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Escuela Naval de Suboficiales

ARC Barranquilla

Historia
Naval

Batalla
naval del
lago de
MaracaiboProfesor: Adolfo Cabrera Manotas
Presentado por: GTE1 Sarmiento Herrera Brayan
GTE1 Rodríguez Girado Jeys
Especialidad: Hidrografía

Agosto 2021
Barranquilla – Atlántico
Para el año de 1823 el imperio español se encontraba agonizando en los
territorios de la gran Colombia, sin embargo, tras la toma de Maracaibo el año
anterior por parte de los realistas, se ponía en riesgo la independencia y la libertad
de la nueva república, el general español Francisco Tomas Morales había
derrotado al Coronel José Sarda, y se disponía a continuar su avance de
reconquista sobre Cúcuta, el general patriota Rafael Urdaneta tan solo podía
contener el avance realista, puesto que ellos contaban con suministros y
provisiones que llegaban desde Maracaibo y España, escoltados por la flota real,
el general francisco de paula Santander, observando la necesidad de controlar los
mares para ganar la guerra en tierra, designo al general de brigada José Padilla,
comandante del tercer departamento de marina de la gran Colombia, para que
liderara la flota naval patriota y terminara de una vez por todas con la hegemonía
real en las aguas de lago Maracaibo, para la heroica misión el general padilla,
contaba con :4 bergantines, 9 goletas, 3 flecheras, 2 lanchas y un bote, así mismo,
con el fin de continuar su ofensiva reconquista, el imperio español designo al
almirante Ángel Laborde y Navarro quien zarpa desde cuba con refuerzos,
teniendo bajo su mando: 4 bergantines, 3 goletas, 3 flecheras, 2 lanchas, 1 bote, 2
pailebotes, 5 faluchos y 7 piraguas, el día 15 de marzo de 1823, el general Padilla
zarpa de Cartagena con dirección hacia los taques, dando inicio de esta manera a
la contienda naval más importante hasta ese año en la gran Colombia.
La flota naval patriota arriba los taques el día 4 de abril, con el fin de cruzar la
barra de Maracaibo, de tal manera que lograra tener acceso directo al corazón del
enemigo, el cual era, la ciudad de Maracaibo, fuente de abastecimiento de los
realistas, el día 8 de mayo, el general Padilla ordena el avance sin detención sobre
la barra, mientras tanto, el ejército español apostado en el castillo San Carlos se
prepara para evitar el cruce de los patriotas, minutos más tarde al divisar en el
horizonte, los españoles observan que la flota patriota se acerca y desde el castillo
se da la orden de fuego a discreción con la artillería.

La flota naval patriota logra el heroico objetivo de cruzar la barra, sin embargo,
durante el forzamiento el bergantín encalla recibiendo 15 impactos de cañón
quedando neutralizado.

El 14 de mayo los patriotas fondean en Punta Palma teniendo contacto con la flota
realista, logrando ponerla en fuga, luego de tres encuentros parciales con la
escuadra española, la flota colombiana se aposto en Moporo con el fin de
abastecerse, el 30 de Mayo en la Ceibita Padilla se encontró con el coronel
Manuel Manrique, comandante de las tropas patriotas con quien coordino el
ataque en tierra, el general Padilla recorre Gibraltar, Corona y Quiriquire,
agregando voluntarios y preparándose para el combate final, el 14 de junio, llega a
los puertos de Altagracia y allí permanece hasta que el día 16 de julio recibe la
noticia de la llegada del Almirante Ángel Laborde con refuerzos españoles, en
poco tiempo, Padilla recibe una nota del almirante Laborde diciendo: “General
José Prudencio Padilla, julio 17 de 1823, participo a vuestra señoría que me hallo
con medios muy sobrados para conseguir su total exterminio, si estos fuesen mis
deseos y mi intención, pero solo ansió ver cesar los males de la guerra y evitar la
efusión de sangre, por lo tanto y ante todas estas cosas propongo a vuestra
señoría una honrosa capitulación, firmado, almirante Ángel Laborde y Navarro”,
sin vacilar y con la frialdad de un verdadero hombre de mar el general Padilla
envía una carta a Laborde respondiendo: “Almirante Ángel Laborde y Navarro, 19
de julio de 1823, aseguro a vuestra señoría que no le daré la molestia de venir a
recibir mi saludo, muy distante de este apostadero, iré por el camino de la gloria a
encontrarlo, firmado, general José Padilla”, el 24 de Julio día de la batalla el
general Padilla, habla con toda su tripulación diciendo: “compañeros, os aseguro
la victoria, porque este es el último esfuerzo de nuestro agonizante enemigo,
nuestro general los acompañara como siempre, hasta perder su existencia,
confiado en vuestro valor y la justicia de nuestra causa colombianos, morir o ser
libres”, a las 10:30 am padilla da sus últimas ordenes de coordinación, y
finalmente a las 2 pm da la orden de combate y ordena el avance, con la brisa a
su favor, los buques republicanos se lanzan velozmente sobre la escuadrilla
española que seguía al ancla en espera del terrible choque para el ataque, el
general Padilla dispuso de dos líneas a los flancos, siendo la derecha la
encargada de evitar la huida.
Hay enormes explosiones
, humo denso, pero en poco tiempo se vislumbra el curso de la batalla, la
tripulación del bergantín San Carlos, el mayor de los buques españoles se lanza al
agua en busca de la costa, como consecuencia del ataque patriota, la mayoría de
unidades enemigas fueron destruidas, otras capturadas y solo dos goletas logran
escapar, el jefe de escuadra Ángel Laborde, abandona apresuradamente la batalla
y se dirige al castillo de San Carlos donde se embarca de nuevo a Cuba, la batalla
de Maracaibo sello definitivamente nuestra independencia, y así el libertador
Simón Bolívar pudo emprender posteriormente las campañas del sur el 24 de julio
de 1823, el general José Padilla y sus valientes hombres abrieron el libro de la
historia para escribir sus nombres en fuegos sobre las aguas del lago Maracaibo.

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