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¿Mis emociones quieren que ya

inicie una relación amorosa?


¿Qué puedo hacer?     
Las emociones pueden ser impredecibles y abrumadoras sobre todo cuando nos
sentimos atraídas por un chico. Afortunadamente no tienes que dejar que las
emociones te controlen. Dios nos ha diseñado como criaturas emocionales y es
importante saber cómo manejar las emociones de una manera que glorifique a Dios
en mis relaciones interpersonales con el sexo opuesto

Podemos ver que muchas señoritas confunden el hecho de que les vasta con sentir
para tomar decisiones amorosas, para abrir su corazón, o aun mas para iniciar una
relación cuando todavía no es el tiempo.

Una especialista que trabaja con mujeres jóvenes dijo lo siguiente:

¡Estamos muy predispuestas a creer que no valemos a menos que logremos la


atención y la aceptación de los chicos!” por lo que se concluye que gran porcentaje
de mujeres “se han sentido mejor respecto a sus vidas cuando tienen un novio”.

Esto es una mentira, Creo que la herramienta más eficaz del diablo para esclavizar a las
mujeres son las emociones. Su táctica consiste en hacernos creer mentiras acerca de
ellas.

Déjame aclárate algo sobre las emociones

1. ¿Qué son las emociones?

Creo que muchas veces confundimos los “sentimientos” con las “emociones” y se usan
indistintamente. Según el Diccionario de la RAE un sentimiento es el “estado afectivo
del ánimo producido por causas que lo impresionan vivamente”. Por su parte,  una
emoción es la “alteración del ánimo intensa y pasajera, agradable o penosa, que va
acompañada de cierta conmoción somática”.

Entonces Los sentimientos son más duraderos, y las emociones son alteraciones del
ánimo que son pasajeras.

Pero hay que entender que Dios nos creó a Su imagen, y las emociones de Dios se
revelan en las escrituras; por lo tanto, Dios nos creó seres emocionales. Sentimos
amor, gozo, felicidad, culpa, ira, decepción, miedo, etc. A veces, nuestras emociones
son vivencias agradables, y a veces no.

A veces, nuestras emociones están fundadas en la verdad, y a veces son "falsas" ya que
se basan en premisas erróneas.
Las emociones están muy relacionadas con el corazón, y no debemos anularlas, ya que
seríamos robots sin ellas, personas frías y calculadoras. Nuestras emociones, al igual
que nuestras mentes y cuerpos, están influenciadas en gran medida por la caída de la
humanidad en el pecado. En otras palabras, nuestras emociones están manchadas por
nuestra naturaleza pecaminosa, y esa es la razón por la cual es necesario controlarlas. 
Pero no debemos dejarnos dominar por ellas: son pasajeras y, por muy intensas que
sean, deben estar sometidas y conducidas por la Palabra de Dios.

Ahora vemos

2. Las mentiras del mundo en relación a las emociones y tu vida amorosa

Cuántas veces escucho a personas dar consejos, aun mas en mi trabajo, o la


universidad que dicen algo similar a esto: “Escucha a tu corazón y déjate llevar por lo
que te dicte”. Esta es una típica frase de película romántica, donde el príncipe busca a
su princesa sin pensar en las consecuencias, solo sigue su corazón. Creo que tú
también la has escuchado

Otros dicen Todo depende de cómo tú te sientas: el mundo te dice, tú eres lo que
sientes o sigue tus instintos… esta clase de mentiras hace que conviertas tus
emociones en un ídolo.

Otros dicen Las emociones son dignas de tu confianza: esta mentira afirma que puedes
confiar en lo que sientes, pero esto es una mentira porque ¿cómo puedes confiar en el
corazón que es engañoso?

Piensas que, porque una emoción es fuerte, le asumimos el hecho de creer que es


verdadera, que es buena y válida en sí misma, pero eso es un engaño. 

La Biblia nos alerta en cuanto a esto: “Engañoso es el corazón más que todas las
cosas”, Jeremías 17:9.

En dos semanas no pueden decirte alguien que te ama, que siente algo por ti, que su
corazón le dice que le gustas, no te puedes dejar llevar por estas afirmaciones, son
mentiras.

Espero estemos entendiendo porque no es buenos tomar decisiones basadas en las


emociones.

Mi esposo suele decir las emociones son como subirse a la montaña rusa, en un
momento estas arriba en lo alto, luego bajas con fuerza, en un momento tu vez al
chicos que te gusta y lo vez guapo, bien vestido, y eso hace que tus emociones se
encienda y digas que ya quieres que sea tu esposo, pero luego en otra ocasión lo vez
mal arreglado, despeinado y dices creo que mejor sigo orando, risas
Las emociones son así un día suben luego bajan, no son estables, son inciertas, y esto
no es base solida para decir alguien si quiero estar contigo. Ahora

3. Las mentiras si sigo mis emociones

Lamentablemente, a muchos jóvenes les ha pasado que decían que tal chico o chica
era la mujer u hombre de su vida porque lo sentían así, se lo dictaba su corazón, y
“sabían” que era la persona que Dios le había preparado, aun a sabiendas de que el
chico aun no esta firme.

Esto nos puede pasar si dejamos que las emociones nos controlen en vez de que
nosotras controlemos nuestras emociones, somos tan expuestas a emocionarnos por
ejemplo ¿cuándo un joven te dice te acompaño al paradero o te escribió cómo estás?
por whatsapp, que si dejamos que las emociones tomen control podemos abrir puertas
cuando aún no es el tiempo, ya empezamos a imaginar incluso como sería formar una
familia con él

Déjame decirte algo:

Muchas jóvenes han considerado una ¨necesidad¨ tener novio en mediano o largo
plazo.
Esta mentira ha logrado calar por igual en la mente de muchas jóvenes. La conclusión
es que muchas chicas creen que necesitan un chico en su vida. Aquí algunas
afirmaciones que tal vez han escuchado, lo han pensado o lo han dicho:
- No es que en realidad tenga que tener un novio, pero me gusta asegurarme de
que le agrado a alguien.
- Como cristiana, es realmente difícil tratar de permanecer firme en la
universidad a la espera del joven indicado. Como todas tienen novio, hay
mucha presión al respecto.
- Me sentiría mucho mejor ahora si tuviera un novio.

Si partimos de la necesidad de tener un novio, concluimos en que la intención de ello


es el matrimonio. Recuerda, Dios no planeó el matrimonio para hacerte feliz, sino para
glorificarse. Si consideras el matrimonio en el tiempo de Dios y con un corazón puro, lo
más seguro es que llegue a ser una de las experiencias y regalos más maravillosos de tu
vida. Sin embargo, el objetivo final de Dios con el matrimonio no es hacerte feliz, sino
glorificarse (Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y
los dos serán una sola carne.Grande es este misterio; mas yo digo esto respecto de
Cristo y de la iglesia. Ef. 5:31-32).

Cuando buscas una relación con un chico para que te haga feliz, te preparas para una
desilusión, y puedes encaminarte al desastre.

Entonces ¿cuál es el momento adecuado para despertar el amor? Es apropiado


“despertar” el amor en el momento de tu vida en que estás lista para empezar a
pensar en casarte, y cuando Dios ha traído a tu vida un hombre que está listo para
comprometerse contigo como esposo para toda la vida. Tus padres, y otros amigos y
líderes temerosos de Dios podrán ayudarte a confirmar que es el “hombre correcto”.

Recuerda que poner en primer lugar a Dios implica buscar su voluntad y eso te llevará
a obedecer los tiempos de Dios.

Las emociones nos engañan, por eso debemos siempre juzgarlas a la luz de la Palabra
de Dios. 

4. ¿Cómo puedo controlar mis emociones?

Entonces, ¿cómo podemos tratar con nuestras emociones a la luz de la Palabra de Dios
para no equivocarnos? Aquí algunos consejos que pueden ayudarnos:

a. Nuestras emociones forman parte de un todo en nuestro ser junto con


nuestros pensamientos, sentimientos etc. Por eso, Dios nos exhorta a guardar
nuestro corazón “Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; porque de él
mana la vida”, Proverbios 4:23. Guardar nuestro corazón no es esconderlo,
sino llenarlo y protegerlo con la Palabra de Dios y nuestra obediencia a ella.
b. Cuando un intérprete de la ley le preguntó a Jesús cuál era el gran
mandamiento de la ley, Jesús le contestó: “Amarás al Señor tu Dios con todo
tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente”. Mateo 22:37. Aquí
vemos que cuando adoramos y alabamos a Dios, todo nuestro ser está
envuelto, incluyendo nuestras emociones. Lo triste y peligroso es cuando nos
dejamos llevar solamente por ellas, y dejamos a un lado nuestra mente y razón.
Esto puede traernos consecuencias graves, e incluso muchos han manipulado
las emociones de las personas, distorsionando la Palabra de Dios para que
hagan lo que su líder espiritual ordene. Necesitamos las emociones, por
supuesto, pero con raciocinio. Es decir, controlar el corazón con la razón.
c. Cuando nuestras emociones nos dicten algo abiertamente contrario a los
mandatos de la Palabra de Dios, tenemos que obedecer lo que Dios nos dice sin
dudar. Por sinceras y fuertes que sean nuestras emociones, seguirlas a
expensas del mandato divino es desobediencia abierta a lo que Dios ya nos ha
dejado dicho. “Engañoso es el corazón más que todas las cosas”,  Jeremías
17:9.
d. Las emociones que no nos llevan a acercarnos más a Dios y hacer su
voluntad vienen de la carne y no del Espíritu. Por lo tanto, no debemos vivir
según la carne nos dicte, sino según el Espíritu de Dios que mora en
nosotros, “ustedes no están en la carne sino en el Espíritu, si en verdad el
Espíritu de Dios habita en ustedes”, Romanos 8:9. Debemos hacer morir con
Su ayuda las manifestaciones, las emociones y obras de la carne.
e. El Espíritu mismo nos da el poder para dominar y distinguir si nuestras
emociones son de Dios y me ayudan a crecer en mi vida cristiana, o si son de la
carne y las tengo que desechar. No está en mis fuerzas, sino en el poder del
Espíritu, como Pablo enseñó a Timoteo: “Porque no nos ha dado Dios espíritu
de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio (de disciplina)”, 2
Timoteo 1:7.
Podemos concluir diciendo sí a las emociones que me ayudan a conocer y
acercarme más a Dios, pero no dejarnos llevar por ellas, ni que dominen nuestra
vida y decisiones. El cristiano solo debe dejarse dominar por la Palabra de Dios y
nuestra obediencia a ella.

5. Consejos prácticos sobre el inicio de una relación amorosa

Quiero hablar directamente con las chicas que están en la edad del grupo «no listas
para el matrimonio». Si eres demasiado joven o simplemente no estás lista, te animo a
que pienses en estas tres preguntas:

1.  ¿Cuál es el propósito de una relación?

Grande es este misterio, pero hablo con referencia a Cristo y a la iglesia. (Ef. 5:32).

El amor romántico no es una idea humana, es una idea de Dios. Estudia las relaciones
románticas en la Biblia. Pregúntate cuál es su propósito. Te doy una pista: nunca
vemos la Biblia alentando a los jóvenes a entablar una relación romántica durante años
sin miras a un matrimonio lejano. Lo que sí vemos es una celebración consistente del
pacto del matrimonio.

Antes de decir «sí» a una relación de noviazgo\cortejo, pregúntate por qué. ¿Por qué
deberías decir «sí»? ¿Cuál es el propósito de la relación? ¿Cuál es la meta? ¿Me
ayudará esta relación a servir mejor a Dios en este momento de mi vida?

2. No necesitas una pareja

Lo primero que debemos decir es algo sorprendentemente contracultural: Tú no


“necesitas” una pareja. Sí: “no es bueno que el hombre esté solo”, pero estar soltero
no es lo mismo que estar solo.

Piensa en esto: Cristo nunca estuvo casado, ¿acaso le faltó algo? Él no fue menos
hombre solo por nunca haber entrado en una relación con una mujer. Tú tampoco lo
eres si nunca has estado en una relación de este tipo, ya sea que tengas 20 años o 60.

Sí: el matrimonio otorga la intimidad que quita la soledad. Pero también encontramos
intimidad en las amistades profundas y verdaderas. Y en la cercanía profunda con Dios.
Ciertamente iniciar una relación de noviazgo da un cierto “high”, donde te sientes por
las nubes por un tiempo, y hasta te da ganas de hacer tus devocionales más temprano
y orar siempre (por él o ella, principalmente).

Pero la vida cristiana no se vive en las nubes, ni en base a emociones. Por tanto, hay
áreas de tu vida que deben estar listas o siendo trabajadas antes de tu involucrarte
emocionalmente con quien esperas sea tu futuro esposo o esposa.
3.  ¿Esto me ayudará a buscar la pureza?

Huid de la fornicación. Todos los demás pecados que un hombre comete están fuera
del cuerpo, pero el fornicario peca contra su propio cuerpo (1 Cor 6:18).

Las relaciones románticas basadas en las emociones crean química entre dos personas.
¿Por qué permitir esa química romántica en tu vida sin ninguna esperanza de
satisfacerla en un matrimonio cercano? Sé prudente y asegúrate de no agregar
tentaciones adicionales que simplemente no necesitan estar en su vida.

4. Ten la mirada puesta en Cristo

Hay muchos más consejos que podríamos mencionar, como “rodéate de personas
sabias y maduras en la fe que puedan aconsejarte” y “ora pidiendo a Dios que te
guarde y guíe tus pasos”. ¡Te animo a hacer esas cosas! Necesitas a Dios, y necesitas a
la iglesia. Sin embargo, termino este artículo animándote a tener puesta la mirada en
Jesús. Junto al primer consejo en esta lista, esto es lo más importante comiences un
noviazgo o no.

No solo para tener una relación que agrade a Dios y sea edificante, sino principalmente
para vivir honrando a Dios en respuesta a su evangelio. Necesitamos amor, alegría,
paz, paciencia, gentileza, bondad, fidelidad, humildad, y mucho control propio. Sin
todo eso, jamás viviremos como necesitamos hacerlo. Colapsaremos con frecuencia.
No seremos pacientes, ni sabremos perdonar o renunciar a nuestros egos.
Sucumbiremos fácilmente a tentaciones. No seremos agradecidos ni amorosos. Todo
esto es fruto del Espíritu Santo que viene a nuestras vidas cuando creemos el evangelio
y atesoramos a Cristo en primer lugar (Gá. 5:22-23).

Siempre necesitaremos el evangelio, la gracia de Dios y el fruto del Espíritu Santo


floreciendo en nuestras vidas para tomar decisiones que lo honren a Él.[1]

Si pudiera ofrecerte un último consejo, sería el siguiente: Espera hasta que puedas
considerar el matrimonio antes de entablar una relación seria. Yo misma hice ese
compromiso y nunca lo he lamentado. De hecho, estoy muy agradecida de haber
mantenido ese compromiso.

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