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LA ORGANIZACIÓN JUDICIAL DOMINICANA

2.1. Principios que rigen la organización dominicana

Desde nuestros orígenes, se puede apreciar que la Organización Judicial ha partido de ideas básicas
que históricamente ha determinado la estructura judicial. Las tendencias generales tienden a producir
órganos e instituciones que se conforman bajo diferentes criterios.

Así, los órganos de jurisdicción se han distinguido por el modo en que quedan constituidos, por
ejemplo en únicos como la Suprema Corte de justicia; o múltiples Juzgados de Primera Instancia,
Cortes de Apelación; permanentes o temporales como las Cámaras de Calificación que se conforman
para conocer sólo de la apelación de un auto de Juez de Instrucción; o por su estructura interna,
unipersonales o colegiados.

También se aprecia un criterio jerárquico piramidal en las diferentes instancias y una estratificación
que los clasifica dependiendo de la titularidad de los oficios que corresponden a cada órgano Jueces
y ministerio público; funcionarios principales y funcionarios auxiliares; pertenecientes al oficio o
adscritos al oficio; etc.).

 Los principios básicos que han normado la organización judicial de nuestro país han sido: el de
pluralidad de los oficios jurisdiccionales; el de pluralidad de los grados de jurisdicción; el de
jerarquía de los oficios; el de la composición y el de división de la competencia judicial dependiendo
de la gravedad del hecho o del monto o trascendencia del asunto litigioso.

Este principio ha permitido que a una misma institución pudieren atribuírsele varias funciones, por
ejemplo: Jueces de Paz y Fiscalizadores que fungen como conciliadores en ciertas materias, además
de sus otras funciones; Jueces de Primera Instancia que son la alzada de los Juzgados de Paz, además
de ser tribunales de primer grado que conocen, salvo restricción legal, de todas las materias; Jueces
de Instrucción tienen nuevas atribuciones cautelares (Ley 24-97) además de las tradicionales
funciones investigativas que el procedimiento criminal les asigna; etc.}
 El "principio de pluralidad" se ha entendido de diferentes modos:

a. El concepto de "unidad de jurisdicción", que en nuestro país fue introducido por el insigne
jurista H. J. Ducoudray y defendido por Herrera Billini, entiende como regla general que los
tribunales en principio conocen de todos los asuntos (penales, civiles y comerciales) y que la
división de los tribunales en cámaras civiles y penales (en Cortes de Apelación y Juzgados de
Primera Instancia) es una excepción a la regla, ya que aunque se considerase cada cámara como
un tribunal, cada una tiene una competencia privativa y plena para conocer de los asuntos que
la ley le atribuye a su conocimiento.
b. Este criterio, permite la categorización de tribunales en aquellos de "derecho común" y
aquellos "de excepción".
c. Una óptica objetiva permite apreciar en la normativa de organización judicial una tendencia a
la división de los tribunales del mismo grado, dependiendo de la especialidad de la materia que
conozcan (cámaras penales y cámaras civiles en Cortes de Apelación y Juzgados de Primera
Instancia).
d. Un criterio inmediatista del principio de la pluralidad permite, igualmente, apreciar una
tendencia legal a la sub-división de tribunales del mismo grado, dividiéndolos en cámaras (por
ejemplo, cámaras penales para los Juzgados de Primera Instancia del Distrito Nacional); salas
(como en el área laboral) o turnos (como en el Tribunal de Tránsito del Distrito Nacional).
e. El principio de pluralidad también explica la tendencia cada vez mas marcada de promover la
creación de fueros especializados para conocer de materias específicos dentro de un mismo
rango jerárquico, por razones de superabundancia litigiosa por ejemplo, los Juzgados de Paz de
Tránsito para conocer sólo del aspecto contravencional de la Ley 241 del 1967 o los Juzgados
de Paz Municipales, para conocer sobre violaciones a normas del fuero Municipal.

Del mismo modo, este criterio de pluralidad de ha determinado la faceta de la división territorial, la
cual ha formado parte de la división política de nuestra nación, que secciona nuestro país en
Provincias, Municipios y un Distrito Nacional (artículos 5, 82 y 86 de la Constitución de la
República). Vale aclarar que en nuestro país la provincia no es una entidad territorial autónoma y
con personalidad jurídica propia, sino una simple división territorial demográfica que sirve de base
para las elecciones de funcionarios o para fines jurisdiccionales . Esto ha permitido en el área
jurisdiccional el sub-dividir demarcaciones (circunscripciones) o concentrarlas (departamentos
judiciales).
2.2. Organización de los tribunales

Estructura y Funcionamiento de los Tribunales.

Los tribunales pueden ser unipersonales o colegiados. Las condiciones de aptitud requeridas para
ser juez son:

 Ser dominicano, de buenas costumbres y tener el grado de Licenciado o doctor en Derecho.


 Para ser juez de la Corte de Apelación se necesita aparte de las exigencias previamente
comentadas tener cuatro años de ejercicio profesional.
 Para ser juez de Primera Instancia se necesita tener dos años de ejercicio profesional.
 Para ser juez de la Suprema Corte de Justicia se exige:
 Tener 35 años de edad o 12 años de ejercicio profesional o de juez.

Por lo demás, los archivos y registros de un tribunal deben estar abiertos al público. Solamente en
casos muy especiales les esta permitido al tribunal celebrar audiencias a puertas cerradas o en
cámara de consejo siendo como ejemplo de la primera el divorcio por incompatibilidad de
caracteres.

Los Jueces.

Loa jueces tienen prerrogativas y obligaciones entre las cuales podemos citar: la inamovilidad
temporal, la dispensa de la tutela, la destitución por haber ejercido falta grave, la suspensión sin
disfrute de sueldo, aunque si una vez enjuiciado demuestra su inocencia deben serle pagados todos
los salarios no percibidos.

Los jueces tienen obligaciones generales y especiales estando entre las primeras, observar una
buena conducta dentro y fuera de sus funciones y entre las ultimas fallar dentro de los noventa días,
responder los pedimentos de las partes en su totalidad, no rehusar o aplazar el fallo de un asunto
alegando oscuridad o desconocimiento de la ley, fallar en conciencia (de acuerdo con su intima
convicción) y en los tribunales colegiados mantener en secreto las deliberaciones, por lo demás, los
jueces no pueden ser políticos, ni dedicarse a otra actividad ajena a su obligación de impartir
justicia, entendiéndose que si acepta cualquier otro cargo, ese magistrado ha presentado su
denuncia. Solo se les permite ser profesores y ocupar cargos honoríficos.
Recusación e Inhibición.

Cuando una persona presume que un juez se ha parcializado con su contraparte podrá solicitar a la
Suprema Corte de Justicia que otro juez conozca el litigio en el que este involucrado, esto es lo que
se llama recusación.

De la misma manera, si un magistrado entiende que hay motivos para se r recusado debe solicitar la
designación de otro juez para conocer de ese litigio, es lo que se llama inhibición.

Las sanciones de los jueces pueden ser disciplinarias como lo seria una amonestación o destitución
como seria el caso de in conducta notoria, haber sido condenado a pena de prisión, falta grave en el
ejercicio de sus funciones y finalmente pecuniarias como las que impone el Tribunal de Tierra y en
los demás tribunales por dolo, responsabilidad civil expresamente pronunciada por la ley, fraude,
denegación de justicia, concusión, cohecho, prevaricación o soborno.

El Ministerio Público.

No solo en los tribunales penales existe el ministerio publico, como lo son el Fiscalizador ante el
Juzgado de Paz, el Procurador Fiscal ante el Juzgado de Primera Instancia, el Procurador General
ante la Corte de apelación, el Abogado del Estado ante el Tribunal de Tierra y el Procurador
General de la Republica ante la Suprema Corte de Justicia. Existen además, el Procurador general
Tributario y el Procurador General Administrativo.

El Ministerio Publico representa en un tribunal los intereses de la sociedad. Cada uno de estos
funcionarios tiene los llamados ayudantes o adjuntos.

La categoría de cada representante del Ministerio Publico es la misma que la del juez. Los
representantes del ministerio publico son designados por el Poder Ejecutivo y deben sumisión a la
disciplina judicial, no tiene por tanto la independencia que tienen los jueces y en esa virtud pueden
ser amonestados directamente por el Procurador General de la Republica, no pueden al igual que
los jueces ejercer la profesión de abogado, excepto cuando se constituyen como representante del
Estado. El abogado del estado es el Fiscal ante el Tribunal de Tierras.
Auxiliares de la Justicia.

Son auxiliares de la justicia el secretario, el alguacil, los abogados, los interpretes judiciales, los
notarios públicos, los médicos legistas, los venduteros públicos, los conservadores de hipotecas, los
registradores de titulo, los agrimensores, los peritos, los síndicos de la quiebra, los curadores de
sucesiones vacantes, los árbitros, los administradores judiciales , entre otros. Las condiciones de
aptitud requeridas para estos auxiliares son las mismas exigidas a cualquier empleado judicial.

Los Abogados.

Tienen una extraordinaria importancia como auxiliares de la justicia. En ese sentido podríamos
decir que tienen el monopolio de asistencia a las partes siendo las únicas excepciones en materia
laboral y criminal, esta ultima con permiso o autorización del juez.

Aunque es una asistencia voluntaria existe la posibilidad de que el Presidente del Tribunal designe
a un profesional del derecho para asistir a un pobre de solemnidad sin que exista la posibilidad de
que el abogado pueda negarse a prestar su asistencia.

Entre el cliente y el abogado existe un contrato de mandato asalariado, este mandato no puede ser
exigido al abogado por la contraparte. Sin embargo, el abogado no puede exceder los límites de ese
mandato y en tal virtud no puede realizar actos que signifiquen renuncia a un derecho sin la debida
autorización especial de su mandante.

El Secretario.

El secretario es el funcionario que tiene fe publica designado por la Suprema Corte de Justicia y sus
obligaciones consisten en asistir al juez en todas sus operaciones. En la parte administrativa el
secretario recibe las apelaciones, las aceptaciones de la comunidad o de la herencia.

Existe discreción respecto de la validez de la apelación declarada por el secretario y que no haya
sido firmada por el secretario. La doctrina y la jurisprudencia están de acuerdo en admitir la validez
de dicho acto aun cuando no este firmado por el secretario. El tribunal no puede constituirse sin la
presencia de un secretario.
Los Alguaciles.

Son oficiales públicos designados también por la Suprema Corte de Justicia y sus actos están
revestidos de autenticidad de manera que para hacerlos caer deben recurrirse al procedimiento de
inscripción en falsedad. Existen en nuestro derecho dos clases de alguaciles: de estrados y
ordinario. Los alguaciles deben circunscribirse a la jurisdicción del tribunal donde trabajan a los
efectos de hacer las notificaciones y demás actos a que están autorizados, también se les llama
ministeriales o ujier.

Los Intérpretes Judiciales.

Son nombrados por la Suprema Corte de Justicia y son los únicos autorizados a traducir
declaraciones de personas que no hablen español, así como los documentos escritos en cualquier
otro idioma que se utiliza en justicia.

Los Notarios Públicos.

Los notarios son designados por la Suprema Corte de Justicia y su nombramiento es de por vida, a
menos que cometan alguna falta que lo haga merecedor de su destitución. Los actos de notario son
los llamados actos auténticos y en estos el notario da fe de todo el contenido del acto.

Algo distinto sucede con los actos bajo firma privada legalizados por notarios en los cuales este
funcionario solamente da fe de haber visto firmar en su presencia el acto de que se trata, pero no en
su contenido.

Otras actuaciones de los notarios son comunes en las particiones, en los contratos de hipoteca y en
una serie de actos designados por ley. Para ser notario se requiere tener por lo menos 25 años.

Los Venduteros Públicos.

Son quienes tienen a su cargo subastar los bienes puestos bajo el amparo de la justicia mediante
embargo. Los venduteros públicos no pueden ejercer el comercio.
Los Médicos Legistas.

Son los únicos autorizados por la ley a expedir válidamente certificados médicos. Sin embargo el
tribunal tiene potestad para designar otros médicos en la realización de un peritaje o experticio.

Otros Auxiliares.

Existen otros tipos de auxiliares de la justicia como:

 Abogados de oficio en los tribunales penales (jurisdicción).


 Agrimensor en los tribunales de tierras.
 Conservador de Hipotecas.
 Registrados de Titulo.
 Los Árbitros.

También son auxiliares, que en cierta medida desplazan a los jueces ordinarios con el único
requerimiento de que su laudo arbitral debe ser homologado por el Juzgado de Primera Instancia
2.3. Clasificación de los tribunales DIAPOSITIVA

Según su composición:

 Tribunales unipersonales: son aquellos cuyas resoluciones son dictadas por un solo juez. Se
llaman juzgados.
 Tribunales colegiados: son aquellos que resuelven con pluralidad de jueces.

Son denominados propiamente tribunales y, en ocasiones cortes.

Según su jerarquía:

 Tribunales inferiores: son aquellos que, en la respectiva organización jerarquiza y piramidal


de los sistemas judiciales, ocupan el grado inferior. Esta clasificación se hace desde un punto
de vista administrativo y no atendiendo al ejercicio de la función jurisdiccional.
Generalmente son tribunales unipersonales.
 Tribunales superiores: son aquellos que, en la respectiva organización judicial, ocupan el
grado superior. Por lo general, son tribunales colegiados y sus integrantes son llamados
ministros o magistrados.

Según la extensión de su competencia

 Tribunales de competencia común o mixta: son aquellos tribunales que tienen competencia
para conocer de toda clase de asuntos o para conocer de una materia y, además de otros
asuntos de competencia especial a falta o inexistencia, en el respectivo territorio
jurisdiccional, de un tribunal con esa competencia. Los tribunales superiores son
generalmente de competencia común.
 Tribunales de competencia especial: son aquellos que tiene competencia de ciertos asuntos
con exclusión de otros.
Según su naturaleza

 Tribunales ordinarios: son aquellos a los cuales le corresponde el conocimiento de todos


los asuntos que se promueven en el respectivo país, cualquiera que sea la naturaleza o la
calidad de las personas que en ellos intervienen, salvo las excepciones legales.
 Tribunales especiales: son aquellos establecidos por la constitución o las leyes para juzgar
determinadas personas o para resolver ciertas materias que, por circunstancias particulares
gozan de este privilegio.
 Tribunales arbitrales: son aquellos constituidos por jueces árbitros es decir por miembros
que no son funcionarios públicos y son remunerados y elegidos por las partes a quienes
prestan sus servicios.
2.4. Tribunales de derecho común, y de excepción. Funciones

Los tribunales dominicanos están agrupados en dos categorías fundamentales: los tribunales de
derecho común u ordinarios y los tribunales de excepción o extraordinarios.

Los tribunales de derecho común u ordinarios son los que tienen competencia para conocer todos los
asuntos no atribuido expresamente a otro tribunal. Son el Juzgado de Primera Instancia y la corte de
apelación. Divididos en cámara civil, comercial, laboral y penal )

Los tribunales de excepción o extraordinarios son los que conocen limitativamente los asuntos que
de un modo expreso les atribuye la ley. Es decir, solo conocen un determinado tipo de causa. Son el
Juzgado de Paz, el tribunal de tierras, el tribunal de contencioso tributario, juzgado de trabajo, y el
Tribunal de Niños, Niñas y Adolescentes

Este tribunal se haya colocado a la cabeza de todos los demás. Es el tribunal de mayor jerarquía en el
sistema de administración de justicia. Su competencia es sobre todo el territorio nacional.

La Suprema Corte de Justicia no es un órgano Consultivo, y por tanto no puede emitir opiniones
acerca de la interpretación de la ley.

La Suprema Corte de Justicia, está integrada por dieciséis jueces elegidos por el Consejo Nacional de
la Magistratura, dentro de ellos tiene un Presidente y a un primer y segundo sustitutos para
reemplazar al Presidente en caso de falta o impedimento. Se rige mediante su Ley Orgánica número
25 del 15 de octubre de 1991.

La Suprema Corte de Justicia puede sesionar en pleno, siendo su quórum mínimo de 12 jueces, toma
sus decisiones por mayoría de votos y en caso de empate, el voto del Presidente es decisorio. Un Juez
de Corte de Apelación, puede ser llamado por auto para completar el quórum requerido del Pleno,
para el caso de ausencia o inhibición de uno de ellos.

Se divide en tres Cámaras que se identifican como Primera Cámara, Segunda Cámara y Tercera
Cámara. Cada Cámara está compuesta por cinco jueces, nombrados por el Pleno de la Suprema Corte
de Justicia, a propuesta del Presidente. Al elegir los jueces de cada Cámara, el Pleno, a propuesta del
Presidente, dispone cuál de ellos ocupa la Presidencia de la misma.
En caso de falta o impedimento del Presidente de una Cámara, desempeña esas funciones el juez,
integrante de la misma con mayor edad. Sin embargo, el Presidente de la Suprema Corte de Justicia,
cuando lo juzgue conveniente, preside cualquiera de dichas Cámaras.

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