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Cuaderno : Principal
Especialista : Rodrigo Cordova
Escrito : 01
Sumilla : Absuelve
Reconvención.
I. PRETENSION CONTRADICTORIA
1
II. RESPECTO A LA DEMANDA POR RECONVENCIÓN FORMULADA
POR EL DEMANDADO
2
1. 3 Así, por ejemplo, respecto a que las causales de nulidad son taxativas, se
puede citar el Expediente N° 1610-98, de la Sala de Procesos Ejecutivos
de la Corte Superior de Justicia de Lima, la cual establece:
“(…) Que nuestro ordenamiento civil prevé la declaración de nulidad de los
actos jurídicos limitada a los casos expresamente previstos por la ley, es
decir a los indicados literal y limitativamente en el artículo doscientos
diecinueve de nuestro Código Civil que en numerus clausus determina sus
causales (…).”
1
GONZALES BARRÓN, Gunther. Derecho Registral y Notarial Volumen I. 4° ed. Ediciones Legales. Lima,
2015. p. 160
3
lo tanto, ello no implicaría la nulidad que alega el demandante. Además, el
hecho de que un acto jurídico no sea ubicado por el actor en los archivos
registrales, no implica que el mismo no exista en la realidad extraregistral,
bastando solamente la existencia en esta última realidad, máxime cuando
el sistema registral peruano es declarativo mas no constitutivo; por lo tanto,
el supuesto hecho de que el título archivado de referencia no se encuentra,
no genera nulidad alguna del acto jurídico de adjudicación que es materia
de cuestionamiento en el presente proceso, máxime cuando la inscripción
fraudulenta a la que hace referencia el demandante solamente se
fundamenta en una presunción que reposa en su interpretación subjetiva,
lo cual resulta inadmisible, toda vez que la presunción de un acto jurídico
es a favor de su validez y no sobre la nulidad, de conformidad con el
principio de conservación del contrato y a la regulación taxativa de las
causales de nulidad, conforme se corrobora con la jurisprudencia citada.
4
“[Si] bien el acotado artículo 910° del Código Civil dispone que el poseedor
de mala fe está obligado a pagar los frutos percibidos, sin embargo no
puede reputarse como tal al comprador que adquiere un bien litigioso, pues
el propio inciso 2 del artículo 1409° del Código Civil considera como lícita
la adquisición de un bien sujeto a litigio, debiéndose entender por ende que
la consecuencia de ello es que el comprador asume el riesgo de perder la
propiedad, mas no puede reputarse que su adquisición haya sido de mala
fe, por cuanto la sentencia que resuelve sobre la situación del bien litigioso
es posterior a la adquisición del mismo (…)”
5
oportunidad. Conforme se tiene de los actuados, los suscritos adquirimos
el bien mediante acto administrativo constituido por adjudicación por parte
del Ministerio de Agricultura; y, con nuestro derecho inscrito y oponible a
terceros, procedimos a celebrar el negocio jurídico sobre bien física y
jurídicamente posible, mediante Escritura Pública, de fecha 04 de junio de
2015. Estas actuaciones negociales, se encuentran investidas de
oponibilidad que otorgó el registro en su oportunidad, de buena fe, al
tratarse de actos de disposición a título oneroso, y, sin que para ello, haya
existido conocimiento de alguna situación litigiosa que permita establecer
el errado e incongruente criterio de ilicitud con el cual, el actor ha
confundido las instituciones de la nulidad del acto. Para ello, ilicitud, no es
lo mismo que imposibilidad, y en ese orden de ideas, debe tener en cuenta
el Juzgador, que el derecho presuntamente adquirido por el reconviniente
se sostiene en un contrato privado de fecha 22 de agosto de 2011, sobre el
cual no se han formulado oposiciones de derecho, reclamos judiciales o
extrajudiciales, y que en forma surrealista le permiten oponer derechos en
forma sorpresiva sobre los cuales por su propio argumento se debía
mantener posesión productiva para obtener un derecho de propiedad por
parte del Estado, y sin embargo, comparece ante el Juzgado con su
documentos nacional e identidad que permite verificar que consigna como
residencia un domicilio ubicado en el exclusivo distrito de San Isidro en
Lima. Esta circunstancia ultima presupone una grosera y tendenciosa
utilización de las debilidades del sistema para obtener un provecho
indebido sobre propiedad ajena.
6
mismo, hay una confusión entre estas causales de nulidad y las
consecuencias que genera un negocio jurídico celebrado de mala fe, toda
vez que la mala fe no es causal de nulidad; por lo tanto, los efectos que
puede producir una conducta contraria a la buena fe son la pérdida del
derecho, la ineficacia del negocio jurídico o incluso la obligación de
indemnizar, pero en ningún caso la nulidad del acto o negocio jurídico.
7
dicho dispositivo contiene varios enunciados normativos, que están
referidos a la (i) negociación, (ii) celebración) y (iii) ejecución del contrato,
así como a la existencia de (iv) buena fe; y (v) común intención de las
partes. 3. Como se ha señalado en los considerandos precedentes, la
demandante afirmó que se había celebrado un contrato, y ese fue, por
ende, el supuesto que había que examinar, generando consecuencias
distintas, no solo por razones para determinar si se había constituido la
voluntad contractual, sino además por las implicancias en los daños que
pudieran ocasionarse. 4. Así, en el caso de las negociaciones, la doctrina
no es unánime en establecer si se está en un supuesto de responsabilidad
contractual o extracontractual. [...] Octavo. No obstante las dudas
planteadas sobre la naturaleza de los daños ocasionados en las
negociaciones precontractuales, este Tribunal Supremo considera que en
el presente caso se trata de asunto irrelevante, tanto porque ello no fue
materia del debate y los hechos se ciñeron a la existencia del contrato y no
al daño en las negociaciones, como porque siendo que la responsabilidad
civil tiene una matriz única y le corresponden los mismos requisitos, entre
ellos el de antijuricidad, este hecho fue analizado en la sentencia
impugnada, determinándose que no existió consenso respecto a la merced
conductiva y, obviamente, que no existió vulneración a la buena fe y a la
común intención de las partes, lo que descarta, de plano, cualquier tipo de
indemnización, ya sea contractual o extracontractual y la aplicación de las
normas denunciadas.”
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1. 17 Conforme a lo expuesto, el Expediente N° 036-2013-0-1308-JR-CI-03, del
Tercer Juzgado Civil de Huaura de la Corte Superior de Justicia de Huaura
señaló:
“[Se] advierte que el recurrente centra su pretensión el siguiente supuesto:
“(…) 5.7. Finalmente hago notar a Ud. Sr. Juez, que sin mediar proceso
previo alguno, se pretende despojarme de mi propiedad y de la posesión
que vengo ejerciendo (...) pues he tomado conocimiento que terceras
personas que dicen pertenecer a instituciones no inscritas en los Registros
Públicos o entidades símiles, utilizando una serie de artimañas, pretenden
adueñarse de lo que no es suyo. Instituto que me compele a iniciar la
presente acción, aunque tardíamente, pero cuya posesión nunca he dejado
de ejercer”. Sétimo. [Se] puede determinar que si bien la pretensión se
encuentra enmarcada en la una nulidad de acto jurídico; [...] lo que
realmente pretendería el recurrente con la presente acción se
circunscribiría al de ejercer el derecho de propiedad respecto de inmueble
materia de litis-, situación que puede ejercitarlo con la utilización de otros
mecanismos legales, y no mediante el mecanismo de la nulidad. Octavo.
[La] situación antes indicada determina que tanto el petitorio como los
fundamentos de hecho, no se encuentren teniendo una interrelación de
complementación; situación que determina la improcedencia de la presente
demanda.”2
1. 18 Lo mismo sucede con la supuesta mala fe por parte del demandante José
Macedo Sánchez en el acto de transferencia a su favor, toda vez que lo
expuesto al respecto, en el punto 3 de la reconvención, consiste en hechos
que son en específico materia de discusión sobre la prevalencia que
deberá reconocerse a alguno de los títulos que se alegan en el presente
proceso, mas no cuenta con vinculación alguna, a efectos de sancionar
con nulidad alguno de los contratos o actos de transferencia que se
exponen en el proceso de mejor derecho de propiedad. En otras palabras,
los argumentos del reconviniente podrán servir para que la demanda de
mejor derecho de propiedad sea declarada infundada, pero no para que la
transferencia a favor del demandante José Macedo Sánchez sea
declarada nula.
2
POZO SANCHEZ, Julio. Summa Civil. Nomos & Tesis. Lima, 2018. p. 267
9
1. 19 Finalmente, respecto a lo alegado por el demandante de la reconvención,
en el punto 5 del escrito, nuevamente se debe enfatizar que el hecho de
que la suscrita y su cónyuge no hayan estado en posesión del inmueble, el
que no se hayan realizado actividades de explotación agrícola o
económica, con la consecuente pérdida del derecho de propiedad resultan
ser hechos que por mandato legal, sólo pueden ser declarados por la
autoridad administrativa del Programa Especial de Titulación de Tierras, y
como tal, al provenir de un contrato celebrado con el Estado se encuentra
sujetos a las reglas de prescripción de la acción de nulidad, conforme lo
establece el artículo 2001° del Código Civil.
II FUNDAMENTOS DE DERECHO
10
- Artículo 478° del Código Procesal Civil
POR TANTO:
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