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El Buen Samaritano (Luc 10:25-37)

INTRODUCCIÓN 

1. Una de las parábolas mejor conocidas es la de "El Buen Samaritano" – ver Luc 10:30-37 


   a. Hospitales han sido llamados posteriormente por el nombre de la persona de esta historia (por
ejemplo, Hospital el Buen Samaritano) 
   b. Las leyes del "Buen Samaritano" han sido aprobadas para animar a los transeúntes a ayudar a
aquellos que están en necesidad 

2. Ha sido común aplicar interpretaciones alegóricas a esta parábola; por ejemplo... 


   a. El viajero representa al hombre que ha abandonado la ciudad celestial (Jerusalén) por una
ciudad mundana (Jericó) 
   b. Los ladrones son representativos del diablo y el pecado, los cuales lo abandonaron moribundo
en el pecado 
   c. Los sacerdotes y el levita se refieren a la Ley y sus sacrificios, los cuales son incapaces de
ayudar 
   d. Pero el buen samaritano es Jesús, quien provee la ayuda necesaria 
   e. El vino representa la sangre de Cristo; el aceite, el ungimiento del Espíritu Santo 
   f. El mesón es la iglesia, y el mesonero el representativo de los apóstoles; las dos monedas
representan el bautismo y la Cena del Señor 

3. Tan interesante como tales interpretaciones podría ser... 


   a. ¿Es lo que realmente está enseñando Jesús en esta parábola? 
   b. ¿O tiene Jesús alguna otra lección que Él desea que nosotros recojamos de ella? 

[En este estudio debemos revisar la declaración de la parábola, y entonces ofrecer algunas
lecciones que creo están más de acuerdo con el propósito original de Jesús al enseñarla...] 

I. LA PARÁBOLA Y SU DECLARACIÓN 
   A. LA CONVERSACIÓN ENTRE JESÚS Y UN INTERPRETE DE LA LEY... 
      1. Un intérprete de la ley se levantó para "probar" a Jesús – Luc 10:25 
         a. Un "interprete de la ley" en este contexto debería ser alguien instruido en la ley de Moisés 
         b. La palabra "probar" no tiene que implicar connotaciones negativas; podría simplemente
significar que el hombre estaba buscando cerciorarse de la fidelidad de Jesús hacia la ley 
         c. Pero hay algunas implicaciones de que él estaba buscando burlarse de Jesús... 
            1) Él se "levantó", tal vez para atraer la atención hacia sí mismo 
            2) Más tarde, buscó "justificarse" a si mismo con otra pregunta; implicando que estaba
interesado en algo más que una simple respuesta a esta cuestión 
         d. Esta pregunta fue similar a aquella preguntada por el joven rico (Luc 18:18): "Maestro
bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna?" 
      2. Jesús contestó a la pregunta señalándole hacia la ley – Luc 10:26 
         a. Al hacerlo, Jesús muestra su propia confianza en la ley 
         b. En una forma similar Jesús dirigió al joven rico hacia la ley – Luc 18:20 
         c. Hay que tener en mente que en ese tiempo la ley a un estaba en vigor, así que la respuesta
debía aun ser encontrada en ella – ver Mt 5:17-19 
      3. El intérprete de la ley replicó con un entendimiento apropiado de lo que la ley enseñaba en
relación a la vida eterna – Luc 10:27-28 
         a. Él citó de Deut 6:5 y Lev 19:18 
         b. Ambas cosas que Jesús citó a otro interprete d la ley en una ocasión posterior – ver Mt
22:34-40 
         c. En base a estas dos leyes, una el amar a Dos, y la otra amar a su prójimo... 
            1) Se basaba la totalidad de la ley 
            2) Aquellos que vivían mientras la ley estaba a un en vigor "vivirían" (por ejemplo, serían
salvados) 
      4. Pero el intérprete de la ley no había terminado... – Luc 10:29 
         a. El deseaba "justificarse" a si mismo (¿Fue el avergonzado por Jesús al responderle tan
fácilmente?) 
         b. Él preguntó la cuestión que precipitó la parábola: "¿Y quién es mi prójimo?" 

 B. LA PARÁBOLA MISMA... 


      1. Un hombre viaja de Jerusalén a Jericó, y es herido – Luc 10:30 
         a. Una distancia de alrededor de 20 millas 
         b. Un camino peligroso, conocido como "El Camino de Sangre" a causa de los ladrones 
         c. Despojado de sus ropas y herido por los ladrones, es abandonado medio muerto 
      2. Dos pasaron de largo, sin hacer nada – Luc 10:31-32 
         a. El primero era un sacerdote, el segundo era un levita 
         b. Ambos eran de la elite religiosa de Israel en ese tiempo 
      3. Un samaritano vino y mostró compasión – Luc 10:33-35 
         a. Los samaritanos eran despreciados por los judíos – ver Jn 4:9 
         b. Ellos eran descendientes de aquellos que fueron deportados en el tiempo de la cautividad
de Asiria (ver 2 Rey 17:24-41) 
         c. No obstante este samaritano que podría haber sido despreciado por los judíos mostró
compasión 
            1) Él vendó las heridas, echándoles aceite y vino (los primeros auxilios de aquellos días) 
            2) Colocó al hombre vendado en su propia cabalgadura y lo llevó a un mesón 
            3) Le da dos denarios al mesonero (dos días de salario) para que lo cuidara 
            4) Le dice al mesonero que gaste lo que sea necesario, y él se lo reembolsará cuando
regrese 

 C. LA CONTINUACIÓN DE JESÚS A ESTA PARÁBOLA... 


      1. Él plantea la cuestión: ¿Quién, pues, de estos tres te parece que fue el prójimo del que cayó
en manos de los ladrones? – Luc 10:36 
      2. El intérprete de la ley replica con la respuesta obvia: "El que usó de misericordia con él." 
      3. Jesús entonces amonesta al intérprete de la ley a hacer lo mismo 
      4. Note que Jesús regresó el enfoque de la cuestión original... 
         a. De "¿quién es mi prójimo?" a "¿quién, pues, fue el prójimo del que cayó en manos de los
ladrones?" 
         b. Esto indica que Jesús buscó atraer la atención a lo que significa "amar a tú prójimo como a
ti mismo" 

[El propósito de la parábola, en vista del contexto y de la manera en que Jesús lo aplica, es claro: 

Jesús enseña quien es realmente nuestro prójimo, y lo que significa amar a nuestro prójimo
como a sí mismo. 
Aquí hay algunas lecciones que pueden ser recogidas de la parábola cuando su propósito se
mantiene en la mente...] 

II. LECCIONES DE LA PARÁBOLA 


    A. UN PRÓJIMO ES ALGUIEN EN NECESIDAD AL CUAL PODEMOS AYUDAR... 
      1. Alguien podría pensar que un prójimo es alguien con el cual tenemos afinidades 
         a. Tal como alguien que es de la misma raza, nacionalidad, o religión 
         b. Por ejemplo, cualquiera que no es considerado su enemigo 
      2. No obstante Jesús dejó fuera tal concepto al aplicar al samaritano como un ejemplo 
         a. Los samaritanos eran diferentes a los judíos en raza, nacionalidad y religión 
         b. Había animosidad entre ellos – ver Jn 4:9; Luc 9:52-53 
         c. Aunque considerados enemigos, el samaritano estaba ayudando a un judío en necesidad 
      3. Y así es como los cristianos están para mostrar "hospitalidad"(literalmente, "amor hacia los
desconocidos") – ver Rom 12:13; Mt 5:43-48; Gál 6:10 
 -- Su prójimo, entonces, ¡es alguien en necesidad a quien Usted tiene la capacidad de ayudar! 

    B. LA INCONGRUENCIA DE PERDER LAS BUENAS RELACIONES ENTRE VECINOS DEBIDO A


LA RELIGIÓN... 
      1. De los tres transeúntes de la parábola, los primeros dos deberían haber sido los primeros en
ayudar 
         a. El sacerdote y el levita deberían haber sido influenciados por su religión para ayudar 
         b. Ciertamente ellos habían sido enseñados a amar al extranjero –Lev 19:33-34; Deut 10:17-
19 
      2. Cuando ellos fueron separados de la buena relación con sus vecinos por su religión, llegaron
a ser hipócritas 
         a. Porque el sacerdote enseñaría la ley, y el levita asistiría en el servicio a Dios 
         b. Pero al fallar en "practicar lo que predicaban" mostraron cuán superficial era realmente la
devoción a su fe 
      3. Como cristianos, necesitamos estar seguros de practicar "la religión pura y sin mácula", de
otra manera nos defraudaremos a nosotros mismos – ver Sant 1.22, 26-27 
 -- ¿Qué tipo de religión tenemos? 

    C. EL COSTO DE LA COMPASIÓN... 


       1. Una buena voluntad para traspasar las barreras sociales 
          a. Como lo ilustró Jesús al usar a un samaritano en esta parábola 
          b. ¡No debería haber barreras religiosas, raciales o de nacionalidad para mostrar compasión! 
       2. Una buena voluntad para tomar riesgos 
          a. El samaritano tomó un gran riesgo al detenerse para ayudar 
                            1) ¿Qué si los ladrones estaban a un cerca? 
             2) ¿Qué si otros asaltantes venían por este camino conocido como "El Camino de Sangre"? 
          b. Así son llamados los cristianos a tomar riesgos – ver Luc 6:30 
             1) ¿Cómo sabemos que la gente no tomará ventaja de nuestra generosidad? 
             2) Tal vez esta es un área donde necesitamos tener fe en Dios 
       3. Una buena voluntad para dejar a un lado una agenda ocupada 
          a. El samaritano iba de viaje, pero tomó el tiempo para detenerse y cuidad del hombre 
          b. Jesús nos enseñó a tomar ese tiempo para mostrar compasión aun cuando sea a la fuerza
– Mt 5:41 
             1) La primera milla podría haber sido obligada 
             2) Pero la segunda milla era una que debía ser dada por amor 
       4. Una buena voluntad para hacer sacrificios 
          a. El samaritano sacrificó más que solo el tiempo y la energía 
             1) Él usó algo de sus propias provisiones – Luc 10:34 
             2) Él aun ofreció un acuerdo abierto para al final proveer para que lo auxiliaran – Luc 10:35 
          b. Jesús enseñó a Sus discípulos a estar dispuestos a hacer sacrificios – Luc 6:29-30,34-35 
          c. Al hacerlo, somos verdaderamente seguidores de Dios y caminamos en amor – Ef 5:1-2 

CONCLUSIÓN 

1. Con la parábola de "El Buen Samaritano", somos desafiados a un estándar de amor más alto 
   a. Más alto en que la definición de "prójimo" es más inclusivo 
   b. Más alto en que la definición de "compasión" es más grande. 

2. Esto no debe ser sorprendente a la luz de lo que Jesús dijo a Sus discípulos tiempo antes: 

   "Porque os digo que si vuestra justicia no fuere mayor que la de los escribas y fariseos, no
entraréis en el reino de los cielos." (Mt 5:20) 

3. ¿Cómo es su justicia? ¿Es cómo la del sacerdote y el levita, o como la del samaritano? 


   a. Solo cuando emulamos el ejemplo del buen samaritano, ¡se puede decir que nuestra justicia
excede a la de los escribas y fariseos! 
   b. ¡Solo entonces podemos tener la seguridad de que entraremos al reino de los cielos! 
   c. Entonces prestemos atención a las palabras que Jesús diJo al intérprete de la ley que Lo probó:

"Ve, y haz tú lo mismo."

De hecho, sin la salvación que Jesús hace posible, ningún tipo de justicia es posible... –
ver Hech 2:36-38; 22:16

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