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S
CRISTIA 1.1. LA SANA DOCTRINA BÍBLICA
La sana doctrina exalta a nuestro Señor Jesucristo. Muchos hoy en día se exaltan a sí
mismos buscando la gloria de hombres y no la de Dios, esto es contrario a la sana
doctrina. Lamentablemente hay quienes hacen más énfasis a su marca personal, se
dan publicidad en las redes sociales, per se han olvidado de predicar la sana
doctrina.
“Si esto enseñas a los hermanos, serás buen ministro de Jesucristo, nutrido con las
palabras de la fe y de la buena doctrina que has seguido” (1 Timoteo 4:6). Es
importante que la iglesia del señor sea nutrida con esa buena doctrina para un
crecimiento espiritual conforme a la sana y santa palabra de Dios.
“Si alguno enseña otra cosa, y no se conforma con las sanas palabras de nuestro
Señor Jesucristo, y a la doctrina que es conforme a la piedad, está envanecido, nada
sabe…” (1 Timoteo 6:3). No podemos envanecernos en cosas que no son conforme
a la sana doctrina, se debe predicar y enseñar las sanas palabras de Jesucristo, las
cuales son la Sana Doctrina.
La iglesia debe predicar la sana doctrina, el mensaje del evangelio al mundo. Incluso
somos llamados a contender “…ardientemente por la fe” (Judas 1:3) y combatir por
la fe del evangelio (Filipenses 1:27). Dios. En estos versículos la fe se refiere a la
sana doctrina, la cual hay que predicar sin agregar ni quitar nada a la palabra de
nuestro Dios.
LA SANA DOCTRINA Y SU IMPORTANCIA
1) La sana doctrina es importante porque es clara al decir que nos dará la salvación
a nosotros mismos y a todo aquel que nos oyere y la ponga por obra, por tal
razón debemos tener cuidado, tanto de nosotros mismos, como también de la
doctrina que hemos aprendido y estamos enseñando o predicando (1Timoteo
4:16).
Fe en Dios (Hebreos 11:1) viene del griego pistis (πίστις) cuyo significado es
persuasión, dar crédito, convicción de la veracidad de Dios, seguridad y creer, es
diferente a la expresión “LA FE” pues significa, en otros pasajes bíblicos, aquello
que es creído, la doctrina o enseñanza ( 2 Corintios 13:5; Romanos 1:5; Gálatas
1:23), es decir, La Sana Doctrina.
Podemos recibir muchas cosas por medio de la fe en Dios tales como sanidades,
liberación, bendiciones materiales, etc.; sin embargo eso no quiere decir que
estamos en la doctrina establecida por nuestro señor Jesucristo.
2 Timoteo 4:3 “Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que
teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias
concupiscencias.” SANA DOCTRINA es la enseñanza de la palabra de Dios en
pureza y verdad sin error o tinieblas.
Hebreos 13:8 dice: “Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos”, es decir
que la palabra de Dios no cambia, es eterna e inmutable en su naturaleza; con ella
“TE SALVARÁS A TI MISMO Y A LOS QUE TE OYEREN” (1Timoteo 4:16),
por tal razón, debemos tener cuidado de la doctrina ya que de una sana doctrina
depende nuestra salvación.
1.2. EL HIJO ENTREGANDO EL REINO AL PADRE (Explicación 1 Corintios
15:24-28)
Luego el fin, cuando entregue el reino al Dios y Padre, cuando haya suprimido todo
dominio, toda autoridad y potencia. Porque preciso es que él reine hasta que haya
puesto a todos sus enemigos debajo de sus pies. Y el postrer enemigo que será
destruido es la muerte.
Porque todas las cosas las sujetó debajo de sus pies. Y cuando dice que todas las
cosas han sido sujetadas a él, claramente se exceptúa aquel que sujetó a él todas las
cosas. Pero luego que todas las cosas le estén sujetas, entonces también el Hijo
mismo se sujetará al que le sujetó a él todas las cosas, para que Dios sea todo en
todos. (1. Corintios 15:24-28).
Para entender adecuadamente esa porción de la Escritura que habla sobre Cristo,
nunca debemos apartarnos del misterio de la Piedad o de la Voluntad de Dios, que
nos enseña que desde la eternidad Dios mismo planeó manifestarse en carne para
salvarnos, y que cuando vino Jesucristo, esas profecías fueron cumplidas. Por eso
nunca podremos entender ese texto, si primero no hemos aceptado que JESUS ES
EMANUEL, DIOS CON NOSOTROS (Mateo 1:23), DIOS MISMO VINIENDO Y
SALVANDO (Isaías 35:4) PERO MANIFESTADO EN CARNE COMO UN
HOMBRE VERDADERO (1. Timoteo 3:16, Colosenses 2:9).
Para interpretar cualquier texto bíblico, lo primero que se debe hacer, es identificar
el tema principal de lo que se está hablando, para no desligar el texto de su contexto,
haciendo interpretaciones que nada tienen que ver con lo allí tratado.
El tema principal de 1. Corintios 15, es que Cristo como el varón perfecto y sin
pecado, ha resucitado y ha obtenido poder sobre la muerte para resucitar y glorificar
a los que creen en Él. Así que nuestra seguridad de la resurreción victoriosa (y por
ende de nuestra salvación) ha sido lograda por el Hijo de Dios, que según Efesios
4:13 es también llamado el Varón Perfecto (Nota: El Hijo es el Varón Perfecto, el
Hombre Perfecto; pero nunca es llamado un semidiós o una segunda persona divina,
pues esas son ideas extrañas a la Biblia).
Luego el fin, cuando entregue el reino al Dios y Padre, cuando haya suprimido todo
dominio, toda autoridad y potencia (v. 24)
Cuando Jesús, en su papel de Hijo o de humano perfecto, haya destruído a todos los
enemigos de Dios, vendrá el fin de este siglo (mundo) y empezará el reino eterno
donde morarán los santos.
Porque preciso es que él reine hasta que haya puesto a todos sus enemigos debajo de
sus pies (v. 25)
Note que el Hijo fue una manifestación de Dios, que Él proveyó a nuestro favor para
poder salvarnos. Para el tiempo de la Gracia, Dios está operando salvación por
medio de su obra en el calvario, y por eso en estos postreros días nos ha hablado por
el Hijo (Hebreos 1:1-2).
Aún su obra en el calvario sigue siendo predicada y continúa siendo eficaz para dar
salvación a los hombres. Por eso la manifestación de Dios en carne, está rescatando
a los perdidos hasta que los enemigos de Dios sean desechos.
Dios sometió todo dominio al Hijo de Dios, al Varón Perfecto, hasta que este varón
destruya a todos los enemigos de Dios. Es en esta función de Varón perfecto, que
Dios está derrotando a sus enemigos (a los enemigos de su propósito inicial para con
la humanidad).
Dios no está sometido a Cristo, porque Dios continúa siendo Dios Todopoderoso,
aún sin necesidad de su manifestación en carne como el Cristo.
Sin embargo, Cristo sí está sometido a Dios, porque Cristo es una manifestación que
Dios asumió en un determinado momento y que cumplirá su objetivo primordial
cuando los enemigos que han afectado el propósito de Dios para con el hombre sean
vencidos.
Pero luego que todas las cosas le estén sujetas, entonces también el Hijo mismo se
sujetará al que le sujetó a él todas las cosas, para que Dios sea todo en todos (v.28)
Cuando todo lo que afectó el propósito de Dios para con el hombre esté sometido al
Hijo (el Varón u Hombre Perfecto), entonces el Hijo mismo se sujetará al Padre. La
manifestación como Hijo habrá alcanzado su propósito máximo y la obra de Dios
será consumada por completo, así que el Hijo habrá logrado su propósito trayendo la
gloria sobre los que aceptaron su obra en la cruz, y Dios podrá ser TODO en todos
los que vencieron haciéndolos entrar en el Reino Eterno.
Ya que Jesús dijo que Él está sentado con su Padre en el trono, la respuesta ahora
debe ser evidente. Cuando Cristo, el templo visible del Padre, se sienta sobre el
trono, Dios el Padre también está allí, porque Él vive y reside en el Cuerpo de
Cristo. "El Padre que mora en mí, Él hace las obras" (Juan 14:10).
El Hijo puede ser visto, pero el Padre invisible también está ahí, encarnado en
Cristo. Esto constituye una prueba irrefutable en el libro de Apocalipsis, de que Dios
está en Cristo. El apóstol Juan no dijo: "He visto al Padre, quien es una Persona, y al
Hijo, que es otra persona, sentados en el trono"; Juan habló sólo de uno.
Introducción:
Afortunadamente Dios nos ha provisto de más evidencias sobre Jesús y su papel que
de cualquier otro evento en la historia humana. No necesitamos aceptarlo por una fe
ciega, porque las evidencias sobre este tópico son abundantes. A continuación
examinaremos cinco evidencias que prueban que JESUS es DIOS.
JESUCRISTO ES DIOS POR LAS SIGUIENTES EVIDENCIAS
Tal vez el significado más grande fue que Él aceptó “la adoración” (Lc. 5:8;
Mt. 28:17). El fundamento intensamente monoteísta de los judíos prohibía
en forma absoluta cualquier adoración de cualquiera que no fuera el Dios
único y verdadero (Ap. 19:10; 22:8,9; Hch. 10:25,26).
Una de las cosas que debemos prestar mucho cuidado son los escritos
apostólicos, porque la Biblia nos ordena que nuestra fe debe estar edificada
sobre “el fundamento de los apóstoles (Nuevo Testamento) y profetas
Antiguo Testamento)…” (Ef. 2:20), Ellos fueron los recipientes de la
revelación divina y los expositores del plan de salvación.
3. De acuerdo a Romanos 9:5 Cristo es Dios sobre todas las cosas. Si Pablo
no hubiera estado seguro de lo que escribía, jamás hubiera escrito tal
cosa, pues recordemos que él era un hebreo de hebreos y un fariseos (Fil.
3:5) un hombre apegado a los normas más estrictas del judaísmo y por lo
tanto un hombre cien por ciento monoteísta.
1. Juan 4:17,18 y Mateo 17:27 nos muestra que Jesús como Dios tiene el
atributo de Omnisciencia.
2. Mateo 18:20 y Juan 3:13 nos muestra que Jesús como Dios tiene el
atributo de Omnipresencia.
3. Mateo 14:25 y Juan 6:10,11 nos enseñan que Jesús como Dios tiene el
atributo de Omnipotencia. En Mateo 28:19 Jesús dijo: “Toda potestad me
es dada en los cielo y en la tierra”, en otras palabras Él es Todopoderoso.
Compare Mateo 14:25 con Job 9:8 y comprobará que Jesús y Jehová son
el mismo.
4. Hebreos 13:8 nos dice que Jesús es Inmutable otro de los atributos
absolutos de Dios. Dios es el único que no cambia.
Conclusión:
Las declaraciones y afirmaciones que la Biblia hace respecto a Jesús, son pruebas
indubitables de que Jesucristo es Dios. Las pruebas que las Escrituras presentas son
inagotables. Reconozcamos que solamente hay un solo Dios verdadero, el cual es
Jesucristo.
Salmo 55:22 "Echa sobre Jehová tu carga, y él te sustentará; no dejará para siempre
caído al justo"
Josué 1:9 "Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni
desmayes; porque Jehová tu Dios estará contigo en donde quiera que vayas"
Todos tenemos días tristes, son días terribles en los que te sientes un desastre,
malhumorado, solo y absolutamente exhausto. Son días en que te sientes pequeño e
insignificante, en lo que todo parece estar fuera de tu alcance.
Tan solo pensar te parece imposible, te sientes frustrado y ansioso, no estás seguro
de cuánto tiempo más podrás aguantar.
Puede que tengan un fuerte dolor de cabeza o ganas de no estar más, cualquiera que
sea la razón, estás convencido que nadie te quiere.
Recuerda que solo se es joven una vez y no se es viejo dos veces. Deja de huir de
todo lo que te aqueja. Es tiempo de enfrentar la realidad. Ahora, relájate, respira y
camina de la mano con Dios...
"No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te
esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia"
(Isaías 41:10)
"¿Por qué te abates, oh alma mía, y por qué te turbas dentro de mí? Espera en Dios;
porque aún he de alabarle, salvación mía y Dios mío" (Salmo 42:11)
En la China siglos atrás, un herrero vio unas hojas de árbol flotando en un tanque de
agua que tenía en su taller, y por simple curiosidad dejo caer una gota de metal
derretido en el extremo puntiagudo de la hoja. Para sorpresa de él, después de girar
unas cuantas veces, el extremo con la gota de metal se halló apuntando hacia el
norte.
Este simple experimento fue lo que dio origen a la brújula. Mas tarde los científicos
descubrieron que la fuerza magnética de la tierra, hacia que la punta de la hoja con
metal siempre apuntara hacia el norte. Hay una fuerza interna llamada Espíritu
Santo que siempre nos guiará – dice Juan 16:13 – a toda verdad. Esto incluye
nuestro diario vivir el cual está lleno de decisiones.
ESCUCHAR LA VOZ DE DIOS ES ALGO QUE SE APRENDE
Nuestro Dios es un Dios que habla, que se comunica. Una de las maneras como El
se comunica es por medio de su ‘rhema’ – Palabra escrita. Pero además de esto,
Dios siempre tiene una palabra para el momento, para cada situación por la que
estemos atravesando. En el libro de Génesis Dios se manifiesta como un Dios que
habla:
En Apocalipsis leemos: El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las Iglesias.
Exodo 21:1 comienza diciendo: Y habló Dios todas estas palabras… El verso 18
continúa diciendo: Todo el pueblo observaba el estruendo y los relámpagos, y el
sonido de la bocina, y el monte que humeaba; y viéndolo el pueblo, temblaron, y se
pusieron de lejos. Y dijeron a Moisés: Habla tú con nosotros, y nosotros oiremos;
pero no hable Dios con nosotros, para que no muramos.
Cuando usted esté planeando algo, va a tomar una decisión, y no siente reposo en su
espíritu, es tiempo de detenerse y no hacer lo que está pensando hacer. Es Dios
hablando a su espíritu; y cuando es la voluntad de Dios, El va a poner reposo en su
espíritu.
Vivir hoy implica tratar con personas difíciles. Es por eso que Pablo escribió a la
iglesia en la carta a los filipenses; para enseñarles sobre la cultura del mundo en
comparación con la cultura de Cristo, especialmente en el ámbito de las relaciones.
RELACIONES UNIFICADAS
Pablo señaló que si bien cada relación que encontraremos en la vida tendrá
dificultades, debemos vivir en paz con todos los hombres, tal como dice Romanos
12:18: "Si es posible, en cuanto dependa de vosotros, estad en paz con todos los
hombres".
Una causa importante de infelicidad en esta vida son las relaciones tensas. Por lo
tanto, las relaciones fuertes y unificadas son los ingredientes clave para el éxito y la
realización en nuestras vidas naturales y espirituales (Eclesiastés 4: 9–12).
Luchamos por llevarnos bien con los demás porque todos somos diferentes: hay una
gran diversidad. Sin embargo, cuando vivimos para Cristo, estamos llamados a
abandonar nuestros valores, características e ideologías, y adoptar los de Cristo.
¡Debemos determinar qué no es como Cristo en nuestras vidas y deshacernos de
eso! Esto ayudará a nuestras relaciones con otras personas, incluso las difíciles.
5 CAUSAS DE CONFLICTO
Hay 5 enemigos de la unidad que debemos perseguir en nuestro caminar con Cristo.
Nuestro objetivo debe ser superarlos y ver relaciones más fuertes como resultado.
COMPETENCIA DIFUSA
ELIMINAR ENGREIMIENTO
Luchamos con orgullo a menudo en la vida. Pero, en lugar de desear que otros nos
vean, deberíamos querer que otros vean a Jesús dentro de nosotros . Nada debe
hacerse en vanidad o deseo personal (Filipenses 2: 3).nLas Escrituras señalan que el
orgullo debe ser eliminado de nuestras vidas o causará destrucción, pues en
Proverbios 8:13 dice: "El temor de Jehová es aborrecer el mal; la soberbia y
arrogancia, el mal camino" (También leer Proverbios 16:18 ; 29:23).
La causa raíz del orgullo se encuentra en nuestros corazones: Nuestro corazón debe
limpiarse y alinearse con Cristo si queremos vivir en paz con los demás (Marcos 7:
21–22). No somos nada sin Cristo en nuestras vidas, "porque el que se cree ser algo,
no siendo nada, a sí mismo se engaña" (Gálatas 6:3).
DISMINUIR LA CRÍTICA
Las críticas están destinadas a derribar a otros. Las Escrituras nos llaman a
considerar a los demás primero y a levantarlos (Filipenses 2:3). En resumen,
debemos ser humildes. La humildad no es pensar menos en nosotros mismos, sino
dejar de enfocarnos en cualquier parte de nosotros mismos.
DEMOSTRAR CONSIDERACIÓN
¡Las Escrituras nos dicen que carguemos con las cargas de los demás, y no podemos
hacer esto efectivamente si nuestros ojos (alcance) están en nosotros mismos! Si
observamos lo que otros enfrentan, podemos ver dónde Dios quiere que ayudemos y
ministramos. No podemos ser insensibles a las necesidades de otras personas.
"Sobrellevad los unos las cargas de los otros, y cumplid así la ley de Cristo" Gálatas
6:2)
Estamos llamados a desarrollar una vida que sea como Cristo. La mente que estaba
en Jesucristo también debería estar en nosotros (Filipenses 2: 6). Jesús se despojó de
todos los privilegios que se le debían y asumió la apariencia de un siervo.
(Filipenses 2: 7–8). ¡Jesús se negó a exigir cualquier derecho y decidió no declarar a
cada persona equivocada, a pesar de que tenía todo el derecho! Cristo eligió amar y
ser un servidor de todos. Nuestro objetivo debe ser actuar como Jesús en cada
situación y en cada relación.
1.7. TESTIMONIO PERSONAL
Los testimonios crean fe para las personas que nos rodean. No podemos dudar de
que Dios existe y de lo que Él es capaz de hacer cuando escuchamos lo que ha
hecho por otra persona. Los testimonios también alientan: ¡No podemos sentirnos
deprimidos o rechazados sabiendo que Dios realizó lo milagroso! Podemos saber
que si Dios lo hizo por otra persona, Él puede hacerlo por nosotros.
Los testimonios también glorifican a Dios. Si bien podemos alabar al Señor durante
los servicios de la iglesia, esta no es la única forma en que Dios quiere recibir
nuestra alabanza y adoración.
Cuando Israel estaba en el desierto, Dios le dio a Moisés instrucciones para construir
un tabernáculo, un lugar donde su presencia pudiera habitar. De todos los muebles
en el tabernáculo, la presencia de Dios descansaría en el propiciatorio: La tapa /
cubierta del Arca del testimonio (pacto) (Éxodo 25:21).
UN NUEVO TESTIMONIO
"Y ellos le han vencido por medio de la sangre del cordero y de la palabra del
testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte" (Apocalipsis
12:11).
(También te invito a leer: Evangelismo Efectivo)
No podemos guardar silencio sobre lo que Dios ha hecho por nosotros. Necesitamos
tener una "actitud de fe" para expresar lo que Dios ha hecho. "Pero teniendo el
mismo espíritu de fe, conforme a lo que está escrito: Creí, por lo cual hablé,
nosotros también creemos, por lo cual también hablamos" (II Corintios 4:13).
La fe que nos ha ayudado a construir nuestro caminar con Dios necesita ser
vocalizada a los demás. Si compartimos lo que Dios ha hecho, otros escucharán y se
alegrarán (Salmos 34: 2).
Nuestros "buenos" testimonios no son los únicos que ayudarán a otros. Nuestras
experiencias "malas", en las que nos hemos equivocado o que Dios ha tenido que
corregirnos, también son testimonios útiles.
El rey David escribió Salmos 51 después de que cometió adulterio. Quería que otros
supieran que no deben cometer el mismo error que él, sino que también se
iluminaría la gracia y la misericordia de Dios hacia él cuando se arrepintiera.
Por último, tenemos que testificar a nuestros amigos incrédulos. Dios nos dará poder
a través del Espíritu Santo para convertirnos en testigos de Él para todas las
personas y todas las partes del mundo .
"Pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me
seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra"
(Hechos 1: 8).
EL AMOR EN EL MATRIMONIO
Pero, el quid básico de este pasaje de la Escritura es simple: los esposos deben
satisfacer las necesidades de su esposa y las esposas deben satisfacer las necesidades
de su esposo.
Cuando las parejas casadas dejan de satisfacer las necesidades de los demás en el
matrimonio, es cuando entra la discordia. En 1 Corintios 7: 3, la palabra griega
render es apodidómi , que significa entregar, realizar o ceder. Los esposos y las
esposas deben amarse en sus matrimonios. Pero, ¿Qué es el amor verdadero?
Jesús nos dio una definición funcional del amor al dar su vida por nosotros. Se nos
dice que hagamos lo mismo por nuestros hermanos y hermanas en Cristo (I Juan
3:16). El verdadero amor se genera a partir del deseo de garantizar lo mejor para
alguien que no sea nosotros, independientemente de si se satisfacen nuestras propias
necesidades. Debemos amar como Cristo amó a la iglesia (Efesios 5:25).
Dios diseñó el conflicto como parte del matrimonio para ayudar a resolver
problemas en la relación (1 Corintios 7:28). Pero, el conflicto puede llegar a ser mal
percibido si usamos el matrimonio únicamente para fines egoístas. Si permitimos
que una actitud egoísta se filtre en el alcance de nuestras relaciones matrimoniales,
pronto descubriremos que el matrimonio se ha convertido en un ídolo en nuestra
vida.
Nadie puede ser desagradable porque, como éramos pecadores, Cristo murió por
nosotros (Romanos 5: 8). Nuestra relación matrimonial se basa en nuestra relación
con Dios, no en el desempeño de nuestro cónyuge.
Cuando Dios hizo al hombre, lo puso en el Jardín del Edén y le dijo que lo cuidara.
Después, Dios vio que no era bueno para el hombre estar solo, y creó una ayuda
para él (Génesis 2:15, 18). Dios creó a los humanos con brechas, y nuestros
cónyuges ayudan a llenar esas brechas.
Las Escrituras nos dicen que moremos unos con otros sabiamente (1 Pedro 3: 7).
Necesitamos conocer a nuestro cónyuge y tratarlo con comprensión y como socios
iguales en la relación con Cristo.
Mientras buscamos encontrar una pareja en la vida, debemos ser la persona con la
que queremos casarnos. En la autoreflexión, también debemos asegurarnos de que
estamos viviendo una vida correcta que atraiga al mismo tipo de persona que
estamos buscando. Los solteros deben ser hoy con quienes te quieres casar en el
futuro.
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