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Fuente: Anatomía con orientación clínica. K. Moore, A. Dailey, A. Agure.

7ma edición
Anatomía Humana Descriptiva, Topográfica y Funcional. H. Rouviere, A. Delmas. 11 edición

Unidad 1
Tema 2
APARATOS Y SISTEMAS
El cuerpo humano está organizado en aparatos y sistemas, los cuales se integran
funcionalmente para cumplir funciones del organismo. Para comprender esta organización,
es necesario conocer las siguientes definiciones.
Órgano: Es la agrupación de diferentes tejidos que forman una unidad estructural
encargada de cumplir una función en el organismo. Ejemplos: corazón, hígado, pulmones,
huesos, músculos
Sistema: Es un conjunto de órganos que tienen la misma estructura y que realizan una
función determinada. Ejemplos: sistema nervioso, sistema óseo, sistema muscular, sistema
endócrino.
Aparato: Es un conjunto de órganos que tiene diferente estructura y que se agrupan y
coordinan para realizar una función general del organismo. Ejemplos: aparato digestivo,
aparato circulatorio, aparato respiratorio.
El cuerpo humano está formado por tres clases de aparatos: los aparatos de la vida de
relación, los aparatos de la nutrición y el aparato de la reproducción.
APARATOS DE RELACIÓN
Los aparatos de la vida de relación son tres:
1. Aparato de la locomoción
2. Aparato de la inervación
3. Aparato sensorial
1. Aparato de la locomoción
El aparato de la locomoción comprende el esqueleto, las articulaciones y los músculos.

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Esqueleto
El esqueleto o sistema esquelético, conformado por 200 huesos, sin considerar los
huesecillos del oído, los pequeños sesamoideos, ni los wormianos, tiene dos partes que son:
o Esqueleto axial, compuesto por los huesos de la cabeza (cráneo y cara), del cuello
(hueso hioides y vértebras cervicales) y del tronco (vértebras, costillas, esternón y
sacro)
o Esqueleto apendicular, compuesto por los huesos de los miembros superiores,
incluida la cintura escapular, de los miembros inferiores, incluida la cintura pélvica.
El esqueleto está compuesto por cartílagos y huesos.
El cartílago es un de tejido conectivo semirígido que forma las partes del esqueleto donde
se requiere más flexibilidad, por ejemplo, los cartílagos costales que unen las costillas al
esternón, o los cartílagos articulares que recubren las superficies articulares de los huesos
que intervienen en una articulación móvil. La proporción de cartílago y hueso en el
esqueleto cambia a medida que la persona crece; cuanto más joven, más cantidad de
cartílago posee. Los huesos del recién nacido son blandos y flexibles porque están
compuestos principalmente por cartílago.

El hueso es un tejido conectivo duro, que compone la mayor parte del esqueleto.
Los huesos cumplen las siguientes funciones:
o Soporte para el cuerpo; es el principal tejido de sostén del organismo.
o Protección para la estructura vitales, por ejemplo, el corazón, el cerebro
o Base mecánica para el movimiento, puesto que actúan como palancas
o Almacenamiento de sales, por ejemplo, calcio
o Aporte continuo de nuevas células sanguíneas, las cuales son producidas por la
médula ósea, en la cavidad medular de muchos huesos.
Los huesos están cubiertos por un tejido conectivo fibroso llamado periostio. El periostio
cubre como funda toda la superficie ósea, excepto, aquella parte donde hay cartílago
articular. El cartílago articular está cubierto por pericondrio.
Constitución de los huesos
Los huesos están formados por tejido óseo compacto y por tejido óseo esponjoso.
El tejido óseo compacto forma la periferia de los huesos una capa continua.
El tejido óseo esponjoso está incluido dentro del tejido compacto. Está formado por láminas
óseas que limitan aréolas comunicadas entre sí y llenas de médula ósea.

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Clasificación de los huesos


Los huesos se clasifican según su forma y las tres dimensiones del espacio (longitud, ancho
y espesor)
o Huesos largos, son aquellos en los cuales la longitud predomina sobre las otras dos
dimensiones. Están formados por un cuerpo o diáfisis y dos extremidades abultadas
o epífisis. Por ejemplo, el húmero en el brazo.
o Huesos planos, se caracterizan por el predominio de la longitud y del ancho sobre el
espesor. Los huesos planos presentan dos caras y bordes cuyo número varía según
la forma de los huesos. Por ejemplo, el hueso parietal del cráneo
o Huesos cortos, son aquellos en los cuales las tres dimensiones son sensiblemente
iguales. Por ejemplo, los huesos del tarso y del carpo

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Detalles anatómicos de los huesos


Los huesos presentan detalles o elementos anatómicos en la superficie donde se insertan
tendones, ligamentos y fascias, o donde las arterias se hallan adyacentes o pasan a través
de ellos. A continuación, se señalan algunos detalles:
o Capítulo: pequeña cabeza articular redondeada. Por ejemplo, el capítulo del húmero
o Cóndilo: área elipsoidea redondeada. Por ejemplo, los cóndilos de la mandíbula
o Cresta: reborde óseo. Por ejemplo, la cresta iliaca
o Cara o carilla: área plana y lisa, habitualmente cubierta de cartílago, donde un hueso
se articula con otro. Por ejemplo, las carillas articulares de las vértebras.
o Foramen o agujero: paso a través de un hueso. Por ejemplo, el agujero magno
o Fosa: Superficie cóncava o área deprimida. Por ejemplo, la fosa ptegidoidea
o Surco: depresión alargada
o Línea: elevación lineal. Por ejemplo, la línea nucal superior
o Protuberancia: prominencia ósea. Por ejemplo, la protuberancia occipital externa.
o Espina: proceso semejante a una espina. Por ejemplo, la espina del esfenoides
o Tubérculo: pequeña eminencia elevada. Por ejemplo, el tubérculo faríngeo.
Vascularización e inervación de los huesos
Los huesos poseen una rica irrigación sanguínea. Sus vasos sanguíneos son las arterias
nutricias (una o más para cada hueso), las cuales pasan a través del hueso compacto del
cuerpo o diáfisis de un hueso largo a través de los agujeros nutricios. Las venas acompañan
a las arterias en su paso por los agujeros nutricios. Los vasos linfáticos son abundantes en
el periostio.
Los nervios acompañan a los vasos sanguíneos óseos. El periostio está ricamente inervado
por nervios sensitivos periósticos, portadores de fibras de la sensibilidad dolorosa. El
periostio es especialmente sensible al desgarro y a la tensión. El hueso recibe un número
escaso de terminaciones sensitivas.

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Articulaciones
Las articulaciones son las uniones entre dos o más huesos o partes rígidas del esqueleto.
Están formadas por un conjunto de elementos por medio de los cuales los huesos se unen
entre sí.
Las articulaciones se dividen en tres clases: fibrosas o inmóviles, cartilaginosas o
semimóviles, sinoviales o móviles.

Articulaciones fibrosas
Se caracterizan por tener superficies articulares unidas por tejido fibroso. Dentro de este
grupo se encuentran las suturas y las sindesmosis.
Las suturas se dividen, según la configuración de sus superficies articulares en:
o Sutura dentada. Los huesos se unen por engranaje de sus superficies articulares que
presentan dentellones. Por ejemplo: la sutura interparietal
o Sutura escamosa. Las superficies articulares están talladas en bisel. Por ejemplo, la
sutura témporoparietal.
o Sutura plana. Sus superficies articulares son planas.
o Sutura esquindelesis. Una de sus superficies tiene la forma de una cresta que se
enclava en una superficie opuesta en forma de ranura. Por ejemplo, la articulación
esfenovomeriana.

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Las sindesmosis unen los huesos mediante una lámina de tejido fibroso, ya sea un
ligamento o una membrana fibrosa. Por ejemplo, la membrana interósea del antebrazo une
el radio y la ulna del antebrazo.
Articulaciones cartilaginosas
Las articulaciones cartilaginosas son ligeramente móviles, y son dos: la sínfisis y la
sincondrosis.
En la sínfisis, las superficies articulares se unen por medio de tejido fibrocartilaginoso que
está situado entre ambas superficies. Por ejemplo, la sínfisis del pubis.
En la sincondrosis, los huesos se unen por medio de cartílago hialino, el cual permite que
se doblen ligeramente en las primeras etapas de la vida. Son uniones temporales que están
presentes durante el desarrollo de un hueso largo, en las cuales la epífisis y la diáfisis están
unidas por una lámina epifisiaria, que permite el crecimiento longitudinal del hueso.
Cuando finaliza el crecimiento, la lámina epifisiaria se convierte en hueso y las epífisis se
fusionan a la diáfisis.

Articulaciones sinoviales
Son articulaciones que permiten movimientos libres entre los huesos que unen. Son
articulaciones de locomoción, que presentan:
o Superficies articulares lisas, separadas por una cavidad articular y móviles unas
sobre otras. Están revestidas por cartílago articular.
o Cápsula articular y ligamentos. Mantienen en contacto a las superficies articulares
o Membrana sinovial. Es una membrana delgada y transparente, aplicada a la cara
profunda de la cápsula articular. Tapiza toda la cavidad articular, a excepción de las
superficies articulares. Segrega un líquido incoloro, viscoso y filante llamado líquido
sinovial o sinovia, el cual lubrica las superficies articulares, facilitando su
deslizamiento.

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Clasificación de las articulaciones sinoviales


Según la configuración de las superficies articulares, se distinguen seis clases de
articulaciones sinoviales:
1. Articulación esferoidea o enartrosis. Una de sus superficies articulares es un
segmento de esfera que se mueve dentro de la concavidad de la otra superficie.
Permite realizar movimientos de flexión, extensión, abducción, aducción, rotación
medial, rotación lateral y circunducción Por ejemplo, la articulación coxofemoral.

2. Articulación elipsoidea o condílea. Una de las superficies es una cabeza elíptica, y la


otra es una superficie cóncava. Permite los movimientos de flexión, extensión,
abducción, aducción. También es posible la circunducción, aunque más restringida
que en las articulaciones en silla de montar. Por ejemplo, la articulación
témporomandibular y las articulaciones metacarpofalángicas.

3. Articulación en silla de montar o encaje recíproco. Las superficies articulares


opuestas tienen una forma parecida a la de una silla de montar, es decir que son
recíprocamente cóncavas y convexas (la concavidad de una se adapta a la
convexidad de la otra). Permiten la abducción, aducción, flexión y extensión y
circunducción. Por ejemplo, la articulación carpometacarpiana en la base del primer
dedo (pulgar).

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4. Articulación gínglimo o tróclea. Una de las superficies tiene forma de polea, y la otra
es inversamente configurada. Solo permite el movimiento de flexión y extensión.
Por ejemplo, la articulación del codo y la articulación de la rodilla.

5. Articulación trocoide, una de las superficies articulares es un cilindro que gira dentro
de la otra superficie que es un anillo. Permite la rotación en torno a un eje central.
Por ejemplo, la articulación atlantoodontoides.

6. Articulación plana o artrodia. Las superficies articulares de los huesos son planas o
casi planas, y los movimientos están limitados por cápsulas articulares firme.
Permiten movimientos de deslizamiento. Por ejemplo, la articulación
acromioclavicular y la articulación entre las apófisis articulares de las vértebras.

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Músculos
El sistema muscular está compuesto por todos los músculos del cuerpo, que se
clasifican en tres tipos:
1. Músculos estriados esqueléticos. Son músculos somáticos voluntarios que
mueven o estabilizan los huesos y otras estructuras del cuerpo humano.
2. Músculo estriado cardíaco. Es un músculo visceral involuntario que constituye la
mayor parte de las paredes cardíacas y de las adyacentes de los grandes vasos,
como la arteria aorta.
3. Músculos lisos (no estriados) son músculos viscerales involuntarios que forman
parte de las paredes de la mayoría de los vasos sanguíneos y órganos huecos
(vísceras), y mueven sustancias a través de ellos mediante contracciones
secuenciales coordinadas (pulsaciones o contracciones peristálticas).

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Los músculos estriados esqueléticos, constituyen el componente activo del aparato


locomotor, y están compuestos por dos partes:
1. Cuerpo o vientre: Parte gruesa, blanda y roja. Es la parte contráctil, muscular o
carnosa que ocupa la parte media del músculo.
2. Tendones: Parte estrecha, más densa y resistente y blanca, que forma las
extremidades de los músculos.
La longitud del músculo incluye el vientre y los tendones.
La mayoría de los músculos esqueléticos se insertan de manera directa o indirecta en los
huesos, los cartílagos, los ligamentos o las fascias, o en alguna combinación de estas
estructuras. Algunos músculos se fijan en órganos (músculos del globo ocular), o en la piel
(músculos faciales).
Los músculos esqueléticos, de acuerdo con su forma, son:
o Músculos planos. Tienen fibras paralelas, a menudo con aponeurosis; por ejemplo,
el músculo oblicuo externo del abdomen
o Músculos peniformes. Son semejantes a plumas por la disposición de sus fascículos;
por ejemplo, el músculo deltoides.
o Músculos fusiformes. Tienen forma de huso, con un vientre greo y redondeado y
extremos adelgazado; por ejemplo, el bíceps braquial.
o Músculos convergentes. Se originan en un área ancha y convergen para formar un
solo tendón; por ejemplo, el pectoral mayor.
o Músculos cuadrados. Tienes cuatro lados iguales; por ejemplo, el recto del abdomen
entre sus intersecciones tendinosas.
o Músculos circulares o esfinterianos. Rodean las aberturas u orificios corporales y los
comprimen cuando se contraen; por ejemplo, el orbicular del ojo (que cierra los
párpados)
o Músculos con múltiples cabezas o vientres. Tienen más de una cabeza de inserción
o más de un vientre contráctil. Los músculos bíceps tienen dos cabezas de inserción
(bíceps braquial), los músculos tríceps tienen tres cabezas (tríceps braquial) y los
músculos digástricos tienen dos vientres.
Contracción muscular
Los músculos esqueléticos funcionan por contracción. Cuando un músculo se contrae y se
acorta, una de sus inserciones permanece fija, y la otra móvil. La inserción móvil es atraída
hacia la fija, lo que produce el movimiento.
Contracción refleja. Los músculos esqueléticos se contraen voluntariamente, sin embargo,
ciertos aspectos de su actividad son automáticos o reflejos, y por lo tanto fuera del control
de la voluntad. Por ejemplo, los movimientos respiratorios del diafragma, los cuales están
controlados la mayor parte del tiempo por reflejos estimulados por las concentraciones de
oxígeno y dióxido de carbono en la sangre.

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Contracción tónica. Incluso cuando están relajados, los músculos de un individuo que
conserva la consciencia, se hallan ligeramente contraídos. Esta ligera contracción,
denominada tono muscular, no produce movimiento ni resistencia activa, pero confiere al
músculo firmeza que ayuda a estabilizar las articulaciones y a mantener la postura. El tono
muscular se pierde cuando la persona está inconsciente, por ejemplo, durante el sueño
profundo o bajo anestesia general.
Contracción fásica. Existen dos clases principales de contracción muscular fásica o activa:
o Contracción isotónica. En la cual el músculo modifica su longitud en relación a la
producción de movimiento. Existen dos clases de contracciones isotónicas. La más
evidente es la contracción concéntrica, en la cual se produce un movimiento como
resultado del acortamiento muscular; por ejemplo, al levantar una copa, empujar
una puerta o dar un golpe. El otro tipo de contracción isotónica es la contracción
excéntrica, en la cual un músculo se alarga mientras se contrae, es decir,
experimenta una relajación controlada y gradual sin dejar de ejercer una fuerza
continua (en disminución). Las contracciones excéntricas son tan importantes como
las concéntricas para los movimientos funcionales coordinados, como andar, correr
y bajar objetos.
o Contracción isométrica. En la cual no varía la longitud del músculo. No hay
movimiento, pero la fuerza (tensión muscular) está aumentada por encima de los
niveles tónicos, para resistir la gravedad u otra fuerza antagónica. Este tipo de
contracción es importante para mantener la postura erguida. Cuando el músculo
principal para un determinado movimiento está llevando a cabo una contracción
concéntrica, el músculo antagonista está realizando una contracción excéntrica
coordinada.
Funciones de los músculos
Los músculos desempeñan funciones específicas para movilizar y posicionar el cuerpo:
o Motor principal (agonista). Es el músculo principal encargado de producir un
determinado movimiento del cuerpo. Se contrae concéntricamente para producir
el movimiento deseado.
o Fijador. Es el músculo que estabiliza las partes proximales de un miembro mediante
una contracción isométrica, mientras ocurren movimientos en las partes distales.
o Sinergista. Es el que complementa la acción del motor principal. Puede ayudarlo
directamente, pero de manera más débil, a producir el movimiento.
o Antagonista. Es un músculo que se opone a la acción de otro. Un antagonista
primario se opone directamente al motor principal. Mientras los motores
principales se contraen concéntricamente para producir el movimiento, los
antagonistas se contraen excéntricamente, con relajación progresiva para producir
un movimiento suave.

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2. Aparato de la inervación
El aparato de la inervación es el que permite al organismo reaccionar frente a los continuos
cambios que se producen en el medio ambiente y en el medio interno. Además de ello,
controla e integra las diversas actividades del organismo, como la circulación y la
respiración; es decir que, controla y regula el funcionamiento de todos los otros aparatos.
Con fines descriptivos se divide de la siguiente manera:
o Estructuralmente, en sistema nervioso central (SNC), compuesto por el encéfalo y
la médula espinal, y sistema nervioso periférico (SNP)
o Funcionalmente, en sistema nervioso somático (SNS) y sistema nervioso autónomo
(SNA)
El tejido nervioso se compone de dos tipos principales de células: neuronas (células
nerviosas) y neuroglia (células de la glia), las cuales sirven de soporte a las neuronas.
Las neuronas son las unidades estructurales y funcionales del sistema nervioso,
especializadas para una rápida comunicación. Una neurona está compuesta por un cuerpo
celular, con prolongaciones denominadas dendritas y un axón, que llevan los impulsos
hacia y desde el cuerpo celular, respectivamente. La mielina, capas de sustancias lipídicas y
proteicas, forma una vaina de mielina en torno a algunos axones, lo que, aumenta
considerablemente la velocidad de conducción de los impulsos.
En el sistema nervioso, la mayoría de las neuronas son de dos tipos:
1. Neuronas motoras multipolares, que poseen dos o más dendritas y un solo axón.
Son el tipo más habitual de neurona en el sistema nervioso. Todas las neuronas
motoras que controlan los músculos esqueléticos y las que componen el SNA son
multipolares.
2. Neuronas sensitivas pseudomonopolares, poseen una corta prolongación,
aparentemente única (pero en realidad doble), que se extiende desde el cuerpo
celular. Esta prolongación común se divide en una prolongación periférica, que
conduce los impulsos desde el órgano receptor, por ejemplo, sensores del tacto, el
dolor o la temperatura en la piel hacia el cuerpo celular; y una prolongación central,
que continúa desde el cuerpo celular hasta el sistema nervioso central. Los cuerpos
celulares de las neuronas pseudomonopolares están localizados fuera del SNC, en
los ganglios sensitivos; por lo tanto, forman parte del SNP.
Sistema nervioso central (SNC)
El SNC, está compuesto por el encéfalo y la médula espinal. Sus funciones principales
consisten en integrar y coordinar las señales nerviosas de entrada y salida y llevar a cabo
funciones mentales superiores, como el pensamiento y el aprendizaje.

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El encéfalo y la médula espinal se componen de sustancia gris y sustancia blanca. Los


cuerpos de las neuronas forman constituyen la sustancia gris; los sistemas de tractos de
fibras de interconexión forman la sustancia blanca.
El SNC está protegido y rodeado por las meninges y el líquido cefalorraquídeo (LCR). Las
meninges son tres capas membranosas: piamadre, aracnoides, duramadre. El encéfalo y la
médula espinal se hallan íntimamente recubiertos en su superficie externa por la capa
meníngea más interna, que es la piamadre, una cubierta fina y transparente. El LCR se halla
entre la piamadre y la aracnoides. Por fuera se encuentra la duramadre, firme y gruesa. La
duramadre del encéfalo está íntimamente relacionada con la cara interna de los huesos del
neurocráneo circundante; la duramadre de la médula espinal está separada de los huesos
de la columna vertebral por el espacio epidural, lleno de tejido adiposo.

Sistema nervioso periférico (SNP)


El SNP se compone de fibras nerviosas y cuerpos celulares, situados fuera del SNC, que
conducen los impulsos nerviosos hacia o desde éste. El SNP está organizado en nervios que
conectan el SNC con las estructuras periféricas.
Una fibra nerviosa consta de un axón y su neurilema (cáscara del nervio) y el tejido
conectivo endoneural circundante. El neurilema está formado por la membrana de las
células de Schwann, que rodea inmediatamente el axón y lo separa de otros axones.
Un nervio consta de:
1. Un haz de fibras nerviosas situadas fuera del SNC
2. Las tres coberturas del tejido conectivo que rodean y unen las fibras nerviosas:
endoneuro, perineuro, epineuro.
3. Los vasos sanguíneos que nutren las fibras nerviosas y su cubierta

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Los nervios están organizados de un modo muy semejante a un cable telefónico. Los axones
son como los hilos individuales aislados por el neurilema y el endoneuro, los hilos aislados
son agrupados por el perineuro, y los grupos están rodeados por el epineuro, que forman
la envoltura más externa del cable. Es importante distinguir entre fibra nerviosa y nervio.
Los nervios se dividen en craneales y espinales.
Los nervios craneales son 12 pares que salen de la cavidad craneal a través de los agujeros
del cráneo, y se identifican por su nombre descriptivo o por un número romano. Sólo 11 de
los 12 pares craneales se originan en el encéfalo; el XI para craneal se origina de la parte
superior de la médula espinal.
Los nervios espinales o raquídeos salen de la columna vertebral, a través de los agujeros
intervertebrales. Se originan en pares bilaterales desde un segmento de la médula espinal.
Son 31 pares de nervios espinales: 8 pares de cervicales, 12 pares toráxicos, 5 pares
lumbares, 5 pares sacros y 1 para coccígeo. Se identifican por una letra y un número, por
ejemplo, T4, para designar la región de la médula espinal y su orden de superior a inferior
(C=cervical, T=toráxica, L=lumbar, S=sacra, Co=coccígea)

Sistema nervioso somático (SNS) o de la vida de relación


El SNS está compuesto por el sistema nervioso central y el sistema nervioso periférico.
Proporciona inervación sensitiva y motora a todas las partes del cuerpo, excepto a las
vísceras de las cavidades corporales, al músculo liso y a las glándulas.
El sistema somático sensitivo trasmite las sensaciones de dolor, temperatura y posición
desde los receptores sensitivos. La mayoría de estas sensaciones alcanzan niveles
conscientes (los podemos sentir).
El sistema somático motor inerva solo a los músculos esqueléticos, con estimulación de los
movimientos voluntarios y reflejos, mediante una contracción muscular como ocurre en
respuesta, por ejemplo, al tocar una plancha caliente.
Sistema nervioso autónomo (SNA) o de la vida vegetativa
El SNA, denominado sistema nervioso visceral o de la vida vegetativa, se compone de fibras
motoras que estimulan al músculo liso (involuntario), al músculo cardíaco, y a las glándulas
(secretoras). Estas fibras motoras están acompañadas por fibras sensitivas que conducen
impulsos del dolor visceral, que regulan la función visceral.
Las fibras motoras están organizadas en dos sistemas o divisiones: el sistema simpático
(toracolumbar) y el sistema parasimpático (craneosacro).

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En el sistema simpático toracolumbar, se encuentran los segmentos toráxicos (T1 al T12= y


lumbares altos (L1 al L2 o al L3) de la médula espinal.
En el sistema parasimpático cráneosacro, se encuentran los nervios craneales III, VII, IX y X,
y los segmentos sacros de la médula espinal S2, S3, S4.
Los sistemas simpático y parasimpático inervan estructuras involuntarias, pero sus efectos
son diferentes y opuestos, pero bien coordinados. El sistema simpático es un sistema
catabólico (con gasto de energía) que permite al organismo afrontar el estrés, como al
prepararse para la respuesta de lucha o fuga. El sistema parasimpático es principalmente
un sistema homeostático o anabólico (conservación de energía), que promueve los
procesos ordenados y tranquilos del organismo, como los que permiten la alimentación y
la asimilación.
3. Aparato sensorial
El aparato sensorial está representado por los órganos de los sentidos, los cuales reciben
impresiones del mundo exterior, que son transmitidas por los nervios al sistema nervioso
central, donde son percibidas y transformadas en sensaciones.
Los órganos de los sentidos son cinco: el órgano del tacto, el órgano del gusto, el órgano del
olfato, el órgano de la vista y el órgano de la audición.
Cada uno de ellos se compone de elementos nerviosos receptores. El elemento receptor
es una célula nerviosa o célula sensorial, cuyas prolongaciones se excitan frente a los
estímulos externo. La impresión recibida llega a los elementos nerviosos del sistema
nervioso central siguiendo sucesivamente las prolongaciones protoplasmáticas (dendritas),
el cuerpo celular y el axón.

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APARATOS DE LA NUTRICIÓN
Existen cuatro aparatos de la nutrición: aparato digestivo, aparato circulatorio, aparato
respiratorio y aparato urinario. A los aparatos de la nutrición se incorporan, las glándulas
vasculares o glándulas de secreción interna.
1. Aparato Digestivo
El aparato digestivo se compone de dos partes: el tubo digestivo, en el cual las materias
alimenticias sufren transformaciones que las hacen asimilables, y las glándulas, cuyos
productos de secreción contribuyen a la digestión de los materiales alimenticios.
El tubo digestivo es un conducto continuo, abierto en sus dos extremidades y situado en
toda su extensión por delante de la columna vertebras; comienza en el orificio bucal y
termina en el ano. Debido a las diferencias de forma, estructura y calibre que presenta, se
distinguen en el tubo digestivo varios segmentos: boca, faringe, esófago, estómago,
intestino delgado e intestino grueso.
La boca, la faringe y el esófago se sitúan superiores al diafragma.
El estómago, el intestino delgado y el intestino grueso se sitúan inferiores al diafragma, en
la cavidad abdominopélvica.
Las glándulas anexas al tubo digestivo son las glándulas salivales, el páncreas y el hígado.
Las glándulas salivales situadas en cavidad bucal y en sus proximidades, vierten su producto
de secreción que es la saliva en dicha cavidad. El páncreas y el hígado se sitúan en la cavidad
abdominal, y sus conductos excretores desembocan en un segmento del intestino delgado
llamado duodeno.

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2. Aparato circulatorio
El aparato circulatorio transporta líquidos por todo el organismo, se compone de los sistema
cardiovascular y linfático.
Sistema cardiovascular
El sistema cardiovascular está formado por el corazón y los vasos sanguíneos constituyen la
red de transporte de la sangre. La sangre lleva nutrientes a los tejidos, y se carga de
productos de desecho, que transporta para su eliminación.
Las características generales de la sangre difieren según sea abundante en materiales
nutritivos o esté cargada de productos de desecho. Desde este punto de vista, se distinguen
la sangre arterial, color rojo bermellón, rica en oxígeno combinado con la hemoglobina, y
la sangre venosa, de color rojo oscuro, escasa en oxígeno y cargada de anhídrido carbónico.
Para asegurar los intercambios nutritivos, la sangre se mueve a lo largo del aparato
circulatorio, que la distribuye por todo el organismo y la devuelve continuamente a su punto
de partida.
El aparato circulatorio comprende un órgano central que es el corazón, que imprime
movimiento a la sangre, y los vasos que la transportan.
Corazón
Es un órgano muscular hueco que presenta cuatro cavidades: dos a la derecha, el atrio
(aurícula) y el ventrículo derecho y dos a la izquierda, el atrio (aurícula) y el ventrículo
izquierdo. El atrio (aurícula) derecho se comunica con el ventrículo derecho y el atrio
(aurícula) izquierdo con el ventrículo izquierdo, pero las cavidades derechas están
separadas de las cavidades izquierdas por los tabiques interatrial e interventricular.
Vasos
Los vasos son conductos membranosos que se ramifican por todo el organismo. Se dividen
en vasos sanguíneos y vasos linfáticos, según contengan sangre o linfa.
Vasos sanguíneos. Son las arterias, las venas y los capilares
Arterias. Las arterias conducen la sangre impulsada por los ventrículos del corazón a todas
las partes del organismo. Son de color blanco rosado en el vivo, y blanco grisáceo en el
cadáver. Sus paredes son relativamente gruesas, contráctiles y elásticas.
El sistema arterial nace del corazón por medio de dos troncos: uno tiene su origen en el
ventrículo izquierdo y se llama arteria aorta; el otro nace del ventrículo derecho y se llama
arteria pulmonar.

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Fuente: Anatomía con orientación clínica. K. Moore, A. Dailey, A. Agure. 7ma edición
Anatomía Humana Descriptiva, Topográfica y Funcional. H. Rouviere, A. Delmas. 11 edición

La arteria aorta se divide en ramas colaterales y terminales que se ramifican por todo el
organismo.
La arteria pulmonar conduce la sangre del ventrículo derecho a los pulmones.
Venas. Las venas son conductos membranosos muy dilatables, que conducen la sangre de
los capilares a los atrios (aurículas). Su pared es rojiza, más delgada y menos elástica y
contráctil que la de las arterias.
Capilares. Son vasos muy finos que unen las últimas ramificaciones de las arterias con los
orígenes de las venas. Están abundantemente anastomosados y forman una red
interpuesta entre las arterias y las venas. En ellos se efectúan los intercambios nutritivos.

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Fuente: Anatomía con orientación clínica. K. Moore, A. Dailey, A. Agure. 7ma edición
Anatomía Humana Descriptiva, Topográfica y Funcional. H. Rouviere, A. Delmas. 11 edición

Mecánica de la circulación
Circulación mayor o sistémica. Es el recorrido que sigue la sangre que empieza en el
ventrículo izquierdo y termina en el atrio derecho del corazón de la siguiente manera: el
ventrículo izquierdo impulsa la sangre rica en oxígeno, a través de la arteria aorta y sus
ramas, hacia los tejidos del organismo, donde se produce el intercambio de oxígeno y
nutrientes por dióxido de carbono en los capilares. La sangre venosa, pobre en oxígeno,
desde los tejidos del organismo, vuelve a través de la vena cava superior y la vena cava
inferior al atrio derecho del corazón.
Circulación menor o pulmonar. Es el recorrido que sigue la sangre que empieza en el
ventrículo derecho y termina en atrio izquierdo del corazón, de la siguiente manera: el
ventrículo derecho impulsa la sangre venosa pobre en oxígeno, y la lleva a los pulmones a
través del tronco pulmonar y arterias pulmonares. El dióxido de carbono se intercambia
por oxígeno en los capilares pulmonares, y luego la sangre rica en oxígeno vuelve por las
venas pulmonares al atrio izquierdo del corazón.
Circulación porta. Las venas que siguen los capilares del estómago, intestino, bazo y
páncreas se unen en un grueso tronco venoso llamado vena porta. Esta penetra en el
hígado, donde se capilariza. De estos capilares nacen las venas suprahepáticas, que
desembocan en los troncos venosos de la circulación mayor.
Se denomina sistema porta a todo aparato vascular, arterial o venoso formado por un vaso
cuyos dos extremos terminan en una red capilar.

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Anatomía Humana Descriptiva, Topográfica y Funcional. H. Rouviere, A. Delmas. 11 edición

Sistema linfático
El sistema linfático constituye una especie de desagüe que permite drenar el exceso de
líquido hístico y de proteínas plasmáticas al torrente sanguíneo, así como eliminar los
desechos procedentes de la descomposición celular y de las infecciones.
Los principales componentes del sistema linfático son:
o Plexos linfáticos o redes de capilares linfáticos, se originan en los espacios
extracelulares (intercelulares) de la mayoría de los tejidos. En ellos penetra el líquido
hístico, las proteínas plasmáticas, las bacterias, los desechos celulares y los
linfocitos.
o Vasos linfáticos, constituyen una amplia red distribuida por casi todo el cuerpo. Hay
capilares y vasos linfáticos en casi todos los lugares donde hay capilares sanguíneos,
a excepción, por ejemplo, de los dientes, el hueso, la médula ósea y todo el sistema
nervioso central.
o Linfa, líquido hístico que penetra en los capilares linfáticos y circula por los vasos
linfáticos. Suele ser acuosa, transparente, ligeramente amarillenta, y tiene una
composición similar al plasma sanguíneo.
o Nódulos linfáticos o ganglios linfáticos, son pequeñas masas de tejido linfático que
se localizan a lo largo de los vasos linfáticos, a través de ellos se filtra la linfa a su
paso hacia el sistema venoso.
o Linfocitos, son células circulantes del sistema inmunitario que reaccionan frente a
los materiales extraños.
o Órganos linfoides, son las partes del cuerpo que producen linfocitos: el timo, la
médula ósea roja, el bazo, las tonsilas y los nodulillos linfáticos solitarios y agregados
en las paredes del tubo digestivo y el apéndice.
Los vasos linfáticos van aumentando de calibre al unirse con otros vasos linfáticos que
drenan la linfa de regiones adyacentes, formando vasos linfáticos grandes, los cuales
desembocan en los grandes vasos colectores, denominados troncos linfáticos, que a la vez
se unen para formar el conducto linfático derecho y el conducto toráxico.
El conducto linfático derecho drena la linfa que procede del cuadrante superior derecho
del cuerpo: mitad derecha de la cabeza, del cuello, del tórax y además del miembro superior
derecho. En la base del cuello, desemboca en el ángulo venoso derecho (unión de la vena
yugular interna derecha y la vena subclavia derecha).
El conducto toráxico drena la linfa del resto del cuerpo: mitad izquierda de la cabeza, del
cuello, del tórax, miembro superior izquierdo, y de toda la porción infradiafragmática del
cuerpo (abdomen, pelvis, miembros inferiores). Desemboca en el ángulo venoso izquierdo
(unión de la vena yugular interna izquierda y la vena subclavia izquierda).
El sistema linfático ejerce otras funciones:

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o Absorción y transporte de las grasas alimentarias. Los vasos linfáticos llamados


quilíferos absorben del intestino delgado los lípidos y vitaminas liposolubles, para
que, los linfáticos viscerales conduzcan luego el líquido lechoso o quilo, al conducto
toráxico.
o Formación de un mecanismo de defensa para el organismo. Cuando un área
infectada drena proteínas extrañas, los linfocitos producen anticuerpos específicos
frente a dichas proteínas, los cuales actúan en el área infectada.
3. Aparato respiratorio
El aparato respiratorio está destinado a poner en contacto el aire atmosférico con la sangre
venosa. A través de él, se exhala dióxido de carbono y se absorbe oxígeno, que transforma
la sangre venosa en sangre arterial.
El aparato respiratorio comprende:
o Los pulmones, en los cuales se producen los intercambios gaseosos. Ocupan la
mayor parte de la caja toráxica y están envueltos por membranas serosas llamadas
pleuras.
o Vías respiratorias, que conducen el aire a los pulmones. Están constituidas por las
fosas nasales, la parte superior de la faringe, la laringe, la tráquea y los bronquios.
La laringe no es solamente un órgano conductor del aire de la respiración. Es
también el órgano esencial de la fonación.

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4. Aparato urinario
El aparato urinario contribuye en gran parte a que el organismo se deshaga de productos
de desasimilación.
Se compone de:
o Riñones, son dos glándulas que secretan la orina
o Uréteres, son dos conductos excretores que conducen la orina hacia la vejiga
o Vejiga, es el reservorio en el cual se recoge la orina en los intervalos entre las
micciones.
o Uretra, es el conducto excretor por el que la orina acumulada en la vejiga es
expulsada al exterior

APARATO DE LA REPRODUCCIÓN
La reproducción sexual es la unión de dos elementos celulares, uno masculino, el
espermatozoide, y otro femenino, el ovocito, para constituir el óvulo fecundado. El óvulo
fecundado se desarrolla y forma un organismo semejante al de sus generadores.
El aparato genital masculino se compone de:
o Testículos, dos órganos que producen los espermatozoides
o Vías espermáticas, que son conductos que conducen los espermatozoides a la uretra
o Glándulas próstata y bulbouretrales, que segregan un líquido destinado a diluir el
esperma
o Uretra, a la que se anexan los órganos eréctiles que aseguran el vaciamiento del
esperma en el órgano reproductor femenino

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El aparato genital femenino comprende:


o Ovarios, órganos reproductores de los ovocitos
o Trompas uterinas (trompas de Falopio) que conducen los ovocitos al órgano de la
gestación
o Útero, es el órgano de la gestación
o Vagina y vulva, órganos de la copulación

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