RESPONDEME MAMA

Yunny es una joven que fue maltratada por su madre a muy temprana
edad, creciendo con odio progresivo hacia ella.

YUNNY: No me mires de esa forma, tú más que nadie tienes la culpa de mi

comportamiento hacia ti. Con tus prohibiciones y reproches me hiciste una
mujer insegura, con miedos y frustraciones. Por tu culpa no tengo
sentimientos. (Irónica) No me pidas que te quiera cuando tú ni siquiera
supiste darme amor. No me hables de tus achaques porque me dan risa.
¿Cuántas veces en mi infancia te dije que dolía la cabeza, el estómago? ¿Y tú
qué respondías? (Pausa) Que eran pretextos para no estudiar o comer.
Pues... ahorita no creo nada de tus dolores. Te odio... Sí... te odio. ¿Sabes
cuándo comencé a odiarte? El mismo día que rompiste mi traje de quince
años. (Pausa) Eso no se le hace a un ser humano, me marcaste para toda la
vida y eso nunca te lo voy a perdonar, así te me arrodilles. (Furiosa)¿Por qué
me trajiste a este mundo? ¿Por qué no me abortaste y me dejaste en
cualquier cañería? Hubiese sido preferible, sería más feliz.(Rabia contenida) Y
pensar que te tengo que soportar hasta el final de tus días.(Pausa corta)
¿Qué te hice aquella tarde para que me lanzaras por las escaleras? Por tu
culpa no pude caminar más. ¿Qué culpa tuve yo de tus peleas con mi padre?
¿Qué culpa tuve yo que mi padre anduviese con otras mujeres? ¿Qué culpa
tuve yo de su abandono? (Grita)
Respóndeme mama, respóndeme…!

TRISTE FINAL

Juan un joven con la autoestima muy baja, por los golpes de la vida que ha
tenido que enfrentar.

JUAN: La gente lo que hace es criticar y juzgar. Ni siquiera imaginan qué me ha

llevado a estar en estas condiciones. Crecí sin el calor de un padre, con una madre
que me dejaba solo, para salir a la calle a buscar el sustento diario. Mi situación tan
precaria y mi falta de voluntad me ha llevado a cometer muchos errores. A veces
quisiera morirme, pues no le consigo sentido a la vida. Pero no tengo los pantalones
bien puestos para terminar con mi existir. Siento rencor por la humanidad, nos
destruimos entre nosotros mismos. (Pausa) Se habla de una falta de valores... que ni
conozco; nunca me los inculcaron. Se dice que soy agresivo y conflictivo, pero nadie
sabe lo que llevo por dentro, ni imaginan cuál es el trauma que me ocasionó todo este
sentimiento negativo hacia la humanidad. No quisiera recordar ese día en el que mi
madre me llevó a su trabajo, pues no tenía con quién dejarme, y, en el patio de
aquella gran mansión, vi servirle la comida al perro y, en mi asombro, no entendía por
qué comía mejor que yo. Lloré de la impotencia al solo imaginar que todas las noches
lo que había en mi humilde morada era arroz con mantequilla. (Pausa) Estoy en un
abismo del que no saldré jamás porque no me da la gana, ya me conformo con las
sobras que me dan. Esperando pronto que sea Dios el que tome la decisión de mi
triste final.