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LA FUNCIÓN DE PRODUCCIÓN

DE LA EMPRESA

ÁREA Y PROCESO DE PRODUCCIÓN


El área de producción de una empresa es aquella área que se encarga de realizar
la función de producir bienes y servicios finales con los factores productivos
necesarios y su posterior salida al mercado. Estos bienes y servicios finales varían
según el sector productivo al que pertenecen (primario, secundario o terciario). Lo
necesario para realizar proceso de producción se basa en la mano de obra y
equipo (con trabajadores para poder realizar y coordinar cada una de las etapas),
instalaciones y herramientas requeridas (capaces de recoger y de realizar el
conjunto de procesos, es decir, un local y máquinas) y los materiales necesarios.
Todo lo nombrado anteriormente se reparte en tres etapas. Estas etapas son las
de desarrollo y obtención de materiales, período de producción y etapa
de acondicionamiento y su posterior salida al mercado:

La recolección de materiales y desarrollo del producto: El diseño y materiales


del producto a ofrecer son pasos importantes, ya que serán clave para una
primera impresión al consumidor. Unos buenos materiales son sinónimo de
calidad, y estos han de ser aptos para los procesos de modificación que
posiblemente sufrirán en la producción. Los materiales y materias primas que se
utilizan para la creación del producto dependen de su correcta suministración por
parte de otras empresas, repartidas en el margen de tiempo establecido,
cumpliendo unos mínimos básicos de calidad. Por otra parte, del diseño también
dependen futuros factores como el control de calidad o la dificultad de elaboración.
Poseer unas instalaciones adecuadas para la producción, donde se encuentre la
maquinaria y recursos precisados para la fabricación es esencial, al igual que el
conocimiento de métodos y procedimientos para utilizarlas. Si se carece de este
factor, el proceso de producción se verá afectado.
Período de producción: Durante este período se procede a la fabricación del
producto, se someten a la elaboración por medio de la acción inmediata del
hombre o de las máquinas, o de ambas. Para ello, los materiales y materias
primas previamente obtenidas son utilizadas, siguiendo el plan y diseño
establecido durante el período de desarrollo. La maquinaria ha de ser adecuada y
competente para lograr conseguir el producto cumpliendo unos mínimos. La
producción de un producto puede ser:

 Unitaria: El producto es elaborado por unidades o en pequeños lotes.


 En serie: Elaborado por lotes en serie (como su propio nombre indica) que
presentan características idénticas.
 Masiva: Gran volumen de producción durante un largo período de tiempo.

Etapa de acondicionamiento y venta: La responsabilidad de los factores


participantes en este periodo de producción es la observación del producto en el
ámbito de calidad y productividad entre otros, además de realizar análisis y
exámenes del producto en cuestión para comprobar que todo esté por encima de
los mínimos establecidos previamente por la empresa y así poder venderlos.
También se encarga de controlar el correcto comportamiento del producto con el
medio ambiente, junto al sector del desarrollo del producto. Tras finalizar el
periodo de producción, el último paso es la la venta del bien o producto en el
mercado.

TIPOS DE PROCESOS PRODUCTIVOS


Un sistema de producción es un sistema que proporciona una agilidad en la
creación de bienes y servicios mediante la aplicación de procedimientos
tecnológico. Estos sistemas son los encargados de producir bienes y servicios en
las distintas organizaciones. Por otro lado, estos sistemas productivos se
encargan de combinar las actividades y tareas de la empresa con el consumo de
estos recursos.

Hay diversos tipos de sistemas productivos:

Según el destino del producto, se clasifican en producción por encargo y


producción para el mercado. En la producción por encargo, la empresa se dedica
a elaborar un producto solicitado previamente, mientras que en la de mercado la
empresa fabrica y elabora productos que serán consumidos por la sociedad en
general.

Según el grado de homogeneidad, los sistemas productivos se clasifican en


producción artesanal y en la producción en serie. En la producción artesanal, los
productos se elaboran de manera individual y tienen características muy
diferentes, ya que algunos clientes pueden ser muy exigentes con aquello que
desean, mientras que en la producción en serie los productos que se elaboran por
igual, es decir, tienen las mismas características.
Los sistemas productivos se clasifican también según su dimensión temporal del
proceso. Así, dentro de este ámbito está dividido en producción continua y
producción intermitente. En la primera, el período de producción es seguido,
continuado, sin parar en ningún momento. Por otra parte, en la producción
intermitente es lo opuesto a la continua, puesto que se dan o se pueden dar
interrupciones en el proceso de producción. Estas interrupciones no son
causantes ni de problemas técnicos ni económicos, aspecto que también lo
diferencia de la producción continua.

Aparte de estos tipos de sistemas productivos mencionados anteriormente, existen


otros importantes, como la clasificación de tipos de sistemas productivos según la
tecnología de la que dispongan en su entorno. En este tipo de sistema productivo
según la tecnología se clasifica en:

 Producción manual: En la producción manual, el factor humano es fundamental


tanto para la elaboración del producto (que suele ser heterogéneo) como para el
trabajador. Algunos ejemplos de este tipo son la agricultura o la minería, puesto
que transforman productos vegetales en aceites, etc. y transforman minerales en
distintos productos, respectivamente.

 Producción mecanizada: En la producción mecanizada, las industrias


mecanizadas desempeñan un papel importante en el proceso de producción, pero
el hombre es el encargado de manejar las herramientas correspondientes, con la
diferencia de que en este tipo de producción el hombre no requiere tanto esfuerzo
físico como el de la manual. Solo se encarga de la supervisión y mantenimiento de
la maquinaria. Algunos ejemplos de este tipo de sistema de producción son la
fabricación de las piezas de un automóvil (ruedas, puertas…), etc.

 Producción automatizada. Por último, hemos de decir que en la producción


automatizada las máquinas son las encargadas de aportar su esfuerzo mediante
el control de otras máquinas, mientras que el hombre se encarga de revisar e
inspeccionar los aparatos mecánicos. Este tipo de producción proporciona
ventajas a los trabajadores, ya que la fabricación de estos materiales son flexibles,
lo que les permite adaptarse a la elaboración de otros bienes. Algunos ejemplos
de este tipo de producción son las impresoras o el embotellado de refrescos.

PRODUCCIÓN Y EFICIENCIA
Entendemos el concepto “eficiencia” como la capacidad o facultad de la que
dispone el ser humano para realizar las cosas de la mejor manera posible y
utilizando los recursos únicamente necesarios para garantizar la calidad. Este
término está profundamente aplicado a la economía, donde podemos distinguir
entre dos tipos de eficiencia: la eficiencia técnica y la eficiencia económica.

La eficiencia técnica se entiende, en el ámbito económico, como la mejora de


los procesos productivos de la empresa y, al mismo tiempo, los ámbitos de que
dispone la empresa. Con ello, si ésta eficiencia adquiere poco a poco una mejora
en su entorno, la empresa será capaz de producir la misma cantidad de productos
consumiendo menos, es decir, siendo más eficiente. Este tipo de eficiencia, junto
con la económica, pueden aumentar la mejora de su empresa con el desarrollo de
los agentes de la empresa y así conseguir su objetivo, el cual es lograr
incrementar el beneficio al máximo posible utilizando el mínimo de recursos.

Por su parte, la eficiencia económica va ligada a la eficiencia técnica, ya que


selecciona aquellos factores que, desde el punto de vista económico, son más
convenientes, ya que tienen un coste menor y desembocan en un incremento de
los beneficios y en la máxima rentabilidad posible. En cambio, lo que las diferencia
es que la eficiencia económica se basa en conseguir producir la misma cantidad
gastando lo menos posible, o producir la mayor cantidad de producto posible
gastando lo mismo que anteriormente se gastaba.

La función de producción se define como la relación que se establece entre la


cantidad de recursos o factores utilizados y la cantidad total de producto que se
obtiene con dichos recursos. La función de producción está dividida en a corto y a
largo plazo. En la producción a largo plazo, no existen factores de producción fijos,
ya que todos son variables. En cambio, en la producción a corto plazo es
exactamente lo contrario: la producción permanece constante.

La ley de los rendimientos decrecientes (también llamados rendimientos


marginales decrecientes) es la regla económica según la cual podemos saber que,
según se aumenta el uso de un factor de producción, es decir, de la tierra, el
trabajo o el capital, si este se mantiene paralelo al nivel de utilización de los demás
factores productivos, llegará un momento en que el aumento de la producción total
unitaria de este segundo factor será cada vez menor. Un ejemplo de la ley de
rendimientos decrecientes es el ejemplo de una fábrica donde se dispone de 4
máquinas y 3 trabajadores o empleados encargados de esas máquinas. Si
contratamos un trabajador más, la producción aumenta, ya que podría usar la
máquina disponible. Si después de contratar este, contratamos uno más, no
dispone de máquina para trabajar, ya que están todas ocupadas, y por tanto no
ayudará en el proceso de producción. A partir de este momento, la producción y el
rendimiento bajarán, al igual que si seguimos contratando trabajadores, ya que
estos no tienen una tarea establecida.

COSTES, INGRESOS Y BENEFICIOS DE LA


EMPRESA
Los costes de una empresa son los valores de los factores productivos de que
dispone la empresa (tierra, trabajo y capital) utilizados por la empresa para
producir un bien o servicio que posteriormente será adquirido por los
consumidores para satisfacer sus necesidades. Toda la producción de este bien o
servicio, depende de los factores productivos. Estos costes dependen del nivel de
producción de la empresa que se desee escoger: cuanto más grande sea la
producción, habrá una mayor cantidad de factores productivos utilizados y, por
tanto, habrá un mayor coste. Estos costes, tienen una llamada “función”, que
establece la relación entre el nivel de producción y el coste económico. Esta
función es la encargada de mostrar los costes mínimos que hay en cada nivel de
producción. Por ello, distinguimos diversos tipos de costes: costes fijos y costes
variables a corto plazo, costes totales y el coste medio o por unidad.

Costes fijos de la empresa: Los costes fijos son los gastos que tiene una
empresa independientemente del volumen de producción o de ventas, es decir, en
un gasto inalterable. Por ejemplo, un coste fijo sería el gasto que la empresa
acarrea con el pago del alquiler de su local o los gastos de administración,
además de impuestos y seguros.

Costes variables: Los gastos o costes variables son los que cambian según el
nivel de la actividad de la empresa y en función de la producción, como por
ejemplo el consumo de energía, incentivos a sus trabajadores, precio de las
materias primas de los productos, etc. Dentro de estos, los costes variables a
corto plazo son aquellos en los cuales la empresa puede realizar cambios en los
factores de producción para hacer frente a las variaciones que pueden producirse.
Las variaciones que pueden producirse son la entrada de factores variables y
factores fijos. Los factores variables son aquellos que sufrirán cambios en la
producción, mientras que los factores fijos, por su parte, no sufrirán ningún tipo de
cambio en la producción, es decir, serán independientes a la cantidad de la
producción.

Los costes a largo plazo son un conjunto de períodos en los cuales la empresa
ajusta los factores las variaciones posibles que pueden producirse, puesto que
todos los factores pueden modificarse. En los costes a largo plazo, la empresa
pone la cantidad que debe producir para obtener el máximo beneficio posible. Esta
cantidad viene determinada por los factores fijos variables y la empresa deberá
elegir una cantidad determinada para que los ingresos sean mayores a los costes
y así conseguir el máximo beneficio.

Coste medio: El coste medio o unidad es aquel coste que se obtiene dividiendo
los costes totales por la cantidad de unidades producidas.

Costes totales: Los costes totales son la suma de los costes fijos y los
variables. “CT = CF + CV”

Los ingresos de una empresa es la cantidad de dinero que recibe la empresa por
la venta de sus bienes o servicios. Pueden ser de tres tipos: los ingresos totales,
los ingresos medios y los ingresos marginales.

Los ingresos totales se obtienen multiplicando el precio del bien por el número de
bienes producidos. Los ingresos medios se obtienen dividiendo el ingreso total
entre la cantidad de unidades producidas. Los ingresos marginales son los
aumentos de una empresa en el ingreso total.
Los beneficios son los ingresos netos, es decir, los productos menos los costes
para producir los productos.

COMPONENTES DEL COSTE DE PRODUCCIÓN


En términos económicos, el coste representa la inversión que se precisa para la
producción y posterior venta de un producto. Dentro de este coste, diferenciamos
dos: los costes directos y los costes indirectos.

Los costes directos se asocian directamente con el producto de una forma muy
clara sin necesidad de reparto. Esto se produce cuando una empresa establece
mecanismos de control para conocer la cantidad de cantidad de coste que va al
producto o servicio. Los costes directos más habituales son:

Materias primas: Son las materias que consumen las empresas para crear sus
productos. Estos materiales suelen ser extraídos directamente de la naturaleza o
creados por otras empresas.

Mano de obra directa: Son las personas directamente relacionadas con el


producto, ya que se encargan de su elaboración. Las horas empleadas en la
elaboración del producto podemos medirlas a través de tarjetas de tiempo o de
trabajo (tarjetas que recogen el tiempo trabajado por un empleado).

Por otro lado, observamos los costes semidirectos. Estos son aquellos costes
que no mantienen una relación muy estrecha con el producto que se va a fabricar,
pero que en cambio, mantienen una relación con las distintas secciones de la
empresa.

Los costes indirectos son aquellos gastos que son necesarios para la
elaboración del producto, ya que no inciden con la producción de los bienes y
servicios, por ejemplo, el coste de la comercialización de un bien o servicio que
está en venta al público, o incluso los costes relacionados con la publicidad del
producto. Los costes indirectos los podemos dividir en dos grupos: los Costes
Indirectos de Producción y los Costes Indirectos Generales.

Los Costes Indirectos de Producción (CIP) son aquellos costes que son
fundamentales para la elaboración de un bien o un servicio. Un ejemplo de este
tipo de coste indirecto es la mano de obra indirecta, que consiste en la
participación de varias personas para la fabricación de un producto.

Por contraste, observamos que los Costes Indirectos Generales (CIG) son
aquellos costes que no son necesarios para la fabricación de bienes y servicios,
como por ejemplo, los costes financieros o los costes administrativos.

Por último, hemos de hacer referencia también al proceso de formación


del coste de la empresa. Esto lo podemos clasificar según el sistema de costes
según las características del sistema de producción y según la estructura del
proceso de formación del coste.

El sistema de costes según las características del sistema de producción se


clasifica en sistema de costes por órdenes de trabajo, que consiste en la
fabricación de un producto por encargo según las necesidades de los clientes y
cuya producción es discontinua (hay pausas durante el proceso de producción) y
el sistema de costes por procesos, en el cual, el producto que se vende es
homogéneo, es decir, que son iguales entre sí y cuya producción es continua, es
decir, no hay pausas en el proceso de producción.

Aparte de estos sistemas, el proceso de formación de la empresa también se


clasifica según la estructura del proceso formativo en el coste, en el que
diferenciamos los sistemas inorgánicos y los orgánicos.

Los sistemas inorgánicos se caracterizan porque no tienen en cuenta el sistema


de organización de la empresa, mientras los sistemas orgánicos sí tienen en
cuenta el sistema de organización de la empresa.

¿PRODUCIR O COMPRAR?
La toma de decisión de una empresa es el proceso por el cual la empresa escoge
aquellos bienes y servicios que más le interesan para lograr sus objetivos, que son
alcanzar el mayor número de ventas posibles y, en consecuencia, obtener el
máximo beneficio posible con el menor gasto posible. La empresa lleva a cabo el
análisis de ciertos puntos de mayor importancia, como la calidad, el coste y el
servicio. En cambio, los puntos de la empresa que tienen menor importancia son
la capacidad de fábrica, los fondos excedentes, las relaciones que mantiene la
empresa con el vendedor, la madurez de este sector o los problemas que puedan
aparecer en esta forma jurídica, entre otros. Dentro del análisis de los puntos de
mayor importancia anteriormente nombrados, podemos observar:

-La calidad del producto, donde los partidarios de producir exponen que la calidad
es un aspecto que se debe controlar minuciosamente, ya que lo ven como un
factor decisivo para el éxito del producto. A consecuencia de esto, la fabricación
es un punto que controlarán con gran ímpetu. Por otro lado, los partidarios de
comprar son críticos con la calidad del producto, que puede llegar a ser rechazado
si este no cumple unos mínimos establecidos.

– El coste es uno de los elementos que determina si la empresa es partidaria de


comprar o de producir. Unas personas utilizan este gasto para fabricar y, al mismo
tiempo, producir bienes y servicios a un menor coste, sin que haya una menor
calidad-precio que el resto de productos producidos por otras empresas y
conseguir la mayor cuota de mercado posible.
Además del coste y las calidad del producto, otro aspecto importante en la
decisión de fabricar o comprar es el servicio, con el cual se pretende que sea
recibido en manos del consumidor y consiga que esta persona esté satisfecho/a
del bien adquirido, y así adquirir más credibilidad por parte de las personas y
mejorar tanto la calidad de los productos, como la vida de los seres humanos.
Para ello, en el momento en el que la empresa decida qué producto desea ofrecer
a todo el personal, ha de contar con la suficiente cantidad de las materias primas,
como por ejemplo, los medios por los que puede hacer llegar el producto de la
forma más rápida posible al consumidor o los medios de comunicación para
ponerse en contacto con las personas que desean ese bien o servicio.

Para tomar esta decisión sobre si comprar el material o producirlo, la empresa


necesita ver qué materiales necesita y qué precio le resulta más asequible. Para
saber el precio que le costaría comprar el material necesario, han de multiplicar el
precio original por la cantidad que desean. La fórmula quedaría así: P(X)=
P(X).Q(X). Por el contrario, para saber el precio que le costaría producir, las
empresas habrán de sumar los costes de fabricación y multiplicarlos por el
resultado de los costes variables medios o por unidad por la cantidad que les
gustaría adquirir. La fórmula quedaría de esta manera: CF+(CVMe.Q).

UMBRAL DE RENTABILIDAD
En el ámbito económico, el umbral de rentabilidad (también llamado punto muerto)
es el número mínimo de unidades que una empresa necesita vender para que el
beneficio de ese preciso momento sea cero. Dicho de otra manera, el punto que
marca la cantidad de producto que debemos vender para empezar a obtener
beneficios. Si una empresa vende por debajo del umbral de rentabilidad no
obtendrá beneficios. Por el contrario, si una empresa vende por encima del umbral
de rentabilidad obtiene beneficios de esas ventas. En el punto muerto el beneficio
es nulo, es decir, los ingresos totales son iguales a los costes totales. Para poder
realizar el cálculo del umbral de rentabilidad, antes necesitamos saber:

 CV
 CF
 PVP (Precio de venta al público)
Análisis de la gráfica del umbral de rentabilidad

Para realizar la representación gráfica del umbral de rentabilidad, debemos


realizar una gráfica que presente un eje vertical en su parte izquierda, donde se
ubican los costes y los ingresos, y un eje vertical, donde se ubican los datos de
ventas (tal y como se observa en la imagen facilitada).

Los costes deben ser representados con una línea horizontal respecto al eje
vertical con número que corresponda, la cual nos marcará dónde empieza la recta
de costes totales, como se observa en la imagen. Por otra parte, la recta de los
ingresos sale del punto 0,0 de los ejes, y se calcula multiplicando la cantidad de
unidades vendidas por su precio. El punto donde las dos rectas coinciden es
el punto muerto o punto donde se empieza a obtener beneficios por las ventas,
es decir, donde se es rentable.

Cálculo umbral de rentabilidad

Para comenzar a analizar la gráfica del umbral de rentabilidad es necesario y


esencial obtener el dato del margen de contribución, el cual se define como la
diferencia que existe entre el precio de venta del producto y los costes variables,
es decir, el resultado de restar los dos valores anteriormente nombrados: precio de
venta (PV) menos el coste variable (CV). Expresado como fórmula, esta quedaría
así: [MdeC = PV – CV].

Para proseguir, y después de haber obtenido el dato del margen de contribución


explicado anteriormente, pasamos a realizar ya por fin el cálculo del umbral de
rentabilidad. Para ello, hemos de realizar la división de los costes fijos totales entre
el margen de contribución. Expresado como fórmula, esta quedaría así: [UR = CFt
÷ MdeC].

El procedimiento del cálculo del umbral de rentabilidad o punto muerto y su


respectiva representación gráfica nos sirve además para determinar si un el
producto es más rentable producirlo o comprarlo en el mercado exterior, de lo que
hablamos previamente en preguntas anteriores.
EQUILIBRIO EN COMPETENCIA PERFECTA
Sabemos que las empresas son creadas para satisfacer las necesidades de los
consumidores, y que estas se mueven dentro del mercado compitiendo con otras
empresas, de modo que el entorno determina la forma de competencia y las
relaciones establecidas en términos de la producción y la oferta empresarial.

Un mercado estará definido por una serie de características, las cuales


encontramos la competencia perfecta, donde esta encontramos
muchísimas empresas, ya que tienen una gran cantidad de compradores
(demanda) y de vendedores (oferta.

El equilibrio de la competencia perfecta se alcanza por el encuentro entre la


demanda del mercado (suma de la demanda de cada uno de los consumidores) y
la oferta de la industria (suma de la oferta de cada una de las empresas que
trabajan en el mercado).

El equilibrio de la competencia perfecta se entiende como el precio que iguala la


cantidad demandada con la ofrecida, es decir, cuando tanto la oferta y la
demanda son exactamente iguales, existen diferentes plazos para definir su
equilibrio:

Corto plazo

El corto plazo es un marco de tiempo en el que cada empresa tienen fijas las
cantidades de recursos productivos. A corto plazo son muchas las cosas que
pueden cambiar y la empresa tiene que reaccionar a esos cambios para no
quedarse atrás respecto a la competencia. El equilibrio a corto plazo muestra
como varía la producción que maximiza el beneficio conforme cambie donde una
empresa puede tener pérdidas económicas o ni ganar ni perder.

Se alcanza un equilibrio competitivo perfecto a corto plazo cuando se cumplen 3


condiciones:

 Todos los agentes están en sus respectivas curvas de oferta y demanda.


 Demanda de mercado = Oferta de mercado
 No existe ninguna fuerza en el mercado.

Largo plazo

El equilibrio de largo plazo en una industria competitiva perfecta ocurre cuando las
empresas obtienen un beneficio normal o el beneficio económico es nulo. Se da
por el punto en que la demanda (y el ingreso marginal, que es idéntico a ésta), es
tangente al punto mínimo del costo total promedio (donde el costo marginal
también cruza con el costo promedio total).
En este tipo de equilibrio a largo plazo pueden ocurrir dos cosas:

 Los beneficios económicos atraigan empresas y ocasionen la expansión de las


empresas existentes, es decir que crezca su negocio y obtengan más beneficios,
gracias a su incremento económico; entonces la empresa obtiene beneficios.
 Las pérdidas económicas ocasionan que las empresas abandonen la industria y
disminuyan el tamaño de su planta, es decir, al perder dinero las empresas se ven
obligadas a disminuir su negocio, ya que al no poseer el patrimonio de antes no
puedan ejercer su trabajo de la misma manera que antes, es decir, no pueden
combatir con sus gastos; entonces la empresa tiene pérdidas.

Los ingresos marginales, como comentamos en preguntas anteriores, son los


aumentos de una empresa en los ingresos totales. El nivel óptimo de
producción es el nivel donde la empresa es más eficiente de acuerdo a los
recursos y materiales disponibles. Sirve para equilibrar la cantidad producción y la
cantidad de recursos que disponemos para producir al nivel óptimo, es decir, para
que cueste menos de producir.

https://elpropagandistaplural.com/2020/01/07/la-funcion-productiva-de-la-empresa-explicada/

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