP (Ment et al., 1998). Sin embargo, es difícil determinar
mayor de LSB (Glass et al., 2008; Shah et al., 2008; Chau et al., 2009). Se la asociación directa entre la hipoxemia secundaria a una enfermedad
han relacionado las infecciones posnatales con alteraciones en el desarrollo pulmonar crónica y la LSB grave, dado que la LSB quística también
de las vías de la sustancia blanca (Inder et al., 2003b; Adams et al., 2010) está habitualmente asociada a HIV e IHPV. La respuesta del feto a la
y problemas diseminados del desarrollo cerebral (Chau et al., 2012). hipoxemia aguda en ausencia de isquemia se ha estudiado extensamente
Incluso en ausencia de confirmación mediante cultivo, las infecciones en los fetos de oveja prematuros. Se ha descubierto que la hipoxemia
se han asociado a índices más altos de parálisis cerebral y otros déficits transitoria causa diversos grados de combinación de LSB y lesión de la
neurológicos compatibles con hallazgos radiológicos en el cerebro del sustancia gris hacia la mitad de la gestación o hacia el final del embarazo
neonato (Stoll et al., 2004; Miller et al., 2005; Shah et al., 2008; Chau en ovejas (Penning et al., 1994; Rees et al., 1997, 1999). Sin embargo, la
et al., 2012). La infección posnatal recurrente constituye un factor de ries- LSB resultaba ser notablemente más grave en presencia de una hipoten-
go importante de la LSB progresiva (Glass et al., 2008). La hipotensión y sión significativa, que llevaba tanto a hipoxia como a isquemia cerebral
las infecciones posnatales, en ausencia de una corioamnionitis confirmada (Ting et al., 1983). La hipoxemia crónica hacia la mitad de la gestación,
mediante análisis histológico, se asociaron a un mayor riesgo de LSB derivada de una insuficiencia placentaria crónica, provocaba alteraciones
confirmada mediante RM (Chau et al., 2009). A pesar de la falta de fuertes en el desarrollo del hipocampo, el cerebelo y la sustancia blanca (Penning
vínculos entre la corioamnionitis prenatal y los resultados neurológicos et al., 1994; Rees et al., 1999). La exposición de neonatos de roedores
adversos, la corioamnionitis puede aumentar el riesgo de infecciones pos- a la hipoxia crónica da como resultado un abanico de retrasos en
natales e hipotensión de forma indirecta, dado que es un factor de riesgo el crecimiento somático y cerebral que se acompaña de alteraciones en el
independiente de isquemia cerebral y LSB. En un único centro, parece desarrollo de la sustancia blanca, como ventriculomegalia, reducción en
que la incidencia de LSB punteada está disminuyendo con el tiempo. los volúmenes de sustancia blanca y gris, y alteraciones de la mieliniza-
En esta cohorte, la exposición prolongada a la indometacina predice una ción (Ment et al., 1998; Turner et al., 2002; Back et al., 2006; Scafidi
reducción de la LSB (Gano et al., 2015). et al., 2014). No obstante, rasgos básicos de la LSB previa al parto en
La displasia broncopulmonar (DBP) y el número de días sometido a seres humanos, como la degeneración de los pre-OL y la gliosis reactiva,
ventilación mecánica se han asociado a un mal desarrollo de la sustancia no se observan en roedores. Por lo tanto, parece que la hipoxemia
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blanca y la corteza cerebral (Anjari et al., 2009; Kaukola et al., 2009; crónica está relacionada con alteraciones en la maduración de la sus-
Ball et al., 2010). Aunque la existencia de antecedentes de DBP es un tancia blanca que se distinguen de la lesión provocada por la HI aguda.
factor predictivo importante del resultado cognitivo, incluso cuando se La hiperoxia también es una posible complicación de la reanima-
controlan el peso tras el nacimiento y la morbilidad neurológica (Short ción neonatal y la ventilación del recién nacido prematuro durante la
et al., 2003), los estudios clínicos y experimentales no han permitido administración de cuidados intensivos, pero no se ha demostrado una
confirmar el papel etiológico de la hipoxemia aislada en la LSB (Back y asociación directa con la LSB previa al parto en seres humanos. Un
Rosenberg, 2014). La exposición posnatal a los corticoesteroides para la estudio sobre reanimación neonatal realizado en conejos no encon-
prevención y el tratamiento de la enfermedad pulmonar crónica puede tró un incremento de HIV ni de lesión cerebral como respuesta a la
dificultar el crecimiento cerebral, y este efecto es más pronunciado con hiperoxia (Chua et al., 2010). Cultivos tisulares sometidos a hiperoxia
la administración de dexametasona (Murphy et al., 2001; Lodygensky han demostrado una mayor vulnerabilidad de los pre-OL a la muerte
et al., 2005). La exposición posnatal a los corticoesteroides administra- celular como consecuencia del estrés oxidativo, y se han observado
dos para el tratamiento de la DBP o de una presión arterial baja también alteraciones temporales en la mielinización en neonatos de roedores
se asocia a un crecimiento anómalo del cerebelo (Tam et al., 2011a). (revisado por Back y Rosenberg, 2014).
Se propuso la hipoxemia como un factor de riesgo independiente Tanto la hipocapnia como la hipercapnia se han asociado a LSB
para la LSB basándose en la sospecha de la asociación entre la LSB y HIV más graves, lo que parece deberse a las alteraciones del FSC

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(Greisen y Vannucci, 2001). Parece que la reducción dramática en la de la maduración cerebral y afectan a estructuras de la sustancia blanca y
incidencia de leucomalacia periventricular quística está relacionada la gris, así como a alteraciones de la función cerebral (Smith et al., 2011;
con una disminución en el número de días de ventilación mecánica Brummelte et al., 2012). El dolor relacionado con las técnicas también se ha
(Hamrick et al., 2004b), posiblemente debido a evitar la alcalosis con vinculado a alteraciones del crecimiento posnatal (Vinall et al., 2012), un
hipocapnia, que puede favorecer la hipotensión. Los primeros estudios factor predictivo de un mal desarrollo cortical (Vinall et al., 2013a).
identificaron la hipocapnia como un factor de riesgo potencial para la Más recientemente, la exposición del neonato prematuro a la medi-
LSB más grave (Fujimoto et al., 1994; Dammann et al., 2001; Okumura cación analgésica y sedante se ha relacionado con una alteración
et al., 2001; Giannakopoulou et al., 2004). La exposición acumulativa regional de la maduración, específica de la exposición. Así, la mayor
a la hipocapnia, pero no a la hiperoxia (Wiswell et al., 1996), se asoció exposición a midazolam predice un desarrollo más lento del hipocampo
a un mayor riesgo de LSB quística más grave. El efecto nocivo de la (Duerden et al., 2016), mientras que una mayor exposición a la morfina
hipocapnia acumulativa, pero no de la hiperoxia, se confirmó en un predice un desarrollo más lento del cerebelo (Zwicker et al., 2016). La
amplio estudio de casi 800 recién nacidos (Shankaran et al., 2006). La exposición a técnicas dolorosas también se asocia a un peor desarrollo
hipercapnia favorece un mayor FSC y la LSB en asociación con una HIV neurológico, que también se ve influido por las interacciones entre los
más grave (v. anteriormente). La hipercapnia permisiva se ha empleado padres y el niño (Tu et al., 2007; Grunau et al., 2009), así como por el
ampliamente como estrategia para proporcionar una mayor presión estrés y la ansiedad de los padres (Perlman, 2002; Benzies et al., 2013).
parcial de dióxido de carbono con el fin de reducir la lesión pulmonar Es importante destacar que los estudios clínicos y experimentales apoyan
en los recién nacidos prematuros sometidos a ventilación mecánica. Los el potencial de las interacciones entre los padres y el niño para compen-
estudios sobre la hipercapnia permisiva no encontraron pruebas de LSB sar la alteración en la maduración cerebral temprana y otras adversidades
quística en la evaluación ecocardiográfica craneal (Mariani et al., 1999; (Vazquez et al., 2000; Tu et al., 2007; Brummelte et al., 2011; Bagot
Carlo et al., 2002). Aunque un pequeño estudio más reciente tampoco et al., 2012; McManus y Poehlmann, 2012; Vinall et al., 2013b).
encontró ningún incremento en la LSB franca como respuesta a la
hipercapnia, se identificó una microestructura anómala de la sustancia
blanca cuando se evaluó a recién nacidos con PEBM a término mediante Patogenia de la lesión crónica de la sustancia
RM con tensor de difusión (Ou et al., 2014). blanca
La LSB es un rasgo prominente y habitual de la hipoglucemia
sintomática en recién nacidos a término que muestra una predilección Papeles emergentes de la mielina en el desarrollo
por la región posterior de la cápsula interna y las regiones cerebrales cerebral, el aprendizaje y la memoria
posteriores. La LSB aparece a menudo acompañada de anomalías de Las alteraciones en la mielinización son uno de los rasgos básicos de
la sustancia gris corticales o subcorticales que pueden observarse en la la LSB crónica. La mielinización comienza en el cerebro prematuro y
RM (Burns et al., 2008). Los estudios experimentales apoyan la obser- normalmente evoluciona en secuencias bien definidas que continúan
vación de que incluso una hipoglucemia leve agudiza la lesión cerebral durante años tras el nacimiento. El papel central de la mielina es recu-
secundaria a HI (Yager et al., 1992; Vannucci y Vannucci, 2001). Los brir los axones para asegurar una conducción nerviosa óptima por todo
estudios en fetos de oveja prematuros (fig. 60.7) descubrieron que el SNC. Sin embargo, nuevos estudios están desafiando la creencia
la hipoglucemia era el factor más significativo en la LSB más grave largamente mantenida de que la mielina es una estructura estable que
secundaria a una HI cerebral global (Riddle et al., 2013). simplemente proporciona un aislamiento estático a las fibras nerviosas.
Los recién nacidos prematuros suelen estar expuestos a múltiples pro- Estudios recientes confirman que las vainas de mielina son estructuras
cedimientos, dolorosos y estresantes, que se han asociado a alteraciones dinámicas que contribuyen de manera importante al aprendizaje y a la
memoria, ya que la remodelación del grosor de las vainas de mielina
mejora o empeora la fuerza relativa de la conducción nerviosa. Así, parece
que la plasticidad adaptativa de la mielina supone un mecanismo por
el que el sistema nervioso puede reforzar o debilitar el flujo de informa-
ción a lo largo de vías que compiten para optimizar el nuevo aprendizaje
(Fields, 2015). Mientras que la plasticidad sináptica trabaja en escalas de
tiempo dinámicas de milisegundos para afinar el aprendizaje y la memo-
ria, la plasticidad de la mielina precisa tiempos más largos para permitir
al sistema nervioso consolidar la adquisición de nuevas habilidades. Por
ejemplo, en los animales adultos, se precisa la generación de nuevos
oligodendrocitos y nueva mielina para el aprendizaje y la adquisición de
nuevas habilidades motoras (Gibson et al., 2014; McKenzie et al., 2014).
Así, la definición de estos nuevos papeles de la mielina subraya el
impacto potencial que la LSB puede tener en la alteración de las secuen-
cias y el momento de la mielinización durante un período crítico en el
desarrollo del cerebro prematuro. El desarrollo del cerebro prematuro
incluye múltiples procesos de maduración y actividad celular, que
• Figura 60.7  La concentración de glucosa y oxígeno (Cao2) en la coinciden con tandas secuenciales de la neurogenia tardía, la gliogenia,
sangre influye en la gravedad de la lesión de la sustancia blanca. Los la maduración glial y neuronal, la sinaptogenia y la mielinización. Es
estudios realizados en fetos de ovejas prematuros analizaron la gravedad probable que la mielinización aberrante afecte al desarrollo tanto de la
de la lesión de la sustancia blanca (LSB) en las lesiones crónicas pos-
sustancia gris como de la blanca, al causar alteraciones duraderas en el
teriores a una hipoxia-isquemia. Los grados de gravedad de la LSB se
establecimiento final de las redes neurales y su conectividad, que son
estimaron basándose en la cuantificación de la magnitud de astrocitos
fundamentales para el funcionamiento normal del cerebro.
reactivos (fracción del área de proteína ácida fibrilar de la glía [GFAP]
en el eje z) en las lesiones. Las ovejas con los grados más graves de
LSB mostraban una combinación de reducción de Cao2 y glucosa en la
Patogenia de la insuficiencia crónica de la mielinización
sangre, mientras que las ovejas con LSB más leves mostraban una Cao2 y posibles estrategias terapéuticas
y una glucosa sanguínea más altas. (Tomado de Riddle A, Maire J, Cai V, Las alteraciones de la mielinización están relacionadas con respuestas
et al. Hemodynamic and metabolic correlates of perinatal white matter injury anómalas de regeneración y reparación a la muerte aguda de pre-OL.
severity. PLoS One. 2013; 8:e82940.) El cerebro prematuro en desarrollo contiene una población de pre-OL

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CAPÍTULO 60 Lesión cerebral en el recién nacido prematuro 891

tempranos que sirve como una supuesta reserva de células que pueden de mielinización a través de una serie de sucesos de inversión de la
organizar la reparación como respuesta a la LSB. En respuesta a la maduración que dan como resultado la regeneración de pre-OL que se
muerte de los pre-OL, los pre-OL tempranos proliferan rápidamente acumulan en lesiones crónicas, pero no consiguen diferenciarse a oligo-
y se diferencian parcialmente para regenerar los pre-OL que mueren dendrocitos funcionales (fig. 60.8). Por el contrario, la LSB necrótica
en la LSB temprana (Segovia et al., 2008; Buser et al., 2012). Así, la focal da como resultado una pérdida tanto de neuroglía como de axones,
sustancia blanca previa al parto en seres humanos es capaz de organizar lo que provoca un bloqueo irreversible en la mielinización (v. fig. 60.8).
una sólida reparación en respuesta a la lesión. A pesar de esta inherente El mecanismo por el que esta cicatriz glial contribuye al fallo de la
plasticidad, la sustancia blanca lesionada muestra una clara astrogliosis, mielinización se está investigando activamente. Es probable que alte-
que se extiende de forma difusa más allá del centro de la lesión como raciones pronunciadas de la composición de la matriz extracelular den
una «cicatriz glial» funcional que bloquea la maduración normal de los como resultado la producción de moléculas inhibidoras que bloqueen
pre-OL a células mielinizantes (Buser et al., 2012). Así, la patogenia la maduración de los pre-OL. Una molécula que ha sido ampliamente
de la LSB difusa crónica lleva a la interrupción del proceso normal estudiada es el ácido hialurónico, producido por astrocitos reactivos

• Figura 60.8  Patogenia del fallo de la mielinización en la lesión crónica difusa de la sustancia blanca.
A. Mecanismos claramente diferenciados median la mielinización anómala en las lesiones necróticas
focales (leucomalacia periventricular [LPV]; vía superior) frente a las lesiones con una lesión difusa de
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la sustancia blanca (LSB; vía inferior). Cuando es más grave, la hipoxia-isquemia (HI) desencadena
la necrosis de la sustancia blanca (vía superior) con una degeneración pancelular que reduce la sus-
tancia blanca de la neuroglía y los axones. El resultado es una necrosis grave en la LPV quística, mien-
tras que, en caso de necrosis más leve, el resultado son microquistes. Una HI más leve (vía inferior)
desencadena la muerte selectiva y precoz de los precursores de los oligodendrocitos (pre-OL), pero
los pre-OL se regeneran rápidamente en las lesiones crónicas nutridos por astrocitos reactivos que
contribuyen a bloquear la diferenciación de pre-OL hacia oligodendrocitos mielinizadores. El fallo de
la mielinización en la LSB difusa es, por tanto, el resultado de la interrupción de los pre-OL más que
de la degeneración axónica, como ocurre en la necrosis de la sustancia blanca. Obsérvese que la vía
inferior es la dominante para muchos supervivientes prematuros, mientras que la vía superior menor
refleja la carga en declive de la necrosis de la sustancia blanca. B. Aspecto típico de la mielinización
temprana normal en neonatos de roedor. Los axones se muestran en rojo, y la mielinización temprana
de los axones, en verde. C. Detención de la maduración de los pre-OL en una lesión crónica de la
sustancia blanca donde se observan numerosos pre-OL (verde), pero los axones (rojo) muestran una
desmielinización difusa. Escala, 100 µm. HI, hipoxia-isquemia; LPV, leucomalacia periventricular;
LSB, lesión de la sustancia blanca; pre-OL, precursores de los oligodendrocitos.

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892 PA RT E XI I Sistema nervioso

dentro de la cicatriz glial y digerido por las hialuronidasas que exis- para resultados neurocognitivos adversos (Gozzo et al., 2009; Schafer
ten en exceso como respuesta a la LSB (Back et al., 2005a; Preston et al., 2009; Mullen et al., 2011).
et al., 2013; Hagen et al., 2014). Estas hialuronidasas generan fragmen- Las contribuciones relativas de los procesos destructivos y la inma-
tos bioactivos de ácido hialurónico que bloquean la maduración de los durez a estas anomalías habituales estructurales, funcionales y del com-
pre-OL. Los estudios preclínicos demostraron que la remielinización portamiento se están investigando activamente. Dos son los mecanismos
funcional se veía favorecida por un inhibidor de la hialuronidasa de complementarios que pueden explicar la alteración del crecimiento
amplio espectro (Preston et al., 2013). Parece que la señalización pos- cerebral en los supervivientes prematuros. El primero supone la dege-
terior implicada en la LSB crónica incluye miembros de la vía Wnt, neración primaria de neuronas en múltiples estructuras corticales y
así como las vías mediadas por el receptor del factor de crecimiento subcorticales compuestas por sustancia gris o la degeneración neuronal
epidérmico (Fancy et al., 2011; Scafidi et al., 2014). Actualmente se secundaria debida a lesión axónica en focos de necrosis en la sustancia
desconoce si el entorno de esta lesión crónica tendrá una influencia blanca. Por ejemplo, se ha sugerido que las neuronas de la subplaca
negativa en los tratamientos basados en células madre para el fomento son especialmente vulnerables a la HI en los neonatos de roedores. Las
de la mielinización (Goldman et al., 2008; Webber et al., 2009). neuronas de la subplaca son una población temporal necesaria para
Dado que parece que múltiples vías de señalización participan en establecer el circuito cortical mediante señales guía para las conexiones
la patogenia de la LSB crónica y en el fallo de la mielinización, una talamocorticales. Esta población era menor en un número de casos
posible estrategia terapéutica es abordar múltiples vías de señalización de autopsia en humanos con diagnóstico de LSB necrótica (Kinney
mediante el factor de crecimiento pleótropo, la eritropoyetina (Epo), et al., 2012). Estos hallazgos son compatibles con una relación entre
que se administra a menudo para estimular la eritropoyesis neonatal. la alteración de la conectividad talamocortical y el retraso cognitivo en
Actualmente se estudia la Epo como agente protector frente a la LSB, niños prematuros (Ball et al., 2015). De la misma manera, en roedores,
ya que se ha demostrado que favorece la angiogenia, la neuroge- parece que la pérdida significativa de neuronas de la subplaca solo tiene
nia y la gliogenia durante la maduración del cerebro normal (Juul lugar en asociación con una degeneración neuronal cortical más grave
et al., 2015). Un estudio controlado aleatorizado sobre la adminis- (McQuillen et al., 2003; Okusa et al., 2014). Las autopsias en humanos
tración intravenosa repetida de una dosis elevada de Epo recombinante también encontraron una pérdida neuronal en la corteza, los ganglios
a neonatos prematuros en los primeros 2 días de vida demostró que basales, el tálamo y el cerebelo asociada a LSB necrótica y degenera-
esta era segura y se asociaba a una mejor maduración de la sustancia ción axónica (Pierson et al., 2007; Andiman et al., 2010; Nagasunder
blanca confirmada por técnicas de imagen con tensor de difusión et al., 2011; Kinney et al., 2012). El mecanismo aparente se relaciona
(Fauchere et al., 2015; O’Gorman et al., 2015), pero los resultados con la degeneración retrógrada de neuronas en respuesta a la lesión
del desarrollo neurológico a los 2 años no eran mejores (Natalucci axonal en la sustancia blanca. Tal y como se ha discutido previamente
et al., 2016). Se está llevando a cabo el estudio Preterm Erythropoietin (v. fig. 60.4A-C), la lesión axónica es un rasgo prominente de la LSB don-
Neuroprotection (PENUT), que administra aleatoriamente a neonatos de la necrosis está presente (Kinney y Back, 1998; Haynes et al., 2008).
nacidos entre las semanas 24 y 27 6/7 de gestación dosis altas de Epo No se ha observado degeneración axónica significativa en la LSB difusa
durante 2 semanas seguido de un tratamiento de mantenimiento con no necrótica (fig. 60.9) ni en humanos ni en los experimentos (Buser
Epo hasta completar las 32 semanas (Juul et al., 2015). Se demostró et al., 2012; Riddle et al., 2012). Así, parece que la degeneración neu-
un posible beneficio para la encefalopatía neonatal, en recién nacidos ronal primaria o secundaria tiene lugar en el contexto de una lesión
a término en un estudio doble ciego controlado con placebo realizado cerebral más grave, donde la LSB necrótica quística también es habitual.
recientemente, de la administración de Epo junto con hipotermia No obstante, como se ha mencionado anteriormente, las lesiones
terapéutica. Se observó una reducción significativa en la lesión cere- necróticas de la sustancia blanca son un componente menor de las LSB
bral confirmada por RM en el período perinatal, así como una mejor difusas en los experimentos y en los estudios de cohortes actuales reali-
función motora al año de edad (Wu et al., 2016). Se están llevando a zados en humanos con LSB (Riddle et al., 2011; Buser et al., 2012).
cabo o están planeados diversos estudios en fase III para comprobar En las autopsias realizadas en humanos con una LSB difusa temprana
la eficacia de la Epo como fármaco neurológico en la encefalopatía y degeneración de los pre-OL, ni la sustancia gris ni la sustancia blanca
hipóxico-isquémica (EHI). previas al parto mostraban indicios de un estrés oxidativo significativo
en las neuronas o axones en proceso de degeneración (fig. 60.10; Back
et al., 2005b). No se ha observado una pérdida neuronal significativa
Lesión de la sustancia gris en el cerebro temprana en asociación con LSB difusa no necrótica en humanos
prematuro (Back, 2005; Pierson, 2007). Por tanto, la LSB difusa desencadena
la degeneración selectiva de pre-OL, pero parece que no afecta a los
Diversos estudios radiológicos han identificado reducciones signifi- axones ni a las neuronas en migración en la sustancia blanca.
cativas en el crecimiento de las estructuras corticales y subcorticales Estas observaciones apoyan la teoría de que una pérdida neuronal
compuestas de sustancia gris en humanos, como los ganglios basa- significativa sería rara en los estudios de cohortes actuales de supervi-
les, el tálamo, el hipocampo y el cerebelo (Srinivasan et al., 2007; vientes prematuros. Compatible con estas observaciones, estos recién
Tam et al., 2009; Keunen et al., 2012; Nossin-Manor et al., 2012; Vinall nacidos muestran más bien anomalías de la sustancia gris más que
et al., 2013a). Los recién nacidos prematuros también muestran una «lesiones» confirmadas por anomalías de la señal en la RM. Para definir
menor conectividad funcional entre la corteza y el tálamo en la RM las respuestas celulares que acompañan a la alteración del crecimiento
de conectividad funcional cuando alcanzan la edad del término del de la sustancia gris cerebral, disponemos de un modelo de isquemia
embarazo, lo que es compatible con los resultados de los estudios previa al parto global en un feto de oveja prematuro. Este modelo
estructurales (Smyser et al., 2010). No obstante, tanto los niños como reproduce fielmente el abanico de LSB y lesiones de la sustancia gris
los adultos que nacieron prematuramente con una función neurocog- en humanos (Back et al., 2012). De hecho, la LSB difusa en el feto de
nitiva normal muestran una alteración de la activación cortical y la oveja prematuro causaba un menor crecimiento de la corteza cerebral
conectividad funcional durante los procesamientos visuales y del len- (Dean et al., 2013) y el núcleo caudado (McClendon et al., 2014)
guaje (Gozzo et al., 2009; Narberhaus et al., 2009; Schafer et al., 2009; sin pérdida de neuronas. Los resultados de estos experimentos son
Doesburg et al., 2011, 2013). Las conexiones talamocorticales también compatibles con las observaciones de la inmadurez microestructural de
se encuentran alteradas en los recién nacidos prematuros con LSB, lo la corteza cerebral en los neonatos prematuros con una restricción del
que da como resultado un déficit visual (Counsell et al., 2007). La crecimiento posnatal (Vinall et al., 2013a). El crecimiento cerebral res-
alteración de la conectividad funcional en niños y adolescentes que tringido se acompañaba de una reducción significativa de la complejidad
nacieron prematuramente es, por tanto, un factor de riesgo significativo de los árboles dendríticos de las principales poblaciones de neuronas

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• Figura 60.9  La degeneración del axón es infrecuente en la lesión de la sustancia blanca crónica
difusa. La lesión de la sustancia blanca es el resultado de la hipoxia-isquemia en el feto de oveja
prematuro. Los axones lesionados se identificaron mediante microscopia electrónica, ya que aún no se
han desarrollado marcadores óptimos para la detección de la degeneración axónica mediante micros-
copia óptica. A. La sustancia blanca normal contenía numerosos axones con un axoplasma normal
y microtúbulos intactos. Es poco frecuente observar un axón inflamado en degeneración (flecha) en
la sustancia blanca de control. B. Regiones de lesión de la sustancia blanca difusa mostraban gran
similitud con los controles normales en cuanto a la escasez de axones degenerativos. C. Por el contrario,
las regiones de necrosis focal de la sustancia blanca (es decir, leucomalacia periventricular) contenían
amplias áreas desprovistas de axones (asteriscos), así como numerosos axones degenerativos (fle-
chas). Escala, 2 µm. (Tomado de Riddle A, Maire J, Gong X, et al. Differential susceptibility to axonopathy
in necrotic and non-necrotic perinatal white matter injury. Stroke. 2013;43:178–184.)
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corticales y de la proyección caudada (fig. 60.11). Resulta importante de las neuronas de proyección viene acompañada de alteraciones en la
destacar que, durante el desarrollo normal del feto tanto en ovejas como función neuronal. Así, estos hallazgos apoyan la observación de que for-
en humanos, el crecimiento cortical cerebral significativo se acompaña mas de lesión cerebral más leves conllevan de todos modos un retraso en el
de un incremento pronunciado en el árbol dendrítico de las neuronas crecimiento cerebral en el que participan alteraciones de la maduración
de proyección. Estas alteraciones morfológicas en la maduración den- neuronal que afectan a grandes poblaciones neuronales diferentes en
drítica de las neuronas de proyección inmaduras se acompañaban de diversas estructuras corticales y subcorticales de sustancia gris.
reducciones significativas en la densidad de las espinas dendríticas, que Dado que las alteraciones en la maduración de las neuronas previas al
son las localizaciones principales de la transmisión sináptica. De hecho, parto tienen lugar durante un período ventana crítico en el establecimien-
los estudios electrofisiológicos descubrieron anomalías significativas to de las conexiones neuronales en humanos, incluso la inmadurez neu-
persistentes en la actividad sináptica de excitación al mes de vida tras ronal temporal puede tener efectos globales persistentes en el desarrollo
una HI previa al parto (McClendon et al., 2014). La reducción de la posterior del circuito del SNC. Al hilo de esta idea, estudios radiológicos
actividad sináptica de estas neuronas de proyección es, por tanto, recientes han evaluado si un menor crecimiento cerebral se acompaña
compatible con la noción de que la inmadurez del árbol dendrítico de alteraciones en la microestructura de la corteza cerebral en desarrollo.

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• Figura 60.10  A diferencia de los precursores de oligodendrocitos, las neuronas y los axones son
notablemente más resistentes al daño oxidativo en las sustancias blanca y gris. A. Escasez habitual de
muerte celular en la corteza cerebral superior observada en un recién nacido prematuro con lesión difusa
de la sustancia blanca en una autopsia. La muerte celular se observa en A-C mediante tinción TUNEL,
que detecta el ADN fragmentado de las células necróticas y apoptósicas. La flecha marca la superficie
pial. B y C. La sustancia blanca periventricular del mismo caso mostraba una degeneración extensa
de los precursores de oligodendrocitos. Las células degenerativas individuales aparecen como puntos
verdes brillantes. D y E. Cuando se comparó con los controles, no se observó una lesión oxidativa
significativa en la corteza cerebral al realizar las autopsias en las que se había observado una lesión sig-
nificativa de la sustancia blanca previa al parto. La lesión oxidativa se midió con dos marcadores
muy estables optimizados para la autopsia de cerebros humanos prematuros: los isoprostanos F2 son
un marcador general de lesión oxidativa en células, y los neuroprostanos F4 detectan específicamente
la lesión de las neuronas y los axones. Escala: A y C. 200 µm. B. 100 µm. LSBPP, lesión de la sus-
tancia blanca previa al parto. (Adaptado de Back SA, et al. Selective vulnerability of preterm white matter
to oxidative damage defined by F2-isoprostanes. Ann Neurol. 2005;58:108-120.)

Durante el desarrollo normal, la corteza cerebral muestra una pérdida gris de los supervivientes prematuros muestra una mayor anisotropía
progresiva normal de la anisotropía fraccional de la corteza cerebral. Esta en el ser humano, lo que es compatible con una mayor inmadurez (Ball
pérdida de anisotropía está relacionada con la maduración progresiva de et al., 2013; Vinall et al., 2013a). Las alteraciones de la anisotropía
las neuronas de proyección de la corteza cerebral (Dean et al., 2013), fraccional de la corteza se han vinculado a problemas en el crecimiento
que constituyen la principal población neuronal de la corteza cerebral. somático (peso, altura y perímetro cefálico), incluso tras tener en cuenta
Las neuronas de proyección inmaduras de la corteza muestran una otras lesiones cerebrales coexistentes confirmadas por RM (p. ej., LSB)
«morfología anisótropa» debido a su árbol dendrítico simplificado, que y otras enfermedades sistémicas (p. ej., infección) (Vinall et al., 2013a).
provoca una difusión asimétrica de agua a lo largo de sus dendritas. Un mejor desarrollo de la sustancia blanca microestructural y una HIV
A medida que avanza la maduración neuronal, el árbol dendrítico adopta menor están relacionadas con concentraciones posnatales más altas de
una «morfología isótropa» en la que la difusión del agua a lo largo de ácido docosahexaenoico, lo que sugiere el potencial de la nutrición
los procesos dendríticos es similar en todas direcciones. Por tanto, las para favorecer la óptima maduración cerebral (Tam et al., 2016). Así,
neuronas de proyección inmaduras de la corteza presentan un árbol den- son muchos los factores, como el estado nutricional y la exposición a la
drítico simplificado que da como resultado una «morfología anisótropa» isquemia cerebral, que pueden contribuir a la patogenia de la inmadurez
más acentuada. Esta reducción de la complejidad del árbol dendrítico neuronal en los supervivientes prematuros. Es necesario realizar más estu-
es responsable de la mayor anisotropía observada en experimentos en dios para determinar cómo las alteraciones de la maduración neuronal
las lesiones crónicas de la sustancia blanca relacionadas con una menor contribuyen a los trastornos diseminados de la conectividad cerebral que
anisotropía en la sustancia blanca normal (v. fig. 60.11E). En el marco parecen subyacer bajo los déficits cognitivos y conductuales persistentes
de un menor crecimiento cortical, se ha descubierto que la sustancia que se observan en los supervivientes prematuros.

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• Figura 60.11  Tras la lesión de la sustancia blanca hipóxico-isquémica, el cerebro prematuro se nutre de neuronas inmaduras que no degeneran,
pero que son muy susceptibles a las alteraciones de la maduración que se manifiestan con una menor complejidad del árbol dendrítico. A. Típica
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neurona de proyección piramidal procedente de la corteza cerebral prematura de un feto de oveja de control que se identificó mediante una tinción
de plata de Golgi. Obsérvense la escasez de procesos y el aspecto simplificado de esta neurona prematura típica. B. Las neuronas sufren un
drástico incremento en la complejidad del árbol dendrítico en los animales casi a término. C y D. Cuatro semanas después de sufrir una isquemia
previa al parto, las neuronas de proyección de la corteza muestran anomalías en la maduración. Una neurona de control típica (C) muestra dendritas
altamente arborizadas, mientras que una breve exposición previa al parto a hipoxia-isquemia da como resultado neuronas con un árbol dendrítico
significativamente más simple (D). Puede apreciarse la menor complejidad de las dendritas por el solapamiento de los anillos concéntricos rojos
de Scholl, que ilustran que los procesos de las neuronas inmaduras se cruzan con los anillos con menos frecuencia. Las líneas amarilla, blanca,
rosa, verde y azul representan las ramas del soma de primer, segundo, tercer, cuarto y quinto orden, respectivamente. Obsérvese la reducción
global de tamaño y complejidad del patrón de ramificación de las neuronas isquémicas en (D). E. Las reducciones del crecimiento cortical también se
manifiestan como alteraciones de la anisotropía fraccional (AF) de la corteza, una medida de la maduración y la complejidad de la microestructura
de la sustancia blanca mediante resonancia magnética. Obsérvese el declive progresivo normal de la AF en los controles (morado) entre el desarrollo
cortical prematuro y casi a término. Como respuesta a la isquemia, se ha observado una mayor anisotropía cortical (difusión de agua más res-
tringida) como respuesta a la isquemia (rojo) en comparación con los controles (morado), que se ha relacionado con la menor complejidad del árbol
dendrítico de las neuronas isquémicas, por ejemplo, en (D), frente a los controles, por ejemplo, en (C). Escala en A y B, 20 µm. AF, anisotropía
fraccional; HI, hipoxia-isquemia. (Tomado de Back SA, Miller SP. Brain injury in premature neonates: a primary cerebral dysmaturation disorder? Ann
Neurol. 2014;75:469–486.)

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Resumen
Los avances en los cuidados intensivos neurológicos de los neonatos se con un amplio abanico de lesiones, que van desde formas graves de
han acompañado de un avance considerable en la reducción de la inci- lesión, relativamente poco frecuentes, a lesiones más moderadas que se
dencia y de la gravedad global de las HIV en los neonatos prematuros. acompañan de alteraciones diseminadas de la maduración celular. Esto
Estos avances han contribuido a reducciones similares en la incidencia se traduce en un gran número de células cerebrales que no consiguen
de LSB necróticas quísticas y lesiones de la sustancia gris más graves. madurar completamente durante el período ventana crítico en el desa-
Sorprendentemente, a pesar de estas importantes reducciones en la rrollo del circuito neural. Estas formas de inmadurez de la sustancia
gravedad de las lesiones, la morbilidad relacionada con el desarrollo blanca y gris cerebral, recientemente descubiertas, suponen nuevos
neurológico se mantiene en cotas elevadas (Synnes et al., 2010). Los desafíos diagnósticos y respaldan la necesidad urgente de obtener
neonatos prematuros sobreviven con una combinación de discapacida- nuevas estrategias terapéuticas que se centren en la regeneración y la
des motoras, cognitivas y conductuales que parecen estar relacionadas reparación para revertir los procesos que favorecen la inmadurez.

Lecturas recomendadas McPherson C, Grunau RE. Neonatal pain control and neurologic
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CAPÍTULO 60 Lesión cerebral en el recién nacido prematuro 896.e5

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61
Lesión cerebral en el recién nacido
a término
RYAN MICHAEL McADAMS Y CHRISTOPHER MICHAEL TRAUDT

PUNTOS CLAVE de lesión cerebral hipóxico-isquémica. Entre los factores subyacentes


que se asocian a estos episodios de hipoxia-isquemia encontramos
• La encefalopatía hipóxico-isquémica (EHI) es una causa principal problemas maternos que causan una mala perfusión placentaria (p. ej.,
de lesión cerebral y mortalidad en neonatos a escala mundial. hipotensión materna, preeclampsia, enfermedad vascular crónica),
• La resonancia magnética (RM) y la espectroscopia por resonancia insuficiencia primaria en la perfusión placentaria (vuelta de cordón,
magnética (ERM) son técnicas radiológicas útiles para identificar prolapso de cordón, nudo de cordón, desprendimiento de placenta o
la lesión cerebral y ayudar a predecir el neurodesarrollo a largo plazo rotura uterina) y problemas en la oxigenación/perfusión fetal (p. ej.,
en neonatos con encefalopatía hipóxico-isquémica. hemorragia fetomaterna, trombosis fetal). La etiología de la EHI suele
• La trombosis cerebral arterial o venosa puede ser la causa basarse en la especulación, y es difícil determinar una causa definitiva.
de convulsiones para las que no se halla explicación.
El análisis placentario desempeña un papel importante en la inves-
• Es posible que las infecciones adquiridas dentro del útero se detecten
tigación de los posibles factores que pueden contribuir al sufrimiento
tras el nacimiento.
• Los neonatos con cardiopatía congénita (CC) presentan una elevada
fetal y conducen a la EHI (vasculopatía trombótica fetal, vellositis cró-
incidencia de anomalías cerebrales confirmadas por técnicas nica con vasculopatía fetal obliterante, corioamnionitis con vasculitis
de neuroimagen y corren un mayor riesgo de sufrir alteraciones fetal grave o necrosis vascular fetal asociada al meconio) (McDonald
del neurodesarrollo. et al., 2004; Redline, 2005). Los neonatos con EHI a menudo han
sufrido anomalías placentarias, especialmente los neonatos en los que
no se ha identificado ningún episodio de alerta en el nacimiento. En
estos neonatos, son habituales la acidosis grave y la patología placentaria
Encefalopatía hipóxico-isquémica inflamatoria (Chang et al., 2012). Los factores inflamatorios intraparto,
como la fiebre materna, la corioamnionitis y la rotura prolongada de
La encefalopatía hipóxico-isquémica (EHI) es la principal causa de membranas, pueden aumentar el riesgo de EHI (Blume et al., 2008).
lesión cerebral (Wu et al., 2004) y de mortalidad (Black et al., 2010) en
neonatos a nivel mundial, con trastornos del neurodesarrollo (TND),
como retraso intelectual, parálisis cerebral (PC), hidrocefalia y convul- Diagnóstico
siones aproximadamente en el 50% de los supervivientes. La hipoxia
intraparto provocó alrededor de 717.000 muertes en 2010 (∼1 de cada Anamnesis del nacimiento y presentación
5 muertes neonatales a escala mundial) (Liu et al., 2012). Los trastornos en la sala de partos
motores y los TND a largo plazo, como problemas cognitivos, neuro­ El diagnóstico de EHI se determina mediante una anamnesis detallada
psicológicos, del aprendizaje y del comportamiento, son habituales en del nacimiento, una exploración neurológica y pruebas analíticas. Entre
los neonatos con EHI moderada o grave que han sobrevivido (Marlow las anamnesis compatibles con una EHI encontramos descripciones de
et al., 2005; van Handel et al., 2007). Se han detectado lesiones cere- sufrimiento intrauterino (confirmado por anomalías en la cardiotoco-
brales secundarias a una hipoxia-isquemia durante el parto hasta en grafía fetal) (Murray et al., 2009), presencia de meconio o antecedentes
el 14,5% de los niños a término con PC (Eunson, 2015). El impacto de un parto difícil (cuadro 61.1). Tras el parto, los recién nacidos con
emocional y los costes asociados a la asistencia médica y la rehabilita- EHI suelen presentar insuficiencia respiratoria que precisa ventilación
ción de los recién nacidos con EHI son notables (Wang et al., 2008). con presión positiva, a menudo con intubación endotraqueal y venti-
Los Centers for Disease Control and Prevention calcularon el coste lación asistida. Los recién nacidos con EHI también pueden sufrir una
total de la vida de las personas con PC nacidas en 2000 en 14.700 parada cardíaca que precise reanimación cardiopulmonar y adrenalina.
millones de dólares americanos (∼1,2 millones de dólares por persona Puntuaciones de Apgar bajas (< 5) a los 5 y a los 10 min de edad son
con PC) (Centers for Disease Control and Prevention, 2004). compatibles con un episodio agudo intraparto o periparto que cause
la EHI. Los neonatos con EHI que han sufrido un episodio hipóxico
intraparto suelen presentar un pH de la arteria umbilical inferior a 7 o
Etiología un déficit de bases igual o superior a 12-15 mmol/l, o ambos («Neonatal
Aunque la etiología de la EHI es multifactorial, suele ser el resultado encephalopathy and neurologic outcome», 2014).
de un episodio grave de hipoxia-isquemia (aguda o prolongada) antes
o durante el parto. La hipoxia conduce a una insuficiencia cardíaca y Signos y síntomas clínicos
vascular, con la consecuente reducción de la perfusión cerebral y el El momento, el grado y la duración de la hipoxia y la alteración de la
metabolismo oxidativo, que puede dar como resultado diversos grados perfusión cerebral influyen en la gravedad de la lesión cerebral en los
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898 PA RT E XI I Sistema nervioso

• CUADRO 61.1  Episodio de alerta de hipoxia convulsiones ni clínicas ni electrográficas subclínicas en los neonatos
con EHI de grado 1 según la escala de Sarnat. Los neonatos con EHI de
o isquemia inmediatamente grado 2 según Sarnat (encefalopatía moderada) se muestran letárgicos
antes del parto o durante el parto y con menor tono muscular, succión débil, pupilas contraídas, reflejo
Rotura uterina
de Moro disminuido y a menudo con convulsiones objetivables. Los
Desprendimiento de placenta grave neonatos con lesiones cerebrales graves, que presentan una EHI de
Prolapso del cordón umbilical grado 3 según Sarnat (encefalopatía grave), están estuporosos con tono
Embolia del líquido amniótico acompañada de hipotensión e hipoxemia muscular flácido, postura intermitente de descerebración (infrecuente),
maternas graves y prolongadas ausencia de reflejos (de succión, faríngeo y de Moro) y pupilas poco
Insuficiencia cardiovascular materna reactivas. También son frecuentes los problemas respiratorios en la EHI
Desangramiento fetal por vasa previa o por hemorragia fetomaterna masiva moderada o grave, con la presencia de respiración periódica y apnea en
la mayoría de los neonatos afectados (Sasidharan, 1992).
Tomado de Executive summary: Neonatal encephalopathy and neurologic outcome, second edition. La EHI es la causa más habitual de convulsiones en el período
Report of the American College of Obstetricians and Gynecologists’ Task Force on Neonatal neonatal, período que se caracteriza por un desajuste en el desarrollo
Encephalopathy. Obstet Gynecol. 2014;123(4):896–901. de las fases excitadoras e inhibidoras de diversos sistemas de neuro-
transmisores, como los receptores de glutamato (N-metil-d-aspartato
[NMDA], ácido α-amino-3-hidroxi-5-metil-4-isoxazol propióni-
co [AMPA] y los receptores de la kainita) y los receptores del ácido
TABLA  Clasificación clínica de la encefalopatía
γ-aminobutírico (GABA) (Shetty, 2015). Las convulsiones objetivables
pueden detectarse en las primeras 24 h de vida. Estas son a menudo
61.1 hipóxico-isquémica
sutiles en cuanto a su presentación y se manifiestan con movimientos
Grado 1 Grado 2 Grado 3 oculares anómalos (p. ej., desviación ocular horizontal y tónica con
(leve) (moderada) (grave) o sin espasmos y parpadeo), movimientos orales, bucales o linguales
(p. ej., succión o golpeteo de labios) o movimientos de las extremida-
Conciencia Hiperalerta Letárgico Estupor o coma des (p. ej., movimientos de nadador o pedaleo de bicicleta). Los episodios de
o embotado
apnea y constantes vitales inestables también pueden formar parte
Actividad Normal Disminuida Ausente de la presentación de las convulsiones. También pueden presentarse
convulsiones que se detectan a nivel electrográfico sin manifestación
Control clínica, por lo que la American Clinical Neurophysiology Society ha
neuromuscular
recomendado el videoelectroencefalograma continuo (EEGc) conven-
  a. Tono muscular Normal Hipotonía leve Flácido cional mientras se baja la temperatura y se recupera en los neonatos con
  b. Postura Flexión distal Flexión distal Descerebración encefalopatía moderada o grave. Como alternativa, puede recurrirse a
leve fuerte intermitente la electroencefalografía de amplitud integrada (EEGa) para el cribado.
  c. Reflejos Hiperactivos Hiperactivos Disminuidos Es importante la vigilancia y la realización de exploraciones seriadas
de extensión o ausentes para la evaluación adecuada de los neonatos con EHI, ya que los signos
Reflejos primitivos y síntomas clínicos suelen evolucionar con el tiempo. Los neonatos
  a. Succión Débil Débil o ausente Ausente con una EHI leve pueden mostrar una exploración normal a las 12 h
  b. Moro Fuerte Débil, incompleto Ausente de vida, mientras que los neonatos con EHI más graves permanecerán
  c. Tónico cervical Leve Fuerte Ausente estuporosos, a menudo con insuficiencia respiratoria y pupilas dilatadas
fijas o poco reactivas a la luz. Los neonatos con afectaciones graves
Función autónoma pueden mostrar alguna mejoría en el nivel de alerta tras 72 h. Sin
  a. Pupilas Dilatadas Contraídas Variables, embargo, la mayoría de ellos mostrarán un tono muscular anómalo
desiguales (hipotonía > hipertonía), grandes dificultades para la alimentación
  b. F recuencia Taquicardia Bradicardia Variable
(p. ej., reflejos de succión y faríngeo disminuidos, problemas en la
cardíaca deglución) y diversos grados de debilidad en las extremidades. En
general, los neonatos que muestran una rápida recuperación clínica y
Convulsiones Ninguna Habituales Poco una exploración normal a la semana de vida suelen alcanzar resultados
frecuentes normales a largo plazo.
Modificado de Sarnat, HB, Sarnat M. Neonatal encephalopathy following fetal distress. A clinical Pruebas analíticas complementarias
and electroencephalographic study. Arch Neurol. 1976;33:696–705.
Las pruebas analíticas complementarias son útiles para la evaluación
de los recién nacidos en los que se sospecha EHI. La insuficiencia
multiorgánica es habitual en los bebés con EHI, que se confirma por
recién nacidos a término con EHI. Al nacer, los neonatos con EHI las anomalías metabólicas y hematológicas, así como la disfunción
presentan depresión neurológica y síntomas clínicos compatibles con hepática, renal, gastrointestinal y cardíaca. Aunque la mayoría de los
una lesión neurológica en las primeras horas de vida. Las manifestacio- neonatos con lesión cerebral debida a una asfixia fetal intraparto sufren
nes clínicas de los neonatos afectados pueden cambiar en las siguientes insuficiencia multiorgánica, en los casos de asfixia intraparto grave
72 h y suelen evaluarse usando la escala de Sarnat, una clasificación y aguda, los neonatos pueden presentar pruebas de lesión cerebral
que se basaba inicialmente en la evaluación de los neonatos de más sin insuficiencia multiorgánica (Martin-Ancel et al., 1995; Phelan
de 36 semanas de gestación (tabla 61.1) (Sarnat y Sarnat, 1976). Los et al., 1998). Debe realizarse un perfil metabólico básico y de sangre
neonatos que presentan una encefalopatía de grado 1 según la escala arterial poco después del parto, ya que se observan con frecuencia
de Sarnat (encefalopatía leve) se muestran hiperalerta con los ojos complicaciones metabólicas, como la hipoglucemia, la hipocalcemia,
abiertos de par en par, a menudo con un «aspecto asombrado» o la la hiponatremia, la hipoxemia y la acidosis. El lactato sérico suele estar
mirada perdida y las pupilas dilatadas. Estos neonatos suelen presentar elevado tras la hipoxia o la isquemia, como resultado del metabolismo
un tono muscular normal, pero el reflejo de Moro está acentuado ante anaeróbico de la glucosa para la obtención de energía en el marco de
estímulos táctiles, luz brillante o ruidos excesivos. No suelen observarse una oxigenación tisular disminuida. Un recuento sanguíneo completo

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CAPÍTULO 61 Lesión cerebral en el recién nacido a término 899

facilitará la evaluación de la leucopenia o la leucocitosis, que pueden patía no dismórfica, la realización de una RM en la primera semana de
sugerir infección; el hematocrito nos sirve para evaluar la anemia vida (tras recuperar la temperatura normal, en el día 4 o 5) puede servir
(p. ej., en los casos de sospecha o confirmación de desprendimien- para la valoración de patrones lesivos compatibles con una EHI y des-
to de placenta), y el recuento plaquetario nos sirve para valorar la cartar otros diagnósticos, como enfermedades neurológicas congénitas,
trombocitopenia, que puede darse en la coagulación intravascular neurovasculares o inflamatorias que precisen intervención (Miller
diseminada (CID). Deben llevarse a cabo estudios de coagulación et al., 2002). Empleando una combinación de pruebas convencionales
para valorar la CID y para guiar el tratamiento si la clínica nos (imágenes ponderadas en T1 y T2), resonancia magnética por difusión
hace sospechar su presencia. Los recién nacidos con CID mostrarán (RMD), resonancia con tensor de difusión y RM/espectroscopia por
un tiempo de protrombina y un tiempo de tromboplastina parcial resonancia magnética (ERM), se puede obtener información sobre la
activada prolongados, una disminución del fibrinógeno y un aumento microestructura, la conectividad y el metabolismo cerebral, y contribuir
de los productos de la degradación de la fibrina, como el dímero D. así al establecimiento del momento de la lesión cerebral en los recién
La función hepática puede estar alterada y puede valorarse mediante nacidos con EHI (Barkovich et al., 2006; «Neonatal encephalopathy and
la comprobación de la alanina transferasa sérica, la aspartato amino- neurologic outcome», 2014). La realización de la RM en el recién naci-
transferasa, la fosfatasa alcalina, la lactato deshidrogenasa, las proteínas do tiene un elevado valor predictivo en neonatos, con y sin tratamiento
totales, la albúmina sérica, la bilirrubina (total y directa) y el cociente con hipotermia terapéutica, en la detección de déficits neurológicos a
internacional normalizado (Shastri et al., 2012). Las concentraciones los 18 meses de edad (Rutherford et al., 2010a). La RMD, que mide el
iniciales de creatinina en el recién nacido pueden ser un reflejo de los movimiento browniano aleatorio de las moléculas de agua en un vóxel
valores maternos, pero un aumento de la creatinina, especialmente en el de tejido, puede identificar tejido cerebral isquémico en el neonato en
marco de una diuresis escasa, es compatible con una insuficiencia renal fases iniciales, pero puede menospreciar la extensión final de las lesiones
aguda. Puede recurrirse al electrocardiograma, el ecocardiograma y las de los ganglios basales y el tálamo (Rutherford et al., 2010b). Dado que
enzimas cardíacas (la creatina cinasa, la isoenzima creatina cinasa-MB las técnicas de RM han seguido evolucionando, lo que ha permitido un
y la troponina I séricas) para valorar el grado de lesión y/o disfunción mayor conocimiento de la extensión y los patrones de la lesión cerebral,
cardíaca que suele acompañar a la EHI (Agrawal et al., 2012; Shastri la tomografía computarizada (TC) se usa con menos frecuencia para la
et al., 2012). Los neonatos con EHI suelen mostrar una menor varia- evaluación de los recién nacidos con sospecha de EHI. Además de
bilidad del latido cardíaco en el electrocardiograma continuo (Matic la preocupación por la exposición a la radiación, la TC carece de la
et al., 2013; Vergales et al., 2014). Debe llevarse a cabo una punción sensibilidad para evaluar las características y la extensión de la lesión
lumbar si la anamnesis no sugiere sufrimiento perinatal, con el fin de cerebral en los recién nacidos a término con encefalopatía («Neonatal
descartar otros trastornos que pueden asemejarse a la EHI, como la encephalopathy and neurologic outcome», 2014).
meningitis. Otras causas de encefalopatía neonatal, como la sepsis, los
trastornos metabólicos, el accidente cerebrovascular arterial o venoso, Espectroscopia de infrarrojo cercano
la disgenesia cerebral, los trastornos neuromusculares congénitos y las La espectroscopia de infrarrojo cercano (NIRS, near-infrared spectros-
metabolopatías congénitas también tienen un cuadro clínico similar copy) permite la monitorización continua no invasiva y desde la cuna de
al de la EHI y deben tenerse en cuenta en el diagnóstico diferencial. la hemodinámica y la oxigenación cerebral. En los neonatos con EHI
tratados con hipotermia, el flujo sanguíneo cerebral regional medido
Electroencefalografía por RM se corresponde en gran medida con los valores de la saturación
En los neonatos con EHI moderada o grave, se recomienda enérgica- venosa mixta obtenidos mediante NIRS (coeficiente de correlación de
mente la monitorización para detectar la presencia de convulsiones elec- Spearman r = 0,88; P = 0,0085) (Wintermark et al., 2014). En los
trográficas. En la actualidad, el EEGc es la prueba estrella para la iden- neonatos con EHI tratados con hipotermia, los patrones de fondo de
tificación de las convulsiones neonatales. Sin embargo, la EEGa es una la EEGa a las 24 h de vida tienen un menor valor predictivo positivo,
herramienta de monitorización que se usa habitualmente para evaluar mientras que el índice de oxigenación tisular media (que refleja la satu-
los patrones de actividad eléctrica cortical y detectar convulsiones elec- ración de oxígeno en las venas, capilares y arterias), medido mediante
trográficas (Shah et al., 2014). En los neonatos con EHI monitorizados NIRS a las 12 h de vida, muestra su correspondencia con los resultados
con EEGc, el tratamiento de las convulsiones electrográficas se asocia finales, con niveles de oxigenación cerebral significativamente mayores
a una menor carga convulsiva, lo que puede tener importancia, ya que en los neonatos que han tenido un mal resultado en comparación
una mayor carga convulsiva se asocia a una lesión cerebral mayor en con los que han tenido resultados normales (Ancora et al., 2013).
la resonancia magnética (RM) y peores resultados a largo plazo (Shah Son necesarios más estudios para determinar el diagnóstico y el valor
et al., 2014; Srinivasakumar et al., 2015). Se ha demostrado que un predictivo de la NIRS en neonatos con EHI tratados con hipotermia.
patrón de fondo anómalo en la EEGa se corresponde con una RM
anómala en pacientes con temperatura normal, pero la hipotermia Patrones de lesión cerebral
terapéutica amortigua esta asociación (Padden et al., 2015).
Volpe describió detalladamente la neuropatología y la patogenia de
Técnicas de neuroimagen
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la lesión cerebral asociada a EHI en neonatos, e identificó cuatro


La ecografía craneal puede emplearse como la técnica radiológica de variedades neuropatológicas principales: 1) necrosis neuronal selec-
primera línea en los recién nacidos con EHI, ya que puede llevarse a tiva (la más habitual); 2) lesión cerebral parasagital; 3) leucomalacia
cabo en la misma cuna en estos neonatos críticamente inestables. Aun- periventricular, y 4) necrosis cerebral isquémica focal (Volpe, 2008).
que los signos sutiles de EHI pueden ser difíciles de detectar mediante En la primera categoría de necrosis neuronal selectiva pueden darse
ecografía, en los casos de EHI grave, la ecografía puede mostrar una diferentes patrones de lesión dependiendo de la gravedad y la duración
mayor ecogenicidad, focal o difusa, en el parénquima cerebral, ven- de la agresión: un patrón difuso secundario a una agresión muy intensa
trículos en forma de ranura y obstrucción de la circulación del líquido y prolongada (que afecta a todos los niveles del sistema nervioso central
cefalorraquídeo (LCR) en los espacios extracerebrales y la fisura inter- [SNC]), un patrón nuclear profundo en la corteza cerebral debido a una
hemisférica (Dinan et al., 2014). La ecografía también puede propor- agresión moderada o intensa y prolongada (que afecta a la neocorteza
cionar información preliminar sobre malformaciones cerebrales u otras cerebral, el hipocampo, los ganglios basales y el tálamo) y un patrón
posibles causas de encefalopatía neonatal que pueden presentarse como nuclear profundo en el tronco encefálico asociado a una agresión intensa
EHI. Aunque la ecografía es una herramienta valiosa para evaluar a los y repentina (afectación de los ganglios basales, el tálamo y el tronco
neonatos con una sospecha de lesión cerebral, la RM es la prueba de encefálico). La lesión cortical difusa que afecta a los ganglios basales
elección en los neonatos con EHI. En los recién nacidos con encefalo- y el tálamo (fig. 61.1) es más habitual en los neonatos que han nacido

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• Figura 61.1  Neonato masculino nacido a término con encefalopatía hipóxico-isquémica grave. Corte
axial de resonancia magnética por difusión (A) y su correspondiente mapa de coeficiente de difusión
aparente (B) que muestra un edema citotóxico parcheado diseminado que afecta tanto a la corteza
cerebral como a los núcleos profundos y al cuerpo calloso. C. Corte axial ponderado en T2 que muestra
también una anomalía cortical parcheada. D. Señal oscura en la región medial inferior del hemisferio
cerebeloso derecho observada en un corte axial ponderado en T2 que indica hemorragia cerebelosa
intraparenquimatosa. (Imágenes por cortesía del Dr. Francisco Perez y la Dra. Teresa Chapman, Seattle
Children’s Hospital, Seattle, WA.)

mediante una cesárea de urgencia o han sufrido una reanimación asocia a una hipoxia parcial prolongada durante el parto y afecta a la
agresiva, una encefalopatía grave y una mayor carga convulsiva, y se sustancia blanca parasagital, además de a la sustancia gris cortical en las
asocia con un mayor deterioro motor y peores resultados cognitivos a agresiones graves. Es más frecuente que la lesión cerebral parasagital
los 30 meses de edad (Miller et al., 2005). La lesión cerebral parasagi- produzca déficits cognitivos que déficits funcionales motores (Miller
tal, también denominada patrón predominante de la zona marginal, se et al., 2005).

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CAPÍTULO 61 Lesión cerebral en el recién nacido a término 901

Mecanismos de la lesión o anuria y una concentración de creatinina elevada. Se recomienda


entonces la estrecha vigilancia de los electrólitos y la restricción de
Los episodios isquémicos globales pueden provocar una disminución líquidos para limitar el edema. La hiponatremia puede ser el resultado
de la perfusión y la consecuente lesión de las regiones marginales del de la sobrecarga de líquidos secundaria a la insuficiencia renal y/o la
cerebro en desarrollo que son vulnerables y dependen del aporte san- disminución de la diuresis debida a un síndrome de alteración en la
guíneo dual procedente de las ramas más distales de dos grandes arterias secreción de la hormona antidiurética. La hipotermia terapéutica es
(p. ej., las arterias cerebrales anterior y media [ACM]). La mala per- imprescindible en los recién nacidos con EHI moderada o grave en los
fusión conduce a una falta de oxígeno y glucosa, lo que provoca la países desarrollados, y debe realizarse en las 6 h posteriores al parto, con
carencia de energía y una pérdida de la función mitocondrial, que el traslado a tiempo a un centro con un programa de hipotermia, si es
constituye el problema celular central que subyace bajo la EHI. Sin preciso. Puede recurrirse al enfriamiento pasivo hasta 33 ± 0,5 °C antes
glucosa ni oxígeno suficiente, la producción de trifosfato de adenosina de emplear el enfriamiento activo de la cabeza o de todo el cuerpo, pero
(ATP) disminuye y las bombas de la membrana celular, que dependen se recomienda el enfriamiento activo durante el transporte siempre que
de la energía, fracasan, lo que lleva a una alteración en los gradientes sea posible. El enfriamiento debe llevarse a cabo en centros que dis-
de iones celulares, la despolarización de la membrana neuronal, la pongan de un equipo de apoyo neurológico (disponibilidad de EEGc
liberación de los neurotransmisores (p. ej., glutamato), una mayor o EEGa), neurorradiología (disponibilidad de RM) y otros servicios,
concentración de calcio citosólico, la inducción de enzimas destructivas como nefrología, digestivo, cardiología, equipo de reanimación cardio-
(p. ej., fosfolipasas, proteasas y endonucleasas) y daño producido por pulmonar extracorpórea (RCPEC), fisioterapia y nutrición.
los radicales libres. Las fosfolipasas activadas (p. ej., fosfolipasa A2)
hidrolizan los fosfolípidos de la membrana celular y liberan ácidos
grasos libres, como el ácido araquidónico, que pueden aumentar la
liberación de glutamato, desacoplar la fosforilación oxidativa e inactivar
Pronóstico
la Na+,K+-ATPasa de la membrana, lo que provoca el daño celular. Las La predicción precisa de los resultados a corto y largo plazo en bebés
proteasas degradan las proteínas del citoesqueleto, y las ciclooxigenasas con EHI sigue siendo un desafío, y es necesario llevar a cabo más
estimulan la producción de ácido araquidónico y prostaglandinas, lo estudios, especialmente en el caso de la hipotermia terapéutica (Ahearne
que puede perpetuar la peroxidación de la membrana. La lesión media- et al., 2016). Una exploración neurológica inicial normal (en neo-
da por el receptor del glutamato excitotóxico puede darse mediante natos no sometidos a hipotermia) se asocia a resultados favorables
la sobreactivación de los receptores de NMDA permeables al calcio del desarrollo a los 2 años de edad, mientras que una exploración
y dependientes de voltaje, que causa la despolarización neuronal y la neurológica inicial anómala tiene un limitado valor predictivo a largo
acumulación de calcio intracelular, lo que desencadena la apoptosis. plazo. Alteraciones en la exploración detectadas en el momento del
La activación de los receptores del glutamato AMPA puede llevar a la alta se corresponden en gran medida con resultados adversos (Murray
muerte de los oligodendrocitos maduros por necrosis, que son células et al., 2010). De la misma manera, una RM normal en la primera
clave en la producción de mielina (Leuchtmann et al., 2003). semana se relaciona con resultados normales, mientras que los resul-
Si se reanima al recién nacido tras un episodio de hipoxia-isque- tados en el caso de lesiones de los ganglios basales o la zona margi-
mia, tendrá lugar la reperfusión del tejido cerebral, lo que puede nal en la RM son más inciertos. La lesión de la sustancia gris profunda
desencadenar una compleja serie de procesos celulares que avanzan en la RM tiene una mayor correspondencia con malos resultados. La
rápidamente mediante cascadas de señales amplificadoras que incluyen ERM también puede ser útil para establecer el pronóstico, ya que un
tipos de oxígeno reactivo, tipos de nitrógeno reactivo, citocinas y cas- N-acetilaspartato (NAA) bajo y picos altos de lactato se corresponden
pasas (proteinasas específicas del cisteinilo aspartato) que inducen la con lesiones graves. Se sigue investigando para identificar marcadores
disfunción y/o la muerte celular. La muerte celular puede deberse a biológicos que predigan la EHI.
diversos procesos, como la necrosis (inflamación y vacuolización de
orgánulos, pérdida de integridad de la membrana celular y digestión Puntuación de Apgar
aleatoria de la cromatina), la apoptosis (agregación de la cromatina, La puntuación de Apgar es subjetiva y no puede determinar la gravedad
condensación nuclear y citoplásmica, formación de cuerpos apoptósicos de la EHI. Esta puntuación tiene una utilidad limitada en la predicción
ligados a la membrana) y la autofagia, un proceso autodegenerativo que de resultados a largo plazo, tal y como describe el seguimiento del
supone la degradación proteolítica de los componentes del citosol en el estudio controlado aleatorizado sobre la hipotermia corporal realizado
lisosoma (gran cantidad de vacuolas citoplásmicas, cromatina nuclear por la Neonatal Research Network del National Institute of Child
parcialmente condensada y conservación de la integridad celular) Health and Human Development, en el que uno de cada cinco bebés
(Northington et al., 2011). con un Apgar de 0 a los 10 min sobrevivió hasta la edad escolar sin
discapacidad moderada o grave (Natarajan et al., 2013).

Tratamiento de la encefalopatía Convulsiones


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hipóxico-isquémica Una mayor carga convulsiva y una excesiva discontinuidad en el EEG


se corresponden con una peor lesión cerebral en la RM y predicen un
Los primeros pasos del tratamiento deben centrarse en conseguir una resultado anómalo del neurodesarrollo en neonatos tratados con hipo-
oxigenación, una ventilación (es decir, asegurar la vía respiratoria) y termia terapéutica (Briatore et al, 2013; Dunne et al., 2017). Parece que
una circulación adecuadas. Deben realizarse pruebas analíticas seriadas la evaluación posnatal a las 3-6 h de vida en los recién nacidos a término
(p. ej., gasometría arterial, perfil metabólico basal, calcio ionizado, con sospecha de EHI mediante una EEGa es fiable a la hora de predecir
lactato, recuento sanguíneo completo, enzimas hepáticas y estudios de el resultado del neurodesarrollo. Un trazado plano (voltaje muy bajo,
coagulación) y la corrección de las alteraciones metabólicas (p. ej., hipo- trazado isoeléctrico con una actividad por debajo de 5 µV), voltaje
glucemia, hiperglucemia e hipocalcemia). Debe valorarse la actividad extremadamente bajo de forma continua (sobre 5 µV o por debajo de
convulsiva clínica y electrográfica (p. ej., con EEGc o EEGa), y esta ellos) y patrones de ráfaga-supresión (patrón de fondo discontinuo con
debe controlarse para evitar una mayor lesión neurológica (Bjorkman períodos de inactividad intercalados con ráfagas de mayor amplitud)
et al., 2010; van Rooij et al., 2010). Puede ser necesario administrar predicen malos resultados a largo plazo (rango de seguimiento de 12
inótropos para corregir la hipotensión, y la ecocardiografía resulta útil meses a 6 años; Toet et al., 1999). Durante la hipotermia terapéutica,
para valorar indicios de disfunción miocárdica. Los neonatos con EHI desde las 48 h de vida, la EEGa nos da una predicción precisa de los
presentan a menudo insuficiencia renal, que se manifiesta con oliguria resultados a largo plazo (18-24 meses; Cseko et al., 2013). La vuelta

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902 PA RT E XI I Sistema nervioso

al ciclo sueño-vigilia en la EEGa es un indicador de un pronóstico esperanzadora y sugiere un resultado normal a largo plazo, mientras
favorable (Osredkar et al., 2005; Cseko et al., 2013). Un EEG normal que una exploración con muchas anomalías es preocupante y sugiere
a las 6 h de vida tiene un valor predictivo positivo del 100% para un un mal pronóstico a largo plazo. El EEG al final de la primera semana
resultado normal a los 2 años (Murray et al., 2009). de vida puede contribuir a la predicción de los resultados a los 2 años
de edad (Biagioni et al., 2001).
Resonancia magnética y espectroscopia por resonancia Dado que no se ha logrado la prevención de la EHI, es urgente
magnética identificar tratamientos complementarios a la hipotermia terapéutica
La RM y la ERM son útiles en la predicción del resultado en neonatos para mejorar sus resultados. A nivel global, también se precisan otras
con EHI (Goergen et al., 2014; Hayakawa et al., 2014; Nanavati intervenciones que puedan usarse en los países de escasos y medianos
et al., 2015). Los patrones de isquemia en la RM (realizada en la prime- recursos, ya que, en estos, la hipotermia terapéutica no suele estar
ra semana de vida) se corresponden con los resultados del neurodesarro- disponible o incluso puede ser nociva (Robertson et al., 2008). Con
llo a los 2 años de edad. Así, resultados favorables se asocian a patrones suerte, el descubrimiento de marcadores biológicos mejores ayudará a
de la región marginal, mientras que patrones centrales y difusos de identificar a neonatos con EHI, a adquirir mayor conocimiento sobre
isquemia se asocian a resultados desfavorables (Twomey et al., 2010). las opciones terapéuticas y a predecir de forma precisa los resultados.
La resonancia con tensor de difusión facilita la evaluación de la locali-
zación, la orientación y la integridad de las vías de la sustancia blanca,
al identificar los patrones de difusión de las moléculas de agua en los Accidente cerebrovascular isquémico arterial
trayectos de esta (Choudhri et al., 2014; Massaro et al., 2015). Las perinatal
alteraciones del cuerpo calloso y el trayecto corticoespinal en neonatos
con EHI detectadas en la resonancia con tensor de difusión (a una Los accidentes cerebrovasculares isquémicos arteriales perinatales
media de 8 días de vida) y que fueron tratados con hipotermia predicen (ACVIAP) son trombosis o embolias arteriales focales o multifoca-
una peor función cognitiva y motora respectivamente en la primera les que tienen lugar entre la semana 20 de gestación y los 28 días de vida
infancia (de 15 a 21 meses de edad). Una mejor perfusión en los gan- (van der Aa et al., 2014). La incidencia registrada varía entre 1 de cada
glios basales y el tálamo confirmada a los 4,5 días de vida (entre los 2 1.600 y 1 de cada 5.000 nacidos vivos (Lee et al., 2005; Laugesaar
y los 7 días) con una RM por marcado arterial de espín, una técnica et al., 2007). Es probable que la incidencia real sea mayor, dado que la
no invasiva que evalúa la perfusión cerebral, se relaciona con resultados mayoría de los estudios son retrospectivos y la RM no se usaba de forma
adversos a los 9-18 meses de edad en neonatos que padecieron una EHI rutinaria. El ACVIAP es más habitual en varones y en la etnia negra no
(De Vis et al., 2015). Se precisan más estudios sobre su correlación con hispana, y se da más a menudo en la distribución de la ACM izquierda.
resultados a largo plazo para aclarar la utilidad de las nuevas técnicas Entre los factores de riesgo del ACVIAP están una madre primípara,
de RM para el diagnóstico, el pronóstico y el tratamiento. preeclampsia, rotura prolongada de membranas, corioamnionitis y
La lesión hipóxico-isquémica puede llevar a la muerte neuronal con anomalías del cordón (Harteman et al., 2012). La presencia de más
la consiguiente disminución de las cifras de NAA, y a una alteración de uno de estos factores de riesgo puede aumentar la probabilidad del
del metabolismo mitocondrial y oxidativo, que se relaciona con unas ACVIAP a 1 de cada 200 (Lee et al., 2005). También se han relacio-
cifras de lactato más elevadas en el cerebro. Basándose en el metaanálisis nado con los ACVIAP los partos complicados instrumentados o que
de 32 estudios en los que se estudiaron 860 recién nacidos con EHI, precisaron una cesárea de urgencia.
las cifras de lactato/NAA de la sustancia gris profunda (talámica o de La patogenia del ACVIAP no se conoce bien. Los cambios fisiológi-
los ganglios basales) es el marcador biológico cuantitativo más preciso cos que sufre la madre durante el embarazo pueden provocar un estado
detectado en la RM para la predicción de los resultados del neurodesa- de hipercoagulabilidad y protrombosis. Los fetos también corren un
rrollo (a ≥ 12 meses de edad; Thayyil et al., 2010). mayor riesgo de desarrollar coágulos, ya que la policitemia fisiológica
provoca hiperviscosidad y la actividad anticoagulante está amortiguada.
Resultados Estos factores, unidos al hecho de que la placenta presenta áreas de
menor flujo sanguíneo, aumentan la propensión a la formación de
En la actualidad, la hipotermia terapéutica en neonatos con EHI trombos en el lado fetal de la placenta. Estos trombos viajarán por la
moderada y grave es parte imprescindible del tratamiento en los países vena umbilical y pueden pasar a través del agujero oval abierto y acceder
desarrollados y ha influido positivamente en los resultados neonatales a las arterias sistémicas y, lo que es más importante, a las cerebrales.
(Jacobs et al., 2013). En los recién nacidos a término y prematuros tar- Otros trastornos fetales que aumentan el riesgo de ACVIAP son los
díos con encefalopatía moderada o grave e indicios de asfixia intraparto, embarazos gemelares, las transfusiones entre gemelos, las malforma-
la hipotermia terapéutica reduce el resultado combinado de mortalidad ciones arteriovenosas, una tracción prolongada del cuello y anomalías
o trastorno importante del neurodesarrollo a los 18 meses de edad de cardíacas (Golomb et al., 2006; Benders et al., 2007). Las lesiones del
un 61% (409/666 recién nacidos de control) a un 46% (312/678 recién ACVIAP suelen ser únicas (70%) y restringidas a la circulación anterior
nacidos tratados) (índice de riesgo típico, 0,75; intervalo de confianza (71%) o a la circulación posterior (7%) y, con menos frecuencia,
(IC) al 95%, 0,68-0,83; diferencia de riesgo típico, −0,15; IC al afectan a ambas (20%) (Kirton et al., 2011). Los accidentes cerebrovas-
95%, −0,2 a –0,1) (Gunn et al., 1998; Eicher et al., 2005; Gluck- culares son más frecuentes en el lado izquierdo (el 51% de todos los
man et al., 2005; Shankaran et al., 2005; Azzopardi et al., 2009; Simbruner accidentes cerebrovasculares, el 73% de todos los accidentes cerebrovas-
et al., 2010; Zhou et al., 2010; Jacobs et al., 2011). Uno de cada siete culares anteriores), pero también pueden afectar al lado derecho (9%)
neonatos con encefalopatía moderada o grave se beneficiará de la hipo- o ser bilaterales (20%) (Kirton et al., 2011).
termia terapéutica (IC al 95%, 5-10). Desafortunadamente, a pesar Aunque la mayoría de los recién nacidos con ACVIAP están asin-
del tratamiento con hipotermia terapéutica, el 44% de los neonatos tomáticos en el momento del nacimiento, pueden observarse signos
con encefalopatía moderada o grave morirán o presentarán discapaci- de enfermedad aguda en el 25% de los recién nacidos con ACVIAP
dades importantes del neurodesarrollo a largo plazo. Los neonatos con (Kirton et al., 2011). En la semana posterior al nacimiento, la mayo-
EHI leve no suelen presentar déficits a largo plazo, mientras que los ría de los recién nacidos con ACVIAP presentan síntomas, y el más
que tienen EHI grave a menudo mueren o presentan discapacidades prevalente es la crisis convulsiva (hasta el 70-90%) (Hayward y Adap-
graves, con tetraparesia espástica, alteraciones visuales corticales y tras- pa, 2014). Los signos neurológicos difusos son más frecuentes que los
tornos epilépticos, a pesar de la hipotermia. Los neonatos con EHI signos focales, y las alteraciones del tono muscular y el bajo nivel de
moderada presentan resultados que van desde la normalidad hasta las conciencia son más habituales que la hemiparesia. Entre los síntomas
anomalías graves. Una exploración clínica normal a los 7-10 días es inespecíficos encontramos dificultad en la respiración y la alimentación.

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CAPÍTULO 61 Lesión cerebral en el recién nacido a término 903

Dado que el síntoma de presentación más habitual es la crisis con- un ACVIAP que afecta a la ACM derecha. De estas secuencias, la más
vulsiva, las pruebas complementarias deben comenzar descartando sensible es la RMD llevada a cabo en la primera semana de vida. El
hipoglucemia, hipocalcemia, trastornos electrolíticos, infección y sín- área de infarto aparecerá como una zona de alta intensidad en la RMD
dromes metabólicos. La RM es la prueba de elección para la detección y de baja intensidad en el mapa de coeficiente de difusión aparente.
del ACVIAP. Las secuencias que se deben emplear son las imágenes Después de la primera semana, el tejido isquémico parece normalizarse,
ponderadas en T1 y T2, la RMD y la angiografía con RM (angio- aunque el área siga siendo isquémica. Este proceso se conoce como
rresonancia). La figura 61.2 muestra la RM de un varón a término con seudonormalización. Puede observarse un menor contraste entre la
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• Figura 61.2  Neonato masculino nacido a término de 4 días de edad con un accidente cerebrovascular
de la arteria cerebral media derecha. A. Corte axial de resonancia magnética por difusión que muestra
una señal anormalmente brillante en todo el hemisferio cerebral derecho, en el territorio de la arteria
cerebral media. El cuerpo calloso también se ve afectado. B. El mapa de coeficiente de difusión aparente
muestra una señal oscura que confirma que se trata de un edema citotóxico. C. Corte frontal ponderado
en T2 que muestra una anomalía en la diferenciación de la sustancia blanca y gris, compatible con un
período de tiempo subagudo (mínimo 6 h) desde la lesión. Una angiorresonancia cerebral no confirmó
la presencia de estenosis (no se muestra aquí). (Imágenes por cortesía del Dr. Randolph Otto y la Dra.
Teresa Chapman, Seattle Children’s Hospital, Seattle, WA.)

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904 PA RT E XI I Sistema nervioso

corteza y la sustancia blanca en las primeras 48 h en las imágenes meningitis, la sepsis, la deshidratación y el RCPEC también se asocian
ponderadas en T2. Se observará una menor intensidad de la señal en a la TSVC. El cuadro clínico inicial es sutil e inespecífico: la crisis
las imágenes ponderadas en T1. A medida que pasa el tiempo desde la convulsiva es el síntoma más habitual, pero también pueden aparecer
lesión, aparece una mayor intensidad cortical. dificultad respiratoria, letargo, apnea y problemas en la alimentación.
Debe llevarse a cabo un EEG para ayudar a localizar el origen de Las técnicas de neuroimagen son cruciales para el diagnóstico de
la epilepsia, así como para tratar las crisis. La ecografía craneal está la TSVC. El seno sagital superior es el que presenta el índice más alto
disponible en la mayoría de los centros que no disponen de RM. La de trombos, seguido de los senos recto y transverso. La mayoría de
sensibilidad de la ecografía mejora desde un 68% en los primeros días los neonatos presentan afectación de múltiples senos. La RM es la
hasta el 87% en la primera semana (Cowan et al., 2005). Dado que los prueba estrella, especialmente cuando se realiza una venografía por
accidentes cerebrovasculares pueden ocurrir en la circulación posterior, RM (MRV; fig. 61.3). La RM tiene dos propósitos: 1) el registro de
es necesario obtener imágenes de la fontanela posterior. A diferencia los senos afectados, y 2) la identificación de las lesiones asociadas. La
de la RM, la ecografía craneal depende del profesional y, por lo tanto, TSVC puede detectarse en ocasiones con imágenes ponderadas en T1
los índices de detección variarán entre los distintos centros. El empleo y T2. La RMD mostrará una difusión restringida en las áreas afectadas
del TC es limitado y no se recomienda, dada la escasa sensibilidad y por la TSVC. La MRV permite al médico visualizar el árbol venoso
la alta dosis de radiación. sin emplear contraste.
Actualmente, la evaluación óptima de la trombosis se encuentra Puede recurrirse a la ecografía para diagnosticar una TSVC. Sin
a debate, y una revisión descubrió que los estudios son «contradicto- embargo, esta tiene un elevado índice de falsos negativos y exige la
rios o no concluyentes debido a la falta de poder estadístico» (Kenet pericia del profesional en el uso del Doppler para medir el flujo del
et al., 2010). Los índices de una posible trombofilia como causa sub- seno venoso (Miller et al., 2012). La ecografía permite detectar hemo-
yacente del ACVIAP varían en la literatura específica hasta en un 68%. rragias intraventriculares y talámicas con facilidad, y debe descartarse
No obstante, el International Pediatric Stroke Study descubrió que tan la TSVC en neonatos a término con una hemorragia intraventricular
solo el 19% de los recién nacidos con ACVIAP recibieron el posible sin explicación (Wu et al., 2003). El TC tiene un elevado índice de
diagnóstico de un aumento en las cifras de lipoproteína(a), mutaciones falsos negativos y, dada la alta radiación, no suele realizarse (Nwosu
de la metilentetrahidrofolato reductasa, aumento de la glucoproteí- et al., 2008). Como ocurre con el ACVIAP, debe llevarse a cabo una
na β2, disminución de la antitrombina III, presencia del factor V Lei- evaluación de la trombofilia, y esta debe incluir análisis basados en
den, el gen 20210A de la protrombina, anticuerpos antifosfolipídicos, proteínas, así como pruebas genéticas. Aunque las pruebas genéticas
el inhibidor del activador del plasminógeno o una disminución de la pueden llevarse a cabo en la fase aguda, los análisis de proteínas se
proteína S (Kirton et al., 2011). realizan con más frecuencia alrededor de los 6 meses de edad debido
El tratamiento del ACVIAP es en gran medida sintomático. El al gran volumen de sangre que se precisa para las pruebas, además de
tratamiento antiepiléptico cuenta con la mayor evidencia de uso, pero porque el consumo de factores durante la trombosis aguda puede llevar
la mayoría de los recién nacidos no precisarán un tratamiento a largo a resultados imprecisos.
plazo, y son muchos los expertos que cada vez más recomiendan sus- El tratamiento de la TSVC debe abordar el factor desencadenante:
pender pronto el tratamiento (Kirton et al., 2011). La anticoagulación por ejemplo, tratar la deshidratación, la meningitis o la CC. Puede
es un tema a debate en la literatura específica actual, y el tipo de fár- observarse el avance del trombo en el 25% de los neonatos y no se
macos antitrombóticos empleados varía en los distintos países. Existe han observado complicaciones con la anticoagulación en recién nacidos
un mayor consenso en la administración de terapia anticoagulante con hemorragias intracraneales asociadas (Moharir et al., 2010). Así,
en recién nacidos con cardiopatía congénita (CC) y ACVIAP, ya que la mayoría de los profesionales tratarán la TSVC con heparina no
corren un mayor riesgo de formación continuada de coágulos (Monagle fraccionada o heparina de bajo peso molecular en neonatos sin hemo-
et al., 2008). rragia. Los que tienen hemorragia que presenten un empeoramiento
Los resultados del neurodesarrollo dependerán del tamaño y la loca- de la TSVC a los 5-7 días deben recibir tratamiento anticoagulante.
lización del accidente cerebrovascular. La mortalidad del ACVIAP es El tratamiento se mantendrá entre 6 y 12 semanas.
muy baja. Los ACVIAP que afectan al territorio de la ACM pueden lle- Se han realizado pocos estudios sobre la TSVC, y los datos del segui-
var a un índice de hemiplejía del 50% (Chabrier et al., 2011). Aunque miento son limitados. Las primeras cifras de mortalidad mostraban
la mayoría de los recién nacidos recibirán el alta sin convulsiones, hasta índices de entre el 2 y el 5%. Sin embargo, estudios más recientes con
el 50% desarrollarán epilepsia posteriormente. Los déficits cognitivos mejores tasas de detección de la TSVC muestran índices de mortalidad
y del lenguaje son más habituales en niños que presentan hemiplejía de entre el 19 y el 25% (Wasay et al., 2008). De los supervivientes, el
o epilepsia tras un ACVIAP (Ricci et al., 2008). El ACVIAP también 60-80% desarrollan trastornos motores, como PC, retraso cognitivo
altera la visión, y pueden darse trastornos del comportamiento. y epilepsia.

Trombosis del seno venoso cerebral Hipoglucemia neonatal


Se ha registrado una incidencia de la trombosis del seno venoso cere- Se desconocen las cifras o la duración exactas de la hipoglucemia que
bral (TSVC) de 0,6-12 de cada 100.000 nacidos vivos (de Veber causan lesión. La literatura específica emplea diversas definiciones de
et al., 2001; Berfelo et al., 2010). Este amplio margen en la incidencia hipoglucemia, lo que complica aún más el asunto. Los valores de gluco-
se debe probablemente a las diferencias en los conocimientos de los sa sanguínea en el feto son el 70% de las cifras maternas y disminuyen
médicos y, por tanto, a las diferencias en el empleo de las técnicas rápidamente durante la primera hora de vida hasta tan solo 25 mg/dl.
de neuroimagen para detectar la TSVC. La alteración en el drenaje Las directrices de la American Academy of Pediatrics para la hipogluce-
venoso debido a una TSVC provoca un aumento de la presión venosa mia asintomática establecen un punto de corte de 45 mg/dl (Committee
que puede llevar a un incremento en la presión hidrostática capilar. La on Fetus and Newborn and Adamkin, 2011). No obstante, la Pediatric
elevación de esta presión conduce a edema vasógeno e infarto hemo- Endocrine Society ha publicado recientemente que las cifras de glucosa
rrágico en la distribución del seno venoso cerebral. Entre los factores de deben mantenerse por encima de 50 mg/dl durante las primeras 48 h de
riesgo materno para padecer una TSVC se encuentran la preeclampsia, vida y por encima de 60 mg/dl después de 48 h (Thornton et al., 2015).
la corioamnionitis y la diabetes gestacional. Un parto complicado, La hipoglucemia sintomática puede cursar con cianosis, temblores,
la aspiración de meconio y la necesidad de intubación también se apnea, convulsiones, cambios en el nivel de conciencia, irritabilidad
han relacionado con la TSVC. Al igual que en el ACVIAP, la CC es y problemas de alimentación. Entre los factores de riesgo neonatales
un factor de riesgo importante. Los trastornos posnatales como la de hipoglucemia están ser pequeño para la edad gestacional, diabetes

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CAPÍTULO 61 Lesión cerebral en el recién nacido a término 905

• Figura 61.3  Neonato masculino prematuro (34 semanas de gestación) de 15 días de edad con
encefalopatía hipóxico-isquémica y un trombo en el seno venoso dural. Cortes axial (A) y frontal (B)
ponderados en T2 que muestran una señal anómala oscura en el parénquima de la región medial
del lóbulo parietal izquierdo, con un aumento de densidad de la señal circundante. C. Corte axial de
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susceptibilidad que muestra una señal oscura y un artefacto, compatibles con restos sanguíneos.
D. Corte frontal con una proyección de máxima intensidad procedente de un venograma por resonancia
magnética que muestra una disminución de la circulación en el seno sagital inferior y en el seno trans-
verso izquierdo compatible con un trombo. Los hallazgos son compatibles con un infarto venoso
hemorrágico y edema vasógeno circundante. (Imágenes por cortesía del Dr. Jason Wright y la Dra. Teresa
Chapman, Seattle Children’s Hospital, Seattle, WA.)

materna, asfixia perinatal, dificultad respiratoria, sepsis y trastornos activación de las fosfatidasas y las proteasas, lo que altera la función
metabólicos congénitos. mitocondrial y genera radicales libres. Esto obstaculiza la producción de
El mecanismo que se ha propuesto para la lesión inducida por ATP, lo que lleva a la apoptosis y a la necrosis neuronal.
hipoglucemia es el aumento de neurotransmisores excitadores que La hipoglucemia puede provocar edema cerebral, necrosis y des-
llevan a una activación excesiva de los receptores de NMDA. Esta mielinización de la sustancia blanca, especialmente en las áreas ricas
activación provoca un aumento de las concentraciones de sodio y calcio en receptores de NMDA. Entre las regiones cerebrales afectadas están
intracelular. La mayor entrada de calcio a las células desencadena la la corteza parietooccipital, el cuerpo calloso, los ganglios basales, el

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906 PA RT E XI I Sistema nervioso

tálamo y la región posterior de la cápsula interna. Entre las secuelas a mayoría de los expertos recomiendan repetir la punción lumbar 2-3
largo plazo derivadas de la hipoglucemia se encuentran las alteraciones días después de comenzar el tratamiento. Los corticoesteroides han
visuales, la epilepsia y los déficits cognitivos. No obstante, un estudio demostrado que reducen las secuelas a largo plazo, especialmente
reciente demostró que no había diferencia en los resultados del neuro- las pérdidas auditivas, en recién nacidos de más edad con meningitis
desarrollo a los 2 años de edad entre los neonatos que habían padecido por Haemophilus influenzae de tipo B e infección por Streptococcus
hipoglucemia y los que no (McKinlay et al., 2015). Es probable que pneumoniae. No obstante, no se recomienda la administración de
el grado de lesión esté directamente relacionado con la gravedad y la corticoesteroides en neonatos con meningitis (Chaudhuri, 2004). El
duración de la hipoglucemia, y con la presencia de comorbilidades, aciclovir es el tratamiento empírico de elección en caso de sospecha
especialmente la EHI. de meningitis vírica.
Las complicaciones relacionadas con la meningitis incluyen el ede-
Infecciones del sistema nervioso central ma cerebral, la hidrocefalia, la hemorragia, la formación de abscesos,
el infarto y la ventriculitis. El edema cerebral se produce como conse-
Las infecciones maternas durante el embarazo y el parto pueden cuencia de una agresión celular citotóxica directa, cambios vasógenos y
afectar al cerebro fetal/neonatal. El riesgo de PC se cuadruplica en una secreción inadecuada de la hormona antidiurética. La obstrucción
los embarazos complicados con corioamnionitis. Es más probable que los del drenaje de LCR puede llevar a hidrocefalia hasta al 24% de los
neonatos de embarazos con corioamnionitis presenten complicaciones recién nacidos. La hemorragia y el infarto pueden estar causados por
adicionales, como EHI, aspiración de meconio que provoca hiperten- una trombosis venosa o arterial. El absceso cerebral se presenta hasta
sión pulmonar e hipoxia, sepsis y meningitis neonatal. La hipertensión en el 13% de los neonatos con meningitis y debe considerarse en caso
pulmonar secundaria a neumonía puede provocar PC en el 30% de de aparición de convulsiones, signos de presión intracraneal (PIC)
los neonatos a término como consecuencia de la agresión combinada elevada o nuevos signos neurológicos focales, y es esencial llevar a cabo
de hipoxia y sepsis. pruebas radiológicas cerebrales con contraste con el fin de establecer el
diagnóstico definitivo (Pong y Bradley, 1999). La ventriculitis aparece
Meningitis hasta en el 20% de los neonatos con meningitis y supone el acantona-
miento de la infección en áreas de difícil acceso para los antibióticos
Los neonatos corren un mayor riesgo de sufrir meningitis que otros gru- sistémicos (Unhanand et al., 1993). La inflamación del recubrimiento
pos de edad debido a la ineficacia de la vía complementaria alternativa, ependimario de los ventrículos obstruye a menudo la circulación del
la migración insuficiente y la fagocitosis de neutrófilos, así como a una LCR. La ausencia de respuesta al tratamiento antibiótico adecuado y
menor actividad de los linfocitos T y B, lo que les deja en situación de la presencia de signos de una PIC elevada pueden sugerir ventricu-
riesgo de contraer infecciones por bacterias encapsuladas. Los estrepto- litis, en cuyo caso será necesaria la administración intraventricular
cocos del grupo B (EGB) son la causa principal de meningoencefalitis de antibióticos.
en el recién nacido a término, seguidos de Escherichia coli y Listeria Los supervivientes de una meningitis neonatal corren un riesgo
monocytogenes. La incidencia de meningitis bacteriana es de 0,3 de cada significativo de discapacidad moderada o grave, que incluye problemas
1.000 nacidos vivos. La incidencia del virus del herpes simple (VHS) del lenguaje, la función motora, la audición, la visión y la capacidad
varía de 1 de cada 5.000 a 1 de cada 26.000 nacidos vivos. Entre los cognitiva, así como epilepsia. Hasta el 20% de los niños identificados
patógenos que están adquiriendo importancia están los enterovirus, el como normales a los 5 años pueden presentar dificultades de aprendiza-
parechovirus 3 humano y Enterobacter sakazakii. je significativas hasta el final de la adolescencia. Entre los indicadores de
Entre los síntomas que aparecen en las primeras 48 h de vida mal pronóstico tenemos bajo peso al nacer, prematuridad, leucopenia
encontramos inestabilidad térmica, apnea, bradicardia, hipotensión, o neutropenia significativas, altas concentraciones de proteína en el
dificultades en la alimentación, disfunción hepática e irritabilidad LCR, retraso en la esterilización del LCR y coma. Las convulsiones
intercalada con letargo. Por el contrario, los síntomas neurológicos se que duren más de 72 h y la necesidad de administrar inótropos predi-
observan con más frecuencia después de las 48 h de vida e incluyen cen una discapacidad moderada o grave o la muerte con un 88% de
estupor, irritabilidad, convulsiones, abultamiento de la fontanela ante- sensibilidad y un 99% de especificidad (Klinger et al., 2000). En una
rior, desviación de la mirada, parálisis de los pares craneales y postura muestra prospectiva de más de 1.500 neonatos que sobrevivieron a la
extensora. A diferencia de lo que ocurre en los niños y los adultos, no es edad de 5 años, la prevalencia de las discapacidades motoras (como
frecuente encontrar rigidez nucal. Debe realizarse una punción lumbar la PC) era de un 8,1%, las dificultades de aprendizaje se daban en un
a cualquier neonato con signos de sepsis o síntomas inespecíficos que 7,5%, convulsiones en un 7,3% y problemas de audición en un 25,8%
puedan deberse a meningitis con objeto de analizar el LCR. Muchos (Bedford et al., 2001). No se registraron problemas en el 65% de los
expertos recomiendan solicitar una reacción en cadena de la polimerasa recién nacidos que sobrevivieron a una meningitis por EGB ni en el
(PCR) para el VHS en todos los neonatos con sospecha de meningitis. 41,5% de los que sobrevivieron a una meningitis por E. coli.
Hasta un tercio de los recién nacidos con hemocultivos negativos
tenían cultivos de LCR positivos, lo que sugiere que pueden pasar Virus del herpes simple
desapercibidos casos de meningitis si no se realiza una punción lumbar
(Stoll et al., 2004). Los hallazgos típicos de pleocitosis, glucosa baja La mayoría de las infecciones por el VHS son consecuencia de una
y proteínas elevadas en el LCR se observan con más frecuencia en las transmisión intraparto, y la exposición posnatal ocasional se debe a
meningitis gramnegativas, las meningitis grampositivas y las meningitis descamación orofaríngea o cutánea del virus procedente de los padres
víricas, especialmente las causadas por el VHS. No hay un parámetro o de contactos hospitalarios. La mayoría de los neonatos debutarán en
del LCR que pueda descartar por sí solo la presencia de meningitis en la segunda semana de vida. Los neonatos pueden presentar palidez,
el neonato de manera fiable (Garges et al., 2006). irritabilidad, llanto agudo, dificultad respiratoria, fiebre, ictericia, con-
El tratamiento antibiótico debe elegirse basándose en el patógeno vulsiones, disfunción hepática y CID (Kimberlin, 2004). Las pruebas
más probable, los patrones locales de sensibilidad a los antibióticos complementarias deben incluir la PCR del LCR para el VHS, cultivos
y las políticas del hospital. La cefotaxima, además de la ampicilina, del líquido de las vesículas, y frotis de la nasofaringe, la conjuntiva
es el antibiótico empírico que se emplea habitualmente debido a la y el recto. La infección del SNC por el VHS puede llevar a lesiones
penetrancia de la barrera hematoencefálica de las cefalosporinas, pero necrosantes que conducirán a microcefalia, quistes porencefálicos y
algunos expertos sugieren que la combinación de la ampicilina y PC. La mortalidad entre los neonatos con una infección del SNC por
un aminoglucósido es una mejor elección, dado su efecto sinérgico. VHS es del 15%. Los dos serotipos del VHS (VHS-1 y VHS-2) supo-
La duración del tratamiento es habitualmente de 14-21 días, y la nen el mismo riesgo de mortalidad. No obstante, el VHS-2 se asocia

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CAPÍTULO 61 Lesión cerebral en el recién nacido a término 907

más habitualmente a morbilidad, incluida la PC, retraso intelectual, ción de la audición (Kimberlin et al., 2003). Los resultados fueron
convulsiones, microcefalia y trastornos oculares (Kimberlin, 2004). aún más esperanzadores cuando se compararon los grupos de estudio
La infección por el VHS-1 tiende a ser más difusa en los neonatos, en y de control en cuanto al mantenimiento posterior de la audición
lugar de mostrar la afectación medial temporal e insular observada en normal, ya que ninguno de los tratados con ganciclovir mostró un
los niños y los adultos. Aunque el empleo de aciclovir ha conseguido empeoramiento de la audición entre el comienzo del tratamiento y el
reducir la morbilidad y la mortalidad secundarias a la infección por seguimiento a los 6 meses, en comparación con el 41% de los pacien-
VHS, es probable que haya secuelas neurológicas en el 50% de los tes de control. El grupo que recibió el tratamiento intravenoso con
neonatos con una meningitis por el VHS (Kimberlin, 2004). ganciclovir mostró menos retrasos en el desarrollo a los 6 y 12 meses
en comparación con los recién nacidos que no recibieron tratamiento
(Oliver et al., 2009).
Toxoplasmosis
La prevalencia de la toxoplasmosis se sitúa en 1 de cada 1.000 nacidos Virus del Zika
vivos y está causada por Toxoplasma gondii (Pickering, 2012). Este pará-
sito puede atravesar la placenta desde una madre infectada e infectar al El 1 de febrero de 2016, la Organización Mundial de la Salud declaró
feto. Se recomienda a las embarazadas que no se expongan a heces de la epidemia del virus del Zika (VZIK), que se expandía rápidamente,
gato y que cocinen la carne hasta que esté bien hecha. La necrosis gra- una «emergencia de salud pública de alcance internacional», basándose
nulomatosa, la hidrocefalia y las calcificaciones de los ganglios basales en las pruebas que estaban apareciendo de que el virus podía causar
y las regiones periventriculares son el resultado de la infección del SNC una lesión cerebral grave en el feto, específicamente, microcefalia grave
por T. gondii y pueden observarse en la ecografía prenatal. En ausencia (Gulland 2016a, 2016b). El VZIK es un arbovirus (se transmite por
de hidrocefalia, también se ha descrito microcefalia. Los neonatos mosquitos) de la familia de los flavivirus, entre los que se encuentran el
pueden presentar hepatomegalia o esplenomegalia, secreción ocular, dengue, el virus del Nilo occidental, el chikungunya y la fiebre amarilla.
problemas en la alimentación, restricción del crecimiento intrauterino, Recientemente, también se han registrado casos de transmisión sexual.
convulsiones, o diminutos puntos rojos o hematomas. El tratamiento En los adultos con infección por el VZIK, tan solo el 20% de ellos
de la toxoplasmosis congénita consiste en la administración de pirime- muestran síntomas, en cuyo caso experimentan una infección autolimi-
tamina, sulfadiacina y leucovorina hasta 1 año (Petersen, 2007). A pesar tada que se caracteriza por fiebre, erupción cutánea, conjuntivitis, dolor
del tratamiento adecuado, el 30% de los recién nacidos con toxoplas- muscular y articular, y fatiga, aunque se estima que 1 de cada 200-300
mosis presentarán convulsiones, alteraciones motoras o ceguera. individuos infectados desarrolla el síndrome de Guillain-Barré. En
2015, una epidemia del VZIK en el noreste de Brasil se relacionó con
Citomegalovirus un incremento acentuado de microcefalia, calcificaciones intracraneales
y anomalías oculares. La microcefalia parecía ser mucho más grave que
El citomegalovirus (CMV) es la infección vírica de origen congénito la microcefalia típica provocada por otras infecciones víricas (CMV,
más habitual, con una incidencia del 0,6-0,75 de todos los partos en rubéola) o por síndromes congénitos. El cerebro fetal afectado se encon-
EE. UU. (Swanson y Schleiss, 2013). La transmisión al feto puede traba con frecuencia más de cuatro desviaciones estándar por debajo de
darse como consecuencia de una infección materna primaria o por la media, con pérdida de circunvoluciones, hidrocefalia notable y áreas
reactivación de una infección latente a cualquier edad gestacional. La de necrosis cerebral. La transmisión vertical ahora se ha confirmado,
infección posnatal no suele causar una enfermedad significativa en los con un aumento en el registro de abortos espontáneos, así como de
recién nacidos a término y no se asocia a discapacidad a largo plazo. fetos afectados de todos los trimestres en las áreas endémicas.
Las infecciones congénitas pueden dar lugar a una restricción del creci- Aunque son muchas las líneas celulares diferentes que pueden
miento intrauterino, trombocitopenia, hidropesía, ictericia, hepatoes- infectarse con el VZIK, las células proegintoras neurales (CPN) son
plenomegalia, microcefalia, calcificación periventricular, convulsiones un objetivo directo del VZIK (Tang et al., 2016). Las CPN infectadas
y pérdida auditiva neurosensitiva. Alrededor del 40-58% de los recién por el VZIK mostraban mayor muerte celular, menor proliferación y
nacidos sintomáticos en el nacimiento desarrollan secuelas, como alteración de la producción de la neuroesfera (Garcez et al., 2016; Li
pérdida auditiva neurosensitiva, retraso intelectual, crisis convulsivas, et al., 2016; Tang et al., 2016). El desarrollo cerebral normal depende
PC, déficits visuales o retraso en el desarrollo (Boppana et al., 1992; en gran medida de la diferenciación, la migración y la maduración
Dollard et al., 2007). de las CPN, que el VZIK obstaculiza, lo que lleva a microcefalia (Li
El diagnóstico en el neonato puede establecerse mediante PCR, et al., 2016). Los niños nacidos de madres infectadas por el VZIK han
cultivo o pruebas de antígenos (antígeno pp65) en la orina, la sangre mostrado una amplia gama de anomalías, que van desde efectos leves
o la saliva en las primeras 3 semanas de vida (Bhatia et al., 2010). Los hasta microcefalia grave, cerebros casi carentes de circunvoluciones,
títulos de anticuerpos no son fiables para establecer el diagnóstico, ya calcificaciones parenquimatosas, hidrocefalia e hipoplasia cerebelosa
que la inmunoglobulina G anti-CMV de la madre atraviesa la placenta, (Culjat et al., 2016). No se sabe si la infección posnatal puede provocar
y los neonatos organizan respuestas de inmunoglobulina M débiles. Un problemas similares o si la infección intrauterina es un requisito para
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recuento sanguíneo completo y las pruebas de función hepática pueden causar problemas a largo plazo. Se está investigando en la inmunización
revelar una pancitopenia y una hepatitis, y las pruebas de coagulación y los tratamientos, pero, por el momento, las únicas estrategias dis-
pueden estar alteradas. Se comprueba la función renal para servir de ponibles son el retraso del embarazo, el uso de preservativos, el control
referencia antes de comenzar el tratamiento con ganciclovir. Debe de la población de mosquitos Aedes y la prevención de las picaduras
evaluarse la audición en todos los recién nacidos con una infección con- de mosquito.
génita por CMV, ya que puede haber pérdida auditiva neurosensitiva
en el momento del nacimiento, y deben realizarse exámenes frecuentes Metabolopatías congénitas
durante la infancia con el fin de evaluar la posibilidad de un deterioro
auditivo (Dahle et al., 2000). La encefalopatía crónica es el resultado de la mayoría de las metabolo-
La pérdida auditiva neurosensitiva puede prevenirse con la admi- patías congénitas. El patrón de la lesión depende del área cerebral más
nistración precoz de ganciclovir. Un estudio aleatorizado indicó que afectada (sustancia blanca, gris o ambas, núcleos corticales o subcor-
el 84% de los tratados con ganciclovir, bien experimentaron una ticales de la sustancia gris). El mecanismo de acción no se comprende
mejoría de la audición o mantuvieron una audición normal entre el totalmente, pero supone la alteración de la función de los astrocitos, la
comienzo del tratamiento y los 6 meses. Por el contrario, tan solo el excitotoxicidad y la carencia de energía (Gropman, 2012). Se discutirán
59% de los pacientes de control mostraron una mejoría o estabiliza- algunas de las metabolopatías congénitas típicas.

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908 PA RT E XI I Sistema nervioso

Fenilcetonuria demostrado que la mayoría de los neonatos con CC (todos los tipos)
muestran rasgos anómalos del neurodesarrollo cuando se comparan
La fenilcetonuria (PKU) es un trastorno autosómico recesivo causado con neonatos de control, pero esas anomalías son más pronunciadas
por un déficit en la fenilalanina hidroxilasa, que se necesita para con- en las lesiones de CC asociadas a una disminución del aporte de sangre
vertir la fenilalanina en tirosina, esencial esta última para la producción oxigenada al cerebro (Masoller et al., 2016). Se ha demostrado que la
de dopamina. La dopamina es esencial para las neuronas piramidales prevalencia de lesiones cerebrales es diferente dependiendo del tipo
prefrontales que participan en la memoria activa y la inhibición. La de CC, y varía del 34% en los casos de transposición de las grandes
patología de la sustancia blanca prefrontal vista en la RM estructural arterias al 49% en los casos de lesiones del lado izquierdo del corazón
y la resonancia con tensor de difusión puede observarse en adultos (Khalil et al., 2014). Mientras los síndromes congénitos identificados,
con PKU (Anderson y Leuzzi, 2010). Es necesaria la restricción de presentes hasta en el 30% de los niños con CC (con el síndrome de
fenilalanina de por vida, ya que la interrupción de la dieta precipita Down y la deleción de 22q11 como los más habituales), son factores
caídas acentuadas en el cociente intelectual en los adultos. La PKU de riesgo independientes para los TND, los recién nacidos con CC
materna mal controlada es teratógena y puede conducir a retraso en muestran una elevada prevalencia de lesiones cerebrales en las técni-
el crecimiento, microcefalia, retrasos del desarrollo significativos y cas de neuroimagen incluso en ausencia de anomalías cromosómicas
defectos en el nacimiento en la descendencia, independientemente de o genéticas, e independientemente del riesgo quirúrgico (Marino
si el feto padece PKU (Levy, 2003). et al., 2012). Aunque las anomalías cerebrales detectadas mediante
técnicas de neuroimagen en recién nacidos con CC pueden aumentar
Trastornos del ciclo de la urea el riesgo de TND, es necesario continuar investigando para establecer
la relación de causalidad entre lesiones cerebrales específicas y tipos de
Los trastornos del ciclo de la urea son trastornos autosómicos recesivos, TND en relación con tipos específicos de CC.
con la excepción del déficit de ornitina transcarbamilasa, que está ligado Otros posibles factores de riesgo para los TND y/o marcadores bio-
al cromosoma X. El síntoma inicial típico en los neonatos sin actividad lógicos de lesión cerebral en recién nacidos con CC son las convulsiones
enzimática en el ciclo de la urea es el coma hiperamoniémico en la y el accidente cerebrovascular. Las convulsiones en el recién nacido
primera semana de vida. Los resultados pueden ser graves, con una y en el período perioperatorio son habituales en pacientes con CC.
morbilidad elevada y una mortalidad que se acerca al 50% (Batshaw Desafortunadamente, las convulsiones suelen ser subclínicas, por lo
y Monahan, 1987). La hiperamoniemia aguda afecta selectivamente que pueden pasar desapercibidas y quedar sin tratar (Gunn et al., 2012;
a la sustancia blanca del cerebro y puede verse inicialmente como Naim et al., 2015). En el Boston Circulatory Arrest Study, en el que
cambios reversibles que afectan a los surcos profundos de los territorios se estudió a 171 recién nacidos con D-transposición de las grandes
marginales de las regiones insular y perirrolándica. La hipoperfusión arterias y a los que se sometió a monitorización con EEGc durante las
secundaria a los trastornos del ciclo de la urea puede desempeñar un primeras 48 h tras la intervención, las convulsiones se detectaron en el
papel en la etiología de la lesión cerebral. 20% de los pacientes, mientras que las convulsiones clínicas se detec-
taron únicamente en el 6% de los pacientes (Helmers et al., 1997). El
Acidemia metilmalónica seguimiento neurofisiológico de 139 de estos pacientes a los 16 años de
edad demostró que una crisis convulsiva postoperatoria era la variable
La acidemia metilmalónica (AMM) es una deficiencia de una enzima médica que más relación mostraba con malos resultados (Bellinger
dependiente de la adenosilcobalamina, la metilmalonilcoenzima A et al., 2011). En los preescolares supervivientes que se sometieron a
mutasa, que se caracteriza por la acumulación de ácido metilmaló- cirugía cardíaca durante el primer año de vida, las convulsiones elec-
nico. Esta es de herencia autosómica recesiva. La AMM se presenta trográficas postoperatorias se asociaban a TND, que se caracterizaban
habitualmente, bien en un recién nacido sano durante los primeros por alteraciones de la función ejecutora y una mayor prevalencia de
días o semanas de vida, bien en recién nacidos con antecedentes de déficits en las interacciones sociales y los comportamientos repetitivos/
mala alimentación, vómitos, letargo progresivo, hipotonía y debilidad restringidos (Gaynor et al., 2013).
muscular. El diagnóstico se realiza gracias a los ácidos orgánicos en Al igual que las convulsiones, el accidente cerebrovascular en el
la orina, que muestran grandes cantidades de ácido metilmalónico, recién nacido y en el período perioperatorio es habitual y puede ser
metilcitrato, ácido propanoico y ácido 3-hidroxipropanoico. Aunque asintomático en pacientes con CC. Antes y después de la reparación,
los aminoácidos plasmáticos suelen mostrar una elevación de la glicina, el accidente cerebrovascular se observa mediante RM en el 10-30% de
esto puede ser normal. La RM muestra típicamente afectación de los los recién nacidos con CC (Martinez-Biarge et al., 2013). Los recién
ganglios basales y la sustancia blanca, con afectación selectiva del globo nacidos con CC cianótica que se someten a cirugía paliativa padecen en
pálido (Gao et al., 2009). la mayoría de los casos un accidente cerebrovascular arterial isquémico
durante el período perioperatorio, y se observan TND en la mayoría de
Cardiopatía congénita los supervivientes (Asakai et al., 2015). Dada la mayor prevalencia
de convulsiones e accidente cerebrovascular en recién nacidos con CC, son
A medida que ha aumentado la supervivencia de los recién nacidos con necesarios claros cribados perioperatorios y estudios de seguimiento a
CC, ha aumentado la atención en la evaluación de las morbilidades a largo plazo para aclarar los factores de riesgo asociados a la CC, con la
largo plazo, especialmente de los resultados del neurodesarrollo. Los esperanza de que un mayor conocimiento nos conducirá al desarrollo
niños con una CC cianótica grave muestran una alta incidencia de de estrategias terapéuticas eficaces.
anomalías cerebrales al nacimiento, y es habitual el diagnóstico de otras
lesiones cerebrales mediante RM tras la corrección quirúrgica (McQui-
llen et al., 2007, 2010; McQuillen y Miller 2010; Miller et al., 2007; Disfunción neurológica inducida
Dimitropoulos et al., 2013). Estos niños corren un mayor riesgo de por bilirrubina y querníctero
padecer un TND significativo, aproximadamente con el 50% de los
supervivientes afectados (Martinez-Biarge et al., 2013). Aún es nece- La hiperbilirrubinemia es muy habitual en el recién nacido y no suele
sario aclarar si una circulación cerebral anómala intraútero da como estar relacionada con efectos negativos en la mayoría de los bebés.
resultado una alteración del desarrollo cerebral, o si una alteración de Aunque no se ha establecido una relación lineal directa entre la concen-
la hemodinámica en el período perioperatorio conduce a una lesión tración sérica/plasmática de bilirrubina total (BT) y el retraso en el
cerebral hipóxica. La ecografía con Doppler del cerebro a término y desarrollo, cifras elevadas de BT se han asociado a neurotoxicidad por
la RM/ERM del cerebro fetal a las 36-38 semanas de gestación han bilirrubina y a TND a largo plazo (Maimburg et al., 2010). Cifras

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CAPÍTULO 61 Lesión cerebral en el recién nacido a término 909

elevadas de bilirrubina no conjugada pueden provocar una mayor basales, las vías visuales y auditivas central y periférica, el hipocampo,
cantidad de bilirrubina no ligada o «libre», que se une con fuerza a el diencéfalo, los núcleos subtalámicos, la región media del cerebro
las membranas ricas en mielina, lo que convierte a las neuronas en el y el cerebelo.
principal objetivo de la toxicidad por bilirrubina, con la lesión cerebral
inducida por bilirrubina afectando fundamentalmente tan solo a un Lecturas recomendadas
subgrupo de neuronas en áreas seleccionadas de los ganglios basales, el
tronco encefálico y el cerebelo (Watchko y Tiribelli, 2013). Las cifras Brites D. Bilirubin injury to neurons and glial cells: new players, novel
elevadas de bilirrubina pueden provocar que células no neuronales, targets, and newer insights. Semin Perinatol 2011;35(3):114-120.
como los astrocitos y la microglía, produzcan citocinas proinflamatorias Adamkin DH. Committee on Fetus and Newborn. Postnatal glucose
que pueden contribuir a la lesión cerebral inducida por bilirrubina homeostasis in late-preterm and term infants. Pediatrics 2011;
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La hiperbilirrubinemia neonatal puede llevar a una encefalopatía Executive summary: Neonatal encephalopathy and neurologic outcome,
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CAPÍTULO 61 Lesión cerebral en el recién nacido a término 909.e5

Resumen
La lesión cerebral en los neonatos a término puede tener conse-
cuencias devastadoras, como graves problemas del neurodesarrollo
a largo plazo y muerte. Los neonatos con lesión cerebral pueden
presentar alteraciones clínicas inmediatamente después del naci-
miento o en las primeras semanas de vida. El cuadro clínico inicial
puede ser sutil o franco, oscilando desde ictericia y dificultades para
la alimentación hasta convulsiones, encefalopatía, insuficiencia res-
piratoria y shock. Las técnicas de resonancia magnética han mejo-
rado nuestra capacidad para diagnosticar y establecer el pronóstico
de múltiples tipos de lesión cerebral en los neonatos. Los super-
vivientes de lesiones cerebrales neonatales suelen correr un riesgo
significativo de discapacidades a largo plazo moderadas o graves,
como problemas con el lenguaje, la función motora, la audición,
la visión, la capacidad cognitiva y epilepsia. Son diversas las causas
que pueden llevar al neonato a padecer una lesión cerebral. A escala
mundial, la encefalopatía hipóxico-isquémica es la principal causa
de lesión cerebral y de mortalidad en el neonato, y es responsable
de alrededor de una de cada cinco muertes neonatales. Las bacterias
y virus siguen causando lesiones cerebrales devastadoras en el recién
nacido. Debido al aumento de la supervivencia de los neonatos con
cardiopatía congénita, se ha tomado conciencia del mayor riesgo de
lesión cerebral, como el accidente cerebrovascular arterial isquémico
perinatal y la trombosis del seno venoso cerebral, en estos neona-
tos. Las metabolopatías congénitas y la hiperbilirrubinemia grave
también son importantes causas de lesión cerebral en los neonatos.

Palabras clave
Encefalopatía hipóxico-isquémica
Metabolopatías congénitas
Querníctero
Meningitis
Técnicas de neuroimagen
Convulsiones
Accidente cerebrovascular
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62
Estrategias de neuroprotección
para el recién nacido
SANDRA E. JUUL, BOBBI FLEISS, RYAN MICHAEL McADAMS Y PIERRE GRESSENS

PUNTOS CLAVE Mecanismos de la enfermedad: identificación


• La lesión cerebral neonatal puede ser el resultado de la interrupción de objetivos para la neuroprotección
del desarrollo normal (predominante en recién nacidos prematuros)
o de daño en tejidos ya existentes (predominante en recién nacidos La lesión cerebral neonatal puede deberse a una lesión clástica (lesión
a término). de tejidos existentes) o a la interrupción o alteración de los procesos
• Los enfoques actuales para la neuroprotección de los recién nacidos normales del desarrollo. La lesión clástica es más habitual en recién
prematuros son la administración prenatal de corticoesteroides, nacidos a término, mientras que en los recién nacidos prematuros,
la administración de sulfato de magnesio, el retraso en el pinzamiento la interrupción del desarrollo normal es generalmente un importante
del cordón y la administración de cafeína. factor contribuyente de la lesión a largo plazo.
• La hipotermia terapéutica es la única técnica cuya eficacia se ha
demostrado para el tratamiento de recién nacidos a término
con complicaciones derivadas del parto.
Lesiones clásticas
• Los nuevos enfoques en neuroprotección, como el empleo de En los estudios experimentales, la hipoxia-isquemia cerebral de sufi-
eritropoyetina, melatonina y la terapia con células madre, se encuentran ciente intensidad para reducir las reservas tisulares de energía (lesión
actualmente en fase de estudio. La neuroprotección ideal probablemente primaria) suele seguirse de la reposición temporal, pero completa, de la
suponga el empleo de diversas técnicas en momentos diferentes. utilización de la glucosa, el trifosfato de adenosina y la fosfocreatina para
la reperfusión/reoxigenación. En consecuencia, se produce un descenso
secundario en la concentración de fosfatos de alta energía, paralelo a
un descenso en el metabolismo tisular de la glucosa y el desarrollo de la
lesión celular. De manera similar, los recién nacidos con encefalopatía

L
as dos causas de muerte más frecuentes en los recién nacidos a neonatal (también denominada encefalopatía isquémica neonatal) mues-
nivel mundial son la prematuridad y las complicaciones derivadas tran anomalías características en el metabolismo energético cerebral, que
del parto. The Lancet ha publicado reiteradamente datos sobre las suele ser normal poco después del nacimiento, pero que algunas horas
causas mundiales, regionales y nacionales de muerte infantil, y la suma después muestra un declive progresivo en la relación entre la concentra-
de estos dos problemas constituye sistemáticamente la causa de cerca ción de fosfocreatina y de fosfatos inorgánicos (Azzopardi et al., 1989).
del 50% de las muertes neonatales a nivel mundial (Black et al., 2010; Los recién nacidos que presentan este fenómeno desarrollan graves TND
Liu et al., 2012, 2015). Para los neonatos que sobreviven tras un parto o mueren, y hay una estrecha relación entre la magnitud de este declive
prematuro y/o complicaciones relacionadas con el parto, el número tardío en la relación entre la concentración de fosfocreatina y de fos-
de alteraciones también es enorme (Global Burden of Disease Pedia- fato inorgánico, un menor desarrollo cerebral y la gravedad del TND.
trics Collaboration, 2016). Las secuelas de estos problemas varían en Estos hallazgos sugieren que la mayoría de las lesiones asociadas
función de los recursos disponibles para ayudar al niño, pero, incluso con hipoxia-isquemia evolucionan con el tiempo después de que tenga
en los países más ricos, el empleo de todos los tratamientos disponi- lugar la alteración, más que durante esta. La hipotermia que sigue a
bles no evita la muerte y los trastornos del neurodesarrollo (TND) la hipoxia-isquemia se aprovecha de este período ventana y reduce
en alrededor del 50% de los niños afectados. Los niños con ictus la insuficiencia energética secundaria y la lesión cerebral (Thoresen
neonatal, cardiopatía cianótica, hipertensión pulmonar, trastornos et al., 1995). No obstante, los mecanismos involucrados en la lesión
metabólicos congénitos, querníctero y exposición fetal al alcohol, entre cerebral secundaria no se entienden por completo, y esta información
otros problemas, también corren un riesgo elevado de TND y, en es básica para el desarrollo de la siguiente generación de terapias, que
teoría, podrían beneficiarse de las estrategias de neuroprotección. Los deben combinarse con la hipotermia en los recién nacidos a término
trastornos pueden ser retrasos intelectuales, déficits motores, sordera, con encefalopatía neonatal.
ceguera y un mayor riesgo de problemas, como trastornos del espectro El déficit de fosfatos de alta energía inducido por la hipoxia-isque-
autista. Dado que, en las últimas décadas, el campo de la neonatología mia lleva a un fallo primario en el mantenimiento de los gradientes
ha conseguido maravillas a la hora de mejorar la supervivencia, la aten- iónicos transmembrana, la liberación de compuestos neuroactivos en
ción debe centrarse ahora en ayudar a los supervivientes a crecer sanos y los compartimentos extracelulares, la acumulación de Ca2+ intracelular
vivir vidas sanas y plenas exentas de trastornos. Para lograr este objetivo y la activación de una serie de mecanismos que, si se mantienen, llevarán
tan audaz, deben desarrollarse nuevas estrategias neuroprotectoras. a la muerte celular inmediata. Si se logra la reanimación del individuo,

910 © 2019. Elsevier España, S.L.U. Reservados todos los derechos

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CAPÍTULO 62 Estrategias de neuroprotección para el recién nacido 911

estas alteraciones agudas se revertirán parcial o completamente, pero El daño cerebral asociado a episodios perinatales adversos se había
se habrá iniciado un complejo proceso por el que múltiples factores considerado, hasta hace poco, una alteración estable. No obstante, dis-
interrelacionados pueden producir una lesión cerebral secundaria. tintas líneas de investigación sugieren que esto no siempre es verdad
Los mecanismos concretos del daño no se comprenden por completo, (Fleiss y Gressens, 2012). Según las pruebas más recientes, además de la
pero se han dilucidado algunos componentes del proceso (Thornton alteración del desarrollo debida al daño inicial en el cerebro inmaduro,
et al., 2012). Los aminoácidos excitadores, la alteración mitocondrial los procesos lesivos pueden persistir durante meses o años. Es probable
(pérdida de la función mitocondrial, alteración de la biogenia y el que estos «mecanismos terciarios» de daño incluyan la inflamación
ciclo de fusión/fisión, liberación de factores que desencadenan la cas- persistente y cambios epigenéticos, y pueden impedir la reparación y
cada apoptósica), la regulación del calcio intracelular, la generación de la regeneración endógenas. Estos procesos, como la inflamación con-
tipos de oxígeno reactivos, como el óxido nítrico, los mecanismos de tinuada, pueden hacer a los pacientes más sensibles a otras lesiones
muerte celular (distintos tipos de muerte celular, como la apoptosis, o pueden predisponerles a desarrollar una alteración cognitiva con la
la necroptosis, la ferroptosis, la partanatosis y la autofagia), cambios edad. Es posible tratar los mecanismos lesivos terciarios por diversos
en la disponibilidad de los factores tróficos y la respuesta inflamatoria medios, como prevenir el efecto represor de la microglía y la sobre-
e inmunitaria están implicados en el proceso. Además, las pruebas activación de los astrocitos, reuniendo las condiciones epigenéticas
experimentales y algunos estudios epidemiológicos recientes apoyan la que permitan el desarrollo y empleando tratamientos celulares que
hipótesis de que la inflamación sistémica perinatal podría desempeñar estimulen la reparación y la regeneración. El reconocimiento de los
un papel clave en la sensibilización a las alteraciones hipóxico-isquémi- mecanismos lesivos terciarios puede constituir el primer paso de una
cas/excitótoxicas cerebrales, un proceso que podría reducir la eficacia compleja tarea translacional hacia la confección de tratamientos seguros
de la hipotermia (Hagberg et al., 2015). y eficaces que puedan emplearse para tratar el cerebro en el que ha
tenido lugar la alteración del desarrollo mucho tiempo después del
problema inicial.
Interrupción/alteración del desarrollo normal
Hasta hace algunos años prevalecía el dogma de que, en los neonatos Enfoques terapéuticos
prematuros, los precursores inmaduros de los oligodendrocitos, muy
sensibles al estrés oxidativo y la excitotoxicidad, morían (daño clástico), Tratamientos actuales para los recién nacidos
lo que provocaba quistes en la sustancia blanca (Volpe et al., 2011). prematuros: tratamientos prenatales
Estudios neuropatológicos más recientes han demostrado que estas
células no mueren en un número significativo, sino más bien son prác- Corticoesteroides
ticamente incapaces de madurar por completo, por lo que no pueden Se sabe desde hace tiempo que la administración de corticoesteroides
contribuir a la mielinización de los axones a pesar de su presencia en de 24 h a 7 días antes del parto reduce el riesgo de muerte o morbilidad
la sustancia blanca (Verney et al., 2012). Lo más probable es que estas en los partos únicos prematuros de 28 a 32 semanas de gestación,
anomalías no clásticas de la sustancia blanca contribuyan significa- con una reducción del riesgo de más del 40% (Mwansa-Kambafwi-
tivamente a la lesión difusa de la misma observada en la resonancia le et al., 2010; Chawla et al., 2013). Entre los beneficios están una
magnética (RM) de muchos recién nacidos prematuros (Rutherford reducción de muerte prematura, síndrome de dificultad respiratoria,
et al., 2010; Kidokoro et al., 2013). hemorragia intraventricular (HIV) y enterocolitis necrosante. A pesar
Los estudios de RM llevados a cabo en recién nacidos prematuros de este conocido beneficio, el cambio en la práctica clínica ha sido
muestran dos rasgos clave que apoyan la hipótesis de que en los meca- lento, con el aumento de su empleo de un 8% en 1985 a un 52%
nismos patógenos de la encefalopatía relacionada con la prematuridad en 1995, un 75% en 2000 y un 85% en 2015. Estudios recientes
también están implicados cambios en la sustancia gris: 1) la conecti- han demostrado que la administración prenatal de corticoesteroides
vidad entre las estructuras grises se ve reducida de forma significativa, también beneficia a los recién nacidos prematuros nacidos de embarazos
especialmente en las conexiones talamocorticales, y 2) la microes- múltiples y a los recién nacidos prematuros de incluso 22 semanas de
tructura de las estructuras corticales se ve reducida, aunque las causas gestación (Boghossian et al., 2016; Wei et al., 2016). Puede repetirse la
celulares y moleculares aún se desconocen en gran medida (Lodygensky administración ante la amenaza de parto prematuro, aunque no se ha
et al., 2010). Basándose en los experimentos pueden sugerirse dis- determinado la seguridad de más de dos ciclos, con algunas pruebas de
tintas hipótesis: 1) un menor número de neuronas y en particular de que el crecimiento de la cabeza fetal puede verse afectado por múltiples
interneuronas que se producen en fases posteriores y podrían verse ciclos repetidos (Whitelaw y Thoresen, 2000; Bonanno et al., 2007).
afectadas por un nacimiento prematuro; 2) una menor arborización
de las neuronas, y 3) una menor densidad sináptica y medular (Penn Sulfato de magnesio
et al., 2015). Es necesario realizar más estudios para determinar los El tratamiento con sulfato de magnesio es un tratamiento prenatal
mecanismos celulares clave y las vías moleculares subyacentes para bien estudiado que puede reducir la parálisis cerebral (PC) y mejorar
identificar posibles objetivos del tratamiento. la función motora gruesa tras un nacimiento prematuro. In vitro,
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Estudios epidemiológicos, neuropatológicos y experimentales el magnesio mitiga el daño excitotóxico al unirse al sitio de unión
han identificado la inflamación sistémica y la inflamación nerviosa para el magnesio del glutamato tipo N-metil-d-aspartato (Zeevalk y
consiguiente como un mecanismo clave en la alteración del desarrollo Nicklas, 1992). También hay pruebas de que el magnesio puede mitigar
de la sustancia blanca y posiblemente de la sustancia gris (Hagberg la inflamación secundaria, reducir la formación de radicales libres,
et al., 2015). Parece que la microglía, el macrófago residente en el estabilizar las membranas celulares, inhibir la producción de radicales
cerebro, desempeña un papel clave en la inflamación nerviosa, por lo libres y mejorar la estabilidad cardiovascular (Galinsky et al., 2014).
que constituye un interesante objetivo para la neuroprotección. No Se han llevado a cabo cinco estudios controlados aleatorizados
obstante, la microglía desempeña múltiples papeles. Pueden ser nocivos prospectivos para determinar los posibles beneficios del magnesio en
para el cerebro en desarrollo cuando adoptan un fenotipo que favorece la neuroprotección. La dosis de magnesio difiere entre los diversos
la inflamación, pero también pueden desempeñar papeles que favorecen estudios, y la administración de una perfusión tras un bolo tampoco
la reparación eliminando productos de desecho y liberando factores fue uniforme en los distintos estudios. La Cochrane Collaboration
proplásticos. Además, la microglía desempeña un papel importante en publicó un metaanálisis de las 6.145 mujeres incluidas en estos estudios
el recorte normal de neuritas y la eliminación de sinapsis durante el en 2009 (Doyle et al., 2009). No se encontraron diferencias en la
desarrollo cerebral (Tay et al., 2016). mortalidad de los recién nacidos, pero se registró una disminución del

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912 PA RT E XI I Sistema nervioso

31% en la incidencia global de PC en el grupo tratado con magnesio, motora: de los 833 niños tratados con cafeína, 176 (21,1%) murieron o
con un riesgo relativo (RR) del 0,68 (intervalo de confianza [IC] al sobrevivieron con uno o más trastornos, en comparación con los 200 de
95%, 0,54-0,87). También se registró una reducción del 39% en el los 807 niños tratados con placebo (24,8%) (cociente de posibilidades
riesgo de disfunción motora importante entre los recién nacidos que ajustado por centro, 0,82; IC al 95%, 0,65-21,03; P = 0,09). Un
recibieron magnesio (RR, 0,61; IC al 95%, 0,44-0,85). No se regis- análisis más profundo ha demostrado un menor índice de problemas
traron diferencias en cuanto a ceguera, sordera, retraso intelectual, HIV, de coordinación relacionados con el desarrollo en los recién nacidos
lesión de la sustancia blanca, Apgar bajo a los 5 min, crisis epilépticas tratados con cafeína en comparación con los recién nacidos tratados
neonatales, hipotonía, necesidad de soporte respiratorio, displasia con placebo (Schmidt et al., 2006, 2007, 2012; Doyle et al., 2014).
broncopulmonar a los 28 días o a las 36 semanas ni duración de la
estancia hospitalaria. No se registraron diferencias maternas en la Método madre canguro
mortalidad ni en las complicaciones obstétricas. Para evitar que un El contacto piel con piel entre una madre y un recién nacido prematuro,
niño desarrolle PC, debe tratarse a 63 mujeres (IC al 95%, 43-155) a menudo denominado método madre canguro, ha demostrado propor-
(Doyle, 2012; Jacquemyn et al., 2015). cionar múltiples beneficios a corto y largo plazo. Los beneficios incluyen
mayor estabilidad fisiológica, menor ansiedad o depresión materna,
Retraso del pinzamiento del cordón mejor lactancia, mayor tolerancia al dolor, mejor crecimiento y menor
En 2012, la American Academy of Pediatrics y el American College mortalidad (Johnston et al., 2008; Athanasopoulou y Fox, 2014;
of Obstetricians and Gynecologists publicaron su opinión unificada Bera et al., 2014a, 2014b; Conde-Agudelo y Diaz-Rossello, 2014; Boundy
recomendando el retraso del pinzamiento del cordón umbilical (RPC) et al., 2016). Scher et al. (2009) demostraron que el contacto piel con
(> 30 s) en los neonatos prematuros para lograr una posible reducción piel durante 1,5 h al día, 4 días a la semana durante 8 semanas aceleraba
del 50% en las HIV (Committee on Obstetric Practice, American los signos electroencefalográficos (EEG) de maduración cerebral.
College of Obstetricians and Gynecologists, 2012). Esta opinión se Están apareciendo nuevos hallazgos que apoyan que los efectos del
basaba en diversos estudios controlados aleatorizados que demostraban método madre canguro pueden mantenerse a largo plazo, mejorando
aumentos en el hematocrito neonatal, reducciones de la HIV y una la atención y la cualidad de los movimientos (Silva et al., 2016), y
mejor estabilidad fisiológica con menos necesidad de soporte vital. En mejorando el desarrollo cognitivo y las funciones ejecutoras del niño
los estudios de seguimiento de los recién nacidos en los que se llevó hasta 10 años (Feldman et al., 2014).
a cabo un RPC en lugar del pinzamiento inmediato, se detectaron
beneficios a largo plazo a los 18-22 meses y a los 4 años de edad
con mejores resultados motores, gruesos y finos, y en las habilidades Futuros tratamientos para los recién nacidos
sociales (Garofalo y Abenhaim, 2012; Andersson et al., 2015; Brocato prematuros
et al., 2016; Rabe et al., 2016).
El período óptimo de retraso del pinzamiento del cordón umbilical Melatonina
en recién nacidos prematuros aún no se ha establecido. Un estudio La melatonina (N-acetil-5-metoxitriptamina), una neurohormona
de cohortes prospectivo en recién nacidos de menos de 32 semanas derivada del aminoácido triptófano y segregada por la glándula pineal,
de gestación comparó el RPC a los 30-45 s con el RPC a los 60-75 s. es un potente antioxidante capaz de combinarse con radicales libres y
Los recién nacidos con mayor retraso presentaban hematocritos más estimular diversas enzimas antioxidantes, como el glutatión, la glutatión
altos antes de las 2 h (49,2 frente a 47,4%; P = 0,02), así como una reductasa, la peroxidasa y la superóxido dismutasa (Reiter et al., 2000).
reducción en los índices de intubación en la sala de partos (11 frente a La melatonina puede estimular directamente la proteína G de la mem-
22%; P = 0,004), hipotermia en el ingreso (1 frente a 5%; P = 0,01), brana celular, que se une a los receptores de melatonina de alta afinidad
tratamiento con surfactante (13 frente a 28%; P = 0,001), intubación (receptores de melatonina 1 y 2) que activan numerosas cascadas de
en las primeras 24 h (20 frente a 34%; P = 0,004) y cualquier intuba- segundo mensajero, que difieren en formas específicas de células, tejidos
ción (27 frente a 40%; P = 0,007), y recibieron menos transfusiones y tipos. La melatonina también puede inducir actividades intracelulares
de eritrocitos (20 frente a 33%; P = 0,008) (Song et al., 2015). Estos independientes de sus receptores al dirigirse a proteínas de unión al
resultados sugieren que para los recién nacidos prematuros podría ser calcio, proteínas citoesqueléticas y estructurales, y componentes de
beneficiosa una transfusión placentaria más prolongada tras el parto. señalización mitocondrial (Luchetti et al., 2010). El perfil de seguridad
El ordeño del cordón umbilical también tiene su atractivo, ya de la melatonina y sus propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y
que proporciona beneficios similares a los del RPC y permitiría una antiapoptósicas la han convertido en un candidato atractivo para la
reanimación más inmediata de los recién nacidos en estado crítico. Un neuroprotección de los neonatos con encefalopatía neonatal (Alonso-
metaanálisis reciente de seis estudios (se practicó el ordeño del cordón Alconada et al., 2013; Biran et al., 2014).
umbilical a 292 recién nacidos prematuros y pinzamiento inmediato La melatonina es un neuroprotector en diversos modelos animales
del cordón a 295) llegó a la conclusión de que, al igual que el RPC, de lesiones en cerebros prematuros, como el de un neonato de ratón
el ordeño del cordón umbilical también mejoraba el hematocrito con lesión de la sustancia blanca por daño excitotóxico (con o sin infla-
inicial, disminuía la incidencia de transfusión, con un índice de riesgo mación sistémica) o un modelo de hipoxia-isquemia de daño cerebral
combinado de 0,74 (IC al 95%, 0,61-0,9; P = 0,002), y disminuía el neonatal y daño de la sustancia blanca secundario a inflamación en fetos
riesgo de enterocolitis necrosante, HIV y muerte (Dang et al., 2015). de oveja (Ramanantsoa et al., 2013). Basándose en estos datos preclíni-
cos, se realizó un estudio farmacocinético en neonatos prematuros para
Cafeína establecer la dosis de melatonina que emularía mejor la exposición fetal
En el trabajo fundamental sobre los efectos de la cafeína en los resul- a la secreción materna de melatonina en el tercer trimestre (Merchant
tados de los prematuros llevado a cabo en 2.006 individuos, Schmidt et al., 2013). Basándose en este estudio farmacocinético y teniendo
et al. (2006) demostraron que, además de reducir la apnea y la necesi- por objetivo la misma concentración de melatonina, se ha iniciado
dad de ventilación mecánica, el tratamiento de recién nacidos con pesos un estudio clínico aleatorizado con suplementos de melatonina como
al nacer de 500-1.250 g reducía el resultado de muerte o supervivencia un posible neuroprotector, y los primeros resultados, basados en la
con uno o más de los siguientes trastornos: PC, déficit cognitivo, evaluación por RM a una edad corregida a término, deberían estar
ceguera y sordera. Un estudio de seguimiento que recogía datos de pronto disponibles. Este estudio se basa en la hipótesis de que los recién
1.640 de los 2.006 bebés incluidos inicialmente en el estudio Caffeine nacidos prematuros, que aún no son capaces de producir su propia
for Apnea of Prematurity (CAP) no demostró ningún beneficio sus- melatonina, pueden mostrar un mejor neurodesarrollo cuando se
tancial, aunque existía una tendencia hacia la mejoría de la función exponen a los niveles adecuados durante la vida uterina.

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CAPÍTULO 62 Estrategias de neuroprotección para el recién nacido 913

La melatonina también promete ser un neuroprotector prenatal que metabólica como la sepsis (Buonocore et al., 2003; Ozment y Turi,
podría administrarse a las embarazadas, ya que parece seguro, y atraviesa 2009). La Epo puede contribuir a la neuroprotección en los recién
la placenta (Okatani et al., 1998) y la barrera hematoencefálica (basán- nacidos prematuros al reducir las cifras de hierro libre y, por lo tanto,
dose en estudios en ratas adultas) (Vitte et al., 1988). Es necesario llevar la ferroptosis.
a cabo una investigación más exhaustiva para clarificar los mecanismos
por los que la melatonina, una neurohormona pleótropa, puede regular Estudios translacionales de neuroprotección neonatal
la supervivencia de las células neuronales, la homeostasis del tejido con eritropoyetina en recién nacidos prematuros
cerebral y la neuroprotección en neonatos con encefalopatía neonatal. Dos informes preliminares sobre recién nacidos prematuros tratados
prospectivamente han demostrado un beneficio:
Neuroprotección con eritropoyetina 1. Recién nacidos prematuros con un peso de 500-1.250 g tratados,
La eritropoyetina (Epo) se utilizó por primera vez por sus efectos bien con Epo (400 U/kg tres veces a la semana, n = 29), bien con
eritropoyéticos, y su uso más habitual es para tratar la anemia en darbepoetina (10 U/kg por dosis una vez a la semana, n = 27),
individuos con insuficiencia renal crónica. La Epo funciona unién- desde el nacimiento hasta las 35 semanas tras la menstruación
dose a los receptores Epo de superficie homólogos, de predominio mostraban un cociente cognitivo acumulativo medio 8-10 puntos
en los eritrocitos nacientes. Los receptores de Epo también están superior a los controles tratados con placebo, y los recién nacidos
presentes en múltiples tipos celulares en el sistema nervioso central tratados con Epo alcanzaban cocientes de 97,9 ± 14 y los recién
(Juul et al., 1998; Bernaudin et al., 1999; Mu et al., 2005), como los nacidos tratados con darbepoetina puntuaban 96,2 ± 7,3 en com-
precursores neuronales (Wang et al., 2004), subgrupos de neuronas paración con los 88 ± 14 de los controles (n = 24). Los recién
maduras (Wallach et al., 2009), astrocitos (Sugawa et al., 2002), nacidos que recibieron Epo también mostraron mejores resulta-
oligodendrocitos (Sugawa et al., 2002; Genc et al., 2006; Iwai dos estadísticos que los controles en las pruebas de permanencia
et al., 2010), microglía (Chong et al., 2003) y células endoteliales del objeto (Ohls et al., 2014). Las puntuaciones combinadas de
(Wang et al., 2004). La Epo se produce en el cerebro, principalmente los TND o el número de fallecimientos eran significativamente
por astrocitos, y se cree que es un importante factor trófico durante el mejores en los grupos tratados con Epo y darbepoetina, con
desarrollo del cerebro, así como un factor protector endógeno. La Epo puntuaciones combinadas del 15,5 frente al 48,2% en el grupo
cerebral se produce en exceso tras una hipoxia prolongada, por lo que de control, y estos mejores resultados intelectuales se mantenían
cifras de Epo elevadas en el nacimiento serán probablemente un reflejo a los 3,5-4 años de edad, aunque los recién nacidos prematuros
de una hipoxia intrauterina crónica y pueden constituir un marcador seguían obteniendo peores resultados que los recién nacidos a
biológico útil para predecir otras complicaciones de la prematuridad, término (Ohls et al., 2016).
como la enterocolitis necrosante (Holm et al., 2016). Cuando se 2. El seguimiento de recién nacidos con extremadamente bajo peso
administra Epo de forma externa con el objetivo de proporcionar al nacer que recibieron Epo en una dosis de 500-2.500 U/kg tres
neuroprotección, se necesitan altas dosis para atravesar la barrera veces en un estudio en fase I/II (Juul et al., 2008) mostraron que
hematoencefálica, a menos que esta esté dañada (Juul et al., 2004; Stat- el tratamiento con Epo se correspondía con una mejoría de las
ler et al., 2007). La Epo no atraviesa la placenta, por lo que no puede puntuaciones cognitivas (R = 0,22; P < 0,05) y motoras (R = 0,15;
administrarse durante el embarazo para conseguir la neuroprotección. P < 0,05) (McAdams et al., 2013).
La Epo tiene efecto antiinflamatorio, antiexcitotóxico, antioxidante y Se ha completado un estudio doble ciego aleatorizado en fase
antiapoptósico (Sun et al., 2005; Juul et al., 2009; Rees et al., 2010), y II sobre la neuroprotección de recién nacidos prematuros con Epo
favorece la neurogenia, la oligodendrogenia y la angiogenia, esenciales (NCT00413946). Se asignaron aleatoriamente 448 recién nacidos
para la reparación de la lesión y el neurodesarrollo normal (Shingo (edad gestacional 26-31 6/7 semanas) para que recibieran Epo
et al., 2001; Wang et al., 2004; Kumral et al., 2005; Iwai et al., 2007; (3.000 U/kg; n = 228) o suero salino (n = 220) administrados a las
Osredkar et al., 2010; Gonzalez et al., 2013; Wassink et al., 2017). 3, 12-18 y 36-42 h tras el nacimiento. La edad gestacional media al
Algunos de estos efectos pueden estar mediados por la estimulación inicio del estudio era de 29,3 semanas, con pesos al nacer de aproxi-
provocada por la Epo de los factores de crecimiento necesarios para el madamente 1.220 g. Se demostró la seguridad de la dosis y la pauta,
crecimiento cerebral normal, como el factor neurotrófico cerebral y el sin que hubiera un incremento de las retinopatías por prematuridad
factor neurotrófico producido por los gliocitos (Dzietko et al., 2004; ni ninguna otra complicación relacionada con la prematuridad (Fau-
Wang et al., 2004). Los efectos de la Epo son dependientes de la dosis, chère et al., 2015), y se vio que un subgrupo de los recién nacidos que
y múltiples dosis son más eficaces que dosis únicas (Kellert et al., 2007; recibieron Epo mostraban una mayor integridad de la sustancia blanca
Gonzalez et al., 2007, 2009). La Epo reduce la pérdida neuronal y en la RM realizada casi a término (Leuchter et al., 2014; O’Gorman
los problemas de aprendizaje que siguen a la lesión cerebral (Demers et al., 2015). Sin embargo, el seguimiento a largo plazo del 81%
et al., 2005; Larpthaveesarp et al., 2016). También disminuye la lesión de los recién nacidos incluidos en el estudio a los 2 años de edad
de la sustancia blanca en modelos de animales (Savino et al., 2006; corregida fue decepcionante, ya que no mostraba ninguna mejora en
Vitellaro-Zuccarello et al., 2008; Li et al., 2009; Iwai et al., 2010; Rees el resultado primario del índice de desarrollo mental de las escalas
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et al., 2010; Zhang et al., 2010; Yamada et al., 2011). Aunque la Epo Bayley de desarrollo infantil (segunda edición) ni en los resultados
suele administrarse inmediatamente después de la lesión en los estudios secundarios del desarrollo motor, PC, déficits visuales o auditivos,
preclínicos, los investigadores han demostrado que incluso cuando la ni en los parámetros de crecimiento (Natalucci et al., 2016). Los
administración se inicia a las 72 h o a la semana de la lesión existen autores vieron que el estudio no tenía suficiente potencia estadística
pruebas de mejores resultados en el comportamiento, una mejor para detectar una diferencia significativa, dado que la incidencia de
neurogenia, mayor producción axónica y menor lesión de la sustancia resultados adversos era menor de la esperada cuando se planeó el
blanca (Iwai et al., 2010; Reitmeir et al., 2011; Jantzie et al., 2016; estudio. También es posible que sea necesaria una administración
Larpthaveesarp et al., 2016). más prolongada de Epo para la neuroprotección de los recién nacidos
Además de los efectos específicos sobre las células en el cerebro, la prematuros durante el prolongado período de vulnerabilidad potencial
Epo aumenta la utilización de hierro al incrementar la eritropoyesis. en la hospitalización inicial.
El hierro es altamente reactivo y normalmente se ve secuestrado por
las proteínas de transporte. El hierro libre produce radicales libres y Riesgos del tratamiento
la consiguiente lesión oxidativa. Los recién nacidos prematuros tienen En los adultos, las complicaciones del tratamiento prolongado con Epo
hierro libre que puede medirse, y su concentración aumenta tras las incluyen policitemia, crisis epilépticas, hipertensión, ictus, infarto de
transfusiones de eritrocitos o durante situaciones de inestabilidad miocardio, insuficiencia cardíaca congestiva, progresión del tumor y

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914 PA RT E XI I Sistema nervioso

una muerte más temprana. No se ha descrito ninguno de estos resul- en nanopartículas que faciliten la administración de fármacos neuro-
tados adversos en los neonatos tratados con Epo en más de 3.000 terapéuticos a células específicas (Kannan et al., 2014). Uno de los
pacientes incluidos en estudios controlados aleatorizados (Juul, 2012; primeros y más sólidos ejemplos de este enfoque fue el empleo de un
Wang et al., 2015; Natalucci et al., 2016). Los estudios sobre Epo dendrímero poliamidoamínico para distribuir N-acetil-d-cisteína con
llevados a cabo en neonatos prematuros y a término con el propósito el fin de reducir la lesión cerebral en un modelo de PC en conejos
de comprobar su efecto eritropoyético han demostrado que se trata de (Kannan et al., 2012). La dosis de N-acetil-d-cisteína necesaria para
un fármaco seguro para esta población. En especial, no se ha demos- una neuroprotección equivalente se redujo 10 veces mediante el empleo
trado un mayor riesgo de retinopatía por prematuridad en los recién de tecnología dirigida a células específicas cuando se comparaba con la
nacidos prematuros tratados con Epo en los estudios controlados alea- inyección intraperitoneal.
torizados prospectivos (Ohlsson y Aher, 2014; Fauchère et al., 2015;
Ohls et al., 2015). Los datos acumulados sobre el uso de dosis neuro- Estados de activación de la microglía
protectoras (1.000-3.000 U/kg por dosis) también han demostrado Nuestra comprensión de la importancia de la inflamación neurológica
su seguridad (Fauchère et al., 2015). Una revisión Cochrane sobre en casi todos los tipos de lesión y enfermedad cerebral ha conducido
la neuroprotección con Epo en recién nacidos prematuros llegó a la a un impulso en la investigación sobre el estado de activación de la
conclusión de que el uso precoz de Epo supone un beneficio a largo microglía (Vexler et al., 2006; Ziebell y Morganti-Kossmann, 2010;
plazo en el neurodesarrollo, sin que ello suponga un incremento en la Drake et al., 2011; Hagberg et al., 2012; Heneka et al., 2015). La
morbilidad (Wang et al., 2015). microglía está constituida por unas células inmunitarias innatas únicas
El Preterm Erythropoietin Neuroprotection Trial (PENUT; residentes en el cerebro y producidas por el saco vitelino que dis-
IND 12656, ClinicalTrials.gov NCT01378273) es un estudio ponen de potencial de autorregeneración y desempeñan múltiples
doble ciego aleatorizado, con grupo de control con placebo, papeles críticos en el desarrollo normal del cerebro y la lesión cerebral
sobre la neuroprotección con Epo en recién nacidos entre las (Ransohoff y Perry, 2009; Hart et al., 2012; Tay et al., 2016). La
semanas 24 y 28 de gestación que se haya en fase III. Se incluirá a activación de la microglía depende de factores extracelulares y puede
940 pacientes en diversos emplazamientos de todo EE. UU. y se les adoptar distintos fenotipos, que para simplificar se pueden describir
evaluará a los 22-26 meses de edad corregida. Los pacientes incluidos como proinflamatorios del tipo M1, inmunorreguladores de tipo
recibirán el fármaco a estudio desde antes de las 24 h de vida hasta M2a y antiinflamatorios de tipo M2b (Chhor et al., 2013). La noción
las 32 semanas tras la menstruación. Este estudio tiene la suficiente de que la microglía puede ser protectora o regeneradora (Kitamura
potencia estadística para proporcionar resultados definitivos sobre et al., 2009; Hamelin et al., 2016) se complica al observar que estas
el potencial neuroprotector de la Epo en esta población. El resultado funciones se ven reguladas temporal y espacialmente de una manera
primario es la muerte o el TND grave a los 22-26 meses de edad específica para la lesión o para la enfermedad (Hart et al., 2012; Hu
corregida, con un resultado secundario de muerte, TND grave o et al., 2012; Wang et al., 2013). Este conocimiento, cada vez más
TND moderado. Se evaluará a los pacientes según la tercera edi- detallado, de cómo la microglía participa en la lesión y el desarrollo
ción de las escalas de Bayley de desarrollo infantil y una exploración normal (Schmid et al., 2009; Nagamoto-Combs y Combs, 2010;
neurológica estandarizada. Los resultados deberían estar disponibles Tarassishin et al., 2011; Butovsky et al., 2014; Tang et al., 2014)
en 2018 (Juul et al., 2015). hace que deba considerarse la vía y el momento de administración
cuando se intenta modular la función de la microglía para maximi-
zar su eficacia protectora y regeneradora (Hickman et al., 2008; Hu
Futuro de la neuroprotección para la lesión et al., 2012). Este mayor conocimiento de la biología de la microglía
del cerebro prematuro se verá favorecido aún más por las técnicas de aislamiento celular
mencionadas anteriormente. Se comienza a plantear la posibilidad de
Hay tres conceptos sobre los que nos gustaría llamar la atención del lec- perfusiones de microglía o de sus «primos» mielocíticos, monocitos y
tor, ya que consideramos que probablemente serán la base de la siguiente macrófagos producidos por la médula ósea como posibles tratamientos
generación de tratamientos que se someterán a estudio clínico. Estos para la lesión cerebral, dadas sus similitudes con las células madre,
pueden aplicarse a recién nacidos tanto a término como prematuros: como la secreción de factores tróficos, la habilidad migratoria y su
aprovechar la especificidad celular, potenciar la protección endógena larga esperanza de vida (Cartier et al., 2014). Las perfusiones de estas
(específicamente, regular el fenotipo de la microglía) y abordar los células, ya estén genética o químicamente prepolarizadas para adoptar el
procesos de lesión en fase terciaria. Además, para los recién nacidos fenotipo de reparación-regeneración, son neuroprotectoras en modelos
prematuros, debe abordarse el concepto de escasez de protectores, el de esclerosis múltiple (Takahashi et al., 2007; Mikita et al., 2011;
desbloqueo de la maduración de los oligodendrocitos y la normaliza- Beutner et al., 2013).
ción de los cambios de la sustancia gris.
Procesos de lesión terciarios
Especificidad celular Cada vez son más las pruebas clínicas y experimentales que apoyan
Los avances en las técnicas que permiten separar células en poblaciones la presencia de mecanismos activos y persistentes que previenen la
puras han impulsado los análisis específicos para un tipo de células en regeneración y/o intensifican el daño cerebral tras la lesión cerebral
los modelos de lesión con el fin de comprender la lesión y la reparación perinatal (Dammann, 2007; Fleiss y Gressens, 2012). Estos mecanis-
(Williamson et al., 2011; Smith et al., 2014; Schang et al., 2014b). mos se denominan procesos de lesión terciarios. Es más, parece que los
Estos estudios han revelado que la misma vía puede participar en procesos neuroinflamatorios persisten, incluida la activación de la
direcciones opuestas durante el desarrollo normal o durante la lesión microglía (Bilbo et al., 2008; Van Steenwinckel et al., 2013). Desde
en tipos de células adyacentes. Un ejemplo asombroso de esto se ve en un punto de vista clínico, los tratamiento que pueden emplear-
la vía Wnt. Concretamente, la reducción de la señalización en la vía se mucho después de la lesión para mejorar el estado neurológico
Wnt es crucial para la maduración normal de los oligodendrocitos, ya resultan altamente sugerentes. Junto con un mayor conocimiento
que se aprecia un incremento de la señal en los oligodendrocitos de de la especificidad celular y los fenotipos microgliales de repara-
las áreas de lesión de la sustancia blanca (Fancy et al., 2009). Por el ción-regeneración, se espera que la investigación sobre la lesión por
contrario, en la microglía, es necesaria la alta actividad de la vía Wnt procesos terciarios permita la posibilidad de mejoras neurológicas
para evitar que estas células inmunitarias innatas activen un fenotipo para cientos de miles de personas con una lesión cerebral adquirida
proinflamatorio, que dañaría los oligodendrocitos (Van Steenwinckel en el período perinatal. Los primeros estudios clínicos que emplearon
et al., 2016). Esta especificidad celular puede favorecerse influyendo células madre para tratar la lesión cerebral perinatal se han dirigido

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CAPÍTULO 62 Estrategias de neuroprotección para el recién nacido 915

a estos procesos terciarios (pacientes de 1-12 años de edad) debido que traten directamente estos procesos, sino únicamente intentos de
a dudas sobre la seguridad al tratar a los pacientes en la fase aguda. normalizar los factores que llevan al parto prematuro y a los procesos
Se ha demostrado el potencial de los tratamientos farmacológicos neuroinflamatorios posteriores.
para mejorar los resultados cuando se administran semanas o meses
tras la lesión en modelos de animales (Saraceno et al., 2010; Zhang
et al., 2011; Byrnes et al., 2012). Tratamientos actuales para recién nacidos
a término
Escasez de protectores endógenos
La placenta suministra al feto múltiples factores, como progesterona, Hipotermia terapéutica
melatonina, hormonas tiroideas y estrógenos. Se teoriza sobre el papel La hipotermia terapéutica (HT) (72 h a una temperatura de 33,5 ±
de la escasez de estos factores debida a un parto prematuro en los 0,5 °C seguida de un recalentamiento progresivo, 0,5 °C por hora
TND de los recién nacidos prematuros y como factor que intensifica hasta la normotermia) es en la actualidad el cuidado estándar para
la lesión en recién nacidos a término (Dammann y Leviton, 1999; tratar a los neonatos con una encefalopatía hipóxico-isquémica (EHI)
Dammann y O’Shea, 2008; Hirst et al., 2008). Cada una de estas sus- moderada o grave. Numerosos estudios controlados aleatorizados han
tancias ha demostrado ser neuroprotectora en los modelos de lesión analizado el beneficio de la HT para mejorar los resultados de los
perinatal en animales (Gibson et al., 2008; Brown et al., 2009; Schang recién nacidos con EHI, y se dispone de múltiples metaanálisis para
et al., 2014b). La hipótesis de la escasez de neuroprotectores tiene ya su revisión.
varias décadas, y los estudios clínicos sobre varios de los principales can- Un metaanálisis Cochrane llevado a cabo por Jacobs et al. (2013)
didatos han arrojado resultados negativos o no concluyentes (Schang incluyó 11 estudios controlados aleatorizados que incluían 1.505 recién
et al., 2014a; Schuit et al., 2015; Norman et al., 2016). Sin embargo, nacidos a término y prematuros tardíos con EHI moderada o grave.
se espera que otros protectores endógenos tengan este potencial, como Esta revisión llegó a la conclusión de que la HT conseguía reducir el
las neurregulinas (Dammann et al., 2008; Taveggia et al., 2008), la número de muertes y mejoraba los resultados del neurodesarrollo en
alopregnanolona (Yawno et al., 2007; Fleiss et al., 2012) y el esterol los supervivientes. Ocho de los 11 estudios (1.344 recién nacidos)
(Trajkovic et al., 2006). demostraron que la HT reducía el resultado combinado de muerte o
TND graves a los 18 meses de edad (46%, 312/678, frente a 61%,
Objetivo: maduración de los oligodendrocitos 409/666, en el grupo de control) (RR típico, 0,75; IC al 95%, 0,68-
La mejora en la calidad de la atención obstétrica ha llevado a un 0,83; diferencia de riesgo [DR] típica, –0,15; IC al 95%, –0,2 a –0,1).
cambio en la fisiopatología de la lesión en los recién nacidos pre- El número de recién nacidos que es necesario tratar para beneficiar a
maturos. Tras el nacimiento prematuro, se sabe que los oligoden- un recién nacido es de 7 (IC al 95%, 5-10).
drocitos son un tipo de célula particularmente vulnerable a la lesión, Los resultados secundarios de la revisión Cochrane incluían mor-
especialmente entre las semanas 22 y 32 de gestación. No obs- talidad, TND grave, efectos secundarios de la hipotermia, así como
tante, no es la muerte de los oligodendrocitos, sino el bloqueo en otros indicadores del resultado del neurodesarrollo (p. ej., gravedad
la maduración, el responsable de la hipomielinización caracterís- de las anomalías en el EEG, crisis epilépticas y hallazgos en la RM).
tica que se observa en estos recién nacidos (Billiards et al., 2008; Once estudios (1.468 recién nacidos) apoyaban la reducción de la
Favrais et al., 2011; Verney et al., 2012; Schang et al., 2014a). La mortalidad con la HT (25%, 186/736, frente a 34%, 250/732,
estimulación de la maduración de los oligodendrocitos también en el grupo de control; RR, 0,75; IC al 95%, 0,64-0,88), para un
es una vía para el diseño de tratamientos dirigidos a la esclerosis número necesario de tratar de 11 recién nacidos. Ocho estudios
múltiple (Franklin y Kotter, 2008; Fancy et al., 2010). En las lesiones (917 recién nacidos) demostraron que la HT disminuye los TND
de la esclerosis múltiple, los oligodendrocitos proliferan a nivel en los recién nacidos supervivientes (26%, 130/495, frente a 39%,
local para después madurar con una cadencia de recaída y remisión. 166/422, en el grupo de control; RR, 0,77; IC al 95%, 0,63-0,94),
Con el tiempo, es el fallo en la maduración de los oligodendrocitos para un número necesario que hay que tratar de 8. Basándose en los
y la remielinización lo que conduce a la acumulación de lesiones estudios controlados aleatorizados disponibles, parece que la HT
que dificultan la función. No se sabe si los tratamientos que se han aumenta la supervivencia sin incrementar la discapacidad grave en
«tomado prestados» del campo de la esclerosis múltiple, donde los los supervivientes.
oligodendrocitos proliferan en un contexto de lesión y después no Entre los efectos secundarios de la HT encontramos bradicardia
consiguen madurar, supondrán un beneficio para los recién nacidos sinusal, trombocitopenia, necrosis del tejido adiposo, coagulopatía
prematuros con encefalopatía por prematuridad, donde los oligoden- intravascular diseminada y, pocas veces, hipertensión pulmonar (Gunn
drocitos nacidos en el medio normal para el desarrollo sufren la et al., 1998; Eicher et al., 2005; Gluckman et al., 2005; Shanka-
interrupción del desarrollo (Franklin y Ffrench-Constant, 2008; ran et al., 2005; Azzopardi et al., 2009; Simbruner et al., 2010; Zhou
Fancy et al., 2011a). Los fármacos diseñados para el tratamiento de et al., 2010; Jacobs et al., 2011). La HT no se ha asociado a un aumento
la esclerosis múltiple que se dirigen a la maduración de los oligoden- significativo en los índices de arritmia cardíaca importante ni hipoten-
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drocitos y que también pueden beneficiar a los recién nacidos con sión, ni a la necesidad de inótropos.
una lesión perinatal incluyen XAV939, rapamicina, olesoxima, En la actualidad se dispone de los datos sobre los resultados a largo
benzotropina y activina A (Fancy et al., 2009; Fancy et al., 2011b; plazo de 379 de los 1.505 recién nacidos (25,2%) incluidos en el
Miron et al., 2013; Kremer et al., 2015). metaanálisis Cochrane. De los 208 (91,3%) participantes en el estudio
del National Institute of Child Health and Human Development
Objetivo: daño de la sustancia gris estadounidense, 109 se evaluaron a la edad de 6-7 años (Shankaran
Aunque la encefalopatía por prematuridad se había considerado hasta et al., 2012). El resultado principal de muerte o un cociente intelectual
ahora una lesión de la sustancia blanca, el espectro cambiante de la (CI) por debajo de 70 seguía siendo más bajo en el grupo tratado con HT
lesión nos ha permitido identificar cambios sutiles en la sustancia gris (46 de 97 niños, 47%) que en el grupo de control (58 de los 93 niños,
(Boardman et al., 2006; Ball et al., 2011, 2013; Zubiaurre-Elorza 62%), pero ya no era significativo (RR en el grupo de HT, 0,78; IC al
et al., 2011). La naturaleza concreta de los cambios de la sustancia 95%, 0,61-1,01). El índice de muerte permaneció significativamente
gris aún no se conoce por completo, pero parece incluir cambios en el más bajo en el grupo tratado con HT (28 frente a 44% en el grupo de
número y/o la distribución de las interneuronas (Salmaso et al., 2014) control; P = 0,04), lo mismo que el índice de mortalidad o discapacidad
y cambios en la densidad de la sinapsis (Dean et al., 2011a, 2011b; grave (41 frente a 60% en el grupo de control; P = 0,03). No había
McClendon et al., 2014). Hasta donde sabemos, no hay fármacos una diferencia significativa en los índices de discapacidad moderada o

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916 PA RT E XI I Sistema nervioso

grave (el 35% del grupo de HT frente al 38% en el grupo de control; Futuros tratamientos para recién nacidos
P = 0,87) o PC (el 17% en el grupo tratado con HT frente al 29%
en el grupo de control; P = 0,14). Basándose en este estudio, parece
a término
que la HT incrementa la supervivencia sin aumentar los índices de Tratamientos neuroprotectores para complementar
discapacidad importante, un CI por debajo de 70 o PC en los niños la hipotermia terapéutica
supervivientes. Eritropoyetina
Se evaluó a 127 de los 325 recién nacidos (39%) que participa- Como se ha mencionado anteriormente, la Epo es una glucopro-
ron en el estudio European Total Body Hypothermia for Neonatal teína que se identificó inicialmente por su papel en la eritropoyesis,
Encephalopathy (TOBY) a los 6-7 años de edad. A los 18 meses, los pero que posee notables propiedades protectoras y reparadoras para el
niños incluidos en el estudio TOBY que habían recibido HT mos- sistema nervioso central (revisado en Rangarajan y Juul, 2014; Juul y
traban un menor riesgo de PC y mejores índices de desarrollo mental Pet, 2015). En una situación de hipoxia-isquemia, la expresión del
y desarrollo psicomotor según las escalas de Bayley del desarrollo receptor de la Epo aumenta rápidamente (Sola et al., 2005; Jantzie
infantil, segunda edición (Azzopardi et al., 2009). A los 6-7 años de et al., 2013). Si existe Epo disponible para unirse al exceso de recep-
edad, los niños que habían recibido HT (75 de 145, 52%) mostraban tores, se favorece la supervivencia de la célula, pero, en ausencia de
una supervivencia significativamente mayor con un CI igual o superior Epo, predominará la vía de la muerte celular programada (Jantzie
a 85 en comparación con los niños que no habían recibido HT (52 et al., 2013, 2015). Esto supone un argumento de peso a favor de la
de 132, 39%; RR, 1,31; P = 0,04) (Azzopardi et al., 2014). Aunque administración exógena de Epo, ya que el aumento en la producción de
los porcentajes de niños que murieron en el grupo de HT (29%) y Epo puede llevar varias horas, mientras que cortos, pero catastróficos,
el grupo de control (30%) fueron similares, en los supervivientes problemas que no logran estimular el aumento de la síntesis endógena
eran más habituales los resultados neurológicos normales en el grupo de Epo pueden provocar una lesión cerebral (Traudt et al., 2013).
tratado con HT (65 de 145; 45%) que en el grupo de control (37 Los estudios preclínicos sobre la neuroprotección con Epo tras una
de 132, 28%; RR 1,6). El riesgo de PC era significativamente más lesión cerebral hipóxico-isquémica muestran sólidos beneficios his-
bajo en los niños supervivientes pertenecientes al grupo tratado con tológicos y funcionales (Kumral et al., 2004; Achterberg et al., 2005;
HT (21%) que en los niños supervivientes pertenecientes al grupo Chang et al., 2005; Demers et al., 2005; Gonzalez et al., 2007; McPher-
de control (36%). Los niños del grupo de HT también presentaban son et al., 2007; Iwai et al., 2010; Sargin et al., 2010; Pet y Juul, 2014;
menos discapacidad moderada o grave (22%) que los niños del grupo Rangarajan y Juul, 2014; Juul y Pet, 2015). La Epo tiene beneficios
de control (37%). tanto a corto como a largo plazo. Entre los beneficios a corto plazo
El seguimiento de niños que participaron en el estudio Cool Cap están sus efectos antiapoptósicos y antiinflamatorios (Digicaylioglu y
también demostró que las evaluaciones del neurodesarrollo a los 18 Lipton, 2001; Sun et al., 2005; Kellert et al., 2007; Juul et al., 2009;
meses predicen los resultados funcionales a largo plazo. Guillet et al. Xiong et al., 2011), mientras que entre los efectos a largo plazo están el
(2012) registraron los resultados en 62 (32 hipotermia, 30 con- aumento de la neurogenia, la plasticidad y la remodelación tisular tras
troles) de los 135 (46%) niños que participaron en el estudio Cool la hipoxia-isquemia (Iwai et al., 2007; Ransome y Turnley, 2007; Yang
Cap y sobrevivieron a la edad de 7-8 años. Mediante el instrumento et al., 2007; Wang et al., 2008; Reitmeir et al., 2011). En primates,
WeeFIM para medir la calidad del autocuidado, la movilidad y la la Epo reduce el resultado combinado de muerte o PC y mejora la
función cognitiva, se vio que la discapacidad a los 18 meses tenía función neurológica en animales sometidos a HT para una EHI (Traudt
una fuerte correlación con los índices de WeeFIM a los 7-8 años de et al., 2013). Los estudios clínicos en fase I y II no han provocado
edad (P < 0,001), lo que apoyaba el efecto terapéutico sostenido dudas sobre la seguridad y sugieren que los recién nacidos con EHI
de la HT para la encefalopatía neonatal. Desafortunadamente, este tratados con dosis múltiples de Epo durante la primera semana de vida
estudio de seguimiento carecía de suficiente potencia estadística muestran mejores resultados neurológicos (Zhu et al., 2009; Elmahdy
para determinar si el tratamiento con HT afectaba a los resultados et al., 2010). Los estudios Neonatal Erythropoietin in Asphyxiated Term
a largo plazo. Newborns (NEAT) y Neonatal Erythropoietin And Therapeutic Hypo­
thermia Outcomes in Newborn Brain Injury (NEATO) han demostrado
Duración e intensidad de la hipotermia su seguridad, viabilidad (Wu et al., 2012) y resultados beneficiosos
Incluso cuando se aplica la HT, cerca del 50% de los neonatos con gracias a la evaluación de las RM precoces, los marcadores biológicos y
EHI moderada o grave mueren o presentan un TND significativo. los resultados a los 6 meses y a los 2 años de edad (incluso en los recién
En un intento por optimizar este tratamiento, se llevó a cabo un nacidos con una lesión cerebral significativa detectada en la RM) (Rogers
estudio clínico para determinar si una HT más prolongada o más et al., 2014; Wu et al., 2016). La Epo está disponible en el mercado y
intensa podría suponer un beneficio mayor (Shankaran et al., 2014). es segura para los recién nacidos. Los estudios en fase III se encuentran
El estudio se detuvo cuando se habían incluido únicamente 364 actualmente en las primeras fases de ejecución a nivel internacional,
neonatos en el estudio (de los 726 planeados) debido a dudas sobre como el estudio Preventing Adverse Outcomes of Neonatal Hypoxic
su seguridad y su utilidad. Se analizaron los resultados secundarios Ischaemic Encephalopathy with Erythropoietin (Australia) y el High-
predefinidos, seguridad y muerte en la unidad de cuidados intensivos Dose Erythropoietin for Asphyxia and Encephalopathy (EE. UU.).
neonatales (UCIN), mediante comparaciones marginales de una
duración de 72 frente a 120 h y una temperatura de 33,5 frente a
32 °C (resultados secundarios predefinidos). Tanto la hipotermia Xenón
más prolongada como la más intensa se relacionaron con una mayor El xenón, un gas noble que atraviesa la placenta y la berrera
mortalidad. Los índices de muerte aumentaron de un 7% (7 de 95 hematoencefálica, se une a los receptores de N-metil-d-aspartato
neonatos) a un 16% (15 de 96 neonatos) cuando se ampliaba el glutamato para inhibir su función y reducir así la apoptosis neu-
tiempo a 33,5 °C de 72 a 120 h. De forma similar, los índices de ronal (Franks et al., 1998; Ma et al., 2007). Se ha demostrado un
mortalidad aumentaron de un 14% (13 de 90 neonatos) a un 17% beneficio significativo en los estudios preclínicos sobre EHI (Lobo
(14 de 83 neonatos) cuando se ampliaba el tiempo a 32 °C de 72 a et al., 2013), como el estudio multicéntrico Total Body Hypot-
120 h. El RR ajustado de muertes en la UCIN para el grupo de 120 h hermia Plus Xenon (TOBY-Xe), que se llevó a cabo en el Reino
frente al grupo de 72 h fue de 1,37 (IC al 95%, 0,92-2,04), y para el Unido. Se incluyó a 92 recién nacidos (36-43 semanas), 46 de los
grupo de 32 °C frente al grupo de 33,5 °C fue de 1,24 (IC al 95%, cuales fueron asignados aleatoriamente a hipotermia únicamente, y
0,69-2,25). Un análisis futuro determinará el resultado primario de los otros 46, a hipotermia más tratamiento con xenón (Azzopardi
muerte o discapacidad a los 18-22 meses. et al., 2015). Los resultados primarios consistieron en la evaluación de

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CAPÍTULO 62 Estrategias de neuroprotección para el recién nacido 917

la disminución del índice lactato talámico a N-acetilaspartato medido hasta la PC (Diukman y Golbus, 1992; van Bekkum, 1998; Matt-
mediante espectroscopia por RM y anisotropía fraccional preservada son, 2000). En el campo de la lesión cerebral perinatal, estas esperanzas
en el segmento posterior de la cápsula interna identificada mediante se han visto frustradas por problemas en las investigaciones, como una
RM en los primeros 15 días de vida. Se ha demostrado que el índice falta de consistencia en el tipo celular empleado (ya que nunca se ha
de lactato a N-acetilaspartato es un marcador biológico detectable por llevado a cabo una comparación exhaustiva de los tipos celulares), la
técnicas de imagen con un buen valor predictivo de los resultados del ausencia de estandarización en la preparación de las células y problemas
neurodesarrollo (Thayyil et al., 2010). Los cambios en anisotropía frac- a la hora de interpretar los efectos específicos de estas células en las
cional, una medida de la conectividad cerebral derivada de la resonancia distintas especies. Aún nos queda mucho por entender en este campo.
con tensor de difusión que valora el grado de difusión anisótropa Para una revisión exhaustiva, véase Fleiss et al. (2014). A pesar de estas
regional, guardan una buena correlación con los resultados en los preguntas sin resolver, se están llevando a cabo varios estudios clínicos
neonatos con EHI (Tusor et al., 2012). Aunque el estudio TOBY-Xe (tabla 62.1). De los estudios que se han completado hasta el momento,
carecía de potencia estadística para detectar cambios en el índice lactato tan solo un estudio con un diseño sólido (doble ciego, aleatorizado y
a N-acetilaspartato, sí disponía del suficiente para detectar cambios en controlado con placebo) ha arrojado resultados (Min et al., 2013). Este
la anisotropía fraccional. Aunque no se registraron episodios adversos estudio combinaba el tratamiento con Epo y con sangre del cordón
graves, no se detectaron diferencias significativas en la RM entre los umbilical, y mostró mejores puntuaciones motoras y funcionales a los 6
grupos. Basándose en los resultados de la RM de 37 recién nacidos meses de edad en el tratamiento combinado con Epo y sangre del cordón
tratados únicamente con hipotermia y de 41 tratados con hipotermia en comparación con el tratamiento único con Epo y la ausencia de
más xenón, no es probable que la HT precoz más el tratamiento con un tratamiento. Este estudio era pequeño (30 pacientes por grupo) y no dis-
30% de xenón durante 24 h iniciado después de las 6 h de vida mejore ponía de un grupo tratado únicamente con sangre del cordón umbilical.
los resultados clínicos en comparación con la HT única en recién naci- No se observó ningún efecto de la Epo, y los autores del estudio sugieren
dos con encefalopatía neonatal. Es necesario estudiar más a fondo los que el principal efecto del tratamiento se debió a la sangre del cordón
múltiples factores que pueden influir en los resultados del tratamiento umbilical y no a la Epo. Además, únicamente se administró el inmu-
con xenón inhalado, como el momento de administración, la dosis nodepresor ciclosporina a los pacientes que recibieron células madre, lo
y la duración del tratamiento. Se esperan los resultados del estudio que constituye un factor de confusión importante, dada la importancia
CoolXenon3 (ClinicalTrials.gov NCT02071394), que combina la HT de la inflamación persistente en los procesos neuropatológicos de la PC
con 18 h de xenón inhalado en recién nacidos hipotérmicos con EHI. (v. «Procesos de lesión terciarios»; Fleiss y Gressens, 2012). Se están
realizando varios estudios adicionales con un diseño sólido.
Argón Los siguientes apartados describen los principales tipos celulares
Además del xenón, hay otro gas inerte, el argón, que resultó prometedor propuestos para su empleo neuroterapéutico y proporcionan informa-
como complemento de la hipotermia en un modelo de encefalopatía ción sobre los estudios clínicos que se están llevando a cabo en el campo
neonatal en lechones (Broad et al., 2016), reuniendo abundantes datos de la lesión cerebral perinatal. La gran mayoría de los estudios clínicos
in vitro y en modelos de la lesión en animales pequeños que respaldan se están llevando a cabo con células madre procedentes de sangre del
sus cualidades neuroprotectoras (Ulbrich y Goebel, 2015). El argón es cordón umbilical o de médula ósea (v. tabla 62.1).
más abundante que el xenón, por lo que es más barato y más práctico Células madre del cordón umbilical.  La sangre del cordón umbi-
para emplearlo en la práctica clínica, ya que no precisaría una compleja lical contiene diversas poblaciones de células madre, como células
disposición de reutilización o recogida. Hasta el momento no existen madre mesenquimatosas (v. más adelante), células madre endoteliales
estudios clínicos que empleen el argón para tratar una lesión neurológica. y células mononucleares procedentes de sangre del cordón umbilical
(CMN-SCU). Las CMN-SCU se diferencian in vitro en prácticamen-
Melatonina te todos los tipos de células maduras, incluyendo células nerviosas.
Se han demostrado los beneficios neuroprotectores de la melatonina en También se ven CMN en la gelatina de Wharton y, junto con las
un modelo de lechón con EHI, en el que la administración intravenosa CMN-SCU, estas tienen un mayor poder proliferativo que las CMN
de melatonina más HT mejoró de manera significativa el metabolismo procedentes de la médula ósea. La accesibilidad, la baja antigenicidad
energético cerebral según las espectroscopias por RM de protones, y la ausencia de problemas éticos a la hora de recogerlas convierten a
redujo la apoptosis en las estructuras cerebrales profundas y disminuyó estas células en atractivas opciones terapéuticas.
la activación de la microglía de la corteza cerebral a las 48 h de la lesión Células madre mesenquimatosas.  Las células madre mesenqui-
(Robertson et al., 2013). En seres humanos, la administración de matosas (CMM) pueden proceder de tejidos fetales o adultos, incluida
melatonina oral (ocho dosis de 10 mg cada una en intervalos de 2 h) sangre fetal del primer trimestre, médula ósea y hepática, placenta,
en las primeras 6 h de vida a recién nacidos a término con encefalopatía médula ósea de adulto y sangre del cordón umbilical. Las CMM
neonatal sin hipotermia (n = 10) redujo las concentraciones séricas pueden diferenciarse en todo tipo de tejido mesenquimatoso (p. ej.,
de malondialdehído, un producto de la peroxidación lipídica, y de hueso, cartílago, grasa) y neuronas, aunque las CMM procedentes del
nitritos/nitratos a las 12 y las 24 h en comparación con los que no feto disponen de un mayor potencial de plasticidad en comparación
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recibieron el tratamiento, los controles sin hipotermia (n = 10), lo que con las CMM de adultos. Entre las características de las CMM que las
sugiere un papel de la melatonina en la reducción del daño oxidativo convierten en atractivas p están su baja inmunogenicidad, ya que no
(Fulia et al., 2001). En un estudio prospectivo reciente realizado por expresan el complejo principal de histocompatibilidad de clase II, y
Aly et al. (2015) en el que participaron 45 recién nacidos a término, sus propiedades antiinflamatorias e inmunodepresoras.
30 con EHI y 15 controles sanos, cuando se comparaba el tratamiento Células madre embrionarias.  Las células madre embrionarias
único con HT (n = 15), la administración de melatonina (5 dosis de (CME) proceden de la masa interna del blastocito y pueden autorreno-
10 mg/kg al día por vía enteral) más HT (n = 15) se relacionó con varse indefinidamente, lo que les permite mantener un fenotipo idéntico
la disminución EEG de las crisis epilépticas, una reducción de las tras la división celular. Las CME son pluripotentes (capaces de dar células
anomalías de la sustancia blanca en la RM después de las 2 semanas del ectodermo, mesodermo y endodermo) y constituyen un suministro
de vida y una mayor supervivencia sin anomalías neurológicas ni del casi ilimitado de células para trasplante. Sin embargo, existe preocupación
desarrollo a los 6 meses de edad (P < 0,001). por la formación de un teratoma tras el trasplante, ya que obviamente
no son autólogas, y su empleo plantea importantes cuestiones éticas.
Células madre Células madre pluripotentes inducidas.  Las células madre pluri­
Durante varias décadas, las células madre han sido una promesa para potentes inducidas (CMPi) se crean al emplear reprogramación quí­
revolucionar el tratamiento de las enfermedades, desde el Alzheimer mica o genética para revertir células somáticas totalmente diferenciadas

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918 PA RT E XI I Sistema nervioso

TABLA
62.1  Estudios clínicos que emplean tratamientos con células madre en pacientes tras una lesión cerebral perinatal

Duración Edad
Título del estudio Intervención de inclusión Participantes
A Safety and Feasibility Study De enero de Células madre autólogas procedentes de placenta humana administradas Menos 20 (estimado)
of Autologous Cord Blood 2016 a junio junto con sangre del cordón autóloga en neonatos con encefalopatía de 6 h
and Human Placental Derived Stem de 2019 hipóxico-isquémica grave (diagnosticada según los criterios estándar
Cells in Neonates With Severe de inclusión en hipotermia). Seguridad únicamente
Hypoxic-Ischemic Encephalopathy
Efficacy of Stem Cells De octubre Células madre mesenquimatosas procedentes de cordón umbilical, cuatro 1-14 años 300 (estimado)
Transplantation Compared de 2013 a dosis, frente a controles con rehabilitación únicamente y controles sin
to Rehabilitation Treatment diciembre tratamiento ni rehabilitación
of Children With Cerebral de 2015
Paralysis (Palsy)

Is Autologous Umbilical Cord De junio de Dos inyecciones, una de células madre autólogas procedentes de sangre De 12 120
Blood Reinfusion Beneficial 2010 a julio de cordón humano y un vehículo control administrado 12 meses meses
in Children With Cerebral de 2016 después. Aleatorización del orden de inyecciones. Seguimiento a 6 años
Palsy: A Randomized, Blinded, de 2 años
Placebo-Controlled, Crossover
Study
Evaluation the Side Effects of Bone De octubre Inyección intratecal de células CD133 procedentes de médula ósea. 4-12 años 12
Marrow Derived CD133 Cells de 2011 Seguridad únicamente
Transplantation in Cerebral Palsy a mayo
Patients de 2012
The Safety of Multiple Intrathecal De abril de Inyección intratecal de células CD133 procedentes de médula ósea frente 4-12 años 8
Injection of Bone Marrow Derived 2012 a abril a pacientes que no reciben células madre
CD133 Cells in Patients With de 2014
Cerebral Palsy

Effects of the Infusion of Autologous De enero de Infusión intravenosa de células madre autólogas en las primeras 48 h 37-42 20
Noncryopreserved CD34+ Cells 2012 a abril tras el nacimiento frente al grupo de control de pacientes que cumplen semanas
in Newborns With Asphyxia de 2013 los criterios de inclusión (Apgar 0-3 a 1 min, acidosis metabólica,
hipoxia, insuficiencia multiorgánica), pero que no desean someterse
a la intervención
Safety and Efficacy of Bone Marrow De marzo Inyección intratecal de 1 millón de células mononucleares autólogas 3-15 años 100 (estimado)
CMN for the Treatment of de 2011
Cerebral Palsy in Subjects Below a agosto
15 Years de 2014

Allogenic Umbilical Cord Blood De mayo de Perfusión alógena de sangre del cordón umbilical bajo inmunodepresión De 10 105
and Erythropoietin Combination 2010 a abril no mieloablativa, más eritropoyetina dos veces a la semana durante 4 meses
Therapy for Cerebral Palsy de 2011 semanas (dos dosis iniciales de 500 IU/kg por vía intravenosa, seguidas a 10 años
de seis dosis de 250 IU/kg por vía subcutánea) y rehabilitación frente
a eritropoyetina más rehabilitación frente a rehabilitación únicamente

Safety and Effectiveness of Cord De enero de Perfusión de una unidad de sangre de cordón enriquecida con células 1-12 años 20
Blood Stem Cells Infusion 2010 a mononucleares frente a placebo
for The Treatment of Cerebral Palsy febrero
in Children de 2014

Intrathecal Autologous Stem Cells De julio de Se estimula a los pacientes con factor de estimulación de colonias 1-8 años 18
for Children With Hypoxic/Ischemic 2009 a abril de granulocitos cinco veces, a continuación se extrae médula ósea
Brain Injury de 2010 y después se administra a los pacientes 8-10 ml de células madre
(CD34+) por vía intratecal frente a las puntuaciones motoras iniciales

BBS, Berg Balance Scale; CI, cociente intelectual; CMN, células mononucleares; DTI, resonancia con tensor de difusión; RM, resonancia magnética; PET con 18F-FDG, tomografía de emisión de positrones
con 18F-fluorodesoxiglucosa.
Referencias bibliográficas (Min et al., 2013; Mancias-Gueria, 2014; Zali et al., 2015).

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CAPÍTULO 62 Estrategias de neuroprotección para el recién nacido 919

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Estado Diseño del estudio Medición de los resultados e identificador del estudio
No reclutando Clasificación de finalidad: seguridad Primario: reacción a la perfusión en los 30 días New York Medical College,
todavía Modelo de intervención: asignación a un único grupo siguientes United States
Enmascaramiento: abierto Secundarios: mejoría neurológica (RM, DTI y prueba de NCT02434965
Propósito principal: tratamiento Sarnat)

En curso Asignación: aleatorizada Primario: Gross Motor Function Measure-88 y Gross General Hospital of
Clasificación de finalidad: seguridad/eficacia Motor Function Measure-66 a los 12 meses Chinese Armed Police
Modelo de intervención: asignación paralela Secundarios: análisis bioquímicos de especies Forces
Enmascaramiento: ciego simple (evaluación glutámicas a los 12 meses NCT01929434
de los resultados)
Propósito primario: tratamiento
Completado, Asignación: aleatorizada Primario: evaluación estandarizada del neurodesarrollo Duke University Medical
pendiente Clasificación de finalidad: eficacia funcional a los 2 años Center, United States
de resultados Modelo de intervención: asignación cruzada Secundario: a los 2 años, 1) calidad de vida, 2) cambios NCT01147653
Enmascaramiento: doble ciego (sujeto, cuidador, en la RM, 3) transcriptomas sanguíneos
investigador, evaluador del resultado)
Propósito primario: tratamiento
Completado (Zali Clasificación de finalidad: seguridad Primario: reacción a la perfusión en los 30 días Royan Institute, Irán
et al., 2015) Modelo de intervención: asignación a un único grupo siguientes NCT01404663
Enmascaramiento: abierto Secundarios: puntuaciones neurológicas (habla
Propósito primario: tratamiento y movilidad)
En curso Asignación: aleatorizada Primario: reacción a la perfusión en las 48 h, Royan Institute, Irán
Clasificación de finalidad: seguridad/eficacia y puntuación motora y sensorial a los 6 meses NCT01763255
Modelo de intervención: asignación paralela Secundario: puntuación neurológica (Gross Motor
Enmascaramiento: abierto Function Measure-66), equilibro (BBS) e incidencia
Propósito primario: tratamiento de espasmo
Completado, Asignación: no aleatorizada Primario: evaluación neurológica de Amiel-Tison Hospital Universitario
resultados no Clasificación de finalidad: seguridad/eficacia a la semana y al año González Monterrey,
disponibles Modelo de intervención: asignación paralela México
Enmascaramiento: abierto NCT01506258
Propósito primario: prevención
En curso Clasificación de finalidad: seguridad/eficacia Primario: a los 6 meses, escala de Ashworth y control Chaitanya Hospital, Pune,
Modelos de intervención: asignación a grupo único motor general según la escala de Oxford India
Enmascaramiento: abierto Secundario: a los 6 meses, CI según la escala NCT01832454
de Binet-Kamat, prueba de comportamiento social
y reducción de la deformidad
Completado (Min Asignación: aleatorizada Primario: evaluación de la función motora gruesa al cabo Sung Kwang Medical
et al., 2013) Clasificación de finalidad: seguridad/eficacia de 1, 3 y 6 meses en comparación con los valores Foundation, Corea
Modelo de intervención: asignación paralela iniciales del Sur
Enmascaramiento: doble ciego (sujeto, cuidador, Secundario: versión coreana de las escalas mentales NCT01193660
investigador, evaluador de resultados) de Bayley del desarrollo infantil-II Bayley Scales of
Propósito primario: tratamiento Infant Development-II Mental Scales, el Quality of
Upper Extremity Skills Test, y la Pediatric Evaluation
of Disability Inventory a los 0, 1, 3 y 6 meses.
Metabolismo de la glucosa cerebral mediante PET
con 18F-FDG a las 2 semanas. RM a los 6 meses.
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Efectos secundarios a los 6 meses


En curso Asignación: aleatorizada Primario: seguridad mediante el seguimiento repetido Georgia Regents
Clasificación de finalidad: seguridad/eficacia durante 1 año con exploraciones clínicas y pruebas University, United
Modelo de intervención: asignación cruzada de laboratorio States
Enmascaramiento: doble ciego (sujeto, cuidador, Secundario: evaluación Gross Motor Function Measure NCT01072370
investigador, evaluador de resultados) estandarizada
Propósito primario: tratamiento
Completado Clasificación de finalidad: eficacia Primario: Battelle Developmental Inventory a los Hospital Universitario
(Mancia-Gueria, Modelo de intervención: asignación a un único grupo 30 días González Monterrey,
2014) Enmascaramiento: abierto Secundario: Battelle Developmental Inventory México
Propósito primario: tratamiento a los 180 días NCT01019733

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920 PA RT E XI I Sistema nervioso

y devolverles la pluripotencia. Las técnicas de reprogramación estaban que ha sufrido hipoxia-isquemia. Se ha demostrado que el poscon-
limitadas inicialmente a la manipulación genética mediante un vector dicionamiento isquémico remoto protege el cerebro del adulto y el
vírico. Las nuevas técnicas que emplean reprogramación química cons- neonato en modelos de hipoxia-isquemia en roedores cuando se aplica
tituyen una mejora importante, ya que se cree que el riesgo de prolifera- inmediatamente en el momento de la reperfusión o se retrasa hasta 24 h
ción anómala tras el trasplante será menor en estas células. Uno de los (Drunalini Perera et al., 2014), y cuando se aplica inmediatamente en
beneficios de estas CMPi es la transferencia autóloga, pero los índices un modelo de encefalopatía neonatal inducida por hipoxia-isquemia
de reprogramación son bajos y se precisa una gran habilidad técnica. en lechones (Ezzati et al., 2016). El mecanismo molecular de acción
Células madre nerviosas.  Las células madre nerviosas proceden por el que el poscondicionamiento isquémico remoto proporciona pro-
del cerebro del embrión o el feto, pero también pueden encontrarse en tección aún es objeto de debate, pero es probable que implique la libe-
el área subventricular y el giro dentado del adulto. Las células madre ración de factores solubles en los tejidos poscondicionados. Existen 12
nerviosas pueden obtenerse de CMPi para evitar los problemas deri- estudios clínicos registrados (ClinicalTrials.gov; limb + ischemic + post­
vados de trasplantes no autólogos. Las células madre nerviosas pueden conditioning) en adultos en los que se emplea un manguito modificado
diferenciarse en neuronas, oligodendrocitos y astrocitos, pero existe el en el brazo, similar al empleado para la medición de la presión arterial,
mismo riesgo de formación de teratoma para las células madre nerviosas para trastornos como el ictus o los trasplantes hepático y cardíaco. No
que para las CME y las CMPi. obstante, en el modelo con lechones fue necesario emplear manguitos
Células madre procedentes del líquido amniótico.  El líquido inguinales para ocluir las arterias femorales de ambas piernas, y es
amniótico contiene células madre con un perfil fenotípico entre el de necesario solucionar los problemas de diseño, elaboración y formación
las CME y el de las CMM. Las células madre procedentes del líquido para el empleo de este equipo en el tratamiento de la lesión cerebral
amniótico son pluripotentes y no cancerígenas. Su recogida exige perinatal en el ámbito clínico.
la amniocentesis, lo que limita su uso.
Objetivo: inflamación
Estrategias para el tratamiento clínico Numerosos datos preclínicos y clínicos sugieren que la presencia de
inflamación predispone el cerebro a término a la lesión y provoca
Además de las crisis epilépticas, los neonatos con encefalopatía neonatal encefalopatía neonatal (Fleiss et al., 2015). Las notables mejoras en la
muestran con frecuencia una inestabilidad cardiovascular que se mani- asistencia obstétrica han reducido la carga de la encefalopatía neonatal
fiesta con hipotensión, acidosis metabólica e hipertensión pulmonar. en los recién nacidos a término, pero el índice permanece en 8,5 de
A diferencia de las recomendaciones sobre HT, más estandarizadas, los cada 1.000, y el tratamiento estándar, la hipotermia, reduce los malos
enfoques clínicos en el uso de antiepilépticos, la reposición de líquidos, resultados en tan solo una octava parte de los recién nacidos. Cada
el uso de vasoconstrictores (incluido el tratamiento con hidrocortisona), vez está más claro que la clasificación de los pacientes en función
el empleo de reposición de bases (p. ej., bicarbonato sódico), estrategias de su estado inflamatorio es una vía potencial para identificar a los
de ventilación, saturaciones de oxígeno determinadas, inhalación de que responderán o no a la hipotermia y/o una clave para identificar
óxido nítrico y los parámetros de la transfusión sanguínea pueden a los pacientes que pueden beneficiarse de tratamientos alternativos.
influir en los resultados en el contexto de una HT. El creciente interés en el descubrimiento de marcadores biológicos
El empleo de fármacos que logren la sedación y eviten los escalofríos en (Beckstrom et al., 2011; Blaise, 2013) y nuestra capacidad, cada vez
los recién nacidos con encefalopatía neonatal sometidos a hipotermia tam- mayor, para llevar a cabo pruebas en la propia cuna ayudarán a la
bién debe estudiarse más a fondo. El empleo actual de la morfina durante clasificación de los pacientes con este propósito. No se han identificado
la HT no está basado en la evidencia y puede no ser ideal debido a su perfil diferencias específicas en la respuesta inflamatoria de los recién nacidos
de efectos secundarios (p. ej., depresión respiratoria, retención urinaria, a término que precisen el diseño de antiinflamatorios específicos, pero
estreñimiento), y porque no evita los escalofríos. La dexmedetomidina se ha estudiado poco esta área. Es más que probable que seamos testigos
(DEX) y la clonidina, ambos agonistas de los receptores adrenérgicos α2, de la modificación del propósito de los tratamientos inflamatorios,
son alternativas prometedoras como sedantes, ya que evitan los escalofríos especialmente en lo que se refiere a la liberación de células específicas
sin deprimir la respiración. La DEX reduce la inflamación (Taniguchi para reducir los efectos secundarios de los fármacos que han fracasado
et al., 2008; Yang et al., 2008), no produce anomalías histológicas en el en las pruebas tradicionales.
cerebro (neonatos de rata) (McAdams et al., 2015) y consigue la neuro-
protección en los modelos de EHI en animales (Laudenbach et al., 2002; Objetivo: autofagia
Paris et al., 2006; Sato et al., 2010). En la actualidad se están llevando a
cabo estudios para valorar la farmacocinética y la seguridad de la DEX La autofagia es el reciclaje ordenado de los componentes intracelula-
(Cool DEX Study, NCT02529202) y la clonidina (NCT02252848) en res y es básico para el funcionamiento normal de la célula. Aunque
los recién nacidos con encefalopatía neonatal durante la HT. en momentos de lesión o estrés la autofagia puede ser protectora, al
proporcionar fuentes alternativas de energía y eliminar toxinas o pató-
genos, también favorece la muerte celular (para una revisión exhaustiva,
Futuro de la neuroprotección en la lesión véase Descloux et al., 2015). Como tal, la comprensión y la modulación
del cerebro a término de la autofagia son unas vías de interés para el diseño neuroterapéutico.
Hay una carencia de herramientas farmacológicas específicas para
Como se indica en los apartados iniciales de este capítulo, la muerte regular la autofagia, pero los estudios genéticos en ratones han probado
celular desempeña un papel significativo en la lesión cerebral del recién la capacidad neuroprotectora de la regulación de la autofagia (Koike
nacido a término y, como tal, se están diseñando más tratamientos et al., 2008; Ginet et al., 2014), incluso en el cerebro inmaduro
específicos para abordar estos procesos. Las áreas de investigación (Xie et al., 2016). Es más, los niveles de marcadores para la autofagia se
discutidas en los apartados siguientes aún no se han investigado en encuentran aumentados en los análisis post mortem en seres humanos,
estudios clínicos para la lesión cerebral perinatal, pero es posible que tanto en los cerebros lesionados prematuros (Vontell et al., 2015) como
se empleen en un futuro tras su validación en esta población. en los a término (Descloux et al., 2015). Es especialmente interesante
la investigación básica sobre mitofagia, reciclaje de la mitocondria,
Poscondicionamiento isquémico remoto ya que la disfunción mitocondrial es una piedra angular de la muerte
El poscondicionamiento isquémico remoto es una intervención tera- celular de la lesión cerebral perinatal (Hagberg et al., 2014; Thornton
péutica prometedora en la que episodios breves de isquemia/reperfusión y Hagberg, 2015). La neuroprotección ideal probablemente incluirá
en una extremidad evitan el daño en otro órgano (como el cerebro) múltiples tratamientos con distintos objetivos en momentos diferentes.

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CAPÍTULO 62 Estrategias de neuroprotección para el recién nacido 921

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CAPÍTULO 62 Estrategias de neuroprotección para el recién nacido 921e.3

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CAPÍTULO 62 Estrategias de neuroprotección para el recién nacido 921e.5

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921e.6 PA RT E X I I Sistema nervioso

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CAPÍTULO 62 Estrategias de neuroprotección para el recién nacido 921e.7

Puntos clave
• La lesión cerebral neonatal puede ser el resultado de la inte-
rrupción del desarrollo normal (predominante en recién nacidos
prematuros) o de daño en tejidos ya existentes (predominante
en recién nacidos a término).
• Los enfoques actuales para la neuroprotección de los recién
nacidos prematuros son la administración prenatal de corticoes-
teroides, la administración de sulfato de magnesio, el retraso en
el pinzamiento del cordón y la administración de cafeína.
• La hipotermia terapéutica es la única técnica cuya eficacia se ha
demostrado para el tratamiento de recién nacidos a término con
complicaciones derivadas del parto.
• Los nuevos enfoques en neuroprotección, como el empleo de
eritropoyetina, melatonina y la terapia con células madre, se
encuentran actualmente en fase de estudio. La neuroprotección
ideal probablemente suponga el empleo de diversas técnicas en
momentos diferentes.
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63
Estudios de neuroimagen neonatal
JEFFREY J. NEIL Y TERRIE E. INDER

PUNTOS CLAVE importante que los profesionales conozcan la relación existente entre la edad
gestacional, el cuadro clínico, la RM y el resultado. Hay que tener presente
• La ecografía craneal es útil para valorar el tamaño ventricular la posible ansiedad de los padres, ya que, si bien constatada de forma
y la hemorragia en los neonatos prematuros durante su estancia anecdótica, nos recuerda la necesidad de que este tipo de comunicación sirva
en la unidad de cuidados intensivos neonatales (UCIN). para favorecer y capacitar a las familias en lugar de provocarles preocupación.
• La resonancia magnética (RM) es la técnica más sensible para muchas
de las formas de lesión encontradas en neonatos tanto a término como
prematuros, como la lesión de la zona marginal, la lesión de los ganglios

E
basales, la lesión de la sustancia blanca y el accidente cerebrovascular. n este capítulo nos centraremos principalmente en las tres téc-
• La tomografía computarizada (TC) solo debe emplearse cuando no se nicas principales para evaluar la estructura y la lesión cerebrales
dispone de RM. en recién nacidos: ecografía craneal (EC), tomografía computa-
• Los hallazgos en la RM tras la lesión cerebral son dinámicos. rizada (TC) y resonancia magnética (RM). Revisaremos los principios
La resonancia por difusión es la más sensible 2-4 días después de estos métodos y describiremos su aplicación en las poblaciones de
de la lesión, y las imágenes ponderadas en T1 y T2 son las más sensibles nacidos prematuros y a término. También revisaremos los métodos
a partir de ese momento. que están desarrollándose y pueden ser de utilidad clínica en el futuro.
• Los estudios de neuroimagen, tanto de neonatos a término como
prematuros, tienen valor pronóstico.
Técnicas de imagen
Ecografía craneal
CONTROVERSIAS La EC se basa en el rebote del ultrasonido en el tejido. Dado que el
ultrasonido no penetra bien el hueso, la EC debe limitarse a recién
¿Es útil la resonancia magnética cerebral a una edad equivalente nacidos con fontanelas abiertas (aunque en ocasiones la ecografía puede
al término del embarazo en bebés extremadamente prematuros? realizarse a través de la porción escamosa del hueso temporal). La EC se
Pros: una RM realizada cerca del momento del alta hospitalaria (edad hace generalmente a través de la fontanela anterior y a menudo incluye
equivalente al término del embarazo) tiene un valor predictivo mejor en imágenes de la fosa posterior obtenidas a través del agujero mastoideo
cuanto al resultado del desarrollo neurológico posterior que ninguna otra (fig. 63.1). Dado que la calidad de las imágenes disminuye con la dis-
evaluación clínica o radiológica, especialmente cuando se emplean sistemas tancia de la sonda, las imágenes de la fosa posterior que se obtienen
de puntuación sistemáticos en la RM. El empleo de la RM para ayudar a
a través del agujero mastoideo tienen más detalles que las obtenidas a
identificar a los recién nacidos con mayor riesgo de trastornos del desarrollo
través de la fontanela anterior. La calidad de la imagen también empeora
neurológico puede permitir que los servicios terapéuticos se centren
en los recién nacidos que se beneficiarían más de ellos, y el comienzo temprano
en cierto modo a medida que las fontanelas se cierran, y la obtención
de los tratamientos adecuados puede mejorar los resultados. La RM a de imágenes ecográficas del cerebro deja de ser factible una vez que
término también puede emplearse como medidor de calidad del resultado la fontanela se cierra por completo a la edad aproximada de 6 meses.
neurológico de la lesión cerebral difícil de detectar en la ecografía, como la Las barreras tisulares, como la existente entre el líquido cefalorra-
lesión de la sustancia blanca y la cerebelosa, y para medir el crecimiento quídeo (LCR) y el parénquima cerebral, devuelven una señal fuerte. En
cerebral, lo que permitiría a la unidad neonatal seguir las incidencias reales consecuencia, la EC es excelente para determinar el perfil del sistema
de la lesión y el retraso en el crecimiento cerebral en esta población de pacientes. ventricular. La hemorragia también se detecta fácilmente, ya que aparece
Contras: no existen estudios que demuestren que la realización de una brillante debido a la fuerte señal devuelta por los eritrocitos libremente
RM en el momento del alta hospitalaria en recién nacidos muy prematuros lleve acumulados. Esta combinación de propiedades hace de la EC una
a mejores resultados del desarrollo neurológico. Es más, la vaga relación técnica muy útil para la evaluación de la hidrocefalia posthemorrágica,
entre los hallazgos de la RM y los resultados puede provocar un pronóstico así como cambios quísticos en la sustancia blanca periventricular de
incierto, lo que conduce a mayor ansiedad en los padres. los neonatos prematuros (v. más adelante). En comparación, el retorno
Comentarios adicionales: la discusión del pronóstico a largo plazo de de la señal del parénquima cerebral es considerablemente más débil,
los recién nacidos muy prematuros con sus padres antes del alta de la UCIN con un aspecto del parénquima relativamente oscuro en comparación con
debería ser una práctica habitual. Esta discusión debe basarse en marcadores la hemorragia o el perfil ventricular. Además, hay poco contraste entre el
clínicos, como la edad gestacional, los antecedentes y la exploración tejido dañado y el intacto. Como resultado, las áreas de lesión cerebral no
neurológica, así como en la RM (cuando sea apropiado). Proponemos que la RM hemorrágica, como el accidente cerebrovascular, son difíciles de detectar
a término debe realizarse en los recién nacidos con alto riesgo de resultados
con la EC, aunque en ocasiones las áreas de lesión no hemorrágica
adversos según su edad gestacional y/o cuadro clínico. En este contexto, es
pueden tener un aspecto más brillante que el tejido circundante.

922 © 2019. Elsevier España, S.L.U. Reservados todos los derechos

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CAPÍTULO 63 Estudios de neuroimagen neonatal 923
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• Figura 63.1  Imágenes de ecografía craneal y sus planos correspondientes. Los planos de las imágenes
(amarillo) se muestran en un corte sagital de la línea media de una resonancia magnética sobre el que se ha
dibujado el contorno de un ventrículo lateral en rojo. A-I. Las imágenes de la ecografía se obtuvieron a través
de la fontanela anterior. J. La imagen se tomó a través del agujero mastoideo. III, tercer ventrículo; IV, cuarto
ventrículo; AT, asta temporal del ventrículo lateral; CB, cerebelo; CC, cuerpo calloso; CIH, cisura interhemis-
férica; CS, cisura de Silvio; CSP, cavidad del septo pelúcido; PC, plexo coroideo; VL, ventrículos laterales.

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924 PA RT E XI I Sistema nervioso

Es importante que los médicos que atienden a los neonatos prematu- Tomografía computarizada
ros revisen personalmente las imágenes de todas las EC de sus pacientes,
de la misma manera que un neonatólogo revisa las radiografías de tórax y La TC se ha empleado en el estudio de recién nacidos desde su inven-
un neurólogo todas las RM. Un posible obstáculo para aprender a valo- ción en los años setenta y fue la técnica radiológica empleada hace
rar las EC es la singularidad de los planos de las imágenes. Las imágenes 40 años para desarrollar la clasificación de Papile de la hemorragia
estándares de una EC realizada a través de la fontanela anterior empiezan intracraneal para neonatos prematuros (Papile et al., 1978). Es similar
habitualmente como cortes muy similares a cortes frontales en la parte a la EC en cuanto a su excelencia para mostrar hemorragias y el perfil
anterior del cerebro, con las imágenes haciéndose paulatinamente más ventricular. Además, al igual que la EC, no proporciona un contraste
oblicuas hasta aproximarse a cortes axiales en las partes posteriores del tisular especialmente bueno en la lesión no hemorrágica. No obstante, a
cerebro (v. fig. 63.1A-F). En ese punto, las imágenes se obtienen con diferencia de la EC, proporciona una imagen clara de las convexidades
la sonda orientada para lograr una imagen sagital de la línea media (v. cerebrales. Proporciona una imagen razonable de la fosa posterior, pero
fig. 63.1G), así como imágenes parasagitales de los hemisferios y los la cualidad de la imagen en esta área se ve degradada por los efectos del
ventrículos laterales (v. fig. 63.1H e I). Las imágenes obtenidas a través hueso circundante. La TC está siendo relegada como técnica de imagen
de la ventana mastoidea también son oblicuas y pueden extenderse hacia en los recién nacidos debido a la preocupación derivada del uso de
arriba y hacia delante para incluir el tercer ventrículo en neonatos muy radiación ionizante. En el cerebro que se encuentra en rápido desarro-
prematuros, en los que la ventana mastoidea está aún completamente llo, la radiación puede provocar una lesión que afecte posteriormente
abierta (v. fig. 63.1J). Otra consecuencia de la necesidad de obtener al CI (Ron et al., 1982; Hall et al., 2004). Es más, existen dudas sobre
imágenes en torno al hueso en lugar de a través de este es que, con la una mayor incidencia de cáncer de cabeza y cuello tras su uso (Karlsson
EC, no pueden verse las convexidades cerebrales. et al., 1998; Brenner et al., 2003; Boice, 2015; Krille et al., 2015).
Además de la información estructural, la ecografía también tiene la
capacidad de permitir la medición del flujo sanguíneo. Esta capacidad Resonancia magnética
es el resultado de que la frecuencia de la señal del ultrasonido empleado
para la imagen sufre un efecto Doppler cuando se refleja en estructu- En comparación con la EC, la RM tiene la desventaja de que debe tras-
ras móviles, como las células de la sangre circulante. Así, la ecografía ladarse a los recién nacidos de la unidad de cuidados intensivos al depar-
Dopp­ler ha demostrado ser útil en la evaluación de la permeabilidad tamento de radiología para su realización, aunque esto puede cambiar, ya
tanto de arterias como de venas. Es fácil convertir este efecto Doppler a que se están desarrollando sistemas de RM que puedan guardarse dentro
unidades de velocidad (m/s), pero obtener un valor del flujo sanguíneo de la unidad de cuidados intensivos neonatales (UCIN). Además, el
(ml/min por g de tejido) a partir de un valor de velocidad no es tan recién nacido es relativamente inaccesible mientras se le realiza la prueba
fácil, ya que deben tenerse en cuenta factores como el diámetro del en caso de una emergencia médica. La principal ventaja de la RM en
vaso, el flujo sanguíneo laminar y el ángulo del haz de ultrasonido con comparación con la EC y la TC es que proporciona un detalle estructural
relación al vaso sanguíneo. En la práctica, las medidas del Doppler se incomparable, una alta sensibilidad a la lesión parenquimatosa y una
expresan habitualmente como el índice resistivo, que se calcula como alta sensibilidad a las malformaciones cerebrales (Raybaud et al., 1996;
la diferencia entre las velocidades del flujo sistólico y diastólico dividido Cowan et al., 2005; de Vries y Volpe, 2013). Desde un punto de vista
por la velocidad del flujo sistólico. En particular, el índice resistivo no práctico, la realización de la técnica en recién nacidos exige adaptar el
se ve afectado por cambios en el ángulo de la sonda con relación al proceso. Por ejemplo, la relación óptima señal/ruido y, por lo tanto,
vaso sanguíneo. Un índice relacionado es el índice de pulsatilidad, que una mejor calidad de imagen, se consigue cuando el dispositivo de
se calcula de la misma manera que el índice resistivo, con la excepción radiofrecuencia empleado para la técnica se ajusta al tamaño de la cabeza
de que el denominador es la velocidad media del flujo en lugar de la del recién nacido, aunque sigue siendo una práctica habitual emplear
velocidad del flujo sistólico. Estas medidas se obtienen habitualmente un dispositivo de cabeza diseñado para adultos en los recién nacidos.
de la arteria cerebral anterior en el punto en el que se curva sobre la Además, el contraste de la imagen es diferente para los recién nacidos y
rodilla del cuerpo calloso y/o de la arteria cerebral media donde adopta los niños más mayores (v. más adelante), por lo que los parámetros del
una dirección superoinferior. Se escogen estos segmentos vasculares tiempo de secuencia pulsátil deben optimizarse para el cerebro del recién
porque, colocado sobre la fontanela anterior, el haz emitido por la sonda nacido con el fin de obtener imágenes con una relación óptima contraste/
es paralelo a las arterias en estos puntos, lo que proporciona medidas ruido. Finalmente, los recién nacidos son bastante menos colaboradores
más fiables. La tabla 63.1 ofrece una comparación de la EC con otras a la hora de mantenerse quietos durante la realización de la prueba que
técnicas de imagen. los pacientes mayores. Como resultado, es práctica habitual en algunos

TABLA
63.1  Comparación de las técnicas de imagen

Modalidad Ventajas Desventajas


Ecografía craneal • En la cuna • Incapaz de mostrar convexidades cerebrales
(EC) • Barata • Difícil de interpretar si no se es radiólogo
• Excelente para evaluar el tamaño y la hemorragia ventricular • Mal contraste tisular en la lesión no hemorrágica
• Es indicativa de la permeabilidad de los vasos (Doppler) • No detecta malformaciones cerebrales sutiles, como las heterotopias
Tomografía • Disponible en la mayoría de los centros médicos • Emplea radiación ionizante
computarizada • Relativamente barata • Mal contraste tisular en la lesión no hemorrágica
(TC) • Muestra bien la hemorragia y el perfil ventricular • Exige el traslado del recién nacido al escáner
Resonancia • Ofrece una amplia variedad de tipos de contraste • Barata
magnética (RM) (estructural y funcional) • Exige el traslado del recién nacido al escáner
• Proporciona detalles inmejorables • Puede ser difícil vigilar al recién nacido mientras está
• Muestra bien la lesión parenquimatosa en el escáner
• Muestra bien malformaciones y heterotopias • El tiempo de la prueba es más largo que para la TC o la EC

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CAPÍTULO 63 Estudios de neuroimagen neonatal 925

centros sedar a los recién nacidos para minimizar el movimiento. No obs- Una consideración final de las imágenes ponderadas en T1 y T2 es
tante, se han desarrollado diversos enfoques para mitigar la movilidad del la detección de la hemorragia. Aunque tanto la TC como la EC también
sujeto (Glover y Pauly, 1992; Pipe, 1999; Mathur et al., 2008; Tamhane detectan la hemorragia, la RM puede proporcionar tanto una pista
y Arfanakis, 2009; Olesen et al., 2010; Gholipour et al., 2011; Tisdall sobre la edad de la lesión (tabla 63.2) como sobre la presencia de lesión
et al., 2012; Ooi et al., 2013; Gumus et al., 2015). Por tanto, la sedación parenquimatosa no hemorrágica asociada. La angiografía por RM
para la realización de la prueba ya no debería ser una práctica habitual, también puede usarse en ocasiones para identificar la oclusión vascular
aunque aún puede ser necesaria en algunos casos. asociada. Al final de este capítulo se incluye una descripción detallada
de la utilidad clínica de la RM para la detección de la hemorragia.
Imágenes ponderadas en T1 y T2
La RM se diferencia de la EC y la TC en que ofrece una amplia variedad Resonancia por difusión
de tipos de contraste. La mayoría de las RM se basan en la detección de El contraste en la resonancia por difusión se basa en el movimien-
la señal procedente de los núcleos de hidrógeno del agua (1H2O), que to del agua, y se miden los desplazamientos de esta que rondan los
están presentes en una concentración de aproximadamente 110 mol/l 2-10 µm. El método se empleó originariamente para medir la difu-
en el tejido. En la técnica «convencional» (imágenes ponderadas en T1 sión en líquidos y se adaptó posteriormente a la RM a mediados de
y T2), el contraste de la imagen se basa en las constantes de tiempo de los ochenta (LeBihan et al., 1986). Cuando se aplica esta técnica a los
relajación T1 o T2 de los 1H2O. Estas constantes de tiempo varían en tejidos, nos referimos al parámetro que describe los desplazamientos
función del entorno químico local. Por ejemplo, los 1H2O del LCR del agua como el coeficiente de difusión aparente (CDA, cuya unidad
tiene una constante de tiempo T2 relativamente grande, por lo que el es mm2/s), reconociendo así el hecho de que el movimiento del agua
LCR tiene un aspecto brillante en las imágenes ponderadas en T2 en en el tejido se ve influido por una variedad de factores además del
comparación con otros tejidos. movimiento browniano, como el transporte activo y los obstáculos
El contraste de la sustancia blanca en la RM cambia dramáticamente al movimiento del agua. La resonancia por difusión se convirtió rápi-
entre el nacimiento y el año de vida. La sustancia blanca no mielinizada damente en un pilar de la radiología clínica cuando se descubrió que
tiene un aspecto oscuro en las imágenes ponderadas en T1 y brillante constituye un marcador precoz de accidente cerebrovascular (Moseley
en las imágenes ponderadas en T2. Con la mielinización, las constantes et al., 1990). En la actualidad, se sabe que la resonancia por difusión
de tiempo T1 y T2 cambian hasta el punto de que la sustancia blanca es sensible para la lesión cerebral, ya que los valores del CDA del agua
mielinizada tiene las propiedades opuestas y tiene un aspecto brillante disminuyen minutos después de que se produzcan diversas lesiones
en las imágenes ponderadas en T1 y oscuro en las ponderadas en T2. además del accidente cerebrovascular, como crisis epilépticas (Zhong
Este cambio en el contraste puede aprovecharse para detectar la mieli- et al., 1993, 1995; Righini et al., 1994; Prichard et al., 1995), des-
nización (Ganzetti et al., 2014), que tiene lugar a distintos ritmos en polarización cortical extendida (Latour et al., 1994; Busch et al., 1995;
diferentes áreas del cerebro. Por ejemplo, las cortezas primarias motora Rother et al., 1996; Takano et al., 1996), lesión excitotóxica (Benvenis-
y visual se desarrollan antes que la mayoría del resto de áreas cerebrales, te et al., 1992; Verheul et al., 1993) y traumatismos (Ford et al., 1994).
lo que se corresponde con la mielinización relativamente temprana de Los cambios en el CDA tras la lesión son dinámicos, tanto en una
sus trayectos asociados en la sustancia blanca. En un neonato nacido a escala de horas como de días. En estudios en roedores (Li et al., 2000),
término, el tracto corticoespinal mielinizado y las radiaciones ópticas los valores del CDA del agua en un área de accidente cerebrovascular des-
tienen un aspecto brillante en las imágenes ponderadas en T1 sobre cienden minutos después de la oclusión de la arteria cerebral media. Si la
un fondo más oscuro, la sustancia blanca no mielinizada (fig. 63.2). oclusión se mantiene durante 90 min o más, los valores de CDA perma-
Dado que la mayor parte de la sustancia blanca de los recién nacidos necen bajos durante 3-4 días para aumentar después gradualmente hasta
no está mielinizada, y las características de la señal de la sustancia gris alcanzar valores por encima de lo normal hacia los días 5-6 (fig. 63.3A).
no muestran cambios apreciables durante el desarrollo, el contraste Este proceso se conoce como seudonormalización, ya que el CDA pasa
gris-blanco está invertido en los neonatos en comparación con el de por valores normales 4-6 días después de la lesión. Cabe destacar que
los niños y recién nacidos de más edad. A medida que tiene lugar la la evolución de los cambios del CDA en el tiempo es diferente en las
mielinización, la intensidad de la señal de la sustancia blanca cambia lesiones más breves. Si el flujo sanguíneo se restablece 30 min después de
de forma gradual (Almli et al., 2007). Entre las edades de 6 y 9 meses, la oclusión, los valores del CDA vuelven a la normalidad minutos después
las intensidades de la señal de la sustancia blanca y gris son similares del restablecimiento del flujo sanguíneo (v. fig. 63.3A). A continuación,
tanto en las imágenes ponderadas en T1 como en T2, lo que hace se produce una disminución secundaria del CDA en las primeras 24 h y
difícil obtener un buen contraste entre el gris y el blanco (v. fig. 63.2). el consiguiente aumento con la seudonormalización a los 4-6 días. Se ha
Así, aunque la RM aún puede ser útil en pacientes de esta edad, no es sugerido que esta breve recuperación de la normalidad de los valores del
especialmente sensible para detectar sutiles malformaciones corticales CDA seguida por la disminución secundaria puede deberse a una insu-
y heterotopias. Hacia el año de edad, el contraste gris-blanco se ha ficiencia energética secundaria, pero no se ha demostrado. Sin embargo,
invertido por completo y es similar al de niños de más edad y adultos. esta evolución más compleja tras una lesión más breve puede explicar
la presencia de lesión por «difusión negativa». En adultos con accidente
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cerebrovascular, la RM por difusión en el primer día muestra casi todos


TABLA  Cambios en la señal de la resonancia magnética los accidentes cerebrovasculares, y falla tan solo en alrededor del 6%
63.2 tras una hemorragia parenquimatosa de los casos (Oppenheim et al., 2000). Estos fallos pueden deberse a una
pequeña fracción de pacientes con accidente cerebrovascular en los que el
INTENSIDAD DE LA SEÑAL flujo sanguíneo se restablece espontáneamente poco después de la lesión.
Edad de la hemorragia Ponderada en T1 Ponderada en T2 En los recién nacidos a término, la incidencia de lesiones por difusión
negativa es mayor, tal vez alrededor del 30% (McKinstry et al., 2002b),
1-3 días Isointensa Baja lo que probablemente se deba a que el mecanismo de lesión es diferente
3-10 días Alta Baja en esta población. Uno puede imaginar un neonato en el útero que sufre
un período de lesión hipóxico-isquémica (p. ej., debido a un desprendi-
10-21 días Alta Alta miento de placenta). Este período de lesión puede ser relativamente breve
3-6 semanas Alta Alta si se rescata al neonato provocando el parto y reanimándolo. En este caso,
los valores del CDA en el tejido lesionado pueden volver temporalmente
De 6 semanas a 10 meses Isointensa Baja a la normalidad antes de sufrir una reducción secundaria seguida de una
seudonormalización. En los neonatos con una lesión más prolongada,

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• Figura 63.2  Cortes sagital (columna izquierda) y axial (columna derecha) de sujetos de distintas
edades. Las imágenes en la primera fila corresponden a un recién nacido. Obsérvese que la mielinización
del tracto corticoespinal es visible a esta edad como un aumento de la intensidad de la señal en la
imagen ponderada en T1 (flecha blanca). Las imágenes de la segunda fila corresponden a un niño de 8
meses. Obsérvese el contraste relativamente pobre entre la sustancia gris y la blanca a esta edad, ya
que la intensidad de la señal de la sustancia blanca cambia con la mielinización. La mielinización de las
radiaciones ópticas es visible en la imagen ponderada en T2 como una reducción de la intensidad de la
señal (flechas negras). Las imágenes de la fila inferior corresponden a un niño de 14 meses. Obsérvese
que el contraste gris-blanco se ha invertido completamente como resultado de la mielinización.

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CAPÍTULO 63 Estudios de neuroimagen neonatal 927

Otro aspecto interesante de la difusión es la anisotropía de difusión.


En la sustancia blanca, los valores del CDA del agua son mayores en
paralelo a los axones que perpendiculares a ellos. Esto se debe a que,
en paralelo a los axones, el agua puede moverse libremente dentro de
las capas de mielina sin atravesar las membranas lipídicas. El agua que
se desplaza perpendicularmente a los axones debe atravesar las capas de
mielina o rodearlas, lo que reduce sus desplazamientos. Esta variación
espacial de los valores del CDA del agua se conoce como anisotropía, y
la difusión en la que el CDA es el mismo en todas direcciones se deno-
mina isótropa. Cuando se obtienen imágenes por difusión, la difusión
se mide varias veces y en distintos ejes, para cada corte individual. Estas
mediciones pueden combinarse en cada elemento, o vóxel, de la imagen
para conseguir una representación espacial de los desplazamientos del
agua. Esta representación puede expresarse matemáticamente como
un tensor, de ahí el nombre de «imágenes con tensor de difusión».
Aunque estos tensores pueden representarse como elipses (Neil, 2008),
las representaciones elípticas son engorrosas en la práctica clínica, por lo
que se muestra el resumen de los parámetros de estas elipses (fig. 63.4).
La medición de la anisotropía de difusión se aplica más a menudo
a la evaluación de la sustancia blanca. Durante el desarrollo, los valores
de la anisotropía aumentan drásticamente con la adición de mielina
(Huppi et al., 1998a; Neil et al., 1998), aunque la sustancia blanca sin
mielinizar muestra un cierto grado de anisotropía de difusión debido a
la disposición paralela de los axones tubulares. En muchos estudios de
investigación, una anisotropía alta se asocia a una sustancia blanca sana,
y valores más bajos se asocian a lesión u otras anomalías. Los valores de
la anisotropía de difusión también pueden aplicarse a la sustancia gris.
Aunque la sustancia gris cortical de los adultos tiene una anisotropía muy
baja, esto no es así en las primeras fases del desarrollo, especialmente antes
de una edad equivalente al término del embarazo. La placa cortical en
desarrollo muestra una microestructura con organización radial debido a
la presencia de glía radial y a las dendritas apicales de las células piramida-
• Figura 63.3  A. Evolución de los cambios del coeficiente de difusión les (McKinstry et al., 2002a; Kroenke et al., 2005). Esta microestructura
aparente (CDA) tras una lesión cerebral. El azul representa una oclusión de lleva a una anisotropía elevada, ya que en la placa cortical de los recién
30 min. El verde representa una oclusión de 90 min. Los datos proceden nacidos prematuros el CDA del agua es mayor en paralelo a la glía radial
de estudios con animales. B. Evolución de los cambios del CDA tras una y las dendritas apicales que perpendicular a ellas. A medida que la placa
lesión cerebral en neonatos humanos nacidos a término. El rojo repre- cortical madura, esta organización radial se ve alterada por la adición de
senta los neonatos normotérmicos. El azul muestra los neonatos tratados dendritas basales a las células piramidales, la involución de la glía radial
con hipotermia terapéutica. Se emplean cocientes de CDA en lugar de
y la mielinización de la sustancia blanca intracortical. Como resultado,
valores absolutos del CDA en el eje de ordenadas de ambos gráficos,
la anisotropía disminuye de forma constante hasta alcanzar valores
dado que los valores del CDA varían según la región en neonatos y las
bajos hacia la edad equivalente al término del embarazo y permanece
áreas de la lesión varían de un neonato a otro. El cociente representa
el tejido lesionado sobre el tejido normal, por lo que valores inferiores
baja a partir de ahí. Obsérvese que el patrón temporal de cambios de
a 1 indican una reducción de los valores del CDA. La línea de puntos la anisotropía es opuesto para la sustancia gris y la blanca. La anisotropía
verde representa los datos correspondientes a neonatos tratados con de la placa cortical en desarrollo es elevada y disminuye a medida que la
hipotermia terapéutica que presentaron una lesión de leve a moderada corteza madura; la anisotropía de la sustancia blanca es inicialmente baja
en las RM de seguimiento. La línea verde discontinua representa los y aumenta a medida que la sustancia blanca se mieliniza. La variación
datos procedentes de neonatos con una lesión grave. (Adaptado de regional, bien conocida, relacionada con el ritmo del desarrollo cortical
Kinstry RC, Miller JH, Snyder AZ, et al. A prospective, longitudinal diffusion también se refleja en la variación regional del ritmo de los cambios de la
tensor imaging study of brain injury in newborns. Neurology. 2002;59:824– anisotropía cortical del agua (Kroenke et al., 2009).
833 [A], y Bednarek N, Mathur A, Inder T, Wilkinson J, Neil J, Shimony J. Aunque la anisotropía de difusión no se utiliza habitualmente en
Impact of therapeutic hypothermia on MRI diffusion changes in neonatal la práctica clínica, puede ser útil para la tractografía de la sustancia
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encephalopathy. Neurology. 2012;78:1420–1427 [B].) blanca (Basser et al., 2000). Con este uso, la orientación de los valores
más altos del CDA del agua viene determinada para cada vóxel de sus-
tancia blanca. Dado que esta es paralela a la dirección de los axones en
no hay una vuelta breve de los valores del CDA a la normalidad. Los ese vóxel, esta orientación puede usarse para seguir las fibras de vóxel
valores del CDA son bajos en el momento del parto y permanecen bajos a vóxel, y de esta manera seguir un trayecto específico de sustancia
hasta que se produce la seudonormalización. La evolución del CDA en blanca (v. fig. 63.4D). Esto comienza a emplearse en la práctica clínica
los neonatos nacidos a término con lesión se muestra en la figura 63.3B. para los pacientes neuroquirúrgicos, en los que la identificación de los
Obsérvese también que los valores del CDA tienden a descender más y trayectos de la sustancia blanca puede ayudar a determinar el enfoque
durante más tiempo en los neonatos tratados con hipotermia terapéutica quirúrgico adecuado (Potgieser et al., 2014).
(Bednarek et al., 2012). En general, la resonancia por difusión es más
sensible a la lesión 2-4 días tras la misma, pero puede mostrar la lesión Angiografía
el primer día si es grave. Por otro lado, las imágenes ponderadas en T1 y La angiorresonancia magnética es una técnica radiológica importante
T2 suelen mostrar la lesión después de 4-5 días. Debe tenerse en cuenta para la evaluación de los recién nacidos. Aunque se han empleado
este lapso cuando se solicita o interpreta una RM para valorar la lesión múltiples enfoques para perfilar los vasos, el contraste suele basarse en
en un neonato. el movimiento macroscópico del agua. Por ejemplo, es posible reducir la

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• Figura 63.4  Resonancia magnética de difusión en neonatos prematuros (A-C) y a término (D).
A. Mapa de difusión en el que la intensidad de la imagen corresponde al coeficiente de difusión del
agua. B. Mapa de anisotropía en el que la intensidad de la imagen corresponde al grado de anisotropía.
La flecha indica un área de la placa cortical en desarrollo que tiene una anisotropía elevada. La punta
de flecha indica la rodilla del cuerpo calloso. C. Un mapa de color muestra la tendencia de los des-
plazamientos del agua: rojo indica mediolateral; verde, anteroposterior, y azul, superoinferior. Obsérvense
las fibras mediolaterales del cuerpo calloso atravesadas (punta de flecha) y las fibras corticoespinales
superoinferiores del segmento posterior de la cápsula interna (flecha). D. Tractografía de difusión de
los tractos corticoespinales (magenta) en un neonato a término.

señal del agua extravascular, estática, en un corte, de forma que la señal Imágenes por susceptibilidad magnética
más fuerte que permanece surge del agua intravascular que fluye en el Otra forma de contraste disponible en las RM se basa en las diferencias
corte durante la obtención de la imagen. Esto puede entonces emplearse en la susceptibilidad magnética y en ocasiones se conoce como imágenes
para generar un angiograma. Como se comenta más adelante, la angio- ponderadas en T2*. Los efectos de la susceptibilidad están causados por
grafía es especialmente útil para la evaluación de la oclusión vascular la yuxtaposición de regiones con distintas propiedades o susceptibilidades
en el accidente cerebrovascular arterial perinatal (Lequin et al., 2009) magnéticas. En la cabeza, estas áreas se encuentran en las barreras aire-
y la detección de las trombosis del seno venoso (Berfelo et al., 2010). tejido, como los senos, donde pueden provocar distorsiones indeseadas

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CAPÍTULO 63 Estudios de neuroimagen neonatal 929

• Figura 63.5  Cortes axiales de una imagen de susceptibilidad magnética en un antiguo neonato prema-
turo. Obsérvense las áreas de disminución de la señal debidas a la hemorragia periventricular (flechas).

• Figura 63.6  Espectros de resonancia magnética de 1H obtenidos de un cerebro humano a 3 Teslas. El


espectro de la izquierda muestra un doblete de lactato relativamente grande en un neonato a término con
asfixia. El espectro de la derecha, obtenido 9 días después, muestra la resolución del doblete de lactato y
una reducción en la resonancia del NAA (flecha) en relación con las resonancias de la colina y la creatina,
causada por la pérdida neuronal. NAA, compuestos con N-acetilaspartato; ppm, partes por millón.
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de la imagen, y cerca de las hemorragias, donde la disminución de hierro para las técnicas de imagen que se han descrito. La espectroscopia por
en la desoxihemoglobina produce intensos efectos de susceptibilidad. RM supone la detección de 1H en los metabolitos del cerebro, como el
Las imágenes por susceptibilidad magnética son extremadamente sensi- lactato, que está presente en concentraciones del orden de 10−2 mol/l.
bles a la hemorragia, que tiene un aspecto oscuro (fig. 63.5). Debido a Esta diferencia de 104 en la concentración convierte a la espectros-
las distorsiones del campo magnético causadas por la extensión de los copia por RM en un desafío mayor que la radiología convencional.
efectos de susceptibilidad más allá del límite de susceptibilidad, pequeñas Por ejemplo, no es factible obtener una imagen de alta resolución de la
hemorragias aparecen como áreas relativamente grandes de señal baja en concentración de lactato cerebral. En su lugar, se obtiene un espectro de
las imágenes por susceptibilidad magnética, lo que las hace muy visibles RM de una única región de interés (espectroscopia de un único vóxel)
y las hace parecer más grandes de lo que realmente son. o se obtiene una rejilla de espectros de un corte grueso del cerebro
(a menudo conocido como imágenes por cambios químicos). Para la
Espectroscopia por resonancia magnética espectroscopia de 1H en la práctica clínica, los picos de resonancia visi-
Como se menciona anteriormente, la concentración del 1H2O en el cere- bles son la colina, la creatina, compuestos con N-acetilaspartato (NAA)
bro es del orden de 110 mol/l, lo que proporciona una señal abundante y el lactato (fig. 63.6). Las razones por las que estas resonancias son más

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930 PA RT E XI I Sistema nervioso

visibles que otras están relacionadas con su composición química y con es una hemorragia dentro de los ventrículos laterales sin dilatación ven-
el hecho de que estos metabolitos están presentes en concentraciones tricular, el grado III es una hemorragia con dilatación ventricular y/o una
relativamente altas. La colina es un componente de las membranas, hemorragia que ocupa más del 50% del ventrículo, y el grado IV exige la
así como un elemento del neurotransmisor acetilcolina. La creatina, presencia de una hemorragia parenquimatosa, que típicamente colinda
cuando se fosforila, almacena energía en forma de uniones a fosfato. (La con la cara superolateral del cuerpo y el atrio del ventrículo lateral.
concentración de fosfocreatina refleja el estado de energía de la célula, Aunque en la actualidad nos referimos a la HIV de grado IV como
pero su detección exige una espectroscopia con fósforo 31 [31P], ya que infarto hemorrágico periventricular en lugar de HIV per se, la mayoría de
la creatina y la fosfocreatina son indistinguibles en la espectroscopia los estudios continúan clasificando los hallazgos de la ecografía craneal
con 1H.) El papel concreto del NAA en el metabolismo cerebral no de acuerdo con este sistema de clasificación anteriormente establecido.
está claro, pero está extendida la creencia de que el NAA se encuentra La incidencia de HIV en neonatos prematuros sigue siendo elevada.
principalmente en las neuronas y no en la glía, y a menudo se inter- Las incidencias arrojadas por los estudios realizados en neonatos desde
preta una reducción de la concentración de NAA como un reflejo de finales de los años ochenta hasta la primera década del siglo XXI han
una reducción en el número de neuronas presentes en una determinada demostrado que la incidencia de HIV no se ha movido de una cifra que
región. El lactato es un intermediario del metabolismo energético, y ronda el 25%. Esto se ha documentado claramente en los datos recientes
sus niveles pueden aumentar en una serie de circunstancias, como la que resumen el riesgo de HIV entre 1993 y 2012 (Stoll et al., 2015). Estos
falta de oxígeno y la glucólisis anaerobia. La concentración de lactato datos sugieren que puede haber un ligero descenso en el riesgo de HIV en
también puede aumentar por la presencia de células inflamatorias, que neonatos con edades gestacionales de 26-28 semanas, sin que haya habido
a menudo emplean glucólisis anaerobia. Obsérvese que la señal del 1H cambios en los neonatos más inmaduros nacidos a las 22-25 semanas
procedente del grupo metilo del lactato es un doblete (un par de picos) de gestación (fig. 63.8). Se sabe desde hace tiempo que hay un mayor
debido a su composición química. En teoría, es posible cuantificar la riesgo de todas las formas de HIV en los prematuros más inmaduros, y
concentración de metabolitos (en mM) comparando las amplitudes los neonatos de menos de 750 g presentan un riesgo de cualquier tipo
de resonancia de los metabolitos con la amplitud de resonancia del de HIV aproximadamente 3 veces mayor que un neonato prematuro de
agua en la misma región cerebral. Esta cuantificación se utiliza pocas más de 1.250 g (42 frente a 14%) y 10 veces mayor de HIV de grado
veces en la práctica clínica, y es más frecuente que las amplitudes de III-IV (20 frente a 2,1%) (Wilson-Costello et al., 2005). El resto de los
resonancia se expresen como cocientes. Por ejemplo, el cociente NAA/ factores de riesgo perinatales para la HIV se resumen en la figura 63.9.
colina o el cociente NAA/creatina pueden proporcionar una estimación La EC es la piedra angular del diagnóstico de HIV en el neonato
de la porción de células de una determinada área que son neuronas. Por prematuro y proporciona una información precisa y útil para su clasi-
último, los núcleos que se añaden al 1H son detectables en la espectros- ficación. En ocasiones puede ser difícil distinguir una HIV que afecte
copia por RM. Entre ellos están 31P, sodio (23Na), un isótopo del carbono únicamente a la matriz germinal (grado I) de una HIV pequeña (gra­
(13C) e incluso los otros dos isótopos del hidrógeno (2H o deuterio no do II). En estas circunstancias, una imagen de los ventrículos laterales
radioactivo y 3H o tritio radioactivo). Aunque la detección de estos a través de la fosa posterior puede ayudar, ya que la sangre tiende
otros núcleos es un punto de interés científico/investigador significativo, a depositarse en las astas occipitales de los ventrículos laterales (los
especialmente la detección del 13C hiperpolarizado para una valoración neonatos suelen estar en decúbito supino durante la EC), y esta imagen
no invasiva del metabolismo, la espectroscopia con núcleos distintos del los muestra todos. La RM también puede mostrar la presencia de HIV
1
H aún no ha encontrado su lugar en la práctica clínica. con una precisión similar, especialmente en la fase aguda, aunque no
es práctica para la exploración seriada de los neonatos prematuros. No
Neonatos prematuros obstante, si la primera RM se realiza a una edad equivalente al término
del embarazo, es posible que una hemorragia pequeña de grado I ya
En las últimas décadas, la tasa de supervivencia de los neonatos muy no sea visible como una hemorragia en las imágenes convencionales
prematuros (nacidos antes de las 30 semanas de gestación) ha aumen- ponderadas en T1 y T2, aunque aún puede deducirse por la presencia
tado drásticamente debido a los avances en la asistencia perinatal y neo- de un quiste en la matriz germinal en el lugar de la hemorragia original
natal. A diferencia de esta disminución de la mortalidad, los resultados y/o un área de baja intensidad de la señal en las imágenes por sus-
del desarrollo neurológico a largo plazo no han mejorado y continúan ceptibilidad magnética, que será el reflejo de los restos de productos
siendo problemáticos, con el consiguiente coste para los individuos, sus sanguíneos en el área.
familias y la sociedad (Anderson y Doyle, 2008; Hintz et al., 2011). La información sobre el momento típico de aparición de la HIV
En los últimos años se ha llevado a cabo una investigación significativa puede ayudar a la decisión de cuándo llevar a cabo la EC en el neonato
para relacionar los hallazgos de la exploración física, médica y perinatal prematuro durante la estancia hospitalaria. En una serie acumulativa
con los resultados del desarrollo neurológico a largo plazo en un intento de 105 neonatos con HIV estudiados con EC desde las primeras horas
por identificar a los neonatos de mayor riesgo. La lesión cerebral grave de vida, aproximadamente el 50% mostraron el debut de la hemo-
(hemorragia intraventricular [HIV] de grado III o IV, hidrocefalia rragia en el primer día de vida, un 25% adicional en el segundo y un
posthemorrágica, hemorragia cerebelosa extensa y/o leucomalacia 15% adicional en el tercero (Volpe, 2001). En un estudio único de
periventricular quística [LPV-q]) se encuentra entre los factores de ries- 1.105 neonatos que pesaban como máximo 2.000 g en el nacimiento,
go principales de un mal resultado del desarrollo neurológico. En este alrededor del 40% de los 265 que desarrollaron HIV lo hicieron en las
apartado se describirán las características radiológicas de estas formas primeras 5 h de vida (Paneth et al., 1993). La probabilidad de aparición
de lesión cerebral en la EC y la RM, junto con una breve descripción de la hemorragia en el primer día de vida era inversamente proporcional
de sus características neuropatológicas. al peso en el nacimiento. En una serie, el 62% de las hemorragias en
los neonatos de entre 500 y 700 g de peso al nacer tuvieron lugar en
Hemorragia intraventricular las primeras 18 h (Perlman y Volpe, 1986). En general, si se limitara
el cribado a un único día en los primeros días de vida, sería de esperar
La HIV de la matriz germinal es la variedad más habitual de hemo- que una prueba en el cuarto día de vida detectara alrededor del 90%
rragia intracraneal neonatal y es característica del neonato prematuro. de todas las hemorragias. Sin embargo, entre el 20 y el 40% de los
La HIV se ha clasificado tradicionalmente en cuatro grados, de I a IV, recién nacidos afectados muestran una extensión de la lesión, y la
y Papile et al. fueron los primeros en hacerlo (Papile et al., 1978). Este máxima extensión de la lesión se alcanza habitualmente a los 3-5 días
sistema se basa en la presencia de cierta cantidad de sangre en la matriz del diagnóstico inicial (Volpe, 2001), por lo que es necesario realizar
germinal y los ventrículos laterales (fig. 63.7). El grado I representa una una segunda prueba unos 5 días después para identificar la extensión
hemorragia limitada a la matriz germinal subependimaria, el grado II máxima de la hemorragia.

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• Figura 63.7  Clasificación de la gravedad de la hemorragia intraventricular de la matriz germinal en


cortes frontales y parasagitales de la ecografía craneal. A. Grado I: hemorragia de la matriz germinal.
B. Grado II: hemorragia intraventricular (HIV) (ocupación < 50% del volumen ventricular). C. Grado
III: HIV con dilatación ventricular. D. Grado V: gran HIV con ecogenicidad parenquimatosa asociada
(infarto hemorrágico). FRON, frontal; SAG D, parasagital derecho; SAG I, parasagital izquierdo. (Por
cortesía de Walsh B, Inder T, Volpe JJ. IVH. In: Polin R, Abman SH, Rowitch D, Benitz WE [eds], Fetal and
Neonatal Physiology, 5th ed. Elsevier, 2016, chapter 134, pp. 1333–1349.)

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• Figura 63.8  Hemorragia intracraneal grave por año de nacimiento y gestación en neonatos nacidos
a las 22-28 semanas de gestación entre 1993 y 2012. Los círculos muestran el porcentaje de neonatos
nacidos cada año evaluados con ecografía craneal y diagnosticados de hemorragia intraventricular
de grado III-IV, una suave curva muestra la tendencia, y el sombreado indica un intervalo de confianza
al 95% para la curva. La interacción año-edad gestacional fue significativa (P = 0,03). Los riesgos
relativos del cambio por año se ajustaron para cada centro de estudio, raza/etnicidad materna, edad
gestacional del neonato, pequeño para la edad gestacional y el sexo. EG, edad gestacional. Datos
tomados de Stoll BJ, Hansen NI, Bell EF, et al.; Eunice Kennedy Shriver National Institute of Child and Human
Development Neonatal Research Network. Trends in care practices, morbidity, and mortality of extremely
preterm neonates, 1993–2012. JAMA. 2015;314:1039–1051.)

• Figura 63.9  Factores de riesgo de la hemorragia intraventricular. CAP, conducto arterioso persis-
tente; VPP, ventilación con presión positiva.

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CAPÍTULO 63 Estudios de neuroimagen neonatal 933

Alrededor del 30-50% de los neonatos con una HIV de gra- varias medidas cuantitativas, como el índice ventricular, la altura
do III-IV desarrollan una dilatación ventricular posthemorrágica ventricular, la anchura del asta anterior y la distancia talamooccipital.
(DVPH), y el 20-40% de los neonatos necesitarán en consecuencia Ningún parámetro ha demostrado ser mejor que otro (fig. 63.10)
una derivación ventriculoperitoneal permanente (Adams-Chapman (Brouwer et al., 2010). Sin embargo, el área del asta occipital es
et al., 2008; de Vries et al., 2013b). Por lo tanto, los neonatos pre- la primera en aumentar de tamaño tras la HIV, y el área del asta
maturos con sangre en los ventrículos laterales (HIV de grado II-IV) frontal, la última (Allan et al., 1982). Esta medición de la distancia
deben someterse a un seguimiento con EC seriadas para vigilar el talamooccipital del ventrículo lateral (Brouwer et al., 2010) a través
tamaño ventricular. Aunque la evaluación cualitativa del tamaño de la fontanela posterior es probablemente el primer indicador de
ventricular puede ser útil, proporciona más información evaluar ventriculomegalia. En la actualidad no existen recomendaciones
el tamaño ventricular en términos cuantitativos mediante valores estándar en cuanto a la frecuencia de las EC en esta situación. Noso-
normativos establecidos (Davies et al., 2000). Se han desarrollado tros realizamos EC dos veces a la semana hasta que el tamaño ven-
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• Figura 63.10  Cortes frontales de una resonancia magnética ponderada en T2 en tres neonatos
prematuros con un infarto hemorrágico periventricular (IHPV). A. IHPV extenso que se comunica con
el ventrículo lateral. B. IHPV más pequeño que parece separado. C. IHPV frontal pequeño sin hemo-
rragia intraventricular asociada. (Adaptado de Vries LS, Benders MJ, Groenendaal F. Progress in neonatal
neurology with a focus on neuroimaging in the preterm infant. Neuropediatrics. 2015;46:234–241.)

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934 PA RT E XI I Sistema nervioso

tricular se estabiliza durante 1 semana, y posteriormente cada 1-2 Lesión de la sustancia blanca
semanas.
Además de ayudar a la identificación de los recién nacidos que Una lesión de la sustancia blanca quística extensa (fig. 63.14), o
necesitan un drenaje del LCR, la EC también resulta útil para evaluar LPV-q, es un problema relativamente poco frecuente en la actuali-
el efecto del drenaje al realizar la prueba antes y después de la inter- dad en neonatos extremadamente prematuros, al ser más habitual la
vención y servir de orientación en cuanto a la frecuencia y el volumen detección de la lesión sutil de la sustancia blanca, especialmente con la
de drenado del LCR necesarios para reducir el tamaño ventricular. Por RM, en esta población (Hamrick et al., 2004; Kidokoro et al., 2014).
ejemplo, cuando se recurre a la punción lumbar para tratar la ven- La EC muestra limitaciones relativas a la hora de mostrar estas lesiones
triculomegalia en recién nacidos con DVPH, el volumen de LCR que más sutiles de la sustancia blanca (Inder et al., 2003), aunque en
hay que drenar varía enormemente entre recién nacidos (10 ml/kg es ocasiones puede detectar la lesión no hemorrágica. Se ha sugerido que
lo habitual), y algunos precisan el drenado de grandes volúmenes de cualquier anomalía en la sustancia blanca cerebral de una ecodensidad
LCR para mejorar el tamaño ventricular (Hunt et al., 2003). En este al menos tan ecógena como el plexo coroideo que persista durante al
caso, las EC antes y después de la intervención dan una indicación menos 7 días es significativa. Es más, la presencia de sustancia
de su eficacia. blanca heterogénea o de aspecto «parcheado» en la EC debe alertar
Merece la pena mencionar que el tamaño ventricular en el que al médico sobre la posibilidad de anomalías de la sustancia blanca
intervenir con un drenaje del LCR, así como la técnica de drenaje (fig. 63.15) (van Wezel-Meijler et al., 2011). Estas lesiones pueden
que hay que emplear, siguen siendo un área de investigación activa tener un origen hemorrágico o isquémico, y la combinación de la
(Mazzola et al., 2014). Es más, el papel del drenaje del LCR intenso RM de difusión y la de susceptibilidad magnética puede ayudar a
para mejorar los resultados sigue sin haberse demostrado, aunque hay distinguirlas (Niwa et al., 2011). También pueden detectarse por
estudios que sugieren que un drenaje más agresivo puede ser útil. Por RM tanto temprana como a una edad equivalente al término del
ejemplo, hay datos retrospectivos que sugieren que una intervención más embarazo, y la tendencia es que sean más frecuentes en la RM tem-
temprana puede asociarse a una menor necesidad de derivación ven- prana. Así, la RM temprana muestra la extensión total de las lesiones
triculoperitoneal y a mejores resultados del desarrollo neurológico de la sustancia blanca, mientras que la RM a una edad equivalente al
(de Vries et al., 2002; Brouwer et al., 2008). Además, una mayor término del embarazo identifica el resto de las lesiones y muestra tejido
ventriculomegalia se ha asociado a peores resultados del desarrollo cicatricial temprano en la glía y la pérdida de volumen de sustancia
neurológico en un estudio de 173 neonatos prematuros con HIV de blanca asociada (fig. 63.16). También se ha descrito otra anomalía de
grado III-IV (fig. 63.11) (Srinivasakumar et al., 2013). En general, se la señal de la sustancia blanca más fácilmente detectable en la RM,
necesitan más datos para resolver este asunto. Un estudio multicéntrico conocida como exceso de señal de alta intensidad difusa. Se observa
aleatorizado sobre la intervención ventricular temprana o tardía (ELVIS, en las imágenes ponderadas en T2 obtenidas a una edad equivalente al
número ISRCTN43171322, o ClinicalTrials.gov NCT00875758) ha término del embarazo (Counsell et al., 2003) y es un hallazgo habitual
terminado de recoger datos, y sus resultados deberían arrojar más luz (Dyet et al., 2006). Mientras que estos cambios en la intensidad de
sobre esta cuestión. la señal de la sustancia blanca se asocian a valores más altos del CDA
Desde un punto de vista práctico, es importante hacer una dis- en la resonancia por difusión, la valoración cualitativa de los cambios
tinción clínica clara entre la ventriculomegalia debida a una atrofia de señal en las imágenes ponderadas en T2 es bastante subjetivo, y
cerebral periventricular y la ventriculomegalia secundaria a una estudios recientes no han conseguido establecer la relación entre estos
hidrocefalia con una alteración asociada de la dinámica del LCR cambios y el resultado a los 18 o a los 30 meses de edad (Kidokoro
para la toma de las decisiones terapéuticas adecuadas. En general, el et al., 2011; Skiold et al., 2012).
desarrollo de la ventriculomegalia secundaria a una atrofia es lento, a Como se ha mencionado anteriormente, la LPV-q extensa, fácil-
lo largo de varias semanas, y no se asocia a un aumento de la presión mente visible tanto con la EC como con la RM, ha disminuido durante
intracraneal (tal vez con una fontanela a tensión) ni a un rápido las últimas décadas, y en la actualidad presenta una incidencia de menos
crecimiento de la cabeza, y evoluciona hacia un tamaño ventricular del 1% en algunos estudios de cohortes (van Haastert et al., 2011).
estable. En la hidrocefalia, el tamaño ventricular puede ser inestable, También existe una variante más localizada de LPV-q. Esta variante,
disminuyendo si el trastorno es temporal o aumentando si el tras- también relativamente infrecuente, es más difícil de detectar, y su
torno es progresivo. La evolución típica de la DVPH en un neonato identificación exige ecografías craneales repetidas durante al menos 4-6
muy prematuro (24 semanas de gestación) con una HIV de grado semanas. Los quistes se localizan habitualmente en la sustancia blanca
IV se muestra en la figura 63.12. Obsérvese la progresión estable de frontoparietal adyacente al borde lateral de los ventrículos laterales
la dilatación ventricular, que se alivia con una derivación subgaleal. y se extienden hasta la sustancia blanca occipital en los casos más
La RM a una edad equivalente al término del embarazo demuestra la graves. Normalmente solo son visibles durante unas pocas semanas y
asimetría por una pérdida de volumen intraparenquimatoso izquierdo pueden estar completamente resueltos al alcanzar la edad equivalente
y una expansión ex vacuo. al término, pero su presencia es un factor predictivo de una futura
El empleo de la RM para detectar una HIV en los primeros parálisis cerebral (PC) (de Vries et al., 2004). Su «resolución» se debe
momentos de la estancia hospitalaria de un neonato muy prematuro probablemente a la coalescencia de los quistes con el ventrículo lateral
es poco práctica por diversas razones, y no hay un consenso en adyacente. Como resultado, su manifestación en la RM al equivalente al
cuanto a su uso con este objetivo. No obstante, la RM puede ser término del embarazo puede ser sutil y consistir en una dilatación ven-
útil para la evaluación de los recién nacidos con DVPH al mostrar tricular de leve a moderada y un muro ventricular de contorno irregular.
detalles del parénquima del infarto hemorrágico periventricular La detección de estos cambios quísticos temporales en la EC puede
que son útiles para la predicción del resultado futuro del desarro- suponer un desafío. La American Academy of Neurology recomendó
llo neurológico. La HIV de grado IV puede ir desde una pequeña en 2002 que todos los neonatos prematuros (< 30 semanas de ges-
hemorragia focalizada hasta una extensa hemorragia que afecte a la tación) se sometieran a una EC a los 7-14 días para la identificación
mayor parte de ambos hemisferios cerebrales (Jary et al., 2012). La de hemorragias de gran tamaño y una segunda EC a las 36-40 sema-
RM puede emplearse para determinar con más precisión la extensión nas para identificar las lesiones quísticas o la ventriculomegalia para
de una lesión hemorrágica de grado IV, que es un determinante predecir el resultado a largo plazo (Ment et al., 2002). Sin embargo,
importante del resultado (de Vries et al., 2015). Con o sin RM, es un cambio quístico periventricular temporal puede pasarse por alto
importante para el médico valorar la extensión de una HIV de grado con este protocolo. Es más, en un estudio de 1.473 recién nacidos con
IV (fig. 63.13), a ser posible estudiando las imágenes, para aconsejar peso extremadamente bajo al nacer (< 1.000 g) en los que se realizaron
adecuadamente a la familia. únicamente dos EC a edades medias de 6 y 47 días, el 29% de los que

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• Figura 63.11  Hemorragia intraventricular (HIV) de grado IV con infarto hemorrágico periventricular (IHPV) complicado en un neonato prematuro nacido a
las 24 semanas de gestación. A. Ecografía craneal (EC) realizada el segundo día de vida que muestra una extensa HIV en el lado izquierdo con ecodensidad
intraparenquimatosa compatible con un IHPV. B. EC en el día 12 de vida que muestra un aumento significativo del tamaño ventricular. C y D. EC frontal
(C) y sagital (D) realizadas el día 20 de vida que muestran una dilatación ventricular significativa con un diámetro talamooccipital de 33 mm (medido entre
las cruces amarillas del tálamo, etiquetado como 1, y el asta occipital del ventrículo lateral) 1 día antes de la inserción de una derivación subgaleal. E. EC
sagital realizada el día 40 de vida que muestra un quiste porencefálico izquierdo consecuencia de un IHPV. Obsérvese que el tamaño ventricular se reduce
tras la inserción de la derivación subgaleal. F. Resonancia magnética realizada el día 84 de vida (36 semanas de edad posmenstrual) que demuestra una
ventriculomegalia asimétrica como consecuencia de la pérdida de volumen ex vacuo en el hemisferio izquierdo. También aparece una lesión talámica
izquierda con hemosiderina. Puede verse un artefacto causado por el efecto de la susceptibilidad magnética sobre la superficie del hemisferio derecho
debido a la derivación subgaleal. Obsérvese que el desarrollo de las circunvoluciones sigue siendo inmaduro para las 36 semanas de edad posmenstrual.

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• Figura 63.12  Visión global de las curvas de referencia para el índice ventricular (A), la anchura del
asta anterior (B) y la distancia talamooccipital (C) según Davies et al. (2000). Las líneas de regresión
con intervalos de confianza al 95% proceden de Levene (1981) y Liao et al. (1986). También se ha
adaptado de Brouwer et al. (2012). AAA, anchura del asta anterior; DTO, distancia talamooccipital; DV,
distancia ventricular. (Datos tomados de Brouwer AJ, Brouwer MJ, Groenendaal F, Benders MJ, Whitelaw
A, de Vries LS. European perspective on the diagnosis and treatment of posthaemorrhagic ventricular
dilatation. Arch Dis Child Fetal Neonatal Ed. 2012;97:F50–55; Davies MW, Swaminathan M, Chuang SL,
Betheras FR. Reference ranges for the linear dimensions of the intracranial ventricles in preterm neonates.
Arch Dis Child Fetal Neonatal Ed. 2000;82:F218–223; Levene MI. Measurement of the growth of the lateral
ventricles in preterm infants with real-time ultrasound. Arch Dis Child. 1981;56:900–904, y Liao MF, Chaou
WT, Tsao LY, Nishida H, Sakanoue M. Ultrasound measurement of the ventricular size in newborn infants.
Brain Dev. 1986;8:262–268.)

tenían EC normales presentaron PC o un índice de desarrollo mental Mientras que la relativa falta de sensibilidad de la EC para detectar la
según la escala de Bayley de menos de 70 a los 18-22 meses de edad lesión que provoca una alteración del desarrollo neurológico puede
(Laptook et al., 2005). Es decir, el hallazgo de dos EC normales no deberse, en cierta medida, a no detectar anomalías temporales, su
tiene un fuerte valor predictivo positivo para el resultado del desarrollo incapacidad para detectar formas más sutiles de lesión cerebral en
neurológico normal. Algunos centros realizan EC con más frecuencia cualquier momento, como la LPV difusa, sin duda también contribuye.
en neonatos muy prematuros con el fin de perfilar mejor la naturaleza La prevalencia de los diversos tipos de anomalías de la sustancia blanca
y la evolución de las lesiones intracraneales con la esperanza de mejorar en neonatos prematuros y a término a una edad equivalente al término
la capacidad pronóstica (tabla 63.3) (Wezel-Meijler y de Vries, 2014). del embarazo se muestra en la tabla 63.4.

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• Figura 63.13  Bayley Scales of Infant Development Scores for Motor and Cognition a los 18-24 meses
en 173 neonatos prematuros con hemorragia intraventricular de grado III-IV. BSID-III, Bayley Scales
of Infant Development. (Adaptado de Srinivasakumar P, Limbrick D, Munro R, et al. Posthemorrhagic
ventricular dilatation—impact on early neurodevelopmental outcome. Am J Perinatol. 2013;30:207–214.)

• Figura 63.14  Leucomalacia periventricular quística visible en una ecografía craneal realizada a los
28 días de vida (A) y en una resonancia magnética realizada a una edad equivalente al término del
embarazo (B). Obsérvense también la pérdida de volumen de la sustancia blanca, más extensa, las
circunvoluciones inmaduras y la pérdida de volumen talámico en la resonancia magnética.
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Hemorragia cerebelosa por más de 30 (Volpe, 2009b). Según las EC, la incidencia regis-
trada de HCB oscila entre el 2 y el 9%, dependiendo de la edad
La hemorragia cerebelosa (HCB) se detecta cada vez más en el gestacional de la población estudiada. Cuando se realiza también
neonato muy prematuro. Esto se debe probablemente a dos factores una RM, la incidencia es mucho mayor, y oscila entre el 15 y el
clave: la mayor supervivencia de los neonatos extremadamente 20% (Limperopoulos et al., 2005; Steggerda et al., 2013). Esto
prematuros (24-28 semanas de gestación) que corren un mayor puede deberse a que la EC solo es sensible a las hemorragias de
riesgo de HCB y el uso más rutinario de la ventana mastoidea más de 4-5 mm de tamaño. Las HCB puntiformes, más pequeñas,
en las EC (v. fig. 63.1) (Limperopoulos et al., 2005; Steggerda son mucho más habituales, pero únicamente pueden diagnosticarse
et al., 2009; Ecury-Goossen et al., 2010). El cerebelo experimenta con una RM, especialmente de susceptibilidad magnética (Parodi
un desarrollo rápido y complejo durante el período preparto. Entre et al., 2015; Plaisier et al., 2015). Cabe destacar que las HCB más
las semanas 24-40 de gestación, el volumen cerebeloso, evaluado grandes tienden a asociarse a lesiones supratentoriales, como la HIV,
mediante ecografía volumétrica tridimensional, se multiplica por y evolucionan hacia la atrofia del hemisferio cerebeloso afectado en
cinco, y el área de la superficie de la corteza cerebelosa se multiplica la RM a una edad equivalente al término del embarazo.

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• Figura 63.15  Ecodensidad de la sustancia blanca en un neonato prematuro de 28 semanas al


comparar la ecografía craneal en el día 5 de vida (izquierda), con lesiones hemorrágicas lineales en la
sustancia blanca periventricular (flecha roja) y el tálamo (flecha blanca), con una resonancia magnética
a una edad equivalente al término del embarazo.

• Figura 63.16  Lesiones de la sustancia blanca (flechas): lesiones puntiformes focales pequeñas (A),
lesiones puntiformes focales múltiples (B) e hiperintensidad lineal en la sustancia blanca periventricular (C).

Predicción del resultado con técnicas de imagen Resonancia magnética estructural


a una edad equivalente al término del embarazo Cada vez es más la literatura disponible sobre la asociación entre las
La capacidad de los médicos y los investigadores para predecir con anomalías de la sustancia blanca en la RM estructural y el resultado
certeza los resultados del desarrollo neurológico y mejorarlos de forma del desarrollo neurológico. Las anomalías de la sustancia blanca se
notable es limitada. Aunque tanto la EC como la RM tienen utilidad, han asociado no solo a dificultades motoras (Spittle et al., 2011), sino
ninguna es perfecta (tabla 63.5) (de Vries et al., 2013a). Como se también a trastornos de la función ejecutora (Edgin et al., 2008; Wood-
menciona anteriormente, la EC tiene un fuerte valor predictivo de ward et al., 2011), la memoria activa verbal, visual y espacial (Clark
una futura PC, en las manos adecuadas (de Vries et al., 2004), pero y Woodward, 2010), el lenguaje (Foster-Cohen et al., 2010; Reidy
las EC normales no son buenos factores predictivos del resultado et al., 2013), y la atención y el aprendizaje (Murray et al., 2014; Omiz-
del desarrollo neurológico normal. La RM es significativamente más zolo et al., 2014). Las anomalías de la sustancia gris cortical también
sensible a lesiones sutiles de la sustancia blanca y el cerebelo. Más pueden detectarse mediante la RM estructural, pero las anomalías de
adelante, mencionamos brevemente la literatura sobre RM a una edad la señal procedentes de la sustancia gris en los neonatos prematuros son
equivalente al término del embarazo y el resultado para prematuros. menos habituales que las anomalías de la señal de la sustancia blanca,

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CAPÍTULO 63 Estudios de neuroimagen neonatal 939

y la lesión de la sustancia gris se manifiesta generalmente como altera- et al., 2006). Por el contrario, un estudio de 76 neonatos prematuros
ciones de los pliegues corticales y el aumento de tamaño de los espacios en el que se empleó un sistema de puntuación similar para valorar las
extracerebrales. En un estudio de 167 neonatos muy prematuros se anomalías de la sustancia gris no encontró ninguna asociación entre
encontraron anomalías de la sustancia gris en la mitad de los neonatos las anomalías de la sustancia gris y el resultado a los 9 años de edad
que consistían en patrones de pliegues corticales anómalos o inmaduros (Iwata et al., 2012). Merece la pena señalar que las alteraciones de los
y/o un aumento de tamaño del espacio subaracnoideo (Woodward pliegues corticales y el aumento de tamaño de los espacios extracerebrales
et al., 2006). Estas anomalías se asociaban a un mayor riesgo de retraso afectan tanto a la sustancia blanca como a la gris. Los pliegues corticales
cognitivo grave, retraso psicomotor y PC a la edad de 2 años, pero en representan probablemente una interacción entre la sustancia gris cortical
menor medida que las anomalías de la sustancia blanca (Woodward y la sustancia blanca subyacente, mientras que el aumento de tamaño de
los espacios extracerebrales puede ser un reflejo de la reducción global
del volumen cerebral que afecta a múltiples tipos de tejidos cerebrales.
TABLA  Recomendaciones de ecografía craneal La literatura sobre las anomalías cerebelosas detectadas en la RM
63.3 según la edad gestacional al nacer estructural y el resultado en los neonatos prematuros es relativamente
escasa, pero la lesión cerebelosa se asocia a un mal resultado del desarro-
EDAD GESTACIONAL AL NACER (SEMANAS) llo neurológico. Los neonatos con lesiones cerebelosas aisladas muestran
23-26 27-29 30-32 33-35 un abanico de déficits del desarrollo neurológico, como discapacidades
motoras graves, anomalías del lenguaje expresivo y receptivo, y déficits
Edad posnatal Días 1, 2 y 3 Día 1 Día 1 Día 1 cognitivos (Limperopoulos et al., 2007). Experimentan además una
a la que debe mayor incidencia de autismo y trastornos del comportamiento (Bros-
realizarse sard-Racine et al., 2015). La lesión cerebelosa aislada también se ha
la ecografía
asociado a una alteración del aumento de volumen regional en el cerebro
craneal
contralateral, con los consiguientes déficits motores, sociales, conduc-
1 semana 1 semana 1 semana 1 semana tuales y del lenguaje (Bolduc et al., 2011; Limperopoulos et al., 2014).
Mientras que la RM estructural a menudo es útil para predecir
2 semanas 2 semanas
el resultado del desarrollo neurológico de los neonatos prematuros,
Cada semana Cada semana 3 semanas 3 semanas una proporción relativamente alta de neonatos sin ningún indicio de
hasta las 31 hasta lesión cerebral (HIV, LPV o HCB) presentan resultados anómalos. Por
semanas las 31 ejemplo, en un estudio, el índice medio de desarrollo mental de los
semanas neonatos prematuros con una RM estructural normal fue de 87, con
una incidencia del 6% de PC (Kidokoro et al., 2014). En un meta­
Cada 2 A las 36
semanas semanas
análisis de la precisión pronóstica de las anomalías en la RM a término
hasta las 36 para predecir el resultado a largo plazo en los neonatos prematuros
semanas (Van’t Hooft et al., 2015), la sensibilidad y la especificidad para predecir
la PC fueron de un 77 y un 79%, respectivamente. Los valores corres-
A término A término A término A término pondientes para predecir el trastorno cognitivo fueron del 66 y el 61%.
Es importante destacar que el análisis se llevó a cabo en un pequeño

TABLA
63.4  Naturaleza y prevalencia de las anomalías de la sustancia blanca en el neonato muy prematuro*

Variables Puntuación 0 Puntuación 1 Puntuación 2 Puntuación 3 Puntuación 4


SUSTANCIA BLANCA CEREBRAL
Lesiones Ninguna Focal unilateral Focal bilateral Unilateral extensa Bilateral extensa
quísticas 94/100 2/0 1/0 2/0 1/0
Anomalía focal Ninguna Puntiforme focal Puntiforme extensa Lineal
de la señal 80/90 13/10 5/0 2/0
Retraso de la SPCI y corona radiada Solo SPCI Mínima, no SPCI
mielinización 67/100 27/0 6/0
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Adelgazamiento Ninguno Parcial Global


del cuerpo (rodilla/cuerpo < 1,3 mm (rodilla/cuerpo < 1,3 mm y esplenio
calloso o esplenio < 2 mm) < 2 mm)
41/82 55/18 4/0
Ventrículos Ambos lados Un lado Ambos lados Ambos lados
laterales DV < 7,5 mm 7,5 mm < DV < 10 mm 7,5 mm < DV < 10 mm o un lado DV > 10 mm
dilatados DV > 10 mm
27/77 20/18 43/5 10/0
Reducción DBPc ≥ 77 mm 77 mm > ABPc ≥ 72 mm 72 mm > ABPc ≥ 67 mm 67 mm > ABPc
del volumen 22/86 31/9 41/5 6/0

*Los datos se muestran como porcentaje de prematuros/porcentaje de controles a término.


ABPc, anchura biparietal corregida; DBPc, diámetro biparietal corregido; DV, diámetro ventricular; SPCI, segmento posterior de la cápsula interna.

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TABLA  Comparación de la ecografía craneal y la resonancia magnética como métodos de predicción del resultado
63.5 motor a los 18-30 meses

Edad en el
Número seguimiento (meses) Sensibilidad Especificidad VPP VPN
Valkama et al., (55) (HIV/LPV/IF grave) EC 51 18 0,67 0,85 0,57 0,89
RM 50 0,82 0,97 0,90 0,95
Woodward et al., (57) (HIV/LPV grave, EC 167 24 0,18 0,95 0,23 0,91
LSB moderada-grave) RM 0,65 0,85 0,31 0,95
de Vries et al., (44) (EC solo) (HIV/LPV-q/IF grave) EC 1.460 24 0,76 0,95 0,48 0,99
de Vries et al., (25) (EC/RM-TEA secuencial) EC 1.691 24 0,57 0,98 0,44 0,99
RM 77 0,92 0,55 0,73 0,90
de Vries et al., (25) (EC, MRI-TEA seriadas EC 77 24 0,79 0,94 0,96 0,69
combinadas) (HIV/LPV-q/IF grave) RM
Mirmiran et al., (56) (LSB moderada-grave; EC 61 30 0,43 0,82 0,33 0,87
lesión focal par.) RM 0,86 0,89 0,60 0,97
Munck et al., (60)a EC 180 24 0,54 0,95 0,47 0,96
RM 0,85 0,78 0,23 0,98
Leijser et al., (7)b EC 32 24 0,75 0,86 0,43 0,96
RM 1,00 0,86 0,43 1,00
Skiold et al., (40) (RM solo) (LSB moderada-grave) RM 107 30 0,60 0,96 0,50 0,98

a
Anomalías mayores: HIV de grados III-IV, hemorragia del parénquima cerebral, quistes de sustancia blanca, señales T1 o T2 anómalas en la corteza, los ganglios basales, el tálamo, el cerebelo o la cápsula
interna, anomalía del cuerpo calloso, anchura del espacio extracerebral de 6 mm o más, ventriculitis.
b
EC grave: LPV multiquística y/o ecodensidades focales dentro de la sustancia blanca; RM muy alterada: cambios de la IS extensos con lesiones hemorrágicas o (pre)quísticas en la sustancia blanca
periventricular, con extensión periventricular y/o subcortical.
EC, ecografía craneal; EET, edad equivalente al término; HIV, hemorragia intraventricular; IF, infarto focal; IS, intensidad de la señal; LPV, leucomalacia periventricular; LPVq, leucomalacia periventricular
quística; LSB, lesión de la sustancia blanca; RM, resonancia magnética; VPN, valor predictivo negativo; VPP, valor predictivo positivo.

número de estudios, con solo dos o tres estudios por categoría de hipocampo del recién nacido se asociaron a puntuaciones menores de la
resultado, destacando la necesidad imperiosa de llevar a cabo más inves- memoria verbal a los 7 años de edad (Thompson et al., 2013). El análisis
tigaciones en esta área. No obstante, la relativa falta de sensibilidad de la volumétrico del cerebro del recién nacido en las RM requiere un software
RM estructural para la identificación de la lesión cerebral en el neonato especializado y, a menudo, la intervención del usuario para garantizar que
prematuro ha llevado a una búsqueda de enfoques más sensibles, como las segmentaciones se hacen correctamente, lo que dificulta el empleo de
los estudios volumétricos, el análisis de las imágenes por difusión y la estas medidas en la práctica clínica rutinaria. Medidas unidimensionales,
RM de conectividad funcional, con la esperanza de encontrar factores más simples, obtenidas mediante RM estructural, guardan una estrecha
predictivos del resultado más sensibles y precisos. relación con los volúmenes y podrían ser útiles en la práctica clínica
Como se ha mencionado anteriormente, el hallazgo del aumento (Nguyen The Tich et al., 2009). Por ejemplo, el diámetro biparietal, que
de tamaño de los espacios extracerebrales en la RM a una edad equi- se relaciona con un volumen cerebral global, es un factor predictivo del
valente al término puede ser un reflejo de un cerebro pequeño debido resultado cognitivo y motor en individuos de 2 años de edad tras el ajuste
a una pérdida de volumen y/o mal crecimiento como consecuencia de de las variables perinatales y el riesgo social (Tich et al., 2011).
una lesión y malnutrición durante el período desde el nacimiento prema-
turo hasta la edad a término. En los estudios de investigación, el volumen Resonancia magnética de difusión
cerebral puede cuantificarse más específicamente, es decir, después de
segmentar el cerebro en las distintas clases de tejido, como la sustancia La RM de difusión es única, ya que proporciona información tanto estruc-
gris cortical, la sustancia blanca, la sustancia gris nuclear profunda, el tural como funcional. La rápida reducción del CDA del agua en el cerebro
tronco encefálico y el cerebelo. Se han descrito alteraciones extensas en asociado con la lesión cerebral aguda refleja una alteración de la «función»
los volúmenes cerebrales de los neonatos prematuros estudiados a edad cerebral en el sentido de que esta reducción tiene lugar minutos después de
equivalente al término del embarazo (Huppi et al., 1998b), y algunos la lesión, un marco temporal mucho menor que el de los cambios estruc-
estudios han relacionado cambios en el volumen con el resultado del turales que pueden detectarse posteriormente con el análisis histológico.
desarrollo neurológico. En el seguimiento a corto plazo (< 2 años), el tras- Para esta discusión, nos centramos más en la información microestructural
torno del desarrollo neurológico se asocia a volúmenes reducidos de sus- disponible mediante las imágenes de difusión. Esta información se aplica
tancia gris cortical y nuclear profunda, un mayor volumen de LCR (Inder más habitualmente a la sustancia blanca y se codifica como anisotropía de
et al., 2005; Young et al., 2015), un volumen reducido de sustancia blanca difusión. Tradicionalmente, una mayor anisotropía se considera un reflejo
(Peterson et al., 2003), un volumen reducido del hipocampo (Beauchamp de una sustancia blanca «más sana» o más «ordenada».
et al., 2008; Thompson et al., 2008), un volumen reducido del tejido Durante el desarrollo temprano cerebral, los coeficientes de difusión
cerebral total (Woodward et al., 2005) y un volumen cerebeloso reducido globales del agua disminuyen de forma constante, más probablemente
(Van Kooij et al., 2012a). A los 5 años, se encontró una relación entre un como un reflejo de la reducción en el contenido de agua del cerebro que
volumen cerebeloso reducido y peores habilidades motoras y de la función acompaña a la maduración. Por otro lado, los valores de la anisotropía
ejecutora (Lind et al., 2010). Por último, volúmenes más pequeños del de difusión en la sustancia blanca aumentan durante el desarrollo en

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CAPÍTULO 63 Estudios de neuroimagen neonatal 941

relación con la mielinización (Huppi et al., 1998a; Neil et al., 1998). de la sustancia gris nuclear profunda afecta a los núcleos profundos de la
Como se ha mencionado anteriormente, la lesión más habitual de sustancia gris y a la corteza perirrolándica, que puede profundizar en la
la sustancia blanca en los neonatos prematuros se caracteriza por los corteza en los casos graves. El patrón de la zona marginal supone la lesión
cambios difusos de la sustancia blanca. Esta lesión difusa se define en las áreas de esta zona situadas entre las arterias cerebrales anterior y
según su análisis histológico (Volpe, 2009a), pero las imágenes de media de la parte anterior y las arterias cerebrales media y posterior de
difusión proporcionan pruebas adicionales de su presencia al mostrar la parte posterior. La lesión de la zona marginal puede ser unilateral o
la reducción global de los valores de la anisotropía de difusión en la bilateral y afecta a la zona marginal anterior, la zona marginal posterior
sustancia blanca de los neonatos prematuros (Huppi et al., 2001). o a ambas. Afecta en primer lugar a la sustancia blanca, pero puede
Las anomalías de difusión también se han relacionado con los resul- extenderse hacia la sustancia gris cortical en los casos graves. Un ejemplo
tados del desarrollo neurológico. En los recién nacidos evaluados antes de cada categoría de lesión se muestra en la figura 63.17. Desde un punto
de los 2 años de edad, unos valores de coeficiente de difusión altos de vista clínico, las dos formas de lesión tienden a asociarse a distintas
en la sustancia blanca (Kaukola et al., 2010) y el cerebelo (Brouwer situaciones clínicas. El patrón de lesión de la zona marginal suele ocurrir
et al., 2014) se asociaron a peores resultados motores. Los valores de la tras un parto normal con una reanimación mínima, puntuaciones de
anisotropía de la sustancia blanca, especialmente en el segmento pos- Apgar relativamente buenas y un pH del cordón umbilical mayor de 7.
terior de la cápsula interna y el cuerpo calloso, también se asociaron Durante el período posnatal, el patrón de lesión de la zona marginal se asocia
a malos resultados motores (Arzoumanian et al., 2003; Drobyshevsky habitualmente a debilidad de la extremidad proximal, hipotonía troncal y
et al., 2007; Rose et al., 2009; van Kooij et al., 2012b; Chau et al., 2013; una incidencia relativamente alta de crisis epilépticas. En fases posteriores de
De Bruine et al., 2013). En los estudios longitudinales de los niños la vida, este patrón de lesión se asocia a trastornos fundamentalmente
prematuros desde los 4 hasta los 7 años, los valores de CDA altos en cognitivos con menos déficits de la función motora (Miller et al., 2005).
el área orbitofrontal derecha se han asociado a problemas sociales y Por otro lado, el patrón de lesión de la sustancia gris nuclear profunda
emocionales (Rogers et al., 2012), y valores altos de CDA en las regiones suele ocurrir tras un episodio centinela (p. ej., prolapso de cordón, des-
del polo occipital y el cerebelo se asociaron a un trastorno de la función prendimiento de placenta o desgarro uterino) con un Apgar bajo y
ejecutora y motora (Thompson et al., 2014). Además, valores bajos de un pH del cordón umbilical menor de 7. Estos neonatos presentan
anisotropía en el segmento posterior de la cápsula interna se asociaron una encefalopatía más profunda y pueden mostrar síntomas y signos
a un mal resultado motor a la edad de 4 años (Rose et al., 2007). de insuficiencia multiorgánica, incluidos el corazón, los riñones y el
En los estudios mencionados anteriormente, una anisotropía baja de hígado. Durante el período posnatal a menudo están hipotónicos y se
la sustancia blanca se asoció con un mal resultado, pero esa relación no es alimentan mal. El trastorno neurológico consiguiente tiende a ser más
universal. En un estudio de niños prematuros evaluados a los 2 años de intenso en estos pacientes y depende de la extensión de la lesión, como
edad, una anisotropía más baja en el lóbulo temporal inferior derecho, pero han señalado Martinez-Biarge et al. (2010). Además, la anomalía de la
una anisotropía más alta en el lóbulo temporal inferior izquierdo, se señal en el segmento posterior de la cápsula interna en la RM tiene una
asociaron a puntuaciones motoras más bajas. En otro estudio, una estrecha relación con el déficit motor consiguiente en estos neonatos
anisotropía más baja en el cíngulo izquierdo se asoció a mejores habi- (Martinez-Biarge et al., 2011). Es importante recordar que, mientras los
lidades sociales y emocionales (Rogers et al., 2016). Estos resultados patrones descritos aquí se asocian habitualmente a una lesión hipóxico-
son compatibles con estudios de difusión en individuos de más edad isquémica, existen patrones similares asociados a otras causas, como
con autismo y otros trastornos del desarrollo (Cheon et al., 2011). Las meningitis (Hernandez et al., 2011) y trastornos metabólicos (Johnston
alteraciones microestructurales que subyacen a estos resultados opues- y Hoon, 2000). Por tanto, la presencia de cualquiera de estos patrones en
tos no se comprenden completamente. Se ha planteado la hipótesis la RM puede ser compatible con una lesión hipóxico-isquémica, pero no
de que la disminución de las ramificaciones de los axones o un menor prueba que haya ocurrido, por lo que el profesional debe ser cauteloso.
número de fibras en el tracto de interés pueden llevar a anisotropías Además de los hallazgos detectados en las imágenes convencionales y
más altas en las áreas lesionadas de la sustancia blanca. de difusión, la espectroscopia también puede proporcionar información
sobre el pronóstico. Un aumento del lactato y una disminución de los
Neonatos a término NAA son los cambios más significativos que se observan. El lactato
puede detectarse en las 24 h posteriores a la lesión, y los NAA empiezan
Encefalopatía neonatal a disminuir después de 48 h (Barkovich et al., 1999). Se observan cifras
elevadas de lactato durante meses tras la lesión, por lo que su presencia
Entre las indicaciones clínicas para los estudios de neuroimagen en los no es siempre indicativa de lesión aguda, aunque la persistencia de la
neonatos a término, la presencia de encefalopatía neonatal es la más señal del lactato conlleva un peor pronóstico (Miller et al., 2002). En
habitual. La encefalopatía neonatal se ha definido como «un síndrome un metaanálisis de 32 estudios que reunió a 806 recién nacidos con
de alteración de la función neurológica definido por el cuadro clínico en encefalopatía neonatal, el cociente lactato/NAA en la sustancia gris pro-
los primeros días de vida del recién nacido a término, que se caracteriza funda es muy preciso como factor pronóstico de discapacidad, con una
por dificultad para iniciar y mantener la respiración, disminución del sensibilidad combinada del 82% y una especificidad del 92% (Thayyil
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tono y los reflejos, alteración del nivel de conciencia y a menudo crisis et al., 2010). Aunque este valor ha resultado útil para predecir el falle-
epilépticas» (Nelson y Leviton, 1991). Afecta a 2-6 de cada 1.000 nacidos cimiento o una discapacidad grave, las pruebas de imagen anatómicas
vivos, tiene una mortalidad del 15-20%, y el 25% de los supervivientes más detalladas pueden ayudar a refinar la información del pronóstico.
presentan una discapacidad grave. Es importante recordar que no todas Un estudio llevado a cabo en neonatos a término que se sometieron
las encefalopatías neonatales están causadas por una isquemia intraparto a RM convencional y de difusión, y a espectroscopia en los ganglios
(Kurinczuk et al., 2010). Se ha calculado que del orden del 40% se deben basales a una media de 4 días de vida mostró que la combinación de
a otras causas, como infección, accidente cerebrovascular o trastornos los valores cuantitativos de CDA, lactato/NAA o ambos mejoraba el
metabólicos y genéticos (Shah et al., 2006). Entre los patrones habituales poder predictivo de la radiología convencional para predecir un mal
de la lesión cerebral en el neonato a término con encefalopatía se encuen- resultado del desarrollo neurológico (para el lactato/NAA, el área bajo
tran la lesión global difusa, la lesión de la sustancia gris nuclear profunda, la curva [AUC] = 0,85 y P = 0,006; para los valores de CDA de los
la lesión del tronco encefálico, la lesión de la zona marginal, la lesión de la ganglios basales, AUC = 0,93 y P < 0,001) (Alderliesten et al., 2011).
sustancia blanca periventricular y el infarto localizado. De estos, la lesión de Distintas técnicas radiológicas (EC, TC y RM) proporcionan
la sustancia gris nuclear profunda (el 25-75% de los casos) y la lesión de la información diferente en los pacientes con encefalopatía neonatal. La
zona marginal (el 15-45% de los casos) son las más habituales (Barkovich tabla 63.6 muestra los datos del Vermont Oxford Neonatal Encephalo-
et al., 1998; Task Force on Neonatal Encephalopathy, 2014). La lesión pathy Registry sobre la aplicación clínica de estas técnicas (Task Force on

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• Figura 63.17  Patrones habituales de la lesión cerebral. Imágenes de difusión obtenidas a los 2-4 días
de la lesión en las que las áreas de lesión aparecen brillantes (flecha). A. Lesión de la zona marginal,
predominantemente en las áreas de la zona marginal anterior y posterior del hemisferio izquierdo.
B. Lesión talámica de los ganglios basales (flecha).

TABLA
63.6  Técnicas de neuroimagen en 1.421 recién nacidos del Vermont Oxford Neonatal Encephalopathy Registry

Ecografía Tomografía computarizada Resonancia magnética


Número de recién nacidos 729 (51%) 477 (34%) 1.074 (75%)
42% del total 28% del total 63% del total
Media (DE) de edad (días) en la primera exploración 3,1 (4,4) 3,2 (3,5) 7,3 (8,7)
Alterado 232 (32%) 271 (57%) 717 (67%)
Hemorragia
  HIV/SE 56 (8%) 59 (12%) 79 (7%)
  Extraaxial 24 (3%) 165 (35%) 212 (20%)
  Parenquimatosa 37 (5%) 57 (12%) 105 (10%)
Lesión nuclear profunda de la sustancia gris 70 (10%) 50 (10%) 309 (29%)
Lesión de la sustancia blanca 16 (2%) 15 (3%) 271 (25%)

DE, desviación estándar; HIV, hemorragia intraventricular; SE, hemorragia subependimaria.

Neonatal Encephalopathy, 2014). Obsérvese que las tres técnicas siguen el respaldo de la American Academy of Pediatrics) sugiere que la infor-
siendo bastante usadas. Obsérvese también que la media de tiempo para mación referente al momento probable de lesión es más fácil de obtener
realizar la prueba varía según la técnica, de forma que la EC y la TC con las pruebas tempranas (durante las primeras 24-96 h de vida) con
se realizan a una media de edad de 3 días de vida, mientras que para la RM un seguimiento para definir todas las características de las anomalías,
la media son 7 días. Probablemente se trate de un reflejo de una mayor idealmente a los 10 días de vida (pero con un período ventana aceptable
complicación logística para trasladar al neonato a la sala de RM para la de 7-21 días de vida) (American College of Obstetricians and Gyneco-
prueba. Sin embargo, la RM supera tanto a la EC como a la TC en la logists, 2014). Esta recomendación se ve apoyada por el hallazgo de que
detección de anomalías, y detecta la lesión en el 67% de los casos, en la extensión de la lesión puede cambiar en los neonatos hasta un 20%
comparación con el 32 y el 57%, respectivamente. Cabe destacar que entre las imágenes obtenidas entre los días 3-4 y las obtenidas más tarde
las lesiones adicionales detectadas en la RM tienen relevancia clínica. (> 7 días), especialmente en neonatos con hipoglucemia y lesiones de
Mientras que la EC y la TC muestran una sensibilidad especial para la la sustancia gris nuclear profunda de moderadas a graves (Chakkarapani
hemorragia intraventricular y extraaxial, la RM es mucho más sensible et al., 2016). Sin embargo, desde un punto de vista práctico, a menudo
a la lesión de la sustancia gris nuclear profunda y de la sustancia blanca solo es posible realizar una única RM. En ese caso, recomendamos que
(p. ej., lesión de la zona marginal). En los neonatos con encefalopatía la prueba se realice después de la primera semana tras la lesión inicial y
neonatal, el American College of Obstetricians and Gynecologists (con tan tarde como sea posible. Por último, puede ser útil realizar una RM

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antes de los 3-4 días en algunos casos, por ejemplo, para confirmar la El síntoma inicial en recién nacidos suele ser crisis epilépticas y/o encefa-
ausencia de lesión en los neonatos para los que se está contemplado un lopatía. Entre los factores de riesgo de la trombosis del seno venoso están
recalentamiento temprano (a menudo en relación con una exploración la encefalopatía hipóxico-isquémica, un parto complicado, un embarazo
normal y una electroencefalografía). Otro ejemplo sería para confirmar complicado, deshidratación, prematuridad, cardiopatía congénita, sepsis
la gravedad de la lesión en los neonatos con encefalopatías profundas y anomalías protrombóticas (Moharir et al., 2011). Desde el punto de
en los que se está considerando un replanteamiento del tratamiento. vista radiológico, la trombosis del seno venoso suele detectarse en un
En este caso, es muy probable que la RM de difusión muestre la lesión primer momento mediante EC o RM como una HIV con o sin hemo-
desde su inicio y la espectroscopia por RM (cociente lactato/NAA) sea rragia talámica asociada (fig. 63.18). En ocasiones, la presencia de un
informativa. coágulo en un seno puede observarse como un área de alta intensidad de
la señal (brillante) en las imágenes ponderadas en T1. Cuando aparecen
Trombosis del seno venoso estos hallazgos, la fleborresonancia es muy útil para perfilar la trombosis,
y es relativamente habitual la afectación de múltiples senos y venas. La
Las técnicas de neuroimagen son necesarias para la detección de la identificación de la extensión de la trombosis es importante, ya que es
trombosis del seno venoso, así como para seguir la respuesta del paciente un trastorno tratable y es habitual emplear tratamiento anticoagulante
al tratamiento. La trombosis del seno venoso es menos frecuente que la (con precaución, en presencia de una lesión hemorrágica significativa).
encefalopatía neonatal y tiene una incidencia de 2-12 de cada 100.000. La fleborresonancia proporciona un medio para evaluar la respuesta al
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• Figura 63.18  Imágenes de un recién nacido a término con trombosis del seno. A. Ecografía craneal
(EC) frontal con una hemorragia talámica de apariencia brillante (flecha). B. Vista parasagital del ven-
trículo lateral izquierdo. Obsérvense la hemorragia talámica (flecha) y la presencia de sangre en el asta
occipital del ventrículo (punta de flecha). C. Corte frontal ponderado en T1 de una resonancia magnética
(RM) correspondiente a la EC expuesta en A. La hemorragia talámica tiene un aspecto brillante (flecha).
D. Corte axial ponderado en T2 de una RM en el que la hemorragia tiene un aspecto oscuro. Obsérvense
la hemorragia talámica (flecha) y la presencia de sangre en los ventrículos laterales (puntas de flecha).

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tratamiento anticoagulante, y suelen realizarse pruebas de seguimiento y deVeber, 2009). Tiene una incidencia de alrededor de 1 de cada
unas semanas después del inicio del tratamiento. 5.000 nacidos vivos, lo que lo convierte en mucho más habitual que la
trombosis del seno venoso. Como se ha descrito con detalle anterior-
Accidente cerebrovascular mente, el aspecto del accidente cerebrovascular cambia con el tiempo.
Al comienzo, es más fácil de detectar mediante RM de difusión, y
El accidente cerebrovascular perinatal se ha definido como una lesión posteriormente es visible en las imágenes ponderadas en T1 y T2
cerebral isquémica focal secundaria a una oclusión vascular (Kirton (fig. 63.19). En el caso del accidente cerebrovascular no hemorrágico,

• Figura 63.19  Imágenes de un recién nacido a término que presentó episodios de contracciones rítmicas
de las extremidades derechas superior e inferior con desviación ocular hacia la derecha a las 24 h de vida
aproximadamente. Obsérvese el área de accidente cerebrovascular en la imagen de difusión a los 2 días
de vida (arriba a la izquierda), que tiene un aspecto brillante (que representa un coeficiente de difusión
aparente bajo). Obsérvese también que la lesión es visible en las imágenes ponderadas en T2 (arriba a
la derecha), en este caso como una pérdida del lazo cortical (flecha). El asterisco en cada imagen señala
un área de artefacto de la susceptibilidad magnética. Las imágenes inferiores se obtuvieron a la edad de
3 semanas. Obsérvese que la lesión ya no es detectable en la imagen de difusión (abajo a la izquierda),
sino que ahora es un área de encefalomalacia en la imagen ponderada en T2 (abajo a la derecha; flecha).

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la RM es considerablemente más sensible que la EC o la TC, lo que similares. Por ejemplo, en neonatos con una oclusión de la arteria
convierte a la RM en la técnica radiológica de elección. Dado que cerebral media, la hemiparesia solo se presenta en el 26% de los niños
los signos neurológicos focales son relativamente poco frecuentes en hacia los 2 años de edad, aunque este número aumenta hasta el 50-70%
los recién nacidos con accidente cerebrovascular, no es infrecuente que los cuando la RM muestra afectación del tracto corticoespinal (Husson
accidentes cerebrovasculares perinatales pasen desapercibidos hasta un et al., 2010).
momento posterior durante el primer año de vida, momento en el que
los déficits neurológicos (generalmente hemiparesia) se hacen obvios. Malformación de la vena de Galeno
En un estudio de 248 neonatos con accidente cerebrovascular arterial
isquémico, parte del International Pediatric Stroke Study (Kirton La malformación de la vena de Galeno es la malformación arteriovenosa
et al., 2011), el 72% debutaron con crisis epilépticas y el 63% con más habitual en el recién nacido, y la mayoría se identifican durante
signos neurológicos no focales. Una vez se ha detectado el accidente el período neonatal. La malformación se asocia a la dilatación de la
cerebrovascular, debe considerarse la angiorresonancia para definir con vena de Galeno y el seno que se extiende hasta el tórculo (fig. 63.20).
detalle la anatomía de la lesión. En el International Pediatric Stroke El síntoma inicial en los recién nacidos suele ser hidrocefalia debida
Study (Kirton et al., 2011), los infartos afectaban preferentemente a a la compresión del acueducto cerebral o a insuficiencia cardíaca de
la circulación anterior y al hemisferio izquierdo, y eran multifocales alto gasto. Las crisis epilépticas también son habituales. El pronóstico
en el 30% de los neonatos. Las causas del accidente cerebrovascular depende del tamaño de la malformación, la edad del diagnóstico y un
neonatal no suelen conocerse, y solo se han identificado anomalías buen resultado de la neurocirugía.
cardíacas y protrombóticas en menos del 20% de los recién nacidos.
La investigación sobre el resultado neurológico tras el accidente cere- Infección
brovascular es relativamente escasa (Lehman y Rivkin, 2014), aunque
la experiencia clínica sugiere que los neonatos muestran una capacidad El aspecto de la infección en las pruebas radiológicas es notablemente
de recuperación mucho mayor que los adultos que presentan lesiones diverso y no solo varía en función del agente infeccioso, sino que
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• Figura 63.20  Imágenes de un recién nacido a término con una malformación de la vena de Galeno.
A y B. Obsérvese el amplio vacío de flujo en las imágenes ponderadas en T2. C. Angiograma corres-
pondiente. (Imágenes por cortesía del Dr. Bob McKinstry.)

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946 PA RT E XI I Sistema nervioso

TABLA  Hallazgos de la resonancia magnética característico en la RM. Como se ha mencionado anteriormente, la


63.7 en infecciones neonatales meningitis bacteriana puede ser muy similar a la lesión hipóxico-
isquémica (Hernandez et al., 2011). Las anomalías características
Infección Hallazgos asociadas a la infección congénita por citomegalovirus se muestran
Meningitis Lesión de los ganglios basales
en la figura 63.21. La marcada predilección del parechovirus (que se
bacteriana Lesión de la zona marginal adquiere tras el nacimiento) por la sustancia blanca es evidente en la
Trombosis del seno venoso figura 63.22.
Infarto (puede ser multifocal)
Absceso Otras hemorragias intracraneales
Empiema extraaxial
Ventriculomegalia Además de las HIV descritas en detalle con anterioridad en los neonatos
prematuros, los otros tipos principales de hemorragia intracraneal
Citomegalovirus Calcificaciones (periventriculares y corticales) neonatal que tienen importancia clínica son: 1) hemorragia epidural;
(congénito) Malformaciones corticales (lisencefalia, 2) hemorragia subdural, incluidas las hemorragias subdurales de la
polimicrogiria, heterotopias) fosa posterior; 3) hemorragia subaracnoidea primaria, y 4) otras
Ventriculomegalia
formas de hemorragias intraparenquimatosas (no cerebelosas). La
Hipoplasia cerebelosa
incidencia aproximada, la localización anatómica del sangrado,
Leucomalacia periventricular
Porencefalia
la frecuencia relativa en los neonatos prematuros frente a los a tér-
mino, y la habitual gravedad clínica de estas hemorragias, incluidas
Toxoplasmosis Necrosis cerebral difusa la HCB y la HIV, se describen en la tabla 63.8.
(congénita) Porencefalia Ha sido un desafío determinar la incidencia de hemorragia intra-
Hidranencefalia craneal, ya que la mayoría de los estudios se han centrado en los
Calcificaciones cerebrales difusas recién nacidos sintomáticos y algunas hemorragias son asintomáticas.
Necrosis periventricular En un pequeño estudio de recién nacidos sintomáticos, la inciden-
Hidrocefalia cia estimada fue de 4,9 por cada 10.000 nacidos vivos (Hanigan
Rubéola Calcificación periventricular y de los ganglios basales et al., 1995). Los datos epidemiológicos más amplios se encuentran
(congénita) Ventriculomegalia en la Californian Perinatal Database, que recoge los registros de la
Lesiones multifocales de la sustancia blanca madre y el neonato en el momento del alta hospitalaria para 600.000
Leucoencefalopatía recién nacidos (2.500-4.000 g) de mujeres nulíparas. En este estudio,
Quistes subcorticales la incidencia de hemorragia intracraneal sintomática asociada a un par-
Las malformaciones corticales son poco frecuentes to espontáneo fue de 1 de cada 1.900 nacimientos, la extracción con
ventosa se realizó en 1 de cada 860 nacimientos, y la extracción
Varicela Necrosis cerebral difusa
con fórceps en 1 de cada 664 nacimientos (Towner et al., 1999). Por
(congénita) Hipoplasia cerebelosa
Malformaciones corticales, como la paquigiria
el contrario, estudios más recientes que empleaban la RM en recién
nacidos asintomáticos durante el primer mes de vida han revelado
Herpes simple Microcefalia con gran pérdida de volumen una frecuencia mucho mayor de hemorragia intracraneal. Un estudio
(congénito) prospectivo de gran tamaño descubrió una prevalencia de hemorragia
subdural del 8% en esta población (Whitby et al., 2004; Rooks
Herpes simple Temprano
(periparto/ et al., 2008). Un segundo estudio de 88 neonatos asintomáticos
Lesión multifocal
posnatal) nacidos por vía vaginal a los que se realizó una RM entre las edades
La anomalía de la señal puede limitarse
de 1 y 5 semanas mostró 17 neonatos a término con hemorragia intra-
a los lóbulos temporales, al cerebelo o al tronco
encefálico (puede ser hemorrágico)
craneal, una prevalencia en el estudio del 26% (Looney et al., 2007).
Lesión de los ganglios basales Estos hallazgos sugieren que la hemorragia intracraneal asintomática
Lesión de la zona marginal en los recién nacidos a término es más frecuente de lo que se había
pensado anteriormente.
Tardío
Con estas limitaciones sobre la incidencia de la hemorragia
Encefalomalacia multiquística intracraneal en mente, la tabla 63.8 proporciona un resumen de la
Pérdida de volumen de la sustancia gris y blanca
localización, la incidencia y los resultados clínicos habituales de los
Calcificación
principales tipos de hemorragia. Obsérvese que la hemorragia sub-
Zika (congénito) Malformaciones corticales (lisencefalia, dural es más frecuente en el neonato a término que en el prematuro
heterotopias, polimicrogiria) y con frecuencia es asintomática, aunque puede revestir gravedad
Calcificaciones parenquimatosas clínica si es extensa. La hemorragia subaracnoidea primaria es más
Ventriculomegalia frecuente en el neonato prematuro que en el neonato a término y
Disgenesia del cuerpo calloso es bastante habitual, pero casi siempre es benigna. La HCB es más
Hipoplasia cerebelosa frecuente en el neonato prematuro que en el neonato a término y
Hipoplasia del tronco encefálico puede tener consecuencias en el desarrollo, como se ha comentado
Parechovirus Lesión difusa de la sustancia blanca sin afectación anteriormente. Como también se ha mencionado anteriormente, la
(neonatal) cortical HIV, una lesión casi exclusiva de los neonatos prematuros, afecta al
resultado del desarrollo. Recientemente, la HIV se ha reconocido
más habitualmente en el recién nacido a término, especialmente en
relación con trombosis del seno venoso y/o lesión cerebral hipóxico-
también puede presentar aspectos diferentes con el mismo agente isquémica. Otras formas de hemorragia intraparenquimatosa, más
infeccioso (tabla 63.7). Por ejemplo, la lesión cerebral asociada a una frecuentes en el neonato a término que en el prematuro, son poco
meningitis bacteriana incluye lesión de la zona marginal, oclusión comunes.
arterial con accidente cerebrovascular, trombosis capilar con áreas de Las tres principales técnicas radiológicas cerebrales (EC, TC y
lesión más pequeñas y trombosis del seno venoso, todas ellas de aspecto RM) tienen diferentes sensibilidades a la hora de detectar la hemo-

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CAPÍTULO 63 Estudios de neuroimagen neonatal 947

• Figura 63.21  Neonato de 16 días nacido después de 31 semanas de gestación con una infección
congénita por citomegalovirus identificada intraútero. A. El corte axial de una resonancia magnética
(RM) ponderada en T1 muestra un aumento de la señal en las regiones periventriculares (flechas cortas),
compatible con calcificación y polimicrogiria difusa (flecha larga). B. Obsérvese la sorprendente hipo-
plasia cerebelosa (flechas). C. A los 6 meses de edad, el corte axial de la RM ponderada en T2 muestra
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una polimicrogiria frontal difusa (flechas largas), una intensidad de la señal anormalmente alta en la
sustancia blanca cerebral (flechas negras cortas) y una marcada escasez de sustancia blanca cerebral
parietooccipital (flechas blancas dobles). (Por cortesía del Dr. Omar Khwaja.)

rragia. Como se ha mencionado, la EC es la técnica de elección noidea y extradural) (Pfister et al., 2012; Barnette et al., 2014). Las
para evaluar la HIV en neonatos prematuros debido a la facilidad para recomendaciones prácticas para neonatos con traumatismos en el
su realización seriada en neonatos en estado crítico. No obstante, la nacimiento y un hematocrito bajo o una coagulopatía publicados
EC no es la técnica de elección para todas las formas de hemorragia. en el 2002 por la American Academy of Neurology recomiendan
En un estudio que analizaba 4.171 recién nacidos a término, se la TC (Ment et al., 2002) basándose en los datos arrojados por dos
realizó EC a 2.006 pacientes, TC a 933 pacientes y RM a 2.690 estudios pequeños sobre diagnósticos de hemorragias intracraneales
pacientes. Aunque la EC identificó bien la HIV, le faltaba la sen- con TC que llevaron a intervenciones (Odita y Hebi, 1996; Perrin
sibilidad de la RM y la TC para la identificación de otros tipos de et al., 1997). Aunque los autores no fueron capaces de determinar el
hemorragia y lesión intracraneal, y mostró una limitación especial impacto de los hallazgos radiológicos en los neonatos que precisaron
para la detección de la hemorragia extraaxial (subdural, subarac- una intervención quirúrgica, tan solo se sometió a cirugía del sistema

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• Figura 63.22  Infección por parechovirus en un neonato. Imágenes de una resonancia magnética
ponderada en T2 (A) y de difusión (B) obtenidas 6 días después de la aparición de la infección por
parechovirus humano en un neonato. C. Imagen ponderada en T1 obtenida a los 3 meses. Obsérvense
las múltiples lesiones puntiformes de la sustancia blanca (A, flechas) y la alteración de la difusión
(B, las áreas con un coeficiente de difusión aparente bajo se ven brillantes) en la sustancia blanca
periventricular que afecta a la radiación óptica y la cápsula interna. Obsérvese también que las áreas
de alta intensidad de la señal en la sustancia blanca periventricular aparecen a los 3 meses de edad,
lo que sugiere gliosis (C). (Adaptado de Verboon-Maciolek MA, Groenendaal F, Hahn CD, et al. Human
parechovirus causes encephalitis with white matter injury in neonates. Ann Neurol. 2008;64:266–273.)

nervioso central a 9 de los 933 neonatos a los que se les realizó una Hemorragia subdural
TC. Debido a los riesgos derivados de la exposición a la radiación
en la TC, sugerimos recurrir a la RM cuando esté disponible, para la La RM es más eficaz que la TC en la definición de la hemorragia
detección de la hemorragia extraaxial. El empleo de la RM tiene el subdural de la fosa posterior (Barkovich, 2005). Aunque se han dado
beneficio adicional de una mejor sensibilidad para detectar la lesión casos, generalmente es difícil detectar un hematoma subdural mediante
parenquimatosa que la TC. El desarrollo de una secuenciación más ecografía. Es más, incluso cuando se detectan estos hematomas, la
rápida en la RM que permita acortar la duración de la prueba para RM y la TC suelen mostrar mejor la extensión y la distribución de las
detectar la hemorragia cerebral debería mejorar la comodidad del lesiones supratentoriales, y las lesiones infratentoriales se detectan mejor
médico y convertirla en la prueba de elección. con la RM. Además, la inmensa mayoría de los hematomas subdurales

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TABLA
63.8  Hemorragia intracraneal

Hemorragia Incidencia (%) Localización de la sangre Prematuro o a término Resultado clínico habitual
Extradural (epidural) Muy infrecuente Entre el cráneo y por fuera de la duramadre AT > PM Variable
Subdural 5-25 Entre la duramadre y la aracnoides AT > PM Benigno
Subaracnoidea 1-2 AT Entre la aracnoides y la piamadre PM > AT Benigno
10 PM
Cerebelosa 0,1 AT Hemisferios cerebelosos y/o vermis PM > AT Grave
5 PM
Intraventricular 0,2 AT Interior de los ventrículos o infarto hemorrágico PM > AT Grave
15 PM periventricular
Parenquimatosa 0,1 AT Parénquima cerebral AT > PM Variable
2-4 PM

AT, a término; PM, prematuro.

para descartar una meningitis). La exclusión de las causas de sangrado


en el espacio subaracnoideo relativamente frecuentes (p. ej., extensión
de una hemorragia subdural, cerebelosa o HIV) y menos frecuentes
(p. ej., tumor, lesiones vasculares) es más fácil con la RM.
La ecografía no tiene sensibilidad para detectar la hemorragia
subaracnoidea, dado el aumento normal de la ecogenicidad en la
periferia del cerebro (Shackelford y Volpe, 1985). Una hemorragia
subaracnoidea extensa distiende en ocasiones la cisura de Silvio, lo que
la hace detectable, pero debe prestarse atención para no confundir una
cisura de Silvio dilatada debido a un sangrado con una cisura ancha
que se observa habitualmente en los neonatos prematuros y que es
el resultado de la separación normal del opérculo frontal y la región
temporal superior hasta la última fase del embarazo (Chamnanvanakij
y Perlman, 1999).

Métodos que aún no se usan en la práctica


clínica
Interpretación cuantitativa de la resonancia
magnética
Casi invariablemente, la RM se somete a interpretación cualitativa
en la práctica clínica. Sin embargo, se han ideado algunos sistemas
• Figura 63.23  Hemorragia subdural tentorial con disposición sanguí-
nea a lo largo de ambas hojas de la tienda y la hoz posterior. (Adaptado de
cuantitativos de puntuación (v. tabla 63.4), aunque ninguno ha sido
Castillo M, Fordham LA. MR of neurologically symptomatic newborns after universalmente aceptado. La mayoría de estos sistemas se basan en
vacuum extraction delivery. AJNR Am J Neuroradiol. 1995;16:816–818.) características de las imágenes convencionales ponderadas en T1 y
T2; algunos tienden a centrarse en la pérdida de volumen cerebral, y
otros en la anomalía de la señal. Dado que la lesión cerebral durante
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el período neonatal puede llevar tanto a problemas en el crecimiento


son infratentoriales, lo que supone para la ecografía más problemas para del cerebro (volumen pequeño) como a lesión en el tejido afectado
un diagnóstico preciso (fig. 63.23). (anomalía de la señal en la RM), es útil tener en cuenta ambos en
el sistema de puntuación. Para complicar aún más las cosas, algunos
sistemas de puntuación se centran en áreas relativamente limitadas,
Hemorragia subaracnoidea como la sustancia blanca, sin tener en cuenta la sustancia gris cortical,
El diagnóstico de la hemorragia subaracnoidea primaria suele hacer- la sustancia gris nuclear profunda y/o la fosa posterior. Un sistema de
se por RM o TC y, en escasas ocasiones, por ecografía (Barnette puntuación más amplio tendría que tener en cuenta tanto la pérdida de
et al., 2014). En la TC puede ser difícil distinguir entre la atenuación volumen como la anomalía de la señal en todo el cerebro y el cerebelo
normal o ligeramente aumentada en las regiones de la hoz cerebral y (Kidokoro et al., 2013).
los senos venosos mayores, y la mayor atenuación provocada por la
hemorragia subaracnoidea. En ocasiones, la posibilidad de una hemo- Cartografía cortical
rragia subaracnoidea primaria se plantea inicialmente por el hallazgo
de un número elevado de eritrocitos y un alto contenido en proteínas Además de los sistemas de puntuación mencionados, la cartografía
en el LCR, que normalmente se ha obtenido con otro propósito (p. ej., cortical proporciona un método para cuantificar las RM. La carto-

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950 PA RT E XI I Sistema nervioso

grafía cortical implica el análisis de la superficie cortical. Con este constituye la base de la RM funcional, en la que las imágenes de sus-
enfoque, se genera una superficie a partir de las imágenes conven- ceptibilidad magnética se obtienen antes, durante y después de que
cionales y se miden un cierto número de parámetros de referencia un individuo realice una tarea. La señal de la RM en estos estudios se
con el fin de determinar rasgos de la topografía cerebral. Uno de los considera una señal dependiente del nivel de oxigenación sanguínea,
más habituales es el área de la superficie cortical, que aumenta drás- o BOLD. Las áreas de activación neuronal se detectan como áreas de
ticamente durante el período posnatal inmediato en los neonatos aumento de intensidad de la señal BOLD durante la realización de la
prematuros. Un segundo parámetro es el índice de circunvolución, tarea. Se puede pensar que este enfoque particular no es muy útil para
una proporción de áreas de superficie: el numerador es el área de la el estudio de los neonatos, que no son especialmente aficionados a
superficie cortical, y el denominador es el área del casco cerebral, que realizar tareas bajo demanda, pero existe una variante de este método
puede imaginarse como el área de superficie de un film empleado que puede emplearse para identificar redes neuronales en reposo o
para envolver el cerebro (Van Essen, 2005). En un cerebro com- incluso durante el sueño. Aunque aún no se conoce completamente
pletamente liso, lisencefálico, el índice de circunvolución sería de 1. la neurofisiología exacta de este método, probablemente se deba a
A medida que aumenta el número y la profundidad de los pliegues cambios espontáneos y graduales en los índices de activación neuronal
corticales, el índice de circunvolución aumenta. Cabe esperar que este locales. Estos cambios tienen lugar durante decenas de segundos o
índice aumente durante el desarrollo normal del cerebro (Shimony minutos y se asocian a cambios equivalentes en la señal BOLD local. Si
et al., 2016). En lo que respecta al área de superficie cortical, el dos regiones cerebrales están conectadas, estos cambios graduales en el
índice de circunvolución se ve afectado por un parto prematuro y es índice de activación, y, por tanto, cambios en la intensidad de la señal
menor en neonatos prematuros a una edad equivalente al término BOLD, tienen lugar simultáneamente. Como resultado, es posible
del embarazo en comparación con los neonatos de control para cada identificar regiones cerebrales conectadas buscando áreas que tengan
región específica (Engelhardt et al., 2015). Los valores del índice fluctuaciones espontáneas sincronizadas en la señal BOLD. Por el con-
de circunvolución también se han relacionado con el resultado del trario, las áreas con una conexión de inhibición muestran fluctuaciones
desarrollo neurológico (Dubois et al., 2008a). Un tercer índice deri- inversamente proporcionales en la señal BOLD. Este método puede
vado de la cartografía cortical es la profundidad de los surcos, que emplearse en los neonatos prematuros para vigilar la aparición de redes
es la distancia entre el casco cerebral y el fondo de cada surco (Van neuronales (fig. 63.24). Aunque la RM de conexión funcional no es
Essen, 2005). En lo que respecta al resto de los parámetros, la pro- una práctica rutinaria y requiere la adquisición de datos y software
fundidad de los surcos aumenta con el desarrollo del cerebro (Dubois especializados, los estudios han demostrado alteraciones extensas de
et al., 2008b; Zubiaurre-Elorza et al., 2009; Shimony et al., 2016), las redes neurales en los neonatos prematuros a una edad equivalente
y se han descrito anomalías de la misma en los neonatos prematuros al término en casos de imágenes convencionales normales (Smyser
(Engelhardt et al., 2015). et al., 2016).

Resonancia magnética funcional Espectroscopia de infrarrojo cercano


Tal y como se ha descrito anteriormente en las imágenes obtenidas La espectroscopia de infrarrojo cercano (NIRS, near-infrared spec-
por susceptibilidad magnética, puede conseguirse que la señal de la troscopy) es análoga a la pulsioximetría que se usa habitualmente en
RM sea sensible a una menor cantidad de hierro en la desoxihemo- la práctica clínica para monitorizar la saturación arterial de oxígeno.
globina. En las zonas de hemorragia, los efectos son sorprendentes. Tanto la pulsioximetría como la NIRS emplean longitudes de onda
Sin embargo, también se pueden detectar efectos más sutiles en caso de la luz similares. En la pulsioximetría, la señal se procesa con el fin
de cambios en la concentración de la desoxihemoglobina intravascular. de aislar la señal de la sangre arterial y medir la saturación arterial de
Por ejemplo, cuando aumentan los índices de activación neuronal en oxígeno. La localización no es especialmente importante en este caso
un área del cerebro debido a la activación de una tarea, aumenta el y se consigue mediante el paso de la luz a través de un dedo usando
flujo sanguíneo local, mientras que el empleo local de oxígeno cambia un par de sensores ópticos. Los dispositivos de NIRS disponibles en el
muy poco. Como resultado, la concentración local de desoxihemo- mercado funcionan de una forma muy similar. Dado que la señal no
globina disminuye, y esta reducción se detecta como un pequeño suele estar destinada a evaluar sangre arterial, la NIRS suele propor-
aumento (del orden de un pequeño porcentaje) en la intensidad de cionar una medida relativa de la oxigenación tisular venosa mixta. Para
la señal en las imágenes de susceptibilidad magnética. Este contraste su aplicación en los estudios como activación funcional, la localización

• Figura 63.24  Resonancia magnética funcional en estado de reposo en neonatos a diversas edades
posmenstruales. Se colocó un punto en la corteza motora (punto amarillo brillante). Las conexiones
entre la corteza motora, la corteza motora contralateral (flecha) y la corteza motora suplementaria
(punta de flecha) aparecen alrededor de la semana 38 de gestación. (Adaptado de Smyser CD, Inder TE,
Shimony JS, et al. Longitudinal analysis of neural network development in preterm infants. Cereb Cortex.
2010;20:2852– 2862.)

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CAPÍTULO 63 Estudios de neuroimagen neonatal 951

en varias regiones cerebrales puede lograrse usando sensores ópticos et al., 2016), HIV (Vesoulis et al., 2016) y oxigenación de la mem-
(Gregg et al., 2010; Liao et al., 2010). Los parámetros disponibles de la brana extracorpórea (Liem et al., 1995). En un estudio de neonatos
NIRS incluyen las concentraciones de oxihemoglobina y desoxihemo- que habían sufrido asfixia, una mayor saturación cerebral de oxígeno
globina, la saturación cerebral de oxígeno y la fracción de extracción de y una menor extracción de oxígeno del tejido cerebral fraccional des-
oxigenación tisular (este último parámetro se calcula en combinación pués de 24 h se asociaron a un mal desarrollo neurológico, lo que
con la saturación arterial de oxígeno obtenida mediante la pulsioxime- sugiere una insuficiencia energética secundaria en estos neonatos
tría). Aunque la NIRS no se emplea habitualmente en la práctica (Toet et al., 2006).
clínica, se ha utilizado para estudiar una gran variedad de trastornos,
como recién nacidos con apnea y bradicardia (Petrova y Mehta, 2006), La bibliografía completa utilizada en este capítulo puede consultarse online
diferentes modos de ventilación (Schwaberger et al., 2015; Guerin en www.expertconsult.com
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951e.6 PA RT E X I I Sistema nervioso

Palabras clave
Ecografía craneal
TC
RM
Recién nacido prematuro
Recién nacido a término
Predicción de resultados
Espectroscopia por RM
Espectroscopia de infrarrojo cercano

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64
Enfermedades neuromusculares
neonatales
NIRANJANA NATARAJAN Y CRISTIAN IONITA

PUNTOS CLAVE defectos genéticos relacionados ha llevado a una mayor heterogeneidad


en la presentación de las enfermedades y, con ella, a nuevos esquemas
• En la evaluación de la hipotonía neonatal se deben considerar de clasificación en función de la patología y los hallazgos genéticos.
las enfermedades neuromusculares, y las pruebas diagnósticas deben
realizarse de forma escalonada.
• Una creatina cinasa (CK) normal no descarta una enfermedad muscular.
Distrofias musculares congénitas
• La electromiografía (EMG) es útil para la evaluación de la hipotonía Las DMC comprenden un grupo heterogéneo de enfermedades carac-
y la debilidad con fines diagnósticos. terizadas por un proceso distrófico en la histopatología del músculo.
• El diagnóstico genético es crucial en pacientes con una enfermedad
Con los últimos avances genéticos, hemos descubierto que muchas de
neuromuscular.
las mutaciones genéticas asociadas a las DMC pueden debutar como
miopatías congénitas. Anteriormente, las DMC se clasificaban por la
presencia o ausencia de merosina en el análisis histopatológico. En un
principio, se detectó la ausencia de merosina, una proteína de la matriz
Enfermedades neuromusculares neonatales extracelular, en un 33-50% de los casos de DMC (Dubowitz, 1994;
Tome et al., 1994; Philpot et al., 1995), y puede acompañarse de
Entre las enfermedades neuromusculares se encuentran las enferme- anomalías cerebrales estructurales (Philpot et al., 1999; Mercuri
dades del músculo (miopatías congénitas y distrofias musculares), de et al., 2001; Muntoni y Voit, 2004). En la última década, los avances
la conexión neuromuscular (miastenia grave y síndromes miasténicos en la genética han permitido distinguir diversas formas clínicas, lo que
congénitos), de los nervios (neuropatías) y de las neuronas motoras ha posibilitado un mejor conocimiento de este grupo de enfermedades.
del asta anterior (atrofias musculares espinales). Se presentan en el Se han propuesto tanto esquemas de clasificación como enfoques
período neonatal como un síndrome del recién nacido hipotónico diagnósticos que tienen en cuenta estos nuevos conocimientos (Munto-
con o sin contracturas. La insuficiencia respiratoria y la dificultad en la ni y Voit, 2004; Mercuri y Muntoni, 2012; Bonnemann et al., 2014).
deglución pueden ser las principales características del cuadro clínico, Basándose en los numerosos genes descubiertos y el número cada vez
y con frecuencia se acompañan de hipotonía y debilidad significativas. mayor de genes causales, se han clasificado recientemente las DMC
Este capítulo analiza lo que sabemos en la actualidad sobre las enferme- en siete subtipos de enfermedades: α-distroglucanopatías, distrofia por
dades neuromusculares que aparecen en el período neonatal y sus manifes- deficiencia de laminina α2, distrofia por mutación del gen LMNA, dis-
taciones clínicas, así como sus rasgos patológicos, genéticos y radiológicos. trofia por deficiencia de colágeno de tipo VI, miopatía por mutación
Por último, se presenta un enfoque para la evaluación diagnóstica de los del gen SEPN1, miopatías por mutación del gen RYR1 y DMC sin
neonatos cuando se sospecha una enfermedad neuromuscular. diagnóstico genético (Bonnemann et al., 2014). Las mutaciones de
SEPN1 y RYR1, clásicamente consideradas miopatías, se incluyen en
Enfermedades musculares primarias esta clasificación debido a la variabilidad de su fenotipo cuando se
manifiestan.
El síntoma inicial de las enfermedades musculares en el período neo-
natal temprano es hipotonía o debilidad. Las enfermedades musculares α-distroglucanopatías
primarias pueden subdividirse en dos categorías: 1) distrofias muscula-
res, y 2) miopatías congénitas. Las distrofias musculares que aparecen Las α-distroglucanopatías suponen la hipoglucosilación del α-distro-
en el período neonatal temprano o en los primeros meses de vida se glucano (DG) de la membrana celular del músculo. El fenotipo es extre-
reúnen bajo el término «distrofias musculares congénitas» (DMC). madamente variable, con cuadros clínicos de leves a graves y subtipos que
Existen diferencias histopatológicas entre las DMC y las miopatías implican una afectación cerebral importante. Las formas más graves son
congénitas. Las DMC muestran cambios distróficos en la biopsia las del síndrome de Walker-Warburg, la enfermedad músculo-ojo-cerebro
muscular, con una alteración de la fibra muscular y su arquitectura, (MOC) y la DMG de Fukuyama. La variante más leve del espectro
mientras que las miopatías congénitas presentan cambios más bien corresponde a los individuos que debutan en la edad adulta con distrofias
sutiles, como desproporción en el tipo de fibras, pero conservando la musculares de cinturas sin afectación cerebral ni ocular.
arquitectura de la fibra muscular. El DG está codificado por un único gen, DAG1, y se une a dos
Aunque la clasificación de estas enfermedades se ha venido reali- proteínas, el α-DG y el β-DG. El α-DG es una glucoproteína de la
zando en función de la histopatología, el descubrimiento reciente de membrana periférica extracelular que se ancla a esta mediante su unión
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CAPÍTULO 64 Enfermedades neuromusculares neonatales 953

a una proteína transmembrana, el β-DG. El α-DG también tiene una la enfermedad MOC (Mercuri et al., 2006; Godfrey et al., 2007;
gran afinidad por la laminina, un componente de la matriz extracelular Clement et al., 2008).
(Endo, 2015). Las distroglucanopatías son secundarias a un defecto en
la glucosilación del DG debido a mutaciones en ciertos genes.
El número de genes relacionados con las distroglucanopatías ha Distrofia muscular congénita de Fukuyama
seguido aumentando y, hasta la fecha, incluye al menos siete, de los que La DMC de Fukuyama, como otras α-distroglucanopatías que se
los seis primeros son los que se detectan con más frecuencia (Kobayashi presentan en el período neonatal, cursa con hipotonía o debilidad,
et al., 1998; Brockington et al., 2001; Yoshida et al., 2001; Beltran-Vale- dificultad en la deglución y problemas de succión. Puede haber con-
ro de Bernabe et al., 2002; Longman et al., 2003; van Reeuwijk et al.,  tracturas articulares. Hay anomalías del SNC, como lisencefalia de
2005a, 2005b; Roscioli et al., 2012; Willer et al., 2012; Buysse aspecto adoquinado, paquigiria o polimicrogiria, y cambios en la sus-
et al., 2013): tancia blanca. La DMC de Fukuyama suele cursar con una afectación
1. Proteína O-manosiltransferasa 1 (POMT1; Online Mendelian muscular más grave y con menos manifestaciones oculares que el SWW
Inheritance in Man [OMIM] 607423). o la enfermedad MOC. El gen FKTN y su producto, la fukutina, son la
2. Proteína O-manosiltransferasa 2 (POMT2; OMIM 607439). única causa descrita (Kobayashi et al., 1998). La DMC de Fukuyama
3. Proteína O-manosa 1,2-acetilglucosaminiltransferasa 1 (POMGnT1; se ha descrito clásicamente en poblaciones japonesas (Fukuyama y
OMIM 606822). Ohsawa, 1984). Sin embargo, se ha registrado el efecto fundador de
4. Fukutina (FCMD; OMIM 607440). FKTN en poblaciones judías askenazíes y coreanas (Chang et al., 2009;
5. Proteína relacionada con la fukutina (FKRP; OMIM 606596). Lim et al., 2010), con algunos casos registrados en otras poblaciones.
6. LARGE (OMIM 603590).
7. Proteína que contiene un dominio de sintasa isoprenoide (ISPD;
OMIM 614631). Otras α-distroglucanopatías
Los estudios realizados en poblaciones grandes de pacientes han
demostrado que las mutaciones descritas no identifican a muchos de los Debe sospecharse una α-distroglucanopatía en todo neonato con ano-
pacientes que muestran una exploración clínica indicativa de α-distro- malías estructurales del SNC que impliquen una lisencefalia de aspecto
glucanopatía, lo que sugiere que aún puede haber genes sin identificar adoquinado o paquigiria/polimicrogiria, o cuando se acompañen con
(Mercuri et al., 2009). Entre los signos clínicos de los pacientes afecta- alteraciones oculares o debilidad. La CK estará significativamente
dos se encuentran una hipertrofia relativa de las extremidades inferiores, elevada en casi todos los casos.
con atrofia muscular de las extremidades superiores y afectación cere-
bral. A medida que se han ido descubriendo mutaciones genéticas, la Distrofia muscular relacionada con LAMA2
heterogeneidad de los fenotipos se ha hecho cada vez más evidente
(Mercuri et al., 2006, 2009; Clement et al., 2008). La distrofia muscular relacionada con LAMA2, anteriormente conocida
A continuación se discuten las tres formas clásicas de α-distroglu- como DMC por deficiencia de merosina, es una causa de hipotonía
canopatías: el síndrome de Walker-Warburg, la enfermedad de MOC grave en el recién nacido. Dado que es secundaria a un defecto en el gen
y la distrofia muscular congénita de Fukuyama. LAMA2, que codifica la laminina α2, se ha adoptado el nuevo término
distrofia muscular relacionada con LAMA2 (Hara et al., 2011). La
laminina α2 es un componente de la merosina, un heterómero de las
Síndrome de Walker-Warburg subunidades α2, β1 y γ1. La ausencia de laminina α2 lleva, por tanto,
a una deficiencia de merosina. El término distrofia muscular congénita
El síndrome de Walker-Warburg (SWW) es la DMC más grave, con por deficiencia de merosina ha caído en desuso, ya que no es específico
una afectación del sistema nervioso central (SNC). La hipotonía y la de la etiología de la enfermedad y también puede ser cierto a nivel his-
debilidad grave del neonato se acompañan de encefalopatía y problemas tológico en algunas distroglucanopatías, por efecto indirecto.
de visión. Entre las enfermedades oculares encontramos disgenesia de Clínicamente, la distrofia muscular relacionada con LAMA2 puede
retina, microftalmía y malformaciones de la cámara anterior (Dobyns manifestarse con debilidad e hipotonía grave en el neonato o en los
et al., 1989). Las malformaciones cerebrales incluyen lisencefalia de primeros 6 meses de vida. Las contracturas pueden presentarse en el
tipo II, que da como resultado una corteza de aspecto adoquinado y momento del nacimiento, junto con un llanto débil e insuficiencia
microgiria, así como desmielinización de la sustancia blanca. Las mal- respiratoria. Los neonatos con mutaciones del LAMA2 suelen mostrar
formaciones cerebelosas también son frecuentes (Dobyns et al., 1989). afectación muscular sin una encefalopatía significativa. No obstante,
Aunque se puede pensar que los recién nacidos presentan única- casi todos los pacientes desarrollan anomalías de la sustancia blanca
mente malformaciones del SNC, la creatina cinasa (CK) está nota- (Ibrahim Abdulla et al., 2007; Kumar et al., 2014).
blemente elevada. Aunque inicialmente se asoció el SWW a POMT1, Deben sospecharse mutaciones del LAMA2 en los neonatos que
posteriormente se ha relacionado con el resto de los genes implicados muestren una hipotonía significativa y/o contracturas en el contexto
en las distroglucanopatías.
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de una insuficiencia respiratoria sin una encefalopatía significativa ni


anomalías oculares. Las cifras de CK durante los primeros años de vida
están elevadas, con frecuencia cuatro o cinco veces por encima de los
Enfermedad músculo-ojo-cerebro límites normales (Oliveira et al., 2008). El análisis histopatológico de
Los síntomas iniciales típicos de la enfermedad MOC en el momento la biopsia muscular mostrará una disminución o una ausencia de unión
del nacimiento o en los primeros meses de vida son la hipotonía y la a la laminina α2. El tratamiento de los pacientes con mutaciones del
debilidad, con un fenotipo de anomalías oculares más leves que el LAMA2 será sintomático.
del SWW, que pueden no detectarse hasta los primeros años de vida
(Santavuori et al., 1989). La resonancia magnética (RM) cerebral revela Distrofia miotónica congénita
enfermedades de la migración neuronal debido a una lisencefalia de
tipo II, como paquigiria o polimicrogiria. Otros hallazgos radiológicos La presentación de la forma congénita de la distrofia miotónica en la
asociados son la hipoplasia cerebelosa y los cambios en la sustancia infancia es diferente de la del fenotipo clásico del adulto. Los neonatos con
blanca (fig. 64.1). Inicialmente, se pensó que la causa estaba en el distrofia miotónica congénita suelen detectarse en el útero al tener com-
gen POMGnT1 (Yoshida et al. 2001), pero, con el tiempo, todas las plicaciones, como polihidramnios y disminución del movimiento fetal,
demás distroglucanopatías descritas también se han relacionado con y pueden nacer prematuramente. En el momento del nacimiento

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954 PA RT E XI I Sistema nervioso

• Figura 64.1  Cambios asociados a distroglucanopatías en la resonancia magnética cerebral. Imágenes de


un paciente con una mutación del gen POMGnT1. Los cortes axial (A) y frontal (B) de las imágenes
ponderadas en T2 muestran una lisencefalia de aspecto adoquinado, cambios en la sustancia blanca y
porencefalia del lóbulo parietal. C. Secuencia FLAIR sagital en T2 que muestra porencefalia y un tronco
encefálico pinzado. D. Imagen tridimensional de una lisencefalia de aspecto adoquinado. (Por cortesía
del Dr. Francisco Perez, MD PhD.)

presentan hipotonía y debilidad. Se da el pie equino varo, o contractura El diagnóstico de distrofia miotónica congénita debe contemplarse
bilateral fija del tobillo. Entre los rasgos faciales se encuentran la diplejía cuando haya antecedentes familiares. La enfermedad se transmite a
facial con una «boca de carpa» y ptosis bilateral. La exploración clínica través de la madre y muestra anticipación genética. La historia clí-
muestra hiporreflexia o arreflexia y debilidad difusa más grave en los nica detallada de la madre y su exploración revelan a menudo rasgos
músculos distales que en los proximales. A esta edad no aparecen mio- faciales característicos de la distrofia miotónica clásica, como calvicie
tonía de prensión ni de percusión, que se desarrollarán en la infancia. frontal, ptosis, diplejía facial, deterioro temporal o cataratas. Además,
Es habitual la dificultad en el manejo de las secreciones, así como una la exploración de la madre revela habitualmente miotonía de prensión.
succión débil y dificultades en la alimentación, que a menudo exigen Estos síntomas a menudo son sutiles, hasta el punto de que la madre
el uso de una sonda nasogástrica. A menudo los neonatos nacen con desconoce su diagnóstico.
insuficiencia respiratoria, o esta se desarrolla en las primeras semanas La miotonía electrográfica o clínica no está presente en el período
de vida. Esta es secundaria a la debilidad muscular de los músculos neonatal. A menudo el diagnóstico se sospecha a raíz del cuadro clínico
respiratorios inspiratorios y espiratorios, lo que da como resultado y de la exploración de la madre y se confirma posteriormente median-
una respiración superficial. En el útero, esto puede llevar a hipoplasia te estudios genéticos. El gen DMPK, localizado en el cromosoma
pulmonar. Estos factores conducen a una elevada mortalidad en la 19q13.3, contiene un trinucleótido citosina-tiamina-guanina (CTG)
unidad de cuidados intensivos neonatales (UCIN), que se calcula en repetido en la región no codificadora 3’ (Mahadevan et al., 1992). Los
el 25-40% de los casos (Reardon et al., 1993; Campbell et al., 2004; individuos no afectados tienen entre 5 y 27 repeticiones, mientras que
Wallgren-Pettersson et al., 2004a). La duración y la gravedad de la los pacientes con una presentación clásica tienen 50-1.000 repeticiones.
debilidad de los músculos respiratorios y la hipoplasia pulmonar son La anticipación genética se relaciona con esta área y, a medida que
claves para el resultado. La ventilación mecánica prolongada, que se aumenta el número y se hace más inestable en generaciones posteriores,
define como la de más de 4 semanas de duración, es un factor pronós- lleva a una presentación más temprana y más grave. Los neonatos con
tico negativo en estos neonatos (Rutherford et al., 1989). una presentación congénita tienen más de 1.000 repeticiones CTG, y

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CAPÍTULO 64 Enfermedades neuromusculares neonatales 955

la gravedad de la enfermedad es proporcional al número de repeticiones Existe riesgo de insuficiencia respiratoria debido a la debilidad de los
(Tsilfidis et al., 1992). músculos respiratorios, incluido el diafragma. Cuando se compara con
Los neonatos que sobreviven al período neonatal precisan habitual- las distrofias musculares, la CK puede ser normal o estar ligeramente
mente soporte respiratorio continuo y pueden sobrevivir hasta la edad elevada. La electromiografía (EMG) puede ser normal o mostrar cam-
adulta con tratamiento y una estrecha vigilancia respiratoria y cardíaca. bios miopáticos leves. Así, la biopsia muscular suele ser el siguiente paso
Sin embargo, es frecuente la alteración cognitiva, que puede ser grave y, junto con las pruebas genéticas, puede llevar al diagnóstico definitivo.
(Echenne et al., 2008).

Otras formas de distrofias musculares Miopatía nemalínica


El término miopatía nemalínica procede del griego «nema», que sig-
Otras formas de distrofias musculares, como la distrofia muscular de nifica hilo. La biopsia muscular muestra varillas similares a hilos. Las
Duchenne, se presentan en la primera infancia, y los síntomas iniciales varillas se tiñen de rojo con la tinción tricrómica de Gomori, lo que les
son la debilidad y la seudohipertrofia gemelar. Los recién nacidos da su aspecto característico. La miopatía nemalínica puede aparecer en
que desarrollan esta distrofia posteriormente presentan cifras de CK cualquier momento de la vida con diversos grados de gravedad. Hay dos
muy altas en ausencia de debilidad durante el período neonatal. La presentaciones básicas que pueden ocurrir durante el período neonatal.
deficiencia de LAMA2, que puede presentarse en el período neonatal, El síntoma inicial en los recién nacidos puede ser una hipotonía signifi-
también puede detectarse por primera vez desde la infancia hasta el cativa con debilidad y afectación bulbar. Los músculos faciales y axiales
comienzo de la edad adulta con distintos grados de gravedad, como estarán afectados. Los neonatos pueden precisar soporte respiratorio,
una distrofia muscular de cinturas. debido a la debilidad de los músculos respiratorios, succión frecuente
El gen LMNA, que se asocia al síndrome de Emery-Dreifuss en y apoyo nutricional, bien con sondas de alimentación o gastrostomía.
niños de más edad o adultos, se ha detectado en neonatos y niños En las formas más graves, la historia del embarazo suele ser significativa
con DMC (Mercuri et al., 2004; D’Amico et al., 2005; Quijano-Roy por la presencia de movimientos fetales reducidos y polihidramnios, y
et al., 2008). El gen LMNA codifica la lámina A/C, que es una proteína el neonato presenta artrogriposis en el momento del nacimiento con
de la membrana nuclear. El síndrome se manifiesta clásicamente con insuficiencia respiratoria grave y problemas de alimentación, además
reducción de los movimientos fetales, hipotonía grave y debilidad de inmovilidad (Romero et al., 2013). El término síndrome de acinesia
con aspecto de «cabeza caída» debido a la afectación de los músculos fetal se usa en pacientes con miopatía nemalínica que presentan esta
del cuello (Quijano-Roy et al., 2008). forma más grave, y también puede haber rasgos dismórficos.
Los pacientes afectados por acinesia fetal o la forma congénita grave
Enfermedades relacionadas con el colágeno tienen un mal pronóstico, y a menudo no se observa ninguna mejoría
en la función respiratoria ni en la debilidad durante los primeros meses
de tipo VI de vida. Los que tienen la presentación más leve muestran una mejoría
Las colagenopatías que afectan al colágeno de tipo VI pueden pre- continuada y, con el tiempo, algunos aprenderán a caminar. Sin embar-
sentarse en el período neonatal o en la primera infancia como DMC go, muchos precisarán soporte respiratorio debido a hipoventilación
denominadas con su epónimo, la distrofia muscular de Ullrich, con nocturna y tendrán problemas de crecimiento o escoliosis.
un fenotipo grave, o con uno más leve, la miopatía de Bethlem. Los Ocho son los genes que se han asociado a la miopatía nemalínica,
genes identificados para esta enfermedad son COL6A1, COL6A2 y siete de los cuales pueden manifestarse en el período neonatal: nebulina
COL6A3. La prevalencia total de las enfermedades del colágeno de (NEB), actina α del músculo esquelético (ACTA1), tropomiosina α de
tipo VI no se conoce. Sin embargo, se cree que es más habitual en la activación lenta (TPM3), tropomiosina β (TPM2), troponina T lenta
población norteamericana, y la segunda distrofia muscular en Japón (TNNT1), cofilina 2 (CFL2) y proteína de tipo Kelch 40 (KLHL40)
tras la de Fukuyama (Bonnemann, 2011). (Romero et al., 2013). La nebulina es responsable hasta del 50% de
En cuanto a la clínica, los neonatos con el fenotipo de la distrofia los casos, y se han descrito diversos fenotipos (Wallgren-Pettersson
muscular de Ullrich presentarán hiperlaxitud significativa, especialmen- et al., 2004b).
te en las articulaciones distales, cifosis temporal y calcaños prominentes.
Puede haber rigidez en las articulaciones y pie equino varo. La piel es
sensible, y la hiperqueratosis folicular se presenta en el primer año de Miopatías de cuerpos
vida. Las miopatías de cuerpos centrales y las de multiminicuerpos cons-
tituyen las «miopatías de cuerpos», que son las miopatías más habituales
Miopatías congénitas a todas las edades (Jungbluth et al., 2011). A nivel histopatológico,
ambas se consideran miopatías de «cuerpos» debido a su patrón en
El término miopatías congénitas hace referencia a enfermedades mus- la tinción tricrómica de Gomori. Debido a la disminución focal de
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culares que no muestran cambios distróficos en la biopsia muscular y la actividad oxidativa, secundaria a la enfermedad muscular, no hay
que se presentan en neonatos o recién nacidos. Las miopatías congénitas tinción oxidativa en la biopsia muscular. Basándonos en el aspecto
tienden a estabilizarse o a tener una evolución lenta. De hecho, algunos visual, las miopatías de cuerpos se clasifican en miopatía de cuerpos
pacientes con miopatías congénitas pueden mejorar con la edad. El centrales, de multicuerpos, de minicuerpos o de multiminicuerpos.
grupo de miopatías congénitas se describió inicialmente en función A nivel clínico, los pacientes con miopatía de cuerpos centrales
de los hallazgos histopatológicos en la biopsia muscular. A medida que pueden debutar en cualquier momento de la vida, y la presentación
el conocimiento genético ha aumentado, nuestra comprensión de las neonatal se distingue por una mayor debilidad proximal que distal
miopatías congénitas ha cambiado. Hemos descubierto que mutaciones y afectación bulbar variable (Malicdan y Nishino, 1993; Jungbluth
específicas de un gen pueden presentarse como distintos fenotipos his- et al., 2011). El cuadro clínico en el momento del nacimiento puede
topatológicos (Sewry et al., 2008). Las miopatías congénitas pueden incluir escoliosis, contracturas y la necesidad de soporte respiratorio.
presentarse en el período neonatal, pero también durante la infancia. La En los casos neonatales más graves puede darse el síndrome de acinesia
histología puede mostrar miopatía nemalínica, enfermedad del núcleo fetal (Romero et al., 2003). La CK sérica suele ser normal o estar
central, miopatía miotubular y miopatía de minicuerpos. ligeramente elevada.
El cuadro clínico inicial típico en el neonato consiste en hipotonía El gen más habitual asociado a la miopatía de cuerpos centrales es el
generalizada, debilidad e hipotonía facial, con posibles contracturas. gen RYR1, que codifica el receptor de rianodina, un canal de calcio del

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956 PA RT E XI I Sistema nervioso

retículo sarcoplásmico (Ferreiro et al., 2002; Jungbluth et al., 2002). la enfermedad, del mismo modo que las mutaciones autosómicas
El receptor de rianodina y las mutaciones del RYR1 también pueden recesivas en RYR1 (Jungbluth et al., 2007, 2008; Snoeck et al., 2015).
llevar a hipertermia maligna. Debido a la variabilidad fenotípica, aún Los resultados de este trastorno dependen en gran medida del
no está claro qué pacientes tendrán esta susceptibilidad, lo que exige grado de soporte respiratorio preciso, y no se han establecido factores
precaución en todos los individuos afectados. Las mutaciones en el pronósticos claros, por lo que es necesaria la valoración individual.
gen RYR1 también pueden expresarse como fenotipos compatibles con Los neonatos con la forma ligada al cromosoma X tienden a tener una
miopatías de multiminicuerpos en el análisis histológico o incluso evolución más difícil y es posible que no sobrevivan al período neonatal.
con miopatía nemalínica (Snoeck et al., 2015). Sin embargo, existe variabilidad fenotípica (Barth y Dubowitz, 1998).
La miopatía de multiminicuerpos es poco frecuente en el período
neonatal y, cuando se presenta, se caracteriza por debilidad axial mar- Enfermedades de las neuronas motoras
cada, facies miopática e insuficiencia respiratoria. Una parte de los
pacientes de más edad pueden debutar con oftalmoplejía, evidente en Las enfermedades de las neuronas motoras comprenden un grupo de
alrededor del 10% de los neonatos con miopatía de multiminicuerpos. alteraciones genéticas que comparten la afectación de las neuronas
Los pacientes con una forma prenatal de esta enfermedad pueden motoras del asta anterior. Este grupo, dominado por la atrofia mus-
debutar con una artrogriposis congénita múltiple debido a la dis- cular espinal (AME) 5q, la enfermedad congénita más habitual de
minución de los movimientos fetales secundaria a debilidad muscular. las neuronas motoras, incluye un número sustancial de otras formas
Dos genes se asocian con frecuencia a la miopatía de multimini- poco frecuentes de enfermedades de las neuronas motoras. Las más
cuerpos. El SEPN1, que codifica la selenoproteína 1, es la causa en la habituales se mencionan a continuación.
mayoría de los pacientes (Ferreiro et al., 2002a). La selenoproteína 1
también se asocia a la enfermedad de la columna vertebral rígida, lo que
sugiere que las dos enfermedades son alélicas. Le sigue en frecuencia el Atrofia muscular espinal 5q
gen RYR1 (Ferreiro et al., 2002b), que también se asocia a la miopatía La AME 5q es una enfermedad autosómica recesiva con una inci-
de cuerpos centrales, como se ha mencionado anteriormente. dencia de aproximadamente 1 de cada 10.000 nacidos vivos (Ogino
et al., 2002). Su presentación y su gravedad son muy diversas, desde
Miopatía miotubular (centronuclear) casos muy graves con debut intrauterino a casos leves que aparecen en
la edad adulta con una discapacidad leve. Dada su amplia variabilidad,
La miopatía centronuclear, también conocida como miopatía mio- la AME se clasifica en tres tipos principales en función de su gravedad
tubular, es una causa poco frecuente de debilidad en el neonato. El y la edad de aparición. Algunos autores reconocen, además de los tres
término se debe al aspecto histopatológico de numerosos núcleos de tipos principales, un tipo adicional: la AME de tipo 0. La mayoría de
localización central en las fibras musculares (Heckmatt et al., 1985; los pacientes cuentan con una deleción homocigótica del gen SMN1.
Jungbluth et al., 2008). La presentación en neonatos se caracteriza por La gran variabilidad del fenotipo clínico se debe fundamentalmente al
hipotonía grave con afectación bulbar, incluida debilidad muscular número de copias de SMN2 que tiene cada individuo. El gen SMN2 es
extraocular y facies miopática. Puede aparecer dificultad respiratoria casi idéntico al SMN1 y produce principalmente una proteína truncada,
que precise ventilación (Heckmatt et al., 1985). Dada la gravedad no funcional, así como una pequeña cantidad de proteína funcional.
de la afectación, también suele contemplarse la distrofia miotónica Más copias de SMN2 corresponden a un fenotipo más leve (tabla 64.1).
congénita, por lo que un buen registro de los antecedentes familiares Todos los pacientes sufren una evolución que incluye una fase de declive
de la madre y su exploración física pueden ayudar en el diagnóstico. seguida de una fase de estabilidad. La fase de declive tiene lugar en el
Los neonatos pueden ser macrosómicos o presentar criptorquidia, datos útero en los recién nacidos que sufren AME de tipo 0 en el momento del
que pueden ayudar en el diagnóstico. El gen MTM1, que codifica la nacimiento. En los recién nacidos en los que la enfermedad se presenta
miotubulina, se localiza en la región Xq28 del cromosoma X, lo que tras el nacimiento, un período de desarrollo normal se sigue de una fase
hace que esta enfermedad sea de predominio masculino. No obstante, de declive que generalmente dura semanas o meses.
en caso de portar esta mutación, las mujeres pueden verse afectadas si Los neonatos con AME de tipo 0 comienzan a presentar debilidad
se da la inactivación anormal del cromosoma X (Dahl et al., 1995). en el útero y a menudo se detecta artrogriposis. La dificultad res-
Las mutaciones autosómicas recesivas también pueden llevar a la piratoria en el momento del nacimiento es la norma y puede haber
enfermedad, con rasgos clínicos similares, como afectación bulbar, debilidad facial además de hipotonía profunda y debilidad muscular en
debilidad facial grave con ptosis y oftalmoplejía (Wallgren-Pettersson las extremidades. La mayoría de estos pacientes mueren en las primeras
et al., 1995). Las mutaciones en BIN1 y DNM2, que codifican la semanas de vida. La AME de tipo 1, o enfermedad de Werdnig-Hoff-
anfifisina 2 y la dinamina 2, respectivamente, también pueden provocar man, se presenta entre el nacimiento y los 6 meses de edad. En algunos

TABLA
64.1  Tipos de atrofia muscular espinal

Tipo de atrofia muscular Número de copias Máximo rendimiento


espinal (AME) del gen SMN2 Edad de inicio motor alcanzado Evolución natural
AME de tipo 0 1 Intraútero Ninguno Mortal en el primer mes de vida
AME de tipo 1 2 Desde el nacimiento Ninguno Mortal en los primeros 2 años de vida
hasta los 6 meses
AME de tipo 2 ≥3 6-18 meses Sentarse de forma Morbilidad grave y a menudo corta esperanza
independiente de vida
AME de tipo 3 ≥3 > 18 meses Caminar de forma Morbilidad moderada y posiblemente corta 
independiente esperanza de vida

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CAPÍTULO 64 Enfermedades neuromusculares neonatales 957

de estos neonatos, los síntomas aparecen poco después del nacimiento, ser de incalculable valor para que los padres tomen decisiones infor-
mientras que en otros la debilidad aparece después de unos meses de madas. Si se opta por el tratamiento agudo, las dos áreas principales
desarrollo más o menos normal. Los pacientes típicos tienen hipotonía que precisan soporte inmediato son las funciones respiratoria y gas-
profunda y debilidad grave. La debilidad es más grave en las piernas trointestinal. Se prefiere el soporte no invasivo para la respiración en
que en los brazos. Los músculos proximales son más débiles que forma de ventilación con presión positiva de dos niveles en las vías
los distales. Generalmente no hay movimientos contra gravedad de los respiratorias (BIPAP), aunque no es infrecuente que algunos de estos
músculos más proximales de las extremidades, y sí algunos movimientos recién nacidos precisen una traqueotomía y ventilación continua.
distales en los tobillos/muñecas o en los dedos de las manos/pies. No A los recién nacidos con AME de tipo 1 les cuesta toser, y la fisioterapia
hay reflejos tendinosos profundos ni afectación facial. De hecho, estos respiratoria ha demostrado ser una herramienta muy importante en
recién nacidos tienden a tener una expresión facial muy vivaz. En el aclaramiento de las vías respiratorias. Es necesario consultar con un
el momento del diagnóstico hay diversos grados de insuficiencia res- neumólogo pediátrico con experiencia en el tratamiento de la AME,
piratoria. El empeoramiento de la función respiratoria con el tiempo y debe hacerse lo antes posible. Básicamente todos los pacientes con
es la norma, con una evolución frecuente hacia el soporte respiratorio AME de tipo 1 cuyos síntomas aparezcan durante el primer mes de
continuo. Debido a la afectación desproporcionada de los músculos vida presentarán una importante dificultad para la deglución, lo que
intercostales y el buen estado relativo del diafragma, se percibe un tórax lleva a broncoaspiración recurrente y a una insuficiente ingesta calórica.
«con forma de campana». Suele haber fasciculaciones en la lengua, por Será necesario realizar una gastrostomía y la fundoplicatura de Nissen lo
lo que deben buscarse. La debilidad bulbar está presente virtualmente antes posible. Las complicaciones traumatológicas, como la escoliosis,
en todos los pacientes con AME de tipo 1, y se manifiesta por dificultad aparecen más tarde. La ventilación no invasiva y la sonda de gastros-
en la deglución, atragantamiento y mala alimentación. Aunque las con- tomía también suelen formar parte del plan de cuidados paliativos.
tracturas no forman parte de la presentación típica de la AME, pueden
desarrollarse tras la inmovilización prolongada.
El diagnóstico suele ser bastante claro. Una vez identificado el Atrofias musculares espinales no 5q
cuadro clínico típico y confirmado que la CK es normal o está mínima- Las AME no 5q comprenden un grupo de enfermedades heterogéneas
mente elevada (hasta 500 UI/l), las pruebas genéticas son el siguiente genética y fenotípicamente que comparten la afectación de las neuronas
paso. El 95% de los pacientes con AME presentarán una deleción motoras. Se emplean diferentes clasificaciones, incluidas las establecidas
homocigótica del gen SMN1. El resto de los pacientes presentarán una en función del patrón hereditario o del patrón de afectación muscular.
mutación puntual en uno de los alelos, mientras que el segundo alelo Algunas de estas enfermedades son importantes entidades para los
habrá desaparecido. En este último grupo, será necesaria la secuencia- neonatólogos, mientras que otras no se observan en recién nacidos.
ción del gen SMN1 para confirmar el diagnóstico. Muchos laboratorios Las enfermedades más importantes con presentación neonatal se des-
comerciales ofrecen, además de la prueba de confirmación del AME, el criben a continuación.
número de copias de SMN2 que puede ser útil para la estadificación y
el pronóstico. La mayoría de los pacientes con AME de tipo 1 cuentan
con dos copias del SMN2. Cabe señalar que, aunque habitualmente la
Atrofia muscular espinal con dificultad respiratoria
CK es normal, en algunos casos puede estar ligeramente elevada, pero La atrofia muscular espinal con dificultad respiratoria (AMEDR)
no por encima de 500 UI/l. En la era de las pruebas genéticas, el papel representa un grupo de enfermedades de las neuronas motoras que
de la biopsia muscular y la EMG ha disminuido. Cuando esté dis- se manifiestan en el momento del nacimiento y comparten ciertos
ponible, la EMG puede ser una forma rápida de confirmar el diagnós- rasgos clínicos característicos. Estas enfermedades se caracterizan por
tico sospechado, especialmente si las decisiones terapéuticas no pueden una insuficiencia respiratoria más bien repentina y grave que precisa
esperar por los resultados de las pruebas genéticas. Actualmente, la soporte respiratorio, así como por debilidad de predominio distal y
biopsia muscular se reserva para casos atípicos. contracturas distales. La insuficiencia respiratoria puede manifestarse
En este momento, el tratamiento de los pacientes con AME de tipo 1 en el momento del nacimiento (lo que sugiere su comienzo en el útero)
sigue siendo sintomático (Iannaccone, 2007). Sin embargo, con la o desarrollarse durante los primeros 6 meses de vida. La debilidad
aprobación del nusinersen por la Food and Drug Administration en del diafragma que lleva a la eventración diafragmática es caracterís-
diciembre de 2016 siguen realizándose estudios clínicos, y es posible tica. Estos rasgos difieren del buen estado relativo del diafragma y la
que pronto se comercialicen otros fármacos. Los fármacos sobre debilidad de predominio proximal observada en la AME 5q. Hasta el
los que se están realizando estudios clínicos son fármacos neuroprotectores momento se han identificado algunos genes. La AMEDR1, la forma
dirigidos al gen SMN2 con el propósito de incrementar la producción de AMEDR más conocida, es una enfermedad autosómica recesiva
de proteína SMN funcional, así como la terapia genética (Arnold causada por mutaciones en el gen IGHMBP2 (proteína 2 de unión
y Burghes, 2013). Los resultados preliminares sobre el nusinersen, a la inmunoglobulina µ). La AMEDR2, una enfermedad ligada al
que aumenta la proteína SMN funcional, dicen que es más eficaz si cromosoma X causada por mutaciones en el gen LAS1L, se ha descrito
se comienza pronto en el curso de la enfermedad. Por tanto, dada la más recientemente (Butterfield et al., 2014). Parece que ambos genes
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importancia de comenzar pronto el tratamiento en presencia de este desempeñan un papel en la biogenia ribosómica. Es probable que se
diagnóstico, es interesante incluir la AME en el cribado del recién descubran otros genes. El tratamiento es sintomático. La enfermedad
nacido. A pesar de los avances en el tratamiento de estos pacientes pulmonar restrictiva es la causa principal de morbilidad y mortalidad.
en las dos últimas décadas, la AME de tipo 1 (especialmente la que La dificultad en la deglución, la broncoaspiración y la insuficiente
debuta en el período neonatal) sigue siendo una enfermedad devas- ingesta calórica también son habituales y precisan la colocación de una
tadora, a menudo con un resultado mortal. La mayoría de los pacientes sonda de gastrostomía. Se cree que el desarrollo cognitivo es normal.
con AME de tipo 1 fallecen durante los primeros 2 años de vida a A menudo se ofrecen cuidados paliativos en los casos más graves,
menos que se realice una intervención respiratoria drástica. En la mientras que los casos más leves pueden beneficiarse de un tratamiento
actualidad, cuidamos a muchos niños con AME de tipo 1 que han agudo respiratorio y gastrointestinal. También se han descrito formas
sobrevivido gracias al tratamiento respiratorio y gastrointestinal agudo. de comienzo tardío con un fenotipo más leve.
Su calidad de vida sigue siendo una preocupación básica. La elección
de tratamientos agudos de soporte vital en lugar de cuidados paliativos Atrofia muscular espinal infantil ligada al cromosoma X
plantea múltiples cuestiones y debates éticos, y seguirá haciéndolo La atrofia muscular espinal infantil ligada al cromosoma X (AME-LX)
hasta que se disponga de tratamientos que modifiquen el curso natural es una enfermedad de las neuronas motoras descrita recientemente y
de la enfermedad. La ayuda de un especialista neuromuscular puede caracterizada por artrogriposis, hipotonía, debilidad proximal, debilidad

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958 PA RT E XI I Sistema nervioso

facial e insuficiencia respiratoria. Se ha descubierto que la AME-LX En un estudio retrospectivo de los casos de SMC que se presentaban
está asociada a mutaciones hemicigóticas en el gen UBE1 (Ramser en la primera infancia, 8 de los 11 pacientes mostraron síntomas en
et al., 2008). La enfermedad suele ser mortal en los primeros 2 años de el momento del nacimiento generalmente con dificultad respirato-
vida. El tratamiento es sintomático. ria grave además de hipotonía, debilidad y contracturas (Zafeiriou
et al., 2004). Las pruebas analíticas suelen ser inespecíficas, con una
Hipoplasia pontocerebelosa más atrofia muscular espinal CK normal. La biopsia muscular es anodina o muestra hallazgos
La hipoplasia pontocerebelosa (HPC) es un grupo heterogéneo de inespecíficos poco importantes. La importancia de las pruebas elec-
enfermedades congénitas que comparten la hipoplasia o la atrofia trofisiológicas, especialmente las de estimulación nerviosa repetida,
del cerebelo y la protuberancia. Son frecuentes otras anomalías del es básica para determinar la presencia de un defecto en la conexión
SNC. La HPC de tipo 1 muestra, como rasgos característicos, neuromuscular. Las pruebas genéticas están disponibles en el mercado.
debilidad e hipotonía muscular provocada por un trastorno en las Aunque un buen número de pacientes con SMC responden en cierta
neuronas motoras. Hasta ahora se han identificado mutaciones en medida a la piridostigmina, los pacientes con ciertos tipos de SMC
tres genes como la causa de la HPC de tipo 1: VRK1, EXOSC3 pueden empeorar, por lo que será necesaria una observación estrecha
y EXOSC8 (Renbaum et al., 2009; Wan et al., 2012; Boczonadi cuando se administre, especialmente si se desconoce el tipo exacto
et al., 2014). Todas muestran un patrón autosómico recesivo. Aun- de SMC. Puede haber otros tratamientos médicos, dependiendo del
que la gravedad y la edad de aparición varían, en muchos de estos SMC específico identificado. Sin embargo, el soporte respiratorio
pacientes aparecen hipotonía, debilidad, contracturas y dificultad sigue siendo importante. Se prefiere la ventilación no invasiva, ya que
respiratoria, así como encefalopatía, en el período neonatal. La algunos pacientes mejoran con la edad. Debe contemplarse el soporte
supervivencia va de algunos meses a algunos años. El tratamiento nutricional mediante una sonda de gastrostomía.
es sintomático. El diagnóstico genético es importante para la pla-
nificación familiar.
Neuropatías periféricas
Miastenia grave neonatal transitoria Las neuropatías periféricas congénitas son una de las causas menos
habituales de síndrome del recién nacido hipotónico en el período
Alrededor del 10-15% de los recién nacidos de madres con miastenia neonatal. Los síntomas iniciales principales en el período neonatal son
grave autoinmunitaria desarrollan una forma temporal de mias­ hipotonía y debilidad, a menudo con malformaciones en los pies. Puede
tenia grave. La enfermedad es el resultado de la transferencia pasiva de haber dificultad respiratoria. Las pruebas electrofisiológicas confirma-
anticuerpos y conduce a debilidad, incluida debilidad de los mús- rán la neuropatía y orientarán las pruebas genéticas al subdividirlas en
culos respiratorios y de la deglución. El tratamiento sintomático es axónicas o desmielinizantes (Baets et al., 2011). El tratamiento será
necesario durante un tiempo breve (de días a semanas), hasta que los sintomático.
títulos de anticuerpos descienden y la fuerza se recupera. El diagnós-
tico se basa en la presencia de anticuerpos frente al receptor de la
acetilcolina (AChR) (anticuerpos cinasa raramente específicos del Abordaje de las enfermedades
músculo) en el plasma del recién nacido. Más recientemente, se ha neuromusculares neonatales
reconocido que algunos de los recién nacidos de madres con mias-
tenia grave autoinmunitaria tienen una evolución más benigna con El campo de las enfermedades neuromusculares pediátricas ha crecido
rasgos miopáticos sin explicación, disartria, insuficiencia velofaríngea enormemente tras los avances genéticos de las últimas dos décadas.
y contracturas. Estos pacientes pueden presentar dificultad en la Aunque las antiguas clasificaciones clínicas y patológicas siguen siendo
deglución y la respiración en el período neonatal. Debe comprobarse útiles, no debemos olvidar que los diferentes genotipos pueden expresar
el estado de los anticuerpos maternos anti-AChR, incluso en ausencia un mismo fenotipo, y que el mismo genotipo puede expresarse con
de síntomas, con el fin de prevenir la recidiva en futuros embarazos diferentes fenotipos. Muchas de estas enfermedades muestran una
(Hacohen et al., 2015). variabilidad intrafamiliar significativa.
Como en cualquier área médica, es esencial recoger una buena his-
Síndromes miasténicos congénitos toria clínica y realizar una exploración física, incluida una exploración
neurológica. Deben registrarse la evolución del embarazo y compli-
Los síndromes miasténicos congénitos (SMC) comprenden un núme- caciones como polihidramnios. Son importantes los antecedentes de
ro creciente de enfermedades heterogéneas, todos ellos caracterizados disminución de los movimientos fetales. Los antecedentes obstétricos
por un fallo en la transmisión neuromuscular secundario a un defecto pueden apuntar a una lesión hipóxico-isquémica como la etiología de
genético. Un número significativo de casos de SMC se manifiestan la hipotonía y la debilidad. Recoger los antecedentes familiares de tres
en el período neonatal o en la primera infancia. El diagnóstico suele generaciones puede ayudar a identificar a otros miembros de la familia
retrasarse años. El cuadro clínico característico consiste en debilidad afectados. No debemos olvidar que muchas enfermedades neuromus-
muscular y fatiga con afectación de los sistemas musculares extraocular, culares pueden presentar una variabilidad intrafamiliar significativa.
bulbar, respiratorio y de las extremidades en diferentes combinaciones Buscar una miotonía de prensión sacudiendo la mano de la madre ayu-
(Engel, 2012). Algunos patrones son lo suficientemente inusuales dará al profesional a sospechar una DMC. Esto debe hacerse siempre
como para merecer una mención especial. Los SMC Dok7 pueden que se evalúe la hipotonía en un recién nacido. La exploración física y
manifestarse inicialmente en el período neonatal con estridor debido neurológica del recién nacido hipotónico debe incluir la definición de
a parálisis bilateral de las cuerdas vocales, dificultad respiratoria y la hipotonía (axial, proximal, distal o difusa), así como de la debilidad
dificultad en la deglución. Algunos pacientes precisarán intubación y (proximal, distal o difusa). Es importante la presencia o ausencia de
soporte ventilatorio (Jephson et al., 2010). Se han detectado episodios los reflejos tendinosos profundos, la posición de reposo y la cantidad
de deterioro respiratorio con fatiga durante las tomas, con escasos de movimientos espontáneos.
síntomas o ausencia de los mismos entre ellas, en un paciente con Dado que la hipotonía de causa central es muy frecuente, deben
deficiencia de acetilcolinesterasa en la placa motora (observación buscarse signos y síntomas que indiquen afectación del SNC. Entre
personal). Las mutaciones de colina acetiltransferasa producen hipo- ellos están, aunque no son los únicos, encefalopatía, crisis epilépticas,
tonía con notables síntomas bulbares e insuficiencia respiratoria en rasgos dismórficos, antecedentes que sugieran una lesión hipóxico-
el período neonatal, seguida de episodios potencialmente mortales isquémica, hipotonía grave en un contexto de debilidad leve y meta-
de apnea en un período posterior de la infancia (Ohno et al., 2001). bolopatías. Los antecedentes de lesión hipóxico-isquémica no son

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CAPÍTULO 64 Enfermedades neuromusculares neonatales 959

• Figura 64.2  Abordaje diagnóstico de las enfermedades neuromusculares neonatales. AChR, re­
ceptor de la acetilcolina; AME, atrofia muscular espinal; CK, creatina cinasa; EMG, electromiografía;
ENR, estimulación nerviosa repetida; norm., valores normales; SMC, síndromes miasténicos congénitos.

excluyentes de un trastorno neuromuscular, ya que muchas de estas Creatina cinasa


enfermedades ponen al recién nacido en una posición de riesgo de
lesión hipóxico-isquémica. Parece que los recién nacidos con DMC La CK es una prueba rápida que debe realizarse ante la primera sos-
presentan una lesión hipóxico-isquémica sobreañadida con una fre- pecha de enfermedad neuromuscular. Cifras con una elevación signi-
cuencia relativamente mayor. A menudo al recién nacido que está hipo- ficativa (más de cinco veces lo normal) apuntarán a una enfermedad
tónico en el momento del nacimiento se le realizan pruebas radiológicas muscular, probablemente un DMC. Pueden observarse cifras normales
cerebrales y en ocasiones de columna. Generalmente se prefiere la RM. o ligeramente elevadas en las miopatías congénitas y en la AME.
En la mayoría de las enfermedades neuromusculares, estas pruebas son
normales. La hipoplasia de la protuberancia y el cerebelo apuntará en la Electromiografía
dirección de una AME con HPC. Algunas formas de DMC a menudo
se manifiestan inicialmente con anomalías cerebrales significativas, tal y Considerada una prueba difícil de realizar en recién nacidos, en las
como se ha mencionado. Los cambios en la sustancia blanca descritos manos adecuadas, la EMG puede ser de inmensa ayuda. Su principal
en la DMC por deficiencia de merosina no son evidentes en el período ventaja es un diagnóstico rápido, en el momento, de un proceso neuró-
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neonatal. Las pruebas cerebrales y espinales son más importantes en la geno, un proceso miopático o un defecto de la transmisión neuromus-
evaluación de la hipotonía de tipo central. cular. Siempre que esté disponible, debe ofrecerse la EMG al comienzo
Además de la historia clínica y la exploración física, las herramientas del proceso diagnóstico.
de las que dispone el médico son:
1. CK. Biopsia muscular
2. Estudios EMG.
3. Biopsia muscular. A pesar de los avances en el diagnóstico genético, la biopsia muscular
4. Pruebas genéticas. sigue siendo una herramienta importante en el diagnóstico de las
Existen pocos diagnósticos visuales. Los síntomas iniciales de la enfermedades neuromusculares. Su principal utilidad consiste en la
DMC son rasgos faciales típicos. Si se combina con un aspecto facial identificación de tipos particulares de miopatía congénita o DMC y,
miopático de la madre y miotonía de prensión, se puede ir directamente como consecuencia, puede dirigir las pruebas genéticas hacia genes
a la confirmación genética. La presentación de la AME en el período más específicos. Dado que el coste de las pruebas genéticas se está
neonatal es otra situación en la que el diagnóstico visual es posible reduciendo, es más factible comenzar las pruebas complementarias
para el neonatólogo experto. La figura 64.2 propone un algoritmo con ellas y emplear la biopsia muscular únicamente si la primera ronda
sistemático por pasos para su evaluación. de pruebas genéticas no consigue determinar una anomalía genética.

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960 PA RT E XI I Sistema nervioso

Pruebas genéticas Echenne B, Rideau A, Roubertie A, Sebire G, Rivier F, Lemieux B. Myoto-


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CAPÍTULO 64 Enfermedades neuromusculares neonatales 960.e3

Resumen
Las enfermedades neuromusculares neonatales son trastornos
del músculo, la conexión neuromuscular, los nervios y las células del
asta anterior, que a menudo cursan con hipotonía neonatal. Tam-
bién pueden acompañarse de insuficiencia respiratoria y dificultades
para la alimentación. Este capítulo analiza lo que conocemos en la
actualidad sobre las manifestaciones clínica y los rasgos patológi-
cos, genéticos y radiológicos de estas enfermedades, y plantea un
enfoque para su evaluación.

Palabras clave
Enfermedad neuromuscular
Hipotonía
Debilidad
Atrofia muscular espinal
Neonato hipotónico
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65
Convulsiones neonatales
NIRANJANA NATARAJAN Y SIDNEY M. GOSPE, JR.

PUNTOS CLAVE En este capítulo, el término convulsión se refiere a una crisis epiléptica,
es decir, aquellas con síntomas electrográficos.
• Las convulsiones neonatales son habituales.
• La evaluación clínica no es suficiente por sí misma para el diagnóstico,
y son necesarias pruebas complementarias.
Diagnóstico de las convulsiones
• Las convulsiones son a menudo síntoma de una causa subyacente que Las convulsiones neonatales suelen ser breves y sutiles, lo que plantea la
precisa estudio. incertidumbre del diagnóstico en presencia de movimientos inusuales.
• La toma de decisiones se divide entre determinar la etiología Con frecuencia, las manifestaciones clínicas que plantean la sospecha
y el tratamiento de las convulsiones. de convulsión llevan al inicio del tratamiento antes de realizar pruebas
complementarias. Sin embargo, esto no se recomienda. Dado que
los recién nacidos pueden mostrar comportamientos automáticos o
motores que emulan los movimientos de una convulsión, y los recién
CONTROVERSIAS nacidos con encefalopatía, que corren un gran riesgo de convulsiones,
• El impacto independiente de las convulsiones únicamente electrográficas pueden desarrollar movimientos paroxísticos no epilépticos junto con
es incierto. Aunque son cada vez más las evidencias que sugieren las convulsiones, es imprescindible realizar pruebas complementarias
un efecto en el riesgo de desarrollar epilepsia posteriormente para ayudar al diagnóstico y limitar el sobretratamiento, así como
y en los resultados del desarrollo neurológico, el tratamiento agudo la ausencia de detección de episodios. Los profesionales médicos de
de las crisis electrográficas sigue estando a debate. distintos ámbitos han mostrado una dificultad para determinar si los
• Los fármacos antiepilépticos (FAE) de primera línea tienen una eficacia episodios son convulsiones o no basándose únicamente en los rasgos
limitada, lo que lleva a diversas prácticas clínicas según el profesional clínicos. Un estudio observacional realizado para evaluar a los profesio-
y a usos extraoficiales de los FAE. nales sanitarios en la identificación de las convulsiones con 20 video-
• La duración óptima del tratamiento con FAE tras la resolución de las clips (11 eran crisis, 9 no) demostró que los profesionales acertaban de
convulsiones varía en función del profesional. Estudios retrospectivos media el 50% de las veces cuando se les proporcionaban únicamente los
sugieren que un tratamiento corto es suficiente.
antecedentes y las manifestaciones clínicas (Malone et al., 2009). Por
otro lado, la identificación de las convulsiones siguiendo únicamente
un criterio clínico puede llevar a que pasen desapercibidas algunas
Convulsiones neonatales convulsiones (Clancy et al., 1988; Murray et al., 2008).
Teniendo esto en cuenta, la American Clinical Neurophysiology
Las convulsiones en el neonato se presentan en 2-4 de cada 1.000 nacidos Society desarrolló unas directrices en 2011 sobre el uso de la electroence-
vivos y son una causa de morbilidad y mortalidad neonatal (Lanska falografía (EEG) continua en neonatos (Shellhaas et al., 2011). Aunque
et al., 1995; Ronen et al., 1999; Saliba et al., 1999). Con frecuencia, el se entiende que no todos los centros dispondrán de los recursos necesarios
síntoma inicial es una urgencia neurológica que precisa pruebas diagnós- para esta vigilancia, estas directrices proporcionan objetivos en la moni-
ticas rápidas y exhaustivas, e intervenciones terapéuticas. Las convulsiones torización de las convulsiones en los neonatos de alto riesgo y ayudan
en el recién nacido pueden ser temporales por anomalías electrolíticas, el a determinar qué neonatos con episodios sospechosos deben evaluarse.
indicador de una lesión o una anomalía cerebral subyacente, o el síntoma Muchas instituciones incorporan la EEG de amplitud integrada (EEGa)
inicial de un trastorno médico subyacente. La clínica de las convulsiones a para ayudar a la detección de las convulsiones. Esta prueba emplea de dos
esta edad difiere de la que se observa en los niños y lactantes más mayores. a cuatro electrodos en el cuero cabelludo para obtener un trazado base de
Las convulsiones pueden ser sutiles o sin manifestaciones clínicas, y información. Esta señal se procesa y se relaciona en el tiempo, creando
difíciles de diferenciar de otros movimientos involuntarios del neonato. un único trazado por hemisferio. Los aspectos técnicos de este enfoque se
Sigue habiendo muchos dilemas en el diagnóstico y tratamiento de describen adecuadamente en otro apartado (El-Dib et al., 2009).
las convulsiones neonatales. Las directrices de los últimos años se han La EEG continua y la EEGa se discuten más adelante.
creado para ayudar a los profesionales a diagnosticar las convulsiones
neonatales mediante pruebas diagnósticas complementarias. Se están Clasificación de las convulsiones
llevando a cabo esfuerzos continuados para determinar cuán drástico
debe ser el tratamiento de las convulsiones, qué fármacos utilizar, Las convulsiones en el neonato suelen ser breves y sutiles, y su manifes-
durante cuánto tiempo tratar las crisis, y el impacto de las convulsiones tación puede ser diferente de la de las convulsiones en niños o lac-
neonatales en el resultado del desarrollo neurológico. tantes de más edad. Clásicamente, las convulsiones neonatales se han
Este capítulo discute el diagnóstico, los criterios neurofisiológicos, la clasificado según el cuadro clínico en cinco categorías: convulsiones
etiología, el tratamiento y el pronóstico de las convulsiones neonatales. clónicas focales, clónicas multifocales, tónicas, mioclónicas y sutiles
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962 PA RT E XI I Sistema nervioso

TABLA
65.1  Tipos de convulsiones

Diagnóstico diferencial con movimientos


Tipo de convulsión Características no epilépticos
Clónica focal • Sacudidas rítmicas repetitivas de una extremidad o una mitad del cuerpo • Sacudidas, temblores
• Hay una fase rápida y una fase lenta de movimiento • Los movimientos no epilépticos tienden a tener
• Los movimientos no pueden eliminarse con restricciones táctiles fases de movimiento iguales
Tónica focal • Rigidez de una extremidad o de una mitad del cuerpo • Rigidez bilateral provocada
• «Fenómeno de liberación del tronco encefálico»
• Reflujo gastroesofágico
Mioclónica • Ráfaga de sacudidas rápidas de una o varias extremidades • Puede ser epiléptico o no epiléptico
«Sutil» • Desviación ocular tónica • Pedaleo
• Rotación de la cabeza • Movimientos de masticación
• Movimientos de masticación

(Volpe, 2008). Otro esquema de clasificación tiene en cuenta la presen- ser epiléptica (convulsiones mioclónicas), mientras que otras no lo son,
cia o ausencia de correspondencia con la EEG durante los movimientos lo que exige una evaluación adicional con estudios neurofisiológicos
observables, diferenciando los movimientos en «epilépticos» y «no para determinar la naturaleza de la mioclonía. La mioclonía suele ser
epilépticos» (tabla 65.1). la manifestación de una patología subyacente y, por lo tanto, exige
una evaluación etiológica en busca de causas metabólicas, infecciosas,
Convulsiones clónicas (focales y multifocales) estructurales y genéticas (Scher, 1985).
En algunos casos, sin embargo, la mioclonía es benigna. En los
Los movimientos rítmicos con una fase flexora rápida seguida de prematuros, la mioclonía puede darse en ausencia de anomalías del
una fase de extensión más lenta que persiste a pesar de la flexión del sistema nervioso. Sin embargo, la consideración de causas metabólicas
miembro afectado pueden significar una convulsión clónica. Este o infecciosas es imprescindible cuando la mioclonía es excesiva. Los
puede confundirse con un fenómeno no epiléptico, como temblores neonatos sanos pueden presentar una mioclonía exagerada durante
o agitación, en algunos recién nacidos. Los rasgos distintivos de estas el sueño, que se conoce como mioclonía neonatal benigna del sueño
entidades son la ritmicidad del episodio y su habilidad para resolverse (Coulter y Allen, 1982).
o modificarse con cambios de posición. Rasgos distintivos sutiles, pero
importantes, son la brevedad de la fase flexora en comparación con la Convulsiones sutiles
fase extensora, ya que los temblores o la agitación tienden a tener fases
flexoras y extensoras idénticas. Las convulsiones sutiles son las que tienen automatismos motores, como
Las convulsiones focales clónicas o hemiclónicas pueden observarse movimientos orobucolinguales, y constituyen el subtipo de convulsiones
en neonatos con lesión localizada en un emplazamiento específico, neonatales que se observa con más frecuencia. Pueden observarse acom-
como ocurre en caso de accidente cerebrovascular perinatal u otros pañando a otros tipos de convulsiones, como las convulsiones clónicas
episodios cerebrovasculares (Clancy et al., 1985; Levy et al., 1985). focales o multifocales. Dada su sutileza, son especialmente difíciles
Las convulsiones multifocales, convulsiones clónicas que proceden de de identificar en la clínica, para lo que a menudo uno debe primero
múltiples localizaciones en distintos momentos, pueden observarse en conocer los reflejos autónomos, los movimientos y los comportamientos
neonatos con anomalías cerebrales multifocales o generalizadas, como típicos del neonato, para después detectar alteraciones de estos patrones
la encefalopatía hipóxico-isquémica. que no tengan explicación. Los movimientos repetidos, como el pedaleo,
así como los movimientos oculares, orales o bucolinguales, se encuen-
Convulsiones tónicas tran en esta categoría. Se debe prestar especial atención a los cambios
en las constantes vitales que las acompañan, como fluctuaciones en la
Las convulsiones tónicas son las que tienen una flexión o una extensión frecuencia cardíaca, la presión arterial o la saturación de oxígeno, que
sostenida de un grupo muscular. Esta puede afectar a las extremidades, de otro modo no tienen explicación. Dado que los movimientos más
pero también a los músculos oculares, con una desviación sostenida de benignos pueden emular estos rasgos motores de las convulsiones sutiles,
la vista o la cabeza, que lleva a rotación de la cabeza. Las convulsiones se recomienda su confirmación con una EEG.
tónicas pueden ser epilépticas o no epilépticas, con una extensión tónica
bilateral que no se muestra en la EEG (Mizrahi y Kellaway, 1987). Movimientos neonatales no epilépticos
La postura tónica no epiléptica puede ser la manifestación de una
«liberación del tronco encefálico» en el contexto de una disfunción Como se ha mencionado previamente, los recién nacidos son propen-
cortical extensa. Esta disfunción cortical puede permitir una expresión sos a una variedad de movimientos que pueden levantar la sospecha
subcortical sin inhibición. Otros movimientos que pueden confundirse de convulsiones, pero que son manifestaciones de otras entidades
con convulsiones tónicas son la postura distónica, que puede coexistir neurológicas o no neurológicas (Mizrahi y Kellaway, 1998). Dada esta
en neonatos con convulsiones, especialmente en caso de lesión cerebral. incertidumbre clínica, se recomienda la EEG con el vídeo correspon-
diente para comparar el episodio clínico con los datos neurofisiológicos
Convulsiones mioclónicas (Shellhaas et al., 2011).

Los movimientos mioclónicos son ráfagas de rápidas sacudidas, que Temblores o agitación
pueden ser focales, multifocales o generalizadas. La mioclonía puede
ocurrir en múltiples localizaciones del sistema nervioso: regiones corti- Los temblores pueden observarse con frecuencia en el neonato,
cales, tronco encefálico y médula espinal. Es decir, la mioclonía puede y el personal sanitario puede confundirlos con actividad clónica.

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CAPÍTULO 65 Convulsiones neonatales 963

La fenomenología de este movimiento es flexión y extensión, con Discinesias


fases equivalentes en tiempo e intensidad, lo que las distingue de la
actividad clónica. La agitación consiste en temblores rítmicos sobre Los movimientos distónicos y discinéticos son frecuentes en el neonato,
un eje fijo. El reposicionamiento del miembro afectado a menudo y es habitual que puedan confundirse con convulsiones. Este grupo
reduce o elimina el movimiento, lo mismo que la flexión. Los neo- de movimientos se asocian a los ganglios basales o las vías extrapira-
natos pueden estar alerta o hiperalerta, aunque puede presentarse midales, y pueden ser secundarios a efectos agudos o crónicos en estas
en neonatos con somnolencia secundaria a encefalopatía. El tem- estructuras. La distonía es la cocontracción involuntaria, sostenida o
blor puede ser asimétrico y de diversa intensidad. Los movimientos intermitente, de los músculos agonistas y antagonistas que llevan a
tienden a ser espontáneos, pero pueden darse en respuesta a una una postura anómala (Sanger et al., 2010). En el neonato, a menudo
estimulación táctil. representa una lesión durante el parto o previa al mismo con una
Tanto los temblores como la agitación pueden ser secundarios lesión grave de los ganglios basales (Scher, 2008). Algunos trastornos
a trastornos metabólicos como la hipoglucemia o la hipocalcemia, congénitos del metabolismo pueden debutar con hipertonicidad, opis-
así como a hemorragia intracraneal y restricción del crecimiento, o tótonos o distonía (p. ej., enfermedad de la orina con olor a jarabe de
a la hipotermia. La exposición a fármacos maternos, como los inhi- arce, trastornos del neurotransmisor de monoamina) (Hyland, 1999;
bidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS), o drogas Strauss et al., 2006).
de abuso, como la cocaína y la marihuana, también se han asociado La distonía o postura desgarbada es el reflejo de una desinhibición
a temblores. No obstante, estos movimientos son habituales, y un subcortical funcional secundaria al daño o a la malformación de la
estudio ha descrito agitación leve, moderada o excesiva en el 44% corteza (Sarnat, 1984). Dado que los movimientos discinéticos y dis-
de los recién nacidos a término sanos (Parker et al., 1990). tónicos son frecuentes en los neonatos con encefalopatía, que también
Los movimientos generalmente disminuyen a medida que aumenta pueden presentar crisis epilépticas, el empleo de vídeo-EEG continua
la edad gestacional, con un resultado neurológico normal (Parker es imperativo para prevenir el error en el diagnóstico y el tratamiento
et al., 1990). inadecuado de cualquiera de los diagnósticos.

Mioclonía sin correspondencia Diagnóstico neurofisiológico de convulsión


electrográfica Las convulsiones neonatales son difíciles de identificar por sus manifes-
La mioclonía se define como una secuencia de movimientos breves, taciones clínicas debido a múltiples razones, entre ellas el desafío de
similares a una descarga, repetidos y a menudo arrítmicos, causados detectar la diferencia con los movimientos involuntarios no epilépti-
por una contracción o una relajación involuntaria repentina de uno cos, muy sutil, como se ha discutido anteriormente, así como por la
o más músculos (Sanger et al., 2010). Los movimientos mioclónicos posibilidad de la disociación electroclínica de las convulsiones tras el
pueden proceder de múltiples lugares del neuroeje, como se ha tratamiento, que son evidentes únicamente con la ayuda de la EEG
mencionado previamente, y pueden carecer de correspondencia (Scher, 1994). Los estudios estiman que hasta el 80% de las convul-
electrográfica. Esta mioclonía no epiléptica es más frecuente en siones pueden ser electrográficas, sin ninguna manifestación clínica
recién nacidos prematuros, pero también en neonatos a término, y (Clancy et al., 1988). La definición neurofisiológica de las convul-
puede ser benigna en algunos casos, mientras que en otros puede ser siones, el estado epiléptico y la disociación electroclínica, así como la
un indicador de anomalías subyacentes. Los movimientos aparecen importancia de las anomalías interictales, se discuten a continuación.
en neonatos sin encefalopatía y se resuelven al despertar. Coulter Debido a la incapacidad para detectar con precisión las convulsiones
y Allen (1982) describieron por primera vez la mioclonía neonatal por su clínica, sigue siendo imprescindible recurrir a las pruebas com-
benigna del sueño; se considera un diagnóstico de exclusión. Debe plementarias para ayudar a la detección de las convulsiones. Se dis-
sospecharse cuando se observe en un recién nacido, por lo demás cutirán brevemente dos modos de detección de convulsiones: la EEG
sano, con mioclonía que aparece durante el sueño y se resuelve y la EEGa. Sigue habiendo controversia en cuanto al grado de trata-
al despertar, y es típicamente arrítmica y de diversa intensidad. miento que precisan las convulsiones exclusivamente electrográficas.
Puede aumentar con los intentos de restricción física o ser inducida Sin embargo, cada vez hay más evidencias que sugieren la importancia
al mecerle, y aparece en cualquier momento del sueño (Maurer del tratamiento. Esta cuestión se discutirá más adelante.
et al., 2010). Suele resolverse hacia los 3 meses de edad, aunque
algunos recién nacidos pueden presentar síntomas hasta los 6-12 Electroencefalografía
meses de edad (Maurer et al., 2010).
Esta es diferente de la mioclonía que aparece en un recién nacido La EEG convencional, la prueba de referencia para la detección de
con encefalopatía. En este caso, la mioclonía puede estar inducida las convulsiones neonatales, es una herramienta inestimable para la
por estímulos, con una mioclonía mayor ante la estimulación táctil detección de convulsiones. Se colocan múltiples electrodos siguiendo
o dolorosa, y se presenta en caso de lesión cerebral grave. Otras el sistema internacional 10-20, o con el montaje neonatal modificado,
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opciones etiológicas en el neonato con mioclonía y encefalopatía junto con un único conductor de electrocardiograma y un cinturón res-
son una infección, como la encefalitis o la meningitis, la hemorragia piratorio. La interpretación de la EEG exige el dominio de los patrones
intraventricular, la leucomalacia periventricular o los trastornos normales y anormales del sueño, y la vigilia del neonato a término y
metabólicos como la encefalopatía por glicina (Scher, 1985). En estos prematuro. Es imprescindible la ayuda del técnico de la EEG o de una
últimos casos, la base de la EEG es habitualmente anómala y puede enfermera a pie de cama para anotar posibles episodios de interés y
mostrar descargas de tipo epiléptico, aunque la propia mioclonía artefactos (como técnicas de enfermería, tomas, etc.).
carece de correspondencia EEG de tipo epiléptico (Scher, 1985).
Algunos fármacos también pueden producir mioclonía no epiléptica. Definiciones neurofisiológicas
Se ha registrado mioclonía inducida por midazolam o loracepam en
neonatos prematuros o con muy bajo peso al nacer (Lee et al., 1994; La American Clinical Neurophysiology Society ha descrito reciente-
Magny et al., 1994; Sexson et al., 1995). Si aparece mioclonía indu- mente las convulsiones y sus características (Tsuchida et al., 2013). Para
cida por fármacos, debe limitarse su uso en el período neonatal siem- que se considere una convulsión, debe haber una actividad rítmica que
pre que sea posible. Dado que se cree que la respuesta tiene que ver dure 10 s con un voltaje pico-pico (pp) mínimo de 2 µV, cuya cualidad
con el desarrollo, es necesario evitar el empleo de benzodiacepinas varíe y se resuelva posteriormente. Los episodios de estas características
durante la lactancia y la niñez. que duren menos de 10 s se conocen como descargas rítmicas breves (DRB)

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964 PA RT E XI I Sistema nervioso

y, aunque no son convulsiones, suponen un mayor riesgo de desa- una sensibilidad media del 76%, con una especificidad media del
rrollarlas. Los estudios de menor duración pueden detectar DRB 85%, pero con una alta variabilidad cuando se comparaban estudios
sin convulsiones electrográficas que tienen una alta probabilidad de (Rakshasbhuvankar et al., 2015). En consecuencia, aún se recomienda
coexistir, por lo que se recomienda la monitorización EEG continua que la EEGa se use como herramienta de cribado cuando el uso de
para garantizar la identificación adecuada de las convulsiones. la prueba de elección, la EEG continua, esté restringido, pero con
El estado epiléptico, definido en los niños de más edad o en adultos recurso a esta última cuando se detecten convulsiones (Glass
como una convulsión que dura más de 30 min o más de una convulsión et al., 2013; Sanchez Fernandez y Loddenkemper, 2015).
sin retorno a los valores de referencia entre ellas, no es una definición
adecuada en los neonatos, dada la habitual comorbilidad de encefalo-
patía y las dificultades generales para identificar el verdadero retorno a Anomalías interictales
los valores de referencia. Por ello, la definición de estado epiléptico se Más allá de la identificación de las convulsiones, la EEG detecta los
ha establecido como convulsiones que ocupan más del 50% de 1 h, lo datos interictales que ayudan al tratamiento del paciente. La presencia
que supone una definición arbitraria (Tsuchida et al., 2013). de anomalías de base puede exigir un seguimiento seriado para iden-
Se recomienda la monitorización EEG continua de los neonatos tificar la evolución de una encefalopatía (Scher, 1994). Aunque es
en algunas poblaciones de alto riesgo, como en los casos en los que se posible que los hallazgos de base no sean patognomónicos de etiologías
sospecha que aparecerán convulsiones neonatales, como es el caso de particulares, estos hallazgos, unidos al resto de las pruebas diagnósticas
una lesión cerebral aguda secundaria a asfixia perinatal, en neonatos complementarias (historia clínica, exploración física y los análisis de
con sospecha clínica de convulsiones o cuando se sospecha epilepsia laboratorio y pruebas radiológicas) ayudan a la determinación del
neonatal. En algunos casos, puede ser adecuado continuar la monito- pronóstico global del paciente.
rización tras la retirada de los fármacos antiepilépticos (FAE). Aunque
en el caso de una lesión cerebral adquirida no es probable que las Etiología de las convulsiones neonatales
convulsiones recidiven poco después de la resolución de las mismas,
puede ser necesaria la monitorización cuando se interrumpan los FAE Una vez que se ha determinado que un neonato sufre convulsiones, la
en los pacientes con síndromes de epilepsia neonatal o malformaciones atención se divide en el tratamiento de las convulsiones, que se discutirá
cerebrales. Se recomienda que los neonatos permanezcan monitorizados más adelante, y la identificación de la etiología de las convulsiones.
durante 24 h una vez finalizada la convulsión. Las convulsiones neonatales no son específicas de una enfermedad
y pueden acompañar a diversos trastornos que pueden ocurrir antes,
Disociación electroclínica durante o después del nacimiento. Las convulsiones pueden darse en
caso de trastornos electrolíticos, como hipoglucemia, hipocalcemia
La administración de FAE en el caso de convulsiones con manifes- o hipomagnesemia, y pueden responder cuando estas se corrigen.
taciones eléctricas y clínicas puede llevar a un fenómeno conocido Las convulsiones pueden deberse a una lesión cerebral subyacente
como disociación electroclínica, donde las convulsiones electrográficas en el contexto de encefalopatía hipóxico-isquémica, lesión previa al
persisten mientras que las manifestaciones clínicas se resuelven. Un parto, accidente cerebrovascular perinatal, hemorragia, traumatismo
estudio calcula que el 25% de los neonatos presentan convulsiones o infección. Disgenesias metabólicas, genéticas o cerebrales son otras
electrográficas persistentes tras recibir FAE a pesar de la resolución de posibles etiologías (tabla 65.2).
las convulsiones clínicas (Scher, 1994).
Esta información sugiere que las convulsiones pueden pasar desa-
percibidas si no se realizan pruebas complementarias, lo que llevará
Encefalopatía hipóxico-isquémica
a la ausencia de diagnóstico y tratamiento del estado epiléptico. Los La hipoxia-isquemia se considera la causa más habitual de convulsiones
efectos de no administrar el tratamiento influyen en el resultado del neonatales y es una posibilidad importante en el neonato con ence-
desarrollo neurológico, como se verá más adelante. falopatía y convulsiones. El American College of Obstetricians and
Gynecologists publicó inicialmente unas directrices en 2004 en las que
Electroencefalografía de amplitud integrada proponía cinco criterios que sugieren una etiología intraparto: acidemia
profunda con un pH de menos de 7, un Apgar de 0 a 3 después de los pri-
La EEGa es un monitor de la función cerebral disponible desde hace poco meros 5 min de vida, bradicardia fetal sostenida repentina o ausencia de
como una herramienta de pie de cama y que se ha utilizado en la última variabilidad de la frecuencia cardíaca fetal, aparición de insuficiencia
década en EE. UU. Emplea de dos a cuatro electrodos, habitualmente multiorgánica en las primeras 72 h y necesidad de radiología inicial
colocados en las regiones central y parietal. Empleando una electrónica (American College of Obstetricians and Gynecologists, 2004). Dados
sofisticada, esta señal se convierte en un único canal que marca la los avances en el conocimiento de la pasada década, estas directrices
amplitud pp de una onda a la siguiente, que se relaciona entonces con se actualizaron en 2014 y reflejan las dificultades para establecer si un
el tiempo. Entre las ventajas de la EEGa encontramos la disponibilidad episodio se dio intraparto y se debió a hipoxia-isquemia o a otro tipo
y la posibilidad de interpretación a pie de cama, así como un coste de encefalopatía neonatal (Executive Summary, 2014).
reducido cuando se compara con la monitorización EEG continua En la era de la hipotermia terapéutica, la identificación de neonatos
(Hellström-Westas et al., 2008). Debido al procesamiento técnico de que puedan beneficiarse de este tratamiento, que trata de prevenir un
esta señal, existen limitaciones, como desafíos en la detección de las fallo energético secundario y una lesión cerebral adicional, supone que
convulsiones breves o de baja amplitud o convulsiones que no proceden los neonatos cumplan criterios de laboratorios sugestivos de lesión
de las regiones cerebrales cubiertas por la EEGa (Shellhaas et al., 2007). hipóxico-isquémica, además de la presencia de encefalopatía moderada
Durante una convulsión, se da un aumento repentino y sostenido de o grave (Gunn et al., 2005; Shankaran et al., 2005).
los márgenes inferior y superior de la EEGa, con una señal EEG inicial Aunque la encefalopatía hipóxico-isquémica es una causa habitual
que muestra una onda monomorfa compatible con una convulsión de las convulsiones neonatales, es importante reconocer que la lesión
(Hellström-Westas et al., 2008). La EEGa también puede verse limi- puede producirse tras el parto, y son varios los factores preparto e
tado, ya que es propenso a los artefactos de la señal por el movimiento, intraparto que muestran una relación estrecha con las convulsiones
la ventilación oscilatoria de alta frecuencia o la oxigenación con mem- neonatales. Un estudio que empleaba modelos logísticos describió el
brana extracorpórea (ECMO). En una revisión sistemática reciente sangrado posnatal, el desprendimiento de placenta, la preeclampsia, la
sobre la detección de las convulsiones neonatales en la EEGa (la EEGa cesárea debida a hemorragia, el líquido meconial y la distocia de hom-
y el trazado sin procesar se examinaban simultáneamente), se observó bro entre los factores preparto e intraparto asociados a convulsiones

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CAPÍTULO 65 Convulsiones neonatales 965

TABLA  Diagnóstico diferencial de la etiología maternas circulantes activaron procesos fisiológicos que provocaron
65.2 de las convulsiones la lesión neurológica, incluso en ausencia de infección (Lieberman
et al., 2000).
Encefalopatía hipóxico-isquémica Las anomalías placentarias pueden ser el reflejo de enfermedades
crónicas, lo que sugiere que un problema preparto en neonatos con
Trastorno metabólico • Hipoglucemia
encefalopatía no se debe a asfixia en el nacimiento. En un estudio de 73
• Hipocalcemia
• Hipomagnesemia
neonatos se evaluaron las placentas de los neonatos con convulsiones
• Hiponatremia confirmadas a nivel electrográfico y se compararon con controles sin
• Hipernatremia convulsiones. Las lesiones placentarias compatibles con asfixia crónica
previa al parto como la vellositis crónica o los cambios en la madu-
Lesiones • Accidente cerebrovascular arterial ración, eran más frecuentes en los recién nacidos con convulsiones
cerebrovasculares o embólico perinatal neonatales que en los que no las tenían (Scher et al., 1998).
• Hemorragia
• Trombosis del seno venoso cerebral
• Trombosis venosa cortical Lesiones cerebrovasculares
• Infarto venoso hemorrágico
Las lesiones isquémicas o hemorrágicas de origen arterial o veno-
Infección • Meningitis bacteriana so se asocian a un alto riesgo de convulsiones en el recién nacido
• Encefalitis vírica (Ment et al., 1984; Clancy et al., 1985; Levy et al., 1985; Scher y
• Infecciones TORCH Beggarly, 1989; Rivkin et al., 1992). En los neonatos a término con
accidente cerebrovascular arterial perinatal, las convulsiones son el
Exposición a drogas/ Incluye, entre otros:
síntoma inicial más habitual, entre el 70 y el 90% de los casos, segui-
fármacos • Metadona
das de hipotonía o problemas para la alimentación (Lee et al., 2005;
o abstinencia • Cocaína
• ISRS
Grunt et al., 2015). Los neonatos con infarto cerebral a menudo tienen
un aspecto sano y tranquilizador, que no es compatible con asfixia.
Malformaciones cerebrales congénitas Será necesario recurrir a los estudios de neuroimagen por resonancia
magnética (RM) para demostrar la lesión focal (Osmond et al., 2014;
Metabolopatías Incluyen, entre otras:
Weeke et al., 2015). Son muchos los factores que se asocian al accidente
congénitas • Encefalopatía por glicina
• Aminoacidopatías
cerebrovascular arterial perinatal relacionados con aspectos que afectan
• Defectos del ciclo de la urea a la díada madre-feto (Lee et al., 2005).
• Epilepsia dependiente de piridoxina En los recién nacidos prematuros, la hemorragia intraventricular
(HIV) es la causa más habitual de convulsiones (Scher et al., 1993;
Convulsiones Causadas por una mutación en uno Sheth et al., 1999). La HIV es habitual en neonatos prematuros y es la
neonatales de los siguientes genes: causa hasta del 45% de las convulsiones confirmadas por EEG en esta
familiares benignas • KCNQ2 población (Scher et al., 1993). La HIV ocurre habitualmente en los
• KCNQ3 primeros días de vida. Puede ser asintomática y detectarse únicamente
• SCN2A en el cribado con ecografías craneales que se realizan con este propósito.
Síndromes epilépticos Puede deberse a mutaciones Sin embargo, en algunos recién nacidos, las manifestaciones son catas-
progresivos en los siguientes genes, entre otros: tróficas, con fontanela a tensión, hipertonía, apnea y convulsiones
• STXBP1 (Volpe, 2008). Se cree que hay más convulsiones de las calculadas
• FOXG1 en los recién nacidos prematuros, ya que estudios prospectivos que
• CDKL5 evalúan la frecuencia de convulsiones en neonatos prematuros de
• KCNQ2 alto riesgo encontraron una mayor incidencia que aquellos en que la
EEG se realizaba en respuesta a un episodio clínico (Hellstrom-Westas
ISRS, inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina; TORCH, toxoplasmosis, otros et al., 1991; Scher et al., 1993; Strober et al., 1997).
patógenos, rubéola, citomegalovirus y virus del herpes.
Las convulsiones causadas por HIV también pueden aparecer en
neonatos a término. Sin embargo, se impone investigar la etiología
más a fondo, ya que un accidente cerebrovascular venoso o una mal-
neonatales (Patterson et al., 1989). También se identificaron otros formación arteriovenosa pueden convertirse en hemorrágicos (Bruno
factores, como diabetes mellitus, edad materna por encima de los 40 et al., 2014).
años, infección o fiebre intraparto en un estudio de población (Glass El infarto venoso cerebral también puede provocar convulsiones
et al., 2009a). neonatales (Rivkin et al., 1992). Esto puede darse en el contexto de
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una infección sistémica, deshidratación o una mala alimentación con


Otras causas de encefalopatía neonatal trombosis del seno venoso cerebral. Estas lesiones pueden convertirse en
hemorrágicas y asociarse a una HIV. En los recién nacidos prematuros,
La encefalopatía hipóxico-isquémica, no obstante, no es la única causa los infartos hemorrágicos periventriculares, también conocidos como
de encefalopatía neonatal que provoca una alteración de la excitación y hemorragia de la matriz germinal de grado IV, tienen lugar en la sus-
el tono muscular. Las causas posnatales, reflejo de anomalías placenta- tancia blanca profunda y pueden complicarse con convulsiones (Strober
rias o restricción del crecimiento, y factores como la fiebre intraparto et al., 1997).
y la inflamación y la infección, pueden dar como resultado una forma Los recién nacidos con defectos cardíacos congénitos, hipertensión
neonatal de encefalopatía con convulsiones neonatales. pulmonar persistente del recién nacido o que precisan ECMO tienen un
En un estudio, la fiebre intraparto se asoció a una cuadruplicación mayor riesgo de convulsiones debido a la lesión secundaria a la hipoxia
en la aparición temprana de convulsiones, incluso en ausencia de por hipotensión recurrente, y de embolia. La hipertensión pulmonar
meningitis o infección neonatal (Lieberman et al., 2000). Se evaluaron persistente del recién nacido puede provocar hipoxia grave y recurrente y
32 neonatos sin una causa proximal de convulsiones y 152 controles. Se se asocia a lesiones cerebrovasculares y convulsiones (Scher et al., 1986).
vio que era más probable que los neonatos con convulsiones hubieran Los resultados del desarrollo neurológico en los neonatos con defectos
nacido en un contexto de fiebre intraparto. Se postula que las citocinas cardíacos congénitos están adquiriendo interés, dados los avances en la

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966 PA RT E XI I Sistema nervioso

cirugía cardiotorácica, que han aumentado la supervivencia de estos niños. controvertido (Heck y Erenberg, 1987; Sinclair, 1997; Committee on
Se ha detectado incidencia de convulsiones clínicas y electrográficas en esta Fetus and Newborn y Adamkin, 2011). Los recién nacidos de madres
población en relación con cirugía cardíaca que precisa parada circulatoria diabéticas y neonatos pequeños para su edad gestacional corren el riesgo de
en hipotermia profunda o tras una reanimación prolongada (Clancy hipoglucemia transitoria, pero debe contemplarse la posibilidad
et al., 2005; Gaynor et al., 2006). En un estudio que se ha publicado de hiperinsulinismo o metabolopatías congénitas en neonatos con
recientemente, todos los neonatos a los que se les practicó cirugía cardíaca hipoglucemia persistente. La hipoglucemia puede coexistir con lesión
se sometieron posteriormente a monitorización EEG continua. En este hipóxico-isquémica o con hipocalcemia, y ambas pueden desencadenar
estudio, el 8% de todos los pacientes operados presentaron convulsiones, convulsiones. Pueden darse agitación, temblores y un tono muscular
la mayoría de las cuales fueron electrográficas sin correspondencia clínica alterado en neonatos con hipoglucemia, que emulan convulsión. La
(Naim et al., 2015). Los recién nacidos con convulsiones presentaron una hipoglucemia persistente o profunda puede llevar a una lesión cerebral,
peor evolución intrahospitalaria y una mayor mortalidad. que clásicamente se describe como una lesión de la sustancia blanca o
La ECMO se asocia a más lesiones cerebrales neonatal y convul- lesión occipital (Griffiths y Laurence, 1974; Tam et al., 2008).
siones. La hipotensión previa a la ECMO, o como complicación del Las convulsiones deben tratarse primero corrigiendo la hipogluce-
soporte con ECMO, coloca al neonato en riesgo de lesión de la zona mia, aunque las convulsiones pueden persistir a pesar de la corrección,
marginal. La anticoagulación necesaria para el uso del circuito puede especialmente en caso de lesión cerebral. Los recién nacidos con hipo-
convertir una lesión isquémica en hemorrágica, con riesgo de edema o glucemia y lesión cerebral pueden desarrollar posteriormente epilepsia
hernia. Se estima que entre el 5 y el 10% de los pacientes desarrollan del lóbulo occipital, aunque la gravedad de la epilepsia varía (Fong y
convulsiones durante la ECMO (Mehta e Ibsen, 2013). Harvey, 2014).

Hipocalcemia
Infección La hipocalcemia se define como una concentración total de calcio
Las infecciones del sistema nervioso central antes o después del de menos de 8 mg/dl en neonatos a término y menos de 7 mg/dl en
parto pueden asociarse a convulsiones neonatales (Kairam y De neonatos prematuros, o un calcio ionizado de menos de 3 mg/dl
Vivo, 1981). Las infecciones TORCH (toxoplasmosis, otros patógenos, (0, 75 mmol/l) (Beers et al., 1999). Los neonatos con hipocalcemia
rubéola, citomegalovirus y virus del herpes) pueden producir cambios pueden sufrir convulsiones secundarias al aumento de la excitabilidad
estructurales en el cerebro que predispongan a las convulsiones y la de la membrana celular (Nardone et al., 2016), lo que lleva a sobre-
encefalopatía. Estas infecciones se analizan en más detalle en la sección saltos exagerados, agitación, sacudidas mioclónicas o convulsiones
sobre enfermedades infecciosas. La encefalitis herpética neonatal se (Keen, 1969; Jain et al., 2010). La hipocalcemia que no responde a
asocia a hallazgos EEG específicos, con descargas de tipo epiléptico la reposición puede ser secundaria a una hipomagnesemia, que debe
focales o multifocales que pueden ser periódicas o cuasi periódicas confirmarse y corregirse como corresponde (Jain et al., 2010). La
(Mizrahi y Tharp, 1982; Mikati et al., 1990). La infección por ente- hipocalcemia de inicio temprano puede observarse en recién nacidos
rovirus también puede manifestarse con encefalopatía y convulsiones de madres diabéticas, recién nacidos pequeños para su edad gestacional
(Verboon-Maciolek et al., 2005, 2006, 2008). o con una lesión hipóxico-isquémica, así como en caso de hiperpara-
La meningitis bacteriana por estreptococos del grupo B, Escherichia tiroidismo (Jain et al., 2010). La aparición tardía suele ser secundaria
coli, Listeria monocytogenes o Mycoplasma también puede cursar con a etiologías endocrinas. Otras opciones neurológicas en la aparición
encefalopatía con convulsiones y puede complicarse por la formación tardía son los síndromes de deleción del 22q11, que pueden cursar
de abscesos (Gaschignard et al., 2011; Chu et al., 2014). Algunos con hipocalcemia, defectos cardíacos y anomalías cerebrales. Estudios
neonatos con meningitis bacteriana pueden sufrir otras complicaciones recientes sugieren que la hipocalcemia neonatal y las convulsiones
del accidente cerebrovascular arterial o de la trombosis del seno venoso resultantes pueden aumentar el riesgo de discapacidad intelectual en
cerebral, con otras lesiones neurológicas (Fitzgerald y Golomb, 2007). esta población (Cheung et al., 2014).
En este contexto, una duración prolongada de las convulsiones Hiponatremia e hipernatremia
(> 72 h) o un patrón EEG notablemente alterado se asocia a un mal
resultado (Klinger et al., 2000, 2001). La hiponatremia es una causa de convulsiones en cualquier momento
Recientemente, el virus del Zika, un flavivirus que se transmite a vital (Nardone et al., 2016), sin embargo, es relativamente infrecuen-
través de los mosquitos, ha recibido mayor atención, dada su asociación te en los neonatos. Cuando aparece, puede ser el resultado de una
con microcefalia en pacientes nacidos de madres infectadas (Schuler- secreción inadecuada de hormona antidiurética en el contexto de un
Faccini et al., 2016). Las investigaciones neurorradiológicas de los traumatismo, asfixia o infección (Volpe, 2008). Las convulsiones hiper-
neonatos afectados muestran calcificaciones intracraneales, lesiones des- natrémicas también son poco frecuentes en los neonatos, pero pueden
tructivas o malformaciones cerebrales, como polimicrogiria y paquigiria ser secundarias a trastornos suprarrenales congénitos o yatrógenos por
(de Fatima Vasco Aragao et al., 2016). Aunque hasta ahora los regis- soluciones intravenosas con alta concentración en sodio.
tros no recogen las convulsiones neonatales como un síntoma inicial, Síndrome de abstinencia e intoxicación
se puede prever un mayor riesgo de ellas secundario a las lesiones
estructurales asociadas o si persiste la meningoencefalitis. Los recién nacidos de madres con abuso de múltiples sustancias pueden
tener un mayor riesgo de convulsiones en el período neonatal. La
exposición prenatal a los opiáceos como la metadona o la heroína
Alteraciones metabólicas puede provocar un síndrome de abstinencia neonatal, que, en los casos
más graves, puede provocar convulsiones (Herzlinger et al., 1977). Los
Los desequilibrios electrolíticos, como la hipoglucemia, la hipocalce- neonatos nacidos de madres con una intoxicación aguda de alcohol
mia, la hipomagnesemia o la hipo- o hipernatremia, pueden provocar son más propensos a convulsiones secundarias a la abstinencia (Pierog
convulsiones. La reposición de glucosa o electrólitos será imperativa et al., 1977). La cocaína, un estimulante con efectos bien estudiados,
para el tratamiento. Se discutirán otros aspectos de estas etiologías puede desencadenar convulsiones en neonatos, bien como resultado
más adelante. de la intoxicación provocada por la ingestión materna, bien de la abs-
tinencia resultante (Kramer et al., 1990; Chiriboga et al., 1993). La
Hipoglucemia cocaína también puede provocar un accidente cerebrovascular neonatal,
Generalmente, se acepta la hipoglucemia como una cifra de glucosa que a su vez aumenta el riesgo de convulsiones. La exposición a otros
de menos de 47 mg/dl, aunque su definición sigue siendo un tema estimulantes, como la metanfetamina, puede asociarse a un síndrome

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CAPÍTULO 65 Convulsiones neonatales 967

de abstinencia y agitación, temblores y sobresaltos exagerados, pero en una etiología metabólica. Se habla de ello en otros apartados (Poretti
general no se han registrado convulsiones (Hudak et al., 2012). et al., 2013).
El consumo de ISRS por parte de la madre, como fluoxetina, Las metabolopatías congénitas que provocan convulsiones pueden
paroxetina y sertralina, también puede llevar a un síndrome de abs- clasificarse en tres categorías: defectos en la neurotransmisión, tras-
tinencia en los neonatos. Los síntomas clínicos incluyen temblores, tornos en la producción energética y trastornos asociados a una mal-
agitación, vómitos, diarrea y trastornos del sueño. En algunos casos, las formación, destrucción o disfunción cerebral, con una base metabólica
convulsiones pueden formar parte del síndrome de abstinencia (Sanz (Van Hove y Lohr, 2011). Se proporcionan ejemplos de todos ellos
et al., 2005). Sin embargo, la EEG sigue siendo imprescindible para el a continuación, aunque una revisión exhaustiva de las enfermedades
diagnóstico, ya que es posible que no todos los movimientos anómalos congénitas se sale del ámbito de este capítulo.
detectados tengan una correspondencia EEG. Entre los trastornos de la neurotransmisión se encuentran la encefa-
La inyección fetal inadvertida con anestesia local en el nervio puden- lopatía por glicina y la epilepsia dependiente de piridoxina. La encefalo-
do durante el parto puede llevar a la intoxicación neonatal con las patía por glicina, también conocida como hiperglicinemia no cetósica,
convulsiones consecuentes (Dodson, 1976; Hillman et al., 1979). Los se debe a déficits en la capacidad de procesar la glicina. La glicina tiene
recién nacidos registrados presentaban apnea, bradicardia, hipotonía y actividad neurotransmisora tanto inhibidora como excitadora, y la
encefalopatía en las primeras 6-8 h de vida. Si se le practica a la madre encefalopatía por glicina cursa con apnea, convulsiones mioclónicas
un bloqueo del nervio pudendo, debe inspeccionarse el cuero cabelludo y supresión repentina en la EEG. En retrospectiva, las madres suelen
y el cuerpo del recién nacido en busca de posibles marcas de pinchazo haber detectado hipos significativos en el útero, que serían el reflejo
como punto de entrada. El tratamiento en este contexto es sintomático, de convulsiones mioclónicas. Las convulsiones responden a menudo
con estimulación de la diuresis, la acidificación de la orina y la diálisis a las benzodiacepinas, pero a largo plazo los pacientes desarrollan una
según sea necesario. encefalopatía mioclónica temprana o síndrome de Ohtahara (Van
Hove et al., 2002).
Malformaciones cerebrales congénitas La epilepsia dependiente de piridoxina es una causa poco frecuente,
pero tratable, de convulsiones neonatales, provocadas por el déficit de
Las malformaciones cerebrales debidas a trastornos o alteraciones del antiquitina, una enzima involucrada en la vía catabólica de la lisina.
desarrollo neurológico pueden provocar convulsiones en el recién Los recién nacidos pueden presentar convulsiones, encefalopatía e
nacido. Estos trastornos se discuten con más detalle en otros aparta- hipotonía en los primeros días de vida (Gospe, 2001 [actualizado en
dos, pero están causados por alteraciones en los estados de inducción, 2014]). En retrospectiva, las madres pueden describir movimientos
segmentación, proliferación, migración, sinaptogenia y mielinización. paroxísticos intrauterinos que serían convulsiones. En algunos pacientes
Las convulsiones pueden aparecer en el período neonatal debido al con epilepsia dependiente de piridoxina, puede haber acidosis láctica y
estrés fisiológico del nacimiento, que puede reducir el umbral de las otras alteraciones bioquímicas, lo que emula rasgos de la encefalopatía
convulsiones. Suele haber encefalopatía, que puede coexistir o con- neonatal secundaria a hipoxia o isquemia. Por tanto, el diagnóstico
fundirse con asfixia en el nacimiento. Prestar especial atención a la de epilepsia dependiente de piridoxina debe considerarse en recién
exploración física puede ayudar a distinguir estas malformaciones, ya nacidos con supuesta encefalopatía hipóxico-isquémica y convulsiones
que los neonatos con lisencefalia o holoprosencefalia presentan rasgos resistentes a los FAE. Los tipos de convulsión y los hallazgos en la EEG
faciales distintivos. Las pruebas de neuroimagen con RM verificarán pueden variar de paciente a paciente, con una tendencia al estado
estas anomalías. Muchos trastornos de disgenesia cerebral carecen de epiléptico. Se trata de un trastorno autosómico recesivo, provocado
hallazgos específicos en la exploración física, por lo que se recomiendan por una mutación genética en ALDH7A1, y los pacientes afectados
las pruebas de neuroimagen en todos los neonatos con convulsiones. presentan cifras elevadas de semialdehído del ácido α-aminoadípico
Un estudio demostró que el 9% de 356 neonatos con convulsiones (AASA) en la sangre y la orina (Stockler et al., 2011). Tradicionalmente
presentaban malformaciones cerebrales (Sheth et al., 1999). se recomendaba la inyección intravenosa de piridoxina en pacientes
Los neonatos con disgenesia cerebral y convulsiones en el período con estado epiléptico, ya que podía llevar a una mejoría significativa
neonatal son los que tienen mayor probabilidad de desarrollar epi- en la EEG. Sin embargo, en la actualidad se sugiere que se administre
lepsia entre todas las causas de convulsiones neonatales (Watanabe piridoxina enteral hasta que las pruebas bioquímicas o genéticas exclu-
et al., 1982). yan el diagnóstico, ya que la respuesta inmediata a la administración
intravenosa varía (Bok et al., 2010). Se sugiere administrar 30 mg/kg
Metabolopatías congénitas de piridoxina dividida en tres dosis diarias.
Entre los ejemplos de trastornos en la producción y utilización
Las anomalías bioquímicas son una causa poco frecuente de convul- energética se encuentran los defectos del ciclo de la urea y el déficit del
siones neonatales, y son responsables de entre el 1 y el 4% de los casos transportador de glucosa de tipo 1 (GLUT1). Los defectos del ciclo de
(Volpe, 2008; Vasudevan y Levene, 2013). Aunque es poco frecuente, la urea pueden cursar con encefalopatía y convulsiones en los primeros
es imprescindible contemplar esta posibilidad, ya que puede haber 2 días de vida con hiperamoniemia significativa. Las convulsiones
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tratamientos específicos para algunas causas, en función del defecto aparecen por acumulación de toxinas producto de la degradación.
enzimático descubierto. En los casos en que no hay tratamiento, sigue Las pruebas séricas de la concentración de amonio y glucosa, ácidos
siendo esencial conocer las implicaciones para el pronóstico. orgánicos en la orina, aminoácidos plasmáticos y las cifras de acilcar-
La historia clínica del embarazo y el parto puede ser anodina. Sin nitina pueden revelar el diagnóstico. El tratamiento incluye diálisis o
embargo, el recién nacido puede presentar encefalopatía, hipotonía, exanguinotransfusión mientras se determina el defecto enzimático,
mala alimentación y convulsiones en los primeros días de vida que junto con ajustes en la dieta, como la restricción de proteínas.
hagan necesaria las pruebas adicionales. Otros recién nacidos, sin El transporte de glucosa en el cerebro está mediado por el GLUT1.
embargo, pueden haber tenido dificultades durante el parto, y es Una disminución del transporte de glucosa a través de la barrera hemato­
necesaria la sospecha clínica en neonatos con convulsiones resistentes encefálica lleva a hipoglucorraquia (cifras de glucosa en el líquido
al tratamiento. Entre los signos que sugieren una metabolopatía con- cefalorraquídeo [LCR] < 45 mg/dl o una proporción de glucosa en el
génita están las convulsiones que comienzan antes del nacimiento, LCR y el plasma < 0,4). Los pacientes pueden presentar convulsiones
las convulsiones resistentes al tratamiento que precisan múltiples intensas en los primeros meses de vida. Una cifra de glucosa en el
FAE, el empeoramiento clínico progresivo o el deterioro en las EEG LCR baja sin una explicación alternativa debe llevar a la realización de
(Ficicioglu y Bearden, 2011). Determinadas pruebas de neuroimagen pruebas genéticas de SLC2A1, el defecto genético principal conocido
pueden demostrar lesiones características que apoyen la posibilidad de para este trastorno (Wang y de Vivo, 2002). En la última década, el

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968 PA RT E XI I Sistema nervioso

fenotipo de estos pacientes se ha diversificado significativamente para 2 ml/kg de glucosa al 10% y, dependiendo de la duración de la hipo-
incluir a los que tienen trastornos del movimiento o epilepsia con glucemia, pueden ser necesarias perfusiones de glucosa para mantener
ausencias de comienzo temprano (Leen et al., 2010). El tratamiento la euglucemia. Las convulsiones causadas por hipocalcemia deben
del déficit del GLUT1 es la dieta cetógena, lo que limita la necesidad tratarse con gluconato cálcico al 10% en los casos de inicio temprano y
de transportar glucosa para el metabolismo cerebral. calcitriol o calcio oral en los de inicio tardío (Beers et al., 1999). Deben
Los trastornos metabólicos que llevan a disgenesia cerebral inclu- comprobarse las cifras de magnesio y repetirse si fuera necesario, ya
yen trastornos de la biogenia de peroxisomas, como el síndrome de que la hipomagnesemia puede acompañar a la hipocalcemia. Aunque
Zellweger. Los recién nacidos presentan rasgos faciales característicos, es poco frecuente, en algunos casos de convulsiones, la hiponatremia o
hipotonía y encefalopatía, acompañados de convulsiones en los pri- la hipernatremia pueden tratarse determinando la etiología subyacente
meros días o semanas de vida. Las pruebas de neuroimagen revelan y con restricción o reposición de líquidos dependiendo de la etiología
defectos de la migración neuronal, como polimicrogiria, mientras que de la alteración del sodio.
las cifras de ácidos grasos de cadenas muy largas están elevadas. Las Como se ha mencionado anteriormente, la epilepsia dependiente de
mutaciones en la familia del gen PEX se han asociado a este grupo de piridoxina es una etiología importante que se debe tener en cuenta en
trastornos metabólicos (Braverman et al., 2016). el recién nacido con convulsiones. Se recomienda que los neonatos se
sometan a una evaluación para detectar esta epilepsia dependiente de
Síndromes de epilepsia neonatal progresivos piridoxina, ya sea comprobando la presencia de AASA en la orina o el
plasma, midiendo los metabolitos neurotransmisores en el LCR (que
Las convulsiones en el período neonatal pocas veces son el síntoma mostrarán patrones característicos en la cromatografía) o comprobando
inicial de un trastorno crónico (Mizrahi y Clancy, 2000). Los neonatos las mutaciones del gen ALDH7A1. Estos análisis de laboratorio deben
afectados pueden sufrir convulsiones mioclónicas, con encefalopatía realizarse al tiempo que se trata al bebé empíricamente con vitamina
mioclónica temprana, o presentar convulsiones frecuentes o multifo- B6 enteral (Bok et al., 2010).
cales. Aunque es poco frecuente, puede haber convulsiones migrato-
rias. Cuando las convulsiones parezcan progresivas, debe evaluarse la
etiología subyacente. Estos síndromes neonatales pueden denominarse
Fármacos antiepilépticos
encefalopatía epiléptica infantil temprana o síndrome de Ohtahara, y la Una vez que se corrigen los trastornos metabólicos, las convulsiones se
EEG puede demostrar un patrón de supresión repentino o desorga- tratan con FAE. Dado que los neonatos pueden sufrir tanto convul-
nizado. La presentación típica de este síndrome son las convulsiones siones clínicas como electrográficas, y el tratamiento con FAE puede
en las primeras semanas o meses de vida. Algunos neonatos pueden provocar una disociación electroclínica, se recomienda que los neonatos
presentar malformaciones cerebrales evidentes o metabolopatía. En que reciban tratamiento con FAE se monitoricen de forma continua
la última década se han asociado muchos genes a encefalopatías epi- con EEG (Shellhaas et al., 2011).
lépticas de inicio temprano, como las mutaciones en los genes ARX, El fenobarbital sigue siendo el fármaco de elección para el trata-
CDKL5 y STXBP1, entre otros. Estos se revisan en otras fuentes (Nieh miento de las convulsiones neonatales para la mayoría de los médicos
y Sherr, 2014; Gursoy y Ercal, 2016). (Bartha et al., 2007; Blume et al., 2009). El fenobarbital es un barbi-
túrico que actúa sobre el receptor del ácido γ-aminobutírico (GABA),
Convulsiones neonatales familiares benignas potenciando la actividad del GABA. El fenobarbital se administra
habitualmente en bolo intravenoso de 20 mg/kg, con una dosis de
Debe contemplarse la posibilidad de una forma poco frecuente de mantenimiento de 4 mg/kg/día. La vida media del fenobarbital es
epilepsia neonatal con un patrón hereditario autosómico dominante en bastante larga en el neonato, de entre 45 y 200 h aproximadamente
los recién nacidos con antecedentes familiares (Pettit y Fenichel, 1980) (Lockman et al., 1979). Deben valorarse los niveles terapéuticos, dado
o cuando se hayan descartado causas estructurales, infecciosas, meta- que es posible que concentraciones superiores a 40 µg/ml no supongan
bólicas y tóxicas. A menudo los padres desconocen que ellos también ningún beneficio terapéutico adicional (Gilman et al., 1989).
tuvieron convulsiones en el período neonatal hasta que los abuelos lo Las opciones terapéuticas distintas del fenobarbital varían enorme-
mencionan después de que el nieto presente convulsiones neonatales. Se mente entre los profesionales (Bartha et al., 2007; Blume et al., 2009).
han implicado varios genes, entre ellos dos genes del canal de potasio, La fenitoína o la fosfenitoína son las que actualmente cuentan con una
KCNQ2 y KCNQ3, así como un gen del canal del sodio, SCN2A (Berko- mayor evidencia que respalde su administración (Painter et al., 1999).
vic et al., 2004; Heron et al., 2007; Grinton et al., 2015). Las mutaciones La fenitoína debe administrarse en una dosis de 15-20 mg/kg. Una
de KCNQ2 también pueden llevar a una encefalopatía epiléptica pro- forma hidrosoluble que se tolera mejor es la fosfenitoína, que puede
gresiva, por lo que se debe ser precavido cuando se informe respecto administrarse en la misma dosis que los equivalentes de la fenitoína
al pronóstico (Allen et al., 2014). Es típico que los recién nacidos con (Painter et al., 1978). A menudo las concentraciones de fenitoína son
convulsiones familiares benignas presenten un patrón interictal normal difíciles de mantener, ya que el fármaco se redistribuye rápidamente
en la EEG y pruebas de neuroimagen normales, mientras que los que en los tejidos y sigue una cinética de orden cero (Painter et al., 1981).
desarrollan una encefalopatía epiléptica tienden a tener EEG alteradas Las benzodiacepinas, como el midazolam, el diacepam o el lorace-
con supresión repentina, descargas de tipo epiléptico multifocales e pam, también pueden emplearse para el control de las convulsiones
hiperintensidades en los ganglios basales (Weckhuysen et al., 2012). neonatales resistentes al tratamiento. Se ha estudiado la seguridad y
Los recién nacidos con epilepsias neonatales benignas tienden a res- la eficacia del midazolam intravenoso en los neonatos, y puede ser
ponder bien a los FAE, y se ha registrado la eficacia de los fármacos una opción para los neonatos con convulsiones resistentes al trata-
para los canales de sodio en los que tienen mutaciones de KCNQ2 miento (Sheth et al., 1996; Castro Conde et al., 2005). La lidocaína,
(Pisano et al., 2015). un antagonista de los canales de sodio, tiene la misma eficacia que
el midazolam en las convulsiones resistentes al tratamiento (Shany
Tratamiento de las convulsiones et al., 2007; Lundqvist et al., 2013; Weeke et al., 2016). Este fármaco
se emplea más habitualmente en Europa que en Norteamérica (Bartha
Una vez que se ha establecido el diagnóstico de convulsiones neona- et al., 2007; Vento et al., 2010).
tales, se comienza el tratamiento mientras se determina la etiología. Dada la eficacia limitada de los FAE, los neurólogos emplean a
Los esfuerzos iniciales deben dirigirse a detectar causas corregibles de menudo los nuevos fármacos para otros usos (Silverstein y Ferrie-
convulsiones neonatales, como hipoglucemia, hipocalcemia o altera- ro, 2008). Se ha descrito la eficacia del levetiracetam en una serie de
ciones del sodio. La hipoglucemia puede corregirse con la perfusión de casos, lo mismo que el topiramato (Furwentsches et al., 2010; Abend

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CAPÍTULO 65 Convulsiones neonatales 969

et al., 2011; Glass et al., 2011a). En la actualidad, se están realizando tratamiento específico y no suelen responder a los FAE administrados
estudios controlados aleatorizados a mayor escala para valorar la segu- en el período neonatal. Sin embargo, los neonatos con malformación
ridad y la eficacia de estos fármacos (Pressler y Mangum, 2013). La cerebral congénita o síndromes epilépticos progresivos presentan un
bumetanida, un diurético del asa, es un antagonista del cotransportador riesgo continuado de convulsiones, que se espera que continúen aun
de sodio-potasio-cloruro (NKCC) neuronal y ha demostrado su eficacia con FAE.
en estudios preclínicos para el tratamiento de las convulsiones neona-
tales (Dzhala et al., 2005). El receptor NKCC se expresa en neuronas Pronóstico
inmaduras y su activación lleva a una elevación del cloruro intracelular,
mientras que la bumetanida revierte este gradiente de cloruro. Un Una cuestión a la que el medico se enfrenta habitualmente en la UCIN
estudio abierto reciente para valorar sus efectos en los neonatos con es la predicción de cómo evolucionará el recién nacido en un futuro
convulsiones secundarias a encefalopatía hipóxico-isquémica no mostró próximo y lejano. Las preocupaciones inmediatas en la UCIN suelen
una mejoría de las convulsiones con bumetanida tras el tratamiento incluir la dificultad respiratoria, ya sea secundaria a la etiología sub-
con fenobarbital y puede haber encontrado una mayor tasa de pérdida yacente o causada por el efecto sedante de los FAE. El primer hito
auditiva (Pressler et al., 2015). Se están llevando a cabo otros estudios del desarrollo neurológico al que se enfrenta el recién nacido es la
para valorar la bumetanida en esta población. alimentación, para la que muchos neonatos necesitan más tiempo o
la colocación de una sonda enteral en la UCIN. Superado el período
Eficacia de los fármacos antiepilépticos neonatal, sigue habiendo consideraciones pronósticas, especialmente
relativas al desarrollo neurológico a largo plazo y a la epilepsia.
El hallazgo de nuevos FAE para el tratamiento de las convulsiones La etiología de las convulsiones del recién nacido tiene mucho que
neonatales es imprescindible, dados los datos disponibles sobre la ver con el resultado final. La predicción del resultado del desarrollo
eficacia de los FAE empleados actualmente. Aunque las tasas exactas neurológico se basa fundamentalmente de la causa de las convulsiones y
varían, los estudios muestran una respuesta completa al fenobarbital en a menudo depende de las pruebas avanzadas de neuroimagen que pue-
menos del 50% de los neonatos (Painter et al., 1978, 1999; Lockman den identificar malformaciones congénitas o áreas de lesión cerebral.
et al., 1979). Los estudios clínicos han variado en lo que respecta a la Los recién nacidos que se libran de los déficits motores en la primera
finalidad, y valoran la supresión de convulsiones clínicas más que las infancia aún pueden desarrollar complicaciones neurofisiológicas más
electrográficas. Sin embargo, las convulsiones electrográficas pueden sutiles durante la adolescencia o el comienzo de la edad adulta (Temple
continuar a pesar de la desaparición de las convulsiones clínicas (Weiner et al., 1995).
et al., 1991). Dado que el fenobarbital actúa sobre el receptor del Los datos neurofisiológicos también desempeñan un papel
GABA, es imprescindible conocer el GABA en el cerebro inmaduro en el pronóstico (Monod et al., 1972; Tharp et al., 1981; Sinclair
para hallar métodos adecuados en el tratamiento de las convulsiones. et al., 1999). Es probable que los recién nacidos con un patrón EEG
La concentración intracelular de cloruro determina la fuerza de la con alteraciones persistentes, como la supresión repentina, tengan un
transmisión GABAérgica. Así, en los neonatos, se encuentran concen- mal resultado, especialmente cuando este persiste en EEG seriadas (Sin-
traciones elevadas de cloruro intracelular, secundario a la expresión clair et al., 1999). Los neonatos con una EEG normal suelen tener una
propia del desarrollo del receptor del NKCC en estas neuronas (Dzhala mejor evolución, mientras que los que tienen una EEG con alteraciones
et al., 2005; Kahle y Staley, 2008). Esta expresión propia del desa- moderadas mostrarán resultados variables (Tharp et al., 1981).
rrollo del NKCC y la consecuente despolarización del receptor del Las convulsiones en sí mismas desempeñan un papel incierto en el
GABA puede ser importante para los procesos dependientes de calcio, resultado del desarrollo neurológico y siguen siendo un área de con-
como la migración neuronal y la sinaptogenia (Brooks-Kayal, 2005). troversia en la neurología neonatal. Los modelos animales muestran
En estudios en animales, esto parece contribuir a la poca eficacia del menos vulnerabilidad a la lesión cerebral inducida por convulsiones en
fenobarbital, de modo que la adición de bumetanida, un antagonista el cerebro del neonato que el cerebro del adulto (Huang et al., 1999).
del NKCC, aumenta la eficacia del fenobarbital en el tratamiento de A pesar de la muerte celular reducida, se ha demostrado que las con-
las convulsiones (Dzhala et al., 2008). vulsiones en el cerebro inmaduro llevan a cambios en el circuito neural
que no se observan en el cerebro maduro. En el hipocampo del neonato
Suspensión de los fármacos antiepilépticos de rata expuesto a anoxia, la estimulación de las convulsiones electro-
gráficas lleva a la despolarización anóxica y a la muerte neuronal dos
La duración del tratamiento del neonato con FAE tras la desaparición veces mayor que en ausencia de convulsiones (Dzhala et al., 2000).
de las convulsiones sigue siendo un área de incertidumbre y con- Otros estudios han demostrado que las convulsiones recurrentes en los
troversia (Guillet y Kwon, 2008). Se reconoce que los FAE empleados neonatos de rata llevan a una pérdida medular de células piramidales en
habitualmente complican la valoración de la excitación, el tono mus- la médula en el hipocampo y también afectan a la neurogenia, al alterar
cular y la capacidad de deglución debido a sus cualidades sedantes. la expresión del glutamato y los receptores del GABA (Holmes, 2009).
En la actualidad se da la recomendación general de que, siempre que El efecto de las convulsiones recurrentes en el neonato de rata lleva a
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sea posible, se suspendan los FAE en la unidad de cuidados intensivos una reducción del número de células, a pesar de una menor muerte
neonatales (UCIN), dada la baja tasa de recidiva de las convulsiones celular (McCabe et al., 2001). Estos cambios en el hipocampo pueden
tras suspender los FAE. Los estudios retrospectivos han demostrado que llevar a epilepsia posteriormente (Holmes, 2009).
hay una baja tasa de recidiva de convulsiones tras la suspensión tem- Existen preocupaciones éticas para el estudio riguroso de los efec-
prana de FAE, y que una mayor duración del tratamiento no previene tos de las convulsiones neonatales en el recién nacido humano, por lo
un desarrollo posterior de epilepsia (Hellstrom-Westas et al., 1995; que los estudios disponibles son limitados. Los estudios estructurales
Guillet y Kwon, 2007). Existe la preocupación adicional de los efectos han demostrado que la gravedad de las convulsiones tiene un efecto
de los FAE en el cerebro inmaduro. Los estudios en animales mues- independiente en la lesión cerebral, medido mediante espectroscopia
tran el aumento de la apoptosis tras el tratamiento con fenobarbital por RM (Miller et al., 2002). Los estudios que evalúan el papel
y fenitoína, entre otros FAE (Mizrahi, 1999; Bittigau et al., 2003). independiente de las convulsiones clínicas en el neonato con ence-
Además, la mayoría de los niños con convulsiones neonatales no falopatía hipóxico-isquémica han dado resultados contradictorios.
presentan recidivas de convulsiones durante el primer año de vida Un estudio demostró un cociente intelectual menor a los 4 años
(Pisani et al., 2015) y, por lo tanto, no es necesario continuar con los de edad cuando se ajustaba a la gravedad de la lesión cerebral en la
FAE. Las convulsiones que se deben a síndromes epilépticos específicos RM (Glass et al., 2009b), mientras que otro no encontró ninguna
durante el primer año de vida, como espasmos infantiles, precisan un diferencia en los resultados a los 18 meses según la escala de Bayley

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970 PA RT E XI I Sistema nervioso

del desarrollo infantil (Kwon et al., 2011). El papel independiente de Conclusiones


las convulsiones electrográficas sigue sin estar claro. Los neonatos con
estado epiléptico confirmado en la EEG muestran un peor resultado Las convulsiones son relativamente frecuentes en la UCIN. La sos-
del desarrollo neurológico y a menudo desarrollan epilepsia posnatal pecha de convulsiones y la realización de pruebas complementarias
(Pisani et al., 2007). McBride et al. (2000) registraron 40 neonatos con ayudarán a distinguirlas de sus emuladores. Una vez diagnosticadas, el
convulsiones electrográficas en comparación con 28 neonatos tratamiento debe enfocarse a determinar su etiología y su tratamiento.
sin ellas, en los que las convulsiones electrográficas se asociaron a Aunque se acepta que el estado epiléptico debe evitarse, el impacto
microcefalia, parálisis cerebral y fallo en el crecimiento. Un estudio propio de las convulsiones neonatales en el desarrollo neurológico sigue
controlado aleatorizado realizado recientemente estudió con un siendo un tema controvertido. Hay cada vez más datos preclínicos y
enfoque prospectivo neonatos con convulsiones electroclínicas y elec- clínicos que sugieren que las convulsiones electrográficas influyen en
trográficas, tratando en un grupo solo las convulsiones electroclínicas, los resultados posteriores del desarrollo neurológico y en la epilepsia.
mientras que en el otro grupo se trataron todas las convulsiones elec- Sin embargo, nuestros FAE de primera línea no son adecuados para
trográficas (incluso las que no tenían manifestaciones clínicas). Este tratar las convulsiones, y se están llevando a cabo investigaciones para
estudio descubrió que los recién nacidos que recibieron tratamiento encontrar fármacos más eficaces.
para todas las convulsiones electrográficas mostraron una menor carga
de convulsiones y recibieron tratamiento antes. Además, aunque
con poca potencia estadística, este estudio sugería que una carga de Lecturas recomendadas
convulsiones mayor se asociaba a una mayor lesión y a puntuaciones
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Convulsión
Epilepsia
Encefalopatía hipóxico-isquémica
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Valoración del riesgo y resultados
del neurodesarrollo
SARA B. DeMAURO Y SUSAN R. HINTZ

PUNTOS CLAVE nacidos a término, como las cardiopatías congénitas (CC), pero no
solo ellas (Marino et al., 2012), necesitan oxigenación con mem-
• Los recién nacidos prematuros y en estado crítico presentan un alto brana extracorpórea (ECMO) en el período neonatal (Ijsselstijn y Van
riesgo de problemas del desarrollo motor y cognitivo, neuroconductuales Heijst, 2014), y la encefalopatía hipóxico-isquémica (EHI), indepen-
y de la función ejecutiva, problemas de aprendizaje y académicos, dientemente del tratamiento con hipotermia terapéutica (Shankaran
problemas neurosensoriales y deficientes resultados de evolución et al., 2005, 2012a), los expone a alto riesgo de problemas neurológicos,
funcional. del desarrollo, funcionales y de salud en la primera infancia y con pos-
• La morbilidad neonatal, los factores socioeconómicos y las terioridad. Lamentablemente, si bien la literatura médica ha descrito
intervenciones precoces pueden influir en los resultados evolutivos cada vez mejor los riesgos de dificultades posteriores en el alta, además
a largo plazo de los recién nacidos de alto riesgo.
de las enfermedades médicas, para estos y otros factores de riesgo
• En la primera infancia es posible predecir con facilidad muchos
predisponentes, en el momento del alta hospitalaria, se pueden pasar
resultados evolutivos adversos de los recién nacidos de alto riesgo
en la edad escolar, la adolescencia y la vida adulta. Las valoraciones en
por alto las necesidades respecto del neurodesarrollo de estos recién
la edad escolar, la adolescencia y la vida adulta tienen una importancia nacidos de alto riesgo nacidos a término o, a veces, no se realiza una
crucial para conocer la trayectoria vital de individuos que fueron recién derivación adecuada a servicios de intervención precoz incluso cuando son
nacidos de alto riesgo. identificados como candidatos durante el seguimiento (Tang et al., 2012).
• Las dificultades cognitivas y neuroconductuales de niños de alto riesgo Los recién nacidos prematuros son las poblaciones de recién nacidos
se asocian con mayores costes y utilización de recursos. de alto riesgo más reconocidas y más elegidas como diana. El naci-
• Todos los recién nacidos de alto riesgo y sus familias deben tener miento prematuro, definido por la Organización Mundial de la Salud
acceso a programas multidisciplinarios e integrales de seguimiento (OMS) como parto antes de las 37 semanas completas de gestación,
del desarrollo para optimizar los resultados evolutivos tanto a corto plazo es un problema cada vez mayor en los países en desarrollo de todo el
como a largo plazo. mundo (Blencowe et al., 2012). También continúa siendo un problema
sustancial también en países desarrollados, aunque el panorama de la
prematuridad parece estar cambiando. Según el National Center for
Health Statistics de los Centers for Disease Control and Prevention,
en EE. UU., la tasa de nacimientos prematuros (proporción de nacidos
Valoración de los resultados evolutivos vivos < 37 semanas de edad gestacional estimada [EGE]) fue del
en recién nacidos de alto riesgo 11,39% en 2013, que fue algo menor que la de del 11,55% de 2012
(Martin et al., 2015). No obstante, esto representa una declinación
¿Quién es el recién nacido de «alto riesgo»? considerable respecto de la tasa máxima de nacimientos prematu-
ros del 12,8% en 2006. Más aún, las tasas de nacimientos prematuros
El término recién nacido de alto riesgo se ha definido de muchas maneras, declinaron para cada una de las razas más numerosas y los grupos de
y ha adquirido numerosas connotaciones negativas. Sin embargo, origen hispano, y en 49 de los 50 estados de EE. UU. durante ese
un objetivo general para intentar caracterizar a los recién nacidos que período. Sin embargo, la proporción de recién nacidos muy prematuros
presentan alto riesgo es un mayor conocimiento y una atención cen- (MP, < 32 semanas de EGE) es del 1,92%, que, si bien disminuyó
trada en los niños que se pueden beneficiar de una mayor vigilancia e del 2,04% de 2006 y 2007, se mantiene relativamente sin cambios.
intervención precoz en una serie de dominios. En una declaración de De modo similar, la tasa de nacimientos extremadamente prematuros
estrategias de la American Academy of Pediatrics (AAP) (AAP, 2008) se (EP, < 28 semanas de EGE) es relativamente estable; en 2013, la tasa
definió de la siguiente manera a los recién nacidos de alto riesgo: 1) el de nacimientos EP era del 0,73%, exactamente igual a la de 2012 y
recién nacido prematuro; 2) el recién nacido con necesidades de espe- 2011, y con cambios mínimos respecto de un máximo del 0,77%
ciales de asistencia sanitaria o dependencia de la tecnología; 3) el recién en 2005. Si bien se ha advertido un descenso de la tasa global de
nacido en riesgo debido a problemas familiares, y 4) el recién nacido nacimientos prematuros, y las tasas de nacimientos MP y EP parecen
con muerte prematura previsible. Otros han destacado la importancia ser minúsculas, la repercusión en términos de nacimientos totales
de valorar de manera crítica el riesgo de cualquier recién nacido que es importante. Con casi cuatro millones de nacimientos anuales en
ingresa en la unidad de cuidados intensivos neonatales (UCIN) o en EE. UU., nacieron alrededor de 450.000 neonatos < 37 semanas de EGE,
la sala de recién nacidos de cuidados especiales (Walker et al., 2012). 75.000 neonatos MP y 30.000 neonatos EP solo en 2013 (March of
Muchas afecciones clínicas y factores de riesgo observados en recién Dimes Peristats, 2016).
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972 PA RT E XI I Sistema nervioso

¿Qué se entiende por «resultados evolutivos»? patrón de referencia para todos los estudios (Marlow, 2013, 2014).
Más aún, el resultado evolutivo DND es, en sí mismo, un resultado
A medida que, a lo largo de las décadas, ha mejorado la supervivencia compuesto, integrado por morbilidad de dominios del neurodesarrollo
incluso de la mayoría de los recién nacidos EP y complejos, la mor- y sensoriales, con diferentes perfiles de riesgo, vías causales y validez
bilidad y la mortalidad a corto plazo han dejado de ser los únicos predictiva. Existen dificultades para interpretar estos datos, posibles
resultados evolutivos comunicados en recién nacidos de alto riesgo para limitaciones en términos de comparaciones entre cohortes y a lo largo
convertirse solo en los primeros de numerosos resultados evolutivos de los años, y preocupación respecto del valor de los resultados evoluti-
de interés. Se reconoce cada vez más la significación crítica de conocer vos del neurodesarrollo precoz para predecir capacidades y dificultades
los resultados evolutivos más tardíos para evaluar el verdadero impacto en etapas más tardías de la infancia y ulteriores.
de las intervenciones y los abordajes de tratamiento en la UCIN, para Durante una visita de seguimiento a los 2-3 años, la serie habitual
el asesoramiento informado, y para la detección precoz directa y los de pruebas y valoraciones incluye la valoración de la función motora,
cuidados preventivos. Sin duda, en algunos estudios de tratamientos y capacidades cognitivas/de desarrollo y resultados evolutivos neurosen-
estrategias de manejo destinados a investigar una hipótesis de mejorar soriales, incluidas deficiencias auditivas y visuales. Estos componentes
la morbilidad intrahospitalaria, lo mejor pueden ser los resultados evo- generales han sido propuestos y recomendados por paneles de expertos
lutivos primarios a corto plazo (Schmidt et al., 2006; SUPPORT Study y grupos de trabajo, como la British Association of Perinatal Medicine
Group of the Eunice Kennedy Shriver NICHD Neonatal Research (Wang et al., 2006; British Association of Perinatal Medicine, 2008),
Network et al., 2010; BOOST II United Kingdom, Australia and y dentro del contexto de estudios y ensayos prospectivos (Schmidt
New Zealand Collaborative Groups et al., 2013). Sin embargo, un et al., 2001; Doyle, 2010a; Moore et al., 2012; Vohr et al., 2012),
seguimiento a más largo plazo o criterios de valoración primarios más aunque las evaluaciones específicas dentro de cada área difieren entre
tardíos pueden aportar datos adicionales valiosos sobre los resultados los grupos y a lo largo del tiempo. (Véanse más detalles en el apartado
evolutivos, las valoraciones de seguridad o información acerca de «Seguimiento multidisciplinario del recién nacido de alto riesgo», más
elementos funcionales (Schmidt et al., 2001, 2012, 2013; Vaucher adelante.)
et al., 2012; BOOST-II Australia and United Kingdom Collaborative
Groups et al., 2016). Función motora
¿Cuáles son estos resultados evolutivos posteriores al alta de posi- Las deficiencias motoras, incluida la parálisis cerebral (PC), son los
ble importancia? ¿Cómo se miden y cuáles son los obstáculos o los resultados evolutivos del neurodesarrollo comunicados con mayor
beneficios de centrarse en distintos resultados evolutivos? El valor frecuencia en recién nacidos de alto riesgo. Las dificultades motoras se
otorgado a un resultado o un grupo de resultados evolutivos puede pueden tornar evidentes durante meses o años, aunque su identificación
diferir mucho para las familias, los niños y los adultos que nacieron oportuna puede permitir intervenciones que mejoren la evolución, lo
con alto riesgo, los médicos y otros profesionales sanitarios, los inves- que refuerza la importancia crucial del seguimiento vigilante a largo
tigadores, los educadores y los involucrados en la implementación de plazo (v. apartado «Dificultades e importancia del seguimiento», más
políticas públicas. Asimismo, la importancia de diversos resultados adelante). La PC se define como un trastorno que implica alteraciones
evolutivos puede variar de manera sustancial dentro de estos grupos y del tono, los reflejos, la coordinación y el movimiento, retrasos para
entre diferentes puntos temporales de sus vidas. Más aún, los resultados alcanzar pautas madurativas y aberración de reflejos primitivos, que es
evolutivos cognitivos y conductuales más tardíos son complejos y están permanente, pero no inmutable, y es causado por una interferencia,
influenciados por el ambiente posterior al alta, las relaciones y factores lesión o anomalía no progresiva del cerebro inmaduro en desarrollo
biológicos (Msall y Park, 2008; Treyvaud et al., 2012). Por lo tanto, el (Bax et al., 2005; Fawke, 2007). La PC también se clasifica según
concepto de que existe un resultado evolutivo «óptimo» de los nacidos el tipo (espástico, discinético o distónico); la topografía (afectación
prematuros o con alto riesgo está mal planteado. de las extremidades), y los factores descriptivos de la extensión y el
En el siguiente apartado presentamos una reseña de algunas cate- patrón de deficiencia (monoplejía, diplejía, hemiplejía y cuadriplejía).
gorías generales de resultados evolutivos más tardíos que se han comu- En ocasiones no es posible diagnosticar de manera fiable la PC hasta
nicado y propuesto para recién nacidos de alto riesgo, en particular los después de los 18 meses, aunque los exámenes previos de los movi-
que han nacido prematuros o con muy bajo peso al nacer (MBPN). mientos generales y otros factores pueden elevar el perfil de riesgo de
Comenzamos prestando especial atención a la valoración de los resul- PC y pueden servir para subrayar la necesidad de seguimiento (Spittle
tados evolutivos del neurodesarrollo precoz (18-36 meses), porque et al., 2011, 2013a).
estos son los comunicados con mayor frecuencia en ensayos y estudios El Gross Motor Function Classification System (GMFCS) (Palisano
prospectivos observacionales. Analizamos las dificultades y los puntos et al., 1997, 2007; Rethlefsen et al., 2010) proporciona un sistema
fuertes informados a esta edad aplicando definiciones de deficiencia válido y fiable para clasificar el grado de limitación de la actividad en
y discapacidad comunicadas con frecuencia, y describimos la serie de la PC. Es un sistema de cinco niveles (I-V) usado para categorizar a
pruebas y valoraciones habituales. Se consideran las limitaciones de las niños hasta de 18 años de edad sobre la base de su desempeño habitual,
definiciones convencionales de resultados evolutivos y las dificultades con especial atención a las capacidades funcionales, como sentarse,
para interpretar los estudios de resultados evolutivos del neurodesarrollo movilizarse, caminar y necesidad de dispositivos de asistencia. Esta
precoz. Asimismo, destacamos las capacidades y dificultades valoradas clasificación ayuda a los médicos a comunicar información acerca de la
durante la edad escolar y la vida adulta. gravedad, la elección de intervenciones y el pronóstico de una manera
estandarizada, fácil de usar, válida y fiable.
Valoraciones de los resultados evolutivos El nivel más alto del GMFCS se asocia con dificultad funcional
del neurodesarrollo precoz creciente, pero cabe destacar que las distinciones entre los niveles I y
II no son tan significativas como las diferencias entre otros niveles, en
En la gran mayoría de los ensayos de intervención y los estudios obser- particular en niños más pequeños. Los niños clasificados como nivel I
vacionales prospectivos que incorporan a recién nacidos de alto riesgo, global pueden caminar sin limitaciones, pero pueden tener dificultad
el resultado evolutivo de neurodesarrollo alrededor de los 2 años de con la velocidad, el equilibrio y la coordinación requeridos para habi-
edad corregida, y en general de muerte o «deterioro del neurodesa- lidades de nivel más alto; entre los 2 y los 4 años pueden sentarse en
rrollo» (DND), se comunica como un resultado evolutivo primario. el suelo con ambas manos libres para manipular objetos, sentarse en el
Si bien el fundamento del resultado evolutivo combinado es claro en suelo y levantarse, y ponerse de pie sin la ayuda de adultos, y caminan
el contexto de resultados competitivos, existe un debate continuo y como método preferido de movilidad sin necesidad de ningún dis-
sustancial respecto de la adecuación de este resultado evolutivo como positivo de asistencia. En cambio, los niños clasificados como nivel V

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CAPÍTULO 66 Valoración del riesgo y resultados del neurodesarrollo 973

muestran deficiencia profunda sin medios de movilidad independiente; brindar una medida de la función «cognitiva», aunque hay limitaciones
entre los 2 y los 4 años, esto se describe como deficiencia física que res- ampliamente reconocidas, como la evolución de las versiones de las
tringe el control voluntario del movimiento y la capacidad de mantener pruebas que dificultan la comparación entre cohortes, la imposibilidad
posturas de la cabeza y el tronco contrarias a la gravedad, y limitaciones de extrapolar los resultados a los 2-3 años al cociente intelectual (CI)
funcionales para sentarse y estar de pie que no son compensadas por en puntos temporales ulteriores y las dificultades para interpretar los
completo mediante el uso de equipo adaptativo. resultados en la población prematura utilizando solo «puntos de corte»
La categorización del GMFCS en niños menores de 2 años de estandarizados en ausencia de un grupo control a término contempo-
edad depende predominantemente del grado de apoyo requerido por ráneo con peso normal al nacer (PNN) (v. apartado «Limitaciones y
el niño para sentarse y también considera habilidades más avanzadas, dificultades para interpretar los estudios de resultados evolutivos del
como arrastrarse y caminar. Si bien algunos niños diagnosticados antes neurodesarrollo precoz», más adelante).
de los 2 años de vida requerirán una reclasificación, la mayoría no se Las Bayley Scales of Infant and Toddler Development (BSID), con
reclasifican en más de un nivel. El valor predictivo positivo (VPP) de un rango etario de prueba de 1 a 42 meses, son ahora la prueba de
una clasificación del GMFCS de nivel I, II o III (el niño caminará con desarrollo más ampliamente usada en recién nacidos de alto riesgo de
dispositivos de ayuda o sin ellos) en comparación con el nivel IV o V todo EE. UU. y Europa. La versión original, publicada en 1969, se
(es probable que el niño necesite una silla de ruedas para movilizarse) revisó en 1993 (Bayley, 1993). La BSID-II tenían dos puntuaciones
es muy alto (0,96). Por consiguiente, el GMFCS proporciona una de desarrollo: el Mental Developmental Index (MDI), compuesto
aproximación sólida, más que una categorización final definitiva, en por tareas cognitivas y de lenguaje, y el Psychomotor Developmental
este grupo etario (Gorter et al., 2009). Index (PDI), compuesto por habilidades motoras finas y gruesas. Esta
Si bien la PC con limitaciones funcionales graves es un problema desventaja percibida, así como el impulso habitual a revisar ediciones
importante, es relativamente rara. Una revisión de un registro aus- debido al «efecto Flynn» (Flynn, 1999), contribuyó a la elaboración
traliano de PC de la década de los setenta a 2004 mostró prevalencia de la BSID-III (Bayley, 2006), que contiene tres dominios principales:
creciente de la PC en las décadas de los setenta y los ochenta atribuida a 1) una puntuación cognitiva compuesta; 2) una puntuación de lenguaje
la mayor supervivencia de recién nacidos EP; en cambio, las tasas de PC compuesta (con subpuntuaciones receptiva y expresiva), y 3) una
se estabilizaron o disminuyeron entre principios de los noventa y 2004 puntuación motora compuesta (con subpuntuaciones motoras gruesa
(Reid et al., 2011; Spittle y Orton, 2014). En niños con PC puede y fina), además de dominios socioemocional y de comportamiento
haber un espectro de hallazgos motores, incluidas muchas deficiencias adaptativo. El objetivo de la BSID-III fue permitir la identificación
motoras y de coordinación que no deben pasar inadvertidas (Vohr de retrasos, así como de puntos fuertes y problemas, en dominios de
et al., 2005). desarrollo específicos, y dirigir las intervenciones a las áreas que lo
En los niños de alto riesgo, incluidos los que han nacido prematu- requerían. Sin embargo, en parte debido a un cambio del abordaje de
ros, se comunican numerosos trastornos motores y de coordinación la normativa de la BSID-III, y quizá también debido a la separación
aparte de la PC. Se considera que lo mejor es realizar el diagnóstico de las escalas cognitiva y de lenguaje, las puntuaciones cognitivas de la
de trastorno del desarrollo de la coordinación (TDC) a los 5 años o BSID-III son sustancialmente más altas que las previstas tanto en los
después, pero se dispone de herramientas de valoración del desempeño niños prematuros de alto riesgo como en los grupos control a término
motor desde los 3 años. Se diagnostica TDC cuando: 1) la coordinación (Anderson et al., 2010; Vohr et al., 2012). Estos hallazgos han llevado
y el desempeño motores están por debajo de lo esperado para la edad a considerar que la BSID-III subestima el retraso madurativo si solo
cronológica y el nivel de inteligencia del niño; 2) el trastorno motor se utilizan las medias normativas de las pruebas, lo que tiene graves
interfiere en las actividades de la vida cotidiana o los logros académicos; implicaciones para los esfuerzos tanto clínicos como de investigación.
3) no se debe a una entidad médica general o neurológica, como la Antes, los «puntos de corte» utilizados habitualmente para la categori-
PC, y 4) las dificultades motoras son excesivas respecto de las asociadas zación de retraso del desarrollo o discapacidad «moderados» y «graves»
con cualquier discapacidad intelectual presente (Sugden et al., 2006; eran 2-3 desviaciones estándares (DE) y mayor de 3 DE por debajo
Blank et al., 2012). Las recomendaciones actuales para el diagnóstico de la media normativa, respectivamente; por consiguiente, para la
de TDC son una puntuación inferior al percentil 15 en la Batería de BSID-II, se consideraba que un MDI de 55 a 70 era un retraso modera-
evaluación de movimiento para niños (Henderson et al., 2007) o una do, mientras que un MDI inferior a 55 se consideraba un retraso grave
prueba equivalente como el Test de competencia motora Bruininks- (British Association of Perinatal Medicine, 2008; Vohr et al., 2012). Sin
Oseretsky (Bruininks y Bruininks, 2005), mientras que directrices embargo, en ausencia de grupos control a término contemporáneos, se
previas recomendaban utilizar una puntuación inferior al percentil 5 en han desplazado los puntos de corte usados habitualmente en la era de
la Batería de evaluación del movimiento para niños. Sin embargo, una la BSID-III. Algunos han sugerido que las puntuaciones cognitiva y de
prueba de movimiento o motora sola no es suficiente para el diagnós- lenguaje de la BSID-III inferiores a 85 o las puntuaciones de «BSID-III
tico de TDC, dado que la observación directa o las entrevistas son combinada» inferiores a 80 proporcionan la mejor definición de retraso
esenciales para determinar el grado de interferencia en las activida- «moderado o grave» para la equivalencia con el MDI menor de 70 de
des de la vida cotidiana. Es importante recordar que, aunque las difi- la BSID-II (Johnson et al., 2014), mientras que otros han modificado
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cultades motoras asociadas con TDC suelen considerarse alteraciones el umbral de categorización de retraso cognitivo para definir retraso
motoras «menores», en particular en comparación con la PC incapa- moderado como 70-84, retraso grave como 55-69 y retraso profundo
citante, pueden ejercer, no obstante, una repercusión considerable como inferior a 54 (Schmidt et al., 2013; Vohr, 2014a).
en el niño. Estas dificultades pueden incluir habilidades funcionales Se dispone de otra prueba de desarrollo, las escalas de Griffiths,
importantes, como habilidades motoras finas, velocidad y exactitud en versiones para 0-2 años y 2-8 años. La primera versión se publicó
de la planificación motora, equilibrio y coordinación. Los niños con en 1967 y fue actualizada en 1996, y en 2006 se publicó una edición
TDC o probable TDC han presentado mayor riesgo de trastornos de extendida y revisada (GMDS-ER). La Griffiths-III se publicó en 2016
la lectura y la atención, problemas socioemocionales y conductuales, (http://www.aricd.ac.uk/about-the-griffiths-scales/).
ansiedad, trastornos del habla y el lenguaje, y otras dificultades (Kirby Existen numerosas pruebas de desarrollo cognitivo para medir
y Sugden, 2007; Lingam et al., 2012). el CI en escala completa o equivalente que se han empleado para
valoraciones en etapas más tardías de la infancia, como la Wechsler
Valoración cognitiva Preschool and Primary Scale of Intelligence (rango de edad: de 2 años
Un componente central de la visita de seguimiento del neurodesarro- y 6 meses a 7 años y 7 meses), ahora en la cuarta edición (WPPSI-IV;
llo del recién nacido de alto riesgo ha sido la administración de una Wechsler, 2012); las Differential Ability Scales (rango de edad: de
prueba de desarrollo estandarizada. Estas pruebas tienen el propósito de 2 años y 6 meses a 17 años y 11 meses), ahora en la segunda edición

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(DAS-II; Elliot, 2007); y la Wechsler Intelligence Scale for Children por ayudas auditivas», ya sea acompañada de los puntos de corte de
(rango de edad: de 6 años y 0 meses a 16 años y 11 meses), ahora en la pérdida auditiva específica en decibelios (PAdB) (profunda > 90 PAdB;
quinta edición (WISC-V; Wechsler et al., 2014). La Wechsler Indivi- grave 70-90 PAdB) de la evaluación auditiva (British Association of
dual Achievement Test (rango de edad: de 4 años y 0 meses a 50 años Perinatal Medicine, 2008), o por examen y observación de hipoacusia
y 11 meses), ahora en la tercera edición (WIAT-III; Wechsler, 2009), bilateral no corregible mediante amplificación (Doyle, 2010b; Vohr
identifica puntos fuertes y débiles académicos, y se ha empleado en et al., 2012; Serenius et al., 2013). De modo similar, en general, se
contextos clínicos, de investigación y educacionales. ha definido discapacidad «grave» en el dominio visual como ceguera
bilateral funcional, incluida agudeza visual inferior a 20/200, o incapa-
Resultados evolutivos visuales y auditivos cidad para percibir luz o solo capaz de percibir luz u objetos reflectantes
Las alteraciones neurosensoriales graves, incluida la deficiencia profun- (British Association of Perinatal Medicine, 2008; Doyle et al. 2010b;
da de la audición y la visión, en recién nacidos prematuros ahora tienen Vohr et al., 2012), o incapaz de fijar y seguir una luz con uno u otro
baja incidencia, pero sus consecuencias a largo plazo son importantes. ojo (Serenius et al., 2013). Las definiciones de deficiencia «moderada»
Las tasas de ceguera y deficiencia auditiva considerable están inversa- auditiva y visual difieren entre los estudios.
mente relacionadas con la edad gestacional (Hintz et al., 2011; Moore
et al., 2012a). La deficiencia visual y auditiva de moderada a grave Deterioro del neurodesarrollo: dificultades y realidades
es más frecuente en recién nacidos de alto riesgo, y las características de un resultado evolutivo compuesto
asociadas son sexo masculino, nacimiento múltiple, PC, hidrocefalia y El DND es un resultado evolutivo compuesto, que combina criterios
convulsiones (Davis et al., 2010; Hintz et al., 2006; Synnes et al., 2012; y puntos de corte de varios dominios presentados antes, como el neu-
Vohr 2014b). romotor, el cognitivo, el auditivo y el visual. La prevalencia relativa
La detección precoz de la deficiencia auditiva es vital para optimizar de cada uno de estos resultados evolutivos no es uniforme, y las tasas de
el desarrollo del habla y el lenguaje, y las directrices y recomendaciones cada resultado evolutivo pueden responder de manera diferente
reflejan la importancia de identificar problemas lo antes posible. Como a un tratamiento experimental. Esto causa necesariamente una serie
se afirmó en la declaración de posición del Joint Committee on Infant de dificultades en la interpretación general, así como problemas de
Hearing de la AAP (AAP, 2007), los recién nacidos ingresados en la posibilidad de generalización y asesoramiento. El uso de resultados
UCIN durante más de 5 días deben ser sometidos a un estudio de evolutivos compuestos durante el asesoramiento en el contexto prenatal
la respuesta auditiva del tronco encefálico como parte de la investiga- o posnatal puede no ser significativo para los padres ni las familias.
ción previa al alta, de manera que no pase inadvertida una hipoacusia El valor de cada componente puede variar mucho de una familia a
neural; en caso de fracaso, se debe hacer una derivación directa a un otra, puede haber una diferente concepción de los resultados evoluti-
audiólogo para un nuevo estudio y, si está indicado, una evaluación vos, y es probable que resulte difícil entender las estadísticas (Janvier
completa de hipoacusia. Independientemente de los resultados de la et al., 2012; Dupont-Thibodeau et al., 2014).
evaluación inicial, se debe realizar una revaluación sobre la base de Además, se ha demostrado una variación considerable entre los
los factores de riesgo individuales y los reingresos. Todos los recién centros en los resultados evolutivos de neurodesarrollo a los 18-22
nacidos, incluidos los sanos, deben ser sometidos a un cribado auditivo meses aun después del ajuste por variables demográficas, intervenciones
al mes de vida, con un nuevo estudio y derivación para evaluación prenatales y factores clínicos neonatales, lo que plantea dificultades
audiológica a los 3 meses de edad en los que no pasan el cribado inicial. para el asesoramiento exacto a partir de conjuntos de datos multicén-
Además, en todos los recién nacidos a los 9, a los 18 y a los 24-30 tricos (Vohr et al., 2004). Lamentablemente, en general no se dispone
meses o antes se emplea una herramienta de cribado global validada de datos robustos de un solo centro sobre resultados evolutivos de
cuando hay motivo de preocupación respecto de la audición o del grupos de alto riesgo específicos. Más aún, el mayor componente que
lenguaje. contribuye al resultado evolutivo compuesto es el de deficiencia o
Los niños nacidos de forma prematura tienen un mayor riesgo de retraso «cognitivo». Como se consideró anteriormente y se analizará
diversas disfunciones y anomalías oftálmicas y visuales, en particular más adelante con mayor detalle en el apartado «Resultados evolutivos
los que tienen antecedentes de retinopatía de la prematuridad (ROP) en edad escolar después de la prematuridad», las pruebas de desarrollo
grave o que necesitó tratamiento y los que presentan lesión cerebral. a los 18-30 meses tienen por objeto valorar capacidades cognitivas.
Estos trastornos visuales funcionales comprenden estrabismo, pro- Sin embargo, en niños con peso extremadamente bajo al nacer
blemas de agudeza, convergencia y campos visuales, y morfología (PEBN) y EP, las puntuaciones de estas pruebas realizadas de forma
retiniana (Holmström y Larsson, 2013). Es importante reconocer precoz predicen poco las puntuaciones cognitivas en la edad escolar
que un resultado a corto plazo de ROP grave en la UCIN puede no (Hack et al., 2005; Roberts et al., 2010; Schmidt et al., 2012; Spencer-
causar los resultados evolutivos visuales funcionales más graves en la Smith et al., 2015).
primera infancia (SUPPORT Study Group of the Eunice Kennedy La muerte o el DND a los 2-3 años es un criterio de valoración
Shriver NICHD Neonatal Research Network et al., 2010; Vaucher primario o secundario principal en una mayoría sustancial de ensayos
et al., 2012). Incluso los niños prematuros sin antecedentes de ROP clínicos y estudios prospectivos en medicina neonatal, en particular
o solo con ROP leve también presentan mayor riesgo de problemas. para recién nacidos EP (Marlow, 2014). Esta combinación es com-
Estudios de seguimiento a largo plazo han demostrado que hasta el prensible, porque la muerte y el DND son resultados evolutivos compe-
50% de los recién nacidos de MBPN tienen cierta deficiencia visual a titivos; en este contexto se asume que los resultados evolutivos adversos
una edad escolar más tardía, y que estos problemas se pueden asociar (muerte y DND) no serán influenciados en direcciones opuestas por
con dificultades de aprendizaje y académicas (Stephenson et al., 2007). una intervención y que, idealmente, los componentes del resultado
Las recomendaciones de la AAP y la American Association of Pedia- evolutivo combinado tendrán valor similar; estos principios pueden
tric Ophthalmology indican que se debe efectuar un seguimiento no siempre ser válidos. Como la incidencia del resultado evolutivo
oftalmológico en los niños con antecedentes de ROP en el curso de compuesto es mayor que la de cualquier componente individual, la
los 4-6 meses del alta, independientemente de la gravedad de la ROP muerte o el DND también pueden ser una elección estadística lógica
(Fierson et al., 2013). para dar potencia a un ensayo; sin embargo, puede no ser la diana más
En los estudios de resultados evolutivos del neurodesarrollo precoz plausible desde el punto de vista biológico. Además, aunque el resultado
en recién nacidos prematuros a los 18-30 meses de edad corregida, los evolutivo del neurodesarrollo a los 2-3 años es de importancia crucial
criterios de discapacidad «profunda» o «grave» en el dominio auditivo para cualquier estudio observacional prospectivo o ensayo clínico de
han incluido, en general, alguna definición de «ausencia de audición recién nacidos de alto riesgo, puede no ser el criterio de valoración
útil» aun con ayudas auditivas o «cierta audición, pero no corregida primario más adecuado para todos los ensayos.

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CAPÍTULO 66 Valoración del riesgo y resultados del neurodesarrollo 975

Limitaciones y dificultades para interpretar Network (NRN) del National Institute of Child Health and Human
Development (NICHD) durante dos períodos adyacentes, y observaron
los estudios de resultados evolutivos que las puntuaciones cognitivas compuestas medias de la BSID-III eran
del neurodesarrollo precoz 11 puntos más altas que las puntuaciones medias del MDI de la BSID-II.
Como se mencionó antes, las visitas de seguimiento de recién nacidos Aun después del ajuste por las diferencias entre los grupos, la
de alto riesgo en la primera infancia de los 18 meses a los 3 años BSID-III fue un factor significativo en una disminución percibida de
suelen valorar resultados evolutivos de múltiples dominios. Si bien estas DND en el período más reciente. Asimismo, existen dilemas respecto
evaluaciones son importantes e informativas, la interpretación y la com- de la utilización significativa de los datos y puntos de corte normativos de
paración de los estudios son difíciles. Numerosos estudios comunican las puntuaciones de las escalas motoras compuestas y motoras finas en
resultados evolutivos por categorías y suelen incluir cualquier hallazgo el contexto de otras valoraciones motoras gruesas a los 18-24 meses de
adverso para dar un estado «de deficiencia» o «sin deficiencia». Las edad corregida y del valor de estas evaluaciones precoces para predecir
definiciones de resultados evolutivos «adversos» pueden no ser unifor- resultados evolutivos más tardíos e intervenir en forma adecuada (Dun-
mes entre los estudios; de hecho, las definiciones de los componentes can et al., 2015). En una cohorte de EP longitudinal, prospectiva, del
individuales de «deficiencia», como PC, ceguera, sordera y retraso del Victoria Infant Collaborative Study Group (VICS Group), los puntos
desarrollo a menudo difieren entre los estudios. Más aún, no todos los de corte normativos de la escala motora de la BSID-III para deficiencia
estudios prospectivos han incorporado controles a término con PNN a los 2 años subestimaron mucho las tasas de deficiencia motora a los 4
contemporáneos. Se ha demostrado que comparar las puntuaciones de años (Spittle et al., 2013b). Además, aunque las escalas cognitivas y de
las pruebas de un grupo de estudio MP o EP con normas estandarizadas lenguaje de la BSID-III a los 2 años se asociaron con funcionamiento
en lugar de con las puntuaciones de un grupo control de pares nacidos cognitivo a los 4 años valorado por las DAS-II, el retraso de desarrollo
a término limita de manera sustancial la relevancia y la veracidad de a los 2 años determinado por datos de referencia y puntos de corte
los hallazgos, y puede tener importantes implicaciones respecto de la normativos de la BSID-III tuvieron baja sensibilidad para predecir
política pública y los recursos (Marlow et al., 2005; Doyle et al., 2010b; futuras deficiencias cognitivas, verbales y de razonamiento no verbal a los
Msall, 2010a; Aylward y Aylward, 2011). 4 años en las DAS-II (Spencer-Smith et al., 2015). Todos estos hallazgos
Las evaluaciones de los resultados evolutivos de desarrollo y neuroló- tienen implicaciones importantes para la disponibilidad de recursos y
gicos en etapas muy precoces de la infancia deben considerarse solo un la política pública. En países, estados o regiones sin políticas específicas
primer paso del seguimiento completo; las valoraciones en la edad escolar, que recomienden valoraciones y servicios longitudinales continuados
la adolescencia y la vida adulta son de crucial importancia para conocer la para niños nacidos EP, la evaluación a los 2-3 años puede ser la última
trayectoria durante la vida y los resultados evolutivos funcionales y sociales oportunidad de detectar problemas antes de la transición al sistema
de individuos que fueron recién nacidos de alto riesgo (Hack, 2009; escolar. Si se determinan necesidades continuas solo por puntuación
Hack et al., 2012; Saigal et al., 2016). Las preocupaciones respecto de los inferior a un punto de corte normativo de la BSID-III, podrían quedar
cambios de las capacidades cognitivas con el tiempo, y un reconocimiento excluidos muchos niños con riesgo significativo de futuras deficiencias.
cada vez mayor de que efectos físicos y ambientales, así como abordajes de Pese a estas numerosas dificultades y salvedades, existe una cantidad
intervención precoz, pueden modificar la recuperación, destacan la nece- sustancial de literatura médica sobre resultados evolutivos neurológicos
sidad de valoraciones más tardías. Algunos problemas neurocognitivos, y cognitivos precoces. El conocimiento del espectro de resultados
de función ejecutiva y conductuales solo se pueden detectar en la edad evolutivos iniciales del neurodesarrollo y los factores asociados con
escolar; incluso reconocer que estos problemas de aprendizaje y atención resultados evolutivos adversos es crucial tanto para la familia como para
pueden afectar a recién nacidos prematuros es un paso crítico para garan- el equipo de asistencia médica. En apartados posteriores de este capítulo
tizar que se asegure apoyo y servicios adecuados para las familias y los revisamos los resultados evolutivos del neurodesarrollo precoz de cohor-
maestros, a fin de ayudar a los niños a alcanzar su mejor evolución posible. tes de alto riesgo recientes, incluidos los nacidos EP, y determinados
La evaluación de los resultados evolutivos neuromotores durante toda la grupos de recién nacidos prematuros tardíos y a término de alto riesgo.
infancia también es crucial. Si bien la mayoría de los estudios de niños
pequeños y en etapas muy precoces de la infancia se centran estrechamen-
Enfoque en los resultados evolutivos funcionales
te en el diagnóstico de PC, los problemas neuromotores y de coordinación La OMS ha definido «discapacidad» como un término paraguas que
más tardíos, como el TDC, son prevalentes en niños de edad escolar naci- cubre deficiencias, limitaciones de la actividad y restricciones de la
dos EP, en comparación con los nacidos a término, y se pueden asociar participación. Una deficiencia es un problema de la función o la estruc-
con otros problemas funcionales y dificultades académicas. Más aún, las tura corporal; una limitación de la actividad es una dificultad hallada
percepciones parentales de TDC no son fiables, pero, a pesar de todo, por un individuo al ejecutar una tarea o acción, y una restricción de
las intervenciones pueden corregir las limitaciones funcionales del TDC, la participación es un problema experimentado por un individuo al
lo que refuerza la importancia de las valoraciones clínicas continuadas intervenir en situaciones de la vida. Según el Informe mundial sobre la
durante toda la infancia (Roberts et al., 2011). discapacidad (WHO y World Bank, 2011), alrededor de 95 millones de
De modo similar, hay preocupaciones sustanciales respecto de la recién nacidos, niños y jóvenes de 0 a 14 años de edad de todo el mun-
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capacidad de las pruebas de desarrollo o cognitivas en niños pequeños, do (5%) viven con una discapacidad, de los cuales 13 millones (0,7%)
en particular las BSID, para detectar retraso del desarrollo cuando se tienen discapacidades consideradas graves. Casi 800 millones (∼16%)
utilizan las normas estandarizadas de las pruebas. En un grupo de recién de individuos mayores de 15 años de edad viven con discapacidad. La
nacidos EP y de PEBN a los 2 años de edad corregida, Anderson et al. International Classification of Functioning, Disability, and Health
(2010) hallaron medias de puntuaciones cognitivas de 96,9 y de pun- (ICF) de la OMS proporciona lenguaje estándar y un marco de refe-
tuaciones motoras de 100,4 de la BSID-III, pero también puntuaciones rencia para la descripción de la salud y estados relacionados con la salud
sustancialmente más altas que las esperadas en el grupo control nacido a centrados en el funcionamiento más que en el diagnóstico solo (WHO,
término. Si solo se aplicaran los criterios normativos de límites de corte 2001). Es una clasificación de salud y dominios relacionados con la
de la BSID-III a las puntuaciones de esta cohorte, se subestimaría de salud que describe lo que puede hacer una persona con un trastorno
manera importante el retraso cognitivo y motor moderado a grave res- de salud en un ambiente estándar, así como lo que puede realizar en su
pecto del grupo control. Vohr et al. (2012) compararon las puntuaciones ambiente habitual. Estos dominios se clasifican desde las perspectivas
medias de la BSID-II frente a las de la BSID-III a los 18-22 meses corporal, individual y social organizados en dos partes, cada una de
de edad corregidas por prematuridad en recién nacidos menores de la cuales comprende dos componentes. La parte 1 –funcionamiento y
27 semanas de EGE nacidos en hospitales de la Neonatal Research discapacidad– incluye funciones y estructuras corporales, y actividades

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976 PA RT E XI I Sistema nervioso

y participación; la parte 2 –factores contextuales– incorpora factores pletas y que sobrevivieron hasta el seguimiento fueron sometidos a
ambientales y factores personales. La ICF está concebida para ser valoración del neurodesarrollo a los 2 años de edad corregida (1991-
aplicable de manera universal y útil en una serie de sectores diferentes, 1992, n = 219, 97% de supervivientes; 1997, n = 149, 99% de super-
como evaluaciones individuales, política pública e investigación. vivientes; 2005, n = 163, 95% de supervivientes). Importa destacar
La ICF se centra en la salud y el funcionamiento, más que en la dis- que también se inscribieron y evaluaron controles > 36 semanas de
capacidad. En la mayoría de los estudios y abordajes, sobre todo en la gestación con PNN. Los niños fueron evaluados para detectar ceguera,
primera infancia e, incluso, hasta la edad escolar, se identifican deficien- sordera (hipoacusia que requería amplificación o peor) y retraso del
cias a través de pruebas o exámenes, y un individuo es clasificado con desarrollo (mediante la BSID). Se obtuvieron puntuaciones cognitivas
respecto a ese hallazgo solo. En cambio, el abordaje de la ICF consiste y de lenguaje compuestas respecto de la media y DE para los controles
en medir el funcionamiento en la sociedad, independientemente de de PNN, en lugar de solo puntuaciones y puntos de corte normativos
las deficiencias de base. Esto permite una perspectiva más amplia que de las pruebas. Asimismo, se practicó exploración neurológica para PC
una clasificación tradicional de salud y discapacidad. La ICF desvía la utilizando el GMFCS, y se describió la PC «grave» como improbabi-
atención del diagnóstico o rótulo a la repercusión sobre la función, que lidad de que alguna vez camine y la PC «moderada» como incapaz de
puede ser afectada por el ambiente, la intervención y otros factores. caminar a los 2 años, pero probabilidad de caminar. La discapacidad
En 2011, la OMS aprobó una clasificación «derivada», la Interna- global se consideró «grave» en niños con PC grave, ceguera o retraso del
tional Classification of Functioning, Disability and Health for Chil- desarrollo grave; «moderada», con PC moderada, sordera o retraso del desa-
dren and Youth, que se ajusta a las clasificaciones habituales de la rrollo moderado, y «leve», con PC leve o retraso del desarrollo leve.
ICF, con el objetivo de crear un abordaje integral a lo largo de la vida La tabla 66.1 presenta los resultados evolutivos de neurodesarro-
para describir la salud y el funcionamiento. Sin embargo, los intentos llo de la cohorte del VICS de 2005 a los 2 años de edad corregida.
de aplicar estos abordajes de clasificación funcional de los resultados Comparando las cohortes de 1991 a 1992, 1995 y 2005, los resultados
evolutivos a estudios de seguimiento de recién nacidos de alto riesgo evolutivos adversos no fueron significativamente diferentes entre las
en etapas muy precoces de la infancia han sido limitados, con algunas épocas, aunque fue menos probable que la cohorte de 2005 presentara
notables excepciones, como Msall et al., que han defendido el marco de los resultados evolutivos más adversos. Cabe destacar que, para las
referencia funcional, aun en edad preescolar precoz, como un resultado cohortes de 1991 a 1992 y la de 1997, las tasas de cualquier PC fueron
evolutivo altamente relevante y mensurable (Msall, 2005). Entre los del 11 y el 12,1%, mientras que, en la cohorte de 2005, la tasa de PC
varios instrumentos existentes, la Vineland Adaptive Behavior Scale había descendido al 9,8%. De modo similar, la cohorte de 2005 tuvo
(VABS) es una encuesta para valorar el comportamiento adaptativo tasas considerablemente más bajas de retraso del desarrollo (3,7%) y
(Sparrow et al., 2005). En niños menores de 6 años, los dominios son discapacidad neurológica grave (3,7%) que la cohorte de 1997 (14,8 y
comunicación (lenguaje receptivo, expresivo), habilidades de la vida 15,4%), que, a su vez, tuvo tasas significativamente más altas de estos
cotidiana (cuidado de sí mismo/personal), socialización (relaciones problemas que la cohorte de 1991 a 1992 (7,3 y 7,8%). El retraso del
interpersonales y juego) y habilidades motoras (gruesas y finas). Hay desarrollo de moderado a grave y la discapacidad de moderada a grave
una versión para el aula destinada a niños de 3 años 0 meses a 12 años también fueron similares entre las cohortes, con una disminución
11 meses. El Pediatric Evaluation of Disability Inventory (PEDI) observada entre 1997 y 2005, pero un aumento de 1991-1992 a 1997
valora el cuidado de sí mismo, la movilidad y las actividades funcio- (retraso del desarrollo de moderado a grave: 1991-1992, 18,3%; 1997,
nales sociales en niños de 6 meses a 7 años (Feldman et al., 1990), y 24,2%; 2005, 16%; discapacidad de moderada a grave: 1991-1992,
se ha usado mucho en niños con discapacidades graves percibidas o 21%; 1997, 28,2%; 2005, 20,3%). Dados estos resultados, no es
conocidas, como los que padecen PC y otras deficiencias físicas. La sorprendente que la utilidad media por superviviente fuera más alta
Functional Independence Measure for Children (Wee FIM) es una (mejor) en 2005 que en cualquiera de las dos cohortes previas en cada
medida de evaluación de habilidades funcionales básicas que consiste en semana gestacional de 22 a 26 semanas. La supervivencia ajustada
18 ítems que abarcan tres subescalas: cuidado de sí mismo, movilidad por calidad aumentó con cada semana de gestación, fue mayor para
y cognición social. La Wee FIM se ha utilizado en niños de 2 a 7 años la cohorte de 1997 en comparación con la cohorte de 1991 a 1992 y
de edad, incluidos recién nacidos de alto riesgo, como los nacidos EP fue estable entre 2005 y 1997. Centrándose en la cohorte de 2005,
y los que tienen factores de riesgo médicos significativos (Ottenba- las puntuaciones medias cognitivas y de lenguaje compuestas fueron
cher et al., 1999; Msall, 2010b). Este instrumento ha mostrado tener mucho más altas que las anticipadas para la cohorte EP (97,5 y 93,9),
excelente validez concurrente con la VABS y el PEDI, y reactividad al pero también más altas para la cohorte control (108,9 y 108,2); el
cambio a lo largo del tiempo (Msall, 2005). Estos instrumentos son retraso de desarrollo para el grupo EP se habría subestimado mucho si
esenciales para conocer la repercusión funcional de la prematuridad no se hubiera evaluado respecto de un grupo control a término. No obs-
extrema y la enfermedad crítica neonatal durante el curso de la vida. tante, más de la mitad de la cohorte EP de 2005 no presentaba retraso
del desarrollo (52,1%) ni ninguna discapacidad (50,9%) a los 2 años.
Resultados evolutivos de recién nacidos Así, estos estudios poblacionales regionales revelan que, aunque
las tasas de supervivencia y supervivencia ajustada por calidad para
prematuros a lo largo de su esperanza de vida recién nacidos de 22 a 27 semanas de EGE aumentaron durante la
década de los noventa y parecen haberse estabilizado hasta la cohorte
Resultados evolutivos del neurodesarrollo de 2005, las tasas de retraso y discapacidad graves a los 2 años parecen
precoz de recién nacidos extremadamente haber mejorado desde finales de la década de los noventa. Como se
describe más adelante en este capítulo, estos investigadores también
prematuros han publicado mucho sobre resultados evolutivos en la edad escolar,
Se han comunicado resultados evolutivos del neurodesarrollo precoz la adolescencia y las etapas iniciales de la vida adulta (Hutchinson
de varias cohortes numerosas de recién nacidos EP de todo el mundo. et al., 2013; Roberts et al., 2013; Burnett et al., 2014).
Estos se resumen en la tabla 66.1 y se presentan en detalle más adelante.
Victoria Infant Collaborative Study Group EPICure 2
El VICS Group ha comunicado una serie de cohortes de nacimientos El estudio EPICure 2 es un estudio poblacional de morbimortalidad
de neonatos EP nacidos en el estado de Victoria (Australia) de 1991 a y resultados evolutivos en el neurodesarrollo (Moore et al., 2012a). Se
1992, en 1997 y en 2005 (Doyle y VICS Group, 2004; Doyle et al., identificó a todos los neonatos nacidos a las 22-26 6/7 semanas de gesta-
2010). Neonatos nacidos vivos a las 22-27 semanas de gestación com- ción en el Reino Unido durante 2006, y se reunieron datos de mortalidad

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TABLA
66.1
 Resultados evolutivos del neurodesarrollo precoz: algunas cohortes recientes de extremadamente prematuros

Cohorte suiza
NRN del NICHD NRN del NICHD VICS 2005 NRN japonesa EPICure 2 (Schlapbach EXPRESS
(Hintz et al., 2011) (Rysavy et al., 2015) (Doyle et al., 2010) (Ishii et al., 2013) (Moore et al., 2012a) et al., 2012) (Serenius et al., 2013)
Descripción EGE < 25 semanas EGE 22-26 semanas EGE 22-27 6/7 EGE 22-25 semanas EGE 22-26 6/7 EGE 24-27 6/7 EGE < 27 semanas
del grupo de estudio semanas semanas semanas
Años de nacimiento 2002-2004 2006-2011 2005 2003-2005 2006 2000-2008 2004-2007
Edad corregida 18-22 meses 18-22 meses 2 años 36-42 meses 3 años 2 años 2,5 años
por prematuridad (cronológica)
en el seguimiento
Número (seguimiento 405 (93%) 2.630 (92%) 163 (95%) 562 (72%) 576 (55%)b 684 (81%) 415 (90%)
porcentual de
pacientes elegibles)
Resultados evolutivos
Ciego 2,2% 0,4% 0 4,6%c 1% No informado 0,9%
por separado
Sordo/requiere ayudas 4,3% 1,4% 2,5% Requiere ayudas No mejorado por No informado No mejorado por ayudas
auditivas auditivas: 1,7% ayudas auditivas: por separado auditivas: 0,2%
0,2% Mejorado por ayudas
Mejorado por ayudas auditivas: 0,7%
auditivas: 5%
Desarrollo/cognitivo BSID-II BSID-III cognitiva CDa CD por KSPDa MDI previstoa BSID-IIe Cognitivo/lenguaje:a
MDI < 70: 51% 70-84: 16,5% Ninguno/≤ 1 DE: 52% < 70: 35% 70-84: 34% MDI < 70: 19% Ninguno: 55%

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MDI < 50: 19% < 70: 9,3% 1-2 DE: 32% < 50: 11% < 70: 30% PDI < 70: 20% Leve: 25%
2-3 DE: 12% Moderado: 11%
> 3 DE: 4% Grave: 9%
Parálisis cerebral (PC) Moderada: 8,7% Moderada: 3,4% Cualquier PC: 9,8% Cualquier PC: 13,7% Cualquier PC: 14% Cualquiera: 7,6%e Leve: 2,9%
o retraso motor Grave: 6,2% Grave: 2,5% PC profunda: 8,2% Motora moderada: 3% Moderada: 2,9%
Motora grave: 5% Grave: 1,3%
Discapacidad Cualquier DND: 58,5% DND moderado: 23,5% Ninguno: 51% Cualquiera: 42,4%d Ninguno/leve: 75% Favorable: 64% Ninguno: 42%
o deterioro DND profundo: 17,5% DND grave: 13,6% Leve: 29% Profundo: 22,6%d Moderado: 12% Moderado: 24% Leve: 31%
Ninguno/mínimo: Moderado: 16% Grave: 13% Grave: 11% Moderado: 16%
21,9% Grave: 4% Grave: 11%
a
Para el VICS, CD = cociente de desarrollo comparado con un grupo control de PNN contemporáneo; para EPICure 2, MDI previsto de la BSID, 2.a ed., de la BSID-III; para EXPRESS, información agregada de puntuaciones cognitivas y de lenguaje de la BSID-III, con media
y DE respecto de un grupo control contemporáneo de 37-41 semanas de EG; para la NRN japonesa solo se dispuso de evaluación formal por la KSPD de 318 participantes.
b
Hubo evaluaciones cara a cara del examinador del estudio en el 55,3%. Resultados evolutivos estimados por imputación múltiple a partir de información perinatal, neonatal y sociodemográfica para toda la cohorte.

Descargado para Anonymous User (n/a) en Universidad Nacional Autonoma de Mexico de ClinicalKey.es por Elsevier en enero 16, 2019.
c

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Definido como ausencia de visión funcional en un ojo o en ambos.
d
Incluye 173 con valoraciones informales de retraso del desarrollo por pediatras, sin pruebas de desarrollo formales.
e
Los datos respecto de PC y las puntuaciones de la BSID-II se comunicaron en Schlapbach et al. (2011).
BSID-II, Bayley Scales of Infant and Toddler Development II; BSID-III, Bayley Scales of Infant and Toddler Development III; CD, cociente de desarrollo; DE, desviación estándar; DND, deterioro del neurodesarrollo; EG, edad gestacional; EGE, edad gestacional estimada;
CAPÍTULO 66 Valoración del riesgo y resultados del neurodesarrollo

EXPRESS, Extremely Preterm Infants in Sweden Study; KSPD, Kyoto Scale of Psychological Development; MDI, Mental Developmental Index; NICHD, National Institute of Child Health and Human Development; NRN, Neonatal Research Network; PNN, peso normal al nacer;
VICS, Victoria Infant Collaborative Study.
977
978 PA RT E XI I Sistema nervioso

y morbilidad desde la sala de partos hasta el final de la hospitalización Swedish Medical Birth Registry. Se definió discapacidad grave como
(Costeloe et al., 2012). Las comparaciones entre el EPICure 1 (Costeloe puntuación compuesta cognitiva, de lenguaje o motora de la BSID-III
et al., 2000) (cohorte de nacimiento de 1995) y el EPICure 2 en los mayor de 3 DE por debajo de la media respecto del grupo control, PC
resultados evolutivos, tanto a corto plazo como del neurodesarrollo, se grave, o ceguera o sordera bilateral. Se definió discapacidad moderada
limitaron a los de 22 a 25 6/7 semanas de gestación nacidos en Inglate- como puntuaciones entre 2 y 3 DE respecto de la media de cualquiera
rra. En el EPICure 2, el seguimiento se vio obstaculizado por cambios de las escalas de la BSID-III, PC moderada, y deficiencia visual o
de los procedimientos gubernamentales nacionales relativos a la inves- auditiva moderada. La discapacidad leve se definió como puntuaciones
tigación en el Reino Unido y las mayores restricciones de privacidad entre 1 y 2 DE respecto de la media de cualquiera de las escalas de la
por el National Health Service. Por consiguiente, el rastreo del éxito se BSID-III o PC leve.
vio limitado de manera sustancial en comparación con el estudio previo Como se resume en la tabla 66.1, de los niños nacidos EP, el 11,3%
y, en consecuencia, se recurrió a imputación múltiple para estimar los tenían discapacidad cognitiva moderada o grave según la BSID-III, en
resultados evolutivos de los pacientes perdidos para el seguimiento. comparación con el 0,5% de los controles. Al considerar las puntua-
Las evaluaciones de seguimiento del EPICure 2 se realizaron con la ciones cognitivas, de lenguaje o motoras, el 15% de los EP y el 3%
BSID-III a una edad diana de 36 meses, y las del EPICure 1, con la BSID-II a de los controles tenían discapacidad moderada, y el 8,9% de los EP y
una edad diana de 30 meses. Para comparar directamente los resultados el 0,3% de los controles tenían discapacidad grave. La proporción de
de las dos cohortes, se convirtieron las puntuaciones combinadas de la niños con discapacidad leve o ninguna discapacidad aumentó del 40%
BSID-III en un «MDI previsto» (Moore et al., 2012b). «Deficiencia a las 22 semanas al 83% a las 26 semanas. Se observó una disminución
grave» se definió como PC no ambulatoria (GMFCS III-V), ceguera, significativa de las discapacidades graves con cada aumento de semana
hipoacusia profunda o cociente de desarrollo menor de 3 DE por gestacional, con un cociente de posibilidades (OR, odds ratio) de 0,58
debajo de la media para la edad. «Deficiencia moderada» se definió (IC del 99%, 0,39-0,86); p < 0,001. Globalmente, el 42% de los
como PC ambulatoria (GMFCS 2), alteración funcional de la visión, niños EP de este grupo no presentaban ninguna discapacidad a
hipoacusia mejorada por dispositivos de ayuda o puntuación de desa- los 30 meses, en comparación con el 78% de los niños control. La
rrollo de II-III DE por debajo de la media. mayor parte del 58% de los niños EP discapacitados tenían discapaci-
De los 1.031 niños del EPICure 2 que sobrevivieron al seguimiento dad leve (31%). En análisis adicionales, Serenius et al. (2015) explo-
(1.041 supervivientes hasta el alta, 10 murieron después del alta), los raron si el grado de la asistencia perinatal en regiones de toda Suecia
examinadores del estudio evaluaron a 576 (55,3%, mediana 34 meses), se asociaba con un mayor riesgo de muerte o DND a los 2,5 años.
y se dispuso de información de otros 191 de registros locales (18,3%, Los investigadores hallaron variación significativa de las prácticas de
mediana 25 meses) (v. tabla 66.1). Los grupos observados en persona intervención obstétricas y neonatales. En regiones con prácticas
y no observados en persona tenían características basales perinatales y de intervención más intensivas, se redujo el riesgo de muerte o DND
neonatales similares, pero diferentes factores socioeconómicos; los niños a los 2,5 años, pero solo para el grupo de 22-24 semanas. Más aún,
de familias con mayor desventaja social tuvieron menos probabilidad no hubo ningún aumento del DND entre los supervivientes asociado
de ser sometidos a una evaluación del estudio formal. con prácticas perinatales más agresivas.
Entre el grupo EPICure 2 con evaluaciones del estudio formales,
el 75% no presentaban deficiencias o tenían deficiencias leves. La Neonatal Research Network japonesa
supervivencia sin discapacidad para toda la cohorte del EPICure 2, La NRN japonesa comunicó resultados evolutivos de neonatos naci-
incluidos los resultados evolutivos imputados, entre los ingresados en dos vivos a las 22-25 semanas de gestación durante 2003-2005 (Ishii
la UCIN demostró aumentos con cada semana de edad gestacional: et al., 2013). Las valoraciones del neurodesarrollo se practicaron a los
22 semanas, 5% (intervalo de confianza [IC] al 95%, 0-26%); 23 36-42 meses de edad cronológica y consistieron en exploración neu-
semanas, 15% (IC al 95%, 10-21%); 24 semanas, 30% (IC al 95%, rológica, valoración funcional de la visión y la audición, y evaluación
25-35%); 25 semanas, 49% (IC al 95%, 43-55%); 26 semanas, 62% cognitiva por la Kyoto Scale of Psychological Development (KSPD). Se
(IC al 95%, 57-67%). Además, el 66% no presentaban discapacidad calculó un cociente de desarrollo (CD), con una puntuación media de
auditiva, visual ni de comunicación, pero se informó de que solo el DE de 100,6 ± 13,4. En este estudio, se definió DND como cualquier
36% de los niños no presentaban ninguna discapacidad del desarrollo PC con GMFCS II-V, hipoacusia, deficiencia visual o puntuación del
(puntuaciones de la BSID-II > 85). Sin embargo, las comparaciones CD por la KSPD menor de 70. Se definió deficiencia profunda como
robustas son difíciles, dado que el número de pacientes era bastante CD inferior a 50 o PC con GMFCS IV o V.
pequeño, en particular para el grupo de menos de 23 semanas de EGE. La tabla 66.1 muestra los puntos destacados de los resultados
Este hallazgo destaca el grave pronóstico de supervivencia en los recién evolutivos. Entre 782 supervivientes a los 3 años, se evaluó a 562
nacidos más prematuros de esta cohorte; solo el 18% de los neonatos (71,9%) en una visita de seguimiento. La tasa de seguimiento entre
de menos de 23 semanas de EGE que ingresaron vivos en una UCIN los supervivientes declinó a lo largo de las semanas de edad gestacional,
sobrevivieron hasta el alta, en comparación con el 48% de los neonatos del 85,2% (23/27) en los nacidos a las 22 semanas de gestación al
de 25 semanas de EGE. 69,6% (240/345) en los nacidos a las 25 semanas de gestación. Entre
los examinados se diagnosticó PC de cualquier gravedad en el 13,7%,
Extremely Preterm Infants in Sweden Study y PC profunda en el 8,2%, con tasas más altas observadas a edades
La cohorte del Extremely Preterm Infants in Sweden Study (EXPRESS) gestacionales más tempranas (22 semanas, 17,4%; 23 semanas, 10,2%).
(año de nacimiento 2004-2007, < 27 semanas de gestación) fue Solo 318 niños fueron evaluados de manera formal mediante la KSPD
seguida hasta una mediana de 30,5 meses, momento en el cual se (56,6% de los seguidos), mientras que 173 fueron evaluados como no
realizaron la BSID-III, exploraciones neurológicas y cuestionarios retrasados según juicio de un pediatra. Si un pediatra consideraba que
parentales (Serenius et al., 2013). De los 707 recién nacidos vivos, 491 había «retraso», se asumía que el CD era inferior a 50 a los fines del
sobrevivieron hasta el seguimiento (69%), se evaluó a 415 de 461 que estudio; por lo tanto, puede haber una sobrestimación de las tasas de
eran elegibles para la inclusión (tasa de seguimiento del 90%) y 399 DND profundo o retraso del desarrollo profundo al incluir estas eva-
de ellos completaron por lo menos parte de la BSID-III. Se dispuso luaciones informales. Entre los evaluados de manera formal, el 34,6%
de revisión de la historia clínica de otros 41 niños. El grupo estaba presentaban retraso del desarrollo de cualquier gravedad (KSPD < 70)
sesgado hacia una edad gestacional más alta, y solo 52 (11%) de la y el 11% presentaban retraso profundo (KSPD < 50). De los niños
cohorte habían nacido a las 22-23 semanas de gestación. Importa des- evaluados solo por un pediatra, el 37% se consideraron retrasados.
tacar que se reclutó un grupo control (37-41 semanas de gestación, Globalmente, al incluir cualquier evaluación, se comunicó DND
emparejado 2:1 con el grupo prematuro) por selección aleatoria del de cualquier gravedad en 208/491 (42,4%) de los supervivientes. Se

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CAPÍTULO 66 Valoración del riesgo y resultados del neurodesarrollo 979

informó del resultado evolutivo compuesto de muerte o cualquier semanas, que representaron una proporción sustancial de la variación
DND en el 45,7% (483/1.057) y muerte o DND profundo en el de resultados evolutivos para niños nacidos en ese rango de edad ges-
36,5% (386/1.057). tacional. Durante este período de estudio, se utilizó la BSID-III y no
hubo grupo control a término.
Follow-Up Study Group de la Neonatal Research Network
del Eunice Kennedy Shriver NICHD Cohorte nacional suiza de extremadamente prematuros
La NRN del NICHD se inició en 1986 como un proyecto multicén- El estudio de cohorte EP nacional suiza fue un estudio prospectivo,
trico en EE. UU., con el principal objetivo de proporcionar un registro longitudinal, de recién nacidos vivos entre las 24 0/7 y 27 6/7 semanas
de datos basales y de morbimortalidad reunidos de manera uniforme, de gestación en Suiza, de 2000 a 2008 (Schlapbach et al., 2012). Se
con el fin de que sirvieran de base para la planificación e implemen- comunicaron los resultados evolutivos a los 18-24 meses de edad corre-
tación de ensayos clínicos. Más adelante, se sumó el Follow-Up Study gida solo para los recién nacidos evaluados en centros que utilizaban
Group de la NRN del NICHD para suministrar seguimiento del la BSID-II. Se definió discapacidad grave como PC con GMFCS de
neurodesarrollo para ensayos y para los que cumplían los criterios nivel III-V, MDI o PDI menor de 55, ausencia de audición útil aun
del Estudio de seguimiento de la NRN, que ahora incluye a recién con dispositivos de ayuda o ceguera bilateral. Se definió discapacidad
nacidos menores de 27 semanas de gestación. moderada como PC con GMFCS de nivel II, MDI o PDI 55-69,
La NRN del NICHD comunicó resultados evolutivos a los 18-22 hipoacusia corregida con ayudas auditivas, reducción moderada de la
meses de edad corregida de neonatos nacidos en un centro de la NRN visión, pero mejor que grave, o ceguera unilateral con buena visión en
con menos de 25 semanas de gestación, durante dos épocas, 1999 a el ojo contralateral. Se definió evolución favorable como supervivencia
2001 (época 1) y 2002 a 2004 (época 2) (Hintz et al., 2011). La visita sin discapacidad moderada o grave. De 1.266 recién nacidos vivos,
de seguimiento incluyó la BSID-II, así como exámenes neurosensoriales 844 sobrevivieron hasta los 18-24 meses, de los cuales 648 tuvieron
y motores. Se definió DND como MDI o PDI inferior a 70, PC de seguimiento, incluidas pruebas de la BSID-II (81%). Para la cohorte
moderada a grave (no ambulatoria o que requiere dispositivos de asis- global, se comunicó que 166 (el 24,3% de aquellos con seguimiento)
tencia), ceguera bilateral (ausencia de visión funcional en ambos ojos) presentaban discapacidad moderada, y 78 (11,4%) presentaban dis-
o hipoacusia grave bilateral que requería amplificación. Se definió capacidad grave. En un informe previo de este grupo que incluyó a
DND profundo como MDI inferior a 50, o GMFCS de nivel 4 o 5. neonatos nacidos hasta el 31 de diciembre de 2007, se comunicaron
Se definió deficiencia nula o mínima como ausencia de lo siguiente: PC y puntuaciones de la BSID-II (Schlapbach et al., 2011). De 541
PC moderada a grave, hipoacusia grave o ceguera bilaterales, y MDI o niños evaluados a los 18-24 meses de edad corregida, 41 (7,6%) pre-
PDI menores de 85. Las tasas de seguimiento en ambas épocas fueron sentaban PC de cualquier gravedad. De los que tenían puntuaciones
de alrededor del 90%. Solo alrededor del 25% de ambos grupos de de la BSID-II, se observó PDI menor de 70 y MDI menor de 70 en
seguimiento estaban compuestos por niños nacidos con menos de 23 99/485 (20,4%) y 99/527 (18,8%), respectivamente.
semanas de gestación.
Aunque los resultados mostraron un aumento absoluto aparente del
DND del 50,1 al 58,7% entre la época 1 y 2, no se observó que la época Resultados evolutivos en edad escolar
se asociara con DND en los análisis multivariados. No se detectó un después de la prematuridad
aumento significativo del DND profundo entre la época 1 (16,8%) y
la época 2 (17,5%). En ambas épocas, las tasas de resultados evolutivos Los supervivientes de prematuridad de edad escolar tienen altas tasas
adversos fueron más altas en niños de menos de 23 semanas de ges- de DND, con tasas de PC del 9-10% y tasas de discapacidad cognitiva
tación que en los de 24 semanas de gestación, aunque las cantidades del 4-36%, lo que depende de la población evaluada, las definicio-
de pacientes eran pequeñas para los resultados evolutivos más raros. nes de resultado evolutivo y la edad en el momento de la valoración
Pese a un manejo perinatal más agresivo con mayor cantidad de cesáreas (Jarjour, 2015). Casi siempre se observa que los recién nacidos que
(40,9-48,8%) y la reducción sustancial del uso posnatal de esteroides presentan graves deficiencias cognitivas, motoras o neurosensoriales
(63,5-32,8%) de la época 1 a la 2, no se observó ninguna mejoría sig- en los primeros años (2-3 años de vida) tienen deficiencias moderadas
nificativa de los resultados evolutivos de neurodesarrollo. Sin embargo, a graves en la edad escolar (Marlow et al., 2005; Kodric et al., 2014).
este estudio difirió de otros en que se centraba estrechamente en los En la cohorte EPICure de neonatos nacidos con menos de 25 semanas
menores de 25 0/7 semanas y en que la evaluación se llevó a cabo a de edad gestacional, el 86% de los niños con discapacidad grave a los
una edad más precoz. Estas cohortes tampoco estaban basadas en la 30 meses continuaron presentando discapacidad de moderada a grave
población, sino que eran representativas de los centros académicos de a los 6 años (fig. 66.1) (Marlow et al., 2005). Sin embargo, es más
la NRN. Como en los análisis previos de este grupo (Vohr et al., 2004), frecuente que los supervivientes de MBPN o MP de edad escolar ten-
se observaron diferencias de los resultados evolutivos entre distintos gan deficiencias más leves que son difíciles de clasificar correctamente
centros, lo que indicó que la variabilidad más allá de la que puede a edades más precoces. Estas deficiencias comprenden deficiencia
explicarse por factores de riesgo perinatales y neonatales desempeña cognitiva leve (CI 1-2 DE por debajo de la media o 70-84); trastornos
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un papel importante en los resultados evolutivos. de aprendizaje, emocionales, de coordinación motora y de la función
La variación interhospitalaria de la supervivencia y el DND a los ejecutiva, y escasos logros académicos.
18-22 meses fue explorada aún más por Rysavy et al. (2015) en recién El retraso cognitivo es la deficiencia más importante en niños que
nacidos en un centro de la NRN antes de las 27 semanas de ges- nacieron MP. En una revisión sistemática de 2002 que incluyó a 1.556
tación entre 2006 y 2011. La definición de deficiencia fue similar a recién nacidos prematuros y 1.720 controles a los 5-14 años de edad,
la de antes, con la excepción de que las puntuaciones cognitivas de los controles tenían puntuaciones cognitivas significativamente más
la BSID-III menores de 70 se categorizaron como DND grave, y altas (diferencia media, 10,9 puntos) (Bhutta et al., 2002). Los recién
las puntuaciones de 70-84, como DND moderado. Se evaluaron los nacidos más inmaduros tienen el máximo riesgo de mal resultado
resultados evolutivos en relación con las tasas hospitalarias de «tra- evolutivo cognitivo; a los 6 años, el 49% de los niños y el 32% de
tamiento activo», definidas como tratamientos que pueden salvar la las niñas de la cohorte EPICure (≤ 25 semanas de gestación en el
vida iniciados después del parto. En todos los recién nacidos, las tasas momento del nacimiento) presentaban deficiencia cognitiva (Marlow
medias globales de supervivencia sin deficiencia grave fueron del 3,4, et al., 2005). En edad escolar, aun los recién nacidos prematuros mode-
el 17,9, el 44,7, el 61,1 y el 75,6% para 22, 23, 24, 25 y 26 semanas rados y tardíos pueden presentar un mayor riesgo de deficiente funcio-
de gestación. Sin embargo, hubo diferencias significativas entre las namiento cognitivo en comparación con sus pares a término (de Jong
tasas hospitalarias de tratamiento activo para los nacidos a las 22-24 et al., 2012). Importa destacar que factores biológicos, como el sexo, el

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980 PA RT E XI I Sistema nervioso

gestación, se observó una correlación directa entre desempeño cognitivo


y problemas conductuales (Delobel-Ayoub et al., 2009). Las posibili-
dades de problemas conductuales eran 2,6 veces más altas en los recién
nacidos con un CI mayor de 2 DE por debajo de la media que en los
que tenían un CI menor de 1 DE por debajo de la media. Sin embargo,
las discapacidades cognitivas no explicaron las tasas más altas de pro-
blemas conductuales en los niños prematuros, porque los prematuros
continuaron teniendo un riesgo más alto aun después del ajuste por
desempeño cognitivo. En esta cohorte, los problemas conductuales
fueron más frecuentes en los niños con antecedentes médicos más com-
plejos, factores de riesgo socioeconómicos y escaso bienestar materno.
Los problemas neuroconductuales o psiquiátricos, incluidos tras-
tornos del espectro autista (TEA) y trastornos por déficit de atención e
hiperactividad (TDAH), se comunican con una frecuencia más alta en
niños prematuros de edad escolar que en la población general (Bhutta
et al., 2002). En el estudio Extremely Low Gestational Age Newborn
(ELGAN) de neonatos nacidos antes de las 28 semanas de gestación, se
diagnosticaron TEA en el 7% en la edad escolar (Kuban et al., 2016).
En esta cohorte, la probabilidad de TEA era del doble en los niños
• Figura 66.1  Gravedad de la discapacidad a los 6 años, basada en varones que en las niñas. Los recién nacidos prematuros moderados y
la clasificación a los 30 meses de edad corregida. Los datos se basan tardíos también pueden tener mayor probabilidad de TEA: un estudio
en 236 niños que nacieron con 25 semanas completas o menos de comunicó que la posibilidad de que se diagnostique autismo a los 10
gestación en el Reino Unido e Irlanda en 1995. (Reproducido a partir años es 1,55 veces más alta en estos niños que en los niños nacidos
de Marlow N, Wolke D, Bracewell MA, Samara M; EPICure Study Group. a término (Buchmayer, 2009). En los niños prematuros, el riesgo de
Neurologic and developmental disability at six years of age after extremely TEA parece aumentar particularmente en los que fueron pequeños
preterm birth. N Engl J Med. 2005;352:9–19. Con autorización de la Mas­ para la edad gestacional, los que tienen malformaciones congénitas,
sachusetts Medical Society.) test de Apgar bajo a los 5 min, hemorragia intracraneal, edema cerebral
o convulsiones en el período neonatal, y los nacidos de madres con
peso de nacimiento y la raza, son predictivos de los resultados evolutivos preeclampsia (Buchmayer et al., 2009).
cognitivos precoces (Linsell et al., 2015). En cambio, cuando los niños En una revisión sistemática, los niños prematuros tuvieron un
alcanzan la edad escolar, la educación parental es más predictiva del riesgo relativo (RR) de diagnóstico de TDAH de 2,64 (IC al 95%,
resultado evolutivo cognitivo que los factores biológicos o perinatales. 1,85-3,78) en comparación con los niños a término (Bhutta, 2002).
Más aún, los niños con ventajas sociales (familia biparental, padres En una numerosa cohorte sueca, las posibilidades de TDAH en la
educados, padres empleados) muestran mayores avances cognitivos edad escolar disminuyeron con la edad gestacional creciente hasta
durante la primera infancia que los que carecen de esas ventajas sociales la edad a término corregida (Lindström et al., 2011). Las posibilidades
(Manley et al., 2015). de TDAH fueron 2:1 entre los recién nacidos más inmaduros (23-28
De modo similar, en 14 estudios de logros académicos en la edad semanas de gestación) y 1:1 entre los recién nacidos a término precoz
escolar, los recién nacidos de MBPN o MP tienen puntuaciones en (37-38 semanas de gestación). En los niños más prematuros, los factores
pruebas de matemáticas, lectura y ortografía que están 0,5-0,75 DE por socioeconómicos no parecen incidir de manera significativa en el riesgo
debajo de las de sus pares a término (Aarnoudse-Moens et al., 2009). de TDAH. En cambio, el riesgo sociodemográfico –en particular baja
Asimismo, el rendimiento en valoraciones académicas está estrecha- educación materna– puede aumentar el riesgo de TDAH en niños
mente relacionado con el peso de nacimiento y la edad gestacional moderadamente prematuros nacidos de mujeres con menor educación
(Bhutta et al., 2002; Aarnoudse-Moens et al., 2009). Así, las posibi- (Lindström et al., 2011). En todo el espectro de edad gestacional, la
lidades de deficiencia grave en los logros académicos son ocho veces probabilidad de diagnosticar TDAH es cuatro veces mayor en los niños
más altas en los neonatos más inmaduros nacidos con menos de 25 varones en edad escolar que en las niñas.
semanas de gestación que en sus controles a término emparejados Como los resultados evolutivos adversos del desarrollo y neuro-
(Marlow et al., 2005). conductuales son considerablemente más frecuentes en recién nacidos
Las medidas de función ejecutiva (fluidez verbal, memoria de tra- prematuros, es esencial que el pediatra que asiste a niños de edad escolar
bajo y flexibilidad cognitiva) también demuestran disminuciones de esté siempre atento a la posibilidad de estos problemas. El acceso precoz
alrededor de 0,5 DE entre recién nacidos MP o de MBPN y controles a a servicios es esencial para optimizar los resultados evolutivos. Muchos
término (Anderson y Doyle, 2004; Aarnoudse-Moens et al., 2009). Sin problemas de desarrollo y conductuales son más frecuentes en niños pre-
embargo, estas no parecen correlacionarse con el peso de nacimiento maturos que en niñas prematuras. Más aún, si bien el riesgo es máximo
o la edad gestacional, y pueden no estar influenciadas por el nivel en la mayoría de los recién nacidos EP, los recién nacidos moderadamente
socioeconómico (Anderson y Doyle, 2004). prematuros y prematuros tardíos también tienen un riesgo más alto
En edad escolar, es más probable que tanto los padres como los de resultado evolutivo adverso en la edad escolar que sus homólogos
maestros comuniquen problemas de conducta en los niños que nacie- nacidos a término. Los problemas en la edad escolar del recién nacido
ron prematuros. Los recién nacidos MP e, incluso, los recién nacidos prematuro mayor consisten en problemas de coordinación motora fina
prematuros tardíos tienen más probabilidad de presentar síntomas de y gruesa, dificultades académicas, problemas de atención y necesidad de
internalización o externalización de la Lista de verificación de la con- apoyo especial en la escuela (Huddy et al., 2001). Como los recién naci-
ducta infantil (Child Behavior Checklist) que sus homólogos a término dos prematuros moderados y tardíos superan por mucho a los recién nacidos
(Bhutta et al., 2002; Delobel-Ayoub et al., 2009; Talge et al., 2010). MP, es crucial conocer la probabilidad de este resultado evolutivo y
Los síntomas de internalización se manifiestan por timidez, inadap- encarar con rapidez cualquier preocupación o problema potencial. Los
tación social y comportamiento retraído (Anderson y Doyle, 2003; problemas cognitivos y neuroconductuales de todos los niños de alto ries-
Aylward, 2005). Es crucial observar que los problemas conductuales go aumentan de manera considerable los costes de la educación especial
suelen afectar a niños con problemas cognitivos. En la cohorte EPIPAGE y la utilización de recursos en la edad escolar, e influyen con firmeza en
regional francesa de niños nacidos con menos de 33 semanas de los resultados evolutivos en etapas ulteriores de la vida.

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CAPÍTULO 66 Valoración del riesgo y resultados del neurodesarrollo 981

Resultados evolutivos en adolescentes y adultos hijo en los hombres nacidos a las 22-27 semanas de gestación es de
0,24; el RR en las mujeres es de 0,33 (Swamy, 2008). Más aún, las
después de la prematuridad mujeres nacidas prematuras tienen mayor probabilidad de tener bebés
La introducción de la ventilación asistida y, luego, del agente tensioacti- prematuros. Es menos probable que los adultos nacidos prematuros se
vo y los esteroides prenatales a fines del siglo XX dio origen a las primeras muden del hogar de sus padres o que convivan con una pareja (Swamy
generaciones sustantivas de supervivientes de MBPN. Estos prematuros et al., 2008; Mathiasen et al., 2009). El ingreso neto es significativa-
supervivientes son ahora adolescentes y adultos, cuya evolución es de mente más bajo en adultos nacidos MP (Mathiasen et al., 2009; Saigal
importancia no solo para los pediatras, sino también para los médicos et al., 2016). Del lado positivo, se comunica de manera uniforme que
de adultos que los asistirán durante el resto de la vida. La asociación entre los adultos nacidos prematuros y con MBPN tienen tasas más bajas de
mayor riesgo de todas las categorías de resultados evolutivos adversos conductas de riesgo, como tabaquismo, consumo de alcohol y drogas, y
y edad gestacional decreciente continúa hasta la adolescencia y la vida comportamiento delictivo (Hack et al., 2004; Saigal et al., 2016). Sin
adulta. Las secuelas médicas de la prematuridad repercuten en la función embargo, esto puede deberse a la dificultad de socialización relacionada
respiratoria, cardiovascular y renal. La probabilidad de presentar PC, con las tasas más altas de comportamientos de internalización.
ceguera y sordera es mucho mayor en los recién nacidos de MBPN La calidad de vida relacionada con la salud es una consideración
supervivientes que en los controles a término comparables (Doyle et al., importante, dado que nuestros pacientes más frágiles y vulnerables llegan a
2010). Como estas suelen ser deficiencias permanentes, las tasas en la la vida adulta (Dinesen y Greisen, 2001; Saigal et al., 2006). Solo algunos
vida adulta reflejan estrechamente las tasas en la edad escolar. Además, estudios pequeños han evaluado la repercusión a largo plazo de la prema-
con el tiempo, los supervivientes de MBPN tienen tasas más altas de turidad en la calidad de vida informada por el propio sujeto. Saigal et al.
otras deficiencias visuales, como vicios de refracción y desprendimiento valoraron la calidad de vida relacionada con la salud en una población
de retina tardío (Saigal et al., 2007). En la vida adulta, los supervivientes de neonatos de MBPN nacidos en 1977-1982 cuando los participantes
prematuros tienen mayor probabilidad de recibir pensiones por invalidez tenían 24 años de edad. Pese a más limitaciones funcionales (cognición,
que los controles nacidos a término (Doyle et al., 2010). sensibilidad, movilidad y cuidado de sí mismo), los participantes de
Es menos probable que los adolescentes nacidos MP, con MBPN MBPN no comunicaron una calidad de vida relacionada con la salud
y moderadamente prematuros completen los estudios secundarios en significativamente diferente de la de los controles nacidos a término. Más
comparación con los adolescentes nacidos a término (Hack et al., 2002; adelante, en la cuarta década de la vida, la misma cohorte indicó auto­
Lindström et al., 2007; Mathiasen et al., 2009). Más aún, los adultos estima más baja junto con medidas más bajas de múltiples variables fun­
nacidos con MBPN o MP tienen menor probabilidad de seguir sus estu- cionales y relacionadas con la salud (Saigal et al., 2016). De modo similar,
dios más allá de la escuela secundaria (Hack et al., 2002; Cooke, 2004; en una pequeña cohorte danesa de adultos jóvenes, la calidad de vida objeti­
Mathiasen et al., 2009). En la vida adulta, las cohortes nacidas prema- va (basada en estándares de la sociedad) fue más baja en los nacidos MP o
turas tienen peor rendimiento en pruebas de rendimiento académico con un problema de salud crónico (Dinesen y Greisen, 2001). Sin embar-
que los controles nacidos a término (Hack et al., 2002). Pocos estudios go, la calidad de vida subjetiva (basada en las preferencias y experiencias
han evaluado de manera rigurosa la función cognitiva en supervivientes de vida individuales) no fue significativamente diferente.
prematuros. Por lo general, se informa que el CI es alrededor de 0,5 Así, la repercusión de la prematuridad sobre los dominios médico,
DE inferior al de los controles a término, pero las diferencias dependen de desarrollo, psicológico y funcional persiste durante toda la vida.
de la población estudiada. Los factores predictivos de CI en el adoles- Es crucial destacar que la mayoría de los recién nacidos EP (22-25
cente y el adulto joven comprenden el nivel de educación de la madre, semanas de gestación) solo ahora sobreviven hasta la vida adulta. Aún
el peso de nacimiento y la edad gestacional. Por ejemplo, dos estudios se debe describir por completo la repercusión adolescente y adulta de
han comunicado un CI de 87 frente a 92 en adolescentes con un peso al la supervivencia en los límites de la viabilidad en la era actual de la
nacimiento de menos de 1.500 g y de 94 frente a 108 en adolescentes con medicina neonatal.
un peso de nacimiento de menos de 1.000 g, cuando se comparan
con controles a término (Hack et al., 2002; Lefebvre et al., 2005). Factores de riesgo de resultados evolutivos
Incluso en adultos sin deficiencia neurosensorial ni cognitiva, los
trastornos de aprendizaje o de función ejecutiva pueden interferir en el adversos en recién nacidos prematuros
logro educacional u ocupacional. Las deficiencias de función ejecutiva
consisten, principalmente, en problemas de inhibición de la respuesta Como se ha comentado anteriormente, los recién nacidos prematuros
y flexibilidad mental (Nosarti et al., 2007). Como se mencionó antes, como grupo presentan riesgo de múltiples resultados evolutivos adversos
los TEA y TDAH son más frecuentes en niños MP o de MBPN, e durante toda la infancia y hasta la vida adulta. Estos riesgos son modi-
incluso en niños prematuros moderados/tardíos; es probable que estos ficados por las características de los pacientes, la morbilidad y las com-
trastornos persistan hasta la vida adulta (Moster et al., 2008; Lindström plicaciones que sobrevienen durante el período neonatal. Las patologías
et al., 2009). Los informes de mayores tasas de esquizofrenia, ansiedad neonatales importantes que inciden directamente en la evolución de
y depresión en adultos nacidos prematuros son incongruentes y con- recién nacidos prematuros son lesión encefálica, displasia broncopulmo-
nar (DBP), infección, enterocolitis necrosante (ECN), y crecimiento y
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tradictorios (Hack et al., 2004; Moster et al., 2008). En un estudio


noruego de gran envergadura, el RR de TEA fue 9,7 veces más alto en nutrición deficientes. Finalizamos este apartado considerando la reper-
adultos nacidos antes de las 28 semanas de gestación que en los nacidos cusión de los factores socioeconómicos sobre los resultados evolutivos.
a término (Moster et al., 2008). Más aún, el RR de sufrir trastornos del
desarrollo psicológico, conductuales o emocionales que justifiquen Lesión encefálica
reclamar una pensión por discapacidad fue 10,5 veces más alto en los
nacidos antes de las 28 semanas de gestación. Ecografía craneal
Globalmente, los adultos nacidos a las 23-27 semanas de gestación Desde fines de la década de los setenta se ha recurrido a la ecografía
tienen una probabilidad 7,5 veces mayor (IC al 95%, 5,5-10) de pade- craneal (EC) para estudiar por la imagen lesiones encefálicas de recién
cer una discapacidad médica que afecte a su capacidad de trabajar, en nacidos (Pape et al., 1979; Slovis et al., 1981). Gracias a la creación de
comparación con los adultos nacidos a término (Moster et al., 2008). un sistema de clasificación estandarizado para la hemorragia intracra-
Entre los que no tienen una discapacidad médica, los adultos nacidos neal (HIC) (Papile et al., 1978), la EC pasó a ser con rapidez y continúa
MP tienen un nivel educacional significativamente más bajo, menores siendo el estudio por imagen neurológico de referencia para recién
ingresos, y es menos probable que se casen y sean padres (Moster nacidos prematuros (Ment et al., 2002). Si bien muchos aún parecen
et al., 2008; Saigal et al., 2016). El RR de tener por lo menos un basarse firmemente solo en la presencia de HIC de grado 3, hemorragia

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intraparenquimatosa (HIP) o leucomalacia periventricular (LPV) quís- edad equivalente a término para refinar los hallazgos específicos de la
tica para asesorar a las familias respecto de los resultados evolutivos EC, han dado como resultado un VPP y un valor predictivo negativo
del neurodesarrollo de sus recién nacidos prematuros, la complejidad del 96 y el 69%, respectivamente, para PC a los 2 años en recién nacidos
de la interpretación de los hallazgos de la EC y las limitaciones de la prematuros (de Vries et al., 2011).
predicción de resultados evolutivos con cualquier estudio por imagen La EC es una modalidad dependiente del operador, los procedi-
neurológico u otros hallazgos individuales deben dar motivo a los mientos de estudio por la imagen y las vistas difieren entre instituciones
médicos para la prudencia y la consideración cuidadosa. y estudios, y no hay un abordaje uniforme de protocolos de estudios
Prácticamente todos los estudios importantes de resultados evo- por la imagen seriados. Si bien la fiabilidad y la exactitud entre los
lutivos del neurodesarrollo precoz en recién nacidos prematuros y calificadores son de muy buenas a excelentes en caso de HIC grave, la
de PEBN han confirmado una firme asociación entre anormalidades coincidencia solo es regular o mala en el caso de hallazgos más sutiles y
importantes de la EC y resultado evolutivo adverso neurológico y LPV sola (Hintz et al., 2007). Se reconoce cada vez más que la hemo-
del desarrollo. Las definiciones de anormalidades de la EC, así como rragia cerebelosa, un hallazgo que puede pasar inadvertido sin vistas
de resultados evolutivos específicos, difieren entre los estudios; sin de EC adecuadas, se asocia con discapacidades del neurodesarrollo en
embargo, la mayoría consideran que la HIP, la ventriculomegalia (VM) niños nacidos prematuros (Limperopoulos et al., 2007, 2014). A veces
o los cambios quísticos, independientemente de la lateralidad o la no se detectan lesiones transitorias, como lesiones ecodensas periventri-
extensión de los hallazgos, son anormalidades graves. En algunos se culares o pequeñas lesiones quísticas colapsantes (Pierrat et al., 2001).
incluye la persistencia de ecodensidad o «flaring» periventricular (de La EC permite visualizar HIP aisladas y, por supuesto, grandes HIV;
Vries et al., 2004, 2011; Ancel et al., 2006). El diagnóstico comunicado sin embargo, no todas las hemorragias «graves» se pueden considerar
en estudios se suele basar en los resultados de una única EC, ya sea equivalentes en términos de asociación con resultados evolutivos del
el «peor» estudio por la imagen o el «final», pero en algunas cohortes neurodesarrollo precoz. Las características de la hemorragia, como
prospectivas se consideran estudios por la imagen seriados. la lateralidad, la desviación de la línea media y la extensión (Bassan
Muchos estudios se han centrado en explorar la asociación de los et al., 2007; Davis et al., 2014), así como la presencia o ausencia de
principales hallazgos de la EC con PC. El estudio ELGAN controló a otros factores clínicos adversos (Merhar et al., 2012), inciden en la
recién nacidos de menos de 28 semanas de gestación de 14 instituciones predicción de resultados evolutivos del neurodesarrollo.
de cinco estados de EE. UU. de 2002 a 2004 (Kuban et al., 2009;
O’Shea et al., 2009). Se realizaron tres EC durante la hospitalización Resonancia magnética
y por múltiples radiólogos. A los 2 años, se realizaron la BSID-II y En los últimos años se ha usado de manera más extensa la RM ence-
exploraciones neurológicas estandarizadas. Los investigadores hallaron fálica en recién nacidos prematuros, tanto para la investigación como
firmes asociaciones independientes entre los hallazgos de la EC y la PC. para las indicaciones clínicas. La RM proporciona un cuadro más
Alrededor de la mitad de los niños con imágenes ecotransparentes o completo y detallado del encéfalo, con mejor delineación de lesiones
VM en la EC presentaban PC, y la aparición tardía de VM, imágenes de estructuras profundas y corticales. Quizá sea aún más importante
ecotransparentes bilaterales y LPV o HIP fueron factores predictivos que la RM permite una mejor detección de la lesión de la sustancia
importantes de cuadriparesia. Sin embargo, casi la mitad de los niños blanca (LSB), que es frecuente en recién nacidos prematuros de edad
con PC a los 2 años tenían EC totalmente normal, y el VPP de la VM corregida a término. La identificación de LSB es de crucial importancia
o las imágenes ecotransparentes para PC moderada o grave fue escaso. para conocer la relación estructura-función del encéfalo en desarrollo
La hemorragia intraventricular (HIV) aislada no fue un firme factor del prematuro, las influencias sobre resultados evolutivos neuromotores
predictivo de PC. y cognitivos ulteriores, y para el desarrollo de futuras estrategias neuro-
Es más, los hallazgos de la EC sola son escasamente predictivos de protectoras (Volpe et al., 2011). La LSB sutil en la RM se asocia con
los resultados evolutivos del desarrollo precoces o de resultados evolu- reducción de los volúmenes encefálico total y de la sustancia gris, y
tivos cognitivos y de aprendizaje en etapas más tardías de la infancia menor volumen de los ganglios basales y el tálamo, lo que se asocia, a
(Hack et al., 2000; Wood et al., 2005), y el 30-40% de los que tienen su vez, con deficiencias del desarrollo en la infancia entre recién nacidos
EC «normal» tienen problemas de neurodesarrollo a los 18-30 meses prematuros. Estos hallazgos y otros aportan evidencia de que la LSB
(Laptook et al., 2005). El grupo del estudio ELGAN mostró que la HIV en el prematuro se asocia con alteraciones madurativas encefálicas, lo
se asociaba con mayor riesgo de deficiencia motora o del desarrollo a los que sugiere una relación global con alteración de la conectividad neural
2 años solo cuando se acompañaba o era seguida de lesiones de la sus- (Dean et al., 2014). Por consiguiente, las investigaciones clínicas se han
tancia blanca, lo que destaca el limitado valor predictivo de los hallazgos centrado en si la RM puede aportar mayor información pronóstica.
de la EC precoz y de la HIV sola. En estudios de seguimiento a plazo Los primeros estudios que intentaron comparar las capacidades
más largo de la cohorte del EPIPAGE nacida a las 24-28 6/7 semanas predictivas de la RM equivalente a término con la EC se vieron limita-
de gestación, las anormalidades importantes de la EC permanecieron dos por el tamaño del estudio y los diferentes abordajes respecto de la
firmemente asociadas con PC (O’Shea et al., 2012). Sin embargo, cronología de los estudios por la imagen (Roelants-van Rijn et al., 2001;
alrededor del 40% de los que presentaban anormalidades importantes Mirmiran et al., 2004; Sie et al., 2005). Con posterioridad, se elaboraron
de la EC neonatal no tuvieron dificultades cognitivas ni de aprendizaje abordajes de puntuación de la LSB, y se publicaron estudios de cohortes
significativas a los 8 años, mientras que el 30-40% de los que no tenían más grandes, de los cuales uno de los primeros fue un proyecto multi-
anormalidades de la EC neonatal presentaron dificultades de moderadas céntrico de Australia y Nueva Zelanda que comparó EC seriadas con
a graves (Beaino et al., 2010). Esto subraya la necesidad de vigilancia a hallazgos de RM cercana al término y su asociación con los resultados
largo plazo durante la infancia de todos los nacidos EP. No obstante, en evolutivos a los 2 años de 167 recién nacidos de menos de 30 semanas
manos habilidosas, con atención técnica meticulosa y EC seriadas, la EC de EGE (Woodward et al., 2006). Este estudio demostró que la LSB
permite observar mucho más allá de la HIC. En un solo centro, de Vries moderada-grave en la RM cercana al término se asociaba de manera
et al. (2004) comunicaron una sensibilidad del 76% y una especificidad significativa con retraso neuromotor y PC, independientemente de
del 95% de las anormalidades de la EC para la PC a los 2 años en los hallazgos de la EC y otros factores de riesgo. La gravedad creciente
pacientes nacidos con menos de 32 semanas de EGE. Es importante de la LSB también se relacionó con puntuaciones más bajas del MDI de
mencionar que, entre los que tenían anormalidades importantes de la la BSID-II, pero no se detectó una asociación independiente de LSB
EC que presentaron PC, alrededor del 30% se detectaron solo después moderada-grave con retraso cognitivo grave. Sin embargo, la EC solo
de 28 días. Asimismo, las anormalidades importantes de la EC no mos- se valoró con respecto a los hallazgos precoces, como grado de HIC
traron una asociación firme con retraso cognitivo a los 2 años. Hallazgos y cambios quísticos periventriculares, y una proporción sustancial
más recientes de este grupo, que usó resonancia magnética (RM) a la de recién nacidos con LSB moderada a grave por RM no tuvieron

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CAPÍTULO 66 Valoración del riesgo y resultados del neurodesarrollo 983

resultados evolutivos adversos a los 2 años. El estudio Neuroimaging dos con menos de 28 semanas de gestación, y las tasas pueden estar
and Neurodevelopmental Outcomes del NICHD fue un estudio pros- aumentando con el tiempo (Stoll et al., 2015). La DBP se asocia con
pectivo de EC precoz y tardía, y RM cercana al término, que incluyó a resultados evolutivos adversos respiratorios, de desarrollo, educacionales
480 recién nacidos de menos de 28 semanas de gestación, con valoración y económicos de salud. Los recién nacidos EP con DBP tienen más tos,
de los resultados evolutivos, incluida BSID-III, a los 18-22 meses (Hintz mayor uso de medicaciones respiratorias, hospitalizaciones y repercu-
et al., 2015a). En modelos multivariados, tanto los hallazgos de la EC sión de la enfermedad respiratoria sobre la familia a los 18-22 meses de
tardía representativos de LSB como los hallazgos de la RM de lesión edad corregida, en comparación con los que no tienen DBP (Stevens
cerebelosa significativa continuaron asociados de manera independiente et al., 2014). Un metaanálisis de las pruebas funcionales pulmonares
con resultados evolutivos adversos del neurodesarrollo. En modelos en niños nacidos prematuros con DBP, nacidos prematuros sin DBP
que no incluyeron EC tardía, los hallazgos de la RM de LSB mode- y niños nacidos a término demostró una disminución significativa
rada a grave y lesiones cerebelosas significativas se asociaron en forma del porcentaje de volumen espiratorio forzado en 1 s, con una dis-
independiente con resultados evolutivos adversos. Los hallazgos de la minución adicional en los que tienen DBP (Kotecha et al., 2013).
EC precoz no se asociaron con resultados evolutivos adversos cuando Varios investigadores han comunicado malos resultados evolutivos del
se tomó en cuenta cualquier estudio por la imagen neurológico tardío. neurodesarrollo en recién nacidos con DBP, comparados con recién
Estos resultados demuestran la necesidad de conocer la evolución de nacidos prematuros sin DBP (Lifschitz et al., 1987; Portnoy et al., 
la lesión encefálica a lo largo del tiempo en lugar de basarse solo en los 1988; Grégoire et al., 1998; Majnemer et al., 2000; Roberts et al., 2009;
hallazgos precoces. De modo similar, en un estudio prospectivo de EC Lodha et al., 2014; Schmidt et al., 2015). La DBP es un factor pre-
seriada y RM cercana al término en neonatos de menos de 27 semanas dictivo independiente uniforme de resultados evolutivos adversos
de gestación en Suecia, se mostraron las asociaciones entre hallazgos de del desarrollo a los 2 y 5 años (Schmidt et al., 2012). La razón de
la RM y resultados evolutivos a los 30 meses, pero los investigadores posibilidades ajustada para muerte o discapacidad a los 5 años es de
determinaron que cualquier anormalidad sustancial de la RM fue detec- 2,3 veces (IC al 95%, 1,8-3) más alta en los niños nacidos prematuros
tada por la EC tardía practicada el mismo día (Skiöld et al., 2013). En con DBP que en los sin DBP (Schmidt et al., 2015). Los informes de
varios estudios se ha observado que la alta intensidad de señal difusa en resultados evolutivos cognitivos a los 8 años sugieren que los niños
la RM cercana al término no se asocia con resultados evolutivos adversos nacidos prematuros con DBP tienen CI más bajos que los sin DBP
en la primera infancia (Jeon et al., 2012; Skiöld et al., 2012). (Robertson et al., 1992; Hughes et al., 1999).
En resumen, pese a lo que parece ser una experiencia sustancial Múltiples estudios aleatorizados de gran envergadura han inten-
con EC y RM encefálica convencional en recién nacidos prematuros, tado reducir las tasas de DBP en neonatos EP aplicando interven-
persisten controversias e interrogantes respecto de qué estudios realizar, ciones o fármacos en la sala de partos o durante la hospitalización
cuándo realizarlos y en qué circunstancias, y respecto de los valores neonatal. Si bien algunas intervenciones o medicaciones disminuyen
relativos para el pronóstico. Estas no son preguntas simples, dado de manera exitosa las tasas de DBP, pocas han demostrado mejores
que el «valor» de la información adicional puede variar según las circuns- resultados evolutivos del desarrollo. La vitamina A reduce la DBP o
tancias clínicas, y en función de los padres y médicos concretos (Janvier y la muerte en recién nacidos de PEBN (RR 0,89), pero no mejora los
Barrington, 2012). La lesión cerebelosa observada por RM, pero no por resultados evolutivos del desarrollo a los 18-22 meses (Ambalavanan
EC, se puede asociar con riesgo más alto de alteraciones del neurodesa- et al., 2005). Los corticoesteroides posnatales reducen la DBP, pero
rrollo (Tam et al., 2011; Hintz et al., 2015a), aunque continúa sin ser aumentan de manera significativa el riesgo de PC si se administran en
clara la importancia de las lesiones punteadas (Steggerda et al., 2013). los primeros 4 días de vida. El uso de corticoesteroides después de los
Otros estudios han mostrado que la RM puede aportar información 7 días de vida reduce la DBP, sin aumentar el riesgo de PC (Halliday
adicional para predecir resultados evolutivos neuromotores (de Vries et al., 2003a, 2003b). La cafeína reduce la DBP a las 36 semanas, la
et al., 2011), complementaria de hallazgos específicos como las eco- PC a los 2 años y la gravedad de la deficiencia motora a los 5 años
densidades periventriculares por EC (Sie et al., 2005) o la exploración (Schmidt et al., 2006, 2007, 2012). En múltiples ensayos aleatorizados,
neurológica (Spittle et al., 2009; Skiöld et al., 2013). La sepsis neonatal el tratamiento con agente tensioactivo por síndrome de dificultad
y la ECN se han vinculado con tasas progresivas o más altas de LSB en respiratoria reduce tanto los síndromes de filtración de aire como la
la RM, y los resultados evolutivos adversos a los 2 años asociados con mortalidad (Bahadue y Soll, 2012). Puede reducir la discapacidad leve
estos trastornos (v. más adelante) pueden ser mediados por LSB (Glass al año, pero no disminuye la discapacidad moderada o grave al año
et al., 2008; Shah et al., 2008). No obstante, las directrices publicadas ni ningún resultado evolutivo adverso a los 2 años (Sinn et al., 2002).
en 2002 no recomiendan RM cercana al término para el estudio por Por último, aunque los corticoesteroides prenatales disminuyen
imagen neurológico sistemático del recién nacido prematuro (Ment numerosas complicaciones de la prematuridad, como mortalidad y
et al., 2002), y una publicación reciente ha propuesto evitar la RM síndrome de dificultad respiratoria, no se ha esclarecido si mejoran las
encefálica convencional equivalente a término sistemática con fines de tasas de enfermedad pulmonar crónica (Roberts y Dalziel, 2006; Carlo
cribado, porque hay «insuficiente evidencia de que la práctica mejore et al., 2011). En los recién nacidos más inmaduros (≤ 25 semanas de
los resultados evolutivos a largo plazo» (Ho et al., 2015). gestación), los esteroides prenatales pueden aumentar las tasas de DBP,
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Futuros estudios deben centrarse más en identificar grupos de quizá por inducir mayor supervivencia de recién nacidos de alto riesgo
alto riesgo específicos de recién nacidos prematuros en los que la RM (Carlo et al., 2011). Aun así, el tratamiento prenatal con esteroides se
mejoraría definidamente la predicción de resultados evolutivos del asocia con una reducción de la discapacidad o deficiencia del desarrollo
neurodesarrollo y permitiría estratificar el riesgo para estudios neu- en los que sobreviven hasta la infancia (Roberts y Dalziel, 2006; Carlo
roprotectores o intervencionistas. Las investigaciones con técnicas et al., 2011). Esto comprende menores tasas de deficiencia cognitiva y
avanzadas de RM, como imágenes con tensor de difusión, RM de PC en recién nacidos de menos de 25 semanas de gestación expuestos
conectividad funcional, morfometría de superficie y métodos volumé- a esteroides prenatales (Carlo et al., 2011).
tricos, son muy prometedoras para ayudar a explorar estas cuestiones Numerosos ensayos neonatales han evaluado diversos métodos de
(Anderson et al., 2015). apoyo respiratorio en la sala de partos y durante la hospitalización. La
extubación precoz o la dependencia completa de soporte no invasivo,
Displasia broncopulmonar como presión positiva continua en la vía respiratoria (CPAP), se ha
convertido en el tratamiento de referencia (Pfister y Soll, 2012). Sin
La DBP, definida en general como dependencia de oxígeno a las 36 embargo, ninguna de las intervenciones respiratorias ha conducido a
semanas de edad posmenstrual, es la morbilidad más frecuente de la mejorías significativas de los resultados evolutivos del desarrollo (Vau-
prematuridad. La DBP afecta casi a la mitad de los neonatos naci- cher et al., 2012).

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984 PA RT E XI I Sistema nervioso

Retinopatía de la prematuridad Se necesita más investigación a fin de identificar nuevas estrategias


para la prevención de la ROP, así como tratamientos que sean seguros
En EE. UU., la retinopatía de la prematuridad (ROP, retinopathy of y conduzcan a mejores resultados evolutivos visuales sin aumentar
prematurity) afecta a alrededor del 60% de los neonatos nacidos con resultados evolutivos adversos del desarrollo.
menos de 28 semanas de gestación, y la enfermedad en estadio 3 o más
alto afecta a alrededor del 15% de dichos neonatos (Stoll et al., 2015).
La incidencia tanto de ROP como de ROP de alto grado que posi-
Infección
blemente necesita tratamiento aumenta de manera considerable con Los recién nacidos prematuros tienen alto riesgo de infecciones
la disminución de la edad gestacional (Stoll et al., 2015). Gracias a los adquiridas tanto en el período perinatal como en el período posnatal.
avances de la crioterapia, el tratamiento láser y el tratamiento farmaco- Debido en gran parte a los esfuerzos para reducir la sepsis de inicio
lógico contra el factor de crecimiento del endotelio vascular (VEGF), tardío yatrógena, las tasas de infección neonatal han descendido en
ahora es rara la ceguera causada por ROP en el mundo desarrollado. No los últimos años. No obstante, alrededor de un cuarto de los recién
obstante, globalmente, hasta 20.000 niños por año quedan ciegos por nacidos EP (nacidos con ≤ 28 semanas de gestación) tienen sepsis
ROP (Blencowe et al., 2013). Los niños nacidos prematuramente que con cultivos positivos mientras permanecen en la UCIN (Schlapbach
son tratados por ROP presentan un riesgo claro de morbilidad visual a et al., 2011; Stoll et al., 2015). Como en otras patologías neonatales,
largo plazo. Sin embargo, los recién nacidos con ROP que no requiere el riesgo de sepsis de inicio tardía aumenta de manera significativa a
tratamiento ni provoca ceguera también presentan riesgo de problemas medida que disminuye la edad gestacional. La infección se asocia con
visuales a largo plazo. A los 6,5 años de seguimiento de la cohorte sueca escaso crecimiento, y en particular escaso crecimiento cefálico, que es
EXPRESS de neonatos nacidos con menos de 27 semanas de gestación, un factor predictivo independiente de resultado evolutivo adverso en
el 38% tenían por lo menos alguna anormalidad oftalmológica, como recién nacidos prematuros (v. más adelante) (Ehrenkranz et al., 2006).
ceguera, estrabismo o vicios de refracción (Hellgren et al., 2016). Los Más aún, la infección se asocia con mayor riesgo de bajo desempeño
problemas visuales mostraron una firme asociación con tratamiento de cognitivo, PC y deficiencia visual a los 18-22 meses (Stoll et al., 2004;
la ROP y edad gestacional más baja. Schlapbach et al., 2011). Tras el ajuste por múltiples factores predic-
Además de la discapacidad visual, la ROP grave se asocia con impor- tivos de PC, los niños de 2 años con antecedentes de prematuridad
tantes discapacidades no visuales. A los 5 años, la ROP en estadio 4 o 5 extrema y sepsis confirmada tienen más del triple de posibilidades de
o la ROP tratada es un factor predictivo independiente de mal resultado PC (Schlapbach et al., 2011). A los 5 años de edad, la sepsis tanto de
evolutivo del neurodesarrollo (Schmidt et al., 2015). Este efecto es de inicio precoz como de inicio tardío en recién nacidos MP se asocia con
magnitud similar y se suma a los riesgos asociados con lesión encefálica aumento significativo de las posibilidades de PC, pero a veces no se
o DBP graves (v. anteriormente). Las posibilidades de discapacidad asocia con deficiencia cognitiva (Mitha et al., 2013).
motora y cognitiva son del cuádruple en estos recién nacidos que en Los recién nacidos con sepsis o meningitis por Candida y los recién
los que no tienen ROP grave (Schmidt et al., 2014). Además, es más nacidos con meningitis bacteriana presentan el aumento más signifi-
probable que presenten deficiencia en múltiples dominios. cativo del riesgo de malos resultados evolutivos del desarrollo en la
La principal estrategia utilizada por los neonatólogos para reducir primera infancia (Bassler et al., 2009; Adams-Chapman et al., 2013).
la ROP ha consistido en restringir el suplemento de oxígeno. En un Sin embargo, en última instancia, el riesgo global de deterioro del neu-
metaanálisis de cinco ensayos sobre dianas de saturación de oxígeno en rodesarrollo (deficiencia cognitiva, PC o deficiencia visual o auditiva)
recién nacidos EP, el riesgo de ROP fue algo menor (cociente de riesgos asociado con infección neonatal es ligeramente menos significativo que
0,72; IC al 95% 0,5-1,04) con dianas de saturación de oxígeno más los riesgos asociados con HIV, ROP o DBP graves (Bassler et al., 2009;
bajas (85-89%) que con saturaciones de oxígeno más altas (91-95%) Schlapbach et al., 2011).
(Manja et al., 2015). Contrarrestando este posible beneficio, la estra-
tegia de diana de saturación baja también se asoció con un aumento Enterocolitis necrosante
del riesgo de muerte antes del alta (cociente de riesgos 1,18; IC al 95%
1,03-1,06), aunque no hubo una diferencia significativa de mortalidad Se diagnostica ECN en alrededor del 7-13% de los neonatos nacidos
a los 18-24 meses. Por consiguiente, la planificación cuidadosa de las con menos de 28 semanas (Stoll et al., 2015). Los recién nacidos con
saturaciones de oxígeno sola es insuficiente para eliminar el riesgo de ECN tienen mayor riesgo de muerte, retraso cognitivo, PC, deficien-
ROP en recién nacidos EP, y es improbable que unas bajas dianas de cia visual o auditiva grave, y de resultado evolutivo compuesto de
saturación de oxígeno eviten un número suficiente de casos de ROP deficiencia del desarrollo a los 18 meses (Schulzke et al., 2007; Bassler
como para justificar los riesgos. et al., 2009). En un estudio observacional de gran envergadura, casi
Asimismo, el efecto del propio tratamiento de la ROP puede tener todo este aumento del riesgo de resultado evolutivo adverso se asocia
implicaciones importantes para los resultados evolutivos visuales y de con ECN que exige intervención quirúrgica (Hintz et al., 2005).
desarrollo. El tratamiento láser es el tratamiento de referencia actual, La EC quirúrgica y la perforación intestinal espontánea se asocian
pero cada vez se utiliza más la inyección de agentes anti-VEGF para con más del doble de posibilidades de DND entre los supervivientes
tratar la ROP aguda. En un pequeño ensayo aleatorizado, un agente (Wadhawan et al., 2014). Sin embargo, al igual que la infección, el
anti-VEGF pareció ser superior al tratamiento láser en la ROP en zona 1 riesgo global de resultados evolutivos adversos asociados con ECN es
(Mintz-Hittner et al., 2011). Sin embargo, dada la preocupación acerca menos significativo que los riesgos asociados con HIV, ROP o DBP
de la absorción sistémica del fármaco, cambios proliferativos tardíos graves (Bassler et al., 2009).
que causan desprendimiento de retina y solo diferencias mínimas en El tratamiento prenatal con corticoesteroides induce una reducción
los resultados evolutivos de la refracción a los 2,5 años en el ensayo de significativa de ECN (Roberts y Dalziel, 2006; Carlo et al., 2011). Pese
Mintz-Hittner et al. (2011), los neonatólogos y los oftalmólogos con- a esta reducción, como ya se mencionó, no se conoce con certeza la
tinúan siendo aprensivos respecto de estos fármacos (Darlow, 2015). repercusión de los esteroides prenatales sobre los resultados evolutivos
Una pequeña serie de casos de 2016 de resultados evolutivos a los del desarrollo. La lactancia materna exclusiva reduce el riesgo de ECN
2 años en recién nacidos tratados con láser, fármaco anti-VEGF o y mejora los resultados evolutivos del desarrollo, aunque no se ha
ambos aumentó esta inquietud (Lien et al., 2016). Los recién nacidos esclarecido si estos dos beneficios tienen una asociación directa entre
que recibieron ambos tratamientos tuvieron tasas significativamente sí. Varias intervenciones adicionales parecen prometedoras para reducir
más altas de deficiencia mental y psicomotora en la BSID-II a los 2 aún más las tasas de ECN, como lactoferrina, probióticos y uso de
años que los recién nacidos tratados con láser. No se detectó ninguna leche donada cuando no se dispone de leche materna. Sin embargo,
diferencia entre los recién nacidos tratados con láser y anti-VEGF. por ahora no hay datos suficientes acerca de la eficacia a corto plazo

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CAPÍTULO 66 Valoración del riesgo y resultados del neurodesarrollo 985

ni de la repercusión a largo plazo sobre los resultados evolutivos del


desarrollo para adoptar ninguno de estos tratamientos como norma
asistencial (Sari et al., 2012; Akar, 2016).

Crecimiento y nutrición
Cada vez se reconoce más que centrarse en el crecimiento y la nutrición
tanto en la UCIN como después del alta es esencial para optimizar los
resultados evolutivos del desarrollo a más largo plazo. En un estudio de
cohortes de gran tamaño, se dividió a los neonatos nacidos con 501-
1.000 g en cuartiles de velocidad de crecimiento intrahospitalaria (Ehrenk-
ranz et al., 2006). El cuartil de velocidad de crecimiento intrahospitalaria
creciente se asoció con riesgo decreciente de PC y resultados evolutivos
del desarrollo más de 2 DE por debajo de la media a los 18-22 meses de
edad corregida, aun después del ajuste por otros factores predictivos
de escaso crecimiento y desarrollo. Los recién nacidos prematuros con
retraso de crecimiento en los primeros 8 meses posteriores al alta tuvieron
deficientes resultados evolutivos del desarrollo en comparación con los que
mostraron crecimiento compensatorio o que mantuvieron una trayectoria
de crecimiento adecuada (Hack et al., 1982). En particular, el escaso cre- • Figura 66.2  Probabilidad de deterioro del neurodesarrollo (DND) de
cimiento cefálico es altamente predictivo de resultados evolutivos adversos los participantes del Caffeine for Apnea of Prematurity Trial (n = 1.514)
del desarrollo hasta al menos los 8-9 años de edad (Hack et al., 1991). a los 5 años de edad corregida, basada en el número de patologías
Dada la firme asociación entre nutrición y crecimiento durante el neonatales. Estas fueron lesión encefálica, displasia broncopulmonar y
primer año de vida y resultados evolutivos del desarrollo, se han evaluado retinopatía de la prematuridad graves. Las barras de error representan
múltiples estrategias para mejorar el crecimiento. En la actualidad, la intervalos de confianza al 95%, la línea continua verde ascendente
nutrición intensiva precoz en la UCIN comprende administración pre- indica predicciones basadas en un modelo ajustado de recuento de
coz de nutrición parenteral, nutrición enteral precoz con leche materna y patologías, y la línea discontinua negra horizontal indica la probabilidad
enriquecimiento de alimentos lácteos enterales. Si bien muchas de estas global de DND en toda la cohorte. (Tomado de Schmidt B, Roberts RS,
estrategias mejoran el crecimiento, hasta la fecha existe poca evidencia de Davis PG, et al. Prediction of late death or disability at age 5 years using a
que estas intervenciones mejoren los resultados evolutivos del desarrollo count of 3 neonatal morbidities in very low birth weight infants. J Pediatr.
(Poindexter et al., 2006; Brown et al., 2016). 2015;167:982–986. Con autorización de Elsevier.)

entre sí para aumentar en forma adicional el riesgo. Los factores de


Nivel socioeconómico riesgo más significativos de malos resultados evolutivos del desarrollo
Nunca se insistirá demasiado en la importancia crucial de los factores por lo menos hasta los 5 años de edad son HIV, ROP y DBP graves
socioeconómicos en el desarrollo a largo plazo de los recién nacidos (fig. 66.2) (Schmidt et al., 2015). Cada una de estas patologías se
de alto riesgo (Hack et al., 1992). Los factores socioeconómicos que asocia con un aumento aditivo lineal del riesgo de resultado evolutivo
influyen en los resultados cognitivos son la educación de los padres, adverso del desarrollo. La infección neonatal –en particular micosis
tener una familia biparental, vecindario, y antecedentes sociales y y meningitis– y la ECN –en particular ECN quirúrgica– se suman
raciales (Aylward, 2005; Manley et al., 2015). Más aún, estos factores a la predicción de mal resultado evolutivo. El crecimiento deficiente
influyen en la probabilidad de que el nivel cognitivo de un niño mejore es un factor predictivo independiente de resultado evolutivo adverso.
durante los primeros años de vida (Manley et al., 2015). De modo Otros factores que aumentan el riesgo de mal resultado evolutivo son
similar, los factores socioeconómicos adversos, como madre más joven la ligadura quirúrgica del conducto arterioso persistente, la anestesia
y escaso bienestar materno, se asocian firmemente con mayores pro- general, convulsiones, la hemorragia pulmonar grave, ser pequeño para
blemas conductuales a los 5 años (Delobel-Ayoub et al., 2009). la edad gestacional y las anomalías congénitas. Por último, el nivel
A medida que los niños de alto riesgo se hacen mayores, los factores socioeconómico de la familia es cada vez más importante a medida
perinatales tienen cada vez menos influencia en el resultado evolutivo, que los niños crecen. La valoración del número y la gravedad de los
mientras que la educación parental continúa siendo muy importante factores de riesgo neonatales ayudará a asesorar a las familias acerca
(Linsell et al., 2015). Es más probable que los niños mayores con limita- de los probables resultados evolutivos del desarrollo y a determinar la
ciones funcionales vivan en familias de recursos limitados, tengan menor posible necesidad de servicios durante la primera infancia.
acceso a la asistencia sanitaria y estén expuestos a ambientes familiares
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menos saludables (Hogan et al., 2000). El menor acceso a la asistencia Otros recién nacidos con alto riesgo
sanitaria necesaria se suele deber al coste. Por consiguiente, se deben de resultados evolutivos adversos
considerar los factores de riesgo sociales, como escasa educación paren-
tal, familia monoparental, baja clase social y bienestar materno, al igual Aunque el foco principal del presente capítulo es la valoración del riesgo
que los factores de riesgo biológicos, al valorar el riesgo de resultados y los resultados evolutivos de recién nacidos prematuros y de bajo peso
evolutivos adversos de desarrollo y conductuales de un niño concreto. al nacer, determinados grupos de recién nacidos prematuros tardíos
y a término tienen un riesgo significativamente más alto de malos
resultados evolutivos, y son considerados a continuación.
Resumen
En resumen, múltiples acontecimientos adversos durante la evolución Encefalopatía hipóxico-isquémica
neonatal pueden repercutir en el riesgo para el desarrollo a más largo
plazo. Cada uno de estos acontecimientos se asocia con un nivel único Los recién nacidos con depresión perinatal o EHI presentan riesgo de
de riesgo y puede incidir en el desarrollo de maneras algo diferentes. malos resultados evolutivos debido a una lesión neurológica sufrida
Más aún, en algunas situaciones, estas patologías pueden interactuar cerca del momento del nacimiento. El diagnóstico de EHI se realiza por

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986 PA RT E XI I Sistema nervioso

exploración neurológica estandarizada compatible con encefalopatía, no garantiza un resultado evolutivo «normal» del desarrollo después de
antecedentes de un acontecimiento perinatal agudo, test de Apgar bajo EHI (Rollins et al., 2014). Por consiguiente, todos los hospitales que
y evidencia de acidosis en una muestra de sangre de cordón umbilical practican hipotermia terapéutica también deben ser capaces de ofrecer
o del recién nacido obtenida poco después del parto. control longitudinal y asistencia del neurodesarrollo (Papile et al., 2014).
Se ha incorporado a más de 1.000 recién nacidos con EHI moderada
o grave en ensayos terapéuticos de hipotermia terapéutica o «enfriamien-
to» por EHI. Estos ensayos han demostrado que el enfriamiento reduce Cardiopatía congénita
de manera significativa la mortalidad (RR, 0,75; IC al 95% 0,63-0,88) y En las últimas décadas, los avances de las técnicas quirúrgicas y el
disminuye las tasas de supervivencia con discapacidad importante a los tratamiento médico han dado por resultado tasas de supervivencia
18 meses de edad (RR, 0,68; IC al 95% 0,56-0,83) (Tagin et al., 2012). significativamente mejores del 0,6-0,9% de los recién nacidos que
Los beneficios del enfriamiento persisten por lo menos hasta la edad nacen con CC (Marino et al., 2012; Latal, 2016). Esto ha determinado
escolar. El seguimiento de dos ensayos aleatorizados de hipotermia un creciente interés por los resultados evolutivos del desarrollo y la
terapéutica por EHI revela tasas más bajas de muerte o discapacidad calidad de vida de niños y adultos jóvenes que sobrevivieron a CC.
grave, PC y discapacidad moderada o grave, además de mejores puntua- Las complicaciones extracardíacas de la CC consisten en problemas
ciones de función motora a los 6-7 años (Shankaran, 2012a; Azzopardi cognitivos, académicos, económicos y psicológicos. La prevalencia de
et al., 2014). Pese al éxito de esta intervención, alrededor de la mitad de mal resultado evolutivo aumenta con la gravedad de la lesión cardíaca
los niños con EHI moderada o grave aún mueren o presentan deficiencia (Wernovsky, 2006). Más aún, los niños que tienen anomalías genéticas
neurológica a largo plazo. Se diagnostica PC casi en el 20% y retraso o prematuridad además de CC tienen mayor riesgo de retrasos del
del desarrollo en más del 22% de los recién nacidos supervivientes desarrollo en comparación con los que no presentan estas variables de
sometidos a hipotermia terapéutica (Tagin et al., 2012). confusión (fig. 66.3).
Se han estudiado las relaciones entre varios factores clínicos y resul- En niños con CC, los problemas de motricidad gruesa suelen ser
tados evolutivos de recién nacidos con EHI. Por cierto, el grado de evidentes en las etapas precoces de la lactancia durante los dos primeros
encefalopatía basado en la valoración clínica original se correlaciona años, pero parecen mejorar con el tiempo. Las tasas de PC son bajas,
estrechamente tanto con el riesgo de mortalidad como con el resultado sobre todo en comparación con otros grupos de alto riesgo, como
evolutivo del desarrollo. Otros signos clínicos precoces predictivos recién nacidos EP o recién nacidos a término con EHI. En niños con
de mal resultado evolutivo a largo plazo son la administración de antecedentes de CC, la inteligencia es 5-10 puntos menor que los
compresiones torácicas durante más de 1 min en el momento del valores previstos, y es menor de 70 en alrededor del 10-20%. Esto se
nacimiento, inicio de la respiración más de 30 min después del parto y asocia con mayores tasas de problemas de lenguaje y aprendizaje en la
déficit de bases mayor de 16 en cualquier momento (Shah et al., 2006). edad escolar, problemas emocionales y conductuales hasta en el 40%,
Las exploraciones clínicas seriadas son más predictivas de resulta- problemas de coordinación visomotora y motora fina, y repercusión
do evolutivo que cualquier exploración individual. La mejoría de considerable sobre la función ejecutiva. A menudo, los supervivientes
la exploración clínica durante el enfriamiento o a las 72 h de vida y la de CC requieren servicios de rehabilitación, como terapia y educa-
exploración normal en el momento del alta se asocian con menores ción especial. Al igual que en los adultos que nacieron prematuros, es
tasas de muerte o discapacidad a los 18 meses (Gunn et al., 2008; probable que la persistencia de estos problemas a lo largo del tiempo
Shankaran et al., 2012b). repercuta en los logros académicos, el empleo y la calidad de vida.
Los niños sometidos a enfriamiento suelen ser monitorizados
mediante electroencefalografía (EEG) o electroencefalografía de ampli-
tud integrada (EEGa). La discontinuidad prolongada en la EEG se aso-
cia con lesión cerebral en la RM y malos resultados evolutivos del desa-
rrollo (Dunne et al., 2017). La descarga-supresión, el bajo voltaje y el
trazado plano predicen los resultados evolutivos del desarrollo después
de los 12 meses (Awal et al., 2016). Sin embargo, no se sabe con certeza
si los datos de la EEGa o la EEG representan una adición significativa
a la valoración clínica inicial basada en la gravedad de la encefalopatía
en la era de la hipotermia terapéutica (Shalak et al., 2003; Shankaran
et al., 2011). Particularmente en recién nacidos sometidos a hipotermia,
la evaluación seriada del patrón de fondo de la EEGa puede mejorar
la predicción de mal resultado evolutivo, al igual que las exploraciones
clínicas seriadas mejoran la predicción (Thoresen et al., 2010). Alrede-
dor de la mitad de los recién nacidos con EHI tienen convulsiones en
la EEG (Boylan et al., 2015). Cuando son tratados mediante enfria-
miento, los recién nacidos con EHI tienen una carga global más baja
de convulsiones, y estas son de duración más breve. La mayoría de estas
convulsiones son subclínicas. La AAP recomienda que los centros que
ofrecen hipotermia terapéutica dispongan de monitorización con EEGa
o EEG (Committee on Fetus and Newborn et al., 2014).
Los patrones y la extensión de la lesión encefálica detectados por
RM son predictivos del resultado evolutivo del desarrollo tanto a los 2
años como en edad escolar en caso de EHI (Shankaran et al., 2015).
En particular, la lesión de los ganglios basales o los tálamos es altamen-
te predictiva de mal resultado evolutivo (Bonifacio et al., 2015). La • Figura 66.3  Relación entre gravedad de la cardiopatía congénita en
interpretación de los hallazgos de la RM depende del momento del niños con síndromes o sin ellos y la gravedad del deterioro del neuro­
examen después del nacimiento, porque las secuelas de la lesión inicial desarrollo. (Modificado de Wernovsky G. Current insights regarding neurolo­
pueden evolucionar durante los primeros días a semanas de vida. Es gical and developmental abnormalities in children and young adults with
más probable que la RM sea normal en los recién nacidos tratados con complex congenital cardiac disease. Cardiol Young. 2006;16:92–104. Con
enfriamiento que en los que no, pero una RM sin hallazgos anormales autorización de Cambridge University Press.)

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CAPÍTULO 66 Valoración del riesgo y resultados del neurodesarrollo 987

En la CC, el resultado evolutivo adverso neurológico o de desarrollo y vigilancia de deficiencias neurosensoriales. Este abordaje proactivo
se asocia con varios factores que se conocen en el período neonatal y garantizará que estos recién nacidos de alto riesgo alcancen su máximo
perioperatorio. Así como la exploración clínica en la EHI es predictiva potencial mientras maduran a lo largo de la infancia y la adolescencia.
del resultado evolutivo a más largo plazo, también lo es una exploración
neurológica meticulosa del recién nacido con CC (Khalil et al., 2014). Tratamiento posterior al alta
Los problemas neuroconductuales suelen ser evidentes antes de la cirugía
paliativa de la CC. Sobrevienen convulsiones en más del 10% de los del recién nacido de alto riesgo
recién nacidos que son sometidos a cirugía de derivación y se asocian con
malos resultados evolutivos, incluida la mortalidad (Clancy et al., 2005; Planificación del alta del recién nacido
Naim et al., 2015). La duración de la estancia en cuidados intensivos es de alto riesgo
un factor de riesgo importante de resultado cognitivo adverso hasta los 8
años, probablemente porque, en esta población, es una medida sustituta La planificación adecuada del alta garantizará una transición suave al
de gravedad global de la enfermedad (Newburger et al., 2003). hogar desde el hospital tanto para el recién nacido de alto riesgo como
Los recién nacidos con CC suelen nacer con encéfalos que son para la familia. Una consulta con los padres para revisar la evolución
pequeños e inmaduros para su edad gestacional, y se considera que hospitalaria del recién nacido y los planes del alta brindará una opor-
esto causa mayor vulnerabilidad durante el período perioperatorio. En tunidad para analizar el progreso del recién nacido y los objetivos para
la RM se detecta lesión encefálica antes y después de la cirugía, que el alta, identificar factores de riesgo de problemas del desarrollo, valorar
consiste, predominantemente, en LSB. De todos modos, aún no se ha el nivel de comprensión de los padres y realizar planes claros para el
correlacionado el grado de LSB con resultados evolutivos del desarrollo alta. Al revisar los diversos factores de riesgo del recién nacido, una
en la población con CC (Latal, 2016). Una declaración de posición charla sincera, pero sensible, respecto del espectro de posibles resultados
de 2012 de la American Heart Association y la AAP estratifica a los evolutivos ayudará a poner en perspectiva el riesgo de discapacidades
niños sobre la base del riesgo de mal resultado evolutivo y recomienda del neurodesarrollo. Se debe tranquilizar a los padres siempre que sea
abordajes basados en la edad para la vigilancia, el cribado y la evaluación posible y darles esperanza.
de niños con CC (Marino et al., 2012). Dado que hoy en día las Las enseñanzas para el alta comprenden los cuidados habituales del
primeras generaciones de supervivientes de CC están alcanzando la bebé sano, el uso de cualquier equipo o medicación especial y orien-
edad adulta, se necesitan con urgencia más trabajos para describir los tación anticipada acerca de asientos para automóviles, sueño seguro y
resultados evolutivos de desarrollo, funcionales y de calidad de vida de otros temas frecuentes. Cuando los recién nacidos son dados de alta
la CC durante la vida adulta. con medicación o equipo, los padres deben demostrar administración
de la medicación y el uso del equipo seguros. Se debe designar a un
pediatra antes del alta a quien el equipo de internación debe informar
Oxigenación con membrana extracorpórea personalmente de todos los datos relevantes acerca de la evolución
La ECMO es un tratamiento que salva la vida en pacientes con insu- hospitalaria del niño y los planes posteriores al alta. La AAP ha esta-
ficiencia cardíaca o respiratoria grave que no pueden ser manejados blecido una política para el cribado y la vigilancia de problemas de
con tratamientos médicos convencionales. Casi la mitad de los pacien- desarrollo en el contexto de atención primaria (AAP, 2006). Véanse las
tes tratados con ECMO son neonatos, y alrededor de tres cuartos recomendaciones generales para los cuidadores principales que asisten
sobreviven hasta el alta (Mok et al., 2016). Tanto la supervivencia como a recién nacidos de alto riesgo después del alta en el cuadro 66.1. Ade-
el resultado evolutivo del desarrollo a más largo plazo después de la más, los recién nacidos que han presentado complicaciones durante la
ECMO dependen de la indicación original de ECMO, la evolución evolución hospitalaria pueden requerir asistencia continua de distintos
previa a la ECMO y las complicaciones durante la ECMO. Las tasas especialistas. Por último, todos los recién nacidos de alto riesgo deben
más altas de supervivencia con ECMO corresponden a recién nacidos ser evaluados en forma intermitente por una clínica de seguimiento
con síndrome de aspiración de meconio, y las más bajas, a recién integral del desarrollo y un programa de intervención precoz. Estos
nacidos con hernia diafragmática congénita. La edad gestacional y servicios son una parte esencial del continuo asistencial prestado a
el peso de nacimiento más bajos se asocian con riesgo más alto de recién nacidos de alto riesgo y a sus familias.
complicaciones y mortalidad. La principal complicación preocupante
durante la ECMO es el sangrado intracraneal. Seguimiento multidisciplinario del recién nacido
Los niños que son tratados con ECMO presentan un riesgo más alto
de morbilidad respiratoria más tardía; hipoacusia; mal desempeño motor,
de alto riesgo
cognitivo y visuomotor, y problemas conductuales. Un ensayo aleatori- Los criterios para derivación de recién nacidos de alto riesgo a segui-
zado de hipotermia terapéutica durante la ECMO no demostró ningún miento integral del desarrollo varían mucho en función de los recursos
efecto neuroprotector a los 2 años (Field et al., 2013). Sin embargo, sin disponibles, el financiamiento y la geografía. El programa integral de
ECMO, es probable que estos niños presenten, aun así, alto riesgo de seguimiento del desarrollo cumple varias funciones importantes. Las
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muchos de estos resultados evolutivos y que tengan tasas de mortalidad altas tasas de seguimiento y la reunión constante de datos sobre resul-
más altas. Por ejemplo, los recién nacidos con hernias diafragmáticas tados evolutivos permiten que un programa de seguimiento aporte a la
congénitas que no reciben ECMO tienen resultados evolutivos de desa- UCIN datos locales exactos para afecciones específicas. Las relaciones
rrollo más bajos a 1 año que las normas previstas, y el 13% presentan estrechas con los servicios comunitarios sanitarios, educacionales y
retrasos cognitivos, motores o de lenguaje graves (Danzer et al., 2015). sociales promueven la coordinación de servicios de intervención, basa-
dos en las necesidades de niños y familias individuales. Más importante
Resumen aún, el programa de seguimiento proporciona asistencia coordinada
e integral que ayudará a la familia a optimizar el crecimiento y desa-
En resumen, los recién nacidos de cada una de estas categorías de alto rrollo del niño; ayudará al niño a integrarse en la familia, la escuela
riesgo deben ser derivados para intervención precoz en el momento del y la comunidad, y posibilitará la intervención oportuna cuando sea
alta hospitalaria. Además, la mayoría deben ser controlados durante toda necesaria para reducir futuros costes médicos, sociales y emocionales. El
la primera infancia por una clínica multidisciplinaria de seguimiento del reconocimiento de que cada niño es un individuo con cualidades, for-
neurodesarrollo que sea capaz de llevar a cabo una vigilancia, cribado, talezas y dificultades únicas, y que cada familia difiere en antecedentes,
diagnóstico y tratamiento integrales. El control debe incluir valoracio- apoyos sociales, finanzas, mecanismos de afrontamiento y expectativas
nes cognitivas y motoras convencionales, evaluaciones conductuales respecto del futuro de su hijo promueve estos objetivos.

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988 PA RT E XI I Sistema nervioso

• CUADRO 66.1  Consideraciones para el médico Las capacidades motoras gruesas y finas se evalúan para valorar el
desarrollo motor y para investigar PC (v. apartado «Valoraciones de los
de atención primaria que asiste resultados evolutivos del neurodesarrollo precoz», anteriormente) y dis-
al recién nacido de alto riesgo función neuromotora menor. Los niños con disfunción neuromotora
después del alta menor tienen retraso leve o nulo y alteraciones neuromotoras leves en
la exploración. Sin embargo, la disfunción neuromotora menor puede
1. Crecimiento: controle el peso, la talla y el perímetro cefálico en todos
tener, aun así, una repercusión funcional considerable, como repercu-
los niños y, en especial, en los que tienen DBP. Controle estrechamente
sión sobre el habla, la alimentación y la coordinación motora. A medida
las capacidades de alimentación.
2. Neurosensoriales: valoración audiológica diagnóstica a los 24-30 meses
que los niños se hacen mayores, los trastornos de coordinación motora
(Harlor y Bower, 2009). Exámenes oftalmológicos continuados y evaluación (TDC) pueden influir en la capacidad de participar en actividades en
posterior al alta en los niños con ROP o riesgo de ROP (Fierson, 2013). múltiples ámbitos, incluidos el hogar y la escuela.
3. Inmunizaciones: vacunas habituales según la fecha de nacimiento, en lugar A menudo, los problemas motores son los primeros en ser recono-
de según la edad corregida. Vacunación antigripal anual del niño y sus cidos y se asocian no solo con problemas motores más tardíos, sino
cuidadores. Palivizumab en todos los recién nacidos y niños pequeños también con discapacidad cognitiva ulterior (Allen y Capute, 1989).
de alto riesgo según recomendaciones de la AAP (AAP, 2014). Los problemas cognitivos y de lenguaje se reconocen más tarde en el
4. Neurodesarrollo: investigue problemas de neurodesarrollo, como TDAH primero o segundo años. El retraso en las capacidades de lenguaje se
y TEA, problemas conductuales y retrasos del desarrollo. puede relacionar con retraso cognitivo, deficiencia auditiva, trastorno
5. Motoras: realice una exploración neuromotora meticulosa y derive a del lenguaje o TEA. El primer paso en la evaluación de un niño con
fisioterapia o terapia ocupacional si no cumple con las pautas madurativas aparente retraso del lenguaje es una evaluación audiológica diagnóstica
o si la exploración es anómala. (Harlor y Bower, 2009). Los problemas neuroconductuales pueden
6. Aprendizaje: derive para evaluación de trastornos de aprendizaje y función hacerse evidentes en niños pequeños; los trastornos de coordinación
ejecutiva si los niños tienen problemas en la escuela. motora, aprendizaje y función ejecutiva se suelen reconocer a edad
7. Sociodemográficas: valore los factores sociodemográficos que pueden escolar. Una vez identificados, se deben encarar los problemas con los
repercutir de manera adversa en los resultados evolutivos, incluidas padres, incluida una descripción no médica de cualquier diagnóstico
ansiedad y depresión parentales. Proporcione acceso a soportes sociales y la explicación de estrategias de intervención específicas.
según esté indicado. La valoración del desarrollo y la adquisición oportuna de pautas
Bibliografía madurativas en recién nacidos prematuros plantea la pregunta con-
trovertida de si se debe realizar una corrección por el grado de pre-
American Academy of Pediatrics Committee on Infectious Diseases, American maturidad. Esta cuestión es muy importante en etapas precoces de la
Academy of Pediatrics Bronchiolitis Guidelines Committee. Updated guidance vida y en los recién nacidos más prematuros. Por lo tanto, en etapas
for palivizumab prophylaxis among infants and young children at increased
precoces de la vida, las expectativas y los resultados de las valoraciones
risk of hospitalization for respiratory syncytial virus infection. Pediatrics
del desarrollo se «ajustan» por prematuridad. A medida que los niños
2014;134:415-420.
Fierson WM, American Academy of Pediatrics Section on Ophthalmology, American
crecen, la diferencia entre la edad ajustada y cronológica se torna menos
Academy of Ophthalmology, American Association for Pediatric Ophthalmology significativa, de manera que la corrección ya no es crítica. Los investiga-
Strabismus, American Association of Certified Orthoptists. Screening dores y los médicos tienen diferentes perspectivas respecto de cuándo
examination of premature infants for retinopathy of prematurity. Pediatrics abandonar –si alguna vez se hace– la corrección por prematuridad. Sin
2013;131:189-195. embargo, dentro de una clínica individual, se debe fijar una norma que
Harlor AD, Bower C. Hearing assessment in infants and children: recommendations sea seguida por todos los médicos para todos los pacientes.
beyond neonatal screening. Pediatrics 2009;124:1252-1263.
Derivación a servicios de intervención precoz
AAP, American Academy of Pediatrics; DBP, displasia broncopulmonar; ROP, retinopatía de la
prematuridad; TDAH, trastorno por déficit de atención e hiperactividad; TEA, trastornos del Todos los niños prematuros y los niños de alto riesgo con capacidades
espectro autista. en cualquier dominio uniformemente por debajo de las expectativas
basadas en su edad deben ser derivados para intervención precoz. La ele-
gibilidad para la vigilancia u otros servicios para recién nacidos o niños
Las evaluaciones apropiadas para una visita a una clínica de seguimien- de alto riesgo difiere según la geografía. En EE. UU., la Individuals with
to cambiarán a medida que el niño crece, se desarrolla e interactúa cada vez Disabilities Education Act exige que los estados proporcionen servicios
más con el ambiente. El reconocimiento de deficiencias, discapacidades y e intervención precoz a recién nacidos y niños pequeños hasta los 3 años
minusvalías se basa, en parte, en los informes parentales, una apreciación de edad con retrasos del desarrollo y con afecciones que causan retrasos
de la variabilidad normal de los patrones de desarrollo y las habilidades de del desarrollo. Sin embargo, los estados difieren en las definiciones de
valoración del examinador para determinar la significación de alteraciones retraso, las normas respecto de la corrección por prematuridad y los
o desviaciones del desarrollo normal. La base de cada evaluación de segui- servicios ofrecidos (Shackelford, 2006).
miento es una de las herramientas básicas de la medicina: la anamnesis Los recién nacidos pueden ser derivados a intervención precoz por
y la exploración física. La anamnesis se centra en el comportamiento, la UCIN, la clínica de seguimiento, el pediatra o la familia. Cada niño
incluyendo el sueño, la alimentación, el temperamento y cualquier pro- que es derivado tiene derecho a una valoración multidisciplinaria y
blema conductual, y las pautas de desarrollo. La exploración física se un coordinador del servicio para facilitar la valoración y los servicios.
amplía para incluir una evaluación del neurodesarrollo con valoración Los programas de intervención precoz reconocen la importancia de:
de la postura; el tono muscular; los reflejos primitivos, protectores y 1) considerar a cada niño como un individuo único; 2) evaluar no solo
tendinosos profundos, y las capacidades funcionales (Amiel-Tison y Gos- las necesidades, sino también los puntos fuertes; 3) incluir a la familia
selin, 2001). En recién nacidos de alto riesgo, una exploración neurológica en el proceso de planificación, y 4) coordinar todos los servicios de
estructurada, detallada, ya a la edad corregida a término muestra alta intervención. La elección de las intervenciones se determina por el
correlación con resultados evolutivos motores por lo menos hasta el año perfil de desarrollo y la salud de cada niño, las necesidades de la familia
de edad. Muchas clínicas multidisciplinarias incluyen un psicólogo de y los recursos disponibles.
primera infancia que evalúa la cognición, el aprendizaje y otras funciones, La intervención precoz ayuda a asegurar que los niños alcancen
ya sea en todas las visitas o en visitas designadas: por ejemplo, a los 12 y su máximo potencial, pero no previene necesariamente la discapaci-
a los 24 meses de edad corregida. dad (Spittle et al., 2015). La investigación acerca de la eficacia de la

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CAPÍTULO 66 Valoración del riesgo y resultados del neurodesarrollo 989

intervención precoz incluye muchas intervenciones diferentes, aplicadas et al., 2013) pueden considerarse el modelo ideal de estudios obser-
con distinta intensidad, en diferentes poblaciones y por diferentes vacionales prospectivos de recién nacidos de alto riesgo. Se aconseja
períodos. Las deficiencias auditivas y visuales responden a la interven- prudencia al comparar los resultados evolutivos de distintas cohortes
ción precoz, y los tratamientos precoces pueden mejorar de manera a lo largo del tiempo, debido a las diferencias de las poblaciones
significativa el funcionamiento a largo plazo y la calidad de vida. Por lo incorporadas y de las tasas de desgaste, los cambios de las versiones o
general, los programas de intervención precoz han mostrado tener efec- del uso de diferentes instrumentos, y los distintos abordajes para usar
tos positivos sobre los resultados evolutivos de desarrollo y neurológicos grupos control a término.
de recién nacidos prematuros durante la lactancia y la primera infancia Fuera del marco de referencia científico del seguimiento con
(Spittle et al., 2015). Específicamente, la intervención precoz se asocia fines de investigación, existe una necesidad clínica sustancial de
con mejores resultados evolutivos conductuales, menor ansiedad y seguimiento del recién nacido de alto riesgo. El propósito y el valor
depresión de los principales cuidadores, y beneficios cognitivos hasta potencial de esta difícil empresa son muchos. Como ha mejorado la
la edad preescolar. Importa destacar que los programas de intervención supervivencia incluso de los recién nacidos más EP y complejos, cada
precoz centrados en la relación padre-hijo son más eficaces que los vez se reconoce más la importancia de los resultados evolutivos del
programas centrados en el niño o el padre solo. neurodesarrollo, más que de los criterios de valoración a corto plazo
La intervención precoz tiene menos repercusión sobre los resultados solos, como medida de la repercusión de las intervenciones y las estra-
evolutivos motores y ninguna sobre las tasas de PC. Sin embargo, tegias terapéuticas en la UCIN. Se ha invertido mucho para asegurar
unos pocos estudios pequeños recientes de tratamiento centrado, la supervivencia de estos recién nacidos de alto riesgo, y se debe hacer
intensivo, orientado a objetivos en recién nacidos con alto riesgo de una inversión similar para garantizar que todos estos niños alcancen
PC han demostrado mejores resultados evolutivos motores (Prosser todo su potencial. Además de las medidas tradicionales de mejoría de
et al., 2012; Eliasson y Holmefur, 2015; Morgan et al., 2016). Has- la calidad para reducir la morbilidad intrahospitalaria que se asocia con
ta la fecha, no ha finalizado ningún estudio a largo plazo de estas resultados evolutivos adversos del neurodesarrollo, la detección precoz,
intervenciones en recién nacidos con riesgo de PC. Por consiguiente, los cuidados preventivos y los programas de intervención que incluyen
aún no se sabe con certeza si alguna forma específica de intervención tanto a los recién nacidos como a las familias son los más prometedores
precoz o tratamiento centrado en la discapacidad repercute a largo para modificar la trayectoria de los resultados evolutivos.
plazo sobre los resultados evolutivos motores funcionales en la escue- Dentro de un marco de referencia ecológico, las relaciones y el
la o el hogar. Sin embargo, una vez un niño recibe un diagnóstico ambiente hogareños son las influencias más inmediatas y proximales
de PC o TDC, las intervenciones dirigidas apuntan, entonces, a la sobre el desarrollo del niño (Bronfenbrenner, 1986). Factores más
prevención de retraso adicional y a compensar las deficiencias, para distales, como los ingresos familiares y factores de la comunidad
optimizar la función y la independencia del niño (Majnemer, 1998). más amplia, influyen en el desarrollo de los niños tanto directamente
Una revisión reciente de tratamientos de niños con TDC observó que como indirectamente por la interacción con otros factores ambien-
el abordaje orientado a tareas, que incluye abordajes cognitivos con tales proximales. Al conocer el abordaje de sistemas de desarrollo y
foco en aspectos específicos de una habilidad motora, era una manera reconocer el profundo potencial de influir en el desarrollo cerebral, se
eficaz de enseñar habilidades motoras en el TDC (Smits-Engelsman pueden comprender los resultados evolutivos positivos en términos de
et al., 2013). La investigación continuada es esencial para identificar mejorías de las vías de desarrollo asociadas con la reactividad sensible
los mejores tratamientos, incluidas la cronología, la intensidad y la de los padres y la participación del niño en cuidados orientados a la
duración, para optimizar los resultados evolutivos de recién nacidos y intervención intensiva (Milgrom et al., 2010; Kolb y Gibb, 2011;
niños prematuros y de alto riesgo. Guralnick, 2012).
Sin duda, implementar un sistema integral de intervenciones preco-
ces y preventivas UCIN-comunidad para recién nacidos de alto riesgo
Dificultades e importancia del seguimiento es una tarea que consume gran cantidad de tiempo y de recursos. Pero
Cada vez hay mayor confianza en la evaluación completa y el informe sin una inversión de este tipo en el futuro, es improbable que trans-
de los resultados evolutivos del neurodesarrollo de estudios prospectivos formemos verdaderamente la asistencia a largo plazo y que mejoremos
y ensayos, y un reconocimiento creciente y adecuado de que esto es los resultados evolutivos durante la vida de los recién nacidos de alto
crucial para conocer de manera completa los resultados evolutivos riesgo.
más allá de la hospitalización inicial e, incluso, más allá de la primera
infancia. Sin embargo, los problemas de seguir a una cohorte durante Lecturas recomendadas
años o décadas y los posibles obstáculos para lograr resultados fiables
son numerosos. El seguimiento a largo plazo requiere tiempo, dedica- Anderson PJ, De Luca CR, Hutchinson E, Roberts G, Doyle LW, Victorian
ción y persistencia del personal de seguimiento y de las familias. Lograr Infant Collaboartive group. Underestimation of developmental delay by
una alta tasa de seguimiento es esencial para limitar el sesgo. Algunos the new Bayley-III Scales. Arch Pediatr Adolesc Med 2010;164(4):352-
estudios comunican que los recién nacidos que no son llevados a las 356.
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citas de seguimiento o que son seguidos solo con gran dificultad tienen Bhutta AT, Cleves MA, Casey PH, Cradock MM, Anand KJ. Cognitive
mayor probabilidad de presentar deficiencia del desarrollo; sin embar- and behavioral outcomes of school-aged children who were born pre-
go, una revisión sistemática sugiere justo lo opuesto (Tin et al., 1998; term: a meta-analysis. JAMA 2002;288(6):728-737.
Hack M, Taylor HG, Drotar D, et al. Poor predictive validity of the Bayley
Callanan et al., 2001; Guillén et al., 2012). Las disparidades sociales
Scales of Infant Development for cognitive function of extremely low
y demográficas, y las diferencias poblacionales han mostrado asociarse birth weight children at school age. Pediatrics 2005;116(2):333-341.
con mayor desgaste (Aylward et al., 1985; Guillén et al., 2012; Kuppala Hintz SR, Barnes PD, Bulas D, SUPPORT Study Group of the Eunice
et al., 2012; Hintz 2015b), lo que inquieta no solo por el posible sesgo Kennedy Shriver NICHD Neonatal Research Network, et al. Neuroi-
introducido, sino también porque esos niños y familias perdidos para el maging and neurodevelopmental outcome in extremely preterm infants.
seguimiento se podrían beneficiar mucho con el apoyo y los servicios. Pediatrics 2015;135:e32-e42.
No obstante, según el grupo del que se extrae una cohorte y la Manley BJ, Roberts RS, Doyle LW, et al. Social variables predict gains in
razón de su creación, puede haber preguntas inherentes relacionadas cognitive scores across the preschool years in children with birth weights
con la posibilidad de generalizar los resultados, independientemente 500 to 1250 grams. J Pediatr 2015;166(4):870.
de tasas de seguimiento excepcionales. Por consiguiente, las cohortes Marlow N, Wolke D, Bracewell M, Samara M, EPICure Group. Neuro-
poblacionales o regionales grandes, como el grupo EPICure (Marlow logic and developmental disability at six years of age after extremely
et al., 2005), VICS (Doyle et al., 2010) y EXPRESS (Serenius preterm birth. N Engl J Med 2005;352:9-19.

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Tang BG, Feldman HM, Huffman LC, Kagawa KJ, Gould JB. Missed Woodward LJ, Anderson PJ, Austin NC, Howard K, Inder TE. Neonatal
opportunities in the referral of high-risk infants to early intervention. MRI to predict neurodevelopmental outcomes in preterm infants.
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Thoresen M, Hellström-Westas L, Liu X, de Vries LS. Effect of hypother- World Health Organization and the World Bank. The World Report on
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CAPÍTULO 66 Valoración del riesgo y resultados del neurodesarrollo 990.e7

Palabras clave
Neurodesarrollo
Cognitivo
Funcional
Extremadamente prematuro
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PA RTE XIII Nutrición

67
Lactancia materna
LYDIA FURMAN Y RICHARD J. SCHANLER

PUNTOS CLAVE Tasas de lactancia materna en EE. UU.


• Las políticas hospitalarias deben apoyar a las madres que desean Si bien la lactancia materna era la norma en la primera parte del siglo XX,
amamantar, y deben reflejar e incorporar los «10 pasos para una las tasas disminuyeron después de la Segunda Guerra Mundial,
lactancia materna eficaz» de la Baby-Friendly Hospital Initiative probablemente debido a que las mujeres volvieron al mundo laboral,
(BFHI; en España, Iniciativa para la Humanización de la Asistencia y por la disponibilidad de las leches maternizadas comerciales para
al Nacimiento y la Lactancia [IHAN]). recién nacidos. El reconocimiento de los beneficios de la lactancia
• La promoción de la lactancia materna debe llegar a la comunidad: materna creció durante la década de los setenta, y las tasas se dupli-
la lactancia materna es un asunto de salud pública, con beneficios caron con creces en EE. UU., del 24,7% en 1971 al 59,7% en 1984
económicos y de salud basados en la evidencia científica. (Wright, 2001). Los Centers for Disease Control and Prevention de
• Todos los pediatras deben estar bien informados sobre el manejo de la EE. UU. comenzaron a monitorizar las tasas anuales de lactancia mater-
lactancia y estar preparados para liderar los equipos de atención médica
na a través de la National Immunization Survey (NIS) en 2001 y pro-
que apoyan el vínculo madre-lactante alimentado al pecho.
porcionaron la primera encuesta nacional de prácticas de maternidad
• Todos los recién nacidos en el momento del alta del hospital deben
recibir atención médica en un centro pediátrico en el que tengan acceso
relacionadas con la lactancia materna, la Maternity Practices in Infant
a especialistas en lactancia las 24 h del día debidamente capacitados. Nutrition and Care Survey, en 2017 (2017). Estas cifras se pueden
• La educación y el apoyo a la lactancia deben ser ofrecidos por personal comparar con los objetivos de lactancia materna del Healthy People
experto y personal sanitario, tanto antes como después del parto, tanto 2020 del Department of Health and Human Services (tabla 67.1). Los
en la comunidad como en el ámbito médico, y tanto para la madre como objetivos más ambiciosos para el 2020 se relacionan con la reducción
para su pareja y para todo su entorno. de los suplementos de leche maternizada (fórmula) para lactantes
• Los cambios en la política nacional de salud, como la disponibilidad de alimentados al pecho, aumentando la proporción de lugares de trabajo
servicios gratuitos de lactancia y bajas por maternidad remuneradas, con apoyo a la lactancia y aumentando la proporción de nacidos vivos
son fundamentales para reducir las disparidades de salud asociadas con en hospitales con mejores prácticas de apoyo a la lactancia (8,1%)
la práctica de la lactancia materna. (Breastfeeding Data and Statistics, 2015; US Department of Health
• Cada unidad de cuidados intensivos neonatales debe tener protocolos and Human Services, 2015). En 2011, el Department of Health and
y guías para apoyar la lactancia en las madres de recién nacidos Human Services de EE. UU. emitió un documento titulado The Sur-
hospitalizados. geon General’s Call to Action to Support Breastfeeding, que revisó la
investigación sobre los múltiples beneficios de la lactancia materna
y describió los pasos que los familiares, servicios de atención médi-
ca, investigadores, empresarios y comunidades pueden adoptar para
apoyar la lactancia materna (DHHS, 2011). Si bien algunos estados

L
a Organización Mundial de la Salud (OMS, http://www.who. y subgrupos de población han cumplido los objetivos de iniciación
int/topics/breastfeeding/en/), la American Academy of Pediatrics y continuación, las disparidades relacionadas con la raza, la etnia, la
(AAP; http://www.aap.org/breastfeeding/) y otras organizacio- edad y el nivel socioeconómico no se han eliminado (CDC, 2015). Los
nes internacionales (World Health Organization, 2002; AAP, 2015; afroamericanos no hispanos y las poblaciones económicamente des-
ACOG, Optimizing Support for Breastfeeding, 2016) recomiendan favorecidas tienen las tasas de lactancia más bajas para todas las medidas
la lactancia materna exclusiva hasta los 6 meses, con continuidad hasta y en todas las edades infantiles, y es menos probable que inicien o
los 12 meses y más. El éxito de la lactancia depende de las actitudes de continúen amamantando las mujeres que son más jóvenes, solteras,
apoyo de los pediatras y de los obstetras de área, las prácticas hospitala- reciben o son elegibles para recibir apoyo del Special Supplemental
rias basadas en la evidencia y la concienciación de que muchas madres Nutrition Program for Women, Infants, and Children (WIC), y las
necesitarán ayuda para establecer y mantener la lactancia materna. Se que tienen un nivel de educación más bajo (tabla 67.2, CDC, 2015).
debe compartir mucha información con los nuevos padres en la breve Las creencias culturales sobre la alimentación también influyen en la
estancia posparto en el hospital, de modo que la educación y el apoyo elección de la lactancia materna (Cassidy y El Tom, 2015). Un ejemplo
prenatal y posterior al amamantamiento son esenciales. Los cuidadores de la cultura de los indios navajo es la creencia de que las emociones
deben estar capacitados para apoyar y documentar la lactancia materna, maternas negativas o positivas pueden transmitirse a través de la leche ma­
y los recién nacidos deben tener programada una visita de seguimiento terna (Wright et al., 1993). Las disparidades en las tasas de lactancia
a los 3-5 días de edad con un profesional de la salud bien informado materna son un campo importante para implementar iniciativas de
que preste ayuda de forma continua para la lactancia (AAP, 2015). salud pública (US Department of Health and Human Services, 2013).
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992 PA RT E XI I I Nutrición

TABLA  Objetivos de alimentación infantil Healthy People 2020 y tasas de lactancia materna en EE. UU.
67.1 de 2004 a 2012
Objetivos Healthy People 2020 2004 2006 2008 2010 2012
Objetivos de lactancia materna
Un 81,9% de inicio en el posparto 73,1 ± 0,8 74 ± 0,9 74,6 ± 0,9 76,7 ± 1,2 80 ± 1,2
Un 46,2% de lactancia materna exclusiva a los 3 meses 31,5 ± 0,9 33,6 ± 1,0 34,3 ± 1,0 37,1 ± 1,4 43,3 ± 1,6
Un 25,5% de lactancia materna exclusiva a los 6 meses 12,1 ± 0,7 14,1 ± 0,8 14,6 ± 0,8 17,2 ± 1,2 21,9 ± 1,4
Un 60,6% de cualquier tipo de lactancia a los 6 meses 42,1 ± 0,9 43,5 ± 1,1 43,5 ± 1,1 47,5 ± 1,4 51,4 ± 1,5
Un 34,1% de cualquier tipo de lactancia a los 12 meses 21,4 ± 0,8 21,4 ± 0,8 21,4 ± 0,8 25,3 ± 1,3 29,2 ± 1,4
Objetivos adicionales
Un 14,2% de lactantes alimentados al pecho en las primeras 23,5 ± 1 24,2 ± 1,1 25,1 ± 1,1 22,8 ± 1,4 19,1 ± 1,3
48 h
Un 38% de los lugares de trabajo con apoyo a la lactancia (El 25% de informes en 2009 nos sirven como referencia; no hay otros datos disponibles)

Los números representan el porcentaje de niños estadounidenses que fueron alimentados al pecho por año de nacimiento, en la National Immunization Survey de EE. UU. (porcentaje de edad ± media,
intervalo de confianza al 95%). Consulte la página web para obtener detalles metodológicos adicionales de la encuesta, y consulte http://www.cdc.gov/breastfeeding/data/reportcard.htm para las tasas
de lactancia materna actualizadas anualmente.
Tomado de HealthyPeople.gov. Maternal, Infant and Child Health. http://www.healthypeople.gov/2020/topics-objectives/topic/maternal-infant-and-child-health/objectives, y Centers for Disease Control and
Prevention. Breastfeeding among U.S. children born 1999-2005, CDC National Immunization Survey. http://www.cdc.gov/breastfeeding/data/NIS_data/index.htm.

• CUADRO 67.1  Diez pasos para una lactancia nal de Emergencia de las Naciones Unidas para la Infancia y la OMS
desarrollaron la Baby-Friendly Hospital Initiative (BFHI; en España,
materna eficaz Iniciativa para la Humanización de la Asistencia al Nacimiento y la
Paso 1: tener una carta de intenciones escrita de la lactancia materna que se Lactancia [IHAN]), un programa internacional para promover políticas
comunique de manera rutinaria a todo el personal de atención médica de apoyo a la lactancia para hospitales y maternidades (cuadro 67.1;
Paso 2: capacitar a todo el personal de salud en las habilidades necesarias Willumsen, 2013). Los «10 pasos» de la IHAN, en combinación con
para implementar esta política un «undécimo paso», el Código Internacional de Comercialización de
Paso 3: informar a todas las mujeres embarazadas sobre los beneficios los Sucedáneos de la Leche Materna de la OMS, que protege contra
y el manejo de la lactancia la provisión y publicidad gratuita de sucedáneos de la leche materna
Paso 4: ayudar a las madres a iniciar la lactancia materna en la primera hora (es decir, fórmula), aumentaron efectivamente las tasas de lactancia
después del parto (World Health Organization, UNICEF y Wellstart International, 2009).
Paso 5: enseñar a las madres cómo amamantar y cómo mantener la lactancia La adherencia a estas prácticas de maternidad basadas en la evidencia
incluso si están separadas de sus recién nacidos aumenta significativamente la probabilidad de que las madres inicien la
Paso 6: no dar a los recién nacidos ningún alimento o bebida que no sea leche lactancia materna, lo hagan de forma exclusiva y continúen amaman-
materna, a menos que esté médicamente indicado tando hasta los 6 meses (DiGirolamo et al., Sinha et al., 2015; Yotebieng
Paso 7: practicar el ingreso hospitalario conjunto permitiendo que las madres et al., 2015). Si bien la implementación de los 10 pasos es óptima, las
y los recién nacidos permanezcan juntos las 24 h del día tasas de lactancia aumentan con la cantidad de pasos practicados, incluso
Paso 8: fomentar la lactancia a demanda con un solo paso, como iniciar el amamantamiento en la primera hora
Paso 9: no dar chupetes o pezones artificiales a los recién nacidos que después del nacimiento con contacto piel con piel (Kramer et al., 2001;
amamantan
Philipp et al., 2001; Rosenberg et al., 2008; Moore et al., 2012; Olaiya
Paso 10: fomentar el establecimiento de grupos de apoyo para la lactancia
et al., 2016). Se ha propuesto la posible expansión a las unidades de
materna y remitir a las madres a ellos en el momento del alta del hospital
o del centro de maternidad
cuidados intensivos neonatales (UCIN) de un programa modificado
de los 10 pasos para una lactancia materna eficaz (Nyqvist et al., 2013;
Tomado de Baby Friendly Hospital Initiative “Ten Steps to Successful Breastfeeding for Hospitals”
World Health Organization, 2015). Los Departments of Health estatales
según lo establecido por UNICEF/Organización Mundial de la Salud. Disponible en han comenzado a crear programas para respaldar los 10 pasos para una
https://www.babyfriendlyusa.org/about-us/baby-friendly-hospital-initiative/the-ten-steps. lactancia materna eficaz (p. ej., http://texastenstep.org/), y el número
de maternidades y hospitales designados como «amigos de los niños»
(por Baby-Friendly USA Inc.) está aumentando (Baby-Friendly, 2015).
Las revisiones sistemáticas sugieren que el apoyo a la lactancia
Intervenciones para apoyar el inicio, materna es óptimo cuando se ofrece preparto y posparto, y en entornos
múltiples: las intervenciones esenciales incluyen asesoramiento por
la exclusividad y el mantenimiento expertos y personal sanitario, prácticas de la IHAN y acciones que
de la lactancia materna movilizan la concienciación comunitaria (Sinha et al., 2015). El ase-
soramiento y la educación en el hogar y el entorno familiar promueven
En respuesta al amplio marketing de las leches maternizadas en los el inicio, la exclusividad y la continuación de la lactancia; el apoyo
países en desarrollo con altas tasas de morbilidad y mortalidad infan- familiar y social por sí solo, sorprendentemente, no tuvo un impacto
til, la Asamblea Mundial de la Salud creó el Código Internacional de significativo (Sinha et al., 2015).
Comercialización de los Sucedáneos de la Leche Materna (1981) para Las iniciativas del WIC, incluyendo mejores paquetes de alimen-
promover la comercialización ética de los productos de leche maternizada tos para las madres que amamantan y consejos de orientación (apoyo
(World Health Organization, 1981). En 1992, el Fondo Internacio- cariñoso), son prometedoras, como lo exige la Affordable Care Act,

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CAPÍTULO 67 Lactancia materna 993

TABLA  Tasas de lactancia materna exclusiva y en algún momento por factores sociodemográficos entre los niños
67.2 nacidos en 2012

LACTANCIA MATERNA EN ALGÚN MOMENTO LACTANCIA MATERNA EXCLUSIVA

Hasta los Hasta los


3 meses 6 meses
Nunca A los 6 meses A los 12 meses
% ± medio % ± medio % ± medio % ± medio % ± medio
Factores sociodemográficos n IC al 95% IC al 95% IC al 95% n IC al 95% IC al 95%
Nacionales de EE. UU. 15.141 80 ± 1,2 51,4 ± 1,5 29,2 ± 1,4 14.768 43,3 ± 1,6 21,9 ± 1,4
Raza/etnia
Hispanas 2.788 82,4 ± 2,8 51,4 ± 3,7 27,9 ± 3,6 2.749 40,3 ± 3,8 20,8 ± 3,3
Blancas no hispanas 8.811 83 ± 1,3 55,8 ± 1,8 32,8 ± 1,8 8.546 48 ± 1,9 24,4 ± 1,7
Negras no hispanas 1.476 66,4 ± 3,8 35,3 ± 4,0 16,9 ± 3,1 1.460 33,4 ± 4,1 13,9 ± 2,9
Asiáticas no hispanas 683 83,2 ± 7,6 65,6 ± 7,7 42,3 ± 7,0 662 46,5 ± 7,5 26,9 ± 7,1
Hawaianas/procedentes de las islas 96 83,9 ± 14,1 32,6 ± 19 14,4 ± 9 95 43,3 ± 24,1 11,8 ± 9,5
del Pacífico no hispanas
Indias americanas/nativas de Alaska 217 71,5 ± 12,6 28,8 ± 11,7 17,9 ± 8,9 212 27,4 ± 11,8 12,5 ± 6,5
no hispanas
Dos o más razas 1.070 75,4 ± 6,5 46,2 ± 6,2 25,3 ± 5,4 1.044 41,4 ± 6,3 23 ± 5,6
Nivel de estudios de la madre
Menos de secundaria 1.575 69,1 ± 3,8 40,3 ± 4,5 21,2 ± 3,9 1.559 32,8 ± 4,5 16,1 ± 3,9
Secundaria 2.755 71,1 ± 3,1 38,2 ± 3,3 20 ± 2,8 2.696 33,5 ± 3,1 16,3 ± 2,5
Algún tipo de estudios/estudios técnicos 3.924 81,2 ± 2,3 45,9 ± 3,2 24,2 ± 2,8 3.814 41,2 ± 3,2 19,5 ± 2,7
Titulación universitaria 6.887 91,2 ± 1,1 70,3 ± 1,9 43,2 ± 2,3 6.699 57,2 ± 2,2 30,6 ± 2,2
Edad materna
< 20 años 103 58,6 ± 16,1 17,4 ± 10 4,3 ± 2,8 103 28,3 ± 13,1 8 ± 7,7
20-29 años 5.443 75,2 ± 2,0 40,6 ± 2,4 21 ± 2,1 5.315 37,8 ± 2,4 18,8 ± 2,1
≥ 30 años 9.595 84,1 ± 1,6 60,2 ± 2,0 35,8 ± 2,0 9.350 47,8 ± 2,1 24,5 ± 1,8
a
Índice de ingresos de pobreza
< 100 3.840 71,4 ± 2,6 37,7 ± 2,9 19,8 ± 2,5 3.768 31,7 ± 2,9 15,6 ± 2,3
100-199 2.952 79 ± 2,6 49,1 ± 3,3 27,9 ± 3,1 2.880 40,5 ± 3,3 19,9 ± 2,8
200-399 4.028 86 ± 2,0 59,5 ± 2,9 36,4 ± 3,0 3.920 54,5 ± 3,0 27,1 ± 3,0
400-599 2.379 88,2 ± 2,1 66,3 ± 3,5 38,1 ± 3,8 2.317 53,7 ± 3,8 30,2 ± 3,9
≥ 600 1.942 90,9 ± 2,1 70,4 ± 3,5 39,1 ± 4,2 1.883 54,4 ± 4,3 27,9 ± 4,1
b
Estado civil
Casadas 10.842 87 ± 1,2 62,3 ± 1,8 37,8 ± 1,8 10.534 51,5 ± 1,9 27,2 ± 1,7
No casadas 4.299 68,3 ± 2,6 33,1 ± 2,7 14,7 ± 2,2 4.234 29,7 ± 2,6 13,2 ± 2,1
Ayuda del WIC
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Sí 6.676 73,1 ± 1,9 39,1 ± 2,2 19,3 ± 1,9 6.549 33,4 ± 2,2 15,6 ± 1,8


No, pero subvencionada 1.096 80,3 ± 6,7 58,2 ± 6,5 40,9 ± 6,0 1.065 51,4 ± 6,5 29,7 ± 5,9
No subvencionada 7.304 90,5 ± 1,1 68,4 ± 1,9 41,6 ± 2,2 7.096 56,8 ± 2,2 30 ± 2,2
a
Razón de ingresos familiares sobre el umbral federal de pobreza en los hogares.
b
No casadas incluye nunca casadas, viudas, separadas y divorciadas.
Las tasas de lactancia materna se basan en muestras de doble recogida de datos (teléfono fijo y móvil) de las National Immunization Surveys de 2013 y de 2014. Para los detalles sobre el diseño del
estudio, consulte los métodos de la encuesta. La lactancia materna exclusiva se define como solo de leche materna, sin sólidos, sin agua y sin otros líquidos.
IC, intervalo de confianza; WIC, Special Supplemental Nutrition Program for Women, Infants, and Children.
Tomado de la National Immunization Survey, los Centers for Disease Control and Prevention y los Department of Health and Human Services (http://www.cdc.gov/breastfeeding/data/nis_data/rates-any-
exclusive-bfsocio-dem-2012.htm). Los tamaños de la muestra que aparecen en las tablas de lactancia materna en la National Immunization Survey son ligeramente menores que los comunicados en
otras publicaciones nacionales de la National Immunization Survey, porque en el análisis de la lactancia de la Division of Nutrition, Physical Activity, and Obesity la muestra se limitó a los registros con
respuestas válidas a las preguntas sobre lactancia materna.

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994 PA RT E XI I I Nutrición

que cubre la educación y los suministros de lactancia y un tiempo de Weiss et al., 2012); 3) la necesidad de identificar y ajustar los factores de
descanso razonable para las trabajadoras para extraer la leche (secciones confusión, como el nivel socioeconómico; 4) el diseño del estudio (p. ej., los
2.713 y 4.207) (Murtagh y Moulton, 2011; Hawkins et al., 2015). Las estudios retrospectivos o transversales son más débiles que los prospectivos
estrategias del trabajo diario que incluyen alimentar al recién nacido longitudinales), y 5) las preocupaciones por la causalidad inversa. Dado
directamente de la mama parecen más efectivas que la extracción por que es casi imposible e indudablemente no ético aleatorizar a las madres
bomba solamente (Fein et al., 2008). Sin embargo, el trabajo materno para amamantar o no, se produce una confusión difícil de cuantificar. La
fuera del hogar, en general, se asocia con un descenso de la iniciación aleatorización por sistema de salud ha sido un enfoque alternativo (Kramer
y continuación de la lactancia materna (Ogbuanu et al., 2011; CDC, et al., 2001; Yotebieng et al., 2015). La mayor parte de la evidencia respalda
2016). Los cambios en las políticas públicas pueden mejorar las tasas los beneficios detallados en los apartados siguientes.
nacionales de lactancia materna: los permisos laborales por maternidad
pagados para las mujeres trabajadoras aumentan la exclusividad y la
duración de la lactancia, y los permisos de maternidad más largos se
Aspectos nutricionales
asocian con un mayor inicio de la lactancia (Fein et al., 2008; DHHS, El modelo de leche humana se utiliza para diseñar la composición de
2011; Ogbuanu et al. 2011; Breastfeeding Promotion and Employment, los sucedáneos de la leche materna, ya que el objetivo de la nutrición
2016; Huang y Yang, 2015; Nandi et al., 2016). La Organización Inter- infantil durante el primer año es imitar la composición corporal del lac-
nacional del Trabajo de las Naciones Unidas recomienda 18 semanas de tante. La leche humana tiene una composición de nutrientes dinámica
baja laboral de maternidad con sueldo, una «meta razonable» que podría que cambia a lo largo de la lactancia, a lo largo del día, y que difiere
acercar a EE. UU. a los objetivos de lactancia de las personas sanas según la alimentación y en cada mujer. Los componentes de la leche
(DHHS, 2011; US Department of Health and Human Services, 2017). humana tienen múltiples funciones nutricionales e inmunológicas.
En la tabla 67.3 se presenta una descripción de la composición de
Evidencias para apoyar la lactancia materna la leche humana que compara la leche de inicio con la más madura
(Picciano, 2001). En las primeras semanas después del nacimiento, el
Hace más de una década, la lactancia materna exclusiva hasta los 6 contenido proteínico total de la leche de las madres que dan a luz pre-
meses de edad se identificó como la intervención preventiva de salud maturamente (leche prematura) es mayor que el de la leche obtenida de
más efectiva para niños menores de 5 años, con el potencial de prevenir las mujeres que dan a luz a término (leche a término), y el contenido de
el 13% de las muertes de niños menores de 5 años en todo el mundo proteína total en ambos disminuye de manera similar en lo que se llama
(Jones et al., 2003). La leche humana tiene beneficios ampliamente leche madura (Ballard y Morrow, 2013). El contenido de la proteína de
reconocidos en países de ingresos altos, medios y bajos con respecto a la leche no está relacionado con la dieta materna, pero aumenta con el
la nutrición infantil, la supervivencia infantil, la función gastrointes- índice de masa corporal (IMC) de la madre (Nommsen et al., 1991).
tinal, la defensa del huésped, el desarrollo neuronal y el bienestar psi- La calidad de la proteína de la leche humana (suero de leche, 70%;
cológico. Los beneficios de la lactancia materna exclusiva, así como un caseína, 30%) difiere de la de la leche bovina (82%, caseína; 18%,
efecto «dependiente de la dosis» de la duración de la lactancia materna suero lácteo). Las caseínas son proteínas con baja solubilidad en ácido
y de la lactancia materna parcial, están bien documentados (Sankar gástrico, mientras que las proteínas del suero permanecen en solución
et al., 2015). Los beneficios para la salud materna aumentan con el después de la precipitación ácida. La fracción de proteína de suero de
número de meses de lactancia, y también están claramente descritos leche se digiere más fácilmente y promueve el vaciado gástrico rápido.
(Chowdhury et al., 2015). No hay pruebas suficientes para respaldar la También proporciona concentraciones más bajas de fenilalanina, tiro-
suplementación con leche maternizada como un cambio en la práctica sina y metionina, y mayores concentraciones de taurina que la fracción
de la lactancia materna exclusiva (Becker y Remmington, 2014). Sin de caseína, y sirve como modelo para mezclas de aminoácidos enterales
embargo, los servicios de salud deben tener en cuenta las perspectivas y parenterales. La principal proteína del suero en la leche humana es la
de los padres sobre los desafíos de la lactancia materna exclusiva y pro- α-lactoalbúmina. La lactoferrina, la lisozima y la inmunoglobulina A
porcionar orientación científica y apoyo personalizado, reconociendo secretora (IgAs) son proteínas de suero humanas inmunoactivas espe-
que cualquier leche materna (incluido el calostro) brinda un beneficio cíficas que resisten la digestión proteolítica y, por lo tanto, sirven como
significativo para la salud (Flaherman y Fuentes-Afflick, 2014). El éxito una primera línea de defensa en el tubo digestivo (Brandtzaeg, 2010).
de los Objetivos de Desarrollo del Milenio de las Naciones Unidas, con El componente lipídico en la leche humana, responsable de pro-
una reducción en el número de muertes de niños menores de 5 años porcionar aproximadamente el 50% de las calorías en la leche, está
de 12,7 millones por año en 1990 a 5,9 millones por año en 2015, fue estructurado para facilitar la digestión y la absorción de las grasas. El
debido a múltiples factores; sin embargo, la lactancia materna fue funda- sistema lipídico está compuesto por un glóbulo de grasa láctea organi-
mental, y es el factor que más ha influido (World Health Organization zado, una lipasa estimulada por las sales biliares y un patrón de ácidos
Media Center, 2015). La lactancia materna exclusiva (de 0 a 5 meses) grasos (alto en ácidos grasos palmítico [C16:0], oleico [C16:1 w9],
está aumentando en un 1% anual en los países con seguimiento de los linoleico [C18:2 w6] y linolénico [C18:3 w3]) distribuidos de forma
Objetivos de Desarrollo del Milenio, con una mediana de cobertura del característica en la molécula de triglicéridos (C16:0 en la posición
39% (Requejo et al., 2015). Cada uno de los Objetivos de Desarrollo 2 de la molécula). Esa distribución es exclusiva de la leche humana.
Sostenible de las Naciones Unidas para el período del 2030, por ejem- Cuando los triglicéridos se hidrolizan en el intestino, se liberan los
plo, «Hambre cero», puede vincularse y apoyarse en la lactancia materna. ácidos grasos libres. El ácido palmítico, en particular, es un ácido
Los beneficios globales sociales y económicos de la lactancia materna graso prevalente que tiene una predilección por unir minerales como
completa son notables, y todavía no se han implementado por completo. el calcio para formar «jabones» insolubles. La formación de jabón
reduce la absorción de grasa y la absorción de minerales (calcio). Sin
Estudios que respaldan los beneficios embargo, el ácido palmítico en los triglicéridos de la leche humana se
de la lactancia materna encuentra principalmente en la posición 2. Las lipasas de leche humana
hidrolizan la molécula de triglicéridos, pero dejan el ácido palmítico
Los problemas metodológicos afectan a la investigación sobre los resultados unido al esqueleto de glicerol. El monoglicérido resultante se absorbe
de salud relacionados con la lactancia materna. Estos incluyen: 1) el recuer- bien. Las mezclas de grasa en la leche maternizada deben modificarse
do de la duración de la lactancia, que está inversamente relacionado con la para compensar la baja absorción de grasa, por lo que contienen una
precisión (Burnham et al., 2014); 2) el uso de definiciones estandarizadas mayor cantidad de ácidos grasos de cadena media, que se absorben
para la duración de la lactancia materna, exclusividad y método de alimen- pasivamente, en un intento de imitar la absorción de grasa superior
tación (extracción o por la mama), que facilite las comparaciones (Noel- de la leche humana.

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CAPÍTULO 67 Lactancia materna 995

TABLA
67.3  Valores representativos de los componentes de la leche humana

Componentes Leche prematura Leche madura Componentes Leche prematura Leche madura
Energía (kcal/l) 650-700   Ácido linoleico (C18:2 w6) 8,9 11,3
Hidratos de carbono   Ácido araquidónico (C20:4 w6) 0,7 0,5
Lactosa (g/l) 20-30 67 Vitaminas hidrosolubles
Glucosa (g/l) 0,2-1,0 0,2-0,3 Ácido ascórbico (mg/l) 100
Oligosacáridos (g/l) 22-24 12-14 Tiamina (µg/l) 20 200
Nitrógeno total (g/l) 3,0 1,9 Riboflavina (µg/l) 400-600
Nitrógeno no proteínico (g/l) 0,5 0,45 Niacina (mg/l) 0,5 1,8-6,0
Nitrógeno proteínico (g/l) 2,5 1,45 Vitamina B6 (mg/l) 0,09-0,31
Proteínas totales (g/l) 16 9 Folato (µg/l) 80-140
  Caseína (g/l) 3,8 5,7 Vitamina B12 (µg/l) 0,5-1,0
  β-caseína (g/l) 2,6 4,4 Acido pantoténico (mg/l) 2-2,5
  k-caseína (g/l) 1,2 1,3 Biotina (µg/l) 5-9
  α-lactoalbúmina (g/l) 3,62 3,26 Vitaminas liposolubles
  Lactoferrina (g/l) 3,53 1,94 Retinol (mg/l) 2 0,3-0,6
  Albúmina (g) 0,39 0,41 Carotenoides (mg/l) 2 0,2-0,6
IgAs (g/l) 2,0 1,0 Vitamina K (µg/l) 2-5 2-3
IgM (g/l) 0,12 0,2 Vitamina D (µg/l) 0,33
IgG (g/l) 0,34 0,05 Vitamina E (mg/l) 8-12 3-8
Lípidos totales (%) 2 3,5 Minerales
Triglicéridos (% de lípidos totales) 97-98 97-98 Calcio (mg/l) 250 200-250
Colesterol* (% de lípidos totales) 0,7-1,3 0,4-0,5 Magnesio (mg/l) 30-35 30-35
Fosfolípidos (% de lípidos totales) 1,1 0,6-0,8 Fósforo (mg/l) 120-160 120-140
Ácidos grasos (a%) 88 88 Sodio (mg/l) 300-400 120-250
Ácidos grasos saturados totales (%) 43-44 44-45 Potasio (mg/l) 600-700 400-550
  Ácido palmítico (C16:0) 20 Cloro (mg/l) 600-800 400-450
Ácidos grasos monoinsaturados (%) 40 Hierro (mg/l) 0,5-1,0 0,3-0,9
  Ácido oleico (C18:1 w9) 32 31 Cinc (mg/l) 8-12 1-3
Ácidos grasos poliinsaturados (%) 13 14-15 Cobre (mg/l) 0,5-0,8 0,2-0,4
Ácidos grasos w3 totales (%) 1,5 1,5 Manganeso (µg/l) 5-6 3
  Ácido linolénico (C18:3 w3) 0,7 0,9 Selenio (µg/l) 40 7-33
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  Ácido eicosapentaenoico (C22:5 w3) 0,2 0,1 Yodo (µg/l) 150


  Ácido docosahexaenoico (C22:6 w3) 0,5 0,2 Flúor (µg/l) 4-15
Ácidos grasos w6 totales (%) 11,6 13,06

*El contenido de colesterol de la leche humana varía entre 100 y 200 mg/l en la mayoría de las muestras de leche humana después del día 21 de la lactancia.
IgAs, inmunoglobulina A secretora; IgG, inmunoglobulina G; IgM, inmunoglobulina M; kcal, kilocalorías.
Modificado de Picciano MF. Appendix: representative values for constituents of human milk. Pediatr Clin North Am. 2001;48:263–272, y Schanler RS, Krebs N, Mass S, eds. AAP/ACOG Breastfeeding
Handbook for Physicians. Elk Grove, IL: American Academy of Pediatrics; 2013:77.

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996 PA RT E XI I I Nutrición

El patrón de ácidos grasos en la leche humana también es único limitada por varias razones (Henderson et al., 2007). El contenido
en su composición de ácidos grasos poliinsaturados de cadena muy proteínico de la leche de las madres que dan a luz prematuramente
larga. El ácido araquidónico (C20:4 w6) y el ácido docosahexaenoico es mayor que el de la leche de las madres que dan a luz a término,
(C22:6 w3), que se encuentran en la leche humana, pero no en la leche pero nunca satisface las necesidades de los recién nacidos prematuros
bovina, y se añaden a las leches maternizadas, son constituyentes de más pequeños e inmaduros (Polberger y Raiha, 1995). La grasa es
las membranas fosfolipídicas retinianas y cerebrales, y se han asociado el nutriente más variable en la leche humana, y su contenido varía
con una mejor función visual y, potencialmente, mejores resultados de a lo largo del día, de madre a madre, en una misma extracción de
desarrollo neuronal (Koletzko et al., 2008). El contenido de grasa de leche, y durante la lactancia (Neville et al., 1984). Además, dado que
la leche varía con la dieta materna y durante toda la alimentación, con la leche humana no se homogeniza, el contenido de grasa se separa del
una leche final (la última parte de la alimentación) que contiene de dos cuerpo de la leche durante el reposo y puede perderse con múltiples
a tres veces más que la leche inicial (leche cruda) (Saarela et al., 2005). transferencias de leche y alimentación por sonda (Greer et al., 1984;
La composición de hidratos de carbono de la leche humana es Schanler, 1988). Las ventajas gastrointestinales de la leche humana
importante como fuente nutricional de lactosa y por la presencia de en comparación con la maternizada para prematuros incluyen un
oligosacáridos. Una consistencia más blanda de las heces, mayor flora vaciado gástrico más rápido, menos intolerancia a la alimentación y
fecal no patógena y una mejor absorción de minerales se han atribuido menos días de alimentación enteral completa (Schanler et al., 1999;
a pequeñas cantidades de lactosa no absorbida. Los oligosacáridos de Tudehope, 2013; Assad et al., 2016). Sin embargo, las concentraciones
la leche humana son polímeros bioactivos de hidratos de carbono (que de proteína, sodio y cinc disminuyen durante la lactancia, y las nece-
también incluyen glucoproteínas) que ayudan a proteger al recién naci- sidades de nutrientes del recién nacido prematuro siguen siendo más
do, porque su estructura imita los receptores de antígenos bacterianos altas que las de los recién nacidos a término. Por lo tanto, en contraste
específicos y evita la unión bacteriana a la mucosa del huésped. Algunos con el bebé a término, esta disminución fisiológica en la proteína de la
ejemplos de oligosacáridos de la leche humana (OLH) incluyen gluca- leche y el contenido de micronutrientes precede cualquier reducción en
nos fucosilados que inhiben específicamente la unión de Haemophilus las necesidades del recién nacido prematuro. Para el recién nacido de
influenzae, Campylobacter jejuni y algunos virus (Morrow et al., 2005). muy bajo peso al nacer (MBPN; < 1.500 g), la alimentación de leche
Los OLH también son prebióticos que estimulan el crecimiento de humana no enriquecida provoca insuficiencia de proteínas, manifestada
bifidobacterias no patógenas. por disminuciones en la velocidad del crecimiento y en los indicadores
Las concentraciones de calcio y fósforo en la leche humana son sig- bioquímicos disminuidos (nitrógeno ureico en sangre [BUN] y concen-
nificativamente más bajas que en otras leches; el calcio y el fósforo están traciones séricas de prealbúmina), e inadecuada salud ósea, marcada
presentes en formas más biodisponibles ligadas a proteínas digeribles y en por disminuciones en la concentración de fósforo sérico y aumentos en
estados complejos e ionizados (Neville y Watters, 1983). Por lo tanto, el la actividad de fosfatasa alcalina, en comparación con la alimentación
contenido mineral óseo de los lactantes alimentados al pecho es similar con leche maternizada para prematuros (Rowe et al., 1979; Cooper
al de los lactantes alimentados con leche maternizada (Venkataraman et al., 1984; Kuschel y Harding, 2004).
et al., 1992). Las concentraciones de cobre y cinc, a pesar de su dis- Por tanto, los recién nacidos con MBPN deberían recibir enri-
minución durante la lactancia, parecen adecuadas para satisfacer las quecedor de leche humana, un suplemento multinutriente diseñado
necesidades nutricionales del niño (Lonnerdal y Hernell, 1994). Sin para satisfacer sus necesidades nutricionales y prevenir enfermedades
embargo, la concentración de hierro no satisface las necesidades del recién por deficiencias y restricción del crecimiento. Un metaanálisis que
nacido a término de 4-6 meses, por lo que, a partir de aproximadamente compara la alimentación de leche humana enriquecida (frente a no
6 meses, se recomienda un suplemento de hierro por vía oral o alimentos enriquecida) muestra un aumento a corto plazo en el peso, la talla y
complementarios que contengan hierro para prevenir la subsiguiente el crecimiento de la circunferencia de la cabeza sin efectos adversos
anemia por deficiencia de hierro; los recién nacidos prematuros y de bajo (Kuschel y Harding, 2004). Además, la densidad ósea, el equilibrio de
peso al nacer deben recibir suplementos de hierro desde el nacimiento nitrógeno y los valores de BUN se incrementan con la leche humana
(Greer y Suttie, 1988; Baker et al., 2010; Qasem et al., 2015). enriquecida frente a la leche sin enriquecer (Quigley y McGuire, 2014).
El contenido de vitamina K en la leche humana en comparación con Enriquecer agrega no solo proteínas, calcio, fósforo y calorías, sino
las leches maternizadas enriquecidas es muy bajo, y se debe administrar también otros micronutrientes (tabla 67.4). Se ha desarrollado una
una única inyección de vitamina K en el nacimiento para prevenir el nueva clase de enriquecedores derivados de la leche humana pasteuri-
sangrado por deficiencia de vitamina K, una condición rara por la cual zada de donante (Sullivan et al., 2010). Se ha demostrado que el uso de
los recién nacidos alimentados al pecho corren un mayor riesgo (Greer una dieta exclusiva de leche humana, elaborada con enriquecedor a base
y Suttie, 1988; Shearer, 2009). El recién nacido alimentado al pecho de leche humana en lugar de enriquecedor de leche humana a base de
está particularmente en riesgo debido al bajo contenido de vitamina K leche bovina, consigue tasas más bajas de enterocolitis necrosante (EN)
de la leche humana y su asociación con el desarrollo de una microflora (Sullivan et al., 2010).
intestinal que produce menos vitamina K. El contenido de vitamina El enriquecedor de leche humana suele agregarse una vez que el
D en la leche humana depende del estado de la vitamina D materna. recién nacido prematuro tolera la alimentación por sonda, y su uso
Muchas mujeres tienen reservas insuficientes de vitamina D, y se ha continúa hasta que el recién nacido haya alcanzado todas las alimenta-
descrito una deficiencia de vitamina D que provoca raquitismo en los ciones orales, un peso de 1.800 g, o esté a punto de ser dado de alta del
recién nacidos alimentados al pecho, especialmente los que tienen una hospital (Tudehope, 2013; Tudehope et al., 2013; Underwood, 2013).
pigmentación oscura de la piel y/o exposición mínima a la luz solar La evidencia sobre el enriquecimiento multinutriente de la leche
(Weisberg et al., 2004). La administración de suplementos de vitamina D materna después del alta hospitalaria es limitada y, por lo tanto, los
por vía oral está indicada y puede realizarse ya sea dándole 400 unidades datos del metaanálisis no proporcionan una orientación convincente
internacionales (UI) diariamente o aconsejando a la madre que amaman- (Young et al., 2013). Sin embargo, el recién nacido probablemente se
ta que tome 6.400 UI/día (Wagner y Greer, 2008; Hollis et al., 2015). beneficiará de un plan individualizado que incluya suplementos o
enriquecimiento, soporte de lactancia materna y monitorización para
lograr un aumento de peso de más de 20 g/día hasta que se alcance el
Implicaciones nutricionales para el recién nacido crecimiento ajustado a la edad, crecimiento lineal de 0,5 cm/semana
prematuro y un nivel de fosfatasa alcalina menor de 450 IU/l (Groh-Wargo y
Thompson, 2014). Habitualmente, la dieta enriquecida se mantiene
La leche materna es la alimentación enteral preferida para los recién durante 3-6 meses, pero se debe evitar el crecimiento excesivo (es decir,
nacidos prematuros, aunque su adecuación nutricional puede estar subir más de dos percentiles de la gráfica de crecimiento).

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CAPÍTULO 67 Lactancia materna 997

TABLA  Composición de nutrientes de la leche humana extraños, y luego se elaboran anticuerpos específicos en las superficies
67.4 prematura con y sin enriquecedor de las mucosas y en la leche materna (Kleinman y Walker, 1979).
Tanto en los países en desarrollo como en los desarrollados, hay una
Leche Leche humana reducción en la mortalidad relacionada con la infección atribuible a la
Leche humana prematura lactancia materna, con una clara relación «dosis-respuesta». El concepto
humana prematura madura más dosis-respuesta se ha clasificado en las siguientes categorías: lactancia mater-
prematura madura leche humana na exclusivamente, predominantemente, parcialmente o nunca. El riesgo
(1 semana) (1 mes) enriquecida* relativo (RR) de muerte por todas las causas infecciosas es significativamen-
te mayor en recién nacidos de 0 a 5 meses que nunca fueron alimentados
Volumen (ml) 100 100 100 al pecho (RR, 8,66) o que fueron alimentados al pecho parcialmente (RR,
Energía (kcal) 67 69 83 4,56), e incluso que recibieron lactancia materna predominantemente,
pero no exclusivamente (RR, 1,7), cada uno en comparación con lactantes
Proteínas (g) 2,4 1,5 2,5-2,6 alimentados exclusivamente con leche materna de 0 a 5 meses. Los niños
Suero/caseína (%) 70/30 70/30 70/30 de 6 a 23 meses que nunca fueron alimentados al pecho, en comparación
con los alimentados al pecho alguna vez, tenían un riesgo de muerte 2,1
Grasa (g) 3,8 3,6 4-4,6 veces mayor (Sankar et al., 2015). En los países en desarrollo, la incidencia,
Triglicéridos de cadena 2 2 11-17 la prevalencia y la mortalidad por enfermedades diarreicas se reducen
media (%) significativamente con la lactancia. Cuando se comparó con la lactancia
materna exclusiva, la mortalidad causada por diarrea fue mayor entre
Hidratos de carbono (g) 6,1 6,7 7,1-8,5
los recién nacidos que nunca fueron alimentados al pecho (RR, 10,52),
Lactosa (%) 100 100 80-85 parcialmente alimentados al pecho (RR, 4,62) o predominantemente
alimentados al pecho (RR, 2,28) (Lamberti et al., 2011). Estos datos
Calcio (mg) 25 29 119-146
demuestran el beneficio «dependiente de la dosis» de la leche materna
Fósforo (mg) 14 9,3 59-76 para la prevención de la muerte causada por enfermedades diarreicas. Los
lactantes no alimentados al pecho de 0 a 11 meses, en comparación con los
Magnesio (mg) 3,1 2,4 3,4-9,4
que fueron alimentados al pecho predominantemente, también tenían un
Sodio (mEq, mmol) 2,2 0,9 1,6 mayor riesgo de muerte por enfermedad diarreica (RR, 11,73) (Lamberti
et al., 2011). Incluso cuando solo se consideran los recién nacidos en el
Potasio (mEq, mmol) 1,8 1,3 2-2,9
mundo desarrollado, el riesgo de enfermedad gastrointestinal inespecífica es
Cloro (mEq, mmol) 2,6 1,5 1,9-2,6 menor entre los recién nacidos de 0 a 11 meses que fueron alimentados al pe­
500 215 935-1.215
cho alguna vez en comparación con los que nunca fueron alimentados al
Cinc (µg)
pecho (Ip et al., 2007). La lactancia exclusiva durante los primeros 6 meses
Cobre (µg) 80 51 95-221 de vida reduce el riesgo de otitis media en niños menores de 2 años, y la
mayor duración también tiene un efecto protector (Bowatte et al., 2015).
Vitamina A (UI) 560 227 847-1.177
Este beneficio puede extenderse hasta la edad de 6 años (Li et al., 2014).
Vitamina D (UI) 4 1,2 122-151 Los datos mundiales indican que el riesgo de infección de las vías res-
piratorias inferiores (IVRI) aguda causada por el virus sincitial respiratorio
Vitamina E (mg) 1,0 0,3 3,5-4,9
aumentó en niños no alimentados al pecho (Shi et al., 2015), y el riesgo
*Los enriquecedores de leche humana Enfamil y Similac son formulaciones en polvo que de muerte por neumonía fue más alto en los lactantes no alimentados al
contienen proteínas bovinas (basadas en la adición de cuatro paquetes a 100 ml de leche hu­ pecho que en los alimentados al pecho exclusivamente de 0 a 5 meses, y
mana prematura madura). Los enriquecedores líquidos compuestos de proteínas de leche en los que nunca antes habían sido alimentados al pecho entre los 6 y los
bovina (líquido acidificante enriquecedor de leche humana Enfamil y líquido concentrado 23 meses (Lamberti et al., 2013). En los países desarrollados, después de
enriquecedor de leche humana Similac) y los enriquecedores líquidos a base de leche humana los ajustes por estancia en guarderías, exposición al humo del tabaco y
también están disponibles (enriquecedor de leche totalmente líquido Prolact + H2MF® [http://
www.prolacta.com/]). Los enriquecedores líquidos desplazan y, por lo tanto, reducen parte del
estado socioeconómico, los riesgos de hospitalización debido a IVRI fueron
volumen de leche humana que recibe el recién nacido. significativamente menores en los lactantes alimentados exclusivamente
kcal, kilocalorías; mEq, miliequivalentes; UI, unidades internacionales. con leche materna durante 4 meses frente a los que no recibieron leche
Tomado de Gross SJ, David RJ, Bauman L, Tomarelli RM. Nutritional composition of milk materna (Ip et al., 2017; tabla 67.6).
produced by mothers delivering preterm. J Pediatr. 1980;96:641–644; Butte NF, Garza C, Los estudios clínicos de todo el mundo durante varias décadas
Johnson CA, Smith EO, Nichols BL. Longitudinal changes in milk composition of mothers también han sugerido una disminución de las tasas de morbilidad en
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Tsang RC. Vitamin D. In: Tsang RC, Nichols BL, eds. Nutrition During Infancy. Philadelphia, PA:
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© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.

In: Tsang RC, Uauy R, Koletzko B, Zlotkin S, eds. Nutrition of the Preterm Infant. Scientific tad et al., 2005). La leche pasteurizada de donantes, en lugar de la
Basis and Practical Guidelines. Cincinnati, OH: Digital Educational Publishing; 2005:173–199, leche maternizada para prematuros, se recomienda actualmente para
y Schanler RJ, Atkinson SA. Human milk. In: Tsang RC, Uauy R, Koletzko B, Zlotkin S, eds. los recién nacidos cuyas madres no pueden proporcionar volúmenes
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Educational Publishing; 2005:333–356.
glu et al., 2013; Quigley y McGuire, 2014; AAP, 2015). Las diferentes
definiciones de «leche humana» (de madre frente a de donante, conge-
lada frente a fresca, mezclada con leche maternizada) y de volumen de
Defensas del huésped: prevención de infecciones toma de leche humana (ml/kg/día frente al porcentaje diario de ingesta
enteral o total) crean dificultades en la interpretación de los resultados;
Factores bioactivos, como la IgAs, la lactoferrina, la lisozima, los oli- sin embargo, los datos de los estudios que cuantifican la ingesta de leche
gosacáridos, los factores de crecimiento y los componentes celulares, humana sugieren que el efecto protector es: 1) optimizado por una dieta
aumentan las defensas activas del huésped recién nacido (tabla 67.5; exclusiva de leche humana, y 2) probablemente dependiente de la dosis.
Ballard y Morrow, 2013). Los recién nacidos también reciben inmu- Los recién nacidos prematuros que reciben su propia leche materna
nidad pasiva específica a través del eje inmunitario enteromamario, en tienen un riesgo significativamente menor de EN después del ajuste para la
el que la madre produce anticuerpos de IgAs en respuesta a antígenos edad gestacional, y un metaanálisis confirma la magnitud de estos resultados

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998 PA RT E XI I I Nutrición

TABLA
67.5  Algunos factores bioactivos de la leche humana

Inmunoglobulinas
IgA secretora Acción antiinfecciosa contra antígenos específicos
IgG Antimicrobiana
IgM Activación del complemento
Lactoferrina Inmunomodulación, quelación del hierro, acción antimicrobiana, antiadhesión, crecimiento y trofismo
intestinales
Lactoaderina Antivírica y antiinflamatoria
Lisozima Lisis bacteriana, inmunomodulación
k-caseína Antiadhesión, flora bacteriana
Oligosacáridos Estimula la colonización por organismos beneficiosos
Gangliósidos y glucosaminoglucanos Prevención de infecciones
Citocinas* Antiinflamatorias, proinflamatorias, función de barrera epitelial, reclutamiento de neutrófilos
Macrófagos Antiinfecciosos y activación de linfocitos T
Factores de crecimiento
Factor de crecimiento epidérmico Vigilancia luminal, reparación del intestino
Factor de crecimiento transformador Promueve el crecimiento epitelial (factor de crecimiento transformador α)
Suprime la función linfocítica (factor de crecimiento transformador β)
Factor de crecimiento nervioso Promueve el crecimiento neuronal
Factor de crecimiento del endotelio vascular Promueve la angiogenia y la reparación tisular
Factor de crecimiento similar a la insulina Promueve el crecimiento
Factor inhibidor de la migración de los macrófagos Previene el movimiento de los macrófagos
Hormonas
Adiponectina Reducción del IMC del niño, antiinflamatoria
Leptina Regulación del IMC y del apetito del niño
Calcitonina Promueve el desarrollo de neuronas entéricas
Somatostatina Regula el crecimiento del epitelio gástrico
Enzimas
Factor acetilhidrolasa activador de las plaquetas Bloquea la acción del factor activador de las plaquetas
Glutatión peroxidasa Previene la oxidación lipídica
Nucleótidos Aumenta la respuesta de los anticuerpos, flora bacteriana
Vitaminas A, E, C Antioxidantes
Glutamina (aminoácido) Combustible para las células intestinales, respuesta inmunitaria
Lípidos Propiedades antiinfecciosas
Mucinas 1 y 4 Bloquea a los agentes infecciosos

*Incluye interleucinas 6, 7, 8 y 10, factor de necrosis tumoral α, factor de crecimiento transformante β e interferón γ.
IMC, índice de masa corporal.
Modificado de Schanler RS, Krebs N, and Mass S, eds. AAP/ACOG Breastfeeding Handbook for Physicians. Elk Grove, IL: American Academy of Pediatrics; 2013:77, y Ballard O, Morrow AL. Human milk
composition: nutrients and bioactive factors. Pediatr Clin North Am. 2013;60:49–74.

(Ip et al., 2007; Sisk et al., 2007; Meinzen-Derr et al., 2009). La leche humana leche humana/kg/día), y costes de UCIN significativamente más bajos. La
de donantes también es protectora contra EN en recién nacidos prematuros en alimentación con leche humana exclusiva, en comparación con todas las otras
comparación con la maternizada (v. más adelante) (Arslanoglu et al., 2013; dietas, se asoció con un menor riesgo de EN (P < 0,011), menos días con
Quigley y McGuire, 2014; Kantorowska et al., 2016). El riesgo de sepsis alimentación enteral completa (P < 0,001) y un menor coste de hospitaliza-
de inicio tardío probablemente se reduzca con la alimentación con leche ción (ahorros de hasta 106.968 dólares por recién nacido) (Patel et al., 2013;
humana (Schanler et al., 1999; Furman et al., 2003; Ronnestad et al., 2005; Assad et al., 2016). Las tasas de retinopatía del recién nacido prematuro en
Cossey et al., 2013; Pammi y Weisman, 2015). La duración de la estancia cualquier etapa y de retinopatía grave disminuyen con la alimentación con
en la UCIN es más corta para lactantes alimentados con leche humana: se leche humana, y se observa una relación dosis-respuesta (Zhou et al., 2015).
ha observado una relación directa entre menor riesgo de morbilidad y dosis La alimentación exclusiva con leche humana también se asocia con un riesgo
de leche humana (el 19% menos de riesgo por cada 10 ml adicionales de reducido de displasia broncopulmonar (Spiegler et al., 2016).

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CAPÍTULO 67 Lactancia materna 999

TABLA
67.6  Beneficios de la lactancia materna para recién nacidos y madres

Intervalo
Cociente de confianza
Enfermedad Comparación de posibilidades al 95%
Beneficios maternos Todos por cada 12 meses adicionales de lactancia
Cáncer de mama 0,74 0,69-0,79
Cáncer de ovario 0,63 0,56-0,71
Hipertensión 0,89 0,84-0,93
Hiperlipidemia 0,81 0,76-0,87
Enfermedad cardiovascular 0,80 0,65-0,97
Diabetes de tipo 2 RR, 0,91 0,86-0,96
Beneficios para los bebés/niños
Enfermedades infecciosas
Todas las causas, 0-5 meses Nunca frente a LM exclusiva RR, 8,66 3,19-23,5
Todas las causas, 6-23 meses LM siempre frente a nunca RR, 2,09 1,68-2,60
Otitis media, < 2 años LM exclusiva ≥ 6 meses 0,57 0,44-0,75
LM siempre frente a nunca 0,67 0,56-0,80
Enfermedad gastrointestinal, 0-11 meses LM siempre frente a nunca 0,36 0,32-0,41
IVRI por el VSR LM siempre frente a nunca 2,24 1,56-3,20
Muertes mundiales por neumonía a los 0-5 meses LM nunca frente a exclusiva RR, 14,97 0,67-332,74
Muertes mundiales por neumonía a los 6-23 meses LM nunca frente a exclusiva RR, 1,92 0,79-4,68
Hospitalizaciones por enfermedades respiratorias LM exclusiva durante 4 meses frente a LM nunca RR, 0,28 0,14-0,54
Enfermedades no infecciosas
Leucemia infantil LM durante al menos 6 meses 0,81 0,73-0,89
Caries dental infantil LM hasta los 12 meses 0,50 0,25-0,99
Asma a las edades de 5-18 años LM siempre frente a nunca 0,88 0,82-0,95
Más frente a menos LM 0,90 0,84-0,97
Eccema < 2 años LM exclusiva hasta los 4 meses 0,74 0,57-0,97
Enfermedad alérgica < 5 años 0,79 0,63-0,98
SMSL LM exclusiva SOR, 0,27 0,24-0,31
LM siempre frente a nunca SOR, 0,55 0,44-0,69
ROP
  ROP grave LH exclusivamente frente a alimentación con leche 0,10 0,04-0,29
maternizada
  Cualquier grado de ROP Cualquier LH frente a alimentación con leche 0,42 0,08-2,18
maternizada
Enterocolitis necrosante 0,17 0,04-0,68
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≥ 50% de LH en los primeros 14 días frente a menos


del 50% de alimentación con LM

Análisis univariante del cociente de posibilidades para lactancia exclusiva y análisis multivariante para cualquier tipo de lactancia.
IVRI, infección de las vías respiratorias inferiores; LH, leche humana; LM, lactancia materna; ROP, retinopatía del prematuro; RR, riesgo relativo; SMSL, síndrome de muerte súbita del lactante; SOR, sumario
de cociente de posibilidades; VSR, virus sincitial respiratorio.

Enfermedades crónicas de la infancia (v. tabla 67.6). Entre estos se encuentran las enfermedades inflamatorias
intestinales y la diabetes de tipo 1, cada uno con un efecto protector
Los datos de estudios epidemiológicos sugieren que ciertos trastornos con una evidencia limitada o dudosa (Klement et al., 2004; Patelarou
crónicos tienen una menor incidencia en niños que fueron alimenta- et al., 2012; Silano et al., 2016). Se ha asociado la lactancia materna
dos al pecho cuando eran recién nacidos; sin embargo, las relaciones durante 6 meses o más con un riesgo reducido del 19% de leucemia
causales entre la lactancia materna y los indicadores de salud de interés infantil (Amitay y Keinan-Boker, 2015). La caries dental se reduce
son difíciles de analizar, debido a la naturaleza de los estudios realizados con una duración más prolongada de la lactancia, aunque la lactancia

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1000 PA RT E XI I I Nutrición

materna después de los 12 meses puede incluso aumentar el riesgo 18-22 meses y a los 30 meses de edad se ha correlacionado con la
(Tham et al., 2015). Los datos son contradictorios con respecto a las recepción de leche humana enriquecida durante la hospitalización. La
enfermedades alérgicas. Un metaanálisis muestra un riesgo reducido de magnitud del efecto a los 18-22 meses fue mayor en el quintil más alto
asma entre los 5 y los 18 años en los niños que han recibido siempre (> 80%), con un promedio de 110 ml/kg por día de leche humana.
lactancia materna frente a los que no la han recibido nunca, y en los A los 30 meses, el efecto persistió de tal manera que, por cada 10 ml/kg
que más han recibido frente a los que menos, sin impacto cuando se por aumento de 1 día en la leche humana, el índice de desarrollo mental
estratifica por atopia familiar (Lodge et al., 2015). La reducción del aumentó 0,59 puntos, el índice de desarrollo psicomotor aumentó
riesgo de eccema antes de los 2 años, pero no después, se asoció con 0,56 puntos y los percentiles de comportamiento total aumentaron
la lactancia materna exclusiva durante 3-4 meses (Lodge et al., 2015). 0,99 puntos (Vohr et al., 2016, 2017).
La lactancia materna no reduce específicamente el riesgo de alergias El vínculo madre-hijo también mejora durante la lactancia (Feldman
alimentarias, aunque parece reducir el riesgo de enfermedad alérgica et al., 2007; Galbally et al., 2011). La base biológica probable para esta
generalizada antes de los 5 años de edad (Lodge et al., 2015). observación universal es la oxitocina, que causa el reflejo de eyección
Parece haber una relación inversa entre la exclusividad y la duración de la leche durante la lactancia, y sirve como neurotransmisor central
de la lactancia materna y el riesgo de obesidad y sobrepeso en la infancia que afecta directamente a las conductas maternas, la interacción social
y la edad adulta (metaanálisis que muestra un cociente de posibilidades madre-recién nacido, la mirada, las vocalizaciones y el contacto afec-
(OR, odds ratio) de 0,74; intervalo de confianza [IC] al 95%, 0,7-0,78) tuoso (Britton et al., 2006).
(Ip et al., 2007; Horta et al., 2015b). Esta asociación es más estrecha para
los estudios que evalúan la lactancia materna exclusiva y para los que Mortalidad infantil
informan de niños en comparación con adultos, y es más débil para
los estudios con un gran número de participantes (> 1.500) y para El riesgo de muerte por cualquier causa en todo el mundo fue
los que ajustaron los datos para los factores de confusión relevantes, mayor entre los niños de 0 a 5 meses que no recibieron lactancia
incluyendo IMC materno, peso al nacer para la edad gestacional y natural (RR, 14,4), la recibieron parcialmente (RR, 4,8) y la reci-
factores socio­económicos. Aunque es difícil eliminar los posibles factores bieron de forma predominante (RR, 1,5) en comparación con los
de confusión residual por datos de estilo de vida difíciles de medir, los que la recibieron exclusivamente (Sankar et al., 2015). Los niños
estudios de alta calidad realizados en entornos de ingresos altos, medios de 6-23 meses que no fueron alimentados al pecho tuvieron una
y bajos muestran una reducción del 13% en el riesgo de obesidad con mayor mortalidad por todas las causas que los que continuaron
la lactancia materna (sumario de OR, 0,87; IC al 95%, 0,76-0,99) (Ip amamantando: la mortalidad disminuyó con la exclusividad y la
et al., 2007; Horta et al., 2015b). Los mecanismos biológicamente duración de la lactancia, pero cualquier lactancia materna fue pro-
plausibles para este efecto incluyen una mejor autorregulación de la tectora (Sankar et al., 2015). La lactancia también parece proteger
ingesta de energía que cuando se alimentan de la mama (Li et al., 2012), contra el síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL) (Hauck
mayor porcentaje de ingesta de proteínas/energía entre los alimentados et al., 2011). En un metaanálisis, el riesgo de muerte súbita del
con leche maternizada que los lactantes alimentados con lactancia lactante se redujo para lactantes alimentados exclusivamente con
natural con mayor obesidad neonatal y, por lo tanto, obesidad infantil leche materna y para cualquiera duración de la lactancia (Hauck
(Heinig et al., 1993; Rolland-Cachera et al., 1995; Stettler et al., 2002), et al., 2011). Aunque se desconoce un mecanismo directo, el efecto
diferencias en la liberación de insulina y otras hormonas intestinales y es potente y dependiente de la dosis, y no aparece solo como un
pancreáticas en lactantes alimentados con leche maternizada frente a marcador de los factores de confusión, como el tabaquismo pasivo
lactancia natural que pueden alterar los patrones de depósitos de grasa o los factores demográficos.
(Lucas et al., 1980), y un riesgo reducido de diabetes mellitus de tipo 2
con la lactancia natural (Horta et al., 2015b). Además, las hormonas en
la leche materna, incluida la leptina, la adiponectina y la grelina, parecen
Beneficios maternos
regular el apetito, el crecimiento, los depósitos de grasa y el equilibrio Existen numerosos beneficios de la lactancia para la madre (v. tabla 67.6).
energético, lo que puede explicar las diferencias en la composición La lactancia tiene un efecto beneficioso sobre el metabolismo de los
corporal temprana y el IMC posterior entre lactantes alimentados al lípidos y la glucosa, y se asocia con una reducción significativa del riesgo
pecho y los que reciben lactancia artificial (Savino et al., 2009; Kon de diabetes de tipo 2 y morbilidad cardiovascular (Schwarz et al., 2009;
et al., 2014). Ni la presión arterial ni los niveles de colesterol en etapas Aune et al., 2014; Chowdhury et al., 2015). Múltiples estudios han
posteriores de la vida parecen verse afectados por la lactancia (Owen documentado una incidencia significativamente menor de cáncer de
et al., 2008; Horta et al., 2015b). mama en mujeres premenopáusicas y de cáncer de ovario en mujeres
que han amamantado (Collaborative Group on Hormonal Factors in
Breast Cancer, 2002; Chowdhury et al., 2015). Ni la pérdida de peso
Aspectos neuroconductuales posparto rápida ni los cambios en la densidad mineral ósea son atribui-
Ha sido dificil de determinar si una mejoría en la capacidad cognitiva bles a la lactancia materna; sin embargo, el riesgo de hemorragia pos-
es atribuible a la lactancia materna y/o a la leche humana. El desa- parto puede reducirse mediante la lactancia combinada con el cuidado
cuerdo se mantiene incluso cuando: 1) los resultados se ajustan para piel con piel, aunque se necesitan estudios adicionales (Chowdhury
los factores de confusión principales de inteligencia, educación y clase et al., 2015; Abedi et al., 2016). La depresión posparto aparece al cesar
socioeconómica materna, y 2) solo se incluyen los estudios que cumplen la lactancia materna, aunque no se sabe si la lactancia materna puede
estándares rigurosos (Ip et al., 2007). Sin embargo, un metaanálisis con reducir directamente la depresión posparto (Dias y Figueiredo, 2015).
criterios de estudio estrictos encontró que la lactancia materna se asoció La lactancia materna exclusiva retrasa la reanudación de los ciclos
positivamente con una ganancia promedio de 3,44 puntos (IC al 95%, ováricos normales y el retorno de la fertilidad, probablemente debido
2,3-4,58 puntos) en las pruebas de inteligencia en la infancia y la adoles- a un nivel elevado de prolactina (McNeilly, 1993). El método de la
cencia para las personas amamantadas. Cuando solo se examinaron los amenorrea de la lactancia, definido por lactancia materna completa
estudios de mayor calidad (n = 4 con tamaño de muestra > 500, tiempo (24 h), sin reanudación de la menstruación, y la edad del lactante
de recordatorio de lactancia < 3 años, controlado para la inteligencia menor de 6 meses son un programa anticonceptivo global altamente
materna), la ganancia en las pruebas de inteligencia todavía fue signifi- efectivo con tasas de eficacia del 98,5-100% (Peterson et al., 2000;
cativa (1,76 puntos; IC al 95%, 0,25-3,26 puntos) (Horta et al., 2015a). WHPO, 2017). Por lo tanto, la lactancia materna puede contribuir al
El neurodesarrollo entre los recién nacidos de muy bajo peso al espaciamiento entre el nacimiento de niños, lo que además mejora la
nacer medido por las Bayley Scales of Infant Development II a los salud materna e infantil.

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CAPÍTULO 67 Lactancia materna 1001

Impacto social de la lactancia materna • CUADRO 67.2  Contraindicaciones


Desde una perspectiva económica nacional, se ha estimado que, si de la lactancia materna
todos los recién nacidos fueran inscritos en el programa WIC (pro-
grama de nutrición suplementaria para mujeres, lactantes y niños) para Maternas
alimentarlos al pecho exclusivamente durante los primeros 6 meses Tuberculosis miliar materna activa no tratada: evitar la lactancia materna y
el contacto con el recién nacido hasta que reciba tratamiento y ya no sea
de vida, los costes de los envasados de alimentos se reducirían en un
contagiosa (aproximadamente 2 semanas)
18%, logrando aproximadamente un ahorro de 1,2 millones de dólares
Lesiones herpéticas activas en la mama: evitar la lactancia materna hasta que
(Institute of Medicine, 2010; Hartmann et al., 2012; US Department se resuelvan las lesiones activas en la mama y el pezón. El herpes vaginal
of Agriculture, Food and Nutrition Service, 2015). Se pueden obte- no es una contraindicación
ner ahorros adicionales a partir de una reducción del gasto en leche Lesiones activas por varicela en la mama: extraiga la leche hasta que las lesiones
maternizada en los hogares y los costes de atención médica, con una estén secas; administre inmunoglobulina de varicela al recién nacido
menor ausencia de trabajo de los padres debido a la disminución de Infección activa por el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH): la infección activa
las tasas de enfermedad experimentadas por los lactantes alimentados por el VIH no es una contraindicación absoluta en los países en vías de desarrolloa
con leche materna. Los costes disminuyen significativamente con cada Infección por el virus linfótropo humano T activo (tipos 1 y 2)
mes adicional de amamantamiento y por cada mes de vuelta al trabajo El uso de drogas ilícitas es una contraindicación absolutab
después de 3 meses (Cattaneo et al., 2006). Los análisis de costes que Las mujeres libres de drogas que consumen metadona pueden amamantar
estiman la carga de la lactancia subóptima para la salud materna por sí Quimioterapia o radioterapia para el tratamiento del cáncer: durante el
solos predijeron una pérdida directa de 733,7 millones de dólares para tratamiento, solicite la consulta acerca de los estudios de diagnóstico que le
la sociedad. Análisis similares mostraron que, si el 80% de las familias de soliciten sobre la radiación recibida, para determinar el tiempo en el que se
EE. UU. amamantaran exclusivamente durante 6 meses, se ahorrarían debe desechar la leche extraída
10.500 millones de dólares y se evitarían 741 muertes infantiles (Bartick Enfermedad materna aguda por el virus de la gripe porcina (gripe H1N1):c
y Reinhold, 2010; Bartick et al., 2013). Por tanto, los extraordinarios si la madre está enferma, lo ideal es que su recién nacido sea alimentado
incentivos sociales y económicos de la lactancia materna justifican que con la leche materna extraída por alguien que no esté enfermo
se fomente para todas las madres y sus hijos.
Infantiles
Galactosemia: la lactosa no se puede ingerir y es el hidrato de carbono
Contraindicaciones de la lactancia materna de la leche materna
Otras metabolopatías congénitas requieren consulta con respecto a los defectos
Existen pocas contraindicaciones absolutas para la lactancia materna metabólicos específicos
(cuadro 67.2; AAP/ACOG, 2012; CDC, 2016). A las madres con
fiebre u otras enfermedades menores se les debe permitir amamantar, a
«Desde 2010, la Organización Mundial de la Salud ha recomendado que las madres infectadas con
ya que el recién nacido ya ha estado expuesto al agente infeccioso y el VIH tomen ARV [medicamentos antirretrovirales] y amamanten exclusivamente a sus recién nacidos
durante 6 meses, luego introduzcan alimentos complementarios apropiados y continúen amamantando
podrá beneficiarse de la inmunidad desarrollada por la madre si la
hasta que el niño cumpla el primer año… Incluso cuando los ARV no están disponibles, se debe
lactancia materna puede continuar. Pocos medicamentos maternos aconsejar a las madres que amamanten exclusivamente durante 6 meses y continúen amamantando
contraindican la lactancia materna, y hay opciones alternativas dis- a partir de ese momento, a menos que las circunstancias ambientales y sociales sean seguras y
ponibles en la mayoría de los casos. La Drugs and Lactation Database favorezcan la alimentación con leche maternizada». Recomendaciones de la Organización Mundial
de la National Library of Medicine de los National Institutes of Health de la Salud disponibles en http://www.who.int/mediacentre/factsheets/fs342/en/.
b
estadounidenses (https://toxnet.nlm.nih.gov/newtoxnet/lactmed.htm) La American Academy of Obstetricians and Gynecologists (Committee opinion no. 637: Marijuana
use during pregnancy and lactation. American College of Obstetricians and Gynecologists. Obstet
es un recurso óptimo y debe consultarse (US National Library of
Gynecol 2015; 126:234-8) y la American Academy of Pediatrics (http://pediatrics.aappublications.
Medicine, 2015). Las madres que se han sometido a cirugía de reduc- org/content/135/3/584) desaconsejan firmemente el consumo de cannabis durante la lactancia; los
ción mamaria o implante mamario pueden amamantar, pero deben autores del capítulo reconocen que la evidencia es limitada y la atención individualizada es importante.
colaborar estrechamente con un especialista en lactancia, porque el c
Véanse las recomendaciones de los Centers for Disease Control and Prevention «2009 H1N1 Flu (Swine
suministro de leche puede verse afectado negativamente si se cortan Flu) and Feeding Your Baby: What Parents Should Know» en http://www.cdc.gov/h1n1flu/infantfeeding.htm.
los conductos o los nervios durante la cirugía. Datos tomados de Kimberlin DW, Brady MT, Jackson MA, Long SS. Red book: 2015 report of the
Committee on Infectious Diseases. Elk Grove, IL: American Academy of Pediatrics, 2015; Division
of Nutrition, Physical Activity, and Obesity, National Center for Chronic Disease Prevention and Health
Anatomía y fisiología de la lactancia Promotion, Centers for Disease Control and Prevention. Diseases and Conditions. When should
a mother avoid breastfeeding? http://www.cdc.gov/breastfeeding/disease; 2016, y Hill M, Reed K.
La leche materna la producen las células alveolares mamarias de la Pregnancy, breast-feeding, and marijuana: a review article. Obstet Gynecol Surv 2013;68:710–718.
mama después del parto. La glándula mamaria es una glándula de
la piel muy evolucionada, y los vestigios rudimentarios se ven por primera
vez durante la sexta semana en el embrión. La mamogenia, o desarrollo
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de las mamas, comienza durante la pubertad con un aumento en el reducción mamaria, ya que los principales nervios y conductos lácteos
tamaño de los senos, debido principalmente al desarrollo de estrógenos pueden haber sido seccionados involuntariamente o dañados durante
y el desarrollo lobuloalveolar facilitado predominantemente por la la cirugía, con riesgo de reducción del suministro de leche.
progesterona. Durante el embarazo, con la acción de estas hormonas y La lactogenia comienza a mediados del embarazo, aunque la secre-
otras, incluida la prolactina y la coriomamotropina, el tejido glandular ción real de leche no se produce en este momento, debido a los altos
de la mama se diferencia aún más, y el epitelio alveolar prolifera y niveles circulantes de progesterona (y probablemente de los estrógenos).
posteriormente se vuelve secretor. Los estudios de investigación que Durante el embarazo, se produce la diferenciación secretora de las células
utilizan ultrasonidos (fig. 67.1) muestran que los conductos lácteos se epiteliales mamarias en lactocitos, que tienen la capacidad de producir
ramifican cerca del pezón, que su número es más bajo y más variable componentes lácteos: esto se conoce como lactogenia I. Al final de la ges-
de lo que se creía anteriormente, que la mayoría del tejido glandular tación, los alvéolos se llenan con proteínas, que incluyen IgAs, y leucocitos
está cerca del pezón y que los «senos galactóforos» que se pensaba que y células descamadas: este fluido glandular es el calostro. La lactogenia II,
almacenaban leche no existen (Ramsay et al., 2005). Estos hallazgos o activación secretora de los lactocitos (conocida coloquialmente como
tienen implicaciones para la extracción manual de la leche materna, ya «subir la leche»), generalmente ocurre entre el día 2 y el día 8. Esta fase,
que la presión inadvertida alrededor del pezón puede inhibir el flujo definida por la aparición copiosa de secreción de leche, se desencadena por
de leche y la lactancia materna después de la cirugía de aumento o el nacimiento y la disminución del nivel de progesterona asociado con la

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1002 PA RT E XI I I Nutrición

• Figura 67.1  Anatomía de la mama. 1. Conductos mamarios ramificados cerca del pezón. 2. Los
senos galactóforos descritos por convención no existen. 3. El tejido glandular se encuentra cerca del
pezón. 4. La grasa subcutánea es mínima en la base del pezón. (Tomado de Medela AG. Old vs new
anatomy. Disponible en http://www.medelabreastfeedingus.com/for-professionals/cbe-information/106/
breast-anatomy-research.)

eliminación de la placenta. Se requieren niveles adecuados de prolactina y


cortisol circulante, y es probable que otras hormonas, como la insulina y la
hormona tiroidea, desempeñen un papel secundario. Durante este tiempo,
el volumen diario de leche aumenta de aproximadamente 50 a 500 ml, y
se produce leche de transición, leche que está literalmente en transición
de calostro a leche madura en cuanto a su composición (Neville, 1999;
Neville et al., 2001; Pang y Hartman, 2007).
El control de la lactogenia es completamente hormonal. La eviden-
cia sugiere que la eliminación de la leche o la succión del lactante no
son necesarias para los cambios programados de la lactogenia, aunque
la extracción de la leche puede mejorar la eficiencia de la secreción tem-
prana de la leche (Neville et al., 2001). El retraso de la lactogenia tardía
II se ha asociado con la retención placentaria (fallo en la disminución
de los niveles de progesterona después del parto), hipotiroidismo, parto
por cesárea y parto prematuro. También hay asociaciones con factores
relacionados con el metabolismo de la glucosa, incluida la diabetes
insulinodependiente materna, el IMC materno elevado, y el mayor
IMC y el mayor peso del niño al nacer (Nommsen-Rivers et al., 2012).
Si la madre comienza a alimentar a su recién nacido al pecho • Figura 67.2  Unidad de secreción láctea: unidad conducto-lobulillar.
(o extraer leche del pecho), la siguiente fase de la lactancia, llamada a, alvéolos; c, conductillos; CP, células plasmáticas. (Tomado de Neville
galactopoyesis o mantenimiento de la secreción de leche, comienza aproxi- MC. Milk secretion: an overview. Disponible en http://www.health-e-lear-
madamente al día 9 del posparto y continúa hasta el destete y la involu- ning.com/articles/Neville_MILK_SECRETION_2008.pdf.)
ción del pecho. El control de la galactopoyesis es tanto endocrino como
autocrino. La prolactina y el cortisol son necesarios para la producción de la hormona oxitocina, que se produce en la hipófisis posterior. La
de leche: la prolactina se une a los receptores de las células epiteliales secreción de oxitocina es estimulada por la succión del recién nacido y
y es responsable de activar los genes de la proteína de la leche para la otros estímulos sensoriales que imitan al recién nacido, como el llanto,
α-lactoalbúmina y la caseína. La síntesis de leche se mantiene entre 700 la vista, el olfato y el tacto. Los receptores de elasticidad en el sistema
y 800 ml/día durante la lactancia, pero el volumen real de leche depende ductal canalicular se activan, y las terminaciones nerviosas aferentes
de la eliminación de la leche. Con el vaciado incompleto de la mama envían una señal al sistema nervioso central. Los lactocitos alveolares
debido a la infrecuente o ineficiente succión del recién nacido, la síntesis están envueltos en células mioepiteliales que carecen de inervación, pero
de leche se ajusta a la baja debido a una proteína de suero de leche tienen receptores de oxitocina (fig. 67.2). En presencia de oxitocina,
producida a nivel local llamada inhibidora de la lactancia (FIL). La FIL extraen la leche en los conductos, lo que lleva a la eyección de la leche.
parece actuar sobre los receptores de células alveolares para disminuir su La prolactina se origina en la parte anterior de la hipófisis y, aunque
sensibilidad a la prolactina y, por lo tanto, para disminuir la producción la secreción también es estimulada por la succión, la producción de
de leche. Los mecanismos celulares para la síntesis y secreción de leche prolactina no se inhibe por el dolor y el estrés como la oxitocina, y el
se describen en otro apartado (Neville, 1999; Neville et al., 2001). reflejo de eyección de la leche no depende directamente de ella.
La leche que se acumuló en los alvéolos no puede fluir pasivamente Durante el destete o períodos más prolongados de succión en el
a los conductos. La eyección real de la leche, o galactocinesis, depende pecho, los niveles de prolactina descienden. Las uniones estrechas entre

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CAPÍTULO 67 Lactancia materna 1003

los lactocitos alveolares parecen abrirse y permitir el paso de electrólitos, • CUADRO 67.3  Factores de riesgo de fracaso
incluidos el sodio y el cloruro. El nivel elevado de sodio en la leche
o dificultad de la lactancia
materna está asociado con varias situaciones clínicas, que incluyen la
involución y la remodelación de la glándula mamaria, que ocurre con Factores maternos
el cese de la secreción de leche (Lawrence et al., 2016). Enfermedad crónica materna (p. ej., fibrosis quística, diabetes de tipo 1 o 2)
Anatómicos
Manejo de la lactancia materna Cirugía previa de los senos
Pezones invertidos, el tamaño del pezón no coincide con la boca del infante
El manejo de la lactancia comienza antes del embarazo (AAP/ACOG, Forma de la mama tubular o variante (el tamaño por sí mismo no es un factor)
2012; ACOG, Optimizing Support for Breastfeeding, 2016). La edu- Obesidad
cación formal prenatal sobre lactancia (paso 3 de la IHAN), además Antecedentes de dificultad de amamantar
de la información personalizada ofrecida durante las visitas prenatales, Complicaciones perinatales (p. ej., hemorragia, hipertensión/preeclampsia,
impacta positivamente en la lactancia exclusiva y el amamantamiento shock, infección)
a los 6 meses (protocolo clínico 19 de la Academy of Breastfeeding Parto por cesárea
Medicine [ABM], Breastfeeding Promotion in the Prenatal Setting, Parto múltiple (gemelos, trillizos, etc.)
http://www.bfmed.org/Resources/Protocols.aspx; Lawrence et al., Separación madre-hijo
2016). Lo ideal es que la educación sobre la lactancia materna y la Secundarios: traumatismo en el pezón, dolor en el pezón, ingurgitación
función de las glándulas mamarias se enseñe en la escuela secundaria
y se continúe durante todo el ciclo de la vida reproductiva. En apoyo Factores infantiles
de este enfoque, la intención prenatal materna de amamantar parece Parto prematuro < 34 semanas
ser el mejor predictor del inicio y la duración de la lactancia (Donath Parto prematuro tardío (34-36 semanas de gestación)
et al., 2003; Stuebe y Bonuck, 2011). Los servicios obstétricos deberían Parto a término temprano a las 37 semanas
promover la discusión sobre la lactancia materna como una opción Peso al nacer grande o pequeño para la edad gestacional
Agarre al pecho ineficaz en las primeras 24 h
basada en la evidencia, y deberían alentar y apoyar a las madres a
Anomalía anatómica o congénita
establecer sus propias metas de amamantamiento.
Trisomía
Malformación congénita grave
Atención hospitalaria Micrognatia, síndrome de Pierre Robin
Fisura palatina o labio leporino
También se ha demostrado que el manejo hospitalario en la sala de Macroglosia o anquiloglosia
partos y los protocolos posparto madre-hijo (v. cuadro 67.1) impactan Anomalía neurológica con hipotonía o hipertonía
en las tasas de lactancia (Kramer et al., 2001; Philipp et al., 2001; Ingreso en la unidad de cuidados intensivos neonatales/complicaciones
DiGirolamo et al., 2008; Rosenberg et al., 2008; AAP, Breastfeed­ perinatales (p. ej., encefalopatía hipóxico-isquémica, neumonía)
ing and the use of Human Milk, 2012; Moore et al., 2012; Sinha Recién nacido soñoliento por cualquier causa
et al., 2015; Yotebieng et al., 2015; Olaiya et al., 2016). Tal como se Separación madre-hijo
resume en el protocolo clínico 5 de la ABM, Peripartum Care, y en Secundarios: suplementos más de una vez en 24 h, peso > 7% por debajo
el protocolo clínico 7, Model Hospital Policy (http://www.bfmed. del peso al nacer, uso excesivo del chupete
org/Resources/Protocols.aspx), los protocolos escritos del hospital
deben promover y apoyar la lactancia materna para cada díada madre-
lactante alimentada al pecho, según las recomendaciones de la AAP
y la OMS, maximizar la capacidad de cada madre para alcanzar sus alimentación en el pecho 8-12 veces en 24 h, teniendo en cuenta los
propios objetivos de lactancia materna y maximizar la oportunidad de gestos de hambre del recién nacido (reflejo de enraizamiento, succión
cada lactante de recibir alimentos completos de leche materna (paso 1 del puño, alerta); 4) amamantamiento en ambos senos, cada alimenta-
de la IHAN) (AAP, Breastfeeding and the use of Human Milk, 2012; ción de hasta 15-20 min por lado o hasta que haya signos de saciedad
Feldman-Winter et al., 2012; Sample Hospital Breastfeeding Policy for infantil (menos ráfagas de succión, pausas más largas, somnolencia), y
Newborns, 2016). Los pasos 10 de la IHAN sirven como una guía útil 5) que la madre se sienta cómoda con la alimentación del recién nacido
y basada en evidencia para la política hospitalaria (v. cuadro 67.1). Cada en el pecho. Deben identificarse factores de riesgo tanto maternos
paso basado en la evidencia puede requerir cambios en las prácticas como infantiles para la lactancia (cuadro 67.3) en las primeras horas
arraigadas del hospital que no son propicias para la lactancia materna. después del nacimiento para que las intervenciones para promover
Por ejemplo, se debe alentar a las madres a que amamanten al recién la salud materna e infantil y el proceso de lactancia puedan iniciarse
nacido en la primera hora después del nacimiento (paso 4 de la IHAN). rápidamente, y este proceso de evaluación debe realizarse durante toda
Los recién nacidos que se colocan piel con piel en el abdomen de la la estancia hospitalaria.
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madre unos minutos después del nacimiento pueden iniciar un «ras-


treo» hacia el seno y el pezón, agarrarse y comenzar a succionar (http://
www.breastcrawl.org/video.shtml). Las rutinas médicas necesarias Agarre al pecho
de identificación infantil, secado, calor, evaluación y administración «Agarrarse bien al pecho» es la piedra angular de una lactancia exitosa,
de gotas oftálmicas profilácticas y vitamina K pueden retrasarse con porque permite una transferencia de leche adecuada al recién nacido y
seguridad hasta después de la primera lactancia para recién nacidos previene el dolor en el pezón de la madre. Se encuentran disponibles
sanos (AAP, Breastfeeding and the use of Human Milk). vídeos breves que demuestran cómo ayudar a una madre a lograr que
se coja bien (https://www.ameda.com/education/baby-knows-latch/).
Manejo inicial La toma en el pecho es diferente de la alimentación con biberón,
ya que el recién nacido extrae la leche de detrás del pezón mien-
Los recién nacidos sanos normales pueden agarrarse al seno en la pri- tras amamanta en lugar de chupar para provocar el flujo. Hay varias
mera hora después del nacimiento. Los objetivos para el recién nacido maneras de mantener a un recién nacido alimentado al pecho, pero,
durante la fase posparto incluyen: 1) el logro del agarre al pecho en para lograr que se coja bien, la madre y el recién nacido deben estar
las primeras horas después del nacimiento; 2) la capacidad de trans- boca abajo, independientemente de la posición de sujeción, con el
ferir leche (o calostro) adecuadamente en cada alimentación; 3) la recién nacido frente al cuerpo de la madre (AAP/ACOG, 2012). La

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1004 PA RT E XI I I Nutrición

madre puede sostener su pecho detrás de la aréola usando una sujeción Crecimiento del lactante alimentado al pecho
con cuatro dedos debajo del pezón y el pulgar arriba. A continuación,
acaricia el labio superior medio del recién nacido con su pezón y, una La tasa y el patrón de aumento de peso de los lactantes alimentados al
vez que se endereza y el recién nacido abre la boca, puede llevar al pecho difieren de los de los lactantes alimentados con leche materni-
recién nacido de inmediato para que abarque el pecho, incluida la zada, y varios estudios han concluido que el crecimiento del lactante
aréola, no solo el pezón. El pezón de la madre está protegido, ya que alimentado al pecho debe considerarse el patrón de normalidad (Butte
está muy atrás en la boca del recién nacido, y la mandíbula del recién et al., 1984b, 1990; Dewey et al., 1991, 1992). El estudio de referencia
nacido masajea la leche por detrás de la aréola. La nariz y el mentón de crecimiento multicéntrico de la OMS se realizó entre 1997 y 2003,
del recién nacido entrarán en contacto con la piel de la madre, y la y reunió datos de crecimiento longitudinal primario de unos 8.500
madre debería experimentar una sensación de tirón sin dolor a medida niños sanos y alimentados al pecho de manera óptima de diferentes
que el recién nacido amamanta con esta sujeción profunda. Muchas orígenes étnicos, raciales y culturales (Brasil, Ghana, India, Noruega,
mujeres reconocen que la lactancia es inicialmente dolorosa debido a Omán y EE. UU.). La OMS publicó posteriormente una referencia
problemas para establecer que se coja bien y debido a las contracciones internacional de crecimiento (http://www.who.int/childgrowth/) basa-
uterinas provocadas por la bajada de oxitocina. Si persiste el dolor en da en el crecimiento de estos lactantes sanos y alimentados al pecho
el seno o en el pezón, se necesita ayuda inmediata para amamantar. de forma completa que marcan el crecimiento y el desarrollo desde
el nacimiento hasta los 5 años, sustituyendo las referencias anteriores
(de Onis et al., 2006). Véanse las gráficas de crecimiento que usan los
Desde las primeras 2 semanas hasta los 2 meses Centers for Disease Control and Prevention, que utilizan las normas
Cada hospital debe establecer grupos de apoyo para amamantar o de la OMS (http://www.CDC.gov/growthcharts/who_charts.htm).
trabajar con grupos de apoyo organizados de la comunidad para que Ocasionalmente, los clínicos tienen dudas sobre cuándo y cómo
las familias tengan un recurso cuando se les da el alta en el hospital intervenir si un lactante alimentado al pecho no está ganando peso
(paso 10 de la IHAN). Todos los recién nacidos alimentados al pecho adecuado (Powers, 2001). Un recién nacido menor de 2 semanas debe
deben ser visitados por un profesional de la salud experto a los 3-5 días ser evaluado si su peso está por debajo del 10% de su peso al nacer.
de edad para reconocer y evitar posibles problemas de deshidratación Un recién nacido que no recupere su peso al nacer a las 2 semanas de
e ictericia graves (AAP, 2015). edad o no esté ganando un mínimo de 20 g por día debe ser evalua-
Las tomas de la lactancia difieren de lactante a lactante y durante do. El niño con crecimiento oscilante, cuando su peso para la edad
cualquier período de 24 h, por lo que, aunque el promedio es de (o el peso para la longitud) es menor de dos desviaciones estándar
8-12 veces al día, algunos lactantes se alimentarán con mayor frecuen- por debajo de la media o su peso para la edad desciende dos líneas del
cia durante algunos períodos cortos. Sin una guía previa, las nuevas percentil en la tabla de crecimiento, también debe ser evaluado. La
madres pueden comparar a sus recién nacidos con recién nacidos exploración física infantil y las evaluaciones del suministro de leche,
alimentados con biberón y malinterpretar la frecuencia normal de la la ingesta, la idoneidad de los alimentos complementarios, la historia y
lactancia materna creyendo que tienen leche insuficiente. A medida los comportamientos maternos, y el entorno del hogar forman parte de
que los recién nacidos crecen, se alimentan más eficientemente, y la la evaluación. El peso con una balanza digital antes e inmediatamente
frecuencia y la duración de las tomas disminuyen. Los nuevos padres después de una alimentación es un método de medir la ingesta de
pueden creer que deben esperar a que su recién nacido llore cuando leche (Meier et al., 1990). La extracción después de una toma es un
está hambriento; es preciso explicarles que el llanto es un signo tardío método para evaluar la leche residual. Deben considerarse otras causas
de hambre y puede dar como resultado que el recién nacido tenga de restricciones de crecimiento no relacionadas específicamente con
dificultades para calmarse y agarrarse al pecho. Los primeros signos la lactancia materna, como la fibrosis quística o la cardiopatía en el
de hambre incluyen reflejo de enraizamiento, chuparse los dedos y los lactante, o la depresión posparto grave en la madre.
puños, y los golpes en los labios. El uso del chupete se asocia con una
reducción en el riesgo de SMSL. Sin embargo, los chupetes no deben Frenillo lingual o anquiloglosia
introducirse hasta que la lactancia esté bien establecida, alrededor de
las 3-4 semanas de edad, porque el uso frecuente de un chupete puede El frenillo lingual, o anquiloglosia, es un trastorno congénito con un pre-
ocultar señales de hambre, y la oferta de pezones artificiales puede dominio masculino (3:1), que se encuentra en el 4-16% de los lactantes,
interferir en el agarre al pecho. Ambas circunstancias pueden tener un en el cual hay un frenillo lingual corto que puede restringir el movimien-
impacto adverso en el suministro de leche materna (Hauck et al., 2011; to de la lengua y su funcionalidad, incluyendo la lactancia materna. El
Task Force on Sudden Infant Death Syndrome, 2011). resultado puede ser un agarre al pecho deficiente, con dolor de pezón y
Una vez que se completa la lactogenia II («subida de la leche»), la transferencia insuficiente de leche, aunque menos de la mitad de los
un recién nacido que no perdió peso excesivo y que está amamantan- neonatos con anquiloglosia (incluso moderada o grave) parecen estar
do eficazmente debe obtener suficiente leche para comenzar a ganar afectados (Ngerncham et al., 2013). Como se describe en el protocolo
peso, 15-30 g por día, en los días 4 o 5. A este ritmo, la mayoría de clínico 11 de la ABM, Neonatal Ankyloglossia (http://www.bfmed.org/
los recién nacidos alimentados al pecho alcanzarán su peso al nacer a los Resources/Protocols.aspx), las herramientas clínicas estandarizadas para
10-14 días y obtendrán 20-30 g por día durante los primeros 2 meses. evaluar el grado de anquiloglosia y su impacto en la lactancia materna
Un recién nacido alimentado al pecho que pesa menos que el peso al incluyen la herramienta de evaluación Hazelbaker para la función del
nacer a las 2 semanas requiere evaluación e intervención. Las guías de frenillo lingual (Amir et al., 2006). Los cambios en el patrón de succión
orientación deben incluir información sobre los brotes de crecimiento, y la transferencia de la leche prefrenotomía y posfrenotomía durante
en los que los recién nacidos están inquietos y amamantan con más 1 semana han sido demostrados en ultrasonografía submentoniana
frecuencia de lo normal durante 2-3 días. Estos típicamente ocurren (Geddes et al., 2008). Sin embargo, existen controversias sobre si la
aproximadamente a las edades de 10 días, 3 semanas, 6 semanas y 3 frenotomía (división del frenillo), la frenectomía (reparación del frenillo),
meses, y cada pocos meses, y pueden ser agotadores para la madre. o la frenoplastia (frenotomía con puntos de sutura) mejoran claramen-
Dado que el suministro de leche depende de la demanda infantil, es te la lactancia materna. Revisiones sistemáticas que incluyeron cinco
óptimo permitir que el lactante amamante con frecuencia. Además, el estudios controlados aleatorios, de los cuales cuatro utilizaron medidas
cribado de la depresión materna, que se asocia con una menor duración validadas de agarre al pecho como resultado primario, concluyeron que
de la lactancia materna, y para otras preocupaciones maternas, como la frenotomía en neonatos seleccionados parece proporcionar mejoras
los pezones doloridos, es fundamental (AAP/ACOG, 2012; Dias y objetivas en las medidas de lactancia materna, con mejoría subjetiva en
Figueiredo, 2015). el dolor materno (Brooks et al., 2014; Francis y Krishnaswami, 2015).

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CAPÍTULO 67 Lactancia materna 1005

Lactancia materna en el recién nacido normales. La causa más común del dolor del pezón es la dificultad con
la técnica de amamantamiento, particularmente que el recién nacido se
prematuro tardío coja al pecho incorrectamente, y la solución a este problema es la ayuda
Los neonatos prematuros tardíos (34-37 6/7 semanas de gestación) especializada. La transferencia de leche limitada se produce cuando el
están en alto riesgo de complicaciones por insuficiencia de la ingesta recién nacido se agarra incorrectamente, lo que provoca un aumento
de leche materna, incluyendo deshidratación, hipernatremia, ictericia de peso insuficiente y una producción de leche deteriorada. Otras
grave y baja ganancia de peso, y sus madres están en alto riesgo de causas potenciales del dolor del pezón incluyen la limpieza excesiva
fracaso de la lactancia debido a la inmadurez y la succión infantil del pecho, el uso de preparaciones que irriten la piel, el trauma de la
ineficaz, según lo revisado en el protocolo clínico 10 de la ABM, Breast­ piel que lleva al impétigo, la infección por Candida y raras veces otras
feeding the Late Preterm Infant (http://www.bfmed.org/resources/ enfermedades dermatológicas. El tratamiento para el dolor del pezón
Protocols.aspx) (Raju, 2006; Meier et al., 2013). Poco tiempo des- depende de la causa subyacente. Si existe un trauma grave, puede ser
pués del nacimiento se puede enseñar a la madre cómo extraer a necesaria la ayuda de un especialista en lactancia, para extraer la leche
mano el calostro para alimentar al recién nacido, y en las 24 h pos- o para usar un protector de pezón hasta que el pezón haya sanado;
teriores al nacimiento ella puede extraer la leche materna cada 2-3 h otras terapias no están basadas en la evidencia (Dennis et al., 2014).
después de amamantar usando un extractor eléctrico de hospital. Las Los protectores de pezones ultrafinos también pueden ayudar a que el
intervenciones para lactantes incluyen despertar al recién nacido para recién nacido se coja a los pezones invertidos, planos o ingurgitados,
alimentar y suplementar con calostro o leche materna extraídos por pueden reducir el flujo rápido de leche, pueden facilitar la transferencia
lo menos cada 2-3 h (mezclados con la leche maternizada si todavía de leche para los recién nacidos prematuros y pueden apoyar el regreso
no hay suficiente leche materna). Esta forma de «triple alimentación» a la mama a los lactantes alimentados con biberón.
de toma por la mama, seguida de suplementos (o simultáneamente si
se utiliza un sistema de toma suplementaria), y después la extracción
materna de la leche, es una vía para el éxito de la lactancia de riesgo. Ingurgitación y conductos lácteos bloqueados
De esta manera, el suministro de leche de la madre no está en riesgo o La plenitud fisiológica del pecho ocurre debido a la congestión vas-
disminuido debido a la succión ineficaz o infrecuente, y el niño fisio- cular durante la fase II de la lactogenia. La ingurgitación patológica,
lógicamente inmaduro se garantiza la suficiente ingesta alimentaria. Se en la que el lactante no puede extraer inicialmente la leche, es el sobre-
debe establecer un plan de manejo de lactancia materna antes del alta. llenado firme, difuso y doloroso, y el edema de los senos generalmente
causados por un rápido aumento del volumen de la leche o de una
alimentación omitida. Como se describe en el protocolo clínico 20 de
Lactancia materna en el recién nacido la ABM, Engorgement (http://www.bfmed.org/Resources/Protocols.
prematuro de muy bajo peso al nacer aspx), los mejores tratamientos para la ingurgitación son una ducha
Las madres de los recién nacidos de MBPN y los neonatos prematuros tibia y un masaje de manos suave para ablandar la aréola y permitir que
se enfrentan a múltiples obstáculos con la lactancia materna, incluyendo el recién nacido se agarre y realice más tomas (o extracción de leche
el crecimiento de la glándula mamaria potencialmente incompleta y el a mano si el recién nacido no puede amamantar), seguido de com-
cebado inadecuado del epitelio mamario, la separación madre-lactante, presas frías durante 5 min después de cada alimentación. La «presión
la fragilidad infantil, la necesidad de mantener el suministro de leche inversa suavizante» es una técnica simple en la que la presión suave
por extracción láctea durante semanas y meses, la fatiga y el estrés, que empuja el líquido hacia atrás y hacia arriba en la mama para reducir
pueden inhibir la lactancia (Jones y Spencer, 2007). Se puede animar a el edema areolar y permitir que se coja al pecho de forma que pueda
las madres a comenzar la extracción de la leche poco después del parto y ser eficaz (Cotterman, 2011). La ingurgitación no debe confundirse
mantener una frecuencia de bombeo de ocho veces al día para optimizar con un conducto de leche taponado, que puede dar lugar a un bulto
y mantener la producción de leche (Furman y Minich, 2002; Jones y localizado en un área de la mama, usualmente debido a la infrecuente
Spencer, 2007). El volumen de la leche en el día 4 puede ser predictivo o ineficaz alimentación o a la presión local debida a la ropa constrictiva.
de la producción a las 6 semanas (Hill et al., 1999). Los métodos que El tratamiento incluye las compresas calientes, el masaje suave del área
combinan el masaje o la extracción a mano («bombeo práctico») con el dolorosa hacia el pezón, las alimentaciones eficaces frecuentes usando
uso de una bomba de pecho eléctrica doble pueden alcanzar volúmenes diversas posiciones infantiles para facilitar el vaciado, y evitar el uso de
de la leche a término y pueden aumentar la densidad calórica de su leche sujetadores apretados o con alambres.
(Jones et al., 2001; Morton et al., 2009, 2012). Los consejos sobre la lac-
tancia no aumentan el estrés ni la ansiedad materna, y pueden conseguir Mastitis
que un mayor número de madres inicien la lactancia y que los neonatos
reciban un mayor volumen de leche materna (Sisk et al., 2006). Enfoques La mastitis puede presentarse como un súbito acceso de mialgia, dolor
multidisciplinares del apoyo a la lactancia, incluyendo educación del en el pecho y síntomas similares a la gripe, y se caracteriza por un
área de calor, mayor sensibilidad, edema y eritema localizados en una
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personal y los padres, cuidado piel con piel (madre canguro), políticas de
apoyo al hospital, grupos de apoyo con asistencia de transporte, acceso mama más de 10 días después del parto. La infección comúnmente
a sacaleches y consultores de lactancia han demostrado mayores índices entra a través de una fisura en la piel, usualmente un pezón agrietado;
de provisión de leche materna para los recién nacidos de MBPN (Meier sin embargo, la estasis de la leche a causa de la ingurgitación o de la
et al., 2004; Dereddy et al., 2015). obstrucción de los conductos puede también llevar a la mastitis. Según
lo revisado en el protocolo 4 de la ABM, Mastitis (http://www.bfmed.
org/Resources/Protocols.aspx), el tratamiento incluye antibióticos y
Problemas de la lactancia materna la continuación de la lactancia materna con alimentación frecuente
(o bombeando) para permitir el drenaje. La terapia adicional incluye
Dolor en los pezones buena ingesta de líquidos, reposo en cama y control del dolor.
Los pezones doloridos y el dolor son las quejas más comunes de las
madres lactantes en el período posparto inmediato. El malestar precoz Producción baja de leche
y leve es común, pero el dolor grave del pezón, la presencia de grietas
o contusiones, el malestar que continúa después de una alimentación La producción baja del suministro de leche es consecuencia sobre todo
o el dolor que no disminuye al final de las primeras 2 semanas no son de un amamantamiento infrecuente y/o ineficaz, de la introducción

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1006 PA RT E XI I I Nutrición

de suplementos de leche maternizada, que disminuye la frecuencia de • CUADRO 67.4  Criterios médicos de elegibilidad
lactancia, o de la introducción precoz del biberón (antes de 3 semanas),
estadounidenses para el uso
que puede disminuir el suministro de leche debido a una extracción
inadecuada. El tratamiento primario incluye una mayor efectividad y de anticonceptivos
frecuencia de extracción de leche; los galactogogos, como las semillas de
alholva, pueden ser efectivos si el uso es temporal y supervisado (aunque MEC 1 Sin restricción (se pueden usar métodos anticonceptivos)
no haya datos basados en la evidencia) (Mortel y Mehta, 2013); el MEC 2 Las ventajas generalmente superan los riesgos teóricos o
protocolo clínico 9 de la ABM, Galactogogues (http://www.bfmed. probados
org/Resources/Protocols.aspx), proporciona un resumen adicional. Los MEC 3 Los riesgos teóricos o probados normalmente superan las
factores maternos que reducen el suministro de leche incluyen hipo- ventajas
prolactinemia primaria o secundaria, alteraciones del eje hipofisario, MEC 4 Riesgo para la salud no aceptable (no deben utilizarse)
enfermedad materna grave, incluyendo sepsis o hemorragia, cirugía MEC, criterios médicos de elegibilidad (medical eligibility criteria).
de mama previa, uso de anticonceptivos que contienen estrógenos, y Tomado de Centers for Disease Control and Prevention. U.S. medical eligibility criteria for
astenia grave, estrés o dolor. No está claro si el tabaquismo materno contraceptive use, 2010: adapted from the World Health Organization Medical Eligibility Criteria for
reduce realmente el suministro de leche o es un factor de riesgo de Contraceptive Use, 4th edition. MMWR Morb Mortal Wkly Rep. 2010;59(RR04):1–85.
conducta para la disminución de la duración de la lactancia materna.
La percepción de una baja producción de leche, en la cual el recién
nacido tiene un patrón de crecimiento normal, pero la madre cree que
no tiene suficiente leche, puede resultar de estímulos de crecimiento Aspectos laborales maternos
que conducen a una mayor demanda infantil, cambios en la eficiencia
de la mama alrededor de 4 semanas que conducen a disminución de la Las madres que buscan combinar la lactancia materna y la artificial
plenitud antes de amamantar o aumento de la eficiencia de la lactan­ o que se enfrentan a la vuelta al trabajo pueden ofrecer un biberón
cia materna a partir de 2-3 meses, lo que conduce a sesiones de lactancia de leche materna extraída diariamente desde el momento en que la
menos frecuentes o más cortas. La comprobación del peso infantil lactancia materna se establece a las 2-3 semanas de edad. Los médicos
es diagnóstica. La depresión materna también puede contribuir a la y las madres reportan que los recién nacidos que no están acostum-
percepción materna de baja producción de leche y se asocia con el brados a un biberón pueden rechazarlo si no se introduce antes de 1
cese temprano de la lactancia materna, de modo que el cribado y el mes de edad. Aunque la lactancia materna exclusiva durante 6 meses
tratamiento son esenciales (Dias y Figueiredo, 2015). con la adición de alimentos complementarios y la lactancia materna
continua hasta los 1-2 años de edad son recomendaciones médicas
basadas en la evidencia, las madres pueden enfrentarse a limitaciones
Anticoncepción personales y laborales. Los seguros sanitarios actualmente deben cubrir
El método de amenorrea de la lactancia (MAL) se considera un criterio el coste de una bomba de extracción de leche materna (Healthcare.gov,
suficiente para «cómo estar razonablemente seguro de que una mujer 2016). Aunque las bombas eléctricas de extracción doble se consideran
no está embarazada», un refrendo de eficacia anticonceptiva (Centers las preferidas para una extracción óptima de la leche, una revisión
for Disease Control and Prevention, 2013) (cuadro 67.4). El MAL y reciente encontró que las intervenciones de bajo coste, incluyendo
los métodos no hormonales o de barrera de anticoncepción no afectan la extracción a mano, el calentamiento de las mamas y las cintas de
al suministro de leche materna y se recomiendan si son aceptables para relajación, pueden ser tanto o más efectivas en situaciones específicas
la madre y su pareja. Para las madres lactantes, de acuerdo con el sis- (Becker et al., 2015). Se debe ofrecer información de apoyo sobre
tema de clasificación de los criterios médicos de elegibilidad (MEC, formas flexibles de combinar el trabajo fuera del hogar con la lactancia
medical eligibility criteria, del 1 al 4) estadounidenses, los dispositivos materna. Además de extraer y almacenar leche materna, es posible que
intrauterinos (DIU), los anticonceptivos orales solo de progestágenos, las madres deseen reducir o flexibilizar la jornada laboral, llevar al recién
los implantes (etonogestrel) y los tratamientos inyectables (acetato de nacido al trabajo o amamantar durante los descansos en un centro de
medroxiprogesterona en depósito [DMPA]) se clasifican como MEC cuidado de niños cercano. El trabajo de 19 h o menos a la semana se
2 para el uso a partir de 10 min después de la salida de la placenta asoció con una mayor probabilidad de continuar la lactancia materna,
hasta 1 mes posparto, y MEC1 para el uso 1 mes o más posparto. El independientemente de la duración del permiso de maternidad (Li
uso de anticonceptivos orales combinados (AOC) está contraindicado et al., 2008; Galtry, 2015; Xiang et al., 2016).
antes de los 21 días posparto (MEC 3) (Centers for Disease Control
and Prevention, 2013). Aunque las Recomendaciones Prácticas para el Ictericia y lactancia materna
Uso de Anticonceptivos 2013 de EE. UU. proporcionan orientación al
personal sanitario, los datos son insuficientes con respecto al impacto La «ictericia por no amamantamiento» y la «ictericia por leche materna»
de los métodos hormonales en el suministro de leche. Una revisión son entidades clínicas distintas, con diferentes enfoques (Academy of
sistemática reciente sobre este tema concluyó que las pruebas eran Breastfeeding Medicine Protocol Committee, ABM Clinical Protocol
limitadas y contradictorias, y que los ensayos eran de moderada a 22, Jaundice, http://www.bfmed.org/Resources/Protocols.aspx; Preer
baja calidad: dos de ocho ensayos encontraron un efecto negativo en y Philipp, 2011).
la duración de la lactancia materna (AOC frente a placebo, y DIU
hormonal frente a no hormonal), y dos de seis ensayos encontraron un
menor volumen de leche (AOC frente a placebo) (Lopez et al., 2015).
Ictericia por no amamantamiento
Una revisión centrada en la anticoncepción con progesterona general- La ictericia grave es la razón más frecuente para la hospitalización de
mente no mostraba un impacto adverso en los resultados de la lactancia neonatos prematuros tardíos y a término, la mayoría de los cuales están
materna; sin embargo, las pruebas sobre el efecto del DMPA posparto amamantando. Si hay algún retraso en la fase II de la lactogenia o si el
precoz son metodológicamente débiles (Brownell et al., 2012; Phillips recién nacido tiene una extracción ineficaz de la leche o una succión
et al., 2016.). Las directrices de prevención de los Centers for Disease infrecuente, se ingiere menos leche y, por consiguiente, se produce
Control and Prevention (http://www.cdc.gov/reproductivehealth/ menos leche, lo que conduce a un ciclo de disminución de la demanda
unintendedpregnancy/usmec.htm) y el protocolo clínico 13 de la y disminución del suministro, con la consecuente «ictericia por ina-
ABM, Contraception and Breastfeeding (www.bfmed.org/Resources/ nición» o ictericia por no amamantamiento. El factor de riesgo más
Protocols.aspx), ofrecen más detalles. común para la extracción inadecuada de leche es el parto prematuro

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CAPÍTULO 67 Lactancia materna 1007

tardío. El intestino neonatal tiene glucuronidasas altamente activas, térmico, la congelación preserva muchos de los beneficios nutricionales e
que unen la bilirrubina conjugada a la bilirrubina no conjugada. La inmunológicos de la leche humana, y la pasteurización de la propia leche
bilirrubina no conjugada se reabsorbe fácilmente y recircula al hígado materna no ofrece ningún beneficio adicional (Cossey et al., 2013).
para su conjugación. La leche alivia la recirculación de la bilirrubina Cuando se congela apropiadamente, la leche puede almacenarse durante
proporcionando calorías y la estimulación gastrocólica. Así, el trata- unos 6 meses. La leche nunca debe descongelarse en un microondas,
miento se centra en mejorar la lactancia materna y proporcionar leche debe usarse en las primeras 24 h y no debe congelarse de nuevo (Centers
(preferiblemente extraída o leche humana de donante, o maternizada) for Disease Control and Prevention, 2016).
al lactante. La fototerapia debe iniciarse según las pautas establecidas
(Academy of Breastfeeding Medicine Protocol Committee, 2010). Leche humana de donante
Los informes del Pilot Kernicterus Registry de EE. UU. constatan
que más del 90% de los casos de querníctero neonatal han ocurrido en La expresión «leche de donante» se refiere generalmente a la leche dona-
neonatos alimentados al pecho, en neonatos prematuros tardíos y en da a un banco de leche por una madre con exceso de leche, usualmente
los que tienen deficiencia de glucosa-6-fosfato deshidrogenasa (G6PD) una mujer que da a luz a un niño a término y generalmente se retrasa
(Johnson, 2009). La prevención primaria incluye el establecimiento de en la lactancia. Después de rigurosos procesos de cribado, la leche se
una lactancia óptima y determinaciones de las concentraciones totales de trata térmicamente a 62,5 °C durante 30 min, con el método Holder
bilirrubina sérica al alta y en la visita de seguimiento a los 3-5 días (AAP, de pasteurización. La leche de donante se utiliza principalmente en las
2015). Las pautas para las familias y el personal sanitario están también UCI neonatales para apoyar la alimentación de neonatos prematuros
disponibles ahora (http://www.cdc.gov/ncbddd/jaundice/index.html). cuyas madres tienen una producción de leche inadecuada para satis-
facer las necesidades de sus neonatos (Arslanoglu et al., 2013). La
Ictericia por leche materna Human Milk Banking Association of North America es una entidad
sin ánimo de lucro fundada en 1985 que ha establecido pautas para la
En los lactantes alimentados al pecho, las concentraciones totales de recolección y pasteurización de la leche y para su uso en la unidad de
bilirrubina sérica permanecen elevadas, y en algunos lactantes esto cuidados intensivos. En 2016 había 18 asociaciones de bancos de leche
puede ocurrir hasta las 12 semanas. En lactantes alimentados con de Norteamérica en EE. UU. y Canadá (https://www.hmbana.org/).
leche maternizada, la concentración de bilirrubina sérica desciende, y El método Holder de pasteurización produce una leche libre de
alcanza valores inferiores a 1,5 mg/dl en los días 11 o 12 después del contaminación microbiana, pero los factores biológicamente e inmu-
nacimiento. Se ha sugerido que la elevación en la concentración de nológicamente activos pueden verse afectados adversamente, incluidas
bilirrubina sérica puede ser protectora contra las agresiones oxidativas, las inmunoglobulinas, la lactoferrina, la lisozima, la eritropoyetina,
ya que la bilirrubina ha demostrado ser un antioxidante eficaz in vitro. la lipasa y la insulina. El tratamiento térmico no afecta a los oligosa-
Los lactantes con ictericia por leche materna parecen sanos y, además cáridos (que pueden ser activos en la prevención de EN) (Ewaschuk
de la ictericia, tienen hallazgos de la exploración física completamente et al., 2011; Arslanoglu et al., 2013). El contenido de hidratos de
normales y crecen sin problemas. La leche materna madura contiene carbono de la leche del donante se preserva generalmente, pero el
un factor no identificado que mejora la absorción intestinal de la contenido proteínico puede ser bajo, porque la leche se dona de las
bilirrubina en el lactante huésped susceptible de padecer ictericia. madres a término más tardíamente. El contenido de grasa de la leche
Mientras que la producción del factor disminuye con el tiempo y el de donante también es bajo, porque la leche no es homogeneizada, y
hígado madura, la concentración de la bilirrubina del suero vuelve a la hay múltiples transferencias de leche con la pérdida de grasa en cada
normalidad. Se deben determinar los niveles de bilirrubina directa para paso (García-Lara et al., 2013).
excluir la atresia biliar, la hepatopatía, la sepsis y otras afecciones, y se Los estudios clínicos sobre el uso de leche humana donante en com-
deben excluir además otras causas de hiperbilirrubinemia prolongada paración con la leche maternizada en la edad neonatal sugieren menores
no conjugada, como la galactosemia, el hipotiroidismo, infecciones tasas de EN y una mejor tolerancia a la alimentación, pero un crecimiento
urinarias, estenosis pilórica o hemólisis de bajo grado debida a G6PD más pobre y más anomalías bioquímicas en el estudio del estado nutricio-
u otras causas. Se debe tranquilizar a los padres, ya que no hay daño nal (Boyd et al., 2007; Quigley y McGuire, 2014). Se realizó un ensayo
en el recién nacido, y la lactancia materna no debe interrumpirse a aleatorizado en neonatos prematuros (Schanler et al., 2005) de leche de
menos que el nivel de bilirrubina aumente hasta alcanzar los niveles donante frente a leche maternizada para prematuros como complementos
de fototerapia (> 20 mg/dl) (Preer y Philipp, 2011). para volúmenes inadecuados de leche materna. Ese estudio pareado no
encontró diferencias en el resultado principal de la EN y/o la sepsis de
Recogida y almacenamiento de leche humana inicio tardío entre los grupos del estudio. Un grupo paralelo que siguió
recibiendo solo la leche materna tuvo tasas significativamente más bajas
Las bombas de extracción de leche eléctricas permiten una producción en los resultados de estos objetivos (Sullivan et al., 2010). Sin embargo,
óptima de leche para las madres separadas de su recién nacido, ya sea los grupos alimentados con leche humana en ese estudio también reci-
por su trabajo o en caso de hospitalización. Las técnicas generales para bieron productos lácteos que contenían proteínas bovinas intactas. Una
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asegurar la limpieza durante la extracción de la leche comienzan con dieta exclusiva de leche humana, apropiadamente enriquecida con un
un buen lavado de manos con agua y jabón. Los kits de recogida deben derivado de leche humana, dio como resultado tasas marcadamente más
enjuagarse, limpiarse con agua jabonosa caliente y secarse al aire. La bajas de NEC y de menos cirugías para EN, menos días de nutrición
prueba bacteriológica de la leche recogida de una madre para alimentar parenteral y menor mortalidad en comparación con una dieta que con-
al propio recién nacido no es habitualmente necesaria. La leche puede tiene leche bovina intacta enriquecida y/o leche maternizada (Sullivan
permanecer sin refrigerar durante 6-8 h, en una bolsa de refrigeración et al., 2010; Cristofalo et al., 2013; Abrams et al., 2014). Por lo tanto,
aislada durante 24 h, y en un frigorífico durante 5 días, cada una sin la leche de donante es una alternativa a la leche materna, pero no la sus-
proliferación bacteriana significativa (Centers for Disease Control tituye. Además, un informe reciente en el que se muestra que el uso de
and Prevention, 2016; Academy of Breastfeeding Medicine Protocol leche de donante se asocia con un uso cada vez mayor de leche materna
Committee, 2010). Tal como se describe en el protocolo clínico 8 de sugiere que el uso de leche de donante puede servir de puente al uso de
la ABM, Human Milk Storage (www.bfmed.org/Resources/Protocols. la leche materna (Kantorowska et al., 2016).
aspx), la congelación es el método preferido para almacenar la leche El negocio de la compra de leche de donante por los hospitales (y
que no se utilizará: las extracciones únicas de leche deben envasarse los individuos) ha creado una industria de los bancos de leche humana
por separado y etiquetarse con la fecha (y el nombre del recién nacido con fines de lucro que depende de donantes pagados. Movimientos
en caso de uso en el centro hospitalario). A diferencia del tratamiento políticos y sociales incluyen la preocupación por el desvío de la leche

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de los bancos sin ánimo de lucro. La venta y la distribución de leche a Schanler RS, Krebs N, Mass S, editors. AAP/ACOG Breastfeeding Handbook
través de Internet para uso personal se ha convertido en una práctica for Physicians. Elk Grove: American Academy of Pediatrics; 2013.
relativamente común fuera de los controles médicos; sin embargo, las Sinha B, Chowdhury R, Sankar MJ, et al. Interventions to improve breast­
pruebas relacionadas con el deterioro, la impureza (mezcla con la leche feeding outcomes: a systematic review and meta-analysis. Acta Paediatr
bovina) y la contaminación (agentes infecciosos, cafeína, exposición al Suppl 2015;104:114-134.
humo) son muy desalentadoras, y la Food and Drug Administration Thulier D. Weighing the facts: a systematic review of expected patterns of
desaconseja esta práctica (http://www.FDA.gov/ScienceResearch/Spe- weight loss in full-term, breastfed infants. J Hum Lact 2016;32:28-34.
cialTopics/PediatricTherapeuticsResearch/ucm235203.htm; Geraghty
et al., 2011; Keim et al., 2015). Recursos educativos online recomendados
Esta lista no es exhaustiva ni se presenta en un orden específico, sino que
Conclusión pretende ser una introducción a los materiales educativos basados
en la web que promueven o informan sobre la lactancia materna.
En resumen, las evidencias corroboran que la lactancia materna reduce Todos los recursos enumerados eran gratuitos en el momento de esta
significativamente la mortalidad por todas las causas, y el número y la publicación.
gravedad de las infecciones en neonatos a término y prematuros en los La Academy of Breastfeeding Medicine tiene protocolos clínicos relaciona-
países desarrollados y en vías de desarrollo. Pruebas sólidas demuestran dos con la lactancia materna, los cuales no están diseñados como están-
que la lactancia materna también promueve la salud materna. También dares de atención, sino que ofrecen pautas informativas. Estos están
es probable que la lactancia materna se asocie con efectos beneficiosos disponibles en http://www.guideline.gov y en http://www.bfmed.org/
a largo plazo sobre la salud, el crecimiento y el desarrollo infantil. Se Resources/Protocols.aspx.
necesitan aumentos sustanciales en las tasas de lactancia materna, parti- La American Academy of Pediatrics ha creado el currículo de residencia
cularmente entre las subpoblaciones raciales, étnicas y socioeconómicas de amamantamiento online para los directores de programas y otros
que tienen las tasas más altas de morbilidad y mortalidad infantil. Los profesores. Este recurso ofrece «herramientas y recursos sobre la lac-
profesionales de la salud están en una posición única para influir en las tancia materna, incluyendo casos clínicos y culturales, presentaciones
mujeres en su decisión de amamantar, y no solo deben colaborar con preparadas sobre el manejo de la lactancia materna, y herramientas de
los especialistas en lactancia, sino que también deben estar preparados evaluación y seguimiento», y está disponible en http://www2.aap.org/
para ayudar en la gestión de los problemas de lactancia materna. La breastfeeding/curriculum/.
Baby-Friendly USA Inc. es el organismo oficial de la iniciativa de hos-
discusión sobre los beneficios de la lactancia materna y los riesgos de
pitales amigos de los niños en EE. UU. El sitio web https://www.
la alimentación con leche maternizada permiten a la madre tomar babyfriendlyusa.org/ es un punto de entrada para comenzar el trabajo
una decisión de alimentación previamente informada, y para muchas para conseguir la designación.
mujeres, el apoyo médico es crucial. Expanding Clinicians’ Roles in Breastfeeding Support es un tutorial
online de dos partes que proporciona 3 h de material con contenido
Lecturas recomendadas que es compatible con la Baby-Friendly Hospital Initiative y sirve
para cumplir con los requisitos de educación para la acreditación de
American College of Obstetricians and Gynecologists’ Committee on Obs- la Baby-Friendly Hospital Initiative: http://www.hriainstitute.org/
tetric Practice; Breastfeeding Expert Work Group. Optimizing support breastfeedingcme/. El sitio web de The Stanford School of Medicine,
for breastfeeding as part of obstetric practice. ACOG Committee Newborn Nursery at Lucile Packard Children’s Hospital «está diseñado
opinion no. 658. Obstet Gynecol 2016;127:e86-e92. para apoyar los objetivos educativos de nuestros alumnos pediátricos»
Department of Health and Human Services. The Surgeon General’s Call y es un recurso para todos los proveedores de salud que promueven la
to Action to Support Breastfeeding. US Department of Health and lactancia materna. Se incluyen varios vídeos: http://newborns.stanford.
Human Services, Office of the Surgeon General; 2011. https://www. edu/Breastfeeding/.
surgeongeneral.gov/library/calls/breastfeeding/calltoactiontosupport- LactMed es una base de datos con información sobre el uso seguro de
breastfeeding.pdf. medicamentos durante la lactancia y se encuentra en la National
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CAPÍTULO 67 Lactancia materna 1008.e1

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implementation_bfhi/en/. 2015;136:e1576-e1586.
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1008.e6 PA RT E X I I I Nutrición

Puntos clave
• Las políticas hospitalarias deben apoyar a las madres que desean
amamantar, y deben reflejar e incorporar los «10 pasos para una
lactancia materna eficaz» de la Baby-Friendly Hospital Initiative
(BFHI; en España, Iniciativa para la Humanización de la Asis-
tencia al Nacimiento y la Lactancia [IHAN]).
• La promoción de la lactancia materna debe llegar a la comu-
nidad: la lactancia materna es un asunto de salud pública, con
beneficios económicos y de salud basados en la evidencia cien-
tífica.
• Todos los pediatras deben estar bien informados sobre el manejo
de la lactancia y estar preparados para liderar los equipos de aten-
ción médica que apoyan el vínculo madre-lactante alimentado
al pecho.
• Todos los recién nacidos en el momento del alta del hospital
deben recibir atención médica en un centro pediátrico en el
que tengan acceso a especialistas en lactancia las 24 h del día
debidamente capacitados.
• La educación y el apoyo a la lactancia deben ser ofrecidos por
personal experto y personal sanitario, tanto antes como después
del parto, tanto en la comunidad como en el ámbito médico, y
tanto para la madre como para su pareja y para todo su entorno.
• Los cambios en la política nacional de salud, como la disponi-
bilidad de servicios gratuitos de lactancia y bajas de maternidad
remuneradas, son fundamentales para reducir las disparidades
de salud asociadas con el uso de la lactancia materna.
• Cada unidad de cuidados intensivos neonatales debe tener pro-
tocolos y guías para apoyar la lactancia en las madres de recién
nacidos hospitalizados.

Palabras clave
Lactancia materna
Leche materna
Leche humana
Lactancia
Lactancia materna exclusiva
Ictericia neonatal
Desigualdades de salud

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68
Nutrición enteral en el recién
nacido de alto riesgo
TARAH T. COLAIZY, SARA B. DeMAURO, KERA M. McNELIS
Y BRENDA B. POINDEXTER

PUNTOS CLAVE que experimentan una o más morbilidades importantes, como displasia
broncopulmonar (DBP), hemorragia intraventricular grave, EN o sepsis
• La ingesta precoz de proteínas se asocia con mejores resultados en el de inicio tardío, tienen un mayor riesgo de restricción del crecimiento.
crecimiento y en el neurodesarrollo de los recién nacidos prematuros: La asociación entre el crecimiento posnatal subóptimo y los resultados
lograr una ingesta adecuada requiere un abordaje nutricional combinado deficientes del neurodesarrollo es especialmente preocupante y enfatiza
por vía enteral y parenteral. la importancia de optimizar el apoyo nutricional para los recién nacidos
• La leche humana materna es la mejor dieta para los recién nacidos prematuros en la unidad de cuidados intensivos neonatales (UCIN).
prematuros. Se necesitan más investigaciones para desarrollar guías Las consideraciones especiales sobre las necesidades de nutrientes
clínicas basadas en la evidencia para el uso de la leche humana
de los recién nacidos prematuros surgen al nacer. Debido a los alma-
de donante cuando la leche materna no está disponible.
cenes limitados del cuerpo, el gasto creciente de energía, la gravedad
• La leche humana no enriquecida contiene cantidades insuficientes de
proteínas, energía y muchos micronutrientes para los niños de muy bajo
de las enfermedades, y/o la inmadurez y la incapacidad de tolerar
peso al nacer, por lo que se requieren suplementos con enriquecedores alimentaciones enterales, los niños prematuros comienzan la nutrición
de leche y/o productos multivitamínicos. parenteral inmediatamente después del nacimiento. Sin embargo, para
• El retraso del crecimiento posnatal sigue siendo una complicación satisfacer los requerimientos de nutrientes, un enfoque combinado
común de los recién nacidos prematuros y se asocia con resultados de la nutrición parenteral con la enteral es imperativo para lograr
adversos. La optimización de los resultados de crecimiento requiere resultados de crecimiento óptimos y minimizar morbilidades como
atención no solo del aumento de peso, sino también del crecimiento la EN. Este capítulo describe la base de las recomendaciones para el
lineal apropiado y de la composición corporal tanto en la unidad de soporte nutriente enteral para recién nacidos de alto riesgo. Además,
cuidados intensivos neonatales como después del alta hospitalaria. se discute la evidencia con respecto a la iniciación y al adelanto de
las nutriciones enterales en niños prematuros. Finalmente, se revisan
consideraciones especiales para la nutrición enteral después del alta de
la UCIN.

P
roporcionar una nutrición enteral óptima a los recién nacidos Requerimientos de macronutrientes
prematuros de alto riesgo es un difícil reto clínico. Para lograr un
crecimiento óptimo, las necesidades nutricionales en el período
neonatal temprano son mayores que en cualquier otro momento de
Proteínas
la vida. Los partos prematuros dan como resultado un menor aporte Cuando la vida fetal es interrumpida por el nacimiento prematuro,
de nutrientes al recién nacido. La enfermedad crítica y la motilidad y los déficits significativos de las proteínas pueden ocurrir y pueden ser
función inmadura del intestino a menudo dificultan el aprovechamiento difíciles si no imposibles de recuperar (Embleton et al., 2001). Varios
de la nutrición. A pesar de la falta de evidencia, el miedo a la enterocolitis estudios observacionales han encontrado una asociación entre la ingesta
necrosante (EN) si la alimentación se adelanta demasiado rápido también temprana de proteínas y el crecimiento posnatal en recién nacidos extre-
puede limitar la instauración de la nutrición enteral de forma óptima. En madamente prematuros (Berry et al., 1997; Olsen et al., 2002). Además,
consecuencia, el recién nacido prematuro requiere un soporte nutricional existe una evidencia cada vez mayor de que la cantidad de ingesta de
especializado para satisfacer estas grandes demandas de crecimiento. proteínas en la vida se correlaciona con mejoría en los resultados del
Las recomendaciones actuales para la administración de nutrición neurodesarrollo. Para optimizar los resultados del crecimiento, por lo
enteral a los recién nacidos prematuros se basan en la esquiva meta de tanto, se debe dar un enfoque especial a la ingesta proteínica enteral.
duplicar las tasas de crecimiento fetal intrauterino para la misma edad El objetivo más comúnmente aceptado de proporcionar nutrición
posmenstrual. Sin embargo, este objetivo rara vez se logra, y la incidencia enteral a los recién nacidos prematuros es lograr un crecimiento com-
de insuficiencia de crecimiento posnatal en recién nacidos de muy bajo parable al del feto. A las 26 semanas de la gestación, el feto incorpora
peso al nacer (MBPN) sigue siendo inaceptablemente alta. Datos de aproximadamente 2,2 g/kg/día; y a término, esta cantidad disminuye
la Neonatal Research Network del Eunice Kennedy Shriver National a aproximadamente 0,9 g/kg/día. Las pérdidas proteínicas están inversa-
Institute of Child Health and Human Development revelaron una res- mente relacionadas con la edad gestacional, y proporcionan una explica-
tricción del crecimiento a las 36 semanas de edad posmenstrual en el ción para los requerimientos de proteína más elevados en recién nacidos
79% de los niños con MBPN (Stoll et al., 2010). Los recién nacidos extremadamente prematuros. La acreción de las proteínas depende
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1010 PA RT E XI I I Nutrición

TABLA  Requisitos estimados de proteínas y energía ser apropiado para la vida extrauterina, dadas las diferencias en la fuente
68.1 para lograr el crecimiento fetal y el metabolismo de los nutrientes. Los cambios en la composición
corporal en respuesta a la ingesta de energía son una consideración im­
Proteínas Energía Proteínas/energía portante, porque la ingesta excesiva de energía puede contribuir a un
Peso (g) (g/kg/día) (kcal/kg/día) (g/100 kcal) acúmulo excesivo de grasa, y estudios recientes han sugerido que el
aumento rápido de peso puede estar asociado con resultados adversos.
500-700 4,0 105 3,8
Las necesidades de la energía del recién nacido se derivan de un
700-900 4,0 108 3,7 cómputo del gasto de energía, del almacenaje de la energía y de las pér-
didas de energía. El gasto energético consiste en la energía necesaria para
900-1.200 4,0 119 3,4
cubrir la tasa metabólica de reposo, la actividad, la termorregulación
1.200-1.500 3,9 125 3,1 y el coste energético del crecimiento. El almacenaje de energía consiste
en la energía (masas grasa y magra) depositada para el crecimiento. Las
1.500-1.800 3,6 128 2,8 pérdidas de energía generalmente se deben a la absorción incompleta de
1.800-2.200 3,4 131 2,6 nutrientes y son mayores en recién nacidos prematuros que en recién
nacidos a término o en adultos. El mayor componente de los requisitos
Basado en el método factorial (Ziegler et al., 2002). de energía estimados totales es el necesario para el metabolismo basal.
Cuando se nutre por vía parenteral, el recién nacido prematuro tiene
menos pérdida de energía fecal, generalmente menos episodios de
estrés por el frío y una actividad algo menor, por lo que las necesidades
de la cantidad y la calidad de la proteína, del consumo de energía y reales de energía para el crecimiento se reducen aproximadamente
de determinadas enfermedades subyacentes (como la sepsis o el estrés a 85-95 kcal/kg/día. En el caso de enfermedades crónicas, como la
quirúrgico), así como de los medicamentos administrados de forma DBP, el gasto energético en reposo aumenta significativamente. Las
concomitante (como los esteroides sistémicos, el fentanilo y la insulina). necesidades totales de energía en recién nacidos prematuros con DBP
Los requerimientos proteínicos en recién nacidos prematuros se aumentan debido a un mayor gasto energético, actividad y pérdidas
han estimado con el uso de una variedad de métodos, incluyendo de energía fecal. No sorprende encontrar que estos infantes pueden
modelos de animales fetales, el enfoque factorial y estimaciones basadas requerir 150 kcal/kg/día para lograr el aumento de peso.
en la composición de la leche humana. En la tabla 68.1 se indican los
requisitos proteínicos estimados con el enfoque factorial para recién
nacidos prematuros de un peso de 500-1.200 g. Con el aumento del Hidratos de carbono
peso corporal, los requisitos de la proteína determinados por el enfoque El principal hidrato de carbono de la leche humana es la lactosa, que
factorial disminuyen (Ziegler et al., 2002). Las necesidades de proteí- suministra casi la mitad de las calorías totales. La lactasa (β-galacto-
nas y energía deben considerarse al mismo tiempo, porque la síntesis sidasa) es una enzima intestinal que hidroliza la lactosa a glucosa y a
de proteínas requiere energía. Los recién nacidos extremadamente galactosa en el intestino delgado. A pesar de niveles más bajos de las
prematuros requieren una mayor relación proteína-energía para un actividades intestinales de la lactasa en los niños prematuros, estos son
crecimiento óptimo. La retención de proteínas, o el equilibrio, es gene- capaces de digerir la lactosa de forma eficaz. Sin embargo, muchas
ralmente una función de la ingesta de proteínas si la ingesta de energía leches maternizadas (fórmulas) infantiles diseñadas para recién nacidos
es adecuada. Los requerimientos de proteína enteral se calculan para ser prematuros suministran polímeros de glucosa. Los polímeros de la
más altos que los parenterales porque solo se absorbe aproximadamente glucosa son digeridos por α-glucosidasas; el nivel de actividad de estas
el 85% de la proteína administrada de forma enteral. En contraste con enzimas se aproxima a los niveles de adultos mucho antes que el de la
los métodos empíricos, este enfoque no toma en consideración los β-galactosidasa, lo que teóricamente hace que los polímeros de glucosa
requisitos nutricionales para la recuperación del crecimiento. sean más fáciles de digerir por el recién nacido prematuro que la lac-
En base de la evidencia actualmente disponible y del consenso de un tosa. Los polímeros de la glucosa también tienen una ventaja en que
panel de expertos, se recomiendan 3,5-4,5 g de proteína por kilogramo aumentan densidad calórica sin un aumento en osmolalidad. La ingesta
de peso por día para los recién nacidos con MBPN alimentados de recomendada de hidratos de carbono para recién nacidos prematuros es
forma completa por vía enteral (Koletzko et al., 2014). Se requieren de 11,6-13,2 g/kg/día (Koletzko et al., 2014). Esta cantidad de ingesta
estudios adicionales para definir más claramente el límite superior de proporcionará suficiente glucosa para satisfacer las necesidades de gasto
la ingesta de proteína por vía enteral en recién nacidos prematuros para energético total.
optimizar el crecimiento y los resultados del neurodesarrollo.
Grasas
Energía Las grasas proporcionan una fuente sustancial de energía para los
En el útero, el feto utiliza la glucosa y los aminoácidos como fuen- recién nacidos prematuros en fase de crecimiento. Los recién nacidos
te de energía. Si la ingesta de energía no es adecuada, la utilización prematuros tienen niveles bajos de lipasa pancreática, ácidos biliares y
de proteínas no es eficiente, lo que provoca una menor retención de lipasa salival. La leche humana, sin embargo, suministra una variedad
nitrógeno. Como se muestra en la tabla 68.1, Ziegler et al. (2002) de lipasas, incluyendo la lipasa de la lipoproteína, la esterasa de la
han estimado que los requerimientos de energía son más bajos en sal biliar y la lipasa no activa. La composición de la grasa de la dieta
niños con menor peso corporal. Junto con la relación inversa entre afecta a la absorción y la digestión. La absorción de ácidos grasos
los requerimientos proteínicos y el peso, la relación proteína-energía aumenta con la disminución de la longitud de la cadena y con el
requerida para alcanzar el crecimiento fetal es más alta en los recién grado de insaturación. Consecuentemente, los triglicéridos de cadena
nacidos más prematuros. La ingesta de energía recomendada para los media (longitud de cadena de carbono de 6-12) son hidrolizados más
recién nacidos prematuros alimentados por vía enteral oscila entre 110 fácilmente que los triglicéridos de cadena larga. En contraste con
y 130 kcal/kg/día (Koletzko et al., 2014). las leches maternizadas diseñadas para los recién nacidos a término, las
La relación óptima entre la proteína enteral y la ingesta de energía leches maternizadas infantiles prematuras suministran triglicéridos de
debe definirse no solo en términos de optimización del aumento de cadena media. La leche humana suministra un 8-12% de grasa como
peso, sino también de la que logre una óptima composición corporal. triglicéridos de cadena media. La ingesta recomendada de lípidos en
Consecuentemente, intentar imitar el ambiente intrauterino puede no recién nacidos prematuros alimentados por vía enteral varía entre 4,8 y

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CAPÍTULO 68 Nutrición enteral en el recién nacido de alto riesgo 1011

6,6 g/kg/día (Koletzko et al., 2014). De esta cantidad, los triglicéridos se utilizan cada vez más como herramientas para estudiar la enferme­
de cadena media deben aportar menos del 40% del consumo total. dad ósea metabólica en recién nacidos prematuros, pero su disponi-
bilidad es variable (Rack et al., 2012; Rehman y Narchi, 2015). El
diagnóstico del raquitismo por el neonatólogos de EE. UU. se realiza
Requerimientos de micronutrientes, vitaminas, sobre todo por las radiografías (Kelly et al., 2014).
minerales y oligoelementos Suplementar la leche humana con calcio y fósforo no solo mejo-
ra la retención neta de ambos minerales, sino que también aumenta
Calcio y fósforo el contenido de mineral óseo. El manejo actual de recién nacidos
prematuros alimentados con leche humana enfatiza la necesidad de
El calcio y el fósforo son componentes primarios del esqueleto, que suplementos de calcio y fósforo. Existe una relación lineal entre la
representan el 99 y el 85%, respectivamente, de la masa ósea. El objetivo ingesta de calcio (o fósforo) y la retención neta en los recién nacidos
de la nutrición infantil precoz es lograr un patrón de mineralización ósea prematuros alimentados por vía enteral. Los recién nacidos prematuros
similar al del feto, y evitar la osteopenia y las fracturas. El pico máximo que reciben leche humana no enriquecida nunca alcanzan tasas de
de acreción de calcio en el feto ocurre al final de la gestación a través del acreción intrauterina adecuadas para el calcio y el fósforo. Las tomas
influjo activo del calcio (Bhatia et al., 2013). Los recién nacidos tendrán diarias de aproximadamente 200 mg/kg/día de calcio y de 100 mg/kg/
mayores necesidades de calcio y fósforo cuando han estado expuestos a día de fósforo pueden lograrse con el uso de enriquecedores de la leche
diuréticos, que aumentan la excreción renal de estos minerales. Los reque- humana (ELH) especializados y leches maternizadas para prematuros, lo
rimientos de fósforo pueden ser mayores en el contexto de una historia que permite satisfacer las estimaciones intrauterinas. Los ELH contienen
de insuficiencia placentaria, y los requerimientos de calcio pueden ser glicerofosfato de calcio altamente soluble, que promueve la retención de
mayores para los recién nacidos expuestos a la teofilina o a los esteroides. calcio (Bhatia et al., 2013). Sin embargo, las leches maternizadas para
La leche materna prematura contiene aproximadamente 250 mg de recién nacidos a término y las leches maternizadas especializadas (no
calcio y 140 mg de fósforo por litro. Un metaanálisis de los estudios de «para prematuros») proporcionan cantidades inadecuadas de calcio y
contenido de leche materna revela que los niveles de calcio y fósforo son fósforo para satisfacer las necesidades de los recién nacidos prematuros
similares en la leche prematura y a término (Gidrewicz y Fenton, 2014). en crecimiento. Varios factores afectan la absorción de calcio y fósforo,
El contenido de calcio y fósforo de los productos de fórmula enteral incluyendo la edad posnatal y la ingesta de calcio, fósforo, lactosa, grasa
diseñados para recién nacidos prematuros en EE. UU. es significativa- y vitamina D. La absorción de calcio aumenta con un ambiente de bajo
mente mayor. En la leche humana, el calcio y el fósforo existen en formas pH y con alto contenido de caseína y alta en lactosa. Las pérdidas de
ionizadas y en complejos que se absorben fácilmente. Así, en el diseño contenido de calcio se observan con la alimentación continua de leche
de leches maternizadas comerciales, se añaden mayores cantidades de materna por sonda (Rogers et al., 2010). La vitamina D, sin embargo,
estos minerales para compensar su más escasa biodisponibilidad, por lo es responsable solamente de un pequeño componente de la absorción
que no es necesaria la suplementación adicional (Bhatia et al., 2013). del calcio en los recién nacidos prematuros.
Sin embargo, al contrario que el niño nacido a término, el recién nacido El momento de aporte de calcio y fósforo suficiente para su alma-
prematuro requiere cantidades significativamente mayores de calcio y cenamiento en los recién nacidos prematuros incluye la hospitalización
fósforo que las que se pueden suministrar con la leche humana. inicial, antes de su alta y el comienzo de la lactancia materna exclusiva.
Para el recién nacido prematuro alimentado con leche humana, el Sin embargo, por la necesidad de una nutrición parenteral prolongada
calcio y el fósforo son insuficientes durante la lactancia, y los niveles y por la incapacidad de proporcionar «recuperación» de cantidades de
son muy inferiores a los necesarios para alcanzar las tasas respectivas de calcio y fósforo en la leche, algunos recién nacidos pueden beneficiarse
crecimiento intrauterino. Los síntomas de deficiencia del calcio y del de calcio y fósforo adicionales después del alta hospitalaria mediante el
fósforo se asocian a los marcadores bioquímicos, como concentraciones uso de leches maternizadas de transición. Los recién nacidos prematuros
bajas del fósforo del suero y de la orina, actividad elevada de la fosfatasa dados de alta con una dieta exclusiva de leche materna pueden requerir
alcalina del suero, y concentraciones elevadas del calcio del suero y de un seguimiento continuo de los marcadores bioquímicos.
la orina. Habitualmente, las concentraciones de fósforo sérico son los
mejores indicadores del estado de calcio y fósforo en recién nacidos
prematuros alimentados con leche humana, y la concentración de Magnesio
fósforo sérico por debajo de 4 mg/dl debe monitorizarse cuidadosa-
Aproximadamente el 60% del magnesio del cuerpo está en el hueso. El
mente. La supervisión de estos marcadores analíticos se debe iniciar
magnesio tiene la tasa más alta de acreción fetal en el tercer trimestre.
durante la hospitalización de los recién nacidos con MBPN (Abrams
La leche materna prematura contiene aproximadamente 30 mg de
y Committee on Nutrition, 2013). El Committee on Nutrition de
magnesio por litro. La absorción del magnesio de la leche humana no
la American Academy of Pediatrics (AAP) publicó pautas para que la
enriquecida es significativamente mayor que la de la leche maternizada.
monitorización analítica de los recién nacidos con MBPN comience
Las necesidades de los recién nacidos prematuros son de 8-15 mg/kg/
4-5 semanas después del nacimiento. La deficiencia prolongada de estos
día (Bhatia et al., 2013), y la retención neta de magnesio en recién naci-
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minerales tiende a estimular la resorción ósea para normalizar las con-


dos alimentados con leche humana satisface las estimaciones intra­
centraciones séricas de calcio. Esta actividad del hueso se correlaciona a
uterinas. La hipomagnesemia puede estar presente en niños de madres
menudo con actividad elevada de la fosfatasa alcalina del suero. Datos
diabéticas y con frecuencia es transitoria. A veces, la hipomagnesemia
de publicaciones muestran que la mayoría de los niños prematuros
puede reducir la secreción y la capacidad de respuesta de la hormona
que tenían una actividad elevada de la fosfatasa alcalina del suero eran
paratiroidea y requerirá de su corrección para lograr la normocalcemia.
los que se alimentaron con leche humana. Además, en el seguimiento
de los mismos niños a los 9 y 18 meses se observó que el crecimiento li­
near era perceptiblemente más bajo en el grupo que tenía la actividad Oligoelementos
más alta de la fosfatasa alcalina sérica en el período neonatal. Un alto
valor de la fosfatasa alcalina en el período neonatal es un predictor Los recién nacidos prematuros son particularmente susceptibles a las
negativo de la altura en adolescentes de 9 a 12 años de edad (Fewtrell deficiencias de oligoelementos debido que la mayoría de su adquisición
et al., 2000). Los niveles de fosfatasa alcalina sérica superiores a 800 ocurre durante el último trimestre del embarazo. La bibliografía sobre
unidades internacionales (UI)/l o la preocupación clínica por las fractu- los requerimientos de oligoelementos para los recién nacidos prema-
ras deben conducirnos a solicitar estudios radiográficos de raquitismo. turos es escasa, al igual que los estudios que apoyan pautas basadas en
La absorciometría de doble energía de rayos X y la ecografía cuantitativa la evidencia para la administración de estos nutrientes (Finch, 2015).

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Cinc causales (Mariath et al., 2011). Una revisión Cochrane de tres ensayos


Varios factores afectan a las necesidades de cinc del recién nacido prema- elegibles (dos de los cuales se realizaron en regiones geográficas con
turo con alimentación enteral. La acreción fetal del cinc es aproximada- niveles bajos de selenio en la población) reportaron una asociación
mente 0,85 mg/kg/día. El crecimiento es un determinante importante de entre la suplementación de selenio en recién nacidos prematuros y la
las necesidades de cinc. Los recién nacidos prematuros que reciben mez- reducción del riesgo de sepsis (Darlow y Austin, 2003).
clas de leche materna pasteurizada (ingesta de cinc de aproximadamente
0,7 mg/kg/día) están en equilibrio negativo de cinc hasta los 60 días pos- Hierro
natales y nunca alcanzan las tasas de acreción intrauterina. En cambio, las Las necesidades de hierro del recién nacido prematuro están determinadas
tomas de 1,8-2 mg/kg/día se asocian con una retención neta de cinc que por el peso al nacer, la concentración inicial de hemoglobina, la velocidad
sobrepasa las tasas de acreción intrauterina. Se recomienda una relación de crecimiento, y la magnitud de la pérdida de hierro y/o el volumen de la
cinc-cobre de menos de 20:1 para los recién nacidos prematuros. sangre transfundida. La dotación de hierro puede estar disminuida por la
La ruta principal de excreción es a través del tubo digestivo. Los restricción del crecimiento y la insuficiencia placentaria en recién nacidos
recién nacidos con grandes pérdidas de líquidos gastrointestinales prematuros (McCarthy et al., 2016). La optimización de las prácticas
pueden llegar a ser deficientes en cinc, y los pacientes con síndrome de de pinzamiento del cordón umbilical ha conllevado un aumento en los
intestino corto pueden requerir 400-800 µg/kg/día. Las manifestaciones depósitos de hierro (Oh et al., 2011; Rabe et al., 2012). El metabolismo
clásicas de la deficiencia del cinc incluyen una dermatitis eritematosa de del hierro posnatal ocurre en tres fases. En la primera fase hay eritropo-
piel y mucosas en las áreas faciales y en las extremidades. La deficiencia yesis disminuida. La concentración de la hemoglobina disminuye hasta
sintomática del cinc produce mayor susceptibilidad a las infecciones, un nadir, aproximadamente a los 2-3 meses de edad posnatal, lo que
al retraso de curación de las heridas y a dificultades en el desarrollo. produce la anemia fisiológica de la prematuridad. En la segunda fase,
Los valores de cinc plasmático inferiores a 50 µg/dl son muy la concentración de hemoglobina se eleva a medida que se produce la
sugerentes de deficiencia, pero no es un biomarcador sensible para la formación activa de eritrocitos. En esta fase se necesita hierro. La tercera
deficiencia marginal, y los niveles pueden ser falsamente elevados en fase es un agotamiento de los depósitos de hierro, o anemia tardía de la
períodos de remodelación ósea. Los niveles de cinc en la sangre son prematuridad, que sucede si la suplementación de hierro es inadecuada.
más bajos en recién nacidos prematuros con enfermedad crítica (Wang La concentración de hierro en la leche materna disminuye a lo largo
et al., 2015). Los niveles se deben medir en el contexto de heces abun- de la lactancia. Los recién nacidos prematuros alimentados con leche
dantes o de pérdidas por las ostomías digestivas. Una actividad muy humana presentan equilibrios de hierro negativos, que, en ausencia de
baja de la fosfatasa alcalina sérica, una enzima dependiente del cinc, es transfusiones, pueden corregirse con suplementos de hierro. La absor-
también sugestiva de deficiencia. Los datos publicados de deficiencia ción del hierro también parece facilitarse por un grado leve de anemia.
sintomática de cinc en recién nacidos prematuros alimentados con Las recomendaciones más recientes del Committee on Nutrition de la
leche humana no suplementada sirven para recordarnos la disminución AAP es comenzar con suplementos de hierro enterales de 2 mg/kg/día
de la concentración de cinc en la leche a medida que avanza la lactancia. al mes de edad en recién nacidos prematuros alimentados con leche
humana (Baker et al., 2010). Esto se puede retrasar en recién nacidos
Cobre prematuros que han recibido múltiples transfusiones de eritrocitos, ya
que cada mililitro de sangre transfundida suministra 1 mg de hierro ele­
No existen métodos universalmente aceptados para evaluar clínicamente mental, lo que conlleva al riesgo de exceso de depósitos de hierro (Park
el estatus del cobre. Los datos del equilibrio del cobre proporcionan y Kim, 2015; Rehman y Narchi, 2015). La suplementación enteral
solamente una estimación de los depósitos del cobre de forma puntual en del hierro es más segura que la administración parenteral. Los recién
el tiempo. Los recién nacidos prematuros que reciben leche materna pas- nacidos prematuros alimentados con leche maternizada deben recibir
teurizada mezclada (ingesta de cobre de aproximadamente 85 µg/kg/día) fórmulas enriquecidas con hierro desde el inicio de la alimentación. A los
presentan un equilibrio de cobre negativo hasta los 30 días posnatales 6 meses de edad, los recién nacidos a término deben recibir 11 mg/día
y nunca cumplen la tasa de acreción intrauterina. La concentración (Baker et al., 2010). La suplementación de hierro disminuye de forma
de cobre es alta en la leche materna temprana y disminuye durante la significativa la prevalencia de anemia ferropénica (Long et al., 2012).
lactancia. La leche humana enriquecida suministra cobre adicional. Los
síntomas de la deficiencia de cobre incluyen osteopenia, neutropenia y
anemia hipocrómica. Los depósitos de cobre están correlacionados nega-
tivamente con la ingesta de cinc y la edad posnatal (Bhatia et al., 2013). CONTROVERSIAS
La deficiencia de cobre puede también presentarse como metabolopatía Aunque está claro que los recién nacidos prematuros requerirán suplementos
ósea con osteoporosis, cambios metafisarios y disrupción de la placa de de hierro, el momento óptimo de inicio de la administración de suplementos
crecimiento (Marquardt et al., 2012). Debido a que el cobre se excreta en y la duración de su uso están menos claros (Mills y Davies, 2012;
la bilis, en los casos de colestasis grave debe limitarse la ingesta de cobre. Taylor, Kennedy, 2013). Existen varias evidencias sobre los efectos de la
suplementación de hierro y la mejoría de los parámetros de neurodesarrollo
Selenio (Long et al., 2012). La desregulación de la homeostasis del ion de hierro que
media el daño oxidativo puede contribuir a los mecanismos fisiopatológicos
El selenio es un oligoelemento esencial y es transportado activamente de la retinopatía del prematuro (Luo et al., 2015). El déficit latente de hierro se
de la madre al feto (Kantola et al., 2004). Puede tener un papel impor- asocia con la maduración neural auditiva anormal en recién nacidos prematuros
tante en el daño oxidativo de los hidroperóxidos orgánicos y puede ser tardíos (Choudhury et al., 2015). La suplementación temprana del hierro da lugar
protector de la toxicidad por la exposición materna a los hidrocarburos a un nadir más alto de las concentraciones de hemoglobina y de ferritina
aromáticos policíclicos, que pueden contribuir a los partos prematu­ del suero, pero puede también causar sobrecargas de hierro (Jin et al., 2015).
ros (Huel et al., 2000). Los niveles bajos de selenio materno en las fases
tempranas de la gestación temprana aumentan el riesgo de rotura pre-
matura de membranas pretérmino (Rayman et al., 2011). En ensayos
controlados aleatorizados, la incidencia de rotura prematura de mem- Sodio y potasio
branas pretérmino fue menor en un grupo de mujeres embarazadas Los recién nacidos prematuros generalmente necesitan más sodio por
que recibieron suplementos de selenio (Tara et al., 2010). Se necesitan unidad de peso corporal que lo que necesitan los recién nacidos a tér-
investigaciones adicionales para clarificar el papel del selenio en los mino. Antiguos estudios propusieron que esta necesidad creciente se
resultados de embarazos adversos, ya que la mayoría de los diseños debía a los mecanismos renales inmaduros de la conservación del sodio,
de estudio están limitados en la capacidad de determinar relaciones pero estudios más recientes en niños muy prematuros han revelado una

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CAPÍTULO 68 Nutrición enteral en el recién nacido de alto riesgo 1013

secreción defectuosa de aldosterona con sensibilidad renal conservada Vitamina D


a esta (Martinerie et al., 2015). Las pérdidas de sodio están inversa- Las directrices propuestas por diferentes organizaciones profesionales
mente relacionadas con la edad gestacional. Un estudio que compara las con respecto a la dosificación óptima de la vitamina D son conflictivas.
ingestas diarias de sodio de 2,9 y 1,6 mEq (mmol)/kg en recién nacidos El Committee on Nutrition de la AAP emitió pautas que establecen
prematuros sugirió que la ingesta de 2,9 mEq/kg condujo a concen- la cantidad de vitamina D recomendada de 400 UI/día para recién
traciones de sodio en suero más apropiadas. La hiponatremia también nacidos. La recomendación se aplica a los recién nacidos que reciben
puede ocurrir en recién nacidos prematuros alimentados principalmente leche humana y a los que consumen menos de 1 l de leche maternizada
con leche humana, ya que el contenido de sodio de la leche prematura infantil al día, y se basan en parte en el riesgo de raquitismo en recién
continúa disminuyendo durante la lactancia (Dutta et al., 2014), aun- nacidos exclusivamente amamantados que no recibieron suplementos
que los estudios han revelado que existe un aumento significativo en de 400 UI de vitamina D por día. Este nivel de suplementación es
las concentraciones de sodio de la leche materna de donante después suficiente para alcanzar una concentración plasmática de 25-hidroxi­
de 1 año posparto (Perrin et al., 2017). La suplementación temprana vitamina D de 50 mmol/l en la mayoría de los recién nacidos (Abrams y
de sodio previene la hiponatremia en recién nacidos muy prematuros y Committee on Nutrition, 2013; McCarthy et al., 2013). Sin embargo,
puede mejorar el aumento de peso (Isemann et al., 2016). La necesidad la Endocrine Society recomienda que los recién nacidos reciban hasta
de estos electrólitos puede aumentar durante o después del uso de 1.000 IU/día para alcanzar una concentración plasmática de 25-hidroxi­
diuréticos. En los recién nacidos con intestino corto u ostomías pueden vitamina D plasmática de 75 mmol/l para obtener beneficios para la
aumentar las necesidades de sodio, y las mediciones urinarias de sodio salud no relacionados con el hueso (Nehra et al., 2013).
se correlacionan con el crecimiento (Mansour et al., 2014). Los fármacos antiepilépticos, como la fenitoína y el fenobarbital, pue-
den afectar al metabolismo de las vitaminas. La etnicidad tiene un papel
Vitaminas en los niveles séricos de 25-hidroxivitamina D. Los niños hispanos tienen
un nivel más bajo en sangre del cordón umbilical (Abrams et al., 2012).
Las vitaminas liposolubles A, D, E y K se almacenan en el cuerpo, y Los recién nacidos prematuros tienen un mayor riesgo de nacer con niveles
las dosis elevadas pueden causar toxicidad. Las vitaminas hidrosolubles séricos de 25-hidroxivitamina D del cordón umbilical (Burris et al., 2004).
(tiamina, riboflavina, niacina, vitamina B6, folato, vitamina B12, ácido
pantoténico, biotina y vitamina C) no se almacenan en el cuerpo, y el
exceso de la ingesta se excreta por la orina o por la bilis (vitamina B12).
CONTROVERSIAS
Por lo tanto, la ingesta de vitaminas hidrosolubles debe monitorizarse de Ciertos polimorfismos del receptor de la vitamina D se asocian con
forma frecuente para evitar los estados carenciales. Las concentraciones una mayor frecuencia de DBP (Koroglu et al., 2014). Los niveles más bajos
de vitamina A y de riboflavina disminuyen en la leche humana en de 25-hidroxivitamina D en el suero materno y neonatal están asociados
condiciones de exposición a la luz y después del paso a través de sondas con la DBP en recién nacidos prematuros (Cetinkaya et al., 2015; Fettah
de alimentación. Como consecuencia de la exposición al aire, las concen- et al., 2015). Estudios recientes han revelado que la administración
traciones de ácido ascórbico son menores en la leche humana mezclada. de suplementos de vitamina D en recién nacidos prematuros se asocia
La pasteurización de la leche materna de donantes conduce a una reduc- con más sibilancias recurrentes del recién nacido (Hibbs et al., 2015).
ción en el contenido de vitamina D (Gomes et al., 2016). Las vitaminas Se está llevando a cabo un ensayo clínico aleatorizado con diferentes estrategias
suplementarias se proporcionan en ELH y en las leches maternizadas de dosificación de vitamina D para recién nacidos prematuros negros.
para prematuros. Se debe administrar un suplemento multivitamínico
a los recién nacidos prematuros una vez que la alimentación cambie a
leche humana sin enriquecer o leche maternizada estándar. Vitamina E
Una sola dosis enteral de suplementos de vitamina E en los recién
Vitamina A nacidos prematuros aumenta los niveles séricos de α-tocoferol, la forma
El contenido reportado de vitamina A de la leche materna prematura es biológicamente activa (Bell et al., 2013). El calostro tiene altas con-
variable, pero es similar al de la leche materna a término. El contenido centraciones de α-tocoferol en la leche a término y prematura (Grilo
es más alto en el calostro (400-600 UI/dl) y en la leche materna con et al., 2013). El sistema de manejo de la leche materna, incluida la
un mayor contenido de grasa, y disminuye en la lactancia madura (60- alimentación con biberón, puede disminuir la concentración de α-toco-
200 UI/dl). El sistema de manejo de la leche materna, incluyendo la ferol (Francis et al., 2012). Existe una alta prevalencia de deficiencia
alimentación con biberón, puede disminuir la concentración de retinol de vitamina E en recién nacidos con MBPN hasta la edad gestacional
(Francis et al., 2012). corregida a término (Kositamongkol et al., 2011). La suplementación
Se necesitan más estudios para establecer la dosificación óptima de los con vitamina E reduce el riesgo de retinopatía del prematuro y la hemo-
suplementos con vitamina A (Moya, 2014). Los metaanálisis revelan que rragia intracraneal, y aumenta el riesgo de sepsis en los niños con MBPN
la suplementación con vitamina A puede dar lugar a una modesta reduc- (Brion et al., 2003). La suplementación con α-tocoferol a largo plazo (> 6
ción del riesgo de DBP o muerte, ya que los niveles bajos de vitamina meses) en recién nacidos con un peso extremadamente bajo al nacer
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A y de proteína de unión al retinol se asocian con una disminución del (PEBN) puede aumentar el cociente intelectual (Kitajima et al., 2015).
aclaramiento de secreciones pulmonares y disminución de la capacidad de
reparación de tejido pulmonar (Darlow y Graham, 2011). Sin embargo, Vitamina K
estos estudios son confusos por el uso de dexametasona en recién nacidos En EE. UU., la fitomenadiona (vitamina K) se administra rutinaria-
prematuros, lo que da como resultado un aumento transitorio y luego mente al nacer por inyección intramuscular para prevenir la enfer-
una caída en los niveles séricos de retinol y de la proteína de unión al medad hemorrágica del recién nacido. Existen regímenes de dosifi-
retinol. Además, hay pruebas de que existe un mayor riesgo de sepsis con cación oral descritos en la literatura, pero hay una falta de evidencia
la administración de vitamina A (Mactier, 2013; Uberos et al., 2014). para apoyar el uso alternativo de forma rutinaria (Ipema, 2012). Los
polimorfismos genéticos en el sistema de coagulación dependiente
de vitamina K pueden hacer que algunos recién nacidos prematuros
CONTROVERSIAS tengan un mayor riesgo de desarrollar hemorragias intraventriculares
Existen nuevos datos de que el ácido retinoico, un metabolito de la vitamina A, (Schreiner et al., 2014). El déficit de proteínas inducidas por el déficit
puede tener un papel en la prevención de la retinopatía del prematuro de vitamina K es el indicador más sensible del estado de la vitami­
(Mactier et al., 2012; Wang et al., 2014). na K, pero el tiempo de protrombina y los estudios de coagulación son
los marcadores que se usan habitualmente.

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1014 PA RT E XI I I Nutrición

Opciones para la nutrición enteral La principal proteína del suero de la leche humana es la α-lactoalbú-
mina, una proteína de alto valor nutricional para el recién nacido y un
Cuando los clínicos están considerando la nutrición enteral en los componente de la síntesis de lactosa de la glándula mamaria. La lactofe-
recién nacidos prematuros, hay varias opciones básicas que deben valo- rrina, la lisozima y la inmunoglobulina A secretora (IgAs) son proteínas
rar. En primer lugar, y lo más importante, es elegir la dieta básica para del suero humanas específicas que son particularmente resistentes a la
el niño, con tres opciones: leche materna, leche humana de donante o hidrólisis y, como tales, recubren el tubo digestivo para desempeñar un
leche maternizada para prematuros. Una vez tomada esta decisión, los papel principal en las defensas del huésped. Por lo tanto, estas proteínas
médicos deben decidir: 1) cuándo iniciar la alimentación enteral; pueden proporcionar protección para el recién nacido prematuro que
2) cómo aumentar los volúmenes de alimentación, y 3) cómo alimentar está expuesto a múltiples patógenos en el entorno de la guardería.
al recién nacido (por vía oral, por gravedad con bolos a través de una Aunque el contenido proteínico de la leche humana de madres que
sonda nasogástrica [NG] u orogástrica [OG] o en infusión continua dan a luz prematuramente es mayor que el contenido proteínico de la
por sonda NG/OG). Debido a las necesidades nutricionales específicas leche humana de madres que dan a luz a término, el contenido proteíni-
de los recién nacidos prematuros (principalmente el requisito de una co de la leche materna prematura disminuye con el tiempo mucho más
mayor ingesta de proteínas y minerales que los proporcionados por la rápidamente de lo que generalmente se cree. Los datos combinados de
leche humana sola), hay una decisión adicional que se debe tomar, que múltiples ensayos pequeños en la década de los ochenta han demostrado
es cuándo se iniciará el enriquecimiento de la leche humana y cómo se un contenido proteínico inicial de la leche materna prematura de aproxi-
debe manejar el enriquecimiento de la leche en cada momento. madamente 1,9 g/dl a la semana después del nacimiento, disminuyendo
a 1,2 g/dl en 30 días, y estos valores se usan generalmente para los
cálculos del contenido proteínico estimado de la leche humana cuando
Leche humana se alimenta a los recién nacidos prematuros (Schanler y Oh, 1980, Gross
et al., 1981; Lemons et al., 1982; Picciano, 2001). De manera similar,
Leche materna el contenido de proteína de la leche producida por las madres que dan
La leche humana materna es la dieta preferida para los recién nacidos a término se estima típicamente en 1 g/dl. Gidrewicz y Fenton (2014)
prematuros en casi todas las circunstancias. Los estudios observaciona­ publicaron un metaanálisis de 41 estudios de composición de la leche
les realizados en los últimos 30 años han demostrado que los recién naci- humana realizados durante 30 años, que representan a más de 3.000
dos prematuros alimentados con leche materna experimentan beneficios madres. Describen que el contenido de proteína de la leche prematura en
para la salud en comparación con los alimentados con leche materni- la primera semana de lactancia es de 2,2 g/dl, disminuyendo a 1,4 g/dl
zada para prematuros, incluido el menor riesgo de las complicaciones en la semana 3 y a 1 g/dl en la semana 10 (tabla 68.2). Estos valores
más comunes de la prematuridad, como la sepsis de inicio tardío, la deben tenerse en cuenta cuando se estima el consumo de proteínas de
EN y la DBP (Lucas y Cole, 1990; Schanler et al., 1999, 2005; Vohr los recién nacidos prematuros alimentados con leche.
et al., 2006; Sisk et al., 2007; Maayan-Metzger et al., 2012). Además, se
ha demostrado que los recién nacidos con MBPN alimentados con leche Grasas
materna requieren menos hospitalizaciones (Vohr et al., 2006) y que La grasa proporciona el 50% de la energía en la leche humana. El sis-
tienen resultados de desarrollo superiores desde los 2 a los 8 años de edad tema de lípidos en la leche humana está estructurado de una manera que
(Lucas et al., 1992), con una relación dosis-respuesta estadísticamente facilita la digestión y la absorción de las grasas. En la leche humana, la
significativa (Vohr, 2007). Las dietas de leche materna son recomendadas grasa existe como glóbulos grasos organizados que contienen una capa
para recién nacidos prematuros por la AAP, la Organización Mundial de de proteína externa y un núcleo interno de lípidos. El tipo de ácidos
la Salud (OMS) y la European Society for Pediatric Gastroenterology, grasos (grandes cantidades de ácidos grasos palmítico 16:0, oleico 18:1,
Hepatology, and Nutrition (Agostoni et al., 2010; Section on Breast­ linoleico 18:2w-6 y linoleico 18:3w-3), su distribución en la molécula de
feeding, 2012). Aunque las tasas de iniciación de la extracción de la triglicéridos (16:0 en la posición 2 de la molécula) y la presencia de lipasa
leche materna aumentan entre las madres de recién nacidos con MBPN estimulada por sales biliares son componentes importantes del sistema
(Colaizy y Morriss, 2008), las madres a veces no pueden producir el volu- lipídico en la leche humana. El contenido de grasa de la leche prematura
men requerido de leche (Jegier et al., 2013) o tienen contraindicaciones es más alto que el de la leche a término en las primeras 2 semanas (2,2-
médicas para la lactancia materna (Neifert, 2001). En estas circuns- 3,5 g/dl en la leche prematura frente a 1,8-3 g/dl en la leche a término)
tancias, la leche materna o la leche maternizada para prematuros deben (Gidrewicz y Fenton, 2014). Sin embargo, la grasa es el macronutriente
utilizarse para sustituir o suplementar la leche materna. En este apartado más variable en la leche humana (v. tabla 68.2). El contenido de grasa de
se abordará la leche materna, tanto de la madre como de donante. la leche humana difiere entre las mujeres, cambia durante el día, aumenta
levemente durante la lactancia y aumenta drásticamente en una sola
Contenido de nutrientes de la leche humana expresión de leche. La variabilidad en el contenido de grasa total no está
Proteínas relacionada con la ingesta de grasa en la dieta materna. Debido a que
En las primeras semanas después del nacimiento, el contenido proteí- no está homogeneizada, la grasa se separa de la leche humana al ponerse
nico de la leche de las madres que dan a luz recién nacidos prematuros de pie el recipiente. La grasa separada puede adherirse a los recipientes
(leche prematura) es mayor que el de la leche obtenida de madres que de recolección, sondas de alimentación y jeringas, y, por lo tanto, no se
dan a luz a término (leche a término). El contenido de proteína tanto puede administrar al recién nacido, lo que afecta a la ingesta de energía.
de la leche prematura como de la leche a término disminuye con el La variabilidad en el contenido de grasa de la leche humana se puede
tiempo, de modo que después de las 2 semanas se nivela a lo que usar de forma ventajosa en el recién nacido prematuro. La mayoría de
se denomina leche madura. La calidad de la proteína (la proporción la transferencia de leche durante la alimentación ocurre en 10-15 min,
de suero de leche y caseína) en la leche humana es particularmente pero la expresión continuada de la leche produce una leche con un
adecuada para el recién nacido prematuro. La leche humana contiene contenido de grasa progresivamente más alto que la leche anterior (la
un 70% de suero de leche y un 30% de caseína, mientras que la leche leche final). El contenido de grasa de la leche final puede ser 1,5-3
bovina contiene un 18% de suero de leche y un 82% de caseína. La veces mayor que el de la leche inicial. El uso de leche final en casos
fracción de suero de la leche está formada por proteínas solubles que seleccionados puede proporcionar energía adicional al recién nacido
permanecen en solución después de la acidificación y, por lo tanto, se prematuro. La leche final y la leche inicial contienen concentraciones
digieren más fácilmente. La leche humana promueve un vaciamiento similares de nitrógeno, calcio, fósforo, sodio y potasio. Las concen-
gástrico más rápido que la leche bovina formada predominantemente traciones de cobre y cinc disminuyen aproximadamente en un 5% de
tanto por caseína como por suero. la leche inicial a la final.

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CAPÍTULO 68 Nutrición enteral en el recién nacido de alto riesgo 1015

TABLA
68.2  Composición de la leche humana a término y prematura

Energía (kcal/dl) Proteínas (g/dl) Grasas (g/dl) Lactosa (kcal/dl) Oligosacáridos (g/dl)
Prematura
Semana 1 60 (45-75) 2,2 (0,3-4,1) 2,6 (0,5-4,7) 5,7 (3,9-7,5) 2,1 (1,3-2,9)
Semana 2 71 (49-94) 1,5 (0,8-2,3) 3,5 (1,2-5,7) 5,7 (4,1-7,3) 2,1 (1,1-3,1)
Semana 3-4 77 (61-92) 1,4 (0,6-2,2) 3,5 (1,6-5,5) 6,0 (5-7) 1,7 (1,1-2,3)
Semana 10-12 66 (39-94) 1,0 (0,6-1,4) 3,7 (0,8-6,5) 6,8 (6,2-7,2) ND
A término
Semana 1 60 (44-77) 1,8 (0,4-3,2) 2,2 (0,7-3,7) 5,8 (4,2-7,4) 1,9 (1,1-2,7)
Semana 2 67 (47-86) 1,3 (0,8-1,8) 3,0 (1,2-4,8) 6,2 (5-7,3) 1,9 (1,1-2,7)
Semana 3-4 66 (48-85) 1,2 (0,8-1,6) 3,3 (1,6-5,1) 6,7 (5,3-8,1) 1,6 (1-2,2)
Semana 10-12 68 (50-86) 0,9 (0,6-1,2) 3,4 (1,6-5,2) 6,7 (5,3-8,1) ND

Los valores se dan como media ± 2 desviaciones estándar.


ND, no disponible.
Modificado de Gidrewicz DA, Fenton TR. A systematic review and meta-analysis of the nutrient content of preterm and term breast milk. BMC Pediatr. 2014;14:216.

Las diferencias entre leche inicial y leche final también deben consi- poliinsaturados de cadena muy larga ácido araquidónico (AA) (20:4w-6)
derarse en términos de la distribución de calorías. La grasa y la proteína y DHA (22:6w-3) se encuentran en la leche humana, pero no en
representan el 42 y el 12%, respectivamente, de las calorías en la leche la leche bovina, y son componentes de fosfolípidos que se encuen-
inicial, y el 55 y el 9% de las calorías en la leche final. La alimentación a tran en el cerebro, la retina y las membranas de células sanguíneas.
largo plazo de la leche final podría tener un efecto negativo en el estatus El AA y el DHA se han asociado funcionalmente con el crecimiento
de las proteínas. Se recomienda una mayor proporción de calorías en corporal, la visión y la cognición. Además, los ácidos grasos son partes
forma de proteínas (10-12%) para los recién nacidos prematuros. La integrales del metabolismo de las prostaglandinas. Cuando su dieta
variabilidad en el contenido de grasa de la leche humana se puede usar se suplementó con ácidos grasos poliinsaturados, los recién nacidos
de forma ventajosa en el recién nacido prematuro. prematuros alimentados con leche maternizada tenían concentra-
ciones de DHA en los eritrocitos similares a las de los recién nacidos
Hidratos de carbono alimentados con leche humana. Los estudios de seguimiento de estos
El principal hidrato de carbono en la leche humana es la lactosa, un recién nacidos suplementados sugieren mejorías en la agudeza visual
disacárido compuesto por los monosacáridos galactosa y glucosa. El en comparación con los recién nacidos que no recibieron suplementos,
contenido de lactosa es similar entre la leche humana prematura y pero de una magnitud similar a la de los recién nacidos alimentados
a término, y no varía con la duración de la lactancia, a diferencia con leche humana (Carlson et al., 1996). También se ha demostrado
de los contenidos de proteínas y grasas, que sí lo hacen. También una mejoría en las medidas cognitivas durante el primer año de vida.
están presentes en la leche humana pequeñas cantidades de glucosa y Tanto el AA como el DHA ahora se agregan a las leches maternizadas
galactosa libres. La leche humana también contiene una gran cantidad prematuras. Las ingestas recomendadas para el DHA y el AA son
de oligosacáridos (oligosacáridos de la leche humana [OLH]), azúcares 11-27 mg/100 kcal y 16-39 mg/100 kcal, respectivamente (Agostoni
complejos formados por cadenas de disacáridos de lactosa, galactosa, et al., 2010; Lapillonne et al., 2013; Uauy y Mena, 2015).
N-acetilglucosamina y ácido N-acetilneuramínico, modificados por
la fucosa y el ácido siálico. Los OLH representan la mayor fracción Carnitina
de hidratos de carbono en la leche humana distintos a la lactosa (el La carnitina se sintetiza a partir de la lisina y la metionina, y sirve
5-10% del total de hidratos de carbono) y a menudo están presentes en como un efector importante de la oxidación de los ácidos grasos en la
cantidades similares a las de las proteínas (v. tabla 68.2). Estos hidratos mitocondria. El aporte de carnitina en la dieta da como resultado una
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de carbono no son utilizados por los recién nacidos como combustible, mejoría de la oxidación de los ácidos grasos. La leche humana contiene
sino que alcanzan la parte distal del intestino de forma intacta, donde abundante carnitina, y todas las leches maternizadas infantiles se com-
actúan como agentes de defensa y prebióticos del huésped, lo que influ- plementan con carnitina.
ye en los patrones de colonización microbiana intestinal (Bode, 2015).
Enzimas de la leche humana
Ácidos grasos esenciales La leche humana contiene enzimas que ayudan al recién nacido en
Los ácidos grasos esenciales, ácidos linoleico y linolénico, están pre- la digestión de nutrientes. La α-amilasa, la enzima responsable de la
sentes en grandes cantidades en la leche humana y en las leches mater- mayor parte de la digestión de los polisacáridos, no está completamente
nizadas comerciales. Sin una ingesta adecuada de estos ácidos grasos, desarrollada al nacer, incluso en recién nacidos a término, que tienen
el déficit de ácidos grasos esenciales (trombocitopenia, dermatitis, solo un 0,2-0,5% de actividad adulta. La amilasa materna es activa con
aumento de infecciones y restricción en el crecimiento) puede desa- el pH del estómago (3,5) y del duodeno (5,3), y puede ayudar al recién
rrollarse tan solo en 1 semana. Solo un 0,5 g/kg/día de ácidos grasos nacido deficiente en la digestión de polímeros de glucosa y almidones.
esenciales (∼4% de la ingesta total de energía) evitarán la deficiencia. El Aunque la leche humana no contiene sustrato para la α-amilasa, esta
ácido α-linolénico es un precursor importante para la síntesis de ácido enzima puede ayudar en la digestión de las comidas, incluidas las leches
eicosapentaenoico y ácido docosahexaenoico (DHA). Los ácidos grasos maternizadas infantiles o ELH que contienen hidratos de carbono

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1016 PA RT E XI I I Nutrición

complejos. Las lipasas (similares a la lipasa pancreática) están presentes Los cálculos de la ingesta de proteínas y energía en los recién nacidos
en la leche humana y ayudan a la digestión de los triglicéridos, de tal prematuros a menudo se realizan con una estimación de 1,4 g/dl para el
manera que una fracción significativa se descompone en ácidos grasos contenido de proteínas. La leche de donante, sin embargo, típicamente
libres y glicerol antes de la digestión en el intestino delgado. La lipasa contiene menos proteínas que esta, con estudios que muestran valores de
estimulada por sales biliares, una lipasa presente en la leche humana, 0,9-1,1 g/dl, con más del 30% de muestras en un estudio de 273 donan-
es muy activa debido a su amplia especificidad de sustrato: hidroliza tes que tienen un contenido de proteína de menos de 1 g/dl (Wojcik
monoacilgliceroles, diacilgliceroles y triacilgliceroles, así como ésteres et al., 2009). Además de la leche materna a término, la manipulación
de colesterol. Esta enzima también es estable en el duodeno y resistente necesaria para procesar la leche del donante para la alimentación causa
al pH bajo del estómago (Lonnerdal, 2003). una pérdida adicional de nutrientes, con un 9% de pérdida de proteínas
y un 13% de pérdida de grasa entre la leche cruda y la leche que ha sido
pasteurizada y sometida a pruebas con sonda NG de alimentación en
Vitaminas y minerales bolos (Vieira et al., 2011). El contenido de grasa de la leche humana
El contenido de vitaminas y minerales de la leche humana prematura, donante es similar al de la leche materna, con menos variabilidad por
así como de los enriquecedores de leche humana multicomponente lote de leche de donante de la HMBANA que la extracción individual
actualmente disponibles, se muestra en la tabla 68.3. de leche materna debido al proceso de agrupamiento. Algunos bancos de
leche de la HMBANA recogen y acumulan leche de madres que dan a
Leche humana de donante luz prematuramente y la dispensan después de la pasteurización como
Se han publicado recomendaciones recientes de la European Society leche prematura para proporcionar un mayor contenido de proteína
for Paediatric Gastroenterology, Hepatology and Nutrition, la Section a los recién nacidos prematuros. Además, algunos bancos de leche
on Breastfeeding de la AAP y la OMS que refrendan el uso de la leche de la HMBANA analizan el contenido de nutrientes de su leche en
humana donante en recién nacidos prematuros cuando la leche materna común, etiquetando contenedores con contenido de energía (kcal/dl)
no está disponible, ya sea como dieta única o como suplemento de la y/o proteína (g/dl), aunque esta práctica no es universal ni obligatoria
leche materna (World Health Organization, 2011; Section on Breast­ por la HMBANA. Prolacta Bioscience y Medolac Laboratories etiquetan
feeding, 2012; ESPGHAN Committee on Nutrition et al., 2013). sus productos comerciales con el contenido de nutrientes.
A pesar de estas recomendaciones y uso generalizado, faltan estudios Además de las diferencias nutricionales observadas anteriormente,
a gran escala sobre el uso de la leche humana de donantes en recién algunos de los mecanismos de defensa del huésped únicos presentes en
nacidos con MBPN durante la era de enriquecimiento rutinario de la leche humana son inactivados por el método Holder de pasteurización
la leche humana. En 2011, el Surgeon General de EE. UU. propuso y congelación. De un 40 a un 60% de las IgAs y un 60% de la lactofe-
más investigaciones para identificar áreas donde las evidencias con rrina en la leche humana son inactivadas por la pasteurización Holder,
respecto a la leche de donantes no son concluyentes y para desarrollar al igual que todos los leucocitos vivos. La lisozima y los oligosacáridos,
guías clínicas basadas en la evidencia para su uso (US Department of otros factores protectores antiinfecciosos en la leche humana, no se ven
Human and Health Services, 2014). afectados. No hay datos publicados sobre los efectos de los procesos
La mayor parte de la leche humana de donante utilizada actual- patentados de pasteurización utilizados por Prolacta Bioscience y Medo-
mente en las UCIN en EE. UU. es dispensada por los 26 bancos lac Laboratories en los componentes de defensa del huésped en la leche
miembros de la Human Milk Banking Association of North America humana de donante. La lipasa y amilasa estimulada por sales biliares
(HMBANA), que dispensaron de forma colectiva en torno a 124.200 l también se inactivan mediante el método Holder de pasteurización.
de leche en 2015. El rápido aumento en el uso de leche de donantes
fue evidente cuando se consideró que, en 2007, la HMBANA dispensó
unos 29.600 l de leche, lo que demuestra que la demanda se cuadru- Iniciación, modo y progresión
plicó en 8 años. La leche procesada y dispensada por la HMBANA se de la alimentación enteral
obtiene de donantes sanas, la mayoría de las cuales dieron a luz a recién
nacidos a término y se sometieron a extensas pruebas de cribado con- La iniciación, el modo y el aumento de ritmo de la alimentación enteral
ductual y serológico (Human Milk Banking Association of North siguen siendo un tema de controversia en neonatología. La literatura
America, 2015). Las donantes son evaluadas para detectar virus de la no informa de forma definitiva de los protocolos, lo que provoca una
inmunodeficiencia humana, virus linfótropos humanos de linfocitos T variación sustancial entre las distintas UCIN. La principal preocupa-
de tipo 1, virus linfótropos humanos de linfocitos T de tipo 2, hepati­ ción con respecto a la alimentación enteral es la presunta asociación de
tis B, hepatitis C y sífilis. Las pruebas se pueden realizar a través de un la alimentación enteral y la EN, con el inicio temprano y/o el avance
cribado de anticuerpos o una reacción en cadena de la polimerasa de rápido de la alimentación, ya que se percibe que aumenta el riesgo de
ácido nucleico según los protocolos de cada banco. La leche se procesa esta complicación en los prematuros.
mediante la agrupación de donaciones de 3 a 10 donantes y la pasteuri- La práctica actual favorece la alimentación enteral mínima de forma
zación de la leche calentándola a 62 °C durante 30 min (pasteurización precoz, también conocida como alimentación trófica o cebado digestivo,
Holder). Después de la pasteurización, se envía una muestra de leche ya que se ha demostrado que la falta de alimentación enteral retrasa la
de cada grupo para el análisis bacteriológico. Los bancos miembros de maduración intestinal en recién nacidos prematuros y produce efectos
la HMBANA mantienen registros que permiten emparejar donantes y negativos. El ayuno causa atrofia intestinal, disminución del peso y del
destinatarios. Pequeñas contribuciones al volumen de leche de donantes tamaño intestinal (en modelos animales), retraso de la maduración de la
usado en las UCIN de EE. UU. las hacen dos productores comerciales, función enzimática intestinal, aumento de la permeabilidad intestinal
Prolacta Bioscience y Medolac Laboratories. Estas compañías usan y translocación bacteriana y retraso en la maduración de la función
procesos patentados para la pasteurización y el análisis de donantes. motora intestinal. Además, el retraso en la alimentación enteral puede
hacer que sea más prolongada la duración de la nutrición parenteral,
Diferencias entre la leche humana materna y de donante con sus riesgos bien descritos, que incluyen trastornos metabólicos,
La leche materna y la leche materna de donantes difieren en algu- hiperbilirrubinemia directa, y colestasis y sepsis de inicio tardío.
nos aspectos importantes, y estas diferencias deben tenerse en cuenta Varias revisiones Cochrane, publicadas desde 2013, han investigado
cuando se elige la leche de donantes como una dieta para los recién varios aspectos de la iniciación y el avance de la alimentación en recién
nacidos prematuros. Dado que la leche humana de donantes se obtiene nacidos prematuros (tabla 68.4) con resultados decepcionantes. Estos
principalmente de madres que dieron a luz a recién nacidos a término, problemas han sido difíciles de estudiar de manera rigurosa, pero se han
esta leche es más baja en proteínas que la leche materna prematura. abordado en una serie de revisiones sistemáticas Cochrane (Kennedy

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CAPÍTULO 68 Nutrición enteral en el recién nacido de alto riesgo 1017

TABLA  Contenido de vitaminas y minerales de la leche humana, cruda y después de la adición de productos
68.3 enriquecedores de leche humana

ELH Similac ELH Enfamil ELH Enfamil


ELH Similac líquido, 4 acidificado acidificado líquido, LHPM + Prolact
líquido, envases, + 100 ml líquido, 4 envases, + Prolact + + 4 H2MF
LHPM 4 envasesa de LHPTa 4 envasesb 100 ml de LHPTb 4 H2MFc (relación 4:1)c
Nutrientes
Energía (kcal) 67 27,4 94 30 97 28 82
Volumen (ml) 100 20 120 20 120 20 80 + 20
Proteínas (g) 1,4 1,4 2,8 2,2 3,6 1,2 2,3
Grasas (g) 3,9 1,1 5 2,3 6,2 1,8 4,9
Hidratos de carbono (g) 6,6 3,2 9,8 < 1,2 < 7,8 1,8 7,1
Vitaminas
Vitamina A (UI) 390 788 1.178 1.160 1.550 61 373
Vitamina D (UI) 2 140 142 188 190 26 27,6
Vitamina E (UI) 1 3,9 4,9 5,6 6,6 0,4 1,2
Vitamina K (µg) 0,2 9,7 9,9 5,7 5,9 < 0,2 < 0,36
Tiamina (vitamina B1) (µg) 21 192 213 184 205 4,1 20,9
Riboflavina (vitamina B2) (µg) 48 492 540 260 308 15 53,4
Vitamina B6 (µg) 15 198 213 140 155 4,1 16,1
Vitamina B12 (µg) 0,05 0,33 0,38 0,64 0,69 0,05 0,09
Niacina (µg) 150 4.176 4.326 3.700 3.850 52,4 172
Ácido fólico (µg) 3,4 27,3 30,7 31 34,4 5,4 8,1
Ácido pantoténico (µg) 181 1.236 1.417 920 1.101 75 220
Biotina (µg) 0,4 30,3 30,7 3,4 3,8 0,2 0,52
Vitamina C (µg) 11 30,9 41,9 15,2 26,2 < 0,2 <9
Colina (mg) 9,4 3,7 13,1 ND ND ND ND
Inositol (mg) 14,7 6,9 21,6 ND ND ND ND
Minerales
Calcio (mg) 25 140,4 165,4 116 141 103 123
Fósforo (mg) 13 80 93 63 76 53,8 64,2
Magnesio (mg) 3,1 8,6 11,7 1,84 4,9 4,7 7,2
Hierro (mg) 0,12 0,43 0,55 1,76 1,9 0,1 1,1
Cinc (mg) 0,34 1,2 1,5 0,96 1,3 0,7 0,97
Manganeso (µg) 0,67 8,5 9,2 10 10,7 < 12 < 12,5
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Cobre (µg) 64,4 58,9 123,3 60 124,4 64 116


Yodo (µg) 11 1,9 12,9 ND ND ND ND
Selenio (µg) 1,5 0,82 2,3 ND ND ND ND
Sodio (mg) 25 21,6 46,6 27 52 37 57
Potasio (mg) 57 82,8 139,8 45 102 34,4 80
Cloro (mg) 55 53,6 108,6 28 83 38,6 82,6
Osmolalidad (mOsm/kg H2O) 290 160 450 144 434 ND ND
a
http://abbottnutrition.com/brands/products/similac-human-milk-fortifier-hydrolyzed-protein-concentrated-liquid.
b
https://www.meadjohnson.com/pediatrics/us-en/product-information/products/premature/enfamil-human-milk-fortifier-acidified-liquid#nutrients-sup-sup.
c
http://www.prolacta.com/Data/Sites/14/media/PDF/mkt-180-prolact-hmf-nutrition-labels.pdf.
ELH, enriquecedor de la leche humana; LHPM, leche humana prematura; ND, no disponible; UI, unidades internacionales.

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1018 PA RT E XI I I Nutrición

TABLA  Metaanálisis: evidencias de la alimentación enteral trófica temprana, la incorporación tardía de alimentación
68.4 progresiva y el lento avance de los volúmenes de alimentación en recién nacidos de muy bajo peso al nacer

Metaanálisis Comparación primaria Población Resultados


Morgan et al. (2013) Alimentación enteral trófica 9 ensayos clínicos Sin diferencias en días con nutrición completa (MD, –1,05;
< 4 días de edad 754 MBPN o recién nacidos IC al 95%, –2,61-0,51), riesgo de EN (RR, 1,07; IC al 95%,
durante al menos 7 días muy prematuros 0,67-1,7)
frente a nutrición enteral
Morgan et al. (2014) Alimentación progresiva 9 ensayos clínicos Disminución de la estancia media para el grupo de
retrasada (> 4 días) 1.106 recién nacidos, pocos alimentación precoz (MD, 2,11 días; IC al 95%, 0,31 a 3,9,
frente a alimentación < 28 semanas o < 1.000 g P = 0,02)
precoz (< 4 días) No hubo diferencias en el riesgo de EN (RR 0,93; IC al 95%,
0,64-1,34), mortalidad (RR, 1,18; IC al 95%, 0,75-1,88)
Morgan et al. (2015) Progresión lenta (< 24 ml/kg/día) 9 ensayos clínicos Mayor incidencia de infección invasiva en el grupo de
frente a progresión 949 recién nacidos, la mayoría progresión lenta (RR, 1,46; IC al 95%, 1,03-2,06; P = 0,03)
más rápida de la nutrición de 1.000-1.500 g al nacer No hubo diferencias en el riesgo de EN (RR, 1,02; IC al 95%,
0,64-1,62), mortalidad (RR, 1,18; IC al 95%, 0,9-1,53)

EN, enterocolitis necrosante; IC, intervalo de confianza; MBPN, muy bajo peso al nacer; MD, diferencia de medias; RR, riesgo relativo.

et al., 2000; Tyson, Kennedy, 2000). El objetivo principal es determinar normales de la liberación de hormona gastrointestinal estimulada
el régimen de alimentación óptimo que no aumente la incidencia de por la alimentación intermitente (Aynsley-Green et al., 1982). La
EN. Comparaciones de: 1) inicio temprano (< 4 días de edad) frente alimentación con bolo promueve el aumento fisiológico normal de las
a inicio tardío de la alimentación; 2) avance precoz de la nutrición hormonas gastrointestinales, lo que puede mejorar la maduración del
(< 4 días) frente a retraso progresivo, y 3) progresión lenta (< 24 ml/kg/ tubo digestivo prematuro (Aynsley-Green et al., 1990), pero la función
día) frente a una progresión del volumen de alimentación más rápida digestiva inmadura, incluido el retraso en el vaciamiento gástrico y la
no produjo diferencias entre ninguna de estas intervenciones en cuanto motilidad intestinal anormal, puede provocar intolerancia alimentaria.
a la incidencia de EN. La alimentación precoz progresiva se asoció con Con ambos métodos de alimentación por sonda, el aporte de nutrientes
una estancia hospitalaria 2 días más corta, y el avance lento del volumen puede verse afectado por la pérdida de nutrientes que permanecen
de alimentación se asoció con un mayor riesgo de infección invasiva, en los tubos de alimentación y los sistemas de infusión en lugar de
sin incluir EN. Los autores de todos estos metaanálisis concluyeron llegar al recién nacido. La grasa, en particular, se sabe que se adhiere al
que la alimentación trófica temprana, la alimentación progresiva tem- equipo de alimentación, disminuyendo el aporte energético (Rayyan
prana y el avance del volumen de alimentación más rápido no están et al., 2015). Cuando se comparó el bolo gravimétrico, la infusión de
asociados con un mayor riesgo de EN, pero que no hay evidencia de bomba de 30 min y la infusión continua con técnicas de alimentación
beneficio o daño de ninguna de estas técnicas de alimentación. Instan simulada con leche humana enriquecida, la menor cantidad de grasa
a tener precaución en la interpretación de los estudios y recomiendan se perdió con un bolo de gravedad (6%), y la mayor cantidad se perdió
ensayos aleatorizados adicionales (Morgan et al., 2013, 2014, 2015). con la infusión continua (25%) (Rogers et al., 2010).

Alimentación por sonda Enriquecimiento de la leche humana


Los recién nacidos prematuros a menudo no pueden ser amaman- Aunque la leche humana es la dieta apropiada y preferida para los recién
tados ni alimentados con biberón al nacer debido a la inmadurez nacidos prematuros, estos corren el riesgo de sufrir una restricción del
del desarrollo. Un metaanálisis de estudios pequeños sugirió que los crecimiento si se utiliza leche no modificada. Los recién nacidos con
recién nacidos con edad posmenstrual de solo 28 semanas pueden MBPN (< 1.500 g), especialmente los que nacen a principios del
alimentarse mediante lactancia (Lucas y Smith, 2015), y que la intro- tercer trimestre del embarazo, tienen necesidades mucho más altas de
ducción de la alimentación oral se puede lograr a las 30-31 semanas calorías, proteínas y minerales que los recién nacidos a término, debido
de edad posmenstrual (Simpson et al., 2002). Sin embargo, los recién al rápido crecimiento y desarrollo que ocurre al final del embarazo.
nacidos extremadamente prematuros pueden ser incapaces incluso de Por lo tanto, es una práctica estándar agregar ELH multicomponente
comenzar los intentos de alimentación oral durante muchas semanas a la leche humana de alimentación de los recién nacidos con MBPN
después del nacimiento y, por lo tanto, dependen de la alimentación para proporcionar los nutrientes adecuados (principalmente proteínas
por sonda NG o OG. La alimentación NG/OG puede administrarse y minerales) para asegurar el crecimiento. El enriquecimiento se inicia
a través de una infusión temporizada, con el uso de una bomba elec- cuando los recién nacidos toleran un volumen significativo de la ingesta
trónica o mediante bolos por gravedad. Las infusiones programadas de leche humana, por lo general entre 50 y 120 ml/kg/día, y el tiempo
pueden ser periódicas, en un intervalo específico y con una duración es muy variable en cada UCIN, sin evidencia para apoyar un volumen
específica, con un período de descanso entre tomas, o continuo, en objetivo específico para la iniciación. Los ELH generalmente se pro-
el que la leche se infunde lentamente las 24 h del día sin período de ducen a partir de leche bovina y contienen dosis estándar de proteínas
descanso. Existen beneficios teóricos y riesgos de ambos métodos de hidrolizadas o intactas, así como hidratos de carbono, grasas, elec-
alimentación, aunque la investigación es escasa, con ensayos pequeños. trólitos, minerales y vitaminas. También hay un ELH disponible que
La alimentación continua puede mejorar la absorción de energía, al está hecho de leche humana de donante. El contenido de nutrientes,
tiempo que disminuye el gasto de energía en comparación con la vitaminas y minerales de los tres ELH más comúnmente usados en
alimentación en bolo (Grant, Denne, 1991), mejora el crecimiento EE. UU. en 2016 se describen como ejemplos en la tabla 68.3. Los
y reduce la intolerancia alimentaria (Toce et al., 1987). Por el con- enriquecedores bovinos están disponibles tanto en forma líquida como
trario, la alimentación continua puede alterar los patrones cíclicos en polvo, aunque se prefiere la forma líquida para el uso en la UCIN

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CAPÍTULO 68 Nutrición enteral en el recién nacido de alto riesgo 1019

debido a problemas de seguridad con respecto a la esterilidad de los estándar y sin análisis de leche (Hair et al., 2014). Otro grupo de inves-
productos en polvo. El ELH derivado de la leche humana es un pro- tigadores utilizó este protocolo para determinar el contenido de grasas,
ducto líquido. Aunque cuando se usan de acuerdo con las instrucciones proteínas e hidratos de carbono de las reservas de 12 h de leche materna
del fabricante todos los productos dan lugar a leche enriquecida que y enriqueció cada macronutriente a los niveles objetivo. Descubrieron
contiene aproximadamente 24 kcal/30 ml, el contenido de proteína que este protocolo daba como resultados un aumento de peso apropiado
difiere sustancialmente, lo cual es preciso tener en cuenta al evaluar y que era clínicamente factible (Rochow et al., 2013).
el crecimiento en recién nacidos con MBPN que tienen altos requeri-
mientos de proteínas. Nutrición infantil y crecimiento
El objetivo de la ingesta de proteína enteral recomendada para
lograr el crecimiento en esta población es 3,5-4,5 g/kg/día con aporte Cada vez más artículos científicos sugieren que la nutrición temprana
de energía de 120-130 kcal/kg/día. Cuando se agrega ELH a la leche tiene implicaciones a largo plazo para la salud y el desarrollo de todos
materna prematura (con un contenido proteínico de al menos 1,4 g/dl), los recién nacidos, en particular los prematuros. En la mayoría de los
los tres productos actuales logran una ingesta proteínica adecuada escenarios, el objetivo principal de la nutrición posnatal para el recién
(3,9-5,4 g/kg/día). Sin embargo, si el contenido de proteína de la nacido prematuro es hacer coincidir lo más posible el crecimiento
leche básica es menor, como en la leche humana de las donantes a y el desarrollo en el útero. Idealmente, esto también optimizaría los
término o la leche materna después de las primeras 3 semanas de vida, resultados de desarrollo a largo plazo. Sin embargo, alimentar al recién
la ingesta de proteínas puede ser insuficiente. Por lo tanto, el paso de nacido prematuro está asociado con varios desafíos. La pérdida de peso
agregar cantidades estándar de ELH de acuerdo con las instrucciones fisiológica en los primeros días después del nacimiento hace que los
del fabricante puede no ser suficiente, y el crecimiento debe monitori- prematuros tengan «crecimiento por recuperar», y es extremadamente
zarse con un aporte de enriquecimiento adicional según sea necesario. difícil proporcionar nutrición (y minerales, en particular) a un ritmo
que coincida con las tasas de acreción en el útero. Por otro lado, los
Enriquecimiento estándar riesgos potenciales de la desnutrición pueden incluir riesgos a corto
El proceso descrito anteriormente se denomina enriquecimiento están- plazo, como el aumento de las tasas de EN y los riesgos a más largo pla­
dar, el cual presupone una composición estándar de la leche humana, zo, como el síndrome metabólico. La mayoría de los datos que res-
a partir de la cual se estiman las ingestas de proteínas y energía. Se paldan la práctica nutricional actual en esta población se derivan
monitoriza el crecimiento y, si es insuficiente, se agregan productos de estudios observacionales. Las limitaciones inherentes a este tipo de
adicionales para aumentar el contenido de proteína y/o energía de la diseño de estudio influyen en las conclusiones que pueden extraerse
leche, con el uso de ELH adicionales (derivados bovinos o humanos) sobre los vínculos entre la nutrición, la morbilidad, el crecimiento y
o suplementos de proteínas, hidratos de carbono o grasas de un solo los resultados.
componente. Estas intervenciones son impulsadas únicamente por Después del nacimiento, los recién nacidos prematuros pueden
la respuesta del crecimiento infantil a la alimentación. Debido a la perder hasta el 15-20% de su peso al nacer y luego recuperar su peso
variabilidad desconocida existente en el contenido de nutrientes de aproximadamente a las 2 semanas de vida. Después de esta pérdida de
la leche humana, el enriquecimiento estándar es impreciso, pero se peso fisiológica y la recuperación del peso al nacer, los recién nacidos
ha demostrado que es exitoso para lograr el crecimiento en algunos de MBPN a menudo aumentan de peso a una tasa intrauterina aproxi-
estudios que usan ELH bovina (Colaizy et al., 2012) y derivados de la mada. Sin embargo, el deficiente crecimiento de las primeras semanas
leche humana (Hair et al., 2013). ejerce un impacto persistente. Según la edad corregida a término, la
mayoría de los recién nacidos prematuros permanecen muy por debajo
Enriquecimiento ajustable del peso de referencia de un recién nacido en la misma edad posmens-
El enriquecimiento ajustable es una modificación del enriquecimiento trual (Ehrenkranz et al., 1999).
estándar en el que se controla el nivel de nitrógeno ureico en sangre La restricción de crecimiento posnatal en el recién nacido pre-
(BUN) infantil como marcador bioquímico para la ingesta adecuada de maturo, definida como el peso corporal o la longitud por debajo del
proteínas. Cuando el nivel de BUN obtenido semanalmente es inferior percentil 10 del crecimiento intrauterino esperado en el momento
al rango deseado (9-14 mg/dl) (Alan et al., 2013), se agregan proteínas del alta hospitalaria, es extremadamente común. Los porcentajes de
adicionales hasta que el BUN alcance el nivel objetivo. En un pequeño fracaso de crecimiento publicados dependen de la población estudiada
estudio, el uso de esta técnica de enriquecimiento consiguió un mejor y generalmente aumentan con la disminución de la edad gestacional
crecimiento, aumento de peso y de la circunferencia de la cabeza, así y el peso al nacer, y aumentan con la gravedad de la enfermedad. De
como mayores puntuaciones en las escalas de desarrollo infantil de más de 24.000 recién nacidos de la base de datos de Pediatrix Medical
Bayley a los 18 meses en comparación con el enriquecimiento estándar Group, Inc., que nacieron antes de las 34 semanas de gestación, el 28%
(Ergenekon et al., 2013). tenían peso por debajo del percentil 10 en el momento del alta hos-
pitalaria (Clark et al., 2003). El fracaso temprano del crecimiento pos-
Enriquecimiento por objetivos (o individualizado) natal puede aumentar el riesgo de efectos adversos a largo plazo, como
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.

Tanto el enriquecimiento estándar como el ajustable son imprecisos, ya la enfermedad cardiovascular y la diabetes de inicio en el adulto (De
que el contenido de nutrientes de la leche humana utilizada se estima Curtis y Rigo, 2004). La variación significativa entre los hospitales en
según valores estándar, que ciertamente no son precisos en todos los el grado de retraso del crecimiento posnatal sugiere que este resultado
casos. La técnica de enriquecimiento por objetivos explica la variabilidad es modificable y puede, al menos en parte, reflejar las diferencias en la
en el contenido de proteínas, energía, grasa e hidratos de carbono en práctica nutricional (Bloom et al., 2003; Cooke et al., 2004).
la leche humana al medir estos nutrientes directamente a través del Los recién nacidos extremadamente prematuros con una veloci-
análisis regular de la leche utilizando instrumentos de análisis de infra- dad de crecimiento menor mientras están en el hospital tienen más
rrojos cercano o medio. Se agregan dosis específicas de enriquecedor, probabilidades de tener el peso, la longitud y la circunferencia de la
de componente único o multicomponente, para llevar el contenido de cabeza por debajo del percentil 10 a los 18 meses de edad corregida
nutrientes de la leche a los objetivos deseados. Este protocolo, cuando (Ehrenkranz et al., 2006). Tanto en EE. UU. como en otros países,
se usa para determinar la densidad de energía de la leche humana, con los recién nacidos prematuros tienen una restricción del crecimiento al
suplementos con crema de leche humana cuando la densidad de ener- menos en la adolescencia y probablemente después (Ford et al., 2000).
gía era menor de 20 kcal/30 ml, provocó una ganancia de peso y de Los recién nacidos más extremadamente prematuros siguen siendo los
longitud superior en comparación con la ganancia de peso y longitud más pequeños y, en particular, pueden tener las circunferencias de la
en una cohorte control de recién nacidos tratados con enriquecimiento cabeza más pequeñas durante toda la infancia (Ericson y Kallen, 1998).

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1020 PA RT E XI I I Nutrición

El crecimiento longitudinal es más lento en los recién nacidos con sobrepeso cuando son adultos (Stettler, Iotova, 2010). En un estudio
morbilidades propias de la prematuridad (Ehrenkranz et al., 1999; multicéntrico de más de 19.000 niños estadounidenses nacidos a
Clark et al., 2003). Por otro lado, los recién nacidos con morbilidades término, el crecimiento en los primeros 4 meses se asoció con el riesgo
como enfermedad pulmonar o EN pueden ser alimentados de for- de sobrepeso a los 7 años (Stettler et al., 2002). Sin embargo, es poco
ma menos agresiva debido a su enfermedad subyacente (Ehrenkranz probable que estos estudios de recién nacidos a término se apliquen
et al., 2011). Los recién nacidos con mayor morbimortalidad continúan a los recién nacidos prematuros, en quienes los beneficios de un cre-
experimentando un crecimiento deficiente durante al menos 2 años, cimiento temprano vigoroso pueden superar cualquier posible riesgo.
lo que se explica solo en parte por la menor velocidad de crecimien- Hay poca evidencia de que los intentos actuales de maximizar el cre-
to durante los primeros meses de vida (Bertino et al., 2007; Ramel cimiento en las UCIN «programen» a recién nacidos muy prematuros
et al., 2012). o críticamente enfermos para posteriores consecuencias metabólicas
La restricción del crecimiento extrauterino entre los recién naci- adversas. De hecho, el crecimiento acelerado o el de recuperación en
dos prematuros ha sido objetivo de múltiples ensayos aleatorizados e los recién nacidos prematuros pueden asociarse con mejores resultados.
intervenciones nutricionales en las últimas décadas. Esto ha llevado al
enfoque actual «agresivo» para la nutrición de los recién nacidos muy Evaluación del crecimiento
prematuros, incluida la administración de suplementos proteínicos
intravenosos de 3,5 g/kg/día al nacer o tan pronto como sea posible y de la composición corporal en los recién
en el primer día de vida, alimentación enteral trófica, idealmente nacidos
con leche materna extraída lo antes posible y enriquecimiento tem-
prano tanto de la leche humana como de la leche maternizada para El crecimiento infantil generalmente se evalúa comprobando el peso
prematuros (Ehrenkranz, 2007). Este enfoque mejora el equilibrio de corporal y midiendo la longitud del cuerpo y el perímetro craneal.
energía y nitrógeno, promueve la recuperación temprana del peso al Estos se comparan con los datos de referencia establecidos o se regis-
nacer y no aumenta el riesgo de acidosis, EN, sepsis u otros paráme- tran en un conjunto de curvas de crecimiento. En general, las curvas
tros clínicos adversos. Varios estudios sugieren que el crecimiento de crecimiento para los recién nacidos prematuros se basan en el creci-
de la masa magra y la recuperación temprana se optimizan con un miento intrauterino esperado. Otros se basan en datos de crecimiento
régimen de alto contenido proteínico. En los niños con PEBN, el posnatal. Se han diseñado diversos tipos de curvas para recién nacidos
aporte precoz de proteínas por vía enteral aumenta significativamente prematuros; las diferencias están relacionadas con las características
el peso, la longitud y la circunferencia de la cabeza al menos hasta la de la población y el tamaño de la muestra, así como con los distintos
edad posmenstrual de 36 semanas (Poindexter et al., 2006). La menor métodos de nutrición neonatal. En general, las curvas tanto para recién
duración de la dependencia de la nutrición parenteral se asocia con nacidos niños como para niñas permiten al clínico evaluar los paráme-
mejores resultados en el crecimiento longitudinal. Sin embargo, la tros de crecimiento relativos a la edad gestacional y las diferencias
pérdida de peso posnatal inmediata «normal» se ve aumentada por equiparables por el sexo. Es importante destacar que los recién nacidos
un estado nutricional subóptimo durante las primeras semanas de prematuros no siempre tienen crecimiento proporcional –o restricción
vida, y la restricción del crecimiento sigue siendo común. Un estudio del crecimiento proporcional– en la UCIN. El crecimiento lineal a
observacional demostró que la pérdida de peso posnatal puede limitarse menudo se altera más que el peso y puede necesitar más tiempo para
a los primeros días (y limitada a ∼8% del peso al nacer) con una recuperarse (Ramel et al., 2012).
nutrición parenteral y enteral temprana optimizada, incluido el objetivo Olsen et al. (2015) publicaron las curvas del índice de masa cor-
de alcanzar 120 kcal/kg/día y 3,8 g/kg/día de proteína al final de la poral (IMC) para los recién nacidos prematuros. Las curvas del IMC
primera semana (Senterre, 2011). permiten al clínico evaluar la proporción de peso con la longitud y
Los recién nacidos con restricción del crecimiento intrauterino distinguir el crecimiento proporcional del desproporcionado, más
(RCIU) probablemente tienen una programación metabólica diferente comúnmente cuando el peso aumenta más rápido que la longitud.
y, por lo tanto, diferentes necesidades nutricionales que los recién naci- De manera similar a otros parámetros de crecimiento y composición
dos que crecen adecuadamente. Los recién nacidos a término nacidos corporal, el IMC varía con el sexo y la edad gestacional.
con RCIU tienen tasas más altas de enfermedades de inicio en adultos, Mientras un recién nacido prematuro está hospitalizado, el creci-
que incluyen hipertensión, cardiopatía y diabetes, y muerte prematura miento se debe monitorizar de forma periódica y registrarse en curvas
(Barker, 1990; Phenekos, 2001). Desafortunadamente, datos similares de crecimiento estandarizadas. Estas curvas deben incluir el peso, la
sobre recién nacidos prematuros con RCIU no están disponibles. Poco longitud, el perímetro craneal y posiblemente el IMC. La nutrición
se sabe sobre cómo identificar o seleccionar a estos recién nacidos, y no debe ajustarse para alcanzar el crecimiento intrauterino esperado, que es
hay estudios que se hayan enfocado específicamente en las necesidades aproximadamente de 20 g/kg/día para los recién nacidos más pequeños
nutricionales de esta población. Por lo tanto, los objetivos nutricionales (Ziegler et al., 2002).
y de crecimiento de los recién nacidos prematuros con RCIU son Los cambios en la composición corporal durante los primeros meses
actualmente similares a los del niño prematuro de tamaño apropiado para y años de vida están asociados con la programación nutricional y
la edad gestacional. Los riesgos de crecimiento lento y tamaño persis- distintas morbilidades en los adultos. La evaluación de las medidas
tentemente pequeño para la edad, que son comunes en la población antropométricas, incluido el IMC, no informan al clínico sobre las
con RCIU, probablemente superan los riesgos asociados con el rápido contribuciones relativas de la masa ósea, la masa grasa y la masa magra
crecimiento de la recuperación temprana. En última instancia, es más al peso corporal. Los datos sobre las contribuciones de los huesos, la
probable que el peso en adultos y el riesgo de consecuencias metabólicas grasa y la masa magra pueden reflejar mejor el estado nutricional de
a largo plazo estén relacionados con el peso de los padres, el peso del un recién nacido y podrían influir en las decisiones sobre el aporte
adulto y las elecciones de estilo de vida que con la nutrición temprana adecuado de nutrientes y las metas para el crecimiento.
agresiva (Greer, 2007) en el recién nacido con RCIU. Muchos recién nacidos prematuros tienen un crecimiento pobre en
Si bien la restricción de crecimiento en el recién nacido prema- la adolescencia, con un IMC más bajo y un peso corporal más bajo.
turo o con RCIU sigue siendo una preocupación importante, un Tienen igual masa grasa y circunferencia de la cintura, con un aumento
crecimiento demasiado rápido en la infancia también se asocia con relativo en la adiposidad abdominal en comparación con los niños
enfermedades de inicio en la edad adulta, incluida la obesidad. Este nacidos a término. La adiposidad también puede diferir en diferentes
fenómeno, en el cual la «programación» temprana conduce a efectos grupos de recién nacidos prematuros. Por ejemplo, los recién nacidos
adversos futuros, se denomina comúnmente hipótesis de Barker (Barker prematuros pequeños para la edad gestacional tienen una masa grasa
et al., 1993). Los recién nacidos a término son más propensos a tener más baja para la edad corregida a término y a los 3 meses de vida, pero

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CAPÍTULO 68 Nutrición enteral en el recién nacido de alto riesgo 1021

se nivelan después de ese punto para equipararse a los recién nacidos aunque el aporte parenteral de aminoácidos antes y en comparación
prematuros (Roggero et al., 2007). Los recién nacidos prematuros con 5 días de vida después mejora el crecimiento hospitalario en recién
críticamente enfermos pueden tener, en vez de adiposidad subcutánea, nacidos con PEBN, no parece mejorar los resultados del desarrollo
una mayor adiposidad central o abdominal, que es un marcador de a los 18 meses de edad corregida (Poindexter et al., 2006). En dos
resistencia a la insulina. Esto tiene implicaciones poco claras para la ensayos aleatorizados con leche maternizada enriquecida frente a leche
salud a corto y largo plazo. El aumento de la adiposidad abdominal, maternizada para recién nacidos a término en el momento del alta
el aumento rápido del peso corporal o el peso corporal absoluto en sí en los recién nacidos prematuros, los recién nacidos alimentados con
mismo pueden ser factores que predisponen a algunos recién nacidos leche maternizada enriquecida para prematuros tuvieron un mejor
prematuros a mayor riesgo de enfermedades de inicio en la edad adulta crecimiento a los 18 meses (Lucas et al., 2001). Sin embargo, no hubo
(Fewtrell et al., 2004; Uthaya, 2005). diferencias en los parámetros de desarrollo a los 18 meses en ninguno
Poco más se sabe acerca de los cambios en la composición corporal de los ensayos.
en recién nacidos prematuros y cómo distinguir lo «normal» de lo La investigación continuada será esencial para establecer qué obje-
«anormal». Sin embargo, un conocimiento de la composición corporal tivos de crecimiento están asociados con los mejores resultados de
es esencial para comparar calidad frente a cantidad de ganancia de desarrollo y de salud a largo plazo en los recién nacidos prematuros, y
peso. Una técnica apropiada para la evaluación de la composición qué estrategias nutricionales logran mejor estos objetivos.
corporal debe ser estandarizada, válida, confiable, portátil, económica
y no invasiva. Idealmente, dicha tecnología debería usarse de forma
periódica para evaluar la respuesta a las distintas intervenciones (Rog- Nutrición después del alta para el recién
gero et al., 2007). Varias técnicas para la evaluación de la composición nacido prematuro
corporal, incluidas la absorciometría de doble energía de rayos X y la
resonancia magnética, están disponibles para su uso en la investigación, Cuando los recién nacidos prematuros son dados de alta, han acumula-
pero no pueden aplicarse de manera práctica en entornos clínicos, parti- do un déficit de energía, proteínas y minerales. Además, generalmente se
cularmente en recién nacidos críticamente enfermos. Hasta que existan dan de alta antes de la fecha originalmente prevista para su nacimiento
datos adicionales sobre los cambios «normales» de la composición a término. En conjunto, estos factores llevan al recién nacido prematuro
corporal en los recién nacidos prematuros y las tecnologías apropiadas a tener mayores necesidades nutricionales después del alta que los recién
para la evaluación de la composición corporal, la composición corporal nacidos sanos apropiados para la edad gestacional. Es esencial adoptar
no puede utilizarse para orientar las intervenciones nutricionales en como objetivo una trayectoria de crecimiento adecuada, porque el
las UCIN. crecimiento posnatal hasta la edad de 1 año en recién nacidos antes de
las 32 semanas tiene una relación positiva con la estatura, el peso y el
IMC hasta al menos los 19 años (Euser et al., 2005).
Resultados de crecimiento y desarrollo Al menos un pequeño ensayo aleatorizado (Koo y Hockman, 2006)
en los recién nacidos prematuros ha demostrado mejores resultados después del alta en el crecimiento
entre los recién nacidos prematuros alimentados con leche materni-
La nutrición óptima no solo es esencial para que coincida con las zada estándar en lugar de enriquecida. Por otro lado, varios ensayos
trayectorias adecuadas de crecimiento, sino también para minimizar aleatorizados han demostrado un mejor crecimiento y acreción mineral
el riesgo de enfermedades de inicio en la edad adulta. La nutrición y tanto en los prematuros sanos como en los recién nacidos con DBP
el crecimiento precoces tienen un impacto en los resultados del desa- cuando se les alimenta con leche maternizada enriquecida después del
rrollo durante toda la infancia. La explicación más probable para este alta (Brunton et al., 1998; Lucas et al., 2001). Carver et al. (2001)
impacto a largo plazo de la nutrición infantil es que el primer año de realizaron un pequeño ensayo clínico en el que los recién nacidos con
vida representa una «ventana crítica» del desarrollo cerebral. En un pesos al nacer menores de 1.800 g fueron aleatorizados para recibir
estudio multicéntrico de cohortes, Ehrenkranz et al. (2006) dividieron leche maternizada para recién nacidos a término o leche maternizada
a los niños con PEBN en cuartiles según las velocidades de crecimiento nutricionalmente enriquecida (22 kcal/30 ml) hasta la edad corregida
intrahospitalario. Identificaron las correlaciones entre el cuartil de de 12 meses. Las altas tasas de pérdida durante el seguimiento limitan
la velocidad de crecimiento intrahospitalario y el riesgo de parálisis las conclusiones que pueden extraerse de esta prueba. Sin embargo, los
cerebral, y los resultados de crecimiento menos de dos desviaciones recién nacidos que recibieron la leche maternizada nutricionalmente
estándar por debajo la media a los 18-22 meses de edad corregida. enriquecida parecían haber mejorado el crecimiento proporcional,
Estas relaciones persistieron cuando se ajustaron para múltiples factores porque pesaban más a los 6 y 12 meses de edad corregida, medían más
potenciales de confusión, como los distintos tipos de centros y la a los 6 meses de edad corregida y tenían mayor crecimiento del períme-
gravedad de la enfermedad. tro craneal a término y a 1, 2, 6 y 12 meses de edad corregida. La
Es probable que el crecimiento posterior al alta sea al menos tan leche maternizada nutricionalmente enriquecida puede haber sido
importante para los resultados del desarrollo como el crecimiento particularmente beneficiosa entre los recién nacidos con peso al nacer
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intrahospitalario. Los recién nacidos prematuros que experimentan inferior a 1.250 g. Bishop et al. (1993) encontraron un aumento en el
recuperación del crecimiento a la edad corregida de 8 meses tienen contenido mineral óseo hasta de 9 meses de edad corregida en los recién
mejores resultados de desarrollo que los que no lo alcanzan o no nacidos que recibieron leche maternizada nutricionalmente enriquecida
avanzan en 8 meses (Hack et al., 1982). El crecimiento de la cabeza en comparación con la leche maternizada para recién nacidos a término.
menor de dos desviaciones estándar por debajo de la media a los 8 Se dispone de menos información para apoyar las decisiones sobre
meses de edad corregida se asocia de forma independiente con un el enriquecimiento de la leche materna después del alta del recién
cociente de inteligencia más bajo y puntuaciones más bajas de lectura, nacido prematuro, particularmente cuando las familias expresan el
matemáticas, ortografía e idioma a los 8-9 años de edad corregida objetivo de amamantar en lugar de alimentar a sus recién nacidos
(Hack et al., 1991). En una cohorte de 62 recién nacidos con MBPN con biberón. Los recién nacidos alimentados con leche materna no
seguidos prospectivamente hasta la edad corregida de 24 meses, la enriquecida tienen un crecimiento más lento y una masa ósea más
velocidad de crecimiento lineal baja en este período se asoció con un baja que los alimentados con leche maternizada después del alta. El
menor rendimiento cognitivo a los 24 meses (Ramel et al., 2012). enriquecimiento de la leche materna posterior al alta generalmente
Aún no se sabe qué intervenciones nutricionales específicas en el se logra mediante la adición de leche maternizada a la leche materna
hospital y en el momento del alta optimizarían el crecimiento y los para aumentar el aporte de energía, proteínas, calcio y fósforo. Tal
resultados del desarrollo en el recién nacido prematuro. Por ejemplo, enriquecimiento mejora la acumulación de minerales, pero puede no

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mejorar el crecimiento a largo plazo. Sin embargo, sobre los datos de Arslanoglu S, Corpeleijn W. ESPGHAN Committee on Nutrition. Donor
la literatura existente, la alimentación con leche «enriquecida» o alta en human milk for preterm infants: current evidence and research direc-
calorías/alta en proteínas se ha convertido en el estándar para el recién tions. J Pediatr Gastroenterol Nutr 2013;57(4):535-542.
nacido prematuro al momento del alta, ya sea que se alimente con Bhatia J, Griffin I, Anderson D, Kler N, Domellöf M. Selected macro/
leche materna o maternizada. El enriquecimiento debe continuarse al micronutrient needs of the routine preterm infant. J Pediatr 2013;162
menos hasta 6 meses de edad corregida para optimizar el crecimiento (3 suppl):S48-S55.
de recuperación. Después de ese tiempo, una nutrición demasiado Colaizy TT, Carlson S, Saftlas AF, Morriss Jr FH. Growth in VLBW infants
agresiva puede conllevar un mayor riesgo de enfermedades de inicio fed predominantly fortified maternal and donor human milk diets:
en la edad adulta (De Curtis y Rigo, 2004). a retrospective cohort study. BMC Pediatr 2012;12:124.
Finch CW. Review of trace mineral requirements for preterm infants: what
Las leches maternizadas posteriores al alta proporcionan más energía
are the current recommendations for clinical practice? Nutr Clin Pract
(22 kcal/30 ml), proteínas (2,8 g/100 kcal), calcio, fósforo y cinc que 2015;30(1):44-58.
las leches maternizadas para recién nacidos a término. En comparación Gidrewicz DA, Fenton TR. A systematic review and meta-analysis of
con la leche maternizada para recién nacidos a término, estas leches the nutrient content of preterm and term breast milk. BMC Pediatr
maternizadas proporcionan un 49% más de proteínas, un 10% más 2014;14:216.
de calorías, un 48% más de calcio, un 62% más de fósforo y un 75% Gomes FP, Shaw PN, Whitfield K, Koorts P, McConachy H, Hewavitha-
más de cinc. Incluso en volúmenes de ingesta hasta de 200 ml/kg/ rana AK. Effect of pasteurisation on the concentrations of vitamin D
día, ni la leche materna ni las leches maternizadas para prematuros compounds in donor breastmilk. Int J Food Sci Nutr 2016;67(1):16-19.
contienen la cantidad recomendada de vitamina D (Greer, 2007). Por Hibbs AM, Babineau DC, Wang X, Redline S. Race differences in the
lo tanto, la vitamina D se debe proporcionar como un suplemento para association between multivitamin exposure and wheezing in preterm
todos los recién nacidos durante la hospitalización y después del alta. infants. J Perinatol 2015;35(3):192-197.
En recién nacidos menores de 1 año, 1 l de leche maternizada infantil Koletzko B, Poindexter B, Uauy R. Recommended nutrient intake levels
enriquecida con vitamina D o leche de vaca por día proporcionará for stable, fully enterally fed very low birth weight infants. World Rev
suficiente vitamina D para suspender la administración de suplementos. Nutr Diet 2014;110:297-299.
La nutrición posterior al alta debe discutirse durante el proceso de Lapillonne A, Groh-Wargo S, Gonzalez CH, Uauy R. Lipid needs of
planificación del alta con las familias de los recién nacidos prematuros. preterm infants: updated recommendations. J Pediatr 2013;162
Además, estos planes deben comentarse con el responsable médico prin- (3 suppl):S37-S47.
cipal para garantizar una transición al ámbito ambulatorio sin problemas Lucas RF, Smith RL. When is it safe to initiate breastfeeding for preterm
Los recién nacidos prematuros que son alimentados con leche mater- infants? Adv Neonatal Care 2015;15(2):134-141.
nizada deben ser alimentados con leche maternizada nutritivamente Olsen IE, Lawson ML, Ferguson AN, et al. BMI curves for preterm infants.
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de su uso variará según la gravedad de la restricción de crecimiento The relationship of poor linear growth velocity with neonatal illness
posnatal, la salud ósea y el crecimiento proporcional después del alta and two-year neurodevelopment in preterm infants. Neonatology
de la UCIN. Del mismo modo, el crecimiento de los recién nacidos 2012;102(1):19-24.
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CAPÍTULO 68 Nutrición enteral en el recién nacido de alto riesgo 1022.e3

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CAPÍTULO 68 Nutrición enteral en el recién nacido de alto riesgo 1022.e5

Puntos clave
• La ingesta precoz de proteínas se asocia con mejores resultados
en el crecimiento y en el neurodesarrollo de los recién nacidos
prematuros: lograr una ingesta adecuada requiere un abordaje
nutricional combinado por vía enteral y parenteral.
• La leche humana materna es la mejor dieta para los recién naci-
dos prematuros. Se necesitan más investigaciones para desarrollar
guías clínicas basadas en la evidencia para el uso de la leche
humana de donante cuando la leche materna no está disponible.
• La leche humana no enriquecida contiene cantidades insufi-
cientes de proteínas, energía y muchos micronutrientes para
los niños de muy bajo peso al nacer, por lo que se requieren
suplementos con enriquecedores de leche y/o productos multi-
vitamínicos.
• El retraso del crecimiento posnatal sigue siendo una com-
plicación común de los recién nacidos prematuros y se asocia
con resultados adversos. La optimización de los resultados de
crecimiento requiere atención no solo del aumento de peso, sino
también del crecimiento lineal apropiado y de la composición
corporal tanto en la unidad de cuidados intensivos neonatales
como después del alta hospitalaria.

Palabras clave
Recién nacido de muy bajo peso al nacer
Leche humana
Donante de leche humana
Retraso del crecimiento posnatal
Requerimientos nutricionales
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69
Nutrición parenteral en el recién nacido
de alto riesgo
SCOTT C. DENNE

PUNTOS CLAVE del crecimiento sin una mayor incidencia de consecuencias clínicas
adversas o de alteraciones metabólicas. Varios estudios observacio-
• Una alta proporción de recién nacidos de peso extremadamente bajo nales han arrojado resultados similares (Poindexter, 2005; Valentine et al.,
al nacer (PEBN) experimentan un crecimiento deficiente en la unidad 2009; Cormack et al., 2013; Rigo y Senterre, 2013; Bolisetty
de cuidados intensivos neonatal. Los déficits nutricionales se acumulan et al., 2014; Morgan et al., 2014). Además de los mejores resultados
rápidamente poco después del nacimiento y son un factor importante en el crecimiento, Stephens et al. (2009) encontraron una asociación
de estos malos resultados de crecimiento. entre el aumento del aporte de proteínas y energía en la primera semana
• Los déficits nutricionales pueden minimizarse, y los resultados del de vida y puntuaciones más altas del Bayley Mental Developmental
crecimiento mejoran cuando se comienza la nutrición parenteral poco Index a los 18 meses de edad corregida. Las soluciones nutricionales
después del nacimiento. El soporte nutricional inicial debe incluir parenterales, aunque aún imperfectas, han mejorado notablemente
glucosa a 4-7 mg/kg/min, aminoácidos a 2-3 g/kg/día y lípidos
desde los inicios de su uso, y las complicaciones son menos comunes.
a 2 g/kg/día.
Sin embargo, en la actualidad, los mejores resultados del crecimiento
• Los objetivos para la nutrición parenteral completa en niños con PEBN
son aportar 90-100 kcal/kg/día (13-15 g/kg de glucosa por día,
en recién nacidos prematuros continúan requiriendo un esfuerzo para
3-4 g/kg de lípidos por día y 3,5-4 g/kg de aminoácidos al día). proporcionar soporte nutricional parenteral, especialmente en la vida
• Se está incrementando el interés por las soluciones de lípidos a base posnatal temprana. Esto significa iniciar la nutrición parenteral en el
de aceite de pescado, que parecen mejorar la hepatopatía asociada curso de las primeras 24 h, continuando hasta que la nutrición enteral
a la nutrición parenteral en recién nacidos que requieren nutrición aporte por lo menos el 75% de los requisitos totales de las proteínas y de
intravenosa a largo plazo. Estos productos actualmente no están la energía, y volviendo a reiniciar la nutrición parenteral rápidamente
disponibles comercialmente en EE. UU. Se necesitan en gran medida cuando se suspenda la alimentación enteral.
ensayos aleatorizados que evalúen las soluciones de nutrición
parenteral basadas en aceite de pescado y otras nuevas fórmulas
de nutrición en recién nacidos prematuros.
Componentes de la nutrición parenteral
Proteínas
Los objetivos iniciales de la nutrición parenteral son minimizar las
pérdidas y preservar los almacenes existentes del cuerpo; esto es par-

E
l soporte nutricional eficaz a los recién nacidos prematuros y ticularmente importante para las proteínas. Las pérdidas de proteínas
gravemente enfermos depende en gran medida de la nutrición son importantes en todos los recién nacidos en ausencia de aporte de
parenteral, especialmente en la vida posnatal temprana. En la aminoácidos, y estas pérdidas son más altas en los recién nacidos más
práctica, el suministro de nutrientes a los recién nacidos prematuros inmaduros. Por ejemplo, los recién nacidos de 26 semanas de gestación
–especialmente los recién nacidos de peso extremadamente bajo al pierden 1,5 g/kg/día de proteína corporal; las pérdidas proteínicas en
nacer (PEBN)– es a menudo inadecuado, y estos recién nacidos acu- recién nacidos a término son aproximadamente la mitad de esa cantidad
mulan grandes déficits en la vida posnatal temprana (Berry et al., 1997; (0,7 g/kg/día) (Denne et al., 1996). Estos altos índices de pérdida en
Embleton et al., 2001; Olsen et al., 2002). Una alta proporción de recién nacidos extremadamente prematuros dan lugar a déficits substan-
recién nacidos con PEBN exhiben un crecimiento deficiente en la ciales de proteínas. Si los recién nacidos extremadamente prematuros
unidad de cuidados intensivos neonatales (UCIN), con mayor riesgo no tienen aportes adecuados de aminoácidos, pierden más del 1,5% de
en los que tienen la edad gestacional más baja y menor peso al nacer sus proteínas corporales por día cuando deben acumular proteínas a un
(Clark et al., 2003; Fanaroff et al., 2007). Sin embargo, cada vez más ritmo del 2% por día. Después de solo 3 días sin aporte de proteínas,
datos indican que el uso precoz de la nutrición parenteral puede redu- se produce un 10% de déficit proteínico.
cir al mínimo las pérdidas de las proteínas y mejorar los resultados Afortunadamente, existen buenas evidencias de que el aporte precoz
del crecimiento (Wilson et al., 1997; Thureen et al., 2003; Poindex- de aminoácidos puede compensar las altas cantidades de pérdida de
ter, 2005; Stephens et al., 2009). Por ejemplo, Wilson et al. (1997), en proteínas y preservar así las proteínas corporales, incluso con bajas
un ensayo clínico aleatorizado de 125 recién nacidos enfermos de muy calorías (Saini et al., 1989; Van Lingen et al., 1992; Rivera et al., 1993;
bajo peso al nacer (MBPN), demostraron que la nutrición parenteral Kashyap y Heird, 1994). La administración de 1,1-2,3 g/kg/día de
precoz combinada con la alimentación enteral disminuyó el retraso aminoácidos con aportes calóricos de 30-50 kcal/kg/día cambian el
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1024 PA RT E XI I I Nutrición

equilibrio proteínico de significativamente negativo a neutro o positivo El objetivo final de la administración de aminoácidos parenterales
en recién nacidos con MBPN enfermos (Saini et al., 1989; Van Lingen es lograr la tasa de acreción adecuada de proteínas fetales. Basándose
et al., 1992; Rivera et al., 1993). Además, Thureen et al. (1998) reali- en diversos estudios que miden las pérdidas y el equilibrio proteíni-
zaron un ensayo aleatorizado comparando un aporte de aminoácidos co, 3,5-4 g/kg/día de aminoácidos es una estimación razonable de los
de 1 g/kg/día frente a 3 g/kg inmediatamente después del nacimiento requerimientos de proteína parenteral en recién nacidos con PEBN
en recién nacidos extremadamente prematuros. A pesar de un aporte (Ziegler, 2007) (tabla 69.1). Algunos estudios sugieren que hasta 4 g/kg/día
calórico modesto en ambos grupos (aproximadamente 50 kcal/kg/día), de aminoácidos son bien tolerados por los recién nacidos con PEBN (Por-
la acreción de la proteína era perceptiblemente mayor en el grupo de celli y Sisk, 2002). Para los recién nacidos prematuros de más de 1.000 g, los
mayor aporte de aminoácidos. En todos estos estudios que evaluaron requerimientos de proteína parenteral estimada son de 3-3,5 g/kg/día. Las
el efecto de la administración precoz de aminoácidos en recién nacidos estimaciones para los recién nacidos a término son de 2,5-3 g/kg/día.
prematuros no se observaron diferencias en las concentraciones de Las recomendaciones de aporte de proteínas en la nutrición parenteral
amoníaco ni en el equilibrio acidobásico entre los recién nacidos que para recién nacidos prematuros se muestran en la tabla 69.1.
recibieron aminoácidos y los que no lo hicieron (Saini et al., 1989; Van La composición de las soluciones de aminoácidos actualmente dis-
Lingen et al., 1992; Rivera et al., 1993; Paisley et al., 2000). Además, ponibles se muestra en la tabla 69.2. Estas soluciones de aminoácidos se
estos estudios no demostraron ninguna relación entre el aporte de los diseñaron para imitar las concentraciones de aminoácidos plasmáticos
aminoácidos y el nitrógeno ureico en sangre (BUN), aunque otros en recién nacidos sanos amamantados de 30 días (TrophAmine) o
estudios encontraron niveles modestamente elevados de BUN en los concentraciones de aminoácidos de sangre de cordón fetal o neonatal
recién nacidos que recibían mayores aportes del aminoácido a los 7 (Primene). No existe información convincente para apoyar la superio-
días de edad (Clark et al., 2007; Blanco et al., 2008). El hecho de que ridad de una solución de aminoácidos neonatal sobre otra.
las concentraciones de BUN no se correlacionen siempre con el aporte Aunque las soluciones de aminoácidos actuales para recién nacidos
del aminoácido en la vida posnatal temprana sugiere que estos nive­ representan un avance sustancial sobre los anteriores hidrolizados
les están relacionados sobre todo con el estado líquido, y que los niveles de la caseína y las primeras mezclas cristalinas de aminoácidos, estas
aumentados de BUN no deben utilizarse como indicador del exceso de soluciones no contienen todos los aminoácidos. La glutamina, un
proteínas. Estos datos indican que la administración de aminoácidos aminoácido suministrado abundantemente por la leche materna y
parenterales a un ritmo de 2-3 g/kg/día, tan pronto como sea posible potencialmente esencial en los recién nacidos prematuros, no se incluye
después del nacimiento (en cuestión de horas), puede preservar las en ninguna solución de aminoácidos disponible debido a problemas de
reservas limitadas de proteínas corporales en recién nacidos prematuros estabilidad. Sin embargo, la Neonatal Research Network del National
y con PEBN enfermos, incluso a través de aportes calóricos bajos. Institute of Child Health and Human Development realizó un ensa-
Es importante señalar que, a pesar de que la administración de yo clínico aleatorizado multicéntrico de suplementos de glutamina
aminoácidos parenterales es beneficiosa con aportes bajos de calorías, es parenteral y encontró que la suplementación con glutamina parenteral
probable que el aumento de la cantidad de calorías mejore los depósitos no disminuyó la mortalidad o la incidencia de sepsis de inicio tardío
de proteínas. Estudios más antiguos en recién nacidos prematuros en los recién nacidos con PEBN (Poindexter et al., 2004). Además,
sugerían que el aumento del aporte calórico de 50-80 kcal/kg/día la glutamina no tuvo efecto sobre la tolerancia a la alimentación
puede mejorar significativamente el equilibrio proteínico (Pineault enteral, la incidencia de enterocolitis necrosante o el crecimiento. La
et al., 1988). Basándose en datos disponibles más actuales, 70-80 kcal/ tirosina, que tiene una solubilidad muy limitada, tampoco se incluye
kg/día pueden ser suficientes para maximizar el depósito de proteínas. en las soluciones actuales de aminoácidos. TrophAmine contiene un
Sin embargo, la energía adicional más allá de esta cantidad proba- derivado soluble de la tirosina (N-acetiltirosina), pero este derivado
blemente es necesaria para producir la acreción apropiada de la grasa parece tener escasa biodisponibilidad. Diversos estudios en recién
(v. apartado «Energía», más adelante). nacidos prematuros sugieren que la fuente de la tirosina puede no

TABLA  Recomendaciones sobre las ingestas diarias de nutrición parenteral en recién nacidos de peso
69.1 extremadamente bajo y muy bajo al nacer
PEBN MBPN
Componentes
a b a
(unidades/kg/día) Día 0 Transición En crecimiento Día 0 Transiciónb En crecimiento
Energía (kcal) 40-50 70-80 90-100 40-50 60-70 90-100
Proteínas (g) 2,0-3,0 3,5 3,5-4,0 2,0-3,0 3,0-3,5 3,0-3,5
Glucosa (g) 7-10 8-15 13-17 7-10 8-15 13-17
Grasa (g) 2 2-3 3-4 2 2-3 3
Sodio (mEq) 0-1 2-4 3-7 0-1 2-4 3-5
Potasio (mEq) 0 0-2 2-3 0 0-2 2-3
Cloro (mEq) 0-1 2-4 3-7 0-1 2-4 3-7
Calcio (mg) 20-60 60 60-80 20-60 60 60-80
Fósforo (mg) 0 45-60 45-60 0 45-60 45-60
Magnesio (mg) 0 3,0-7,2 3,0-7,2 0 3,0-7,2 3,0-7,2
a
Administraciones por vía parenteral recomendadas en el primer día de vida.
b
Período de transición a la estabilidad fisiológica y metabólica. Para la mayoría de los recién nacidos prematuros, esto ocurre entre los 2 y los 7 días de vida.
MBPN, muy bajo peso al nacer; PEBN, peso extremadamente bajo al nacer.

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CAPÍTULO 69 Nutrición parenteral en el recién nacido de alto riesgo 1025

TABLA  Composición de soluciones de aminoácidos el aporte de energía y con el avance de la edad posnatal (Bauer
69.2 parenterales comerciales et al., 2003a, 2003B; Torine et al., 2007; Weintraub et al., 2009). El
gasto energético también parece ser mayor en los recién nacidos más
CONCENTRACIÓN (mg/dl) prematuros (Weintraub et al., 2009). Un aporte de aproximadamente
Aminoácido a
Aminosyn-PF TrophAmine Primeneb Premasolb 70 kcal/kg/día es un objetivo clínico razonable para lograr un equilibrio
energético neutro o ligeramente positivo, aunque, debido a la intole-
Histidina 312 480 380 480 rancia a la glucosa y de los lípidos, este aporte puede no ser superado
Isoleucina 760 820 670 820
hasta unos días después del nacimiento. Sin embargo, maximizar el
aporte de energía dentro de los límites de la tolerancia a la glucosa
Leucina 1.200 1.400 1.000 1.400 y a los lípidos puede minimizar los déficits energéticos acumulados.
También es importante resaltar que las afecciones clínicas comunes,
Lisina 677 820 1.100 820
como la sepsis y la enfermedad pulmonar crónica, pueden aumentar
Metionina 180 340 240 340 significativamente el gasto energético, lo que puede exagerar aún más
los déficits energéticos (Bauer et al., 2003c; Torine et al., 2007).
Fenilalanina 427 480 420 480
Para conseguir las velocidades normales de crecimiento, se debe
Treonina 512 420 370 420 lograr un equilibrio energético positivo de 20-25 kcal/kg/día (Den-
ne, 2001). Esto requiere 90-100 kcal/kg/día para recién nacidos
Triptófano 180 200 200 200 prematuros con menos de 1.000 g de peso al nacer y 100-110 kcal/
Valina 673 780 760 780 kg/día para recién nacidos con PEBN (v. tabla 69.1). Una adminis-
tración parenteral de 80-90 kcal/kg/día suele ser suficiente para los
Alanina 698 540 800 540 recién nacidos a término. La mayoría de las calorías parenterales se
Arginina 1.227 1.200 840 1.200 proporcionan mejor con un aporte calórico equilibrado de lípidos y
glucosa. Los requerimientos de energía parenteral son menores que los
Prolina 812 680 300 680 requeridos para la nutrición enteral, porque no se pierde energía en las
Serina 495 380 400 380 heces. Las recomendaciones para el aporte de energía por vía parenteral
se muestran en la tabla 69.2.
Taurina 70 25 60 25
Tirosina 44 240 c
45 240c Glucosa
Glicina 385 360 400 360 La glucosa es típicamente el primer nutriente parenteral proporcionado
Cisteína – 189
al niño prematuro, y la administración de la glucosa se inicia minutos
< 16 < 16
después del nacimiento para mantener la homeostasis de la glucosa y
Ácido glutámico 820 500 1.000 500 para preservar los almacenes endógenos de los hidratos de carbono.
Aunque las definiciones precisas de hipoglucemia e hiperglucemia
Ácido aspártico 527 320 600 320
siguen siendo un tema de debate, mantener concentraciones de glucosa
a
Todas las mezclas de aminoácidos que se muestran son soluciones al 10%.
superiores a 40 mg/dl y por debajo de 150-200 mg/dl es un objetivo
b
Primene está disponible en Canadá; Premasol, en EE. UU. clínico razonable (Cornblath et al., 2000). La hipoglucemia se evita
c
Mezcla de l-tirosina y N-acetiltirosina. fácilmente en recién nacidos prematuros al mantener un aporte cons-
tante de glucosa intravenosa, pero la hiperglucemia es más a menudo
problemática, especialmente en los recién nacidos con PEBN poco des-
pués del nacimiento. La hiperglucemia es muy común en esta población
ser óptima en las soluciones actuales de aminoácidos (Brunton en la vida posnatal temprana. Hasta tres cuartas partes de los recién
et al., 2000). La cisteína no se incluye en la mayoría de las soluciones nacidos con PEBN tienen concentraciones de glucosa superiores a
de aminoácidos, ya que no es estable durante largos períodos de tiempo. 150 mg/dl, y un tercio de los recién nacidos, concentraciones de glucosa
Sin embargo, un suplemento de clorhidrato de cisteína que se puede superiores a 180 mg/dl (Blanco et al., 2006; Beardsall et al., 2008).
agregar a la solución nutricional parenteral justo antes del parto está Los ritmos de infusión de glucosa de 4-7 mg/kg/min (70-110 ml/
disponible comercialmente. Hay evidencias que apoyan que, cuando kg/día de glucosa en agua al 10% [G10A]) son puntos de partida apro-
los suplementos de clorhidrato de cisteína se agregan a la nutrición piados para la mayoría de los recién nacidos. Estos ritmos de infusión
parenteral, la retención de nitrógeno mejora en los recién nacidos de glucosa se aproximan o exceden ligeramente a la tasa de liberación
prematuros (Soghier y Brion, 2006). La adición del clorhidrato de endógena de glucosa del hígado en recién nacidos prematuros y a
la cisteína también mejora la solubilidad del calcio y del fósforo en término de 1.000 g al nacer; por lo tanto, estos índices de infusión
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las soluciones parenterales de la nutrición y también puede mejorar de glucosa sirven para preservar los depósitos limitados del hidrato de
de forma importante el estado antioxidante del glutatión. Por estas carbono en estos niños. Para los recién nacidos con PEBN, se requiere
razones, se recomienda la adición de clorhidrato de cisteína (40 mg/g un ritmo de 8-10 mg/kg por minuto para hacer que coincidan con
de aminoácidos, hasta un máximo de 120 mg/kg). El clorhidrato de la producción endógena de glucosa (Hertz et al., 1993). Desafor-
cisteína puede producir acidosis metabólica, pero esta posibilidad puede tunadamente, muchos bebés no tolerarán este ritmo de infusión de
ser apropiadamente contrarrestada por el uso de acetato en la solución glucosa durante varios días sin desarrollar hiperglucemia. Debido a que
de nutrición parenteral como tampón (Peters et al., 1997). los recién nacidos con PEBN pueden tener requerimientos líquidos
superiores a 100 ml/kg/día, puede ser necesario comenzar con glucosa
Energía al 5% para mantener los ritmos de infusión de glucosa en el rango de
4-7 mg/kg para lograr la homeostasis de la glucosa.
El objetivo inicial de la nutrición parenteral en la vida posnatal tem- Un aumento gradual de la perfusión de glucosa durante 2-7 días,
prana es proporcionar el aporte de energía suficiente para por lo menos hasta alcanzar 13-17 g/kg/día, generalmente se tolera bien cuando la
equilibrar el gasto energético, para preservar los depósitos de energía del glucosa se combina con la administración de aminoácidos. Un ritmo de
cuerpo. Las medidas de gasto energético en recién nacidos prematuros infusión de 18 g/kg/día es un máximo razonable para el aporte de la glu-
oscilan entre 30 y 70 kcal/kg/día. El gasto energético aumenta con cosa i.v., porque las tasas más altas probablemente exceden la capacidad

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1026 PA RT E XI I I Nutrición

oxidativa de la glucosa (Jones et al., 1993; Chessex et al., 1995). Exce- TABLA  Composición de las emulsiones lipídicas
der la capacidad oxidativa de la glucosa conducirá a una lipogenia 69.3 para nutrición parenteral
importante, un proceso enérgicamente costoso. El aporte de cantidades
apropiadas de glucosa raramente requiere concentraciones de solución Intralipid Liposyn II
de glucosa superiores al 12,5%, a menos que los recién nacidos precisen al 20% al 20% Omegaven*
restricción de líquidos. Las recomendaciones para la administración
de glucosa durante la nutrición parenteral se detallan en la tabla 69.1. Aceite
Algunos niños con PEBN tienen dificultad para tolerar incluso Soja 20 10 –
cantidades moderadas de aportes de glucosa. Este problema general-
mente puede ser resuelto por una reducción temporal del ritmo de Cártamo 10 –
infusión de glucosa. El uso de insulina en esta situación sigue sien- Pescado – – 10
do una práctica controvertida. Collins et al. (1991), en un pequeño
ensayo clínico controlado y aleatorizado, demostraron un aumento Grasas (%)
de peso en recién nacidos que recibieron infusiones de insulina. No Ácido linoleico 50 65 0,1-0,7
se observaron diferencias en la circunferencia o longitud de la cabeza
entre estos recién nacidos y los controles, lo que sugiere que la insulina Ácido α-linolénico 9 4 < 0,2
puede haber producido aumentos en la masa grasa, pero no en el tejido EPA – – 1,3-2,8
magro. Poindexter et al. (1998) evaluaron el efecto de la insulina sobre
el metabolismo proteínico mediante un pinzamiento euglucémico DHA – – 1,4-3,1
hiperinsulinémico. La infusión de la insulina no dio lugar a ninguna
Ácido araquidónico – – 0,1-0,4
mejoría en el equilibrio proteínico y produjo acidosis láctica de forma
inesperada. Se diseñó un ensayo clínico aleatorizado multicéntrico Glicerol 2,3 2,5 2,5
para determinar si la terapia precoz de insulina reduciría la hiper-
Fosfolípidos de huevos 1,2 1,2 1,2
glucemia y provocaría mejores resultados en los recién nacidos con
MBPN (Beardsall et al., 2008). El estudio no demostró mejorías en Fitoesteroles, mg/l 348 + 33 383 0
la mortalidad, la sepsis, el crecimiento, la enfermedad intracraneal, la
enterocolitis necrosante o la enfermedad pulmonar crónica, y se cerró DHA, ácido docosahexaenoico; EPA, ácido eicosapentaenoico.
antes de tiempo por resultados no alcanzados. Aunque la insulina *Omegaven no está aprobado para su uso en EE. UU. y solo está disponible bajo el protocolo
de uso experimental o compasivo. Omegaven solo está disponible como solución al 10%
redujo la hiperglucemia, también incrementó lo episodios de hipo- (10 g de lípidos por 100 ml).
glucemia. Además, la mortalidad a los 28 días fue mayor en el grupo
de insulina. Otro ensayo controlado aleatorizado examinó el efecto
de la insulina en recién nacidos con MBPN con hiperglucemia que
fueron aleatorizados para recibir insulina, ya sea cuando los niveles Cada vez existe mayor interés en las soluciones de lípidos a base de
de glucosa superaron los 150 mg/dl o cuando los niveles de glucosa aceite de pescado, aunque ninguno de estos productos está disponible
superaron los 180 mg/dl (Alsweilier et al., 2012). El objetivo primario actualmente en EE. UU. Una revisión sistemática reciente de las emul-
fue el crecimiento lineal, que se redujo significativamente en el grupo de siones basadas en aceite de pescado concluyó que estos productos son
uso de insulina más agresivo, junto con un porcentaje dos veces mayor efectivos para reducir la hepatopatía asociada a la nutrición parenteral
de hipoglucemias. En la actualidad, no existen pruebas que respalden (HPANP), pero no parecen prevenir la HPANP en recién nacidos
un beneficio clínico de la administración rutinaria de insulina en los (Park et al., 2015). La evaluación de las nuevas soluciones de lípidos pa­
recién nacidos con MBPN. Sin embargo, algunos casos raros de recién renterales, basadas en aceite de pescado, es un área de interés activo y
nacidos con MBPN permanecen hiperglucémicos a pesar de la adminis- requerirá grandes ensayos aleatorizados en recién nacidos prematuros.
tración de cantidades muy bajas de infusión de glucosa; estos niños Las soluciones lipídicas i.v. contienen partículas lipídicas similares en
pueden requerir insulina exógena, comenzando con 0,05 unidades/kg/h tamaño a quilomicrones producidos de forma endógena. Estas partículas
durante un corto período de tiempo, para lograr la normoglucemia. son hidrolizadas por la lipoproteína lipasa en ácidos grasos libres. La
Cumplir con el objetivo de 13-17 g/kg/día de glucosa i.v. dará lugar actividad de la lipoproteína lipasa y el aclaramiento de los triglicéridos
a un aporte calórico de 45-60 kcal/kg/día, que es insuficiente por sí disminuyen en los recién nacidos prematuros de menos de 28 semanas
mismo para satisfacer las necesidades totales de energía. Los lípidos i.v. de gestación (Brans et al., 1990). Aunque la heparina puede liberar
son necesarios para suministrar el resto de las calorías no proteínicas. lipoproteína lipasa del endotelio a la circulación, actualmente no existen
Un equilibrio entre glucosa y lípidos para el aporte de calorías no pro- pruebas de que esto aumente la utilización de lípidos en recién nacidos
teínicas tiene una serie de ventajas: se aproxima mejor a la proporción prematuros (Spear et al., 1988). En ausencia de más datos que demues-
de hidratos de carbono/grasas de las alimentaciones enterales, puede tren la ventaja clínica de la administración de la heparina, la adición
mejorar la acumulación general de proteínas y minimiza los gastos rutinaria de la heparina en infusiones del lípido no se recomienda.
totales de energía (Nose et al., 1987; Van Aerde et al., 1989). Los ácidos linoleico y linolénico no pueden sintetizarse endóge-
namente y, por lo tanto, son ácidos grasos esenciales para los seres
Lípidos humanos. La evidencia de la deficiencia bioquímica de ácidos grasos
esenciales se puede observar en recién nacidos prematuros en el plazo
Los lípidos de infusión i.v. se componen de triglicéridos, fosfolípidos de de 72 h de nacimiento (Foote et al., 1991). La deficiencia de ácidos
la yema de huevo para emulsionar y glicerol, que se agrega para alcanzar grasos esenciales puede evitarse si se proporcionan 0,5-1 g/kg de peso
la isotonía. Las soluciones lipídicas i.v. disponibles comercialmente en por el día de lípidos intravenosos. Son necesarios aportes adicionales de
EE. UU. derivan del aceite de soja (Intralipid) o de una combinación lípidos i.v., más allá de estas cantidades si los requisitos energéticos de los
de aceite de soja y aceite de cártamo (Liposyn II). Estas soluciones con- recién nacidos prematuros no se cumplen en la vida posnatal temprana.
tienen triglicéridos de cadena larga. Las diferencias en la fuente lipídica Existen evidencias importantes de que la administración temprana
dan como resultado un perfil ligeramente diferente de ácidos grasos. de lípidos i.v. a recién nacidos prematuros es segura y bien tolerada.
Las composiciones de las soluciones de lípidos i.v. se muestran en la Drenckpohl et al. demostraron que el inicio con 2 g/kg de peso de lípidos
tabla 69.3. Todos los productos de lípidos i.v. disponibles tienen un en el día 1 aumentó significativamente el aporte de energía de los recién
perfil de ácidos grasos sustancialmente diferente al de la leche humana. nacidos con MBPN, y que la hipertrigliceridemia ocurrió solo en el 15%

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CAPÍTULO 69 Nutrición parenteral en el recién nacido de alto riesgo 1027

de los recién nacidos (Drenckpohl et al., 2008). Un estudio más reciente necesaria hasta el día 3 de vida. Sin embargo, es necesario medir con
mostró un mejor equilibrio de nitrógeno cuando los lípidos se iniciaron a frecuencia las concentraciones de sodio y el equilibrio hídrico. Des-
2 g/kg de peso el día 1 en recién nacidos con MBPN (Vlaardingerbroek pués de la diuresis inicial, 2-4 miliequivalentes (mEq) de sodio/kg/
et al., 2013). Una revisión sistemática y un metaanálisis sobre el uso día son generalmente suficientes para mantener el sodio sérico en el
precoz frente a tardío de lípidos en recién nacidos prematuros no mos- rango normal, pero los recién nacidos con PEBN a veces requieren
traron efectos perjudiciales con el uso precoz de los lípidos en cuanto a mayores aportes de sodio para compensar pérdidas renales mayores.
la mortalidad, la displasia broncopulmonar o la sepsis (Vlaardingerbroek Las necesidades de cloro siguen el mismo curso en el tiempo que las
et al., 2012). Sin embargo, no se pudo demostrar un efecto beneficioso necesidades de sodio, y también son generalmente 2-4 mEq/kg/día.
de la administración precoz de los lípidos en el crecimiento a largo plazo. Una vez que se añaden electrólitos a la solución nutricional parenteral,
Con los datos disponibles, comenzar con 2 g/kg de peso de lípidos la cantidad de cloro administrado no debe ser inferior a 1 mEq/kg/día,
i.v. el día 1 en los recién nacidos con PEBN y MBPN es una práctica y no se debe omitir todo el cloro cuando se administra bicarbonato
clínica recomendada. Este enfoque apoya las necesidades de ácidos sódico o acetato para corregir la acidosis metabólica. Las necesidades del
grasos esenciales y minimiza los déficits de energía y proteínas. potasio son también bajas en los primeros días de vida, y el potasio se
El ritmo de infusión del lípido i.v. es importante, y el aclaramiento debe omitir probablemente en las soluciones parenterales en niños con
de los lípidos plasmáticos se mejora cuando los lípidos i.v. se adminis- PEBN hasta que la función renal esté claramente estable. El aporte de
tran en infusión continua durante 24 h (Putet, 2000). Las concentra- potasio de 2-3 mEq/kg/día normalmente es adecuado para mantener
ciones de triglicéridos se utilizan habitualmente como un indicador de concentraciones normales de potasio sérico.
la tolerancia a los lípidos, y mantener concentraciones de triglicéridos Las soluciones de nutrición parenteral normalmente requieren
por debajo de 150-200 mg/dl parece razonable; sin embargo, no hay la adición de aniones, ya sea acetato o cloruro. En general, el aporte
datos disponibles que respalden esta práctica. Las recomendaciones de aniones se debe proporcionar como acetato para prevenir acidosis
para el aporte de lípidos parenterales se proporcionan en la tabla 69.1. metabólica hiperclorémica. Un ensayo clínico controlado aleatorizado
Numerosos estudios han documentado la superioridad de las emulsio- demostró que el acetato en las soluciones de nutrición parenteral mejora
nes lipídicas al 20% sobre las emulsiones lipídicas al 10% (Putet, 2000). eficazmente esta acidosis metabólica (Phelps y Cochran, 1989).
El aclaramiento lipídico es mejor con las soluciones al 20%, porque tie- El aporte de calcio y fósforo en la nutrición parenteral sigue siendo
nen la mitad de la cantidad de emulsionantes de fosfolípidos equivalentes un importante desafío clínico debido a su solubilidad limitada. Actual-
a la misma cantidad de triglicéridos. Los fosfolípidos pueden combinarse mente no es posible suministrar suficiente calcio y fósforo para conse-
con el colesterol para formar la lipoproteína X, que en última instancia guir la mineralización ósea adecuada en los recién nacidos prematuros
interfiere en el aclaramiento de los lípidos infundidos. En consecuencia, utilizando las soluciones disponibles en EE. UU. En otros países están
se debe evitar el uso de emulsiones lipídicas al 10%. Recientemente está disponibles preparaciones de fosfato orgánico (p. ej., glicerofosfato), y
disponible una solución lipídica al 30% que puede ofrecer aún más el calcio y el fósforo se pueden suministrar en soluciones de nutrición
ventajas, aunque actualmente no existen datos comparativos. parenteral en cantidades que se aproximan a las de la nutrición enteral.
Las emulsiones lipídicas i.v. pueden experimentar la peroxidación La precipitación del calcio y del fósforo sigue siendo un problema en
lipídica, con la formación de radicales libres orgánicos, potencialmente EE. UU. La solubilidad del calcio y del fósforo en las soluciones de
lesivos para los tejidos. La luz, especialmente la fototerapia, puede nutrición parenteral dependen de la temperatura, del tipo y de la con-
desempeñar un cierto papel en el aumento de la peroxidación lipídica centración de aminoácidos, de la concentración de la glucosa, del pH,
en las emulsiones lipídicas i.v. (Neuzil et al., 1995). Sin embargo, las pre­ del tipo de sal de calcio, de la secuencia de adición de calcio y fósforo a
paraciones multivitamínicas incluidas en las soluciones i.v. son los la solución, de la relación calcio:fósforo y de la presencia de lípidos. La
contribuyentes más importantes a la generación de peróxidos, y las adición de cisteína a las soluciones de nutrición parenteral disminuye el
emulsiones lipídicas pueden tener solo un efecto aditivo menor (Lavoie pH, lo que mejora la solubilidad del calcio y del fósforo. Para los recién
et al., 1997). Algunos estudios con un número pequeño de casos han nacidos prematuros que reciben nutrición parenteral se recomiendan
sugerido que la protección de la luz puede reducir la enfermedad pul- aportes de 60-80 mg/kg/día de calcio elemental (1,5-2 mmol/kg/
monar crónica, pero estos resultados no han sido consistentes (Chessex día) y de 48-60 mg/kg de peso de fósforo al día (1,5-2 mmol/kg/día)
et al., 2007; Bassiouny et al., 2009; Sherlock y Chessex, 2009). Según (Atkinson y Tsang, 2005). Una relación calcio:fósforo de 1,7:1 (1,3:1
estos hallazgos, algunos clínicos protegen las soluciones de lípidos i.v. por relación molar) puede ser óptima para la mineralización del hueso,
de la luz, aunque la importancia y la eficacia clínica de esta práctica pero parece que los recién nacidos pueden tolerar las relaciones molares
siguen cuestionadas. Solo es posible que un ensayo clínico aleatorio de de 0,8 a 1,5 (Atkinson y Tsang, 2005). En general, el calcio y el fósforo
grandes dimensiones resuelva este problema (Sherlock y Chessex, 2009). se deben agregar a las soluciones nutricionales parenterales en la vida
La carnitina facilita el transporte de ácidos grasos de cadena larga a posnatal temprana. El magnesio es también un nutriente necesario y
través de la membrana miocárdica y, por tanto, juega un papel impor- se debe suministrar 3-7,2 mg/kg/día. Las concentraciones de calcio,
tante en su oxidación. Los recién nacidos prematuros que reciben fósforo y magnesio séricas deben monitorizarse con frecuencia.
nutrición parenteral tienen niveles bajos de carnitina, pero el signi- Las recomendaciones para los oligoelementos en recién nacidos a
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ficado clínico de este hallazgo sigue siendo incierto. Un metaanálisis término y prematuros se derivan principalmente de las directrices de la
de los estudios que evalúan la suplementación con carnitina en la American Society for Clinical Nutrition de 1988 (Greene et al., 1988),
nutrición parenteral no demostró que ejerciese efecto sobre la cetogenia, con algunas actualizaciones recientes de la American Society of Paren-
la utilización de lípidos o el aumento de peso (Cairns y Stalker, 2000). teral and Enteral Nutrition (Vanek et al., 2012; Finch, 2015). Existe
Actualmente existe insuficiente información disponible para apoyar una un consenso razonable de que el cinc y el selenio deben añadirse desde
recomendación para la suplementación rutinaria de la carnitina en los el principio a las soluciones de nutrición parenteral (Finch, 2015).
recién nacidos alimentados por vía parenteral. Probablemente no se necesiten otros oligoelementos hasta después de
las primeras 2 semanas de vida. Los aportes recomendados de oligo­
elementos para recién nacidos a término y prematuros se detallan en
Electrólitos, minerales, oligoelementos la tabla 69.4.
y vitaminas El cinc y el cobre están disponibles en forma de sulfato y se pue-
den agregar por separado a las soluciones parenterales. Se dispone de
Las necesidades de sodio son bajas en los primeros días de vida debido varias soluciones pediátricas de oligoelementos que contienen cinc,
a la esperada eliminación de agua libre. Para los bebés con PEBN, cobre, magnesio y cromo en diversas proporciones. Estas soluciones
la adición de sodio a la solución nutricional parenteral puede no ser se proporcionan generalmente a 0,2 ml/kg/día. Cuando se utilizan

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1028 PA RT E XI I I Nutrición

TABLA  Recomendaciones para la administración TABLA  Dosis recomendada de vitaminas en la nutrición


69.4 parenteral de oligoelementos en recién nacidos 69.5 parenteral en recién nacidos a término
prematuros y a término y prematuros
A término Prematuros A término Prematuros
Oligoelemento (µg/kg/día) (µg/kg/día) Vitaminas (dosis diaria) (dosis/kg/día)a
Cromoa 0,20 0,05-0,30 Liposolubles
b
Cobre 20 29 Vitamina A (UI) 2.300 700-1.500
c
Hierro – – Vitamina D (UI) 400 40-160
d
Flúor – – Vitamina E (UI) 7 2,8-3,5
Yodo 1 1 Vitamina K (µg) 200 b
10b
Manganesob 1 1 Hidrosolubles
Molibdeno 0,25 0,25 Vitamina B6 (µg) 1.000 150-200
a
Selenio 2 1,5-4,5 Vitamina B12 (µg) 1 0,3
e
Cinc 250 400 Vitamina C (mg) 80 15-25
a
La disfunción renal puede causar toxicidad. Biotina (µg) 20 5-8
b
La excreción biliar disminuida puede causar toxicidad.
c
El hierro no se recomienda a menos que la nutrición parenteral dure más de 2 meses (los Ácido fólico (µg) 140 56
requerimientos intravenosos diarios estimados son de 250-670 µg/kg de peso para los
recién nacidos a término y de 100-200 µg/kg de peso para los recién nacidos prematuros). Niacina (mg) 17 4-6,8
d
Debido a la falta de información sobre la compatibilidad del flúor con la nutrición parenteral
Ácido pantoténico (mg) 5 1-2
total (NPT) y sobre el nivel de contaminación de flúor en las soluciones de NPT, no se pueden
hacer recomendaciones firmes. Con la NPT a largo plazo (más de 3 meses), una dosis de Riboflavina (µg) 1.400 150-200
500 µg/día puede ser importante en los recién nacidos prematuros, que ya tienen una mayor
incidencia de caries dentales posteriores. Tiamina (µg) 1.200 200-350
e
El único oligoelemento recomendado el día 1 de nutrición parenteral. Si el bebé requiere NPT
durante más de 3 meses, la dosificación debe reducirse a 100 µg/kg/día. a
El máximo no debe exceder la dosificación para el bebé a término.
Datos tomados de Vanek VW, Boren P, Buchman A, et al. A.S.P.E.N. position paper: recommen- b
Esto no incluye la dosis de 0,5-1 mg de vitamina K que se administrará al nacer.
dations for changes in commercially available parenteral multivitamin and multi-trace element Datos tomados de Vanek VW, Boren P, Buchman A, et al. A.S.P.E.N. position paper: recommen-
products. Nutr Clin Pract. 2012;27:440–491. dations for changes in commercially available parenteral multivitamin and multi-trace element
products. Nutr Clin Pract. 2012;27:440–491.

soluciones de oligoelementos, generalmente se necesitan cantidades La colestasis se resuelve más a menudo después de la interrupción de la
adicionales para proporcionar el aporte recomendado para los recién nutrición parenteral y del inicio de la alimentación enteral. En algunos
nacidos prematuros. En los recién nacidos con colestasis se debe sus- casos se ha documentado el fallo hepático irreversible, pero esto parece
pender el cobre y el manganeso, y se debe usar el cromo y el selenio con ocurrir solamente después de varios meses de uso.
precaución y en cantidades más pequeñas en los recién nacidos con dis- La etiología de la colestasis por HPANP es desconocida, y lo más
función renal. En la actualidad, el hierro parenteral solo se recomienda probable es que su origen sea multifactorial. Los pacientes con mayor
cuando los recién nacidos prematuros son alimentados exclusivamente riesgo son los recién nacidos prematuros gravemente enfermos que son
por soluciones parenterales durante los primeros 2 meses de vida. susceptibles a múltiples afecciones, como la hipoxia, la inestabilidad
Las necesidades recomendadas de vitaminas para recién nacidos hemodinámica y la sepsis. Los factores de riesgo más frecuentemente
prematuros y a término en la nutrición parenteral se muestran en identificados en la colestasis asociada a la nutrición parenteral son la
la tabla 69.5. Actualmente solo hay disponibles dos preparaciones duración de la nutrición parenteral, el grado de inmadurez y la alimen-
pediátricas multivitamínicas. Estas preparaciones proporcionan can- tación enteral tardía (Steinbach et al., 2008). También hay evidencia
tidades algo mayores de la mayoría de las vitaminas B que las de las de que ser más pequeño para la edad gestacional es también un factor
recomendaciones. de riesgo independiente para HPANP (Robinson y Ehrenkranz, 2008).
Una revisión sistemática reciente estimó un 25% de colestasis asociada
Complicaciones de la nutrición parenteral a la nutrición parenteral en recién nacidos prematuros, pero existe una
variación sustancial entre los distintos estudios (Lauriti et al., 2014).
Aunque se reportaron inicialmente una gran variedad de compli- Hay evidencias crecientes que implican a las emulsiones deriva-
caciones asociadas a la nutrición parenteral, la mayor parte de estas das de la soja en la patogenia de la HPANP. Las soluciones lipídicas
ahora son raras con las soluciones parenterales actuales. Muchas de las derivadas de la soja contienen fitoesteroles, altas concentraciones de
complicaciones (desequilibrios de la glucosa y electrólitos) se pueden ácidos grasos poliinsaturados (AGPI) proinflamatorios w-6 y bajas
prevenir o corregir manipulando los componentes de la infusión. concentraciones de antioxidantes (es decir, α-tocoferol). Diversos estu-
Actualmente, las complicaciones primarias de la nutrición parenteral dios en animales y humanos han demostrado que estos componentes,
son la colestasis y las relacionadas con el catéter de infusión. tanto solos como combinados, contribuyen a la HPANP (Nandivada
La ictericia colestásica como resultado de disfunción hepática es et al., 2013).
una complicación bien reconocida de la nutrición parenteral. La lesión Actualmente existen múltiples estudios, en su mayoría observa-
histológica inicial es la colestasis, intracelular e intracanalicular, segui- cionales, que demuestran mejoría en la HPANP en recién nacidos en
da por la inflamación portal y la progresión a la proliferación de los los que se utiliza el producto a base de aceite de pescado Omegaven
conductos biliares después de varias semanas de nutrición parenteral. (Gura et al., 2008; Diamond et al., 2009; Puder et al., 2009; Park

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CAPÍTULO 69 Nutrición parenteral en el recién nacido de alto riesgo 1029

et al., 2015). Puder et al. (2009) realizaron un ensayo abierto de Uso de la nutrición parenteral en las unidades
Omegaven en 42 recién nacidos con síndrome de intestino corto con
HPANP y los compararon con una cohorte similar de recién nacidos de cuidados intensivos neonatales:
con síndrome de intestino corto que recibieron solo lípidos intraveno- enfoque práctico
sos a base de soja. El grupo que recibía Omegaven tenía índices más
bajos de mortalidad y de indicación de trasplante de hígado, y una La parte anterior de este capítulo ha presentado las bases científicas
tasa más alta de regresión de la colestasis. Sin embargo, esta terapia para las recomendaciones relativas a la administración de la nutrición
está disponible actualmente solamente en EE. UU. dentro de ensayos parenteral a recién nacidos. Los párrafos siguientes presentan una
clínicos o de protocolos de uso compasivo. Se necesitan más datos aproximación práctica a la administración de la nutrición parenteral,
de ensayos clínicos aleatorizados antes de recomendar cambios en la con un énfasis particular en niños con PEBN.
práctica clínica para incluir Omegaven en el tratamiento de la HPANP. Todos los médicos responsables del cuidado de los recién nacidos
Algunos recién nacidos con colestasis requerirán nutrición parente- con PEBN deben reconocer la necesidad urgente de iniciar los amino­
ral continua. En estos niños, el uso de las alimentaciones enterales de ácidos i.v. poco después del nacimiento. Como se mencionó ante-
pequeño volumen junto con la nutrición parenteral puede estabilizar riormente, el niño con PEBN pierde el 1,5% de la proteína corporal
o mejorar la función hepática. Se ha demostrado que el uso de feno- total cada día que se retrasan los aminoácidos. Consecuentemente, el
barbital y ácido ursodesoxicólico es beneficioso en algunos estudios en objetivo de la nutrición parenteral precoz debe ser limitar el catabolis-
niños mayores y en adultos. Sin embargo, un estudio en recién nacidos mo y preservar los depósitos endógenos de las proteínas. Numerosos
prematuros demostró que el ácido tauroursodesoxicólico no impidió estudios han demostrado claramente tanto la seguridad como la eficacia
el desarrollo de la colestasis asociada a la nutrición parenteral y fue de los aminoácidos administrados de forma temprana para lograr este
ineficaz en la reducción de la colestasis una vez que ocurrió (Heubi objetivo, incluso a través de aportes calóricos bajos.
et al., 2002). En la actualidad no se puede recomendar el uso rutinario Recomendamos comenzar con 3 g de aminoácidos/kg/día el pri-
de ácido ursodesoxicólico o fenobarbital en la colestasis asociada a la mer día después del nacimiento. Esto se puede lograr simplemente
nutrición parenteral. añadiendo una de las soluciones cristalinas de aminoácidos diseñadas
Hay nuevos datos que sugieren que la restricción lipídica puede para su uso en recién nacidos (Aminosyn-PF, Primene, Premasol o
prevenir o mejorar la HPANP; sin embargo, no todos los estudios han TrophAmine) junto con glucosa para utilizar como aporte inicial de
demostrado este efecto (Calkins et al., 2014; Jakobsen et al., 2015). líquidos y como mantenimiento en recién nacidos con PEBN. Se
Dado el papel fundamental de los lípidos en el aporte de las necesidades recomienda desarrollar una preparación de la solución de aminoácidos
calóricas y el desarrollo cerebral, la restricción de lípidos no se debe neonatales realizada con antelación en la farmacia. La solución contiene
utilizar de forma rutinaria para los recién nacidos con PEBN y MBPN. aminoácidos en una glucosa al 7,5% que, cuando se suministra a
Esta estrategia podría considerarse en recién nacidos que precisen a lar- 60 ml/kg/día, proporciona 3 g de aminoácidos/kg/día. Los fluidos
go plazo la nutrición parenteral, pero se necesitan estudios adicionales. adicionales con o sin electrólitos y/o una mayor concentración de
Las complicaciones relacionadas con el catéter siguen siendo un pro- glucosa se infunden «en Y», con los ajustes necesarios de los líquidos,
blema importante asociado a la nutrición parenteral. La complicación la glucosa y los requerimientos de electrólitos, eliminando la necesidad
principal es la infección. Los dos patógenos bacterianos más comunes de desperdiciar la bolsa de nutrición parenteral cuando se precisan
son Staphylococcus epidermidis y Staphylococcus aureus. Las infecciones cambios. Es importante tener en cuenta que esta solución de stock
micóticas también pueden ocurrir, y los agentes más comunes son no debe aumentarse más allá de los 60 ml/kg/día. Cualquier cambio
Candida albicans y Malassezia furfur. La incidencia de sepsis durante de los fluidos totales debe hacerse con fluidos auxiliares. Esta mezcla
la nutrición parenteral es mayor en las edades gestacionales más bajas de glucosa y aminoácidos se puede administrar a través de una línea
y también aumenta con la duración de la nutrición parenteral. La periférica i.v., línea venosa umbilical o catéter venoso central percu-
sepsis asociada a la nutrición parenteral está producida por muchos táneo. El uso creciente de la colocación de catéteres venosos centrales
factores; uno de ellos es que los pacientes más inmaduros y críticamente percutáneos facilitó el uso precoz y extenso de la nutrición parenteral
enfermos tienen más probabilidades de recibir nutrición parenteral por en niños prematuros. En nuestras salas de recién nacidos, la opción más
períodos más prolongados. En los recién nacidos que han desarrollado recomendada es la colocación de la línea venosa central percutánea en
colestasis mientras reciben nutrición parenteral, la incidencia de sepsis los recién nacidos con PEBN durante su evolución posnatal.
está aumentada. En la actualidad, evitar las infecciones asociadas a la Para cumplir con las necesidades de crecimiento, se requieren
nutrición parenteral se logra por la atención meticulosa a la técnica 3,5-4 g/kg/día de aminoácidos. Es importante señalar que tales cantida-
estéril en el cuidado del catéter, la instauración precoz y el adelanto des son meramente estimaciones, y los requisitos proteínicos para man-
de la nutrición enteral, y la retirada rápida del catéter cuando se logra tener un crecimiento óptimo en los recién nacidos con PEBN podrían
la nutrición enteral de forma adecuada. La vancomicina profiláctica ser aún mayores. Una vez que se inicia la administración de aminoácidos,
en dosis bajas puede disminuir la incidencia de la sepsis asociada a la el ritmo de infusión puede incrementarse para cumplir con las necesi-
nutrición parenteral, pero, debido a la posible toxicidad y el potencial dades de crecimiento durante un período relativamente corto. Por lo
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de resistencia a los antibióticos, esta práctica no puede recomendarse general, incrementamos el consumo de aminoácidos 3,5 g/kg/día en el
(Craft et al., 2004). segundo día de vida. Dados los datos disponibles, también recomen-
También se han descrito complicaciones específicamente relacio- damos la adición de cisteína a la solución de aminoácidos (40 mg/g de
nadas con el catéter. Los catéteres Broviac son difíciles de colocar y se aminoácidos, hasta un máximo de 120 mg). Sin embargo, retrasamos
asocian con trombosis en recién nacidos (Sadiq et al., 1987). En la la adición de la cisteína hasta que otros electrólitos se incluyan en la
mayoría de las UCIN, los catéteres Broviac se han sustituido en gran solución parenteral de la nutrición, de modo que el acetato pueda
medida por catéteres Silastic de pequeño calibre colocados de forma agregarse para amortiguar la carga ácida de la cisteína.
percutánea. Sin embargo, todos los catéteres centrales, incluyendo la La glucosa se debe suministrar en una cantidad suficiente para
variedad de pequeño calibre, han producido complicaciones peligrosas mantener concentraciones normales de glucosa plasmática. Como se
para la vida. El taponamiento pericárdico y los derrames pleurales ha comentado anteriormente, la producción de glucosa y las tasas de
significativos son complicaciones conocidas del uso de catéteres cen- utilización son más altas en los recién nacidos prematuros. Sus necesi-
trales en recién nacidos (Hermansen y Hermansen, 2005). Aunque dades de glucosa se sitúan en el rango de 6-8 mg/kg/min, mientras que
estos sean acontecimientos infrecuentes, el conocimiento clínico y el las necesidades del recién nacido a término son de aproximadamente
reconocimiento temprano de estas complicaciones pueden prevenir 3-4 mg/kg/min. Administrar la glucosa al 10% en 100 ml/kg/día
la mortalidad. supone un ritmo de infusión de la glucosa de 7 mg/kg/min. Es probable

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1030 PA RT E XI I I Nutrición

TABLA  Valores calóricos de las soluciones de nutrición TABLA  Seguimiento sugerido durante la nutrición
69.6 parenteral 69.7 parenteral

Calorías no Parámetro Frecuencia


Composición* kcal/kg/día proteínicas (%)
Peso Diariamente
Ejemplo 1: fluidos totales a 110 ml/kg/día
Longitud y perímetro cefálico Semanalmente
Glucosa al 10% 37 55
Glucosa plasmática Una vez por turno
Lípidos: 3 g/kg/día 30 45 durante la primera semana,
después diariamente
Aminoácidos: 3,5 g/kg/día 14 –
Na, K y Cl, BUN, Ca, P, Mg, Dos o tres veces semanales
Total 81 – hematocrito séricos durante la primera semana,
Ejemplo 2: fluidos totales a 80 ml/kg/día después semanalmente

Glucosa al 12,5% 34 53 Fosfatasa alcalina, ALT (SGPT), GGT, Semanalmente


bilirrubina fraccionada
Lípidos: 3 g/kg/día 30 47
ALT, alanina transaminasa; BUN, nitrógeno ureico en sangre; GGT, γ-glutamiltranspeptidasa;
Aminoácidos: 3,5 g/kg/día 14 – SGPT, transaminasa glutámico-pirúvica sérica.
Total 78 –
Ejemplo 3: fluidos totales a 140 ml/kg/día
proteínas y de los lípidos de la nutrición parenteral puede disminuirse
Glucosa al 12,5% 60 67
gradualmente. Además, la atención cuidadosa y la reintroducción de
Lípidos: 3 g/kg/día 30 33 la nutrición parenteral durante episodios de intolerancia a la nutrición
enteral no puede ser sobrevalorada. Los recién nacidos con intolerancia
Aminoácidos: 3,5 g/kg/día 14 – a los alimentos enterales en los que las situaciones de dieta absoluta
Total 104 – son necesarias con frecuencia presentan un desafío adicional. En estos
recién nacidos puede ser prudente determinar los aportes de volumen
*Glucosa: 3,4 kcal/g; proteínas: 4 kcal/g; lípidos (emulsión al 20%): 10 kcal/g. completos de la nutricional parenteral de acuerdo con la situación de
dieta absoluta y, a continuación, introducir la solución de nutrición
parenteral a un ritmo más bajo si se administran alimentos enterales.
Con esta aproximación, si un cambio al estado de dieta absoluta llega
que en recién nacidos que nacen con menos de 1.000 g, el inicio con a ser necesario después de que la administración del líquido parenteral
glucosa al 5% sea prudente si sus requerimientos de líquidos totales de la nutrición haya comenzado, el volumen se puede aumentar con
son mayores de 120-150 ml/kg/día. seguridad sin afectar a la ingesta calórica y de las proteínas.
Los lípidos deben iniciarse en el curso de las primeras 24 h. Habitual-
mente iniciamos los lípidos a un ritmo de 2 g/kg/día e incrementamos Agradecimiento
en 0,5-1 g/kg/día a un máximo de 3 g/kg/día mientras monitorizamos y
mantenemos los triglicéridos séricos en menos de 200 mg/dl. Dadas las Me gustaría expresar mi agradecimiento a la Dra. Brenda Poindexter,
numerosas ventajas de las soluciones al 20% sobre las del 10%, siempre que contribuyó a la versión anterior de este capítulo.
se deben utilizar emulsiones lipídicas al 20%. Para facilitar la separación
y evitar el deterioro de la oxigenación, los lípidos deben infundirse Lecturas recomendadas
durante un período de 24 h. Actualmente no hay pruebas que apoyen
el uso de la infusión cíclica en los cuidados agudos de las UCIN. Bauer J, Maier K, Hellstern G, Linderkamp O. Longitudinal evaluation
Los objetivos de aporte calórico durante la nutrición parenteral son of energy expenditure in preterm infants with birth weight less than
más bajos que con las nutriciones enterales. Para lograr un equilibrio 1000 g. Br J Nutr 2003;89:533-537.
óptimo de proteínas, aproximadamente 70-80 kcal/kg/día es una meta Beardsall K, Vanhaesebrouck S, Ogilvy-Stuart AL, et al. Early insulin the-
razonable. Para optimizar el crecimiento, es posible que se necesiten rapy in very-low-birth-weight infants. N Engl J Med 2008;359:1873-
aportes calóricos algo mayores. El equilibrio no proteínico entre los 1884.
hidratos de carbono y los lípidos debe ser aproximadamente 60:40. Denne S. Protein and energy requirements in preterm infants. Semin
Estos objetivos generalmente se pueden lograr utilizando soluciones Neonatol 2001;6:377-382.
de glucosa con concentraciones no superiores al 12,5% (tabla 69.6). Embleton ND, Morgan C, King C. Balancing risks and benefits of
Disponemos de escasos datos relacionados con la monitorización de parenteral nutrition for preterm infants: can we define the optimal
pruebas de laboratorio durante el tratamiento con la nutrición parente- composition? Arch Dis Child Fetal Neonatal Ed 2015;100:F72-F75.
Fanaroff AA, Stoll BJ, Wright LL, et al. Trends in neonatal morbidity
ral. En la tabla 69.7 se muestra la supervisión sugerida para los recién
and mortality for very low birthweight infants. Am J Obstet Gynecol
nacidos que reciben nutrición parenteral. No todos estos exámenes de
2007;196(147).
laboratorio pueden ser apropiados en recién nacidos con PEBN debido Morgan C, McGowan P, Herwtker S, Hart AE, Turner MA. Postnatal
a las limitaciones relacionadas con las extracciones de sangre. head growth in preterm infants: a randomized controlled parenteral
El uso de la nutrición parenteral debe ir acompañado de la inicia- nutrition study. Pediatrics 2014;133:e120-e128.
ción precoz de la nutrición enteral (idealmente en el primer día). La Nandivada P, Carlson SJ, Chang MI, Cowan E, Gura KM, Puder M.
nutrición parenteral se debe continuar hasta que la nutrición ente- Treatment of parenteral nutrition-associated liver disease: the role of
ral esté bien establecida y proporcionando aproximadamente 100- lipid emulsions. Adv Nutr 2013;4:711-717.
110 kcal/kg/día, aunque la disponibilidad del acceso intravenoso pueda Stephens BE, Walden RV, Gargus RA, et al. First-week protein and energy
requerir la terminación anticipada de la nutrición parenteral en algunas intakes are associated with 18-month developmental outcomes in
circunstancias. Al incrementar la nutrición enteral, el contenido de las extremely low birth weight infants. Pediatrics 2009;123:1337-1343.

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CAPÍTULO 69 Nutrición parenteral en el recién nacido de alto riesgo 1031.e3

Resumen
• Una alta proporción de recién nacidos de peso extremadamen­
te bajo al nacer (PEBN) experimentan un crecimiento deficiente
en la unidad de cuidados intensivos neonatal. Los déficits nutri-
cionales se acumulan rápidamente poco después del nacimiento
y son un factor importante de estos malos resultados de creci-
miento.
• Los déficits nutricionales pueden minimizarse, y los resultados
del crecimiento mejoran cuando se comienza la nutrición paren-
teral poco después del nacimiento. El soporte nutricional inicial
debe incluir glucosa a 4-7 mg/kg/min, aminoácidos a 2-3 g/kg/
día y lípidos a 2 g/kg/día.
• Los objetivos para la nutrición parenteral completa en niños con
PEBN son aportar 90-100 kcal/kg/día (13-15 g/kg de glucosa
por día, 3-4 g/kg de lípidos por día y 3,5-4 g/kg de aminoácidos
al día).
• Se está incrementando el interés por las soluciones de lípidos a
base de aceite de pescado, que parecen mejorar la hepatopatía
asociada a la nutrición parenteral en recién nacidos que requieren
nutrición intravenosa a largo plazo. Estos productos actualmente
no están disponibles comercialmente en EE. UU. Se necesitan en
gran medida ensayos aleatorizados que evalúen las soluciones de
nutrición parenteral basadas en aceite de pescado y otras nuevas
fórmulas de nutrición en recién nacidos prematuros.

Palabras clave
Nutrición parenteral
Energía
Proteínas
Glucosa
Lípidos
Crecimiento
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PA RTE XIV  Aparato digestivo

70
Desarrollo del tubo digestivo
REED A. DIMMITT, ZACHARY M. SELLERS Y ERIC SIBLEY

PUNTOS CLAVE de gestación. Aunque la dismotilidad es un «hito» normal del desarrollo


en el entorno fetal, el peristaltismo descoordinado en el recién nacido
• El intestino proximal (esófago, estómago, duodeno, hígado y páncreas), de peso extremadamente bajo al nacer se relaciona con problemas
el medio (yeyuno, íleon, colon ascendente y colon transverso) y el distal posnatales importantes.
(colon descendente, colon sigmoide y recto) se forman como resultado El conocimiento de los procesos celulares y moleculares de la mor­
de una serie de plegamientos, alargamientos y dilataciones luminales. fogenia temprana se está expandiendo con rapidez. Estos procesos
• Los mecanismos moleculares que regulan el desarrollo tisular del tubo suponen una interferencia entre factores maternos y fetales durante
digestivo y la diferenciación celular integran interacciones controladas el desarrollo. En primer lugar se analizará la embriología del tubo
genéticamente entre los compuestos tróficos y los receptores celulares, digestivo, antes de proceder con su desarrollo funcional y la digestión.
y entre los factores de transcripción nuclear y el ADN del gen diana.
• Además, la microbiota digestiva tiene gran importancia en el desarrollo
del intestino. Intestino proximal
Esófago
La morfogenia normal del intestino proximal se puede subdividir en
cinco etapas sucesivas de desarrollo (Kluth et al., 2003). En la primera
etapa, que se produce en los días 22 a 23 de gestación, el intestino
Desarrollo estructural y funcional proximal primitivo se diferencia en las estructuras ventral y dorsal,
denominadas campo pulmonar y área esofágica, respectivamente. El
El conocimiento del desarrollo del tubo digestivo humano, tanto desde área esofágica tiene una capa de células que consta de 10 somitas.
el punto de vista anatómico como celular, cuenta con una larga historia En la segunda etapa se desarrolla el esbozo pulmonar desde el campo
que se remonta a más de un siglo. Este conocimiento abarca procesos pulmonar caudal proximal al hígado. A continuación, en la tercera
prenatales intrauterinos y posnatales. Los cambios en la morfogenia etapa, aparecen crestas longitudinales dentro de la luz del intestino
y en la diferenciación celular conducen a la formación estructural proximal en desarrollo, lo que origina un área esofágica dorsal visible
del tubo digestivo del embrión en desarrollo. La función digestiva e independiente. En la cuarta etapa se produce la proliferación de las
continúa desarrollándose después del nacimiento. Los avances en crestas longitudinales, que origina un tabique traqueoesofágico. Pos­
biología molecular han revelado que existen aspectos específicos del teriormente, mediante la apoptosis en la sección central del tabique
desarrollo del tubo digestivo que integran interacciones controladas comienza la separación inicial de los compartimentos dorsal y ventral.
genéticamente entre compuestos tróficos y receptores celulares en los En la quinta etapa se produce la formación de las estructuras res­
diferentes órganos del tubo digestivo. piratorias y esofágicas definitivas, entre la sexta y séptima semanas de
Desde una perspectiva global, el tubo digestivo es el resultado de la gestación.
invaginación y el plegamiento embrionarios durante la cuarta semana Algunos investigadores que utilizan Drosophila y modelos murinos
de gestación. Al final, las membranas de la bucofaringe y la cloaca se han identificado una miríada de vías de señalización clave y factores
rompen, y permiten una comunicación directa entre el tubo diges­ de transcripción en el desarrollo del intestino proximal (Jacobs et al.,
tivo fetal y el entorno intrauterino. El intestino proximal (esófago, 2012). Por ejemplo, la vía de señalización hedgehog parece ser esencial
estómago, duodeno, hígado y páncreas), el medio (yeyuno, íleon, en el mantenimiento de los nichos de células madre y en la dirección
colon ascendente y colon transverso) y el distal (colon descenden­ del desarrollo de los ejes (fig. 70.2) (Lees et al., 2005). Hedgehog se
te, colon sigmoide y recto) se forman como resultado de una serie une a un receptor de membrana celular Patched (Ptc) que da como
de plegamientos, alargamientos y dilataciones luminales. Durante el resultado la señalización y diferenciación celular mediada por factores
primer trimestre, con más alargamiento y crecimiento, el intestino de transcripción. Los defectos en esta vía se relacionan con anomalías
en desarrollo migra hacia el cordón umbilical. Regresa a la cavidad congénitas del intestino proximal.
abdominal fetal y gira en sentido antihorario alrededor del eje de la
arteria mesentérica superior aproximadamente a las 20 semanas de ges­
tación (fig. 70.1). Por lo tanto, la morfogenia básica del tubo digestivo Estómago
fetal está completa en el segundo trimestre, pero aún es necesaria una En torno a la sexta semana de gestación, el estómago del feto está bien
mayor maduración funcional intrauterina y posnatal. Por ejemplo, la definido. Las capas musculares (circular interna y longitudinal externa)
motilidad digestiva está notoriamente desorganizada a las 24 semanas se vuelven visibles a las 9 semanas. Alrededor de la semana 12, la

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CAPÍTULO 70 Desarrollo del tubo digestivo 1033

• Figura 70.1  Diagramas que muestran la rotación normal del tubo digestivo. A. Quinta semana de
vida intrauterina (vista lateral). El intestino proximal, el medio y el distal se muestran con su irrigación
individual ayudada por el mesenterio dorsal común en el plano sagital. El asa del intestino medio se
ha herniado en el cordón umbilical. B. Octava semana de vida intrauterina (vista anteroposterior). Se
está completando la primera etapa de la rotación. Obsérvese el estrecho istmo duodeno-colon del
que depende el asa del intestino medio y la posición del intestino delgado a la derecha y el colon a la
izquierda. El mantenimiento de esta posición dentro del abdomen después del nacimiento se denomina
no rotación. C. Alrededor de la semana 10 de vida intrauterina, durante la segunda etapa de rotación
(vista anteroposterior). El intestino en la hernia umbilical temporal está en proceso de reducción; la parte
más proximal del segmento prearterial que entra en el abdomen a la derecha de la arteria mesentérica
superior se mantiene hacia delante cerca del ciego y el colon ascendente, permitiendo que el intestino
pase por debajo. A medida que las espirales de intestino delgado se acumulan dentro del abdomen,
el intestino distal se desplaza hacia la izquierda y hacia arriba. D. Semana 11 de vida intrauterina, al
final de la segunda etapa de rotación. Desde su posición sagital original, el intestino medio ha girado
270° en sentido antihorario sobre el origen de la arteria mesentérica superior. Se han alcanzado los
fundamentos de la disposición permanente de las vísceras. (Tomado de Gardner CE Jr, Hart D. Anomalies
of intestinal rotation as a cause of intestinal obstruction. Arch Surg. 1934;29:942–946. Copyright 1934,
American Medical Association.)

Hígado y páncreas
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mucosa gástrica se ha diferenciado en varios tipos de epitelio: las células


cimógenas, endocrinas, mucosas y parietales. En torno a la semana 16, El hígado y el páncreas se desarrollan a partir de dos dominios ana­
todas estas células secretan sus respectivos productos celulares. tómicos diferentes del epitelio endodérmico definitivo del intestino
Se ha demostrado que varios factores tróficos están implicados proximal embrionario. Los experimentos para confeccionar mapas de
en la diferenciación del epitelio gástrico. Las interferencias entre el destino demuestran que el hígado surge de células precursoras en el
factor de crecimiento transformador β1 y las proteínas lamininas de la intestino proximal ventral en desarrollo, así como de un pequeño grupo
membrana basal son mediadores importantes de la polaridad epitelial de células endodérmicas localizadas en la línea media ventral. Durante
gástrica (Basque et al., 2002). Los factores de crecimiento para fibro­ el cierre del intestino proximal, los dominios medial y lateral convergen.
blastos 10 y 2, que son proteínas de la vía hedgehog, son determinantes Después de la diferenciación inicial, varios factores de transcripción
fuertes de la diferenciación epitelial gástrica, y, de manera especial, conforman las células precursoras del hígado en desarrollo, en hepato­
de la diferenciación de células parietales (Spencer-Dene et al., 2006). citos y células del conducto biliar (fig. 70.3) (Zaret y Grompe, 2008;
Algunos investigadores han identificado y caracterizado otras diversas Gordillo et al., 2015). La vía Wnt/β-catenina es un regulador integral
vías de señalización clave y factores de transcripción implicados en la de la zonificación y proliferación hepática, sometida a una estricta
morfogenia gástrica y en la diferenciación celular (Kim y Shivdisani, regulación espaciotemporal. Esto se produce en parte por la expresión
2016). de ligandos de R-espondina (RSPO), que se unen a los receptores

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1034 PA RT E XI V Aparato digestivo

• Figura 70.2  Vía de señalización hedgehog en las células de los mamíferos. A. En ausencia de hed-
gehog (Hh), el receptor Patched (Ptc) ejerce un efecto inhibidor sobre Smoothened (Smo), una proteína
transmembrana con homología a receptores acoplados a proteínas G. B. En presencia del ligando de
Hh, se libera la acción inhibidora de Ptc sobre Smo. El producto Gli completo ahora se estabiliza y se
transfiere al núcleo. Una vez en el núcleo, el producto Gli completo se une (y aumenta su expresión) a
las dianas transcripcionales, como Ptc o HIP, otra proteína de unión a Hh. De esta manera, se secuestra
el exceso de Hh y se regula la vía.

LGR4/5, lo que conduce a una mayor señalización de Wnt a través y los canalículos biliares pueden detectarse en la sexta semana. Los
de E3-ubicuitina ligasas y dominio de dedos de cinc ring (ZNRF3, ácidos biliares están presentes en el hígado a las 12 semanas y se secretan
RNF43). A nivel experimental, la RSPO1 recombinante acelera la activamente en el intestino delgado a las 22 semanas de gestación.
regeneración hepática tras una hepatectomía parcial, lo que abre la
puerta a nuevas terapias en el daño hepático (Planas-Paz et al., 2016). Intestino medio e intestino distal
El páncreas también se origina en los dominios del endodermo
lateral adyacentes y caudales a los dominios laterales del hígado, y en Aunque algunas porciones del intestino delgado derivan del intestino
células próximas a la línea media dorsal del intestino proximal. En un proximal y del intestino medio, y partes del colon derivan del intes­
proceso aún más complejo que el hepático, la expresión diferencial tino medio y del intestino distal, se analizarán estas porciones del tubo
de los factores de transcripción induce a las células progenitoras pan­ digestivo desde la perspectiva del órgano final.
creáticas a convertirse en células específicas endocrinas, acinares o
ductales (v. fig. 70.3) (Zaret y Grompe, 2008; Jennings et al., 2015). Intestino delgado
La primera transición en la organogenia se define por la proliferación La función digestiva fundamental del intestino delgado necesita un
de las células progenitoras pancreáticas, seguida por la diferenciación, epitelio intestinal para secretar enzimas digestivas y proporcionar una
el crecimiento, la ramificación y la delineación del linaje celular en superficie suficiente para la absorción de nutrientes. Por lo tanto, es
los subtipos endocrino y exocrino. La transición final implica remo­ importante comprender el desarrollo de la diferenciación celular, así
delación, apoptosis, neogenia y crecimiento, para producir un órgano como la longitud intestinal total.
maduro (Dassaye et al., 2016). Como se mencionó anteriormente, la vía de señalización hedgehog
Desde el punto de vista de la organogenia, la rotación y la fusión también es importante en la diferenciación endodérmica y mesodérmi­
de los esbozos pancreáticos dorsal y ventral ocurren en la séptima ca en el desarrollo del intestino delgado. Además, los genes Sox9, Sox17
semana de gestación. En torno a la semana 14 se puede detectar la y SRY, que codifican los factores de transcripción correspondientes, han
insulina inmunorreactiva, y los gránulos de cimógeno pancreático demostrado ser esenciales en la diferenciación del endodermo, mientras
están presentes en las células acinares. La amilasa aparece en la semana que la familia Hox de genes del factor de transcripción está involucrada
16. La tripsina, la lipasa y la amilasa se secretan en el duodeno a las en la diferenciación mesodérmica (de Santa Barbara et al., 2003).
31 semanas (Zoppi et al., 1972). Como se mencionó anteriormente, Después de la diferenciación, el desarrollo de las vellosidades intes­
el hígado se forma de una yema que protruye del intestino proximal. tinales y las criptas está bajo el control de varios factores de crecimiento
La porción craneal de la yema se diferencia en parénquima hepático, y la que se secretan en las vías autocrina, paracrina, endocrina y exocrina
porción caudal, en la vesícula biliar. Los lóbulos hepáticos específicos (Ménard, 2004). Los péptidos similares al glucagón de tipos 1 y 2 son

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CAPÍTULO 70 Desarrollo del tubo digestivo 1035

• Figura 70.3  Factores reguladores que controlan los linajes de los tipos celulares en el hígado y el
páncreas. Los genes del factor de transcripción implicados en la diferenciación se indican en cursiva.
(Tomado de Zaret KS, Grompe M. Generation and regeneration of cells of the liver and pancreas. Science.
2008;322:1490–1494.)

secretados por las neuronas intestinales y las células L, respectivamente, Colon


y se relacionan con una mayor longitud intestinal (Sigalet et al., 2004). El intestino distal está formado por una dilatación temprana del ciego
Se están llevando a cabo ensayos clínicos en adultos donde se administra fetal en la cuarta semana de gestación. En la semana 12, esta estructura
el péptido similar al glucagón de tipo 2 a pacientes con síndrome del primitiva adquiere las características anatómicas macroscópicas del
intestino corto, y que pueden llegar a ser prometedores en pacientes colon. Al mismo tiempo, se completa la rotación del intestino medio,
pediátricos con insuficiencia intestinal. Los experimentos preclínicos lo que provoca que el ciego se sitúe en el espacio abdominal inferior
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resultan prometedores en cuanto a que los factores tróficos, como el derecho. El sello distintivo de la función colónica es la motilidad
péptido similar al glucagón de tipo 2, el factor de crecimiento similar coordinada, especialmente en el desarrollo del recto. El recto se forma
a la insulina y el factor de crecimiento epidérmico, pueden resultar en la octava semana, mientras que la formación de capas musculares
beneficiosos en el tratamiento del síndrome del intestino corto neonatal completas y la migración neuronal de las células de la cresta neural
y pediátrico (Lim et al., 2016). Los nuevos avances en la generación se completan a las 24 semanas. En la semana 22, el colon prematuro
de organoides intestinales han aportado una nueva dimensión en la mantiene algunos aspectos del intestino delgado, como las vellosidades
comprensión de las moléculas responsables del desarrollo intestinal y y la actividad de la disacaridasa. Con la maduración del desarrollo, las
la ingeniería de tejidos in vitro (Clevers et al., 2014). estructuras de la cripta colónica dominan la superficie de la mucosa, y
El intestino delgado está bien desarrollado después de su migración disminuyen las características intestinales (Raul et al., 1986).
extracorpórea al cordón umbilical. La rápida proliferación epitelial Se han relacionado varios factores tróficos con la diferenciación
ocluye la luz del intestino delgado al inicio del desarrollo, pero la luz colónica, desde el aspecto del desarrollo celular. Elf-3, miembro de
se vuelve evidente a las 12 semanas de gestación. Existe un desarrollo la familia del factor de transcripción Ets, controla la diferenciación
gradual de la función digestiva que no se completa del todo hasta la epitelial intestinal durante el desarrollo, al regular la expresión de los
semana 34 de gestación, lo que plantea problemas adicionales con res­ receptores del factor de crecimiento en las células epiteliales (Jedlicka
pecto a la administración de nutrición enteral a los bebés prematuros. y Gutierrez-Hartmann, 2008). Se ha demostrado que los micro-ARN

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1036 PA RT E XI V Aparato digestivo

regulan la diferenciación celular y el mantenimiento de las células más bajos que en recién nacidos a término y pueden relacionarse con
madre pluripotentes (Monzo et al., 2008). aumento en la sepsis y la EN en prematuros (Mallow et al., 1996).
El sistema nervioso entérico en desarrollo deriva en gran parte de Entre los componentes celulares de la inmunidad innata están
las células de la cresta neural vagal, con contribución adicional de los macrófagos y los granulocitos. Los macrófagos están presentes en
la migración de las células precursoras de la región sacra. Entre las el intestino fetal a partir de la semana 11 de gestación. Un estudio
moléculas que se ha demostrado que controlan la migración de células reciente ha demostrado que la quemerina es un reclutador potente
ganglionares están las vías de señalización RET/GFRa1/GDNF y de macrófagos intestinales, con una producción máxima a las 20-24
del receptor de endotelina B/endotelina 3, factores de transcripción semanas (Maheshwari et al., 2009).
como Phox2b, Sox10, Pax3, Mash1, Hox11L1 y Sip1, el sistema de Anteriormente se creía que las células del sistema inmunitario
señalización hedgehog, neurotrofinas y proteínas morfogénicas óseas innato actuaban de forma inespecífica en respuesta a estímulos pató­
(Burns y Thapar, 2006; Monzo et al., 2008; McKenna et al., 2010). Los genos. Ahora se sabe que los componentes bacterianos específicos se
defectos en estas moléculas pueden estar relacionados con enfermedades transmiten a través de receptores asociados a la membrana llamados
colónicas congénitas, como la enfermedad de Hirschsprung. receptores de tipo Toll (TLR). Por ejemplo, el lipopolisacárido de
las bacterias gramnegativas es el ligando de TLR4, lo que da como
Desarrollo del sistema inmunitario de la mucosa resultado una respuesta inflamatoria posterior. Los TLR son expresados
tanto por las células inmunitarias como por las epiteliales digestivas.
El tubo digestivo es el órgano inmunitario más grande del cuerpo y, TLR4 se expresa en los enterocitos fetales a partir de las 18 semanas
por lo tanto, se merece un control de su desarrollo. Al igual que otros de gestación (Fusunyan et al., 2001) y puede ser inducido después del
aspectos del desarrollo del tubo digestivo, el sistema inmunitario de nacimiento con la adquisición de la microbiota intestinal.
la mucosa sufre cambios fetales y posnatales. Se ha demostrado que Los linfocitos T y la inmunidad humoral componen el sistema
los cambios drásticos que siguen a la exposición a los alimentos y inmunitario adaptativo de la defensa del huésped. Se ha demostrado
las moléculas derivadas de bacterias después del nacimiento son un que los linfocitos proliferan en respuesta a estímulos mitógenos a las
determinante principal en la modificación inmunológica en curso de 12 semanas de gestación. Las placas de Peyer son tejido linfoide que
la mucosa. procesa antígenos de la luz intestinal. Las células M constituyen un
La inmunidad de la mucosa consta de las ramas innata y adaptativa. epitelio intestinal diferenciado cuya función es procesar antígenos a
El sistema inmunitario innato incluye un componente químico/no los linfocitos y otras células en las placas de Peyer. Se pueden observar
celular (p. ej., ácido gástrico, capa mucosa intestinal, función de barrera a las 17 semanas de gestación. Las placas de Peyer son esenciales para
epitelial y defensinas) y un componente celular (p. ej., neutrófilos, la producción de células plasmáticas que secretan inmunoglobulinas
macrófagos y células presentadoras de antígeno). El sistema inmunitario asociadas a la mucosa.
adaptativo está formado por linfocitos T y por la inmunidad humoral Una vez que los linfocitos T indiferenciados interactúan con el
mediada por linfocitos B. antígeno, desarrollan fenotipos específicos basados en la producción
Aunque se considera principalmente que participan en la digestión, de citocinas. Actualmente, entre los subconjuntos de linfocitos T se
el ácido gástrico, las sales biliares y las secreciones pancreáticas sirven incluyen los linfocitos T cooperadores (Th) 1, Th2, Th17 (que pro­
para inhibir el crecimiento potencial de bacterias patógenas. Algunos duce IL-17) y los linfocitos T reguladoras (Weaver et al., 2006). En el
investigadores clínicos han demostrado que retrasar la alimentación en ambiente estéril intrauterino, los linfocitos T son predominantemente
los bebés prematuros produce una disminución en la secreción de ácido Th2, promoviendo una simbiosis entre el feto y la madre. Con la
gástrico, que es posiblemente el mecanismo por el cual la alimentación presentación del antígeno hay un cambio hacia células más maduras.
trófica previene la enterocolitis necrosante (EN) (Hyman et al., 1983; Se desconoce la edad gestacional a la que ocurre esta obligación de los
Berseth et al., 2003). Además, administrar antagonistas de los recep­ linfocitos T, lo que es un área fértil para futuras investigaciones.
tores de la histamina H2 a estos bebés se relaciona con un aumento de
la sepsis (Beck-Sague et al., 1994) y EN (Guillet et al., 2006). Microbiota digestiva
Las mucinas, las glucoproteínas, las inmunoglobulinas, los glu­
colípidos, los factores trefoil y la albúmina son constituyentes de la No está claro en qué momento los microorganismos comienzan a colo­
capa de moco luminal. Anteriormente se creía que el moco funciona nizar el intestino humano, pero hay una evidencia creciente de que ocu­
de manera inespecífica para evitar la adhesión bacteriana y expulsar rre antes de lo que se pensaba. Los recién nacidos por vía vaginal tienen
posibles patógenos. Ahora se sabe con certeza que ciertos componentes una microbiota digestiva diferente de los nacidos por cesárea. Los recién
de la capa de moco están involucrados en la curación de la mucosa. nacidos a término por vía vaginal presentan en los primeros días de
Específicamente, la familia del factor trefoil tiene propiedades proan­ vida una secuenciación microbiana que muestra un enriquecimiento
giógenas y antiapoptósicas, así como moduladoras de la interacción de Bacteroides, Bifidobacterium, Parabacteroides y especies de Escherichia/
célula-célula y potenciadoras del factor de crecimiento epidérmico Shigella. Esto contrasta con las especies de Enterobacter, Haemophilus,
(Hoffmann, 2005). Staphylococcus, Streptococcus y Veillonella encontradas en recién nacidos
La función de barrera epitelial se logra mediante proteínas intrace­ por cesárea (Bäckhed et al., 2015). Estas diferencias parecen estar
lulares que unen las células entre sí, evitando que penetren moléculas relacionadas con la exposición inicial a la piel y al entorno del campo
grandes. Recientemente se ha demostrado que estas proteínas no son quirúrgico o a la vagina, ya que se pueden restaurar parcialmente las
solo «puntos de soldadura», sino que poseen una naturaleza dinámica y bacterias de la flora vaginal al exponer a los recién nacidos por cesárea
responden a estímulos fisiológicos y patológicos (Graham et al., 2009). a secreciones vaginales (Dominguez-Bello et al., 2016). Sin embar­
Además, las células dendríticas, que son un tipo de células presenta­ go, los datos que muestran que los recién nacidos prematuros tienen
doras de antígeno, pueden muestrear la microbiota de la luz intestinal microbiota diferente de los recién nacidos a término sugieren que el
enviando «periscopios» a través de las uniones estrechas, lo que sugiere intestino puede no ser estéril antes del nacimiento. Dentro de la placa
una interacción entre células inmunitarias y epiteliales. basal de la placenta residen bacterias grampositivas y gramnegativas,
Las defensinas son proteínas antimicrobianas secretadas por un y el microbioma placentario tiene un perfil taxonómico similar al
epitelio intestinal especializado llamado células de Paneth. Parece ser microbioma oral adulto (Aagaard et al., 2014).
que las defensinas se expresan uniformemente en el tubo digestivo a las La microbiota digestiva tiene un papel importante en el desarrollo
14 semanas de gestación, pero en torno a la semana 17 se encuentran intestinal, la salud y la enfermedad. En los ratones, la microbiota intes­
limitadas al intestino delgado. El número de células de Paneth y la tinal afecta a la altura de las vellosidades, la profundidad de las criptas,
expresión de defensinas en bebés de 24 semanas son significativamente la proliferación de células epiteliales, el número de células caliciformes

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CAPÍTULO 70 Desarrollo del tubo digestivo 1037

y de Paneth, y las uniones estrechas (Yu et al., 2016). La microbiota hacia la circulación portal. El transporte activo de glucosa y galactosa
está implicada en el ensamblaje temprano de los circuitos neuronales a los enterocitos se lleva a cabo predominantemente a través de la pro­
intestinales y modula la liberación de neurotransmisores a través de teína apical cotransportadora sodio-glucosa SGLT1. La glucosa y la
ligandos TLR y la generación de ácidos grasos de cadena corta (Obata galactosa son transportadas fuera del enterocito por la proteína baso­
et al., 2016). Los microorganismos intestinales regulan el sistema inmu­ lateral transportadora GLUT2. Los defectos congénitos de la proteína
nitario a través del muestreo de antígenos luminales. Los organismos SGLT1 producen casos raros de malabsorción de glucosa-galactosa
comensales estimulan la generación de macrófagos tolerógenos y células caracterizados por diarrea grave, ácida y acuosa en el período neonatal
dendríticas, con la generación posterior de linfocitos T reguladores, (Martín et al., 1996). El tratamiento consiste en una dieta sin glucosa
creando así un entorno antiinflamatorio (Maranduba et al., 2015). La crea­ ni galactosa, administrada inicialmente como una leche de fórmula
ción de un estado inmunológico proinflamatorio tanto local como con fructosa.
sistémico se ha relacionado con un número creciente de enfermedades
autoinmunitarias que incluyen, entre otras, la enfermedad inflamatoria Digestión de las proteínas
intestinal (Myoshi et al., 2016), la diabetes de tipo 1 (Needell et al., Las proteínas contribuyen con menos del 10% de las calorías ingeridas
2016) y la psoriasis (Zakostelska et al., 2016). por los bebés. Muchos de los aminoácidos utilizados para la síntesis de
proteínas se producen dentro del organismo. Sin embargo, los aminoáci­
Fisiología digestiva dos esenciales se deben proporcionar a través de las proteínas de la dieta.
De manera similar a la digestión de los hidratos de carbono complejos,
La función del tubo digestivo humano es digerir y absorber los nutrien­ la digestión de las proteínas comprende la hidrólisis enzimática tanto
tes que se consumen con los alimentos. La digestión de los nutrientes en la luz como en la mucosa. Las proteínas son digeridas en primer
consiste en la descomposición de hidratos de carbono, proteínas y lugar dentro de la luz intestinal por proteasas secretadas por el estómago
grasas en moléculas componentes más pequeñas (monosacáridos; (pepsina) y el páncreas (tripsina, quimotripsina, carboxipeptidasa y elas­
oligopéptidos y aminoácidos, y ácidos grasos libres y monoglicéridos), tasa). Los productos finales de la digestión luminal son aminoácidos y
que pueden transportarse al epitelio intestinal de absorción y, posterior­ oligopéptidos compuestos por entre dos y seis residuos de aminoácidos.
mente, a la circulación portal. La función digestiva humana madura La digestión de los oligopéptidos con más de dos residuos se realiza
a lo largo de la embriogenia, a medida que los órganos digestivos se mediante peptidasas de la mucosa del borde en cepillo unidas a la mem­
desarrollan y adquieren diferentes competencias digestivas. brana. Los dipéptidos y tripéptidos pueden ser transportados a través de
la membrana del enterocito mediante el transportador unido a protones
Digestión de los hidratos de carbono PEPT1, y pueden ser hidrolizados adicionalmente mediante peptidasas
En los recién nacidos a término, los hidratos de carbono suminis­ citosólicas que existen dentro de la célula, o ser transportados como
tran aproximadamente el 40% de las calorías ingeridas. Los azúcares péptidos fuera de la célula y en el sistema portal (Liang et al., 1995). Los
y los almidones constituyen los hidratos de carbono de la dieta. La aminoácidos son transportados al interior de los enterocitos mediante
lactosa es el azúcar predominante en la leche materna humana y en la una gran variedad de transportadores de aminoácidos. La actividad de
mayoría de las fórmulas lácteas infantiles. Antes de la absorción de sus la mayoría de las peptidasas citosólicas y del borde en cepillo está bien
monosacáridos constituyentes, glucosa y galactosa, la lactosa, que es un desarrollada en el bebé prematuro. Sin embargo, hay evidencia de que
disacárido, debe ser hidrolizada por la acción enzimática de la enzima algunas proteínas de la leche pueden absorberse intactas en la circulación
lactasa intestinal. La lactasa es una proteína unida a la membrana (Kuitunen et al., 1994).
presente en la superficie apical de los enterocitos, las células absortivas
intestinales. El gen de la lactasa se expresa en el colon y el intestino
Digestión de las grasas
delgado durante el inicio de la vida fetal. A término, sin embargo,
se establece un gradiente espacial de expresión del gen de la lactasa, La grasa proporciona el 40-50% de la ingesta calórica del recién naci­
con expresión máxima en el intestino proximal (Raul et al., 1986). do. Al igual que la digestión de hidratos de carbono y proteínas, el
La actividad de la lactasa aumenta durante la maduración fetal, y el procesamiento de las grasas se inicia en la luz antes de la absorción en
mayor aumento (alrededor de cuatro veces mayor) se produce durante la mucosa. Las lipasas lingual, gástrica y pancreática actúan a través de
el tercer trimestre (Weaver et al., 1986). En ausencia de suficiente la acción enzimática para hidrolizar las grasas en los ácidos grasos libres
hidrólisis de lactasa, la lactosa no digerida puede provocar una diarrea y monoglicéridos que las forman. Al nacer, existe una concentración
osmótica. Aunque los bebés prematuros tienen niveles relativamente relativamente baja de lipasas pancreáticas. Las lipasas linguales y las
bajos de actividad de lactasa, si se les alimenta con leche materna o con gástricas, sin embargo, están presentes a las 26 semanas de gestación,
leche artificial que contenga lactosa pueden, por lo general, mantener contribuyendo así de manera importante a la digestión de las grasas en
un crecimiento normal con poca diarrea (MacLean y Fink, 1980). el recién nacido (Hamosh et al., 1981). Además, una lipasa dependiente
Algunas fórmulas también contienen hidratos de carbono complejos de las sales biliares que está presente en la leche humana es capaz de
en forma de polímeros de glucosa. Los polímeros de glucosa necesitan hidrolizar las grasas (Freed et al., 1987). Las sales biliares secretadas por
el hígado y la vesícula biliar son necesarias para la absorción eficaz de las
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la amilasa para su hidrólisis. El proceso de digestión de los hidratos de


carbono complejos se inicia en la luz del tubo digestivo por la acción grasas, y actúan emulsionándolas en la luz intestinal. El flujo de bilis al
de las α-amilasas secretadas por las glándulas salivales y el páncreas. intestino aumenta rápidamente después del nacimiento y del inicio de la
Debido a que los niveles de amilasa pancreática son bajos en los recién alimentación. Después de la hidrólisis luminal de las grasas, las micelas
nacidos, la amilasa salival contribuye a la digestión de una cantidad mixtas de ácidos grasos y monoglicéridos difunden directamente a través
significativa de polímeros de glucosa, junto con la enzima glucoamila­ de la membrana de las células intestinales de la mucosa.
sa de la mucosa (Hodge et al., 1983). La glucoamilasa es una hidrolasa
unida a la membrana, sintetizada por los enterocitos, que elimina los Lecturas recomendadas
residuos de moléculas individuales de glucosa de las cadenas α (1-4) de
los polímeros de glucosa. La actividad de glucoamilasa es detectable a Bäckhed F, Roswall J, Peng Y, et al. Dynamics and Stabilization of the
las 13 semanas de gestación y aumenta de dos a tres veces en el recién Human Gut Microbiome During the First Year of Life. Cell Host
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1038.e2 PA RT E X I V Aparato digestivo

Resumen
El desarrollo del tubo digestivo humano abarca procesos prenatales
intrauterinos y posnatales. Los cambios que se producen tanto
en la morfogenia como en la diferenciación celular conducen a
la formación estructural del tubo digestivo del embrión en desa­
rrollo. La función digestiva continúa desarrollándose después del
nacimiento. Los avances en biología molecular han revelado que
existen aspectos específicos del desarrollo del tubo digestivo
que integran interacciones controladas genéticamente entre com­
puestos tróficos y receptores celulares en los diferentes órganos
del tubo digestivo. Además, la microbiota digestiva tiene gran
importancia en el desarrollo del intestino.

Palabras clave
Intestino proximal
Intestino medio
Intestino distal
Microbioma
Fisiología digestiva

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71
Anomalías estructurales
del tubo digestivo
KATHERINE T. FLYNN-O’BRIEN, SAMUEL RICE-TOWNSEND
Y DANIEL J. LEDBETTER

PUNTOS CLAVE tubo digestivo y del abdomen, como atresia biliar, enterocolitis necro-
sante (EN), defectos de la pared abdominal y tumores abdominales.
• Los pequeños quistes de inclusión en la cavidad oral son frecuentes
en los recién nacidos y casi siempre se resuelven sin tratamiento.
• Hay que sospechar el diagnóstico de atresia esofágica cuando existe
Trastornos de la cavidad oral
dificultad alimentaria con imposibilidad de introducir una sonda En este apartado se revisan los trastornos de las superficies epiteliales
desde la nariz (o la boca) hasta el estómago. de la boca, incluidos quistes y tumores, y los trastornos de la lengua y
• En el tipo más frecuente de atresia esofágica hay una fístula de la
las glándulas salivales.
tráquea al segmento distal del esófago (fístula traqueoesofágica [FTE]),
que es responsable del aire en el tubo digestivo observado en las
radiografías. Cuando no se visualiza aire, esto sugiere que se trata solo Boca
de atresia esofágica sin FTE.
• Los factores de riesgo más importantes de mortalidad en las anomalías Los recién nacidos suelen presentar quistes de inclusión transitorios
de atresia esofágica son la prematuridad y las cardiopatías congénitas en la boca que se pueden clasificar en tres tipos: perlas de Epstein,
importantes asociadas. nódulos de Bohn y quistes de la lámina dental (Singh et al., 2012;
• Los recién nacidos con estenosis pilórica presentan vómitos no Cizmeci et al., 2014). Las perlas de Epstein son pequeños nódulos
biliosos de la ingesta, depleción de la volemia y alcalosis metabólica llenos de queratina que se hallan en la línea media del paladar. Se
hipoclorémica e hipopotasémica en las primeras semanas de vida. considera que son quistes de inclusión epitelial localizados en la línea
• En los recién nacidos, los vómitos biliosos indican obstrucción mecánica de fusión embriológica del paladar (Singh et al., 2012). Por lo general,
del tubo digestivo y, específicamente, malrotación con vólvulo los nódulos de Bohn se localizan a lo largo de los bordes alveolares
del intestino medio hasta que se demuestre lo contrario. (dentales) y son remanentes de las glándulas salivales en desarrollo
• La sospecha de vólvulo del intestino medio exige evaluación quirúrgica (Singh et al., 2012). Los quistes de la lámina dental son pequeñas
urgente. Lo mejor es realizar el diagnóstico de vólvulo cuando hay pápulas blancas, abultadas, que se observan en la línea media del
signos de obstrucción intestinal y no aguardar a que aparezcan signos paladar o en los bordes alveolares (dentales). Estos son quistes de
de isquemia intestinal. inclusión de la lámina dental, el ectodermo productor de queratina
• Si preocupa la posibilidad de malrotación intestinal y vólvulo
del desarrollo dentario. Los quistes de la lámina dental pueden ser
del intestino medio, se debe practicar un tránsito gastroduodenal
aislados o pueden aparecer en grupos. Son muy frecuentes en los
con contraste para evaluar la posición del ligamento de Treitz
(el punto de transición entre el duodeno y el yeyuno).
recién nacidos a término, y su prevalencia es hasta del 65% para el
• La falta de eliminación de meconio en el primer día de vida debe subtipo palatino y del 25-53% para el subtipo alveolar. Aunque a
plantear la sospecha de obstrucción intestinal distal. veces preocupa su aspecto, los tres tipos de quistes de inclusión oral
• La manera de descartar el diagnóstico de enfermedad de Hirschsprung son benignos y suelen ser asintomáticos. Su evolución natural es la
en un recién nacido es mediante biopsia rectal por aspiración. rotura espontánea y la fusión con el epitelio oral en el término de 5
meses del nacimiento, por lo que un enfoque conservador es adecuado,
y rara vez se necesita tratamiento (Singh et al., 2012). En ocasiones,
los quistes de inclusión oral se pueden confundir con un tumor de
la cavidad oral, por ejemplo, un épulis congénito pequeño, o con la

E
ste capítulo expondrá una visión general de las anomalías estruc- erupción de un diente neonatal.
turales del tubo digestivo observadas en los recién nacidos. La Los tumores de la cavidad oral son raros en los recién nacidos. Los
mayoría de los trastornos son congénitos; sin embargo, algunos dos tumores más frecuentes de la cavidad oral son el tumor de células
son adquiridos. Si bien hay una variedad y un número casi ilimitados granulares y el teratoma orofaríngeo. El tumor de células granulares
de anomalías estructurales, nos concentraremos en las que son relativa- también se conoce como épulis congénito («épulis» es la denominación
mente frecuentes y que tienen presentaciones neonatales importantes. para cualquier crecimiento gingival). Es un tumor benigno que se
Los temas se analizarán en progresión anatómica, desde la boca hasta el presenta como una masa lisa, roja o rosada, localizada en el borde
ano. En otros capítulos se consideran varios trastornos importantes del alveolar (dental) (Kumar et al., 2015).

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1040 PA RT E XI V Aparato digestivo

El teratoma de la cavidad oral aparece en el maxilar superior o el Las operaciones por macroglosia tienen por objetivo reducir el tamaño
paladar, y también se denomina epignato. Los teratomas son tumores de la lengua y preservar su función (Perkins, 2009; Klosterman y
que se originan en las células germinales fetales durante el desarro- Tatum, 2015).
llo, y están formados por células y tejidos derivados de las tres capas
germinales (ectodermo, mesodermo y endodermo). En el recién nacido,
se suelen localizar en la región sacrococcígea, pero pueden aparecer en
Glándulas salivales
las gónadas o en otros lugares de la línea media o cercanos a esta. En Las glándulas salivales (glándulas parótidas, submandibulares y sublin-
general, los síntomas se deben a la compresión de estructuras normales, guales) pueden ser la fuente de varios problemas del recién nacido.
aunque puede haber degeneración maligna. La ránula es un quiste lleno de moco que se origina en la glándula
Las pruebas de imagen prenatales pueden detectar los teratomas de sublingual. En los recién nacidos, la ránula es causada por la obs-
la cavidad oral de mayor tamaño, pero los tumores de células granulares trucción congénita de un conducto de la glándula sublingual (George
suelen ser más pequeños y se descubren en la exploración física después et al., 2015). Las ránulas que son totalmente intraorales se conocen
del nacimiento (Kim et al., 2008). Los tumores de células granulares como ránulas simples, mientras que las que se extienden a través del
y los teratomas de la cavidad oral varían de tamaño y, cuando son suelo de la boca más allá del músculo milohioideo se denominan
grandes, su efecto compresivo puede provocar dificultad para la alimen- ránulas sumergidas y se manifiestan por una masa submandibular o
tación e, incluso, obstrucción de la vía respiratoria superior (Kumar y cervical (Clyburn et al., 2009). La exploración física permite sospechar
Sharma, 2008; Kumar et al., 2015). La mayoría de los tumores de la la presencia de una ránula, y el diagnóstico se puede confirmar por
cavidad oral requieren resección quirúrgica. El momento de la cirugía ecografía, tomografía computarizada (TC) o resonancia magnética
depende de la gravedad o la potencial gravedad de los síntomas (Kumar (RM). Si la exploración física y los estudios por la imagen no son
y Sharma, 2008; Kumar et al., 2015). definitivos, la aspiración del quiste que muestra líquido amarillo con
amilasa y mucina confirma el diagnóstico (Zhi et al., 2014). Las ránulas
Lengua se pueden resolver de forma espontánea, por lo que se pueden observar
hasta el transcurso de 6 meses antes de la escisión o la escleroterapia
La lengua es crucial para las actividades neonatales importantes de (Zhi et al., 2014).
succión y deglución, de manera que los trastornos congénitos, como La parotiditis y la sialoadenitis supurativas neonatales son infecciones
aglosia, anquiloglosia y macroglosia, se suelen advertir en etapas tem- raras de las glándulas salivales y parótidas, respectivamente, pero deben
pranas de la vida. La aglosia, o ausencia congénita de parte o toda la considerarse en cualquier recién nacido que presente tumefacción
lengua, es un trastorno muy raro causado por falta de embriogenia de inflamatoria unilateral submandibular o parotídea (Weibel et al., 2005;
la lengua en las semanas 4-8 de gestación. Por lo general, se asocia con Ismail et al., 2013; Ryan y Padmakumar, 2015). La contaminación
anomalías craneofaciales y de las extremidades (Bommarito y Zanato, bacteriana de las glándulas proviene de la cavidad oral a través de
2016). los conductos de drenaje o de la diseminación hemática de bacterie-
La anquiloglosia se suele conocer como lengua anclada. Con dife- mia transitoria (Spiegel et al., 2004; Miranda y Pereira, 2010; Ismail
rencia, la forma más frecuente de lengua anclada es la anquiloglosia et al., 2013). Los factores de riesgo de estas infecciones son prema-
inferior, que consiste en un frenillo inferior anormalmente corto, engro- turidad, alimentación nasogástrica prolongada, ventilación mecáni-
sado o tirante, que limita la movilidad lingual y puede interferir en la ca, deshidratación y mastitis materna (Ryan y Padmakumar, 2015).
deglución y el habla (Chinnadurai et al., 2015; Francis et al., 2015). Staphylococcus aureus es el agente etiológico más frecuente, aunque
La mayoría de los recién nacidos con anquiloglosia inferior no tienen también se han comunicado especies de Streptococcus, Escherichia coli
ninguna dificultad para la lactancia. Sin embargo, si presentan dichas y Haemophilus influenzae. Se recomienda tratamiento con antibióticos
dificultades, los siguientes pasos son la evaluación y el asesoramien- intravenosos de amplio espectro, incluido un β-lactámico antiestafilo-
to, dado que la mayoría mejorarán sin intervención. Si persisten las cócico y un aminoglucósido o una cefalosporina de tercera generación
dificultades, la frenotomía, que es la sección quirúrgica del frenillo, (Weibel et al., 2005; Ismail et al., 2013; Ryan y Padmakumar, 2015).
puede mejorar la alimentación. Asimismo, la anquiloglosia inferior pue­ Los hemangiomas parotídeos son los tumores de las glándulas sali-
de incidir en la articulación del habla, pero no retrasa el desarro­ vales más frecuentes en los recién nacidos. Se manifiestan por una masa
llo general del habla y el lenguaje (Chinnadurai et al., 2015). La an­ de crecimiento rápido en la región preauricular (Weiss et al., 2011).
quiloglosia superior es una anomalía rara, pero más grave, que consiste Pueden ser segmentarios y afectar a estructuras del territorio de dis-
en una conexión fibrosa u ósea entre la lengua y el paladar duro. Se tribución del ramo V3 (mandibular) del nervio trigémino, como la
asocia con otras anomalías significativas, como fisura palatina, micro- glándula parótida, la piel suprayacente y la vía respiratoria. Alternativa-
glosia, micrognatia, malformaciones digestivas y deformidad de las mente, pueden ser focales, y localizarse dentro de la glándula parótida
extremidades (Bolling et al., 2007; Wieker y Sieg, 2014). Puede causar y afectar solo a dicha glándula (Weiss et al., 2011). Tradicionalmente,
dificultades alimentarias e, incluso, obstrucción de la vía respiratoria, los hemangiomas tienen una fase de crecimiento rápido en los primeros
lo que hace necesarios el reconocimiento y el tratamiento tempranos meses de vida, seguida de involución espontánea durante la siguiente
(Bolling et al., 2007). década. El diagnóstico se realiza por exploración física y se confirma
La macroglosia se define como un aumento de tamaño de la lengua, por ecografía Doppler y, a veces, RM (Kollipara et al., 2013). La obser-
y se puede clasificar en «macroglosia verdadera» o «seudomacroglosia» vación sola es adecuada en caso de lesiones pequeñas no desfigurantes,
(Perkins, 2009; Klosterman y Tatum, 2015). La macroglosia verdadera sin manifestaciones sistémicas, como insuficiencia cardíaca congestiva.
se puede deber a hipertrofia muscular de la lengua, que suele ser el Las opciones terapéuticas consisten en corticoesteroides intralesionales,
resultado de una anomalía genética, como el síndrome Beckwith- β-bloqueantes no selectivos sistémicos (p. ej., propranolol), esclero­
Wiedemann (Perkins, 2009). La infiltración tisular por amiloidosis, terapia endovascular y resección quirúrgica con mapeo intraoperatorio
infección, hemangiomas/linfangiomas o enfermedades sistémicas, del nervio facial (Weiss et al., 2011).
como hipotiroidismo y diabetes, también pueden causar macroglosia
(Perkins, 2009; Klosterman y Tatum, 2015). La seudomacroglosia Trastornos del cuello
tiene lugar cuando la lengua parece grande, porque la cavidad oral es
relativamente pequeña, como sucede en recién nacidos con hipoplasia Si bien la mayoría de los trastornos del cuello no son anomalías estruc-
mandibular (micrognatia), o cuando la lengua está desplazada en turales del tubo digestivo, las anomalías de la orofaringe en desarro-
sentido anterior (Klosterman y Tatum, 2015). Se necesita tratamiento llo, incluidas las de las hendiduras branquiales y la tiroides, pueden
quirúrgico si hay afectación de la vía respiratoria, disfagia o disartria. presentarse como masas cervicales. Por lo general, las anomalías de

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CAPÍTULO 71 Anomalías estructurales del tubo digestivo 1041

las hendiduras branquiales se manifiestan por masas cervicales latera- agrandada en su localización normal. Durante las semanas 5-7 de
les; y las anomalías tiroideas, por masas cervicales en la línea media. gestación, la tiroides rudimentaria migra desde el agujero ciego (es
Consideraremos de forma sucinta estos temas y otras masas cervicales decir, la base de la lengua) hasta su posición final en la región cervical
neonatales laterales y en la línea media antes de cubrir los trastornos inferior por delante de la tráquea (Guerra et al., 2014). En el inicio de
del esófago en el siguiente apartado. la migración normal, el endodermo de la faringe primitiva se invagina
y forma el conducto tirogloso, con la glándula tiroides en desarrollo
en su porción inferior. El conducto desciende hasta la región cervical
Anomalías branquiales inferior y, en general, se oblitera en la semana 10 de gestación. La
Durante el desarrollo temprano, el disco embrionario trilaminar, plano, obliteración incompleta del conducto puede dar origen a un quiste
adopta la forma de un cuerpo cilíndrico, y en la cabeza, el cuello y la del conducto tirogloso que se presenta como una masa cervical en la
parte superior del tórax, este proceso comprende el aparato faríngeo o línea media entre el hueso hioides y la glándula tiroides. Los quistes
branquial. (Branquial es el término empleado con mayor frecuencia en del conducto tirogloso muestran una propensión a infectarse, y está
medicina clínica para describir estas estructuras del desarrollo, por lo indicada la escisión quirúrgica (Simon y Magit, 2012; Erikci y Hos-
que lo emplearemos aquí.) El aparato branquial consiste en una serie gor, 2014).
de arcos que se pliegan y reúnen en lo que será la línea media ventral. La escisión simple de un quiste del conducto tirogloso se asocia
Los arcos contienen mesodermo y están separados por indentaciones con una alta tasa de recidiva, presumiblemente debido a pequeños
que, en la superficie ectodérmica externa, se denominan hendiduras, y fragmentos residuales de tejido del conducto tirogloso que no están
en la superficie endodérmica interna, bolsas. Los arcos, y las hendiduras en continuidad con el quiste principal. Por consiguiente, la operación
y bolsas que los separan, se numeran de craneal a caudal en función de de elección es el procedimiento de Sistrunk: una escisión en bloque del
su posición embrionaria (Prosser y Myer, 2015) (fig. 71.1). quiste y su trayecto, incluida la parte media del hueso hioides. Las
Las anomalías de las hendiduras branquiales se deben a la oblite- infecciones previas aumentan el riesgo de recidiva del quiste después
ración incompleta de las hendiduras y bolsas embrionarias, lo que da de la cirugía (Simon y Magit, 2012).
origen a un quiste, un seno o una fístula revestidos de epitelio. Un Los trastornos del desarrollo tiroideo pueden dar por resultado
quiste no tiene ninguna conexión directa de su revestimiento epitelial una tiroides de localización anormal o tiroides ectópica. En general,
interno con el epitelio normal de la piel o la faringe. En cambio, un el tejido tiroideo funcional no localizado por delante del segundo,
seno es una extensión epitelial anormal desde la piel o la faringe, mien- tercero o cuarto anillos traqueales se considera ectópico. Se puede hallar
tras que una fístula es una conexión epitelial anormal entre la piel y la tejido tiroideo ectópico en cualquier lugar entre el agujero ciego y el
faringe. La mayoría de las anomalías de las hendiduras branquiales son mediastino (Santangelo et al., 2016). La localización más frecuente de
quistes, y el 95% de ellos se originan en la segunda hendidura bran- la tiroides ectópica es la lengua. La tiroides lingual se debe al fracaso de
quial. Si bien son anomalías congénitas presentes desde el nacimiento, la migración normal de la tiroides durante el desarrollo y se manifiesta
a menudo se manifiestan en niños mayores y adolescentes o, incluso, por una masa en la línea media posterior de la lengua. La mayoría de los
en adultos. En general, se presentan como masas cervicales en el borde pacientes con una tiroides lingual no tienen tejido tiroideo adicional en
anterior del músculo esternocleidomastoideo (Prosser y Myer, 2015). posición normal. Una tiroides lingual de gran tamaño puede provocar
Estas masas cervicales pueden ser asintomáticas o provocar síntomas síntomas de obstrucción de la vía respiratoria.
por compresión o infección. El diagnóstico del quiste se realiza por la Una glándula tiroides con agrandamiento difuso, no dolorosa en
posición característica en la exploración física y puede ser respaldado la palpación en el momento del nacimiento se conoce como bocio
por el aspecto en la ecografía, la TC o la RM. Una fístula verdadera congénito. Este se puede asociar con hipertiroidismo, hipotiroidis-
se puede demostrar mediante esofagograma de contraste (Prosser y mo o estado eutiroideo. El diagnóstico de bocio congénito se puede
Myer, 2015; Adams et al., 2016). El tratamiento de los quistes de la confirmar mediante ecografía. Se debe valorar la función tiroidea para
hendidura branquial consiste en el tratamiento inicial de cualquier determinar la necesidad de reemplazo de hormona tiroidea.
complicación infecciosa y la escisión quirúrgica completa una vez
resuelta la infección. Otras masas cervicales
A menudo, las masas cervicales se distinguen por su localización. Como
Tiroides ya se mencionó, las anomalías branquiales suelen presentarse como
La tiroides puede ser la causa de una masa cervical cuando persisten y masas cervicales laterales. El diagnóstico diferencial de masas cervicales
aumentan de tamaño remanentes de su origen embriológico, cuando laterales que aparecen en las primeras semanas de vida incluye higromas
la glándula se encuentra en una localización anormal o cuando está quísticos y los asociados con tortícolis.
El «seudotumor esternocleidomastoideo del recién nacido», o masa
cervical asociada con tortícolis muscular congénita, es un engrosamien-
to firme, no doloroso en la palpación, de la mitad inferior del músculo
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esternocleidomastoideo. La masa se asocia con tensión y acortamiento


del músculo esternocleidomastoideo que causa una posición caracterís-
tica de la cabeza del paciente: la cara girada hacia el lado contralateral
a la lesión con el mentón levantado. Hay reducción de la amplitud
de movimiento. Se desconoce la etiología, pero se asocia con partos
difíciles. El cuadro es más común en los varones, más frecuente del
lado derecho y, en general, se manifiesta en las primeras semanas de
vida (Skelton y Howlett, 2014). El diagnóstico se basa en los hallazgos
característicos de la exploración. El tratamiento está dirigido a mejorar
la amplitud de movimiento y la postura mediante fisioterapia. En
general, no es necesaria la cirugía.
Los higromas quísticos son malformaciones linfáticas congénitas.
Las malformaciones linfáticas se pueden definir por el tamaño de los
espacios quísticos (< 2 cm es microquístico, > 2 cm es macroquís-
• Figura 71.1  Anomalías de las hendiduras branquiales. tico), y la localización se basa en el sistema de estadificación de Serres

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1042 PA RT E XI V Aparato digestivo

o el sistema de Mulliken/McGill (Adams et al., 2012). Clásicamente, VACTERL (defectos vertebrales, malformaciones anorrectales, defectos
los higromas quísticos cervicales son macroquísticos y se localizan en cardíacos, y anomalías traqueoesofágicas, renales y de las extremidades)
el triángulo posterior, con mayor frecuencia del lado izquierdo. Están (Solomon, 2011). En EE. UU., de 2.689 niños con atresia esofágica, el
presentes en el momento del nacimiento y suelen crecer con el niño, 59,1% presentaron defectos cardíacos asociados (con suma frecuencia,
pero pueden aumentar de tamaño de forma súbita debido a hemorragia comunicación interauricular, 46,6%, y comunicación interventri-
interna o infección. El tratamiento consiste en escisión quirúrgica o cular, 21,2%). Se detectaron defectos de las vértebras, la columna o
escleroterapia. Una revisión sistemática de 2012 no halló evidencia las costillas en el 25,4% de los niños. Además, se observó asociación
concluyente para avalar la superioridad de una modalidad terapéutica con anomalías renales en el 21,8% de los niños, con malformaciones
respecto de la otra (Adams et al., 2012). anorrectales en el 11,6% y deformidades de las extremidades en el
Además de las anomalías tiroideas, las masas cervicales en la línea 6,4%. Alrededor de un tercio de los pacientes tenían tres defectos,
media en los recién nacidos comprenden quistes dermoides, teratomas incluida la atresia esofágica, lo que permitía un diagnóstico formal de
y, rara vez, un timo no descendido. Los quistes dermoides son quistes VACTERL. Asimismo, se observó atresia duodenal, que no forma parte
subcutáneos revestidos de epitelio pavimentoso estratificado, quera- de VACTERL, en el 4,7% de los niños con atresia esofágica incluidos
tinizado, con faneras como folículos pilosos, glándulas sudoríparas y en el estudio (Lautz et al., 2015).
glándulas sebáceas (Bloom et al., 2002). En general, se localizan en la
cara y el cuero cabelludo en las líneas de fusión embrionarias, y también Clasificación
pueden aparecer en la línea media cervical cerca del hueso hioides y Las atresias esofágicas con malformaciones traqueoesofágicas se presen-
ser confundidos con quistes del conducto tirogloso. Son proclives a la tan como un espectro de anomalías. Se han propuesto varios sistemas de
infección y deben ser extirpados. En los casos simples no se necesitan clasificación para denominar las diversas combinaciones (Vogt, 1929;
pruebas de imagen. Los teratomas cervicales se suelen localizar en la Gross, 1953); sin embargo, en el contexto clínico, lo mejor es sim-
línea media y, desde el punto de vista biológico, son el mismo tumor plemente describir las anomalías anatómicas. La figura 71.2 muestra
que los teratomas orofaríngeos, descritos en el apartado anterior. Por las variantes más importantes.
lo general, se originan cerca de la laringe y la tráquea, y pueden causar
obstrucción de la vía respiratoria. Casi todas las masas cervicales en la Diagnóstico
línea media requieren resección quirúrgica. Si bien es posible sospechar el diagnóstico de atresia esofágica en el
período prenatal, el diagnóstico se suele efectuar después del nacimien-
to. La ecografía prenatal que revela polihidramnios y un estómago
Enfermedades del esófago anormalmente pequeño puede hacer pensar en atresia esofágica; sin
Los recién nacidos con trastornos del esófago son pacientes difíci- embargo, ambos hallazgos son inespecíficos (Stringer et al., 1995).
les de tratar, en particular si presentan prematuridad o cardiopatía Si, además del polihidramnios y un estómago pequeño, se observa
congénita asociadas. En este apartado se abordan la atresia esofágica un esófago dilatado en el cuello, el diagnóstico de atresia esofágica es
y sus variantes frecuentes, y se repasan de manera sucinta los tras- más probable (Shulman et al., 2002). Corresponde considerar RM
tornos congénitos relacionados, como la hendidura laringotraqueal, la fetal si la ecografía prenatal es sugestiva de atresia esofágica (Langer
estenosis esofágica, el quiste de duplicación esofágica y la perforación et al., 2001). El diagnóstico prenatal permite la oportunidad de ase-
esofágica adquirida. sorar a los padres acerca del diagnóstico, el tratamiento posnatal y el
pronóstico.
Cuando se sospecha que un recién nacido tiene atresia esofágica,
Atresia esofágica debido a hallazgos prenatales o a síntomas clínicos posnatales como
babeo excesivo, asfixia o tos con la alimentación, la mejor manera
La atresia esofágica es la anomalía congénita más frecuente del esófago
de descartar el diagnóstico consiste en introducir una sonda hasta el
y consiste en la separación congénita del esófago en segmentos que
estómago. Una sonda nasogástrica (NG) que no llega con facilidad
no están en continuidad. La atresia esofágica se suele asociar con una
al estómago y que, por estudio radiológico, se observa que se detiene
fístula traqueoesofágica (FTE).
o enrolla en la región media o superior del tórax entre el segundo
y el cuarto cuerpos vertebrales es diagnóstica de atresia esofágica
Epidemiología
(fig. 71.3). Una radiografía de perfil puede mostrar la sonda pos-
Se estima que la incidencia de atresia esofágica es de entre 1 de cada terior a la vía respiratoria y, en ocasiones, se puede observar una
2.500 y 1 de cada 4.500 nacidos vivos, con alguna variación entre dis- FTE ocupada por aire. Para delinear la bolsa, rara vez se necesita
tintas regiones del mundo (Kyyronen y Hemminki, 1988; Pedersen un estudio de contraste formal, que además conlleva un riesgo de
et al., 2012). Un estudio poblacional de Italia llevado a cabo de 1981- aspiración.
2012 halló 407 casos en 1.417.724 nacidos vivos para una incidencia Cuando se detecta atresia esofágica, la presencia de una FTE
de 1 de cada 3.500 (Cassina et al., 2016). Por lo general, la atresia distal se confirma por la presencia de aire en el estómago y el intes-
esofágica es un trastorno esporádico, y el riesgo de recurrencia en un tino (v. fig. 71.3). La ausencia de aire en el abdomen indica una
futuro hermano es menor del 1% (Choinitzki et al., 2013). atresia esofágica pura o una atresia esofágica con una FTE a la bolsa
superior aislada (fig. 71.4). A menudo, no se llega al diagnóstico de
Etiología y anomalías asociadas FTE aislada sin atresia esofágica (es decir, tipo H) en el nacimiento,
La embriología básica del intestino proximal y las variantes de atresia porque la presentación puede ser sutil. Los síntomas pueden consistir
esofágica y FTE no se conocen por completo (Merei y Hutson, 2002; en asfixia y tos con las tomas e infecciones respiratorias recurrentes
Metzger et al., 2011). La atresia esofágica se puede asociar con sín- (causadas por aspiración). El abdomen también puede parecer dis-
dromes genéticos, como síndrome de Down, síndrome de Edwards, tendido, debido al exceso de aire que ingresa en el tubo digestivo
síndrome de CHARGE (coloboma ocular, defectos cardíacos, atresia de a partir de la fístula (Karnak et al., 1997). Como el esófago está
coanas, retraso del crecimiento y el desarrollo, y anomalías óticas y sor- intacto, se introducirá normalmente una sonda hasta el estómago. El
dera), síndrome de Feingold y anemia de Fanconi (Felix et al., 2007). diagnóstico puede realizarse por broncoscopia (fig. 71.5) o estudios
Sin embargo, la mayoría de las veces, la atresia esofágica se acompa- por la imagen especializados, como un «esofagograma retrógrado»
ña, más que de cualquier síndrome específico, de otras anomalías en (fig. 71.6), en el que se inyecta contraste a medida que se retira con
ausencia de un defecto o síndrome genético conocido. Estas anoma- lentitud la sonda NG desde el estómago para mostrar mejor la fístula
lías adicionales suelen corresponder a la distribución de la asociación (Karnak et al., 1997).

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CAPÍTULO 71 Anomalías estructurales del tubo digestivo 1043

• Figura 71.2  Atresia esofágica con fístula traqueoesofágica y sin ella, según las clasificaciones de
Vogt y Gross, y frecuencia asociada (Tomado de Vogt, 1929; Gross, 1953; Spitz, 2007).

• Figura 71.3  Radiografía de atresia esofágica con fístula traqueo­


esofágica distal.

• Figura 71.4  Radiografía de atresia esofágica pura sin fístula.


Tratamiento preoperatorio
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Cuando se diagnostica o sospecha una atresia esofágica, el recién nacido


debe ser evaluado de inmediato por un cirujano pediátrico. En la pruebas para VACTERL, incluidos ecografía renal y pruebas de imagen
situación más frecuente, cuando hay una FTE al esófago distal, puede espinales, puede realizarse después de la operación. En ocasiones,
sobrevenir dificultad respiratoria por aspiración de contenido de la bol- la imposibilidad de ventilar al recién nacido obliga a practicar una
sa proximal, aspiración de contenido gástrico hacia la tráquea, pérdida operación urgente para ligar la fístula o descomprimir el abdomen.
de ventilación a través de la FTE y compresión de los pulmones por
el abdomen distendido. En consecuencia, se debe evitar la ventilación Intervención
con presión positiva si es posible, colocar al paciente con la cabeza El objetivo primario de la operación inicial es seccionar y cerrar la
elevada y evacuar el contenido de la bolsa proximal con una sonda NG. FTE. No se recomienda la ligadura simple (atadura) de la FTE debido
La mayoría de las veces, el recién nacido está estable, y hay tiempo al alto riesgo de recidiva. Una vez seccionada la FTE, se debe practicar
de confirmar el diagnóstico y evaluar anomalías VACTERL asociadas una anastomosis esofágica terminoterminal. En recién nacidos ines-
antes de la cirugía. El estudio más importante es un ecocardiograma tables o prematuros, suele ser más seguro realizar una reparación en
que investigue defectos cardíacos o anomalías de los grandes vasos, que distintos tiempos practicando la anastomosis esofágica en una fecha
están presentes en alrededor del 18% de los casos (Berthet et al., 2015) ulterior, después de que el paciente se haya estabilizado y crecido (Petros-
y pueden influir en el abordaje quirúrgico. El resto de la batería de yan et al., 2009). Asimismo, una larga distancia entre los segmentos

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1044 PA RT E XI V Aparato digestivo

y la presión positiva en la línea de sutura traqueal. De modo similar,


no se debe realizar aspiración intensa para no lesionar las reparaciones
traqueal ni esofágica. Igualmente, si es necesario practicar una reintu-
bación, esta se debe realizar con extremo cuidado. Se pueden adminis-
trar tomas enterales por el tubo de gastrostomía o por una sonda NG
colocada a través de la anastomosis durante la cirugía, o se pueden
retrasar hasta que se considere que la anastomosis está cicatrizada y
preparada para la alimentación oral o la colocación de una sonda.
Por lo general, solicitamos un estudio de contraste del esófago a los
7 días de postoperatorio y, si la anastomosis ha cicatrizado, retiramos
el tubo torácico, aunque esta no es una práctica uniforme (Yanchar
et al., 2001).

Evolución
Se comunicó una supervivencia global del 93%, y el bajo peso de
nacimiento y la presencia de patología cardíaca importante fueron los
factores predictivos más importantes de mortalidad (Spitz et al., 1994).
Los avances continuos de los cuidados intensivos neonatales han mejo-
rado mucho la evolución aun en los recién nacidos prematuros más
pequeños (Lopez et al., 2006; Malakounides et al., 2015).
Las complicaciones tempranas tras la reparación de una atresia
• Figura 71.5  Broncoscopia de una fístula traqueoesofágica de tipo H.
esofágica son la filtración y la estenosis de la anastomosis. Se observan
filtraciones hasta en el 20% de los casos, aunque la mayoría de ellas
son pequeñas, contenidas y se resuelven sin otra operación (Chitt-
mittrapap et al., 1992). Las filtraciones se pueden detectar al observar
saliva en el drenaje torácico, pero se suelen descubrir en los estudios de
contraste postoperatorios habituales. Hasta en un tercio de los casos,
se observa estenosis de la anastomosis, que es más frecuente cuando
esta se creó bajo tensión o se complicó por filtración postoperatoria
(Chittmittrapap et al., 1990). Las estenosis clínicamente significativas
se suelen manifestar por dificultad alimentaria y, en general, se tratan
de manera exitosa mediante dilataciones seriadas (Serhal et al., 2010;
Raitio et al., 2016).
Los pacientes con atresia esofágica presentan con frecuencia reflujo
gastroesofágico (RGE) y traqueomalacia (Tovar y Fragoso, 2013). El
RGE puede ser más problemático en pacientes con atresia esofági-
ca, debido a la dismotilidad inherente del esófago distal (Kawahara
et al., 2007). Se recomienda la administración sistemática de blo-
queantes del ácido gástrico para mejorar los síntomas y reducir el riesgo
de formación de estenosis por exposición a ácido. Muchos pacientes
necesitan luego tratamiento quirúrgico del reflujo mediante fundo-
plicatura (Bergmeijer et al., 2000).
La traqueomalacia es una debilidad estructural focal o generalizada
de la tráquea que causa estenosis o colapso de la vía respiratoria con
la presión intratorácica creciente (p. ej., espiración). Los pacientes
pueden presentar estridor espiratorio, «tos perruna», enfermedades
respiratorias recurrentes o episodios agudos potencialmente fatales. Se
llega al diagnóstico por broncoscopia, que muestra colapso de la vía
respiratoria durante la respiración espontánea. En casos graves, una
aortopexia permite tratar de manera eficaz el trastorno al suspender
la aorta (y, en consecuencia, la pared traqueal anterior unida) del
esternón, lo que la aleja de la pared posterior de la tráquea (Corbally
et al., 1993; Dave y Currie, 2006).
• Figura 71.6  Esofagograma retrógrado.

Hendidura laringotraqueoesofágica
esofágicos proximal y distal puede impedir la anastomosis en la ope- Una hendidura laringotraqueoesofágica (HL) es una conexión congé-
ración inicial. Si no se practica ninguna anastomosis, se debe colocar nita rara de longitud variable entre la cara posterior de la laringe y la
un tubo de gastrostomía en la operación inicial para tener acceso a la tráquea, y la cara anterior del esófago, que se debe a la falta de fusión
alimentación hasta que se pueda reparar la atresia. A menudo, se coloca en la línea media durante el desarrollo. La hendidura se inicia proxi-
un tubo torácico para evacuar cualquier fuga de la anastomosis esofágica. malmente en la laringe y se extiende en dirección distal. La longitud
de la comunicación puede ser tan solo un defecto mucoso superficial
Tratamiento postoperatorio entre los cartílagos aritenoides o abarcar toda la longitud de la tráquea
El recién nacido debe ser extubado tan pronto como sea seguro y e, incluso, los bronquios principales (fig. 71.7) (Ryan et al., 1991;
posible para reducir el riesgo de traumatismo del tubo endotraqueal Ryan y Doody, 2014). Una HL se puede asociar con síndrome de

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CAPÍTULO 71 Anomalías estructurales del tubo digestivo 1045

• Figura 71.7  Esquema de la hendidura laringotraqueoesofágica.

Pallister-Hall, síndrome CHARGE, síndrome G de Opitz o asociación delgado. Pueden ser quísticas o tubulares. Los quistes de duplicación
VACTERL (Leboulanger y Garabedian, 2011). Alrededor del 12% esofágica, conocidos también como quistes de duplicación del intes­
de los recién nacidos con HL también presentan una FTE más distal tino proximal, suelen estar cubiertos por una capa de músculo liso
(Fraga et al., 2015). Los síntomas se relacionan con la longitud de la y contienen un revestimiento epitelial que puede consistir en una
conexión entre el esófago y la tráquea. Los defectos menores pueden histología híbrida con elementos de tejido respiratorio y digestivo
causar aspiración sutil recurrente e infecciones respiratorias recurren- dentro de la misma lesión (Nobuhara et al., 1997). En general, la luz
tes. En los defectos largos puede haber incapacidad ventilatoria con del quiste no se comunica con la luz del intestino proximal normal
dificultad respiratoria grave. A veces resulta difícil tratar la dificultad (Michaud et al., 2013).
respiratoria, porque el tubo endotraqueal puede migrar («caer») en A menudo, la presentación clínica se debe a compresión de las
el esófago tras la colocación a través de las cuerdas vocales. La mejor estructuras adyacentes del tórax, y los síntomas pueden consistir en
manera de realizar el diagnóstico es mediante broncoscopia rígida, tos, sibilancias y disfagia. A menudo, se llega al diagnóstico en etapas
que también puede ayudar a colocar el tubo endotraqueal más allá del más tardías de la infancia (Azzie y Beasley, 2003). La mayoría de los
límite distal del defecto. A menudo, los defectos menores se tratan con casos tienen una radiografía de tórax anormal debido al efecto com-
éxito solo espesando los alimentos, aunque se pueden reparar por vía presivo, y los estudios de contraste demostrarán compresión de la
endoscópica (Sandu y Monnier, 2006). Las reparaciones de defectos luz esofágica. La TC suele ofrecer mejor visualización de las lesiones
largos son operaciones mayores y complejas del tórax y el cuello que (fig. 71.8) (Shamberger et al., 1995). El tratamiento es la resección
pueden exigir circulación extracorpórea. quirúrgica (Holcomb et al., 1989).

Estenosis esofágica congénita Perforación esofágica


La estenosis esofágica congénita es infrecuente, con una incidencia de Los neonatos de bajo peso al nacer presentan un riesgo más alto de
entre 1 de cada 25.000 y 1 de cada 50.000 (Vasudevan et al., 2002). perforación yatrógena del esófago (Hesketh et al., 2015). En un recién
Por lo general, se asocia con otras anomalías, y hasta el 50% también nacido, la presentación de la perforación esofágica puede remedar atre-
presentarán atresia esofágica (McCann et al., 2015). Hay tres tipos his- sia esofágica; en ambas, no es posible introducir una sonda orogástrica
tológicos: 1) engrosamiento fibromuscular; 2) cartílago de remanentes o NG hasta el estómago (Krasna et al., 1987). Pero, cuando la sonda
traqueobronquiales ectópicos en la pared esofágica, y 3) tejido mem- supera el nivel de la carina, pero no ingresa en el estómago, esto debe
branoso. La mayoría de los defectos se localizan en el segmento distal plantear la posibilidad de perforación, porque las atresias casi siempre se
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del esófago, la mayoría de las veces 1-2 cm por encima de la unión localizan en la carina o por encima de esta (v. fig. 71.8). El tratamiento
esofagogástrica. Más de la mitad de los casos se diagnostican después depende de la localización y la gravedad de la perforación. Cuando
del período neonatal. La disfagia y los vómitos recurrentes son síntomas la perforación es pequeña y la filtración del contenido esofágico está
frecuentes. Un estudio de contraste permite llegar de manera fiable al contenida por las estructuras circundantes del mediastino, puede haber
diagnóstico, que se confirma por endoscopia. En los casos asociados con curación con antibióticos solos, sin reparación quirúrgica. Es impor-
atresia esofágica, el diagnóstico también es posible mediante la evalua- tante realizar un estudio de contraste de seguimiento para documentar
ción del segmento distal del esófago durante la reparación quirúrgica la curación antes de iniciar la alimentación. Cuando la perforación y
y después de esta (Michaud et al., 2013). El tratamiento consiste en la filtración de contenido esofágico son de gran magnitud, en especial
dilatación o resección quirúrgica (Vasudevan et al., 2002). con contaminación del espacio pleural, está indicada la intervención
quirúrgica urgente (Mollitt et al., 1981).
Quiste de duplicación esofágica
Enfermedades del estómago
Las duplicaciones son malformaciones congénitas de etiología des-
conocida que se pueden formar en cualquier lugar a lo largo del tubo Las dos malformaciones congénitas del estómago analizadas, la atresia
digestivo en desarrollo, pero que son más frecuentes en el intestino pilórica y la duplicación gástrica, son bastante raras y se manifiestan por

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1046 PA RT E XI V Aparato digestivo

• Figura 71.8  Esofagograma de un quiste de duplicación esofágica. • Figura 71.9  Radiografía de atresia pilórica en el contexto de epider­
mólisis ampollosa.

vómitos secundarios a obstrucción parcial o completa. Una obstrucción


gástrica adquirida, la estenosis pilórica, es mucho más frecuente y
también se manifiesta por vómitos más tardíos. El último trastorno
revisado, la perforación gástrica neonatal, es un trastorno adquirido
que se presenta con peritonitis e, incluso, sepsis.

Atresia pilórica
La atresia pilórica es una obstrucción completa, intrínseca, de origen
congénito, del píloro. Es rara y afecta a 1 de cada 100.000 nacidos
vivos. Existen tres variantes anatómicas distintas de atresia pilórica:
1) membrana simple (el 57% de los casos); 2) reemplazo por tejido
sólido (el 34% de los casos), y 3) separación completa del estómago y
el duodeno (el 9% de los casos) (Okoye et al., 2000).
En el período prenatal, la atresia pilórica causa polihidramnios y
dilatación del estómago, por lo que el diagnóstico prenatal es frecuente.
La alimentación después del nacimiento provoca vómitos no biliosos.
El diagnóstico se confirma por radiografías abdominales que revelan
aire en el estómago dilatado, pero ausencia de aire en el tubo diges-
tivo distal al estómago (fig. 71.9). La falta de dilatación del duodeno
proximal en las pruebas de imagen distingue la atresia pilórica de
la atresia duodenal más frecuente (fig. 71.10). Los recién nacidos con
atresia pilórica deben ser evaluados para detectar epidermólisis ampo-
llosa (EA), debido a la asociación frecuente de estas dos afecciones
raras (Pfendner y Lucky, 2013). El pronóstico de los pacientes con EA
y atresia pilórica es malo, aunque se han comunicado supervivientes
(Hayashi et al., 1991). El tratamiento quirúrgico de todas las formas
de atresia pilórica consiste en resecar o sortear la obstrucción.

Duplicación gástrica
Las duplicaciones gástricas son similares a los quistes de duplicación
esofágica en que están rodeadas de músculo liso y, en general, no se
comunican con la luz del estómago. Son infrecuentes y representan • Figura 71.10  Radiografía de atresia duodenal que se presentó con
solo el 5% de las duplicaciones abdominales. un signo de la «doble burbuja».

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CAPÍTULO 71 Anomalías estructurales del tubo digestivo 1047

Por lo general, se localizan en la región distal del estómago y, a


medida que aumentan de tamaño, causan síntomas de obstrucción
cada vez más grave del tracto de salida gástrico, con vómitos que en
general no son biliosos (Azzie y Beasley, 2003). Alrededor de un tercio
de las duplicaciones gástricas se detectan en el período neonatal. El
diagnóstico se puede sospechar al palpar una masa abdominal superior,
por la compresión extrínseca de la región distal del estómago en el
tránsito gastroduodenal (TGD) o por la visualización de la masa en
la ecografía o la TC. El tratamiento es la extirpación quirúrgica, y se
recomienda incluso en los casos detectados de manera incidental, dado
que la mayoría finalmente causarán síntomas de obstrucción del tracto
de salida gástrico (Azzie y Beasley, 2003).

Estenosis pilórica
La estenosis pilórica (o estenosis hipertrófica de píloro [EHP]) es un tras-
torno adquirido de hipertrofia del músculo pilórico en el extremo
distal del estómago. Esta hipertrofia estrecha el tracto de salida gástrico
y provoca vómitos no biliosos que se agravan de manera progresiva.
La estenosis pilórica es uno de los problemas estructurales más
frecuentes del tubo digestivo en los recién nacidos, con una inciden-
cia de 2-5 de cada 1.000 nacidos vivos en la población occidental.
Sobreviene casi con exclusividad entre las 3 y 8 semanas de vida. Es
de cuatro a cinco veces más frecuente en el sexo masculino que en
el sexo femenino, y los recién nacidos blancos suelen estar afectados
más a menudo que los recién nacidos negros o asiáticos. Se observa
una declinación del riesgo con el orden de nacimiento creciente
(MacMahon, 2006).
Se desconoce la etiología de la EHP. Los factores genéticos deben
desempeñar un papel, dado que hay un mayor riesgo dentro de algunas
familias: por ejemplo, si un recién nacido tiene estenosis pilórica, la
probabilidad de presentar el trastorno es de casi el 25% en el geme­
lo idéntico, mientras que es del 5,8% en un hermano que no es gemelo
(MacMahon, 2006). Asimismo, la EHP es más frecuente de lo previsto
en recién nacidos con ciertos síndromes (Panteli, 2009). La exposición • Figura 71.11  Ecografía de estenosis hipertrófica del píloro.
a eritromicina y prostaglandinas también puede aumentar el riesgo de
presentar EHP (Pandya y Heiss, 2012).
Como ya se mencionó, los recién nacidos con EHP tienen ante- sonda NG desde el momento del ingreso y con un catéter de goma rojo
cedentes de vómitos alimentarios y de contenido gástrico, como los de mayor calibre inmediatamente antes de la inducción de la anestesia.
pacientes con RGE o alergia a las proteínas de la leche de vaca. Dado El tratamiento quirúrgico de la estenosis pilórica consiste en sec-
que la hipertrofia pilórica y el grado de obstrucción del tracto de salida cionar la capa del músculo pilórico por completo, de manera que
gástrico son progresivos, los vómitos también se tornan cada vez más se exponga la submucosa desde el duodeno hasta el antro gástrico.
graves. A diferencia de las obstrucciones intestinales, que son distales Esta piloromiotomía se puede practicar por abordaje a cielo abierto o
a la desembocadura del conducto biliar en el duodeno, los vómitos de laparoscópico. La operación es notablemente eficaz, de manera que se
la EHP no son biliosos, y la pérdida de contenido gástrico no diluido puede reanudar la alimentación poco después de la cirugía, y el alta
por la bilis ni las secreciones pancreáticas provoca alcalosis metabólica suele ser posible en el término de 1 o 2 días.
hipoclorémica e hipopotasémica. Los resultados del tratamiento moderno de la estenosis pilórica son
La exploración física de un recién nacido con estenosis pilórica se excelentes. La mortalidad es sumamente rara, y solo existe un pequeño
puede caracterizar por la deshidratación, y, en algunos casos, puede riesgo de infección del sitio quirúrgico o problemas de la herida. Otros
palparse el píloro hipertrofiado como una masa abdominal superior problemas infrecuentes tras la piloromiotomía son: 1) peritonitis y
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móvil y firme conocida como la «oliva» pilórica. Por lo general, el sepsis por una lesión mucosa de espesor completo no reconocida, y
diagnóstico se confirma mediante pruebas de imagen, la mayoría de 2) miotomía incompleta, que puede inducir vómitos recurrentes (diag-
las veces ecografía abdominal. Los hallazgos ecográficos de estenosis nosticada por TGD, dado que la ecografía repetida mostrará cambios
pilórica consisten en espesor del músculo pilórico mayor de 3 mm y postoperatorios). Después de la piloromiotomía, el píloro cicatriza
longitud mayor de 15 mm (fig. 71.11) (Hernanz-Schulman, 2009). con el tiempo, se remodela y parece normal. A largo plazo no hay
Asimismo, las radiografías con contraste del tubo digestivo superior ninguna alteración funcional del estómago.
pueden confirmar el diagnóstico de estenosis pilórica si no se dispone
de ecografía.
Después del diagnóstico, el primer paso del tratamiento es corregir Perforación gástrica
la depleción de la volemia, dado que esto permitirá la corrección de
cualquier hipopotasemia y alcalosis asociadas. La alcalosis metabólica Como en el caso de las perforaciones esofágicas, se considera que los
se debe corregir antes de la cirugía para prevenir la apnea inducida por recién nacidos de bajo peso al nacer presentan un riesgo más alto de
alcalosis después de la anestesia general. A veces puede llevar 1 día o más perforaciones gástricas asociadas con catéteres que los recién nacidos
optimizar la volemia, el equilibrio acidobásico y los electrólitos séricos. a término. En ausencia de traumatismo evidente, la rotura del estó-
Para limitar el riesgo de aspiración, se debe evacuar el estómago con una mago se denomina «espontánea», aunque a menudo se identifican

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1048 PA RT E XI V Aparato digestivo

posibles factores de riesgo, como prematuridad, atresia duodenal, lateral derecha del cuerpo hasta el ángulo hepático; 4) fijación del colon
ventilación mecánica o hipoxia neonatal (Leone y Krasna, 2000; Duran descendente a la pared lateral izquierda del cuerpo desde el ángulo
et al., 2007). No se conoce el mecanismo de la perforación gástrica esplénico al colon sigmoideo, y 5) fijación de la irrigación sanguínea de
espontánea, pero parece ser distinto de la EN, dado que esta suele res- todo el intestino medio (yeyuno, íleon, y colon derecho y transverso) al
petar el estómago, y el aspecto macroscópico y microscópico observado retroperitoneo en un pedículo ancho desde el ligamento de Treitz, en
en la EN y en la perforación intestinal espontánea no se observan en el cuadrante superior izquierdo del abdomen, hasta el ciego, en el cua-
las perforaciones espontáneas del estómago (Holgersen, 1981). Por lo drante inferior derecho. Si bien existe un amplio espectro de anomalías
general, las perforaciones gástricas se presentan con grandes cantidades anatómicas (denominadas en conjunto anomalías de la rotación intes­
de aire libre en las radiografías de abdomen. Están indicadas la opera- tinal) (Graziano et al., 2015), nos centraremos en la malrotación in­
ción de urgencia y la reparación quirúrgica urgente. testinal clásica, en la que el duodeno no cruza la columna y no se for-
man las otras fijaciones normales al retroperitoneo, lo que determina un
pedículo vascular mesentérico angosto. Este pedículo vascular angosto
Enfermedades del intestino sostiene la mayor parte del intestino delgado y grueso, y es proclive a
Los trastornos del intestino considerados son la malrotación intestinal girar y causar vólvulo del intestino medio. La malrotación clásica se
y el vólvulo del intestino medio potencialmente fatales, las atresias puede acompañar de fijaciones retroperitoneales anormales, conocidas
intestinales, las duplicaciones entéricas, la invaginación y el íleo meco- como bandas de Ladd, que cruzan la segunda porción del duodeno.
nial. Estos trastornos se manifiestan por obstrucción intestinal, que La verdadera prevalencia de malrotación es difícil de determinar
puede ser complicada por isquemia, necrosis, sangrado, perforación por varias razones, como presentación sintomática durante toda la
intestinal y/o sepsis. Las presentaciones clínicas de estos trastornos y vida y variantes asintomáticas detectadas durante pruebas de imagen u
muchos otros del tubo digestivo suelen ser inespecíficas, y consisten operaciones en una serie de niños (e incluso adultos). Se presume que
en alguna combinación de signos y síntomas, como dolor, intolerancia las anomalías anatómicas más graves son más proclives al vólvulo y se
alimentaria, vómitos, ausencia de deposiciones, dolor a la palpación, manifiestan en etapas más tempranas de la vida, aunque puede haber
distensión o masa. vólvulo potencialmente fatal en adultos. Sin embargo, la mayoría de
La anamnesis y la exploración física suelen aportar indicios para los casos se presentan en la lactancia. La malrotación puede producirse
el diagnóstico. El dolor y el dolor a la palpación se pueden deber a sola, pero es un componente regular de la gastrosquisis, el onfalocele
distensión visceral y/o irritación peritoneal. Por lo general, se observan y la hernia diafragmática congénita, y también puede acompañar a la
vómitos no biliosos en caso de obstrucción proximal a la ampolla de atresia intestinal, la invaginación (es decir, síndrome de Waugh) (Al
Vater (el sitio de drenaje de bilis hacia el duodeno), en tanto que una Momani, 2014), la heterotaxia y diversos defectos cardíacos.
obstrucción más distal provoca vómitos biliosos. La distensión abdo- Los recién nacidos y los bebés con vólvulo del intestino medio debu-
minal suele ser el resultado de la dilatación difusa de asas intestinales tan con vómitos biliosos, porque el giro y la obstrucción son distales a la
causada por un íleo funcional (estasis intestinal con acumulación de aire ampolla de Vater. En estadios evolutivos tempranos puede haber dolor
deglutido, alimentos y secreciones digestivas) o por una obstrucción abdominal, pero también pueden estar ausentes el dolor a la palpación
distal. En general, las obstrucciones más proximales del estómago y y la distensión. A medida que progresa el giro del mesenterio, resulta
el duodeno no causan distensión abdominal. La falta de eliminación afectada la irrigación intestinal y comienza la isquemia y, eventualmen-
de meconio en las primeras 24 h de vida debe plantear la sospecha de te, la necrosis intestinal y la peritonitis, con el consiguiente dolor, dolor
obstrucción digestiva distal. a la palpación, defensa, distensión abdominal y, finalmente, signos
La presunción clínica de obstrucción intestinal requiere medidas de sepsis. Las radiografías de abdomen pueden ser normales o pueden
de sostén y evaluación diagnóstica simultáneas. Se debe suspender la mostrar un abdomen sin gas ni asas intestinales distendidas. Las pruebas
alimentación y, si hay distensión abdominal o signos de distensión analíticas pueden ser normales hasta que aparecen peritonitis y sepsis
intestinal en los estudios por la imagen, se debe practicar descom- por isquemia intestinal.
presión gástrica a través de una sonda NG o un tubo orogástrico. Se Dado que el vólvulo expone a riesgo de alteración vascular a todo el
deben administrar líquidos intravenosos para satisfacer las necesidades intestino medio, lo mejor es realizar el diagnóstico cuando comienzan
de mantenimiento continuas, reemplazar cualquier déficit y compensar los síntomas y signos de obstrucción, antes de que aparezcan síntomas
cualquier pérdida anormal concurrente. Si preocupa la posibilidad de y signos de isquemia intestinal. Dado que el diagnóstico temprano
infección, se deben administrar antibióticos. es crucial, se debe presumir que cualquier recién nacido o bebé con
Corresponde practicar una exploración abdominal dirigida para vómitos biliosos presenta malrotación y vólvulo hasta que se demuestre
investigar distensión, dolor a la palpación, edema y eritema abdomi- lo contrario, y se debe considerar con firmeza un TGD urgente. En la
nales localizados, hernias y masas. Las radiografías de abdomen pueden malrotación, el ligamento de Treitz no cruzará la línea media hasta su
ayudar al diagnóstico, pero rara vez son definitivas. Se revisarán los posición normal en el pedículo izquierdo del cuerpo vertebral y estará
hallazgos característicos de las pruebas de imagen de determinados por debajo (en el eje craneocaudal) de la altura del bulbo duodenal
trastornos. Si hay preocupación significativa por una obstrucción (fig. 71.12).
intestinal, se recomienda una consulta quirúrgica. Otros hallazgos de las pruebas de imagen que hacen pensar en
malrotación y vólvulo son la posición anormal del ciego en el enema de
contraste y la relación anormal de los vasos mesentéricos por ecografía.
Malrotación y vólvulo Asimismo, se puede diagnosticar malrotación por TC, pero la TC
rara vez está indicada en los recién nacidos. Es importante reconocer
La rotación intestinal normal se produce cuando el intestino medio que, en este contexto, el vólvulo se puede asociar con una radiografía
que está herniado fuera de la cavidad abdominal en el cordón umbilical simple de abdomen de aspecto normal y, en consecuencia, hay que estar
en etapas tempranas del desarrollo reingresa en la cavidad abdominal siempre muy atento a esta posibilidad cuando los hallazgos clínicos
durante las semanas 10-12 de gestación y se fija al retroperitoneo con son sugestivos.
un patrón preciso. Da por resultado: 1) fijación del duodeno en el El vólvulo del intestino medio es una urgencia quirúrgica. Si bien
retroperitoneo que rodea al páncreas y transición al yeyuno intraperi- se han descrito abordajes laparoscópicos que pueden ser útiles en la
toneal (visible externamente como el ligamento de Treitz) en un punto malrotación asintomática, se recomienda una laparotomía a cielo
situado a la izquierda de la columna y por encima del nivel del bulbo abierto en presencia de síntomas agudos (Lodwick et al., 2015). La
duodenal; 2) flotación libre de todas las asas de intestino delgado en el operación de elección es una intervención de Ladd, que consiste en:
abdomen; 3) fijación del ciego y el colon ascendente a la pared posterior 1) desrotar el intestino que ha presentado el vólvulo; 2) seccionar las

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CAPÍTULO 71 Anomalías estructurales del tubo digestivo 1049

• Figura 71.12  Tránsito gastroduodenal que muestra malrotación con o sin obstrucción/vólvulo.

bandas anormales; 3) ensanchar el mesenterio, y 4) disponer el intestino exacto de la anomalía del desarrollo, pero se puede deber a la falta de
de manera que el mesenterio del intestino medio quede plano en el recanalización (Fairbanks et al., 2006).
retroperitoneo, con el intestino delgado proximal del lado derecho del Es probable que la prevalencia de atresia duodenal sea de alrededor
abdomen, y el íleon distal y el ciego en el cuadrante superior izquierdo. de 1 de cada 5.000 nacimientos, pero no se ha dilucidado por com-
Por lo general, se reseca el apéndice, dado que la operación hace que su pleto, ya que numerosos estudios evalúan todas las atresias intestinales,
localización final sea impredecible y puede dificultar mucho el diagnós- en lugar de la atresia duodenal específicamente (Sinha et al., 2010). La
tico de apendicitis en etapas ulteriores de la vida. Cuando hay necrosis atresia duodenal se suele asociar con otras anomalías, como trisomía 21,
intestinal, se reseca el intestino no viable. Cuando la viabilidad intes- asociación VACTERL, anomalías cardíacas, malrotación, malformacio-
tinal es cuestionable, se pueden practicar intervenciones de «segunda nes anorrectales y anomalías de la vía biliar, lo que tiene importantes
inspección». El tratamiento profiláctico de la malrotación asintomática implicaciones para la evaluación y el tratamiento (Escobar et al., 2004;
puede ser laparoscópico; sin embargo, se debate si una intervención Choudhry et al., 2009).
de Ladd laparoscópica es tan eficaz como una intervención a cielo En presencia de otras anomalías asociadas o polihidramnios, se
abierto (Graziano et al., 2015; Lodwick et al., 2015). En recién nacidos puede sospechar atresia duodenal en el período prenatal. El diagnós-
con cardiopatías congénitas y malrotación asintomática, la American tico se puede confirmar mediante una ecografía que revele una «doble
Pediatric Surgery Association recomienda observación o posponer la burbuja» (Choudhry et al., 2009). Si no se sospecha el diagnóstico antes
intervención de Ladd hasta después del tratamiento paliativo de la del nacimiento, la presentación típica en el recién nacido son los vómi-
cardiopatía congénita (Graziano et al., 2015). tos. En general, los vómitos son biliosos, aunque no siempre, porque
la obstrucción suele ser distal a la ampolla de Vater. Una radiografía de
abdomen que muestre una doble burbuja sin aire en el tubo digestivo
Atresia intestinal distal confirma el diagnóstico de atresia duodenal (v. fig. 71.10). Una
La atresia intestinal es una obstrucción completa congénita de la luz radiografía con una doble burbuja y aire presente en el tubo digestivo
intestinal. La atresia es un problema intrínseco del intestino y no una distal indica que el recién nacido puede tener estenosis duodenal, pero
compresión extrínseca. Las atresias esofágica y pilórica se analizan en deben seguir preocupando la malrotación y el vólvulo.
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otros apartados de este capítulo. Las atresias duodenal y anorrectal se Tras el diagnóstico, el tratamiento inicial consiste en descompresión
consideran por separado, porque cada una tiene embriología, factores gástrica con una sonda NG, reposición de líquidos y corrección de
de riesgo y afecciones asociadas singulares. Las atresias yeyunal, ileal y las alteraciones electrolíticas. El tratamiento quirúrgico consiste en la
de colon tienen muchas características en común y son consideradas en derivación de la obstrucción, en general con una duodenoduodenos-
su conjunto. Según la localización anatómica, algunas formas de atresia tomía. Se debe evaluar todo el intestino para detectar otras atresias
son incompletas y es más correcto denominarlas «estenosis» intestinal, intestinales. Lo habitual es un abordaje a cielo abierto; sin embargo, se
pero la presentación, la evaluación y el tratamiento son similares, de ha descrito un abordaje laparoscópico (Kay et al., 2009). Por lo general,
manera que unificaremos el análisis de atresias y estenosis. la evolución es buena, pero las posibles complicaciones tempranas
son filtración y estenosis anastomóticas. Los problemas potenciales
Atresia duodenal a largo plazo son la escasa movilidad del estómago y el duodeno con o
Existen distintas variaciones anatómicas de atresia duodenal, incluidas sin megaduodeno asociado (Escobar et al., 2004).
membranas, oclusiones simples, separaciones completas de los segmen-
tos proximal y distal, y páncreas anular, en el que la fusión anormal Atresias yeyunoileal y colónica
del páncreas ventral y dorsal rodea la segunda porción del duodeno y Las atresias yeyunoileal y colónica se clasifican sobre la base de la
provoca obstrucción completa o incompleta. Se desconoce el carácter anomalía anatómica (fig. 71.13). Se considera que la etiología de las

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anastomosis. El síndrome del intestino corto es un posible problema a


largo plazo si las atresias causan una pérdida de gran parte de la longitud
del intestino delgado.
Los recién nacidos con atresia colónica presentan un cuadro simi-
lar al de los que tienen atresia más proximal; sin embargo, como la
obstrucción tiene una localización más distal en el tubo digestivo,
la presentación suele diferirse hasta el segundo o tercer días de vida.
Las radiografías de abdomen muestran dilatación del intestino distal
y pueden revelar un colon muy dilatado si la válvula ileocecal impide
que el aire refluya hacia el íleon distal. El tratamiento es similar al de
los casos de atresia yeyunoileal, con laparotomía, resección del colon
dilatado y anastomosis. El diagnóstico y el tratamiento oportunos
son esenciales y se asocian con una evolución en general excelente, en
tanto que el diagnóstico y el tratamiento tardíos (más de 72 h después
del nacimiento) aumentan el riesgo de morbimortalidad (Haxhija
et al., 2011).

Íleo meconial
El íleo meconial es una obstrucción intraluminal del íleon terminal
por meconio anormal. La fibrosis quística (FQ) es responsable del
90% de los pacientes que presentan íleo meconial, mientras que hasta
el 20% de los pacientes con FQ tienen íleo meconial cuando son
recién nacidos. La FQ es causada por mutaciones del regulador trans-
membrana de fibrosis quística (CFTR), que altera el transporte de
bicarbonato y cloruro. Estos cambios líquidos intraluminales pueden
dar origen al meconio característico que se adhiere a la pared intestinal
y causa la obstrucción. El íleo meconial puede ser «no complicado» y
causar solo obstrucción intestinal, o puede ser «complicado» cuando
la obstrucción provoca perforación o torsión e isquemia prenatales,
que pueden causar atresia ileal (Rescorla y Grosfeld, 1993). Obsérve­
• Figura 71.13  Tipos de atresia intestinal. se que peritonitis meconial es una descripción del resultado de cualquier
perforación intrauterina, ya sea causada por íleo meconial o por otro
problema.
Es posible sospechar el diagnóstico prenatal de FQ cuando hay
atresias yeyunoileal y colónica es la alteración vascular mesentérica antecedentes familiares de FQ o cuando los padres son portadores de
prenatal. En algunos casos también pueden participar factores genéticos mutaciones del CFTR. El diagnóstico de FQ se puede confirmar por
y señalización defectuosa del factor de crecimiento de fibroblastos análisis de ADN fetal, y los hallazgos ecográficos prenatales de intes-
(Fairbanks et al., 2006). tino hiperecoico, dilatación intestinal e imposibilidad de identificar la
La prevalencia de las atresias intestinales es de 1,6-2,8 de cada vesícula biliar, si bien no son sensibles ni específicos, se han asociado
10.000 nacidos vivos (Cragan et al., 1993; Hemming y Rankin, 2007; con íleo meconial (Carlyle et al., 2012).
Best et al., 2012). Las características clínicas importantes de los En el recién nacido, la presentación clínica del íleo meconial es
pacientes con atresia yeyunoileal son que alrededor de un tercio son similar a la de la atresia yeyunoileal, con distensión abdominal a las
prematuros y que hay menos probabilidad de anomalías asociadas, 12-24 h del nacimiento, vómitos y falta de eliminación de meconio
especialmente en comparación con pacientes que presentan atresia (Rescorla y Grosfeld, 1993). Las radiografías de abdomen muestran
duodenal (Adams y Stanton, 2014). asas intestinales dilatadas que sugieren obstrucción intestinal distal. Si
La ecografía prenatal puede mostrar asas intestinales dilatadas. Des- se ha producido una perforación intrauterina, se observa distensión
pués del nacimiento, los neonatos con atresia yeyunoileal y colónica abdominal inmediata en el momento del nacimiento (en lugar de
presentan vómitos biliosos, distensión abdominal y ausencia o retraso varias horas más tarde), y las radiografías de abdomen pueden mostrar
de la eliminación de meconio; cuanto más proximal es la atresia, más calcificaciones intraabdominales.
rápida es la aparición de los signos y síntomas. Las radiografías de El tratamiento inicial de recién nacidos con íleo meconial es el mis-
abdomen muestran asas intestinales dilatadas con niveles hidroaéreos y mo que el de cualquier neonato con obstrucción intestinal y consiste
ausencia de gas en el recto. Después de las radiografías abdominales, el en líquidos intravenosos, corrección de las alteraciones electrolíticas
siguiente paso de la evaluación es un enema de contraste, que ayudará y descompresión gástrica. Un enema de contraste puede confirmar
a diferenciar la atresia intestinal del íleo meconial no complicado, la el diagnóstico y ofrece la posibilidad de tratamiento conservador del
enfermedad de Hirschsprung (EH) y el síndrome del colon izquierdo íleo meconial no complicado mediante la instilación de contraste
pequeño (Adams y Stanton, 2014). El enema de contraste también hidrosoluble alrededor y en el interior del meconio anormal, lo que
demostrará la permeabilidad del colon distal, lo que es importante lo ablanda y estimula su salida por el recto, con el consiguiente alivio
para la toma de decisiones intraoperatorias. de la obstrucción (Carlyle et al., 2012). Se han recomendado solucio-
El tratamiento inicial es la descompresión gástrica y la reposición nes hiperosmolares para arrastrar líquido hacia la luz intestinal, pero
de líquidos, seguidas de la operación, que, además de reparar el intes- conllevan el riesgo de desplazamientos potencialmente peligrosos de
tino, suele implicar la resección o el ahusamiento de grandes segmentos líquido intravascular. Asimismo, se ha recurrido a la administración
dilatados que son proclives a presentar dismotilidad grave. de N-acetilcisteína en la luz intestinal proximal o distal para ayudar a
Los resultados tempranos y a largo plazo de la reparación quirúrgica romper el meconio anormal y aliviar la obstrucción. El fracaso de las
de las atresias yeyunoileal y colónica son buenos. Existe un pequeño medidas conservadoras o la presencia de un íleo meconial complicado
riesgo de infección del sitio quirúrgico, y de filtración y estenosis de la son indicaciones de intervención quirúrgica.

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CAPÍTULO 71 Anomalías estructurales del tubo digestivo 1051

El tratamiento quirúrgico del íleo meconial no complicado consiste Las duplicaciones colónicas y rectales son raras, pero pueden causar
en laparotomía, abertura del intestino delgado proximal a la obstruc- obstrucción o vólvulo (Holcomb et al., 1989).
ción e irrigación con solución salina o N-acetilcisteína hasta eliminar El diagnóstico se realiza mediante ecografía y/o estudios de con-
el meconio obstructivo. Por lo general, se puede practicar el cierre traste que pueden mostrar un defecto de llenado. La ecografía se puede
primario del intestino, aunque a veces se colocan tubos para permitir utilizar en el período prenatal, lo que permite un tratamiento posnatal
irrigación adicional tras la cirugía. Por definición, el íleo meconial temprano (Laje et al., 2010). Se puede recurrir a la TC y la RM para
complicado exige una operación. Esta consiste en la resección del intes- definir la localización y el tamaño de la duplicación. El tratamiento sue-
tino afectado, la reparación de las atresias y, en general, anastomosis le ser la escisión quirúrgica; sin embargo, se ha descrito escisión endos-
primaria, aunque a veces se utilizan estomas para derivación transitoria. cópica en caso de duplicaciones proximales (Meier y Mellinger, 2012).
Por lo general, la evolución digestiva a largo plazo después del
tratamiento conservador o quirúrgico del íleo meconial no complicado
es bastante buena desde una perspectiva quirúrgica, aunque la insufi- Invaginación
ciencia pancreática requiere tratamiento médico de por vida. La invaginación es la penetración de una porción de intestino en otra,
y suele afectar al íleon distal y al colon ascendente. Por lo general, se
Quistes de duplicación entérica observa en recién nacidos mayores y en niños pequeños, pero también
Los quistes de duplicación entérica, a menudo denominados sim- es una causa rara de obstrucción intestinal en neonatos (Aboagye
plemente duplicaciones, pueden localizarse en cualquier lugar del tubo et al., 2014). Los síntomas de presentación de intolerancia alimentaria,
digestivo desde la boca hasta el ano (Gross et al., 1952; Holcomb vómitos, distensión abdominal y sangre en materia fecal son ines-
et al., 1989). Las duplicaciones pueden ser quísticas o tubulares, y están pecíficos, y pueden retrasar el diagnóstico y el tratamiento (Taskinlar
formadas por un revestimiento interno de epitelio digestivo y una capa et al., 2014). Se puede llegar al diagnóstico por ecografía o enema de
externa de músculo liso. La mayoría de las duplicaciones tienen lugar en contraste, o en el momento de la cirugía por obstrucción intestinal.
el intestino delgado, en especial el íleon distal, y a menudo se encuen- El tratamiento consiste en la reducción quirúrgica, con resección si
tran del lado mesentérico de la luz (fig. 71.14) (Narlawar et al., 2002). es necesaria.
La prevalencia global de duplicaciones no está bien definida, pero
es probable que la incidencia acumulada para todas las localizaciones
y todos los tipos sea de alrededor de 1 de cada 4.000-5.000, aunque Enfermedades del colon
cualquier localización o tipo específico de duplicación es bastante
rara. Existen diversas teorías para explicar la etiología embriológica de Apendicitis neonatal
las duplicaciones entéricas; sin embargo, se suele aceptar la teoría del
notocordio dividido (Sharma et al., 2009). La apendicitis neonatal es rara (Karaman et al., 2003). Algunos casos
La presentación clínica de una duplicación entérica depende de tres se asocian con EH. Por lo general, la presentación clínica consiste
factores: 1) su localización; 2) su efecto compresivo relativo, y 3) las en vómitos, distensión y dolor a la palpación abdominal, y fiebre
complicaciones relacionadas con secreciones del epitelio afectado (Raveenthiran, 2015). Es raro llegar al diagnóstico antes de practicar
(Azzie y Beasley, 2003). En otros apartados se describen los quistes una operación por peritonitis secundaria a perforación apendicular. En
de duplicación esofágica y gástrica, de manera que este apartado se la literatura médica se ha debatido una posible asociación con la EH,
centrará en las duplicaciones del intestino delgado y grueso. Solo y corresponde considerar una biopsia rectal por aspiración en recién
alrededor del 4-5% de las duplicaciones entéricas se localizan en el nacidos que presentan apendicitis.
duodeno (Macpherson, 1993; Lopez-Fernandez et al., 2013). Las
duplicaciones duodenales pueden estar conectadas con los conductos Enfermedad de Hirschsprung
biliares o pancreáticos. Las presentaciones clínicas son masas asin-
tomáticas, obstrucción digestiva y pancreatitis (Chen et al., 2010; La EH se caracteriza por ausencia de las células ganglionares parasim-
Lopez-Fernandez et al., 2013). Las duplicaciones yeyunales e ileales páticas intrínsecas de los plexos submucoso y mientérico, causada por
a menudo se manifiestan por obstrucción intestinal o invaginación. detención prematura de la migración craneocaudal normal de las células
de la cresta neural hacia el interior de la pared intestinal. La mayoría de
las veces, la EH afecta al recto y el colon sigmoideo; sin embargo, hasta
el 10% de los casos afectan a todo el colon (es decir, aganglionosis
colónica total). Rara vez afecta al intestino delgado (Kessmann, 2006;
Amiel et al., 2008). El colon agangliónico presenta alteración de la
motilidad y causa una obstrucción intestinal distal funcional de variable
gravedad. Esta puede manifestarse por obstrucción intestinal en el
recién nacido o por estreñimiento en recién nacidos mayores y niños.
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La EH se puede complicar por enterocolitis, que puede causar un


cuadro clínico de distensión abdominal marcada, dolor, dolor a la
palpación y manifestaciones sistémicas de sepsis. Se desconoce la causa
de la enterocolitis; sin embargo, esta puede aparecer antes o después de
la corrección quirúrgica de la EH.
Se estima que la prevalencia de la EH es de 1 de cada 5.000 nacidos
vivos (Amiel et al., 2008). Los hombres suelen estar más afectados que
las mujeres (4:1), y los asiáticos, los afroamericanos y los caucásicos
(2,8, 2,1 y 1,5 de cada 10.000 nacidos vivos, respectivamente) se ven
afectados con mayor frecuencia que los hispanos (1 de cada 10.000
nacidos vivos) (Amiel et al., 2008). La EH puede ser un problema ais-
lado; sin embargo, casi en el 20% de los casos se detectan anomalías
cromosómicas. Si bien se han implicado alteraciones de muchos genes
• Figura 71.14  Fotografía intraoperatoria de un quiste en la EH, no se han definido alteraciones genéticas en la mayoría de
de duplicación. los pacientes (Amiel et al., 2008).

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1052 PA RT E XI V Aparato digestivo

Cuando la EH se presenta en un recién nacido, el cuadro clínico meconial presentan eliminación diferida de meconio, distensión
suele corresponder a una obstrucción intestinal distal, con intolerancia abdominal y, quizá, vómitos (Cuenca et al., 2012). El tapón meconial
alimentaria, vómitos y distensión abdominal. Se puede sospechar el se diagnostica por el reconocimiento de la eliminación de meconio
diagnóstico cuando se elimina meconio después de las 24 h de vida. anómalo tras la estimulación rectal, la irrigación o el enema de con-
La radiografía de abdomen puede mostrar asas intestinales dilatadas y traste (fig. 71.16). Por lo general, el enema de contraste resuelve la obs-
escaso gas rectal. El enema de contraste revelará recto e intestino distal trucción, y pocos recién nacidos necesitan una intervención quirúrgica,
de calibre normal que se extiende por cierta distancia en dirección aunque pueden requerir evaluación adicional para investigar FQ o EH.
proximal y, luego, una «zona de transición» hasta el intestino dilatado
más proximal (fig. 71.15). El diagnóstico se confirma mediante biopsias
rectales, que muestran troncos nerviosos hipertróficos y ausencia de Trastornos anorrectales
células ganglionares (Kessmann, 2006; Amiel et al., 2008). Las malformaciones anorrectales (MAR) son un espectro de anomalías
El tratamiento quirúrgico de la EH consiste en escisión del colon congénitas en las que el ano está ausente o tiene una localización
distal anormalmente inervado y un «descenso» del intestino proximal anómala fuera de los músculos esfinterianos normales. A menudo,
con inervación normal, que se conecta con el recto distal preservado, las MAR se describen como «altas» o «bajas», lo que depende de si el
justo por encima del conducto anal, y se han descrito varias técnicas recto termina por encima o por debajo del componente del músculo
diferentes. Las intervenciones se pueden practicar en múltiples tiempos, elevador del complejo muscular esfinteriano anal. En esta clasificación
con una colostomía inicial y, luego, un descenso definitivo ulterior, o de altas o bajas, las lesiones que tienen fístulas hacia la vía urinaria o
se puede llevar a cabo la operación en un solo tiempo. Además, las la vagina son altas.
intervenciones se pueden llevar a cabo por vía laparoscópica, a cielo No se conoce por completo la embriología de las MAR, porque estas
abierto, totalmente por abordaje transanal o con alguna combinación se deben a una alteración de la compleja coordinación del intestino dis-
de abordajes. tal (intestino distal), las estructuras genitourinarias distales (en especial,
Las posibles complicaciones quirúrgicas son filtración o estenosis de vejiga, uretra y vagina), y los componentes musculoesqueléticos de la
la anastomosis, o daño de estructuras cercanas, incluidos componentes pelvis y el perineo (Kluth, 2010).
del esfínter anal. La evolución funcional de un paciente dado no se La prevalencia de las MAR es de alrededor de 1 de cada 5.000 nacidos
conocerá durante años, hasta que el niño alcance la edad de control de vivos. Las anomalías asociadas son frecuentes. Las más notables son las
esfínteres, pero, en general, es esperable que la mayoría de los pacientes de la asociación VACTERL. En una gran revisión multicéntrica, de los
logren continencia social y tengan una buena calidad de vida (Lane 4.962 niños sometidos a reparación de MAR, el 31% presentaban ano-
et al., 2016). Es importante recordar que la cirugía no cura la EH (cada malías vertebrales; el 40%, cardiopatía congénita; el 7%, atresia esofágica
operación deja detrás un esfínter anal anormalmente inervado), pero (AE)/FTE; el 34%, anomalías genitourinarias, y el 7%, defectos de las
una operación bien practicada puede proporcionar excelentes resultados extremidades. El 36% tenían tres o más anomalías definidas y cumplían
paliativos, en especial con seguimiento a largo plazo y tratamiento a los criterios para el diagnóstico formal de VACTERL (Lautz et al., 2015).
cargo de especialistas. Las MAR también se asocian con malrotación (Chesley et al., 2015), EH
(Hofmann y Puri, 2013) y trisomía 21.
Tapón meconial El diagnóstico prenatal de MAR es infrecuente. Después del naci-
miento, el diagnóstico de una MAR depende de una buena exploración
El síndrome del tapón meconial es la obstrucción intraluminal del colon física. Las pruebas de imagen no son necesarias; sin embargo, pueden
por meconio anormal. Esto contrasta con la obstrucción intraluminal
del íleon terminal en el íleo meconial. Los recién nacidos con tapón

• Figura 71.15  Enema de contraste en la enfermedad de Hirschsprung. • Figura 71.16  Enema de contraste de tapón meconial.

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CAPÍTULO 71 Anomalías estructurales del tubo digestivo 1053

ayudar a determinar el nivel del defecto y la existencia de una fístula. con anomalías anatómicas menos graves también requieren tratamiento
Por lo general, el ano normal se localiza en un punto intermedio entre médico (intestinal) para obtener un buen resultado. Además de la
el cóccix y el escroto o el orificio vaginal, y las fístulas asociadas con incontinencia y el estreñimiento, otras complicaciones a largo plazo
MAR son anteriores a la posición normal del ano, con casos más graves pueden consistir en incontinencia urinaria, disfunción eyaculatoria y
que ingresan en la uretra, la vejiga o la vagina (que no son visibles en la disfunción eréctil (Rigueros Springford et al., 2016).
piel). La ausencia de ano es bastante simple de determinar; en cambio,
el diagnóstico se puede retrasar cuando hay una fístula en el perineo,
en especial cuando los detalles de su posición son enmascarados por Lecturas recomendadas
meconio o heces.
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El tratamiento de los pacientes con MAR comprende medidas de Dev. Elsevier Ireland Ltd 2014;90(12):921-925. doi: 10.1016/j.earl-
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asociadas y alivio de la obstrucción. Se requiere descompresión gástrica Amiel J, Sproat-Emison E, Garcia-Barcelo M, et al. Hirschsprung disease,
y líquidos intravenosos hasta que se resuelve la obstrucción intestinal y associated syndromes and genetics: a review. J Med Genet 2008;45(1):
es factible la alimentación enteral. La evaluación de anomalías asociadas 1-14. doi: 10.1136/jmg.2007.053959.
consiste en una exploración física detallada y pruebas de imagen, como Azzie G, Beasley S. Diagnosis and treatment of foregut duplications.
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Por lo general, el alivio de la obstrucción exige una operación, malformations. Pediatr Surg Int 2013;29(9):899-904. doi: 10.1007/
aunque algunas MAR tienen una fístula de baja resistencia que permite s00383-013-3355-z.
la eliminación espontánea de meconio y heces. Las MAR en las que el Carlyle BE, Borowitz DS, Glick PL. A review of pathophysiology and
extremo del recto está cerca de la parte media del complejo esfinteriano management of fetuses and neonates with meconium ileus for the
anal en el perineo (en general, menos de 1 cm) a menudo se pueden pediatric surgeon. J Pediatr Surg. Elsevier Inc 2012;47(4):772-781.
corregir con una única cirugía neonatal conocida como anoplastia. Las doi: 10.1016/j.jpedsurg.2012.02.019.
MAR en las que el recto termina más allá del complejo esfinteriano anal Choudhry MS, Rahman N, Boyd P, Lakhoo K. Duodenal atresia: Asso-
suelen requerir un abordaje en distintos tiempos, con una colostomía ciated anomalies, prenatal diagnosis and outcome. Pediatr Surg Int
inicial, y una anoplastia y cierre de la colostomía ulteriores. En general, 2009;25(8):727-730. doi: 10.1007/s00383-009-2406-y.
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MAR es colocar el recto en el medio del complejo esfinteriano anal. La Association outcomes and evidence based practice committee systema-
anorrectoplastia sagital posterior, descrita por primera vez en 1982 por tic review. J Pediatr Surg. Elsevier Inc 2015;50(10):1783-1790. doi:
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con mayor frecuencia. Pandya S, Heiss K. Pyloric stenosis in pediatric surgery: an evidence-based
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anatómica, y con la presencia y gravedad de anomalías asociadas. Al suc.2012.03.006 vii–viii.
igual que en la EH, la cirugía por MAR es más paliativa que curativa, Prosser JD, Myer IM. Branchial cleft anomalies and thymic cysts. Otolaryn­
y lleva años valorar con exactitud la evolución funcional. Un signo de gol Clin North Am. Elsevier Inc 2015;48(1):1-14. doi: 10.1016/j.
buen pronóstico es la presencia de un sacro normal, presumiblemente otc.2014.09.002.
porque un sacro anómalo suele implicar inervación pélvica anormal. Un Ryan DP, Doody DP. Management of congenital tracheal anomalies and
niño con una MAR baja y sacro normal tiene una buena probabilidad laryngotracheoesophageal clefts. Semin Pediatr Surg 2014;23(5):257-
de continencia voluntaria; en cambio, en un niño con una MAR alta y 260. doi: 10.1053/j.sempedsurg.2014.09.005.
un sacro anormal, la continencia voluntaria es mucho menos probable. Spitz L. Oesophageal atresia. Orphanet J Rare Dis 2007;2:24.
Sin embargo, muchos niños con anomalías anatómicas relativamente
graves pueden lograr continencia social después de una buena opera- La bibliografía completa utilizada en este capítulo puede consultarse online
ción y tratamiento médico (intestinal) a largo plazo, y muchos niños en www.expertconsult.com
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Recién nacido
Anomalía
Trastorno congénito
Tratamiento

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72
Inmunidad innata y mucosa del tubo
digestivo en desarrollo
STEVEN J. McELROY, MARK R. FREY, BENJAMIN A. TORRES
Y AKHIL MAHESHWARI

PUNTOS CLAVE regulación del equilibrio entre la tolerancia inmunitaria y la respuesta


inflamatoria dan como resultado una reacción inadecuada del hués-
• El desarrollo del tubo digestivo humano es un proceso complejo que ped a la exposición antigénica. Esto aumenta la vulnerabilidad del
comienza en la embriogenia temprana y continúa hasta la introducción huésped frente a enfermedades inflamatorias crónicas no reguladas e
de alimentos sólidos, entre el final de la lactancia y la primera infancia. inmunidad desregulada.
• Una barrera eficaz requiere la presencia de los sistemas inmunitarios
innato y adaptativo.
• El desarrollo, la maduración y el mantenimiento de las complejas
Desarrollo del tubo digestivo
funciones del tubo digestivo requieren la interacción con los riesgos El desarrollo del tubo digestivo se extiende desde la embriogenia tem-
del entorno, como el líquido amniótico y las bacterias comensales
prana hasta la introducción de alimentos sólidos desde el final de la
intestinales.
lactancia hasta la primera infancia. Este período de ontogenia puede
• El bebé prematuro posee y experimenta múltiples perturbaciones para
el desarrollo intestinal e inmunitario posnatal que probablemente actúen
separarse en cinco fases de desarrollo (tabla 72.1 y fig. 72.1) (Wagner
de manera conjunta para aumentar la vulnerabilidad del prematuro a la et al., 2008). La organogenia embrionaria y la formación del intes-
enterocolitis necrosante. tino primitivo se producen en la fase I. En la fase II, el tubo diges-
tivo se convierte en una estructura tubular, el desarrollo anatómico
(alargamiento y formación de estructuras vellosas) continúa y se inicia
el papel funcional del epitelio intestinal. La fase III se caracteriza
por crecimiento lineal rápido, desarrollo anatómico continuo de la

E
l tubo digestivo humano completamente desarrollado alcan- arquitectura de las vellosidades y diferenciación celular en curso con
za una longitud total aproximada de 6,5-9 m (Hounnou la maduración de las funciones fisiológicas celulares específicas. La
et al., 2002). Posee una superficie mucosa de 300-400 m2 fase IV comienza inmediatamente después del nacimiento. En ese
(DeWitt y Kudsk, 1999; Helander y Fandriks, 2014), equivalente al momento, el desarrollo estructural e inmunitario posnatal está media-
tamaño de una pista de tenis individual. Dentro del tubo digestivo do por la interacción entre el huésped y las exposiciones exógenas y
coexiste una variada comunidad microbiana, con una abundancia ambientales. Esta fase de desarrollo está dirigida principalmente por el
de microorganismos que excede con creces la cantidad de células de establecimiento del microbioma intestinal y la respuesta a los factores
todo el cuerpo humano (Bjorksten, 2004). Durante el desarrollo, alimentarios presentes en la leche humana y/o maternizada. El des-
la interacción entre este microbioma y el epitelio de la mucosa tete de la lactancia materna o artificial y la introducción de alimentos
intestinal es un componente esencial en la educación de las res- sólidos indican el comienzo de la fase V. Durante este período se
puestas inmunitaria e inflamatoria del huésped contra antígenos refinan el desarrollo estructural de los intestinos y la maduración de
extraños. la inmunidad de la mucosa (Cummins y Thompson, 2002; Cummins
El desarrollo anatómico y funcional del tubo digestivo comienza et al., 2006).
durante la embriogenia temprana y continúa hasta bien entrada la
infancia. Además de las capacidades digestivas y de absorción esen- Desarrollo fetal
ciales, proporcionadas por este sistema de órganos, el tubo digestivo
también se convertirá en la mayor barrera defensiva y el mayor órgano Las fases I-III del desarrollo intestinal se producen en el útero. Al final
inmunitario del cuerpo. Sus complejas estructuras anatómicas y fun- del primer trimestre han hecho su aparición muchos de los elementos
ciones dinámicas protegen al huésped de una avalancha de antígenos celulares epiteliales, incluidas las células especializadas (tabla 72.2).
ambientales y alimentarios, comenzando inmediatamente después de Durante este mismo período se lleva a cabo el desarrollo de las estruc-
nacer. Estas múltiples capas de defensas intestinales están elegante- turas anatómicas necesarias para la función óptima del tubo digestivo,
mente coordinadas y estrechamente reguladas, ya que las respuestas incluida la formación de criptas y vellosidades. Los elementos micros-
inmunitarias e inflamatorias deben estar en un equilibrio constante cópicos clave, como las uniones estrechas (UE), también aparecen en
entre un ataque agresivo inflamatorio contra patógenos potenciales esta fase. También en el primer y en el segundo trimestres aparecen
y el desencadenamiento de una respuesta tolerante a los antígenos células especializadas, como las caliciformes, las de Paneth, las entero­
ambientales que facilitan el desarrollo. El desarrollo anómalo y la endocrinas y las células de los micropliegues (M) (Henning, 1985;

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CAPÍTULO 72 Inmunidad innata y mucosa del tubo digestivo en desarrollo 1055

TABLA
72.1  Etapas del desarrollo intestinal

Etapa Período de tiempo Desarrollo


Etapa I: embrionaria 0-5 semanas de gestación Fase embrionaria de la organogenia
Formas intestinales primitivas
Sitios de entrada y salida de la formación del tubo digestivo
Etapa II: desarrollo 6-20 semanas Comienza la deglución
tubular Desarrollo de vellosidades (8-12 semanas) y criptas (12-19 semanas)
Se desarrollan las células epiteliales especializadas; aparecen la mucina y los péptidos
antimicrobianos
Las placas de Peyer comienzan a desarrollarse
Etapa III: crecimiento 20-40 semanas Caracterizada por diferenciación activa
lineal y diferenciación Aumenta el número de células en las criptas, lo que hace que las células migren
hacia las vellosidades
Rápido aumento en la longitud intestinal (casi 10 cm/semana entre las semanas 24 y 40)
Aparición de las enzimas intestinales
Se establecen los macrófagos y las poblaciones linfocíticas de la lámina propia
Crecimiento acompañado de apoptosis selectiva; no solo se produce en las puntas
de las vellosidades, sino también en las criptas
Etapa IV: expansión Desde el nacimiento Comienza después del nacimiento con la exposición a la nutrición enteral
mucosa I hasta los 5 meses, La alimentación con leche humana produce diferenciación y desarrollo de la mucosa más
antes del destete rápidos que la lactancia artificial
El crecimiento de la mucosa continúa durante la lactancia: aumento de la profundidad de las criptas,
aumento de la anchura y el número de vellosidades, y aparición de pliegues submucosos
El tubo digestivo se enfrenta a la mayor carga antigénica del cuerpo en forma de proteínas
de la dieta, organismos comensales y patógenos: mayor carga antigénica con lactancia artificial
El sistema inmunitario de la mucosa intestinal desarrolla una capacidad extraordinaria
para distinguir entre microorganismos patógenos extraños, y proteínas nutrientes seguras
y organismos comensales: el proceso facilitado por la leche humana conduce a una tolerancia
oral efectiva; el éxito de las interacciones locales entre la inmunidad local innata y la específica
se convierte en el requisito previo para una salud que dure toda la vida
Etapa V: expansión > 5-6 meses, después Se produce durante la fase de destete al final de la lactancia/primera infancia, en la transición
mucosa II del destete de las tomas lácteas a los alimentos sólidos complementarios
Segunda fase de expansión mucosa, relacionada con la hiperplasia epitelial, que hace que el
intestino tenga una función similar a la de niños mayores y adultos. Vellosidades más grandes,
lanceoladas; se aprecian las fisuras de las criptas

Modificado de Wagner CL, Taylor SN, Johnson D. Host factors in amniotic fluid and breast milk that contribute to gut maturation. Clin Rev Allerg Immunol. 2008;34:191–204.

Buisine et al., 1998; Sanderson et al., 1999; Fusunyan et al., 2001; que contribuyen al contenido de líquido amniótico, como la placenta,
Rumbo y Schiffrin, 2005; Lin et al., 2008; McElroy y Weitkamp, 2011; las membranas amnióticas y el feto. El feto no contribuye de manera
Heida et al., 2016). activa y significativa al volumen y composición de este líquido hasta
la segunda mitad del embarazo, y lo hace principalmente a través de
Papel del líquido amniótico en el desarrollo digestivo la deglución y la micción (Underwood et al., 2005).
precoz El líquido amniótico es una mezcla compleja y dinámica. Su
El desarrollo, la maduración y el mantenimiento de las complejas composición varía a lo largo de la gestación. Un análisis proteómico
funciones del tubo digestivo requieren la interacción con exposiciones a las 16-18 semanas de gestación identificó más de 500 proteínas,
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.

ambientales. Este proceso se repetirá con cada entorno cambiante y aunque esta sea probablemente una representación insuficiente (Cho
exposición antigénica. Los distintos períodos de exposiciones nuevas et al., 2007). El líquido amniótico está enriquecido con hormonas,
comprenden la vida intrauterina (feto), la introducción posnatal al citocinas y factores de crecimiento, nutrientes y otras proteínas plas-
entorno y a la leche materna o de fórmula como única fuente alimenti- máticas, moduladores de la coagulación, moduladores de la inmunidad
cia (lactancia temprana), la transición a los alimentos sólidos (lactancia e inflamación, y mediadores del crecimiento y la diferenciación celular,
tardía) y la diversificación de la dieta y, por lo tanto, de la exposición que en conjunto facilitan el desarrollo del tubo digestivo y del sistema
antigénica (primera infancia). inmunitario asociado (cuadro 72.1) (Underwood et al., 2005; Cho
Se puede decir que el líquido amniótico es la primera «exposición et al., 2007; Wagner et al., 2008).
ambiental» que contribuye al desarrollo del tubo digestivo. La cavidad A partir de las semanas 8-11 de gestación, el feto ingiere cantidades
amniótica se distingue al inicio de la embriogenia, y el líquido amnió- cada vez mayores de líquido amniótico, que pueden llegar a 500 ml/
tico se acumula rápidamente en la gestación incipiente (Underwood día en el tercer trimestre (Pritchard, 1966, Brace et al., 1994, Mann
et al., 2005). Su composición inicial es predominantemente agua y et al., 1996, Montgomery et al., 1999). Así, desde el principio del
solutos del plasma materno suministrados al feto a través de la placenta segundo trimestre hasta el parto, el tubo digestivo del feto se encuentra
que se difunden desde los tejidos fetales no queratinizados al espacio continuamente bañado en líquido amniótico. En un modelo animal
amniótico. A medida que la gestación avanza hay otras estructuras con un feto de oveja (Trahair et al., 1986; Trahair y Harding, 1992), la

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1056 PA RT E XI V Aparato digestivo

• Figura 72.1  Desarrollo digestivo. El desarrollo del tubo digestivo puede dividirse en cinco etapas, que
abarcan desde el desarrollo tubular en la embriogenia temprana hasta la lactancia tardía y la infancia
temprana. Des., desarrollo; IgA, inmunoglobulina A; MALT, tejido linfoide asociado a las mucosas.

interrupción de la ingestión de líquido amniótico por ligadura esofágica las citocinas y los factores de crecimiento que se distribuyen a la mucosa
en la mitad de la gestación causó atrofia mucosa, aplanamiento de las intestinal a través del líquido amniótico, y después del nacimiento a tra-
vellosidades y anormalidades en los enterocitos, como borramiento vés de la leche materna, el intestino fetal y neonatal expresa de manera
de las microvellosidades, acumulación de glucógeno, extrusión celular constitucional muchas de las denominadas citocinas «inflamatorias» y
y disgenesia lisosómica. De manera acorde con estos hallazgos, los factores de crecimiento a niveles mucho mayores que el intestino del
recién nacidos humanos con obstrucción intestinal congénita también adulto. Las células epiteliales intestinales expresan receptores análogos
muestran aplanamiento de las vellosidades y criptas superficiales y poco para la mayoría de estas citocinas, y la evidencia de modelos in vitro y
organizadas, distales a la zona de la obstrucción (Condino et al., 2004). animales sugiere que muchos de estos agentes pueden sobrevivir a la
En el modelo de feto de oveja descrito anteriormente, los efectos de la digestión intestinal y pueden aumentar la proliferación, migración y
ingestión interrumpida de líquido amniótico en la mucosa intestinal diferenciación de los enterocitos, prevenir la apoptosis y promover la
se revirtieron gradualmente después de la eliminación de las ligaduras restitución de la mucosa (Underwood et al., 2005; Jain et al., 2014;
esofágicas y la restitución de la ingestión de líquido amniótico, pero Good et al., 2015; MohanKumar et al., 2017).
no mediante la infusión de lactato de Ringer. Estos hallazgos indicaron
que los efectos «tróficos» del líquido amniótico eran secundarios a las
moléculas bioactivas presentes en este líquido y no se debían sim- Inmunidad mucosa del tubo digestivo
plemente al flujo de líquido a través de la luz intestinal (Trahair y en desarrollo
Harding, 1995).
Se puede detectar una gran cantidad de citocinas y factores de Poco después del parto comienza la fase IV del desarrollo del tubo
crecimiento en el líquido amniótico, como el factor de crecimiento digestivo. El recién nacido se enfrenta rápidamente con estímulos
epidérmico (EGF), el factor de crecimiento ligado a la heparina, el ambientales, microbianos y alimentarios que influyen en el desarrollo
factor de crecimiento transformador β (TGF-β) (isoformas TGF-β1 y y la maduración intestinal, y en la inmunidad mucosa. La interac-
TGF-β2), los factores de crecimiento similares a la insulina, el factor ción satisfactoria entre estas exposiciones antigénicas y las respuestas
de crecimiento de hepatocitos, el factor de crecimiento de fibroblastos, celulares del huésped es esencial para el desarrollo de la inmunidad
las quimiocinas, la eritropoyetina y el factor estimulante de colonias mucosa innata y adaptativa del tubo digestivo y, en última instancia,
de granulocitos (MohanKumar et al., 2017). Estas citocinas tienen un la protección a largo plazo del huésped. Una respuesta intestinal in­
papel complejo y multifacético en el desarrollo intestinal. Además de adecuada a los desafíos ambientales puede conducir a una regulación

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CAPÍTULO 72 Inmunidad innata y mucosa del tubo digestivo en desarrollo 1057

TABLA • CUADRO 72.1  Composición del líquido


72.2  Desarrollo fetal del tubo digestivo amniótico
Rasgo del desarrollo Edad gestacional, semanas Hormonas
Células especializadas GH
GRP
Linfocitos intraepiteliales 8 Prolactina
Epitelio absorbente intestinal 9
Factores tróficos o de crecimiento
Células caliciformes 8-10 EGF
TGF-α
Células enteroendocrinas 9-11 TGF-β1
Células de Paneth 20-24 IGF-1
Eritropoyetina
Células de los micropliegues 17 G-CSF
(células M) HGF
Factor de crecimiento del endotelio vascular
Células dendríticas 19
Componentes estructurales avanzados Nutrientes y otras proteínas
Agua
Uniones estrechas 10 Electrólitos
Arquitectura de las criptas 12 Hidratos de carbono
y las vellosidades Aminoácidos
Lípidos
Placas de Peyer 19 Albúmina
Transferrina
Elementos de la inmunidad mucosa innata
Ceruloplasmina
Mucina 8-10* α-fetoproteína
Proteína de unión a vitamina D
Defensinas 13 Apolipoproteína A-1
Lisozima 20
Moduladores de la inmunidad y la inflamación
Receptores de tipo Toll: TLR2, TLR4 20 Inmunoglobulinas
Interleucinas
*Algunos investigadores observan la presencia de mucina desde las 6-7 semanas de gestación Complemento
(Buisine MP, Devisme L, Savidge TC, et al. Mucin gene expression in human embryonic and α-defensinas
fetal intestine. Gut. 1998;43:519–524). Lactoferrina
Datos tomados de Buisine MP, Devisme L, Savidge TC, et al. Mucin gene expression in human
Lisozima
embryonic and fetal intestine. Gut. 1998;43:519–524; Fusunyan RD, Nanthakumar NN,
Baldeon ME, Walker WA. Evidence for an innate immune response in the immature human
Calprotectina
intestine: toll-like receptors on fetal enterocytes. Pediatr Res. 2001;49:589–593; Louis NA, Catelicidina
Lin PW. The intestinal immune barrier. NeoReviews. 2009;10:e180–e190; Mallow EB, Harris α1-antitripsina
A, Salzman N, et al. Human enteric defensins. Gene structure and developmental expres- α1-microglobulina
sion. J Biol Chem. 1996;271:4038–4045; Neu J, Li N. The neonatal gastrointestinal tract:
developmental anatomy, physiology, and clinical implications. NeoReviews. 2003;4:e7–e13; Crecimiento y diferenciación celular
Rumbo M, Schiffrin EJ. Ontogeny of intestinal epithelium immune functions: developmental Fibronectina
and environmental regulation. Cell Mol Life Sci. 2005;62:1288–1296, y Heida FH, Beyduz G, Periostina
Bulthuiz ML, et al. Paneth cells in the developing gut: when do they arise and when are they
Precursor de la proteína Ig-h3 inducida por el TGF-β
immune competent? Pediatr Res. 2016; 80:306–310.
Poliaminas

Moduladores de la coagulación
inmunitaria e inflamatoria alterada con consecuencias locales a nivel Antitrombina III
del tubo digestivo y sistémicas. Plasminógeno
Sin embargo, antes de comprender la influencia potencial de las
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exposiciones ambientales sobre el desarrollo intestinal y la inmunidad EGF, factor de crecimiento epidérmico; G-CSF, factor estimulante de colonias
de granulocitos; GH, hormona del crecimiento; GRP, péptido liberador de gastrina; HGF, factor de
mucosa se deben revisar las estructuras específicas que existen para crecimiento de hepatocitos; IGF-1, factor de crecimiento similar a la insulina 1; TGF-α, factor
coordinar esta interacción. Los componentes intestinales que forman de crecimiento transformante α; TGF-β1, factor de crecimiento transformante β1.
las capas de defensa y actúan como mediadores en la tolerancia oral
adecuada o en el grado de respuesta agresiva se pueden encontrar
dentro de la capa epitelial, los leucocitos en la lámina propia y en la
submucosa, y las estructuras que comprenden el tejido linfoide asociado químicas diseñadas para proporcionar una vigilancia constante y evitar la
al intestino (GALT). adherencia epitelial y la translocación de patógenos potenciales o el paso
de antígenos entre los espacios paracelulares. Dentro de esta primera línea
Barreras físicas y químicas de defensa están el entorno ácido del estómago, las numerosas enzimas
digestivas que existen a lo largo de toda la ruta digestiva y las sales biliares
Los antígenos extraños (p. ej., patógenos bacterianos, antígenos alimen- (Martin y Walker, 2008). Estos factores sirven para digerir los nutrientes
tarios o xenobióticos), cuando entran en la luz intestinal, se encuen- de la dieta, pero un beneficio adicional de este proceso digestivo es la
tran muchas capas de defensas mucosas estrechamente coordinadas. destrucción de patógenos ingeridos y otras proteínas potencialmente
La primera capa de defensa la compone una serie de barreras físicas y inmunógenas en moléculas pequeñas no inmunógenas de menos de

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1058 PA RT E XI V Aparato digestivo

10 aminoácidos de longitud, aproximadamente (Mayer, 2003). Otros Estas uniones son complejos multiproteínicos que anclan la membrana
mecanismos de esta primera defensa mucosa incluyen la producción de plasmática al citoesqueleto de actina, agrupan y organizan las proteínas
moco por las células caliciformes para inhibir la adherencia microbiana, transmembrana, regulan la permeabilidad selectiva del epitelio y pro-
la presencia de inmunoglobulina A secretora (IgAs) polimérica en el mueven la extrusión regulada de las células de la superficie intestinal
interior de la capa mucosa para unirse a antígenos luminales, el peris- (Guan et al., 2011; Marchiando et al., 2011).
taltismo para facilitar la eliminación de complejos antígeno-anticuerpo Las UE pueden contener hasta 40 proteínas transmembrana diferen-
(McElroy y Weitkamp, 2011; Johansson et al., 2013), la secreción de tes, entre las que están la ocludina, las claudinas, las moléculas de adhe-
péptidos antimicrobianos (AMP) por las células de Paneth (Clevers y sión intercelular y la tricelulina (Ikenouchi et al., 2005; Suzuki, 2013).
Bevins, 2013) y el mantenimiento de las UE para evitar el paso entre las Las UE conectan la célula al andamiaje intracelular a través de la familia
células (Groschwitz y Hogan, 2009; Marchiando et al., 2011). de proteínas de la zónula oclusiva (ZO 1-3). Además, forman poros
que contienen asas cargadas de aminoácidos que ayudan a regular el
Capa de células epiteliales y uniones estrechas tamaño, la fuerza y la especificidad de los iones que pueden atravesar
la unión (Al-Sadi et al., 2011). Las UA constan principalmente de
El epitelio intestinal es una sola capa de células compuesta por múltiples complejos cadherina-catenina (Lievin-Le Moal y Servin, 2006). Mien-
tipos de células que incluyen enterocitos, células enteroendocrinas, tras que las proteínas de las UE controlan la porosidad selectiva de la
linfocitos intraepiteliales, células caliciformes, células de Paneth, células barrera epitelial, las de las adherentes anclan las células adyacentes entre
en cepillo y células M (fig. 72.2) (Crosnier et al., 2006; Lievin-Le Moal sí a través de interacciones citoesqueléticas (Desai et al., 2013), coor-
y Servin, 2006; van der Flier y Clevers, 2009). Cada uno de estos linajes dinan los anillos de actina cortical y sirven como sitio de señalización
tiene funciones especializadas individualizadas (analizadas en mayor intracelular. Las UA también parecen actuar como un sensor de estrés
detalle más adelante); sus interacciones célula a célula junto con su mecánico, lo que permite a la membrana plasmática resistir las fuerzas
adherencia constituyen la base de la barrera de células intestinales y la de tracción a medida que las células se reorganizan durante el desarrollo
primera línea de defensa contra la penetración potencial de bacterias o la homeostasis (Grashoff et al., 2010; Yonemura et al., 2010).
y antígenos patógenos en la mucosa subyacente. La alteración de las proteínas de unión es común en las enfer-
La barrera intestinal se mantiene mediante la regulación y el man- medades inflamatorias intestinales (Clark et al., 2006, Bergmann
tenimiento de dos vías: la vía transcelular y la paracelular (Groschwitz et al., 2013, Hogberg et al., 2013). El factor de necrosis tumoral
y Hogan, 2009). La vía paracelular regula la transferencia selectiva de (TNF), el interferón γ (IFN-γ) y el óxido nítrico pueden promover
líquidos, electrólitos y péptidos pequeños a través del espacio interce- la reorganización de proteínas de unión y ocasionar alteración de
lular. Está regulada por tres tipos de uniones intercelulares: las UE, que la barrera, como pasa en la enterocolitis necrosante (EN) (Elding
unen las células epiteliales intestinales cerca de sus superficies apicales y et al., 2011; Hunter y De Plaen, 2014). Por el contrario, los mediadores
regulan la permeabilidad de la monocapa, las uniones adherentes (UA) de señalización que potencian o protegen la formación de UE, como
y los desmosomas, que anclan las células por las superficies laterales. el butirato (ácido graso de cadena corta) y la glutamina (aminoácido)

• Figura 72.2  Componentes estructurales de la barrera epitelial intestinal y del sistema inmunitario.
Capa de células epiteliales: enterocitos, células enteroendocrinas, linfocitos intraepiteliales, células
caliciformes, células de Paneth y células de los micropliegues. Tejido linfoide asociado al intestino
(GALT): sitios inductores: ganglios linfáticos mesentéricos, placas de Peyer, folículos linfoides aislados;
sitios efectores: epitelio (linfocito intraepitelial) y células plasmáticas productoras de inmunoglobulina
A de la lámina propia, linfocitos T sensibilizados, monocitos y mastocitos. CAMP, péptidos catiónicos
antimicrobianos; célula M, célula de los micropliegues; IgA, inmunoglobulinas A; VEA, vénula de
endotelio alto. (Tomado de Magalhaes JG, Tattoli I, Girardin SE. The intestinal epithelial barrier: how to
distinguish between the microbial flora and pathogens. Semin Immunol. 2007;19:106–115.)

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CAPÍTULO 72 Inmunidad innata y mucosa del tubo digestivo en desarrollo 1059

(Fasano y Shea-Donohue, 2005), tienden a proteger contra los tras- de la función normal de las células madre (Clevers, 2013; Clevers y
tornos intestinales. Bevins, 2013). Se ha relacionado con trastornos intestinales, como la
enfermedad inflamatoria intestinal y la EN (Wehkamp 2005a, 2005b;
Células inmunitarias epiteliales especializadas McElroy et al., 2011). Además de la producción de AMP, las células
de Paneth desempeñan un papel importante en la homeostasis de las
Las células caliciformes son un importante linaje celular secretor del células epiteliales (Vaishnava et al., 2011), la regulación de la microvas-
epitelio intestinal, que producen moco compuesto principalmente culatura esplácnica (Stappenbeck et al., 2002) y el mantenimiento del
de mucinas y sales inorgánicas suspendidas en agua (Lievin-Le Moal nicho de células madre (Sato et al., 2011).
y Servin, 2006; Johansson et al., 2013; Kandasamy et al., 2014). La Las células M residen en el interior de la capa de células epiteliales,
capa de moco adsorbe otras glucoproteínas, glucolípidos y albúmina. recubriendo focos organizados de tejido linfoide. Al igual que las células
Esta mezcla compleja forma una barrera funcional, pero altamente caliciformes, las células M se originan en las criptas, se diferencian y
dinámica, entre la mucosa y los microorganismos luminales (Johansson migran hacia el eje cripta-vellosidad. Sin embargo, a diferencia de sus
et al., 2013). También secuestra/estabiliza diversas moléculas bioactivas células vecinas, las células M carecen de microvellosidades en su superficie
muy importantes para el desarrollo, la homeostasis y la recuperación luminal. En su lugar, la superficie luminal presenta micropliegues, lo
intestinales (Lievin-Le Moal y Servin 2006; Lin et al., 2008; Johansson que da lugar a su nombre (Mabbott et al., 2013). Además, la mem-
y Hansson, 2011; Johansson et al., 2013). brana basolateral se invagina para formar un «bolsillo» citoplásmico que
Hasta el momento se han identificado más de 20 genes de mucina, generalmente contiene linfocitos y, de manera ocasional, macrófagos u
de los cuales MUC2 es la forma predominante, producido por las células otras células (Schmedtje, 1980; Jarry et al., 1989; Ermak et al., 1994).
caliciformes intestinales (Andrianifahanana et al., 2006; Kandasamy Las células M desempeñan un papel importante en la presentación
et al., 2014). En el intestino maduro, las células caliciformes aumentan de antígenos luminales a las células del sistema inmunitario y se han
la producción de moco mediante la exposición a citocinas inflamatorias, podido observar en el feto humano desde las 17 semanas de gestación
como el TNF, o de productos bacterianos como los lipopolisacáridos, (Jakobovits et al., 1972; Bockman y Cooper, 1975; Moxey y Trier, 1978;
la flagelina A y los ácidos lipoteicoicos (Dharmani et al., 2009). Sin Braegger et al., 1992; Daya, 1993). La población de células M se expande
embargo, en el intestino en desarrollo, muchos de los mismos mediadores rápidamente en la primera semana del período posnatal en modelos
inflamatorios tienen un efecto inhibidor paradójico sobre la producción animales, pero estos cambios no se han estudiado en neonatos humanos,
de moco (Levine et al., 1995; McElroy et al., 2011). De acuerdo con por lo que su papel funcional en el ser humano no está bien definido
estos datos, las muestras tisulares resecadas quirúrgicamente de EN en hu­ (Torres-Medina, 1981; Roy y Ruiz, 1986; Wolf et al., 1987).
manos y en modelos animales con lesión similar a la EN también mues-
tran menor cantidad de células caliciformes positivas a mucina y concen- Monocitos, macrófagos, células dendríticas y mastocitos
traciones más bajas de mucina 2 (Clark et al., 2006; Khailova et al., 2009. Los macrófagos aparecen en la submucosa y en la lámina propia a las
Martin et al., 2011; McElroy et al., 2011). 10 semanas de gestación, y se puede ver una población de tamaño
Además de las mucinas, las células caliciformes intestinales también considerable hacia la mitad de la gestación (Braegger et al., 1992;
producen factor trefoil (TFF) intestinal (específicamente TFF3) y la Maheshwari et al., 2009, 2011) que se desarrolla tanto por la prolife-
molécula similar a la resistina β (RELM-β) (Dharmani et al., 2009), que ración de los macrófagos residentes como a través del reclutamiento de
pueden aumentar y estabilizar la capa de moco (Suemori et al., 1991; monocitos circulantes (Bain et al., 2014). La expansión de la población
Krimi et al., 2008). En el intestino adulto, las células caliciformes son de macrófagos en el intestino contrasta con el pulmón, donde las pobla-
capaces de presentar antígenos de bajo peso molecular a las células den- ciones de macrófagos alveolares son pequeñas en el feto y se expanden
dríticas (DC) en la lámina propia (McDole et al., 2012). Si bien la mayoritariamente después del nacimiento (Alenghat y Esterly, 1984;
importancia fisiológica y la regulación del desarrollo de esta actividad aún Jacobs et al., 1985; Kurland et al., 1988).
no se entienden del todo, está claro que estas células pueden tener una En el intestino, los macrófagos residentes son las primeras células del
función más compleja en el tubo digestivo de lo que se creía previamente. sistema inmunitario innato en encontrarse a las bacterias que rompen el
Las células de Paneth están ubicadas en las bases de las criptas y, a dife- epitelio y acceden a la lámina propia (Schenk y Mueller 2008; Farache
rencia de las células caliciformes, no migran hacia el eje cripta-vellosidad, et al., 2013). En el intestino adulto, los macrófagos muestran una
sino que permanecen en la base de las criptas (Clevers, 2013; Clevers dicotomía funcional única, por la que estas células exhiben ávidas acti-
y Bevins, 2013). Estas células producen AMP de manera constitutiva vidades fagocíticas y bactericidas, pero no muestran signos de activación
y en respuesta a exposiciones a patógenos entéricos (Ouellette, 2010; ni producen citocinas al exponerse a productos bacterianos (Smythies
Salzman, 2010; Bevins y Salzman, 2011). Su posición en la base de la et al., 2005; Schenk y Mueller, 2008). Esta «anergia inflamatoria» de
cripta, cerca de las células madre, les permite proteger a estas células los macrófagos intestinales es un resultado de la diferenciación mediada
no diferenciadas de los microorganismos y así preservar la capacidad por el TGF-β y sirve para minimizar la inflamación en la mucosa intes-
regenerativa del epitelio intestinal. Los AMP derivados de las células de tinal, a pesar de la estrecha proximidad física a las bacterias luminales.
Paneth actualmente se clasifican en dos familias principales: las defensinas A diferencia del intestino adulto, el intestino fetal/prematuro es defi-
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(α-defensinas y β-defensinas) y las catelicidinas. La actividad antimi- ciente en cuanto al desarrollo en la actividad biológica del TGF-β
crobiana de estos AMP deriva de la incorporación a la membrana celular (Maheshwari et al., 2011; Namachivayam et al., 2013). Por consi-
y de la formación de poros, lo que provoca la afluencia de solutos y guiente, los macrófagos recién reclutados para el intestino en desarrollo
agua (Ouellette et al., 1994; Salzman, 2010; Bevins y Salzman, 2011). tienden a conservar sus características inflamatorias y la capacidad de
Las α-defensinas (también conocidas como criptidinas) son activadas producir una respuesta inflamatoria exagerada durante la translocación
por la metaloproteasa de la matriz de tipo 7 (MMP-7) para adquirir bacteriana y en la EN (Maheshwari et al., 2011).
actividad microbicida (Schenk y Mueller, 2008). Entre otros compues- Las DC son células presentadoras de antígeno (APC) que se cree que
tos bactericidas presentes en las células de Paneth están la fosfolipasa actúan como un sistema de centinela intestinal al examinar constante-
secretora A2, la proteína regeneradora 3γ derivada de islotes (RegIII-γ), mente la luz del intestino. En el intestino adulto, las DC usan sus largas
la MMP-7, la interleucina 1 (IL-1), el TNF-α, la IL-1β y la lisozima proyecciones para detectar señales inflamatorias y capturar antígenos
(Salzman et al., 2007; Ouellette, 2010; Bevins y Salzman, 2011; Under- luminales, y posteriormente migrar a órganos linfoides secundarios para
wood, 2012; Clevers y Bevins, 2013; McElroy et al., 2013). interactuar con los linfocitos T (Johansson-Lindbom et al., 2005; Jaens-
La alteración de las células de Paneth puede tener consecuencias son et al., 2008; Bogunovic et al., 2009; Schulz et al., 2009; Farache
significativas para el intestino, como la disminución del aclaramien- et al., 2013). Sin embargo, existen muy pocos datos sobre las DC intes-
to de patógenos bacterianos (Sherman et al., 2005) o la alteración tinales fetales/neonatales. Se pueden detectar antígenos leucocíticos

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1060 PA RT E XI V Aparato digestivo

humanos DR (HLA-DR+) parecidos a las DC tanto en la lámina propia nacimiento impulsa la expansión de los subgrupos IgM+ (Fagarasan
como en las placas de Peyer a partir de la semana 14 de gestación, pero et al., 2001) e IgA+ (Crabbe et al., 1970a, 1970b; Shroff et al., 1995).
estas células pueden tener cierto solapamiento con los macrófagos de
la lámina propia (Spencer et al., 1987; MacDonald, 1996).
Los mastocitos aparecen en el intestino generalmente después de Muestreo y presentación de antígenos
la colonización microbiana posnatal. Estas células contienen gran- Los antígenos bacterianos, alimentarios y/o xenobióticos presentes en la
des reservas de citocinas y quimiocinas preformadas, y sirven como luz intestinal se internalizan y procesan por varias vías que involucran
centinelas que informan sobre la exposición a bacterias o productos células M, DC intraepiteliales y enterocitos, que pueden capturar antí-
bacterianos en la mucosa (McILwain et al., 2010). Los mastocitos genos por pinocitosis inespecífica, endocitosis mediada por receptor, o
también se unen a las IgE a través de los receptores ε de la región por medio de receptores de tipo Toll (TLR) o por reconocimiento de
del fragmento cristalizable (Fc), y liberan histamina y serotonina. receptores con dominios de oligomerización de unión a nucleótidos
Estos mediadores regulan al alza la producción de mucina, aumentan (NOD) (fig. 72.3).
la permeabilidad intestinal, contraen las células del músculo liso y
promueven el reclutamiento de leucocitos mediante la liberación de Vías de las células de los micropliegues y dendríticas
quimiocinas almacenadas.
Las células M residen dentro de la capa epitelial de una sola célula y
están posicionadas de manera única sobre secciones organizadas de
Tejido linfoide asociado al intestino e inmunidad tejido linfoide y placas de Peyer. Las células M muestrean antígenos,
los transportan activamente al interior de la submucosa y los presen-
adaptativa tan a las células efectoras, como las DC y los linfocitos. Este proceso
El GALT tiene dos componentes principales: los sitios inductores y los conduce a la diferenciación de los linfocitos T y a la activación de los
efectores (v. fig. 72.2) (Magalhaes et al., 2007). Los sitios inductores linfocitos B. Se sabe que en el intestino adulto las DC intercalan sus
representan las estructuras donde se inician las respuestas inmunitarias, extensiones dendríticas a través de las uniones paracelulares para mues-
es decir, la captación y el procesamiento de los antígenos (Neurath trear antígenos luminales y luego migran a las estructuras linfoides para
et al., 2002; Magalhaes et al., 2007; Bogunovic et al., 2009). Es dentro participar en la activación de los linfocitos T y B. Se pueden encontrar
de estas estructuras donde las APC activan los linfocitos T CD4, los vías similares en el intestino neonatal.
linfocitos T CD8 y los linfocitos B. Los sitios inductores constan de
nódulos linfáticos mesentéricos, placas de Peyer, folículos linfoides Endocitosis y procesamiento mediados por receptores:
aislados (ILF) y criptoplacas, que son agrupaciones de linfocitos inma- receptores de tipo Toll y con dominios de oligomerización
duros que dan lugar a ILF. de unión a nucleótidos
En la semana 11 de gestación se pueden identificar en el íleon Los receptores de reconocimiento de patrones (PRR), como los TLR, los
fetal rudimentos de las placas de Peyer que son agregados de células receptores de péptidos formilados y los receptores NOD, reconocen y
linfoides HLA-DR+ CD4+ (Spencer et al., 1985; Finke et al., 2002). se unen a regiones específicas altamente conservadas de los patógenos o
Los linfocitos T y B aparecen a las 18-20 semanas, y se pueden identi- motivos moleculares, comúnmente denominados patrones moleculares
ficar zonas distintas de linfocitos B y linfocitos T. Las placas de Peyer vinculados a patógenos (PAMP) o patrones moleculares vinculados a
pueden ser detectadas macroscópicamente a las 24 semanas (Spencer microorganismos. La conservación de estos motivos moleculares entre
et al., 1985; MacDonald y Spencer, 1994; Husband y Gleeson, 1996). los microorganismos de la misma clase permite que la célula de la mucosa
Los centros germinales se desarrollan después del nacimiento (Husband reconozca a la mayoría de los microorganismos mediante el uso de un
y Gleeson, 1996). selecto grupo de PRR. Entre los grupos generales de PAMP están los áci-
Las células efectoras son las células inmunitarias que, una vez activa- dos nucleicos (p. ej., ácido ribonucleico en los microorganismos víricos),
das, modulan la señalización inmunitaria e inflamatoria corriente abajo. los polipéptidos (p. ej., flagelina) y las macromoléculas (p. ej., lipopolisa-
Los sitios efectores son las ubicaciones donde se encuentran estas células cáridos de la pared celular bacteriana de microorganismos gramnegativos
efectoras; entre ellos están el epitelio y la lámina propia. La célula efec- y peptidoglucanos en la pared celular bacteriana de microorganismos
tora primaria dentro del epitelio es el linfocito intraepitelial (LIE). Los grampositivos) (Louis y Lin, 2009; Tanner et al., 2015).
LIE son linfocitos T situados a lo largo de la cara basolateral de la capa Los TLR son proteínas transmembrana que se expresan en las super-
de células epiteliales. En el intestino fetal existe una población reducida ficies luminal o basolateral de las células de defensa del huésped. El
de LIE, que se desarrolla principalmente después del nacimiento (Cerf- componente extracelular del dominio de reconocimiento de repeticio-
Bensussan y Guy-Grand, 1991; MacDonald y Spencer, 1994). Por el nes ricas en leucina se une al PAMP específico, mientras que el dominio
contrario, los linfocitos de la lámina propia alcanzan los niveles del final intracelular similar al del receptor de la IL-1 activa las proteínas cito-
de la gestación en torno a las semanas 19-27 (Spencer et al., 1986). plásmicas responsables de la señalización corriente abajo (Macdonald y
Desde el punto de vista funcional, los linfocitos T intestinales pueden Monteleone, 2005; Gribar et al., 2008; Louis y Lin, 2009). La familia
tardar varios años en madurar; el repertorio de la cadena β del receptor de los TLR en los mamíferos está formada por las proteínas TLR1-13.
de linfocitos T muestra un patrón policlonal durante el período fetal y Los TLR1-11 están conservados entre los humanos y los ratones, pero
el primer año de vida, y se somete a una restricción gradual del patrón TLR10 no es funcional en los ratones (Joosten et al., 2016). El intestino
oligoclonal típico de los adultos (Williams et al., 2004). Aproximada- humano expresa los TLR1-9 de manera específica (Yu y Gao, 2015).
mente, entre el 10 y el 30% de los LIE pueden expresar el receptor de Cada TLR reconoce y se une a PAMP específicos (algunos de manera
los linfocitos T γδ (Spencer et al., 1985). Estos linfocitos T γδ pueden exclusiva a un TLR en particular), y hay algunos que se superponen con
desempeñar un papel en la función de los enterocitos y en la inmunidad otros TLR. TLR4 es expresado preferentemente por los enterocitos den-
antimicrobiana, y pueden mostrar actividad citotóxica (Boismenu y tro de las criptas, mientras que TLR2, TLR3 y TLR5 son expresados
Havran, 1994; Komano et al., 1995; Kagnoff, 1998). de manera preferente en los enterocitos de las vellosidades (Fusunyan
En el intestino fetal, los linfocitos B pueden detectarse en la lámina et al., 2001; Winkler et al., 2007; Gribar et al., 2008). Los NOD se
propia desde la semana 14 de gestación (Spencer et al., 1985). La distinguen de los TLR porque residen dentro del citoplasma celular.
mayoría de los linfocitos B intestinales muestran un fenotipo maduro De especial interés para el tubo digestivo, NOD1 y NOD2 (también
de linfocitos B (CD20+IgM+IgD+cadena ligera+). Aunque los linfocitos conocidos como dominio 4 de reclutamiento de caspasa [CARD4] y
B del intestino fetal incluyen poblaciones tanto de IgM+ como de CARD15) se expresan dentro de APC intestinales y células epiteliales
IgG+ (Rognum et al., 1992), la colonización microbiana después del (Winkler et al., 2007).

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CAPÍTULO 72 Inmunidad innata y mucosa del tubo digestivo en desarrollo 1061

• Figura 72.3  Muestreo de antígenos. a1, pinocitosis, endocitosis mediada por receptores; a2, reco-
nocimiento del receptor de tipo Toll (TLR) apical; a3, reconocimiento del TLR basolateral; a4, recono-
cimiento del receptor del dominio de oligomerización de unión a nucleótidos; b, vía de células de los
micropliegues; c, vía de células dendríticas intraepiteliales. Ag, antígeno; CM, célula M; DC, célula
dendrítica; EC, enterocito; NOD, dominio de oligomerización de unión a nucleótidos; TLR, receptor de
tipo Toll. (Tomado de Winkler P, Ghadimi D, Schrezenmeir J, Kraehenbuhl JP. Molecular and cellular basis
of microflora-host interactions. J Nutr. 2007;137:756S–772S.)

El complejo PAMP-PRR provoca la activación de varias vías de la producción de anticuerpos, la desgranulación de los mastocitos y la
señalización citoplásmica ampliamente descritas. Dentro de estas vías activación de los eosinófilos (Neurath et al., 2002) (fig. 72.5).
están la de activación del factor nuclear kB (NF-kB), la de las proteína
cinasas activadas por mitógeno (MAPK) y la del factor regulador del
interferón (IRF) (Louis y Lin, 2009; Neish, 2009). La modulación de Exposiciones exógenas y su impacto
estas vías involucra una serie regulada de fosforilación y ubicuitinación. en la defensa inmunitaria intestinal innata
Con la ubicuitinación, el NF-kB, las MAPK y el IRF son libres de
translocarse en el núcleo celular y aumentar la producción de moléculas Colonización bacteriana
corriente abajo, que se combinan para iniciar una respuesta inflamatoria El humano adulto promedio tiene una microbiota intestinal formada
eficaz para librar al cuerpo del patógeno invasor. Este grupo diverso de por 1013-1014 microorganismos, que representan entre 800 y 1.000
moléculas incluye citocinas, AMP, mensajeros quimiotácticos, molécu- especies de bacterias que codifican millones de genes (Qin et al., 2010).
las de adhesión y otros reactivos de fase aguda. De manera simultánea La abundancia de microorganismos aumenta distalmente a lo largo del
a la activación de estas vías proinflamatorias se produce la estimulación tubo digestivo (Martin y Walker, 2008). Curiosamente, los perfiles
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de las vías apoptósicas (a través de las caspasas), para ayudar en la elimi- de colonización son exclusivos de la ubicación dentro del tubo diges-
nación de células infectadas o dañadas (fig. 72.4) (Louis y Lin, 2009; tivo, y esto es cierto no solo en las principales divisiones (p. ej., íleon
Sharma y Tepas, 2010; Gunther et al., 2013, 2014). frente a colon), sino también a través de las microestructuras dentro
del intestino (p. ej., la microbiota dentro de la luz frente a dentro de
Polarización de los linfocitos T cooperadores 1/2 la capa mucosa frente a dentro de las criptas frente a la colonización
La señalización corriente abajo mediada por los complejos PRR-PAMP y adherencia en las células epiteliales intestinales) (Lievin-Le Moal
activa la diferenciación de las APC, que, a su vez, modula la diferencia- y Servin, 2006; Romano-Keeler y Weitkamp, 2015). Para colonizar
ción de los linfocitos T cooperadores (Th). La clase específica de APC de manera eficaz el epitelio intestinal, las bacterias se adhieren a los
media el tipo de diferenciación que experimentarán los linfocitos Th. receptores de hidratos de carbono o glucoconjugados de manera pare-
Por ejemplo, DC CD8+ regula la maduración de los linfocitos Th a cida a la lectina. La expresión de glucoconjugados está controlada por
linfocitos Th1, mientras que DC CD8– activa los linfocitos Th2. Los lin- las enzimas glucosiltransferasas, que están reguladas por el desarrollo.
focitos Th1 aumentan la producción citocínica de IFN-γ y linfotoxina, La maduración continua de este proceso es estimulada por bacterias
activan los macrófagos y se relacionan con la hipersensibilidad de tipo colonizadoras (Walker, 2002; Forchielli y Walker, 2005).
retardado. Los linfocitos Th2 aumentan la producción de IL-4, IL-5, Durante la primera semana de vida, el perfil de colonización
IL-9 e IL-13. Los linfocitos Th2 median la respuesta alérgica y facilitan bacteriana de un recién nacido saludable a término es inestable y lo

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1062 PA RT E XI V Aparato digestivo

• Figura 72.4  Receptores de reconocimiento de patrones, activación compleja de patrones moleculares


vinculados a patógenos (patrones moleculares vinculados a microorganismos) y señalización corriente
abajo. Los componentes microbianos, como lipopolisacáridos (LPS), ácido lipoteicoico (LTA), péptidos
formilados y flagelina, sirven como patrones moleculares asociados a microorganismos (MAMP)
y receptores de reconocimiento de patrones de señal (PRR), incluidos los receptores de tipo Toll (TLR), los
receptores de péptidos formilados (FPR) o los receptores del tipo de dominio de oligomerización de unión
a nucleótidos (NOD). La integración de estas señales evoca emisiones celulares basadas en la percepción
inicial del organismo desencadenante. La emisión puede ser una respuesta protectora hacia la microbiota
comensal o inflamatoria hacia el o los organismos patógenos, o puede desencadenar apoptosis. AMP,
péptidos antimicrobianos; IFN-1, interferón 1; MAPK, proteína cinasa activada por mitógeno; NF-kB,
factor nuclear kB; ROS, especies reactivas del oxígeno. (Reproducido con autorización a partir de Sharma
R, Young C, Neu J. Molecular modulation of intestinal epithelial barrier: contribution of microbiota. Jrnl of
Biomedicine and Biotechnology, vol. 2010, Article ID 305879, 15 pages, 2010. doi:10.1155/2010/305879.)

constituye una variedad sencilla de microorganismos. A esto le sigue de Lactobacillus y Prevotella), mientras que los nacidos por cesárea
rápidamente una densidad de colonización persistente y más estable, tienen una composición intestinal inicial más similar a la flora de la
en el rango de 109-1010 por cada gramo de heces (Favier et al., 2002; piel materna, incluyendo Staphylococcus y Corynebacterium (Biasucci
Palmer et al., 2007; Jost et al., 2012). Una vez que se establece el patrón et al., 2008; Dominguez-Bello et al., 2010). Una vez que se produce
de flora intestinal, hay una estabilidad relativa en esta población micro- la colonización, los patrones tienden a reflejar la población microbiana
biana, con muy pocos cambios a lo largo del tiempo en los perfiles de autóctona que reside en el entorno del niño, con un número bajo de
colonización. Sin embargo, sí que se producen alteraciones, principal- anaerobios estrictos, como Bifidobacterium y Bacteroides, y mayor
mente en respuesta a cambios importantes en la ingesta dietética, como proporción de Clostridium difficile (Penders et al., 2006; Adlerberth y
la introducción de alimentos sólidos o el uso de medicamentos (anti- Wold, 2009). Aunque recientemente se ha sugerido que el microbioma
bióticos) (Stark y Lee, 1982; Penders et al., 2006; Palmer et al., 2007; adulto es relativamente insensible a algunos eventos del inicio de la
Bezirtzoglou et al., 2011; Jost et al., 2012). Poco tiempo después del vida, incluido el tipo de parto (Falony et al., 2016), las diferencias en
inicio de un cambio microbiano se restablece la estabilidad, y hacia el estas poblaciones aún pueden desempeñar un papel en la susceptibili-
final del primer año de vida, los patrones de colonización comienzan dad a las enfermedades pediátricas a través de dinámicas de alteración
a reflejar los observados en los adultos (Underwood et al., 2015). El del desarrollo.
momento de la colonización microbiana y la composición específica
del microbioma consolidado varían en función del tipo de parto, la Alimentación
dieta y otras exposiciones ambientales (entorno hospitalario, uso de Los bebés alimentados con leche humana tienden a presentar Bifidobac-
antibióticos) (Collado et al., 2015). terium (un organismo comensal con múltiples beneficios inmunitarios),
como el microorganismo predominante dentro de su microbiota intes-
Tipo de parto tinal (Underwood et al., 2015). Entre otros microorganismos que
Al nacer, el recién nacido humano presenta escasez de bacterias en el pueden estar presentes en menor cantidad están los estafilococos,
tubo digestivo. Después del nacimiento, sin embargo, la flora intes- los estreptococos, los lactobacilos y otros anaerobios raros (Penders
tinal del recién nacido se expande rápidamente (Elgin et al., 2016). et al., 2006; Palmer et al., 2007). Por el contrario, es más probable
Los neonatos nacidos por parto vaginal tienen una flora intestinal que la flora intestinal de los bebés alimentados con leche maternizada
inicial que se asemeja a la flora vaginal materna (que incluye especies tenga en sus heces un mayor número de microorganismos patógenos,

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CAPÍTULO 72 Inmunidad innata y mucosa del tubo digestivo en desarrollo 1063

o sala (Stewart et al., 2013). Todas estas observaciones respaldan el


profundo impacto que ejerce el entorno físico en el establecimiento
de la microbiota intestinal (Palmer et al., 2007).

Antibióticos
Los antibióticos influyen tanto en la densidad como en la composi-
ción de los microorganismos del interior del tubo digestivo (Palmer
et al., 2007; Elgin et al., 2016). Como era de esperar, los antibióticos
tienden a disminuir las poblaciones de microorganismos comensales de
baja resistencia, dejando atrás otros más patógenos y potencialmente
perjudiciales para el huésped, por lo que algunos microorganismos,
como Bifidobacterium y Bacteroides, se reducen significativamente
(Underwood et al., 2015). Quizás sea incluso más preocupante que,
después de que se haya completado la tanda de antibióticos, existe
una restauración lenta de la población de Bifidobacterium, y la de
Bacteroides es poco probable que se restablezca (Bennet y Nord, 1987).
Además, con la administración de antibióticos se ha observado una
demora en la colonización por especies de Lactobacillus, un aumento
en las especies de Klebsiella y una rápida colonización por estafilococos
(Magne et al., 2005, Stewart et al., 2013).

Microbiota intestinal, inmunidad intestinal e inflamación


Aunque el intestino funciona como la barrera de defensa más grande
y se protege activamente contra la invasión de organismos patógenos,
el establecimiento de una microflora intestinal estable y diversa, y
la subsiguiente «interferencia microbiano-epitelial» entre bacterias
colonizadoras y comensales y el epitelio intestinal es esencial para
un desarrollo óptimo de la inmunidad mucosa y la regulación de la
inflamación intestinal (Johansson et al., 2013). Esta interacción es muy
importante para el desarrollo adecuado de la inmunidad del huésped
(Macpherson y Harris, 2004; Artis, 2008; Claud et al., 2013). La
diversidad de organismos dentro de la microbiota intestinal que facilita
la interacción microbiana-epitelial saludable permite muchos beneficios
posteriores para el desarrollo intestinal y la inmunidad mucosa. Entre
• Figura 72.5  Polarización de los linfocitos T cooperadores 1/2. estos beneficios están mantener la integridad de la barrera mucosa
APC, células presentadoras de antígeno; DC, célula dendrítica; IFN-γ, inter-
reduciendo la permeabilidad de la mucosa, aumentar la producción
ferón γ; IL, interleucina; T, linfocito T; Th1, linfocito T cooperador de tipo 1; de moco, fortalecer las UE intestinales, aumentar la producción de
Th2, linfocito T cooperador de tipo 2. (Tomado de Neurath MF, Finotto pequeñas proteínas 2a ricas en prolina e inhibir la translocación bac-
S, Glimcher LH. The role of Th1/Th2 polarization in mucosal immunity. Nat teriana (Strober, 2013; Neish, 2014; Longman y Littman, 2015).
Med. 2002;8:567–573.) El microbioma intestinal saludable participa en la regulación de la
adherencia bacteriana y la colonización de microorganismos patógenos,
al producir AMP (como las defensinas), reducir el pH intraluminal
como enterobacterias, especies de Bacteroides y Clostridium difficile, y competir por los sitios de unión a la superficie celular. Este papel
en comparación con los bebés que recibieron leche materna (Penders protector también se conoce de forma conjunta como resistencia a
et al., 2006; Adlerberth y Wold, 2009; Bezirtzoglou et al., 2011). Las la colonización (Vollaard y Clasener, 1994). Los microorganismos
contribuciones exclusivas de la leche materna (como la presencia de oli- también participan en la mejora de las defensas inmunitarias intes-
gosacáridos e inmunomoduladores) probablemente explican, en parte, tinales aumentando la producción de ácidos grasos de cadena corta
los patrones de colonización dispares observados entre recién nacidos IgA y la fagocitosis de leucocitos sanguíneos, regulando la inflamación
amamantados y alimentados con fórmula (Elgin et al., 2016). Al igual intestinal a través de la diferenciación de linfocitos Th, aumentando
que el tipo de parto, la lactancia parece tener poco poder predictivo para la producción de citocinas antiinflamatorias y disminuyendo la pro-
ducción de citocinas proinflamatorias (Hooper et al., 2012; Ivanov y
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el microbioma central de un adulto sano (Falony et al., 2016), pero


puede tener un papel importante en la protección o susceptibilidad a Honda, 2012; Neish, 2014).
una serie de afecciones durante la lactancia o infancia, cuando la flora
intestinal todavía se está constituyendo. Alimentación: leche materna y maternizada
Al igual que el líquido amniótico, la leche materna es rica en com-
Entorno ponentes bioactivos esenciales para proporcionar al recién nacido
El entorno en el que reside el bebé ejerce una fuerte influencia sobre inmaduro un complemento con función inmunitaria innata al inicio
la composición final de la microbiota intestinal. Los bebés hospitali- del período posnatal de transición, mientras que el recién nacido
zados tienden a tener un predominio de organismos patógenos, como inmaduro desarrolla sus propias defensas inmunitarias innatas (New-
coliformes, Bacteroides y Clostridium (Penders et al., 2006; La Rosa burg y Walker, 2007). Se ha demostrado que los factores de la leche
et al., 2014), patrón que refleja el alto riesgo de su estancia. Este aspecto materna promueven el desarrollo estructural posnatal del tubo diges-
es importante en los prematuros y en los recién nacidos a término enfer- tivo; producen un patrón de colonización bacteriana beneficioso y
mos. Además, los bebés que residen en el mismo entorno comparten favorable; suministran proteínas bactericidas, y proporcionan otras
microbiotas similares. Esto está bien demostrado a través de estudios defensas inmunitarias (cuadro 72.2) (Donovan et al., 2012). Además,
en hermanos y en recién nacidos hospitalizados en la misma institución la leche humana se adapta para satisfacer las necesidades del bebé y

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1064 PA RT E XI V Aparato digestivo

• CUADRO 72.2  Compuestos nutricionales (Sangild, 2006). Por razones obvias, los estudios morfológicos en bebés
humanos para examinar los beneficios potenciales de la leche materna
y bioactivos que se encuentran son más difíciles de realizar. Sin embargo, se han realizado en bebés
en la leche humana humanos estudios que evalúan la alimentación y la función de la barrera
Proteínas intestinal, que se pueden usar como medida indirecta del desarrollo
e integridad morfológica. De hecho, los recién nacidos alimentados
α-caseína
β-caseína
principalmente con leche maternizada mostraron un aumento de la
k-caseína permeabilidad intestinal en comparación con los de la leche materna,
α-lactoalbúmina lo que sugiere un compromiso en la función de la barrera intestinal
(Taylor et al., 2009).
Lípidos Con el tiempo, la composición de la leche maternizada ha sido
Ácidos grasos poliinsaturados de cadena larga (AGPICL); ácido araquidónico (AA); modificada en repetidas ocasiones; sin embargo, no llega a propor-
ácido docosahexaenoico (DHA); ácido eicosapentanoico (EPA) cionar la multitud de factores que están presentes en la leche materna
Ácido linoleico conjugado y, por lo tanto, los bebés alimentados con leche maternizada no
Colesterol comparten los mismos beneficios de salud que se observan en los
Membrana del glóbulo graso de la leche materna bebés amamantados. Los bebés alimentados principalmente con
leche materna tienen una incidencia reducida de infecciones (p. ej.,
Hidratos de carbono diarrea, enfermedades del tracto respiratorio superior, otitis media,
Lactosa infecciones urinarias, bacteriemia) (Quigley et al., 2009; Hengs-
Oligosacáridos termann et al., 2010), enfermedades atópicas, como eccema y asma
Mucinas (Bener et al., 2007), y enfermedades autoinmunitarias, como la
diabetes mellitus (Pereira et al., 2014). Entre los prematuros, los
Enzimas alimentados con leche materna tienen menos probabilidades de
α-amilasa desarrollar infecciones (Hylander et al., 1998) y 10 veces menos
α1-antitripsina
probabilidades de desarrollar EN en comparación con los alimentados
Lipasa estimulada por las sales biliares
con leche maternizada (Lucas y Cole, 1990).
Lactoperoxidasa y mieloperoxidasa
Haptocorrina
Proteínas de unión al folato Impacto de la alteración de la inmunidad
Glucoconjugados
mucosa en la enfermedad a corto y largo plazo
Factores inmunitarios La inmadurez del desarrollo del sistema inmunitario, las exposiciones
Inmunoglobulinas (IgAs, IgA, IgG, IgM) al entorno hospitalario y las intervenciones médicas se combinan para
Lactoferrina obstaculizar el desarrollo posnatal de la inmunidad innata y mucosa
Lisozima
en el recién nacido prematuro (tabla 72.3) (Martin y Walker, 2006).
Lactoaderina
Estos factores plantean amenazas potenciales para el bebé prematuro,
Nucleótidos
Receptores de tipo Toll
en particular frente a enfermedades mediadas por la inmunidad mucosa
Citocinas, interleucinas alterada y la colonización bacteriana intestinal.
Macrófagos
Linfocitos Prematuridad y enterocolitis necrosante
Neutrófilos
Microorganismos comensales Barreras físicas y químicas deficientes
La primera línea de defensa de barreras físicas y químicas inespecíficas
Factores de crecimiento a menudo se ve afectada por la producción inadecuada de acidez gás-
Factores de crecimiento similares a la insulina (IGF-1, IGF-2) trica, enzimas digestivas, moco, inmunoglobulinas y la disminución
Factor de crecimiento epidérmico (EGF) del peristaltismo. Además, la exposición frecuente a medicamentos
Proteínas de unión a los IGF
(antibióticos, antagonistas de los receptores H2, vasoconstrictores,
Factor de crecimiento transformante α (TGF-α), TGF-β
sedantes y paralizantes) disminuye estas defensas intrínsecas, al reducir
Factores neurotróficos
Factor de crecimiento humano
la expresión de péptidos antibacterianos alterando la acidez natural
Factor estimulante de colonias de granulocitos (G-CSF) y disminuyendo el peristaltismo (Schumann et al., 2005; Louis y
Factor de crecimiento del endotelio vascular (VEGF) Lin, 2009). Como consecuencia, existe una capacidad reducida para
Eritropoyetina (Epo) eliminar los microorganismos patógenos, lo que permite una mayor
adherencia epitelial y translocación bacteriana. El desarrollo inadecuado
de la barrera se ve agravado por la atrofia inducida de la mucosa y las
vellosidades, que probablemente se produce como consecuencia de la
ausencia prolongada de alimentación enteral (Hartl y Alpers, 2011).
proporcionar los nutrientes esenciales óptimos para cada etapa de su
desarrollo. Por ejemplo, el crecimiento y los factores inmunitarios Colonización anómala del intestino prematuro
tienden a ser más altos en la leche prematura que en la leche a término Aunque en su día se pensó que el entorno intrauterino era estéril, se
(Walker, 2010; Donovan et al., 2012). han identificado bacterias en muestras tempranas de meconio de recién
Se ha demostrado en modelos animales en lechones y roedores que nacidos prematuros, lo que sugiere que puede tener un posible efecto
los factores presentes en la leche materna contribuyen al desarrollo prenatal sobre la colonización bacteriana intestinal temprana (Elgin
estructural en curso del tubo digestivo. Cuando se les administra leche et al., 2016). Entre los microorganismos fecales que se observan de
materna (especialmente calostro) frente a la de fórmula, o en ausencia manera habitual en los recién nacidos prematuros, una vez que se ha
de sustrato enteral, los animales que reciben leche materna demues- establecido una comunidad microbiana más amplia, se incluyen ente-
tran un aumento en la masa mucosa y la altura de las vellosidades rococos, miembros de la familia Enterobacteriaceae, Escherichia coli,

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CAPÍTULO 72 Inmunidad innata y mucosa del tubo digestivo en desarrollo 1065

TABLA  Exposiciones en la unidad de cuidados la inmadurez de la expresión del glucoconjugado en el epitelio (un
72.3 intensivos neonatales y posibles consecuencias importante modulador de la adherencia bacteriana) y las particulares
sobre la barrera de defensa intestinal exposiciones al entorno que experimentan los prematuros. Los neonatos
prematuros presentan, casi de manera general, un inicio retrasado
y la colonización bacteriana en recién nacidos de la alimentación enteral, están expuestos a antibióticos de amplio
prematuros espectro de manera precoz y prolongada, y se exponen a la flora del
Exposición Posibles consecuencias entorno hospitalario (Elgin et al., 2016). Cada uno de estos factores
contribuye al retraso en la colonización intestinal por bacterias comen-
Defensa Prematuridad ↓ Niveles de inmunoglobulina sales no patógenas, al predominio de bacterias patógenas y a la falta de
de barrera ↓ Producción de enzimas diversidad microbiana.
no específica digestivas
↓ Producción de moco Enterocolitis necrosante
Peristaltismo disfuncional
La EN es una enfermedad digestiva muy grave que se observa prin-
Retraso en la Atrofia de las vellosidades
cipalmente en bebés prematuros. Su patogenia es compleja y no se
alimentación ↓ Producción de enzimas
comprende bien. La evidencia actual sugiere que la EN se produce
digestivas
↓ Producción de moco
cuando una barrera epitelial disfuncional o anatómicamente alte-
↓ Peristaltismo rada del intestino prematuro permite la translocación bacteriana
al interior de la pared intestinal, lugar donde estas bacterias y sus
Antagonistas ↓ Acidez gástrica
de los receptores productos inducen una respuesta inflamatoria altamente exagerada
H2 de la histamina y desregulada. La figura 72.6 relaciona algunos de los antecedentes
Vasopresores e ↑ Riesgo de isquemia
clínicos y manifestaciones fisiopatológicas posibles de la EN. En este
indometacina intestinal y lesión esquema se requieren factores críticos del huésped (prematuridad),
de los enterocitos del entorno (factores/agentes isquémicos/osmóticos/infecciosos que
pueden producir lesión de la mucosa) y factores del agente (sobrecre-
Sedantes y ↓ Peristaltismo
paralizantes cimiento bacteriano, disbiosis con proliferaciones proteobacterianas).
Como ya se ha comentado anteriormente, el bebé prematuro posee
Colonización Prematuridad Respuesta inflamatoria y experimenta múltiples perturbaciones para el desarrollo intestinal
bacteriana acentuada e inmunitario posnatal que probablemente funcionen de manera
Patrón de glucosilación conjunta para aumentar la vulnerabilidad del prematuro a la EN.
anómalo Algunos ejemplos que ilustran este hecho son la mayor prevalencia
Retraso en la Retraso en la colonización en bebés alimentados con leche maternizada (falta de exposición a
alimentación bacteriana los compuestos bioactivos que se encuentran en la leche materna),
Antibióticos de Esterilización prolongada la asociación de sobrecrecimiento de proteobacterias observada en la
amplio espectro del intestino composición del microbioma de bebés que desarrollaron EN frente a
Retraso en la colonización los del grupo control (Claud et al., 2013; Morrow et al., 2013; Gritz
por bacterias beneficiosas y Bhandari, 2015; Lu y Ni, 2015; Warner et al., 2016), la reducción
y comensales de EN con el uso de probióticos (Neu, 2014; Patel y Denning, 2015)
Colonización bacteriana
y la mayor incidencia tras la exposición prolongada a antibióticos
preferentemente
(colonización bacteriana tardía con preferencia por microorganismos
por bacterias patógenas
patógenos) y a antagonistas de los receptores H2 (disminuyen la acidez
Lactancia artificial Colonización bacteriana
gástrica, amortiguando así un componente de la primera línea de
y hospitalización preferentemente
por bacterias patógenas
defensa contra antígenos patógenos producido por el tubo digestivo)
(Guillet et al., 2006; Cotten et al., 2009).
Tomado de Martin CR, Walker WA. Intestinal immune defences and the inflammatory response
in necrotising enterocolitis. Semin Fetal Neonatal Med. 2006;11:369–377. Enfermedades atópicas
La incidencia de enfermedades alérgicas ha aumentado notable-
mente en las últimas décadas en los países desarrollados. Un posible
mecanismo patógeno de este fenómeno es la denominada hipótesis
estafilococos, estreptococos, y especies de Clostridium y de Bacteroides de la higiene (Bach, 2002; von Mutius, 2007). En este modelo son
(Stark y Lee, 1982; Palmer et al., 2007; Jost et al., 2012; La Rosa esenciales la interacción con los microorganismos y la colonización
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et al., 2014; Elgin et al., 2016). Este perfil bacteriano es claramente posterior por estos microorganismos para entrenar la inmunidad
diferente de los observados en recién nacidos a término alimentados mucosa. A través de la colonización por una población microbiana
con leche materna, pero similar a los patrones que muestran los recién diversa, el recién nacido cambia de una respuesta celular con perfil
nacidos a término alimentados con leche maternizada (Schwiertz predominante Th2 (condicionada durante el desarrollo fetal para evi-
et al., 2003; Arboleya et al., 2012a). Sin embargo, a diferencia de estos tar el rechazo materno del feto) (Morein et al., 2007) a una respuesta
últimos, la colonización por estas bacterias patógenas persiste por más celular Th1. Sin embargo, en los países desarrollados con medidas
tiempo (Arboleya et al., 2012a, 2012b, 2015), y hay un desarrollo lento higiénicas y sanitarias mejoradas, la diversidad de microorganismos
de una mayor diversidad de especies, con una progresión no aleatoria en el ecosistema intestinal es deficiente y continúa habiendo un
hacia un bioma con predominio de Clostridium (Schwiertz et al., 2003; predominio de las respuestas celulares Th2 (Tlaskalova-Hogenova
La Rosa et al., 2014). et al., 2002). A través de la observación de los distintos patrones de
Las diferencias en los patrones de colonización bacteriana entre colonización observados en sujetos atópicos frente a controles sanos
los bebés sanos nacidos a término y los prematuros pueden explicarse (Bjorksten, 2004; Vaarala et al., 2008) y de la reducción de enferme-
parcialmente por las deficientes barreras físicas y químicas descritas dades atópicas con suplementos de probióticos (Bjorksten, 2005) se
anteriormente, que permiten mayor penetración y adherencia de ayuda a la contribución vital que desempeña el ecosistema intestinal
microorganismos patógenos. Entre otros factores importantes están en el desarrollo de las respuestas alérgicas. Otros defectos que se han

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• Figura 72.6  Antecedentes clínicos y probables efectos fisiopatológicos en la enterocolitis necrosante.


IL, interleucina; MyD88, gen 88 de respuesta primaria de diferenciación mieloide; NF-kB1, factor nuclear
kB1; VEGF, factor de crecimiento del endotelio vascular. (Tomado de Kasivajjula H, Maheshwari A.
Pathophysiology and current management of necrotizing enterocolitis. Indian J Pediatr. 2014;81:489–497.)

observado en la inmunidad mucosa son mayor permeabilidad intes- proteína que en su forma nativa inhibe la activación de TLR2, y es
tinal y déficit de IgA en los individuos alérgicos. más común en los pacientes con enfermedad de Crohn que en los con-
troles (O’Neill, 2004; Strober et al., 2014). La alteración de la función
de barrera intestinal se ha descrito ampliamente en la enfermedad
Enfermedad inflamatoria intestinal, enfermedad de Crohn. Sin embargo, la cuestión de si los defectos de barrera son
circunstancias desencadenantes o amplificadoras de la patogenia sigue
celíaca y diabetes de tipo 1 siendo controvertida.
La alteración en varias de las áreas de la inmunidad mucosa innata La presencia de un «intestino permeable» puede ser importante en
desempeña un papel importante en la patogenia de la enfermedad la patogenia de enfermedades autoinmunitarias como la enfermedad
de Crohn, la enfermedad celíaca y la diabetes mellitus de tipo 1. Los celíaca y la diabetes mellitus de tipo 1. El proceso por el cual una
individuos con enfermedad de Crohn presentan alteración de la fun- brecha en la función de la barrera intestinal conduce a la enfermedad
ción de la barrera intestinal, expresión diferencial de TLR3 y TLR4, y celíaca se ha convertido en el modelo genérico de las enfermedades
respuestas celulares con predominio Th1. La expresión diferencial de autoinmunitarias con participación intestinal. La gliadina (proteína
los TLR y las respuestas celulares dominadas por Th1 probablemente del trigo, la cebada y el centeno) activa el gen 88 de respuesta primaria
contribuyan a la respuesta inflamatoria excesiva e inapropiada a los de diferenciación mieloide, que, a su vez, regula al alza la liberación
estímulos antigénicos (hacia las bacterias comensales y patógenas), de zonulina. La regulación positiva de zonulina abre las UE, lo que
que es una de las características distintivas de esta enfermedad (Neu- permite el paso intraepitelial de la gliadina a la submucosa intestinal
rath et al., 2002; Macdonald y Monteleone, 2005; Sartor, 2008). Se para interactuar con las células inmunitarias efectoras y aumentar la
sugiere, además, la existencia de un desequilibrio en las respuestas producción de citocinas proinflamatorias, lo que finalmente conduce
celulares Th1/Th2 en los pacientes con enfermedad de Crohn, por el a inflamación intestinal y daño celular. La eliminación del gluten de
hallazgo de que una mutación genética en el gen NOD2 produce una la dieta detiene este proceso, y permite la restauración de la función

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CAPÍTULO 72 Inmunidad innata y mucosa del tubo digestivo en desarrollo 1067

de la barrera intestinal y la recuperación del intestino (Stein y Schup- Conclusión


pan, 2014). También se han implicado en la patogenia de la diabetes
mellitus de tipo 1 la interacción entre la modificación en las bacterias El tubo digestivo desempeña funciones nutricionales e inmunitarias
que colonizan el intestino, la función de barrera alterada y una respuesta complejas, esenciales para la supervivencia. El desarrollo morfológico
proinflamatoria desregulada (Mejia-Leon y Barca, 2015). Al igual que del tubo digestivo para el desempeño de estas funciones especializadas
ocurre en los sujetos con enfermedad de Crohn en comparación con comienza en la embriogenia temprana y continúa durante toda la
los controles, las personas con diabetes mellitus de tipo 1 presentan un infancia. La exposición al líquido amniótico, seguida de exposiciones
deterioro de la función de la barrera intestinal (Li y Atkinson, 2015). posnatales a la leche materna, a la leche maternizada y a microorganis-
La alteración en la función de la barrera también se ha podido demos- mos ambientales, es esencial para la diferenciación anatómica continua
trar en modelos animales que a la larga desarrollaron diabetes. Los del tubo digestivo y el desarrollo de la inmunidad mucosa. Por último,
animales diabéticos presentan una menor expresión de claudina (que es a lo largo de la vida del huésped se establecen y mantienen múltiples
una proteína importante en los complejos de UE) antes de la aparición capas de defensas inmunitarias y un equilibrio entre la tolerancia oral
de la enfermedad. Por último, el análisis de biopsias del intestino de y el grado de respuesta inflamatoria. La alteración de este equilibrio
niños con diabetes mellitus de tipo 1 demostró una mayor presencia o de cualquier componente de las múltiples capas de las defensas de
y expresión de células inflamatorias y biomarcadores (p. ej., moléculas la mucosa aumenta la vulnerabilidad del huésped a enfermedades
HLA de clase II, molécula de adhesión intercelular 1, IL-4, IL-1α) atópicas, trastornos autoinmunitarios o enfermedades mediadas por
dentro de la arquitectura de la vellosidad. inflamación crónica no regulada.

Obesidad Agradecimientos
En la obesidad son evidentes los patrones alterados de colonización Los autores desean agradecer al Dr. Cami Martin y al Dr. Allan Walker
bacteriana. En modelos animales de obesidad genética, los ratones su experiencia en esta área y también sus esfuerzos con respecto a la
obesos tienen patrones de colonización microbiana claramente dife- versión anterior de este capítulo.
rentes en comparación con sus compañeros de camada delgados, con
mayores recuentos bacterianos de Firmicutes y menores en Bacteroi- Lecturas recomendadas
detes. Estos cambios microbianos también se observan en los modelos
animales de obesidad inducida por la dieta, al someter a los ratones a Artis D. Epithelial-cell recognition of commensal bacteria and maintenance
una dieta abundante e hipercalórica de manera prolongada (Reinhardt of immune homeostasis in the gut. Nat Rev Immunol 2008;8:411-420.
et al., 2009). En los humanos, la obesidad infantil es mayor en los Bach JF. The effect of infections on susceptibility to autoimmune and
recién nacidos alimentados con leche maternizada que en los amaman- allergic diseases. N Engl J Med 2002;347:911-920.
tados. Además, como ya se comentó anteriormente, existen patrones Donovan SM. Role of human milk components in gastrointestinal develop-
distintos de colonización microbiana entre estos dos grupos, lo que ment: current knowledge and future NEEDS. J Pediatr 2006;149:S49-
sugiere que su ecosistema puede desempeñar un papel en la propensión S61.
a la obesidad. En un estudio longitudinal de la obesidad infantil, los Jost T, Lacroix C, Braegger CP, Chassard C. New insights in gut micro-
bebés que más tarde desarrollaron obesidad, en comparación con biota establishment in healthy breast fed neonates. PLoS ONE
2012;7(8):e44595.
los que mantuvieron un peso normal en la infancia, presentaban un
La Rosa PS, Warner BB, Zhou Y, et al. Patterned progression of bacte-
patrón microbiano fecal que contenía concentraciones más bajas de
rial populations in the premature infant gut. Proc Natl Acad Sci USA
Bifidobacterium y mayores concentraciones de Staphylococcus aureus. 2014;111:12522-12527.
Se ha relacionado la obesidad con inflamación crónica de bajo grado, Magalhaes JG, Tattoli I, Girardin SE. The intestinal epithelial barrier:
por lo que la reducción del microorganismo comensal Bifidobacterium how to distinguish between the microbial flora and pathogens. Semin
y la mayor presencia del organismo patógeno Staphylococcus aureus Immunol 2007;19:106-115.
pueden, en parte, contribuir a la patogenia de la inflamación crónica Perez-Lopez A, Behnsen J, Nuccio SP, Raffatellu M. Mucosal immunity
(Kalliomaki et al., 2008). to pathogenic intestinal bacteria. Nat Rev Immunol 2016;16:135-148.
El ecosistema intestinal es un modulador importante de las activi- Wagner CL, Taylor SN, Johnson D. Host factors in amniotic fluid and
dades metabólicas del huésped, algunas de las cuales son importantes breast milk that contribute to gut maturation. Clin Rev Allergy Immunol
para la patogenia de la obesidad. Los estudios metagenómicos de la 2008;34:191-204.
microbiota en pacientes obesos demuestran una mayor presencia de Winkler P, Ghadimi D, Schrezenmeir J, Kraehenbuhl JP. Molecular and
genes que participan en la producción de energía. Entre otras vías meta- cellular basis of microflora-host interactions. J Nutr 2007;137:756S-
bólicas mediadas por la microbiota están el aumento de la lipogenia 772S.
hepática, la disminución de la oxidación de ácidos grasos en el músculo
esquelético y la inflamación crónica mediada por lipopolisacáridos en La bibliografía completa utilizada en este capítulo puede consultarse online en
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.

el tejido adiposo (Reinhardt et al., 2009). www.expertconsult.com

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CAPÍTULO 72 Inmunidad innata y mucosa del tubo digestivo en desarrollo 1067.e1

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CAPÍTULO 72 Inmunidad innata y mucosa del tubo digestivo en desarrollo 1067.e5

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1067.e6 PA RT E XI V Aparato digestivo

Palabras clave
Desarrollo intestinal
Epitelio intestinal
Tejido linfoide asociado al intestino
Enterocolitis necrosante
Enfermedad inflamatoria intestinal
Obesidad
Diabetes

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73
Defectos de la pared abdominal
DANIEL J. LEDBETTER, SHILPA CHABRA Y PATRICK J. JAVID

PUNTOS CLAVE se detectan anomalías del cordón umbilical generalmente se requiere


una mayor valoración del feto en busca de anomalías cromosómicas
• El onfalocele es un defecto congénito de la región umbilical, en la línea y malformaciones estructurales. Además, en muchos de los fetos con
media de la pared abdominal. El intestino, el hígado y otros órganos anomalías del cordón umbilical se necesitan exámenes más frecuentes
que están herniados al exterior del abdomen se encuentran cubiertos del bienestar fetal (Moshiri et al., 2014). Varias de las anomalías del
por una membrana. El cordón umbilical se inserta en la membrana cordón umbilical se revisarán más adelante, aunque muchas ya se
del onfalocele. han descrito.
• La gastrosquisis es un defecto congénito de la pared abdominal
localizado justo a la derecha del ombligo. El intestino herniado
al exterior del abdomen no está cubierto por una membrana. Cordón umbilical no enrollado
• Los fetos y los recién nacidos con un onfalocele tienen un alto riesgo
de anomalías asociadas, especialmente alteraciones cromosómicas Casi el 5% de los cordones umbilicales no están enrollados o tienen
y malformaciones cardíacas. pocas espirales, por lo que es una de las anomalías más comunes
• Los fetos y los recién nacidos con gastrosquisis tienen un riesgo bajo del cordón umbilical. Se ha formulado el índice de enrollamiento
de presentar anomalías asociadas, excepto para la atresia intestinal, umbilical y determinado los estándares de la edad gestacional para
con un riesgo del 10-25%. cuantificar el grado de enrollamiento del cordón umbilical (de Laat
• Los resultados clínicos de los pacientes con onfalocele están et al., 2005). Un feto con un índice de enrollamiento menor al
determinados principalmente por las anomalías asociadas. percentil 5 para la edad gestacional presenta mayor riesgo de res-
• La evolución clínica de los pacientes con gastrosquisis están tricción del crecimiento intrauterino (RCIU), parto prematuro,
determinada principalmente por su función intestinal. sufrimiento fetal durante el trabajo de parto y parto, líquido amnió-
tico meconial, muerte fetal intrauterina y aberraciones cromosómicas
(Mittal et al., 2015), aunque estas relaciones son controvertidas
(Khong, 2010; Jessop et al., 2014).

E
ste capítulo analiza algunos de los problemas congénitos y
adquiridos de la pared abdominal que se observan en los recién Arteria umbilical única
nacidos. El capítulo comienza con una breve revisión de las
anomalías del cordón umbilical que se pueden encontrar en las prue- La arteria umbilical única es también una anomalía relativamente fre-
bas prenatales de imagen; a esto le sigue un análisis de las anomalías cuente, que se observa en el 0,5-1% de los embarazos (Pomeranz, 2004;
umbilicales que se ven después del nacimiento. El resto del capítulo Granese et al., 2007; Jessop et al., 2014). Se relaciona con muerte
es una revisión de los defectos congénitos de la pared abdominal y fetal intrauterina, RCIU y gestación múltiple (Voskamp et al., 2013).
las hernias. Se centra en la gastrosquisis y el onfalocele, que son los Aunque la arteria umbilical única no es específica ni sensible, des-
dos defectos congénitos más comunes de la pared abdominal que se de un punto de vista diagnóstico, para ninguna anomalía congénita
observan en la unidad de cuidados intensivos neonatales (UCIN). en concreto, los fetos con esta alteración presentan mayor riesgo de
A este análisis le sigue una breve revisión de los defectos menos comu- malformaciones congénitas (especialmente genitourinarias) y anomalías
nes. El capítulo finaliza con una breve consideración sobre las hernias cromosómicas (Voskamp et al., 2013). Cuando se descubre una arteria
de la pared abdominal. umbilical única después del parto, no está del todo claro si el recién
nacido necesita una valoración específica más allá de un examen físico
de rutina (Deshpande et al., 2009).
Anomalías del cordón umbilical
El cordón umbilical es la conexión directa entre la placenta y el feto. Dilatación de los vasos umbilicales
Normalmente consta de una vena y dos arterias umbilicales reves-
tidas por una matriz gelatinosa conocida como gelatina de Wharton, Las dilataciones focales de los vasos umbilicales son mucho menos
que está cubierta por una capa del amnios. Las anomalías del cordón comunes que la arteria umbilical única. Las dilataciones focales de la
umbilical se han ido identificando con mayor frecuencia a medida vena umbilical se conocen como varices de la vena umbilical, y las de
que las pruebas prenatales de imagen se han vuelto más comunes y la arteria umbilical como aneurismas de la arteria umbilical. Ambas
más detalladas. Aunque las anomalías del cordón umbilical no son afecciones son raras, pero parecen estar relacionadas con anomalías
graves, a menudo se asocian con otras afecciones patológicas que fetales y cromosómicas, y también con mayor riesgo de resultados fe­
provocan malos resultados fetales y neonatales. Por lo tanto, cuando tales adversos (Mankuta et al., 2011; Doehrman et al., 2014).

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CAPÍTULO 73 Defectos de la pared abdominal 1069

Quistes del cordón umbilical tétanos neonatal. Esto puede ser un problema importante en los países
menos desarrollados (Razvi et al., 2001; Khan et al., 2013).
Los quistes del cordón umbilical pueden ser quistes verdaderos, que La infección bacteriana típica de los tejidos blandos de la región
son restos epiteliales del conducto vitelino, también conocido como periumbilical se denomina onfalitis. La onfalitis oscila en gravedad
conducto onfalomesentérico (Heifetz y Rueda-Pedraza, 1983) o desde la celulitis simple hasta la infección necrosante de los tejidos
alantoides, que forma el uraco. Por otra parte, los quistes del cordón blandos de la pared abdominal. La gravedad de la infección depende
umbilical pueden ser seudoquistes, que son colecciones de líquido en de las defensas del huésped, la virulencia del organismo infectante
el cordón que no están rodeadas por epitelio (Sepulveda et al., 1999). y la profundidad de la invasión. En los países desarrollados, la inci-
Los seudoquistes son más comunes que los quistes verdaderos y su causa dencia de onfalitis es inferior al 1%, pero en los menos desarrollados
presunta es la degeneración de la gelatina de Wharton, la acumulación es mucho mayor (Sinha et al., 2015). La onfalitis a menudo es una
de edema del cordón umbilical o la licuefacción de un hematoma del infección polimicrobiana en la que hay Staphylococcus, Streptococcus,
cordón umbilical. Los seudoquistes del cordón umbilical que se des- y bacilos gramnegativos aerobios y anaerobios (Fraser et al., 2006).
cubren durante el primer trimestre son relativamente frecuentes y, a El tratamiento de la onfalitis incluye antibióticos de amplio espectro
menudo, se resuelven espontáneamente, pero los que persisten en el y, en infecciones invasivas, desbridamiento quirúrgico de los tejidos
segundo trimestre se relacionan con aneuploidía y malformaciones feta- afectados. La onfalitis puede ser una infección grave que provoque una
les (Ross et al., 1997). Los quistes del cordón umbilical generalmente sepsis sistémica potencialmente mortal. La infección también puede
son pequeños, pero, si son grandes, pueden producir compresión del diseminarse por la vena umbilical y causar inflamación y trombosis de
flujo sanguíneo del cordón y requieren ser aspirados. la vena porta, que puede evolucionar a hipertensión portal sintomática
años después (Fraser et al., 2006).
Hematomas del cordón umbilical
Los hematomas del cordón umbilical pueden ser el resultado de una
Granulomas umbilicales
punción del cordón intencionada o no durante la amniocentesis o, Los granulomas umbilicales son el resultado de la persistencia e hiper-
con menor frecuencia, ocurrir espontáneamente. La mayoría de los trofia del tejido de granulación normal presente en la base del ombligo
hematomas del cordón umbilical no causan ningún problema, pero después de que el cordón umbilical se separa de la pared del cuerpo.
algunos tienen un tamaño y una posición que pueden alterar el flujo Histológicamente, los granulomas están compuestos por fibroblastos
sanguíneo de los vasos umbilicales (Sepulveda et al., 1995). y capilares. Los granulomas umbilicales son la causa más común de
masa y de secreción umbilicales en el recién nacido. Generalmente se
Anomalías del cordón umbilical presentan como pequeñas (< 1 cm de diámetro) masas húmedas en
el ombligo, de color rosado rojo. Pueden producir un drenaje serosan-
Las anomalías umbilicales que se observan en los recién nacidos gene- guinolento o exudado fibrinoso, que se puede confundir con el drenaje
ralmente se presentan como una masa o con secreción umbilical. La de una infección de tejidos blandos. La mayoría de los granulomas
anomalía umbilical más común es el granuloma. Otras anormalidades pequeños se secarán espontáneamente, con lo que la piel circundante
incluyen la caída tardía del cordón umbilical, las infecciones umbilicales se contraerá y el ombligo cicatrizará (Pomeranz, 2004; Snyder, 2007).
y periumbilicales, y la persistencia congénita del uraco y el conducto A veces la piel crece sobre el granuloma y, como el tejido inflamatorio
onfalomesentérico. se encoge, acabará como un colgajo de piel. Estos colgajos normalmente
se vuelven más pequeños con el tiempo. La cauterización con nitrato
de plata del tejido de granulación eliminará o disminuirá el tamaño del
Caída tardía del cordón umbilical granuloma umbilical y permitirá que la piel cicatrice. Generalmente no
El cordón umbilical generalmente se seca y se cae en la primera sema- es necesaria la extirpación quirúrgica a menos que las lesiones persistan
na de vida, aunque el momento de esta separación es muy variable. (Snyder, 2007).
Parte de esta variabilidad depende del cuidado del cordón después
del nacimiento, ya que la colonización bacteriana parece desempeñar Persistencia del uraco y del conducto
un papel importante en el proceso. Esto explica por qué los cordones
que se tratan con una pauta antiséptica más intensa generalmente se onfalomesentérico
caen más tarde que los que simplemente se mantienen limpios y secos El uraco y el conducto onfalomesentérico son estructuras embrionarias
(Mullany et al., 2013). del cordón umbilical que normalmente involucionan o se obliteran.
No existe una definición estándar de «caída tardía del cordón Cuando persisten, los vestigios pueden causar problemas. El uraco es
umbilical», pero en EE. UU., si el cordón no se cae en las primeras el vestigio del alantoides, que en las primeras semanas de desarrollo
3 semanas, aumenta la preocupación por deficiencias inmunitarias, es una protrusión de la superficie interna o endodérmica del embrión
anomalías del uraco o infección (Razvi et al., 2001). Debe sospecharse que se une al saco vitelino (situado en el pedículo embrionario), que
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déficit de adhesión leucocítica cuando un recién nacido presenta caída luego se convierte en el cordón umbilical. El punto de unión del alan-
tardía del cordón e infección de partes blandas alrededor del tallo toides con el embrión en desarrollo forma parte del intestino distal,
umbilical (van de Vijver et al., 2013). Sin embargo, es importante que finalmente se convierte en la vejiga. El conducto onfalomesentérico
recordar que la mayoría de las infecciones relacionadas con el cordón (también conocido como conducto vitelino) es también una protrusión
umbilical no se relacionan con deficiencias inmunológicas. de la superficie endodérmica interna del embrión que se une al saco
vitelino, pero el punto de conexión del conducto onfalomesentérico
Infecciones umbilicales y periumbilicales está en el intestino medio. El conducto onfalomesentérico generalmen-
te desaparece antes de la novena semana de gestación.
La falta de una barrera epitelial en el ombligo no cicatrizado, la colo- La persistencia del uraco y del conducto onfalomesentérico puede
nización bacteriana normal de la piel y la posible contaminación de la presentarse con secreción a través del ombligo, con una masa umbilical
zona durante el cuidado del cordón hacen que el ombligo sea vulnerable o periumbilical, o con ambos. El tamaño y la ubicación del vestigio
a la invasión bacteriana. Los recién nacidos de madres no vacunadas y persistente a menudo determinan la presentación clínica, más que su
con cuidado inadecuado del cordón umbilical corren riesgo de contraer origen embrionario. Los diferentes tipos de vestigios embrionarios se

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1070 PA RT E XI V Aparato digestivo

• Figura 73.1  Esquema de los tipos de anomalías del uraco y del conducto onfalomesentérico.

representan esquemáticamente en la figura 73.1 e incluyen pólipos infectan. Es necesario extirparlos, aunque, si están infectados, primero
umbilicales, senos, fístulas, quistes y bandas. Estos tipos pueden existir pueden requerir incisión y drenaje, y posteriormente, extirpación de
solos o combinados. intervalo.
Los pólipos umbilicales son una causa mucho menos frecuente de El vestigio persistente completo del uraco o del conducto onfalo­
masa o de secreción umbilical que los granulomas. Un pólipo umbilical mesentérico es una fístula entre el ombligo y la vejiga o entre el om­
es un vestigio epitelial del conducto onfalomesentérico o del uraco bligo y el intestino, respectivamente (v. fig. 73.1). Cuando la fístula se
que persiste a nivel de la piel, y se presenta como una masa redonda, comunica con la vejiga, se conoce como uraco permeable y puede dre­
húmeda, de color rojo brillante. El exudado seroso o las secreciones nar la orina. Cuando la fístula se comunica con el tubo digestivo,
mucosas del epitelio son responsables del drenaje umbilical. A diferen- se conoce como fístula onfalomesentérica (o vitelina) y puede drenar
cia del tejido de granulación de un granuloma umbilical, el epitelio de el contenido intestinal. El tratamiento de las fístulas consiste en la
un pólipo no responderá a la cauterización con nitrato de plata, por lo extirpación quirúrgica y el cierre de la vejiga o el intestino, respectiva­
que se requiere la escisión quirúrgica. mente (Snyder, 2007).
El vestigio parcial y persistente del uraco o del conducto onfalo-
mesentérico que se abre a la piel del ombligo se conoce como seno del Defectos de la pared abdominal
uraco o seno umbilical (u onfalomesentérico) (v. fig. 73.1). Al igual que
los pólipos umbilicales, los senos se manifiestan con drenaje umbilical En este apartado se repasan la gastrosquisis y el onfalocele, que son
y requieren escisión quirúrgica. Los vestigios parcial y persistente del los dos defectos más comunes de la pared abdominal observados en la
uraco o del conducto onfalomesentérico abierto a la luz de la vejiga o UCIN, y se tratan brevemente otros menos frecuentes.
del tubo digestivo se conocen como divertículo vesical o divertículo de La gastrosquisis y el onfalocele se parecen en que ambos son defectos
Meckel, respectivamente (v. fig. 73.1). Los vestigios parcial y persistente congénitos de la pared abdominal que se manifiestan con herniación
del uraco o del conducto onfalomesentérico que no se comunica con del contenido abdominal fuera del cuerpo. Ambas entidades requieren
la piel ni con la vejiga o la luz intestinal subyacentes se conocen como la reducción del contenido herniado a la cavidad abdominal y el cierre
quistes del uraco u onfalomesentérico, respectivamente (v. fig. 73.1), y del defecto de la pared. Sin embargo, la gastrosquisis y el onfalocele
se presentan como una masa en la línea media de la pared abdominal, son trastornos distintos que presentan diferencias importantes en la
en o cerca del ombligo. Los quistes también pueden manifestarse anatomía y en los procesos asociados que explican su tratamiento y
con aumento de tamaño, dolor, sensibilidad en la zona y fiebre si se resultados específicos (fig. 73.2).

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CAPÍTULO 73 Defectos de la pared abdominal 1071

• Figura 73.2  Gastrosquisis frente a onfalocele.

Gastrosquisis evanescente pueden tener poco o nada de intestino viable fuera del
abdomen y sufrir de síndrome del intestino corto.
La gastrosquisis es un defecto circular de la pared abdominal situado La prevalencia de la gastrosquisis es de 2,3-4,4 casos por cada 10.000
a la derecha de un cordón umbilical normalmente inserto, con nacidos vivos (Kirby et al., 2013). No hay predilección de género,
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herniación de una porción variable de intestino fuera de la cavidad pero la incidencia es más alta en las familias blancas hispanas y no
abdominal y, posiblemente, de partes de otros órganos. No tiene hispanas (Jones et al., 2016). Por razones desconocidas, su incidencia
membrana de recubrimiento, y el intestino está expuesto directamen- está aumentando en todo el mundo. En EE. UU., la incidencia casi se
te al líquido amniótico en el período prenatal y al aire después del duplicó entre 1995 y 2005 (de 2,3 a 4,4 por cada 10.000 nacidos vivos)
nacimiento (v. fig. 73.2). Es excepcional que una parte importante (Parker et al., 2010), y hubo un aumento del 30% en la incidencia
del hígado se hernie por una gastrosquisis. En raras ocasiones, el entre 1995-2005 y 2006-2012 (Jones et al., 2016).
defecto de la gastrosquisis está en posición especular en el lado La gastrosquisis, por lo general, es un defecto aislado que ocurre
izquierdo del ombligo. esporádicamente. La etiología probablemente sea multifactorial. El
La gastrosquisis se puede clasificar como «simple» o «compleja». factor de riesgo de mayor peso es la baja edad materna. Las madres
Se denomina «compleja» cuando existe atresia intestinal asociada, menores de 20 años tienen un riesgo varias veces mayor de tener un
vólvulo segmentario o del intestino medio, isquemia intestinal, per- bebé con gastrosquisis (Loane et al., 2007; Chabra et al., 2011; Skars-
foración intestinal o enterocolitis necrosante. La gastrosquisis fugaz es gard et al., 2015). Hay otros muchos factores maternos que se han
una forma de gastrosquisis compleja en la que el músculo de la pared relacionado con esta malformación, entre los que están el consumo
abdominal que rodea el defecto de la gastrosquisis se cierra dentro del de drogas, el bajo índice de masa corporal, el tabaquismo, los antide-
útero y estrangula el intestino (fig. 73.3). Los bebés con gastrosquisis presivos, el estado civil soltera y las infecciones genitourinarias durante

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1072 PA RT E XI V Aparato digestivo

• Figura 73.3  Gastrosquisis evanescente. Obsérvese que el defecto


de la gastrosquisis se ha cerrado por completo, lo que provoca una
restricción importante en la irrigación mesentérica y atresia intestinal, • Figura 73.4  Gastrosquisis con una banda desde el mesenterio hasta
así como una pequeña asa ciega aislada en el exterior de la pared el ombligo. El bastoncillo está debajo de la banda.
abdominal. En el interior del abdomen existe una zona proximal de
atresia del intestino delgado que está completamente separada del
extremo cerrado del intestino distal restante.
hígado que sobresalga fuera de la pared corporal y cordón umbilical
normalmente inserto en la pared corporal, justo a la izquierda del
defecto.
la gestación (Centers for Disease Control and Prevention, 2007; Parker El equipo multidisciplinar para la atención óptima de los pacientes
et al., 2010; Hook-Dufresne et al., 2015). La tendencia de la gastros- con gastrosquisis lo forman especialistas en medicina materno-fetal,
quisis a aparecer en conglomerados de casos sugiere la influencia de neonatólogos y cirujanos pediátricos. Se recomienda encarecidamente
agentes teratógenos. Los estudios poblacionales han mostrado una la consulta prenatal con este grupo multidisciplinar. Los fetos con
mayor incidencia en áreas donde se usa la atracina (un producto quí- gastrosquisis tienen un riesgo importante de RCIU, parto prematuro
mico agrícola habitual) y donde se encuentran concentraciones elevadas espontáneo y muerte fetal (Carpenter et al., 1984; Netta et al., 2007;
de este producto en el agua (Mattix et al., 2007; Waller et al., 2010). Santiago-Munoz et al., 2007; Barseghyan et al., 2012). No se realiza
La embriología de la gastrosquisis no está completamente definida; el cariotipo fetal de manera rutinaria, ya que no parece existir una
sin embargo, se han postulado varias teorías, entre las que están: etiología genética específica de la gastrosquisis y los cromosomas suelen
1) fallo de la unión del pliegue ventral lateral derecho con otros plie- ser normales. A los fetos con gastrosquisis se les realiza un seguimiento
gues corporales de la pared en el ombligo, o 2) fallo del desarrollo del ecográfico riguroso cada 2-3 semanas para valorar la anatomía intestinal
celoma umbilical cuando el intestino primitivo se alarga (Feldkamp y el crecimiento fetal.
et al., 2007; Sadler, 2010). No se conoce una etiología genética espe- El momento del parto sigue siendo controvertido en esta enferme-
cífica para la gastrosquisis, aunque existen casos raros de familias con dad. Hay quien piensa que el parto prematuro programado reduce las
múltiples descendientes afectados. complicaciones intestinales posnatales y la incidencia de muerte fetal
A diferencia del onfalocele, las anomalías extraintestinales no se intrauterina; sin embargo, no hay datos de gran calidad, y los estu-
asocian con la gastrosquisis de manera habitual. En un gran estudio dios retrospectivos presentan resultados contradictorios. Una revisión
internacional, el 4,5% de los participantes presentaban anomalías del Cochrane incluyó solo un estudio prospectivo aleatorizado, que tuvo
sistema nervioso central; el 2,5%, anomalías cardiovasculares; el 2,2%, muy poco poder estadístico para resolver el problema, por lo que se
en las extremidades, y el 1,9% tenían anomalías renales (Mastroiaco- recomendó mayor investigación (Grant et al., 2013).
vo et al., 2007). Las anomalías intestinales son las malformaciones El argumento contra el parto prematuro planificado se refuerza
asociadas más comunes en los pacientes con gastrosquisis. Casi todos con estudios actuales de resultados que demuestran firmemente que
los bebés con gastrosquisis presentan malrotación intestinal, ya que el el parto prematuro es una fuente importante de resultados adversos
intestino no regresó de manera normal a la cavidad abdominal durante en recién nacidos con gastrosquisis (Boutros et al., 2009; Maram-
el desarrollo fetal y no tuvo posibilidad de rotación normal y fijación reddy et al., 2009; South et al., 2013; Carnaghan et al., 2014; Over-
al retroperitoneo. La atresia intestinal aparece en el 10-25% de los cash et al., 2014). Además, la prevalencia semanal de muerte fetal
bebés con gastrosquisis (Kronfli et al., 2010; Ghionzoli et al., 2012) y intrauterina no aumenta después de la semana 35 de gestación (South
está causada probablemente por la contracción de la pared abdominal et al., 2013). Por lo tanto, muchos centros, incluido el nuestro, ahora
(v. fig. 73.3) o por bandas asociadas que pueden afectar al flujo de abogan por el parto cercano al término.
sangre al intestino (fig. 73.4). Existe un consenso más sólido con respecto a la vía de parto para
Con la atención prenatal sistemática en el mundo desarrollado, los niños con gastrosquisis, ya que la cesárea parece no ofrecer ningún
alrededor del 90% de los casos de gastrosquisis se diagnostican beneficio para el bebé o la madre (Segel et al., 2001; Salihu et al., 2004;
antes del nacimiento. El nivel de α-fetoproteína (AFP) materna Abdel-Latif et al., 2008). La cesárea está reservada para las indicaciones
suele estar elevado en la gastrosquisis fetal (Saller et al., 1994), y obstétricas habituales.
el diagnóstico puede confirmarse mediante ecografía prenatal al Después del parto, debe valorarse cuidadosamente la perfusión del
inicio del segundo trimestre. En la ecografía prenatal, los hallazgos contenido herniado. Si se sospecha isquemia intestinal o infarto, está
diagnósticos de gastrosquisis son asas intestinales extraabdominales indicada la consulta quirúrgica inmediata para la detorsión intestinal e
sin saco cobertor. incluso la ampliación de emergencia del defecto de la gastrosquisis. Si
La gastrosquisis puede ser difícil de diferenciar de un onfalocele las vísceras están bien perfundidas, es importante que a continuación se
roto. Los hallazgos a favor del diagnóstico de gastrosquisis en lugar coloque una bolsa de plástico transparente sobre el intestino expuesto,
de un onfalocele roto son un defecto de la pared abdominal relati- a modo de cubierta temporal que minimice la pérdida de calor por
vamente pequeño (generalmente < 4 cm de diámetro), ausencia de evaporación y de líquido. La bolsa se puede colocar sobre toda la parte

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CAPÍTULO 73 Defectos de la pared abdominal 1073

• Figura 73.5  Gastrosquisis con intestino herniado en un silo de Silas-


tic que ha sido cosido a un defecto de la pared abdominal ampliado
quirúrgicamente.

• Figura 73.6  Gastrosquisis con intestino herniado en un silo prefor-


inferior del cuerpo, desde los pezones hasta los pies. Hay que canalizar mado de Silastic con resortes que se ha colocado en el defecto de la
una vía periférica para comenzar a administrar líquidos intravenosos y gastrosquisis.
antibióticos de amplio espectro. También se colocará una sonda oro- o
nasogástrica para aspirar y vaciar el estómago. Se ha de mantener al
bebé caliente y seco durante la reanimación inicial.
Después de la reanimación y estabilización iniciales, el paciente
es trasladado a una UCIN con servicio de cirugía pediátrica. Para el
transporte no es necesaria la intubación endotraqueal a menos que
esté indicada para soporte respiratorio. El bebé debe colocarse con
el lado derecho ligeramente inclinado hacia abajo para evitar que se
estrangule el mesenterio y maximizar así el flujo de sangre al intestino.
La sonda oro- o nasogástrica debe permanecer en modo de aspira-
ción intermitente baja durante el traslado. Se debe controlar la perfusión
intestinal.
El objetivo de la reparación quirúrgica en la gastrosquisis es la
reducción segura de las partes evisceradas y el cierre definitivo de la
pared abdominal. Existen múltiples opciones quirúrgicas para lograr
este objetivo, y tanto la reparación primaria como por etapas son
alternativas aceptables.
La reparación primaria tradicional de la gastrosquisis consiste en la
sutura del defecto de la fascia, en el quirófano, con anestesia general.
Esto se realiza mientras se monitoriza la presión intragástrica o la vesical
para asegurarse de que el cierre no cause un síndrome compartimental
abdominal. En algunos casos se requiere un parche protésico para
cerrar el defecto. • Figura 73.7  Gastrosquisis después de la reducción del intestino
El cierre por etapas, con cobertura inicial de silo, también es un herniado al interior del abdomen y cobertura sin sutura con el cordón en
procedimiento aceptado que requiere una reducción posterior del espiral del defecto de gastrosquisis de la pared abdominal.
intestino herniado y el cierre de la pared abdominal. Los silos pueden
estar hechos de Silastic u otras láminas plásticas, cosidos de manera
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circunferencial a los bordes de la fascia del defecto original o ampliado técnica, el cordón se deja relativamente largo en el momento del parto
de la gastrosquisis (fig. 73.5). Otra técnica es usar un silo preformado de y las partes evisceradas se reducen al interior de la cavidad abdominal
Silastic, con resortes, que se fabrica con diferentes diámetros y se puede mientras se monitoriza la presión intraabdominal. Los defectos de
insertar en el defecto de la pared abdominal a pie de cuna (fig. 73.6). la fascia y de la piel se cubren con el cordón umbilical colocado en
Una vez que se coloca el silo, el intestino se va reduciendo gradualmente espiral, que se fija con un apósito (fig. 73.7). En la mayoría de los
durante varios días al interior de la cavidad abdominal, ya sea solo por casos, el defecto se contrae y la piel cicatriza debajo y alrededor del
gravedad o mediante presión externa. Cuando la reducción lleva más cordón en 14 días. Usando esta técnica, algunos niños tendrán una
de 7-10 días, aumenta el riesgo de dehiscencia del silo desde la pared hernia umbilical persistente que se puede reparar entre los 3 y los 4
abdominal. El cierre primario diferido de la fascia se realiza cuando el años de edad.
contenido abdominal se ha reducido casi por completo al interior de A pesar de muchos estudios retrospectivos, análisis de bases de
la cavidad abdominal. datos y metaanálisis, no está claro qué abordaje quirúrgico es mejor
El cierre primario del cordón umbilical es una técnica relativamente para un bebé en particular con gastrosquisis (Mills et al., 2010;
nueva que usa el propio muñón umbilical del paciente como apósito Alali et al., 2011; Bradnock et al., 2011; McNamara et al., 2011;
biológico para sellar el defecto de la gastrosquisis sin intentar el cierre Murthy et al., 2014; Stanger et al., 2014; Emami et al., 2015; Ross
primario de la fascia (Sandler et al., 2004; Choi et al., 2012). En esta et al., 2015). Muchos estudios tienen un sesgo de selección impor-

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1074 PA RT E XI V Aparato digestivo

tante y no analizan por separado a los pacientes con gastrosquisis umbilical supuestamente es normal. Dado que solo existe un ani-
compleja, lo que dificulta la comparación de los resultados. El único llo umbilical abierto y no existe defecto de la pared abdominal, la
estudio aleatorizado y prospectivo para evaluar el cierre primario de reparación quirúrgica es mucho más fácil. Más importante aún:
la fascia frente al diferido se publicó en 2008 y no encontró dife- a diferencia de los recién nacidos con onfalocele, los que nacen con
rencias significativas en los resultados entre ambas técnicas (Pastor hernia del cordón umbilical tienen un bajo riesgo de anomalías
et al., 2008). Un metaanálisis publicado recientemente sugiere que el asociadas. Sin embargo, la diferenciación clínica puede ser difícil, y
cierre primario diferido puede que se relacione con mejores medidas algunos médicos no hacen distinción entre las dos malformaciones
de resultados cuando los estudios con sesgo de selección se eliminan (Raju et al., 2015).
del análisis (Kunz et al., 2013). Los resultados de los estudios actuales La incidencia de onfalocele se estima entre 1,5-3 por cada 10.000
sugieren que las estrategias de cierre primario y diferido son seguras nacimientos (Marshall et al., 2015). Dicha incidencia se ha man-
y efectivas. tenido estable en el tiempo, a diferencia de la de la gastrosquisis,
La elección del cierre primario de la fascia frente al diferido utili- que está aumentando (Kirby et al., 2013; Marshall et al., 2015).
zando un silo puede ser menos relevante en la etapa del cierre primario La mayoría de los casos de onfalocele son esporádicos, pero hay
del cordón umbilical. El cierre primario del cordón umbilical es exitoso casos familiares infrecuentes (Frolov et al., 2010). Entre los factores
en la mayoría de los bebés con gastrosquisis, puede realizarse en la de riesgo están la edad materna inferior a 20 años o mayor de 40
cabecera de la cuna, no siempre requiere anestesia general y reduce (Byron-Scott et al., 1998).
la duración de la ventilación mecánica (Riboh et al., 2009; Emami El desarrollo normal del abdomen implica que el disco embrio-
et al., 2015). En nuestra experiencia, la técnica se asocia con estancias nario plano de tres capas se pliegue desde la parte superior, inferior
más cortas en la UCIN y menor tiempo hasta el inicio de la nutrición y ambos lados para encontrarse en el anillo umbilical que rodea el
enteral (Chesley et al., 2015). cordón umbilical y formar el torso cilíndrico, entre la cuarta y la quinta
Los bebés con gastrosquisis no complicada presentan estancias hos- semanas de gestación. El tubo digestivo también comienza a crecer muy
pitalarias promedio de entre 4 y 6 semanas, lo que se debe principal- rápidamente al principio del primer trimestre y, debido a la falta de
mente a su incapacidad para tolerar completamente las tomas por vía espacio suficiente en la cavidad abdominal, se produce una herniación
enteral. Los bebés con gastrosquisis complicada por lo general tienen fisiológica del intestino a través del anillo umbilical, hacia el cordón
estancias hospitalarias mucho más largas. umbilical. En torno a las 10-12 semanas de gestación, el intestino
En el mundo desarrollado, los resultados de los niños nacidos con normalmente vuelve a la cavidad abdominal en un patrón preciso de
gastrosquisis son excelentes. Se puede esperar una supervivencia de rotación y posterior fijación para asumir su posición final. No se conoce
más del 95% en los casos de gastrosquisis no complicada. Los bebés por completo la embriología del onfalocele, pero se cree que implica
con gastrosquisis compleja tienen mayor riesgo de mortalidad general, un plegamiento incompleto de la pared abdominal y el fallo del tracto
síndrome del intestino corto, obstrucción intestinal, enterocolitis intestinal para regresar desde el cordón umbilical (Sadler, 2010; Torres
necrosante y necesidad de nutrición parenteral domiciliaria después et al., 2015).
de recibir el alta (Bergholz et al., 2014). Aunque solo una pequeña En contraste con el relativamente bajo riesgo de anomalías asociadas
minoría de los bebés con gastrosquisis necesitarán una resección intes- en los recién nacidos con gastrosquisis, en los bebés con onfaloce-
tinal extensa, esta anomalía sigue siendo la causa principal del sín- le se han relacionado frecuentemente anomalías que tienen mucha
drome del intestino corto en la mayoría de las series de niños con importancia en cómo se tratan estos pacientes y en su resultado final
insuficiencia intestinal (Modi et al., 2007; Javid et al., 2010). A pesar (Lakshminarayanan y Lakhoo, 2014). Las alteraciones cromosómicas
de los excelentes resultados generales para la gastrosquisis en el mundo son frecuentes, como las trisomías 13 y 18, especialmente en los fetos
desarrollado, la mortalidad sigue siendo muy alta en los países en vías diagnosticados al principio de la gestación (Prefumo e Izzi, 2014;
de desarrollo (Ford et al., 2016). Marshall et al., 2015). Además, son comunes otras malformaciones
Los resultados de la gastrosquisis a largo plazo son favorables. La congénitas, especialmente las cardiopatías, que pueden encontrar-
mayoría de los pacientes tendrán una función digestiva normal y se hasta en el 50% de los recién nacidos con onfalocele (Marshall
resultados normales en el desarrollo neurológico (Gorra et al., 2012; et al., 2015). Finalmente, el onfalocele es un componente de muchos
Harris et al., 2016). Aunque la gastrosquisis casi siempre se asocia con síndromes diferentes de malformaciones congénitas, incluido el sín-
malrotación intestinal, el riesgo de padecer posteriormente un vólvulo drome de Beckwith-Wiedemann, que aparece en el 6% de los recién
del intestino medio es bajo, probablemente porque las adherencias nacidos con onfalocele y hasta en el 10-20% de los recién nacidos que
intraabdominales que se derivan de la reducción y el cierre limitan la se cree que presentan un onfalocele aislado en la valoración prenatal
capacidad del intestino para girarse. Estos pacientes pueden desarrollar (Corey et al., 2014).
hernias en el sitio de la reparación. Finalmente, aunque los niños con Se puede sospechar un diagnóstico prenatal de onfalocele cuan-
gastrosquisis suelen presentar criptorquidia, alrededor del 50% de do están elevados los niveles de AFP sérica materna o cuando existe
los pacientes experimentarán un descenso testicular espontáneo y no aneuploidía fetal, pero el diagnóstico definitivo se hace por ecografía
requerirán intervención. prenatal. Los hallazgos ecográficos prenatales que se encuentran en
el onfalocele son órganos abdominales herniados fuera de la cavidad
abdominal, cubiertos por una membrana e inserción anormal del
Onfalocele cordón umbilical en la membrana y no en la pared abdominal (Prefumo
El onfalocele es un defecto de la línea media de la pared abdominal e Izzi, 2014). El diagnóstico del onfalocele a través de la ecografía
con herniación del intestino y posiblemente del hígado y otros órganos prenatal puede realizarse de forma fiable después del primer trimestre,
fuera del abdomen. El contenido herniado está cubierto por una mem- cuando el intestino (que está fisiológicamente herniado en el cordón
brana formada por peritoneo en el interior, amnios en el exterior y umbilical) regresa a la cavidad abdominal. Dado que el hígado nunca
gelatina de Wharton entre esas dos capas. El cordón umbilical se inserta está fuera de la cavidad abdominal de forma normal, el hallazgo de
en la membrana, en lugar de la pared abdominal (v. fig. 73.3). Por lo este órgano fuera del abdomen permite un diagnóstico potencial de
general, la membrana del onfalocele está intacta, pero a veces se rompe onfalocele más temprano y más preciso (Tassin y Benachi, 2014).
y las vísceras herniadas no están cubiertas. Los casos de onfalocele roto También es importante tener en cuenta la presencia o ausencia de
se pueden confundir con gastrosquisis, pero existen diferencias claras hígado en el onfalocele, ya que su ausencia se asocia con un mayor
(v. apartado «Gastrosquisis»). riesgo de otras anomalías (Prefumo e Izzi, 2014).
Algunos autores hacen una distinción entre onfalocele y hernia El manejo prenatal del onfalocele incluye la valoración de las
del cordón umbilical. En una hernia del cordón umbilical, el anillo anomalías asociadas y el control del crecimiento fetal. Todos los fetos

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CAPÍTULO 73 Defectos de la pared abdominal 1075

con sospecha de onfalocele deben someterse a pruebas de imagen


para anomalías estructurales. La ecocardiografía fetal también está
indicada debido al alto riesgo de cardiopatías congénitas. Debido al
alto riesgo de RCIU, se realiza un control prenatal del crecimiento
fetal. Se recomiendan otros exámenes específicos para valorar la
hipoplasia pulmonar asociada y el tamaño relativo del defecto, de
cara a proporcionar un mejor asesoramiento prenatal acerca de la
evolución hospitalaria esperada y el pronóstico a largo plazo (Danzer
et al., 2012b).
Otros cuidados obstétricos, incluidos el momento y el método de
parto, generalmente están determinados por factores maternos y fetales
habituales más que por la presencia de onfalocele. Normalmente, no
existe de manera específica ningún beneficio en un parto prematuro, y
puede ser perjudicial (Porter et al., 2009). La cesárea no está indicada
para la mayoría de fetos con un onfalocele, aunque para los que tienen
defectos grandes que contengan el hígado (p. ej., onfaloceles gigantes)
ha sido recomendada y se realiza con asiduidad (Segel et al., 2001; • Figura 73.8  Pequeño onfalocele. Obsérvese la inserción del cordón
Biard et al., 2004) para evitar la rotura del saco. umbilical en la membrana intacta del onfalocele.
Después del parto, la valoración inicial y la reanimación de un bebé
con un onfalocele siguen el mismo orden y prioridad que para cualquier
recién nacido. Durante la reanimación inicial, el recién nacido debe
manipularse cuidadosamente para evitar que la membrana se desgarre. mantiene intacto. La mejor forma de hacerlo es tratar la membrana con
Después de la reanimación inicial, el onfalocele debe ser inspeccionado agentes tópicos que permitan que el saco epitelice (Ledbetter, 2012). Se
para confirmar que está intacto, y posteriormente se cubre con un han utilizado distintos agentes tópicos para tratar el saco del onfalocele
apósito no adherente para proteger el saco. (Whitehouse et al., 2010; Ein y Langer, 2012; Nicoara et al., 2014).
La membrana de un onfalocele roto a veces puede repararse (Akak- A medida que el saco va curando, el bebé va creciendo. El crecimiento
po-Numado et al., 2012), pero esto no siempre es posible. Cuando de la cavidad abdominal permite que los órganos herniados se reduzcan
no se puede reparar un onfalocele roto, el cuidado del paciente y del al interior del abdomen, solo con la gravedad o con mayor compresión
defecto de la pared abdominal siguen un camino más similar al de los externa. Además, el crecimiento pulmonar mejorará la capacidad del
recién nacidos con gastrosquisis, aunque el cierre quirúrgico suele ser bebé para tolerar una intervención quirúrgica. La reparación final de
más complicado, y tanto la mortalidad como la morbilidad son altas la pared abdominal se puede realizar meses o incluso años después
(Yamagishi et al., 2007). (Lee et al., 2006).
Los recién nacidos con onfalocele, especialmente grandes onfalo- Aunque no existe una definición consensuada para el onfalocele
celes, pueden tener insuficiencia respiratoria causada por hipoplasia gigante, se describe a menudo como el onfalocele con defecto de la
pulmonar e hipertensión pulmonar (Baerg et al., 2015), y pueden fascia mayor de 5 cm de diámetro o el que contiene una gran pro-
necesitar asistencia respiratoria (Panitch, 2015). Además, los bebés porción de hígado (Whitehouse et al., 2010). El tratamiento tópico
con síndrome de Beckwith-Wiedemann asociado pueden tener hipo- y el cierre diferido son herramientas importantes en el manejo del
glucemia y precisar glucosa suplementaria. Es necesaria una valoración onfalocele gigante cuando no hay posibilidad razonable de reducción
precoz de las posibles anomalías asociadas, especialmente cardiopatías temprana y cierre primario. Recomendamos la sulfadiacina de plata
congénitas, para diagnosticar las enfermedades que pueden requerir tópica, ya que es fácil de usar, segura y eficaz (Lee et al., 2006).
más tratamiento. Cualquier agente utilizado por vía tópica puede ser absorbido sis-
El objetivo del tratamiento quirúrgico del onfalocele es reducir los témicamente y ser potencialmente dañino para el bebé. Por ejemplo,
órganos herniados al interior de la cavidad abdominal y cerrar la pared. el mercurocromo puede provocar intoxicación por mercurio, y el
El cierre quirúrgico de un onfalocele no es urgente, siempre y cuando yodo se ha relacionado con hiper- e hipotiroidismo. La toxicidad
la membrana del onfalocele permanezca intacta, por lo que hay tiempo de la plata es un problema teórico a la hora de usar sulfadiacina de
de valorar las anomalías asociadas y el tratamiento de apoyo de otros plata u otros productos para el cuidado de heridas que contengan
problemas importantes. este metal; sin embargo, no se ha comunicado ningún signo ni
Cuando el onfalocele es relativamente pequeño (fig. 73.8) y el síntoma clínico.
bebé está estable, por lo general se realiza una operación temprana con La supervivencia y los resultados a largo plazo de fetos o recién
escisión de la membrana del onfalocele, reducción de los órganos her- nacidos con onfalocele se determinan principalmente por la grave-
niados y cierre de los músculos de la pared abdominal. Si el defecto es dad de las anomalías asociadas (Gamba y Midrio, 2014; Marshall
et al., 2015). Los bebés con onfaloceles gigantes presentan mayor
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demasiado grande para reducir los órganos y cerrar la pared abdominal


de forma segura en la misma operación, se puede hacer la reparación mortalidad y morbilidad debido al gran defecto de la pared abdominal
por etapas, con la colocación inicial del silo, seguida de la reduc- e hipoplasia e hipertensión pulmonar asociadas (Biard et al., 2004;
ción secuencial del silo y, por último, el cierre de la pared abdominal. Danzer et al., 2012a, 2015).
Esta estrategia es casi idéntica al abordaje por etapas que se utiliza a
menudo en la gastrosquisis (Ledbetter, 2012). El abordaje precoz por Otros defectos de la pared abdominal
etapas no siempre resulta exitoso si el defecto abdominal es grande y
hay una cantidad importante de contenido herniado que debe reducirse Anomalía del pedículo embrionario
a una cavidad abdominal relativamente pequeña. Además, la reducción La anomalía del pedículo embrionario, conocida también como com-
del contenido abdominal puede alterar la ventilación, lo que puede plejo miembro-pared, es un defecto grave, muy poco frecuente, del
resultar un problema grave en el contexto de una insuficiencia pulmo- abdomen y el tórax que casi siempre es letal. A través de la ecografía
nar subyacente (Tsakayannis et al., 1996). prenatal se pueden visualizar los órganos herniados del tórax y abdo-
Para evitar el estrés de la cirugía neonatal, la reparación del onfaloce- men, que están cubiertos por una membrana. Además, los fetos con
le puede retrasarse hasta que el bebé sea más grande y pueda tolerar una anomalía del pedículo embrionario por lo general presentan escoliosis
cirugía mayor. Este enfoque diferido puede realizarse cuando el saco se y, con frecuencia, otras malformaciones. Hay ausencia de cordón

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1076 PA RT E XI V Aparato digestivo

umbilical, o este es muy corto. En ausencia de cordón umbilical existen de la pared abdominal es una alteración en la que los contenidos
conexiones vasculares directas entre el feto y la placenta. Es importante intraabdominales sobresalen a través del músculo sano y las capas de
reconocer la anomalía del pedículo embrionario en las pruebas de fascia de la pared abdominal. Los defectos congénitos de la pared abdo-
imagen prenatales para que las familias puedan recibir asesoramiento minal tratados en el apartado anterior son distintos tipos de hernias.
prenatal adecuado (Pakdaman et al., 2015). A diferencia de los trastornos que se presentan en la etapa prenatal
o inmediatamente después del nacimiento, este apartado analizará
Extrofia vesical brevemente otras hernias de la pared abdominal que normalmente se
La extrofia vesical es una anomalía de la pared abdominal inferior, la presentan después del nacimiento, aunque su causa anatómica puede
pelvis y los órganos pélvicos en la que la vejiga abierta forma la parte deberse a una anomalía del desarrollo.
inferior del abdomen anterior. La vejiga abierta se acompaña de sepa-
ración de la sínfisis púbica. Es una anomalía rara, con una incidencia Diástasis de los rectos
de 3-5 casos por cada 100.000 nacimientos, y es el doble de frecuente Aunque la diástasis de los rectos es una variante de la normalidad
en niños que en niñas (Jayachandran et al., 2011). La etiología es des- y no una hernia, frecuentemente se confunde con una hernia de la
conocida, y se encuentra agrupada en el complejo de malformaciones pared abdominal, por lo que se analiza aquí. La sección central de
extrofia-epispadias. El tratamiento quirúrgico es necesario, pero no la pared abdominal anterior normal consta de dos músculos rectos
urgente, por lo que los pacientes pueden ser transferidos a centros abdominales que se extienden desde las costillas hasta la ingle. Entre
especializados para el tratamiento definitivo. El manejo temprano estos músculos existe una extensión de la fascia del músculo recto
consiste en proteger de posibles daños la mucosa vesical expuesta con conocida como la línea alba, que une los dos músculos rectos y crea una
apósitos no adherentes. La valoración de anomalías asociadas incluye pared abdominal sólida. La separación visible de los músculos rectos
la ecografía para las malformaciones de las vías urinarias superiores y con la línea alba intacta se conoce como diástasis de los rectos o rectus
una radiografía abdominal para analizar el grado de separación de los abdominis diastasis. En esta alteración, la capa musculoaponeurótica de
huesos ilíacos. la pared corporal está intacta, pero el abultamiento de la línea media de
la línea alba de la fascia cuando los músculos abdominales se contraen
Extrofia cloacal a menudo se confunde con una hernia.
La diástasis de los rectos aparece claramente en el examen físico
La extrofia cloacal es otra anomalía que se engloba en el complejo de como un abultamiento de la línea media de la pared abdominal, entre
malformaciones extrofia-epispadias. También se conoce como com- la apófisis xifoides y el ombligo. Los estudios de imagen no están indi-
plejo OEIS (onfalocele, extrofia, ano imperforado, disrafia espinal), cados. Aunque este trastorno puede suponer un problema estético en
sigla que describe sus características habituales. Es una anomalía rara, una mujer puérpera, en un bebé no supone un problema patológico
que aparece aproximadamente en 1 de cada 100.000 nacimientos, y y, generalmente, se va notando menos con el crecimiento normal. Se
se asocia con la deleción 1p36 (Feldkamp et al., 2011). La mayoría de ha recomendado el tratamiento quirúrgico en los adultos para mejorar
los pacientes presentan un defecto de la pared abdominal que en su la apariencia de la pared abdominal, pero no está indicado en recién
cara cefálica incluye un onfalocele. El onfalocele se continúa con una nacidos y niños (Akram y Matzen, 2014).
extrofia más caudal y compleja compuesta por dos mitades laterales
de la vejiga unidas a una extrofia intestinal central llamada placa cecal. Hernia epigástrica
Este complejo de extrofias se acompaña de diástasis de la sínfisis púbica Las hernias epigástricas son pequeños defectos fasciales en la línea alba
(similar a la observada en la extrofia vesical) y de ano imperforado. (la fascia de la línea media entre los músculos rectos del abdomen),
Puede estar asociada a disrafia espinal. a través de los cuales puede herniarse la grasa preperitoneal. Los
El peristaltismo intestinal y la presión abdominal a menudo con- defectos de la fascia suelen ser demasiado pequeños para palparse
ducen al prolapso del íleon terminal y de las luces del colon distal/ debido a que generalmente tienen solo unos pocos milímetros de
intestino distal que normalmente están unidas a la placa cecal. El diámetro, pero la grasa preperitoneal puede herniarse como un
tratamiento temprano consiste en poner un apósito no adherente sobre champiñón, solo con un pequeño tallo atravesando el defecto y una
la vejiga expuesta y la mucosa intestinal. La reconstrucción quirúrgica cabeza más grande en el tejido subcutáneo que puede ser visible y
es compleja y a menudo se realiza por etapas. La supervivencia global palpable (Coats et al., 2000). Las hernias epigástricas generalmente
es alta, pero hay una morbilidad importante a largo plazo, que incluye son asintomáticas, y la reparación quirúrgica puede posponerse hasta
anomalías anorrectales, de las vías urinarias y de la función neurológica más adelante en la vida.
(Versteegh et al., 2013).
Hernia umbilical
Síndrome del abdomen en ciruela pasa El anillo umbilical es la capa fascial normal que rodea el cordón umbi-
El síndrome del abdomen en ciruela pasa, también conocido como lical cuando atraviesa la pared abdominal. Representa la unión de los
síndrome prune belly y síndrome de Eagle-Barrett, es una rara afección pliegues superior, inferior y lateral de la pared corporal. Una hernia
que se caracteriza por una falta completa o parcial de la pared mus- umbilical es una protrusión del intestino o epiplón a través del ani-
cular abdominal y malformaciones genitourinarias graves. Una de llo umbilical abierto, que produce un abultamiento en el ombligo. El
las principales causas de mortalidad en los recién nacidos con este anillo umbilical normalmente se cierra después del nacimiento, pero
síndrome es la hipoplasia pulmonar, mientras que las anomalías de pueden pasar meses o años hasta que se vuelva demasiado pequeño para
las vías urinarias, que a menudo provocan insuficiencia renal termi- que el intestino se hernie a través de la pared abdominal.
nal, constituyen un componente importante de la morbilidad a largo Las hernias umbilicales por lo general no están presentes en el
plazo (Seidel et al., 2015; Arlen et al., 2016). Se han descrito varios nacimiento o en los primeros días de vida, pero pueden volverse
procedimientos de reconstrucción de la pared abdominal que supues- perceptibles después de algunas semanas. Son más comunes en los
tamente mejoran las funciones vesical y digestiva, además de mejorar bebés prematuros y mucho más comunes en los bebés afroamericanos
la apariencia (Hassett et al., 2012). que en los caucásicos. La mayoría de las hernias umbilicales son
esporádicas, pero, por razones desconocidas, algunas familias pre-
Hernias de la pared abdominal sentan mayor riesgo. Son más evidentes cuando aumenta la presión
Las hernias se producen cuando el contenido de una cavidad corporal intraabdominal con el llanto o el esfuerzo, pero generalmente no
se extiende a través de la pared normal de esa cavidad. La hernia causan dolor ni molestias. La gran mayoría de las hernias umbilicales

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CAPÍTULO 73 Defectos de la pared abdominal 1077

• Figura 73.9  Hernia inguinal en un bebé. Hernia inguinal derecha en una niña (A) y en un niño (B).
Obsérvese la asimetría en el área inguinal con el bulto prominente que pone de manifiesto la hernia.

se cierran espontáneamente antes de la edad escolar y los síntomas contenido no se puede reducir al interior del abdomen. Por lo tanto,
son poco frecuentes en la vida temprana, por lo que la reparación una hernia inguinal no reducible o incarcerada requiere una valoración
quirúrgica generalmente se retrasa hasta los 3-5 años o hasta que quirúrgica urgente. En los recién nacidos que por lo demás estén
aparezcan los síntomas (Kelly y Ponsky, 2013). sanos, las hernias inguinales se reparan de manera electiva poco des-
pués de su diagnóstico, ya que la operación se tolera bien y el riesgo
Hernia inguinal e hidrocele de la anestesia es bajo (Davidson et al., 2016). Los bebés prematuros
Las hernias inguinales son la protuberancia de los contenidos intraab- son propensos a la apnea después de la anestesia general, por lo que la
dominales en la ingle, a través de la pared abdominal (fig. 73.9). Esto duración ideal de una intervención quirúrgica en estos niños es con-
puede ser consecuencia de una lesión o debilidad muscular de la pared trovertida (Duggan et al., 2015; Sulkowski et al., 2015). Un bebé con
abdominal en los adultos, pero, en los recién nacidos, la hernia es la hernia inguinal presenta mayor riesgo de desarrollar una hernia contra­
consecuencia de la protrusión congénita persistente del peritoneo a lateral en el futuro, pero el riesgo puede no ser lo suficientemente
través de las aberturas fisiológicas, interna y externa del anillo hacia alto como para justificar la reparación «profiláctica» sistemática de la
los músculos de la pared abdominal. Esta protrusión peritoneal se hernia (Wenk et al., 2015).
denomina proceso vaginal patente. Al atravesar la pared abdominal, Las hernias debutan con bultos en la ingle que pueden extenderse
está inmediatamente adyacente a las estructuras del cordón espermá- hacia el escroto o los labios mayores. Cuando solo hay líquido en
tico en los varones y al ligamento redondo del útero en las niñas. En un proceso vaginal persistente, se emplea el término hidrocele. Los
los niños, el proceso vaginal es el camino del descenso normal del tes- hidroceles pueden ser simples colecciones presentes al nacer en la bolsa
tículo, y por lo general se cierra, excepto una pequeña bolsa alrededor fisiológica alrededor del testículo o pueden desarrollarse después del
del testículo. Cuando permanece abierto y es lo suficientemente nacimiento a lo largo de cualquier parte del trayecto del proceso vaginal.
grande, la presión en el abdomen puede permitir que el contenido Los hidroceles presentes al nacer pueden resolverse espontáneamente,
intraabdominal pase a través de la pared abdominal, incluso hasta el aunque el proceso puede llegar a durar 1 año. Los que se desarrollan
escroto. Cuando los órganos o partes de ellos sobresalen, hablamos de después del nacimiento es muy probable que tengan una comunicación
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hernia, y cuando solo el líquido pasa al proceso vaginal, de hidrocele abierta al abdomen y poco probable que se resuelvan, por lo que se
(Kelly y Ponsky, 2013). tratan como hernias inguinales, aunque su reparación no es urgente.
Aproximadamente el 1% de los niños tendrán una hernia inguinal. Los hidroceles más grandes pueden ser difíciles de diferenciar de las
Las hernias son mucho más frecuentes en los niños que en las niñas hernias inguinales, especialmente cuando el líquido de su interior se
(Grosfeld, 1989). También son mucho más comunes en los prema- extiende hacia el conducto inguinal.
turos en comparación con los bebés a término (Peevy et al., 1986).
A diferencia de las hernias umbilicales, las inguinales no cicatrizan Lecturas recomendadas
espontáneamente y tienden a hacerse más grandes con el tiempo. El
mayor riesgo de una hernia inguinal es la posibilidad de estrangulación Frolov P, Alali J, Klein MD. Clinical risk factors for gastroschisis and
de su contenido, y puede existir isquemia intestinal que ponga en omphalocele in humans: a review of the literature. Pediatr Surg Int
peligro la vida. Otra complicación es la reducción del suministro 2010;26:1135-1148.
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Surg 1996;31:1088-1090, discussion 1090-1091. ruptured giant omphalocele. Pediatr Surg Int 2007;23:199-201.
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Palabras clave
Pared abdominal
Gastrosquisis
Hernia
Onfalocele
Cordón umbilical
Ombligo

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74
Reflujo gastroesofágico neonatal
MORGAN K. RICHARDS Y ADAM B. GOLDIN

PUNTOS CLAVE Fisiología anómala: enfermedad por reflujo


• El reflujo gastroesofágico es fisiológico en los recién nacidos, pero, gastroesofágico
cuando se asocia con complicaciones, se clasifica como enfermedad
por reflujo gastroesofágico (ERGE) y puede justificar una intervención. En cambio, la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) es
• Los síntomas de reflujo gastroesofágico se superponen el pasaje fisiopatológico de material gástrico hacia el esófago, que
con los de muchas otras afecciones frecuentes. se asocia con una variedad de síntomas y/o complicaciones impor-
• Los síntomas fisiopatológicos de los recién nacidos atribuidos a menudo tantes (Milla et al., 2002; Gold, 2004; Hassall, 2005; Vandenplas
a ERGE se pueden dividir en tres categorías: esofágicos benignos, et al., 2009). La ERGE es infrecuente en recién nacidos y afecta solo
esofágicos graves y extraesofágicos. a 1 de cada 300, aunque se considera que ciertas poblaciones, como
• No hay ninguna prueba de referencia para el diagnóstico de ERGE recién nacidos prematuros o en estado crítico, presentan un riesgo más
en recién nacidos; por consiguiente, la elección de la intervención alto (Henry, 2004).
y la medida de su éxito deben estar guiadas por los síntomas Sin embargo, la complejidad para distinguir RGE de ERGE reside
de presentación. en definir síntomas y complicaciones significativos, y en probar con
• Ningún antagonista de la histamina ni inhibidor de la bomba de protones claridad que estos son directamente causados por el pasaje de contenido
está aprobado por la Food and Drug Administration estadounidense gástrico hacia el esófago. En los recién nacidos son frecuentes varios
para su uso en los recién nacidos. síntomas, como vómitos frecuentes, irritabilidad, angustia y llanto sin
• Existe una significativa variación geográfica e institucional causa reconocida. Si bien estos síntomas pueden atribuirse a RGE y a
en la frecuencia y el tipo de intervención quirúrgica antirreflujo. ERGE, también se pueden deber a muchos otros problemas de base,
como alergia a la proteína de la leche de vaca, trastornos neurológicos,
infección urinaria y estreñimiento (Vandenplas et al., 2009). Por lo
general, los síntomas que no causan repercusión fisiológica ni con-
Introducción ductual no necesitan evaluación adicional. Por ejemplo, el «escupidor
feliz» es un recién nacido que regurgita una pequeña cantidad después
El reflujo gastroesofágico (RGE) es el pasaje fisiológico del contenido de algunas tomas cada día, pero continúa creciendo y aumentando
gástrico al esófago. Es un fenómeno natural en recién nacidos, niños de peso a lo largo de una trayectoria normal. En cambio, cuando los
y adultos, que suele durar menos de 3 min, se acompaña de síntomas vómitos recurrentes se combinan con escaso aumento de peso, corres-
escasos o nulos y, en general, se produce en el período posprandial. ponde considerar un plan de estudios completo para ERGE y otros
Puede tener lugar varias veces al día y, en ocasiones, puede asociarse con diagnósticos diferenciales (Hassall 2005; Vandenplas et al., 2009).
escupir o vomitar. En los recién nacidos, es frecuente el RGE normal En los recién nacidos, los síntomas fisiopatológicos que a menudo
que afecta hasta al 65% de los recién nacidos menores de 4 meses y se atribuyen a ERGE pueden dividirse en tres categorías: esofágicos
disminuye de manera natural con el tiempo para afectar solo al 1% benignos, esofágicos graves y extraesofágicos. Los síntomas esofági-
a los 12 meses (Henry, 2004). Es probable que la trayectoria de esta cos benignos son vómitos recurrentes, rechazo del alimento y arqueo.
evolución natural esté relacionada con el alargamiento del esófago y Los síntomas esofágicos graves son estenosis, esofagitis erosiva y esófago
la disminución de los episodios de relajación transitoria del esfínter de Barrett. Los síntomas extraesofágicos son escaso aumento de peso,
esofágico inferior (Henry, 2004). apnea con bradicardia asociada, sibilancias, asma, aspiración, otitis
media, sinusitis, ronquera, erosiones dentales, dolor de garganta cró-
Anatomía y fisiología normales nico, estridor crónico, vómitos sanguinolentos, anemia, tos crónica y
neumonía recurrente (Gold, 2004; Henry, 2004).
El mecanismo de deglución normal consiste en un bolo de alimento Hay una serie de factores etiológicos que aumentan la propensión
o saliva que se traslada de la boca a la faringe y por el esófago hasta el del recién nacido a una frecuencia más alta de RGE (Milla et al., 2002;
estómago, y es impulsado en dirección anterógrada por contracciones Hassall, 2005). Estos factores pueden dividirse en los asociados con
musculares peristálticas del esófago. El esfínter esofágico inferior, locali- fisiología normal del recién nacido, fisiología de base anómala y causas
zado en la unión gastroesofágica, tiene un tono de reposo que aumenta yatrógenas. Por lo general, los neonatos a término y prematuros tie-
con la distensión gástrica reciente y actúa como una barrera anatómica nen características anatómicas y fisiológicas que aumentan su riesgo
contra el reflujo de contenido gástrico a la luz esofágica. La disminución de de ERGE, como un esófago más corto y más angosto, retraso del
la presión del esfínter esofágico inferior se produce con la deglución vaciamiento gástrico y un esfínter esofágico inferior más corto, que
y la liberación de gas del estómago en forma de eructo (Henry, 2004). suele ser superior al diafragma y que se relaja en forma periódica

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1080 PA RT E XI V Aparato digestivo

independientemente de la deglución (Henry, 2004). Más allá de las la pH-metría en niños con síntomas respiratorios, digestivos y mixtos
consideraciones anatómicas, las dietas de los recién nacidos consisten de ERGE, y observó que solo los niños con síntomas digestivos tenían
en líquidos (leche materna o maternizada), que se administran en forma un porcentaje algo más alto de tiempo con pH superior a 4 y que el
frecuente y en un volumen relativo más grande debido a sus esquemas episodio más largo era, en promedio, 4 min más prolongado que en
de alimentación y las altas necesidades calóricas (Henry, 2004). La los grupos de comparación (Gorenstein et al., 2003). Estos hallazgos
inhibición del peristaltismo del cuerpo esofágico con relajación del sugieren que, si bien la pH-metría puede medir la exposición esofágica
esfínter esofágico inferior, el menor tono de reposo del esfínter esofá- a ácido, en los niños, esta medida sola se correlaciona poco con los
gico inferior, la distensión gástrica, el retraso del vaciamiento esofágico, síntomas y signos que se consideran asociados con el diagnóstico de
la hernia hiatal y el deterioro neurológico son ejemplos de factores que ERGE.
se asocian con fisiología de base anómala (Gold, 2004). Los ejemplos
de factores yatrógenos que aumentan el riesgo de ERGE son posición pH-metría de 24 h e impedancia intraluminal multicanal
supina durante las tomas y tratamientos adyuvantes de neonatos, como combinadas
cafeína por apnea. El examen de pH-MII combina la detección de pH anómalo en el
Los síntomas de los niños mayores y los adultos son distintos de los esófago con impedancia y, específicamente, medición de la presión del
de los recién nacidos. Los niños mayores pueden presentar molestias esfínter esofágico inferior. La impedancia intraluminal multicanal suma
o dolor abdominal, náuseas por a primera hora de la mañana, eructo la capacidad de detectar el movimiento del bolo por el esófago. Esto
con ardor, dolor torácico retroesternal, pirosis, vómitos recurrentes y es importante en la evaluación de ERGE, porque permite examinar
síntomas extraesofágicos, como apnea/bradicardia, sibilancias/asma, reflujo ácido y no ácido. En una comparación directa de pH-metría
otitis media, ronquera, erosiones dentales, dolor de garganta crónico, de 24 h y pH-MII, Wu et al. determinaron que la pH-MII detectaba
tos crónica, esofagitis, estenosis esofágica, esófago de Barrett y neumo- una cantidad significativamente mayor de episodios de reflujo que la
nía recurrente (Gold, 2004; Hassall, 2005). Un estudio sobre evolución pH-metría sola, con mejor correlación sintomática (Wu et al., 2013).
natural de niños de 2 a 17 años de edad (media de edad, 6,8 años) Pese al beneficio teórico de la pH-MII, Rosen et al. observaron que sus
llevado a cabo por Ashorn et al. halló que, en los niños, el síntoma más resultados no se correlacionaban con la evolución tras la intervención
frecuente era el dolor abdominal recurrente, que fue comunicado en antirreflujo (Rosen et al., 2010). En cambio, Berquist et al. demos-
el 63% de los pacientes (Ashorn et al., 2002). traron que la frecuencia media de episodios de ERGE antes de la
intervención antirreflujo era significativamente más alta que en los
Diagnóstico controles, y que, después de la operación, era significativamente más
baja (Berquist et al., 1981).
Determinaciones objetivas
Se han empleado diversas pruebas diagnósticas para potenciar la his-
Manometría
toria clínica y la exploración física en el diagnóstico de ERGE, aunque La manometría mide la presión y la longitud del esfínter esofágico
ninguna tiene suficiente exactitud para actuar como patrón de refe- inferior. Puede ser de especial utilidad para el diagnóstico de trastornos
rencia. Además, se carece de datos para determinar la sensibilidad, la de motilidad esofágica. La manometría esofágica de alta resolución,
especificidad, el valor predictivo positivo o el valor predictivo negativo si bien es frecuente en adultos, se ha adoptado con más lentitud en
de estas pruebas. Dichas pruebas comprenden pH-metría de 24 h, pacientes pediátricos (Goldani et al., 2010).
pH-metría de 24 h e impedancia intraluminal multicanal combinadas
(pH-MII), manometría, endoscopia, gammagrafía gástrica (estudio de Gammagrafía gástrica
vaciamiento gástrico) y esofagografía con bario (Mauritz et al., 2011). Tradicionalmente, la gammagrafía del estómago (vaciamiento gástrico)
era un componente esencial del plan de estudios y el diagnóstico de
pH-metría de 24 h la ERGE para algunos profesionales, específicamente para detectar la
En el diagnóstico de ERGE se suele utilizar la pH-metría de 24 h. presencia de retraso del vaciamiento gástrico como etiología del reflujo.
Esta se considera una medida objetiva de la exposición a ácido del La gammagrafía es un estudio radiológico de medicina nuclear en el que
esófago que incluye cuatro elementos: el tiempo total que el esófago los pacientes ingieren una fórmula con tecnecio y en el que se capturan
presenta un pH superior a 4, el número de episodios de pH superior imágenes seriadas a lo largo del tiempo que miden el movimiento del
a 4, el porcentaje de tiempo con un pH superior a 4 y el período más contraste, ya sea cuando sale del estómago o cuando refluye hacia el
prolongado de pH superior a 4. A menudo, los estudios se practican esófago. En un estudio, los autores realizaron gammagrafía gástrica
por lo menos con dos conductos –uno en el esófago distal y otro en a 51 pacientes con RGE documentado y compararon los resultados
el proximal– para verificar también el nivel de exposición a ácido. Los con los de 24 controles sin RGE, y hallaron una diferencia estadís-
estudios sobre la utilidad de esta prueba en niños y recién nacidos ticamente significativa de los tiempos de vaciamiento gástrico (Knatten
son variados. Un estudio de Ashorn et al. demostró que había escasa et al., 2013). Otros estudios han obtenido resultados variados, y no
correlación entre resultados anómalos de la pH-metría e inflama- existe un estudio prospectivo bien planificado del uso de gamma-
ción histológica observada en la exploración endoscópica con biopsia grafía gástrica e intervención de vaciamiento gástrico en el contexto
(Ashorn et al., 2002). Tovar et al. examinaron a pacientes sometidos de retraso del vaciamiento gástrico. Quizá el mejor uso de este examen
a operaciones antirreflujo en el contexto de estudios de pH normales en pacientes con presunta ERGE corresponde a los que presentan
(Tovar et al., 1991). Los autores estudiaron a 14 niños con diagnós- neumonía por aspiración, en quienes la detección de tecnecio en los
tico de ERGE basado en síntomas clínicos, como vómitos, disfagia/ pulmones durante el examen es bastante sensible y específica para la
dolor y patología de las vías respiratorias, en quienes se practicó una aspiración (Sherman et al., 2009).
operación antirreflujo por ERGE, pero que tenían manometría normal.
Se comparó a estos pacientes con 14 controles que también presentaban Tránsito gastroduodenal
manometría normal y que además tenían un plan de estudio para Se puede recurrir al tránsito gastroduodenal para definir la anato-
ERGE, pero en los que, finalmente, no hubo indicaciones para una mía luminal al seguir un bolo de contraste a lo largo del esófago,
operación antirreflujo. Los autores observaron que los niños sometidos el estómago y el duodeno. Se utiliza de forma óptima para evaluar
a una operación antirreflujo presentaron resolución de los síntomas, lo diagnósticos como acalasia, esófago en cascanueces y otras anomalías
que llevó a concluir la posibilidad de resultados falsos negativos de la anatómicas que pueden asociarse con síntomas relacionados con
manometría. Un estudio de Gorenstein et al. analizó los hallazgos de ERGE. En la población neonatal, un diagnóstico frecuente con una

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CAPÍTULO 74 Reflujo gastroesofágico neonatal 1081

superposición sintomática considerable con ERGE es la anomalía de en forma directa la secreción ácida, con el consiguiente aumento del
malrotación, que se diagnostica mejor con un tránsito gastroduode- pH por encima de 4 durante un período más prolongado (Lightdale
nal. Para la evaluación del reflujo clásico, el tránsito gastroduodenal et al., 2013). En un estudio prospectivo de 78 niños consecutivos
tiene escaso rendimiento en comparación con otras pruebas, como la (media de edad, 40,6 meses; desviación estándar, 36,4 meses; rango,
pH-metría. En su estudio de cohortes retrospectivo de 656 pacientes 1-181 meses) derivados al departamento pediátrico de endoscopia y
con una media de edad de 17,4 meses (rango, 0,15-228 meses) que motilidad digestiva de la Universidad de Nápoles en Italia, se compa-
fueron sometidos a una intervención antirreflujo y tenían un tránsito raron los inhibidores de la bomba de protones y los antagonistas del
gastroduodenal preoperatorio, Valusek et al. observaron que esta receptor de histamina H2 (Ummarino et al., 2012). Se observó que los
prueba modificó el tratamiento clínico solo en el 4% de los casos al inhibidores de la bomba de protones eran superiores para la resolución
intentar delinear reflujo patológico (Valusek et al., 2010). Es probable de síntomas extraesofágicos. Si bien los inhibidores de la bomba de
que la utilidad del estudio sea más alta si se consideran pacientes con protones pueden ser más eficaces, ninguno ha sido aprobado para su
un plan de estudios para ERGE en los que el tránsito gastroduodenal uso en recién nacidos (menores de 1 año de edad), y la indicación de
detecta malrotación, que requiere una intervención de Ladd en lugar tratamiento debe ser específica, dado que esta clase de medicación no
de una intervención antirreflujo. ha mostrado reducir los síntomas de irritabilidad (Moore et al., 2003;
Griebel, 2010).
Indicaciones de tratamiento médico Se han estudiado cuatro inhibidores de la bomba de protones
en estudios prospectivos aleatorizados y controlados. Un estudio
y quirúrgico de la enfermedad por reflujo multicéntrico aleatorizado, con enmascaramiento doble, controlado
gastroesofágico con placebo del inhibidor de la bomba de protones lansoprazol en
recién nacidos de 1-12 meses de más de 2 kg de peso con ERGE
La intervención médica o quirúrgica debe dirigirse solo a los recién sintomática (definida como llanto durante la hora siguiente a la toma
nacidos con síntomas o complicaciones problemáticos. La medición y en al menos el 25% de las tomas ) y por lo menos 1 semana de trata-
el éxito del tratamiento deben ser la resolución de la indicación inicial. miento no farmacológico de los síntomas, no halló ninguna diferencia
La definición de consenso de ERGE pediátrica estuvo a cargo de un estadísticamente significativa en la mejoría de los síntomas (Orenstein
panel de expertos y se publicó en 2009 (Sherman et al., 2009). Los et al., 2009). Un estudio aleatorizado, con doble enmascaramiento,
expertos definieron la ERGE de la siguiente manera: los pacientes controlado con placebo y de diseño cruzado de omeprazol en 10
pediátricos presentan ERGE cuando el reflujo de contenido gástrico recién nacidos prematuros con síntomas como problemas alimen-
es la causa de síntomas y/o complicaciones problemáticos. Importa tarios, vómitos, irritabilidad y pérdida de peso que se consideraban
destacar que se definió regurgitación como el pasaje del contenido relacionados con ERGE, halló que, si bien la acidez gástrica y esofágica
refluido a la faringe, la boca o desde la boca, y, si bien este es un síntoma disminuyó de manera considerable en el grupo con omeprazol, no
característico de la ERGE, no es necesario ni suficiente para su diagnós- hubo diferencias significativas en la frecuencia de los síntomas (Omari
tico (Sherman et al., 2009). El panel también observó que los vómitos et al., 2007). Un estudio multicéntrico, aleatorizado, con doble enmas-
biliosos no deben ser diagnosticados como ERGE. caramiento, controlado con placebo y de grupos paralelos de esome-
prazol no halló ninguna diferencia en el tiempo hasta la suspensión de
Opciones para intervenciones la medicación relacionado con el agravamiento de los síntomas entre
los grupos (Winter et al., 2015). Un estudio de Winter et al. trató
Fármacos inicialmente a 128 recién nacidos de 1 a 11 meses con pantoprazol,
luego aleatorizó a 106 de esos pacientes a una evaluación de panto-
Las dos clases principales de fármacos usados para el tratamiento de la prazol con doble enmascaramiento, controlada con placebo (Winter
ERGE son medicaciones amortiguadoras o supresoras de ácido y pro- et al., 2010). Los autores comunicaron que, si bien se observó una
cinéticas. Las medicaciones amortiguadoras y supresoras de ácido son disminución significativa de los síntomas durante la fase abierta del
antiácidos, antagonistas de los receptores de histamina e inhibidores de estudio cuando todos los pacientes recibieron pantoprazol, no hubo
la bomba de protones. Los antiácidos reducen el medio ácido del estó- ningún aumento significativo de las puntuaciones medias semanales
mago al actuar como un amortiguador. En teoría, la elevación del pH de síntomas cuando se aleatorizó a los pacientes a recibir pantoprazol
permite la curación de la mucosa y el alivio de los síntomas. Por lo o placebo. Otros riesgos potencialmente asociados con medicaciones
general, estas medicaciones no se recomiendan en recién nacidos o supresoras de ácido son neumonía extrahospitalaria, gastroenteritis,
niños con ERGE, porque han mostrado causar toxicidad por aluminio, candidemia y enterocolitis necrosante en recién nacidos prematuros
y síndrome de leche y alcalinos (Drug and Therapeutics Bulletin, 2010; (Van der Pol et al., 2011; Lightdale et al., 2013). Ningún inhibidor de
Lightdale et al., 2013). la bomba de protones está aprobado por la Food and Drug Adminis-
Los antagonistas del receptor de histamina bloquean el receptor tration estadounidense para recién nacidos menores de 1 año de edad
de histamina de las células parietales del estómago, lo que reduce la con ERGE, aunque es probable que el uso no autorizado sea frecuente
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liberación de ácido. Si bien un estudio aleatorizado y controlado ha (Drug and Therapeutics Bulletin, 2010; Griebel 2010).
observado en los niños una mejoría significativa de la esofagitis erosiva Los procinéticos son otra clase de medicaciones usadas para tratar
y la exposición a ácido con nizatidina en comparación con placebo, es los síntomas de ERGE. El mecanismo de acción propuesto para los
frecuente la taquifilaxia (Simeone et al., 1997; Lightdale et al., 2013). procinéticos en el tratamiento de la ERGE consiste en aumento de la
Un estudio no aleatorizado prospectivo, observacional y multicéntrico presión del esfínter esofágico inferior y mayor vaciamiento gástrico.
de recién nacidos de muy bajo peso al nacer ingresados de forma con- El procinético indicado con mayor frecuencia es la metoclopramida,
secutiva comparó a los que recibieron ranitidina y a los que no (Terrin aunque las reacciones adversas significativas son somnolencia, reaccio-
et al., 2011). Los autores hallaron que los recién nacidos que recibieron nes extrapiramidales y desasosiego. Si bien se recomienda tratamiento
ranitidina tuvieron una probabilidad cinco veces mayor de presentar médico como tratamiento de primera línea de la ERGE, no hay nin-
una infección, más del séxtuple del riesgo de enterocolitis necrosante guna medicación que cuente con la aprobación de la Food and Drug
y una mortalidad significativamente más alta que los controles. Administration estadounidense para su uso en recién nacidos, y se care-
Los inhibidores de la bomba de protones reducen la secreción ce de datos prospectivos definitivos en recién nacidos (Rudolph, 2003;
ácida al bloquear la H+,K+-ATPasa de la célula gástrica parietal. En Drug and Therapeutics Bulletin, 2010; Greene y Moeny, 2010). Pese
comparación con los antagonistas del receptor de histamina, los inhi- a la falta de aprobación, han aumentado las prescripciones (Greene y
bidores de la bomba de protones son más potentes, porque bloquean Moeny, 2010).

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Intervención quirúrgica cualquier síntoma de presentación. Es importante recordar que muchos


de los síntomas asociados con ERGE no son sensibles ni específicos para
Se han descrito una multitud de intervenciones quirúrgicas para el el diagnóstico. Por consiguiente, es crucial comprender que el objetivo
tratamiento de la ERGE. Los diversos abordajes técnicos consisten en es tratar el síntoma o el signo atribuido a la ERGE y no necesariamente
intervenciones antirreflujo a cielo abierto, laparoscópicas y robóticas, la ERGE en sí misma.
aunque no se limitan a estas. Las variaciones técnicas varían de fun-
doplicatura parcial a completa. En niños con deterioro neurológico
significativo y ERGE grave resistente al tratamiento, algunos cirujanos Lecturas recomendadas
han recomendado una separación esofagogástrica (Islam et al., 2004;
Boubnova et al., 2009; Zaidi et al., 2010; Cundy et al., 2013). Más Ashorn M, Ruuska T, Karikoski R, Laippala P. The natural course of
recientemente, se han intentado operaciones más modernas, que aún gastroesophageal reflux disease in children. Scand J Gastroenterol
no están estandarizadas, como refuerzo del esfínter esofágico inferior 2002;37(6):638-641.
mediante imanes, fundoplicatura endoluminal y esclerosis. Parece Drug and Therapeutics Bulletin. Managing gastro-oesophageal reflux in
haber variación geográfica e institucional en el tipo y el abordaje de infants. BMJ 2010;341:c4420.
la intervención quirúrgica antirreflujo (Goldin et al., 2009; Nusrat y Goldin AB, Garrison M, Christakis D. Variations between hospitals
Bielefeldt, 2014). Los numerosos abordajes y variaciones técnicas de in antireflux procedures in children. Arch Pediatr Adolesc Med
las intervenciones antirreflujo reflejan el hecho de que no hay ninguna 2009;163(7):658-663.
operación individual que haya mostrado ser uniformemente superior. Goldin AB, Sawin R, Seidel KD, Flum DR. Do antireflux operations
Por lo general, las operaciones antirreflujo se planifican para corregir decrease the rate of reflux-related hospitalizations in children? Pediatrics
y mejorar la anatomía del esfínter esofágico inferior y el diafragma. 2006;118(6):2326-2333.
Hassall E. Decisions in diagnosing and managing chronic gastroesophageal
La intervención practicada con mayor frecuencia, denominada fundo-
reflux disease in children. J Pediatr 2005;146(3 suppl):S3-S12.
plicatura de Nissen, comprende varios componentes. Aumenta la lon-
Lightdale JR, Gremse DA. Section on Gastroenterology, Hepatology, and
gitud esofágica intraabdominal, lo que incrementa la presión externa y Nutrition. Gastroesophageal reflux: management guidance for the
aumenta la función del esfínter esofágico inferior. Envolver el fondo del pediatrician. Pediatrics 2013;131(5):e1684-e1695.
estómago alrededor del esfínter esofágico inferior fortalece más dicho Mauritz FA, van Herwaarden-Lindeboom MY, Stomp W. The effects and
esfínter, porque comparte la inervación y se contrae de forma simultá- efficacy of antireflux surgery in children with gastroesophageal reflux
nea para recrear el ángulo de His, lo que deriva el contenido gástrico disease: a systematic review. J Gastrointest Surg 2011;15(10):1872-1878.
lejos del esófago y repara de manera eficaz los pilares diafragmáticos. Milla P, Cucchiara S, DiLorenzo C, Rivera NM, Rudolph C, Tomomasa T.
Se ha observado que, independientemente del abordaje, todas las Motility disorders in childhood: Working Group Report of the First
operaciones que encaran los síntomas de la ERGE se asocian con World Congress of Pediatric Gastroenterology, Hepatology, and Nutri-
complicaciones a corto plazo y a largo plazo. Un estudio sobre fundo- tion. J Pediatr Gastroenterol Nutr 2002;35(suppl 2):S187-S195.
plicatura de Nissen laparoscópica en recién nacidos y niños que pesaban Moore DJ, Tao BS, Lines DR, Hirte C, Heddle ML, Davidson GP. Double-
menos de 5 kg observó que el 71% necesitaron una estancia post­ blind placebo-controlled trial of omeprazole in irritable infants with
operatoria en la unidad de cuidados intensivos durante un promedio gastroesophageal reflux. J Pediatr 2003;143:219-223.
de 2 semanas, y el 31% requirieron ventilación mecánica postoperatoria Orenstein SR, Hassall E, Furmaga-Jablonska W, Atkinson S, Raanan M.
durante un promedio de 12 días (Shah et al., 2010). En esta cohorte, se Multicenter, double-blind, randomized, placebo-controlled trial asses-
observó que las complicaciones de la intervención eran reflujo recurren- sing the efficacy and safety of proton pump inhibitor lansoprazole in
te, perforación gástrica y hemorragia (Shah et al., 2010). Una revisión infants with symptoms of gastroesophageal reflux disease. J Pediatr
multiinstitucional comunicó que la menor edad en el momento de la 2009;154(4):514-520 e4.
intervención antirreflujo se asociaba significativamente con la necesidad Sherman PM, Hassall E, Fagundes-Neto U, et al. A global, evidence-based
consensus on the definition of gastroesophageal reflux disease in the
de rehacer la fundoplicatura (Baerg et al., 2013). La corta edad también
pediatric population. Am J Gastroenterol 2009;1278-1295.
se ha asociado con una tasa más baja de hospitalización después de la
Simeone D, Caria MC, Miele E, Staiano A. Treatment of childhood pep-
intervención antirreflujo (Goldin et al., 2006). tic esophagitis: a double-blind placebo-controlled trial of nizatidine.
La comparación de fundoplicatura de Nissen laparoscópica y a J Pediatr Gastroenterol Nutr 1997;25(1):51-55.
cielo abierto es limitada, aunque la literatura médica actual indica Vandenplas Y, Rudolph CD, Di Lorenzo C, et al. Pediatric gastroesopha-
que es probable que el abordaje laparoscópico sea una alternativa geal reflux clinical practice guidelines: joint recommendations of the
segura (Blewett et al., 2002; Rangel et al., 2003). La comparación de North American Society for Pediatric Gastroenterology, Hepatology,
fundoplicatura parcial y completa revela una falta de estudios bien and Nutrition (NASPGHAN) and the European Society for Pediatric
planificados, de manera que, en la actualidad, los dos abordajes parecen Gastroenterology, Hepatology, and Nutrition (ESPGHAN). J Pediatr
tener eficacia comparable para controlar los síntomas de ERGE en Gastroenterol Nutr 2009;49(4):498-547.
niños neurológicamente normales (Mauritz et al., 2013). Winter H, Kum-Nji P, Mahomedy SH, et al. Efficacy and safety of panto-
prazole delayed-release granules for oral suspension in a placebo-con-
Conclusión trolled treatment-withdrawal study in infants 1-11 months old with
symptomatic GERD. J Pediatr Gastroenterol Nutr 2010;50(6):609-618.
Pese a la frecuencia con la que se diagnostica ERGE en los niños y,
especialmente, en los neonatos, existe una considerable complejidad La bibliografía completa utilizada en este capítulo puede consultarse online
en obtener una prueba objetiva de que la ERGE es responsable de en www.expertconsult.com

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CAPÍTULO 74 Reflujo gastroesofágico neonatal 1082.e1

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Palabras clave
Reflujo gastroesofágico (RGE)
ERGE
Procedimientos antirreflujo
Neonatal

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75
Microbioma intestinal
JOSEF NEU

PUNTOS CLAVE secuenciación del ADN sin cultivo, que evalúan taxones de microor-
ganismos residentes en diversos nichos del cuerpo humano, nos han
• Se está acumulando evidencia de que el entorno fetal no es estéril proporcionado el conocimiento de que, al evaluar el número de genes
ni tampoco lo es la leche materna, y que la exposición temprana a o células del ser humano promedio, solo el 10% son de mamíferos, y
microorganismos puede desempeñar un papel importante en la salud el resto son microbianos (Xu y Gordon, 2003; Gill et al., 2006). En la
ulterior. actualidad, sabemos que hay más de 2.000 taxones de microorganismos
• La manipulación del microbioma inicial con antibióticos (administrados bacterianos dentro de nuestro cuerpo, la mayoría de los cuales residen
antes o después del nacimiento), la modalidad de parto y otras en el intestino. El reciente desarrollo de técnicas no basadas en cultivo
condiciones ambientales pueden modificar el delicado equilibrio entre para evaluar el ADN microbiano está aportando nuevos conocimientos
los microorganismos y el huésped humano, y provocar enfermedad. sobre la relación que existe entre los microorganismos y sus huéspedes
• Los metabolitos producidos por los microorganismos, así como
mamíferos, en especial los microorganismos que residen en el tubo
por las interacciones huésped-microorganismo, pueden desempeñar
digestivo (Gill et al., 2006), donde ejercen un efecto profundo sobre
un papel en el desarrollo inmunológico del huésped.
la fisiología digestiva, el desarrollo y la salud del huésped (Stappen-
beck et al., 2002; Xu y Gordon, 2003; Hooper, 2004; Dethlefsen
et al., 2007). Durante la evolución, el huésped ha desarrollado res-
puestas protectoras contra microorganismos extraños, pero, al mismo

D
esde la iniciación del Proyecto Microbioma Humano en tiempo, ha desarrollado un mecanismo que proporciona un ambiente
2007 (Turnbaugh et al., 2007) ha habido notorios avances acogedor y mutuamente beneficioso para los microorganismos y el
en nuestros conocimientos sobre las interacciones entre seres huésped (Hooper y Gordon, 2001; Hooper et al., 2002; Bäckhed
humanos y su entorno microbiano. Se está esclareciendo que la gran et al., 2004, 2005; Hooper, 2004).
mayoría de los microorganismos bacterianos, la «microbiota», que
interactúan con los seres humanos no son patógenos, sino más bien Tecnologías
comensales y simbiontes, muchos de los cuales desempeñan un papel
importante en la salud. La interacción de microorganismos con la En la actualidad hay dos métodos no basados en cultivos (fig. 75.1)
embarazada, el feto, el neonato y el recién nacido parece tener especial usados con frecuencia para la caracterización del microbioma (el con-
importancia para el desarrollo, la salud y la enfermedad futuros. junto de genes de la microbiota):
Este capítulo presenta una reseña de nuestro conocimiento actual • Estudios del ácido ribonucleico ribosómico (ARNr) de subunidad
del microbioma, definido como el material genético combinado pequeña, en los que se utilizan secuencias variables del gen de ARNr
de los microorganismos en un ambiente particular, y su manera de 16S como marcadores filogenéticos para definir qué linajes están
relacionarse con la unidad fetomaterna, el neonato y la salud ulterior. presentes en una muestra.
Se incluirá una breve descripción de tecnologías nuevas y en desarro- • Estudios de secuenciación metagenómicos, en los que el ADN de
llo, que están posibilitando rápidos avances en este campo. Asimis- la comunidad se somete a secuenciación de fragmentos escogidos
mo, se describen diversos aspectos del microbioma durante la vida al azar (shotgun sequencing) (Fodor, 2014).
intrauterina y fetal en cuanto a su relación con el parto prematuro, El ARNr 16S es una parte del ARN ribosómico que se utiliza para
entidades patológicas de recién nacidos prematuros y a término, estudios filogenéticos porque está altamente conservado entre dife-
como enterocolitis necrosante (EN) y sepsis, interacciones básicas rentes especies de bacterias y arqueas. Además de sitios de unión al
entre el microbioma y el sistema inmunitario intestinal, y su fun- cebador altamente conservados, las secuencias del gen de ARNr 16S
ción de biorreactor/nutricional. También se analizan las alteraciones contienen regiones hipervariables que pueden proporcionar secuencias
que afectan al ecosistema humano-microbiano –el «holobionte» de firma específicas de especie útiles para la identificación bacteriana.
(Gilbert, 2014a)–, como antibióticos y otros fármacos, modalidad En consecuencia, la secuenciación del gen de ARNr 16S se ha vuelto
de parto y dieta. prevalente en la microbiología médica como alternativa rápida y exacta
a los métodos fenotípicos de identificación bacteriana.
Perspectivas históricas En esta técnica se extrae ADN de muestras fecales; se amplifican
los genes diana de ARNr 16S (en general, la región V1-3 o V4) usan-
Más allá del cultivo do cebadores universales de la reacción en cadena de la polimerasa
capaces de hibridación eficiente con los genes de ARNr de la mayoría
Nuevas tecnologías que emplean métodos no basados en cultivo de las bacterias. Sobre la base del grado de similitud nucleotídica (por
han mostrado que la mayoría de los microorganismos del intestino lo general, entre el 95 y el 99%), después se separan las secuencias
aún no se han cultivado. Los avances de tecnologías basadas en la en unidades taxonómicas operacionales que forman la base de las
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• Figura 75.1  Dos métodos usados con frecuencia para el análisis del microbioma. La secuenciación
del ARNr 16S es el método más rápido y menos costoso. Aporta información acerca de la abundancia
relativa de taxones presentes en una muestra («quién está ahí»). La secuenciación de todo el ADN del
microbioma analiza el ADN total de una muestra, pero, además de aportar información taxonómica,
también puede proporcionar información funcional («qué están haciendo los microorganismos»).
ARNr, ácido ribonucleico ribosómico; PCR, reacción en cadena de la polimerasa. (Adaptado de: https://
www.neb.com/tools-and-resources/feature-articles/addressing-challenges-in-microbiome-dna-analysis.)

comparaciones entre las muestras. Esta técnica se utiliza fundamental- 23.000 genes), sino también por el componente genético microbiano
mente para obtener información taxonómica («quién está ahí»), más (el microbioma –denominado a veces el «segundo genoma»–, que com-
que datos funcionales («qué están haciendo»), que pueden ser mejor prende por lo menos 100 veces más genes que los derivados del esperma-
proporcionados mediante secuenciación metagenómica de fragmentos tozoide y el óvulo humanos). Estos actúan sinérgicamente con factores
escogidos al azar (Fodor, 2014). ambientales, como la dieta, para comprender el epigenoma, el proteoma,
La metagenómica es el estudio de material genético recuperado el transcriptoma, el metaboloma y el epigenoma (fig. 75.2). Estos corres-
directamente de muestras ambientales, que permite estudios de orga- ponden a diversas funciones microbianas, y las tecnologías para su
nismos que no son fáciles de cultivar en un laboratorio, así como análisis están avanzando con rapidez. La transcriptómica permitirá la
estudios de organismos en su ambiente natural. Estos estudios utilizan detección de productos génicos microbianos más específicos, al igual
secuenciación de fragmentos escogidos al azar para obtener (en su que la metabolómica y la proteómica. Se considera que el microbioma
mayor parte) muestras no sesgadas de todos los genes de todos los desempeña un papel prominente en el metabolismo humano, porque los
miembros de las comunidades estudiadas (Fodor, 2014). Esta técnica microorganismos producen pequeñas moléculas nocivas y beneficiosas
proporciona mucha más información respecto de la función de los para los humanos, como vitaminas, polifenoles, colesterol y ácidos grasos
genes microbianos totales, pero también es mucho más costosa que las de cadena corta (AGCC) (Nicholson et al., 2012). Una comparación
técnicas basadas en ARNr 16S. Sin embargo, estas técnicas están en reciente de los perfiles plasmáticos en ratones convencionales y libres
rápida evolución, y los costes ya no son tan prohibitivos. de gérmenes mostró una firme correlación entre las concentraciones de
metabolitos plasmáticos y los microorganismos presentes (Wikoff
Otras «ómicas» et al., 2009). Futuros estudios pueden hallar patrones de metabolitos
significativamente diferentes en muestras de orina y materia fecal de
La exposición antes mencionada destaca el hecho de que el organismo madres que tienen partos prematuros en comparación con las que
humano está compuesto y controlado no solo por su complemento tienen partos a término cuando empleemos sistemas de mapeo de vías
genético mamífero (genoma humano, que comprende alrededor de biológicas.

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CAPÍTULO 75 Microbioma intestinal 1085

• CUADRO 75.1  Funciones de la microbiota


1. Metabólicas/nutricionales
a. Vitaminas
b. Ácidos grasos de cadena corta
2. Desarrollo intestinal
a. Proliferación y recuperación epitelial
b. Angiogenia
3. Exclusión de patógenos
4. Inmunorregulación innata
a. Modulación de la respuesta inflamatoria
b. Reconocimiento y destrucción de patógenos
5. Inmunorregulación adaptativa
a. Desarrollo de tolerancia

• Figura 75.2  Dogma central del genoma humano. El ADN es transcrito


a ARN, que codifica una proteína que, a su vez, produce metabolitos.
El microbioma presenta transformaciones similares, pero los productos
entre la microbiota luminal y las vías de transducción de señales. Los
metabólicos del microbioma pueden ser epigenéticamente activos y
TLR son receptores de la superficie celular que reconocen ligandos
modular la vía genómica humana. microbianos específicos, tanto de patógenos como de comensales, lo
que permite que el sistema inmunitario innato reconozca lo no propio
y active respuestas inmunitarias tanto innatas como adaptativas (Takeda
La epigenómica permitirá integrar las técnicas de análisis de micro- et al., 2003). El epitelio y las células inmunitarias residentes dependen
ARN, metilación del ADN y modificación de histonas en la amplifica- de bacterias comensales, que secretan moléculas como lipopolisacáridos
ción y silenciamiento de genes y productos génicos del huésped. Ade- y ácido lipoteicoico. A su vez, estos interactúan con una población de
más, el análisis de las interacciones génicas microorganismo-huésped es TLR superficiales, en los que la señalización aumenta la capacidad
un área que está recibiendo considerable atención (Duca et al., 2014; de la superficie epitelial para tolerar la lesión, mientras a la vez prepara
Sanchez et al., 2015; Sun y Hu, 2016). la superficie para mejores respuestas de reparación (Madara, 2004;
Las alteraciones del microbioma intestinal se han vinculado con Strober, 2004). Por consiguiente, la disrupción de TLR o la eliminación
obesidad, enfermedades autoinmunitarias, asma alérgica, eccema e, de sus ligandos (bacterias) reducirán la capacidad de la superficie intes-
incluso, inducción de parto prematuro, algunas de las cuales se des- tinal para protegerse y repararse tras una lesión inflamatoria o infecciosa
criben en este capítulo (Chang y Neu, 2015). El papel de los microor- (Rakoff-Nahoum et al., 2004).
ganismos intestinales, en especial durante el desarrollo temprano Además de los efectos de la microbiota sobre el sistema inmunitario
de estos componentes muy interrelacionados, se relaciona claramente innato, también hay efectos significativos sobre las respuestas adaptati-
con la salud y la enfermedad humanas, y es un área interesante de in­ vas. Los linfocitos T reguladores (Treg) pueden moderar la inflamación
vestigación futura (Turnbaugh y Gordon, 2008). La utilización de después de la infección microbiana. En el intestino, se generan sub-
estas tecnologías multiómicas en desarrollo y su interpretación usando grupos de Treg a partir de linfocitos T indiferenciados (Treg «induci-
abordajes sofisticados de «big data» (gran volumen de datos) serán bles»). Esto puede ser importante, porque estos producen la citocina
fundamentales para el progreso en estas áreas. antiinflamatoria interleucina 10 (IL-10) (Lee y Mazmanian, 2010).
Varias bacterias han mostrado inducir Treg y producción de IL-10 en
el intestino (O’Mahony et al., 2008). Miembros del género Bacteroides
Acciones del microbioma intestinal contienen la molécula bacteriana polisacárido A, que dirige el desarrollo
celular y físico del sistema inmunitario a través de Treg y, en conse-
El metaorganismo humano se ha descrito como un holobionte, que cuencia, se consideran protectores, debido a su capacidad de suprimir
se ha definido como un «super- o metaorganismo que se adapta y la patología del huésped impulsada por inflamación. Esta es un área
transforma según los cambios ambientales, lo que causa la evolución de considerable investigación actual, dado su probable participación
de toda la entidad» (Gilbert, 2014a, 2014b). Contiene un compo- en numerosas entidades patológicas, como diabetes de tipo 1 y otras
nente procariótico en el intestino, que comprende casi 1014 células enfermedades autoinmunitarias.
que pesan más de 1 kg en el ser humano adulto. Existe un marcado
gradiente aboral en el número y los tipos de microorganismos de
diferentes regiones del intestino, con 10 11 en el colon ascendente, Función de biorreactor
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107-8 en el íleon distal y 102-3 en el yeyuno. Está surgiendo un mejor


conocimiento de muchas de las acciones de la microbiota en el tubo Los hidratos de carbono complejos son mal digeridos por el aparato
digestivo (cuadro 75.1). Si bien hay superposición funcional entre las digestivo humano y requieren microbiota para su degradación por
regiones intestinales, el intestino delgado interviene principalmente fermentación. En el intestino distal, principalmente el colon, los
en la inmunorreactividad y las funciones inmunitarias, y el intestino microorganismos intestinales cumplen una función de biorreactor,
grueso desempeña más de una función de biorreactor/metabólica que es muy susceptible de estudio mediante metodologías meta-
(Neish, 2009). bolómicas (Nyangale et al., 2012). Los productos finales de la fer-
mentación son AGCC, como el acetato, el propionato y el butirato.
Los AGCC influyen en diversos aspectos de la fisiología intestinal,
Inflamación intestinal y función inmunitaria además de ser una fuente calórica (Rios-Covian et al., 2016). Poseen
actividades de promoción de la diferenciación y el crecimiento que se
Los microorganismos intestinales representan un punto de control considera que están relacionadas con sus efectos sobre la actividad de
regulador clave para el desarrollo del sistema inmunitario adaptativo y la histona desacetilasa y también ejercen efectos epigenéticos. Tienen
también de la respuesta inflamatoria innata. El epitelio intestinal depen- efectos inmunomoduladores y efectos importantes sobre las uniones
de de receptores de tipo Toll (TLR) para actuar como una interfase estrechas interepiteliales. Algunos ejemplos de procesos que pueden

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1086 PA RT E XI V Aparato digestivo

ser mediados por esta función de biorreactor son la manera en que los et al., 2009; DiGiulio, 2012; Moles et al., 2013; Aagaard et al., 2014;
cambios de la población microbiana inciden en la obesidad, la dia- Ardissone et al., 2014; Payne y Bayatibojakhi, 2014), y la taxonomía
betes no insulinodependiente y la ateroesclerosis (Ley et al., 2006). de estos microorganismos difiere según el estadio de madurez fetal
En el intestino distal, sobre todo el colon, los hidratos de carbono (Aagaard et al., 2014; Ardissone et al., 2014). El hallazgo de que un
complejos no digeridos en individuos destetados son principalmente mayor grado de prematuridad está directamente relacionado con la
fibras vegetales, mientras que en el recién nacido son sobre todo carga de ADN bacteriano en el líquido amniótico sugiere una relación
oligosacáridos no digeridos de la leche materna (Bode, 2015) y, en entre parto prematuro y carga microbiana (DiGiulio et al., 2008;
algunos casos, fundamentalmente en recién nacidos muy prematuros, DiGiulio, 2012). Además, esta relación está causalmente implicada
lactosa no absorbida (Kien et al., 2002). Esto es importante en los por las concentraciones de ADN microbiano que se correlacionan de
recién nacidos prematuros, que se considera que tienen actividad forma directa con las concentraciones de células sanguíneas e IL-6 en
de lactasa más baja que los recién nacidos a término (Antonowicz y el líquido amniótico. Esto sugiere una secuencia fisiopatológica de
Lebenthal, 1977). Aun si hay una deficiencia de actividad de lactasa mayor carga microbiana, inflamación y parto prematuro (DiGiulio
en el intestino delgado de neonatos muy prematuros, una flora et al., 2008; Han et al., 2009; Combs et al., 2014). La «infección»
intestinal distal saludable puede «rescatar» parte de la lactosa no intrauterina y la respuesta inflamatoria fetal ulterior se han vinculado
digerida en fuentes de energía de 2-4 carbonos absorbibles y útiles con prematuridad, y patología cerebral, pulmonar y ocular después
(Kien, 1996). del parto prematuro (Dammann et al., 2002; Dammann y Levi-
La microbiota ejerce un efecto de magnitud sobre la bioquímica ton, 2006). Una hipótesis relaciona los microorganismos deglutidos
plasmática de los mamíferos. El perfil basado en espectrometría de del líquido amniótico con una respuesta inflamatoria derivada del
masas del suero de ratones libres de gérmenes y no libres de gérmenes intestino, y parto prematuro y morbilidad neonatal (fig. 75.3). En
demuestra que un número significativamente grande de especies esta hipótesis, el feto deglute microorganismos del líquido amniótico
químicas halladas en la circulación sistémica aparecen debido a (presumiblemente procedentes de microorganismos vaginales ascen-
la presencia de la microbiota. Estos metabolitos relacionados con dentes). Luego, estos microorganismos llegan al tubo digestivo fetal
microorganismos pueden ser beneficiosos o tóxicos para el huésped muy inmunorreactivo, donde un síndrome de respuesta inflamatoria
(Wikoff et al., 2009). fetal (SRIF) provoca una respuesta inflamatoria que induce parto
prematuro y morbilidad neonatal.
Desarrollo del microbioma intestinal Estudios que investigan el microbioma placentario muestran
una relación entre diferentes taxones de microorganismos y el nivel
Entorno fetal no estéril de prematuridad (Aagaard et al., 2014). Resulta interesante que se
observó una similitud entre microorganismos placentarios y secuen-
El dogma de que el feto reside en un entorno estéril y que el recién cias de ADN microbiano orales de una base de datos de mujeres no
nacido solo adquiere su microbiota tras la exposición al medio extra­ embarazadas. Asimismo, estos estudios observaron que Escherichia
uterino se está cuestionando de manera efectiva (Funkhouser y Bordens- coli era uno de los taxones más grandes representados en las mues-
tein, 2013; Reid et al., 2015; Romano-Keeler y Weitkamp, 2015; tras placentarias (Aagaard et al., 2014). Interesa destacar que este es
Rautava, 2016). Desde hace décadas se ha sabido que, aun sin rotura un residente habitual del intestino y, por lo tanto, sugiere un origen
del amnios, el líquido amniótico suele contener concentraciones intestinal materno.
significativas de bacterias (Bobitt y Ledger, 1977). Además, estudios Los mecanismos de cómo se relacionan los microorganismos mater-
que emplean técnicas no basadas en cultivo también revelan microor- no-fetales con el parto prematuro no son claros, pero la evidencia parece
ganismos en la placenta, el líquido amniótico y el meconio (Han indicar que los microorganismos del intestino fetal pueden desempeñar

• Figura 75.3  Vía hipotética a través de la cual los microorganismos del líquido amniótico son deglu-
tidos por el feto. Estos microorganismos (presumiblemente derivados de microorganismos vaginales
ascendentes) alcanzan el tubo digestivo fetal, muy inmunorreactivo, en el que un síndrome de res-
puesta inflamatoria fetal provoca una respuesta inflamatoria que provoca parto prematuro y morbilidad
neonatal. SRIF, síndrome de respuesta inflamatoria fetal.

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CAPÍTULO 75 Microbioma intestinal 1087

un papel (v. fig. 75.3). Esto es respaldado por: 1) la relación bien cono-


cida de colonización microbiana del líquido amniótico, SRIF y parto
prematuro (Bobitt y Ledger, 1977; Romero et al., 1988, 1998, 2007;
Andrews et al., 1995; Goldenberg et al., 2008); 2) el hecho de que
el feto degluta grandes cantidades de líquido amniótico durante el
segundo y el tercer trimestres de embarazo (Brace y Wolf, 1989; Gil-
bert y Brace, 1993), y 3) la capacidad de la inflamación sistémica de
derivar del tubo digestivo (Carrico et al., 1986), en especial en el feto
(Nanthakumar et al., 2000).

Interacciones huésped-microorganismos
en el intestino materno
Las interacciones huésped-microorganismos en el intestino materno
contribuyen al metabolismo materno durante el embarazo y hacen
pensar que la «disbiosis» (definida como un desequilibrio microbiano
sobre el cuerpo o en su interior) en el tubo digestivo materno puede
influir en los mediadores inflamatorios fetales, los linfocitos T efectores, • Figura 75.4  Posibles orígenes del microbioma fetal/placentario. Estos
y células reguladoras de tolerancia y patrones metabólicos que inducen incluyen una vía hemática desde la cavidad oral o el tubo digestivo,
parto prematuro. La madre reconoce inmunológicamente al feto como o una vía ascendente por translocación a través de las membranas
propio mediante un equilibrio de estos linfocitos T y mantiene la coriónico-deciduales.
tolerancia, pero la disbiosis puede afectar a este equilibrio, lo que
induce una respuesta que lleva a eliminar de forma prematura al feto
del medio intrauterino (Trowsdale y Betz, 2006). Hace poco se han de que microorganismos procedentes de la vagina sean el origen del
mostrado los efectos de la dieta de la embarazada sobre el microbioma, parto prematuro (Romero et al., 2014). Otra posible fuente es la boca
el epigenoma y el metaboloma, que afectan a la enfermedad ulterior materna (tejido periodontal) (Madianos et al., 2013). Un estudio
en la descendencia, en estudios en los que la alimentación de ratones investigó el microbioma placentario de recién nacidos con diversa edad
con una dieta rica en fibra determinaba una microbiota intestinal gestacional y halló asociaciones entre taxones microbianos placenta-
característica, con mayores concentraciones del acetato de AGCC y rios, parto prematuro e infecciones en etapas gestacionales tempranas
notoria disminución de la enfermedad alérgica en la descendencia (Aagaard et al., 2014). Interesa destacar que también se detectó una
(Thorburn et al., 2015). Por lo tanto, una evaluación de la dieta de similitud entre los microorganismos placentarios y los hallados en la
la madre y cómo incide en la microbiota puede revelar enfoques para boca a partir de una base de datos de microbioma humano, pero las
reducir la morbilidad y el parto prematuro mediante la modulación muestras no procedían de los mismos individuos; por consiguiente,
del microbioma materno por medios dietéticos durante el embarazo. no son posibles las comparaciones directas entre fuentes microbianas.
Esto podría ser a través de modificación de metabolitos y/o mediadores Además, los taxones placentarios más representados en ese estudio
inflamatorios, que deberían ser detectables en las heces, la sangre o la correspondieron a E. coli, que son microorganismos intestinales. Estu-
orina maternas. dios más recientes (Shiozaki et al., 2014) evaluaron muestras fecales
Se está acumulando evidencia que avala que las células inmuni- y vaginales maternas de tres grupos de mujeres que: 1) dieron a luz a
tarias innatas, como neutrófilos, macrófagos y mastocitos, median el recién nacidos a término sin trabajo de parto prematuro; 2) dieron a
proceso de parto al liberar factores proinflamatorios, como citocinas, luz a recién nacidos a término, pero con trabajo de parto prematuro,
quimiocinas y metaloproteinasas de la matriz (Lusyati et al., 2013). y 3) tuvieron un parto prematuro. Se observaron diferencias signi-
Los subgrupos de linfocitos T y linfocitos B (células inmunitarias ficativas en los taxones microbianos de muestras fecales entre estos
adaptativas) participan en el mantenimiento de la tolerancia feto- tres grupos: hubo diferencias significativas en los grupos Clostridium,
materna durante el embarazo, y una alteración de su función o Lactobacillus y Bacteroidetes. Al igual que en un estudio de Romero
abundancia puede inducir parto prematuro (Challis et al., 2009; et al. (2014), no se observaron diferencias en la microbiota vaginal
Gomez-Lopez et al., 2014). Se observan marcadas elevaciones de entre estos tres grupos, lo que sugiere que el intestino materno es la
Treg CD4+CD25+ Forkhead Box P3 (Foxp3+) en la sangre periférica fuente de los microorganismos fetales relacionados con parto prema-
durante etapas gestacionales tempranas, pero declinan durante el turo. Es importante resaltar que se sabe que los microorganismos se
parto, ya sea a término o prematuro, lo que sugiere su participación pueden translocar a través del tubo digestivo materno en los roedores
en el mantenimiento del embarazo y la iniciación del parto (Xiong (Jimenez et al., 2008) y los seres humanos (Rautava et al., 2012), y que
et al., 2010). Asimismo, las células inmunitarias que establecen un
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la Listeria transmitida por alimentos se puede translocar del intestino


puente entre los sistemas inmunitarios innato y adaptativo, como materno al feto (Vazquez-Boland et al., 2001). Por consiguiente, hallar
las células dendríticas, también pueden intervenir en la fisiopatolo- las principales fuentes de los microorganismos que se relacionan con
gía del parto prematuro. Se necesita un equilibrio entre las células parto prematuro y otras patologías relacionadas con inflamación será
inmunitarias innatas y adaptativas para mantener el embarazo; una un desafío importante.
alteración de este equilibrio inducirá el parto (Gomez et al., 1998; Conocer de dónde provienen los microorganismos fetomaternos es
Gomez-Lopez et al., 2014). crucial para proponer intervenciones terapéuticas específicas basadas
en microorganismos para prevenir el parto prematuro espontáneo.
Fuente del microbioma fetomaterno El origen de estas bacterias puede diferir, lo que depende de los
taxones bacterianos considerados. Cabría conjeturar que el intestino
Existe una brecha en nuestro conocimiento de la fuente del microbioma materno es una fuente probable de la mayoría de estos microorganis-
placentario/fetal. La figura 75.4 ilustra las posibles fuentes. mos, pero, como se mencionó antes, también pueden participar
Se ha implicado a microorganismos vaginales en la inducción microorganismos que ascienden por vía vaginal y/o microorganismos
del parto prematuro (McGregor et al., 1994; White et al., 2011; orales transmitidos por vía hemática. Esto requiere investigación más
DiGiulio, 2015). Sin embargo, otro estudio contradice el concepto rigurosa evaluando la microbiota de diversas fuentes en el mismo par

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madre-recién nacido (placenta, vagina, boca, sangre, heces maternas Efecto de la dieta
y meconio del recién nacido) usando secuenciación del ARNr 16S y
metagenómica, y herramientas bioinformáticas de rastreo de fuentes La leche materna contiene una amplia serie de componentes biológi-
recién desarrolladas. camente activos. Los recién nacidos que reciben lactancia natural, a
diferencia de los alimentados con leche artificial, tienen un ecosistema
intestinal caracterizado por una fuerte prevalencia de bifidobacterias
Microbioma del recién nacido y lactobacilos que parecen proteger al recién nacido prematuro (Saa-
vedra, 2001; Bourlioux et al., 2003). Varios estudios han mostrado la
Modalidad de parto presencia de microorganismos en la leche materna (Hunt et al., 2011;
Collado et al., 2015). Streptococcus y Staphylococcus están altamente
Existe una asociación entre la modalidad de parto –vaginal frente representados, pero se encuentran también otros taxones. Estos estu-
a cesárea– y la composición ulterior del microbioma del recién dios sugieren que los microorganismos de la leche de una madre en
nacido en desarrollo (Salminen et al., 2004; Biasucci et al., 2008; particular son estables a lo largo del tiempo, pero difieren mucho de
Dominguez-Bello et al., 2010; Cabrera-Rubio et al., 2012; Azad una madre a la siguiente, lo que hace pensar en la «personalización»
et al., 2013; Jakobsson et al., 2014). Esto podría tener considera- de los microorganismos de la leche. Entre las numerosas sustancias
bles implicaciones sanitarias en zonas donde la tasa de cesáreas sin presentes en leche materna, también hay oligosacáridos (Bode, 2012).
indicaciones médicas sólidas es muy alta, dado que la cesárea se Se considera que estos estimulan el desarrollo de microorganismos
asocia con mayores riesgos de diversos desenlaces adversos (Card­ bifidógenos en el colon, de ahí que se pueda considerar que la leche
well et al., 2008; Decker et al., 2010; Blustein et al., 2013; Bernardi materna es una sustancia simbiótica (Coppa et al., 2004) que tiene las
et al., 2015; Miettinen et al., 2015; Mueller et al., 2015). Estos propiedades tanto de un probiótico como de un prebiótico.
estudios epidemiológicos están plagados de factores de confusión,
pero se deben considerar con seriedad este tipo de asociaciones.
Aún resta por establecer de manera rigurosa la relación causal entre Efectos de los antibióticos sobre la microbiota
cesárea y algunos de estos desenlaces adversos. No se ha esclarecido intestinal
todavía si la lactancia materna, como han sugerido estudios pequeños
(Azad et al., 2013; Madan et al., 2016), puede revertir el microbioma La administración de antibióticos a recién nacidos prematuros es una
hacia uno que sea de composición y función similares al resultan- práctica frecuente en la UCIN debido a la preocupación respecto de la
te del parto vaginal. Los estudios que muestran restablecimiento sepsis. Varios estudios han mostrado una disbiosis que se produce antes
parcial de la microbiota de recién nacidos por cesárea mediante del inicio de la EN (Claud y Walker, 2001; Mai et al., 2011, 2013;
transferencia microbiana vaginal usando hisopados vaginales son Claud et al., 2013; Warner et al., 2016). De forma más reciente, se
interesantes, porque, de hecho, sugieren que es posible restablecer la ha mostrado que las posibilidades de presentar EN y la mortalidad
microbiota vaginal en recién nacidos por cesárea (Dominguez-Bello asociada con EN se correlacionan con la duración de la exposición a
et al., 2016). Sin embargo, no se ha investigado de manera adecuada antibióticos (Cotten et al., 2009; Alexander et al., 2011). Sin embargo,
la seguridad de inocular al recién nacido microorganismos vaginales en estos estudios no se ha esclarecido si el grado inicial de enfermedad
desconocidos, y, en consecuencia, este método no está preparado indujo un mayor uso de antibióticos o si el mayor uso de antibióti-
para el uso sistemático. cos indujo un mayor grado de enfermedad. Los efectos de la exposición
a antibióticos sobre la diversidad microbiana del intestino han mos-
trado durar meses después de la suspensión del tratamiento y ejercer
Inflamación derivada del intestino efectos persistentes. Por consiguiente, es crucial reconsiderar el uso
excesivo sistemático de antibióticos en el prematuro.
Se ha atribuido un papel importante a la inflamación sistémica (en
general, derivada del intestino) en varias enfermedades neonatales,
como EN, enfermedad pulmonar crónica, hemorragia intraventricular, Efectos de los antagonistas H2
leucomalacia periventricular y alteraciones hematopoyéticas (Dam- Los recién nacidos prematuros tienen secreción limitada de ácido
mann y Leviton, 1999; Dammann et al., 2002). gástrico, que puede reducirse aún más mediante la administración de
antagonistas H2 que se han vinculado con EN en neonatos prematuros
Nutrición parenteral total (Guillet et al., 2006; Terrin et al., 2012). Tradicionalmente, en los
recién nacidos prematuros se han empleado antagonistas H2 para el
El uso prolongado de nutrición parenteral total (NPT), antibióticos tratamiento de la apnea y la bradicardia presuntamente secundarias a
y antagonistas H2 son prácticas frecuentes en la unidad de cuidados reflujo gastroesofágico, así como en la NPT mientras el paciente no
intensivos neonatales (UCIN). En el recién nacido prematuro, la recibe nada por la boca. Se considera que los antagonistas H2 elevan
dependencia de la nutrición parenteral puede ser muy significativa en el pH gástrico y reducen la acción bactericida en el estómago, con
la promoción de inflamación intestinal (Kudsk, 2002). Es materia de el consiguiente aumento del número total de bacterias, lo que pro-
especulación si esto se debe, en parte, a la estimulación de la prolife- mueve la proliferación de bacterias potencialmente patógenas (Gupta
ración de bacterias comensales, pero estudios en animales apuntan a et al., 2013). Estos se encuentran entre los fármacos mal usados más a
una proliferación excesiva de proteobacterias potencialmente patógenas menudo en la UCIN, y se desaconseja su administración sistemática
cuando se administra NPT. (Ho et al., 2015).

Resumen
En este capítulo se ha analizado de manera sucinta la ciencia transgeneracionales mediante mecanismos epigenéticos. Debe que-
reciente del microbioma en cuanto a su relación con el embarazo dar claro que esta es un área que está preparada para avances cien-
y el neonato. Las interacciones entre los microorganismos y el tíficos y clínicamente relevantes en la prevención y el tratamiento
huésped, así como entre los productos microbianos y el huésped, de la enfermedad y el mantenimiento de la salud, aun después de
sobre todo en etapas tempranas de la vida, pueden tener efectos la lactancia.

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CAPÍTULO 75 Microbioma intestinal 1089.e3

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1089.e4 PA RT E X I V Aparato digestivo

Palabras clave
Microbioma
Feto
Embarazo
Intestino
Enterocolitis necrosante

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76
Enterocolitis necrosante
y síndrome del intestino corto
PATRICK J. JAVID, KEVIN M. RIGGLE Y CAITLIN SMITH

PUNTOS CLAVE et al., 1991; Lemons et al., 2001). En los recién nacidos a término,


la incidencia de EN es de 0,5 de cada 1.000 nacidos vivos (Lemons
• La enterocolitis necrosante (EN) es la urgencia digestiva más frecuente et al., 2001), y la enfermedad se suele asociar con otros factores de
en la unidad de cuidados intensivos neonatales y una causa importante riesgo que reducen la perfusión mesentérica, como cardiopatía con-
de mortalidad en recién nacidos de muy bajo peso al nacer. génita (CC), acontecimientos perinatales hipoxémicos, restricción
• La patogenia es multifactorial, con combinación de alteración de la del crecimiento intrauterino, sepsis o patología respiratoria (Holman
perfusión intestinal, colonización bacteriana anómala, alteración de la et al., 2006). Los recién nacidos prematuros que no han sido alimen-
función de barrera del intestino, y una respuesta inmunitaria inmadura, tados por vía enteral también pueden presentar perforación intes-
hiperactiva, que causa inflamación, isquemia y eventual necrosis tinal, pero este proceso patológico tiende a ser una entidad patológica
intestinal. diferente llamada perforación intestinal espontánea (PIE). La PIE es una
• El tratamiento médico consiste en reposo intestinal, antibióticos
perforación intestinal aislada, sin los signos adicionales de isquemia o
de amplio espectro y medidas de soporte.
necrosis intestinal que se suelen observar en la EN. A diferencia de la
• Las opciones quirúrgicas comprenden drenaje peritoneal primario
o laparotomía con resección intestinal.
EN, la mayoría de las veces, la PIE sobreviene antes de la iniciación de
• La mortalidad por EN alcanza el 50% en los pacientes que requieren la alimentación enteral en las primeras 2 semanas de vida (Pumberger
cirugía, de ahí la importancia de las medidas preventivas, como et al., 2002). Los recién nacidos con PIE tienen morbimortalidad
lactancia materna y suplementos de probióticos. mucho más baja que los que tienen EN (Fisher et al., 2014). Sin
embargo, la PIE y la EN pueden ser difíciles de diferenciar antes de la
exploración quirúrgica, y muchos estudios de evolución clínica de la EN
pueden incluir recién nacidos con EN y PIE.
Cabe destacar que la incidencia de EN varía mucho en todo el
Enterocolitis necrosante mundo. En EE. UU., la incidencia de EN en recién nacidos de muy
bajo peso al nacer (MBPN; < 1.500 g) varía del 3 al 10% (Llanos
La enterocolitis necrosante (EN) es la urgencia digestiva más frecuente et al., 2002; Guillet et al., 2006; Holman et al., 2006), en comparación
en la unidad de cuidados intensivos neonatales (UCIN), y es una con el 28% en Hong Kong (Siu et al., 1998), el 14% en Argentina
causa importante de mortalidad en recién nacidos prematuros y de (Halac et al., 1990), el 7% en Austria (Eibl et al., 1988), el 7% en
bajo peso al nacer. La incidencia de EN es inversamente proporcional Canadá (Sankaran et al., 2004), el 4% en Gales (Luig et al., 2005) y
a la edad gestacional y el peso al nacer, y la EN afecta al 7-10% el 1-2% en Japón (Okuyama et al., 2002). No se ha observado nin-
de los recién nacidos que pesan más de 1.500 g. Lamentablemente, guna declinación apreciable de la incidencia de EN en las últimas dos
pese a décadas de investigación y a los avances de la asistencia en la décadas.
UCIN, la mortalidad asociada con EN se mantiene entre el 15 y el
30% y es aún más alta en recién nacidos con EN que necesitan una Factores de riesgo
intervención quirúrgica. Los supervivientes de EN pueden presentar
complicaciones a largo plazo, como estenosis intestinal, síndrome del Prematuridad y bajo peso al nacer
intestino corto (SIC) y deterioro del neurodesarrollo (DND). Las
estrategias preventivas, como alimentación enteral con leche materna Se ha observado que una serie de factores de riesgo se asocian de manera
y suplementos de probióticos, son de primordial importancia para regular con la EN, de los cuales los más convincentes son prematuridad
combatir esta enfermedad letal. y bajo peso al nacer. Lemons et al. (2001) comunicaron por primera
vez la relación inversa entre peso al nacer y EN. Recientemente, Jaksic
Epidemiología et al. han demostrado elegantemente esta relación y de qué manera
se relaciona con la mortalidad asociada a EN utilizando datos de la
La EN es, principalmente, una enfermedad de recién nacidos de bajo Vermont Oxford Network (Fitzgibbons et al., 2009). La incidencia de
peso al nacer que sobreviene de días a semanas después de la inicia- EN aumenta de manera sostenida, del 3% en recién nacidos de 1.250-
ción de la alimentación enteral. De hecho, más del 90% de los casos 1.500 g al 12% en recién nacidos de 500-750 g. En concordancia, la
comunicados de EN corresponden a recién nacidos prematuros (Uauy mortalidad en esos dos grupos es del 16 y el 42%, respectivamente.

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CAPÍTULO 76 Enterocolitis necrosante y síndrome del intestino corto 1091

Alimentación con leche maternizada de investigación especializada, el conocimiento acabado de la patogenia


de la EN sigue siendo difícil. El conocimiento actual de la enfermedad
La alimentación con leche maternizada se asocia con un mayor riesgo es que esta es multifactorial, con la combinación de alteración de
de EN, en comparación con la alimentación con leche materna. Desde la perfusión intestinal, colonización bacteriana anómala, alteración
hace tiempo se sabe que la leche materna es la fuente nutricional óptima de la función de barrera del intestino y una respuesta inmunitaria
para recién nacidos prematuros y que protege contra la EN (Lucas y inmadura, hiperactiva, que induce inflamación, isquemia y eventual
Cole, 1990). En la actualidad, existe mucha evidencia que respalda necrosis intestinal.
estos hallazgos, incluida una revisión Cochrane reciente que comunica
que el riesgo de EN es 2,8 veces más alto en recién nacidos prematuros
alimentados con leche maternizada que en los alimentados con leche Isquemia intestinal
materna (Cristofalo et al., 2013; Quigley y Mcguire, 2014). Las primeras hipótesis respecto de la patogenia de la EN giraron
alrededor de la idea de que acontecimientos hipoxémicos/isquémicos
Cardiopatía congénita perinatales inducían hipoperfusión esplácnica y la consiguiente lesión
intestinal (Touloukian et al., 1972). En respaldo de esta hipótesis, los
Otros factores de riesgo que se han asociado con una mayor tasa de especímenes histológicos de EN demuestran características isquémicas,
EN son CC y uso de indometacina. como ulceración mucosa y necrosis por coagulación (Nowicki, 2005).
Antes se consideraba que el cierre profiláctico del conducto arterioso Hallazgos epidemiológicos, incluida la mayor incidencia de EN en
persistente (CAP) conllevaba un riesgo hasta del 30% de EN; sin recién nacidos con CC grave, consumo materno de cocaína y, posi-
embargo, un mayor estudio ha indicado que es el tratamiento con indo- blemente, una asociación con transfusión de sangre, también avalan
metacina, y no el CAP en sí mismo, el que aumenta el riesgo de EN. este mecanismo. Sin embargo, la vasta mayoría de los recién nacidos
De hecho, estudios controlados y aleatorizados ulteriores y revisiones con EN no presentan ningún antecedente de acontecimientos hipoxé-
Cochrane han demostrado una mayor tasa de EN en recién nacidos micos (Stoll et al., 1980). Además, muchos modelos animales de EN
prematuros tratados con indometacina. Más aún, datos recientes han recurren a hipoxia intermitente para provocar lesión intestinal similar
observado que el cierre del CAP con ibuprofeno fue tan eficaz como a la EN humana, aunque a menudo se necesita otro factor, como una
la indometacina y redujo en más del 50% el riesgo de EN (Ohlsson bacteria o un lipopolisacárido patológicos, para inducir EN, lo que
et al., 2015). hace pensar que la hipoxia sola es insuficiente para causar EN (Sodhi
Las formas más graves de CC (excluidos el CAP y las comunica- et al., 2008). Evidencia más reciente parece sugerir que una respuesta
ciones interauriculares e interventriculares) se asocian con una mayor inflamatoria exagerada en el intestino del prematuro causa alteración
incidencia de EN. Hace poco, la Vermont Oxford Network comunicó de la homeostasis microcirculatoria intestinal, regulada por un equili-
un riesgo del 13% de EN en recién nacidos con MBPN con CC, en brio entre el óxido nítrico vasodilatador y el mediador vasocons-
comparación con el 9% en recién nacidos con MBPN sin CC. Además, trictor endotelina 1 (Watkins y Besner, 2013). La inflamación mucosa
la combinación de CC y EN aumentó la tasa de mortalidad global al modifica el equilibrio en favor de la vasoconstricción, que provoca
55% (Fisher et al., 2015). isquemia microvascular intramural y representa un acontecimiento
secundario crítico en la patogenia de la EN, pero lo más probable es
que no sea el factor desencadenante.
Transfusiones de sangre
Cada vez han más evidencia que sugiere una asociación entre trans-
fusión de concentrados eritrocíticos (TCE) y EN. Se postula que se
Colonización bacteriana anómala
produce autorregulación vascular intestinal tras la corrección de la En comparación con los neonatos a término, los neonatos prema-
anemia, que induce lesión intestinal aguda relacionada con la trans- turos tienen menor diversidad bacteriana global, así como menor
fusión (LIART) (Marin y Strickland, 2013; Nickel y Josephson, 2015). cantidad de organismos comensales, como especies de Bifidobacteria
Se necesitan más datos para comprender mejor este patrón, dado que y Lactobacillus, que protegen contra la inflamación y promueven la
todos los estudios hasta la fecha son retrospectivos, y hay por lo menos salud intestinal (Gewolb et al., 1999). Además, ha habido varios
un estudio de cohortes que no muestran ninguna asociación temporal informes sobre brotes locales de EN que sugieren que las bacterias
entre EN y TCE. pueden desempeñar un papel causal en la patogenia de la EN (Boccia
et al., 2001). Si bien ha habido numerosos estudios que intentan
identificar bacterias específicas asociadas con EN, hay escaso consenso,
Microorganismos infecciosos y no se ha identificado ninguna especie bacteriana constante que
Aunque la EN suele presentarse de forma esporádica, hay numerosos cumpla los criterios como causa de EN. Aun así, los animales libres
informes de brotes de EN en el contexto de la UCIN y epidemias de gérmenes no presentan EN (Musemeche et al., 1986), y se acepta
que la colonización anómala del intestino con bacterias gramnegativas
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ocasionales que parecen asociarse con un patógeno bacteriano indi-


vidual, presumiblemente causal (Boccia et al., 2001). Los orga- potencialmente patógenas, como Escherichia, Salmonella, Shigella,
nismos asociados con EN son Klebsiella pneumoniae, Escherichia Klebsiella y/o Pseudomonas, desempeña un papel clave en la patogenia
coli, Clostridium perfringens, estafilococos coagulasa-negativos y de la EN (Grishin et al., 2013).
rotavirus. Si bien se ha postulado ampliamente que la EN la causa
un microorganismo infeccioso concreto, ningún patógeno aislado Alteración de la función de barrera del intestino
ha cumplido todos los postulados de Koch, y ahora se presume que
la colonización anómala del intestino del recién nacido prematuro y respuesta proinflamatoria
con bacterias patógenas es una contribución clave a la EN, pero no Independientemente de la etiología de la lesión inicial, estos acon-
la causa absoluta. tecimientos inducen la alteración de la barrera epitelial intestinal
unida a una respuesta inmunitaria exagerada e inmadura. A su vez,
Patogenia esto causa una respuesta proinflamatoria que impulsa la progresión
de la EN.
Desde hace tiempo, el mecanismo exacto de la patogenia de la EN ha La pieza central de la respuesta proinflamatoria parece ser el receptor
sido el flagelo de muchos laboratorios de investigación; pese a décadas de tipo Toll 4 (TLR4) (Hackam et al., 2013). El TLR4 es un receptor de

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1092 PA RT E XI V Aparato digestivo

reconocimiento de patrones altamente conservado, que es activado por inflamación intestinal grave y necrosis, las características clínicas
un lipopolisacárido, una proteína virulenta de la pared celular hallada distintivas de la EN.
en bacterias gramnegativas. Los recién nacidos a término expresan bajos
niveles de TLR4 en la mucosa intestinal. En cambio, el intestino del Presentación clínica
prematuro se caracteriza por altos niveles de TLR4. Cuando el intestino
del prematuro es colonizado con bacterias gramnegativas patógenas, La presentación clínica de la EN puede incluir un amplio espectro de
existe una respuesta inflamatoria anterógrada exagerada mediada por hallazgos. En los casos leves, los únicos signos pueden consistir en ligera
mayor producción del factor nuclear kB, que impulsa la transcripción hematoquecia y alto residuo gástrico. Los casos más complicados de
de citocinas proinflamatorias (p. ej., interleucina 1 [IL-1] y factor de EN pueden manifestarse por distensión y dolor en la palpación abdo-
necrosis tumoral α), óxido nítrico sintetasa inducible y fosfolipasa A2 minales, con franca intolerancia alimentaria. En los casos más graves
(Gribar et al., 2009). Asimismo, los recién nacidos prematuros han hay signos de respuesta inflamatoria significativa y sepsis, que pueden
mostrado propensión a sintetizar la citocina proinflamatoria IL-8 en incluir trombocitopenia, leucopenia, letargo, acidosis, hipotensión,
respuesta a bacterias patógenas (Claud et al., 2004). Además, los recién apnea y muerte. Además, la evolución temporal para la progresión des-
nacidos prematuros tienen menor actividad de acetilhidrolasa del factor de los primeros síntomas hasta la afectación hemodinámica significativa
activador de plaquetas (PAF), lo que predispone a mayores concen- puede ser en extremo variable, con la posibilidad de progresión rápida
traciones de PAF, un potente mediador proinflamatorio que contribuye y paro cardiorrespiratorio si no se reconoce.
a la EN (Caplan et al., 1990). Esta respuesta proinflamatoria exagera- Un hallazgo frecuente en la EN de comienzo reciente es la neuma-
da induce alteración de la barrera intestinal, mayor translocación de tosis intestinal (fig. 76.1) en la radiografía de abdomen, y esto puede
bacterias patógenas, sepsis sistémica e hiperactivación persistente de la observarse con presencia de gas en la vena porta o sin ella (fig. 76.2). Los
cascada proinflamatoria. criterios de Bell, publicados por primera vez en 1978 (Bell et al., 1978)
Además del realce de las vías proinflamatorias, los neonatos prema- y modificados luego en 1986 (Walsh y Kliegman, 1986), son un sis-
turos muestran depleción de los mediadores antiinflamatorios, como tema de clasificación elaborado con el objetivo de estandarizar las
el factor de crecimiento epidérmico (EGF) (Shin et al., 2000). En opciones terapéuticas para EN sobre la base del estadio preciso de la
particular, el EGF de unión a heparina (HB-EGF), un miembro de la enfermedad en el momento del diagnóstico (tabla 76.1). La presencia
familia EGF, es un factor de crecimiento que actúa para mantener la de gas en la vena porta con neumatosis intestinal o sin ella se asocia con
función de la barrera intestinal y facilita la reparación epitelial intestinal un peor pronóstico (Molik et al., 2001). Se ha debatido si la presencia
después de la lesión. El HB-EGF también funciona como un potente de gas en la vena porta en la radiografía de abdomen es una indicación
mediador antiinflamatorio y, en modelos animales, ha mostrado ser relativa para una operación, pero se considera de forma generalizada un
beneficioso como tratamiento de la lesión intestinal y prevención de indicador de mala evolución clínica. Es importante obtener radiografías
la EN. Más aún, el HB-EGF está presente en la leche materna y está de abdomen en múltiples proyecciones para identificar la presencia de
disminuido en los recién nacidos con EN, lo que sugiere un papel neumoperitoneo, y la manera más fácil de detectarlo es una radiografía
significativo en la patogenia de la EN (Besner, 2015). en proyección lateral estricta o en decúbito lateral (fig. 76.3A). Otros
Esta combinación de una respuesta proinflamatoria exagerada hallazgos más ocultos de aire libre que se pueden observar son una
sin contrarregulación por mediadores antiinflamatorios clave, uni- colección periumbilical o el así llamado «signo de la pelota de rugby»
da a la alteración de la barrera epitelial intestinal, da por resultado visualizado en una radiografía anteroposterior (fig. 76.3B). Más recien-

• Figura 76.1  A. Aspecto radiográfico típico de neumatosis intestinal observado en la enterocolitis


necrosante: anillos concéntricos oscuros alrededor de las asas intestinales en el cuadrante superior
derecho. B. Radiografía que muestra el patrón de burbujas gaseosas observado ocasionalmente en la
enterocolitis necrosante. (Por cortesía del Dr. Lalo Cabrera-Meza, Baylor College of Medicine, Houston,
Texas.)

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CAPÍTULO 76 Enterocolitis necrosante y síndrome del intestino corto 1093

temente, se han utilizado los hallazgos ecográficos de gas en la vena


porta y neumatosis para diagnosticar EN. Bohnhorst et al. (2003) y
Dördelmann et al. (2009) han mostrado que estos hallazgos ecográficos
pueden permitir el diagnóstico más temprano y más preciso de EN.
Sin embargo, los signos ecográficos de gas en la vena porta se deben
utilizar con prudencia al decidir sobre la necesidad de intervención
quirúrgica, dado que se observan hasta en el 10% de los casos leves de
EN que se resuelven con tratamiento médico solo (Silva et al., 2007;
Garbi-Goutel et al., 2014).
Pese al desarrollo de sistemas de puntuación, aún es difícil pre-
decir qué recién nacidos progresarán con rapidez a EN fulminante
que requiere intervención quirúrgica y cuáles tendrán una evolución
clínica más benigna. Importa destacar que algunos recién nacidos
que requerirán cirugía permanecerán lo suficientemente estables
para ser trasladados al quirófano para cirugía, mientras que otros
progresarán con tanta rapidez que el traslado a quirófano para la
intervención es arriesgado, lo que exige operar en la UCIN, o da por
resultado la muerte del recién nacido por su enfermedad. Ng et al.
(2013) describieron la puntuación LIT, que utiliza una combinación
de biomarcadores para intentar identificar a los pacientes con EN
quirúrgica más gravemente afectados. Se midió una combinación
de biomarcadores de la barrera intestinal, L-FABP, I-FABP y TFF3
(LIT), y los recién nacidos que evolucionaron a EN quirúrgica tenían
concentraciones significativamente más altas de biomarcadores que
los recién nacidos que solo presentaban signos de sepsis o EN médi-
• Figura 76.2  Radiografía que revela la presencia de gas portal, que se ca. Si bien este estudio ha sido prometedor para identificar a los
visualiza como estrías lineales oscuras dentro de la densidad hepática. (Por pacientes de más alto riesgo, por ahora no se utiliza en la mayoría
cortesía del Dr. Lalo Cabrera-Meza, Baylor College of Medicine, Houston, Texas.) de los centros.

TABLA
76.1  Criterios de estadificación de Bell modificados para la enterocolitis necrosante

Estadio Signos sistémicos Signos intestinales Signos radiológicos Tratamiento


I: presunta
A Temperatura inestable, Residuo elevado previo a la Normal o íleo leve Dieta absoluta, antibióticos
apnea, bradicardia alimentación por sonda, leve × 3 días
distensión abdominal, sangre
oculta en las heces
B Igual que en IA Igual que en IA, más sangre Igual que en IA Igual que en IA
macroscópica en las heces
II: definida
A: levemente enfermo Igual que en IA Igual que en I, más ausencia Íleo, neumatosis Dieta absoluta,
de ruidos hidroaéreos, dolor intestinal antibióticos × 7-10 días
en la palpación abdominal
B: moderadamente Igual que en I, más acidosis Igual que en I, más ausencia de Igual que en IIA, más Dieta absoluta, antibióticos
enfermo metabólica leve, ruidos hidroaéreos, dolor definido gas en la vena × 14 días
trombocitopenia leve en la palpación abdominal, porta, con o sin
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celulitis abdominal, masa ascitis


en el cuadrante inferior derecho
III: avanzada
A: gravemente enfermo, Igual que en IIB, más Igual que en I y II, más signos de Igual que en IIB, más Dieta absoluta, antibióticos
intestino intacto hipotensión, bradicardia, peritonitis generalizada, marcado ascitis definida × 14 días, reposición
acidosis respiratoria, dolor en la palpación y distensión de líquidos, soporte inótropo,
acidosis metabólica, abdominal tratamiento con respirador,
coagulación intravascular paracentesis
diseminada, neutropenia
B: gravemente enfermo, Igual que en IIIA Igual que en IIIA Igual que en IIB, más Igual que en IIA, más cirugía
intestino perforado neumoperitoneo

Tomado de Walsh MC, Kliegman RM, Fanaroff AA. Necrotizing enterocolitis: a practitioner’s perspective. Pediatr Rev. 1988;9:219–226. Reproducido con autorización de Pediatrics.

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1094 PA RT E XI V Aparato digestivo

• Figura 76.3  A. Radiografía que demuestra perforación intestinal, manifestada por la presencia
de una imagen gaseosa radiotransparente entre la densidad hepática y la pared abdominal externa.
B. Radiografía de otro recién nacido cuyo intestino está perforado. El aire se localiza por delante de las
asas intestinales, así como a lo largo de la pared abdominal derecha, donde desplaza las asas intestinales
en sentido medial. (Por cortesía del Dr. Lalo Cabrera-Meza, Baylor College of Medicine, Houston, Texas.)

Tratamiento ración abdominal, se introducen con lentitud los alimentos enterales


y se aumentan de manera cuidadosa.
Tratamiento médico
Por lo general, el tratamiento de la EN está dirigido a las medidas Tratamiento quirúrgico
de soporte, dado que no se ha identificado ningún tratamiento ni Pese a la asistencia intensiva neonatal óptima, hasta el 50% de los recién
intervención particular para enlentecer o detener la progresión de este nacidos con EN requerirán intervención quirúrgica. La única indicación
proceso patológico. La iniciación rápida de antibióticos de amplio verdaderamente absoluta de intervención quirúrgica es el neumoperito-
espectro, la suspensión de la alimentación y la descompresión gás- neo. Las indicaciones relativas son neumatosis intestinal difusa, gas en la
trica son las claves del tratamiento. No hay consenso respaldado en la vena porta, un asa intestinal dilatada y fija o deterioro clínico pese al tra-
evidencia respecto del régimen antibiótico específico para tratar la EN, tamiento médico máximo. Cuando la gravedad de la EN alcanza el punto
como quedó claro a partir de una encuesta internacional y una revisión de la intervención quirúrgica, hay un aumento asociado de la mortalidad:
Cochrane (Shah y Sinn, 2012; Zani et al., 2015). Por consiguiente, a el 35% en recién nacidos con MBPN con EN quirúrgica en comparación
menudo se prescriben antibióticos por protocolo institucional según con el 21% en recién nacidos con MBPN con EN médica (Fitzgibbons
los antibiogramas locales. Por lo general, se instituyen en etapas tem- et al., 2009). Además, los supervivientes de EN quirúrgica presentan
pranas antibióticos de amplio espectro para cubrir la flora entérica mayor riesgo de SIC, estenosis intestinales (Heida et al., 2015) y DND
típica, incluida cobertura de gramnegativos y anaerobios. En los centros respecto de los recién nacidos con EN médica (Murthy et al., 2014).
con colonización estafilocócica frecuente también se debe considerar la
vancomicina. Se suele continuar con tratamiento conservador de esta
manera durante un mínimo de 7-10 días, lo que depende de la gravedad Laparotomía frente a colocación de drenaje
de los hallazgos clínicos y radiográficos, aunque ningún estudio ha peritoneal
investigado de manera específica el curso óptimo de tratamiento anti-
biótico. En pacientes que requieren intervención quirúrgica, los cultivos Tradicionalmente, la intervención quirúrgica por EN se basaba en
intraoperatorios pueden ayudar a guiar el tratamiento antibiótico. laparotomía exploradora, resección de todos los segmentos de intestino
Por lo general, en tanto el estado clínico del paciente sea estable o necrótico y creación de enterostomías (Walsh y Kliegman, 1986). Sin
mejore con estas medidas, se continúa con radiografías intermitentes embargo, de forma más reciente ha habido un movimiento hacia el uso
para controlar la neumatosis y con tratamiento médico hasta la resolu- de drenaje peritoneal primario (DPP) como tratamiento definitivo de
ción de la neumatosis en las radiografías y la mejoría de la exploración la EN. En 1977 se utilizó por primera vez el DPP como una medida
abdominal. Toda desviación respecto de una evolución clínica estable para ganar tiempo (Ein et al., 1977), y en 1992 se describió como
manifestada por inestabilidad hemodinámica, afectación respiratoria tratamiento definitivo (Takamatsu et al., 1992). Desde esa época ha
por distensión abdominal, trombocitopenia, anemia o coagulación habido numerosos estudios que compararon la eficacia del DPP con
intravascular diseminada puede obligar a la intervención quirúrgica. la laparotomía. En 2001, un metaanálisis no pudo determinar una
Una vez finalizado el tratamiento antibiótico y normalizada la explo- diferencia de evolución entre DPP y laparotomía en recién nacidos

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CAPÍTULO 76 Enterocolitis necrosante y síndrome del intestino corto 1095

con EN que necesitaron intervención quirúrgica (Moss et al., 2001). MBPN con EN médica es del 21%, con un rango del 6% en recién
Este fue seguido de un estudio observacional que utilizó la base de nacidos que pesan 1.500 g a casi el 50% en recién nacidos que pesan
datos del National Institute of Child Health and Human Development menos de 500 g. De modo similar, los recién nacidos con EN que
(NICHD) y que tampoco halló ninguna diferencia de mortalidad pesan menos de 500 g y requieren intervención quirúrgica tienen una
entre DPP y laparotomía en recién nacidos con peso extremadamente mortalidad asociada de casi el 50%. A diferencia de la EN médica,
bajo al nacer (PEBN) con EN quirúrgica (Blakely et al., 2006). Sin la mortalidad de la EN quirúrgica se mantiene en el 30%, aun en recién
embargo, este estudio también mostró una tendencia a mejor evolución nacidos que pesan 1.500 g (Fitzgibbons et al., 2009).
del neurodesarrollo en el grupo de laparotomía. En cambio, un estudio Una de las complicaciones diferidas más frecuentes de los supervi-
que utilizó la Kids’ Inpatient Database observó que el DPP se asoció vientes de EN médica y quirúrgica es la formación de estenosis intes-
con posibilidades 5,7 veces mayores de muerte en comparación con tinales, lo que causa intolerancia alimentaria. Las estenosis aparecen
la laparotomía; esto se ha confirmado en otros estudios de cohortes hasta en el 35% de los supervivientes de EN tras la recuperación y la
(Choo et al., 2011). Todos estos estudios presentan sesgo de selección reiniciación de las tomas enterales (Horwitz et al., 1995). Si bien la
como factor de confusión, dado que los recién nacidos más prematuros presentación típica es la intolerancia alimentaria 2-3 semanas después
y aquellos cuyo estado era más crítico tendieron a ser tratados con DPP. de la reiniciación de las tomas, se han comunicado estenosis asociadas
Estos datos contradictorios llevaron a realizar dos estudios aleatori- a EN hasta 6 semanas después de un curso de EN (Valla et al., 1985).
zados y controlados que compararon DPP y laparotomía, los estudios La mayoría de las estenosis asociadas a EN requerirán intervención
NEC Steps y NET. El estudio NEC Steps observó que, en los recién quirúrgica y se diagnostican mediante pruebas de imagen radioscópicas.
nacidos con MBPN, no había una diferencia estadística de la morta- Otras complicaciones asociadas a EN son el SIC, las infecciones
lidad a 90 días ni de la duración de la nutrición parenteral entre DPP de la vía por acceso venoso central crónico y la hepatopatía asociada
como terapia definitiva y laparotomía (Moss et al., 2006). El estudio a la nutrición parenteral (HPANP). Los recién nacidos prematuros
NET investigó el DPP como medida para ganar tiempo frente a lapa- presentan mayor riesgo de HPANP en general y, por consiguiente, esta
rotomía inicial en recién nacidos con MBPN y tampoco detectó una se suele observar en recién nacidos que presentan EN. Además, la EN
diferencia de mortalidad entre los dos grupos. Sin embargo, se observó recurrente afecta hasta el 6% de los pacientes, con éxito del tratamiento
que el grupo de DDP tardaba más en alcanzar una alimentación enteral médico en la mayoría de los casos recurrentes (Stringer et al., 1993).
completa (Rees et al., 2008). Cabe destacar que el 50% de los recién El DND a largo plazo es frecuente en los supervivientes de EN
nacidos de los grupos de DPP requirieron una eventual laparotomía en quirúrgica. Los estudios previos han demostrado DND hasta en el
ambos estudios. Lamentablemente, estos dos estudios no tuvieron una 50% de los supervivientes de EN a los 12-20 meses de edad (Sonntag
potencia suficiente y no consideraron el DND como criterio de valora- et al., 2000). Un estudio que utilizó la base de datos del NICHD
ción. En consecuencia, tanto una revisión Cochrane (Rao et al., 2011) observó que los recién nacidos de PEBN con EN quirúrgica, pero no
como una revisión sistemática reciente del comité de evolución de la médica, tuvieron un aumento significativo de las posibilidades de DND
American Pediatric Surgical Association (Downard et al., 2012) han en comparación con los recién nacidos sin EN (Hintz et al., 2005).
concluido en que aún hay evidencia insuficiente para recomendar el
DPP como un tratamiento definitivo de la EN quirúrgica. Esperamos Prevención
tener una respuesta a este debate después de finalizar el estudio NEST
(NCT 01029353), que ha aleatorizado a recién nacidos que pesaban Dada la presentación aguda de la EN, su progresión rápida y la falta
menos de 1.000 g a DPP o laparotomía y valorará la evolución, incluido de pruebas de detección sistemática de fácil acceso, el método más
el DND, a los 18-22 meses. prometedor para reducir la morbimortalidad de la EN reside en la
prevención. Más aún, se necesitan de forma desesperada medidas pre-
ventivas, dado que la mejor asistencia neonatal ha dado por resultado
Opciones quirúrgicas mayor supervivencia de recién nacidos extremadamente prematuros,
Es importante conocer que existen varias opciones quirúrgicas cuando que son los que tienen máximo riesgo de presentar EN. En estudios
se toma la decisión de practicar una laparotomía por EN. El abordaje en animales, una incidencia más baja de EN se ha asociado con ali-
tradicional de resección del intestino necrótico y creación de una osto- mentación con leche materna (Dvorak et al., 2004), suplementos de
mía es eficaz, pero conlleva los riesgos de complicaciones del estoma, inmunoglobulina A (IgA) (Barlow et al., 1974), probióticos (Caplan
así como la necesidad de una segunda operación para el cierre de la et al., 1999), antagonistas del PAF (Caplan et al., 1997), ácidos grasos
ostomía (O’Connor y Sawin, 1998). La resección con anastomosis poliinsaturados (AGPI) (Lu et al., 2007), EGF (Dvorak et al., 2008),
primaria en un recién nacido prematuro de tamaño apropiado y hemo- fosfatasa alcalina intestinal (Whitehouse et al., 2010) o antioxidantes
dinámicamente estable evita los riesgos de los estomas y tiene la ventaja (Cueva y Hsueh, 1988). Estudios en seres humanos han mostrado un
de requerir solo una operación (Griffiths et al., 1989). Sin embargo, el limitado éxito en la prevención de la EN usando IgA (Eibl et al., 1988),
riesgo de filtración y estenosis puede ser mayor con este tratamiento, esteroides (Halac et al., 1990), AGPI (Carlson et al., 1998), glutamina
y se necesitan más datos antes de poder efectuar una recomendación (El-Shimi et al., 2015), arginina (Mitchell et al., 2014) y lactoferrina
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definitiva de anastomosis primaria. (Manzoni et al., 2014). Hasta la fecha, ninguna de estas estrategias
En los pacientes con necrosis más extensa o múltiples segmentos ha mostrado una reducción significativa de la incidencia de EN en
del intestino afectado, otros abordajes quirúrgicos, como la técnica clip estudios aleatorizados en gran escala, y existe una evidencia limitada
and drop (Vaughan et al., 1996) o el abordaje patch, drain, and wait para abogar por su implementación generalizada. La evidencia actual
(Moore, 2000), requieren múltiples operaciones en distintos tiempos, sugiere que las dos estrategias más prometedoras para prevenir la EN
pero pueden dar por resultado mejor preservación de la longitud intes- son el uso exclusivo de leche materna y los suplementos de probióticos.
tinal en los recién nacidos con alto riesgo de presentar SIC. Los datos
sobre estas técnicas se limitan a pequeñas series de casos en la literatura Uso exclusivo de leche materna
quirúrgica.
La leche materna es una fuente nutricional ideal para el recién nacido
Evolución prematuro por innumerables razones. La leche materna proporciona
una serie de factores antiinfecciosos, como IgA y probióticos, así como
La mortalidad asociada con EN continúa siendo alta, y el peor pronós- nutrientes esenciales que promueven la salud intestinal, lo que resulta
tico corresponde a los recién nacidos con MBPN que presentan EN importante para la prevención de la EN. En la actualidad hay nume-
quirúrgica. En términos generales, la mortalidad en recién nacidos con rosos estudios controlados y aleatorizados que han demostrado que

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1096 PA RT E XI V Aparato digestivo

la incidencia de EN es menor cuando los recién nacidos prematuros de supervivencia cuando los niños con SIC son tratados en centros
son alimentados de manera exclusiva con leche materna que con leche pediátricos especializados, multidisciplinarios, de rehabilitación intes-
maternizada (Schanler et al., 2005; Sullivan et al., 2010; Cristofalo tinal (Modi et al., 2008).
et al., 2013). Además, cada vez hay más evidencia, incluidos los resul- El objetivo de la rehabilitación intestinal consiste en progresar
tados de un estudio aleatorizado y controlado reciente, de una menor lentamente con la alimentación enteral y prescindir de forma progresiva
incidencia de EN en recién nacidos prematuros alimentados exclusiva- de la nutrición parenteral, a medida que el intestino restante atraviesa
mente con leche materna donada, en comparación con la alimentación el proceso de adaptación intestinal. Tras la resección intestinal masiva,
con leche maternizada (Cristofalo et al., 2013). Revisiones Cochrane está bien establecido que el intestino remanente presenta alteraciones
recientes han concluido en que hay evidencia convincente que indica estructurales significativas. Desde el punto de vista macroscópico, el
que todos los recién nacidos prematuros deben ser alimentados con intestino proximal se dilata a fin de aumentar la superficie mucosa para
leche materna cuando es factible (Quigley y Mcguire, 2014). Futuros la absorción de nutrientes. Todo aumento de la longitud del intestino
estudios deberán evaluar el riesgo de EN en bebés alimentados con más allá del crecimiento global del paciente es insignificante, con excep-
leche materna enriquecida con leche maternizada, como se suele utilizar ción del recién nacido extremadamente prematuro en el que el intestino
en recién nacidos con MBPN, respecto de la alimentación con leche puede continuar alargándose hasta el término. Un estudio reciente que
materna convencional o leche maternizada sola. utilizó mediciones intraoperatorias de la longitud intestinal demostró
Además de la práctica de utilizar leche materna, muchos han que la longitud del intestino delgado se puede duplicar cuando se
postulado que los esquemas de alimentación cuidadosamente regi- compara al neonato extremadamente prematuro con el recién nacido
mentados pueden reducir la incidencia de EN. Pese a los beneficios a término pequeño (Struijs et al., 2009). Los cambios microscópicos
teóricos, varios estudios aleatorizados y controlados, y dos revisiones de adaptación intestinal consisten en aumento de la profundidad de las
Cochrane recientes no han hallado ninguna diferencia en la inciden- criptas, mayor altura de las vellosidades y mayor número de enterocitos
cia de EN con progreso rápido o lento de la alimentación (Morgan para permitir hiperplasia de la mucosa. Es probable que la adaptación
et al., 2015), iniciación diferida o temprana de la alimentación ente- intestinal comience poco después de la resección, pero puede continuar
ral (Morgan et al., 2014) y alimentación enteral continua o en bolo durante años en niños (Squires et al., 2012). Se considera que el íleon se
(Downard et al., 2012). adapta mejor que el yeyuno, y esto puede explicar por qué los pacientes
con una válvula ileocecal intacta tienen una mejor probabilidad de que
se suspenda la nutrición parenteral (Khan et al., 2015).
Probióticos En la última década se ha observado una mejoría significativa de la
Otro método prometedor para prevenir la EN son los suplementos supervivencia a largo plazo de niños con SIC. Es probable que la mejor
de probióticos. Como se analizó antes, hay colonización anómala del evolución sea multifactorial y esté relacionada con la asistencia multi-
intestino del recién nacido prematuro, y los suplementos de probióticos disciplinaria, la administración más segura de nutrición parenteral, la
comensales, no patológicos, pueden amortiguar la respuesta proin- mejor prevención y tratamiento de sepsis asociada a vías centrales, y
flamatoria que impulsa EN. Por cierto, existen varios estudios aleato- las técnicas innovadoras de alargamiento intestinal. En la actualidad,
rizados y controlados que muestran una reducción de la incidencia de la supervivencia a largo plazo de niños con SIC alcanza el 80-90% en
EN en recién nacidos con MBPN tras los suplementos de probióticos centros especializados en insuficiencia intestinal (Javid et al., 2010;
(Wang et al., 2012). De hecho, una revisión Cochrane reciente con- Khalil et al., 2012; Infantino et al., 2013). Ahora existe una expecta-
cluyó que los suplementos de probióticos en recién nacidos prematuros tiva razonable de que, si los niños sobreviven a su enfermedad crítica
se asocian con una disminución de la mortalidad global y la incidencia neonatal y salvo enfermedades concomitantes graves, los niños con
de EN (Alfaleh y Anabrees, 2014). Este grupo ha pasado a recomendar insuficiencia intestinal puedan sobrevivir hasta la edad escolar y más
firmemente la administración sistemática de suplementos de probióticos allá. Incluso los niños con la mínima longitud intestinal pueden tener
en la población de recién nacidos prematuros. Sin embargo, una cues- evolución razonable a largo plazo, aunque requieren asistencia avanzada
tión que todavía se debe encarar es el tipo, el momento y la duración del continua (Infantino et al., 2013; Sanchez et al., 2013). Además, estu-
tratamiento, dado que muchos de los estudios han empleado diferentes dios preliminares sobre el neurodesarrollo de niños con insuficiencia
regímenes de probióticos. Además, se debe tener cuidado al elegir las intestinal han mostrado resultados alentadores (Javid et al., 2015).
fórmulas de probióticos, dado que estos preparados no están sometidos Existe controversia respecto de la longitud mínima de intestino delgado
a regulaciones rigurosas, y ha habido comunicaciones de aumento necesaria para la supervivencia, y esta cuestión plantea problemas tanto
del asma en la infancia relacionado con probióticos (Kalliomäki fisiológicos como éticos. Los recién nacidos con cualquier longitud de
et al., 2007), así como evolución adversa en adultos con pancreatitis intestino viable restante distal al ligamento de Treitz han mostrado
en estado crítico tratados con probióticos (Besselink et al., 2008). Sin supervivencia razonable en series contemporáneas, aunque los recién
embargo, hasta ahora hay una evidencia abrumadora que indica que nacidos con los remanentes intestinales más cortos pueden necesitar,
los probióticos son seguros y eficaces para prevenir la EN. finalmente, trasplante intestinal cuando son niños mayores.
En particular, la modificación de los lípidos intravenosos en recién
Síndrome del intestino corto nacidos y niños pequeños con insuficiencia intestinal ha determinado
una reducción sustancial de la incidencia y gravedad de la hepatopatía
La insuficiencia intestinal se define como la incapacidad del intestino colestásica asociada a nutrición parenteral, denominada ahora con
de satisfacer las necesidades de energía, líquido y electrólitos, debido a mayor propiedad hepatopatía asociada a insuficiencia intestinal (HPAII).
longitud o función inadecuadas. El SIC es la forma más frecuente de Si bien no se conoce por completo la etiología de la HPAII, se ha
insuficiencia intestinal en los niños. Las etiologías frecuentes de SIC demostrado que el reemplazo de la emulsión lipídica a base de soja
pediátrico son EN, gastrosquisis, atresia intestinal y vólvulo del intes- por lípidos a base de aceite de pescado ricos en w-3 puede inducir la
tino medio. De esta manera, el SIC en los niños suele ser el resultado reversión bioquímica de la HPAII (Puder et al., 2009). Además, datos
de la resección intestinal masiva en recién nacidos pequeños. emergentes han mostrado que la restricción de los lípidos a base de
El tratamiento de niños con SIC requiere asistencia compleja y soja intravenosos a una asignación total de 1 g/kg por día puede tanto
multidisciplinaria. Recientemente, determinadas instituciones pediátricas prevenir como revertir la HPAII en recién nacidos con SIC (Rollins
de alta complejidad han implementado programas de rehabilitación et al., 2013; Sanchez et al., 2013). Hoy en día, muchos centros tratan
intestinal especializados que incorporan un equipo multidisciplinario sistemáticamente a recién nacidos en riesgo de HPAII con restricción de
de profesionales sanitarios para facilitar la asistencia a largo plazo de lípidos para evitar las complicaciones de la HPAII. La reducción
la insuficiencia intestinal. Los datos han demostrado un beneficio de la incidencia de HPAII ha permitido a los profesionales sanitarios

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CAPÍTULO 76 Enterocolitis necrosante y síndrome del intestino corto 1097

centrarse en la rehabilitación intestinal a largo plazo de estos pacientes, del paciente y el injerto en el trasplante intestinal pediátrico está mejo-
en lugar de esforzarse en un trasplante intestinal y hepático temprano. rando y se acerca a los resultados observados en el trasplante hepático
En 2006 se estableció el Pediatric Intestinal Failure Consortium y renal (Sudan et al., 2014).
(PIFCon), que consiste en 18 instituciones de toda Norteamérica, con
programas pediátricos multidisciplinarios de rehabilitación intestinal.
En un estudio de cohortes multicéntrico y retrospectivo de pacientes Lecturas recomendadas
tratados entre 2000 y 2007 en centros del PIFCon, el 27% de los
pacientes murieron, y el 26% fueron sometidos a trasplante intestinal AlFaleh K, Anabrees J. Probiotics for prevention of necrotizing enterocolitis
(Squires et al., 2012). Casi la mitad de los pacientes incorporados en el in preterm infants. Cochrane Database Syst Rev 2014;(4):CD005496.
estudio retrospectivo alcanzaron autonomía enteral. Interesa destacar Fitzgibbons SC, Ching Y, Yu D, et al. Mortality of necrotizing enterocolitis
que se continuó suspendiendo la nutrición parenteral de los niños expressed by birth weight categories. J Pediatr Surg 2009;44(6):1072-
varios años después de la derivación a un centro de rehabilitación intes- 1075, discussion 1075-1076.
tinal, lo que indica que, en los niños, el proceso de adaptación intestinal Grishin A, Papillon S, Bell B, Wang J, Ford HR. The role of the intestinal
puede llevar años. Otros datos de la base de datos del PIFCon demues- microbiota in the pathogenesis of necrotizing enterocolitis. Semin
tran que los recién nacidos que presentaron EN tuvieron una mayor Pediatr Surg 2013;22(2):69-75.
probabilidad de alcanzar autonomía enteral que los niños con etiologías Hackam DJ, Good M, Sodhi CP. Mechanisms of gut barrier failure in the
alternativas de SIC (Khan et al., 2015). pathogenesis of necrotizing enterocolitis: Toll-like receptors throw
El papel del alargamiento quirúrgico del intestino en el tratamiento the switch. Semin Pediatr Surg 2013;22(2):76-82.
del SIC pediátrico continúa evolucionando. Las técnicas frecuentes de Khan FA, Squires RH, Litman HJ, et al. Predictors of enteral autonomy
alargamiento intestinal son el procedimiento de alargamiento intestinal in children with intestinal failure: a multicenter cohort study. J Peds
longitudinal y de ahusamiento diseñado por Bianchi (Bianchi, 1999) y 2015;167(1):29-34.
la enteroplastia transversal seriada (STEP, serial transverse enteroplasty) Moss RL, Dimmitt RA, Barnhart DC, et al. Laparotomy versus peritoneal
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introducida en 2002 (Kim et al., 2003). Ambas intervenciones están
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destinadas a prolongar el tiempo de tránsito intestinal, de manera que Nowicki PT. Ischemia and necrotizing enterocolitis: where, when, and
puedan optimizar la absorción de nutrientes. Los niños con anatomía how. Semin Pediatr Surg 2005;14(3):152-158.
del intestino corto que alcanzan una meseta en su progreso de alimen- Rees CM, Eaton S, Kiely EM, Wade AM, McHugh K, Pierro A. Peritoneal
tación enteral y presentan dilatación intestinal significativa son los drainage or laparotomy for neonatal bowel perforation? A randomized
candidatos ideales para una intervención de alargamiento intestinal. Los controlled trial. Ann Surg 2008;248(1):44-51.
resultados de la intervención de alargamiento varían según el centro, Quigley M, McGuire W. Formula versus donor breast milk for feeding pre-
aunque una publicación reciente del International STEP Data Registry term or low birth weight infants. Cochrane Database Syst Rev 2014;(4):
comunicó que el 55% de los niños alcanzaron autonomía enteral des- CD002971.
pués de la STEP (Jones et al., 2013). Squires RH, Duggan C, Teitelbaum DH, et al. Natural history of pedia-
El trasplante intestinal continúa siendo una opción para niños tric intestinal failure: initial report from the pediatric intestinal failure
con SIC grave que no pueden lograr autonomía enteral sostenida. consortium. J Pediatr 2012;161(4):723-728.
Asimismo, la mayoría de los centros consideran como indicación para Watkins DJ, Besner GE. The role of the intestinal microcirculation in
el trasplante la pérdida de la mayor parte de los sitios de acceso venoso necrotizing enterocolitis. Semin Pediatr Surg 2013;22(2):83-87.
central debida a trombosis. Sin embargo, gracias al éxito reciente de
la rehabilitación intestinal, ha disminuido la utilización del trasplante La bibliografía completa utilizada en este capítulo puede consultarse online
intestinal en niños pequeños con SIC. La supervivencia a largo plazo en www.expertconsult.com
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CAPÍTULO 76 Enterocolitis necrosante y síndrome del intestino corto 1097.e1

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CAPÍTULO 76 Enterocolitis necrosante y síndrome del intestino corto 1097.e3

Palabras clave
Enterocolitis necrosante
Síndrome del intestino corto
Resección intestinal
Nutrición parenteral
Prematuridad
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77
Hepatopatías
ERIN R. LANE, KAREN M. CHISHOLM Y KAREN F. MURRAY

PUNTOS CLAVE En el feto, la vena umbilical lleva sangre oxigenada al hígado a través
de la vena porta izquierda y el conducto venoso, que luego se une con
• La ictericia de inicio temprano (< 24 h de edad) o de aparición reciente la vena hepática izquierda cuando esta drena en la vena cava inferior.
nunca es normal y debe ser investigada. El conducto venoso se cierra de forma espontánea en el momento del
• La evaluación inicial de un recién nacido ictérico siempre debe incluir nacimiento. Las anomalías congénitas de la vena porta o la trombosis
las concentraciones de bilirrubina conjugada y no conjugada. asociada con la colocación de un catéter venoso umbilical pueden
• Los recién nacidos que presentan ictericia secundaria a causar obstrucción de la vena porta e hipertensión portal. La hiper­
hiperbilirrubinemia conjugada deben ser sometidos a una evaluación tensión portal describe un aumento patológico de la presión venosa
rápida para detectar causas potencialmente fatales y tratables en el sistema de la vena porta, que se produce cuando la presión portal
de colestasis, y después, para otras causas.
aumenta por encima de 10 mmHg. La hipertensión portal puede ser
de etiología prehepática (vena porta), intrahepática (cirrosis) o post­
hepática (venosa hepática). Los signos y síntomas de hipertensión
Introducción a la hepatopatía neonatal portal son esplenomegalia, ascitis y hemorragia digestiva por varices
sangrantes.
El hígado es el órgano abdominal de mayor tamaño y actúa como Los neonatos con hepatopatía pueden presentar una serie de
principal lugar del cuerpo para la producción de energía, el metabo­ fenotipos clínicos, que varían de ictericia asintomática a insuficiencia
lismo, la síntesis de proteínas y la desintoxicación. Desde el punto de hepática aguda. La evaluación clínica y el tratamiento difieren según
vista embriológico, el hígado deriva de una excrecencia endodérmica la etiología de base. Los signos clínicos que hacen pensar en hepato­
del intestino proximal y el tabique transverso. Existen múltiples patía de base son ascitis, hepatomegalia con esplenomegalia o sin ella,
tipos de células dentro del parénquima hepático, como hepatocitos, coagulopatía, aumento de transaminasas, hiperamoniemia, hipoglu­
colangiocitos, células estrelladas, células endoteliales y células del cemia y colestasis. La evaluación inicial de una presunta hepatopatía
sistema inmunitario innato. Las funciones clave del hepatocito debe consistir en una exploración física detallada, pruebas analíticas
comprenden la síntesis de proteínas; la síntesis y oxidación de los y de imagen. La evaluación analítica inicial de una presunta hepato­
ácidos grasos; la formación de lípidos, colesterol y sales biliares; patía consiste en una valoración de la lesión y función hepatocelular,
el metabolismo de la bilirrubina; la gluconeogenia; la síntesis de incluidas concentraciones de aspartato aminotransferasa (AST),
glucosa; el ciclo de la urea y la producción de amoníaco, y la desin­ alanina aminotransferasa (ALT), fosfatasa alcalina (ALP), γ-glutamil­
toxicación. El hepatocito es la única célula del cuerpo que sintetiza transpeptidasa (GGT), concentraciones de bilirrubina conjugada
albúmina, fibrinógeno y factores de coagulación protrombínicos. y no conjugada, tiempo de protrombina/cociente internacional
En el contexto de hepatopatía significativa, la pérdida de la función normalizado (INR) y concentraciones de albúmina. Los aumentos
de síntesis normal del hepatocito a menudo causa la aparición de de ALT y AST séricas indican lesión hepatocelular; sin embargo,
coagulopatía e hipoalbuminemia. estas no son específicas del hígado y se pueden hallar en otros tejidos,
La bilis está compuesta fundamentalmente por ácidos biliares, como eritrocitos y músculo esquelético. Un aumento de ALP y GGT
bilirrubina y grasas, que son sintetizados en el hepatocito, secretados al puede indicar obstrucción o inflamación biliar; de todos modos, hay
canalículo, transportados a los conductos biliares y, finalmente, secre­ que tener cuidado en los niños, porque una ALP elevada también es
tados al intestino o almacenados dentro de la vesícula biliar. Es crucial indicativa de crecimiento y metabolismo óseos normales. Como se
para solubilizar las grasas de la dieta y las vitaminas liposolubles (A, D, mencionó antes, un aumento de transaminasas (AST, ALT) indica
E y K) a fin de que estén disponibles para la absorción. La disrupción lesión de los hepatocitos, mientras que un aumento del tiempo de
de este proceso en cualquier nivel provoca colestasis. La colestasis se protrombina/INR e hipoalbuminemia indica pérdida de la función
define como la obstrucción de la excreción normal de bilis desde el normal de los hepatocitos y, con suma probabilidad, un mayor grado
hígado, con la consiguiente acumulación anómala de componentes de de lesión de los hepatocitos. La modalidad inicial más adecuada de
la bilis dentro del hígado y el suero. Si bien colestasis no es sinónimo pruebas de imagen es la ecografía abdominal, que permite detectar
de ictericia por hiperbilirrubinemia conjugada, la concentración sérica anomalías anatómicas o vasculares o trombosis, o hace pensar en
de bilirrubina conjugada es el marcador de colestasis más útil desde el hipertensión portal de base.
punto de vista clínico. En el neonato, la hepatopatía suele presentarse con ictericia recien­
Al igual que los pulmones, el hígado es singular en cuanto a que te o persistente. Los recién nacidos con ictericia reciente deben ser
tiene una doble irrigación sanguínea: sangre venosa rica en nutrientes sometidos a una evaluación urgente, dado que nunca es normal.
de la vena porta y sangre arterial rica en oxígeno de la arteria hepática. Corresponde llevar a cabo una evaluación rápida en los recién nacidos
El drenaje venoso del hígado tiene lugar a través de las venas hepáticas. a término con ictericia que persiste más allá de los 14 días o en

1098 © 2019. Elsevier España, S.L.U. Reservados todos los derechos

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CAPÍTULO 77 Hepatopatías 1099

recién nacidos prematuros con ictericia más allá de los 21 días de etiología específica. En estos recién nacidos, las biopsias hepáticas sue­
vida (Murray y Horslen, 2014). En cualquier recién nacido ictérico len demostrar colestasis intrahepática inespecífica y transformación de
es necesario determinar si la ictericia se debe a hiperbilirrubinemia hepatocitos en células gigantes (Balistreri y Bezerra, 2006) (fig. 77.2).
conjugada o no conjugada. Si bien el diagnóstico diferencial de En la actualidad, se reconoce que las células gigantes multinucleadas
posibles causas variará según el tipo de bilirrubina predominante, representan una respuesta estereotípica del hígado inmaduro a la lesión
es prudente priorizar la evaluación para identificar las afecciones en hepatocelular de muchas etiologías, como infección, obstrucción biliar
las que la intervención temprana se asocia con mejor evolución, por y metabolopatía. Hoy en día, gracias a los avances en secuenciación de
ejemplo, sepsis. siguiente generación del ADN, el número de etiologías identificables
A menudo, se observa hiperbilirrubinemia no conjugada elevada de colestasis y hepatitis neonatal ha aumentado de manera sustancial,
secundaria a ictericia por leche materna, sepsis, hemólisis secun­ lo que reduce más la frecuencia y la utilidad del diagnóstico.
daria a incompatibilidad de grupos sanguíneos (ABO y rhesus) o
discrasia eritrocítica, y, en casos más raros, a síndrome de Crigler- Hepatopatía colestásica
Najjar. Si bien la ictericia fisiológica y la ictericia por leche materna
son frecuentes, se debe investigar, aun así, la ictericia secundaria a Colestasis hace referencia a la obstrucción de la excreción normal
hiperbilirrubinemia no conjugada si esta es de inicio muy temprano de bilis del hígado, con la consiguiente acumulación anómala de
(en las primeras 24 h de vida), se prolonga más allá de los 14 días sales biliares, bilirrubina y lípidos en la sangre. En los recién nacidos,
o las concentraciones son altas. La ictericia por leche materna es la colestasis puede presentarse como ictericia asintomática, prurito,
la etiología más probable de la hiperbilirrubinemia no conjugada deficiencia de vitaminas liposolubles sin causa reconocida o insufi­
cuando la concentración sérica muestra una tendencia descendente; ciencia hepática aguda. Las heces acólicas sugieren obstrucción biliar
no hay evidencia de hemólisis, infección, función tiroidea anómala funcional o anatómica. Los siguientes apartados repasan las etiologías
o aumento de aminotransferasas séricas, y el niño se encuentra bien más frecuentes de colestasis neonatal, y analizan la evaluación y el
desde el punto de vista clínico. En cambio, si la hiperbilirrubinemia tratamiento clínico específicos de enfermedad.
no conjugada persiste o aumenta, o el niño impresiona enfermo, El tratamiento nutricional es crucial y central para la asistencia de
se deben investigar trastornos que influyen en la conjugación de la recién nacidos con colestasis crónica. Con el tiempo suele haber retraso
bilirrubina y el metabolismo de la hemoglobina. de crecimiento secundario a malabsorción por flujo biliar inadecuado,
La presencia de hiperbilirrubinemia conjugada (definida como congestión intestinal por hipertensión portal y mayores necesidades
concentración de bilirrubina conjugada ≥ 15% del total) debe plantear calóricas en el contexto de inflamación hepática crónica. La inges­
la sospecha de hepatopatía de base. La figura 77.1 muestra un algoritmo ta calórica diaria estimada en recién nacidos con colestasis crónica
para la evaluación inicial de la hiperbilirrubinemia conjugada neonatal. se puede acercar al 150% de la de los recién nacidos sanos (Hsu y
A continuación, se repasan etiologías específicas de colestasis neonatal, Chang, 2014). Además, la malabsorción de vitaminas liposolubles
que se resumen en la tabla 77.1. Hepatitis neonatal idiopática es un (A, D, E y K) puede provocar coagulopatía progresiva y fracturas
término aplicado tradicionalmente a recién nacidos que presentan patológicas. Si bien es preferible la nutrición enteral, algunos recién
colestasis o hepatitis neonatal en quienes no se puede detectar una nacidos requieren optimización nutricional con nutrición parenteral
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• Figura 77.1  Algoritmo para la evaluación de un recién nacido con hiperbilirrubinemia conjugada.
ALP, fosfatasa alcalina; ALT, alanina aminotransferasa; AST, aspartato aminotransferasa; GGT, γ-glutamil
transpeptidasa; HIDA, gammagrafía hepatobiliar con ácido iminodiacético; INR, cociente internacional
normalizado; TSH, tirotropina.

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1100 PA RT E XI V Aparato digestivo

TABLA cadena media (TCM), dado que esta fuente de grasas se absorbe direc­
77.1  Causas de colestasis neonatal tamente por el sistema de la vena porta y no necesita emulsificación por
ácidos biliares ni transporte activo, que está alterado en la colestasis.
Infecciosas Los niños con hipertensión portal y ascitis también se benefician de
la restricción de sodio.
Virus del herpes simple
Citomegalovirus
Adenovirus Atresia biliar
Hepatitis B
Sepsis/infección urinaria La atresia biliar (AB) es un trastorno hepatobiliar idiopático de la
Colecistitis lactancia caracterizado por inflamación y fibrosis progresiva que cau­
Colangitis san obliteración de los conductos biliares extrahepáticos (Balistreri
et al., 1996; Hartley et al., 2009). A medida que progresa la enferme­
Endocrinas dad, el resultado final es la destrucción y obliteración variables de los
Hipotiroidismo conductos biliares intrahepáticos. La AB es la causa más frecuente de
Insuficiencia panhipofisaria hepatopatía crónica infantil y la indicación más frecuente de trasplan­
Insuficiencia suprarrenal te hepático en la población pediátrica. La incidencia comunicada de
AB es de 0,5-3,2 de cada 10.000 nacidos vivos, pero varía en función
Metabólicas/genéticas de la geografía y la etnicidad. Por lo general, los recién nacidos con
Galactosemia AB presentan manifestaciones entre las semanas 2 y 5 de vida, pero,
Tirosinemia de tipo 1 de no mediar intervención rápida, la evolución natural de la AB es
Síndrome de Dubin-Johnson siempre mortal a los 2 años de edad.
Síndrome de Rotor La AB se caracteriza por la anatomía de obstrucción biliar extrahe­
Trastornos de la síntesis de ácidos biliares pática (Karrer et al., 1990). Existen dos fenotipos clínicos: AB «clásica»,
Deficiencia de α1-antitripsina que no se asocia con anomalías congénitas extrahepáticas, y «AB con
Fibrosis quística malformación esplénica», que se asocia con otras anomalías congénitas,
Trastornos del transporte de bilis (colestasis como transposición visceral, poliesplenia o asplenia, malformaciones
intrahepática familiar progresiva) vasculares y cardíacas, y malrotación intestinal.
Trastornos de la biogenia del peroxisoma La AB suele manifestarse por ictericia colestásica y hepatoespleno­
megalia entre las 2 y las 5 semanas de edad. Las heces acólicas, que son
Cardiovasculares
frecuentes, hacen pensar en obstrucción biliar, pero a menudo aparecen
Insuficiencia cardíaca mucho después del inicio de la ictericia. Si el recién nacido también
Shock tenía antecedentes de ictericia fisiológica, la ictericia colestásica puede
Isquemia hepática no reconocerse como un episodio nuevo; esto destaca la importancia
de evaluar cualquier ictericia prolongada o reciente en recién nacidos.
Sindrómicas
Si bien suele haber esplenomegalia en el momento del diagnóstico,
Trisomía 21 otros signos de hipertensión portal, como ascitis, en general aparecen
Trisomía 13 en etapas evolutivas más tardías de la enfermedad. A medida que la
Trisomía 18 inflamación y la colestasis crónicas inducen malabsorción, muchos
Síndrome de Joubert recién nacidos con AB presentan aumento de peso inadecuado.
Síndrome de Ivemark Es crucial la rápida diferenciación entre AB y otras causas de coles­
Síndrome de Beckwith-Wiedemann tasis neonatal, dado que la intervención quirúrgica antes de los 2
Síndrome de Bardet-Biedl meses de edad ha mostrado mejorar el éxito de la cirugía y la evolución
Biliares (Ohi, 2001; Shneider et al., 2006). Si las pruebas analíticas iniciales son
sugestivas de AB, se impone una consulta con un hepatólogo infantil.
Atresia biliar La evaluación analítica en etapas evolutivas tempranas de la enfermedad
Quiste de colédoco suele demostrar hiperbilirrubinemia conjugada de 2-7 mg/dl y concen­
Síndrome de Alagille traciones de bilirrubina total de 5-12 mg/dl (Hsu y Chang, 2014).
Coledocolitiasis Por lo general, se observan aumentos de ALT, ALP y GGT (Hsu y
Colangitis esclerosante neonatal Chang, 2014). Se recomienda ecografía abdominal como modalidad
Enfermedad de Caroli de pruebas de imagen de primera línea, que puede demostrar ausen­
Obstrucción por masa o estenosis
cia de la vesícula biliar después de ayuno adecuado o un remanente
Nutricionales fibrótico del conducto biliar extrahepático. En el hilio hepático, se
puede describir como «signo del cordón triangular» un cordón ecógeno
Nutrición parenteral total triangular o tubular de tejido fibroso que representa el remanente biliar.
La sensibilidad comunicada de este hallazgo ecográfico es del 73%
(Lee et al., 2003). Como seguimiento de la ecografía abdominal se
total. Los principios generales de tratamiento nutricional en los recién puede recurrir a la gammagrafía hepatobiliar con derivados del ácido
nacidos colestásicos consisten en garantizar calorías y nutrientes absor­ iminodiacético marcados con tecnecio (gammagrafía con HIDA)
bibles adecuados, controlar las concentraciones y los suplementos de para ayudar a diferenciar entre causas obstructivas y no obstructivas
vitaminas liposolubles, y, en recién nacidos que no pueden mantener de colestasis neonatal. En la AB, las pruebas con radionucleótidos
una ingesta adecuada por vía oral para el crecimiento, prepararse para demuestran rápida captación del marcador, pero ausencia de excreción
aumentar el soporte nutricional y los suplementos con tomas ente­ al intestino a las 24 h. La sensibilidad de las gammagrafías con HIDA
rales complementarias a través de sonda nasogástrica o iniciación de puede aumentar mediante el pretratamiento con fenobarbital oral
nutrición parenteral en situaciones de retraso de crecimiento o falta de (5 mg/kg/día) durante 5 días. Sin embargo, hay que tener cuidado
aumento de peso adecuado con nutrición enteral máxima. La selección de no diferir el diagnóstico definitivo aguardando los resultados de
de la leche artificial debe considerar el contenido de triglicéridos de la prueba y reconocer que las causas funcionales de colestasis (como

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CAPÍTULO 77 Hepatopatías 1101

• Figura 77.2  Histología de la hepatitis neonatal. A. Vista a bajo aumento de una tinción con hema-
toxilina y eosina de una biopsia hepática que demuestra hepatocitos con transformación en células
gigantes y degeneración en globo. Es evidente cierta colestasis. B. Vista a mayor aumento de la misma
biopsia que muestra los hepatocitos con transformación en células gigantes, así como un foco de
hematopoyesis extramedular.

• Figura 77.3  Histología de la atresia biliar. A. Tinción con hematoxilina y eosina de una biopsia
hepática de una niña de 3 meses de edad que demuestra proliferación de conductillos biliares. Se
observan tapones de bilis. B. Tinción tricrómica de Masson de un espécimen de trasplante hepático de
la misma niña a los 8 meses de edad. Este espécimen presenta cirrosis difusa con expansión fibro­
sa de los espacios portales. La tríada portal carece de conductos biliares, pero hay una marcada reac­
ción de los conductillos biliares, muchos de los cuales contienen tapones de bilis.

hipotiroidismo) también pueden causar falta de excreción de HIDA la Y de Roux con el hígado en el hilio hepático, la región del hígado
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en la gammagrafía. La biopsia hepática percutánea es útil para des­ a partir de la cual los conductos biliares se vuelven extrahepáticos. El
cartar causas alternativas de colestasis. Los hallazgos histopatológicos restablecimiento del flujo biliar puede evitar o retrasar la progresión de
que respaldan un diagnóstico de AB demuestran proliferación ductal la enfermedad, el agravamiento de la fibrosis y la evolución a hepato­
biliar y taponamiento de los conductos biliares (fig. 77.3). Dado el patía terminal. Sin embargo, pese a la portoenterostomía de Kasai,
carácter progresivo de la AB, los hallazgos histológicos variarán según la mayoría de los niños progresan a cirrosis e hipertensión portal, y,
el momento de progresión. finalmente, requieren trasplante hepático.
El fracaso para descartar AB una vez finalizada la evaluación previa
exige exploración quirúrgica con colangiograma intraoperatorio. Se Síndrome de Alagille (displasia arteriohepática)
puede llegar al diagnóstico de AB o confirmarlo en el momento de la
laparotomía al observar atresia del árbol biliar y ausencia de permea­ El síndrome de Alagille (SALG) es un trastorno genético autosómico
bilidad del sistema ductal biliar en el colangiograma intraoperatorio. dominante o esporádico de novo caracterizado por colestasis crónica y
Si se confirma la AB, se recomienda la intervención quirúrgica con progresiva secundaria a escasez de conductos biliares intralobulillares.
una portoenterostomía hepática de Kasai. Esta es una intervención La prevalencia estimada es de 1 de cada 30.000 nacidos vivos (Murray
quirúrgica que restablece el flujo normal de bilis al resecar los conductos y Horslen, 2014). La mayoría de los niños con SALG presentan una
biliares obstruidos y crear una anastomosis de una rama yeyunal de mutación del gen JAG1, localizado en el cromosoma 20 (Li et al., 1997;

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1102 PA RT E XI V Aparato digestivo

Oda et al., 1997; Warthen et al., 2006). El producto de JAG1 es un (Kamath y Piccoli, 2014) (fig. 77.4). En recién nacidos a término y
ligando de la vía de señalización Notch, que desempeña un papel clave niños mayores, el cociente normal entre conductos biliares y espacio
en la embriogenia y la patogenia del trastorno. Un pequeño número de portal oscila de 0,9 a 1,8; los cocientes menores de 0,9 son sugestivos
recién nacidos con SALG tienen mutaciones de NOTCH2 (McDaniell de escasez. Dada la progresión normal del desarrollo del sistema biliar
et al., 2006; Kamath et al., 2012). en la lactancia y la importancia de descartar AB, los recién nacidos con
El SALG es un síndrome multiorgánico caracterizado por hepato­ ictericia colestásica y aumento de GGT suelen requerir biopsia hepática
patía colestásica, rasgos faciales estereotípicos, cardiopatía congénita, y gammagrafía hepatobiliar, y un colangiograma intraoperatorio para
embriotoxón posterior, vértebras en mariposa y enfermedad renal. verificar la permeabilidad del sistema biliar extrahepático.
La mayoría de los recién nacidos con SALG presentan colestasis en La osteopatía metabólica es especialmente llamativa en el SALG. El
los primeros 3 meses de vida; sin embargo, los que tienen manifes­ aumento de ALP suele reflejar metabolismo óseo anómalo, además de
taciones extrahepáticas graves (en general, causadas por la cardiopatía patología biliar. Las concentraciones séricas de sales biliares pueden ser
congénita asociada) pueden debutar en el momento del nacimiento en extremo altas, aun en ausencia de ictericia, lo que provoca prurito
o, incluso, ser identificados mediante la ecografía prenatal. Si bien resistente al tratamiento. La hipercolesterolemia y la hipertrigliceridemia
muchas formas de cardiopatía congénita se han asociado con SALG pueden causar la aparición de xantomas, más prominentes en las super­
(p. ej., tetralogía de Fallot y transposición de las grandes arterias), la ficies extensoras y las zonas de traumatismos menores, incluidas la zona
más frecuente es la estenosis pulmonar periférica. Los rasgos faciales del pañal y las superficies plantares de los pies, el abdomen y el cuello.
característicos suelen ser difíciles de apreciar en el período neonatal, El tratamiento del SALG está dirigido a mejorar o mantener la
pero consisten en frente prominente y mentón puntiagudo, que nutrición adecuada, tratar las complicaciones si hay colestasis y apoyar
confieren un aspecto triangular a la cara, ojos hundidos con hiperte­ la salud cardiovascular. La introducción de este apartado presenta
lorismo y nariz en silla de montar. detalles respecto del tratamiento nutricional de los recién nacidos con
Cuando la ictericia colestásica aparece en las primeras 6 semanas colestasis.
de vida, se debe tener cuidado de distinguir el SALG de etiologías
alternativas de colestasis neonatal, en particular AB y otras causas trata­ Deficiencia de α1-antitripsina
bles en las que la iniciación oportuna del tratamiento puede modificar
la evolución. La evaluación inicial debe incluir bioquímica sérica, La deficiencia de α1-antitripsina (A1AT) es la causa genética más
ecografía abdominal y ecocardiograma cuando se detecta un soplo frecuente de hepatopatía y afecta a alrededor de 1 de cada 2.000 nacidos
cardíaco. En el SALG, la hiperbilirrubinemia conjugada se asocia vivos (Perlmutter, 1998, 2000, 2007). Es un trastorno autosómico
con aumento de aminotransferasas séricas y GGT, lo que refleja la dominante que causa una reducción de la A1AT, una serina proteasa
afectación biliar. Si existe la sospecha clínica de SALG, se debe realizar producida en el hígado cuyo papel es inhibir otras proteasas y elastasas
una radiografía de columna para evaluar una hemivértebra o vértebra que pueden inducir destrucción celular. El defecto genético se debe a la
en mariposa, y se recomienda una evaluación oftalmológica para inves­ sustitución de un único aminoácido dentro de la proteína A1AT, que
tigar un embriotoxón posterior. causa un plegamiento molecular anómalo e incapacidad de la proteína
Aunque no se necesita una biopsia hepática para el diagnóstico de de ser procesada más allá del aparato de Golgi. La acumulación hepática
SALG en presencia de otras características sindrómicas estereotípicas, se excesiva de la proteína A1AT anómala causa lesión hepatocelular.
debe practicar una cuando hay dudas diagnósticas. La histopatología del El fenotipo clínico de la deficiencia de A1AT comprende manifes­
SALG se caracteriza por escasez de conductos biliares; sin embargo, esto taciones tanto hepáticas como pulmonares. Por lo general, la enferme­
no es patognomónico. En el recién nacido prematuro, el número de con­ dad pulmonar se manifiesta en la edad adulta, mientras que la afectación
ductos biliares suele estar disminuido y, en consecuencia, se debe tener hepática suele estar presente en los neonatos. En la A1AT, la hepato­
cuidado de no llegar a un diagnóstico incorrecto de escasez patológica patía se caracteriza la mayoría de las veces por ictericia colestásica,

• Figura 77.4  Histología del síndrome de Alagille. A. Tinción con hematoxilina y eosina de una biopsia
hepática de un niño de 3 meses que demuestra pérdida de conductos biliares en una tríada portal. Esta
escasez de conductos biliares se acompaña de colestasis hepatocanalicular. Los hepatocitos también
presentan tumefacción. B. A los 10 meses de edad, otro niño recibió un trasplante por síndrome de
Alagille. En la tinción con hematoxilina y eosina, el hígado mostró escasez de conductos biliares en las
tríadas portales. Esta biopsia también muestra colestasis hepatocanalicular leve.

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CAPÍTULO 77 Hepatopatías 1103

pero, en los casos más avanzados, también se puede observar hepato­ de los ácidos biliares. Los trastornos de la síntesis de ácidos biliares son
esplenomegalia y ascitis. raros, con una prevalencia de 1 de cada 50.000 en la población general.
La deficiencia de A1AT se diagnostica por pruebas serológicas e En el período neonatal, los fenotipos de los trastornos de la síntesis de
histología hepática. La prueba sérica más específica es el fenotipado de ácidos grasos son hepatitis aguda, insuficiencia hepática aguda, coles­
A1AT (tipo Pi). Si bien se suele utilizar como una prueba de detección tasis persistente y hepatitis crónica progresiva.
menos costosa y más ampliamente accesible, las concentraciones séricas En los seres humanos, el ácido cólico y el ácido quenodesoxicólico
de A1AT pueden presentar falsos aumentos hasta el rango normal en son los principales ácidos biliares, y la alteración de cualquier paso de su
períodos de inflamación o infección sistémicas y, en consecuencia, no síntesis provoca la acumulación de metabolitos intermedios tóxicos. La
se deben emplear para el diagnóstico de A1AT. Las variantes de A1AT se lesión hepática asociada con trastornos de la síntesis de ácidos biliares se
denominan según su patrón de migración electroforética (Pierce y debe a lesión hepatocelular directa por acumulación de intermediarios
Eradio, 1979). La proteína normal se designa M, y las variantes S y tóxicos o a la acumulación de colesterol, fármacos y otros tóxicos dentro
Z son las más frecuentes e inducen una reducción de A1AT sérica. del hígado por excreción biliar anómala.
La variante PiZZ homocigótica se denomina así porque presenta la Las manifestaciones clínicas más frecuentes de los trastornos de la
migración más lenta en gel y causa el fenotipo patológico más grave. síntesis de ácidos biliares son ictericia neonatal, retraso de crecimiento,
En general, la hepatopatía se manifiesta solo en las variantes PiZZ, hepatoesplenomegalia, osteopatía metabólica y sangrado en etapas tem­
PiSZ o, rara vez, PiMZ (Ranes y Stoller, 2005). pranas de la infancia. Algunos trastornos se asocian con enfermedad
El hallazgo histológico clásico, pero no patognomónico, de la neurológica progresiva, manifestada por convulsiones, retraso del
deficiencia de A1AT son glóbulos eosinófilos resistentes a diastasa desarrollo, sordera, ceguera y debilidad neuromuscular.
y positivos para ácido peryódico de Schiff dentro de los hepatocitos, En los recién nacidos con trastornos de la síntesis de ácidos biliares,
que representan la proteína anormal acumulada atrapada dentro del las pruebas analíticas muestran concentraciones séricas normales o bajas
retículo endoplásmico. La histología hepática también puede demos­ de ácidos biliares, aumento de aminotransferasas séricas, GGT normal
trar destrucción, proliferación de conductos biliares y, quizá, escasez y complicaciones de la malabsorción de grasas, como deficiencia de
de conductos biliares, lo que es importante para descartar AB y SALG. vitaminas liposolubles. Si se observan bajas concentraciones séricas de
Si bien se ha utilizado A1AT recombinante para el tratamiento ácidos biliares, se deben medir los ácidos biliares urinarios para identifi­
de las manifestaciones pulmonares, el tratamiento de la hepatopatía car el defecto de síntesis particular. Por lo general, las biopsias hepáticas
asociada es sobre todo de sostén, dado que por ahora no se dispone son inespecíficas y pueden demostrar taponamiento canalicular biliar,
de terapias específicas ni dirigidas. Como en todos los trastornos inflamación sin proliferación de conductos biliares o transformación
que causan colestasis, es frecuente la malabsorción de grasas en la en células gigantes (Setchell y Heubi, 2006).
deficiencia de A1AT. Por lo general, los recién nacidos colestásicos El tratamiento de errores congénitos de la síntesis de ácidos biliares
se benefician con leche artificial rica en TCM para ayudar a la absor­ se centra en apoyar el crecimiento normal y administrar suplementos
ción de grasas y los suplementos de vitaminas liposolubles según de vitaminas liposolubles. El ácido cólico es un tratamiento preferido
sea necesario. Además, se puede utilizar ácido ursodesoxicólico para de la mayoría de los trastornos frecuentes de la síntesis de los princi­
mejorar el flujo biliar; sin embargo, ningún estudio ha demostrado pales ácidos biliares, porque suprime la producción de intermediarios
un beneficio claro. Tradicionalmente se consideraba que la lactancia tóxicos de los ácidos biliares. El ursodiol no está indicado, porque
materna proporcionaba algún beneficio; sin embargo, en un estudio no suprime la producción de intermediarios anómalos de los ácidos
que comparó a recién nacidos alimentados con leche artificial y con biliares.
leche materna no se detectó ningún beneficio (Udall et al., 1985;
Labrune et al., 1989). Para prevenir la aceleración de las manifes­
taciones pulmonares, como enfisema temprano, es crucial no fumar Colestasis intrahepática familiar progresiva
y evitar la contaminación ambiental. La colestasis intrahepática familiar progresiva (CIFP) es un grupo
En los recién nacidos y los niños con hepatopatía terminal está de trastornos autosómicos recesivos caracterizados por exportación
indicado el trasplante hepático. Como la mayor parte de la A1AT se defectuosa de bilis que induce colestasis. Este grupo de trastornos se
produce en el hígado, el receptor asume el fenotipo Pi de los donantes, clasifica sobre la base de la mutación genética, y se denominan CIFP-1,
y después del trasplante presenta concentraciones séricas normales de la CIFP-2 y CIFP-3. La hepatopatía de la CIFP se debe a la acumulación
proteína funcional, menor riesgo de enfermedad pulmonar y ninguna de sales biliares dentro de los hepatocitos que causa intensa colestasis,
probabilidad de enfermedad recurrente en el órgano trasplantado. deficiencia de vitaminas liposolubles y prurito resistente al tratamiento.
La CIFP-1, conocida también como enfermedad de Byler, es cau­
Hepatopatía por fibrosis quística sada por una mutación del gen ATP8B1 del cromosoma 18q21-22,
que codifica una proteína flipasa (FIC1) que facilita el movimiento de
Si bien la fibrosis quística (FQ) es frecuente y se observa en alrededor de los aminofosfolípidos de la membrana canalicular externa a la interna.
1 de cada 2.500 nacimientos en Norteamérica, la hepatopatía relaciona­ Como el gen también se expresa en muchos tejidos extrahepáticos,
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da con FQ es infrecuente en el período neonatal. Se estima que menos los individuos afectados pueden presentar, además, talla baja, sordera,
del 2% de los recién nacidos con FQ debutan con colestasis (Narkowicz pancreatitis y diarrea persistente.
y Waasdorp Hurtado, 2014). Dada la baja incidencia de hepatopatía La CIFP-2 se debe a un defecto de la bomba exportadora de sales
relacionada con FQ en los neonatos, la investigación de FQ, más allá biliares (BSEP) de los canalículos biliares causado por una mutación
de los cribados neonatales impuestos por el estado, se debe reservar del gen ABCB11 del cromosoma 2q24. La BSEP es responsable de
para los recién nacidos en los que se han descartado causas alternativas transportar ácidos biliares del interior del hepatocito al canalículo. La
de colestasis o para los recién nacidos con otras características típicas disrupción de la BSEP causa acumulación de ácidos biliares dentro
de FQ, como íleo meconial o aumento insuficiente de peso a pesar de del hepatocito, lo que provoca colestasis grave y rápida progresión
una ingesta calórica en teoría adecuada. a hepatopatía terminal. La CIFP-2 se manifiesta más temprano y es
una hepatopatía más rápidamente progresiva que la CIFP-1. Los niños
Trastornos de la síntesis de ácidos biliares con CIFP-2 tienen un mayor riesgo de presentar carcinoma hepato­
celular, un riesgo que persiste aun después del trasplante hepático.
Hay varios pasos de la síntesis de ácidos biliares que pueden estar alte­ La CIFP-3 es causada por una mutación del gen ABCB4 del
rados, lo que causa una acumulación de intermediarios hepatotóxicos cromosoma 7q21, que codifica la proteína 3 asociada a resistencia

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a múltiples fármacos (MDR3) y media el movimiento de aminofos­ considerar la selección juiciosa de antimicrobianos, dado que se sabe
folípidos de la bicapa lipídica canalicular interna a la externa. Más que que varios agravan la colestasis al desplazar la bilirrubina de la albúmina
una deficiencia de exportación de ácidos biliares, los pacientes con (p. ej., ceftriaxona) o que causan hepatotoxicidad directa (p. ej., trimeto­
CIFP-3 presentan una deficiencia de exportación de fosfolípidos. La prim-sulfametoxazol y fluconazol) (Murray y Horslen, 2014). Además
bilis resultante carece de fosfolípidos, lo que torna a las micelas ines­ de las infecciones bacterianas habituales, las infecciones TORCH (toxo­
tables y tóxicas para los conductos biliares y causa una colangiopatía plasmosis, otros patógenos, rubéola, citomegalovirus, virus del herpes y
intrahepática progresiva. A diferencia de la CIFP-1 y 2, solo un tercio sífilis), así como infecciones por hepatitis B, parvovirus B19, adenovirus
de los niños con CIFP-3 presentan colestasis durante la lactancia, y o virus ECHO pueden causar colestasis y hepatitis neonatales. Para
la mayoría tienen manifestaciones en etapas más tardías de la infancia más detalles sobre el diagnóstico y los tratamientos específicos de las
y la adolescencia. Cuando los recién nacidos con CIFP-3 presentan, infecciones congénitas o neonatales, consúltese la parte IX.
de hecho, hepatopatía, suelen tener cálculos biliares de colesterol que
complican su colestasis intrahepática.
Por lo general, los recién nacidos con CIFP tienen concentraciones Hepatopatía asociada a la nutrición parenteral
séricas muy altas de ácidos biliares, con solo un leve aumento de bili­ La hepatopatía asociada a la nutrición parenteral (HPANP) es una
rrubina sérica. Los marcadores bioquímicos característicos de CIFP-1 y causa importante y frecuente de hepatitis, colestasis y morbilidad
2 son GGT normal o baja, colesterol sérico normal y solo una leve trans­ relacionada con el hígado en el período neonatal. Se estima que entre
aminitis; de todos modos, el diagnóstico específico requiere estudios el 33 y el 85% de los recién nacidos prematuros que reciben nutrición
genéticos. La CIFP-3 se manifiesta por aumento de GGT en ausencia parenteral durante más de 7 días presentan HPANP (Duro et al., 2011;
de obstrucción biliar extrahepática. La colestasis intrahepática que se Koseesirikul et al., 2012). En los recién nacidos, la manifestación
suele observar en la CIFP a menudo progresa a hepatopatía terminal. fenotípica principal de HPANP es la colestasis. Cuando se adminis­
Inicialmente, el tratamiento de la CIFP se centra en el manejo tra nutrición parenteral total (NPT) durante un período breve, en
nutricional de la colestasis, debido a la insuficiente absorción de grasas y general menos de 2 semanas, la inflamación hepática transitoria suele
vitaminas liposolubles. Además, a menudo es necesario un tratamiento resolverse por completo. En cambio, el uso prolongado aumenta el
intensivo del prurito debilitante con ursodiol, antihistamínicos, coles­ riesgo de hepatopatía grave e irreversible, que finalmente puede causar
tiramina, rifampicina y antagonistas de los opioides. En los casos insuficiencia hepática (Nanji y Anderson, 1985; Beath et al., 1995).
resistentes, el tratamiento puede incluir derivación biliar parcial, inte­ A menudo, la HPANP se manifiesta por esteatosis hepática, con
rrupción de la circulación enterohepática mediante exclusión ileal aumento de aminotransferasas séricas, colelitiasis y colestasis. Se han
quirúrgica y trasplante hepático (Englert et al., 2007). identificado varios factores de riesgo que contribuyen a la aparición
de HPANP, como prematuridad, bajo peso de nacimiento, falta de
Fibrosis hepática congénita alimentación enteral, sepsis, síndrome del intestino corto y enteroco­
litis necrosante (Btaiche y Khalidi, 2002; Rangel et al., 2012). En un
La fibrosis hepática congénita (FHC) es una malformación heredi­ recién nacido que recibe NPT, una concentración sérica de bilirrubina
taria de los conductos biliares causada por el fracaso del remodelado conjugada menor de 2 mg/dl y ALT mayor del doble del límite superior
durante la embriogenia. Es un trastorno autosómico recesivo que puede de lo normal hacen pensar en el diagnóstico de HPANP.
presentarse en forma aislada, pero se observa con mayor frecuencia El tratamiento de la HPANP consiste en la iniciación temprana y
como una característica de varios síndromes, como síndromes de Ive­ la continuación de alimentación enteral, la minimización de lípidos a
mark, Bardet-Biedl, Caroli y Joubert, enfermedad renal poliquística menos de 1 g/kg/día y prevención de la infección. Se puede administrar
autosómica recesiva (ERPAR) y trastorno de glucosilación de tipo 1b. ursodiol en una dosis de 20-30 mg/kg/día en dosis divididas para mejorar
El síndrome de Caroli se caracteriza por FHC y ectasia ductal, con o estimular el flujo de bilis (Kowdley, 2000; Chen et al., 2004; Al-Hathlol
dilatación quística de los conductos intrahepáticos. La mayoría de et al., 2006). Además, la administración de formulaciones lipídicas a base
las veces, los recién nacidos con FHC presentan hipertensión portal de aceite de pescado o de ácidos grasos w-6, en lugar de a base de soja, ha
y esplenomegalia, aunque algunos presentan colestasis causada por mostrado ser eficaz para resolver la colestasis (Murray y Horslen, 2014).
colangitis. Típicamente, la FHC se asocia con transaminasas normales Se requiere reconocimiento e intervención temprana para prevenir un
y función sintética intacta, pese al avance de la hipertensión portal. daño hepático irreversible, que puede progresar a hepatopatía terminal.
Cuando se complica con colangitis, se suele observar aumento transi­
torio de GGT y bilirrubina conjugada. Se puede llegar al diagnóstico Hepatopatía metabólica
de síndrome de Caroli mediante pruebas de imagen con ecografía
Doppler de abdomen o resonancia magnética (RM) de hígado con Las metabolopatías congénitas suelen presentarse con aumento de
colangiopancreatografía por RM. Cuando se asocia con ERPAR, es aminotransferasas séricas, hepatomegalia o alteraciones metabólicas.
posible el diagnóstico clínico de FHC, pero es necesario el diagnóstico Hay varios fenotipos clínicos de hepatopatía metabólica, como insu­
histológico si aparece de forma aislada. ficiencia hepática aguda, encefalopatía, colestasis y hepatomegalia
El tratamiento de la FHC está dirigido a tratar las complicaciones aislada. Las tablas 77.2 y 77.3 resumen los fenotipos clínicos de la
de la hipertensión portal, y a prevenir y tratar la colangitis. Es fre­ hepatopatía metabólica neonatal y las etiologías de la insuficiencia
cuente que se requiera derivación portosistémica para descomprimir la hepática neonatal aguda.
hipertensión portal avanzada. En el síndrome de Caroli, la dilatación
quística focal puede ser susceptible de lobulectomía hepática, pero, si
es difusa, se necesita un trasplante de hígado. Trastornos del metabolismo de los hidratos
de carbono
Infecciones Galactosemia
Las infecciones congénitas o perinatales y la sepsis son causas frecuentes La galactosemia se debe a la imposibilidad de metabolizar galactosa por
de colestasis hepática, hepatitis y, a veces, insuficiencia hepática neona­ deficiencia de alguna de las siguientes enzimas: galactocinasa, galactosa-
tales. Una anamnesis y una exploración física detalladas pueden indicar 1-fosfato uridiltransferasa (Gal-1-PUT) o uridina difosfato galactosa-4-
infección como etiología de la hepatopatía neonatal. En recién nacidos epimerasa. La deficiencia de Gal-1-PUT es la causa más frecuente de
con colestasis que parecen enfermos se recomienda una evaluación rápida galactosemia e impide que se metabolice galactosa a glucosa-1-fos­
para infección bacteriana (como sepsis o infección urinaria). Se debe fato. Es un trastorno autosómico recesivo con una incidencia de 1 de

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CAPÍTULO 77 Hepatopatías 1105

TABLA
77.2  Manifestaciones clínicas frecuentes de hepatopatías metabólicas en el período neonatal

Manifestación clínica Trastorno metabólico Pruebas analíticas


Insuficiencia hepática Galactosemia Actividad de galactosa-1-fosfato uridiltransferasa eritrocítica, análisis
aguda mutacional de ADN
Tirosinemia Orina: succinilacetona
Intolerancia hereditaria a la fructosa Cribado: sustancias reductoras en la orina
Estudios genéticos
Análisis de actividad enzimática
Trastornos mitocondriales Lactato y piruvato séricos
Trastornos de la oxidación de los ácidos grasos Análisis enzimático en fibroblastos, perfil de acilcarnitina, estudios genéticos
Hepatopatía gestacional isoinmunitaria Ferritina, biopsia hepática con tinción de C5b-9
Encefalopatía Trastornos de oxidación de los ácidos grasos Como arriba (ferritina, biopsia hepática con tinción de C5b-9)
Acidemias orgánicas Ácidos orgánicos urinarios
Trastornos del ciclo de la urea Concentración sérica de amoníaco, perfil de aminoácidos séricos
Colestasis Trastornos del peroxisoma Detección especializada de metabolitos urinarios, como ácidos grasos
de cadena muy larga, ácido pipecólico, ácido fitánico, ácido pristánico
Trastornos por depósito lisosómico Biopsia hepática, actividad de glucocerebrosidasa leucocítica, análisis genético
mutacional
Hepatomegalia Glucogenosis Análisis enzimático en el hígado o fibroblastos, estudios genéticos
Trastornos por depósito lisosómico Véase arriba (biopsia hepática, actividad de glucocerebrosidasa leucocítica
y análisis genético mutacional)

TABLA cada 60.000 nacidos vivos (Squires y Heubi, 2014). El metabolismo


77.3  Causas de insuficiencia hepática aguda neonatal anómalo de la galactosa provoca acumulación de metabolitos tóxicos
en el hígado, el encéfalo, el riñón y el cristalino.
Infecciosas Clásicamente, la galactosemia se manifiesta en las primeras semanas
Virus del herpes simple de vida después de que el recién nacido ingiera leche materna o leches
Virus del herpes humano 6 artificiales que contienen lactosa. Los síntomas de presentación pueden
Citomegalovirus consistir en restricción del crecimiento, ictericia, vómitos y diarrea. En
Adenovirus ocasiones, los recién nacidos pueden tener una presentación aguda,
Gripe con sepsis por Escherichia coli acompañada de acidosis grave, ictericia
Hepatitis B y coagulopatía. Otros hallazgos clínicos pueden ser hepatomegalia,
Sepsis bacteriana ascitis, sangrado, hipotonía, edema y protrusión de la fontanela. Si
Enterovirus bien los recién nacidos afectados eliminarán azúcares reductores por
Parvovirus B19 la orina (prueba positiva de sustancias reductoras en la orina) mientras
Paludismo aún ingieren galactosa, el patrón de referencia para el diagnóstico es la
Metabólicas/genéticas demostración de una ausencia completa de actividad de Gal-1-PUT
mediante un análisis cuantitativo en eritrocitos. Muchos cribados
Galactosemia neonatales pueden identificar variantes de la enfermedad, que causan
Tirosinemia de tipo 1 variable actividad de Gal-1-PUT. Corresponde destacar que, como el
Intolerancia hereditaria a la fructosa análisis es de actividad enzimática eritrocítica, el análisis después de
Deficiencia de fructosa-1,6-bisfosfatasa una transfusión de eritrocitos no dará resultados fiables.
Trastornos de la oxidación de los ácidos grasos
El tratamiento de la galactosemia se centra en la estabilización
Trastornos mitocondriales
inmediata del recién nacido en estado crítico, así como en la restric­
De mecanismo inmunitario ción urgente de galactosa de la dieta. Por lo general, el tratamiento es
de sostén y consiste en administración de líquidos intravenosos con
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Hepatopatía gestacional isoinmunitaria


Anemia hemolítica autoinmunitaria con hepatitis glucosa, vitamina K, antibióticos e iniciación de una fórmula a base
de células gigantes de soja (sin contenido de galactosa). A medida que los recién nacidos
Linfohistiocitosis hemofagocítica incorporan alimentos sólidos, se recomienda continuar evitando los
alimentos con lactosa. Pese al tratamiento, muchos niños presentarán
Vasculares algún grado de retraso del desarrollo.
Isquemia
Insuficiencia cardíaca Intolerancia hereditaria a la fructosa
Tóxicas La intolerancia hereditaria a la fructosa (IHF) es un trastorno autosómico
Fármacos recesivo caracterizado por una deficiencia de fructosa-1-fosfato aldolasa
Toxinas (aldolasa B), que es importante tanto en la glucólisis como en la gluco­
neogenia, y que desempeña un papel crucial en el metabolismo de la
Neoplásicas fructosa. La incidencia es de alrededor de 1 de cada 20.000 nacidos vivos
Leucemia (Squires y Heubi, 2014). Alrededor del 75% de la fructosa dietética la
metaboliza el hígado, y el resto la metabolizan los riñones y el intestino

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1106 PA RT E XI V Aparato digestivo

delgado. La deficiencia de aldolasa B induce una acumulación tóxica no es tan rápida ni grave, y la restricción del crecimiento puede ser
de fructosa-1-fosfato y atrapa fosfato en una forma no utilizable, lo que más prominente. Las manifestaciones en el músculo esquelético
causa una depleción de los depósitos de trifosfato de adenosina (ATP) y, (hipotonía) y cardíacas (miocardiopatía) aparecen en etapas más
a su vez, inhibe la gluconeogenia y la glucogenólisis normales. tardías de la infancia. El diagnóstico se realiza por medición directa
La mayoría de los recién nacidos con IHF son sanos hasta la de la actividad de amilo-1,6-glucosidasa en el hígado o, de forma
ingestión de fructosa o sacarosa (disacárido de glucosa y fructosa). Al más reciente, por análisis mutacional del gen asociado, AGL. El
ingerir fructosa, pueden comenzar a acumular metabolitos tóxicos, tratamiento refleja el de la glucogenosis de tipo I, con esfuerzos para
con las consiguientes alteraciones metabólicas que provocan vómitos, mantener la euglucemia.
hepatomegalia y restricción del crecimiento. El diagnóstico puede La glucogenosis de tipo IV (enfermedad de Andersen) es un tras­
sospecharse tras obtener una detallada anamnesis dietética y hallar torno autosómico recesivo causado por una mutación del gen GBE1,
pruebas analíticas de insuficiencia hepática aguda, hipoglucemia y que causa deficiencia de la enzima ramificadora de glucógeno; afecta a
acidosis tubular renal proximal. Se puede investigar la presencia en la alrededor de 800.000 individuos en todo el mundo y representa el 3%
orina de sustancias reductoras, dado que la fructosa en orina positivizará de los casos de glucogenosis. La glucogenosis de tipo IV puede manifes­
la prueba, aunque no es específica. El diagnóstico definitivo exige la tarse en el período prenatal por hidropesía o en el período posnatal
confirmación mediante estudios genéticos de las mutaciones del gen por hipotonía, insuficiencia cardíaca (secundaria a miocardiopatía),
ALDOB, localizado en 9q22.3, o análisis enzimático de tejido hepático. contracturas y atrofia muscular. El diagnóstico se basa en la ausencia
El tratamiento de la IHF exige la inmediata eliminación de la fruc­ de actividad de enzima ramificadora en fibroblastos cutáneos o la
tosa y la sacarosa de la dieta. Pocas veces puede lograrse la eliminación detección de mutaciones del gen GBE1. El tratamiento consiste en
completa, y no hay umbrales establecidos de la restricción requerida. trasplante hepático en los casos de evolución a hepatopatía terminal
Además, como la gravedad de la deficiencia enzimática es heterogé­ (por lo general, en la tercera década de la vida); sin embargo, hay que
nea, algunos pacientes pueden presentar síntomas crónicos pese al tener cuidado en la selección de pacientes, porque las manifestaciones
tratamiento (Stanbury, 1983). Por fortuna, con la restricción dietética extrahepáticas pueden limitar la vida.
casi completa de fructosa y sacarosa, la mayoría de los niños con IHF
presentan crecimiento y desarrollo normales.
Trastornos del metabolismo de los aminoácidos
Glucogenosis
Tirosinemia de tipo 1
El glucógeno es un polímero de glucosa almacenado principalmente
en el hígado y el músculo, y que es necesario para la homeostasis de La tirosinemia es un trastorno autosómico recesivo con una inciden­
la glucosa durante el ayuno. Hay 12 glucogenosis reconocidas, pero cia de 1 de cada 100.000 nacidos vivos. Se debe a la deficiencia de
solo los tipos I, III y IV se manifiestan primariamente por hepatopatía fumarilacetoacetato hidrolasa, la enzima responsable del paso final de
neonatal. la degradación de la tirosina (Squires y Heubi, 2014). Por lo general,
La glucogenosis de tipo I, conocida también como enfermedad de la tirosinemia se manifiesta agudamente en el período neonatal y debe
von Gierke, nombrada así por su descubridor, Edgar von Gierke, es un ser incluida en el diagnóstico diferencial de hepatopatía neonatal
trastorno autosómico recesivo raro, con una incidencia de alrededor de fulminante. La restricción del crecimiento, los vómitos, la ascitis, la
1 de cada 100.000 nacidos vivos (Squires y Heubi, 2014). Hay varios coagulopatía, la hipoglucemia y la hiperbilirrubinemia pueden ser los
defectos que inducen la manifestación clínica de glucogenosis de tipo I; signos y síntomas de presentación iniciales. En recién nacidos mayores
sin embargo, el resultado final es la ausencia o disminución de la actividad y niños, puede haber una presentación más crónica caracterizada por
de la glucosa-6-fosfatasa (G6P). Por lo general, los recién nacidos con restricción del crecimiento, síndrome de Fanconi y manifestaciones
glucogenosis de tipo I presentan hepatomegalia e hipoglucemia en ayu­ neurológicas. Los niños con tirosinemia de tipo 1 presentan un ries­
nas, a menudo observadas por primera vez cuando los niños comienzan go a largo plazo de presentar carcinoma hepatocelular. El diagnós­
a dormir más de 4 h. Otras manifestaciones clínicas de los afectados por tico se realiza por medición de concentraciones urinarias elevadas de
glucogenosis de tipo I son acidosis láctica, hiperuricemia, hiperlipidemia, succinilacetona.
hiperfosfatemia, neutropenia (específica de la glucogenosis de tipo Ib) y En el período neonatal, el tratamiento consiste en corregir altera­
sangrado secundario a disfunción plaquetaria. ciones metabólicas, tratar la sepsis y corregir la coagulopatía, lo que
El diagnóstico se confirma por análisis mutacional del ADN de se sigue de restricción de tirosina dietética mediante la utilización de
los genes posiblemente afectados. La glucogenosis Ia es responsable fórmulas específicas. Sin embargo, el tratamiento con dieta sola da por
del 80% de los casos y se debe a la mutación de G6PC, el gen de G6P, resultado una supervivencia inferior al 40% al año de edad (Holme y
localizado en el cromosoma 17q21, y la glucogenosis Ib representa Lindstedt, 1998; McKiernan, 2006; Masurel-Paulet et al., 2008). Se ha
menos del 20% de los casos y se debe a mutaciones del gen G6PT1, demostrado que el tratamiento con NTBC (2-(2-nitro-4-trifluorome­
el transportador de G6P. El diagnóstico prenatal es posible mediante tilbenzoil)-1,3-ciclohexanediona, nitisinona) mejora la supervivencia
biopsia de vellosidades coriónicas. a más del 85% al año de edad, y en la actualidad es el tratamiento de
En la lactancia, el tratamiento consiste en mantener la eugluce­ referencia de la tirosinemia (Mohan et al., 1999). La NTBC actúa
mia con tomas frecuentes y alimentación enteral continua durante la mediante la inhibición reversible de 4-hidroxifenilpiruvato dioxigenasa,
noche con una fórmula rica en glucosa y pobre en grasas. En recién por lo que evita la formación de maleilacetoacetato y fumarilaceto­
nacidos mayores y niños se recomienda una dieta equilibrada con acetato, los precursores del compuesto hepatotóxico succinilacetona.
hidratos de carbono y raciones frecuentes, que incluyen la adición
de almidón de maíz. El almidón de maíz proporciona una fuente Enfermedad de la orina con olor a jarabe de arce
duradera de glucosa porque se degrada con lentitud por la α-amilasa La enfermedad de la orina con olor a jarabe de arce (EOOJA), al igual
y, por consiguiente, evita la necesidad de ingesta horaria de glucosa. que otros trastornos raros del metabolismo de los aminoácidos, es auto­
Con control metabólico y glucémico adecuado, los niños suelen crecer sómica recesiva y se investiga mediante pruebas de cribado en recién
y desarrollarse con normalidad. nacidos en todo EE. UU. La enfermedad, causada por la deficiencia
La glucogenosis de tipo III (enfermedad de Cori o Forbes) es del complejo de deshidrogenasas de α-cetoácidos de cadena ramificada,
una enfermedad autosómica recesiva que se debe a deficiencia de la causa una acumulación de aminoácidos de cadena ramificada y sus
enzima desramificadora de glucógeno, amilo-1,6-glucosidasa, y afecta cetoácidos tóxicos. La mayoría de los recién nacidos presentan vómitos,
a 1 de cada 100.000 nacidos vivos. En la lactancia, la presentación es acidosis y disfunción neurocognitiva evolutiva o alteración intermiten­
similar a la glucogenosis de tipo I, aunque la hipoglucemia en general te del sensorio. El trastorno recibe su nombre por el olor particularmente

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CAPÍTULO 77 Hepatopatías 1107

dulce, que recuerda al jarabe de arce, que desprende la orina de los de carbono, y suplementos de TCM. La morbilidad es alta pese a la
recién nacidos afectados. Las pruebas analíticas pueden revelar una intervención dietética.
leve elevación de las transaminasas, hipoglucemia e hiperamoniemia. La deficiencia de HMG-CoA sintasa induce falta de formación de
El diagnóstico se realiza por la identificación de un exceso de amino­ cetonas durante períodos de estrés, lo que provoca hipoglucemia hipoce­
ácidos de cadena ramificada (valina, leucina e isoleucina) en el suero. tósica. Los recién nacidos pueden presentar hepatomegalia, encefalopatía
El tratamiento es dietético, con restricción de aminoácidos de cadena o coma en el contexto de enfermedades agudas o ayuno. Por lo general,
ramificada por limitación de la ingesta de proteínas, suplementos las aminotransferasas séricas son normales, al igual que el lactato sérico.
de fórmula especializada y cuidado de no inducir catabolismo. La Se presume el diagnóstico por la ausencia de cetonas urinarias con perfil
evolución clínica y la historia natural de la EOOJA y otros trastornos normal de acilcarnitina, y se confirma por estudios moleculares. El
del metabolismo de los aminoácidos se caracterizan por crisis metabó­ tratamiento consiste, en gran medida, en evitar el ayuno.
licas intermitentes, incluidas cetosis, acidosis e hiperamoniemia, que La CACT es necesaria para transportar ácidos grasos de cadena larga
pueden ser tratadas mediante administración intravenosa de glucosa, del citosol a la mitocondria, lo que mantiene la producción de ATP. La
arginina y, rara vez, diálisis. Cabe considerar trasplante hepático en los mayoría de los pacientes con deficiencia de CACT presentan hipoglu­
pacientes cuyas crisis metabólicas graves amenazan con causar retrasos cemia hipocetósica, disfunción hepática, miocardiopatía y convulsiones
del desarrollo evolutivos. en el período neonatal. Las pruebas analíticas suelen revelar hipocetosis,
hipoglucemia, hiperamoniemia, aumento de creatina cinasa, aumento
de aminotransferasas séricas, bajas concentraciones de carnitina y perfil
Trastornos del metabolismo de los ácidos anómalo de acilcarnitina. El diagnóstico se confirma mediante estudios
orgánicos genéticos. El tratamiento es dietético y consiste en una dieta pobre en
grasas con suplementos de TCM y carnitina. La morbimortalidad es
Las deficiencias autosómicas recesivas de ácido metilmalónico, ácido alta en presencia de miocardiopatía.
isovalérico y 3-hidroxi-3-metilglutarina (HMG)-coenzima A (CoA)
liasa son raras y representan los trastornos del metabolismo de ácidos
orgánicos. En EE. UU., la mayoría se investigan mediante cribado Trastornos del ciclo de la urea
neonatal sistemático, pero se confirman con la identificación de un
patrón particular de ácidos orgánicos en la orina. En conjunto, se Una de las principales funciones del hígado es la ureagenia, para eli­
manifiestan por crisis metabólicas, de modo similar a la EOOJA. El minar amoníaco, que es el producto final del metabolismo de los
tratamiento se basa, en gran medida, en evitar el catabolismo y en aminoácidos. La acumulación de amoníaco y glutamina causa dis­
dietas adaptadas. función hepatocelular y del sistema nervioso central. Los trastornos
más frecuentes de la ureagenia son deficiencia de ornitina transcarbo­
xilasa, carbamoilfosfato sintasa y citrulinemia. Estos trastornos suelen
Trastornos de la oxidación de los ácidos grasos manifestarse en el período neonatal con hiperamoniemia y, quizá,
edema cerebral, en los primeros días de vida. La presentación clínica
La oxidación de los ácidos grasos (OAG) es responsable de la produc­ se puede confundir con sepsis. La hiperamoniemia con baja concen­
ción de la energía celular requerida para la función normal del mús­ tración sérica de nitrógeno ureico y patrones típicos de aumentos
culo cardíaco y esquelético, y la homeostasis de la glucosa. La OAG se anómalos de aminoácidos séricos hacen pensar en el diagnóstico. Este
produce, en gran medida, dentro de las mitocondrias. El resultado final se confirma mediante estudios genéticos moleculares. El tratamiento
de la OAG es la producción de cetonas, que sirven de fuente de energía debe ser dirigido por un especialista en metabolismo y se centra, en
crucial cuando hay depleción de los depósitos de glucosa. Los trastornos gran medida, en mantener el amoníaco sérico dentro del rango normal,
de la OAG son deficiencia de acil-CoA deshidrogenasa de cadena media prevenir el catabolismo y utilizar una leche artificial con restricción de
(MCADD), deficiencia de 3-hidroxiacil-CoA deshidrogenasa de cadena proteínas, de las cuales la mitad corresponda a aminoácidos esenciales.
larga (LCHADD), deficiencia de HMG-CoA sintasa y deficiencia de En pacientes con episodios graves recurrentes de crisis metabólicas con
carnitina acilcarnitina translocasa (CACT). hiperamoniemia, cabe considerar el trasplante hepático.
La MCADD es un trastorno autosómico recesivo que afecta el
metabolismo de los ácidos grasos de cadena media y causa hipoglu­
cemia en ayunas y acumulación de acil-CoA tóxica. Por lo general, la Hepatopatías mitocondriales
presentación clínica consiste en letargo recurrente, vómitos, coma e,
incluso, muerte por hipoglucemia potencialmente fatal. Las pruebas Las hepatopatías mitocondriales secundarias a deficiencias del complejo
analíticas revelan hipoglucemia, hepatitis, hiperamoniemia, hipocetosis de la cadena respiratoria pueden manifestarse en el período neonatal
e hiperuricemia. La confirmación del diagnóstico se realiza mediante por insuficiencia hepática aguda. Además, corresponde sospechar
análisis enzimáticos de fibroblastos o estudios genéticos. El tratamien­ trastornos mitocondriales en neonatos que presentan hipoglucemia,
to consiste en evitar la hipoglucemia, pero los recién nacidos están hipotonía, convulsiones y disfunción hepática sintética progresiva en la
primera semana de vida. El aumento de lactato y, específicamente, los
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expuestos a muerte súbita, debido a alteraciones metabólicas, y muchos


presentan retrasos del desarrollo significativos. cocientes lactato-piruvato mayores de 30 hacen pensar en el diagnós­
La LCHADD es un trastorno del metabolismo de los ácidos grasos tico. Gracias a los avances del análisis mutacional del ADN mitocon­
que afecta al complejo mitocondrial trifuncional, cuya función primaria drial, se pueden identificar algunos trastornos; sin embargo, se dispone
es metabolizar los ácidos grasos de cadena larga (hallados en los aceites y de pocos tratamientos dirigidos. Se puede considerar el trasplante
la leche). La presentación clásica de un neonato con LCHADD son las hepático si otras enfermedades concomitantes no hacen prever una
dificultades para la alimentación de inicio agudo en el período neonatal, escasa supervivencia postrasplante.
acompañadas de letargo, hipotonía e hipoglucemia hipocetósica. Los
niños mayores pueden evolucionar a neuropatía y retinopatía. En un Trastornos por depósito lisosómico
feto, la LCHADD predispone a la madre a presentar síndrome de
hemólisis, disfunción hepática y plaquetopenia (HELLP), e hígado Los trastornos por depósito lisosómico suelen manifestarse por hepato­
graso agudo del embarazo. El diagnóstico se presume por investigación esplenomegalia, así como por una serie de síntomas sistémicos. Las
neonatal y se confirma midiendo la actividad de LCHADD en fibro­ más frecuentes son la enfermedad de Gaucher, la enfermedad de
blastos o músculo o por análisis mutacional. El tratamiento es, en gran Niemann-Pick de tipo C (ENP-C) y la deficiencia de lipasa ácida
medida, dietético, con una dieta pobre en grasas y rica en hidratos lisosómica.

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1108 PA RT E XI V Aparato digestivo

La enfermedad de Gaucher es una enfermedad genética autosómica de la normal. En condiciones normales, el hígado fetal no afectado
recesiva que se debe a la deficiencia de una enzima lisosómica, glucoce­ produce hepcidina para regular la transferencia placentaria de hierro
rebrosidasa, que causa una acumulación de glucolípidos dentro de los (Bonilla, 2012), pero, en la HPGI, la cantidad drásticamente menor
lisosomas. La incidencia es de alrededor de 1 de cada 75.000 nacidos de hepcidina no logra regular en forma adecuada el ingreso de hierro,
vivos, pero es más prevalente en recién nacidos de ascendencia judía con la consiguiente sobrecarga de hierro.
askenazí (Squires y Heubi, 2014). Se debe plantear la sospecha clínica Siempre se debe sospechar HPGI en recién nacidos con hepato­
en recién nacidos que presentan hepatoesplenomegalia y enzimas patía prenatal o neonatal, en especial con insuficiencia hepática. Los
hepáticas normales o levemente elevadas. La biopsia hepática, que recién nacidos con HPGI suelen estar enfermos en el momento del
demuestra macrófagos llenos de lípidos, conocidos también como nacimiento. En el período fetal, son frecuentes el oligohidramnios o
células de Gaucher, respalda el diagnóstico; sin embargo, este se con­ la restricción del crecimiento intrauterino. Por lo general, los recién
firma al demostrar actividad reducida de glucocerebrosidasa en los nacidos afectados presentan insuficiencia hepática aguda en el período
leucocitos o por análisis mutacional. Es factible el diagnóstico prenatal neonatal, con hipoglucemia y coagulopatía o, más rara vez, con cirrosis.
mediante biopsia de vellosidades coriónicas o amniocentesis. En niños Por lo general, aparece colestasis con el tiempo, pero no está presente en
sintomáticos se recomienda el tratamiento dirigido mediante reemplazo el momento del nacimiento. Los hallazgos analíticos pueden consistir
enzimático con glucocerebrosidasas recombinantes. en ALT normal o ligeramente elevada, concentraciones elevadas de
La ENP-C es autosómica recesiva y se debe a mutaciones de NPC1 ferritina (ng/ml) (en general, > 800, pero es frecuente que superen
y NPC2. Estas mutaciones causan alteración del procesamiento y trans­ 15.000), α-fetoproteína (ng/ml) mayor de 80.000, pero habitualmente
porte del colesterol de las lipoproteínas de baja densidad (LDL), que se mayor de 300.000, y saturación de hierro mayor del 90%. Las pruebas
manifiesta clínicamente por hepatoesplenomegalia y degeneración neuro­ de imagen pueden mostrar siderosis extrahepática que afecta al pán­
cognitiva progresiva, con distonía, convulsiones, disfagia y ataxia. Los creas, el miocardio, la tiroides y las glándulas salivales.
hallazgos analíticos de la ENP-C son disminución de las lipoproteínas La biopsia hepática que demuestra menor volumen de hepatocitos
de alta densidad, hipertrigliceridemia y aumento de LDL. El diagnós­ y presencia del complejo C5b-9 en la inmunohistoquímica es sugestiva
tico se confirma por cultivo celular de fibroblastos y estudios genéticos. del diagnóstico (Pan et al., 2010). Las biopsias también pueden mostrar
El tratamiento es, en gran medida, de sostén, dado que el trasplante de colapso de hepatocitos, fibrosis y siderosis (fig. 77.5). Sin embargo, es
médula ósea, el trasplante hepático y las medicaciones hipolipidemiantes preciso demostrar siderosis extrahepática para confirmar el diagnóstico.
no han mostrado conferir un beneficio de supervivencia. Esto se puede lograr mediante biopsia tisular o RM. En general, puede
La deficiencia de lipasa ácida lisosómica causa dos fenotipos distintos: ser preferible obtener tejido mucoso (biopsia glandular submucosa).
la enfermedad de Wolman y la enfermedad por depósito de ésteres de Esto puede controlarse por RM si la biopsia es negativa y, aun así, se
colesterol (EDEC). Ambas son secundarias a la acumulación lisosómica sospecha el diagnóstico. Lamentablemente, la HPGI a menudo se
anómala de ésteres de colesterol, triglicéridos y otros lípidos. La gravedad diagnostica en la autopsia, en la que se observa siderosis extrahepática.
del fenotipo depende del grado de reducción de la actividad de lipasa El tratamiento intenta bloquear la acción de los anticuerpos exis­
ácida lisosómica. La enfermedad de Wolman es la manifestación más gra­ tentes mediante la administración de inmunoglobulina intravenosa
ve de la deficiencia de lipasa ácida lisosómica. Los recién nacidos suelen (IGIV) en dosis altas (1 g/kg), así como eliminar los anticuerpos exis­
presentar restricción del crecimiento, esteatorrea, hepatoesplenomegalia e tentes mediante exanguinotransfusión de doble volumen. Este régimen
ictericia en las primeras semanas de vida. Por lo general, la muerte sobre­ ha mostrado mejorar la supervivencia hasta el 75-80% sin trasplante
viene durante el primer año de vida. Las calcificaciones de las glándulas hepático (Rand et al., 2009). Antes de este régimen terapéutico, la evo­
suprarrenales, la colestasis, el aumento de transaminasas, la disfunción lución era muy mala con otros tratamientos médicos, como quelantes
sintética hepática y un perfil normal de lípidos plasmáticos sugieren el del hierro y antioxidantes, que no tienen cabida en las recomendaciones
diagnóstico. Las biopsias hepáticas tienen un aspecto anaranjado-amarillo de tratamiento actuales. La HPGI continúa siendo una indicación
característico secundario a la acumulación de lípidos y grasa. En general, frecuente de trasplante hepático en el período neonatal; sin embargo,
la EDEC se manifiesta en niños mayores o, incluso, en la edad adulta. el trasplante de estos pacientes se complica por el tamaño pequeño del
El tratamiento es, en gran medida, de sostén, aunque existen estudios recién nacido y la insuficiencia multiorgánica.
de lipasa ácida lisosómica recombinante. Dada la rápida progresión y alta mortalidad asociadas con HPGI, si
se sospecha esta afección, el recién nacido debe recibir de inmediato una
Hepatopatía gestacional isoinmunitaria dosis de IGIV, aun antes de completar las pruebas diagnósticas. Los efectos
colaterales de la IGIV son mínimos, y esta tiene una mínima repercusión
Tradicionalmente, la hepatopatía gestacional isoinmunitaria (HPGI) sobre la evolución natural de causas alternativas de insuficiencia hepática
se denominaba hemocromatosis neonatal, un término empleado para neonatal. Si se confirma el diagnóstico, se debe recurrir a la exanguinotrans­
describir el fenotipo clínico de hepatopatía neonatal grave secundaria fusión de doble volumen, seguida de una segunda dosis de IGIV.
a un error congénito del metabolismo del hierro, que causaba siderosis La probabilidad de diagnosticar HPGI en cada uno de los recién
hepática y extrahepática. Recientemente, los avances en el conocimien­ nacidos siguientes nacidos de una madre cuyo hijo anterior nació con
to de la patogenia desacreditan suposiciones previas de que la HPGI se HPGI es mayor del 90% (Whitington y Kelly, 2008). Sin embargo,
debe a una sobrecarga primaria de hierro. En la actualidad, la evidencia se considera que la HPGI es congénita y familiar, pero no hereditaria
sugiere que la sobrecarga de hierro es el fenotipo resultante de la HPGI (Whitington, 2007). Se está desarrollando evidencia para la prevención
(Bonilla et al., 2012; Whitington, 2012; Zoller y Kinsley, 2012). Si de HPGI. Dado el alto riesgo de que los siguientes recién nacidos
bien casi toda sobrecarga de hierro no hematopoyética se debe a HPGI, presenten HPGI después de un nacimiento índice de un recién nacido
hay unas pocas asociaciones raras distintas de HPGI. Estas comprenden afectado, todas las madres deben ser tratadas durante el embarazo con
la trisomía 21, el síndrome de depleción de ADN mitocondrial y los infusiones repetidas de IGIV a las 14 semanas de edad gestacional, a
trastornos de la síntesis de ácidos biliares. las 16 semanas y en forma semanal desde las 18 semanas hasta el parto
La patogenia de la HPGI deriva de la lesión de hepatocitos mediada (Whitington y Hibbard, 2004).
por complemento y de la isoinmunidad activada por inmunoglobulina G
(IgG) materna (la única inmunoglobulina que atraviesa con libertad Malformaciones vasculares
la placenta). Una vez producida la sensibilización, la IgG materna
antihepatocito fetal se une al antígeno hepático fetal. Luego, se produce En general, las malformaciones vasculares del hígado se manifiestan
la destrucción de los hepatocitos fetales mediada por complemento, en el período neonatal si se asocian con malformaciones cutáneas o
lo que determina una masa hepática neonatal que es del 10-25% causan un cortocircuito sistémico significativo de sangre. Los tipos de

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CAPÍTULO 77 Hepatopatías 1109

• Figura 77.5  Histología de la hepatopatía gestacional isoinmunitaria. A. Tinción con hematoxilina y


eosina de un hígado que demuestra fibrosis pericelular. Muchos hepatocitos contienen pigmento, parte
del cual una parte es hemosiderina, y otra, bilis. B. La tinción de hierro de Gomori correspondiente
muestra depósito de hierro dentro de los hepatocitos. C. Tinción de hierro que demuestra depósito de
hierro en las células epiteliales acinares del páncreas. D. Tinción de hierro que demuestra depósito
de hierro en las células foliculares tiroideas.

cortocircuito pueden ir de la arteria hepática a la vena hepática, de la persistencia de la circulación fetal con un conducto venoso persistente
arteria hepática a la vena porta o de la vena porta a la circulación sis­ puede permitir el cortocircuito intrahepático de la vena porta izquierda
témica (cortocircuitos portosistémicos). a una vena hepática.
Lo más frecuente es que los cortocircuitos portosistémicos se
detecten de manera incidental en pruebas de imagen abdominales de
Malformaciones arteriovenosas individuos con hipertensión portal u otras malformaciones vasculares.
Si derivan flujo sanguíneo portal significativo del hígado, pueden
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Las malformaciones arteriovenosas que derivan grandes volúmenes


de sangre pueden manifestarse en el período neonatal por anemia, inducir aumento de amoníaco sérico. Por lo general, no se observa
insuficiencia cardíaca, hipertensión portal o hepatomegalia según la hipertensión portal en los cortocircuitos portosistémicos.
afectación vascular. El tratamiento consiste en embolización, ligadura o El tratamiento de los cortocircuitos portosistémicos congénitos
resección quirúrgicas. El trasplante hepático se reserva para las lesiones varía y depende de la gravedad de las secuelas clínicas. Varios pueden
que no son susceptibles de una intervención quirúrgica más limitada cerrarse de forma espontánea; sin embargo, se debe considerar el cierre
y que provocan complicaciones potencialmente fatales. de los que contribuyen a encefalopatía y aparición ulterior de retraso del
desarrollo o afectación cardiopulmonar. Las técnicas pueden consistir
en embolización, ligadura quirúrgica o, rara vez, trasplante hepático
Cortocircuitos portosistémicos congénitos (Ohnishi, 2005; Gillespie et al., 2006).
Los cortocircuitos portosistémicos congénitos permiten que la sangre
venosa intestinal sortee el hígado y sea derivada directamente al sis­ Telangiectasia hemorrágica hereditaria
tema venoso sistémico. Pueden ser de origen intrahepático o extrahe­
pático (figs. 77.6 y 77.7). Los cortocircuitos portosistémicos extrahepá­ La telangiectasia hemorrágica hereditaria (THH) es una enfermedad
ticos se conocen como «malformaciones de Abernathy» (fig. 77.8). La autosómica dominante caracterizada por telangiectasias mucosas

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1110 PA RT E XI V Aparato digestivo

• Figura 77.6  Fístula arterioportal intrahepática congénita. A. Imagen frontal en proyección de


intensidad máxima de una tomografía computarizada en fase arterial del abdomen que demuestra una
conexión fistulosa entre la arteria hepática izquierda (flecha blanca) y la vena porta izquierda (flecha
negra) con un aneurisma de gran tamaño asociado. Las imágenes de angiograma por sustracción
digital del tronco celíaco en las fases arterial (B) y diferida (C) vuelven a demostrar la fístula arterioportal
irrigada por la arteria hepática izquierda (flecha blanca), con cortocircuito al sistema venoso porta (flecha
negra). (Imágenes por cortesía del Dr. Eric Monroe, Interventional Radiology, Seattle Children’s Hospital,
Seattle, Washington.)

y cutáneas, y malformaciones vasculares viscerales. Los órganos colangiopatía isquémica si la sangre arterial hepática es derivada de los
viscerales afectados con mayor frecuencia son los pulmones, el conductos biliares.
hígado, el intestino y el encéfalo. Se estima que la prevalencia es Al igual que en todas las lesiones vasculares asociadas con el hígado,
de 1 de cada 10.000 nacidos vivos. El diagnóstico de THH se el diagnóstico se realiza mediante ecografía Doppler del abdomen. En
basa en el cumplimiento de más de tres de los cuatros criterios el caso de la THH, la mayoría de las veces, la ecografía demuestra una
clínicos y en estudios genéticos. Los criterios clínicos son epistaxis arteria hepática dilatada con aumento del flujo en la arteria hepática
espontánea y recurrente, múltiples telangiectasias cutáneas y en y vascularidad intrahepática. En la tomografía computarizada (TC),
la cavidad oral, lesiones vasculares viscerales y un familiar directo la presencia de múltiples telangiectasias induce una intensificación
con THH. heterogénea del hígado. La biopsia hepática conlleva alto riesgo de
La mayoría de los recién nacidos con THH presentarán insufi­ sangrado.
ciencia cardíaca con alto gasto cardíaco y, posiblemente, hipertensión Cabe considerar trasplante hepático en el contexto de insuficiencia
portal secundaria a derivación arterioportal. Puede sobrevenir una cardíaca, isquemia biliar o hipertensión portal grave.

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CAPÍTULO 77 Hepatopatías 1111

• Figura 77.7  Cortocircuito portosistémico intrahepático congénito. A. Imagen sagital de una tomo-
grafía computarizada en fase venosa del abdomen que demuestra un cortocircuito portosistémico
anómalo entre la división anterior de la vena porta derecha (flecha blanca) y la vena hepática media
(flecha negra). B. El angiograma por sustracción digital oblicuo anterior derecho después del cateterismo
a través del cortocircuito de la vena porta vuelve a demostrar el amplio cortocircuito portosistémico
entre la vena porta (flecha blanca) y la vena hepática media (flecha negra). (Imágenes por cortesía del
Dr. Eric Monroe, Interventional Radiology, Seattle Children’s Hospital, Seattle, Washington.)
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• Figura 77.8  Malformación de Abernathy. A. Imagen axial de una tomografía computarizada (TC) en
fase arterial tardía que demuestra un recorrido craneocaudal de la vena porta (flecha blanca) y ausencia
de vena porta dentro del hilio hepático. B. La imagen de reformateo multiplanar de la TC confirma un
recorrido anómalo de la vena porta (flecha negra) que drena a la aurícula derecha, paralela a la vena
cava inferior (flecha blanca). (Imágenes por cortesía del Dr. Eric Monroe, Interventional Radiology, Seattle
Children’s Hospital, Seattle, Washington.)

Hemangiomas hepáticos infantiles los recién nacidos presentan lesiones cutáneas o subcutáneas asociadas;
sin embargo, muchos tienen lesiones vasculares aisladas del hígado, el
Los hemangiomas hepáticos infantiles (HHI) son el tumor benigno encéfalo y los pulmones. Se debe sospechar HHI en recién nacidos con
más frecuente de la lactancia y afectan hasta el 1-2% de los recién naci­ cinco o más hemangiomas cutáneos, y este hallazgo físico debe instar
dos y a más del 10% al año de edad (Boon et al., 1996). La mayoría de a investigar afectación visceral.

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1112 PA RT E XI V Aparato digestivo

El HHI es el tumor pediátrico más frecuente del hígado y puede Quistes hepáticos congénitos
caracterizarse como focal, multifocal o difuso. La mayoría de los recién
nacidos con HHI tienen manifestaciones antes de los 6 meses de edad Los quistes hepáticos congénitos son una de las masas hepáti­
y presentan progresión inicial del tamaño de las lesiones desde el naci­ cas benignas más frecuentes en la lactancia. Gracias a las técnicas
miento hasta los 12 meses, lo que es seguido de un período de regresión modernas de estudio por imagen, los quistes hepáticos simples se
e involución alrededor de los 2-10 años de edad. suelen diagnosticar por ecografía en el período prenatal. Existe un
Por lo general, el HHI focal es incidental y puede observarse inicial­ amplio espectro de patologías que causan quistes hepáticos simples.
mente en la ecografía prenatal. No se asocian con hallazgos cutáneos, y Se suele considerar que los quistes simples se desarrollan a partir
suelen ser asintomáticos; las lesiones de mayor tamaño pueden causar de conductos biliares aberrantes y que, en general, no se asocian
insuficiencia cardíaca con alto gasto cardíaco. El diagnóstico se realiza con lesiones quísticas de otros órganos (Rogers et al., 2007). Se
por ecografía, que identifica una lesión hiper- o hipoecoica con eco­ caracterizan por una capa de epitelio cúbico o cilíndrico que rodea
textura heterogénea, con investigación Doppler del flujo vascular. En una colección de líquido seroso. La mayoría de los quistes hepáticos
la RM se observan lesiones hipointensas en las imágenes ponderadas simples son incidentales, asintomáticos, no requieren intervención
en T1 e hiperintensas en las ponderadas en T2 con realce centrípeto y pueden disminuir de tamaño o resolverse con el tiempo. Se reco­
con contraste con gadolinio. mienda practicar ecografías seriadas, periódicas, para controlar el
Los HHI multifocal y difuso se asocian con múltiples hemangiomas crecimiento o la resolución durante el intervalo entre los estudios.
cutáneos. En general, el HHI multifocal no es evidente en el momento Las indicaciones de intervención quirúrgica son crecimiento durante
del nacimiento, sino que se manifiesta en el curso de las primeras el intervalo entre los controles, gran tamaño que puede causar com­
semanas de vida, cuando los hemangiomas se tornan más prominentes. presión de estructuras vecinas o riesgo de rotura, o los que se tornan
Los recién nacidos sintomáticos presentan hepatomegalia, insuficien­ sintomáticos (Rogers, 2007).
cia cardíaca, anemia y, en ocasiones, trombocitopenia secundaria a
consumo, hemorragia o trombosis dentro del hemangioma. Rara vez,
los hemangiomas pueden estimular la inactivación de tiroxina, con el Lecturas recomendadas
consiguiente hipotiroidismo. En ocasiones, la rotura de los hemangio­
Fawaz R, Baumann U, Ekong U, et al. Guideline for the evaluation
mas puede causar hemorragia intraperitoneal. La ecografía y la RM
of cholestatic jaundice in infants: joint recommendations of the
son similares a las del HHI focal, pero con lesiones más numerosas. North American society for pediatric gastroenterology, hepatology,
El tratamiento se reserva para los recién nacidos sintomáticos, ya que and nutrition and the European society for pediatric gastroen­
los recién nacidos asintomáticos pueden ser observados y controlados terology, hepatology, and nutrition. J Pediatr Gastroenterol Nutr
mediante pruebas de imagen seriadas. El tratamiento médico emplea 2017;64(1):154-168.
propranolol en una dosis de 1-3 mg/kg/día, que se prosigue hasta Hartley JL, Davenport M, Kelly DA. Biliary atresia. Lancet 2009;374:1704-
finalizada la fase de proliferación alrededor de los 9-12 meses de edad. 1713.
Los tratamientos de segunda línea en caso de fracaso del propranolol Koseesirikul P, Chotinaruemol S, Ukarapol N. Incidence and risk fac­
comprenden esteroides, vincristina e interferón α2a (Leaute-Labreze tors of PN-associated liver disease in newborn infants. Pediatr Int
et al., 2008; Mazereeus-Hautier et al., 2010). Si fracasa el tratamiento 2012;54:434-436.
médico o en el contexto de disfunción orgánica significativa, se puede Kowdley KV. Ursodeoxycholic acid therapy in hepatobiliary disease. Am
recurrir a la embolización o la resección quirúrgica. Se ha realizado tras­ J Med 2000;108(6):481-486.
plante hepático en circunstancias clínicas críticas en las que no había Leaute-Labreze C, Dumas de la Roque E, Hubiche T, Boralevi F, Tham­
otras opciones (Christison-Lagay et al., 2007; Dickie et al., 2009). Rara bo JB, Taieb A. Propranolol for severe hemangiomas of infancy. N Engl
vez el HHI multifocal se puede asociar con angiosarcoma hepático. J Med 2008;24:2649-2651.
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Hepatoblastoma NY: Springer; 2014.
Si bien muchos tumores sólidos y quísticos del hígado pueden pre­ Ohi R. Surgery for biliary atresia. Liver 2001;21:175-182.
sentarse en el período neonatal, el tumor maligno más frecuente es Perlmutter DH. Alpha-1-antitrypsin deficiency. Semin Liver Dis
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el hepatoblastoma. Los factores de riesgo de hepatoblastoma son
Rangel SJ, Calkins CM, Cowles RA, et al. Parenteral nutrition-associated
prematuridad, bajo peso al nacer, poliposis adenomatosa familiar, cholestasis: an American Pediatric Surgical Association Outcomes
trisomía 18, glucogenosis Ia, síndrome de Beckwith-Wiedemann y and Clinical Trials Committee systematic review. J Pediatr Surg
síndrome de Li-Faumeni. La mayoría de las veces, el hepatoblastoma 2012;47(1):225-240.
se manifiesta por una masa abdominal asociada con pérdida de peso, Shneider BL, Brown MB, Haber B, et al. A multicenter study of the
dolor abdominal y menor ingesta oral. El diagnóstico se realiza por los outcome of biliary atresia in the United States, 1997-2000. J Pediatr
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pero heterogénea, que puede contener zonas de necrosis, hemorragia Whitington PF. Gestational alloimmune liver disease and neonatal hemo­
o calcificación. La RM es la prueba de imagen de elección. Se requiere chromatosis. Semin Liver Dis 2012;32:325-332.
biopsia para diferenciar el subtipo epitelial (fetal, embrionario, macro­
trabecular e indiferenciado de células pequeñas). El tratamiento se basa,
fundamentalmente, en la resección, aumentada por quimioterapia; La bibliografía completa utilizada en este capítulo puede consultarse online
cuando no es resecable, se puede considerar trasplante hepático. en www.expertconsult.com

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CAPÍTULO 77 Hepatopatías 1112.e1

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CAPÍTULO 77 Hepatopatías 1112.e3

Puntos clave
• La ictericia de inicio temprano (< 24 h de edad) o de aparición
reciente nunca es normal y debe ser investigada.
• La evaluación inicial de un recién nacido ictérico siempre debe
incluir las concentraciones de bilirrubina conjugada y no con­
jugada.
• Los recién nacidos que presentan ictericia secundaria a hiperbili­
rrubinemia conjugada deben ser sometidos a una evaluación
rápida para detectar causas potencialmente fatales y tratables
de colestasis, y después, para otras causas, como hepatopatía
gestacional isoinmunitaria.

Palabras clave
Colestasis neonatal
Hepatopatía metabólica
Hepatitis neonatal
Ictericia
Atresia biliar
Hepatopatía gestacional isoinmunitaria
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PA RTE XV  Sistema hematológico y trastornos del metabolismo de la bilirrubina

78
Hematología del desarrollo embrionario
SANDRA E. JUUL Y ROBERT D. CHRISTENSEN

PUNTOS CLAVE entonces cambia de puesto al hígado y finalmente a la médula ósea


(Song et al., 2016). Cada linaje de células sufre cambios de desarrollo
• Las células madre pluripotentes sustentan la función hematopoyética que son únicos y específicos (Yoder, 2014). Los detalles de estos sis-
durante toda la vida de la persona; el destino de las células temas y el efecto clínico resultante de estos cambios se revisan en los
en desarrollo está influenciado por el microambiente. capítulos siguientes.
• El sitio de la eritropoyesis cambia durante el desarrollo, progresando
del saco vitelino a la región aorta-gonadal-mesonefros, al hígado
y, posteriormente, a la médula ósea. La eritropoyetina (Epo) es el factor Biología de las células madre
principal que regula la eritropoyesis secundaria.
• Los tetrámeros de hemoglobina cambian durante el desarrollo
Las células madre pluripotentes mantienen la función medular durante
embrionario. La afinidad por el oxígeno disminuye a medida toda la vida de una persona. Una característica única de estas células es
que las hemoglobinas cambian de formas embrionarias a adultas. que su descendencia directa incluye al menos una célula hija idéntica,
• El nivel de hematocrito óptimo para la transfusión en los neonatos sigue perpetuando así la población. En cambio, las células progenitoras son
siendo desconocido, porque los beneficios y riesgos de la transfusión más especializadas y solo dan lugar a células más diferenciadas que
en un hematocrito determinado no están probados. ellas mismas. El destino de cualquier célula particular en desarrollo es
• La necesidad de transfusiones en la unidad de cuidados intensivos determinado en gran parte por su microambiente.
neonatales puede reducirse mediante el pinzamiento tardío del cordón Los cambios de desarrollo en el número, la función y la localización
umbilical o el ordeño del cordón, reduciendo las pérdidas relacionadas de las HSC son de gran interés para los biólogos del trasplante y para los
con la flebotomía y con el uso de agentes estimulantes genetistas. La capacidad proliferativa de las HSC difiere con la fuente
de la eritropoyesis (Epo o darbepoetina). anatómica de las células y con la edad a la que se obtienen las células.
• La mayoría de las transfusiones de plaquetas que se administran La sensibilidad de estas células a las citocinas recombinantes también
en la unidad de cuidados intensivos neonatales son profilácticas, cambia con la edad. Mejorar la comprensión de la ontogenia de estas
lo que significa que son transfusiones en neonatos con recuento células puede ser útil para optimizar su uso clínico.
plaquetario bajo que no sangran. El recuento plaquetario en el cual Las HSC embrionarias y fetales son capaces de repoblar los organis-
los beneficios de la transfusión plaquetaria superan los riesgos es mos adultos (Easterbrook et al., 2016). Por el contrario, las células
incierto. La «masa plaquetaria» (combinación de recuento plaquetario madre adultas trasplantadas tienen una menor capacidad de auto-
con el volumen plaquetario) puede proporcionar un mejor criterio de rrenovación, que a veces provoca un rechazo tardío del trasplante.
transfusión que el recuento plaquetario solo. En general, 10-20 ml
Esto podría deberse a que las células madre obtenidas de los adultos
de plaquetas de donante único por kilogramo deben aumentar el
continúan expresando el programa de diferenciación adulta, incluso
recuento plaquetario en más de 100.000/µl. El uso de concentrados
de plaquetas debe evitarse, debido a que el procesamiento da como
si se trasplantan en un ambiente neonatal, lo que indica un cambio
resultado la activación plaquetaria y a la disminución de su función. irreversible en la expresión génica (Dziadosz et al., 2016). Otras expli-
caciones para la disminución del potencial proliferativo pueden tener
que ver con el daño del ADN con el tiempo y el acortamiento de los
telómeros que supone cada división de células madre, limitando el
potencial replicativo (Warren y Rossi, 2009).
Introducción a la hematopoyesis embrionaria Las investigaciones en curso se centran en optimizar las técnicas de
recolección de células madre. Los marcadores de la superficie celular,
La hematopoyesis es el proceso mediante el cual las células madre que son dependientes de la madurez de la célula y la edad gestacional,
multipotentes que se autorregeneran dan lugar a todas las células se utilizan a menudo para identificar y separar HSC con el uso de
sanguíneas diferenciadas (fig. 78.1). Este proceso implica la expresión los anticuerpos monoclonales y análisis de clasificación de células
coordinada de los factores de crecimiento, algunos de los cuales actúan activadas por fluorescencia. Por ejemplo, CD34, un sialomucina de
sobre progenitores primitivos que pueden dar lugar a múltiples linajes superficie celular, es un antígeno usado comúnmente para seleccionar
celulares y otros que apoyan la maduración clonal de células madre HSC y células progenitoras eritropoyéticas tempranas. Combinar la
hematopoyéticas (HSC, hematopoietic stem cells) multipotentes com- positividad de CD34 con la ausencia de marcadores específicos del
prometidas con el linaje. La hematopoyesis comienza en el embrión, linaje permite la selección de una población altamente enriquecida de
con los primeros progenitores linfoides que emergen en el embrión células deseadas para el trasplante. La investigación también se enfoca
y en el saco vitelino antes de la detección de células madre en el día en optimizar los sitios de obtención de células madre. Tanto la médula
embrionario 7,5 (Lin y Yoder et al., 2014). Hacia el día 10, las HSC ósea como la sangre del cordón umbilical son ricas en células madre
están presentes en la región aorta-gónadas-mesonefros, y la actividad y se han utilizado durante mucho tiempo como fuentes de células

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1114 PA RT E XV Sistema hematológico y trastornos del metabolismo de la bilirrubina

• Figura 78.1  Descripción general de la hematopoyesis. Los linajes hematopoyéticos se describen en


esta revisión simplificada de la hematopoyesis. BFU-E, unidad formadora de brotes eritroides; BFU-MK,
unidad formadora de brotes de megacariocitos; CFU-E, unidad formadora de colonias eritroides;
CFU-Eos, unidad formadora de colonias de eosinófilos; CFU-MK, unidad formadora de colonias de
megacariocitos; CFU-GM, unidad formadora de colonias de granulocitos-macrófagos; NK, natural
killer (citolítico natural); PMN, leucocitos polimorfonucleares. (Por cortesía de Alexander R. Vermillion.)

progenitoras. La recolección de células madre de la sangre periférica por la SCU almacenada esté disponible a un coste para el uso futuro de
aféresis estimulada, con expansión ex vivo de poblaciones seleccionadas, individuos o de una familia. Sin embargo, existe una baja probabilidad
es también una opción actualmente (Brugger et al., 2000). de que un individuo necesite un trasplante autólogo de SCU (Roura
La sangre del cordón umbilical (SCU) se puede obtener como fuen- et al., 2015).
te de HSC y se utiliza para el trasplante en pacientes con fallo medular, Retrasar 60 s el pinzamiento del cordón umbilical aumenta el
enfermedades malignas o inmunodeficiencias (Alfraih et al., 2016; volumen sanguíneo del neonato y aumenta la dotación de hierro.
Kekre y Autin, 2016). Las células progenitoras hematopoyéticas en la En teoría, esta práctica podría provocar insuficientes SCU restantes
SCU tienden a tener un alto índice de proliferación en comparación para los bancos. La Canadian Task Force on Preventive Health
con las células obtenidas a partir de la médula adulta (Schoemans Care sugiere que el pinzamiento tardío del cordón tiene beneficios
et al., 2006). Debido a la inmadurez de las células SCU, la compati- significativos para el neonato, y que permanece suficiente sangre
bilidad del sistema HLA es menos estricta para la SCU, permitiendo típicamente en el cordón umbilical y la placenta después de un
una identificación de la unidad donante más eficiente en comparación pinzamiento retrasado para los bancos de SCU. El grupo de trabajo
con un registro de donantes de médula ósea (Barker et al., 2002). Esta canadiense sugiere que se pueden lograr generalmente ambas técnicas
característica también permite mejorar la capacidad de emparejar a los (Armson et al., 2015).
pacientes en poblaciones étnicas minoritarias, puesto que los registros
de médula ósea son con frecuencia escasos. Las estrategias prometedoras Aspectos de la eritropoyesis
para aumentar las células disponibles para el trasplante incluyen la
combinación de múltiples unidades de SCU (Barker et al., 2005) y la durante el desarrollo embrionario
expansión ex vivo de las unidades de SCU.
El primer uso exitoso de la SCU para los propósitos del trasplante La eritropoyesis es el proceso de producción perpetua de eritrocitos.
de HSC se realizó 1989, entre hermanos HLA idénticos, para la ane- Diversas adaptaciones ocurren a través del desarrollo para solucionar
mia aplásica grave de la anemia de Fanconi (Gluckman et al., 1989). las demandas cambiantes de oxígeno del embrión, del feto y del recién
Desde entonces se han realizado miles de trasplantes de SCU para nacido. El tipo de células producidas, los lugares en los que se producen, e
tratar neoplasias malignas como la leucemia linfoblástica aguda, la incluso los microambientes dentro de estos lugares cambian a medida que
leucemia mieloide aguda y la leucemia mieloide crónica; trastornos de avanza el desarrollo (fig. 78.2). Los mecanismos moleculares implicados
la médula ósea, como la anemia Fanconi; inmunodeficiencias, como en iniciar, regular y mantener estas adaptaciones son complejos.
la deficiencia inmunitaria combinada grave; trastornos metabólicos, y
hemoglobinopatías (Kekre y Antin, 2016). Eritropoyesis primitiva y definitiva
La SCU puede ser almacenada en bancos comerciales públicos o
privados. La donación de células cultivadas a bancos de SCU públicos Durante el desarrollo se forman dos tipos de eritrocitos: los eritrocitos
permite el almacenamiento en un banco central disponible para todos primitivos y los definitivos. El hígado es el órgano primario de la
los individuos que necesitan trasplante. Los bancos privados hacen que hematopoyesis durante la vida fetal, pero los eritrocitos primitivos se

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CAPÍTULO 78 Hematología del desarrollo embrionario 1115

• Figura 78.2  Sitios cambiantes de la hematopoyesis durante la gestación humana. La gestación


fetal se muestra en meses a lo largo de la flecha horizontal central. Se muestra la sincronización de
acontecimientos significativos durante la hematopoyesis, comenzando con la eritropoyesis primitiva y
la megacariocitopoyesis en el saco vitelino, y terminando con la hematopoyesis definitiva en la médula
ósea durante el final de la gestación. AGM, aorta-gónadas-mesonefros.

forman por primera vez en el saco vitelino (Yoshimoto y Yoder, 2009). hepática, que expresa cinasa 1 (Flk-1) (Lancrin et al., 2009). Entre el día
Los eritrocitos primitivos grandes se producen en las islas sanguíneas del embrionario 8 y el día embrionario 11,5 se requiere factor de transcrip-
saco vitelino días después de la implantación del embrión. Estas células ción relacionado con runt (RUNTX1) para la formación de HSC y sus
entran en la vasculatura recién formada del embrión, donde continúan progenitores. Las células progenitoras primitivas se desarrollan primero
dividiéndose y diferenciándose durante varios días. Este proceso solo en el saco vitelino, seguido por la aparición de progenitores definitivos,
es mínimamente sensible a la eritropoyetina (Epo) (Palis, 2014). Los también en el saco vitelino (Palis, 2008). Otra fuente de los progenitores
eritroblastos primitivos son grandes (> 20 µm), CD34 negativos, y precoces definitivos es la región ventral de la aorta embrionaria (Tavian
contienen hemoglobina predominantemente embrionaria. La síntesis y Peault, 2005; Palis, 2008). Una vez que se establece la circulación, los
de la hemoglobina continúa hasta que cesa la replicación celular (Bous- progenitores de todas las líneas se detectan en la sangre, después en el
sios y Bertles, 1988). En ratones ocurre una transición a la eritropoyesis hígado y, finalmente, en la médula (Tavian et al., 2001).
definitiva en el día embrionario 13,5 (la gestación completa es 21
días). La eritropoyesis definitiva se caracteriza por eritroblastos más Saco vitelino
pequeños (< 20 µm), CD34 positivos, que producen hemoglobinas El saco vitelino es una estructura extraembrionaria que se puede
fetales y adultas, con la extrusión de sus núcleos cuando son maduros. subdividir en saco vitelino primario y secundario. El saco vitelino
A diferencia de la eritropoyesis primitiva, este proceso depende de la primario es transitorio y no tiene ninguna función hematopoyética
transducción de señales de cinasa Janus y de la estimulación de la Epo conocida. En los seres humanos se forma por la proliferación y la
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(Neubauer et al., 1998). Los eritroblastos primitivos normalmente diferenciación de las células endodérmicas primitivas 7-8 días después
sufren apoptosis, y llegan a extinguirse durante la vida fetal, mien- de la concepción. Estas células endodérmicas dan lugar a precursores
tras que los eritroblastos definitivos son capaces de autorrenovarse mesodérmicos (células intermedias). El saco vitelino primario entonces
(Dieterlen-Lievre, 1997). se deshace en pequeñas vesículas, y el saco vitelino secundario se forma
de sus remanentes entre los 12 y los 15 días siguientes a la concepción.
Cambio del sitio primario de la eritropoyesis Hacia los 16-19 días, la eritropoyesis primitiva se produce en el saco
vitelino humano (Kelemen y Janossa, 1980; Kennedy et al., 1997).
Los seres humanos tienen cuatro sitios principales de eritropoyesis El saco vitelino secundario es un sitio activo en la síntesis de proteí-
embrionarias y fetales: saco vitelino, aorta (región ventral), hígado y nas, en el transporte de nutrientes y en la hematopoyesis (Enders y
médula ósea. En los roedores, el bazo es también un sitio importante de King 1993). Las células hematopoyéticas primitivas, adheridas a las
la hematopoyesis, pero no hay evidencia para esto en los seres humanos células endoteliales circundantes, se observan por primera vez en el día
sanos (Calhoun et al., 1996). Los estudios que utilizaron un sistema de 16 en la capa mesodérmica. Estas masas de células hematopoyéticas-
diferenciación de células madre embrionarias in vitro mostraron que las endoteliales han sido descritas como islas de la sangre. A medida que se
células endoteliales, las células hematopoyéticas primitivas y las colonias produce la maduración, estas islas de sangre migran unas hacia las otras,
de células sanguíneas definitivas surgen de una célula progenitora común mezclándose y formando una red de capilares. En los pequeños vasos

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presentes en esta etapa de desarrollo se observan pequeños racimos de factores de crecimiento hematopoyéticos y citocinas, así como la matriz
células no diferenciadas, los hemangioblastos, y racimos de eritroblastos extracelular en la que proliferan las células.
primitivos (Enders y King, 1993). Cuando avanza la diferenciación, Se piensa que los factores de crecimiento actúan principalmente
emergen los linajes celulares endoteliales y hematopoyéticos. Estos tipos como señales permisivas y/o selectivas, permitiendo que los tipos de
de células comparten marcadores moleculares comunes y la capacidad células ya comprometidas proliferen y se diferencien. Los factores
de respuesta a un grupo de factores de crecimiento y, dependiendo del de crecimiento importantes para la eritropoyesis definitiva incluyen
microambiente, pueden derivar de una célula madre común en cultivo la Epo, el factor de células madre, la interleucina 3 (IL-3), la trombo-
(Eichmann et al., 1997; Lux et al., 2008; Lancrin et al., 2009). poyetina (TPO), y posiblemente la insulina y el factor de crecimiento
Después de la sexta semana después de la concepción, los eritroblas- similar a la insulina I, que actúan como factores de supervivencia no
tos definitivos se encuentran en el saco vitelino. Una disminución en la esenciales para las células CD34+ (Ratajczak et al., 1998). Estos factores
hematopoyesis del saco vitelino se observa después de la octava semana de crecimiento trabajan en conjunto para promover la eritropoyesis
(Enders y King, 1993). Las células hematopoyéticas derivadas del saco definitiva. Sin embargo, la Epo es el principal factor de crecimiento: en
vitelino tienen un potencial más restringido in vivo, ya que solo los eri- ausencia de señalización de Epo, como en los casos de las mutaciones
trocitos y macrófagos están presentes en el saco vitelino (Enzan, 1986), completas de Epo y del receptor de Epo, no se produce la eritropoyesis
mientras que en el hígado las células progenitoras se desarrollan en el definitiva. Las mutaciones completas de Epo o de su receptor son letales
espectro completo de las células hematopoyéticas. Sin embargo, cuando a los 13,5 días de gestación en el ratón, debido a anemia grave.
las células madre derivadas del saco vitelino se cultivan in vitro o se tras-
plantan, son multipotentes, lo que ilustra la importancia del microam-
biente en el desarrollo de células comprometidas con los linajes. Hematopoyesis extramedular
La hematopoyesis extramedular puede ocurrir después de que la médu­
Región aorta-gónadas-mesonefros
la ósea se haya establecido como el sitio primario de la eritropoyesis. Las
Otro sitio de la actividad eritropoyética temprana en el embrión humano enfermedades que inducen esta situación incluyen afecciones hemolíticas,
en desarrollo es la región ventral de la aorta, en la región periumbilical rubéola congénita, infección por citomegalovirus e infección por parvo-
(Tavian y Peault, 2005). En los seres humanos, alrededor del día 23 tras virus B19. La hematopoyesis extramedular puede ocurrir en el hígado, el
la concepción las células progenitoras hematopoyéticas multipotentes bazo, las glándulas suprarrenales, el páncreas, la tiroides, el endocardio,
en esta región son más numerosas que en el saco vitelino o en el hígado. los testículos, el útero, la piel o el cerebro (Yamamoto et al., 2016).
Hacia el día 40 de gestación, la hematopoyesis en este sitio finaliza. Cuando la piel está involucrada en un neonato, se observa el clásico
sarpullido en «bollo de arándanos», típico de la rubéola congénita o la
Hígado infección por citomegalovirus.
Poco tiempo después del inicio de la circulación sanguínea (semanas 4-5
de gestación), la eritropoyesis comienza en el hígado (Kelemen y Janos-
sa, 1980). Al igual que en el saco vitelino, inicialmente predominan los Ontogenia de los eritrocitos
eritroblastos primitivos. Sin embargo, durante las siguientes 4 semanas,
los eritrocitos definitivos se convierten en la forma predominante de Las células precursoras más tempranas específicas para el linaje eritroide
eritrocitos. Durante este tiempo, la masa del hígado aumenta 40 veces, son las células de la unidad formadora de brotes eritroides (BFU-E). Las
con las células hematopoyéticas que constituyen el 60% del hígado en células BFU-E tienen un número bajo de receptores de Epo (Sawada
la semana 11 a la semana 12 (Thomas y Yoffey, 1964). Mientras tanto, et al., 1990) y responden a la Epo, así como al factor estimulante de
otros tipos de células hematopoyéticas también se producen en el hígado. colonias de granulocitos y macrófagos (GM-CSF) y a la IL-3. A medida
De forma temprana en este proceso (5 semanas) predominan los macró- que estas células maduran en células eritroides formadoras de unidades
fagos, con aproximadamente un granulocito por cada nueve macrófagos eritroides y proeritroblastos, se vuelven altamente dependientes de la Epo,
(Slayton et al., 1998b). En contraste con el saco vitelino, durante el lo que se refleja en la alta densidad de receptores Epo en la membrana
período de la hematopoyesis hepática máxima (semanas 6 a 18) se genera celular (hasta 1.000 por célula) (Broudy et al., 1991). Los eritroblastos
la producción de todas las líneas celulares hematopoyéticas (eritrocitos, maduros tienen menos receptores de Epo y son menos sensibles a la
macrófagos, megacariocitos, granulocitos y linfocitos). Entre las semanas estimulación por Epo, y los reticulocitos y eritrocitos no tienen receptores
18 y 21 de gestación, la hematopoyesis en el hígado disminuye, pero el Epo y no responden a la Epo. Las principales funciones del metabolismo
hígado continúa como un órgano eritropoyético hasta el final. de los eritrocitos maduros son mantener reservas adecuadas de trifosfato
de adenosina (ATP), producir sustancias reductoras para actuar como
Médula ósea antioxidantes y producir 2,3-difosfoglicerato (2,3-DPG), que modifica
Mientras que la hematopoyesis hepática disminuye, la médula ósea la afinidad por el oxígeno de la hemoglobina.
se convierte en el sitio primario de eritropoyesis, y así continua a lo Durante el desarrollo embrionario, se producen importantes cam-
largo de la vida posnatal. El proceso de eritropoyesis en la médula ósea bios en el hematocrito, el recuento de reticulocitos y la morfología
comienza sobre las 8 semanas, otra vez con la primitiva eritrocitosis de los eritrocitos, el contenido de la membrana, la deformabilidad,
(Kelemen y Janossa, 1980). Durante las siguientes semanas gestaciona- la vida media y el metabolismo. En el transcurso de la gestación, se
les se produce un cambio a la eritropoyesis definitiva, y a las 14 semanas espera un aumento en el hematocrito, desde un 36 ± 3% a las 18-20
solo se presentan eritroblastos definitivos. Al igual que en el hígado, la semanas de gestación (muestras fetales) hasta un 61 ± 7% al término
producción de todas las células hematopoyéticas ocurre en la médula del parto. Para mantener este aumento en el hematocrito y el volumen
ósea. Las células eritropoyéticas constituyen un máximo de un 35% sanguíneo (hasta 7 ml/día durante el último trimestre), se requiere la
de las células totales de la médula ósea en la semana 12 de gestación, y producción de aproximadamente 50 × 109 eritrocitos por día. Durante
caen después a entre un 20 y un 30% (Charbord et al., 1996). este mismo período de desarrollo fetal, el tamaño de los eritrocitos
(el volumen celular medio) disminuye de 134 ± 9 femtolitros (fl) a 119 ±
9 fl (Christensen et al., 2008). A término, el volumen celular medio es
Factores que influyen en los sitios mayor que el de los adultos sanos normales y desciende en el período
de la eritropoyesis posnatal, alcanzando un nadir entre 4 y 6 meses. Luego aumenta para
alcanzar valores adultos (88 ± 8 fl) aproximadamente en 1 año.
El microambiente en cada sitio de la hematopoyesis influye en el tipo y Los reticulocitos son eritrocitos casi maduros liberados de la médula
el momento del desarrollo hematopoyético. El microambiente incluye ósea a la circulación. Aunque su núcleo ha sido extruido, retienen

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CAPÍTULO 78 Hematología del desarrollo embrionario 1117

orgánulos citoplásmicos como ribosomas, mitocondrias y cuerpos de son consistentes con los cambios en la hemoglobina y el hematocrito
Golgi durante aproximadamente 24 h. Estas células recién liberadas observados después del nacimiento a término (anemia fisiológica). En
se pueden diferenciar de los eritrocitos maduros mediante métodos los lactantes prematuros, la anemia es más grave y persiste durante
manuales que implican tinción con nuevo azul de metileno o azul más tiempo, lo que lleva a la anemia de la prematuridad. Las concen-
de cresilo brillante, que tiñen el ácido nucleico dentro de las células. traciones de Epo en estos lactantes son excesivamente bajas, lo que
También se pueden enumerar por medios electrónicos, que incluyen el constituye la razón de ser de la terapia con Epo humana recombinante.
paso por la citometría de flujo de células que son más grandes y con-
tienen más ácido nucleico que los eritrocitos maduros. El recuento de Ontogenia, organización y estructura
los reticulocitos se puede utilizar para evaluar el nivel de producción de de las hemoglobinas
eritrocitos, porque los valores altos indican eritropoyesis activa, mien- La hemoglobina es una molécula tetramérica que comprende dos
tras que los bajos indican niveles bajos de eritropoyesis. Al nacer, los pares de subunidades polipeptídicas. A medida que avanza el desa-
recuentos de reticulocitos en los lactantes nacidos prematuros tienden a rrollo, se construyen varias hemoglobinas mediante una combinación
ser mayores que en los lactantes a término (400.000-550.000/µl frente de dos globinas tipo α (ζ o α) con dos globinas tipo β (ε, γ, δ o β)
a 200.000-400.000/µl) (Henry y Christensen, 2015a). Se pueden obte- para formar tetrámeros de hemoglobina. Estos tetrámeros incluyen
ner recuentos de reticulocitos absolutos, porcentaje de reticulocitos del las hemoglobinas embrionarias, la hemoglobina Gower 1 (ζ2ε2), la
total de eritrocitos y recuentos de reticulocitos corregidos. En general, hemoglobina Gower 2 (α2ε2) y la hemoglobina Portland 1 (ζ2γ2),
cuando se evalúa a los neonatos, el recuento absoluto de reticulocitos la hemoglobina fetal (hemoglobina F) (α2γ2) y las hemoglobinas adul­
es el más útil (Christensen et al., 2016b). tas A (α2β2) y A2 (α2δ2). Su expresión y proporción dependen de la edad
La morfología de los eritrocitos es bastante heterogénea en los gestacional, pero pueden modificarse mediante mecanismos externos.
lactantes prematuros y a término en comparación con los adultos. Las La función básica de las diversas hemoglobinas es similar, pero su
células de formas irregulares, como los poiquilocitos, los acantocitos, afinidad por el oxígeno es diferente. A medida que las hemoglobinas
los esquistocitos y los crenocitos, son comunes en los frotis de sangre cambian de formas embrionarias a fetales y adultas, la afinidad por el
de los recién nacidos. Esto refleja cambios en el desarrollo de la defor- oxígeno disminuye. Por lo tanto, el cambio de la síntesis de hemo-
mabilidad y flexibilidad de la membrana celular. El eritrocito neonatal globina embrionaria a fetal y adulta es un mecanismo importante
tiene una vida media aproximadamente de 70-80 días en comparación por el cual el feto en desarrollo se adapta del ambiente intrauterino
con 120 días para el eritrocito del adulto. relativamente hipóxico al ambiente extrauterino relativamente rico en
oxígeno (Dzierzak y Phillipsen, 2013).
Cambios de la regulación de la eritropoyesis Cambios en la síntesis de hemoglobina
durante el desarrollo embrionario durante el desarrollo embrionario
El principal factor de crecimiento que regula la eritropoyesis es la Epo. Los genes incluidos en las familias de α-globina y β-globina se expresan
Esta glucoproteína de 30,4 kDa contiene 165 aminoácidos y está amplia- de acuerdo con un estricto calendario ontogenético, y la expresión
mente glucosilada, con un 40% de contenido de hidratos de carbono. La cuantitativa de los genes de cada una de estas familias está estrictamente
Epo mantiene la producción de eritrocitos durante la vida fetal, neonatal equilibrada y coordinada (Bard, 2000). La síntesis de hemoglobina
y adulta al inhibir la apoptosis de los progenitores eritroides, y al estimu- comienza alrededor de 14 días después de la concepción, con síntesis de
lar su proliferación y diferenciación en normoblastos (Jelkmann, 1992). ζ-globina y cadenas de ε-globina. Estas son reemplazadas por la síntesis
Dado que muy poca Epo cruza la placenta, las concentraciones de Epo de α-globina y cadenas de γ-globina sobre la quinta a séptima semanas
medidas en el feto reflejan la síntesis fetal (Widness et al., 1991; Eichhorn de gestación (la hemoglobina Gower 2, la hemoglobina Portland 1 y
et al., 1993). La producción de Epo comienza en la vida fetal temprana, la hemoglobina F se convierten en predominantes) (Gale y al., 1979).
y se ha identificado Epo en el líquido celómico extraembrionario y en el A las 12 semanas de gestación, la hemoglobina F (α2γ2) representa casi
fluido amniótico (Campbell et al., 1992). El sitio primario de la produc- la totalidad de la hemoglobina producida (Cividalli et al., 1974). Des-
ción de la Epo durante la vida fetal es el hígado, con transición al riñón pués de la semana 20 de gestación no se producen cadenas ε-globina,
después del nacimiento (Fahnenstich y Dame, 1996). Esta transición pero la producción de las cadenas de ζ-globina puede persistir duran-
está mediada en parte por la expresión de GATA4 (Dame et al., 2004). te el último trimestre en condiciones patológicas como α-talasemia
La producción de Epo es estimulada por la hipoxia a través de las vías homocigótica. Se producen picos de expresión del gen de la γ-globina
del factor inducible por hipoxia (HIF) 1 y 2 (Dioum et al., 2009; Fisher durante la mitad de la gestación que disminuyen rápidamente durante
et al., 2009; Lam et al., 2009; Semenza, 2009; Webb et al., 2009). El el último mes de gestación. La síntesis de β-globina, requerida para la
HIF es un complejo de unión a ADN compuesto de dos subunidades: hemoglobina A, comienza en la sexta semana de gestación, y aumenta
HIF-1β, que no es sensible al oxígeno y se expresa constitutivamente, a medida que la síntesis de γ-globina disminuye, una transición que
e HIF-1α o HIF-2α, que son altamente sensibles al oxígeno. El com- continúa hasta el sexto mes de vida (Kazazian y Woodhead, 1973).
Por lo tanto, la síntesis de hemoglobina A aumenta cuantitativamente
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plejo HIF está, a su vez, regulado por las enzimas del dominio prolilo
de la hidroxilasa 1-3 (Weidemann y Johnson, 2009). Se han notificado después de la 30.ª semana de gestación. Al final del último trimestre,
concentraciones elevadas de Epo (hasta 8.000 mU/ml) en estados pato- ocurre un cambio rápido de la síntesis de hemoglobina fetal a hemo-
lógicos, como hipoxia fetal, anemia e insuficiencia placentaria, y en globina adulta, y disminuye del 85% a las 34 semanas de gestación al
lactantes de madres diabéticas (Teramo y Widness, 2009). 60-80% al nacer (Peri et al., 1998). La síntesis de cadenas de δ-globina,
Durante el desarrollo fetal, las concentraciones circulantes de Epo requerida para la hemoglobina A2 (α2δ2), comienza en las semanas 34
oscilan entre 4 mU/ml a las 16 semanas de gestación y 40 mU/ml a a 35 de gestación. Después del nacimiento, ocurre un aumento rápido
término (Forestier et al., 1991; Fahnenstich et al., 1996). Un entorno en la síntesis de hemoglobina A y hemoglobina A2.
intrauterino hostil puede provocar una mayor producción de Epo, que
refleja hipoxemia fetal (Halmesmäki et al., 1990; Ruth et al., 1990). En Transfusión de eritrocitos
los lactantes sanos a término, las concentraciones séricas de Epo dis-
minuyen después del nacimiento para alcanzar un nadir entre la cuarta Los eritrocitos se pueden transfundir a pacientes anémicos para aumen-
y la sexta semanas de edad (Ruth et al., 1990). A las 10-12 semanas tar simultáneamente el volumen de sangre y el contenido de eritrocitos
alcanzan concentraciones de adultos (aproximadamente 15 mU/ml) del receptor, aumentando así la capacidad de transporte de oxígeno.
(Kling et al., 1996). Estos cambios en las concentraciones de Epo La capacidad técnica para almacenar sangre para futuras transfusiones

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se desarrolló a principios del siglo XX (Rous y Turner, 1916). En los El pinzamiento tardío del cordón umbilical durante el nacimiento,
primeros años, los eritrocitos se mantuvieron viables en una solución durante 60-90 s, es un medio seguro y efectivo para aumentar el
de citrato y glucosa, pero las soluciones actuales permiten almacenar hematocrito inicial de los neonatos prematuros (Brocato et al., 2016).
células hasta 42 días en soluciones como citrato-fosfato-glucosa, citrato- La creciente evidencia indica que el ordeño o pinzamiento del cordón
fosfato-glucosa-adenina y varias soluciones con aditivos, que pueden umbilical, una manera más rápida para realizar una transfusión de
contener glucosa adicional, manitol y adenina (Nemkov et al., 2016). SCU o de sangre de la placenta al nacer, es igualmente seguro y
El hematocrito de los «concentrados de eritrocitos» típicamente varía efectivo (Christensen et al., 2014, Katheria et al., 2015). Las prácticas
del 55 al 80%. Durante el almacenamiento, los eritrocitos sufren actuales para evitar las transfusiones en la UCIN incluyen el pinza-
cambios metabólicos y estructurales. Los contenidos de 2,3-DPG, miento tardío o el ordeño del cordón umbilical, más los esfuerzos
antioxidantes y ATP disminuyen, la glucólisis disminuye, la fragi- para reducir las pérdidas relacionadas con la flebotomía. Estos últimos
lidad osmótica aumenta y la deformabilidad disminuye (Matthews incluyen extraer toda la sangre necesaria para las pruebas analíti-
et al., 2015). Las bombas de membrana dependientes de ATP se vuel- cas en el momento del nacimiento utilizando sangre fetal sobrante
ven disfuncionales, y el contenido de potasio extracelular aumenta a del cordón umbilical y, por lo tanto, no extraer sangre de lactantes
un ritmo de 1 mEq/día, lo que puede ser peligroso cuando se trans- prematuros pequeños al ingresar a la UCIN (Henry et al., 2015b).
funden grandes volúmenes rápidamente. El daño oxidativo ocurre en Un medio adicional para evitar las transfusiones es utilizar agentes
los lípidos y las proteínas durante el almacenamiento y la irradiación estimulantes de la eritropoyesis, Epo o darbepoetina de acción pro-
(Remy et al., 2015). Los compuestos proinflamatorios se acumulan du­ longada. Estos pueden mantener los niveles de hemoglobina más altos
rante el almacenamiento de sangre, particularmente si no se reducen de lo normal, reducir los requerimientos de transfusiones y quizás
de leucocitos. Después de una transfusión de eritrocitos, la esperanza de conducir a mejores resultados del desarrollo neurológico (Ohls et al.,
vida media del eritrocito es de 85 días, con una semivida media de 43 ± 11 2013, 2014, 2015, 2016).
días (Strauss et al., 2004).
Los riesgos de la transfusión de eritrocitos pueden deberse al pro- Metabolismo de la bilirrubina
ceso de almacenamiento, la transfusión en sí y la asociación con daño
oxidativo. Debido al proceso de almacenamiento y al aumento de la La principal fuente de bilirrubina en el feto y el neonato es el metabolis-
edad de la sangre almacenada, la transfusión de eritrocitos expone al mo del hemo derivado de la hemoglobina de los eritrocitos circulantes.
receptor a altos niveles de potasio, glucosa, hidrógeno y ácido láctico; El paso limitante de la velocidad en la descomposición del hemo es la
la importancia clínica depende de la edad de la sangre y del volumen formación de biliverdina, un proceso controlado por la hemooxigenasa
y la velocidad de la transfusión (Remy et al., 2015). Aunque es raro, (Rodgers y Stevenson, 1990). Después de la descomposición del hemo,
las infecciones bacterianas transmitidas por transfusión pueden ocurrir el hierro se recicla, el monóxido de carbono se libera y exhala, y la bili-
debido a la contaminación bacteriana de la sangre almacenada (Niu verdina se reduce a bilirrubina IXα por la biliverdina reductasa. En el
et al., 2006). Otros riesgos de la transfusión de eritrocitos incluyen útero, la madre procesa la bilirrubina no conjugada después de la trans-
infecciones víricas, lesiones pulmonares agudas relacionadas con ferencia placentaria. Después del nacimiento, el monóxido de carbono
la transfusión y reacción del injerto contra el huésped (Lieberman espirado se puede cuantificar para evaluar la tasa de descomposición
et al., 2014). Las transfusiones múltiples de eritrocitos en ausencia de del hemo (Christensen et al., 2016a). La bilirrubina no conjugada
una pérdida importante relacionada con la flebotomía también pueden es lipófila y está estrechamente unida a la albúmina circulante. La
poner al paciente en riesgo de sobrecarga de hierro y daño oxidativo conjugación de la bilirrubina da como resultado una molécula soluble
(Park y Kim, 2015). Una unidad de 420 ml de sangre completa con- en agua relativamente polar, diglucurónido de bilirrubina, que puede
tiene 200 mg de hierro, que luego se procesa en unidades de 250 ml excretarse. Este proceso ocurre en el hígado y depende de la ligandina,
de concentrados de eritrocitos (Porter, 2001), por lo que una unidad de una proteína de transferencia y la enzima uridina difosfoglucuronil-
sangre con un hematocrito del 60% tiene un contenido de hierro transferasa. La capacidad de conjugación del feto y el recién nacido se
de 0,7 mg/ml, que se vuelve disponible cuando las células se reponen. ve afectada en relación con la de los individuos mayores debido a la
Hay mayor cantidad de hierro no unido en la sangre almacenada, lo que actividad reducida de la transferasa y los bajos niveles de ácido uridina
puede aumentar la cantidad de especies reactivas de oxígeno (Hirano difosfoglucurónico (Dennery et al., 2001).
et al., 2001). En estudios retrospectivos y observacionales, un mayor
número de transfusiones de eritrocitos se ha asociado con la retinopatía
del prematuro (Dani et al., 2001), la displasia broncopulmonar, la
Aspectos de la megacariocitopoyesis
enterocolitis necrosante y el uso de diuréticos (Valieva et al., 2009). durante el desarrollo embrionario
Los valores óptimos de hematocrito y las indicaciones para trans-
fusiones en lactantes en la unidad de cuidados intensivos neonatales Las plaquetas son fragmentos anucleados pequeños (7,5 fl) de megaca-
(UCIN) siguen siendo controvertidos. En el pasado, los lactantes eran riocitos que circulan como discos relativamente lisos cuando no están
transfundidos si el hematocrito estaba por debajo del 40%. Debido al activados. La vida útil circulante normal de una plaqueta es de 10
riesgo de transfusiones y la falta de evidencia de beneficio, se han pro- días. Las plaquetas proporcionan hemostasia cuando se produce una
puesto pautas de transfusión más restrictivas (dos Santos et al., 2011). rotura del revestimiento endotelial vascular, y se activan y se adhieren
La mayoría de los estudios que comparan los protocolos transfusionales al subendotelio expuesto. Las plaquetas activadas generan mediadores,
restrictivos con los más flexibles en lactantes prematuros no han demos- que incluyen el potente vasoconstrictor tromboxano A2 y difosfato de
trado un beneficio sustancial y duradero para mantener niveles más adenosina, los cuales contribuyen aún más a la formación de tapones
altos de hemoglobina (Bell et al., 2005; Kirpalani et al., 2006). En un hemostáticos (Gremmel et al., 2016).
estudio, el resultado del neurodesarrollo en la edad escolar fue peor
con la práctica de transfusiones en UCIN menos estrictas (Nopoulos Sitios de producción de megacariocitos
et al., 2011). Actualmente no existe un marcador fiable para identificar
la necesidad de transfusiones en neonatos, aunque se han estudiado La megacariocitopoyesis es el proceso mediante el cual se desarrollan
los siguientes: indicadores clínicos (Wardle y Weindling, 2001), con- los megacariocitos y, en última instancia, las plaquetas. Al igual que
centración de ácido láctico (Wardle y Weindling, 2001; Takahashi con la eritropoyesis, los sitios de megacariocitopoyesis cambian durante
et al., 2009), hallazgos ecocardiográficos (Alkalay et al., 2003), y uso el desarrollo embrionario y fetal. En el desarrollo embrionario del
de espectroscopia del infrarrojo cercano de la oxigenación cerebral y ratón, los megacariocitos se encuentran en el saco vitelino temprano
visceral (Sandal et al.) (McGrath y Palis, 2005). Estas células, cuando se cultivan en presencia

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CAPÍTULO 78 Hematología del desarrollo embrionario 1119

de factor de células madre, IL-3, IL-6, Epo, TPO y factor estimulante marcada homología a la Epo. La TPO es producida principalmente
de colonias de granulocitos (G-CSF), producen no solo células BFU-E, por el hígado, aunque otros tejidos expresan pequeñas cantidades.
sino también colonias de megacariocitos. Los progenitores de megaca- Actúa como un potente estimulador de todas las etapas del desarrollo
riocitos comparten un progenitor común con células hematopoyéticas de megacariocito al unirse a su receptor específico de superficie celu-
primitivas (McGrath y Palis, 2005). En los humanos, los estudios con lar, leucemia mieloproliferativa c (c-MPL). En los modelos knockout
microfotografías electrónicas han demostrado que los megacariocitos para TPO y para c-MPL, la producción plaquetaria es del 10-15%
están presentes en el hígado y en el aparato circulatorio a las 8 semanas comparada con la de los controles, lo que confirma que la TPO es el
de la concepción (Hesseldahl y Falck-Larsen, 1971). regulador primario de la producción plaquetaria, pero también indica
que existen vías alternativas para la megacariocitopoyesis. La TPO está
Precursores de megacariocitos ligada a la superficie de las plaquetas por su receptor, reduciendo así la
exposición de los megacariocitos a la hormona (Kaushansky, 2015). Las
La megacariocitopoyesis comienza con las HSC pluripotentes, que dan concentraciones de TPO en suero tienden a ser más bajas en lactantes
lugar a células progenitoras mieloides (unidad de células formadoras prematuros que en lactantes y niños mayores, y la respuesta de la TPO
de colonias en el bazo), luego a unidades formadoras de colonias de a la trombocitopenia es menos potente cuando la edad gestacional
megacariocitos grandes y abundantes, seguidas de unidades formadoras disminuye. Esto se contrarresta con una mayor sensibilidad de los
de colonias megacariocíticas (v. fig. 78.1). Con el avance de la madu- precursores de los megacariocitos a la TPO (Liu y Sola, 2011).
ración se unen pequeñas células mononucleares que son indistingui-
bles de monocitos de células poliploides grandes, que se reconocen
fácilmente sobre la base de su fenotipo. El proceso de diferenciación de
Cambios del recuento plaquetario
megacariocitos se ha separado en cuatro etapas. Las células de la etapa I, durante el desarrollo embrionario
o megacarioblastos, son las más pequeñas e inmaduras. A medida que
las células maduran a través de la etapa II (promegacariocitos), la eta­ El recuento de plaquetas fetal aumenta con la gestación. A las 15
pa III (megacariocitos granulares) y la etapa IV (megacariocitos madu- semanas, el recuento de plaquetas promedio es 187.000/µl, y aumenta
ros), el núcleo se divide en múltiples lóbulos, el citoplasma se vuelve a 274.000/µl a término. En general, los lactantes prematuros tienen
cada vez más eosinófilo por tinción de Wright-Giemsa y el tamaño recuentos plaquetarios ligeramente más bajos que los adultos con un
celular aumenta desde 6-24 hasta 50 µm. La presencia de gránulos rango más amplio de normal (100.000/-450.000/µl) (Henry y Chris-
aumenta constantemente hasta que en las células maduras se organizan tensen, 2015a).
en «campos plaquetarios». A diferencia de otras líneas celulares, cuando
el núcleo de los megacariocitos madura, sufre endomitosis o endorredu- Transfusiones de plaquetas
plicación, un proceso por el cual aumenta la ploidía celular en ausencia
de la división celular. Los megacariocitos de adultos típicamente tienen La práctica clínica con respecto a la transfusión plaquetaria es incon-
una ploidía modal de 16N, mientras que muestras comparables de sistente, ya que no existen pautas basadas en evidencias (Cremer
lactantes prematuros o a término tienen una ploidía significativamente et al., 2016). En 2005, en una encuesta por Internet de neonatólo-
menor de menos de 8N (Slayton et al., 2005). Los megacariocitos de gos en EE. UU. y Canadá, se observaron amplias variaciones en la
recién nacidos también son típicamente más pequeños que los de los práctica clínica, con transfusiones de plaquetas administradas con
adultos, aunque manifiestan características de megacariocitos maduros frecuencia a neonatos sin sangrado con recuentos de plaquetas mayores
(Fuchs et al., 2012). Los megacariocitos de tamaño adulto aparecen a de 50.000/µl. Esta práctica era particularmente común durante el
los 2 años de edad. Típicamente, las células más pequeñas con menor tratamiento con indometacina, antes o después de procedimientos o
ploidía producen menos plaquetas que las células más grandes con de cirugías, o después del diagnóstico de hemorragias intraventriculares
mayor ploidía. A pesar de esto, los recuentos de plaquetas de fetos son (Josephson et al., 2009). Esto es alarmante, ya que varios estudios
solo un poco más bajos que los de los adultos (Wiedmeier et al., 2009). muestran una correlación entre el número de transfusiones de plaquetas
recibidas por neonatos hospitalizados y la tasa de mortalidad (Garcia
Control de la megacariocitopoyesis et al., 2001; Baer et al., 2007). En un estudio de 1.600 pacientes
trombocitopénicos de UCIN, los que recibieron transfusiones de
Las plaquetas son útiles para la función primaria de la hemostasia, plaquetas tuvieron tasas de mortalidad mayores: el 2% para los que
pero también participan en la defensa antimicrobiana y la reparación no recibieron transfusiones, el 11% para los que recibieron 1-2 trans-
tisular (Grozovsky et al., 2015). En el proceso de megacariocitopoyesis fusiones, el 35% para los que recibieron más de 10 transfusiones y el
participan múltiples citocinas; sin embargo, la TPO es la principal. El 50% para los que recibieron 20 o más transfusiones (Baer et al., 2007).
factor de células madre, la IL-3 y la IL-6 aumentan la ploidía y el tama- Esto se debió parcialmente a la enfermedad subyacente que requirió
ño de los megacariocitos. La IL-11 también estimula la proliferación que el lactante fuera transfundido. Sin embargo, dado que las prácticas
de progenitores de los megacariocitos e induce la maduración de los de transfusión difieren tan ampliamente, parte del aumento de la
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mismos, mientras que otros factores de crecimiento, como la Epo, el mortalidad podría atribuirse estadísticamente a los efectos nocivos
factor de células madre, los GM-CSF, la IL-1, el factor de crecimiento de las transfusiones múltiples de plaquetas. En un intento de crear
de fibroblasto básico, el factor de crecimiento derivado de plaquetas y un enfoque razonable, pero seguro, de las transfusiones de plaquetas,
el interferón γ, tienen un papel menos claramente definido. Algunas se compararon dos pautas de forma prospectiva: una basada en el
citocinas inhiben la trombopoyesis, incluyendo el factor de crecimiento recuento de plaquetas y otra basada en la masa de la plaqueta (producto
transformante β y el factor plaquetario 4 (Gewirtz et al., 1995). La del volumen plaquetario medio y el recuento plaquetario). Fueron
magnitud de la influencia de estos factores de crecimiento cambia con transfundidos menos pacientes cuando la masa plaquetaria se utilizó
el desarrollo. como indicación de la transfusión (Gerday et al., 2009). Roberts et al.
(2008) recomendaron que se eviten las transfusiones profilácticas
Trombopoyetina de plaquetas después de la primera semana de vida, a menos que el
La presencia de un factor de crecimiento que regulaba la formación recuento de plaquetas descienda por debajo de 30.000/µl. Durante
de la plaqueta fue intuida en los años cincuenta, pero no se descubrió la primera semana de vida recomiendan como indicación de la trans-
hasta 1994, cuando la proteína fue aislada por Kaushansky (2015). fusión 50.000/µl para los lactantes prematuros. Para los pacientes con
La TPO se compone de 332 aminoácidos y contiene dos dominios. recuentos plaquetarios superiores a 50.000/µl, las transfusiones deben
El aminoterminal es el dominio activo (153 aminoácidos) y lleva reservarse para los que tienen sangrado grave activo. Otra controversia

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se refiere a la preparación de plaquetas: el donante único, el donante y los referidos a la inmunidad, llamados linfocinas. Cuando fueron
múltiple, una unidad única o las preparaciones múltiples de concen- secuenciadas, las linfocinas se denominaron como IL con números.
trados de plaquetas. En general, 10-20 ml de plaquetas por kilogramo Hay una gran cantidad de solapamiento funcional entre los factores
de un solo donante deben aumentar el recuento de plaquetas en más de crecimiento hematopoyéticos (redundancia), y cada factor de cre-
de 100.000/µl. En ausencia de consumo, algunas de las plaquetas del cimiento tiene una multiplicidad de acciones biológicas (pleotropía).
donante deben permanecer en la circulación del receptor durante Así, más de una citocina controla las células en cualquier linaje celular,
1 semana. Se debe evitar el uso de concentrado de plaquetas, ya que el y la mayoría de los factores afectan a las células en más de un linaje
procesamiento produce activación plaquetaria y disminuye su función. (Vaidya y Kale, 2015).
La Epo, el GM-CSF y el G-CSF pertenecen a una familia de
Aspectos de la granulocitopoyesis citocinas hematopoyéticas que comparten una estructura y una
función terciarias por la unión a los receptores específicos de la
durante el desarrollo embrionario superficie celular. La unión específica del ligando da como resultado
cambios alostéricos en las moléculas del receptor, que, dependiendo
La hematopoyesis temprana se caracteriza casi exclusivamente por la
del tipo de receptor, provocan la activación de la proteína cinasa,
eritropoyesis, aunque se produce un pequeño número de macrófagos
como con el factor de colonia-estimulante del macrófago (Bourette
en el saco vitelino. Después del comienzo de la circulación en la cuarta
y Rohrschneider, 2000), o una cascada de señalización intracelular
a quinta semanas de la gestación, los macrófagos aparecen en el hígado,
a través de la vía de la cinasa Janus 2, como con la Epo (Kuhrt y
el cerebro y los pulmones. Durante la quinta semana, la hematopoyesis
Wojchowski, 2015).
comienza en el hígado, y las primeras células hematopoyéticas que apa-
Muchas de las citocinas hematopoyéticas fueron descubiertas en
recen son los macrófagos (Kelemen y Janossa, 1980). Se desconoce si
base de sus efectos promotores del crecimiento en las células hematopo-
las células de Kupffer se originan en el saco vitelino y migran al hígado
yéticas o sus funciones inmunitarias específicas. Inicialmente se suponía
o aparecen de novo en el hígado. El espacio de la médula comienza a
que sus efectos eran específicos del sistema hematopoyético. Esta visión
desarrollarse alrededor de la octava semana después de la concepción,
fue incompleta. Los receptores funcionales se expresan por otras células
y, como ocurre en el hígado, las primeras células hematopoyéticas que
no hematopoyéticas, con funciones claras no hematopoyéticas revisadas
aparecen en los huesos son los fagocitos (Kelemen y Janossa, 1980;
por Li et al. (2015) y Juul y Pet (2015). Por ejemplo, tanto las células
Slayton et al., 1998b). Estos osteoclastos fagocíticos parecen sacar el
de la glía como las neuronas producen muchas de las citocinas que
núcleo del espacio de la médula. Cuando la hematopoyesis se establece
se creía que estaban restringidas al sistema hematopoyético. Además,
en la médula en las semanas 10-11 después de la concepción, sobre
expresan receptores para estos péptidos, lo que demuestra la interacción
todo se producen los neutrófilos, en contraste con el hígado, donde
paracrina y autocrina. La Epo y los G-CSF están disponibles en forma
predominan los macrófagos (Slayton et al., 1998a, 1998b).
recombinante, y están aprobados por la Food and Drug Administration
El timo aparece alrededor de las 8 semanas después de la con-
estadounidense para su uso clínico.
cepción. Se piensa que los progenitores de los linfocitos T migran
del hígado fetal al timo a la 8-9 semanas después de la concepción
(Haynes et al., 1989), y, en la décima semana, las células linfoides Agradecimientos
constituyen el 95% de este órgano, con precursores de granulocitos y
Este trabajo fue financiado en parte por una beca R01HD052820
macrófagos que componen el resto. Los precursores de los linfocitos B
del Eunice Kennedy Shriver National Institute of Child Health and
aparecen primero en el epiplón y en el hígado fetal en la semana 8
Human Development.
después de la concepción. La producción de los linfocitos B en el epi-
plón ocurre de forma transitoria a partir de las 8-12 semanas (Solvason
y Kearney, 1992), mientras que la producción continúa en el hígado Lecturas recomendadas
fetal. Los linfocitos T reguladores se encuentran en el timo y los órga-
nos linfáticos secundarios en el inicio del segundo trimestre, y se ha Ciau-Uitz A, Monteiro R, Kirmizitas A, Patient R. Developmental hemato-
propuesto que participan en la autorreactividad y en la tolerancia poiesis: ontogeny, genetic programming and conservation. Exp Hematol
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Los factores de crecimiento hematopoyéticos se pueden clasificar en dos
grupos: los responsables de la regulación del crecimiento y la diferen- La bibliografía completa utilizada en este capítulo puede consultarse online
ciación mieloide y eritroide, llamados factores estimulantes de colonias, en www.expertconsult.com

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CAPÍTULO 78 Hematología del desarrollo embrionario 1120.e1

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CAPÍTULO 78 Hematología del desarrollo embrionario 1120.e3

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1120.e4 PA RT E XV Sistema hematológico y trastornos del metabolismo de la bilirrubina

Palabras clave
Célula madre
Progenitor hematopoyético
Factores de crecimiento hematopoyéticos
Eritropoyetina
Transfusión
Bilirrubina

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79
Enfermedades neonatales hemorrágicas
y trombóticas
MATTHEW A. SAXONHOUSE

PUNTOS CLAVE Sistema hemostático neonatal


• Los trastornos de la coagulación adquiridos o hereditarios deben La lesión del vaso sanguíneo causada por el endotelio dañado conduce
ser considerados en cualquier neonato que sufra una hemorragia al sangrado. Si este sangrado no se reduce, ocurrirá una hemorragia
importante. patológica. La hemostasia se refiere al proceso en el cual el sangrado
• El tratamiento para trastornos específicos de la coagulación debe se controla en el lugar del endotelio dañado (Roberts et al., 2006). El
proporcionarse en las consultas de hematología pediátrica y basarse proceso de hemostasia implica la interacción entre endotelio, subendo­
en las pautas más actuales. telio, plaquetas, células circulantes y proteínas plasmáticas. La lesión de
• La tromboembolia (TE) es un problema importante que afecta tanto los vasos sanguíneos conduce a una respuesta inmediata y local de los
a los neonatos a término como a los prematuros. componentes plasmáticos y celulares. La trombosis se confina al área de
• Los episodios de TE importantes que experimentan la mayoría lesión y lleva a la reparación eventual del tejido. Un modelo de hemos­
de los neonatos han sido provocados por factores de riesgo adquiridos tasia que combina las fases vasculares, plaquetas y factores plasmáticos
y/o un trastorno protrombótico.
se presenta en el vídeo 79.1 (los vídeos de este capítulo están disponibles
• Las pruebas de imagen adecuadas son esenciales para identificar
en www.expertconsult.com). El resultado final es una trombosis fir­
con precisión los episodios de TE neonatales.
• El uso de catéteres venosos/arteriales centrales aumenta
me y localizada que lleva a la cesación del sangrado. La trombosis
significativamente el riesgo de trombosis de un neonato. entonces sirve como un «andamio» para la reparación del tejido y lleva
• Las recomendaciones para el tratamiento de los episodios de TE a la restauración completa del revestimiento endotelial (Young, 2015).
neonatales se basan en opiniones de expertos y los datos publicados La fibrinólisis, como se muestra en el vídeo 79.2, debe ocurrir para la
de casos/series. reparación del vaso sanguíneo y el retorno del flujo de sangre.
• El cuidado de los neonatos con trastornos de la coagulación Los procesos hemostáticos están regulados por anticoagulantes natu­
o episodios de TE significativos debe llevarse a cabo en un centro rales (vídeo 79.3), cuyo trabajo consiste en contener estos procesos en
de referencia terciaria que tenga el apoyo apropiado de las distintas el lugar de la lesión y evitar que estas reacciones se vuelvan sistémicas y
subespecialidades. patológicas (Young, 2015). Las deficiencias en las proteínas naturales de
la anticoagulación pueden llevar a la formación de trombosis patológicas
durante el período neonatal, y estos trastornos se describen más adelante.
La compleja interacción de los componentes hemostáticos, fibrinolíticos
y anticoagulantes del sistema hemostático da lugar a una maquinaria bien
calibrada que permite que la hemostasia ocurra en el sitio de la lesión y que

L
as hemorragias neonatales y las enfermedades trombóticas pue­ la fibrinólisis siga, facilitando un proceso de reparación local del tejido.
den presentar un desafío diagnóstico para el médico. El exceso
y/o las deficiencias de ciertas proteínas de la coagulación/anticoa­
gulación, junto con factores de riesgo adquiridos y/o protrombóticos
Hemostasia durante el desarrollo
múltiples y/o trombocitopenia, pueden dar lugar a una emergencia El sistema hemostático neonatal difiere significativamente del de los
hemorrágica o tromboembólica (TE). El diagnóstico preciso de una niños mayores y los adultos (Will, 2015). Las concentraciones de las pro­
enfermedad hemorrágica congénita puede evitar potencialmente teínas procoagulantes, anticoagulantes y fibrinolíticas, comparadas con
secuelas significativas a largo plazo, pero la falta de ensayos clínicos los adul­tos, se muestran en la tabla 79.1. Esencialmente todas las proteínas
aleatorizados sobre el tratamiento de las trombosis neonatales hace que procoagulantes, a excepción del fibrinógeno, los factores V y VIII, y el
el neonatólogo deba conjeturar cuál será el mejor enfoque terapéutico. factor de von Willebrand (FvW), son más bajos. Estos niveles inferiores
En este capítulo, primero repasaremos el sistema hemostático neonatal. son equilibrados por niveles más bajos de proteínas anticoagulantes, a
Las enfermedades hemorrágicas neonatales se describen con una dis­ excepción de la α2-macroglobulina, que es la única proteína anticoa­
cusión de las opciones actuales del tratamiento. Revisaremos los factores gulante que se eleva durante el período neonatal. Todas las proteínas
de riesgo congénitos y adquiridos, y las localizaciones más comunes fibrinolíticas están disminuidas. Estas diferencias colocan al recién nacido
para las trombosis neonatales. Finalmente, se describen los protocolos en un estado protrombótico «relativo», pero otros factores equilibran el sis­
de evaluación sugeridos para neonatos con emergencias TE, así como tema y evitan que un neonato a término o un neonato prematuro «bueno»
las opciones actuales de tratamiento. experimenten trombosis espontánea. Sin embargo, muchos factores

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1122 PA RT E XV Sistema hematológico y trastornos del metabolismo de la bilirrubina

TABLA  Niveles neonatales de proteínas TABLA  Criterios diagnósticos analíticos en el recién


79.1 de coagulación/anticoagulación/fibrinólisis 79.3 nacido con hemorragiaa
en comparación con los niveles adultos
Enfermedad TP TTPa Plaquetas Fibrinógeno
Niveles de proteínas Hemofilia A Normal ↑↑↑ Normales Normal
Niveles de proteínas disminuidos
elevados comparados comparados con Hemofilia B Normal ↑↑↑ Normales Normal
con los valores adultos los valores adultos Hemofilia C Normal ↑↑ Normales Normal
Procoagulantes Fibrinógeno Factores II, VII, IX, X, XI,
Deficiencia Normal Normal Normales Normal
Factor Va XII, XIIIb
de factor XIII
Factor VIII Precalicreína
FvW Cininógenos de alto Deficiencia de ↑↑ ↑↑ Normales Normal
peso molecular factores II, V y X
Anticoagulantes α2-macroglobulina Antitrombina III Enfermedad ↑↑↑ Normal/↑b Normales Normal
Cofactor II de la hemorrágica
heparina del recién
Proteína C nacido
Proteína S
CIDc ↑↑↑ ↑↑↑ Bajas Bajo
Fibrinolíticas Activador del Plasminógeno
plasminógeno tisular α2-antiplasmina Hepatopatíac ↑↑↑ ↑↑↑ Bajas Bajo
Inhibidor del activador
EvW Normal Normal/↑ Normales Normal
del plasminógeno
Hipofibrinogenemia ↑↑↑ ↑↑↑ Normales Bajo
a
Los niveles de factor V son bajos el primer día de vida, pero alcanzan valores de adultos días
después del nacimiento (Will, 2015). Disfibrinogenemia ↑↑↑ ↑↑↑ Normales Normal/bajo
b
Los niveles son el 50% de los valores adultos (Will, 2015).
FvW, factor de von Willebrand. a
En cualquier recién nacido con hemorragia debe realizarse un hemograma completo y
Adaptado de Manco-Johnson M. Controversies in neonatal thrombotic disorders. In: Ohls RY pruebas de coagulación.
ed. Hematology, Immunology and Infectious Disease: Neonatology Questions and Controversies. b
Los valores de TTPa pueden estar prolongados, pero no tanto como la elevación del TP.
Philadelphia, PA: Saunders Elsevier; 2008, 59; con autorización. c
Para distinguir entre la CID y la hepatopatía deben solicitarse una determinación del factor
VIII. Los valores del factor VIII serán normales en recién nacidos con hepatopatía, pero bajos
en recién nacidos con CID.
CID, coagulación intravascular diseminada; EvW, enfermedad de von Willebrand; TP, tiempo
de protrombina; TTPa, tiempo de tromboplastina parcial activado.
Datos tomados de las siguientes referencias: Campbell y Bolton-Maggs, 2015; Young, 2015;
TABLA  Factores de riesgo adquiridos para el desarrollo Jaffray et al., 2016.
79.2 de trombosis neonatal
Factores de riesgo Factores de riesgo Factores de riesgo
de la madre del parto del neonato adquiridos (tabla 79.2) y/o protrombóticos pueden alterar este equilibrio,
Infertilidad Cesárea urgente Catéteres centrales haciendo que el recién nacido entre en un estado protrombótico.
Oligohidramnios Anomalías de venosos/arteriales* Las razones exactas de las diferencias en el sistema hemostático fetal y
Enfermedades la frecuencia Cardiopatía congénita neonatal, comparadas con adultos, son confusas, pero apoyadas por teo­
protrombóticas cardíaca fetal Sepsis rías recientes. Los niveles inferiores de antitrombina III (ATIII) se equili­
Preeclampsia Instrumentación Meningitis bran por concentraciones elevadas de α2-macroglobulina, lo que permite
Diabetes Líquido amniótico Asfixia al nacer la angiogenia sin restricción durante el crecimiento intenso mientras se
Restricción meconial Síndrome de dificultad mantiene una vía eficaz anticoagulante (Monagle et al., 2006; Monagle
del crecimiento respiratoria y Massicotte, 2011). Los niveles inferiores de vitamina K durante el
intrauterino Deshidratación crecimiento fetal pueden reducir la síntesis de la osteocalcina, evitando
Corioamnionitis Síndrome nefrítico/ la maduración prematura del cartílago fetal (Booth, 1997).
Rotura prolongada nefrótico congénito A pesar de tener un sistema hemostático equilibrado en el nacimien­
de membranas Enterocolitis necrosante to, el tiempo de protrombina (TP) neonatal y el tiempo de tromboplas­
Enfermedades Policitemia tina parcial activado (TTPa) están elevados cuando se comparan con
autoinmunitarias Hipertensión pulmonar los adultos. El factor tisular (TF) elevado en neonatos compensa los
Cirugía niveles inferiores del inhibidor de la vía del factor tisular (TFPI) y el
Oxigenación ATIII. Algunos parámetros de la agregación plaquetaria disminuida en
con membrana recién nacidos se compensan con niveles más altos de FvW y del factor
extracorpórea
VIII (FVIII). Por lo tanto, a pesar de los niveles más bajos de proteínas
Medicamentos
de coagulación, los neonatos son capaces de formar trombosis efectivas.
(esteroides)
El sistema hemostático neonatal sufre numerosos cambios durante
*Factor de riesgo más importante para la trombosis. los primeros 6 meses de vida, y muchos de los niveles más bajos de
Tomado de Saxonhouse MA, Manco-Johnson MJ. The evaluation and management of neonatal
proteína alcanzan valores de adultos durante este período.
coagulation disorders. Semin Perinatol. 2009;33:56; con autorización; y datos tomados
de las siguientes referencias: Nowak-Gottl et al., 1997b, 2003; van Ommen et al., 2001;
Manco-Johnson et al., 2002; Golomb et al., 2004; Kosch et al., 2004; Chalmers, 2005; Lee Enfermedades hemorrágicas en el neonato
et al., 2005; Wu et al., 2005; Alioglu et al., 2006; Kenet y Nowak-Gottl, 2006; Beardsley, 2007;
Boffa y Lachassinne, 2007; Lau et al., 2007; Raju et al., 2007; Wasay et al., 2008. Cuando un neonatólogo se enfrenta con un recién nacido que sangra
activamente o uno que ha sufrido una hemorragia significativa, debe

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CAPÍTULO 79 Enfermedades neonatales hemorrágicas y trombóticas 1123

TABLA
79.4  Enfermedades hemorrágicas hereditarias y adquiridas en neonatos

Hereditarias Clasificación Síntomas


Hemofilia A (FVIII) Grave (< 1%) Hemorragia después de la circuncisión y/o tras extracciones sanguíneas,
Hemofilia B (FIX) Moderada (1-5%) HIC, hemorragia extracraneal, hematomas excesivos, hematomas
Leve (> 40%) musculares, hemorragia después de la cirugía
Deficiencia Hipofibrinogenemia: niveles disminuidos (heterocigóticos) Sangrado prolongado del muñón umbilical, hemorragia después
de fibrinógeno Afibrinogenemia: niveles ausentes (homocigóticos) de la circuncisión, HIC o hemorragias mucocutáneas
Disfibrinogenemia disfuncional
Factor II Hemorragias mucocutáneas, HIC, sangrado prolongado del muñón
(protrombina) umbilical, hemorragias después de intervenciones
Factor V Asociado habitualmente a anomalías congénitas,
sobre todo cardíacas
Factor VII Los niveles no se asocian al fenotipo hemorrágico
Factor X
Factor XI Los niveles no se asocian al fenotipo hemorrágico
Factor XIII Sangrado prolongado del muñón umbilical, HIC, hemorragias después
de intervenciones
Adquiridas Clasificación Síntomas
CID Sangrado prolongado después de la punción venosa del talón, ictericia,
Hepatopatía hemorragia pulmonar
Deficiencia Precoz < 24 h Hematoma cefálico, sangrado por el muñón del cordón umbilical, HIC
de vitamina K Clásica 1-7 días Hemorragia digestiva, sangrado por el muñón del cordón umbilical,
hemorragias mucocutáneas, hemorragia después de la circuncisión, HIC
Tardía ≥ 2 semanas HIC, hemorragias mucocutáneas, hemorragia digestiva

CID, coagulación intravascular diseminada; FVIII, factor VIII; FIX, factor IX; HIC, hemorragia intracraneal.
Tomado de Saxonhouse MA, Manco-Johnson MJ. The evaluation and management of neonatal coagulation disorders, Semin Perinatol. 2009;33:56; con autorización.
Datos tomados de las siguientes referencias: Campbell y Bolton-Maggs, 2015; Young, 2015; Jaffray et al., 2016.

considerar las enfermedades de la coagulación adquiridas o heredadas, Hemofilia


especialmente si el recién nacido tiene un recuento de plaquetas normal.
En la tabla 79.3 se muestran los criterios diagnósticos analíticos para Las enfermedades congénitas hemorrágicas más frecuentes son
el recién nacido con hemorragia. Las enfermedades de la coagulación la hemofilia A (deficiencia de FVIII) y la hemofilia B (deficien­
hereditarias y adquiridas y los síntomas más comunes asociados a su pre­ cia del factor IX), ambos heredados de forma recesiva ligada al
sentación en el recién nacido se muestran en la tabla 79.4. Es importante sexo. La incidencia de la hemofilia A es de 1 de cada 5.000 va­
obtener un detallado historial familiar y obstétrico de cualquier neonato rones, y la de la hemofilia B es de 1 de cada 20.000 varones (Sou­
que haya experimentado hemorragias significativas, ya que ciertas pistas cie et al., 1998). Aproximadamente un tercio de los casos ocur­
pueden permitir al clínico adoptar el enfoque correcto. rirán en ausencia de antecedentes familiares positivos (Chal­
mers, 2004b). Las mujeres heterocigóticas pueden tener hemofilia
Datos analíticos leve como resultado de la inactivación no aleatoria del cromoso­
ma X (Young, 2015). La gravedad de la hemofilia está determi­
La primera aproximación (cribado inicial) a cualquier recién nacido con nada por el tipo de mutación y la parte de la proteína afectada
una enfermedad hemorrágica sospechosa debe ser un hemograma com­ (Young, 2015). Con la ausencia de FVIII o factor IX, se reduce la
pleto y un estudio de coagulación inicial (TP, TTPa y fibrinógeno). Para formación de trombina en la superficie de las plaquetas activadas,
realizar el diagnóstico correcto se deben realizar pruebas más específicas. lo que provoca una trombosis con una integridad estructural defi­
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.

Es importante que el neonatólogo recuerde que el método de extracción ciente que es más susceptible a la fibrinólisis y, como consecuencia,
de la muestra puede afectar a los resultados: por ejemplo, las muestras de se presenta sangrado. Cuanto menor es el nivel del factor, mayor
la prueba del talón pueden dar lugar a agregar las plaquetas, lo que es el potencial para una hemorragia de inicio precoz más grave.
producirá un recuento de plaquetas falsamente bajo y nunca debe ser Aproximadamente el 70% de los pacientes con hemofilia se diagnos­
utilizado para un cribado de coagulación. Los niveles de hematocrito tican durante el primer mes de vida, con una edad media de los
superiores al 55% pueden dar lugar a tiempos de coagulación diluidos pacientes con hemofilia que tienen su primer sangrado de 28,5 días
prolongados. Además, la recolección de muestras de sangre a través de (Conway y Hilgartner, 1994; Chalmers, 2004b). La presentación
vías arteriales o venosas heparinizadas prolongará el TTPa, a menos que más común de la hemofilia en el neonato es el sangrado excesivo, ya
el tubo tenga la heparina absorbida y/o se elimine la sangre adecuada de sea después de la circuncisión o de una cirugía. Otras clasificaciones
la vía antes de la colección de la muestra para eliminar la heparina de la de la hemofilia A y B, basadas en el nivel de actividad del factor y
vía. Cuando se interpretan los valores de la detección de la coagulación los tipos de sangrado que pueden presentar los neonatos se mues­
y las pruebas de forma más detallada, los valores deben interpretarse tran en la tabla 79.4.
utilizando intervalos normales ajustados por edad basados en la edad La mayoría de los recién nacidos sintomáticos tendrán una
gestacional y los días de vida. Estos han sido publicados por Andrew prolongación significativa de su TTPa; sin embargo, si existe sos­
et al. (1987, 1988b, 1990). pecha diagnóstica, los niveles específicos del factor deben ser siempre

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1124 PA RT E XV Sistema hematológico y trastornos del metabolismo de la bilirrubina

TABLA  Tratamiento de las enfermedades hemorrágicas ser útil para el tratamiento de las hemorragias menores (Young, 2015). El
79.5 congénitas/adquiridas plasma fresco congelado (PFC) se debe utilizar solamente en el contexto
de una hemorragia aguda cuando la prueba confirmatoria no está todavía
Factor Terapia sustitutiva disponible (Chalmers, 2004a; Kulkarni y Lusher, 2001).
Hemofilia A Concentrado de factor VIII
Hemofilia B Concentrado de factor IX
Enfermedad de von Willebrand
Fibrinógeno Concentrado de fibrinógeno El FvW, principal proteína plasmática requerida para la adherencia
PFC o crioprecipitado si los concentrados no están plaquetaria, también tiene un papel en la agregación plaquetaria y
disponibles sirve como el transportador para el FVIII (Yong, 2015). La ausencia, la
reducción o la función anómala del FvW dan como resultado defectos
Factor II Concentrados de complejo de protrombina en la adherencia y la agregación plaquetarias, aumentando el riesgo de
(si están disponibles) sangrado. La efectividad del FvW como proteína adhesiva se basa en
PFC si los concentrados no están disponibles la multimerización de la proteína, lo que da como resultado moléculas
Factor V PFC muy grandes que comprenden lo que se conoce como multímeros de
alto peso molecular (Young, 2015). Los recién nacidos tienen concen­
Factor VII Factor VIIa recombinante o concentrados de complejo traciones más altas de FvW en plasma y una proporción creciente
de protrombina (si están disponibles) de multímeros del FvW de alto peso molecular. Como resultado, la
Factor X Concentrados de complejo de protrombina presentación de la enfermedad de von Willebrand (EvW) durante el
(si están disponibles) período neonatal es rara (Weinstein et al., 1989).
PFC si los concentrados no están disponibles El espectro de la EvW consiste en defectos cuantitativos (tipos 1 y 3)
o defectos cualitativos (tipos 2A, 2B, 2M y 2N). El tipo 1 se debe a las
Factor XI PFC cantidades reducidas de FvW que resultan de la producción/secreción
Factor XIII Derivados de plasma y concentrados de FXIII disminuidas del FvW o de la desaparición progresiva del FvW de la
recombinante (solo para las deleciones circulación (Young, 2015). El tipo 3 es causado por la ausencia com­
de la subunidad A) pleta de FvW y es generalmente el resultado de mutaciones graves de
Crioprecipitados si los concentrados no están disponibles genes; es el tipo más probable durante el período neonatal. El tipo
2A es causado por defectos en la multimerización que dan lugar a
Deficiencia precoz Vitamina K parenteral una ausencia de multímeros grandes y de tamaño mediano, lo que
de vitamina K Concentrados de protrombina para hemorragia activa
afecta a la adherencia plaquetaria (datos de casos publicados en recién
Deficiencia clásica
nacidos). El tipo 2B se debe a una mutación que lleva a un incre­
de vitamina K
Deficiencia tardía
mento de la unión de los multímeros de alto peso molecular a las
de vitamina K plaquetas, desplazándolos del depósito plasmático (datos de casos
publicados en recién nacidos). El tipo 2M se debe a una mutación que
CID* PFC y crioprecipitados, plaquetas da por resultado la incapacidad del FvW de unirse a las plaquetas. El
tipo 2N afecta a la capacidad del FvW de unirse al FVIII y da como
Hepatopatía* Crioprecipitados, PFC, concentrados de complejo
de protrombina, plaquetas, vitamina K, factor VIIa
resultado una reducción de los niveles circulantes de FVIII (Donner
recombinante et al., 1987; Sadler et al., 2006; Branchford y Di Paola, 2012;
Ng et al., 2015).
*Tratamiento para pacientes con hemorragia, no para pruebas analíticas anómalas. Cuando se sospecha EvW en un recién nacido se requiere una
CID, coagulación intravascular diseminada; FXIII, factor XIII; PFC, plasma fresco congelado. prueba especializada. Las pruebas de la coagulación pueden demostrar
Tomado de Saxonhouse MA, Manco-Johnson MJ. The evaluation and management of neonatal un TTPa prolongado aislado y la prolongación de la adrenalina y del
coagulation disorders. Semin Perinatol. 2009;33:56; con autorización. tiempo de la obturación del ADP medido por el PFA-100. Las pruebas
Datos tomados de las siguientes referencias: Campbell y Bolton-Maggs, 2015; Young, 2015;
adicionales evaluarían los niveles de FvW (ensayo del antígeno del
Jaffray et al., 2016.
FvW), función de la unión plaquetaria (análisis del cofactor ristocetina)
y función de la unión al FVIII (actividad del FVIII) (Branchford y Di
Paola, 2012; Ng et al., 2015). La ayuda de un hematólogo pediátrico
determinados. Si hay un historial familiar claro de hemofilia, los es imprescindible si existe sospecha diagnóstica (Young, 2015).
niveles de factor pueden ser examinados a partir de muestras de El tratamiento de la EvW de tipo 3 debe consistir en el reemplazo
sangre del cordón umbilical, pero la gravedad de la enfermedad del factor usando un concentrado de FVIII de pureza intermedia
siempre debe determinarse a partir de las muestras obtenidas des­ que contiene los multímeros de alto peso molecular del FvW (Sadler
pués del nacimiento. et al., 2006; NG et al., 2015). La desmopresina debe reservarse para
Debido a que los niveles de FVIII aumentan durante el período los pacientes con la EvW de tipo 1, pero debe utilizarse solamente
neonatal, el diagnóstico de hemofilia A leve puede ser difícil, y las pruebas después de la consulta con un hematólogo pediátrico (Young, 2015).
confirmatorias deben hacerse a los 6-12 meses de edad. Además, los
niveles inferiores del factor IX al nacer también pueden hacer que el
diagnóstico de la hemofilia B leve sea difícil, y las pruebas también Otras enfermedades de la coagulación
deben repetirse a los 6-12 meses de vida. El tratamiento es el reemplazo hereditarias infrecuentes
del factor específico y debe hacerse en una consulta de hematología
pediátrica, pues hay un número de concentrados del factor que están Hay otras deficiencias de factores infrecuentes, heredadas de forma
disponibles comercialmente para FVIII y la deficiencia del factor IX autosómica recesiva, en entre 1 de cada 500.000 y 1 de cada 2 millones
(tabla 79.5) (Young, 2015). Muchos neonatos no requieren tratamiento de nacidos vivos, lo que representa el 3-5% de todas las enfermedades
durante el período neonatal, ya que pueden no manifestar síntomas de la coagulación (Acharya et al., 2004; Palla et al., 2015). Un listado
hemorrágicos. Los tratamientos adyuvantes para la hemofilia (utilizada completo de las enfermedades y sus síntomas potenciales se muestra
solo en conjunción con la hematología pediátrica), como la desmopre­ en la tabla 79.4. Las deficiencias graves del fibrinógeno, del factor
sina, pueden aumentar los factores a niveles hemostáticos, lo cual puede VII, del factor X y del factor XIII son las más probables (dentro de las

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CAPÍTULO 79 Enfermedades neonatales hemorrágicas y trombóticas 1125

enfermedades de la coagulación infrecuentes) que se pueden presentar TTPa 2-6 h después de la administración de la vitamina K parenteral
durante el período neonatal. La mayoría de estas deficiencias se presen­ confirmaría el diagnóstico. Sin embargo, si un paciente con sospecha
tarán con una anomalía en las pruebas de coagulación (v. tabla 79.3). de HDVK se presenta con una hemorragia grave, debemos instaurar
La prueba adicional para la anomalía específica entonces confirmará tratamiento adicional con concentrados del complejo de protrombina
el diagnóstico (Jaffray et al., 2016). El clínico debe recordar que los (contienen todos los factores dependientes de vitamina K; no dis­
niveles de muchos de estos factores en los recién nacidos son más bajos ponible en todas las instituciones) destinada a la corrección inmediata
para empezar, y, por lo tanto, el diagnóstico puede ser difícil y debe de las deficiencias de dichos factores (Young, 2015).
ser confirmado a los 6-12 meses de vida. El tratamiento de las diversas La práctica común en EE. UU. es proporcionar a todos los bebés
deficiencias se muestra en la tabla 79.5. 1 mg (0,3 mg/kg para recién nacidos < 1.000 g y 0,5 mg para
El factor XIII se compone de dos subunidades y enlaces interconec­ los > 1.000 g, pero < 32 semanas de gestación) de vitamina K i.m. el
tados con la fibrina para estabilizar los coágulos. Los niveles bajos del primer día de vida (Saxonhouse y Manco-Johnson, 2009). Esta dosis
factor XIII no prolongan el TP o el TTPa. Por lo tanto, en cualquier única ha demostrado prevenir la HDVK clásica y tardía, incluso en
recién nacido con sospecha de una enfermedad de la coagulación que recién nacidos con ictericia colestásica (American Academy of Pediatrics
tenga un recuento de plaquetas normal, niveles normales de fibrinó­ Committee on Fetus and Newborn, 2003; McNinch et al., 2007). La
geno, y valores normales de TP y de TTPa, debemos descartar una seguridad de la vitamina K i.m. se ha cuestionado debido a publica­
deficiencia del factor XIII con un análisis cuantitativo. El tratamiento ciones sobre la asociación entre la administración de vitamina K i.m.
se muestra en la tabla 79.5. en recién nacidos y una mayor incidencia de cáncer infantil (Golding
et al., 1990, 1992). Estudios adicionales han concluido que no existe
ninguna asociación entre la vitamina K i.m. y la leucemia infantil u
Enfermedades de la coagulación adquiridas otros cánceres (Ross y Davies, 2000). Datos adicionales han sugerido
un origen prenatal de la leucemia infantil, lo que debilita aún más
Deficiencia de vitamina K la existencia de relación causal entre la vitamina K i.m. y el cáncer
La vitamina K se encuentra en las hortalizas de hoja verde como (Wiemels et al., 1999).
vitamina K1 (fitomenadiona) y se sintetiza como vitamina K2 en las La administración oral apropiada de la vitamina K ha mostrado
bacterias intestinales (Saxonhouse y Manco-Johnson, 2009). Es un tener una eficacia similar a la de la vitamina K administrada de for­
cofactor esencial para el proceso de la γ-carboxilación de los factores ma i.m. en la prevención de la HDVK precoz y clásica (von Kries y
II, VII, IX y X, y de la proteína C y la proteína S (Jaffray et al., 2016). Hanawa, 1993; Puckett y Ofringa, 2000). Sin embargo, los casos de
La colonización bacteriana insuficiente del colon al nacer, la ingesta HDVK tardía comenzaron a aumentar, y los datos de la vigilancia de
dietética inadecuada en recién nacidos amamantados y la mala trans­ cuatro países revelaron fallos de la profilaxis oral entre 1,2 y 1,8 de cada
ferencia a través de la placenta ponen a los neonatos en riesgo de hemo­ 100.000 nacidos vivos (Cornelissen et al., 1997), con índices más altos
rragia por deficiencia de vitamina K (HDVK). Las diferentes formas de 2-4 de cada 100.000 casos cuando la dosificación oral era incom­
y su presentación clínica se muestran en la tabla 79.4. El tratamiento pleta. Los datos más recientes han demostrado que la dosificación oral
se muestra en la tabla 79.5. semanal o diaria de la vitamina K protege a casi todos los bebés de la
La HDVK precoz se debe a la ingesta materna de anticoagulantes HDVK, y la HDVK tardía permanece confinada a los recién nacidos
orales, anticonvulsivos y agentes antituberculosos. Estos agentes cruzan amamantados que no recibieron vitamina K o solo una dosis oral
la placenta e interfieren en el metabolismo de la vitamina K. La HDVK (Hansen et al., 2003; van Hasselt et al., 2008).
clásica ocurre debido a una deficiencia fisiológica de la vitamina K Un estudio más reciente evaluó la asociación de la HDVK en recién
en el nacimiento combinada con una dieta única con leche materna nacidos amamantados con atresia biliar no diagnosticada tratados
o una alimentación inadecuada. La HDVK tardía se presenta en un con dosis oral frente a i.m. de vitamina K (Witt et al., 2016). De los
recién nacido que es amamantado de forma única que recibe una dosis 91 recién nacidos amamantados diagnosticados con atresia biliar, 25
inadecuada de vitamina K (ninguna o una sola dosis oral) o que tiene recibieron una dosis de 2 mg i.m. después del nacimiento en com­
una enfermedad intercurrente asociada que interfiere en la absorción paración con 55 y 11 recién nacidos que recibieron 25 y 150 µg de
o el aporte de vitamina K, como diarrea, fibrosis quística, deficiencia dosificación diaria oral, respectivamente; el 4% de los recién nacidos
de la α1-antitripsina, atresia biliar, hepatitis y enfermedad celíaca. En que recibían dosis i.m. experimentaron una HDVK en comparación
ausencia de profilaxis con vitamina K, la incidencia de la HDVK tardía con el 82% (ambos grupos) de los recién nacidos que recibieron solo
es de 4-10 de cada 100.000 nacimientos (Sutor, 1995). Cuando se dosis orales. Más importante aún, el 0% de los recién nacidos que
proporciona profilaxis intramuscular (i.m.) de vitamina K, la incidencia recibieron la dosis i.m. experimentaron HIC en comparación con el
de HDVK tardía disminuye a 0,24-3,2 de cada 100.000 nacidos vivos 40 y el 27%, respectivamente, en los grupos que recibieron dosis orales
(Schulte et al., 2014). (Witt et al., 2016).
Si se sospecha HDVK, se debe realizar un análisis de coagula­
ción que demostrará generalmente una prolongación aislada del TP, Coagulación intravascular diseminada
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seguida de una prolongación del TTPa. La prolongación del TP a La coagulación intravascular diseminada (CID) es un proceso complejo
menudo es desproporcionada con respecto a la elevación del TTPa. que implica la activación y la desregulación de la coagulación y de los
La concentración de fibrinógeno y los recuentos de plaquetas serán sistemas inflamatorios, que causa la generación masiva de trombina
normales. Además, las concentraciones de los factores II, VII, IX y X con la deposición extendida de fibrina y el consumo de las proteínas de
están disminuidas. Una alternativa es medir los niveles del factor II coagulación y plaquetas, que en última instancia conducen a un daño
de coagulación no carboxilado o anómalo (Clarke y Shearer, 2007). multiorgánico (Chalmers, 2004b). La CID siempre ocurre como un
Este factor se libera en el torrente sanguíneo en las primeras etapas episodio secundario, y muchos problemas perinatales y neonatales se
de la deficiencia de vitamina K, y se puede detectar bien antes de asocian a ella. Estos incluyen asfixia al nacer, síndrome de dificultad res­
que los cambios en el TP se manifiesten. La adopción de esta prue­ piratoria, síndrome de aspiración de meconio, infección, enterocolitis
ba en la práctica clínica puede mejorar el diagnóstico precoz de necrosante, hipotermia, insuficiencia placentaria grave, forma homoci­
HDVK, lo que puede conducir a una disminución de la incidencia gótica de deficiencia de proteína C/S y trombosis (Chalmers, 2004b).
de hemorragia intracraneal (HIC). El diagnóstico de CID se establece en un recién nacido enfermo
Cuando se presenta un paciente con sospecha de HDVK, el tra­ con la ayuda de los parámetros analíticos (v. tabla 79.3). El aspecto más
tamiento parenteral (intravenoso, i.m. o inyección subcutánea) con importante del tratamiento de la CID es tratar el trastorno subyacente.
vitamina K debe administrarse de inmediato. La mejoría del TP y del Sin embargo, una vez que se establece la CID, puede ser difícil de

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controlar (Chalmers, 2004b). El enfoque del tratamiento agudo en el tasa de recurrencia del TE neonatal sigue siendo baja y oscila entre el
recién nacido es apoyar la hemostasia adecuada para reducir el riesgo 3,3 y el 7% (Kurnik et al., 2003).
de hemorragia espontánea. Esto se alcanza generalmente con las trans­
fusiones de plaquetas, PFC o crioprecipitados (Williams et al., 2002).
Otra opción es inhibir la activación del sistema de coagulación con Factores de riesgo para la tromboembolia
heparina. Sin embargo, los ensayos clínicos en neonatos no han neonatal
sido concluyentes, y el riesgo de sangrado puede aumentar (Gobel
Tanto la hipercoagulabilidad como los disturbios del flujo sanguíneo y
et al., 1980; Albisetti et al., 2005).
el daño/disrupción endotelial (tríada de Virchow) pertenecen en cierto
Hepatopatía grado a los recién nacidos admitidos en la UCIN (Young, 2015). Por lo
tanto, es comprensible por qué los neonatos tienen la tasa más alta de
La hepatopatía aguda es infrecuente en la población neonatal. Las episodios TE entre los pacientes pediátricos. Según lo mostrado en la
enfermedades que pueden llevar a la insuficiencia hepática aguda tabla 79.1, los recién nacidos, particularmente los neonatos prematuros,
incluyen la cardiopatía congénita con bajo gasto, la asfixia al nacer, son deficientes en las proteínas anticoagulantes, especialmente proteína
la atresia biliar extrahepática, las metabolopatías congénitas, el sín­ C y proteína S. Las enfermedades protrombóticas pueden también estar
drome hemofagocítico y la hepatitis vírica. Los mecanismos que presentes, exponiendo al recién nacido a un estado de hipercoagulabi­
contribuyen a las anomalías hemostáticas incluyen disminución de lidad. El shock hipovolémico, séptico o cardiógeno puede afectar a un
la síntesis de los factores de coagulación, activación de los sistemas de recién nacido enfermo, y producir hipotensión e interrumpir el flujo de
coagulación y fibrinolíticos, aclaramiento disminuido de los compo­ sangre a los órganos vitales. La policitemia o ciertas lesiones cardíacas
nentes hemostáticos activados, pérdida de proteínas de coagulación también pueden originar un flujo sanguíneo lento y/o hiperviscosidad,
en el líquido ascítico, trombocitopenia, disfunción plaquetaria y aumentando el riesgo de trombosis. Sin embargo, la presencia de CVC
deficiencia de vitamina K (Albisetti et al., 2005). El diagnóstico y catéteres arteriales es, con diferencia, el mayor riesgo adquirido para
de la insuficiencia hepática aguda en el recién nacido incluye la el desarrollo de TE en neonatos (Schmidt y Andrew, 1995; Nowak-
elevación de las enzimas hepáticas, la hiperbilirrubinemia directa, el Gottl et al., 1997b; van Ommen et al., 2001; Greenway et al., 2004;
TP y el TTPa prolongados, la trombocitopenia, las concentraciones Beardsley, 2007). La inserción, la infusión de sustancias hiperosmolares
elevadas del amoníaco, los niveles disminuidos del fibrinógeno y y la cantidad de tiempo que un catéter permanece en su lugar pueden
las concentraciones disminuidas de factores VII y V (v. tabla 79.3). Una dañar el endotelio, aumentando el riesgo de trombosis. Se han evaluado
concentración de FVIII normal, que refleja la síntesis extrahepática, los efectos de los diferentes tipos de materiales del catéter, el diseño
puede ayudar a distinguir la hepatopatía primaria de la CID (Albiset­ del catéter y el número de luces. Los resultados de estas revisiones solo
ti et al., 2005). El tratamiento, además de tratar la causa subyacente han demostrado que se asociaron menos complicaciones trombóticas
de la hepatopatía (si es posible), incluye concentrados de complejo a los catéteres arteriales umbilicales (CAU) del orificio final (Barring­
de protrombina (si está disponible; Young, 2015), crioprecipitados ton, 2000a, 2000b, 2000C, 2000d). En la tabla 79.2 se muestran los
(si el fibrinógeno está bajo), PFC, factor recombinante VIIa (para factores de riesgo implicados en la TE neonatal.
el sangrado que no responde a las plaquetas y productos de plasma),
plaquetas y vitamina K.
Enfermedades protrombóticas: fisiopatología y su papel
en la tromboembolia neonatal
Trombosis neonatal
Una mutación genética que provoca la ausencia completa o la defi­
Epidemiología ciencia grave de un inhibidor de la hemostasia, la producción de un
inhibidor de la hemostasia que tiene una función inadecuada a pesar de
La TE neonatal se está convirtiendo en una entidad cada vez más los niveles normales o una sobreproducción de una proteína procoagu­
reconocida. La incidencia exacta de la TE neonatal varía con los tipos lante o cofactor aumenta enormemente el riesgo de TE en un neonato.
de trombosis reportados y cómo se maneja en los distintos centros. Cuanto más grave es la mutación, mayor es el riesgo de desarrollo de
Cuatro registros han reportado datos sobre la epidemiología de la TE trombosis grave. Enfermedades protrombóticas homocigóticas, como
neonatal: el registro alemán reportó una incidencia de 5,1 episodios la deficiencia grave de proteína C, proteína S o ATIII, se presentan
por cada 100.000 nacidos vivos (Nowak-Gottl et al., 1997b); el registro generalmente en recién nacidos con manifestaciones clínicas graves,
canadiense comunicó 2,4 episodios que se manifiestan clínicamente principalmente púrpura fulminante (Monagle et al., 2004). El debate
(excluyendo el accidente cerebrovascular) por cada 1.000 admisiones que continúa actualmente es cómo la herencia de una mutación pro­
de la unidad de cuidados intensivos neonatales (UCIN) (Schmidt y trombótica heterocigótica aumenta el riesgo de un recién nacido para
Andrew, 1995); el registro holandés publicó 0,07 episodios de trombosis la TE sintomática. A pesar de tener una mutación protrombótica
venosa por cada 10.000 niños (van Ommen et al., 2001), y los informes heterocigótica, un recién nacido puede que nunca experimente un
más recientes del registro italiano reportaron una incidencia de 3,4-6,5 episodio sintomático de TE, lo que demuestra que la herencia de
por cada 10.000 nacidos vivos y 5,8-6,6 por cada 1.000 admisiones en un rasgo protrombótico no garantiza un episodio sintomático de TE.
UCIN para los episodios trombóticos venosos y arteriales sistémicos Otros factores de riesgo adquiridos (v. tabla 79.2) están generalmente
no cerebrales (Saracco et al., 2016). Los cuatro registros observaron presentes. Las enfermedades protrombóticas que se han asociado a TE
que las trombosis ocurrieron tanto en recién nacidos a término como neonatal se muestran en el cuadro 79.1.
prematuros, y el registro italiano reportó una mayor incidencia entre Los registros neonatales han demostrado que más del 80% de
los recién nacidos prematuros. Los registros alemán, canadiense y los neonatos con trombosis sintomática presentan factores de riesgo
holandés reportaron una incidencia de eventos igual en los dos sexos, adquiridos (v. tabla 79.2) (Schmidt y Andrew, 1995; Nowak-Gottl
excepto en la trombosis de la vena renal, que afectó más a neonatos et al., 1997b; van Ommen et al., 2001; Saracco et al., 2016). Por lo
varones (Schmidt y Andrew, 1995; Nowak-Gottl et al., 1997b; van tanto, parece que la combinación de factores adquiridos y la presencia
Ommen et al., 2001); mientras que el registro italiano reportó una de una mutación protrombótica puede representar una «bomba de
mayor incidencia de todos los tipos de trombosis entre los neonatos relojería» para la TE neonatal. Los datos del registro y otros estudios
varones (Saracco et al., 2016). Estos registros también demostraron que de casos han demostrado que la mayoría de los episodios neonatales
la mayoría de las trombosis venosas en recién nacidos se asocian a los sintomáticos de la TE provienen de la asociación de defectos protrom­
catéteres venosos centrales (CVC) (Schmidt y Zipursky, 1984; Nowak- bóticos múltiples o de la combinación de defectos protrombóticos y de
Gottl et al., 1997b; Saracco et al., 2016; van Ommen et al., 2001). La condiciones clínicas o ambientales (Schmidt y Andrew, 1995; Nowak-

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CAPÍTULO 79 Enfermedades neonatales hemorrágicas y trombóticas 1127

• CUADRO 79.1  Enfermedades protrombóticas El anticoagulante lúpico, el anticuerpo anticardiolipina, los anti­
cuerpos de la anti-β2-glucoproteína I y otros anticuerpos maternos
implicadas en el desarrollo antifosfolipídicos pueden desempeñar un papel significativo en las TE
de tromboembolia neonatal neonatales, especialmente apoplejías neonatales. Estos anticuerpos
conducen a trombosis en la placenta o pueden ser transportados a
Mutación del factor V de Leiden (la más común)
Mutación de gen del factor II G20210A (el 1-2% de los caucásicos)
través de la placenta y servir como nidos para la formación de la trom­
Aumento de apolipoproteína(a) bosis (Chalmers, 2005; Manco-Johnson, 2008; Nelson, 2008). Una
Genotipo de la mutación del gen de la metilenotetrahidrofolato reductasa revisión reciente de 16 recién nacidos con una historia de anticuerpos
(MTHFR C677T) antifosfolipídicos maternos y de trombosis perinatal encontró que
Hiperhomocisteinemia 13/16 tenían trombosis arteriales y 8/16 presentaban apoplejía. Por
Deficiencia de proteína C eso, las madres y/o los recién nacidos con acontecimientos arteriales
Deficiencia de proteína S o venosos significativos de TE se deben estudiar para descartar la pre­
Deficiencia de antitrombina III sencia de anticuerpos antifosfolipídicos (Boffa y Lachassinne, 2007).
Deficiencia del cofactor II de la heparina
Disfibrinogenemia Localizaciones de las trombosis neonatales,
Mutación del gen PAI-1 4g/5G
Aumento de los niveles de los factores VIIIC, IX, XI o fibrinógeno
modalidades de las pruebas de imagen
Anticuerpos antifosfolipídicos (incluidos anticuerpos anticardiolipina, para diagnosticarlas y pautas de tratamiento
anticoagulante lúpico) de las trombosis específicas
Cromosoma 2q
Deleción del cromosoma 2q13 Los episodios de TE neonatales pueden ocurrir en distintas localizacio­
Datos tomados de las siguientes referencias: Alioglu et al., 2006; Boffa y Lachassinne, 2007; Buc­ciarelli
nes (tabla 79.6). La mayoría de los episodios sintomáticos generalmente
et al., 1999; Dahlback et al., 1996; Kenet et al., 2010; Nowak-Gottl et al., 1999b, 2003; Rosendaal, 2005; se identifican con las pruebas de imagen apropiadas (v. tabla 79.6). Sin
Saxonhouse y Burchfield, 2009. embargo, un acceso intravenoso difícil, el deseo de limitar la exposición
Adaptado de Saxonhouse MA. Thrombosis in the neonatal intensive care unit. Clin Perinatol. a la radiación, las tasas de filtración glomerulares más bajas y la inac­
2015;42:651–673. cesibilidad para realizar pruebas específicas a la cabecera del paciente
limitan el uso en neonatos de muchas de las técnicas consideradas de
referencia en adultos y niños (Rajagopal et al., 2016). Por lo tanto,
el eco-Doppler es la modalidad más usada y con mayor seguridad.
Gottl et al., 1997a, 1997b, 2001; van Ommen et al., 2001; Khan El pequeño diámetro de algunos vasos, la presión baja del pulso y la
et al., 1991). Por lo tanto, actualmente se recomienda que los pacientes presencia de un CVC en el sitio del trombo pueden limitar la inter­
pediátricos, incluidos los neonatos, con trombosis (independientemen­ pretación de los resultados (Rajagopal et al., 2016).
te de otros factores de riesgo adquiridos) se sometan a pruebas para
identificar rasgos protrombóticos (v. cuadro 79.1) (Manco-Johnson Trombosis arterial
et al., 2002). Más adelante se presenta un enfoque analítico más deta­
llado basado en el tipo de trombosis y los factores de riesgo adquiridos. Accidente cerebrovascular isquémico arterial perinatal
La enfermedad protrombótica más común es la mutación del factor La mayoría de los episodios de TE arterial neonatal se producen por
V de Leiden, que reduce la inactivación del factor V activado por su un accidente cerebrovascular isquémico arterial perinatal (ACVIAP).
regulador, la proteína C activada (Zoller et al., 2014). La presencia de El accidente cerebrovascular perinatal supone una agresión isquémica
la mutación 20210 de la protrombina tiene el potencial de aumentar o hemorrágica y puede ocurrir a partir desde las 20 semanas de la
las concentraciones circulantes de protrombina en un 15-30% (Poort edad gestacional hasta el día 28 días posnatal. Las subcategorías del
et al., 1996; Junker et al., 1999). El papel exacto de las mutaciones en la accidente cerebrovascular perinatal y los síntomas de presentación se
enzima de la metilenotetrahidrofolato reductasa (MTHFR) en el riesgo muestran en la tabla 79.7 (Greenway et al., 2004; Raju et al., 2007;
de TE neonatal sigue siendo confuso (Couto et al., 2004). La mutación Gacio et al., 2015). El accidente cerebrovascular arterial en neonatos se
da lugar a un defecto de la remetilación de la homocisteína en metionina, refiere como ACVIAP en el resto del capítulo (las trombosis del seno
que causa finalmente hiperhomocisteinemia. Se ha especulado que los venoso cerebral se presentan más adelante). El ACVIAP se refiere a una
niveles aumentados de homocisteína constituyen un riesgo creciente para afección con encefalopatía aguda, convulsiones o déficits neurológicos
la enfermedad vascular prematura y para la trombosis arterial (Eldibany que se presentan en el recién nacido a término o prematuro antes del
y Caprini, 2007; Khan et al., 1991). Sin embargo, la mayoría de los 29 día posnatal con pruebas de imagen cerebrales que confirman un
estudios han asociado un mayor riesgo de trombosis debido a niveles infarto parenquimatoso en el territorio arterial concreto (fig. 79.1)
elevados de homocisteína (daño renal) y no a la mutación genética. Así, la (Fernandez-Lopez et al., 2014; Gacio et al., 2015). El ACVIAP es res­
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relación entre la mutación del gen MTHFR y el riesgo de trombosis arte­ ponsable del 22-70% de la parálisis cerebral hemipléjica congénita en
rial neonatal sigue siendo polémica (Rook et al., 2005; Brenner, 2006). neonatos (Lynch y Nelson, 2001; Lynch et al., 2001; Chalmers, 2005),
El sistema de proteína C activada, constituido por proteína C más así como de otras comorbilidades neurológicas, incluyendo enferme­
proteína S y factor V como cofactores, separa e inactiva los elementos dades convulsivas, retraso en el desarrollo del lenguaje y trastornos
V y VIII. Las mutaciones que afectan a la cantidad o la calidad de estas conductuales (Nelson, 2008).
proteínas pueden contribuir a un aumento de la trombosis venosa La incidencia del ACVIAP varía de 20 a 63,4 de cada 100.000
neonatal. La ATIII, cuando está ligada a la heparina sulfato, inhibe la nacidos vivos y depende de si se incluyen o no los episodios diagnostica­
trombina y los factores activados IX, X y XI. Las mutaciones pueden dos después del primer mes de vida (Schulzke et al., 2005; Laugesaar
provocar deficiencias en la producción de ATIII, aumentando el riesgo et al., 2007). La mayoría de las anomalías ocurren en el hemisferio
de trombosis (Schneppenheim y Greiner, 2006). Las elevaciones en la izquierdo dentro de la distribución de la arteria cerebral media, y
lipoproteína(a) (que reduce la capacidad fibrinolítica) se han implicado las lesiones anteriores y posteriores de la arteria cerebral son menos
como factor de riesgo significativo para la trombosis venosa y arterial comunes (Chalmers, 2005; Hunt e Inder, 2006). El origen de la arteria
en los registros alemanes y holandeses; sin embargo, la generalización carótida izquierda de la aorta permite una ruta vascular más directa al
de estos hallazgos a todas las poblaciones sigue estando poco clara cerebro como un pasillo para los émbolos cardíacos. Raramente ocu­
(Nowak-Gottl et al., 1999b, 1999c). rren los infartos cerebrales multifocales, y estos tienden a ser de origen

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TABLA
79.6  Localizaciones de las trombosis en los neonatos y pruebas de imagen indicadas para diagnosticarlas

Tipo de trombosis
Tipo de vaso (Vasos posiblemente implicados) Pruebas de imagen
Arterial Accidente cerebrovascular isquémico arterial perinatal RM de difusión/ARM
(Arteria cerebral media izquierda, arteria cerebral anterior, arteria cerebral posterior)
Yatrógena Eco-Doppler
(Aorta abdominal, arteria radial, arteria renal, arteria mesentérica, arteria poplítea)
Espontánea
(Arteria ilíaca, arteria pulmonar izquierda, arco aórtico, aorta descendente, arteria renal)
Venoso Oclusión vascular yatrógena/espontánea
(VCS, VCI, vena hepática, vena subclavia, venas abdominales, venas periféricas)
Vena renal
Vena porta
Seno venoso cerebral RM de difusión
(Seno sagital superior, senos transversos del sistema venoso superficial, seno recto del sistema venoso profundo) con venografía
Relacionada con cardiopatías congénitas Ecocardiografía
(Aurículas derecha e izquierda, ventrículo derecho, VCS, VCI)

ARM, angiorresonancia magnética; RM, resonancia magnética; VCI, vena cava inferior; VCS, vena cava superior.
Adaptado de Saxonhouse MA. Management of neonatal thrombosis. Clin Perinatol. 2012;39:192–193; con autorización.
Datos tomados de las siguientes referencias: Golomb et al., 2004; Chalmers, 2005; Wasay et al., 2008; Sharathkumar et al., 2009; Elhassan et al., 2010; Nagel et al., 2010; Tridapalli et al., 2010;
Monagle et al., 2012.

TABLA  Subcategorías del accidente cerebrovascular


79.7 perinatal y sus síntomas de presentación

Subcategoría Descripción Síntomas


Accidente Ocurre después del Convulsiones (focales),
cerebrovascular nacimiento, pero antes apnea, movimientos
isquémico arterial del día 29 de vida de masticación o de
neonatal pedaleo, dificultades
Accidente Difícil de establecer persistentes
cerebrovascular si el accidente de alimentación
isquémico arterial cerebrovascular
perinatal ocurre antes, durante
o después del
nacimiento, pero ocurre
desde la semana 20
de gestación
hasta el nacimiento
Sospecha de Síntomas iniciales
accidente sutiles con secuelas
cerebrovascular posteriores
isquémico perinatal
Trombosis Convulsiones, apnea,
de los senos letargo, irritabilidad,
venosos cerebrales mala alimentación, • Figura 79.1  Imagen axial de resonancia magnética de difusión que
del recién nacido nerviosismo, demuestra áreas de alta intensidad de señal en los lóbulos frontales y
trombocitopenia, parietales bilaterales, el lóbulo occipital izquierdo, el tálamo izquierdo y
anemia, cambios el puente de Varolio izquierdo.
en el tono muscular

Datos tomados de las siguientes referencias: deVeber et al., 2001; Golomb et al., 2004; a la trombosis de los vasos sanguíneos placentarios y episodios catas­
Chalmers, 2005; Hunt y Inder, 2006; Raju et al., 2007; Kersbergen et al., 2011; Moharir tróficos súbitos pueden dar lugar a émbolos que se desprenden de la
et al., 2011; van der Aa et al., 2014; Gacio et al., 2015.
circulación placentaria y entran en la circulación fetal, pasando a través
de un agujero oval permeable con predilección por entrar en la arteria
cerebral media izquierda (Elbers et al., 2011).
embólico (fig. 79.2). Muchos factores de riesgo potenciales han sido Las enfermedades protrombóticas (v. cuadro 79.1) juegan un papel
implicados en la etiología del ACVIAP (v. tabla 79.2). en el ACVIAP (Kenet et al., 2010). En un estudio de 91 neonatos
La patología placentaria es el mayor factor de riesgo para el ACVIAP. a término completo con ACVIAP, se identificaron factores de ries­
Alteraciones maternas/fetales que pueden dar lugar a una disminución go protrombóticos, principalmente la lipoproteína(a), en el 68% de
de la reserva placentaria, procesos tromboinflamatorios que conducen estos neonatos en comparación con el 25% en los controles (Gunther

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CAPÍTULO 79 Enfermedades neonatales hemorrágicas y trombóticas 1129

• Figura 79.3  Trombosis arterial con necrosis cutánea.

• Figura 79.2  Angiorresonancia magnética tridimensional (3D) con


proyección de imagen de máxima intensidad (time-of-flight). La imagen
demuestra la oclusión de la arteria carótida interna derecha en su origen
(flecha). Las arterias vertebrales son diminutas (puntas de flecha), y la
arteria basilar no se visualiza.

et al., 2000). Un estudio más reciente de 24 neonatos con ACVIAP


identificó enfermedades protrombóticas (el más común, la deficiencia
de proteína C) en el 28,6% de los neonatos (Mercuri et al., 2001).
También se ha especulado que la presencia de una enfermedad pro­
trombótica en un recién nacido con ACVIAP puede indicar un peor
resultado neurológico (Mercuri et al., 2001).
No existen ensayos clínicos aleatorizados que aborden el tratamiento • Figura 79.4  Trombo aórtico diagnosticado por resonancia magnética.
de los neonatos con ACVIAP. Las pautas actuales del American College
of Chest Physicians recomiendan la anticoagulación para los neonatos en neonatos enfermos admitidos en la UCIN. Aproximadamente el
con ACVIAP si hay una fuente cardioembólica en el momento del 10-64% de los recién nacidos ingresados en una UCIN requieren la
episodio o si hay evidencia de ACVIAP recurrentes. De lo contrario, colocación de un CAU (Saxonhouse, 2015). Los catéteres arteriales
se recomiendan medidas de apoyo (Monagle et al., 2012; van der Aa femorales se utilizan con menos frecuencia, pero se utilizan más común­
et al., 2014). El tratamiento, en caso de necesidad, depende en última mente en neonatos con cardiopatías congénitas o en los que requieren
instancia de la situación clínica aguda y de los riesgos hemorrágicos cirugías amplias. A pesar de su importante papel, los neonatólogos
específicos para ese recién nacido. deben recordar que las complicaciones de los catéteres arteriales ocu­
La resonancia magnética (RM) de difusión es la técnica más sensible rren y van desde la disfunción/infección de la vía hasta la isquemia
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para la detección precoz del ACVIAP (Venkataraman et al., 2004). de extremidades/órganos, como se muestra en las figuras 79.3 y 79.4.
Esta técnica permite la detección de edema cerebral, que es una señal La incidencia de trombosis arterial de CAU basada en informes
temprana de daño isquémico cerebral (Lovblad et al., 2001; Mader de autopsias ha oscilado entre el 9 y el 28% (Richardson al., 2002),
et al., 2002). La angiografía permite la detección de trombosis si hay mientras que la incidencia de trombosis relacionadas con VAP se des­
una historia de partos con instrumentación/difíciles. Aunque la eco­ conoce. Las complicaciones potenciales a corto y largo plazo del CAU
grafía transcraneal (ETC) es el método menos invasivo para diagnos­ incluyen isquemia mesentérica, hipertensión, disfunción/fracaso renal,
ticar el ACVIAP, también es el menos sensible. Un estudio encontró pérdida de la extremidad e insuficiencia cardíaca congestiva (Seibert
que el 75% de los casos de los ACVIAP neonatales se omitieron cuando et al., 1991; Greenberg et al., 1998; Nouri et al., 2007). Se ha encon­
se utilizó ETC (Estan y Hope, 1997). Por lo tanto, el ACVIAP nunca trado que el alto posicionamiento del CAU (T6-T9) tiene menos
debe ser excluido en ningún neonato basándose en el resultado negativo complicaciones clínicas (Barrington, 2000d), mientras que la infusión
de la tomografía computarizada o de la ETC. continua de dosis bajas de heparina a 1 U/ml prolonga la permeabilidad
del catéter, pero no reduce el riesgo de trombosis (Barrington, 2000c).
Trombosis arterial yatrógena/espontánea Los signos clínicos de la trombosis relacionada con VAP incluyen
La monitorización continua de la presión arterial y los gases sanguí­ la isquemia de la extremidad, las extremidades pálidas o frías dis­
neos, CAU y vías arteriales periféricas (VAP) se utilizan con frecuencia talmente al lugar de la canalización, pulso débil o ausente, y la presión

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• Figura 79.5  Trombosis arterial de la arteria digital.

arterial disminuida o no medible (fig. 79.5) (Veldman et al., 2008).


El material del catéter, la duración de la colocación y las soluciones
infundidas influyen en el riesgo de trombosis relacionada con CAU y
la relacionada con VAP.
La sospecha o la confirmación de una trombosis arterial justifican la
retirada inmediata del catéter arterial. Puede ocurrir espasmo vascular,
y simplemente la retirada del catéter puede resolver los síntomas. Si
persisten los síntomas de espasmo, se necesitan más acciones. En la
figura 79.6 se muestra el tratamiento del neonato con espasmo vascular. • Figura 79.6  Tratamiento del vasoespasmo periférico. Recomendacio-
Si se sospecha trombosis, el método más sensible para diagnosticar nes actuales para la evaluación y el tratamiento de los recién nacidos
una trombosis arterial relacionada con el catéter es la angiografía con con vasoespasmo periférico causado por complicaciones de las vías
contraste (Greenway et al., 2004), pero, debido a su riesgo en recién arteriales periféricas y de catéteres arteriales umbilicales. Se proporciona
nacidos, generalmente se reserva para niños mayores y adultos. Por la dosificación de la nitroglicerina. PA, presión arterial.
tanto, se emplea principalmente la ecografía con Doppler.
Las posibles opciones de tratamiento para los neonatos con un
episodio de TE periférica relacionada con el catéter arterial son retirar catéter son las principales causas por las que se desarrollan las trombosis
el catéter con solo medidas de apoyo, anticoagulación después de la (Bhat y Monagle, 2012; Sellitto y Messina, 2012).
retirada del catéter si hay síntomas que no amenazan las extremidades Los neonatos, especialmente los recién nacidos de muy bajo peso al
o trombólisis si hay síntomas que amenazan las extremidades (Monagle nacer (< 1.500 g), habitualmente tienen catéteres venosos umbilicales
et al, 2012). (CVU) colocados durante los primeros días de vida, ya que el acceso
Las opciones de tratamiento para las trombosis relacionadas con el periférico puede ser difícil de asegurar. A pesar de su importancia
catéter arterial femoral se muestran en la tabla 79.8. En las tablas 79.9 clínica, los CVU representan la causa más común para la trombosis
a 79.11 se muestran las pautas de dosificación para la trombólisis y/o en recién nacidos prematuros (Rajagopal et al., 2016). La incidencia
la anticoagulación relacionadas con trombosis aórtica yatrógena o exacta de la trombosis relacionada con los CVU varía, pero informes
idiopática clínicamente significativa. recientes indican que oscila entre un 21 y un 71% (dependiendo de lo
agresivos que sean los centros en el cribado de la trombosis asintomáti­
Trombosis venosa ca), e incluyen trombosis de la vena porta, la vena renal y la vena cava
inferior (Bhat y Monagle, 2012). Estudios de autopsia estiman que el
El mayor riesgo para el desarrollo de trombosis venosa en neonatos 20-65% de los recién nacidos que mueren con un CVU in situ tienen
admitidos en la UCIN es la presencia de un CVC. Los factores de evidencia microscópica de TE (Schmidt y Zipursky, 1984; Kulkarni y
riesgo adicionales (v. tabla 79.2) combinados con la presencia de un Lusher, 2001; Tanke et al., 1994). La trombosis intracardíaca producida
CVC aumentan aún más el riesgo. por la colocación de un CVU se produce entre un 1,8 y un 5,3% (Bhat
y Monagle, 2012).
Trombosis relacionada con catéter (catéteres venosos Los síntomas y los signos clínicos sugestivos de una trombosis rela­
umbilicales y catéteres venosos centrales insertados cionada con CVU incluyen la infección persistente, la trombocitopenia
en vías periféricas) persistente, el mal funcionamiento de la vía y el edema bilateral de las
Los recién nacidos prematuros y enfermos se benefician enormemente extremidades inferiores (fig. 79.7) (Monagle et al., 2012). Los Centers
de los CVC. La infusión de medicamentos vitales y el soporte nutricio­ for Disease Control and Prevention recomendaron que el uso de CVU
nal conducen a mejores resultados, pero existen riesgos de trombosis, se limite a 14 días (O’Grady et al., 2002). Un ensayo aleatorizado que
infección, mal funcionamiento y muerte. Los neonatólogos y el perso­ comparaba el uso a largo plazo de los CVU (hasta 28 días) con el uso
nal de las UCIN deben sopesar el beneficio frente al riesgo por cada día a corto plazo (7-10 días) seguido de la colocación de una vía venosa
que un CVC permanezca en su lugar, y el catéter debe ser retirado tan central periférica demostró que el 4% de los neonatos en el grupo de
pronto como sea posible. El daño a las paredes de los vasos sanguíneos uso a corto plazo comparados con el 7% de los neonatos en el grupo
durante la inserción, el flujo sanguíneo interrumpido, la infusión de a largo plazo desarrollaron trombosis significativas (detectadas por
sustancias que dañan el endotelio y los materiales trombógenos del ecocardiografía). Sin embargo, todos los trombos estaban en la punta

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CAPÍTULO 79 Enfermedades neonatales hemorrágicas y trombóticas 1131

TABLA
79.8  Tratamiento de la trombosis de la arteria femoral

Tratamiento Gravedad de la trombosis Descripción


HNF i.v. (v. tabla 79.9) Trombosis aguda de la arteria femoral, pero sin riesgo El tratamiento debe continuar hasta la resolución del
de amputación de la extremidad coágulo, pero no durante más de 5-7 días. Se puede
cambiar a HBPM (v. tabla 79.10) después de 48-72 h de
tratamiento y continuar hasta la resolución del coágulo
HNF i.v. seguida de rt-TPA Trombosis de la arteria femoral con amenaza de pérdida Comenzar con HNF i.v. (v. tabla 79.9) pero, si los síntomas
si el coágulo no mejora de la extremidad o de daño orgánico no mejoran en 24-48 h, se puede comenzar con rt-TPA
o los síntomas empeoran con HNF (v. tabla 79.11). Si el rt-TPA está contraindicado,
(v. tablas 79.9 y 79.11) se puede necesitar cirugía

HBPM, heparina de bajo peso molecular; HNF, heparina no fraccionada; rt-TPA, activador del plasminógeno tisular recombinante.
Datos tomados de Monagle et al., 2012.

TABLA  Indicaciones clínicas y pautas de dosificación recomendadas para el tratamiento con heparina no fraccionada
79.9 en neonatos

Monitorización adecuada
Indicación clínica Dosis recomendada actualmente (se puede aplicar a todas las pautas de tratamiento)
Trombo sintomático, pero < 28 semanas de EG Mantenga el nivel del antifactor Xa de 0,35-0,7 unidades/ml (TTPa de 60-85 s)
sin amenaza para la vida Dosis de mantenimiento: 15 U/kg/h Verifique el nivel de antifactor Xa 6 h después de iniciar el tratamiento. Si se
o para la extremidad Dosis en bolo*: 25 unidades/kg i.v. proporciona dosis de carga, verifique los niveles 6 h después de la dosis.
durante 10 min Si es necesario, realice cambios en la carga de dosificación. Si necesita
28-37 semanas de EG hacer cambios en las dosis, compruebe los niveles 6 h después de cada
Dosis de mantenimiento: 15 U/kg/h cambio en la velocidad de infusión
Dosis en bolo*: 50 unidades/kg Los niveles de antifactor Xa deben revisarse diariamente durante el tratamiento
durante 10 min El hemograma completo, el recuento plaquetario y el estudio de la
> 37 semanas de EG coagulación (incluidos TTPa, TP y fibrinógeno) deben realizarse antes
Dosis de mantenimiento: 28 U/kg/h de comenzar el tratamiento con HNF
Dosis en bolo*: 100 unidades/kg El recuento de plaquetas debe repetirse diariamente durante 2-3 días una vez
durante 10 min que se logren niveles terapéuticos y después al menos dos veces a la semana
*Las dosis en bolo solo deben utilizarse si existe un riesgo significativo o evidencia de progresión del trombo (Bhatt et al., 2015).
El tratamiento con HNF debe limitarse a 10-14 días.
EG, edad gestacional; HNF, heparina no fraccionada; TP, tiempo de protrombina; TTPa, tiempo de tromboplastina parcial activado.
Adaptado de Armstrong-Wells JL, Manco-Johnson MJ. Neonatal thrombosis. In: de Alarcon P, Werner EJ, Christensen RD eds, Neonatal Hematology. New York, NY: Cambridge University Press; 2013;282;
con autorización.
Datos tomados de las siguientes referencias: Manco-Johnson, 2006; Monagle et al., 2012; Armstrong-Wells, 2013.

TABLA
79.10  Directrices de indicaciones clínicas y dosis recomendadas para el tratamiento con HBPM en neonatos

Otras recomendaciones de Dosis


Situación clínica Dosis tradicional dosis (Armstrong-Wells, 2013) profiláctica Monitorización adecuada
Trombo sintomático, Cualquier EG < 28 semanas de gestación 0,75-1 mg/kg s.c. Objetivo de niveles de anti-FXa:
pero sin amenaza 1,5 mg/kg s.c. cada 12 h 1,25 mg/kg s.c. cada 12 h cada 12 h 0,5-1 U/ml
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.

para la extremidad 28-37 semanas de gestación Verifique el nivel 4 h después


1,5 mg/kg s.c. cada 12 h de la segunda dosis y después
> 37 semanas de gestación a los pocos días o semanalmente
1,625 mg/kg s.c. cada 12 h (Molinari et al., 2014)
Los ajustes de dosis basados en
los niveles de anti-FXA han sido
publicados por Monagle et al., 2012
En recién nacidos con alto perfil
hemorrágico, use dosis de 1 mg/kg
s.c. cada 12 h (Monagle et al., 2012)
EG, edad gestacional; FX, factor X; HBPM, heparina de bajo peso molecular.
Adaptado de Armstrong-Wells JL, Manco-Johnson MJ. Neonatal thrombosis. In: de Alarcon P, Werner EJ, Christensen RD (eds), Neonatal Hematology. New York: Cambridge University Press; 2013;282;
con autorización.
Datos tomados de las siguientes referencias: Streif et al., 2003; Michaels et al., 2004; Obaid et al., 2004; Manco-Johnson, 2006; Malowany et al., 2007, 2008; Monagle et al., 2012.

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1132 PA RT E XV Sistema hematológico y trastornos del metabolismo de la bilirrubina

TABLA
79.11  Directrices de indicaciones clínicas y dosis recomendadas para el tratamiento con rt-TPA en neonatos

Situación clínica Edad gestacional Dosis recomendada Monitorización adecuada


Trombo con < 28 semanas 0,03-0,06 mg/kg/h Se puede considerar un aumento de la dosis hasta 0,24 mg/kg/h,
amenaza vital Infunda HNF a 10 U/kg/h pero debe hacerse lentamente y con monitorización continua
o de pérdida del paciente (v. tabla 79.17)
de la extremidad Puede usarse el mismo esquema Se recomienda suplementación con plasminógeno (PFC, 10 ml/kg)
> 28 semanas
que hasta < 28 semanas, antes de comenzar el tratamiento para asegurar una
o bien 0,1-0,5 mg/kg/h trombólisis adecuada (Monagle et al., 2012)
en 6-12 h con dosis diaria
repetida hasta los 3 días
Infunda HNF a 10 U/kg/h durante
la infusión de rt-TPA
HNF, heparina no fraccionada; PFC, plasma fresco congelado; rt-TPA, activador del plasminógeno tisular de tipo recombinante.
– Si no se produce la disolución del coágulo 12-24 h después de comenzar la infusión y/o los dímeros D no están aumentados, puede añadirse una cantidad adicional de 10 ml de PFC para mejorar la
eficacia del rt-TPA.
– Interrumpa la infusión cuando se disuelva el coágulo (un máximo de 96 h).
– Mantenga los niveles de fibrinógeno por encima de 100 mg/dl (administre crioprecipitados si son inferiores a 100 mg/dl) y el recuento de plaquetas por encima de 50 × 104/µl.
Adaptado de Armstrong-Wells JL, Manco-Johnson MJ. Neonatal thrombosis. In: de Alarcon P, Werner EJ, Christensen RD eds, Neonatal Hematology. New York, NY: Cambridge University Press; 2013;282;
con autorización.
Datos tomados de las siguientes referencias: Wang et al., 2003; Manco-Johnson, 2006.

superior debido a la obstrucción de las venas subclavias distales por


las clavículas. Además, la compresión de las venas en una localización
central por el catéter no es factible debido a la caja torácica del recién
nacido (Albisetti et al., 2005).
Las complicaciones a largo plazo de la TE venosa incluyen la obs­
trucción venosa crónica con circulación colateral cutánea prominente,
el quilotórax, la hipertensión portal y la embolia. La mayoría de los
niños que presentan síndrome postrombótico tienen una historia
anterior de TE venosa neonatal (Barnes et al., 2002).
Hay dos opciones con respecto al tratamiento de las trombosis rela­
cionadas con el CVC. La primera es iniciar la anticoagulación seguida
de la extracción del catéter después de 3-5 días de anticoagulación.
La anticoagulación (la dosificación se proporciona en las tablas 79.9
y 79.10) debe continuar hasta que haya una resolución del trombo,
y el tratamiento puede durar de 2 semanas a 3 meses, dependien­
do del tamaño, la localización y los síntomas del trombo (Monagle
et al., 2012). La segunda opción es proporcionar medidas de apoyo
solo con la extracción inmediata del catéter. El control radiológico
• Figura 79.7  Trombo de la vena femoral profunda. Obsérvese la pierna
debe continuar para evaluar la propagación del coágulo. Si esto ocurre,
hinchada, con el patrón de congestión venosa en la piel.
entonces se debe iniciar la anticoagulación (Monagle et al., 2012).

del CVU, y ninguno de los neonatos requirió tratamiento (Butler-


O’Hara et al., 2006). Trombosis intracardíaca y trombosis en recién nacidos
Para mejorar la nutrición y administrar medicamentos parenterales a con cardiopatía congénita compleja
largo plazo, los catéteres venosos centrales insertados en vías periféricas La colocación de un CVC en la aurícula derecha puede conducir a un
(CVCP) o los CVC colocados quirúrgicamente se colocan rutinaria­ daño del endocardio, induciendo el taponamiento del pericardio y/o el
mente en neonatos prematuros y enfermos, y tienden a dejarse en su desarrollo de trombos intracardíacos. El desarrollo de las vegetaciones
lugar durante semanas hasta que el tratamiento finalice o los recién intracardíacas secundarias a las infecciones de CVC puede exponer
nacidos comiencen con alimentación enteral completa. Las manifes­ a un recién nacido a la infección prolongada y a la diseminación de
taciones clínicas de las trombosis relacionadas con CVCP y CVC émbolos sépticos. La formación del trombo en la aurícula derecha y la
colocados quirúrgicamente incluyen hinchazón/dolor/palidez unilateral vena cava superior se ha asociado a un alto riesgo de la endocarditis,
de la extremidad, el síndrome de la vena cava superior, el quilotórax, a la persistencia de la sepsis, a la obstrucción de la arteria pulmonar, a
el quilopericardio, la trombosis intracardíaca, la sepsis no resuelta, la disfunción ventricular, a la afectación hemodinámica aguda y
la trombocitopenia y la insuficiencia cardíaca (Andrew et al., 2001; a la muerte (Schmidt y Andrew, 1995; Torres-Valdivieso et al., 2003;
Saxonhouse y Burchfield, 2009; Rajagopal et al., 2016). Hermansen y Hermansen, 2005; Ulloa-Ricardez et al., 2015).
El método de referencia para diagnosticar la TE venosa es la veno­ La trombosis es una complicación común reportada en los recién
grafía por RM; sin embargo, esta modalidad es difícil de realizar en nacidos que se operan de la cardiopatía congénita compleja (Cholette
neonatos (Greenway et al., 2004). Por lo tanto, la ecografía es la moda­ et al., 2007). Se sabe menos sobre los neonatos que se encuentran en
lidad más ampliamente utilizada y más segura. Los falsos negativos procedimientos paliativos iniciales para la fisiología del ventrículo
ocurren a menudo al evaluar las trombosis en el sistema venoso central único. Una revisión retrospectiva de recién nacidos sometidos a la

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CAPÍTULO 79 Enfermedades neonatales hemorrágicas y trombóticas 1133

reparación paliativa encontró que en los pacientes que murieron y TABLA


tenían autopsias disponibles, el 33% de las muertes eran atribuibles 79.12  Tratamiento de la trombosis de la vena renal
a la trombosis (Fenton et al., 2003). Una revisión más reciente de
22 neonatos que sufrieron reparación paliativa entre 1 y 11 días de TVR unilateral TVR bilateral
vida encontró evidencia de trombos en cinco recién nacidos (23%) Ausencia de Medidas de apoyo con Medidas de apoyo con
(Cholette et al., 2007). afectación renal monitorización de la monitorización de la
Un estudio reciente de casos y controles realizado en neonatos con o de extensión extensión de la TVR extensión de la TVR
derivación preferente a la UCIN demostró una incidencia de la trombo­ a la vena cava Si se extiende, Si se extiende,
sis intracardíaca de 22,5 casos de cada 1.000 admisiones (Ulloa-Ricar­ inferior anticoagulación de 6 anticoagulación de 6
dez et al., 2015). Muchos de estos recién nacidos estaban críticamente semanas a 3 meses semanas a 3 meses
enfermos y tenían cardiopatía congénita compleja. Los principales
factores de riesgo de este estudio incluyeron la prematuridad, la his­ Extensión a la vena Anticoagulación* Anticoagulación*
toria materna de la diabetes gestacional/diabetes mellitus, la técnica de cava inferior
colocación de un CVC, y la infección por Staphylococcus epidermidis. Fallo renal N/A Inicie terapia trombolítica
Además, casi la cuarta parte de estos recién nacidos murieron a pesar con rt-TPA*, seguido
de recibir tratamiento para la trombosis (Ulloa-Ricardez et al., 015). de anticoagulación
La ecocardiografía es la prueba preferida para diagnosticar la for­
mación auricular derecha del trombo, las vegetaciones intracardíacas o *Para las opciones de dosificación, véanse las tablas 79.9 a 79.11.
la formación del trombo en recién nacidos con fisiología de ventrículo rt-TPA, activador del plasminógeno tisular de tipo recombinante; TVR, trombosis de la vena
renal.
único. Los signos sospechosos de un trombo auricular incluyen soplo
Adaptado de Saxonhouse MA. Management of neonatal thrombosis. Clin Perinatol. 2012;
de nuevo comienzo, sepsis persistente, trombocitopenia persistente e 39:195; con autorización.
insuficiencia cardíaca. El tratamiento quirúrgico para extraer el trombo Datos tomados de las siguientes referencias: Kosch et al., 2004; Marks et al., 2005; Messinger
en los recién nacidos no es factible, especialmente en los recién nacidos et al., 2006; Lau et al., 2007; Monagle et al., 2012.
prematuros. Existen casos publicados donde se ha usado el activador del
plasminógeno tisular recombinante (rt-TPA) para la trombólisis
del trombo auricular relacionado con el catéter en neonatos (Rimens­
berger et al., 2001; Torres-Valdivieso et al., 2003; Wang et al., 2003; renal, hipertensión y muerte (Lau et al., 2007). Un estudio demostró
Tardin et al., 2007). El rt-TPA también se ha utilizado con éxito en el el desarrollo de la hipertensión en el 19 y el 22% de los neonatos con
tratamiento de recién nacidos prematuros con endocarditis infecciosa TVR unilateral y bilateral, respectivamente (Lau et al., 2007). En la
(Marks et al., 2002). tabla 79.12 (Monagle et al., 2012) se muestran las recomendaciones de
tratamiento más recientes basadas en series observacionales y de casos,
Trombosis de la vena renal y en opiniones de expertos. Un análisis más reciente demostró que la
La mayoría de los casos de trombosis de la vena renal (TVR) neonatal anticoagulación y la fibrinólisis parecían prevenir el empeoramiento de
se presentan en recién nacidos prematuros, generalmente durante el la insuficiencia renal en recién nacidos con TVR bilateral. Sin embargo,
primer mes de vida (Bokenkamp et al., 2000; Lau et al., 2007). La la atrofia renal no parecía cambiar cuando se utilizaban medidas de
TVR es la TE venosa espontánea más común en recién nacidos, con apoyo o anticoagulación/fibrinólisis, lo que sugiere que muchos
una incidencia de cerca de 0,5 de cada 1.000 admisiones de las UCIN de estos acontecimientos pueden ocurrir en el útero y ser de naturaleza
(Schmidt y Andrew, 1995). Una revisión de 271 casos neonatales crónica (Bidadi et al., 2016).
demostró que el 70% de los casos eran unilaterales, de los cuales el
64% implicaban el riñón izquierdo, y afectaron a los varones con más Trombosis de la vena porta
frecuencia (Messinger et al., 2006; Lau et al., 2007). Estos hallazgos Los dos factores de riesgo principales para el desarrollo de la trombosis
fueron reproducidos por una revisión más reciente de 10 casos (Bidadi de la vena porta (TVP) en recién nacidos son la sepsis/onfalitis y el uso
et al., 2016). Los signos cardinales sugestivos de TVR son la hematuria de CVU (Williams y Chan, 2011). La mayoría de los casos tienden a
macroscópica, una masa abdominal palpable y la trombocitopenia. El ser clínicamente silenciosos, dificultando el diagnóstico. Las incidencias
estudio más reciente demuestra que esta tríada está presente en el 50% varían (debido a la agresividad para solicitar pruebas de imagen en
de los pacientes (Bidadi et al., 2016). Otros síntomas incluyen oliguria, pacientes asintomáticos) entre el 1 y el 43% (Kim et al., 2001; Williams
proteinuria, insuficiencia renal aguda e hipertensión. Los factores de y Chan, 2011). La ecografía es la modalidad preferida para el diagnós­
riesgo (v. tabla 79.2) se encuentran con frecuencia en los casos tico, y los resultados de la transformación cavernosa de la vena porta
de TVR. El estudio más reciente demostró factores de riesgo hasta en con la esplenomegalia subsecuente y la revocación del flujo porta se
el 90% de los recién nacidos con TVR, con un 50% con al menos tres utilizan para documentar su gravedad (Williams y Chan, 2011).
factores de riesgo: la prematuridad y la asfixia perinatal son los más La resolución espontánea de la TVP asintomática es relativamente
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comunes (Bidadi et al., 2016). Se han encontrado factores de riesgo común, pero la detección de la TVP, incluso en pacientes asintomáticos,
protrombóticos en algunos casos de TVR neonatal, con estudios que autoriza la observación periódica para vigilar los signos de hipertensión
encontraron al menos un factor de riesgo protrombótico en el 17-67% portal. Esta complicación puede manifestarse hasta 10 años después
de los casos (Kosch et al., 2004; Marks et al., 2005; Lau et al., 2007; del período neonatal (Williams y Chan, 2011). Las opciones de tra­
Bidadi et al., 2016). Debido a la asociación potencial de enfermedades tamiento, basadas en datos clínicos limitados, se proporcionan en la
protrombóticas y de TVR, una evaluación de trombofilia hereditaria tabla 79.13 (Williams y Chan, 2011).
es obligada.
El diagnóstico de la TVR se hace generalmente con eco-Doppler. Trombosis del seno venoso cerebral
Los criterios radiográficos para TVR incluyen presencia de un coágulo La trombosis del seno venoso cerebral (TSVC) representa una subca­
ecógeno, distensión venosa secundaria a la presencia de un trombo o tegoría del accidente cerebrovascular perinatal (O’Brien, 2015). Los
ausencia de flujo (Bidadi et al., 2016). síntomas son similares a los del ACVIAP e incluyen convulsiones, apnea,
El tratamiento de la TVR es controvertido, ya que no existen gran­ letargo, irritabilidad, mala alimentación, nerviosismo o cambios en el
des ensayos clínicos aleatorizados que aborden el problema. Sin embar­ tono muscular (de Veber et al., 2001; Wasay et al., 2008). Estos pueden
go, las complicaciones de la TVR son graves e incluyen hemorragia estar acompañados de anemia y/o trombocitopenia. Una revisión reciente
suprarrenal, extensión del coágulo a la vena cava inferior, insuficiencia demostró que el 90% de los niños que presentaron TSVC tenían factores

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